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Etanol a partir de biomasa lignocelulósica

Book · October 2012

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2 authors:

Alejandro Julio Abril Enrique A. Navarro


Instituto Cubano de Investigaciones de los Derivados de la Caña de Azúcar University of Valencia
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H3CO
H3CO
HO OCH3 O
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ETANOL A PARTIR DE
OCH3OCH3 OH
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LIGNOCELULÓSICA
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H3CO HO OHO OH O OHO
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OH O HO OH O HO
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Enrique A. Navarro
OH OH
OH O HO OH O
O HO
OH O OH
OH OH
O
OH O
HO
OH O HO
O
OH
OH O

OH

1
© Aleta Ediciones (2012).
ISBN: 978-84-15225-50-8, 101 páginas
Depósito Legal: V-2846-2012
Imprime: GRÁFICAS SOL- Écija

2
Etanol a partir de Biomasa Lignocelulósica

Prólogo
El empleo del etanol como aditivo en el combustible automotor, ha ganado una gran
actualidad, impulsado por la tendencia al incremento en los precios del petróleo y sus
derivados y a las ventajas evidentes del etanol en cuanto a sus posibilidades de mezclado
con la gasolina en altas proporciones con incrementos en el índice de octano de la mezcla.
También influye el hecho de ser una tecnología conocida y de bajo nivel de complejidad y
aceptada en general como ecológica.
El uso del etanol como aditivo o combustible automotor, se conoce desde prácticamente el
inicio de la era del automóvil, y fue parte de la propaganda de los Ford modelo T, que
podrían funcionar con etanol del maíz. Durante las guerras mundiales, también se
desarrollaron algunas tecnologías de obtención de etanol a partir de residuos vegetales y se
realizaron mezclas con gasolina. Posteriormente, a partir de los años 70, Brasil inició un
amplio programa de desarrollo del etanol anhidro como aditivo o sustituto de la gasolina,
en un momento en que aún el precio del etanol no competía con esta.
La actual tendencia al incremento de los precios del petróleo, que alcanzaron valores
cercanos a los 150 dólares el barril en julio del 2008, y se han mantenido entre 80 y 90
dólares, ha creado una situación muy favorable para el incremento en la producción de
etanol combustible y el desarrollo de nuevos procesos, basados en el empleo de jugos de
caña de forma directa, granos como el maíz, trigo y otros productos ricos en almidón y a
partir de biomasa lignocelulósica (tanto de residuos vegetales, como de plantaciones
energéticas).
El empleo de granos en la producción de etanol, es inaceptable, desde el punto de vista
ético, en un mundo donde una gran parte de a población pasa hambre. Además, está
demostrada la ineficiencia energética de estos procesos.
El uso de la biomasa lignocelulósica, parece tener más perspectivas como fuente de
materias primas para la obtención de etanol, aunque debe analizarse con gran profundidad y
3
con un enfoque objetivo y holístico, que incluya todas las implicaciones actuales y futuras
de estas tecnologías, sin caer en un falso optimismo, incluyendo las limitaciones cada vez
mayores de la tierra disponible en el mundo para la agricultura, que ya es escasa en muchos
lugares y es necesario darle el uso más racional y eficiente.
El empleo del etanol como combustible automotor tiene aspectos relacionados con su
impacto medioambiental que no están aún bien definidos. En especial los productos de su
combustión, la disposición de las vinazas y del CO2 producido.
En la presente Monografía, se muestran las características y fuentes de la biomasa vegetal,
así como las tecnologías en desarrollo, sus características y posibilidades para la obtención
de etanol a partir de biomasa lignocelulósica.
Es de destacar que las tecnologías de obtención de etanol a partir de biomasa
lignocelulósica no están optimizadas en la actualidad y no compiten aún económicamente
con las tradicionales.
Ya inician su operación con fines demostrativos plantas de obtención de etanol a partir de
biomasa lignocelulósica, que permitirán divulgar sus ventajas y difundir estas tecnologías.

AUTORES

Alejandro J. Abril González, es Dr. en Ciencias Químicas. Investigador Titular y Director


de Química del Instituto Cubano de Investigaciones de los Derivados de la Caña de Azucar,
(ICIDCA).

Enrique A. Navarro Camba, es Dr. en Física. Catedrático de la Universitat de València.


Coordinador de la Unidad de Logística de la Biomasa y Tratamiento MW, e investigador
del Instituto de Robótica y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (IRTIC)
de la Universitat de València.

4
ÍNDICE
Pág.

I. Introducción 7
I. 1. La crisis del petróleo 8
I. 2. Demandas crecientes de combustibles y energía 9
I. 3. Cambio climático 10
I. 4. El “conflicto” de la tierra 10
I. 5. Alternativas de combustibles 10
II. Origen y concepto de la biomasa 11
II.1. Origen 11
II. 2. Concepto de biomasa 14
II. 3. Clasificación de la biomasa 15
II. 4. Biomasa lignocelulósica 16
III. Estructura de la biomasa lignocelulósica 19
III. 1. Estructura de la pared celular 19
III. 2. Estructura química 22
1. Celulosa
2. Hemicelulosas
3. Lignina
4. Extractivos
III. 3 Influencia de la estructura de los materiales de biomasa 33
lignocelulósica en su procesamiento
IV. Aprovechamiento energético de la biomasa 34
lignocelulósica
IV. 1. Los cultivos energéticos 35
IV. 2. Biorefinerías 36
IV. 3. El aprovechamiento energético de la biomasa y las emisiones 38

5
de CO2
V. Bioetanol 41
V. 1. El bioetanol 41
V. 2. Fuentes de obtención del bioetanol 43
V. 3. Procesos de obtención de bioetanol 44
VI. Obtención de etanol por vía bioquímica a partir de 45
materiales lignocelulósicos
VI. 1. Pretratamiento 47
VI. 2. Hidrólisis 53
VI. 3. Fermentación 55
VI. 4. Destilación 56
VI. 5. Disposición de residuales 56
VII. Procesos para la producción de etanol a partir de 56
biomasa lignocelulósica
VII. 1. Procesos en dos etapas 58
VII. 2. Procesos en una etapa 60
VII. 3. Ingeniería metabólica de microorganismos para la conversión 63
de lignocelulosa a etanol
VIII. Procesos industriales y a escala piloto utilizados en la 68
obtención de etanol a partir de biomasa
lignocelulósica.
VIII. 1. Planta de Biomasa de BCyL 68
VIII. 2. Tecnología SunOpta 72
VIII. 3. Proceso Iogen 73
VIII. 4. Proceso BioGasol 75
VIII. 5 Proceso ARKENOL 76
VIII. 6. Proceso de Y.H. Percival Zhang 79
VIII. 7. Proceso Honda de Etanol de Biomasa 80
VIII. 8. Proceso ACOS 81

6
VIII. 9. Proyecto Piloto MAXIFUELS 82
IX. El Mercado del Etanol 84
X. Problemas vinculados a la producción de etanol 86
X. 1. La formación de CO2 86
X. 2. Las vinazas 87
X. 3. El etanol en mezclas con gasolina 87
X. 4. Problemas de la obtención de etanol a partir de biomasa 88
lignocelulósica

XI. Posibilidades del bioetanol como sustituto de la 88


gasolina
XI.1. Tierras dedicadas a la agricultura 88
XI. 2. El bioetanol lignocelulósico como sustituto de la gasolina 90
XII. Consideraciones Finales 93
XIII. Referencias 95

7
I. Introducción
La humanidad demanda cada vez más energía, la cual está estrechamente vinculada al
desarrollo de la sociedad. Durante el siglo XX y los inicios del XXI, la fuente fundamental
de energía fueron los combustibles fósiles, básicamente petróleo, gas natural y carbón, los
cuales se emplean también como materias primas de partida para la industria química.

En el momento actual, en los finales de la primera década del siglo XXI, ya puede verse
con más claridad que el fin del aprovechamiento del petróleo (por su agotamiento o por
alcanzar precios por su baja disponibilidad que se vuelva impracticable su uso) se producirá
en las próximas décadas, por lo que en el futuro, tanto la generación de energía, como la
fuente fundamental de materias primas tendrá que centrarse en otras fuentes,
principalmente renovables.

La biomasa, fundamentalmente la vegetal, es una fuente renovable de energía y de


productos químicos y materiales, resultado de la conversión de la energía solar por las
plantas a través del proceso de fotosíntesis. Ante el fin cercano de la “Era del petróleo”, la
biomasa debe alcanzar un protagonismo en los próximos años y convertirse en la base de la
nueva industria del futuro cercano.

Figura 1. Era de los biomateriales

8
.
Figura 2. Potencial de la biomasa como fuente de productos y energía

A continuación se relacionan los principales problemas actuales que afectan a nuestra


sociedad en el campo de la energía y el medio ambiente.

• Las crisis del petróleo


• Demandas crecientes de combustibles y energía
• Cambio Climático
• El “conflicto” de la tierra
• Alternativas de combustibles

I. 1. Las crisis del petróleo


Se puso de manifiesto por primera vez en los años 70 del siglo XX con un incremento
significativo en los precios del mismo que provocaron alarma en el mundo y fue una señal
que confirmó la gran influencia del precio del petróleo en la economía (y política) mundial.

Desde la segunda mitad del siglo XX, se hacen pronósticos sobre la fecha en que se acabará
el petróleo (o cuando se hará inviable su extracción) que estaban en el orden de 30 a 50
años. El desarrollo de nuevas técnicas de extracción y búsqueda y la aparición de nuevos
yacimientos, han extendido el pronóstico a otros 30 años, pero lo importante es el hecho

9
real del incremento sostenido de los precios que harán en algunas décadas inviable su
empleo como combustible de uso masivo, en especial para los países más pobres.
En julio del 2008, los precios alcanzaron valores cercanos a los 150 dólares el barril, pero
unos meses después cayeron a algo más de 30, recuperándose posteriormente hasta alcanzar
valores del orden de los 60-70, los cuales se deben mantener durante el 2009 (EIA 2009).
Este comportamiento de subidas espectaculares y caídas se debe mantener en los próximos
años.

I. 2. Demandas crecientes de combustibles y energía


El consumo de energía por habitante por año de un país, es un índice directamente
relacionado con el desarrollo social y nivel de vida de un país o región. La generación de
esta energía se basa en la actualidad en el empleo de combustibles fósiles, con índices que
muestran una gran desigualdad entre los países ricos y pobres. En el caso de los países más
desarrollados, en especial Estados Unidos, el patrón de consumo de portadores energéticos
es irracional e irrepetible como modelo para el resto de los países.

Las demandas mundiales de energía se deben duplicar en los próximos 20 años. De un


consumo actual del orden de los 12 Giga toneladas en el 2007, debe aumentar a 24 en el
2025, (Castro 2003) lo que obliga a la búsqueda de alternativas viables y sostenibles y
acorta el plazo para la solución del problema.

7800
Población
7600

7400
7200
7000

6800
6600
2005 2010 2015 2020 2025

Figura 3. Incrementos en la población mundial

10
Por otra parte, la población mundial mantiene su crecimiento, esperándose una población
de más de 7600 millones para el 2020, de los cuales, 6400 millones estarán en países en
desarrollo (83%), en los que el consumo de combustibles tiene índices mucho menores que
en los países desarrollados, pero que de seguir las mismas tendencias de consumo de estos,
puede provocar incrementos mucho mayores en las demandas de combustibles. (Inforo
2009)

I. 3. Cambio climático
Si en los inicios del siglo XXI, no había una opinión unánime acerca de la realidad del
fenómeno del cambio climático, en la actualidad, ya está casi unánimemente aceptada, en el
que la actividad del hombre ha jugado un papel importante, en especial por la quema de
combustibles fósiles y su contribución al efecto el efecto invernadero, la deforestación y la
destrucción parcial de la capa de ozono entre otros factores.

I. 4. El “conflicto” de la tierra
La superficie de nuestro planeta está cubierta solamente en aproximadamente una cuarta
parte por tierra, que incluye los desiertos, humedales, bosques, zonas urbanas, ríos y lagos,
áreas montañosas, zonas para la cría de ganado y áreas agrícolas. Esta área, con el
desarrollo actual de la sociedad humana, no es probable que crezca, sino que por el
contrario tiende a reducirse.

Como consecuencia del cambio climático, las zonas desérticas están creciendo en muchas
partes del planeta, la urbanización (muchas veces incontrolada), reduce las áreas cultivables
y bosques, por lo que en la actualidad ya es necesario comenzar a planificar a mediano y
largo plazo la estrategia de utilización de la tierra de manera racional para cubrir las
necesidades de alimentación, urbanización, generación de energía, áreas de bosques y
represas y lagos artificiales para el almacenamiento de agua dulce.

I. 5. Alternativas de combustibles
Existen varias alternativas para la sustitución progresiva de los combustibles fósiles, las
fundamentales son en primer lugar el incremento de la eficiencia en la generación y el

11
ahorro, así como el empleo de la energía hidráulica, la eólica, nuclear, solar (directa y
fotovoltaica), la obtención de combustibles a partir de la biomasa y otras en desarrollo
como la de las mareas y otras.

En el caso del aprovechamiento de la biomasa, el combustible líquido que más se ha


desarrollado y ha recibido más atención como posible sustituto de la gasolina es el etanol,
teniendo en cuenta la gran experiencia acumulada en su obtención, posibilidades de
mezclarse con la gasolina en diferentes proporciones, sin la necesidad de realizar grandes
cambios en los motores y la posibilidad de utilizar la infraestructura existente para la
distribución de la gasolina.

II. Origen y concepto de la biomasa

II.1. Origen
La energía que puede obtenerse a partir de la biomasa proviene de la luz solar, que gracias
al proceso de fotosíntesis se aprovecha por las plantas verdes mediante reacciones químicas
en las células vivas. La energía solar entonces se transforma en energía química, que se
acumula en diferentes compuestos orgánicos (polisacáridos, grasas y otros) a lo largo de
toda la cadena trófica, incluido el hombre.

El ser humano, además, la transforma por procedimientos artificiales para obtener bienes de
consumo. Todo este proceso da lugar a elementos utilizables directamente o como materia
prima, pero también a subproductos que, entre otras, tienen la posibilidad de encontrar
aplicación en el campo energético.

12
Figura 3. Generación de biomasa.

Las plantas aprovechan la radiación solar para su metabolismo a través de la fotosíntesis,


que es un proceso mediante el cual éstas transforman la energía solar en energía química. El
proceso fotosintético está constituido por un complejo entramado de reacciones
fotoquímicas y bioquímicas que ocurren en los cloroplastos de la célula, la cual es la
verdadera fábrica de energía que sostiene la vida. La energía química se refiere a la
implicada en la formación o la rotura de enlaces entre los átomos que forman las moléculas.

La energía química se almacena en forma de moléculas orgánicas como la glucosa,


fabricada por las plantas en la fotosíntesis con fines de almacén energético. La glucosa, un
azúcar de 6 carbonos, es el combustible sintetizado en primer lugar; posteriormente los
monómeros de glucosa se polimerizan dando lugar a las macromoléculas que forman los
polisacáridos. El almidón en los vegetales y el glucógeno en los animales son los
polisacáridos que constituyen las reservas de energía de la vida vegetal y animal. La
molécula de almidón está formada por unas 3 000 unidades de glucosa mientras que el
glucógeno por 12 a 18 unidades.

13
La fotosíntesis consta de dos fases: una fase luminosa y una fase oscura. Durante la fase
luminosa, la energía de la radiación solar se emplea en pasar a un estado excitado (más
energético) los electrones de las moléculas de clorofila.
La fase luminosa se resume así:

Radiación Solar
H2O + NADP + 3/2 ADP + 3/2 Pi NADPH + 3/2 ATP + H + ½ O2

Donde:
NADP - nicotín adenín dinucleótico fosfato
ADP- adenosín difosfato
NADPH- Estado reducido del nicotín adenín dinucleótico fosfato
Pi - Fosfato inorgánico

En la fase oscura se sintetiza la materia orgánica con la incorporación a la materia vegetal


de CO2 y en mucha menor escala de otros elementos integrantes de las proteínas y los
nucleótidos como el azufre y el nitrógeno. Se emplean en esta fase las moléculas reductoras
y las moléculas energéticas formadas en la fase luminosa, NADPH y ATP respectivamente.
La reacción representativa de la fase oscura es:

6CO2 + 12NADPH + 12H + 18ATP + 12H2O C6H12O6 + 12NADP + 18ADP + 18Pi

Esta síntesis consume del orden de 4,4 kWh por kg de glucosa C6H12O6. La eficiencia de la
fotosíntesis es de un 5%, esto quiere decir que se necesitan 88 kWh solares para fabricar
este kilogramo. En condiciones reales de crecimiento de las plantas, el rendimiento final de
la fotosíntesis es en general de un 0,3%. Algunas plantas son algo más eficientes porque
utilizan durante la fase oscura diferentes líneas de síntesis de la glucosa, como la caña de
azúcar, el maíz y el sorgo entre otras.

El proceso fotosintético hace crecer la biomasa vegetal, siendo este el alimento necesario
para los animales. De este modo se desarrolla la biomasa animal, que durante su

14
metabolismo y al final de su ciclo de vida produce también residuos aprovechables
energéticamente.

II. 2. Concepto de biomasa


En este trabajo, emplearemos la definición de I. Mateos Moreno. (2006) que define la
biomasa como el conjunto de materia orgánica renovable de origen vegetal, animal o
procedente de la transformación natural o artificial de la misma.

