Sie sind auf Seite 1von 3

Responsabilidad penal es la consecuencia jurídica derivada de la comisión de un hecho

tipificado en una ley penal por un sujeto imputable, y siempre que dicho hecho sea
contrario al orden jurídico, es decir, sea antijurídico; además de punible. Generan
responsabilidad penal todas aquellas acciones humanas (entendidas como voluntarias) que
lesionen o generen un riesgo de lesión a un bien jurídicamente protegido por el
ordenamiento jurídico (por ejemplo: vida, integridad física, libertad, honor, orden público,
etc.). La comisión de un delito o falta generará responsabilidad penal.

La responsabilidad penal se concreta en la imposición de una pena, que bien puede ser de
privativa de libertad (como la pena de prisión o la localización permanente), privativa de
otros derechos (como el derecho a portar armas, el derecho a conducir vehículos a motor, el
derecho a residir en un lugar determinado, etc.), pudiendo también consistir dicha pena en
una multa pecuniaria.

La responsabilidad penal es la consecuencia jurídica de la violación de la ley, realizada por quien


siendo imputable o in imputable, lleva a término actos previstos como ilícitos, lesionando o
poniendo en peligro un bien material o la integridad física de las personas. La responsabilidad
penal es, en Derecho, la sujeción de una persona que vulnera un deber de conducta impuesto por
el Derecho penal al deber de afrontar las consecuencias que impone la ley. Dichas consecuencias
se imponen a la persona cuando se le encuentra culpable de haber cometido un delito o haber
sido cómplice de éste.

La responsabilidad penal la impone el Estado, y consiste en una pena que busca castigar al
delincuente e intentar su re inserción para evitar que vuelva a delinquir.

También podrá ser común o especial:

Común: cuando el delito cometido puede ser realizado por cualquier individuo (robo, violación,
asesinato).
Especial: cuando el delito es cometido por un funcionario público aprovechándose de su
condición.

Son sanciones accesorias, que se aplicarán a juicio del tribunal:

1º. La in habilitación para el ejercicio de funciones o empleos públicos, hasta por dos (2) años
después de cumplirse la pena principal, cuando se trate de hechos punibles cometidos por
funcionarios públicos.

2º. La in habilitación para el ejercicio de la profesión, arte o industria, hasta por un (1) año después
de cumplida la sanción principal, cuando el delito haya sido cometido por el condenado con abuso
de su industria, profesión o arte, o con violación de alguno de los deberes que le sean inherentes.

3º. La publicación de la sentencia, a expensas del condenado, en un órgano de prensa de


circulación nacional.

4º. La obligación de destruir, naturalizar o tratar las sustancias, materiales, instrumentos u objetos
fabricados, importados u ofrecidos en venta, y susceptibles de ocasionar daños al ambiente o a la
salud de las personas.

5º. La suspensión del permiso o autorización con que se hubiese actuado, hasta por un lapso de
dos (2) años, después de cumplida la sanción principal.

6º. La suspensión del ejercicio de cargos directivos y de representación en personas jurídicas hasta
por tres (3) años, después de cumplida la pena principal.

7º. La prohibición de contratar con la Administración Pública hasta por un lapso de tres (3) años,
después de cumplida la sanción principal.

Es necesariamente accesoria a otra pena principal, el comiso de los equipos, instrumentos,


sustancias u objetos con que se hubiere ejecutado, a no ser que pertenezcan a un tercero ajeno al
hecho; y de los efectos que de El provengan.

Algunos artículos del "código civil" sección V de los hechos ilícitos:

Articulo 1.185.- El que con intención, o por negligencia o por imprudencia, ha causado un daño a
otro, está obligado a repararlo. Debe igualmente reparación quien haya causado un daño a otro,
excediendo, en el ejercicio de su derecho, los límites fijados por la buena fe o por el objeto en vista
del cual le ha sido conferido ese derecho.
Artículo 1.186.- El incapaz queda obligado por sus actos ilícitos, siempre que haya obrado con
discernimiento.

Artículo 1.187.- En caso de daño causado por una persona privada de discernimiento, si la víctima
no ha podido obtener reparación de quien la tiene bajo su cuidado, los jueces pueden, en
consideración a la situación de las partes, condenar al autor del daño a una indemnización
equitativa.

Artículo 1.188.- No es responsable el que causa un daño a otro en su legítima defensa o en


defensa de un tercero. El que causa un daño a otro para preservarse a sí mismo o para proteger a
un tercero de un daño inminente y mucho más grave, no está obligado a reparación sino en la
medida en que el Juez lo estime equitativo.

Artículo 1.189.- Cuando el hecho de la víctima ha contribuido a causar el daño, la obligación de


repararlo se disminuirá en la medida en que la víctima ha contribuido a aquél.

Artículo 1.190.- El padre, la madre, y a falta de éstos, el tutor, son responsables del daño
ocasionado por el hecho ilícito de los menores que habiten con ellos. Los preceptores y artesanos
son Responsables del daño ocasionado por el hecho ilícito de sus alumnos y aprendices, mientras
permanezcan bajo su vigilancia. La responsabilidad de estas personas, no tiene efecto cuando ellas
prueban que no han podido impedir el hecho que ha dado origen a esa responsabilidad; pero ella
subsiste aun cuando el autor del acto sea irresponsable por falta de discernimiento.

Das könnte Ihnen auch gefallen