Comportamiento de líder.

Rincón Reyes René.

El liderazgo ha sido un objeto de controversia dentro del comportamiento organizacional desde

hace ya varios años. La relevancia del tema, dentro del marco de la psicología ha sido de interés
debido a que los psicólogos se han interesado en cómo una sola persona puede tener la capacidad
de influir sobre los demás en su comportamiento para lograr metas definidas, en su poder de
convencimiento, y en su capacidad de planificar y organizar a sus seguidores. Debido a lo
anterior es que el liderazgo se ha transformado en un tema de estudio serio, donde se han
teorizado diversas hipótesis a lo largo de los años, desde que el líder nace y no se hace (teoría de
los rasgos), hasta una teoría donde los líderes no existen per se, sino que el liderazgo es
simplemente una valoración que los demás le atribuyen a una persona (teoría de los atributos del
liderazgo). Lo cual hace que nos cuestionemos, realmente, ¿qué es el liderazgo? Además,
¿cualquiera puede ser líder? Y, sobre todo, ¿qué caracteriza a un líder?

¿Cualquiera puede ser líder?

Debido a la forma en que estamos abordando el tema y al llamarlo comportamiento de líder, se

está diciendo que, en primer lugar, éste no es un comportamiento que surge de la nada, sino que,
en su lugar, son conductas que se van aprendiendo y que nos van dando un “repertorio” que nos
es útil para aplicarlo en determinadas circunstancias. Lo cual nos da el segundo punto
importante: es una serie de comportamientos que se realizan en determinado contexto, por lo
cual son APRENDIDOS, es decir, cualquiera puede aprender a comportarse como líder.

Lo anterior puede, de igual forma a llevarnos a cierta confusión, pues nos da la idea de
que hay una serie de conductas específicas que todo líder debe realizar, lo cual no es cierto. Se
podría decir que el comportamiento de líder tiene que ver más con lo que Carpio, Pacheco,
Canales y Flores (1998), denominaron como “comportamiento inteligente”, lo cual son formas
de comportamiento efectivo, variado y novedoso, y no la simple repetición de conductas
aprendidas con anterioridad. Esto significa que la persona que presente comportamiento de líder
debe aprender a interactuar con el medio para lograr soluciones ante problemas no esperados o
ante situaciones problemáticas (efectivo), debe de lograr idear diversos métodos para dar
soluciones a un mismo problema (variado) y debe de saber cómo improvisar, es decir, idear
conductas funcionales no utilizadas con anterioridad (novedoso).

Profundizando un poco más en el tema, ahora revisaremos qué es el comportamiento de

líder, y, sobre todo, cómo se comporta el líder.

¿Qué es el comportamiento de líder?

A manera de diferenciación, hay que definir por qué no hablar de “liderazgo” y, en su lugar,
hablar de “comportamiento de líder”. La palabra liderazgo, según Robbins (1994), se define
como “la capacidad para influir en un grupo con objeto de que alcance metas”. Sin embargo,
trabajar con una definición de este tipo puede generar confusión, debido a que el término
“liderazgo” sugiere su existencia como sujeto ontológico, como una instancia que de alguna
forma es la causa de aquellas conductas valoradas como “de líder”. En contraste, la expresión
comportamiento de líder hace referencia a la tendencia por comportarse de una forma en
particular que está asociada a la ocurrencia de conductas en ámbitos específicos de desempeño
(Carpio, Pacheco, Flores y Canales, 1998).

Lo anterior quiere decir, en primer lugar, que no estamos hablando de algo “que se tiene”
o que “se desarrolla”, sino de un conjunto de conductas específicas que, en ciertas circunstancias,
influyen para que un conjunto de personas trabajen hacia una meta en común, es decir, el
comportamiento de líder es el conjunto de conductas que, bajo cierto contexto, potencian que un
grupo de personas se comporten para conseguir una meta específica. En segundo lugar, esta
definición nos da un punto de partida donde podemos decir que ese término al que se ha
denominado “liderazgo”, no es una “capacidad”, es decir, algo que se tiene, sino un responder
ante las circunstancias, lo que nos da un punto importante a tratar: el comportamiento de líder
involucra tres variables: la persona que debe comportarse como líder, los subordinados a quienes
se debe guiar, y el contexto en que esta interacción ocurre.
 El líder es aquella persona que dirige o guía al grupo hacia una meta en común que él
mismo define y estructura.

Los subordinados son el conjunto de personas que forman un equipo que debe responder
para lograr un objetivo fijado por el líder.

El contexto son todas las circunstancias que definen el problema a resolver, lo cual
incluye los siguientes factores: cómo se comporta el líder, cómo se comporta cada uno de los
subordinados, la meta que se quiere alcanzar, el procedimiento mediante el cual se quiere
conseguir lograr la meta, el tiempo que se tiene para lograr la meta, el cómo ha trabajado
antes el grupo para lograr metas, el cómo ha dirigido el líder antes a otros grupos (o a ese
mismo grupo) para alcanzar otras metas, los valores a los cuales se suscribe el líder, los valores
a los cuales se suscriben los subordinados, el lugar en el cual se trabajará, y los
auspiciadores.

