SOHO

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10 CINE 29 EN FORMA 66 CRÓNICA CARLOS TRIVIÑO MORCOTE CALL CENTER Luz Stella Abaunza
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El dron acuático Los mellizos fantásticos 01-8000 911100 PUBLICACIONES
Los 10 inventos de 2017 SEMANA S.A.
18 SEXO del bitcoin
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La infidelidad
Gotti, el último Don
19 BELLEZA Fútbol, política y
44 INFOGRAFÍA dictadura
Cuidado para la piel
Hollywood y el acoso 102 HISTORIA C L U B D E S U S C R I P TO R E S
20 MOTOR sexual La mansión de Medina ZONA VIP PUBLICACIONES SEMANA
El Fórmula 1 de calle
54 PERFIL 106 TESTIMONIO www.ZonaVIPSemana.com
24 WEB TV
El príncipe árabe que El mundo detrás de una ZONA VIP - PUBLICACIONES SEMANA
El regreso de The Crown compró un Da Vinci escopeta
26 HOMBRE
DE MUNDO
114 OPINIÓN
Lucas Pombo Editor Publicaciones Semana S.A. Distribución Comunican S.A. Printed in Colombia by Panamericana
Felipe y Sebastián Falla
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Prohibida la reproducción total o parcial sin autorización expresa
de Publicaciones Semana S.A. ISSN 0124-1400
4

MATADOR
Es uno de los caricaturistas
más leídos y comentados de
Colombia desde el diario El
Tiempo. Las suyas son sátiras
de un poder ante el cual no
se arredra este pereirano que
está cerca de los cincuenta.
Ácido, e inteligente como
pocos, se le midió en esta
edición de comienzo de año
a hacer un pronóstico de los
doce meses por venir. A ver
cómo le salió. VALERIA
ANGARITA
Periodista de la Javeriana y
de nuestra redacción desde
hace dos años. Valeria, además
de producir las crónicas y los
testimonios que usted lee, es-
cribe sobre estilo de vida. Para
el estreno de la película sobre
el mítico John Gotti, protago-
nizada por John Travolta, le
pedimos un apasionante perfil
sobre el segundo criminal más
célebre de la historia después
de Al Capone.
MARIANA TORO
Cuando le propusimos apare-
cer en SoHo, respondió con un
tajante “no”. Cuando le dijimos
que no era para eso, sino para
que escribiera un artículo,
aceptó inmediatamente. Es po-
litóloga de la Javeriana, donde
pasó toda su carrera becada
y ganó dos órdenes al mérito.
Para esta edición le pedimos un
extenso perfil de los mellizos
que inventaron Facebook pero
JUAN PABLO
que ahora están metidos en el
mundo del bitcoin. GUTIÉRREZ
Guti, como le dicen sus amigos
y no tan amigos, es uno de los
fotógrafos colombianos con
más experiencia en producto y
personajes que han aparecido
en revistas como Arcadia o
Bocas, para la cual es habitual
colaborador. En esta ocasión,
le pedimos que acompañara
a Juan Sebastián Gaviria a
disparar escopeta a Guatavita.
Sus fotos son elocuentes.
LAS OPINIONES Y LOS JUICIOS EXPRESADOS POR LOS COLABORADORES EN SUS ARTÍCULOS Y COLUMNAS NO REPRESENTAN LA POSICIÓN DE LA REVISTA.
5
COLABORADORES // SOHO
VÍCTOR
DIUSABÁ
Periodista, lleva años como
editor, jefe de redacción de
importantes medios impresos
nacionales y cuenta con in-
cursiones en el periodismo
digital. Es el actual consultor
editorial de Semana Rural. Un
apasionado por la historia, en
particular por capítulos como
el Bogotazo, la Segunda Gue-
rra Mundial y la Guerra Civil
Española. Para esta edición JUAN
escribió un texto sobre la SEBASTIÁN
inevitable conexión entre el
fútbol y la política. GAVIRIA
Nació en Bogotá, en 1980. Tras
ser expulsado a los 17 de una
academia militar en Estados
Unidos, regresó a Colombia y
abandonó sus estudios secun-
darios. Sus años de vida erran-
te en las carreteras surameri-
canas están registrados en los
más de 700 poemas del libro
Cicatriz Souvenir (Común
Presencia, 2009).
LARIZA
PIZANO
Es la editora política de la
revista Semana, casa editorial
en la cual ha estado vinculada
desde hace una década larga.
Con la misma voz directa con
la que cuenta, cada ocho días,
los avatares del Senado, la
Presidencia o las altas cortes,
Lariza investigó para esta
edición cuál fue el destino de
la mítica mansión de Santiago ANDRÉS
ESPINOSA
Medina, el tesorero de la cam-
paña Samper Presidente. Este fotógrafo bumangués mar-
ca la pauta en el campo de la
moda. Por algo su trabajo se ha
publicado en medios como Ro-
lling Stone, GQ, Fucsia, Diners y
ha sido autor de campañas para
diseñadores y marcas influyen-
tes como Johanna Ortiz y
Silvia Tcherassi.
Andrés es el fotógrafo de cabe-
cera de personalidades como
Mónica Fonseca, Paulina Vega
y Taliana Vargas. Ahora, por
segunda vez, fue el fotógrafo de
nuestra portada.
EN - BRA // SOHO

María
Teresa
Mora
Esta impresionante mu-
jer es, de lejos, una de las
modelos más cotizadas
que tiene Colombia. ¿No
nos cree? Lea y verá por
qué se lo decimos.
Cuando esta vallecaucana
dejó su natal Palmira y se fue
a vivir a Bogotá tenía un ob-
jetivo claro: estudiar Diseño de
Modas. Lo que no sabía era que el
modelaje también iba a tocar a su
puerta y, pese a terminar la carre-
ra sin obstáculos, fueron las pasa-
relas las que la consagraron. Lleva
11 años modelando y siempre
está presente en los desfiles
y eventos más relevantes del
país —como Cali Exposhow o
Colombiamoda— representan-
do a reconocidos diseñadores
nacionales. Pero también ha
trabajado en pasarelas inter-
nacionales: vivió un tiempo en
Asia modelando en Hong Kong,
Singapur y la Semana de la Moda
de Tokio, con marcas como Dior
o Channel. Desde hace un tiem-
po vive en Bogotá, pero se niega a
considerarse como una rola más
y tiene claro que, aunque le gusta
vivir el momento, eventualmente
se irá a vivir a Londres. Cuando
no está frente a una cámara o en
una pasarela, María Teresa se la
pasa en festivales musicales de
todo el mundo, especialmente de
música indie, como el Sziget Fes-
tival de Budapest, en Hungría, el
último en el que estuvo.

6
MISCELÁNEA
EL RANKING EL RÉCORD

LOS 5 MEJORES
RESTAURANTES
DEL MUNDO
1. ELEVEN MADISON PARK
Nueva York, Estados Unidos
Ocupa el primer lugar por mezclar a la perfección
hospitalidad y gastronomía en un entorno icónico.
Su tipo de comida es neoyorquina fusionada con
cocina europea moderna.

2. OSTERIA FRANCESCANA
Módena, Italia
Massimo Bottura, el chef del restaurante, le apostó
a una cocina italiana contemporánea. Sus platos, al
igual que el sitio, tienen una gran influencia artística
sobre todo por la poesía, el arte y el jazz.
3. EL CELLER DE CAN ROCA
Girona, España
El restaurante de los tres hermanos Roca mezcla
técnicas de vanguardia y múltiples ingredientes para
crear platos muy estilizados, que además están dise-
ñados para evocar recuerdos, emociones y el paisaje
de la región.
EL FISICOCULTURISTA
MÁS VIEJO DEL MUNDO
Con 85 años, Jim Arrington tiene el ré-
cord mundial por ser el fisicoculturista
más viejo de todos. Comenzó a entrenar a
los 13 años, inicialmente, para impresio-
nar a las mujeres. Después se convirtió en
una pasión de tiempo completo y ha par-
ticipado en 60 competencias de fisicocul-
turismo, de las cuales ha ganado 16. Toda-
vía sigue activo y compitiendo: hace una
rutina en la que trabaja todo el cuerpo de
dos a tres días a la semana.
EL MEME

4. MIRAZUR
Menton, Francia
El chef argentino Mauro Colagreco trabaja con
ingredientes de su propia huerta y del mercado de
Ventimiglia. Por eso sus platos mediterráneos son GIMNASIOS
tan frescos y con alimentos con mucho sabor.
EN DICIEMBRE

5. CENTRAL
Lima, Perú
Es el primero en Latinoamérica y es un recorrido por

GIMNASIOS
la diversidad peruana con platos de todas las altitu-
des de los Andes, el Amazonas y el mar. Central logró
que Lima fuera un destino obligatorio.
EN ENERO

8
 ALGUIEN PAGA POR ESTO EL VOYERISTA

MARION
COTILLARD
ACTRIZ FRANCESA

LA APP
EL CARRO SUBMARINO
DE JAMES BOND
ALARMY
PRECIO: 997.000 DÓLARES
(2990 MILLONES DE PESOS)
El Lotus Esprit sumergible es uno de los carros más famosos del ¿Le cuesta volver a la rutina?
007. Apareció en La espía que me amó, estrenada en 1977 y protagonizada ¿Madrugar es lo peor que le
por Roger Moore. En la película, Bond maneja el Lotus por un muelle y se puede pasar? ¿Tiene que oír la
lanza al océano para evadir a un helicóptero que lo persigue. Una vez en el alarma más de una vez para le-
agua, el carro se convierte en un submarino solo con oprimir un botón. Fue vantarse de la cama? Si es su caso
encontrado hace 29 años en un contenedor en Nueva York y comprado por baje esta aplicación. Básicamente,
apenas 100 dólares (unos 300.000 pesos). Funciona perfecto como subma- para apagar esta alarma tiene que
rino, pero no es apto para ser manejado. La subasta fue en Londres y aun- resolver una ecuación, tomarle
que inicialmente el nombre del comprador se mantuvo anónimo, después se foto a su baño o a cualquier otra
supo que se trataba de Elon Musk. El millonario inventor y empresario pagó cosa que la app le indique. Ya no
por el Lotus con la idea de convertir este concepto en realidad. tiene excusas para quedarse dor-
mido porque “la alarma no sonó”.
Además es gratis y está disponible
para iOS y Android.

9
CINE // SOHO

Churchill,
el discurso que
ganó la guerra
El 18 de enero se estrena en Colombia Las horas más oscuras, la película que expone
uno de los momentos más difíciles que asumió Churchill al enfrentar a los nazis en la
Segunda Guerra Mundial.

Si por algo se destacaba Winston Churchill,
además de su liderazgo, era por su impresio-
nante capacidad oratoria. Por eso uno de los mo-
mentos relevantes de Las horas más oscuras muestra
al ex primer ministro dando un discurso a los ingleses
que ya daban por perdida la guerra contra la Alemania
nazi. “Porque sin victoria no puede haber superviven-
cia”, dice, mientras sale entre aplausos, ocultando la
angustia que le produce decidir entre negociar un tra-
tado de paz con Hitler o mantenerse fiel a sus ideales
y a la libertad de una nación.
Es claro que en el mundo del cine y las grandes pro-
ducciones hay una tendencia a reconstruir los hechos
de la Segunda Guerra Mundial. A mediados de 2017,

10
 LOS PROTAGONISTAS
GARY OLDMAN
Cuando le ofrecieron el pa-
pel de Churchill, Oldman lo
rechazó en un principio. No
La película muestra a un sabía qué le podía aportar
a un rol que han interpre-
Churchill menos heroico y tado otros con tanto éxito.
Finalmente se animó cuan-
más humano para demostrar do supo que no sería una
biografía sino una película
que también cometió errores sobre las cinco semanas
más difíciles del primer
en su lucha contra Hitler. ministro. Además, quería
trabajar con el director Joe
Wright, recordado por el
Christopher Nolan revivió la batalla de Dunkerque con capítulo de Black Mirror,
“Caída en picado”, uno
una espectacular producción; Jonathan Teplitzky, el mis- de los más exitosos de la
mo de Burning Man, dirigió la película Churchill, basada serie de Netflix.
en la vida del ex primer ministro británico justo antes de
dar vía libre al desembarco de Normandía. Incluso series,
como The Crown, lo incluyeron para hablar de la historia OLDMAN COMO CHURCHILL
de su país. Gary Oldman pasó
Ahora lo hace Joe Wright, el reconocido director de más de 200 horas
en maquillaje
Orgullo y prejuicio. Pero esta no es una representación sometiéndose a una
más: según dicen los críticos, la película muestra a un transformación que
Winston Churchill menos heroico y más humano que, requirió engordar con
prótesis muy pesadas.
sin querer derribar al ícono británico, pretende demos- Para prepararse para
trar que también cometió errores en su lucha contra la el papel leyó todos
Alemania de Hitler y los nazis. “Sangre, esfuerzo, lágrimas los libros y artículos
sobre Churchill y
y sudor” es una de las frases más recordadas del ex primer estudió su psicología
ministro británico y Wright la plasma en su película sin para no hacer un
dificultad. acento sobreactuado y
poder interpretar sus
Gary Oldman es el encargado de revivir al “León Bri- discursos con más
tánico” y, de acuerdo con las imágenes que se han co- naturalidad. Ademas,
nocido previas al estreno, el parecido es increíble. conoció todos los
lugares donde el primer
También hay una impresionante interpretación de ministro vivió y trabajó.
la voz, pues muchos recuerdan la dificultad que tenía
Churchill para pronunciar la “s” y Oldman lo llevó a la pelí-
cula con total naturalidad. Su preparación duró un año en un
proceso de cuatro fases que consistieron en una investigación
a fondo, el trabajo de su voz, recorrer los lugares frecuenta- WINSTON CHURCHILL
La historia que contará
dos por Churchill y la personificación a punta de maquillaje. esta película es sobre
Sin embargo, hay comentarios que aseguran que Oldman la angustia que sintió
cuando asumió el cargo
mostró a un hombre totalmente débil y dependiente de su es- de primer ministro y no
posa, algo en lo que muchos difieren. Esto tiene que ver con el sabía qué hacer con los
hecho de que el actor —al estudiar su psicología— notara que soldados británicos va-
rados en Dunkerque du-
en privado no tenía la misma fuerza que expresaba en públi- rante la Segunda Guerra
co. De todas formas, gracias a este papel, el británico es favo- Mundial. Es considerado
rito a ser nominado a los Premios Óscar como mejor actor. como uno de los líderes
más importantes durante
Escena tras escena, el espectador podrá experimen- la guerra. También es re-
tar la fuerza de los discursos de Churchill a través de cordado por ser un gran
Elizabeth Layton (Lily James), una mecanógrafa joven y orador y por haberse
ganado un Nobel de
tímida que debe escribir los pensamientos que él le dicta. Literatura. Esta es la de-
Gracias a ello, es una de las primeras personas en enterar- cimoquinta película que
se de las difíciles decisiones que toma el mandatario en se hace sobre Churchill.
un momento histórico para el mundo. Sin duda Las horas
más oscuras se convertirá en una película obligatoria para
el repaso de la historia universal.

11
LIBROS // SOHO
LOS
SECRETOS
DE “LA VOZ”
El hombre que dirigió los últimos 20 años de carrera
de Frank Sinatra cuenta las intimidades de uno de los
artistas más influyentes del siglo XX.
C
uando Eliot Weisman comenzó a trabajar como mánager
de Frank Sinatra, en 1975, el cantante estadounidense ya
era toda una leyenda de la música. No solo tenía 60 años
—40 de ellos de vida artística—, sino que había vivido su mayor
época de esplendor y de fama unas décadas atrás, durante los años
cuarenta y cincuenta. El sex symbol que encantaba con su voz y pro-
tagonizaba películas taquilleras se había convertido en un hombre
que se asomaba a la tercera edad, tenía fama de problemático y mu-
chos decían que ya había pasado su cuarto de hora.
Pero Weisman asumió el reto. Uno difícil, porque Sinatra es-
taba acostumbrado a una vida de hoteles cinco estrellas, aviones
privados, restaurantes costosos, joyas para su esposa y plata para
repartirles a sus amigos, sobre todo cuando estaban en proble-
mas. Así que su labor, antes que nada, fue garantizar que el dinero
siguiera llegando.
Por fortuna, la voz de Sinatra seguía ahí. Así que con un poco
de esfuerzo y olfato para los negocios, Weis-
man logró que el cantante se anotara algunos
de sus éxitos más recordados, como el álbum
Duets, que hoy sigue siendo el más vendido Con el paso de
de su carrera, o las giras masivas como Toge-
ther Again —junto con Dean Martin y Sammy
los años, Sinatra
Davis Jr.— y Ultimate Event Tour. Le fue tan empezó a olvi-
bien que se quedó junto a Sinatra por dos dé-
cadas, hasta su muerte en 1998.
dar incluso la
Pero mientras organizaba los concier- letra de sus
tos, las giras y las grabaciones de los álbu- canciones.
mes, Weisman también tenía que lidiar con
un montón de problemas dentro del equipo.
El principal era que, con el paso de los años, a
Sinatra la edad le empezó a pasar factura. Ya no solo era su
personalidad difícil —algunas veces encantador y otras un
poco despreciable—, o su mal genio, sino la pérdida de me-
moria (alguna veces, incluso, olvidaba la letra de sus cancio-
12
The Way It Was:
My Life with Frank
Sinatra / Eliot
Weisman,
311páginas. Hachette
Book Group, Inc.
Por: José Vicente Guzmán
nes), la mala visión o los problemas de audición. Todo eso
causado, según sospecha Weisman, por unos antidepresivos que “La
voz” —como llaman a Sinatra en Estados Unidos— tomaba en exceso.
Esa y otras historias hacen parte de The Way It Was: My Life with
Frank Sinatra, un libro de Weisman y la periodista Jennifer Valoppi
publicado en octubre y que resume los 23 años que el mánager tra-
bajó con el artista y fue testigo de su éxito, su decadencia y su retiro.
Debido a que Weisman terminó siendo amigo y confidente de
Sinatra y su familia, el texto está lleno de anécdotas curiosas y re-
veladoras. Una de las más llamativas es que el cantante siempre
cargaba con una Uzi dorada que le había regalado la primera mi-
nistra de Israel, Golda Meir, y que en un viaje a Verona, Italia, casi
los mete en problemas: unos agentes de inmigración se subieron
al avión y les preguntaron si tenían algo que declarar, y aunque el
arma estaba escondida en el piso, dijeron que no. El equipo pasó
los minutos más largos de su vida, pero al final, los agentes solo
se tomaron unas fotos con Sinatra y salieron
sonrientes del avión.
El libro también cuenta que Weisman in-
tentó hacer que Sinatra dejara de tomar los
antidepresivos que, creía, estaban deterio-
rando su salud. Pero Barbara, la cuarta es-
posa del cantante y quien estuvo con él hasta
su muerte, no lo permitió, pues temía que al
retirárselos o cambiárselos por otros, Sinatra
se tornara violento o se descontrolara.
En 1996, “La voz” se retiró por su mala sa-
lud y, sobre todo, por la pérdida de la memo-
ria. Tras su retiro, su estado se deterioró aún
más y murió dos años después de un ataque al
corazón. Hasta ese momento, e incluso después por temas de su
herencia, Weisman estuvo al pie del cañón. Por eso, más que una
colección de anécdotas, el libro es una oda a su amigo, su jefe y al
artista que más ha admirado en su vida.
 BAR // SOHO

El coctel del guayabo

Sí, aunque suene contradictorio, existe un coctel diseñado para
que se lo tome después de una noche de excesos. Es el bloody mary,
un clásico que no falla.
Este coctel nació en un bar de París
alrededor de 1920. El estadounidense
Fernand Petiot pidió vodka y zumo de
tomate mezclados en partes iguales. Diez
años más tarde, en el hotel St. Regis de Nue-
va York, ya lo preparaban con pimienta,
limón, salsa inglesa y tabasco, creando así También
el bloody mary. La historia del nombre es
más conocida: dicen que se lo pusieron por
funciona muy
María I de Inglaterra, quien condenó a 300 bien para
protestantes a la hoguera y recibió el apodo arrancar la
de María “la Sanguinaria”.
Aunque es un coctel muy clásico, ya hay noche o como
muchas variaciones. La receta base es una aperitivo.
mezcla de vodka, jugo de tomate, cítricos,
sal de apio, tabasco, salsa inglesa y rába-
no picante. Pero no es una camisa de fuer-
za. Por ejemplo, existe el red snapper que,
en vez de vodka, se hace con ginebra; o el
bloody María, que se prepara con tequila.
El adorno (o garnish) también ha cambiado
mucho, en lugar del clásico apio se le puede
poner tocineta, mini hamburguesas y hasta
un pedazo de pollo. La combinación, aun-
que no lo crea, es buenísima.
Foto: Juan Moore
VIAJES // SOHO

Fotos: Cortesía Gran Hotel Potrerillos

EL GRAN HOTEL
En Mendoza, Argentina, se encuentra un ícono de la hotelería
montañera desde 1940. Es el Gran Hotel Potrerillos y parece
sacado de una película.

14
No hay un mendocino que no conozca
este hotel. Es de esos sitios que una vez
se visitan no se olvidan. Queda al pie de
la cordillera de los Andes y frente al di-
que Potrerillos. Es un paisaje que quita el
aliento.
El Gran Hotel Potrerillos recuerda un
poco al hotel de El resplandor por lo im-
ponente que es, los nevados al horizonte
y porque pareciera estar detenido en el
tiempo. Pero, lejos de ser un espacio ate-
rrador, produce justo todo lo contrario:
una tranquilidad absoluta.
Desde 1940 empezó su construcción en
manos del arquitecto Arturo Civit. Los reco-
nocimientos no tardaron en llegar y pronto
se convirtió en patrimonio provincial. Pero
mantener un hotel de este nivel no ha sido
fácil y cerró en dos oportunidades.
En 2005, después de casi 15 años de es-
tar abandonado, el hotel tuvo una nueva
oportunidad y resurgió con tanta fuerza
que será difícil que vuelva a cerrar. Gran
parte de la fachada y la arquitectura ori-
ginal se mantuvieron, pero por dentro es
mucho más moderno y tiene todas las co-
modidades de un hotel de lujo.
Es un hotel boutique con 34 habitacio-
nes, salas enormes con chimenea, terrazas
y patios para disfrutar del clima, una pis-
cina con vista al dique y a la montaña y un
restaurante gourmet —con comida típica
mendocina y argentina—, que es uno de los
mejores de la provincia.
Además, una ciudad que tenga más ár-
boles que habitantes merece ser visitada.
Así es Mendoza, una de las nueve Grandes
Capitales del Vino y un destino de enotu-
rismo —para los amantes del vino— emer-
gente. La ciudad es una parada obligatoria
para los escaladores que van al Aconcagua
—la montaña más alta de los hemisferios
meridional y occidental—, para los viaje-
ros de aventura y quienes quieran hacer
los Caminos del Vino. DÓNDE: Luján, Mendoza (Argentina)
Los imperdibles para visitar son las
PRECIOS POR NOCHE: Desde 400.000 pesos la
bodegas como Casa Vigil, Séptima y Los estándar y desde 500.000 la suite.
Toneles, la olivícola Laur —después del
vino, el aceite de oliva es su industria más ¿CÓMO LLEGAR?: Desde Panamá puede tomar un
vuelo directo a Mendoza con Copa Airlines y
importante— y hacer el obligado recorrido de ahí a Luján hay una hora en carro.
citadino. Para cerrar como dios manda,
hay que hacer una parada en Entre Cielos:
además de tener su propio viñedo tiene un
spa turco para quedar como nuevo.
15
VIDA NOCTURNA // SOHO

Fotos Karen Salamanca

Segundo, de primera
Hace unos meses abrió Segundo y, rápidamente, se convirtió en uno de los restaurantes
favoritos de los bogotanos. Tiene un concepto único y un bar con mucho protagonismo.

