Post-crecimiento económico: Un cambio de

paradigma en curso

Por Samuel Alexander

WP 2/14

Febrero 2014
Este documento de trabajo fue escrito como parte de la Pon Caminos de
carbono proyecto, a el Melbourne
Instituto para una Sociedad Sostenible. Este proyecto está explorando y
evaluando las estrategias de descarbonización rápidos, y las implicaciones
sociales, económicos y políticos de este tipo de estrategias,
de diversos disciplinario y
perspectivas interdisciplinarias. En ese contexto más amplio, el presente documento
proporciona una revisión de la literatura y el análisis crítico de la economía
post-crecimiento.
 Si la tierra debe perder gran parte de su agrado la que se debe a las cosas que el aumento ilimitado de la riqueza y la
población sería extirpar de ella, por el mero propósito de lo que le permite soportar una más grande, pero no una
población mejor o más feliz, yo sinceramente espero, por el bien de la posteridad, que van a estar contentos de estar
parado, mucho antes de que la necesidad les obliga a ello. - John Stuart Mill, Principios de Economía Política ( 1848)

Post-crecimiento económico: Un cambio de paradigma en curso

Samuel Alexander 1

1. I INTRODUCCIÓN

'El ir para el crecimiento es del gobierno prioridad número uno', declaró Gordon Brown en
2010, el entonces primer ministro del Reino Unido, la captura perfectamente el espíritu de nuestro tiempo (Settle,
2010). Es una visión del mundo que da forma a la economía mundial hoy más que nunca (Purdey, 2010), al menos
como un reflejo de la economía deseo, si no como una descripción de reciente o anticipada económica realidad. A
medida que la economía global emerge lentamente, al menos superficialmente, de la crisis financiera global - una
crisis en la que muchas economías de todo el mundo sufrieron la recesión - el imperativo de todos los gobiernos de
todo el mundo para maximizar el crecimiento en el Producto Interno Bruto (PIB) nunca ha parecido más fuerte. El
supuesto económico subyacente es que el crecimiento del PIB es el camino más directo a la prosperidad nacional, y
esta visión del progreso es ampliamente aceptada en todo el espectro político, donde el crecimiento se utiliza como
piedra de toque de la política y el éxito institucional (Hamilton, 2003).

A pesar del dominio de este modelo de crecimiento del progreso en todo el mundo, nunca ha dejado de tener sus críticos, y ya que este
documento se esbozarán, hay razones para pensar que los motivos de oposición están creciendo en número, la fuerza y ​la sofisticación. Fue
el filósofo de la ciencia Thomas Kuhn (1962), que argumentaron que los cambios de paradigma en las ciencias naturales se producen cuando
el paradigma existente encuentra cada vez más incapaces de resolver los problemas críticos que establece para sí mismo. Como anomalías
aumentan en número y gravedad, la necesidad de un paradigma alternativo se vuelve más clara, y, finalmente, un nuevo paradigma es
desarrollado que puede resolver más problemas que el anterior. En ese momento un cambio de paradigma se pone en movimiento, y con el
tiempo el nuevo paradigma es aceptado y el viejo pierde su influencia, a veces de forma abrupta. De la misma manera, este documento
propone que un cambio de paradigma en la macroeconomía está en marcha, con un marco de crecimiento económico posterior a la amenaza
para resolver las anomalías críticos que parecen irresolubles desde dentro del paradigma de crecimiento existente. Veremos que una creciente
variedad de los teóricos, de diversos orígenes disciplinarias, están cuestionando la viabilidad e incluso la conveniencia de crecimiento
continuo, especialmente con respecto a las regiones más desarrolladas del mundo. Cada vez hay una llamada a mirar 'más allá del
crecimiento' (véase, están cuestionando la viabilidad e incluso la conveniencia de crecimiento continuo, especialmente con respecto a las
regiones más altamente desarrollados del mundo. Cada vez hay una llamada a mirar 'más allá del crecimiento' (véase, están cuestionando la
viabilidad e incluso la conveniencia de crecimiento continuo, especialmente con respecto a las regiones más altamente desarrollados del
mundo. Cada vez hay una llamada a mirar 'más allá del crecimiento' (véase,

por ejemplo, Costanza et al, 2014; Kubiszewski et al, 2013; Stiglitz, Sen y Fitoussi, 2010), sobre la base de que el crecimiento puede
ahora ser la causa de los problemas que tradicionalmente se esperaban resolver. No sólo puede argumentarse que un cambio de
paradigma post-crecimiento es en progreso, Parece que la importancia fundamental de este cambio radica en el hecho de que es en
relación con el progreso.
Es decir, se está cambiando la naturaleza misma de lo que significa 'progreso'.
En este trabajo los principales pensadores y movimientos en este paradigma emergente de la 'post
la economía del crecimiento' será re visto. A modo de introducción, una breve descripción de la
paradigma de crecimiento es Presente d, a fin de destacar más adelante, a modo de contraste, algunos de

1 Dr. Samuel Alexander es un profesor con la Oficina de Programas Ambientales, Universidad de Melbourne. También es
investigador de la Melbourne Institute Sociedad Sostenible y co-director de la Instituto simplicidad . El autor desea agradecer al
Profesor John Wiseman por ofrecer muy útiles comentarios sobre una versión anterior de este documento.

1
las características más destacadas del paradigma alternativo. a continuación, se proporciona una revisión de la literatura sustancial
de la economía post-crecimiento, después de lo cual algunas de las cuestiones pendientes en este movimiento emergente se
describen. Este trabajo pretende plantear preguntas acerca de lo que las perspectivas de este movimiento tiene para desalojar el
paradigma del crecimiento de la posición dominante que ocupa actualmente en la conciencia popular; ¿Qué importancia puede
tener si fuese alguna vez para tener éxito; y cuáles son las consecuencias podrían ser si fuera estando marginados. El documento
concluye con la descripción de un programa de investigación de temas críticos.

2. T ÉL GRAMO CRECIMIENTO METRO ODELO DE PAG ROGRESO

El crecimiento económico se define convencionalmente como un aumento en el PIB, y así es como se utiliza el término en este
documento, a menos que se indique lo contrario. El resultado de los sistemas nacionales de contabilidad elaborados, el PIB puede
ser entendido en sentido amplio como 'el valor de mercado de todos los bienes y servicios [es decir] materias primas producidas
dentro de un país finales durante un período determinado de tiempo' (Mankiw, 2008: 510). Se puede calcular de tres maneras
diferentes, pero formalmente equivalentes, como Tim Jackson (2002: 99) explica:

[PIB] puede verse, en primer lugar, como el total de todos (ingresos salarios y beneficios) obtenidos a partir de la
producción de bienes y servicios de propiedad nacional. A continuación, puede ser considerado como el total de gastos hecha
en el consumo de los bienes y servicios terminados. Por último, puede ser vista como la suma de la valor añadido por todas
las actividades que producen bienes y servicios económicos.

PIB contabilidad surgió por primera vez a principios de 1930 con el inicio de la Gran Depresión, que puso de relieve la
necesidad de que los datos económicos más detallados. En respuesta a esta deficiencia, Departamento de Comercio de
los Estados Unidos encargó Simon Kuznets (que más tarde recibirá el Premio Nobel de Economía) para desarrollar un
conjunto de cuentas nacionales. Estos fueron el prototipo de lo que más tarde se convirtieron en las cuentas del PIB.
contabilidad del PIB desarrollado significativamente durante la Segunda Guerra Mundial para ayudar con la planificación,
pero fue realmente en la era post-guerra que el PIB se dio a conocer, no sólo en los Estados Unidos, sino también cada
vez más en todo el mundo (Collins, 2000). Casi inmediatamente las comparaciones internacionales del PIB per cápita se
hicieron como una forma de evaluar la relación 'progreso' de las naciones (Purdey, 2010).

De acuerdo con este paradigma macroeconómico dominante, el crecimiento del PIB proporciona a los
gobiernos, a través de los impuestos, con más recursos para pagar los servicios sociales más importantes de la
nación. Proporciona los fondos necesarios para la seguridad nacional y una fuerza de policía, las elecciones
democráticas, atención de salud sofisticado, sistemas de saneamiento y otras infraestructuras, la educación
pública, las prestaciones por desempleo, etc., así como la financiación de las cosas tales como los programas
de protección del medio ambiente, la ayuda externa y las artes. Estas son todas las cosas buenas, se podría
aceptar, pero cuestan dinero, y los fondos son siempre limitados. Por lo tanto, al maximizar el crecimiento de la
economía de un gobierno puede conseguir una mayor financiación para esos servicios, contribuyendo así
directamente, por lo que el paradigma implica, para el bienestar social, económico y ecológico.

