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DERECHO

TE: FINANCIERO
DOCEN

SEGUNDO SALOMÓN IDROGO ZAMORA

CICLO:
X
UNIDAD:
1
MODALIDAD:
SUA CONTABILIDAD

INTEGRANTES:
- CHICOMA HUAMAN ESTEFANI
- RUIZ LOPEZ ITALO
- SALDARRIAGA SANCHEZ MARIA
INTRODUCCIÒN

Se ha dicho muchas veces que para indagar el concepto de Derecho financiero es

preciso situarse en el ámbito de la realidad en que este Derecho se produce y se

desenvuelve y que, por esta razón, deviene necesario analizar la naturaleza y el

contenido de la actividad que el Derecho financiero regula . Del mismo modo, resulta

imprescindible para el adecuado desarrollo posterior de una determinada disciplina,

acotar con rigor el ámbito de realidad sobre el que la misma incide, es decir, precisar

claramente, ya desde una fase inicial, el objeto sobre el que aquella concreta disciplina

se proyecta. Esto es así, porque uno de los factores que más puede perturbar su

desenvolvimiento y debilitar su interna cohesión es la imprecisión del objeto. Este, en

palabras de Sáinz de Bujanda, “sólo puede aislarse idealmente puesto que se trata de

un objeto de conocimiento- con el empleo de un adecuado método de análisis. Si no

se acota con rigor el ámbito de la realidad sobre el que la disciplina ha de operar, ni se

señalan los instrumentos lógicos que han de emplearse en la tarea investigadora, ésta

se proyectará estérilmente sobre campos que deban ser explotados con otras técnicas

y a los que corresponderán ciencias distintas de la que se persigue”.

Este ámbito de la realidad sobre el que se proyecta el Derecho financiero se viene

identificando doctrinalmente en relación con dos puntos de referencia, a saber: la

Hacienda Pública y, la actividad financiera. Por ello presentamos el presente trabajo lo

cual esperamos sea de su total agrado.


EL DERECHO FINANCIERO

1. CONCEPTO Y CONTENIDO

El Derecho Financiero comprende el conjunto de normas jurídicas que regulan


la actividad financiera estatal, y con esta breve fórmula quedaría delimitado el
campo que abarca esta disciplina jurídica, pero no obstante ello, se impone
efectuar una más amplia explicación sobre este concepto.

1. Enfoque objetivo

Las normas jurídicas que regulan la obtención, manejo y aplicación de los


recursos económicos, así como las relaciones jurídicas que se generan con
motivo de dicha actividad, se pueden considerar las definiciones de
Pugliese, Giannini, Rossy y Micheli, entre otras. Pero el primero de los
citados, el Derecho Financiero es “la disciplina que tiene por objeto el
estudio sistemático del conjunto de las normas que reglamentan la
recaudación, la gestión y la erogación de los medios económicos que
necesitan el Estado y los otros órganos públicos para el desarrollo de sus
actividades, y el estudio de las relaciones jurídicas entre los poderes y los
órganos del Estado, entre los contribuyentes y el Estado y entre los mismo
contribuyentes que derivan de la aplicación de esas normas”. Para el
segundo, el Derecho Financiero puede definirse: “como el conjunto de
normas que regulan la recaudación, la gestión y la erogación de los medios
económicos que se necesitan para la vida de los entes públicos”.

Para Rossy, el Derecho Financiero es : “la rama del Derecho Público que
estudia y proclama los principios e instituciones jurídicas que deben regir la
actividad del ente público, consistente en la dotación dineraria, por atender
a las necesidades estatales y las generales del país, la obtención de tales
medios dinerarios, su administración e inversión y la realización dineraria de
aquellas dotaciones y de estos medios”.
El último de los tratadistas mencionados sostiene que: “el estudio de
las normas jurídicas que disciplinan los ingresos del Estado y de los demás
entes públicos, la administración del dinero recaudado y las formas jurídicas
de los gastos, constituye el objeto de una rama especial del Derecho
Público que se suele denominar Derecho Financiero”