Los restaurantes cada vez tienen más pinta de bar y los bares cada vez
le apuestan más a tener muy buena comida. El grupo Takami, conscien-
te de esta nueva movida, abrió Segundo, un sitio que mezcla a la perfección
un bar con todas las de la ley y un restaurante de primer nivel. De hecho, la
arquitectura del lugar fue pensada de esa manera y es un espacio que sobresa-
le. Tiene una barra imponente con su propio ambiente y un comedor amplio
con un ventanal enorme. Es un restaurante de cocina de autor y, aunque el
concepto ya suena trillado, en Segundo la comida realmente tiene el sello de
Adolfo Cavalie. El chef peruano reinterpreta algunos clásicos aunque también
hay otros platos que no encontrará en ninguna parte; eso sí, siempre trabajan-
do con alimentos locales sin perder los sabores de cada producto. El menú está
inspirado en su recorrido como cocinero pero con su propia filosofía. Del co-
medor pruebe el pulpo con lentejas, las mollejas de ternera, el ceviche, el tartar
y el arroz meloso. Del bar también hay mucho de dónde escoger y todo es bue-
RECOMENDADO SOHO
El cochinillo confitado
nísimo; pida, por ejemplo, el ají dulce, las bombas de carne y la mazorca avella- con cremoso de coliflor.
nada. Pásese por ahí y después nos da las gracias.
Dónde: calle 85 n.º 12-90 / Instagram: @segundobogota

16

El primer dron
submarino
Si bucear y la vida marina son lo suyo, este juguete es para usted. Con iBubble
puede desde tomarse una selfie hasta hacer documentales bajo el mar, como todo un
Un equipo de aficionados
al buceo y de ingenieros
franceses creó iBubble,
el primer dron subacuático
autónomo, con el que podrá
hacer videos semiprofesio-
nales de la vida submarina
(funciona con cámaras GoPro
de Alta Definición). ¿Cómo?
Es muy sencillo. El iBubble
navega solo con un sistema
patentado de ubicación con el
que sigue al buzo y graba todo
lo que él ve. Usted puede na-
dar libremente y con una pul-
sera lo conduce, escoge el án-
gulo de cámara que prefiera e
incluso le puede decir que siga
GADGETS // SOHO
profesional.
tortugas, tiburones u otros
animales de tamaño mediano.
Lo mejor es que puede dejar el
iBubble en el agua y manejarlo
a control remoto mientras ve
lo que sucede en tiempo real.
Otras de sus característi-
cas son que puede sumergirlo
hasta 60 metros y la batería
dura una hora. Además, tie-
ne unos sensores para que no Las primeras unidades serán enviadas en junio
se estrelle contra arrecifes o de 2018.
corales, y tampoco pone en
Cuesta 2699
DÓLARES
peligro la vida marina.
El iBubble nació como una
iniciativa del crowdfunding (unos 8 millones de pesos).
Indiegogo y ya superó su meta
La consigue en www.indiegogo.com
comercial inicial.
17
 SEXO // SOHO

UNA VEZ
INFIEL,
SIEMPRE
INFIEL
Si para ciertas parejas una infidelidad es una ofen-
sa imperdonable, para otras puede ser la oportunidad
para revivir el romance en la relación. Por eso no existe una
regla universal para condenar a los infieles. Sin embargo,
una encuesta hecha a 10.000 estadounidenses, publicada
en la revista Playboy, pretende dar a conocer cómo reac-
cionaría una persona a una infidelidad. La encuesta mues-
tra que la generación más tolerante a cualquier engaño
—empezando por una mentira— son los baby
boomers (85 %), es decir, aquellos entre los 55 y 70 años.
Les siguen los de la generación X (79 %), que tienen entre
37 y 55 años; y, luego, los millennials (74 %), que tienen
entre 22 y 36 años. A estos últimos no les queda tan fácil
hacer borrón y cuenta nueva. Por otro lado, las mujeres
son quienes perdonan una infidelidad con más facilidad:
el 71 % perdonó alguna vez a su compañero por un en-
gaño, frente al 57 % de los hombres. Lo curioso es que el
44 % de las mujeres y el 33 % de los hombres fueron más
allá y les dieron una nueva oportunidad a sus parejas des-
pués de un segundo engaño. Aún más sorprendente es
que el 71 % de las personas cree que los infieles pueden
Foto 123rf

cambiar. Pero según una investigación de la

Universidad de Denver, las personas que han engañado en
una relación pasada son tres veces más propensas a recaer.

SEXO DE 25 MINUTOS EL PORNO Y LOS DATOS

El sitio web Saucy Dates encuestó a
3836 personas para averiguar la dura-
ción ideal de una relacion sexual. Las mu-
jeres esperan que, sin contar el juego pre-
vio, dure 25 minutos, algo que está lejos
de la realidad. Según una investigación de
la Universidad de Queensland, en Austra-
lia, la penetración solo dura 5 minutos en
promedio hasta que el hombre llega al clí-
max; mientras que una mujer puede tardar
entre 20 y 30 minutos en venirse. Por eso,
es casi imposible llegar a un acuerdo en-
tre los dos sobre cuánto debe durar el sexo.
Y, aunque es difícil, para la doctora Carla
Marie Manly, una buena forma de compen-
sar es lograr que el juego previo dure 13 mi-
nutos en los que ella sea el centro de atención.
LAS MUJERES
La revista Playboy publicó un estudio
en el que explica por qué el 60 % de las
mujeres dicen que no les gusta ver porno-
grafía. La encuesta asegura que algunas
mujeres sienten que el porno no representa
con precisión el placer femenino, principal-
mente, porque no hay juegos previos. Otro
de los problemas es que ven a las actrices
como si las estuvieran obligando. Para esto,
proponen hacer videos previos de los acto-
res invitando al espectador a divertirse y así,
posiblemente, no se sentirían incómodas
viendo este contenido. Pero, sobre todo, el
problema es que las mujeres no saben qué
categorías buscar, razón por la que termi-
nan evitándolo.
DEL VOYEUR
Voyeur es un documental que Netflix
lanzó el año pasado sobre la relación
entre Gay Talese, un reconocido perio-
dista, y Gerald Foos, quien compró un mo-
tel para espiar a las parejas teniendo sexo.
Foos ingresaba todos los días a un ducto que
construyó detrás de una pequeña ventila-
ción en el techo para que sus huéspedes no
lo descubrieran observándolos. Cada deta-
lle que veía, lo anotaba en su cuaderno. Uno
de los datos que más sorprendió es que tenía
el número de orgasmos de los hombres y el
de las mujeres. Con cierto orgullo, Foos ase-
gura, como si fuera un investigador, que las
mujeres no disfrutan tener sexo en motel
mientras que los hombres sí.

18
 BELLEZA // SOHO

PARA VERSE BIEN

TODO EL AÑO
Desde hace algunos años, en el país se consiguen cada vez más productos para el cuidado de la piel.
Deje de pensar que es pura vanidad y arriésguese a sentirse tan bien por fuera como por dentro.

1 2 3

4 5

7
8 9
Foto Juan Moore

10 11

1 . G E L O R G Á N I C O PA R A A F E I TA R D E L’ O C C I TA N E 2 . S H A M P O O Y A C O N D I C I O N A D O R PA R A B A R B A Y P E L O D E K I E H L’ S 3 . G E L H U M E C A N T E C O R P O R A L
PA R A L A D U C H A D E K I E H L’ S 4 . P R O T E C T O R S O L A R H I D R ATA N T E M U LT I V I TA M Í N I C O D E O B O T I C Á R I O 5 . C R E M A H I D R ATA N T E A N T I E D A D D E L’ O C C I TA N E
6 . T Ó N I C O FA C I A L PA R A R E M O V E R I M P U R E Z A S D E E C C O R A 7. B Á L S A M O PA R A D E S P U É S D E A F E I TA R D E L’ O C C I TA N E 8 . C R E M A H U M E C TA N T E C O N
Á C I D O H I A L U R Ó N I C O D E E C C O R A 9 . G E L E X F O L I A N T E D E K I E H L’ S 1 0 . A C E I T E PA R A B A R B A D E K I E H L’ S 1 1 . C O N T O R N O D E O J O S E N G E L D E L’ O C C I TA N E .

19
MOTOR // SOHO

Foto Mercedes-Benz
Fórmula 1 de calle
Este Mercedes se presentó hace unos meses en el salón del automóvil de Frankfurt,
Alemania. El AMG Project ONE tiene la tecnología y el diseño de las pistas, pero está
pensado para las calles.
Con motivo de los 50 años de las versiones algo únicamente visto en carros de carreras, espe-
AMG de Mercedes-Benz, la marca alemana creó cialmente en los Fórmula 1.
este prototipo, que tiene como misión principal ser Este proyecto tardó varios años en ser realidad y lo
el primer carro de calle con tecnología de un Fórmu- estudiaron centenares de ingenieros de Mercedes-Benz
la 1 y revolucionar para siempre el concepto de los para convertirlo en un auténtico volador. Por eso está
carros deportivos. ¿Qué tan cierto es? Pues para em- compuesto principalmente de fibra de carbono para re-
pezar, le contamos que funciona como un híbrido ya ducir su peso y utiliza la tecnología y el software de con-
que tiene motor de combustión —similar al que usa ducción de un Fórmula 1 para mejorar y asegurar su uso
un F1— y cuatro motores eléctricos que, en conjun- efectivo. El interior no se queda atrás: la cabina, para dos
to, alcanzan más de 1000 caballos de potencia. Eso le personas, es totalmente deportiva con un timón similar
permite alcanzar de 0 a 200 km/h en menos de seis al de un carro de carreras y dos pantallas táctiles de diez
segundos y puede llegar a una velocidad máxima de pulgadas. Aunque todavía no se conocen precios ni fecha
hasta 350 km/h. Además, sería el primer carro de ca- oficial de venta al público, se estima que este poderoso
lle que alcance las 11.000 revoluciones por minuto, hipercarro no bajaría de los 2,5 millones de dólares.

LA CIFRA

4
Esos son los títulos de Fórmula 1 conseguidos por el
piloto británico Lewis Hamilton, de la escudería Mercedes.
Además de coronarse campeón el año pasado, Hamilton
logró el título en 2014, 2015 y 2008, igualando así la
marca de cuatro o más títulos de Juan Manuel Fangio,
Michael Schumacher, Alain Prost y Sebastian Vettel.

20

Fotos cortesía Vélez
Ser valiente se lleva
en la piel
Nada más personal que un tatuaje, por eso Vélez y SoHo se unieron
para tatuar la piel y los productos de cuero de unas 600 personas que se
animaron a poner su sello.
Como sabrá, Vélez estuvo en nuestra fiesta
de aniversario 18 y a la gente le gustó tanto lo
que montamos que quisimos repetir. Por si no
estaba enterado, esa noche repartimos unas ma-
nillas de cuero que funcionaban como un pase
para un tatuaje temporal. La gente hizo fila du-
rante toda la rumba para tatuarse.
Les pedimos a tres tatuadores que se le midie-
ran a hacer lo mismo a los clientes que pasaron
por las tiendas Vélez de Unicentro y Titán Plaza,
en Bogotá, y el centro comercial Santafé, en Me-
dellín. Juan Carlos Salas, Katherin y Lizeth Gar-
zón fueron los duros que aceptaron la invitación.
Pero además de poder llevar su sello en la
piel, también lo estampaban en los produc-
tos de cuero de Vélez. Era muy fácil, solo te-
nían que comprar lo que más les gustara,
ESTILO // SOHO
proponer un diseño y listo. Lo mejor de todo es
que no había límites, usted podía llevar cualquier
idea y se la tatuaban sin problema mientras una
máquina láser hacía exactamente lo mismo
en el cuero.
Sobra decir que fue un éxito. Según las cuen-
tas, a cada tienda asistieron alrededor de 200
personas y salieron felices con su marca per-
sonal. Además, en Colombia muy pocos sitios
personalizan sus productos tal y como usted se
lo imagina.
La buena noticia es que esta personalización
es permanente. Sí, leyó bien. Puede ir a cual-
quiera de las 14 ciudades del país en las que hay
tiendas Vélez y la hacen con mucho gusto. Así
que vaya craneándose un diseño, recuerde que
aquí los límites no existen.
21
MOTOR // SOHO

Un camino
diferente
El nuevo Maverick Trail, de Can Am, es un auténtico juguete para los amantes de los vehículos
off road y es la perfecta excusa para animarse a entrar a un segmento que cada vez crece más.

22
Si existe un carro que prometa horas y
horas de diversión sin que uno se canse,
bien puede ser el Maverick Trail, de Can
Am, la marca canadiense que se especia-
liza en vehículos recreacionales como
cuatrimotos, motos de agua, nieve y más.
Y es que para muchos manejar una simple
cuatrimoto ya no basta, llegó la hora de
subirle un poco a las revoluciones. Con el
Maverick Trail usted logrará precisamen-
te eso, y fresco, que irá mucho más seguro
de lo que piensa.
Conocido por el término side by side
(lado a lado), por el hecho de que uno va
conduciendo con alguien al lado, este vehí-
culo robusto se caracteriza por ser el más
pequeño y liviano de la marca: mide tan
solo 127 centímetros de ancho —algo que
permite su paso por senderos cerrados y
compicados— y puede incluso caber en el
platón de una camioneta pick-up. Pero que
el tamaño no lo engañe: el Maverick Trail
es una auténtica máquina de potencia óp-
tima para cualquier desafío en terreno
agreste. ¿Cómo lo consigue? En gran par-
te gracias a un eficiente motor bicilíndrico
que, dependiendo de su versión, tiene 51
o 75 caballos de potencia. Eso, créanos, es
suficiente para trepar montañas, superar
lodo, pasar pequeños pozos y hasta alcan-
zar los 100 km/h en una carretera destapa-
da. Ah, y es automático, así que olvídese de
los cambios.
El Maverick Trail viene con suspen-
sión delantera y trasera, ambas con barras
estabilizadoras, lo que lo hace práctica-
mente imposible de volcar a pesar de las
condiciones en las que lo esté manejan-
do. Además, tiene amortiguadores de gas,
tracción completa y un tren impulsor que
usted controla con un solo botón para ele-
gir entre 4x2 o 4x4. Traducción: donde
sea que lo meta, usted va a ir cómodo en
la cabina interior que, a propósito, viene
asegurada con barras de acero, cinturones
de seguridad y con la opción de añadirle
puertas laterales reforzadas.
Como sabemos que lo va
a manejar con amigos y se
va a meter paseos bravos, el
Maverick Trail viene con una
parte trasera con anclajes para
maletas, neveras y todo lo que
necesite cargar. Y tranquilo,
que si se le hace de noche, las
luces son led y le iluminan de
sobra el camino. Eso sí, el cas-
co para todos sus ocupantes
es obligatorio.
Personalizado
Para que el Maverick Trail sea
tan único como su dueño, Can
Am tiene disponibles más de
50 accesorios para que usted
lo engalle como quiera. Desde
lo básico, como puertas late-
rales, bómper trasero y delan-
tero, espejos, paneles de luces
y barras reforzadas de acero
hasta gallos como suspensio- ¿DÓNDE LO CONSIGUE?
El Maverick Trail y todos los productos
nes para las sillas, cinturones Can Am son distribuidos por Los Coches
deportivos, maletas de carga y en Colombia la marca cuenta con ocho
con anclajes para seguridad y concesionarios. El precio empieza desde
barras de sonido para totear los $66.800.000.
música mientras maneja.
23
WEB TV // SOHO

Fotos Cortesía Netflix

El regreso
de The Crown
Resentimientos, rebeldía y tragedias personales mandan la parada
en esta segunda temporada que hunde su mirada en los conflictos de
Isabel y Felipe. No tiene pierde.
La primera temporada de The Crown cámara, son el príncipe consorte Felipe y la
fue un éxito rotundo. Creada por Peter princesa Margarita. El esposo de Isabel es
Morgan, gran conocedor de la historia de humanizado mediante sus tragedias perso-
la reina Isabel y su mandato, la serie es una nales, pero no por eso es perdonado por sus
mezcla novelesca de historia mundial y errores y crueldades como pareja y como
drama romántico. La británica Claire Foy padre. Su deseo de sobresalir y de formar
interpreta a la reina, una figura doble. Por a sus hijos se traduce en el sufrimiento de
una parte, es una mandataria que debe li- su familia. Por otro lado, la hermana me-
derar a su país mientras sufre una serie de nor de la reina busca libertad y amor, lo
crisis y cambios en el orden mundial; por que se convierte en una serie de escándalos
otra, es la matriarca de una compleja fami- —uno de ellos hasta incluye fotos desnuda,
lia llena de pequeños resentimientos y re- lo cual no es exageración de un guionis-
beldías. El contraste entre los dos papeles ta sino un toque de realidad histórica—.
de Isabel sigue siendo tan fascinante como The Crown no es una de esas series que no
en la primera temporada, pero la nueva logra dar la talla después de una excelente SOHO LE CUENTA
entrega se permite desarrollar más a quie- primera temporada. En vez, presenta una El creador de la serie, Peter Morgan,
planea que The Crown tenga por lo
nes la rodean. Los más beneficiados, por lo nueva tanda de episodios envolventes y menos 60 episodios a lo largo de seis
menos en términos de tiempo delante de la sorprendentemente divertidos. temporadas.

24

Los secretos del ron
Es uno de los tragos más apetecidos por los colombianos, pero también uno que guarda cientos de
años de misterios. Por eso un experto responde las dudas más frecuentes.
JAVIER HERRERA
Director y presidente del Congreso Internacional
del Ron. Estuvo en Colombia para certificar a
la Licorera de Caldas como la mejor empresa
productora de ron de 2016.
Seguramente cada vez que usted tiene en
las manos una botella de ron se pregunta:
¿es mejor con hielo? ¿Lo guardo en la neve-
ra? ¿Cómo identifico un buen ron? Por eso, en
SoHo aprovechamos el paso por Colombia de
un experto en el asunto para ponerlo al tablero y
preguntarle algunas de las cosas más importan-
tes para, de una vez por todas, disfrutar de un
buen ron. Tome nota.
¿Cuáles son los tipos de ron que debo probar?
Lo primero es probar uno de cada proceso
de producción: el primero que es de guarapo de
caña, lo ponen a fermentar y lo destilan. El se-
gundo es el de miel de caña, que es el jugo eva-
porado en agua y posteriormente concentrado.
El tercero parte del residuo que queda de la pro-
ducción del azúcar, lo fermentan y lo destilan.
También debe probar un ron agrícola, hecho de
jugo de caña; busque rones de ediciones especia-
les, por ejemplo, en Colombia hay unos que se
hacen a 54 grados de concentración de alcohol y
tienen unos sabores especiales a madera que no
encuentra con rones comunes de 40 o 35 grados.
25
BAR // SOHO
Foto 123RF
¿Cómo reconocer uno de buena calidad?
La primera condición es que le guste, si es así,
disfrútelo sin remordimientos. Si lo que está pro-
bando es un ron blanco, el sabor debe ser a mela-
za o a caña de azúcar. Si el ron está envejecido, le
debe recordar al guarapo con una notas de made-
ra, vainilla, cacao, cáscara de naranja y pasas.
¿Hay formas de arreglar un mal ron?
Si es un mal ron, siempre sabrá mal, pero hay
unas opciones para disimularlo. La primera es
combinarlo; ponerle un poco de azúcar ayuda a sua-
vizar ese alcohol. Obviamente, si el trago es malo, el
guayabo al día siguiente va a ser insoportable. Un
alcohol bien producido no debe darle resaca.
¿Cómo hacer un buen cuba libre?
Yo lo hago con unas gotas de lima —eso re-
fresca el ron y le da acidificación— y también
recomiendo ponerle unas notas de chocolate.
De igual manera, el clásico con gaseosa de cola
y unas gotas de lima no tiene pierde. Eso sí, re-
cuerde que el mejor ron para prepararlo debe
tener más notas de cacao, uva pasa y suele ser
más dulce.
HOMBRE DE MUNDO // SOHO

Felipe y
Sebastián
Falla
Los hermanos Falla
son los genios detrás de
Whitman, una marca de
ropa para hombre hecha a
la medida. Su propuesta es
clásica y está inspirada en la
moda europea. Son expertos
en trajes, abrigos, chaquetas
livianas, camisas y zapatos.
Abrieron la tienda hace poco
más de un año y les ha ido tan
bien que ya tienen clientes
extranjeros y planes para
seguir creciendo.

PARA LA NOCHE
Use un abrigo en lana
que horme bien (es
decir, a su medida) y en
un color oscuro como
el azul.

PARA LA TARDE
Una chaqueta liviana, un
blazer desestructurado o
una chaqueta
impermeable de algún
color tierra.

26 Foto: JUAN MOORE

 MODA // SOHO

2
1

CHAQUETA O-COONOR
1 DE WHITMAN

2 CAMISA A CUADROS 3
DE PURPLE STITCH

4
3 ZAPATOS
OXFORD DE WHITMAN

4 RELOJ DE KOMO STORE

5 CINTURÓN DE SOLOIO

6 PANTALON 5
DRILL DE GEF

7 MEDIAS DE SOLOIO

FOTOGRAFÍA: JUAN MOORE

PRODUCCIÓN: MARCELA
CARVAJAL

AGRADECIMIENTOS: WHITMAN,
WWW.WHITMANSTORE.COM /
KOMO STORE, CRA. 11 N.° 84-09,
PASEO LA CABRERA / SOLOIO,
C.C. ANDINO, TEL.: 6104909
/ GEF, WWW.GEF.COM.CO, CL.
85N.° 13-53

6 7

28

¿Solo o acompañado?
Levantarse a correr por su cuenta,
o ir al gimnasio sin hablarle a nadie, son
cosas que parecen estar quedando en el
pasado. Ahora la cuestión es encontrar
compañeros para hacer ejercicios juntos
o unirse a una clase grupal. ¿Qué tan bue-
no es? Un estudio hecho por la Facultad
de Medicina de la Universidad de New
England, en Estados Unidos, encontró
que sorpresivamente son muchos los be-
neficios de ponerse en forma en compa-
ñía. El estudio dividió a dos grupos de estu-
diantes en dos categorías: los que entrenan
juntos y los que no, y les pidieron que eva-
luaran sus resultados desde tres aspectos:
mental, físico y emocional. Entre los re-
sultados se encontró que aquellos que lo
hicieron en grupo mejoraron su calidad de
vida y se redujo su estrés diario; además,
establecieron una mejor rutina y se sin-
tieron más motivados a seguir entrenan-
do. Una de las causas principales, dice el
estudio, es que se genera una especie de
competencia sana con quienes uno entre-
na: aumentan las ganas de demostrarle al
otro que se está mejorando. Así mismo, la
investigación reveló que, aquellos que se
ejercitaron solos, no sufrieron grandes
cambios personales ni en su entorno y
que, además, tuvieron que hacer ejercicio
por más tiempo para sentirse satisfechos.
Esto, sin embargo, no quiere decir que
hacer ejercicio por cuenta propia traiga
efectos negativos. Cualquier tipo de ejer-
cicio y rutina establecida son, por supues-
to, una ganancia y un hábito saludable.
Simplemente, para algunos, la verdadera
motivación está en los demás.
29
EN FORMA // SOHO
LA MASA CORPORAL
Pesarse y dividir ese número por su esta-
tura es una fórmula sencilla para saber si
usted tiene unos kilos de más. La realidad
es que no sirve mucho. Nutricionistas y ex-
pertos en obesidad aseguran que esta escala
es bastante obsoleta al no tener en cuenta
dos factores vitales. El primero es que no
determina cuánta grasa corporal tiene us-
ted en su cuerpo, algo que debe medirse con
exámenes de laboratorio. El segundo es que
jamás mide la circunferencia de su cintura,
y ese aspecto puede ser vital para descubrir
enfermedades relacionadas con la obesidad,
como la diabetes o los problemas cardiacos.
LOS INTERVALOS
Últimamente se han puesto de moda las
rutinas rápidas que aseguran resultados
efectivos con poco tiempo de práctica. Por
ejemplo, los ejercicios de intervalos de alta
intensidad (también conocidos como HIIT,
por sus siglas en inglés) que consisten en
alternar periodos cortos de tiempo de un
entrenamiento cardiovascular muy intenso
con periodos de una intensidad baja. Un
estudio de la Universidad de North Carolina,
en Estados Unidos, encontró que estas
rutinas ayudan a que usted siga quemando
grasa tiempo después de terminar el
ejercicio, mejoran la presión sanguínea y
hasta incrementan su estado físico.
LA MEJOR HORA
Mucho se habla sobre la hora ideal para
hacer ejercicio y parece que nadie tiene la
respuesta exacta. Una investigación del
American Council of Exercise descubrió
que eso depende del tipo de vida que lleve
cada uno: alguien que trabaja ocho horas
diarias frente a un computador, puede
tranquilamente ejercitarse en la noche,
mientras que a alguien que tiene que
moverse por la ciudad varias veces al día,
le conviene hacerlo en la mañana. Lo que
sí es claro es que ambos horarios tienen
beneficios: en la mañana, le da más energía
para todo el día; en la noche, su cuerpo está
más preparado para el ejercicio.
IDEAS // SOHO

Cartera de
Salvatore
Ferragamo.

OBJETOS DE
RECONCILIACIÓN
Hay engaños que un buen regalo puede ayudar a aliviar... O, por lo menos, a pensárselo de nuevo
para que el amor siempre sea más fuerte. Vaya a la fija con estas recomendaciones.

