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Ornar J. Palmieri
XIII
Ornar J. Palmieri
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Contenido
Cuarta parte
Infecciones m icóticas y p o r algas
79 - Paludism o........................................................................................................635
80 - Enfermedad de C hagas.................................................................................645
81 - Toxoplasm osis................................................................................................655
82 - Leishm aniosis................................................................................................ 663
83 - B abesiosis....................................................................................................... 669
84 - Microsporidiosis............................................................................................673
85 - Infecciones por amebas de vida lib re........................................................ 675
86 - Esquistosom osis.............................................................................................679
87 - Fasciolosis.......................................................................................................683
88 - Paragonimosis................................................................................................ 687
89 - Capilariosis.....................................................................................................689
90 - Angiostrongilosis...........................................................................................691
VIII
91 - H idatidosis..................................................................................................... 693
92 - Triquinosis ......................................................................................................
93 - Cisticercosis ................................................................................................... 703
94 - Oncocercosis ..................................................................................................707
95 - Parasitosis intestinales ................................................................................. 711
96- Miasis .............................................................................................................. 731
97 - Síndromes de larva migrans .......................................................................735
Primera parte
Generalidades
Síndromes clínicos
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Introducción al estudio
de las enfermedades infecciosas
Ornar J. Palmieri
En los últimos años se han realizado importan una enfermedad es importante tener en cuenta el
tes avances en el conocim iento de las enferme ciclo biológico de los distintos microorganismos.
dades infecciosas en cuanto a su etiología, diag Las enfermedades infecciosas cumplen duran
nóstico, tratamiento y prevención; no obstante te su evolución distintos períodos: incubación,
ello, aún constituyen uno de los problemas más invasión, estado y convalecencia. Las formas clí
frecuentes en la práctica médica, y también, son nicas que originan pueden ser inaparentes o
las responsables de una elevada morbimortalidad. asintomáticas, leves, graves y mortales.
Las enfermedades infecciosas pueden compro
meter distintos aparatos y sistemas del organis
HISTORIA CLÍNICA
mo, por lo tanto, deben ser conocidas no sólo por
e! infectólogo, sino que todos los médicos dedi La historia clínica es el elemento fundamental
cados a la atención de pacientes tendrán que diag para llegar al diagnóstico, tanto en pacientes con
nosticar y luego tratar distintas infecciones. És enfermedad infecciosa, com o en los que pade
tas, están producidas por una gran variedad de cen afecciones debido a otras etiologías.
microorganismos tales como virus, bacterias, hon
gos y parásitos los que ingresan al organismo A n teced en tes h ered itarios. Pueden revelar
vehiculizados por aire, agua, alimentos, vectores condiciones que predisponen a las enfermedades
artrópodos, inyecciones, transfusiones, objetos infecciosas tales com o diabetes, alergia, asma,
inanimados (fóm ites), elem entos que producen talasemia, inmunodeficiencias y otras.
heridas traumáticas o quirúrgicas, hombre a hom
bre o de los animales al hombre (zoonosis). Los A ntecedentes personales. Son también de par
reservorios de dichos patógenos constituyen el ticular valor y deben incluir el interrogatorio so
punto de partida de la infección para el hospede bre enfermedades padecidas, puesto que algunas
ro susceptible, ya sea el hombre, los animales o confieren inmunidad permanente, mientras que
los vegetales. El tiempo en el cual se transmite el otras se caracterizan por la recidiva. Se interro
agente infeccioso en forma directa o indirecta de gará sobre antecedentes de vacunaciones, trans
persona infectada a sana, o de animal infectado a fusiones, heridas, operaciones, hábitos sexuales,
persona sana, o de persona infectada a animales viajes, drogadicción y consumo de medicamen
se denomina período de transmisibilidad. A fm tos, en particular analgésicos, antiinflamatorios,
de conocer las posibilidades de transmisión de corticosteroides y antimicrobianos. Respecto de
a P rim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
estos últimos se tendrá en cuenta la posibilidad ratura baja a lo normal una vez por día. Si la va
de generar resistencia microbiana, dificultar la riación es muy grande, fiebre en picos o en agu
búsqueda del agente etiológico a través de los jas, se denomina fie b re héctica y se observa en
exámenes microbiológicos, favorecer la aparición abscesos, infecciones piógenas y tuberculosis en
de sobreinfecciones bacterianas o micóticas e in tre otras.
cluso provocar fiebre por medicamentos. Los Fiebre rem itente. Es la que disminuye en ge
analgésicos, los antiinflamatorios y los corticos- neral por las mañanas, pero sin llegar a valores
teroides pueden normalizar o modificar la curva normales. Se observa en supuraciones, bronco-
febril y ocultar otros síntomas orientadores y ade neumonía y otras.
más, predisponer a la aparición de distintos pa Fiebre ondulante. S t caracteriza por períodos
decimientos infecciosos y no infecciosos. febriles cortos con intervalos de uno a varios días
de temperatura normal. Se constata en el paludis
A ntecedentes epidem iológicos. Pueden llevar mo, brucelosis, endocarditis bacteriana, enferme
por sí mismos al diagnóstico de la enfermedad dad de Hodgkin (fiebre de Pel-Ebstein), infec
infecciosa o a una firme sospecha sobre la m is ciones piógenas e infecciones canaliculares como
ma. Éstos, son una parte importantísima de la ana las de las vías biliares o urinarias. En este último
mnesis; se preguntará sobre el lugar de nacimien caso, en general, la infección se ve favorecida
to, la residencia habitual y los viajes a zonas en por la obstrucción de alguna de estas vías, que
démicas. Para evaluar estos dalos es preciso te cuando se debe a litiasis y la obstrucción es in
ner conocimiento de la geografía médica y de los termitente, la fiebre baja al restituirse la permeabi
períodos de incubación de las enfermedades que lidad de los conductos.
pudieron haberse contraído. Otros aspectos a in Fiebre recurrente. Se caracteriza por alternar
terrogar son los antecedentes de posibles contac períodos de fiebre continua de 5 días o más, se
tos con personas o animales enfermos o muertos, guidos de otros tantos días de apirexia. Se obser
vectores artrópodos, presencia de roedores, carac va en infecciones crónicas con episodios de bac-
terísticas de la vivienda, servicios sanitarios, epi teriemia.
demias, incursiones recreativas o accidentales en Hay que enfatizar en que la fiebre no siempre
ríos o arroyos, agua de consumo, alimentos y los es causada por un proceso infeccioso, por lo tan
antecedentes de haber estado en áreas endémicas. to, no debe asociarse con un intempestivo trata
miento antimicrobiano. La inflamación y el do
E nferm edad actual. Es el padecimiento que lor tampoco, aunque sea evidente la tétrada de
lleva a la consulta, es lo primero que hay que in C elso (dolor, rubor, calor, tumor); a veces se de
terrogar y son básicas las preguntas sobre cómo ben a colagenopatías, ataque agudo de gota, etc.
y cuándo com enzó, si tomó medicamentos antes El descenso de la fiebre puede ser brusco o en
(fiebre por medicamentos) o después del com ien crisis, o gradual o en lisis.
zo de la enfermedad (reacciones de hipersensi- La hipertermia es el aumento de la temperatu
bilidad, m odificación de la evolución de la m is ra sin la intervención de citocinas pirógenas y es
ma, deterioro de la inmunidad o la presencia de debido a mayor producción de calor con menor
microorganismos de selección). Habitualmente la disipación, o disregulación, en cambio fiebre es
fiebre es el motivo de la consulta, y de sus carac la elevación de la temperatura mediada por cito
terísticas sé pueden obtener elem entos orien cinas pirógenas com o respuesta a microorganis
tadores del diagnóstico; puede ser continua, in mos u otros pirógenos; y síndrome febril es una
termitente, remitente, ondulante o recurrente. respuesta fisiológica compleja con componentes
F iebre continua. Es la que presenta pocas va sistém icos, inm unológicos y endocrinos donde
riaciones diarias, las que no llegan a 1® C. Puede además de fiebre, hay taquicardia, taquipnea, su-
observarse en la fiebre tifoidea, endocarditis in doración, mal estado general, etc. En cuanto a la
fecciosa y otras enfermedades septicém icas. temperatura normal y otras causas de síndromes
Fiebre interm itente. Se la puede definir como febriles se estudiarán en los capítulos siguientes
una exageración del ritmo circadiano. La tempe (ver el capítulo Fiebre de origen desconocido).
C apitulo 1 - Introducción al estudio de las enferm edades infecciosas □
fecal, LCR, orina), identificación del microorga dad funcional parcial o total de los órganos invo
nismo. pruebas de sensibilidad in vitro, antige- lucrados o la muerte del enfermo.
nemia, reacción en cadena de la polimerasa (PCR).
Estudios virológicos. Exámenes directos, cul
TRATAMIENTO
tivos, serología, PCR, carga viral.
Exámenes parasitológicos. Materia fecal, san Sin diagnóstico no hay tratamiento ni pronósti
gre, orina, directo, enriquecimiento, serología. co. No deben prescribirse antimicrobianos hasta
Estudios micológicos. Directo, cultivos, serolo no tener el diagnóstico etiológico o por lo menos
gía, antigenemia, antigenuria, antigenorraquia. haber recogido las muestras para los estudios
Biopsias. Serán remitidas para su estudio histo- microbiológicos y posteriormente la realización de
patológico en los líquidos fijadores habituales, o las pruebas de sensibilidad in vitro (antibiograma,
en los que indique el patólogo de acuerdo con la CIM, CBM, poder bactericida del suero, etc.).
sospecha diagnóstica; y además, otra parle será En los distintos capítulos de este libro se am
enviada en tubo seco, estéril, o en solución fisioló pliarán los conceptos que aquí sólo se han enun
gica, para los estudios microbiológicos correspon ciado a fin de establecer generalidades sobre el
dientes. También el microbiólogo debe ser infor enfoque del enfermo infeccioso.
mado del posible patógeno para así orientar su
búsqueda a través de coloraciones especiales, me PROFILAXIS
dios de cultivo adecuados u otros estudios.
La prevención es una de las funciones más im
portantes del médico. Se deberá interrogar sobre
PRONÓSTICO
las vacunas recibidas y luego completar el esque
El pronóstico está en relación directa con la ma de vacunaciones de acuerdo con la edad, los
exactitud del diagnóstico y el correcto manejo estudios serológicos y la posibilidad de viajes a
terapéutico. No siempre puede establecerse un zonas endémicas. El amplio espectro de la pre
pronóstico acorde con la evolución, dada la po vención incluye el agua, los alimentos, los vec
sibilidad de situaciones imprevisibles o poco pre tores artrópodos y toda otra posibilidad de llevar
visibles que lo cambien en forma diametralmen la enfermedad de hombre a hombre, de animal a
te opuesta. El pronóstico incluye la curación sin hombre (zoonosis), a través de transfusiones,
secuelas, la curación con secuelas en la capaci hábitos sexuales, prácticas quirúrgicas; etc.
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Agente infeccioso: es todo organismo (virus, donde no sea un problema fundamental de salud
rickettsia, bacteria, hongo, protozoo o helminto) pública.
capaz de producir una infección o una enferme
dad infecciosa. Educación para la salud: proceso mediante
el cual las personas y grupos aprenden a fomen
Cobertura: en epidemiología, es la magnitud tar, proteger o restablecer la salud.
en la cual los servicios ofrecidos cubren las ne La educación para la salud comienza con las
cesidades potenciales de salud en una comuni personas tal como son, con los intereses que pu
dad. Se expresa con una relación en la cual el dieran tener para mejorar sus condiciones de vida.
numerador es el número de servicios brindados
y el denominador el número de casos en los que Efícacia: el grado en el cual una intervención
el servicio debió haberse prestado. específica, procedimiento, régimen o servicio
produce un resultado beneficioso en condiciones
Cobertura de vacunación: es el porcentaje de óptimas.
la población objeto que ha sido vacunada.
Eficiencia: son los efectos o resultados fínales
Contacto: cualquier persona o animal cuya re alcanzados en relación con el esfuerzo invertido
lación con un individuo o animal infectado, o con en términos de dinero, recursos y tiempo.
un ambiente contaminado, genere la posibilidad
de contraer el agente infeccioso. Elim inación: nivel intermedio de impacto en
tre control y erradicación.
Contaminación: presencia de un agente infec
cioso en la superficie del cuerpo, y en vestimen Endemia: es la presencia continua de una en
ta, ropas de cama, juguetes, instrumentos quirúr fermedad o un agente infeccioso dentro de una
gicos, apósitos u otros objetos inanimados o sus zona geográfica determinada. También puede
tancias, incluso el agua y los alimentos. denotar la prevalencia habitual de una enferme
dad particular en el interior de esa zona. El tér
Control: para ejercer restricción o regulación, mino hiperendemia significa la transmisión in
para corregir o restaurar a lo normal. Aplicado a tensa y persistente, y holoendemia, un nivel ele
las enfermedades, el término «control» describe vado de infección que comienza a panir de una
las operaciones o procedimientos dirigidos a re edad temprana y afecta a la mayor parte de la
ducir la prevalencia de la enfermedad a un nivel población.
8 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
B ib lio g rafía------------------------------
Benenson AS. El control de las enfermedades transmisibles. Epidemiología clínica. 2* ed. Interamericana/McGraw-
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Con frecuencia creciente el médico se enfren T em peratura norm al. La temperatura cor
ta con casos de fiebre prolongada de difícil diag poral normal, medida en la boca o en el recto, se
nóstico. A pesar de algunos cambios que puedan considera que es 37®C. La temperatura axilar sue
introducirse en la definición clásica que propo le ser 0,6°C más baja; no obstante, la temperatu
nen Petersdorf y Beeson -e n la excelente revi ra normal es variable entre individuos sanos. Al<
sión de 100 casos publicada en 1961-, a los fmes gunas personas, sobre todo adultos jóvenes y mu
prácticos esta última continúa vigente y se enun jeres en la segunda fase del ciclo ovárico, pue
cia como fieb re de más de tres semanas de dura den tener hasta 37,8®C. El ejercicio físico y las
ción, con tem peraturas superiores a m edi comidas también pueden aumentar ia temperatu
das en varias ocasiones, sin diagnóstico después ra corporal. Ésta también presenta cambios diur
de una sem ana de estudios en un medio hospita nos de hasta 1°C; la temperatura más baja se re
lario. gistra por la mañana y la más alta por la tarde,
La condición de más de 38*^0 de temperatura pero vuelve a bajar por la noche. A veces las va
tiene por fínalidad excluir aquellos casos de hi- riaciones excesivas de la temperatura diaria nor
pertermia habitual o esencial que oscilan entre mal se consideran fiebre, lo cual es un error.
37,3°C a 37,8®C y nunca superan ios 38®C. El
criterio de las tres semanas de duración, como H om eostasis térmica. En la homeostasis tér
mínimo, permite excluir todos aquellos padeci mica se reconocen mecanismos termogénicos y
mientos que se autolimitan en un plazo me termolíticos. Los mecanismos termogénicos se
nor, como la mayoría de las infecciones virales basan en el aumento de la producción interna de
más comunes. Por último, su causa debe perma calor y en la disminución de las pérdidas exter
necer oculta después de un interrogatorio exhaus nas. La mayor fuente de producción de calor es
tivo, un examen sem iológico prolijo, la realiza el temblor de los músculos esqueléticos, mien
ción de exámenes de laboratorio y los estudios tras que la conservación del calor corporal se debe
de diagnóstico por imágenes. Sólo aquellos cua a la vasoconstricción cutánea.
dros que reúnan estas tres condiciones pueden Los mecanismos termolíticos regulan la pérdi
rotularse como fiebre de origen desconocido da de calor por vasodilatación a través de la piel,
(FOD); por lo tanto, quedan excluidas de esta y por calentamiento del aire y evaporación a tra
defínición enfermedades que se manifiestan con vés del pulmón.
fiebre prolongada pero que por su clara expre
sión clínica o por los resultados de los estudios Patogenia de la fíebre. Las causas que pue
radiológicos o de laboratorio se diagnostican con den determinar aumento de temperatura, que son
rapidez. m últiples, accionan sobre los centros hipota-
14 □ Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
lámicos termorreguladores que rigen los ntieca- po de enfermedades se encuentran ejemplos muy
nismos termogénicos y termolfticos. claros de lo que se define como FOD, ya que tanto
El proceso fisiopatológico fundamental en la el examen clínico como la rutina de laboratorio y
producción de fiebre es el ajuste del mecanismo radiológica no revelan elementos orientadores del
hipotalámico de regulación de la temperatura en diagnóstico. Lo mismo se puede decir de las leu
un nivel más elevado que el normal, debido a al cemias y del mieloma.
gún proceso patológico. El factor desencadenante Otras neoplasias pueden expresarse con hiper-
del aumento de la temperatura podría ser la libe termia como primero y único síntoma; es el caso
ración de prostaglandinas, sobre todo la de clase del cáncer de colon en todas sus localizaciones.
E^, por las células endoteliales de los microvasos También las neoplasias del hígado y del riñón sue
cerebrales próximos al área hipotalámica termo- len expresarse de esta forma.
rreguladora. Este mecanismo es estimulado por El hepatocarcinoma con frecuencia es una com-
dos tipos de sustancias circulantes: pirógenos plicación de la cirrosis hepática y debe sospe
exógenos y endógenos. Los pirógenos exógenos charse siempre que un enfermo cirrótico empeo
están constituidos por diversos y complejos agen re clínicamente sin causa aparente que lo justifi
tes, como las bacterias y sus endotoxinas, virus, que. Los elementos clínicos que orientan hacia
hongos, protozoos, reacciones inmunitarias, tu esta evolución, aparte de la fiebre, son: aumento
mores, fármacos y otros. Éstos, además, pueden del tamaño del hígado, dolor en el hipocondrio
desencadenar la liberación de pirógenos endóge derecho, ascitis de comienzo brusco, hipogluce-
nos desde los macrófagos y otras fuentes. Los mia y aumento de la fosfatasa alcalina. La pre
principales pirógenos endógenos son la interleu- sencia en el plasma de alfafetoproteína es un dato
cina 1, la caquectina o factor de necrosis tumo- de gran valor para el diagnóstico, aunque no es
ral, y los interferones. Estos últimos producen la absolutamente específico.
activación de los macrófagos y pueden incremen En el carcinoma renal, aparte del cuadro febril,
tar la producción de interleucina 1 y factor de pueden presentarse características particulares,
necrosis tumoral. La patogenia de la fiebre tiene como reacción leucemoide con leucocitosis de has
el mismo mecanismo fisiopatológico para pro ta 100.CX)0 glóbulos blancos por milímetro cúbi
cesos de muy diferentes etiologías, lo cual hace co, policitemia, dermatitis eccematoide, hiperten
que sea un signo totalmente inespecífico. Sólo sión, hipercalcemia, plasmocitosis y amiloidosis.
es la expresión de la ruptura del equilibrio entre
los sistemas termogénico y termolítico, pero pue C olagenopatías. Dentro de éstas, el lupus eri-
de ser producida por enfermedades infecciosas y tematoso diseminado, la artritis reumatoidea y la
no infecciosas. fiebre reumática pueden expresarse por FOD mu
Dentro de las enfermedades infecciosas, todas cho antes de dar otros signos o síntomas orien
las noxas son capaces de determinar aumento de tadores. Salvo la fiebre, las manifestaciones ini
la temperatura. En consecuencia, se deberán con ciales de la dermatomiositis o la polimiositis tam
siderar: virus, bacterias (incluidas rickettsias, bién pueden ser clínicamente poco expresivas.
espiroquetas, clamidias y micoplasmas), hongos,
protozoos y helmintos. Vasculltis. Son otro grupo importante de enfer
Dentro de las enfermedades no infecciosas que medades a considerar. Dentro de éstas hay que
producen FOD la gama también es muy amplia. recordar la poliarteritis nudosa, la granulomatosis
Se pasará una revista rápida a estas últimas, para de Wegener, la vasculitis granulomatosa y alérgica
enumerar luego las de naturaleza infecciosa. de Churg-Strauss y la vasculitis alérgica por hi-
persensibilidad o leucocitoclástica. Son varios los
agentes desencadenantes de esta última: fármacos,
FOD DE ORIGEN NO INFECCIOSO
infecciones, neoplasias, colagenopatías y otros.
Neoplasias. Ocupan un importante lugar como También debe considerarse la arteritis de célu
causa de FOD, con mayor frecuencia en la enfer las gigantes, una de cuyas localizaciones frecuen
medad de Hodgkin y otros linfomas. En este gru tes es la arteria temporal (arteritis temporal de
Capítulo 3 - Fiebre de origen desconocido □ 15
Horton). Otras arterias, por lo general craneales, cia de la causa que la produjo, es capaz de pro
pueden estar comprometidas en esta enfermedad vocar por sí sola temperatura elevada. La hiper-
(occipitales, oftálmicas u otras). La arteritis de función corticosuprarrenal puede originar fiebre
células gigantes se vincula con frecuencia con la prolongada por la posible acción de la etioco-
polimialgia reumática (ver más adelante). lanolona.
Fiebre por medicamentos. En muchos casos Fiebre ficticia. Debe sospecharse en individuos
ésta pone a prueba la sagacidad del médico. La que fueron estudiados en varias ocasiones, e in
toma permanente de fármacos no siempre surge cluso hospitalizados, sin resultados positivos des
del interrogatorio. Éste debe ser muy cuidadoso y pués de llevar a cabo numero.sos procedimientos
se tendrán en cuenta la ingestión de laxantes, diagnósticos. Los métodos empleados para simu
fenolftaleína, sulfamidas, antibióticos, sedantes, lar la fiebre son varios: manipulación del termó
quinina, anticonceptivos, antihipertensivos y otros. metro por frotación vigorosa con los dedos, po
La hidralazina, la procainamida, la isoniazida y nerlo en agua caliente, acercarlo a la lámpara o
otros fármacos pueden provocar un cuadro clíni cambiarlo por otro cuya columna mercurial haya
co similar al del lupus eritematoso diseminado. sido elevada previamente hasta la marca desea
Algunos psicofármacos, neurolépticos, aniide- da. La palpación de la piel, que está fría mientras
presivos tricícíicos, inhibidores de la monoami- la marca termométrica es de 39®C a 40®C, puede
nooxidasa y otros, producen a veces un grave ser un dato revelador de la falsedad de este he
cuadro febril denominado síndrome neuroléptico cho. Lo mismo ocurre con la frecuencia del piil-
maligno. so, que salvo algunas excepciones, como la fie
bre tifoidea y algunas infecciones virales, aumen
E ndocrinopatías. Estos trastornos también ta en unas diez pulsaciones por cada 0,5®C de
pueden causar fiebre prolongada; el hiperti- incremento de la temperatura corporal. Ante la
roidismo lo hace con mayor frecuencia y por eso sospecha de fiebre ficticia, lo más eficaz es la
se lo debe pesquisar con cuidado. Se examina el vigilancia cuidadosa del enfermo mientras se le
cuello, donde pueden encontrarse nódulos o toma la temperatura.
agrandamiento difuso de la glándula tiroides, y
además se investigará la existencia de temblor, Síndrom e de fatiga crónica. En épocas ante
exoftalmos, nerviosismo, dianea, adelgazamiento riores, este trastorno, de naturaleza no debida
con hiperfagia, caída del cabello, sensación de mente aclarada aún, se denominaba neurastenia
calor, y piel caliente y húmeda. epidémica, enfermedad de Islandia, enfermedad
La tiroiditis subaguda merece un comentario de Royal Free y encefalomielitis miálgica. En
especial. Si bien no es una enfennedad frecuen época más reciente pasó a llamarse infección cró
te, puede dar lugar a dificultades diagnósticas. nica por el virus de Epslein-Barr, mononucleosis
El síntoma que en general (leva a la consulta es crónica y enfermedad del Yuppie. El síndrome
la fiebre y el dalo de laboratorio más llamativo, de hipertermia hipotalámica, o hipertermia habi
la eritrosedimentación muy acelerada. El paciente tual o esencial, o “fiebre psicógena'’, puede simu
no siempre refiere dolor en el cuello, de allí la lar este trastorno. En realidad la fiebre en estos
importancia de un cuidadoso examen semioló- enfennos no responde a la definición clásica de
gico. Éste suele mostrar una glándula aumentada FOD. Se presenta habitualmente en pacientes
de tamaño, de consistencia firme y dolorosa a la jóvenes, entre los que predominan mujeres, de
palpación. Puede aparecer algunos días después buen nivel sociocultural, quienes experimentan
de un episodio de faringitis aguda y a veces se fatiga inhabilitante de por lo menos tres meses de
asocia con infecciones virales como la parotiditis duración, “fiebre” de aproximadamente 37,5®C,
epidémica o el sarampión. nunca mayor de 38®C y uno o más de los siguien*
La diabetes puede ser causa de FOD por pre tes síntomas: cefalea, mialgias, adenopatías, fa
disponer a distintos procesos infecciosos. La in ringitis sin exudado, tos y diarrea. En algunos
suficiencia corticosuprarrenal, con independen casos el inicio de los síntomas es precedido por
16 □ P riw cra p ar/e - Generalidades - Síndromes clínicos
una enfermedad febril aguda, com o infección malabsorción: diarrea, pérdida de peso y dolor
viral de las vías respiratorias o mononucleosis abdominal. El edema periférico es frecuente, y
infecciosa. El examen físico suele ser absoluta* la fiebre, con escalofríos o sin ellos, se hace pre
mente normal, al igual que ios exámenes com sente en más de la mitad de los pacientes. Otros
plementarios de laboratorio y radiológicos. No síntomas son artralgias, artritis, confusión, pér
se ha podido demostrar, tai como ha sido suge dida de la memoria, afectación de pares craneanos
rido, que los agentes causales sean el virus de -con nistagmo y oftalmoplejía-, linfadenopatías y
Epstein-Barr, el herpesvirus humano 6 u otros anemia. El diagnóstico se realiza mediante biopsia
agentes etiológicos. Es importante tener en cuenta del tejido afectado: biopsia peroral del intestino del
la aparición frecuente en estos pacientes de tras gado, ganglios linfáticos periféricos o mesentéri-
tornos psíquicos, de los cuales no se sabe aún si cos. Este padecimiento se trata con antimicrobianos.
son causa o efecto del síndrome aunque siempre Otra de las afecciones capaces de provocar
es conveniente la consulta psiquiátrica. FOD es la alergia a inhalantes (alveolitis alérgica
extrínseca) que pueden estar presentes en casas,
Otros trastornos. Hay enfermedades, de etio fábricas o depósitos. En estos casos la fiebre des
logía no establecida aún con claridad, que tam aparece al abandonar el lugar donde se inhalan
bién son capaces de determinar FOD, com o los alérgenos. La naturaleza de éstos es variada;
sarcoidosis, ileítis de Crohn o enfermedad intes pueden ser polvos de algodón, cáñamo, lino o
tinal granulomatosa inespecífíca, enfermedad in yute. En estos casos es orientadora del diagnós
testinal ulcerosa inespecífíca, enfennedad perió tico la presencia de síntomas respiratorios, como
dica de Reimann o fiebre mediterránea familiar, tos, expectoración o broncospasmo. Otros alér
osteítis pubiana, policondritis recidivante y otras. genos son los hongos de las sustancias enmohe
La polimialgia reumática debe considerarse en cidas u otros polvos orgánicos, como los que pro
individuos de más de 60 años con fiebre prolon ducen el pulmón de los granjeros, criadores de
gada, debilidad proximal de ios miembros supe pájaros, recolectores de heno y segadores; y de
riores e inferiores, eritrosedimentación acelerada los que manipulan cereales, estiércol y otros.
(más de 50 mm), aumento de la alfa-2-globulina y En algunas tareas industriales se inhalan sus
anemia hipocrómica. Como ya se mencionó, en tancias tóxicas que también pueden ser causa de
estos enfermos debe tenerse presente una posible FOD, como ocurre con los fundidores de cinc. La
asociación con la arteritis de células gigantes. característica de estos padecimientos es su desapa
Distintas causas, infecciosas o no infecciosas, rición tras domingos o feriados, lo que les ha val
pueden determinar trom boflebitis, con trom- ido la denominación de fieb re de los días lunes.
boembolismo pulmonar o sin él, y FOD.
Un padecimiento poco frecuente que puede ser
FOD DE ORIGEN INFECCIOSO
causa de FOD es la enfermedad de Whipple, con
siderada en el presente como de etiología infec Infecciones urinarias. Las infecciones urina
ciosa aunque no ha sido cultivado el microorga rias son causa frecuente de fiebre prolongada. Por
nismo causante. Lo sugiere el hecho de que los otra parte, no siempre su diagnóstico surge con
órganos afectados estén invadidos por bacilos claridad de la clínica o del laboratorio, y muchas
grampositivos pequeños, que por la reacción en veces para llegar a él se requiere un estudio cui
cadena de la polimerasa (PCR) han sido clasifi dadoso del paciente. Se efectuarán análisis bacte
cados como un nuevo género y especie para el riológicos de orina orientados en particular al
que ha sido propuesto el nombre de Trophetym a recuento de colonias y al aislamiento del agente
wippclii y también por la buena respuesta obte infeccioso, que debe ser compatible con infec
nida con los antimicrobianos. Las manifestacio ción urinaria. Por supuesto, como complemento
nes clínicas son variadas y dependen de los órga de todo esto y con fines terapéuticos debe pedir
nos afectados. Los síntomas gastrointestinales se el antibiograma, que puede ser un medio de
suelen ser importantes y similares a los que se orientación útil para seleccionar la terapéutica
observan en otros padecimientos que causan antiinfecciosa. El estudio radiológico del árbol
Capítulo 3 • Fiebre de origen desconocido □ 17
urinario es indispensable para detectar afeccio* atención especial ya que inducen sospechas que
nes que predisponen a la infección y faciliian la llevan al diagnóstico. La hepatitis tuberculosa es
recidiva, o aquellos casos que son tributarios de un ejemplo de lo anterior; puede expresarse por
solución quirúrgica. La ecografía o la tomografía hepatomegalia y alteraciones en el cnzimograma
axial computarizada permiten poner en eviden que sugieren colestasis. El medio de diagnóstico
cia abscesos perirrenales imposibles de diagnos más eficaz de esta localización es la punción biop
ticar por otros medios. sia hepática, cuyo estudio histológico detectará
La prostatiiis bacteriana, aguda o crónica, pue el granuloma, un hallazgo compatible con esta
de ser causa de FOD de difícil diagnóstico. afección. Para obtener el diagnóstico de certeza
se cultiva parte del tejido extraído, donde podrá
Endocarditis bacteriana. Para su diagnóstico demostrarse el bacilo de Koch. La localización
etiológico deben realizarse hemocultivos seriados renal puede ser sugerida por signos o síntomas de
en aerobiosis y anaerobiosis. El bacteriólogo ob cistitis, la presencia de piuria ácida y los estudios
servará estos cultivos durante 15 días o más (tener bacteriológicos negativos para gérmenes comunes.
en cuenta el desarrollo lento de algunas cepas En estos casos, para buscar el bacilo de Koch se
bacterianas). La positividad de los hemocultivos efectúan cultivos de orina recogida durante 12
puede estar dificultada por la aplicación previa de horas con régimen de concentración previo.
antibióticos, o aun tratarse de endocarditis con
hemocultivos negativos. Los exámenes comple Infecciones intraabdominales. A veces el exa
mentarios también son útiles para orientar este men semiológico es poco expresivo y pueden cau
diagnóstico. La ecocardiografía puede demostrar sar fiebre de difícil diagnóstico. Esto suele suce
vegetaciones o defectos anatómicos que predispo der con las colecistitis, las colangitis y, en particu
nen a la endocarditis bacteriana. Este método tam lar, con las colecciones purulentas intrahepáticas,
bién permite diagnosticar el mixoma auricular, subfrénicas, interasas o de otras localizaciones
una afección no infecciosa pero con clínica simi intraabdominales. El diagnóstico es posible me
lar. diante ecografía, tomografía axial computarizada
y gammagrafía.
Tuberculosis. La tuberculosis pulmonar, a ve
ces, no tiene repercusión radiológica. En la Ginecopatías. Es preciso tenerlas en cuenta en
primoinfección, por ejemplo, el chancro de ino toda paciente con FOD. Deberán considerarse:
culación no tiene la densidad radiológica nece anexitis tuberculosa o no tuberculosa, piosálpinx,
saria para ser evidente; tampoco las adenopatías enfermedad pelviana inflamatoria, infecciones
intertraqueobronquiales poseen el tamaño sufi debido al DIU, feto muerto y retenido, endome-
ciente como para visualizarse en la telerradio tritis, miometritis supurativa, endom etriosis,
grafía de tórax y generar sospecha. Otro tanto tromboflebitis pelvianas, absceso ovárico y mio
ocurre con la granulia tuberculosa, que puede ma en nccrobiosis. En todas las pacientes coiTes-
evolucionar con manifestaciones radiológicas es ponde efectuar un examen ginecológico minucio
casas o nulas en los primeros días de enferme so. En algunos casos la ecografía pelviana es un
dad. valioso auxiliar en el diagnóstico de las afeccio
La serositis o poliserositis tuberculosa suele te nes mencionadas.
ner expresión clínica o radiológica que ponga en
evidencia el derrame pleural, la presencia de lí B rucelosis. Es una enfermedad proteiforme
quido ascítico o signos y síntomas de meningi y es muchas veces causa de FOD. En estos casos
tis. Los líquidos obtenidos por punción de estas es de gran importancia el antecedente epide
localizaciones deben cultivarse y si hubiera de miológico: haber sido obrero de frigorífico o tra
rrame pleural, la biopsia con aguja proporciona bajador rural. La brucelosis también puede con
rá muestras para el estudio histológico de la pleura traerse por ingestión de “quesillo de cabra” u otros
parietal y el cultivo de uno de los fragmentos ex alimentos que no hayan sido sometidos a coc
traídos. Las manifestaciones viscerales merecen ción y provengan de animales enfermos. Se so
18 O Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
rieres a 38® C. Es muy importante tener en cuenta sible solicitud de estudios específicos de las
estas afecciones en las que se suele pensar pocas afecciones mencionadas antes. No hay que omitir
veces. El examen parasitológico de la materia fe las reacciones serológicas que correspondan, de
cal debe convertirse en análisis de rutina si se acuerdo con las posibilidades etiológicas; la reac
quiere llegar al diagnóstico. En ocasiones es ne ción de Manioux o PPD, el proteinograma, el
cesario recurrir al sondeo duodenal. En la bilis colagenograma y el hepatograma. También se efec
así obtenida y centrifugada se pueden hallar for tuarán exámenes bacteriológicos directos de to
mas vegetativas de Giardia lamblia, huevos de dos los materiales que puedan obtenerse: esputo,
F asciola heparica, A n c y lo sto m a duod en a le, orina y pus de abscesos o fístulas; además todos
Necator am ericanus o larvas de Strongyloides ellos de cultivarán para bacterias, hongos y bacilo
stcrcoraiis. Todos estos parásitos pueden ser causa de Koch. Por último, corresponde solicitar exa
de fiebre por períodos prolongados y también men citológico para detectar células neoplásicas.
eosinofilia en sangre periférica. Los hem ocultivos deben realizarlos bacte
La amebiasis puede provocar fiebre prolonga riólogos bien entrenados y en condiciones de
da, además de diarrea o constipación. La localiza aerobiosis y anaerobiosis. En los últimos años se
ción visceral más frecuente es en el hígado, donde han incorporado técnicas que dotan de un mayor
es posible que se desanolle el absceso amebiano. grado de sensibilidad a este método, com o la
Las migraciones larvarias viscerales de algu centrifugación-lisis, el cultivo de membranas
nos parásitos -Toxocara canis o T. cati, Ascaris esterilizantes a través de las cuales se ha filtrado
lumbricoides, N ecator americanus, Ancylostoma sangre y la determinación del consumo de meta-
duodenale. Strongyloides stercoralis, Fasciola bolitos mediante sustancias marcadas. Si el
hepático y Paragonim us rin g eri- generan fiebre hemograma lo justifica, se llevará a cabo la pun
y leucocitosis de más de 15.000 elementos por ción medular aspirativa o la biopsia de médula
milímetro cubico, con eosinofilia del 30% a! 70%. ósea. También se efectuarán biopsias de ganglios
Strongyloides stercoralis es capaz de producir patológicos o nódulos subcutáneos. Una mitad
autoinfestaciones masivas -potencialmente mor del material se enviará para el examen anato-
tales-en inmunodeprimidos. mopatológico y la otra para estudios bacterioló
gicos, micológicos e investigación del bacilo de
Koch. Si se sospecha actinomicosis, recordar que
DIAGNÓSTICO
su agente etiológico es sensible a los antibióticos
Todo enfermo con FOD debe ser internado, tras y se desarrolla en medios anaerobios. Mediante
lo cual se le indica reposo y suspensión de todos biopsia de piel, tejido celular subcutáneo y mús
los medicamentos que estuviera recibiendo. Me culo es posible llegar al diagnóstico de derma-
diante un interrogatorio minucioso se recogerán tomiositis, polimiositis, triquinosis, vasculítis y
antecedentes hereditarios, personales, de medio otros trastornos. La biopsia pleural siempre debe
y epidemiológicos. Es muy importante indagar realizarse si hay derrame pleural no purulento.
acerca de la ingestión de medicamentos, hecho Una parte de la muestra se enviará para el estu
que a veces es involuntaria o deliberadamente dio histopatológico y el resto para los estudios
negado, como en el caso de laxantes, analgésicos, bacteriológico, micológico y del bacilo de Koch.
antihipertensivos, anticonceptivos y otros, que El líquido obtenido se enviará para el estudio fí
por su habitualidad no son considerados medica sico, químico, citológico y microbiológico. De
mentos. Además se deberá realizar un examen igual modo se procederá con el líquido ascíticoo
clínico exhaustivo, que junto con el interrogato de punción de abscesos.
rio habrá de reiterarse diariamente. En ocasiones La biopsia hepática por punción se efectuará
sólo en el curso de la evolución aparecen elemen siempre que el hepatograma haga pensar en la
tos sem iológicos que orientan la investigación y afectación de ese órgano. Antes de realizarla es
el diagnóstico. Se solicitarán los exámenes de ru conveniente contar con una ecografía o tomo-
tina, de laboratorio y radiológicos, cuyos resul grafía computarizada (TC) abdominal, las cuales
tados y la orientación clínica determinarán la po pueden mostrar enfermedad difusa, nodular o
20 □ Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
quística. En el primer caso, la biopsia conven costeroides que podrán utilizarse si se piensa en
cional percutánea con la aguja de Menghini po colagenopatías o vasculitis alérgicas, pero se ten
drá ser suficiente para el diagnóstico. En cuanto drán presente los riesgos que implican estas tera
a los nódulos, la biopsia puede llevarse a cabo péuticas en caso de error diagnóstico.
bajo guía ecográfica o de TC. En ausencia de También puede utilizarse la prueba del napro-
imágenes quísticas, la hidatidosis se descarta xeno. En las dosis habituales, este fármaco pue
mediante la serología. Una parte del fragmento de ser útil para suprimir la fiebre en pacientes
obtenido con la punción biopsia se envía al con enfermedad neoplásica. No obstante, esta
anatomopatólogo y el resto, o el lavado de la aguja prueba es un procedimiento adicional que no re
de punción con solución fisiológica, se reserva emplaza los estudios para descartar infección.
para el estudio microbiológico.
Hace algunos años la laparotomía exploradora
NUEVOS ENFOQUES SO BRE FOD
era un procedimiento de rutina si no se llegaba al
diagnóstico con los estudios complementarios y Hasta aquí lo descripto no se ha apartado del
se pretendía descartar abscesos -hepáticos, sub- concepto clásico de FOD, pero los avances de la
frénicos, perirrenales, periapendiculares, peridi- Medicina han determinado la necesidad de am
verticulares- y otras afecciones abdominales; pliarlo, no sólo a los fines semánticos sino en res
pero todas ellas pueden hacerse evidentes con los puesta a una necesidad práctica. Estos nuevos en
métodos de diagnóstico por imágenes actuales. foques incluyen FOD nosocom ial, FOD en neit-
No obstante, en los casos en que haya evidencia iropénicos, FO D asociada con el H IV y FOD
clara de localización abdominal que no se pudo p o sq u in n g ica . Estas nuevas categorías son to
diagnosticar por otros m edios, se impone la talmente diferentes de las clásicas en duración,
laparoscopia o bien la laparotomía. etiología, tratamiento y resultados. Antes de pa
Los radioisótopos también son de gran interés sar a describirlas es necesario aclarar que en mu
para el diagnóstico de ciertos trastornos. Su uso chas oportunidades hay superposición de situa
en estudios como la centeilografía o la gamma- ciones que dificultan el encasillamiento en una u
grafía permite delectar la localización de dife otra variante. El denominador común de estas
rentes procesos. Son de indudable valor en el re FOD es que en general requieren tratamiento ur
conocimiento del embolismo pulmonar. La gam- gente y por lo tanto empírico.
magrafía con galio es útil para demostrar la loca
lización de procesos inflamatorios o abscesos, por FOD nosocom ial. Se produce en enfermos
la afinidad de este radioisótopo con los leucoci cuya fiebre se desarrolla durante la hospitaliza
tos polimorfonucleares neutrófilos. En algunas ción. La mayor parte de ellos tiene enfermeda
afecciones las imágenes por resonancia magné des importantes, ya diagnosticadas, por las cua
tica (RM) pueden ser un método de diagnóstico les reciben tratamientos complejos. Se trata de
irreemplazable. pacientes con traumatismos graves, quemados,
portadores de neoplasias o individuos sometidos
Pruebas terapéuticas. En forma deliberada no a intervenciones de cirugía mayor, trasplante de
se han mencionado aún las pruebas terapéuticas órganos o terapia antineoplásica, que requieren
que algunos autores preconizan. Éstas deben rea internación en unidades de cuidados intensivos.
lizarse en última instancia y después de haber Las causas de esta FOD nosocomial son diversas
agotado los estudios clínicos, microbiológicos, y su estudio requiere tener en cuenta la enferme
radiológicos y otros. dad que motivó la internación y las complicacio
Las pruebas terapéuticas más utilizadas son: el nes de ésta (infecciones o fiebre por medicamen
tratamiento con antibióticos, en los casos en que tos). Muchas de las FOD nosocomiales son pro
se sospeche enfermedad por bacterias comunes; ducidas por infecciones, algunas de fácil diag
el tratamiento antituberculoso cuando la sospe nóstico mediante hemocultivos o cultivos de co
cha de esa afección sea muy fnine y luego de las lecciones purulentas, y otras más difíciles de diag
tomas de muestras para cultivos; y los corii- nosticar, como la candidiasis sistémica, la infec
Capítulo 3 - Fiebre de origen desconocido □ 21
ción por citomegalovirus en individuos politrans- incluye, como en las otras variantes de FOD, exá
fundidos, las hepatitis no A no B no C, la colecis menes sem iológicos minuciosos, estudios por
titis alitiásica, la sinusitis maxilar por sonda naso- imágenes, análisis de laboratorio, procedimien
gástrica y la fiebre por medicamentos. Otras ve tos serológicos y microbiológicos, además de
ces coexisten varias causas, lo cual acentúa la hemocultivos y urocultivos. Todo esto es previo
dificultad diagnóstica. El examen físico de estos a la terapéutica empírica que, como ya se ha se
pacientes puede estar obstaculizado por las con ñalado, en estos casos tiene indicación precisa.
diciones propias de los cuidados intensivos, como
el monitoreo, los respiradores, las sondas y otros FOD asociada con el HIV. El enfermo infec
elementos. Hay que tener en cuenta la remoción tado por HIV tiene un sinnúmero de posibilida
de apósitos o vendajes a fm de permitir un ade des diagnósticas en caso de presentar fiebre. La
cuado examen físico; como ya se ha comentado» sistemática de su estudio es similar a la ya enun
éste deberá ser minucioso y repetido, además de ciada en párrafos anteriores. En primer lugar, se
complementado con los medios auxiliares de tendrá en cuenta la fiebre prolongada en la infec
diagnóstico (ecografías, TC, RM, gammagrafías, ción aguda por HIV, donde además de la fiebre
endoscopias, biopsias, serologías y otros). pueden orientar al diagnóstico los antecedentes
epidemiológicos y los síntomas, que en algunos
FOD en neutropénicos. Debido a las terapias casos pueden simular mononucleosis infecciosa.
antiblásticas con fármacos citotóxicos, el número En esta etapa de la infección, a veces meses des
de enfermos neutropénicos se ha incrementado en pués, se produce la seroconversión. Pero una
forma considerable. Existe una relación inversa serología positiva para HIV no significa que la
entre el número de neutrófilos en sangre periférica causa de la fiebre esté en relación únicamente con
y la frecuencia de infecciones. Son factores im esta infección. Las posibilidades diagnósticas se
portantes la naturaleza y el curso de la enferme relacionan con el número de linfocitos T CD4+.
dad subyacente, la gravedad y duración de la neu- Si éstos están por debajo de 400 por m m \ la bús
tropenia, y las condiciones de administración de queda debe orientarse a todas aquellas afeccio
la quimioterapia. En estos pacientes predominan nes que complican la inmunodepresión que pro
bacteriemias y neumonías, así como las infeccio voca el HIV. Los recuentos de T CD4+ por deba
nes de la piel, las mucosas y los tejidos blandos. jo de 200 células por mm^ amplían la lista de po
En la etapa inicial de la neutropenia son fre sibilidades diagnósticas. Dentro de las que no tie
cuentes las infecciones bacterianas, pero después nen una explicación obvia y por lo tanto consti
los agentes etiológicos comienzan a diversifícarse tuyen FOD, hay que recordar las infecciones por
y predominan virus y hongos. Las infecciones por micobacterias atípicas, la toxoplasmosis, la crip-
el virus del herpes simple son especialmente fre tococosis y la infección diseminada por citome-
cuentes en las fases tempranas postrasplante de galovirus.
médula ósea. Dada la gravedad de las infeccio
nes en los enfermos neutropénicos, en ellos se FOD posquirúrgica. A las causas ya recono
justifica la administración de un tratamiento em cidas de FOD es conveniente agregar las pirexias
pírico. Hay protocolos que guían la elección de posoperatorias, por la frecuencia con que se produ
la terapéutica antimicrobiana y además incluyen cen y las dificultades diagnósticas que generan.
antibióticos de uso corriente, más fármacos Encontrar el origen requiere una anamnesis proli
antivirales y antimicóticos si fallan los primeros. ja así como un examen clínico minucioso y reite
Con el tratamiento empírico se obtiene con fre rado, complementado con distintos procedimien
cuencia una mejoría rápida, aunque sólo en un tos de laboratorio y de diagnóstico por imágenes.
porcentaje que oscila entre un 30% y un 60% de Las estadísticas señalan un porcentaje aproxi
los casos es factible la identificación del agente mado al 20% para la fiebre de etiología infeccio
etiológico. La posibilidad de recurrencia de los sa y un 80% para las que no responden a ese mo
episodios febriles está en relación con la persis tivo, En un número importante de casos no es
tencia de la neutropenia. El enfoque diagnóstico posible determinar el origen de la fiebre.
22 □ Prim era parte ~ Generalidades - Síndromes clínicos
Las causas que determinan la pirexia pueden malignas, tratamientos citostáticos, corticoste-
dividirse en tres grandes grupos: 1) las que no roides, neutropenia, disglobulinemias o disfun
dependen directamente de la operación; 2) las ción inmunitaria.
que dependen de la operación, y 3) las indepen Las bacterias que colonizan las heridas pueden
dientes de la operación. Dentro del primer grupo ser de origen exógeno (aire, instrumentos, equi
son frecuentes la flebitis por catéter, la flebitis po quirúrgico, piel del paciente, larga duración
química, las trombosis venosas profundas, el del acto quirúrgico y curaciones posteriores) o
tromboembolismo pulmonar, ios abscesos glú endógeno (bacteriemia o contacto con el conte
teos, las infecciones de las vías urinarias, las in nido de una viscera hueca). Ante la sospecha de
fecciones del aparato respiratorio, la fiebre por infección de la herida debe realizarse el examen
medicamentos y la hepatitis posanestesia. Den bacteriológico de la secreción o del material as
tro del segundo grupo se tendrán en cuenta la in pirado. El examen directo con coloración de Gram
fección de la herida quirúrgica, las infecciones muestra leucocitos polimorfonucleares y microor
de las serosas (peritonitis, meningitis, artritis), las ganismos, que por sus características morfotin-
infecciones viscerales y las infecciones sistémi- toriales pueden orientar la etiología del proceso
cas. En el tercer grupo se considerarán otras en infeccioso. El examen bacterioscópico se com
fermedades coexistentes sin relación con la enfer pletará con cultivos, aislamiento bacteriano y
medad que motivó el acto quirúrgico: lupus eri- pruebas de sensibilidad a los antimicrobianos. Las
tematoso, artritis reumatoidea, vasculitis alér bacterias halladas más a menudo son estafilo
gica, linfomas y otras. Es importante establecer cocos y estreptococos. Sin embargo, la flora de
la relación cronológica entre el acto operatorio y selección condicionada por tratamientos anti
el comienzo de la fiebre. bióticos puede determinar infecciones por baci
En cada caso -cada uno se considerará en for los gramnegativos u hongos.
ma individual- se llevará a cabo una anamnesis Hay que tener especialmente en cuenta el diag
detallada y un examen clínico prolijo y cuidado nóstico diferencial de infección de la herida con
so en forma previa a los estudios complementa hematomas o seromas, que también pueden pre
rios. A continuación se considerarán las causas sentar fenómenos inflamatorios locales. El diag
más frecuentes de fiebre posquirúrgica. nóstico por punción aspirativa encierra el riesgo
Infección de la herida. A pesar de los adelan de llevar una infección a un área donde no exis
tos de la época actual, ésta es la causa más fre tía, posibilidad que habrá que evaluar antes de
cuente de fiebre en el posoperatorio. En general punzar.
se presenta entre el quinto y el octavo día, con Infección urinaria. Ésta es otra causa muy im
fiebre elevada, de comienzo brusco, que puede portante de fiebre en el posoperatorio. Es común
estar acompañada por escalofríos. En determina en los sujetos a los que se les deja sonda vesical
das circunstancias el período de incubación pue permanente, a pesar de los estrictos cuidados del
de ser menor -2 4 a 48 horas-, como en las infec catéter, y sistema de drenaje cerrado. La terapéu
ciones por estreptococos betahemolíticos o clos- tica antimicrobiana preventiva no evita la infec
tridios. En cambio, en los individuos que reciben ción, sobre todo después de algunos días de per
antibióticos o en inm unocomprometidos los manencia de la sonda vesical; además provoca la
signos de infección pueden aparecer en forma aparición de cepas resistentes. En los pacientes
más tardía. En casos de anergia intensa puede de sexo masculino hay que tener en cuenta la apa
haber pus en la herida sin signos locales de infla rición de prostatitis o epididimitis. Es rutinario
mación. en la fiebre del posoperatorio el estudio de la ori
Factores locales y sistémicos predisponen a la na: sedimento, examen bacteriológico directo,
infección de las heridas: presencia de tejidos cultivos, recuento de colonias y antibiograma.
necróticos, coágulos, espacios muertos, cuerpos Estas infecciones pueden ser causa de bacteriemia
extraños, trastornos locales de la irrigación, eda y sepsis, sobre todo en los pacientes sometidos a
des extremas de la vida, obesidad, desnutrición, manipulaciones instrumentales o con obstrucción
diabetes, insuficiencia renal, shock, neoplasias parcial de las vías urinarias.
Capítulo 3 - Fiebre de origen desconocido □ 23
Aparato respiratorio. Las complicaciones pul C atéteres intravenosos. Los catéteres intra
monares son problemas frecuentes en el poso- venosos pueden determinar fiebre por mecanis
peratorio y muchas veces causa de muerte. Las mos infecciosos o no infecciosos. La coloniza
afecciones previas del aparato respiratorio son ción del catéter puede provenir de la piel que lo
una condición predisponente de gran importan circunda y provocar una tromboflebitis supurativa
cia (fumadores, EPOC, asma, secuelas de infec de donde en general se aíslan Staphylococcus
ciones parenquimatosas, pleurales o quirúrgicas). aureus, pero también pueden aislarse estafilo
La ateleciasia es uno de los problemas más co cocos coagulasa negativos, bacilos gramnega-
munes y se produce luego de operaciones abdo tivos y diversas especies de hongos, como Candi
minales o torácicas. Las zonas atelectásicas pue da albicans y Torulopsis glahrata. La coloniza
den infectarse y determinar la aparición de un cua ción del catéter puede determinar bacteriemia o
dro infeccioso. septicemia. Los aislamientos en los hemocultivos
La aspiración de contenido gástrico, en gene efectuados después de haber retirado el catéter
ral asociado con los vómitos posanestesia, deter sugieren septicemia. En el estudio de la infec
mina un cuadro de neumonitis química. El pH ción por catéter deben realizarse cultivos cuanti
bajo del jugo gástrico produce necrosis de las tativos o semicuantitativos de su punta.
células alveolares tipo I, hemorragia alveolar, Los mecanismos no infecciosos de la fiebre por
necrosis de la mucosa bronquial y formación de catéter intravenoso están determinados por la pre
membranas hialinas. Puede que no haya sobrein- sencia del dispositivo, en general en venas su
fección bacteriana, dado que en general el jugo perficiales, o por irritación química causada por
gástrico es estéril. La aspiración de contenido los medicamentos que circulan por él. No siem
bucofaríngeo, que lleva la flora que coloniza esa pre hay manifestaciones clínicas claras de la fie
área, determina en cambio la producción de neu bre por catéter; por lo tanto, establecida la sos
monía bacteriana. Los microorganismos aislados pecha se procederá a retirarlo.
son P eptostreptococcus, P eptococcus, Bacte- Hay que tener en cuenta la posibilidad de que
raides melaninogenicus y Fusohacterium nuclea- se inyecten directamente en el paciente bacterias
(uní. aunque también pueden hallarse otros gér provenientes de la contaminación de tubuladuras
menes. La mayoría de los pacientes tiene infec o soluciones parenterales, incluida sangre o sus
ciones mixtas, tres o cuatro microorganismos con derivados. Esta situación puede sospecharse ante
predominio de los anaerobios. Algunos estudios un brote de infección hospitalaria por el mismo
muestran la correspondencia entre la flora oral y microorganismo, con frecuencia bacilos gramne-
la de la neumonía aspirativa. En los pacientes hos gativos hidrófilos o levaduras.
pitalizados, después de 4 o 5 días la flora orofarín- Injertos vasculares y prótesis valvulares. Tan
gea muestra bacterias aerobias patógenas, entre las to en los injertos vasculares como en las prótesis
que se incluyen Staphylococcus aureus, Pscuáo- valvulares pueden desarrollarse colonias de
monas aeruginosa. Proíeus y Escherichia coU. microorganismos. La forma de presentación tie
Trom bosis venosas profundas y trom hoem - ne un parámetro común que es el síndrome febril
botismo pulmonar. Estos procesos pueden origi acompañado por escalofríos, sudoración y bacte-
nar fiebre en el posoperatorio sin que el cuadro riemia, que puede llegar al shock bacteriémico.
clínico sea orientador. El examen físico puede no La infección puede ser precoz, antes de los 12
evidenciar las tromboflebitis pelvianas o de las meses de la cirugía, y la contaminación por lo
venas prostéticas y aun es difícil en las de los general se produce dentro del acto quirúrgico. Los
miembros inferiores. microorganismos más frecuentes son los esta
El tromboembolismo pulmonar también pue filococos y los bacilos gramnegativos. La infec
de evolucionar con fiebre y sin la signosinto- ción tardía, después de los 12 meses del acto
matología clásica, por lo que para confirmar el operatorio, se produce por bacteriemia y los gér
diagnóstico se requerirán centellogramas de ven menes más frecuentes son los estreptococos y en
tilación-perfusión, flebografías y arteriografías segundo lugar los estafilococos.
pulmonares.
24 □ Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
H iperterm ia m aligna. Es un trastorno raro del mentos deben suspenderse los que sean sospe
músculo esquelético, de origen genético, que tie chosos. La fiebre puede persistir por varios días
ne una alta mortalidad (30% a 40%). Se presenta a pesar de la interrupción de la administración
a los pocos minutos de la inducción anestésica, del fármaco.
pero también puede hacerlo varias horas después Fiebre p o r transfusiones. La sangre o sus deri
de finalizado el acto quirúrgico. Se debe a una vados pueden originar fiebre por mecanismos in
liberación anormal de calcio por el sarcoplasma, munes o por haberse contaminado con bacterias
inducida por algunos relajantes musculares. Otros durante su manipulación y almacenamiento. Ade
desencadenantes pueden ser ios anestésicos inha más con la sangre transfundida pueden trans
latorios: halotano, ciclopropano y metoxiflurano. mitirse otras infecciones, como hepatitis B, C,
El cuadro clínico consiste en temperaturas entre no A no B no C, citomegalovirosis, sífilis, bruce-
39®C y 42®C, que en ocasiones pueden llegar a los losis, paludismo, toxoplasmosis, enfermedad de
44°C a 46°C, y además taquicardia, taquipnea, Chagas y otras.
taquiarritmias, cianosis, rigidez muscular, acidosis, Fiebre poscardiocirugía. Después de la ciru
hipoxemia, hipergiucemia, hipercalcemia e hiper- gía cardíaca pueden aparecer cuadros febriles de
potasemia. Pueden agregarse mioglobinemia e in etiología aún no determinada y evolución limita
suficiencia renal aguda mioglobinúrica. da, como los que sobrevienen después de bypass
Hepatitis por anestésicos. El anestésico vincu coronarios o de la colocación de prótesis val
lado con más frecuencia con la hepatitis poso- vulares, los cuales se denominan fieb re poscar-
peratoria es el halotano. La fiebre se presenta diotom ía o pospericardiotom ía. También puede
entre los 7 a 15 días del posoperatorio. En quie producirse un cuadro febril que comienza aproxi
nes lo han recibido con anterioridad aparece en madamente a las ocho semanas e incluye hepa-
tre las 24 y las 48 horas; se acompaña con náu toesplenomegalia, leucocitosis, linfomonocitos
seas, vómitos y suele haber hepatomegalia dolo- atípleos en el extendido de sangre periférica y
rosa. El laboratorio revela leucocitosis, eosinofília alteraciones de las enzimas hepáticas. Se resuel
y aumento de las enzimas hepáticas. ve en forma espontánea en varias semanas y pa
Fiebre p o r medicamentos. A un gran número rece deberse a citomegalovirus.
de agentes terapéuticos se les atribuye el efecto Fiebre poscirugía abdom inal. La aparición de
de provocar hipertermia. En este cuadro clínico fiebre después de la cirugía abdominal es un he
la fiebre es a veces el único elemento y en gene cho muy frecuente. La causa principal, como én
ral el buen estado del paciente no está en rela las otras cirugías, es la infección de la herida, en
ción con los picos febriles. Puede haber otras ma particular cuando se abordan órganos infectados
nifestaciones que acompañan a la fiebre, las cua (apendicitis, colecistitis, diveniculitis). Le sigue
les contribuyen a sospechar el diagnóstico de en frecuencia la peritonitis, que puede ser pre
fiebre por medicamentos; algunas de ellas son: existente, si es que hubo perforación de viscera
erupciones cutáneas -exantemas morbiliformes, hueca, o por contaminación en el acto quirúrgi
escarlatiniformes, mixtos, urticaria, eritemas poli co. Ésta puede ser generalizada o localizada,
morfos en sus variantes mucosas, cutáneas y cuta- como en el caso de las colecciones purulentas:
neomucosas-; artralgias, adenopatías dolorosas, abscesos subfrénicos, subhepáticos, interasas o
hepatitis y nefritis. El laboratorio puede mostrar de fondo de saco de Douglas. La circulación por
eosin ofilia.'L os m edicam entos que con más tal puede llevar gérmenes al parénquima hepáti
frecuencia producen fiebre son casi todos los uti co, lo que determina la aparición de hepatitis sép
lizados; su lista es grande y aquí sólo se señalarán tica y abscesos a ese nivel. Los esquemas anti
algunos: penicilinas, cefalosporinas, sulfamidas, bióticos utilizados posteriormente a esta ciru
tetraciclinas, cloranfenicol, nitrofuranos, isoniazi- gía en general no son útiles frente al enterococo,
da, anfotericina B , rifampicina, hidralazina, por lo que éste puede convertirse en germen de
tiazidas, furosemida, difenilhidantoína, carba- selección y agente patógeno de la infección poso-
mazepina, alfametildopa, alopurinol, salicilatos peratoria. Hay que tener muy en cuenta la posibi
y otros. Ante la sospecha de fiebre por medica lidad de que se presente colecistitis aguda, aun en
Capítulo 3 - Fiebre de origen desconocido □ 25
El estudio bacteriológico precoz, basado en una sangre sea menor. Es preciso que el material ob
interpretación clínica adecuada, permite el uso tenido llegue con rapidez al laboratorio.
racional de los antimicrobianos y aumenta la efi Para la evaluación de los cultivos se debe te
ciencia terapéutica. ner en cuenta la flora normal que coloniza la’piel
Es fundamental que el bacteriólogo asuma un y las mucosas.
pape! dinámico, tenga contacto permanente con El informe de un buen examen directo tiene un
el médico, y responda con idoneidad y prontitud valor incuestionable para el seguimiento infec-
los requerimientos de éste. Su propósito es lle tológico, porque en él se basa la elección de la
gar al diagnóstico etiológico y comprobar lo an conducta. Por consiguiente, es necesario remar
tes posible la sensibilidad del microorganismo a car la importancia de realizar ese examen, tanto
los antimicrobianos; para ello es importante co en fresco como con las coloraciones de Gram,
nocer los antecedentes del paciente y del diag Ziehl-Neelsen y otras. Todos estos procedimien
nóstico presuntivo, a fm de racionalizar la bús tos posibilitan la identificación del microorganis
queda bacteriológica. También informará todo mo predominante, que orienta en la elección de
cambio de la flora bacteriana y la aparición de una terapéutica antimicrobiana temprana mien
resistencias o de cepas oportunistas. tras se aguarda el resultado de los cultivos perti
Los factores que dificultan un buen diagnósti nentes.
co bacteriológico son el diagnóstico clínico erró
neo, el tratamiento antibiótico previo, la loma de
HEMOCULTIVOS
las muestras en forma incorrecta, o su conserva
ción y transporte inadecuados, y el tiempo exce Los hemocultivos forman parte de la rutina bá
sivo entre la loma del material y su procesamien sica en todo paciente febril, ya que es la forma
to. más importante de llegar al diagnóstico de mu
Las muestras deben ser representativas y sufi chas enfermedades infecciosas. Lo ideal es obte
cientes para un estudio bacteriológico completo, ner tres muestras, porque la positividad de dos
sin olvidar que tal vez sea el único momento en de ellas permite diferenciar una bacteriemia de
que se cuente con material de un paciente no tra una contaminación. Una extracción de sangre re
tado. La toma se lleva a cabo antes del comienzo presenta un hemocultivo, con independencia del
de la terapéutica o de lo contrario ésta se suspen número de frascos que se siembren.
de con suficiente anticipación. Si esto último no El volumen de sangre es la variable que más se
es posible, lo más conveniente es efectuar las to relaciona con el rendimiento de los hemocultivos.
mas cuando la concentración de antibiótico en En los adultos se cultiva 1 mL de sangre por cada
28 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
10 mL de caldo de cultivo. Si el volumen de san res o catéteres, además su hallazgo puede tener
gre es mayor, aumenta la probabilidad de obte significación clínica.
ner falsos negativos por atrapamiento bacteriano El procesamiento de hemocultivos puede rea
en el coágulo de fibrina. La obtención de más de lizarse por métodos convencionales inoculando
30 mL de sangre no aumenta el aislamiento de la sangre extraída en frascos que permitan el de
microorganismos. sarrollo de microorganismos aerobios y anaero
El mejor momento para la extracción de san bios como también se pueden utilizar otras meto
gre es antes de que sobrevenga el pico febril, ya dologías como son la lisis-centrifugación, este
que durante éste se produce la lisis bacteriana. sistema consiste en tubos que contienen un agen
En pacientes con bacteríemias continuas la ex te lítico (saponina) en propilenglicol, anticoagu
tracción puede llevarse a cabo en cualquier mo lante (EDTA o polianetol sulfonato de sodio) ade
mento. Si no se evidencia desarrollo a las 48 a 72 más de una capa fluorquímica inerte que facilita
horas, se pueden repetir las tomas. Antes de la la sedimentación de las bacterias. Los medios
extracción hay que tener en cuenta no sólo la bifásicos como el de Ruiz Castañeda son utiliza
curva térmica sino también otros síntomas clíni dos para la recuperación de Brucella sp y tam
cos, como aumento del pulso, hipotensión, esca bién en el cultivo del LCR.
lofríos, postración, etcétera. Los métodos automatizados abarcan distintas
El intervalo entre las tomas depende de la ur técnicas. Dentro de ellas, las técnicas radiomé-
gencia, aunque en general es de treinta minutos. tricas son un sistema basado en caldo de las mis
En los pacientes graves es necesario obtener con mas características que el hemocultivo conven
rapidez dos o tres muestras, ya que hay que ini cional, al que se adicionan sustratos marcados
ciar cuanto antes la terapéutica antimicrobiana radioactivos. Cuando los microorganismos desa
empírica. En los pacientes febriles de evolución rrollan estas sustancias son metabolizadas y des
prolongada se pueden realizar las tomas que se prenden COj en el medio y en el aire del frasco.
consideren necesarias, con intervalos de varias Este sistema denominado Bactec utiliza la técni
horas entre una y otra. ca de espectrometría infrarroja, que se basa en la
La extracción de sangre para los hemocultivos detección infrarroja del COjdel aire de la botella
se hará previa antisepsia de la piel con alcohol producido por el metabolismo bacteriano. El
yodado al 2% que se dejará actuar durante 1 mi Bact/Alert también se basa en la producción de
nuto, luego pasar alcohol a 70® que se dejará eva COj de las bacterias que se desarrollan en el cal
porar antes de proceder a la punción venosa o do, que al disolverse en el agua del medio de cul
eventualmente arterial. El tapón del frasco tam tivo producen ácido carbónico que reduce el pH
bién requiere antisepsia, para descontaminarlo y es detectado por un indicador que cambia de
antes de inocular la sangre. color (del verde al amarillo) que es leído por el
Los hemocultivos se incuban a 37®C durante aparato. Los equipos para estos métodos inclu
siete días, con lo que es posible rescatar el 95% yen capacidades de agitación e incubación pro-
de las bacteriemias. En pacientes en quienes se gramables, junto con la lectura a intervalos pre
sospecha endocarditis la incubación debe prolon determinados, además de ofrecer la posibilidad
garse, como mínimo, durante tres semanas. En del uso de código de barras para la identificación
brucelosis, leptospirosis, micobacteriosis y mico del paciente.
sis se requiere un seguimiento de los cultivos de
cuatro semanas antes de informar un resultado
UROCULTIVOS
negativo. Hay que tener en cuenta que menos del
10% de las bacteriemias son polimicrobianas. En la mayoría de los casos un sedimento uri
Hay microorganismos considerados contami nario normal descarta la infección urinaria (lU).
nantes, como Staphylococcus coagulasa negati Para la toma de la muestra es importante saber
vo, Corynebacterium spp y otros. Antes de des si el paciente controla los esfínteres o no. Si los
cartarlos hay que informar al médico su aisla controla, la muestra se toma del chorro medio.
miento, porque pueden infectar prótesis articula Se recolecta la primera orina de la mañana o con
CapUulo 4 - Diagnóstico bacteriológico □ 29
ires horas de retención, previa higiene genital con el pH, la densidad y el sedimento urinarios.
a«ua y un jabón que no haya sido usado previa Es posible interpretar por error como negati
mente; en el hombre se retrae el prepucio y en la vos (falsos negativos) los que provienen de pa
mujer se coloca un tapón vaginal de gasa estéril. cientes que reciben antibióticos, si la densidad
Se elimina el primer chorro, que arrastra los urinaria es menor a 1005 y el pH inferior a 5 o
microorganismos de la uretra, y el chorro medio superior a 8,5 y si el tiempo de retención fue in
se recolecta en frasco estéril. La muestra se remi suficiente o había obstrucción ureteral, focos re
te con rapidez al laboratorio o se guarda en la nales no drenantes o microorganismos que no se
heladera a 4®C, ya que la orina es un medio de desarrollan en los medios habituales.
cultivo rico en nutrientes que favorecen el desa En los portadores de sonda vesical, la adhe
rrollo bacteriano. El frasco de recolección se trans sión de los microorganismos a las paredes de ésta
porta en un envase térmico con un refrigerante. es favorecida por el pH de la orina, por la pre
Si el paciente no controla esfínteres, la toma sencia de proteínas y sales urinarias, y por el tipo
de la muestra se realiza por recolección al ace de material con el que está fabricada. En la super
cho, previa higiene y descarte del primer chorro. ficie interna de la sonda se desarrolla una película
En pacientes con sonda se efectúa la punción formada por bacterias, moco, proteínas y restos
de ésta, previamente se la pinza durante 15 a 20 celulares. Por lo general, en estos pacientes las lU
minutos y luego se la punza en la zona más son polimicrobianas, por lo que el tratamiento se
proximal, previa desinfección con alcohol 70® o basa en la sensibilidad a los antibióticos de cada
povidona yodada al 10%. uno de los microorganismos aislados.
