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LA CULTURA CHIMÚ

Chimú es una cultura preincaica que se desarrolló en la costa norte tras el


decaimiento del Imperio huari entre los años 1000 y 1200. Ocuparon los
territorios que antes habitaron
los mochicas y los lambayeques,
llegando a expandir sus dominios,
en su etapa de mayor desarrollo,
por toda una extensa franja costera
del norte del Perú de unos 800 km
de longitud, desde Tumbes hasta
el valle de Huarmey.

En su desarrollo se distinguen dos


etapas; en la primera se trataba de
un reducido grupo localizado en el
antiguo valle Moche y zonas
aledañas (900-1300); y en la
segunda ya habían conquistado un
vasto territorio y eran un reino en
constante expansión (1300-1470). Diversos historiadores sostienen que, hacia
mediados del siglo XV, los chimúes fueron derrotados por los incas.

Los chimúes se destacaron en el plano urbanístico gracias a sus formidables


construcciones. Muestra de ello son Chan Chan, la fortaleza de Paramonga,
entre otras. Así también se destacaron en metalurgia, en los que utilizaron una
diversidad de técnicas y metales para su elaboración; y en textilería (tejidos
de algodón, lana de llama, alpaca y vicuña).

ORIGENES

Los chimúes aparecen hacia el año 900. El fundador del reino chimú
fue Tacaynamo, un personaje legendario que habría llegado con su séquito
sobre grandes balsas de madera y adoptó el nombre de “Gran Chimú”.
Se cree que el llamado “reino del Chimú” tuvo diez gobernantes, pero solo se
conocen los nombres de cuatro de ellos: el ya mencionado Tacaynamo,
Guacricur, Naucempinco y
Minchancaman. Este
último fue un gran
conquistador, llegando al
sur hasta las cercanías del
triple valle de Chillón-
Rímac-Lurín; sin embargo,
acabó siendo arrollado por
el expansionismo incaico.

Los gobernantes eran tratados como dioses y vivían en un elegante palacio de


Chan Chan. Había clases sociales regidas por un estado imperial que había
conquistado al reino Sicán de Lambayeque. Justamente las leyendas de
Naylamp en Sicán y Tacaynamo en Chimú transmitían fantásticamente las
guerras iniciales por esas tierras. El pueblo pagaba tributo a los gobernantes (en
productos o en trabajo).

ORGANIZACIÓN SOCIAL

El reino de Chimú fué un estado clasista, es decir, que estuvo organizado a base
de clases, con profundas diferencias entre sus componentes.

La integraban:

- El Emperador denominado Chimú Cápac o Gran Chimú.- Suprema autoridad


política, religiosa y militar, y, a su vez, cabeza de la sociedad. Vivía en un lujoso
palacio en la ciudad de Chanchán, rodeado de una numerosa corte de nobles y
sirvientes.

- Los grandes Curacas.- Salidos de la nobleza, dueños de tierras, como los


Señores Feudales de la Edad Media. Integraban esta clase también otros jefes
locales, esto es, jefes de pueblos sometidos; gozaban todos ellos de gran
consideración del soberano.
- La Alta Clase Media.- Cuyos componentes beneficiábanse, asimismo, de la
tierra, a la vez que disfrutaban de grandes privilegios como de una vida llena de
comodidades.

- Los Campesinos.- Sobre quienes reca&iaacute;a todo el trabajo de la tierra. Era


la clase laboriosa a la que, seguramente, pertenecían también los famosos
artesanos chimús, que eran numerosos y muy seleccionados.

- Los Sirvientes.- Eran los últimos componentes de la pirámide social; hallábanse


consagrados a las faenas del hogar, al servicio del soberano y a la nobleza como
de otros personajes de gran figuración social.

METALURGIA Y ORFEBRERÍA

En metalurgia y orfebrería fueron discípulos de la cultura lambayeque. Durante


mucho tiempo fueron considerados joyas del arte chimú lo que en realidad
pertenecía a los lambayeque, como el célebre cuchillo de Íllimo.

