SOBRE LA LEY DE LA SIMILITUD

Con el decidido propósito de universalizar los conceptos, consideramos que lo que

define y diferencia a la homeopatía de manera fundamental de cualquier otro sistema
médico-terapéutico es “La ley de la similitud”, que plantea grosso modo que “lo semejante
cura a lo semejante”. La homeopatía clásica la define de esta manera: una afección
dinámica más débil es destruida permanentemente en el organismo vivo, por otra más
fuerte si ésta última, aunque diferente en su género, es muy semejante a aquélla en sus
manifestaciones (Organon, parágrafo 26).
Nosotros queriendo plantear la ley de la similitud de una manera que creemos es
más exacta y completa, la enunciamos así:

“Toda sustancia informacional que exista en la naturaleza o que haya sido creada de manera
artificial, que tenga la capacidad al entrar en contacto con ella y ser expuesto a su información de
manera abrupta y excesiva o ínfima pero frecuente, de generar en cualquier espécimen sano y sensible
una perturbación característica (ENFERMEDAD), cuya única expresión visible es a través del
conjunto específico de síntomas y signos que desarrolla; tiene entonces también ésta misma sustancia
informacional la capacidad de eliminar o curar la perturbación característica (ENFERMEDAD),
con el conjunto específico de síntomas y signos, que le sea semejante en un espécimen enfermo, siempre
que dicha sustancia informacional sea suministrada en dosis mínimas o infinitesimales y haya sido
sometida a vigorosas agitaciones controladas, las cuales suelen denominarse, sucusiones”.

Desglosando este enunciado para su mayor entendimiento quedaría así:

o Toda sustancia informacional que exista en la naturaleza o que haya sido creada de
manera artificial.
o Que tenga la capacidad, al entrar en contacto con ella y ser expuesto a su información
de manera abrupta y excesiva o ínfima pero frecuente.
o Que tenga la capacidad… De generar en cualquier espécimen sano y sensible una
perturbación característica (Enfermedad).
o Cuya única expresión visible es a través del conjunto específico de síntomas y signos
que desarrolla.
o Tiene entonces también ésta misma sustancia informacional.
o La capacidad de eliminar o curar la perturbación característica (Enfermedad) con el
conjunto específico de síntomas y signos que le sea semejante, en un espécimen
enfermo.
o Siempre que dicha sustancia informacional sea suministrada en dosis mínimas o
infinitesimales.
o Y haya sido sometida a vigorosas agitaciones controladas, las cuales suelen
denominarse, sucusiones.

HELMUTH HAROLD MEDINA BOLAÑO