Para descartar contaminación, o si se sospe Corresponde solicitar una muestra nueva en los
cha lU por anaerobios, es necesario recurrir a la siguientes casos: si se produce desarrollo polimi-
punción suprapubiana, la cual normalmente es crobiano, si no hay desarrollo en orinas con sedi
estéril. mento patológico, si se desea corroborar una bac-
En este último caso cualquier recuento de co teriuria asintomática, si el hallazgo bacteriano
lonias es significativo. Es la única muestra que sugiere un microorganismo contaminante, si se
se siembra en medio líquido. La punción se rea recuperan microorganismos poco frecuentes y
liza a un centímetro de la sínfisis pubiana, ase para descartar tuberculosis renal. En este último
gurándose antes de que la vejiga esté llena. caso, se sembrará en los medios adecuados el se
Las muestras que no se procesan, por carecer de dimento de la orina recogida durante las 12 ho
valor bacteriológico, son la punta de la sonda vesi ras previas, con un régimen de escasa ingestión
cal, la bolsa colectora y la orina del frasco colector. de líquidos.
El diagnóstico bacteriológico de la lU requiere La piuria no siempre indica infección, también
cultivos cuantitativos. puede aparecer en cuadros de deshidratación o
Una gota de orina que se deja secar sobre un litiasis, como también si se realizaron interven
portaobjetos y que coloreada con tinción de Gram ciones quirúrgicas previas.
permite observar por lo menos dos bacterias por
campo de inmersión, se correlaciona con un recuen
DIARREAS
to de colonias mayor o igual a 100.000 UFC/mL.
Los recuentos de colonias significativos en la Según la QMS la diarrea se defme como el au
interpretación de los cultivos son el hallazgo de mento del número y volumen de las deposicio
más de 100.000 UFC/mL de un microorganismo nes, con disminución de la consistencia, por lo
compatible con infección urinaria. que toma la forma del envase que las contienen. ,
Pueden obtenerse falsos positivos en pacientes Es importante conocer la existencia de antece
con uretritis, en muestras contaminadas por falta dentes de viajes, pérdida de peso, ingestión de |
de higiene, en orinas conservadas a temperatura pescado, enfermedades predisponentes (HIV) o
ambiente o por el uso de un jabón contaminado. uso de antibióticos.
En el informe se incluye la tipificación y el La muestra se obtiene al comienzo de los sín
antibiograma del o los microorganismos aislados; tomas y antes de la prescripción de antibióticos.
30 □ Prim era parte • Generalidades - Síndromes clínicos
Todos los materiales destinados a cultivo se porte para su envío al laboratorio. Los medios de
conservan a temperatura ambiente hasta que sean transporte más utilizados son el de Stuart, donde
procesados. Una muestra negativa nunca indica se conserva el material hasta doce horas, y el de
ausencia del patógeno. Cary Blair, que lo conserva hasta cinco días.
Deben rechazarse las muestras provenientes de H isopado anal. Se pasa un hisopo estéril por
pañales, por los fal.sos negativos que induce la el margen del ano y se lo coloca en el medio de
acidez de la orina. transporte elegido. Para investigar N eisseria
En niños con diarrea sanguinolenta es impor gonorrfweae se usan preferentemente hisopos tra
tante descartar Escherichia coli 0157:H 7, por su tados con carbón activado. Para C hia m yd ia
asociación con el síndrome urémico-hemolítico. trachomatis se utilizan como medio de transpor
Las colonias sospechosas que se desarrollan en te soluciones de sacarosa-fosfato.
sorbitol agar Mac Conkey se confirman por Líquido duodenal. Se envía en tubo seco y es
serología. Para la búsqueda de portadores de téril.
Salmonella spp se pueden transportar las mues Biopsia de intestino. Remitir en tioglicolato de
tras en caldo selenito. sodio.
La búsqueda de Crypfosporidiiim en pacientes
con SIDA requiere el examen de un extendido de
LÍQUIDO CEFALORRAQUÍDEO
materia fecal coloreado con un anticuerpo
monocional o con coloración de Kinyoun modi El estudio del líquido cefalorraquídeo (LCR)
ficada. En pacientes con diarrea y en tratamiento es fundamental para el diagnóstico etiológico de
antibiótico, debe investigarse Clostridium diffidle las meningitis.
por cultivo o por enzimoinmunoensayo (ELISA), Diversos microorganismos pueden ser respon
que revela las toxinas A y B. sables de esta enfermedad, pero los más frecuen
El informe del examen directo debe incluir el tes son Síreptococcus pneum oniae, N eisseria
recuento de leucocitos y la investigación de la pre m eningitidis, H aem ophilus influenzae, Listeria
sencia de hematíes, parásitos o levaduras; estas úl monocytogeties, Siaphylococcus aureus, Esche
timas tienen significación clínica cuando hay más richia coli y Síreptococcus spp.
de 5.000 colonias por gramo de materia fecal. El La punción se realiza antes de iniciar cualquier
infiltrado leucocitario se infonna como «abundan tratamiento antibiótico. El LCR se recolecta en
te», «regular», «escaso» o «no se observa». tres tubos, uno para los estudios físico, químico
Los enteropatógenos se tipifican, por pruebas y citológico; otro para el bacteriológico, y el res
bioquímicas o serológicas y el resultado de! tante para las pruebas inmunológicas u otros es
antibiograma. En toda disbacteriosis, si hay pre tudios complementarios.
dominio absoluto de una especie, se la debe tipi Como los microorganismos responsables son
ficar e informar. muy lábiles, el material deberá procesarse de in
Las muestras que se remiten para estudio bac mediato. La muestra se conserva a temperatura
teriológico son las siguientes: ambiente o a 37° C, nunca se dejará en la heladera,
Coprociiltivo. En un frasco estéril se recoge salvo que se sospeche meningitis viral, tuber
materia fecal de una deposición reciente. Se rea culosa, micóiica o por Listeria monocytogenes.
liza el examen microscópico directo y los culti Para la decisión terapéutica inicial es funda
vos. Para el recuento de leucocitos se utiliza como mental el examen directo del centrifugado del
colorante azul de metileno o Giemsa, lo que ayu LCR con coloración de Gram. A veces es muy
da a distinguir una diarrea invasora de otra que difícil definir si un microorganismo es grampo-
no lo es (ver el capítulo Diarreas infecciosas). sitivo o gramnegativo. Tanto su morfología como
H isopado rectal. Se introduce en el recto un la capacidad de colorearse pueden estar altera
hisopo estéril sin lubricante (excepto el del me das si el paciente ha recibido antibióticos previa
dio de transporte); .se verifica que esté impregna mente. Si se sospecha que Cryptococcus neofor-
do con materia fecal (signo de la ampolla rectal m ans es el agente etiológico, corresponde llevar
ocupada) y luego se coloca en el medio de trans a cabo el examen del LCR con tinta china, bús
Capítulo 4 - Diagnóstico bacteriológico □ 31
queda de la antigenon aquia con )a prueba de aglu El material con el que está fabricado el catéter
tinación del látex y confirmación posterior me y el tiempo de permanencia de éste tienen una
diante cultivos. También se realizará la colora relación directa con esta infección.
ción de Z ieh l-N eelsen para la búsqueda de Las muestras que deben enviarse para cultivo
micobacterias. incluyen:
Cuando el paciente presente epidemiología y • La puma del catéter (3 o 4 cm en tubo seco y
clínica compatible con leptospirosis, se realizará estéril).
microscopía de campo oscuro, además de los es • Dos muestras para hemocultivo obtenidas por
tudios por técnicas inmunológicas y los cultivos punción de distintas venas.
correspondientes. • Hisopado de la herida donde se inserta el ca
Los métodos inmunoserológicos que permi téter (en medio de transporte).
ten la d etección de an tígen os bacterianos • Hisopado de la conexión del catéter con la
{S trep to co ccu s p n e u m o n ia e , N e iss e r ia niC’ vía de infusión (en medio de transporte) y
n in g id d is , H a e m o p h ilu s in fliien za e ) son la • Punción aspirativa de la vena en la que se
coaglutinación, aglutinación de partículas de lá sospecha que hay tromboflebitis supurativa
tex y la contrainmunoelectroforesis. La sensibi
lidad de los métodos de diagnóstico rápido dis Para el cultivo de la punta del catéter pueden
minuye cuando en el examen directo se obser utilizarse las siguientes técnicas:
van pocos microorganismos o ninguno. La bio Semicuantitativa, como el método de Maki» que
logía molecular supera el aporte de ios métodos permite la evaluación de la parte externa del ca
inmunológicos aplicados al diagnostico micro- téter. Se considera significativo un recuento de
biológico. La reacción en cadena de la polimerasa colonias mayor o igual a 15 UFC/mL.
(PCR) permite aumentar el número de copias de Cuantitativas, cuyo recuento significativo es
un fragmento de ácido nucleico específico de un mayor o igual a 1.000 UFC/mL.
microorganismo, hasta más de un millón de ve Dentro de estas últimas se encuentran los mé
ces para su posterior detección con sondas todos de Cleri y Brun-Buisson, que evalúan tan
moleculares. Este método tiene mayor sensibili to la parte interna como la externa del catéter, y
dad y mayor especificidad, delecta alrededor de el método de Linares, que sólo permite el estu
100 UFC/mL. Potencialmente es capaz de detec dio de la parte interna.
tar una sola copia de un gen presente entre Si se desea conservar la vía, se realizará un re-
1.000.000 de células eucariotas. Sin embargo esta trocultivo. En este caso el cultivo de la sangre
elevada especificidad trae aparejada serias difi obtenida a través del catéter que presente un re
cultades técnicas para evitar contaminaciones del cuento de colonias 5 a 10 veces mayor que el del
material con otros ácidos nucleicos que podrían hemocultivo convencional, es indicación para el
falsear los resultados (las características del LCR retiro del dispositivo.
normal y patológico se detallan en el capítulo Los retrocultivos por el método automatizado
Meningitis). Bact/Alert para catéteres permanentes se reali
zarán cultivando iguales volúmenes de .sangre de
una muestra del catéter y una muestra de sangre
INFECCIONES ASOCIADAS CON CATÉTERES
periférica.
Se considera infección asociada con el catéter Para considerar la infección asociada con el catéter
cuando de la punta de éste y de los hemocultivos tiene que desarrollar la muestra de sangre del caté
se aísla el mismo microorganismo. ter dos horas antes que la muestra de sangi-e peiiférica.
La forma más ostensible de esta enfermedad
es la tromboflebitis supurativa.
INFECCIONES DE LAS VÍAS RESPIRATORIAS
La sepsis asociada con catéteres tiene una in
cidencia del 1% y una mortalidad del 60%, que El examen m icrobiológico del esputo es la
se reduce al 50% si cursa sin flebitis. En los pa muestra de elección para evaluar una infección
cientes quemados es cinco veces más frecuente. de las vías respiratorias.
32 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
La muestra debe recogerse en las primeras ho Lavado bronquial. Se usa para la búsqueda de
ras de la mañana, en frasco estéril, de boca an micobacterias, no sirve para el rescate de anae
cha, previa higiene bucal con buches de agua robios y tiene poco valor para gérmenes comu
bicarbonatada. Se remite al laboratorio dentro de nes y hongos.
las dos horas que siguen a su recolección, para C epillo envainado. M ediante la fibrobron-
evitar el desarrollo de la flora acompañante, que coscopia con cepillo envainado se evita la conta
puede impedir la recuperación del verdadero res minación orofaríngea. El cepillo debe transportarse
ponsable del proceso infeccioso {Streptococcus rápidamente al laboratorio, en tubo seco y estéril
pneum oniae, Haem ophilus influenzae y otros). para evitar su desecación. Permite la búsqueda
Un esputo es representativo cuando tiene más de anaerobios y tiene poco valor para micobac
de 25 leucocitos polimorfonucleares y menos de terias y hongos, ya que la muestra es escasa.
10 células epiteliales superficiales por campo de Lavado broncoalveolar. Es una muestra de ma
100 aumentos. yor volumen obtenida mediante la fibrobron-
Para el cultivo de las secreciones traqueales va coscopia. Se utiliza para investigar micobacterias,
len las consideraciones ya mencionadas. Debe gém ienes comunes y hongos. No es adecuada
realizarse la búsqueda de fibras de elastina con para anaerobios.
hidróxido de potasio al 40% y usar la técnica La muestra, que no debe ser menor de 5 mL, se
cuantitativa para su procesamiento. Es significa centrifuga a 2.500 rpm durante 10 minutos para
tivo un recuento mayor de 106 UFC/mL en la hacer un recuento diferencial de células. El re
interpretación de los cultivos. sultado es significativo si hay menos del 1% de
Para el cultivo de micobacterias y hongos la células epiteliales superficiales y un recuento de
muestra puede conservarse en la heladera a 4°C. colonias mayor o igual a 100.000 UFC/mL.
Es importante conocer los antecedentes del pa Se informa el examen directo con las colo
ciente: si es inmunodeprimido, si está tomando raciones de Gram, Giemsa y Ziehl-Neelsen. En
antibióticos, si está en asistencia respiratoria me caso de sospecha clínica se puede realizar la co
cánica y si tiene otras enfermedades (diabetes, loración de Kinyoun para N ocardia spp o la de
alcoholismo). En todos los casos los aislamien Gomori-Grpcott para Pneum ocysfis jiroveci.
tos bacteriológicos deben correlacionarse con la Biopsia de pulmón. Se realiza cuando no ha sido
clínica, aunque algunos microorganismos siem posible llegar al diagnóstico con las muestras to
pre se consideran patógenos {Mycobacterium tu madas por fibrobroncoscopia y la clínica del pa
berculosis). Si se sospecha tuberculosis, se reco ciente justifica su indicación.
mienda enviar para cultivo en medios especia Los exámenes directos se realizan por impron
les, tres muestras de esputo recogidas en tres días tas o a partir de homogeneizados de la muestra
seguidos, conservadas en la heladera a 4®C. recogida.
Punción transtraqueal. Se realiza fundamen H isopado de fa u ces. Se pasa un hisopo por las
talmente para el aislamiento de microorganismos fauces y se coloca en medio de transporte de
anaerobios, en pacientes con trastornos de la con Stuart. Si se observan seudomembranas, hay que
ciencia y en los inmunodcprimidos. desprenderlas con una pinza y colocarlas en un
Está contraindicada en pacientes con reflejo tubo seco y estéril, que se remite con rapidez al
tusígeno exacerbado, alteraciones psicomotoras, laboratorio. Debe recordarse que el diagnóstico
trastornos de la coagulación y en bronquiales cró de difteria es clínico y no bacteriológico. Es im
nicos con hipoxia grave. Las complicaciones más portante la información que brinda el examen
frecuentes de este procedimiento son las hemo microscópico con coloración de Gram, en el que
rragias, las infecciones, el enfisema mediastínico podrán observarse las corinebacterias despla
y el neumotórax. zantes que ayudan a confirmar la sospecha clíni
Normalmente es un material estéril y cualquier ca. Además, se cultivará en medios selectivos con
desarrollo en los cultivos se considera responsa telurito de potasio.
ble del cuadro respiratorio, salvo en pacientes En los casos de faringitis el cultivo permite con
bronquiales crónicos. firmar o descartar la presencia de estreptococos
Capítulo 4 - Diagnóstico bacteriológico □ 33
Estos estudios bacteriológicos por examen di coloración de Gram se observan células clave,
recto son de gran importancia, ya que Mycobac- en ausencia de bacilos de Doderléin.
teriuin ¡eprae no se cultiva (ver el capítulo Le El diagnóstico de chancro blando requiere del
pra). examen directo del exudado de la úlcera con co
loración de Gram. así como la punción aspirativa
de los ganglios abscedados. Puede observarse el
INFECCIONES DEL TRACTO GENITAL FEMENINO
cocobacilo gramnegativo (HaemophUus ducreyi),
Para llegar al diagnóstico de las vulvovaginitis que se confirma por cultivo.
es necesario el estudio bacteriológico del flujo En los pacientes con sífilis primaria o secun
vaginal. La muestra se toma del endocérvix y del daria, Treponema pallidum se investiga median
fondo de saco vaginal, en lo posible, sin tratamien te la observación con microscopio de fondo os
to antibiótico previo, lejos de los días del período curo del material obtenido de las lesiones. Su
menstrual, con una buena higiene la noche ante negatividad no descarta el diagnóstico, que pue
rior y un lavado superficial el día del estudio. de confirmarse mediante la serología.
Se usan espéculos descartables, hisopos esté El diagnóstico de tricomonosis se basa en un
riles y medios de transporte adecuados para con examen en fresco de una muestra obtenida del
servar el material, el que habrá de procesarse fondo de saco vaginal en la que se observe Tri-
dentro de las dos horas de su recolección. chomonas vaginalis con movimientos activos y
Un informe adecuado incluye el examen en se cultiva en el medio de Diamond. Los extendi
fresco y los exámenes directos con las tinciones dos fijados se colorean con Giemsa.
de Gram y Giemsa. Para el diagnóstico de la enfermedad pelviana
En las pacientes con DIU es importante inves inflamatoria la muestra se obtiene por culdo-
tigar i^c/i/iowyceí israelii en las secreciones del centesis o aspiración de la cavidad uterina. Son
cuello uterino. La presencia de Neisseria gonorr- varios los microorganismos capaces de causar
hoeae se confirma por cultivo del moco cervical, la, entre ellos C hlam ydia trachom atis y N eisse
ya que la observación microscópica de un frotis ria gonorrhoeae; otros pueden ser bacterias
coloreado con Gram carece de validez diagnós aerobias y anaerobias, que en general están aso
tica. Si el cultivo es positivo, es necesario con ciadas.
signar si se trata de una cepa productora de beta-
lactamasas o no. El material para el diagnóstico
URETRITIS EN EL HOMBRE
del linfogranuloma venéreo {Chlamydia tracho’
maíis) se extrae del cuello del útero mediante un Para el estudio de los exudados uretrales el pa
hisopo de alginato de calcio, ya que los de made ciente debe concurrir al laboratorio sin orinar o
ra son tóxicos para el microorganismo. con la mayor retención posible. En el hombre las
El diagnóstico presuntivo se realiza con un ex uretritis pueden ser gonocócicas o no gono-
tendido coloreado con Giemsa. Se confirma por cócicas. Para el diagnóstico de las primeras se
cultivo en células Me Coy o HeLa, o por inmuno- lleva a cabo un frotis de la secreción purulenta,
fluorescencia directa. que en el examen directo, con coloración de
Para M yco p la sm a h o m in is y U reaplasm a Gram, muestra diplococos gramnegativos intra-
urealyticum el material se extrae del endocérvix. celulares y extracelulares compatibles con Neisse
Su conservación, transporte y procesamiento tie ria gonorrhoeae. Este hallazgo es suficiente para
nen las m ism as c o n sid era cio n es que para el diagnóstico presuntivo, que se confirma por
clamidias. cultivo en medio deThayer-Martin. En todos los
La vaginosis bacteriana, enfermedad produci casos es necesario establecer si la cepa es produc
da por Gardnerella vaginalis, bacilos anaerobios tora de betalactamasas o no.
gramnegativos, M ycoplasm a hom inis y M o b i' Si la secreción es escasa, hay que ejercer pre
¡uncus spp, se sospecha cuando la secreción es sión sobre la uretra y tomar el material mediante
maloliente y de un pH mayor que 4,5, y con prue la introducción en ella de un hisopo de alginato
ba de Whiff positiva. En el examen directo con de calcio o carbón activado.
Capítulo 4 - Diagnóstico bacteriológico □ 35
Las uretritis no gonocócicas son de etiología Las uretritis por Trichomonas vaginalis produ
variada {Chlamydia trachom atis, M ycoplasm a cen escasa secreción mucopurulenta. En el hom
hom'mis, Vreaplasm a w ealyticum , Garcinerella bre es frecuente que el parásito sea inmóvil. Se
vaginalis, Enierococcus spp, Escherichia coli). En realizarán los cultivos en el medio de Diamond y
las uretritis por Chlamydia trachomatis hay secre los extendidos se fijan y colorean con Giemsa.
ción matinal, escasa y cristalina, que se acompa La PCR es el método útil sensible y específico
ña con ardor. Se coloca un hisopo de alginato de en el diagnóstico de infecciones por Chlamydia
calcio en la uretra, se lo hace rolar y luego se lo trachomatis, Haemophylus ducreyi, Treponema
introduce en un medio de transporte adecuado. pallidum y Herpes simple I-II.
-,‘fe f i tRíilSiW», tn fi«5W<> t i í á j i í , 4i?‘ííófe« ítPr tm cotoíÉ ítfiW t n e s ifv e vdu mí re^itíje. «iift'*
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Los antimicrobianos son las sustancias utiliza Todas las penicilinas tienen un mecanismo de
das en et tratamiento etiológico de las enferme acción similar, ya que se unen a receptores de las
dades infecciosas. Pueden ser quimioterápicos, bacterias, las proteínas fijadoras de penicilina
antibióticos o quimioantibióticos. Los primeros (PBP). A partir de este proceso interfieren en la
en ser utilizados con buenos resultados fueron síntesis de la pared, lo que lleva a la lisis y muer
los quimioterápicos (Ehrlich, 1906). Son medica te de la célula.
mentos obtenidos por síntesis química en el la La administración de penicilina puede produ
boratorio (arsenicales, sulfamidas, nitrofuranos, cir diferentes reacciones adversas, como la reac
quinolonas y otros). ción alérgica inmediata, de tipo anafiláctica, que
Los antibióticos son desarrollados a partir de suele presentarse dentro de los treinta minutos
seres vivos (hongos, bacterias o algas). Así fueron de la administración. Las manifestaciones clíni
denominados por Waksman en 1943, quien tuvo cas son sudoración, taquicardia, broncospasmo
en cuenta la capacidad de estas sustancias de mo y estado de shock. Otros efectos adversos aso
dificar los procesos metabólicos vitales y llevar a ciados con la penicilina son la reacción alérgica
la muerte a otros seres vivos. tardía, el fenómeno de Jarish-Herxheimer y la
Los quimioantibióticos son antibióticos obteni toxicidad a nivel del sistema nervioso central.
dos por síntesis o por semisíntesis. Estos últimos
tienen como base productos biológicos modifica Penicilina G, penicilina G benzatina y penicilina V
dos en el laboratorio. No obstante, el uso ha consa £1 espectro antimicrobiano de estas penicili
grado la palabra antibiótico para referirse a los agen nas comprende cocos gram positivos (estrep
tes terapéuticos destinados al tratamiento de las in tococos betahemolíticos de los grupos A y B,
fecciones, aunque la denominación preferible es la Streptococcus viridans, S. pneum oniae, Pepto-
de antimicrobianos. En este capítulo se tratarán coccus y Pepíostreptococcus), bacilos grampo
aquellos de uso corriente y eficacia comprobada. sitivos (Corynebacierium diphtheriae, Bacillus
anthracis y lactobacilos), bacilos grampositivos
ANTIBACTERIANOS anaerobios {C íostñdium tetani, C. perfringens,
C . b o tu lin u m ), d ip lo c o c o s g ram n egativos
PENICILINAS {Neisseria m eningitidis, N. gonorrhoeae)^ baci
los anaerobios gramnegativos (Fiisobacterium,
A partir de la penicilina natural se han desarro Bacteroides melaninogenicus). También son sen
llado distintos derivados de gran utilidad para el sibles Treponema paüidum , Leptospira, Actino-
tratamiento de diversas infecciones. m yces israelH y Borrelia.
38 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
s%
m La penicilina G puede administrarse por vía
intramuscular o intravenosa. Se distribuye am
S. viridans, Peptococcus, Enterococcus fa eca lis,
C orynebacteriiim diphtheriae, h isteria mono-
• pliamente en los diferentes tejidos. Las meninges cytogenes, H aemophilus influenzae, Saimonella.
inflamadas permiten una mejor difusión en el sis Shigella, N eisseria m eningitidis, B nicella sp y
tema nervioso central. M oraxella ca ta n halis.
La penicilina G benzatina se administra por vía Se absorben bien por vía oral, la amoxicilina
fii inlramu-scular y su vida media es de siete a diez aun mejor que la ampicilina.
días. Los efectos adversos más comunes son diairea
La penicilina V o fenoximetilpenicilina se ab y erupción maculopapulosa. N o deben indicarse
m sorbe bien por vía oral y alcanza su pico sérico a
la hora de su administración.
ante la posibilidad de mononucleosis infecciosa,
por la frecuencia con que en esta enfermedad se
% producen exantemas purpúricos.
m Indicaciones y dosis
La penicilina está indicada en diferentes pro indicaciones y dosis
m cesos infecciosos, entre los que se incluyen: in
fecciones estreptocócicas (faringoamigdalitis, es
Estos antimicrobianos están indicados en dife
rentes afecciones, como otitis media aguda, sinu
m carlatina, piodermitis y celulitis), meningitis (por sitis, infecciones por H aem ophilus influe/nae no
m Amincpenicitínas
Este grupo de antibióticos betalactámicos está
integrado por la carbenicilina y la ticarcilina, que
m
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Capitulo 5 - Antimicrobianos □ 39
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42 O Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
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Está indicado en neumonías inlrahospitalarias, Es útil en infecciones de vías urinarias, gineco
osteomielitis, endocarditis, meningitis, gonoco- lógicas, sepsis y neumonías intrahospitalarias por
cia, septicemias, e infecciones de vías urinarias, microorganismos gramnegativos. Los efectos
abdominales y ginecológicas. adversos, de poca relevancia, son náuseas, vó
Entre los efectos secundarios asociados con su mitos, tromboflebitis y exantemas.
administración se incluyen flebitis y trombofle La dosis es de l a 2 g cada 6 a 12 horas por vía IM
bitis, trastornos gastrointestinales, exantemas y, o IV. La dosis pediátrica es de 100 a 150 mg/kg/día.
en altas dosis, neurotoxicidad y nefrotoxicidad.
La dosis en adultos es de 0,5 g IM cada 8 a 12
AMINOGLUCÓSIDOS
horas; o de 0,5 a 1 g IV cada 6 a 8 horas. En
niños 10 a 15 mg/kg IM o IV cada 6 horas. Son antimicrobianos bactericidas que penetran
a través de la pared y la membrana celular, tras
Meropenem lo cual se unen en forma irreversible a los ribo-
Es un antimicrobiano de espectro similar al somas 30S; esto altera la síntesis de proteínas en
imipenem que se administra por vía IV. Su acti la bacteria y genera su muerte. Tienen actividad
vidad bactericida es el resultado de la inhibición contra casi todos los microorganismos gramne
de la síntesis de la pared celular de la mayoría de gativos aerobios, la cual es sinérgica o aditiva
las bacterias grampositivas y gramnegativas. No con la ejercida por las penicilinas o las cefalos-
está indicado para tratar infecciones causadas por porinas contra bacilos gramnegativos o cocos
estafilococos resistentes a la meticilina. La dosis grampositivos aerobios, aunque no deben admi
en adultos es de 0,5 a 1 g cada 6 a 8 horas y en nistrarse en la misma solución parenteral o mez
niños, 10 a 20 mg/kg cada 6 a 8 horas. clarse en la misma jeringa.
Una de las propiedades de los aminoglucósidos
Ertapenem es su efecto posantibiótico, que se define como
Es activo frente a microorganismos grampo- la supresión persistente del crecimiento bacte
sitivos aerobios como S. pneumoniaey estrepto riano luego de una exposición breve al fármaco.
cocos, estafilococos sensibles a m eticilina y Se considera que cuanto mayor es la concentra
Lisferia. No es activo frente a enterococos, ni a ción, más prolongado es el efecto posantibiótico.
estafilococos resistentes a meticilina. Es activo Esta propiedad permite su administración cada
frente a E. co/i, Klebsiella, H aemophilus, N. go- 24 horas, lo cual disminuye la toxicidad renal.
n o n h o eo e y Boctevoides fragilis. N o es activo Su principal desventaja se relaciona con la toxi
frente a P. aeruginosa y Acinetobacter. La dosis cidad renal y del nervio auditivo (coclear y ves
en el adulto es de 1 g/día IM o IV. tibular). Pueden producir bloqueo neuromuscular,
por lo que no deben administrarse antes y duran
te la anestesia general.
MONOBACTÁMICOS
A continuación se detallan las principales in
Aztreonam dicaciones de los diferentes aminoglucósidos .
Es un antimicrobiano sintético de acción bac
tericida, que inhibe la síntesis de la pared celular Estreptomicina
bacteriana. Su acción se ejerce en particular con Es un antimicrobiano de primera línea en el tra
tra bacterias gramnegativas, debido a su afinidad tamiento de la tuberculosis. Siempre debe asociar
por las proteínas fijadoras de penicilina de los se con otros antimicrobianos.
microorganismos susceptibles. A diferencia de los Se administra por vía IM, pero también puede
otros agentes betalactámicos, tiene poca efecti utilizarse por vía IV en infusión lenta. Se elim i
vidad contra bacterias gram positivas, com o na por vía renal. Su penetración a través de las
estreptococos y estafilococos. Se indica princi meninges es escasa, pero aumenta si están infla
palmente com o alternativa de los aminoglu- madas. Es nefrotóxica y ototóxica. También pue
cósidos, ya que su espectro de acción es casi el de provocar exantemas y parestesias peribucales.
mismo que el de éstos pero no es nefrotóxico. Atraviesa la placenta y puede provocar sordera
Capítulo 5 - Antimicrobianos D 43
congéniia. En forma periódica deben realizarse cipalmente por vía renal, por lo tanto, quienes
controles audiométricos y de los parámetros re reciben esta sulfonamida deben ingerir líquidos
nales, con el fin de corregir la dosis si sobreviniere en abundancia a fm de evitar la formación de cris
alguna alteración significativa. La dosis en adul tales en el interior de los túbulos renales. La do
tos es de 1 g cada 24 h y en niños de 15mg/kg/día. sis por vía oral para adultos es de ig a cada 4 a
6 horas. En niños 100a 150 mg/kg/día, divididos
Gentamicina en 4 tomas.
Se utiliza en infecciones urinarias e infecciones
graves por microorganismos gramnegativos sen Trimetoprima-Sulfametoxazol (Cotrimoxazol)
sibles. Se administra por vía IM o IV, en adultos Es la combinación de una proporción fija (1:5)
160 a 240 mg cada 24 h. En niños, 5 a 7 mg/kg/día. de una diaminopirimidina, la trimetoprima (TMP),
y una sulfonamida, el sulfametoxazol (SMX). El
Amikacina mecanismo de acción es el bloqueo de la síntesis
Tiene indicaciones similares a la gentamicina, del folato bacteriano. El espectro antimicrobiano
aunque es más activa que esta última. Es el abarca bacterias grampositivas y gramnegativas,
aminoglucósido de elección en las infecciones por así como microorganismos no bacterianos. Los
Pscudomonas aeruginosa. aunque siempre se la gérmenes más sensibles son: E. cali, Salmonelta.
debe asociar con un betalactámico. Es bactericida Vibrio cholerae, Chlamydia trachomatis, Pneu-
contra M. tuberculosis. Como los demás amino- m ocysíis jiroveci, Shigella, Nocardia asteroides
glucósidos, es ototóxico y nefrotóxico. Se admi e ¡sospora belli.
nistra por vía IM o IV, en adultos 1 a 1,5 g cada Un porcentaje bajo de pacientes presenta sín
24 h. En niños, 15 a 30 mg/kg/día. tomas gastrointestinales o erupciones cutáneas.
En algunos casos se comunican alteraciones
Kanamicina hemáticas, como anemia, trombocitopenia, neu-
En el presente tiene indicaciones muy limita tropenia y aplasia medular.
das. Es de segunda elección en algunos casos de Puede administrarse por vía oral o IV, en dosis
tuberculosis multirresistente y en las infecciones de 160 mg de TMP -f- 800 mg de SMX cada 12 ho
por M. kansasii. La dosis es de 15 a 30 mg/kg/día ras, y en casos graves a cada 6 a 8 horas. En niños
por vía IM o IV cada 24 horas. la dosis es de 8 a 12 mg/kg de TMP y 40 a 60 mg/kg
de SMX cada 12 horas. En la infección poi'Pneu-
Neomicína mocysíis jiroveci, la dosis es de 20 mg/kg/día de
Se indica para la preparación prequirúrgica del TMP y 100 mg/kg de SMX cada 6 horas.
colon o en la insuficiencia hepática. La dosis es
de 50 a 100 mg/kg/día cada 6 horas por vía oral.
CLORANFENICOL
A continuación se consignan las dosis de los La dosis en adultos es de 1.200 a 2.400 mg/día,
diferentes macrólidos. repartidos cada 6 a 8 horas. En niños, 20 a
30 mg/kg/día.
Eritronticina. En adultos, 250 a 500 mg cada 6
horas por vía oral. En niños, 30 a 50 mg/kg/día.
GLUCOPÉPTIDOS
Claritromicina. En adultos, 250 a 500 mg cada
12 horas por vía oral. En niños, 15 mg/kg/día. Integran este grupo la vancomicina y la teico-
Este macrólido también se presenta para usar por planina.
vía intravenosa, lo cual lo hace adecuado para el
tratamiento de las neumonías atípicas graves. La Vancomicina
dosis es de 500 mg IV cada 12 horas. La vancomicina es un agente bactericida que
Roxitromicina. En adultos, 150 mg cada 12 ho inhibe la síntesis de la pared celular de la bacte
ras o 300 mg cada 24 horas por vía oral. En niños, ria. Es activo sólo frente a bacterias grampo-
8 mg/kg/día. sitivas, en especial estafilococos, tanto sensibles
Azinom idna. En adultos 500 mg cada 24 horas como resistentes a la meticilina. Sin embargo, este
por vía oral, durante 3 a 5 días. En niños, 10 mg/kg antimicrobiano es bacteriostático frente a ente-
cada 24 horas. rococos aunque en algunos casos estos microor
Espiramicina. En adultos 1 g (3.000.000 UI) ganismos son resistentes. Su absorción por vía
cada 8 a 12 horas. oral es muy pobre. Se la utiliza por esta vía en la
diarrea causada por C. dijficile.
Además de la probabilidad de algunas interac Sus principales indicaciones clínicas son las in
ciones medicamentosas, los principales efectos se fecciones graves causadas por Staphylococcus
cundarios de los macrólidos son trastornos diges aureus y 5. epidermidis resistentes a la meticilina
tivos, intolerancia hepática y erupción cutánea. y la colitis seudomembranosa por C. difficile.
Las reacciones adversas más importantes son
neutropenia, erupciones cutáneas, flebitis y el sín
LlNCOSAMtNAS
drome del cuello rojo cuando se administra rápi
Este grupo está compuesto por la lincomicina y damente.
la clindamicina. Tienen los mismos sitios de ac La dosis en adultos es de 1 g IV cada 12 horas;
ción que los macrólidos, los ribosomas 50S. En la en niños, 40 a 60 mg/kg/día. La administración
actualidad la lincomicina es de uso muy restringi debe realizarse por venoclisis durante 30 a 60 mi
do, dado que puede reemplazarse con ventajas por nutos. En la colitis seudomembranosa la dosis es
la clindamicina. Ésta se indica para el tratamiento de 250 mg cada 6 horas por vía oral.
de las infecciones producidas por cocos grampo-
siiivos, como estreptococos y estafilococos, y es Teicoplanina
eficaz contra las bacterias anaerobias gramne- Tiene una estructura molecular relacionada con
gativas, en especial Bacteroidesfragilis. la vancomicina. Su mecanismo de acción se ba
Su absorción gastrointestinal es rápida y casi sa en el daño que produce en la pared celular
total. En las infecciones graves se administra por bacteriana. El espectro antimicrobiano abarca
vía intravenosa. bacterias gram positivas com o estafilococos,
Sus principales indicaciones clínicas son: in estreptococos, enterococos y bacterias grampo
fecciones abdominales o pelvianas causadas por sitivas anaerobias, como clostridios, Lisíeria y
anaerobios, osteomielitis por gérmenes suscepti C orynebacterium . Contra enterococos es algo
bles, neumonías por aspiración o abscesos de pul más activa que la vancomicina.
món, infecciones odontógenas y toxoplasmosis Está indicada en infecciones de piel, tejidos
del sistema nervioso central. blandos, huesos, articulaciones, sepsis y endo
Los efectos secundarios asociados con su utili carditis, como también en infecciones en hués
zación son diarrea por Closiridium d ijfk ile , reac pedes inmunodeprimidos.
ciones alérgicas, y toxicidad hepática y hemática.
Ü
46 □ Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
Los efectos secundarios asociados con su ad en niños, durante dos días. En la quimioprofilaxis
ministración son erupciones cutáneas y dolor en de la infección por H. infíuenzae tipo b, la dosis
el sitio de aplicación. en adultos es de 600 mg/día y 20 mg/kg cada 24
Tiene una vida media larga, lo que permite su horas en niños, durante cuatro días. Se adminis
administración una o dos veces por día. Puede tra por vía oral, pero en infecciones graves, por
aplicarse por vía IM o IV. La dosis en adultos es vía intravenosa.
de 200 a 400 mg/día. En niños, 6 a 10 mg/kg/día,
Rifapentina
Es un análogo de la rifampicina para el trata
RIFAMICINAS
miento de la tuberculosis. Se utiliza por vía oral
Se describirán los siguientes derivados: rifam- y tiene acción prolongada.
picina, rifapentina, rifabutina y ritaximina. La rifapentina es activa contra M ycohacteriuni
tuberculosis. M. avium com plex y Toxoptasma
Rifampicina gondii. Las cepas de M. tuberculosis resistentes
Es un derivado semisintético de la rifamicina a la rifampicina lo son también a la rifapentina.
B; pertenece a un grupo de antibióticos macro- En adultos se administra por vía oral en dosis
cíclico s com plejos desarrollados a partir de de 600 mg dos veces por semana los primeros
Streptomycesmediterrcmei. Es bactericida por in dos meses, luego 600 mg una vez por semana,
hibir el ADN dependiente de la RNA polimerasa siempre en asociación con otros fármacos antitu
de las bacterias. Penetra en las células fagoci- berculosos.
tarias, por lo que es útil contra microorganismos
intracelulares. Rifabutina
Su espectro antimicrobiano abarca bacterias Es un fármaco más activo que la rifampicina
grampositivas -estafilococos, estreptococos, neu frente a M ycobacterium avium com plex como así
mococos, clostridios y Lisíería-, microorganismos también contra M. tuberculosis. Otras micobac-
gramnegativos -m eningococo, Haemophilus in- terías, en una gran proporción son sensibles a la
jlítenzae, HaemophUus ducreyi, Brucella, LegiO' rifabutina como M. m arinum, M. scrofulaceum y
nella, Proteus y Klebsiella-; también es muy activa M. leprae. En el adulto la dosis oral es de 150 a
contra Mycobactenum tuberculosis y M. kansasii. 300 mg por día en una sola toma.
Luego de su absorción se elimina por la orina,
la saliva, las lágrimas y el sudor, líquidos a los Rifaximina
que confiere una coloración anaranjada. Los efec Es un fármaco activo frente a Staphylococcus,
tos secundarios son erupciones cutáneas, hepati Streptococcus, Enterococcus y la mayoría de las
tis tóxica, interferencia con el metabolismo de enterobacterias enteropatógenas, por lo que tie
otros fármacos, nefritis intersticial, síntomas gast ne indicación en la diarrea del viajero. P. aerugi-
rointestinales y exantemas. nosa es resistente. En general hay desarrollo de
Sus principales indicaciones son tuberculosis, resistencias a partir del tercero ai quinto día de
infecciones pormicobacterias atípicas, infeccio tratamiento.
nes estafilocócicas y brucelosis. Siempre debe La dosis en adultos es de 800 a 1.200 mg/día
asociarse con otros antimicrobianos, dado que ge por vía oral, en 2 o 3 tomas. En niños, 20 a
nera resistencia con rapidez. 30 mg/kg/día.
La dosis para adultos es de 600 mg cada 12 a
24 horas y en niños, 10 a 20 mg/kg/día, dividi
ISONIACIDA
dos en 2 a 3 dosis. Como fármaco único sólo está
indicada en la quimioprofilaxis de contactos de La isoniacida es un fármaco sintético, la hídra-
individuos infectados por N eisseria meningiticlis cida de ácido isonicotínico o isonicotil hidracida.
y H. infíuenzae tipo b. La dosis de quimioprofi- Tiene actividad bactericida intracelular y extrace-
laxis contra el meningococo es de 600 mg cada lular contra M ycobacterium tuberculosis y M.
12 horas en los adultos y 10 mg/kg cada 12 horas kansasii. Las micobacterias atípicas son resisten-
Capítulo 5 - Aniimicrobianos □ 47
les. Aclúa sobre los bacilos en fase de crecimien g in o s o , S e rr a tia . K le h sie lla , E n tero b a cter,
to aciivo, pero no tiene tanto efecto sobre los ba Salnw nella, Shigella y H. influenzae.
cilos de metabolismo lento o intermitente. No Se absorbe poco cuando se la administra por
suele tener resistencias cruzadas. La isoniacida vía oral. Está indicada en osteomielitis, infeccio
se absorbe bien tanto por vía oral como intra nes del sistema nervioso central, artritis, neumo
muscular. La absorción en el tracto intestinal se nías y pielonefritis causadas por gérmenes sus
produce en unas dos horas y se distribuye por ceptibles, en especial estafilococos y P. aerugi’
iodo el organismo, pulmón, abscesos, caseum, nosa. Siempre debe utilizarse asociada con otros
huesos, sistema nervioso, cámaiti anterior del ojo, antimicrobianos.
cavidad pleural, sinovial y peritoneal y llega al Su elevado contenido de sodio (cada gramo con
LCR. En este último, sí hay inflamación de las tiene 14,5 mEq de Na) obliga a considerar su uti
meninges, las concentraciones son equivalentes lización en determinadas afecciones, en particular
a las del plasma; luego descienden al mejorar el en niños y en adultos con insuficiencia cardíaca.
proceso inflamatorio. No hay que modificar la Los efectos tóxicos son escasos, aunque puede
dosis en la insuficiencia hepática o renal, salvo desencadenar hipersensibilidad cutánea, incre
que éstas sean muy acentuadas. No debe usarse mento de las transaminasas, diarrea, hipernatre-
ante la sospecha de hepatitis. mia y flebitis.
Los efectos adversos son raros si no se supera La dosis en adultos es de 2 a 4 g IV cada 6
la dosis máxima diaria. Puede ocasionar eleva horas, mientras que en niños se administran 100
ción transitoria de las transaminasas y en muy a 200 mg/kg/día.
raras oportunidades hepatitis que puede ser mor
tal. Los trastornos gastrointestinales son infre
NITROFURANTOÍNA
cuentes. A veces puede provocar neuritis perifé
rica. ñebre, exantemas, artralgias, psicosis, de Debido a sus propiedades químicas y farma
presión. euforia; o convulsiones en pacientes con cológicas, se emplea exclusivamente para la pre
enfermedad neurológica previa. En sujetos con vención y el tratamiento de las infecciones uri
riesgo de tener concentraciones bajas de piri- narias. Son sensibles más del 90% de cepas de E.
doxina (vitamina B6) como alcohólicos, diabéti coli, Citrobacter, Síaphylococcus saprophyticus
cos, embarazadas o desnutridos debe administrar y Enterococcus faecaÜs.
se un suplemento de 10 a 30 mg diarios de piri- La absorción aumenta cuando se ingiere con
doxina. alimentos. La excreción es predominantemente
La isoniacida es una droga de primera línea en urinaria; las concentraciones en orina son muy
el tratamiento de la tuberculosis y se prescribe elevadas y suelen exceder la CIM de los microor
para el tratamiento inicial en asociación con otras ganismos susceptibles.
drogas antituberculosas. Puede utilizarse en la Entre los efectos adversos se incluyen náuseas,
gestación y la lactancia. Está indicada en todas vómitos, cefalea, reacciones de hipersensibilidad
las formas de tuberculosis. Es el medicamento cutánea, anemia m egaloblástica, eosin ofilia,
de elección para la quimioprofilaxis en niños e polineuropatías y neumonitis.
inmunodeprimidos que hayan tenido contacto con La dosis en adultos es de 200 a 400 mg/día y
tuberculosos. en niños, 5 a 7 mg/kg/día, por vía oral, fraccio
Se administra en dosis de 5 mg/kg/día, en una nados en cuatro tomas.
sola toma, sin pasar de los 300 mg/día.
METR0NIDA20L
FOSFOMICIWA
El metronidazol pertenece al grupo de los
Es un antibiótico bactericida que bloquea la sín 5-nitroimidazólicos. Su mecanismo de acción es
tesis de la pared celular de la bacteria. Es activa principalmente citotóxico. Los metabolitos inter
contra estafilococos, neum ococos y bacterias medios se unen al ADN de las células blanco, lo que
gramnegativas, como E. coli, Pseuclomonas aeru- provoca rupturas en la cadena del ácido nucleico.
48 □ Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
ción frecuente con fluoroquinolonas potencia los etapa de este proceso es catalizada por la enzi
efectos neurotóxicos de ambas sustancias. La do ma timidina cinasa inducida por las células in
sis es de 15 mg/kg/día. En el adulto, 750 mg/día, fectadas por los virus heipes. El trifosfato de aci
en dos tomas (500 mg por la mañana y 250 mg por clovir inhibe la síntesis del ADN viral al compe
la noche). tir con una desoxiguanosina como sustrato de la
polimerasa del ADN del virus. La menor produc
ción de trifosfato de aciclovir en las células no
ETIONAMIDA-PROTIONAMIDA
infectadas y su especificidad por la polimerasa del
La etionamida se administra por vía oral y tie ADN viral produce muy pocos efectos tóxicos en
ne una penetración meníngea variable. Entre los las células. Se presenta en forma de cápsulas, un
efectos adversos se incluyen trastornos gastroin güento, suspensión y solución para administración
testinales (náuseas, vómitos y diarrea). También intravenosa. La absorción tras la administración
puede provocar hepatitis tóxica, que obliga a sus oral es muy escasa, por lo que es necesario, en los
pender el tratamiento. Está contraindicada duran casos graves, la administración por vía intravenosa.
te el embarazo. La dosis es de 15 mg/kg/día en 3 Debido a que su vida media plasmática es corta,
tomas diarias. la dosis diaria total debe dividirse en 4 o 5 tomas.
La protionamida es más activa y se administra El aciclovir es efectivo para tratar las infeccio
en dosis de 500 a 750 mg por vía oral. nes causadas por los virus del herpes simple tipos
1 y 2, y varicela zoster. La administración intrave
nosa está indicada en los casos de varicela en pa
CLOFAZIMINA
cientes inmunocomprometidos, encefalitis herpé-
Es de amplia utilización contra Mycobacterium tica, episodios iniciales y recurrentes por herpes-
¡eprac. Se concentra en las células del sistema virus l y 2 que comprometen la piel y mucosas, y
reticuloendotelial y en los macrófagos. Su prin en el herpes zoster. Su uso durante el embarazo
cipal efecto tóxico es la coloración rojiza acen sólo está indicado cuando los beneficios justifi
tuada de la piel, que se intensifica por la exposi quen con claridad el eventual riesgo para el feto.
ción solar. Otros efectos tóxicos que se pueden Las reacciones adversas más comunes son náu
presentar son hiperqueratosis, dolor abdominal, seas, vómitos e hipersensibilidad cutánea.
decoloración del iris y depósitos de microcrista- La dosis habitual por vía oral es de 200 mg cada
les del fármaco en el cristalino. En pacientes con 4 h, sin toma nocturna, o sea 5 veces por día. En
sida se ha descripto el depósito pulmonar de esos los casos graves o en el herpes zoster la dosis es
cristales. Se administra por vía oral, en dosis de de 800 mg 5 veces por día. Por vía intravenosa la
100 mg/día (ver también el capítulo Lepra). dosis es de 10 mg/kg cada 8 horas, durante 10 días.
Valaciclovir
ANTIVIRALES
El valaciclovir es el 1-valil éster del aciclovir.
Los disponibles en la actualidad son eficaces Después de su administración oral, en el tracto
para el tratamiento y la profilaxis de diferentes gastrointestinal y el hígado se convierte rápida
enfermedades virales. La mayoría inhibe dife mente en aciclovir. Esta reacción es catalizada
rentes etapas de la replicación de los virus, por por la enzima valaciclovir hidrolasa. Su biodis-
lo que no suelen ser de utilidad en las fases de ponibilidad tras la administración oral es 3 a 5
latencia. En este capítulo se tratarán los de uso veces mayor que la del aciclovir. Es un fármaco
más frecuente. Los antirretrovirales se conside efectivo para el tratamiento de las infecciones
rarán en el capítulo de Infección por HlV/sida. causadas por los virus del herpes simple y vari
cela zoster, así como en la profilaxis de la enfer
Aciclovir medad por citomegalovirus.
Es un análogo de la 2-desoxiguanosina, cuyo La dosis es de 1.000 mg cada 8 horas durante 7
efecto anliviral se inicia luego de su biotransfor- días en el herpes zoster y de 500 mg cada 12 horas
mación en trifosfato de aciclovir. La primera durante 7 días en el herpes simple mucocutáneo.
52 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
12 horas. Estos agentes antivirales actúan en las no se lo administra solo. Es particularmente acti
infecciones producidas por los virus influenza A vo contra Candida y C. neoformans. Su penetra
y B, tanto en forma terapéutica com o preventiva. ción en el LCR es buena, alcanza niveles de has
En efecto» cuando se administran en las primeras ta el 80% de los plasmáticos, y su absorción tain-
etapas de la afección gripal, se observa el acorta bién es muy buena. Los efectos tóxicos son alte
miento de los síntomas y en consecuencia una raciones hepáticas, intolerancia gastrointestinal
rápida resolución de la enfermedad. y anormalidades hemáticas.
Estos fármacos son bien tolerados y, en el caso La dosis para adultos es de 100 a 150 mg/kg/día
del oseltamivir, los efectos adversos son princi fraccionados cada 6 horas, por vía oral o IV. En
palmente gastrointestinales, en general leves y niños, 50 a 150 mg/kg/día.
transitorios. La dosis de este último en los adul
tos es de 75 mg, por vía oral, 2 veces por día Griseofulvina
durante 5 días. Es producida por una especie de Peniciliium .
Su mecanismo de acción se basa en la inhibición
de la mitosis del hongo. Su espectro abarca prin
ANTIMICÓTICOS
cipalmente dermatófitos, com o M icrosporum ,
Anfotericlna B Trichophyton y Epidermophyton. Aunque es un
La anfotericina B es uno de los fármacos de fármaco bien tolerado, pueden presentarse efec
mayor espectro antifúngico; se lo utiliza para el tos adversos entre los que se incluyen cefalea,
tratamiento de las micosis invasoras. náuseas, vómitos y gusto amargo.
Su mecanismo de acción se basa en su unión al La dosis en adultos es de 500 mg a I g por día;
ergosterol, uno de los principales esteróles de la en niños, 10 a 15 mg/kg/día.
membrana celular del hongo, lo que lleva a la aper
tura de los poros, con la consiguiente pérdida de Azoles
constituyentes y muerte celular. Los efectos ad Se dividen en imidazoles y triazoles. Entre los
versos asociados con su administración incluyen primeros se incluyen el miconazol y el ketoco-
fiebre, escalofríos, trom boflebitis, trastornos nazol. Los triazoles son el itraconazol, fluconazol,
hidroelectrolíticos, aumento de lacreatinina, ane voriconazol y posaconazol.
mia y otras. La dosis correcta para el tratamiento Los azoles son una alternativa segura y efecti
de las diferentes afecciones micóticas es de 0,3 a va a la anfotericina B para el tratamiento de mu
1,5 mg/kg cada 24 a 48 horas por vía IV. La for chas micosis sistémicas. Todos estos fármacos
ma farmacéutica convencional es el desoxicolato ejercen su acción mediante la inhibición de la
de anfotericina. La dosis total no debe superar biosíntesis del ergosterol, que es el principal es-
los 2 a 3 g. Siempre hay que comenzar con dosis terol de la membrana celular. Sin embargo, estas
bajas, con incrementos diarios. Sólo se diluye en sustancias pueden interactuar con las enzimas del
suero glucosado al 5% y se administra en 4 a 6 huésped, que son dependientes del citocromo
horas. No requiere protección de la luz. P450. Esta interacción es la que produce alguna
En la actualidad hay nuevas formas farmacéu de las principales reacciones adversas de estos
ticas, como la liposómica, los complejos lipídicos fármacos. Los principales compuestos azólicos
y la dispersión coloidal, que en general no pre que se tratarán en este capítulo son miconazol,
sentan los efectos adversos descriptos para la for ketoconazol, itraconazol, fluconazol, voriconazol
ma convencional. De la anfotericina liposómica y posaconazol.
se administran dosis de 1 a 5 mg/kg/día por vía
IV; del complejo lipídico, 2,5 a 5 mg/kg/día, y de Miconazol
la dispersión coloidal, 1 a 5 mg/kg/día. Es un imidazol que se presenta para su aplica
ción tópica, oral e intravenosa. Como agente
Flucitosina antimicótico ha sido reemplazado por otros más
La 5-fluorocitosina es un fármaco antifúngico efectivos y menos tóxicos, en la actualidad su uso
efectivo, pero debido a la resistencia que origina está limitado al tratamiento tópico.
54 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
les provoca una parálisis que facilila su expulsión fármacos más utilizados en la terapéutica anti
del tracto digestivo. Luego de su administración parasitaria: tiabendazol, mebendazol, fluben-
por vía oral se absorbe muy poco. En general es dazol y albendazol. El principal metabolito del
bien tolerado y en raras ocasiones puede provocar tríclabendazol es el sulfóxido, que es el res
n astomos gastrointestinales o reacciones alérgicas. ponsable de su actividad antiparasitaria contra
Está indicado en las parasitosis por A scaris Fasciola hepatica. La principal característica de
lumbricoides, Enterohius verm icularis, N ecaíor este fármaco es su acción sobre los tres estadios
am encanus, Ancylostom a duodenale y Trichiiris evolutivos del parásito: temprano inmaduro, in
tñchiitra. maduro y adulto. Su metabolito activo, el sulfó
Tanto en niños com o en adultos, en las para xido, tiene una poderosa acción sobre el tegu
sitosis por Ascaris lum bricoides, N ccator a m e n mento del parásito al inhibir la síntesis de proteí
canus. Ancylostom a duodenale y Trichuris tri- nas. Este fármaco ha sido extensamente investi
chiura se administran 100 mg dos veces por día, gado en animales. Su utilidad en el hombre se
por vía oral, durante 3 días. evaluó en varias publicaciones en las que se se
En oxiurosis, tanto en niños com o en adultos ñala la buena tolerancia y la ausencia de toxici
se indican 100 mg en una sola toma, repetida a dad. Aunque este fármaco no está aprobado para
los 15 días. No debe omitirse el tratamiento del uso humano, es el de mayor eficacia y sería el
grupo familiar. tratamiento de elección de la fasciolosis.
En el comercio está disponible como suspen
Albendazol sión al 5% o 10%, para uso veterinario. La dosis
Es un derivado benzimidazólico con potente es de 10 mg/kg por vía oral, en una sola dosis
efecto antihelmíntico; también se utiliza en la administrada en ayunas. En caso de persistencia
hidatidosis y la cisticercosis. Bloquea la captación de la infección, puede administrarse una segun
de glucosa por los parásitos intestinales y sus lar da dosis.
vas. Se absorbe en parte en el intestino y se distri
buye por todo el organismo. Se metaboliza en el Pamoato de pirantel
hígado, donde se biotransforma en sulfóxido de Es un derivado de la tetrahidropirimidina con
albendazol y es excretado en esa forma por la ori un poderoso efecto antiparasitario. Paraliza los
na; el resto se elimina con las heces. En general es vermes por bloqueo neuromuscular, lo cual evita
bien tolerado. En raras ocasiones puede provocar la migración de los parásitos y causa su elimina
trastornos gastrointestinales y cefalea. ción. Se absorbe poco y en el intestino permane
Está indicado en oxiurosis, ascariosis, anquí- ce el 50% a 70% de la dosis administrada, lo que
lostomosis, necatorosis, tricocefalosis, estrongi- permite su acción intensa a ese nivel.
loidosis, teniosis, himenolepiosis nana, hidati En general es bien tolerado; raras veces produ
dosis y cisticercosis. ce anorexia, náuseas, vómitos, diarrea, cefalea,
En ascariosis, anquilostomosis, necatorosis y mareos, somnolencia, insomnio o reacciones de
tricocefalosis se administra a niños y adultos una hipersensibilidad, como fiebre medicamentosa o
sola toma de 400 mg. En teniosis, estrongiloidosis exantemas urticarianos.
e himenolepiosis nana, 400 mg en toma única dia Es muy efectiv o en infestaciones produci
ria tanto en niños como en adultos, durante 3 días das por Enterobius verm icularis, A scaris lum-
consecutivos. En oxiurosis, 100 mg en niños ma bricoides, A n cylo sto m a duodenale y N ecato r
yores de 2 años y 400 mg en adultos, en una sola am ericanus.
toma que se repite a los 15 días. En hidatidosis, En ascariosis, necatorosis y anquilostomosis
10 m g^g/día durante plazos variables. En cisti se administra por vía oral, en dosis única de 10 a
cercosis, 15 mg/kg/día durante 15 días. 20 mg de fármaco base por kilogramo de peso.
