Sie sind auf Seite 1von 152

INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 1

INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 2


INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 3

Gestión
de Riesgos
Corporativos
Marco Integrado
Resumen Ejecutivo
Marco
septiembre 2004

Committee of Sponsoring Organizations


of the Treadway Commission (COSO)
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 4

Committee of Sponsoring Organizations of the Treadway Comission (COSO)


SUPERVISIÓN
PRESIDENCIA COSO: John J. Flaherty
AMERICAN ACCOUNTING ASSOCIATION: Larry E. Rittenberg
AMERICAN INSTITUTE OF CERTIFIED PUBLIC ACCOUNTANTS: Alan W. Anderson
FINANCIAL EXECUTIVES INTERNACIONAL: John P. Jessup, Nicholas S. Cyprus
INSTITUTE OF MANAGEMENT ACCOUNTANTS: Frank C. Minter, Dennis E. Neider
THE INSTITUTE OF INTERNAL AUDITORS: William G. Bishop, III, David A. Richards

Consejo asesor del proyecto COSO


GUÍA
Tony Maki (Presidente) James W. DeLoach John P. Jessup
Socio Director ejecutivo Vicepresidente y Tesorero
MOSS ADAMS LLP PROTIVIFI INC. E. I. DUPONT DE NEMOURS AND CO.

Mark S. Beasley Andrew J. Jackson Tony M. Knapp


Catedrático Vicepresidente primero de los Vicepresidente primero y
Servicios de aseguramiento Controller
de riesgos
NORTH CAROLINA STATE UNIVERSITY AMERICAN EXPRESS COMPANY MOTOROLA, INC.

Jerry W. DeFoor Steven E. Jameson Douglas F. Prawitt


Vicepresidente y Controller Vicepresidente ejecutivo, Catedrático
Director de Auditoría interna y
Responsable de riesgos
PROTECTIVE LIFE CORPORATION COMMUNITY TRUST BANCORP, INC. BRIGHAM YOUNG UNIVERSITY

PricewaterhouseCoopers LLP
AUTORÍA
Richard M. Steinberg Miles E.A. Everson
Anterior Socio responsable de Gobierno Corporativo Socio responsable de Servicios Financieros
(Actualmente, en Steinberg Governance Advisors) Finanzas, Operaciones, Riesgos y Cumplimiento Normativo
Nueva York

Frank J. Martens Lucy E. Nottingham


Director Ejecutivo Gerente
Servicios a Clientes Servicios Internos
Vancouver (Canadá) Boston

4
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 5

ÍNDICE

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS - MARCO INTEGRADO

PRÓLOGO
Luis Aranaz Zuza y José Luis Madariaga Gandarias ................................................ 7

INTRODUCCIÓN
John J. Flaherty y Toni Maki ..................................................................................... 9

RESUMEN EJECUTIVO ......................................................................................... 15

MARCO
1. Definición ...................................................................................................... 25
2. Ambiente interno ........................................................................................... 39
3. Establecimiento de objetivos ........................................................................ 47
4. Identificación de eventos .............................................................................. 55
5. Evaluación de riesgos ................................................................................... 63
6. Respuesta a los riesgos ................................................................................ 71
7. Actividades de control .................................................................................. 77
8. Información y comunicación ......................................................................... 85
9. Supervisión ................................................................................................... 93
10. Roles y responsabilidades ............................................................................ 101
11. Limitaciones de la gestión de riesgos corporativos ..................................... 111
12. Qué hacer ...................................................................................................... 115

ANEXOS
A Objetivos y Metodología ............................................................................... 121
B Resumen de principios clave ........................................................................ 125
C Relación entre Gestión de riesgos corporativos – Marco integrado
y Control interno – Marco integrado ............................................................. 135
D Bibliogafía seleccionada ............................................................................... 139
E Consideración a los comentarios ................................................................. 141
F Glosario ......................................................................................................... 147
G Agradecimientos ........................................................................................... 151

5
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 6
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 7

PRÓLOGO

Han pasado 8 años desde que, en 1997 PricewaterhouseCoopers y el Instituto de


Auditores Internos de España publicaran la traducción al castellano del “Control
Interno-Marco Integrado” más conocido como Informe COSO.
Este documento, emitido por el Committee of Sponsoring Organizations of the
Treadway Commission (COSO) formado por representantes de la American
Accounting Association, American Institute of Certified Public Accountants, Financial
Executives International, Institute of Management Accountants y The Institute of
Internal Auditors, se ha constituido como un elemento fundamental dentro de las
organizaciones para la consecución de sus objetivos a través de la definición de un
marco común de control interno.
Tras el éxito cosechado por esta publicación, en los últimos años ha ido cobrando
cada vez más relevancia el concepto de gestión de riesgos, como pieza clave en la
creación de valor para los grupos de interés de las organizaciones.
Debido a esta tendencia, en el año 2001, COSO percibe la necesidad de desarrollar
un marco integrado de gestión de riesgos corporativos que defina las pautas y con-
ceptos fundamentales así como una terminología común en esta área. Para su
desarrollo cuenta con PricewaterhouseCoopers y en septiembre de 2004 emite, pre-
cedido por una extraordinaria expectación, el informe definitivo “Gestión de Riesgos
Corporativos-Marco Integrado”.
Con enorme satisfacción presentamos ahora, fruto de la colaboración de
PricewaterhouseCoopers en España y el Instituto de Auditores Internos de España, la
edición de esta traducción al castellano del Informe COSO sobre Gestión de Riesgos
Corporativos.
Tanto desde el Instituto de Auditores Internos como desde PricewaterhouseCoopers
consideramos fundamental la difusión del conocimiento de los conceptos de gestión
de riesgos, claramente definidos en este documento, no solo dirigida a los profesio-
nales de la auditoría interna, sino a todos los niveles de la organización y de otros
ámbitos de la sociedad mercantil española.
El presente documento se divide en dos partes. La primera contiene un Resumen
Ejecutivo y el Marco Integrado. El Resumen Ejecutivo es una perspectiva de alto nivel
dirigida a los consejeros delegados, otros altos directivos, consejeros y reguladores.
El Marco Integrado define la gestión de riesgos corporativos y describe principios y
conceptos, proporcionando orientación a todos los niveles de dirección en empresas
y otras organizaciones para ser usada en la evaluación y mejora de la eficacia de
dicha gestión. Determina ocho componentes a considerar dentro de la gestión de
riesgos relacionándolos con cuatro categorías de objetivos organizacionales y con las
distintas divisiones o unidades de las entidades. La segunda parte del documento

7
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 8

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

corresponde a las Técnicas de aplicación y proporciona ejemplos de algunas técni-


cas de gestión de riesgos para las entidades relacionadas con los componentes y
contenidos del Marco.
Este Marco Integrado se encuentra también estrechamente relacionado con el
Informe COSO sobre Control Interno que considera la gestión de riesgos corporati-
vos como pieza fundamental entre sus elementos.
Desde estas líneas, nos gustaría transmitir nuestro agradecimiento a todos los profe-
sionales de PricewaterhouseCoopers que, bajo la dirección de Enric Doménech y la
supervisión de Ramón Abella han puesto gran empeño y dedicación en la traducción
de este informe y a los del Instituto de Auditores Internos de España encabezado por
su Director General Javier Faleato y que, con la colaboración de Rafael González
Marín han hecho posible esta edición del informe en castellano, informe que, sin
duda, constituirá una guía práctica y un elemento de consulta indispensable sobre
todos los aspectos relacionados con los riesgos de las entidades, su gestión y con-
trol, incluyendo, la responsabilidad del auditor interno en la supervisión de la gestión
integral de riesgos.

Mayo 2005

Luis Aranaz Zuza José Luis Madariaga Gandarias


PRESIDENTE PRESIDENTE
Instituto de Auditores Internos de España PricewaterhouseCoopers

8
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 9

INTRODUCCIÓN

Hace más de una década, el Comittee of Sponsoring Organizations of the Treadway


Commission (COSO) emitió Control Interno – Marco Integrado, para ayudar a com-
pañías y otras entidades a evaluar y mejorar sus sistemas de control interno. Desde
ese momento, dicho marco fue incorporado a las políticas, normativas y regulaciones
y utilizado por miles de compañías para controlar mejor sus actividades en su pro-
greso hacia el logro de sus objetivos.
En los últimos años hemos visto una conciencia y enfoque más sensibles respecto a
la gestión de riesgos, y se ha hecho cada vez más patente que existe la necesidad
de establecer un marco sólido para identificar, evaluar y gestionar los riesgos de
modo eficaz. En el año 2001 COSO inició un proyecto, contratando a
PricewaterhouseCoopers, para desarrollar un marco que fuera accesible para el uso
de la dirección de las empresas en la evaluación y mejora de la gestión de riesgos en
sus organizaciones.
Durante el desarrollo de este marco han acontecido una serie de escándalos mer-
cantiles y fallos donde los inversores, personal y demás grupos de interés han sufri-
do pérdidas tremendas. Después han habido requerimientos para mejorar el gobier-
no corporativo y la gestión de riesgos a través de nuevas legislaciones, normativas y
estándares para la cotización de las sociedades. La necesidad de un marco de ges-
tión de riesgos que facilitara los conceptos y principios más importantes, un lengua-
je común, y una orientación clara, se hizo más acuciante. COSO considera que este
informe Gestión de Riesgos Corporativos – Marco Integrado cubre esta necesidad, y
espera que sea ampliamente aceptado por compañías y demás organizaciones y,
claro está, por todos los grupos de interés.
Entre las consecuencias en los EEUU de la situación descrita anteriormente, está la
Ley Sarbanes-Oxley de 2002, y la normativa similar promulgada o por promulgar en
otros países. Esta ley amplía el requisito de siempre, en virtud del cual, las socieda-
des anónimas deben mantener sistemas de control interno, exigiendo que la direc-
ción certifique la eficacia de dichos sistemas y que el auditor acredite la misma.
Control Interno – Marco Integrado, que sigue en vigor a lo largo del tiempo, sirve
como estándar ampliamente aceptado para satisfacer dichos requisitos de reporting.
Este informe, Gestión de Riesgos Corporativos – Marco Integrado profundiza en el
control interno, facilitando un enfoque más extenso y sólido sobre el tema de la ges-
tión de riesgos en las empresas. Aunque no se pretende sustituir el marco de control
interno, la intención es incorporar el mismo dentro del marco de gestión de riesgos
para que las compañías puedan decidir su utilización tanto para satisfacer sus nece-
sidades de control interno como para progresar hacia un proceso de gestión de ries-
gos más completo.

9
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 10

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Entre los retos más críticos a los que se enfrentan los directivos de hoy está el deter-
minar cuánto riesgo está dispuesta a aceptar la entidad y cuánto riesgo acepta a medi-
da que se esfuerza en crear valor. Este informe les ayudará a enfrentarse mejor a este
reto.

John J. Flaherty Tony Maki


Presidente COSO Presidente, Consejo Asesor COSO

10
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 11
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 12
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 13

Gestión
de Riesgos Corporativos -
Marco Integrado

Resumen
Ejecutivo
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 14
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 15

RESUMEN EJECUTIVO

La premisa subyacente en la gestión de riesgos corporativos es que las entidades


existen con el fin último de generar valor para sus grupos de interés. Todas se enfren-
tan a la ausencia de certeza y el reto para su dirección es determinar cuánta incerti-
dumbre se puede aceptar mientras se esfuerzan en incrementar el valor para sus gru-
pos de interés.
La incertidumbre implica riesgos y oportunidades y posee el potencial de erosionar o
aumentar el valor. La gestión de riesgos corporativos permite a la dirección tratar efi-
cazmente la incertidumbre y sus riesgos y oportunidades asociados, mejorando así
la capacidad de generar valor.
Se maximiza el valor cuando la dirección establece una estrategia y objetivos para
encontrar un equilibrio óptimo entre los objetivos de crecimiento y rentabilidad y los
riesgos asociados, además de desplegar recursos eficaz y eficientemente a fin de
lograr los objetivos de la entidad. La gestión de riesgos corporativos incluye las
siguientes capacidades:
• Alinear el riesgo aceptado y la estrategia
En su evaluación de alternativas estratégicas, la dirección considera el riesgo acep-
tado por la entidad, estableciendo los objetivos correspondientes y desarrollando
mecanismos para gestionar los riesgos asociados.
• Mejorar las decisiones de respuesta a los riesgos
La gestión de riesgos corporativos proporciona rigor para identificar los riesgos y
seleccionar entre las posibles alternativas de respuesta a ellos: evitar, reducir, com-
partir o aceptar.
• Reducir las sorpresas y pérdidas operativas
Las entidades consiguen mejorar su capacidad para identificar los eventos potenciales
y establecer respuestas, reduciendo las sorpresas y los costes o pérdidas asociados.
• Identificar y gestionar la diversidad de riesgos para toda la entidad
Cada entidad se enfrenta a múltiples riesgos que afectan a las distintas partes de la
organización y la gestión de riesgos corporativos facilita respuestas eficaces e inte-
gradas a los impactos interrelacionados de dichos riesgos.
• Aprovechar las oportunidades
Mediante la consideración de una amplia gama de potenciales eventos, la dirección
está en posición de identificar y aprovechar las oportunidades de modo proactivo.
• Mejorar la dotación de capital
La obtención de información sólida sobre el riesgo permite a la dirección evaluar efi-
cazmente las necesidades globales de capital y mejorar su asignación.

15
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 16

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Estas capacidades, inherentes en la gestión de riesgos corporativos, ayudan a la


dirección a alcanzar los objetivos de rendimiento y rentabilidad de la entidad y pre-
venir la pérdida de recursos. La gestión de riesgos corporativos permite asegurar una
información eficaz y el cumplimiento de leyes y normas, además de ayudar a evitar
daños a la reputación de la entidad y sus consecuencias derivadas. En suma, la ges-
tión de riesgos corporativos ayuda a una entidad a llegar al destino deseado, evitan-
do baches y sorpresas por el camino.

Eventos – Riesgos y Oportunidades


Los eventos pueden tener un impacto negativo, positivo o de ambos tipos a la vez.
Los que tienen un impacto negativo representan riesgos que pueden impedir la cre-
ación de valor o erosionar el valor existente. Los eventos con impacto positivo pue-
den compensar los impactos negativos o representar oportunidades, que derivan de
la posibilidad de que ocurra un acontecimiento que afecte positivamente al logro de
los objetivos, ayudando a la creación de valor o a su conservación. La dirección cana-
liza las oportunidades que surgen, para que reviertan en la estrategia y el proceso de
definición de objetivos, y formula planes que permitan aprovecharlas.

Definición de la Gestión de Riesgos Corporativos


La gestión de riesgos corporativos se ocupa de los riesgos y oportunidades que afec-
tan a la creación de valor o su preservación. Se define de la siguiente manera:
La gestión de riesgos corporativos es un proceso efectuado por el conse-
jo de administración de una entidad, su dirección y restante personal, apli-
cable a la definición de estrategias en toda la empresa y diseñado para
identificar eventos potenciales que puedan afectar a la organización, ges-
tionar sus riesgos dentro del riesgo aceptado y proporcionar una seguridad
razonable sobre el logro de los objetivos.
Esta definición recoge los siguientes conceptos básicos de la gestión de riesgos cor-
porativos:
• Es un proceso continuo que fluye por toda la entidad.
• Es realizado por su personal en todos los niveles de la organización.
• Se aplica en el establecimiento de la estrategia.
• Se aplica en toda la entidad, en cada nivel y unidad, e incluye adoptar una pers-
pectiva del riesgo a nivel conjunto de la entidad.
• Está diseñado para identificar acontecimientos potenciales que, de ocurrir, afecta-
rían a la entidad y para gestionar los riesgos dentro del nivel de riesgo aceptado.
• Es capaz de proporcionar una seguridad razonable al consejo de administración y
a la dirección de una entidad.
• Está orientada al logro de objetivos dentro de unas categorías diferenciadas, aun-
que susceptibles de solaparse.
La definición es amplia en sus fines y recoge los conceptos claves de la gestión de
riesgos por parte de empresas y otras organizaciones, proporcionando una base para
su aplicación en todas las organizaciones, industrias y sectores. Se centra directa-
mente en la consecución de los objetivos establecidos por una entidad determinada
y proporciona una base para definir la eficacia de la gestión de riesgos corporativos.

16
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 17

RESUMEN EJECUTIVO

Consecución de Objetivos
Dentro del contexto de misión o visión establecida en una entidad, su dirección esta-
blece los objetivos estratégicos, selecciona la estrategia y fija objetivos alineados que
fluyen en cascada en toda la entidad. El presente Marco de gestión de riesgos cor-
porativos está orientado a alcanzar los objetivos de la entidad, que se pueden clasi-
ficar en cuatro categorías:
• Estrategia: Objetivos a alto nivel, alineados con la misión de la entidad y dándole
apoyo
• Operaciones: Objetivos vinculados al uso eficaz y eficiente de recursos
• Información: Objetivos de fiabilidad de la información suministrada
• Cumplimiento: Objetivos relativos al cumplimiento de leyes y normas aplicables
Esta clasificación de los objetivos de una entidad permite centrarse en aspectos dife-
renciados de la gestión de riesgos corporativos. Estas categorías distintas, aunque
solapables –un objetivo individual puede incidir en más de una categoría– se dirigen
a necesidades diferentes de la entidad y pueden ser de responsabilidad directa de
diferentes ejecutivos. También permiten establecer diferencias entre lo que cabe
esperar de cada una de ellas. Otra categoría utilizada por algunas entidades es la sal-
vaguarda de activos.
Dado que los objetivos relacionados con la fiabilidad de la información y el cumpli-
miento de leyes y normas están integrados en el control de la entidad, puede esperar-
se que la gestión de riesgos corporativos facilite una seguridad razonable de su con-
secución. El logro de los objetivos estratégicos y operativos, sin embargo, está sujeto
a acontecimientos externos no siempre bajo control de la entidad; por tanto, respecto
a ellos, la gestión de riesgos corporativos puede proporcionar una seguridad razonable
de que la dirección, y el consejo de administración en su papel de supervisión, estén
siendo informados oportunamente del progreso de la entidad hacia su consecución.

Componentes de la Gestión de Riesgos Corporativos


La gestión de riesgos corporativos consta de ocho componentes relacionados entre sí,
que se derivan de la manera en que la dirección conduce la empresa y cómo están inte-
grados en el proceso de gestión. A continuación, se describen estos componentes:
• Ambiente interno
Abarca el talante de una organización y establece la base de cómo el personal de
la entidad percibe y trata los riesgos, incluyendo la filosofía para su gestión, el ries-
go aceptado, la integridad y valores éticos y el entorno en que se actúa.
• Establecimiento de objetivos
Los objetivos deben existir antes de que la dirección pueda identificar potenciales
eventos que afecten a su consecución. La gestión de riesgos corporativos asegura
que la dirección ha establecido un proceso para fijar objetivos y que los objetivos
seleccionados apoyan la misión de la entidad y están en línea con ella, además de
ser consecuentes con el riesgo aceptado.
• Identificación de eventos
Los acontecimientos internos y externos que afectan a los objetivos de la entidad
deben ser identificados, diferenciando entre riesgos y oportunidades. Estas últimas
revierten hacia la estrategia de la dirección o los procesos para fijar objetivos.

17
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 18

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

• Evaluación de riesgos
Los riesgos se analizan considerando su probabilidad e impacto como base para
determinar cómo deben ser gestionados y se evalúan desde una doble perspecti-
va, inherente y residual.
• Respuesta a los riesgos
La dirección selecciona las posibles respuestas - evitar, aceptar, reducir o compar-
tir los riesgos - desarrollando una serie de acciones para alinearlos con el riesgo
aceptado y las tolerancias al riesgo de la entidad.
• Actividades de control
Las políticas y procedimientos se establecen e implantan para ayudar a asegurar
que las respuestas a los riesgos se llevan a cabo eficazmente.
• Información y comunicación
La información relevante se identifica, capta y comunica en forma y plazo adecua-
do para permitir al personal afrontar sus responsabilidades. Una comunicación efi-
caz debe producirse en un sentido amplio, fluyendo en todas direcciones dentro de
la entidad.
• Supervisión
La totalidad de la gestión de riesgos corporativos se supervisa, realizando modifi-
caciones oportunas cuando se necesiten. Esta supervisión se lleva a cabo median-
te actividades permanentes de la dirección, evaluaciones independientes o ambas
actuaciones a la vez.
La gestión de riesgos corporativos no constituye estrictamente un proceso en serie,
donde cada componente afecta sólo al siguiente, sino un proceso multidireccional e
iterativo en que casi cualquier componente puede influir en otro.

Relación entre objetivos y componentes


Existe una relación directa entre los objetivos que la entidad desea lograr y los com-
ponentes de la gestión de riesgos corporativos, que representan lo que hace falta
para lograr aquellos. La relación se representa con una matriz tridimensional, en
forma de cubo.

Las cuatro categorías de objetivos


–estrategia, operaciones, información y
cumplimiento– están representadas por
columnas verticales, los ocho compo-
nentes lo están por filas horizontales y
las unidades de la entidad, por la tercera
dimensión del cubo. Este gráfico refleja
la capacidad de centrarse sobre la totali-
dad de la gestión de riesgos corporativos
de una entidad o bien por categoría de
objetivos, componente, unidad o cual-
quier subconjunto deseado.

18
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 19

RESUMEN EJECUTIVO

Eficacia
La afirmación de que la gestión de riesgos corporativos de una entidad es “eficaz” es
un juicio resultante de la evaluación de si los ocho componentes están presentes y
funcionan de modo eficaz. Así, estos componentes también son criterios para esti-
mar la eficacia de dicha gestión. Para que estén presentes y funcionen de forma ade-
cuada, no puede existir ninguna debilidad material y los riesgos necesitan estar den-
tro del nivel de riesgo aceptado por la entidad.
Cuando se determine que la gestión de riesgos es eficaz en cada una de las cuatro
categorías de objetivos, respectivamente, el consejo de administración y la dirección
tendrán la seguridad razonable de que conocen el grado de consecución de los obje-
tivos estratégicos y operativos de la entidad, que su información es fiable y que se
cumplen las leyes y la normas aplicables.
Los ocho componentes no funcionan de modo idéntico en todas las entidades. Su
aplicación en las pequeñas y medianas empresas, por ejemplo, puede ser menos
formal y estructurada. Sin embargo, estas entidades podrían poseer una gestión efi-
caz de riesgos corporativos, siempre que cada componente esté presente y funcione
adecuadamente.

Limitaciones
Aunque la gestión de riesgos corporativos proporciona ventajas importantes, también
presenta limitaciones. Además de los factores comentados anteriormente, las limita-
ciones se derivan de hechos como que el juicio humano puede ser erróneo durante
la toma de decisiones, que las decisiones sobre la respuesta al riesgo y el estableci-
miento de controles necesitan tener en cuenta los costes y beneficios relativos, que
pueden darse fallos por error humano, que pueden eludirse los controles mediante
connivencia de dos o más personas y que la dirección puede hacer caso omiso a las
decisiones relacionadas con la gestión de riesgos corporativos. Estas limitaciones
impiden que el consejo o la dirección tengan seguridad absoluta de la consecución
de los objetivos de la entidad.

Inclusión del Control Interno


El control interno constituye una parte integral de la gestión de riesgos corporativos.
Este Marco lo incluye, constituyendo una conceptualización y una herramienta más
sólidas para la dirección. El control interno se define y describe en el documento
Control Interno – Marco integrado. Dado que éste ha perdurado a lo largo del tiempo
y es la base para las reglas, normas y leyes existentes, se mantiene vigente para defi-
nir y enmarcar el control interno. Aunque el presente documento sólo recoge partes
de Control Interno – Marco integrado, su estructura entera se incorpora en él a través
de referencias.

Roles y Responsabilidades
Todas las personas que integran una entidad tienen alguna responsabilidad en la ges-
tión de riesgos corporativos. El consejero delegado es su responsable último y debe-

19
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 20

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

ría asumir su titularidad. Otros directivos apoyan la filosofía de gestión de riesgos de


la entidad, promueven el cumplimiento del riesgo aceptado y gestionan los riesgos
dentro de sus áreas de responsabilidad en conformidad con la tolerancia al riesgo. El
director de riesgos, director financiero, auditor interno u otros, desempeñan normal-
mente responsabilidades claves de apoyo. El restante personal de la entidad es res-
ponsable de ejecutar la gestión de riesgos corporativos de acuerdo con las directri-
ces y protocolos establecidos.
El consejo de administración desarrolla una importante supervisión de la gestión de
riesgos corporativos, es consciente del riesgo aceptado por la entidad y está de
acuerdo con él. Algunos terceros, como los clientes, proveedores, colaboradores,
auditores externos, reguladores y analistas financieros, proporcionan a menudo infor-
mación útil para el desarrollo de la gestión de riesgos corporativos, aunque no son
responsables de su eficacia en la entidad ni forman parte de ella.

Estructura de este Documento


El presente documento se divide en dos partes. La primera contiene el Marco y un
Resumen Ejecutivo. El Marco define la gestión de riesgos corporativos y describe
principios y conceptos, proporcionando orientación a todos los niveles de dirección
en empresas y otras organizaciones para ser usada en la evaluación y mejora de la
eficacia de dicha gestión. El Resumen Ejecutivo es una perspectiva de alto nivel diri-
gida a los consejeros delegados, otros altos directivos, consejeros y reguladores. La
segunda parte del documento corresponde a las Técnicas de aplicación y proporcio-
na ejemplos de técnicas útiles para aplicar los componentes del Marco.

Uso de este Informe


Las acciones sugeridas que podrían adoptarse como resultado de este documento
dependen de la posición y papel de las partes implicadas:

• Consejo de Administración
El consejo debería comentar con la alta dirección el estado de la gestión de riesgos
corporativos de la entidad y aportar su supervisión según se necesite. Asimismo,
debería asegurarse de que es informado de los riesgos más significativos, de las
acciones que la dirección está realizando y cómo ésta asegura una gestión eficaz
de riesgos.
• Alta dirección
Este documento sugiere que el consejero delegado evalúe las capacidades de ges-
tión de riesgos corporativos de la organización. Por ejemplo, un consejero delega-
do reúne a los responsables de unidad de negocio y al personal clave del staff para
comentar una evaluación inicial de las capacidades y eficacia de la gestión de ries-
gos corporativos. Sea cual sea su forma, esta evaluación inicial debería determinar
si existe la necesidad de otra evaluación más profunda y amplia y, en caso afirma-
tivo, cómo proceder a realizarla.
• Otro personal de la entidad
Los directivos y demás personal deberían considerar cómo están desempeñando
sus responsabilidades a la luz del presente Marco y comentar sus ideas con res-

20
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 21

RESUMEN EJECUTIVO

ponsables superiores para reforzar la gestión de riesgos corporativos. Los audito-


res internos deberían considerar el alcance de su enfoque sobre dicha gestión.
• Reguladores
Este Marco puede fomentar una visión compartida de la gestión de riesgos corpo-
rativos, incluyendo lo que se puede hacer y sus limitaciones. Los reguladores pue-
den referirse a este Marco al establecer sus expectativas, bien mediante normas o
guías o en la realización de inspecciones en las entidades bajo su supervisión.
• Organizaciones profesionales
Las entidades encargadas de establecer normas y otras organizaciones que pro-
porcionan orientación sobre gestión financiera, auditoría y temas afines, deberían
considerar sus normas y guías a la luz de este Marco. A medida que se eliminen
divergencias de conceptos y terminología, todas las partes se beneficiarán de ello.
• Educadores
Este Marco puede ser tema de investigación y análisis universitario, para ver dónde
se pueden realizar futuras mejoras. En la idea de que este documento sea acepta-
do como base compartida de comprensión, sus conceptos y términos deberían
encontrar una forma de integrarse en los programas de estudios universitarios.
Establecidos estos cimientos para una comprensión mutua, todas las partes podrán
hablar un lenguaje común y se comunicarán más eficazmente. Los directivos estarán
en posición de evaluar el proceso de gestión de riesgos corporativos de su entidad
respecto a una norma y podrán potenciar el proceso de consecución de los objetivos
establecidos. La investigación futura puede apoyarse en esta base sólida, mientras
que los legisladores y reguladores podrán incrementar su comprensión de la gestión
de riesgos corporativos, incluidas sus ventajas y limitaciones. Si todas las partes inte-
resadas utilizan este Marco común para dicha gestión, se podrán obtener las venta-
jas comentadas.

21
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 22
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 23

Gestión
de Riesgos Corporativos -
Marco Integrado

Marco
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 24
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 25

1. Definición

Resumen del capítulo: Todas las entidades se enfrentan a la ausencia de


certeza sobre el futuro y el reto para su dirección es determinar qué nivel de
incertidumbre puede aceptar mientras se esfuerza en hacer crecer el valor
para sus grupos de interés. La gestión de riesgos corporativos capacita a la
dirección para identificar, evaluar y gestionar los riesgos en caso de incerti-
dumbre y es esencial para la creación y conservación de valor. Dicha gestión
es un proceso realizado por el consejo de administración, la dirección y
demás personal de una entidad, que se aplica a la definición de estrategia en
toda la entidad. Está diseñada para identificar los eventos potenciales que
puedan afectar a la entidad y gestionar los riesgos para que estén dentro del
riesgo aceptado por ella, facilitando una seguridad razonable respecto al logro
de sus objetivos. Está constituida por ocho componentes relacionados entre
sí, que integran el modo en que la dirección conduce la empresa. Estos com-
ponentes están vinculados entre sí y sirven de criterio para determinar si la
gestión de riesgos corporativos es eficaz.

Un objetivo clave del presente Marco es ayudar a las direcciones de empresas y otras
entidades a enfrentarse mejor al riesgo en su intento por alcanzar sus objetivos. Pero la
gestión de riesgos corporativos tiene diferentes significados para personas distintas,
porque presenta una amplia gama de definiciones y contenidos que impiden una com-
prensión común. Por esto, un objetivo importante es integrar los diferentes conceptos
de la gestión de riesgos en un marco en el que se establezca una definición común, se
identifiquen los componentes y se describan los conceptos claves. Este marco integra
la mayoría de perspectivas posibles y proporciona un punto de partida para la evalua-
ción y mejora de cada entidad y para futuras iniciativas regulatorias y educativas.

Incertidumbre y Valor

Una premisa subyacente en la gestión de riesgos corporativos es que cada entidad,


tenga ánimo de lucro o no o sea un organismo estatal, existe para generar valor para
sus grupos de interés. Todas las entidades se enfrentan a la incertidumbre y el reto
para su dirección es determinar cuánta incertidumbre puede aceptar mientras se
esfuerza en hacer crecer el valor para dichos grupos. La incertidumbre presenta a la
vez riesgos y oportunidades, con un potencial para erosionar o mejorar el valor. La
gestión de riesgos corporativos permite a la dirección tratar eficazmente la incerti-
dumbre y sus riesgos y oportunidades asociados, mejorando así la capacidad de la
entidad para generar valor.

25
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 26

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Las empresas funcionan en entornos donde factores como la globalización, tecnolo-


gía, reestructuraciones, mercados cambiantes, competencia y regulación crean incer-
tidumbre. La incertidumbre emana de la incapacidad para determinar acertadamente
la probabilidad de ocurrencia de los eventos y sus impactos correspondientes. La
incertidumbre también se presenta y crea como consecuencia de las decisiones
estratégicas de la entidad. Por ejemplo, pensemos en una entidad que tenga una
estrategia de crecimiento basada en la expansión de sus operaciones a otro país.
Esta estrategia elegida presenta tanto riesgos como oportunidades, relacionados con
la estabilidad de su entorno político, recursos, mercados, canales, capacidades de la
fuerza laboral y costes.
Las decisiones de la dirección en todas sus actividades, desde el establecimiento de
la estrategia hasta las operaciones cotidianas de la empresa, crean, conservan o ero-
sionan el valor. La creación de valor se produce a través del despliegue de recursos,
incluyendo personas, capital, tecnología y marca, siempre que el beneficio derivado
supere a los recursos utilizados. La conservación de valor tiene lugar cuando el valor
creado perdura a través de, entre otros factores, una calidad superior del producto, la
capacidad productiva y la satisfacción del cliente. El valor puede erosionarse cuando
no se alcanzan los objetivos debido a una estrategia o ejecución inadecuada. Implícito
en las decisiones para reconocer los riesgos y oportunidades, está el requisito de que
la dirección considere la información de los entornos interno y externo, despliegue
recursos valiosos y reajuste las actividades a las circunstancias cambiantes.
El valor se maximiza cuando la dirección establece una estrategia y unos objetivos
que consiguen un equilibrio óptimo entre las metas de crecimiento y rentabilidad y los
riesgos asociados y despliega eficiente y eficazmente los recursos a fin de alcanzar
los objetivos de la entidad. La gestión de riesgos corporativos abarca las siguientes
capacidades:

• Alinear el riesgo aceptado y la estrategia


La dirección considera el riesgo aceptado por la entidad primeramente al evaluar las
alternativas estratégicas y luego, al establecer los objetivos alineados con la estra-
tegia seleccionada y desarrollar mecanismos para gestionar los riesgos relativos.
Por ejemplo, una empresa farmacéutica tiene un bajo riesgo aceptado respecto al
valor de marca, por lo que, para protegerla, mantiene unos amplios protocolos que
afiancen la seguridad del producto e invierte regularmente recursos significativos en
las fases preliminares de investigación y desarrollo, con lo que refuerza la creación
de valor de marca.
• Mejorar las decisiones de respuesta a los riesgos
La gestión de riesgos corporativos proporciona rigor para identificar respuestas
alternativas al riesgo y seleccionar entre ellas –evitar, reducir, compartir y aceptar el
riesgo–. Por ejemplo, la dirección de una empresa que usa vehículos de su propie-
dad y opera con ellos para efectuar los repartos, reconoce los riesgos inherentes en
su proceso de entrega, incluyendo el coste de los daños y perjuicios de los coches
y empleados. Las alternativas disponibles son reducir los riesgos a través de una
eficaz selección, contratación y formación de conductores, evitarlos mediante la
externalización del reparto, compartirlos a través de seguros o simplemente acep-
tarlos. La gestión de riesgos corporativos facilita la metodología y técnicas para
tomar estas decisiones.

26
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 27

DEFINICIÓN

• Reducir sorpresas y pérdidas operativas


Las entidades mejoran su capacidad para identificar eventos potenciales, evaluar
los riesgos y establecer respuestas a ellos, reduciendo así las sorpresas y sus cos-
tes o pérdidas derivados. Por ejemplo, una empresa industrial hace un seguimien-
to de los ratios de defectos en componentes y equipos usando múltiples criterios,
incluyendo los del tiempo de reparación, la incapacidad de satisfacer la demanda
de clientes, la seguridad laboral y el coste de las reparaciones previstas frente a las
imprevistas, y responde estableciendo programas concordantes de mantenimiento.
• Identificar y gestionar riesgos en toda la entidad
Cada entidad se enfrenta a múltiples riesgos que afectan a diferentes partes de la
organización. Su dirección no sólo necesita gestionar los riesgos individuales, sino
también entender los impactos interrelacionados. Por ejemplo, un banco se enfren-
ta a una variedad de riesgos al efectuar sus actividades comerciales en toda la enti-
dad y la dirección ha desarrollado un sistema informático que analiza los datos de
las transacciones y del mercado procedentes de otros sistemas internos, que, junto
con información relevante generada externamente, proporcionan una visión agre-
gada de los riesgos en todas las actividades de negocio. El sistema informático
permite la capacidad de ahondar hasta los niveles de departamento, cliente, inter-
mediario y transacción y cuantifica los riesgos en las categorías establecidas en
relación con sus respectivas tolerancias. El sistema permite que el banco agregue
datos previamente dispares para responder más eficazmente a los riesgos usando
perspectivas tanto agregadas como seleccionadas por objetivos.
• Facilitar respuestas integradas a riesgos múltiples
Los procesos empresariales implican muchos riesgos inherentes y la gestión de
riesgos corporativos permite soluciones integradas para gestionarlos. Por ejemplo,
un mayorista se enfrenta a riesgos de defecto o exceso de existencias, de provee-
dores poco fiables y de precios de compra innecesariamente altos. La dirección
identificó y evaluó el riesgo en el contexto de la estrategia, objetivos y respuestas
alternativas de la entidad y desarrolló un sistema de control de inventarios de
amplio alcance. El sistema se integraba con los proveedores, compartiendo infor-
mación de ventas e inventario, permitiendo una colaboración estratégica y evitan-
do roturas de inventario y costes innecesarios de transporte, mediante contratos de
suministros a largo plazo y mejores precios. Los proveedores asumieron la respon-
sabilidad de reponer existencias, generando reducciones adicionales de costes.
• Aprovechar las oportunidades
Al considerar una amplia gama de eventos potenciales, en lugar de limitarse sólo a
los riesgos, la dirección identifica los eventos que representan oportunidades. Por
ejemplo, una empresa de alimentación consideró los eventos potenciales que
probablemente afectarían a su objetivo de crecimiento perdurable de los ingresos.
Al evaluar los eventos, la dirección determinó que los principales consumidores de
la empresa eran cada vez más conscientes de los temas de salud y cambiaban sus
preferencias dietéticas, lo que indicaba un declive de la demanda futura de los
productos actuales de la empresa. Al determinar su respuesta, la dirección
identificó formas para aplicar sus capacidades existentes al desarrollo de productos
nuevos, permitiendo a la empresa no sólo mantener los ingresos por clientes
actuales, sino también crear otros adicionales atrayendo a una base consumidora
más amplia.

27
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 28

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

• Mejorar la aplicación de capital


La obtención de información sólida sobre los riesgos permite que la dirección eva-
lúe eficazmente las necesidades globales de capital y mejore su asignación. Por
ejemplo, una entidad financiera quedó sometida a nuevas normas reguladoras que
aumentarían sus requisitos de capital, a menos que la dirección calculara más espe-
cíficamente los niveles de riesgo crediticio y operativo y las respectivas necesida-
des de capital. La entidad evaluó el riesgo en términos de coste del desarrollo de
sistemas frente al coste de capital adicional y tomó una decisión consensuada. Con
las aplicaciones informáticas existentes fácilmente modificables, la entidad des-
arrolló cálculos más precisos, evitando así la necesidad de buscar fuentes de capi-
tal adicional.
Estas capacidades están implícitas en la gestión de riesgos corporativos, que ayuda
a la dirección a lograr los objetivos de rendimiento y rentabilidad de la entidad e impe-
dir la pérdida de recursos, así como a asegurar una información eficaz y que se cum-
plan las leyes y normas, evitando daños a su reputación y consecuencias derivadas.
En definitiva, la gestión de riesgos corporativos ayuda a la entidad a llegar al destino
deseado, salvando obstáculos y sorpresas en el camino.

