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Resumen
El siglo XXI inició como el siglo de la innovación evidenciando su importancia como el
fundamento del bienestar y la generación de valor para la sociedad. Se han publicado numerosos
artículos producto de investigaciones y libros escritos por expertos y consultores que proponen
diversas formas de innovar en las organizaciones. Los diversos enfoques abarcan los campos de la
planeación, el liderazgo, la gestión, el talento humano y el equipo, las unidades de investigación,
I+D+i, creatividad e ideación, el proyecto de innovación, la cultura, entre otros. Las diversas
ofertas se centran en la implementación de las anteriores herramientas en la organización en el
supuesto de que esta cuenta con las capacidades de asimilarlas. El presente artículo es el resultado
de una investigación exploratoria que busca entender el proceso de cambio de una organización
que no innova a una que cuenta con las capacidades para hacerlo. Se utiliza el recurso de la
metáfora, en particular la de la metamorfosis del lepidóptero (mariposa) para describir el proceso
en la que la organización se prepara para incorporar los elementos que necesita para innovar (fase
de oruga) y la fase en que centra la mayoría de sus esfuerzos en incorporarlos e inicia
transformaciones internas (fase crisálida) que la convierten en una organización capaz de innovar
continuamente (fase adulta o de mariposa). El resultado de la investigación muestra un proceso de
cambio intencional con fases estructuradas (con asignación de responsables, tiempo, recursos y
programación) de la organización para innovar. Una de las principales conclusiones es que la
organización que decida hacer el cambio debe preparase y asignar recursos para planear y ejecutar
las fases de oruga y crisálida para lograr ser una organización que innova (mariposa) exitosa. En
posteriores desarrollos se espera validar e implementar el modelo.
Palabras clave: innovación, organizaciones, complejidad, cambio, metáforas, capacidades.
1. Introducción
La competitividad de un país depende la las capacidades que tienen las organizaciones
(fundamentalmente las empresas) en innovar. Los recientes indicadores de innovación y
competitividad colocan al país en posiciones desfavorables a nivel mundial y de América Latina.
Uno de los factores desfavorables es la poca incorporación de nuevo conocimiento en los negocios
de las empresas, el bajo nivel de complejidad de los negocios y la dificultad de trabajar
cooperadamente participando en aglomeraciones y redes de innovación y de conocimiento, poca
capacidad de gestionar la I+D+i, un sistema financiero sin instrumentos para capital de riesgo, es
decir su baja capacidad de innovar (Cornell University, 2015; Worl Economics Forum, 2015).
Esta preocupación la plasma el gobierno al modificar el Conpes de Ciencia, Tecnología e
Innovación e integrarlo al de competitividad. En el documento se expresa la preocupación de la
debilidad de las empresas de incorporar la investigación-innovación en sus negocios y la dificultad
de la interrelación universidad – empresa. (Conpes, 2016).
La gran mayoría de los documentos y textos desarrollados por expertos e investigadores (se refleja
en el documento Conpes citado anteriormente) han centrado en algunos de los aspectos del proceso
de innovación muy enfocado en organizaciones que ya innovan o han desarrollado alguna
capacidad para hacerlo y en la creación de empresas de tecnología. Sin embargo, aún en el caso de
propuestas de gestión de la innovación en la organización se describen algunos de los diferentes
elementos y actores que intervienen en el proceso de forma desarticulada sin plantear la forma de
introducirlos en la operación de la misma.
El presente trabajo se enfoca en el proceso de cambio organizacional que debe gestionarse para
pasar de una empresa tradicional a una que tenga las capacidades de innovar de forma permanente
y pueda beneficiarse de la infraestructura construida de los sistemas nacionales de ciencia,
tecnología e innovación del país.
El documento es parte de la investigación exploratoria desarrollada por el autor como parte de su
tesis del doctorado en Pensamiento Complejo de la Universidad Mundo Real Edgar Morin.
En la primera parte se describen los diferentes actores e interrelaciones que intervienen en el
proceso de innovación en las organizaciones y que conforman su capacidad de innovar. Este
planteamiento se ha recogido en un modelo llamado HIPER 666 modificado (Rodríguez, 2006)
En el numeral segundo se plantea el problema y las principales preguntas que guían la
investigación, esto es, ¿de que forma se desarrolla esta capacidad de innovar a partir de una
organización tradicional?.
Posteriormente se describe la metáfora como herramienta que permite mirar con nuevos ojos el
proceso de transformación de las organizaciones innovativas y la selección de la metáfora de la
metamorfosis de los lepidópteros.
