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Pascual Fernández, José DEL CHINCHORRO A LA NASA: EL PUERTO DE


LAS NIEVES, AGAETE
1988 "Del chinchorro a la nasa: el Puerto de las Nieves
(Agaete)". En Actas del Coloquio de Etnografla Marítima, pp. José Pascual Fernández.
53-67, Santiago de Compostela, Museo do Pobo Galego. Dep. Antropología Cultural.
Universidad de Lo. Laguna.

INTRODUCCION
En la presente comunicación pretendo abordar someramente algunos de los rasgos funda-
mentales de la historia de la vocación marinera de Agaete (1) en el presente siglo. Los aspectos
fundamentales a los que me refiero se concretan en tres momentos claves. En el primero, lavo-
cación marinera a la cual nos referimos se evidencia por una importante dedicación al cabotaje
interinsular, dedicación que se mantuvo hasta los añ.os cuarenta con pujanza. Desde aquí se dió
paso a un segundo momento clave, en el que tras la caída del cabotaje se centrará la economía
marinera en el trabajo con los chmchorros, al que se dedicará una cifra bastante alta de pobla-
ción hasta los añ.os sesenta, en los que la innovación tecnológica de la "nasa grande" marcará
un tercer y nuevo momento.
Estos procesos se dan paralelos al del establecimiento del Puerto de Las Nieves como en-
tidad de población en la que los pescadores son mayoría. A principios de siglo y hasta los añ.os
cincuenta, la grnn mayoría de los pescadores de Agaete residían en el casco del pueblo, situado
poco más o menos a un kilómetro del mar. Con la construcción de un grupo de viviendas so-
ciales ("casas baratas'') hacia comienzos de los cincuenta se modificó esta tónica, y los pescado-
res pasaron a residir en Las Nieves. Hoy en día este núcleo de población cuenta con unos dos-
cientos treinta habitantes, cifra que se ve muy incrementada en los veranos por un abundante
fenómeno de residencia seamdaria.
Dos elementos ecológicos resultan especialmente interesantes desde nuestra perspectiva
a) El "mar de leva"(olcaje muy fuerte en~ oril~) azota la zona con frecuencia en los in-
viernos, lo que no permite mantener fondeados barcos donde usualmente se hace en verano. No
hay refugio pesquero en el pueblo que evite esto, lo que, como ya veremos, condiciona aspec-
tos como el ciclo productivo, comercialización, etc.
b) El viento, abundante y fuene en verano, y mucho menos en invierno, dificulta durante
la primera estación muchas veces las mreas pesqueras. especialmente con cierto tipo deanes.
El factor 'a' podemos decir que durante mucho tiempo ha provocado en la wna, como en las

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HISTORIA DE UNA TRANSFORMACION TECNOLOGICA
zonas norte ~ las restantes islas, una gran dificultad para faenar en los inviernos. Todavía hoy
en esta estación han de botarse y vararse las embarcaciones a diario. El factor b' implica una En el presente apartado hablaremos sobre la problemática de las transfmnaciones tecnológi·
serie de dificultades a la hora de faenar en los veranos; desplazarse muy lejos a base de remos cas que, desde el mundo marinero. han influenciado en el man::.o social y económico de Agaete.
con viento del calibre que es allí usual es bastante dificultoso, por poner un ejemplo que podría Partimos para ello de la consideración de las características de la economía tradicional de
ser muy caracterlstico de las épocas de las que vamos a tratar. aquellos que podemos considerar pescadores en el Agaete anterior a 1940. Epoca en la cual el
Además de estos dos factores hemos de resaltar que la riqueza en fondos rocosos cabotaje cumplía un papel fundamental en las actividades de la zona y el sector.
("mariscos") de la zona proporciona (o proporcionaba) una importante reserva piscícola. Con los aftos treinta nos encontramos con la primera transformación económica im¡x>r-
En esta ponencia abordo un tipo de análisis en gran medida cualitativo por la gran dificul- tante: el desarrollo del transporte por carretera provoca que el tráfico de cabotaje pierda rentabili-
tad de obtener datos exactos sobre los temas que me ocupan. En "Especialización y Estrategias dad , y de esta forma. que en un período de tiempo bastante cono, se vaya a pique. Nos encon-
de las unidades ¡roductivas de un pueblo de pescadores. (Las Nieves, Agaete)", ponencia pre- tramos por tanto con la primera transformación tecnológica que influirá sobre el sector, aunque
sentada en .el simposium de Antropología de la Pesca en el lll Congreso de Antropología de no se de directamente a su interior.