2. Enfoque subjetivo

Rodríguez Berejio al referirse a la concepción subjetiva del Derecho


Financiero, sostiene que de esta manera dicha disciplina tiene que quedar
comprendida dentro del Derecho Administrativo, en cuanto a derecho propio
de las Administraciones Públicas, expresando sobre el particular lo
siguiente: “Según esta concepción subjetiva del Derecho Financiero como
derecho de la Administración Financiera del Estado o de derecho de la
Hacienda Pública, esto es, como Derecho Estatutario, el Derecho
Financiero es el ordenamiento jurídico propio y singular de la Administración
Financiera. Las normas y principios que la integran tiene por objeto la
regulación de la organización y de la actividad de las personas
administrativas a quienes está atribuida la titularidad de la función
financiera”.

Entre la diversidad de enfoques o tratamientos científicos que la Hacienda


Pública admite, aparece el que la considera como organización establecida
dentro del Estado para la realización de determinadas funciones estatales.
En cuanto a organización, la Hacienda Pública es ante todo un hecho o
fenómeno jurídico, y con más precisión, una institución u ordenamiento
jurídico encuadrado en esa institución u ordenamiento jurídico más amplio y
complejo que es el Estado del cual forma parte.

La distinción entre Hacienda pública y Administración Pública, existe sin


duda una forma de ser, de estar organizado, de manifestación del Estado,
que sería por ello el Estado Hacienda Pública, o Hacienda Pública sin más,
a la que se refiere constantemente el Derecho Estatal, al igual que existe
una forma de organización y manifestación del Estado que es la
Administración Pública, la cual, por ello, puede entenderse perfectamente
como un ordenamiento jurídico.
Debemos señalar qué se entiende por La Hacienda pública: es una
organización de recursos o medios destinados de modo permanente a un
fin determinado.

Éste es el concepto que expresa el artículo 1° de la Ley de Administración y


Contabilidad de la Hacienda Pública. La Hacienda Pública desempeña en el
seno del Estado una función instrumental que admite grados diversos y se
concreta en diferentes modalidades, según la naturaleza y destino de los
recursos que la integran, pero cuyo fin es siempre el mismo: hacer posible
la existencia del Estado y el cumplimiento de los fines que el mismo
persigue, y, por tanto, el desarrollo de la actividad administrativa típica. A
este objetivo se halla destinada de modo permanente la Hacienda Pública,
en cuya composición entran los bienes y derechos pertenecientes al
Estado: dominio público y patrimonio del Estado, ingresos públicos de
naturaleza no tributaria e ingresos públicos a título tributarios basados en el
deber de los ciudadanos de contribuir al sostenimiento de las cargas
públicas.

Podemos decir que el Derecho Financiero es el ordenamiento jurídico


propio y singular de la Hacienda Pública; esto es, el conjunto de normas
que regula el ejercicio de las funciones financieras del Estado y demás
entes públicos.

3. Posición que comprende tanto al aspecto subjetivo como al material u


objetivo

Encontramos el grupo de definiciones que enfocan el Derecho Financiero


desde su doble perspectiva, esto es, tanto subjetiva como objetiva. De la
más reiteradas por los tratadistas, es, sin duda la de Ingrosso, quien define
esta disciplina como: “el conjunto de normas jurídicas que regulan la
actividad del Estado y de las entidades menores de Derecho Público,
considerada en la composición de los órganos que la ejercen, en el
ordenamiento formal de sus procedimientos y actos, y en el contenido de
las relacione jurídicas que ella origina”.

El Derecho financiero es el regulador de la actividad financiera del Estado es


materia de desarrollo dentro de la legislación y la doctrina nacional, pero
lamentablemente en nuestro país no está regulado legalmente
el concepto de esta importante rama del derecho.

Ante esta carencia estructuraremos la definición de lo que es el derecho


financiero en base a lo que nos dice la doctrina y para ello usaremos una
presentación denominada “El Derecho Financiero” que forma parte del material
a ser usado en el desarrollo de la presente sesión.

