Universidad Nacional
Autonoma de México
Instituto
De
Ingenieria
84
Contribucion al estudio de la
socavacién local en pilas de puente
José Antonio Maza Alvarez
José Luis Sanchez Bribiesca
Enero de 1964 84Contribucién al estudio de la socavacién local
en pilas de puente
José Antonio MAZA ALVAREZ y José Luis SANCHEZ BRIBIESCA*
INTRODUCCION
Hace ya varias décadas que algunos destacados
investigadores se ocupan del importante problema
que. para el disefiador, representa la seleccion de
la profundidad de desplante de las pilas de un
puente El problema tiene especial interés cuando
Ja estructura se ubtca en una seccion de un cauce
cuyo fondo esta formado por materiales no cohe-
sivos que alcanzan profundidades tales que hacen
impracticable la cimentacién sobre un manto de
roca firme.
Para atacar este problema se hace necesario de-
terminar con aproximacién suficiente la profundi-
dad maxima que alcanzara la socavacion en la
proximidad de las pilas del puente. Esta socava-
fidn es producida por la capacidad de arrastre de
la corriente y habré de clasificarse en tres grupos
1 La socavacién general, a lo largo del cauce.
que ocurre cuando, al aumentar el caudal, se in-
crementa la capacidad de arrastre de la corriente
con la consiguiente disminucién del nivel del fon-
do del rio.
2. La socavacién localizada en la seccién del
cruce y en las zonas adyacentes a ella, que se pre-
sentara porque la obstruccién que representa para
el escurtimiento la presencia de las pilas. o la dis-
minucién del ancho de seccién transversal para
acortar [a longitud del puente, trae consigo un au-
mento de la velocidad media de la corriente en la
zona menctonada, con lo que también crece la ca~
pacidad de arrastre.
3. Una socavacién local, en Ja cara aguas arri-
ba de las pilas. que ocurriré porque la alteracién
que en el flujo produce la presencia de tales es-
tructuras, da lugar a corrientes transversales con
gran capacidad erosiva.
El objeto de este trabajo es comentar y amphar
en lo posible los diversos criterios elaborados en
la actualidad para valuar el tercer tipo de soca-
vacion descrito. La necesidad de tal estudio surgid
fen el Instituto de Ingenieria cuando, después de
Snalizar {a literatura disponible sobre el tema, se
legé a la conclusion de que existen fundamental
mente dos criterios, aparentemente antagénicos, no
‘obstante que ambos estan respaldados por nume-
rosas pruebas de laboratono y lo que es mas. por
mediciones efectuadas en prototipo.
El primer criterio ha sido propuesto por Laursen
y Toch, de acuerdo con los estudios realizados por
* Investigadores del Instituto de Ingenieria, UNAM
Enero DE 1964
a Universidad de lowa: después ha sido ampliado
‘or Souza Pinto, Magliolo y Romitta, entre otros.
segundo criterio, que se debe a Yaroslavtsiev,
es el resultado de mediciones hechas en varios
puentes de la Unién Soviética y ha sido corrobo-
ado por las observaciones de Bata. Andreiev y
otros investigadores. Para Laursen y su escuela
la socavacién depende fundamentalmente del ti-
rante y en segundo término de la forma de la pila.
si bien este segundo parametro no es significative
cuando la corriente ataca a la pila en forma obli-
cua; en cambio la velocidad media de la corriente
y el tamaiio de los granos del fondo no son fac-
toes que sean tomados en cuenta para determinar
la profundidad de socavacién, de acuerdo con este
qriterio. Por el contrario, para Yaroslavtsiev, la
socavacién depende del cuadrado de la velocidad
media de la corriente en primer término: y tanto
el tamafio de los granos del fondo. como la geo-
metria de la pila. aun en el caso de ataque oblicuo
Ge la Corriente. son parimetros significativos en
a valuacién de la profundidad de socavacién.