San Seba.suán, abordo un análisis sincrónico y cuantitativo de algunos aspectos fundamentales La mano de obra antes empleada por el cabotaje pasaría a ser absorbida, después de su
de esta misma comunidad. Un estudio mucho más amplio puede ser hallado en mi memoria de caída, por una técnica de pesca que se caracteriza por necesitar mucha mano de obra: los chin-
Licenciatura titulada "El Pueno de Las Nieves (Agaete): especialización y cambio tecnológico chorros. Que aumentaron bastante en número precisamente a ¡mtir de estas fechas y que se
en una comunidad pesquera" (2 vols.) presentada el30-ll-1.984 en la U. de La Laguna. En ella mantuvieron en esta situación hasta los aftos sesenta, fecha hacia la cual se produce la otra gran
abordo análisis demográficos, históricos y de estrategias productivas mucho más detallados. transformación tecnológica sobre la cual nos centraremos y que examinamos con mayor dete-
En el presenta mapa puede observarse la situación de algunas de las comunidades funda- nimiento: la introducción de la nasa grande, que a la vez ofrecía una mayor rentabilidad y que
mentales de pescadores en la isla de Gran Canaria. interactuaba en la cadena trófica de manera tal que provocaba una disminucíon en las capturns de
los chinchorros.
A la hora de abordar este apartado nos vemos obligados a considerar aspectos como la in-
teracción de las diversas técnicas de pesca con el medio manno, con la cadena trófica, etc., in-
teracción que intentamos reflejar prestando atención a las implicaciones ecológicas de las mis-
mas, lo que cobra especial imponancia de cara a la transición del chinchorro a la nasa. y de cara
Las Palmas a un cierto examen crítico de la situación actual.

LA HORA DEL CABOTAJE


La economía tradicional de Agaete se encontraba centrada en actividades como la agricul-
La Aldea tura, el cabotaje, la zapatería, etc. Como zona hasta hace poco muy rica en agua y tierras férti-
les. la agricultura tuvo un gran desarrollo. Pero ni esta actividad ni la zapatería son las que lla-
man nuestra atención. Lo relevante para nosotros es la importancia que el tráfico de cabotaje
tuvo para la economía de la comarca desde siglos atrás hasta la déca:ia de los treinta.
Específicamente nos interesa la imponancia que tuvo el cabotaje desde comienzo de siglo
hasta esa fecha
No parecen existir ningún tipo de archivos sobre los barcos que tenían su base en Agaete
y el Puerto de Las Nieves. Los armadores que poseían buques en esta zona han fallecido ya, y al
ser empresas de un caracter "familiar••, no quedan archivos que puedan ser consultados, así
como no existen tampoco en el Ayuntamiento, Junta de Puenos Menores, etc, sobre el tráfico
en la zona. El medio al que hemos recurrido de cara a reconstruir en la medida de lo posible
estas actividades no es otro que la tradición oral, medio por el cual, de todas fornutS, no pode-
mos ir mucho más allá del presente siglo. De cualquier manera tenemos algunos otros datos
que confmnan la importancia del cabotaje en la zona desde muy antiguo(2). El pequeño muelle
con el que todavía cuenta Las Nieves fue realizado hacia 1875, y una fecha tan temprana confrr-
MAPA GRAN CANARIA ma que este tipo de actividades tenía un gran raigambre en Agaete.

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De entre las familias que poseían barcos dedicados al cabotaje en la zona destaca notoria- que se suponía alemán, se pr<Xluce el ocaso del tráfico de cabotaje, se produce el hundimiento de
mente la constituida por "los Trujillo'', que llegaron a poseer una verdadera flota de vapores y esta familia, principal empresa armadora con notable diferencia de la zona.
veleros dedicados al cabotaje interinsular y con la cercana costa de Africa. En total serfan unos Una alternativa debía aparecer para satisfacer la mano de obra excedente que habían deja:io
diez barcos los que llegaron a tener; una verdadera flota para la época (3).0tras familias quepo- libre los barcos de cabotaje. La alternativa significaría un giro hacia la faceta "pescadora", un
seían buques destinados al cabotaje eran los "Padrón" de Galdar, los de''Marfa Pepa" de Agaete, giro hacia la actividad extractiva de los recursos del mar, antes que hacia la faceta comercial que
una cambullonera a la que conocían como "la Cangreja", etc.(4).En total más de una quincena gobernaba el cabotaje. Los chinchorros serán los que tomarán este papel.
de buques destinados al calx>taje podíamos hallar en la zona, y teniendo en cuenta que cada uno
de ellos contaba con una tripulación que oscilaba entre 10 y 12 hombres (al menos), nos pode-
mos hacer una idea de la imponancia que el calx>taje poseía de cara tanto al pueblo como a la LOS CHINCHORROS
población de pescadores. Además, otros buques de las "compañías del tomate", Fyffes, Tory,
Con la caída del cabotaje la mano de obra que queda sin trabajo a consecuencia de ello en
etc., también teman entre sus tripulaciones a muchos marineros de la zona. En suma, para una
buena parte encontrará empleo en los chinchorros, artes de arrastre utilizados preferentemente
población que oscilaba entre las 3159 personas en 1.900 y las 4900 en 1940 (población de de-
recho), tal número de personas trabajando en el cabotaje era muy notorio. Por ejemplo, según para la captura de especies como la sardina, chicharro, caballa,etc.