Brillo Labial de Lancôme. Botas Sequined de Chanel. Reloj de Freywille. Pluma Mon Heritage
de Mont Blanc.

30
 Gafas de Chanel. Espadrilles Mademoiselle de Perfume Aura de Loewe. Pulsera Hardwear de
Longchamp. Tiffany & Co.

Blusa de encajes y seda de CH Abrigo de CH Carolina Herrera. Camisa blanca de CH Carolina

Carolina Herrera. Herrera.

Bragas con apertura de Ellipse. Cartera Glitter Tea Rose Dinky Bragas con apertura de Ellipse. Labial de Lancôme
de Coach.

31
 PE R F I L

TATUADO
EN LA
PIEL
El reconocido tatuador colombiano
Carlox Angarita escribió para SoHo
sobre cómo y por qué empezó a tatuar y
los beneficios que este oficio ha traído a
su vida.

D
esde que cumplí 14
años mi vida ha es-
tado ligada al tatua-
je. Fue por esa época que, al
descubrir un libro de tatuajes
africanos, me llené de valor y
le propuse a mi mejor amigo
que nos marcáramos la piel.
No teníamos pistolas ni nin-
gún implemento adecuado, sin
embargo, nos la ingeniamos
para construir una máquina
con ayuda del motor de un ra-
dio casero. Ante las ansias, ni
siquiera esperé a encontrar el
diseño ideal y me basé en unas
letras chinas que estaban en
una botella de cerveza. Años
después, me di cuenta de que
mi primer tatuaje era la frase
“siete grados de alcohol”.
Nunca murió esa intriga
por la piel y la tinta. Por eso,
a los 21 empecé a trabajar
en un estudio profesional
que quedaba cerca a Vía Li-
bre, en el centro de Bogotá.
Ahí inicié como todos: tomé
un curso para ser aprendiz,
pero era el encargado de ha-
cer el aseo en la tienda y, muy

32

Un norteamericano me pidió que
le tatuara una lata de Colombiana
porque amó nuestro país.
ocasionalmente, dibujaba. Cuan-
do empecé a tatuar de verdad, no
hacía lo que hago ahora. Me dedi-
caba a hacer dibujos prediseña-
dos y letras. Pero como disfruto
de la pintura y el óleo, quise ha-
llar la forma de involucrar los dos
mundos. Entonces nació mi con-
cepto de realismo: con ayuda del
manejo de los colores y los deta-
lles fue que marqué la diferencia
con otros tatuadores. Antes, na-
die hacía eso; y ahora, los que sa-
ben hacerlo bien son muy pocos.
Como tatuador he consegui-
do varios logros: en La Plata,
Argentina, por ejemplo, me die-
ron tres reconocimientos en un
solo encuentro (mejor tatuaje
de realismo, mejor tatuaje del
día y mejor tatuaje de la conven-
ción). También me han invitado
a algunas de las convenciones de
tatuajes más importantes del pla-
neta y he vivido en ciudades como
PE R F I L
Los Ángeles, donde tatué
durante cuatro años. Ahora
estoy en Bogotá y tengo tres
estudios en distintas partes
de la ciudad. Además, he teni-
do el privilegio de compartir
momentos y anécdotas inte-
resantes con las personas que
he tatuado. Recuerdo mucho
cuando, por ejemplo, un nor-
teamericano me pidió que le
tatuara una lata de Colombia-
na porque amó nuestro país
y quería honrarlo con lo que
más disfrutó.
Es una profesión única en
la que siempre intento simu-
lar los detalles más pequeños
de una foto o de un contexto
para que la piel adopte, con la
mayor naturalidad, lo que se
quiere plasmar. A fin de cuen-
tas, mi idea es y siempre será
dejarle a quien recibe el tatua-
je un recuerdo imborrable.
33
 ¿CUÁL SERÁ EL PRÓXIMO
Son dos de los candidatos más opcionados para convertirse en el próximo mandatario

EDAD

61 AÑOS

Sergio
Fajardo ¿CUÁL FUE SU
ÚLTIMO SUELDO COMO
GOBERNADOR?
$ 12.831.000
(CIFRA DE 2015)

¿Dónde estudió? ¿A cuál partido político pertenece? Subdirector de El Colombiano, columnista de ¿Cuántos seguidores tiene
Universidad de los Andes, Universidad de Independiente (aunque será candidato por Coalición los diarios El Mundo, El Espectador y de la revista
Dinero, también es miembro fundador de la en Twitter?
Wisconsin-Madison Colombia, un movimiento sin personería jurídica que
integran Compromiso Ciudadano, Alianza Verde y el Polo Comisión Facilitadora de Paz de Antioquia 961.000**
¿Dónde nació? Democrático)
Medellín ¿Qué libros tiene publicados? ¿Cuántos seguidores tiene
¿Qué cargos políticos ejerció? 1 El poder de la decencia (también ha en Facebook?
¿Quién es su esposa?
Alcalde de Medellín (2004-2007), gobernador de participado en varios libros de matemáticas de la 288.000**
Antioquia (2012-2015) Gobernación de Antioquia)
Ana Lucrecia Ramírez Restrepo, médica psiquiatra
**Hasta diciembre 20 de 2017
¿Qué otros cargos ejerció? ¿Qué estudió?
¿Cuántos hijos tiene? Director del Centro de Ciencia y Tecnología de Antioquia, Matemáticas, máster en matemáticas,
2 (Mariana y Alejandro) miembro del Consejo Nacional de Ciencias Básicas,
miembro de la Comisión Nacional de Maestros y
doctor en matemáticas

Doctorados, miembro de la Junta Directiva de la

Fundación de Apoyo a la Universidad de Antioquia.

34
 PRESIDENTE DE COLOMBIA?
de la república y representan movimientos políticos muy distintos. ¿Con cuál se queda?

EDAD

41 AÑOS

Iván
¿CUÁL FUE SU
ÚLTIMO SUELDO COMO
SENADOR?
$ 29.800.000
Duque
(EN 2017)

¿Dónde estudió? ¿Qué cargos políticos ejerció? ¿Qué libros tiene publicados? ¿Cuántos seguidores tiene en
Universidad Sergio Arboleda, American University, Senador de la República (2014-actualidad) 3 (Maquiavelo en Colombia, Pecados Facebook?
Georgetown University
¿Qué otros cargos ejerció? monetarios y coautor de La economía naranja) 32.000**
¿Dónde nació? Consultor de la Presidencia del Banco Interamericano ¿Qué estudió? **Hasta diciembre 20 de 2017
Bogotá de Desarrollo, asesor del Panel de Investigación Derecho, maestría en derecho internacional
conformado por el secretario general de las Naciones
económico, maestría en gerencia pública
¿Quién es su esposa? Unidas, consejero principal de Colombia en el Directorio
María Juliana Ruiz, abogada Ejecutivo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID),
jefe de la División de Cultura, Creatividad y Solidaridad ¿Cuántos seguidores tiene en
¿Cuántos hijos tiene? del BID, asesor del ministro de Hacienda y Crédito Público Twitter?
3 (Luciana, Eloísa y Matías) (Juan Manuel Santos en ese entonces), consultor de la 100.300**
Corporación Andina de Fomento (CAF)
¿A cuál partido político pertenece?
Centro Democrático

35 Ilustración: Cristian Escobar

LISTA // SOHO
Los diez mejores
Todos los años, la revista estadounidense Time entrega un listado de los 25 inventos
JIBO
Asistentes personales, como Amazon Echo o Google
Home, ya son frecuentes en algunas casas. Sin embar-
go, Jibo va más allá y funciona como un pequeño robot
que habla, se mueve y se adapta al estado de ánimo
de su dueño. Además de resumirle noticias y contarle
cómo está el clima, tiene una pantalla integrada y una
cámara fotográfica. Aunque le faltan mejoras, Jibo es
un enorme avance en la manera en cómo los humanos
y las máquinas van a interactuar en el futuro.
VICIS ZERO1
El fútbol americano es el deporte
más popular de Estados Unidos.
También el que más contusiones
en la cabeza y daños cerebrales
produce. Es un tema muy polémi-
co del cual Sam Browd, un neuro-
cirujano estadounidense se cansó
de escuchar. Por eso, reconstruyó
los cascos de los jugadores, que lle-
vaban décadas siendo los mismos,
y les cambió el material para ser
más resistentes. Ahora es el casco
oficial de 18 equipos profesionales
de la NFL.
36
ESIGHT 3
Conocidas como las gafas
más poderosas del planeta,
tienen la capacidad de de-
volverles la vista a los ciegos.
¿Cómo? Por medio de una
cámara de alta definición que
graba lo que el usuario está
observando y un algoritmo
que determina el contraste y
el alcance de las imágenes.
TESLA
MODEL 3
El Tesla Model 3 es el
mejor carro eléctrico de
la actualidad. Alcanza
velocidades máximas
superiores a los 200 km/h
y tiene una autonomía de
hasta 340 km con una sola
carga. El precio de entra-
da es de 35.000 dólares.
IPHONE X
El nuevo consentido de Apple es
el celular más sofisticado de la
historia. Cuenta con una pantalla
táctil que se extiende por todo el
equipo, un procesador optimizado
para realidad aumentada y una
cámara tan inteligente que des-
bloquea el celular según la cara
del usuario. Es también el iPhone
más caro de la historia y este mes
llegó a Colombia por precios su-
periores a los 4 millones de pesos.
 inventos de 2017
más revolucionarios del año. En SoHo escogimos los que más nos gustaron.
THYSSENKRUPP
MULTI
La empresa alemana de ascensores ThyssenKrupp
quiere cambiar para siempre la forma de movilizar-
se por los edificios con MULTI, un sistema que deja
a un lado las cuerdas y el peso y lo reemplaza con la
tecnología magnética implementada en trenes de
alta velocidad. Los ascensores podrán, incluso, mo-
verse hacia los lados. El primer MULTI se construi-
rá en 2021 en Berlín.
BEMPU
La grasa es un elemento funda-
mental en los bebés, pero muchos
de ellos no la tienen, ya sea porque
nacieron con bajo peso o fueron
prematuros. Sin embargo, a veces
las incubadoras no alcanzan y
los recién nacidos son propensos
a desarrollar problemas respi-
ratorios. Esta pequeña pulsera
tiene como objetivo prevenir eso
monitoreando constantemente la
temperatura. Si descubre que está
baja, inmediatamente produce un
sonido y una luz naranja.
37
NEST
SECURE
Este avanzado sistema de
seguridad, en vez de pensar
en cómo alejar a los intrusos,
está mejorando el ingreso de
los residentes. El usuario, por
medio de un pequeño apa-
rato, similar a un llavero, lo
acerca a un sensor y la puerta
se abre sin llaves.
ADIDAS
FUTURE-
CRAFT 4D
Estos tenis no solo tienen en
cuenta las medidas exactas
del usuario, sino también va-
riables como la flexibilidad,
el contacto con el piso y la
amortiguación. La clave está
en la impresión 3D que usa la
marca y que le permite perso-
nalizar cada milímetro.
HALO TOP
¿Por qué un helado entra en la
lista? Porque es el helado más
saludable jamás producido,
con tan solo 360 calorías por
tarro (unos 500 ml). El secreto
es la utilización de polialcohol,
azúcar de caña y el endulzante
estevia entre sus ingredientes.
Halo Top fue pensado para que
personas en dieta o con sobre-
peso no tengan que privarse de
este alimento. Su éxito ha sido
tal que ya es el helado más ven-
dido en Estados Unidos.
38
 PE R F I L

JOHN GOT T I

EL ÚLTIMO DON
Para la mayoría de la gente solo han existido dos mafiosos
legendarios en el mundo: Al Capone y Pablo Escobar.
Pero hay un tercero, el norteamericano John Gotti,
cuya apasionante historia se estrena en la gran pantalla
interpretada por John Travolta.
POR VALERIA ANGARITA ALZATE Fotos Getty Images

G
otti empezó su vida criminal
en 1950 como soldado, que, en
otras palabras, viene siendo un
sicario. Inicialmente, secuestraba ca-
miones y mataba; pero tenía muy claro
que su objetivo era hacer parte de la or-
ganización criminal más grande de ese
entonces: la mafia.
En 1973, logró unirse a la familia más
poderosa de la Cosa Nostra: los Gambino.
Las otras eran Colombo, Bonanno,
Lucchese y Genovese.
Estas cinco habían logrado
organizarse como una
empresa con jerarquías
y reglas de juego propias.
Hay un jefe a la cabeza y
lo siguen un subjefe, el
consigliere (consejero), los
capos y luego vienen los
soldados, que son los que
hacen el trabajo sucio.
El jefe de los Gambino
era “Don Carlo” Gambino,
que según muchos fue el que
inspiró el personaje de El
Padrino. Era un hombre que
hablaba suave pero no dejaba
rival alguno con cabeza. Ha
sido uno de los pocos capos en
la historia real que nunca fue a
la cárcel y murió ya viejo.
En los años setenta,
Escobar, como el narcotráficante más poderoso; y Gotti, como el mafioso más glamuroso.
un sobrino suyo fue ase-
sinado por un “soldado” de la mafia ir- el patriarca murió y su cuñado Paul
landesa y quería vengarse. Esa tarea se Castellano subió al mando. Pero no era
la puso a Gotti y fue su oportunidad para muy querido por algunos pues se con-
ganarse un puesto dentro de la familia. sideraba más un empresario que un
Gotti mató al irlandés y por el crimen gánster y eso a Gotti lo enfurecía. Decía
fue condenado a siete años de cárcel que se creía más importante y rico que el
pero logró salir en menos de dos. resto, además no venía de la calle como
Cuando recuperó su libertad, como casi todos los demás.
había respetado el principio sagrado de Mientras los Gambino se adaptaban
la omertá —nunca delatar—, Gambino a su nuevo líder, el FBI le declaraba la
lo promovió a capo. Un tiempo después, guerra a la Cosa Nostra. Los perseguían
y los tenían intercepta-
dos para, por fin, tener
una prueba que los man-
dara a la cárcel. Uno de
los primeros casos que
abrieron fue para inves-
tigar a Gotti. Pero era
esquivo y lograba salirse
con la suya. Siempre.
Aunque la mafia es-
taba metida en todo lo
que diera dinero, la dro-
ga no era un negocio que
viera con buenos ojos. Si
bien muchos se lucra-
ban del narcotráfico, al-
gunos jefes, como Paul
Castellano, decían que
el que se metiera con
droga sería castigado
con la pena de muerte.
Al Capone pasó a la historia como el gánster más famoso del mundo; Pablo Así era como él quería
deshacerse de Gotti, por

39
 En 1965 fue arrestado por primera vez
por secuestrar tres camiones.
más que él no estuviera metido en ese
negocio.
Gotti era consciente de esto y sa-
bía que o lo mataba o esperaba a que
lo mataran. Pero dar de baja al jefe de
una familia no era una opción. La Cosa
Nostra tenía sus reglas y para poder ma-
tar a Castellano necesitaba el permiso
de los otros cuatro jefes. Incluso el sim-
ple hecho de sugerirlo podía hacer que
lo mataran. Aun así, Gotti se la jugó y
tuvo la bendición de tres de los líderes:
ellos también estaban cansados de la fi-
losofía del duro de los Gambino.
Su primera estrategia fue
pedirle a su principal rival dentro de los
Gambino que fuera su mano derecha:
“Sammy the Bull” Gravano. Se ganó su
confianza y así supo información vital
interna, como que Castellano estaba
tan seguro de que nadie lo iba a trai-
cionar que solo andaba con un chofer,
“Tommy” Bilotti, y desarmado.
Gotti supo que, el 16 de diciembre de
1985, Castellano iba a cenar al Sparks
Steak House en Manhattan; sabía incluso
la hora a la que llegaría. Contrató a cuatro
sicarios que se vistieron igual: gabardina
beige y sombrero de piel ruso. La idea era
Gotti mandó a matar a Paul Castellano, el jefe de la familia Gambino. Unos sicarios
le dispararon cuando se bajaba del carro frente a un restaurante en Manhattan.
Gotti sabía que si no mataba a Paul
Castellano, él lo mataba, pero asesinar
al jefe de una familia simplemente no
era una opción.
que si alguien los veía, no pudiera identifi-
carlos fácilmente después. Desde un carro
que estaba parqueado frente al restauran-
te, Gotti contemplaría todo con Gravano.
Cuando Castellano se bajaba del ca-
rro, los cuatro sicarios le dispararon
sin piedad, y a su chófer también. Los
cuerpos quedaron tendidos en el piso
de la Calle 46 y la escena es una de las
postales más recordadas de la mafia
italoamericana. En cuestión de días,
todos los mafiosos sabían quién había
dado la orden.
En enero de 1986, eligieron a Gotti
como el nuevo jefe de los Gambino. Así
empezó una nueva era, no solo para la
familia sino para la Cosa Nostra e inclu-
so para la cultura popular. No es usual
que un mafioso muestre su cara, pero
Gotti era adicto a la fama y adoraba la
atención de los medios de comunica-
ción. Esta fue una de las tantas normas
40
que rompió en un negocio en el que la
discreción es la regla de oro.
Antes de subir al poder, “Johnny
Boy”, como también se le conocía, era
un poco más sencillo, andaba en cami-
setas y con joyas baratas. Sin embar-
go, después de llegar al trono, nunca se
puso otra cosa que no fueran trajes de
seda de 2000 dólares. Se volvió adicto a
la ropa hecha a la medida —incluso tenía
medias con sus iniciales— y sus visitas a
la peluquería eran infaltables.
Por esa época, Gotti fue llamado a un
juicio por asalto: peleó con un vendedor
de neveras de Queens por un puesto de
parqueadero. Este no tenía ni idea de que
se estaba enfrentando a un temido ma-
fioso y lo acusó con la Policía. Poco antes
de la citación, los medios de comunica-
ción ya daban a conocer que Gotti era el
nuevo líder de los Gambino y su pasado
era difundido sin reservas por la prensa.
 PE R F I L

JOHN GOT T I

“Sammy The Bull” (derecha) se convirtió en el subjefe de la familia Gambino El testimonio de Gravano contra Gotti duró nueve días y fue suficiente para
después del asesinato de Castellano. condenarlo a cadena perpetua en la cárcel de máxima seguridad donde murió.

Una de esas anécdotas es sobre el ase-
sino de su hijo. En 1980, un vecino de los
Gotti, John Favara, atropelló a uno de
sus hijos y lo mató. Aunque se trató de un
accidente, Gotti y otros más se vengaron.
Nunca se supo a ciencia cierta qué pasó,
pero se rumora que lo secuestraron y que
el mismo Gotti lo mató con una motosie-
rra. Nunca encontraron su cuerpo.
Después de escuchar historias como
esas, el vendedor, súbitamente, adquirió
mala memoria. Ya no recordaba exacta-
mente cómo era el hombre que lo había
golpeado y, entonces, no había funda-
mento para un juicio.
Esa era la primera vez que Gotti sa-
lía limpio de un tribunal, pero la dicha
le duró poco, pues unos días después le
llegó una nueva citación. Esta vez era el
FBI el que lo acusaba. Tenía suficiente
evidencia para condenarlo por extor-
sión, y a algunos de sus asociados, por
tráfico de heroína.
Se presentó al tribunal como una
celebridad en la carpeta roja. Posaba
sin problema frente a las cámaras de los
medios de comunicación y así empezó
su protagonismo en las portadas de re-
vistas y periódicos. Incluso en medio de
este escándalo mediático sacaba tiempo
para conversar con periodistas mujeres
(nunca hombres). Tomaban expreso y
les contaba de su vida. Todo el mundo le
pedía autógrafos. Y es que la gente lo veía
como alguien a quien admirar. No tenía
la imagen de un sanguinario
sino la de un tipo con buenas
intenciones. En cierta forma, “Va a morir
un fenómeno parecido al de
Pablo Escobar en Medellín.
porque se
Fue lo que llamaron “el pri- negó a venir
mer mafioso de portada”.
El juicio se realizó en
cuando lo
agosto de 1986, el mismo año en llamé”, decía
el que subió al poder. Ya para
ese entonces, “Johnny Boy” era
Gotti.
considerado un héroe local. Sin
embargo, para desgracia del FBI, los acusa-
dos fueron absueltos de sus cargos. Después
se supo que en el jurado del caso —que lo
declaró inocente— había algunos miembros
que se habían dejado sobornar.
Más tarde vino un tercer juicio. Esta
vez estaba acusado de haber ordenado
un asesinato. El crimen se trataba de un
tiroteo a un líder sindical por haber des-
trozado un restaurante de un amigo de
Gotti. La prueba que tenían era un audio
en el que supuestamente habría dado la
instrucción. Pero la calidad de la graba-
ción era tan mala que fue declarado ino-
cente una vez más.
Con su tercer juicio ganado, ya no había
duda de que Gotti era invencible e intocable.
Por ir en contra de
la ley y salir siem-
pre por la puerta
grande, lo apodaron
“Don de Teflón”. No
importaba cuántas
pruebas tuvieran, él
siempre se salía con
la suya.
***
Hacia 1989, el
gobierno de los Estados Unidos estaba
desesperado por atrapar a Gotti y, por
primera vez, armó un plan de inteligen-
cia que se convirtió en una cruzada para
detenerlo. El FBI dispuso de todos sus
recursos y de miles de dólares para ha-
cerlo caer. Tenía un par de infiltrados en
la familia Gambino y fue así como des-
cubrió que Gotti frecuentaba un club del
barrio italiano de Nueva York llamado
Ravenite.

41
 PE R F I L
Los agentes pusieron micrófonos por
todo el club y lo vigilaban 24 horas al día
desde un edificio que quedaba al frente.
La jugada les permitió descubrir quiénes
hacían parte de la organización, de hecho,
supieron de personas que no tenían ni idea
de que formaban parte de la Cosa Nostra.
Pero los audios eran inaudibles. La músi-
ca del club no permitía que se escuchara
lo que decían e incluso cuando limpiaron
el ruido de fondo, había largas pausas en
las que nadie hablaba; y, luego, cuando se
escuchaban las voces nuevamente, reto-
maban una conversación banal.
No lograban conseguir nada que lo in-
criminara. Analizaron una y otra vez los
videos de vigilancia y, por fin, descubrie-
ron una pista que sería clave. Notaron que
cada vez que dejaban de hablar, una señora
salía de un edificio del lado. Esa señora era
Nettie Cerelli, la viuda de un soldado de los
Gambino. También se dieron cuenta de que
dentro del club había una escalera que co-
nectaba con los apartamentos del edificio.
El Día de Acción de Gracias de 1989,
unos agentes del FBI entraron al apar-
tamento de la viuda. Sabían que había
salido de la ciudad y era su única oportu-
nidad, pues Cerelli solo salía de su casa
cuando los Gambino se lo pedían para
llevar a cabo sus reuniones. Unos se que-
daron en la calle vigilando, mientras que
otros instalaban un transmisor que Gotti
y sus asociados nunca encontraron.
Ahora solo quedaba esperar. Esta vez se
escuchaba fuerte y claro. Gotti era un poco
sordo así que nunca susurraban. Primero,
confesó que había matado a su asociado
Robert DiBernardo: “Cuando DiB fue ‘gol-
peado’ (wacked, en inglés, era la expresión
que usaban para decir que lo habían mata-
do), me contaron una historia. Estaba en la
cárcel cuando lo ‘golpeé’. Sabía por qué se
estaba haciendo. Lo hice de todos modos”.
Era solo el principio. Después vinie-
ron más frases en las que aceptaba que
era un asesino: “Cada vez que tienes un
compañero que no está de acuerdo con
nosotros, lo matamos”. También quedó
grabada una que pasaría a la historia:
“Va a morir porque se negó a venir cuan-
do lo llamé. Fue lo único que hizo mal”.
42
Así mismo, ordenó a un mafioso para que
le dijera a otro capo —que estaba empezando
un negocio por su cuenta— que le iba a cor-
tar la cabeza y admitió el asesinato de Louis
Milito, uno de sus soldados. Hablaba tan có-
modo y seguro que también habló de su obs-
trucción a la justicia, la evasión de impuestos y
sus sobornos, entre otros crímenes.
El 11 de diciembre de 1990, el FBI arrestó
a John Gotti y a Sammy Gravano, su subje-
fe, por los asesinatos que habían confesado
en las cintas. Una vez más parecía seguro
de que no lo atraparían, pero tan pronto
escuchó un fragmento de la grabación supo
que esta vez no la tenía tan fácil. Esa misma
noche durmió en la cárcel.
Al día siguiente, Gravano le pidió al
FBI que le dejara oír los audios. Algo sim-
plemente no le cuadraba y estaba en lo
cierto. Escuchó una conversación de un
poco más de una hora en la que Gotti de-
cía que estaba cansado de la codicia de
Gravano y que por creerle sus chismes había
ordenado el asesinato de un amigo que, en
el fondo, era inocente. De la conversación
quedó claro que los días de Sammy estaban
contados. Eso fue suficiente para que “The
Bull” se convirtiera en el soplón más grande
en la historia de la Cosa Nostra.
Gravano contó todo. Confesó sus 19
asesinatos —incluyendo el de su cuña-
do—, contó todos los detalles sobre la
muerte de Castellano y testificó durante
nueve días todo lo que había que saber
sobre la mafia italoamericana. Con su
testimonio entregó a Gotti y a otros 35
integrantes de los Gambino.
“El teflón ha desaparecido. El Don está
ahora cubierto de velcro y todos los car-
gos se le han quedado pegados”, senten-
ció Jim Fox, el entonces jefe del FBI de
Nueva York. En junio de 1993, lo decla-
raron culpable y fue sentenciado a cade-
na perpetua.
Gravano solo pasó unos años en la cár-
cel y después entró al programa de Pro-
tección de Testigos. La mafia le puso a su
cabeza el precio de un millón de dólares,
por lo que fue a donde un cirujano plás-
tico y pidió que le dejaran la cara como
la de Robert Redford, pero solo terminó
haciéndose una rinoplastia.
 PE R F I L

John Travolta tuvo

que representar
a Gotti tanto
en la cima de su
gloria (arriba a
la derecha), como
en la decadencia
de sus días finales
tras las rejas
(abajo).