Eventos – Riesgos y Oportunidades

Un evento es un incidente o acontecimiento procedente de fuentes internas o exter-


nas que afecta a la consecución de objetivos y que puede tener un impacto negativo
o positivo o de ambos tipos a la vez. Los eventos de signo negativo constituyen ries-
gos. Por tanto, un riesgo se define como sigue:
Riesgo es la posibilidad de que un evento ocurra y afecte desfavorablemente
al logro de objetivos.
Los eventos con impacto negativo impiden la creación del valor o erosionan el valor
existente. Ejemplos de esto lo constituyen las averías de la maquinaria, un incendio o
pérdidas de crédito. Este tipo de eventos pueden derivarse de condiciones aparente-
mente positivas, como, por ejemplo, cuando la demanda de productos por los clientes
supera a la capacidad productiva, provocando fallos al atender las solicitudes de los
compradores, la erosión de la fidelidad del cliente y el declive de pedidos futuros.
Los eventos con impacto positivo pueden compensar otros impactos negativos o
representar oportunidades. Una oportunidad se define como sigue:
Oportunidad es la posibilidad de que un evento ocurra y afecte positivamen-
te a la consecución de objetivos.
Las oportunidades refuerzan la creación de valor o su conservación. La dirección las
revierte hacia la estrategia o los procesos de fijación de objetivos, para que se pue-
dan formular acciones que aprovechen las oportunidades.

Definición de la Gestión de Riesgos Corporativos

La gestión de riesgos corporativos se ocupa de los riesgos y oportunidades que afec-


tan a la creación de valor o su preservación. Se define de la siguiente manera:

28
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 29

DEFINICIÓN

La gestión de riesgos corporativos es un proceso efectuado por el consejo de


administración de una entidad, su dirección y restante personal, aplicado en
la definición de la estrategia y en toda la entidad y diseñado para identificar
eventos potenciales que puedan afectar a la organización y gestionar sus ries-
gos dentro del riesgo aceptado, proporcionandor una seguridad razonable
sobre el logro de objetivos.

Esta definición refleja algunos conceptos fundamentales de la gestión de riesgos cor-


porativos:
• Es un proceso continuo que fluye a través de una entidad.
• Se realiza por personas en cada nivel de una organización.
• Se aplica al establecimiento de la estrategia.
• Se aplica en toda la empresa, a cada nivel y unidad, e incluye una perspectiva del
riesgo al nivel de entidad
• Está diseñada para identificar eventos potenciales que afecten a la entidad y ges-
tionar los riesgos dentro del riesgo aceptado.
• Puede proporcionar una seguridad razonable a la dirección y al consejo de admi-
nistración de una entidad.
• Está orientada a la consecución de objetivos en una o varias categorías separadas,
aunque solapables - es un medio para conseguir un fin, no un fin en sí mismo.
La definición es conscientemente amplia por varias razones. Capta los conceptos
claves fundamentales de cómo las empresas y otras organizaciones gestionan el ries-
go y proporciona una base para su aplicación en todas las entidades y sectores. Se
centra directamente en el cumplimiento de los objetivos establecidos por una entidad
determinada y proporciona una base para definir la eficacia en la gestión de riesgos
corporativos que se comentará posteriormente en este capítulo.
A continuación, se presentan los conceptos fundamentales mencionados antes.

Un Proceso

La gestión de riesgos corporativos no es estática, sino más bien un intercambio con-


tinuo o iterativo de acciones que fluyen por toda la entidad, que se difunden y están
implícitas en la forma como la dirección lleva el negocio.
La gestión de riesgos corporativos es diferente de la perspectiva de algunos obser-
vadores, que la ven como un mero apéndice de las actividades de una entidad. Con
esto no queremos decir que una eficaz gestión de riesgos corporativos no requiera
un esfuerzo adicional, llegado el caso. Al considerar los riesgos crediticios o de tipo
de cambio, por ejemplo, puede requerirse un esfuerzo adicional para desarrollar
modelos adecuados y elaborar análisis y cálculos necesarios. Sin embargo, estos
mecanismos de gestión de riesgos corporativos están integrados en las actividades
operativas de una entidad y existen gracias a razones empresariales de fondo. De
hecho, dicha gestión resulta más eficaz cuando esos mecanismos están integrados

29
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 30

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

en la infraestructura de la entidad y forman parte de su esencia. Al integrarlos, la ges-


tión de riesgos corporativos puede afectar directamente a la capacidad de la entidad
para implantar su estrategia y cumplir su misión.
La integración de la gestión de riesgos corporativos tiene implicaciones importantes
para la contención de costes, especialmente en los mercados altamente competiti-
vos a los que se enfrentan muchas empresas. Añadir nuevos procedimientos inde-
pendientes de los ya existentes, provoca un aumento de costes. Al centrarse en las
operaciones existentes y su aportación a la gestión de riesgos corporativos e integrar
ésta en las actividades operativas básicas, una entidad puede evitar procedimientos
y costes innecesarios. Además, la práctica de construir la mencionada gestión den-
tro del tejido operativo ayuda a identificar nuevas oportunidades que la dirección
puede aprovechar para hacer crecer el negocio.

Realizado por Personas

La gestión de riesgos corporativos se realiza por el consejo de administración, la


dirección y demás personal de una entidad. Son las personas de la organización,
mediante lo que hacen y dicen, quienes la hacen realidad. Las personas establecen
la misión, estrategia y objetivos de la entidad y colocan los mecanismos de dicha
gestión en el lugar adecuado.
De forma similar, la gestión de riesgos corporativos afecta a las acciones de las per-
sonas, reconociendo que éstas no siempre se entienden, se comunican o actúan de
modo consistente. Cada individuo aporta a su puesto de trabajo su historial y capa-
cidades técnicas propias y, a su vez, tiene necesidades y prioridades diferentes.
Estos hechos afectan a la gestión de riesgos corporativos y son afectados por ésta.
Cada persona tiene su propio punto de vista, que influye en su manera de identificar,
evaluar y responder al riesgo. La gestión de riesgos corporativos proporciona los
mecanismos necesarios para ayudar a las personas a entender el riesgo en el con-
texto de los objetivos de la entidad. Las personas deben conocer sus responsabili-
dades y límites de autoridad. Asimismo, deberá existir un vínculo claro y estrecho
entre los deberes de las personas y el modo de realizarlos, así como con la estrate-
gia y objetivos de la entidad.
El personal de una organización incluye al consejo de administración, la dirección y
demás empleados. Aunque los consejeros aportan primordialmente la supervisión de
la entidad, también proporcionan orientación y aprueban la estrategia y políticas.
Como tal, el consejo de administración de una empresa constituye un componente
importante de su gestión de riesgos corporativos.

Aplicado al Establecimiento de la Estrategia

Una entidad fija su misión o visión y establece los objetivos estratégicos, que son las
metas de alto nivel que están en línea con aquella y la apoyan. Para alcanzar sus
objetivos estratégicos, la entidad establece una estrategia y también fija los objetivos
conexos que desea realizar y se derivan de ella, fluyendo en cascada hacia las uni-
dades de negocio, divisiones y procesos.

30
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 31

DEFINICIÓN

La gestión de riesgos corporativos se aplica durante el proceso del establecimiento


de la estrategia, en el que la dirección contempla los riesgos relacionados con las
opciones alternativas. Por ejemplo, una alternativa puede ser la de adquirir otras
empresas para incrementar la cuota de mercado y otra, la de recortar los costes de
aprovisionamiento para obtener una tasa más alta de margen bruto. Cada una de
ellas plantea diferentes riesgos. Si la dirección selecciona la primera, es posible que
la empresa se vea obligada a penetrar en mercados nuevos y, así, sus competidores
pueden ganar cuota en los mercados actualmente existentes o que la entidad no
tenga la capacidad de implantar eficazmente su estrategia. Con la segunda alternati-
va, los riesgos implicarán, incluso, la utilización de nuevas tecnologías o proveedores
o la formación de nuevas alianzas. Las técnicas de gestión de riesgos corporativos
se aplican a este nivel para ayudar a la dirección a evaluar y elegir la estrategia de la
entidad y los objetivos asociados a ella.

Aplicado en toda la Empresa

Al aplicar la gestión de riesgos corporativos, una entidad debería considerar toda la


gama de sus actividades en los diferentes niveles de la organización, desde aquellas
al nivel de empresa, como son la planificación estratégica y la asignación de recur-
sos, hasta las de unidades de negocio, como son el marketing y los recursos huma-
nos, y las de procesos de negocio, como son la producción y la revisión de solven-
cia de los clientes. La gestión de riesgos corporativos también se aplica en proyec-
tos especiales y nuevas iniciativas que podrían no tener aún un lugar en la jerarquía
o el organigrama de la organización.
La gestión de riesgos corporativos requiere que una entidad adopte una perspectiva
de cartera global para los riesgos. Esto puede implicar que cada directivo responsa-
ble de una unidad de negocio, función, proceso o cualquier actividad tenga que des-
arrollar una evaluación de sus riesgos, que se puede efectuar de modo cuantitativo o
cualitativo. Con una visión compuesta de cada nivel sucesivo de la organización, la
alta dirección está en posición de determinar si la cartera de riesgo global de la enti-
dad se corresponde a su riesgo aceptado.
La dirección considera los riesgos interrelacionados desde una perspectiva de carte-
ra a nivel de entidad. Los riesgos de las unidades individuales pueden mantenerse
dentro de las tolerancias al riesgo de cada una de ellas, aunque es posible que suma-
dos superen el riesgo aceptado por la entidad en su conjunto. O, al contrario, ciertos
eventos potenciales pueden representar un riesgo inaceptable para una unidad de
negocio, pero generar un efecto compensatorio en otra. Es preciso identificar los ries-
gos interrelacionados y actuar sobre ellos para que la totalidad de los riesgos sean
concordantes con el riesgo aceptado por la entidad de forma global.

Riesgo Aceptado

El riesgo aceptado es el volumen de riesgo, a un nivel amplio, que una entidad está
dispuesta a aceptar en su búsqueda de valor. Refleja la filosofía de gestión de ries-
gos de la entidad y, por consiguiente, influye en su cultura y estilo operativo. Muchas
entidades consideran el riesgo aceptado de manera cualitativa, calificándolo como

31
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 32

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

alto, moderado o bajo, mientras existen otras que adoptan un enfoque cuantitativo,
reflejando y equilibrando los objetivos de crecimiento, rendimiento y riesgo. Una
empresa con un riesgo aceptado alto puede estar dispuesta a asignar una gran parte
del capital a áreas de alto riesgo, como son los mercados emergentes. Por el contra-
rio, una compañía con un riesgo aceptado bajo podría optar por limitar su riesgo a
corto plazo de amplias pérdidas de capital, invirtiendo sólo en mercados maduros y
estables.
El riesgo aceptado se relaciona directamente con la estrategia de una entidad y se
tiene en cuenta para establecerla, ya que diferentes estrategias exponen a una enti-
dad a riesgos distintos. La gestión de riesgos corporativos ayuda a la dirección a ele-
gir una estrategia que ponga en línea la creación anticipada de valor con el riesgo
aceptado por la entidad.
El riesgo aceptado orienta la asignación de recursos, pues la dirección dota de recur-
sos a las diferentes unidades de negocio e iniciativas teniendo en cuenta el riesgo
aceptado por la entidad y los planes de cada unidad para generar el rendimiento
deseado a partir de los recursos invertidos. La dirección considera su riesgo acepta-
do al alinear la organización, personal y procesos y diseña la infraestructura necesa-
ria para supervisar eficazmente los riesgos y responder a ellos.
Las tolerancias al riesgo están relacionadas con los objetivos de la entidad. La tole-
rancia al riesgo es el nivel aceptable de variación relativa al logro de un objetivo con-
creto y a menudo se mide mejor en las mismas unidades usadas para medir dicho
objetivo.
Al fijar la tolerancia al riesgo, la dirección considera la importancia relativa del objeti-
vo correspondiente y alinea las tolerancias al riesgo con el riesgo aceptado. Operar
dentro de las tolerancias al riesgo ayuda a asegurar que la entidad se mantenga den-
tro de su riesgo aceptado y, por consiguiente, que la entidad consiga sus objetivos.

Proporciona una Seguridad Razonable

Una gestión de riesgos corporativos bien diseñada y realizada puede facilitar a la


dirección y al consejo de administración una seguridad razonable sobre la consecu-
ción de objetivos de la entidad. Este concepto de seguridad razonable refleja la idea
de que la incertidumbre y el riesgo están relacionados con el futuro, que nadie puede
predecir con precisión, y no implica que la gestión de riesgos corporativos fracase
con mucha frecuencia.
Muchos factores, individual y colectivamente, refuerzan el concepto de seguridad
razonable. El efecto acumulativo de las respuestas al riesgo que satisfacen objetivos
múltiples y el carácter multifuncional de los controles internos reducen el riesgo de
que una entidad pueda no alcanzar sus objetivos. Es más, las actividades y respon-
sabilidades operativas y cotidianas de las personas que actúan en varios niveles de
una organización están orientadas a la consecución de sus objetivos. Evidentemente,
entre una muestra de entidades bien controladas, es probable que de forma regular
la mayoría esté informada del progreso hacia su estrategia y objetivos operativos,
alcance sus objetivos de cumplimiento y genere consistentemente –periodo tras
periodo y ejercicio tras ejercicio- informes fiables. Sin embargo, puede producirse un
evento incontrolable, un error o un inadecuado incidente con la información. En otras

32
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 33

DEFINICIÓN

palabras, incluso una gestión eficaz de riesgos corporativos puede experimentar el


fracaso. La seguridad razonable no es una seguridad absoluta.

Consecución de Objetivos

Dentro del contexto de la misión establecida, la dirección fija objetivos estratégicos,


selecciona su estrategia y establece otros objetivos que fluyen en cascada por toda
la entidad y están en línea con la estrategia y vinculados a ella. Aunque muchos obje-
tivos son específicos para una entidad determinada, algunos son ampliamente com-
partidos. Por ejemplo, son objetivos comunes para prácticamente todas las entida-
des la consecución y mantenimiento de una reputación positiva en el ámbito empre-
sarial y de negocio, la generación de información fiable para los grupos de interés o
un desarrollo de operaciones en concordancia con las leyes y normas.
Este Marco establece cuatro categorías de objetivos de una entidad:
• Estrategia
Relativos a los objetivos de alto nivel, alineados con la misión de la entidad y pres-
tándole apoyo
• Operaciones
Relativos al uso eficaz y eficiente de los recursos de la entidad
• Información
Relativos a la fiabilidad de los informes de la entidad
• Cumplimiento
Relativos al cumplimiento por la entidad de las leyes y normas aplicables
Esta clasificación de los objetivos de una entidad por categorías permite enfocar los
aspectos diferenciados de la gestión de riesgos corporativos. Estas categorías dis-
tintas, aunque solapables (un objetivo concreto puede incidir en más de una catego-
ría) atienden a las distintas necesidades de la entidad y posiblemente a la responsa-
bilidad directa de diferentes directivos, permitiendo también distinguir entre lo que
puede esperarse de cada una de ellas.
Algunas entidades utilizan otra categoría de objetivos, la “salvaguarda de recursos”,
a veces denominada “salvaguarda de activos”. Desde una perspectiva amplia, trata
de la prevención de pérdidas de activos o recursos de una entidad por robo, despil-
farro, ineficiencia o simplemente por decisiones empresariales equivocadas, tales
como vender productos a un precio demasiado bajo, no haber podido retener a
empleados claves o evitar infracciones de patentes o incurrir en pasivos imprevistos.
Son principalmente objetivos operacionales, aunque ciertos aspectos de la salva-
guarda pueden clasificarse en otras categorías. Cuando se aplican requisitos legales
o normativos, se trata de temas de cumplimiento. Cuando se consideran conjunta-
mente con la información al público, a menudo se usa una definición más restringida
de la salvaguarda de activos, que trata de la prevención o detección oportuna de
cualquier adquisición, uso o disposición no autorizada de los activos de la entidad
que podría tener un efecto material sobre los estados financieros.
Se puede esperar de la gestión de riesgos corporativos que proporcione una seguri-
dad razonable del logro de objetivos relativos a la fiabilidad de la información y el

33
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 34

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

cumplimiento de leyes y normas. La consecución de estas categorías de objetivos


está dentro del control de la entidad y depende de su grado de éxito en la realización
de actividades relativas a ellas.
Sin embargo, el logro de objetivos estratégicos, como la obtención de una cuota de
mercado específica, y de objetivos operativos, como el lanzamiento con éxito de una
nueva línea de producto, no está siempre dentro del control de la entidad. La gestión
de riesgos corporativos no puede prevenir juicios o decisiones equivocadas, ni even-
tos externos que puedan provocar que una entidad falle en la consecución de obje-
tivos operativos. Sin embargo, sí mejora la probabilidad de que la dirección tome
mejores decisiones. Respecto a dichos objetivos, la gestión de riesgos corporativos
puede proporcionar una seguridad razonable de que la dirección y el consejo de
administración, en su papel de supervisión, sean informados oportunamente del
grado de progreso de la entidad hacia la consecución de sus objetivos.

Componentes de la Gestión de Riesgos Corporativos

La gestión de riesgos corporativos consta de ocho componentes interrelacionados,


derivados de la manera como la dirección lleva el negocio, que se integran en el pro-
ceso de gestión. Estos componentes son:
• Ambiente interno
La dirección fija una filosofía respecto al riesgo y determina el riesgo aceptado. El
ambiente interno establece la base de cómo el personal de la empresa debe perci-
bir y afrontar el control y el riesgo. El núcleo de cualquier negocio está constituido
por sus personas – con sus atributos individuales, incluyendo integridad, valores
éticos y competencia- y el entorno en el que actúan.
• Establecimiento de objetivos
Los objetivos deben existir antes de que la dirección pueda identificar los eventos
potenciales que afectan a su consecución. La gestión de riesgos corporativos ase-
gura que la dirección ha establecido un proceso para fijar objetivos y que los obje-
tivos seleccionados apoyan la misión de la entidad y se alinean con ella, además de
ser consistentes con el riesgo aceptado.
• Identificación de eventos
Deben identificarse los eventos potenciales que pueden tener un impacto en la enti-
dad. Esto implica la identificación de posibles acontecimientos internos o externos
que afectan a la consecución de objetivos, diferenciándolos según su procedencia,
e incluye la distinción entre los que representan riesgos u oportunidades o ambas
circunstancias a la vez. Las oportunidades se reenvían hacia la estrategia de la
dirección o a los procesos para fijar objetivos.
• Evaluación de riesgos
Los riesgos identificados se analizan para formar una base que determine cómo
deben gestionarse y se asocian a los objetivos a los que pueden afectar, evaluán-
dose desde la doble perspectiva de riesgo inherente y residual y considerando tanto
su probabilidad como su impacto.
• Respuesta a los riesgos
El personal identifica y evalúa las posibles respuestas a los riesgos: evitar, aceptar,

34
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 35

DEFINICIÓN

reducir o compartir. La dirección selecciona un conjunto de acciones para poner en


línea los riesgos con sus tolerancias respectivas y el riesgo aceptado por la entidad.
• Actividades de control
Las políticas y procedimientos se establecen y ejecutan para asegurar que se llevan
a cabo eficazmente las respuestas a los riesgos seleccionadas por la dirección.
• Información y comunicación
La información relevante se identifica, capta y comunica de un modo y en un plazo
que permita a las personas desarrollar sus responsabilidades. Hace falta informa-
ción a todos los niveles de una entidad para identificar, evaluar y responder a los
riesgos. También puede darse una comunicación eficaz en sentido amplio, cuando
fluye en todas direcciones dentro de la entidad. El personal debe recibir comunica-
ciones claras sobre su papel y responsabilidades.
• Supervisión
Toda la gestión de riesgos corporativos se supervisa, realizando en ella las modifi-
caciones que sean necesarias. De este modo, se puede reaccionar dinámicamente
y cambiar si varían las circunstancias. Esta supervisión se lleva a cabo a través de
actividades permanentes de la dirección, evaluaciones independientes de la gestión
de riesgos corporativos o una combinación de ambas actuaciones.
La gestión de riesgos corporativos es un proceso dinámico. Por ejemplo, la evalua-
ción de los riesgos induce una respuesta a ellos y puede influir en las actividades de
control, así como destacar la conveniencia de reconsiderar las necesidades informa-
tivas y de comunicación o las actividades de supervisión de la entidad. Así, la ges-
tión de riesgos corporativos no sólo constituye estrictamente un proceso en serie,
donde cada componente afecta sólo al siguiente, sino que es un proceso multidirec-
cional e iterativo en que casi cualquier componente puede influir en otro.
No existen dos entidades que apliquen o debieran aplicar la gestión de riesgos cor-
porativos del mismo modo. Las empresas y sus capacidades y necesidades de ges-
tión de riesgos corporativos difieren enormemente según su dimensión y sector y
según la filosofía y cultura de la dirección. Así, aunque todas las entidades deberían
tener cada componente en su lugar y operando eficazmente, la aplicación de la ges-
tión de riesgos corporativos en una entidad –incluyendo las herramientas y técnicas
aplicadas y la asignación de papeles y responsabilidades - a menudo no tendrá el
mismo aspecto que la empleada en otras entidades.

Relación entre Objetivos y Componentes

Existe una relación directa entre los objetivos que una entidad intenta alcanzar y los
componentes de la gestión de riesgos corporativos, que representan lo que hace falta
para lograr aquellos. Esta relación se muestra a través de la matriz tridimensional en
forma de cubo que se muestra en la figura 1.1.

35
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 36

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Figura 1.1

(Gráfico del cubo)

• Las cuatro categorías de objetivos –estrategia, operaciones, información y cumplimiento– están represen-
tadas por las columnas verticales.
• Los ochos componentes están representados por las filas horizontales.
• La entidad y sus unidades están representadas por la tercera dimensión del cubo.

Cada fila con un componente cruza y afecta a las cuatro categorías de objetivos. Por
ejemplo, los datos financieros y no financieros generados desde fuentes internas y
externas, que forman parte del componente de información y comunicación, son
necesarios para fijar la estrategia, gestionar eficazmente las operaciones del nego-
cio, informar adecuadamente y determinar si la entidad cumple o no las leyes apli-
cables.
Asimismo, si observamos las categorías de objetivos, los ocho componentes son
relevantes para cualquiera de ellas. Tomando una categoría, por ejemplo, la eficacia
y eficiencia operativa, le resultan aplicables los ocho componentes, que son impor-
tantes para su consecución.
Debería reconocerse que las cuatro columnas representan categorías de objetivos de
una entidad y no partes o unidades de ésta. De acuerdo con esto, cuando se consi-
dere la categoría de objetivos relativos a la información, por ejemplo, será necesario
conocer una amplia gama de datos sobre las operaciones de la entidad. Pero en este
caso, el foco está en la segunda columna desde la derecha en la cara horizontal
superior –“información de objetivos”– y no en la tercera –“operaciones”– como podría
parecer.

Eficacia

Aunque la gestión de riesgos corporativos es un proceso, su eficacia es un estado o


condición en un momento determinado. Discernir si la gestión de riesgos corporati-
vos es “eficaz” es un juicio que se deriva de una evaluación acerca de si están pre-

36
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 37

DEFINICIÓN

sentes los ocho componentes y funcionan eficazmente. Así, los componentes tam-
bién constituyen criterios para una gestión eficaz de riesgos corporativos. Para que
los componentes estén presentes y funcionen adecuadamente, no puede haber debi-
lidades materiales y los riesgos deben haberse encajado dentro del riesgo aceptado
por la entidad.
Cuando se determine que la gestión de riesgos corporativos es eficaz en cada una
de las cuatro categorías de objetivos, respectivamente, el consejo de administración
y la dirección tendrán una seguridad razonable de que:
• Se conoce el grado de consecución de los objetivos estratégicos de la entidad
• Se conoce el grado de consecución de los objetivos operativos de la entidad
• La información de la entidad es fiable
• Se cumplen las leyes y normas aplicables
Aunque para que la gestión de riesgos corporativos pueda considerarse eficaz, los
ocho componentes deben estar presentes y funcionar correctamente – aplicando los
principios descritos en capítulos siguientes -, pueden existir entre ellos algunos con-
flictos. Dado que las técnicas de gestión de riesgos corporativos sirven para una
variedad de propósitos, algunas de las que se aplican a un determinado componen-
te también pueden cubrir el propósito de técnicas normalmente aplicables a otros.
Adicionalmente, las respuestas a los riesgos pueden diferir en su grado de atención
a uno concreto, por lo que las respuestas y controles complementarios, cada uno de
efecto limitado, pueden ser satisfactorios en conjunto.
Los conceptos que comentamos aquí son aplicables a todas las entidades, sea cual
sea su dimensión. Aunque algunas pequeñas y medianas empresas puedan implan-
tar factores de componentes en forma diferente a otras más grandes, también pue-
den conseguir una gestión eficaz de riesgos corporativos. La metodología para cada
componente probablemente sea menos formal y estructurada en las entidades
pequeñas que en las grandes, pero los conceptos básicos deberán estar presentes
en todas ellas.
Normalmente, la gestión de riesgos corporativos se considera dentro del contexto de
una entidad en su conjunto, lo que implica considerar su aplicación a las unidades
significativas de negocio. Sin embargo, puede haber circunstancias en las que la efi-
cacia de dicha gestión deba ser evaluada de modo individual en una determinada uni-
dad de negocio. En tales casos, para que exista eficacia en la gestión en esta unidad,
los ocho componentes tienen que estar presentes y funcionar eficazmente en ella.
Así, por ejemplo, como contar con un consejo de administración con características
específicas forma parte del ámbito interno, la gestión de riesgos corporativos de una
especifica unidad de negocio sólo podrá juzgarse como eficaz cuando dicha unidad
tenga un consejo de administración u organismo similar que funcione adecuadamen-
te (o cuando el consejo de administración de la entidad lleve a cabo una adecuada
supervisión directa sobre la unidad de negocio). De forma similar, debido a que el
componente de respuesta a los riesgos se describe desde una perspectiva de carte-
ra de riesgos, para que la gestión de riesgos corporativos en dicha unidad de nego-
cio pueda considerarse eficaz, también debería aplicarse en ella este tipo de pers-
pectiva.

37
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 38

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Inclusión del Control Interno

El control interno es una parte integral de la gestión de riesgos corporativos y, en con-


secuencia, el Marco de esta última incluye a aquél, aportando así a la dirección una
conceptualización y herramienta más robustas. El control interno se define y descri-
be en el documento Control Interno – Marco integrado. Como este documento com-
pone la base de las reglas, normas y leyes existentes y ha resistido la prueba del
tiempo, continúa vigente como fuente de la definición y el marco del control interno.
Aunque en el presente documento sólo se reproduzcan algunas secciones de Control
interno – Marco integrado, su totalidad sí queda integrada en él mediante referencias.
El anexo C describe la relación existente entre la gestión de riesgos corporativos y el
control interno.

Gestión de Riesgos Corporativos y Proceso de Dirección

Como la gestión de riesgos corporativos forma parte del proceso de dirección, los
componentes del presente Marco se comentan dentro del contexto de lo que hace la
gerencia al dirigir una empresa u otro tipo de entidad. Por el contrario, no todo lo que
hace la dirección de una entidad forma parte de la gestión de riesgos corporativos y
así, muchos juicios aplicados en la toma de decisiones directivas y otras acciones
asociadas, aunque constituyan parte del proceso de dirección, no forman parte de
esa gestión. Por ejemplo:
• Constituye un componente crítico de la gestión de riesgos corporativos el que exis-
ta un proceso apropiado para fijar objetivos en la entidad, pero determinados obje-
tivos seleccionados por la dirección no forman parte de dicha gestión.
• Responder a los riesgos, desde una adecuada evaluación suya, forma parte de la
gestión de riesgos corporativos, pero no así determinadas respuestas al riesgo
seleccionadas y la correspondiente asignación de recursos de la entidad.
• Establecer y ejecutar actividades de control para ayudar a asegurar que se llevan a
cabo de modo eficaz las respuestas a los riesgos que la dirección selecciona, forma
parte de la gestión de riesgos corporativos, pero no así las particulares actividades
de control seleccionadas.
En general, la gestión de riesgos corporativos implica a aquellos elementos del pro-
ceso de dirección que permiten a la gerencia tomar decisiones informadas basadas
en el riesgo, pero determinadas decisiones seleccionadas dentro de una gama de
opciones apropiadas no sirven para establecer si la gestión de riesgos corporativos
es eficaz o no. Sin embargo, aunque los objetivos, respuestas al riesgo y actividades
de control elegidas sean temas a juicio de la dirección, la selección efectuada debe
dar como resultado la reducción del riesgo a un nivel aceptable, determinado por el
riesgo aceptado y una seguridad razonable respecto a la consecución de los objeti-
vos de la entidad.

38
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 39

2. Ámbiente interno

Resumen del capítulo: El ambiente interno abarca el talante de una organi-


zación, que influye en la conciencia de sus empleados sobre el riesgo y forma
la base de los otros componentes de la gestión de riesgos corporativos, pro-
porcionando disciplina y estructura. Los factores del ambiente interno inclu-
yen la filosofía de gestión de riesgos de una entidad, su riesgo aceptado, la
supervisión ejercida por el consejo de administración, la integridad, valores
éticos y competencia de su personal y la forma en que la dirección asigna la
autoridad y responsabilidad y organiza y desarrolla a sus empleados.

El ambiente interno constituye la base de todos los demás componentes de la gestión


de riesgos corporativos, proporcionando disciplina y estructura, e influye en cómo se
establecen las estrategias y objetivos, se estructuran las actividades de negocio, se
identifican y evalúan los riesgos y se actúa sobre ellos. Asimismo, incide en el diseño y

39
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 40

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

funcionamiento de las actividades de control, los sistemas de información y comunica-


ción y las actividades de supervisión.
El ambiente interno se ve influido por la historia y cultura de una entidad y comprende
muchos elementos, incluyendo los valores éticos de la entidad, la competencia y des-
arrollo del personal, la filosofía de la dirección para gestionar riesgos y la forma de asig-
nar la autoridad y responsabilidad. El consejo de administración es una parte crítica del
ambiente interno e influye de modo significativo en sus otros factores.
Aunque todos los elementos sean importantes, el alcance del tratamiento de cada uno
variará según la entidad. Por ejemplo, el consejero delegado de una empresa con una
plantilla reducida y operaciones centralizadas podría no establecer líneas formales de
responsabilidad ni políticas operativas detalladas. Sin embargo, la empresa podría con-
tar con un ambiente interno que proporcionase cimientos adecuados para la gestión de
riesgos corporativos.

Filosofía de Gestión de Riesgos

La filosofía de gestión de riesgos de una entidad es el conjunto de creencias y actitu-


des compartidas que caracterizan cómo se contempla el riesgo en ella, desde el des-
arrollo e implantación de la estrategia hasta sus actividades cotidianas. Refleja los valo-
res de la entidad, influye en su cultura y estilo operativo y afecta a cómo se aplican los
componentes de dicha gestión, incluyendo la identificación de riegos, los tipos de ries-
go aceptados y cómo son gestionados.
Una entidad que ha tenido éxito aceptando riesgos significativos probablemente tenga
una visión diferente de la gestión de riesgos corporativos que otra que se haya enfren-
tado a severas consecuencias económicas o reguladoras por haberse aventurado en
territorio peligroso. Aunque algunas entidades pueden trabajar para conseguir una ges-
tión de riesgos corporativos que satisfaga las exigencias de algún grupo de interés
externo, como su empresa matriz o un posible regulador, es más frecuente que se haga
porque su dirección reconoce que una gestión eficaz de riesgos corporativos ayuda a
la entidad a crear y conservar valor.
Cuando la filosofía de gestión de riesgos esté bien desarrollada, entendida y acepta-
da por el personal, la entidad estará en posición de reconocer y gestionar los riesgos
eficazmente. De lo contrario, puede existir de manera inaceptable una aplicación des-
igual de la gestión de riesgos corporativos en las unidades de negocio, funciones o
departamentos. Pero incluso cuando la filosofía de la entidad esté muy desarrollada,
pueden existir diferencias culturales entre las unidades, lo que provocará una variación
en la aplicación de dicha gestión. Los directivos de algunas unidades pueden estar
preparados para asumir un mayor riesgo, mientras que otros pueden ser más conser-
vadores. Por ejemplo, una función de ventas agresiva puede poner su énfasis en la eje-
cución de la venta, sin una cuidadosa atención a temas de cumplimiento normativo,
mientras que el personal de la unidad de contratación de personal centra significati-
vamente su atención en asegurarse del cumplimiento de todas las políticas y normas,
internas y externas, relevantes. Vistas de manera separada, estas distintas subcultu-
ras podrían tener efectos adversos sobre la entidad. Sin embargo, trabajando bien
conjuntamente, las unidades pueden reflejar adecuadamente la filosofía de gestión de
riesgos.

40
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 41

AMBIENTE INTERNO

Esta filosofía se refleja en casi todo el quehacer de la dirección para gestionar la enti-
dad y se plasma en las declaraciones de políticas, las comunicaciones verbales y escri-
tas y la toma de decisiones. Tanto si la dirección pone su énfasis en las políticas escri-
tas, normas de conducta, indicadores de rendimiento e informes de excepción, como
si prefiere operar más informalmente mediante contactos personales con los directivos
claves, lo críticamente importante es que desde ella se potencie la filosofía, no sólo con
palabras, sino con acciones diarias.

Riesgo Aceptado

El riesgo aceptado es el volumen de riesgo, a un nivel amplio, que una entidad está dis-
puesta a aceptar en su búsqueda de valor. Refleja la filosofía de gestión de riesgo de la
entidad e impacta a su vez en su cultura y estilo operativo.
El riesgo aceptado debe tenerse en cuenta al fijar la estrategia, pues el rendimiento
deseado de la estrategia debe estar alineado con el riesgo aceptado de la entidad.
Diferentes estrategias expondrán a la entidad a niveles diferentes de riesgo y la gestión
de riesgos corporativos, aplicada en esta fase de fijación de estrategias, ayuda a la
dirección a seleccionar una estrategia coherente con el riesgo aceptado.
Las entidades pueden considerar el riesgo aceptado de un modo cualitativo, usando
categorías como alto, moderado o bajo, o bien optar por un enfoque cuantitativo, que
refleje los objetivos de crecimiento y rendimiento y los equilibre con los riesgos.

El Consejo de Administración

El consejo de administración de una entidad es una parte crítica del ámbito interno e
influye de modo significativo en sus elementos. Su independencia frente a la dirección,
la experiencia y reputación de sus miembros, su grado de implicación y supervisión de
las actividades y la adecuación de sus acciones juegan un papel muy importante. Otras
características son el alcance con que se plantean y persiguen, junto con la dirección,
cuestiones difíciles relativas a estrategias, planes y rendimientos y su interacción o la
del comité de auditoría con los auditores internos y externos.
Un consejo de administración u organismo similar activo e implicado debería poseer una
adecuada experiencia directiva, técnica y de otro tipo, junto con la necesaria mentalidad
para llevar a cabo sus responsabilidades de supervisión. Esto es crítico para un entorno
eficaz de gestión de riesgos corporativos. Y, dado que el consejo tiene que estar prepa-
rado para cuestionar y fiscalizar las actividades de la dirección, presentar enfoques alter-
nativos y actuar frente a prácticas ilícitas, debería contar con consejeros externos.
Los miembros de la alta dirección pueden ser partícipes eficaces en el consejo, apor-
tando su conocimiento profundo de la empresa. Sin embargo, debe existir un número
suficiente de miembros externos independientes que no sólo faciliten consejo y orien-
tación razonables, sino que también sirvan como una necesaria verificación y supervi-
sión de la dirección. Se puede concluir que, para que el ámbito interno sea eficaz, el
consejo debe tener al menos una mayoría de miembros externos independientes.
Los consejos de administración eficaces aseguran que la dirección mantiene una ade-
cuada gestión de riesgos corporativos. Aunque una empresa podría históricamente no

41
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 42

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

haber sufrido pérdidas ni estar expuesta a riesgos significativos, el consejo no debe


sucumbir a la idea mítica de que los eventos con serias consecuencias adversas “no
pueden tener lugar aquí”. Hay que reconocer que, aunque una compañía pueda tener
una estrategia sólida, empleados competentes, sólidos procesos de negocio y una tec-
nología fiable, es vulnerable al riesgo como cualquier entidad y necesita un proceso de
gestión de riesgos corporativos que funcione eficazmente.

Integridad y Valores éticos

La estrategia y objetivos de una entidad y la manera en que se ponen en práctica se


basan en las preferencias, juicios de valor y estilos de gestión. La integridad de la direc-
ción y su compromiso con los valores éticos influyen en dichas preferencias y juicios,
que se traducen en normas de conducta. Dado que la reputación de una entidad es tan
valiosa, las normas de conducta deben ir más allá del mero cumplimiento de la ley. Los
directivos de empresas bien gestionadas aceptan cada vez más la idea de que la ética
es rentable y que una conducta íntegra es un buen negocio.
La integridad de la dirección es un requisito previo de la conducta ética en todos los
aspectos de la actividad de una entidad. La eficacia de la gestión de riesgos corpora-
tivos no debe sobreponerse a la integridad y los valores éticos de las personas que
crean, administran y controlan sus actividades. La integridad y valores éticos son ele-
mentos esenciales del ámbito interno de una entidad y afectan al diseño, administra-
ción y seguimiento de los otros componentes de la gestión de riesgos corporativos.
A menudo, resulta difícil establecer los valores éticos, dada la necesidad de tener en
cuenta las preocupaciones de varias partes. Los valores de la dirección deben equili-
brar los intereses de la empresa, sus empleados, proveedores, clientes y competidores
y del público en general. La búsqueda de este equilibrio entre intereses, a menudo con-
trarios, puede resultar complicada y frustrante. Por ejemplo, las actividades empresa-
riales para proveer un producto esencial (petróleo, madera o comida) pueden provocar
repercusiones medioambientales.
La conducta ética y la integridad de la dirección se derivan de la cultura corporativa,
que abarca las normas éticas y de conducta y cómo son comunicadas y potenciadas.
Las políticas oficiales especifican lo que el consejo y la dirección quieren que suceda.
La cultura corporativa determina lo que actualmente ocurre y qué reglas son acatadas,
manipuladas o ignoradas. La alta dirección –empezando por el consejero delegado–
juega un papel clave a la hora de establecer la cultura corporativa. Como personalidad
dominante en la entidad, es precisamente el consejero delegado quien establece a
menudo el talante ético de la entidad.
Ciertos factores organizativos también pueden influir en la probabilidad de que existan
prácticas fraudulentas y cuestionables en la información financiera. Estos mismos fac-
tores probablemente también influyan en la conducta ética. Los individuos pueden
implicarse en actos deshonestos, ilegales o no éticos, simplemente porque la entidad
les proporciona importantes incentivos o tentaciones para hacerlo. Un énfasis indebido
sobre los resultados, particularmente a corto plazo, puede fomentar un ambiente inter-
no inadecuado. Enfocarse solamente a los resultados a corto plazo puede dañar a la
entidad, incluso en ese mismo corto plazo. Centrarse en los resultados –ventas o bene-
ficios a cualquier coste– a menudo provoca acciones o reacciones no deseadas. Las

42
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 43

AMBIENTE INTERNO

tácticas agresivas de venta, las negociaciones sin piedad, las ofertas tácitas de sobor-
nos, por ejemplo, pueden provocar reacciones con efectos inmediatos (e, incluso, dura-
deros).
Otros incentivos para implicarse en prácticas de información fraudulentas o cuestiona-
bles y, por extensión, en otras formas de conducta no ética, pueden incluir recompen-
sas altamente dependientes de la información facilitada, financiera y no financiera, par-
ticularmente respecto a los resultados a corto plazo.
Eliminar o reducir los incentivos y tentaciones inadecuadas supone un buen camino
hacia la eliminación de conductas no deseadas. Como se ha sugerido, esto puede con-
seguirse siguiendo prácticas empresariales sólidas y rentables. Por ejemplo, los incen-
tivos sobre el funcionamiento –acompañados de controles adecuados– pueden ser una
técnica muy útil de gestión siempre que los objetivos de rendimiento sean realistas.
Fijar objetivos de este tipo constituye una buena práctica de motivación, que reduce
tensiones contraproducentes y el interés por presentar información fraudulenta. De
forma similar, un sistema bien controlado de información puede servir de protección
contra la tentación de presentar erróneamente los datos de la entidad.
Otra causa de prácticas cuestionables es la ignorancia. Los valores éticos no sólo
deben ser comunicados, sino también acompañados por una orientación explícita de lo
que está bien y mal. Los códigos formales de conducta corporativa son importantes y
sirven de base para un programa eficaz de ética. Los códigos tratan una variedad de
temas de conducta, tales como integridad y ética, conflictos de interés, pagos ilegales
o inadecuados y acuerdos contra la libre competencia. También son importantes los
canales ascendentes de comunicación, para que los empleados se sientan cómodos
aportando información relevante.
La existencia de un código escrito de conducta, de documentación donde conste que
los empleados lo han recibido y entendido y un adecuado canal de comunicaciones no
aseguran por sí mismos que el código se esté cumpliendo. También son importantes
para su cumplimiento las sanciones resultantes para los empleados que lo violen, los
mecanismos que animen al personal a denunciar presuntas violaciones y las acciones
disciplinarias contra empleados que conscientemente no denuncien las infracciones.
Sin embargo, el cumplimiento de las normas éticas, formalizadas o no en un código
escrito, está igualmente, si no más, asegurado eficazmente por las acciones de la alta
dirección y su ejemplo. Es probable que los empleados desarrollen las mismas actitu-
des hacia lo correcto e incorrecto -y acerca de los riesgos y controles- que las exhibi-
das por la alta dirección. Los mensajes transmitidos por las acciones de la dirección se
incorporan rápidamente a la cultura corporativa. El conocimiento de que el consejero
delegado ha “hecho lo correcto” éticamente cuando se ha enfrentado a una decisión
empresarial ardua, difunde un mensaje poderoso por toda la entidad.

