Sie sind auf Seite 1von 13

REQUISITOS PARA QUE PROCEDA

Será necesario demostrar la verosimilitud en el derecho, el peligro en la demora, y prestar una contra-cautela. Cada
uno de estos tres elementos aparece en mayor o menor grado en algunos embargos en determinados juicios, en
situaciones diversas y se van debilitando.

ATENUACIÒN DE ALGUNOS REQUISITOS:

El Código Procesal Civil y Comercial de la Nación regula una serie de supuestos específicos en los que la procedencia
del embargo preventivo se sujeta a menores exigencias o presupuestos para su procedencia, o se subordina a una
particular comprobación sumaria a través de un medio especial de prueba. Ello no significa que la enumeración que
contiene sea limitativa o taxativa.
En el embargo preventivo el requisito de VEROSIMILITUD EN EL DERECHO es atenuado o cede totalmente cuando se
trata de situaciones especiales como que el deudor no tenga domicilio en la República; o que la existencia del crédito
este demostrada con instrumento público o privado atribuido al deudor, confirmada la firma en este último caso por dos
testigos; o que existan deudas justificadas por libros de comercio llevados en debida forma (artículo 209); o en la
demanda por escrituración (artículo 210); o en situaciones derivadas del proceso como rebeldía, sentencia favorable,
etc. (artículo 211)
En otras situaciones lo que se ve debilitado es JUSTIFICAR LA DEMORA, ya que el mismo a los efectos de la medida
precautoria, surge de la sola duración del proceso, “la prolongación un tiempo más o menos largo crea siempre un
riesgo en la justicia" 1

La CONTRA-CAUTELA algunos autores como Falcon no la consideran un presupuesto de las medidas cautelares sino
un acto que justifica la igualdad jurídica. Sin embargo, también cede o se debilita cuando la medida cautelar está
suficientemente garantizada en caso de haber sido tomada sin derecho, o cuando se trata de igualar la situación de los
contendientes en el proceso permitiendo el acceso al mismo de las personas sin recursos con iguales derechos. Por
ello aparece el artículo 200 en que no se exige contra-cautela si quien obtuvo la medida fuera la Nación, o una
Provincia, una Municipalidad o una persona que justifique ser reconocidamente abonada; tampoco se le exige a quien
actuare con beneficio de litigar sin gastos.

A) SUPUESTOS DE PROCEDENCIA DEL EMBARGO PREVENTIVO:

Articulo 209 del CPCCN” Podrán pedir Embargo Preventivo el acreedor en dinero o en especie que se hallare en las
siguientes situaciones:
1-Que el deudor no tenga su domicilio en la republica.
En un primer caso se refiere a cuestiones en el deudor no ofrece garantías por no hallarse en la republica o realizar
actos tendientes al incumplimiento de la deuda. La ley da por cierto la verosimilitud del derecho a partir de la prueba
de la calidad del deudor, excluyendo empero el peligro en la demora, ya que el embargo procedería aunque el deudor
fuere titular de dominio de más de un bien en la República.
Como enseña Palacios 2 , la verosimilitud del derecho, en este contexto habrá de ser objeto del acreditamiento de
acuerdo a las formas exigidas en los incisos 2° y 4° del artículo 209 del CPCCN.
No es suficiente que el deudor tenga su domicilio fuera de la Republica por cuanto debe acreditarse no solo la
existencia de la deuda liquida o ilíquida, exigible o sometida a plazo o condición, independientemente de que el deudor
tenga bienes en la Republica 3 , ya que el mudamiento posterior a la deuda crea la presunción –suficiente para la medida
cautelar-de que podrían cambiar de lugar los bienes, o enajenarlos difícil obtener el cumplimiento de la deuda, sino
imposible Kielmanovich 4
considera que dicha hipótesis ofrece dudas en cuanto a su justificación en los tiempos actuales y debería analizarse a
la luz de los Tratados Internacionales celebrados por la Argentina ,así como ejemplo, con sujeción a los términos de
la Convención sobre Igualdad de Trato con la Republica Oriental del Uruguay aprobada por ley 22410, desde que el
vecino país no hubiese establecido esta modalidad, el articulo 209 inc1°, devendría contrario a la misma y por lo tanto
inaplicable, máxime que en virtud de la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados(articulo 27), las normas
del derecho interno no pueden oponerse a lo establecido en aquellos.

2-Que la existencia del crédito este demostrada con instrumento público o privado atribuido al deudor, abonada la firma
en información sumaria de dos testigos.
Habrá de acompañarse el documento original donde se halle estampada la firma del deudor. La certificación notarial de
la misma suple las exigencias del artículo 209 inc2° del CPCCN. Por lo que se logra así y por no decir mayor certeza
que la que apunta a consagrar la norma mediante información sumaria, sin perder de vista que la producción de prueba
no se agota en la testimonial. Debemos señalar que la autenticidad de la firma podrá ser establecida pericialmente 5 o
resultar de las circunstancias ajenas a la información del abono, por ejemplo: así cuando la misma no ha sido
desconocida al contestar la demanda. No
resulta imprescindible que los testigos que abonen la firman atribuida al demandado lo hayan visto firmar, para lo
cual el demandado podrá ejercer las defensas del caso y que debería hacer valer en el momento apropiado como por
ejemplo la acción de redargución de falsedad, sin que ello signifique la improcedencia del embargo.
Destaca Palacio, si el instrumento privado estuviere firmado por autorización del que aparece como obligado, deberá

1
FALCON Enrique M. - “Tratado de Derecho Procesal Civil y Comercial”, Tomo IV: “Sistemas Cautelares”, Editorial Rubinzal-
Culzoni, Edición 2006, Capitulo XXXIV, p.188
2
PALACIO Lino Enrique.”Derecho Procesal Civil”, tomo VIII, p .100
3
PODETTI Y GUERRER Leconte, tratado de las medidas cautelares, p. 228
4
KIELMANOVICH Jorge. “Medidas Cautelares”, Editorial Rubinzal-Culzoni, Edición 2000, Capitulo IV, p.236.
5
KIELMANOVICH Jorge L.-“Medidas Cautelares”, Editorial Rubinzal-Culzoni, Edición 2000, Capitulo IV, p.238
1
acompañar el documento que así lo acredite (Acta Poder) o producirse la prueba sumaria que permita comprobar dicho
extremo, de la misma manera que deberá acreditarse que quien se obligo por la persona jurídica contaba con
facultades para ello. Alsina sostiene que es indispensable que el documento este firmado por lo que no cabria
examinar la procedencia del embargo a partir de la impresión digital o signos. La
ley impone la demostración de la verosimilitud del derecho pero no exige el peligro en la demora.

3-Que fundándose en una acción en un contrato bilateral se justifique su existencia en la misma forma del inciso
anterior, debiendo en este caso probarse además sumariamente el cumplimiento del contrato por parte del actor salvo
que ofrezca cumplirlo o se trate de una obligación a plazo.
Estimamos que en el embargo preventivo respecto de los contratos bilaterales procede aun cuando en la demanda no
se requiriese el cumplimiento sino la resolución del mismo o ya el resarcimiento fundado en su incumplimiento, y en
tanto se pruebe la existencia en la misma forma que el inciso anterior, y sumariamente el cumplimiento del mismo por
parte del requirente, salvo que este ofreciere cumplirlo o de su obligación fuere a plazo. Cabe añadir en el supuesto
anterior, no necesariamente se deberá acreditarse la existencia del contrato con documentos o instrumentos, así en los
supuestos del articulo 1190 y concordantes del Código Civil, si se justifica la existencia de un principio de prueba por
escrito o la circunstancia de que el deudor recibió la prestación y se niega a cumplir el contrato.
Al requirente le incumbe probar que ha dado cumplimiento a las obligaciones que estaban a su cargo (art1201, Código
Civil), sin perjuicio de que ello pueda resultar del contrato, o bien ofrecer su cumplimiento poniendo su prestación a
disposición de la contraria, salvo que aquellas estuviesen sujetas a plazo o condición suspensiva y que dicha
circunstancia resultara del contrato. La ley impone la demostración de la verosimilitud del derecho pero no exige el
peligro en la demora.

4-Que la deuda este justificada por los libros de comercio llevados en debida forma por el actor o resulte del boleto
del corredor de acuerdo a sus libros siempre que estos puedan servir de prueba o surja de la certificación realizada por
un contador publico nacional en el supuesto de la factura conformada.
Este inciso se refiere a los libros de los comerciantes llevados en legal forma (artículos.44, 53,67 del Código de
Comercio). El juez de registro puede autorizar el empleo de medios mecánicos u otros para la contabilización, en
reemplazo o complemento de los libros a que se refiere el artículo 44 del Código de Comercio, excepto el de
inventario o balances (Art 61 del Código de Comercio).
El dictamen del contador a que se refiere dicho inciso, debe ser practicado en el proceso por los peritos inscriptos de
conformidad a las exigencias legales y reglamentarias 6 . Libros de corredores, deben llevar un libro “asiento exacto y
metódico de todas las operaciones en que intervienen, tomando nota de cada una, inmediatamente después de
concluida, en un cuaderno manual foliado”, además de llevar el libro d registro (artículos 91 al 93 del Código de
Comercio). En el caso del corredor lo que se toma para el embargo es la minuta o boleto que debe entregar a las
partes dentro de las 24 horas de la conclusión del contrato (articulo 102, Código de Comercio)
En lo que respecta a la factura conformada conviene recordar que la ley 24760 derogo el régimen del decreto
ley6601/63, estableciendo en cambio la denominado “factura de crédito “como tal es también un titulo ejecutivo de
dudosa aplicación y sin observancia en el medio.