los datos obtenidos a partir de los padrones de 191 O, en esta fecha aparecen unos 250 marine- Al ser sacados del mar por zonas de playas (mienttas sea "JX)Sible) mediante la tracción hu-
ros, y de entre estos, 9 con el título de "pescadores" .En esta época la diferenciación no era del mana, y al ser artes que muchas veces tienen unos 100 ó 150 metros por cada manga, más el
todo nítida entre ambas actividades. Si bien muchos de los llamados marineros no eran "pesca- copo, etc., es evidente que necesitan mucha fuerza de trabajo para su empleo, son necesarios
dores" en sentido estricto, pues su familia procedía "de tierra", y sus actividades en la mar se ce- muchos hombres. Normalmente para un chinchorro de estas dimensiones son necesarios unos
fiirían al cabotaje, si que podemos decir que los pescadores que existían en esta época trabajaban veinte hombres.
durante gran parte de su tiempo en el cabotaje. Antes de la guerra antes de los años cuarenta, no proliferaban excesivamente las unidades
La dedicación que por tanto mantenían los pescadores de la zona noroeste de la isla de Gran productivas que centraban su actividad en el chinchorro. Después de esta fecha aumentó su nú-
Canaria poseía un caracter eminentemente de ··uempo parcial''. Durante la primavera y el vera- mero hasta llegar a unos seis trabajando a la vez, propiedad de pescadores de Agaete, más otros
no se dedicaban a la pesca, pues esta es la época en la que el tiempo favorece estas actividades, y tres o cuatro que llegaban a venir del vecino puerto de Sardina, y del Sur, y que muchas veces
desarrollaban estas tareas preferentemente en el Sur de la isla, al ser la única zona de elevadas también absorbían mano de obra en Agaete (5). Una sencilla multiplicación nos da un censo de
capturas en la que había delegacioner. de las empresas conserveras o de salazón. Durante el in- unos 100 pescadores dedicados a las faenas de los chinchorros, más algunos otros que se dedica-
vierno, en el cual las inclemencias del tiempo los obligaban a desplazarse de la zona Sur de la ban a la pesca del calamar o de liña en pequeñas chal~, y dos wúdades productivas que conta-
isla, al habitar en chozas en los barrancos de Mogán o Veneguera, se enfrentaban tambien en ban ya en esta época con algunas nasas de hiemo y tela metálica.
Agaete con un mal tiempo casi contínuo (mar de leva o "relx>so'). Por ello tenían que dedicarse No era tan1¡X)CO en este caso una actividad que se desarrollara de igual manera en verano e
a otras actividades: este era el caso del cabotaje. Unas palabras de un viejo pescador, nacido en inview.o. Mientras que en la estación veraniega se salía a pescar con el chinchorro todos los
Mogán pero que desde su más tierna infancia vivió en Agaete describen esto con gran claridad: días, y se dejaba a un lado el traslado a Mogán, en invierno el tiempo, el mar de leva casi cons-
EntreVistador; Antes iban a Mogán en los veranos a pescar...? tante típico de las zonas Norte de nuestras islas, impedía que se pudieran utilizar los anes con la
misma frecuencia que en la estación anterior. Dado esto habían de ser complementados los in-
Pescador, "Antes del movimiento díamos todos los añ.os ... todos los añ.os, hubiera o no gresos provinientes de la pesca con otros producto de actividades distintas. Se combinaba el tra-
hubiera dfamos en Abril... y a veces nos corría el invierno de allí... Cuando el invierno bajo en los empaquetados de tomates o en la agricultura con la pesca, o se iba al pinar en busca
nos corría porque no teníamos casas sino eran chozas... (...)" de leña para venderla posterionnente en los pueblos cercanos, etc... No era por tanto una activi-
Entrevistador: Y antes en los inviernos se embarcaban por los malos tiempos de aquí dad estrictamente full time, aunque había niveles diferentes de dedicación a la misma, y en algu-
¿no? ... nos casos esta dedicación era prácticamente exclusiva. Otras veces la importancia de estas acti-
vidades para los productores era menor; gente de "tierra" podía ocasionalmente participar en las
Pescador; ..Yo antes de soltero todos los añ.os ...cuando venía de Mogán... ¡a embarcar!, me
embarcaba. .." faenas de este tipo de anes sin que ello implicara que la pesca tomara caracter centtal para ellos.