Toda esta variedad, en cuanto a orígenes, de posibles materiales a incluir en este término,
tiene como nexo común el derivar directa o indirectamente del proceso de fotosíntesis. Por
esta razón se presentan de manera periódica y no limitada en el tiempo, o sea, de forma
renovable.

Teniendo en cuenta la definición anterior, ésta se puede clasificar, atendiendo a su origen,


en: Biomasa Vegetal, Animal y Residual. La Vegetal incluye a toda la biomasa de
procedencia vegetal. Incluye la biomasa lignocelulósica y a los productos de la agricultura
conteniendo azúcares, almidones y proteínas, como granos, frutos y otros.

Biomasa natural: Es la que se produce en ecosistemas naturales. La explotación intensiva


de este recurso no es compatible con la protección del entorno.

Biomasa residual: Es todo desecho de materia orgánica proveniente de los seres vivos, ya
sea por vía natural o debido a la intervención de las tecnologías del hombre. Incluye los
residuos forestales y agrícolas, los residuos sólidos urbanos y los residuos biodegradables
(efluentes ganaderos, lodos de depuradoras, aguas residuales urbanas,…). Los residuos
orgánicos que a menudo se consideran un subproducto, pueden llegar a cobrar un valor
muy importante en los procesos productivos.

Cultivos energéticos: son los realizados con el único objeto de su aprovechamiento


energético y se caracterizan por una gran producción de materia viva por unidad de tiempo.

15
Excedentes agrícolas: están constituidos por los productos agrícolas que no son empleados
por el hombre.

II. 3. Clasificación de la biomasa


Según su procedencia, se puede clasificar en:
• Ganadera.
• Agrícola.
• Forestal.
• Urbana.
• Industrial.

La biomasa se puede transformar en una amplia variedad de productos líquidos, sólidos o


gaseosos importantes desde el punto de vista energético, industrial y agrícola. Los procesos
de aprovechamiento y valorización se pueden dividir en físico-químicos (alteración de las
características físico-químicas del material), termoquímicos (descomposición térmica de la
biomasa) y bioquímicos (debidos al empleo de microorganismos o enzimas que degradan
la materia orgánica).

Residuos agrícolas
Se agrupan en dos grandes grupos: residuos de cultivos leñosos y residuos de cultivos
herbáceos.

Residuos de cultivos leñosos


Estos residuos presentan una marcada estacionalidad, tanto por el momento de su
producción como por la necesidad de retirarlos del campo en el menor tiempo posible para
no interferir otras tareas agrícolas, y evitar la propagación de plagas o incendios.

De los residuos agrícolas leñosos podemos destacar los generados en las podas de
diferentes plantaciones y bosques.

16
Residuos de cultivos herbáceos
La mayor parte de los residuos generados por las industrias agrícolas y agroalimentarias no
pueden ser considerados estrictamente como tales, ya que en muchas ocasiones son
realmente subproductos que se emplean como materia prima en otras industrias.

Los residuos biodegradables engloban una serie de subproductos susceptibles de ser


transformados mediante mecanismos de degradación anaerobia, descomponiéndose y
dando lugar a una fracción en estado gaseoso.

II. 4. Biomasa lignocelulósica


Es la biomasa vegetal constituida fundamentalmente por celulosa, hemicelulosas y lignina.
Se excluyen en este caso la biomasa constituida principalmente por almidón, proteínas y
azúcares, como son los casos de los granos, cereales, mieles y otros.

La biomasa de origen lignocelulósico, es el material orgánico más abundante en la tierra.


Sus fuentes son los bosques, cultivos agrícolas, residuos de cosechas y otros residuos
industriales como residuos de la industria de la madera y los tableros, residuos de la
industria del papel y el papel reciclado.

Las primeras aplicaciones de la biomasa de origen lignocelulósico, fueron como


combustible, la construcción y alimento animal fundamentalmente. Hoy, sus aplicaciones
son muy amplias y constituyen la base de muchas industrias como la de la celulosa y papel,
fuente de obtención de productos químicos, composites, materiales de construcción,
combustibles líquidos y gaseosos y muchas más.

Los materiales lignocelulósicos, tienen la ventaja de ser biodegradables, y renovables,


siendo el resultado del proceso de fotosíntesis de los vegetales mediante la energía solar.
Bajo este enfoque, su empleo como combustibles representa una forma sostenible y
amigable con el medio ambiente de aprovechamiento de la energía solar.

17
La biomasa de origen lignocelulósico, está constituida fundamentalmente por celulosa,
hemicelulosas, lignina, extractivos (mezcla de diferentes compuestos orgánicos) y algunos
componentes inorgánicos, que se transforman en cenizas después de la combustión del
material. Estos componentes, constituyen también la base de un gran número de
aplicaciones y derivados de gran importancia y valor agregado.

A continuación se muestran las fuentes, categorías y tipos de biomasa lignocelulósica.

Tabla 1. Fuentes, Categorías y Tipos de Biomasa Lignocelulósica.


A. Industrias 1. Residuos forestales
forestales •Tocones •Follaje
•Copas •Cortezas
•Ramas
2. Desechos industriales
•Aserrín •Recorterías
•Bordes •Defectos
B. Industria de 1. Pulpas
Celulosa y •Pulpas Químicas •Pulpa para disolver y absorbente
Papel y •Pulpas Mecánicas, quimimecánicas y
Tableros semiquímicas
2. Tableros
•Tableros de fibra •Tableros prensados
•Tableros de partículas •Tableros MDF
3. Cartones y moldeados
•Cajas corrugadas •Cartones y cartulinas estucadas
•Cartulinas •Moldeados de celulosa
•Cartones multicapa

4. Papeles de imprenta y escribir


5. Papeles y cartones industriales
6. Licores residuales del pulpeo y fabricación de papel.
•Licores negros y efluentes de blanqueo •Fibras de rechazo
•Residuales de papel.
C. Sector Urbano 1. Desechos sólidos locales
•Cajas, envases de Madera, pallet •Papeles desechables
•Cartones, cajas de cartón y otros envases •Muebles de madera
de papel y cartón •Envases de alimentos
•Papeles, libros y otros impresos •Desechos de instrumentos de
•Papel de desechos de oficinas madera

18
2. Escombros
•Construcciones de Madera •Árboles
D. Derivados de 1. Cultivos no maderables y Fibras naturales
las •Algodón •Abacá
producciones •Bambú •Esparto
agrícolas y de •Henequén •Cáñamo
•Kenaf •Miscantus
alimentos
•Lino •Caña energética
•Crotolaria
2. Residuos agrícolas de cosechas
•Paja y bagazo de caña de azúcar •Pajas de cosechas de cereales.
•Pulpa de café •Residuos de producción de vinos,
•Residuos de producciones de frutales aceites y otros productos.

A pesar de la gran variedad y cantidad de biomasa lignocelulósica, no toda se puede


aprovechar eficientemente, por causa de su disponibilidad, concentración y otros factores,
que pueden hacer inviable su aprovechamiento.

Figura 5. Biomasa lignocelulósica

19
III. Estructura de la biomasa lignocelulósica

III. 1. Estructura de la pared celular


En general, se toma la estructura celular de la madera, como ejemplo de la estructura de la
lignocelulosa. En su estado natural, empleando la madera como modelo, las capas de la
pared celular se representan en las figuras 6 y 7. Los espesores de las capas, se muestran en
la figura 6.

Figura 6. Esquema de la pared celular de la madera.

20
Superficie externa Superficie interna

Pared Primaria (P)

Capa interna de S2 Capa externa de S2

0-6 láminas 4-6 láminas alternadas con


Capa media de la orientación contraria de las
pared secundaria (S2) microfifrillas

Algunas láminas entre S1 y S2 30-50 láminas Algunas láminas entre S1 y S2

Figura 7. Esquema de la estructura en capas de las fibras de madera.


Entre las células, se encuentra la Lamela media (ML), con un alto contenido de lignina, que
actúa como pegamento para mantener unidas las fibras. Es de aproximadamente 0,1- 1
micrómetros de espesor. Su alto contenido de lignina la convierte en un aislador duro e
hidrofóbico alrededor de las fibras, que tiene que ser removido para permitir su separación.
Hacia el interior, se encuentra la Pared primaria (P). La misma se puede dividir en una
superficie externa y una interna.

El ordenamiento de las microfibrillas que la constituyen, se incrementa del exterior al


interior. Las fibrillas de celulosa forman un enrejado delgado con muy poca orientación,
embebida en sustancias amorfas, hemicelulosas pécticas y fundamentalmente lignina. Por
ello tiene muy poca capacidad de hinchamiento y estalla al tratar la fibra con agentes
hinchantes.

21
Después de P, se encuentra la Pared secundaria, que consta de tres capas S1 (externa), S2
(media) y S3 (interna). En S1, las microfibrillas están orientadas en una estructura helicoidal
cruzada.

S2, es la capa de mayor espesor y en general juega un papel de gran importancia en los
procesos a que se someten los materiales lignocelulósicos. Constituye el grueso del espesor
de la fibra (75%), con un espesor variable entre 2 –10 micrómetros. Su contenido de
celulosa relativamente alto se presenta en microfibrillas. Ocasionalmente se presentan
discontinuidades en el ordenamiento de las microfibrillas, que facilitan la accesibilidad al
ataque químico.

La estructura de la lignina incrustante es amorfa pero íntimamente mezclada con el


enrollamiento. Las investigaciones realizadas han demostrado que el ángulo en que se
enrollan las microfibrillas está relacionado con las propiedades de resistencia de las fibras.

Se ha encontrado que mientras mayor es la orientación o paralelismo de las microfibrillas


con el eje longitudinal de la fibra, más resistente es la fibra. El enrollamiento microfibrilar
de celulosa de la capa S2 en la pared secundaria aparece incrustado con hemicelulosas y
lignina formando una estructura densa.

Las microfibrillas de S3, se pueden ordenar en dos o más orientaciones. Es la estructura que
limita la pared de la fibra hacia el lumen, y su mayor interés está dado desde el punto de
vista del pulpeo, ya que es la primera capa de la pared celular que se pone en contacto con
los reactivos en los procesos químicos. Su espesor varía entre 0,07 – 0,1 micrómetros.
Tiene una estructura densa, consistente en un enrollado de microfibrillas celulósicas
arregladas en un ángulo que varía con la especie. Se discute si la estructura es de tipo rejilla
al igual que la capa S1, o si es de tipo enrollado en espiral.

Finalmente, en algunos casos, existe la capa llamada W en la superficie más interna de la


pared celular. En algunos casos se considera la existencia de una pared terciaria (T), entre
S3 y W.

22
Espesor relativo
aproximado
5%
10%
75%
10%

Figura 8. Espesor relativo de las capas de la pared celular de la madera.

III. 2. Estructura química


Los materiales constituidos por biomasa lignocelulósica, están constituidos
fundamentalmente por celulosa, hemicelulosas, lignina, extractivos (mezcla de diferentes
compuestos orgánicos) y algunos componentes inorgánicos, que se transforman en cenizas
después de la combustión del material.

La celulosa, hemicelulosas y lignina, constituyen en general más del 75% del material
vegetal, y están constituidos por polímeros orgánicos de alto peso molecular. (Tabla 2).

23
Tabla 2. Estructura química de materiales de biomasa lignocelulósica seleccionados
Componente % Coníferas Maderas Bagazo Paja de Paja de Algodón
(a) duras de caña trigo arroz (a)
(a) (b) (c) (c)
Celulosa 40-45 40-50 43-47 38-42 34-36 95-99
Hemicelulosas 20-27 23-33 28-32 28-32 24-30 -
Lignina 25-30 18-23 20-22 19-23 22-23 -
Extractivos 4,0 1,5-2,0 2,5-3,0 3,0-5,0 2,0-3,0 1-5
Cenizas 2-4 1,5-3,5 1,5-2,5 4-6 17-19 -
(a) Basile De Castro F. (1994), (b)Triana O. y col. (1990), (c) Wiselogel, A. Tyson, S. , Johnson, D. (1996)

1. Celulosa
La celulosa es un polímero de cadena lineal, formado por la unión de unidades
anhidroglucosa, en cadenas de glucano. Las unidades anhidroglucosa, están unidas por
enlaces β-(1,4)-glucosídicos. Debido a este tipo de unión, se ha establecido a la celobiosa
como la unidad repetida en las cadenas de celulosa. (Figura 9). El grado de polimerización
(GP) de la celulosa nativa está en el rango de 7,000-15,000 [(GP) =Masa molecular de la
celulosa/Masa molecular de la glucosa)].

Unidad de celobiosa

Figura 9. Cadena de celulosa

24
Por la formación de enlaces de puentes de hidrógeno intermoleculares y extramoleculares
entre los grupos OH de una misma cadena y cadenas adyacentes, las cadenas de celulosa
tienden a ordenarse en planos paralelos y formar una estructura cristalina supramolecular.
De esta forma, conjuntos de cadenas lineales en la dirección longitudinal, tienden a formar
microfibrillas, que se orientan en la estructura de la pared celular. (Dey y Brinson, 1984).

La estereoquímica de las unidades de glucosa en las cadenas de celulosa, con cada unidad
de glucosa formando un ángulo de 180 0 con su vecino, permite la formación de tres enlaces
de hidrógeno por residuo entre cada cadena adyacente. (Figura 10)

Figura 10. Red de enlaces por puente de hidrógeno en la celulosa. Cada residuo de
glucosa forma dos enlaces intramoleculares (O3-H⋅⋅⋅O5' y O6⋅⋅⋅H-O2') y un enlace
intermolecular (06-H⋅⋅⋅O3). (Gardner y Blackwell, 1974)

Esta gran red de enlaces de hidrógeno, es la razón fundamental de la resistencia de la


celulosa. Al asociarse las cadenas de celulosa, de forma paralela, le confieren una
determinada cristalinidad (Cowling y Kirk, 1976).

25
La cristalinidad de la celulosa, hace que la misma sea insoluble en agua, a pesar de su alto
contenido de grupos OH y tiene implicaciones importantes en los procesos a que son
sometidos los materiales lignocelulósicos, ya que esta estructura cristalina, limita el ataque
de diferentes reactivos químicos y enzimas. En general, la estructura de la celulosa en los
materiales lignocelulósicos, consta de zonas cristalinas y zonas amorfas.

Para romper o penetrar esta estructura, se requieren severos tratamientos y condiciones, que
permitan incrementar la accesibilidad de la celulosa. La estructura de la celulosa no es el
único factor que limita su accesibilidad. Otros componentes que están íntimamente
vinculados a la celulosa en el vegetal, como son la lignina y las hemicelulosas, juegan un
importante rol en los procesos utilizados para el aprovechamiento de los materiales
lignocelulósicos, como son los procesos físico-químicos, por microorganismos y
enzimáticos (Cowling, 1975).

Los tratamientos físicos como la molida, aumentan la superficie expuesta del material, así
como disminuyen el grado de polimerización del material y su cristalinidad, por lo que
facilitan los tratamientos posteriores. Los tratamientos químicos con ácidos, álcalis o
agentes oxidantes, pueden además romper la estructura interna y las barreras estéricas de la
lignina y hemicelulosas asociadas, favoreciendo los procesos posteriores para el
aprovechamiento del material lignocelulósico. (Millett et al., 1975).

2. Hemicelulosas
El término hemicelulosas se empleó primeramente para referirse a cualquier polisacárido de
origen vegetal que se extraía en soluciones ligeramente alcalinas (Schulze, 1891 citado por
Wilkie, 1979). Se conocen diferentes tipos de hemicelulosas en las plantas; xilanos,
mananos, glucanos, galactanos y galacturanos (Wilkie, 1979). Los xilanos y mananos, son
los grupos de hemicelulosas más importantes presentes en los materiales lignocelulósicos.
En general, las hemicelulosas tienen bajos grados de polimerización (<200) (Cowling y
Kirk, 1976).

26
Los xilanos son las hemicelulosas más comunes y los polisacáridos no celulósicos más
importantes de las angiospermas (por ejemplo monocotiledóneas y maderas duras). Los
xilanos están constituidas por un esqueleto de unidades anhidro xilopiranosil unidas por
enlaces ß-1-4 glicosídicos, en el cual se pueden sustituir varios residuos.

Las posibles configuraciones de los dos tipos más comunes de xilanos, llamados
glucoarabinoxilano, glucuronoxilano y glucomanano, se muestran en la figura 11

Figura 11. Posibles configuraciones de los glucoarabinoxilanos, glucuronoxilanos y


glucomananos, (Thompson, 1983)

Los glucuronoarabinoxilanos se encuentran con frecuencia en las monocotiledóneas. Estos


xilanos presentan unidades L-arabinofuranosil unidas por enlaces (1-3) glicosídicos y ácido
glucurónico, presente en general como éter 4-O-metil unido por enlaces (1-2) glicosídicos a
la cadena principal de xilosa.

27
El tercer sustituyente más común, unido normalmente al C2 y/o C3 de la cadena de xilosa,
es el grupo acetilo (Thompson, 1983). Se considera que mientras mayor es la sustitución de
grupos acetilo, mayor es la solubilidad del xilano y menor su habilidad para unirse a la
celulosa (Wallace, 1989).