5-Que aun estando la deuda sujeta a condición o plazo, se acredite sumariamente que el deudor trata de enajenar,
ocultar o trasportar sus bienes, comprometiendo su garantía o siempre que se justifique del mismo modo que por
cualquier causa ha disminuido apreciablemente su solvencia después de haber contraído la obligación
La norma contempla actos de enajenar, ocultar o transportar sus bienes, es decir en grado de tentativa por parte del
deudor, para que el embargo proceda no basta que el deudor trate de enajenar, ocultar o transporta bienes, sino que
dichos hechos deben comprometer su solvencia económica, es decir, la prueba de esas solas circunstancias no es
suficiente, sino que ellas tengan aptitud para incidir negativamente en l a capacidad patrimonial del deudor ,
requiriéndose además la justificación sumaria de que el valor de los bienes que el deudor trato de enajenar, ocultar o
transportar es susceptible de comprometer la prenda común de sus acreedores. La interpretación es amplia ya que el
peligro concreto por oposición al potencial o abstracto antes descripto. Amplio o extensivo debe entenderse por
después de haber contraído la obligación. Para que proceda el embargo además deberá acreditarse la calidad del
deudor o lo que es lo mismo la verosimilitud del derecho.
B) OTROS SUPUESTOS DE EMBARGOS PREVENTIVOS:
Artículos 210 del CPCCN. Podrán igualmente pedir el embargo preventivo:

1-El coheredero, el condómino o el socio, sobre los viene de la herencia, del condominio, o de la sociedad, si
acreditaran la verosimilitud del derecho y el peligro en la demora;
Respecto a este supuesto, el embargo procede a requerimiento del coheredero, condómino o socio en tanto acrediten
la calidad de tales esto es la verosimilitud del derecho- y el peligro en la demora, por los medios generales, si bien el
mismo habrá de recaer sobre los bienes de la herencia, del condominio o de la sociedad. La medida será procedente
por desconocerse la calidad de tales o porque la pretensión se orienta a preservar la integridad del patrimonio común
en igualdad entre sus titulares. Así respecto a los alquileres devengados por bienes que integran el acervo hereditario.
En cuanto al embargo preventivo sobre los bienes del condominio, se trata por ejemplo de prevenir que uno de los
comuneros realice actos materiales o jurídicos que puedan importar el ejercicio inmediato del derecho de propiedad,
por ejemplo la venta de los frutos de la cosa común (art2680, Código Civil).
En lo que respecta a los bienes sociales y mas allá de las medidas cautelares que autorizan la ley 19550LSC, el mismo
procede por ejemplo, si se acredita el propósito del órgano de administración de vender o gravar indebidamente bienes
societarios. La ley impone la demostración del derecho y
del peligro en la demora.

6
FALCON Enrique M.-“Tratado de Derecho Procesal Civil y Comercial”, Tomo IV.”Sistemas Cautelares”, Editorial Rubinzal
Culzoni, Edición 2006, Capitulo XXXIV, p.206
2
2-El propietario, el locatario principal de predios urbanos o rústicos, haya o no contrato de arrendamiento, respecto de
las cosas afectadas a los privilegios que le reconoce la ley. Deberá acompañar a su petición el titulo de propiedad o el
contrato de alquiler o intimar al locatario para que formule previamente las manifestaciones necesarias.
En este contexto debemos señalar que el artículo 1578 del Código Civil establece que si la cosa arrendada fuese un
inmueble, compete al locador, aunque la obligación este afianzada, acción ejecutiva para el cobro de los alquileres o
rentas, requiriendo mandamiento de embargo sobre los bienes sujetos al privilegio concedido por este Código al crédito
del locador. Por su parte el articulo 3883 del citado ordenamiento señala que” gozan de privilegios los créditos por
alquileres o arrendamientos de fincas urbanas o rurales, sean los acreedores los propietarios de ellas o sean
usufructuarios o locatarios principales, a saber: por dos años vencidos si se trata de casa; por tres años vencidos si se
trata de una hacienda de campo”. “las cosa sobre que se ejerce este privilegio son todos los muebles que se
encuentran en la casa, o que sirven para la explotación de la hacienda rural, salvo excepciones previstas en este
Código, aunque no pertenezcan al locatario, introducidos allí de un manera permanente o para ser vendidos o
consumidos”. ”El dinero, los títulos de crédito que se encuentran en la casa y las cosas muebles
que solo accidentalmente están allí , de donde se deben ser sacadas, no están afectadas al privilegio del locador ,
cuando él ha sido instruido de su destino , o cuando éste le ha sido conocido por la profesión del locatario, por la
naturaleza de la cosa o por cualquier otra circunstancia , como también los muebles que el locador sabia que no le
pertenecían al locatario, y las cosas robadas o perdidas que no son comprendidas en este privilegio”. Se trata de un
privilegio, como indica el Artículo 3884 del Código Civil, que garantizan no solo los alquileres que se les deban, sino
también las otras obligaciones del locatario que derivan del contrato de arrendamiento. En este
orden de ideas, cabe destacar que el fiador que pagase la deuda afianzada queda subrogado en todos los derechos,
privilegios y garantías anteriores o posteriores a la fianza del acreedor contra el deudor (Art.2029,Cód.Civ.),por lo que
aquel con estas premisas queda facultado apara solicitar el embargo preventivo contra bienes del locatario afianzado.
En este sentido no será necesaria más que la presentación del titulo de dominio si se trata de un embargo por cuenta
del propietario sobre las cosas afectadas a los privilegios que reconoce al locador el articulo 3883 del CC, sin
necesidad que demuestre que el demandado es inquilino ni el monto de la deuda, ya que se presume que quien ocupa
con sus bienes un inmueble ajeno lo hace a titulo de inquilino , y por ello adeuda lo que señala el propietario., bastando
para ello su sola afirmación sobre su importe en razón de que el embargo debe limitarse exclusivamente a las cosas
afectadas a su privilegio”. La calidad de locatario no necesariamente habrá de acreditarse con prueba documental por
lo que se deberá intimar previamente para que formule sus manifestaciones necesarias bajo apercibimiento de tener
por exacta la afirmación del requirente. La ley impone la demostración de la
verosimilitud del derecho pero no exige la comprobación del peligro en la demora.
En este caso la caución juratoria se entenderá prestada en el pedido de la medida cautelar (Art.199, CPCCN).

3- La persona a quien la ley le reconoce privilegios sobre ciertos bienes muebles o inmuebles, siempre que el crédito se
justifique en la forma establecida en el artículo 209 inc2°.
En este sentido, y sin perder de vista que este supuesto comprende el supuesto del inc2° (más allá de que este no se
exige el abono para la firma a diferencia en el inc3°), se trata de los privilegios reconocidos en las leyes sustanciales y
leyes especiales. Así el articulo 3879 del Código Civil señala que tienen un privilegio sobre la generalidad de los bienes
del deudor , sean muebles o inmuebles, los gastos de justicia hechos en interés común de los acreedores, y los que
cause la administración durante el concurso, y los créditos del fisco y de las municipalidades, por impuestos públicos,
directos o indirectos. A su turno el
articulo 3928 del mismo ordenamiento dispone que los coherederos y todos los participes que han dividido una masa
de bienes compuesta de muebles o inmuebles, o de varios muebles determinados, tienen privilegio por la garantía de
partición sobre los bienes antes indivisos, y también por el precio de la licitación del inmueble, adjudicado a alguno de
ellos. Por su parte, el articulo 327 de la LSC prevé
que la emisión de debentures con garantía flotante afecta el pago de todos los derechos, bienes muebles o inmuebles,
presentes y futuros o una parte de ellos, de la sociedad emisora y otorga los privilegios que corresponden a la prenda,
a la hipoteca o a la anticresis, según el caso. No
obstante, a tenor de lo que establece el articulo 3878del Código Civil, cualquiera sea el privilegio del acreedor, no
podrá ejercerse sobre el lecho cotidiano del deudor y de su familia, las ropas y muebles de su indispensable uso y los
instrumentos necesarios para su profesión, arte y oficio.
En este caso la caución juratoria se entenderá prestada en el pedido de la medida cautelar (articulo 199 del CPCCN).
La ley impone la demostración de la verosimilitud del derecho pero no exige la comprobación del peligro en la
demora.

4-La persona que haya de demandar por acción reivindicatoria, petición de herencia, nulidad de testamento o
simulación, respecto de la cosa demanda, mientras dure el juicio, y siempre que se presentaren documentos que hagan
verosímil la pretensión deducida.
La acción reivindicatoria en el concepto del articulo 2758del código Civil” es un a acción que nace del dominio que cada
uno tiene de cosas particulares, por lo cual el propietario que ha perdido la posesión, la reclama, la reivindica, contra
aquel que se encuentra en posesión d ella que concuerda con el articulo 323, inciso 2º (exhibición de la cosa
mueble),de la medidas preparatorias.
En la acción de petición de herencia debe limitarse a la cosa demandada pero no es extensible a otros bienes,
corresponde también a los parientes en grado sucesible por inacción del heredero (3424 del Código Civil).
En el caso de nulidad del testamento, la caída del testamento pone a los otros herederos en lugar de los que indica el
instrumento cuya nulidad se pide. Sobre la base de la
mencionada pretensión, procede sobre los bienes relictos, aunque el vínculo no haya sido justificado en legal forma, si
hay pretensiones serias de que el mismo existe, claro esta que a condición de que se presentaran los documentos que
hicieran verosímil la pretensión deducida. Para concluir, que se ha considerado incluida dentro del concepto de acción
reivindicatoria a la retención de inclusión de los bienes hereditarios.
Incluida dentro del concepto de acción reivindicatoria a la retención de inclusión de los bienes hereditarios.
En la acción de Simulación (articulo 960 del Código Civil) en este supuesto debe existir presunciones graves, ya que

3
es corriente a la existencia de los elementos preconstituidos 7
La ley impone la demostración de la verosimilitud del derecho pero no exige la comprobación del peligro en la demora.