Por otra parte, este paradigma también implica que a medida que una economía crece, también lo hacen los ingresos
personales, lo que significa que las personas, no sólo los gobiernos, tienen más dinero y por lo tanto más libertad para comprar
las cosas que ellos desean o necesitan más. A partir de este punto de vista parece, sin duda, el crecimiento bueno - tanto a nivel
individual como a nivel nacional - de la que parece deducirse que una economía más grande es siempre mejor. Por
esencialmente confundir el bienestar económico y social, el crecimiento del PIB per cápita se convierte en una medida no sólo
del éxito económico, sino del progreso social de una nación en términos más generales, una visión que se denomina en este
documento como el 'modelo de crecimiento del progreso'.

economistas de crecimiento convencional aceptan que hay una 'escala óptima' en el

micro nivel económico (Mankiw, 2008) - es decir, que no acepta con el tiempo se

2
llegará un punto en el crecimiento en la producción de una empresa individual va a costar más de lo que vale, y por lo tanto ser
juzgado crecimiento 'antieconómica'; en algún momento, es decir, la contratación de más empleados o la compra de más de
establecimientos industriales no va a maximizar los beneficios. Sin embargo, no hay lugar en el paradigma de crecimiento para
una 'escala óptima' en el macro nivel económico, no 'escala óptima' de la economía en su conjunto. En particular, los
economistas de crecimiento argumentan que no hay límites biofísicos del crecimiento. Esto es porque se cree que las mejoras
tecnológicas y de eficiencia de asignación para permitir una economía infinita expansión, a pesar del hecho de que las
materias primas necesarias para la producción son finitos. eficiencia tecnológica, se supone, permitirá a los seres humanos
continuamente para consumir un conjunto finito de los recursos de manera más eficiente o, mejor aún, a consumir un conjunto
de recursos hasta ahora inaccesibles (por ejemplo Lovins, 1998; Lomborg, 2001). Alternativamente, el ingenio humano en
conjunción con los mecanismos de fijación de precios dará lugar a los escasos recursos de ser sustituido por menos recursos
escasos cuando los beneficios de hacerlo superan los costos (Simon y Kahn,

1984). eficiencia en la asignación, se supone, se asegurará de que los mecanismos de mercado se mueven
continuamente los recursos en manos de los que van a 'explotar' ellos mejor (Posner,
1986). Todo esto se espera que el crecimiento 'desacoplar' de impacto ambiental, un proceso mediante el cual se cree que el
PIB puede crecer mientras que cada unidad de PIB se vuelve menos recursos y consume mucha energía. Cuando uno mira
el mundo a través de esta lente neoclásica, lo que más importa es que los productos están disponibles para el intercambio en
el mercado, porque entonces la 'mano invisible' se dice que es maximizar el bienestar social al tiempo que protege el medio
ambiente mejor que cualquier otro sistema de estructurar la sociedad . Los precios se asegurará de que los recursos
naturales se consumen en un grado 'óptima'. Dado que se supone que cada transacción de mercado en condiciones no
coercitivas para aumentar la riqueza de vendedor y el comprador - de lo contrario ¿por qué realizar transacciones de las
partes? - el paradigma de crecimiento implica que 'mercados libres' son en interés de todos y que la actividad del mercado
debe ser maximizada (Friedman, 2002). 2

Sobre estos supuestos neoclásicos, los defensores del crecimiento se intenta demostrar que una economía como un
todo puede y debe seguir creciendo indefinidamente. El gran problema social de acuerdo con este relato influyente es que
incluso las naciones más ricas no tienen 'suficiente' y por lo tanto debe perseguir 'más'. El crecimiento económico se anunció
por lo tanto todo el mundo, y todo el espectro político, ya que el objetivo hacia el que todas las naciones deben dirigir su
energía colectiva. No sólo son el crecimiento y la salud del medio ambiente visto como objetivos compatibles, el crecimiento en
el mundo rico es visto como el mejor medio para el levantamiento de las personas y las naciones más pobres de la pobreza.
Dentro del modelo de crecimiento, es decir, la solución a la pobreza consiste en hacer crecer un pastel económico más grande
( 'una marea creciente levanta todos los barcos'), no cortar el pastel económico diferente (redistribución).

Este modelo de crecimiento afecta a muchas personas como básicamente correcta, y, como se ha señalado, se puede
aceptar que partes de él, por lo menos, tienen cierta plausibilidad intuitiva. Seguro que más dinero es mejor que menos? Como
veremos a continuación, sin embargo, hay una larga tradición de escepticismo crecimiento que, de diversas maneras, ha
argumentado que hay problemas críticos con este 'más es siempre mejor' modelo de crecimiento - problemas que un creciente coro
de los teóricos sostienen que no puede ser descartado como anomalías menores en un paradigma de otro modo funcional.

3. AL iteratura R REVISIÓN DEL PAG Ost- GRAMO CRECIMIENTO mi CONOMÍA

La siguiente revisión de la literatura tendrá un enfoque predominantemente macroeconómica, con

la tradición macroeconómica empezando, como veremos más adelante, con los economistas como Thomas
Malthus y John Stuart Mill. yo t vale la pena señalar, sin embargo, que muchos de los post-crecimiento

2 Para un examen crítico de la teoría de 'libre mercado', véase Samuel Alexander, 'propiedad más allá de crecimiento: Hacia una política de
la simplicidad voluntaria' (tesis doctoral, Facultad de Derecho de Melbourne) Capítulo 2. Disponible aquí: http://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=1941069
[Accessed November 10 2013].

3
perspectivas de que la expresión macroeconómica finalmente encontrado puede interpretarse como que han
tenido sus raíces en pensadores y culturas mucho más antiguas, cuyo foco eran más en perspectivas
personales y sociales que la macroeconomía. Una de las características definitorias de la macroeconomía
post-crecimiento es un cuestionamiento de los valores materialistas - un cuestionamiento de la propia
búsqueda de la riqueza material como un camino para el bienestar - y claramente que el posicionamiento crítico
tiene sus raíces en la antigüedad (Vanenbroeck, 1991). Si bien este cuerpo de ideas es muy amplio y profundo,
ejemplos representativos proceden de pensadores tan diversos como el Buda, Lao-Tse, Confucio, Diógenes,
Sócrates, Aristóteles, Epicteto, Jesús, Marco Aurelio, Séneca y San Francisco, mientras que en el más
moderno se podrían citar veces pensadores como William Morris, John Ruskin, Henry Thoreau, Gandhi, y
Helen Nearing,

2014). Todos estos pensadores y culturas, y una gran muchos más, han negado expresamente que 'la buena vida'
depende de la abundancia de las cosas materiales, y en lugar destacado la importancia de las virtudes como la
moderación, sobriedad, la sencillez, y la suficiencia. En consecuencia, esta diversa tradición de sabiduría, con
profundas raíces históricas, se puede entender a proporcionar algunas de las bases filosóficas y éticas de la
macroeconomía posteriores de crecimiento. A pesar de estas perspectivas se centraron principalmente en el individual

beneficios de vivir una vida basada en la suficiencia material, tal vez lo más parecido a una expresión de un post-crecimiento macroeconómica
en los tiempos antiguos se pueden encontrar en Platón
República, donde se hace una distinción entre una 'ciudad saludable' basado en la moderación y una 'ciudad febril'
impulsado implacablemente en los deseos insaciables de lujo y la extravagancia (Platón, 2004). Si uno busca una
expresión más desarrollada de la economía post-crecimiento, sin embargo, uno debe mirar a finales del siglo XVIII
y más allá, a partir de Thomas Malthus.

Malthus es más famoso por su Ensayo sobre el principio de la población, publicado por primera vez en 1798, en la
que hizo su caso, para lo que se conoce como la 'catástrofe malthusiana'. En esencia, Malthus afirmó que el crecimiento
de la población superaría la capacidad de producción agrícola para alimentar a la gente, una dinámica que le propuso
terminaría en una 'hambruna gigantesca inevitable' (Malthus, 2007 [1798]: 54). Aunque nunca usó la frase, Malthus
sostenía que había «límites del crecimiento. La falla crítica en su teoría, sin embargo, fue que no tuvo en cuenta los
impactos de la tecnología, por lo que ocurrió fue que el desarrollo tecnológico dio lugar a enormes aumentos de la
productividad en la producción agrícola, por lo que es posible alimentar a una población en aumento, por lo tanto evitar,
o al menos retrasar, la catástrofe predicha. Hoy en día el término 'malthusiano' o 'neo-malthusiano' se utiliza
generalmente como un epíteto calumnioso para describir aquellos que predicen una catástrofe basado en premisas
falsas. Sin embargo, ya que la población mundial se mueve hacia ocho mil millones de personas, los desafíos
planteados por el crecimiento demográfico sin embargo pueden justificar la sombría perspectiva de Malthus. Paul Ehrlich
(1970) quizá ha hecho más que cualquier otra para mantener la cuestión de la población a la vanguardia de las
preocupaciones ambientales y sociales, que muestra claramente que, siendo iguales todas las demás cosas, el
crecimiento de la población tiende a aumentar el impacto ambiental, en particular el alto expande de impacto clase de
consumidor (Ehrlich y Holdren, 1971; Alcott, 2010). Malthus merece su lugar en la historia de la economía del
crecimiento post sobre la base de que él fue el primero en plantear la posibilidad de que el crecimiento ilimitado de la
población, junto con el crecimiento económico que tal población en crecimiento dependería, eventualmente podría
conducir al sufrimiento humano y degradación ambiental en una escala trágica. A pesar de los errores teóricos en
Malthus trabajo original, un caso puede ser hecho de que una 'catástrofe malthusiana' de alguna forma sigue siendo una
posibilidad real de forma preocupante, con la ONU predice que la población mundial llegará a 9,6 mil millones de

2050, tal vez tan alto como 10,9 mil millones (UNDSEA, 2012). Mientras que la economía convencional ve crecimiento de la
población como una buena cosa - proporcionar un mayor número de trabajadores y consumidores para estimular la actividad
económica - no es una cuestión muy real sobre si los ecosistemas planetarios pueden sostener una población tan grande, y
cuáles son las consecuencias pueden ser si no pueden .