No solo era el cabotaje la alternativa a escoger. Muchas veces optaban también por tmba- A la vez un cierto número de marineros residentes en Agaete faenaban en las aguas del
jar en la agricultura. Lo que debe quedar claro es que la pesca era, en la gran mayoría de los banco Sahariano.
casos, una actividad a tiempo parcial, que debía ser complementada a lo largo del ciclo anual. Hacia 1960, según datos de los padrones, hallamos unos 102 pescadores y 32 marineros
Pero el cabotaje tenía que de morir. Había de dejar su lugar predominante en la zona como que en su mayoría (estos últimos) se hallaban embarcados en la costa Africana. En
vehículo de transporte de mercancías. Con los añ.os 30, con el desarrollo del tiáfico rodado de 1965,mientras el número de marineros pennanecía constante, el de pescadores se veía casi redu-
mercacías, y marcado por el hundimiemo de un va¡x>r de los Trujillo a manos de un submarino cido a la mitad: 61.

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La pregunta acerca de cual fue el motivo que provocó esto es obligada. La contestación
más plausible y la que confmnan los testimonios emic, acusa a las "nasas grandes" de este fe- El proceso estaba claro. Ante la rentabilidad que ofrecía la nasa grande, y ante el papel que
nómeno. La transformación se dio en un período de tiempo muy corto como nos confrrma un tomaba ésta en la cadena trófica, como veremos en el siguiente apanOOo, aquellos pescadores
antiguo propietario de chinchorros. que poseían un mínimo de capital dan el salto. Aquellos otros que no lo poseían en ese mo-
mento se verán muchas veces ayudados, tanto para poner nasas como para instalar motores, ¡xr
"...no, no hubo más ninguno, se quitaron todos a la vez (...) Sí, en el año se quitó todo". "gente de tiena"o "de fuera... Como dice un pescador:
Se quitaron todos los chinchorros menos uno. que hasta hoy ha seguido funcionando y "Después de la guerra, después de la guerra, cuando ya la gente fue cogiendo más conoci-
que sobrevivió ¡x>r una serie de peculiaridades especfficas.(6). núento y fueron viendo ya el asunto, todo el mundo se dedicaron a poner nasas y a poner
Dos factores resultaron fundamentales de cara a la caída en picado de los chinchorros en motores, porque siempre había alguien que ayudara, le daba la mano..."
esta época. Uno de ellos fue la elevada rentabilidad comparativa de las nasas grandes , otro un La introducción de los motores más o menos generalizada se dió a comienzos de los ai\os
fenómeno de tipo ecológico que estudiaremos más adelante. sesenta, y en algunos casos un poco antes; la de las nasas grandes ocurrió paralela a aquella:
Unas palabras del hijo de un antiguo propietario de chinchorro explican esto muy gráfica- los motores favorecieron el acceso a los pesqueros "profundos" y alejados de la costa que nece-
mente. sitaba esta técnica. Las palabras anteriores del pescador se refieren a que fue después de la gue-
•• .. .antes el hilo de algodón pues como se trababa en los riscos pues se rompía. y casi no rra, pero mucho después, como aseveró posteriormente en la conversación.
daban para ello y mire padre, esto casi no da ya para los artes, y tanta gente para partir, Las implicaciones de esta innovación son evidentes; de las unidades productivas constitui-
pues antes se usaban 15 ó 20 hombres por cada arte, y había por lo menos aquí cuatro das por 20 hombres se pasa a otras en las que bastan dos, y las elevadas capturas de sama y
artes, como el mío, y todos tenían pues quince o veinte hombres para trabajar en las pla- pargo propias de los primeros años de utilización de esta técnica le dieron una rentabilidad nota-
yas de ahí abajo. Pues mire padre. ya que tenemos la falúa, vamos a arrimar los chincho- ble. Pero ••• ¿Qué pasaba con aquellos que no podían emplear esta técnica? ... ¿Qué pasaba con
rros y dedicamos a las nasas y a la pesca fuera. de cordel. Pues listo, arrimemos los chin- los desposeídos de medios de producción, de embarcaciones con las cuales siquiera salir a pescar •
chorros y nos dediquemos a las nasas..." con liña?.
Este pareció ser uno de los razonanúentos fundamentales empleados por los propietarios La emigración o la pesca en el banco Canario Sahariano fueron las únicas salidas para
de los chinchorros en la época, aunque no el único. Veamos someramente las características de aquellos que carecían de medios de producción y no tenían quien se los proporcionase. Quedan
las ru5aS grandes. así explicadas las cifras que comentábamos en el apanOOo anterior, la disminución de 102 a 61
pescadores en el plazo que va de 1.960 a 1.965. Gran parte de esta emigración se dirigirá hacia
Las Palmas y se instalará en los barrios marineros de la capital.