Otra situación que habilita el embargo preventivo y que amplia los supuestos del Art. 210, es el caso de demanda por
escrituración, que esta contemplado en el Art. 211, que dice “Cuando se demandare el cumplimiento de un contrato de
compraventa, si el derecho fuese verosímil, el adquirente podrá solicitar el embargo del bien objeto de aquel”. Se trata
del embargo sin monto, dicha norma estipula que lo embargable es el inmueble objeto del juicio, que no puede ser
sustituido, y el fin es imposibilitar que se lo transfiera o grave, para asegurar el perfeccionamiento de la transmisión de
dominio prometida. Por lo tanto, la medida del embargo esta dada por la razonable extensión de la pretensión y
depende de que el inmueble constituya una sola unidad o este dividido en propiedad horizontal. Este embargo que
autoriza el Art. 211 no procede si el bien prometido en venta fue enajenado a un tercero y sino se demuestra la
verosimilitud del derecho invocado, ya que es el único requisito que la ley exige porque no es necesaria la
comprobación del peligro en la demora.

Además de los todos estos acontecimientos que se platean en el derecho material que dan lugar al embargo preventivo,
hay situaciones derivas del proceso en si, que también pueden llegar a decretar el embargo, conforme al Art. 212 del
CPCCN: “Además de los supuestos contemplados en los artículos anteriores, durante el proceso podrá decretarse el
embargo preventivo:
1) En el caso del artículo 63.
2) Siempre que por confesión expresa o ficta derivada de la incomparecencia del absolvente a la audiencia de
posiciones, o en el caso del artículo 356, inciso 1, resultare verosímil el derecho alegado.
3) Si quien lo solicita hubiese obtenido sentencia favorable, aunque estuviere recurrida.”
Respecto del inciso 1° se refiere al embargo que corresponde al decretarse la rebeldía, contra la parte que ha sido
declarada rebelde. No es necesario demostrar el peligro en la demora y la verosimilitud del derecho que se encuentra
insita en la misma rebeldía, ya que se invierte la presunción de verosimilitud a favor de quien ha obtenido la rebeldía.
En este caso el embargo tiene por finalidad asegurar el objeto del juicio o el pago de las costas si el rebelde es el actor.
En cuanto a la confesión que esta regulada el Inc. 2 de dicho artículo, esta puede ser prestada por el actor o por el
demandado, en el escrito de la demanda, en la contestación, en la reconvención y su contestación, en un incidente, en
las excepciones, o en la audiencia de absolución de posiciones ya sea por vía de una confesión expresa o presumida,
pero en el caso que la confesión sea expresa no debe haber sido prestada en forma condicional o con reservas, y si la
confesión es ficta el embargo se halla supeditado a la circunstancia de que no exista prueba contraria que desvirtúe la
verosimilitud del hecho.
En torno al Inc. 3° faculta a solicitar el embargo a quien hubiese obtenido sentencia favorable, aunque estuviere
recurrida, ya que una sentencia favorable presenta el mayor grado de verosimilitud, en ello se funda la norma para
permitir el embargo preventivo sin necesidad de demostrar la verosimilitud del derecho ni el peligro en la demora.
Aunque no haya cantidad liquida, procede el embargo preventivo solicitado por el litigante que ha obtenido una
sentencia favorable, debiendo en tal caso el juez fijar una cantidad prudencial por la cual debe librarse el mandamiento.

BIENES SUSCEPTIBLES DE EMBARGO

Los bienes que constituyen el objeto del embargo tienen que pertenecer al deudor o sujeto pasivo del proceso, motivo
por el cual en los bienes gananciales es improcedente la traba de embargo que se efectúe sobre dicho bien si esta
inscripto a nombre del cónyuge del deudor, ya que el deudor tiene sobre ese bien ganancial un crédito que solo se hará
efectivo en caso de disolución de la sociedad conyugal, pero no es propietario ni condómino. Y por aplicación del
plenario “Banco Provincia de Buenos Aires c/ Sztabinski, Simon” 8 se deja sin efecto un embargo trabado sobre un
inmueble registrado a nombre del cónyuge del deudor,
En principio, son susceptibles de embargo la totalidad de los bienes materiales e inmateriales que siendo apreciables
en dinero, forman el patrimonio de una persona, como prenda común de los acreedores, con las excepciones que la ley
determina.
Según Kielmanovich, a la hora de determinar que bienes son embargables o no, “hay que examinar e interpretar de
manera restrictiva lo que disponen tanto las normas del Derecho procesal como sustancial, debido a que la
inembargabilidad es una excepción al principio general de que el patrimonio es la prenda común de los acreedores”. 9
Los bienes que resultan embargables son: Los depósitos en caja de ahorro, plazo fijo, en el caso de una sucesión
indivisa los derechos y acciones que sobre ella posea el deudor, bienes inmuebles o muebles registrables, muebles
comunes, productos fungibles, etc.
En el caso que el embargo se trabe sobre productos fungibles queda configurado el denominado embargo flotante, este
se traba sobre un determinado stock de bienes, debido a la características que posee las cosas objeto de este tipo de
embargo, ya que al ser fungibles y en la mayoría de los casos se hecha a perder sino se consume, por Ej. los fiambres.
Por estas razones se consumen dichos bienes, pero se traba el embargo sobre un número fijo de bienes, que configura
el stock.

PROCEDIMIENTO PARA EL EMBARGO

7
CNCIV., sala C, 28-11-75,L. L. 1976-A-491, sum. 33.
209. la procedencia del embargo preventivo en procesos por declaración de simulación esta supeditada esta sujeta a que el actor
presente documentos que hagan verosímil la pretensión incoada (Art 210 inc4,CPCCN), cuando por la índole de la pretensión
deducida-en el caso consistente en la alegación de simulación por un tercero – el fumus bonis iuris debe inducir el carácter ficticio
del negocio y el prejuicio que ocasiona a quien lo impugna(CNCiv., sala A, 3-7-95, “Golden Cuer SRL.c/Levin Raul”, J. A. 1998-I,
sínt.)
8
(En pleno, 19-8-75, Banco Provincia de Buenos Aires c/ Sztabinski, Simon”, E.D. 63-496)
9
KIELMANOVICH Jorge L. -“Medidas Cautelares”, Editorial Rubinzal-Culzoni, Edición 2000, Capitulo IV, p.230
4
El art. 213 prescribe la forma de la traba del embargo y dice que el embargo se trabara en la forma prescripta para el
juicio ejecutivo. Se limitará a los bienes necesarios para cubrir el crédito que se reclama y las costas. Mientras no se
dispusiere el secuestro o la administración judicial de lo embargado, el deudor podrá continuar en el uso normal de la
cosa. Del análisis de este articulo se admite que el embargo no puede constituir una medida de perjuicio por el solo
hecho de dañar al deudor, sino que es una medida de garantía para la posterior reparación, por eso debe limitarse a los
bienes necesarios para cubrir el crédito y las costas, siguiendo a la hora de afectar los bienes a embargo el criterio que
el acreedor no podrá exigir que el embargo recaiga sobre determinados bienes con perjuicio grave para el deudor si
hubiese otros disponibles. Para evitar este problema algunos códigos procesales como el de la provincia de Tucumán
establece un orden de la traba de embargo que es: Dinero en efectivo, créditos y acciones, alhajas y metales preciosos,
inmuebles, semovientes, muebles, sueldos y demás remuneraciones, pero en general los códigos prescinden de una
enumeración especifica, aludiendo solo a que no se ejerza un abuso de derecho produciéndole un perjuicio grave al
deudor habiendo otros bienes disponibles, pero este derecho que posee el deudor no puede ejercitarlo cuando: a) Se
ejecute un crédito con garantía hipotecaria o prendaría, en que el embargo deberá trabarse sobre una garantía, sin
perjuicio de que si ese bien resulta insuficiente, se amplié el embargo; b) Se ejecute un crédito que tuviere privilegio
especial, en que le embargo deberá efectuarse sobre los bienes afectados, en tanto sena embargables.
Si el embargo se produce sobre bienes muebles comunes el Art. 531 del CPCCN, que es el modelo básico, establece el
siguiente procedimiento: 1) Libramiento de mandamiento: El juez mandara a librar mandamiento de embargo, el
mandamiento es una orden judicial por la que se dispone realizar una determinada actividad sobre cosas, bienes o
personas, pero también el mandamiento obra a la vez como medio de comunicación, el Art. 214 del CPCCN se refiere a
estos mandamientos diciendo que en ellos se incluirá siempre la autorización para que el oficial de justicia solicite el
auxilio a la fuerza pública, en caso necesario, y el allanamiento de domicilio si hubiera resistencia.
En cuanto a la firma del mandamiento puede ser realizada por el juez o por el funcionario que la ley establezca,
siempre previa orden del juez. El oficial de justicia procederá a embargar los bienes suficientes, a su juicio, para cubrir
la cantidad fijada en el mandamiento.
En el mandamiento se incluye la potestad del autorizado (generalmente el abogado del ejecutante) para señalar bienes
a embargo, también debe dejarse en el constancia de la habilitación de día y hora y del lugar. Además contendrá la
prevención de que el embargado debe abstenerse de cualquier acto respecto de los bienes objeto del a medida, que
pueda causar la disminución de la garantía del crédito, bajo apercibimiento de las sanciones penales que correspondan,
2) Requerimientos al deudor: El oficial de justicia requerirá al propietario de los bienes para que manifieste si se
encuentran embargados o afectados por prenda u otro gravamen.
Esta etapa, el requerimiento al deudor, para que informe el estado jurídico de los bienes procede cualquiera sea el bien
que se embargue, mueble o inmueble, pero especialmente son los bienes muebles los que requieren de esta
manifestación debido a que pueden estar afectados sin que se haya tomado conocimiento de tal circunstancia, ya que
no es necesario la diligencia previa de informe de inscripción y condiciones del dominio.
En el caso que los bienes embargados estén en poder, de un tercero, se notificará a éste en el día personalmente o por
cédula, y desde ese momento se transforma en indisponible.
Si el embargo se efectúa sobre bienes muebles registrables, inmuebles, depósitos bancarios, acciones que cotizan en
bolsa, etc., se aplica el Art. 538 del CPCCN que establece que el juez debe ordenar el libramiento de un oficio a la
entidad que corresponda para que realice la traba, indisponga los fondos, acciones, o los transfiera. En este tipo de
bienes para que el embargo sea efectivo basta con su anotación en el registro respectivo, en la forma y con los
recaudos que resulten de la ley. Los oficios o exhortos serán librados dentro de las 48 horas de la providencia que
ordenare el embargo.
Con la anotación del embargo en el registro correspondiente según el bien que se embarga, se bloquea la transmisión.
En el caso de los inmuebles se ha resuelto que la escritura anterior al embargo anotado en el registro tiene preferencia
sobre los embargos si fue inscripta en fecha o con posterioridad al plazo de vigencia del certificado de libre
disponibilidad si se realizo la tradición.
En cambio si los bienes embargados fuesen muebles el art. 216 del CPCCN establece que serán depositados a la orden
judicial. Sin embargo, si se tratase de los de la casa en que vive el deudor y no fuesen inembargables, aquel será
constituido en depositario de ellos, salvo que no sea posible. Quien ha sido constituido en depositario de objetos
embargados tiene la obligación de presentarlos dentro del día siguiente al de la intimación judicial y no puede eludir
dicha entrega invocando el derecho de retención. En caso de que no cumpla con dicha intimación, el juez debe remitir
los antecedentes al tribunal penal competente, y puede ordenar la detención del depositario hasta el momento en que
ese tribunal comience a actuar. (Art. 217 del CPCCN).
Otra obligación del depositario que deberá cumplir en caso que la cosa embargada fuese de difícil o costosa
conservación o hubiese peligro de perdida o desvalorización, es poner tal hecho en conocimiento del juez.
En cuanto a la suspensión del embargo el Art. 215 del CPCCN dispone que los funcionarios encargados de la ejecución
del embargo solo podrán suspenderlo cuando el deudor entregue la suma expresa en el mandamiento, por ende el pago
es lo único que suspende el actuar del funcionario.

