DISCURSO : EL DÍA DE LA RAZA

El Día de la Raza, denominado así en América, es un día en el que se

celebran discursos y ofrendas florales ante el monumento erigido a Cristóbal
Colón en una de las principales plazas del Paseo de la Reforma, en la ciudad
de México.

El 12 de octubre se conmemora la fecha en que la expedición de Cristóbal

Colón llegó a las costas de una isla americana, en 1492. El 12 de octubre se ha
considerado como un día memorable porque a partir de entonces se inició el
contacto entre Europa y América, que culminó con el llamado "encuentro de
dos mundos", que transforma las visiones del mundo y las vidas tanto de
europeos como de americanos.

¿Por qué día de la raza?

El Día de la Raza fue instituido para unir aquellos pueblos o países que
tienen en común la lengua, el origen o la religión. Se puede considerar
entonces esta fecha como ocasión para detenerse a pensar y ver que las
naciones americanas deben ser plurales en lo cultural, lo étnico y lo racial
valorándose, respetándose y reconociéndose.

Un pueblo que se reconoce asimismo es aquel que es capaz de volver a sus

orígenes, recorrer su historia con madurez, y valorar los procesos que le
permiten plantearse en el presente como pueblo.
Con esta premisa, quiero invitarles hoy a celebrar el día de la raza con un
nuevo significado para nosotros.
Aquel significado en el que, dentro de la diversidad cultural, social, política
y también étnica, somos capaces de reconocer elementos de identidad y
unidad, que nos facultan, en definitiva, para plantearnos de manera sólida
hacia un futuro común y propio.

Sin embargo es necesario que ustedes sepan que en los últimos tiempos esta
fecha ha sido revisada y cuestionada desde posiciones historiográficas y
políticas diversas.

Muchos críticos consideran que en la conquista Española existen

"leyendas rosas y negras al respecto"; que España llega a America a
evangelizar y culturizar pero existe. "La historia negra que está basada en
tanto, como las defensas o resistencia de los aborígenes y conquistadores"
cuestionando al 12 de octubre de 1492 como uno de los días más nefastos de
la historia de la humanidad. Más que un encuentro, aquello fue un terrible
“choque” de culturas, en el que una de ellas terminó llevándose por delante a
la otra, por considerarla primitiva; saqueando sus tierras y riquezas,
silenciando sus lenguas, ocultando sus culturas, etc.

Es por eso, que muchos han cuestionado el termino El día de la raza desde
su nombre: RAZA un término que muchas veces induce discriminación,
intolerancia, y que hasta a llegado a reforzar todos estos malos sentimientos
dentro de la gente.

El INADI : Instituto Nacional Contra la Discriminación, la Xenofobia y

el Racismo propone cambiar el nombre de "Día de la Raza"
ha elaborado un proyecto para que el 12 de octubre sea denominado "Día de
la Diversidad Cultural Americana". El objetivo es que se transforme en una
jornada de valorización de las identidades étnicas y culturales y de reflexión
histórica.

Finalmente, y después de estas consideraciones de rigor, del día de la raza,

el mestizaje producido fue "en todo sentido". "Fue cultural, lingüístico, y se
formó así una identidad nueva. "El mestizaje existe. Negar o dar sentido
contrario es negar nuestra propia historia. Hay que ser consientes de lo que
ocurrió a partir del 12 de octubre irrefutablemente América deja de ser
"exclusividad de aborígenes" para ser otra América. "Nace la América
Hispana que complementa a la aborigen".

La raza, entonces, no es un concepto biológico, es el sello personal

inconfundible es algo puramente espiritual. Raza es un estilo de vida, practicar
el bien y vivir en dignidad".

Constituye una suma de imponderables que hace que nosotros seamos lo que
somos y nos impulsa a ser lo que debemos ser, por nuestro origen y nuestro
destino.

La historia, la religión y el idioma nos sitúan en el mapa de la cultura

occidental y latina, a través de su vertiente hispánica, en la que el heroísmo y
la nobleza, el ascetismo y la espiritualidad, alcanzan sus más sublimes
proporciones. Como afirmó Renán que “el verdadero hombre de progreso es el
que tiene los pies enraizados en el pasado”.

Y finalmente concluyo diciendo, que raza, conozco una sola; la raza

humana...