 Cómo se comporta el líder: tiene que ver con cómo la persona que hará el rol de líder se
comporta en contextos distintos al laboral, es decir, su comportamiento fuera del contexto en
que debe comportarse como líder.
 Cómo se comporta cada uno de los subordinados: como se sabe, un grupo de
subordinados está formado por un conjunto de individuos que trabajan juntos, lo que
significa que no hay que ver a un grupo como un conjunto unificado de personas, sino a
individuos en conjunto, esto significa que cada uno de los miembros del grupo tienen una
historia particular, por lo que cada uno de ellos, al igual que el líder, se comportan de cierta
manera fuera del contexto laboral, lo cual se debe tomar en cuenta porque podrá influir en su
comportamiento laboral.
 Meta que se quiere alcanzar: es el objetivo que se quiere alcanzar: aquello que el líder
quiere lograr y hacia donde guía a lo subordinados, es por lo que trabajan en conjunto.
 Procedimiento mediante el cual se quiere conseguir la meta: es la metodología planteada
para conseguir la meta, es la guía del líder expresada a manera de instrucciones, es decir, es
lo que el líder, en conjunto con los subordinados seguirán para llegar hasta la meta.
 Tiempo que se tiene para lograr la meta: es un factor importante, pues delimita el ritmo al
cual deberán trabajar los subordinados y el líder.
 Cómo ha trabajado antes el grupo para lograr otras metas: aquí se define el trabajo en
conjunto que se ha tenido en proyectos anteriores (si es que lo ha habido) del grupo con el
que se trabajará. Esto nos dará información de cómo se ha desenvuelto el grupo en
circunstancias similares.
 Cómo ha dirigido el líder antes a otros grupos: esto nos dará información sobre cómo se
ha desenvuelto y comportado el líder antes, en circunstancias similares.
 Valores a los cuales se suscribe el líder: esto representa los valores y creencias que el líder
tiene, esto puede influir en la forma de trabajo y, por tanto, en la interacción que tendrá con
los subordinados y con la forma de llegar a la meta.
 Valores a los cuales se suscriben los subordinados: de nuevo, hay que recalcar que estos
aspectos se deben considerar de manera individual, pues cada individuo tiene valores
diferentes, y todos ellos posibilitarán un desempeño diferente y una forma de trabajar en
conjunto con el líder.
 Lugar en el que se trabajará: este factor situacional es muy importante, porque de nuevo,
posibilita que se trabaje de cierta forma y, por tanto, puede ser decisivo en si se alcanza la
meta o no.
 Auspiciadores: son todos aquellos individuos que afectan el desempeño del líder o de los
subordinados o ambos (para bien o para mal), pero que no están involucrados de manera
directa en el proyecto, es decir, no son líderes directos de los subordinados, ni forman parte
de los subordinados.

Los elementos anteriores forman parte de toda interacción líder-subordinados, lo que

significa que cada uno de los elementos anteriores posibilita cierto tipo de desempeño en la
realización de una tarea y, por consiguiente, en si se alcanza o no la meta. Estos son criterios que
deben valorarse y analizarse para que el líder sepa mejor qué es lo que debe hacer y cómo debe
comportarse según la circunstancia que se presente o dependiendo de la persona a la que deba
dirigirse.
 ¿Cómo se comporta un líder?

Para contestar esta pregunta, se debe realizar primero un análisis lo más preciso posible de los
elementos mencionados en el apartado anterior, pues es este análisis el que dictará al líder cómo
deberá comportarse ante los subordinados para alcanzar la meta establecida.

