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El profesor Archel realiza una exploración, desde una perspectiva critica, del
discurso y el lenguaje que se emplean en los informes anuales de la empresa
Seat-Volkswagen, los cuales fueron permeados por la situación política y social de
España y por la situación económica de la empresa.
La elaboración de estos informes pasa por varios momentos, entre los que se
encuentran:
Los cambios políticos que vivió España a mediados de los años setenta.
El cambio organizacional que se produjo con el abandono de la producción
en masa y la implementación de la producción flexible y el suministro just-
in-time.
La privatización de la firma en 1986.
El marco teórico en el que se sustenta el autor para éste estudio lo plasma en el
siguiente párrafo del texto: “El informe anual es uno de los mecanismos a
disposición de la firma para trasladar y dar a conocer a la sociedad su ideología y
su perspectiva (Amernic, 1992), comunicando y reconstruyendo para ello
realidades interesadas (Hines, 1988)”. Para demostrar esto utiliza dos etapas
importantes de la empresa:
De acuerdo con el profesor Archel, en esta etapa, los informes anuales se enfocan
en otros aspectos de la empresa: la logística, producción, círculos de calidad,
investigación y los recursos humanos.
La importancia del discurso esta dada por la manera como interpreta y describe al
mundo. En el texto se infiere que el lenguaje utilizado en el discurso puede ser
explícito o implícito en cada uno de los informes anuales, y adicionalmente realiza
un análisis de los cambios de lenguaje, las metáforas y los silencios.
La ideología, en cambio, esta condicionada por el hecho de pertenecer a una
hegemonía porque es ahí donde se establecen las pautas, condiciones y reglas
sociales e intelectuales en una colectividad, con el fin de difundir sus propias
ideas sobre la concepción del mundo y así mismo satisfacer sus propios intereses.
Dentro de esa linea de tiempo, el autor expresa que el alcance de los informes
anuales se ve minimizado o “silenciado”, por otras situaciones adyacentes a los
mismos. Por ejemplo en la primera etapa, antes de la privatización, Seat-
Volkswagen recoge sus inquietudes sobre la incertidumbre que representaba ese
momento político, social y económico en el que estaba inmersa la firma. Mientras
que después de la privatización, el profesor Archel considera que hay
“abundantes zonas oscuras”, es decir, que en los informes no hay nada explicito
que demuestre cual era la situación real de los trabajadores por la
implementación del sistema “just in time”.