La concentración relativa de grupos acetilo en las hemicelulosas, es también importante en


el caso de los tratamientos de materiales lignocelulósicos con vapor, ya que la eficiencia de
tales tratamientos depende en parte de la liberación de estos grupos que actúan como
catalizadores de las reacciones químicas posteriores [Aronovsky y Gortner (1930) citado
por Muzzy et al. (1983)].

La segunda forma más abundante de los xilanos son los glucuronoxilanos, los cuales se
encuentran en general en las maderas duras y tienen una estructura similar a la de los
glucuronoarabinoxilanos, con la diferencia de que las unidades arabinofuranosil están
ausentes (Thompson, 1983).

A pesar de las diferencias en la composición de azúcares y grado de sustitución, se observa


que los xilanos presentes en las monocotiledóneas y maderas duras presentan similitudes
con respecto a sus propiedades físico-químicas y comportamientos frente a los tratamientos
a que son sometidos. En general, las hemicelulosas y en particular los xilanos, pueden ser
solubilizados de manera eficiente por la hidrólisis en medio ácido débil (Wilkie, 1979).

Para lograr una solubilización de la glucosa presente en la celulosa, en proporción


semejante a la que se logra con las hemicelulosas, se requiere un tratamiento mucho más
drástico de hidrólisis ácida, o una combinación de hidrólisis ácida-tratamiento enzimático.
La relativa facilidad de extracción de azúcares de las hemicelulosas, la han convertido en
una fuente de obtención de combustibles, alimento animal y productos químicos
(Thompson, 1983; Overend y Chornet, 1987).

28
Los mananos, son los mayores componentes de las hemicelulosas de las maderas blandas.
Normalmente, son de más difícil extracción de la pared celular que los xilanos. El
glucomanano, es el manano más importante presente en las maderas blandas. Está
constituido por un esqueleto de unidades de glucopiranosil y manopiranosil unidos por
enlaces ß-1-4 glicosídicos.

Los grupos acetilo se pueden encontrar unidos a C2 y/o C3 de las unidades de glucosa o
manosa, dependiendo de las características de la planta. Al igual que en el caso de los
xilanos, la existencia de los grupos acetilo en los mánanos, tiene importantes implicaciones
en sus propiedades físicas (Wayman y Parekh, 1990).

En la figura 12, se muestran las formulas de los azúcares que componen las hemicelulosas.

Figura 12. Unidades de azúcares en las hemicelulosas.

29
3. Lignina
La lignina es el componente no carbohidrático más importante presente en la pared celular
de la planta madura. Se considera que la lignina cumple dos
funciones fundamentales en los vegetales: Dar resistencia y
servir de pegamento a la pared celular y aportar resistencia al
ataque de los microbios (Theander y Åman, 1984). La lignina es
un polímero condensado de alto peso molecular y estructura amorfa. Está constituida por
unidades fenilpropano.

Estas unidades se encuentran unidas por enlaces carbono- carbono (C-C) y tipo éter (C-O-
C) (Figura 13).

Las ligninas se clasifican de acuerdo a las unidades monoméricas que las constituyen en
estructuras del tipo p-hidroxifenil, guayacil y siringil.

Figura 13. Estructura esquemática de las principales estructuras de la lignina de las


gimnospermas. (Adler, 1977)

30
Estas estructuras corresponden a los siguientes precursores de la lignina: alcoholes p-
coumaril, coniferil y sinapil (Figura 14).

Figura 14. Estructura química de los alcoholes p-coumaril, coniferil y sinapil.


Principales precursores en la biosíntesis de la lignina. (Theander y Åman, 1984)

Las ligninas guayacílicas, ricas en residuos de guayacil, se encuentran en las gimnospermas


(maderas blandas). Las maderas duras contienen tanto grupos guayacílicas como
siringílicas en una relación que puede variar de 4:1 a 1:2. El último y posiblemente más
complejo grupo de ligninas son las ligninas de las plantas anuales. Las mismas contienen
los tres residuos aromáticos en cantidades significativas (Nimz et al., 1981).

Estos tipos de lignina son muy diferentes de las ligninas de maderas, ya que poseen ácidos
fenólicos (PAC), ácidos p-coumárico y ferúlico y amino ácidos estrechamente asociados
con el núcleo de la matriz de lignina (Van Soest, 1982). Los PAC se encuentran enlazados
a la lignina por enlaces éter o éster (Billa et al., 1993).

Los fuertes enlaces covalentes en la estructura de la lignina (por ejemplo C-C y enlaces de
éter, hace a la lignina muy resistente a la acción hidrolítica de Las ligninas guayacílicas,
ricas en residuos de guayacil, se encuentran en las gimnospermas (maderas blandas). Las
maderas duras contienen tanto grupos guayacílicas como siringílicas en una relación que
puede variar de 4:1 a 1:2.

31
El último y posiblemente más complejo grupo de ligninas son las ligninas de las plantas
anuales. Las mismas contienen los tres residuos aromáticos en cantidades significativas
(Nimz et al., 1981). Estos tipos de lignina son muy diferentes de las ligninas de maderas, ya
que poseen ácidos fenólicos (PAC), ácidos p-coumárico y ferúlico y amino ácidos
estrechamente asociados con el núcleo de la matriz de lignina (Van Soest, 1982).

Los PAC se encuentran enlazados a la lignina por enlaces éter o éster (Billa et al., 1993).
De acuerdo a mediciones analíticas (Wayman y Chua, 1979a), los alcoholes
fenilpropanoides presentes en el núcleo de la lignina, producen p-hidroxibenzaldehido,
vainillina y siringaldehido cuando se someten a moderada oxidación. La oxidación de los
ácidos p-coumárico y ferúlico puede también dar p-hidroxibenzaldehido y vainillina,
(Figura15).

Figura 15. Relación entre alcoholes cinamílicos, ácidos y sus productos de oxidación
por nitrobenceno. (Harris y Hartley, 1976)
32
Cuando materiales lignocelulósicos obtenidos de pajas y plantas anuales se someten a
oxidación con nitrobenceno, la mayor parte del p-hidroxibenzaldehido y hasta el 25% de la
vainillina, se producen a partir de los ácidos p-coumárico y ferúlico presentes (Van Soest,
1982).

La presencia de PAC en las ligninas de pajas y plantas anuales, tiene importantes


consecuencias en la eficiencia de los tratamientos químicos utilizados para incrementar la
utilización de estos materiales. Los PAC de las ligninas de pajas y plantas anuales, se
pueden disolver cuando se someten a tratamientos con álcalis en frío. Otras ligninas que no
contienen enlaces lábiles a la acción de álcalis, no son afectadas. Para lograr la
deslignificación de cualquier material lignocelulósico, los enlaces éter entre los precursores
de la lignina tienen que ser rotos por tratamientos con agentes oxidantes o tratamientos con
agentes químicos a altas temperaturas (Chua y Wayman, 1979b).

Las ligninas guayacílicas, ricas en residuos de guayacil, se encuentran en las gimnospermas


(maderas blandas). Las maderas duras contienen tanto grupos guayacílicas como
siringílicas en una relación que puede variar de 4:1 a 1:2.

4. Extractivos
Se denominan extractivos a los compuestos orgánicos de bajo peso molecular que están
presentes en los materiales lignocelulósicos y que pueden extraerse con disolventes
orgánicos o mezclas de los mismos, tales como etanol-benceno, cloroformo y otros.

Las resinas son extractivos característicos de las maderas, y están compuestas por terpenos,
lignanos y otros compuestos aromáticos, grasas, ceras, ácidos grasos, y alcoholes,
serpentinas, taninos y flavonoides. Los extractivos representan en general entre el 4 y 10%
del peso total del material. Los extractivos se encuentran fundamentalmente en los canales
resinosos, células parenquimatosas y una pequeña cantidad en la lamela media y pared
celular de las traqueidas. Algunos extractivos son tóxicos y protegen a las maderas del
ataque de hongos y termitas.

33
III. 3 Influencia de la estructura de los materiales de biomasa lignocelulósica en su
procesamiento
La estructura del material lignocelulósico, fuente de origen, edad, características
morfológicas y características químicas y estructurales de sus componentes químicos,
celulosa, hemicelulosas, lignina, extractivos y cenizas, tienen una influencia fundamental
en los procesos empleados para la transformación por vía química, física o enzimática del
material lignocelulósico en diferentes productos.

Es de gran importancia realizar una caracterización completa del material, para conocer de
manera detallada su estructura y características químicas del mismo y sus componentes, de
forma de poder diseñar los tratamientos más eficaces para lograr una transformación
eficiente del material.

Otro aspecto de gran importancia a tener en cuenta en el aprovechamiento de los materiales


lignocelulósicos es su manipulación y almacenamiento. Al ser materiales biodegradables,
las condiciones de almacenamiento y manipulación, son de gran importancia para la
conservación del material en las condiciones adecuadas para su procesamiento, evitando las
pérdidas que se pueden producir por procesos de fermentación y degradación incontrolados,
que pueden afectar seriamente las propiedades del material y disminuir sensiblemente su
rendimiento.

34
IV. Aprovechamiento energético de la biomasa lignocelulósica
Para el aprovechamiento de la energía de la biomasa lignocelulósica contenida en los
enlaces químicos del carbono, hay que realizar siempre una combustión. La combustión de
la biomasa sólida puede realizarse directamente en un horno; sin embargo, cuando
mediante tratamientos físicos, químicos y biológicos intermedios obtenemos combustibles
líquidos o gaseosos, éstos se pueden quemar tanto en las calderas como en motores de
combustión interna, donde podemos extraer calor y trabajo mecánico.

Este trabajo se puede emplear para hacer funcionar máquinas y vehículos o para generar
electricidad en grupos electrógenos o turbinas, y el calor puede usarse en proceso
industriales, para el acondicionamiento del hábitat humano, animal o vegetal, y para la
generación de electricidad.

La obtención o adecuación para el uso de los combustibles procedentes de la biomasa


lignocelulósica, ya sea residual o no, requiere casi siempre de tratamientos físicos,
químicos o biológicos, y entre éstos están:

• El secado para eliminar la humedad.


• La combustión incompleta para producir carbón vegetal.
• La fermentación alcohólica.
• La producción de biogás.
• La gasificación para obtener gas pobre (CO, H2, N2), o gas de síntesis (CO, H2).
• La pirólisis para obtener combustibles sólidos, líquidos y gaseosos.

Las características estructurales y bioquímicas, según la procedencia de cada tipo de


biomasa y el análisis de las necesidades de nuestros procesos industriales o domésticos,
condicionan cuáles pueden ser las tecnologías para un aprovechamiento óptimo, siempre
teniendo en cuenta la realización de una evaluación del impacto ambiental si lo hubiere.

En el proceso de aprovechamiento energético, aparecen también productos o subproductos


con valor añadido, es el caso de la producción de compost utilizando el residuo sólido de la

35
fermentación alcohólica o la digestión anaerobia. En general, se trata de no consumir más
biomasa de la que se regenera como residuo o como producto de la intervención humana, y
no retirar del medio la biomasa necesaria para mantener los nutrientes y las características
estructurales de los suelos, ya sean naturales o generados por la acción agrícola humana.

IV. 1. Los cultivos energéticos


No toda la biomasa lignocelulósica aprovechable para la generación de energía tiene que
ser residual. Podemos cultivar plantas con el único fin de generar energía, por combustión
directa, o mediante su densificación o su transformación en “biocombustibles”, son los
llamados “cultivos energéticos”.

Los cultivos energéticos podrían aprovechar las tierras agrícolas no aptas para la
producción de alimentos, para la siembra de variedades vegetales de muy alta producción
de biomasa expresada en toneladas por hectárea por año, con bajas demandas de agua y
nutrientes y alta resistencia a enfermedades.

Considerando el estado físico de los derivados de origen agrario con potencial


aprovechamiento energético cabe distinguir:

• Los que se encuentran en estado sólido, como la biomasa lignocelulósica, apropiados


para producir calor mediante combustión directa en calderas, lo que permite utilizarlos
en desecación y/o en generación de vapor, con una relación energética global
(salida/entrada) que llega a ser mayor de 3.
• Obtenidos en estado líquido, que pueden ser utilizados como carburantes de los motores
de combustión interna, adaptándose al estado actual de la técnica, tanto en los de
encendido por compresión como por chispa, como son los aceites vegetales con
diferentes grados de transformación y los alcoholes obtenidos por destilación.
• Según el tipo de carburante obtenido y la técnica de transformación utilizada, la relación
energética global, incluyendo la valoración energética de los subproductos, alcanza
valores entre 2 y 2,5.

36
• Los que se obtienen en forma gaseosa por pirólisis y gasificación de la biomasa
lignocelulósica que permiten producir un gas con una relación energética global de 2,7 a
2,9 o por fermentación anaerobia de la biomasa obteniéndose un gas con una relación
energética global superior a 2.

El establecimiento de plantaciones con fines energéticos puede considerarse un


procedimiento renovable, ya que en los procesos de combustión se devuelve a la atmósfera
sólo aquel CO2 que las propias plantas han retirado de la misma para su crecimiento.
Evidentemente, esto no es óbice para evaluar previamente el impacto ambiental sobre el
ecosistema y sobre la socioeconomía de la zona al cambiar las especies de cultivo.

La consideración de renovable de la tecnología de aprovechamiento de los cultivos


energéticos, sólo puede darse si la biomasa obtenida y consumida es tal que se regenera a la
misma velocidad con la que se extrae, y se extrae en una cantidad que no afecta a la
estructura y composición de los suelos. Las líneas de investigación, y los actuales
desarrollos tecnológicos van encaminados principalmente al establecimiento de métodos de
cultivo de especies, y de técnicas extractivas de las que se puedan obtener los
biocombustibles.

En el balance global, es necesario comprobar que la energía extraída sea mayor que la
consumida en todo el proceso de cultivo, más la necesaria para las manipulaciones
anteriores y posteriores al mismo, incluyendo la fabricación y costo de fertilizantes,
agroquímicos, agua y otros insumos.

IV. 2. Biorefinerías
El desarrollo y puesta en marcha de los cultivos energéticos puede dar lugar a la creación
de diferentes “agroindustrias” o biorefinerías, como los complejos agroeléctricos, las
biodestilerías, la generación de biocombustibles y los complejos de producción de
diferentes materiales como papel y cartón, polímeros, derivados de la celulosa y la lignina y
productos para la industria química.

37
En el primer caso, se trata de crear industrias productoras de electricidad en centrales
térmicas alimentadas con biomasa producida en sus inmediaciones. Para esta finalidad se
requiere un tipo de biomasa de muy bajo costo con alto rendimiento por unidad de
superficie. La biomasa lignocelulósica producida con especies leñosas de crecimiento
rápido o con herbáceas perennes de alta producción parece ser la más adecuada para ello.

En cuanto a los biocombustibles, se pueden considerar dos alternativas, tomando en


consideración los tipos de motores más difundidos en el mercado. La de los biocarburantes
para los motores de encendido por chispa, y la de los biocarburantes para los motores de
encendido por compresión o Diesel.

En el caso de los complejos productivos, la base puede ser la industria de celulosa y papel,
con un concepto más flexible, en los que se produciría además de celulosa y papel,
diferentes productos químicos y derivados. La energía necesaria sería obtenida a partir de la
propia biomasa, incluyendo la cogeneración y entrega de electricidad a la red.

Figura 16. La Biorefinería

38
IV. 3. El aprovechamiento energético de la biomasa y las emisiones de CO2
Dado que la biomasa (residual o no) proviene de la fotosíntesis, el dióxido de carbono
emitido por su combustión viene y vuelve a la atmósfera. A diferencia de la quema de
combustibles fósiles; éstos liberan a la atmósfera cantidades de dióxido de carbono que ya
no pertenecían al ciclo atmosférico, sino al geológico, provocando un aumento de la
concentración del dióxido de carbono presente en la atmósfera.

Por lo tanto, la sustitución de combustibles fósiles por biomasa no sólo no produce más
emisiones de dióxido de carbono, sino que tiene un efecto levemente captador de éste, ya
que no todo el dióxido de carbono capitalizado por las plantas en forma de biomasa es
devuelto luego a la atmósfera en su combustión (como es el caso de las raíces de árboles y
otros cultivos, que no son usados como recurso energético).

De modo que, desde esta perspectiva, el dióxido de carbono pasa de ser un elemento
contaminante contra el que luchar a ser una riqueza potencialmente explotable en nuestro
beneficio.

Otro importante aspecto que se vería favorecido por una generalización en el


aprovechamiento de la biomasa sería el derivado de la reforestación de grandes áreas, con
los consiguientes beneficios en cuanto a retención de agua por el terreno, disminución de la
degradación y erosión del suelo, y la posibilidad de dar a los bosques así creados un uso
general para esparcimiento y recreo.

De manera que, dentro de las energías renovables, la biomasa, además de tener las
características generales de todas éstas, puede llegar a ser un instrumento eficaz para luchar
contra el cambio climático; particularmente en el control del dióxido de carbono y el efecto
invernadero. En cualquier caso, el 15% de la energía consumida actualmente en el mundo
procede de esta fuente. Sin embargo, la mayor parte se obtiene ineficientemente, sobre todo
en países en desarrollo.

39
La biomasa tiene menos poder calorífico que el carbón y prácticamente nada de azufre.
Tiene más compuestos volátiles, lo cual le hace gasificar mejor, y más humedad, por lo que
el tiempo de residencia en la reacción es mayor.