En atencién a que no es posible estudiar en
modelo reducido un fenémeno tan complejo. dada
Ta cantidad de parémetros que lo determinan y la
dificultad de establecer las escalas correspondien:
tes, se construyeron en el Instituto de Ingenieria
estructuras reducidas especialmente disefiadas pata
tstudiar en el Laboratorio la valide: y limites de
Splicabilidad de los dos criterios mencionados. Se
busco también una explicacion satisfactoria a las
discrepancias aparentes. Si en los parrafos siguien-
fes se llama modelos a estos dispositivos, es més
bien por la costumbre de dar ese nombre a las
pequetias estructuras que se usan en el Laboratono
Frio porque representen prototipos especificos
Ciertamente que la pequefiez relativa de estas
estructuras hizo ver la necesidad de aumentar el
campo de la experimentacién mediante el empleo
de otras mayores, en las cuales puedan hacerse
ensayos con tirantes y velocidades mas grandes
que fos empleados hasta la fecha y también con
Granulometrias mas variadas. Sin embargo, con los
Fesultados de los estudios hasta hoy realizados, se
pueden obtener ya conclusiones de interés, que
Rabran de ser ampliadas y confirmadas a medida
que progresen los estudios nuevos que se piensa
fealizar en fecha proxima
‘A reserva de discutir con mayor amplitud en
los parrafos subsecuentes los conceptos que se pre-
sentan en esta introduccién, considérese Ta gra-
fica 1 en donde se han representado superpuestos
43‘roneho deo
Grieica 1 Curva de Laursen. y algunas obtemdas de la
Firmula’ de Yarosiavtziev
los resultados que se obtienen al calcular la soca-
vacién relativa con los criterios de Laursen y Ya-
toslavtsiev. Si se consignan en el eje vertical las
profundidades de socavacién relativas, o relaciones
socavacién-ancho de la pila, y en el eje horizontal
la relaci6n tirante ancho de la pila, el trazo grueso
muestra la relacién entre ambos parametros, segin
el criterio de Laursen. y los trazos mas delgados
indican las relaciones obtenidas segiin Yaroslavt-
siev cuando se mantiene constante la velocidad y
se varia solamente el tirante.
Ahora bien. segin los resultados experimenta-
les, ha podido observarse que para un tirante
dado. la profundidad de socavacin concuerda bas-
tante bien con la variacién que indica Yaroslavt-
siev, al variar la velocidad, con tal que la relacion
h/b sea mayor que 1.5 y en tanto no se haya
pasado Ja curva de Laursen; esto es, existe un
valor limite para la velocidad, més alla de la cual
la socavacién ya no progresa. mientras no varie el
tirante. Todo hace suponer entonces que con el eri-
terio de Laursen se determina el intervalo de apli-
cabilidad del criterio de Yaroslavtsiev, de suerte
que los criterios antagénicos en apariencia, resul-
turaleza. en tanto que en un rio de planicie, el
ctiterio de Laursen, que es itil sélo en condiciones
extremas, conducira también a resultados absurs
dos.* Esta interpretacién parece constituir una
explicacién plausible al hecho de que las medicio.
nes realizadas por Hubbard en el rio Shunk, con.
cuerden con el criterio de Laursen, mientras que
Jas mediciones hechas por Bata y Andreiev * con.
firmen el criterio de Yaroslavtsiev. Conviene hacer
notar que, segin parece, Laursen y Yaroslavisiev
desconocian mutuamente sus trabajos respectivos
por lo menos en la época de sus primeras publi.
caciones,
BREVE DESCRIPCION DE LOS METODOS
DE LAURSEN Y YAROSLAVTSIEV
Al considerar la poca difusién que tienen en
nuestro medio los diferentes trabajos que se men.
cionan en la bibliografia, se ha crefdo conveniente
presentar aqui, por lo menos de manera sucinta
los criterios de Laursen y Yaroslavtsiev. a fin de
facilitar la comprensién de los conceptos que ha-
bran de discutirse en seguida. Al hacer dicha pre-
sentacién, se usard la siguiente nomenclatura
S. es la profundidad maxima de la erosién en
la nariz de la pila (m)
& es el ancho de la pila (m)
‘A es el tirante de la corriente (m)**
v es la velocidad media de la cornente
(m/seg)
des el diametro medio del maternal del fon-
do (cm)**
g 6s la aceleracién de la gravedad (m/seg')
5, es la longitud de la proyeccién de la pula
sobre un plano normal a las lineas de co-
rriente, véase fig. 2.
K, es funcién de h’b segiin se muestra en la
grafica 2.