Es muy posible que los chimúes, al conquistar Lambayeque, trasladaran a los


joyeros u orfebres de esta cultura a su capital Chan Chan, para que les iniciaran
en dicho arte; posteriormente, los incas harían algo similar, trasladando al Cuzco
a los artesanos chimúes para que sirvieran al Imperio. Los espléndidos objetos
de orfebrería de oro y plata que tanto asombraron a los conquistadores
españoles eran en realidad obra de los orfebres chimúes, que ocupaban un
barrio en la capital incaica.
Los chimúes conocieron y desarrollaron importantes técnicas de orfebrería: la
fundición, el vaciado a la cera perdida, el martillado, el plateado, el dorado, la
soldadura. De los talleres chimúes salían una gran variedad de objetos
metalúrgicos, destinados para fines ceremoniales, suntuarios y utilitarios.
Destacan las máscaras, vasos, pectorales, collares y objetos en miniatura.

ALIMENTACIÓN

Conocieron la totalidad de plantas alimenticias nativas y su dieta se


complementó con animales
domésticos, especies marinas y
de agua dulce, de caza y
recolección.

El mar fue una fuente inagotable


de recursos que los Chimú
supieron aprovechar al máximo.
Usaron embarcaciones de totora y
madera, provistas de redes, pesos
y flotadores, anzuelos y otros aparejos, para la pesca en alta mar y en orilla de
playa, donde también recolectaron mariscos y algas marinas. Además de
grandes pescadores, fueron experimentados navegantes e hicieron largas
travesías para aprovisionarse de productos exóticos como el Spondylus sp. o
“mullu” de uso ritual, o el guano de las islas, usado como abono en la agricultura.
TEXTILERIA

El hilado consiste en la práctica manual y elemental de unir un conjunto de hilos


pequeños para poder lograr un hilo largo y continuo, en esta labor inicial de la
textileria se utilizaron diversos instrumentos como el huso. El huso, es un
instrumento manual confeccionado de una varita pequeña y delgada que
generalmente se va adelgazando a ambos extremos; se lo emplea junto a un
tortero o piruro que se inserta en la parte inferior para que haga contrapeso. Se
empieza a hilar tomando de la rueca (donde se ha fijado la fibra que se va a hilar)
algunas fibras que son fijadas en el huso que se lo hará girar rápidamente entre
el pulgar, el cordial y el índice para lograr enrollar y torcer las fibras
ininterrumpidas. Cuando ya se había obtenido los hilos necesarios se empezaba
el tejido ósea el entrecruzamiento o combinación de los hilos para hacer las telas.
Los Chimú confeccionaron telas, gasas, brocados, bordados, telas dobles, telas
pintadas, etc. Algunas veces los textiles fueron adornados con plumas y placas
de oro y plata, los colorantes se obtuvieron de ciertas plantas que contenían
tanino, del molle y del nogal; de minerales como la arcilla ferruginosa y el
mordiente de aluminio y de animales como la cochinilla. Las prendas se
confeccionaron de la lana de cuatro animales; el guanaco, la llama, la alpaca, y
la vicuña y de la planta de algodónnativo que crece en forma natural en siete
colores diferentes. La vestimenta de los Chimú consistió en taparrabos, camisas
sin mangas con o sin flecos, pequeños ponchos, túnicas, etc.
CERÁMICA

Vasija erótica. La tradición de la cerámica de motivos eróticos estuvo presente


en la cultura Moche y Vicuscon anterioridad a Chimú. Museo de
América (Madrid)

Las cerámicas chimúes cumplieron 2 funciones, como recipientes para uso diario
o doméstico y las cerámicas de uso ceremonial o para ofrendas de los entierros.
Los primeros fueron elaborados sin mayor acabado mientras los funerarios
muestran bastante dedicación. Las principales características de las vasijas
chimúes son una pequeña escultura en la unión del gollete con el arco, su
fabricación moldeada para la cerámica ceremonial y modelada para uso diario,
su coloración generalmente negro metálico con algunas variantes, su brillo
característico se obtenía humeando la vasija que previamente había sido pulida.
También se elaboraron cerámicos de colores claros en pequeñas cantidades. En
la cerámica se han plasmado muchas representaciones realistas como animales,
frutos y personajes, así como, escenas místicas
RELIGIÓN