4
 Mientras que Malthus profetizó sobre crecimiento de la población que debe conducir a la inanición masiva, otros
economistas clásicos, como David Ricardo, desarrollado teorías igualmente tenebroso - tales como la denominada 'ley de
bronce del salario' - que sostenía que las leyes económicas se traduciría en salarios inevitablemente se mueve hacia los
niveles de subsistencia desnudos (véase, en general, Hollander, 1992). Debido a estas teorías, los detalles de los que no
necesitan actualmente desempaquetar, la economía llegó a ser conocido como la 'ciencia lúgubre'. Pero mientras que otros
economistas clásicos fueron teorizar pesimista acerca de cómo las leyes económicas limitaría la capacidad de las
economías para crecer y satisfacer las necesidades humanas, en 1848 John Stuart Mill publicó su primera Principios de
economía política, en el que hay una corta discusión, capítulo descuidado que tal vez una economía no crece, no puede ser
tan malo. Es este capítulo, titulado 'del estado estacionario', donde nos encontramos con la primera defensa explícita de
una economía post-crecimiento, y sobre esa base es Mill, en lugar de Malthus o Ricardo, que merece el reconocimiento
como el verdadero fundador de la post -Crecimiento economía.

Molino planteó la pregunta: '¿Hacia qué fin último es la sociedad que tiende por su progreso industrial?' (Mill,
2004 [1848]: 188). Sin complicaciones en la superficie, tal vez, esta pregunta sutilmente desafía el modelo de
crecimiento del progreso en tres aspectos importantes: en primer lugar, porque reconoce, implícitamente, que el
progreso industrial (o lo que hoy llamaríamos el crecimiento económico) sólo tiene un valor instrumental y no de
cualquier valor intrínseco; En segundo lugar, ya que aumenta la posibilidad de que hubiera llegado un momento en que
el crecimiento económico ya no sirve a ningún propósito que vale la pena; y en tercer lugar, y quizás más importante, ya
que nos lleva a considerar no sólo la cantidad de crecimiento económico es

suficiente, sino también lo que queremos crecimiento para. Molino propuso que si llegó un momento en que el crecimiento
económico dejó de aportar al bienestar (o comenzó a socavar esas cosas sobre las cuales depende el bienestar), el
sistema económico más adecuado sería lo que llamó 'el estado estacionario'. Con esto quiere decir una sociedad con una
población estable y un crecimiento nulo en stock de capital físico, sino que continuó mejoras en la tecnología y lo que
llamó el 'arte de vivir'. Molino argumentó que la tecnología en un estado estacionario no serviría para aumentar la riqueza
material, sino para abreviar el trabajo, un enfoque que está siendo objeto de mayor atención en el 21 S t siglo como un medio
para promover la calidad de vida al tiempo que reduce el impacto ecológico (véase, por ejemplo, Coote y Franklin, 2013).
En cuanto a la 'arte de vivir', Mill fue de la opinión de que el progreso cultural, moral y social sería mucho más probable
'cuando las mentes dejaron de ser absorbido por el arte de conseguir en adelante,' para luego añadir que 'es apenas
necesario remarcar que una condición estacionaria del capital y de la población implica ningún estado estacionario del
mejoramiento humano'(Mill, 2004 [1848]: 191). A pesar de su coherencia y atractivo como una visión de una sociedad
futura, la concepción de un estado estacionario de Mill demostró ser demasiado lejos por delante de su tiempo y fue
ignorada esencialmente sus contemporáneos. Para las generaciones venideras, el escepticismo de crecimiento que
implicaba permaneció latente y olvidada.

No fue hasta la década de 1950 y 60 que el escepticismo crecimiento remerged. Más de un siglo de crecimiento
económico relativamente sostenido se habían producido desde la obra de Mill - impulsada por el combustible fósil, la
revolución industrial - lo que significa que en esta etapa la mayoría de los occidentales estaban viviendo en un nivel de vida
material que Mili nunca han atrevido a pensar que sea posible. Los libros se publicaban con títulos como La sociedad
opulenta ( Galbraith,
1958) y El desafío de la abundancia ( Theobald, 1961), lo que sugiere que un estado estacionario con
suficientes recursos materiales para todos no era la quimera utópico puede, una vez ha parecido ser. de
hecho, las economías occidentales habían crecido significativamente, proporcionando la gran mayoría de
sus ciudadanos con las comodidades materiales sin precedentes, pero no todo el mundo tomó esto como
un avance social sin paliativos, y algunos empezaban a dudar tanto de la conveniencia y viabilidad de un
crecimiento económico continuo. Kenneth Boulding (1997 [1966]) fue uno de los primeros en argumentar
en cualquier longitud que el crecimiento económico, siendo dependiente de los recursos naturales, no
podría continuar indefinidamente en un planeta finito. Se le conoce por bromeó que cualquier persona que
pensó que podía 'era un loco o un economista' (citado en Collins, 2000: 141). En el ámbito cultural,

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naciones fijos en el crecimiento y el consumo fueron la creación de "sociedades de una sola dimensión. Argumentó que la
aparición de las culturas de consumo orientada fue homogeneizar la experiencia humana y proporcionar a las personas
con poco más que una 'falta de libertad cómoda' (Marcuse, 2002 [1964]: 3; véase también, Adorno, 2002).

escepticismo crecimiento recibió su primera declaración amplia, sin embargo, en 1967, con la publicación de
Esdras Mishan de Los costes del crecimiento económico. En este texto romper camino-, dirigida a las naciones
occidentales acomodadas, Mishan expresó profundas reservas acerca de si la expansión económica ilimitada - una
política que llamó 'growthmania' (Mishan, 1967: 3) - se encontraba en aras del bienestar humano. Después de reconocer
que el crecimiento había llevado históricamente importantes beneficios a Occidente, el levantamiento de muchas
personas de la pobreza, Mishan se dedicó a poner de relieve la desagradable costes de crecimiento económico que se
sintió muy a menudo se pasa por alto cuando los gobiernos en forma de sus políticas a favor del crecimiento. Poniendo
en duda el paradigma económico dominante, él provocativamente sugirió que tal vez los costes del crecimiento - el que
sostenía incluido mala salud psicológica, largas horas de trabajo, pérdida de la comunidad, paisajes urbanos feas, la
congestión del tráfico, la contaminación, la degradación del medio ambiente, etc. - eran comienzan a ser mayores que los
beneficios. Sólo por un momento, se propuso, debemos poner nuestra mente a la pregunta de si todo es realmente vale la
pena, ya que podría no haber un mejor camino a seguir. En el contexto de esta revisión de la literatura, lo que es
particularmente significativo sobre el argumento de Mishan es el hecho de que expone cómo la búsqueda decidida de
crecimiento coloca severos límites a la acción del gobierno, excluyendo presumiblemente cualquier política o reforma
institucional que retrasar el crecimiento de ninguna manera. Mishan reconoció que si el crecimiento fuera nunca a perder
su posición privilegiada como la piedra de toque de la política y el éxito institucional, nuevas vías abriría para la reforma
política, legal y económica progresiva. En las siguientes décadas, sin embargo, el deseo de crecimiento no sólo se
mantuvo sino que se intensifica y la política de crecimiento se hizo más profundamente arraigada (Purdey, 2010; Collins,
2000).

Pocos años después de la publicación del manifiesto de Mishan, varios otros textos surgieron lo que
hizo contribuciones significativas a la tradición de escepticismo crecimiento. En 1972 un grupo de analistas
de sistemas, conocido como el Club de Roma, causó mucha controversia con su publicación, Los límites
del crecimiento ( Meadows et al, 1972), que se ha dado en el texto del medio ambiente más leído de todos
los tiempos. En este libro los autores exploraron, con la ayuda de técnicas de modelado por ordenador, las
posibles consecuencias de un crecimiento exponencial de la población humana y el consumo de recursos
en un mundo de recursos finitos. Su diagnóstico alarmante, pero podría decirse que era de sentido común
que si las tendencias de crecimiento de la población mundial, la industrialización y el agotamiento de
recursos eran para continuar o acelerar, el planeta con el tiempo vendría en contra de 'límites al
crecimiento', con consecuencias potencialmente catastróficas. Ampliamente pero erróneamente
despedidos en el momento de ignorar los mecanismos de fijación de precios, subestimando el potencial de
aumento de la eficiencia, y la negación de la adaptación (Bardi, 2011), et al, 2004). El trabajo de Graham
Turner (2012), en particular, proporciona soporte riguroso para el análisis 'límites al crecimiento'.

