Este
es
el
regalo
mas
importante
que
tus
hijos
pueden
tener,
la
vida
de
Jesus
a
través
de
la
palabra
de
Dios
y
la
oración.
No
podemos
dar
este
regalo
si
nunca
hemos
recibido
este
regalo
nosotros
mismos.
Quiero
animarte
si
es
que
nunca
has
recibido
este
regalo
del
amor
que
Jesús
quiere
darte,
buscame
al
final
de
esta
conferencia
y
pregunta
que
necesitas
para
recibir
este
regalo.
Tenemos
que
presentarles
a
Cristo
a
nuestros
hijos,
-‐el
pan
de
vida-‐
no
podemos
recibir
a
Cristo
por
nuestros
hijos,
pero
podemos
poner
el
fundamento,
crear
el
ambiente
para
que
la
fe
en
Jesús
de
tus
hijos
tome
raices
y
crezca.
Regresemos
a
Deuteronomio
6
empezando
con
el
verso
4
al
9.
V.5
Dios
quiere
que
le
amemos
con
todo
lo
que
tenemos
dentro
de
nosotros
para
enseñar
esto
a
nuestros
hijos.
Nuestra
meta
como
padres
no
es
criar
buenos
hijos
(podria
asustarte
esta
declaración)
sino
hijos
que
amen
a
Dios
para
comprometerse
y
seguir
a
Jesus,
es
modelar
y
ser
un
ejemplo
con
nuestra
relación
con
Dios.
Estos
versos
estan
dandonos
un
plan
para
educar
y
criar
a
nuestros
hijos
para
llegar
a
ser
una
decendencia
piadosa,
este
es
el
Plan
de
Dios
paso
a
paso.
El
primer
verso
dice:
“Imprimelos
sobre
tus
hijos”
–significa
enseñarles
diligentemente-‐
no
es
un
accidente
o
algo
casual.
Es
aproposito,
calculado,
de
manera
sistematica,
para
dar
a
nuestros
hijos
la
palabra
de
Dios,
hablaremos
como
hacerlo
luego.
Verso
7.
“habla
acerca
de
ellosy
cuando
nos
sentemos,
en
la
casa,
cuando
caminemos
al
lado
del
camino,
cuando
nos
acostemos
y
cuando
nos
levantemos,
esto
significa
estar
enseñando
a
nuestros
hijos
todo
el
tiempo,
todos
los
días,
estas
son
actividades
diarias
de
familia,
cuando
te
levantas
en
la
mañana,
cantas,
puedes
cantar
para
tus
hijos,
“este
es
el
dia
que
hizo
el
señor”
“Cristo
me
ama”
esta
es
una
buena
manera
para
empezar
el
día,
pon
musica
para
levantar
a
tu
hijo.
Algunos
de
los
momentos
mas
enseñables
son
aquellos
cuando
estas
sentado
o
caminando
al
lado
del
camino,
-‐esto
significa
cuando
vas
a
hacer
tus
actividades
cotidianas-‐
una
situacion
puede
venir
y
una
leccion
necesita
ser
aprendida,
puede
ser
a
la
mesa
a
la
hora
de
las
comidas,
podemos
tener
una
gran
conversación
espiritual
en
las
comidas,
en
el
carro,
o
cuando
los
niños
estan
listos
para
ir
a
la
cama.
Dios
siempre
está
enseñando
a
nuestros
hijos.
El
tiene
un
plan
de
lección
diaria
para
ellos,
permitele
trabajar
este
plan
de
lección,
no
lo
estorbes,
coopera,
ayuda
a
tu
hijo
a
ver
lo
que
Dios
está
haciendo.
Versiculo
8
dice:
…
Cuando
dice
“Atalas”-‐
significa
estas
palabras
que
él
habló-‐
para
amar
a
Dios
con
todo
el
corazón,
alma,
mente
y
fuerzas.
El
nos
dice
cuatro
diferentes
lugares
para
poner
este
gran
mensaje
y
como
en
señar
esto
a
nuestros
hijos.
Primero
dice:
“átalos
a
sus
manos”
…
necesitamos
consagrar
nuestras
manos,
demostrar
a
nuestros
hijos
que
amamos
a
Dios
mas
que
las
cosas
del
mundo,
mas
que
las
posesiones,
estatus,
etc,
ellos
necesitan
ver
que
estamos
dando
nuesto
corazón
total
y
completamente
a
Dios.
La
segunda
cosa
que
dice
es:
“Ponerlas
en
sus
frentes,
en
los
tiempos
judios
antiguos
y
creo
que
algunos
judios
ortodoxos
continuan
hacendolo
hoy,
tenian
una
tira
en
la
cabeza
con
una
cajita
adjunta
y
contenian
estas
palabras
escritas
en
la
caja:
“Ama
al
señor
tu
corazón,
con
toda
tu
alma,
con
toda
tu
mente,
todas
tus
fuerzas”
y
para
enseñarlas
a
tus
hijos
al
lado
del
camino.