La cultura Chimú, tuvo a la religión como sustento de su poder, debido a la


utilización de esta para adoctrinar en la obediencia a las clases bajas. El
comienzo de la realización de sacrificios fue dirigido por la casta sacerdotal para
su beneficio político y atemorización de la
sociedad con sangrientas y cruentas escenas al
mismo estilo de la posterior civilización incaica.
Para los chimú la muerte no constituía el término
de la vida, existía por ende una vida ultraterrenal
en el cielo, donde los hombres seguían viviendo
en otra esfera del mundo y la vida que esperaba
tras la muerte era tan sólo la prolongación de su
estadía terrenal, con sus mismas obligaciones o privilegios. Por esta razón, se
estima que se sepultaba a los difuntos con provisiones y bienes.

Si bien era una religión politeísta, el culto principal estuvo dedicado a la diosa
Luna, Quillapa Huillac, considerada más poderosa que el Dios Sol, por su
influencia sobre el crecimiento de las plantas y su utilización como marcador del
tiempo. Se le atribuía el alboroto del mar y las tempestades, también era
considerada como protectora de la pesca y castigadora de los ladrones, cuando
no aparecía en el cielo. Otro Dios de importancia fue Kon, el felino volador,
antiguo dios costeño adorado como creador del mundo por importantes reinos
como Paracas y Nazca. En sus imágenes más conocidas se le puede ver
volando, con máscaras felínicas, pies replegados y portando un báculo,
alimentos y cabezas trofeo.

Además de la adoración de estas divinidades, los Chimú, rendían culto a dioses


celestiales como el relámpago, el trueno y las estrellas. También en cada
poblado se veneraban otras divinidades, como la Luna, Shi, el Mar, Ni, el Sol,
Jiang, la Tierra, Gris y dioses de piedra llamados Alaecpong.

Sus rituales funerarios, se caracterizan por la elaboración de máscaras de oro


con pintura roja de cinabrio, decoradas con plumas de colores y conchas de
moluscos de la zona o piedras semipreciosas, las cuales eran enterradas junto
a los difuntos acaudalados o nobles del pueblo Chimú.
ARTE

Los restos de su arquitectura ha permitido definir que los


gobernantes vivieron en los palacios y recintos
monumentales, mientras el pueblo residió en viviendas
de quincha con habitaciones pequeñas y fuera de la
arquitectura monumental. La decoración de las paredes
es sobre la base de frisos modelados en relieve, y en
algunos casos, pintada. Los diseños son de figuras
zoomorfas, como peces y aves, así como de figuras
geométricas, todo policromado.

CHAN CHAN

Chan Chan fue la capital del reino chimú y la


residencia del Gran Chimú o soberano, que
tenía la categoría de emperador. Abarcaba una
superficie de 25 km2, lo que lo convierte en una
de las ciudades más grandes del mundo en los
siglos XV y XVI. Su plano estaba diseñado como
los anillos concéntricos de un árbol, salvo en la parte occidental donde hubo una
tendencia al arreglo rectilíneo. Se divide en tres sectores:

Área monumental, conformada por dos tipos de construcciones:

Un grupo de diez ciudadelas o recintos rectangulares de adobe de hasta 9 m de


altura y tres m de espesor en las bases. Eran los palacios donde vivían el rey y
su familia, así como guardaban sus sepulturas. Por ello se presume que fueron
diez los monarcas chimúes, por el número de estos palacios.

Una serie de pirámides truncas, con fines ceremoniales (como Huaca Toledo,
Las Conchas, Obispo y El Higo).

Área intermedia, que sería la morada de gente acomodada, que no pertenecía a


la nobleza.

Los Barrios, donde vivían la población trabajadora, en viviendas pequeñas e


irregulares. Se calcula que la población que albergó superaba los 30.000
habitantes.

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