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La lengua de Canaán a otros lo que se te ha revelado.

El sábado
Entonces un angel me transporto
suavemente a este oscuro mundo. A veces
Oh si pudiese hablar me parece que no puedo ya permanecer Recuerda el sábado día santo,
en la lengua de Canaán aqui. Tan lobregas me resultan todas día del Señor
te diría un poco de la gloria las cosas de la tierra, me siento tan Obedecemos el mandamiento
de un mundo mejor, sola, pues he visto una tierra mejor. de nuestro Dios
Oh si pudiese hablar en la lengua de
Canaán te diría un poco de la gloria Oh si pudiese volar Reconozcamos
de un mundo mejor. cual paloma por cielo y mar, su inmensa compasión
Donde noche no hay navegar y cruzar el Jordan Guardando el día santo
y el Cordero es luz, a un mundo mejor, de nuestro Dios
donde lagrimas no hay, Donde noche no hay
oh el cielo no es como la tierra y el Cordero es luz, Entrad a su templo agradecidos
donde lagrimas no hay, en adoración
Oh si pudiese hablar oh el cielo no es como la tierra. Que se oigan notas de alabanzas
en la lengua de Canaán a nuestro Dios
te diría un poco de la gloria Oh si pudiese hablar
de un mundo mejor, en la lengua de Canaán Te adoramos
te diría un poco de la gloria con júbilo y amor
No me es posible describir las de un mundo mejor, Guardando el día santo
maravillas que vi, te diría un poco de la gloria de nuestro Dios
vi tablas de piedra en que estaban de un mundo mejor.
esculpidas en letras De un mundo mejor, Recuerda el sábado día santo,
de oro los nombres de los redimidos, de un mundo mejor, día del Señor
después de admirar la gloria del templo de un mundo mejor Obedecemos el mandamiento
salimos y Jesús nos dejo para ir la de nuestro Dios
cuidad, pronto oímos su amable voz que
decía, Vengan pueblo mio han salido de Te adoramos con júbilo y amor
una gran tribulación y han hecho mi Guardando el día santo
voluntad sufrieron por mi, vengan a la de nuestro Dios
mesa que yo mismo serviré! Nosotros
exclamamos: Aleluya, gloria! Y entramos
en la ciudad. Vi una mesa de plata pura
de muchos kilometros de longitud, y sin
embargo nuestra vista la abarcaba toda.
Vi el fruto del arbol de la vida, el
mana, almendras, higos, granadas, uvas
y muchas otras especies de frutas. Le
rogue a Jesus que me permitiese comer
del fruto pero me respondio: Todavia
no, debes volver a la tierra y referir

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