Sie sind auf Seite 1von 3

CASO YANANGO

Según el informe del médico radiosanitario del IPEN [1], el día 20 de febrero de 1999, en la Central Hidroeléctrica
de Yanango, ubicada en la selva del distrito de San Ramón, Departamento de Junín, aproximadamente 300 km al
Este de Lima, en circunstancias no aclaradas todavía, una fuente radiactiva de Iridio 192 de 1360 GBq. (36.8 Ci),
usada en gammagrafía industrial, se desprendió del equipo contenedor y fue tomada por un trabajador soldador
de 36 años de edad y colocada en el bolsillo posterior derecho de su pantalón (desde las 16:30 h). Allí permaneció
durante seis horas aproximadamente. El trabajo lo realizaban dentro de un tubo de 2 metros de diámetro e indica
que la mitad del tiempo realizó el trabajo sentado y su ayudante estuvo durante ese tiempo con él a una distancia
aproximada de 1,0 a 1,5 metros. Para dirigirse a su casa (a las 22:00 h) tomó un microbús en el que viajaban unas
15 personas, el viaje duró unos 30 minutos. Al llegar a su casa fueron expuestos a la radiación su esposa y sus tres
hijos, de 10, 7, y 1,5 años, con la fuente radiactiva que permaneció en la habitación por una hora a distancia entre
0,5 y 2 m. En esas circunstancias, hubo un lapso no bien determinado en el que la esposa del accidentado estuvo
sentada sobre el pantalón con la fuente aún en él, mientras daba de lactar a su hijo menor y ayudaba a su esposo.
(Este dato lo recordó recién el 12 de marzo). Con la intención de hacer la dosimetría biológica de los afectados, el
día 22 de febrero se hizo la toma de muestras de la familia y el ayudante del soldador accidentado. Ese mismo día
se prepararon los cultivos de linfocitos, haciéndose repeticiones de siembra al día siguiente para mayor seguridad
de obtener muestra suficiente para el análisis al microscopio. La preparación de las muestras, luego de 48 horas
de cultivo, se hizo el jueves 24 y viernes 25 de febrero. Una rápida visualización de las muestras preparadas nos
permitió descubrir que ninguno de los 6 cultivos preparados con la sangre del soldador accidentado había crecido
mientras que las otras cinco muestras mostraron un crecimiento normal. En los primeros días de marzo se nos
permitió tomar una segunda muestra de sangre al paciente para hacer un nuevo intento de hacer la dosimetría
biológica. Esta vez sembramos 8 cultivos y al igual que en la primera ocasión utilizamos lo mejor de nuestra
tecnología. Lamentablemente, los resultados fueron igualmente desalentadores: no hubo crecimiento de
linfocitos in vitro. Ninguno de los cultivos sembrados sufrió contaminación y toda la incubación fue normal de
acuerdo al protocolo aceptado por el OIEA [2]

Un técnico olvida el material radiactivo en una tubería posteriormente otro técnico “se lo encuentra” y sin
decir nada creyendo que es algo de valor económico lo pone en su bolsillo
posterior

como veran este contenedor de IRIDIO 192 no tiene ninguna advertencia que sea facilmente
reconocida

2”

Das könnte Ihnen auch gefallen