Puede repetirse dos o tres días consecutivos. Se
Tríclabendazol aconseja no pasar de l g por dosis. En la oxiurosis
El tríclabendazol pertenece al grupo de los se administra una sola dosis que se repetirá a los
benzimidazoles, que también integran los cuatro 15 días.
58 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
B ibliografía-----------------------------------------------
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Organización Panamericana de la Salud. Tratamiento de
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6
Profilaxis en infectología
Horacio Mingrone
Norma Porteiro
Ornar J. Palmieri
Se denomina profilaxis prim aria al conjunto 2) La utilización debe ser restringida, para ev i
de medidas tendientes a evitar la adquisición de tar la aparición de resistencia.
una infección, y profilaxis secundaria^ a las que 3) El antimicrobiano elegido debe ser de es
se toman para impedir la aparición de la enfer pectro reducido y bajo costo.
medad clínica cuando la infección ya se ha insta
lado. En realidad, el objetivo es reducir esos ries Debe destacarse que las recomendaciones no
gos, ya que la efectividad de la prevención no son estáticas ni permanentes, sino que están su
siempre es absoluta. jetas a revisiones periódicas a cargo de com isio
La profilaxis puede ser de recomendación uni nes de especialistas y organismos de control, los
versal (más aplicable a las inmunizaciones) o que se basan en los resultados obtenidos y en los
estar dirigida a determinadas poblaciones consi datos de la vigilancia epidemiológica.
deradas de alto riesgo para la adquisición de una Las situaciones en las que se utilizan antimi
infección determinada. Dentro de este último gru crobianos para la prevención de las complicacio
po se encuentran los contactos directos de pacien nes infecciosas son diversas, pero se clasifican
tes con enfermedades infectocontagiosas, los in en dos áreas: quim ioprofilaxis m édica y quimio^
dividuos que visitan áreas endemoepidémicas, profilaxis quirúrgica.
quienes padecen enfermedades o estados mór La primera se lleva a cabo en aquellas enfer
bidos que favorecen la aparición de ciertas in medades en las que se ha demostrado que la pro
fecciones (pacientes con lesiones valvulares, filaxis ha reducido la frecuencia o gravedad de
esplenectomizados, etc.) y aquellos en quienes las infecciones asociadas con ellas.
las infecciones adquieren especial gravedad, La segunda es la que se utiliza para reducir la
como los pacientes con sida o linfomas. incidencia de infecciones en el sitio quirúrgico.
Los procedimientos mediante los cuales se ins
trumenta la prevención son varios (cuadro 6-1).
C u ad ro 6-1. Tipos de profilaxis en infectología.
El presente capítulo se referirá a la qidmiopro- • Medidas de bioseguridad
filaxis, o sea a la prevención mediante el uso de
« Medidas epidemiológicas
antimicrobianos, cuya aplicación está regida por
• Inmunizaciones
algunas reglas generales;
• Uso de antimicrobianos
1) El beneficio debe superar el riesgo de su uso.
60 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
PROFILAXIS MÉDICA
Cirugía ORL. Tonsilectomía y adenoidectomía.
C irugía respiratoria. Incluida la fibrobroncos-
Endocarditis bacteriana copia con broncoscopio flexible, aun sin biopsia,
La endocarditis bacteriana (EB) representa el en pacientes con alto riesgo de desarrollar EB.
\%o de los ingresos hospitalarios y aún es una Cirugía gastrointestinal (G í). Escleroterapia de
entidad de mortalidad elevada. En algunos casos várices esofágicas, dilatación esofágica, cirugía
su diagnóstico es dificultoso debido a la diversi> biliar, cirugía intestinal con compromiso de la
dad de los síntomas y signos. mucosa, colangiografía endoscópica retrógrada
La quimioprofiiaxis de la EB tiene com o obje si hay obstrucción de la vía biliar, incluida la
tivo evitar la colonización de las válvulas cardía esofagogastroduodenoscopia, aun sin biopsia en
cas por las bacterias que pasan al torrente circu pacientes con alto riesgo de desarrollar EB.
latorio durante la remoción de focos sépticos C irugía genitourinaria (G V ). Cistoscopia, di
(cuadro 6-2). El antibiótico utilizado debe alcan latación uretral y cirugía prostática.
zar niveles en sangre iguales o superiores a la
CIM de los microorganismos responsables (en El principal problema de la profilaxis es el bajo
especial S. viridans) en el momento del procedi nivel de cumplimiento, por lo que en la actuali
miento quirúrgico. dad se utilizan regímenes más simples, más cor
tos y por vía oral. Se administra una sola dosis
Se indica profilaxis a los pacientes con riesgo antes del procedimiento.
alto o moderado de desarrollar EB. • C irugía dental, ORL, respiratoria y esofágica:
• Pacientes con alto riesgo de desarrollar EB Amoxicilina, 2 g i hora antes.
a) Quienes padecen cardiopatía congénita con Si hay imposibilidad de administrar medicamen
cianosis (transposición de los grandes vasos, tos por VO:
tetralogía de Fallot). Ampicilina, 2 g, o cefazolina, 1 g IM 30 minu
b) Portadores de prótesis valvulares. tos antes.
c) Individuos que han padecido endocarditis. Alérgicos a la penicilina:
• Pacientes con riesgo moderado de desarrollar EB Azitromicina o claritromicina, 500 mg, o clinda-
a) Individuos con valvulopatía adquirida, reu micina, 600 mg o cefadroxilo, 2 g VO 1 hora antes.
mática o de otro origen. • C irugía G I (excluida la esofágica) y G V ’.
b) Portadores de miocardiopatfa hipertrófica. Pacientes con alto riesgo:
c) Mayores de 45 años con prolapso de la vál Ampicilina, 2 g IM, más gentamicina, 80 mg 30
vula mitral con regurgitación. minutos antes.
Alérgicos a la penicilina:
Los procedimientos en los cuales se indica la Vancomicina, 1 g IV a pasar en 30 a 60 minu
profilaxis son: tos en goteo, más gentamicina, 80 mg IM 30 mi
Cirugía dental. Procedimientos que produzcan nutos antes.
sangrado, cirugía periodontal, tratamientos de Pacientes con riesgo moderado:
conducto e implantes dentales. Amoxicilina, 2 g VO una hora antes.
Alérgicos a la penicilina:
Vancomicina, 1 g IV a pasar en 30 a 60 minutos.
C uad ro 6*2. Incidencia de bacteríenriia luego de dis-
tintos procedimientos diagnósticos. Fiebre reumática
La fiebre reumática (FR) es una complicación
•Cirugía dental 20 a 80%
no supurativa de las infecciones causadas por el
• Cirugía urológica 12 a 4 6 %
estreptococo betahemolítico del grupo A.
• Colonoscopia O a 9 %
La profilaxis primaria se utiliza para evitar el
• Colon por enema 8 a 11 %
primer brote de FR luego de una infección estrep-
• Biopsía hepática 3 a 13%
tocócica. El grupo de mayor riesgo son los niños
• Broncosccpia 10 a 15%
de 5 a 10 años, por lo general luego de infeccio
Capítulo 6 - Profilaxis en infectología □ 61
nes del aparato respiratorio superior (aunque este En mujeres embarazadas la profilaxis se conti
antecedente clínico se reconoce en menos del núa hasta el parto, y en los niños, hasta la solución
50% de los casos). El tratamiento adecuado de quirúrgica del problema anatómico que genera el
esas infecciones evita la aparición de la FR. reflujo o el residuo. Si esto no fuera posible, se
instaura la profilaxis por 6 meses, al cabo de los
P r o f ila x is p r im a r ia cuales se evalúa si es necesario continuarla.
Se realiza con penicilina G benzatina por vía
IM una sola dosis o penicilina V por vía oral, I n d ic a c io n e s r e la tiv a s
durante 10 días, en las dosis habituales. Esta Se estima que alrededor del 20% de las muje
medida tiene eficacia para prevenir la FR cuan res con antecedentes de lU baja presentarán
do se administra hasta 7 a 9 días después del co recurrencias. Luego del tercer episodio se reco
mienzo de los síntomas. mienda realizar estudios con el fin de descartar
anomalías del aparato urinario. Habitualmente no
P r o f ü a x is s e c u n d a r ia se encuentran alteraciones estructurales de la vía
La profilaxis secundaria tiene como objetivo urinaria.
evitar la recurrencia de un nuevo brote de FR ante En este grupo, la aparición de complicaciones
ulteriores infecciones estreptocócicas. ascendentes o pielonefritis crónica es excepcional.
Se realiza con penicilina G benzatina, 1,2 mi Se contempla la profilaxis en las siguientes si
llones UI por vía IM cada 4 semanas. Como al tuaciones:
ternativa, penicilina V -5 0 0 .0 0 0 UI 2 veces por a) Mujeres adultas con lU sintomática que pre
día- o claritromicina -2 5 0 mg 2 veces por día-. senten más de 3 episodios en 12 meses. Si está
Si el paciente es portador de una secuela relacionado con el acto sexual, se recomienda
valvular reumática, en el futuro deberá realizar profilaxis poscoito con una dosis única de 160 mg
profilaxis para la EB ante procedimientos que deTM P/800 m g d e SMX.
produzcan bacteriemia. b) En los ancianos puede considerarse la profi
laxis en casos de lU sintomática recurrente, aso
Infección urinaria recurrente ciada con uropatía obstructiva inoperable. El pro
La infección urinaria recurrente tiene conse blema es especialmente común en ancianos con
cuencias graves en los niños, en quienes puede sonda vesical permanente, en quienes la lU es
conducir a la insuficiencia renal. Por lo tanto, éste inevitable. Es por ello que se debe ser muy cau
es el grupo más vulnerable en el que es preciso teloso, con el fin de evitar la aparición de resis
evitar la reiteración de los episodios de infección tencia bacteriana por presión de selección. En
urinaria (lU ). estos casos se indicará 1 comprimido de 160 mg
de TMP/800 mg de SM X 3 veces por semana o
In d ic a c io n e s a b s o lu ta s amoxicilina, 250 mg/día.
a) Niños menores de 5 años, en quienes por
estudios urodinámicos se demuestre reflujo o re Erisipela recurrente
siduo vesical posmicción. Con frecuencia la erisipela recurrente se aso
b) Embarazadas luego del tercer episodio de cia con trastornos en los miembros inferiores,
lU o bacteriuria asintomática. Las embarazadas como insuficiencia venosa crónica, linfedema,
con lU recurrente presentan mayor riesgo de parto traumatismos previos, cirugías, m icosis Ínter-
pretérmino. digital y algunos trastornos generales como dia
En los niños se administrará nitrofurantoína betes, obesidad y tabaquismo.
2 mg/kg una vez por día o TPM/SMX, sobre la En la mayoría de los casos es causada por
base de 2 mg/kg/día de trimetoprima en una sola estreptococos de los grupos A, C y G.
dosis. Se indica quimioprofilaxis si el paciente presen
En adultos, 1 comprimido de 160 mg deTM P/ ta más de tres episodios al año. Sin embargo, hay
800 mg de SMX una vez por día o una cápsula que destacar que la profilaxis brinda escasa protec
de nitrofurantoína de 100 mg 1 vez por día. ción cuando hay factores locales, cuya corrección
62 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
Cefazolina 2h 4 horas
Cefoxitina. piperaciünd y ampicilina 1h 4 horas
Vancomicina 6h No requiere dosis ¡ntraoperatoria
Metronidazol 8h No requiere dosis intraoperatoria
Clindamicina 3h No requiere dosis intraoperatoria
íWvíibiaficdVi^í'.%!í'?>:' : r,,;
Colocación de prótesis y material Cefazolina 1 g/IA. Luego 1g c/8 h x 24 h
de osteosíntesis
Fractura expuesta Igual profilaxis
Amputación Clindamicina. 600 mg. más gentamicina. 1,5 mg/kg/lA. Luego clindamicina,
600 mg c/8 h, más gentamicina, 3 mg/kg x 24 h; o cefazolina más
metronidazol o cefoxitina, 2 g/lA. Luego 1g c/6h x 24 h
Otros procedimientos Cefazolina Ig/IA OU
■■•rGirügíacái^^
Tipo dé cirügíá " Antibiótico
Cirugía cardíaca con colocación de Cefazolina, Ig/IA. Luego Ig c/8 h x 24 h. o vancomicina, 1 g IV
material protésico o no, o colocación 30 minutos antes del acto quirúrgico
de prótesis vasculares
Colocación de marcapasos definitivo Cefazolina, 1 g/IA DU, o vancomicina, 1 g IV 30 minutos antes
del acto quirúrgico
;• ^;Ñfiuroíit;ugra
■tip o
Craneotomía (que no atraviesa Cefazolina 1g/lA DU
la mucosa sinusal ni oral)
y laminectomía
Cirugía transesfenoidal o que Clindamicina, 600 mg/IA. Luego 600 mg c/8 h x 24 h. o cefazolina, 1 g/lA.
atraviesa la mucosa oral Luego. 1g c/8 h x 24, o vancomicina, 1 g IV 30 minutos antes del acto
0 sinusal quirúrgico
• jCirugíárabdominal
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i:.* \P. . 'íl.^M i^ú ií4ixe iív .'VV'aCiííVl p^ fíí íi^ iio SC JS S O fr COQ'-^Í« rj^’lá scí^ - i UA
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áÉ É ttáiB iB
Inmunoprofilaxis
Gerardo E. Laube
Ornar J. Palmieri
t
Redén nacido Única 1* dosis
dosis (») (**) t
2 meses 1* dosis 1* dosis 2* dosis
4 meses 2* dosis 2" dosis 3* dosis <
6meses
12 meses
3* dosis 3* dosis
1* dosis 1* dosis
c
18 meses 4* dosis 4‘ dosis t
6 años refuerzo refuerzo 2* dosis
11 años refuerzo (***) «
16 años refuerzo
Cada 10 años refuerzo f
Puerperio o 1* dosis
posaborto i
inmediato
€
(1) BCG: antituberculosa, (*) antes del egreso de la Maternidad
(2) DTP'Hib: difteria, tétanos, pertussis, Haemophilus ir)fluenz3e tipo b <t
(3) DTP: difteria, tétanos, pertussis
(4) OPV: antipoliomieiítica oral (Sabin) t
(5) SRP; sarampión, rubéola, parotiditis
(6) dT: difteria, tétanos. Embarazadas: aplicar vacuna dT a partir del 2® trimestre de embarazo; 1*, 2* dosis de refuerzo
según corresponda y luego cada 10 años. En caso de no contar con vacuna dT, aplicar la antitetánica
f
(7) H8: hepatitis B. (**) Antes de las 12 h de vida. (*•*) A los 11 años, si no recibió et esquema indicado, se aplicarán 3 í-
dosis (0*30180). Además, está indicada en los miembros del equipo de salud, adolescentes y adultos
(8) HA: hepatitis A. Se aplicará al cumplir el año de edad, junto con la triple viral f
(9) SR: sarampión, rubéola. Se aplicará por única vez como parte de la estrategia general para la erradicación de la
rubéola congénita y mantener elevados títulos protectores de anticuerpos antisarampionosos X
Adenda: vacunas contra la fiebre amarilla y fiebre hemorrágica argentina, si residen o se trasladan a zonas de riesgo.
t .
fueron previstos en las etapas previas de control tos, como errores durante la aplicación, uso de c
solventes inapropiados, vía de aplicación equi
y evaluación. Se define como efecto adverso al
episodio médico que se presenta después de la vocada, sobredosis y otras. c
administración de un fármaco. Los episodios que En el cuadro 7-1 se mencionan las vacunas ac t
se producen luego de la aplicación de las vacu tualmente disponibles.
nas en el marco de los programas de inmunizacio En el cuadro 7-2 se detallan las vacunas compren i
nes son denominados efectos adversos supuesta- didas en el Calendario Nacional de Vacunación
mente atribuibles a ¡a vacunación e inm uniza de la República Argentina, Ministerio de Salud t
ción. En este marco existen circunstancias que Pública, febrero de 2009.
deben comunicarse, com o los casos de linfa f
denitis por BCG, los abscesos en el sitio de la (
DESCRIPCIÓN DE LAS DISTINTAS
inyección, las muertes sospechadas de estar rela
VACUNAS
cionadas con la inmunización, los casos que re (
quieran internación y que se sospechen de estar VACUNA BCG
asociadas con la vacunación, así como aquellas La tuberculosis aún es un problema sanitario (
situaciones que puedan desencadenar dichos efec de importancia en los países en vías de desarro-
l
70 G Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
lio. Esto hace que deban establecerse programas pese más de 2.000 g. La vía de aplicación es única
de prevención, diagnóstico y tratamiento adecua mente intradérmica. Deben vacunarse hasta los 6
dos para todas aquellas comunidades que regis años de vida todos aquellos niños que no presenten
tren tasas de incidencia y prevalencia elevadas. cicatriz ni constancia de haber sido vacunados.
En este sentido, el diagnóstico temprano y el tra La vacunación induce una reacción tuberculí-
tamiento supervisado, junto con la vacuna BCG, nica posterior de un diámetro variable (3 a 20 mm)
representan la tríada fundamental para un ade cuyo tamaño depende de distintos factores, como
cuado control de la enfermedad. la edad al momento de la vacunación y la canti
Desde las primeras semanas de vida, todo niño dad de bacilos atenuados, pero no predice el gra
está expuesto, en grado variable, a entrar en con do de protección proporcionada.
tacto con enfermos bacilíferos, lo que constituye Si bien la vacuna BCG es muy segura, puede
un riesgo de infección. Entre los que se infectan, originar reacciones secundarias como la inflama
aproximadamente un 10% puede enfermar du ción de los ganglios axilares y un nódulo dérmi
rante los años posteriores, mientras que el resto co grande, con supuración prolongada, que per
curará en forma espontánea. El riesgo de contraer manece varios meses y que en algunas ocasiones
la enfermedad más grave es mayor en los niños se debe a fallas técnicas. Es una lesión poco do-
pequeños; por lo tanto, es muy importante vacu lorosa y, salvo en los casos de sobreinfección, no
nar con BCG antes de que puedan ser infectados. requiere tratamiento. Las com plicaciones más
La inmunización con BCG tiene el propósito de graves incluyen la infección diseminada y la
provocar una infección controlada, por bacilos osteítis, las que pueden aparecer 1 a 12 meses
incapaces de producir lesiones progresivas en el luego de su administración.
ser humano, pero que tienen capacidad antigénica. Está contraindicada en casos de inmunodefi-
La vacuna BCG es una vacuna compuesta por ciencias graves, peso inferior a 2.000 g, enfer
una suspensión de bacilos bovinos atenuados, la medades infecciosas y dermatosis generalizadas.
cepa Calmette y Guerin (BCG). Las diferentes Actualmente, tanto la OPS como la QMS acon
subcepas de vacunas BCG deben su nombre al sejan su aplicación en hijos de mujeres sero-
laboratorio o lugar donde han sido cultivadas, positivas para el HIV. En estos niños, si bien es re
como Danesa, Moreau, Glaxo, Pasteur y Tokio. comendable descartar la infección por HIV antes
La vacuna intradérmica debe contener no menos de su administración, se recomienda aplicarla in
de 100.000 bacilos por cada 0,1 mL. mediatamente después del nacimiento en todos
En la actualidad se sabe que la capacidad para aquellos casos en que la madre fue sometida al tra
inducir reacciones tuberculínicas posvacunales es tamiento de prevención de la transmisión vertical.
una característica de cada cepa y no se relaciona
en forma directa con el efecto protector. Se ha
VACUNA ANTI-HEPATITIS B (HB)
demostrado que la eficacia global de la vacuna
para menores de 5 años es del 73% y la protec La hepatitis B constituye un verdadero desa
ción para las formas extrapulmonares alcanza del fío, debido a la gran cantidad de personas porta
95% al 100%. doras que existen en todo el mundo con capaci
En un principio el cultivo se realizaba en me dad de contagiar. Esta situación no sólo se pre
dio líquido y así se la fraccionaba hasta su uso, senta en individuos de alto riesgo, com o en los
lo cual la hacía vulnerable a la acción del calor y adictos a drogas inyectables, los que tienen con
la luz. Esta falta de estabilidad fue una de las tacto sexual con portadores crónicos o los indi
causas de las disparidades en el efecto protector viduos con riesgo profesional, sino que también
observado en distintos estudios. La liofilización adquiere importancia la transmisión perinatal. En
ha re.suelto este inconveniente, ya que permite la actualidad se practican estrategias destinadas
controlar cada partida antes de ser utilizada. a controlar la infección por el virus de la hepati
La vacuna se administra en una dosis única den tis B en lodos ios lactantes, así com o la detec
tro de los primeros días de vida y antes del alta de ción del HBsAg en todas las embarazadas. En
la mateniidad, siempre y cuando el recién nacido este caso, el recién nacido debe recibir en forma
Capítulo 7 - Inmunoprofilaxis □ 71
inmediata la gam m aglob u lin a anti-hepatitis B y, suspensión de bacilos Bordetella pertussis muer
en distinto sitio , la prim era d o sis de la vacuna. tos y el componente conjugado de Haem ophilus
D ebido a la dificultad d e proceder a la evalu a infuenzae tipo b.
ción rutinaria d e las em barazadas, y a que la v a El toxoide tetánico inactivado con formol, debe
cuna es altam ente e fe c tiv a para evitar el co n ta contener entre 5 y 30 Lf/dosis; el toxoide difté
gio en los c a so s d e e x p o sic ió n perinatal, en la rico, entre 10 y 30 Lf/dosis y el de Bordetella
República A rgentina s e im p lem en tó, a partir de p ertu ssis una potencia de 4 U.l. y contener hasta
noviem bre de 2 0 0 0 , la vacunación obligatoria a 16 unidades de microorganismos muertos por
todos lo s recién nacid os antes de las 12 horas de cada dosis.
vida. L uego de esta primera d o sis s e aplicará la La incorporación del componente nnú-Haemo-
segunda a los 2 m ese s y la tercera a lo s 6 m eses. philus influenzoe tipo b (anti-Hib) se debe a que este
Además de cumplir con el esquem a del recién cocobacilo gramnegativo es el responsable de afec
nacido, la vacuna está indicada a partir de los 11 ciones invasivas, como meningitis, neumonía o abs
años de edad, así com o para todos los m iem bros del cesos, así como de procesos no invasivos como oti
equipo de salud, con un esquem a de 0 , 1 y 6 m eses. tis y bronquitis. Actualmente, existen vacunas de
Las diferentes vacunas disponibles en la Ar nominadas conjugadas que se caracterizan por
gentina son similares en las tasas de seroconver- tener una proteína transportadora o carrier uni
sión que proporcionan, que varían entre el 90% da al polisacárido capsular. La gran ventaja de
y el 100%. A fin de evaluar si hubo respuesta a este tipo de vacunas es su inmunogenicidad én
la vacuna, dos meses después de la última dosis, menores de 2 años. Existen cuatro tipos de va
se solicitará la determinación de anticuerpos anti- cunas que difieren en su com posición en el tipo
HBs; un título superior a 10 UI/L se considera de proteína transportadora (toxoide diftérico, mu-
protector. La duración de la inmunidad varía, tante CRM107 de la proteína de C orynehac-
pero diversos estudios demuestran que luego de terium diphtheriae, complejo proteico de la mem
diez años de seguimiento todavía hay anticueipos brana externa de N eisseria m eningitidis del gru
protectores en algunos individuos. Aunque estos po B o toxoide tetánico), todas las cuales pueden
anticuerpos no estén presentes, se ha comproba intercambiarse entre sí. Deben conservarse en la
do la existencia de una buena memoria inmu- heladera entre los 2*^C y 8°C.
nitaria en muchos vacunados que no tenían con La vacuna cuádruple se aplicará a partir de los
centraciones detectables de anti-HBs. Algunos 2 meses, con refuerzos a los 4, 6 y 18 meses. El
investigadores vinculan la falta de respuesta que componente anti-Hib se aplicará solamente has
se observa en algunos individuos, con la existen ta los 5 años de edad, razón por la cual al ingreso
cia de factores genéticos que estarían asociados escolar de los 6 años se aplicará la vacuna triple
al sistema HLA, bacteriana. En los casos de interrupción del es
Esta vacuna está elaborada con el antígeno de quema siempre debe completarse el misiao, in
superficie de la hepatitis B (H BsA g) recom- dependientemente del tiempo transcurrido. En
binante adsorbido en hidróxido de aluminio. Debe este sentido debe recordarse que siempre se con
conservarse en la heladera a temperaturas entre sideran los esquemas como dosis/vida, por lo que
los 2®C y 8®C. Las reacciones adversas comuni no deben reiniciarse en los casos en que se inte
cadas son mínimas, principalmente de tipo local, rrumpan los mismos.
y raras veces cuadros febriles. Las contraindica La vacuna cuádruple se administra por vía in
ciones son similares a las generales de todas las tramuscular, de preferencia en la región antero-
vacunas. Puede aplicarse en forma simultánea con lateral externa del muslo o en el brazo, en el
otras vacunas, pero en sitios diferentes. músculo deltoides.
Las molestias locales son infrecuentes y con
sisten en dolor en el sitio de la inyección. Puede
VACUNA CUÁDRUPLE BACTERIANA (DTP-Hib)
producir fiebre y malestar genera!, que suelen
Esta vacuna está compuesta por los toxoides desaparecer dentro de las 48 horas. Se puede ad
diftérico y tetánico superficiales purificados, una ministrar en forma simultánea con otras vacunas.
72 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
a
VACUNAS ANTI-POLIOMIELÍTICAS producir rápida respuesta local y general, con
costos operativos no significativos. Las desven
La poliomielitis es una enfermedad de distri tajas que se han comunicado son la posibilidad
bución universal, con mayor frecuencia de apa de mutación, los fracasos que se han producido
rición en los meses de verano, que en general en zonas tropicales por interferencia viral y la no
afecta a los niños. Las infecciones subclínicas son conveniencia de administrarla a pacientes con
muy frecuentes, hecho de gran importancia epide inmunodeficiencias.
miológica ya que indica la diseminación de la
enfermedad en una comunidad determinada.
VACUNA TRIPLE VIRAL (SRP)
A partir de la década de 1960 se introdujo la
vacuna Sabin, de administración oral, que pro Esta vacuna es una combinación de cepas vira
dujo un descenso significativo de la enfermedad, les atenuadas de sarampión, rubéola y parotiditis
el que se mantiene en la actualidad. Sin embar que se presentan liofilizadas.
go, en los últimos años se siguen comunicando Las cepas para el sarampión y la parotiditis son
brotes en algunos países, particularmente de Áfri cultivadas en embrión de pollo, mientras que la
ca y Asia. Existen 2 tipos de vacunas: la vacuna de la rubéola es cultivada en células diploides
Sabin y la vacuna Salk. humanas. En la Argentina existen diversas vacu
La vacuna Sabin (OPV) está elaborada con vi nas disponibles: para sarampión, las cepas utili
rus vivos atenuados y su administración es oral. zadas son Schwartz o Edmonston-Zagreb, para • i
Estos virus provocan una infección en el aparato rubéola la cepa Wistar RA27/3 y para parotiditis
digestivo, con la consiguiente inducción de in las cepas Jeryl Lynn, Urabe AM9 y Rit 1485.
munidad. Se absorbe con rapidez, proceso que Deben conservarse en la heladera entre los 2®C
se favorece si no se ingieren alimentos dentro de y 8®C, no congelarse y preservarse de su exposi
los 30 minutos luego de su aplicación. ción a la luz solar.
La vacuna tipo Salk (IPV), está elaborada con La inmunogenicidad es de aproximadamente
virus inactivados. Se administra por vía subcutá el 90% al 95%, con una eficacia superior al 95%.
nea o intramuscular, es inmunogénica y altamente El esquema de vacunación es a los 12 meses y
eficaz. Su indicación principal es para los niños al ingreso escolar de los 6 años. Deben vacunarse
con inmunodeficiencias, particularmente aquellos todos los adolescentes a partir de los 11 años que
pacientes infectados por el virus HIV, así como no tengan dos dosis previas aplicadas. En los ca
para quienes convivan con individuos inmunode- sos de interrupción del esquema, debe comple
ficientes a los que no se les aplicará la vacuna Sabin. tarse el mismo con la dosis faltante sin importar
Ambas vacunas deben conservarse a tempera el tiempo transcurrido desde la última dosis.
turas entre 2®C y 8°C. Esta vacuna se aplica en dosis de 0,5 mL, por
El esquema básico de administración para am vía subcutánea en la parte superior del brazo.
bas vacunas es su aplicación a los 2 ,4 y 6 meses Los efectos adversos se presentan en el 5% al
de vida, y refuerzos a los 18 meses y al ingreso 10% de los casos y son diferentes de acuerdo con
escolar de los 6 años. cada uno de los componentes; sarampión (fiebre,
Estas vacunas no suelen generar reacciones exantema, tos, conjuntivitis), rubéola (fiebre,
secundarias; no obstante se han descripto paráli exantema, linfadenitis) o parotiditis (tumefacción
sis luego de la administración de la cepa Sabin parotídea, fiebre).
oral (un caso cada 9 millones de dosis). Las contraindicaciones incluyen reacciones
Las ventajas de la vacuna Salk se basan en la alérgicas de tipo anafiláctico con las dosis pre
imposibilidad de mutación y en su utilidad en vias, inmunodeficiencias graves o el embarazo.
pacientes inmunodeprimidos. Sus desventajas son Sin embargo, a pesar de no haberse comunicado
la ausencia de respuesta local intestinal y la apli casos de anomalías fetales atribuidas a la vacu
cación parenteral. na, no se recomienda la administración de nin
La vacuna de la cepa Sabin confiere inmuni guna vacuna atenuada en gestantes, ni dos meses
dad humoral e intestinal; es muy adecuada para antes de la posibilidad de embarazo. Pueden
Capitulo 7 - Inm unoprofilaxis □ 73
vacunarse los pacientes infectados por el HIV, Estas vacunas pueden administrarse en forma
con recuentos de linfocitos T CD4+ superiores al simultánea con otras vacunas, aunque deben apli
15%. carse en sitios diferentes.
La hepatitis A es una enfermedad de distribu Esta vacuna está constituida por los toxoides
ción universal. Según los diferentes estudios diftérico y tetánico purificados, con una suspen
epidemiológicos, existen áreas de endemicidad sión de bacilos Bordetella pertussis muertos, ad
alta, media y baja, que se relacionan principal sorbidos en hidróxido o fosfato de aluminio. Debe
mente con la situación socioeconóm ica de cada conservarse en la heladera entre los 2®C y 8®C.
región geográfica. En efecto, la falta de un ma No debe congelarse porque precipita el adyuvante
nejo adecuado del agua potable y de las excretas con la consiguiente pérdida de potencia.
se asocia con los mayores índices de prevalencia En el Calendario Nacional de Vacunación de
de esta afección. La República Argentina se en la República Argentina (2007) está indicada su
cuentra entre las áreas de endemicidad alta, con aplicación sólo a los 6 años como refuerzo de la
lasas de prevalencia de anticuerpos anti-HAV del inmunización contra difteria, tétanos y pertussis
30% en menores de 5 años y superiores al 70% recibida hasta los 18 meses con la vacuna cuá
en mayores de 15 años. Se considera que la gran druple (DTP Hib). Debe aplicarse en la región
mayoría de la población adulta posee anticuerpos anterolateral externa del muslo o en el brazo, en
protectores por haber padecido la enfermedad en el músculo deltoides.
forma clínica o subclínica Los efectos adversos más frecuentes incluyen
Las diferentes vacunas anti-hepatitis A son a dolor y tumefacción en el lugar de aplicación,
virus inactivados y se elaboran con las siguientes fiebre, llanto persistente e irritabilidad. Esporá
cepas virales: HM 175, CR326, GBM y RG-SB. dicamente pueden presentarse com plicaciones
Todas deben conservarse entre los 2®C y 8®C y com o som nolencia, convulsiones, hipotonía,
no pueden congelarse ni exponerse a la luz. hiporreflexia, anafilaxia y encefalopatía. La pro
La decisión para su indicación en una pobla babilidad de estas complicaciones, particularmen
ción depende de las prioridades de ese país y del te presentes con la mayor edad, desaconseja su
costo-beneficio, que en general guardan relación administración en niños mayores de 7 años, por
con el estado sanitario de esa región. Esta vacu lo que a partir de esta edad se indica la vacuna
na ha demostrado su eficacia para el control de doble bacteriana.
brotes, por lo que está indicada en aquellas situa Debido al elevado número de complicaciones
ciones en la que es posible un brote epidémico relacionadas con la vacuna preparada con la sus
como en el caso de inundaciones. pensión de bacilos Bordetella p ertussis muertos,
El esquema de estas vacunas es de dos dosis se han desarrollado vacunas acelulares (DTPa)
con intervalos de 6 a 12 meses, que se adminis que contienen sólo componentes antigénicos,
tran a partir de los 12 meses de vida. Si bien la com o la hemaglutinina filamentosa, la toxina
concentración de anticuerpos disminuye con el pertussis, la pertactina y las fimbrias. Los prepa
tiempo, existen estudios que muestran que los rados comercialmente disponibles incluyen 2, 3
anticuerpos protectores persisten por más de 20 y 4 de estos componentes.
años, por lo que en la actualidad no está indica La vacuna triple acelular combinada para adul
da la revacunación. Debido a las elevadas tasas tos (dTPa) está compuesta por los toxoides difté
de seroconversión en personas inmunocompe- rico y tetánico y dos componentes acelulares de
tentes, no se requiere indicar estudios serológicos B. pertussis (hemaglutinina filamentosa y toxoide
posvacunación. pertussis). Este compuesto ha demostrado su efi
Los efectos adversos incluyen dolor y eritema cacia y seguridad, por lo que puede ser utilizado
en el sitio de aplicación, así como malestar gene en caso de brotes, así como para refuerzos preex-
ral, en particular cefalea. posición. En este sentido, en algunos países se la
o
74 O P rim era parte - Generalidades - Síndrom es clínicos
recomienda como dosis de refuerzo única a par Las reacciones adversas corresponden a cada
tir de la adolescencia. También se está evaluan uno de sus contenidos, con una frecuencia del
do su indicación en embarazadas y en el posparto 5% al 10% y son para el componente antisaram
inmediato. pión, fiebre, exantema, tos y conjuntivitis, y para
el de rubéola, fiebre, exantema y linfadenitis.
VACUNA DOBLE BACTERIANA ADULTOS (dT)
VACUNA ANTl-VARICELOSA
Es una asociación de los toxoides diftérico y
tetánico purificados y adsorbidos en hidróxido o El agente inmunizante es una cepa del virus
fosfato de aluminio. varicela-zoster (cepa OKA), aislada en Japón en
En el caso de los adolescentes que hayan reci el año 1970 y atenuada por el pasaje a través de
bido las 5 dosis de vacuna DPT, debe aplicarse cultivos de tejidos. Se ha establecido que luego
una dosis a los 16 años, y a partir de esta edad, de una dosis de vacuna aplicada a niños entre 1 y
cada 10 años. 12 años, la seroconversión es de aproximadamen
Las embarazadas deben recibir esta vacuna te el 97%, con persistencia de los anticuerpos
como esquema básico a partir del 2® trimestre de durante más de 10 años.
la gestación. No deben vacunarse aquellas em La vacuna liofilizada debe almacenarse con
barazadas que acrediten el esquema completo y gelada a -15°C. El diluyeme se guarda por sepa
el tiempo transcurrido desde entonces sea inferior rado a temperatura ambiente o en heladera entre
a 10 años. Si este intervalo es superior a los 10 los 2°C y 8®C. Una vez que se reconstituye, debe
años deberá administrarse una dosis de refuerzo. aplicarse inmediatamente para evitar la pérdida
La vacunación muestra una eficacia superior de potencia.
al 95%, y alcanza el 100% para la prevención del Debido a la elevada seroconversión en la edad
tétanos neonatal. pediátrica, se aplica una dosis en niños entre 1 y
Los efectos adversos son leves e infrecuentes, 12 años; sin embargo, com o la seroconversión es
y consisten en dolor e induración en el sitio de menor a partir de esta edad, en mayores de 13
aplicación, así como fiebre moderada y malestar años deben administrarse dos dosis con 1 a 2
general. meses de intervalo.
Esta vacuna debe conservarse a una tempera La vacunación está recomendada para todas
tura entre 2®C y 8®C. No debe congelarse porque aquellas personas que residan en áreas de alta pre-
precipita el adyuvante con la consiguiente pérdi valencia. La vacuna es bien tolerada, aunque en
da de potencia. ocasiones pueden presentarse reacciones menores
como fiebre y un exantema papulovesiculoso leve.
Se han descripto casos de varicela en niños va
VACUNA DOBLE VIRAL (S R )
cunados, pero en estas situaciones la enferme
Es una suspensión liofilizada de una combina dad nunca ha sido grave y la cantidad de vesícu
ción de cepas de virus vivos atenuados de saram las presentes ha sido significativamente menor a
pión (cepas Schwartz o Edmonston-Zagreb) y de las que se registran en las formas comunes. Puede
rubéola (cepa Wistar RA27/3). Deben vacunarse indicarse, por su acción de bloqueo, dentro de los
todas las mujeres susceptibles, que no tengan dos 3 días luego del contacto con un caso de varicela,
dosis previas, en el posparto o posaborto inme a fin de evitar la aparición de un brote, particular
diato por única vez, antes del egreso de la mater mente en instituciones cerradas como escuelas.
nidad. Está contraindicada en personas con deterio
La vacuna también está indicada para el con ro franco de la inmunidad. Sin embargo, las últi
trol de foco, por su acción de bloqueo. En este mas recomendaciones indican que puede aplicar
caso debe administrarse antes de los 3 días del se a qu ien es presenten in m u n od eficien cias
contacto. Se aplica en forma subcutánea en la humorales o a los niños con infección por HIV
parte superior del brazo. Esta vacuna debe con con cargas virales muy bajas y un recuento de
servarse a una temperatura entre 2^C y 8®C. linfocitos T CD4+ superior al 25%.
C apítulo 7 - Inmunoprofilaxis □ 75
En algunos países ya se dispone de una vacuna La vacuna puede indicarse a partir de los 6
tetravalente viral (sarampión, rubéola, parotiditis, meses de vida. El esquema es de dos dosis de
varicela) que está indicada para su aplicación en 0,25 mL, con un intervalo de un mes, por vía
niños de 1 a 6 años de edad. intramuscular. Para los adolescentes y adultos se
indica una dosis única de 0,5 mL. Se recomienda
la revacunación anual de acuerdo con la cepa pre
VACUNA ANTl-HERPES ZOSTER
dominante en ese momento.
El herpes zoster es una erupción metamérica do- Esta vacuna está indicada en particular para ios
lorosa que afecta con mayor frecuencia a indivi individuos mayores de 65 años, y para todos aque
duos mayores y a pacientes inmunocomprometidos. llos menores de esta edad que padezcan inmuno-
Es causada por la reactivación del virus varicela- deficiencias y enfermedades respiratorias cróni
zosier. La complicación más frecuente del her cas. Los miembros del equipo de salud deberán
pes zoster es la neuralgia posheipética, a veces ser vacunados en forma anual ya que deben ac
extremadamente dolorosa y que puede persistir tuar como barrera epidemiológica. También debe
durante semanas o meses. El tratamiento inmediato aplicarse a embarazadas en aquellas situaciones
con aciclovir, valaciclovir o famciclovir suele re que así lo requieran, y en particular cuando la fecha
ducir la gravedad y la duración del dolor, si bien probable de parto sea en los meses de invierno.
en algunas oportunidades deben indicarse anal Hay diversas presentaciones comerciales, las
gésicos mayores o antidepresivos tricíclicos. cuales incluyen una jeringa prellenada con una
La vacuna disponible en la actualidad es un dosis de 0,5 mL que debe conservarse entre los
preparado del virus varicela-zoster atenuado, cepa 2®C y 8®C. Las reacciones adversas son habitual-
OKA, similar a la utilizada en las vacunas anti mente leves como dolor y tumefacción en el sitio
varicela. Su potencia es mínima, varias veces in de la aplicación, mialgias, malestar general y fie
ferior a la presente en las vacunas contra la vari bre. Las contraindicaciones incluyen afecciones
cela. Esta vacuna está recomendada para las per respiratorias agudas, antecedentes de reacciones
sonas mayores de 60 años y no tiene contraindi anafilácticas con las dosis previas, cuadros de
caciones. incluso en aquellos pacientes que re hipersensibilidad grave al huevo o a alguno de
fieren haber padecido previamente un herpes sus componentes.
zoster. No es necesaria la revacunación.
Está contraindicada en aquellos pacientes que
VACUNAS ANTI-NEUMOCÓCICAS
presentan afecciones con inmunocompromiso
grave, enfermedades oncohematológicas, sida y Se reconocen en la actualidad aproximadamen
otras inmunodeficiencias. te 84 serotipos de neumococos que se diferen
cian por la antigenicidad de sus polisacáridos
capsulares.
VACUNA ANTI-INFLUENZA
Existen dos tipos de vacunas antineumocócicas:
La gripe es una enfermedad febril aguda que una es la elaborada con polisacáridos capsulares
habitualmente es autolimitada. El tipo A es el res del neumococo y la otra es la conjugada.
ponsable de las grandes epidemias, mientras que La vacuna con polisacáridos, contiene 23 sero
los tipos B y C producen brotes epidémicos más tipos que son responsables de casi el 90% de las
limitados y esporádicos. Los agentes inmunizantes infecciones invasivas producidas por este micro
se preparan a partir de las cepas A o B, de acuerdo organismo.
con las circunstancias epidemiológicas del mo Debe conservarse a una temperatura entre los
mento y del área geográfica. En este sentido, es 2®C y 8®C. Esta vacuna está indicada en niños
habitual que la OMS recomiende a los laborato mayores de 2 años y adultos que estén en riesgo
rios fabricantes la composición de las vacunas, por de padecer afecciones invasivas graves por Strep^
lo que en algunas circunstancias se sugieren ce tococcus pneiim oniae, tales com o cardiopatías
pas diferentes para el hemisferio norte o el hemis congénitas, enfermedades pulmonares crónicas,
ferio sur. fístulas de LCR, anesplenia funcional o anató
76 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
mica, H lV/sída, enfermedades oncohem atoló- b) B ivalente BC. Preparada con proteínas de la
I-.1
gicas, síndrome nefrótico, trasplantes, diabetes e membrana externa del grupo B y polisacáridos
implante coclear. capsulares del grupo C.
Se aplica en dosis única de 0,5 mL por vía c) Polisacárida aníim eningocócica C conjuga-
intramuscular y es recomendable su administra da. Preparada con polisacáridos del grupo C con
ción por lo menos dos semanas antes de situa jugados con la porción proteica del toxoide
ciones de inmunosupresión com o la esplenec- tetánico, absorbida con hidróxido de aluminio. vi
tomía, inicio de la terapéutica amineoplásica o d) Tetravalente A ,C ,Y y W -135. Preparada con 4?-
trasplante. La revacunación está indicada a los 3 polisacáridos de los serotipos mencionados con •VI
años de la primovacunación en el caso de aque jugados con toxoide diftérico.
llos niños que lo fueron antes de los 10 años de Estas vacunas están indicadas en brotes epidé
edad y a los 5 años para mayores de esta edad. micos, y en las regiones endémicas, en aquellos
Para el caso de los mayores de 65 años, deberán individuos con factores de riesgo como anesple-
recibir una dosis de refuerzo a los 5 años. No se nia funcional o anatómica o deficiencias del com
recomienda la revacunación para aquellos indi plemento.
viduos que padezcan afecciones com o enferme El componente A es eficaz a partir de los 6
dad pulmonar obstructiva crónica, cardiopatías, m eses de edad y el C a partir de los 2 años. Para
diabetes, alcoholismo o fístula de LCR. la vacuna BC se comprobó que su efectividad es
Los efectos adversos más comunes incluyen del 74% a partir de los 4 años de edad. La vacuna
dolor y eritema en el sitio de aplicación, y even antim eningocócica C conjugada es segura e
tualmente fiebre. Puede administrarse en forma inmunogénica a partir de los 2 meses de vida,
simultánea con otras vacunas, si son aplicadas con una seroconversión mayor al 98%.
en sitios diferentes. Los esquemas y dosis de estas vacunas son:
La vacuna conjugada, destinada a niños, utili Vacuna AC . Una dosis única, por vía intramus
za la técnica de conjugar antígenos polisacáridos cular, a partir de los 2 años si el brote es por el
con proteínas denominadas transportadoras o grupo C y de los 6 meses si es por el grupo A.
carrier en forma covalente. Este tipo de vacuna Vacuna B C . Deben aplicarse 2 dosis por vía
ha demostrado buena inmunogenicidad y efica intramuscular con un intervalo de 2 meses.
cia protectora para aquellos serotipos incluidos Vacuna C p olisacárida conjugada, En los ni
en la misma, para los lactantes mayores de 2 ños menores de 12 meses se aplicarán 3 dosis con
meses, particularmente para las enfermedades intervalos no menores de un mes a partir de los 2
invasivas como neumonía, meningitis y bacterie- meses; en niños mayores de 12 meses, adolescen
mia. La vacuna conjugada heptavalente incluye tes y adultos, se administrará una dosis única.
los serotipos 4, 6B, 9V, 14, 18C, 19F, 23F que Los efectos adversos incluyen eritema y dolor
están conjugados con 20 pg de CRM^^. El es en el lugar de la inyección, fiebre y decaimiento.
quema de vacunación es a los 2 ,4 y 6 meses, con En el caso de la vacuna BC se han observado, si
i
un refuerzo entre los 15 y 18 meses de edad. bien en forma muy infrecuente, hipotonía o
hiporrespuesta y síndrome purpúrico con o sin
poliartritis.
VACUNAS ANTÍ-MENINGOCÓCICAS
Vacuna tetravalente A ,C ,Y y W-135: fue apro
Existen vacunas con diferentes combinaciones bada en EE.UU. para su administración a partir
de cepas de N eisseria m eningitidis. Este micro de los 11 años y en Canadá a partir de los 2 años.
organismo puede desencadenar bacteriemias y Esta vacuna demostró una buena respuesta de los
meningitis, particularmente en niños, y en los me títulos de anticuerpos luego de la primera dosis,
ses fríos, aunque en ocasiones pueden desenca si bien existen diferencias relacionadas con las
denar brotes epidémicos. edades de los vacunados. Las recomendaciones
Las vacunas disponibles son: actuales para los niños mayores de 2 años inclu
a) Bivalente AC . Compuesta por los polisacá yen a aquellos residentes en países en los cuales
ridos capsulares de los grupos A y C, la enfermedad meningocócica es hiperendémica,
C apítulo 7 - Inmunoprofiiaxis O 77
ios que padecen inmunodeficiencias y ios que ce o no hay certeza sobre su estado, frente a toda
presenten anesplenia anatómica o funcional. mordedura por especies silvestres y personal de la
No se comunicaron efectos adversos significa boratorio accidentado con material contaminado.
tivos, por lo que se deberá evaluar la convenien Cuando se utiliza la vacuna de células Vero,
cia de su aplicación de acuerdo con la situación las dosis deben administrarse los días 0 , 3 ,7 ,1 4 ,
epidemiológica de cada región geográfica en par 28 y un refuerzo optativo a los 90 días. En los
ticular. casos de exposiciones graves las dosis se aplica
Las contraindicaciones para estas vacunas son: rán los días O, 3, 7, 14 y 28. Inmediatamente an
hipersensibilidad a alguno de los componentes, tes de la primera dosis de vacuna se aplicará por
procesos febriles agudos y, para el caso de la va única vez, en otro sitio, gammaglobulina hipe-
cuna BC, convulsiones o afecciones purpúricas. rinmune. También se recomienda toda vez que
En las poblaciones en que persistan las situa sea posible, administrar la mitad de la dosis por
ciones que justificaron el esquema inicial, se debe infiltración alrededor de la herida y el resto en
revacunar con las vacunas adecuadas. forma intramuscular, de preferencia en la región
glútea.
Si se utiliza la vacuna de tejido nervioso, fren
VACUNA ANTI-RÁBICA
te a exposiciones leves el esquema es de l dosis
La rabia es una enfermedad viral del sistema diaria durante 7 días y 3 refuerzos los días 10,20
nervioso central que puede afectar a cualquier y 30 o 60. En las exposiciones graves se agrega
mamífero. El reservorio es animal, el que trans la gammaglobulina antirrábica en la forma ya
mite la afección a través de las mordeduras o la señalada. En los casos de interrupción del esque
midas sobre las mucosas o heridas. Las vacunas ma antes de la 5* dosis, se debe reiniciar el m is
antirrábicas de uso humano son inactivadas. Se mo desde la primera dosis.
emplean 2 tipos de vacunas: La vacuna de células Vero se administra por
a) Vacuna producida en células Vero, que es vía intramuscular, mientras que la de tejido ner
una suspensión estabilizada y liofilizada de la vioso se aplica por vía subcutánea, ambas en la
cepa Wistar, Pitman-Moore, y que se mantiene región deltoidea.
estable durante 5 años a una temperatura de 2^C En aquellas situaciones en que se produzcan
a 8®C y durante 3 años a 37®C, por lo que mues nuevos accidentes dentro del año de finalizado el
tra ser muy útil para aquellas provincias con tem tratamiento previo, es recomendable realizar un
peraturas elevadas. estudio serológico o aplicar una dosis de refuerzo.
b) Vacuna de tejido nervioso, que utiliza el ce Con respecto a la inmunogenicidad, cuando se
rebro de ratón lactante de un día de vida. Esta aplica la vacuna de células Vero, a los 7 días ya
vacuna es trivalente y contiene 3 cepas de virus se detectan anticuerpos, y se alcanza el 100% de
rábico. Una de las cepas fue aislada originalmente seroconversión a las dos semanas. En el caso de
por Pasteur mientras que las otras dos lo fueron la vacuna de tejido nervioso, los anticuerpos apa
por Fuenzalida de un perro y un humano con ra recen a los 10 días de su administración, pero
bia. Ésta, debe mantenerse refrigerada entre los recién se llega al nivel de seroconversión com
2°C y 8°C. pleta después de la 5* dosis.
La profilaxis preexposición está destinada a Los efectos adversos suelen ser poco impor
aquellas personas con un riesgo elevado para tantes con la vacuna de células Vero. En cambio,
contraer la enfermedad, particularmente trabaja con la vacuna de tejido nervioso existe el riesgo,
dores de laboratorio que manipulan el virus, ve debido a la presencia de mielina, de estimular la
terinarios, cuidadores de animales, trabajadores formación de anticuerpos antimiclina que pue
de áreas rurales con contacto eventual con ani dan desencadenar enfermedades graves. Estas
males silvestres y viajeros de turismo de aventu reacciones solían presentarse luego de la 10* do
ra a regiones endemo-epidémicas. sis. En la actualidad existen procedimientos de
La profilaxis posexposición debe indicarse en purificación para eliminar los restos de mielina
exposiciones leves o graves si el animal desapare de la vacuna (ver también el capítulo Rabia).
■m
78 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
'f
Actualmente existen dos vacunas: la vacuna medidas eficientes de prevención. En este senti
monovalente G1 P l(8 ) humana y la humana-bo- do, ya desde principios del siglo XX el esfuerzo
vina pentavalente (G l, G2, G3. G4 y P l(8). Am se dirigió a la investigación de vacunas eficaces
bas son vacunas a virus atenuados, deben conser tanto para los animales como para el ser huma
varse entre los 2®C y 8®C y se administran por la no. A partir de un brote epidémico que se produ
vía oral, a partir de las 6 semanas de vida. El jo en Cuba en 1980, se estableció un programa
esquema de vacunación para la vacuna mono nacional de control que se puso en vigencia a
valente es de dos dosis con un intervalo de 2 me partir del año siguiente. A tal efecto, a partir de
ses, mientras que para la vacuna multivalente hu- 1994 se inició la investigación de una vacuna
mana-bovina es de tres dosis con intervalos de 4 a inactivada que incluyó los serovares conicola,
10 semanas. Es recomendable que el esquema sea copenhagi y m odzok con un gel de hidróxido de
completado no más allá de los 6 meses de vida y aluminio como adyuvante.
sin intercambio de las marcas comerciales. La efi La vacuna resultó ser segura para el control de
cacia de ambas vacunas es superior al 85% y llega la enfermedad, con una buena seroconversión, si
a evitar el 100% de casos graves, con una dismi bien algo inferior a la observada con otras cepas.
nución general de las internaciones por diaiTea. En la actualidad se lleva a cabo un plan piloto de
Estas vacunas están contraindicadas en casos vacunación en la Argentina, provincia de Entre Ríos
de inmunodeficiencia, así como en lactantes con a fm de evaluar su inmunogenicidad y eficacia.
alteraciones gastrointestinales. Hasta el momen
to no se comunicó su asociación con invaginación
VACUNA ANTl-HPV
intestinal, como tampoco evidencias de mutación
a cepas virulentas. Pueden administrarse en for La infección por el papilomavirus humano (HPV)
ma conjunta con otras vacunas, incluso con la representa una de las principales causas de enfer
antipoliomielítica oral, ya que se demostró que medades de transmisión sexual (ETS). Si bien en la
no se producen cambios en los títulos de anticuer mayoría de los casos la afección es asintomática y
pos alcanzados. autoUmitada, la infección persistente por serotipos
oncogénicos puede evolucionar hacia el carcinoma
del cuello uterino. Algunos serotipos de HPV tam
VACUNA ANTI-FIEBRE HEMORRÁGICA
bién son responsables de verrugas genitales y de
ARGENTINA
neoplasias anogenitales. El método de Papani-
La fiebre hemonágica argentina es una enfer colaou es de suma utilidad para la detección de las
medad viral aguda cuyo agente etiológico es el lesiones precancerosas. Sin embargo, no siempre
vims Junín. La vacuna está elaborada con el virus se practica, por lo que este tipo de neoplasias está
Junín atenuado, cepa Candid#l, cultivado en cé ampliamente difundido, especialmente en las cla
lulas diploides de pulmón fetal de mono Rhesus. ses socioeconómicas más vulnerables.
La misma demostró ser segura e inmunogénica Existen dos tipos de vacunas para el HPV:
y tiene una eficacia superior al 95%. La apari tetravalente (serotipos 6-11-16-18) y bivalente
ción de anticuerpos suele producirse a partir de (16-18). Los serotipos 16 y 18 son los responsa
los 15 días luego de la vacunación. Su aplicación bles de aproximadamente el 70% de las displasias
está destinada a una población limitada. Está in de alto grado y de la mayoría de las lesiones
dicada para las personas entre los 15 y 65 años escamosas de alto grado. Ambas vacunas deben
de edad que sean residentes, trabajen o visiten administrarse con un esquema de 3 dosis en in
las áreas endém icas. D ebe aplicarse por vía tervalos de l a 2 meses entre cada dosis. Si bien
intramuscular en dosis única de 0,5 mL. todavía está en discusión la edad ideal para la
vacunación, se considera que la misma debe in
dicarse antes del inicio de las relaciones sexua
VACUNA ANTI-LEPTOSPIROSIS
les, por lo que puede ser variable cuando se con
La leptospirosis planteó desde hace muchos sideran distintas poblaciones. En los países que
años un verdadero desafío para el desarrollo de adoptaron estas vacunas, se determinó que sean
80 □ Prim era paríe - Generalidades - Síndromes clínicos
aplicadas entre los 10 y los 12 años. La vía de parotiditis), en l a 2 dosis según corresponda,
administración es IM. Los efectos adversos son deberá ser indicada a todo el personal de salud
en general leves y se asocian con dolor en el sitio susceptible. En este sentido es importante tener
de la administración. Debe tenerse en cuenta que en cuenta que se consideran inmunes a todos los
la vacunación no sustituye el examen rutinario adultos que hayan recibido 2 dosis de triple viral
para la detección del cáncer cervical. o 1 dosis de triple viral más l dosis de doble viral,
los que tengan inmunidad docum entada por
serología y los adultos mayores de 45 años.
VACUNAS PARA EL PERSONAL DESALUD
La vacuna antivaricelosa está indicada con un
La vacunación del personal de salud tiene por esquema de 2 dosis con un mes de intervalo en
objetivo provocar la protección individual de e s aquellos miembros del personal de salud que sean
tos trabajadores y evitar que los mismos puedan susceptibles. En aquellas situaciones dudosas y
eventualmente contagiar a los pacientes. Todos cuando no existe la posibilidad de efectuar la
los miembros del equipo de salud deben estar serología se debe indicar la vacuna.
protegidos con todas las vacunas obligatorias,
además de mantener permanentemente las nor
SUERO S Y GAMMAGLOBULINAS
mas de bioseguridad. Deben tener completo el
esquema de la vacuna doble de adultos (dT), se La inmunización pasiva se suele lograr me
aplicarán 3 dosis (O, 1 y 6 meses) o recibir los diante la administración de sueros hiperinmunes.
refuerzos cada 10 años en el caso de haber sido Habitualmente los anticuerpos se administran en
inmunizados durante la infancia. Actualmente se forma de sueros com pletos o luego del fraccio
recomienda que todos los adultos, incluido el namiento de los m ism os, y se pueden obtener
personal de salud, reciban una dosis de refuerzo tanto de seres humanos com o de animales.
de la vacuna triple acelular para adultos (dTPa). El principal objetivo de la inmunización pasi
La vacuna para la hepatitis B es obligatoria para va es el de brindar protección inmediata, parti
todos los miembros del equipo de salud (ley N® cularmente la neutralización de toxinas o vene
24.141). Se aplican tres dosis (0-1-6 meses). Es nos, así como para modificar el curso clínico de
efectiva y segura y tiene una eficacia superior al determinadas infecciones ya establecidas.
95%. Aproximadamente uno o dos meses luego Las principales diferencias que existen entre
de finalizado el esquem a debe realizarse la la inmunización activa y la inmunización pasiva
cuantifícación de los anticuerpos anti-HBs para se relacionan con la inmediata protección que
determinar la respuesta, la que se considera pro brindan las inmunoglobulinas, así como del tiem
tectora con títulos superiores a 10 mUI/mL. En po relativamente breve de la misma. Esto se debe
el caso de ausencia de respuesta se debe revacunar a que en condiciones fisiológicas, la vida media
con tres dosis. Si nuevamente hay ausencia de de las inmunoglobulinas es de aproximadamente
respuesta, se lo considera no respondedor y ante 3 semanas. Por otra parte, tampoco inducen me
un contacto con un fluido contaminado deberá moria inmunitaria, lo que explica que a medida
recibir gammaglobulina específica. que se produce su catabolismo, el individuo vuel
Si bien las normas nacionales no establecen la ve a quedar susceptible. Al administrarse sueros
indicación rutinaria de la vacuna para la hepati de origen animal puede desencadenarse una res
tis A, la misma debería administrarse a todos los puesta de hipersensibilidad que se manifiesta por
miembros del equipo de salud con serología anti- episodios de alergia. Prácticamente todas las
HAV negativa. inmunoglobulinas son del tipo IgG, y reflejan los
La vacuna antigripal tiene como finalidad redu antecedentes de las enfermedades padecidas y las
cir la posibilidad de transmisión de la enfermedad vacunaciones previas de los donantes.
a aquellos pacientes que tienen mayor riesgo de Es importante tener presente que cuando se
padecer complicaciones. La misma deberá apli administran inmunoglobulinas se deberá esperar
carse en forma anual durante los meses de otoño. un tiempo que habitualmente no es inferior a los
La vacuna triple viral (sarampión, rubéola. 3 meses, para la aplicación de vacunas, particu-
C apítulo 7 • Inmunoprofilaxis □ 81
larmcnte las compuestas por virus atenuados. ción correcta y que presenten heridas potencial-
Existen inm unoglobulinas polivalentes, así mente tetanígenas y aun para el tratamiento del
como IgM híperinmunes contra el tétanos, hepa tétanos.
titis B, rabia y Rh. También se dispone de sueros Las de administración IV también pueden di
de origen animal para la rabia, difteria, botulis- vidirse en:
mo y contra algunos venenos de ofidios y ara • Polivalentes, indicadas para inmunodeficien-
ñas. Existen además inmunoglobulinas intrave cias primarias, secundarias y afecciones inmu-
nosas contra el citomegalovirus, varicela-zoster, nitarias, tales como la enfermedad de Kawasaki
virus sincitial respiratorio y hepatitis B. Además, y la púrpura trombocitopénica inmune. Su efica
el advenimiento de las inmunoglobulinas intra cia es probable en el síndrome de Guillain-Barré
venosas, las que dem ostraron propiedades y el síndrome del shock tóxico estafilocócico.
inmunon-eguladoras, ha posibilitado su indicación • Hiperinmunes o específicas, que incluyen:
en ciertas enfermedades autoinmunes. a) Inmunoglobulina intravenosa anticitome-
Las inmunoglobulinas pueden clasificarse para galovirus, indicada para la prevención de las in
su uso terapéutico de acuerdo con su vía de ad fecciones luego de trasplantes y en pacientes in
ministración IM o IV. fectados con enfermedad aguda.
