FACULTAD DE INGENIERÍA, ARQUITECTURA Y

URBANISMO
ESCUELA ACADÉMICO PROFESIONAL DE
INGENIERÍA DE SISTEMAS

PRESENCIA DEL TRABAJO INFANTIL EN EL DISTRITO

DE JOSÉ LEONARDO ORTÍZ

AUTOR
SANDRO PAÚL PÉREZ CHANDUVÍ

ASIGNATURA
DERECHOS HUMANOS Y SOCIEDAD PERUANA

TUTOR VIRTUAL
HENRY BAIQUE CAMACHO

CICLO
VII

Pimentel – Abril 2018

 Presencia del trabajo infantil en el
distrito de José Leonardo Ortiz.
Por: Sandro Paúl Pérez Chanduví
Estudiante de la Carrera de Ingeniería de Sistemas
PEaD - USS

Introducción
El trabajo infantil es una actividad que se ha venido desarrollando a lo largo de la historia en
todas las culturas, privando a los niños de su infancia y perjudicándolos física y mentalmente,
impidiendo un desarrollo adecuado de esta etapa de la vida. Nuestro Perú no ha estado ni está
ajena a esta situación, forma parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación,
la Ciencia y la Cultura, institución que, a través de la Convención sobre los Derechos del Niño,
obliga a los gobiernos a proteger a los jóvenes menores de 18 años de la explotación laboral,
existe también el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, institución que vela por los
derechos de los niños y adolescente en nuestro país. A pesar de ello, el trabajo infantil es una
realidad que la podemos palpar día a día, cuando transitamos por las calles de nuestra localidad,
encontramos en las esquinas a niños ofreciendo algún tipo de producto, los mercados de abastos
son también un punto de concentración de este tipo de actividad. De manera particular, el
Mercado Mayorista de Moshoqueque (lugar al cual el investigador concurre semanalmente) es
un lugar donde se puede apreciar de forma directa la presencia del trabajo infantil, y hasta ahora,
ninguna autoridad ha tomado alguna acción para poder erradicar o mermar esta situación que
vulnera los derechos de los niños.

Método
Para el desarrollo del presente trabajo se empleo el método de Observación sistemática, pues
ya se tenía un objetivo claro de observación que es el trabajo infantil, para lo cual se agrupó la
información a partir de este criterio. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) define al
trabajo infantil como todo trabajo que priva a los niños de su niñez, su potencial y su dignidad, y
que es perjudicial para su desarrollo físico y psicológico. Las Convenciones 138 y 182 de la OIT
definen como trabajadores infantiles a los menores de 12 años que realizan actividades
remuneradas, a los de 12 y 14 años que realizan trabajos más livianos, y a todos los niños y
niñas sometidos a las peores formas de trabajo infantil, por medio de las cuales se les esclaviza,
se les recluta a la fuerza, se les prostituye, se les somete a la trata, se les obliga a cometer
actividades ilegales o se les pone en peligro. Asimismo, la ONG internacional Humanium,
comprometida a acabar con la violación de los derechos infantiles en el mundo, brinda una
definición clara de trabajo infantil, “El trabajo infantil se refiere a cualquier trabajo o actividad que
priva a los niños de su infancia”.

Resultados
Si bien es cierto, a lo largo de la historia el trabajo infantil a existido en el seno familiar, ya sea
ayudando en las tareas del hogar, labores artesanales o agrícolas, que dicho sea de paso, no
era considerada como algo negativo, muy por el contrario, era una manera de formar a los niños,
desarrollando en ellos habilidades que le permitan defenderse cuando lleguen a la edad adulta;
también existía el trabajo fuera de casa que, si eran remunerados, el pago no justificaba el
esfuerzo de los infantes, esto sin hablar de casos extremos que llegaban hasta la esclavitud.
Actualmente, esta situación no ha cambiado, existen casos de trata de menores, prostitución
infantil, trabajos domésticos, agrícolas, mineros, entre otros; situaciones que roban a los niños la
oportunidad de educarse, formarse y disfrutar de su etapa de vida; pero existen situaciones en
que el niño se ve en la necesidad de trabajar en cualquier actividad con el fin de colaborar con
los gastos de su hogar, sobre todo en las familias numerosas.
Situaciones como éstas últimas las podemos apreciar en el mercado de abastos de
Moshoqueque, en donde encontramos a niños vendiendo diferentes productos, algunos de ellos
trabajan al lado de sus padres o familiares, otros de forma independiente; existen también
menores varones que ofrecen sus servicios consistentes en ayudar a cargar los productos que
adquieren los compradores, sobre todo dirigido a las compradoras mujeres.
Consultando con una comerciante, la cual trabajaba con sus dos menores hijas, sobre el porqué
hacia trabajar a sus hijas, manifestó que, “No tengo con quien dejarlas, además están a mi lado
y de paso les enseño a trabajar”. Manifestó también que la mayor de ellas era muy buena en las
matemáticas, gracias a que desde pequeña ha trabajado con ella y era quien se encargaba de
dar los vueltos a los clientes.
Como éste, existen otros casos que, por falta de tiempo y recursos económicos no fueron
posibles investigar, ya que se tendría que hacer trabajo minucioso y seguimiento a los diversos
casos que se pueden encontrar en este centro de abastos, que sin duda llevaría a tener una
noción más clara de esta realidad.

Comentario
Si bien es cierto, esta situación, se podría decir que es comprensible, no deja de ser ajena a un
problema social, que no solo se da en nuestro país, y que el Estado es quien debe poner más
énfasis en brindar una solución a esta realidad, ya sea a través de campañas, orientación,
denuncias, entre otros. Asimismo, debe realizar una recopilación de información en donde se
recoja los datos posibles que permitan conocer la realidad de estos menores, que, si bien es
cierto, existen casos, como el descrito, que son comprensibles, no se descarta la existencia de
menores que se sientan obligados y hasta amenazados a trabajar, sin contar que deben existir
casos de explotación, por lo que el gobierno central, regional o local debe hacer un
empadronamiento de estos casos y conocer de cerca la realidad de estos niños, para de esta
manera tomas las medidas necesarias que permitan a estos menores poder gozar de una
educación y puedan disfrutar de esta etapa de sus vidas, ya que por ser un mercado de abastos,
existen trabajos livianos y pesados (por clasificarlos de alguna manera), trabajos consistentes en
recorrer el mercado o establecido en un lugar determinado vendiendo condimentos, que para un
adulto no demandaría un gran esfuerzo, como trabajos que se inician desde muy temprano que
demande esfuerzo físico por los infantes consistentes en cargar bultos sin ningún tipo de
protección, poniendo en peligro la salud física e incluso hasta la vida de estos menores.
Y como afirma Kari Tapiola, “La pobreza lleva al trabajo infantil y el trabajo infantil perpetúa la
pobreza”.

Referencias bibliográficas
- UNESCO (2017). “Niños trabajadores”. Recuperado de:
http://www.unesco.org/new/es/social-and-human-sciences/themes/fight-against-
discrimination/education-of-children-in-need/working-children/
- HUMANIUM (2018). “Trabajo infantil”. Recuperado de: https://www.humanium.org/es/trabajo-
infantil/
- OIT (2018). “Trabajo infantil”. Recuperado de: http://www.oit.org/global/topics/child-
labour/lang--es/index.htm
- UNICEF (2018). “Trabajo infantil”. Recuperado de:
https://www.unicef.org/spanish/protection/files/FactSheet_child_labour_sp.pdf