El derecho financiero es aquel derecho que se encarga de regular y organizar


todas las actividades que tienen que ver con las finanzas y la presupuestación
de un Estado. Como tal, el derecho financiero (a diferencia del derecho
tributario o fiscal) forma parte del derecho público ya que se establece entre
entidades públicas como los Estados, instituciones administrativas, legislativas,
etc. El derecho financiero supone una gran relevancia en lo que respecta al
buen funcionamiento de los Estados ya que es el responsable de otorgar a las
entidades y personas gobernantes con las prerrogativas monetarias y
financieras para llevar a cabo diferentes proyectos de gobierno, medidas y
decisiones que requieran el uso del presupuesto disponible.

1. OBJETIVO

El derecho financiero tiene como principal objetivo evitar el abuso de los fondos
públicos a manos de los funcionarios de turnos y esto lo logra a través del
establecimiento de límites, controles y regulaciones al uso de esos capitales que
se consideran no pertenecientes a la persona que se encuentra gobernando si no
al aporte de todos los individuos que conforman la sociedad.

Lineamientos que nos permiten comprender porque es el derecho financiero una


disciplina dotada de autonomía científica.

1. El derecho financiero como disciplina dotada de autonomía científica

1.1. Consideraciones generales

El jurídico es uno de los enfoques científicos que se puede proyectar sobre


la actividad financiera. Esta disciplina es, ante todo, jurídica: se ocupa,
como hemos dicho de la regulación normativa de los ingresos y gastos
públicos Situados ya en la parcela jurídico-científica, es necesario precisar
el modo como integra lo financiero del mundo jurídico en general.
Es decir, si lo hace con perfil y rasgos propios diferenciales con
respecto a otras parcelas jurídicas o si lo hace sin perfil y rasgos propios,
zambullido en un conjunto jurídico más general donde se difuman sus
caracteres.

1.2. Alcance de la autonomía científica

No podemos pronunciarnos acerca de si concurre o no autonomía


científica en la disciplina cuyo estudio comenzamos sin antes precisar el
alcance que hay que dar a la autonomía científica de las distintas partes en
las que se puede descomponer el Derecho en su conjunto. Hoy el
concepto de autonomía no entraña separación absoluta, sino sólo relativa
y no excluyente de la intercomunicación. No debe perderse nunca la
perspectiva de la unidad del conjunto. Se yergue la participación de toda
parte del Derecho dotada de autonomía científica en lo que llamamos,
acudiendo al concepto acuñado “fondo jurídico común”. El Derecho
Financiero como disciplina jurídica autónoma se zambulle plenamente en
el conjunto, categorías y conceptos jurídicos que, configuran el cimiento
científico común a todo lo jurídico.

1.3. La autonomía científica del Derecho Financiero en particular.

1.3.1. Situación Actual.

El estudio científico de lo financiero se desarrolló al inicio de


manera predominante bajo un conjunto de vista económico político.
Sólo tras denotados esfuerzos de delimitación y depuración cobró
propio y definitivo carácter la apreciación jurídico-científica de la
actividad financiera.

1.3.2. Requisitos

Tres son los elementos esenciales que deben coincidir para que
pueda hablarse de autonomía científica de un fragmento del
ordenamiento jurídico:

1. Primero: Una parte de la realidad social suficientemente


acotada.
La autonomía científica reclama la presencia de un objeto
de conocimiento, que, si bien no es menester que aparezca
radical nítidamente delimitado con respecto a otros, es
insoslayable que al menos lo haga de modo relativo y suficiente.
Más la delimitación ha de ser fruto de la existencia de una parte
de la realidad social suficiente y, al menos, relativamente
acotada con relación a otra.

Es positiva la respuesta a la pregunta de si lo Jurídico –


Financiero se rige sobre una parcela de lo social a la que
acompaña las características antes dicha para así predicar su
autonomía científica. Pocas porciones de la realidad social
aparecen tan delimitadas en la organización y funciones de los
poderes públicos contemporáneos como la que conforman la
actividad financiera, es decir, la acción de obtención de ingresos
por los entes públicos para atender al gasto público merced al
cual se satisfacen las crecientes necesidades públicas.

2. Segundo: Un conjunto de normas homogéneas.

Las normas jurídicas han de ser dotadas de ciertas


características comunes. Sin embargo la homogeneidad pedida
no es total y absoluta, sino parcial y relativa en congruencia con
la amplitud y complejidad de la parcela de la realidad sobre las
que tales normas se proyecten.