En 1973 un análisis de apoyo fue ofrecido por el economista budista, Ernst Schumacher, en su texto
provocador, Lo pequeño es hermoso: Un estudio de la economía como si la gente importara. Schumacher criticado
la teoría económica convencional por no abordar el tema de la macro-económica 'escala', es decir, por no hacer la
pregunta de cuánto crecimiento es 'suficiente' y en su lugar sólo si se asume que una economía más grande es
siempre mejor. Desafiando la opinión ortodoxa de que la política económica debe buscar siempre para maximizar
las oportunidades de consumo a través de un crecimiento continuo, Schumacher propuso que el objetivo, tanto de
los individuos y las sociedades, debe ser obtener el máximo de bienestar con la cantidad mínima de consumo.
Sensible a pesar de esta propuesta pueda parecer, el mundo no estaba preparado para ello, y Wilfred Beckerman,
que representa

6
ortodoxia económica, finalmente respondió a los argumentos de Schumacher afirma que 'lo pequeño es estúpida'
(Beckerman, 1995).
En los próximos años hubo varios acontecimientos de importancia sociológica que proporcionaron apoyo adicional
para el escepticismo crecimiento. Teóricos como Richard Easterlin (1974), Fred Hirsch (1976), y Tibor Scitovsky (1992
[1976]), provistos de diversas maneras argumentos y pruebas en el sentido de que 'más crecimiento' no siempre significa
'más felicidad' o 'más bienestar '. Una vez que se satisfagan las necesidades materiales básicas de una sociedad,
algunos de estos teóricos argumentaron, un mayor crecimiento de la renta per cápita contribuye poco o nada a su
bienestar general. Scitovsky explica este hallazgo, basándose en que, más allá de las necesidades materiales básicas,
los seres humanos simplemente no encuentran el consumo y la acumulación de cosas materiales todo lo que se cumple,
en contra de las promesas culturalmente arraigadas de anuncios (véase también, Kasser, 2002). Una explicación
relacionada ofrecido por Easterlin y Hirsch era esencialmente que una vez básica se satisfagan las necesidades
materiales, las personas tienden a ser más preocupado por la riqueza relativa de la riqueza absoluta y, por lo tanto,
comenzar a participar en la competición de estado derrochador que es necesariamente un juego de suma cero (véase
también, Veblen, 2009 [1899]). Es un juego de suma cero, porque si se aumenta el estado de una persona, el estado de
otra persona debe haber disminuido relativamente, dejando normalmente la satisfacción general sin cambios (Easterlin,
1995). Como argumentó Hirsch (1976), esto indica que hay "límites sociales del crecimiento. Estos puntos de vista
sociológicos, entre otros, cuestionan la suposición de que un mayor consumo es siempre mejor, levantando más dudas,
al menos en relación con las sociedades opulentas, acerca de la validez del modelo de crecimiento como un camino de
progreso social (véase Alexander, 2012a). En años más recientes, este trabajo ha evolucionado, con Tim Jackson Prosperidad
sin crecimiento ( 2009) merece mención especial, aunque sólo sea por la atención que se llevó a perspectivas económicas
post-crecimiento, más que por cualquier contribución original que hizo a la literatura.

Desde la década de 1970 en adelante, economista ecológico Herman Daly, construida y desarrolló
esta tradición diversa de manera importante, prestando especial atención a la situación emergente del
medio ambiente y su impacto sobre cuestiones de escala macro-económica (Daly y Farley, 2004). Dos
aspectos del trabajo de Daly son de particular importancia. La primera es su noción de una economía
'estado estacionario' (Daly, 1973), que puede ser entendido como una expresión moderna de la noción de
una economía 'estado estacionario' de Mill. Daly critica la economía neoclásica de crecimiento orientado
para tratar el entorno natural como un subconjunto de una economía sin límites, precio dependiente,
proponiendo en cambio que la economía debe ser considerado como un subconjunto del entorno finito, los
límites biofísicos de la que una economía no puede exceder justificadamente . La fusión de perspectivas
ambientalistas y económicas, Daly (1996) sostiene que el desarrollo sostenible en el mundo desarrollado
implica necesariamente un cambio radical lejos de 'economías de crecimiento' hacia lo que él llama una
economía de estado estacionario ". Con esto quiere decir una economía que sigue desarrollando en
respuesta a las nuevas tecnologías y los cambios en las fuerzas del mercado y culturales, pero sin crecer
más allá de los límites biofísicos sostenible del planeta. En la elaboración de su perspectiva 'estado
estacionario' en términos biofísicos y no en términos de PIB, Daly también reconoce sus deudas
intelectuales a Frederick Soddy (véase Daly, 1980) y Nicholas Georgescu-Roegen (1971), cuyos escritos
puesto de manifiesto la estrecha relación entre energía y economía (cuestión se analiza más adelante). El
análisis de la huella ecológica desarrollado por Mathis Wackernagel y William Rees (1996) es también de
gran valor en este contexto,

El segundo aspecto de merecer la beca de Daly de reconocimiento es el trabajo que fue pionera en el
desarrollo con John Cobb 'indicadores alternativos al PIB (Daly y Cobb,
1989). Daly y Cobb fueron de los primeros críticos del PIB y minuciosamente expuestos sus muchos defectos como un
proxy para el bienestar social. PIB, según este argumento, no es más que una medida de la actividad económica total, que
no hace distinción entre la actividad que contribuye a

7
el bienestar y la actividad que no lo hace. Por ejemplo, el PIB trata a los gastos de mercado en las armas,
antidepresivos, y la limpieza de derrames de petróleo, no diferente de los gastos en educación, paneles solares, y
bicicletas. También señalaron que el PIB no dice nada en absoluto sobre el nivel o la naturaleza de no de mercado la
actividad en una sociedad, tales como participación de la comunidad o el funcionamiento de los ecosistemas; ni tampoco
dice nada acerca de la distribución de la riqueza en una sociedad PIB (véase también, Stiglitz, Sen y Fitoussi, 2010).
Este último punto sobre la desigualdad es especialmente importante a la luz de la evidencia reciente que muestra que
las economías que tienen distribuciones amplias de la riqueza obtienen mejores resultados en toda una serie de
indicadores sociales (Wilkinson y Pickett, 2010). Queriendo dar una evaluación mucho más matizada de progreso y
bienestar general, Daly y Cobb desarrolló el Índice de Bienestar Económico Sostenible (IBES). Este índice y otros como
él - como el Indicador de Progreso Real (GPI), el Índice del Planeta Feliz (HPI), y la noción de Bhután de la Felicidad
Nacional Bruta (FIB) - tener en cuenta importantes factores sociales y ecológicos que el PIB simplemente no lo hace
reflejar (por ejemplo, Césped, 2006; Césped y Clarke, 2008; Costanza et al, 2009). Por ejemplo, el IBES y GPI comienzan
con un gasto total de consumo privado y luego hacer deducciones para cosas tales como el agotamiento de recursos, la
contaminación, las desigualdades de ingresos, pérdida de tiempo libre, '' gastos defensivos, etc., y hacer adiciones para
cosas tales como la infraestructura pública, voluntario, y el trabajo doméstico. El objetivo es medir, con la mayor
precisión posible, el bienestar general de una nación, incluyendo su sostenibilidad, no sólo su actividad total del
mercado. Los resultados de estos índices tienden a mostrar que a pesar del crecimiento constante del PIB durante las
últimas décadas, el verdadero progreso de muchas naciones desarrolladas se ha estancado o incluso en declive
(Kubiszewski et al, 2013). Dicho de otro modo, los resultados indican que el crecimiento ha dejado de contribuir al
bienestar en el mundo desarrollado y ahora incluso puede ser la causa de los mismos problemas que el crecimiento se
supone que es la solución, lo que sugiere que muchas naciones desarrolladas han entrado en una fase de 'crecimiento
antieconómico' (Daly , 1999). La redistribución de la riqueza y la protección de los ecosistemas naturales son dos áreas
de particular importancia en estos resultados tienen implicaciones potencialmente revolucionario para cómo las naciones
estructurar sus economías.

Algunas de las expresiones más radicales de escepticismo crecimiento que han surgido en la última década han surgido del
movimiento 'decrecimiento' (Baykan, 2007; Fournier, 2008; Latouche, 2009; Kallis; 2011; Alexander, 2012b). En términos generales, el
decrecimiento se puede definir como 'una reducción a escala equitativa de producción y consumo que aumenta el bienestar humano y mejora
las condiciones ecológicas' (Schneider et al, 2010: 512.) A pesar de que no es una doctrina unificada por cualquier medio, un consenso
emergente dentro del movimiento por el decrecimiento se ha traducido en la "Declaración de París de 2008, que describe de forma concisa la
visión básica. Este documento (parafraseando) exige un cambio de paradigma de la búsqueda general y ilimitado de crecimiento económico a
un concepto de ambas economías mundiales y nacionales 'redimensionamiento'. A nivel mundial, mediante la reducción de la huella ecológica
global (incluyendo la huella de carbono) a un nivel sostenible derecha dimensionamiento. En los países donde la huella per cápita es mayor
que el nivel global sostenible, esto correcto dimensionamiento implica una reducción de este nivel a través del proceso de contracción
económica voluntaria (es decir, el decrecimiento). En los países donde la pobreza generalizada sigue siendo, dimensionamiento derecha
implica aumentar el consumo a un nivel adecuado para una vida digna. Esto tendrá que incluir el aumento de la actividad económica en
algunos casos, pero la Declaración sostiene que la redistribución del ingreso y la riqueza dentro y entre países es una parte más esencial del
proceso. Una vez que se ha alcanzado el tamaño conveniente, concluye la Declaración, el objetivo debe ser el de mantener una economía de
estado estacionario "con un nivel relativamente estable de recursos y el consumo de energía. La principal contribución hecha por el
decrecimiento de becas es el reconocimiento explícito de que la sostenibilidad implica, no sólo renunciar a un mayor crecimiento, pero en
realidad iniciar una pero la Declaración sostiene que la redistribución del ingreso y la riqueza dentro y entre países es una parte más esencial
del proceso. Una vez que se ha alcanzado el tamaño conveniente, concluye la Declaración, el objetivo debe ser el de mantener una economía
de estado estacionario "con un nivel relativamente estable de recursos y el consumo de energía. La principal contribución hecha por el
decrecimiento de becas es el reconocimiento explícito de que la sostenibilidad implica, no sólo renunciar a un mayor crecimiento, pero en
realidad iniciar una pero la Declaración sostiene que la redistribución del ingreso y la riqueza dentro y entre países es una parte más esencial
del proceso. Una vez que se ha alcanzado el tamaño conveniente, concluye la Declaración, el objetivo debe ser el de mantener una economía
de estado estacionario "con un nivel relativamente estable de recursos y el consumo de energía. La principal contribución hecha por el
decrecimiento de becas es el reconocimiento explícito de que la sostenibilidad implica, no sólo renunciar a un mayor crecimiento, pero en
realidad iniciar una fase de contracción planificada de la 'escala' de las economías desarrolladas. Esa es una posición totalmente ausente del
discurso ambiental y política dominante, donde la ideología del crecimiento sigue reinando.

