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Empezamos con la hipótesis sobre el Origen del Universo, el cual empezó con
una explosión cataclísmica llamada Bing Bang ; toda la materia y energía que
ahora constituye el Universo estaba comprimida en un pequeño punto
infinitesimal, por razones que nadie entiende, el punto de explosión se generó
hace 13 600 millones de años y actualmente continúa expandiéndose (Figura 1).
Los primeros átomos (hidrógeno y helio) y tazas de litio, berilo y boro se
desarrollaron poco después del Big Bang. Estos átomos formaron grandes nubes
de gas, llamadas nebulosas.
Figura 1. El concepto de expansión del Universo, las espirales representan las
galaxias. Ga (giga años) significa “hace billones de años”.
Nuestro sol navega alrededor de la Vía Láctea, junto a ocho planetas: Mercurio,
Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno y demás objetos, por
medio del “pegamento” gravitacional.
Un planeta es un objeto sólido esférico que orbita una estrella y puede viajar con
una luna o muchas lunas, una luna es un objeto cuya órbita es alrededor de un
planeta. De los ocho planetas de nuestro Sistema Solar, los cuatro más cercano
al Sol (Mercurio, Venus, la Tierra y Marte) se llaman los planetas interiores, o los
planetas terrestres (planetas similares a la Tierra), porque consisten en una capa
de roca que rodea un núcleo de aleación de hierro, igual que la Tierra. Los
siguientes cuatro planetas tradicionalmente han sido llamados los planetas
exteriores, los planetas jovianos (planetas similares a Júpiter), o los planetas
gaseosos gigantes (Figura 3). Júpiter, tiene una masa que es aproximadamente
318 veces la de la Tierra y un diámetro de 11,2 veces más grande. Júpiter y
Saturno difieren significativamente de Urano y Neptuno. Júpiter y Saturno tienen
una composición elemental similar a la del sol y así constan fundamentalmente
de hidrógeno y helio. Urano y Neptuno, por el contrario, parecen estar
constituidos predominantemente de "hielo" (metano sólido, sulfuro de hidrógeno,
amoníaco y agua). Tenga en cuenta que a pesar de que Júpiter y Saturno tienen
la misma composición que el Sol, no se encienden como el Sol debido a que sus
masas son tan pequeñas que sus interiores nunca llegaron a ser lo
suficientemente calientes. Nuestro sistema solar consiste del Sol (99% de masa),
cuatro pequeños planetas similares a la Tierra y cuatro planetas gaseosos
gigantes, estos también contienen asteroides rocosos o metálicos y los objetos
del cinturón Kuiper y Oort. Plutón ahora es considerado un objeto del cinturón de
Kuiper.
Figura 3. (a) Los tamaños relativos de los planetas de nuestro Sistema Solar.
Plutón ya no se califica como un planeta, a partir de 2006, por lo que no aparece
aquí. (b) Un diagrama del sistema solar indica que todos los planetas clásicos
tienen órbitas que se encuentran en el mismo plano. Un cinturón de asteroides,
planetesimales rocosos y metálicos que nunca se unieron en un planeta, se
encuentran entre Marte y Júpiter. El Cinturón de Kuiper de objetos helados (no
se muestra) se encuentra fuera de la órbita de Neptuno. Plutón, un planeta hasta
su reclasificación en 2006, tiene una órbita que se encuentra oblicuo al plano del
Sistema Solar. Plutón es probablemente un objeto del Cinturón de Kuiper, cuya
órbita se ha cambiado en respuesta a la atracción gravitatoria de los planetas.
Nuestro sistema solar se formó aproximadamente hace 4 560 millones de años,
más de 9 mil millones de años después del Big Bang, nuestro Sol es,
probablemente, una de tercera, cuarta o quinta generación de estrella, creado a
partir de una nebulosa que contenía todos los noventa y dos elementos. Los
materiales en esta nebulosa podrían dividirse en dos clases, los materiales
volátiles como hidrógeno, helio, metano, amoníaco, agua, y monóxido de
carbono son los que podrían existir como gas en la superficie de la Tierra. Y los
materiales refractarios que son los que se funden sólo a altas temperaturas,
como se mencionó anteriormente el primer paso en la formación de una estrella
es el desarrollo de un disco de acreción que no solo contiene helio e hidrógeno
sino otros gases como hielo y polvo. Este disco de acreción contiene las materias
primas de las que se formaron los planetas, con el tiempo, la esfera central del
disco se convirtió en un proto-sol y el resto en una serie de anillos concéntricos,
el que se encuentra en los anillos se comienza a acrecionar y formar piezas más
grandes, estos granos se agruparon y formaron bloques del tamaño de balones
de basquetbol (Figura 4). Con el tiempo suficientes bloques acrecionaron para
formar planetesimales, cuerpos suyo diámetro supera 1 metro, debido a su masa
los planetesimales ejercen la suficiente gravedad para atraer otros objetos
cercanos, estos actúan como aspiradoras, atraen detritos y crecen
progresivamente. Finalmente se convierten en protoplanetas, planetas con
cuerpos de tamaño similar a los actuales, una vez que los protoplanetas han
incorporado casi todos los escombros cerca de sus órbitas, su crecimiento cesó
y se convirtieron en los planetas que existen en la actualidad, todavía existen
algunos planetesimales. La naturaleza del planeta resultante de la acreción
depende de la distancia con el protosol. En las órbitas interiores, consiste
principalmente de polvo, los pequeños planetas terrestres están compuestos de
roca y metal; en la parte exterior del sistema solar, donde además de gas y polvo,
cantidades significativas de hielo existen, grandes protoplanetas, tan grandes
como 15 veces el tamaño de la Tierra se formaron. Cuando el Sol se encendió,
hacia el final de la época en que los planetas se estaban formando, generó un
fuerte viento estelar (en este caso, el viento solar) que soplaba los gases que
quedan fuera de la parte interna del recién nacido Sistema Solar. Pero el viento
era demasiado débil para vencer a los gases de los planetas gigantes gaseosos,
por la atracción gravitatoria de los planetas estos eran demasiado fuertes, este
modelo que acabamos de describir se llama teoría nebular de la formación del
Sistema Solar.
Figura 4. El interior granulado de este meteorito (un fragmento de material sólido
que se cayó desde el espacio y aterrizó en la Tierra) puede parecerse a la textura
de un pequeño planetesimal. La muestra es de unos 15 cm de largo.
Los planetesimales fueron de forma irregular y los asteroides hoy tienen una
forma irregular. Los planetas por otro lado son escencialmente esferas debido a
que cuando un protoplaneta crece lo suficiente la gravedad puede cambiar su
forma. La roca que compone un pequeño planetesimal es fresca y lo
suficientemente fuerte para que la fuerza de gravedad no sea lo suficiente para
causar una deformación dúctil en la roca. Pero una vez que un planetesimal
crece más allá de un cierto tamaño crítico, el interior del planeta se calienta y la
roca se convierte en lo suficientemente suave para que la roca fluya en respuesta
a la gravedad, también la fuerza gravitacional se vuelve más fuerte, la forma
especial es una esfera debido a que en una esfera la distribución de la masa
alrededor del centro se ha igualado.
Figura 5. Formación del Sistema Solar de acuerdo a la hipótesis de la nebulosa
primitiva.
Bibliografía
Edward Tarbuck, F. L. (2005). Ciencias de la Tierra: Una introducción a la
geología física. Madrid: Pearson.
Marshak, S. (2008). Earth Portrait of a Planet, 3rd Edition . New York: Norton &
Company, Inc.
Stephen, N. (2015). Phisical Geology. New Orleans: Tulane University.