Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Material Nº6
Guía de Aprendizaje Nº3
EL GOBIERNO MILITAR
1973-1990
APRENDIZAJES ESPERADOS.
1
La crisis de 1973 y la llegada del Régimen Militar al poder.
Un acontecimiento de las características del ocurrido en septiembre de 1973, necesariamente
posee varias causas o antecedentes y también varias interpretaciones. De modo general, están los
que justificaron la acción militar en contra del gobierno de Allende y calificaron la llegada del
nuevo gobierno como salvadores de la patria, y en la posición contraria, luego de pasar por
diversos matices en la valoración de los hechos, se ubican quienes observaron en esta acción, la
más violenta ejercida por los militares y quienes les apoyaban, en contra de un gobierno
legítimamente elegido en 1970 y que se constituyó en una sangrienta dictadura que cambió para
siempre los principios políticos bajo los cuales se había desenvuelto la vida nacional en este
aspecto.
Sin agotar el tema, entre las razones que se dan para entender lo que ocurría en Chile antes del
golpe militar y que se relacionaron con las causas de éste, se encuentran las siguientes:
La ruptura del régimen político democrático por la polarización de las posiciones entre la
izquierda y los grupos representantes del centro político liberal y la derecha tradicional. En este
aspecto prácticamente desaparece el centro político pragmático que en otros momentos estuvo
representado por partidos poderosos como fueron el Radical y la Democracia Cristiana. La
descalificación fue total y llegó a manifestarse en la vida cotidiana cuando por ejemplo, con
desprecio, chilenos de posiciones de derecha se referían a los “upelientos” y los de izquierda
encasillaban a sus rivales políticos bajo en nombre de “momios”. En este aspecto, una gran
responsabilidad tuvieron los dirigentes políticos y altos personeros de la vida nacional que a
través de los diarios, radios y otros medios utilizaban un lenguaje procaz y provocativo para
calificar a los oponentes políticos.
La división política producida al interior del gobierno, por la cual algunos sectores presionaban
para acelerar los cambios y con ello abandonar el discurso oficial de conseguir el socialismo a
través de la vía institucional y electoral.
La legitimación de la violencia, expresada cuando el MIR llamaba a la lucha armada para tomar
todo el poder y, Patria y Libertad practicaba la violencia a través de diverso tipo de atentados,
para dirimir diferencias.
La desvalorización de la democracia como sistema. De este modo se llevó a militares a formar
parte del gobierno y los opositores políticos a “golpear la puerta de los cuarteles” exigiendo la
intervención militar para salir del caos.
La negativa de los poderosos a renunciar a sus históricos privilegios y las altas expectativas del
pueblo, que pensaba obtener lo que siempre le había sido negado lo más rápidamente posible
sin considerar la institucionalidad vigente. La polarización social en este sentido hace
irreconciliables las posiciones y lleva a los
segmentos a tomar todo tipo de medidas para
concretar sus ideas y fortalecer sus posiciones en
defensa de sus intereses.
Los crecientes problemas de orden económico que
se manifestaron en el alza inflacionaria, la escasez
de bienes y las colas para adquirirlos, la inadecuada
distribución a cargo de las JAP, el acaparamiento, el
déficit fiscal, los sabotajes y el racionamiento.
El abandono de ciertos sectores de las Fuerzas
Armadas de su neutralidad política. La influencia de
EE UU, su ideología anticomunista y la doctrina de la
Seguridad Nacional, en la cual se instruía a la
oficialidad de las Fuerzas Armadas. Ello provocaba
que ciertos grupos militares actuaran para evitar la
influencia de Cuba y la URSS, de modo que no
hubiese inclinación de los gobiernos
latinoamericanos hacia modelos socialistas.