PRIMER EMBARGANTE

Se denomina primer embargante al acreedor que al obtener el embargo de bienes de su deudor, no afectados a créditos
privilegiados, tendrá derecho a cobrar íntegramente su crédito, intereses y costas, con preferencia a otros acreedores,
salvo en el caso de concurso, produciendo que los embargos posteriores solo afectaran el sobrante que quedare
después de pagados los créditos que hayan obtenidos embargos anteriores. (Art. 218 CPCCN). El artículo representa la
conclusión de la jurisprudencia firme anterior al código (ley 17454). Además de lo que establece llanamente el articulo
recién comentado, en el orden de preferencias, el embargo prima sobre la hipoteca inscripta tardíamente, mas el
embargo anotado con posterioridad a la escritura, pero antes de su inscripción, no prevalece sobre ésta si fue inscripta
en término, pues la anotación y reserva de venta tiene también prioridad sobre el embargo. Pero en todos los demás
casos corresponde aplicar el articulo 2505 del código civil según el cual "La adquisición o transmisión de derechos
reales sobre inmuebles, solamente se juzgará perfeccionada mediante la inscripción de los respectivos títulos en los
registros inmobiliarios de la jurisdicción que corresponda. Esas adquisiciones o transmisiones no serán oponibles a
terceros mientras no estén registradas. "

5
A pesar de esta prioridad que posee el primer embargante, la misma no es absoluta, ya que cede ante privilegios
especiales.
En relación a los inmuebles se ha resuelto que la prelación en el cobro se determina por el orden y las fechas en que
se ha procedido a anotar el embargo y esa preferencia es por la suma que se decreto y anoto, por ende el primer
embargante no tiene preferencia alguna sobre el cobro de accesorios que exceden su crédito.
Para entender sobre estas cuestiones de preferencia o prioridad algunos autores como Gozaini y Kielmanovich 10
sostienen que será competente el juez que dispuso el primer embargo.

BIENES EMBARGABLES E INEMBARGABLES – INTRODUCCIÒN:

En principio, podemos establecer un marco perimetral en donde discriminar cuales son los bienes embargables y cuáles
no, para pasar luego a detallar cada una de las excepciones según los diversos supuestos fácticos que los diversos
ordenamientos jurídicos plantean. Decimos que son suceptibles de embargo la totalidad de los bienes materiales e
inmateriales que siendo apreciables en dinero, forman el patrimonio de una persona, de conformidad con lo que
disponen los artículos 2311 y 2312 del Código Civil, como tal prenda común de los acreedores, con las excepciones que
la ley determina (art 2312 y su nota, Cód. Civil)
A su vez, y en forma excepcional, la ley dispone la inembargabilidad de ciertos bienes con fundamento, principalmente,
en el respeto de la personalidad humana y el sustrato de corte solidarista que preside la sociedad moderna
En cuanto a los bienes que pueden concretamente ser objeto de embargo, habrá de examinarse observando lo que
disponen tanto las normas del Derecho Procesal como sustancial.
Pero, ¿que tipo de interpretación debe darse a las normas con respecto al embargo?
Algunas posturas sostienen que debe primar una interpretación restrictiva en torno a las hipótesis de
inembargabiliadad, pues configuran una excepción al principio general de que el patrimonio es la prenda común de los
acreedores. Esta postura se condice con disposición que contiene el artículo 219 in fine del ordenamiento procesal
nacional en este sentido.
Para otros sin embargo, correspondería lo contrario, seguir un criterio amplio a objeto de que el ámbito familiar del
deudor cuente con el máximo resguardo, para preservar de toda injerencia de sus acreedores aquellos bienes que le
son necesarios para la subsistencia material y moral de si mismo y de su familia y para llevar una vida digna y
mínimamente decorosa.
Sin embargo, en forma unànime se sostiene que la inembargabilidad interesa al orden pùblico, por lo que el embargo
indebidamente trabado sobre bienes inembargables puede y debe ser levantado en cualquier tiempo, y aun de oficio,
tanto sea frente a los supuestos enumerados en el Còdigo Procesal Civil y Comercial de la Nación, como aquellos
enumerados en las distintas leyes de fondo.
Por otro lado, la determinación de las circunstancias que deben concurrir para que la inembargabiliadad sea viable,
queda librada a la apreciación judicial, debiendo ser interpretadas con criterio restrictivo.

ARTÌCULO 219 DEL CÒDIGO PROCESAL CIVIL Y COMERCIAL DE LA NACIÒN – PUNTO DE PARTIDA Y SUSTENTO
LEGAL DE LOS DISTINTOS SUPUESTOS DE INEMBARGABILIDAD:

El código procesal en su artículo 219 dispone que no se trabará nunca embargo:

1) en el lecho cotidiano del deudor, de su mujer e hijos, en las ropas y muebles de su indispensable uso, ni en los
instrumentos necesarios para la profesión, arte y oficio que ejerza
2) sobre los sepulcros, salvo que el crédito corresponda a su precio de venta, construcción o suministro de materiales
3) en los demás bienes exceptuados de embargo por ley, y que “ningún otro bien quedará exceptuado”
Los ordenamientos provinciales contemplan la misma normativa en el mismo número de artículos: Buenos Aires,
Catamarca, Chaco, Chubut, Formosa, La Pampa (con variantes en la redacción), Misiones, Neuquén, Rio Negro, San
Luis y Santiago del Estero. También Entre Rios (art 216), La Rioja (art 106), San Juan (art 244) y Córdoba (artículo 542,
con variantes en la redacción)
La enumeración del inc 1° del artículo 219 es coincidente con la contenida en el art. 3878, parr. 2°, del Cód. Civil,
relativo a la división de privilegios en la concurrencia de los derecho reales y personales contra los bienes del deudor
común (agregado por ley 12296), para distinguir aquellos bienes sobre los que el acreedor no puede ejercer privilegio
alguno, cualquiera que fuere.
Siguiendo la redacción del citado artículo, el inciso 1° comprende, a la par del lecho y las ropas del deudor, de su mujer
e hijos, los “muebles de uso indispensable” del mismo, aludiendo a aquellos de los que no se puede prescindir de un
hogar – y no a todo ajuar doméstico propio de una familia tipo – esto es, a los que impiden el normal desenvolvimiento
familiar, según los usos y desarrollo material alcanzado, en el lugar y tiempo de que se trate y en tanto tengan el
carácter de únicos. Vale decir, que habiendo más de uno, los otros no resultan indispensables y por consiguiente,
pasan a ser embargables
Siguiendo la letra del Código Civil, La ley 12.296, referida a inembar gabilidad de ropas y objeto de uso indispensable,
por su artículo Io agregó como segundo apartado del artículo 3878 del citado Código lo siguiente: "Cualquiera sea el
privilegio del acreedor, no podrá ejercerse sobre el lecho cotidiano del deudor y de su familia, las ropas y muebles de
su indispensable uso y los instrumentos necesarios para su profesión, arte u oficio. Sobre estos bienes tampoco podrá
ejercerse el derecho de retención".
La jurisprudencia se ha expedido favorablemente sobre la posibilidad de trabar medidas cautelares sobre bienes
muebles, tales como televisores color, combinado de radio y tocadisco, juego de living y mesa ratona, con el propósito
de no disminuir sin razón suficiente la garantía de los acreedores.
Es indudable que las mesas ratonas y el aparato de aire acondicionado no tienen el carácter de indispensables, y por lo
tanto, son embargables
Algo similar ocurre con el juego de sillones de living, los que resultan embargables, puesto que las sillas del comedor –
que integran los muebles de uso común en la casa – y su indiscutible afectación a la vida hogareña, suplen las
funciones de aquel. En idéntico sentido se ha resuelto que, cuando existen en el patrimonio del ejecutado otros bienes
10
KIELMANOVICH Jorge L. -“Medidas Cautelares”, Editorial Rubinzal-Culzoni, Edición 2000, Capitulo IV, p.227
6
que pueden cumplir idéntica función, las sillas, sillones, la mesa del comedor y ratonas no se encuentran comprendidas
en el supuesto del art. 219 del Cód. Procesal
Sin embargo, se ha resuelto que, en la medida en que el juego de living, que integra el ajuar de la casa, contribuye a
proporcionar a sus ocupantes un mínimo bienestar, se encuentra comprendido en el art. 219, inc 1°, del Cód Procesal
Civil y Comercial de la Nación. Pero para que pueda encuadrarse un sillón de dos cuerpos dentro de las directivas del
art 219, éste debe constituir un mueble indispensable dentro del ambiente familiar, de modo tal que no pueda ser
reemplazado a través de otros bienes existentes en el inmueble.
Respecto de la araña de luces, se ha dicho que es inembargable cuando no sea suntuosa, pero es embargable cuando
es de bronce con caireles de dieciséis luces. El mueble llamado modular, en razón de su naturaleza y destino, resulta
de indispensable uso; por lo tanto, es inembargable.
Así, las cosas, entran en la categoría de bienes inembargables la estufa de gas y sus garrafas; el horno, la heladera
eléctrica; la máquina de coser; las copas y tazas de té, café, tetera, cafetera y lechera, siempre que no sean objetos
suntuarios; el lavarropas, sin que obste a su inembargabilidad el hecho de requerir reparación. Recientemente se ha
dispuesto el levantamiento del embargo trabado sobre un lavarropas, un teléfono, dos sillones, una mesa y un mueble
con estantes, fundándose el tribunal en que “resulta inenembargable el mobiliario o ajuar básico de un hogar que
exhibe características corrientes y no de lujo”
Ahora bien, en lo atinente a la embargabilidad del televisor se plantea una cuestión especial.
Las opiniones de la doctrina y los precedentes jurisprudenciales difieren respecto de este tema
Mientras algunos sostienen que no se trata de un bien de uso indispensable, y por lo tanto, propician su
embargabilidad, salvo que el deudor demuestre razones que hagan del aparato una cosa indispensable – por ejemplo,
enfermo o persona anciana - , otros lo consideran indispensable y inembargable, en razón de constituir un medio de
información corriente puesto al servicio del hombre común y que escapa a una estimación puramente especulativa.
Otra corriente de pensamiento, adopta una posición al margen de la discusión, y nos dice no cabe incluir al televisor, en
la categoría de embargable o inembargable. Ello es así pues a tal fin es indispensable analizar las circunstancias del
caso y determinar qué medida satisface necesidades especiales en lo que se vincula con el acceso al esparcimiento o a
la información.
Para resolver si es procedente acceder al desembargo del televisor, resulta necesario que su propietario demuestre,
que en su caso concreto, tiene ese carácter, sea por enfermedad, vejez u otra situación particular, y que resulte
indispensable para el mantenimiento de su bienestar y el de su grupo conviviente.
Siguiendo con el artículo 219, encontramos que también resultan inembargables aquellos instrumentos necesarios para
su “profesión”, “arte”, “oficio”. El fin de la misma en esta parte, apunta a proteger el trabajo individual del deudor, para
que este obtenga un salario o remuneración suficiente para su sustento, por lo que sólo resultan comprendidos dentro
de su ámbito los implementos, herramientas y útiles manuales de trabajo, y se encuentran por ende, excluidos, las
instalaciones, maquinarias, o instrumental mecánico que importan una acumulación de capital; una actividad que
excede el ámbito del desempeño personal del deudor; o una organización empresarial.
La ley menciona de manera exclusiva los instrumentos que utiliza el deudor para el ejercicio de su profesión, no
alcanzando a los que puede utilizar su familia (mujer e hijos)
Lo expuesto concuerda también con lo dispuesto en el art 3878 del Cod. Civil, haciendo referencia a los implementos
manuales de trabajo indispensables para el ejercicio individual de aquellos, pero de ninguna manera se refiere a
instalaciones, maquinarias o instrumental mecánico

En ese sentido, a modo de ejemplo, podemos enumerar los siguientes instrumentos inembargables:

Automotor de alquiler: Cuando se trata, por ejemplo, de un taxímetro con el cual trabaja el demandado, y no la sola
circunstancia de tratarse de un taxi, ya que es necesaria la prueba de su indispensabilidad como instrumento de trabajo
y que el producto de su explotación es único ingreso del grupo familiar del deudor. Asimismo, se requiere que el
automotor sea explotado en forma personal por el mismo deudor y no por terceros en relación de dependencia
Distinta solución se ha adoptado con relación a la licencia de taxi. En efecto, se ha resuelto que, toda vez que la
licencia de taxi constituye un bien inmaterial, respecto del cual pueden realizarse actos de disposición, no habiendo
previsto en forma expresa que actos de disposición se encuentran prohibidos, dicha licencia puede ser objeto de
embargo, razón por la cual, mientras dure dicha medida, su actual titular o licenciatario no puede cederla o transferirla
a un tercero
Muebles de oficina: No corresponde el embargo de los bienes de oficina de un profesional, compuestos por escritorios,
sillas, sillones, archivos de metal, maquinas de escribir, mesas de máquina, armario o biblioteca
Libros: son inembargables cuando devienen necesarios para el ejercicio de la profesión del demandado
Maquinas profesionales: El frontofocómetro y la mesa de trabajo, indispensables para el ejercicio de la profesión óptica,
resultan inembargables
Objetos de peluquería. Es viable el levantamiento del embargo sobre sillones o toilettes con espejos por considerarse
indispensables para el desarrollo de las tareas de un peluquero
Maquinarias: el aparato de rayos, cuando el deudor es de profesión odontólogo, no es susceptible de embargo. Cuando
se trata presumiblemente de un taller artesanal, no solo pueden embargarse las máquinas de coser y la plancha para
sastre. En cambio, las instalaciones, máquinas o instrumental mecánico que se encuentren en un establecimiento que
excede el ámbito de una actividad de carácter individual o artesanal, no encuadran dentro del precepto consagrado en
el art. 219 del Cod. Procesal.
Herramientas: Las instalaciones, máquinas o instrumental mecánico que se encuentren en un establecimiento que
excede el ámbito de una actividad de carácter individual o artesanal no encuadran dentro del precepto consagrado en el
art. 219 del Cod. Procesal
Ahora bien, si no se demuestra que las herramientas cauteladas pueden ser suplidas por otras que el deudor tuviese en
su taller mecánico, no cabe sino admitir el desembargo sobre la base de lo establecido en el art. 219, inc 1°, del Cód.
Proc. Civil y Comerc. De la Nación y la naturaleza de las cosas embargadas que, objetivamente, encuadran en las
necesarias para el ejercicio del oficio del afectado

SUPUESTO QUE COMPRENDE EL ARTÌCULO 219, INCÌSO 3º:

7
A continuación, voy a pasar a enumerar diversos supuestos comprendidos en la legislación de fondo, y que el artículo
219 CPCCN no describe en toda su extenciòn:

CREDITOS POR HONRARIOS ADEUDADOS – INEMBARGABILIDAD

Tratándose de un crédito por honorarios devengados como consecuencia de trabajos realizados en un expediente
judicial, debe admitirse el embargo preventivo, aunque limitado a una suma prima facie, guarden proporción con la
entidad de la deuda. Asimismo, no es óbice para decretar la medida el hecho de que el peticionario de ella no se haya
apartado del juicio, hábida cuenta de que su actuación genera el derecho al cobro de honorarios por las tareas
cumplidas hasta ese momento
Por otra parte, teniendo en cuenta el derecho que le asiste al letrado de perseguir el cobro de sus honorarios contra el
condenado en costas, resulta incuestionable la facultad de trabar embargo sobre el inmueble de propiedad del deudor
(conf art 500, inc 3° y 502, cod. Proc. Civil y Com. De la Nación). No obsta a lo dicho el hecho de que con anterioridad
haya trabado otro embargo preventivo contra el ejecutante que patrocinara hasta su renuncia por las sumas que
pudiera percibir en el curso del proceso.
Por lo demás, es posible el embargo de créditos mediante la correspondiente notificación judicial al deudor del
ejecutado, quien no podrá en adelante pagar a su acreedor (arg. Art. 736. Cod. Civil).
A su vez Es factible la traba de un embargo sobre los derechos que le correspondan al acreedor respecto de un
inmueble del deudor a fin de garantizar el pago de los honorarios a que tienen derecho los profesionales que tramitaron
el juicio