No
voy
a
ponerme
una
caja
en
la
frente,
entonces
¿Cómo
hago
esto?.
Puedo
consagrar
mi
cara
–
asi
que
cuando
nuestro
hijos
miren
nuestra
cara,
miren
mis
ojos,
escuchen
mi
boca,
mis
hijos
constantemente
recordaran
que
amo
a
Dios
con
todo
mi
corazón,
mi
alma,
mi
mente,
y
fuerzas.
Quiero
que
mis
hijos
vean
todo
esto
en
mi
cara,
¿No?
Nuestros
hijos
nos
imitan
y
cuando
mis
hijos
vean
mi
cara,
quiero
que
sepan
lo
que
esta
dentro
de
mi
corazón.
Puedo
consagrar
mis
ojos:
Que
todo
lo
que
veo
y
mis
ojos
vean,
glorifique
a
Dios,
leyendo
libros
que
te
animen
a
glorificar
a
Dios,
en
lo
que
vean
en
el
cine,
en
la
tv,
en
la
pc,
video
juegos
etc.
Puedo
consagrar
mi
boca:
Glorificar
a
Dios
con
la
manera
que
hablo,
como
un
modelo
para
mis
hijos,
entonces
debo
entrenar
a
mis
hijos
en
la
manera
como
deben
hablar.
–
para
hacerlo
de
manera
que
glorifiquen
a
Dios.
V.9
“Escribelas
(estas
palabras
que
han
sido
habladas)
en
los
marcos
e
las
puertas
de
las
casas,
esto
está
hablando
de
los
lugares
cuando
la
gente
venga
a
visitarte,
es
contacto
personal
con
otros.
Podemos
consagrar
nuestra
casa
para
el
Señor,
cada
cuarto
en
nuestro
hogar,
todo
sea
para
la
gloria
de
Dios.
Que
cuando
vengan
a
nuestro
hogar
ellos
sientan
que
Dios
es
bienvenido
en
nuestro
hogar.
Sigue
y
dice:
“
en
los
portales”
en
los
tiempos
biblicos
el
portal
era
el
lugar
donde
los
hombres
hacian
negocios,
era
el
mercado
de
los
negocios,
¿Estoy
consagrando
a
Dios
el
lugar
de
negocio?
¿Cuándo
hago
negocios
con
otro
soy
paciente?
Mis
hijos
estan
viendome,
¿Estoy
glorificando
a
Dios
y
amandole
con
todo
mi
corazon,
alma,
mente
y
fuerzas,
cuando
voy
a
las
puertas
de
la
cuidad?
Nosotros
como
padres
no
podemos
forzar
la
fe
en
nuestros
hijos,
hablamos
del
evangelio,
señalando
las
cosas
de
Dios
y
cada
aspecto
de
la
vida,
un
día
ellos
tendran
que
desidir,
pero
tu
seras
el
modelo
(se
un
ejemplo
de
como
luce
tener
una
relación
con
Dios).
Se
apasionado
enseñando
el
evangelio,
como
los
somos
con
nuestras
habilidades,
sociales,
modales,
etc.
Recuerda
esto
no
es
solo
buen
comportamiento,
pero
nuestros
hijos
aprenderán
a
amar
el
corazón
de
Dios.
No
es
el
trabajo
de
la
iglesia
entrenarlos
en
el
evangelio,
ese
es
el
trabajo
de
los
padre.
Eneseñales
a
través
de
la
palabra
de
Dios:
• Musica.
• Historias.
• Versiculos
de
memoria.
• Escuela
dominical.
ORA:
Ellos
nesecitan
escucharte
orar,
ellos
modelaran
tus
oraciones,
enseñales
que
hablar
con
Dios
es
como
hablar
con
mamá
o
papá.
Ora
con
ellos
en:
• Las
comidas.
• Al
acostarse.
• En
situaciones
de
crisis.
Tambien
es
importante
orar
por
tus
hijos
–
hablales
versiculos
que
oran
por
tus
hijos-‐
(Compartir
escrituras
de
oracion
por
los
hijos).
Ora
por
sus
futuras
parejas:
empieza
ahora,
que
amen
a
Dios,
Sirvan
a
Dios,
por
protección,
que
se
guarden
puros
hasta
el
matrimonio).
Regresemos
a
deuteronomio
6:20.
Nuestros
hijos
van
a
preguntar
¿Por
qué
paso
esto?
¿Por
qué
nací?
¿Por
qué
estoy
aquí?
¿Qué
responderemos?
Queremos
siempre
dirigirlos
al
Señor.
Quiero
animarte
a
tener
una
vision
para
tus
hijos,
somos
llamados
a
producir
una
decendencia
piadosa,
asi
que
entrenemos
a
nuestros
hijos
y
estimulemosles
a
amar
a
Dios,
con
todo
su
corazon,
alma,
mente
y
fuerzas,
¿para
que
los
entrenamos?
¿para
que
nacieron?
La
respuesta
es
que
cada
uno
de
nosotros
tiene
un
propósito
en
el
Reino
esperando
ser
cumplido.
ca
carácter.