“Ellos desean que se les hablen cosas

halagüeñas. Y si se tocan males

específicos de los individuos, se quejan
de demasiada severidad y simpatizan
con aquellos que están haciendo lo
malo... Permitid que la verdad sea
cortante. Se me ha mostrado que la
razón por la cual nuestros ministros no
tienen más éxito, es porque tienen
miedo de herir los sentimientos, temen
no ser lo suficientemente corteses, y así
rebajan las normas de la verdad” – 2
SG, Vol. 2 p. 284