INEMBARGABILIDAD DE LOS SEPULCROS:

El inc 2° Del Art 219 Del Cód Proc. Civil y Com. De la Nación ha receptado como otra de las excepciones al principio
que establece que el conjunto de los bienes del deudor constituyen la prenda común de los acreedores, la
inembargabiliadad de los sepulcros.
Su origen legal se remonta al año 1902, cuando la ley 4128 estableció por el artículo 12 que los sepulcros no serían
ejecutables, salvo cuando se reclame su precio de compra o construcción, disposición que ulteriormente ha pasado al
Código Procesal vigente. No se trata de calificar a los bienes a que se refieren estas disposiciones como fuera de
comercio o extra- patrimoniales, sino de preservarlos de la acción de los acreedores. El artículo 219, al hacer la
salvedad referida al precio de compra o cons trucción del sepulcro, indica claramente que por esos créditos, los se -
pulcros son susceptibles de embargo, como de ejecución judicial es decir, de su venta en remate público, lo que no
podía ocurrir de admitirse la calificación de bienes fuera del comercio o extrapatrimoniales. Aun cuando la ley 4128 es
anterior al régimen jurídico vigente para la concesión de sepulcros, de carácter temporario, la disposición del ar tículo
219 del Código Procesal, que no hace distingos de ninguna naturaleza, persuade de su aplicación al sistema de
concesión por tiempo determinado.
Jurisprudencialmente se dijo que sería inimaginable que el constructor de una bóveda no pudiera percibir su crédito por
esa causa, por la indisponibilidad establecida en las normas administrativas municipales.
Embargabilidad de los bienes del Cónyuge:
Téngase en cuenta que, como regla, un cónyuge no responde con sus bienes propios o gananciales de su
administración por las deudas del otro, si bien, a la luz de los que dispone la ley 11357, procedería empero, el embargo
de los frutos de aquellos cuando la obligación se ha constituido por el otro para atender a las necesidades del hogar,
gastos de conservación de los bienes comunes o educación de los hijos o si se prueba que el bien ha sido
ilegítimamente sustraído a la responsabilidad que le es debida.
En ese orden de ideas, el pedido de un acreedor de embargar un bien que figura a nombre del cónyuge del deudor
debe ser rechazado de oficio por el juez y, en su caso, si lo hubiera ordenado, debe levantar la medida aunque se
encuentre consentida.
A su vez, se ha resuelto que, salvo que se trate de asegurar el cobro de créditos contra el haber propio del cónyuge
demandado, o para hacer efectivo el cobro de la cuota alimentaria, no corresponde trabar embargo sobre los sueldos,
honorarios o remuneraciones que el otro cónyuge deba percibir con posterioridad a la notificación de la demanda de
divorcio, ni tampoco sobre los frutos que produzcan los bienes propios de éste, después de ese momento.

EMBARGABILIDAD EN MATERIA DE ALIMENTOS:

En el caso de las deudas por alimentos, y tratándose específicamente de alimentos a favor de la madre e hijos del
obligado, la jurisprudencia ha dicho que resultan embargables su aparador, cristalero, mesa, sillas (existiendo otras) y
teléfono inalámbrico, y a que no se encuentran en la categoría de indispensables. Así, pues, si bien lo que importa para
decretar la inembargabilidad de los bienes del codeudor es que sean de uso indispensable, debe privilegiarse el
amparo de un derecho personalísimo del menor, como es garantizarle el cobro de alimentos que le debe su progenitor
para obtener una subsistencia digna.
A su vez, jurisprudencialmente se ha dicho que en relación al supuesto de pensión alimentaria, y en virtud el artículo
371 in fine del Código Civil, que cuando el uso exclusivo del inmueble para el alojamiento de la cónyuge e hijos
menores se constituye en pago en especie de la obligación alimentaria, dicho bien es inembargable, pudiendo
disponerse así el levantamiento de oficio del embargo indebidamente trabado
Embargabilidad en materia de Aeronaves, Buques y propiedad horizontal:
A su turno, la ley 23111 que aprueba la convención para la unificación de Reglas relativas al embargo preventivo de
Aeronaves de Roma (1933, señala que todas las aeronaves son susceptibles de embargo, con excepción de las
públicas, mientras que el artículo 35 de la ley 22232 veda el embargo sobre los inmuebles gravados a favor del Banco
Hipotecario por préstamos otorgados para vivienda única propia
Por su parte, la Ley 20094 de Navegación, en su artículo 541 dispone que no pueden ser objeto de embargo a) los
buques de guerra nacionales o extranjeros, y los buques en construcción destinados a incorporarse a los efectivos
militares de un Estado b) todo otro buque afectado al servicio del poder público del Estado nacional, de una provincia o

8
de una municipalidad, y los demás buques de propiedad o explotados por el Estado nacional, una provincia o una
municipalidad, si el propietario o explotador renuncia a ampararse en la limitación de responsabilidad prevista en el
Título III, Capítulo I, Sección 4°.
Tampoco pueden ser embargados los buques afectados al servicio del poder público de un Estado extanjero c) los
buques cargados, prontos para zarpar, salvo que la deuda respectiva haya sido contraída para reparar, aprestar y
aprovisionar el buque para ese viaje, o sea posterior a la carga del buque.
En materia de propiedad horizontal, cabe señalar que no resulta jurídicamente admisible embargar la totalidad de un
edificio sometido al régimen de propiedad horizontal o alguna parte de el, ya que no se trata de bienes que pertenezcan
consorcio, sino a los copropietarios, que son personas distintas de aquel. Así, por ejemplo, el ascensor es
inembargable cuando pertenece a un edificio dividido en propiedad horizontal y se ejecutan deudas del consorcio.
Además cabe señalar que los efectos de la inscripción como bien de familia de la unidad funcional desti nada a vivienda,
en un edificio sometido al citado régimen, no alcanzan a la unidad destinada al depó sito de vehículos. Ello por cuanto
esta última no reviste el carácter de una unidad complementaria accesoria a la vivien da amparada, sino que conforma
una unidad funcional independiente de las restantes que integran el edificio.
Por otra parte, se ha decidido que la inembargabilidad del bien de familia no puede oponerse cuando se trata de la
ejecución de un crédito originado en expensas comunes, pues la obligación de contribuir al pago y costos necesarios
para el mantenimiento del inmueble afectado al régimen de pro piedad horizontal, tiene su fuente en el reglamento de
copropiedad, que es preexistente a la afectación del régimen del bien de familia que el propietario pudiere hacer; de
modo que las deudas por expensas comunes dan lugar a embargo y ejecución, pues no se trata de obligaciones
nacidas con posterioridad a la inscripción, sino de "rubros" o "renglones" de tales obligaciones.
Embargabilidad de las Cuentas Bancarias:
En este caso, se toma en consideración la exclusión del abuso del derecho, recordando al instituto como el que
no permite ejercer un derecho permitido por una norma jurídica en forma tal que vulnere derechos de terceros, sin que
a la persona que lo ejerce, le cause algún beneficio, o que vaya en evidente desmedro de un derecho ajeno, motivo por
el cual, por ejemplo, no es procedente trabar embargo sobre cuentas corrientes bancarias si es de presumir que el
demandado cuenta con otros bienes suficientes para responder a los créditos, que ya ello ocasionaría un perjuicio a
que no se detiene con la sola inmovilización de los fondos depositados, sino que normalmente originará dificultades en
las relaciones comerciales y financieras del cuentacorrentista con los bancos y con terceros tenedores de cheques
librados con anterioridad al embargo
En cambio, resultan embargables los depósitos en caja de ahorro, plazo fijo – nominativos o transferibles, ya
que dichos fondos no están afectados a relaciones comerciales, sino que en la mayoría de los casos suponen reservas
al margen de la cuenta corriente cuya inmovilización no afecta normalmente derechos de terceros

INEMBARGABILIDAD POR PRÈSTAMOS HIPOTECARIOS QUE PROVENGAN DEL BANCO HIPOTECARIO NACIONAL
Y DE PRESTACIONES ASISTENCIALES:

De los inmuebles adquiridos o construidos con préstamos otorgados por el Banco Hipotecario Nacional, se ha decidido
que la inembargabilidad dispuesta respecto de aquellos (art. 35, ley 22232, modif, por ley 24143, art 34) es de carácter
imperativo, dado el interés social y familiar que sustenta, siendo irrenunciable para el beneficiario, lo que obliga al juez
a aplicarla aun de oficio. En otro aspecto en este caso, se estableció que la inembargabilidad de los inmuebles
adquiridos mediante préstamo otorgado por la institución señalada, no obsta a que los acreedores del adquiriente
puedan peticionar la inhibición general de bienes de éste, a efectos de evitar que el titular. Pero la inembargabilidad
prevista, al tratarse de una vivienda financiada por el Banco Hipotecario Nacional, no alcanza al tercer adquirente de la
cosa protegida, si la transferencia no cuenta con el consentimiento de la institución ban cada, ni a las expensas
comunes.
A este régimen se suman las viviendas familiares adquiridas con créditos otorgados por bancos oficiales o mixtos pro -
vinciales
A su vez, se agrega la ley 25.963 que establece la inembargabilidad de las sumas percibidas con motivo de
prestaciones asistenciales tales como subsidios, ayudas, contribuciones o contraprestaciones no remu nerativas por
participación en planes sociales, becas y pasantías. Esta inembargabilidad está limitada al monto del salario mínimo,
vital y móvil, estableciéndose proporciones de embargabilidad en la medida en que superen dicho monto.

INEMBARGABILIDAD EN MATERIA LABORAL.

