PRIMER PARCIAL DE PSICOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN

Prof. Leticia Fernández

Bach. Darío Larroude Álvarez – 4.929.737-3 – 2°A Historia

Julio 2018.

En el presente trabajo se recalcará la importancia de las diversas características

del aprendizaje, a raíz de un contexto situado, en este caso el aula, donde en
este momento desarrollo la práctica. Estas observaciones se expondrán de
forma general, relacionándolos con la idiosincrasia del grupo y su entorno. Según
el autor César Coll en su obra “El Conocimiento Psicológico y Práctica Educativa;
Introducción a las Relaciones entre Psicología y Educación”, los procesos de
cambio de comportamiento han sido estudiados, a lo largo del tiempo, por
distintos psicólogos y psicopedagogos a través de tres categorías conductuales
fundamentales; las de índole psicomotriz, cognitiva y afectiva. En cuanto a la
primera, refieren a la capacidad motriz, la segunda a la apropiación de
conocimientos y la tercera a la interiorización de sistemas, valores, normas,
actitudes e intereses. De ningún modo podemos alegar que la clasificación de
Coll y sus categorías actúan de modo independiente, sino que interactúan, se
complementan e incluso se sitúan jerárquicamente. Por ejemplo, según su
criterio, una actividad intelectual conlleva a una implicación afectiva que también
necesita una actividad motriz. Asimismo utilizaré la propuesta incluida dentro de
los postulados de Ausubel y Robinson (1969), el cual determina dos subclases;
los factores intrapersonales o internos al alumno y los ambientales o propios de
la situación en la que se encuentra inmerso aquel en el transcurso del proceso.
Las variables internas en cada subclase serán explicitadas luego de la
presentación del grupo modelo, del cual tratará el trabajo.
La presente obra se desarrollará en el Liceo N°1, “José Enrique Rodó”, localizado
en el barrio Ciudad Vieja. En materia social, el Liceo puede calificarse como
dificultoso. Encontramos una gran cantidad de extranjeros provenientes en su
mayoría de la República Dominicana, Cuba, Venezuela e incluso países
africanos, los cuales a través de sus diferencias culturales, que son atendidas,
modifican el clima del aula y el administrativo. Existe también un gran porcentaje
de deserción. Se trata de un grupo de primer año, conformado por dieciséis
alumnos en donde destacamos cinco repetidores y una chica extranjera,
procedente de Venezuela.
En el siguiente análisis no se pretende separar, siguiendo con el pensamiento y
la metodología de Coll, las categorías de manera independiente, sino redirigir los
problemas universales y constantemente observados a cada una.

 Factores Intrapersonales.
En cuanto a la madurez física y psicomotriz, cabe destacar que nos enfrentamos
a un grupo cuya franja etaria ronda los quince y diecisiete años, los que nos
demuestra un pleno tránsito por la fase de desarrollo sexual. Sin embargo, se
presentó un informe que evidenciaba una dificultad con respecto al manejo del
espacio por parte de los alumnos (malas posturas, constante caída de útiles,
movimientos involuntarios), constatado en la evaluación diagnóstica, lo que llevó
a la reciente introducción de clásicos bancos de tabla grande, sustituyendo a los
de tabla diestra o zurda. Esta evidente dificultad es explicada, por los
profesionales de la institución, a través la constante utilización del celular y la
falta de costumbre a la postura que toman, debido a que en la escuela se ha
intentado de estimular a las actividades extracurriculares que no supongan estar
sentado continuamente.
En tanto a los mecanismos de aprendizaje, encontramos ciertos elementos
universales que pueden ser observados tanto en mi grupo como en los otros (lo
he hecho yo mismo, presenciando visitas didácticas de otros practicantes de la
profesora). Hoy en día nos enfrentamos a una generación carente de lectura, de
hábitos de estudio y con grandes dificultades para la expresión escrita. Esto
queda demostrado cuando acudimos a la redacción, por ejemplo, como ejercicio
o deber y se nos devuelve un punteo. En yuxtaposición, los deberes raramente
son realizados, muchas veces debido a sus ausencias. Asimismo, existe una
tendencia generalizada a buscar material en el Internet en vez de acudir a libros
–la biblioteca es poco frecuentada, casi desperdiciada, por más que algunos
alumnos hagan uso de ella, extraen libros de la sección narrativa-, algo que por
experiencia personal en liceos, noto siempre. Las posturas repetitivas respecto
a ciertos contenidos que logran retener del año anterior les quitan capacidad de
perspectiva; a la hora de evaluar su rendimiento se nos presenta una dificultad,
ya que las tareas son realizadas, pero sin el apoyo bibliográfico debido y con la
ayuda de ciertos conocimientos que se adquirieron de antemano.
Cuando nos referimos al nivel y estructura de los conocimientos adquiridos
previamente, observamos que en su mayoría presentan un nivel intermedio en
lo referido al rendimiento y capacidad, aunque hallamos serios escollos en lo
referido a la ortografía y geografía, provenientes de una débil base escolar. Estos
aspectos continuamente se trabajan y se reiteran para automatizarlos; este
problema es más bien universal hoy en día y debe atenderse mediante un
ejercicio sistémico. Las participaciones son activas, aunque evidentemente esto
es producto de la memorización de conceptos del año anterior; lo notamos a
través de anticipaciones, ideas robóticamente repetidas, evocaciones de
conceptos que aún no se han puesto a colación, etcétera.
Las características afectivas, motivación y actitudes, dirigiéndolas al aspecto
vincular, no presentan problemas de comportamiento que sean dignos de
estigmatizar, más allá de las actitudes que emanan de cada lógico duelo
adolescente. Los chicos que han repetido se reúnen en un pequeño subgrupo
que en sí, no ejercen demasiada influencia hacia al resto; al ser la clase muy
reducida en número, no se crean situaciones propicias que puedan ser utilizadas
para una dispersión general. Por lo demás se destacan al menos tres alumnos
con problemas familiares de importancia que los inducen a evitar apellidos
maternos o paternos, a frecuentar su inasistencia (a este caso se presta gran
tolerancia), a atraer parientes a la clase (a los cuales, cuando el alumno se
ausenta, al pariente se trata de convertir en portador de mensajes o tareas
domiciliarias) o a manifestar súbitos cambios de humor. Siendo para muchos la
segunda o tercera vez que cursan primer año, no presentan ningún problema
físico o intelectual que los limite; sus problemas, son más bien de índole familiar
y de voluntad. Mi profesora adscriptora ha solicitado que no se le realice
transferencias a un centro nocturno, confiando en que en esta instancia logren
resultados.
Finalmente, dentro de las características de la personalidad, el nivel de ansiedad,
el concepto de sí mismo y el sistema de valores, es preciso mencionar que más
allá de la transmisión de la disciplina, en el aula se hace especial hincapié en
normas de convivencia y valores, así como en posturas de clase que se deben
automatizar para un correcto desempeño (abrir el cuaderno al llegar a clase,
realizar las tareas, etcétera), las cuales son reiteradas constantemente. No
obstante, en algunos alumnos notamos, más allá de la clásica necesidad de
llamar la atención, una fuerte frustración en cuanto a su humor, que es
contagiada al ambiente; las réplicas a mí y a la profesora son frecuentes, pero
evidencian una respuesta agresiva a la presión y a la necesidad de actuar
correctamente para no repetir otro año –lo que a la postre, los conducirá a
problemas familiares-. Consecuentemente debemos, ante nada, tener tolerancia
ante la problemática familiar que es ajena a la institución y al cuerpo docente.