Compromiso con la Competencia

La competencia refleja los conocimientos y habilidades necesarios para realizar el


cometido asignado. La dirección decide el nivel de realización de los cometidos, sope-
sando la estrategia y objetivos de la entidad respecto a sus planes de implantación y
realización. Existe a menudo un conflicto entre competencia y coste –no es necesario,
por ejemplo, contratar a un ingeniero eléctrico para cambiar una bombilla.

43
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 44

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

La dirección establece los niveles de competencia para trabajos concretos y los trans-
forma en conocimientos y habilidades requeridos. A su vez, éstos pueden depender de
la inteligencia, formación y experiencia del individuo. Los factores a tener en cuenta en
el desarrollo de niveles de conocimiento y habilidad incluyen la naturaleza y grado del
juicio a aplicar en un trabajo concreto. A menudo, existe un conflicto entre el grado de
supervisión y el nivel de competencia requerido del individuo.

Estructura Organizativa

La estructura organizativa de una entidad proporciona el marco para planificar, ejecu-


tar, controlar y supervisar sus actividades. Una estructura organizativa relevante inclu-
ye la definición de áreas claves de autoridad y responsabilidad y el establecimiento de
líneas adecuadas de información. Por ejemplo, una función de auditoría interna debe-
ría estructurarse de manera que alcance objetividad organizativa y que se permita su
acceso ilimitado a la alta dirección y al comité de auditoría del consejo, al mismo tiem-
po que su máximo responsable debe informar y reportar a un nivel de la organización
que permita que la auditoría interna cumpla con su cometido.
Una entidad desarrolla una estructura organizativa ajustada a sus necesidades. Algunas
son centralizadas y otras descentralizadas. Unas presentan relaciones directas de
dependencia, mientras otras tienen una organización del tipo matricial. Ciertas entida-
des están organizadas por sector de actividad o línea de producto, por ubicación geo-
gráfica, por un modo concreto de distribución o por una determinada red comercial.
Otras entidades, incluyendo muchos organismos gubernamentales, estatales o locales,
y entidades sin ánimo de lucro, están organizadas por funciones.
La adecuación de la estructura organizativa de una entidad depende en parte de su
dimensión y de la naturaleza de sus actividades. Una organización muy estructurada
con líneas formales de dependencia y responsabilidad puede resultar adecuada para
una entidad grande con muchas divisiones operativas, incluyendo las operaciones en
el extranjero. Sin embargo, en una empresa reducida, esta estructura podría impedir el
flujo necesario de información. Sea cual sea dicha estructura, una entidad debería orga-
nizarse para permitir una gestión eficaz de riesgos corporativos, desarrollar sus activi-
dades y alcanzar sus objetivos.

Asignación de Autoridad y Responsabilidad

La asignación de autoridad y responsabilidad implica el punto hasta el que los indivi-


duos y equipos están autorizados y animados a utilizar su iniciativa para tratar los
temas y resolver problemas, así como los límites de dicha autoridad. Incluye el esta-
blecimiento de relaciones de información y protocolos de autorización, además de polí-
ticas que describan las prácticas empresariales adecuadas, los conocimientos y expe-
riencia del personal clave y los recursos proporcionados para que lleven a cabo sus
cometidos.
Algunas entidades han descentralizado la toma de decisiones a niveles inferiores para
aproximar la toma de decisiones al personal de línea. Una empresa puede tomar esta
opción para estar más orientada al mercado o centrada en temas de calidad o, quizás,
para eliminar defectos, reducir la duración de los ciclos o aumentar la satisfacción del

44
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 45

AMBIENTE INTERNO

cliente. La alineación de la autoridad y la responsabilidad a menudo se efectúa para ani-


mar las iniciativas individuales dentro de límites. La delegación de autoridad significa
traspasar el control central de algunas decisiones de negocio hacia niveles inferiores –a
los individuos que están más cerca de las transacciones empresariales cotidianas. Esto
puede implicar la delegación de facultades para vender productos con descuento,
negociar contratos con proveedores, licencias o patentes a largo plazo y formar alian-
zas o joint ventures.
Un reto crítico será delegar sólo en la cuantía requerida para alcanzar objetivos, lo que
implica asegurar que la toma de decisiones se basa en prácticas sólidas de identifica-
ción y evaluación de riesgos, incluyendo su dimensionamiento y la relación entre pérdi-
das potenciales y ganancias posibles al determinar los riesgos aceptables y cómo ges-
tionarlos.
Otro reto será asegurarse de que todo el personal entiende los objetivos de la entidad.
Es esencial que los individuos conozcan cómo sus acciones se relacionan entre sí y
contribuyan a la consecución de objetivos.
Una mayor delegación a veces va intencionalmente acompañada o lleva como resulta-
do a una simplificación o “aplanamiento” de la estructura organizativa. Un cambio
estructural útil que fomente la creatividad, la toma de iniciativas y reduzca los tiempos
de respuesta, puede mejorar la competitividad y la satisfacción del cliente. Esta mayor
delegación de facultades puede acarrear como requisito implícito un mayor nivel de
competencia del empleado, además de un aumento de su responsabilidad. También
puede exigir procedimientos efectivos para que la dirección controle los resultados,
asegurándose de que las decisiones puedan anularse o aceptarse según el caso. En
combinación con mejores decisiones orientadas al mercado, delegar puede aumentar
el número de decisiones indeseadas o no anticipadas. Por ejemplo, si un director
comercial regional decide que su autoridad para vender con un descuento del 35%
sobre precio de catálogo le permite aplicar un descuento temporal del 45% a fin de
aumentar la cuota de mercado, la dirección posiblemente debiera conocerlo, para
poder anular o aceptar dicha decisión.
El ámbito interno se ve muy influenciado por el grado de responsabilidad reconocido
por los individuos, algo aplicable hasta al consejero delegado, quien, conjuntamente
con la supervisión del consejo de administración, es el máximo responsable de todas
las actividades de la entidad.
Los principios adicionales relativos a los papeles y responsabilidades de las partes inte-
grantes para una gestión eficaz de riesgos corporativos se establecen en el capítulo
Papeles y Responsabilidades.

Normas para Recursos Humanos

Las prácticas de recursos humanos relacionadas con la contratación, orientación, for-


mación, evaluación, tutoría, promoción, compensación y adopción de acciones reme-
diadoras transmiten mensajes a los empleados en relación con los niveles esperados
de integridad, conducta ética y competencia. Por ejemplo, las normas de contratación
de las personas más cualificadas, poniendo el énfasis en su historial académico, expe-
riencia laboral previa, logros anteriores y pruebas de su integridad y conducta ética,
muestran el compromiso de una entidad con las personas competentes y de confian-

45
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 46

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

za. Lo mismo se aplica cuando las prácticas de selección e incorporación de personal


incluyen entrevistas formales y unos cursos de formación sobre la historia, cultura y
estilo operativo de la entidad.
Las políticas de formación pueden potenciar los niveles esperados de rendimiento y
conducta mediante la comunicación de los papeles y responsabilidades futuras y la
inclusión de prácticas, tales como los talleres y seminarios de formación, estudio de
casos simulados y ejercicios de interpretación de papeles. Los traslados y ascensos
impulsados por evaluaciones periódicas del rendimiento muestran el compromiso de la
entidad con la promoción de sus empleados cualificados. Los programas competitivos
de compensación que incluyen incentivos sirven para motivar y potenciar el rendimien-
to destacable –aunque los sistemas de compensación deberán estar estructurados y
debidamente controlados, para evitar la indebida tentación de falsificar los resultados
comunicados. Las acciones disciplinarias transmiten el mensaje de que no serán tole-
radas las violaciones de la conducta esperada.
Es esencial que los empleados estén preparados para enfrentarse a nuevos retos a
medida que los temas y riesgos cambian en la entidad y se hacen más complejos
–impulsados en parte por tecnologías que cambian rápidamente y el aumento de la
competitividad. La educación y formación, basadas en cursos, autoestudio o enseñan-
za en el puesto de trabajo, deberían ayudar al personal a mantenerse a nivel con un
entorno en evolución y enfrentarse eficazmente a él. No es suficiente la contratación de
personas competentes a las que se les proporciona solo formación en el momento ini-
cial. El proceso formativo debe ser constante.

Implicaciones

Es difícil valorar en exceso la importancia del ambiente interno de una entidad y el


impacto –positivo o negativo- que pueda tener en los otros componentes de la gestión
de riesgos corporativos. El impacto de un ambiente interno ineficaz puede tener
amplias consecuencias, tales como pérdidas financieras, una imagen pública mancilla-
da o la quiebra.
Por ejemplo, se pensaba que cierta compañía de energía mantenía una eficaz gestión
de riesgos corporativos, ya que contaba con directivos muy cualificados y respetados,
un prestigioso consejo de administración, una estrategia innovadora, sistemas de infor-
mación y controles bien diseñados, amplios manuales de políticas sobre las funciones
de riesgo y control y detallados procedimientos integrales de conciliación y supervisión.
Sin embargo, su ambiente interno tenía un defecto significativo: La dirección participa-
ba en prácticas empresariales muy cuestionables y el consejo miraba para otro lado. Se
averiguó que la compañía había falseado sus resultados financieros y que sufría una
perdida de confianza de los accionistas, una crisis de liquidez y la destrucción de valor
de la entidad. Finalmente, dió lugar a una de las quiebras más sonadas de la historia.
La actitud e interés de la alta dirección por una gestión eficaz de riesgos corporativos
han de ser claros y definitivos y deben calar en la organización. No es suficiente con
decir las palabras adecuadas, pues una actitud de “haz como digo, pero no como
hago” sólo provocará un entorno ineficaz.

46
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 47

3. Establecimiento de objetivos

Resumen del capítulo: Los objetivos se fijan a escala estratégica, estable-


ciendo con ellos una base para los objetivos operativos, de información y de
cumplimiento. Cada entidad se enfrenta a una gama de riesgos procedentes
de fuentes externas e internas y una condición previa para la identificación
eficaz de eventos, la evaluación de sus riesgos y la respuesta a ellos es fijar
los objetivos, que tienen que estar alineados con el riesgo aceptado por la
entidad, que orienta a su vez los niveles de tolerancia al riesgo de la misma.

El establecimiento de objetivos es condición previa para la identificación de eventos,


la evaluación de riesgos y la respuestas a ellos. Tienen que existir primero los objeti-
vos para que la dirección pueda identificar y evaluar los riesgos que impidan su con-
secución y adoptar las medidas necesarias para gestionar éstos últimos.

47
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 48

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Objetivos Estratégicos

La misión de una entidad establece en amplios términos lo que se aspira a alcanzar.


Sea cual sea el término empleado, como “misión”, “visión” o “finalidad”, es impor-
tante que la dirección –con la supervisión del consejo– establezca expresamente la
razón de ser de la entidad en términos generales. A partir de esto, la dirección fija los
objetivos estratégicos, formula la estrategia y establece los correspondientes objeti-
vos operativos, de información y de cumplimiento para la organización. Aunque la
misión de una entidad y sus objetivos estratégicos sean generalmente estables, su
estrategia y muchos objetivos relacionados con ella son más dinámicos y se adecuan
mejor a las cambiantes condiciones internas y externas. A medida que éstas cam-
bian, la estrategia y los objetivos conexos deben volver a situarse en línea con los
objetivos estratégicos.
Estos objetivos estratégicos son de alto nivel, están alineados con la misión/visión de
la entidad y la dan su apoyo. Reflejan la opción que ha elegido la dirección en cuan-
to a cómo la entidad creará valor para sus grupos de interés.
Al considerar las posibles formas alternativas de alcanzar los objetivos estratégicos,
la dirección identifica los riesgos asociados a una gama amplia de elecciones estra-
tégicas y considera sus implicaciones. Se pueden aplicar diferentes técnicas de iden-
tificación y evaluación de los riesgos, que se expondrán en capítulos posteriores,
durante el proceso de establecimiento de la estrategia. De este modo, en la fijación
de estrategias y objetivos, se usan técnicas de gestión de riesgos corporativos.

Objetivos Relacionados

Constituye un factor crítico de éxito el establecimiento de objetivos adecuados que


apoyen a la estrategia seleccionada, correspondiente a todas las actividades de la
entidad, y estén en línea con ella. Al enfocar primero los objetivos estratégicos y la
estrategia, una entidad está en posición de desarrollar los objetivos globales, cuya
consecución creará y conservará el valor. Los objetivos al nivel de empresa están vin-
culados y se integran con otros objetivos más específicos, que repercuten en casca-
da en la organización hasta llegar a subobjetivos establecidos, por ejemplo, en las
diversas actividades de ventas, producción, ingeniería e infraestructura.
Al fijar sus objetivos a los niveles de entidad y actividades, la organización puede iden-
tificar los factores críticos de éxito, que han de funcionar bien si se quieren alcanzar los
objetivos. Estos factores críticos afectan a la entidad, a cada unidad de negocio, función
o departamento y a los individuos. Al fijar sus objetivos, la dirección puede identificar los
criterios de medida del rendimiento, con atención a los factores críticos de éxito.
Cuando los objetivos guardan conformidad con las prácticas y rendimientos anterio-
res, se conoce la conexión entre actividades. Sin embargo, cuando los objetivos se
desvían de estas prácticas anteriores de la entidad, la dirección debe reorientar las
conexiones o aceptar unos riegos mayores. En dichos casos, existe incluso una
mayor necesidad de que los objetivos o subobjetivos por unidad de negocio estén en
consonancia con la nueva orientación.
Los objetivos deben ser fácilmente entendibles y mensurables. La gestión de riesgos
corporativos exige que el personal a todos los niveles tenga un entendimiento nece-

48
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 49

ESTABLECIMIENTO DE OBJETIVOS

sario de los objetivos de la entidad, en cuanto se relacionan con el ámbito del indivi-
duo. Todos los empleados deben tener una comprensión mutua de lo que se ha de
lograr y de los medios para medir lo que se consiga.

Categorías de Objetivos Relacionados

A pesar de la diversidad de objetivos entre entidades, se pueden establecer algunas


categorías amplias:

• Objetivos operativos
Se corresponden con la eficacia y eficiencia de las operaciones de la entidad, inclu-
yendo los objetivos de rendimiento y rentabilidad y de salvaguarda de recursos fren-
te a pérdidas. Varían según las opciones de la dirección respecto a estructura y ren-
dimiento.
• Objetivos de información
Relativos a la fiabilidad de la información. Incluyen información interna y externa e
implican la financiera y no financiera.
• Objetivos de cumplimiento
Se refieren al cumplimiento de leyes y normas relevantes. Dependen de factores
externos y tienden a ser similares entre entidades, en algunos casos, y sectorial-
mente, en otros.
Ciertos objetivos dependen del tipo de negocio de la entidad. Algunas empresas, por
ejemplo, remiten información a agencias medioambientales y otras que cotizan en
bolsa la remiten a los reguladores de los mercados de valores. Estos requisitos exter-
nos se establecen por leyes o normas y se incluyen en las categorías de información
o cumplimiento o, como en estos ejemplos, en ambas.
Por contra, los objetivos operativos, así como los relativos a la información interna de
gestión, se basan más en las preferencias, juicios y estilo de la dirección. Varían
mucho entre entidades, simplemente porque personas capaces y honestas pueden
seleccionar objetivos diferentes. Respecto al desarrollo de productos, por ejemplo,
una entidad decide adaptarse inmediatamente a los cambios, otra prefiere hacerlo
con cierta rapidez y otra, incluso, con cierta lentitud. Estas opciones afectan a la
estructura, competencias, equipo humano y controles de la función de investigación
y desarrollo. Por tanto, no existe una fórmula óptima de establecimiento de objetivos
para todas las entidades.

Objetivos Operativos

Los objetivos operativos se refieren a la eficacia y eficiencia de las operaciones de la


entidad e incluyen otros subobjetivos orientados a mejorar ambas características
mediante la movilización de la empresa hacia sus metas finales.
Los objetivos operativos deben reflejar los entornos empresarial, sectorial y econó-
mico en los que actúa la entidad. Necesitan, por ejemplo, ser relevantes respecto a
las presiones competitivas hacia la calidad, una menor duración del ciclo de puesta

49
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 50

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

a disposición del producto en el mercado o hacia los cambios tecnológicos. La direc-


ción debe asegurar que los objetivos reflejan la realidad y las exigencias del merca-
do y que están expresados en términos que permitan conocer las principales medi-
das del rendimiento. Un conjunto claro de objetivos operativos, vinculados a subob-
jetivos, es esencial para el éxito. Los objetivos operativos proporcionan un punto de
focalización para orientar la asignación de recursos. Si los objetivos no son claros o
no están bien concebidos, dicha asignación puede resultar desenfocada.

Objetivos de Información

Una información fiable proporciona a la dirección datos seguros y completos, ade-


cuados para la finalidad pretendida, y la presta apoyo en su toma de decisiones y en
el seguimiento de las actividades y rendimientos de la entidad. Ejemplos de dicha
información son los resultados de las campañas de marketing, los informes de ven-
tas diarias, la calidad de producción y los resultados de encuestas sobre la satisfac-
ción de clientes y empleados. La información también está relacionada con los docu-
mentos preparados para su difusión externa, como es el caso de los estados finan-
cieros y sus notas de detalle, los comentarios y análisis de la dirección y los informes
presentados a entidades reguladoras.

Objetivos de Cumplimiento

Las entidades deben llevar a cabo sus actividades y a menudo acciones concretas
de acuerdo con las leyes y normas relevantes. Estos requisitos pueden referirse al
mercado, precios e impuestos, medioambiente, bienestar de los empleados y
comercio exterior. Las leyes y normas aplicables establecen pautas mínimas de
conducta, que la entidad integra en sus objetivos de cumplimiento. Por ejemplo, las
normas sobre higiene y salud laboral hacen que una empresa defina uno de sus
objetivos como “Empaquetar y etiquetar todas los productos químicos según
normativa”. En este caso, las políticas y procedimientos se dirigen a los programas
de comunicación, inspecciones in situ y formación. El historial del cumplimiento de
una entidad puede afectar de modo significativo –positiva o negativamente– a su
reputación en la comunidad y el mercado.

Subcategorías

Las categorías de objetivos forman parte del lenguaje común establecido por este
Marco y facilitan la comprensión y la comunicación. Una entidad puede, sin embar-
go, encontrar útil plantear un subconjunto de una o más de estas categorías, para
facilitar la comunicación interna y externa sobre un tema más específico. Una empre-
sa podría optar por comunicar la eficacia de una parte de la categoría de información,
por ejemplo la gestión de riesgos corporativos en la información externa o quizás sólo
en la información externa de índole financiera. Actuando así, permite que la comuni-
cación se mantenga dentro del contexto del presente Marco para dicha gestión y, a
su vez, permite las comunicaciones sobre determinados subconjuntos de categorías.

50
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 51

ESTABLECIMIENTO DE OBJETIVOS

Sobreposición de Objetivos

Un objetivo de una categoría puede reforzar a otro objetivo de otra o solaparse con
él. La categoría en que incide un objetivo depende a veces de las circunstancias. Por
ejemplo, proporcionar información fiable a la dirección de una unidad de negocio
para que gestione y controle sus actividades de producción, puede servir para alcan-
zar objetivos operativos y de información. Incluso, si esta información sirve para
comunicar datos medioambientales a la Administración, también se están alcanzan-
do objetivos de cumplimiento.
Algunas entidades usan otra categoría de objetivos, la “salvaguarda de recursos”, a
veces denominada “salvaguarda de activos”, que se solapa con las otras categorías
de objetivos. Vista con amplitud, la salvaguarda de activos trata de prevenir la pérdi-
da de activos o recursos de una entidad por robo, despilfarro, ineficiencia o lo que
resulta ser simplemente malas decisiones empresariales - como la venta de produc-
tos a un precio demasiado bajo, la ausencia de retención de empleados claves, no
haber prevenido la violación de patentes o incurrir en pasivos no previstos. Son prin-
cipalmente objetivos operativos, aunque algunos aspectos de la salvaguarda de acti-
vos pueden incluirse en otras categorías. Sin embargo, cuando se aplican requisitos
legales o de normas, se convierten en objetivos de cumplimiento. Por otro lado, el
reflejo adecuado de las pérdidas de activos en los estados financieros de la entidad
representa un objetivo de información.
Considerada conjuntamente con la información pública, se usa a menudo una defini-
ción más estrecha de la salvaguarda de activos, que trata de la oportuna prevención
o detección de la adquisición, uso o disposición no autorizada de los activos de una
entidad. Para más información sobre esta categoría de objetivos, hay que referirse al
documento Control Interno – Marco Integrado, que incluye el módulo Addenda a la
información para terceros.

Consecución de Objetivos

Un proceso adecuado para establecer objetivos es un componente crítico de la ges-


tión de riesgos corporativos. Aunque los objetivos proporcionan metas mensurables
a las que se encamina la entidad cuando realiza sus actividades, existen en ellos dife-
rentes grados de importancia y prioridad. Por tanto, aunque una entidad deba tener
seguridad razonable de que ciertos objetivos se están alcanzando, puede que éste
no sea el caso para todos ellos.
Una gestión eficaz de riesgos corporativos proporciona seguridad razonable de que
los objetivos de información de una entidad se están cumpliendo. De forma similar,
también debería existir seguridad razonable de que los objetivos de cumplimiento se
están alcanzando. La consecución de ambos tipos de objetivos está ampliamente
bajo el control de la entidad. O sea, una vez definidos los objetivos, la entidad tiene
el control sobre su capacidad de hacer lo que haga falta para lograrlos.
Sin embargo, existe una diferencia entre los objetivos estratégicos y operativos, por-
que su consecución no está exclusivamente bajo el control de la entidad. Una empre-
sa puede actuar tal como está previsto, pero es posible que un competidor le lleve
ventaja. Está sujeta a eventos externos –como un cambio de gobierno, mal tiempo u

51
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 52

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

otros– cuya existencia no esté bajo su control. Incluso, es posible que la entidad haya
contemplado alguno de dichos eventos en el proceso de fijación de objetivos, tra-
tándolos como si su probabilidad fuera remota y elaborando un plan de contingencia
para el caso en que tuviesen lugar. Sin embargo, tal plan sólo mitiga el impacto de los
eventos externos y no asegura que los objetivos se vayan a alcanzar.
La gestión de riesgos corporativos sobre las operaciones se centra principalmente en
el desarrollo de una coherencia de objetivos y metas en toda la organización, en la
identificación de factores de éxito y riesgos claves, en la evaluación de riesgos y la
formulación de respuestas acertadas, en las respuestas adecuadas a los riesgos, en
el establecimiento de los controles necesarios y en la información oportuna del fun-
cionamiento y expectativas. En cuanto a los objetivos estratégicos y operativos, la
gestión de riesgos corporativos puede proporcionar seguridad razonable de que la
dirección y el consejo, en su papel de supervisión, estén informados oportunamente
del progreso de la entidad en su camino hacia el logro de dichos objetivos.

Objetivos Seleccionados

Como parte de la gestión de riesgos corporativos, la dirección no sólo elige los obje-
tivos y considera cómo apoyan la misión de la entidad, sino que también asegura que
estén alineados con el riesgo aceptado por la entidad. Un error en dicha alineación
podría dar como resultado una aceptación insuficiente del riesgo existente en el logro
de objetivos o, por el contrario, una aceptación de un riesgo excesivo. Una gestión
eficaz de riesgos corporativos no dicta los objetivos que la dirección debe elegir, pero
le proporciona un proceso para alinear los objetivos estratégicos con la misión de la
entidad y asegurar que éstos, junto con sus correspondientes objetivos conexos,
concuerdan con el riesgo aceptado por la entidad.

Riesgo Aceptado

El riesgo aceptado, establecido por la dirección bajo control del consejo de adminis-
tración, es una orientación para establecer los objetivos. Las empresas pueden
expresar su riesgo aceptado como un equilibrio adecuado entre crecimiento, riesgo
y rendimiento o como unas medidas de adición de valor para el accionista, ajustadas
a su propio nivel de riesgo. Algunas entidades, como son las organizaciones sin
ánimo de lucro, expresan su riesgo aceptado como el nivel de riesgo que aceptarían
a cambio de crear valor para sus grupos de interés.
Existe una relación entre el riesgo aceptado de una entidad y su estrategia.
Normalmente se pueden diseñar muchas estrategias diferentes para conseguir los
objetivos deseados de crecimiento y rendimiento, cada uno con riesgos diferentes.
La gestión de riesgos corporativos, aplicada al establecimiento de la estrategia,
ayuda a la dirección a seleccionar una estrategia consecuente con su riesgo acepta-
do. Si el riesgo asociado a la estrategia no está alineado con el riesgo aceptado por
la entidad, se revisa la estrategia, lo que puede ocurrir cuando la dirección formule
inicialmente una estrategia que exceda del riesgo aceptado por la entidad o cuando
dicha estrategia no contemple riesgo suficiente para permitir que la entidad alcance
sus objetivos estratégicos y su misión.

52
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 53

ESTABLECIMIENTO DE OBJETIVOS

El riesgo aceptado se ve reflejado en la estrategia de la entidad, que, a su vez orien-


ta la asignación de recursos. La dirección distribuye los recursos entre las unidades
de negocio teniendo en cuenta el riesgo aceptado por la entidad y los planes estra-
tégicos de cada unidad de negocio, para así generar el rendimiento deseado sobre
los recursos invertidos. La dirección busca alinear la organización, el personal, los
procesos y la infraestructura para facilitar la implantación de la estrategia con éxito y
capacitar a la entidad a mantenerse dentro de los límites de su riesgo aceptado.

Tolerancias al Riesgo

Las tolerancias al riesgo son los niveles aceptables de desviación relativa a la conse-
cución de objetivos. Pueden medirse, y a menudo resulta mejor, con las mismas uni-
dades que los objetivos correspondientes.
Las medidas de rendimiento se usan para ayudar a asegurar que los resultados rea-
les se ciñen a las tolerancias al riesgo establecidas. Por ejemplo, una empresa fija un
objetivo del 98% de puntualidad para sus entregas, con una desviación aceptable
entre el 97% y el 100%; fija como objetivo de formación una nota de aprobado del
90%, con un rendimiento aceptable mínimo del 75%; y espera que el personal res-
ponda a todas las reclamaciones de los clientes en un plazo de 24 horas, aunque
acepta que hasta un 25% de ellas se atiendan entre 24 y 36 horas.
Al fijar las tolerancias al riesgo, la dirección tiene en cuenta la importancia relativa de
los objetivos correspondientes y alinea aquellas con el riesgo aceptado. Operar den-
tro de las tolerancias al riesgo proporciona a la dirección una mayor confianza en que
la entidad permanece dentro de su riesgo aceptado, que, a su vez, proporciona una
seguridad más elevada de que la entidad alcanzará sus objetivos.

53
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 54
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 55

4. Identificación de eventos

Resumen del capítulo: La dirección identifica los eventos potenciales que,


de ocurrir, afectarán a la entidad y determina si representan oportunidades o
si pueden afectar negativamente a la capacidad de la empresa para implantar
la estrategia y lograr los objetivos con éxito. Los eventos con impacto negati-
vo representan riesgos, que exigen la evaluación y respuesta de la dirección.
Los eventos con impacto positivo representan oportunidades, que la direc-
ción reconduce hacia la estrategia y el proceso de fijación de objetivos.
Cuando identifica los eventos, la dirección contempla una serie de factores
internos y externos que pueden dar lugar a riesgos y oportunidades, en el
contexto del ámbito global de la organización.

Eventos

Un evento es un incidente o acontecimiento, derivado de fuentes internas o externas,


que afecta a la implantación de la estrategia o la consecución de objetivos. Los even-
tos pueden tener un impacto positivo, negativo o de ambos tipos a la vez.

55
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 56

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Al identificar eventos, la dirección reconoce que existen incertidumbres, por lo que no


sabe si alguno en particular tendrá lugar y, de tenerlo, cuándo será, ni su impacto exac-
to. La dirección considera inicialmente una gama de eventos potenciales, derivados de
fuentes internas o externas, sin tener que centrarse necesariamente sobre si su impac-
to es positivo o negativo. De esta forma, la dirección identifica no sólo los eventos poten-
ciales negativos, sino también aquellos que representan oportunidades a aprovechar.
Los eventos abarcan desde lo evidente a lo desconocido y sus efectos, desde lo
inconsecuente a lo muy significativo. Para evitar una consideración excesiva de even-
tos relevantes, procede realizar de forma separada su identificación y la evaluación
de su probabilidad de ocurrencia e impacto, aspecto este último que corresponde a
la Evaluación de Riesgos. Sin embargo, existen limitaciones prácticas y a menudo es
difícil saber distinguirlas. Pero incluso los eventos con una probabilidad de ocurren-
cia relativamente baja no deberían ignorarse si es grande su impacto sobre la conse-
cución de un objetivo importante.

Factores Influyentes

Son muchos los factores externos e internos que provocan eventos que afectan a la
implantación de la estrategia y la consecución de objetivos. Como parte de la gestión
de riesgos corporativos, la dirección reconoce la importancia de entender dichos fac-
tores y el tipo de evento que puede derivarse de ellos. Los factores externos, junto
con ejemplos de eventos relacionados y sus implicaciones, incluyen los siguientes:
• Económicos
Eventos tales como los cambios de precios, la disponibilidad de capital o unas
menores barreras a la entrada de la competencia, que generan mayores o menores
costes de capital y competidores nuevos.
• Medioambientales
Incluyen las inundaciones, incendios y terremotos, que provocan daños a las insta-
laciones o edificios, un acceso restringido a las materias primas o la pérdida de
capital humano.
• Políticos
Incluyen la elección de gobiernos con nuevos programas políticos, leyes y normas,
que provocan, por ejemplo, nuevas restricciones o aperturas en el acceso a merca-
dos extranjeros o impuestos mayores o menores.
• Sociales
Relacionados con los cambios demográficos, costumbres sociales, estructuras
familiares, prioridades trabajo/ocio y actividades terroristas, que tienen como resul-
tado cambios en la demanda de productos y servicios, nuevos puntos de venta,
aspectos relacionados con recursos humanos y paros en la producción.
• Tecnológicos
Relativos a los nuevos medios de comercio electrónico, que generan una mayor dis-
ponibilidad de datos, reducciones de costes de infraestructura y un mayor aumen-
to en la demanda de servicios basados en la tecnología.
Los eventos también se derivan de las decisiones de la dirección respecto a cómo se
producirán. La aptitud y capacidad de una entidad para reflejar las decisiones previas

56
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 57

IDENTIFICACIÓN DE EVENTOS

influye en los acontecimientos futuros y afecta a las decisiones de la dirección. Los


factores internos, junto con ejemplos de eventos relacionados y sus implicaciones,
incluyen los siguientes:
• Infraestructura
Eventos como el incremento de asignación de capital para mantenimiento preven-
tivo y el apoyo a los centros de atención a clientes reducen el tiempo de inactividad
del equipo y se mejora la satisfacción del cliente.
• Personal
Eventos como los accidentes laborales, las actividades fraudulentas y el venci-
miento de convenios colectivos, causan pérdidas de personal disponible o moneta-
rias, daños de imagen y paros en la producción.
• Procesos
Eventos como la modificación de procesos sin adecuados protocolos para la ges-
tión de los cambios, los errores en su ejecución y la externalización de entregas al
cliente con un control insuficiente, provocan pérdidas de cuota de mercado, inefi-
ciencias e insatisfacción y pérdidas de clientes.
• Tecnología
Eventos como el aumento de recursos para gestionar la volatilidad de volumen, los
fallos de seguridad y la potencial caída de los sistemas dan lugar a atrasos en la
producción, transacciones fraudulentas e incapacidad para continuar las operacio-
nes del negocio.
La identificación de factores internos y externos que impactan en los eventos es útil,
a su vez, para identificar a estos últimos. Una vez que se han identificado los princi-
pales factores contribuyentes, la dirección puede considerar su relevancia y centrar-
se en los eventos que puedan afectar al logro de objetivos.
Un fabricante e importador de calzado, por ejemplo, estableció una visión de ser líder
del sector del calzado masculino de alta calidad. Para conseguirla, procedió a fabricar
productos que combinaban estilo, confort y durabilidad, usando técnicas avanzadas y
proveedores muy selectos. La empresa revisó su entorno operativo externo e identifi-
có factores sociales y eventos, tales como la edad cambiante de sus consumidores
potenciales o las tendencias cambiantes del vestir para el trabajo. Eventos relaciona-
dos con factores económicos eran las fluctuaciones en los tipos de cambio e interés.
Los factores internos tecnológicos indicaban un sistema desfasado de gestión de la
distribución y los factores de personal, una inadecuada formación en marketing.
Además de identificar los eventos al nivel de entidad, también deben identificarse al
nivel de actividad, lo que ayuda a centrar la evaluación de riesgos (el tema del capí-
tulo siguiente) sobre las principales unidades de negocio o funciones, tales como
ventas, producción, marketing, avances tecnológicos e investigación y desarrollo.

Técnicas de Identificación de Eventos

La metodología de identificación de eventos de una entidad puede comprender una


combinación de técnicas, junto con herramientas de apoyo. Por ejemplo, la dirección
puede usar talleres interactivos de trabajo como parte de dicha metodología, con un
monitor que emplee alguna herramienta tecnológica para ayudar a los participantes.

57
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 58

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Las técnicas de identificación de eventos se aplican tanto al pasado como al futuro.


Aquellas centradas en eventos y tendencias pasadas consideran temas tales como
historiales de impagos, cambios en los precios de los bienes y accidentes que pro-
vocan pérdidas de tiempo. Las técnicas que se centran en los riesgos futuros consi-
deran temas tales como cambios demográficos, nuevas condiciones de mercado y
acciones de los competidores.
Las técnicas varían ampliamente en su nivel de sofisticación. Aunque muchas de las
más sofisticadas corresponden a sectores específicos, la mayoría se derivan de un
enfoque común. Por ejemplo, tanto los servicios financieros como los del sector de
la seguridad e higiene utilizan técnicas de rastreo e identificación de eventos que
generen pérdidas. Estas técnicas empiezan con un enfoque sobre los eventos histó-
ricos comunes –los enfoques más básicos estudian acontecimientos derivados de
percepciones del personal, mientras que las técnicas más avanzadas se basan en
fuentes reales de eventos observables– y luego, se introducen los datos en modelos
de previsión más sofisticados. Las empresas más avanzadas en la gestión de riesgos
corporativos normalmente aplican una combinación de técnicas que contemplan a la
vez eventos pasados y futuros potenciales.
Las técnicas también varían según dónde se estén aplicando dentro de una entidad.
Algunas se centran en el análisis detallado de datos y crean una perspectiva ascen-
dente de eventos, mientras que otras lo enfocan al contrario. La figura 4.1 proporcio-
na ejemplos de las técnicas de identificación de eventos.

• Inventarios de eventos
Son relaciones detalladas de acontecimientos potenciales comunes a empresas de un sector deter-
minado o a un proceso o actividad específica que se da en diversos sectores. Las aplicaciones de
software pueden generar relaciones relevantes de eventos genéricos potenciales, que algunas enti-
dades usan como punto de partida para la identificación de eventos. Por ejemplo, una empresa que
esté acometiendo un proyecto de desarrollo de software elaborará un inventario que describa even-
tos genéricos relativos a este tipo de proyecto.
• Análisis interno
Puede llevarse a cabo como parte de un proceso rutinario del ciclo de planificación empresarial,
normalmente mediante reuniones del personal de la unidad de negocio. El análisis interno utiliza a
veces la información procedente de grupos de interés de dicha unidad (clientes, proveedores y otras
unidades de negocio) o de expertos en el tema ajenos a ella (expertos funcionales internos o exter-
nos o la auditoría interna). Por ejemplo, una empresa que esté considerando introducir un nuevo
producto, usa su propia experiencia histórica, junto con investigación externa de mercado que iden-
tifique eventos que hayan afectado al éxito de productos de los competidores.
• Dispositivos de escala o umbral
Estos dispositivos alertan a la dirección respecto a áreas con problemas comparando transaccio-
nes o eventos actuales con criterios predefinidos. Una vez que suena la alarma, es posible que un
evento exija una evaluación ulterior o una respuesta inmediata. Por ejemplo, la dirección de una
empresa hace un seguimiento del volumen de ventas en mercados seleccionados con vista a nue-
vos programas de marketing o publicidad y reorienta los recursos según los resultados. La direc-
ción de otra empresa sigue las estructuras de precios de los competidores y contempla cambios en
sus propios precios cuando se franquea un determinado umbral.
• Talleres de trabajo y entrevistas
Estas técnicas identifican los eventos aprovechando el conocimiento y la experiencia acumulada de
la dirección, el personal y los grupos de interés, a través de discusiones estructuradas. Un monitor
lidera y facilita la discusión sobre los eventos que pueden afectar a la consecución de objetivos de

58
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 59

IDENTIFICACIÓN DE EVENTOS

la entidad o alguna de sus unidades. Por ejemplo, un controller financiero dirige un taller de traba-
jo con miembros del equipo contable, para identificar eventos que puedan afectar a los objetivos de
información financiera externa. Al combinar los conocimientos y la experiencia de los miembros del
equipo, se identifican eventos importantes que de otro modo podrían haberse olvidado.
• Análisis del flujo del proceso
Esta técnica considera la combinación de inputs, tareas, responsabilidades y outputs de un proce-
so. Al considerar los factores internos y externos que afectan en cierto proceso a los inputs de las
actividades o a estas mismas, una entidad identifica los eventos que podrían afectar a la consecu-
ción de los objetivos. Por ejemplo, un laboratorio médico elabora mapas de los procesos de recep-
ción y análisis de muestras de sangre. Utilizándolos, se considera la gama de factores que podrían
afectar a los elementos del proceso citados anteriormente, identificando así riesgos relativos al eti-
quetado de muestras, transferencias en el proceso y cambios de turno del personal.
• Indicadores de eventos importantes
Supervisando datos correlacionados con los eventos, las entidades identifican la existencia de con-
diciones que podrían dar lugar a un acontecimiento. Por ejemplo, las instituciones financieras reco-
nocen desde hace mucho tiempo la correlación entre la demora en el pago de préstamos y su even-
tual impago futuro, así como el efecto positivo de una intervención anticipada. Por ello, el control
de las pautas de pago permite mitigar el impago mediante acciones oportunas anticipadas.
• Metodologías para datos de eventos con pérdidas
Los archivos de datos sobre eventos individuales con pérdidas en el pasado son una fuente útil de
información para identificar las tendencias y causas principales. Una vez que se identifica una de
éstas, la dirección puede averiguar qué es más efectivo, si evaluarla y tratarla o afrontar los even-
tos individuales. Por ejemplo, una empresa que explota una gran flota de coches mantiene una base
de datos de las reclamaciones por accidentes y, mediante su análisis, averigua que un porcentaje
desproporcionado de ellos, tanto en número como en importe, se vincula a conductores del equipo
en ciertas unidades, localizaciones geográficas y franjas de edad. Este análisis capacita a la direc-
ción para identificar las causas principales de los eventos y tomar acciones.