Años después, renunció a su nueva

identidad y volvió a dar la cara para una
entrevista y para el lanzamiento de su
biografía. Pero el crimen nunca dejó de
correr por sus venas y, en 2002, fue con-
denado por operar una importante red
de narcotráfico. Recuperó su libertad a
principios de 2017.

***
Sobre Gotti se decía que era un tipo
fascinante, pero que el poder se le había
subido a la cabeza y lo había traicionado.
Desde su celda en Illinois, Gotti se
rehusaba a dejar morir la Cosa Nostra y
nombró a su hijo mayor, John A. Gotti
Jr., como el nuevo jefe de los Gambino.
Pero en 1999 lo condenaron por extor-
sión y fue condenado a seis años de pri-
sión. Victoria DiGiorgio, la esposa de
Gotti, siempre lamentó que el padre de
sus hijos los hubiera metido a la mafia.
Gotti pasó su condena completamen-
te solo, apenas podía salir al patio una
hora al día. La única vez que salió de la
cárcel fue en 1998 para tratarse en el a cabo en un sitio no religioso, pues la Gotti nunca entendió que dirigía una
centro médico para presos federales en Diócesis de Brooklyn no permitió que organización criminal secreta. Que las re-
Missouri: le habían diagnosticado cán- fuera de otra manera. Asistieron unas glas de la mafia no se rompen, y una de esas
cer de garganta y tenían que operarlo 300 personas, pero nadie de las otras es que un gánster no es una figura pública:
para extraerle un tumor. Dos años des- cuatro familias de la Cosa Nostra, pues los mafiosos de portada no pueden existir.
pués, descubrieron que el cáncer había para ellos, el único legado que dejó Gotti Este pez grande murió por su boca por re-
vuelto y pasó el resto de su vida en ese fue el de un hombre que mató a su jefe y husarse a vivir bajo la alcantarilla. Pasó con
centro médico. que, por bocón, mandó a prisión a mu- Pablo Escobar, pasó con Al Capone y pasó
Murió en una celda el 10 de junio de chos de ellos. Lo enterraron junto a su con Gotti. No es posible ser un criminal de
2002, a los 61 años. El funeral se llevó hijo Frank. ese calibre y pretender salir bien librado.

43
 HOLLYWOOD Y EL
Harvey Weinstein, Kevin Spacey y otros se han hecho tratamientos
¿Realmente sirven? Estos

TRASTORNO
COMPULSIVO SEXUAL KEVIN SPACEY, GANADOR DE UN PREMIO
ÓSCAR Y PROTAGONISTA DE LA EXITOSA
IMPOSIBILIDAD DE CONTROLAR SERIE HOUSE OF CARDS, FUE ACUSADO
EL DESEO SEXUAL DE ABUSO SEXUAL POR SUCESOS
OCURRIDOS HACE DOS DÉCADAS

DESDE HARVEY WEINSTEIN, UNO DE LOS MÁS

IMPORTANTES PRODUCTORES DE LA

1983
el trastorno compulsi-
vo sexual, o adicción
INDUSTRIA CINEMATOGRÁFICA, FUE
DENUNCIADO POR ACOSO SEXUAL

CHARLIE SHEEN, EL EXPROTAGONISTA DE

sexual, es reconocido LA EXITOSA SERIE TWO AND A HALF MEN,
como una enfermedad CONFESÓ ESTAR CONTAGIADO DE SIDA
COMO CONSECUENCIA DE ESTA ADICCIÓN

MICHAEL DOUGLAS FUE UNO DE

LOS PRIMEROS EN ADMITIR SU
ADICCIÓN ANTE EL PÚBLICO

TIGER WOODS Y KATE MOSS SON

EL 12 % DE LOS HOMBRES ALGUNAS DE LAS CELEBRIDADES
Y EL 6 % DE LAS MUJERES QUE HAN ACUDIDO A THE MEADOWS, UN
CENTRO UBICADO EN ARIZONA PARA
DEL MUNDO SON ADICTOS
TRATAR SU ADICCIÓN
AL SEXO

44
 ACOSO SEXUAL
contra la adicción sexual después de sus escándalos.
son algunos datos.

45%
Las causas de la hipersexualidad aún son
desconocidas. Algunos consideran que son
deficiencias químicas o lesiones cerebrales

A The Meadows ofrece progra-

80
60%
mas de rehabilitación para
adictos a la pornografía, al
cibersexo y también trata la
adicción sexual en jóvenes
de 18 a 25 años DESDE ESTA DÉCADA
EXISTEN CLÍNICAS ESPE-
DE DÍAS ES LO QUE DURA UN CIALIZADAS PARA TRATAR
TRATAMIENTO EN THE MEADOWS PARA LA HIPERSEXUALIDAD EN
CURAR A UN PACIENTE CON ALGUNA
ADICCIÓN SEXUAL ESTADOS UNIDOS

40.000
DÓLARES —MÁS DE 100 “El sexo en Estados
MILLONES DE PESOS—
CUESTA UN TRATAMIENTO
Unidos es una obse-
EN THE MEADOWS sión. En otras partes
MASTURBACIÓN Y RELACIONES SEXUALES del mundo, un hecho”
COMPULSIVAS CON DESCONOCIDOS, ACOSO Marlene Dietrich
Y/O ABUSO SEXUAL SON ALGUNOS DE LOS
COMPORTAMIENTOS DE LOS ADICTOS
AL SEXO

45
 S Í M B O LO

Ximena
Córdoba
La reina pin-up de
Protagonistas
La presentadora y
modelo en su cara
más retro. Disfrútela.
Fotos ANDRÉS ESPINOSA

47
 S Í M B O LO

X I MEN A CÓRDOBA

El decálogo de
Ximena Córdoba
Esta increíble paisa 1 Fama: 15 minutos. 8 Vejez: Inevitable.
inició su carrera en
televisión en 2002 2 Maternidad: 9 Erotismo: Una
cuando, con apenas 22 Todo. Lo más impor- cualidad importante
años, fue la ganadora tante de la vida. en el ser humano.
de la primera edición
de Protagonistas de 3 Sexo: Un deleite. 10 Pornografía:
novela. En 2006, dejó Innecesaria.
Medellín para trabajar
en Estados Unidos y
4 Desnudo: Parcial.

desde 2013 triunfa

como presentadora en
5 Matrimonio: Algo
que se tiene que
Univisión, uno de los experimentar.
canales de habla hispana
más grandes del mundo.
SoHo le dio diez
6 Reality: Diversión.

palabras a Ximena
y ella nos respondió 7 Placer: Necesario.

con lo primero que

pensó. Lo dejamos con
sus respuestas y, por
supuesto, con estas fotos
que no se puede perder.

48
 S Í M B O LO

X I MEN A CÓRDOBA

51
 S Í M B O LO

X I MEN A CÓRDOBA

FOTOGRAFÍA: ANDRÉS ESPINOSA / ASISTENTE DE FOTOGRAFÍA: BORIS NIETO / DIRECCIÓN DE ARTE: HELENA FADUL / MODELO: XIMENA CÓRDOBA / MAQUILLAJE Y PEINADO: ÁLEX OSPINA / PRODUCCIÓN Y STYLING: ANA MARÍA
LONDOÑO, MARCELA CARVAJAL Y ANDRÉS YEPES.

AGRADECIMIENTOS: STUDIO F, WWW.STUDIOF.COM.CO, CARRERA 13 N.º 82-71 / VERDE LIMÓN, CARRERA 13A N.º 87-37 / PINK FILOSOFY, WWW.PINKFILOSOFY.COM, C.C. EL RETIRO / PÁJARO LIMÓN, WWW.PAJAROLIMON.COM, C.C. EL
RETIRO / NASTY PINS, WWW.NASTYPINS.COM / LEVI’S UNICENTRO / DIESEL, GLOBAL.DIESEL.COM, C.C. EL RETIRO.

53
54
 PE R F I L

EL P RÍ N CI P E

¿QUIÉN ES EL
COMPRADOR
DEL DA VINCI? Foto GETTY IMAGES / ARCHIVO PARTICULAR

Un enigmático príncipe confirma el dicho de que hay quienes

“predican, pero no aplican”.
Ha creado mansión más
desconcierto cara del mundo
la revelación y un yate de
de quién es el 500 millones
nuevo dueño del de dólares. Lo
cuadro más caro sorprendente
de la historia, el es que este
Salvator Mundi, futuro rey tiene
cuyo costo fue bajo arresto
de 450 millones a la mitad de
de dólares. Se su familia por
confirmó que despilfarro y
fue el heredero enriquecimiento
al trono de ilícito. Se trata
Arabia Saudita de una increíble
quien, según historia de
investigaciones dinastías,
del New York intrigas y
Times, también excesos que está
compró en sacudiendo a
secreto la Oriente Medio.

55
 El yate del príncipe heredero costó 500 millones de dólares. Tiene dos piscinas, pista para helicóptero y un pequeño submarino.

E
n Arabia Saudita vive un prín-
cipe que ha intentado construir
una imagen de sí mismo como el
cruzado en contra de los excesos y las ma-
las prácticas de la familia real. Se trata del
príncipe Mohamed bin Salman, el hijo del
rey Salman bin Abdulaziz con su tercera es-
posa. Bin Salman es el asistente segundo del
primer ministro y, desde 2015, el ministro
de Defensa de Arabia Saudita. Ese mismo
año, el rey retiró a su otro hijo, el príncipe
Mohammed bin Nayef, quien supuesta-
mente iba a ser su heredero, y lo puso en
arresto domiciliario para reemplazarlo por
Bin Salman como cabeza de la familia real y
heredero del trono en el futuro.
Con tan solo 32 años, el príncipe es, en-
tonces, una voz dominante en las políticas
militares, extranjeras, económicas y so-
ciales de Arabia Saudita. Eso ha provocado
descontento en la extensa familia real, in-
cómoda con el hecho de que una sola figu-
ra, tan joven y de un solo linaje, concentre
El heredero Ritz-Carlton y los ha presionado para que
firmen millones de dólares en activos si
tanto poder. al trono era uno de quieren evitar su enjuiciamiento y recobrar
A finales de 2017, Mohamed bin Salman
fue nombrado por su padre director de un
sus hermanos. Pero su libertad.
Vale la pena anotar que uno de ellos, el
comité anticorrupción. Tan solo unas ho- el actual monarca príncipe Al Waleed bin Talal, quien con-
ras después de su creación ya estaba orde-
nando arrestos al multimillonario príncipe
lo desplazó y trolaba la firma de inversiones Kingdom
Holding, era uno de los hombres más ricos
Al Waleed bin Talal, otros diez príncipes, Mohamed bin del mundo. Tiene participaciones importan-
cuatro ministros y decenas de exministros,
además de muchos hombres de negocios
Salman, de 32 tes en Apple, Citigroup, 21st Century Fox,
Twitter, entre muchas otras compañías
y funcionarios ricos del reino. Bin Salman años, será el conocidas, y el control de las redes de tele-
los detuvo extrajudicialmente en el hotel futuro rey. visión por satélite en todo el mundo árabe.

56
El palacio es una reconstrucción en que lo único original son los jardines. Un castillo del siglo XVII fue destruido para hacer una imitación que se ve demasiado nueva.

Como muchos son hermanos o primos,

no deja de sorprender que el heredero al
trono los haya encerrado con amenazas de
cárcel. Y a pesar de que es tan rico como
ellos, es percibido en su país como un es-
tadista moderno, reformista y austero que
ha intentado hacer política de una manera
diferente. Tras el desplome del precio del
petróleo (la principal fuente de riqueza del
país) en la última década, el gobierno ha tra-
tado de cerrar los déficits presupuestarios
con la disciplina financiera.
Por otra parte, muchos lo consideran
la oveja negra de la familia real por te-
ner una postura abierta en varios temas,
sobre todo de índole social. En 2015, Bin
Salman prometió que, después de su
muerte, su fortuna —que supuestamente
es de 32.000 millones de dólares— iría a
la caridad. También apoyó a las mujeres que Christie’s subastó por 450 millones EL CUADRO
al volante antes de que el reino anunciara de dólares hace poco más de un mes. El miércoles 6 de diciembre, The New
que les otorgaría el derecho a manejar. Al parecer, también acaba de adquirir York Times informó que la compra de
A pesar de esa imagen de sí que el prín- la mansión más cara del planeta, cerca Salvator Mundi se había realizado a nom-
cipe ha querido construir y proyectar, el de Versalles, Francia, y un yate de 500 bre del príncipe Bader bin Abdullah bin
diario The New York Times ha dedicado millones de dólares con dos piscinas. Mohammed bin Farhan al Saud, amigo per-
varios artículos a destapar una faceta de su Pero eso no es lo más grave: según la sonal del príncipe Mohamed bin Salman.
personalidad que no se conocía: el nivel in- investigación, el príncipe ha hecho esas La casa de subastas se negó a confirmar el
verosímil de su propio despilfarro, que va en compras mediante testaferros y empresas nombre del verdadero comprador y, sin
contravía de todo lo que pregona en público. fachada para que no se le relacione con el embargo, son varias las razones que permi-
Según la investigación del diario es- gasto excesivo del gobierno de una nación ten afirmar que Bader realizó esa compra a
tadounidense, Bin Salman no solo es en la que la línea que divide el dinero estatal nombre del príncipe.
el verdadero comprador del cuadro de la fortuna real (cuya proveniencia es bas- En primer lugar, según el diario, el prín-
más costoso de la historia, Salvator tante oscura) es cada vez más difusa, y don- cipe Bader no es lo suficientemente rico
Mundi, atribuido a Leonardo da Vinci, de la crisis se hace cada vez más evidente. como para realizar una compra tan costosa,

57

ni tiene una historia pública como coleccio-
nista de arte.
En segundo lugar, Bader es un vie-
jo amigo de Mohamed bin Salman, y al
menos una vez actuó en su nombre, en
la compra de un complejo turístico para
media docena de príncipes de la familia
inmediata de Mohamed.
¿Las razones para no haber hecho la
compra directamente? Como dice el artí-
culo de The New York Times: “Hacer una
compra de arte récord en su propio nom-
bre podría ser incómodo para el prínci-
pe heredero porque está dirigiendo una
campaña enérgica contra la corrupción
y el enriquecimiento personal de la élite
del reino, incluidos algunos de sus primos
reales”. Y continúa: “El Salvator Mundi de
Leonardo también puede ofender las sensi-
bilidades y violar las reglas del reino musul-
mán ultraconservador. La pintura de la épo-
ca del Renacimiento es una representación
reverencial de Jesucristo y los musulmanes
creen que Jesús no es el salvador sino un
profeta. Los clérigos saudíes también ense-
ñan que el islam prohíbe cualquier obra de
arte en la que aparezca un ser humano y que
la representación de cualquiera de los profe-
tas está especialmente prohibida”.
Aún así se rumora que el cuadro termina-
rá —ya sea como un préstamo, un alquiler o
un regalo— en el nuevo Louvre de Oriente
Medio, pues da la casualidad de que el prín-
cipe heredero de Abu Dabi, Mohammed bin
Zayed, es cercano a Mohamed bin Salman.
EL CASTILLO Y EL YATE
La cuestión de estas otras compras del
heredero al trono es mucho más complica-
da que la anterior. El Château Louis XIV,
construido en 2009 sobre los escombros de
un castillo del siglo XVII, se vendió hace dos
años en más de 300 millones de dólares. La
revista Fortune lo llamó “la casa más cara del
mundo”, sin embargo se desconocía la iden-
tidad del comprador.
Un nuevo artículo de The New York
Times —escrito por los periodistas Nicholas
Kulish y Michael Forsythe, publicado el 16 de
diciembre pasado— afirma que los documen-
tos rastreados y las numerosas entrevistas
conducen al príncipe. La historia del Château
Louis XIV es, dice el artículo, toda una “novela
PE R F I L
EL P RÍ N CI P E
El príncipe heredero Mohamed bin Salman (izquierda) y su hermano Mohammed bin Nayef (dere-
cha), quien era originalmente el verdadero heredero al trono. Aquí aparecen durante una reunión en
el Despacho Oval de la Casa Blanca.
financiera, con un abogado en el Gran Ducado
de Luxemburgo y un reparador para los muy
ricos de la nación mediterránea de Malta (…)
La propiedad del castillo en Louveciennes,
Francia, está cuidadosamente rodeada por
empresas ficticias en Francia y Luxembur-
go. Esas compañías son propiedad de Eight
Investment Company, una empresa saudita
administrada por el director de la fundación
personal del príncipe Mohamed. Los asesores
de los miembros de la familia real dicen que el
castillo, en última instancia, pertenece al prín-
cipe heredero”.
Según el diario, Eight Investment es la
misma compañía que financió la compra del
príncipe de un yate de 440 pies que le per-
tenecía a un magnate ruso. Esta sociedad
también compró recientemente una finca de
620 acres en Condé-sur-Vesgre, a una hora
de París: “Las dos nuevas propiedades fran-
cesas, Château Louis XIV y Le Rouvray, per-
tenecen a dos compañías francesas. Estas son
propiedad de una compañía de Luxemburgo,
Prestigestate SARL, que a su vez es propiedad
de Eight Investment (…). Eight Investment,
según documentos de la firma de abogados
Bermudan Appleby, ‘es propiedad de
miembros de la familia real saudita’. Entre los
conocedores de esos intríngulis se sabe que
quien está detrás de todo esto es Bin Salman”.
58
Al respecto, los paradise papers “reve-
laron —dice el artículo de The New York
Times— cómo pelotones de abogados,
banqueros y contables en Alemania, Ber-
mudas y la Isla de Man trabajaron para
transferir rápidamente la propiedad a
Eight Investment. El precio del yate, según
los borradores del contrato, fue de 420 mi-
llones de euros, o 494 millones en dólares de
hoy, incluso más que el castillo. Los correos
electrónicos entre los abogados indicaron
que el yate sería propiedad de una compa-
ñía de las Islas Caimán llamada Pegasus
VIII, que se creó en 2014. En ese momento
también se reveló que el príncipe Mohamed
había comprado otro yate de 60 millones,
rebautizado Pegasus VIII”.
Aunque, como recuerdan los periodis-
tas, se supone que en Arabia Saudita se les
hace seguimiento a los gastos y a las pose-
siones del gobierno, las recientes investiga-
ciones de los paradise papers y los papeles
de Panamá han mostrado detalles nuevos
y ocultos de la riqueza del príncipe. Estas
revelaciones han escandalizado no solo por
los montos del dinero invertido, sino por-
que el protagonista de esa racha de excesos
y despilfarros sea el hombre que tiene bajo
arresto a la mitad de su familia por actos de
ostentación económica injustificada.
 CRÓNICA

CHRI S TI N E KEELER

La relación secreta que tuvieron Keeler y el entonces ministro de Guerra John Profumo fue catalogada por
la prensa sensacionalista británica como un escándalo que llevó a la renuncia del funcionario.

CHRISTINE
KEELER
POR IGNACIO MAYORGA ALZATE Foto GETTY

La mujer que a los 20 años protagonizó un escándalo que

terminó tumbando al gobierno británico hace medio siglo
acaba de morir. Una historia de sexo y espionaje que
no se ha repetido.

M
ientras exhalaba su último
aliento el pasado 6 de diciem-
bre, Christine Keeler debió
haber recordado, en el desencanto de sus
momentos finales, la fantástica y trágica
vida que tuvo. Había participado, medio
siglo antes, en ostentosas fiestas de la más
alta sociedad británica en unas circuns-
tancias que habrían de cambiar la historia
de ese país y en las cuales ella fue la prota-
gonista principal.
La historia de su vida es una de las
más inquietantes del siglo pasado en
Inglaterra, quizás por el grado de fas-
cinación que produce en los ciudada-
nos del común la caída de los podero-
sos, o incluso la caída de un gobierno.
La alta sociedad
británica
siempre ha tenido
una franja de
perversión sexual.
Cuando todo eso sucedió, ella tenía ape-
nas la edad legal para pedir un trago en
un bar. Sin embargo, ya era bailarina to-
pless en un concurrido cabaret del Soho
londinense. Antes de llegar a los 18 años,
según relata en sus memorias, Keeler ya
había perdido la virginidad y a un hijo,
había presenciado la lujuria masculina
y había aprendido a aprovechar para su
beneficio personal lo que la genética le
había regalado por azar. Había descu-
bierto que la belleza era un elemento
tan importante en la vida como el dinero
y el poder.
Una noche conoció a Stephen Ward,
un reconocido osteópata, quien estaba
de moda por incluir entre sus clientes a
lo más granado del mundo del poder y de
la farándula del Londres de los años se-
senta. Entre estos había personajes tan
famosos como Winston Churchill, lord
Astor, Elizabeth Taylor y Frank Sinatra.
Por cuenta de dos breves aventuras se-
xuales, la joven inglesa terminó en el ojo
del huracán. Alcanzó la inmortalidad en

61
 Antes de llegar a
los 18 años, Keeler
ya había perdido
la virginidad y a
un hijo.
la cultura popular mientras era el eje cen-
tral de un triángulo amoroso que los ta-
bloides inflaron de manera irresponsable.
EL ENCANTADOR WARD
Stephen Ward llevaba ya casi dos dé-
cadas en el centro de la movida social lon-
dinense cuando se encontró con la joven
Christine. Era un arribista carismático y
tenía un talento para el dibujo que había
empezado a explotar a la par que florecía su
carrera como osteópata. El seudodoctor era
el favorito de importantes personajes de la
política inglesa como duques, lores, minis-
tros y estrellas de Hollywood. La relación
con Keeler empezó de manera espontánea.
Estaba seducido y fascinado por la pretty
baby, a quien convirtió rápidamente en su
protegida y compañera principal en una se-
rie de orgías clandestinas.
La alta sociedad británica siempre ha te-
nido una franja de perversión sexual. El sa-
domasoquismo y otras prácticas de esa na-
turaleza son más comunes allá que en otros
países de Europa. Los organizadores de esos
eventos, en consecuencia, son personajes
valorados, pues se requieren múltiples con-
tactos y mucha discreción. Ward, por su
nombre y condición de osteópata y artista,
conocía a hombres poderosos y mujeres be-
llas. A cada una de estas partes le interesaba
conocer a la otra.
Al poco tiempo de conocer a Christine, la
invitó a vivir en su apartamento. Poco tiem-
po después llegó otra showgirl, Mandy Ri-
ce-Davies, con una historia de vida similar
a la de Keeler. En otras palabras, múltiples
romances de corta duración de los cuales
cada una sacaba una platica. Curiosamen-
te, la relación de las dos mujeres con Ward
nunca fue sexual. Él era el encantador doc-
tor que las presentaba en el circuito de sus
amistades políticas y aristocráticas. Fue en
una de estas fiestas, celebrada en Cliveden,
la majestuosa casa señorial de
lord Astor, que Ward presentó
a Keeler con John Profumo, por
entonces ministro de Guerra
del gobierno inglés a cargo de
Harold Macmillan. Astor era
para la época amante de Mandy
Rice-Davies, la cual le había
sido presentada por Ward.
Christine, ya en su vejez,
recordaría este primer en-
cuentro en unas memorias
publicadas que incluyen las
palabras: “John —o Jack,
como yo lo conocía— era un
hombre con ojos golosos... y
unas manos que le seguían el
juego. Ya había conocido hom-
bres que me deseaban, pero él
estaba absolutamente desbo-
cado. Nada más le importaba
sino lograr estar conmigo, una
niña de 19 años. Nos conoci- CHRISTINE
mos en Cliveden, la mansión
de la familia Astor en Buckin- 1964
ghamshire, en julio de 1961.
Stephen (Ward) le alquilaba a
lord Astor un pequeño cottage
adjunto a la casa principal que
tenía su propia piscina. Yo es-
taba nadando desnuda en esta
cuando Bill Astor llegó con
Jack. Había una pequeña toa-
lla en el otro extremo y nadé mientras caminábamos y luego persiguiéndome fu-
rápido para alcanzarla. Podía riosamente alrededor de los muebles. La primera vez
cubrir mis senos o mi espalda, que nos acostamos fue en el apartamento de Stephen.
pero no ambas partes. Busqué Estaba siendo encantador y coqueto, luego nos está-
un lugar en el medio y traté de bamos besando y ya entonces estaba saltando encima
pasar por allí sin revelar toda mío. Lo disfruté, ya que fue amable y amoroso des-
mi desnudez. Ellos trataron de pués. Nunca pensé en lo que podría pasar.
quitármela. Corrí alrededor Ese verano fui feliz teniendo un romance con uno
de la piscina con lord Astor, de los hombres más poderosos del mundo. Fuimos a
jefe de la legendaria familia, y su casa en Regent’s Park y, como lo habíamos hecho en
John Profumo, uno de los mi- Cliveden, me dio un tour por la casa. En el comedor me
nistros de gobierno más im- dijo en chiste: ‘Usualmente viene la reina a cenar. Ella
portantes de Macmillan, per- es mi novia favorita’. Me llevó a su cama marital e hi-
siguiéndome. Me invitaron a cimos el amor. Parece increíble que nuestra aventura
la casa. Jack me sugirió que la resultara en tanto daño y tragedia. No fue un romance
recorriéramos juntos. Me dijo: importante. Me he sentido triste por Jack, pero nun-
‘¿Un beso?’. ca apenada. Él era un adulto, mucho mayor, y yo cla-
Fue algo más perverso, con ramente no era la primera niña que había perseguido.
él acariciándome la espalda Tampoco la última”.
62
 CHRISTINE
2014

Cincuenta años separan estas dos fotos. A la izquierda, Keeler en su juventud, cuan-
do solía asistir a la piscina de la familia Astor y coqueteaba con los hombres de la Stephen Ward y sus amigas (Christine a la derecha en la foto). El médico era un arribista
realeza inglesa. A la derecha, Keeler en un estado deplorable, hace unos años. que conquistó a la alta sociedad presentándoles mujeres hermosas a los poderosos.

