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Lectura y Redacción Universitaria

“DEJAME CAMINAR POR LA CALLE TRANQUILA”


Estudiante: Lucely Yelin Pacheco Torres

El acoso sexual callejero es un tipo de violencia, si bien es cierto a medida que pasan los
años las mujeres nos sentimos cada vez más inseguras , no solamente por la delincuencia
que cada vez está peor y no es que solo las mujeres nos sentimos con ese temor, si no la
humanidad en general.
Estaba leyendo en internet y habían muchos comentarios sobre que nosotras las mujeres no
deberíamos andar en minifalda, en ropas cortas, diminutas, o como quieran llamarlo. MI
OPINION y creo que de muchas personas, yo no creo que tengamos que oprimirnos de lo que
nos gusta solo por no “provocar” a los hombre que nos acosan - que yo como MUJER tengo
la culpa de que me falten el respeto?- porque no pueden ser ellos culpables de sus errores?
– porque siempre nosotras?

Este un tema que necesita una solución de manera urgente, done las mujeres en su mayoría
son las más afectadas, es por eso que este ensayo intentara responder a preguntas como:
que es el acoso sexual callejero? , A quienes afecta?, y cual esta importancia de elaborar este
estudio, también se buscara plantear una posible solución para este tema de mucha
importancia el cual es EL ACOSO CALLEJERO .
Uno de los puntos a tratar en este ensayo es dar una definición al acoso sexual callejero.
Cuando hablamos de acoso sexual callejero involucramos sujetos y acciones que no
necesariamente afectan la integridad física, lo que si nos afecta es psicológicamente,
nuestras emociones propias de cada persona, el acoso sexual lo definiremos como:
“Es una forma de acoso sexual que consiste en comentarios indeseados, silbidos y otras acciones
similares hacia personas desde extraños y en espacios públicos, Ocurran en espacios públicos o
semi-públicos, es decir, espacios donde no es clara la propiedad y responsabilidad de alguien en
definir reglas y en mantener la seguridad. De forma unidireccional, es decir, sin considerar si la
víctima desea recibir el acto o si lo aprecia o no. Con la potencialidad de producir malestar a nivel
individual o social, bajo la forma de emociones negativas, como rabia, miedo, asco o impotencia o
estrés; creencias negativas, modificación de la conducta, rechazo social, conflicto, etc.” (Billi, 2015,
pág.12)
Este se define como el conjunto de prácticas cotidianas, como frases, gestos, silbidos,
sonidos de besos, tocamientos, masturbación pública, exhibicionismo, seguimientos (a pie o
en auto), entre otras, los cuales tienen claramente una connotación sexual. Generalmente
estas prácticas son realizadas de hombres hacia mujeres, a pesar de que se trate de
personas desconocidas. Uno de los más grandes problemas en torno a este tema es que
dichas conductas se ven como normales ante la sociedad, incluso llegando a ser
justificadas.
Las personas afectadas son predominante mujeres, y dentro de ellas, las más jóvenes: a
nivel nacional una encueta del instituto de Opinión Publica de la Pontificia UNIVERSIDAD
CATOLICA DEL PERU sobre acoso sexual callejero _ realizada a 1.203 e 19 regiones del país ,
muestra que lamentablemente no hay peruana que escape de esta forma de hostigamiento.
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De acuerdo con el estudio, 7 de cada 10 mujeres entrevistadas de entre 18 a 29 años señaló