Figura 4.1

La profundidad, amplitud, calendario y disciplina en la identificación de eventos varí-


an según entidades. La dirección selecciona técnicas que encajan con su filosofía de
gestión de riesgos y asegura que la entidad desarrolla las capacidades necesarias de
identificación de eventos y que están operativas las herramientas de apoyo. Por enci-
ma de todo, la identificación de eventos necesita ser potente y fiable, ya que forma
la base de los componentes de la evaluación de riesgos y de la respuesta a ellos.

Interdependencias

Frecuentemente, los eventos no ocurren de forma aislada. Un acontecimiento puede


hacer que se desencadene otro, por lo que pueden ocurrir de forma concurrente. En
la identificación de eventos, la dirección debería entender cómo éstos se relacionan
entre sí. Evaluando estas relaciones, se puede determinar dónde mejor deberían apli-
carse los esfuerzos en la gestión de riesgos. Por ejemplo, un cambio en el tipo de
interés de un banco central afecta a los tipos de cambio de moneda extranjera, rele-
vantes para las ganancias y pérdidas en las transacciones de una entidad. Una deci-
sión para reducir la inversión en capital pospone una actualización de los sistemas de
gestión de distribución, provocando más tiempo de inactividad y un aumento de cos-

59
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 60

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

tes operativos. Una decisión para ampliar la formación en marketing puede mejorar
las capacidades de venta y la calidad de servicio, lo que dará lugar a un aumento de
la frecuencia y volumen de los pedidos recurrentes de clientes. Una decisión para
entrar en una nueva línea de negocio, con incentivos importantes vinculados al ren-
dimiento, puede incrementar los riesgos de error en la aplicación de principios con-
tables y de que se genere una información fraudulenta.

Categorías de Eventos

Puede ser útil agrupar los eventos potenciales en categorías. Al agregarlos horizon-
talmente en toda la entidad y verticalmente dentro de las unidades operativas, la
dirección desarrolla un entendimiento de las relaciones entre eventos, obteniendo
una mejor información como base para la evaluación los riesgos. Mediante esta agre-
gación de eventos similares, la dirección puede determinar mejor las oportunidades
y riesgos.
La clasificación de eventos por categorías también permite a la dirección considerar
la totalidad de los esfuerzos aplicados a su identificación. Por ejemplo, una empresa
puede haber clasificado los eventos relacionados con los cobros de deudores en una
única categoría denominada impago de deudores. Si la dirección estudia los eventos
relacionados con esta categoría, puede evaluar si se han identificado todos los posi-
bles eventos significativos relacionados con dicho impago.
Algunas empresas desarrollan categorías de eventos basadas en la clasificación de
sus objetivos por categorías, usando una jerarquía que empieza con los objetivos de
alto nivel y luego, en cascada hasta los objetivos relevantes para las unidades orga-
nizativas, funciones o procesos de negocio.
La figura 4.2 ilustra un enfoque usado para establecer las categorías de eventos den-
tro de un contexto de amplios factores internos y externos.

60
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 61

IDENTIFICACIÓN DE EVENTOS

Categorías de eventos
Factores externos Factores internos

Económicos Infraestructura
• Disponibilidad del capital • Disponibilidad de activos
• Emisión de deuda, impago • Capacidad de los activos
• Concentración • Acceso al capital
• Liquidez • Complejidad
• Mercados financieros
• Desempleo
• Competecia
• Fusiones/Adquisiciones

Medioambientales Personal
• Emisiones y residuos • Capacidad del personal
• Energía • Actividad fraudulenta
• Catástrofes naturales • Seguridad e higiene
• Desarrollo sostenible

Políticos Procesos
• Cambios de gobierno • Capacidad
• Legislación • Diseño
• Políticas públicas • Ejecución
• Regulación • Proveedores/Subordinados

Sociales Tecnología
• Demografía • Integridad de datos
• Comportamiento del consumidor • Disponibilidad de datos y sistemas
• Responsabilidad social corporativa • Selección de sistemas
• Privacidad • Desarrollo
• Terrorismo • Despliegue
• Mantenimiento

Tecnológicos
• Interrupciones
• Comercio electrónico
• Datos externos
• Tecnología emergente

Figura 4.2

Distinción entre Riesgos y Oportunidades

Los eventos, si ocurren, tienen un impacto negativo, positivo o de ambos tipos a la


vez. Los de signo negativo representan riesgos, que requieren la evaluación y res-
puesta de la dirección. Por tanto, un riesgo es la posibilidad de que ocurra un even-
to que afecte de modo adverso a la consecución de objetivos.
Los eventos de signo positivo representan oportunidades, que compensan los impac-
tos negativos de los riesgos. Una oportunidad es la posibilidad de que ocurra un

61
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 62

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

evento que afecte positivamente a la consecución de objetivos y la creación de valor.


Los eventos que implican oportunidades son canalizados hacia los procesos de la
dirección en que se establecen la estrategia y objetivos de la entidad, de forma que
puedan formularse acciones para aprovechar las oportunidades. Los eventos que
compensen el impacto negativo de los riesgos deben tenerse en cuenta por parte de
la dirección al evaluar los riesgos y darles respuesta.

62
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 63

5. Evaluación de riesgos

Resumen del capítulo: La evaluación de riesgos permite a una entidad con-


siderar la amplitud con que los eventos potenciales impactan en la consecu-
ción de objetivos. La dirección evalúa estos acontecimientos desde una doble
perspectiva – probabilidad e impacto- y normalmente usa una combinación
de métodos cualitativos y cuantitativos. Los impactos positivos y negativos de
los eventos potenciales deben examinarse, individualmente o por categoría,
en toda la entidad. Los riesgos se evalúan con un doble enfoque: riesgo inhe-
rente y riesgo residual.

Contexto de la Evaluación de Riesgos

Los factores externos e internos determinan qué eventos pueden ocurrir y hasta qué
punto afectarán a los objetivos de una entidad. Aunque algunos factores son comu-
nes a empresas de un mismo sector, los eventos resultantes son a menudo únicos

63
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 64

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

para una entidad determinada, debido a sus objetivos establecidos y sus decisiones
anteriores. En la gestión de riesgos, la dirección tiene en cuenta la mezcla de poten-
ciales eventos futuros relevantes para la entidad y sus actividades, dentro del con-
texto de los aspectos que conforman el perfil de riesgo de la entidad, como son su
dimensión, la complejidad de sus operaciones y el grado de regulación de sus activi-
dades.
Al evaluar los riesgos, la dirección considera los eventos esperados e inesperados.
Muchos de éstos son rutinarios y recurrentes y ya se contemplan en los programas
de gestión y presupuestos operativos, pero otros son inesperados. La dirección eva-
lúa el riesgo de los eventos potenciales inesperados y, si todavía no lo ha hecho, los
eventos esperados que puedan tener un impacto significativo en la entidad.
Aunque el término “evaluación de riesgos” se aplica a veces en relación con una acti-
vidad puntual, en el contexto de la gestión de riesgos corporativos su componente
con esa misma denominación constituye una continua e iterativa interacción de
acciones que tienen lugar a través de la entidad.

Riesgo Inherente y Riesgo Residual

La dirección considera a la vez ambos conceptos de riesgo. El riesgo inherente es


aquél al que se enfrenta una entidad en ausencia de acciones de la dirección para
modificar su probabilidad o impacto. El riesgo residual es el que permanece después
de que la dirección desarrolle sus respuestas a los riesgos.

Estimación de Probabilidad e Impacto

La incertidumbre de los eventos potenciales se evalúa desde dos perspectivas – pro-


babilidad e impacto. La primera representa la posibilidad de que ocurra un evento
determinado, mientras que la segunda refleja su efecto. Ambos términos se aplican
de forma común, aunque algunas entidades usen otros, tales como frecuencia, seve-
ridad, seriedad o consecuencia. A veces, las palabras adquieren connotaciones más
especificas y el concepto “probabilidad” puede indicar tanto la posibilidad de que
ocurra cierto evento en términos cualitativos como alta, media y baja o derivados de
otras escalas de medida o bien en términos cuantitativos como porcentaje, frecuen-
cia y ocurrencia o derivados de otras métricas numéricas.
Es una tarea difícil y llena de retos la determinación de cuánta atención hay que pres-
tar a la evaluación de la gama de riesgos a los que se enfrenta una entidad. Su direc-
ción reconoce que generalmente no merece ulterior consideración un riesgo con
poca probabilidad de ocurrencia y escaso impacto potencial. Por otro lado, exige una
atención considerable un riesgo con alta probabilidad de ocurrencia y significativo
impacto potencial. Las circunstancias entre ambos extremos normalmente requieren
juicios difíciles. Es importante que el análisis sea racional y cuidadoso.
El horizonte temporal usado para evaluar los riesgos debería ser consecuente con el
horizonte temporal de la estrategia y objetivos correspondientes. Como estos dos
conceptos apuntan en muchas entidades a horizontes de tiempo entre el corto y
medio plazo, la dirección se centra naturalmente en los riesgos asociados con estos

64
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 65

EVALUACIÓN DE RIESGOS

plazos de tiempo. Sin embargo, algunos aspectos de la orientación y objetivos estra-


tégicos se extienden hasta el largo plazo. Como resultado, la dirección necesita ser
consciente de los marcos temporales más dilatados y no obviar los riesgos que
pueda deparar un futuro distante.
Por ejemplo, una empresa que opera en California puede tener en cuenta el riesgo de
interrupción de sus operaciones a causa de un terremoto. Sin un horizonte temporal
específico para la evaluación de riesgos, la probabilidad de que un terremoto supere
los seis grados en la escala de Richter es alta, quizá con una certeza virtual. Por otro
lado, la probabilidad de que un terremoto de tal intensidad suceda dentro de dos
años es sustancialmente menor. Al establecer un horizonte de tiempo, la entidad
entiende mejor la importancia relativa del riesgo y mejora su capacidad para compa-
rar riesgos múltiples.
La dirección usa a menudo medidas del funcionamiento para determinar el grado de
consecución de objetivos y normalmente aplica la misma unidad de medida, u otra
congruente con ella, que la utilizada para considerar el impacto potencial de un ries-
go sobre la consecución de un objetivo concreto. Una empresa, por ejemplo, que
tiene establecido el objetivo de mantener un nivel determinado de servicio al cliente,
habrá diseñado un coeficiente u otro tipo de medida para dicho objetivo –tales como
el índice de satisfacción del cliente, el número de reclamaciones o el volumen de
negocio recurrente. Cuando se evalúa el impacto de un riesgo que podría afectar al
servicio al cliente –tal como la posibilidad de que la web de la empresa pueda estar
no disponible durante un periodo de tiempo– se determina mejor el impacto usando
las mismas medidas.

Fuentes de Datos

A menudo, las estimaciones de la probabilidad del riesgo y su impacto se determinan


usando datos procedentes de eventos anteriores observables, que proporcionan una
base más objetiva que las estimaciones totalmente subjetivas. Los datos generados
internamente a partir de la experiencia propia de la entidad pueden reflejar un menor
sesgo subjetivo personal y proporcionan mejores resultados que los datos proceden-
tes de fuentes externas. Sin embargo, incluso cuando los datos generados interna-
mente sean un input primordial, los datos externos pueden resultar útiles como punto
de contraste o para mejorar el análisis. Por ejemplo, la dirección de una empresa que
evalúa el riesgo de paradas en la producción por fallos de los equipos, primero estu-
dia la frecuencia e impacto de fallos anteriores de su propio equipo productivo. A
continuación complementa dichos datos con datos comparativos del sector, lo que
permite una estimación más exacta de la probabilidad e impacto de los fallos, lo que
permite una programación más eficaz del mantenimiento preventivo. Se debe ser
cauto cuando se usan eventos pasados para establecer previsiones futuras, ya que
los factores que influyen en los eventos pueden cambiar con el tiempo.

Perspectivas

La dirección formula a menudo juicios subjetivos sobre la incertidumbre y, al hacer


esto, debe reconocer sus limitaciones inherentes. Los resultados de investigaciones

65
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 66

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

psicológicas indican que las personas que toman decisiones a varios niveles de
capacidad, incluyendo los directivos de empresa, tienen demasiada confianza en su
capacidad de estimación y no reconocen el volumen de incertidumbre que realmen-
te existe. Los estudios muestran un marcado sesgo de confianza excesiva, que lleva
a intervalos de confianza inadecuadamente estrechos respecto a las estimaciones o
probabilidades, tal como se aplican, por ejemplo, en las metodologías del valor en
riesgo. Esta inclinación hacia el exceso de confianza al estimar la incertidumbre
puede minimizarse mediante el uso eficaz de datos empíricos generados interna o
externamente. En ausencia de éstos, una aguda conciencia de la penetración de los
sesgos puede ayudar a mitigar los efectos de ese exceso de confianza.
Las tendencias humanas respecto a la toma de decisiones se muestran de otra
forma, pues no es infrecuente que las personas tomen diferentes opciones en bús-
queda de ganancias antes que en evitar pérdidas. Al reconocer estas tendencias, los
directivos pueden estructurar la información para reforzar el riesgo aceptado y el
comportamiento hacia el riesgo en toda la entidad. La manera de presentar la infor-
mación puede afectar de modo significativo a su interpretación y cómo se perciben
los riesgos y oportunidades asociados, tal como se expone en la Figura 5.1

Los individuos tienen reacciones diferentes ante pérdidas potenciales que frente a ganancias poten-
ciales. La manera de enmarcar un riesgo –enfocando hacia lo positivo (una ganancia potencial) o lo
negativo (una pérdida potencial)- influirá a menudo en la respuesta. La teoría de la prospección, que
explora la toma de decisiones del ser humano, dice que los individuos no son neutrales ante el riesgo
y de hecho, una respuesta a pérdidas tiende a ser más extrema que otra frente a ganancias. Y con
esto surge una inclinación hacia la mala interpretación de las probabilidades y las reacciones hacia la
mejor solución. A modo ilustrativo, un individuo se enfrenta a dos conjuntos de opciones:
1. Aceptar una ganancia segura de 240 u.m. o bien una posibilidad del 25% de ganar 1.000 u.m. más
la restante probabilidad del 75% de no ganar nada.
2. Aceptar una pérdida segura de 750 u.m. o bien una posibilidad del 75% de perder 1.000 u.m. más
la restante probabilidad del 25% de no perder nada.
En el primer conjunto de opciones, la mayoría de las personas selecciona una “ganancia segura de
240”, debido a la inclinación a evitar riesgos en las ganancias y a las preguntas planteadas de forma
positiva. En contraste, la mayoría de las personas selecciona una “posibilidad del 75% de perder
1.000”, debido a la inclinación a asumir riesgos en las pérdidas y a las preguntas planteadas de modo
negativo. La teoría de la prospectiva mantiene que las personas no quieren arriesgar lo que ya tienen
o piensan que pueden tener, pero tendrán mayores tolerancias al riesgo cuando crean que pueden
minimizar pérdidas.

Figura 5.1

Técnicas de Evaluación

La metodología de evaluación de riesgos de una entidad consiste en una combina-


ción de técnicas cualitativas y cuantitativas. La dirección aplica a menudo técnicas
cualitativas cuando los riesgos no se prestan a la cuantificación o cuando no están
disponibles datos suficientes y creíbles para una evaluación cuantitativa o la obten-
ción y análisis de ellos no resulte eficaz por su coste. Las técnicas cuantitativas típi-

66
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 67

EVALUACIÓN DE RIESGOS

camente aportan más precisión y se usan en actividades más complejas y sofistica-


das, para complementar las técnicas cualitativas.
Las técnicas cuantitativas de evaluación normalmente exigen un mayor grado de
esfuerzo y rigor y a veces emplean modelos matemáticos. Estas técnicas dependen
mucho de la calidad de los datos e hipótesis de soporte y resultan más relevantes
para riesgos con un historial y una frecuencia de variabilidad conocidos, pues permi-
ten una proyección fiable. La figura 5.2 proporciona ejemplos de técnicas cuantitati-
vas de evaluación de riesgos.

• Benchmarking
Es un proceso comparativo entre entidades, que enfoca eventos o procesos concretos, compara
medidas y resultados mediante métricas comunes e identifica oportunidades de mejora. Se des-
arrollan datos sobre dichos eventos y procesos y mediciones para comparar el funcionamiento.
Algunas empresas usan esta técnica para evaluar la probabilidad e impacto de eventos en un sec-
tor determinado.
• Modelos probalísticos
Sobre la base de ciertas hipótesis, los modelos probabilísticos relacionan una gama de eventos con
su probabilidad de ocurrencia e impacto resultante. Ambos conceptos se evalúan a partir de datos
históricos o resultados simulados que reflejen hipótesis de comportamiento futuro. Se usan mode-
los probabilísticos para evaluar el valor en riesgo, el flujo de caja en riesgo y los resultados en ries-
go y también para desarrollar distribuciones de pérdidas operacionales y crediticias. Los modelos
probabilísticos pueden usarse con diferentes horizontes de tiempo para estimar resultados tales
como la franja de valores de los instrumentos financieros a lo largo del tiempo y también, para eva-
luar resultados medios o esperados frente a impactos extremos o inesperados.
• Modelos no probalísticos
Los modelos no probabilísticos aplican hipótesis subjetivas para estimar el impacto de eventos sin
una probabilidad asociada cuantificada. La evaluación del impacto de eventos se basa en datos his-
tóricos o simulados e hipótesis de comportamiento futuro. Ejemplos de este tipo de modelos son las
medidas de sensibilidad, las pruebas de carga y los análisis de escenarios.

Figura 5.2

Para conseguir un consenso sobre probabilidad e impacto usando técnicas cualitati-


vas de evaluación, las entidades pueden aplicar el mismo enfoque que usan en la
identificación de eventos, tales como las entrevistas y grupos de trabajo. Un proce-
so de autoevaluación del riesgo capta los puntos de vista de los participantes sobre
la probabilidad y el impacto potencial de eventos futuros, usando escalas descripti-
vas o numéricas.
Una entidad no necesita aplicar las mismas técnicas de evaluación en todas sus uni-
dades de negocio. Antes bien, la selección de técnicas debería reflejar la necesidad de
precisión y la cultura de cada unidad. En una empresa, por ejemplo, al identificar y eva-
luar los riesgos al nivel de proceso, una unidad usa cuestionarios de autoevaluación,
mientras que otra utiliza grupos de trabajo. Los riesgos se evalúan de modo inherente
o residual y luego, se organizan y agrupan según las categorías de riesgo y objetivos
de ambas unidades. Aunque se apliquen métodos distintos, ambos proporcionan sufi-
ciente concordancia para facilitar la evaluación de riesgos en toda la entidad.
La dirección puede generar una medida del impacto cuantitativo de un evento en
toda la entidad cuando todas las evaluaciones individuales de riesgo referentes al
mismo se expresen en términos cuantitativos. Por ejemplo, el impacto de un cambio

67
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 68

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

en el precio de la energía sobre el margen bruto se calcula en todas las unidades de


negocio y se determina así el impacto global para toda la entidad. Cuando exista una
mezcla de medidas cualitativas y cuantitativas, la dirección desarrolla una evaluación
cualitativa a través de ambos tipos de medición, con el resultado de una evaluación
compuesta expresada en términos cualitativos. La generación de estas evaluaciones
compuestas se facilita estableciendo términos comunes de probabilidad e impacto
para toda la entidad y categorías comunes de riesgo para las medidas cualitativas.

Relaciones entre Eventos

Cuando los eventos potenciales no están relacionados entre sí, la dirección los eva-
lúa individualmente. Por ejemplo, una empresa con unidades de negocio expuestas
a diferentes fluctuaciones de precios –tales como el de la pasta de papel o el de
monedas extranjeras– evaluaría los riesgos independientemente de los movimientos
del mercado. Pero cuando exista correlación entre los eventos o éstos se combinen
e interaccionen para crear probabilidades o impactos significativamente diferentes, la
dirección los evaluará en conjunto. Aunque el impacto de un solo evento pueda ser
ligero, el impacto de una secuencia o combinación de eventos puede ser más signi-
ficativo.

Por ejemplo, una válvula defectuosa de un depósito de propano en un almacén de


distribución origina un escape de gas, mientras se mantienen cerradas las puertas de
la instalación para retener el calor de las oficinas adyacentes. Cuando el conductor
de un camión que se acerca al almacén activa un dispositivo a control remoto para
abrir las puertas, la presencia conjunta del gas y la chispa del motor de la puerta cau-
san una explosión. Eventos distintos interaccionan y dan como resultado un riesgo
significativo. En otro ejemplo, una empresa se introduce en un mercado extranjero,
donde cuenta con nuevos directivos contratados localmente, sistemas de informa-
ción no probados y poca base para que la dirección central pueda juzgar su corres-
pondiente funcionamiento, lo que da como resultado un riesgo significativo de infor-
mación errónea o fraudulenta.

Cuando sea probable que los riesgos afecten a múltiples unidades de negocio, la
dirección puede agruparlos en categorías comunes de eventos y después, conside-
rarlos primero según unidad y luego conjuntamente para toda la entidad. Por ejem-
plo, las unidades de una empresa de servicios están sujetas al riesgo de modificación
del tipo de interés oficial y su dirección evalúa este riesgo no sólo en cada unidad,
sino también de una forma combinada global. Una empresa industrial tiene muchas
unidades de negocio, cada una expuesta a las fluctuaciones en el precio del oro, por
lo que la dirección agrega el riesgo de los cambios potenciales en dicho precio en una
única medida que muestra el efecto neto de un cambio de 1 u.m. por onza del metal
sobre su inventario total de oro.

La naturaleza de los eventos y el hecho de que estén relacionados o no, puede afec-
tar a las técnicas de evaluación utilizadas. Por ejemplo, al evaluar el impacto de even-
tos que podrían tener un efecto extremo, la dirección puede usar pruebas de “stress
testing”, mientras que para evaluar el efecto de eventos múltiples, la dirección puede
encontrar más útil el uso de simulaciones o análisis de escenarios.

68
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 69

EVALUACIÓN DE RIESGOS

La observación de interrelaciones entre probabilidad e impacto de los riesgos cons-


tituye una importante responsabilidad de la dirección. Una gestión eficaz de riesgos
corporativos requiere que su evaluación se realice atendiendo tanto al riesgo inhe-
rente como a la repuesta a él, como se expone en el capítulo siguiente.

69
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 70
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 71

6. Respuesta a los riesgos

Resumen del capítulo: Una vez evaluados los riesgos relevantes, la dirección
determina cómo responder a ellos. Las respuestas pueden ser las de evitar,
reducir, compartir y aceptar el riesgo. Al considerar su respuesta, la dirección
evalúa su efecto sobre la probabilidad e impacto del riesgo, así como los cos-
tes y beneficios, y selecciona aquella que sitúe el riesgo residual dentro de las
tolerancias al riesgo establecidas. La dirección identifica cualquier oportuni-
dad que pueda existir y asume una perspectiva del riesgo globalmente para la
entidad o bien una perspectiva de la cartera de riesgos, determinando si el
riesgo residual global concuerda con el riesgo aceptado por la entidad.

(Gráfico del cubo)

Las respuestas a los riesgos se incluyen en las siguientes categorías:


• Evitar
Supone salir de las actividades que generen riesgos. Evitar el riesgo puede implicar
el cese de una línea de producto, frenar la expansión hacia un nuevo mercado geo-
gráfico o la venta de una división.

71
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 72

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

• Reducir
Implica llevar a cabo acciones para reducir la probabilidad o el impacto del riesgo
o ambos conceptos a la vez. Esto implica típicamente a algunas de las muchas
decisiones empresariales cotidianas.
• Compartir
La probabilidad o el impacto del riesgo se reducen trasladando o, de otro modo,
compartiendo una parte del riesgo. Las técnicas comunes incluyen la contratación
de seguros, la realización de operaciones de cobertura o la externalización de una
actividad.
• Aceptar
No se emprende ninguna acción que afecte a la probabilidad o el impacto del riesgo.
La figura 6.1 muestra ejemplos de cómo se aplican dichas respuestas a los riesgos.

• Evitar
Una organización sin ánimo de lucro identificó y evaluó los riesgos generados por el suministro
directo de servicios médicos a sus miembros y decidió no aceptar los riesgos correspondientes,
decidiendo facilitar en su lugar un servicio de referencia a terceros.
• Reducir
Una empresa dedicada a la compensación de valores bursátiles identificó y evaluó el riesgo de que
sus sistemas no estuvieran disponibles durante más de tres horas y concluyó que no podía aceptar
el impacto de tal evento. La empresa invirtió en tecnología y mejoró sus sistemas de autodetección
de fallos y seguridad, reduciendo así la probabilidad de que no estuviesen disponibles.
• Compartir
Una universidad identificó y evaluó el riesgo asociado a la gestión de sus residencias de estudian-
tes y concluyó que no tenía la capacidad interna suficiente para gestionar eficazmente dichas impor-
tantes instalaciones residenciales. La universidad externalizó la gestión de las residencias a una
empresa de gestión inmobiliaria, con la consiguiente reducción del impacto y probabilidad de los
riesgos correspondientes.
• Aceptar
Una agencia gubernamental identificó y evaluó los riesgos de incendio de sus infraestructuras en
varias regiones geográficas y también evaluó el coste de compartir su impacto mediante una póliza
de seguros. Concluyó que el coste adicional del seguro y las franquicias correspondientes excedían
del coste probable de reposición y decidió aceptar el riesgo.

Figura 6.1

La respuesta de evitar el riesgo sugiere que no se identificó ninguna opción de res-


puesta que redujera el impacto y probabilidad hasta un nivel aceptable. Las respues-
tas de reducir o compartir reducen el riesgo residual a un nivel en línea con las tole-
rancias de riesgo deseadas, mientras que una respuesta de aceptación sugiere que
el riesgo inherente ya está dentro de las tolerancias de riesgo.
Para muchos riesgos, las opciones de respuesta adecuadas son evidentes y bien
aceptadas. Por ejemplo, para el riesgo de perder la disponibilidad de los sistemas
informáticos, una opción típica de respuesta es la implantación de un plan de conti-
nuidad del negocio. Para otros riesgos, las opciones disponibles pueden no ser tan
evidentes, lo que exigirá investigación y análisis. Por ejemplo, las opciones de res-
puesta relevantes para mitigar el efecto de las actividades de un competidor sobre el
valor de la marca pueden requerir un estudio y análisis del mercado.

72
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 73

RESPUESTA A LOS RIESGOS

Al determinar la respuesta a los riesgos, la dirección debería tener en cuenta lo


siguiente:
• Los efectos de las respuestas potenciales sobre la probabilidad y el impacto del
riesgo –y qué opciones de respuesta están en línea con las tolerancias al riesgo de
la entidad
• Los costes y beneficios de las respuestas potenciales
• Las posibles oportunidades para alcanzar los objetivos de la entidad, lo que va más
allá del tratamiento de un riesgo concreto
Para los riesgos significativos, una entidad considera típicamente las respuestas
posibles dentro de una gama de opciones de respuesta, lo que proporciona profun-
didad a la selección de respuesta y se enfrenta al “status quo”.

Evaluación de Posibles Respuestas

Los riesgos inherentes se analizan y las respuestas a ellos se evalúan con el propó-
sito de conseguir un nivel de riesgo residual en línea con las tolerancias al riesgo de
la entidad. A menudo, cualquiera de las diversas respuestas posibles situará dicho
riesgo residual dentro del marco de esas tolerancias y, a veces, una combinación de
ellas proporcionará el resultado óptimo. Por otro lado, a veces una respuesta afecta-
rá a múltiples riesgos, en cuyo caso la dirección puede decidir que no se precisan
acciones adicionales para tratar un riesgo determinado.

Evaluación del Efecto sobre la Probabilidad y el Impacto del Riesgo

Al evaluar las opciones de respuesta, la dirección considera el efecto sobre la proba-


bilidad del riesgo y su impacto, reconociendo que una respuesta puede afectarlas de
modo diferente. Por ejemplo, una empresa con un centro informático ubicado en una
región con fuerte actividad tormentosa establece un plan de continuidad de negocio
que, aunque no tiene efecto alguno sobre la probabilidad de que se produzca una tor-
menta, mitiga el impacto de los daños en el edificio o de la dificultad para que el per-
sonal acceda a su trabajo. Por otro lado, la opción de trasladar el centro informático
a otra región no reducirá el impacto de posibles tormentas que puedan producirse,
pero sí reduce la probabilidad de que tengan lugar en este nuevo centro.
Al analizar las respuestas, la dirección puede tener en cuenta los eventos y tenden-
cias pasadas y los posibles escenarios futuros. Al evaluar las respuestas alternativas,
la dirección típicamente determina su efecto potencial usando las mismas unidades
de medición, u otras congruentes, que las usadas para el objetivo correspondiente.

Evaluación de Costes y Beneficios

Los recursos siempre presentan restricciones y las entidades pueden considerar los
costes y beneficios derivados de opciones alternativas de respuesta a este tipo de
riesgo. Las medidas de coste/beneficio para la puesta en práctica de respuestas se
realizan con varios niveles de precisión. Generalmente, es más fácil tratar los costes,

73
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 74

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

pues en muchos casos pueden cuantificarse con bastante detalle. Normalmente, se


tienen en cuenta todos los costes directos relacionados con la implantación de una
respuesta y los costes indirectos que se puedan medir de un modo práctico. Algunas
entidades también incluyen los costes de oportunidad relativos al uso de recursos.
En algunos casos, sin embargo, es difícil cuantificar los costes de la respuesta al ries-
go. Surgen retos respecto a la cuantificación al estimar el tiempo y el esfuerzo aso-
ciados a una determinada respuesta, como puede ser el caso, por ejemplo, de reca-
bar información de mercado sobre las preferencias en evolución de los clientes, las
actividades de los competidores u otra información generada externamente.
El lado de los beneficios implica a menudo valoraciones mucho más subjetivas. Por
ejemplo, las ventajas de los programas de formación son normalmente evidentes,
pero son difíciles de cuantificar. En muchos casos, sin embargo, el beneficio de una
respuesta al riesgo puede evaluarse dentro del contexto de beneficios ligados a la
consecución del objetivo correspondiente.
Al considerar las relaciones coste-beneficio, la atención a los riesgos como si estu-
vieran interrelacionados permite a la dirección agrupar las respuestas para reducir y
compartir el riesgo de la entidad. Por ejemplo, cuando se comparte un riesgo
mediante un seguro, puede ser beneficioso combinar los riesgos en una sola póliza
ya que el precio normalmente se reduce cuando se aseguran conjuntamente diversas
exposiciones a riesgos bajo un mismo acuerdo de cobertura.

Oportunidades en las Opciones de Respuesta

El capítulo sobre identificación de eventos describe cómo la dirección identifica


aquellos potenciales que afectan a la consecución de objetivos de la entidad, bien
positiva o negativamente. Los eventos con impacto positivo representan las oportu-
nidades y se revierten hacia los procesos de fijación de objetivos o estrategias.
De forma similar, las oportunidades pueden identificarse al contemplar las respuestas a
los riesgos. Las consideraciones sobre estas respuestas a los riesgos no deberían limi-
tarse exclusivamente a la reducción de los riesgos identificados, sino que también
deberían incluir la consideración de nuevas oportunidades para la entidad. La dirección
puede identificar las respuestas innovadoras, que, aunque pertenezcan a las categorí-
as de respuestas descritas anteriormente en este capítulo, pueden ser totalmente
nuevas para la entidad e, incluso, para el sector. Dichas oportunidades pueden surgir
cuando existen opciones de respuesta a los riesgos que están alcanzando los límites
de eficacia y cuando ulteriores actualizaciones probablemente sólo faciliten cambios
marginales en el impacto y probabilidad del riesgo. Un ejemplo es la respuesta creati-
va de una empresa de seguros automovilísticos que, ante el alto número de siniestros
en ciertos cruces de carreteras, decidió financiar mejoras en la señalización con semá-
foros, reduciendo así las reclamaciones por accidentes y mejorando los márgenes.

Respuestas Seleccionadas

Una vez evaluados los efectos de las respuestas alternativas a los riesgos, la direc-
ción decide cómo pretende gestionar los riesgos, seleccionando una respuesta o una

74
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 75

RESPUESTA A LOS RIESGOS

combinación de ellas diseñada para situar la probabilidad e impacto del riesgo den-
tro de las tolerancias establecidas. Sin embargo, cuando una respuesta a los riesgos
pudiera desembocar en que el riesgo residual superará la tolerancia establecida, la
dirección tiene que volver sobre sus pasos y revisar su respuesta o, bajo ciertas cir-
cunstancias, reconsiderar la tolerancia al riesgo establecida. Por tanto, el equilibrio
entre riesgo y tolerancia al riesgo puede implicar un proceso iterativo.
Evaluar las respuestas alternativas a los riesgos inherentes requiere tener en cuenta
los riesgos adicionales que pueden derivarse de cada respuesta, lo que puede iniciar
un proceso iterativo en que la dirección, antes de tomar su decisión, considere dichos
riesgos adicionales, incluyendo aquellos que pudieran no ser evidentes de modo
inmediato.
Una vez que la dirección selecciona una respuesta, es posible que necesite desarro-
llar un plan de implantación para ejecutarla. Una parte crítica de dicho plan es el esta-
blecimiento de acciones de control (presentadas en el capítulo siguiente) para ase-
gurar que se lleva a cabo la respuesta a los riesgos.
La dirección reconoce que siempre existirá algún nivel de riesgo residual, no sólo por
las limitaciones de los recursos, sino también por la incertidumbre del futuro y demás
limitaciones inherentes a todas las actividades.

Perspectiva de Carteras de Riesgos

La gestión de riesgos corporativos requiere que el riesgo se considere desde una


perspectiva: de toda la entidad o desde otra perspectiva de carteras de riesgos.
Normalmente, la dirección elige un enfoque en que primero se contemplan los ries-
gos de cada unidad de negocio, departamento o función y luego su director respon-
sable desarrolla una evaluación compuesta de ellos, que refleja su perfil de riesgo
residual respecto a sus objetivos y tolerancias al riesgo.
Con una perspectiva del riesgo para cada unidad individual, la alta dirección de una
empresa está bien situada para tener una perspectiva de carteras y determinar si el
perfil de riesgo residual de la entidad está a la par del riesgo aceptado global res-
pecto a sus objetivos. Los riesgos de las diferentes unidades pueden estar dentro de
sus respectivas tolerancias individuales, pero en conjunto pueden superar al riesgo
aceptado globalmente por la entidad, en cuyo caso hacen falta respuestas adiciona-
les o diferentes para emplazar el riesgo dentro del nivel de riesgo aceptado. A la
inversa, los riesgos pueden compensarse naturalmente a través de la entidad cuan-
do, por ejemplo, algunas unidades individuales tienen un mayor riesgo y otras son
relativamente adversas a él, de tal modo que el riesgo global está dentro del riesgo
aceptado por la entidad, evitando la necesidad de una respuesta diferente a los ries-
gos.
Una perspectiva de carteras de riesgos puede ser representada de muchas maneras.
Puede alcanzarse centrándose en los principales riesgos o categorías de riesgo de
las unidades de negocio o de la empresa en su totalidad, usando métricas como el
capital ajustado al riesgo o el capital en riesgo. Dichas medidas compuestas son par-
ticularmente útiles para medir el riesgo frente a objetivos establecidos en términos de
resultados, crecimiento u otras medidas de funcionamiento, a veces relacionadas con
el capital asignado o disponible. Estas medidas de la perspectiva de carteras pueden

75
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 76

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

facilitar información útil para la reasignación del capital entre unidades y la modifica-
ción de la orientación estratégica.
Un ejemplo es una empresa industrial que aplica una perspectiva de carteras de ries-
gos en el contexto de su objetivo de resultados operativos. La dirección aplica las
categorías comunes de eventos para captar riesgos en todas las unidades de nego-
cio. A continuación, elabora un gráfico que muestra, por categoría y unidad de nego-
cio, la probabilidad de riesgo en términos de frecuencia en un horizonte temporal y
los impactos relativos sobre resultados. El resultado es una perspectiva compuesta,
o de carteras, del riesgo al que se enfrenta la empresa, con la dirección y el consejo
de administración en situación de considerar la naturaleza, probabilidad y dimensión
relativa de los riesgos y cómo pueden afectar a los resultados.
Otro ejemplo es una entidad financiera que requiera de sus unidades de negocio que
establezcan objetivos, tolerancias al riesgo y medidas de rendimiento, todo en térmi-
nos de rendimiento del capital ajustado al riesgo. Esta métrica, consistentemente
aplicada, ayuda a la dirección a englobar las evaluaciones combinadas de riesgo de
las unidades en una perspectiva de carteras de riesgos para la entidad en su conjun-
to y le permite considerar los riesgos de las unidades por objetivo y determinar si la
entidad está dentro de su riesgo aceptado.
Cuando se mira el riesgo desde una perspectiva de carteras, la dirección está en
posición de considerar si permanece dentro del riesgo aceptado establecido.
Además, puede volver a evaluar la naturaleza y tipo del riesgo que desea asumir. En
casos donde la perspectiva de carteras contemple significativamente menores ries-
gos que el riesgo aceptado por la entidad, la dirección puede decidir motivar a los
directores de unidades individuales de negocio para que acepten un mayor riesgo en
áreas seleccionadas, esforzándose en mejorar el crecimiento y rendimiento global de
la entidad.