8
 En respuesta a 'libre mercado ecologistas' o 'optimistas tecnológicos' que afirman que no hay conflicto entre
el crecimiento y la sostenibilidad, y que afirman que algo llamado 'crecimiento verde' es el camino a seguir, los
estudiosos del decrecimiento señalar que, aunque tecno-eficiencia mejoras han sido ampliamente aplicado, los
flujos de materiales y energía siguen aumentando (ver Weidmann et al, 2013; Alexander, 2014). Este aumento en
el material y el uso de energía a pesar de mejoras en la eficiencia y la tecnología es debido en gran parte a
efectos de rebote '', junto con la estructura inherente 'crecer o morir' de las economías de crecimiento. Aunque no
es muy apreciado,
'efecto rebote' son altamente
significativo, para que significan que las mejoras tecno-eficiencia, en lugar de reducir el material y el uso de energía, a
menudo funcionar simplemente para crear los ingresos que se gasta entonces en la producción o el consumo de más de
la misma materia prima (un rebote primario) o de otras materias primas (un rebote secundario ). Si esto es así, ya que el
peso de la evidencia sugiere que es (Polimeni et al 2009; Arenque y Sorrell, 2009), la tecnología y la eficiencia son
fatalmente defectuosas soluciones a los problemas ecológicos del crecimiento y el consumo excesivo. Este no es un
argumento contra el uso de tecnologías apropiadas, sin embargo, sino un argumento que la tecnología ofrece ningún
escape de los límites biofísicos del crecimiento (Huesemann y Huesemann, 2011). Con el fin de reducir el impacto
ambiental, crecimiento escépticos argumentan que la tecnología debe regirse por una ética de suficiencia, no un
imperativo de crecer.

Hay una perspectiva post-crecimiento final digno de reconocimiento, incluso si las complejidades no pueden ser
exploradas. Se basa en el reconocimiento por parte de algunos economistas ecológicos que hay una estrecha relación
entre el consumo de energía y la actividad económica (Hall y Klitgaard, 2012). Desde este punto de vista - a veces
llamado 'economía biofísica' - los niveles sin precedentes de crecimiento económico experimentado desde la revolución
industrial han sido en gran parte debido a la abundancia disponible de la energía barata en las formas de carbón, el
gas, y en especial del petróleo. Los combustibles fósiles son recursos finitos, sin embargo, y analistas de energía desde
Marion King Hubbert (1956) han conocido que en algún momento la producción de combustibles fósiles finitos voluntad
'pico' y, después de una meseta, finalmente entrar en declive. La preocupación aquí es que, mientras que la producción
puede estabilizarse, et al, 2010), poniendo así presión al alza sobre el precio de los combustibles fósiles, como el 'retorno
de energía en la inversión' descensos (Murphy y Hall, 2011). Este fenómeno parece estar en marcha ya en relación con
el petróleo, la producción de petróleo crudo de entrar en una meseta alrededor de 2005, haciendo que el precio del
petróleo aumente de alrededor de $ 25 por barril, históricamente, a un precio promedio de $ 110 desde 2011 (IEA,
2013a: 2). En un mundo que consume 90 millones de barriles de petróleo cada día, tales subidas de precios
importantes implicaciones económicas, por la succión del gasto discrecional y la inversión lejos del resto de la
economía. De hecho, algunos analistas sostienen que el petróleo caro es al menos parte de la razón por la economía
global, que es tan dependiente del petróleo para el transporte, pesticidas, plásticos, etc., está mostrando signos
persistentes de estancamiento e inestabilidad (Heinberg, 2011). Por otra parte, si el petróleo caro y otros 'límites del
crecimiento' son de hecho poner fin a más de dos siglos de crecimiento económico, entonces esto es probable que
causen estragos en las sociedades altamente endeudados de todo ese mundo que en la actualidad, bajo un marco
capitalista, dependerá en el crecimiento de pagar las deudas y mantener el desempleo en la bahía. Al final pesimista del
espectro, algunos analistas sostienen que la crisis financiera global no era más que el primero de la serie de las
próximas crisis que se van a aumentar en magnitud que el modelo de crecimiento no puede hacer frente a, o incluso
reconocer, energía, recursos y límites de la deuda (Tverberg, 2012). A partir de estos puntos de vista, el mundo puede
tener una alternativa al modelo de crecimiento que le impone más pronto que tarde, con independencia de si el mundo
quiere o está listo para tal alternativa (véase, por ejemplo,

La relación entre la energía y la economía también se convierte en un problema en el contexto de la mitigación del
cambio climático. En la actualidad, los combustibles fósiles constituyen más del 80% del suministro mundial de energía (IEA,
2013b: 6). Si las naciones de todo el mundo eligen a descarbonizar las economías en respuesta al cambio climático (véase
Wiseman et al, 2013), esto puede implicar el fin del crecimiento, o incluso la contracción económica significativa, ya que
existen serias dudas sobre si la energía renovable será capaz para reemplazar totalmente la densidad energética

9
combustibles fósiles en una manera oportuna o de bajo costo (véase, por ejemplo Trainer, 2013a, 2013b). Este no es un
argumento en contra de la energía renovable, por supuesto; la sugerencia no es más que al crecimiento orientado a las
sociedades de consumo podría no ser sostenida si el mundo rápidamente descarbonizado para funcionar exclusiva o
principalmente en fuentes renovables de energía (Hopkins y Miller, 2013). Una transición a la energía renovable 100%, por lo
tanto, también puede implicar que consume mucha menos energía, y en las regiones altamente desarrolladas del mundo, el
declive energético significaría probablemente la transición a algún paradigma económico post-crecimiento a través de un
proceso de contracción de la economía planificada, o decrecimiento. El trabajo de Kevin Anderson es particularmente
importante en este caso (véase Anderson, 2013), porque él es uno de los únicos científicos del clima que reconoce (o basta
con decir abiertamente) que la reducción de presupuesto de carbono del mundo pasan por el decrecimiento y la reducción del
consumo en las sociedades de alto consumo. Eso no es una implicación muchos están dispuestos a aceptar, incluso entre
muchos o la mayoría de los participantes en el amplio movimiento ambiental. De hecho, esta ceguera - que incluso podría ser
ceguera voluntaria - es probablemente el mejor corto del movimiento ambiental viene.

3. O Y BSTACLES yo TEMAS SOBRE LA PAG ATH A UN PAG Ost- GRAMO CRECIMIENTO mi CONOMÍA

Mientras pasa a lo largo de muchos asuntos de detalle, esta revisión ha indicado, no obstante, una amplia variedad de
temas que, a los ojos de muchos observadores, socavan la coherencia del paradigma de crecimiento. Si una vez que la
humanidad vivía en un 'planeta vacío', donde los beneficios del crecimiento superan claramente los costes, hoy parece
que vivimos en una "total del planeta, donde continuó el crecimiento en las regiones desarrolladas del mundo, por lo
menos, es ecológicamente insostenible y socialmente injusta, y podría decirse que ni siquiera socialmente deseable
desde una perspectiva de 'felicidad' (Diener et al, 2010). Según los últimos informes de la Red de la Huella Global (2013),
la economía mundial supera la capacidad de carga sostenible del planeta en un 50 por ciento, provocando una tormenta
perfecta de problemas ecológicos crónicas, incluyendo el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, el agotamiento de
recursos, la erosión del suelo , la deforestación, la escasez de agua y la contaminación (Rockstrom et al, 2009; Brown,
2011; Ehrlich y Ehrlich, 2013). Para hacer más pesada la carga ambiental aún, la población humana se establece en
llegar a las nueve o diez mil millones en las próximas décadas. Pero a pesar de este hecho de disparar ecológica bruto -
ya pesar del hecho de que las tecnologías no están reduciendo el impacto global de la economía mundial - esencialmente
todas las naciones del planeta buscan hacer crecer sus economías más allá, y sin límite aparente. Este es el paradigma
de crecimiento, y se encuentra en el proceso de chocar con la realidad biofísica (Turner, 2012).

