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Historia[editar]

Artículo principal: Historia de la prostitución


Edad Antigua[editar]

Papiro Erotico De Turin, fechado en torno al reinado de Ramsés II (1279-


1213 a.C.)
Antiguo Oriente Próximo[editar]
Véase también: Ishtar
Una de las formas más antiguas de prostitución de la que existen registros
históricos es la prostitución religiosa, practicada inicialmente en Sumeria.
Ya desde el siglo XVIII a. C., en la antigua Mesopotamia se reconocía la
necesidad de proteger los derechos de propiedad de las prostitutas. En
el Código de Hammurabi se hallan apartados que regulan los derechos
particulares de las hieródulas.13[cita requerida]
Por su parte, los antiguos historiadores Heródoto y Tucídides documentan
la existencia en Babilonia de la obligación para todas las mujeres, al
menos una vez en su vida, de acudir al Templo de Ishtar para practicar
sexo con un extranjero como muestra de hospitalidad, a cambio de un
pago simbólico.14 También en la Edad Antigua, la prostitución estaba bien
presente en Cerdeña y Sicilia, así como en varias culturas fenicias, en las
que se practicaba como rito religioso en honor de Astarté.15
Sin embargo, el alcance y la naturaleza de este fenómeno está en disputa
entre los historiadores.[cita requerida]
Antigua Grecia[editar]
Artículo principal: Prostitución en la Antigua Grecia
Cortesana y su cliente, Escena erótica. Espejo de bronce procedente de
Corinto, mediados del siglo IV a. C.
La prostitución fue, desde la Época Arcaica, una actividad común en la
vida cotidiana de las ciudades griegas más importantes. Particularmente
en las zonas portuarias, daba trabajo, de forma legal, a un número
significativo de personas, constituyendo una actividad económica de
primer nivel. Ejercida tanto por hombres jóvenes como por mujeres de
todas las edades, la clientela era mayoritariamente masculina.
Las prostitutas griegas pertenecían a distintas categorías, dependiendo de
diversos factores relacionados con su trabajo: las pornai, las
prostitutas independientes y las heteras; además, existía una categoría
específica de los templos sagrados, la de las prostitutas sagradas, que se
abastecía, habitualmente, de heteras.
Las pórnai eran, normalmente, esclavas propiedad de un proxeneta. Este
propietario podía ser un ciudadano (también un o una meteco), para el que
ese negocio constituía una fuente de ingresos como cualquier otra y por el
que tenía que pagar un impuesto proporcional a los beneficios que le
generaba. En la época clásica, las pórnai son esclavas de origen bárbaro;
a partir del período helenístico, se incorporan al gremio muchas jóvenes
esclavas, que solo dejarían de serlo cuando fuesen adoptadas por su amo.
Su trabajo se desarrollaba en los prostíbulos, generalmente en los barrios
conocidos por esta actividad, tales como El Pireo (puerto de Atenas) o
el Cerámico de Atenas. Son frecuentadas por los marinos y los ciudadanos
pobres.
Las prostitutas independientes trabajaban directamente en la calle. Estas
prostitutas son de orígenes diversos: mujeres metecas que no encuentran
otro empleo en la ciudad de llegada, viudas pobres, antiguas pornai que
han logrado independizarse. En Atenas, debían estar registradas y pagar
un impuesto. Se puede, también, incluir en esta categoría a las músicos y
bailarinas que ofician en los banquetes masculinos. Aristóteles, en
la Constitución de los atenienses (L, 2), menciona entre las atribuciones
específicas de diez magistrados (cinco intra muros y cinco para el Pireo),
el ἀστυνόμοι, astynómoi, o cargo de velar por que «las instrumentistas de
flauta, de lira y de cítara no sean alquiladas por más de dos dracmas por
noche»; queda así claro que los servicios sexuales eran claramente parte
del alquiler cuyo precio, a pesar del control practicado por los astynomes,
tiende a ser más elevado cuanto más corre el tiempo.
Las heteras constituyen la categoría más alta entre las prostitutas. A
diferencia de las otras, no ofrecen sólo servicios sexuales y sus
prestaciones no son puntuales. Comparables en cierta medida a
las geishas japonesas, poseen una educación esmerada y son capaces de
tomar parte en las conversaciones entre gentes cultivadas. Únicas entre
todas las mujeres de Grecia, espartiatas aparte, son independientes y
pueden administrar sus bienes.
La ofrenda a las divinidades en forma de mujeres-prostitutas no alcanzó en
Grecia una amplitud comparable a la que existió en el Próximo
Oriente antiguo; no obstante, se conocen varios casos. Por un lado, dentro
del propio mundo griego, hubo prostitución sagrada en Sicilia, en Chipre,
en el reino del Ponto o en Capadocia; por otro, la hubo también en Corinto,
cuyo templo de Afrodita alojaba una importante tropa servil, al menos
después de la época clásica. Así, en 464 a. C., un tal
Jenofonte, ciudadano de Corinto y vencedor de la carrera a pie y
del pentatlón en los Juegos Olímpicos, dedicó a Afrodita, en signo de
agradecimiento, cien jóvenes mujeres al templo de la diosa.
Antigua Roma[editar]
Artículos principales: Sexualidad en la Antigua
Roma#Prostitución y Burdeles de Roma.
Fragmento de pintura mural que muestra a dos amantes en la cama, de la
casa de Lucio Cecilio Jocundo en Pompeya, ca. 50-79 d.C, Museo
Arqueológico Nacional de Nápoles
La prostitución en la antigua Roma era símbolo de vergüenza.16 La falta
de reputación era reflejada en la ley, la cual, en la República Tardía y
principios del Principado, la clasifica a sus practicantes como «infames» —
traducido como «falta de reputación»—. Los fragmentos de fuentes legales
sobre la prostitución son primariamente encontrados en el Cuerpo de
Derecho Civil que fue compilado en los primeros años del siglo VI.16