Las de administración IM pueden ser: b) Inmunoglobulina antivaricela-zoster, que se
• Polivalentes o inespecíficas; éstas contienen indica para la profilaxis en individuos que puedan
aniicueipos específicos en relación con los ante padecer formas graves de la enfermedad, especial
cedentes infecciosos o de inmunizaciones previas mente recién nacidos e inmunocomprometidos.
de los donantes. Se utilizan en determinadas si c) Inmunoglobulina antivirus sincitial respira
tuaciones clínicas particulares, como la profilaxis torio, que se administra para la profilaxis de in
para el sarampión y la hepatitis A. Para que sean fecciones graves en lactantes en riesgo. Debe in
eficaces, estas sustancias deben administrarse dicarse en dosis de 750 mg/kg en forma mensual
antes de los 15 días partir de la fecha de contac durante los 5 meses de la estación invernal. Tam
to. Las últimas recomendaciones indican que para bién se encuentra d isp o n ib le en form a de
la profilaxis del sarampión y de la hepatitis A anticuerpos monoclonales (Palivizumab que
deben aplicarse las vacunas respectivas dentro los puede administrarse a los niños menores de 2 años
primeros días luego del contacto. con enfermedad pulmonar crónica y los recién
♦ Inmunoglobulinas hiperinmunes o esp»ecíficas, nacidos de menos de 32 semanas de gestación,
en las que se selecciona un grupo de donantes frente durante los meses de invierno.
a antígenos concretos, que se adquirieron en fonma d) Inmunoglobulina intravenosa antihepatitis B,
natural o mediante vacunaciones. La inmunoglo- cuyo uso está indicado para la prevención de la
bulina antihepatitis B logra anticuerpos anti-HBs reinfección por el virus en individuos sometidos
durante aproximadamente 60 días. Está indicada a trasplantes hepáticos.
para la profilaxis posexposición, así como en re Las inmunoglobulinas homólogas están indi
cién nacidos de madres HBsAg positivas. cadas tanto para la profilaxis pasiva, como la
La inmunoglobulina antirrábica se indica a in antitetánica, antihepatitis B, antirrábica, así como
dividuos expuestos que no han sido vacunados, para el tratamiento de enfermedades como el té
asociada con la profilaxis activa que se aplicará tanos y la fiebre hemorrágica argentina. En este
en otro sitio. último caso se utiliza el plasma inmune obtenido
La inmunoglobulina antitetánica se indica para de pacientes que curaron de esta enfermedad (ver
aquellos individuos sin antecedentes de vacuna el capítulo Fiebre hemorrágica argentina).
Bibliografía ---------------- -
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82 O P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
C uad ro 8-1. Definiciones de! comité de consenso de! American College of Chest Physician y la Societyof
Critica! Care Medicine (ACCP/SCCM).
Se entiende como tal a la respuesta inflamatoria sistémica desencadenada ante una variedad de situaciones clínicas
graves, de etiología infecciosa o no, que se define por la presencia de 2 o más de las siguientes condiciones:
Temperatura mayor de 38^ C o menor de 36^ C
FrecueiKia cardiaca de más de 90 latidos/minuto.
Frecuencia respiratoria mayor a 20 respiraciones/minuto o PaC02 menor de 32 mm Hg.
Recuento de leucocitos m avor dp 12 000/mm ^ n m onnr río á n n n /m m i r\ la nroconrii, Ha mác ria! Í/JO/.
r
Es la persistencia de hipotensión inducida por la sepsis, a pesar del tratamiento adecuado, y asociada con
hipoperfusión periférica Oos pacientes que reciben fármacos inotrópicos o vasopresores pueden no estar hipotensos
en el momento en que se objetiva el déficit de perfusión).
consecuencias, el conocim iento de las even Los abscesos obstruidos en forma intermitente,
tualidades señaladas hace aconsejable la instau com o en las vías urinarias o biliares, también
ración de tratamiento profiláctico con antimi pueden ser causa de bacteriemia intermitente. La
crobianos inmediatamente antes y 24 a 48 horas elevación de la temperatura y el escalofrío son
después del procedimiento que puede generarla. característicos de esta entidad.
La bactcriem ia interm itente es el pasaje recu La bacteriem ia continua se caracteriza porque
rrente de bacterias a la sangre, debido a lo cual todos los hemocultivos son positivos. Las infec
los hemocuUivos seriados son positivos en for ciones intravasculares, como la endocarditis bac
ma intermitente. Es una característica de los abs teriana, la tromboflebitis séptica y la endarieritis
cesos y de algunas infecciones, como la bruce- infecciosa son causas frecuentes. Ciertas infec
losis. En los abscesos perirrectales o prostáticos ciones, com o la fiebre tifoidea, la brucelosis, el
puede producirse bacteriemia después del tacto carbunco y otras, también pueden producirla. Por
rectal o ia defecación. Los pacientes con absce lo tanto, el concepto de bacteriemia continua pue
sos perirrenales pueden tenerla tras la palpación de superponerse a la denominación de septice
de la zona o el traumatismo del flanco afectado. mia.
V
i
C apítulo 8 - Sepsis □ 85
i
diveiticulitis {E. coli y otras enterobacterias). (
e t io l o g ía
Algunos datos epidem iológicos, como el tra
(
C om o ya se m en cion ó, la sep sis s e d efin e com o bajo rural o el consumo de lácteos no industria
la p r e s e n c ia d e una r e sp u e s ta in fla m a to r ia lizados, harán pensar en Brucella como agente (
sistém ica asociad a con una e tio lo g ía in fe c c io sa , etiológico; el antecedente de haber residido en
sea ésta bacteriana, parasitaria, viral o m icótica. áreas endémicas de estrongiloidosis (sobre todo i
Por la frecuencia con que este cuadro se pro en pacientes inmunodeprimidos o con corticote-
duce en los pacientes hospitalizados, la sepsis se rapia prolongada) obliga a descartar enfermedad i
considera fundamentalmente un problema noso diseminada por S. stercoralis y, en consecuen
t
comial y, sobre todo, de los pacientes en estado cia, bacteriemia por E. coli. El trabajo rural en el
crítico (unidades de terapia intensiva, unidades nordeste argentino o en regiones determinadas de l
de neonatología, servicios de quemados, pacien Paraguay, Brasil, Venezuela y Colombia puede
tes que cursan posoperatorios prolongados, etc.). inducir la sospecha de enfermedad diseminada i
Sin embargo, el cuadro no se limita a esta pobla por P. hrasiliensis, mientras que ciertas tareas
ción restringida, sino que también se presenta en rurales o recreativas la generarán sobre fiebre
i
el medio extrahospitalario, donde existen infini
dad de situaciones que generan la aparición de
hemorrágica argentina, enfennedad por hanta- i
virus, leptospirosis y otras infecciones.
sepsis en la comunidad. Por consiguiente, para Sin embargo, es el resultado del laboratorio el (
establecer la etiología de la sepsis se requiere de único dato que permite establecer la etiología
análisis bacteriológicos y clínico-epidem iológi- definitiva en los casos de sepsis, sea por técnicas (
cos exhaustivos. serológicas o, preferentemente, mediante el ais
<
En los pacientes hospitalizados, los proce lamiento microbiológico. El hemocultivo es fun
dimientos invasivos (asistencia respiratoria me damental para el diagnóstico, cuya realización c
cánica, catéteres venosos centrales, catéteres arte sistemática en pacientes en los que se sospecha
riales, sondeo vesical, procedimientos quirúr infección da como resultado alrededor de un 15% i
gicos) obliga a considerar los gérmenes intra- de resultados positivos. El 50% de los hemocul-
hospitalarios (5. aureus, P. aeruginosa, Acineío- tivos positivos clínicamente valorables, obteni i
hacter sp, enterobacterias, E nterococcus sp) y dos en un hospital general, corresponden a pa
i
la sensibilidad a los antim icrobianos de los cientes que adquirieron la infección en la comu
microorganismos aislados en los distintos centros
de internación: S. aureus resistente a la meticilina,
nidad. c
bacilos gramnegativos no fermentadores con sen
EPIDEMIOLOGÍA
c
sibilidad restringida a pocos antibióticos, ente
robacterias productoras de betalactamasas de es Los estudios epidemiológicos permitieron esta c
pectro amplio y Enterococcus sp resistente a la blecer factores de riesgo asociados con el desa (
vancomicina. rrollo de SRIS, que se resumen en el cuadro 8-2.
La existencia de detenninados factores de ries Se logró reconocer así que la probabilidad de (
go (catéteres venosos, reemplazos valvulares, pro que un paciente desarrolle disfunción de órganos
cedimientos de cirugía abdominal) también obli o muerte crece con el estadio evolutivo y con el (
ga a considerar la presencia de Candida sp y, en el número de criterios de SRIS que reúne.
caso de procedimientos invasivos cardiovascu Por lo tanto, el reconocimiento temprano del
i
lares, de Staphylococcus coagulasa negativos. SRIS es de importancia vital para adoptar con (
En la sepsis de la comunidad deben tenerse en ductas terapéuticas adecuadas y precoces.
cuenta, como factores de riesgo, la adicción a dro í
gas de uso intravenoso (5. aureus, Candida sp), la
PATOGENIA
enfermedad por HIV (M. tuberculosis, complejo
M kl.Salm onella sp, C. neoformans, S. stercoralis,
H. capsulatum) y la existencia de antecedentes de
La sepsis se caracteriza por la respuesta des
medida del huésped ante la presencia de microor
t
infecciones urinarias, biliares, apendicitis y ganismos. «
>(
((
86 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
Esta presencia determina la liberación de pro sucede, se produce el síndrome de respuesta infla
ductos microbianos, que al actuar sobre las célu matoria sistémica.
las del organismo (m acrófagos, polimorfonu- A nivel molecular los productos bacterianos in-
cleares y linfocitos) favorecen la liberación de teractúan con las células del sistema inmune, con lo
citocinas. Éstas regulan la respuesta inflamatoria que generan su activación y el incremento ulterior
a nivel vascular y central, por lo que provocan de la síntesis de citocinas. Su interacción con re
fiebre, vasodilatación periférica, redistribución ceptores específicos a nivel de los vasos determina
circulatoria y activación del sistema inmune. la relajación del músculo liso vascular, con aumen
Entre los microorganismos capaces de provo to de la capacitancia del lecho distal e hipotensión.
car esta respuesta inflamatoria sistémica, las bac En respuesta a estos cambios se secretan ami
terias son los más comunes, aunque también hon nas vasoactivas, que al aumentar la frecuencia
gos, micobacterias, parásitos y virus pueden des cardíaca y el volumen sistólico completan el cua
encadenar el síndrome de respuesta inflamatoria dro hemodinámico de la sepsis, caracterizado por
sistémica. la presencia de resistencias vasculares periféricas
Entre los productos bacterianos que determi disminuidas con volumen minuto cardíaco alto.
nan la evolución de la infección hacia la sepsis y Si el proceso avanza, los mecanismos compensa
a su expresión más grave, el shock séptico, se torios se toman insuficientes, aparece hipotensión
encuentran el lipopolisacárido de la pared de las arterial con hipoperfusión tisular, generación de
bacterias gramnegativas y la exotoxina del shock ácido láctico por metabolismo anaerobio y falla
tóxico de los estreptococos y estafilococos. orgánica. Esta última se manifiesta por oliguria,
La secuencia de activación del sistema inmune encefalopatía, alteraciones del hepatograma y tras
es compleja.y todavía no se conoce por com ple tornos de la coagulación. Por último, la suma de
to. La estimulación de los macrófagos residentes estas fallas individuales constituye el síndrome de
en el tejido conectivo es responsable, en princi falla multiorgánica.
pio, de comenzar la cascada de la inflamación Las alteraciones hemodinámicas se expresan
que se encarga de delimitar el proceso infeccio con taquicardia e hipotensión; el volumen minu
so. Estas células liberan citocinas -interleucina to cardíaco suele ser alto, com o en un intento de
1 (IL -1), interleucina 6 (IL-6) y factor de necrosis mantener la perfusión tisular con resistencias
tumoral (TNF)~, metabolitos del ácido araqui- vasculares periféricas muy disminuidas. La pre-
dónico y radicales libres del oxígeno, que al ac carga del ventrículo izquierdo en general es baja,
tuar sobre el endotelio vascular y los polimor- com o expresión de la redistribución del espacio
fonucleares circulantes favorecen la adhesión de intravascular a expensas de la vasoplejía y el au
éstos a la pared de los vasos sanguíneos y la pos mento de la permeabilidad capilar.
terior migración al tejido conectivo. Normalmen En algunos individuos las toxinas bacterianas
te esta respuesta es limitada, beneficiosa para el y las propias cito cin a s producen depresión
huésped y no se generaliza; pero si esto último miocárdica, con bajo volumen sistólico y precar-
C apitulo 8 - Sepsis Q 87
oa ventrícular alta. En general son ancianos o da del gasto cardíaco. También suele haber fenó
pacientes con enfermedades concurrentes. Este menos trombóticos o hemorrágicos .secundarios
es un hallazgo de pésimo pronóstico. a coagulación intrávascular diseminada.
La sepsis es un proceso generalizado, que en El cuadro clínico de la sepsis puede ser suma
mayor o menor medida puede afectar todos los mente polimorfo, en función del fenómeno que
órganos. le dio origen. En consecuencia, las m anifes
Las lesiones anatómicas pueden ser primarias taciones iniciales dependerán en muchos casos
o secundarias. Como lesiones primarias se en del órgano blanco primario, pero en muchos otros
tienden las que dan origen al proceso séptico; por (pacientes añosos o en asistencia respiratoria me
ejemplo, infiltrados pulmonares constituidos cánica, en coma, posquirúrgicos, etc.) los signos
por neutrófílos, con exudación y bacterias en la clínicos pueden ser mucho más sutiles; es necesa
neumonía o colecciones purulentas, como en ios rio el monitoreo periódico en busca de SRIS y
abscesos o las metástasis infecciosas a distancia. disfunción orgánica, lo cual posibilitará contar con
De estas lesiones en general puede recuperarse un diagnóstico precoz y tratamiento inmediato.
el agente causal. Las lesiones secundarias son Al inicio los pacientes tienen alguno de los
producidas por mecanismos desencadenados por parámetros que definen h. respuesta inflamatoria
el proceso séptico y mediados por la acción inmu- sistémica. Es común la presentación con fiebre y
nitaria, con com prom iso endotelial marcado. escalofríos, que suele anunciar la existencia de
También pueden depender de alteraciones hemo- bacteriemia.
dinámicas por hipoperfusión o ser secundarias a Con independencia del sitio de origen, la evo
coagulación intravascular diseminada. lución hacia la hipotensión y, por último, al shock
En el pulmón estas lesiones se manifiestan refractario es la regla en los casos en los que no
como exudados proteináceos con infiltración se instituye el tratamiento adecuado.
polimorfonuclear en parches y proliferación in Son frecuentes los trastornos de la conciencia
tersticial, lo que en clínica se traduce como le (desorientación, excitación o estupor) más co
sión pulmonar con déficit de la hematosis, que munes en los pacientes añosos.
puede ser tan grave como para llevar al distrés La piel está fría y con livideces que evidencian
respiratorio del adulto. la hipoperfusión tisular. El aumento de la permea
El tubo digestivo es asiento frecuente de lesio bilidad capilar favorece la aparición de edemas
nes, entre las cuales las más comunes son gastri generalizados.
tis hemorrágica, úlceras por estrés y la atrofia La aparición en la piel de petequias y manchas
vellositaria. equimóticas revela los trastornos de la coagu
En el hígado se observa esteatosis, que de lación. Sea el aparato respiratorio el origen del
acuerdo con la gravedad del proceso es de mayor cuadro séptico o no, se mostrará como órgano de
o menor cuantía, la que en estadios avanzados choque, con distintos grados de daño pulmonar
puede determinar la falla orgánica. secundario. Éste puede llevar al síndrome de
En la piel, al igual que en los otros órganos, se distrés respiratorio agudo del adulto, con la conse
observa daño endotelial que determina lesiones cuente falla respiratoria e hipoxemia, y necesi
isquémicas, con alteraciones de la microvas- dad frecuente de asistencia respiratoria mecáni
culatura. ca.
El compromiso del riñón en principio es rever Los cambios fisiopatológicos y hemodinámicos
sible y secundario a los cambios hemodinámicos descriptos, se evidencian por la aparición de fa
profundos. Cuando éstos persisten, se constituye lla hemodinámica, con taquicardia, tendencia a
la necrosis tubular aguda. la hipotensión, y caída de la presión capilar pul
En estadios finales el compromiso isquémico monar y de la resistencia periférica. Al inicio este
del miocardio se traduce clínicamente com o caí estado se puede corregir con fármacos inotrópicos
88 □ Prim era parte - Generalidades • Síndromes clínicos
igifoMgPnW
<í
i
90 O Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
forma efectuar el diagnóstico temprano de SRIS ejemplo, grandes quemados, pancreatitis aguda,
y disfunción orgánica. embolia pulmonar, síndrome de distrés respira
Diagnosticado el SRIS, es necesario estable torio agudo de! adulto de causa no infecciosa,
cer si se debe a una noxa microbiana o no, para politraumatismos y otras. Muchas de las entida
lo cual los datos clínicos y epidem iológicos son des mencionadas son clínicamente indistinguibles
de importancia vital. de la sepsis, por lo que la sospecha clínica tem
El diagnóstico de sepsis sólo podrá formularse prana y la toma de cultivos adecuados es funda
con la demostración del agente etiológico que mental para el diagnóstico.
desencadena el síndrome. En algunos casos se recomienda el seguimien
Para efectuar el diagnóstico microbiológico de to con cultivos de control (de biopsias de piel en
ben tomarse las muestras correctas de acuerdo grandes quemados, hemocultivos en pancreatitis
con la presunción clínica. Se realizarán hemocul- aguda, etc.).
livos y urocultivos, y ulteriormente cultivos de
todos los materiales sospechosos: líquido cefa
TRATAMIENTO
lorraquídeo si se sospechara meningitis, material
de piel si se observaran lesiones sugestivas de El tratamiento antimicrobiano dependerá de la
algún proceso específico, materia fecal en casos etiología sospechada. En los casos de sepsis
de presunción de enfermedades gastrointestinales intrahospitalaria (cuadro 8-3) el esquema pres-
invasoras y muestras provenientes del aparato cripto deberá contemplar la flora de la instiiu-
respiratorio (esputo o material obtenido por fibro- ción (habitualmente bacilos gramnegativos y S.
broncoscopia) si se sospechara neumonía. aureus resistentes a la meticilina).
Siempre deben buscarse colecciones que pue La sepsis poscirugía abdominal se trata en for
dan drenarse y cultivar ese material. ma empírica, pero hay que tener en cuenta que
En cuanto a los hemocultivos, se realizarán por E n tero co ccu s y C andida sp son los posibles
lo menos tres y un máximo de seis, para gérme microorganismos de selección si hubo antibio-
nes aerobios y anaerobios. En medios líquidos ticoterapia previa.
adecuados se siembra 1 mL de sangre por cada Siempre deben buscarse colecciones purulentas
10 mL de caldo de cultivo. Las muestras deben y, en caso de que existan, hay que proceder a su
obtenerse de distintas venas en procedimientos drenaje.
separados por algún intervalo de tiempo, de acuer En los cuadros de sepsis extrahospitalaria la
do con la gravedad o la urgencia del caso. Si no confección correcta de la historia clínica permi
es posible obtener sangre venosa, se recurrirá a tirá iniciar una terapéutica empírica adecuada
la sangre arterial. También es posible hacer cul (cuadro 8-4).
tivos de médula ósea por punción de la espina Como norma general, todos los esquemas de
ih'aca posterosuperior. antimicrobianos se adecuarán al resultado de los
Se tendrán en cuenta como causa de este síndro
me, además de las bacterias, hongos, parásitos y
virus. Para investigar estas etiologías se recurri
rá a las técnicas adecuadas según la sospecha clí Cuadro 8-5. Tratamiento antimicrobiano empírico
nica. inicial de acuerdo con el foco, la situación epidemio-
En todos los casos el diagnóstico etiológico es lógica y la etiología posible.
de una importancia fundamental, dado que per 1. Los esquemas antibióticos sugeridos se deben adecuar
mite efectuar una terapéutica dirigida y hacer un a las características epidemiológicas de la flora
pronóstico cieno. de la institución.
2. El tratamiento iniciado en forma empírica se modifica
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL para adecuarlo a los aislamientos obtenidos.
El diagnóstico diferencial de la sepsis debe in 3. Al comienzo del tratamiento la vía de administración
cluir todas las causas de SRIS no infecciosas; por debe ser Intravenosa.
92 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
V*
I
94 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
Los pacientes neuiropénicos (sea por procesos sonal médico y paramédico, antes y después del
malignos, quimioterapia oncológica o trasplante contacto con cualquier paciente. Su costo es bajo
de médula ósea) son más susceptibles a las infec y en distintos estudios epidem iológicos se ha
ciones por bacilos gramnegativos (cuadro 8-6); demostrado que es una medida altamente efec
en ellos el episodio febril es una urgencia in- tiva, aunque de muy difícil aceptación por parle
fectológica en la que debe instituirse con rapi del personal de la salud.
dez un esquema empírico, debido a la elevada De acuerdo con las características de los pa
mortalidad asociada con cada uno de estos epi cientes tratados, pueden indicarse medidas de
sodios. aislamiento. Con aquellos en quienes se sospe
En los enfermos alcohólicos y los sometidos a chan enfermedades transmisibles por la vía aé
diálisis en forma crónica hay un déficit en la mi rea se pueden tomar medidas de “aislamiento res
gración de los macrófagos, por lo que su capa piratorio'* (habitación individual, filtros de aire,
cidad de respuesta a la infección es menor que utilización de barbijos por todos los visitantes a
en la población normal y ello ensombrece el pro la sala, etc.). Es creciente el número de notifica
nóstico de vida. ciones de epidemias nosocom iales de tubercu
Los pacientes esplenectomizados o con anes- losis en pacientes no aislados debidamente. Hay
plenia funcional se encuentran en riesgo elevado que tener en cuenta las epidemias nosocomiales
de padecer infecciones graves por gérm enes de tuberculosis multirresistente.
capsulados (5. pneum oniae, H. influenzae, N. L os pacientes portadores de enferm edades
m eningiíidis) que pueden adquirir una gravedad transmisibles por contacto pueden requerir “aisla
inusitada. miento de contacto” (utilización de camisolín y
Ciertos factores del microorganismo -v ir u guantes descartables, además del lavado de ma
lencia e inóculo- también condicionan la grave nos para todo el personal que entre en contacto
dad del cuadro séptico. Las bacteriemias por físico con el enfermo). La bibliografía interna
Pseudom onas sp o Staphylococcus aureus habi cional abunda en datos de epidemias transmiti
tualmente se asocian con mayor mortalidad que das por esta vía, sobre todo en unidades cenadas
las producidas por otros microorganismos. (neonatológicas, terapia intensiva y centros quirúr
Con independencia de la virulencia propia del gicos).
microorganismo, la sensibilidad restringida a los Debe disminuirse el tiempo de estadía del pa
antibióticos, que a menudo exhiben las bacterias ciente en el medio hospitalario, así como el tiem
nosocomiales, introduce un factor de gravedad po de permanencia de los medios de diagnóstico y
dado lo limitado del arsenal terapéutico y la po tratamiento invasivos (sondas vesicales, catéteres
sibilid ad de utilizar inicialm en te esquem as -venosos, arteriales o de Swan-Ganz-, o la per
antibióticos erróneos. manencia en asistencia respiratoria mecánica).
Por último, el estadio evolutivo del fenómeno Es imprescindible el cuidado estricto de las
de respuesta inflamatoria sistémica también es tubuladuras de infusión venosa, la utilización del
fundamental para el pronóstico. menor número posible de conectores y llaves de
tres vías, así como el recambio periódico de és
tas, además del aseo, desinfección o esteriliza
PROFILAXIS
ción (o ambos procedimientos) de los instrumen
Se han utilizado diversas medidas para dism i tos médicos de diagnóstico y tratamiento (fibro-
nuir la incidencia de sepsis en el medio hospi broncoscopios, respiradores, y sus tubuladuras,
talario. Muchas de ellas han sido discutidas» por material quirúrgico y otros). Existen comunica
los altos costos que generan y por la producción ciones de epidemias nosocom iales de infeccio
de efectos colaterales, com o la aparición de re nes por P se u d o m o n a s sp, A c in e to b a c te r sp,
sistencia a los antimicrobianos. Staphylococcus aureus o E nterococcus sp, trans
Sin duda, para evitar la diseminación nosoco mitidas por estos implementos.
mial de infecciones la medida más simple y efec Los pacientes que reciben asistencia respira
tiva es el lavado de manos sistemático, del per toria mecánica deben permanecer con la cabece
Capítulo 8 - Sepsis □ 95
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T
Endocarditis infecciosa
Ornar J. Palmieri
Elena I. M aiolo
DEFINICION
como los estreptococos del grupo viridans. Esto
determina una endocarditis de curso indolente,
Se denomina endocarditis infecciosa a la in que sin tratamiento lleva a la muerte luego de
fección de la superficie endocárdica del corazón. varios meses de evolución.
El término infecciosa hace referencia a los múl Las clasificaciones más recientes son endocar
tiples agentes etiológicos que pueden provocar ditis de válvula nativa, endocarditis de válvula
la, si bien en la gran mayoría de los casos es de protésica y endocarditis en adictos a drogas de
origen bacteriano. El compromiso endocárdico, uso intravenoso (ADIV). La clasificación basa
caracterizado por la presencia de vegetaciones, da en el agente etiológico es útil, ya que puede
asienta con frecuencia sobre el endocardio val predecir el curso de la enfermedad, presuponer
vular y puede extenderse a las cuerdas tendinosas, la presencia o ausencia de alteraciones cardíacas
los músculos papilares y el endocardio mural. Si preexistentes y orientar la elección del antimi
las lesiones iniciales se localizan sobre altera crobiano apropiado.
ciones como la coartación aórtica o el conducto
arterioso persistente, se denominan endarteritis.
ETIOLOGÍA
coccus faecium \ en orden de importancia sigue agentes etiológicos aislados son similares a los
Staphylococcus aureus sensible a la meticilina de la afección de válvula nativa.
(15% a 35%). Streptococcus bovis (5% a 10%)
en el 50% de los casos se halla asociado a enfer
EPIDEMIOLOGIA
medad colónica. Con menos frecuencia la endo
carditis es provocada por estreptococos mi- La endocarditis infecciosa es una enfermedad
croaerófilos, estreptococos betahemolíticos del prevalente, con elevada mortalidad aun en la era
grupo A y Streptococcus pneum oniae. La inci antibiótica. En las últimas décadas la edad pro
dencia de endocarditis por bacilos gramnegativos medio de los pacientes ha aumentado desde los
dentro de las de válvula nativa es en general in 30 hasta los 50 años. En la actualidad la gran
ferior al 10% y los agentes aislados más a me mayoría de los casos tiene entre 31 y 60 años,
nudo pertenecen a! grupo HACEK (Haentophilus excepto los provocados por estreptococos del
sp, A c tin o h a c iU u s a c tin o m ic e te n c o m ita n s , grupo D, que afectan a individuos mayores de 70
Cardiobacterium hominis, EikencUa corroclens y años. Un 60% a 80% de los enfermos tiene algu
K in g e lla k in g a e ), B r u c e lla , P s e u d o m o n a s na anomalía cardíaca preexistente. La endocar
oentginosa y enterobacterias en general. Menos ditis infecciosa es poco frecuente en la población
frecuentes aún son los anaerobios, Listeria sp, pediátrica, pero se observa en pacientes que pa
L c g io n e lla sp, C o x ie lla b u r n e tii, N e isse ria decen enfermedad cardíaca congénita, en los ca
gonorrhoeae, Chiamydia psittaci y hongos. sos secundarios a la reparación quirúrgica de ésta
La incidencia de endocarditis de válvula nati o como complicación en pacientes con bacte-
va de adquisición intranosocomial ha aumenta riemia asociada con catéteres.
do en los últimos años, debido a la utilización Los menores de 35 años con endocarditis in
creciente de dispositivos intravasculares, caté fecciosa son en general mujeres con antece
teres de hemodiálisis e infección de heridas qui- dentes de fiebre reumática, si bien su incidencia
riírgicas. El microorganismo causante en el 80% ha disminuido en los últimos años de la era anti
al 90% de los casos es Staphylococcus aureus biótica. Por el contrario, la incidencia de enfer
resistente a la meticilina; en menor porcentaje, medades vasculares degenerativas ha aumenta
Staphylococcus epiderm idis y, más raros aun, do en pacientes ancianos, debido a su mayor su
bacilos gram negativos com o P se u d o m o n a s pervivencia.
aeruginosa, bacterias del grupo KES (Klebsiella, Prácticamente todas las anomalías estructura
l'Uttcrobacter, Serratia) y Candida. les predisponen al desarrollo de endocarditis in
Staphylococcus aureus sensible a la meticilina fecciosa, dado que la mayoría de ellas provoca
es el principal agente de endocarditis en ADIV; turbulencia en el flujo sanguíneo.
en un mínimo porcentaje se aíslan bacilos gram El 30% al 75% de las endocarditis infecciosas
negativos, anaerobios y hongos. En algunos ca se presentan en pacientes que han padecido en
sos se aísla más de un microorganismo. fermedad reumática; de éstas, el 85% compro
La endocarditis de válvula protésica se divide meten la válvula mitral, con una relación mujer
en precoz y íardfa. La primera es la que se pre hombre de 2:1. El compromiso aórtico es más
senta antes del año de realizado el reemplazo raro y predomina levem ente en hombres. Las
valvular y la tardía la que aparece después. anomalías congénitas determinan el 6% al 24%
Staphylococcus epidermidis es el principal agente de los casos y son, en orden de importancia, con
ctiológico en endocarditis de válvula protési ducto arterioso persistente, defectos ventriculares
ca precoz, en el 50% de los casos es resistente a sep tales, coartación aórtica, válvula aórtica
la meticilina. En menor porcentaje se aíslan bicúspide, tetralogía de Fallot y, más raramente,
Staphylococcus aureus, Corynebacterium sp (dif- estenosis de la válvula pulmonar. Los casos se
tcromorfos), bacilos gramnegativos y hongos, cundarios a defectos del ostium secundum o
como Aspergillus y Candida. A pesar de la dife atriales no son frecuentes, ya que la alteración
rencia, desde el punto de vista del pronóstico, en del flujo sanguíneo que determinan es de baja
la endocarditis de válvula protésica tardía los turbulencia. En el 30% al 40% de los pacientes
C apítulo 9 - Endocarditis infecciosa □ 99
la endocarditis es de válvula nativa. Se presenta como ocurre en pacientes neoplásicos, con en
en mayores de 60 años y es secundaria a calcifi fermedades caquectizantes o con colagenopatías.
cación de! anillo mitral, por enfermedad arte- Las situaciones hemodinámicas que producen
riosclerótica, o a la presencia de trombos ulterio el despulimiento de! endotelio son la lesión pro
res al infarto agudo de miocardio. Las causas vocada por la corriente sanguínea anormal de alta
menos frecuentes son el síndrome de Marfan con velocidad (como ocurre en la insuficiencia mitral
insuficiencia aórtica, la enfermedad cardíaca y aórtica), por el flujo de una cámara de alta pre
luética, la fístula arteriovenosa y la estenosis sión a otra de baja presión (tal como se observa
subaórtica hipertrófica dinámica o hipertrofia en los defectos ventriculares septales) y por la
asimétrica del tabique interventricular. Por últi turbulencia que se produce entre dos cámaras
mo, cabe mencionar a los pacientes gravemente separadas por un orificio estrecho capaz de ge
enfermos con largos períodos de hospitalización nerar un gradiente de presión. La mayor concen
sometidos a hiperalimentación parenteral, con tración de bacterias se halla en el área de baja
catéteres intravenosos, de hemodiálisis o de moni- presión inmediatamente distal a la obstrucción.
toreo hemodinámico, y cables de marcapasos Este hecho determina que la superficie ventricular
intracavitario, quienes constituyen un grupo de de la válvula aórtica y la superficie atrial de la
altísimo riesgo de padecer endocarditis de adqui válvula mitral sean las localizaciones típicas de
sición intranosocomial. la endocarditis en la insuficiencia aórtica y mitral,
La incidencia de endocarditis de válvula proté respectivamente.
sica ha aumentado en relación con la mayor fre El endotelio vascular sano resiste la adhesión
cuencia con que se practican los reemplazos val bacteriana, pero si está dañado, los microorga
vulares. La endocarditis que se observa en ADIV nismos se adhieren con facilidad. La bacteriemia
compromete con frecuencia las cavidades cardía transitoria se produce cuando cualquier mucosa
cas derechas. Se produce aun en ausencia de ano colonizada por bacterias es traumatizada. Los
malías cardíacas o valvulares subyacentes, por le procedim ientos que habitualmente ocasionan
sión química del endotelio de la válvula tricúspide. bacteriemia son las manipulaciones dentales en
En el 20% al 40% de los pacientes no se detec general (extracciones, cirugía, cepillado enér
ta cardiopatía subyacente. gico), la broncoscopia, (en especial si se utilizan
en d oscop ios rígidos), la am igdaiectom ía, la
intubación orotraqueal, la endoscopia digestiva,
PATOGENIA
el cateterismo uretral, lacistoscopia, la resección
La endocarditis infecciosa es el resultado de prostática transuretral y algunos procedimientos
una interacción compleja entre los factores que ginecobstétricos, en especial la colocación y re
provocan el daño del endotelio vascular, los efec moción de elementos anticonceptivos como el
tos locales hemodinámicos, las bacterias circu dispositivo intrauterino.
lantes y las defensas locales y sistémicas del hos (3tros factores a tener en cuenta son los que
pedero. El endotelio dañado o denudado es un dependen de la virulencia bacteriana y de la in
inductor potente de trombogénesis. La lesión munidad propia del hospedero, como el poder
endotelial permite el depósito de fibrina y pla bactericida del suero mediado por el com ple
quetas, que constituyen la llamada endocarditis mento, en especial ante bacterias gramnegativas,
trombótica no bacteriana o trombo fibrinopla- si bien existen cepas serorresistentes com o
quetario, el cual será colonizado por bacterias. E sch erich ia coli^ P seudom onas aeruginosa y
Este hecho es favorecido por características par S e rr a tia m a rc e sc e n s. Otras bacterias com o
ticulares de algunas bacterias, como la mayor Siaphylococcus aiireiis y Streptococciis pneii-
adhesividad aun con bajo inóculo. La endocardi m oniae pueden afectar válvulas con lesiones mí
tis trombótica no bacteriana también puede pro nimas y aun normales. Las bacteriemias provo
ducirse en presencia de complejos inmunes cir cadas por estreptococos productores de dextranos
culantes o de estados de hipercoagulabíiidad, se asocian con mayor frecuencia a endocarditis
haya o no coagulación intravascular diseminada, que las cepas no productoras. La fibronectina.
100 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
secretada com o respuesta a la lesión vascular ruptura del tabique interventriculary del múscu
por las células endoteliales, plaquetas y fibroblas lo papilar, con una tasa de curaciones mucho
tos, favorece la adhesión de bacterias que poseen menor que en los casos subagudos.
receptores para fibronectina, com o Sta p liy- Los abscesos intramiocárdicos y del anillo
lococcus aureus, estreptococos del grupo viri- valvular, frecuentes en la endocarditis aguda por
dans, Streptococcus pneum oniae y Candida. La Staphylococcus aureus, se asocian con trastor
fibronectina, secretada como respuesta a la le nos de la conducción. Los fenómenos embólicos
sión vascular por las células endoteliales, pla en endocarditis bacteriana han disminuido en for
quetas y fibroblastos, favorece la adhesión de ma notoria en la era antibiótica. Se presentan en
bacterias que poseen receptores para la misma, el 15% al 35% de los casos y comprometen con
com o S ta p h y lo c o cc u s aureus, S trep to co c cu s frecuencia las circulaciones renal, esplénica,
pneu-m oniae, Candida y estreptococos del gru coronaria y cerebral.
po viridans. A este grupo pertenece Streptococcus Los mal llamados aneurismas micóticos por su
sanguis que exhibe dos antígenos de superficie. aspecto m acroscópico -e n realidad son aneu
Clase I y Clase II, que promueven la adhesión rismas in fe c c io so s- son dilataciones aneuris-
del microorganismo a la superficie de las pla máticas de los vasos sanguíneos. Se producen por
quetas y la agregación de las mismas. invasión bacteriana directa de la pared arterial,
Hay otros importantes factores en la patogenia con formación de abscesos y ruptura por oclu
de endocarditis bacteriana, como la producción sión embólica y séptica de los vasa vasorum, o
de glicocálix, una glicoproteína que promueve por depósito de inmunocomplejos que dañan la
la adhesión bacteriana, por ejem plo, de Sta- pared arterial. Su localización habitual es la zona
p h y lo c o c c u s epid erm id is. La tromboplastina de bifurcación arterial, en especial en las ramas
tisular y la trombospondina, que también es una periféricas de la arteria cerebral media, pero
g lic o p r o te ín a alm acenada en lo s gránulos pueden asentar en cualquier vaso de la econo
p laq u etarios, aum entan la ad h esiv id a d de mía y son asintomáticos hasta que se produce la
Staphylococcus aureus al endotelio. ruptura.
El compromiso embólico renal se manifiesta
por el hallazgo de abscesos, infartos o glo-
ANATOMÍA PATOLÓGICA
merulonefritis focal, caracterizada por prolife
Las vegetaciones presentan grandes variacio ración endotelial y mesangial, hemorragias, in
nes macroscópicas en consistencia y tamaño; filtrado polimorfonuclear, necrosis fibrinoide y
pueden medir desde pocos milímetros hasta va curación por fibrosis. En el 10% al 15% de los
rios centímetros. Asientan en el borde libre de casos se observa glomerulonefritis mediada por
las válvulas, como masas frágiles e irregulares. inmunocomplejos, que la microscopía electróni
En la m icroscopía óptica estas lesiones están ca revela com o depósitos subepíteliales electro-
constituidas por fibrina, agregados plaquetarios densos de IgG, IgM e IgA, o depósitos de com
y restos de elementos celulares de la sangre. Tam plemento detectados por inmunofluorcscencia.
bién se observan colonias de conglomerados de Las embolias pulmonares, con derrame pleural o
bacterias, cuya visualización a veces es dificul empiema, se ven en los casos de endocarditis
tosa por hallarse en la profundidad de la vegeta derecha. En las em bolias cutáneas, com o los
ción. En la valva subyacente se observa una re nódulos de Osler, la microscopía óptica revela
acción inflamatoria inespecífica. proliferación de la íntima arteriolar, trombosis, y
El proceso de formación de la vegetación pue necrosis de vénulas y arteriolas. Las lesiones de
de llevar a la destrucción total de la válvula; la Janeway son em bolias sépticas que se carac
curación se produce por fibrosis y calcificación terizan por la presencia de bacterias, infiltrado
ulterior. En los casos agudos de endocarditis in polimorfonuclear, necrosis y hemorragias subcu
fecciosa se evidencian grandes focos de necrosis táneas. Las manchas de Roth, que se visualizan
y supuración, asociados con frecuencia a perfo con facilidad en el examen de fondo de ojo, se
ración valvular, ruptura de cuerdas tendinosas, caracterizan por la presencia de infiltrados lin-
r
<
Capí7u/o P - Endocarditis infecciosa D 101
(
fociiarios, hemorragias y edema de la capa de fi frecuentes en las endocarditis de curso subagudo (
bras nerviosas de la retina. o lento, son nódulos eritematosos dolorosos en los
pulpejos de los dedos. Las manchas de Janeway
(
son maculopápulas eritematosas localizadas en <
manifestaciones clínicas
palmas y plantas. Las manchas de Roth del fon
La endocarditis infecciosa puede seguir un cur do de ojo se presentan con una zona central páli
so agudo o subagudo. Las manifestaciones clíni da, ovalada, rodeada de un halo hemorrágico.
cas son en extremo proteiformes y pueden estar La esplenomegalia se presenta en el 25% al i
referidas a cualquier aparato o sistema del orga 60% de los pacientes, aunque en la era antibiótica
(
nismo. Este hecho está en relación estrecha con esta frecuencia se redujo. Las embolias sistémicas
la bacteriemia persistente, el agente etiológico, se observan en el 20% al 30% de los casos y pue (
el tamaño de las vegetaciones, la presencia de den aparecer en cualquier momento de la evolu
complicaciones cardíacas o extracardíacas, los ción, pero son más comunes al comienzo de la t
fenómenos em bólicos y los inmunocomplejos enfermedad. En orden decreciente de frecuencia
circulantes. La forma de presentación más fre comprometen el sistema nervioso centra], el bazo, i
cuente de la endocarditis infecciosa es el síndro el riñón y las extrem idades inferiores. Los
me febril prolongado, pero a menudo ios prime aneurismas micóticos se observan en 2% al 5%
i
ros signos y síntomas dependen de la localiza de los enfermos y comprometen principalmen i
ción de los fenómenos embólicos o de las com te el sistema nervioso central. El 25% de los pa
plicaciones. La fiebre está presente en el 90% de cientes presenta alguna manifestación neuroló- c
¡os casos de endocarditis de válvula nativa, ex gica. Las manifestaciones clínicas en ADIV de
cepto en pacientes inmunodeprimidos, ancianos, penden de la válvula afectada; por lo general es i
con insuficiencia renal o cardíaca avanzada y los la tricúspide y el agente etiológico más frecuente
c
casos tratados previamente con antimicrobianos. es Staphylococcus aureus. El soplo tricuspídeo es
Los síntomas generales son astenia, anorexia,
pérdida de peso y artromialgias. Estas últimas se
una observación rara; la gran mayoría de los pa
cientes presenta fiebre y manifestaciones respi
c
relacionan con la presencia de inmunocomplejos. ratorias, como dolor pleurítico, hemoptisis, dis c
Las manifestaciones clínicas solapadas, que en
general se asocian con agentes etiológicos como
nea y tos que están determinadas por embolias
sépticas pulmonares. c
los estreptococos del grupo viridans, el grupo La endocarditis de válvula protésica es extre e.
HACEK o Staphylococcus epiderm idis, consis madamente grave. Se divide, como ya se señaló,
ten en fiebre moderada y toxemia leve. Otros en precoz y tardía, y se caracteriza por fiebre, i
agentes etiológicos, como Staphylococcus au- toxemia, disfunción protésica y manifestaciones
reus, Streptococcus pneum oniae y estreptococos embólicas. c
del grupo A, evolucionan con un curso agudo,
toxemia importante, fiebre alta, escalofríos, ma c
DIAGNÓSTICO
nifestaciones embólicas tempranas e insuficien <c
cia cardíaca aguda. El diagnóstico de endocarditis infecciosa se
La aparición de un nuevo soplo cardíaco de basa en la concurrencia de varios factores, dado t
carácter regurgitante o las variaciones de un so que sus manifestaciones clínicas son proteiformes
plo preexistente se encuentran en el Z5% de los en extremo. Los signos y síntomas son variables; t
casos. La insuficiencia cardíaca de curso agudo dependen de la duración de la bacteriemia y de
es de mal pronóstico, puede estar determinada por la localización de los microorganismos. (i
descompensación de una insuficiencia cardíaca Los hallazgos de laboratorio son inespecíficos.
previa, por anemia, fiebre, ruptura de cuerdas El síndrome anémico se encuentra en más del
tendinosas o por destrucción valvular, en espe 80% de los pacientes; la trombocitopenia es me 1
cial en casos de compromiso de la válvula aórtica. nos frecuente y su incidencia no supera el 30%
El 20% de los pacientes presenta petequias y he de los episodios; la leucocitosis con desviación a
morragias subungueales. Los nódulos de Osler, la izquierda, presente en el 20% al 30% de los
t
f
(I
102 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
intravenoso, a pesar de lo cual las recidivas son Terapéutica antimicrobiana según el agente
frecuentes. etiológico
La elección del antibiótico se basa en las prue Endocarditis estreptocócica
bas de sensibilidad del microorganismo median La gran mayoría de los estreptococos del gru
te la técnica de difusión en disco; y de las deter po viridans son sensibles a la penicilina, al igual
minaciones de la concentración inhibitoria míni que S. pyogenes y ios estreptococos no entero-
ma (CIM) y de la concentración bactericida m í cocos del grupo D. La CIM de penicilina para la
nima (CBM ) para el microorganismo aislado mayoría de los estreptococos es 0,1 a 1 ^ig/mL;
(mínima concentración del antibiótico capaz de también son sensibles a cefazolina, vancomicina,
inhibir o de matar, respectivamente, a un inóculo estreptomicina y gentamicina. S. bovis es muy
determinado) que se efectúan mediante las prue sensible a la penicilina. Para la mayoría de las
bas de dilución en caldo. Para erradicar la infec cepas hay sinergia entre penicilina (o vancomi
ción se necesita la acción bactericida sostenida cina) más estreptomicina, gentamicina o kana-
del antibiótico. Se lo administra por la vía intra micina. El régimen recomendado para pacientes
venosa porque las concentraciones séricas ade jóvenes con endocarditis por estreptococos sen
cuadas se correlacionan con una mejor penetra sibles a CIM de penicilina < 0,1 |ig/m L es 15 a
ción en las vegetaciones. 20 millones de UI diarias de penicilina IV, dividi
En el trombo fibrinoplaquetario las bacterias se das cada 4 horas, más 500 mg por vía IV de estrep
multiplican libremente, por lo cual su concentra tomicina cada 12 horas, durante dos semanas. En
ción es muy elevada. La tasa de reproducción es pacientes ancianos, con deterioro de la función
mayor en la periferia de la vegetación y disminu renal o con riesgo de padecer ototoxicidad, el ré
ye hacia el centro, donde los gérmenes se hallan gimen sugerido es 15 a 20 millones de UI diarias
en un estado de actividad metabólica reducida. de penicilina IV divididas cada 4 horas y durante
Esto dificulta la acción de los antibióticos betalac- 4 semanas, sin la adición del aminoglucósido.
támicos que actúan sobre la síntesis de la pared Para individuos alérgicos a la penicilina, la in
celular. Por otra parte, la absorción tras la admi dicación es cefazolina - 2 g IV cada 6 horas- más
nistración por vía bucal es errática y los antibió estreptomicina o gentamicina. Si los betalactá
ticos bacteriostáticos no son efectivos. La admi micos están contraindicados, se utilizará vanco
nistración de betalactámicos junto con aminoglu- micina, 1 g IV cada 12 horas.
cósidos produce una mayor acción bactericida. A Los estreptococos sensibles a CIM mayores
esta acción sinérgica se suma el efecto posantibió de 0,5 pg/mL se tratan igual que el enterococo.
tico de los aminoglucósidos, que consiste en la Para Enterococcus faecalis la (ÍIM de ampicilina
inhibición del crecimiento bacteriano aun después es de 0,4 a 3,1 fig/mL y la de penicilina, 0,4 a
de la caída de los niveles terapéuticos del fármaco. 12,5 jxg/mL. Esto demuestra una resistencia natu
El monitoreo del paciente se realiza con hemo- ral del enterococo a los agentes betalactámicos, que
cultivos de control, para verificar la negativi- en este caso poseen efecto bacteriostático y para
zación de la bacteriemia, la determinación de ami obtener un efecto sinérgico bactericida hay que ad
noglucósidos (dado que éstos tienen un escaso ministrarlos junto con un aminoglucósido.
margen terapéutico y mayor toxicidad) y la deter En la endocarditis por enterococos el régimen
minación del poder bactericida del suero (PBS), recomendado es 20 m illones de UI diarias de
en pico y en valle. Para determinar el PBS (la penicilina por vía IV, fraccionadas cada 4 horas,
mínima dilución de suero del paciente capaz de o ampicilina - 2 a 3 g IV cada 4 horas-, más
inhibir el desarrollo bacteriano) se confrontan estreptomicina o gentamicina durante 4 a 6 se
diluciones seriadas del suero ante un inóculo co manas. Si las pruebas de sensibilidad revelan re
nocido del gernien aislado. La referencia a pico sistencia a la estreptomicina, se la debe reem
y valle se relaciona con la máxima y la mínima plazar por gentamicina. La aparición de cepas de
concentración del antibiótico en sangre. Los va enterococo resistentes a la vancomicina es un
lores predictivos de curación bacteriológica son problema creciente y un desafío terapéutico,
de 1/64 y 1/32, respectivamente. en estos casos se han utilizado con algún éxito el
i
I
Capítulo 9 - Endocarditis infecciosa □ 105
linezolid, que es una oxazolinidona, y las estrep- de acuerdo con el antibiograma. En general
lograminas, quinupristina-dalfopristina. En los se utilizan cefalosporinas de tercera generación
casos de resistencia debidos a la producción de (cefotáxima 2 g IV cada 4 a 6 horas o ceftriaxona
beialaciamasas se emplean dosis elevadas de pe 2 g IV cada 12 horas, o ceftazidima 2 g IV cada 8
nicilina IV, 40.000.000 de UI diarias o tratamien horas) o ciprofloxacina 400 mg IV cada 12 horas
tos combinados con ampicilina, cefalosporinas de en asociación con el aminoglucósido al que el
y generación y aminoglucósidos. En las endo microorganismo es sensible: amikacina o genta
carditis con compromiso de la válvula mitral de micina durante 4 a 6 semanas.
niás de 3 meses de evolución, endocarditis de La endocarditis fúngica por C a n d id a sp o
válvula protésica y recidiva de la endocarditis, el por A spergillus se trata con anfotericina B en
tratamiento debe prolongarse por 8 a 12 sem a dosis de 0,3 a 0,5 mg/kg IV durante 6 a 8 sema
nas. En algunos casos la curación sólo se obtiene nas. En general tienen indicación quirúrgica, da
con la cirugía. do el tamaño importante que alcanzan las vege
taciones y el elevado porcentaje de fenómenos
Endocarditis estafílocócica embólicos.
La mayoría de los aislamientos de S. aureus,
adquiridos en la comunidad o no, son resisten
EVOLUCIÓN
tes a la penicilina (CIM > 0,2 (Xg/mL). Si el mi
croorganismo fuera sen sib le a la penicilina Luego de iniciado el tratamiento, la deferves
(CIM < 0,1 |ig/m L), ésta es el agente de elec cencia en general se produce en 3 a 7 días, con
ción, en dosis de 20 millones de UI por día por caída de la fiebre y negativización de los he-
vía IV, fraccionadas cada 4 horas, durante 4 a 6 mocultivos. En la endocarditis por S. aureus con
semanas. En ia endocarditis provocada por frecuencia la fiebre persiste entre 7 y 10 días y
S. aureus resistente a la penicilina pero sensible los hemocultivos suelen mantenerse positivos
a la meticilina, el tratamiento es cefazolina 2 g durante la primera sem ana de tratam iento
IV cada 8 horas durante 4 a 6 semanas más genta- antimicrobiano. La persistencia de la fiebre hace
micina l mg/kg de peso IV o IM cada 24 horas necesario descartar el absceso del anillo o las
durante dos semanas. complicaciones supurativas metastásicas.
En pacientes alérgicos a la penicilina o con
endocarditis por S. aureus resistente a la meti-
PROFILAXIS
cilina se utiliza vancomicina, 1 g cada 12 horas
por vía IV durante 4 semanas. La rifampicina es En procedimientos odontológicos, de la cavi
altamente activa contra 5. aureus, pero nunca se dad bucal o del tracto respiratorio superior, así
la debe utilizar sola debido a la aparición de re como en cirugía menor del tracto gastrointestinal
sistencia. Está indicada en casos de endocarditis o genitourinario, la profilaxis consiste en ia ad
con baja actividad bactericida del suero durante ministración de amoxicilina, 2 g VO 1 hora antes
la terapia con betalactámicos o vancomicina, o y 1,5 g 6 horas después del procedimiento. En
en pacientes con com plicaciones supurativas, pacientes alérgicos a la penicilina y sólo en pro
como abscesos murales o del anillo valvular. cedimientos del tracto respiratorio o la cavidad
En la endocarditis de válvula protésica causa bucal, se utiliza clindamicina, 600 mg VO 1 hora
da por S. epiderm idiSt el 87% de las cepas son antes y 300 mg 6 horas después. En pacientes de
resistentes a la meticilina. Se tratan con vanco alto riesgo, en quienes se llevarán a cabo pro
micina más gentamicina en las dosis ya señala cedimientos en los tractos genitourinario o gas
das, más rifampicina, 600 mg IV cada 12 horas, trointestinal, se utilizarán antibióticos parente-
durante 6 semanas. rales com o ampicilina-sulbactam 3 g IV más
gentamicina 1,5 mg/kg IM o IV 30 minutos an
Otros microorganismos tes del procedimiento. Este régimen parcnteral
En la endocarditis por bacilos gramnegati- puede repetirse 8 horas después o, como alter
vos el antibiótico de elección debe seleccionarse nativa, amoxicilina, 1,5 g VO 6 horas después.
T
106 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
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J é
10
Infecciones del tracto respiratorio
superior
Ornar J. Palmieri
A continuación se estudiarán las infecciones gitis los estreptococos betahemolíticos de los gru
que con más frecuencia comprometen el tracto pos C y G, las infecciones mixtas por anaerobios
respiratorio superior según el siguiente orden: (angina de Plaut-Vincent por asociación fusoes-
faringitis, rinitis, otitis, sinusitis y laringitis. pirilar), Neisseria gonorrhoeae, Coiynebacíerium
u lc e r a n s , A r c a n o b a c te r iu m h a e m o lyticiim ^
Yersinia en tero co litica , Treponem a pallidttm ,
FARINGITIS
C hlam ydia pneiim oniae y M ycoplasm a pneum o-
La faringitis es la inflamación de la pared farín niae.
gea y su tejido linfático que se caracteriza por
hiperemia, con o sin exudado, ulceración o seudo- Epidemiología
membranas. Puede afectar la faringe, amígdalas, La epidem iología varía con la edad del pacien
úvula, paladar blando, adenoides y anillo linfático te y con el agente etiológico. La mayor parte de
faríngeo. Distintos microorganismos pueden se estas afecciones se producen en los meses fríos
causa de faringitis, dentro de ellos predominan del año, son transmisibles en la comunidad y los
los virus y las bacterias. niños son los más afectados. Entre los adoles
centes y adultos jóvenes deben tenerse en cuenta
Etiología las faringitis provocadas por el EB V, Mycoplasma
Se considerarán las etiologías virales y las bac pneum oniae y los relacionados con la actividad
terianas. sexual (HIV, T. pallidum y N . gonorrhoeae).
Las etiologías virales más frecuentes correspon
den a los virus respiratorios: rinovirus, coronavi- Manifestaciones clínicas
rus, influenza y parainfluenza. Otros virus respon Las manifestaciones clínicas más frecuentes de
sables son los adenovirus, los virus Coxsackie A, las faringitis son: dolor de garganta de variable
los virus del herpes simple (HSV), el virus de intensidad, espontáneo o a la deglución (odino-
Epstein-Barr (EB V), el citomegalovirus (CMV) y fagia), fiebre, malestar general, mialgias, rinitis,
el virus de la inmunodeficiencia humana (HIV). laringitis y traqueítis. Estos síntomas difieren
Las etiologías bacterianas más importantes de acuerdo con el agente etiológico y con ia for
son: S tr e p to c o c c u s p y o g e n e s (estrep tococo ma clínica que el mismo origine: faringitis erite-
betahemoiítico del grupo A) y C orynebacterium matosa, petequial, vesicular, eritematopultácea,
diphtheriae. Además pueden ser causa de farin cripticopultácea, ulcerosa o seudomembranosa.
108 □ iP nw era p a r/^ - G eneralidades - Síndrom es clínicos
Lafarin g itis eriiem aiosa se caracteriza por una están eritematosas con poca repercusión ganglionar
rubefacción que puede estar circunscripta a ios submaxilar.
pilares anteriores o abarcar amígdalas, pilares El virus de la influenza, agente etiológico de la
posteriores, parte del paladar blando y la úvula, gripe, ocasiona una faringitis eritematosa con
que además puede estar edematosa. Sobre este edema de la mucosa, dolor de garganta, coriza,
fondo congestivo a veces asientan petequias lo disfonía, laringitis, traqueítis y tos que se acom
que configura la fa rin g itis petequial, o vesícu pañan de otras m anifestaciones del síndrome
las, como en la faringitis vesicular. En lafaringitis gripal com o fiebre, mialgias y cefalea.
eritem atopultácea sobre el fondo congestivo se El adenovirus causa una faringitis eritematosa,
destacan las amígdalas tumefactas y cubiertas por a veces con exudado blanquecino sobre las amíg
un exudado blanco, cremoso, purulento que con dalas (eritematopultácea), que se acompaña de
trasta con la rubicundez de la mucosa que lo ro dolor de garganta, fiebre, cefalea, mialgias y en
dea. Este exudado se desprende con facilidad y un tercio de los casos conjuntivitis bilateral (fie
no deja una superficie sangrante. Hay odinofagia bre faringoconjuntival).
y se palpan adenopatías subangulomaxilares do- El EBV, agente etiológico de la mononucleosis
lorosas. En \ 2í fa rin g itis cripticopultácea el exu infecciosa, origina en general una faringitis con
dado se limita a las criptas de las amígdalas, aun exudado blanquecino que cubre total o parcial
que puede confluir y originar una faringitis erite mente ambas amígdalas, adenopatías subangu
matopultácea. En la farin g itis ulcerosa sobre el lomaxilares, nucales, axilares, hepatoespleno-
fondo congestivo se observan úlceras de fondo megalia y fiebre (ver el capítulo M ononucleosis
granuloso, a veces profundas cubiertas por un exu infecciosa).
dado grisáceo o rojizo. En \<¡i fa rin g itis seudo- El CMV determina un cuadro clínico similar
membranosa el exudado se desprende con dificul al de la m ononucleosis infecciosa.
tad, deja una superficie sangrante y es coherente, La herpangina es producida por el virus Cox-
es decir no se disocia en el agua. Esta faringitis sackie A y se presenta con odinofagia, fiebre,
es típica de la difteria (ver el capítulo Difteria). mialgias y una faringitis eritematosa con escaso
El cuadro clínico puede sugerir o no un micro número de pequeñas vesículas que asientan en
organismo en particular, en tanto que la certeza los pilares anteriores, úvula y paladar blando.
diagnóstica se obtendrá al evaluar los aspectos Estas vesículas se abren en pocas horas y se trans
epidem iológicos y de laboratorio. forman en úlceras de 1 a 2 mm de diámetro cu
biertas de un exudado blanquecino.
Faringitis virales. Pueden ser la expresión de La faringitis aguda por el HSV, a veces asociada
resfríos comunes (rinovirus, coronavirus, virus con una gingivoestomatitis, es la expresión de la
parainñuenza) y se acompañan de rinitis, fiebre, infección primaria por este virus. Puede provocar
odinofagia, mialgias y malestar general. Las fauces una faringitis eritematosa o presentarse con lesio
■.'.Enferniédádes'qué^pfqdüceriA^^^^^
\t
d
110 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
de una virosis respiratoria aguda. En cuanto a las los antimicrobianos de acuerdo con el agente etio
faringitis eritematosas de causa bacteriana los lógico. La faringitis estreptocócica se tratará con
hallazgos clínicos no permiten asegurar el diag penicilina V por vía oral en dosis de 500.000 a
nóstico etiológico por lo que se recurrirá al cul 1.500.000 UI cada 6 a 8 horas en los adultos y
tivo del hisopado faucial. Existen métodos rápi 50.000 Ul/kg/día en los niños, repartidos cada 6
dos de delección de antígenos cuya positividad a 8 horas, durante 10 días. Otra alternativa es la
indica infección por S. pyogenes y por lo tanto la penicilina G benzatina por vía IM en una sola dosis
indicación de tratamiento. La negatividad de es de 1.200.000 a 2.400.000 UI en los adultos y de
tas pruebas no exluye la infección por dicho mi- 600.000 a 1.200.000 UI en los niños. No deben uti
croorgani.smo, por lo tanto siempre deberán rea lizarse ampicilina ni amoxocicilina. En los pacien
lizarse los cultivos del hisopado faríngeo. Con tes alérgicos a la penicilina se utilizarán los
viene señalar que los métodos rápidos no identi- macrólidos como la claritromicina de 250 a 500 mg
ñcan a los estreptococos de los grupos C y G, cada 12 horas en los adultos o 15 mg/kg/día en los
también relacionados con faringitis. niños, repartidos cada 12 horas, durante 10 días
o la azitromicina 500 mg cada 24 horas en los
Faringitis con exudado. Streptococcus pyo- adultos o 10 mg/kg cada 24 horas en los niños,
genes también puede originar una faringitis erite- durante 5 días.
m atopultácea con exudado que cubre ambas La angina de Plaut-Vincent se tratará con anti
amígdalas. Otras bacterias y virus se tendrán en microbianos que tengan actividad contra gérme
cuenta en las faringitis con exudado como las nes anaerobios. Puede indicarse la clindamicina
provocadas por los estreptococos de los grupos en dosis de 300 a 600 mg por vía oral, IV o IM cada
C y G, las bacterias anaerobias, C. diphtheriaey 6 a 8 horas en los adultos y 40 mg/kg/día en los
adenovirus, virus del herpes simple y el virus de niños, repartidos cada 6 a 8 horas, durante 10 días.
Epstein-Barr. Las enfermedades causadas por En las faringitis con edema importante pueden
estos agentes etiológicos se describen en los ca utilizarse los corticosteroides.
pítulos correspondientes.
Profilaxis
Diagnóstico diferencial La difteria tiene una eficaz profilaxis median
El diagnóstico diferencial de las faringitis eri te la vacunación con el toxoide diftérico (ver el
tematosas hay que establecerlo con las faringitis capítulo Difteria). La vacuna contra la influenza
eritematosas virales y las bacterianas. Dentro de es útil en la prevención de las faringitis provoca
estas últimas, en especial, con la provocada por das por ese virus. Aún no existen vacunas contra
Streptoccus pyogenes (estreptococo beta-hemo- otros patógenos capaces de provocar faringitis.
lítico grupo A), para la que se dispone de un trata Los pacientes con ep isod ios recidivantes de
miento etiológico eficaz capaz de evitar las com faringitis por S. pyogenes asociados con la por
plicaciones tanto las supurativas o intrainfecciosas tación faríngea de dicha bacteria pueden reque
como las no supurativas o posinfecciosas. rir tratamiento con antimicrobianos, aunque es
En las farinitis con exudado se considerará la difícil su erradicación. Resulta muy eficaz la clin
posibilidad de ser la expresión local de enferme damicina por vía oral en dosis de 40 mg/kg/día,
dades generales graves como hemopatías, agranu- repartida cada 8 horas, durante 10 días. También
locitosis, leucemia o, enfermedades infecciosas puede utilizarse una combinación de rifampicina
como escarlatina, difteria, mononucleosis infec con penicilina V o con penicilina G benzatina.
ciosa, adenovirosis y las provocadas por el virus
del herpes sim ple, bacterias anaerobias y los
RINITIS
estreptococos de los grupos A, C y G.
Se denominan rinitis a las afecciones inflamatorias
Tratamiento de la mucosa nasal, pueden ser agudas o crónicas.
