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El 24 de julio del 2001, entró en vigencia la ley 19.741, texto que modifica el
régimen de pensiones alimenticias contenido en la ley 14.908. A continuación
analizamos los principales aspectos de dicho texto legal.
Para ver los requisitos que se deben cumplir para presentar una demanda de
alimentos en favor de sus hijos pulse aquí.
Pensión mínima.
Se presume que el demandado tiene ingresos, como para pagar a su hijo menor, el
40% de un ingreso mínimo, es decir, $40.000 aproximadamente. Ahora bien, si el
demandado tiene más de un hijo menor, lo que se presume es que tiene ingresos
para pagar por cada uno, el 30% de un ingreso mínimo ($30.000).
Alimentos provisorios.
El juez deberá decretar alimentos provisorios, desde el momento en que exista
fundamento plausible del derecho a alimentos (antes el juez podía hacerlo, ahora,
se le exige que lo haga). Tratándose de alimentos para hijos menores de edad, la
ley no sólo obliga al juez a decretar alimentos provisorios, sino que le da un plazo
muy corto para hacerlo: 10 días desde la notificación de la demanda. Si el
demandado no puede darlos, deberá aportar las pruebas que demuestran que no
puede hacerlo, en dicho plazo.
Hasta hoy día, al no existir la obligación del juez de decretar los alimentos
provisorios, si es que la mujer no los pedía, el juez no los decretaba.
Tratándose de alimentos para los hijos menores del demandado, existían casos en
que solicitándolos la mujer, el juez no los daba y otros en que lo hacía en fechas
posteriores al comparendo. Incluso a veces, los decretaba un poco antes de la
dictación de la sentencia, momento en el cual, obviamente el asunto ya no tenía
ningún sentido. Por eso es tan importante que ahora la nueva ley le dé un plazo
para hacerlo cuando se trata de alimentos para hijos menores de edad.
Si el trabajador teme que esta forma de pago perjudique su trabajo, el juez podrá
eximirlo por una vez, pero si no cumple, el juez volverá a la regla general y
ordenará que su empleador le descuente por planilla el monto de la pensión.
Antes de la modificación, el juez podía ordenar la retención, pero muchas veces los
demandados le pedían que no lo hiciera para no perjudicar su trabajo. El juez
accedía a su petición, y los demandados no cumplían con la forma de pago que el
juez les ordenaba, debiendo la mujer solicitar órdenes de arresto, que muchas
veces no solucionaban el problema porque no se ubicaba al demandado para
arrestarlo o arrestándolo éste pasaba los 15 días preso sin pagar.
Antes, quienes debían autorizar estos avenimientos eran los secretarios de los
tribunales. Ocurría entonces que la demandante y el demandado, luego de celebrar
el avenimiento, debían ponerse de acuerdo para ir al juzgado con el fin de que el
secretario autorizara sus firmas, lo que retrasaba la validez de los mismos y a
veces terminaba en viajes inútiles, con pérdida de tiempo y de plata, porque uno de
los 2 no asistía al tribunal en la fecha acordada.