Capítulo 1: Propósito y Significado del Espíritu Santo

El tema del Espíritu Santo es apropiado para estudiar junto con el

Serie de sermones titulada Cristo Nuestra Justicia. Los dos sujetos van juntos tan
íntimamente que no puedes separarlos Tanto la justificación como la santificación se
logran mediante más que Jesús Fue la actividad de Cristo la que estableció la
justificación y la santificación, pero el Espíritu Santo es el que implementa, o hace
efectivo, el trabajo de justificación y santificación que Cristo ha logrado. No puedes
separar el Activando a la Agencia, como yo lo llamo, de Cristo, nuestra justicia. Si usted
predica a Cristo nuestro la rectitud sin el Espíritu Santo, nunca será efectiva en tu vida.
Solo será una teoría. Se vuelve práctico cuando el Espíritu Santo entra en tu corazón y
se activa los principios que Cristo estableció en Cristo nuestra justicia. Como pones los
dos juntos, comienzas a tener una experiencia; y Elena de White escribió que Cristo
nuestra rectitud, un término que ella usó como sinónimo de justificación por la fe, es
mucho más que una teoría Debe ser una experiencia práctica y de trabajo en nuestras
vidas. Se vuelve efectivo como el Espíritu Santo viene y trabaja en el corazón
El mayor obstáculo en el cristianismo genuino es la brecha que el pecado ha hecho
entre Dios y hombre De alguna manera, el pecado que provocó la separación debe ser
salvado, y el propósito del Espíritu Santo es lograr esto. No es suficiente que los
pecados sean perdonados. Si Dios todavía está lejos, todavía lejano espiritualmente
del hombre, no importa cuánto estás perdonado. Eres impío y sin Cristo. No solo
debemos pedir Su bendiciones Debemos preguntar por él ¡Necesitamos más que
ayuda! Necesitamos a Dios con y en nosotros.
Dios estaba con el hombre al principio. Él fue una gran bendición. Él es la fuente
de amor y vida y de todo lo bueno. Adán y Eva tuvieron todo esto cuando tuvieron el su
presencia. Como vendría en el fresco del día para visitarlos, todas esas bendiciones
vino sobre ellos; pero el pecado los separó. El propósito del cristianismo es cerrar esa
brecha de separación Debe haber más que buenas doctrinas, más que un
comportamiento correcto, más que una buen entendimiento, y más que perdón. Debe
ser Emmanuel: "Dios con nosotros".
Mateo 1:23. Hoy necesitamos a Dios con nosotros tanto como en el tiempo de Cristo.
De lo contrario, estamos personas indefensas y vulnerables a Satanás, sus tentaciones
y su dominio. Por lo tanto, la El Espíritu Santo salvando esta brecha entre Dios y el
hombre es de lo que estamos hablando aquí, y sin embargo, también implica mucho
más que eso. Jesús dijo: "Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en
mí, y yo en él, este lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis hacer. "Juan 5:15.

Sin su presencia, su poder, su vida, somos impotentes. "El que tiene al Hijo tiene
vida; y el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene vida. "1 Juan 5:12. Esto dice que si
tener todo lo demás excepto Dios o Jesús (que es Dios), no tienes vida eterna.
Puedes tratar de ser siempre tan justo, pero sin Jesús no tenemos vida; y lo haremos
no vivir para siempre sin él Debe haber una posesión de Él: una unión, una relación
donde caminamos juntos; donde Él mora con nosotros y en nosotros, o nos faltarán
estas cosas.
Debe haber una restauración de Dios y del hombre, o reconciliación como lo llama la
Biblia, o nosotros no son realmente salvados o rescatados.

Es por eso que el Padre envió a su único Hijo. Cuando Jesús se hizo humano, Dios
estaba adoptando la familia humana. Él estaba diciendo que ahora somos Suyos, y se
unió a Jesús. Él es una combinación de divinidad y humanidad. Antes de eso, Él era
cien por ciento Dios. Él no era hombre En la encarnación, se convirtió en un hombre
cien por cien y cien por ciento Dios. Hubo una combinación única por primera vez. El
Padre no es Dios y hombre, pero Jesús sí. Y debido a que Jesús fue plantado en la
familia humana y teniendo descendencia espiritual como Él, puedes pertenecer a esa
combinación única de Dios y el hombre: "Cristo en ti, la esperanza de gloria ...".
Colosenses 1:27. Hubo una adopción, una unión, una unión para que Dios estuviera
con el hombre y ya no estuviera separado.
¿Logró Él la restauración de Dios en el hombre cuando Jesús se hizo humano? No
exactamente, y no completamente. Solo aquellos que estaban físicamente con Jesús
realmente tenían a Dios con el hombre. El resto no. Cuando Jesús dejó este mundo y
supo que se iba, dijo que no deseaba separar a Dios y al hombre, porque Emmanuel
(Dios con el hombre) iba a ser un arreglo permanente. Sabía que cuando se fuera iba a
haber un problema de separación. Él discutió esto cuando habló de Su partida. "... voy
a preparar un lugar para ti." "Pero ahora voy a Mi camino al que me envió; y ninguno de
vosotros me pregunta: ¿Adónde vas? "" Sin embargo, te digo la verdad; Te conviene
que me vaya: porque si no voy, el Consolador no vendrá a ti; pero si me voy, lo enviaré
a usted ". Juan 14: 2; Juan 16: 5,7. Mientras hablaba sobre la separación de Dios y el
hombre, comenzó a decir que algo iba a suceder. Otro Consolador vendría.
Mientras continúas allí en Juan 14 versículos 16 y 18, dice: "Y rezaré al Padre, y él te
dará otro Consolador, para que él permanezca contigo para siempre ... No te dejaré sin
consuelo: vendré para ti. "Dijo que se iba a ir, pero que en realidad no se iría
permanentemente, sino que regresaría. Él no estaba hablando solo de la segunda
venida. También habló sobre la venida del Espíritu Santo. Dijo que se iría, pero que eso
era bueno porque enviaría otro Consolador. Dijo que cuando ese otro Consolador
vendría, vendría a nosotros. Cristo debía estar presente con Sus seguidores a través
de Su Espíritu para que no hubiera una separación entre Dios y el hombre. Cuando
Jesús partió de este mundo, Él aún estaría presente con nosotros a través de la
persona del Espíritu Santo.
Jesús discutió esto con sus discípulos: "... esperen la promesa del Padre, la cual, dice
el, oísteis de mí ... pero seréis bautizados con el Espíritu Santo." Hechos 1: 4,5. Jesús
estaba diciendo que cuando se fuera, Dios no los dejaría en paz. Dios iba a estar con
ellos. Dijo que esto se lograría a través de la persona del Espíritu Santo.
Fue Jesús quien se hizo humano, y una razón fue quitar nuestros pecados. La Biblia
dice: "He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo". Juan 1:29. Nuestros
pecados nos han separado de él. Si Él quita los pecados, entonces la valla está baja.
Las barricadas se han ido. Se eliminan los letreros de "Mantener fuera".