Gord*s

sin cabeza - Charlotte Cooper.

Traducción libre: Nicolás Cuello

Empecé a tomar conciencia del fenómeno "Gord*s sin cabeza" hace un par de años atrás,
cuando la ola actual de la Guerra contra la Obesidad ( también conocida en la prensa como la
Epidemia Global de la Obesidad, o la Crisis de la Obesidad, etc.) empezó a tener cada vez mas
cobertura y atención. Cada escrito colaboracionista sobe el costo financiero de la obesidad, y
cada perorata hecha nota de prensa sobre la bomba de tiempo que significa la obesidad era
acompañada por una fotografía de una persona gorda, aparentemente fotografiada sin su
consentimiento, con su cabeza cuidadosamente cortada, y fuera del marco de la foto.

Desde entonces, el fenómeno "Gord*s sin cabeza" se ha convertido en una marca del nuevo
periodismo. Es un tanto bizarro, porque la gente gorda esta en las noticias todo el día, casi
constantemente ; La "Obesidad" devuelve mas del doble de resultados en las noticias del
buscador Google que "Madonna". Pero somos presentad*s como objetos, como símbolos,
como un problema colectivo, como algo que tiene que ser discutido. A menos que juguemos el
juego y sostengamos miradas opresivas, autodestructivas, y medicalizadas sobre la gordura,
las voces de las personas gordas, sus sentimientos, sus ideas y opiniones sobre que implica ser
gord* están completamente ausentes de los discursos públicos. Es por esto, que actualmente
estamos completamente incapacitados para capitalizar de esta atracción masiva sobre el
cuerpo gordo por parte de los televidentes y los lectores, y esto seguirá siendo probablemente
de esta manera mientras seamos seres privados de nuestra propia representación y
autonomía.

Como "Gord*s sin cabeza", nuestro cuerpo se convierte en algo simbólico: estamos ahí pero no
tenemos voz, ni siquiera una boca en una cabeza, no tenemos cerebro, ni pensamientos ni
opiniones. En su lugar somos reducid*s y deshumanizad*s como símbolos del miedo cultural:
el cuerpo, la panza, el culo, la comida. Allí hay un simbolismo también, en la manera en la que
estas personas en estas fotografías han sido decapitadas. Es como si hubiéramos sido
castigadas por existir, nuestro derecho a hablar ha sido eliminado por una mirada lasciva,
nuestras imágenes sin cabeza acompañan artículos que asumen que un mundo sin gente como
nosotros seria un mundo mejor.

Sin embargo, estas son personas reales que dejan ver que han sido fotografiadas sin su
conocimiento, sin su permiso, sin haber sido remuneradas de ninguna manera, para
fotografías comerciales que luego son vendidas por fotógrafos y agencias. Me pregunto que se
sentirá abrir el diario una mañana, o hacer click en un sitio web, y ver una versión sin cabeza
de vos mism*, contra un titulo que denuncia y rechaza a las personas que se ven como vos.
Imagino que seria difícil incluso para una persona con una autoestima alta hacerse cargo de
esta humillación y vergüenza sobre su cuerpo, como no pensarlo para cualquier persona
gorda que ha crecido depresivamente en ambientes que l* han educado en el odio hacia su
propio cuerpo.

L*s "Gord*s sin cabeza" son una versión de la gente gorda, un desfile sin fin de nosotr*s,
tomado de nosotr*s y luego comercializado entre y para nosotr*s, con odio y de manera
ignorante. Estas imágenes están impregnadas del hedor de una cultura de vigilancia que para
las personas gordas - cuyos cuerpos son vigilados por miradas de desaprobación - es
demasiado familiar. Realmente es cierto que podrías estar en cualquier lado, caminando por
la calle, volviendo de hacer compras, esperando un colectivo, en el gimnasio, en una cantina,
hech* un desastre o verdaderamente hermos*, y así todo, una imagen sobre tu monstruosidad
puede ser producida y reproducida fuera de tu control, quizás sin que te des cuenta. Y podrías
ser cualquiera: un hombre, una mujer, un niñ* - si, un niñ* - rico, pobre, y todos los del medio.
Hay fotógrafos allí afuera esperando por gente como yo, que están al acecho, buscando las
tomas mejor pagadas: una mujer gorda de clase baja, vestida de la forma mas barata,
comiendo con entusiasmo comida chatarra en la calle. Yo sugeriría que el miedo al
cumplimiento de un estereotipo de la gente gorda hace esta toma bastante difícil de alcanzar .
Tanto es así que sorprendente la comida esta en gran medida ausente de estas imágenes, y
llamo la atención del espectador*, por ejemplo, sobre esta imagen de la mujer en un top
rayado, que ha cometido el error de estar en pie cerca de un cartel publicitario de un
sándwich, que ni siquiera está comiendo, cargando una bolsa de compras de Evans, la tienda
de ropa para mujeres gordas mas grande del Reino Unido. Así todo, la implicación de lo que
hace cuando llega a su casa es muy clara .

Encontré estas imágenes online, googleando las siguientes palabras: obeso, obesidad,
epidemia de obesidad, hombre obeso, mujer obesa, niñ* obes*, sobrepeso, gordo. Muchas de
las imágenes pertenecen al banco de datos e una de las agencias de fotografías mas grandes
del mundo, que facilita imágenes a empresas y medios de comunicación. Incluí un par de
imágenes en esta lista, de aquellas que no fueron decapitadas, aunque permanecen sin rostro
mostrando la parte de atrás de sus cabezas a la cámara. Una de estas fotos es bastante
memorable porque reúne a un grupo de mujeres gordas con sus ojos borrados, como si fueran
criminales. Quizás para algunas personas lo sean.

Si cualquiera de estas fotografías son de ustedes, o de personas que conozcan, y fueron
tomadas sin su consentimiento, me parece que puede ser una buena idea pedir asesoría legal.
SI alguna vez termino en una de estas fotografías, me gustaría que cada editor de imágenes en
el planeta sepa que voy a demandarles hasta el culo por haberlo hecho. Quizás sea una buena
idea dejar que las agencias se enteren que estas imágenes son deshumanizantes, o decirles a
los editores que es lo que pensamos cuando utilizan a l*s "gord*s sin cabeza", quizás incluso
recomendarles que cada imagen que toman y publican sobre una persona gorda sin cabeza
debería ser balanceada con un articulo por y sobre un activista de la gordura.

Me veo a mi misma en estas imágenes, luzco de la misma manera que muchas de las personas
en estas fotos, y me gustaría sugerir otros modos en los que pudieran estas imágenes ser
vistas: desafía tu disgusto, mirá mas allá de como la gente esta vestida, qué es lo que hacen,
pensá cómo la imagen fue tomada, qué mensaje esta siendo forzada a validar, cómo ese
mensaje se relaciona con la persona en la imagen, quien fue pagado por la fotografía, y luego
trata de imaginar quien será ese "Gord* sin Cabeza", tratá de ser alcanzado por su humanidad.

Version original: Cooper, C. (2007) ‘Headless Fatties’ [Online]. London. Available:
http://charlottecooper.net/publishing/digital/headless-fatties-01-07