ESPÍAS INTERNACIONALES
Mientras Profumo, que era un hombre
casado, llenaba de atenciones a Keeler, se-
guramente más y más costosas de las que
registraría posteriormente la joven, Ward
también había promovido un romance
entre su pretty baby y el capitán Yevgeny
Ivanov, un agente de la KGB que trabajaba
en la embajada soviética. Había entonces
un triángulo amoroso sin mayores conse-
cuencias a primera vista que las posibles
implicaciones emocionales o conyugales.
Sin embargo, pronto se convirtió en un
problema de Estado cuando la prensa sen-
sacionalista reveló que había una mujer
que se estaba acostando simultáneamente
con el ministro de Guerra británico y con
un espía ruso. Se especulaba que, en teoría,
La modelo se estaba acostando
simultáneamente con el ministro más
importante de Inglaterra y con un espía
soviético. Esa fue su perdición.
secretos vitales de la seguridad podrían ser
obtenidos y trasmitidos en la alcoba. La in-
genua stripper fue presentada como una
Mata Hari.
No obstante, nada tuvieron que ver los
bandos opuestos en que estallara el pro-
blema. Más bien fue el descuido de Keeler
y sus otros amoríos los que desemboca-
rían en la caída del gobierno inglés. Para
1962, lejos del apartamento de Ward y de
los cotilleos de los pasillos del Parlamento,
Keeler se había establecido como una mo-
delo por comisión y vivía la desbordada vida
de los antros ilegales de jazz de la comuni-
dad negra en Londres. Fue allí, entre humo
de marihuana y los ritmos del rock steady,
que se enredó con dos afroingleses: Johnny
Edgecombe, promotor de jazz oriundo de
Antigua y Barbuda, y Lucky Gordon, un mú-
sico jamaiquino.
Como los dos estaban enamorados de
ella, tuvieron una violenta pelea en la que
ambos resultaron heridos. El episodio lle-
gó a juicio. Edgecombe, descontrolado por

63

Los hombres responsables del triángulo amoroso que escandalizó a una nación: John Profumo (izquierda), ministro de Guerra británico; Yevgeny Ivanov (centro),
agregado naval de la embajada soviética en Londres, y Stephen Ward (derecha), famoso osteópata y artista que organizaba orgías para la crema londinense.
los celos y por el miedo de ir a la cárcel, fue
al apartamento de Ward a buscar a Chris-
tine, quien estaba acompañada de Mandy
Rice-Davies. Le exigió a gritos que abriera la
puerta, pues necesitaba que ella fuera a tes-
tificar a su favor ante la justicia. Ella se negó
a recibirlo y él arremetió a balazos contra la
puerta del apartamento del famoso doctor.
Este sería el detonante que pondría a Kee-
ler en el ojo del huracán, pues cuando fue
obligada a dar declaración sobre los sucesos,
terminó revelando detalles fundamentales
de su relación con Ivanov y Profumo.
EL ESCÁNDALO PROFUMO
Mal asesorada por la oportunista pren-
sa amarillista inglesa, Keeler terminó ven-
diendo su historia al mejor postor. Poco le
serviría este dinero, pues como explicaría
posteriormente, todo se dilapidó en pa-
garles a los abogados que aparecerían en la
década siguiente. Profumo fue inmediata-
mente interrogado por el Parlamento sobre
su supuesta relación con la joven de 20 años.
El ministro, con sobriedad británica, negó
todo vínculo afectivo con Keeler. Se limitó
a decir: “Nunca ha habido nada indebido
entre la señorita Keeler y yo”. Esas palabras
resuenan infames en la memoria colecti-
va, pues en el Reino Unido, y en particular
en el Parlamento, pocas cosas son tan gra-
CRÓNICA
CHRI S T I N E KEELER
El día que la
Justicia inglesa
lo condenó por
proxenetismo,
Ward prefirió
suicidarse. Hoy
muchos consideran
que era inocente.
ves como mentir. Acosado por la evidencia
presentada por Keeler, una carta escrita en
medio de un arrebato amoroso, el ministro
se vio obligado a rectificar su declaración,
aceptando su corta aventura con la joven,
pidiendo perdón y renunciando “al honor
de ser ministro o miembro del Parlamento”.
Eso significó la muerte política de un hom-
bre que probablemente sería el próximo
primer ministro del Reino Unido.
Conforme avanzaba el juicio por el epi-
sodio violento de los dos hombres del Ca-
ribe, más actores ingresaron a la polémica.
Cuando salió a flote el nombre de Ivanov, el
espía de la KGB, su gobierno le exigió regre-
sar inmediatamente a Rusia para minimizar
la participación de ese país en el escándalo.
64
Lord Astor, quien fue llamado como testigo
por ser amante de Mandy Rice-Davies, negó
todo. Como Mandy había reconocido tener
relaciones sexuales con él, los periodistas
le preguntaron a ella al salir de la audiencia
cómo se explicaba la negación del aristócra-
ta. Contestaría con una frase que fue recogi-
da en 1979 por El diccionario Oxford de citas:
“He would, wouldn’t he?”. Eso, traducido
coloquialmente, querría decir “qué más po-
dría hacer”.
Ward, mientras tanto, se vio abando-
nado no solo por Astor, sino por toda la
oligarquía a la que antaño había luchado
tanto por complacer. Como las dos jóve-
nes vivían con él y se acostaban con todo
el mundo, la Justicia le imputó cargos de
proxenetismo. Esa acusación era injusta.
El doctor unía a sus modelos con los po-
derosos no por dinero, sino por arribista.
Su trabajo como intermediario en esos en-
cuentros le permitió formar parte de una
clase social a la que él no pertenecía por
nacimiento. Deprimido y desconcertado,
cuando fue encontrado culpable, se suici-
dó con una sobredosis de somníferos en su
apartamento, rodeado de los dibujos que
había realizado de Astor, Profumo, Ivanov,
Rice-Davies y, sobre todo, de Keeler. La
nota que dejó escrita decía: “No estoy dis-
puesto a satisfacer a los buitres”.
 En el lujoso palacio de Cliveden, ocupado en esos momentos por lord Astor
(derecha) y su familia, se dio el primer encuentro entre Keeler y Profumo.
EL FINAL DE UN ÍCONO
Luego de la muerte de Ward y la caída
de Profumo, Macmillan se vio obligado a
renunciar al gobierno británico y, en 1964,
manchado por el escándalo sexual y po-
lítico, el Partido Conservador perdió las
elecciones y el Partido Laborista subió al
poder. Keeler, por su parte, intentó seguir
sacándole jugo cuanto pudo a su novelada
historia amorosa. Abusando de esta, ven-
dió los derechos fílmicos de sus aventuras
para la realización de una cinta que nunca
se estrenó en el Reino Unido y que llevó por
título The Keeler Affair.
No solo publicó una memoria sino dos,
agregándole cada vez más morbo para que
se la publicaran. Nunca logró que su carrera
despegara, aunque su vida quedó retratada
en producciones como la película Scandal,
de 1989, que la propia Keeler calificó de
apenas una “polaroid” de lo que fue la
verdadera historia. Andrew Lloyd Webber,
el compositor de musicales más famoso
del mundo (Cats y The Phantom of the
Opera, entre otros) decidió en 2013 hacer
una obra sobre el escándalo Profumo. La
tituló Stephen Ward y el propósito era
reivindicar al osteópata como el chivo
expiatorio de la hipocresía de la alta
sociedad británica. La obra fue una de las
pocas de Lloyd Webber que fracasaron.
Los días de Keeler terminaron hace un
mes de manera melancólica. Casada y divor-
ciada dos veces, tuvo dos hijos y una nieta.
Uno de sus hijos se suicidó por el estigma de
ser su descendiente. Después del escándalo
que la convirtió en una de las mujeres más
famosas de Inglaterra, la antigua bailarina
y modelo terminó saltando de un puesto
menor a otro, presentándose siempre con
un nombre falso y siendo despedida cuando
era descubierta. Primero vivió en un tráiler
y en los últimos años fue mantenida por el
Estado inglés.
Como si acostarse con Christine Keeler
fuera el mayor pecado de la historia, Profu-
mo se dedicó durante 40 años al servicio co-
munitario en los barrios pobres de Londres.
Se volvió una especie de madre Teresa ves-
tida en la famosa calle de los sastres Saville
Row. Fue tal su sacrificio y su abnegación,
que la reina Isabel II lo condecoró a comien-
zos de los años noventa. Tuvo el inmenso
honor antes de morir de ser invitado a un
banquete y sentarse al lado de la soberana.
Ivanov, el espía ruso, tuvo un final tan
triste como el de Christine Keeler. Recha-
zado por su gobierno y su país por meterles
sexo a sus funciones, se convirtió en un al-
cohólico depresivo hasta el día de su muer-
te. A la única a la que le fue bien fue a Mandy
Rice-Davies, quien se casó con un israelí
65
millonario y acabó en Israel en una vida de
lujo y en una relación estable. Murió hace
apenas dos años.
Sea como fuere, Christine se ha con-
vertido en un símbolo de una era. Fueron
años anteriores a los Beatles, en los que la
sociedad británica combinaba residuos
del puritanismo de la era victoriana con
excesos sexuales clandestinos de las clases
altas como los que protagonizaba Stephen
Ward. Más allá de las intrigas políticas que
sus escandalosos amoríos podrían desper-
tar, lo cierto es que las historias de orgías
entre los poderosos fascinaron e indigna-
ron al pueblo británico. Medio siglo des-
pués de los hechos, muchos reconocen que
las premisas del escándalo eran ficticias.
La teoría era que una habilísima seductora
podía sacarle secretos nucleares al minis-
tro inglés para entregárselos al espía ruso
en lo más álgido de la Guerra Fría.
La verdad es que Christine Keeler no
era más era una stripper analfabeta que
descubrió que la verdadera bomba ató-
mica era el sexo. Y los dos protagonistas
masculinos de esa tragedia, el inglés Pro-
fumo y el ruso Ivanov, no eran las víctimas
potenciales de una Mata Hari, sino dos
hombres arrechos.
 EL REGRESO
DE MARÍA
SHARÁPOVA (Y LAS DIEZ TENISTAS MÁS
ESPECTACULARES DE LA TEMPORADA)
La flamante tenista rusa volverá a tener una temporada
completa este año luego de estar suspendida 15 meses
por dopaje. Amada por muchos, odiada por otros, quiere
demostrar que volvió mejor que nunca.
66
 CRÓNICA

S H A R Á P OVA

POR ALFREDO BONILLA Fotos Getty/AFP

C
uando María Sharápova anun-
ció una inesperada rueda de pren-
sa en marzo de 2016, todo el mun-
do asumió que se iba a retirar. Pero, vestida
de negro y con aspecto lúgubre, reveló que
no había pasado un examen de drogas:
“Asumo toda la responsabilidad, cometí
un grave error; he decepcionado a mis ad-
miradores y al deporte. Sé que debo asu-
mir las consecuencias pero espero tener
una nueva oportunidad”. Fue uno de los
momentos más sorpresivos en la historia
del tenis y uno que marcó para siempre a
la tenista rusa.
Esa mañana, en un hotel de Los Án-
geles, Sharápova habló frente a decenas
de periodistas con la pausa y la tran-
quilidad que suele demostrar cuando
tiene bajo control un partido de tenis.
Contó que llevaba 10 años tomando mel-
donium, un medicamento que solo se
distribuye en Rusia y los países bálti-
cos, y sirve como remedio farmacéutico.
María tiene un problema cardiaco y un
historial familiar de diabetes, así que, en
2006, su doctor se lo recetó. Lo que ella
no sabía, ni su equipo de trabajo le co-
mentó, fue que a partir del primero de
enero de 2016 había entrado en la lista de
sustancias prohibidas por la Federación
Internacional de Tenis (ITF) luego de en-
contrar que, entre sus efectos, se encuentra
la capacidad de mejorar el rendimiento fí-
sico de los atletas. La habían notificado por
correo, pero ella jamás lo leyó. El que sí vio
—varias veces para asegurarse de que no era
un error o una broma— fue uno en el que le
informaban el positivo en una prueba de ori-
na en el abierto de Australia, semanas atrás.
En su reciente autobiografía Unstoppa-
ble, publicada en septiembre, Sharápova
cuenta que se sintió atrapada y engañada,
y si fallaba en sus argumentos para ganar
cualquier apelación, sería el final de su ca-
rrera. Aun así, su primera sensación fue de
alivio; supo que había hecho lo correcto al
anunciar la rueda de prensa y pensó que sus
familiares, amigos y hasta rivales la iban a
entender. Pero se equivocó: la prensa la til-
dó inmediatamente de mentirosa y trampo-
sa. Horas después, la marca de ropa depor-
tiva Nike, que lleva patrocinando a la rusa
toda su carrera, lanzó un comunicado sus-
pendiendo el acuerdo. Las siguientes dos
semanas, la tenista lloró como nunca antes
lo había hecho hasta que logró armarse de
fuerza y coraje, con un solo objetivo: dar la
batalla, quizá la más difícil de su vida.
Sharápova recibió la notificación de su dopaje
por correo, días después convocó una rueda de
prensa para anunciarle al mundo la noticia.
Desde enero,
esa droga había
entrado en la lista
de sustancias
prohibidas por
la Federación
Internacional de
Tenis.
***
María Sharápova nació en el pequeño
pueblo de Niagan, al noreste de una Unión
Soviética comunista, con pocas oportunida-
des para familias de escasos recursos como
la suya. Su padre, Yuri, que aprendió a jugar
tenis solo, le puso una raqueta en la mano a
María cuando tenía 4 años y ella demostró
su habilidad y coordinación a pesar de su
corta edad. A los 6, María, que se colgaba
de vigas y andamios para estirar y crecer
más rápido, llamó la atención de entrena-
dores en Moscú. A Yuri le aseguraron que
podía convertirse en la mejor del mundo,
pero no en la Rusia del siglo XX.
Su padre, entonces, decidió dejarlo
todo (el país, el trabajo y hasta la
esposa) y llevar a María a Estados
Unidos; tan solo tenían 700 dólares
y un sueño. Llegaron al lugar al
que sabían que tenían que llegar: la
renombrada academia de tenis de Nick
Bollettieri en Bradenton, Florida, cuna
de grandes tenistas como Andre Agassi,
Jim Courier, Marcelo Ríos, entre otros. A
Sharápova le negaron la beca pero
Bollettieri dejó que se entrenara ahí.
Sin embargo, en unos meses fue sacada
del todo porque les estaba ganando
partidos a niños mayores y sus papás se
quejaban. Tres años después, Bollettieri,
dejando claro que no podía desperdiciar el
talento de Sharápova, quien ya tenía otro
entrenador, decidió otorgarle una beca y
hasta una vida sostenible a su familia, algo
que permitió que su madre, Yelena, dejara
Rusia y finalmente se reencontrara con su
hija y su esposo.
Sin duda la rusa era la tenista más talen-
tosa de la academia pero, en ocasiones, pa-
recía estar en el lugar equivocado: mientras
a todas las niñas les gustaba chismosear y
tener un modelo a seguir, ella solo quería
entrenar y ser la mejor. En una ocasión, las
hermanas Williams, ya catalogadas como
las responsables del futuro del tenis feme-
nino, visitaron la academia. Mientras todas
sus compañeras se peleaban por conocerlas,
Sharápova, demasiado orgullosa para ha-
cerlo, se escondió en un cobertizo y las vio
entrenar por un pequeño hueco en la pared.

67
cobertizo y las vio entrenar por un peque-
ño hueco en la pared.
Fue esa personalidad competitiva la
que la llevó a ver a las Williams como un
simple obstáculo en su ambición de ser la
mejor. En 2002, con apenas 15 años, ganó
el Torneo Junior de Wimbledon, mientras
Serena Williams conquistaba su primer tí-
tulo de mayores. En la gala de campeones
no le interesó saludar a la estadounidense,
solo tenía una misión: ganarle. Dos años
después, en ese mismo escenario, lo consi-
guió. Con 17 años y frente a la gran favorita
al título, la rusa demostró un desempeño
implacable y memorable para conseguir su
primer título de Grand Slam.
Son muchos los que titulan ese par-
tido como el inicio de la rivalidad
Sharápova-Serena, una batalla que, en
la cancha, claramente está a favor de
Williams con un apabullante historial de
19 victorias y dos derrotas. Por fuera de
la cancha, la historia es otra: la rusa tiene
muchos más ingresos en patrocinios y en
su autobiografía aclara que siempre ha res-
petado a Serena, pero que jamás le ha inte-
resado ser su amiga. En 2013, tuvo una bre-
ve relación con el tenista búlgaro Grigor
Dimitrov, exnovio de Serena, quien varias
veces tildó a la rusa de aburrida e incapaz
de asistir a eventos importantes.
Sharápova es la única tenista rusa en obtener las cuatro grandes coronas del tenis mundial.
***
Si hay algo que ha cambiado en la per-
sonalidad de María Sharápova es la men- comunicación con la ITF. El miércoles 26 Estados Unidos, un torneo que promueve
talidad de no dejarse ganar por lo que de abril de 2016, justo el día en que ter- más los flashes, la publicidad y los patro-
piensen otros. Su carácter fuerte, y sus minó la sanción, Sharápova regresó a una cinios que la tradición y la elegancia, le
ganas de superarse cada vez más, no solo cancha de tenis. Fue gracias a una invita- sirvió a María para ingresar nuevamen-
la llevaron varias veces a ser la tenista ción que recibió en el abierto de Stuttgart, te a las cien mejores del mundo. Un mes
número uno del mundo, sino que fueron Alemania, en donde le ganó a la italiana después, ganó el abierto de Tianjin en
piezas claves para armarse de coraje y Roberta Vinci y llegó a semifinales de aquel China, su título número 40 y su primero
presentar una apelación que pudiese, a torneo. desde que regresó.
fin de cuentas, reducir su suspensión. Debido a su larga ausencia, la rusa La rusa ahora se prepara para reinven-
Aunque hubo varias semanas en las que perdió muchos lugares en el ranking de tarse y tener un 2018 soñado en el que
contempló el retiro, sabía que su historia la WTA, algo que la llevó a arrancar de sabe que tiene mucho por aclarar, aun-
necesitaba otro final. ceros y verse obligada a competir en los que ignore las críticas. Son varias las per-
El 4 de octubre de 2016, ante el Tribunal torneos desde las etapas clasificatorias sonalidades importantes del tenis que
de Arbitraje Deportivo (TAS) en Lausana, o al recibir invitaciones. En septiembre, aún debaten su regreso, y se estipula que
Suiza, María ganó la apelación, y la sanción la recibió para el US Open (uno de los Sharápova tendrá difícil su participa-
(originalmente de dos años) fue reducida a cuatro torneos grandes del año), en el ción en torneos como Roland Garros o
15 meses. El TAS determinó que la rusa no que llegó a la cuarta ronda y dejó a un Wimbledon, en los que el juego limpio es
había tomado meldonium con intención de lado a la rumana Simona Halep, hoy prioridad. Pero ella no se dejará vulnerar,
doparse, sino por desinformación y mala número uno del mundo. Ese abierto de solo espera su próximo rival.

68
 CRÓNICA

S H A R Á P OVA

LAS HEREDERAS Aunque hay muchas mejor ranqueadas

jugadoras de esta temporada que comienza
AMANDINE HESSE
Edad: 24
Nacionalidad: francesa
Posición actual: 221

SERENA WILLIAMS
ANGELIQUE KERBER Edad: 36
Edad: 29 Nacionalidad:
Nacionalidad: alemana estadounidense
Posición actual: 21 Posición actual: 22

CAMILA GIORGI
Edad: 25
Nacionalidad:
italiana
Posición
actual: 79

MANDY MINELLA
Edad: 32
Nacionalidad:
luxemburguesa
Posición actual: 142

BELINDA BENCIC
Edad: 20
Nacionalidad: suiza
Posición actual: 74

70
 CRÓNICA

S H A R Á P OVA

DE SHARÁPOVA
estas son algunas de las más bellas
este enero con el Abierto de Australia.

PETRA KVITOVÁ
Edad: 27
Nacionalidad:
CAROLINE WOZNIACKI checa
Edad: 27 Posición
Nacionalidad: danesa actual: 29
Posición actual: 3

ELINA SVITOLINA
Edad: 23
Nacionalidad: ucraniana
Posición actual: 6

EUGÉNIE BOUCHARD
Edad: 23
Nacionalidad:
canadiense
Posición actual: 82

71
 M O DA

EDI TORI AL

Ligeros
de
equipaje
Las lanas livianas y los algodones son los
mandatos para ese viaje de las tierras frías a
las cálidas. Unas cuantas ideas primaverales.

Fotos JUAN MOORE

72
 Blazer blanco, camiseta
negra de Gef, reloj de Mont
Blanc y pantalón blanco.
Chaqueta
Bomber de
Seven.Seven,
buzo rojo de Gef
Men, camisa
blanca de Gef
Men, pantalón
de H&M, tenis de
Nike y maleta de
Mont Blanc.

74
 Suit beige de
Seven.Seven, camisa
blanca de Gef Men y
zapatos de H&M.
 Chaqueta
impermeable de Gef
Men, saco verde,
camisa blanca de
Azulu y pantalón de
Gef Men.

76
 M O DA

EDI TORI AL

Abrigo de H&M, cuello

tortuga de H&M, reloj
Mont Blanc, jeans
blancos de Diesel y
zapatos de H&M.

FOTOGRAFÍA: JUAN MOORE / ASISTENTE DE FOTOGRAFÍA: BORIS NIETO / MODELO: ANDRÉS ESPINOSA / PRODUCCIÓN Y STYLING: ANA MARÍA LONDOÑO Y MARCELA CARVAJAL / MAQUILLAJE Y PEINADO: EDWIN BELTRÁN
AGRADECIMIENTOS: GEF MEN, WWW.GEF.COM.CO, CALLE 85 N.º 13-53, C.C. TITÁN PLAZA / SEVEN.SEVEN, WWW.SEVENSEVEN.COM, CARRERA 13 N.º 81-37 / AZULU, WWW.AZULU.COM, CARRERA 12 N.º 93-57 / DIESEL,
GLOBAL.DIESEL.COM, C.C. EL RETIRO / H&M PARQUE LA COLINA.