 Cómo se comporta el líder: esto irá en función del análisis que se haga de los diversos
elementos que influyen en la realización de la tarea, es decir, hasta después de hacer el
análisis detallado de estos elementos, pues depende de ellos la postura que deberá tomar el
líder para dirigirlos.
 Cómo se comporta cada uno de los subordinados: hay que recordar que, aunque los
subordinados formen un grupo, no se puede descartar la individualidad de cada uno de ellos y
que cada uno tiene comportamientos únicos, por lo que el líder debe volverse muy hábil en
reconocer cada uno de estos, pues no a todos se les puede liderar por igual.
 Meta que se quiere alcanzar: tener perfectamente definido qué se quiere alcanzar es pieza
fundamental de todo comportamiento de líder, pues desde el primer momento éste realiza
planes en función de la meta. Una meta que no es clara o que es planteada muy difícil,
raramente conseguirá que el líder sepa cómo actuar y dirigir al grupo, por lo que, desde que
se presenta la meta y en el cómo se presenta, comienza el líder a comportarse de manera
específica para motivar a sus subordinados.
 Procedimiento mediante el cual se quiere conseguir la meta: tan importante como tener
bien definida la meta, es tener definido a priori también el cómo se planea llegar a la meta.
El procedimiento, si es posible, debe plantearse con un cronograma, y, sobre todo SER
REALIZADO Y REVISADO POR EL LÍDER. Este procedimiento debe considerar todos los
elementos que se han mencionado (cómo se comporta el líder, cómo se comporta cada uno de
los subordinados, etc.), e implica la parte más difícil del líder, pues mientras estructura el
procedimiento para llegar a la meta, debe considerar variables extrañas que pudieran
presentarse, su papel dentro del proyecto, el papel de los demás dentro del proyecto, los
recursos necesarios para llevarlo a cabo y el tiempo disponible para su realización.
 Tiempo que se tiene para lograr la meta: delimita el procedimiento y la velocidad a la que
se debe realizar el procedimiento. Debe tomarse muy en cuenta, pues muchas veces la falta
 de planeación o muchos de los errores del líder se basan en no contemplar el tiempo que se
tiene sino hasta que ya es tarde.
 Cómo ha trabajado antes el grupo para lograr otras metas: obviamente la experiencia
cuenta, y el trabajo en grupo es algo que debe considerarse. Antes de iniciar cualquier
proyecto, el líder debe investigar si sus subordinados ya habían trabajado antes juntos en
algún otro proyecto y cómo lo hicieron, después a nivel individual cómo habían trabajado, en
qué áreas se desenvuelve mejor cada uno, qué experiencia tiene cada uno en relación a la
meta actual, etc. La historia del grupo, tanto en conjunto como individualmente, importa,
pues ayuda al líder en la planeación del procedimiento e, incluso, a evaluar cómo se ejecutará
el proyecto.
 Cómo ha dirigido el líder antes a otros grupos: al igual que de los subordinados, es
importante que el líder siempre tenga en cuenta su propia experiencia dirigiendo, pues de ahí
puede recuperar errores que ha cometido y cómo evitarlos, cómo ha reaccionado diversa
gente ante determinadas conductas de él en su papel de líder, cómo ha manejado los tiempos,
los problemas que se presentaban de improviso, etc. Esta experiencia es la que, en muchos
sentidos, influye en el éxito de un proyecto, aunque no es determinante.
 Valores a los cuales se suscribe el líder: las creencias y valores son siempre importantes,
pues son las que como humanos nos ayudan a tomar decisiones y nos dictan cómo
comportarnos. Los valores en el líder son importantes, entendiendo la palabra valores como
las creencias, tendencias, hábitos, costumbres, propensiones, inclinaciones y moralidad del
sujeto, pues son factores disposicionales que en algún momento dado influirán sobre el
comportamiento de líder.
 Valores a los cuales se suscriben los subordinados: de igual forma que el líder, los
subordinados también tienen valores, los cuales también deben ser tomados en cuenta en la
planeación, pues lo que se plantee en el procedimiento, hay que recordar que será ejecutado
mayormente por los subordinados, por lo que conocer sus valores es importante para elaborar
el mismo.
 Lugar en el que se trabajará: otro factor disposicional, que posibilita que se trabaje de
cierta forma. Es importante considerar el lugar en varios aspectos: qué tipo de lugar es
(recreativo, educativo, etc.), el espacio que tendrán para trabajar, y organizar el
 procedimiento también en función de esto, del espacio disponible, del tipo de lugar que es, y
de la ubicación del mismo.
 Auspiciadores: para un líder es importante evitar que personas ajenas a la relación líder-
subordinados interfieran en la elaboración del mismo, sin embargo, a veces esto es imposible
según el nivel de relevancia del auspiciador. En este caso se recomienda adaptar las diversas
recomendaciones u órdenes según los elementos ya revisados y NO intentar adaptar a los
subordinados (o a sí mismo incluso) a las demandas nuevas.

Un análisis detallado de todos estos elementos son los que le dirán a líder cómo comportarse
según la circunstancia, pues el análisis es como su caja de herramientas, la cual podrá utilizar
cada que se requiera, y le dará una visión más amplia del problema, de la meta, de cómo
realizarla, y, sobre todo, de cómo comportarse para potenciar que un grupo de subordinados
cumplan una meta, que es, en principio, la función del líder.

Conclusiones.

La forma en que debe abordarse el tema que era considerado como “liderazgo”, debe ser a través
del término: comportamiento de líder, para evitar confundir un fenómeno conductual con un
“fenómeno interno”. El estudiarlo de esta manera tiene ventajas sobre la vieja concepción, pues
nos da la premisa de que se puede aprender este comportamiento así como nos permite
determinar características controlables que pueden tener relevancia en este tipo de interacción
líder-subordinados.

Finalmente, hay que destacar la importancia del análisis en la eficacia de una tarea de
líder, pues es ésta la que hará generar la experiencia necesaria para la ampliación del repertorio
conductual y lograr un desarrollo en el comportamiento inteligente del individuo.
Referencias.

Carpio, Claudio, Pacheco, Virginia, Canales, César y Flores, Carlos. (1998). Comportamiento
inteligente y juegos de lenguaje en la enseñanza de la psicología. Acta comportamentalia. 6 (1)
pp. 47-80.

Robbins, S. (1994). Comportamiento organizacional. México: Prentice Hall.