En relación con lo anterior inserta la “Guerra Fría” que tiene en América Latina uno de sus
escenarios, sobre todo desde la crisis de los misiles de 1962 que tuvo fuertes repercusiones en
2
Cuba y Latinoamérica. EE UU pugna por mantener la hegemonía en el continente y en ello debe
enfrentar al gobierno de Allende que intentaba un acercamiento con las URSS y Cuba.
En el curso de las próximas semanas serán normalizadas las actividades productivas, extractivas,
comerciales y de servicios en todo el país, así como de la administración pública en general. Para
ello, la patria precisa del concurso de sus profesionales, empleados, obreros y campesinos, quienes
unidos en el anhelo común de forjar un Chile grande y libre, confiando en la conducción patriótica
de las Fuerzas Armadas y Carabineros, constituirán el baluarte y fundamento de la reconstrucción
nacional.
(…) Nada deben temer quienes equivocadamente confiaron en traidores que ofrecieron una “patria
nueva”, y solo nos dieron hambre, odio, atropellos e injusticia. Sólo la unidad nacional salvará a
Chile de la autodestrucción y rescatará a su pueblo de la degradación a que conducía el
comunismo. El gobierno demostrará con hechos su concepto de participación de la gestión
empresarial. Los empleados y obreros volverán a sus actividades laborales y gremiales sin
temores, complejos y rencores para luchar unidos por un destino común de grandeza y libertad.
Bando n°31 de la junta de gobierno, 14 de sep. de 1973. (Fragmento)
Entre los primeros actos realizados por la Junta de Gobierno se pueden nombrar:
La Junta asume el poder ejecutivo y el legislativo y por lo tanto se clausura el Congreso.
No se afecta de este modo al poder judicial que había manifestado su apoyo al gobierno
militar.
Se estableció el Estado de Sitio.
Quedan fuera de la ley los partidos de Izquierda que integraban la U.P.
Se proscribe la Central Única de Trabajadores (CUT).
Se declaran en receso todos los demás partidos, que más tarde serían disueltos en marzo
de 1977.
3
Los alcaldes y los regidores fueron reemplazados por funcionarios designados por la Junta.
Se designaron también a otros funcionarios en la administración pública y las escuelas y de
modo similar se intervino a las universidades.
4
La Constitución de 1980.
Un plebiscito, realizado sin registros electorales ni organismos que garantizaran la limpieza del
acto, sin información adecuada e imparcial y bajo estado de emergencia, realizado el 11 de
septiembre de 1980, aprobó la nueva Constitución Política.En ella se estableció:
-un régimen presidencialista.
-la protección del las garantías individuales y el derecho de propiedad.
-la proscripción de cualquier movimiento que se declarase marxista.
-un Consejo de Seguridad Nacional integrado mayoritariamente por las fuerzas armadas y de
orden como garante del sistema político.
-la inamovilidad de los Comandantes en Jefe de las fuerzas armadas y del Director General de
Carabineros.
-complejos procedimientos para reformar la Constitución que partía por el alto quórum exigido.
-el Senado estaría conformado por senadores elegidos y designados.
-normas transitorias para el período 1980-1989.
5
importancia, siendo reemplazada por los servicios (telecomunicaciones, finanzas, salud,
educación, comercio, transporte y vivienda).
A pesar de los problemas en materia de seguridad social y condiciones de empleo, los éxitos
alcanzados en algunos aspectos macroeconómicos provocaron que se hablara del “milagro
chileno”, expresión acuñada por economistas ingleses y estadounidenses. Entre 1976 y 1981 el
crecimiento llegó a casi el 8%. En Chile y especialmente en Santiago se levantaron nuevos
edificios, se multiplicaron los automóviles, los restaurantes y los centros comerciales. Se trajeron
nuevos equipos de sonido y televisores y los hogares vieron la llegada de refrigeradores,
lavadoras y otros artículos electrodomésticos que podían ser pagados con la tarjeta de pago, un
nuevo medio aparecido en los años setenta. El nuevo consumo trajo aparejado el endeudamiento
que no sólo era característico del ciudadano común ya que, como las importaciones se financiaron
con préstamos de bancos internacionales, se comprometió en esto prácticamente a toda la
institucionalidad económica, por ello la deuda externa aumentó de 9.300.000 dólares en 1975 a
16.300.000 en 1981.