Gakrica 2. Relacién entre a eronén relativa y la profundidad relative
tan ser complementarios. El desconocimiento de
este hecho puede conducir, sin embargo, a resul-
tados absurdos; en efecto, en un rio de montaia
con velocidades muy grandes, el ctiterio de Yaros-
lavtsiev puede conducir a la prediccién de soca.
vaciones muy fuertes que no ocurrirén en la na-
44
‘nSeeeierse,stemplopronuasto por Levedioy' en
ssu libro y se vera que para una pila rectangular
de espesor y 6.5 m de ancho, colocada en un tio con ti
ante de 5.5 m y velocidad de’ 1.20 m, segin Yaroslavisiev,
Ja socavacién seria de 1.65 m y segin Laursen de 500 m,
Se Vease la grafica 2
+++ Aproximadamente dy
IncesteniaKy
es un coeficiente que depende del angulo
de incidencia de la corriente contra la pila,
y se define en la grafica 3.
es un coeficiente de forma que se define
en Ia tabla I.
es un coeficiente de forma que se define
en la fig. 2.
es funcién de v?/gb, y puede obtenerse de
la grafica 4.
es un coeficiente de ubicacién que varia
de 0.6 para pilas colocadas en el cauce
principal, a 1.0 para pilas colocadas en el
cauce de avenidas.
es funcién de h. by y se puede obtener de
la grafica 5
,- FACTOR coRRECTIVO
Grarica 3.
Foro 1. Vista del canal de ensayos desde aguas abajo. Al
fondo se encuentra el vertedor para medic el-gasto y el
‘alimentador de arena.
correeciin cuando existe un angulo de incidencia entee el eje
ide la pila y la corriente
ee Ee
833 3 6633362 at Me eile. Salgahe ge ats (0k
Grarica 4. Coeficiente K
Segiin Laursen. cuando la mayor dimensién
transversal de la pila esta alineada con el flujo
la soc
avacion es
S=KK:b
(K; vale J para una pila rectangular)
Eero pe 1964
Si la pila esta esviajada Ia socavacién es
SaKKb
Para Yaroslavtsiev la socavacién esta dada por
la formula
S = KK (a+ Ky)e/g 30d. con las siguien-
45Grarica 5.
TaBta L Copricisnte DE CORRECCION QUE DEPENDE DE LA
FORMA DE LA PILA. SOLO ES APLICABLE A LAS PILAS ORIEN-
TAOAS SEGUN EA CORRIENTE
FORMA DE La NARIZ COEFICIENTE Ky
RECTANGULAR "A 00
SEMICIRCULAR Ce D 0.90
ELIPTICA a
0.75
Lenricucar
tes limitaciones: el valor 30d no debe tomarse en
cuenta si d < 0.5 cm. y el valor de S no es con-
fiable si h/b < 2
ENSAYOS HECHOS EN EL INSTITUTO
DE INGENIERIA
Los estudios experimentales que se hicieron en
el Instituto, se levaron a cabo en un canal de
15 m de longitud y 2 de ancho. En la seccién ini-
cial se dispuso un alimentador y distribuidor de
arena, ideado especialmente para regular el gasto
sélido que debia suministrarse al canal (ver fotos
1 y 2, y fig. 1). En tres secciones intermedias se
colocaron tres limnimetros cuya funci6n era el re-
gistro de la superficie libre del agua. A diez me-
tros de la seccién inicial se ubie6 la seccién de
pruebas, en la cual el fondo era mas profundo, a
fin de alojar alli una base de concreto que lastrara
la pila durante los ensayos: ademas, en la seccién
de prueba las paredes del canal se hicieron de
lucita para poder observar el arrastre del fondo
46
Coeficiente Ky
(ver foto 8), el cual estaba constituido por una
capa de arena de 20 cm de espesor. en toda la
extensién del modelo. El canal descrito descarga
en un tanque de sedimentacin, provisto de una
compuerta para regular el tirante y la pendiente
en el canal
Durante los ensayos se pudieron alcanzar tiran-
tes maximos de 35 cm, velocidades maximas de 60
cm/seg y gastos hasta de 200 It/seg. Estos ensa-
yos se hicieron con una pila de seccion rectangular
de 7 x 28 em. con una circular de 13.3 cm de di
metro y con una rectangular con la nariz redondea-
da (fig. 2. y foto 3): las pilas estan hechas con
laminas de lucita y tienen un rayado exterior para
registrar la profundidad de socavaci6n, la cual
podia medirse con suficiente exactitud por medio
de un espejo introducido en las pilas, cuya posicién
Foro 2. Alimentador y disteibuidor de arena. El material se
deposita en la folva y su volumen de salida es peoporcional
fa cantidad de agia que se hace pasar por cl deposit.
INGENIERIAky=12.4
senatbcosa
Ky 10.0
A
\ Sh
(aay
L
ea
Fic. 2. Forma y dimensiones de las pias estudiadas (coeficientes de Yaroslavtziew)
podia modificarse mediante hilos especialmente
colocados.