La inembargabilidad en materia laboral, en principio, rige la normativa del Código de Procedimientos Civil, debiendo
completarse la lista de bienes exceptuados con los supuestos previstos en la ley de contrato de trabajo (vi vienda del
trabajador por las costas del juicio y limitaciones en cuanto al embargo de los salarios e indemnizaciones laborales).
Principio general
En lo que respecta a los bienes inembargables, rigen en el proceso laboral las previsiones legales aplicables en el
fuero civil.
Bienes exceptuados de embargo por ley
La vivienda del trabajador no podrá ser afectada al pago de costas en caso alguno (art. 20 parr. 2o, ley de contrato de
trabajo 20.744), siendo irrelevante, a los efectos del beneficio, el valor de la misma (28).
Normas de la legislación laboral. Remuneraciones. La legislación laboral tiene variadas normas al respecto: 1) Ley de
Contrato de Trabajo 20.744. Texto ordenado por decreto 390/76. Título IV, De la remune ración del trabajador:, Capítulo
II, Del salario mínimo vital y móvil. Inembargabilidad: Artículo 120. "El salario mínimo vital es inembar gable en la
proporción que establezca la reglamentación, salvo por deu das alimentarias". Capítulo IV, De la tutela y pago de
remuneración. Cuota de embargabilidad. Artículo 147: "Las remuneraciones debidas a los trabajadores serán
inembargables en la proporción resultante de la aplicación del artículo 120, salvo por deudas alimentarias. En lo que
exceda de este monto, quedarán afectadas a embargo en la proporción que fije la reglamentación que dicte el Poder
Ejecutivo Nacional, con la salvedad de las cuotas por alimentos o litis expensas, las que deberán ser fijadas dentro de
los límites que permita la subsistencia del alimen tante". Aplicación al pago de indemnizaciones y otros beneficios: Ar -
tículo 149. "Lo dispuesto en el presente capítulo, en lo que resulte aplicable, regirá respecto de las indemnizaciones

9
debidas al trabajador o sus derecho habientes, con motivo del contrato de trabajo o de su extinción". 2) Reglamentación
de la Ley de Contrato de Trabajo. Decreto 484/87 (Regí. arts. 120, 147, y 149, Régimen del contrato de trabajo).
Artículo Io. "Las remuneraciones devengadas por los traba jadores en cada período mensual, así como cada cuota del
sueldo anual complementario son inembargables hasta una suma equivalente al im porte mensual del salario mínimo
vital fijado de conformidad con lo dispuesto en los artículos 116 y siguientes del régimen de contrato de trabajo. Las
remuneraciones superiores a ese importe serán embargables en la siguiente proporción: 1. Remuneraciones no
superiores al doble del salario mínimo vital mensual, hasta el diez por ciento (10%) del importe que excediere de este
último. 2. Retribuciones superiores al doble del salario mínimo vital mensual, hasta el veinte por ciento (20%) del
importe que excediere de este último". Artículo 2o. "A los efectos de la determinación de los importes sujetos a embargo
sólo se tendrán en cuenta las remuneraciones en dinero por su importe bruto, con in dependencia de lo dispuesto en el
artículo 183 del régimen de contrato de trabajo". Artículo 3o. "Las indemnizaciones debidas al trabajador o a sus
derechohabientes con motivo del contrato de trabajo o su extinción (por despido) serán embargables en las siguientes
proporciones: 1. Indemnizaciones no superiores al doble del salario mínimo vital men sual, hasta diez por ciento (10%)
del importe de aquéllas. 2. Indemnizaciones superiores al doble del salario mínimo vital mensual, hasta el veinte por
ciento (20%) del importe de aquéllas. A los efectos de de terminar el porcentaje de embargabilidad aplicable de acuerdo
con lo previsto en el presente artículo, deberán considerarse conjuntamente todos los conceptos derivados de la
extinción del contrato de trabajo". Artículo 4o. "Los límites de embargabilidad establecidos en el presente decreto no
serán de aplicación en el caso de cuotas por alimentos o litisexpensas, las que deberán ser fijadas en modo que
permitan la subsistencia del alimentante". En el campo de la inembargabilidad se ob servan también las
indemnizaciones por accidentes de trabajo.

BENEFICIO DE LITIGAR SIN GASTOS, INEMBARGABILIDAD?

El beneficio de litigar sin gastos exime del pago de las costas del juicio pero no del embargo que terceros acreedores
puedan pedir sobre las sumas de dinero obtenidas en la causa, que se rige por las reglas de la inembargabilidad de
ciertos bienes y no por las del mencionado beneficio.

INEMBARGABILIDAD DEL USUFRUCTO DE LOS PADRES SOBRE LOS BIENES DE SUS HIJOS:

el usufructo de los padres sobre los bienes de los hijos. se ubica dentro de la categoría de los bienes exceptuados de
embargo en lo que fuera necesario para el cumplimiento de las cargas derivadas de aquél conforme a los artìculos 291
y 292 del código civil.

INEMBARGABILIDAD DE LA RENTA PÙBLICA:

La inembargabilidad de la renta pública, en principio, tie ne su razón de ser en su afectación a los servicios públicos, y
si no se acreditó que eran imprescindibles los fondos embar gados para su satisfacción, son susceptibles de tal medida.
De ahí que, para que resulte procedente el levantamiento de la medida cautelar, en virtud de lo dispuesto por el art. 105
de la ley 19.987, debe acreditarse que las sumas de dinero en cuestión son indispensables para preservar el bien
común, su origen o procedencia, y el servicio público a que se hallan afectadas243. Ello es así porque no todo el dinero
del municipio puede ser considerado "renta", calificación que sólo co rresponde a las sumas que recibe a cambio de las
múltiples y diversas formas en que la comuna presta a la comunidad los servicios que le son propios, dentro de los
cuales no se incluyen las donaciones.
Se ha resuelto que eran embargables los depósitos en cuenta corriente general que tenía la Municipalidad de la Ciu dad
de Buenos Aires, si no resultaba que a consecuencia de tal medida judicial se la privaba de los elementos indispensa -
bles de que dependía su subsistencia, ni que estos fondos eran indispensables para satisfacer impostergables
necesidades públicas. En relación con los fondos públicos provin ciales, el más alto tribunal ha decidido que el, control
administrativo sobre el movimiento de aquéllos no importa convertirlos en bienes inembargables.

INEMBARGABILIDAD DEL BIEN DE FAMILIA Y LA VIVIENDA ÙNICA:

El art. 38 de la ley 14.394 dispone que "el bien de familia no será susceptible de ejecución o embargo por deudas
posteriores a su inscripción como tal, ni aun en caso de concurso o quiebra, con excepción de las obligaciones
provenientes de impuestos o tasas que graven directamente el inmueble, gravámenes constituidos con arre glo a lo
dispuesto en el art. 37, o créditos por construcción o mejoras introducidas en la finca". Asimismo, el art. 37 auto riza a
afectarlo habiendo prestado el consentimiento el cón yuge: "si éste se opusiere, faltare o fuere incapaz, sólo podrá
autorizarse el gravamen cuando mediare causa grave o mani fiesta utilidad para la familia". La ley 14.394, en su art. 34
y ss., establece un régimen especial por medio del cual tiende a proteger el ente familiar, tutelando su bienestar
económico y su supervivencia; a tal fin introduce restricciones, propor cionando a aquél un hogar inembargable e
inalienable que los preserve de la miseria, le garantice un abrigo y le permita atender a sus necesidades.
Así, pues, se limita las acciones de los acreedores en lo relativo al cobro de sus créditos mediante la ejecución del in -
mueble o de sus frutos (art. 38).
En algunos ordenamientos provinciales, se dispuso la inembargabilidad automática de la vivienda familiar, tal es el caso
de Código de Procedimientos de Mendoza, de La Pampa, la Constitución de la provincia de Santiago del Estero y la de
Córdoba
Para poner un ejemplo de este tipo de legislación, encontramos Córdoba, a partir de su reforma de la constitución del
año 1987, consagra explícitamente la inembargabilidad de la vivienda única. En tal sentido, el art. 58 de dicha carta
provincial dispone: "Todos los habitantes tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna, la que junto a los servicios
con ella conexos y la tierra necesaria para su asentamiento, tienen un valor social fundamental. La vivienda única es
inembargable en las condiciones que fija la ley". Por otra parte, la ley reglamen taria es la ley provincial 8067, la cual
establece en su art. Io que se considerará automáticamente inscripta de pleno derecho como bien de familia la vivienda
única que cumpla con los requisitos establecidos en la ley nacional 14 394 y la ley provincial 6074. El caso más
renombrado a raíz de estas normas ha sido el caso "Banco Suquía c/Tomassini". En la referida causa un banco privado