Se describen los hallazgos y su aplicación a las organizaciones que han decidido construir
capacidades de innovar ampliando los procesos a seguir en forma de fases.
Finalmente se plantean algunas conclusiones que guían los desarrollos de investigaciones futuras.
.
2. La organización con capacidades de innovar- El modelo HIPER 666 modificado.
1
Se definen actores como las variables del sistema o de la red (se pueden definir como nodos) que afectan el
objeto de estudio. Pueden ser organizaciones y cualquiera de sus componentes, cultura, personas, subsistemas,
etc (Axelrod y Cohen, 1999).
EMERGENCIA - INDUCIDA
AUTO - ORGANIZACI ÓN
ECO
El nivel Auto es el conformado por la organización y trasciende su estructura. Son las capacidades
de construir redes y vencer la barreras internas que impiden el aprendizaje y las retroacciones entre
los actores internos que dinamizan la innovación. Se presentan seis agentes fundamentales para el
proceso de innovación: el direccionamiento estratégico hacia la innovación, el cambio y la
creatividad; los sistemas de comunicación e información; la estructuración y procesos de la
operación con su flexibilidad y adaptabilidad; la gestión del talento humano en donde se privilegia
la dialógica entre lo individual y grupal; la capacidad de crear, adaptar, convertir y difundir el
conocimiento basado en actividades de investigación y desarrollo y de gestión de ideas a lo largo
de la organización y su permeabilidad más allá de sus fronteras y finalmente, su estructura
organizacional, que posibilita o crea barreras al proceso innovador.
El nivel del entorno (eco) es el ecosistema en que se nutre la organización y en donde obtiene los
recursos que necesita y que carece para el proceso de innovación. Este sustrato representa lo que
se conoce como los sistemas de innovación o redes sociales de innovación. Éstos son, en resumen,
un conjunto de actores que se interrelacionan sistémicamente con la organización y en algunos
casos entre ellos. Se presentan ocho actores2: el institucional – gubernamental que establece las
políticas, leyes, decretos, instituciones que apoyan y fomentan la I+D+i; la malla industrial
2
En los últimos años se ha incorporado un nuevo actor: personas o grupos externos a la organización interesados en
participar en el desarrollo de las ideas innovadoras y que son motivadas por retos personales e intelectuales, por el
reconocimiento público y por condiciones monetarias (Skarzynski, 2012)
(incluyendo los emprendimientos) que posibilita o restringe las sinergias entre el sector industrial
relacionado con el producto innovador y con aquellos otros sectores que polinizan el accionar
innovador de la organización; el mercado del conocimiento fundamentado en los centros de
investigación, de desarrollo tecnológico y de innovación, los clusters, parques u otras formas de
aglomeración; las universidades con las unidades de transferencia de tecnología y conocimiento y
los investigadores y grupos de investigación entre otros; la dinámica innovativa de los
competidores; la capacidad social de generación de talento humano apropiado para la innovación
por parte de las Instituciones de Educación Superior (técnicos, tecnólogos y profesionales
altamente calificados tanto en los saberes específicos como en su capacidad de integrarlos a las
organizaciones en equipos interdisciplinarios); la capacidad de los proveedores de proponer
nuevos insumos y tecnologías que posibilitan su incorporación novedosa a la innovación propuesta
y finalmente la capacidad financiera nacional e internacional que posibilita a la empresa de acceder
al mercado del dinero para apoyar los procesos innovativos de alto riesgo e incertidumbre.
Estos dos niveles permiten el desarrollo particular del proceso de innovación en sí mismo, el cual
es resultado de una decisión estratégica, de tipo convergente-divergente, en la que se presentan
eventos no programados, con patrones caóticos; en la que el grupo de personas responsables de
llevarlo a cabo por medio de un proyecto (que cambian con el tiempo y cuyas motivaciones no son
las mismas) buscan alianzas (construyendo redes) intra y trans- organizacionales que permitan
aumentar la probabilidad de superar las fases del proyecto ( estas no son lineales en el tiempo sino
que tienen la posibilidad de regresiones) y cuya terminación es difusa y cuyos objetivos finales
pueden ser diferentes a los iniciales. Es por lo tanto una propiedad emergente.
Las fases del proceso del proyecto de innovación son: iniciación, desarrollo, implementación y
terminación. Cada una de estas fases contiene y desarrolla su propia complejidad, y el resultado
del proceso es una emergencia que afecta la dinámica de la innovación de la organización y la
transforma a la vez que es transformadora. Este proceso está sustentado por dos competencias
fundamentales que direccionan la innovación: la capacidad de creación e invención y el
conocimiento que el grupo responsable puede generar y extraer tanto del interior de la misma
organización como de su entorno.
