LOS ELEMENTOS DE NUESTRA IDENTIDAD NACIONAL

Publicado 19th November 2012 por Juan Carlos Andrade Flórez

Mucho se ha dicho y a escrito a lo largo de los años sobre un tema tan sensible para todo colombiano y para la nación en
su conjunto y en todas las oportunidades se intenta responder una sola pregunta ¿que nos identifica como colombianos?

En realidad no es una pregunta fácil si se tiene en cuenta que puede ser resuelta desde diferentes ángulos aunque ninguno
podrá responderla a cabalidad por que no será fácil encontrar la esencia de esta patria en esos factores que describiré
ahora.

En primer lugar los publicistas dicen que COLOMBIA ES PASIÓN sin embargo esa palabra abarca muchas cosas y se presta
para muchas interpretaciones por que puede ser pasión al trabajo, al amor, al ocio o al deporte no hay nada concreto.

Hay comerciales de TV que se aproximan a describir y enumerar muchas cualidades de los colombianos como el ser
trabajadores, felices o soñadores y el amor y la entrega por la familia y la fe en lo que se hace, sin embargo no me parece
correcto que se asocien estas características con una gaseosa o un producto para la venta porque eso es comerciar los
sentimientos de la gente y eso no es sano.

Tampoco hayamos la respuesta completa en decir que todos los colombianos nos sentimos representados en lo grande
que hacen JUANES y SHAKIRA en el exterior, si eso realmente no es significativo para la vida directa de uno.

Sé que esta confusa esta parte pero intentare ser claro y empezare por decir que debe ser cada persona desde su modo
de ser y de vivir el encargado de construir lo que lo haga ser colombiano es decir este concepto es algo que se debe edificar
paso a paso en cada momento histórico particular y después de que sea algo sólido hay que mirar puentes que nos unan
con nuestros hermanos de otras regiones.

Lo que debe prevalecer a la hora de decir que lo que es ser colombiano debe ser las ganas y el empuje de todo un pueblo
de querer salir adelante dejar atrás los odios y los rencores y sentarnos a pensar si por el camino que vamos está todo
bien y que podemos hacer para combatir eficazmente la pobreza y la desigualdad.

En primer lugar creo que la constituyente de hace 20 años llego a la misma conclusión mía de estas páginas y es que era
necesario convocar a todos los sectores de la sociedad sin distingo de color ni clase social ni convicción política para hacer
de este un país incluyente y que respete su esencia multicultural. Pero esto evidentemente no es suficiente porque se
necesita que todo lo que dice esa carta política se ponga en práctica, se dice popularmente que la constitución de
Colombia está hecha para Suiza, porque supone que este país es tolerante y solidario cuando muchas veces no es así.

Cada vez hay más inequidad porque los servicios básicos como la salud y educación no son un derecho sino un privilegio,
es decir solo quien pueda pagarlos tiene derecho a disfrutar de una atención y cobertura de calidad. Es increíble por
ejemplo que en pleno siglo XXI existan los llamados paseos de la muerte que no es otra cosa que la absurda muerte de
personas a la puerta de los hospitales porque no tiene con qué pagar o por que los médicos se demoran en atenderlo
porque el servicio de urgencias no están eficiente como debe ser ya que demoran 3 horas en atender una urgencia.

Mucha de la responsabilidad de este fenómeno la tiene la ley 100 de 1993, pues convirtió a la salud en un negocio privado
y lucrativo para unas entidades prestadores de salud o EPS que cobran lo que quieran a sus afiliados y restringen los
servicios médicos para no gastar tanto dinero y muchas veces los pacientes tienen que acudir a la protección constitucional
de la tutela como único medio para que les hagan sus tratamientos.

En cuanto a la educación el panorama no es más alentador si se tiene en cuenta que se ha privilegio cantidad sobre calidad,
es decir que la idea es mostrar más cobertura pero a la hora que uno mira ésta es mediocre y también se ven las
diferencias entre lo público y lo privado entre otras cosas porque muchas escuelas en zonas rurales están en condiciones
deplorables y muchas veces un solo profesor le debe dar clase a 7 cursos al tiempo, algunos niños estudian casi a la
intemperie, sin un buen pupitre y exponiendo su vida.
No tengo la fórmula mágica para hacer de este un mejor país pero creo que lo primero que hay que tener en cuenta
organizar el país no en departamentos sino por regiones socioculturalmente afines como la región andina o la Caribe,
donde hay historias y costumbres similares que podrían empujar el desarrollo de toda esa masa poblacional.

Hay del mismo modo hay que ofrecer oportunidades dignas de vivienda y empleo y más capacitación técnica y tecnológica
para desarrollar conocimiento por qué bien dicen por ahí que el que produce el conocimiento tiene el poder. Alguna vez
leí el libro del periodista del MIAMI HERALD, Andrés Oppenheimer, CUENTOS CHINOS, donde analiza el milagro económico
de Europa y china y dice que Latinoamérica está mal porque no produce nada, ni un valor agregado, además muchos
países no tienen muy desarrollada la industria nacional y en este libro se dice que también es importante la liberalización
de la economía para que el mercado de la producción y el consumo se mueva.

También habrá que mejorar la red vial del país para poder agilizar el comercio nacional terrestre, hacer más puentes,
mega- obras y fomentar la pequeña y mediana empresa, para que la gente pueda hacer empresa y crear empleo y el
estado debe darles capacitación para montar estas empresas en temas de contabilidad y políticas laborales y hacer posible
que estas empresas puedan llevar sus productos al exterior.

Para concluir la presente reflexión es hora de construir la sociedad y el país pensados desde el desarrollo humano y la
dignidad de las personas, dar oportunidades y brindar así herramientas para que la gente pueda escoger que quiere hacer
en su vida con total respeto y libertad sin que sea presionado por nadie.

No menos importante esta la parte de generar políticas incluyentes a los grupos vulnerables como los discapacitados y los
afrocolombianos y los desplazados, es hora de tener en cuenta su voz y lo que piensan no se trata de que los ricos se
queden sin nada, sino que se trata de procurar que los menos favorecidos tengan una vida cada vez mejor.

Finalmente hay que dejar de pensar que solo en el exterior mejora la imagen del país porque eso sirve en parte para atraer
inversión pero no para subir la autoestima y la fortaleza de la nación, necesitamos que todos creamos en el país que no lo
critiquemos y que no hagamos odiosas comparaciones con el mundo sino que empecemos a ver nuestros problemas como
una oportunidad de recomponer las cosas y en caminarnos al primer mundo con innovación, tecnología y empuje que
tanto caracteriza a este pueblo.
Tomado de: http://juanchoandrade.blogspot.com/2012/11/los-elementos-de-nuestra-identidad.html

Actividad

1. Una vez leído el anterior texto hacer un análisis crítico sobre él asumiendo una posición personal y compararlo con el
video que acabaron de ver.