76
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 77

7. Actividades de control

Resumen del capítulo: Las actividades de control son las políticas y proce-
dimientos que ayudan a asegurar que se llevan a cabo las respuestas de la
dirección a los riesgos. Las actividades de control tienen lugar a través de la
organización, a todos los niveles y en todas las funciones. Incluyen una gama
de actividades –tan diversas como aprobaciones, autorizaciones, verificacio-
nes, conciliaciones, revisiones del funcionamiento operativo, seguridad de los
activos y segregación de funciones.

(Gráfico del cubo)

Las actividades de control son las políticas y procedimientos. Estos últimos son las
acciones de las personas para implantar las políticas, directamente o a través de la
aplicación de tecnología, y ayudar a asegurar que se llevan a cabo las respuestas de
la dirección a los riesgos. Las actividades de control pueden ser clasificadas por la
naturaleza de los objetivos de la entidad con la que están relacionadas: estrategia,
operaciones, información y cumplimiento.

77
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 78

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Aunque algunas actividades de control corresponden exclusivamente a una sola


categoría, a menudo se solapan. Según circunstancias, una determinada actividad de
control podría ayudar a alcanzar los objetivos de la entidad en más de una categoría.
Por ejemplo, ciertos controles sobre operaciones también pueden ayudar a asegurar
una información fiable y las actividades de control sobre la información también pue-
den servir para llevar a cabo el cumplimiento.

Integración con la respuesta al riesgo

Después de haber seleccionado las respuestas al riesgo, la dirección identifica las


actividades de control necesarias para ayudar a asegurar que las respuestas a los
riesgos se lleven a cabo adecuada y oportunamente.
El siguiente ejemplo sirve para ilustrar el vínculo entre objetivos, respuestas a los ries-
gos y actividades de control. Una empresa fija un objetivo de alcanzar o superar las
ventas presupuestadas, identificando como riesgo la falta de conocimientos suficien-
tes sobre factores externos tales como las necesidades actuales y potenciales de los
clientes. Para reducir la probabilidad de ocurrencia y el impacto del riesgo, la direc-
ción establece historiales de compra de los clientes actuales y realiza unas nuevas
iniciativas de investigación de mercado. Estas respuestas al riesgo sirven como pun-
tos básicos para establecer las actividades de control, incluyendo el seguimiento del
desarrollo de dichos historiales en comparación con los calendarios establecidos y la
adopción de medidas para asegurar la exactitud de los datos informados. En este
sentido, las actividades de control están integradas directamente en el proceso de
gestión.
Al seleccionar las actividades de control, la dirección considera cómo se relacionan
entre sí. En algunos ejemplos, una sola de ellas afecta a riesgos múltiples. En otros,
son necesarias muchas actividades de control para una respuesta al riesgo. Incluso,
en otros, la dirección puede descubrir que las actividades de control existentes son
suficientes para asegurar que las nuevas respuestas a los riesgos se ejecutan eficaz-
mente.
Aunque las actividades de control se establecen generalmente para asegurar que las
respuestas a los riesgos se lleven a cabo de modo adecuado, con respecto a ciertos
objetivos, también constituyen por sí mismas una respuesta al riesgo. Por ejemplo,
para un objetivo que establece que unas transacciones específicas deben estar debi-
damente autorizadas, la respuesta será probablemente unas actividades de control
tales como la segregación de funciones o la aprobación por personal supervisor.
De igual manera que la selección de respuestas a los riesgos considera su adecua-
ción y el riesgo residual que resulta de ellas, la selección o revisión de las actividades
de control debería incluir la consideración de su relevancia y adecuación a la res-
puesta al riesgo y los objetivos relacionados. Esto puede llevarse a cabo consideran-
do por separado la adecuación de dichas actividades o bien contemplando el riesgo
residual dentro del contexto formado por las respuestas al riesgo y las correspon-
dientes actividades de control.
Estas últimas son una parte importante del proceso con el que una empresa se
esfuerza en alcanzar sus objetivos de negocio. No se realizan simplemente porque sí
o porque parezcan la cosa correcta o adecuada a hacer. En el ejemplo anterior, la

78
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 79

ACTIVIDADES DE CONTROL

dirección necesita tomar medidas para asegurar que se consiguen los objetivos de
venta. Las actividades de control sirven como mecanismos para gestionar la conse-
cución de tal objetivo.

Tipos de actividades de control

Se han propuesto muchas descripciones diferentes de los tipos de actividades de


control, incluyendo los controles de prevención, detección, manuales, informáticos y
de dirección. Las actividades de control también pueden tipificarse según objetivos
concretos de control, tales como los de asegurar la integridad y exactitud del proce-
samiento de datos.
La figura 7.1 describe las actividades de control utilizadas normalmente. Son solo
unos cuantos de entre muchos procedimientos normalmente aplicados por el perso-
nal en distintos niveles de la organización que sirven para potenciar la adhesión a los
planes de acción establecidos y mantener el rumbo de las entidades hacia el logro de
sus objetivos. Se presentan a continuación para ilustrar la amplitud y variedad de las
actividades de control y no para sugerir una determinada clasificación.

• Revisiones a alto nivel


La alta dirección revisa el funcionamiento real en contraste con presupuestos, previsiones y datos
de periodos previos y de competidores. Se hace un seguimiento de las iniciativas importantes –tales
como las campañas de marketing, la mejora de los procesos de producción y los programas de con-
tención o reducción del coste- para medir hasta qué punto se consiguen los objetivos. También se
supervisa la implantación de planes financieros, de desarrollo de nuevos productos y de joint ven-
tures.
• Gestión directa de funciones o actividades
Los directivos que gestionan las funciones o actividades revisan los informes de rendimiento. Un
directivo responsable de los créditos al consumo de un banco revisa los informes por sucursal,
región y tipo de préstamo (garantías), verificando los resúmenes, identificando tendencias y compa-
rando los resultados con estadísticas y objetivos económicos. A su vez, los directores de oficina
reciben datos de las nuevas operaciones, clasificadas por responsable del préstamo y por segmen-
to de cliente local. Estos directores también se centran en temas de cumplimiento, revisando los
informes que requieren los reguladores sobre nuevos depósitos que superen unos importes especí-
ficos. Se realizan conciliaciones de los flujos de caja diarios, reportando las posiciones netas a la
central para su posterior transferencia e inversión durante la noche.
• Procesamiento de la información
Se lleva a cabo una variedad de controles para verificar la exactitud, integridad y autorización de las
transacciones. Los datos introducidos están sometidos a comprobaciones en línea y conciliaciones
con ficheros de control aprobados. Se aceptará un pedido de un cliente, por ejemplo, sólo tras con-
trastarse con un fichero de clientes y verificarse el límite de crédito autorizado. Las secuencias
numéricas de las transacciones son registradas y se hace un seguimiento de las excepciones, que
se comunican a niveles superiores. Se controlan el desarrollo de nuevos sistemas y las modificacio-
nes en los existentes, como es el caso del acceso a datos, ficheros y programas.
• Controles físicos
Los equipos, existencias, valores, efectivo y demás activos están físicamente asegurados, se some-
ten periódicamente a recuentos y se contrastan con los importes de los registros de control.
• Indicadores de rendimiento
El contraste entre sí de diferentes conjuntos de datos –operativos o financieros–, junto con el análi-
sis de relaciones y las acciones de investigación y corrección, constituye una actividad de control.
Los indicadores de rendimiento incluyen, por ejemplo, la rotación de plantilla por unidad. Al investi-
gar resultados inesperados o tendencias inusuales, la dirección identifica las circunstancias en que

79
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 80

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

una capacidad insuficiente para completar los procesos claves puede significar que los objetivos
tengan una menor probabilidad de alcanzarse. El uso de esta información por los directivos –sólo
para decisiones operativas o también para seguir los resultados inesperados en los sistemas de
información– determina si el análisis de los indicadores de rendimiento sólo tienen efectos operati-
vos o también de control sobre la información.
• Segregación de funciones
Las funciones se dividen o segregan entre diferentes personas para reducir el riesgo de error o frau-
de. Por ejemplo, están segregadas las responsabilidades para autorizar transacciones, registrarlas y
manejar el activo correspondiente. Un director que autoriza las ventas a crédito no puede ser res-
ponsable del mantenimiento de las cuentas a cobrar o la custodia de los cobros. Asimismo, el per-
sonal comercial no tendrá capacidad para modificar los ficheros de precio de productos o los por-
centajes de comisión.

Figura 7.1

A menudo, se pone en marcha una combinación de controles para tratar las corres-
pondientes respuestas al riesgo. Por ejemplo, la dirección de una empresa fija los
límites de transacción para gestionar los riesgos relativos a una cartera de inversión
y establece actividades de control diseñadas para ayudar a asegurar que no se supe-
ran los límites de contratación. Las actividades de control incluyen controles preven-
tivos, para frenar ciertas transacciones antes de su ejecución, y controles de detec-
ción, para identificar otras oportunamente. Las actividades de control combinan con-
troles informáticos y manuales, incluyendo aquellos automatizados que aseguran la
captación correcta de la información, y procedimientos de autorización y aprobación
de las decisiones de inversión por parte de las personas responsables.

Políticas y procedimientos

Las actividades de control normalmente implican dos componentes: una política que
establece lo que debe hacerse y procedimientos para llevarla a cabo. Por ejemplo,
una política podría exigir la revisión de las actividades de contratación de clientes por
parte de un director de oficina de una entidad de gestión bursátil. El procedimiento lo
constituye dicha revisión en sí misma, realizada de manera oportuna y con atención
a los factores establecidos en la política, tales como la naturaleza y volumen de los
valores contratados y su relación con el patrimonio y edad del cliente.
Muchas veces, las políticas se comunican verbalmente. Las políticas no escritas pue-
den ser eficaces cuando la política lleve años en vigor y constituya una práctica bien
comprendida y en organizaciones reducidas donde los canales de comunicación
impliquen pocos niveles directivos y una interacción estrecha, junto con la supervi-
sión del personal. Pero independientemente de si está escrita o no, una política debe-
ría implantarse de forma meditada, consciente y consecuente. Un procedimiento no
será útil si se lleva a cabo mecánicamente y sin un enfoque claro y continuo sobre las
condiciones a las que se orienta la política. Posteriormente, es esencial investigar las
condiciones identificadas como resultado del procedimiento y adoptar las acciones
correctivas necesarias. Las acciones de seguimiento podrían variar según la dimen-
sión y estructura organizativa de una empresa. Pueden abarcar desde procesos for-
males de información de una empresa grande –donde las unidades de negocio expli-
can por qué no se alcanzan los objetivos y qué acciones se están adoptando para

80
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 81

ACTIVIDADES DE CONTROL

evitar la repetición de ello– hasta el caso de un director-propietario de una empresa


pequeña que se desplaza personalmente para hablar con el responsable de planta
sobre lo que ha fallado y qué es necesario hacer.

Controles sobre los sistemas de información

Con una dependencia importante de los sistemas de información para operar una
empresa y alcanzar los objetivos de información y cumplimiento, hacen falta contro-
les sobre dichos sistemas. Pueden usarse dos amplios grupos de actividades de con-
trol de los sistemas de información. El primero lo forman los controles generales, que
se aplican a muchos de esos sistemas, si no a todos, y ayudan a asegurar que siguen
funcionando continua y adecuadamente. El segundo son los controles de aplicación,
que incluyen fases informatizadas dentro del software para controlar el proceso.
Ambos tipos de controles, combinados con controles manuales de proceso cuando
sea necesario, operan juntos para asegurar la integridad, exactitud y validez de la
información.

Controles Generales

Los controles generales incluyen controles sobre la gestión de la tecnología de infor-


mación, su infraestructura, la gestión de seguridad y la adquisición, desarrollo y man-
tenimiento del software. Se aplican a todos los sistemas –desde entornos de main-
frames o cliente/servidor hasta ordenadores de sobremesa o portátiles. La Figura 7.2
propone ejemplos de controles comunes dentro de estas categorías.

• Gestión de la tecnología de información


Un comité de trabajo proporciona supervisión, seguimiento e información de las actividades de tec-
nología informática y las iniciativas para su mejora.
• Infraestructuras de la tecnología de información
Los controles se aplican a la definición, adquisición, instalación, configuración, integración y mante-
nimiento de los sistemas. Pueden incluir acuerdos de servicio que establezcan y potencien su fun-
cionamiento, los planes de continuidad del negocio que mantienen la disponibilidad del sistema, el
seguimiento del rendimiento de la red para detectar fallos operativos y la programación de tiempos
para las operaciones informáticas. El componente del software del sistema dentro de la infraestruc-
tura de la tecnología de información puede incluir controles tales como la revisión y aprobación de
nuevas adquisiciones significativas por parte de la dirección o un comité de trabajo, la restricción de
accesos a la configuración del sistema y al software del sistema operativo, las conciliaciones auto-
máticas de datos a los que se accede a través del software “middleware” y la detección de bit de
paridad en los errores de comunicación. Los controles del software del sistema también incluyen el
seguimiento de incidencias, el “logging” del sistema y la revisión de informes de detalle sobre el uso
de utilidades informáticas que alteren los datos.
• Gestión de la seguridad
Son controles de acceso lógico tales como contraseñas seguras de restricción de accesos a la red,
bases de datos y aplicaciones. Las cuentas y números de usuario y los correspondientes controles
del privilegio de acceso ayudan a limitar éste sólo a las aplicaciones o funciones necesarias para que
cada usuario autorizado desempeñe su cometido. Los “firewalls” de Internet y las redes privadas vir-
tuales protegen los datos contra acceso externo sin autorización.
• Adquisición, desarrollo y mantenimiento del software
Los controles sobre la adquisición e implantación del software se incorporan a un proceso estable-

81
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 82

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

cido para gestionar el cambio, incluyendo los requisitos de documentación, la comprobación de la


aceptación del usuario, las pruebas de carga y las evaluaciones del riesgo de proyectos. El acceso
a los códigos fuente está controlado mediante una librería de códigos. Las personas que desarro-
llan software sólo trabajan en entornos segregados de desarrollo/prueba y no tienen acceso al entor-
no de producción. Los controles sobre los cambios en el sistema incluyen la necesaria autorización
de las solicitudes de modificación, revisión de los cambios, aprobaciones, documentación, com-
probaciones, implicaciones de los cambios para otros componentes de la tecnología de información,
resultados de las pruebas de carga y protocolos de implantación.

Figura 7.2

Controles de Aplicación

Los controles de aplicación se centran directamente en la integridad, exactitud, auto-


rización y validez de la captación y procesamiento de datos. Ayudan a asegurar que
los datos se captan o generan en el momento de necesitarlos, que las aplicaciones
de soporte estén disponibles y que los errores de interfaz se detecten rápidamente.
Un objetivo importante de los controles de aplicación es prevenir que los errores se intro-
duzcan en el sistema, así como detectarlos y corregirlos una vez introducidos en él. Para
ello, los controles de aplicación a menudo implican comprobaciones informatizadas de
edición, que consisten en formato, existencia, razonabilidad y otras comprobaciones de
datos integrados ya en las aplicaciones durante su desarrollo. Si se diseñan correcta-
mente, pueden facilitar el control sobre los datos introducidos en el sistema.
La Figura 7.3 ofrece ejemplos de controles de aplicación. Son sólo unos cuantos
entre múltiples controles realizados cada día, mediante cálculo y contraste, que sir-
ven para prevenir y detectar la captación y procesamiento de datos inexactos,
incompletos, inconsecuentes o inadecuados.

• Equilibrar las actividades de control


Detectar los errores en la captación de datos, mediante la conciliación entre los importes introduci-
dos, manual o automáticamente, y un total de control. Una empresa cuadra automáticamente el
número total de transacciones procesadas y transferidas desde su sistema on-line de introducción
de pedidos con el número de transacciones recibidas en su sistema de facturación.
• Dígitos de control
Validan los datos mediante cálculos. La numeración de los repuestos de una empresa contiene un
dígito de control que detecta y corrige pedidos inexactos a sus proveedores.
• Listados predefinidos de datos
Proporcionan al usuario listas preestablecidas de datos aceptables. La Intranet de una empresa
ofrece listas de selección de productos disponibles para su compra.
• Pruebas de razonabilidad de datos
Comparan los datos captados con una pauta existente o aprendida de razonabilidad. Un pedido soli-
citado a un proveedor por un minorista del sector de bricolaje por un volumen inusual de tableros
de madera provoca una revisión.
• Pruebas lógicas
Incluyen el uso de límites de rango o pruebas alfanuméricas o de valor. Una agencia gubernamental
detecta errores potenciales en los números de la seguridad social verificando si todos los números
introducidos contienen nueve dígitos.

Figura 7.3

82
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 83

ACTIVIDADES DE CONTROL

Aspectos Específicos de las Entidades

Debido a que cada entidad tiene su propio conjunto de objetivos y enfoques de


implantación, existirán diferencias en las respuestas al riesgo y las actividades de
control relacionadas. Incluso cuando dos entidades tuvieran objetivos idénticos y
tomasen decisiones similares respecto a cómo alcanzarlos, las actividades de control
probablemente serían distintas. Cada entidad está gestionada por personas diferen-
tes que tienen criterios individuales diferentes en la aplicación de controles. Es más,
los controles reflejan el entorno y sector en que opera una entidad, así como su
dimensión y complejidad de organización, la naturaleza y alcance de sus actividades
y sus antecedentes y cultura.
Las organizaciones grandes y complejas con diversidad de actividades pueden
enfrentarse a situaciones de control más difíciles que las organizaciones pequeñas y
sencillas con actividades menos variadas. Una entidad con operaciones descentrali-
zadas y un énfasis en la autonomía e innovación local presenta diferentes circuns-
tancias de control que otra altamente centralizada. Otros factores que influyen en la
complejidad de una entidad, y, por tanto, la naturaleza de sus controles, incluyen la
ubicación y dispersión geográfica, la extensión y sofisticación de las operaciones y
los métodos de procesamiento de información.

83
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 84
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 85

8. Información y comunicación

Resumen del capítulo: La información pertinente se identifica, capta y comu-


nica de una forma y en un marco de tiempo que permiten a las personas lle-
var a cabo sus responsabilidades Los sistemas de información usan datos
generados internamente y otras entradas de fuentes externas y sus salidas
informativas facilitan la gestión de riesgos y la toma de decisiones informadas
relativas a los objetivos. También existe una comunicación eficaz fluyendo en
todas direcciones dentro de la organización. Todo el personal recibe un men-
saje claro desde la alta dirección de que deben considerar seriamente las res-
ponsabilidades de gestión de los riesgos corporativos. Las personas entien-
den su papel en dicha gestión y cómo las actividades individuales se relacio-
nan con el trabajo de los demás. Asimismo, deben tener unos medios para
comunicar hacia arriba la información significativa. También debe haber una
comunicación eficaz con terceros, tales como los clientes, proveedores, regu-
ladores y accionistas.

(Gráfico del cubo)

85
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 86

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Cada empresa identifica y capta una amplia gama de información, relativa a los even-
tos y actividades tanto externos como internos, relevantes para dirigir la entidad. Esta
información se facilita al personal de una forma y en un marco de tiempo que le per-
mitan llevar a cabo su gestión de riesgos corporativos y demás responsabilidades.

Información

La información se necesita a todos los niveles de la organización para identificar, eva-


luar y responder a los riesgos y por otra parte dirigir la entidad y conseguir sus obje-
tivos. Se usa mucha información, relevante para una o más categorías de objetivos.
La información operativa de fuentes internas y externas, tanto financiera como no
financiera, es relevante para múltiples objetivos de negocio. La información financie-
ra, por ejemplo, se usa para elaborar los estados financieros con fines de información
y también para tomar decisiones operativas, tales como la supervisión del funciona-
miento y la asignación de recursos. Una información financiera fiable es básica para
planificar, presupuestar, fijar precios, evaluar el rendimiento del vendedor, evaluar
joint ventures y alianzas y llevar a cabo otras actividades de gestión.
De forma similar, la información operativa es esencial para elaborar los informes
financieros y de otro tipo. Esto incluye aquella más rutinaria –compras, ventas y
demás transacciones– junto con la correspondiente a nuevas versiones de producto
o condiciones económicas de los competidores, que pueden afectar a las existencias
y las valoraciones de cuentas a cobrar. La información necesaria a efectos de cum-
plimiento, tal como la relativa a las emisiones de partículas a la atmósfera o datos del
personal, también puede aplicarse a objetivos de información financiera.
La información procede de muchas fuentes –internas y externas, de forma cuantita-
tiva y cualitativa– y facilita respuestas a las condiciones cambiantes. Un reto para la
dirección es cómo procesar y depurar grandes volúmenes de datos para convertirlos
en información manejable y se enfrenta a él estableciendo una infraestructura de sis-
temas de información para buscar, captar, procesar, analizar y comunicar la informa-
ción relevante. Estos sistemas –habitualmente informatizados, pero conteniendo
también entradas manuales o interfaces– se ven a menudo dentro del contexto del
procesamiento de datos generados internamente. Pero los sistemas de información
tienen una aplicación más amplia. También abordan características o circunstancias
de eventos externos, por ejemplo, datos económicos específicos de un mercado o
sector que muestran cambios en la demanda de los productos o servicios de una
empresa, datos sobre productos y servicios para los procesos de producción, infor-
mación de mercado sobre la evolución de preferencias o demandas del consumidor,
información sobre las actividades de desarrollo de productos de los competidores e
iniciativas legislativas o normativas.
Los sistemas de información pueden ser formales o informales. Las conversaciones
con clientes, proveedores, reguladores y personal de la entidad a menudo proporcio-
nan información crítica necesaria para identificar riesgos y oportunidades. De forma
similar, la asistencia a seminarios profesionales o del sector y la participación en aso-
ciaciones mercantiles o de otro tipo pueden ser una fuente de información valiosa.
Es particularmente importante mantener la información en forma coherente con las
necesidades cuando una entidad se enfrenta a cambios fundamentales en el sector,

86
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 87

INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN

competidores muy innovadores y rápidos o cambios significativos en la demanda de


los consumidores. Los sistemas de información cambian según la necesidad de
apoyo a nuevos objetivos, por lo que deben identificar y captar la información finan-
ciera y no financiera y procesarla y comunicarla en un marco de tiempo y una forma
que sean útiles para controlar las actividades de la entidad.

Sistemas Estratégicos e Integrados

Como las empresas se han hecho más colaboradoras con los clientes, proveedores
y socios de negocio y se integran más con ellos, la división entre la arquitectura de
los sistemas de información de una entidad y la de los terceros es cada vez más
ténue. Como resultado, el procesamiento y la gestión de datos a menudo llega a ser
una responsabilidad compartida de múltiples entidades. En tales casos, la arquitec-
tura de los sistemas de información de una organización debe ser suficientemente
flexible y ágil como para integrarse eficazmente con los terceros vinculados.
El diseño de una arquitectura de sistemas de información y la adquisición de la tec-
nología son aspectos importantes de la estrategia de una entidad y las decisiones
respecto a la tecnología pueden resultar críticas para lograr los objetivos. Las deci-
siones sobre la selección e implantación de tecnología dependen de muchos facto-
res, incluyendo objetivos organizativos, necesidades del mercado y exigencias com-
petitivas. Aunque los sistemas de información sean fundamentales para una gestión
eficaz de riesgos corporativos, también las técnicas empleadas en esta gestión pue-
den ayudar a tomar decisiones tecnológicas.
Desde hace mucho tiempo, los sistemas de información se diseñan y aplican para
apoyar la estrategia de negocio. Este papel se hace crítico a medida que las necesi-
dades del negocio cambian y la tecnología crea nuevas oportunidades para aprove-
char una ventaja estratégica. En algunos casos, los cambios tecnológicos han redu-
cido la ventaja adquirida en el despliegue inicial, al impulsar un nuevo rumbo estra-
tégico. Por ejemplo, los sistemas de reserva de las líneas aéreas que facilitaron a los
agentes de viajes un acceso fácil a la información de vuelo, luego se desplazaron
hacia el cliente –enfrentándose a sistemas de reserva por Internet, reduciendo o eli-
minando de modo significativo la implicación de la agencia de viajes tradicional.

Integración con las Operaciones

Los sistemas de información a menudo están totalmente integrados en la mayoría de


los aspectos de las operaciones. Los sistemas de Internet o basados en la red son
frecuentes y muchas empresas tienen sistemas de información para toda la entidad,
tales como la planificación corporativa de recursos. Estas aplicaciones facilitan el
acceso a información previamente enmarcada en silos funcionales o departamenta-
les, haciéndola así disponible para un uso amplio de la dirección. Las transacciones
se registran y siguen en tiempo real, permitiendo a los directivos acceder inmediata-
mente a información financiera y operativa de forma más eficaz para controlar las
actividades del negocio. Por ejemplo, una empresa constructora dedicada a proyec-
tos a gran escala utiliza un sistema integrado, basado en una extranet, para alcanzar
las expectativas del mercado y de eficiencia. El sistema proporciona información que

87
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 88

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

ayuda a los directivos a seguir las existencias y componentes suministrados a los


clientes, identificar los excesos y defectos de suministros de material en muchas
obras, obtener un ahorro de costes respecto a los proveedores de materiales usua-
les, vincularse a organizaciones similares para obtener descuentos por volumen y
supervisar las actividades de los subcontratistas. Esto también permite al personal
compartir sin fisuras los planos actuales con arquitectos e ingenieros, clientes, sub-
contratistas y reguladores, aunque manteniendo el control de las versiones de los
planos. Adicionalmente, el sistema abarca las capacidades de gestión del conoci-
miento que permite a los empleados de la empresa compartir soluciones innovado-
ras en toda la organización.
Para apoyar una gestión eficaz de riesgos corporativos, una entidad capta y usa
datos actuales e históricos. Los datos históricos permiten seguir el funcionamiento
real respecto a objetivos, planes y expectativas y proporcionan ideas sobre el rendi-
miento de la entidad bajo condiciones pasadas, permitiendo a la dirección identificar
correlaciones y tendencias y prever el funcionamiento futuro. Los datos históricos
también pueden facilitar un aviso anticipado de eventos potenciales que merecen la
atención de la dirección.
Los datos presentes o actuales permiten a la entidad determinar si se mantiene den-
tro de las tolerancias al riesgo establecidas y permiten a la dirección tener una pers-
pectiva en tiempo real de los riesgos existentes en un proceso, función o unidad e
identificar variaciones frente a las expectativas.
Los desarrollos en los sistemas de información han mejorado la capacidad de
muchas organizaciones para medir y supervisar el funcionamiento y presentar infor-
mación analítica a escala corporativa. La complejidad e integración de los sistemas
continua, con organizaciones que utilizan nuevas capacidades tecnológicas a medi-
da que éstas surgen. Sin embargo, la creciente dependencia de los sistemas de infor-
mación a niveles estratégico y operativo genera nuevos riesgos –tales como los fallos
de seguridad o los fraudes informáticos- que deben integrarse en la gestión de ries-
gos corporativos de la entidad.

Profundidad y Oportunidad de la Información

La infraestructura de la información busca y capta datos dentro de un marco de tiem-


po y con una profundidad consecuentes con la necesidad de la entidad de identifi-
car, evaluar y responder al riesgo y permanecer dentro de las tolerancias a él. La
oportunidad del flujo de información necesita ser coherente con el ritmo de cambio
de los ámbitos externo e interno de la entidad.
La importancia de la profundidad de los datos se ilustra si observamos diferentes
eventos que afectan a una agencia de valores ubicada en una ciudad propensa a las
inundaciones. Para planificar la continuidad del negocio, la dirección mantiene un
conocimiento general de las condiciones de inundación potencial y está en situación
de aconsejar al personal cuándo desplazarse a las instalaciones de seguridad. La
información captada a este alto nivel es suficiente para permitir que la firma gestione
adecuadamente el riesgo. En contraste, como agencia de valores que es, la firma
busca y capta continuamente cambios en los precios de valores, bonos y bienes tan-
gibles hasta con varios decimales. Este nivel de oportunidad y detalle de los datos es

88
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 89

INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN

consecuente con la necesidad que tiene la firma de responder inmediatamente a los


cambios de precios que puedan generar riesgos, tales como una posición que asume
demasiado riesgos respecto a un solo sector de mercado o un valor que no con-
cuerda con el riesgo aceptado de la firma.
La infraestructura de información transforma los datos no tratados en información
relevante que ayuda al personal a llevar a cabo su gestión de riesgos corporativos y
demás responsabilidades. La información se proporciona en una forma y dentro de
un marco de tiempo que permite las actuaciones, es utilizable con facilidad y están
vinculadas a las responsabilidades definidas.
Los avances en la recogida, procesamiento y almacenamiento de datos han dado
como resultado un crecimiento exponencial del volumen de datos. Con más datos
disponibles –a menudo en tiempo real– para más gente en una organización, el reto
es evitar la “sobrecarga de información”, asegurando el flujo de la información ade-
cuada, en la forma adecuada, al nivel de detalle adecuado, a las personas adecua-
das y en el momento adecuado. En el desarrollo de la infraestructura de conocimien-
tos e información, hay que contemplar los distintos requisitos de información de los
usuarios y departamentos y la información de resumen necesaria para los diferentes
niveles de dirección.

Calidad de la Información

Dada la creciente dependencia en sofisticados sistemas de información y en siste-


mas y procesos para la toma de decisiones automatizados e impulsados por los
datos, es esencial la fiabilidad de estos últimos. Unos datos inexactos pueden dar
como resultado riesgos no identificados o pobres evaluaciones y decisiones empre-
sariales equivocadas.

La calidad de la información incluye averiguar si:


• Su contenido es adecuado – ¿Está al nivel correcto de detalle?
• Es oportuna – ¿Está disponible cuando se necesita y dentro de un plazo adecuado?
• Está actualizada – ¿Es la última información disponible?
• Es exacta – ¿Sus datos son correctos?
• Está accesible – ¿Las personas que la necesitan pueden obtenerla fácilmente?
Para impulsar la calidad de los datos, las entidades establecen programas corporati-
vos para su gestión que abarcan la adquisición, mantenimiento y distribución de
información relevante. Sin tales programas, los sistemas de información no podrían
facilitar la información que la dirección y otro personal requieren.
Los retos son muchos, pues los conflictos entre necesidades funcionales, restriccio-
nes del sistema y procesos no integrados pueden inhibir la adquisición y uso efecti-
vo de los datos. Para enfrentarse a ellos, la dirección establece un plan estratégico
con claras responsabilidades sobre la integridad de los datos y realiza periódica-
mente evaluaciones de su calidad.

89
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 90

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Para realizar una gestión de riesgos corporativos, es fundamental disponer de una


información correcta y en el lugar y momento adecuados. Por esto, los sistemas de
información, aunque constituyan un componente de la gestión de riesgos corporati-
vos, también deben ser controlados.

Comunicación

La comunicación es inherente a los sistemas de información. Como ya se ha comen-


tado antes, estos sistemas deben proporcionar información al personal adecuado,
para que pueda llevar a cabo sus responsabilidades operativas, de información y de
cumplimiento. Pero la comunicación también debe tener lugar en un sentido más
amplio, abordando las expectativas, las responsabilidades de los individuos y grupos
y otros temas importantes.

Comunicación Interna

La dirección proporciona comunicaciones específicas y orientadas que se dirigen a


las expectativas de comportamiento y las responsabilidades del personal. Esto inclu-
ye una exposición clara de la filosofía y enfoque de la gestión de riesgos corporati-
vos de la entidad y una delegación clara de autoridad. La comunicación sobre pro-
cesos y procedimientos debería alinearse con la cultura deseada y reforzarla.
La comunicación debe expresar eficazmente:
• La importancia y relevancia de una gestión eficaz de riesgos corporativos
• Los objetivos de la entidad
• El riesgo aceptado y las tolerancias al riesgo de la entidad
• Un lenguaje común de riesgos
• Los papeles y responsabilidades del personal al desarrollar y apoyar los compo-
nentes de la gestión de riesgos corporativos
Todo el personal, sobre todo aquél con responsabilidades importantes en la gestión
operativa o financiera, necesita recibir de la alta dirección un mensaje claro acerca de
que la gestión de riesgos corporativos debe realizarse seriamente. Son importantes
la claridad del mensaje y la eficacia con que se comunique.
El personal también debe saber cómo sus actividades se relacionan con el trabajo de
los demás. Este conocimiento es necesario para reconocer un problema o determi-
nar su causa y la acción correctora. También deben saber qué comportamiento es
considerado aceptable o no. Ha habido ejemplos muy difundidos de información
fraudulenta, en los que los directivos, bajo presión de cumplir los presupuestos, alte-
raron los resultados operativos. En algunos de estos casos, nadie les había dicho a
estos individuos que esta práctica podría ser ilegal o inadecuada, lo que subraya la
naturaleza crítica de cómo se comunican los mensajes dentro de una organización.
Un directivo que da instrucciones a sus subordinados diciendo “Hay que cumplir el
presupuesto. No me importa cómo lo hagan, pero háganlo” puede estar enviando un
mensaje equivocado sin darse cuenta.

90
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 91

INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN

Los empleados de línea que tratan los temas operativos críticos cada día son a menu-
do los mejor situados para reconocer los problemas cuando surgen y los canales de
comunicación deberían asegurar que el personal puede comunicar la información
basada en el riesgo a todas las unidades de negocio, procesos o funciones, además
de enviarla a sus superiores. Por ejemplo, los representantes comerciales o los gesto-
res de cuenta pueden enterarse de las necesidades importantes del cliente sobre el
diseño de un producto, el personal de producción puede conocer unas deficiencias
costosas de proceso y el personal de compras puede encontrarse con incentivos
inadecuados procedentes de los proveedores. Los fallos de comunicación pueden
ocurrir cuando se disuade a personas o unidades de negocio de que faciliten infor-
mación importante a otras personas o unidades o bien cuando aquellas no tienen
herramientas para hacerlo. El personal podría ser consciente de los riesgos importan-
tes, pero puede estar poco dispuesto a informar de ellos o ser incapaz de hacerlo.
Para que tal información sea informada, debe haber canales abiertos de comunica-
ción y una clara disposición de escucha. El personal debe creer que sus superiores
realmente quieren conocer los problemas y tratarlos eficazmente. La mayoría de los
directivos reconocen intelectualmente que deberían evitar la reacción de “matar al
mensajero”. Sin embargo, al calor del momento, pueden ser poco receptivos a las
personas que aportan problemas legítimos. El personal absorbe rápidamente las
señales orales o no orales cuando un superior no tiene el tiempo ni el interés para tra-
tar los problemas detectados. Y para colmo, el directivo poco receptivo es el último
en saber que el canal de comunicaciones ha sido efectivamente sellado.
En la mayoría de los casos, las líneas normales de información de una organización son
los canales adecuados de comunicación. En algunas circunstancias, sin embargo,
hacen falta líneas de comunicación independientes que sirvan como mecanismo de
seguridad en caso de que los canales normales no sean operativos. Junto con la super-
visión del consejo o del comité de auditoría, muchas empresas proporcionan, y hacen
que los empleados lo sepan, un canal directo al responsable de auditoría interna, al
asesor legal o a otro alto directivo con acceso al consejo de administración y las leyes
y normas exigen cada vez más que las compañías establezcan estos mecanismos.
Debido a su importancia, una gestión eficaz de riesgos corporativos requiere dicho
canal alternativo de comunicaciones. Sin ambos canales de comunicación abiertos y
sin disposición a escuchar, el flujo ascendente de información puede bloquearse.
Es importante que el personal entienda que no habrá represalias por comunicar infor-
mación relevante. Se envía un mensaje claro con la existencia de mecanismos que
animen a los empleados a informar de las violaciones sospechadas del código de
conducta de una entidad o por el trato que se dé al personal que presente denuncias.
Puede potenciarse estos mensajes importantes con un código de conducta integral y
relevante, sesiones de formación del personal, mecanismos corporativos permanentes
de comunicaciones y retroalimentación y un ejemplo adecuado de la alta dirección.
Entre los canales más críticos de comunicación está aquél entre la alta dirección y el
consejo de administración. La dirección debe mantener al día al consejo sobre el fun-
cionamiento de la entidad, los riesgos que afronta, la gestión corporativa de estos
últimos y demás eventos o temas relevantes. Cuanto mejor sean las comunicaciones,
más eficaz será el consejo en llevar a cabo sus responsabilidades supervisoras
–actuando como una caja de resonancia para la dirección en temas críticos, siguien-
do sus actividades y facilitando consejos y orientación. Del mismo modo, el consejo

91
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 92

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

debería comunicar sus necesidades de información a la dirección y, a su vez, pro-


porcionarle retroalimentación y guía.

Comunicación Externa

Existe la necesidad de una comunicación adecuada no sólo dentro de la entidad, sino


también con el mundo exterior. Con canales de comunicación externos abiertos, los
clientes y proveedores pueden proporcionar inputs muy significativos sobre el dise-
ño o la calidad de los productos o servicios, permitiendo a la empresa tratar las
demandas o preferencias del cliente en evolución. Por ejemplo, las quejas y reclama-
ciones presentadas por los clientes o proveedores acerca de entregas, cobros, fac-
turas o demás actividades a menudo señalan problemas operativos y posiblemente
prácticas fraudulentas o inadecuadas. La dirección debería estar dispuesta a reco-
nocer las implicaciones de tales circunstancias e investigar y tomar las necesarias
medidas correctivas, centrándose en el impacto sobre la información financiera, el
cumplimiento y los objetivos operativos.
Una comunicación abierta sobre el riesgo tolerado y la tolerancia al riesgo es impor-
tante, particularmente para entidades vinculadas con otras en cadenas de suministro
o empresas de comercio electrónico. En tales casos, la dirección considera cómo
ambos conceptos se alinean con los de sus asociados, asegurando que no se acep-
te inadvertidamente demasiado riesgo a través de sus socios.
La comunicación con grupos de interés, reguladores, analistas financieros y otros ter-
ceros les proporciona información relevante para sus necesidades, pues pueden
comprender rápidamente las circunstancias y riesgos a los que se enfrenta la entidad.
Esta comunicación debería ser significativa, pertinente y oportuna y estar de acuer-
do con las disposiciones legales y regulatorias.
El compromiso de la dirección con la comunicación hacia terceros –si es abierta, fran-
ca y seria en el seguimiento o no lo es– también envía un mensaje a través de la orga-
nización.

Medios de Comunicación

La comunicación puede tomar formas tales como un manual de políticas, escritos


internos, correos electrónicos, novedades en los tablones de anuncios, mensajes en
la web y de vídeo. Cuando los mensajes se transmiten verbalmente –en grandes gru-
pos, reuniones reducidas o entrevistas personales– el tono de voz y el lenguaje cor-
poral ponen énfasis a lo que se está diciendo.
La manera como la dirección trata al personal puede comunicar un mensaje potente.
Los directivos deberían recordar que sus acciones hablan más fuerte que sus palabras.
Dichas acciones están, a su vez, influidas por la historia y cultura de la entidad, basa-
das en observaciones anteriores de cómo sus mentores trataron situaciones similares.
Una entidad con un historial de integridad operativa y cuya cultura está bien asumi-
da por las personas de la organización, probablemente tenga poca dificultad para
comunicar su mensaje. Una entidad sin tal tradición necesitará esforzarse más en la
forma en que comunique sus mensajes.

