Sie sind auf Seite 1von 1

Tráfico de órganos

Hoy en día gran parte de la población del mundo ha requerido de un trasplante de órgano, por
ende han recurrido a la opción de la donación para poder obtener un órgano saludable. Este
acto tiene como finalidad a contribuir en la mejora de la salud de las personas. Sin embargo, en
estos últimos tiempos, la donación de órganos ha descendido significativamente. Debido a lo
anteriormente dicho, surge la interrogante de si sería permisible la legalización de la venta de
órganos en nuestro país.

La proposición de esta idea tan descabellada e impensable generaría un grave peligro para la
población peruana, debido a que aumentaría el índice de mafias que se dediquen a la
comercialización de órganos. Ello produce a que las personas se conviertan en un objeto de
venta, lo cual sería realmente inaceptable, puesto que no está admitido adquirir ganancias a
cambio de dar algún órgano humano. Esto es fundamentado por la Organización Mundial de la
Salud que nos da a conocer que la venta de órganos va en oposición de la Declaración Universal
de Derechos Humanos. En este documento nos indica que las partes del cuerpo humano no están
admitidas a ser comercializadas y también nos manifiesta a que se debe impedir el cobro por un
órgano.

La legalización de la venta de órganos traería como consecuencia la existencia de varios centros


hospitalarios, los cuales ofrecerán servicios para el trasplante de órganos, pero eso no significa
que esos establecimientos cuenten con las condiciones óptimas para este tipo de prácticas o
que cuente con un personal médico calificado. Un ejemplo es lo ocurrido en Rusia en el año de
1993. Hubo dos médicos que se dedicaron a crear una “empresa” dedicada a la obtención de
órganos de varios inmigrantes y personas con una situación económica paupérrima. Dentro de
las instalaciones se hallaron 700 órganos (corazones, pulmones y riñones) y también se localizó
1400 hígados, 1800 timos y 2000 ojos. Entonces con este claro ejemplo, se puede observar que
al legalizar la venta de órganos no podemos garantizar que los médicos conserven su
profesionalismo ético.

Se aumentaría el índice de asesinatos y secuestros, principalmente en la población infante. Por


ejemplo, se ha registrado en el país de Nicaragua la desaparición de 400 niños por cada año, en
realidad aún se desconoce las razones de ese suceso, sin embargo las organizaciones sociales
internacionales que velan por la integridad infantil sospechan de estas mafias comercializadoras
de órganos. Por otra parte, en Brasil se ha acontecido que se han encontrado cadáveres de niños
con los órganos extraídos o también se ha dado el caso de aparecen vivos, pero sin algún órgano.
Ello con lleva a que la legalización de la venta de órganos pasaría a fomentar la matanza
indiscriminada dentro de una población.

En conclusión, dar una valorización económica a un órgano es como ir en contra de la ética y de


los DDHH, también al permitir esta legalización estaríamos propagando actos ilícitos (asesinatos,
secuestros, etc.) que originan la masiva comercialización de órganos. Además, si se implanta
este modelo mercantilista, entonces se desvalorizará la donación.

Das könnte Ihnen auch gefallen