Los ensayos se efectuaron con tres arenas dife-
rentes. cuyos diametros medios fueron 0.57, 0.17
y 1.3 mm y cuyas granulometrias se pueden ver en
Jas curvas granulométricas 1.2 y 3. En las fotos
1a 7 se puede apreciar la forma del distribuidor
de arena, asi como una vista general del canal, las
pilas ensayadas v el aspecto de la socavacién ob-
servada mediante el espejo-
Foro 3, Los ensayos se hicieron con las tres pilas centrales
Antes de realizar cada uno de los ensayos que se
describiran después, se hizo necesario calibrar el
modelo, para determinar el gasto sélido que debia
suministrarse, con cada granulometria, en las dis-
tintas condiciones de escurrimiento.
Para ejecutar cada ensayo se procedia primero
a colocar y nivelar en la seccién de pruebas, a la
pila que se deseaba estudiar y a extender la capa
de arena con la granulometria seleccionada. Des.
pués, se Ilenaba cuidadosamente el canal median-
te la descarga del tanque superior y la compuerta
del tanque de sedimentacién: en seguida se repro-
Enero DE 1964
ducian las condiciones de gasto. tirante y veloci-
dad media segiin las cuales se deseaba hacer la
prueba, En el transcurso de ésta se registraban
Cada 15 minutos las caracteristicas de flujo antes
mencionadas; asi, se mantenian invariables estas
condiciones hasta que podia observarse que la so-
cavacién ya no prosperaba, en cuyo caso se decia
que se habia legado al equilibrio para la condi
cién ensayada
Para nimeros de Froude grandes el proceso to-
maba unas 4 horas y para nimeros pequefios podia
ser suficiente con solo una hora. En muchas con-
diciones sin embargo. se producian dunas en el mo-
delo, lo cual hacia que la profundidad de socava-
cién oscilara durante la prueba: en estos casos el
ensayo se prolongaba 2 horas mas y la socavacién
que se consideraba representativa era la maxima
registrada durante ese intervalo. Los datos obteni-
dos directamente del modelo se registraban en ta-
bias similares a la II y de alli se escogian los co-
rrespondientes a la condicién de maxima socava-
cién para resumirlos y compararlos con los de otros
ensayos en una tabla similar a la IIT
En un principio, el desconocimiento del fenéme-
no hizo que se prestara especial interés a detalles
de importancia relativamente secundaria, como eran
la forma en que se iniciaba la socavacién y la di-
reccién de las particulas y lineas de corriente; sin
embargo, al contiuar los estudio, podo verse que
estos fenémenos se repetian sistemSticamente para
cada una de las pilas ensayadas y se decidi6 con-
centrar la atencién en las profundidades de soca-
vacién maximas y en los tiempos necesarios para
alcanzarlas, Tal manera de proceder. dio lugar a
que las observaciones hechas con la primera de
las arenas estudiadas, condujeran en ocasiones a
resultados dudosos, los cuales hubieron de corro-
borarse posteriormente con los otros dos materia-
les estudiados.
47TABLA II. OsseRvactones EN EL MODELO.
Emayeron::Alefandee aeemus — Facne: ai ete fiame ate £63 — Hojo Nox: —f
tipo Ghelanepuhe” adr b=Feo Ancho del conoi: 222m Materiel mévit: Leena Kiper
Curva granuloméfrica Nou: J; Dygt —__mmj Dgg? 422_mmi Dig mms Ys = toni
72549)
2|z2/|
les 221
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CONSIDERACIONES GENERALES SOBRE
LAS PRUEBAS HECHAS EN
EL LABORATORIO
Para entender la forma en que se realiza el pro-
ceso de socavacién, podrian resumirse en seguida
Jos resultados que se obtendrian al realizar una
prueba ideal, que se conseguiria si, al mantener
Constante el tirante en el modelo, se fuera incre-
mentando sucesivamente la velocidad. Esta prueba
podria reconstruirse facilmente, con solo confron-
tar los resultados obtenidos en otros ensayos en
los que el tirante ha sido el mismo y se ha variado
la velocidad media.
La prueba ideal que se menciona, habria de ini-
ciarse con la arena del fondo cuidadosamente
enrasada, como se hizo en casi todos los ensayos
Se observaria entonces que al alcanzar el agua
una velocidad préxima a los 16 cm/seg, para una
pila rectangular, la socavacién ocurriria primero
en las dos esquinas de la cara aguas arriba. Con el
aumento de velocidad, la socavacién alli localizada
creceria también; pero al mismo tiempo empezaria
4 aumentar la erosion en toda la cara anterior. bas
ta que la socavacién alcanzara la misma profun-
didad en todo el ancho de esa cara (ver fig. 3.y Fome.*: Aupeco dl Fore orate ner de
fotografias 4, 5, 6 y 13). Al continuar el aumento teil.