 Factores Ambientales.
En cuanto a las características del profesor, su capacidad intelectual,
conocimiento de la materia, aptitud pedagógica, rasgos de la personalidad y sus
características afectivas, la docente a cargo es una respetada profesora con gran
antigüedad y experiencia. A lo largo del tiempo se ha abocado en imbuir de
pautas de convivencia y valores fundamentales a los alumnos, con gran éxito,
además de una más que correcta metodología para transmitir su disciplina. Por
ahora, me ha sido de gran ayuda. Dentro de sus años de carrera ha reforzado
su conocimiento con el estudio de la geografía, agronomía, numismática –acorde
al programa de Historia Antigua de primero-, lo que le otorgó un bagaje cultural
para afrontar los baches de una clase; inspira gran respeto y autoridad. Con los
alumnos posee un profundo vínculo enraizado en su larga trayectoria en la
institución, apartándolos para expresarle sus preocupaciones y consiguiendo
resultados; esto nos muestra su devoción por la enseñanza moral y por ciertos
alumnos que merecen paciencia a causa de sus difíciles situaciones familiares.
Los factores de grupo y sociales, las relaciones interpersonales y las condiciones
materiales, nos llevan a mencionar que en el grupo de primero que ostento, por
ejemplo, tengo la presencia de seis repetidores, muchos de ellos cursando por
tercera vez el año; sin embargo, se atiende debidamente a esta cuestión,
mediante colectivos de padres y hasta solicitando la no transferencia de ciertos
estudiantes que acarician la mayoría de edad para cursar Ciclo Básico,
conectándolos directamente con profesionales y educadores a cargo, como
también a la tutela de los docentes más experimentados y antiguos en la
institución, quienes escasean. Así, encontramos que los grupos son reducidos y
altamente heterogéneos bajo un profesorado muy rotativo –esto observado en la
Sala Docente-. Físicamente, el Liceo es modesto, aunque posea tres plantas.
Cuenta con no más de veinte salones distribuidos a través de unas instalaciones
un tanto confusas, lo que conduce a que si uno no es funcionario o alumno
antiguo, probablemente se pierda al subir las escaleras (me ocurrió a mí en las
primeras jornadas). Los pasillos en ocasiones son muy angostos. No obstante,
es preciso demarcar que posee una biblioteca en excelentes condiciones, de
dimensiones considerables, donde además de contar con los principales
manuales y libros específicos para el alumnado, se halla a disposición obras de
trascendencia como lo es una gran parte del Archivo Artiguista. Asimismo, existe
un Salón de Informática, de Educación Audiovisual y de Música con recursos
didácticos limitados, así con un gimnasio de escasas proporciones anexado al
Salón de Infantes aledaño. Cabe mencionar que actualmente el Liceo se
encuentra en obras y esto en ocasiones puede producir molestia sonora.
Al referirnos a sus intervenciones pedagógicas y sus métodos de enseñanza,
destacamos la intención de que los alumnos logren una automatización de
conceptos vitales para el programa, además de la incorporación de conceptos
fundamentales (Ejemplos: Economía, Agricultura y Ganadería, Ubicaciones
Geográficas, Única Especie) que sirvan como base para abordar los siguientes
temas del curso. También es imprescindible entender a la Historia como proceso,
que los alumnos logren abrir sus mentes y entender, al posicionarme yo en una
postura neutral ante los contenidos abordados o al decantarme por una
conclusión, que nada de lo que aprendan dentro de esta disciplina ocurrió de
golpe. Pero ante todo, se debe ser consciente de la diversidad del grupo. La
propuesta son presentadas junto a algunas “anécdotas” que tengan base en un
capital cultural que pueda estimular a los alumnos que presentan timidez o
dificultades propias, como también a los que repiten de memoria, además de
estimular la interpretación. Uno de los grandes objetivos es instruir al alumno
mediante armado de frases y “trampas en el material”, para que el contenido
pueda ser absorbido y no sólo imbuido para luego recitarlo de memoria.