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Para practicar el lettering necesitamos tener a mano algunos materiales básicos, similares a los

que necesitamos en caligrafía:


- Papel: el papel es un básico, pero no sirve cualquier papel. Necesitamos uno que nos permita que
la tinta fluya con facilidad para poder dibujar las letras. Os recomendamos uno de alto gramaje,
consistente, que no traspase y que no tenga mucho grano (para que el rotulador se mueva con
facilidad).
Os podemos recomendar los siguientes:
Cuadernos Rhodia: ¡lo mejor de lo mejor para los rotus! Vienen punteados y los Tombow resbalan
a la perfección por este tipo de hoja.
El papel caballo
El bloc de ilustración de Canson
Papel Canson Marker (especial para rotuladores)
Bloc Windosr & Newton
- Rotuladores: unos buenos rotuladores son una inversión a largo plazo. Sin duda, para el lettering,
nuestros preferidos son los rotuladores Tombow ABT. Tienen doble punta (una punta fina y una
punta tipo pincel flexible y compacta) ideal para trabajar trazos más finos y gruesos.
Otra opción son los rotuladores Art & Graphic de Kuretake, muy similares a los Tombow, se
pueden acuarelar y cuentan con doble punta.
Los ZIG Clean & Color son también de una calidad estupenda, pero hay que tener en cuenta que el
trazo que se consigue es diferente. Se distinguen por su punta estilo pincel, es decir, se compone
de diferentes cerdas y no es de esponja. El efecto que se consigue con ellos es más desenfadado,
un "efecto brocha" muy característico.
- Acuarelas y pincel: si queréis practicar este tipo de lettering con acuarela no os pueden faltar
estos dos instrumentos. Un pincel de punta redondeada o, aún mejor, un pincel con depósito de
agua del que ya os hemos explicado sus múltiples ventajas y usos, entre los cuales destaca el.

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