Durante su combustión, la generación de óxidos de nitrógeno suele ser muy baja. Dada la
pequeña cantidad de azufre en su composición, la cantidad de dióxido de azufre liberada en
la combustión está por debajo de los controles más exigentes.

Las emisiones de la combustión de la biomasa más problemáticas son las partículas (PM10),
los compuestos volátiles orgánicos (VOC·s) y las sustancias tóxicas (en los residuos sólidos
urbanos). Las PM10 pueden reducirse utilizando filtros adecuados o por precipitación
electrostática. Los VOC·s son responsables de la formación de ozono junto con la luz y la
temperatura. Todos ellos pueden tener consecuencias negativas para la salud y los
ecosistemas.

La extracción y utilización del metano, originado en los vertederos y en los digestores


anaerobios de residuos ganaderos y aguas residuales, impiden que sea liberado a la
atmósfera, contribuyendo de manera importante al efecto invernadero. Del mismo modo, si
los residuos agrícolas y forestales se quemasen a cielo abierto, se liberarían a la atmósfera
diez veces más PM10, VOC·s y compuestos orgánicos que si fuesen quemados en una planta
para obtención de electricidad.

Como ya se ha mencionado, la cantidad de dióxido de carbono liberada durante la


combustión de la biomasa es, como mucho, igual a la que absorbe durante su etapa de
crecimiento en el proceso de la fotosíntesis. Por tanto la eliminación neta de dióxido de
carbono en el aprovechamiento energético de la biomasa es, en el peor de los casos, de
valor cero, aunque, normalmente, la biomasa tiene un efecto sumidero del dióxido de
carbono a largo plazo.

Los vertederos de Residuos sólidos urbanos (RSU) y los residuos del ganado en
explotaciones intensivas, si no son convenientemente procesados para su aprovechamiento

40
energético, contaminan las aguas superficiales debido a los lixiviados a que dan origen,
produciendo en los ríos un aumento de la demanda biológica de oxígeno (DBO) y por tanto,
la desaparición de la vida en los mismos. El problema puede evitarse por medio de
digestores anaerobios con los que se obtiene biogás (Metano), que puede utilizarse PM10
para la generación de electricidad. En ambos casos, el aprovechamiento energético de los
residuos reduce la contaminación de las aguas.

La utilización de la tierra para cultivos energéticos presenta una serie de incertidumbres por
el impacto que puede ocasionar. En primer lugar, existe una preocupación respecto a la
utilización de agua para estos cultivos, que podría competir con los cultivos alimentarios
tradicionales.

El efecto de la utilización de la biomasa sobre el suelo es diferente según sea su origen y el


proceso de transformación de la misma.

En el caso de los cultivos energéticos, el problema de la erosión emerge como uno de los
más importantes. Los periodos más críticos son la siembra y la recolección; sin embargo,
los cultivos energéticos tienen ciclos más largos: los árboles se suelen cortar cada cinco o
diez años; en los herbáceos, se trata de utilizar especies que rebroten después de su corte.
Por lo tanto, los cultivos energéticos tienen un impacto sobre la erosión del suelo menor
que los cultivos tradicionales.

En cuanto a los residuos agrícolas, se sabe que la permanencia de una pequeña porción de
residuos en el suelo le proporciona mayor capacidad de retención de nutrientes y de agua,
además de reducir ligeramente la erosión. Sin embargo, si se dejan demasiados residuos en
el suelo, pueden reducir la producción al disminuir la temperatura del mismo. Los residuos
agrícolas reducen también la formación de nitratos, y pueden albergar microorganismos
productores de infecciones en futuras cosechas.

Otro posible impacto del uso de la biomasa es el de las cenizas. La biomasa agrícola tiene
mucha menor cantidad de cenizas que el carbón. Sin embargo, estas cenizas originadas en

41
la combustión de la biomasa agrícola o cultivos energéticos pueden utilizarse como
regeneradores de suelos ácidos en agricultura y silvicultura y son completamente inocuas.

Las ventajas de los cultivos energéticos son las siguientes (Lynd L.R. 2003): El
mantenimiento de actividades agrícolas en las zonas rurales, conservando el carácter
específico de éstas; la eliminación de los subsidios agrarios y de paro; el restablecimiento
de ecosistemas; la disminución del éxodo rural; la producción y generación de energía en el
propio país que revierte en la propia economía con beneficios directos sobre ésta, incluidos
los impuestos generados; el desarrollo de tecnologías y la creación de nuevas industrias; y
la disminución del riesgo en el suministro de combustibles.

Este riesgo puede ser un incremento incontrolable de los precios del combustible, una
interrupción en el suministro exterior o cambios futuros en la regulación. Por ello, cada vez
más, existe la preocupación de lograr una diversidad en el suministro de combustible y no
depender exclusivamente de uno o de muy pocos. El caso más claro es el del petróleo, para
el sector del transporte.

V. Bioetanol

V. 1. El bioetanol
Se denomina bioetanol al obtenido a partir de fuentes de biomasa vegetal; mieles y jugos
ricos en sacarosa de fábricas azucareras, productos ricos en almidón y a partir de materiales
lignocelulósicos. No se incluye al etanol obtenido por vía petroquímica y a partir del gas
natural.

Cualquier material que contenga azúcares o hidratos de carbono fermentables, almidón,


celulosa o hemicelulosas, puede servir como materia prima para la obtención de etanol. Las
materias primas se clasifican en tres grupos: azucaradas, amiláceas (cereales, tubérculos,…)
y lignocelulósicas, (maderas, plantas anuales).

42
Desde inicios del siglo XX, se comenzó a emplear el etanol obtenido de la caña de azúcar o
del maíz en mezclas con la gasolina en los motores de combustión interna de forma
coyuntural, en especial en períodos de guerra. En Cuba se hizo famoso el término
“MOFUCO”, nombre comercial de una mezcla de etanol y gasolina empleada en
automóviles de la firma “Motor fuel company”. El término se quedó en el vocabulario
popular para referirse a las bebidas alcohólicas de baja calidad o de manufactura casera.

Figura 17.

Brasil, desde los años 70, comenzó un programa dirigido a la sustitución parcial o total de
la gasolina por etanol anhidro, el cual tuvo sus altibajos de acuerdo a las fluctuaciones del
precio del petróleo. El etanol proporciona características antidetonantes, por lo que mejora
el índice de octano de la gasolina y es un efectivo sustituto del tetraetil plomo y el
Metilterbutil éter (MTBE). El aumento del índice de octano, permite aumentar la relación
de compresión de los motores para conseguir mejores rendimientos en la transformación de
energía química a energía mecánica. Otra ventaja del uso del etanol es la disminución de las
emisiones de óxidos de nitrógeno, monóxido de carbono, e hidrocarburos volátiles.

El proceso general de transformación de la glucosa en etanol (fermentación alcohólica)


mediante microorganismos u enzimas, se puede resumir en la ecuación siguiente:

C6H12O6 2CH3CH2OH + 2CO2


2ADP -> 2ATP

43
V. 2. Fuentes de obtención del bioetanol
El etanol a partir de azúcares, es conocido desde los albores de la humanidad (vinos y otras
bebidas fermentadas) y en la actualidad se produce con una alta eficiencia y grandes
volúmenes, en especial desde el empleo del etanol anhidro como aditivo o combustible
automotor.

La producción de etanol a partir de granos es muy criticada por sus implicaciones éticas al
convertir alimentos en combustibles para automóviles y su efecto en el incremento en la
poca disponibilidad e incrementos en el precio de los granos. El proceso se basa en la
cocción, hidrólisis y fermentación de los almidones que contienen.

En el mundo se llevan a cabo gran cantidad de estudios y proyectos para desarrollar la


producción a escala comercial de etanol a partir de biomasa lignocelulósica. Los materiales
que más se han investigado son la madera y los residuos forestales, papel reciclado y
residuos de la industria papelera, bagazo de caña, desechos agrícolas (hojas, ramas, hierba,
frutas, paja, etc.) así como residuos sólidos urbanos.

El etanol obtenido de biomasa lignocelulósica, (presentes en todos los vegetales en una


estructura compuesta fundamentalmente de celulosa, hemicelulosas y lignina), consiste en
la hidrólisis de la celulosa (a glucosa) y de las hemicelulosas a xilosa y otros azúcares y
posterior fermentación a etanol.

Los procesos a partir de los tres tipos de materias primas se muestran en la figura 18.

44
Pretratamiento
BIOMASA Fermentación Destilación ETANOL
AZUCARADA mecánico

BIOMASA Pretratamiento Hidrólisis


AMILÁCEA mecánico Cocción enzimática Fermentación Destilación ETANOL

Hidrólisis
ácida
BIOMASA Pretratamiento Fermentación Destilación ETANOL
LIGNOCELU Hidrólisis
LÓSICA
mecánico enzimática

Hidrólisis
y fermentación
simultánea

Figura 18. Fuentes de obtención de etanol

V. 3. Procesos de obtención de bioetanol

1. Fermentación de azúcares
Es el proceso tradicional, su eficiencia actual es alta por las mejoras tecnológicas
realizadas.

La materia prima de mejores características es la caña de azúcar, ya que el proceso puede


ser autosuficiente energéticamente e incluso aportar energía eléctrica a la red. Su
crecimiento estará limitado por la disponibilidad de mieles y azúcar.

Se ha estimado un valor de 8 para la relación salida/entrada entre la energía liberada


durante la combustión de etanol y la energía necesaria para su producción a partir de mieles
y azúcar de caña, considerando todo el ciclo de vida del producto desde la extracción de las
materias primas y los insumos requeridos, pasando por su transporte, hasta el proceso de
transformación hasta etanol. (Berg, 2001). Esta es la relación más alta entre todos los
procesos.

45
2. Etanol de granos
La producción de etanol a partir de granos está muy cuestionada por sus implicaciones
éticas al convertir alimentos en combustibles para automóviles. La relación salida/entrada
entre la energía liberada durante la combustión de etanol y la energía necesaria para su
producción es de 1,1-1,2 (Prakash et al., 1998) lo que hace que en los procesos más
eficientes prácticamente se emplea en su obtención la misma energía que la que se puede
obtener del etanol posteriormente.

En los casos del empleo de cultivos ricos en almidón como trigo, maíz y otros, el proceso
consiste en general de los pasos siguientes (Ballesteros I. 1998):

1. Molida de los granos


2. Liquefacción del maíz con vapor y α-amilasa a 90-120 oC
3. Sacarificación del macerado con glucoamilasa a 60 oC
4. Fermentación de los azúcares con levadura
5. Destilación del fermentado a etanol crudo (45% v/v)
6. Rectificación a 96% v/v
7. Deshidratación a 99.9% con tamices moleculares.

En el caso del maíz, los residuales del proceso se están empleando en la obtención de un
concentrado proteico para la alimentación animal.

VI. Obtención de etanol por vía bioquímica a partir de materiales


lignocelulósicos

La composición de los materiales lignocelulósicos, constituidos por celulosa (con zonas


cristalinas y amorfas), hemicelulosas y lignina, en una estructura compleja y difícil de
penetrar y atacar por agentes químicos, requieren de un pretratamiento para “romper” esa
estructura y facilitar los procesos posteriores (Galbe, 1993; Galbe, 1997; Macmillan, 1997).

46
Teniendo en cuenta estas características, los procesos empleados para la obtención de

etanol, tienen que ajustarse de acuerdo a las características y propiedades de estos

componentes y requerir en general de varias etapas como pretratamiento, detoxificación y

otras (Bothast, 1999; Gardner, 1974). .

La celulosa y hemicelulosas, deben ser hidrolizadas a azúcares simples, para luego ser
fermentados a etanol (Cowling, 1975). La fermentación de la glucosa hidrolizada a partir de
la celulosa es un proceso establecido. Sin embargo, la fermentación de las pentosas
hidrolizadas de las hemicelulosas, es un proceso que presenta en la actualidad algunas
dificultades técnico económicas (Cowling, 1976; Thompson, 1983; Wilkie, 1979).

La lignina, es un polifenol y no puede ser fermentada a etanol, así como los extractivos y
otros componentes presentes (Kirk, 1977; Nimz, 1981; Wallace, 1989; Van Soest, 1982).
La lignina además produce un efecto inhibidor en los procesos fermentativos, por lo que
cualquier proceso viable de obtención de etanol a partir de biomasa lignocelulósica, tiene
que incluir la extracción de la lignina y su aprovechamiento en la obtención de productos
de valor y/o generación de energía (Adler, 1977).

Esta situación crea un problema adicional, ya que un proceso donde se produzcan varios
productos, requiere tener un mercado seguro para todos, a fin de evitar acumulaciones de
uno de ellos o crear un nuevo residual (Szczodrak, 1996).

La lignina es fuente de una gran cantidad de productos de gran valor agregado, así como
una posible fuente de energía que pudiera emplearse total o parcialmente en cubrir las
demandas energéticas de una planta productora de etanol a partir de biomasa (Triana,
1990).

La relación salida/entrada entre la energía liberada durante la combustión de etanol y la


energía necesaria para su producción a partir de residuos lignocelulósicos es de 6, un poco

47
menor que la del proceso con azúcares y mieles, pero muy superior a la de granos (Van
Zessen et al., 2003).

En la figura se muestra el proceso general de obtención de etanol a partir de biomasa


lignocelulósica por vía bioquímica (Zaldivar, 2001).

Biomasa Pretratamiento Hidrólisis Fermentación Destilación


lignocelulósica
.

Etanol

Figura 19. Etanol de biomasa lignocelulósica

VI. 1. Pretratamiento
La etapa distintiva de este proceso es el pretratamiento, que consiste en las operaciones de
recolección, transporte y manipulación, almacenamiento, molida o astillado y otras, para
reducir el tamaño de las partículas, lograr la apertura del material fibroso, convertirlo en
una suspensión que se pueda bombear y facilitar la posterior penetración de los agentes
químicos de hidrólisis (Muzzy, 1983).

Incluye también un tratamiento termoquímico, con el fin de lograr un ablandamiento de la


lignina y las hemicelulosas que facilite el posterior ataque de las enzimas o
microorganismos (Millet, 1975).

Casi todos los métodos de pretratamiento se basan en tecnologías empleadas en la segunda


mitad del siglo XX en la industria de celulosa y papel.

De acuerdo con Lynd (1996), un pretratamiento ideal, debe cumplir con los requisitos
siguientes:
• Producir fibras reactivas
• Separar las pentosas sin degradarlas
• No generar compuestos que inhiban la fermentación

48
• No requerir una reducción drástica del tamaño de partículas
• Empleo de reactores de tamaño razonable y costo moderado
• No generar residuales sólidos
• Proceso simple
• Efectivo a bajos contenidos de humedad

Para el pretratamiento se han propuesto y desarrollado diferentes métodos, los cuales se


relacionan en la Tabla 3 .

Tabla 3. Métodos empleados para el pretratamiento de la biomasa lignocelulósica


para la obtención de etanol (Sund y Cheng 2002, Yu y Zhang, 2003 Söderström et al.
2003, Lynd et al. 2002. Laser et al. 2002.)
Métodos Observaciones
Físicos
Pulverizado mecánico •Molida en molinos de bolas (0,2 a 2,0 mm), de cuchillas o martillos.(3
a 6 mm). Residuos de maderas, maíz, bagazo de caña y pajas.

Pirólisis •T>3000C Hidrólisis con H2SO4 1N, 970C 2,5 h de los resíduos
Maderas y residuos de algodón
Químicos
Ácidos diluidos •Efectivo para residuos agrícolas
•Acuosa •Menos eficiente para maderas y cultivos energéticos.
•Sulfúrico •Problemas de corrosión
• Ácidos orgánicos
Explosión con vapor •Se emplea H2SO4 , SO2 y CO2 como catalizador
• Catalizada con •Es el proceso más empleado
ácidos •Funciona bien con astillas de maderas duras, menos con suaves
• Explosión con •Altos consumos de energía con maderas.
•El AFEX no genera inhibidores
amoniaco (AFEX)
Agua líquida caliente • Agua 170-2300C, a presión, 1-46 min. Hidrólisis de >80% de
LHW hemicelulosas y algo de celulosa. Concentración de sólidos <20%.
Aplicado a bagazo de caña.
Organosolv •Preferido para fraccionar biomasa
•Efectivo con maderas y residuos
•Extrae lignina de gran calidad
•Es un proceso caro
Bisulfito (ácido) • Se emplea en maderas (astillas) y residuos, a 160-180°C y pH 2-5,
30 minutes, y molida en refinador de discos.
Ozono •Se realiza a temperatura ambiente y presión atmosférica.
•No genera inhibidores.
Alcalinos • Semejantes a los procesos de pulpeo empleados en la Industria del
papel.

49
Se reporta también, (US Pat. 6333181) un método para mejorar la etapa de degradación de
la lignocelulosa, en el proceso de obtención de etanol, mediante un tratamiento previo del
material con ultrasonido. Este tratamiento reduce las demandas de celulasa de un 33-50%,
las cuales constituyen el elemento de mayor costo en el proceso.

Sin embargo, ninguno de los métodos de pretratamiento propuestos se puede aplicar en


forma genérica a las diferentes materias primas (Claassen et al., 1999). Esto justifica la
realización de análisis detallados de estas tecnologías en cada caso particular. La síntesis de
procesos puede aportar las herramientas necesarias para descartar en forma preliminar las
opciones con menos perspectivas, teniendo en cuenta nuevos procedimientos, esquemas y
alternativas que se planteen en la etapa de diseño.