La prostituta era un personaje sugestivo en la literatura de la antigua
Roma. Era muchas veces invocada como recurso literario, una metáfora
para lo corrompido.17 Eran notadas por su vestimenta, vestidos de colores
chillones hechos de lino transparente. También se distinguían por usar una
toga, que eran ropas usadas típicamente por hombres romanos. Por ende,
se ha dicho que la prostituta no era ética para el hombre.17 Para muchos
escritores romanos, la prostitución representaba la más degradante forma
imaginable de existencia para una mujer, representando lo más profundo
de la impureza. Las asociaban con la suciedad, lo que realzaba aún más
su bajo rango.18
Los proxenetas en la antigua Roma también eran sujetos de «infamia». El
proxenetismo era el acto de obtener ganancia por las acciones de la
prostituta. Esto era mediante el manejo de las mismas, buscando clientes
o siendo dueños de un burdel. Estos tipos de asociaciones con la
prostitución eran mirados con desdén y estigmatizados por la sociedad
romana.18 Esto era reflejado claramente en la ley romana: «La ocupación
de un proxeneta no es menos degradante que la práctica de la
prostitución19 y el crimen por ello es incluido en las Leges Juliae, como una
pena reservada contra el marido que tenga ganancias monetarias por el
adulterio de su esposa».20
Juana de Arco expulsa a las prostitutas del ejército. Edición en miniatura
del libro de Martial d'Auvergne, Las vigilias de Carlos VII, hacia 1484, BnF,
Manuscrito francés 5054, folio 60 verso
Edad Media[editar]
Véase también: Edad Media#Delito y pecado. El sexo
Durante la Baja Edad Media la prostitución fue objeto críticas morales y
una reglamentación más o menos permisiva. La prostitución podía estar
confinada en determinados barrios y estar restringida en determinadas
fechas, como la Semana Santa. La erradicación de la prostitución no se
concebía posible, dado lo inevitable del pecado, y su papel de mal
menor que evitaba que el deseo irrefrenable de los varones fuera en contra
del honor de las doncellas y las mujeres respetables y se consideraba que
evitaba la homosexualidad.21
Algunos burdeles eran regentados por los propios municipios, y desde
mediados del siglo XIV, estos concejos o asambleas de vecinos regulaban
la prostitución arrendando los establecimientos a los padres de
la mancebía que controlaban rigurosamente a las prostitutas, que debían
ser solteras, con buena salud y someterse regularmente a inspecciones
sanitarias y de higiene corporal. Entre los padres de la mancebía se
encontraban caballeros de alto rango que participaban en un negocio muy
lucrativo.22
América Precolombina[editar]
Mientras tanto, en la América precolombina, las prostitutas del
pueblo azteca se clasificaban entre aquellas que se prostituían como parte
de un intercambio económico, y las que cumplían una función ritual como
acompañantes de los guerreros, con quienes tenían la posibilidad de
casarse.23
Edad Moderna[editar]
Siglos XVI y XVII[editar]
Prostitutas francesas llevadas a la comisaría, pintado por Étienne Jeaurat
Hacia finales del siglo XV se endureció la visión negativa de la prostitución.
Un brote de sífilis en Nápoles durante 1494, que más tarde se extendería
por Europa, podría haber tenido origen en el intercambio colombino.24 La
prevalencia de otras enfermedades de transmisión sexual a principios del
siglo XVI emergió la asociación entre prostitutas, plagas y contagio,
causando la prohibición de la prostitución y los burdeles por parte de las
autoridades seculares.25 El derecho canónico definía una prostituta como
"una mujer promiscua, independientemente de elementos económicos."26
La prostituta era considerada una “puta … disponible para la lujuria de
muchos hombres,” y se asociaba estrechamente con la promiscuidad.27
La cortesana[editar]
Además a una dama que vivía o servía en la Corte, cortesana también era
en Occidente el nombre para las prostitutas de lujo, cuyos caros servicios
solo podían permitirse hombres poderosos o adinerados.28 Al principio
aludía a las amantes que algunos reyes mantenían en palacio, y, por
extensión, desde el siglo XVIII se convirtió en sinónimo de prostituta de
lujo. Célebres cortesanas fueron las
emperatrices Mesalina y Teodora, Madame du Barry, amante del rey Luis
XV en el siglo XVIII, Marie Duplessis y Lola Montes en el siglo XIX y Liane
de Pougy, La Bella Otero y Mata Hari durante la Belle Epoque.
Edad Contemporánea[editar]
Siglo XIX[editar]
En el siglo XIX se desató una polémica pública tras la aprobación
en Francia y más tarde en Reino Unido de leyes de enfermedades
contagiosas. Esta legislación obligaba a las mujeres sospechosas de ser
prostitutas a someterse a exámenes pélvicos, tanto en Francia y Reino
Unido como en sus colonias. Muchas feministas lucharon por derogar
estas leyes, bien porque la prostitución debería ser ilegal y, por lo tanto, no
regulada gubernamentalmente, o bien porque forzaba a las mujeres a
someterse a exámenes médicos degradantes. La situación era similar en
el Imperio Ruso.
El Reino Unido adoptó una política de segregación social en el Raj
británico (actual India), pero mantuvieron los burdeles llenos de mujeres
indias.29 A finales del siglo XIX y principios del XX, existía una red que
prostituía a mujeres chinas y japonesas en países
como China, Japón, Corea, Singapur y el Raj británico. También existía
una red que prostituía a mujeres europeas en India, Sri Lanka, Singapur,
China y Japón durante el mismo periodo.30 El destino más común para las
prostitutas europeas en Asia eran las colonias británicas de India y Ceilán,
donde cientos de mujeres y niñas de la Europa continental y Japón servían
a los soldados británicos.313233
Siglo XX[editar]

