CONSIDERACIONES NECESARIAS PARA REMITIR EL INFORME ANUAL POS ACREDITACIÓN

Cuando alcanzamos la acreditación, es claro que se trata de un logro trascendente, producto del
esfuerzo de muchas personas, las mismas que han podido constituirse en un equipo, el que a su vez,
se ha inspirado en la convicción que la CALIDAD EDUCATIVA es esencial para cumplir con su misión
formativa.
Pero las personas no son máquinas y cuando forman equipo necesitan generar mecanismos que
garanticen que ese logro, no solamente mantenga su calidad, sino que se convierta en hábito
institucional. Solo así se hará verdaderamente sostenible en el tiempo.
La acreditación es un reconocimiento público que demuestra haber satisfecho la exigencia de
estándares específicos que validan una manera óptima de hacer las cosas, pero esta conquista es el
primer paso, el primer escalón, de una escalera que, debe ser infinita para consolidarse como
CULTURA, vale decir, como una forma de vida institucional. Esta cultura de calidad se sustenta
entonces en lo que se denomina MEJORA CONTINUA.
El SINEACE tiene la misión, estratégica para el país, de promover y garantizar calidad en el servicio
formativo que brindan todas las instituciones educativas a nivel nacional. Esta misión la cumple a
través de la gestión de procesos de acreditación y certificación. Para ello, ha establecido estrategias
de acompañamiento y capacitación que permiten apoyar el esfuerzo de las instituciones y los
programas de estudio que han decidido buscar la optimización de sus procesos y resultados en
beneficio de sus estudiantes. Sin embargo, el apoyo eficaz está condicionado a información
suficiente y oportuna. De ahí la importancia de los reportes.
¿QUÉ ES UN INFORME POS ACREDITACIÓN?
Si para el proceso de autoevaluación de instituciones y/o programas de estudio que buscan
acreditarse, los reportes de avance permiten el acompañamiento debido a efecto de poder dirigir la
asistencia técnica suficiente y necesaria; para las entidades que ya alcanzaron la acreditación, los
reportes anuales, son imprescindibles para consolidar lo logrado, impulsar el aprovechamiento de
las oportunidades de mejora o acaso también, para evitar el eventual retroceso.
Las instituciones, y ahora, los programas de estudio con acreditación vigente, deben remitir al
SINEACE la información necesaria para la sinergia indispensable. Este reporte anual debe
proporcionar información de manera sucinta, pero relevante, sobre el estado de la cuestión,
actualizando los datos formales y la información significativa, describiendo las medidas tomadas
para garantizar la sostenibilidad y los resultados que se van obteniendo durante su implementación.
Todo es perfectible. Lo único constante es el cambio. Debemos garantizar que todo cambio revele
una evolución y nunca, involución. De ahí la importancia que el informe anual tenga un abordaje
prospectivo que vislumbre la viabilidad futura del programa de estudios.
En ese razonamiento, se entiende que doce meses es un lapso de tiempo razonable para evaluar los
indicadores de sostenibilidad, los que eventualmente pueden también evidenciar el nivel de
compromiso real que el colectivo tiene con una finalidad más trascendente que la acreditación
misma: la Calidad como Cultura de Excelencia.
EL INFORME POS ACREDITACIÓN COMO INSTRUMENTO DE GESTIÓN
El concepto de “instrumento” alude a cualquier herramienta útil para que una actividad planificada
se desarrolle convenientemente o proporcione la información requerida. Mientras que un
“mecanismo” identifica la forma en la que diversas partes o piezas se articulan para realizar un
proyecto integral que busca concretar un fin mayor.
El esquema del informe anual que proponemos busca configurar un instrumento para el análisis y la
evaluación de la sostenibilidad de los logros alcanzados por el Programa de Estudios, toda vez que
nos permite extraer información relevante para garantizar el mantenimiento de sus fortalezas y
evolución positiva. Por ello, parte sustancial del reporte es la descripción de las actividades
desarrolladas, las que articuladas deberán revelar el mecanismo o la técnica utilizada para mantener
vigente y en desarrollo permanente los logros de la acreditación alcanzada.

VALOR COYUNTURAL DEL INFORME ANUAL POS ACREDITACIÓN

Estamos en un momento especialmente importante. Se trata del tránsito de un modelo prescriptivo
de acreditación institucional, hacia un modelo vigente que ahora privilegia lo cualitativo, no
prescriptivo, que evalúa cada programa de estudios por separado.
Transitar de un modelo a otro, no es un proceso automático. En este caso, para aprender, es
imprescindible “desaprender”, salir de nuestra zona de confort. Por tanto, requiere voluntad,
organización y capacidad de análisis. Pero además, el modelo vigente, al privilegiar lo cualitativo,
nos obliga a un ejercicio de racionalidad adicional para efecto que las argumentaciones con las que
se sustentan nuestras actividades se expresen de manera clara.
Al “qué” hacemos y al “cómo hacemos” las cosas, ahora, con el modelo vigente, se le suma el “por
qué” y el “para qué” las hacemos. Se trata entonces de poner énfasis en la sustentación
argumentativa. Las instituciones acreditadas con el anterior modelo tienen entonces el reto de
cambiar de enfoque y los informes anuales deben revelar tal empoderamiento.
Por ello, el formato que adjuntamos, plantea un esquema de 5 aspectos diferenciados: a)
actualización de datos; b) actividades programadas en función de las oportunidades de mejora
detectadas; c) lista de actividades ya desarrolladas; d) forma cómo fueron implementadas y
finalmente, e) resultados obtenidos (subrayando, en este último caso, el instrumento que usamos
para medir nuestros resultados). Todo de forma resumida, concreta y relevante.
Finalmente, considerando que en hay entidades con acreditación institucional vigente, alcanzada en
el marco del modelo anterior, lo que corresponde es remitir un informe anual que, redactado en un
solo documento, igualmente consigne el estado de sostenibilidad de cada uno de los programas por
separado, desarrollado con el enfoque cualitativo que propone el modelo vigente para las cuatro
dimensiones de la matriz (gestión estratégica, formación integral, soporte institucional y resultados).
Adjuntamos aquí el esquema que debe contener el informe anual, recordando que, éste se debe
remitir SOLO POR VÍA VIRTUAL, a la dirección de correo: rchirinos@sineace.gob.pe consignando en
el asunto: INFORME ANUAL POS ACREDITACIÓN.