Las etapas de pretratamiento e hidrólisis, constituyen unos de los principales problemas


vinculados a la producción de etanol a partir de biomasa lignocelulósica. El complejo
lignocelulósico está compuesto principalmente de una matriz de carbohidratos compuesta
de celulosa y lignina enlazada por cadenas de hemicelulosa.

Los pretratamientos Físicos y Físico-Químicos, tienen como objetivo desintegrar esta


matriz de tal manera que la celulosa reduzca al máximo su grado de cristalinidad y aumente
la celulosa amorfa, que es la más adecuada para el posterior ataque enzimático.
Adicionalmente, la mayor parte de la hemicelulosa se hidroliza durante el pretratamiento y
la lignina se libera o puede incluso descomponerse.

En una etapa posterior, la celulosa liberada se somete a hidrólisis enzimática con celulasas
exógenas, lo cual hace que se obtenga una solución de azúcares fermentables que contiene
principalmente glucosa, así como pentosas resultantes de la hidrólisis inicial de la
hemicelulosa.

50
Estos azúcares son posteriormente convertidos a etanol mediante microorganismos que
pueden utilizar uno o varios de los azúcares presentes en el material lignocelulósico
pretratado e hidrolizado. Este complejo proceso puede ser representado por las reacciones:

Figura 20. Conversión de glucosa y xilosa en etanol

El pretratamiento permite que los rendimientos en la hidrólisis de celulosa aumenten de


menos del 20% de los rendimientos teóricos a valores mayores al 90% (Lynd, 1996).

La explosión con vapor (Steam explosion) es el método más empleado para el


pretratamiento de los materiales lignocelulósicos (McMillan, 1994). En este método, la
biomasa preparada adecuadamente se somete a vapor a altas temperatura y presión y
posteriormente se realiza una descompresión rápida, lo que provoca la explosión del tejido
celular y la separación de sus componentes en determinada extensión, lo que facilita la
posterior hidrólisis. (Sun y Cheng, 2002). La adición de H2SO4, SO2, CO2 mejora la
hidrólisis posterior. (Morjanoff y Gray, 1987).

51
La explosion con vapor consume un 70% menos energía que los tratamientos mecánicos
(Holtzapple 1989).Su principal desventaja es la formación de inhibidores de la
fermentación. (Mackie, 1985).

Otro proceso de pretratamiento es la Explosión con amoniaco (Ammonia fiber explosion


AFEX). En este proceso, el material se somete al ataque de amoniaco líquido a altas
temperatura y presión y posteriormente se realiza una descompresión rápida, semejante a la
explosión con vapor, provocando una rápida sacarificación del material lignocelulósico. Se
ha aplicado a diferentes residuos agrícolas. (Mes-Hartree et al., 1988; Vlasenko et al., 1997;
Holtzapple et al. 1992; Reshamwala et al. 1995; Tengerdy y Nagy, 1988; Holtzapple et al.,
1991). Este proceso no genera inhibidores de la fermentación (Dale et al., 1984; Mes-
Hartree et al., 1988), ni requiere de partículas de pequeño tamaño para el proceso
(Holtzapple et al., 1990). Otras ventajas de este proceso consisten en la posibilidad de
reciclar el amoniaco por su volatilidad (Wyman et al., 2005a). El amoniaco rompe la
cristalinidad de la celulosa. (Gollapalli et al., 2002; Mitchell et al., 1990).

También se usa la explosión con CO2. El rendimiento es menor que en los dos casos
anteriores, pero mayor que en la hidrólisis enzimática sin pretratamiento. (Dale y Moreira,
1982; Zheng et al. 1998).

El ozono también se puede emplear para el pretratamiento de materiales lignocelulósicos.


(Ben-Ghedalia and Miron, 1981; Neely, 1984; Ben-Ghedalia and Shefet, 1983; Vidal y
Molinier, 1988). El pretratamiento con ozono tiene la ventaja de realizarse a temperatura
ambiente y presión atmosférica y no genera inhibidores (Vidal y Molinier, 1988).

Para la hidrólisis ácida, se han empleado ácidos sulfúrico y clorhídrico concentrados, con la
desventaja de ser tóxicos y corrosivos. Además deben recuperarse para hacer el proceso
económicamente viable. (Sivers y Zacchi, 1995).

Los ácidos diluidos se emplean de forma satisfactoria para el pretratamiento. El ácido


sulfúrico diluido permite lograr altas velocidades de reacción y mejora de manera

52
significativa la hidrólisis de la celulosa. (Esteghlalian et al., 1997; Lloyed y Wyman, 2005;
Wyman et al., 2005b). Al incrementar la hidrólisis de las hemicelulosas, que constituyen la
tercera parte de la fracción de carbohidratos del material, se mejora también la economía
del proceso. (Hinman et al., 1992).

En general, existen dos tipos de pretratamientos con ácidos diluidos. Altas temperaturas
(>160 oC) procesos continuos y bajos contenidos de sólidos (5–10%) (Converse et al.,
1989) y Bajas temperaturas, (<160 .C), de forma discontinua y altos contenidos de sólidos
(10–40%) (Esteghlalian et al., 1997). Estudios de Liu (2003) y Wyman (2004), mostraron
que un incremento de la velocidad de flujo mejora la remoción de hemicelulosas y lignina
en los pretratamientos con agua caliente a presión o ácido sulfúrico muy diluido y altas
temperaturas.

Los resultados de los pretratamientos con álcalis dependen del contenido de lignina del
material (McMillan, 1994), incrementándose la porosidad del material (Tarkow y Feist,
1969). También provoca una disminución de la cristalinidad, ruptura de los enlaces entre la
lignina y los carbohidratos y rupturas en la estructura de la lignina (Fan et al., 1987). A
pesar de sus ventajas, presenta dificultades desde el punto de vista de la economía del
proceso para la obtención de combustibles (Hsu, 1996).

La biodegradación de la lignina se puede catalizar con la enzima peroxidasa con la


presencia de H2O2 (Azzam, 1989). El pretratamiento de bagazo de caña con H2O2 mejora
significativamente la susceptibilidad a la hidrólisis enzimática (Bjerre et al., 1996).

En los procesos de pretratamiento biológicos, se han empleado hongos blancos, pardos y


otros para la degradación de la lignina y las hemicelulosas en materiales lignocelulósicos
(Schurz, 1978; Fan et al., 1987; Boominathan y Reddy, 1992; Waldner et al., 1988;
Jacobsen y Wyman, 2002; Nagle et al., 2002).

En la tabla 4, se muestra un pronóstico del costo de las etapas de producción de etanol a


partir de tuzas de maíz hasta el 2012 (Zhui, 2008). En la actualidad, la mayor contribución

53
al costo del proceso, es de las enzimas, pero con los nuevos desarrollos que se están
realizando en este campo, el costo de las enzimas debe disminuir significativamente. Para
el 2012, la etapa más costosa será el pretratamiento la cual será decisiva para lograr la
viabilidad de estos procesos.

Teniendo en cuenta la necesidad de un proceso de astillamiento o molida para reducir su


tamaño, es difícil que sea viable el empleo de maderas y cultivos energéticos.

Las mayores posibilidades las tendrán los residuos agrícolas de alta disponibilidad y
concentración, si se aplican procesos simples y económicos.

Tabla 4. Pronóstico del costo de las etapas de producción de etanol (tuzas de maíz,
USD/L)
Proceso 2005 2009 2012
Pretratamiento 0,12 (28%) 0,08(22%) 0,07(30%)

Enzimas 0,09 (21%) 0,09(25%) 0,03(13%)

Sacarificación-fermentación 0,08(19%) 0,07(20%) 0,03(13%)

Destilación 0,05(11%) 0,05(13%) 0,04(18%)

Balance de planta 0,09(21%) 0,07(20%) 0,06(26%)

Total 0,43 0,36 0,23

VI. 2. Hidrólisis
La hidrólisis se puede realizar catalizada por ácidos, bases, calor y con la ayuda de
microorganismos y tiene por objetivo convertir la masa viscosa obtenida en la etapa
anterior en una solución de azúcares en forma de oligómeros para después convertir los
azúcares oligoméricos en azúcares monoméricos, en general glucosa (C6) y xilosa (C5).

Los pretratamientos e hidrólisis ácidos son de los más empleados en los procesos
industriales y tienen la ventaja de que separan azúcares monoméricos de las hemicelulosas
y exponen a las fibras celulósicas a la acción hidrolítica posterior (Farone, 1996b). Tiene la

54
desventaja de generar algunos compuestos inhibidores, por lo que se hace necesario un paso
de detoxificación (Farone, 1996a).

Las sustancias inhibidoras se originan como resultado de la hidrólisis de los diferentes


componentes, de los ácidos orgánicos esterificados de la hemicelulosa, y de los derivados
fenólicos solubilizados de la lignina. Así mismo, los inhibidores se forman a partir de
productos de degradación de los azúcares solubles y de la lignina (Lynd, 1996; Palmqvist y
Hahn-Hägerdal, 2000a, b). Por eso, y dependiendo del tipo de pretratamiento e hidrólisis
utilizados, es necesario llevar a cabo la detoxificación de las corrientes que van a ser
sometidas a fermentación.

En la Tabla 5 se resumen las principales características de los métodos de detoxificación


más empleados para la obtención de bioetanol con base en la información compilada para
hidrolizados de madera.

Tabla 5. Métodos de detoxificación de hidrolizados de biomasa para la obtención de


etanol.
Métodos Procedimiento Fundamento Ejemplos
Físicos
Evaporación Separación de fracciones Eliminar inhibidores Eliminación de ácido acético,
volátiles y dilución de las volátiles furfural y compuestos fenólicos.
no volátiles
Extracción Empleo de solventes Extracción de inhibidores Extracción de ácido acético y otros,
orgánicos con solventes furfural y sus derivados y
compuestos fenólicos con éter
dietílico o acetato de etilo.
Químicos
Neutralización Neutralización con Precipitación de Hidrolizado de residuos de algodón
Ca(OH)2 ó CaO a pH 6 y compuestos tóxicos tratados por pirólisis
filtración con membrana
o adsorción
Detoxificación Ca(OH)2 a pH 9-10,5, Precipitación de Hidrólisis de bagazo por explosión
alcalina luego cambio de pH con compuestos tóxicos por con vapor. Remoción de ácido
(alcalinización) ácido sulfúrico a pH 5,5- adición de Ca(OH)2 y acético y otros, furfural y sus
6,0 cambio de pH derivados y compuestos fenólicos
Detoxificación KOH pH 10. Cambio de Remoción de compuestos Disminución del contenido de
alcalina pH a 6,5 con HCl y volátiles al calentar el aldehídos y cetonas en hidrólisis de
combinada adición de 1% de sulfito hidrolizado a 90oC. bagazo y madera de sauce.
de sodio.
Intercambio Resinas de base débil Adsorción de inhibidores Remoción de ácido acético y otros,
iónico tipo Amberlita, en la resina furfural y sus derivados y
regeneradas con compuestos fenólicos en diferentes
amoníaco. procesos.Recuperación de azúcares.

55
Biológicos
Detoxificación Lacasa y peroxidasa de Oxidación enzimática que Remoción del 80% de compuestos
enzimática trametes versicolor remueve los compuestos fenólicos en hidrolizados de bagazo
y ácidos fenólicos. de caña pretratado con explosión con
vapor.
Detoxificación Trichoderma reesei Degradación de Remoción de ácido acético y otros,
microbiana inhibidores por el hongo furfural y sus derivados y
compuestos fenólicos en diferentes
procesos.

VI. 3. Fermentación
Se realiza con el objetivo de fermentar los azúcares monoméricos (glucosa (C6) y xilosa
(C5)) a etanol. Los tratamientos enzimáticos son los preferidos (Zaldivar J. y col. 2001).
Las opciones a utilizar son las siguientes:

•Hidrólisis y fermentación separadas (SHF). Tiene la ventaja de que cada operación


puede realizarse en condiciones óptimas de temperatura y pH, pero la acumulación de
glucosa como resultado de la hidrólisis, inhibe la actividad de la celulasa.

•Sacarificación y fermentación simultáneas (SSF), usando celulasas de fuentes


externas. En este caso, la glucosa obtenida es transformada rápidamente a etanol. Este
proceso tiene una mayor velocidad de hidrólisis y mayor rendimiento, necesita una carga
menor de enzima y reduce el riesgo de contaminación. Se necesita sin embargo un
compromiso entre la temperatura de operación y la velocidad total del proceso, ya que el
paso de hidrólisis es más lento que la fermentación. Una adaptación del proceso SSF, está
patentada y se conoce como el proceso Gula SSF (Gauss et al., 1976).

•Sacarificación y fermentación separadas, en la cual los microorganismos también


producen celulasa, llamado también como “Conversión microbiana directa”. Se emplea
clostridia anaeróbica, la cual crece a altas temperaturas produciendo enzimas celulolíticas
que hidrolizan el sustrato y los azúcares generados son convertidos inmediatamente en
etanol. Tiene las desventajas de un bajo rendimiento en etanol, provocado por la formación
de subproductos, la baja tolerancia del microorganismo al etanol y el limitado crecimiento
en los siropes hidrolizados.

56
VI. 4. Destilación
En tres etapas: Obtención de etanol crudo (45%), Rectificación a 96% y Deshidratación a
99.9%.

VI. 5. Disposición de residuales


Consiste en una solución a los residuales sólidos, líquidos y gaseosos generados en el
proceso.

Este es un punto muy importante, ya que una de las fuerzas motrices del desarrollo de los
procesos de obtención de etanol a partir de biomasa lignocelulósica, es la preservación del
medio ambiente (Szczodrak y Fiedurek 1996). Los procesos de obtención de etanol a partir
de biomasa lignocelulósica, pueden generar grandes cantidades de desechos como los
siguientes:

•Productos químicos que es necesario recuperar o disponer


•Biomasa celular residual de la fermentación
•Agua residual del proceso
•Vinazas, el residual de la destilación. Se ha calculado que una planta de 100 millones de
litros de etanol al año, genera una contaminación semejante a una ciudad de 1,4 millones
de habitantes.

VII. Procesos para la producción de etanol a partir de biomasa


lignocelulósica

En la figura 21 se muestra la evolución de los procesos empleados en la obtención de etanol


a partir de biomasa lignocelulósica.

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Hidrólisis ácida Glucosa a etanol No uso de hemicelulosa 1950

Producción Hidrólisis Glucosa a No uso de 1970


de enzima etanol hemicelulosa

Producción Hidrólisis enzimática No uso de 1980


de enzima Glucosa a etanol hemicelulosa

Producción Hidrólisis enzimática


Hoy
de enzima Glucosa a etanol
Azúcares hemicelulósicos a etanol

Producción de enzima
Hidrólisis enzimática Mañana
Glucosa a etanol
Azúcares hemicelulósicos a etanol

Figura 21. Avances de los Procesos de Obtención de Etanol a partir de Lignocelulosa

Hasta 1950, el proceso consistía en una hidrólisis ácida de la celulosa, y su posterior


fermentación a etanol. Las hemicelulosas y lignina eran un residual del proceso.

En los años 70, la enzima celulasa estaba disponible para la hidrólisis, lo que permitía
alcanzar altos rendimientos en la hidrólisis y eliminación de reacciones indeseadas. Las
hemicelulosas y lignina no se aprovechaban.

En los años 80 del siglo pasado, el desarrollo de las enzimas y de microorganismos capaces
de fermentar las pentosas, permitieron realizar en principio la fermentación de los azúcares
hidrolizados de la celulosa y hemicelulosas.

En la actualidad, es factible la fermentación a etanol de los hidrolizados de celulosa y


hemicelulosas, así como existen diferentes aplicaciones de la lignina que pueden permitir la
obtención de productos de gran valor, o su empleo en la generación de energía.

58
Los procesos empleados en la actualidad, se realizan en una o dos etapas. A continuación se
describen de forma general los mismos.

VII. 1. Procesos en dos etapas


Los procesos comerciales de obtención de etanol a partir de biomasa lignocelulósica están
basados en procesos de hidrólisis ácida, mediante la que se puede conseguir, en condiciones
adecuadas de presión y temperatura, una solubilización de la hemicelulosa y la celulosa,
quedando prácticamente inalterada la lignina (Wayman, 1990).

A temperaturas superiores a los 200ºC aparecen productos de descomposición de los


azúcares (furfural, hidroximetilfurfural y una serie de productos solubles no identificados),
lo que conduce a un menor rendimiento. Por otra parte, estas sustancias son inhibidores del
proceso fermentativo por lo que deben eliminarse del hidrolizado antes de realizar la
fermentación.

Los métodos industriales de sacarificación de la fracción celulósica se agrupan en dos tipos:


Los que emplean ácidos concentrados y bajas temperaturas (40-60ºC) y los que utilizan
ácidos diluidos a temperaturas más altas (170-240ºC). Pese a los altos rendimientos de
hidrólisis (cercanos al 80%) que se obtienen con los procesos que utilizan ácidos
concentrados, no existe en la actualidad operando con este sistema ninguna planta industrial
por falta de rentabilidad.