Considere la aritmética básica del crecimiento: si el PIB de las naciones desarrolladas fueron creciendo en un 3%
por año en las próximas décadas - que parece ser el punto de referencia para el 'éxito' - y para el año 2080 una población
global de diez mil millones ha logrado igualmente un alto nivel de vida material - que parece ser el objetivo del programa
de desarrollo mundial - entonces la economía mundial podría ser 40-60 veces más grande de lo que es hoy en día. Hacer
una pausa por un momento para pensar en esas figuras. Aun teniendo en cuenta la incertidumbre significativa en este tipo
de previsiones, e incluso asumiendo muchas mejoras en la eficiencia se implementan para reducir la intensidad de los
recursos de cada dólar de PIB, es simplemente no es creíble pensar que los ecosistemas del planeta podían tolerar la
economía mundial se multiplique en tamaño aún dos o tres o cuatro veces, y mucho menos cuarenta o sesenta veces.
Tierra está luchando para absorber los impactos de la economía global existente, ya pesar de décadas de avance
tecnológico extraordinario, la situación ecológica es cada vez peor, no mejor. Es muy difícil, por lo tanto, llegar a la
conclusión de que la sostenibilidad apropiado significa que las naciones deben superdesarrolladas entran en una fase de
decrecimiento significativo en el consumo de materiales y energía, por lo que hay un cierto 'espacio ecológico' para las
naciones más pobres a expandir sus capacidades económicas con el fin de satisfacer las necesidades básicas para todos.
Cuando esto se ha logrado, la humanidad debe encontrar una manera de mantener una economía relativamente 'estado
estacionario' que opera dentro de la capacidad de carga sostenible del planeta. Esta

10
alternativa, visión post-crecimiento del progreso puede sonar idealista - y en el clima político neoliberal de hoy sin duda se
encuentra en la franja intelectual - pero en el largo plazo de un sólo alguna vez golpea en lo que se apunta a, y la
economía post-crecimiento tienen una coherencia que la visión de crecimiento decididamente carece.

Si es de hecho el caso de que el paradigma de crecimiento no tiene futuro - sobre todo debido a la imposibilidad de
su persistencia en la cara de los límites biofísicos del crecimiento - a continuación, la crítica del crecimiento debe ir
siempre acompañada por una discusión de cuáles son las mejores alternativas y cómo llegar allí. En el cierre de este
análisis, algunas cuestiones pendientes, que se describen, se argumenta, merece más atención si el cambio de paradigma
hacia una macroeconomía post-crecimiento es llegar a buen término.

3.1. La mejor forma de enmarcar la alternativa?

A medida que más gente viene a reconocer los 'límites del crecimiento', pide un modelo macroeconómico alternativo
seguramente se convertirá en más fuerte y más numerosos. Si bien esto puede ser el catalizador que acelera el cambio de
paradigma hacia una economía post-crecimiento - un cambio de paradigma que parece estar ya en marcha - también hay que
aceptar que el paradigma de crecimiento se mantiene, por el momento, el meta-narrativa que gobierna el programa de
desarrollo mundial. Este dominio se debe en parte, sin duda, a los intereses creados corporaciones y los partidos políticos que
muchos tienen en el mantenimiento de una economía de crecimiento, así como los medios de comunicación influencia la
publicidad y la comunicación tienen en la promoción de los valores materialistas y culturas consumistas. Esto plantea la
importante cuestión de cómo los defensores de una alternativa de crecimiento post deben tratar de enmarcar la transición.
¿Hay que tratar de redimir a la noción de 'desarrollo sostenible'? ¿Hay que abrazar el lenguaje del 'estado estacionario' de Mill
o la economía del Daly 'estado estacionario'? Es el vocabulario del 'decrecimiento' necesaria para expresar la magnitud de los
cambios necesarios? O deberíamos estar hablando de una política o economía de la 'felicidad' o 'suficiente'? Y cómo hacer
frente al hecho de que todos los economistas post-crecimiento, presumiblemente, todavía quieren 'crecimiento' en la cultura,
la energía renovable, carriles bici, ocio, bienestar, etc. 'El decrecimiento en ¿Qué? 'Se podría sugerir, es tan importante como
la pregunta' El crecimiento de la ¿Qué? 'Otras formas de enmarcar el debate podrían incluir 'economía de bienestar', 'un
planeta economía' o 'economía del clima de seguridad'. Estas cuestiones sobre la mejor manera de enmarcar la alternativa a
la economía de crecimiento convencional no son simplemente cosméticos. Después de todo, no es suficiente para los
objetores de crecimiento meramente para ser correctos en sus diagnósticos y prescripciones; si quieren tener alguna
influencia, que también tienen que ser escuchados y ser persuasivo, y que requiere de pensar en la mejor manera de
enmarcar la nueva narrativa.

El problema con tratar de redimir el lenguaje del 'desarrollo sostenible' es que sus ambigüedades han sido
explotadas desde hace muchas décadas, de tal manera que ha llegado a significar nada en absoluto, dependiendo de los
intereses que tiene la intención de servir, y por lo tanto esto significa hay mucho de cualquier sustancia. Todo el mundo parece
estar a favor de 'desarrollo sostenible', lo que significa que carece de contenido como un concepto, y se forma con
demasiada facilidad y reformado. Más de lo mismo, más o menos, ha sido el resultado. El otro problema es que el
desarrollo sostenible siempre ha estado arraigada profundamente en el paradigma de crecimiento - si el desarrollo
sostenible significa algo, significa 'crecimiento verde' o 'crecimiento sostenido' (por ejemplo, ONU, 2012). Pero si el
crecimiento en sí es el problema que hay que repensar, a continuación, el desarrollo sostenible no puede ser la bandera
bajo la cual marchar. Se puede llevar demasiado equipaje. De ahí la utilidad del discurso 'decrecimiento' - que no puede
ser más explícito acerca de su rechazo del paradigma del crecimiento y de la exigencia, en el mundo desarrollado, al
menos, por una contracción de recursos y el consumo de energía. Mientras que el capitalismo neoliberal demostró ser
muy capaz de cooptar el lenguaje de 'desarrollo sostenible' con el fin de evitar el cambio, es difícil imaginar cómo el
neoliberalismo podría cooptar decrecimiento sin degenerar en orwelliano doble discurso: el decrecimiento significa
crecimiento! Sin embargo, a pesar de la coherencia de decrecimiento como una visión radical para la sostenibilidad,

11
tiene problemas obvios 'relaciones públicas' que tratar. Es difícil imaginar una campaña de la corriente principal que emerge bajo la
bandera del 'decrecimiento', lo que si bien tiene un valor conceptual en el posicionándose claramente contra el crecimiento, puede que
no sea el mejor término a utilizar si la incorporación de esa posición es el objetivo. Hay demasiadas personas que son propensos a
interpretar el término como siendo de alguna manera contra el 'progreso', a pesar de que los estudiosos del decrecimiento que
insistirían
medio progreso, aunque de carácter reconcebida. Incluso las nociones de un 'estado estacionario' o economía del estado
'estado estacionario' se parecen implicar el estancamiento, aunque, de nuevo, los defensores tienen claro que es sólo impacto
biofísico que no crece, dejándola abierta para una economía como para el progreso o crecer en términos culturales,
tecnológicos y morales.
En consecuencia, la noción de 'progreso' puede ser él mismo el término que necesita ser re-concebido, como vemos ya
está sucediendo con los indicadores alternativos al PIB, como el 'Indicador de Progreso Real'. Estos indicadores pueden ser
los medios más claros de comunicar la idea de que 'verdadero progreso' hoy en día no significará el crecimiento del PIB, e
incluso puede implicar el decrecimiento. La idea de una política o la economía de 'felicidad', mientras que el riesgo de
encontrarse con demasiado optimista, también puede dar sus frutos, haciendo hincapié en lo personal y social beneficios que
puede fluir de pensar en el paradigma del crecimiento (véase también, NEF, 2012). Un 'economía de suficiencia' tiene un gran
valor para poner de relieve los estilos de vida implicaciones del paradigma alternativo (discutido más adelante). Si bien todas
estas cuestiones terminológicas debe tener en cuenta, puede ser que las diferentes formas de enmarcar la alternativa pueden
ser necesarios en diferentes contextos. Como el título de este artículo sugiere, sin embargo, la frase 'economía
post-crecimiento' puede ser un medio-tierra adecuada, en la medida en que es explícitamente en contra de crecimiento - y por
lo tanto tiene algunos contenidos de oposición - mientras que al mismo tiempo lo que implica que es 'después' o 'más allá' de
crecimiento, lo que sugiere el progreso en lugar de declive social.

3.2. Los problemas de la deuda, el interés y la banca de reserva fraccional

Otros temas que merecen más atención en la literatura de la economía post-crecimiento son cuestiones financieras y
bancarias relacionadas con la deuda, préstamos con intereses, y la banca de reserva fraccional. A veces los estudiosos
de crecimiento post-dan la impresión de que el 'crecimiento' es una característica del orden económico existente que
puede ser quitado, dejando la estructura esencial de ese orden más o menos en su lugar. Sin embargo, como Ted
Trainer (2011) y otros han insistido, las economías de mercado existentes no son economías que tener

crecimiento; son economías de crecimiento, que tienen un 'crecer o morir' imperativo integrado en su misma estructura (Smith,
2010). La búsqueda de beneficios (o la maximización de utilidades) es un elemento de las economías de mercado que no
puede ser fácilmente destruido, dando lugar a diversos problemas financieros que sugieren que una economía
post-crecimiento nunca podría surgir sin realizar cambios fundamentales con respecto a la banca y las finanzas Los sistemas.
Uno no se refiere aquí a cosas como una regulación más estricta de los préstamos depredadores o más apoyo estatal para
las cooperativas de crédito, aunque puede incluir esas cosas. En su lugar, se habla de, problemas estructurales más
profundos acerca de qué hacer con las deudas personales y nacionales montañosas de la existencia, así como el hecho de
que los préstamos con entidades de la banca de reserva fraccional implican y dependen de un suministro de dinero en
constante expansión. Los individuos y los gobiernos asumieron enormes préstamos en las últimas décadas, basa en el
supuesto de que el futuro del crecimiento sería similar a la del pasado. Pero si estamos alcanzando o excediendo los límites
del crecimiento '', entonces se convertirá en mucho más difícil o imposible para aquellas deudas que devolver. Y, sin embargo,
bajo el sistema actual, las cosas rápidamente descomposición cuando las deudas no se pagan, como se ejemplifica por la
crisis financiera global, por lo que los economistas post-crecimiento deben formular estrategias coherentes para hacer frente
al problema de la deuda. Del mismo modo, los préstamos que devengan intereses implicar una ampliación de la oferta de
dinero, ya que los prestatarios tienen que pagar la suma prestada más los intereses. Pero si una economía post-crecimiento
significa poner fin a la expansión de la oferta de dinero, entonces no es claro si los préstamos que devengan intereses o la
banca de reserva fraccional puede ser una parte de tales

