WWW.PUBLIMETRO.
PE
MARTES 9 DE OCTUBRE DEL 2018
AUTORA DEL BLOG ‘BUEN BOCADO’
Los avances de la cien-
cia han demostrado una
conexión que encuentro
fascinante: nuestra salud
intestinal afecta directa-
mente a nuestras emocio-
nes, y viceversa.
Solo basta recordar esos
síntomas que aparecen
cuando uno está nervioso
o ansioso por alguna situa-
ción en particular: dolor o
“mariposas” en el estóma-
go, náuseas, diarrea o falta
de apetito. Es así como el
cerebro influye en nuestro
sistema digestivo.
Pero ¿cómo influye
la salud intestinal en las
emociones? Lo que ocurre
es que contamos con un
sistema nervioso entéri-
VIDA SANA
JACKELYN
FRIEDMAN
MAGÍSTER DE CIENCIAS EN
NUTRICIÓN Y DIETÉTICA.
DE WWW.PUBLIMETRO.PE
co, que regula todas las
funciones del aparato
digestivo. El nervio vago es
el encargado de conectar
el cerebro con el sistema
digestivo. Aunque parezca
curioso, nuestro intestino
cuenta con una gran can-
tidad de neuronas, por lo
que muchos científicos lo
han denominado como “el
segundo cerebro”.
Además, las bacterias
presentes en el intestino,
llamadas microbiota intesti-
nal, participan en una serie
de procesos que incluyen
la producción de neuro-
transmisores y vitaminas,
absorción de nutrientes,
reforzamiento del sistema
inmune y más.
LA ASOMBROSA CONEXIÓN
INTESTINO-CEREBRO
La serotonina, el neuro-
transmisor encargado de
producir felicidad y bien-
estar, es producida en un
90% en el intestino. De la
misma forma, también se
produce el neurotransmi-
sor GABA, relacionado con
el control de la ansiedad.
Esto explicaría por qué
nuestra salud digestiva
está tan relacionada con
nuestras emociones. Di-
versas investigaciones han
demostrado que muchos
antidepresivos no tienen
la capacidad de reducir
la depresión, como sí los
cambios en la dieta.
Por tanto, tener una
salud intestinal adecuada
sería beneficioso para la
estabilidad Emocional.
Para ello, se recomienda
el consumo de probióticos
(bacterias beneficiosas para
el intestino), y de prebióti-
cos (fibras que son fer-
mentadas por las bacterias
intestinales). Los alimentos
que se recomiendan para
tener una flora intestinal
adecuada son:
1 Alimentos fermentados:
suelen tener probióticos,
como el lactobacilli. Algunos
ejemplos: yogur, kéfir, que-
so, vegetales encurtidos,
sauerkraut (col fermenta-
da), entre otros.
2 Alimentos ricos en
polifenoles: café, aceite
de oliva, cacao y té verde.
Esta sustancia vegetal se
usa para incrementar las
bacterias beneficiosas del
intestino.
3 Alimentos ricos en trip-
tófano. Es un aminoáci-
do precursor de la seroto-
nina. Se encuentra en el
pavo, huevo, queso, nueces
y semillas, tofu, pescado,
entre otros.
4 Alimentos ricos en fibra:
frutas y vegetales, me-
nestras, granos integrales y
semillas; estos prebióticos
no solo son buenos para
mantener la microbiota;
también reducen las hor-
monas del estrés.
13
5 Alimentos con Omega-3.
Este ácido graso esencial
está presente en el salmón,
las sardinas, la anchove-
ta, linaza, chía y nueces.
También se consigue como
suplemento. Su consumo
se ha relacionado con la
reducción de la depresión,
y la prevención de diversos
desórdenes del cerebro.
Además de llevar una
alimentación balanceada y
variada para cuidar la salud
digestiva, es necesario con-
trolar los niveles de estrés
realizando actividad física,
y técnicas de relajación
como yoga o meditación.
Como dice el dicho: “Mente
sana en cuerpo sano”.