El arranque del proceso de innovación puede ser producto de cualquiera de estos actores que
propician comportamientos y fomentan inestabilidades dentro de la organización en cualquiera de
los seis actores Auto. Así mismo, hay influencias transversales entre ellos y pueden ser a su vez
influenciados por la cultura de la organización en forma retroactuante (figura 4).
Figura 2. Modelo Hiper 666 modificado (elaboración propia)
La complejidad se visualiza al constatar que existe una interrelación entre los actores de cada uno
de los niveles y entre los niveles, que producen eventos sorprendentes. Estas interrelaciones pueden
generar cambios y presionar acciones no previsibles con anterioridad; algunos actores desempeñan
el papel de atractores3 para el resto, pero este papel no es permanente. Además, acciones de actores
3
Un atractor es un estado hacia el cual un sistema es “arrastrado” o “atraído” debido a sus propiedades
estabilizándolo (Lewin, 1995)
que a simple vista no son importantes (para otros) pueden generar reacciones desproporcionadas
en todo el sistema, así como estrategias que se esperan pueden impactar y desencadenar impactos
importantes, pueden desvanecerse.
3. El problema
¿Organización
Innovadora?
4
Cuyo negocio no depende de desarrollar innovaciones.
Un análisis de la inmensa mayoría de textos de expertos nacionales e internacionales en innovación
en empresas hace énfasis, dependiendo de su experiencia personal, en algún aspecto del proceso
de la innovación: la estrategia de innovación, la cultura, el talento humano, el equipo, la gestión
de la tecnología, el plan de negocios, la gestión del conocimiento, ideación y creatividad, la unidad
de I+D+i, el proyecto, la estructura organizacional, las relaciones con algunos actores del
ecosistema (innovación abierta), entre otros. Su propuesta es intervenir sobre alguno de los actores
del nivel auto o eco, ya sea creándolo o modificándolo (estado 2 de la figura 3)
La intervención se realiza sin cambiar los procesos y formas organizativas establecidas y sin
modificar su funcionamiento.
Se describe cómo se realiza el cambio de una organización tradicional a la emergencia de una
organización que cuenta con las capacidades para innovar de forma permanente.
Fase Crisálida
Fase Oruga Metamorfosis
6. Conclusiones
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Battram (2001) identifica el “borde del caos” como una zona de transición entre el orden y el caos abierta a
posibilidades; es el lugar en que el sistema interactúa con su entorno, en donde se presenta riesgo pero también
se está abierto al aprendizaje y la creatividad. Es una zona de complejidad y abierta a posibilidades
Las fases de oruga y pre-capullo son importantes en la preparación del proceso de cambio
identificando cuales son las capacidades construidas así como sus carencias y debilidades e
identifican los actores externos que deben ser aliados en dicho proceso; de la misma forma se
ratifica la importancia del rol de la Alta Dirección en el liderazgo y profundidad de los cambios
que debe acometer.
En estas dos etapas se prepara a los miembros de la organización para el cambio y se establece la
estrategia para el manejo de la resistencia al mismo.
El gran aporte de la metáfora es la fase de la metamorfosis en donde se establece la necesidad de
centrar la mayoría de los esfuerzos organizacionales en el acto de destrucción-creación de redes y
dinámicas internas, de construcción de redes de cooperación con el ecosistema y del balance
altamente inestable de mantener la producción a la vez que se producen las transformaciones
necesarias. Es un periodo de incertidumbre y riesgo que es mitigado con la preparación
desarrollada en las dos fases anteriores y abierto a la emergencia de nuevas posibilidades.
La organización innovadora emerge de la crisálida en un proceso de aprendizaje y ajuste del diseño
organizacional inicial que le permite el desarrollo de innovaciones de forma coherente, sistemática
y permanente.
En general, las organizaciones no conciben la complejidad del proceso del cambio a la que se
enfrentan y el impacto que produce en toda la organización. Pasan de organización tradicional a
introducir algunos cambios desarticulados con el todo.
Finalmente se encuentra que la emergencia en organización innovadora se fundamenta en un acto
de destrucción-creación inducida que genera una crisis e inestabilidad en el interior de la misma
pero que posibilita la aparición de lo nuevo.
Esta aproximación al cambio en organizaciones que pretenden ser innovadoras debe ser verificada
con estudios de caso en organizaciones que han realizado el proceso para evidenciar las fases en
su dimensión y profundidad.
7. Referencias