La Crisis de 1982
Este año se desata en el país una crisis de mayor gravedad que la que se experimentó en 1929.
Entre las razones de ella se encuentran el excesivo endeudamiento externo, el desempleo
estructural y la decadencia de las exportaciones; a ello se suma la situación internacional donde la
guerra entre Irán e Irak provocan un problema con los precios del petróleo. El sistema financiero
internacional por su parte subió los intereses de los préstamos y redujo su oferta. Por lo tanto, el
encarecimiento del crédito y de las materias primas como el petróleo, actúan sobre la economía
chilena que por años estaba financiando el crédito con préstamos externos. La deuda externa
chilena se triplicó entre 1977 y 1983 y, en ese contexto, subió la tasa de interés de los EE UU
siendo uno de los efectos el anuncio de México del “cese de pagos”, que ponía en evidencia las
dificultades de Latinoamérica de atender al servicio de la deuda.
Deuda subordinada: en 1982 tras perder el 30% de las reservas internacionales, la brusca
devaluación del peso, la contracción del producto nacional, y la disminución de los créditos externos,
los sectores productivo y financiero se vieron incapaces de responder a sus compromisos crediticios,
lo que transformó el problema de la deuda en la más profunda amenaza al sistema económico
nacional. Esta situación llevó al gobierno a una profunda intervención para rescatar a la banca, ya
que por medio del Banco Central otorgó créditos que dieron liquidez a los bancos comerciales,
permitiendo la continuidad de su funcionamiento. Esto se tradujo en la compra, por parte del Banco
Central, de la cartera de deuda mala de los bancos, condonando deudas, multas e intereses
vencidos, lo que provocó un enorme costo para este banco y para todo el país, que debió asumir la
irresponsabilidad del sistema financiero.
6
La reactivación económica.
El desequilibrio financiero en América Latina generado por la recesión mundial que significó, en el
caso de muchos países, que no pudieran seguir pagando la deuda, obligó a la región a solicitar
ayuda a las entidades financieras multinacionales, el Banco Mundial, el Fondo Monetario
Internacional y el Banco Interamericano de Desarrollo. Las exigencias a cambio de ese apoyo
fueron duras medidas estabilizadoras que se tradujeron en la reducción del déficit fiscal a través
de privatizaciones, reducción de la deuda externa y expansión de las exportaciones. Chile que
había iniciado el camino propuesto, aplicó medidas de modo más gradual que, de todos modos,
implicaron considerables costos sociales. En la economía nacional, la crisis de 1982 había
interrumpido el modelo privatizador, incluso volviendo algunas empresas a control estatal (área
rara de la economía), sin embargo, luego de la crisis, el impulso privatizador se retomó por
diversos medios, a saber: subastas cerradas a grandes grupos económicos, aplicación del
capitalismo popular o transacciones en la bolsa de comercio.
Privatización y Emprendimiento
El “capitalismo popular” ha logrado integrar a 2.900.000 trabajadores del país a la
propiedad de las empresas que están contempladas en el programa de privatización. Si
bien el trabajador no se convierte directamente en capitalista popular, indirectamente se
transforma en propietario de una parte del capital y recibe los beneficios del crecimiento y
de las utilidades que experimentan estas empresas (…) De esta forma se ha logrado
alcanzar un mayor consenso entre las personas en cuanto a las ventajas de un sistema
económico basado en la libertad de emprender y en el derecho a la propiedad privada.
Valenzuela, Mario. “Reprivatización y capitalismo popular en Chile”, en Estudios públicos n° 33,1989.