El tratamiento de las faringitis virales es sinto Las rinitis agudas se caracterizan por su gran
mático. En las faringitis bacterianas se indicarán frecuencia y en general por ser provocadas por
Cap/7«/o JO - Infecciones del tracto respiratorio superior □ 111
rinovirus. Se manifiestan por estornudos, obstruc realiza con doxiciclina asociada a estreptomicina
ción nasal y rinorrea mucosa, a veces mucopu- osulfadiazina.
rulenta o sanguinolenta. Se producen en los me La rinosporidiosis producida por Rh'm ospo’
ses fríos del año, en general son autolimitadas y ridium seeberi se caracteriza por el crecimiento
sólo requieren tratamiento sintomático. Otros vi lento de pólipos nasales y su tratamiento es qui
rus también pueden ser causa de rinitis aguda rúrgico.
como adenovirus, coronavirus, virus influenza o La mucormicosis es una grave enfermedad pro
virus parainfluenza. Otras veces son sintomáticas ducida por hongos de las esp ecies R hizopus,
de afecciones como sarampión, escarlatina, vari Mucor, Absidia o Rhizom ucor que afecta en gene
cela y otras. Merece mención especial la rinitis ral a diabéticos descompensados y que origina una
diftérica que debe sospecharse en un niño con grave rinitis serosanguinolenta que luego se ex
rinitis serohemorrágica y erosiones en e! vestí tiende a los tejidos vecinos (ver el capítulo Mu
bulo nasal. La rinoscopia puede evidenciar las cormicosis).
características pseudomembranas (ver el capítu La sífilis congénita puede manifestarse con
lo Difteria). rinitis y produce la típica deformación denomi
En el recién nacido puede producirse la rinitis nada «nariz en silla de montar».
gonocócica acom pañada de fiebre, rinorrea La leishmaniosis, la tuberculosis, la lepra, la his-
purulenta y conjuntivitis, que en la actualidad, toplasmosis, la paracoccidioidomicosis, las miasis
se observa excepcionalmente. y otras enfermedades infecciosas también pueden
La rinitis de la sífilis coiigénita se manifiesta ser el origen de rinitis crónica y de importantes
de modo progresivo algunas semanas después del alteraciones de la pirámide nasal. Éstas, se estu
nacimiento, con escasa fiebre, obstrucción nasal, diarán en los capítulos correspondientes.
rinorrea hemorragicopurulenta, costras y erosio
nes vestibulares.
OTITIS
Las rinitis crónicas son menos frecuentes y son
debidas a distintos microorganism os. M erece Se considerará la otitis externa y la otitis media.
mencionarse el rinoescleroma, o escleroma, ya
que puede extenderse a la faringe, laringe y trá Otitis externa
quea. Su agente etiológico es K lebsiella rhinos- La otitis externa es una dermoepidermitis agu
cleromafis y produce rinitis granulomatosa cró da o crónica, que suele comprometer en forma
nica en la que alternan zonas hipertróficas y aislada o en conjunto, el pabellón auricular, el
atróficas cubiertas con costras de un olor parti conducto auditivo externo y la capa epidérmica
cular. La histopatología revela las características o externa de la membrana timpánica, y puede ser
células de Mickulicz en cuyo proioplasma vacuo- provocada por distintos microorganismos.
lado se visualiza el agente etiológico. El trata La otitis externa circunscripta o fo rú n cu lo del
miento se realiza con cotrinioxazol, ciproflo- conducto auditivo externo es la infección estafi-
xacina o doxiciclina. locócica de los folículos pilosebáceos. Las cau
Otro microorganismo responsable de rinitis sas predisponentes son el prurito que ocasionan
crónica es K lebsiella ozaenae, agente etiológico algunas dem iatosis, alergias por contacto debi
de la ocena, en que se presenta com o una rinitis das a productos cosm éticos, fijadores para el ca
atrófica cubierta por costras secas y malolientes. bello o esmalte de uñas, la introducción de obje
Se trata con ciprofloxacina oral asociada con la tos como horquillas o palillos, los lavados exce
administración intranasal de aminoglucósidos. sivos, la inmersión en cursos de agua o piscinas
El muermo es una rinitis producida por Bur- («otitis del nadador») y demás elem entos que
kholderia (Pseudom onas) m allei que ocasiona modifiquen la piel de la zona. El forúnculo del
una enfermedad respiratoria equina que a veces conducto auditivo externo se caracteriza por in
se transmite al hombre u otros animales dom és tensa otalgia, congestión y edema que imposibi
ticos. Se caracteriza por lesiones granulomatosas lita la colocación del otoscopio, el que incrementa
ulceradas y rinonea purulenta. El tratamiento se más aún el dolor. Éste, se exacerba también con la
112 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
células redondas y gran número de osteoclastos dos molares de la arcada superior. Otras causas
en las paredes óseas de la caja. El hueso que la de sinusitis son los barotraumas por inmersiones
rodea presenta fibrosis, es irregular con deficiente marinas profundas o viajes aéreos, los irritantes
neumatización del hueso temporal y signos de in químicos y las anomalías del moco, como suele
flamación activa. Debido a la intensa granulación verse en la fibrosis quística. Los tumores y las
y proliferación de la mucosa pueden originarse enfermedades granulomatosas también pueden
pólipos. Otra forma clínica de las otitis crónicas causar sinusitis secundaria a la obstrucción.
es el colesteatoma, tumor benigno en cuanto a su En los casos habituales no está indicada la pun
estructura histológica pero maligno por su evo ción sinusal y los cultivos del drenaje nasal no
lución, de crecimiento excéntrico y de gran po son confiables.
der destructor. El tratamiento empírico de las sinusitis bacte
El diagnóstico y el tratamiento debe realizarlo rianas agudas debe dirigirse contra los patógenos
el especialista. El infectólogo se limitará a inves bacterianos más comunes com o Streptococcus
tigar la presencia de microorganismos y realizar pneum oniae, HaemophUus influenzae, M oraxella
el tratamiento con antimicrobianos de acuerdo c a ta rrh a lis, S ta p h y lo c o cc u s a u reu s, S trepto-
con la sensibilidad. Los hallazgos bacteriológicos c o c c u s p y o g e n e s , B a c te r o id e s , P e p to s tr e p -
más frecuentes incluyen: S. aureus, P. aeruginosa, to co ccu s y F u sobacterium . Pueden utilizarse
Klebsiella, Froteus, E. coli, Prevotella y algunas a m oxicilin a, trim etoprim a-sulfam etoxazol o
especies de bacteroides. amoxicilina-clavulanato, durante 10 a 15 días. En
la sinusitis nosocomial los patógenos más fre
cuentes son S. aureus y bacilos gramnegativos.
SINUSITIS
En esta circunstancia conviene cultivar el mate
La más frecuente es la sinusitis maxilar, segui rial obtenido por punción aspirativa del seno afec
da por la etmoidal, la frontal y la esfenoidal. En tado, para guiar el tratamiento. A l inicio se indi
general es secundaria a una infección viral de las can antimicrobianos de amplio espectro que se
vías respiratorias altas. Muchas de estas infec adaptarán después al resultado del cultivo. La
ciones se complican con sinusitis bacteriana agu punción, para aspiración y lavado del seno, o la
da con repercusión clínica. cirugía, para ensanchar los orificios y drenar las
Las infecciones respiratorias altas de origen secreciones espesas, pueden resultar imprescin
viral aumentan la cantidad de m oco y dañan las dibles en la sinusitis aguda grave.
células ciliadas con lo cual retardan el tiempo de
transporte del moco y además, constituyen la cau
LARINGITIS
sa más frecuente de obstrucción de los orificios
de los senos paranasales. La rinitis alérgica, ya La laringitis se debe a la infiamación aguda de
sea por edema de la mucosa o por pólipos, es otra la mucosa laríngea, las cuerdas vocales y en oca
causa común de obstrucción de los orificios. La siones, también de la tráquea. La mayoría de los
intubación nasotraqueal o nasogástrica puede casos son producidos por los virus parainfluenza
determinar la obstrucción de los orificios, por lo y en ocasiones por M ycoplasm a pneum oniae. La
que constituye un factor de riesgo para las sinu laringitis aguda se caracteriza por la aparición de
sitis nosocomiales. Las infeccione.s alveoloden- ronquera y tos sin estridor. Suele acompañar a
tarias, como granulomas, osteítis, abscesos o quis las rinitis y faringitis víricas. La terapéutica es
tes periapicales originan sinusitis maxilares en sintomática y consiste en humidificar el aire inha
un 5% a 10% de los casos, lo cual es debido a la lado y el reposo de la voz. También son aconse
proximidad de la cúpula alveolar con el piso del jables las nebulizaciones. Si se produce infección
seno maxilar com o ocurre con las raíces de los bacteriana secundaria, se utilizarán ios antimicro
segundos premolares, y de los primeros y segun bianos.
114 G - G eneralidades - Síndromes clínicos
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11
rxxap.'.::
Se tratarán las infecciones del tracto respirato bronquitis provocadas por los virus del resfrío
rio inferior en el siguiente orden: traqueobron- común, como rinovirus y coronavirus, es raro que
quitis aguda, traqueobronquitis crónica, neumo haya fiebre.
nía aguda, neumonía crónica, absceso pulmonar La auscultación torácica se caracteriza por
y pleuresía. estertores gruesos que se modifican con la tos;
no hay disnea ni cianosis. Puede haber molestias
y dolor retroesternal asociados con la tos. En ge
TRAQUEOBRONQUITIS AGUDA
neral, es una afección que se autolimita en 10 a
La traqueobronquitis aguda es la inflamación 15 días.
del árbol traqueobronquial asociada por lo gene El tratamiento es fundamentalmente sintomá
ral con una infección respiratoria viral. Los virus tico: antipiréticos y antitusivos. En general los
capaces de provocarla son: influenza, parain- antibióticos no están indicados, dada la natura
fluenza, adenovirus, rinovirus, coronavirus, vi leza viral de la mayoría de las traquebronquitis
rus sincitial respiratorio, virus Coxsackie A21, agudas. D e sospecharse micoplasma, clamidias
virus de la rubéola, del sarampión y otros; y las o infección bacteriana, pueden utilizarse ma-
bacterias son Bordetella pertussis, M ycoplasm a crólidos, com o claritromicina, roxitromicina o
pneumoniae y C hlam ydia pneum oniae. También azitromicina.
es posible hallar Streptococcus pneum oniae y
Haemophilus influenzae, aunque no está estable
TRAQUEOBRONQUITIS CRÓNICA
cido con claridad su papel patogénico.
Los microorganismos patógenos provocan al La traqueobronquitis crónica es la inflamación
teraciones de la mucosa traqueobronquial, como de! árbol traqueobronquial que se caracteriza por
inflamación, edem a, hipersecreción m ucosa, tos e hipersecreción mucosa. La causa más co
mucopurulenta o sanguinolenta con daño de la mún es el hábito tabáquico; otras son la inhala
función mucociliar. El virus influenza puede pro ción de vapores irritantes en algunas actividades
ducir necrosis del epitelio. laborales y el reflujo gastroesofágico. En ocasio
La tos es el síntoma predominante de la tra nes hay antecedentes de alergia o asma. La
queobronquitis aguda; puede ser seca o con ex reagudización de la traqueobronquitis crónica
pectoración. La temperatura varía de acuerdo con suele ser de causa infecciosa y tiene com o agen
el agente etiológico determinante, 38®C o más tes etiológicos los ya considerados al estudiar la
en las infecciones por virus influenza, adenovi traqueobronquitis aguda y en especial a M o-
rus y M ycoplasm a pneum oniae. En las traqueo- raxella c a ta n halis.
116 □ - G eneralidades - Síndrom es clínicos
Etiología Epidemíología
Varía según: a) la edad del paciente, b) el lugar Las infecciones respiratorias constituyen afec
de adquisición de la neumonía (de la comunidad ciones frecuentes. Los procesos que afectan las
o extrahospitalaria, y nosocom ial o intrahos- vías aéreas superiores (faringitis, laringitis, tra-
pitalaria) y c) la presencia de enferm edades queítis) son habitualmente banales; sin embargo,
preexistentes. En el recién nacido predominan los las infecciones del tracto respiratorio bajo pue
gérm en es adquiridos en e l canal del parto den causar un compromiso grave de la salud y
{Escherichia coli, estreptococos grupo B). En el aun de la vida del paciente, en especial cuando
niño son más frecuentes H aem ophiliis influenzae existen enfermedades preexistentes com o diabe
y Streptococcus pneum oniae. En el adulto, 5. tes, alcoholism o, inmunodepresión, tabaquismo
pneum oniae es el agente identificado en el 40% o enferm edad pulm onar obstructiva crónica
al 80% de los casos de neum onías extrahos- (EPOC). Las neumonías recurrentes se incluyen
pitalarias. dentro de las enfermedades marcadoras del sida
Los pacientes con diabetes o bronquitis cróni (ver el capítulo Enfermedad por el Virus de la
ca, así como los alcohólicos y ancianos, pueden Inmunodeficiencia Humana- HlV/sida).
sufrir infecciones por bacilos gramnegativos, en La neumonía neum ocócica puede presentarse
especial K lebsiella pneum oniae, E . co li y En- en cualquier estación, pero es más común duran
tero b a cter spp. Los portadores de leucem ia, te el invierno.
mieloma múltiple, anemia de células falciformes Los serotipos que causan neumonía con mayor
o los sometidos a esplenectom ía sufren infeccio frecuencia en adultos son 1 , 3 , 4 , 5 , 7 , 8 , 1 2 ,1 4 y
nes por gérm enes capsulados com o S. p n e u 19. Los adultos normales pueden ser portadores
m oniae o H . influenzae. del neum ococo en las vías aéreas superiores y
En las neumonías intrahospitalarias predomi desempeñar un papel importante en la disemina
nan los bacilos gramnegativos resistentes a los ción de los serotipos patógenos, en especial en
antibióticos. Son especialmente frecuentes P seu las comunidades cerradas. En estas circunstan
dom onas aeruginosa, K. p neum oniae, E. coli, cias, la aparición de infecciones respiratorias
Proíeus sp, Enterobacter sp, Serratia m arcescens virales puede dar lugar a epidemias de neumo
y A cinetobacter calcoaceticus. En estos casos nías bacterianas, en especial por neum ococos y
también puede identificarse S ta p h y lo c o c c u s estafilococos.
aureus com o agente etiológico. La neumonía neum ocócica complica con fre
Las neumonías por gérmenes anaerobios son cuencia a los pacientes con anesplenia anatómi
frecuentes en pacientes con alteraciones del sen ca o funcional, como también a los portadores de
sorio, ya que éstas permiten la aspiración de m ieloma múltiple o hipogammaglobulinemia.
f
secreciones orofaríngeas. También la enfermedad
periodontal origina un incremento en el número Patogenia
de bacterias anaerobias de la cavidad bucal, las L os m icroorgan ism os pueden alcanzar el
que causan infecciones graves cuando son aspi- parénquima pulmonar por tres vías:
C apítulo 11 - Infecciones del tracto respiratorio inferior □ 117
• Por penetración a través de las vías respira pulmonares, hasta alcanzar las cisuras, lo que
torias, ya sea por inhalación de microorganismos origina la consolidación de todo el lóbulo.
suspendidos en el aire o por aspiración de los pre Evoluciona en cuatro períodos establecidos por
sentes en las secreciones orofaríngeas. La mayor Laennec: en la porción más externa del área de
parte de las neumonías, en especial las de adqui consolidación aparece una zona de congestión y
sición extrahospitalaria, responden a este meca edema, en la cual los alvéolos están llenos de un
nismo. líquido seroso acelular poblado de bacterias. Por
• Por extensión directa, a partir de un foco con dentro se observa una zona con abundantes
tiguo situado en el mediastino o en el espacio leucocitos y fenómenos de fagocitosis. Más ha
subfrénico. En estos casos suele producirse un cia adentro se comprueba una zona de consolida
empiema pleural. ción, donde los alvéolos están repletos de célu
• Por disem inación hem ática desde un foco las. En la periferia predominan el edema y la he
séptico distante. Es el caso de las tromboflebitis morragia, lo que se denom ina «hepatización
sépticas o la endocarditis derecha. roja». En las áreas más centrales de la lesión, la
densa infiltración leucocitaria explica el color
En estas situaciones se producen fallas en los característico de la «hepatización gris».
mecanismos de defensa naturales del pulmón La bronconeum onía se caracteriza por la pre
contra las infecciones. Éstos son de 2 tipos: sencia de exudado purulento en el interior de los
bronquiolos terminales y alvéolos adyacentes. El
1. Locales, que son muy importantes para ase exudado es más denso y apenas se difunde a tra
gurar la esterilidad habitual de bronquios y vés de la pared alveolar. Se trata de una bron-
alvéolos. Dentro de ellos, los principales son: q u io lo a lv eo litis supurativa y ulcerativa, con
a) las defensas de superficie, en especial la acti necrosis de la pared bronquial, trombosis vascular
vidad mucociliar, enzimas antiinfecciosas ines- y abscedación del parénquima. Si los abscesos
pecíficas (lisozima) y sustancias con actividad peribronquiales comunican con la vía aérea, en
inmunitaria específica como la IgA secretoria de tra aire a la cavidad del absceso y se forma el
las mucosas, presente en las secreciones salival, neum atocele característico, por atrapamiento
nasal y bronquial; b) los m acrófagos alveolares, aéreo. La infección se difunde por vía bronquial
adaptados en particular a la fagocitosis y muy y origina m ú ltip les fo c o s de co n so lid a ció n
importantes para garantizar la integridad del pul lobulillar. La extensión desde el intersticio a la
món profundo, y c) el reflejo tusígeno desperta serosa es causa de exudación y derrame pleural.
do por cualquier material extraño que trasponga En las neumonías intersticiales la reacción infla
la glotis. matoria predomina en el intersticio, con edema y
2. G en era les, representados por las inmu- exudado compuesto por células mononucleares.
noglobulinas séricas, que pueden alterarse en for Cuando la infección so localiza en el espacio
ma cualitativa o cuantitativa (hipogamm aglo- subpleural, puede originar un exudado serofí-
bulinemias o agammaglobulinemias). brinoso de naturaleza reactiva, o bien un empie-
ma si el germen invade la pleura.
Las neumonías agudas bacterianas siempre es
tán asociadas con una alteración transitoria o per Clasificación
manente de estos mecanismos de defensa del pul Las neumonías pueden clasificarse de acuerdo
món. con criterios anatómico, patogénico, etiológico
y clínico.
Anatomía patológica
La neum onía lobular se caracteriza por la pre 1. El criterio anatóm ico contempla el sitio de
sencia de un exudado fíbrinopurulento en el in asiento del proceso. Se denominan, entonces, neu
terior de los alvéolos. La infección se extiende monía lobular, lobulillar o bronconeumonía, y
en forma centrífuga y progresa hacia los alvéolos neumonía intersticial o neumonitis. En la neu
vecinos sin respetar el límite de los segmentos m o n ía lo b u la r, provocada por S trep to co c cu s
118 □ P r / m ^ r a - G eneralidades - Síndromes clínicos
pneumoniae, el microorganismo alcanza el parén- causal o por los resultados de las pruebas sero-
quima pulmonar por vía aérea, se disemina en for lógicas. Según este criterio se clasifican en neu
ma centrífuga, llega a los espacios aéreos perifé monías por virus, hongos o bacterias (rickettsias,
ricos - a través de los conductos de Lamben- y pasa micoplasma o clamidias).
de un alvéolo a otro a través de los poros de Kohn.
En la bronconeum onía el proceso inflamatorio 4. La clasificación clínica las divide en neu
comienza en la vía aérea y de allí se propaga al m onías bacterianas localizadas, grupo que com
parénquima circundante, com o ocurre en la prende las neumonías agudas sim ples no supu
bronconeumonía por Staphylococcus aureus. rativas, limitadas a un segmento o lóbulo pulmo
En la neiim onitis la inflamación compromete nar, y las neumonías agudas supurativas o absce
el intersticio pulmonar, como en el caso de las so de pulmón. Las primeras suelen tener buen
neumonitis por virus, micoplama o clamidias, que pronóstico y en general se curan sin secuelas. Las
en general determinan neum onías atípicas. supuraciones pulmonares requieren tratamiento
más intensivo y prolongado. Pueden dejar secue
2. El criterio patogénico toma en cuenta el es las y, en algunas oportunidades, el tratamiento
tado previo del huésped y la vía de llegada de los m édico debe completarse con la cirugía.
microorganismos al árbol bronquial. Se denomi Las neum onías bacterianas graves se denomi
nan neum onías prim arias o prim itivas aquellas nan así por la extensión del fo co infeccioso
que afectan a pacientes sin alteraciones previas y (bronconeumonías de focos m últiples), por la
son provocadas por los microorganismos habi presencia de microorganismos resistentes a los
tuales del árbol respiratorio, como la neumonía antimicrobianos o por comprometer a gerontes,
neumocócica. inmunodeficientes, pacientes con trastornos car
Son secundarias las que se instalan en indivi díacos o individuos con EPOC.
duos afectados por enfermedades orgánicas o de
ficiencias inmunitarias previas. Son causadas por Además se las clasifica en neum onías de la
microorganismos oportunistas, poco patógenos en c o m u n id a d o e xtra h o sp ita la ria s y neum onías
condiciones habituales pero capaces de inducir nosocom iales o intrahospitalarias.
infección respiratoria en algunas circunstancias,
como la neumonía por P seudom onas aeruginosa Manifestaciones clínicas
que compromete a pacientes intubados y en asis La neum onía neum ocócica tiene un período de
tencia respiratoria mecánica. incubación que oscila entre 1 y 3 días.
Las neum onías hem atógenas o m etastásicas El com ienzo es agudo y brusco, con fiebre alta
son aquellas en las cuales lós microorganismos (39®C a 40®C), escalofrío intenso y duradero, y
llegan al pulmón transportados por la circulación dolor torácico en forma de puntada de costado.
sistémica. En estos casos debe investigarse la pre La tos es productiva, con expectoración mucopu-
sencia de un foco séptico extrapulmonar. Es fre rulenta, hemoptoica o herrumbrosa.
cuente la disposición bilateral de las lesiones, En los pacientes de edad avanzada o debilita
com o en el caso de la neumonía estafilocócica. dos la presentación es insidiosa, con febrícula,
Las neum onías aspirativas son la consecuen deshidratación y confusión mental.
cia del ingreso al pulmón de microorganismos El examen físico muestra un síndrome de con
provenientes de la encrucijada aerodigestiva. Son densación, a veces con compromiso pleural. En
frecuentes en pacientes con compromiso de la un 25% a 30% de los casos hay episodios de
conciencia que aspiran secreciones o en los ali bacteriemia con hemocultivos positivos. La neu
mentados por sonda nasogástrica. Los agentes monía neumocócica es la fom ia más frecuente
etiológicos más comunes son anaerobios y baci de neumonía extrahospitalaria. Strep to co ccu s
los gramnegativos. pneum oniae es un diplococo grampositivo, lan
ceolado, aerobio, anaerobio facultativo, que en
3. La clasificación etiológica depende del la un medio de agar sangre da una reacción alfahe-
boratorio, ya sea por reconocimiento del agente molítica. Su principal componente antigénico es
C apítulo 11 - Infecciones del tracto respiratorio inferior □ 119
la cápsula, que puede ponerse de manifiesto uti tos productiva con expectoración mucopurulenta
lizando el antisuero específico de tipo, que pro y, en ocasiones, hemoptisis y dolor pleurítico.
duce su tumefacción (reacción de Quellung). Produce neumonía lobular o segmentaria, con
La neum onía estafilocócica es una neumonía frecuente derrame pleural paraneumónico y, a
grave, de frecuente adquisición intranosocomial, veces, bacteriemia.
que rara vez se presenta como enfermedad pri Pseudom onas aeruginosa es un bacilo gramne-
maria. Síaphylococcus aiireus es un coco gram- gativo aerobio, no fermentados que se aísla con
positivo que se agrupa en racimos y en agar san frecuencia de nebulizadores, humidificadores,
gre desarrolla colonias doradas (de allí el nom filtros de aire, aparatos de asistencia respiratoria
bre). Hay dos formas de presentación de neumo y cánulas de traqueostom ía. En todos estos
nía estafilocócica. La primera es la que aparece reservorios se pueden mantener las condiciones
con posterioridad a in feccion es respiratorias necesarias para la supervivencia del microorga
virales del tipo de la influenza o el sarampión. nismo. Además este agente resiste habitualmen
Estas últimas provocan modificaciones anatómi te la acción de los antisépticos utilizados para
cas y funcionales del epitelio respiratorio que esterilizar estos equipos.
predisponen a la sobreinfección bacteriana. La Las condiciones predisponentes para la adqui
otra forma de presentación es la asociada con sición de neumonía por P. aeruginosa son que
infección sistémica (metástasis sépticas pulmo maduras graves, EPOC, fibrosis quística, anti-
nares y en otros parénquimas). bioticoterapia prolongada previa, terapéutica con
Suele haber causas predisponentes, com o corticosteroides, neoplasias sólidas o leucemias.
catéteres venosos, adicción a drogas intravenosas, Las infecciones por este agente adquieren su
diálisis crónica, inm unodepresión, diabetes y máxima frecuencia en los pacientes neutropénicos
otras. El com ienzo es agudo o subagudo, con fie con menos de 5(K3 granulocitos neutrófílos/mm^.
bre, escalofríos, disnea, tos y dolor pleurítico. No El cuadro clínico es el de una bronconeumonía
es frecuente el hallazgo del síndrome de conden difusa bilateral, con compromiso de varios lóbu
sación completo. Se auscultan estertores húme los y tendencia a la formación de abscesos. Las
dos o crepitantes en varios focos y signos de de lesiones predominan en los lóbulos inferiores. En
rrame pleural. los cuadros sépticos, el ectima gangrenoso es un
Las neum onías p o r bacilos gram negativos -d e signo cutáneo orientador de esta etiología.
elevada mortalidad- constituyen más del 60% de K lebsiella pneum oniae es un bacilo gramne-
las adquiridas en el hospital. Se adquieren: a) por gativo capsulado que se dispone de a pares o en
aspiración endógena de la flora orofaríngea, que cadenas cortas. Las neumonías que causa se ca
es el mecanismo más común. Luego de 48 a 72 racterizan por comprometer más de un lóbulo y
horas de internación los pacientes presentan una se localizan con mucha frecuencia en el lóbulo
colonización creciente de la región orofaucial por superior del pulmón derecho. En general hay un
gérmenes gramnegativos, cuyo ingreso al pulmón aumento del volumen del lóbulo, con abomba
por aspiración es tanto más probable cuánto más miento de la cisura menor, y es frecuente la abs-
deprimidas se encuentren las defensas del hués cedación. El com ienzo suele ser agudo, con
ped. Esto ocurre en especial en casos de compro fiebre, escalofríos, sudoración, tos productiva,
miso del sensorio por drogas, anestesia o estados disnea y dolor pleurítico. El esputo es mucoge-
de coma. También es frecuente en pacientes año latinoso, adherente, color rojo ladrillo -m ezcla
sos con EPOC o en inmunodeprimidos; b) p o r de sangre y m o co - en «jalea de grosellas». A ve
aspiración exógena de bacterias presentes en el ces la hemoptisis es franca. La diabetes y el al
ambiente hospitalario, y c) p o r disem inación coholism o son factores predisponentes. Puede
hemática a partir de un foco infeccioso ubicado causar neumonías intrahospitalarias o extrahospi-
en el tubo digestivo o el aparato genitourinario. talarias.
H aem ophiius influenzae afecta a pacientes con El examen físico revela un síndrome de con
EPOC, alcohólicos y ancianos. El cuadro clínico densación lobular. En el 20% de los casos se
se inicia en forma brusca con fiebre, escalofríos. acompaña de bacteriem ia con localizacion es
120 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndromes clínicos
extrapulmonares com o pericarditis, meningitis, de obtener una muestra adecuada del esputo. La
poliartritis y ótras. expectoración se obtiene de un golpe de tos pro
A diferencia de otras neumonías por gramne- fundo, para evitar la contaminación con secre
galivos, las neumonías por E scherichia co li son ciones nasofaríngeas; se la coloca en un frasco
casi siempre secundarias a bacteriemia origina estéril y se procesa antes de las dos horas. El exa
da en focos sépticos gastrointestinales, abdomi men directo con coloración de Gram -d e impor
nales o genitourinarios (pielonefritis, abscesos, tancia fundam ental- se correlaciona con el culti
diverticulitis). vo en el 75% de los casos. La muestra debe con
El cuadro clínico no difiere del de otras neu tener menos de 10 células epiteliales y más de 25
monías, compromete con mayor frecuencia los leucocitos PMN por campo microscópico de bajo
lóbulos inferiores y suele acompañarse con em- aumento.
piema. El examen bacteriológico del líquido pleural
Serraíia marcescens es un bacilo aerobio gram- (directo y cultivo) tiene gran valor diagnóstico.
negativo, oportunista y característico de las in La punción u*anstraqueal está indicada cuando el
fecciones nosocom iales. Al igual que P. aeru- paciente no puede expectorar, cuando existe com
ginosa, se relaciona con el empleo de elementos promiso de la conciencia, no se puede obtener una
para la asistencia respiratoria. Provoca cuadros muestra de esputo confiable o si se sospecha una
de bronconeumonía, con infiltrados apicales o infección por bacterias anaerobias. La punción
basales, y, con frecuencia, empiema. pulmonar aspirativa tiene las mismas indicaciones.
La fibrobroncoscopia con lavado broncoal-
Diagnóstico veolar es la principal indicación en las infeccio
El diagnóstico se basa en criterios clínicos, nes pulmonares en huéspedes inmunocompro-
microbiológicos y radiológicos. metidos sin diagnóstico o sin respuesta al trata
miento, así com o en aquellos pacientes en quie
Clínico nes se sospecha una neoplasia pulmonar.
Todo aumento súbito de la temperatura, acom Los hemocultivos deben realizarse en todos los
pañado por escalofríos, tos y dolor torácico de pacientes. Un 25% al 30% de las neumonías
tipo «puntada de costado», debe hacer sospechar neum ocócicas cursan con bacteriemia y hemo
el diagnóstico de neumonía. Sin embargo, durante cultivos positivos.
las primeras horas de la ev o lu ció n el dolor La contrainmunoelectroforesis en suero, orina
torácico y la tos pueden faltar, e incluso la aus o esputo es un método rápido y sencillo que per
cultación puede ser normal. En los ancianos el mite demostrarla presencia del antígeno capsular
diagnóstico de neumonía, com o el de cualquier del neum ococo en el 75% de los pacientes. Tam
otra infección, requiere un alto índice de sospe bién pueden utilizarse la coaglutinación y la aglu
cha debido a su escasa expresión clínica. En e s tinación del látex.
tos casos, la fiebre sin foco aparente, acompaña La PCR para neumonía bacteriana es un méto
da con taquipnea o desorientación, pueden ser los do rápido, sensible y específico, especialmente
únicos elem entos positivos para el diagnóstico. cuando se trata de microorganismos de difícil
Es importante tener en cuenta que una neumonía identificación com o L e g io n e lla p n eu m o p h ila ,
basal puede simular una afección intraabdominal, M y c o p la sm a p n e u m o n ia e , C h la m y d ia p n e u -
con dolor que sugiere una apendicitis o colecistitis m oniae y C hlam ydia psittaci.
agudas.
Radiológico
Microbiológico La radiografía de tórax orienta el diagnóstico
El diagnóstico de neumonía se confirma por el hasta tanto se obtengan los resultados del espu
aislamiento del agente causal en esputo, sangre, to, los hem ocultivos y la serología. En ia neumo
líquido pleural, punción transtraqueal o en m e nía neum ocócica es característica la consolida
tástasis sépticas. En algunos casos pueden ser ción lobular o segmentaria homogénea, con bron-
útiles los exámenes serológicos. Hay que tratar cograma aéreo. Dado que el proceso es alveolar.
Capítulo 11 ‘ Infecciones del tracto respiratorio inferior □ 121
para evitar el tabicam iento y las adherencias entre 0,1 a 1 mg/L y resistentes a las cepas con
pleurales. Sin tratamiento, puede llegar a abrirse CIM mayor de 1 mg/L. Estas últimas presentan
al exterior a través de la pared torácica (empie- grados sim ilares de resistencia a aminopeni-
ma de necesidad) o en un bronquio, lo que origi cilinas, m eticilina, isoxazolilpenicilinas, carbo-
na una fístula broncopleural. xipenicilinas y cefalosporinas de primera gene
Una complicación grave, en particular de la neumo ración, com o también a antimicrobianos perte
nía neumocócica, es la meningitis, que se presen necientes a familias diferentes de los betalactá-
ta en un 20% de las neumonías de esta etiología. micos, com o macrólidos y tetraciclinas. En cam
La endocarditis, la pericarditis y las artritis sép bio, las cefalosporinas de tercera generación son
ticas pueden complicar las neumonías estafilocó- altamente efectivas.
cicas. Es importante recordar que el mecanismo de
En la neumonía por KlebsieJla pneum oniae hay resistencia a la penicilina de los neum ococos no
destrucción rápida de tejidos, con tendencia a la se debe a la síntesis de enzimas inactivadoras,
supuración y abscedación. Son frecuentes las del tipo de las betalactamasas, sino que se esta-
complicaciones extrapulmonares, como pericar blece por alteraciones de las proteínas ligadoras
ditis y poliartritis. de la penicilina (PBP í?protein binding penicilin).
Para las cepas sensibles, el tratamiento de elec
Pronóstico ción e s la p en icilin a G só d ic a en d o sis de
Depende de la edad del paciente, las enferme 1.000.000 de UI por vía IV cada 6 horas, durante
dades previas, los datos clínicos, las alteraciones 7 a 10 días o hasta que la temperatura se manten
de laboratorio y radiológicas, y el patógeno invo ga normal durante 72 horas. Como alternativa
lucrado. para pacientes ambulatorios, puede utilizarse
Son signos de mal pronóstico la presencia de amoxicilina -5 0 0 mg cada 8 horas-, ampicilina
diabetes, insuficiencia cardíaca, EPOC, alcoho - 5 0 0 mg cada 6 horas- o claritromicina -5 0 0 mg
lismo, inmunodepresión, neoplasias, insuficien cada 12 horas por vía oral-. Para cepas resisten
cia renal, frecuencia respiratoria elevada, hipoten tes se utilizarán cefalosporinas de tercera gene
sión arterial sostenida, compromiso del sensorio, ración: cefotaxim a - 2 g IV cada 6 h oras- o
localizaciones extrapulmonares (m eningitis, en ceftriaxona - l a 2 g IV cada 12 horas-. En la
docarditis), anemia, leucopenia con neutropenia, mayoría de los casos la respuesta al tratamiento
hipoxemia y compromiso multilobular o derra es rápida, con defervescencia en crisis y notable
me pleural, y la edad mayor de 65 años. mejoría de los síntomas en 72 a 96 horas.
m
C apítulo 11 • Infecciones del tracto respiratorio inferior □ 123
bién puede comprobarse disnea de intensidad padecer estas infecciones. Por este motivo, la fre
variable, fiebre, hemoptisis y dolor pleurítico. cuencia de infecciones por anaerobios en pacien
Sem iológicam ente se comprueba síndrome de tes desdentados es menor. Para que se produzca
condensación y, a veces, broncospasmo. El espu la aspiración de las secreciones orofaríngeas es
to, por lo general mucopurulento, puede volver preciso que el paciente haya sufrido un descenso
se abundante por la existencia de bronquiec- en su nivel de conciencia, por anestesia, alcoho
tasias. lismo, adicción a drogas, coma de cualquier etio
logía, convulsiones o intervenciones bucofarín-
Diagnóstico diferencial geas. La aspiración es frecuente en pacientes afec
Se incluyen neumopatías crónicas de causa no tados por neoplasias de las vías aéreas superiores
infecciosa, com o neoplasias, sarcoidosis, granu- o del esófago. La obstrucción bronquial por carci
lom atosis de Wegener, neum oconiosis, inters- noma broncogénico, adenopatías o cuerpos extra
ticiopatías, eosin ofilia pulmonar, neumopatía ños también puede originar un absceso pulmonar.
lipoidea, etcétera. Los abscesos metastásicos pueden ser resulta
do del tromboembolismo pulmonar séptico ori
Tratamiento ginado en una endocarditis del corazón derecho,
Dependerá del agente etiológico determinante. de una tromboflebitis pelviana consecutiva a in
fecciones ginecológicas, de aborto séptico o de
la propagación de un absceso subdiafragmático.
A BSC ESO PULMONAR
£1 primer acontecimiento en la patogenia es la
Definición producción de una neumonía. Ulteriormente la
Es una infección supurativa en la que hay des trom bosis de lo s pequeños v asos origina la
trucción del parénquima y formación de una o isquemia de la zona neumónica, con liberación
varias cavidades, que contienen aire y líquido. de enzimas proteolíticas que generan necrosis y
licuefacción del tejido pulmonar. El contenido
Etiología líquido se vacía en el bronquio de drenaje con
Los abscesos provocados por Staphylococcus formación de una cavidad.
aureuSy K lebsiella pneum oniae, Streptococcus
pneumoniae y Pseudomonas aeruginosa suelen ser Manifestaciones clínicas
la consecuencia de la evolución hacia la cavita El com ienzo puede ser brusco o insidioso. Se
ción de neumonías causadas por dichos gérmenes. presenta con fiebre, dolor torácico, sudoración,
Los abscesos por anaerobios suelen tener el anorexia y pérdida de peso. A los pocos días se
antecedente de la aspiración de secrecion es agrega tos productiva. La expectoración, de un
orofaríngeas. Son provocados por los microor olor fétido característico, puede eliminarse en
ganismos que colonizan la cavidad bucal, en es grandes volúm enes luego de un acceso de tos
pecial los espacios intergingivodentales, y que (vóm ica). La hemoptisis es frecuente. En la ma
con frecuencia provocan periodontitis y absce yoría de los casos el interrogatorio permite des
sos apicales. Los agentes etiológicos son B acte- cubrir el antecedente de la pérdida de conciencia
roldes m elaninogenicus, B acteroides fr a g ilis y o de consumo excesivo de alcohol.
bacilos gramnegativos anaerobios com o FusO’ El examen físico pone en evidencia la existen
bacterium nucleatum y P revotella interm edia. cia de infecciones dentarias y gingivales, y una
zona de matidez con estertores húmedos en la zona
Patogenia afectada.
Los abscesos primarios del pulmón que invo A veces los abscesos pulmonares se acompa
lucran flora anaerobia habitualmente se produ ñan con empiema y fístula broncopleural.
cen por aspiración del contenido orofaríngeo; la
causa predisponente es la alteración del estado Diagnóstico
de conciencia. La presencia de gingivitis, perio Se establece con la radiografía de tórax, que
dontitis y caries dentales incrementa el riesgo de revela una cavidad con contenido líquido rodea
C a/i//íi/o i / ‘ Infecciones del tracto respiratorio inferior □ 125
da por un consolidación. Con frecuencia moptisis y septicemia. Esta última puede origi
demuestra un nivel hidroaéreo en la cavidad al nar metástasis sépticas en distintos órganos.
tomar radiografías en diferentes posiciones. Como
la aspiración suele producirse en decúbito supino, Tratamiento
el segmento posterior del lóbulo superior derecho Consiste en la administración del antimicro
y los segmentos posteriores de los lóbulos infe biano adecuado en las dosis precisas y durante el
riores, derecho e izquierdo, son los afectados con tiempo suficiente. Se indica penicilina G - 5 a 10
más frecuencia. Si la cavidad tiene un buen dre m illones de UI por día por vía intravenosa-. Si
naje en la luz bronquial, puede que no se observe los agentes causales son gérmenes productores
el nivel líquido y quede una cavidad residual. de betalactamasas, podrá utilizarse clindamicina,
El examen microbiológico del esputo suele de en dosis de 20 a 40 mg/kg/día, o metronidazol
mostrar el agente etiológico. Con frecuencia se “20 a 40 m g/kg/día- también por vía intravenosa.
hallan Staphylococcus aureus o Klebsiella pneu‘ El tratamiento debe mantenerse durante 4 a 6 se
moniae; mientras que en los abscesos pulmonares manas.
por aspiración hay flora mixta (aerobia y anaerobia). £1 drenaje postural facilita el vaciamiento de
Para la identificación de gérmenes anaerobios la cavidad, así como la broncoaspiración median
puede recurrirse a la aspiración transtorácica o te la broncoscopia.
transtraqueal, y en el empiema, a la punción y
aspiración del derrame pleural. PLEU R ESÍA S
Definición
Diagnóstico diferencial Pleuresía es la inflamación de la serosa pleural
El carcinoma broncogénico puede asemejarse con exudado hacia la cavidad o en su superficie.
a un absceso pulmonar primario cuando entra en Puede ser aguda o crónica y responder a diferen
un proceso de necrosis o si la obstrucción bron tes etiologías.
quial genera un absceso microbiano. La historia
clínica, el examen seriado de la expectoración con Etiología
estudios citológicos y microbiológicos, así como Pueden ser de causa infecciosa o no infeccio
la radiología y la tomografía computarizada y la sa. Las primeras, pueden provocarlas múltiples
broncoscopia con biopsia, ayudan al diagnóstico microorganismos.
diferencial entre ambas entidades. En los tumo
res el esputo no es fétido y radiológicamente la Patogenia
pared del absceso es irregular y más gruesa. La Los gérmenes pueden alcanzar la pleura por
tuberculosis suele tener un com ienzo más insi propagación linfática desde ganglios traqueo*
dioso, con síndrome de impregnación, esputo no bronquiales, hecho frecuente en la tuberculosis;
fétido, compromiso más frecuente de los lóbulos por diseminación hemática a partir de focos pul
superiores y la presencia en la expectoración de monares o extrapulmonares, y por propagación
bacilos ácido-alcohol resistentes. También debe directa o contigüidad desde lesiones de localiza
rán tenerse en cuenta aquellas m icosis bronco- ción subpleural o infradiafragmática.
pulmonares que pueden ca v ila rse, com o la
histoplasmosis, la coccidioidom icosis y otras.
Anatomía patológica
Los quistes pulmonares infectados tienen pa
redes delgadas en ausencia de consolidación La pleuresía serofibrinosa suele iniciarse como
periférica, con menor com prom iso del estado una pleuritis serosa y después, cuando la reac
general. Otros diagnósticos diferenciales son las ción exudativa es más importante, se transforma
bronquiectasias quísticas y el infarto pulmonar. en serofibrinosa. Es un líquido transparente ca
racterístico, límpido y ambarino, en cuyo sedi
Complicaciones mento se pueden observar linfocitos, macrófagos,
Las complicaciones más importantes del abs polimorfonucleares y células m esoteliales. La
ceso pulmonar son empiema, neumotórax, he mayoría de las pleuresías serofibrinosas son de
126 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndromes clínicos
etiología tuberculosa y suelen ser la primera ma te pleural. Tiene curso benigno y se autolimita
nifestación clínica de la infección bacilar. En es en 5 a 7 días sin dejar secuelas.
tos casos la histopatología a veces permite ob El tratamiento es sintomático; se basa en anal
servar los granulomas tuberculoides (folículos de gésicos, antiinflamatorios no esteroides y, even
Koster). tualmente, corticosteroides.
La pleuresía purulenta o em piem a se caracte Las pleuresías serofibrinosas se clasifican, de
riza por un exudado espeso, de color amarillo o acuerdo con su mecanismo de producción y la
verdoso, abundante y con mayor reacción infla com posición química del derrame, en trasudados
matoria pleural que en el caso de las pleuresías y exudados. Los trasudados responden al aumento
serofibrinosas. El exudado está compuesto casi de la presión hidrostática de los capilares (insu
en su totalidad por leucocitos polimorfonucleares ficiencia cardíaca congestiva, pericarditis cons
y pueden identificarse los m icroorganism os trictiva, síndrome de la vena cava superior) o a
causales. Puede ser unilateral o bilateral y por lo la disminución de la presión coloidosm ótica por
general es do causa bacteriana, tuberculosa o hipoalbuminemia (cirrosis hepática, síndrome
micótica. nefrótico y otros).
En general se producen por disem inación a Los exudados son de causa infecciosa (bacte
partir de un foco pulmonar supurativo, pero a rias, hongos, virus o parásitos) y no infecciosa
veces responden a una patogenia hemática o (neoplasias, enfermedades del colágeno, afeccio
linfática a partir de infecciones a distancia. Con nes intraabdominales com o abscesos subdiafrag-
m enos frecu en cia los a b sceso s subdiafrag- máticos o pancreatitis, sarcoidosis, uremia, trau
máticos, en especial del lado derecho, pueden matismos). La causa infecciosa más frecuente de
atravesar el diafragma y abrirse en la cavidad derrame pleural serofibrinoso es la pleuresía
pleural. tuberculosa (ver el capítulo Tuberculosis).
Sin el tratamiento adecuado, y en ocasiones a L as pleuresías p urulentas o em piem as se ca
pesar de él, el empiema puede desarrollar adh racterizan por la presencia de pus en la cavidad
erencias capaces de obliterar el espacio pleural y pleural y por la existencia de gérmenes en el lí
a veces calcificarse. quido. Se producen com o respuesta inflamatoria
La pleuresía hem orrágica responde a diátesis a un foco infeccioso de la vecindad, neumonías
hemorrágicas, hemotórax traumático o neoplasias (empiema paraneumónico) o abscesos. Tienen
pleurales. tendencia al tabicamiento, lo que dificulta el pos
terior drenaje del líquido. Los gérmenes que con
Manifestaciones clínicas mayor frecuencia provocan este tipo de derra
Dependen de la etapa evolutiva y el tipo de exu m es son los anaerobios, neum ococos y estafi
dado, se estudiarán las pleu ritis secas, las p le u lococos.
resías serofibrinosas, purulentas o empiemas.
Las pleuritis secas son producidas por proce Diagnóstico
sos inflamatorios localizados. Cursan con esca Se basa en el cuadro clínico con la tríada clási
so derrame y su principal característica es el do ca de dolor torácico, tos y disnea, y en el examen
lor pleurítico. Sus causas más frecuentes son las físico. Debe tenerse en cuenta que si los derra
infecciones virales y el trombocmbolismo pul mes son de pequeño volumen el examen físico
monar. De las infecciones virales, la más conoci puede ser normal. En derrames mayores el sín
da es la pleurodinia epidém ica, causada por el drome de derrame pleural se comprueba con
virus Coxsackie B , que afecta a adolescentes y matidez, disminución o abolición del murmullo
adultos jóvenes y se caracteriza por malestar ge vesicular y de las vibraciones vocales. La radio
neral, fiebre, odinofagia y dolores musculares grafía de tórax suele demostrar el derrame pleural.
difusos. Domina el cuadro un dolor intenso de Para confirmar el diagnóstico etiológico debe
tipo puntada de costado, acompañado por tos seca rá recurrirse a la obtención de líquido pleural
que aumenta con la respiración profunda. Como mediante toracocentesis. El color del líquido ob
signo auscultatorio característico se percibe fro tenido puede orientar hacia la etiología: citrino
C apítulo 11 - Infecciones del tracto respiratorio inferior □ 127
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Infecciones nosocomiales
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Las infecciones nosocom iales son producidas La invasión de los gérmenes es favorecida por
por microorganismos adquiridos en el medio hos la ruptura de las barreras de defensa del organis
pitalario. Constituyen un grave problema, que mo por cirugía, catéteres, sonda vesical, sonda (
afecta a cerca del 10% de los pacientes interna nasogástrica, intubación orotraqueal y traqueos-
dos en el hospital, genera mayor tiempo de inter tomía. Otros factores contribuyentes son la ali
nación, aumenta el costo hospitalario y produce mentación parenteral y los que dependen de los
mayor morbimortalidad. Esta cifra, de importan microorganismos.
cia creciente en la actualidad, se debe al empleo Los agentes etiológicos han variado a través
de técnicas agresivas, cuidados intensivos, tras de los años. Staphylococcus aureus fue el princi
plantes, quimioterapia, radioterapia, corticote- pal agente, luego se incrementó la frecuencia de
rapia y a la selección de microorganismos resis gramnegativos aerobios multirresistentes (ente-
tentes por el uso de antimicrobianos. Las locali robacterias y P seudom onas aeruginosa). En la
zaciones más frecuentes en orden de importan última década se mantuvo la incidencia de baci (
cia son: infección urinaria, infección de ¡a h eri los gramnegativos, pero hay un crecimiento im
da quirúrgica, neum onía y bacteriem ia. En cuan portante de las infecciones causadas por estafi 'i '
to a su etiología, en general se deben a microor lococos resistentes a la meticilina, coagulasa- -X
ganismos resistentes a los antimicrobianos. positivos y coagulasa negativos, estos últimos
Se admite que los microorganismos que cau considerados hoy verdaderos patógenos.
san las infecciones nosocom iales pueden ser de Otro problema de importancia creciente es la
origen endógeno o exógeno. Los primeros pro emergencia de EnterococcuSt asociada con el uso
vienen de la flora propia del paciente y los se indiscriminado de cefalosporinas de tercera ge
gundos de una fuente exterior. neración y quinolonas.
(t .
La transmisión de los gérm enes intrahospi- La infección por hongos del género C andida
lalarios es interhumana, lo que pone de manifiesto en general es favorecida por la utilización de ali
que el lavado de las manos es, en la práctica, la mentación parenteral. A continuación se tratarán
medida más eficaz de control de las infecciones las localizaciones antes mencionadas.
hospitalarias. (j
La microflora endógena -q u e desempeña un
INFECCIÓN URINARIA
papel fundamental en el desarrollo de las infec
ciones nosocom iales- es alterada por la estadía Es la infección nosocomial más frecuente, con
en el hospital y por el uso de antimicrobianos no una incidencia del 35% al 45%. El 80% de estos
selectivos. casos se asocia con la utilización de sondas c
f
c
l
130 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndromes clínicos
vesicales y el 5% ai 10% con otras manipulacio quirúrgico, la duración de éste, la estancia previa
nes del tracto genitourinario. Los factores de ries del enfermo en el hospital y la higiene del equi
go de la infección urinaria son el tiempo de per po quirúrgico.
manencia del catéter, la técnica para colocarlo y Las infecciones exógenas son en general mono*
la interrupción del sistema cerrado sonda-tubo microbianas, provocadas por bacterias com o
colector. Los agentes etiológicos en general pro estafilococos coagulasa-positivos o coagulasa-
vienen de la flora colónica del paciente y, con negativos, enterobacterias y Pseudom onas. Las
menor frecuencia, de fuentes exógenas (entero- infecciones endógenas son en general polimi-
bacterias y bacilos gramnegativos aerobios no crobianas, causadas por bacterias aerobias y
fermentadores). Las vías a través de las cuales anaerobias (bacteroides, enterobacterias, entero-
los gérmenes acceden a la vejiga, luego de la colo cocos, corinebacterias, clostridios).
nización periuretral, son básicamente tres: desde El diagnóstico de la infección posquirúrgica es
la uretra, en el momento de la inserción del caté difícil porque los síntomas, com o fiebre o dolor,
ter; por vía ascendente (a través de la uretra y la pueden deberse a causas no infecciosas, como la
superficie externa de la sonda) o por vía intralu- reabsorción de hematomas y exudados. El íleo
minal luego de la colonización de ésta. La última prolongado o el neumoperitoneo pueden ser la
es la vía más frecuente. La presencia de bacte expresión de la evolución del posoperatorio in
rias en la orina, aun con bajo recuento de unida mediato o deberse a com plicaciones infecciosas.
des formadoras de colonias (UFC), es un índice En la mayoría de los casos el tratamiento es
temprano de infección urinaria. Bacteriurias ma médico (aislamiento del agente etiológico y pres
yores o iguales a 1.000 UFC, más la presencia de cripción de antimicrobianos) y quirúrgico (dre
piuria, son indicadoras de infección. naje de los abscesos).
El tratamiento se basa en el aislamiento bacte La utilización de antibióticos, con propósito
riológico y el antibiograma, y en forma empírica profiláctico o terapéutico, no sustituye la técnica
mediante la utilización de los antimicrobianos quirúrgica adecuada. La profilaxis antibiótica se
elegidos de acuerdo con los patrones de resisten utiliza en las cirugías lim pias contam inadas (en
cia revelados por la vigilancia epidem iológica de éstas se penetra en el tracto digestivo, respirato
cada unidad de internación. rio, genitourinario o en la cavidad orofaríngea sin
contaminación significativa o infección previa),
y en las contam inadas (en estas intervenciones
INFECCIÓN DE LA HERIDA QUIRÚRGICA
se transgreden las medidas de asepsia quirúrgi
Es la segunda en frecuencia y representa el 10% ca, hay salida de material gastrointestinal o in
al 30% de las infecciones nosocomiales. La inci flamación aguda no purulenta, com o en la infec
dencia en tod os lo s p acien tes intervenidos ción del tracto urinario o biliar).
quirúrgicamente es del 5% al 17%. La infección No se realiza profilaxis antibiótica en las cirugías
puede ser superficial, por contaminación de la consideradas lim pias, que son aquellas interven
brecha operatoria, o profunda (abscesos o infec ciones en las cuales el único territorio potencial
ción protésica). La infección superficial es la más mente séptico que atraviesa el cirujano es la piel,
frecuente. por ejemplo en las hemioplastias. Las excepcio
Los factores de riesgo de la infección posqui- nes a esta regla la constituyen algunas cirugías lim
rúrgica son la capacidad patógena de las bacte pias en que s í está aceptado el uso de antibióticos
rias que contaminan la herida quirúrgica, las con profilácticos, como en la colocación de prótesis ar
diciones locales (hematomas, seromas, cuerpos ticulares, vasculares o de válvulas cardíacas.
extraños, prótesis, isquemia), el deterioro de los En las cirugías sucias o infectadas, com o las
mecanismos de defensa del huésped (edad avan heridas traumáticas abiertas o con tejido necró-
zada, neoplasias, diabetes, inmunosupresión), las tico, cuerpo extraño o contaminadas con pus o
fallas en ¡a esterilización del instrumental utili materia fecal, está indicado el tratamiento anti
zado, el grado de desinfección del quirófano, el microbiano, ya que esta definición presupone la
número de personas presentes durante el acto presencia previa de infección.
72 - Infecciones nosocom iales □ 131
La profilaxis se implementa en función de las Los agentes etiológicos aislados con más fre
bacterias halladas con más frecuencia según el cuencia son las enterobacterias pertenecientes al
sitio quirúrgico. En el caso de la cirugía torácica, grupo KES {KlebsieUa, Enterohacter, S e n atia),
ei antibiótico elegido deberá ser efectivo contra E scherichia coli, Pseudom onas, Acineíohacter y
cocos grampositivos, y en la cirugía abdominal estafilococos resistentes a la meticilina. La inci
lo será frente a enterobacterias y anaerobios. dencia de los microorganismos y el patrón de
sensibilidad a distintos antibióticos varían según
neumonía nosocom ial
las características de cada unidad de cuidados
intensivos. Esto pone de manifiesto la importan
Constituye 10% a 15% del total de las infec cia de la implementación de un sistema de vigi
ciones adquiridas en el hospital. Esto significa lancia epidem iológica, cuyos resultados deben
que el 0,5% al 1% de los pacientes internados servir para determinar el tratamiento empírico
sufrirán neumonía nosocomial. inicial. Éste es un paso fundamental y decisivo
La mortalidad se acerca al 33% y afecta sobre para la elección de un tratamiento eficaz. La
todo a poblaciones de pacientes hospitalizados mortalidad de la neumonía nosocom ial oscila
de alto riesgo. Del 30% al 50% del total de las entre un 30% y un 70%.
neumonías nosocomiales se presentan en pacien
tes internados en terapia intensiva, de éstas el 50%
BACTERIEMIA
aparece luego de intervenciones .quirúrgicas y el
50% restante tras maniobras de intubación y ven Las manifestaciones clínicas son proteiformes,
tilación mecánica. Los factores de riesgo para el el paciente puede estar asintomático, presentar
desarrollo de neumonía nosocomial son la pre signos clínicos de sepsis o síntomas relaciona
sencia de intubación nasotraqueal u orotraqueal, dos con el foco secundario.
la disminución del nivel de conciencia, la enfer En la práctica el diagnóstico se fundamenta en
medad pulmonar obstructiva crónica, la aspira el aislamiento ~en los hem ocultivos- de microor
ción del contenido gástrico, los antecedentes de ganism os considerados patógenos. Las bac-
cirugía torácica o abdominal y la edad superior a teriemias en general se producen en áreas cerra
los 70 años. das: unidades de cuidados intensivos (UCI), uni
Tras 48 horas de estadía en la unidad de cuida dades de diálisis o unidades de neonatología.
dos intensivos la tasa de colonización por baci Pueden dividirse en primarias, sin un foco claro
los gramnegativos entéricos de la flora del pa de origen, o secundarias a un foco séptico identi-
ciente es superior al 70%. ficable (pulmonar, digestivo, urinario, piel y par
En los pacientes con alteración de la concien tes blandas) y representan el 70% de los casos,
cia, trastornos en la deglución, vaciamiento gás mientras que las bacteriemias asociadas con caté
trico lento o disminución de la motilidad del tubo teres son sólo ei 10%.
digestivo se producen microaspiraciones de con Los factores de riesgo son las edades extremas
tenido orofaríngeo, que es la vía más frecuente de la vida, la neutropenia, las quemaduras, las
de desarrollo de la neumonía nosocomial. Ade enfermedades subyacentes y la presencia de in
más de la pérdida de las barreras naturales, la fección previa. Los gérmenes más frecuentes, en
intubación orotraqueal favorece las filtraciones orden de importancia, son bacilos entéricos gram
bacterianas alrededor del tubo. La sonda naso- negativos, cocos grampositivos -co m o estafilo
gástrica puede favorecer la colonización al per cocos y enterococos-y bacilos gramnegativos no
mitir la migración de las bacterias por sus pare fermentadores, com o A cinetobacter y P seu d o
des hacia la faringe. m onas. La fungemia por Candida por lo general
La elevación dcl pH gástrico por encima de se asocia con la alim entación parenteral, la
cuatro, debida a la utilización de antiácidos, fa antibioticoterapia de amplio espectro, la estancia
vorece en más del 70% la colonización de la prolongada en UCI y las complicaciones posqui-
mucosa gástrica por bacilos entéricos gramne rúrgicas de la cirugía abdominal. Los gérmenes
gativos. asociados con más frecuencia a sepsis por dispo
132 □ Prim era parte - G eneralidades - Síndromes clínicos
sitivos intravasculares son Staphylococcus aureus depende de la virulencia de la bacteria, del estado
y S. epidermidis^ con patrones de sensibilidad di previo del paciente, de la edad, de la repercusión
ferentes a los aislados en la comunidad. Son por sistémica, del tratamiento del foco de origen y de
lo común resistentes a la meticilina. El pronóstico la antibioticoterapia adecuada y precoz.
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134 O P r / m ^ r a - G eneralidades - Síndrom es clínicos
lériles. Los mecanismos que preservan y mantie Varios factores predisponen a la aparición de lU:
nen esta condición son:
• Alteraciones anatómicas o funcionales de las
• Vaciamiento vesical. vías urinarias (cálculos pieloureterales, válvulas
• Transporte ureteral y válvulas vesicoureterales. uretrales, fim osis, tumores, estenosis cicatrizales
• Poder antibacteriano del líquido prostáiico. y otras).
• Fagocitosis. • Daño renal previo, de causa infecciosa o no.
• Sistema inmune competente. • Instrumentación del árbol urinario (sondas,
• Propiedades fisicoquím icas de la orina. catéteres).
• Factores antimicrobianos del urotelio. • Embarazo (por la compresión mecánica de
las vías urinarias debido al útero grávido y la ac
Los gérmenes pueden llegar al árbol urinario ción miorrelajante de la progesterona sobre la
por 3 vías principales. musculatura lisa de los uréteres).
• Diabetes.
Ascendente. Es la más frecuente y consiste en • Relaciones sexuales.
la propagación de gérmenes desde la uretra distal. • Estados de inmunodepresión.
La mayor incidencia de lU en mujeres demues
tra la importancia de esta vía. Además hay factores diversos relacionados con
los microorganismos responsables que influyen
H emática. Mucho menos frecuente que la an en su capacidad uropatógena o virulencia; éstos,
terior, se debe a la localización renal de ciertos más la resistencia del huésped, condicionan la
procesos generalizados. Se observa en caso de gravedad de la infección.
infecciones debidas a Staphylococcus aureus (en Entre los factores de virulencia más importan
el curso de estafilococem ias), C andida albicans tes pueden citarse:
(en casos de sepsis por este microorganismo) y
por M ycobacterium tuberculosis (siempre secun • Antígenos O y K (lipopolisacáridos y poli-
daria a un foco pulmonar). sacáridos).
• Adhesinas, en particular las fimbrias.
Linfática. Las evidencias reales de que puedan • Hemolisinas.
llegar gérmenes al árbol urinario exclusivam en • Sideróforos o proteínas captadoras de hierro.
te por esta vía son escasas y controversiales. Sin
embargo, es posible, debido a la existencia de co En relación con la fisiopatogenia de las lU en
nexiones linfáticas entre la vejiga y los riñones a la mujer, debe destacarse el valor de los reser-
través dei tejido submucoso ureteral. vorios de los microorganismos que provienen de
la flora fecal, que colonizan el introito vaginal y
El concepto de lU implica la colonización de luego la uretra. E. coli suele reemplazar la flora
la orina por microorganismos o la invasión por normal de la vagina o del introito, constituida
parle de éstos de estructuras del árbol urinario, o principalmente por L a cto b a cillu s sp, C oryne-
ambas cosas. La presencia de bacterias en la ori bacterium sp y anaerobios. Además, las células
na (bacteriuria) es el denominador común de uroepiteiiales de mujeres con lU recurrentes per
ambos procesos, aunque hay algunas excepcio miten una mayor adherencia bacteriana que las
nes de lU sin bacteriuria demostrable (TBC, m i de mujeres normales.
cosis, tratamiento antibiótico previo, presencia de El hallazgo de E. coli en la vagina debe hacer
formas L o protoplastos, pielonefritis crónica, pH sospechar la existencia de lU . Es importante en
u osmolaridad urinaria en valores extremos). tonces controlar la colonización uretral en muje
La presencia de bacteriuria no siempre implica res portadoras de E. coli en la vagina y efectuar
la existencia de una lU , sino que es un dato anor en ellas tratamientos con antisépticos, com o una
mal de laboratorio que habrá que evaluar en el forma de evitar la aparición de episodios recu
contexto global del cuadro clínico. rrentes de lU .
C apítulo 13 - Infecciones urinarias □ 135
Las cepas de E. coli que producen lU altas tie punta de las pirámides renales. Suele ser bilate
nen características de virulencia que facilitan el ral y constituye una forma grave de exterioriza-
desencadenamiento de ese proceso. De esta ma ción de la pielonefritis aguda, en particular en los
nera. cuando una cepa hemolítica y poseedora de pacientes diabéticos y en los no diabéticos que
fimbrias P llega a la vejiga, puede localizarse con padecen obstrucción importante de las vías urina
facilidad en el parénquima o la pelvis renal sin rias, como en el caso de la hipertrofia prostática.
que medie alteración estructural alguna de las vías La pionefrosis es la distensión de la pelvis re
urinarias. nal, los cálices y el uréter, que se cubren con un
exudado purulento como consecuencia de pielo
nefritis con obstrucción, en especial litiásica, de
anatomía patológica
la vía urinaria.
