Facultad de humanidades y Ciencias Sociales

Licenciatura en Historia
Historia Medieval

Informe:
Simbología política del poder imperial en
Bizancio: Los pendientes de las coronas.

Profesor: Nicolás Molina.

Taller: Historia Medieval
Alumno: Jaime Oportus P.

Viña del mar, 10 de octubre de 2018.

El poder desde mucho antes del periodo de la edad media, hasta hoy en día, ha sido para mi
juicio un problema. Una problemática bajo la perspectiva de la representación de este poder,
es decir, de donde emana realmente o como lo obtiene una persona en un sentido tanto
espiritual como terrenal.
En nuestras sociedades actuales, para que una persona pueda gozar y acceder al poder, debe
existir algún tipo de proclamación por parte de diferentes mecanismos como puede ser
democrático o autoritarios, por ejemplo, mediante la cual ostentará la delegación del conjunto
social, al que sustituirá en la toma de decisiones. De esta forma nuestros gobernantes a lo
largo de los años para reflejar su poder y establecerlo de una manera de primacía se
aprovechan mas de los medios de comunicación icónicos.
Así lo deja en manifiesto el profesor Héctor Herrera Cajas en su obra simbología política del
poder imperial en Bizancio: los pendientes de las coronas.
La materialización del poder es una forma de representación de este, es decir son diversas las
expresiones simbólicas que reflejan algún tipo de autoridad o poder como lo es: los diferentes
tipos de uniformes, la arquitectura, diversos tipos de creaciones culturales, o en este caso
detallare, la corona y sus pendientes.
Quizás uno de los símbolos monárquicos mas importantes e influyentes en cuanto al poder
sea la corona y sus pendientes, 1“las dimensiones simbólicas integradas en una corona son
múltiples y, con el paso del tiempo y las modificaciones culturales, se han acrecentado, pero
manteniéndose todas ellas centradas alrededor de su eje original, el poder.” Esto es tan
importante que normalmente se le llama a la institución en conjunto.
La religión con la corona y los pendientes estaban demasiados ligados, tanto así que Dios era
el que elegía al emperador para otorgarle el máximo poder, es decir existe una concentración
de poder en la persona que es emperador, en otras palabras, el sujeto que porta dicha corona
es la representación misma de Dios. A pesar de esta gran magnitud de importancia y poder
que influía en quien era el portador, la corona en si no es un objeto que tenga una utilidad
para la vida diaria, si no mas bien que su uso se restringe a los actos ceremoniales o de gran
importancia para aquella época.

1
Hector Herrera Cajas, “Simbologia politica del poder imperial en bizancio: los pendientes de las coronas”,
en: Byzantion Nes Hellár, 13.15, 1993-1996, p. 15.
Así pues, para ser coronado no basta solo con tener la corona, si no que se deben cumplir una
serie de pasos y solemnidades rigurosamente hasta llegar a la investidura. Es un ritual de
máxima importancia ya que, existía un lazo de divinidad en el momento exacto de la
coronación, con otras palabras, 2“hay pues, un misterio en el acto mismo de la coronación, en
ese instante en que Dios corona al elegido para gobernar el Imperio, usando de intermediario
al Patriarca o al Prepósito.” Esta relación mística que se genera es la que produce el poder
que asigna Dios al emperador y a la vez la divinización del monarca, quien era una persona
común, pasa a ser el sostén del universo. Todo esto se refleja en la corona, la cual es la
encargada de representar el poder tanto en el ámbito terrenal como espiritual. Claramente
existe una gran influencia de carácter religiosa, ante esto y por consiguiente es totalmente
obra del ser humano. Lo que probablemente ocurre hoy en día, si llegamos establecer algún
tipo de relación en cuanto a la soberanía que recae en la comunidad y la soberanía de origen
divino de los emperadores.
En definitiva, es precisamente la corona uno de los símbolos mas sagrados en aquel periodo,
por medio del cual se transmite el poder del todopoderoso a la persona elegida por el mismo,
como emperador. Sera la coronación la expresión mas clara y visible del dominio que posee
el emperador ante todo el imperio y personas que habitaban en el. Asimismo, por otro lado,
el lazo que existe con la ceremonia eclesiástica queda en clara evidencia, la existencia en
todas las ocasiones, de alguna figura como la de Cristo, un ángel, la virgen o algún santo, a
los cuales se le atribuye el gesto que en el ritual pertenece al patriarca o al prepósito, como
ya se había nombrado antes.
A pesar de que la corona con el paso de los siglos se fue modificando y evolucionando tanto
en el ámbito de características propias o añadiendo vestimentas especiales e incluso los
mismos pendientes, los cuales 3“son bien conocidos gracias a una abundante iconografía que
cubre todos los siglos de la historia del imperio”, cuya función era primordial ya que, era el
componente mas místico de la corona y lo mas valioso por que estaba compuesto por metales
y piedras preciosas y valiosas, los que se encontraban incorporados en la dimensión

2
Hector Herrera Cajas, “Simbologia politica del poder imperial en bizancio: los pendientes de las coronas”,
en: Byzantion Nes Hellar, 13.15, 1993-1996, p. 24.
3
Hector Herrera Cajas, “Simbologia politica del poder imperial en bizancio: los pendientes de las coronas”,
en: Byzantion Nes Hellár, 13.15, 1993-1996, p. 37.
espiritual. Aun así, la finalidad era la misma, el poder, la religión y la política. Tres elementos
esenciales compuesto en uno solo, la corona con pendientes del emperador.
Se puede entender que la iconografía y la simbolización, era el real poder existente en el
imperio de Bizancio. La increíble capacidad de materialización pudo lograr que el poder se
presentara del ámbito espiritual al terrenal y poder llevarlo acabo sobre el imperio y las
personas.