92
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 93

9. Supervisión

Resumen del capítulo: La gestión de riesgos corporativos se supervisa - revi-


sando la presencia y funcionamiento de sus componentes a lo largo del tiempo,
lo que se lleva a cabo mediante actividades permanentes de supervisión, eva-
luaciones independientes o una combinación de ambas técnicas. Durante el
transcurso normal de las actividades de gestión, tiene lugar una supervisión per-
manente. El alcance y frecuencia de las evaluaciones independientes depende-
rá fundamentalmente de la evaluación de riesgos y la eficacia de los procedi-
mientos de supervisión permanente. Las deficiencias en la gestión de riesgos
corporativos se comunican de forma ascendente, trasladando los temas más
importantes a la alta dirección y al consejo de administración.

La gestión de riesgos corporativos de una entidad cambia con el tiempo. Las res-
puestas a los riesgos que antaño eran eficaces pueden llegar a ser irrelevantes, las
actividades de control pueden resultar menos eficaces o inexistentes o los objetivos
de la entidad pueden cambiar. Esto puede ser debido a la llegada de nuevo personal,

93
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 94

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

cambios en la estructura u orientación de la entidad o la introducción de nuevos pro-


cesos. Enfrentada a tales cambios, la dirección necesita determinar si el funciona-
miento de la gestión de riesgos corporativos continua siendo eficaz.
La supervisión puede realizarse de dos maneras: a través de actividades permanen-
tes o mediante evaluaciones independientes. Los mecanismos de gestión de riesgos
corporativos normalmente se estructuran para que puedan autocontrolarse perma-
nentemente, al menos hasta cierto punto. Cuanto mayor es el alcance y eficacia de
la supervisión permanente, existe menor necesidad de elaborar evaluaciones inde-
pendientes. La frecuencia necesaria de éstas últimas para que la dirección tenga una
seguridad razonable de la eficacia de la gestión de riesgos corporativos es una cues-
tión de criterio de la dirección. Para determinarla, se tendrá en cuenta la naturaleza y
alcance de los cambios producidos y sus riesgos correspondientes, la competencia
y experiencia del personal que implanta las respuestas a los riesgos y sus controles
correspondientes y, también, los resultados de la supervisión permanente.
Normalmente, alguna combinación de supervisión permanente y evaluaciones inde-
pendientes asegurará que la gestión de riesgos corporativos mantiene su eficacia en
el tiempo.
La supervisión permanente está integrada en las actividades operativas normales y
recurrentes de una entidad. La supervisión se lleva a cabo en tiempo real, reacciona
de modo dinámico a las condiciones cambiantes y está integrada en la entidad, de
tal manera que resulta más eficaz que las evaluaciones independientes. Como las
evaluaciones independientes tienen lugar después de los hechos, a menudo los pro-
blemas se identificarán más rápidamente con las pautas de supervisión permanente.
Muchas entidades con sólidas actividades de supervisión permanente realizan, sin
embargo, evaluaciones independientes de la gestión de riesgos corporativos periódi-
camente. Una entidad que perciba alguna necesidad de realizar frecuentes evalua-
ciones independientes debería centrarse en la mejora de sus actividades de supervi-
sión permanente.

Actividades de Supervisión Permanente

Muchas actividades sirven para seguir la eficacia de la gestión de riesgos corporati-


vos durante el transcurso normal del negocio. Se derivan de las actividades norma-
les de gestión, que podrían implicar análisis de varianza, comparaciones de informa-
ción procedente de fuentes diferentes y el análisis y tratamiento de acontecimientos
inesperados.
Son los directivos de línea o función de apoyo quienes llevan a cabo las actividades
de supervisión y dan meditada consideración a las implicaciones de la información
que reciben. Al centrarse en relaciones, incoherencias u otras implicaciones relevan-
tes, plantean cuestiones y las siguen con otro personal, según sea necesario, para
determinar si es precisa una acción correctiva o de otro tipo. Las actividades perma-
nentes de supervisión se distinguen de las actividades de funcionamiento según lo
requiera la política de procesos de negocio. Por ejemplo, se definen mejor como acti-
vidades de control las aprobaciones de transacciones, las conciliaciones de saldos y
la verificación de exactitud de los cambios en los ficheros maestros, realizadas según
las pautas marcadas por los sistemas informáticos o los procesos de contabilidad.

94
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 95

SUPERVISIÓN

La figura 9.1 incluye ejemplos de actividades de supervisión permanente.

• Los directivos que revisan los informes operativos, usados para gestionar las operaciones de modo
permanente, pueden detectar inexactitudes o excepciones relativas a los resultados esperados. Por
ejemplo, los directores de ventas, compras y producción al nivel de división, filial y entidad que están
en contacto con las operaciones pueden cuestionar los informes que discrepen significativamente
de su conocimiento de las operaciones. Una información oportuna y completa y la resolución de
dichas excepciones mejoran la eficacia del proceso.

• Los cambios en la información incluida en los modelos de valor en riesgo usados para evaluar los
impactos de los movimientos potenciales del mercado sobre la posición financiera de la entidad se
refieren a las transacciones financieras comunicadas, centrándose en las relaciones esperadas.

• Las comunicaciones de terceros corroboran la información generada internamente o indican inci-


dencias. De hecho, los clientes contrastan implícitamente los datos de facturación efectuando su
pago. Por otro lado, las reclamaciones de clientes sobre facturas podrían indicar deficiencias en el
sistema de procesamiento de las transacciones de ventas. Asimismo, los informes de los directores
de inversión sobre beneficios, pérdidas e ingresos en operaciones con valores pueden confirmar los
registros de la entidad (o los propios de los directores) o señalar problemas en ellos. La revisión de
las políticas y prácticas de seguridad en una empresa aseguradora proporciona información sobre
la seguridad operativa y el grado de cumplimiento.

• Los reguladores se comunican con la dirección sobre temas de cumplimiento u otros que reflejan el
funcionamiento de la gestión de riesgos corporativos.

• Los auditores y asesores internos y externos facilitan periódicamente recomendaciones para refor-
zar la gestión de riesgos corporativos. Los auditores pueden prestar una atención considerable a los
riesgos claves, las respuestas a ellos y el diseño de las actividades de control. Pueden identificarse
debilidades potenciales y recomendarse a la dirección acciones alternativas, acompañadas de infor-
mación útil para efectuar determinaciones sobre coste-beneficio. Los auditores internos y otro per-
sonal que desarrolle funciones similares de revisión pueden ser particularmente eficaces en la super-
visión de las actividades de la entidad.

• Los seminarios de formación, sesiones de planificación y otras reuniones proporcionan una retroa-
limentación importante a la dirección sobre si la gestión de riesgos corporativos está siendo eficaz.
Junto a problemas particulares que pueden indicar la presencia de temas de riesgo, a menudo se
hace patente la consciencia de los participantes respecto al riesgo y el control interno.

• Durante el transcurso normal de la gestión del negocio, los directivos comentan con el personal
temas tales como su entendimiento del código de conducta de la identidad, cómo identifican los
riesgos y asuntos relacionados con el control de las actividades. Estos comentarios confirman el
funcionamiento correcto de los componentes de la gestión de riesgos corporativos o sacan a la
superficie cuestiones que requieren atención.

Figura 9.1

Evaluaciones Independientes

Aunque los procedimientos de seguimiento permanente normalmente proporcionan


una retroalimentación importante sobre la eficacia de otros componentes de la ges-
tión de riesgos corporativos, puede resultar provechoso echar un nuevo vistazo de
vez en cuando, centrándose directamente sobre la eficacia de dicha gestión. Esto
también proporciona una oportunidad de tener en cuenta la eficacia continuada de
los procedimientos de supervisión permanente.

95
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 96

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Alcance y Frecuencia

Las evaluaciones de la gestión de riesgos corporativos varían en alcance y frecuen-


cia según la significatividad de los riesgos y la importancia de las respuestas a ellos,
así como los correspondientes controles disponibles para gestionarlos. Las áreas de
riesgo de alta prioridad y sus respuestas tienden a evaluarse más a menudo. La eva-
luación de la totalidad de la gestión de riesgos corporativos –que generalmente se
necesita con menor frecuencia que la evaluación de partes concretas de la entidad-
puede estar suscitada por diversas razones: cambios importantes en la estrategia o
gestión, adquisiciones o enajenaciones, cambios en las condiciones económicaso
políticas y cambios en las operaciones o los métodos de procesamiento de datos.
Cuando se toma la decisión de realizar una evaluación integral de la gestión de ries-
gos corporativos de una entidad, hay que dirigir la atención hacia su aplicación en
el establecimiento de la estrategia, así como en relación con las actividades signifi-
cativas. El alcance de la evaluación también dependerá de qué categorías de objeti-
vos –estratégicos, operativos, de información y de cumplimiento- van a tenerse en
cuenta.

Quién Evalúa

A menudo, las evaluaciones tienen la forma de autoevaluaciones, en las que los res-
ponsables de una determinada unidad o función establecen la eficacia de la gestión
de riesgos corporativos en sus actividades. Por ejemplo, el consejero delegado de
una división dirige la evaluación de sus actividades de gestión de riesgos.
Personalmente, evalúa las actividades relativas a las decisiones estratégicas y los
objetivos de alto nivel, junto al componente de ámbito interno, mientras que las per-
sonas responsables de las diversas actividades operativas de la división evalúan la
eficacia de los componentes de la gestión de riesgos relacionados con sus respecti-
vas áreas de responsabilidad. Los directores de línea se centran en los objetivos ope-
rativos y de cumplimiento y el controller de la división afronta los objetivos de infor-
mación. A continuación, la alta dirección considera las evaluaciones de la división,
junto con las de otras divisiones de la empresa.
Los auditores internos normalmente realizan evaluaciones como parte de sus funcio-
nes normales o a petición expresa de la alta dirección, el consejo de administración
o los directivos de filiales y divisiones. Asimismo, la dirección puede utilizar informa-
ción de los auditores externos para considerar la eficacia de la gestión de riesgos
corporativos. Se puede aplicar una combinación de esfuerzos a la realización de los
procedimientos de evaluación que la dirección estime necesarios.

Proceso de Evaluación

La evaluación de la gestión de riesgos corporativos constituye un proceso en sí


misma. Aunque los enfoques o técnicas varían, hay que aportar al proceso una dis-
ciplina, con ciertos fundamentos inherentes a ella.
El evaluador debe entender cada actividad de la entidad y cada componente de la
gestión de riesgos corporativos a abordar. Puede resultar útil centrarse primero en

96
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 97

SUPERVISIÓN

cómo la gestión de riesgos corporativos funciona de manera significativa –a veces,


esto se denomina diseño del sistema o proceso.
El evaluador debe determinar cómo funciona el sistema en realidad. Los procedi-
mientos diseñados para operar de un modo concreto pueden ser modificados con el
tiempo para operar de forma diferente o ser eliminados. A veces, se establecen pro-
cedimientos nuevos que no son conocidos por aquellos que describieron el proceso
y no están incluidos en la documentación disponible. Una determinación sobre el fun-
cionamiento real puede realizarse manteniendo entrevistas con el personal operativo
o que resulte afectado por la gestión de riesgos corporativos, con análisis de los
registros de funcionamiento o una combinación de procedimientos.
El evaluador analiza el diseño del proceso de gestión de riesgos corporativos y los
resultados de las pruebas realizadas. El análisis se lleva a cabo contrastado el fun-
cionamiento con el trasfondo de normas establecidas por la dirección para cada
componente, con el objetivo último de determinar si el proceso proporciona seguri-
dad razonable respecto a los objetivos fijados.

Metodología

Se dispone de una variedad de metodologías y herramientas de evaluación, incluyen-


do listas de comprobación, cuestionarios, cuadros de mando y técnicas de diagramas
de flujo. Como parte de su metodología de evaluación, algunas empresas comparan su
proceso de gestión de riesgos corporativos con el de otras empresas con buena repu-
tación en este terreno, que pueden facilitar información comparativa. Las comparacio-
nes pueden realizarse directamente o bajo el control de asociaciones mercantiles o sec-
toriales y, así, las funciones de revisión cercana de algunos sectores pueden ayudar a
una empresa a evaluar su gestión de riesgos corporativos respecto a sus iguales. Pero
es necesaria cierta precaución pues, en el momento de realizar las comparaciones, hay
que tener en cuenta las diferencias respectivas que existen en objetivos, hechos y cir-
cunstancias. Los ocho componentes de la gestión de riesgos corporativos, además de
las limitaciones inherentes a ella, se deberán tener en consideración.

Documentación

El alcance de la documentación sobre gestión de riesgos corporativos de una enti-


dad varía con su dimensión, complejidad y factores similares. Las organizaciones
más grandes normalmente disponen de manuales escritos de políticas, organigramas
formales, descripciones escritas de las funciones del personal, instrucciones opera-
tivas y diagramas de flujo de los sistemas de información. Las entidades más peque-
ñas habitualmente tienen un volumen considerablemente menor de documentación.
Muchos aspectos de su gestión de riesgos corporativos son informales y no están
documentados, aunque se llevan a cabo de manera periódica y muy eficaz. Se pue-
den efectuar comprobaciones de estas actividades del mismo modo que en el caso
de actividades documentadas. El hecho de que los componentes de la gestión de
riesgos corporativos no estén documentados no significa que no sean eficaces o que
no puedan evaluarse. Sin embargo, un nivel adecuado de documentación normal-
mente hace que las evaluaciones sean más eficaces y eficientes.

97
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 98

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

El evaluador puede decidir documentar el proceso de evaluación en sí mismo.


Normalmente, se parte de documentación existente en la gestión de riesgos corpo-
rativos de la entidad y, habitualmente, se complementa este proceso con documen-
tación adicional, junto con descripciones de las pruebas y los análisis efectuados
durante la evaluación.
Si la dirección tiene la intención de enviar una declaración a terceros relativa a la efi-
cacia de su gestión de riesgos corporativos, debería tener en cuenta el desarrollo y
retención de la documentación que dé soporte a tal afirmación. Esta documentación
puede resultar útil si posteriormente se pone dicho mensaje en entredicho.

Información de Deficiencias

Las deficiencias en la gestión de riesgos corporativos de una entidad pueden proce-


der de muchas fuentes, incluyendo los procedimientos de supervisión permanente de
la entidad, las evaluaciones independientes e información de terceros. Una deficien-
cia es una situación dentro de la gestión de riesgos corporativos que merece aten-
ción y que puede representar una debilidad percibida, potencial o real, o una oportu-
nidad para fortalecer la gestión de riesgos corporativos y aumentar la probabilidad de
que se logren los objetivos de la entidad.

Fuentes de Información

Una de las mejores fuentes de información sobre las deficiencias de la gestión de


riesgos corporativos es la misma gestión de riesgos. Las actividades de supervisión
permanente de una empresa, incluyendo las acciones directivas y la supervisión dia-
ria de los empleados, generan ideas de aquellos directamente involucrados en las
actividades de la entidad. Estas ideas surgen en tiempo real y pueden proporcionar
una rápida identificación de deficiencias. Otras fuentes de éstas son las evaluaciones
independientes de gestión de riesgos corporativos. Tanto las realizadas por la direc-
ción, los auditores internos u otras funciones, pueden destacar áreas con necesida-
des de mejora.
Los terceros proporcionan frecuentemente información importante sobre el funciona-
miento de la gestión de riesgos corporativos de una entidad. Entre ellos se incluyen
clientes, proveedores, y otros que colaboran con la entidad, así como los auditores
externos y reguladores. Los informes procedentes de fuentes externas deberían con-
templarse cuidadosamente por sus implicaciones para la gestión de riesgos corpora-
tivos y las acciones correctivas que deban aplicarse.

De qué se Informa

¿Qué es lo que se debería informar?. Aunque no sea posible una respuesta universal,
hay ciertos parámetros que pueden delimitarse.
Todas las deficiencias identificadas de gestión de riesgos corporativos que afectan a
la capacidad de la entidad para desarrollar e implantar su estrategia y establecer y
alcanzar sus objetivos deberían comunicarse a quienes se encuentran en posición de

98
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 99

SUPERVISIÓN

tomar las medidas necesarias. La naturaleza de los temas a comunicar variará según
la autoridad individual para abordar las circunstancias que surjan y las actividades de
supervisión de sus superiores. Al considerar qué se necesita comunicar, es preciso
observar las implicaciones de los resultados. No sólo es esencial que se informe de
una transacción o evento determinado, sino también que se vuelvan a evaluar aque-
llos procedimientos potencialmente defectuosos.
Se puede argumentar que no existe ningún problema tan insignificante que no merez-
ca una investigación de sus implicaciones. Que un empleado coja un poco de dinero
de la caja para su uso personal, por ejemplo, no es un hecho significativo en sí mismo
y probablemente ni en términos del importe total manejado en dicha caja. Así que la
investigación podría no valer la pena. Sin embargo, la aparente aprobación del uso
personal del dinero de la entidad que esa inacción supondría, transmitiría un mensa-
je equivocado a los empleados.
Junto a las deficiencias, también debería informarse de las oportunidades identifica-
das que puedan aumentar la probabilidad de conseguir los objetivos de la entidad.

A quién se Informa

La información generada en el transcurso de las actividades operativas es usual-


mente comunicada a través de los canales normales a los superiores inmediatos,
quienes, a su vez, pueden trasladarla en todas direcciones de la organización, para
que acabe en las personas que pueden y deberían actuar al respecto. Los canales de
comunicación alternativos también deberían existir para difundir la información sen-
sible, tales como los actos ilegales o inadecuados. Ante el hallazgo de deficiencias
en la gestión de riesgos corporativos, normalmente debería informarse no sólo al res-
ponsable de la función o actividad implicada, sino también, al menos, al nivel inme-
diato por encima de esta persona. Un nivel superior de la dirección proporciona el
necesario apoyo o supervisión para tomar acciones correctoras y está en posición de
comunicarse con otras personas de la organización cuyas actividades pueden estar
afectadas. Cuando lo averiguado traspasa demarcaciones organizativas, la informa-
ción también debería atravesarlas, dirigiéndose a un nivel superior suficientemente
alto para asegurar que se toman las medidas adecuadas.

Directrices de Información

Es esencial facilitar al responsable adecuado la necesaria información sobre las defi-


ciencias de gestión de riesgos corporativos. Hay que establecer protocolos para
identificar qué información se necesita a un nivel determinado para tomar decisiones
eficazmente.
Tales protocolos reflejan la regla general de que un directivo debería recibir la infor-
mación que afecta a las acciones o el comportamiento del personal bajo su respon-
sabilidad, además de aquella otra necesaria para alcanzar objetivos específicos. Un
consejero delegado normalmente desearía estar informado, por ejemplo, de las
infracciones serias de políticas y procedimientos y también querría recibir información
de soporte sobre temas que pudieran tener impacto financiero o implicaciones estra-
tégicas significativas o afectar a la reputación de la entidad.

99
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 100

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Los altos directivos deberían ser informados de las deficiencias en la gestión de ries-
gos y de control que afecten a sus unidades. Ejemplos de ellas son las circunstan-
cias en que los activos con un determinado valor monetario no están protegidos ade-
cuadamente, donde la competencia de los empleados es insuficiente o cuando no se
llevan a cabo correctamente las conciliaciones financieras. Los directivos deberían
ser informados de las deficiencias en sus unidades, con niveles de detalle en aumen-
to cuanto más se desciende por la estructura organizativa.
Los supervisores definen los protocolos de información para sus subordinados. El
grado de especificidad variará, aumentando normalmente en los niveles inferiores de
la organización. Aunque dichos protocolos puedan impedir una información eficaz si
se definen de modo demasiado restrictivo, ésta se puede mejorar proporcionándole
flexibilidad suficiente.
Las partes interesadas a las que hay que comunicar las deficiencias a veces propor-
cionan directrices concretas respecto a lo que debería comunicarse. Un consejo de
administración o comité de auditoría, por ejemplo, puede solicitar a la dirección o a
los auditores internos o externos que comuniquen sólo aquellas deficiencias que
alcancen un determinado umbral de importancia.

100
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 101

10. Roles y responsabilidades

Resumen del capítulo: Todo el personal de una entidad tiene alguna respon-
sabilidad en la gestión de riesgos corporativos. El consejero delegado es res-
ponsable en último lugar y debería asumir su “titularidad”. Otros directivos apo-
yan la filosofía de gestión de riesgos, promocionan el cumplimiento del riesgo
aceptado y gestionan los riesgos dentro de sus áreas de responsabilidad, en
coherencia con las tolerancias al riesgo. Otras personas son responsables de
desarrollar la gestión de riesgos corporativos según las directivas y protocolos
establecidos. El consejo de administración proporciona una importante super-
visión de dicha gestión. Algunos terceros facilitan a menudo información útil
para llevarla a cabo, aunque no sean responsables de su eficacia.

La gestión de riesgos corporativos es efectuada por diversas partes implicadas, cada


una con responsabilidades importantes. El consejo de administración (directamente
o través de sus comités), la dirección, los auditores internos y otro personal, todos
hacen importantes contribuciones a la gestión de riesgos. Otras partes afectadas,
tales como los auditores externos y los organismos reguladores, son asociados a
veces a las evaluaciones de riesgo y el control interno. Sin embargo, existe una dis-
tinción entre aquellos que forman parte del proceso de la gestión de riesgos corpo-
rativos de una entidad y los que no, cuyas acciones, sin embargo, pueden afectar al
proceso o, de otro modo, ayudar a la entidad a conseguir sus objetivos. Ayudar de
modo directo o indirecto a una entidad a conseguir sus objetivos, sin embargo, no
hace que un tercero forme parte de la gestión de riesgos corporativos de la entidad
o sea responsable de ella.

Personal de la Entidad

El consejo de administración, la dirección, los directores financieros y de riesgos, los


auditores internos y, de hecho, toda persona de la entidad, contribuyen a una gestión
eficaz de riesgos corporativos.

Consejo de Administración

La alta dirección responde ante el consejo de administración, que proporciona super-


visión, asesoramiento y orientación. Mediante la selección del equipo directivo, el
consejo desempeña su principal papel en la definición de lo que espera en cuanto a

101
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 102

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

integridad y valores éticos, y mediante sus actividades de supervisión puede deter-


minar si se cumplen sus expectativas. De forma similar, al reservarse autoridad en
ciertas decisiones claves, el consejo juega un papel en la formulación de la estrate-
gia, estableciendo los objetivos de alto nivel, y en la asignación de recursos en sen-
tido amplio.
El consejo facilita su supervisión con respecto a la gestión de riesgos corporativos
cuando:
• Sabe hasta qué punto la dirección ha establecido una gestión eficaz de riesgos cor-
porativos en la organización
• Es consciente del riesgo aceptado por la entidad y está de acuerdo con él
• Revisa la perspectiva de carteras de riesgos de la entidad y la contrasta con el ries-
go aceptado por ella
• Está informado de los riesgos más significativos y de si la dirección está respon-
diendo adecuadamente
El consejo forma parte del componente de ámbito interno de la gestión de riesgos
corporativos y debe tener la composición y enfoque necesarios para conseguir que
ésta sea eficaz.
Los miembros eficaces de un consejo son objetivos, capaces e inquisitivos. Tienen
un conocimiento práctico de las actividades y el entorno de la entidad y dedican el
tiempo necesario al cumplimiento de sus responsabilidades como consejeros.
Utilizan los recursos necesarios para dirigir investigaciones especiales y mantienen
comunicaciones abiertas y sin restricciones con los auditores internos y externos y
con los asesores legales.
Los consejos de administración pueden utilizar comités para llevar a cabo sus fun-
ciones. Su uso y enfoque varían de una entidad a otra, aunque los comités más
comunes son los de nombramientos/gobierno corporativo, remuneración y auditoría,
cada uno de ellos atendiendo a componentes de la gestión de riesgos corporativos.
El comité de nombramientos, por ejemplo, identifica y tiene en cuenta las cualifica-
ciones de los previsibles miembros del consejo, mientras que el comité de remune-
ración considera la adecuación de los sistemas de motivación y compensación, equi-
librando programas sanos de incentivos, con la necesidad de evitar la innecesaria
tentación de manipular las variables base de la compensación. El comité de audito-
ría tiene un papel directo en la fiabilidad de la información al exterior y debe conocer
los riegos claves relativos a ella. El consejo y sus comités forman una parte impor-
tante de la gestión de riesgos corporativos.

La Dirección

La dirección es responsable de todas las actividades de una entidad, incluyendo la


gestión de riesgos corporativos. Naturalmente, los directivos a diferentes niveles tie-
nen distintas responsabilidades en la gestión de riesgos corporativos, que varían
según las características de una entidad, a veces de modo significativo.
En cualquier entidad, el consejero delegado tiene la responsabilidad última sobre la
gestión de riesgos corporativos. Uno de los aspectos más importantes de dicha res-

102
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 103

ROLES Y RESPONSABILIDADES

ponsabilidad es el de asegurar la presencia de un ambiente interno positivo. Más que


cualquier otro individuo o función, el consejero delegado marca el talante en la cum-
bre de la organización, que influye en los factores del ambiente interno y en otros
componentes de la gestión de riesgos corporativos. Un consejero delegado también
puede influir en el consejo de administración, a través de cualquier influencia que
tenga en la identificación de nuevos miembros, en marcar un ejemplo que sirva para
atraer o alejar candidatos para el consejo. Cada vez más, estos candidatos miran con
cuidado la integridad y valores éticos de la alta dirección en el momento de decidir si
quieren aceptar el nombramiento que se les ha ofrecido. Los potenciales consejeros
también están centrados en si la gestión de riesgos corporativos de la entidad posee
los fundamentos críticos necesarios de integridad y valores éticos que hagan posible
su eficacia.
Las responsabilidades del consejero delegado incluyen asegurar que están en su
lugar todos los componentes de la gestión de riesgos corporativos. El consejero dele-
gado generalmente realiza esta función a través de las siguientes actuaciones:
• Proporcionar liderazgo y orientación a los altos directivos. Junto con ellos, el con-
sejero delegado configura los valores, principios y políticas operativas importantes
que constituyen los cimientos de la gestión de riesgos corporativos de la entidad.
El consejero delegado y los altos directivos establecen los objetivos estratégicos, la
estrategia y los correspondientes objetivos de alto nivel. También formulan las polí-
ticas, en sentido amplio, desarrollan la cultura de la entidad y establecen su filoso-
fía de gestión de riesgos y el nivel de riesgo aceptado. Ejecutan acciones que con-
ciernen a la estructura organizativa de la entidad, el contenido y comunicación de
las políticas claves y el tipo de planificación y sistemas de información a usar
• Reunirse periódicamente con los altos directivos responsables de las áreas funcio-
nales importantes –ventas, marketing, producción, compras, finanzas, recursos
humanos– para revisar sus responsabilidades, incluyendo cómo gestionan los ries-
gos. El consejero delegado adquiere conocimientos de los riesgos inherentes a las
operaciones, las respuestas a ellos, las mejoras necesarias de control y la situación
de las acciones en marcha. Para desempeñar esta responsabilidad, el consejero
delegado debe definir claramente la información que necesita.
Con sus conocimientos, el consejero delegado está en posición de supervisar las
actividades y riesgos en relación con el riesgo aceptado por la entidad. Cuando la
evolución de las circunstancias, los riesgos emergentes, la implantación de la estra-
tegia o acciones esperadas indiquen un potencial desajuste con el riesgo aceptado,
el consejero delegado tomará las medidas necesarias para restablecer la concordan-
cia y comentará con el consejo de administración la posibilidad de acciones ulterio-
res o de ajustar el riesgo aceptado por la entidad.
Los altos directivos a cargo de las unidades organizativas tienen la responsabilidad
de gestionar los riesgos relacionados con los objetivos de sus unidades. Convierten
la estrategia en operaciones, identifican los eventos, evalúan los riesgos y deciden las
respuestas a éstos. Los directivos orientan la aplicación de los componentes de la
gestión de riesgos corporativos en sus áreas de responsabilidad y aseguran que sea
coherente con las tolerancias al riesgo. En este sentido, existe una cadena descen-
dente de responsabilidad, donde cada directivo es como un consejero delegado de
su área de responsabilidad.

103
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 104

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Los altos directivos normalmente delegan la responsabilidad sobre los procedimien-


tos específicos de gestión de riesgos corporativos en los respectivos directivos de los
procesos, funciones o departamentos. Por tanto, estos directivos normalmente jue-
gan un papel muy participativo en el diseño y desarrollo de procedimientos de riesgo
relativos a los objetivos de la unidad, tales como las técnicas para identificar eventos
y evaluar riesgos, y en la determinación de respuestas, tales como el desarrollo de
protocolos para la compra de materias primas o la aceptación de nuevos clientes.
También formulan recomendaciones sobre las actividades de control, supervisan su
aplicación y se reúnen con los directivos de nivel superior para informarles de su fun-
cionamiento.
Esto puede implicar la investigación de eventos o condiciones externas, errores en la
entrada de datos y transacciones que aparecen en los informes de excepciones, ana-
lizando las causas de desviación frente a los presupuestos de gastos de un departa-
mento y haciendo un seguimiento de los pedidos rechazados por clientes o los nive-
les de inventario de productos. Los temas significativos, tanto si corresponden a una
transacción determinada o son un índice de una preocupación más importante, se
comunican de manera ascendente en la organización.
Las funciones de apoyo, tales como las de recursos humanos, cumplimiento y ase-
soría legal, también tienen importantes papeles de soporte en el diseño o configura-
ción de los componentes de una gestión eficaz de riesgos corporativos. La función
de recursos humanos puede diseñar y ayudar a implantar programas de formación
sobre el código de conducta de la entidad y otras políticas amplias, a menudo des-
arrollados junto con los líderes de las unidades de negocio. Las funciones legales
facilitan información a los directores de línea sobre las nuevas legislaciones y normas
que afectan a las políticas operativas y además, bien sus propios responsables o los
de la función de cumplimiento, suministran información esencial sobre si las transac-
ciones planificadas o los protocolos se adecuan a los requisitos legales y éticos.
Las responsabilidades de los directivos deberían abarcar tanto la autoridad como la ren-
dición de cuentas. Cada directivo debería responder ante su nivel inmediato superior por
su parte de gestión de riesgos corporativos, siendo el consejero delegado el responsa-
ble último ante el consejo de administración. Aunque diferentes niveles de dirección tie-
nen distintas responsabilidades y funciones de gestión de riesgos corporativos, sus
acciones deberían fundirse en la gestión de riesgos corporativos de la entidad.

Responsable de Riesgos

Algunas empresas han establecido un punto centralizado de coordinación para faci-


litar la gestión de riesgos corporativos. Un responsable de riesgo – denominado en
algunas organizaciones como director o gerente de riesgos– trabaja junto a otros
directivos para establecer una gestión eficaz de riesgos corporativos en sus respec-
tivas áreas de responsabilidad. Este responsable, nombrado por el consejero dele-
gado y en dependencia directa de él, tiene recursos para ayudar a efectuar la gestión
de riesgos a través de las filiales, negocios, departamentos, funciones y actividades.
El director de riesgos puede tener la responsabilidad de supervisar el progreso de
dicha gestión y ayudar a los demás directivos a informar sobre los riesgos relevantes
que existen en la entidad en todas direcciones. El director de riesgos también puede
servir como un canal complementario de información.

104
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 105

ROLES Y RESPONSABILIDADES

Algunas empresas asignan este papel a otro alto directivo, tales como el director
financiero, el máximo responsable legal, el director de auditoría interna o el director
de cumplimiento. Otras han decidido que la importancia y amplitud del alcance de
esta función requieren una asignación funcional y recursos diferenciados.
Las empresas han visto que este papel tiene más éxito cuando se establecen clara-
mente sus responsabilidades como función de apoyo –proporcionando soporte y
ayuda a los directores de línea. Para que la gestión de riesgos corporativos sea efi-
caz, los directores de línea deben asumir la responsabilidad primordial de dicha ges-
tión en sus áreas respectivas.
Las responsabilidades del director de riesgos pueden incluir lo siguiente:
• Establecer las políticas de la gestión de riesgos corporativos, incluyendo la defini-
ción de papeles y responsabilidades, y participar en la formulación de objetivos
para su implantación
• Enmarcar la autoridad y responsabilidad de la gestión de riesgos corporativos en
las unidades de negocio
• Promover las capacidades de gestión de riesgos corporativos en toda la entidad,
facilitando el desarrollo de pericia técnica en dicha gestión y ayudando a los direc-
tivos a alinear las respuestas a los riesgos con las tolerancias a ellos y la aplicación
de adecuados controles
• Guiar la integración de la gestión de riesgos corporativos con otras actividades de
planificación del negocio y de gestión
• Establecer un lenguaje común para la gestión de riesgos que incluya la unificación
de medidas de su probabilidad e impacto y de las categorías de riesgo
• Ayudar a los directivos a desarrollar protocolos de información, incluyendo umbra-
les cuantitativos y cualitativos, y a supervisar el proceso de distribución de informes
• Informar al consejero delegado sobre el progreso y las excepciones resultantes, así
como de las acciones necesarias recomendadas

Directivos Financieros

Los controllers y directores financieros, con sus equipos, son particularmente impor-
tantes para las actividades de gestión de riesgos corporativos, pues sus actividades
propias inciden ascendente y descendentemente en todas las unidades operativas y
de negocio. Con mucha frecuencia, estos directivos están implicados en el desarrollo
de presupuestos y planes globales de la entidad, al mismo tiempo que siguen y ana-
lizan su funcionamiento, a menudo desde una perspectiva operativa, de cumplimien-
to y de información. Estas actividades usualmente forman parte de una organización
central o “corporativa”, aunque normalmente también tienen una responsabilidad
“autorizativa” para supervisar las actividades de divisiones, filiales y demás unidades.
El director financiero, el director de contabilidad, el controller y otros responsables de
la función financiera son esenciales en el modo con que la dirección ejerce la gestión
de riesgos corporativos. Todos juegan un papel importante en la prevención y detec-
ción de la información fraudulenta y, además, el director financiero, como parte de la
alta dirección, ayuda a establecer el talante de conducta ética de la organización, es

105
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 106

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

el máximo responsable de los estados financieros e influye en el diseño, implantación


y supervisión de los sistemas de información de la empresa.
Cuando se atiende a los componentes de la gestión de riesgos corporativos, es evi-
dente que el director financiero y sus colaboradores juegan papeles esenciales. Este
directivo es un agente clave en el establecimiento de objetivos, la determinación de
estrategias, el análisis de riesgos y la toma de decisiones sobre cómo gestionar los
cambios que afecten a la entidad. Facilita información y orientación valiosa y se cen-
tra en la supervisión y posterior seguimiento de las acciones decididas.
Debería considerarse al director financiero como un igual a los otros responsables
funcionales. Cualquier intento de la dirección de tenerlo estrechamente centrado -
limitado principalmente a áreas de información financiera y tesorería, por ejemplo-
podría minorar seriamente la capacidad de la entidad para tener éxito.

Auditores Internos

Los auditores internos juegan un papel clave en la evaluación de la eficacia de la ges-


tión de riesgos corporativos y en la recomendación de mejoras en ella. Las normas
del Instituto de Auditores Internos establecen que el alcance de la auditoría interna
debería abarcar la gestión del riesgo y los sistemas de control, lo que incluye la eva-
luación de la fiabilidad de la información, la eficacia y eficiencia de las operaciones y
el cumplimiento de leyes y normas aplicables. Al llevar a cabo sus responsabilidades,
los auditores internos ayudan a la dirección y al consejo de administración o su comi-
té de auditoria examinando, evaluando e informando sobre la adecuación y eficacia
de la gestión de riesgos corporativos de la entidad y recomendando mejoras en ella.
Las normas del mencionado Instituto también determinan qué papeles son los ade-
cuados para la auditoría interna, estableciendo claramente que los auditores internos
deberían ser objetivos respecto a las actividades que auditan. Esta objetividad debe-
rá reflejarse en su posición y autoridad dentro de la entidad y en una adecuada asig-
nación de personal. El hecho de contar con una adecuada posición y autoridad en la
organización implica temas tales como la existencia de una línea de información a la
persona con autoridad suficiente para asegurar una debida cobertura, consideración
y respuesta a la auditoría, el nombramiento y cese del director de auditoría interna
como responsabilidad exclusiva directa del consejo de administración o comité de
auditoría, el acceso permanente a ambos órganos de gobierno y la facultad para
hacer el seguimiento de los resultados y recomendaciones.

Otro Personal de la Entidad

La gestión de riesgos corporativos es, hasta cierto punto, responsabilidad de toda


persona de una entidad y, por esto, debería ser una parte explícita o implícita de su
descripción de funciones. Esto es verdad desde una doble perspectiva:
• Virtualmente, todo el personal juega algún papel en el ejercicio de la gestión de ries-
gos corporativos. Puede generar información usada en la identificación o evaluación
de los riesgos o tomar otras acciones necesarias para llevarla a cabo. El esmero con
que se realicen estas actividades afecta directamente a la eficacia de dicha gestión.

106
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 107

ROLES Y RESPONSABILIDADES

• Todo el personal es responsable de dar apoyo a los flujos de información y comu-


nicación inherentes a la gestión de riesgos corporativos. Esto incluye comunicar a
niveles superiores de la organización cualquier problema en las operaciones,
incumplimiento del código de conducta, violación de políticas o acto ilegal. La ges-
tión de riesgos corporativos descansa en las comprobaciones y comparaciones,
incluyendo la segregación de funciones y que el personal no “mire hacia otro lado”.
Los empleados deberían entender la necesidad de resistir la presión de sus supe-
riores para que participen en actividades inadecuadas y, asimismo, deberían estar
disponibles canales independientes de las líneas normales de información para per-
mitir informar de tal circunstancia.
La gestión de riesgos corporativos es un asunto de todos y los papeles y responsa-
bilidades de cada empleado deberían definirse bien y comunicarse eficazmente.

Terceros

Varios terceros pueden contribuir a la consecución de objetivos de la entidad, a veces


mediante acciones que van en paralelo a las realizadas dentro de la entidad. En otros
casos, estos terceros pueden facilitar información útil para la entidad en sus activi-
dades de gestión de riesgos corporativos.

Auditores Externos

Los auditores externos aportan al consejo de administración y a la dirección una


perspectiva única, independiente y objetiva que puede contribuir al logro de sus obje-
tivos de información financiera externa por parte de una entidad, así como de otros
objetivos.
Durante una auditoría de los estados financieros, el auditor expresa su opinión sobre
la imagen fiel transmitida, de acuerdo con principios contables generalmente acepta-
dos, con lo que contribuye a alcanzar objetivos de información financiera externa.
Este auditor puede contribuir aun más al logro de dichos objetivos, facilitando infor-
mación útil a la dirección para que lleve a cabo sus responsabilidades relativas a la
gestión de riesgos. Tal información incluye:
• Averiguaciones de la auditoría, información analítica y recomendaciones de accio-
nes necesarias para alcanzar los objetivos establecidos
• Averiguaciones sobre deficiencias en la gestión de riesgos y el control que llaman
la atención del auditor y recomendaciones para mejorarlas
El informe de auditoría se relacionará frecuentemente no sólo con el proceso de infor-
mación de la entidad, sino también con sus actividades estratégicas, operativas y de
cumplimiento, y puede hacer importantes contribuciones a la consecución de sus
objetivos en todas estas áreas. La información se comunica a la dirección y, según su
relevancia, al consejo de administración o a su comité de auditoría.
Es importante reconocer que una auditoría de los estados financieros normalmente
no incluye un enfoque significativo sobre la gestión de riesgos corporativos y, en
cualquier caso, no da como resultado la expresión de una opinión del auditor sobre

107
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 108

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

dicha gestión. Sin embargo, cuando las leyes o normas exigen que el auditor evalúe
las declaraciones de una empresa relativas a su control interno sobre la información
financiera y los fundamentos en que se apoyan dichas declaraciones, el alcance del
trabajo dirigido a dichas áreas será más amplio y se obtendrá información y seguri-
dad adicionales.