La p ie lo n e fr itis a g u d a es la in flam ación La cistitis aguda se caracteriza por la hiperemia
supurativa de un riñón o de ambos, producida por de la mucosa, que puede cubrirse con un exuda
cualquier microorganismo piógeno. Es análoga do purulento, amarillento o blanco grisáceo. Si
a la supuración o formación de absceso en otros el proceso continúa, el aspecto normal, atercio
tejidos. El signo histológico característico es la pelado, de la mucosa es reemplazado por una su
necrosis supurativa, que puede presentarse como perficie hem orrágica, granulosa y friable, a
abscesos focales en uno o ambos riñones, o como veces con ulceraciones superficiales. El predo
áreas extensas de supuración capaces de destruir m inio del componente hemoiTágico, constituye
grandes segmentos del riñón e incluso todo el ór la cistitis hem orrágica, mientras que si prevale
gano. En general la invasión bacteriana es mayor ce el exudado, se denomina cistitis supurativa.
en la médula, pero cuando las bacterias han pro- El progreso de la infección puede provocar la
liferado invaden la corteza, en la que producen cistitis ulcerosa, originada por el esfacelo y ulce
una reacción inflamatoria más intensa. En la in ración de grandes zonas de la mucosa. Por último,
fección grave y confluente los abscesos sustitu la infección puede extenderse a la pared subya
yen casi todo el parénquima renal, lo que da lu cente, donde causará ulceraciones profundas y abs
gar al cmtrax. La propagación a través de la cáp cesos intramurales, con edema inflamatorio e
sula hacia los tejidos adyacentes conduce a la isquemia que dan lugar a la cistitis gangrenosa.
formación del absceso perirrenal. En c a so s m uy a v a n za d o s o cuand o lo s
En una etapa temprana la infiltración con pre microorganismos son muy virulentos, la infec
dominio de polimorfonucleares se circunscribe ción puede atravesar la pared de la vejiga y dar
al tejido intersticial; luego progresa hacia los lugar a abscesos p eriv esica les, perforación,
túbulos, a los que destruye. peritonitis pelviana y fístulas hacia órganos
La luz tubular es una vía fácil de extensión del vecinos.
proceso infeccioso a los tubos colectores. Por úl La persistencia de la infección origina la cistitis
timo se terminan destruyendo los glomérulos. El crónica, que sólo difiere de la forma aguda en el
exudado dentro de los túbulos da origen a los c i carácter del infiltrado inflamatorio, que en este
lindros granulosos o leucocitarios que se obser caso mostrará el predominio de linfocitos.
van en el sedimento urinario.
La pielonefritis crónica se caracteriza por la
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
presencia de cicatrices renales, focales o difusas,
con engrosamiento de la cápsula y reducción del Los signos y síntomas clásicos de las lU son
tamaño del órgano. En el examen histológico las dolor lumbar, fiebre, pujos y tenesmo vesical, di
zonas del riñón atacadas son reemplazadas por suria y polaquiuria, cuya frecuencia varía según
tejido fibroso e infiltración intersticial en la que se trate de lU altas o bajas. En ciertas situaciones
predominan linfocitos y células plasmáticas. no hay sintomatología urinaria específica; no obs
Algunos tipos especiales de pielonefritis inclu tante, debe hacer sospechar la lU y descartar su
yen la p apilitis necrotizantcy que es una com bi presencia, el retraso en el crecim iento en los
nación de necrosis isquémica y supurativa de la lactantes, la fiebre de origen desconocido, la
136 □ Prim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
hipertensión arterial en personas jóvenes y la dia poco frecuentes y deben atribuirse a errores en la
betes descompensada sin causa aparente. elección de la terapéutica o a obstrucciones, li
En los niños portadores de lU son frecuentes las tiasis o alteraciones anatómicas de las vías uri
manifestaciones gastrointestinales y la enuresis. narias. Para establecer esta posibilidad de mane
En el interrogatorio de los pacientes afectados ra fehaciente, debe recurrirse a métodos micro-
por lU deberán tenerse en cuenta los anteceden biológicos precisos que brinden el biovar, el sero-
tes de instrumentación del árbol urinario, los em var y el antibiovar de la cepa en estudio, en espe
barazos, las internaciones previas y las enferme cial de las diferentes cepas de E. c o li, de la que
dades asociadas. se reconocen más de 170 serovares diferentes.
Para su mejor comprensión, las lU se pueden Las reinfecciones son la causa más frecuente
clasificar, desde un punto de vista anatomoclfnico, de las recidivas; suelen presentarse con frecuen
en distintos tipos que se describen a continuación. cia en mujeres sexualmente activas o en pacien
tes con alguna forma de obstrucción urinaria, en
lU aguda no complicada especial litiasis.
Es aquella que aparece en sujetos sin altera En ambos casos, recaídas o reinfecciones, de
ciones estructurales ni funcionales del árbol uri ben buscarse los factores predisponentes para
nario y que no se asocia con sondas ni cuadros corregirlos o eliminarlos.
de sepsis. Se caracteriza por disuria, polaquiuria,
incontinencia de orina y dolor suprapúbico, los lU asintomática o bacteriuria asintomátíca
que expresan e l com prom iso de la m ucosa Se caracteriza por dos urocultivos positivos
vesical. En su etiología predomina E. c o li (90% para el mismo microorganismo, acompañados por
de los casos) y suele responder muy bien al trata sedimento urinario normal y ausencia de mani
miento antimicrobiano. festaciones clínicas. Su presentación aumenta con
Hay que tener en cuenta que estos síntomas la edad, y es más frecuente en el sexo femenino
pueden corresponder a cuadros de vaginitis sin y en los diabéticos.
lU . Si el cultivo convencional de la orina resulta
negativo, hay que considerar la posibilidad de que C istitis abacteriana
se trate de un síndrome uretral femenino, (ver más Se defme por la presencia de síntomas vesicales
adelante). También estos mismps síntomas pue y sedimento urinario patológico, con urocultivos
den presentarse en el curso de una pielonefritis. reiteradamente negativos.
prostática duele a la palpación, se encuentra au aguda, lU alta subclínica, uretritis y vaginitis.
mentada de tamaño e indurada en forma focal o La orientación hacia uno u otro diagnóstico < "
difusa. La bacteriuria es frecuente y el tratamiento dependerá de las características del sedimento uri
debe incluir fármacos que alcancen concentra nario, del resultado del recuento de colonias y del ( ■
ciones elevadas en el tejido prostético com o microorganismo identificado.
rifampicina, cotrim oxazol, fluoroquinolonas, Las pacientes consultan habitualmente por «ar
macrólidos y tetraciclinas. Debido al alto riesgo
de bacteriemia, mientras no se hayan logrado ni
dor al orinar» y disuria de instalación aguda o gra C
dual. También es importante en estos casos inte
veles adecuados en sangre de un antimicrobiano rrogar acerca de la existencia de secreción vaginal (
apropiado no se debe practicar el masaje pros o cervicovaginal anormal y solicitar el examen
tético durante la fase aguda de la enfermedad. microbiológico de la orina, de la uretra y de la se i
La prostatitis crónica es la causa más común creción cervicovaginal. Además de los habituales
K
de episodios recidivantes de lU en el hombre patógenos causantes de lU baja o cistitis, es fre
adulto. El tacto rectal y la ecografía pueden no cuente el aislamiento de otros agentes, como N. i
ayudar al diagnóstico, ya que la inflamación cró gonorrhoeae, U. urealyticum y C. trachomatis.
nica de la glándula no siempre se acompaña con Se considera que un 30% a 40% de los diag t-
su hipertrofia. nósticos de lU baja en mujeres sexualmente acti
Para el diagnóstico está indicada la toma de vas son erróneos y que en realidad éstas padecen <
diferentes muestras. La primera es de orina uretritis o vaginitis. 4
uretral, o sea del primer chorro de la micción; la A veces el SU F puede responder a causas no
segunda es la del chorro medio, la tercera es la infecciosas, lo que hay que sospechar cuando el i
de secreción prostética obtenida por masaje y la sedimento urinario arroje recuentos de menos de
última, la de orina emitida luego del masaje de la 5 leucocitos por campo microscópico de 400 au t. ■
glándula. Se confirma con un recuento bacteriano mentos. Por el contrario, la ausencia de desarro
%r
diez veces mayor en el líquido prostético o en la llo de microorganismos en la orina obtenida por
orina emitida después de esta maniobra que en la chorro m edio, pero con sedim ento patológico % ^
orina del segundo chorro de la micción. A sim is (más de 5 leucocitos por campo microscópico de
mo, el recuento de polimorfonucleares en la se 400 aumentos) deberá conducir al estudio del
creción prostética deberá ser mayor de 10 leuco material uretrovaginal.
citos por campo microscópico, que es el máximo Si esto no fuera posible, es aceptable instaurar
número normal observado en el líquido no infec el tratamiento empírico con un antimicrobiano
tado. Si es imposible obtener el líquido prostético activo sobre los agentes causales del SUF, sobre
por medio del masaje, el semen puede ser una todo luego de la falla de una terapéutica conven
muestra adecuada. cional para una lU .
El tratamiento de la prostatitis crónica es pro
longado, dura no menos de 6 a 12 semanas. A pe
lU en algunas circunstancias especiales
sar de esto, el índice de curaciones oscila entre el
35% al 70%. Cuando no es posible esterilizar la En el recién nacido
glándula, deberán tratarse los episodios de lU o Las lU son muchas veces secundarias a cua
utilizar un esquema de profilaxis de largo plazo. dros de sepsis (vía hemática). Su incidencia va
ría del 1% en los mayores de 2.500 g hasta el
10% en los pretérmino, con predominio en los
Síndrome uretral femenino (SUF)
varones. En 70% a 75% de los casos son causa
Es un cuadro clínico relevante y frecuente en das por E. coli, seguida por K lebsiella y Staphy-
la mujer sexualmente activa, caracterizado por lococcus coagulasa negativos.
ardor al orinar en ausencia de fiebre y dolor lum
bar e inexistencia de antecedentes de lU . En la m ujer embarazada
Puede asociarse con diversas entidades clíni Se increm enta la incidencia de bacteriuria
cas; entre las cuales las más frecuentes son cistitis asintomática, que si no se controla puede llevar a
138 O P rim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
Orquitis
COMPLICACIONES
Suele observarse en pacientes de más de 40
Sepsis años con infección urinaria, som etidos a mani
Las infecciones urinarias constituyen un foco pulación urológica y en general a partir de una
de sepsis muy frecuente, con capacidad para lle epididimitis.
var al shock séptico y a la muerte.
PRONÓSTICO
Absceso perinefrítico
Es la colección de pus en la celda renal, como En las l ü sin obstrucción ni reflujo vesicou-
consecuencia de la rotura de un microabsceso de reteral el pronóstico es bueno. Pero la existencia
la corteza renal en el curso de una pielonefritis de cualesquiera de las dos circunstancias men
aguda. Los gérmenes responsables más frecuen cionadas lo ensombrece, porque hacen posible
tes son E. coli y S. aureus, que se propagan hacia que evolucione hacia un deterioro progresivo de
los tejidos perirrenales a través de la cápsula re la función renal.
nal. Su manifestación clínica puede ser la de una Los recién nacidos, las embarazadas, los pa
l ü alta con fiebre persistente a pesar del trata cientes diabéticos, los inmunodeprimidos y los
miento antibiótico, o com o un síndrome febril de gerentes constituyen grupos de alto riesgo por la
com ienzo insidioso y de difícil interpretación. probabilidad de com plicaciones.
La ecografía y la TC de abdomen permiten rea
lizar el diagnóstico. La etiología podrá determi
TRATAMIENTO
narse por medio de urocultivos, hemocultivos o
p u n ción p ercu tán ea d ir ig id a con co n tro l Medidas generales
ecográfico. • A bundante hidratación. Su finalidad es dis*
En general son abscesos muitiloculares, cuyo minuir la osmolaridad urinaria del intersticio re
tratamiento incluye el drenaje quirúrgico y la nal, lo que reduce la multiplicación bacteriana y
administración de antibióticos en función del re favorece la fa g o c ito sis y neutralización por
sultado de los cultivos. En casos seleccionados anticuerpos a ese nivel. Una diuresis adecuada
se podrá intentar el drenaje percutáneo. facilita además el arrastre miccional de las bac
terias vesicales.
Abscesos perivesicales
Se producen en casos muy avanzados o causa • A u m en ta r la frecu en cia m iccional. El objeti
dos por gérmenes muy virulentos, lo que da lu vo es disminuir el tiempo que la orina permane
gar a fístulas hacia los órganos vecinos, perfora ce retenida en la vejiga.
ción y peritonitis pelviana.
• Tratam iento sintom ático. D e ser necesario,
Litiasis se realizará con antiespasmódicos y analgésicos.
Se denominan «cálculos infecciosos» porque
se producen com o consecuencia de la infección La co n ju n c ió n de h id ra ta ció n adecuada,
vesical o renal por bacterias productoras de m icciones frecuentes y mantenimiento de un pH
ureasa. Por lo general son de gran tamaño. Los urinario ácido, así com o la fagocitosis de los
de la pelvis renal pueden ser coraliformes. La leucocitos polimorfonucleares son por lo gene
mayoría de los pacientes presenta anomalías de ral suficientes para eliminar las lU bajas en au
las vías urinarias (reflujo o estenosis) que favo sencia de com plicaciones u obstrucciones, siem
recen la infección. pre que se trate de un paciente sin alteraciones
inmunitarias ni enfermedades basales. La admi
Epididim itis nistración de antimicrobianos ayuda a reducir el
Es una inflamación aguda del epidídimo que tiempo necesario para que los urocultivos se vuel
en general se produce por reflujo deferencial de van negativos, en consecuencia limitan el riesgo
orina uretral infectada. de com plicaciones.
T
C apítulo 13 - Infecciones urinarias □ 141
ca, deben practicarse urocultivos de control a los manteniendo la dosis nocturna del antibiótico y
15, 30 y 180 días de finalizado el tratamiento. recolectando la orina por la mañana, con no me
nos de 3 horas de retención. Estos pacientes de*
8. R espuesta al tratam iento ben ingerir líquido en abundancia, a fin de man
Los síntomas urinarios y la fiebre suelen des tener una adecuada diuresis. Con ello se reduce
aparecer en 3 a 5 días. La persistencia de la tem la osmolaridad medular, lo que favorece las de
peratura obligará a descartar una obstrucción del fensas biológicas y evita el desarrollo de formas
tracto urinario o un tratamiento inadecuado. L bacterianas (bacterias sin pared).
La orina se vuelve estéril en 24 a 48 horas; los En estos casos también son útiles las micciones
urocultivos de control se efectuarán 7 a 10 días y frecuentes y después del coito (en especial las
4 a 6 semanas después de la finalización del tra mujeres).
tamiento. Para los pacientes con cateterismo vesical per
Durante el tratamiento los urocultivos sólo se manente la profilaxis incluye: 1) colocación de
efectuarán si no hay respuesta clínica luego del un equipo estéril con la máxima asepsia posible,
quinto día o si el ancibiograma indica resistencia 2) lavado de manos cada vez que haya que mani
al antimicrobiano utilizado. pular la sonda, 3) mantener el drenaje cerrado y
la sonda permeable, 4) fijar el catéter para evitar
traumatismos, 5) evitar las irrigaciones y 6) man
PROFILAXIS
tener siempre la bolsa de drenaje por debajo del
Está indicada en los siguientes casos: nivel de la vejiga. El cateterismo vesical, aun con
• Pielonefritis agudas no complicadas recidivantes. una asepsia rigurosa, es una fuente indudable de
• Pielonefritis ascendentes crónicas. lU , ya que el paso de la sonda arrastrados gérme
• Cistitis recidivante de la mujer en relación nes de la uretra anterior hasta el interior de la
con la actividad sexual. vejiga. Por tal razón, la sonda vesical permanen
• Prostatitis crónicas. te sólo debe ser una indicación de necesidad. En
• Pacientes con sonda. lo posible, si el paciente vacía en forma espontá
• Cirugía e instrumentación urológica. nea la vejiga conviene utilizar colectores, o bien
realizar cateterismos intermitentes procurando
Para las 4 primeras circunstancias puede utili retirar la sonda con lentitud a fin de lograr un
zarse trimetoprima/sulfametoxazol, 160 + 800 vaciamiento completo de la vejiga.
mg, o norfloxacina, 200 a 400 mg, o cefadroxilo, Para la cirugía y los procedimientos de instrumen
500 mg 3 veces por semana en una dosis oral tación urológicos se administra trimetoprima/sul
nocturna. En la cistitis recidivante de la mujer en fam etoxazol, 160 + 800 mg, respectivamente, o
relación con la actividad sexual, la dosis se ad norfloxacina, 400 mg por vía oral, o gentamicina
ministrará antes o después del coito. La profi por vía IM en dosis de 4 mg/kg, desde 2 horas
laxis se instituye durante 6 m eses. Ante la sospe antes y cada 12 horas durante las 24 horas poste
cha de TU sintomática, se efectuará el urocultivo riores al procedimiento.
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Ui'
Infecciones perineales
Ornar j. Palmieri
Roberto G. Castiglioni
R*
Se describirán brevemente las infecciones peri y cultivo. Se elimina el aire del interior de la jerin
neales que son m otivo frecuente de consulta ga y la punta de la aguja se ocluye con un tapón de
infectológica. En la mayoría de ellas el tratamien goma. Esta maniobra tiene por objeto recuperar la
to es médico y quirúrgico. Este último -parte in ñora anaerobia. Otras veces será enviado al labo
soslayable de la terapéutica- permite el drenaje ratorio el material obtenido con hisopo estéril, el
de colecciones purulentas o la reparación de las cual se introduce en un tubo con medio de trans
alteraciones anatómicas producidas por la infec porte, o también muestras de tejido en tubo o fras
ción. El tratamiento médico, complemento indis co estéril con solución fisiológica, además de las
pensable del quirúrgico, está fundamentalmente remitidas en solución de formol para el estudio
dirigido a su agente etiológico, el que será identi histopatológico. Si no se dispone de laboratorio
ficado con antelación para poder indicar una tera de bacteriología en el momento de la obtención
péutica adecuada. Por lo tanto, inmediatamente del material, se realizarán 5 o 6 extendidos en
antes de la prescripción de los antimicrobianos portaobjetos, los que se dejan secar al aire para lue
siempre se lleva a cabo el estudio bacteriológico go entregarios al laboratorio. También se sembrará
de los materiales obtenidos del foco infeccioso. 0,5 a 1 cm^ del material en un frasco de hemocul-
Mientras se esperan los resultados de los exáme tivo. Éste puede dejarse a la temperatura ambiente
nes bacteriológicos, estos fármacos serán admi hasta llevario al laboratorio. El resto dcl materia! se
nistrados en forma empírica contra los patógenos guarda en la heladera a disposición del bacteriólogo.
más frecuentes o probables. La localización, evo El cultivo, que se hace en aerobiosis y anaerobiosis,
lución y manifestaciones clínicas del proceso in es fundamental para el correcto diagnóstico micro-
feccioso a veces permiten suponer la identidad del biológico y el antibiograma, el que permitirá ajus
o los agentes etiológicos. También es posible in tar el tratamiento antimicrobiano en forma racio
dicar una terapéutica racional orientada por el re nal. Si el criterio clínico lo justifica, también se rea
sultado del examen directo de las muestras con la lizarán hemocultivos, un mínimo de tres muestras.
coloración de Gram. Éste se realiza en pocos m i Aquí se considerarán las pautas terapéuticas
nutos y es conveniente disponer de su resultado con antimicrobianos de las infecciones perineales
antes de la indicación de los antimicrobianos. Es más frecuentes, sin considerar otras alternativas.
importante respetar las técnicas de recolección
adecuadas para que los resultados sean confiables.
A BSC ESO S PERIAN ALES Y RECTALES
En lo posible las colecciones se punzan y aspiran
con jeringa, la cual se remite de inmediato al la La teoría criptoglandular explica el mecanis
boratorio de bacteriología para su examen directo mo de la infección e incluso su etiología bacte
144 □ Prim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
C
€
C
146 G Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
zona, como la trombosis hemorroidal aguda, las vical uterino, neoplasias vulvares, carcinoma del
fisuras o los traumatismos. La sífilis secundaria pene y del ano. En la actualidad se acepta la trans
se manifiesta en la zona perianal como condilomas misión sexual de los condilomas acuminados. El
planos. Hay que hacer el diagnóstico diferencial diagnóstico es esencialmente clínico. La citología
con los condilomas acuminados por HPV. Para el con la tinción de Papanicolaou es la técnica más
diagnóstico se recurre al examen en fondo oscuro, empleada para la detección de las infecciones por
que tanto en el chancro como en los condilomas HPV; son características la c o ilo c ito sis y la
planos permite la observación de los treponemas. disqueratosis. El diagnóstico diferencial hay que
Además deben realizarse las reacciones sero- plantearlo con el m olusco contagioso y con los
lógicas no treponémicas (inespecíficas), como la condilom as planos de la sífilis secundaria. La
VDRL, y las treponémicas (específicas), com o multiplicidad de tratamientos de esta afección
la FTA-Abs. El tratamiento de la sífilis primaria pone de manifiesto su escasa eficacia. Los m éto
y secundaria consiste en la administración de dos utilizados son de destrucción local; el más
penicilina benzatina -2 .4 0 0 .0 0 0 U por vía intra empleado es la tintura de podofilino al 25%, la
muscular, una vez por semana durante 4 a 6 se cual no debe permanecer más de 2 horas en con
manas-. En los alérgicos a la penicilina se utili tacto con la piel y se aplica 1 a 2 veces por sema
zará doxiciclina -2 0 0 mg vía oral 2 veces por día na. Está contraindicada en el embarazo. Otro
durante 15 d ías- (ver el capítulo Enfermedades agente citotóxico es el ácido tricloroacético en
de transmisión sexual). solución al 50%, que se aplica una vez por sema
na. Puede provocar úlceras de cicatrización
tórpida. También se utilizan métodos quirúrgicos
H ERPES SIM PLE
y los interferones alfa y beta (ver el capítulo En
K1 virus del herpes simple tipos I y II puede fermedades de transmisión sexual).
provocar lesiones perianales. Comienza con la
«parición de múltiples vesículas confluentes, las
LINFOGRANULOMA VENÉREO
(|uc dan lesiones policíclicas que luego se trans-
íorman en úlceras dolorosas. En los inmunocom- Es ca u sa d o por C h la m y d ia tr a c h o m a tis ,
pclcntcs las lesiones evolucionan en forma e s serotipos L l, L2 y L3. La lesión inicial puede
pontánea a la curación en 10 a 15 días, pero en presentarse com o una pápula, una úlcera de poca
los inmunocomprometidos se cronifican y sólo profundidad o erosión, o com o lesión herpe-
se curan con el tratamiento adecuado. Se utiliza tiforme. Los linfáticos retroperitoneales pueden
aciclovir en dosis de 200 a 800 mg cada 4 horas estar afectados y producir estenosis rectales. Es
por vía oral, evitando la toma nocturna, o sea 5 una enfermedad de transmisión sexual. El diag
dosis cada 24 horas durante 10 días. nóstico de laboratorio se realiza con anticuerpos
Puede complementarse con la aplicación local m onoclonales (inmunofluorescencia directa) o
de cremas con aciclovir. Las lesiones suelen in por métodos inmunoenzimáticos (ELISA). El tra
fectarse en forma secundaria, lo que requerirá tra tamiento de elección es doxiciclina - 1 0 0 mg 2
tamiento con antimicrobianos (ver el capítulo En- veces por día, durante 15 a 20 d ía s-. También
Icrmedades por virus de la familia Herpesviridae). pueden utilizarse eritromicina, claritromicina,
roxitromicina y azitromicina (ver el capítulo En
fermedades de transmisión sexual).
CONDILOMAS ACUMINADOS
de la escarificación de las lesiones o por histo- Son células grandes cuyos núcleos tienen un ta
palología. maño aumentado y presentan una gran inclusión
hialina rodeada de un halo claro que rechaza la
Sarcoma de Kaposi cromatina contra la membrana nuclear. En el cito
Es una n eop lasia m ulticéntrica de origen plasm a pueden v erse pequeñas in c lu sio n es
endotelial. Su frecuencia es mayor en los hom basófilas. Este virus suele causar una infección
bres homosexuales o bisexuales; la mujer adquie diseminada en las etapas tardías de la infección
re la enfermedad por el contacto sexual con hom por HIV con lesiones ulcerosas a cualquier nivel
bres bisexuales. La enfermedad se caracteriza por del aparato digestivo, com o la boca, el esófago,
máculas, pápulas, placas o nódulos, cutáneos o el estóm ago, el colon y la región perianal. El
mucosos; tienen una coloración que va desde el diagnóstico se establece con la demostración
rosa pálido hasta un rojo violáceo intenso y se de las inclusiones virales típicas en la citología o
distribuyen en todo el tegumento. El diagnóstico en la biopsia de las úlceras. Hay controversias
es clínico e histopatológico y el diagnóstico di respecto de este virus como causa de la afección
ferencial se hace con la angiomatosis bacilar. sintom ática, inclu so cuando se lo encuentra
en las lesiones. Un gran número de cuerpos de
Carcinoma anogenital inclusión en los tejidos y la presencia de un pro
Es más común en los varones homosexuales, con ceso inflamatorio intenso o vasculitis típica por
independencia del HIV y en relación con el HPV CM V son elem en tos importantes que corre
oncogénico. Con la inmunodepresión, los cambios lacionan el virus con las lesiones. En ciertas opor
displásicos progresan hacia procesos malignos. tunidades se observa coexistencia con el HSV.
El diagnóstico diferencial debe plantearse con las
Citomegatovirus úlceras perianales descriptas precedentemente. El
Es un virus ADN que debe su nombre al aspec tratamiento es con ganciclovir o foscarnet.
to característico de las células afectadas por él.
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proporción de 3 a 1. La edad de mayor frecuen grandes vasos. En otros, pueden deberse a focos
cia de aparición se sitúa entre los 30 y los 40 años, sépticos dentarios o a infecciones pulmonares.
aunque esto varía de acuerdo con la etiología. En los abscesos postraumáticos o posquirúr-
gicos los microorganismos penetran a través de
Patogenia la herida.
Los agentes causales de abscesos pueden lle
gar al parénquima encefálico en forma directa, Anatomía patológica
desde un foco contiguo o por vía hemática. En la El proceso patológico muestra una evolución
mayoría de los pacientes puede comprobarse un que pasa por diferentes etapas: 1) cerebritis ini
foco infeccioso vecino, en especial sinusal u cial, 2) cerebritis tardía y 3) necrosis central ro
ótico. En estas situaciones los microorganismos deada por cápsula. La formación de esta última
llegan por diseminación directa, a través de una depende de cien o s factores, com o la concentra
osteom ielitis o de una tromboflebitis. El foco ción de oxígeno, las características de patogeni-
ótico suele originar abscesos de cerebro, mien cidad del microorganismo y la respuesta inmu-
tras que el foco mastoideo genera abscesos de nitaria del paciente. Esta evolución puede ser dis
cerebelo. La sinusitis frontal puede generar abs tinta en los enfermos inmunocomprometidos.
cesos en el lóbulo frontal.
La llegada de los gérmenes por vía hemática Manifestaciones clínicas
se hace a partir de focos distantes. Su localiza Se estima que, en general, menos de la mitad
ción preferencia! es en el territorio de la arteria de los pacientes presenta la tríada clásica de fie
silviana, que es la responsable del mayor aporte bre, cefalea y alteraciones neurológicas focales.
de sangre al cerebro. La ubicación en la región Los síntomas relevantes son los propios de la
de la arteria cerebral media desencadena habi masa ocupante más que los infecciosos. En estos
tualmente abscesos poco encapsulados. casos la signosintom atología neurológica estará
En algunos casos los abscesos encefálicos son de acuerdo con la localización del proceso. Por
secundarios a cardiopatías congénitas, en espe este motivo, en caso de abscesos cerebelosos el
cial tetralogía de Fallot y transposición de los paciente llega a la consulta por ataxia, nistagmo
y dismetría. Los abscesos encefálicos múltiples debe continuarse durante cuatro a seis semanas
generan cuadros clínicos confusos. (15-2). Ante la ausencia de un diagnóstico etio-
lógico, el tratamiento empírico se basará en el
Diagnóstico mecanismo patogénico que llevó a la formación
El diagnóstico se sospecha por los anteceden del proceso supurativo.
tes del enfermo y por la presencia de un síndro En la mayoría de los pacientes se requiere el
me de hipertensión intracraneana. La punción drenaje quirúrgico. En estos casos la aspiración
lumbar está contraindicada en todos los casos en mediante la cirugía estereotáctica es el procedi
que se sospecha un absceso, por la posibilidad miento de elección. Sin embargo, con la aspira
de enclavamiento del tronco cerebral. La tomo- ción no siempre se logra el drenaje completo, en
grafía computarizada (TC) es el procedimiento especial en lesiones con múltiples tabiques.
radiológico de elección, ya que permite la locali
zación del proceso infeccioso no sólo a nivel del
A BSC ESO S SUBD URALES
parénquima encefálico, sino también del foco de
origen si éste está ubicado en ios senos parana- Definición
sales o el oído. Sin embargo, las imágenes por Los abscesos o empiemas subdurales son pro
resonancia magnética (RM) ofrecen ciertas ven cesos supurativos que se localizan en el espacio
tajas por sobre la TC, ya que permiten detectar virtual existente entre la superficie interna de la
precozmente los signos de cerebritis. En todos duramadre y la externa de la aracnoides. Se pre
¡os casos es importante solicitar el estudio con sentan en general com o e m p iem a s u b d u ra l
sustancia de contraste, ya que es la única forma intracraneano, aunque también se lo observa
de evidenciar la existencia de la cápsula. En los com o em piem a subdural espinal.
centros especializados la aspiración del material
purulento, mediante el procedimiento estereotác-
Absceso subdural intracraneano
tico, permite realizar el diagnóstico ijiicrobioló-
gico. Etiología
Entre los microorganismos responsables se in
Diagnóstico diferencial cluyen con más frecuencia los estreptococos anae
El diagnóstico diferencial del absceso encefá robios y los estafilococos, aunque también puede
lico incluye el empiema subdural, las masas tu- deberse a otros gérmenes aerobios y anaerobios.
morales del encéfalo, el quiste hidatídico, los
aneurismas cerebrales y el hematoma subdural o Patogenia
intraparenquimatoso. Las imágenes de laT C o la El proceso llega al espacio subdural a través
RM pueden resolver muchos de estos diagnósti de las venas emisarias o por contigüidad de una
cos diferenciales. osteom ielitis del cráneo. En la mayoría de los
casos la infección se origina en los senos parana-
Pronóstico sales, los frontales o los etmoidales, con pocas
Depende de la localización, del agente etioló- manifestaciones clínicas. En los niños el empie
gico, de la precocidad del diagnóstico, y del tra ma subdural es casi siempre una complicación de
tamiento rápido y adecuado. A pesar de los nue las meningitis bacterianas y es producido por los
vos y más efectivos antimicrobianos, así como mismos microorganismos involucrados en ella.
de los avances en las técnicas neuroquirúrgicas,
los abscesos encefálicos aún son una enferme Anatomía patológica
dad grave. El proceso supurativo puede afectar uno o am
bos hemisferios. En algunas ocasiones se produ
Tratamiento ce una reacción inflamatoria en el espacio suba-
En todo paciente en quien se sospeche la pre racnoideo. En otras, el edema cerebral vecino al
sencia de un absceso encefálico se iniciará la te foco infeccioso determina una mala evolución si
rapéutica antimicrobiana de inmediato, la que no se efectúa con rapidez el drenaje quirúrgico.
154 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
m
Manifestaciones clínicas con antimicrobianos efectivos contra S. aureuSy ade
El empiema subdural se manifiesta clínica más del drenaje quirúrgico, a fm de prevenir el daño
mente con fiebre, vómitos, cefalea y compromi medular.
so m eningoencefalílico. Después aparecen los
signos neurológicos focales, acompañados por ios
A B SC E SO S EPIDURALES
propios de la hipertensión intracraneana. En oca
siones el cuadro sigue una evolución fulminante Definición
o subaguda. El tratamiento previo con antibióticos Los abscesos epidurales son infecciones loca*
puede enmascarar los síntomas. En los niños el lizadas entre la duramadre y el cráneo (absceso
comienzo suele ser inespecífíco, con irritabilidad epidural intracraneano) o entre la duramadre y
y rechazo de la alimentación. En los lactantes la columna vertebral {absceso epidural espinal).
puede observarse aumento del perímetro cefálico En general sus límites son netos y se acompañan
y abombamiento de las fontanelas. con osteom ielitis local.
Tratamiento Diagnóstico
La terapéutica se basa en tres principios: 1) ma El diagnóstico se basa en la fiebre persistente,
nejo del edema cerebral, 2) antibioticoterapia la leucocitosis con neutrofilia y las manifestacio
durante no menos de tres semanas, con antibió nes neuroiógicas focales. La RM o la TC son los
ticos de amplio espectro, de acuerdo con la etio procedimientos diagnósticos de elección.
logía y 3) el drenaje quirúrgico. Este último debe
realizarse sin tardanza, en especial en aquellas Pronóstico
situaciones que progresan con rapidez. El pronóstico es favorable si el tratamiento es
el adecuado.
Absceso subdural espinal
Es una entidad infrecuente, cuyo agente etioló- Tratamiento
gico habitual es Staphylococcus aureiis. La locali Todo absceso epidural debe considerarse como
zación topográfica más común es la región ver una urgencia neuroquirúrgica. Se practicará el
tebral torácica y lumbar. Los síntomas sugesti drenaje del proceso supurativo, lo que evitará la
vos de la presencia de un empiema subdural evolución hacia un empiema subdural. La tera
espinal son los propios de la compresión medular. péutica es con antimicrobianos cuyo espectro
La RM es el procedimiento diagnóstico de elec abarca estreptococos aerobios y anaerobios, y
ción. El tratamiento debe iniciarse con rapidez estafilococos.
C apitulo 15 - A bscesos del sitem a nervioso central O 155
B ib liografía - ............................................................................................................................................................
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Meningitis
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Ornar J. Palmieri «
cs*«.r.ii.*Kía‘3».»35?5W~ia^;»í;:a5íií5-'rci2ES£?aKriia^^
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El sistem a nervioso central está recubierto por traumatismos, infecciones contiguas, neuroci- ((
tres membranas: la duramadre^ la aracnoides y rugía o fístulas del LCR que drenen hacia la piel,
la piam adre. oídos o fosas nasales. <
La duram adre, dura y fibrosa, es la más peri Estos procesos inflamatorios producen altera
férica y su superficie exterior está adherida al ciones del LCR y se extienden por todo el espa
periostio. Se la denomina paquimeninge y su in cio subaracnoideo del encéfalo, la médula espinal i
flamación, paquimeningitis. y a veces, de los ventrículos cerebrales. Con fre
La hoja parietal de la aracnoides está íntima cuencia el encéfalo está involucrado en mayor o (
mente adherida a la superficie interna de la menor grado, por lo que la mayor parte de las
duramadre y la hoja visceral se extiende sobre m eningitis son, en realidad, m eningoencefalitis. 'i
las partes salientes de la superficie cerebral. En t
tre la hoja parietal y visceral de la aracnoides hay
SÍNDROME MENÍNGEO
un espacio virtual. i
La piam adre, que es la membrana nutricia, re El síndrom e m eníngeo es el conjunto de signos
cubre todo el neuroeje siguiendo sus anfractuo y síntomas que exteriorizan la afectación de las (
sidades. Entre la p ia m a d re y la a ra c n o id e s m eninges; está constituido por los siguientes
(
visceral queda un espacio, denominado espacio síndromes:
subaracnoideo, por el que circula el líquido cefa M-
lorraquídeo (LCR). La piam adre y la aracnoides • Síndrom e de hipertensión endocraneana:
visceral constituyen las m eninges blandas o cefalea, vóm itos, bradicardia, edema de papila, (X
leptomeninges, cuya inflamación se denomina fotofobia, oftalmoplejías, constipación.
leptomeningitis o simplemente meningitis.
t
Las meninges duras (duramadre y hoja parietal
de la aracnoides) en general son asiento de in
• Síndrome de hipertensión endorraquídea:
posición en gatillo de fusil, trastornos motores, tras
c
fecciones crónicas tales como tuberculosis, m i tornos sensitivos (hiperestesia), alteración dé los (i
cosis, además de otras meningitis crónicas, y de reflejos, contracturas musculares (rigidez de nuca,
terminan las inflamaciones denominadas paqui vientre en batea, signos de Kemig y Brudzinski). (i
meningitis. Los siguientes signos sem iológicos ponen de
Las leptom eningitis están determinadas por manifiesto las contracturas musculares y son fun
procesos infecciosos agudos provocados por dis damentales para establecer el diagnóstico del sín n
tintos microorganismos, que pueden llegar a la drome. Rigidez de nuca: debe explorarse movien
meninges por distintas vías: hemática, linfática do la cabeza del paciente en sentido anteropos- (t-
y directa. Esta última puede ser consecuencia de terior. Si hay rigidez de nuca, el paciente no po
t
l
11=
m
158 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndromes clínicos
(« I
drá tocar con el mentón el mango del esternón. Otra sobre el esternón y se imprime un movimien
Vientre en batea: la pared abdominal está contrac- to de flexión a la cabeza. La respuesta positiva
OI» turada y no es posible deprimirla sin despertar es la flexión de los miembros inferiores, o sea la
dolor, lo que puede confundirse con un abdomen elevación de las rodillas. El signo de Brudzinski
agudo. II, o signo de la pierna, o contralateral, se explo
Signo (¡e K ernig: el signo de Kernig I, o del ra con el enfermo acostado, flexionando la pier
tronco, se explora con el paciente en decúbito na sobre el muslo y éste sobre el abdomen. Si es
(a dorsal. El examinador coloca su antebrazo deba positivo, la pierna contralateral se flexiona.
jo de los hombros y la otra mano sobre las rodi
«i» llas del paciente. Se intenta sentarlo y, en caso • Síndrom e encefalítico; alteraciones psíqui
positivo, se flexionan los miembros inferiores sin cas, convulsiones, parálisis, estupor o coma, afa
(lü que la mano apoyada sobre las rodillas pueda sia o mutismo, nistagmo, parálisis oculares y otros
impedirlo. Para buscar el signo de Kernig II, o trastornos.
(n»
de los miembros inferiores, se procede com o en
bl el signo de Laségue; se levanta el miembro infe • Síndrom e infeccioso: fiebre, eritemas, púr
rior, tomándolo por el talón, y la otra mano se puras, herpes simple peribucal, polipnea, hepato-
((» coloca sobre la rodilla del paciente. En caso po m egalia, esplenomegalia, manifestaciones vaso
sitivo, al elevar el pie se flexiona el miembro. motoras (raya meníngea de Trousseau).
Signo de Brudzinski: el signo de Brudzinski I,
o de la nuca, se explora con el paciente en decú • Síndrom e del líquido cefalorraquídeo: el
(A
bito dorsal y sin almohada. El examinador colo estudio físico, químico, citológico, microbioló-
<!f» ca una mano en el occipucio del paciente y la gico e inmunológico del LCR revela alteracio
nes; éstas casi siempre son capaces de definir la
m etiología de las meningitis y permitir el segui
Cuadro 16-1. Liquido cefalorraquídeo (valores nor miento de su evolución (cuadro 16-1 y 16-2).
o males).
r*-vertT'.'. n r •. •.
<» Tensión Sentado 18 a 25 cm de H^O ETIOLOGÍA
Acostado 7 a 17 cm de HjO
a N o infecciosa: vasculares (hemorragia menín
Aspecto . Transparente - incoloro
gea), vasculitis alérgicas, colagenopatías, tumo
<9 Proteínas totales 15 a 45 mg/100 mL res del cerebelo, siembras carcinomatosas menín
Albúmina 10 a 30 mg/100 mL geas, sarcoidosis, insolación, meningitis asépticas
&
Globulinas. 5 a 15 mg/100 mL
inducidas por fármacos (cotrimoxazol, azatiopri-
na, antiinflamatorios no esteroides y otros), trau
Reacciones de Pandy Negativas
matismos y meningitis químicas producidas por
y de Nonne-Apelt *
6» el medio de contraste yodado hidrosoluble para
Glucosa + 40 a 80 mg/100 mL el estudio radiculomielográfico, o fármacos uti
di Cloruros (expresado 7003 750 mg^lOOmL : lizados para el tratamiento intratecal (metotre-
en NaCI) xato, anfotericina B y otros).
9
Cloro - 430 a 460 rrig/100 mL
9 Infecciosa: virus, bacterias (incluidas rickettsias,
120 a 130 m Eq/l :
clamidias, treponemas, borrelias y leptospiras),
d» Células (linfocítos laSpormm*
hongos, protozoos y helmintos.
0 monocitos)
Bacteriología Es un líquido estéril
LÍQUIDO c e f a l o r r a q u íd e o
* Detectan e) aumento del pasaje de las globulinas, son cualkuan-
títatívas y la positividad se expresa de 4-a Su estudio es fundamental para un diagnóstico
t La glucorraquia es aproximadamente el 60% de la glucemia.
Ü Determinar la glucemia antes de la obtención del LCft. Tener etiológico correcto. Será considerado en particu
especialmente en cuenta en los diabéticos. lar al tratar las distintas meningitis. La obtención
i»
i»
C apítulo 16 - M eningitis □ 159
del líquido cefalorraquídeo requiere de la pun quido claro y con líquido turbio o purulentas.
ción lumbar -en ire la cuarta y la quinta vértebras Hay que destacar que las distintas causas in
lumbares (linca bicrestílea)- con el paciente pre fecciosas pueden provocar cuadros clínicos y ca
ferentemente en decúbito lateral, aunque también racterísticas del LCR que no determinen de mane
puede estar sentado. Previamente deberá descar ra uniforme el encasillamiento en uno de los gru
tarse la existencia de hipertensión endocraneana, pos mencionados; por ejemplo, meningitis bacte
por el peligro de enclavamiento buibar que lleve riana que en algún momento de su evolución pre
al paciente a la muerte. sente líquido claro, meningitis viral con líquido
Se realizará el examen neurológico completo turbio o meningitis tuberculosa de aparente co
en busca de signos de foco, alteración de los refle mienzo agudo, etc. Por lo tanto, a los fmes de su
jos pupilares y el examen de fondo de ojo. Si bien estudio, se clasificarán de acuerdo con su etiología
el aspecto normal de este último no descarta total en bacterianas, virales, m icóticas y tuberculosa.
mente la hipertensión endocraneana, el edema de
papila haría peligrosa la punción. No obstante, si
MENINGITIS BACTERIANAS
ella fuera indispensable, será realizada en un cen
tro especializado. La tomografía axial compu- Meningitis meningocócica
tarizada o la resonancia magnética del encéfalo Es una enfermedad infectocontagiosa, la más
permiten descartar lesiones expansivas en la fosa frecuente de las meningitis bacterianas agudas, que
posterior o accidentes cerebrovasculares. La pun se presenta en forma esporádica o epidémica. Ea
ción cistemal debe realizarse en casos de bloqueos causada por N eisseria m eningitidis, que tiene 9
y quedará en manos del neurocirujano. serotipos: A. B, C, D, X, Y. Z, 29-C y W-135.
Como ya fue señalado, en el LCR se realizarán
los exámenes físico, químico, citológico, micro- Epidemiología
biológico e inmunológico que en la mayoría de Las infecciones meningocócicas son endémi
los casos permitirán el diagnóstico etiológico. cas, epidémicas y de distribución universal. Se
transmiten por contacto directo o a través de
secreciones de la nariz o la garganta de personas
MENINGITIS INFECCIOSAS
enfermas, o portadores sanos. El reservorio es el
Se considerarán las meningitis infecciosas de hombre.
más importancia en la práctica médica. A los fi
nes de su estudio se las puede dividir en menin Patogenia
gitis agudas y meningitis subagudas o crónicas. Luego de la colonización de la mucosa naso
También pueden dividirse en meningitis con lí faríngea por el meningococo, se produce la inva
Células Pleocitosis con predominio Pleocitosis con predominio Pleocitosis con predominio
iinfocitarío de neutrófUos Iinfocitarío
160 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
sión local del microorganismo a la que sigue la y anisocoria. Los trastornos psíquicos pueden
bacteriemia. A través de la vía hemática se pro estar ausentes o expresarse com o delirio, excita
duce la colonización meníngea y la replicación ción psicomotora, confusión mental o coma.
bacteriana en el espacio subaracnoideo. Merecen especial mención dos manifestacio
nes cutáneas que sugieren la etiología menin-
Anatomía patológica gocócica. Una aparece al com ienzo de la enfer
La a fecta ció n m en ín gea com prom ete las medad y es la erupción purpúrica; la otra, que se
meninges cerebrales y medulares. Las meninges evidencia alrededor del quinto día, es el herpes
blandas aparecen congestionadas, edematosas y sim ple peribucal. La erupción purpúrica puede
cubiertas por exudado purulento. Éste forma un ser simplemente petequial y de pocos elementos,
casquete sobre la superficie del cerebro, aunque o bien muy importante, conformando zonas de 1
también, y a veces en mayor medida, en la base a 5 cm de diámetro que en oportunidades llegan
del cerebro, el quiasma y los pedúnculos cerebra a la necrosis de la piel. Estas lesiones a veces
les. Pueden observarse arteritis y tromboflebitis están centradas por una pequeña vesicopústula
craneanas, con obstrucción vascular y el consi de la que se puede aislar el meningococo. El her
guiente compromiso parenquimatoso. pes simple puede tener una extensión llamativa
Los ventrículos están dilatados, en especial que abarca toda el área peribucal, las mejillas y
cuando el exudado tabica los orificios de com u el mentón. Las manifestaciones articulares son
nicación del LCR. El examen por microscopía frecuentes. Suele haber artralgias o derrames de
óptica revela congestión vascular y manguitos grandes articulaciones, que pueden ser serosos o
linfoplasm ocitarios perivasculares, con focos purulentos.
encefalom ielíticos diseminados. La coagulación intravascular diseminada, que
suele hacerse presente, determina múltiples he
Manifestaciones clínicas morragias con compromiso bilateral de las glán
£1 período de incubación es de 2 a 10 días, con dulas suprarrenales (síndrome de Waterhouse-
más frecuencia entre 3 a 4 días. El com ienzo en Fridérichsen).
general es brusco y puede ser precedido por
rinofaringitis. Los síntomas iniciales son cefalea Diagnóstico
intensa, raquialgia, vómitos y fiebre de 39®C a La clínica puede realizar el diagnóstico de sín
40®C. Casi en forma simultánea se establece el drome meníngeo, mientras que el cuadro cutá
síndrome meníngeo: cefalea, náuseas, vóm itos, neo y la noción de medio epidém ico sugieren la
contracturas, característica actitud en gatillo de etiología m eningocócica. El diagnóstico de cer
fusil, signos de Kernig y Brudzinski, rigidez de teza se realiza a través del examen del LCR, cuyo
nuca, fiebre e hiperestesia, que despierta dolores aspecto es turbio o purulento, la tensión está au
espontáneos y provocados por los más suaves mentada, y las proteínas ascienden entre 100 y
movimientos. Los reflejos tendinosos están exal 200 mg/lOOmL, las reacciones de Pandy y Nonne-
tados. Los trastornos vasomotores se expresan Apelt son positivas (+++ o ++++), la glucosa ha
con rubicundez y con el signo de Trousseau o descendido o está ausente y la clorurorraquia es
«raya meningítica», que se obtiene al frotar la normal, salvo por la hipocloremia que puede pro
piel con un elemento romo, lo que produce una ducirse en los casos de vómitos reiterados. Hay
línea roja que persiste más tiempo que en el suje pleocitosis - 5 0 0 hasta más de 10.000 leucocitos
to normal. Las m anifestaciones oculares, que por mm^- con el 100% de polinucleares neu-
pueden presentarse com o consecuencia de me trófilos. El examen microscópico del sedimento
tástasis bacterianas, son iritis, íridociclitis, panof- puede mostrar diplococos gramnegativos y los
talmía, conjuntivitis, queratitis o neuritis óptica. cultivos pueden ser positivos. También se solici
Otras responden a la hipertensión endocraneana, tarán hem ocultivos y cultivos de secreciones
como el edema de papila o el compromiso del VI faríngeas y de las lesiones vesicopustulosas cu
par craneal, que es el afectado con mayor fre táneas, si existieran, con el objeto de aislar la bac
cuencia. Puede haber nistagmo, m iosis, midriasis teria. Cuando el examen bacteriológico del LCR
26 - M eningitis D 161
Complicaciones Profilaxis
Hipertensión endocraneana con herniación del La meningitis meningocócica es la única que
uncus o amígdalas cerebelosas; hidrocefalia, c o puede presentarse en forma epidémica; por lo
municante o no comunicante; crisis com iciales tanto, para prevenir la enfermedad y eliminar a
focales o generalizadas; déficit neurológicos los posibles portadores hay que tratar a los con
focales (hemiparesia, afasia, déficit campimé- tactos. En los adultos se administran 600 mg de
tricos y otros); lesión de los pares craneales (so rifampicina cada 12 horas durante 2 días. En los
bre todo III, rv, VI, VII y VIII); shock endotóxico; niños de 1 a 12 años, 10 mg/kg cada 12 horas, y
coagulación intravascular diseminada y síndro en los menores de 1 año, 5 mg/kg cada 12 horas
me de Waterhouse-Friderichsen. • durante 2 días. Hay vacunas preparadas con
polisacáridos de meningococo. El concepto sobre
Pronóstico las vacunas en uso (A + C o la tetravalente contra
En la era preantibiótica la mortalidad era del A, C, Y y W -135. disponible en los EE.UU.) es
50%. Si se producía la curación, en general las que la repuesta a los polisacáridos en general es
secuelas eran graves e incluían demencia, epi escasa, sobre todo en niños menores de 18 me
lepsia, sordera, hemiplejía e hidrocefalia. En la ses; salvo el componente A que es inmunogénico
actualidad el diagnóstico temprano y el tratamien en los lactantes desde el tercer mes.
to adecuado posibilitan la curación en el 95% de Se utiliza para el control de las epidemias; se
los casos. aplican 2 dosis con 3 m eses de intervalo. N o se
recomienda este tipo de vacunas para la inmuni
Tratamiento zación de rutina, excepto en situaciones particu
Debe iniciarse con la mayor urgencia. Una vez lares; com o anesplenia funcional o anatómica,
determinada la etiología m eningocócica, se ad deficiencias de fracciones terminales del comple
ministra penicilina G por vía intravenosa, en do mento (C5, C9), brotes epidémicos en institucio
sis de 24.000.000 UI por día divididas cada 3 ho nes cerradas, como colegios con internos, etc. El
ras. En el niño la dosis es de 250.000 Ul/kg/día, meningococo del grupo C fue prevalente en el
En los casos de alergia a la penicilina se utilizará brote epidémico que se extendió desde 1973 hasta
el cloranfenicol en dosis de 4 a 6 g diarios por 1977, en coincidencia con la epidemia brasileña,
vía IV repartidos cada 6 horas. En el niño la do inicialmente lo fue el grupo C, en 1971-1972, y
sis es de 50 a 100 mg/kg/día. Otra alternativa es luego con mayor intensidad el grupo A, que cau
íiHí» 162 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
só una gran morbilidad y letalidad. En la Argen anemia de células falciformes, mieloma, hipo-
tina no hubo casos por este último serotipo. En gammaglobulinemia y otros trastornos).
Brasil la vacuna A + C contribuyó al cese de la
epidemia. Por contigüidad. Las infecciones neumocóci-
En la actualidad, en los EE.UU. y América la cas de los senos paranasales, el oído medio o la
:C\l
tina se registra un incremento de casos por el apófisis mastoides pueden originar meningitis por
ziR serotipo B. En Cuba, en el Instituto Finlay de La esta vía.
Habana, se produce una vacuna preparada a par
,ií) tir de proteínas de la membrana externa del Vía directa. Las fístulas meníngeas postrau-
m eningococo del grupo B purificadas, conjuga máticas o posquirúrgicas pueden ser causa de
'#■ das con el polisacárido capsular del meningococo meningitis neum ocócica cuando drenan el LCR
del grupo C. El complejo proteína-polisacárido hacia la rinofaringe. Si lo hacen hacia la piel, las
es adsorbido en un gel de hidróxido de aluminio. bacterias involucradas son estafilococos y baci
Se aconseja aplicar dos dosis separadas por un los gramnegativos.
■>t
intervalo de 6 a 8 semanas, por vía intramuscular
profunda en el músculo deltoides. Anatom ía patológica
Actulamente se dispone de una vacuna conjuga En todas las meningitis purulentas los hallaz
Í|H da contra el meningococo del grupo C que es más gos anatomopatológicos son semejantes. En el
inmunogénica que las preparadas con polisacári- caso del neum ococo, el exudado es más abun
’í l
dos capsulares (ver el capítulo Inmunoprofilaxis). dante y consistente que en la meningitis por me
ningococo descripta precedentemente. El resto de
los hallazgos es similar.
Meningitis neumocócica
Etiología y patogenia Manifestaciones clínicas
Es la producida por Streptococcus pneum oniae. Corresponden a un síndrome meníngeo que en
Las vías posibles de llegada del neumococo al SNC general evoluciona en forma rápida y desfavora
son la hemática, por contigüidad y la directa. ble, por lo que es importante el diagnóstico urgen
ifii te y la instauración del tratamiento adecuado.
Vía hem ática. A partir de focos distantes,
v% como la neumonía u otras localizaciones del m i Diagnóstico
croorganismo en el aparato respiratorio. Puede El LCR tiene las características físicas, quími
tener relevancia en sujetos inmunocompetentes cas y citológicas señaladas para el meningococo.
o con alteraciones de la inmunidad (pacientes con En el sedimento pueden hallarse diplococos gram-
anesplenia funcional o anatómica, portadores de positivos lanceolados. Los cultivos y la coaglu-
lí»>
Q
Cuadro 16-3. Tratamiento antibiótico para cepas de neumococo resistentes a la penicilina.
B «^f^póslficación^^^^
#
Ceftrlaxona 2 g IV cada 12 horas lOOmg/kg/día
C9 más
Vancomicina 1 g iV cada 12 horas 40 mg/kg/día .
m
#
C apítulo 16 - M eningitis □ 167
o carcinomas. Entre las de causa infecciosa se partir de un foco tuberculoso distante, o como
considerarán todas las otras meningitis micóticas consecuencia de la diseminación miliar. Es más
y, en especial, la meningitis tuberculosa. frecuente en niños y adultos jóvenes, pero puede
presentarse a cualquier edad. El agente etiológico
C o m p lic a c io n e s es M ycobacterium tuberculosis.
Trastornos o pérdida de la visión, parálisis de
los nervios craneales, disfunción motora y alte Epidemiología
raciones psíquicas. Los antecedentes de contacto con pacientes
tuberculosos se encuentran en el 20% al 30% de
P r o n ó s tic o los casos. La incidencia es directamente propor
Si hay enfermedad grave subyacente, el pro cional a la prevalencia de la infección tuberculosa
nóstico dependerá de ésta. En los pacientes sin en una comunidad y depende de sus condiciones
enfermedad predisponente el tratamiento adecua higiénicas, socioeconóm icas y culturales. Es la
do cura la casi totalidad de los casos. Sin trata meningitis más frecuente después de las virales
miento, la mortalidad es del 100%. y bacterianas.
T r a t a m ie n t o Patogenia
El tratamiento de elección es la anfotericina B, El microorganismo llega al SNC por vía hemá
0,4 mg/kg/día diluidos en 500 mL de solución de tica.
dextrosa al 5% , que se administrarán por vía
intravenosa en 4 a 6 horas. La anfotericina se Anatomía patológica
presenta en un frasco ampolla con 50 mg de fár En el examen macroscópico se evidencia un
maco, que se diluyen con 10 mL de agua bides- exudado gelatinoso o fibrinoso que ocupa el e s
tilada estéril. D e ese frasco ampolla se sacará la pacio subaracnoideo; es más importante en la base
cantidad necesaria para diluir en 500 mL de so del cerebro y se extiende a los surcos laterales.
lución de dextrosa al 5%; el resto se conserva en En el examen microscópico este exudado apa
la heladera. En forma simultánea se administrará rece constituido por células inflamatorias cróni
5-fluorocitosina, 100 a 150 mg/kg/día por vía oral, cas, linfocitos, células plasmáticas, macrófagos
en dosis fraccionadas cada 6 horas. Esta com bi y fibroblastos. También se observan tubérculos,
nación permite utilizar dosis menores de anfote algunos de ellos con necrosis caseosa y células
ricina que las habituales. El tratamiento se conti gigantes. Las arterias pueden presentar endar-
núa durante 6 a 8 semanas y en su transcurso se teritis obliterante con infiltrados inflamatorios en
realizarán controles de la función renal, hepato- sus paredes y engrosamiento de la íntima. A ve
grama, ionograma y hemograma. Como alterna ces se observa una aracnoiditis con adherencias
tiva, o en aquellos enfermos en los que el trata fibrosas densas, sobre todo en la base del cere
miento de elección sea impracticable, puede uti bro. Este cuadro anatomopatológico puede pro
lizarse fluconazol: 400 mg/día por vía oral o IV ducir trastornos en la circulación del LCR, como
(ver el capítulo Criptococosis). se verá más adelante.
etam butoK 25 m g/kg/día oral; pirazinam ida, intratecal. El uso de corticosteroides aún está en
25 mg/kg/día hasta 2 g/día, oral. Salvo la estrep discusión; parece ser beneficioso cuando existe
tomicina, todos estos medicamentos pueden ad edema cerebral o hiper-proteinorraquia marcada
ministrarse en forma ora! por la mañana. La vía (ver el capítulo Tu-berculosis).
parenteral o por sonda nasogástrica está reserva
da para los casos de trastornos del sensorio o a
Profilaxis
vómitos, en los que no es posible la administra La vacuna BCG es un eficaz método profilác
ción por vía oral. N o debe realizarse tratamiento tico de la meningitis tuberculosa. I
B ibliografía--------------------------------------------------
Adams RD, V ícto r M , Ropper AH. Principios de Principios y Práctica. 6a ed. Elsevier. Madrid. 2006.
Neurología. 6* ed. M cGraw-Hiil. ínteram ericana. Plum F y Posner JB. Estupor y coma. 2a ed. Editorial El
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Mandell GL, BennettJEy Dolin R. Enfermedades Infecciosas Philadelphia, 1997.
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Encefalitis
Ornar J. Palmieri
el grupo B, la encefalitis por garrapata (Europa mutismo, signo de Babinski, hemiparesia, ataxia,
central), encefalitis japonesa (Japón), encefalitis m ovim ientos involuntarios, sacudidas m iocló-
del valle de Murray (EE.UU.) y encefalitis de San nicas, nistagmo, paresia facial, parálisis oculares
Luis (EE.UU., Jamaica, Panamá, Trinidad, Bra y síndrome meníngeo. Los signos neurológicos
sil, Argentina), mientras que el Grupo California acompañantes pueden ser evocadores del virus
produce la encefalitis de California (EE.UU.). causal. En el caso del virus del herpes simple tipo
Otros virus productores de encefalitis son los 1, son frecuentes las lesiones temporales y en la
enterovirus (ECHO, C oxsackie y poliovirus), varicela las lesiones cerebelosas. En las infec
herpesvirus (herpes sim ple, varicela zoster, ciones por enterovirus las lesiones encefalíticas
citomegalovirus y virus de Epstein-Barr), virus son acompañadas por las medulares. La evolu
de la fiebre urliana, del sarampión, de la rubéola, ción de la encefalitis es variable y se relaciona
de la influenza, de la rabia, adenovirus, virus de con el virus causal, desde formas leves a formas
la coriomeningitis linfocitaria y el HIV. graves con muerte rápida. La curación puede pro
ducirse con secuelas o sin ellas.
Manifestaciones clínicas
Dentro de un contexto de síntomas generales Diagnóstico
como fiebre, mialgias, trastornos digestivos o res El cuadro clínico y neurológico suele orientar
piratorios se destacan los signos y síntomas de la hacia una encefalitis viral. Los antecedentes del
afectación neurológica, vinculados con las estruc medio epidémico o el diagnóstico de sarampión,
turas anatómicas afectadas en forma predominan varicela, herpes zoster, rubéola o fiebre urliana
te. El com ienzo de la enfermedad es casi siem sugerirán esa etiología viral. La encefalitis por el
pre brusco, con cefalea, desorientación, trastor virus de Epstein-Barr es sospechada por el cua
nos de la conciencia, del comportamiento y aluci dro clínico y la fórmula leucocitaria característi
naciones. Se pueden agregar letargo, estupor o ca de la mononucleosis infecciosa. Un examen
coma, náuseas y vóm itos, convulsiones, afasia o citológico del sedimento urinario que muestre
4
células gigantes con inclusiones y elevación de Cuadro 17-2. Causas virales de encefalom ielitis
las transaminasas sugiere ciiom egalovirosis. Las aguda.
respectivas serologías confirmarán la presunción
■ P o r ih fe c c ió ii d ire cta .
diagnóstica o no. La punción lumbar puede m os
trar un LCR normal o con 50 a 300 cél/mm^ con TOGAVIRIDAE PICORNAVIRIDAE
predominio polimorfonuclear al com ienzo, para Alphavirus (grupo A) Enterovirus
virar con rapidez hacia células mononucleadas. Equina de! Este PoliONÁrus
La presencia de hematíes junto con células m o Equina del Oeste Coxsackievirus
nonucleadas sugiere encefalitis por virus del her Equina Venezolana Echovirus
pes simple tipo 1. La proteinorraquia suele estar Flavivírus (grupo B) RABDOVIRIDAE
normal o poco elevada. La glucorraquia y la San Luis Lyssavírus
clorurorraquia son normales. A veces es posible Vaile de Murray Rabia
hacer aislamientos virales del LCR, en el que Japonesa
HERPESVIRIDAE
además se solicitarán titulaciones de anticuerpos Transmitidas por
Herpesvirus
antivirales, en paralelo con las del suero, durante garrapatas
Herpes simple tipo 1y II
la fase aguda de la enfermedad. En ei suero de Dengue
Varicela zoster
ben practicarse titu la cio n es de anticuerpos PARAM YXO VIRIDAE Epstein-Barr
antivirales durante la fase aguda de la enferme Paramyxovirus Citomegalovírus
dad y dos semanas después (muestras pareadas). Fiebre uriiana
ADENOVIRIDAE
Tiene valor de positividad un aumento de cuatro M orbillívírus
veces o más de los títulos de la segunda muestra Sarampión BUNYAVIRIDAE
respecto de los de la primera. El EEG se realiza Bunyavirus
ARENAVIRIDAE
rá en lodos los casos; no provoca mayores m o Serogrupo California
Arenavirus
lestias al enfermo y de hacerse en forma seriada Coriomeningitis RETROVIRIDAE
permite seguir la evolución de la enfermedad. linfocitaria Lentivirus
Mostrará puntas y ondas lentas aisladas o en sal Machupo Virus de la
vas en todas las derivaciones, lo cual puede ex Lassa Inmunodeficiencia
cluir un absceso o tumor. Sin embargo, la ence Junín Humana (HIV)
falitis herpética suele tener localización tempo
ral o bitemporal. Los elementos más valiosos para Cuadro 17-3. Causas virales de encefalom ielitis
el d iagn óstico anatóm ico son la tom ografía aguda.
computarizada (TC) y las imágenes por resonan
• ' P ó s irife c d o s a s ; ' , v
cia magnética (RM). La biopsia cerebral puede
ser necesaria en casos muy especiales, para lo TOGAVIRIDAE POXVIRIDAE
grar un diagnóstico certero. Las alteraciones Rubivirus Orthopoxvirus
histológicas más comunes de las encefalitis vira Rubéola Vacuna
les, aunque no específicas, son los infiltrados peri- M YXO VIRID AE HERPESVIRIDAE
vasculares y parenquimatosos mononucleares, los Influenzavlrus Herpesvirus
nodulillos gliales y la neuronofagia. Una forma Influenza A y B . Varicela zoster
rápida de diagnóstico es la identificación del vi Epstein-Barr
PARAM YXO VIRIDAE
rus en la biopsia cerebral mediante anticuerpos
Paramyxovirus
específicos marcados con fluoresceína. Otras ca
Fiebre uriiana
racterísticas histopatológicas son los cuerpos de
Morbillivirus
inclusión intranucleares asociados con infeccio
nes por los virus herpes y los cuerpos de Negri
propios de la rabia.
