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Sociales
Introducción
Hay una DOBLE COMPLEJIDAD para construir una didáctica de las ciencias sociales. A
la complejidad de su objeto (la enseñanza de las ciencias sociales) se añade el
controvertido carácter epistemológico de la didáctica misma como disciplina.
Para construir una DIDÁCTICA DE LAS CIENCIAS SOCIALES se debe responder, entre
otras cosas, a:
Todo esto teniendo en cuenta que en las ciencias sociales, a diferencia de otras
ciencias, coexisten DIVERSOS ENFOQUES Y TEORÍAS, sin que exista un paradigma (al
interior de cada ciencia), o un programa de investigación que pueda considerarse
predominante y superador a los demás. SI PENSAMOS EN LA PSICOLOGÍA, EXISTEN
DIVERSAS ESCUELAS SIN QUE UNA PRESENTE UNA TEORÍA O PARADIGMA
SUPERADOR.
El texto presenta una serie de autores que discuten acerca de la “validez” y el STATUS
EPISTEMOLÓGICO DE LA DIDÁCTICA.
Algunos plantean que no puede tener carácter científico y por tanto no puede ser
sometida a los mismos controles que los que recibe una teoría científica. Para validar
el conocimiento pedagógico hay que demostrar que las conclusiones que ofrece valen
la pena llevarlas a la práctica.
Desde una concepción POSITIVISTA la ciencia tiene como meta alcanzar la verdad.
Para esta corriente, la didáctica, al igual que otras ciencias sociales, es una disciplina
que NO PUEDE SER CONSIDERADA COMO UN PUNTO DE VISTA CIENTÍFICO, ya que
está ligada a la búsqueda del logro práctico de los fines de la educación. Por tanto, LA
DIDÁCTICA (desde una concepción positivista) ES UNA TEORÍA PRÁCTICA, NO
CIENTÍFICA.
TEORÍA CRÍTICA: La ciencia social es definida a partir de una ruptura con la concepción
positivista. Se niegan el dualismo hechos/decisiones y la contradicción
conocer/valorar.
Desde este punto de vista, se plantea un nuevo análisis del status epistemológico de la
didáctica. La didáctica puede ocuparse de la práctica pedagógica, estar impregnada de
valores y adoptar una postura normativa, sin perder su potencial para constituirse en
disciplina científica. Pero para esto, la didáctica debe realizar una DOBLE RUPTURA:
con la “didáctica espontánea” de los docentes y con el conocimiento “espontáneo” y
las teorías implícitas acerca de lo social y de la realidad en general (que de ninguna
manera son “naturales”). Desde esta perspectiva (en línea con la teoría crítica), LA
DIDÁCTICA PODRÍA SER ACEPTADA COMO DISCIPLINA CIENTÍFICA, y en particular,
COMO CIENCIA SOCIAL. Cuenta con suficientes condiciones de validación y
justificación de los conocimientos que aporta para la configuración de la práctica
pedagógica y su entendimiento.
La acción didáctica es una acción con sentido, orientada a fines, y la didáctica ser
ocupa no sólo de la investigación empírica con el objetivo de determinar una
racionalidad, sino también de prescribir los fines cuyo logro sería deseable y los medios
más apropiados para alcanzarlos.
La didáctica, siendo normativa, tiene que dar cuenta y orientarse hacia lo general y
repetible, pero la naturaleza del acto pedagógico no permite obviar lo que tiene de
único e irrepetible. Siempre hay en las prácticas de enseñanza, un lugar para lo no
previsto.