Sie sind auf Seite 1von 3

Definición de incidente del embargo inmobiliario.

Actualmente la mayoría de la doctrina y la jurisprudencia admite como incidentes


de embargo inmobiliario cualquier actuación procesal, vinculada al fondo o a la
forma, a condición de que pueda tener incidencia en el desarrollo normal del
procedimiento del embargo. Estas actuaciones procesales pueden ser
interpuestas por una cualquiera de las partes interesadas y, excepcionalmente,
por una persona ajena al procedimiento.

Se consideran incidentes de forma los que están vinculados a las irregularidades


que se comentan en los actos procesales que forman parte del embargo. Mientras,
los de fondos están relacionados con el derecho de propiedad, la capacidad del
embargante o del embargado, la Inembargabilidad del inmueble, la ausencia o
deficiencia del título ejecutorio, entre otros.

Procedimiento a seguir en materia de incidente del embargo


inmobiliario.

Actualmente el Código de Procedimiento Civil enumera siete incidentes: la


acumulación de embargo, la subrogación en las persecuciones, la radiación del
embargo, la demanda en distracción, las nulidades del procedimiento, la falsa
subasta y la conversión del embargo en venta voluntaria. Antes de analizar si se
trata o no de una enumeración enunciativa o limitativa, cabe destacar que la
doctrina está dividida en cuanto a admitir la condición de incidente de la puja
ulterior. Al respecto, nos identificamos con quienes rechazan la condición de
incidente de la puja ulterior, porque entendemos que la reventa del inmueble no
obstaculiza ni impide el desarrollo del procedimiento, y se limita a dejar abierta la
posibilidad de que el inmueble pueda ser vendido a un mejor precio, lo cual
beneficia a todas las partes interesadas.

En lo que respecta al carácter de la enumeración hecha por el legislador, nos


inclinamos por la tesis que sostiene que es enunciativa, porque no existe ninguna
razón para descartar como incidente una actuación procesal no contemplada de
manera expresa, pero que, de alguna manera, constituya un obstáculo al
desarrollo normal del embargo. En este orden de ideas, pensamos, por ejemplo,
en la oferta real de pago seguida de consignación y de validez. Tal actuación
puede tener como consecuencia no sólo la obstaculización del embargo sino,
inclusive, la terminación del mismo, lo cual podría ocurrir si se valida dicha oferta
por cumplir con los requisitos legales previstos para la materia.
5.3. LAS VÍAS DE RECURSOS CONTRA LAS DECISIONES DE LOS
INCIDENTES DEL EMBARGO INMOBILIARIO

Justificación de la prohibición de distracción de costa

En materia de incidente de embargo inmobiliario, lo relativo a las costas y


honorarios se rige por un procedimiento distinto al que se sigue en el derecho
común, tanto en lo que concierne a la forma de la liquidación como en cuanto a la
forma de realizarla.

En efecto, en el derecho común, el abogado de la parte gananciosa liquida las


costas y honorarios en cada uno de los tribunales que han decidido en relación al
caso de que se trate, a condición de que el mismo haya terminado de manera
definitiva e irrevocable. En cambio, en la materia que nos ocupa el abogado del
persiguiente debe solicitar al juez del embargo, antes de que se realice la venta, la
liquidación de las costas y los honorarios, en razón de que la suma que resulte de
dicha liquidación se agrega al precio de adjudicación. De lo anteriormente
expuesto, resulta que quien termina pagando las mismas es el embargado y
dueño del inmueble objeto de la subasta.

La lógica anterior es la que explica el contenido del último párrafo del mencionado
artículo 730, en la medida de que si las costas y los honorarios se agregan al
precio de la adjudicación, y quien termina pagándola es el embargado, a través del
adjudicatario y, por otra parte, es el abogado del persiguiente quien se beneficia
de las mismas, parecería innecesario ordenar la distracción. Sin embargo, dicha
lógica, aunque planteada de manera general, no se corresponde con la realidad
del procedimiento de los incidentes del embargo inmobiliario. Ello así, porque no
siempre es el embargado quien invoca los incidentes, ni quien siempre termina
perdiendo.

Casos en los cuales es necesario ordenar la distracción de las costas y los


honorarios

Por lo explicado anteriormente, no es necesario insistir en que si el incidente lo


invoca el embargado y la demanda es rechazada, no tendría sentido ordenar la
distracción de las costas y honorarios. De suerte que en los párrafos que siguen
analizaremos los casos en los cuales procede ordenar la distracción de las costas
y honorarios.

Demanda incidental interpuesta por el embargado. En la eventualidad que la


demanda sea interpuesta por el embargado y la misma sea acogida, no existe
razón válida para que se prohíba la distracción de las costas y honorarios. Si el
procedimiento es anulado, por ejemplo, debe condenarse en costas al
persiguiente, quien ha sucumbido, por no haber hecho correctamente el
procedimiento. El abogado del embargado tiene derecho a requerir la liquidación
de las costas y honorarios siguiendo el procedimiento aplicable en el derecho
común, y a exigir que las mismas se pongan a cargo del persiguiente y se
distraigan en su beneficio.

Das könnte Ihnen auch gefallen