(Fragmento)
Pese a la crisis, el sector exportador se benefició con los estímulos aplicados por el gobierno
militar; las materias primas como el cobre, los productos forestales, los productos agrícolas y la
pesca fueron los rubros más exitosos.
Ayudó a este auge un escenario internacional favorable a las exportaciones, como es el caso de
que se haya mantenido alto el tipo de cambio desde 1987, lo que produjo grandes ganancias a los
exportadores de materias primas nacionales.
7
Las políticas sociales y el rol subsidiario del Estado
La reorientación de rol del Estado desde 1973 produjo la aplicación del rol subsidiario de este. El
modelo neoliberal, señalaba que la educación, la salud, la vivienda y el sistema de pensiones,
entre otros, obedecían a las leyes del mercado y el Estado debía llevar su acción a los sectores
más vulnerables. En virtud de ello, las políticas sociales expresaron la subsidiaridad del Estado y
la entrega de recursos a quienes sus escasos ingresos no les permitían el acceso a bienes básicos.
Se complementan los subsidios con programas sociales de emergencia en los períodos de crisis. El
sistema también comprendió el traspaso de servicios básicos a las municipalidades y la
incorporación de privados en servicios de salud, previsión social y educación. Otros aspectos
vinculados a este tema fueron el cambio de la legislación laboral y el Código del Trabajo y la
subvención por alumno como parte de un subsidio a la demanda, todo lo cual cambió
substancialmente lo obrado en este sentido desde los gobiernos radicales.
La regionalización.
Lo anterior se acompañó con el plan de regionalización del país, en el cual fue decisiva la labor de
la CONARA, la Comisión Nacional de la Reforma Administrativa y que significó que se dividiera el
país en Regiones, Provincias y Comunas, a cargo de Intendentes, Gobernadores y Alcaldes, todos
designados por el gobierno, en las cuales se pusieran en práctica los principios de la
Descentralización y Desconcentración a fin de conseguir los objetivos planteados de
racionalización de la función administrativa del Estado, el desarrollo económico, la integración
nacional y la seguridad nacional. El balance, después de algunos años, indica que, aunque se
desconcentró la administración, poco se avanzó en la real descentralización.
8
Los cambios en Educación.
La política de Viviendas.
En consecuencia con el sistema, los privados se encargan de la construcción y financiamiento de
las viviendas. El Estado entrega subsidios a los sectores de menores ingresos para postular a la
casa propia. Como esto comprendía un ahorro de las familias, hubo muchas que quedaron
excluidas de la posibilidad de obtener algo propio. El gobierno también inició un programa de
erradicación de campamentos para instalarlos en la periferia de las ciudades y, de este modo,
lograr que se transformaran los terrenos que se desocupaban en la base de grandes proyectos
inmobiliarios. En Santiago se erradicaron 30.000 familias entre 1979 y 1985. Aparte de los
problemas de infraestructura y equipamiento que tuvieron las construcciones básicas que se
habilitaron para ellos, fue precario el acceso a la educación, a la salud y al transporte.
9
“Cuando llegué a la empresa, luego de haber sido exonerado por razones políticas que yo
consideré injustas, el dueño me señaló que era obligación que todo trabajador que fuera a
ingresar, cotizara en la AFP. Necesitado de trabajo y temeroso de que una negativa significara un
problema más de inseguridad, cesantía y posible persecución, firmé y quedé en un sistema que
hoy (2012) me significa una jubilación cuyo monto me tiene, después de trabajar 40 años,
integrando el segmento elevado de pobres que ostenta el país”.
Testimonio de S.S.V.D en las Redes Sociales.
El desempleo
El desempleo entre 1974 y 1983 superó el 19% y los
salarios disminuyeron en un 21%. Estas cifras hablan
del costo que significó para los trabajadores la
adopción del neoliberalismo por el cual se produjo
una contracción del sector industrial y un aumento
de la economía de mercado y del sector servicios.