12
una alternativa. Estas preguntas sugieren que será imposible eliminar el 'crecimiento' de las economías existentes sin
repensar fundamentalmente la naturaleza de los sistemas bancarios y financieros. Si bien estos son asuntos muy complejos
- pidiendo a la experiencia más allá de lo que el autor de este artículo puede proporcionar - esta breve sección habrá
servido para algo que vale la pena si se pone de relieve un programa de investigación que se debe dar más atención por los
economistas posteriores de crecimiento. Después de todo, sin embargo problemático el paradigma de crecimiento podría
ser, una alternativa es poco probable que se abrazado en masa hasta más de sus detalles se describen, especialmente con
respecto a los sistemas bancarios y financieros que son compatibles con una alternativa tan post-crecimiento. Estas
preguntas también plantean cuestiones más amplias acerca de si una alternativa post-crecimiento es consistente con las
instituciones básicas del capitalismo (es decir, la propiedad privada y los mercados) o si se requiere algún tipo de
eco-socialismo para facilitar la transición. Este es un debate que está actualmente en curso (ver Sarkar, 1999; Smith, 2010;
Trainer, 2011; Lawn, 2011).

3.3. implicaciones de estilo de vida radicales de una economía post-crecimiento

Otra área de negligencia dentro de la literatura sobre economía post-crecimiento se refiere a las implicaciones de estilo de vida de una
transición más allá del crecimiento. Si el objetivo de una economía post-crecimiento es vivir dentro de la capacidad de carga del planeta, y
para compartir los recursos finitos de la Tierra de alguna manera equitativa entre la población mundial (White, 2007; Vale y Vale, 2013),
entonces parece claro que nada se asemeja a la de alto impacto, de alto consumo energético, de estilo occidental estilos de vida del
consumidor podría mantenerse. En un artículo reciente, Steb Fisher (2013) describió un caso para las naciones desarrolladas por qué (su
atención se centró Australia) tendría que reducir el consumo de recursos y el 6% de los niveles actuales si siete mil millones de personas a
vivir de forma sostenible en el planeta. Eso es 16 veces menor que los niveles actuales de consumo! La aritmética y supuestos pueden (y sin
duda será debatida), pero aún así, bajar el cambio requiere la magnitud de 'un planeta vivo' es drástica, por decir lo menos. El punto es que la
vida sostenible en un planeta lleno no significa simplemente el reciclaje, el compostaje y la compra de bombillas eficientes, es necesario
aunque tales prácticas pueden ser. Más bien, significa cambio fundamental del estilo de vida en un grado pocas personas se atreven a imaginar
(ver Trainer, 2010; Alexander, 2013a). Sin intentar actualmente para describir un cambio tal en ningún detalle, un planeta habitable podría
implicar un cambio revolucionario hacia la agricultura urbana orgánica, a la La Habana en Cuba, con todas las familias que maximizan la
producción de alimentos y la recolección de agua, instalación de sus casas para la eficiencia energética, y que viven más densamente dentro
de esas casas; puede ser que implique renunciar a los coches privados y vuelos aéreos regulares a favor de caminar, montar en bicicleta o en
transporte público electrificado; puede ser que implique vigilante reciclaje y la reutilización creativa más, o todos, los desechos producidos, y la
reparación de ropa y herramientas en lugar de comprar nuevos. De manera más general, sería sin duda implicaría prescindir de muchas
comodidades y el confort que los consumidores muchas 'primer mundo' dan por sentado hoy en día, como un teléfono móvil nuevo cada pocos
años, aparatos de cocina o superfluos adornos para el hogar, o renovaciones en su casa cosméticos. Del mismo modo, en lugar de girar en el
calentador o acondicionador de aire, es posible que tengamos que poner en un suéter de lana cuando hace frío o cerrar las cortinas en los
días de calor para mantener el calor. Los cambios necesarios serían infinitas en número y radical en la naturaleza, pero se presta poca
atención a estas cuestiones por economistas post-crecimiento, tal vez debido a un inconsciente 'tecno-optimismo' que asume que la tecnología
será capaz de desacoplar los estilos de vida de los consumidores de su impacto ecológico. El problema es que esto da la impresión de que
algo parecido a los estilos de vida del consumidor podría mantenerse en una economía post-crecimiento o decrecimiento, cuando en realidad
el grado de exceso ecológico y los límites de la tecnología sugieren lo contrario. Si la sostenibilidad significa el decrecimiento, a continuación,
la sostenibilidad implica un movimiento hacia estilos de vida de simplicidad radical (entrenador, 2012). Los cambios necesarios serían infinitas
en número y radical en la naturaleza, pero se presta poca atención a estas cuestiones por economistas post-crecimiento, tal vez debido a un
inconsciente 'tecno-optimismo' que asume que la tecnología será capaz de desacoplar los estilos de vida de los consumidores de su impacto
ecológico. El problema es que esto da la impresión de que algo parecido a los estilos de vida del consumidor podría mantenerse en una
economía post-crecimiento o decrecimiento, cuando en realidad el grado de exceso ecológico y los límites de la tecnología sugieren lo
contrario. Si la sostenibilidad significa el decrecimiento, a continuación, la sostenibilidad implica un movimiento hacia estilos de vida de
simplicidad radical (entrenador, 2012). Los cambios necesarios serían infinitas en número y radical en la naturaleza, pero se presta poca
atención a estas cuestiones por economistas post-crecimiento, tal vez debido a un inconsciente 'tecno-optimismo' que asume que la tecnología
será capaz de desacoplar los estilos de vida de los consumidores de su impacto ecológico. El problema es que esto da la impresión de que
algo parecido a los estilos de vida del consumidor podría mantenerse en una economía post-crecimiento o decrecimiento, cuando en realidad
el grado de exceso ecológico y los límites de la tecnología sugieren lo contrario. Si la sostenibilidad significa el decrecimiento, a continuación, la sostenibilidad implica un mo
También hay que destacar, sin embargo, que los estilos de vida de simplicidad radical requeridos por un
planeta vivo no tiene por qué implicar dificultades. Por el contrario, radicales

13
simplicidad implica centrarse en lo que es suficiente para vivir bien, y luego dedicar la tiempo y energía a las
fuentes no materiales de significado y el bienestar. Si bien es cierto que esto implica una revolución cultural en
las actitudes 'primer mundo' a consumo de material - y una reinvención de la 'buena vida' - un caso empírico y
filosófico se puede hacer que las personas puedan vivir 'más' con un número significativamente ' menos
(Alexander, 2009; Alexander, 2012a; Alexander y Ussher, 2012). 3

3.4. Las teorías del cambio - democrática, ecosocialista, anarquista

A resaltado última cuestión pena se refiere a la naturaleza de cualquier transición hacia una economía
post-crecimiento. Lo que sería conducir dicha transición? ¿Y cómo se produce? Estas son preguntas importantes, pero
una vez más, que están un poco descuidados en la literatura sobre la economía post-crecimiento. Que la literatura es
particularmente fuerte en el crítica del crecimiento (Meadows et al, 2004; Jackson, 2009; Turner, 2012), y un creciente
cuerpo de trabajo se dedica a describiendo lo que es una economía post-crecimiento podría parecerse a un nivel
político y macroeconómico (con un hueco, como se ha señalado, en relación con las finanzas y asuntos bancarios).
Considerablemente menos atención se ha dedicado a la comprensión de cómo la transición hacia una economía
post-crecimiento podría desarrollarse (Alexander, 2013b). Esto es problemático, ya que no basta con diagnosticar los
problemas y describir la mejor alternativa. Es igualmente necesario tener en cuenta las preguntas acerca de cómo
movilizar a las comunidades y desestabilizar las estructuras de poder existentes, con el fin de traer una economía
post-crecimiento en existencia. Hay varias categorías amplias de transición que describen la pena, con la esperanza de
traer más atención a las cuestiones objeto de examen. 4

La primera teoría de la transición podría ser llamado 'reformismo radical', que puede ser entendida para significar una
transición que se aferra a las nociones básicas de una economía de mercado y un estado democrático centralizado, y
argumenta que los cambios necesarios para una economía post-crecimiento debe ser provocada por la reforma
parlamentaria radical. Este enfoque de la transición es actualmente dominante en los círculos verdes (por ejemplo, Jackson,
2009) y se supone que un funcionamiento, la democracia representativa producirá una economía post-crecimiento cuando
los ciudadanos están dispuestos a votar por ella. Esta teoría concibe un cambio de cultura de crecimiento posterior a la
primera creciendo en fuerza e influencia, y con el tiempo filtrando hacia arriba para encontrar finalmente la expresión
política y macroeconómica, principalmente a través de la legislatura.