77
 Jonathan
Laura O

Historias
de cama
SoHo estuvo en el set de Protagonistas 2017 y los
finalistas se le midieron a mostrarse sin tapujos
debajo de las sábanas, tal como son.
Fotos JUAN MOORE

84
María P.
Camilo y
Daniella

85
 M O D E LO
PROTAGONISTAS
C
omo todas
las prue-
bas que
tienen que
superar los
Protago-
nistas, la
idea es po-
nerles re-
tos que los
saquen de lo cotidiano y hasta los hagan
sentir incómodos. Eso fue lo que se cra-
neó su profesora Carolina Castro, junto
con la producción de SoHo, en esta inol-
vidable sesión de fotos. El resultado no
pudo ser mejor —ya se dará cuenta con
está memorable galería— pero como
sabemos que también quiere conocer a
cada finalista un poco mejor, acá se los
presentamos.
Jonathan Fierro
Este barranquillero de 31 años fue el
ganador de Protagonistas de Nuestra
Tele 2017: se quedó con el 41 % de los
votos frente a los otros cuatro finalis-
tas. Estudió actuación pero se dedica al
Amílcar y Giselle fisicoculturismo y también da asesorías
de nutrición y ejercicio. Sus estudios
se notaron ante las cámaras, pues
varias veces fue destacado por los
profesores y hasta sus compañeros
buscaban sus recomendaciones.
Jonathan se
quedó con el
Camilo Castellanos
Este youtuber nació en Bogotá y 41 % de los votos
tiene 25 años. Dice que le teme al
fracaso y se la pasa haciendo reír
frente a los otros
a la gente. Se ufana de ser exhi- cuatro finalistas.
bicionista, por eso no es casua-
lidad que en uno de sus videos
más exitosos hace un truco de magia
para besar universitarias. Camilo lle-
gó a la final de Protagonistas y muchos
lo recuerdan por su extraña relación
con “Mapu”, otra de las concursantes.
Daniella de Lucca
Esta cantante bogotana de 25 años tie-
ne el nombre artístico de “Dani Six” y,
pese a no estudiar música, sí ha toma-
Giselle do varias clases particulares. Su género
86
favorito es el rock y precisa-
mente por eso fue escogida
como la voz principal del rea-
lity. Aunque al principio no
le parecía gran cosa estar en
Protagonistas —incluso fue
eliminada pero la salida de
otro concursante le permitió
regresar—, al volver llegó a la
final con todas las ganas.
María Paula Moreno
Esta espectacular bogota-
na de 20 años es estudiante
de psicología. “Mapu”, como
la llaman los Protagonistas,
ha demostrado que tiene un
gran talento como modelo
—además de un cuerpo increí-
ble—, y también ha cultivado
sus dotes para la actuación,
tanto que fue tres veces pro-
tegida en la prueba de talento.
Amílcar Barros Meriño
Después de estudiar unos se-
mestres de Administración
de Empresas, este costeño
viajó a Estados Unidos para
estudiar Arte Dramático y
vivió 10 años allá. Tiene una
posición política clara contra
Trump, Uribe y lo que pasa en
Venezuela. En la casa estudio
demostró ser uno de los más
talentosos (fue protegido en
cuatro pruebas de talento) y
fue reconocido por sus com-
pañeros en varias ocasiones
como el más coqueto.
 M O D E LO

PROTAGONISTAS

Daniella

87
 M O D E LO

PROTAGONISTAS

Jonathan
Laura O
FOTOGRAFÍA: JUAN MOORE / ASISTENTE DE FOTOGRAFÍA: BORIS NIETO / MAQUILLAJE Y PEINADO: NADIA KOSH / ASISTENTES DE MAQUILLAJE: WILLIAM RÍOS, MARCELA CORTÉS, SHARON PAJOY
Y DAVID CEBALLOS / PRODUCCIÓN Y STYLING: ANDRÉS YEPES / ASISTENTE DE STYLING: ANDRÉS CONDE.

AGRADECIMIENTOS: DIESEL, GLOBAL.DIESEL.COM, C.C. EL RETIRO, TEL.: 3764186 / GEF, WWW.GEF.COM.CO, CALLE 85 N.° 13-53 / CHEVIGNION, C.C. ANDINO, TEL.: 2560251.

88
Maria P
CRÓNICA

90
 CRÓNICA

BI T COI N

LOS MELLIZOS
FANTÁSTICOS
DEL BITCOIN
Tras su fracaso con Facebook, el cual inventaron con Mark
Zuckerberg, estos dos hermanos son los reyes de una moneda virtual
que levanta sospechas y que enriquece a gente de todo el planeta:
desde Caquetá, en Colombia, hasta Tokio. ¿Quiénes son?
POR MARIANA TORO NADER Foto GETTY IMAGES

P
ocas mujeres en el mundo no
querrían tener de pretendiente
a Tyler Winklevoss. Es joven,
guapo, atlético —finalista olímpico de
remo en los Juegos Olímpicos Pekín
2008— y un brillante economista de la
Universidad de Harvard. Como si fue-
ra poco, hace unas semanas se supo
que podría estar cerca de ser uno de los
hombres más ricos del mundo. Y, bueno,
si las cosas no resultan, siempre existirá
una segunda opción idéntica: su herma-
no gemelo, Cameron.
En solo cuatro años, los Winklevoss
se convirtieron en los mayores billona-
rios de la criptomoneda bitcoin que, ac-
tualmente, es furor en el mundo. Solo en
esa moneda virtual, amasan una fortuna
que supera los 1100 millones de dólares.
Sin duda, los “gemelos fantásticos” son
hoy todo un partido. Pero no siempre lo
fueron.
Si 2017 fue su año soñado, 2004 fue
su pesadilla. En ese entonces estaban
doblemente humillados, doblemente
perdidos y doblemente quebrados. No
por nada la trama de la película La red
social (2010), del director David Fin-
cher, se inspira en ellos. Y es que se vol-
vieron famosos por acusar a Mark Zuc-
kerberg de haberles robado su idea de
Solo en esa moneda
virtual, amasan
una fortuna
que supera los
1100 millones de
dólares.
crear una red social para la Universidad
de Harvard.
Los Winklevii —como les dicen de ca-
riño en Estados Unidos— contrataron a
Zuckerberg, quien en ese entonces solo
era un cerebrito más del campus, para
que les ayudara a poner en marcha los
algoritmos de Harvard Connection —
una forma de conectar a los miembros
del alma mater, que luego pasó a llamar-
se ConnectU—. Dos meses después, bajo
esa idea, Facebook apareció en la web.
Los gemelos se fueron con toda contra
Zuckerberg. No ahorraron ni un peso en
abogados y en 2008 lo demandaron por
más de 100 millones de dólares. Ade-
más, en 2010, la página Business Insi-
der filtró unos mensajes enviados por
Zuckerberg a un amigo, cuando trabaja-
ba para los hermanos, en los que decía
que tenía la intención de demorar la im-
plementación de la red de los Winklevii

91
para lanzar la suya. “Sí, los voy a joder”, fue-
ron sus palabras.
En 2011, aceptaron un acuerdo por
65 millones de dólares, entre efectivo y ac-
ciones, y los metieron en un fondo para ver
cómo los invertían. Dos años después, esta-
ban paseando en Ibiza, España, y un “apare-
cido” les contó sobre los bitcoins y los dejó
encantados. Era su momento de regresar
al mundo tecnológico, así que decidieron
invertir 11 millones de dólares en bitcoin,
el 1 % del stock que había en ese momento
circulando en el mundo. Cuando compra-
ron 90.000 criptomonedas, cada una valía
120 dólares; hace pocos días se estimaba que
una puede costar 12.000 dólares. La inver-
sión se multiplicó tanto que llegó a costar
diez veces más que el oro.
Muchos consideran que los Winklevoss no
son los únicos multimillonarios de bitcoin,
Cuando compraron 90.000
criptomonedas, cada una valía
120 dólares; hace pocos días se
estimaba que una puede costar
12.000 dólares.
pero sí las primeras figuras públicas que llegaron a ese ni-
vel. Y es que Bitcoin es un gran misterio, empezando por su
inventor, que nunca se ha dejado ver en público y del que
solo se sabe su seudónimo: Satoshi Nakamoto.
La circulación de los bitcoins está controlada por
Blockchain, un software que, aunque los nerds di-
gitales dicen que es imposible de hackear, los ana-
listas financieros no hacen más que encender alar-
mas por los riesgos que acarrea invertir en una
criptomoneda. La Comisión del Mercado de Valores de
Estados Unidos (SEC) rechazó la propuesta de los
92
 CRÓNICA

BI T COI N

La gente entra en jor versión del oro. Y no le faltan razones para pen-
sar esto, pues en 2014 le pagaron con bitcoins a Virgin
el entramado de Galactic —la empresa del magnate Richard Branson que pro-
las criptomonedas mueve el turismo espacial— dos tiquetes de ida y vuelta al
espacio por un precio de 250.000 dólares cada uno. En ese
para participar en entonces, pagaron con 716 bitcoins, hoy solo necesitarían 23
“actividades viles, como para salir a la estratósfera, y si la criptomoneda sigue con sus
precios astronómicos y no se desploma, cada vez será menos.
el lavado de activos y la Puede que aún no lleguen a la cantidad de ce-
evasión fiscal”. ros de su némesis Zuckerberg, una fortuna que se esti-
ma por los 73.000 millones de dólares, pero los gemelos
Winklevoss le han dicho al que
quiera escucharlos que per-
Winklevoss de meter a Bit- der no hace parte de su ADN
coin en la bolsa y la Reserva compartido. Y no sería raro
Federal la calificó como un que en pocos años entren a la
peligro para la estabilidad selecta lista de los hombres
financiera. Los inversionis- más ricos del mundo según
tas de Goldman Sachs han Forbes. Las cenicientas del
afirmado que es una burbuja mundo digital tienen como
a punto de reventar porque ejemplo de superación a su
carece de regulación, de ga- propia familia; como le dije-
rantías a largo plazo y porque ron a la revista Vanity Fair:
puede caerse con un solo clic. su bisabuelo paterno era un
Hasta el nobel de eco- obrero de las minas de car-
nomía Joseph Stiglitz cri- bón, su abuelo solo estudió
ticó a Bitcoin por su falta hasta octavo grado, su familia
de transparencia, y le afir- materna estaba compuesta
mó a la BBC que si la gente por artistas que se ganaban
entra en el entramado de la vida presentándose de un
las criptomonedas es para lado a otro y su hermana ma-
participar en “actividades vi- yor, Amanda, murió por una
les, como el lavado de activos sobredosis de cocaína. Su pa-
y la evasión fiscal”. Incluso dre, Howard Winklevoss Jr.,
el verdadero “lobo de Wall fue quien sacó adelante a la
Street”, el excorredor de bol- familia, pasando de contador
sa Jordan Belfort, que pagó a dueño de una empresa de
casi dos años de cárcel por licencias de software, con lo
fraude financiero y que ins- cual se los pudo llevar a vivir a
piró la película protagoniza- Greenwich, Connecticut, una
da por Leonardo DiCaprio, le Mark Zuckerberg, creador de Facebook, ostenta una fortuna de 72 billones de de las ciudades con mayor ni-
dijo al Financial Times que dólares, convirtiéndolo así en la quinta persona más rica del planeta. vel de vida de Estados Unidos.
con las divisas virtuales “una Además, los geme-
gigantesca estafa está por los Winklevoss tienen
explotar en la cara de mucha gente. Es, por mucho, peor que dos puntos a su favor. A diferencia de una empresa como
cualquiera que yo haya hecho”. Facebook, que constantemente hay que dirigir y renovar, Bitcoin
Pero los gemelos están felices con su moneda vir- está creciendo sola, no la rigen los bancos ni la bolsa, y solo
tual. Crearon WinkDex, una herramienta para monito- está en manos de inversionistas privados. Y, al contrario de
rear los cambios de valor en Bitcoin; Gemini, su propia Zuckerberg, que ha crecido como palma, ellos tuvieron que
tasa de cambio, y Winklevoss Capital, su propio fondo de enfrentarse a que, cuando se toca fondo, lo único que queda
inversión. El año pasado, Tyler le expresó al periódi- es subir. Porque, como dice el viejo adagio popular, en juego
co británico The Telegraph que las bitcoins son una me- largo hay desquite.

93
 CRÓNICA

BI T COI N

En la película La red social se cuenta

cómo fue el proceso de la demanda
que los gemelos Winklevoss entablaron
en contra de Zuckerberg, quien presun-
tamente les robó la idea de Facebook.
Finalmente, ambas partes llegaron a un
acuerdo por 65 millones de dólares.

¿QUÉ ES EL BITCOIN?
B itcoin es una moneda virtual
o criptomoneda que sirve
para adquirir productos y servicios.
A diferencia de las divisas, es des-
centralizada, por lo cual no existe
un ente de control que sea respon-
sable de su emisión o registro de
sus movimientos. Este medio de
intercambio electrónico consiste
en una secuencia alfanumérica le-
gible para las personas que se aso-
cian a un monedero virtual para
descontar y recibir pagos.
Los monederos virtuales —obli-
gatorios para todos los usuarios—
son sistemas para almacenar un
bitcoin y poder operar con ellos.
Estos monederos pueden ser utili-
zados desde computadores o des-
de dispositivos móviles, siempre y
cuando se cuente con la aplicación
que posee bitcoin para realizar las
operaciones. Para poder hacer un
intercambio a través de Bitcoin,
cada usuario tiene una clave y el
sistema peer—to—peer (P2P) le
permite descontar la cantidad de
bitcoins a quien compra, y aumen-
tar la cantidad de bitcoins de la
cuenta de quien vende.
El único respaldo de esa mo-
neda son los algoritmos tecnoló-
gicos que, hasta el momento, no
han podido ser penetrados —aun-
que existe el riesgo—. Esto se ha
logrado, en gran parte, gracias a
una base de datos conocida como
Blockchain que hace posible las
transferencias de manera segura
y sin el riesgo de duplicidad. Ade-
más, también incorpora la totali-
dad de la información de las ante-
riores operaciones, más las que se
derivan de nuevas transacciones
para un uso más efectivo.

94
 FÚTBOL
POLÍTICA
Y DICTADURA
Desde Benito Mussolini hasta nuestros días, abundan los casos en
los que gobiernos autoritarios han hecho del fútbol la mejor forma
para blindar su permanencia en el poder y acrecentar su popularidad.
Historia negra de una pasión.

96
 CRÓNICA

FÚ TBOL Y P OLÍ T I CA

POR VÍCTOR DIUSABÁ ROJAS Fotos Getty Images

–A
h, señor (Vittorio) Pozzo,
me olvidaba. Ya sabe que el
mariscal (Italo) Balbo salu-
dará al pueblo en el desfile. Quiero que es-
tén los jugadores y también quiero que esté
usted. Hay que recompensarle al mariscal
los servicios que está brindando al país…
—No sería conveniente que mis mucha-
chos vayan al desfile. Digamos que eso los
puede desconcentrar…
—Vamos a hacer de cuenta que a mí,
Benito Mussolini, me gustaría mucho que
los jugadores vayan a la celebración.
—(...) En ese caso, no tengo ninguna
duda. Ellos estarán allí, pero sin mí. Yo so-
lamente dirijo lo que puedo controlar.
—Está bien, señor Pozzo. Tiene razón.
Usted es el único responsable del éxito.
Pero que Dios lo ayude si llega a fracasar...
Son los primeros meses de 1934 y la con-
versación es auténtica. Sucede en el Palazzo general del Partido Fascista Republicano. dio Nacional del Partido Nacional Fascista
Venezia, muy probablemente en la Sala del Es escueto y muy contundente: “Vencer (así se le bautizó). Un descarado caso de in-
Mappamondo, donde el Duce atiende los o morir”. No es Starace, debe pensar el fluencia en las canchas, además con efectos
principales asuntos de Estado. Y este, qué viejo en esa cabeza a la que nunca le esca- sobre el siguiente Mundial, el de Francia
duda cabe, es uno de ellos. Está visto que sea sombrero, es Mussolini en persona. 38; una victoria de la manipulación política.
“la Nazionale” (la selección de fútbol) es tan Italia va al campo y gana 4 goles a 2. Ya es Como lo harían otros más, cada uno a su ma-
importante como Balbo y sus tres medallas bicampeón. Días después, en la recepción nera, a lo largo de años en que el Mundial ha
al valor en la Primera Guerra Mundial. en el mismo Palazzo, Mussolini se hace pasado de ser la quijotada de los treinta al ne-
Por eso, el Duce quiere verse flanqueado tomar la foto con los jugadores. Con un gocio multimillonario de hoy.
por el héroe en los campos de batalla y por detalle que no sobra: todos van vestidos de
los futbolistas que, si escuchan bien a su militares, además con uniformes de las di- PELÉ Y LOS AÑOS NEGROS
director técnico, sabrán mejor que nunca ferentes fuerzas armadas. Más que levan- Y saltemos, no más, a México 70, que
la enorme diferencia que hay entre ganar y tar una copa, ya lo verán, es una premoni- equivale a decir la mejor selección nacional
perder. Benito Amilcare Andrea Mussolini ción. No están equivocados. de todos los tiempos, con Pelé como líder.
Mussolini sabe cuánto significa la imagen Mussolini y Pozzo; Pozzo y Mussolini, Sobre ese tema, pocas discusiones caben.
de la victoria para un pueblo que anda su- con un telón de fondo del tamaño del Esta- Tan encantador como efectivo, el llama-
bido en lo más alto de la ola del fascismo. do “Scratch” se hizo fenómeno de masas,
Viejo zorro, no va a dejar pasar esta nueva gracias, entre otros, a que ese fue el primer
oportunidad de cosechar puntos y adeptos. mundial con masiva retransmisión en di-
Por eso, dedicará tanto tiempo y empe-
Mussolini sabe recto, incluida Colombia.
ño a marcar al centímetro a Pozzo durante cuánto significa Si alguien era dueño de esa magia he-
cuatro años. Primero, en ese Mundial del cha fútbol (“O Rey” más Jairzinho, Tos-
34, que Italia gana sin problemas, más aún
la imagen de la tão, Gerson, Rivelino, Carlos Alberto,
en su condición de local. Y luego, en el ca- victoria para un Clodoaldo y demás estrellas), ese era el
mino a Francia, sede del siguiente. Aquel pueblo brasileño, comenzando porque la
19 de junio de 1938, fecha de la final ante
pueblo que anda mayoría de esos jugadores había nacido
Hungría, don Vittorio recibe un telegrama subido en lo más allá en su seno, en las favelas. La fiesta
en el camerino del estadio Colombes, de popular, pues, parecía servida. Eso, si no
París, a pocos minutos de iniciar el partido.
alto de la ola del nos detenemos en un detalle nada menor:
Lo firma un tal Aquiles Starace, secretario fascismo. una cosa era la alegría del equipo que se

97
 “El Scratch”, la selección brasileña de 1970, fue una de las mejores de la historia al reunir cinco
números 10 de varios clubes: Pelé, Jairzinho, Gerson, Tostão y Rivelino.
paseaba triunfal por las canchas mexica-
nas; otra, la nación que vivía la pesadilla
de una dictadura militar con nombre pro-
pio, Emílio Garrastazu Médici.
Aquel 21 de junio de 1970, mien-
tras Pelé se iba en hombros del esta-
dio Azteca, con el torso desnudo y un
sombrero charro por cabeza tras haber
apabullado a Italia 4 a 1 en la final, el
mundo miraba para otro lado hasta ol-
vidar “el Brasil de las 20.000 torturas”
o los años negros de la dictadura, como
se le llamó al periodo de Garrastazu.
Ni las ejecuciones sumarias ni las desa-
pariciones ocuparon una línea en los te-
letipos de la época.
El dictador encabezó el júbilo. No por
casualidad, pues durante años había esta-
do más que ocupado en ese equipo. Siem-
pre se interesó en hacerle la vida difícil a
João Saldanha, periodista y autodidacta
que se había atrevido a postularse como
director técnico hasta ganarse al cargo de
seleccionador nacional. Polémico, pen-
denciero y bebedor, lo que más le disgusta-
ba de Saldanha al régimen era otro asunto,
sus ideas de izquierda, que dejaba oír sin
temor, hasta ganarse en la calle el mote de
“Juan Sin Miedo”. Cuando Garrastazu en
persona le ordenó que pusiera a jugar a su
consentido Darío Maravilha y dejara en la
“Hubo un momento en el
que pensé dejar la selección
debido a las atrocidades
que los militares estaban
provocando en Brasil”, Pelé.
suplencia a Tostão, Saldanha se negó: “Yo
no le digo a quién debe nombrar usted en
los ministerios. No me diga usted quiénes
deben jugar en la selección”.
Seguro de que no debía entregar cuentas
a nadie, Saldanha cometió el error de tocar
lo intocable, nada menos que a Pelé. Eso, y
una derrota ante Argentina en un partido
que no valía nada, le hicieron la maleta. Ga-
rrastazu movió entonces los hilos de la po-
derosa Confederación Brasileña de Fútbol
(CBF) e impuso a un excampeón del mun-
dial del 58, ajeno a la discusión de ideas y
bastante dócil, Mário “Lobo” Zagallo. Y por
enésima vez, el presidente de facto preten-
dió poner a su protegido Darío, sin éxito. El
tipo no daba la talla.
Zagallo pidió entonces permiso para
obrar. Garrastazu se lo concedió. Conde-
nado a no fracasar, “el Lobo” echó mano de
una estrategia impensada: cinco cerebros
número 10, cada uno de ellos en distintos
98
Emílio Garrastazu Médici, presidente
dictador de Brasil, en 1970.
equipos, puestos en
una misma formación.
Pelé (Santos), Jairzinho
(Botafogo), Gerson (São
Paulo), Tostão (Cruzei-
ro) y Rivelino (Corin-
thians) se juntaron para
maravillar al planeta.
Brasil arrasó y se hizo
inmortal, mientras Garrastazu no pasaba de
ser un sátrapa de poca monta que despacha-
ba de la peor manera a sus opositores, antes
de advertirles, con un eslogan más que di-
ciente, “Brasil: lo tomas o lo dejas”.
Pasado un tiempo, Pelé marcó distancia:
“Al estar pendientes del fútbol y del cam-
peonato, lo que estaba pasando en nuestro
país llegó a pasar a segundo plano. Ganar el
Mundial de México en 1970 fue una autén-
tica alegría para todos, pero la parte mala
fue que eso tapó las torturas, los desapare-
cidos y los asesinatos. Hubo un momento
en el que pensé dejar la selección debido
a las atrocidades que los militares estaban
provocando en Brasil…”.
EL QUILOMBO DEL 78
A diferencia de Garrastazu, Rafael Vi-
dela y su Junta Militar no pudieron gua-
recerse del todo bajo el título mundial
de la selección Argentina en 1978. Ni en