Desde 1975 se implementaron por parte del Estado,
planes de empleos de emergencia para enfrentar el
problema, los que fueron reactivados tras las crisis.
El Programa de Empleo Mínimo (PEM), creado en
1975 consistía, en general, en trabajos realizados
para las municipalidades en materia de reparaciones
de calles, limpieza, regadío, forestación y ayuda en
atención de párvulos. Comprendía un sistema simple
cuyo pago era un tercio del salario mínimo.
El Programa de Ocupación para Jefes de Hogar
(POJH), creado en 1982 para mejorar el PEM,
requería mano de obra de mayor calificación y estaba
destinado a jefes de hogar. Siendo de todos modos bajos, los ingresos se doblaron y hubo una
mayor jerarquía laboral.
10
Derechos Humanos y violencia política
Chile desde 1973 vivió la experiencia de tener un Estado que por 17 años fue gobernado por las
Fuerzas Armadas y que vulneró sistemáticamente los Derechos Humanos. También hubo
organizaciones armadas emergidas en la sociedad civil que enfrentaron al gobierno.
Tanto el MIR, que intentó frustradamente en 1978, iniciar un movimiento armado de guerrillas en
el sur del país, como el Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR) creado en 1983, fueron los
grupos más conocidos que optaron por la vía armada revolucionaria. El segundo internó armas,
hizo atentados a torres de alta tensión e intentó asesinar al general Pinochet en 1986.
11
las violaciones a los derechos humanos y a sus familias, formó organizaciones solidarias como
comedores populares y ollas comunes. Se disolvió en 1992, ya recuperada la democracia.
Junto a otras organizaciones de defensa de diversos aspectos relacionados con los Derechos
Humanos, destacó la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos que, entre otras
acciones, se opuso a la aplicación del decreto- ley de amnistía de 1978.
En América del Sur los países viven, en general, la experiencia de los golpes militares como lo
ilustra el siguiente gráfico, lo que implicó también acciones concertadas entre diversos países para
perseguir, detener y ajusticiar a los opositores de las dictaduras. La “Operación Cóndor” es un
ejemplo de esa acción que comprometió directamente a los Estados.
12
Regímenes militares en
América Latina
13
1983 y el nuevo escenario político.
Este año la protesta masiva se hizo sentir no sólo en términos económicos sino en el ámbito
político. La comunidad organizada: trabajadores, estudiantes, colegios profesionales, pobladores,
mujeres en defensa de los Derechos Humanos, y otras, se manifestaron en marchas, tomas,
espectáculos, encuentros en los barrios populares, caceroleos y otras manifestaciones que fueron
creciendo entre 1983 y 1987, manifestaciones variadas, muchas de las cuales terminaban con
gran represión por parte de las autoridades.
En 1985 la Junta de Gobierno rechazó, señalando que había un itinerario determinado, el Acuerdo
Nacional que se había aprobado para adelantar el retorno a la democracia. Un esfuerzo en el que
había participado Sergio Onofre Jarpa y el arzobispo Juan Francisco Fresno y fuerzas políticas
opositoras, entre las cuales estaba la Democracia Cristiana, el partido Radical y miembros del
partido Socialista.
La oposición se rearticula
La etapa del gobierno militar que se extiende entre 1984 y 1988 se caracterizó por una mayor
movilización de la ciudadanía que aprovechó la suspensión de la censura, el retorno de ciertos
exiliados, la autorización para el funcionamiento de asociaciones gremiales y la organización de
los estudiantes universitarios, cuyas dirigencias habían sido designadas así como las autoridades
de las altas casas de estudio. Como reacción, el régimen estableció el Estado de Sitio en 1984,
1985 y 1986.
El calendario político fue aceptado por un segmento de la oposición, mientras que el Partido
Comunista radicalizó su posición, fundó el Frente Patriótico Manuel Rodríguez y creó con facciones
más radicalizadas de otros partidos y movimientos de izquierda el Movimiento Popular
Democrático, destinado a usar todo tipo de recursos en contra del régimen.
