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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO

FACULTAD DE CIENCIAS POLÍTICAS Y SOCIALES

ENRIQUE ALEJANDRO MOISÉS ESPELETA

INTRODUCCIÓN A LAS TEORÍAS DE LA COMUNICACIÓN

ACTIVIDAD 1
ORIGEN Y DESARROLLO DE LOS PROCESOS DE COMUNICACIÓN
Desde una pequeña hormiga, hasta los seres humanos y los más grandes
depredadores sobre la faz de la Tierra, todos sin duda alguna poseemos códigos que
nos permiten interactuar el uno con el otro.

Es así como podemos decir que todos los seres vivos, sin excepción, poseemos la
capacidad de comunicarnos.

Una de las pruebas de las cuáles puedo hablar, es estudiada por la Etología, que es la
ciencia que estudia las conductas de los seres vivos.

Todos los seres vivos poseemos la característica de la irritabilidad, la cuál es la


respuesta más primitiva de toda la materia viva ante una perturbación externa.

Así pues, en base a los estímulos recibidos creamos experiencias de aprendizaje, las
cuáles crearán respuestas a estos estímulos y es por esta razón que surgen los actos
reflejos, los cuáles no son más que simples respuestas a los estímulos del entorno.

He aquí la forma más primitiva de comunicación y podemos igualmente verificar que a


nivel celular, los diferentes tipos de comunicación, desde la interacción de la membrana
plasmática con los nutrientes del entorno o los virus y enfermedades, hasta la forma
más compleja de comunicación, están intrínsecamente relacionados con el estímulo.

Hablando de un nivel macro celular podemos introducir la definición de percepción, la


cual podemos decir que es la información que se recibe por los sentidos, se procesa en
el cerebro y es almacenada en la memoria, produciendo así alguna forma de respuesta
física o mental.

Percibimos la información de manera diferente dependiendo de si esperamos que sea


favorable o desfavorable para nosotros. Podemos compararla con el proceso de
selección de la membrana plasmática en la célula, la cual puede discriminar los
nutrientes de los desechos tóxicos.

Existe también otro tipo de percepción dependiendo de la intensidad del estímulo,


estamos hablando de la percepción selectiva. Si el estímulo es intenso, estamos
obligados a percibirlo conscientemente. Tengamos como ejemplo un terremoto, el
simple estímulo del movimiento, nos hará encender nuestro sentido de alerta y así
responderemos al estímulo de manera inmediata y consciente.

Igualmente, como parte de la percepción selectiva, podemos decir que existen


variaciones en los estímulos, lo cual hace que no tengamos una reacción consciente
ante ellos. Por ejemplo, alguien que vive cerca de un aeropuerto, escuchará
constantemente el sonido de los motores de los aviones o el ruido de las llantas
aterrizando en la pista, y al ser este un estímulo constante, la persona tenderá a
acostumbrarse al mismo.

Otra de las variables de las cuáles podemos hablar es de las actitudes en torno a las
cosas que nos rodean.

En los años de nuestra formación, desarrollamos un sistema de creencias y valores


que determinan nuestras actitudes hacia todas las cosas y personas que nos rodean.

Todas estas actitudes cambian a lo largo de toda nuestra vida, por ejemplo, la idea que
teníamos de los hombres lobo cuando teníamos cinco años, no es la misma que la que
tenemos ahora.

La interrelación entre la percepción y las actitudes es compleja. Las actitudes que


sostenemos impregnan nuestra conducta comunicativa y esto es parte importante del
proceso total de percepción y comunicación.

Una parte importante del proceso de comunicación se da a partir del surgimiento de la


oralidad que dio paso al nacimiento del lenguaje, con un lenguaje común, la
comunicación sería más fácil. Es así que igualmente la explosión artística que ocurrió
hace cuarenta mil años atrás influyó en gran parte al comportamiento humano y por lo
consiguiente a los procesos de la comunicación.

También es cierto que la comunicación implica mucho más que las palabras que se
utilizan. El campo de la comunicación no verbal es tan extenso que no podríamos
abarcar todos y cada uno de los puntos en este ensayo, incluye los signos vocales,
paralingüísticos, expresiones faciales, gestos, vestimenta, acento, proxémica y varía
dependiendo de la región geográfica o cultural en donde se presente.

La comunicación es considerada un proceso deliberado, cuyo propósito es emitir y


recibir mensajes, esta, a veces, se produce sin un intento consciente deliberado. Antes
de ser emisores aprendimos a ser receptores.

La comunicación no se completa hasta que el receptor cumple plenamente su cometido


de percibir y desencadenar la respuesta que el otro ser vivo comunicante le demanda.

Es así que podemos concluir que la evolución de las especies depende directamente
de la comunicación, ya que en la selección natural, los organismos más fuertes son
quienes incorporan el proceso de comunicación.

Una vez que conocemos los orígenes del proceso de comunicación y comprendemos
que la comunicación va más allá de palabras o textos, podemos entender todo lo que
nos rodea y podemos también decir que si no existiera la comunicación, la vida en la
Tierra sería inviable.
BIBLIOGRAFÍA
Ellis, Richard y Ann McClintok (1990). Teoría y práctica de la comunicación humana.
Paidós, Barcelona, 17-75.

Piñuel, J. L. y Lozano, C. (2006). Ensayo general sobre la comunicación. Barcelona:


Paidós. Cap. 2 (pp. 51-75).

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