FIDUCIA INMOBILIARIA

Es el Fideicomiso cuyo objetivo es administrar los recursos y bienes destinados a desarrollar un

proyecto inmobiliario, de acuerdo con las instrucciones señaladas en el contrato, promoviendo
de esta forma seguridad, confianza y transparencia entre las Partes involucradas en el
Proyecto.

Se transfiere al Fideicomiso un bien inmueble, licencias, permisos, concesiones, proyecto

arquitectónico y recursos para que sean administrados con el fin de desarrollar un proyecto de
infraestructura o un desarrollo inmobiliario de acuerdo con las instrucciones señaladas en el
propio contrato.

Al final del proyecto, el fiduciario transfiere los bienes inmuebles construidos a los
fideicomisarios o compradores.

Este tipo de fideicomisos crea un medio de control para la administración de los bienes que
formen parte del patrimonio del fideicomiso.

Elementos:

EL FIDEICOMITENTE:

Es el propietario de los bienes o titular de los derechos que serán transferidos en

fideicomiso.

EL FIDUCIARIO:

Es la entidad especializada que cuenta con autorización de la

Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) para desarrollar operaciones financieras
como titular los bienes que se transfieren, así como responsable de llevar a cabo todos los
actos y operaciones necesarios para cumplir la finalidad del fideicomiso.

EL FIDEICOMISARIO:

Es el beneficiario del fideicomiso. El mismo fideicomitente puede ser beneficiario del

fideicomiso o una tercera persona.

EJEMPLO:

Supongamos que este es el dueño o propietario del

terreno, al ver que la zona en la que está su terreno es
bastante cotizada.

Entonces decide llamar a un profesional con

experiencia para que lo asesore, el mismo examina
el terreno y le dice al propietario que es un
excelente lote para hacer un edifico de
departamentos.
 Al ponerse ambos de acuerdo requieren de un
abogado para que arme y firme el contrato de
fideicomiso.

Una vez firmado este contrato, como el

propietario aporto el terreno pasa a ser un
FIDUCIANTE dentro del FIDEICOMISO, el
administrador es el FIDUCIARIO y el terreno el
BIEN A TRANSFERIR.

Al iniciar la obra contratan a una inmobiliaria

para comenzar a buscar los beneficiarios, que
en este caso, son los compradores.

De este modo, como participante del fideicomiso, el beneficiario debe de comenzar a pagar las
cuotas acordadas en el contrato teniendo claro que lo que está adquiriendo en un DERECHO.

Una vez terminado el edificio y concluido el

proyecto, lo que antes era tan solo un DERECHO
pasa a ser un TITULO DE PROPIEDAD convirtiendo
al beneficiario en propietario de la unidad que
eligió.