Para ser referentes en la continuidad del gobierno militar se organizaron los seguidores de
Pinochet y su obra, siendo la Unión Demócrata Independiente (UDI), el partido fundado por el
abogado gremialista Jaime Guzmán, la agrupación política más destacada (1983). También
resurgió el partido Nacional y Avanzada Nacional este último de corte más nacionalista. Para estos
grupos la meta era la continuidad de Pinochet cuando se realizara el plebiscito.
La visita de Juan Pablo II a Chile, realizada entre el 1 y el 6 de abril de 1987, fue el único
viaje de ese papa a ese país y, hasta el momento, es la única oportunidad en que un
pontífice ha visitado Chile.
Este hecho histórico, que se enmarcó dentro del 33 er viaje apostólico de Juan Pablo II (en el
cual también visitó Argentina y Uruguay), revolucionó a los fieles del catolicismo y aportó
con múltiples significados, debido a que se desarrolló durante el Régimen Militar de Augusto
Pinochet, sirviendo para distender en cierta medida las tensiones políticas de ese entonces.
En este aspecto destacó el arte popular, la canción protesta, a través de variados estilos desde el
folclore al rock. Desarrollaron su acción en peñas, teatros y universidades y viajaron al extranjero
para encontrarse con los exiliados. Entre ellos, destacan Inti Illimani, Quilapayún, Los Jaivas, Sol
y Lluvia, Isabel Parra y Patricio Manns. A ellos se suman los colectivos de los 80 con Los
Prisioneros y Fulano y el Colectivo Acciones de Arte, que con su campaña del No+ hizo múltiples
rayados en Santiago. En este destacaron Fernando Balcells, Daniela Eltit y Raúl Zurita, entre
otros.
14
1988. El esperado plebiscito
Sin poder derrotar al régimen con las movilizaciones, la oposición se abocó a la lucha por ganar el
plebiscito. Importante en este tiempo fue la formación de Partidos por el NO que sumó 17
colectividades políticas encabezadas por Patricio Aylwin.
El 5 de octubre de 1988, se llevó a cabo el plebiscito que consultaba si Pinochet seguía como
Presidente hasta 1997. Realizado con propaganda electoral y bajo condiciones muy diferentes de
las anteriores consultas, triunfó la opción NO con un 55,99% de los votos contra el 44, 01%
obtenido por el SÍ, lo que significaba que, en el plazo de un año debían realizarse elecciones para
elegir un Presidente de la República. También se harían elecciones para reinaugurar el Congreso
Nacional.
Se cerraba así un nuevo y polémico período de la historia nacional.
15
Glosario
CHICAGO BOYS: Se les denomina de esta manera a aquellos economistas chilenos que, una
vez cursados sus estudios de pregrado en la Pontificia Universidad Católica
de Chile o en la Universidad de Chile, continuaron perfeccionando sus
conocimientos en la Universidad de Chicago.
ESTADO DE SITIO: Régimen de excepción constitucional declarado por un gobierno, que permite
restringir las libertades individuales y el normal desenvolvimiento de las
instituciones.
GASTO PÚBLICO: Gastos hechos por el Estado, sueldos, salarios, transferencias, subsidios,
compra de bienes de capital y otras inversiones y pagos de deuda pública.
RECURSO DE AMPARO: es una garantía que la Constitución, concede a toda persona que ha
visto privada, perturbada o amenazada su libertad personal y su seguridad
individual. El objetivo de este recurso es que el afectado sea llevado ante
un juez para que revise la legalidad de la privación de libertad. Si es el
caso, se decretará su libertad inmediata o se pondrá al individuo a
disposición del juez competente.
16
BIBLIOGRAFÍA.
CST06-DMDS
Puedes complementar los contenidos de esta guía visitando nuestra página Web.
http://www.pedrodevaldivia.cl
17