Tres prostitutas en un portal de Rue Asselin, en el barrio rojo de París en


1924–25, fotografiadas por Eugène Atget
En 1921, la Liga de las Naciones firmó la Convención Internacional para la
Supresión de la Trata de Mujeres y Niños. En esta convención, algunas
naciones declararon reservas respecto a la prostitución.
Los principales teóricos del comunismo se oponían a la prostitución. Los
gobiernos comunistas a menudo tomaron pasos para reprimir la
prostitución, aunque la práctica persistió. En los países que siguieron
siendo nominalmente comunistas tras la Guerra Fría, especialmente en
China, la prostitución siguió siendo ilegal y, sin embargo, común.
Durante la Segunda Guerra Mundial, los soldados del Imperio del
Japón participaron en prostitución forzada durante sus invasiones en Asia
Oriental y Sudeste Asiático. El término "mujeres de consuelo" se convirtió
en un eufemismo para entre 20.000 y 400.000
mujeres coreanas y japonesas que fueron forzadas a prostituirse en
burdeles del Ejército Imperial Japonés durante la guerra.34
A finales del siglo XX emergió el turismo sexual como un aspecto
controvertido del turismo occidental y la globalización. El turismo sexual es
normalmente llevado a cabo por turistas internacionales provinientes de
países más ricos.