10
de la provincia de Córdoba inició un Juicio ejecutivo ron- ira un particular por lo que trabó embargo sobre la vivienda
única del deudor. Por tal motivo, el demandado solicitó el levan la miento de la medida cautelar amparándose en el art
58 de la Constitución provincial y en la ley 8067. Posteriormente, el Ban co planteó la inconstitucionalidad de las normas
señaladas
El Juzgado de primera instancia interviniente hizo lugar a lo peticionado por el Banco tras declarar la
Inconstitucionalidad de dichas normas. El fallo fue apelado por el particular demandado y revocado por la Cámara que
se expidió a favor de la constitucionalidad. Posteriormente, el caso llegó al Tribunal Superior de Justicia de la provincia
de Córdoba.
El alto tribunal cordobés entendió que en la institución de la inembargabilidad humana plasma dos en los tratados
internacionales de jerarquía constitucional Señaló que la vivienda única y asiento del grupo familiar es una situación de
hecho, por tanto mutable, y por ello debe eximírsela de la inscripción registral, operando automáticamente el resguar do
legal. Asimismo, de acuerdo con la jurisprudencia de la Corte Constitucional colombiana sostuvo que, en virtud del art.
2° del Pacto San José de Costa Rica, la adecuación de la legislación interna al texto de la Convención puede ser
cumplida por la jurisprudencia y no únicamente por la legislación formal.
Finalmente, en el año 2002 la Corte Suprema de Justicia d la Nación declaró la inconstitucionalidad del art. 58 de la
Constitución de Córdoba y la ley provincial 8067, al considerar que las relaciones entre acreedores y deudores sólo
pueden ser objeto de la exclusiva legislación del Congreso de la Nación en virtud de lo dispuesto en el art. 75, inc. 12
de la C.N. Asimismo, entendió que es materia propia del Congreso de la Nación determinar, "qué bienes del deudor
están sujetos al poder de agresión patrimonial del acreedor —y cuáles, en cambio, no lo están—", por lo cual "no
corresponde que las provincias incursionen en ese ám bito". En este sentido, ha sido compartido por la doctrina
mayoritaria.
El criterio sentado por la Corte Suprema fue acatado por el máximo tribunal de Córdoba por razones de economía
procesal, hasta que volvió a tratar la cuestión en la causa "Romero c/Lerma". En esta oportunidad, el tribunal sostuvo
que la inembargabilidad de la vivienda única no resulta contraria a las normas federales que también establecen la
defensa del bien de familia. La ley nacional 14.394 también establece, como medida de defensa del bien de familia, la
inembargabilidad e inejecutabilidad, de modo que no puede decirse que la Constitución de la provincia de Córdoba le
haya dado a este bien una protección mayor. El objeto de protección coincide con el del bien de familia; esto es que,
además de ser única, se trate de una vivienda cuyo valor no exce da las necesidades de sustento y vivienda de su
familia. Asimismo, el tribunal resaltó que la vivienda única no puede ser mirada desde la óptica constitucional
exclusivamente como propiedad, sino también como derecho social garantizado concurrentemente por las normas
constitucionales supranacionales, federales y lo cales.

INEMBARGABILIDAD SOBRE BIENES DE LA IGLESIA:

Los tribunales han dicho, que dado que los bienes sagrados de la Iglesia están exentos de la jurisdicción de la
autoridad civil y sujetos a la autoridad eclesiástica legítima, para decretar el embargo sobre ellos se requiere el
cumplimiento de las formalidades impuestas por las normas respectivas, tomando así la doctrina de Bidart Campos, en
la cual considera que la ley estatal debe hacer un envío al derecho canónico, y que para que el embargo proceda, debe
seguirse el procedimiento que exija este cuerpo normativo para la reali zación de actos que importen su enajenación o
su afectación patrimonial.
Los tribunales también han resuelto que habiéndose probado que se trata de bienes sagrados, sin que se acreditara su
desafectación al culto divino, ellos pertenecen al dominio público eclesiástico y no resultan suscep tibles de embargo y
ejecución forzada.
A su vez, resultan inembargables las habitaciones adyacentes a la Iglesia, dada su afectación al servicio público
eclesiástico (para el despacho de los asuntos parroquiales), lo cual es aplicable a la sede del obispado, en donde se
atienden todas las cuestiones administrativas y eclesiásticas concernientes a la dióce sis. Si el bien inmueble se
encuentra directa y mediatamente vinculado a la finalidad propia del obispado en los términos del canon 1254.2 del
Código Canónico, es un bien inalienable, imprescriptible e inembargable, mientras no se lo desafecte o se autorice su
enajenación de acuerdo con la legislación canónica

INEMBARGABILIDAD DE LOS BIENES DEL ESTADO:

Es improcedente el embargo de un inmueble del Estado Nacional, pues de los términos del artículo 2340, inciso T del
Código Civil -aun cuando su enumeración sea meramente ejemplificativa-, cuanto del texto del artícu lo 2342 del mismo
cuerpo legal, se infiere que la fórmula diferenciadora del dominio público del Estado del dominio privado de él, estaría
dada por la circunstancia de que las cosas destinadas al uso y goce de todos e insusceptibles de propiedad privada,
según su naturaleza, serían dominicales, razón por la cual atendiendo a la finalidad y a los servicios para los que está
destinado el inmueble en cuestión, su carácter de tal deviene indiscutible y su inembargabilidad también. (Ver fallo
miranda)
Las decisiones que se pronuncien en juicios contra la Nación, cuando sean condenatorios contra ésta, tendrán carácter
meramente declaratorio, limitado al simple reconocimiento del derecho que se pretenda (art. 7o, ley 3952). Debe
distinguirse entre bienes públicos y privados del Es tado, en el caso de bienes de las provincias se aplica un criterio
similar. En este campo también opera el concepto de bienes fuera de comercio (Cód. Civ., arts. 2336/2338). Los bienes
particulares de las municipalidades resultan, en principio, embargables (art. 42, Cód. Civ.), salvo que se acredite que
están afectados a un servicio público, o que resultan imprescindibles para satisfacer necesidades pú blicas
impostergables. No pueden invocarse disposiciones de leyes lo cales que dispongan la inembargabilidad o la supediten
a determinados requisitos, contrariando derechos y garantías que acuerda la ley civil, lo mismo que la renta pública.
Finalmente la ley 25.973 declaró aplicable el régimen de inembargabilidad en beneficio de las provincias, los municipios
y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en relación con los fondos públicos que les pertenecen, previsto en los
artículos 19 y 20 de la ley 24.624 y sus normas complementarias.

11
Embargo Indebido. Levantamiento de oficio. Si las causas que generaron el embargo fueron producto de causas
incorrectas no habría fundamento que sostenga la medida, por eso se establece que ante los supuestos del art. 219 del
C.P.C.C.N. se va a producir el levantamiento de oficio regulado en el art. 220 del mismo código. En el procedimiento del
embargo el juez toma conocimiento cuando llega el acta al juzgado y recién ahí puede obrar, es una facultad
potestativa.

Levantamiento a pedido de parte


El art. 65 CPCCN habilita a que la parte solicite el levantamiento del embargo si “el interesado justificase haber
incurrido en rebeldía por causa que no haya estado a su alcance vencer. Serán aplicables las normas sobre ampliación,
sustitución o reducción de las medidas precautorias. Las peticiones sobre procedencia o alcance de las medidas
precautorias tramitarán por incidente, sin detener el curso del proceso principal”.
Si el embargo se produce sobre bienes inembargables y el juez no actúa de oficio la legitimación para solicitar la
remoción del mismo se amplia a la parte, su conyugue o hijos aunque la resolución que lo decretó se hallare consentida
según lo establece el art. 220 CPCCN.

Levantamiento a instancia de terceros


Kielmanovich sostiene que “los terceros afectados por un embargo sobre bienes de su propiedad o respecto de los
cuales les asista un mejor derecho a ser pagados, cuentan con dos mecanismos para tutelar su derecho y obtener el
levantamiento del embargo: por un lado, por la promoción de un incidente simplificado de levantamiento sin tercería;
por el otro a través de la deducción de las llamadas tercerías de dominio y eventualmente de mejor derecho, las que
según lo establece el artículo 101 del Código Procesal. Habrán de tramitar por las normas del juicio ordinario, sumario
o ya por las de los incidentes, de acuerdo a la mayor o menor complejidad del asunto”. i

Levantamiento de embargo sin tercería


El art. 104 CPCCN establece: El tercero perjudicado por embargo podrá pedir su levantamiento sin promover tercería,
acompañando el titulo de dominio u ofreciendo sumaria información sobre su posesión, según la naturaleza de los
bienes... Se dará traslado al embargante… La resolución será recurrible cuando haga lugar al desembargo. Si lo
denegara el interesado podrá deducir directamente la tercería, cumpliendo los requisitos exigidos por el art. 98.
Es un incidente optativo, abreviado y de excepción al que solo se recurre cuando es de sencilla resolución y la prueba
es concluyente.
Cuando se habla de que la prueba varia según la naturaleza de los bienes quiere decir que si son bienes no
registrables, se probará con la posesión teniendo en cuenta la presunción de propiedad del artículo 2412 del Código
Civil. Si son bienes inmuebles la prueba deberá ser sobre la existencia del título, escritura pública, la tradición y la
inscripción en el registro para que sea oponible a terceros (este requisito no se exige en aquellos bienes adquiridos en
subasta pública ya que la venta queda perfeccionada con la aprobación del remate).

Levantamiento de embargo con tercería


Kielmanovich dice que la tercería es la pretensión de que se vale una persona distinta de la actora y demandada que
intervienen en un determinado proceso, a fin de reclamar el levantamiento de un embargo decretado en él sobre un
bien de su propiedad o en razón de su mejor derecho a ser pagado frente al embargante.
El artículo 97 CPCCN establece que la tercería de dominio deberá deducirse antes de que se otorgue la posesión de
los bienes; la de mejor derecho antes de que se pague al acreedor.
El artículo 99 CPCCN establece que el tercerista podrá en cualquier momento obtener el levantamiento del embargo
dando garantía suficiente de responder por el crédito del embargante, comprensivo del capital, intereses y costas, para
el caso de que no probase que los bienes embargados le pertenecen.
La tercería de dominio quiere obtener la reivindicación de la cosa embargada, por eso los modos de prueba tanto para
los bienes muebles como para los inmuebles son iguales que la prueba de ambos bienes que se expuso en el
levantamiento de embargo sin tercerías.

12
i

Das könnte Ihnen auch gefallen