El periodista y entrenador João Saldanha fue
despedido por el dictador por sus ideas de izquierda.
ese momento ni ahora que han pasado
los años. Al autodenominado Proceso de
Reorganización Nacional y a sus autores
no dejan de aparecerles nuevas revelacio-
nes que demuestran hasta dónde llegaron
los atropellos que dejaron más de 22.000
personas entre asesinadas y aquellas a las
que se llevaron vivas los escuadrones de te-
rror que servían a la dictadura.
Los militares habían asaltado el poder
en 1976, cuando derrocaron a María Estela
Martínez, viuda de Juan Domingo Perón.
El Mundial, otorgado 12 años atrás por la
Fifa, les cayó a los golpistas como anillo al
dedo. Fanático como ninguno del fútbol,
el pueblo argentino se dedicaría quizás a
pensar más en la pelota que en los alcances
de lo que tramaba en la Casa Rosada, que-
darse durante largos años al mando de los
destinos de la nación.
Sus cálculos estaban errados. La fiebre
mundialista, ni ninguna otra, eran inca-
paces de tapar el tamaño de los crímenes
y del miedo que asolaban de día y noche a
la sociedad argentina. Y las voces en el exi-
lio, con la intelectualidad a la vanguardia,
advertían que el Mundial sería utilizado
con fines propagandísticos. Pero hay que
admitir que el fútbol, entre otras cosas, es
adicción pura. El torneo comenzó y, a ve-
ces tumbos, la selección local comenzó a
CRÓNICA
FÚ TBOL Y P OLÍ T I CA
La campeona del mundo en 1978 fue la selección Argentina, acusada de fraude tras conseguir una
goleada de 6-0 a Perú, en la segunda fase del torneo. Después venció a Holanda en la final.
avanzar al único destino que a Videla y a
los suyos servía, el título.
Buen equipo, en las manos de un ícono
nacional, el técnico César Luis Menotti,
esa meta era bastante probable. Eso sí,
con un factor inmanejable de por medio,
el siempre poderoso Brasil. Sin enfrentarlo
directamente, había que ser superiores a
los eternos rivales. Y demostrarlo signifi-
caba vencer a Perú por, mínimo, cuatro go-
les de diferencia, en un partido definitivo si
de llegar a la final se trataba.
Ese es el otro duelo que Videla nunca
pudo ganar, al lado del que perdió ante las
víctimas de sus atrocidades. Argentina le
ganó a Perú 6 a 0 en el estadio de Rosario, el
21 de junio, resultado escandaloso, aún más A Rafael Videla y a la junta militar les cayó
como anillo al dedo el Mundial de 1978.
en la lectura que se hizo de él. El hecho de que
el arquero del Perú fuera el argentino Ramón
“Chupete” Quiroga fue la puerta de entrada a pre jueguen peruanos, los otros siempre se
todo tipo de supuestos. Que lo siguen siendo prestan para cosas (...) Lo de Quiroga nun-
hoy, por cuanto nunca existió la prueba reina ca me gustó. Con seis jugadores de la se-
de un presunto soborno a los peruanos. lección hablamos un día antes con Marcos
Futbolistas y autores de posibles alian- Calderón (el técnico del 78) y le pedimos
zas negaron siempre cualquier irregulari- que no lo hiciera jugar ante Argentina”.
dad. Con una excepción. Muchos años des- Hay otra versión, la de un supuesto
pués, en 2010, en curso de un debate por acuerdo entre las dictaduras de Vide-
la posible convocatoria de extranjeros na- la y de su homólogo, Francisco Morales
cionalizados a la selección nacional perua- Bermúdez, usurpador entonces de la Casa
na, José Velásquez, quien jugó ese partido de Pizarro, en Lima. Posteriores acuerdos
ante Argentina, dijo: “Es mejor que siem- comerciales entre las dos naciones, con
99

Chile clasificó al Mundial de 1974 en el repechaje que
no quiso jugar la URSS en protesta contra Pinochet.
los funestos personajes aún a cargo de los
gobiernos, habrían significado el pago del
favor. Nadie ni nada certifica esa hipóte-
sis. Como tampoco muchos consideran
digno de credibilidad lo que dijo Fernando
Rodríguez Mondragón, hijo de Gilberto
Rodríguez Orejuela, en su libro El hijo del
ajedrecista, cuando afirmó que fue el cartel
de Cali el que pagó a los jugadores de Perú
para que se dejarán vencer por Argentina.
En lo que sí coinciden algunos ana-
listas es que la victoria de su equipo en
el Mundial les dio a Videla y a la Junta Mi-
litar un segundo aire. Y que si el resultado
hubiera sido diferente al título argentino,
el destino hubiera sido otro, como sí suce-
dió después tras la debacle en las Malvinas.
CHILE Y EL DUELO FANTASMA
Y de esta saga de fútbol y timos no podía
ser excepción el general Augusto Pinochet
Ugarte. Su capítulo en los mundiales de
fútbol corresponde a la, quizás, mayor ver-
güenza de la historia de los eliminatorias.
El golpe y la muerte de Salvador Allende
(11 de septiembre de 1973) sucedieron a
ocho meses de dar inicio al Mundial de
Alemania 74. Por esas coincidencias que
rayan en lo absurdo, una repesca, o re-
CRÓNICA
FÚ TBOL Y P OLÍ T I CA
pechaje, puso apenas dos meses después
de esa fecha a la Unión Soviética y a Chile
frente a frente. El ganador de la serie ob-
tendría un cupo a la serie final.
El primer partido de dos, programado
en Moscú, estuvo lleno de tensión. El re-
pudio al asalto al Palacio de la Moneda era
general en casi todas partes, pero si había
quienes se sentían tocados con los hechos
del 11 y la cacería de adeptos a Allende,
esos eran Cuba y la Unión Soviética. Los
estrechos lazos entre lo que había sido el
gobierno de la Unidad Popular y el mundo
socialista, hacían entonces de la Junta Mi-
litar un enemigo sin ningún tipo de mati-
ces. Pero ahora el fútbol se atravesaba. El
equipo chileno fue tratado casi que con in-
diferencia y poco pareció importar el 0 a 0
con que se marchaba de la capital, un buen
dividendo.
100
La revancha, programada en Santiago
para el 21 de noviembre de 1973, no se jugó.
La Unión Soviética decidió no enviar a ju-
gar a su selección, como protesta, apunta-
ron sus dirigentes del fútbol, por el hecho
de tener que jugar en un Estadio Nacional
que servía de campo de concentración.
La Fifa armó entonces una pantomima.
Los jugadores chilenos aparecieron en la
cancha y, a la orden del pito del árbitro,
avanzaron haciendo suaves toques entre
cuatro de ellos sin más oposición que la de
la brisa, para que el capitán, “Chamaco”
Valdés, anotara en un arco vacío. Unas
8000 personas celebraron lo que parecía
un gol y Chile se calificó. Para no decep-
cionar a los asistentes, se jugó enseguida
un partido contra el Santos de Brasil, que,
para castigar la vergüenza, empujó un 5 a
0 en la portería chilena.
Casi 14 años después, en 1987, Chile fue
sede del Mundial juvenil de fútbol. El día
de la final entre Yugoslavia y Alemania
Federal, Pinochet, aún en el poder, me-
tió centenares de militares infiltrados (en
realidad uniformados con traje, corbata y
lentes oscuros) en las tribunas del mismo
Estadio Nacional en procura de cazar con-
tradictores. El “Y va a caer... y va a caer... y
va a caer” hecho coro por miles de asisten-
tes abortó esa operación miedo y le indicó
que su final estaba más cerca.
EL 1-0 DE LA GUERRA FRÍA
No hay que escapar del mismo 1974
para dar con otra coincidencia a la que no
se le puede bajar del carácter de increíble:
el partido que, por obligación, debieron
sostener la entonces Alemania Occiden-
tal y la República Democrática Alemana
(RDA). Como si se tratara de un concurso
de morbo, el sorteo se había encargado de
ponerlas en el mismo grupo 1, al lado de
Chile y Australia.
Faltaron espacios en los medios de
comunicación y sillas en los bares para
diagnosticar cuánto significaba ese cho-
que, que antes de un 11 contra 11 era el
enfrentamiento de dos concepciones del
mundo, un auténtico derbi de la Guerra
Fría. Eso sí, no cabían dudas sobre quién
vencería: la Alemania del Oeste, que conta-
ba con jugadores de primera calidad como
 Un duelo épico vivieron las selecciones de Alemania del Oeste (blanco) y del Este (azul) en 1974, en
lo que fue considerado un derbi del capitalismo contra el comunismo, que ganó 1-0 el segundo.
Franz Beckenbauer, Paul Breitner y Gerd
Müller, entre otros. En cambio, del otro
lado, según el discurso oficial, se trataba de
genuinos representantes del proletariado
dispuestos a entregar hasta la última gota
de sudor por su pueblo.
Al cabo de 90 minutos en el estadio
de Hamburgo, un nombre se hizo común
en todas las primeras páginas de los dia-
rios: Jürgen Sparwasser. “Chuté desde
el este con dirección oeste”, respondió,
no sin carga política, el hombre que ha-
bía venido del otro lado de la Cortina
de Hierro para humillar al capitalismo,
como pregonaban los diarios oficiales
de la RDA y vecinos. El 1 a 0 no cambió
el curso de la historia final. La Alemania
símbolo de Occidente ganó el título, lue-
go de derrotar a una arisca Holanda en
el encuentro definitorio y Sparwasser se
hizo protagonista durante años. Más aún
cuando desechó una oferta para ir a jugar
en Occidente, lo que lo ungió ante los su-
yos como un tipo coherente y leal. Pero
el cuento de hadas no duró para siem-
pre. En 1988, cansado de que lo hubieran
usado y de no haber recibido ni siquiera
la casa y el carro prometido por su haza-
ña, el exjugador aprovechó la invitación a
un partido de veteranos en el otro Berlín
para no volver a la RDA, justo en momen-
to en que el muro ya comenzaba a crujir y
sus cimientos a ceder.
3000 MUERTOS
Esa lucha entre las Alemanias no ha-
bía hecho más que darle razón a Ryszard
Kapuscinski cuando años antes había di-
cho que “la frontera entre el fútbol y la
política es tan tenue que resulta casi im-
perceptible”. Sabía bien el maestro del ofi-
cio por qué lo decía y, sobre todo, cuando
denominó “la guerra del fútbol” al feroz
choque, ese sí, entre El Salvador y
Honduras en 1969.
Para ser justos, no fue el fútbol el que hizo
la guerra, pero sí se le usó, de lado y lado, para
dispararla. Los ánimos caldeados desde los
gobiernos de los presidentes Fidel Sánchez
Hernández (El Salvador) y Oswaldo López
Arellano (Honduras) encontraron en la dis-
puta por un cupo al Mundial de México 70
el cerillo para prender fuego a la frontera
entre dos naciones hermanas. El saldo: más
de 3000 muertos y una cifra imprecisa de he-
ridos, según los cálculos más conservadores.
Los partidos de ida y vuelta en Teguci-
galpa y San Salvador fueron un infierno, en
los que lo más importante para los jugado-
res era salvar sus vidas. Cerco a los hoteles
en donde se hospedaban los equipos, lin-
chamiento de hinchas contrarios y asona-
das con huevos podridos y ratas muertas
como artillería fueron casi comunes, tal
cual lo contó el periodista polaco.
Pero, a diferencia de las anteriores his-
torias, el personaje aquí fue una hincha.
101
Amelia Bolaños, salvadoreña, tenía 18 años
en la época. El día en que los jugadores de
su país jugaron en Tegucigalpa, ella estaba
en su casa atenta a la transimisión del en-
cuentro. En los minutos finales el futbolis-
ta hondureño Roberto Cardona logró el gol
de la victoria. Ella, quien conocía las humi-
llaciones que, antes del partido, habían su-
frido jugadores y seguidores de la selección
de su país, tomó el arma de fuego de su pa-
dre y se pegó un tiro en el corazón.
El hecho se volvió una bola de nieve y
los sentimientos nacionales se desborda-
ron. El sepelio tuvo ribetes dramáticos con
presidente y ministros a bordo, a lo que se
sumó el equipo nacional de fútbol en ple-
no. Era un hecho que la guerra estaba en
marcha. Políticos irresponsables dieron el
puntapié para que así fuera. Y así fue…
Hoy sería impensable un desenlace de
ese tenor. Quizás, la pregunta actual es:
desde la arista política, ¿cuánto puede dar-
le el Mundial a Vladimir Putin en términos
de popularidad local y frente a su dimen-
sión en el concierto internacional? Aun-
que, antes, valdría conocer si es cierto que
necesita de este evento o le basta ese perfil
de autosuficiencia con que ha manejado
las cosas: apenas una semana después del
sorteo del Mundial, salió a anunciar que
se lanza como candidato presidencial a las
elecciones de marzo próximo. ¿Mera coin-
cidencia? ¿O jugada de número 10?
CRÓNICA

102
 LA MANSIÓN DE
MEDINA
Aunque fue célebre por sus reuniones entre el jet set y la
política, la que fue la mansión del tesorero Santiago Medina
es ahora escenario de matrimonios y podría ser vendida.
POR LARIZA PIZANO Foto León Darío Peláez

L
a lujosa casa en la que vivió San-
tiago Medina Serna esta desti-
nada al amor y a las relaciones
públicas. Durante sus últimos años, el
tesorero de la campaña de Ernesto Sam-
per vivió en la mansión del norte de Bo-
gotá rodeado de misterio, lujos y espe-
culaciones. Su pareja por años, y quien
lo acompañó hasta su muerte, fue Édgar
Ernesto Hernández, un decorador de
interiores con quien Medina compartía
el gusto por los anticuarios, las lámpa-
ras doradas, las esculturas de bronce,
los pianos de época, los tapetes persas
de color rojo, los espejos, las campanas
y los cuadros, los mismos con paisajes
de la sabana, con cuya supuesta ven-
ta justificó la entrada a sus cuentas de
40 millones de pesos provenientes de
una empresa fachada del cartel de Cali,
que terminaron en las finanzas de la
campaña samperista.
Hoy la casa todavía sigue tapizada
con espejos dorados. Como también
son doradas las barandas, las duchas,
las llaves de los baños, las chimeneas y
las chapas de entrada a la piscina en la
que, a sus 48 años, y poco tiempo antes
de morir, Medina hacía ejercicios para
aliviar sus problemas de salud.
Pero entre tantas antigüedades no
hay fantasmas. De hecho, la mayoría
de cosas que tenía Medina en la casa
no eran del todo viejas. También había
muchas imitaciones que le gustaban
en sus recorridos por los mercados de
pulgas, cada vez que viajaba a Europa.
Algunas de ellas las vendía en el anti-
cuario que tenía en el barrio Rosales, y
con otras decoraba su sala mientras un
desfile de políticos colombianos ad-
miraba su gusto. Fue particularmente

103
sonada una de las fiestas que hizo para
celebrar el triunfo de Ernesto Sam-
per a la presidencia de la república, en
1994, a la que asistió buena parte del
establecimiento bogotano. “Invitaba
cien personas y me llegaban doscien-
tas”, dijo en el libro Mis verdades, tus
mentiras, que publicó después de ser
condenado por el proceso 8000.
Hoy la casa de Medina sigue siendo
un espacio de fastuosas fiestas. Pero
a ella no van miembros del estableci-
miento, sino decenas de parejas de clase
media que quieren celebrar su matrimo-
nio con toda la pompa del caso. Se llama
Mansión Francesa y le dicen Mansión
Medina, confundiéndose a veces con el
lujoso Hotel Casa Medina, ubicado en la
carrera séptima con calle 70 en Bogotá.
En su salón principal idealmente caben
cien personas, que antes de sentarse a
comer acompañan a los novios a tomar-
se fotos en el ático, la piscina o los jar-
dines. Pero hay un lugar que prefieren
las novias: la escalera principal. Suelen
adornarla con flores y pétalos en el piso,
como los que adornaron algunas de las
Quería armar
un verdadero
palacio. Un lugar
donde estuvieran
presentes el jet set
y la política, que en
Colombia son casi
lo mismo.
novelas nacionales filmadas en el lugar:
La viuda de la mafia, Pura sangre y Vera-
no en Venecia.
La Mansión Medina es considerada
patrimonio por su valor arquitectónico.
Sin embargo, sorprende que esta casa,
imitación republicana, tenga un valor
más paisajista que estructural. Su estilo
es similar al de otras edificaciones bo-
gotanas, como la Alcaldía y algunos edi-
ficios de San Victorino, pero es menos
antigua. En plata blanca, es una rareza.
Ni siquiera hay claridad sobre quién fue
su arquitecto. Para la urbanista Katya
104
González, experta en patrimonio, es una
casa que llama la atención y que tiene
un valor paisajístico, pero responde a
una tendencia de mediados del siglo XX
en Colombia en la que se puso de moda
importar planos desde París para hacer
construcciones similares.
La primera referencia que se tiene
de la mansión en la Oficina de Instru-
mentos Públicos de Bogotá es del 7 de
octubre de 1954, cuando la propiedad
fue vendida por Jorge Salcedo Salgar a
Federico Schorr. De Salgar se sabe que
era un doctor vinculado a la Facultad de
Medicina de la Universidad Nacional,
que lideró el debate sobre la moderni-
zación de los hospitales en los años cua-
renta y se enamoró de una casa hecha
en 1950, aunque pareciese más vieja.
De Schorr, por su parte, se sabe que era
descendiente de alemanes, algunos de
los cuales migraron a Colombia y otros a
Argentina, y algunos de cuyos herederos
se dedican al negocio de los envíos y el
embalaje.
Luego de procesos de sucesión y pa-
gos de hipotecas, los Schorr tuvieron en
 CRÓNICA

MAN S I ÓN DE MEDI N A

su poder la casa hasta 1987, cuando la

vendieron a Santiago Medina por cinco
millones de pesos. Pero para ese enton-
ces Medina, quien venía de una impor-
tante trayectoria en el sector privado en
cargos directivos como Cementos Bo-
yacá, Proficol e Industrias Agrícolas de
Cali, ya estaba obsesionado con la deco-
ración. Dicen quienes lo conocieron que
le metió 500 millones de pesos a la casa
para reforzar sus estructuras, arreglar la
piscina, pintar las paredes, hacerles pai-
sajismo a los jardines y llenarla de obje-
tos. Entre ellos, un piano que perteneció
al expresidente Marco Fidel Suárez.
En 1989, Medina se trasteó a la casa.
Era su obsesión, aseguran. Quería armar
un verdadero palacio. Un lugar donde es-
tuvieran presentes el jet set y la política,
que en Colombia son casi lo mismo. Con
Édgar, su pareja, subía y bajaba mue-
bles, les ordenaba a las empleadas alistar
la vajilla para el té, ponía y disponía los
cuadros y estaba pendiente del bombillo
que mejor le iba a cada lámpara de cris-
tal. “Esta no es de los Héroes”, decía, re-
firiéndose al Lámparas Baccarat ubicado
al frente del monumento a los Héroes, en
la Autopista Norte con calle 80.
Medina vivió en la mansión has-
ta 1998, de donde salió a finales de año
para terminar muriendo en la Clínica
del Country, el 15 de enero del año si-
guiente. Durante su agonía se concen- empresas John Alexander Alfonso. Para blanqueó al menos 900.000 euros pro-
tró en su testamento, detallado y con- garantizar los derechos de sucesión de este venientes del tráfico de estupefacientes
creto, otorgado mediante la escritura último, tuvo que mediar un juez y fallar que y fue acusado de ser lavador del cartel de
pública 5032 de la notaría 20. Los tres entre él y Hernández sí había existido una Cali. Según El Tiempo, diez años antes
beneficiarios de la totalidad de sus pro- unión marital de hecho. Algo —aunque fue- usaba la Fundación Colombia Paz como
piedades fueron su pareja, Édgar, con el se mínimo— de la casa de Medina, probable- fachada. A comienzos de siglo, Cuevas
40 %, y su madre y su hermana, con el mente, terminó en sus manos. ya había sido capturado por lavado y
10 % para cada una. Entre sus beneficia- Varios líos de sucesión a comienzos de recluido en La Picota, de donde se voló
rios también estuvo el médico Santiago la década del 2000, y reclamos interpues- meses después.
Rojas, quien lo ayudó en su convalecen- tos por algunas personas que compraron Pero después de estar en el centro de
cia y a quien le dejó el 2 %. El albacea de derechos de sucesión de los testamenta- la jugada política, la mansión de Santiago
sus muebles fue también Édgar, quien rios, llevaron al juez 41 civil del circuito a Medina es hoy un salón de recepciones
se quedó con todos ellos, ropa y enseres. secuestrar y avaluar el bien con el fin de en el lugar más cotizado de Bogotá. De los
Édgar tuvo que buscar refugio para la venderlo y reconocer los derechos de los poderosos solo queda el recuerdo, además
viudez. Al poco tiempo de morir su esposo, demandantes. El consorcio Eaton College de las aspiraciones de quienes buscan sen-
se fue a vivir a otra gigantesca casa Girardot, International y la Fundación Colombia tirse, a través de la arquitectura, parte una
también llena de objetos de decoración. Re- Paz, incluida en el testamento, fueron élite enamorada y universal. Cornisas, ca-
cuperado, en 2005 estableció una relación hasta entonces sus socios mayoritarios. piteles, balaustres, molduras frisos lisos
que le duró hasta su muerte, cinco años Hasta esa época también trabajó en hacen parte de los amplios espacios de esta
después. Se enamoró del administrador de la casa el español Óscar Cuevas, quien isla, algo extravagante, de la capital.

105
 CRÓNICA

EL MUNDO
DETRÁS DE UNA
ESCOPETA
Juan Sebastián Gaviria, autor de Brújulas rotas, La
venta y Contenido explícito, nos lleva al mundo del
sporting clays, un deporte que crece a buen ritmo
en el mundo y que, bajo el lente de este escritor
colombiano, es una herramienta para alcanzar
estados elevados de conciencia.
POR JUAN SEBASTIÁN GAVIRIA
Foto JUAN PABLO GUTIÉRREZ

A
bro el baúl y saco
mi escopeta de
una caja me-
tálica en cuya superfi-
cie se ven calcomanías
de aerolíneas y ras-
pones de incontables
viajes a lo largo del
mundo. Es una Beretta
DT11, el Lamborghini
de las escopetas. El
olor que me llega a la
nariz, una mezcla de miles de kilómetros. Me saluda con amabi-
aceite, pólvora, sudor, lidad, echa una mirada rápida a la escopeta
acero y metal, me lleva que mis manos arman con ademanes mecá-
de regreso a mi infancia. nicos, y abre la parte trasera de su camio-
Junto a mí se estaciona neta. Al lanzar un atisbo, veo varias cajas
una Ford de platón de la que de munición marca Clever y dos escopetas
baja un viejito con cabello blan- dentro de fundas de cuero. El tipo es un ve-
co y las venas azules dibuján- terano y no me cuesta imaginarme que si
dose bajo la piel traslúcida del El olor, una mezcla llego a la tercera edad quizás acabe convir-
dorso de sus manos. Viene re- tiéndome en alguien como él, un anciano
molcando un buggy camuflado de aceite, pólvora, que no necesita de un bastón para caminar,
con llantas de combate. Tiene sudor, acero y pero que sin una escopeta no tiene motivos
placas de Montana, y calculo para estar de pie.
que para venir a la competencia metal, me lleva a Me despido y camino a lo largo del pol-
debió manejar un buen par de mi infancia. voriento parqueadero repleto de autos y