Tipos[editar]
Callejera[editar]

Una prostituta callejera hablando con un cliente potencial en Turín, Italia,


2005.
En la prostitución callejera, la prostituta busca clientes en la vía pública,
esperando en una acera o esquina. Una vez un cliente contacta, el sexo se
da en el coche del cliente, en un lugar apartado en la calle o en una
habitación alquilada. Los hoteles habituales alquilan habitaciones por
horas.
En Venezuela son conocidas con el nombre de caminadoras.
En burdeles[editar]
Artículo principal: Burdel
Véase también: Zona roja
Interior de un burdel, pintura de Henri de Toulouse-Lautrec.
Los términos burdel, lupanar, prostíbulo y mancebía designan uno de los
tipos de lugar en donde se practica la prostitución. En algunos casos en el
establecimiento no hay ninguna relación formal entre la prostituta y el local.
Por costumbre, los clientes van a sabiendas de la alta concentración de
prostitutas, y viceversa. En otros casos, el local y la prostituta tienen una
relación establecida entre ambos, a cambio de un salario mínimo o de
una comisión en las bebidas que le invitan. Ella debe cumplir con un
mínimo de normas de la casa, como por ejemplo ir a "trabajar" un mínimo
de días a la semana y cumplir con un horario mínimo. En ambos casos la
prostituta termina su jornada en cuanto consigue un cliente dispuesto a
contratar sus servicios.
Con frecuencia en los bares en donde la relación local-prostituta equivale a
la relación entre un patrón y su trabajador(a), el cliente debe pagar
una compensación para que la prostituta/o pueda excusarse del trabajo,
bajo el concepto de que al marcharse, ella/el deja de generar invitaciones
a bebidas por parte de los clientes, y al haber menos chicas/os, el bar
pierde atractivo en la noche, por lo cual se reduce la clientela. En ambos
casos, relación libre o formal entre el local y la prostituta, la prostituta se
beneficia de un entorno de trabajo más seguro, mientras que el bar se
beneficia de la atracción que ejercen ellas haciendo que aumenten la
clientela y el consumo de bebidas.
Existe también la modalidad de los "salón de masajes", donde los
"masajistas", además de los servicios de masajes se avienen a prácticas
sexuales a cambio de dinero, ya sea como parte de un trato particular o
como parte de la oferta del local. Las relaciones sexualesgeneralmente se
realizan en los mismos apartados en los que se practican los masajes,
aunque es posible efectuar tratos para llevar el servicio fuera del local. En
estos casos, al igual que en los bares, el local recibe una compensación
para que el masajista pueda retirarse o se considera como "comisión de
servicio", por los que el local establece una tarifa mayor.
En algunas grandes ciudades los burdeles se concentran en los
llamados barrios rojos. Zonas establecidas donde se tolera la prostitución.
Escorts[editar]
Véase también: Chica de compañía
Los servicios de escort o chicas de compañía se diferencian de otras
formas de prostitución en que las actividades sexuales no están
publicitadas explícitamente como incluidas en el servicio. El pago está
asociado al tiempo y compañía de la escort. Sin embargo, es habitual la
expectativa de que las actividades sexuales están incluidas. En este caso,
los servicios sexuales pueden darse en el domicilio del cliente o una
habitación de hotel, o bien en el domicilio de la escort. Las escort pueden
ser independientes o trabajar para una agencia. Los servicios se suelen
publicitar en Internet, en publicaciones regionales o guías telefónicas.
Turismo sexual[editar]
Artículo principal: Turismo sexual
El turismo sexual consiste en viajar con el fin de tener relaciones sexuales
con prostitutas o participar en otras actividades sexuales. Entre las
razones por las que se recurre al turismo sexual se cuentan: una mayor
tolerancia a la prostitución que en el país de origen, precios más
bajos, privacidad o la preferencia por determinados grupos étnicos.
También es una práctica extendida entre pederastas, que buscan
una edad de consentimiento menor o permisividad respecto a
la prostitución infantil.

Problemas socioeconómicos[editar]
Tráfico de personas[editar]
Artículo principal: Trata de personas
En la trata de personas algunas víctimas están obligadas a prostituirse.
Frecuentemente se trata de un fenómeno relacionado con la inmigración
ilegal donde las mafias operan para secuestrar y vender a estas personas
a otros países para prostituirse. La Oficina de Naciones Unidas contra la
Droga y el Delito (ONUDD) ha puesto en marcha varias iniciativas para
luchar contra esta lacra del tráfico de personas, especialmente de mujeres
y niños.
Esta oficina define, en su generalidad, la trata de personas como la acción
de captar, transportar, trasladar, acoger o recibir personas, recurriendo a la
amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al
fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o
a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener
el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra con fines
de explotación.35
Las Naciones Unidas, ya en 1949, promovieron una convención para el
control de la prostitución y la lucha contra el tráfico de personas
esclavizadas generado a su alrededor.36 Las Naciones Unidas declaró en
2009 que las estimaciones muestran que podría haber alrededor de
270.000 víctimas de la trata de personas en la Unión Europea

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