LA NASA Con la adopción de esta técnica por un número cada vez mayor de las unidades producti-
La nasa ba sido de siempre utilizada por los pescadores de Agaete. Ahora bi~ el modelo vas, con el aumento en definitiva de las nasas fondeadas en la zona, se produce el comienzo de
actual de~ cuya construcción se realiza en hierro y tela metálica, se introdujo en Las Nie- un proceso de incremento constante del número de nasas de cada unidad productiva al bajar el
ves en la década de los añ.os 20. Efectuó esta innovación una unidad productiva especiahnente índice de capturas ¡x>r cada una de ellas. De poseer entre diez y quince nasas en total-de los di-
capitalizada, que precisamente fue la primera también en introducir los motores ¡x>r esa misma versos tipos- por unidad productiva, se pasa en nuestros días a 150 en algunos casos...Y las
época. Una década más tarde otra unidad productiva seguiría su camino: comenzaría a utilizar capturas son menores ahora que antes. como nos han referido numerosos informantes.
motores y nasas de este tipo. Las empleadas anteriormente se elaboraban con cana y mimbre, y
capturaban mucho menos pescado.
Hacia los años sesenta se ensayó un nuevo tipo de~ cuyo modelo parece haberse to-
mado de unas similares que se utilizaban en el Sur de Gran Canaria. Nasas de 12 metros de perí- UNA VISION ECOLOGICA DEL PROCESO
metro y un metro de alto, que empleaban un rollo de 50m x 1m de tela metálica. El resultado El único factor que intervino en la sustitución de los chinchorros por la nasa como tecno-
fueron unas -capturas elevadas de especies además muy apreciadas. como la sama y el pargo. Se logía dominante entre los pescadores del Puerto de las Nieves no fue la mayor rentabilidad in-
las fondeaba a profundidades relativamente grandes, en ..pesqueros" que antes se utilizaban para
mediata de la nasa grande. Paralelo a su introducción se produjo un curioso fenómeno que daba
la pesca a liña de las especies antedichas. Se produjo al mismo tiempo una búsqueda activa de la puntilla a los chinchorros; veamos sus características a la luz de las palabras de un viejo pes-
este tipo de lugares. cador.
La rentabilidad comparativa de tal tipo de nasa respecto a los chinchorros era bastante alta.
..Entrevistador: por esa época...¿Fue mucho más tarde cuando el Cápita dejó el chincho-
Exigía una inversión inicial medianamente elevada que normalmente se podían pennitir los no?
dueños de los chinchorros, aunque no los que en ellos trabajaban ganando solo una "soldada.. o
incluso menos. Pescador: Sí, más tarde...Cuando compré la falúa ya el Cápita no trabajaba con el chincho-
rro ...

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Entrevistador: ¿Y cómo fue que lo dejó él? •••¿Porque las nasas le daban más o ...? Pero no solamente tuvieron estos cambios tecnológicos y económicos esas implicacio-
nes. Paralelo, por ejemplo, al cambio del chinchorro por las nasas se dió un proceso de progre-
Pescador: No, después dejé ya de dir, quedó otro trabajando con el, pero después se empezó
siva "dedicación exclusiva" a las faenas pesqueras. Efectivamente, no se ttat.aba ya de una técni-
las nasas~ ya día cogiendo la sama que era quien echaba la sardina pa tierra y ansí
ca que pxiía emplearse sólo en verano y era compatible con la dedicación a otras actividades en
fue fallando la sardina. ..ya... ya nadie pOOía dir porque no ganaba, pa... vivir•..y ya todo el
invierno: significó, como veremos con mayor detalle, la sedentarización de una población de
mmuto fue buscando otra cosa•..
pescadores a tiempo completo durante todo el ciclo anual.
Entrevistador: O sea, que las nasas grandes fueron las que mataron los chinchorros prácti-
En otra dimensión también afectó la transformación a la caracterización de las unidades
camente•••
productivas de pescadores. Por un lado se produjo una disminución importante en el tamaño de
Pescador. Sí...Mataron el chinchorro y mataron todo, hasta la pesca.•.porque, si se matan éstas. Por otro, se dió una progresiva capitalización..• Efectivamente, las nasas resultaban
los padres ya no hay hijos ....". utensilios muy costosos para la economía de las unidades domésticas y /o productivas de la
Nada más gráfico que unas palabras corno las anteriores, conf1Im3da.s por otros grandes época. Para su adquisición blvo que recunirse a préstamos de "gente de fuera", y también a aho-
chinchorreros. El que las pronunciaba fue considerado en sus buenos tiempos corno el mejor rros obtenidos en la pesca en el banco Sahariano. Igual ocurrió con la adquisición de los moto-
patrón de chinchorro que había, y otros patrones hablan en los mismos términos. res, tan conectada con el empleo de las nasas como tecnología fundamental.