Entre los procesos de hidrólisis de celulosa utilizando ácidos diluidos el método de


percolación, en el que el ácido se hace pasar a través del material, ha sido el más utilizado.
Puesto que la eficiencia de conversión de la celulosa en glucosa aumenta con la temperatura
de proceso, desde los años 70 se están desarrollando procesos que trabajan a temperaturas
en el entorno de los 250º-270ºC. La realización del proceso a estas temperaturas, para
lograr mejores rendimientos, obliga a tiempos de residencia muy cortos que minimizan las
reacciones de degradación de la glucosa.

59
Para lograr las condiciones drásticas de temperatura y cortos tiempos de residencia
necesarias para realizar de manera más eficiente la hidrólisis ácida de la celulosa, los
reactores rápidos de flujo pistón que se desarrollan en Estados Unidos parecen ofrecer las
mejores expectativas.

Una alternativa a los reactores de flujo pistón la constituye el reactor de hidrólisis


ultrarrápida “flash” que el CIEMAT (Centro de Investigaciones Energéticas,
Medioambientales y Tecnológicas de Madrid, España) junto con la empresa alemana
Zellplan ha desarrollado en el marco de un proyecto financiado por la Unión Europea. La
hidrólisis “flash” no sólo permite reacciones muy rápidas, sino que también supone bajos
costos de equipamiento, cuando se compara con los utilizados en las tecnologías
convencionales, debido al pequeño tamaño de los equipos empleados en el proceso.

Cuando la biomasa se somete a un tratamiento ácido, los problemas mencionados se evitan


si se utiliza en el proceso una hidrólisis enzimática. Cualquier proceso de hidrólisis
enzimática de biomasa lignocelulósica necesita una fase de pretratamiento, ya que la
celulosa es resistente al ataque enzimático. Los pretratamientos hidrotérmicos parecen ser
los métodos mas efectivos para mejorar la sacarificación enzimática de estos materiales, ya
que reducen la cristalinidad de la celulosa, aumentan la densidad de la biomasa y suponen
bajos costos económicos y energéticos.

En los procesos que realizan la hidrólisis y la fermentación por separado, una parte de la
biomasa pretratada es utilizada como sustrato para la obtención de las enzimas, que una vez
obtenidas, se extraen y se añaden al resto del material pretratado en un reactor de hidrólisis.
Durante este proceso, las enzimas realizan la ruptura de la celulosa en las unidades de
glucosa que la componen. Tras la ruptura parcial de la fibra de celulosa, por la acción del
pretratamiento, se produce el ataque enzimático mediante la interacción sinérgica de las
endo y las exoglucanasas, obteniéndose glucosa, celobiosa y oligosacáridos. La celobiosa
es hidrolizada mediante la α-glucosidasa.

60
En la mayoría de los organismos capaces de hidrolizar la celulosa, la síntesis de celulasas es
inducida por la presencia de celulosa y reprimida por la presencia de glucosa u otros
azúcares fácilmente metabolizables en el medio de cultivo. La acumulación de los azúcares
producidos durante la hidrólisis de la celulosa inhibe la acción de las enzimas celulolíticas,
limitando los rendimientos de sacarificación del proceso.

VII. 2. Procesos en una etapa


Los procesos de sacarificación y fermentación simultánea (SSF) se han revelado como los
más prometedores para transformar la celulosa a etanol ya que presentan ventajas
sustanciales cuando se comparan con los procesos convencionales de sacarificación y
fermentación separada.

En el sistema SSF los procesos involucrados son virtualmente los mismos que en los
procesos convencionales con la excepción de que la hidrólisis y la fermentación se realizan
en el mismo reactor. La presencia de los microorganismos junto con la enzima, reduce la
acumulación de azúcar en el reactor y, puesto que el azúcar producido durante la hidrólisis
de la celulosa inhibe la acción de las enzimas celulolíticas, es posible obtener mayores
rendimientos de sacarificación.

Otras ventajas del proceso SSF son los menores requerimientos de enzima para realizar la
hidrólisis y menores costos de inversión ya que se requieren menos equipos.

Las investigaciones realizadas en los últimos años sobre el proceso SSF han conducido a
mejoras significativas en la producción de etanol. Estos estudios se han basado
principalmente en la selección del microorganismo, concentración óptima de enzima y
diferente pretratamiento del substrato, pero considerando casi exclusivamente procesos en
batch.

A pesar de estas ventajas, un problema asociado al sistema SSF, y que es actualmente


objeto de investigación, es la diferente temperatura óptima para la sacarificación (45º-50ºC)

61
y la fermentación (30º-32), por lo que es necesario la utilización de levaduras
termotolerantes cuando se quieren realizar procesos acoplados SSF.

Algunos procesos empleados en la producción de etanol a partir de biomasa


lignocelulósica, están basados en modificaciones del proceso Gulf SSF (Ingram et al. 1997)
Estos procesos consisten en general en el empleo de cepas de E. Coli. Los pasos son los
siguientes:

•Hidrólisis ácida.
•Separación sólido/líquido
•Lavado
•Tratamiento del licor de hemicelulosas con Ca(OH)2 (Detoxificar el licor)
•Fermentación con E. coli

La lignina se extrae de la fracción sólida y puede emplearse como combustible en la planta


industrial. La celulosa se hidroliza con una celulasa comercial a glucosa y se fermenta con
S. Cerevisiae. Alternativamente, para disminuir el costo de las enzimas, en este paso puede
utilizarse la K. oxytoca P2, la cual requiere una cantidad menor de celulasa. Evaluaciones
económicas preliminares, consideran que el costo de producción del etanol empleando en el
proceso E. coli KO11 en un sustrato rico en pentosas, sería de 0,48 USD/l (Von Sivers et al.
1994).

Un proceso basado en Z. mobilis para la utilización de lignocelulosa obtenida de maderas


duras (McMillan 1999), consiste en la producción de celulasas in situ para facilitar el
proceso de sacarificación y fermentación simultáneas. El costo estimado del etanol
obtenido por este proceso es de 0,36 USD/l. Se estima que con los progresos de la
ingeniería metabólica, se podrá llegar en el futuro a precios de 0,11 USD/l (Wooley et al.
1999).

62
Las líneas en las que se trabaja para reducir los costos en estos procesos son las siguientes:

•Desarrollo de reactores a contracorriente para el pretratamiento de la biomasa.


•Métodos eficientes de extracción de la lignina y búsquedas de nuevas aplicaciones para la
misma.
•Integración y optimización de todas las operaciones unitarias del proceso.
•Mejorar la eficiencia de las celulasas y hemicelulasas.
•Diversificar las producciones, incluyendo derivados del etanol.
•Solucionar los residuales del proceso.

En 1989 el CIEMAT (Ballesteros I. 1998) comenzó un programa de investigación


enfocado a la obtención de levaduras capaces de producir etanol con buenos rendimientos a
temperaturas superiores a 40ºC. Como resultado de estos trabajos, y mediante mutagénesis
química, se ha obtenido una cepa mutante de Kluyveromyces marxianus que permite
obtener rendimiento en etanol superiores en un 50%.

El desarrollo de los procesos continuos presenta una serie de ventajas sobre los realizados
en batch, que incluyen la posibilidad de mantener una alta concentración de células en el
reactor, la posibilidad de utilizar conceptos avanzados en la configuración de los reactores,
minimizar el costo de obtención del producto, etc.

Todas estas ventajas han conducido a que sean los reactores continuos los más empleados
en la industria de obtención de etanol a partir de cereales. Sin embargo, se han realizado
pocos estudios experimentales sobre diseño de bioreactores para la conversión en continuo
de biomasa lignocelulósica a etanol.

Sin duda, los avances tecnológicos que se realicen en los próximos años en este campo
permitirán desarrollar procesos para transformar la biomasa lignocelulósica a etanol y otros
combustibles de manera eficiente y a menores costos que los actuales.

63
VII. 3. Ingeniería metabólica de microorganismos para la conversión de lignocelulosa
a etanol
La Ingeniería Metabólica se define como “La mejora en la formación de productos o en las
propiedades celulares, a través de la modificación de reacciones bioquímicas específicas o
la introducción de nuevas mediante tecnologías de ADN recombinante” (Bailey, 1991;
Stephanopoulos, 1998).

En la tabla 6, se muestran los requisitos esenciales y deseados que deben tener los
microorganismos para utilizarse en la fermentación de biomasa lignocelulósica.

Tabla 6. Requisitos esenciales y deseados de los microorganismos


Requisitos Esenciales Requisitos deseados
Amplio rango de sustratos Actuar sobre diferentes azúcares
Alto rendimiento y productividad en etanol Hidrolizar celulosa y hemicelulosas
Mínima formación de subproductos Estatus GRAS
Alta tolerancia al etanol Reciclable
Alta tolerancia a inhibidores Mínimo suplemento de nutrientes
Resistente al medio (pH, fuerza iónica, temp., Conc. de Resistencia a bajos pH y altas
etanol) temperaturas
GRAS – Generalmente considerado seguro Agencia FDA de Estados Unidos

El microorganismo preferido en los procesos fermentativos, Saccharomyces cerevisiae, es


incapaz de fermentar las pentosas y por lo tanto de uso limitado en la fermentación de la
biomasa lignocelulósica con alto contenido de pentosas, a menos que se le modifique
genéticamente. Lo mismo ocurre con la bacteria etanologénica Zymomonas móbilis.

Existen dos grupos de microorganismos que son capaces de fermentar las pentosas, como
las bacterias entéricas y algunos tipos de levaduras, pero con el inconveniente de bajos
rendimientos de etanol. En el caso de levaduras que fermentan xilosas como son la
Pachysolen tannophilus, Cándida shehatae y Pichia stipitis, su utilización a gran escala se
ve limitada por la sensibilidad de las mismas a concentraciones de etanol mayores de 40 g/l,
requerir un cuidadoso monitoreo de las condiciones microaerofílicas, alta sensibilidad a los

64
inhibidores y la incapacidad de fermentar la xilosa a bajos valores de pH. (Hahn-Hägerdal
et al 1994; Chandrakant y Bisaria 1998).

Debido a la falta de un microorganismo natural para la fermentación eficiente de sustratos


lignocelulósicos, se hace un énfasis especial en la construcción por ingeniería metabólica,
de microorganismos eficientes para este proceso (Hahn-Hägerdal et al., 1994; Chandrakant
y Bisaria 1998). .

Como las bases moleculares para explicar algunas de las propiedades de los
microorganismos no están bien comprendidas, como por ejemplo la tolerancia al etanol,
procedimientos como la mutagénesis y el tamizado han probado ser de utilidad en el
desarrollo de microorganismos que cumplan con los requerimientos necesarios para la
fermentación de materiales lignocelulósicos.

Como resultado de esta estrategia, a partir del inicio de los años 80, se han desarrollado una
variedad de microorganismos con perspectivas para la fermentación de estos materiales.
Las plataformas con mayores perspectivas y sobre las que se realizan los mayores esfuerzos
son la S. Cerevisiae, Z. Movilis y Echerichia coli (Yu, 2003).

La S. Cerevisiae, presenta varios de los requisitos de la tabla, como altos rendimientos en


etanol y productividad, alta tolerancia al etanol, a las condiciones del medio, a bajos pH y
es seguro su empleo.

En condiciones anaeróbicas, es capaz de convertir 1 mol de glucosa en 2 moles de etanol y


CO2 a través de la vía glicolítica. El proceso se lleva a cabo normalmente a pH 5 y 30oC.
Se realizan tres enfoques para lograr que este microorganismo fermente la xilosa, que es la
pentosa más común en las hemicelulosas. La inserción de genes bacteriales de xilosa
isomerasa, la inserción de genes que utilizan pentosas de P. stipitis y el mejoramiento del
consumo de xilulosa.

65
La inserción del gen bacterial xilosa isomerasa (de E. coli, Bacillus subtilis o Termos
thermophilus), no provocó la fermentación de la xilosa. Esto se atribuyó a diferentes
factores como las diferencias en el pH interno entre la bacteria y la levadura y otras causas
(Sarthy et al. 1987; Amore et al. 1989, citados por Zaldivar J.y col. 2001).

La inserción de genes XYL1 (xilosa reductasa) y XYL2 (xilitol dehidrogenasa), de P.


stipitis, hace que la S. Cerevisiae crezca en la xilosa y produzca bajos niveles de etanol (1,6
g de etanol/l de 21,7 g de xilosa/l, lo cual no es suficiente para un proceso económicamente
viable.

El mejoramiento del consumo de xilulosa, se ensayó por Deng y Ho (1990) (citado por
Zaldivar J. y col. 2001), mediante la inserción de genes de S. Ccereviciae y genes
heterológos de XYL1 y XYL2 de P. stipitis, los cuales se insertaron en un huésped híbrido
obtenido por el cultivo de S. uvarum y S. diastáticus, obteniéndose la cepa Saccharomyces
1400 pLNH32, capaz de crecer en xilosa solamente con un rendimiento del 66% del
teórico. Sin embargo, el rendimiento obtenido de xilitol fue aún alto.

Otra cepa obtenida, la Saccharomyces 1400 pLNH33, fue capaz de crecer en glucosa y
xilosa, pero inestable en un medio no selectivo (Ho et al. 1993, citado por Zaldivar J.y col.
2001).

Otras modificaciones, como la integración cromosomal, resultaron en la obtención de la


Saccharomyces 1400 LNH-ST, que crecía bien en mezclas de xilosa y glucosa con
rendimientos del 70% del teórico en un proceso continuo en dos etapas. (Toon et al. 1997,
citado por Zaldivar J. y col. 2001).

El enfoque actual para mejorar la conversión de las pentosas en la S. cerevisiae, es la


inserción de genes para el metabolismo de arabinosa y transporte de xilosa. Para la
arabinosa, una buena fuente de genes son las levaduras como la Cándida aurigiensis y para
el transporte de xilosa, la P. stipitis.

66
El segundo microorganismo etanologénico, Z. mobilis, que se emplea en la producción de
bebidas, fermenta a pH 5 y entre 30 y 40ºC. Tiene un rendimiento del orden del 97% del
teórico. Para ampliar su espectro de sustratos fermentables, se emplea la estrategia de
insertarle genes que le permitan la utilización de la xilosa y la arabinosa.

Mediante este procedimiento, se han obtenido cepas como las Z. movilis CP4 (pZB5),
ATCC 39676 (pZB186) y 206C (pZB301), capaces de fermentar la xilosa y arabinosa con
altos rendimientos (>80%) (Zaldivar J. y col. 2001).

La E. coli y algunas bacterias entéricas, poseen de forma natural un amplio rango de


utilización de sustratos, convirtiendo hexosas (glucosa, manosa, galactosa, fructosa),
pentosas (xilosa y arabinosa), y ácidos urónicos (ácido galacturónico y glucurónico) al
metabolito central piruvato. Este compuesto se convierte posteriormente a una mezcla igual
de etanol, lactato, acetato y formiato (H2O y CO2). Normalmente, la fermentación se lleva a
cabo a pH 7 y a temperaturas de 30 a 35ºC.

La principal estrategia para incrementar la producción de etanol a partir de E. coli y hacer


este proceso factible para sustratos obtenidos a partir de biomasa lignocelulósica, es
mediante la redirección del flujo de carbono, hacia la producción de etanol, mediante la
inserción de genes de Z. movilis y otras vías (Zaldivar J. y col. 2001).
Otro aspecto al que se dirigen las investigaciones en el campo de la Ingeniería Metabólica,
es al incremento de la tolerancia de los microorganismos a los inhibidores.

Teniendo en cuenta la estructura compleja de los materiales lignocelulósicos y la necesidad


de separar las hemicelulosas, lignina y celulosa, para hidrolizar las hemicelulosas y la
celulosa a azúcares simples, los procesos de prehidrólisis o hidrólisis, emplean en general
altas temperaturas, agentes químicos y otras condiciones que hacen que se generen también
otros compuestos que pueden constituir inhibidores para la posterior fermentación.

La cantidad y el tipo de los inhibidores presentes dependerán también de la fuente de


lignocelulosa, condiciones del proceso y otros factores (Clark, 1984; Buchert, 1990,

67
Buchert, 1991; Palmqvist, 1996; Palmqvist, 2000a, 2000b; Larsson, 1997; Larsson; 1999;
Taherzadeh, 1997ª; Stemberg, 1998). Los inhibidores que se generan pueden provenir de la
degradación de los azúcares (furfural de las pentosas, hidroximetilfurfural de las hexosas),
ácidos orgánicos por degradación u oxidación, derivados de la lignina e impurezas
inorgánicas (Fengel, 1984; Ranatunga, 2000).

Los inhibidores afectan la fisiología general de las células, disminuyendo su capacidad de


generación de etanol. En el caso de la S. cerevisiae se ha estudiado la inhibición provocada
por los furanos (Palmqvist, 1999a; Taherzadeh, 2000), ácidos alifáticos (Taherzadeh,
1997b, Palmqvist, 1999b) y compuestos aromáticos (Ando, 1986; Larsson, 2000).

También se han estudiado el efecto inhibidor sobre la Z. mobilis CP4 (pZB5) por parte de
algunos compuestos alifáticos y aromáticos (Ranatunga, 1997). Se han realizado también
estudios similares en la E. coli KO11 Y LY01 (Zaldivar, 1999, 1999ª; Zaldivar, 2000).

Se realizan diferentes estudios, en los procesos anteriormente citados, para limitar al


mínimo la formación de subproductos e incrementar la tolerancia de los microorganismos
al etanol, a los inhibidores y a las variaciones del medio (concentración de azúcares, pH,
temperatura y otras), así como aumentar la capacidad de utilizar a todos los azucares
simultáneamente (evitar la represión por glucosa) la posibilidad de rehusar los
microorganismos y reducir al mínimo los requerimientos de nutrientes.