La detección de ácidos nucleicos con la reac nóstico de las encefalitis, especialmente en las
ción en cadena de la polimerasa (PCR) es un provocadas por virus tales com o H erpes sim ple,
método rápido, sensible y no invasivo en el diag- Enterovirus y Poliomavirus. En la meningoen-
w
m
m
174 □ Prim era parte - G eneralidades - Síndromes clínicos
m
C uad ro 17-4. Causas no virales de encefalomielitis. cíente, la meningoencefalitis tuberculosa o la pro
Septicemia Vasculitis
vocada por C¡yprococcus neoform ans, también
# con las demás meningitis micóticas. Además se
Toxoplasmosis Paludismo (P. faldparum)
rán consideradas las infecciones parasitarias;
m Endocarditis bacteriana Naeglería
toxoplasm osis, cisticercosis, amebiasis y triqui
subaguda Acanthamoeba
m Sífilis meningovascular
nosis. Dentro de las afecciones no infecciosas se
Triquinosis
excluirán las intoxicaciones agudas, los trastor
Leptospirosis Legionelosis
« nos metabólicos, los accidentes vasculares, los
Tuberculosis Mycoplasma
procesos vasculíticos, los tumores, los trauma
Hístoplasmosis Psitacosis
tismos y los trastornos psiquiátricos.
Coccidioidomicosis Criptococosis
# Tripanosomosis Enfermedad de Beh?et
Tratamiento
Lupus erítematoso Enfermedad de
Los pacientes deben ser internados en unida
diseminado Chagas-Mazza
Fiebre tifoidea
des de cuidados intensivos, a fín de asegurar un
m control adecuado del medio interno. La alimen
tación se realizará por vía parenteral o por sonda
#
nasogástrica cuando los trastornos deglutorios o
cefalitis herpética, el ADN viral puede detectar el estado de conciencia lo hagan necesario. Se
se pocos días después de instalado el cuadro clí efectuará el control y la eventual corrección de
nico, y en caso de ser inicialmente negativa, debe los parámetros hematimétricos y hemodinámicos.
repetirse en 48 a 72 horas. La utilización de son Es posible que sean necesarios los medicamen
# das múltiples permite detectar en un solo paso y tos para combatir el edema y la hipertensión
con menor riesgo de contaminación varios agen intracraneana. El paciente debe estar en la cama
tes etiológicos (HSV, CMV. VZV). semisentado, ya que esta posición disminuye la
« La PCR también se utiliza en el diagnóstico de presión intracraneana. Si la enfermedad es pro
encefalitis por TreponemapaUidum, Borrelia burg- vocada por HSV o VZV, se prescribirá aciclovir
« dorferi y Toxoplasma gondii. Además, es muy sen a razón de 10 mg/kg cada 8 horas, en infusión
sible y específica en el diagnóstico de meningoen- intravenosa administrada en 1 hora, durante 10
# cefalitis por M ycobacterium tuberculosis. días. Comenzar, de ser posible, antes de las 48
horas de iniciados los síntom as. La antibioti-
Diagnóstico diferencial coterapia sólo se empleará si se demuestran com
# Se hará con las meningitis bacterianas de co plicaciones bacterianas. Los corticosteroides es
mienzo reciente o las tratadas en forma insufi- tarían indicados en las encefalitis posinfecciosas.
#
« B ibliografía------------------------------------------------
Adams RD, Víctor M, Ropper AH. Principios de Neurología. Plum F y Posner JB. Estupor y coma. 2a ed. Editorial £1
6*ed. McGraw-Hill. Interamericana. México. 1999. Manual Moderno, México 1982.
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Principios y Práctica. 6a ed. Elsevier. Madrid. 2006.
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18
Osteomielitis
Elena I. M aiolo
Ornar J. Palmieri
los vasos pequeños. La fagocitosis de las bacte ríodos de inactividad que alternan con recurrencias.
rias provoca la liberación de enzimas osieolíticas Con frecuencia se observan fístulas cutáneas, a '
que favorecen la necrosis ósea. La infección se través de las cuales mana un material purulento y
extiende hacia la cortical, a través de los conduc a veces hasta pequeños trozos de hueso necrótico.
tos de Havers y del sistema de Volkmann, y pro En general no hay fiebre, excepto ante la existencia
gresa hacia la superficie ósea donde se formarán de infección de parles blandas o abscesos. Los pe.
abscesos subperiósticos y habrá compromiso de ríodos de exacerbación se caracterizan por un au-
las partes blandas. En la infección crónica los mentó de la secreción purulenta a través de la fí$.
segmentos no vascularizados, por trombosis y ede tula, dolor local y eritrosedimentación acelerada.
ma, originan focos de necrosis isquémica denomi Con el tratamiento adecuado, sólo un bajo por
nados secuestros, los cuales favorecen la per centaje de las osteom ielitis agudas evolucionan
sistencia de los microorganismos. El hueso nuevo a la cronicidad.
(involucro), originado en el periostio, se deposita
sobre el secuestro y desempeña una función e s Osteomielitis vertebral
tructural en la fase de curación. La osteom ielitis vertebral puede originarse por
vía hemática, secundaria a endocarditis bacteriana
o a sepsis por catéteres. El origen genitourinario
a n a t o m ía p a t o l ó g ic a
es muy frecuente en los ancianos. En estos casos
La osteomielitis aguda se caracteriza por la pre las bacterias llegan a través del plexo venoso pros-
sencia de bacterias, infiltrado polimorfonuclear tático. La osteomielitis vertebral también puede
neutrófilo, trombosis y congestión vascular. En la ser secundaria a heridas traumáticas o quirúrgicas.
osteomielitis crónica hay necrosis ósea, resorción La osteom ielitis vertebral compromete la co
del tejido óseo por osteoclastos, infiltrado mono- lumna lumbar, seguida en orden de frecuencia por
nuclear, tejido de granulación y fibrosis. El ha la torácica y la cervical. En cambio, en la espondi
llazgo de microorganismos no es habitual. litis tuberculosa (mal de Pott) las vértebras más
afectadas son las dorsales.
Los cuerpos vertebrales están muy vasculari
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
zados por las arterias espinales, que se bifurcan
Osteomielitis hematógena aguda e irrigan más de un cuerpo vertebral. Por este mo
Afecta por lo general los huesos largos, casi tivo el compromiso de los cuerpos venebrales ad
siempre un solo hueso, con más frecuencia la ti yacentes es muy frecuente; además, en ciertas
bia seguida por el fémur o el húmero. Tiene un ocasiones la infección excede los límites de la vér
comienzo agudo con fiebre alta, escalofríos, do tebra y origina abscesos epidurales, subdurales,
lor y sensibilidad local. En forma ocasional, so paravertebrales o laterofaríngeos. En los casos gra
bre la zona afectada se observa eritema cutáneo ves puede extenderse hasta el mediastino, el es
y tumefacción. pacio subfrénico e incluso el retroperitoneo.
En pacientes menores de un año e incluso en la En la mayoría de los casos hay dolor espontá
pubertad, la infección puede atravesar la epífisis neo del cuerpo vertebral, que se exacerba con la
y comprometer la articulación. El hemograma percusión. Al principio no es muy intenso, pero
muestra leucocitosis y neutrofilia. En la radio puede agravarse durante la evolución. La contrac-
grafía simple se observa engrosamiento de las tura de los m úsculos paravertebrales lim ita la
partes blandas y, en ocasiones, rarefacción ósea. movilidad. El cuadro es en general subagudo; la
La reacción perióstica se presenta al cabo de diez fiebre no siempre está presente y algunos pacien
días y las lesiones líticas (absceso de Brodie) lo tes tienen dolor referido a causa de la irritación
hacen luego de dos a seis semanas. de las raíces nerviosas, con déficit motor y sen
sorial. La eritrosedimentación por lo general está
Osteomielitis hematógena crónica acelerada y la leucocitosis es poco frecuente.
La osteomielitis crónica es una entidad de curso En la radiografía simple se observa erosión de
prolongado, que se caracteriza por presentar pe los platillos vertebrales contiguos y pinzamiento
f
<í
Capítulo 18 - O steom ielitis □ 177
del disco intervertebral. Las imágenes por reso partes blandas, y por biopsia del hueso. Los cul
nancia magnética (RM) son muy útiles para el tivos se realizan en los medios habituales para
diagnóstico de abscesos epidurales, paraespina- bacterias aerobias y anaerobias, hongos y mico-
les, retrofaríngeos, m ediastínicos, retroperito- bacterias.
neales o del músculo psoasilíaco. En la osteom ielitis crónica el hisopado de la
fístula en general no se correlaciona con el agente
etiológico. En estos casos se realiza la punción as
diagnóstico
pirativa de la lesión - a través de la piel sana próxi
El diagnóstico de osteom ielitis debe ser pre ma a la fístula-, la biopsia ósea y el cultivo del
coz, ya que la implementación de un tratamiento material obtenido por desbridamiento quirúrgico.
adecuado puede evitar la necrosis ósea y la evolu En la tercera parte de los casos de osteomielitis
ción hacia la cronicidad. La radiografía simple aguda de los niños los hemocultivos son positi
suele ser normal en la fase temprana de la enferme vos, pero lo son en menor medida en los adultos
dad. En la osteomielitis aguda y en las exacerba y en la osteom ielitis vertebral.
ciones de la osteomielitis crónica, hay leucocitosis,
neutrofilia y eritrosedimentación acelerada.
COMPLICACIONES
El centellograma óseo con bifosfonatos mar
cados con tecnecio 99m tiene una sensibilidad Las complicaciones pueden ser locales o a dis
elevada y es de mucha utilidad en las fases tem tancia. Las primeras son la propagación de la in
pranas de la infección. Puede mostrar un aumen fección -d esd e una m etáfisis hasta la opuesta
to de la captación desde la aparición de los pri (osteítis bipolar), a toda la diáfisis (pandiafísitis)
meros síntomas. o a todo el hueso (panosteítis)-, el desprendimiento
En el diagnóstico diferencial se incluyen frac de la epífisis, la fractura a nivel de la lesión, la
turas, tumores e infartos, dado que el tecnecio se invasión sucesiva de varios huesos, el compromi
concentra en zonas de actividad osteoblástica so de la articulación contigua (hidrartosis, artritis
intensa o de gran vascularización. supurativa o pioartrosis), el acortamiento del hue
La gammagrafía con leucocitos marcados con so por destrucción del cartílago de conjunción y,
citrato de galio o las inmunoglobulinas marca en las fístulas crónicas, la degeneración carcino-
das con indio revelan afinidad aumentada del matosa del trayecto fistuloso. Si no se practica el
trazador por los sitios de inflamación activa, por drenaje quirúrgico, el absceso epidural en las osteo
lo que son procedimientos útiles para poner en mielitis vertebrales puede conducir a la parálisis.
evidencia procesos infecciosos. La gammagrafía Entre las com plicaciones a distancia se inclu
secuencial con tecnecio y galio posibilita el diag yen endocarditis, meningitis, y abscesos hepáti
nóstico diferencial de infección activa con alte cos, renales y pulmonares. En los casos cróni
raciones óseas de etiología inflamatoria. cos, amiloidosis.
La tomografía computarizada (TC) es de utili
dad en el diagnóstico de secuestros, fístulas y abs
TRATAMIENTO
cesos de parles blandas. La RM es de elección
para documentar la resolución anatómica de El tratamiento con antimicrobianos sólo se ini
abscesos epidurales, el compromiso de partes blan ciará luego de tomar muestras para hemocultivos
das, la osteomielitis vertebral y la osteomielitis del y del foco óseo. El examen directo de estas últi
pie diabético. En la osteomielitis crónica puede mas, con la coloración de Gram, orientará la elec
determinar la presencia de infección activa y defi ción del tratamiento empírico. Si el examen di
nir la extensión del desbridamiento quirúrgico. recto fuera negativo, el tratamiento se orientará
El diagnóstico microbiológico debe ser ante hacia los patógenos más probables. En la mayo
rior al tratamiento empírico. La toma de mues ría de los casos el tratamiento empírico debe con
tras del foco óseo o de sus adyacencias -guiada siderar la posibilidad de infección por StaphylO'
por las técnicas de diagnóstico por im ágenes- se coccits aureus', por lo tanto se administrará una
lleva a cabo por punción y aspiración, ósea y de cefalosporina de primera generación (cefazolina)
*
178 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
Artritis infeccciosas
Elena I. M aiolo
Ornar J. Palmieri
}SS^' ••íiS . 5r
Las artritis fúngicas son de origen hemático y brana sinovial, presencia de fibrina, infiltrado
afectan a pacientes inmunodeprimidos. Son pro linfoplasm ocitario y polimorfonuclear. En los
vocadas por hongos saprófitos, com o C andida y casos graves la reacción inflamatoria provoca un
Aspergillus. Las enfermedades por hongos pa exudado fibrinopurulento importante y necrosis.
tógenos causantes de enfermedad diseminada, co Con la tinción de Gram es posible poner en evi-
mo histoplasm osis* p aracoccid ioid om icosis, dencia el microorganismo responsable. En la ar
coccidioidom icosis y criptococosis, en forma tritis tuberculosa se observan desde infiltrados
ocasional pueden provocar artritis. linfoplasmocitarios sinoviales difusos, con algu
Las infecciones virales, como la rubéola y la nas células gigantes y caseificación, hasta los tí
parotiditis, cuando se contraen luego de la pu p ico s granulom as co n flu en tes con necrosis
bertad se asocian con artritis de resolución es caseosa central, en los cuales en la mitad de los
pontánea. Otras causas de artritis son el virus de casos la tinción de Ziehl-Neelsen revela el baci
la hepatitis B, adenovirus, herpesvirus, picorna- lo. En las artritis fúngicas se observa una reac
virus, alfavirus y parvovirus B19. ción de tipo granulomatoso que requiere tinciones
Treponem a pallidum causa artritis en la etapa esp eciales para poner en evidencia al agente
secundaria y espondilodiscitis luética en la etapa etiológico.
terciaria.
Borrelia burgdorferi, agente etiológico de la
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
enfermedad de Lyme, transmitida por la morde
dura de garrapatas, produce una sinovitis reactiva El síntoma predominante en las artritis es el
en la etapa terciaria de la enfermedad. Otras ar dolor, que es de moderado a intenso, la limita
tritis posinfecciosas pueden responder a infeccio ción de la movilidad de la articulación compro
nes entéricas por Salm onella, Shigeila, Campy- metida, la fiebre y los escalofríos. La piel vecina
lobacter y Yersinia^ en especial en portadores del está eritematosa, caliente, con edema y tumefac
antígeno de histocompatibilidad HLA-B27. ción provocados por la acumulación de líquido
sinovial. En forma ocasional, en las artritis agu
das bacterianas de los niños se produce la infec
PATOGENIA
ción de los tejidos blandos adyacentes y celulitis.
La membrana sinovial está muy vascularizada, En la mayoría de los casos hay compromiso
por lo que la principal vía de contaminación es la monoarticular, más frecuente en la rodilla, segui
hemática, a partir de un foco primario. En los da por las articulaciones de la cadera, el hombro,
niños menores de un año, la artritis bacteriana la muñeca, el tobillo y otras.
puede producir con posterioridad osteom ielitis, Las m anifestaciones clínicas de la enfermedad
debido a que los capilares atraviesan la placa de gonocócica diseminada permiten diferenciar dos
crecimiento epifisario. Por el contrario, en pa formas de presentación. La primera es de comien
cientes mayores de un año esa misma placa con zo agudo, con síntomas generales com o fiebre y
tiene y restringe la infección al espacio articular. escalofríos, compromiso poliarticular y lesiones
Además la artritis puede originarse por extensión cutáneas; estas últimas son máculas, pápulas y
de focos infecciosos contiguos, com o osteom ie petequias, que evolucionan a vesículas y pústu
litis e infecciones de partes blandas. Con menos las en 3 a 4 días. N eisseria gonorrhoeae se aísla
frecuencia se produce por inoculación directa con facilidad de los hem ocultivos, así com o del
iatrogénica, por ejemplo luego de intervenciones cultivo de los exudados uretral, rectal, faríngeo,
quirúrgicas traumatológicas o infiltraciones. endocervical, de lesiones cutáneas y, muy rara
mente, del líquido articular. El cuadro librado a
su evolución natural presenta remisiones y exa
ANATOMIA PATOLÓGICA
cerbaciones, con recurrencia de las lesiones cu
Los hallazgos varían según el agente etiológico. táneas y poliartritis.
En la artritis bacteriana se observa reacción in La segunda forma de presentación es una artri
flamatoria intensa, con hiperplasia de la mem tis supurativa monoarticular, con cultivos positi
C apítulo 19 - A rtritis infeccciosas □ 181
vos del líquido sinovial y hemocuUivos por lo servar la erosión de la superficie articular en adul
general negativos. En algunos casos las poliar- tos y el desplazamiento del núcleo de osificación
{ralgias y las lesiones cutáneas son transitorias y en los niños. C.
preceden a la artritis.
Las manifestaciones clínicas de las espondilo-
En la artritis tuberculosa se observa estrecha
miento de la superficie articular, erosión y for
c,
discitis bacterianas son principalmente el dolor mación de quistes.
continuo de comienzo agudo, que se exacerba con La ecografía, la tomografía computarizada (TC)
la presión local, además de fiebre y malestar ge y las imágenes por resonancia magnética son úti
neral. En ancianos e inmunodeprimidos puede ser les para determinar la magnitud del derrame
de curso indolente. En orden decreciente de fre sinovial. La punción en las articulaciones de ac
cuencia se comprometen las vértebras lumbares, ceso difícil, com o las de la cadera y el hombro
las dorsales y las cervicales. Los síntomas neu- pueden ser guiadas por la ecografía o la TC.
rológicos se deben a la compresión de las estruc
turas nerviosas por la presencia de abscesos
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
epidurales y paravertebrales, o por la destrucción
del disco intervertebral. Las manifestaciones c lí Incluye todas las monoartritis, poliartritis y oli-
nicas de la espondilodiscitis tuberculosa o mal goartritis reactivas de etiología autoinmune. Otros
de Pott son similares, pero de curso insidioso. diagnósticos diferenciales de importancia son
artritis reumatoidea, fiebre reumática, gota, con-
drocalcinosis o seudogota. Las espondilodiscitis
DIAGNÓSTICO
plantean el diagnóstico diferencial con metásta
El hemograma muestra leu cocitosis y neu- sis vertebrales; si bien éstas no comprometen el
trofilia, mientras que la eritrosedimentación está disco, los síntomas son similares en ambas.
acelerada. El diagnóstico de certeza se obtiene
por aislamiento del agente etiológico en hemocul-
COMPLICACIONES
tivos o en el líquido articular obtenido por artro-
centesis. El cultivo del líquido articular es posi Las complicaciones habituales son secundarias
tivo en la mayoría de las artritis bacterianas y en a la extensión de la infección fuera del espacio
un tercio de las gonocócicas. En este último caso articular, y consisten en osteom ielitis y celulitis
se deberán cultivar, además, los exudados ure con formación de abscesos en los tejidos adya
trales, endocervicales, rectales y faríngeos en centes.
medio de Thayer-Martin. Alrededor de un tercio de las artritis infeccio
El líquido sinovial es turbio o purulento y en sas generan secuelas, como alteraciones funcio
ocasiones, serosanguinolento. Presenta más de nales o limitaciones de la movilidad articular, que
50.000 células por mm^ entre las que predomi se reducen de manera importante con el inicio
nan los neutrófilos. En la artritis reumatoidea el temprano del tratamiento. Casi la mitad de los
líquido sinovial también puede ser de aspecto adultos afectados presentan lim itaciones de la
purulento por el importante aflujo de polimorfo- movilidad y dolor persistente. En los niños con
nucleares neutrófilos. El descenso de la glucosa artritis complicadas con osteom ielitis se pueden
en el líquido sinovial es inespecífico y de baja observar secuelas graves, como acortamiento del
sensibilidad. miembro por compromiso del núcleo de osifica
En ios casos en que se sospeche la etiología ción.
fúngica o tuberculosa, se deberán realizar culti
vos en los medios adecuados. La radiografía en
PRONÓSTICO
la etapa temprana puede mostrar distensión de la
cápsula articular y edema de partes blandas. La Los factores de mal pronóstico que deben te
destrucción de la superficie articular no se ve con nerse en cuenta son la edad avanzada, la presen
claridad, excepto tras dos semanas o más desde cia de prótesis articulares y las enfermedades sub
el inicio del cuadro clínico, cuando se puede ob yacentes graves.
182 □ P rim era parte - G eneralidades : Síndrom es clínicos
#
Bibliografía'^-
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i)
"3
—
Trv*í.tis-^C3-í>-
Generalidades de zoonosis
Ornar J. Palmieri
A lfredo C. Seijo
Fiebre hemorrágica argentina, rabia, enfermedades por hantawrus, fiebre amarilla, encefalitis por arbovirus
Zoonosis parasitarias •V :vVÍ i-. •
Triquinosis, hidatidosis, enfermedad de Chagas, cisticerco$is, toxoplasmosis, distomatosis, leishmanlosis
Zoonosis micóticas.
Algunas dermatofitosis como las provocadas por Microsporum canis, M. gypseum y Trichophyton mentagrophytes.
Micosis sistémicas como la histoplasmosis y la críptococosis.
compañía. Esto trae aparejadas cuestiones como cuya prevención se basa en un control de calidad
contaminación de ambientes públicos, manejo adecuado de éstos.
integral de las poblaciones animales y, lo más 3) La irrupción, a fines del siglo X X , de enfer
importante, evitar la transmisión de enfermeda medades consideradas controladas o «históricas»,
des a pacientes inmunocompromeiidos (infección denominadas «emergentes», en su mayoría zoo-
por HIV, pacientes oncológicos, receptores de nóticas, en las que la causa de la emergencia se
trasplantes y ancianos). atribuye a los cambios profundos en los ecosis
2) Las zoonosis transmitidas por alimentos, temas causados por el hombre o la naturaleza.
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Enfermedades exantemáticas
Gerardo E. Laube
Ornar J. Palmieri
período de estado: comienza con la aparición técnicas de alta sensibilidad y especificidad como
del exantema, que es maculopapuloso, suave al el enzimoinmunoensayo y el radioinmunoensayo.
tacto, morbiliforme y de diseminación cefalo-
caudal. Esta erupción es acompañada por un nue
Diagnóstico diferencial
vo pico febril. El aspecto del paciente, con exan
tema y catarro conjuntival y nasal, configura la Debe efectuarse con otras afecciones que cur
llamada «cara sucia» del sarampión. A los 4 a 5 san con exantema maculopapuloso.
días la erupción comienza a desaparecer en el mis
mo orden en que apareció. Deja máculas hiper- R u b éo la : poliadenom egalias generalizadas,
pigmentadas, denominadas «manchas café con le esplenom egalia y exantema morbiliforme más
che», que son más notorias en aquellos pacientes atenuado, sin triple catarro ni manchas de Koplik.
de piel más oscura. La desaparición del exante
ma puede acompañarse con una descamación fma. M egaloeriíem a: lactantes con exantema morbi
liforme de tipo maculopapuloso, que tiende a con
Período de convalecencia: los pacientes, en fluir en la cara (signo de la bofetada), con poca
especial los adolescentes y adultos, pueden ma fiebre.
nifestar astenia psicofísica, que dura 2 a 3 sema
nas. Exantem a sttbito posfehríl: lactantes con 3 días
de fiebre sin otros signos. Al desaparecer ésta, se
Formas clínicas presenta una erupción generalizada que dura 24
Las observadas con más frecuencia son: a 36 horas.
A nivel del sistema nervioso central, durante 5^ día, en ese caso la dosis es de 0,4 mL/kg (ver
el período agudo puede presentarse meningitis el capítulo Inmunoprofilaxis).
con LCR hipertenso, claro, con disociación citoal-
buminosa, glucosa y cloruros normales. Tiene una
RUBÉO LA
mortalidad que en algunas estadísticas llega al
10%, aunque en general cura sin secuelas. D u Definición
rante la convalecencia, el depósito de inmuno- Enfermedad infectocontagiosa producida por
com plejos en la m ielina puede producir una un virus de la familia Togaviridae. Por lo general
meningoencefalitis desmielinizante de evolución sus síntomas son leves, pero cuando se presenta
tórpida, con una mortalidad aproximada al 40%, en la mujer embarazada puede producir impor
que en ocasiones deja secuelas graves. Años des tantes daños en el embrión.
pués del período agudo puede producirse una
enfermedad progresiva del SNC, causada por una Etiología
infección sarampionosa persistente denominada El virus de la rubéola pertenece al género Rubi-
panencefalitis esclerosante sitbaguda. virus. Mide 50 a 60 nm, contiene 3 polipéptidos
Otras com plicaciones posibles son gastroen y tiene una envoltura lipoproteica. Penetra por la
teritis, adenitis mesentérica y miocarditis. mucosa respiratoria, con una primera multipli
cación allí y en los ganglios linfáticos locales,
Pronóstico seguida por viremia y diseminación que alcanza
Está determinado principalmente por la edad su máximo durante la segunda semana.
del enfermo, por la forma clínica y por la presen
cia o ausencia de complicaciones. Los brotes epi Manifestaciones clínícas
démicos, en especial cuando los afectados son in En su forma adquirida se pueden distinguir 4
dividuos de bajo nivel socioeconómico, condicio períodos.
nan en general un pronóstico de gravedad, sobre
todo debido a la mayor frecuencia de las sobrein- P eríodo de incubación: es asintomático y dura
fecciones bacterianas del aparato respiratorio. 14 a 21 días.
período de estado: se inicia con una erupción Saram pión: triple catarro, manchas de Kóplik
que se inicia en la cara pero se generaliza en 24 y exantema maculopapuloso.
a 72 horas. Este exantema es áspero al tacto («pa
pel de lija o piel de gallina») y no deja espacios M o n o n u c le o sis in fe c c io sa : angina, fiebre,
de piel sana salvo a nivel del rostro, donde la esplenomegalia y poliadenomcgalias. Hemogra
palidez periorificial configura la denominada ma con linfomonocitosis. La serología confirma
«facies de Filatow». Son muy frecuentes los sig el diagnóstico.
nos de fragilidad capilar (prueba del lazo positi
va). Exantem as p o r enterovirus: más frecuentes en
Entre el 3® y el 5® día la lengua, por descama lactantes con erupción, que puede ser tanto
ción» adquiere el aspecto de doble V (zona ante escarlatiniforme como morbiliforme.
rior y bordes rojos, y posterior, saburra!). Más tar
de, cuando pierda por completcf la saburra, se con Síndrom e d el shock tóxico: com ienzo agudo
vertirá en lengua de gato o aframbuesada. Al 4® con fiebre, hipotensión, insuficiencia renal, com
día declina la temperatura y desaparece el exante promiso orgánico multisistémico y exantema ge
ma. Al 8®día comienza la descamación de la piel neralizado. Es producido por Staphylococciis
que se completa en 8 a 10 días. La intensidad de la aureus o Strepíococcus pyogenes. Puede haber
descamación es directamente proporcional con la un foco infeccioso evidente como ceiulitis, abs
del exantema. cesos, miositis o fascitis nectrotizante o sin un
foco fácilmente reconocible.
Período de convalecencia: en las formas gra
ves puede durar 1 a 2 semanas, con persistencia E nferm edad de Kawasaki: fiebre, congestión
de la astenia y la adinamía. conjuntiva!, adenopatías cervicales, exantema,
descamación, artralgias, artritis y arteritis.
Complicaciones
Pueden dividirse en supurativas, dentro de la Tratamiento
fase aguda de la enfermedad (abscesos amigda- La penicilina es el fármaco de elección. Nunca
linos, adenitis subangulomaxilar, bacteriemias, se han aislado cepas de estreptococos del grupo
otitis media), y no supurativas, que aparecen 2 a A resistentes a la penicilina. Se administrará la
3 semanas después de la etapa aguda (fiebre reu fenoxim etilpenicilina (penicilina V) en dosis de
mática y glomerulonefritis). 500.000 a 1.000.000 UI por vía oral, cada 8 ho
ras, durante 10 días. La penicilina G benzatina
Diagnóstico es una alternativa eficaz ya que asegura concen
La sospecha se genera ante todo paciente que traciones sanguíneas adecuadas y evita el riesgo
inicia su enfermedad en forma brusca con fiebre, del incumplimiento del tratamiento oral, pero su
vómitos, odinofagia, angina eritematosa o con adm inistración es dolorosa. La d o sis es de
exudado blanquecino, un exantema micropa- 600.000 UI a los niños que pesan menos de 30
puloso rojo que en 24 a 48 horas se extiende a kilos y de 1.200.000 UI a los que superan ese
todo el tegumento y un hemograma con leucoci peso, en todos los casos se aplicará una dosis úni
tosis con neutrofilia. El estudio bacteriológico del ca. Los pacientes alérgicos a la penicilina se trata
exudado faucial revela la presencia del estrep rán con macrólidos como la claritromicina en do
tococo. La prueba de la antiestreptolisina «O» sis de 15 mg/kg/día dividida en dos tomas, duran
(ASTO) suele ser francamente positiva. te 10 días o azitromicina en dosis de 12 mg/kg
cada 24 horas, durante 5 días.
Diagnóstico diferencial
Debe efectuarse con: Profilaxis
El paciente debe ser aislado hasta 24 horas des
Rubéola: adenomegalias, hemograma de tipo pués de iniciada la terapéutica antibiótica. Se
viral, exantema maculopapuloso no tan intenso. identifican los contactos con portación faucial
192 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndrom es clínicos
de estreptococos, a fin de efectuar la terapéutica ciona por brotes; por eso en una misma zona se
antibacteriana. observan elem entos en distinta etapa evolutiva,
lo que condiciona polimorfismo local y general.
Cada brote se acompaña con un repunte febril y
VARICELA
la erupción tiene una orientación cefalocaudal y
Definición confluencia hacia el eje central, es decir, sigue la
Enfermedad endemoepidémica producida por ley del máximo centrípeto. Las máculas evolu
el virus varicela zoster. La primoinfección pro cionan a pápulas, vesículas y costras que se des
duce la varicela, que es una afección exantemática prenden a la semana sin dejar cicatriz, salvo que
generalizada, m aculopapulovesiculocostrosa. se haya lesionado la membrana basal por rasca
Después de curada la varicela, el virus permane do o sobreinfección.
ce en estado de latencia en los ganglios sensiti
vos durante toda la vida y en determinadas cir Período de convalecencia: puede haber aste
cunstancias se reactiva y produce el herpes zoster. nia psicofísica, que aumenta con la edad del pa
ciente y dura 2 a 3 semanas.
Etiología
El virus varicela zoster pertenece al grupo de Complicaciones
los herpesvirus. Tiene simetría cúbica icosaé- La com plicación más frecuente es la infección
drica, mide unos 100 nm de diámetro, posee cuer secundaria de la piel por cocos grampositivos.
pos de inclusión nucleares y sus partículas con También puede comprometerse el tejido celular
tienen ADN. Es fácil encontrarlo en las lesiones subcutáneo, lo que generará abscesos y flemones.
vesiculares. La localización del virus en el tejido pulmonar
puede originar neumonía varicelosa, con tos, ex
Patogenia pectoración hemoptoica, cianosis, taquipnea y a
El virus ingresa a través de las vías respirato veces afectación pleural. Las com plicaciones
rias, la piel y las conjuntivas, donde se produce neurológicas son: encefalitis con compromiso
lareplicación primaria, con viremia posterior que cerebeloso, mielitis transversa o ascendente y sín
llega a la piel. En ésta se produce el exantema drome de Guillain-Barré. En niños con afecciones
que evolucionará de mácula a pápula, vesícula y malignas puede producirse una forma progresiva
costra. A partir de estas lesiones el virus ascien con diseminación visceral. Otras complicaciones
de por los nervios periféricos hasta alcanzar los m enos frecu en tes son m io ca rd itis, púrpura
ganglios nerviosos, donde permanece en estado trombocitopénica, artritis y glomerulonefritis.
latente.
Diagnóstico diferencial
Manifestaciones clínicas Deberá hacerse con:
Se describen los 4 períodos de su evolución.
H erpes zoster generalizado: dolor, distribución
Período de incubación: á\yí2itx\\.rt I 4 y 2 1 días, radicular, vesículas en ramillete.
es asintom ático, aunque en algunas ocasiones
puede observarse exantema fugaz. H erpes sim ple disem inado: lesiones vesiculo
sas de tipo monomorfo.
P eríodo de invasión: dura 1 a 2 días. Lo carac
terístico es el enantema de pilares, amígdalas y P rurigo: erupción cutánea papulosa con pruri
paladar blando, además de escasos elem entos to, en la cual la lesión característica tiene forma
cutáneos maculopapulosos o maculopapulove- de cúpula con pequeñas vesículas a las que sue
siculosos pruriginosos, y fiebre. len seguir costras o liquenificación.
Período de estado: se caracteriza por el exan ¡m pétigo: es afebril, sin enantema, no hay
tema maculopapulovesiculocostroso que evolu polimorfismo ni aparece por brotes.
c-
C apítulo 21 - Enferm edades exantem áticas ü 193
c
Escabiosis im petigenizada: tiene surcos y v e Varicela congénita c
sículas perlados, predomina en los pliegues y el Cuando la enfermedad es padecida en el pri
prurito es predominantemente nocturno. mer trimestre del embarazo, puede producirse el
aborto; pero si la gestación llega al término, el f
Toxidermias: hay antecedente de la ingestión recién nacido suele ser de bajo peso y presentar
de medicamentos. lesiones cicatrizales en la piel, hipotrofia de
miembros, alteraciones oculares (coriorretinitis,
Picaduras de insectos: hay antecedente epide atrofia óptica, microftalmía, cataratas), daño ce
miológico, por lo general están comprometidas rebral y retraso mental.
i
zonas expuestas. Cuando la infección materna se produce du
rante el período perinatal, un 20% de los neonatos
Erupción variceliform e de K aposi: se produce puede padecer infección generalizada, con un
en niños con eccema atópico, hay monomorfismo índice de mortalidad cercano al 35%.
local y general, y es producida por el virus del
t
herpes simple.
ENFERMEDAD DE KAWASAKI
c
(
194 □ P rim era parte - G eneralidades - Síndromes clínicos
- 9 6. Adenomegalia cervical, que adopta la forma 1 año, padecer fiebre de más de 14 días de dura
de adenopatía única submaxilar. ción, eritrosedimentación acelerada durante más
Hay también manifestaciones asociadas» entre de 1 mes, trombocitosis y palpación de aneuris
las que de incluyen artralgias y artritis, que pue mas periféricos.
den presentarse hasta en el 30% de los casos. El diagnóstico es clínico, y se establece de
La enfermedad de Kawasaki es una vasculitis acuerdo con los síntomas y signos mencionados.
sistémica que afecta las arterias de calibre me El tratamiento se basa en la administración de
diano y pequeño. El compromiso cardiovascular aspirina; 30 a 100 mg/kg/día durante el período
puede manifestarse con aneurismas coronarios y agudo, con reducción en el período de conva
de otras arterias. La arteritis es autolimitada, aun lecencia.
que los aneurismas coronarios pueden progresar, También se preconiza el uso de gammaglobu-
lo que hace indispensable una evaluación ade lina IV en la dosis de 400 mg/kg/día durante 5
cuada para tratar con rapidez estas com plicacio días consecutivos, a fin de disminuir la inciden
nes. Hay criterios para pronosticar el riesgo co cia de aneurismas, aunque en muchos centros se
ronario: ser del sexo masculino y tener menos de ia utiliza en dosis única de 1,5 a 2 g/kg.
estado general lo permita, el paciente deberá ser de los niveles de proteínas en el líquido ascítico
som etido a !a intervención quirúrgica con re no es definitoria.
paración de la perforación, lavado peritoneal, El tratamiento es m édico y la elección del es
extracción de restos necróticos de la cavidad ab quema antibiótico dependerá del agente causal.
dominal y la colocación de drenajes. El pronós Una vez efectuada la recolección de muestras para
tico es siempre reservado y empeora con la edad, cultivo de líquido ascítico y hem ocultivos, podrá
la peritonitis fecal, el shock o la falla respira indicarse un esquema antimicrobiano empírico,
toria. como la asociación de ceftriaxona, en dosis de
2 g/día, más metronidazol, 1,5 g/día, por vía intra
Peritonitis bacteriana espontánea venosa. El pronóstico de esta complicación depen
Es la infección primaria del peritoneo en au de del de la enfermedad preexistente, pero hay que
sencia de un proceso agudo intraabdominal de tener en cuenta que es una causa frecuente de insu
sencadenante. Los gérmenes involucrados pue ficiencia hepática en pacientes con cirrosis.
den no ser de origen entérico; con frecuencia se
aíslan el neum ococo y el estafilococo. La perito Peritonitis en la diálisis crónica
nitis espontánea es característica de aquellos pa Esta com plicación se presenta en el 10% de los
cientes con ascitis preexistente, con focos sépti pacientes con insuficiencia renal som etidos a
cos extraabdominales (endocarditis, catéteres diálisis peritoneal crónica mediante catéter peri
intravasculares infectados o infecciones urinarias) toneal permanente. Más de la mitad de los casos
o con inmunodeficiencias. Suele observarse con son causados por microorganismos que forman
frecuencia en la ascitis provocada por síndrome parte de la flora cutánea habitual, com o Staphylo-
nefrótico o cirrosis hepática. La morbilidad aso coccus aureiís, S. epiderm idis y Síreptococcus sp.
ciada con esta entidad se ha reducido en forma Las bacterias gramnegativas están involucradas
notable en los últimos años a partir de los esque con menor frecuencia y a veces se aíslan hongos.
mas de profilaxis que se implementan en los pa El tratamiento se basa en la administración de
cientes con factores predisponentes. El mecanis antibióticos intraperitoneales y sistém icos, y en
mo más frecuente de infección en los cirróticos ocasiones hay que retirar el catéter de diálisis.
con ascitis es el pasaje de bacterias intestinales a
través de la pared intestinal.
INFECCIONES INTRAPERITONEALES
Foreste motivo, la descontaminación bacteria
na por medio de antibióticos activos contra gér A bscesos intraperitoneales
menes gramnegativos (fluoroquinolonas) se con Se producen casi siempre por el pasaje de flora
sidera una medida preventiva eficaz. En estos entérica de la luz intestinal a la cavidad peritoneal,
pacientes la contaminación peritoneal puede ser como consecuencia de perforación, isquemia, trau
facilitada por el deterioro de la función hepática matismos o lesiones quirúrgicas. Suelen localizarse
en relación con la erradicación de bacterias y el en áreas bien delimitadas de los companimientos
rápido pasaje de los gérmenes desde los linfáticos supramesocólico o inframesocólico. Las localiza
hepáticos al líquido ascítico. ciones más frecuentes son la pelviana y la subdia-
El cuadro clínico se caracteriza por dolor ab fragmática, lo que se explica por tratarse de las
dominal difuso con reacción peritoneal, íleo, fie áreas con mayor declive cuando el paciente está
bre, náuseas y vómitos. El diagnóstico incluye el en decúbito, junto con el efecto de las contraccio
estudio del líquido peritoneal, que permite alcan nes diafragmáticas que atraen el líquido perito
zar el diagnóstico etiológico en un elevado por neal hacia la región subfrénica a través del espa
centaje de casos. La presencia de gérmenes en el cio parietocólico derecho. El cuadro clínico se
examen directo con la coloración de Gram, la exis caracteriza por fiebre con frecuencia en picos,
tencia de más de 300 leucocitos/mm^, un pH me dolor y distensión abdominal, con anorexia, náu
nor de 7,3 y un nivel de lactato mayor que 25 tc\g% seas, vóm itos y mal estado general. La presencia
son elem entos importantes a tener en cuenta en de escalofríos indica bacteriemia procedente del
el momento del diagnóstico. La determinación absceso o de su extensión a órganos adyacentes.
CApiVi/Zo 22 - Infecciones abdom inales Q 197
La localización del absceso depende del foco enterococos, K. pneum oniae, P. aeruginosá) y
contaminante y del declive del líquido peritoneal; anaerobias {B. fra g ilis y especies de Fusobac-
la mayoría de los abscesos causados por perfora te riu m , P e p to c o c c u s , P e p to s tr e p to c o c c u s y
ción apendicular se localizan en la fosa ilíaca clostridios). <c.
derecha, aunque pueden diseminarse al fondo de En pacientes inmunocomprometidos, así como
saco de Douglas o al resto de la cavidad peritoneal, en portadores de catéteres intravasculares o en <L,
en especial a los espacios subfrénico y subhepático. individuos sometidos a tratamientos prolongados
Los secundarios a infecciones hepatobiliares se con antimicrobianos, debe sospecharse la etiolo
localizan en el espacio subfrénico derecho. Los gía micótica. Las muestras para el diagnóstico X,
síntomas pueden referirse al tórax, con dolor en m icrobiológico pueden tomarse por aspiración
la base del hemitórax derecho o irradiado al hom con aguja fma, guiada por ecografía o TC, o du c
bro homolateral, disminución de la entrada de rante el acto quirúrgico, y se las somete a un e x
aire, respiración superficial, matidez, derrame haustivo estudio microbiológico (bacterias aero
pleural o atelectasias basales, o signos de reduc bias y anaerobias, hongos y micobacterias). Los
%■
ción de la motilidad del hemidiafragma derecho. hem ocullivos se practican en lodos los pacientes
A veces pueden disem inarse por el esp acio y pueden alcanzar hasta un 25% de positividad. <c
parietocólico derecho a la fosa ilíaca derecha o El tratamiento de los abscesos intraabdominales
al fondo de saco de Douglas, lo que origina los es médico y quirúrgico; incluye las medidas de 't
síntomas propios de esta localización. sostén tendientes a mejorar el estado general del
Los abscesos que se originan en procesos in paciente, la prescripción de esquemas de antibió
fecciosos que afectan el bazo se localizan en el ticos empíricos de amplio espectro, que sean ac 'l ,
espacio subfrénico izquierdo y se acompañan con tivos contra aerobios y anaerobios, y el drenaje
similares características sem iológicas. quirúrgico que deberá indicarse lo más temprano
Los síntom as rectales (d olor anal, pujos, posible. El tipo de drenaje dependerá del número
tenesmo) o urinarios (disuria, polaquiuria) sugie y la localización de los abscesos; en general, los
ren una localización pelviana. Ésta puede confír* abscesos solitarios se drenan por vía percutánea
marse mediante el tacto rectal o vaginal, ya que
provoca poca repercusión abdominal.
cuando la accesibilidad y localización así lo per
mitan. La exploración quirúrgica será necesaria ""i
Las colecciones intermesentéricas se desarro si se sospecha la existencia de varios abscesos o
llan entre las asas del intestino delgado y el me- la imposibilidad del drenaje percutáneo con ca
senterio y se acompañan con fiebre y en la ma téter. El tratamiento antibiótico empírico consis
yoría de los casos con íleo paralítico. te en la asociación de metronidazol o clindami-
La radiología convencional, la ecografía, la TC cina, un am inoglucósido y un betalactám ico
o la RM, así com o los estudios con radioisótopos (amoxicilina, piperacilina).
(galio 67, leucocitos marcados) ayudan a esta (i:;
blecer la localización del absceso. La radiografía Apendicitis aguda
simple de abdomen en posición de pie puede evi Es la enfermedad quirúrgica aguda del abdo
denciar imágenes con nivel hidroaéreo, íleo pa men más frecuente; puede presentarse a cualquier
ralítico localizado, desplazamiento de las asas edad, con franco predominio entre los 12 y los
intestinales y derrame pleural homolateral. La 20 años. En su patogenia desempeña un papel
ecografía y la TC son las técnicas más usadas en muy importante la obstrucción de la luz apendi
la actualidad para visualizar los abscesos intraab- cular, que puede deberse a coprolitos, hipertrofia
dominales; la elección de uno u otro método de del tejido linfoide del interior del órgano, cuer
pende de cada caso en particular. En el presente, pos extraños -sem illas de vegetales o frutas- y
los estudios por imágenes efectuados por radió parásitos intestinales, com o Enterobius vermi-
logos intervencionistas tienen un doble objetivo: cularis y A scaris lum bricoides. La obstrucción
diagnóstico y terapéutico. de la luz produce la acumulación de secreciones
La mayoría de los abscesos son polim icro- mucosas con incremento de la presión intralu-
bianos, causados por bacterias aerobias (£. coU, minal, congestión venosa y compresión de los
dt
A l'
m vasos que irrigan la porción distal de! apéndice. vuelve sintomática cuando aparece alguna de su.s
Esto condiciona la invasión y reproducción de com plicaciones graves: hemorragia, perforación
« bacterias y la eventual perforación de la pared y diverticulitis.
m isquémica. Una vez producida la perforación La diverticulitis es un proceso inflamatorio con
apendicutar, se inicia el cuadro de peritonitis, que infección local de uno o más divertículos. Suele
m puede ser pelviana o extenderse al espacio sub- iniciarse por la retención de materia fecal en el
hepático derecho a partir del flujo normal del lí saco diverticular debido a la estrechez de su cue
quido peritoneal. La rotura apendicular suele so llo. Las heces se desecan y transforman en co-
brevenir dentro de las 48 horas de iniciados los prolitos, que erosionan en forma mecánica la mu
m
síntomas. A veces la inflamación queda localiza cosa colónica con posterior invasión bacteriana de
m da, por la formación de adherencias entre el cie la porción distal del divertículo. Como éste asien
go y el íleon, y el cuadro clínico evoluciona en ta fuera de la pared colónica y el proceso inflama
m un tiempo más largo, que lleva a la formación de torio se inicia en su punta, lo que en realidad se
un flemón apendicular, y con posterioridad se produce es una peridiverticulitis con perforación
« origina el absceso. Los microorganismos que se macroscópica o microscópica del divertículo.
aíslan en casos de apendicitis aguda son los de la Los síntomas predominantes son dolor abdo
flora intestinal normal compuesta por enterobac- minal y fiebre. El dolor es con frecuencia cons
terias y anaerobios. tante y se localiza en la fosa ilíaca izquierda. La
El cuadro clínico se caracteriza por dolor de fiebre, a veces acompañada por escalofríos, pue
comienzo epigástrico, que luego se localiza en la de ser la única manifestación de la enfermedad,
fosa ilíaca derecha y se acompaña con fiebre, náu en especial en los ancianos. La gravedad del cua
m dro clínico y los hallazgos del examen físico de
seas y vómitos. En algunos pacientes el dolor pue
m de irradiarse hacia la región lumbar o el hipo penden de la extensión e intensidad del proceso
condrio derecho, según la ubicación anatómica inflamatorio. Éste suele comprometer con rapi
I* del apéndice. En el examen físico predomina el dez la serosa, por lo que pueden comprobarse sig
dolor con la palpación, que inicialmente se loca nos peritoneales localizados en la fosa ilíaca iz
# liza en la fosa ilíaca derecha y puede acompañarse quierda. Es frecuente el hallazgo de una cuerda
con reacción peritoneal localizada. Después el cólica palpable y dolorosa. La diverticulitis agu
dolor se generaliza, al igual que los signos de com da puede complicarse con perforación y peri
# promiso peritoneal. La temperatura diferencial tonitis fecal generalizada, la que es de muy mal
axilorrectal es habitualmente mayor de un grado. pronóstico.
# El laboratorio evidencia leucocitosis con neu- En algunos p acientes las m an ifestacion es
trofilia y eritrosedimentación acelerada. La ra inflamatorias se atenúan y la reiteración de epi
diografía simple de abdomen puede mostrar íleo sodios de diverticulitis puede favorecer la evolu
localizado o generalizado. El tratamiento siem ción hacía una forma crónica seudotumoral y
#
pre es quirúrgico, además deberá indicarse la te estenosante. La formación de abscesos silentes
m rapéutica antibiótica adecuada. puede obstruir el colon o provocar fístulas hacia
otras asas intestinales, vejiga o vagina.
# Diverticulitis La diverticulitis no complicada responde al tra
Los divertículos del colon son protrusiones de tamiento médico. El tratamiento quirúrgico de
# berá indicarse en forma urgente cuando se com
la mucosa a través de puntos de mayor debilidad
de la capa muscular; por lo tanto, la pared de los prueben signos de peritonitis, de progresión de
divertículos carece de capa muscular. Predomi un absceso, a pesar de la antibioticoterapia ade
nan en el colon distal, pero pueden encontrarse cuada, u oclusión intestinal.
en otros sitios del órgano.
« La prevalencia de los divertículos se incrementa Colecistitis aguda
con la edad y son muy frecuentes en edades avan Es la inflamación aguda de la pared de la vesí
zadas. La mayoría de los sujetos no presenta sín cula biliar como respuesta a la infección bacte
« tomas. La enfermedad diverticular de! colon se riana. Con excepción de las formas primarias
#
(•
C apítulo 22 - Infecciones abdom inales □ 199
(colecistitis por salmondas) y de las lesiones isqué trucción parcial de las vías biliares. Es habitual
micas agudas (diabetes), la mayoría de los casos que se asocie con coledocolitiasis (colangitis as
son secundarios a la obstrucción aguda del con cendente) y, con menor frecuencia, con el carci
ducto cístico. En el 80% de los casos la colecistitis noma de las vías biliares. También puede presen
aguda es una complicación de la colelitiasis; el 20% tarse com o una com plicación de la esfintero-
restante son colecistitis alitiásicas secundarias a plastia.
nutrición parenteral total u hospitalizaciones pro Desde el punto de vista clínico .se caracteriza
longadas, posoperatorios e infección por HIV. por fiebre en picos precedida por escalofríos, ic
Los agentes etiológicos predominantes son E. tericia y dolor en el hipocondrio derecho.
coli y los anaerobios de las especies B acteroides El laboratorio demuestra la existencia de leuco
y C lostñdium . citosis con neutrofilia y eritrosedimentación ace
E! cuadro clínico se caracteriza por dolor loca lerada. El cultivo de la bilis es positivo en el 75%
lizado en el hipocondrio derecho acompañado por de los pacientes y los hemocultivos, en un 40% de
anorexia, náuseas, vóm itos y fiebre. El hipo los casos. El microorganismo que se aísla con
condrio derecho es selectivamente doloroso con mayor frecuencia es £ . coli. Cuando la infección
la palpación, en especial en inspiración profunda progresa puede complicarse con la formación de
(signo de Murphy). En algunos sujetos puede múltiples abscesos hepáticos.
palparse la vesícula. La ictericia, por lo general Una variante e.special por su gravedad es la
leve, se presenta en un pequeño porcentaje de forma supurativa. Compromete casi con exclusi
casos. En pacientes seniles o debilitados la cole vidad a ancianos y constituye una indicación para
cistitis puede tener un curso subagudo y mani efectuar la laparotomía de urgencia para descom
festarse como fiebre de origen desconocido. presión y drenaje de la vía biliar. La antibio-
El laboratorio evidencia leucocitosis con neu- ticoterapia de amplio espectro y las medidas ge
trofilia. Las transaminasas -fosfatasa alcalina y nerales de sostén completan el tratamiento.
gammaglutamiltranspeplidasa- pueden estar ele
vadas en grado moderado aun en ausencia de
A BSC ESO S VISC ERA LES
coledocolitiasis. La amilasa también puede ele
varse en ausencia de pancreatitis simultánea. La Comprometen el hígado, el bazo y el páncreas.
radiografía simple de abdomen puede evidenciar La localización más frecuente es la hepática.
cálculos radiopacos. La ecografía -e l método más
valioso para confirmar el diagnóstico- muestra Abscesos hepáticos
el engrosamiento de la pared, la distensión vesicu Pueden ser primarios o secundarios, únicos o
lar y la litiasis o barro biliar. múltiples. El lóbulo derecho es el comprometido
Las complicaciones más importantes de la cole con más frecuencia. Los primarios por lo general
cistitis aguda son la perforación localizada con se originan en infartos hepáticos y los secunda
absceso perivesicular, la perforación en cavidad rios, en tromboembolismo séptico. Los consecu
libre, que origina una peritonitis biliar o coleperi- tivos a colangitis séptica suelen ser múltiples y
toneo con elevada mortalidad, y las fístulas colecis- comprometen ambos lóbulos. Por último, en los
toentéricas, por la perforación de la vesícula en el que se originan a partir de apendicitis, colecistitis,
duodeno. diverticulitis o focos sépticos abdominopelvianos
El tratamiento consiste en hidratación parenteral, las bacterias llegan por vía portal o por contigüi
sonda nasogástrica, analgésicos, antibioticoterapia dad. Se han descripto también como complica
(ampicilina, gentamicina y metronidazol) y en la ción del trasplante hepático así como de enfer
mayoría de los casos el abordaje quirúrgico ur medades granulomatosas crónicas, diabetes me-
gente. llitus, anemia de células falciformes. hemopa-
tías malignas, hepatocarcinoma y en pacientes
Colangitis con infección por HIV. La etiología en general es
La colangitis es la inflamación de los conduc polimicrobiana e incluye bacterias aerobias y
tos biliares, que en general coincide con una obs anaerobias de la flora del aparato digestivo:
200 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
fiebre, náuseas, vómitos y un cuadro séptico de El diagnóstico se confirma con los mismos
gravedad variable. En el examen físico se com métodos utilizados para los restantes abscesos
prueba distensión abdominal, dolor con la palpa viscerales. La TC y la ecografía permitan cono
ción superficial y profunda, e íleo paralítico. Pue cer la localización anatómica.
de haber derrame pleural izquierdo. El tratamiento incluye la administración de
El diagnóstico se confirma por la ecografía y antibióticos (aminoglucósidos más clindamicina
laTC. El tratamiento es médico y quirúrgico. o metronidazol) y el drenaje quirúrgico a cielo
abierto, o por punción guiada por TC o ecografía.
absceso s RETROPERITONEALES
Abscesos del músculo psoas
Constituyen cerca del 40% de los abscesos ab Pueden ser primarios o secundarios a osteo
dominales y entre ellos se incluyen los perirre- mielitis o discitis vertebral, piógena o tubercu
nales y ios del músculo psoas. Se asocian con losa, artritis séptica de la articulación sacroilíaca,
una elevada morbimortalidad, principalmente apendicitis retrocecal perforada, abscesos perirre
debida a las dificultades para el diagnóstico y el nales o enfermedad de Crohn. En la actualidad
retraso en el inicio de la terapéutica. El retrope- Staphylococcus aureus es el patógeno aislado con
riioneo es una región anatómica compleja, com mayor frecuencia en los abscesos primarios y en
prendida entre el peritoneo parietal posterior y la los originados en osteomielitis vertebrales, sacroi-
parte posterior de la fascia transversal. Se divi leítis y perinefritis. Cuando se originan en una
de en 3 espacios: el pararrenal anterior o retroperi- perforación de viscera hueca la flora es mixta e
toneal anterior, el perirrenal y el pararrenal poste incluye microorganismos aerobios y anaerobios.
rior o retroperitoneal posterior. Limita por arriba Debido a la localización posterior del músculo
con el diafragma, por debajo con el reborde de la psoas, los síntomas son poco sugestivos; a veces
pelvis y a los laterales con los músculos lumbares. se manifiestan como fiebre de origen desconoci
do. También pueden presentarse con dolor irra
Abscesos perirrenales diado a la cadera, la ingle, el muslo y la espalda.
Se originan habitualmente a partir de infeccio El paciente suele flexionar la cadera y rotar la
nes renales y los gérmenes que predominan son pierna hacia afuera; ya que esa posición, al rela
las enterobacterias. Cuando son secundarios a jar el músculo, alivia el dolor. La elevación del
bacteriemias el agente involucrado por lo gene miembro homolateral despierta dolor y en la fosa
ral es Staphylococcus aureus, y si se inician en el ilíaca puede palparse una masa dolorosa.
tubo digestivo, predominan las enterobacterias y Hay leucocitosis con neutrofilia, eritrosedi
los anaerobios. mentación acelerada y los hemocultivos suelen
El cuadro clínico se caracteriza por fiebre, es ser positivos. La radiografía simple de abdomen
calofríos, compromiso del estado general, náu de pie muestra borramiento del borde del psoas.
seas, vómitos y dolor lumbar, que puede propa La TC con contraste y la ecografía proporcionan
garse a glúteos, ingles, caderas o muslos, sin las el mejor detalle anatómico del psoas, además
características del dolor cólico asociado con la permiten detectar el compromiso de órganos ad
litiasis renoureteral. Hay puñopercusión lumbar yacentes.
dolorosa, abovedamiento de la región lumbar, El tratamiento incluye el drenaje quirúrgico o
distensión abdominal y, a veces, íleo paralítico. percutáneo, con aguja guiada por TC o ecografía,
En los exámenes de laboratorio se comprueba y la antibioticoterapia de acuerdo con la flora
leucocitosis, neutrofilia y eritrosedimentación predominante.
acelerada. La radiografía directa de abdomen
puede mostrar asas intestinales dilatadas por el
A BSC ESO S DE LA PARED ABDOMINAL
íleo y el borramiento de la silueta del músculo
psoas. En los procesos causados por gérmenes Pueden deberse a múltiples causas: bacteriemia
anaerobios suele haber gas dentro de la colec o septicemia, infecciones de piel y heridas trau
ción. máticas o quirúrgicas. Estas últimas son las res
202 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
ponsables, con mayor frecuencia, de los absce sos originados por la cirugía de apendicitis,
sos de la pared abdominal. En general se produ colecistitis o diverticulitis la infección es poli-
cen entre los 8 y 15 días del posoperatorio. La microbiana y se debe a bacterias de la flora in
fiebre de 39*C a 40®C y el cuadro general (esca testinal (E. coli, bacilos aerobios gramnegativos,
lofríos. astenia, anorexia, palidez, sudoración) son bacteroides o Enrerococcus). Estos abscesos pue
orientadores de esta complicación posquirdrgica. den ser foco emisor de microorganismos y origi
El dolor local debido al acto quirúrgico, que ya nar infecciones sistémicas.
había cedido parcialmente, vuelve a incremen Aunque la mayoría de las veces el diagnóstico
tarse. Hay tumefacción de la herida y a veces a clínico es claro, es importante el examen ecográ-
través de ella o de los puntos de sutura drena ma fico porque, además de confirmar el diagnósti
terial purulento o seropurulento. co, permite descartar abscesos en la cavidad
El absceso asienta en general en el tejido celu peritoneal.
lar subcutáneo, pero puede comprometer la piel El laboratorio evidencia leucocitosis, neutro-
y los planos profundos. En ocasiones drena en filia y eritrosedimentación acelerada. Antes de
forma espontánea hacia la piel o hacia el perito administrar el tratamiento antimicrobiano se lle
neo. Las causas predisponentes son los defectos vará a cabo el examen bacteriológico directo (flo.
en la técnica quirúrgica o de la esterilización del ra predominante) y los cultivos en aerobiosis y
material quirúrgico, así como hematomas, sero- anaerobiosis del material del absceso, obtenido
mas, tejidos necróticos o cuerpos extraños (gasa, por punción aspirativa o por el drenaje quirúrgi
material de sutura) en la herida. En intervencio co, además de los correspondientes hemocultivos.
nes quirúrgicas sobre la pared abdominal que no El tratamiento es quirúrgico y debe asegurar el
hayan interesado órganos huecos o previamente completo drenaje del absceso. Además se reali
infectados, como en la cirugía de hernias, los abs zará el tratamiento empírico con antimicrobianos
cesos son provocados por microorganismos prove activos frente a microorganismos aerobios y
nientes de la piel del paciente o del exterior, por lo anaerobios, hasta tanto se obtengan los resulta
general Sfaphylococcus aureus. En ios absce dos de los exámenes bacteriológicos.
Bibliografía - • .........-
M andell GL, Bennett JE y Dolin R. Enferm edades W llson SE, Finegoid SM y W illiam s RA. Infecciones
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2*ed. McGraw-HÜl/Interamericana. México, 1999. Interamericana. México, 2000.
23
Enfermedades por venenos de animales
Olindo A. L. Martino
Tomás Orduna
Ornar J. Palmieri
El ser humano es susceptible a ia acción tóxica De acuerdo con diferentes variables, depen
de ciertos venenos de animales inoculados a tra dientes del animal agresor y del sujeto agredido,
vés de picaduras o mordeduras. el emponzoñamiento evolucionará hacia una for
Toda exposición entraña un riesgo imprevisto ma cutánea o cutaneosistémica. Entre esas varia
para la salud, mientras que la magnitud del daño bles se destacan: cantidad de veneno inoculado,
dependerá de los siguientes factores: picadura, área de inoculación y susceptibilidad individual
mordedura o contacto con las estructuras o al veneno de Loxosceles.
secreciones del animal; inoculación de la ponzo
ña específica (veneno biológico), complicacio Loxoscelísmo cutáneo
nes vinculadas con sobreinfecciones y factores La picadura de esta araña produce una sensa
de riesgo relacionados con la víctima. ción punzante, poco dolorosa, relacionada con la
Aquí se estudiarán sólo las zoopatías médicas acción mecánica de los quelíceros. El sitio de la
más importantes. lesión suele localizarse con mayor frecuencia en
los miembros.
