REÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL POLITECNICA DE LAS FUERZAS

ARMADAS

Nazareth Zambrano. CI: 27.084.926

Revolución industrial y sus consecuencias en la evolución de las ciencias de

la salud.

A mediados del siglo XVII, el continente europeo comenzaría a experimentar una

serie de cambios, que traerían como resultado principal el reemplazo del modelo
económico agrícola de antaño, por la industria tecnológica presente en los tiempos
actuales. Dichos cambios se repartieron en dos etapas principales. La primera,
comprendida entre el año 1750 y 1840, y una segunda, entre 1880 y 1914. Ambas,
caracterizas por la aparición de nuevas tecnologías que permitirían a los
trabajadores una mayor velocidad de producción, eficacia en el manejo de materia
prima, así como variación en la distribución demográfica de la población presente,
migraciones, surgimiento de nuevos modelos sociales y el surgimiento de un
nuevo tipo de profesionales que pudieran realizar la labor requerida por un mundo
en constante cambio.

Sin embargo, la industrialización que se inició en Inglaterra y posteriormente se

expandió a todo el territorio del continente, acarreo importantes cambios no solo
sociales y económicos favorables, sino también en las amenazas a la salud de los
pobladores y trabajadores de la Europa industrial.
El reemplazo de las pequeñas poblaciones por metrópolis fue un proceso
accidentado y lento. Los primeros trabajadores de estas nuevas empresas, fueron
los marginados sociales, inmigrantes ilegales, antiguos pobladores de los campos
que se trasladaron a las ciudades buscando oportunidades de empleo. Para su
desgracia, las condiciones desfavorables, deficiente en los alimentos y cadente
retribución monetaria por parte de los arrendatarios, se trasformaron en nuevas
amenazas para la salud de las personas.

Las soluciones, que pretendían afianzar los derechos de los empleados,

empezando por una retribución monetaria adecuada y protección legal durante sus
labores, llegarían tiempo después. La invención de nuevas maquinarias, así como
debutaron como alternativas magistrales para la facilitación del trabajo, fueron un
problema que ocasiono considerables pérdidas humanas durante el
desenvolvimiento de sus acciones. La minera, una de las principales actividades
practicadas por estas industrias en crecimiento, tuvo como consecuencia la
destrucción de una extensa área de terreno, contaminación del aire, surgimiento
de nuevos agentes patógenos. Pero, por las ventajas empresariales que
ofrecieron inventos tales como ‘‘La máquina de vapor’’ en 1829, que acabarían por
cambiar el curso no solo del trabajo en minería, industria textil, agricultura, sino
también en la medicina y sus áreas vecinas.

Los efectos adversos a la salud tuvieron también un origen psicológico. Cuando

los trabajadores debían dejar a sus familias para acercarse al área de trabajo
tendían a acoger conductas nocivas, tales como el alcoholismo y la prostitución,
que traían consigo enfermedades de transmisión sexual, entre las que se
destacan la clamidia y, problemas hepáticos. Las malas condiciones de
saneamiento básicas, toxicidad en el aire, escases de alimentos originaron
epidemias que llegaron a causar un número considerable de muertes.

Como consecuencia a estas problemáticas, surgieron numerosas iniciativas de

salud pública, servicios, orientados al tratamiento de enfermedades, control y
prevención de las mismas.
Los riesgos laborales que experimentaban los trabajadores por la falta de
experiencia, agregado de materiales químicos nocivos, poco aseo y gran cantidad
de lesiones que acabaron por cobrar la vida de muchos individuos, acabo por
formar dar un importante aporte a la salud ocupacional, evaluación de riesgos y
prevención de los mismos.

Aunque sin lugar a dudas la gran mayoría de avances en esta rama de la medicina
se dieron durante el segundo proceso de revolución industrial. Se dieron
importantes avances técnicos, biológicos y fisiológicos. El siglo XIX europeo,
marcado por el descubrimiento fundamental, primero, de mejores bases
fisiológicas para el conocimiento médico, que llevarían paulatinamente, a una
mayor eficacia en la práctica de la medicina. Mientras que, por otro lado, la actitud
de las poblaciones hacia el médico y la enfermedad, influida sin duda por este
contexto, desempeñará también, en el otro extremo de la cadena, un cometido
fundamental en el progreso médico. Esto último permitió que a principios del siglo
XX, la fatalidad relacionada con la enfermedad comenzara a mermar.

El nacimiento de las políticas de sanidad pública a través, en un primer momento,

del fenómeno hospitalario, fue también uno de los numerosos aportes que se
hicieron evidentes durante este espacio temporal. Es decir, el paso del hospital
común al hospital para enfermos con su función de escuela clínica (para la
capacitación del nuevo personal de salud) y, poco después, al nacimiento del
hospital-laboratorio, como movimiento conducente a la especialización de los
centros, con una atención particular dirigida al nacimiento del hospital psiquiátrico,
tratamiento de enfermedades cognitivas y, la aplicación de la primera vacuna
contra la viruela (1796).

También durante la revolución industrial tiene lugar una auténtica revolución sobre
la cirugía. Se realiza la primera ovariotomía por Efraín Mac Dowell en 1809, años
antes del descubrimiento de la anestesia. Los grandes elementos que
revolucionan la medicina y la cirugía del siglo XIX terminarían siendo la anestesia,
que no acabaría de desarrollarse mediados del siglo XX. Luego la incorporación
de antisepsia, asepsia en los procedimientos para disminuir el riesgo de infección
postoperatorias y, la detención de hemorragias reglada por pinzas quirúrgicas.

Por último, en el centro de la institución hospitalaria, surge el desarrollo del

personal hospitalario en todos los niveles de la jerarquía, la profesionalización de
los mismo con la evolución del papel de las instancias médicas en el seno de los
centros, la sustitución del personal sanitario religioso por enfermeros y la
diversidad de las relaciones entre el hospital y el estado en los distintos países.

Como se puede ver, durante los momentos más importantes de la revolución

industrial, surgieron una serie de problemáticas que como resultado forzaron la
evolución de la medicina quirúrgica, ambulatoria y ocupacional para maximizar las
oportunidades de supervivencia de los individuos. Con ello, la incorporación de
esas maquinarias y técnicas de ingeniería en el campo, acabarían por dar un paso
en la dirección correcta para la evolución y desenvolvimiento de las ciencias
sanitarias, trayendo consigo, mejor calidad de vida.