Queda clara. por tanto, la influencia de las nasas en el ecosistema marino sobre el que tra-
bajaban nuestros pescadores. Las elevadas capturas de pargo y sama. depredadores naturales de
especies como la sardina, elevadas cap.uras características de la primera época de las nasas gran- DEL TIEMPO PARCIAL A LA DEDICACION EXCLUSIVA
des, ocasionaban que la sardina se viera menos acosada y se acercara menos a tierra, con lo que En nuestra opinión no resulta muy arriesgado aflnnar que hasta los años cincuenta y se-
los chinchorr~ por su radio de acción ceñido a profundidades y distancias de la costa bastante senta no se constituyó una población numerosa de pescadores dedicados exclusivamente a estas
reducidas, veían sus capturas mermadas... E igual ocurrió con su rentabilidad, por lo que se in- laoores.
clinaba todavía más la balanza hacía las nasas grandes. Durante toda la historia de Agaete siempre ha habido un gran número de pescadores que se
Otro }:I'OCeSO interesante a coosiderar desde aquí es el de awrento en el tnírrero de nasas que se dedicaban en los inviernos a embarcarse. Hasta los años treinta, como ya hemos visto, esto se
ha venido dando desde los años sesenta, y que se ha visto favocecido poc la utilización de la maqui- realizaba en barcos de cabotaje interinsular principalmente. Desde los anos cuarenta a los se-
nilla en los últimos cuatro o cinco años. Cada vez hay más nasas..•Y parece que también cada vez senta, al carecerse de barcos de caootaje en los que embarcar, se pasó a hacer lo propio en barcos
se captura menos pescado y de menor tamaño. No sólo con la tu&\ ocurre esto. Igual pasa con el pesqueros que faenaban en el banco Sahariano, pero ahora era menor el número de marineros en
trasmallo. Este verano contemplé muchas veces como se levaban 25 nasas pequeñas y apenas se ellos. Conforme iba entrando la década de los años sesenta , al carecerse de barcos de cabotaje en
cogfan díez o doce kgs. de pescado • O se calaban una docena de paños de tramlallo para ca¡)turar los que embarcar, se pasó a hacer lo propio en barcos pesqueros que faenaban en el banco Saha-
ocho kilos de viejas ..• Cosas que unos años atrás habrían sido ímpensables. riano, pero ahora era menor el número de marineros en ellos. Confonne iba entrando la década
Todo hace pensar que se ha sobrepasado la capacidad de carga del territorio (utilizando COii de los años sesenta, y especialmente la de los años setenta, se redujo el número de pescadores
embarcados en 1a costa". En nuestros días apenas queda media docena de hombres faenando en
delicadeza un concepto tan problemático). Qué se deba bacer ahora ya es otro problema.
barcos de pesca de altura
A la vez era bastante nonnal hasta hace pocos años trabajar en los inviernos en la agricul-
IMPLICACIONES SOCIALES Y ECONOMICAS DE LAS tura, cultivando la tierra, en empaquetados de tomates, etc. Muchas veces se llegaba incluso a ir
TRANSFORMACIONES a recoger leila al vecino pinar de Tamadaba para venderla en los pueblos cercanos. La técnica de
la nasa acabó en buena medida con estas estrategias diversificadoras. Efectivamente, la nasa es
Hemos examinado ya los elementos fimdament.ales del cambio tecnológico que se ha dado una técnica que ha de ser utilizada a la fuerza durante todo el año por varios motivos. En primer
en la zona del Puerto de Las Nieves a lo largo del presente siglo. Cambio tecnológico que con- lugar, al implicar unos costos de producción altos por la necesaria renovación de la tela metáli-
taba, de suyo, con notables implicaciones sociales. La caída del cabotaje significó una dismi- ca cada cuatro o seis meses, la única fonna de amonizar estos costos es emplear las nasas de
nución importante de la marinería, de la pobJación dedicada a "embarcarse", y el que muchos de fonna continuada. Por otra parte, al tener que ser levadas las nasas con frecuencia, a causa del
los que se encontraron sin trabajo tuvieran que optar por marchar a la costa de Africa a pescar, grave peligro de pénlida que implica el dejarlas muchos días en el mar sin comprobar su situa-
por permanercer en Agaete trabajando en los chinchorros, o simplemente, por cambiar radical- ción, por las mooificaciones que pueden haber provocado las mareas o el "arruaje, esto exige
mente de actividad y/o residencia. Muchos marcharon a Las Palmas. una dedicación casi exclusiva a ellas, que aumenta proporcionalmente con el número de nasas
que posee la unidad pnxluctiva.