La homogeneidad puede derivar de la concurrencia de varios


factores, sin que sean necesarios todos para que se produzcan.
Entre ellos destacamos: Las categorías comunes, o
construcciones ideáticas que la integran y dan explicación
unitaria a un conjunto de reglas jurídicas aparentemente
dispersas; la unidad lógica o trabazón entre las normas jurídicas
pretendidamente homogéneas, y, por fin, el propósito común al
que sirven o función que cumplen dentro del ordenamiento
jurídico.
A la luz de lo anterior, la existencia de un conjunto de
normas homogéneas se da respecto a lo Jurídico – Financiero.
Porque entre las normas de los ingresos de los entes públicos y
la de los gastos de igual condición existe un vínculo tanto
instrumental como de trabazón lógica inmaterial, que permiten
hablar de su homogeneidad.

3. Tercero: La existencia de unos principios constitucionales


propios.

Para que la autonomía científica de las partes del ordenamiento


jurídico reciba fundada consagración es imprescindible la
existencia de principios en los que reposan el conjunto de
preceptos cuya autonomía científica se postula. La tendencia de
constitucionalismo actual ha sido el paulatino asentamiento de
estos principios en las Constituciones más recientes. En este
sentido la Constitución formula expresamente o implícitamente
principios constitucionales tanto del gasto público como del
ingreso tributario. Se da por inducción la existencia de un
principio de justicia financiera proyectable con mayor o menos
intensidad sobre toda la disciplina estudiada.

Se puede también apreciar la existencia de un principio como el


de legalidad que, si bien igualmente propia de otras esferas
jurídicas, se manifiesta de una manera especial en lo jurídico
financiero.

2. AUTONOMÍA DEL DERECHO FINANCIERO

1. Corriente Administrativa

Sustentada por Pérez de Ayala, Mayer y Giorgio del Vecchio.

Según estos autores, agrupados en la llamada escuela administrativista


clásica, el derecho financiero es una parte, un capítulo especializado del
derecho administrativo y por consiguiente no tiene autonomía.

Pues éstos afirman que el Derecho Financiero forma parte del Derecho
Administrativo porque su objeto es una mera función administrativa que se
sintetiza en la actividad que despliega el estado para conseguir
recurso.

2. Corriente Autonomista

Sustentada por Myrbach, Rheinfeld y Mario Pugliese.

Para estos autores los problemas jurídicos que surgen de la actividad


financiera del Estado se resuelven mediante principios propios
de carácter unitario, además, señalan que el derecho financiero tiene
importantes ramas jurídicas como el derecho tributario.
CONCLUSIONES

1. Podemos concluir que el Derecho Financiero tiene como objeto de estudio la


actividad financiera del Estado, y que, no se ocupa de la actividad bursátil,
los bancos o los negocios privados en general. A mayor abundamiento, el
Derecho Financiero tiene normas y principios propios, como hemos visto.

2. El Derecho Financiero es la rama del Derecho Público que disciplina la


actividad financiera de los Entes públicos, esto es, la actividad encaminada a la
obtención, gestión y gasto de los recursos necesarios para atender la
satisfacción de las necesidades colectivas. La disciplina tiene, entonces, dos
partes claramente diferenciadas: los ingresos públicos y los gastos públicos.

3. Y, finalmente, que el Derecho Financiero contiene el Derecho Tributario, el


Derecho Patrimonial Público, el Derecho del Crédito Público y el Derecho
Presupuestal.
BIBLIOGRAFÌA

1. Fernández Martínez, Jesús. Curso Elemental de Derecho

2. Fiscal. Ediciones FACPYA. Primera Edición. Nuevo León,México. 1987.

3. Margáin Manautou, Emilio.Introducción al Estudio del


DerechoTributario. Universidad Autónoma de San Luís Potosí. Quinta Edición.
México. 1979.

4. www.derecho.usmp.edu.pe/.../derecho_financiero/index.php
5. www.mundotutoriales.com/tutoriales_derecho_financiero-mdtema25.htm
6. Constitución Política del Perú – 1993

ANEXOS

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