Se reporta el empleo de Zymomonas mobilis modificada genéticamente con la integración


de seis genes que le permiten fermentar las pentosas y glucosa simultáneamente a partir de
biomasa lignocelulósica (Shi-Zhong Li 2006). La nueva cepa no requiere de antibióticos
para su mantenimiento. Las enzimas para el metabolismo de las pentosas, son
continuamente expresadas de forma estable durante el proceso de fermentación.

La Zymomonas mobilis modificada tiene las ventajas de requerir un mínimo de nutrientes,


crecer a bajos pH y altas temperaturas y es considerada GRAS.

68
En la tabla siguiente se muestra una comparación de la Zymomonas mobilis modificada y
echerichia coli, que muestra las ventajas de la misma.

Tabla 7. Comparación de la Zymomonas mobilis modificada y echerichia coli


Zymomonas mobilis echerichia coli
Etanol (g/l) 62 27
Rendimiento de Etanol ( % del teórico) 97 90
Productividad (g/l por hora) 1,29 0,92

VIII. Procesos industriales y a escala piloto utilizados en la obtención de


etanol a partir de biomasa lignocelulósica.

Existen en la actualidad varios procesos en desarrollo a escala piloto, patente y escala


industrial, así como diferentes proyectos para la obtención de etanol a partir de biomasa
lignocelulósica. El primer proceso semi-industrial inició sus operaciones a finales del 2006
en España.

A continuación se describen los principales procesos y tecnologías.

VIII. 1. Planta de Biomasa de BCyL


La primera planta de biomasa a escala semi-comercial del mundo, construida por Abengoa
Bioenergía para demostrar la tecnología de conversión de la biomasa en etanol, inició sus
operaciones a finales del 2006.

La planta procesará 70 toneladas diarias de residuos agrícolas, como la paja del trigo, para
producir más de 5 millones de litros de etanol carburante al año. Su objetivo final es el
desarrollo de tecnologías de producción competitivas con la gasolina. Considerando el
rápido incremento del precio de los productos derivados del petróleo, es cada vez más
urgente la necesidad de desarrollar tecnologías alternativas que den lugar a productos

69
químicos y a carburantes a partir de fuentes renovables, como son los residuos agrícolas
(paja de cereal, residuos de mazorcas de maíz, etc.).

Abengoa Bioenergy R&D (ABRD) es quien proporciona su tecnología patentada de


proceso, así como el diseño de la ingeniería de proceso de la Planta de Biomasa de BCyL.
Los objetivos fundamentales de la Planta de Biomasa son demostrar comercialmente el
proceso de conversión de biomasa en etanol, optimizar las unidades de proceso, y
establecer un punto de partida para una futura expansión de la industria del etanol. Además
de etanol, la planta producirá una cantidad suficiente de residuos de fermentación para el
desarrollo y análisis de coproductos, como son piensos animales y sustancias químicas.

Los principales pasos del proceso de la planta (como se muestra en la Figura 22) son los
siguientes: Almacenamiento y preparación de la materia prima, pretratamiento, hidrólisis de
la celulosa, fermentación del etanol y recuperación del etanol.

La materia prima lignocelulósica, como la paja de trigo y de cebada, es, en primer lugar,
molida y limpiada, y entonces se realiza un pretratamiento sobre la misma. La biomasa ya
pretratada es digerida por las enzimas, para liberar las moléculas de azúcar, que serán a
continuación fermentadas por las levaduras dando lugar a etanol y dióxido de carbono. El
etanol es recuperado en el proceso de destilación, y queda un residuo de la fermentación
que es procesado para obtener pienso animal, o bien para recuperar sustancias químicas de
sean de utilidad. ABRD tiene previsto implementar la segunda fase de este proyecto en el
otoño del 2007.

En esta segunda fase, la biomasa procesada experimentará un proceso de fraccionamiento,


que es una tecnología actualmente bajo desarrollo, para extraer la lignina, los azúcares de
cinco carbonos, y obtención de piensos animales.

70
Figura 22. Diagrama de proceso de la Planta de Biomasa de BCyL

Teniendo en cuenta que la Planta de Biomasa de BCyL es la primera demostración


comercial de Abengoa de la tecnología de conversión de biomasa en etanol en el mundo,
ABRD ha asumido en su diseño la siguiente filosofía:

1) Diseñar la Planta con la mayor flexibilidad posible para acoger futuros cambios en el
proceso y de modo que sea robusta, fácil de operar y de mantener.

2) Diseñar la Planta minimizando la inversión y optimizando el flujo de material para


minimizar tratamientos innecesarios, reducir necesidades de inventario, etc.; y usar equipos
ya probados y fiables siempre que sea posible.

Basada en el diseño del proceso de ABRD, Abener, la sociedad de Ingeniería y


Construcción de Abengoa, desarrolló la ingeniería de detalle.

Este proyecto supone un paso gigantesco hacia la comercialización de etanol procedente de


biomasa, que llevará a un crecimiento sostenible y beneficiará al medio ambiente.
71
Este esfuerzo aúna a socios de diversas comunidades de investigación y empresas
industriales para desarrollar y demostrar una tecnología competitiva de conversión de
biomasa en etanol.

Además, ABRD tiene la intención de aplicar alternativas y know-how novedosos para


mejorar el funcionamiento de la planta y reducir los costos de producción de bioetanol.

Usando datos obtenidos de la planta, ABRD podrá llevar a cabo un análisis del ciclo de
vida que, combinado con una evaluación económica, proporcionará un modelo práctico
para la conversión de biomasa en etanol, pienso y sustancias químicas.

La Figura 23 muestra la localización de la Planta de Biomasa, junto a la planta de etanol de


cereal que produce 195 millones de litros anuales. La localización conjunta y la integración
de la producción de etanol de biomasa con la de cereal tienen el fin de reducir la inversión y
los costos de operación de la Planta de Biomasa.

Abengoa Bioenergía usará la Planta de Biomasa de BCyL como trampolín para el


desarrollo y lanzamiento de tecnologías competitivas de conversión de la biomasa, que
aseguren a la compañía un crecimiento sostenible y a largo plazo.

72
Figura 23. Localización de la Planta de Biomasa de BCyL (junto a la Planta de Etanol
de Cereal de 195 MML/año)

VIII. 2. Tecnología SunOpta (Wiekenkamp S. 2006)


Compañía canadiense que incluye entre sus tres unidades de trabajo al Grupo StakeTech
Steam Explosion, reconocido por su experiencia de más de 30 años y liderazgo mundial en
la preparación, pretratamiento y en las tecnologías de explosión con vapor para el
tratamiento de la biomasa.

El proceso de pretratamiento de la paja de trigo, en la planta de Abengoa, será suministrado


por SunOpta, basado en la explosión con vapor, pero enfocado a la producción de etanol a
partir de la biomasa, después de estudios realizados en sus instalaciones experimentales en
Norval, Ontario. Las enzimas necesarias serán suministradas por Novozymes.

También, SunOpta, le ha transferido su proceso continuo de explosión con vapor para el


tratamiento de la biomasa a la Compañía Celunol (anteriormente BC International) para una
planta demostrativa en Louisiana, Estados Unidos. Las materias primas posibles incluyen

73
paja de trigo y otros cultivos, residuos lignocelulósicos de la cosecha del maíz, pajas,
aserrín, bagazo de caña y otros materiales lignocelulósicos.

La tecnología de Celunol para la fermentación, se basa en el empleo de Echerichia coli


modificada por ingeniería genética lo cual le permite fermentar las hexosas y pentosas
presentes en la biomasa lignocelulósica.

SunOpta, también construirá una planta demostrativa para la producción de etanol a partir
de residuos lignocelulósicos en China, en un acuerdo de desarrollo conjunto con la
Corporación China de Fuentes de Alcohol (CRAC) y la firma Novozymes.

VIII. 3. Proceso Iogen


Iogen es una empresa canadiense fundada en los años 70. Las investigaciones de esta
compañía han desarrollado un proceso a partir de paja/madera para la obtención de etanol
de lignocelulosa y la producción y márketing de enzimas para varias aplicaciones.

Iogen es la única compañía canadiense productora de enzimas industriales, y tiene en


funcionamiento desde 1985 unas instalaciones donde se procesa una tonelada diaria. En
estas instalaciones Iogen desarrolló sus sistemas de procesamiento de vanguardia,
ampliando su planta de etanol a 40 toneladas diarias en 2000.

El proceso de Iogen consiste en una hidrólisis enzimática para transformar biomasa


lignocelulósica en etanol. El aspecto excepcional de esta técnica lo conforma el tratamiento
previo de auto-hidrólisis rápida (steam treatment), del que Iogen fue pionera mientras se
desarrollaban, fabricaban y sacaban al mercado las enzimas patentadas.

Iogen posee patentes de ciertos aspectos del proceso de auto-hidrólisis rápida y la


producción de enzimas en Canadá y otros países. El diagrama del proceso se muestra en la
figura 24.

74
Figura 24. Proceso IOGEN

El tratamiento previo conlleva una auto-hidrólisis rápida con ácido diluido que se mantiene
a temperatura y presión elevadas. La hidrólisis y fermentación son pasos llevados a cabo a
temperatura y presión ambiente. La destilación es el proceso común del etanol.

El proceso Iogen es apropiado para los residuos agrícolas, tales como los del maíz y el
trigo. Los residuos de maderas duras también se pueden emplear como materia prima.

Después de dejar secar el cáñamo, sólo se requiere cortarlo en pequeños trozos de poco más
de un centímetro. Iogen extrae la lignina antes de la fermentación argumentando que así se
eliminan algunos de los inhibidores de la levadura y la hace mucho más efectiva.

Debido al relativamente ligero tratamiento previo, la lignina puede ser utilizada para la
producción de una resina de fenol formaldehído. No obstante, Iogen utiliza en la actualidad

75
la lignina como combustible en centros de cogeneración, de hecho este producto del
proceso del etanol suministra toda la energía a las instalaciones y se venden los excedentes
energéticos a la red eléctrica nacional.

Empleando la proporción de peso seco de biomasa con relación a la producción de energía


facilitada por Iogen, se calcula la cantidad de terreno necesaria para suministrar la materia
prima a las instalaciones. Dado que se pueden obtener 275-300 litros de etanol por cada
tonelada de biomasa seca, de una producción de 17 t/ha proporciona unos 5100 l/ha. Unas
instalaciones que produjeran unos 45 millones de litros al año necesitarían
aproximadamente 7.446 hectáreas.

Los costos básicos asociados a la producción de etanol ligno-celulósico derivan de la


producción de las enzimas necesarias para procesar la compleja cadena de carbohidratos y
del costo de la materia prima. Es necesaria la construcción de tres instalaciones; una planta
de etanol, una planta de fabricación de enzimas y un centro de cogeneración para la lignina
que suministrará la electricidad a todas las instalaciones además de proporcionar unos
ingresos anuales de 500.000 dólares.

Los gastos de construcción de las tres instalaciones se calcula que son de unos 100 millones
de dólares (EE.UU.), pero el costo de este capital inicial se compensa con una rentabilidad
estimada del capital del 20%, la creación de empleo (directo e indirecto) y reducciones en
la importación de combustible.

VIII. 4. Proceso BioGasol


En la Figura 25, se muestra el esquema del proceso BioGasol. El mismo se diseñó para la
obtención de etanol a partir de paja de trigo. Las principales características de este proceso
son el pretratamiento por explosión con vapor en equipos especialmente diseñados para este
fin, fermentación del tipo SSF (sacarificación y fermentación simultáneas) en un sistema de
reactores de alta eficiencia, separación y fermentación separada de las xilosas y obtención
de biogás a partir de los residuos por tratamiento anaeróbico.

76
La compañía aporta la tecnología y la ingeniería del proceso.

Figura 25. Proceso BioGasol

VIII. 5 Proceso ARKENOL


Consiste en la hidrólisis de la biomasa lignocelulósica, empleando ácidos concentrados.
Se basa en la decristalización de la celulosa provocada por los ácidos concentrados, seguida
por la hidrólisis de los azúcares con ácidos diluidos hasta cerca de los rendimientos
teóricos.

La separación del ácido de los azúcares, su recuperación y reconcentración, son


operaciones unitarias críticas en el proceso. La fermentación posterior, convierte los
azúcares en etanol. El Grupo Alkenol y Masada tienen planes de usar este proceso en sus
plantas de bioetanol.

77
Proceso.
La habilidad del ácido sulfúrico concentrado para disolver y luego hidrolizar con ácido
diluido al algodón nativo se reportó en la literatura en 1831. El ácido concentrado rompe
los enlaces de hidrógeno entre las cadenas de celulosa y por tanto su estructura cristalina,
convirtiéndola en una estructura amorfa, formando una gelatina con el ácido, susceptible de
ser hidrolizada con ácido diluido. De esta forma, la dilución en este estado con agua a bajas
temperaturas, provoca una hidrólisis cuantitativa de la celulosa, con muy poca degradación.
De hecho, se emplea este principio para cuantificar el contenido de glucosa en celulosa, y
determinar el contenido de lignina.

Entre 1937 y 1948 (Harris, E. E. 1949), durante la segunda guerra mundial, se desarrollaron
varios procesos industriales para hidrolizar residuos lignocelulósicos de la cosecha de maíz
y otros cultivos, en los cuales, en general la fracción rica en glucosa se fermentaba a etanol,
con un rendimiento del orden del 85-90% del teórico. La lignina representaba un residual.
Uno de los procesos, empleaba la separación por membrana para separar los azúcares del
ácido, con un 80% de recobrado (Wenzl, H.F.J 1970).

Basado en el empleo del ácido sulfúrico, está el proceso Peoria, aplicado por la Universidad
Purdue y la Autoridad del Valle de Tennesee (TVA) (Broder, J. D.; Barrier, J. W.;
Lightsey, G. R 1992). Las principales mejoras realizadas consistieron la disminución del
consumo y en el reciclado del ácido.

En la figura 26 se muestra un esquema del proceso empleado.

78
Figura 26

En el proceso Arkenol, la decristalización se realiza por la adición de ácido sulfúrico al


77% sobre la biomasa lignocelulósica al 10%. El ácido se añade en una relación de 1.25/1
sobre la biomasa lignocelulósica. La temperatura se mantiene a menos de 50ºC. Mediante
la adición de agua, el ácido se diluye al 20-30% y se calienta a 100ºC durante 1 hora, para
hidrolizar los azúcares. El gel formado, se prensa para extraer la fracción azúcares-ácido. El
residuo se somete a una segunda hidrólisis.

Una mejora del proceso introducida por TVA e investigadores de la Universidad de


Mississippi (Nanguneri, D. R.; Hester, R. D 1990), consistió en el empleo de una columna
cromatográfica para la separación con un alto rendimiento de los azúcares y el ácido.

La fermentación convierte tanto las xilosas como la glucosa con un rendimiento del 85% y
92% respectivamente. Se requiere de un evaporador de triple efecto para reconcentrar el
ácido. El recobrado de azúcares en la columna de separación del ácido-azúcar es del 98%
(Yancey, M. A 1997 y Farone, W. A 1996 a, b)

79
Los procesos con ácido sulfúrico concentrado, se emplearon especialmente en la antigua
URSS y Japón, en épocas de crisis, ya que en general no eran económicamente viables. En
la actualidad, con las mejoras en los procesos de separación, recirculación y disminución
del consumo del ácido, existen posibilidades de abrir de nuevo su aplicación comercial, en
especial en casos de biomasa lignocelulósica disponible a bajos precios o residuos que
representen problemas medioambientales (Wright, J. D 1984).

Existe un proyecto en ejecución en el condado de Sacramento, California, para obtener


bioetanol a partir de paja de arroz, donde además se aprovecha la sílice. Se empleará una
cepa de Zymomonas Mobilis recombinante para la fermentación (Anónimo 1997).

Se ha explorado la producción de Etanol a partir de residuos sólidos urbanos (RSU). El


proceso de obtención de bioetanol a partir de estos residuos por hidrólisis ácida ya se ha
patentado (Titmas, 1999) y se ha reportado que la compañía Masada Resource Group
planea iniciar antes del 2010 la operación de la primera planta productora de Etanol en
EEUU a partir de RSU en Middletown, New York (Ames y Werner, 2003).

Otro enfoque comprende la hidrólisis enzimática del almidón y la celulosa presentes en


forma mayoritaria en los RSU de origen vegetal procedentes de plazas de mercado para su
conversión posterior a Etanol (Cardona et al., 2004), resultando difícil la conversión de la
celulosa pero no la del almidón y verificándose la posibilidad de obtener alcohol a partir de
estos residuos vegetales.

VIII. 6. Proceso de Y.H. Percival Zhang (Virginia Tech.2006)


Y.H. Percival Zhang es Profesor Asistente de Ingeniería de Sistemas Biológicos en el
Colegio de Agricultura y Ciencias de la Vida en el Instituto Tecnológico de Virginia,
Estados Unidos y colaborador del NREL (National Renewable Energy Laboratory).

El proceso de obtención de etanol a partir de biomasa lignocelulósica, consiste en el


empleo de solventes orgánicos en la etapa de pretratamiento, hidrólisis con ácidos

80
concentrados y solventes orgánicos. Este proceso tiene las ventajas de realizarse a presión
atmosférica y temperaturas de 50ºC, lo que evita la formación de inhibidores de la
fermentación.

