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Los 5 Errores que un Buen

Reclutador debe Evitar


BUEN RECLUTADOR

El tiempo es oro. Una de


las principales
preocupaciones cuando
reclutamos es perder el
tiempo. La consecuencia
es que los procesos de
selección que se alargan en
el tiempo más de lo
esperado suponen dinero
para la empresa. Optimizar el tiempo, no significa solamente hacerlo más
deprisa. Si no seleccionamos al candidato adecuado, estaremos
perdiendo el tiempo, porque tendremos que volver a empezar de nuevo el
proceso de selección, con todo el coste que ello conlleva. Optimizar el
tiempo y evitar así un mal reclutamiento, son importantes para atraer al
mejor talento (Twittear Esto).

Es por ello que a continuación, te presentamos 5 errores que debes evitar


cuando reclutas, así optimizarás tiempo y esfuerzo, y evitarás un mal
reclutamiento.

1. No planificar
El reloj se mueve a toda prisa y ante la petición de una nueva contratación,
nos lanzamos a reclutar, sin perder tiempo. En muchos casos la necesidad
es inminente y debería “estar para ayer”. Invertir tiempo al principio del
proceso en planificar, no es perder tiempo, es ganar tiempo (Twittear
Esto). Estructurar las tareas y pasos a seguir cuando reclutamos, nos ayudará
a optimizar nuestros procesos y agilizar los tiempos de reclutamiento.

Planificar nos ayuda a evitar un mal reclutamiento, por lo que no te olvides de


“afilar el hacha”, como nos cuenta la siguiente historia de Stephen Covey en
"Los Siete Hábitos de la Gente Altamente Efectiva":

"En cierta ocasión, un hombre joven llegó a un campo de leñadores, ubicado


en la montaña, con el propósito de obtener trabajo. Durante su primer día de
labores trabajó arduamente y como resultado, taló muchos árboles. El
segundo día, trabajó tanto como el primero, pero su producción, fue
escasamente la mitad del primer día. Al tercer día, se propuso mejorar su
producción. Golpeó con furia el hacha contra los árboles, pero los resultados
fueron nulos.

Al ver el capataz el escaso rendimiento del joven leñador, le preguntó:

"¿Cuándo fue la última vez que afilaste tu hacha?"

El joven respondió:

"Realmente no he tenido tiempo de hacerlo, he estado demasiado ocupado


cortando árboles".

2. No definir correctamente el puesto de


trabajo
Antes de comenzar debemos
definir correctamente el
puesto de trabajo. Sin tener
claro qué es lo que
buscamos, ¿cómo vamos a
encontrarlo?. Perderemos
mucho tiempo entrevistando
candidatos que no son
adecuados para el puesto, antes de dar con el adecuado. Contar con una
detallada descripción del puesto de trabajo, es imprescindible para
empezar el proceso de reclutamiento (Twittear Esto).

A esa descripción debemos añadir los requisitos y competencias que debe


tener la persona idónea para el puesto. No se trata de ser rígidos, todo lo
contrario. El candidato perfecto no existe, pero sí el candidato idóneo. Se trata
de establecer unas bases con las competencias que debe poseer
el candidato idóneo en función de las funciones que desempeñará en el
puesto de trabajo.

3. No hacer las preguntas adecuadas


El arte de hacer preguntas entra en juego en los procesos de reclutamiento.
Saber hacer las preguntas adecuadas a los candidatos es fundamental para
seleccionar el talento adecuado para el puesto. Para evitar un mal
reclutamiento debemos hacer preguntas oportunas que nos faciliten la
información que necesitamos, para determinar si el candidato es idóneo para
el puesto de trabajo.

Partir de la definición del puesto es fundamental para conocer la información


que debemos recabar sobre los candidatos. Cada entrevistador tiene un estilo
diferente, unos redactarán las preguntas antes de la entrevista, otros
improvisarán. Lo importante es saber qué información queremos recabar
con nuestras preguntas. Si tenemos esto claro, con algo de práctica las
preguntas saldrán solas.

4. Publicar en los lugares equivocados


Por muy bueno que sea un puesto de empleo y muy atractiva que redactemos
nuestra oferta, si no lo publicamos en el lugar adecuado, no encontraremos
el talento que buscamos. De nada sirve, o de poco, publicar una oferta de
empleo para seleccionar un abogado en un portal de empleo especializado
en IT.

Publicar en cientos de lugares, sin una selección previa, tampoco sirve.


Posiblemente más candidatos se inscriban en nuestra oferta, pero ¿son
candidatos adecuados? Perderemos tiempo y esfuerzo cribando candidatos
que no cumplen los requisitos del puesto.

5. No utilizar herramientas 2.0


No podemos obviar que la mayor parte del talento se encuentra en la red.
Hoy en día casi todo el mundo se conecta a alguna red social y si el candidato
está en búsqueda activa de empleo buscará en portales de empleo. Utilizar
las redes sociales aportará grandes beneficios para difundir nuestras ofertas
de empleo y llegar al talento que queremos en nuestra empresa. A través de
las redes sociales podemos llegar a personas que no están en búsqueda
activa de empleo.

Otra herramienta 2.0 con la que debemos de contar para no perder tiempo en
nuestros procesos de selección, es un software de reclutamiento. Con un
buen software de reclutamiento que automatice tareas y que facilite el trabajo
administrativo y organizativo, podremos dedicar más tiempo a lo que es
importante en el proceso de reclutamiento, las personas.
Así pues, si somos capaces de tener en cuenta todos estos elementos y nos
fijamos en no cometer ninguno de los errores de esta lista, podemos estar
seguros de que realizaremos un reclutamiento de éxito. Si lo hacemos así, al
final ahorraremos tiempo y esfuerzo que podremos invertir en mejorar otros
aspectos de nuestros procesos de selección.

¿Qué errores sueles cometer en tus procesos de reclutamiento? ¿Cómo


nos ayuda la resolución de estos errores en nuestros procesos?

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