Cuando se produjo un fenómeno similar con los chinchorros, cuando les sobrevino a
estos la crisis, nuevamente gran parte de las familias que vivían del mar tuvieron que buscar No sólo provcx:a esto una creciente dificultad para combinar la nasa con otras actividades
otras ~vidades a que~ y otros lugares en donde vivir. fuera de la pesca, sino que también ocasiona el que dado un cierto número de nasas en la unidad

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productiva típica de dos personas, sus componentes no pueden utilizar prácticamente ninguna CONCLUSIONES
otta técnica de~ a no ser que la unidad productiva aumente de dimensiones y se disponga 1) Se han dado tres grandes momentos en el presente siglo en la vocación marinera de
de más fuerza de trabajo. La nasa por tanto aparece como una técnica que hace tender a las unida- Agaete, lo que }Xldríamos denominar tres épocas: la del cabotaje, basta los años treinta, la de
des productivas que poseen un cierto número de ellas a la especialización. los chinchorros basta los años sesenta, y la de la nasa hasta nuestros días.
2) El paso de cada una de estas épocas a la siguiente ha conllevado importantes ~for­
maciones sociales y económicas~ entre otras cosas ¡xr absorber cada una de ellas un número di-
CAPITALIZACION Y PRODUCCION
ferente de mano de obra respecto a la anterior.
Paralelo al proceso de establecimiento de unidades productivas estables que se da en los
3) El nacimiento de una población estable de pescadores dedicada durante todo el año a la
años sesenta. encontramos cómo se da también una progresiva capitalización de éstas, impres-
pesca y que no se emban::aba con asiduidad en pesqueros de altura o barcos de cabotaje nace con
cindible para el empleo de la tecnología reina en aquel entonces: la nasa.
los añ.os cincuenta y sesenta. Hasta ese entonces solían combinarse con gran frecuencia la
Este proceso no había comenzado en los años sesenta. Ya en los años veinte una unidad pesca de bajura con las actividades antes citadas o con el trabajo en tierra
productiva había alcanzado un grado de capitalización notable. poseyendo falúa, nasas, y un
4) El empleo de la técnica de la nasa exigía una capitalización importante, para lo que
sardinal (traiña). El capital en este caso provenía tanto de negocios en el mar como de otros en
tuvo un papel fundamental la inversión de gente de tierra.
tierra. A mediados de los años treinta otta unidad productiva más se sumó a esta tónica de eleva-
da capitalización. También en esta ocasión el origen del capital provenía de negocios en tierra 5) A partir del empleo de las nasas se produjo un proceso lento de acumulación de capital
(tiendas de comestibles, etc). y de un préstamo de gente de tierra. En los años cuarenta si bien que ha llegado basta nuestros días.
los chinchorros exigían un cierto capital, éste no era excesivo, de ahí el que proliferaran con 6) El motivo fundamental para la caída del cabotajen favor de los chinchorros fue el desa-
una cierta facilidad. Con la utilización masiva de las nasas a partir de los años sesenta cambia la rrollo del tráfico¡xr carretera.
tónica rápidamente. Inmediatamente después de la caída de los chinchorros proliferaron unida-
7) La causa de la caída de los chinchorros en favor de las nasas fue doble: las nasas grandes
des productivaliJ, de una o dos personas, que en pequeñas chalanas se dedicaban a la pesca de an*
resultaban muy rentables y a la vez interactuaban sobre la cadena trófica de manera que dificul-
zuelo con aparejo o a la pesca del calamar. Muchas veces se combinaba la pesca de este tipo en taban la actividad de los chinchorros.
Agaete con la pesca en barcos de altura en el Banco Canario Sahariano. Sin embargo la acwnu-
lación de capital resultaba difícil, y la necesidad de emplear motores y nasas para obtener una
rentabilidad óptima empujó a los pescadores que allí quedaban a pedir préstamos, a "gente de
tierra", para adquirir estos medios de producción. Prácticamente ningún pescador pudo comprar
estos bienes "al contado". Siempre debían intervenir alguien "de tierra", como fiador o com-
prando el motor para frselo posteriormente pagando poco a poco.