Incenteria
48de la velocidad, se sniciaria el movimiento de todo
el material de) fondo y podria observarse que ha-
bria aporte de material sélido a la zona erosiona-
da. Sila velocidad aumentara todavia mas, la so-
cavacién continuaria su progreso, si bien llegaria
un momento en que tal progreso empezaria a decli-
nar hasta que, alcanzada cierta velocidad, la soca-
vacién ya no progresaria mientras no se aumen-
tara el tirante.
‘Ahora bien, puede afirmarse que en tanto no
hay arrastre de fondo, el material socavado se de-
posita en las zonas adyacentes a las caras laterales
Ge la pila en forma de un monticulo a cada lado:
la cima de este monticulo se desplaza aguas abajo
cuando aumenta la velocidad y si el arrastre del
fondo llega a presentarse, el monticulo se localiza
en la zona inmediata al extremo de aguas abajo
de la pila.
FORMA DE INICIARSE
LA SOCAVACION
Cendieidn mieume
vive
Condicior ntermeaic
Por otra parte, segiin lo que se dijo en el inciso
anterior, para un tirante y una velocidad dadas, es
menester que transcurra cierto tempo, hasta que
be estabilice el proceso y se pueda medir correcta-
mente la socavacién maxima; tal estabilizacion se
altera en el caso en que el arrastre del fondo traiga
consigo la formacién de dunas. que pueden ser
estacionarias 0 desplazarse hacia aguas abajo. En
tales casos la profundidad de socavacién oscila
como puede verse en la grafica 6. Alli se ve que
cuando la cresta de una duna se acerca a la zona
erosionada, se propicia la profundidad, que, llega
2 su maximo cuando la cresta esta sobre el borde
de la zona socavada; valor, este iltimo, que se con-
serva hasta que la mitad de la duna se ha despla-
ado aguas abajo, para decrecer después hasta
el paso de la duna siguiente
SOCAVACION
Consieiin méxime
Fic 3 Zonas en donde se locahzan las ma
Exero De 1964
wyores sveavactones para distintas condiciones
de la corriente
49Guarics 6 Avance de ‘a profundidad de 1a erosion con
fempo figuras que_presentan tas condiciones de maxims
2 y minimos de ia curva B
Foro 5, La socavacién en una pila rectangular se inicia
‘en las esquinas.
50
Foro 6, Aspecto de la socavacién al incimientarse ly pro:
fundidad de la erosiin
En la fig. 3 pueden verse los procesos analo-
gos al descrito, para pilas circulares 0 rectangula-
es con nariz redondeada o bien. finalmente para
una pila rectangular esviajada. Cabe mencionar
que para la pila circular. el material socavado se
deposita aguas abajo de la misma y que. como las
velocidades verticales ascendentes son muy fuertes.
se forma atras de ella un borbollén cargado con
material del fondo. Para la pila esviajada, la so-
cavacién maxima se incrementa con el aumento de
velocidad y cambia de ubicacién como se muestra
en la fig. 3, hasta que. al alcanzarse cierta veloci-
dad, la profundidad de la socavacion adquiere
valores que oscilan en torno al maximo alcanzado
y la zona erosionada permanece practicamente en
el mismo sitio.
RESULTADOS DE LOS ESTUDIOS
EXPERIMENTALES HECHOS EN
EL INSTITUTO
Segiin se indicd en los incisos precedentes. los
resultados de cada uno de los ensayos realizados,
se consignaron primero en tablas como la II. para
después vaciar los datos que correspondian a las
condiciones de maxima socavacién, en una tabla
similar a la III, en la cual se han afladido, para fi-
nes de comparacién, las socavaciones que se obten-
drian al aplicar los criterios de Laursen y Yaros-
lavtsiev, para las mismas condiciones en que se
produjo esa socavacion maxima. Se agregaron tan-
én en la tabla mencionada, algunos parametros
adimensionales como el niimero de Reynolds y el
de Froude, para investigar la posible correspon-
dencia entre ellos y el fendmeno estudiado.
De los valores que se consignan en la tabla III
puede comprobarse que
IncenteriaForo 7. Aspecto del fondo. con dunas. Se puede observar
Ficilmente ehespejo y el cayado en la cara exterior de ta pil
J. Las profundidades de socavacién medidas
son todas menores a las que se obtendrian al apli-
car el criterio de Laursen, con excepcién de unas