Un segundo enfoque se podría llamar 'ecosocialista', que se diferencia del reformismo radical medida en que niega que una
economía post-crecimiento podría basarse en los mercados y la propiedad privada - es decir, basada en un marco esencialmente
capitalista - y sostiene que lo que se necesita es el establecimiento de un gobierno socialista fuerte y centralizado, con una visión
de color verde oscuro (ver Sakar, 1999). El argumento, en definitiva, es que los mercados tienen un 'imperativo de crecimiento'
integrado en su propia naturaleza (Smith, 2010), lo que significa que la idea de una de buena gana capitalismo post-crecimiento es
esencialmente una contradicción en los términos. Teniendo en cuenta que la clase capitalista es poco probable que renunciar a su
poder de buena gana, ecosocialistas, como la mayoría de los socialistas, argumentan que la reforma parlamentaria será
inadecuado para la tarea de crear una economía post-crecimiento, con el argumento de que el Estado capitalista se dice que es
principalmente una herramienta para la promoción de los intereses de la clase capitalista. En consecuencia, eco-

socialista tienden a creer que algunos se requerirá forma de revolución, a través del cual estado

3 Aunque esta discusión se centra en las naciones desarrolladas, obviamente, ahí está toda una otra agrupación de cuestiones a tener en cuenta

sobre la relevancia de 'decrecimiento' para el Sur Global, así como las cuestiones relacionadas con la distribución de la riqueza, tanto dentro como

entre las naciones. Véase, en general, Wilkinson y Pickett (2010); Entrenador, (2010) Ch 5; y Negro (2007).

4 Para un análisis más detallado de estas cuestiones, véase Samuel Alexander y Jonathan Rutherford, 'El color verde oscuro

alternativa: se discuten estrategias de transición' Informe del Instituto simplicidad 14a

(2014).

14
el poder se gana con el propósito de socializar la economía y establecer, por medio de la planificación centralizada,
un marco regulatorio post-crecimiento.
Una tercera teoría de la transición podría ser llamado 'eco-anarquista' (véase Trainer, 2010; Holmgren, 2002;
Fotopoulous, 1997). Esta escuela de pensamiento tiende a estar de acuerdo con la crítica socialista o ecosocialista del
capitalismo, pero sostiene que la estrategia de tratar de tomar el poder estatal con el propósito de realizar una economía
post-crecimiento es defectuoso. Como anarquistas, creen que los seres humanos deben ser autónomos en el ámbito local
y que las jerarquías políticas inherentes a los gobiernos centralizados son incompatibles con una existencia totalmente
libre y digna. Sin embargo, en el contexto de la economía post-crecimiento, ecoanarquistas tienen una crítica
complementaria del estado. Los gobiernos, en su opinión, tienen un sesgo inherente hacia el crecimiento, sobre la base de
que las políticas públicas cuestan dinero, incentivar a los gobiernos a buscar el crecimiento económico que pagar por esas
políticas a través de una base tributaria más grande. Por estas razones, se argumenta que los gobiernos de cualquier
tendencia - ya sea capitalista o socialista - tenderán a buscar el crecimiento, la implicación de los cuales, los anarquistas
eco argumentan, es que una economía post-crecimiento nunca podría salir de la 'arriba hacia abajo', pero sólo podría
surgir 'desde abajo' a nivel de base.

Si bien estas opiniones superficiales sin duda plantean más preguntas que respuestas, el objetivo era
simplemente para plantear la cuestión de la 'estrategia'. Si una economía post-crecimiento es lo que se
necesita, teóricos y activistas tienen que poner sus mentes a la cuestión de dónde dirigir sus energías de
oposición, pues no hay apenas energía de oposición a los residuos. ¿Debería la gente de campaña para
los Verdes y tratar de radicalizar ellos? En caso de que tratar de agitar y organizar para una revolución
socialista? O en caso de que esencialmente ignorar los gobiernos y simplemente se dedicó a 'pre-calcular'
la alternativa post-crecimiento a nivel de base, dentro de la cáscara de la economía de crecimiento
existente? Por último, es la transición suave y racional, o proceder a través de una serie de crisis y las
respuestas? Estas preguntas no tienen respuestas claras,

4. C CONCLUSIÓN Y R NVESTIGACIONES UN GENDA

Esta revisión de la literatura sugiere que las bases de una economía post-crecimiento son cada vez más robusta y, de hecho,
que el movimiento de una economía 'más allá del crecimiento' está desarrollando algo de impulso real (véase, Stiglitz, Sen y
Fitoussi, 2010; Milne de 2012, el Real Gobierno de Bhután, 2012; Costanza et al, 2014). Al mismo tiempo, es difícil confiar en
que una transición suave se llevará a cabo en el marco de tiempo estrechamiento disponible. Los intereses creados (por
ejemplo, la industria de los combustibles fósiles, los medios de comunicación concentrados privadas, corporaciones
transnacionales, etc.) están en todas partes insidiosamente trabajando para mantener el status quo y resistir movimientos de
cambio. Sin embargo, si un caso científico y moral sólida se puede hacer para una economía post-crecimiento, entonces es
el trabajo de los académicos, educadores y activistas que seguir presionando para el cambio, sin importar las posibilidades
de éxito. Como Bertrand Russell (2009: 45) escribió una vez, 'Gloom es una emoción inútil'.

Si resulta que ya es demasiado tarde para evitar algún tipo de 'gran ruptura' (dorado, 2011), la economía de
crecimiento choca con los límites biofísicos al crecimiento, a continuación, en términos prácticos, el intento de 'pre-figura'
post- alternativas de crecimiento aquí y ahora se presenta como una estrategia coherente para adoptar, aunque sólo sea
en el micro-escala en un principio. Si lo hace, le ayudará a aumentar la resiliencia en previsión de futuros choques, y
aumentar la probabilidad de que los modos menos destructivas de la civilización podrían surgir de un día desde el orden
existente. Ante todo, este proceso creativo de la renovación de la civilización requiere la infusión de la ética de suficiencia
en nuestro pensamiento y la práctica económica.

Este análisis se cerrará con un resumen de algunos programas de investigación y de promoción que se propone podría

ayudar a la economía post-crecimiento anticipado al abordar las cuestiones pendientes señaladas por esta revisión de la

literatura: 15
• Tomar en serio la cuestión de la mejor manera 'marco' el paradigma macroeconómico alternativo. Puede
que no haya una sola manera 'correcta' de hacer esto, pero la reflexión sobre estas cuestiones
terminológicas en relación con los contextos y audiencias específicas pueden aumentar la probabilidad de
llegar a un público más amplio, lo que obviamente es una parte necesaria de la transición.

• Prestar más atención a lo que los sistemas de banca y finanzas estarían obligados a hacer una función
economía post-crecimiento, y cómo una transición a este tipo de sistemas podría jugar fuera.

• Hacer frente a la cuestión de si una economía post-crecimiento es compatible con las

propiedades y estructuras de mercado básicas del capitalismo o si se requieren estructuras
fundamentalmente diferentes, y si es así, lo que sea.

• Honestamente reconocer las implicaciones radicales del 'presupuesto de carbono'. Kevin Anderson (2013) ha
llamado más la atención sobre este tema, mostrando que mantener por debajo de 2 grados implica el
decrecimiento en las partes más ricas del mundo. Sin embargo, una gran cantidad de trabajo que queda por
hacer la incorporación de este mensaje y desembalaje de sus implicaciones.

• Hacer hincapié en las implicaciones de estilo de vida radicales de alejarse de una economía de crecimiento.
consumidores de alto impacto estilos de vida son incompatibles con
sostenibilidad; El decrecimiento implica estilos de vida de simplicidad voluntaria.

• Ir más allá de simplemente criticar crecimiento (diagnóstico) y la descripción de la alternativa

(prescripción), y dedicar más atención a las cuestiones de la mejor manera facilitar la transición a la
alternativa propuesta. Esto es en parte un debate sobre qué estrategias son propensos a ofrecer la
mayor influencia, pero también exige ejercicios 'Previendo', donde diversos futuros post-crecimiento se
esbozan de forma creativa a cabo para ayudar a más personas a liberarse de las limitaciones
imaginativas de la trayectoria de crecimiento actual .

• Frente a toda la serie de otras cuestiones acerca de cómo superar los diversos obstáculos y barreras
sociales, psicológicos, culturales, económicos, legales y políticos que actualmente obstruyen el
camino hacia una economía post-crecimiento y afianzan el status quo.

• Reconocer que la transición hacia una economía post-crecimiento en las regiones desarrolladas del mundo va
a tener implicaciones para las regiones en desarrollo del mundo. Dar una consideración más profunda a las
cuestiones de la justicia social y la equidad en esta transición, prestando especial atención a las formas en que
una redistribución de la riqueza sistémica podría ayudar a facilitar la transición hacia una economía
post-crecimiento y reducir al mínimo el sufrimiento como el nuevo paradigma establece sus raíces.

• Enfrentar el espinoso tema del crecimiento de la población. Si bien esta cuestión no debe ser utilizado
como chivo expiatorio para desviar la atención de consumo excesivo 'primer mundo' - el problema principal
- está claro que el crecimiento de la población tiende a ser un multiplicador de todo, incluyendo carga
ecológica, y la población mundial por lo que debe ser equitativamente limitado y eventualmente reducida.

• Aclarar y recoger argumentos para 'esperanza a tierra' en estos tiempos extremadamente difíciles. Tanto
la desesperación y el optimismo ingenuo son respuestas inútiles
- tentar a pesar de que ambos, a veces, pueden ser.

dieciséis
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