A partir de la compra del primer motor y las primeras nasas era normal que se produjera en
las unidades productivas o domésticas un lento proceso de acumulación de capital. Proceso que
se evidenciaba en la adquisición de embarcaciones y motores mayores para faenar en los vera-
nos, y que en las últimas décadas se ha visto muy favorecido por la pesca del bonito, elemento
clave en la acumulación de capital de algunas unidades productivas no del todo especializadas en
la nasa. Sin embargo la inversión realizada en estas embarcaciones "mayores" se veía limitada
¡xr el hecho de que no existía refugio pesquero en Las Nieves. con lo que las embarcaciones de
más de 6 ó 6,5 metros sólo podían ser utilizadas en verano ¡xr el peligro que conllevaban los
"rebosos" en invierno. La rentabilidad de una inversión en medios de producción de varios mi-
llones para que sean utilizados sólo en los meses de verano parece no demasiado plausible. Los
barcos mayores que han sido adquiridos, dados estos condicionamientos no sobrepasan los doce
metros, y hasta que no se realice el refugio pesquero parece bastante difícil que se adquieran o
construyan barcos mayores. Al mismo tiempo, la inexistencia de un refugio pesquero ha limi-
tado la utilización de técnicas que se presumían rentables. como la ~ que dada la climatolo-
gía de la zona sólo podría ser utilizada de manera constante en invierno, y al estar los barcos
mayores varados no puede ser empleada.

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NOTAS BIBLIOGRAFIA

(l) Pueblo de la zona noroeste de Gran Canarla con unos 4.427 habitantes en nuestros días (datos Acheson, James M., AntJvopology of Fishing, Annual Review of Anthropology, 1981, 10: 275-
provisionales momenclators) 316.
(2) Pua estos temas resulta interesante consultar ·Las Comunicaciones Marítimas lntennsulares" Acheson, James M. & Reidman, R., Technical in.novation in the New En.glandfin.-fishing industry·
de Carmen Calero Martín y "Agaete en la Historia" de Jesús Véldez. entre otras referencJaS. Una vi- an. examinatiol'l of the Down.s an.d MoJv Jrypothesis, American Ethnologist IX, 1982, pp.
sión más detallada puede hallarse en mi memoria de Ltcenctatura. 538-558.
(3) Entre los nombres de estos barcos, siguiendo 1as referencias de la tradición oral, podemos citar: Alexander, P., Sea tenure in SouJhern. Sn Lanka, en Spoehr (ed.), 1980, (1977), pp. 91-11}.
Esperanza, San Carlos, la Luc~ el San Antonio, La Candelana, el Esperanto, el Consuelo, el Gadir,
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el Esterote, el Chip:trripi, y la Esperancilla. (ver pág. siguiente).
so de Antropología. San Sehastián.
(4) Los "Padrones" de galdar poseían buques como "El Aguila" y "El Boheme". Los de "Maria Pepa"
Berthelot, S., De la péhe sur le cote occiden.tale d'Afrique et des établissemen.ts les plus utiles au.x
poseían el pailebote "La Luz". Mauricio Alamo y Familia poseían "el Gaspar".
progrés de cette industrie, 1840, París. Bethune éditeur.
(5) Podemos enumerar los chinchorros de Agaete, haciendo referencia a los nombres por los que
Breton, Yvan D., The zn.jluence ofmodernization on. the modes ofproduction zn. coastaljlShing: an
usualmente son conocidos de la manera siguiente: poseían chmchorros "Juan de Todos", el "Cápi-
e:xample from Venezuela, en Stelhe Srnith (ed.) 1977, pp. 125-138.
ta", "Magín", "Manuelejo", "Manuel Niño", y "Manuel el de Leonor". El chinchorro de Magín sería
adquirido por Matí.as Annas Saavedra, consutuyendo la umca umdad productiva que todavía hoy se Calero Martín, C. G .• Las comun.icaclones marftimas interinsulares, 1979. Las Palmas, Colección
dedica a esta técnica. Guagua. Cabildo Insular.

Del venico puerto de Sardina venía el chmchorro de "Pepe el Ciego", y de "Juanero", otro más. Del Cano Fernández, V. & Pérez Artiles, J.. Estrategias de adaptación. de la pesca al proceso de desarro-
sur solía venir algún otro chinchorro. llo capital¡sta (Mogón, Gran. Canaria), 1984, Actas del III Congreso de Antropología, San Se-
bastJán.
(6) Entre estas peculiaridades podemos desta.car.
Cordell, J., Carryrn.g capacity an.alysis of fued territorial fishing, en Spoehr (ed.) 1980, (1978),
a) Un gran número de hijos que aportaban fuerza de trabajo, tan necesaria en este arte de pesca. pp. 39-62.
b) Utilizar mano de obra marginal (no integnuia en unidades productivas estables) o bien no sténdo-
Díaz Rodríguez, P., Ecologfa, modernización y transformación económica el'l una coi'I'Ul'IÍ.dad pes-
lo pero fuera de su jornada de trabajo norrnal.Además, a los pocos años de quedar trabajando en soli-
quera de Tenerife· San Marcos (lcod de los Vinos) en Actas del Coloquto de Etnografía Maríti-
tario en la comunidad se introdujo el hilo de nylon, con el cual los costes de mantenimiento de los
ma, 1984, Santiago de Compostela.
chinchorros se reducían muchísimo, y su rentabilidad se muluplicaba.
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