En la etapa de pretratamiento en sistemas multietapas, el proceso emplea un solvente fuerte


de la celulosa, para separar la celulosa, hemicelulosas y lignina, en lugar de ácidos
corrosivos, altas temperaturas y presiones.

Posteriormente al pretratamiento y reciclado de reactivos, la biomasa lignocelulósica se


fracciona en cuatro productos:

• Lignina
• Azúcares de las hemicelulosas
• Celulosa amorfa
• Ácido Acético

Este fraccionamiento permite revalorizar estos productos y hacer más flexible el proceso, al
convertirlo en una biorefinería.

La celulosa amorfa se puede hidrolizar con facilidad con altos rendimientos para fermentar
a etanol. Se plantea que el proceso es viable económicamente.

VIII. 7. Proceso Honda de Etanol de Biomasa (Anon. 2006)


Honda Motor Co. ha desarrollado un proceso para producir etanol a partir de biomasa
celulósica. Para perfeccionar el proceso, Honda se ha unido en sociedad con el Instituto de
Investigaciones de Tecnología Innovadora para la Tierra (RITE), entidad no lucrativa
creada por el gobierno japonés y empresas privadas.

El proceso se puede emplear para producir grandes volúmenes de etanol a partir de


desechos maderables, hojas y otras biomasas blandas ampliamente disponibles. Usa un

81
microorganismo desarrollado por RITE que contribuye a reducir la interferencia con la
fermentación, permitiendo una producción de etanol más eficiente.

La unidad investigadora de Honda R&D Co. planea establecer una compañía piloto en 2008
con el fin de probar la tecnología en aplicaciones prácticas.

VIII. 8. Proceso ACOS (Acid Catalized Organosolv Sacharification) (ACOS 2006)


Diseñado para la obtención de bioetanol a partir de maderas y bagazo de caña de azúcar. El
proceso combina la hidrólisis con ácido diluido (Schoeller/Madison), con el organosolv. El
resultado es la hidrólisis y disolución total de los carbohidratos presentes en la biomasa
lignocelulósica (celulosa y hemicelulosas) y extracción de la lignina. El rendimiento total
es de más del 98%. No se generan inhibidores de la fermentación. Las pentosas y glucosa,
se pueden fermentar a etanol, o emplearse como materia prima para otros productos
(biorefinería).

Como solvente se emplea la acetona. El proceso se puede aplicar a cualquier material


lignocelulósico, incluyendo el papel reciclado y residuos forestales y de cosechas. Es de
gran flexibilidad. Puede producir una gran variedad de productos como Etanol, ácido
láctico, xilitol, lignosulfonato, fertilizantes, CO2, ceras y otros productos.

La capacidad propuesta de una planta de esta tecnología es de 350 t/d (base seca) de
biomasa lignocelulósica, que requeriría de 8000-8500 ha tomando como referencia la caña
de azúcar. Refieren que se puede obtener etanol a un costo menor de 0,20 USD/l.

82
Figura 27. Proceso ACOS

VIII. 9. Proyecto Piloto MAXIFUELS


Proyecto para la obtención de bioetanol a partir de paja de trigo en el que participan DTU –
Biocentrum (Project Manager) de Dinamarca y la firma Novozymes. En la figura 28 se
muestra un esquema del proceso empleado. La fermentación se realiza por el sistema SSF.
La glucosa y xilosa se fermentan separadamente.

83
Figura 28. Diagrama de flujo del proceso

En la figura 29, se muestra la etapa de pretratamiento, que se realiza por explosión por
vapor. Se genera metano e hidrógeno en el proceso.

Figura 29. Etapa de pretratamiento

84
IX. El Mercado del Etanol

Figura 30. Proyecciones del crecimiento del mercado de etanol

En la figura 30 se muestran los pronósticos en el crecimiento de la producción mundial de


etanol en el 2004. Para el 2008, se esperaban producciones en el orden de los 55000
millones de litros. Sin embargo, el crecimiento ha sido mayor de lo esperado, alcanzando la
cifra de los 63,5 millones de litros.

Según el Informe del Estado Global de los Renovables en 2007 divulgado en Washington
(REN 21, 2008), un 4% del consumo mundial de gasolina en el 2007 (1300 MMM de
litros), se sustituyó por eletanol. Una adición promedio de un 10% a la gasolina,
incrementaría su demanda a más del doble de la producción actual. Estas demandas no
podrán ser cubiertas mediante la obtención de etanol a partir de azúcares o granos, las que
alcanzarán su límite en pocos años y solamente se podrán cubrir con la producción de
etanol a partir de residuos lignocelulósicos (O. Rojas, 2006).

En la Figura 31 se muestran las producciones de etanol, hasta el 2008, donde se destaca


que la mayor parte de la producción actual se emplea como combustible automotor.
85
En la Figura 32, aparecen las producciones Brasil y Estados Unidos y el resto del mundo,
entre el 2000 y el 2009, donde puede apreciarse que en estos dos países se concentra cerca
del 86% de la producción mundial.

Países como Estados Unidos, Brasil y otros países sudamericanos ven en los
biocombustibles la posibilidad de reducir su dependencia a las importaciones de petróleo,
aunque los mismos aún no representen un ahorro significativo con respecto a los
hidrocarburos.

80

70 Mundial

60 Etanol Combustible

50
MMM L

40

30

20
10

0
1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009

Año

Figura 31. Producción mundial de etanol (OIA 2008)

86
Figura 32. Figura 32 Producción de etanol de Brasil, Estados Unidos y el resto del
mundo (OIA, 2009)

X. Problemas vinculados a la producción de etanol.


X. 1. La formación de CO2

C6H12O6 2CH3CH2OH + 2CO2

La ecuación general de obtención de etanol a partir de la glucosa proveniente de cualquier


fuente genera a un 100% de rendimiento para 1 t de glucosa, 0,51 t de etanol y 0,49 t de
CO2. En general, el CO2 se aprovecha parcialmente en la producción de hielo seco.

El incremento de la producción de etanol, hará muy difícil el aprovechamiento del CO2 en


las cantidades gigantescas que se obtendrá. Se reporta su uso en la obtención de
bicarbonato de sodio (Profana, 2007), pero esa solución solamente permitirá aprovechar
una pequeña fracción.

La producción de etanol sin una solución para el CO2 generado, implicaría el envío a la
atmósfera del mismo, lo cual descartaría esta producción como “amigable” con el medio
ambiente.

87
X. 2. Las vinazas
La producción de etanol genera grandes cantidades de vinaza, que tiene varias aplicaciones.
Sin embargo, al incrementarse la producción de etanol, va a ser difícil buscar mercado para
los posibles productos, por lo que será necesario disponer de manera adecuada la vinaza,
para que no constituya un problema medioambiental.

X. 3. El etanol en mezclas con gasolina


La única ventaja clara de la mezcla de etanol con gasolina es económica, debido al alto
precio de la misma. Sus implicaciones medioambientales no están claras. Existen opiniones
de que su combustión en mezcla con la gasolina, puede generar acetaldehído, ozono y
compuestos cancerígenos (BBC 2007).

X. 4. Problemas de la obtención de etanol a partir de biomasa lignocelulósica


Además de los problemas generales relacionados con la obtención de etanol, se encuentran
los siguientes.

A pesar de la gran disponibilidad de materiales y residuos lignocelulósicos, es decisivo el


proceso de recolección, manipulación, almacenamiento y preparación del material, así
como la concentración del mismo en t/ha.año. Estos aspectos pueden hacer o no un proceso
viable.

• Existen varias posibilidades de pretratamiento, los cuales en general no se han


optimizado.
• El proceso de fermentación de las pentosas de las hemicelulosas en etanol no es
viable aún por el costo elevado de las enzimas requeridas.
• No está clara qué solución darle a la lignina presente en los materiales
lignocelulósicos, que constituyen el 25% aproximado del material.
• El costo actual del etanol obtenido por esta vía es en la actualidad superior al de los
procesos con azúcares y granos.

88
XI. Posibilidades del bioetanol como sustituto de la gasolina
XI.1. Tierras dedicadas a la agricultura
En la Figura 33, se muestra el porcentaje actual del área mundial dedicado a la agricultura,
que representa solamente el 11,5% del total. Incluye el suelo con cultivos no permanentes y
suelo con cultivos permanentes y a los prados temporales para segar o pastos (FAO 2006).

En la Tabla 8 aparecen los 30 países con mayor cantidad de tierras dedicadas a la


agricultura (FAO 2006) (en el orden de 100 000 km2 y mayor). Los países con mayores
áreas dedicadas, coinciden con los de mayor extensión, pero con porcentajes variables de
utilización, que dependen de varios factores como son áreas desérticas, pantanos,
condiciones climáticas extremas, densidad de población y otros factores.

11,5 %

Área terrestre total (1) (km2) 133662342,0


Área dedicada a la agricultura (km2) 15356738,1
Porcentaje (%) 11,5
(1) Incluyendo aguas interiores

Figura 33. Área terrestre dedicada a la agricultura

89
Tabla 8. 30 países con mayor cantidad de tierra dedicada a la agricultura
% D. Área D. Ag. % D. Área D. Ag.
2
País Ag. km País Ag. km2
Estados Unidos 19,2 1886713,0 Pakistán 26,1 207780,8

India 57,1 1807555,3 Francia 35,6 193651,5


1588835,8 184576,0
China 16,6 Irán 11,2
Rusia 7,6 1297715,2 Sudán 7,3 182923,4

Brasil 7,9 675244,9 Tailandia 34,6 177537,8

Canadá 5,7 569126,2 Sudáfrica 12,9 157262,6

Australia 6,2 476302,6 Níger 11,4 144438,0

Indonesia 19,0 361863,3 Etiopía 11,8 133738,8

Ucrania 57,6 347731,2 Polonia 42,1 128825,8

Nigeria 36,7 339022,9 Alemania 34,5 123154,7

Argentina 10,6 294722,4 Myanmar 16,7 112984,2

México 14,3 280906,6 Italia 36,4 109681,6

Turquía 33,8 263454,8 Filipinas 35,9 107700,0

Kazajstán 8,4 228253,2 Rumania 42,9 101887,5

España 42,1 213021,8 Bangladesh 64,7 95477,8

Área total
6,23% cultivada en
1,0MMkm2
30 países
África (km2) 12792089,7
18,1% 34,83%
2,8MMkm2 5,35MMkm2 Área total
Europa cultivada
Asia/Oceanía en el
mundo
24,14%
3,7MMkm2
(km2) 15356738,1
% 83,3
América Área total
30 países 89991706
% total 67

Figura 34. Distribución por continentes del área dedicada a la agricultura por los 30
países seleccionados.

90
En la Figura 34, se muestra la distribución por continentes del área dedicada a la agricultura
por los 30 países seleccionados (FAO 2006). Se puede apreciar que estos países poseen el
83,3% del total del área cultivable del mundo, a pesar que representan el 63% del área total
mundial. Entre estos 30 países, por continentes, Asia y Oceanía y América presentan las
mayores áreas cultivables.

Es posible que en los próximos años, pueda producirse un incremento en el área cultivable
en algunos países y regiones, en especial en África, América Latina y Asia/Oceanía, pero a
su vez, factores como la urbanización, desertificación, disminución de áreas costeras,
deforestación y otros, provocan una disminución del área cultivable, por lo que el balance
global puede ser negativo.

En la actualidad, es necesario planificar a mediano y largo plazo la estrategia de utilización


de la tierra de manera racional para cubrir las necesidades de alimentación, urbanización,
generación de energía, áreas de bosques y represas y lagos artificiales para el
almacenamiento de agua dulce.

XI. 2. El bioetanol lignocelulósico como sustituto de la gasolina

En la figura 35, aparecen las reacciones de obtención de etanol a partir de celulosa


(glucosa) y hemicelulosas (xilosa). A partir de los rendimientos de etanol teóricos,
considerando que la celulosa se convierte en glucosa y las hemicelulosas en xilosa, se
puede hacer un ejercicio para calcular la cantidad de etanol que podría producirse en el
10% de la tierra cultivable del mundo (Abril A. 2008).

Otras consideraciones fueron las siguientes:


•Siembra de pinos y de caña de azúcar de altos rendimientos en biomasa seca.
•Conversión de toda la holocelulosa (celulosa y hemicelulosas) en etanol (80% de
rendimiento).
•Conversión de la celulosa, hemicelulosas y azúcares de la caña en etanol.

91
(1) C6H12O6 2CH3CH2OH + 2CO2
1t 0,51 t 0,49 t
Celulosa

(2) 3/5 C5H10O5 CH3CH2OH + CO2


1t 0,51 t 0,49 t
Hemicelulosas

Figura 35. Reacciones de obtención de etanol a partir de biomasa vegetal

En la Tabla 9, se muestran los resultados.

Tabla 9. Estimados de producción de etanol a partir de pinos y caña de azúcar en el


10% de las tierras cultivables del mundo (EtOH: Etanol)
Área cultivable en el mundo (ha) 1535,7 Millones
10% del área cultivable mundial(ha) 153,6 Millones
Plantación Pinos Caña azúcar(*)
Área a cultivar (ha) 76,8 MM 76,8 MM
Rendimiento biomasa seca 15 t/ha/año 60 t/ha/año.
Contenido de holocelulosa 70% -
Rendimiento de conversión en EtOH 80% -
Índice de obtención de EtOH 5355 L/ha/año 7800 l/ha/año
Total de EtOH en 76,8 MM ha 411264 MM L/año 599040 MM L/año
Total 1010304 MM de L/año
Demanda estimada gasolina 2020 2000 000 MM Litros

(*)Uso de azúcar, bagazo y miel. Estimado 130 L etanol por tonelada de caña.

A pesar de los altos rendimientos de etanol y las condiciones extremas considerados,


solamente se podrían cubrir el 50% de las demandas de gasolina previstas para el 2020.

Por lo anterior, es de esperar que en las condiciones actuales, el etanol solamente podrá
jugar el papel de aditivo de la gasolina, para extender su uso y nunca podría ser un sustituto
de ésta, a excepción de algunos países como Brasil por un tiempo determinado.

92
Es interesante el hecho de que la mayoría de los proyectos en ejecución para el desarrollo
del etanol lignocelulósico, son financiados por las grandes compañías de petróleo.

Las perspectivas del etanol como combustible automotor parecen estar ligadas a las de la
gasolina, por lo que no parece ser una opción ventajosa a mediano y largo plazo.

93
XII. Consideraciones Finales
• La producción de bioetanol a partir de biomasa lignocelulósica, podría ser de interés en
la coyuntura actual de crisis cíclicas en el suministro y precios del petróleo para los
países (en general en vías de desarrollo) que no disponen de fuentes fósiles de energía,
pero con climas apropiados para la generación de biomasa y disponibilidad de residuos
agrícolas baratos. .
• Existe en la actualidad un rechazo por consideraciones éticas, a la producción de
bioetanol y biodiesel para su empleo como combustible a partir de productos
alimenticios como azúcares, granos, maíz y aceites comestibles.
• Un aspecto importante a tener en cuenta en la producción de etanol a partir de biomasa
lignocelulósica, es su competencia con el uso de la tierra para la producción de
alimentos, la urbanización, áreas industriales, reservas forestales, industria forestal,
creación de zonas industriales y generación de energía mediante energía eólica, celdas
fotovoltaicas y otros usos del terreno. El área aprovechable de la tierra es constante, por
lo que las decisiones a tomar en cuanto a su empleo serán de importancia estratégica.
• El crecimiento en la producción de etanol solamente podrá ser posible a partir de la
biomasa lignocelulósica. El empleo del etanol como combustible automotor, solamente
tendrá sentido en mezclas con la gasolina, de acuerdo a las demandas crecientes de
combustibles. Su empleo como combustible único podría darse de forma puntual en
países como Brasil, en períodos de tiempo limitados.
• Las tecnologías de obtención de etanol a partir de biomasa lignocelulósica no están
optimizadas en la actualidad y no compiten aún económicamente con las tradicionales.
La fermentación de las hemicelulosas y la disposición de la lignina no están resueltas.
• La recolección, manipulación, almacenamiento y preparación del material, así como la
concentración del mismo en t/ha.año, son aspectos fundamentales que en general no han
sido suficientemente estudiados para la viabilidad del proceso.
• Ya inician su operación con fines demostrativos plantas de obtención de etanol a partir
de biomasa lignocelulósica, que permitirán divulgar sus ventajas y difundir esta
tecnología.

94
• El empleo del etanol como combustible automotor tiene aspectos relacionados con su
impacto medioambiental que no están aún bien definidos. En especial los productos de
su combustión, la disposición de las vinazas y del CO2 producido.
• El bagazo, la paja de caña y otros residuos agrícolas, constituyen materiales
lignocelulósicos con perspectivas para la obtención de etanol, teniendo en cuenta su
disponibilidad y concentración en t/ha.año.
• Solamente el 11,5% del total de la superficie terrestre son tierras cultivables, por lo que
su empleo debe ser seleccionado cuidadosamente, teniendo en cuenta las necesidades
prioritarias de la alimentación.
• Las perspectivas del etanol como combustible automotor parecen estar ligadas a las de la
gasolina, por lo que no parece ser una opción ventajosa a largo plazo.

95
XIII. Referencias

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