haber sido blanco de al me-nos una modalidad de acoso sexual callejero, y lamentablemente
en la capital llegando a un porcentaje lamentable de 9 de cada 10 mujeres, y a nivel mundial
el 70% de mujer sufre acoso sexual callejero. Así, el 73.8% de entrevistadas aseguran que
aquellas que se visten provocativamente se exponen a que les falten el respeto, y un 51.6%
considera que las que reciben un piropo bonito de un desconocido deberían sentirse
halagadas.
El 4 de marzo del 2015, el Congreso de la Republica del Perú aprobó un proyecto de LEY
PARA PREVENIR Y SANCIONAR EL ACOSO SEXUAL EN ESPACIOS PUBLICOS que previene
y sanciona el acoso sexual callejero, el primero de su naturaleza en el continente. Tal como
su nombre lo señala, la mencionada ley no solo busca sancionar las prácticas de acoso
callejero, sino también prevenir que estas sigan produciéndose y brindar la atención
correspondiente a las personas que sean víctimas de esta forma de hostigamiento en la vía
pública o transporte público, las personas afectadas son predominante mujeres, y dentro de
ellas, las más jóvenes: a nivel nacional siete de cada diez mujeres entrevistadas de 18 a 29
años señaló haber sido blanco de al me-nos una modalidad de acoso sexual callejero en los
últimos seis meses; y en Lima Metropolitana, nueve de cada diez.”
Es la naturalización del problema lo que ha hecho que sea invisible por tantos años. Sin
embargo, una encuesta realizada sobre el tema mostró que más del 50% de mujeres afirma
que les ha ocurrido alguna de las situaciones de acoso sexual callejero ya mencionadas.
Este fenómeno es más común en zonas urbanas y se dirige sobre todo a mujeres jóvenes
entre 18 y 29 años. Cuando se exploran las causas por las que se cree que se cometen estas
faltas, la primera razón que se suele atribuir es la vestimenta. Tanto hombres como mujeres
sostienen que el hecho de que una mujer lleve poca ropa es una provocación para ser
acosada en la calle. Otro argumento que señalan es que se trata de un halago a la belleza de
la mujer.
Todas estas posibles motivaciones están ligadas a lo que podría desatar la conducta del
agresor. Tal vez lo más conveniente sería reflexionar acerca de cómo se sienten las personas
que reciben este tipo de comentarios o gestos con connotaciones sexuales. En realidad,
estas situaciones resultan incómodas, vergonzosas y frustrantes para las mujeres pues
quienes practican el acoso se escudan en la anonimidad. Por ello, en vez de ser tomado
como algo positivo, lo habitual es que se experimente como una invasión al espacio
personal, al espacio íntimo, y que termine generando malestar. Pero, ¿qué hay detrás de
estas prácticas? Si se explora un poco más a fondo el problema, se puede observar que este
fenómeno evidencia una lucha de poder entre géneros. Por un lado, las mujeres no pueden
sentirse dueñas de un espacio público que, en teoría, les pertenece tanto como a los
hombres. Este hecho se ve expresado en la inseguridad percibida en el momento de caminar
por las calles, la cual se refuerza cuando se presentan nuevas situaciones de acoso callejero
y generan desagrado, vergüenza y miedo a que vuelva a ocurrir. Por otra parte, la
inseguridad lleva a que las mujeres sientan la necesidad de buscar a alguien que las
acompañe y que así puedan sentirse protegidas.
Como ya se ha visto, muchas de estas prácticas se mantienen porque hasta hace poco
tiempo no habían sido problematizadas y al no ver una reacción, los agresores creen que no
tiene nada de malo o que no les acarreará problemas reales, como legales o el rechazo de
personas cercanas por ejemplo. Por el contrario, es lamentable que existan contextos en que
el grupo celebra la conducta, demostrando una actitud machista y que ve a la mujer como un
objeto. Por eso, se trata de conductas que están muy arraigadas en nuestra sociedad y que
pasan como divertidas cuando, para las afectadas, es absolutamente todo lo contrario.
En ese sentido, es importante saber cómo reaccionar ante situaciones de este tipo sin
exponerse a peligros. Una buena opción es responder asertivamente. Si considera que el
lugar en el que se encuentra es seguro, puede responder haciendo notar qué es lo que le
molesta de la acción que ha tenido la otra persona. Intente decirlo con calma porque el
agresor podría reaccionar violentamente. En la misma línea, responder con un insulto o
estando alterado puede hacer que se pierda de vista el mensaje principal, que es mostrar que
el acoso, lejos de ser un halago, es algo indeseable para usted. Otra opción, en caso
identifique que el agresor pertenece a una empresa o institución, es denunciar el caso en su
centro laboral para que se produzca una sanción. Puede tomar la misma acción de denuncia
con la policía o el serenazgo. Existen municipalidades que están concientizadas al respecto y
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tomarán las medidas necesarias, como por ejemplo la de Miraflores. Últimamente suele ser
de utilidad el uso de celulares para contar con evidencias suficientes para probar el hecho.

En este sentido, resulta fundamental hacer del acoso sexual callejero un tema de estudio que
se pueda difundir en los distintos establecimientos educacionales, permita –a través del
conocimiento- desnaturalizar estas prácticas, pues de esta forma, sería posible dilucidar las
diversas imposiciones y relaciones de poder que surgen a través de las normas patriarcales,
haciendo reflexionar a la población y que en un futuro se pueda llevar a la praxis desarraigando
de esta forma, el machismo y todo lo que este conlleva.
Por otro lado, como posible solución incluye por completo el punto expuesto anteriormente: la
educación; pues creo que más que legislar para sancionar estos actos, el problema subyace en
nuestra cultura y en las lógicas heredadas de épocas anteriores.
Por lo tanto, es vital que el conocimiento respecto a esta temática se pueda difundir al resto de
la población, más que mantenerse dentro de la academia, pues siendo nosotros parte de esta,
ya nos encontramos en conocimiento de la complejidad y la amplitud del tema, siendo nuestro
deber como futuros docentes y sujetos que forman parte de la sociedad, dar a conocer y
visibilizar el sistema patriarcal, cómo nos aqueja y por qué debemos actuar con suma urgencia.

La lucha contra el acoso sexual callejero es bastante complicada porque implica cambiar una
práctica diaria que es socialmente aceptada sin pasar por el razonamiento de cuánto está
afectando a las mujeres. Estas conductas cambiarán en la medida en que tanto las autoridades
como la sociedad se comprometan a tomar acciones en contra del acoso sexual callejero y a
fomentar la reflexión en personas de todas las edades sobre el respeto en espacios públicos y
privados. El acoso sexual callejero no es divertido, es perturbador para las miles de mujeres que
no se sienten libres de salir de sus casas por temor a ser invadidas.
SEÑORES AUTORIDADES NESECITAMOS QUE ESTO ACABE YA!
BASTA YA ¡
QUE ESPERAN? , QUE SUCEDA ALGO PEOR COMO UNA VIOLACION O MUERTE QUE
SERIA LO PEOR AUN YA SIENDO ACOSADA?
NO MAS VIOLENCIA!
NO MAS VIOLACIONES!
NO MAS ACOSOS SEXUALES!
NOS MAS INSEGURIDAD!
NO MAS PORFAVOR!

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