Legisladores y Reguladores

Los legisladores y reguladores afectan a la gestión de riesgos corporativos de


muchas entidades, bien a través de requisitos para establecer mecanismos de ges-
tión de riesgos o controles internos o bien mediante inspección de determinadas enti-
dades. Muchas de las leyes y normas relevantes abordan primordialmente los riesgos
y controles de la información financiera. Algunas, sin embargo –particularmente
aquéllas que se aplican a los organismos gubernamentales– también pueden tratar
objetivos operativos y de cumplimiento. Muchas entidades están sujetas desde hace
mucho tiempo a requisitos legales de control interno. Por ejemplo, las sociedades
anónimas de Estados Unidos están obligadas a establecer y mantener sistemas de
control interno contable que satisfagan determinados objetivos. La más reciente
legislación exige que la alta dirección de empresas que cotizan en bolsa certifique la
eficacia del control interno de la entidad sobre su información financiera, junto con la
conformidad del auditor.
Varios organismos reguladores examinan directamente las entidades sobre las que
ostentan responsabilidad supervisora. Por ejemplo, los inspectores de un banco cen-
tral llevan a cabo inspecciones de los bancos bajo su jurisdicción y a menudo se cen-
tran en aspectos de sus sistemas de gestión de riesgos y de control interno. Estos
organismos emiten recomendaciones y adoptan acciones de refuerzo.
Por tanto, los legisladores y reguladores afectan a la gestión de riesgos corporativos
de dos maneras. Primero, establecen las reglas que impulsan a la dirección a asegu-
rar que la gestión de riesgos y los sistemas de control satisfacen los requisitos míni-
mos legales y estatutarios. Después, tras inspeccionar una entidad, facilitan informa-
ción útil para aplicar su gestión de riesgos corporativos, recomendaciones y a veces
directrices a su dirección respecto a las mejoras necesarias.

Terceros en Interacción con la Entidad

Los clientes, proveedores, socios de negocio y otros terceros que colaboran en los
negocios de una entidad son una fuente importante de información usada en las acti-
vidades de gestión de riesgos corporativos. La información puede ser variada, desde
la demanda emergente de productos o servicios nuevos, discrepancias sobre envíos
y facturas, temas de calidad o acciones de empleados que desbordan las fronteras
del comportamiento ético. Esta información puede ser muy importante para la enti-
dad en el logro de sus objetivos estratégicos, operativos, de información y de cum-
plimiento. La entidad debe disponer de mecanismos para recibir tal información y
tomar las acciones adecuadas. Estas últimas no sólo implican abordar la situación de
la que se ha informado, sino también investigar el origen subyacente del problema y
remediarlo.

108
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 109

ROLES Y RESPONSABILIDADES

Además de los clientes y proveedores, otros terceros, tales como los acreedores,
pueden facilitar una supervisión respecto a la consecución de objetivos de la entidad.
Un banco, por ejemplo, puede solicitar informes sobre el cumplimiento por parte de
una entidad de ciertos acuerdos sobre la deuda. También puede recomendar indica-
dores de funcionamiento u otros objetivos o controles deseados.

Proveedores de Servicios Externos

Muchas organizaciones externalizan a veces funciones de negocio, tales como las


operaciones administrativas, financieras y otras internas, delegando su gestión coti-
diana en proveedores externos, a fin de obtener acceso a capacidades superiores y
para reducir el coste de servicios. Una institución financiera puede externalizar su
proceso de revisión de préstamos a terceros; una empresa tecnológica, la operación
y mantenimiento de su proceso de información y un minorista, su auditoría interna.
Aunque los proveedores externos realicen actividades para cada entidad y por su
cuenta, las respectivas direcciones no puede abdicar de su responsabilidad de ges-
tionar los riesgos correspondientes y deberían implantar un programa para supervi-
sarlos.

Analistas financieros, Agencias calificadoras de solvencia financiera y


Medios de comunicación

Los analistas financieros y las agencias calificadoras de solvencia financiera tienen en


cuenta muchos factores relevantes para el valor de una entidad como inversión.
Analizan la estrategia y objetivos de la dirección, los estados financieros históricos y
la información financiera proyectada, las acciones tomadas en respuesta a las condi-
ciones económicas y de mercado, el potencial de éxito a corto y medio plazo, el ren-
dimiento del sector y comparaciones con otras entidades similares. Los medios de
comunicación, particularmente los periodistas financieros, también pueden realizar
análisis similares.
Las actividades investigadoras y de seguimiento de dichos terceros pueden propor-
cionar ideas sobre cómo otros perciben el funcionamiento de la entidad, los riesgos
económicos y sectoriales a los que se enfrenta la entidad, las estrategias innovado-
ras operativas o financieras que pueden mejorar el rendimiento y las tendencias del
sector. Esta información a veces se facilita directamente a la entidad en reuniones
personales o bien, indirectamente, la propia entidad la capta de análisis externos para
inversores reales o potenciales y del público. En cualquier caso, la dirección debería
tener en cuenta las observaciones e ideas de los analistas financieros, las agencias
calificadoras de solvencia financiera y los medios de comunicación que puedan
mejorar la gestión de riesgos corporativos.

109
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 110
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 111

11. Limitaciones de la gestión


de riesgos corporativos

Resumen del capítulo: Una eficaz gestión de riesgos corporativos, sin impor-
tar su grado de buen diseño y ejecución, sólo proporciona una seguridad
razonable a la dirección y al consejo de administración respecto a la conse-
cución de objetivos de la entidad. Esta consecución está afectada por las limi-
taciones inherentes a cualquier proceso de gestión, que incluyen los factores
de que el juicio humano en la toma de decisiones puede ser defectuoso y que
pueden ocurrir problemas por causa de fallos humanos como simples errores
o equivocaciones. Adicionalmente, cabe considerar que los controles pueden
evadirse con la connivencia de dos o más personas y la dirección tiene capa-
cidad para obviar el proceso de gestión de riesgos corporativos, incluyendo
las decisiones de respuesta a los riesgos y las actividades de control. Otro
factor limitativo es la necesidad de considerar los costes y beneficios relativos
a las respuestas a los riesgos

Para algunos observadores, la gestión de riesgos corporativos, con un control inter-


no integrado, asegura que la entidad no fallará –esto es, que la entidad siempre
alcanzará sus objetivos. Esta perspectiva es errónea.
Al considerar las limitaciones de la gestión de riesgos corporativos, hay que recono-
cer tres conceptos distintos:
• El riesgo corresponde al futuro, que es inherentemente incierto.
• La gestión de riesgos corporativos –incluso una que sea eficaz– opera a distintos
niveles con respecto a objetivos diferentes. Respecto a los objetivos estratégicos y
operativos, dicha gestión puede ayudar a asegurar que la dirección, y el consejo en
su papel supervisor, es consciente en forma oportuna sólo del grado de progreso
de la entidad hacia la consecución de dichos objetivos. Sin embargo, no puede pro-
porcionar ni siquiera una seguridad razonable de que los objetivos en sí mismos se
alcancen.
• La gestión de riesgos corporativos no puede facilitar una seguridad absoluta res-
pecto a ninguna de las categorías de objetivos.
La primera limitación recuerda que nadie puede predecir el futuro con certeza. La
segunda reconoce que ciertos eventos están sencillamente fuera del control de la
dirección. La tercera tiene que ver con el hecho de que ningún proceso hará siempre
todo aquello para lo que lo ha sido diseñado.
El concepto de seguridad razonable no implica que la gestión de riesgos corporati-
vos vaya a fracasar frecuentemente y muchos factores, individual y colectivamente,

111
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 112

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

lo refuerzan. El efecto acumulativo de las respuestas al riesgo que satisfacen múlti-


ples objetivos y la naturaleza “multifinalista” de los controles internos reducen el ries-
go de que una entidad no pueda conseguir sus objetivos. Es más, las habituales y
cotidianas actividades operativas y responsabilidades personales que funcionan en
varios niveles de una organización se orientan al logro de los objetivos de la entidad.
De hecho, en una muestra de entidades bien controladas, es probable que la mayo-
ría esté informada regularmente de su avance hacia los objetivos estratégicos y ope-
rativos, alcance sus objetivos de cumplimiento con regularidad y genere periódica-
mente informes fiables. Sin embargo, puede ocurrir un evento incontrolable, un error
o una información errónea. En otras palabras, incluso una gestión eficaz de riesgos
corporativos puede experimentar un fallo. La seguridad razonable no constituye una
seguridad absoluta.

Juicios

La eficacia de la gestión de riesgos corporativos está limitada por las realidades de


la fragilidad humana al tomar decisiones empresariales, algo a hacer aplicando un jui-
cio humano en el tiempo disponible, a partir de la información existente y bajo las pre-
siones de la dirección del negocio. Con la clarividencia de la retrospección, es posi-
ble averiguar más tarde que algunas decisiones han producido resultados inferiores
a lo esperado y que podrían necesitar un cambio.

Fracasos

Una gestión de riesgos corporativos bien diseñada puede fallar. Es posible que el per-
sonal no entienda bien las instrucciones y que cometa errores de juicio o por desidia,
distracción o fatiga. Un supervisor de un departamento de contabilidad que sea res-
ponsable de la investigación de incidencias sencillamente puede olvidarse de hacer
el seguimiento o fallar al no continuar la investigación hasta el punto conveniente
donde efectuar correcciones adecuadas. El personal temporal que realiza funciones
de control supliendo a empleados de baja por enfermedad o vacaciones puede des-
empeñar mal su cometido. Los cambios de sistema pueden haberse implantado
antes de formar al personal para que reaccione adecuadamente ante los signos de
funcionamiento incorrecto.

Connivencia

Las situaciones de connivencia entre dos o más individuos pueden provocar fallos en
la gestión de riesgos corporativos. Las personas que actúan colectivamente para per-
petrar y ocultar un acto a menudo pueden alterar datos financieros u otra información
de gestión de una forma que no pueda ser identificada por el proceso de gestión de
riesgos corporativos. Por ejemplo, puede haber confabulación entre un empleado
que realiza una importante función de control y un cliente, un proveedor u otro emple-
ado. A un nivel distinto, varios niveles de la dirección de ventas o de otra división
podrían conspirar para eludir controles y conseguir que los resultados a informar
coincidan o superen los objetivos presupuestados o fijados como incentivo.

112
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 113

LIMITACIONES DE LA GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS

Costes y Beneficios

Como se comenta en el capítulo Evaluación de riesgos, siempre existen restricciones


en los recursos y las entidades deben tener en cuenta los costes y beneficios relati-
vos que las decisiones implican, incluyendo aquellos relacionados con la respuesta
al riesgo y las actividades de control.
Al determinar si debe decidirse una acción o establecerse un control, deben consi-
derarse tanto el riesgo de fracaso y el efecto potencial en la entidad, como los cos-
tes correspondientes. Por ejemplo, es posible que no resulte provechoso para una
empresa instalar controles sofisticados de inventario para supervisar los niveles de
materias primas, si es bajo el coste de las que se usan en un proceso de producción,
si el material no es perecedero, si existen suministros externos disponibles y si hay
espacio libre en los almacenes.
Los costes y beneficios de implantar unas capacidades de identificación de eventos
y evaluación de riesgos y las correspondientes respuestas y actividades de control
pueden medirse con niveles distintos de precisión, que a menudo varían según la
naturaleza de la entidad. El reto es encontrar el equilibrio adecuado. Del mismo modo
que los recursos limitados no deberían asignarse a riesgos no significativos, un con-
trol excesivo es costoso y contraproducente. Los clientes que realizan pedidos tele-
fónicamente no van a tolerar procedimientos de aceptación demasiado complicados
o largos. Un banco que hace “pasar por el aro” a potenciales clientes solventes no
concederá muchos préstamos nuevos. Un control demasiado escaso, por el contra-
rio, presenta riesgos innecesarios de morosidad. Hace falta un equilibrio adecuado en
un entorno muy competitivo. A pesar de las dificultades, se seguirán tomando deci-
siones coste-beneficio.

Imposición de la Dirección

La gestión de riesgos corporativos es tan eficaz como lo sean las personas respon-
sables de su funcionamiento. Incluso en entidades gestionadas y controladas eficaz-
mente –aquellas con niveles generalmente altos de integridad y conciencia de los
riesgos y del control, canales alternativos de comunicaciones y un consejo de admi-
nistración activo e informado que posea un adecuado proceso de gobierno corpora-
tivo– un directivo todavía podría hacer caso omiso de la gestión de riesgos corpora-
tivos. Ningún sistema de control o gestión es infalible y aquellas personas con inten-
ciones delictivas se empeñarán en burlar los sistemas. Sin embargo, una gestión efi-
caz de riesgos corporativos mejorará la capacidad de la entidad para prevenir y
detectar aquellas actividades que hagan caso omiso de ella.
El término “imposición de la dirección” se usa aquí con el significado de hacer caso
omiso de las políticas o procedimientos estipulados con fines no legítimos – tales
como el enriquecimiento personal o la presentación mejorada de la posición finan-
ciera o del nivel cumplimiento de una entidad. Un director de una división o unidad o
un miembro de la alta dirección pueden prescindir de la gestión de riesgos corpora-
tivos por muchas razones: aumentar los ingresos informados para cubrir una reduc-
ción inesperada de cuota de mercado, alterar los resultados informados a fin de
alcanzar presupuestos no realistas, incrementar el valor de mercado de la entidad
antes de una oferta publica de venta, lograr las proyecciones de ventas o resultados

113
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 114

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

a fin de agrandar los incentivos vinculados al rendimiento o valor de las opciones


sobre acciones, encubrir violaciones de contratos de préstamos y ocultar la falta de
cumplimiento de las normas legales. Son prácticas de omisión las presentaciones fal-
sas deliberadas a bancos, auditores y proveedores y la emisión intencionada de
documentos falsos tales como pedidos de compra o facturas de venta.
La imposición de la dirección no debería confundirse con su intervención. Esta última
representa las acciones de la dirección para desviarse con fines legítimos de las polí-
ticas o procedimientos establecidos. La intervención de la dirección es necesaria
para tratar con transacciones no recurrentes y poco habituales o eventos que, de otro
modo, podrían manejarse inadecuadamente. Es necesario dar margen a la interven-
ción de la dirección, porque no se puede diseñar ningún proceso que anticipe todos
los riesgos y circunstancias. Las acciones de la dirección para efectuar tal tipo de
intervención están generalmente abiertas y documentadas o, de otra forma, son reve-
ladas al personal adecuado. Hacer caso omiso de la gestión de riesgos corporativos
normalmente no genera documentación ni revelaciones y tiene la intención de encu-
brir las acciones.

114
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 115

12. Qué hacer

Las acciones que podrían llevarse a cabo como consecuencia de este documento
dependen de la posición y papel de las partes implicadas.

• Miembros del consejo de administración


Los miembros del consejo de administración deberían comentar con la alta direc-
ción el estado de la gestión de riesgos corporativos de la entidad y efectuar su
supervisión según se necesite. El consejo también debería asegurar que los meca-
nismos de dicha gestión proporcionan una evaluación de los riesgos más significa-
tivos relacionados con la estrategia y los objetivos, incluyendo las acciones que la
dirección esté realizando y su propio grado de implicación en la supervisión de la
gestión de riesgos corporativos. El consejo debería buscar y obtener información de
los auditores internos y externos y sus asesores.
• Alta dirección
Este documento sugiere que el consejero delegado debería evaluar las capacidades
de gestión de riesgos corporativos de la entidad. Usando el presente Marco, un con-
sejero delegado, junto con los directivos operativos y financieros claves, puede cen-
trar su atención donde sea necesario. Con un determinado enfoque, el consejero
delegado reúne a los responsables de las unidades de negocio y las funciones claves
de apoyo para comentar una evaluación inicial de dichas capacidades y la eficacia de
la gestión de riesgos. Independientemente de su forma, esta evaluación inicial debe-
ría determinar si hay necesidad de otra evaluación más exhaustiva y amplia y cómo
proceder a ella. También debería confirmarse que los procesos permanentes de
supervisión están implantados. El tiempo dedicado a evaluar la gestión de riesgos
corporativos representa una inversión, capaz de generar un beneficio importante.
• Otro personal de la entidad
Los directivos y demás personas deberían considerar, a la vista de este Marco,
cómo llevan a cabo sus responsabilidades de gestión de riesgos corporativos e
intercambiar ideas para potenciarlas con otras personas de mayor rango en la enti-
dad. Los auditores internos deberían considerar la ampliación de su enfoque sobre
la gestión de riesgos corporativos.
• Reguladores
Las expectativas de la gestión de riesgos corporativos varían mucho con respecto
a lo que se puede conseguir con ella y a qué significa el concepto de “seguridad
razonable” y cómo se aplica. Este Marco puede promover una visión compartida de
dicha gestión, incluyendo lo que puede conseguir y sus limitaciones. Los regulado-
res pueden referirse a él al establecer sus expectativas, bien mediante normas o
recomendaciones o a través de inspecciones en las entidades que supervisan.

115
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 116

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

• Asociaciones profesionales
Las asociaciones profesionales que establecen reglas y otras profesionales que
facilitan orientación sobre la gestión financiera, auditoría y temas relacionados
deberían examinar sus normas y orientaciones a la luz de este Marco. En la medi-
da en que se elimine la diversidad en conceptos y terminología, todas las partes se
beneficiarán.
• Educadores
Este Marco debería estar sujeto a la investigación y análisis universitario, para ver
dónde se pueden hacer futuras mejoras. En la idea de que este documento llegue
a aceptarse como una base común de comprensión y entendimiento, sus concep-
tos y términos deberían encontrar su lugar en los planes de estudios universitarios.
Creemos que su contenido ofrece numerosos beneficios. Con esta base de entendi-
miento mutuo, todas las partes podrán hablar un lenguaje común y comunicarse más
eficazmente. Los directivos estarán en posición de evaluar los procesos de gestión
de riesgos corporativos respecto a una norma, potenciando el proceso y dirigiendo
sus empresas hacia los objetivos establecidos. La investigación futura puede apo-
yarse sobre una base sólida. Los legisladores y reguladores podrán conseguir un
incremento de su comprensión acerca de la gestión de riesgos corporativos, sus
beneficios y limitaciones. Con todas las partes implicadas utilizando un marco común
para dicha gestión, se conseguirán beneficios para todos.

116
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 117
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 118
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 119

Gestión
de Riesgos Corporativos -
Marco Integrado

Anexos
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 120
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 121

Anexo A
Objetivos y metodología

A finales de 2001, el Committee of Sponsoring Organizations of the Treadway


Commission (COSO) inició un estudio diseñado para ayudar a organizaciones a ges-
tionar los riesgos. A pesar de la abundancia de literatura sobre el tema, COSO con-
cluyó que hacía falta que dicho estudio diseñara y construyera un marco y las corres-
pondientes técnicas de aplicación. PricewaterhouseCoopers fue contratada para diri-
gir este proyecto, que dio como resultado este informe, Gestión de Riesgos
Corporativos – Marco Integrado.
El Marco define el riesgo y la gestión de riesgos corporativos y proporciona defini-
ciones básicas, conceptos, categorías de objetivos, componentes y principios de un
marco integral de la gestión de riesgos corporativos. Proporciona orientación a las
empresas y demás organizaciones para determinar cómo mejorar dicha gestión, pro-
porcionando el contexto y facilitando su aplicación en el mundo real. El documento
ha sido diseñado también para proveer una base para uso de las entidades cuando
determinen si su gestión de riesgos corporativos es eficaz y, en caso negativo, qué
necesitan para que lo sea.
Las Técnicas de Aplicación están vinculadas directamente con el Marco.
Proporcionan ejemplos de técnicas de gestión de riesgos que las empresas y otras
organizaciones pueden aplicar a varios niveles –empresa, línea de negocio, proceso
o función– y para apoyar la mejora puntual o evolutiva.
Dadas las necesidades diversas de los lectores, se obtuvo información de directivos
corporativos de organizaciones de varias dimensiones, incluyendo empresas públi-
cas y privadas de sectores diversos y organismos gubernamentales. Este grupo de
directivos estaba compuesto por consejeros delegados, directores financieros, direc-
tores de riesgo, controllers, auditores internos, legisladores, reguladores, abogados,
auditores externos, consultores, profesores universitarios y otros.
Durante el proyecto, su equipo responsable recibió consejos y asesoramiento de un
Consejo Asesor de la Junta del COSO, compuesto por personas de direcciones finan-
cieras, auditoría interna y externa y de universidades. Este Consejo se reunió perió-
dicamente con el equipo del proyecto y los miembros de la Junta del COSO para revi-
sar el plan de trabajo, su progreso y los borradores del Marco y comentar los temas
que pudieran derivarse. En los hitos más importantes del proyecto, el Consejo Asesor
y el equipo de trabajo establecieron comunicación con la Junta del COSO.
La metodología aplicada en este estudio fue diseñada para generar un informe de
acuerdo con los objetivos establecidos. El proyecto se estructuró en cinco fases:

121
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 122

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

1. Evaluación

El equipo de proyecto evaluó los modelos actuales de gestión de riesgos corporativos


a través de una revisión de literatura, encuestas y grupos de trabajo, con el propósito
de obtener la información a través del amplio espectro de dicha gestión. Esta fase abar-
có el análisis de información, comparando y contrastando los conceptos y prácticas de
las filosofías y protocolos de gestión de riesgos corporativos, entendiendo las necesi-
dades del usuario e identificando los temas y preocupaciones críticas.

2. Visión

El equipo creó un modelo conceptual de trabajo para el marco de la gestión de ries-


gos corporativos y desarrolló un inventario preliminar de herramientas como base de
las técnicas de aplicación. Usando técnicas individualizadas de solicitud de informa-
ción, el equipo contrastó los conceptos con grupos de interés y de usuarios claves y,
con la retroalimentación obtenida, refinó el modelo conceptual.

3. Construcción y Diseño

Usando el modelo conceptual refinado como un anteproyecto, el equipo desarrolló el


Marco, incluyendo definiciones, categorías de objetivos, componentes, principios,
infraestructura y el contexto directivo, junto con los comentarios correspondientes.
Esta fase también abarcó el diseño de la organización y el enfoque para desarrollar
las técnicas de aplicación. Tanto el borrador del marco como las técnicas fueron revi-
sadas con los grupos de interés y de usuarios claves ya citados y se obtuvieron
comentarios y sugerencias.

4. Preparación de la Presentación al Público

En esta fase, el equipo refinó el Marco y desarrolló en mayor amplitud las técnicas de
aplicación, revisándolas con los directivos de varias empresas, que facilitaron retroa-
limentación sobre su valor y utilidad.

5. Finalización

Esta fase abarcó la presentación del volumen del Marco para información pública
durante noventa días y comprobaciones de campo en varias empresas. Una vez
recogidos los comentarios, el equipo de proyecto los revisó y analizó, identificando
las modificaciones necesarias. El equipo finalizó el Marco y las Técnicas de
Aplicación y remitió los textos definitivos al Consejo Asesor y la Junta del COSO para
su revisión y aprobación.

Como parte del proceso, el equipo de proyecto consideró cuidadosamente toda la


información recibida, incluyendo otros marcos ya existentes. Una relación de algunas

122
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 123

ANEXO A - OBJETIVOS Y METODOLOGÍA

de las fuentes publicadas se incluye en el Anexo D – Bibliografía seleccionada. Como


cabría esperar, se expresaron muchas opiniones, a veces contradictorias, sobre
temas fundamentales –dentro de una fase de proyecto o entre fases. El equipo de tra-
bajo, junto con el Consejo Asesor del COSO y con la supervisión de la Junta, hizo una
reflexión exhaustiva sobre los fundamentos de las posiciones planteadas, tanto indi-
vidualmente como dentro del contexto de los temas correspondientes, incluyendo
aquellas que facilitaran el desarrollo de un marco relevante, lógico e internamente
consecuente. El Consejo Asesor y la Junta del COSO han dado su total apoyo al
marco resultante de este proceso y lo han aprobado.

123
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 124
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 125

Anexo B
Resumen de principios claves

A continuación, se destacan los principios claves inherentes a los ocho componen-


tes de la gestión de riesgos corporativos. Este anexo no pretende facilitar una rela-
ción completa de los principios establecidos en el Marco, ni precisarlos o describir-
los totalmente.

ÁMBIENTE INTERNO

Filosofía de la gestión de riesgos

• La filosofía de la gestión de riesgos de la entidad representa las convicciones y acti-


tudes compartidas que caracterizan cómo la entidad contempla el riesgo en todas
sus actividades
• Refleja los valores de la entidad, influyendo en su cultura y estilo operativo
• Afecta a cómo se aplican los componentes de la gestión de riesgos corporativos,
incluyendo la identificación de eventos, los tipos de riesgo aceptado y la gestión de
riesgos
• Está bien desarrollada, entendida y aceptada por el personal de la entidad
• Se ha integrado en las declaraciones de políticas de la entidad, las comunicaciones
verbales y escritas y la toma de decisiones
• La dirección refuerza la filosofía no sólo con palabras, sino también con acciones
cotidianas

Riesgo aceptado
• El riesgo aceptado por la entidad refleja su filosofía de gestión de riesgos e influye
en la cultura y estilo operativo
• Se tiene en consideración en el establecimiento de la estrategia, que queda en línea
con el riesgo aceptado

Consejo de Administración
• El consejo es activo y posee una adecuada experiencia directiva y técnica y de otro
tipo, junto con la mentalidad necesaria para realizar sus funciones supervisoras

125
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 126

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

• Está preparado para cuestionar y fiscalizar las actividades de la dirección, presen-


tar perspectivas alternativas y actuar contra el dolo
• Tiene al menos una mayoría de consejeros externos e independientes
• Proporciona la supervisión de la gestión de riesgos corporativos y es consciente del
riesgo aceptado por la entidad y está de acuerdo con él

Integridad y valores éticos


• Las normas de conducta de la entidad reflejan la integridad y valores éticos
• Los valores éticos no sólo se comunican, sino que también van acompañados de
una orientación explícita sobre lo que es correcto o incorrecto
• La integridad y los valores éticos son comunicados a través de un código formal de
conducta
• Los canales ascendentes de comunicación existen cuando los empleados se sien-
ten cómodos aportando información relevante
• Las sanciones se aplican a los empleados que violan el código. Los mecanismos
animan al empleado a presentar denuncias por sospechas de violaciones y se
toman acciones disciplinarias contra empleados que conscientemente optan por no
informar sobre ellas
• La integridad y los valores éticos se comunican a través de acciones de la dirección
y sus ejemplos

Compromiso con las competencias


• Las competencias de los empleados de la entidad reflejan los conocimientos y
habilidades necesarios para realizar las tareas asignadas
• La dirección alinea las competencias y el coste

Estructura organizativa
• La estructura organizativa define las áreas clave de responsabilidad
• Establece las líneas de información
• Se desarrolla teniendo en cuenta la dimensión de la entidad y la naturaleza de sus
actividades
• Permite una gestión eficaz de riesgos corporativos

Delegación de autoridad y responsabilidad


• Ambos tipos de delegación marcan los límites de la autoridad y establecen hasta
qué punto se confiere ésta a los equipos y personas y se les anima a usar su ini-
ciativa para abordar temas y resolver problemas

126
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 127

ANEXO B - RESUMEN DE PRINCIPIOS CLAVE

• Las asignaciones correspondientes establecen las relaciones de información y los


protocolos de autorización
• Las políticas describen las prácticas empresariales adecuadas, el conocimiento y
experiencia del personal clave y los recursos asociados
• Las personas conocen cómo sus acciones se relacionan entre sí y contribuyen a la
consecución de objetivos

Normas de recursos humanos


• Estas normas abordan la contratación, orientación, formación, evaluación, aseso-
ramiento, promoción, compensación y acciones correctoras e impulsan los niveles
esperados de integridad, comportamiento ético y competencias
• Las acciones disciplinarias transmiten el mensaje de que las violaciones del com-
portamiento esperado no serán toleradas

ESTABLECIMIENTO DE OBJETIVOS

Objetivos estratégicos
• Los objetivos estratégicos de la entidad establecen objetivos de alto nivel, en línea
con su misión / visión y dando apoyo a ésta
• Reflejan las decisiones estratégicas de la dirección respecto a cómo la entidad pre-
tenderá crear valor para sus grupos de interés
• La dirección identifica los riesgos asociados a las decisiones estratégicas y consi-
dera sus implicaciones

Objetivos conexos
• Los objetivos conexos apoyan la estrategia seleccionada, relativa a todas las acti-
vidades de la entidad
• Cada nivel de objetivos está vinculado a objetivos más específicos que fluyen en
cascada por toda la organización
• Los objetivos son fácilmente comprensibles y medibles
• Están en línea con el riesgo aceptado

Objetivos seleccionados
• La dirección tiene un proceso que alinea los objetivos estratégicos con la misión de
la entidad, asegurando que los objetivos estratégicos y relacionados son conse-
cuentes con el riesgo aceptado por la entidad

127
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 128

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Riesgo aceptado
• El riesgo aceptado por la entidad es la guía principal para establecer la estrategia
• Orienta la dotación de recursos
• Alinea a la organización, personas, procesos e infraestructura

Tolerancias al riesgo
• Las tolerancias al riesgo son medibles, preferiblemente en las mismas unidades que
los objetivos conexos
• Están en línea con el riesgo aceptado

IDENTIFICACIÓN DE EVENTOS

Eventos
• La dirección identifica los eventos potenciales que afectan a la implantación de la
estrategia o a la consecución de los objetivos – aquéllos que pueden tener un
impacto positivo o negativo o de ambos tipos
• Se tienen en cuenta incluso los eventos con una posibilidad de ocurrencia relativa-
mente baja siempre que su impacto sobre la consecución de algún objetivo sea
importante

Factores influyentes
• La dirección reconoce la importancia de entender los factores internos y externos y
el tipo de eventos que pueden emanar de ellos
• Se identifican los eventos tanto a nivel de entidad como de actividad

Técnicas de identificación de eventos


• Las técnicas aplicadas miran tanto al pasado como al futuro
• La dirección selecciona técnicas adecuadas para su filosofía de gestión de riesgos y
asegura que la entidad desarrolla las capacidades de identificación de eventos
• La identificación de los eventos es sólida, formando la base de la evaluación de
riesgos y los componentes de respuesta a ellos

Interdependencias
• La dirección entiende cómo los eventos se relacionan entre sí

128
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 129

ANEXO B - RESUMEN DE PRINCIPIOS CLAVE

Distinción entre riesgos y oportunidades


• Los eventos con impactos negativos representan riesgos, que la dirección evalúa y
a los cuales responde
• Los eventos que representan oportunidades son canalizados hacia el proceso de
establecimiento de estrategia y objetivos

EVALUACIÓN DE RIESGOS

• Al evaluar los riesgos, la dirección considera los eventos esperados e inesperados

Riesgo inherente y residual


• La dirección evalúa los riesgos inherentes previamente
• Una vez desarrolladas las respuestas, la dirección considera el riesgo residual

Estimación de probabilidad e impacto


• Los eventos potenciales son evaluados desde dos perspectivas: probabilidad e
impacto
• Al evaluar el impacto, la dirección normalmente utiliza la misma unidad de medi-
ción, u otra coherente, que la empleada para el objetivo
• El horizonte temporal aplicado para evaluar los riesgos debería ser consecuente
con el horizonte de tiempo de la estrategia y objetivos correspondientes

Técnicas de evaluación
• La dirección usa una combinación de técnicas cualitativas y cuantitativas
• Las técnicas apoyan el desarrollo de una evaluación compuesta de los riesgos

Relaciones entre los eventos


• Donde existe una correlación entre eventos o donde se combinen e interaccionen,
la dirección los evalúa en conjunto

RESPUESTA AL RIESGO

• Al responder a los riesgos, la dirección considera entre evitar, reducir, compartir o


aceptar el riesgo

129
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 130

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Evaluación de posibles respuestas


• Las respuestas se evalúan con la intención de alinear el riesgo residual y las tole-
rancias al riesgo de la entidad
• Al evaluar las respuestas a los riesgos, la dirección considera sus efectos sobre la
probabilidad y el impacto
• La dirección considera sus costes y beneficios, además de las nuevas oportunida-
des

Respuestas seleccionadas
• Las respuestas elegidas por la dirección están diseñadas para enmarcar la proba-
bilidad de riesgo esperada y el impacto dentro de las tolerancias de riesgo
• La dirección considera los riesgos adicionales que pueden derivarse de una res-
puesta

Perspectiva de carteras de riesgos


• La dirección considera los riesgos desde la perspectiva de toda la entidad o la de
carteras de riesgos
• La dirección determina si el perfil de riesgo residual de la entidad es consecuente
con su riesgo aceptado global

ACTIVIDADES DE CONTROL

Integración con la respuesta a los riesgos


• La dirección identifica las actividades de control necesarias para ayudar a asegurar
que las respuestas a los riesgos se llevan a cabo de modo adecuado y oportuno
• La selección o revisión de las actividades de control incluye la consideración de su
relevancia y adecuación a las respuestas a los riesgos y al objetivo relacionado
• Al seleccionar las actividades de control, la dirección considera cómo se interrela-
cionan las actividades de control

Tipos de actividades de control


• La dirección selecciona entre varios tipos de actividades de control, incluyendo los
controles de detección, manuales, informáticos y de gestión.

Políticas y procedimientos
• Las políticas se implantan de forma meditada, consciente y coherente

130
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 131

ANEXO B - RESUMEN DE PRINCIPIOS CLAVE

• Los procedimientos se llevan a cabo con un enfoque claro y permanente sobre las
condiciones hacia las que se orienta la política
• Las condiciones identificadas como resultado del procedimiento son investigadas y
se toman las acciones correctoras adecuadas

Controles informáticos
• Se implantan adecuados controles generales y de aplicaciones

INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN

Información
• La información relevante se obtiene de fuentes internas y externas
• La entidad capta y usa los datos históricos y actuales, según necesidad, para apo-
yar una gestión eficaz de riesgos corporativos
• La infraestructura de información convierte los datos no tratados en información
relevante que ayuda al personal a realizar su gestión de riesgos corporativos y otras
responsabilidades. La información se facilita con profundidad, forma y marco tem-
poral adecuados para que resulte disponible, utilizable y vinculada a responsabili-
dades definidas –incluyendo la necesidad de identificar y evaluar el riesgo y res-
ponder al mismo
• Los datos e información fuente son fiables y facilitados a tiempo en el lugar ade-
cuado para permitir una toma eficaz de decisiones
• La oportunidad del flujo de información es coherente con el ritmo de cambios en los
entornos externos e internos de la entidad
• Los sistemas de información cambian según se necesite para apoyar a los objeti-
vos nuevos

Comunicación
• La dirección proporciona una comunicación específica y directa relativa a las
expectativas de comportamiento y responsabilidades del personal, incluyendo una
nítida exposición de la filosofía y enfoque de gestión de riesgos corporativos de la
entidad y una clara delegación de autoridad
• La comunicación sobre procesos y procedimientos está en línea con la cultura
deseada y se ajusta a ella
• Todo el personal recibe un mensaje claro desde la alta dirección de que la gestión
de riesgos corporativos ha de tomarse en serio
• El personal sabe cómo sus actividades se relacionan con el trabajo de los demás,
permitiéndoles reconocer los problemas, determinar sus causas y tomar acciones
correctoras

131
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 132

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

• El personal sabe qué comportamiento se considera aceptable y no aceptable


• Existen canales abiertos de comunicación y una disposición a escuchar y el perso-
nal cree que sus superiores realmente desean conocer los problemas y que los
abordarán eficazmente
• Hay canales de comunicación independientes de las líneas normales de informa-
ción y el personal entiende que no habrá represalias por trasladar información rele-
vante
• Un canal abierto de comunicaciones existe entre la alta dirección y el consejo de
administración, siendo comunicada oportunamente la información adecuada
• Están abiertos unos canales externos de comunicaciones y a través de ellos los
clientes y proveedores pueden facilitar información significativa
• La entidad comunica la información relevante a los reguladores, analistas financie-
ros y otros terceros

SUPERVISIÓN

• La dirección determina, a través de actividades permanente de supervisión, eva-


luaciones independientes o una combinación de ambas, si el funcionamiento de la
gestión de riesgos corporativos sigue siendo eficaz

Actividades permanentes de supervisión


• Las actividades permanentes de supervisión están integradas en las operaciones
normales y recurrentes de la entidad realizadas durante el transcurso normal del
negocio
• Se llevan a cabo en tiempo real y reaccionan dinámicamente ante las condiciones
cambiantes

Evaluaciones independientes
• Las evaluaciones independientes se centran directamente en la eficacia de la ges-
tión de riesgos corporativos y proporcionan una oportunidad para considerar la
efectividad de las actividades de supervisión permanente.
• El evaluador entiende cada una de las actividades de la entidad y cada componen-
te de la gestión de riesgos corporativos que está siendo abordado
• El evaluador analiza el diseño de la gestión de riesgos corporativos de la entidad y
los resultados de las pruebas realizadas frente al trasfondo de normas establecidas
por la dirección, determinando si dicha gestión proporciona una seguridad razona-
ble respecto a los objetivos fijados

132
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 133

ANEXO B - RESUMEN DE PRINCIPIOS CLAVE

Información de deficiencias
• Las deficiencias informadas desde fuentes internas o externas se consideran cui-
dadosamente por sus implicaciones para la gestión de riesgos corporativos y se
adoptan las acciones correctoras adecuadas
• Todas las deficiencias identificadas que afectan a la capacidad de la entidad para
desarrollar e implantar su estrategia y alcanzar sus objetivos establecidos se comu-
nican a aquellas personas en posición de efectuar las acciones necesarias
• No sólo se informa de las transacciones o eventos investigados y corregidos, sino
que también se vuelven a evaluar los procedimientos subyacentes potencialmente
defectuosos
• Se establecen protocolos para identificar qué información es necesaria a un nivel
determinado para tomar decisiones eficazmente

ROLES Y RESPONSABILIDADES

Consejo de Administración
• El consejo sabe hasta qué punto la dirección ha establecido una gestión eficaz de
riesgos corporativos en la organización
• Es consciente del riesgo aceptado por la entidad y está de acuerdo con él
• Revisa la perspectiva de carteras de riesgos y la contrasta con el riesgo aceptado
• Está informado de los riesgos más significativos y si la dirección está respondien-
do adecuadamente

Dirección
• El consejero delegado tiene la última responsabilidad de la gestión de riesgos cor-
porativos
• Asegura la presencia de un ámbito interno positivo y que todos los componentes
de la gestión de riesgos corporativos están implantados
• Los altos directivos a cargo de las unidades organizativas tienen la responsabilidad
de gestionar los riesgos relacionados con los objetivos de sus unidades
• Guía la aplicación de la gestión de riesgos corporativos, asegurando que su aplica-
ción es coherente con las tolerancias al riesgo
• Cada directivo es responsable ante el nivel superior inmediato de su parte de ges-
tión de riesgos corporativos, siendo el consejero delegado el último responsable
ante el consejo de administración

133
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 134

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Otro personal de la entidad


• La gestión de riesgos corporativos es una parte implícita o explícita de la descrip-
ción de funciones de cada persona
• El personal entiende la necesidad de resistirse a la presión de sus superiores a par-
ticipar en actividades impropias y están disponibles canales independientes de las
líneas normales de información para permitir informar de dichas circunstancias
• Los papeles y responsabilidades del personal en la gestión de riesgos corporativos
están bien definidos y eficazmente comunicados

Terceros que interaccionan con la entidad


• Existen mecanismos para recibir información pertinente de terceros que interaccio-
nan con la entidad y tomar las acciones adecuadas
• Una acción no sólo incluye abordar la situación particular informada, sino también
la investigación del origen subyacente del problema y su resolución
• Respecto a las actividades externalizadas, la dirección ha implantado un programa
para supervisarlas
• La dirección considera las observaciones e ideas de los analistas financieros, las
agencias calificadoras de solvencia financiera y los medios de comunicación que
puedan mejorar la gestión de riesgos corporativos

134
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 135

Anexo C
Relación entre Gestión de
riesgos corporativos – Marco
integrado y Control interno –
Marco integrado
Control Interno – Marco Integrado
En 1992, el Committee of Sponsoring Organizations of the Treadway Commission
(COSO) emitió Control interno – Marco integrado, que establece un marco para el con-
trol interno y proporciona herramientas de evaluación que las empresas y otras entida-
des pueden usar para evaluar sus sistemas de control. Dicho marco identifica y descri-
be cinco componentes interrelacionados, necesarios para un control interno eficaz.
Control interno – Marco integrado define al control interno como un proceso, efec-
tuado por el consejo de administración, la dirección y demás personal de una enti-
dad, diseñado para facilitar una seguridad razonable respecto de la consecución de
objetivos en las siguientes categorías:
• Eficacia y eficiencia de las operaciones
• Fiabilidad de la información financiera
• Cumplimiento de leyes y normas aplicables
El presente anexo presenta la relación entre los respectivos marcos del control inter-
no y de la gestión de riesgos corporativos.