106
 CRÓNICA
S P ORTI N G C L AYS
briagarme. Respiro para man-
tenerla a raya, cosa que sus olas
ácidas rompan contra mis pies.
Vamos a hacer esto.
Llego al puesto nueve de la
cancha azul con 15 minutos
para respirar, fumar, relajarme,
meter mi cabeza en el juego. El
nombre del juego es sporting
clays, y si no lo has jugado a
muerte, como si de ello depen-
diera el mundo, entonces no
lo has jugado en absoluto. El
puesto es un marco de made-
ra sembrado sobre un suelo de
tablas junto al camino. Al lado
del marco hay un tipo sentado
en una silla plegable, protegido
del sol con un paraguas. Lo salu-
do. No oigo qué me dice. Estoy
demasiado nervioso. Boto el ci-
garrillo y me dedico a respirar.
Al cabo de unos minutos llegan
los otros dos miembros de mi
escuadra. Uno de ellos es un ja-
maiquino. El otro es un gringo
de Chicago. Nos saludamos y
nos presentamos. No somos un
equipo, sino una escuadra. Va-
mos a hacer el recorrido juntos
y, técnicamente, estamos com-
pitiendo entre nosotros. En un
En el sporting clays se usan cartuchos de varios calibres, intento de espantar fantasmas
como .410, .20 y .28, pero el calibre .12 es el más popular. con mi escoba zen, me repito
que solo estoy compitiendo
camionetas.Trepoauncarritodegolfyarranco.Elairequegolpeamicara contra mí mismo. En el suelo
es caliente. Estoy en el Campeonato Mundial de Sporting Clays en Esta- frente al marco de madera hay
dos Unidos. Cogiendo el timón con una mano, hurgo en mi morral y saco una caneca rebosante de cartu-
mi horario. Cancha azul. Puesto nueve. Reviso el mapa. Este polígono es chos vacíos, cajas de munición
enorme y si me pierdo corro el riesgo de no llegar a tiempo.
Paso junto a la sede, afuera de la cual hay varios corros de
tiradores conversando animosamente. Aquí y allá hay ca-
Para espantar fan-
rritos de golf atiborrados de escopetas, maletines y cajas de tasmas con mi esco-
tiros. La fila de registro de tiradores alcanza a salirse por la
puerta trasera de la sede. Me llega el olor a humo de puro.
ba zen, me repito que
Las carcajadas nerviosas alcanzan mis oídos. Respiro hon- solo estoy compitien-
do. Manejo pisando a fondo el pedal de ese carrito de golf
en cuyas entrañas vibra un motor de podadora. Me cruzo do contra mí mismo.
con los carritos de otros tiradores, algunos de los cuales vie-
nen de disparar en la cancha a la que estoy a punto de enfrentarme. En y botellas de agua estrujadas;
sus rostros leo todo tipo de expresiones que me abstengo de interpretar. rastros de los tiradores que
Estoy nervioso. Tengo ganas de orinar y de vomitar. Es la competencia, recorrieron esa cancha en la
poniéndome a circular la sangre. Bien. La adrenalina comienza a em- rotación de la mañana. Ya casi
108
es mediodía, y a las 12 en pun-
to será nuestro turno. Alrede-
dor se oyen los carritos de golf
y los buggys que se esparcen
sobre las trenzas de caminos
polvorientos hacia las distintas
canchas. El bosque de la Flori-
da, inesperadamente salvaje,
se alza espeso de los bordes del
camino. Al mirar en rededor veo
extensiones de pastizales altos,
palmeras, solitarios árboles
retorcidos que parecen haber
sido calcinados por relámpagos
y bosques lejanos que me re-
cuerdan mucho a los moricha-
les de los Llanos Orientales co-
lombianos. La música de fondo
son las constantes explosiones
superpuestas en los campos de
práctica, un sonido que me hace
pensar en una enorme olla den-
tro de la cual revientan granos
de maíz pira. De repente se for-
ma un silencio tenso. Al mirar
hacia el fondo del camino de tie-
rra veo que se acerca una cuatri-
moto a toda marcha. Encima va
un miembro del staff del polígo-
no, un tipo fornido con el rostro
tostado por el sol y unas gafas
Oakley desvencijadas y cubier-
tas de polvo. Al pasar ante cada
uno de los puestos hace una se-
ñal con la mano y el sonido de su
cuatrimoto va despertando los
primeros tiros de la rotación del
mediodía.
Soy el primero en la escua-
dra. Es cosa del azar. El juez
llama mi nombre desde su silla,
así que cojo mi escopeta y cami-
no hacia el marco de madera.
Es un marco normal, el tipo de
marco que uno esperaría ver a la
entrada de una casa campesina,
pero a la altura de mi cintura
está atravesado horizontalmen-
te por una tabla de madera que
sirve para apoyar la escopeta
mientras recargas. Así son los
marcos de sporting, como una
puerta sembrada en medio del
 La limpieza del arma es fundamental para su buen funcionamiento. Muchos tiradores hacen de este momento un ritual.
bosque para que te asomes y atisbes a los
más íntimos rincones de ti mismo. Más que
un marco, es un espejo. Pido las muestras.
El juez tiene un control en la mano. Oprime
el botón, suenan las máquinas que están es-
condidas tras los arbustos y dos platos ana-
ranjados cogen vuelo y trazan sus parábolas
a unos 20 metros de distancia. Leo el menú.
Cuatro veces A más B simultáneo. Detrás de
mí, el jamaiquino suelta un lamento, venci-
do de antemano, intimidado por la trayec-
toria y la velocidad de los platos. El gringo
me desea suerte. Respiro hondo. Visualizo,
tratando de simular la sensación de rom-
per ese par de platos, como quien trata de
recordar algo que aún no ha vivido, como
quien sueña despierto. Reviso mi posición,
confirmando que el pie izquierdo esté apun-
tando hacia el sitio donde pienso apretar el
gatillo. Abro mi escopeta. De nuevo el olor
a acero y aceite. Meto un cartucho en cada
uno de los dos cañones. Cierro la escope-
ta, que se ajusta con un clic suave. Respiro
nuevamente. Apoyo la culata en el hombro
derecho. Acaricio el gatillo con el dedo índi-
ce. Poso los ojos en esa franja de cielo donde
los platos comienzan a verse tras salir de las
máquinas. Digo “pull” y ese par de platos en-
demoniados vuelan, distantes y más rápidos
de lo que se veían cuando pedí la
muestra.
En el sporting clays, a dife-
rencia del trap o el skeet, los
platos pueden volar en infini-
tos ángulos y velocidades. Las
máquinas pueden estar a tu
lado, detrás de ti, escondidas
tras fardos de heno... Una can-
cha tiene entre 13 y 15 puestos.
En cada puesto disparas tres
o cuatro pares. Por lo general
un recorrido suma 100 platos.
Cada puesto tiene dos máqui-
nas. Nunca vas a disparar una
cancha igual a otra. Las varia-
bles son eternas. No terminas
de conquistarlas nunca. En-
tonces: ¿cómo es posible que
rompa ese par de platos, si no
sé la distancia o la velocidad
exacta a la que están volando?
Solo tengo un dato, que es la
velocidad de mis tiros, 400
metros por segundo, y eso no
me sirve para absolutamente
nada. ¿Cómo es posible que
vaya a romper esos platos cuya
velocidad desconozco y cu-
109
yas engañosas parábolas solo he visto una vez? Aquí
es donde el sporting clays se convierte en un acto de
cultivación espiritual.
La primera vez que disparé un arma fue a los 3 años
de edad. Se trató de un revólver calibre .22 de mi pa-
dre. La primera vez que disparé una escopeta fue a los
11 años. Mi padre y yo estábamos caminando por un
potrero en una finca de Tocaima, cazando perdices.
El calor era absurdo. Los zancudos me estaban desfi-
gurando la cara. Llevábamos cinco horas de caminata.
Mi padre llevaba 12 perdices colgando de su cinturón
en unas pequeñas horcas de cuero, con los ojos y los pi-
cos ensangrentados. Ese fue el día que maté una liebre
con una escopeta calibre 16. Nos la comimos esa misma
noche. La escena me marcó tanto que después la metí
en mi novela Shotgun Zen, para que el joven Carter
Atwood, el protagonista, sintiera lo que yo sentí ese día.
Las jornadas de cacería con mi padre, las sesiones de
limpieza de armas al atardecer, las cenas de codornices
asadas en las que cada tanto debíamos pausar para es-
cupir algún perdigón que se había quedado escondido
entre la carne, esa novela está repleta de escenas au-
tobiográficas. Los mejores recuerdos que tengo de mi
infancia, cazando y disparando junto a mi padre. Toda
mi vida he estado rodeado de armas de fuego. Algunos
de los recuerdos que se reflejan en el acero no son tan
buenos: a los 17 años de edad, el día en que secuestra-
ron a mi abuelo, mi papá tocó a la puerta del aparta-
mento donde yo vivía con mi madre, me dio su Colt .45

El pre-shot routine tiene lugar instantes antes de pedir los platos. Este
es el momento en el que la mente debe vaciarse de pensamientos.
y me dijo que la usara si era ne-
cesario. Para este entonces yo
ya tenía claro que las armas de
fuego prestan una triple utili-
dad. Está el lado de la defensa y
la depredación. Está el lado de
la estética (no es en vano que
en todo museo serio existe una
sección con armas blancas y de
fuego). Y está el lado espiritual:
la insospechada realidad de
que existimos quienes usamos
estas herramientas de des-
trucción para cultivar nuestra
disciplina, nuestro equilibrio y
nuestro silencio interior.
Ambos platos explotan en el
aire como ovnis. Polvo rojo yén-
dose en el viento. Yo ni siquiera
sé bien qué pasó. Abro la esco-
peta, que escupe dos cartuchos
vacíos y humeantes contra la
palma de mi mano. Los arrojo a
la caneca que está a mi derecha.
Vuelvo a cargar. Vuelvo a respi-
rar. Vuelvo a visualizar. La cula-
ta en el hombro. Los ojos bien
abiertos. “¡Pull...!”.
Después de recorrer el con-
tinente en motocicleta con
quien hoy en día es mi esposa
CRÓNICA
S P ORTI N G C L AYS
recía en mi radar. Florida, Texas, Guatavi-
ta, Carolina del Norte, Illinois, La Calera,
Montería, Francia...
Dos días después de su nacimiento, mi
hija ya estaba en el polígono del Markham
Park en Florida. Con ella y mi esposa hemos
recorrido el mundo buscando competen-
cias de sporting clays. Entre los tiradores
de Colombia, a la mayoría de los cuales co-
nocimos en el Club Cazandes, mi hija tiene
un ejército de padrinos. También acabó por
volverse famosa entre los tiradores de Esta-
dos Unidos, algunos de los cuales comenza-
ron a apodarla “Hollywood” tras verla en in-
contables competencias, siempre sonriente,
saludando con sus enormes tapaoídos y sus
pequeñas gafas de sol. De cierta manera, la
escopeta ha sido la aguja de la brújula que
marca el destino de nuestros viajes. Y los lu-
gares que hemos visto, la gente que hemos
conocido, las historias que hemos escucha-
do, todo esto nos lo ha dado la escopeta por
y la madre de mi hija, la vida me empujó a la escritura viajar detrás de ella. Todos los pormenores,
de narrativa. Lo primero que escribí fue Brújulas rotas, los problemas que hemos tenido tramitan-
una novela autobiográfica. Y seguí con unos cuántos
experimentos, algunos de los cuales acabarían con-
virtiéndose en buenos proyectos. No fueron tiempos
muy bonitos: había pasado los últimos dos años sobre
una moto, a la intemperie, todo para acabar de regreso
en Bogotá, con esa asquerosa sensación de no tener a
dónde ir, ni por qué. No hacía sino escribir. El encie-
rro era absoluto. Todos los días en el escritorio, por el
simple hecho de que no había nada más en el mundo
que me llamara la atención, nada más que representara
un verdadero desafío. Esto tuvo un costo. Mi ansiedad,
mi trastorno obsesivo, mi agresividad y mi neurosis se
salieron de proporciones. Hubo violencia de la fea, de
la que no necesita de armas ni deja rastros de sangre.
Cierto día mi padre me llamó y me preguntó si quería ir
a disparar platos. Le pregunté qué era eso. Platos, dijo,
con escopeta. No tenía mucho que perder, así que fui a
la que sería mi primera competencia de sporting clays.
Recuerdo estar parado en medio de esa cancha, un po-
trero plano como una mesa de billar gigante rodeada
por enormes montañas afiladas y lejanos bosques, en-
candilado, con el hombro adormecido, sin poder creer
que algo así existiera y que yo me hubiera demorado
tanto en descubrirlo. Tras apretar el gatillo y ver un
plato volverse polvo en el aire por primera vez, supe
que había tocado tierra firme. Esto no era un deporte,
mucho menos un hobby: esto era aire para el hombre
que se estaba asfixiando. Compré una escopeta y de in-
mediato me puse a competir en cuanto concurso apa-
110

do permisos de exportación e importación,
los papeleos, las exhaustivas requisas en los
aeropuertos, los vuelos perdidos, todo eso
ha sido un precio demasiado bajo a cambio
de lo que hemos recibido a cambio. Y es que
llega un punto en que la escopeta deja de ser
una hermosa pieza de combate con cañones
de acero y culata de madera: de pronto, se
convierte en una representación tangible
de algo profundo, instintivo, indomable, de
esa parte de la voluntad humana que no solo
quiere habitar el presente, sino penetrarlo
para alcanzar su corazón palpitante.
En el puesto diez hay dos máquinas que
lanzan platos rastreros que avanzan hacia
el tirador como perdices en son de vengan-
za. Comienza el jamaiquino, que rompe los
tres pares, y después viene el gringo, a quien
se le escapa un plato del segundo par. Llega
mi turno y rompo el primer par. Esos platos
vienen tan rápido que algunos pedazos de
arcilla anaranjada aterrizan a mis pies des-
pués de haberlos quebrado. Rompo el se-
gundo par. Estoy volando. Entonces pienso
CRÓNICA
S P ORT I N G C L AYS
Entre los tiradores
de Colombia, a la
mayoría de los cua-
les conocimos en el
Club Cazandes, mi
hija tiene un ejército
de padrinos.
si hoy será el día. En la primera
estación rompí los cuatro pares.
Ya voy dos pares rotos de la se-
gunda estación. ¿Será que hoy
voy a rebasar mi récord de 94
platos sobre 100? Cargo. Y me
como el último par. Es como si
hubiera metido balas de salva
en mi arma. Los platos caen al
suelo intactos, anaranjados,
sin un rasguño. Por supuesto
que me los comí... No es que
el segundo puesto del recorri-
do fuera demasiado temprano
para preguntarme si ese día
conseguiría un resultado ex-
cepcional: lo que sucede es que
siempre es muy temprano para
eso; aquí no hay espacio para el
futuro. Quisiera reírme, quisie-
ra tomármelo suave, pero sien-
to algo frío derramándose en mi
estómago.
El sporting clays nació en
Inglaterra como un pasatiem-
po para entrenar fuera de tem-
poradas de cacería. Y creció
hasta convertirse en algo dra-
máticamente distinto. Técni-
camente es un deporte. Para
mí, se convirtió en un lugar de
equilibrio. De autodescubri-
miento. Al ver cómo alguien
dispara en sporting, puedes
ver cómo se comporta en la
vida. Cómo reacciona ante los
problemas. Cómo improvisa.
Cómo se toma una derrota.
Cómo se adapta a las adversi-
dades. Cómo maneja el éxito.
Como dije, no te paras ante un
111
marco, sino ante un espejo.
Estoy manejando hacia la sexta esta-
ción y en total he perdido cuatro platos.
Las matemáticas me están embrujando. Sí.
Recuerdo ese par que me comí en el puesto
nueve. Recuerdo con amargura que en el
puesto once solo rompí tres de cuatro pares.
Autoflagelo... Si aquí no hay espacio para
el futuro, menos aún lo hay para el pasado.
Pero el puntaje hechiza, el puntaje acecha;
el mayor peligro que corres en estos polí-
gonos es el mismo que corres fuera de ellos:
acabar reduciéndote a un número, a una cifra. El jamai-
quino se da cuenta de que me salí de los rieles y se me
acerca cuando me parqueo junto al puesto 14. Me habla
de mi escopeta. Me pregunta si puede sostenerla. Yo sé
que él está disparando con una Krieghoff K-80, que es
toda una máquina, y que toda esta charla es una excusa
para subirme el ánimo. Entonces comenzamos a hablar
y empiezo a sentirme más relajado. Este tipo de acerca-
mientos entre tiradores es normal. De hecho, es un de-
porte en el que la camaradería suele rebasar el espíritu
de competencia. No es inusual que, cuando fallas un pla-
to, uno de los tiradores de tu escuadra trate de ayudarte
a corregir tu error, aunque esto pueda llegar a represen-
tar que le ganes. En el fondo, todo tirador curtido sabe
que si no hay placer en este deporte, entonces no hay
nada. Tras mi charla con el jamaiquino, efectivamente
me siento mejor. Tengo que confiar en mí. Pero lo que
sucede es que, en el sporting, confiar en uno mismo con-
siste en confiar en las capacidades que uno mismo tiene
para dejar que las cosas sucedan, porque no es uno el que
rompe los platos. Pero tampoco es la suerte.
Una de las cosas que más me gustó cuando empe-
cé a disparar sporting clays fue que de inmediato me di
cuenta de que era un juego en el que, realmente, no ha-
bía lugar para el pensamiento. Es todo entrañas, es todo
instinto e intuición. Y por esto mismo resultó tan bueno
para hacerle contrapeso a mi escritorio y brindarme algo
de equilibrio. El que calcula demasiado, pierde. El que
planea más de la cuenta, pierde. Por supuesto, hay un
momento para hace planes, y este se acaba en el instante
en el que dices “pull”. De ahí en adelante, los ejercicios
conscientes son castigados con todo el peso del fracaso.
La rutina, la respiración consciente, la relajación y
la visualización, todo lo que haces antes de enfrentarte
a un par de platos está destinado a surtir un efecto es-
pecífico: el de despertar al depredador interno y dejar-
lo trabajar en paz. El de mantener a raya al ser pensan-
te y controlador, consciente, calculador, con el que el
mundo civilizado ha arropado al cazador primario que
llevas dentro. Si piensas en lo que sucedió en el pasa-
do o en lo que pueda suceder en el futuro, el plato que
está volando frente a ti no se va
a romper. En cambio, si lo úni-
co que existe en el mundo es
ese plato, si todos tus sentidos
se han entregado a detallar el
modo en que se desplaza por el
aire, tu conciencia va a estar lo
suficientemente hipnotizada
como para que tu instinto haga
el trabajo pesado. Entonces,
el depredador interior entra-
rá en escena y decidirá dónde
poner el cañón de tu escope-
ta y apretar el gatillo para que
esos perdigones que vuelan
a 400 metros por segundo se
encuentren con el plato en el
momento preciso y lo vuelvan
un remolino de polvo rojo. Es
magia pura.
Después, mientras te ale-
jas del marco, el depredador
se escurrirá lentamente en
medio de los pastizales de tu
conciencia, pero permanecerá
ahí, listo para volver a tomar
control de tu cuerpo, alenta-
do por el clic de tu escopeta
al abrirse, salivando al oír los
cartuchos deslizándose den-
tro de los cañones. Cuando,
al final de la jornada, te den
tu trofeo, realmente están
premiando que cuentes con
la capacidad de sustraerte, de
no estar, o de estar más allá de
ti; están premiando que hayas
tenido las herramientas para
distraer tu conciencia con una
tarea simple mientras tu sub-
consciente se hacía cargo de la
gran matanza. Exacto. No fuiste
tú. Fue tu animal interior, ese
cazador resiliente a los asedios
de la civilización y el tiempo.
Los grandes arqueros ja-
poneses tratan el tiro de arco
como una actividad sagra-
da. No creo que el sporting
se merezca menos respeto.
Ellos también dicen que el
tiro de arco es un pretexto
para alcanzar un estado men-
El zancudo negro a lo lejos pare-
ce partirse por la mitad casi dos
segundos después de que la es-
copeta se sacude contra el hom-
bro. Al segundo plato le quito
un pedazo diminuto, que por
suerte la juez alcanza a ver. “Le
arrancaste una pluma del culo”,
dice el jamaiquino. “Le diste con
el balín de oro”, suelta el gringo.
Ignoro los comentarios, respiro,
cargo, visualizo. Apoyo la culata
en el hombro. Lo pido. De nuevo
el primer plato se desmaya a lo
lejos, otra vez un largo instante
después del sonido del disparo:
así de lejos está. Al segundo pla-
to le doy en todo el centro y me
quedo mirando los trozos que
saltan por el aire.
Me preparo para el últi-
mo par del recorrido. Esto
es bueno. Esto está bien. De
repente, no sé dónde estoy.
tal que se podría adquirir de muchos otros modos, pintando, sir- Me siento tan cómodo como
viendo el té, danzando. Esto también es aplicable al sporting clays. cuando patrullaba los potre-
Efectivamente, es un pretexto. Como ejercicio, me ha enseñado a ros recalcitrantes de Tocaima
desligarme del ego y la vanidad para permitirle al subconsciente co- en compañía de mi padre. No
ger las riendas. Me ha enseñado que confiar en mí no es confiar en sé cuántos platos he perdido.
mi conciencia, en mis capacidades para controlar, manipular y cal- No me importa qué diga la
cular, sino confiar en una fuerza profunda que es sabia más allá de lo tabla de puntajes, porque ha
que alcanzo a imaginar. dejado de existir. Solo sé que
Cuando llegamos a la última estación, el puesto ocho, vemos que me encuentro en un contra-
la escuadra de adelante está terminando de disparar. Falta un tira- dictorio estado de ausencia
dor, que se está acomodando frente al marco y hunde la mano en la y presencia pura. Estoy y no
bolsa de cuero que le cuelga de la cintura para sacar un par de cartu- estoy. Soy y no soy. Esto es a
chos. En un carrito de golf al borde del camino hay un chico de unos lo que los arqueros japoneses
14 años que está llorando en silencio. Las lágrimas ruedan una tras se refieren por satori. He roto
otra por su rostro inexpresivo. Sostiene la escopeta sobre los muslos la frontera de mi cuerpo. Es
y recorre el cañón con los dedos pensativamente mientras purga su como si pudiera extender el
impotencia y su tristeza. Lo entiendo. He estado ahí. Como dije, el brazo y romper esos platos
nombre del juego es sporting clays. con la mano. No están cerca
La juez del puesto ocho me llama. Es una mujer amable, que tiene ni lejos. La escopeta ha cobra-
la inocente imprudencia de excusarse por la mala suerte que tuvo de do vida y sabe exactamente
ser nombrada juez de la estación más difícil de todo el recorrido. Me cómo moverse, dónde situar-
pregunto qué tan duro puede ser y me paro ante el marco. La máqui- se, y mis manos simplemente
na A está tan lejos que es un puntito naranja en medio del potrero. La acompañan su movimiento.
máquina B está a unos 20 metros de nosotros. Pido las muestras. La Esta es mi victoria íntima
primera máquina lanza un plato que el viento parece llevarse, es un y personal: una vez más, el
punto negro, un zancudo, una mota. Detrás de mí, el jamaiquino y el sporting clays me ha brindado
gringo comienzan a preguntarse entre ellos si ese plato está a 60 o 70 el gran regalo de permitirme
metros. La segunda máquina arroja un plato a ras de suelo, de filo, habitar el núcleo del instante
envenenado con todo el resorte. Bien. Vamos. Disparo el primer par. presente.
112
LA COLUMNA DE LUCAS POMBO
Bola de cristal
C
on la inscripción de las listas de candidatos al Congre-
so de la República empieza el conteo regresivo para las
elecciones del 11 de marzo, y aunque en política no existe
la futurología, aquí va una predicción de lo que puede pasar en la
carrera hacia el Senado.
A pesar de haber perdido a tres de sus senadores por decisio-
nes judiciales, La U no se extingui-
rá, como muchos lo pronostican.
El partido que llevó a Juan
Manuel Santos a la
Presidencia en 2010 y 2014
depende de la maquinaria y
esta sigue intacta en las regio-
nes. La permanencia en cuer-
po ajeno de los “ñoños” en el
tarjetón es muestra de la apuesta
de este partido en las elecciones:
sacrificar la poca opinión que tiene
para mantener, en la medida de lo po-
sible, su representación parlamentaria
y poder endosar sus votos al mejor pos-
tor en la elección presidencial. Pasa de
21 a 18 senadores.
El Partido Liberal se la jugó por
renovar su camada de barones elec-
torales. Los cinco primeros renglo-
nes de la lista liberal al Senado se-
rán ocupados por representantes
a la Cámara que, respaldados por
importantes estructuras políticas,
quieren dar el salto a la Cámara Alta.
César Gaviria le dio una patada al ta-
blero y bajó del pedestal a importan-
tes dirigentes de su partido como
Horacio Serpa y Juan Fernando
Cristo; se juega su pellejo el 11 de
marzo. Mantiene sus 17 curules.
En el Partido Conservador
vemos más de lo mismo. Salvo
por la llegada de Miguel Gómez
Martínez a las toldas azules y el
salto de David Barguil de la Cá-
mara de Representantes al Se-
nado, no hay mayores sorpresas
114
en las listas de este partido. Algunos de sus actuales senadores han
perdido fuerza electoral y otros, como Luis Emilio Sierra, Jorge Her-
nando Pedraza y Hernán Andrade, no buscarán la reelección. Pasa de
18 a 15 senadores.
El uribismo cambió radicalmente la estrategia que lo llevó en
2014 a ser la segunda bancada más grande en el Congreso. Con la
apuesta de abrir sus listas, el Centro Democrático no solo busca am-
pliar su caudal electoral más allá de los dos millones de votos del
expresidente Álvaro Uribe, sino crear estructuras políticas en las
regiones que se traduzcan en alcaldías, gobernaciones y sobre todo
en votos para la elección presidencial. Pasa de 20 a 22 curules.
Cambio Radical será la sopresa en la próxima elección. Duran-
te casi un año, Germán Vargas Lleras y Jorge Enrique Vélez se
empeñaron en llevar a las grandes casas políticas del país —algu-
nas de ellas muy cuestionadas— a su colectividad, con miras a la
elección presidencial.
Los casi seis millones
César Gaviria le de firmas presentadas
por Vargas para impul-
dio una patada sar su candidatura son
al tablero y bajó un abrebocas del poder
del pedestal a electoral de su nueva
estructura. Pasa de 9 a
importantes 15 senadores.
dirigentes. La Alianza Verde
y el Polo Democráti-
co le apuestan al voto
de opinión para superar el umbral electoral. La permanencia de
Jorge Enrique Robledo en la lista del Polo y la llegada de Antanas
Mockus a la cabeza de la lista verde son buenas noticias para estos
partidos que, bajo la sombrilla de la Coalición Colombia, impulsan
la candidatura presidencial de Sergio Fajardo. Tanto el Polo como
la Alianza Verde mantienen sus cinco curules.
Opción Ciudadana sufrió un duro golpe con la salida del clan
Aguilar y García Romero de sus toldas. Entre los senadores Mauri-
cio Aguilar y Teresita García, que decidieron no aspirar a la reelec-
ción, se cuentan cerca de 138.000 votos que difícilmente se podrán
remplazar. Su personería jurídica pende de un hilo. Pasa de cinco a
tres senadores.
El Mira y la “Lista de la decencia”, impulsada por Clara López
y Gustavo Petro, no la tendrán fácil. El reto será entrar a disputar
mano a mano los votos con maquinarias electorales establecidas y
con importantes figuras de opinión, mientras escapan del fantasma
del umbral.