Más amplia que el Control interno


El control interno está inmerso en la gestión de riesgos corporativos y forma parte
íntegra de ella. Dicha gestión es más amplia que el control interno, concepto este últi-
mo que va ampliando y elaborando para formar una conceptualización sólida centra-
da más concretamente en los riesgos. El Control interno – Marco integrado sigue
siendo válido para las entidades que se focalicen en el control interno en sí mismo.

Categorías de Objetivos
El Control interno – Marco integrado especifica tres categorías de objetivos –opera-
ciones, información financiera y cumplimiento– y, a su vez, la gestión de riesgos cor-
porativos contiene también tres categorías casi iguales– operaciones, información y

135
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 136

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

cumplimiento. La categoría de información del marco de control interno se define


como relativa a la fiabilidad de los estados financieros publicados, mientras que en el
marco de gestión de riesgos corporativos, esta categoría ha sido ampliada de modo
significativo, para cubrir todos los informes desarrollados por una entidad, divulga-
dos tanto interna como externamente. Se incluyen en ella los informes usados inter-
namente por la dirección y los emitidos a terceros, incluyendo las presentaciones a
organismos reguladores y los informes enviados a los grupos de interés. Es más, su
alcance se expande desde los estados financieros, pero no limitándose a cubrirlos de
un modo más amplio, sino a incorporar también la información no financiera.
Adicionalmente, Gestión de riesgos corporativos – Marco integrado añade otra cate-
goría de objetivos, denominados objetivos estratégicos, que operan a un nivel mayor
que los otros y se derivan de la misión o visión de la entidad, con las que deberían
estar alineados los objetivos operativos, de información y de cumplimiento. La ges-
tión de riesgos corporativos se aplica en el establecimiento de la estrategia, así como
en las actuaciones para alcanzar los objetivos de las otras tres categorías.
El marco de gestión de riesgos corporativos introduce los conceptos de riesgo acep-
tado y tolerancia al riesgo. El riesgo aceptado es el volumen amplio de riesgo que una
entidad está dispuesta a aceptar en la realización de su misión/visión. Sirve de punto
de orientación para establecer la estrategia y seleccionar los objetivos conexos. Las
tolerancias al riesgo son los niveles aceptables de variación en relación con el logro
de objetivos. Al establecerlas, la dirección considera la importancia relativa de los
objetivos relacionados y alinea las tolerancias al riesgo con el riesgo aceptado.
Operar dentro de las tolerancias al riesgo proporciona a la dirección una mayor segu-
ridad de que la entidad permanece dentro de su riesgo aceptado, lo que, a su vez,
facilita un mayor nivel de confianza en que la entidad alcanzará sus objetivos.

Perspectiva de Carteras

La perspectiva de carteras de riesgos es un concepto no contemplado en el marco


de control interno. Además de centrarse en los riesgos considerando el alcance de
objetivos de la entidad a escala individual, es necesario tener en cuenta los riesgos
compuestos desde una perspectiva de “cartera”.

Componentes

Con un enfoque mejorado sobre el riesgo, el marco de gestión de riesgos corporati-


vos expande el componente de evaluación de riesgos del marco del control interno,
creando cuatro componentes –establecimiento de objetivos (que es un requisito pre-
vio para el control interno), identificación de eventos, evaluación de riesgos y res-
puesta al riesgo.

Ambiente Interno

Al comentar este componente, el marco de gestión de riesgos corporativos habla de


la filosofía de gestión de riesgos de una entidad, que es el conjunto de creencias y

136
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 137

ANEXO C - RELACIÓN ENTRE GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO Y CONTROL INTERNO – MARCO INTEGRADO

actitudes compartidas que caracterizan cómo la entidad contempla los riesgos, refle-
ja sus valores e impacta en su cultura y estilo operativo. Según lo descrito antes,
dicho marco abarca el concepto del riesgo aceptado de una entidad, que está apo-
yado en tolerancias al riesgo más específicas.
Dada la importancia crítica del consejo de administración y su composición, el marco
de gestión de riesgos corporativos amplía la necesidad establecida en el marco del
control interno de tener una masa crítica mínima de miembros independientes –nor-
malmente, al menos dos miembros independientes- y establece que, para que sea
eficaz la gestión de riesgos corporativos, el consejo deberá tener al menos una mayo-
ría de miembros externos e independientes.

Identificación de Eventos

Los marcos de la gestión de riesgos corporativos y del control interno reconocen que
los riesgos existen en cualquier nivel de la entidad y que resultan de una variedad de
factores internos y externos. Ambos marcos consideran la identificación de los ries-
gos en el contexto del impacto potencial sobre la consecución de objetivos.
El primero de estos dos marcos plantea el concepto de eventos potenciales, defi-
niendo un evento como un incidente o acontecimiento emanado de fuentes internas
o externas que afecta a la implantación de la estrategia o al logro de objetivos. Los
potenciales eventos de impacto positivo representan oportunidades, mientras que los
de impacto negativo representan riesgos. La gestión de riesgos corporativos implica
la identificación de eventos potenciales, usando una combinación de técnicas que
contemplan tanto el pasado como las tendencias emergentes, y qué los provoca.

Evaluación de Riesgos

Aunque ambos marcos requieren una evaluación de riesgos en términos de probabi-


lidad de que un determinado riesgo ocurra y de su impacto potencial, el marco de
gestión de riesgos corporativos sugiere que se ha de mirar la evaluación de riesgos
de manera más afinada. Los riesgos se consideran como inherentes o residuales,
preferiblemente expresados en la misma unidad de medida de los objetivos a los que
se refieran. Los horizontes temporales deben ser coherentes con las estrategias y
objetivos de la entidad y, cuando sea posible, con los datos observables. El marco de
gestión de riesgos corporativos también reclama atención a los riesgos interrelacio-
nados, describiendo cómo un solo evento puede crear múltiples riesgos.
Como ya se ha comentado, dicha gestión abarca la necesidad para la dirección de
desarrollar una perspectiva de cartera al nivel de entidad. Mientras que el responsa-
ble de cada unidad de negocio, función, proceso u otra actividad desarrolla una eva-
luación compuesta de los riesgos de su unidad individual, la dirección de la entidad
considera los riesgos desde una perspectiva de “carteras”.

Respuesta a los Riesgos

El marco de gestión de riesgos corporativos identifica cuatro categorías de respues-

137
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 138

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

ta al riesgo –evitar, reducir, compartir y aceptar. Como parte de dicha gestión, la


dirección considera las respuestas potenciales en estas categorías y las tiene en
cuenta con la intención de conseguir un nivel de riesgo residual en línea con las tole-
rancias al riesgo de la entidad. Tras considerar las respuestas a los riesgos a escala
individual o de grupo, la dirección contempla su efecto agregado en toda la entidad.

Actividades de Control

Ambos marcos presentan las actividades de control como una ayuda para asegurar
que las respuestas al riesgo de la dirección se llevan a cabo. El marco de gestión de
riesgos corporativos hace ver explícitamente que en algunos casos las mismas acti-
vidades de control sirven de respuesta a los riesgos.

Información y Comunicación

El marco de gestión de riesgos corporativos amplía el componente de comunicación


e información del control interno, destacando la consideración de datos derivados de
eventos pasados y presentes y datos potenciales futuros. Los datos históricos per-
miten a la entidad seguir el funcionamiento actual respecto a los objetivos, planes y
expectativas y proporcionan ideas sobre cómo la entidad se comportó en periodos
anteriores bajo condiciones diversas. Los datos actuales facilitan información adicio-
nal importante, mientras que los datos sobre posibles eventos futuros y sus factores
subyacentes completan el análisis de la información. La infraestructura de esta últi-
ma busca y capta los datos en un marco de tiempo y con una profundidad de deta-
lle concordantes con la necesidad de la entidad de identificar eventos, evaluar ries-
gos y responder a ellos y mantenerse dentro de su riesgo aceptado.
El comentario respecto a la existencia en el marco del control interno de un canal
alternativo de comunicaciones, independiente de las líneas normales de información,
tiene mayor énfasis en el marco de gestión de riesgos corporativos, que establece
que ésta gestión, para ser eficaz requiere dicho canal.

Roles y Responsabilidades

Ambos marcos centran la atención en los papeles y responsabilidades de algunas


“partes organizativas” que forman parte del control interno y la gestión de riesgos
corporativos o que les facilitan importante información. El marco de gestión de ries-
gos corporativos describe los roles y responsabilidades de los directores de riesgos
y amplían el papel del consejo de administración de la entidad.

138
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 139

Anexo D
Bibliografía seleccionada

American Institute of Certified Public Accountants and The Canadian Institute of Chartered
Accounts, Managing Risk in the New Economy, New York AICP. 2000
Banham, Russ. A High Level of Intolerance. CFO, The Magazine for Senior Financial Executives.
April 2000.
Barton, Thomas L., William G. Shenkir and Paul L. Walker. Making Enterprise Risk Management
Pay Off: How Leading Companies Implement Risk Management. Financial Executive. 2001.
Bazerman, Max H. Judgement in Managerial Decision Making. New York. John Wiley & Sons.
2001
Committee of Sponsoring Organization of the Treadway Commission (COSO). Internal Control
– Integrated Framework. New York AICPA. 1992.
Crouhy, Michael, Dan Galai and Robert Mark. Risk Management. New York. McGraw-Hill. 2001.
Davidson, Clive. Lofty Ambitions for Measuring Global Risk. Securities Industry News. June 5,
2000.
DeLoach, James W. Enterprise-Wide Risk Management: Strategies for Linking Risk and
Opportunity. London. Financial Times Prentice Hall. 2000.
DiPiazza, Samuel A., Jr. y Robert G. Eccles. Building Public Trust: the Future of Corporate
Reporting. New York. John Wiley & Sons. 2002
Everson, Miles. Creating an Operational Risk-Sensitive Culture. The RMA Journal. March 1, 2002.
Economist Intelligence Unit, en colaboración con Arthur Andersen & Co. Managing Business
Risk – An Integrated Approach. The Economist Intelligence Unit. 1995.
Economist Intelligence Unit, en colaboración con MCC Enterprise Risk. Enterprise Risk
Management – Implementing New Solutions. The Economist Intelligence Unit. 2001.
FEI Research Foundation, en colaboración con Andersen. Risk Management: An Enterprise
Perspective. Financial Executive. 2002.
Haubenstock, Michael and John Gontero. Operational Risk Management: The Next Frontier.
New York. RMA. 2001.
Institute of Chartered Accountants in England and Wales. Internal Control Guidance for
Directors on the Combined Code. London. ICAEW. 1999.
Institute of Directors in Southern Africa. King Report on Corporate Governance for South Africa
2001. The Institute of Directors in Southern Africa. 2001.
International Organisation for Standardization. ISO/IEC Guide 73. 2002.
Lam, James. The CRO is Here to Stay. Risk Management. April 2001.
National Commission on Fraudulent Financial Información. Report of the National Commission
on Fraudulent Financial Información. 1987.

139
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 140

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Nottingham, Lucy. A Conceptual Framework for Integrated Risk Management. Ottawa.


Conference Board of Canada. 1997.
Risk Management Group of the Basel Committee on Banking Supervision. Sound Practices for
the Management and Supervision of Operational Risk. 2001.
Root, Stephen J. Beyond COSO Internal Control to Enhance Corporate Governance. New York.
John Wiley & Sons. 1998.
Standards Australia and Standards New Zealand. Australian/New Zealand Standard 4360:1990:
Risk Management. Standards Australia and Standards New Zealand. 1999.
Steinberg, Richard M. The CEO and the Board: Enhancing the Relationship. G100 Insights. April
2003.
Steinberg, Richard M. and Catherine L. Bromilow. Corporate Governance and the Board – What
Works Best. The Institute of Internal Auditors Research Foundation. 2001.
The Institute of Risk Management (IRM), The Association of Insurance and Risk Managers (AIR-
MIC) and ALARM The National Forum for Risk Management in the Public Sector. A Risk
Management Standard. AIRMIC, ALARM, and IRM. 2002.
Thiessen, Karen. A Composite Sketch of Chief Risk Officer. Ottawa. Conference Board of
Canada. 2001.
Thiessen, Karen. Don’t Gamble with Goodwill – The Value of Effectively Communicating Risks.
Ottawa. Conference Board of Canada. 2000.
Tillinghast – Towers Perrin. Enterprise Risk Management: Trends and Emerging Practices. New
York. Tillinghast – Towers Perrin. 2001.
Walker, Paul L., William G. Shenkir and Thomas L. Barton. Enterprise Risk Management: Pulling
It All Together. The Institute of Internal Auditors Research Foundation. 2002.

140
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 141

Anexo E
Consideración a los comentarios

Según se indica en el Anexo A, un borrador de este Marco se ha expuesto a revisión


pública. Las 78 cartas de respuesta recibidas contienen cientos de comentarios indi-
viduales sobre una amplia gama de temas y su contenido ha sido considerado en la
formulación de revisiones del documento final. Este anexo resume los temas más sig-
nificativos y las modificaciones resultantes reflejadas en este informe definitivo y tam-
bién facilita una perspectiva sobre por qué algunos enfoques han sido aceptados y
otros no.

Definición de la Gestión de Riesgos Corporativos

Generar valor para los grupos de interés


El borrador describía cómo la gestión de riesgos corporativos permite a una organi-
zación generar valor para sus grupos de interés, aunque el concepto de valor no estu-
viera explícitamente reflejado en la definición de dicha gestión. Algunas personas
sugirieron que esta definición debería contener tal referencia explícita.
Se llegó a la conclusión de que la definición debería mantenerse tal como se presen-
taba. La definición dice explícitamente que la gestión de riesgos corporativos impli-
ca facilitar una seguridad respecto a la consecución de objetivos de la entidad, lo que
inherentemente genera valor. Es más, el texto que enmarca a la definición describe
cómo la gestión de riesgos corporativos proporciona valor para los grupos de interés.
Debido a esta vinculación existente con el concepto de valor y su descripción y para
evitar una definición irrazonablemente larga (tal como sugieren otras respuestas), se
ha mantenido la definición.

Oportunidades
El borrador describía como la gestión de riesgos corporativos implica identificar y
abordar los eventos potenciales que tengan un impacto negativo sobre una entidad,
denominados riesgos, y los eventos de impacto positivo, denominados oportunida-
des. Algunas de las personas que respondieron han dicho que, dada la importancia
de la identificación de oportunidades, la definición del riesgo debería ampliarse para
incluir este concepto. Unas personas argumentaban que excluir a las oportunidades
como parte de la definición del riesgo podría llevar al lector a no ver a dicho concep-
to como parte de la gestión de riesgos corporativos, socavando así la relevancia del
Marco. Por contra, algunas otras sugirieron que se eliminara del informe final toda
referencia a las oportunidades.

141
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 142

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

La conclusión fue que, dada la importancia de identificar y aprovechar las oportuni-


dades, se debería mantener en el Marco, e incluso mejorar, los comentarios sobre
ellas. Así, el informe final amplía las reflexiones dedicadas a la identificación de opor-
tunidades y la reacción a ellas, formando ambos conceptos una parte integral de la
gestión de riesgos corporativos. Los comentarios de los capítulos del informe final
sobre componentes describen aún más el proceso por el que la dirección considera
en la gestión del riesgo los efectos negativos y positivos de los eventos potenciales.
En cuanto a la definición del riesgo, se decidió que añadir el concepto de oportuni-
dad enturbiaría los conceptos y haría más difícil la comunicación. Mantener la distin-
ción entre un evento negativo y uno positivo aporta claridad al lenguaje de la gestión
de riesgos corporativos.

Un proceso
El borrador definía la gestión de riesgos corporativos como un proceso y establecía
componentes que pueden verse como elementos de un proceso. Algunas respuestas
aludían a que el término “proceso” implicaba de forma inadecuada la realización
secuencial de pasos o tareas predefinidas.
El informe ha sido revisado para potenciar el concepto de que la gestión de riesgos
corporativos no se realiza necesariamente de modo secuencial, sino que constituye
una interacción permanente e iterativa de acciones llevadas a cabo en toda la enti-
dad.

Aplicado al establecimiento de la estrategia


El borrador describía cómo los objetivos deben establecerse y comunicarse clara-
mente antes de que puedan ser identificados y abordados los riesgos que amenazan
su consecución. También exponía que las técnicas de gestión de riesgos corporati-
vos se aplican al establecimiento de la estrategia para ayudar a la dirección a evaluar
y seleccionar la estrategia de la entidad y vincularla a los objetivos correspondientes.
Algunos comentarios indicaban que la gestión de riesgos es secundaria frente al des-
arrollo de la estrategia de la entidad por su dirección y que el Marco pone un énfasis
indebido en el riesgo en lugar de hacerlo en el establecimiento de objetivos.
Se llegó a la conclusión de que no es necesario ni útil presentar un concepto, el esta-
blecimiento de la estrategia, como más importante que el otro, la gestión de riesgos.
Ambos son importantes e inherentes a la gestión de riesgos corporativos. El docu-
mento final, sin embargo, sí contiene una exposición mejorada del proceso del esta-
blecimiento de la estrategia y de los objetivos al efectuar dicha gestión empresarial.

Riesgo aceptado y Tolerancia al riesgo


El borrador abordó los conceptos de riesgo aceptado y tolerancia al riesgo. Algunos
comentarios sugerían que hacía falta incluir información adicional, incluyendo orien-
tación sobre cómo expresar y medir el riesgo aceptado. Otros destacaban que exis-
tía poca diferencia entre los dos conceptos y que deberían combinarse en uno.
El informe final mantiene la distinción entre riesgo aceptado y tolerancia al riesgo,

142
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 143

ANEXO E - CONSIDERACIÓN A LOS COMENTARIOS

perteneciendo el primero a un nivel alto de la entidad en su conjunto, mientras que el


segundo se refiere a objetivos específicos. Las Técnicas de aplicación proporcionan
ejemplos de la aplicación de ambos conceptos.

Seguridad razonable
Algunos comentarios recibidos sugerían que el concepto de seguridad razonable
debería definirse de forma más precisa.
Se decidió que la discusión en torno a dicho término es adecuada y que una mayor
precisión en su definición excedería del alcance de este proyecto.

Categorías de objetivos
Algunas respuestas decían que establecer cuatro categorías de objetivos de una enti-
dad no ayuda y complica innecesariamente el marco.
El documento final mantiene todas estas categorías, sobre la base de que esa clasi-
ficación permite centrarse en distintos aspectos de la gestión de riesgos corporati-
vos, facilita la distinción entre lo que puede esperarse de cada categoría de objetivos
y apoya el uso de un lenguaje común en dicha gestión.

Consecución de objetivos
Algunas personas que respondieron preguntaban por qué la seguridad razonable se
aplica sólo a la amplitud con que se están consiguiendo los objetivos estratégicos y
operativos, antes bien que a su consecución real.
Se pensó que la distinción entre lo que puede esperarse de la gestión de riesgos cor-
porativos respecto al alcance de objetivos estratégicos y operativos, en relación con
los objetivos de información y cumplimiento, continuaba siendo adecuada por las
razones expuestas en el documento, centradas en si dicha consecución está dentro
o fuera del control de la entidad.

Eficacia
Algunas respuestas exponían que la eficacia de la gestión de riesgos corporativos
debería definirse en relación con los resultados logrados, medidos en términos de
realizaciones que el proceso está intentando alcanzar, antes que en un juicio subjeti-
vo sobre si los ocho componentes están presentes y funcionan adecuadamente.
Los criterios de eficacia –la presencia y funcionamiento eficaz de cada componente-
permanecen en el documento final. Se llegó a la conclusión de que el principio des-
arrollado en el marco del control interno y extendido al marco de gestión de riesgos
corporativos es lógico y sirve para mejorar las necesidades de los usuarios - que
cuando los ocho componentes estén presentes y funcionen eficazmente (y no exista
ninguna debilidad material), el resultado o producto es que la dirección y el consejo
de administración obtengan una seguridad razonable de la consecución de los obje-
tivos establecidos. El documento final mantiene dicho principio y destaca además

143
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 144

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

que la contención de los riesgos dentro del riesgo aceptado por la entidad es un ele-
mento necesario para una eficaz gestión de riesgos. Se ha eliminado el concepto de
juicio subjetivo, como el de la presencia y funcionamiento de los ocho componentes,
sobre la base de que los juicios pueden ser objetivos y estar basados en los princi-
pios de este Marco.

Inclusión del Control Interno


El borrador contenía parte del texto de Control interno – Marco integrado e indicaba
que su totalidad se había incorporado mediante referencia al marco de la gestión de
riesgos corporativos. El borrador incluía un anexo que comparaba y contrastaba
ambos marcos.
Algunos comentarios sugerían que el informe final debería identificar de forma desta-
cada aquellas secciones tomadas del texto Control interno – Marco integrado y otros
recomendaban que su totalidad se incorporara como un anexo al presente informe,
con un contraste detallado de las diferencias entre ambos documentos. Finalmente,
otras respuestas recibidas solicitaban que este informe describiera detalladamente
de qué modo el Control interno – Marco integrado se había expandido hacia el marco
de gestión de riesgos corporativos. Algunas personas comentaron que el presente
documento debía destacar y clarificar el objetivo y el propósito de cada marco.
Se decidió que la descripción de las diferencias entre los dos marcos estaba en el
nivel adecuado. El Anexo C destaca las diferencias claves e identifica qué conceptos
del marco de gestión de riesgos corporativos han sido incorporados directamente del
Control interno – Marco integrado, qué otros conceptos procedentes del marco de
control interno han sido ampliados y cuáles son nuevos. Se estimó innecesario incluir
el marco de control interno como anexo, ya que está fácilmente disponible para los
usuarios. El propósito y el público objetivo de cada uno de los marcos ya están des-
critos con suficiente profundidad.

Gestión de riesgos corporativos y Proceso de gestión


Algunos comentarios sugerían que el anexo que compara las actividades de gestión
con las actividades de gestión de riesgos corporativos facilitaba poca información útil
y podía provocar confusión en los lectores. Algunas personas dijeron que el estable-
cimiento de las actividades de gestión como algo distinto a las actividades de ges-
tión de riesgos corporativos podría reducir –en lugar de reforzar– la noción de inte-
grar la gestión de riesgos dentro de las actividades de negocio y gestión.
La figura del borrador no ha sido incluida en el informe final y, en su lugar, se pre-
sentan mensajes relevantes en el texto.

Información y comunicación
Algunos comentarios se referían a la importancia de un canal de comunicaciones
ajeno a las líneas normales de información y sugerían que era un elemento necesario
de la gestión de riesgos corporativos.
El informe final refleja este enfoque y afirma que, para que la gestión de riesgos cor-

144
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 145

ANEXO E - CONSIDERACIÓN A LOS COMENTARIOS

porativos sea eficaz, una entidad debe mantener un canal de comunicaciones de ese
tipo.

Roles y responsabilidades
Algunas respuestas planteaban que se necesitaba una mayor claridad respecto a las
diferentes responsabilidades en la gestión de riesgos corporativos por parte del con-
sejo de administración, la dirección, otro personal de la entidad y terceros.
El informe final amplía este aspecto y clarifica los respectivos roles y responsabilida-
des de cada una de estas partes.

Otras consideraciones

Forma y presentación
Algunas personas que respondieron aludían a la extensión, formato y estilo del borra-
dor y expresaban una variedad de perspectivas sobre cómo se podría organizar y
perfeccionar el informe.
Se llegó a la conclusión de que el informe debería reorganizarse y depurarse, para
mejorar su legibilidad y claridad y eliminar redundancias. El Resumen Ejecutivo del
borrador ha sido sustituido por un resumen más breve. El capítulo 1 del borrador, La
relevancia de la gestión de riesgos corporativos ha sido eliminado, incorporando los
conceptos más importantes en el capítulo 1 definitivo del informe, Definición. Se han
reducido las redundancias, se han eliminado o abreviado los planteamientos menos
importantes y se ha simplificado el estilo.

Relación entre Gestión de riesgos corporativos – Marco integrado y otros infor-


mes y legislación
Algunas respuestas recibidas decían que sería útil abordar las relaciones entre el
marco de gestión de riesgos corporativos y la Ley Sarbanes-Oxley de 2002, el New
Basel Capital Accord del Basel Committee on Banking Supervision y la legislación
sobre gestión de riesgos de Australia, Canadá, Alemania, Japón, Reino Unido y otros
países. Algunos comentarios recomendaban que el documento indicase claramente
que el documento Control interno – Marco integrado continua siendo un marco acep-
table para el cumplimiento de la Sección 404 de la Ley Sarbanes-Oxley y que la emi-
sión del texto Gestión de riesgos corporativos – Marco integrado no requería que las
empresas lo aplicasen con fines de cumplimiento de dicha sección.
Se llegó a la conclusión de que la conciliación entre la Gestión de riesgos corporati-
vos – Marco integrado y otros documentos va más allá del alcance de este proyecto.
Respecto al cumplimiento de la Sección 404 antes citada, el COSO está comunican-
do, a través del “Prólogo” de este informe, que el texto Control Interno- Marco inte-
grado permanece vigente y de manera adecuada se percibe como una base de infor-
mación bajo ciertos requisitos legislativos como la Ley Sarbanes-Oxley.

145
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 146

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Consejos para la aplicación


Algunas sugerencias aludían a la inclusión de un contenido específico para el volu-
men de consejos para la aplicación. Algunos pedían que se incluyeran uno o más
casos monográficos para ayudar a implantar el marco a organizaciones de dimensio-
nes diferentes. Otras sugerían que el documento Marco y los consejos para la apli-
cación contuvieran enlaces de referencia cruzada.
Se decidió que el volumen de consejos para la aplicación debería incluir cierto con-
tenido sugerido, incluyendo ejemplos de cómo las entidades pueden aplicar concep-
tos específicos descritos en el Marco. El informe final contiene esta información, aun-
que se decidió que no era práctico identificar o desarrollar un caso monográfico que
ilustrara la aplicación de todos los conceptos del Marco y que, de hacerlo, se estaría
excediendo el alcance del proyecto. Con un enfoque más nítido para el contenido de
este volumen, se concluyó que su título más apropiado sería el de Técnicas de apli-
cación y el nombre se modificó en consonancia. También se han incluido enlaces
entre Técnicas de aplicación y el Marco.

146
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 147

Anexo F
Glosario

Categoría de objetivos.
Cada una de las cuatro categorías de objetivos de la entidad – estrategia, eficacia y
eficiencia de las operaciones, fiabilidad de la información y cumplimiento de leyes y
normas aplicables. Las categorías se solapan, de modo que un objetivo determinado
puede incidir en más de una categoría.

Componente.
Hay ocho componentes en la gestión de riesgos corporativos: ambiente interno de la
entidad, establecimiento de objetivos, identificación de eventos, evaluación de ries-
gos, respuesta a los riesgos, actividades de control, información y comunicación, y
supervisión.

Control.
1. Sustantivo que indica un concepto. Por ejemplo, existencia de un control – una
política o procedimiento que forma parte del control interno. Un control puede
existir en cualquiera de los ocho componentes.
2. Sustantivo que indica un estado o condición. Por ejemplo, efectuar control – el
resultado de políticas y procedimientos diseñados para controlar. Este resultado
puede ser o no un control interno eficaz.
3. Verbo como palabra derivada. Por ejemplo, controlar – regular. Establecer o
implantar una política que efectúe el control

Controles de aplicación.
Procedimientos programados en el software de aplicación y procedimientos manua-
les relacionados con ellos, diseñados para ayudar a asegurar la integridad y fiabilidad
del procesamiento de la información. Los ejemplos incluyen las comprobaciones
informatizadas de edición, verificaciones de secuencia numérica y procedimientos
manuales para seguir temas identificados en los informes de incidencias.

Controles generales.
Políticas y procedimientos que ayudan a asegurar el funcionamiento adecuado y per-
manente de los sistemas de información. Se incluyen en este concepto los controles
de gestión de la tecnología de información, de la infraestructura de la tecnología
informática, de la gestión de la seguridad y de la adquisición, desarrollo y manteni-
miento del software. Los controles generales apoyan el funcionamiento de los con-
troles de aplicación programados. Otros términos similares son controles generales
informáticos y controles de tecnología informática.

147
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 148

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Control interno.
Un proceso, efectuado por el consejo de administración, la dirección y demás perso-
nal de una entidad, diseñado para proporcionar una seguridad razonable respecto a
la consecución de objetivos en las siguientes categorías:
• Eficacia y eficiencia de las operaciones
• Fiabilidad de la información financiera
• Cumplimiento de leyes y normas aplicables

Controles manuales.
Controles realizados manualmente y no por ordenador.

Criterios.
Un conjunto de normas frente a las que se puede medir la gestión de riesgos corpora-
tivos al determinar su eficacia. Los ocho componentes de la gestión de riesgos corpo-
rativos, tomados en el contexto de las limitaciones inherentes a dicha gestión, repre-
sentan criterios de eficacia de ella para cada una de sus cuatro categorías de objetivos.

Cumplimiento.
Término usado en relación con el concepto “objetivos” y que tiene que ver con el
cumplimiento de leyes y normas aplicables a la entidad.

Deficiencia.
Una condición dentro de la gestión de riesgos corporativos merecedora de atención,
que puede representar una debilidad percibida, potencial o real, o una oportunidad
para potenciar dicha gestión y propiciar una mayor probabilidad de que se alcancen
los objetivos de la entidad.

Diseño
1. Intención. Según aparece en su propia definición, la gestión de riesgos corporati-
vos intenta identificar los eventos potenciales que puedan afectar a la entidad y
gestionar los riesgos dentro del riesgo aceptado, proporcionando una seguridad
razonable del logro de objetivos.
1. Plan. La manera como se espera que funcione un proceso, que puede contrastar
con la realidad de cómo funciona.

Efectuado.
Se usa en la gestión de riesgos corporativos: concebido y mantenido.

Entidad.
Una organización de cualquier dimensión establecida para servir un propósito deter-
minado. Una entidad, por ejemplo, puede ser una empresa, una organización sin
ánimo de lucro, un organismo gubernamental o una institución universitaria. Otros
términos sinónimos son organización y empresa.

Estratégico.
Término usado en relación con el concepto “objetivos”. Tiene que ver con los objetivos
de alto nivel que están alineados con la misión (o visión) de la entidad y que la apoyan.

148
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 149

ANEXO F - GLOSARIO

Evento.
Un incidente o acontecimiento, derivado de fuentes internas o externas a la entidad,
que afecta a la consecución los objetivos.
Grupos de interés.
Conjunto de personas físicas o jurídicas que colaboran con una entidad o están afec-
tados por ella, tales como accionistas, comunidad en que opera, empleados, clientes
y proveedores.
Impacto.
El resultado o efecto de un evento. Puede existir una gama de posibles impactos aso-
ciados a un evento. El impacto de un evento puede ser positivo o negativo sobre los
objetivos relacionados de la entidad.

Imposición de la dirección.
Las acciones de la dirección para saltarse las políticas o procedimientos con propó-
sitos ilegítimos de enriquecimiento personal o de presentación alterada de las condi-
ciones financieras de la entidad o su cumplimiento de normas. Este concepto con-
trasta con el de Intervención de la dirección.

Incertidumbre.
La incapacidad de saber anticipadamente la probabilidad e impacto exactos de even-
tos futuros.

Información.
Término usado en relación con el concepto “objetivos”. Tiene que ver con la integri-
dad y fiabilidad de la información de la entidad, incluyendo la interna y externa y la
financiera y no financiera.

Integridad.
La calidad o condición de tener principios morales sólidos, de poseer virtud, honra-
dez y sinceridad, de desear hacer lo correcto y de profesar y vivir una serie de valo-
res y expectativas.

Intervención de la dirección.
Las acciones de la dirección para saltarse las políticas o procedimientos prescritos
por razones legítimas. Esta intervención es normalmente necesaria para abordar
transacciones no habituales ni recurrentes o eventos que de otro modo podrían ser
manejados incorrectamente por el sistema. Este concepto contrasta con el de
Imposición de la dirección.

Limitaciones inherentes.
Las limitaciones en la gestión de riesgos corporativos relativas a los límites del juicio
humano, las restricciones de los recursos, la necesidad de tener en cuenta el coste
de los controles respecto a los beneficios esperados, la realidad de que los fallos
pueden ocurrir y la posibilidad de que la dirección prescinda de los controles o esté
en connivencia para incumplirlos.

Operaciones.
Término usado en relación con el concepto “objetivos”. Tiene que ver con la eficacia
y eficiencia de las actividades de una entidad, incluyendo metas de rendimiento y
rentabilidad, y con la salvaguarda de recursos frente a pérdidas.

149
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 150

GESTIÓN DE RIESGOS CORPORATIVOS – MARCO INTEGRADO

Oportunidad.
La posibilidad de que un evento ocurra y afecte positivamente a la consecución de
objetivos.

Política.
Las directrices de la dirección de lo que debería hacerse para efectuar el control. Una
política sirve como base para la implantación de procedimientos.

Probabilidad.
La posibilidad de que un evento dado ocurra. Los términos a veces adquieren con-
notaciones más específicas y, así, “probabilidad” tanto puede indicar dicha posibili-
dad en términos cualitativos como alto, medio y bajo o derivados de otras escalas de
juicio o bien indicarla mediante una medida cuantitativa, como porcentaje, frecuencia
u otra métrica numérica.

Procedimiento.
Una acción para poner en práctica una política.

Proceso de gestión.
La serie de acciones tomadas por la dirección para conducir una entidad. La gestión
de riesgos corporativos es una parte del proceso de gestión y está integrada en él.

Proceso de gestión de riesgos corporativos.


Otra forma de denominar a la gestión de riesgos corporativos desarrollada en una
entidad.

Riesgo.
La posibilidad de que un evento ocurra y afecte adversamente a la consecución de
objetivos.

Riesgo aceptado.
La cuantía, en sentido amplio del riesgo, que una entidad está dispuesta a asumir
para realizar su misión (o visión).

Riesgo inherente.
El riesgo al que se somete una entidad en ausencia de acciones de la dirección para
alterar o reducir su probabilidad de ocurrencia e impacto.

Riesgo residual.
El riesgo remanente después de que la dirección haya llevado a cabo una acción para
modificar la probabilidad o impacto de un riesgo.

Seguridad razonable.
El concepto de que la gestión de riesgos corporativos, por muy bien diseñada y ope-
rativa que esté, no puede proporcionar una garantía de la consecución de objetivos
de la entidad, debido a las Limitaciones Inherentes a dicha gestión.

Sistema de control interno.


Un sinónimo del control interno existente en una entidad.

Tolerancia al riesgo.
La variación aceptable en la consecución de un objetivo.

150
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 151

Anexo G
Agradecimientos

El COSO Board, el Consejo Asesor y PricewaterhouseCoopers LLP desean agrade-


cer a los muchos directivos, legisladores, reguladores, auditores, profesores de uni-
versidad y otros que dedicaron su tiempo y esfuerzo colaborando y contribuyendo a
varios aspectos del estudio. También quisiéramos reconocer los esfuerzos significa-
tivos de las organizaciones del COSO y sus miembros que respondieron a las
encuestas, participaron en los grupos de trabajo y reuniones y facilitaron comentarios
e ideas durante el desarrollo de este marco.
Los siguientes socios y personal de PricewaterhouseCoopers hicieron una aportación
importante a este marco: Dick Anderson, Jeffrey Boyle, Glenn Brady, Michael Bridge,
John Bromfield, Gary Chamblee, Nicholas Chipman, John Copley, Michael de
Crspigny, Stephen Delvecchio, Scout Dillman, P. Gregory Garrison, Bruno Passer,
Susan Kenney, Brian Kinman, Robert Lamoureux, James LaTorre, Mike Maali, Jorge
Manoel, Cathy McKeon, Juan Pujadas, Richard Reynolds, Mark Stephen, Robert
Sullivan, Jeffrey Thompson y Shyam Venkat.
Las siguientes personas también hicieron una aportación al presente estudio: Michael
Haubenstock, Director de Gestión de riesgos corporativos, Capital One Finance
Corporation; Adrienne Willich, Gerente de Riesgo operacional, Capital One Finance
Corporation; y Daniel Mudge, Presidente y Consejero Delegado, OpVantage. Richard
A. Scott, William G. Shenkir, y Paul L. Walker de la University of Virginia realizaron la
investigación inicial que llevó a este estudio. Gracias también a Myra Cleary por su
orientación editorial.
Asimismo quisiéramos hacer una mención especial a Robert G. Eccles, Presidente,
de Advisory Capital Partners, Inc. y antiguo Profesor de la Harvard Business School,
por sus amplias aportaciones a este marco.
Por último, es nuestro deseo rendir homenaje a William H. Bishop, III, Presidente del
Institute of Internal Auditors, quien, hasta su muerte esforzó enormemente en mejo-
rar el papel y valor de la profesión de auditoría. La aportación de Bill al presente pro-
yecto, y, en realidad, al proyecto del marco de control interno de COSO, ha ayudado
a mejorar estos informes. Como compañero y amigo, se le echará mucho de menos.

151
INFORME COSO-OKJ 25/5/05 18:14 Página 152

Das könnte Ihnen auch gefallen