Transcurrido un lapso variable, entre minutos
ARAÑAS
y algunas horas, en el área de la picadura apare
Las arañas son artrópodos, ampliamente distri ce dolor de tipo urente (sensación de quemadu
buidos por lodo el mundo, que comprenden gran ra). que suele acompañar gran parte de la evolu
cantidad de familias con numerosos géneros y es ción de la enfermedad y extenderse a zonas ad
pecies. Varios de estos géneros son responsables de yacentes.
accidentes que pueden causar daño local o sistémico. La lesión cutánea se inicia con una pápula, que
al cabo de algunas horas llega a medir 2 o 3 cm,
Loxosceles la cual evoluciona a placa eritematosa o bien a la
La picadura de arañas del género Loxosceles clásica placa íivedoide. Esta última muestra áreas
provoca una pequeña lesión traumática en el si rojo-violáceas que .se alternan con otras de tinte
tio de hincadura de los quelíceros, evidenciable pálido y contornos irregulares; el conjunto da un
muchas veces sólo con 1a ayuda de una lupa. El aspecto de mármol veteado. La frecuencia de apa
momento en que se produce el accidente puede rición de la placa y su tamaño son muy variables.
pasar desapercibido, ya que a menudo se produ Desde el inicio del cuadro se desarrolla un ede
ce en las horas del descanso. ma de consistencia dura que afecta toda el área
204 □ Prim era parle - Generalidades - Síiidromc.s clínicos
de la lesión. Entre el quinto y el séptimo día la La dosis depende del cuadro clínico; para el
zona afectada se oscurece, evoluciona a la ne- loxoscelism o cutáneo es de 5 ampollas por vía
crosis y se convierte en una escara. Luego de 10 IM o IV, y para los ca so s de loxoscelism o
a 15 días ésta comienza a desprenderse lentamen cutaneosistémíco es de 10 ampollas. En presen
te por los bordes y tra.s su caída queda una úlcera cia de anemia hemolítica grave está indicada la
de bordes irregulares. La cicairización suele pro administración temprana de corticosteroides. Se
ducirse en 4 a 6 semanas. considera que la dapsona, 100 mg cada 12 horas,
A veces se registran manifesiaciones genera tiene una acción terapéutica marcada, con dismi
les de poca duración (insomnio, astenia, escalo nución de la respuesta local. La diálisis está in
fríos). dicada en los casos de insuficiencia renal.
Sus características clínicas son las de un sín motriz, contracciones tonicoclónicas, taquicardia,
drome neurológico con dolor y parestesias inten hipotensión, sudoración, broncorrea, edema pul
sas en el lugar de la picadura, sudoración, sialorrea, monar, sialorrea, rinorrea y epífora. En algunos
visión bonosa, calambres musculares, priapismo, casos la progresión de la siniomatología puede
excitación psicomotriz y crisis convulsivas. El llevar a la muerte.
cuadro suele ser más grave en los niños.
Tratamiento
Tratamiento En los sujetos adultos el accidente no reviste
El antiveneno específico está formalmente in gravedad, por lo que sólo se realizará el trata
dicado, sobre todo en niños pequeños. miento sintomático.
En los niños pequeños, en cambio, debido a la
iycosa gravedad de los síntomas se requiere el antive
También se la denomina «araña lobo» o «ara neno específico.
ña jardinera». Es muy común en parques y jardi
nes; su tamaño habitual oscila entre 25 y 30 mm.
OFIDIOS
La picadura de esta araña produce una pápula
eritematosa muy dolorosa. Pueden aparecer pe Accidentes por mordedura de yarará
queñas vesículas con contenido seroso y a veces Alrededor del 95% de los accidentes que se
áreas equimóticas. producen en la Argentina debidos a ofidios vene
nosos son mordeduras de víboras del género
Tratamiento Botbrops. Los ejemplares, de diversos tamaños,
Suele ser suficiente la medicación sintomática poseen un aparato inoculador constituido por dos
(analgésicos, antihistamínicos). En regiones tro colm illos finos, largos y levemente curvos, que
picales ha resultado beneficioso el uso del antive tienen un conducto central (solenoglifo) sem e
neno específico. jante a una verdadera aguja hipodérmica. Se ha
llan en la región anterior del maxilar superior y
tienen la facultad de protruir cuando el animal
ESCORPIONES
ataca y de retraerse contra el paladar cuando la
Tityus trivittatus boca está cerrada. En la Argentina se conocen las
Dentro de los escorpiones, Tityus friviítarus es sig u ie n te s e sp e c ie s: B o th ro p s a lte r n a tiis ,
la especie más difundida en América. En la Ar Bothrops neuw iedii d iponts, Bothrops am m o-
gentina se lo encuentra desde el norte del país dytoides, Bothrops jararaca y Bothrops jarara-
hasta la provincia de Buenos Aires inclusive. Es CUSSlí.
de color castaño claro o rojizo. Posee una pinza El veneno de yarará tiene tres propiedades fun
anterior, que utiliza para inmovilizar a su presa, damentales: proteolítica, coagulante y hemorrá-
y una cola articulada, que termina en una púa gica. La acción necrótica o proteolítica se debe a
doble que vehiculiza el veneno. Esta especie pa la presencia de proteasa, fosfolipasa A, nucleasa
rece ser partenogénica, lo que favorecería su dis y sustancias com o la L-am inoácido-oxidasa,
persión geográfica. En las zonas rurales se los hialuronidasa y factores liberadores de histamina,
halla en lugares secos y oscuros, debajo de cor bradicinina y otras. Todas estas enzimas produ
tezas de árboles, piedras, ladrillos, etc. cen daño celular e inflamación, que pueden lle
Se han adaptado bien a las zonas urbanas, como var a la necrosis en el sitio de la mordedura. La
la ciudad de Buenos Aires, donde se los ha en realización de maniobras locales, como tornique
contrado en sótanos, túneles y depósitos. te, cauterización y aplicación local del antiveneno
La picadura de escorpión determina manifes favorecen esa acción y agravan el cuadro local.
taciones locales y generales. En el lugar de la pi El efecto coagulante depende principalmente
cadura el individuo refiere dolor de intensidad de la enzima L-arginina esterasa. Esta enzima
variable, eritema, edema y parestesias. Las ma transforma el fibrinógeno en fibrina y además
nifestaciones generales son excitación psico actúa sobre la protrombina y el factor X. Se pro
m
m
206 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
<R
«I ducen así múlliples microtrombos que pueden La muerte en las primeras 72 horas se debe al
depositarse en diferentes visceras, principalmen shock o a la hemorragia cerebral o en otras visceras.
te en el riñón, el pulmón, el corazón y el cerebro. La letalidad del accidente botrópico sin trata
La acción hemorrágica es producida por com miento se acerca al 8%, pero se reduce al 0,5%
ponentes del veneno (metaloproteínas) que le cuando el antiveneno se utiliza oportunamente.
sionan la membrana basal de los endotelios
vasculares, a lo que se suma la trombocitopenia Diagnóstico
y las alteraciones de la coagulación menciona El diagnóstico de accidente botrópico en la eta
das. pa precoz es sugerido por un edema doloroso, en
Si el veneno circula por los vasos en cantidad cuyo centro se encuentran las improntas dentarias
suficiente, el fibrinógeno desaparece por comple del ofidio, y por la aparición de signos revelado
to y la sangre se torna incoagulable. La adición res de la alteración de la coagulación sanguínea
de trombina no revierte el cuadro, pero sí lo lo (equimosis local, epistaxis, hemorragia gingival).
gra el antiveneno en dosis adecuadas. La localización más frecuente de la mordedura es
el tercio distal de los miembros inferiores.
Manifestaciones clínicas
Luego de la mordedura, que deja la impronta Tratamiento
de los colmillos, comienza en forma casi instan Se aplicará el antiveneno específico en dosis
tánea un dolor de intensidad variable. A los po suficiente y por vía intravenosa. El tratamiento
cos minutos aparece un edema duro, que puede debe ser precoz para neutralizar con rapidez los
abarcar todo el miembro afectado. Al cabo de 12 efectos del veneno. En todos los casos deberá ha
a 24 horas se observa equimosis y a veces apare cerse la profilaxis antitetánica.
cen ampollas de contenido seroso o hemátíco. La
equimosis suele extenderse a todo el miembro y Accidentes por mordedura de víbora de cascabel
evolucionar a la necrosis cutánea. En los casos La denominación víbora de cascabel (Crotaius
graves se compromete el músculo y los planos durissus terrificus) se atribuye a la presencia de
óseos. Si hay alteraciones de la coagulación, apa un apéndice caudal articulado que con el movi
recen hemorragias gingivales, epistaxis y hema- miento produce una vibración que origina un so
temesis. En ocasiones el paciente acusa dismi nido característico.
nución de la agudeza visual, náuseas, vómitos, El veneno posee tres acciones: neurotóxica,
taquicardia, hipotensión y shock. Este último miotóxica y coagulante.
puede llevar a la necrosis tubular renal y, en con
secuencia, a la insuficiencia renal aguda. Manifestaciones clínicas
En los exámenes de laboratorio se comprueba A diferencia del accidente botrópico, en el si
leucocitosis leve o moderada, trombocitopenia, tio de la mordedura los signos locales son dis
tiempo de protrombina prolongado, que puede cretos: eritema leve, con edema ligero o no, equi
llegar hasta la incoagulación sanguínea, albu mosis pequeña, dolor poco acentuado y sensa
minuria y hematuria. ción de adormecimiento.
Existe una forma leve de emponzoñamiento, Luego de 15 a 30 minutos sobrevienen visión
caracterizada por dolor y edema discreto, con alte borrosa, diplopía, ptosis palpebral, disminución
raciones de la coagulación o sin ellas y manifes de la agudeza visual, alteraciones del equilibrio,
taciones hemorrágicas leves o ausentes. cefalea e hiporreflexia osteotendinosa.
En la forma moderada el edema supera el seg El cuadro neurológico se asocia con mialgias
mento anatómico agredido y se comprueban ma generalizadas (miotoxicidad) y mioglobinuria que
nifestaciones hemorrágicas. La forma grave se en casos graves puede llevar al daño renal. En
caracteriza por hemorragias viscerales y shock, ocasiones hay incoagulabilidad sanguínea o tiem
mientras que el cuadro local típico incluye ede po de coagulación prolongado. La muerte, que
ma extenso y duro, dolor intenso y, a veces, sín puede sobrevenir entre las 24 a 48 horas o al cabo
drome compartimental. de varios días, se debe a insuficiencia renal. Sin
Capitulo 23 - Enferm edades por venenos de anim ales □ 207
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l í del organismo durante largos períodos en los que Hay una alta prevalencia de sífilis entre los in
evade la respuesta inmune. fectados por HIV, debido a que la vía de transmi
Se divide por fisión binaria cada 30 a 33 horas, sión de ambos agentes patógenos es la misma.
es de forma espiralada y ejecuta un triple movi
l i
miento característico que visto con el microsco Patogenia
pio de campo oscuro permite identificarla entre La sífilis se transmite por contacto directo con
oíros treponemas no patógenos. lesiones infecciosas (sífilis primaria o secunda
«• ria). Treponema pallidum penetra a través de la
Epidemiología piel o las mucosas sin necesidad de que éstas se
li La distribución de la sífilis es mundial y sus encuentren traumatizadas. Comienza a replicarse
patrones epidemiológicos son los de la mayoría en el sitio de inoculación y a las pocas horas se
ۥ
de las ETS. Es más frecuente entre personas disemina por vía hemática y linfática. Esto des
!• sexualmente activas con conductas de riesgo (dro- encadena una respuesta inmune que culmina con
gadicción, prostitución). El aumento de su inci la síntesis de anticuerpos específicos antitre-
(* dencia entre los heterosexuales, a partir de la se ponémicos y anticuerpos inespecíficos. Ambos
gunda mitad de la década del 80, se ha acompa son evidenciables por el resultado positivo de las
ñado del correspondiente incremento en las ta reaccion es ser o ló g ic a s, treponém icas y no
sas de sífilis congénita. treponémicas (ver más adelante).
El tiempo de incubación varía entre 10 y 90
c i días con una media de 3 semanas.
Cuadro 24-1. Clasifícddón de las BT$ según su causa. La enfermedad cursa con períodos de gran
contagiosidad de persona a persona (primario y
secundario) y etapas silentes sólo detectables
Sífilis
mediante pruebas serológicas. Durante los esta
Chancro blando o chancroide
dios de actividad el riesgo de contagio a la pareja
H Gonorrea
varía del 30% al 60%.
Enfermedades por Chiamydia trachomatis
Enfermedades por Mycoplasma hominis
Anatomía patológica
Enfermedades por Ureaplasma urealyticum
m En la sífilis prim aria, en las lesiones se obser
Vaginosis bacteriana
va vasodilatación, con proliferación de células
i» Granuloma inguinal
endoteliales e infiltrados perivasculares, con
linfocitos y abundantes células plasmáticas. La
.,t í Herpes simple (HSV) intensidad del infiltrado determina la dureza ca
Condilomas acuminados (HPV) racterística del chancro primario. Las tinciones
'M
Molusco contagioso argénticas identifican las espiroquetas a nivel
Ü Hepatitis B dermoepidérmico.
HlV/sida La sífilis secundaria se caracteriza por una
i» Infección por Citomegalovirus capilaritis plasmocitaria, mínima en la etapa de
roséola y más llamativa en el resto de las lesio
II nes. En las lesiones de más de tres meses de evo
Tricomoniasis
lución se insinúan infiltrados granulomatosos de
41 Giardiasis
células epitelioides y gigantes.
Amebiasis
ft l En la actualidad la sífilis terciaria es muy in
I
frecuente; puede manifestarse años después de
»• Candrdiasis la infección inicial.
El aparato cardiovascular es el más afectado,
O AíU
80% a 85% de los casos. En cambio, el compro
Escabiosis
miso del SNC se produce en el 5% al 10% de los
lá l Pediculosis pubiana
casos. Otras manifestaciones posibles son las
Al
41
I»'
Ca/;i7M/o 2^ - Enferm edades de transmisión sexual □ 211
lesiones gomosas en el hígado, pulmón u otras Sífilis terciaria: es la forma tardía de la enfer
localizaciones. medad, sólo observable en un tercio de los pa
La sífilis cardiovascular -quQ afecta principal cientes no tratados. Se caracteriza por el escaso
mente la aorta- produce una cicatrización infla número de treponemas en las lesiones, pero hay
matoria de la túnica media (mesoaortitis) que gran destrucción de tejidos.
debilita la pared arterial. Ello es causa de dilata
ción (aneurisma) y ensanchamiento de la luz Sífilis latente: el diagnóstico sólo es posible por
vascular, insuficiencia del anillo valvular y este la realización de pruebas reactivas, treponémicas
nosis de los ostium coronarios. y no treponémicas, en ausencia de síntomas.
La sífilis del SNC, o neurosífilis, también es
una manifestación tardía que puede presentarse Manifestaciones clínicas
como sífilis m eningovascular, tabes dorsal o p a Sífilis primaria
rálisis general progresiva. La sífilis meningo- En el sitio de inoculación y después de un pe
vascular se caracteriza por la presencia de una ríodo de incubación de unos 25 días, aparece el
endarteritis obliterante con reacción inflamatoria chancro primario o chancro duro, lesión indolo
perivascular en la que predominan célu las ra, indurada y de aspecto limpio. Por lo general
plasmáticas. es único, pero también suele haber varios. En la
La {abes dorsal se caracteriza por la pérdida de actualidad es frecuente observar formas atípicas:
axones y de mielina de las raíces dorsales, con atro chancro fagedénico, balanitis erosiva y otras.
fia de los cordones posteriores de la médula Las localizaciones más comunes en el hombre
espinal. La pérdida de sensibilidad que esto gene son el surco balanoprepucial, el frenillo y el glan
ra es la causa de la arlropatía degenerativa de la de. En la mujer se suele encontrar en los labios
articulación de la rodilla (artropatía de Charcot). mayores, los menores y el clítoris. En el 25% de
La parálisis general progresiva se produce por los casos asienta en el cuello uterino y pasa inad
la atrofia cerebral generada por la invasión vertido.
parenquimatosa difusa del treponema, que causa El 10% de los chancros tiene ubicación extra-
necrosis celular. Hay pérdida de neuronas cor genital: ano, lengua, labios, etc. A la semana de
ticales y proliferación de la microglia. su aparición se pueden palpar las adenopatías sa
Los gomas sifilíticos están constituidos por télites, definidas por su aflegmasia característica.
necrosis plástica o gomosa; son más frecuentes La evolución del chancro dura 2 a 3 semanas,
en hígado, huesos y testículos. La erosión de un al cabo de las cuales desaparece en forma espon
goma cutáneo o submucoso suele producir una tánea y se inicia el período de latencia precoz.
úlcera anfractuosa. Puede haber un goma solita El diagnóstico diferencial del chancro sifilítico
rio o varios, y su tamaño oscila desde algunos abarca chancro blando, herpes simple, linfogra-
milímetros a grandes masas tumorales. La cica nuloma venéreo, chancro escabiótico, epitelioma
trización de los gomas en el hígado determina y otras lesiones ulcerosas.
una lesión conocida como hepar lobatum.
Sifílis SGCUtJdaria
Clasificación Se inicia al cabo de 4 a 8 semanas después del
La sífilis se clasifica en precoz y tardía. Es chancro, o sea 2 a 3 meses después del contagio.
precoz cuando el tiempo de evolución es menor Es el resultado de la diseminación sistémica de
de un año y tardía cuando supera ese umbral o los treponemas y su impacto en los distintos teji
no se puede determinar su antigüedad. dos.
Es el período más contagioso y en el cual el
Sífilis primaria: se caracteriza por la presencia título de anticuerpos tiene su valor máximo.
del chancro en el sitio de inoculación. Como resultado de esta «sepsis treponémica»
el paciente puede presentar síntomas generales
Sífilis secundaria: su rasgo distintivo es la inva como fiebre, cefalea, dolores óseos y decaimien
sión de Treponema pailidum a los distintos tejidos. to general. En etapas más avanzadas se suele ver
212 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
alopecia de cuero cabelludo y cola de cejas; más El diagnóstico diferencial del goma sifilítico
raramente, hepatomegalia e incluso ictericia. En incluye gomas micóticos y tuberculoso, mientras
algunos pacientes puede presentarse síndrome que los tubérculos deben diferenciarse de la tu
nefróiico por inmunocomplejos circulantes. berculosis y la lepra.
Es clásica la presencia generalizada de adeno-
patías indoloras. No obstante, el signo más típi SiUiis cardiovascular
co de este período es el compromiso cutáneo, que Por lo general comienza 15 a 20 años después
se presenta con intensidad variada en el 75% al de la infección primaria y su manifestación princi
100% de los casos. Se trata de un exantema que pal es la aortitis, que puede presentarse como
pasa de un estadio maculoso (roséola sifilítica) a aortitis no complicada, insuficiencia aórtica o
otro papuloso, no pruriginoso, que si bien es de aneurisma aórtico. Las complicaciones que pue
localización muy variable, nunca falta en palmas den llevar a la muerte son la insuficiencia circu
y plantas. latoria, la obstrucción coronaria o la rotura del
A las lesiones de este período se las denomina aneurisma. La aorta ascendente es la afectada
sifílides. En los pliegues, las sifílides se maceran con mayor frecuencia. Produce debilidad del ani
y se conocen como condilomas planos (anales, llo valvular aórtico, distorsión de las cúspides,
vulvares, etc.). Los condilomas planos y las sifí regurgitación aórtica y estenosis de las arterias
lides mucosas (orales, genitales), por ser lesio coronarias.
nes húmedas, son muy contagiosas.
En ausencia de tratamiento las lesiones de la Neurosífilis
sífilis secundaria evolucionan por brotes recu Puede ser asintomática o sintomática. En la pri
rrentes hasta desaparecer sin dejar cicatriz. El mera no hay signos o síntomas neurológicos que
polimorfismo de estas manifestaciones justifíca sean expresión de lesiones del sistema nervioso.
que a la sífilis se la denomine «la gran simula Éstas sólo pueden diagnosticarse detectando anor
dora». malidades del LCR, con VDRL o FTA-Abs posi
Luego de esta etapa de secundarismo el sujeto tivas.
entra en otro período de latencia. La reactivación La neurosífilis sintomática depende del grado de
ulterior sólo se produce en un tercio de los casos compromiso parenquimatoso, vascular o meníngeo.
y constituye el último estadio, o sea la sífilis ter El goma sifilítico puede comprometer el siste
ciaria. ma nervioso, lo que origina síntomas -fenóm e
El diagnóstico diferencial de la sífilis secun nos compresivos, signos focales motores y au
daria debe hacerse con los exantemas virales, la mento de la presión intracraneana- relacionados
farmacodermia, la pitiriasis versicolor, la piti- con el tamaño y localización de las lesiones.
riasis rosada y otros exantemas. En la actualidad la sífilis cerebrovascular es
un cuadro raro. El accidente cerebrovascular, que
SifíUs terciaria se presenta en pacientes de 35 a 55 años, es pre
Es la forma tardía, que asume distintas carac cedido por cefalea, vértigo y hemiparesia.
terísticas de acuerdo con el momento cronológico La parálisis general progresiva es una menin-
en que se presente. goencefalitis crónica que aparece entre los 20 y
La localización cutánea, llamada forma benig los 40 años después de la sífilis primaria. Tiene
na, está constituida por la presencia de tubércu un comienzo discreto, con deterioro psíquico y
los (le sio n e s dérm icas) o gom as (le sio n e s físico asociado con trastornos motores, al que en
hipodérmicas). Los tubérculos se ubican por lo forma progresiva se agregan déficit de la concen
general en la región centrofacial, el tronco y los tración y la memoria, como también alteraciones
genitales. Suelen ser escasos, poco contagiosos, psiquiátricas. Éstas consisten en cuadros de
destructivos y dejan secuela cicatrizal. Los g o megalomanía que concluyen con deterioro inte
m as son más frecuentes en los miembros y en el lectual y motor progresivo, que lleva a la muerte
cuero cabelludo; cuando asientan sobre un plano antes de los 5 años del comienzo de los sínto
óseo, pueden destruirlo. mas.
T
Capítulo 24 - Enferm edades de transmisión sexual □ 213
La neurosífilis tabética suele iniciarse entre los S ífilis congénita tardía. Sus características
15 y 20 años de la sífilis primaria. Se caracteriza destructivas -que recuerdan la sífilis terciaria del
por la degeneración de los cordones posteriores adulto- son secuelas de la forma precoz no trata
(je la médula, que origina un cuadro de ataxia da. Entre ios hallazgos típicos están la tríada de
progresiva, con dolores lancinantes de los miem Hutchinson (sordera, queratitis intersticial y al
bros inferiores y crisis viscerales. Hay pérdida teraciones dentarias), las cicatrices radiadas
de los reflejos tendinosos y de la sensibilidad peribucales, las tibias en hoja de sable y las alte
profunda, trastornos vegetativos (disfunción vesi raciones óseas craneanas.
cal e intestinal) y, con frecuencia, se asocian el
signo de Argyll-Robertson, la atrofia óptica, el Diagnóstico
mal perforante plantar y la artropatía degenerativa El diagnóstico clínico se basa en la epidemio
de la rodilla (artropatía de Charcot). logía y en el aspecto de las lesiones, de acuerdo
con lo descripto precedentemente.
SifíÜs y HIV El diagnóstico de laboratorio requiere los pro
En los infectados por HIV -entre quienes la cedimientos que se describen a continuación.
incidencia de sífilis es elevada- el curso de la
enfermedad dependerá del estado inmunitario. Examen directo. Se realiza con microscopía de
Cuando hay compromiso grave del sistema in fondo oscuro y es un método útil para el diag
mune, las manifestaciones son más floridas y las nóstico de la sífilis primaria o secundaria, siem
pruebas serológicas, difíciles de interpretar. pre y cuando haya lesiones cutáneas o mucosas
Por su gravedad, y porque es muy común en con treponemas en abundancia, com o el chan
esta población, es importante detectar la neuro cro, las placas mucosas y los condilomas. El re
sífilis temprana. Ésta puede ser asintomática sultado negativo no excluye el diagnóstico de sí
-sólo detectable por punción lumbar- o adoptar filis. El material obtenido de las lesiones de la
la forma inflamatoria (meningitis, neuritis ópti mucosa bucal o genital presenta el inconvenien
ca bulbar, uveítis, coriorretinitis). te de que hay que diferenciar Treponema pallidum
de otros treponemas, no patógenos, comunes en
Sífilis congénita esas cavidades. No obstante, un resultado positi
La transmisión vertical de la sífilis puede tener vo obtenido por un bacteriólogo entrenado es
lugar en cualquier momento del embarazo; cuanto suficiente para establecer el diagnóstico e iniciar
más precoz sea la infección materna (mayor el tratamiento.
antigenemia), más elevado será el riesgo.
En las embarazadas con sífilis primaria o se Serología. La serología para sífilis suele ha
cundaria el riesgo de transmisión al feto supera cerse positiva una a tres semanas después de la
el 60%, mientras que con sífilis no sintomática aparición del chancro. Este estudio se emplea para
desciende al 30%. Puede haber muerte fetal el diagnóstico de sífilis primaria, secundaria, la
intraútero o bien un recién nacido vivo con sífi tente y terciaria. Además es útil para el segui
lis congénita. miento de la enfermedad y el control de la efica
cia del tratamiento.
S ífilis congénita precoz. Es equivalente al El procedimiento incluye pruebas reagínicas,
secundarismo del adulto y muy grave; suele pre que son inespecíficas o no treponémicas, y p ru e
sentarse en el momento del nacimiento o en los bas treponémicas, que son específicas. En las
primeros meses de vida y los hallazgos caracte primeras se emplea un antígeno de cardiolipina-
rísticos son hepatoesplenomegalia, ictericia, neu lecitina-colesterol, que por su similitud antigénica
monía intersticial, rinitis, amigdalitis y un cua con los tejidos humanos normales suele dar re
dro cutáneo específico, el penfigoide sifilítico, sultados positivos falsos. La más usada es la
que se observa en más del 30% de los casos y se VDRL iyenereal disease research laboratory). La
caracteriza por la formación de ampollas palmo- mayoría de los positivos falsos se dan con títulos
plantares. menores de 1:8 y en general se asocian con otras
w
‘Í 9
214 O Primera parte - Generalidades - Síndromes clínicos
<(«
‘ vo de esos materiales que, de dar resultado posi- ciales y no a la profundidad. En forma ocasional,
j livo, establece el diagnóstico de certeza. por encima del ligamento inguinal se palpa una
tumefacción ganglionar no supurativa.
Tratamiento El plastrón ganglionar evoluciona hacia un re
Los fármacos más útiles son azitromicina Ig blandecimiento, con fistulización por varias bo
^ por vía bucal o ceftriaxona 500 mg por vía intra- cas y salida de un material purulento amarronado
, muscular en dosis única. del que se puede aislar al agente etiológico.
f; A la fistulización de los ganglios sigue un cur
so crónico; éste puede prolongarse por más de
l in f o g r a n u l o m a v e n é r e o
un año debido a la cicatrización y reapertura re
E[ linfogranuloma venéreo (LGV) o enferme currente de bocas. En las mujeres, en quienes la
dad de Nicolas-Fabre o poradenitis es una enti adenitis suele ser retroperitoneal, los síntomas
dad poco frecuente causada por los serotipos L l, pueden imitar los de una afección anexial o
L2 y L3 de Chlamydia trachom atis, una bacteria apendicular. En algunos casos el enfermo presenta
pequeña, gramnegativa, que se comporta como mal estado general.
parásito intracelular obligado y causa enferme El período terciario está constituido por las
dades de evolución crónica. El LGV sólo se trans manifestaciones tardías del LGV. Éstas sólo se
mite por vía sexual, deja inmunidad y se lo suele observan en algunos pacientes no tratados y has
relacionar con conductas sexuales promiscuas. Es ta 20 años después de haber adquirido la enfer
más frecuente en países de clima tropical. medad. Son la consecuencia de la extensión del
proceso hacia los tejidos periganglionares e in
Anatomía patológica vasión de los órganos vecinos, lo que produce
Lo más típico es el hallazgo de microabscesos úlceras vaginales crónicas, proctitis, estenosis
estrellados en los ganglios afectados. Son cavi rectal, abscesos y fístulas rectovaginales, y ele
dades, por lo general triangulares, con paredes fantiasis de los órganos genitales.
tapizadas con células epitelioides. Durante la
evolución de la enfermedad estos microabscesos Diagnóstico
se hacen necróticos, y se cubren con neutrófilos Se basa en la clínica y en la detección de Chlamy-
y macrófagos. dia trachomatis (L l, L2, L3), por métodos direc
i tos -^n el material de aspiración de los nódulos
Manifestaciones clínicas linfáticos- o indirectos, mediante serología.
El LGV tiene un período de incubación de 1 a M étodos directos: cultivo en células McCoy o
4 semanas luego del cual aparece la lesión ini Hela-229, o detección del antígeno por anticuer
cial, que muchas veces pasa desapercibida debi pos monoclonales.
do a su corta duración y pequeño tamaño (micro- M étodos indirectos: tienen un valor limitado
chancro poradénico). Se trata de una pápula que para el diagnóstico, pero la detección de anticuer
se erosiona con rapidez y adquiere un aspecto pos contra Chlamydia trachom atis y su determi
herpetiforme; como desaparece en 2 o 3 días es nación periódica son útiles para evaluar el resul
raro que el paciente concurra a la consulta. Esta tado del tratamiento.
lesión primaria, que puede ser genital o extra-
genital, constituye el período prim ario de la en Tratamiento
fermedad. Doxiciclina 100 mg por vía bucal, dos veces
El período secundario comienza después de las por día, durante 21 días o azitromicina 500 mg
dos semanas, con la diseminación linfática de la por vía bucal, una vez por día, durante 15 días.
clamidia que produce la aparición de las adenitis
regionales. La más típica de éstas es la inguinal,
GRANULOMA INGUINAL
que en la mayoría de los casos es unilateral. Los
ganglios se caracterizan por ser varios y estar El granuloma inguinal o donovanosis es una
unidos entre sí; se adhieren a los planos superfi enfermedad infectocontagiosa, ulceroprolifera-
216 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
tiva, invasora, producida por C alym m atobac- rados histológicos. Con tinción de Giemsa sej
terium granulom atis. Es un bacilo gramnegativo observan estructuras ovoides, de tonalidad inten
cuyo hábitat natural es el intestino, donde no cau sa, rodeadas por una cápsula más clara.
sa enfermedad. En las lesiones se sitúa dentro de
los macrófagos, en grupos de 20 o más y con la Tratamiento
apariencia de ser una formación quística (cuer> D o x ic iclin a 100 mg dos v e ce s por día o
pos de Donovan). roxitromicina 300 mg por día, durante 3 sema
nas.
Epidemiología
Es una enfermedad relacionada con niveles
URETRITIS
socioeconómicos bajos y poca higiene. Se discute
si su transmisión es realmente sexual, ya que es Es un síndrome caracterizado por la aparición
poco común el contagio a la pareja. También se ha de exudado uretral que puede acompañarse de
descripto su aparición en edades extremas de la disuria y prurito del meato uretral.
vida en ausencia de antecedentes de relaciones
sexuales. Por otro lado, es más frecuente en eda Etiología
des de máxima actividad sexual, en personas con Bacteriana, micótica, parasitaria, viral y trau
antecedentes de coito anal y de hábitos promiscuos. mática.
k>
i^por ardor uretral. Puede originar epididimitis,
SECRECIONES VAGINALES
fprostatitis y síndrome de Reiter.
^ Se requiere la identificación de La anatomía y los cambios fisiológicos del apa
é c . trachom atis en el material obtenido por rato genital femenino explican las dificultades
.'hisopado uretral, con la metodología descripta diagnósticas de las ETS en las mujeres, así como
^í'para el diagnóstico de linfogranuloma venéreo. la mayor vulnerabilidad de éstas a las complica
^ Tratamiento. Doxiciclina, 100 mg cada 12 ho- ciones, a veces con secuelas graves y permanen
ras, por vía bucal, durante 15 días o azitromicina tes tanto para ellas como para su descendencia.
■ Ig bucal, en dosis única. Es frecuente que la mujer se comporte como
La uretritis por M ycoplasma hom inis tiene sín- portadora asintomática; de esta manera, el perío
• tomas similares a los de la anterior. El diagnósti- do entre la adquisición de la enfermedad y su tra
co se realiza mediante el cultivo específico y el tamiento se prolonga, con lo cual aumenta su
I tratamiento es el mismo que para C. trachomatis. papel epidemiológico en la transmisibilidad así
La uretritis por Gardnerella vaginalis se diag- como la probabilidad de complicaciones.
nóstica por el examen bacteriológico y la epide- La infección gonocócica se caracteriza por
I miología (ver más adelante Vaginosis bacteriana). leucorrea purulenta. N e isse ria g o n o rrh o ea e
I Tratamiento. Metronidazol 500 mg dos veces asienta en forma primaria en el epitelio cilindri
por día durante 7 días. co del endocérvix. La infección puede propagarse
La uretritis por E. coli se diagostica y se trata y producir salpingitis y enfermedad pelviana
de acuerdo con lo expresado en el capítulo Infec inflamatoria, además de ser causa de embarazo
ciones urinarias. ectópico y esterilidad.
En el recién nacido de madre con gonococia se
Uretritis micótica produce con frecuencia conjuntivitis. De no me
Es raro que Candida albicans origine uretritis, diar tratamiento precoz, la consecuencia es la ce
pero sí es frecuente la balanitis por este hongo. guera.
I Los estados de inmunodepresión, la diabetes y Las infecciones por Chlamydia trachom atis y
los tratamientos previos, con antibióticos, corti- M ycoplasm a hom inis producen leucorrea esca i
i costeroides o inmunosupresores, predisponen a sa, que puede acompañarse con polaquiuria y di
I padecer esta micosis. suria. i
En el recién nacido, la infección por C. tracho- i
i Uretritis parasitaria m atis puede provocar conjuntivitis y neumonía.
I Es la producida por Trichomonas vaginalis; se c
caracteriza por provocar escasa secreción mu- Vaginosis bacteriana
copurulenta. Producida por el complejo GAMM {Gardne
D iagnóstico. Investigación microscópica en rella vaginalis, anaerobios, M ycoplasma hominis
fresco de T. vaginalis en el exudado uretral o su y M obilincus)y se caracteriza por un exudado c
cultivo en medios selectivos.
Tratamiento. Metronidazol, 500 mg dos veces
vaginal abundante, homogéneo y maloliente. c
•por día, por vía bucal, durante 10 días. Diagnóstico
En el examen microscópico se observan las
i Uretritis virales llamadas «células clave», células epiteliales cubier
¿ Tanto HSV como HPV pueden dar síntomas de tas de cocobacilos que desdibujan los márgenes.
R uretritis cuando se localizan dentro del meato. Hay escasos polimoifonucleares y ausencia de Lac- c
tobacillus. El pH es superior a 4,5 y al añadir KOH
<
■■Uretritis traumática al 10% se desprende un típico olor a pescado.
V- Se produce por un mecanismo irritativo, por lo (
general por compresión manual que el paciente Tratamiento
realiza para verificar la ausencia de secreción. Metronidazol, 500 mg 2 veces por día, por vía <
bucal, durante 7 días. En caso de no poder utili
(
<
i
218 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
14 zarse la vía bucal, pueden prescribirse tabletas poral determinada. Alrededor de 40 tipos de HPV
vaginales de 100 mg de clindamicina, durante 3 pueden infectar el tracto genital, muchas veces
(« noches. en forma sintomática. Quince de ellos se han cla
sificado como de alto riesgo o carcinogénicos (16
(« Candidiasis vaginal 18, 3 1 .3 5 , 3 9 ,4 5 , 52, 56. 58. 5 9 . 68, 73 y 82). A
C. albicans produce un exudado blanco, adhe- nivel de genitales externos los tipos de HPV más
rente, acompañado por prurito intenso. Se deben prevalentes son 6 y 11 .
íM
investigar antecedentes de tratamiento con anti
bióticos o anticonceptivos, inmunosupresión por Manifestaciones clínicas
ít fármacos, HIV y diabetes. Es particularmente fre El período de incubación es variable y oscila
cuente en el embarazo. entre 6 semanas y 24 meses.
Ü Son formaciones papilomatosas, sésiles o pedi-
Diagnóstico culadas, únicas o múltiples, de coloración rosa^
íé
Se realiza por el examen microscópico directo do-pálida. Pueden hacerse vegetantes, con lo cual
y cultivo dcl flujo vaginal. adquieren aspecto de coliflor o cresta de gallo.
&
Son asintomáticas, pero pueden inflamarse y pro
Tratamiento vocar fimosis.
Ruconazol, 150 mg por vía bucal en una sola do
li sis. Puede complementarse con tratamiento local. Diagnóstico
Se realiza por la clínica, mediante colposcopia
0 Tricomontasis vaginal o penescopia, examen citológico con coloración
Trichomonas vaginalis produce un flujo ama de Papanicolaou, estudio histopatológico e hibri
41
rillento, de aspecto espumoso y maloliente, que dación del HPV.
m se acompaña con prurito. El estudio histopatológico muestra paraquera-
Es frecuente encontrar tricomoniasis vaginal tosis, papilomatosis, acantosis y vacuolización de
t t asociada con otras ETS. Cuando coexiste con el las células epiteliales. La presencia de coilocitos
gonococo, T. vaginalis lo fagocita. Esto debe te es característica del HPV. Corresponde informar
nerse en cuenta al indicar el tratamiento. Se de al patólogo si la biopsia se obtuvo después de
ben tratar en forma simultánea la tricomoniasis y efectuar aplicaciones con tintura de podofilino,
•
la gonococia. ya que ésta puede provocar alteraciones celula
9 res que se confunden con las presentes en lesio
Diagnóstico nes malignas.
Se basa en el examen microscópico directo en
fresco de una muestra de flujo vaginal, obtenida Diagnóstico diferencial
del fondo de saco vaginal posterior. También pue Deberá establecerse en particular con los con
den utilizarse varios medios de cultivo. dilomas planos sifilíticos.
Tratamiento Tratamiento
Metronidazol, 500 mg por vía bucal, dos veces La elección del más adecuado requiere tener
por día, durante 10 días. Puede complementarse en cuenta el sitio anatómico, así como el tamaño
con tratamiento local. y número de las lesiones.
Las posibilidades disponibles en el presente son
las topicaciones con tintura de podofílino, ácido
CONDILOMAS ACUMINADOS
tricloroacético, pomada con 5-fluorouracilo o de
Los condilomas acuminados o verrugas geni uso más reciente, la aplicación tópica semanal,
tales tienen com o agente etiológico un virus por parte del propio paciente de imiquimod
ADN, el papilom avirus humano (HPV), del cual (inmunomodulador). Como tratamiento destruc
por hibridación se han identificado más de 60 ti tivo físico pueden utilizarse la aplicación de lá
pos. Cada tipo tiene afinidad por una zona cor ser, criocirugía o electrocirugía.
Capítulo 2 4 ' Enferm edades de transmisión sexual □ 219
Las lesiones deben controlarse en forma perió- localizar en el pene o en el escroto, y se acompa
dica y hacer el seguimiento simultáneo de la pa ñan con dolor, ardor miccional, secreción uretral
reja, para evitar reinfecciones. y prurito.
En las mujeres infectadas por HIV el potencial El cuadro puede acompañarse con fiebre,
carcinogénico del HPV está aumentado, por lo mialgias y adenopatías regionales. La intensidad
cual el control ginecológico en esta población de los síntomas se hace máxima entre los 8 y 10
debe ser muy estricto. días, con un curso clínico de unos 15 días.
El herpes genital recurrenfe es más leve y de
menor duración que la primoinfección.
h e r p e s g e n it a l
La vulvovaginitis por HSV se caracteriza por
Es una afección producida por el virus del her dolor, ardor vaginal y vesículas agrupadas, que
pes simple (HSV). se rompen y dejan superficies erosionadas. Se
Su frecuencia ha aumentado en los últimos años acompañan con eritema y edema genital. Otra
y. por su tendencia a las recidivas frecuentes, afec lo ca liza ció n genital posible del HSV es la
ta la conducta sexual y social de quienes lo pade cervicitis.
cen. Es de gran importancia la detección de HSV
en las embarazadas, dado que hay alto riesgo de
Etiología co n ta g io al n eo n a to , m ayor en c a so s de
Hay 2 tipos antigénicos de HSV capaces de primoinfección materna que en los episodios re
causar herpes genital: los tipos 1 y 2; el primero currentes, ya que en el primer caso la concentra
se relacionaría más con el sexo oral. ción de virus excretado es mucho más importan
Tienen como único huésped natural el ser hu te. En mujeres con embarazo a término y herpes
mano y afin idad e sp e c ia l por lo s tejid os gen ital en actividad corresponde practicar
ectodérmicos. cesárea.
El herpes sim ple genital en enfermos de SIDA
Epidemiología se caracteriza por la presencia de úlceras cróni
La transmisión se produce por contacto direc cas, dolorosas, de evolución tórpida y recidi
to con secreciones infectadas. La inoculación es vantes.
más frecuente en los tejidos mucocutáneos, la
mucosa bucal, y los genitales internos y exter Diagnóstico
nos. Es más frecuente entre los 18 y los 30 años. Citodiagnóstico de Tzanck: permite observar
c é lu la s g ig a n tes m u ltin u clea d a s, c élu la s
Manifestaciones clínicas balonizantes y cuerpos de inclusión intranu-
La prim oinfección se produce después de un cleares.
período de incubación de 3 a 14 días desde el Aislam iento y cultivo viral a partir del líquido
contacto. Una vez inoculado el virus, hay una de las vesículas.
mínima replicación local; las partículas virales Inm unofluorescencia directa.
viajan a lo largo de las vías nerviosas sensitivas Test de neutralización viral con anticuerpos
y se establecen, en estado de latencia, en los monoclonales.
ganglios sensitivos radiculares. A sí permanecen Histopatología: vesícula intraepidérmica pro
hasta que por diversos estímulos se activan y re ducida por degeneración reticular y balonizante,
tornan, por vía nerviosa, a los tegumentos. La y cuerpos de inclusión intranucleares.
inmunidad humoral y celular interviene en la
patogenia y condiciona el curso de la infección. Tratamiento
Ésta comienza con la aparición de vesículas pe Se utiliza aciclovir. La dosis habitual es de 2 g
queñas, de contenido seroso, que se agrupan en diarios repartidos en 5 tomas por vía bucal du
ramillete. Ulteriormente las vesículas se rompen rante 7 días. En los pacientes con HIV, en quie
y progresan hacia lesiones erosivas en el curso nes el HSV adquiere una virulencia inusitada, la
de 2 a 4 días. En el hombre las lesiones se suelen dosis de aciclovir es de 4 g diarios.
l
220 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
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f» 222 D Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
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incluirse dentro de los diagnósticos diferencia
0 MANIFESTACIONES CLÍNICAS
les.
Las manifestaciones clínicas pueden ser varia
bles, pero los hallazgos más frecuentes son fie
COMPLICACIONES
bre, dolor hipogásirico, cervicitis mucopurulenta
y dolor al movilizar el cuello y anexos. Es fre Las com plicaciones más frecuentes son los
cuente la leucocitosis y la eritrosedimentación abscesos y la pelviperitonitis. Las consecuencias
acelerada. de mayor gravedad son el embarazo ectópico y
m la infertilidad. Esta última aumenta en propor
Ü ción alarmante ante cada episodio de EPI y se
DIAGNOSTICO
debe a esclerosis o a obstrucción tubaria. La ma
a El diagnóstico se basa en las manifestaciones yor lasa de infertilidad se asocia con la infección
clínicas y en los hallazgos de laboratorio. Un dato por C. (rachomaiis. Algunas pacientes, después
ti» orientador es la presencia de un exudado cervi del ep iso d io presentan dispareunia y dolor
cal con más de cinco leucocitos por campo mi pelviano crónico por adherencias pelvianas.
I» croscópico. En la mayoría de los casos los
hemocultivos son negativos. El diagnóstico mi-
o PRONÓSTICO
crobiológico se basa en el aislamiento y cultivo
o de muestras clínicas. Existe gran diferencia en La respuesta al tratamiento instituido tempra
tre los cultivos endocervicales, de fondo de saco namente es buena, con mejoría del estado gene
d de Douglas y los obtenidos por laparoscopia. Este ral y disminución del cuadro febril.
último método tiene menor riesgo de contamina
m ción, no se asocia con mayor morbilidad y puede
TRATAMIENTO
utilizarse en la práctica clínica. La muestra se
o
toma a través de un catéter fmo o por biopsia. Si El tratamiento se basa en reposo en cama y
# se sospecha obstrucción tubaria, se realiza pun antibioticoterapia. Es indicación de internación
ción aspiración de ella. La biopsia de endometrio la sospecha de apendicitis aguda o embarazo
es otro método que también puede utilizarse para ectópico, así como aquellos casos con evolución
el diagnóstico de la EPI. desfavorable tras 48 horas de tratamiento. Tam
La culdocentesis no permite realizar el diag bién se hospitalizarán las pacientes en las que se
nóstico definitivo de infección de las trompas por sospeche un absceso tuboovárico, las que eviden
#
Chlanxydia. El examen bacteriológico del cuello cien un gran deterioro del estado general y las
# uterino es muy útil para el diagnóstico de las en afectadas por inmunodepresión.
fermedades de transmisión sexual asociadas con Debido a que es posible la participación de más
la EPI, com o las in feccion es por N eisseria de un patógeno, el tratamiento antibiótico empí
gononhoeae y por Chlamydia trachomatis. rico debe ser de amplio espectro. Las combina
La ecografía, la gammagrafía y la tomografía ciones utilizadas con más frecuencia en pacien
computarizada deben tenerse en cuenta para el tes ambulatorias son: ciprofloxacina, 500 mg dos
# veces por día durante 14 días, más metronidazol,
diagnóstico de los abscesos pelvianos.
500 mg dos veces por día durante 14 días ambos
#
por vía oral. Otra alternativa es administrar una
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
# única dosis de 500 mg de ceftriaxona IM más
Los principales diagnósticos diferenciales doxiciclina 100 mg por vía oral, cada doce ho
# abarcan las afecciones crónicas de la pelvis fe ras, durante 14 días.
menina, como endometriosis y tumor de ovario, Las alternativas de administración parenteral
# o las agudas, como hemorragia del cuerpo lúteo, son las siguientes: a) cefoxitina, 2 g IV cada 6
embarazo ectópico, apendicitis aguda, linfadenitis horas, más doxiciclina; b) clindamicina, 600 mg
#
m esentérica y trom b ofleb itis de las venas IV cada 6 horas más gentamicina, IM o IV 4 a
pelvianas. La apendicitis aguda también debe 5 m g/kg en una dosis diaria; c) am picilina-
#
Capítulo 25 - Enferm edad pelviana inflamatoria G 223
sulbactam, 3 g IV cada 6 horas más doxiciclina, los de gran tamaño requieren drenaje ya sea por
y d) ciprofloxacina, 200 mg IV cada 12 horas más cirugía Iaparoscópica,percutáneo o transvagina].
meironidazol 5 00 mg IV cada 8 horas, más Los casos de pelviperitonitis requieren drenaje
doxiciclina. Esta última se administrará por vía quirúrgico por laparotomía.
oral en la dosis antes mencionada.
El tratamiento empírico de la pareja incluye
PROFILAXIS
antimicrobianos activos contra N . gonoirhoeae
y C. trachomatis. Es la misma que para las enfermedades de
El tratamiento del absceso tuboovárico requie transmisión sexual, en especial ia de las infec
re antibióticos activos contra bacilos gramne- ciones por N . gonoirhoeoe y C. irachomatis. Se
gativos y anaerobios. Para los abscesos peque deberá efectuar el correcto diagnóstico y trata
ños suele bastar con el tratamiento médico, pero miento de las parejas sexuales.
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Diarreas infecciosas
M arcelo E. Corti
Gerardo E. Laube
Ornar J. Palmieri
(%
m
226 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
(%
(« de absorción del tubo gastrointestinal se produ líquidas con aumento del volumen y del número
cirá diarrea. de deposiciones. Las bajas se originan en el co
(• Desde el punto de vista fisiopatogénico exis lon y se caracterizan por heces de pequeño volu-
ten dos mecanismos principales por los cuales men y mayor frecuencia, con pujos y tenesmo
(•
los microorganismos pueden causar diarrea. El rectal. Cuando se acompañan de moco, pus y san
primero es a través de la acción de enterotoxinas gre constituyen lo que se define como síndrome
(•
que se fijan a gangliósidos presentes en la mem disentérico (ver más adelante).
brana de los enterocitos lo cual inicia una serie De acuerdo con el tiempo de evolución se cla
de fenómenos que terminan en la estimulación sifican en agudas con menos de dos semanas des
m de la adenilciclasa que cataliza la transformación de el inicio de los síntomas y crónicas con una
del ATP en AM P-cíclico. Este sistema energéti duración mayor de tres a cuatro semanas o con
m co es responsable de la secreción activa del ión síntomas intermitentes prolongados.
cloro y de la inhibición de la absorción de sodio. De acuerdo con el mecanismo de acción de las
(§
Este flujo iónico determina un derrame de líqui toxinas, se clasifican en diarreas infecciosas cau
m do isotónico en la luz intestinal, sin proteínas pero sadas por neurotoxinas (generalmente ingresan
con gran cantidad de agua y electrolitos como preformadas con los alimentos, como en el caso
m sodio, cloro, potasio y bicarbonato. Las diarreas del botulismo), por enterotoxinas secretorias (có
provocadas por enterotoxinas son por lo tanto lera) y por citotoxinas (Escherichia coli entero-
m diarreas secretorias, que comprometen principal toxigénica).
mente el intestino delgado y provocan deshidra- También pueden clasificarse en diarreas no
m
tación con desequilibrio hidroelectrolítico. No inflamatorias y diarreas inflamatorias.
m hay cambios histológicos a nivel de las células
de la mucosa intestinal que conservan su capaci Diarreas no inflamatorias
m dad de absorción pero que requieren de una fuente Cuando el microorganismo no invade la mu
exógena de energía como la glucosa. Un buen cosa, la diarrea es de tipo no inflamatorio, como
m ejemplo de este mecanismo es la diarrea provo la provocada por agentes virales como el agente
cada por el vibrión colérico. Norwalk y Rotavirus. Los síntomas aparecen lue
« go de 24 a 48 horas de la ingestión por lo general
El segu n d o m ecan ism o fisio p a to g é n ic o
involucra a aquellos patógenos que deben inva de mariscos poco cocidos, ensaladas o agua con
dir las células epiteliales intestinales para causar taminada, y consisten en fiebre, diarrea, cólicos
enfermedad. En este caso, el proceso patológico abdominales, mialgias y cefalea. El cuadro casi
involucra al intestino distal y al colon y se acom siempre es leve y autolimitado.
paña de una respuesta inflamatoria que destruye Los parásitos como G iardia lambHo y Cryp-
las células de la mucosa intestinal con formación tosporidium provocan en general dolor abdomi
de numerosos y pequeños abscesos y úlceras. nal leve, diarrea y en ocasiones esteatorrea. Es
Estas son diarreas osmóticas, con heces de pe característica la anorexia y el cuadro so mani
queño volumen, presencia de leucocitos polimor- fiesta 1 a 3 semanas después de la exposición.
fonucleares en las heces y, a veces, manifesta Escherichia coli enterotoxigénica es frecuente en
ciones extraintestinales como consecuencia de la personas que viajan a zonas donde ésta es endémi
invasión tisular y bacteriemia. Son ejemplos de ca. Este microorganismo elabora enterotoxinas que
este tipo de diarreas, la disentería bacilar o estimulan la secreción de las células epiteliales. Se
amebiana y la provocada por Escherichia coli caracteriza por dolor epigástrico y diarrea acuosa
enteroinvasiva, entre otros patógenos. 24 a 72 horas después de la exposición.
La infección por Vibrio cholerae por lo gene
ral es de comienzo agudo, curso afebril y se ma
CLASIFICACIÓN
nifiesta 16 a 72 horas después de la visita al área
Según la localización del trastorno se las divi endémica. El vibrión elabora una toxina potente
de en altas y bajas. Las primeras comprometen que causa la secreción m asiva de líquido y
el intestino delgado y provocan heces pastosas o electrólitos mediante la activación del AMP cí
Capítulo 26 - Diarreas infecciosas □ 227
i
clico. Si bien puede haber casos leves, en gene te y el período de incubación puede extenderse
ral es una diarrea acuosa grave con deposiciones hasta una semana después de la ingestión de car
superiores a un litro por hora (ver el capítulo ne o lácteos contaminados. La diarrea es profu
Cólera). sa, sanguinolenta y con intenso dolor abdominal.
Los síntomas predominantes de la infección por La infección por Vibrio parahaem olyticus se
Siaphylococcus aureus y Bacillus cereus son náu caracteriza por la aparición de diarrea explosiva
seas y vómitos, con dolor abdominal leve y difu y dolor abdominal de tipo cólico tras 12 a 24 horas
so. La diarrea es en general de tipo secretor y el de haber ingerido mariscos o pescado poco coci
comienzo, al cabo de pocas horas luego de la in do. El cuadro se acompaña con fiebre alta y e s
gestión, se debe a la presencia de toxina prefor- calofríos.
mada por las bacterias presentes en los alimen La infección por Yersinia enterocoütico se ca
tos. La fiebre no es habitual y por lo general el racteriza por dolor abdominal, en general locali
cuadro se autolimita en 24 horas. zado en la fosa ilíaca derecha, debido al compro
Por último, aunque poco frecuente, se mencio miso frecuente del íleon terminal y el ciego que
nará la infección por Clostridium pe/fringens, de muchas veces obliga al diagnóstico diferencial
comienzo agudo, entre 6 y 24 horas posteriores a con la apendicitis aguda. La diarrea es abundan
la ingestión de alimentos, por lo general carne te, por lo general acuosa y a veces sanguinolenta.
contaminada. La infección por Yersinia se asocia en ocasiones
con síndrome de Reiter (artritis, uretritis y con
Diarreas ínfiamatorias juntivitis).
Cuando el microorganismo invade la mucosa, La infección por Entamoeba histolytica se pro
la diarrea es de tipo inflamatoria, como la provo- duce por la ingestión de agua o alimentos con
! cada por los agentes que se describen a conti taminados con materia fecal. Las manifestaciones
nuación clínicas son en extremo variables y pueden origi
La infección provocada por Salm onella no nar un cuadro leve, con dolor abdominal y deposi
tífica se asocia con la ingestión de carne de aves, ciones acuosas, o bien una forma disentérica clá
vaca, cerdo o huevos poco cocidos y se mani sica o una colitis fulminante con dolor abdomi
fiesta 6 a 48 horas después de la ingestión. Como nal, íleo, toxemia marcada y mortalidad elevada.
factores de riesgo se reconocen la administración Treponema pallidum , Neisseria gonorrhoeae,
previa de antibióticos, la utilización de antiácidos, Chlamydia y virus del herpes simple provocan
la edad avanzada, la diabetes, la gastrectomía, la proctitis venéreas. Habitualmente no causan dia
presencia de linfomas o el sida. El comienzo es rrea sino dolor, tenesmo rectal y a veces exuda
agudo, con náuseas y vómitos, fiebre alta, esca do.
lofríos, malestar general, dolor periumbilical y La infección que provoca Campylobacter es de
deposiciones diarreicas abundantes no sangui comienzo agudo y se manifiesta 12 a 24 horas
nolentas. En pocos pacientes el cuadro se pre después de la exposición. Se relaciona con la in
senta como disentería clásica, con moco, pus y gestión de aves mal cocidas y se caracteriza por
j. sangre, además de pujos y tenesmo rectal. malestar general, mialgias y cefalea. La diarrea
La infección por Shigella, de origen fecal-oral, es de tipo acuosa con dolor abdominal y con el
■ se debe a la ingestión de ciertos alimentos conta correr de las horas se torna sanguinolenta.
minados, como leche, huevos, quesos y vegeta
les; a relaciones homosexuales y a viajes a áreas
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
endémicas. Sus manifestaciones clínicas son fie
bre, dolor abdominal y diarrea. En algunos casos Éstas varían en mayor o en menor grado de
se presenta como disentería. Los casos graves se acuerdo con el agente etiológico, pero en gene
deben a la elaboración de una toxina que causa ral consisten en náuseas, vómitos, dolor abdomi
necrosis tisular intestinal extensa, nal, con distensión abdominal y dolor a la palpa
i En la infección por Escherichia coli entero- ción, fiebre y la diarrea que puede ser acuosa,
; hemorrágica la fiebre no es un hallazgo frecuen por malabsorción o sanguinolenta.
EL
228 □ Prim era parte • Generalidades - Síndromes clínicos
i
Capítulo 26 - Diarreas infecciosas □ 229
ii; >i
a-' (C
Si bien el cuadro inicialmente no siempre es Diarrea del viajero
claro» la indicación de tratamiento antibiótico se La diarrea es un motivo de consulta frecuente
basa en las manifestaciones clínicas y en la pre entre los viajeros a regiones de clima tropical o a
sunción diagnóstica. Cuando el tratamiento em países en vías de desarrollo. Su incidencia varía
pírico está indicado, el antibiótico de elección es considerablemente entre 2% en áreas de bajo ries
la ciprofloxacina, 500 mg por vía oral cada 12 go como los EE.UU., Europa y Australia al 40%
horas o trimetoprima-sulfametoxazol, 160/800 en América latina, el Caribe, Africa y el sudeste
(■
mg dos veces por día durante 5 días. Ambos asiático. Cerca del 80% de los casos se compor
antimicrobianos poseen actividad contra los agen tan como diarreas agudas de etiología bacteriana.
tes etiológicos más frecuentes. El principal agente etiológico es Escherichia
La ciprofloxacina por vía intravenosa está in coli enterotoxigénica pero también puede ser cau c ’
dicada en casos graves de salmonelosis, dado que sada por Escherichia coii enteroinvasiva, Sal-
se presenta en forma bacteriémica en un tercio m o n e lla spp, S h ig e lla spp, C a m p y lo b a c te r c
de los casos. Se tendrá en cuenta el pasaje a la spp, C ryp to sp o rid iu m spp, G iardia lam blia,
vía oral en cuanto se confírme la negatividad de E. histolytica y rotavirus. Como casi todas las í
los hemocultivos. diarreas agudas bacterianas e l período de
En el tratamiento de la diarrea aguda por incubación es corto entre 1 a 5 días y la mayoría
4
Yersinia y S h ig e lla , la primera e lecció n es de los casos se resuelven en 2 a 4 días. Un 5% de c
trimetoprima-sulfametoxazol y en segundo lugar los pacientes evolucionan en forma más prolon
ciprofloxacina por vía oral. El tratamiento de la gada y presentan diarrea crónica.
infección por Vibrio cholerae incluye doxiciclina, Para evitar la diarrea del viajero es fundamen
100 mg cada 12 horas por vía oral durante dos tal cumplir con las normas de prevención que €>
días o trimetoprima-sulfametoxazol como segun incluyen el lavado de manos antes de comer, evi
da opción. tar la ingesta de agua no potabilizada (incluso la
La diarrea provocada por C am pylobacter se usada en el lavando de los dientes), no comer ali i:
trata con ciprofloxacina, 500 mg por vía oral cada mentos vendidos en la calle, especialmente en
12 horas o eritromicina, 500 mg por vía oral cada saladas o frutas que deben ser siempre peladas y
6horas durante 5 días. cocidas o preparadas por la propia persona.
La infección por Giardia lam blia se trata con Deben tenerse en cuenta dos conceptos: el de c :
metronidazol, 250 mg por vía oral cada 8 horas,
durante 5 días y E ntam oeba h isto ly tic a con
quimioprofílaxis y el de tratamiento.
La profilaxis de la diarrea del viajero con c;
metronidazol, 500 mg cada 6 horas durante 7 a antibióticos deberá indicarse en todos aquellos
10 días. sujetos en quienes un episodio de diarrea pueda
descompensar alguna enfermedad subyacente. c
Entre estas indicaciones se incluyen: insuficien
PROFILAXIS
cia cardíaca, respiratoria o renal, diabetes, uso
La prevención de las diarreas infecciosas se
^ basa fundamentalmente en el cumplimiento es-
de diuréticos, digital o litio, deficiencia de la ba
rrera ácida gástrica por el uso de inhibidores de c.
^ tricto de medidas higiénicas y normas de biose-
guridad, tanto en la elaboración de los alimentos
los receptores de la histamina o inhibidores
de la bomba de protones, inmunodcficiencias
c
como en su manipulación. Es muy importante el (sida, neoplasias, inmunodepresión por fárma c
lavado de las manos. cos), colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn y via
jeros que no deben correr el riesgo de enfermar c
se, como soldados o deportistas. Las fluoroqui-
OTROS SÍNDROMES DIARREICOS c
nolonas permiten la prevención de la diarrea del
^ Por su importancia y frecuencia se considera- viajero en el 90% de los casos en regiones donde
c
• rán por separado: diarrea del viajero, toxiin- los enteropatógenos son sensibles mientras que
i fecciones alimentarias, diarrea por antibióticos y el subsalicilato de bismuto sólo lo hace en el 65%.
1 síndrome disentérico. Las tetraciclinas y el cotrimoxazol no se reco
230 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
<•
miendan por la elevada tasa de resistencia de los Se describirán a continuación las característi
patógenos incriminados en estos episodios. cas de las toxiinfecciones provocadas por los
En relación con el tratamiento está indicado en agentes antes mencionados.
m casos de diarreas graves con dolor abdominal y
fiebre, persistencia de la diarrea luego de 48 ho Staphylococcus aureus
(é ras de tratamiento sintomático, y en todas las si El mecanismo patogénico de la toxiinfección
tuaciones de riesgo citadas en las indicaciones alimentaria por este microorganismo es la exis
m de quimioprofílaxis. El tratamiento se basa en el tencia de una enterotoxina, que produce el esta
uso de ciprofloxacina en dosis de 500 mg dos filococo cuando contamina productos lácteos y
m
veces por día por vía oral o norfloxacina 400 mg de repostería. Este tipo de toxiinfección suele
m dos veces por día por vía oral durante tres días a originarse por el consumo de alimentos en insti
cinco días. tuciones, asilos, aviones, etc. Los síntomas y sig
m Cyclospora cayetanensis puede ser la causa de nos más comunes son los vómitos, que se presen
diarrea del viajero en el 3% de los casos; el trata tan antes de las seis horas, y después la diarrea.
• miento de elección es trimetoprima-sulfameto- Los enfermos habitualmente están afebriles. De- ¡
xazol 160/800 mg dos veces al día durante 7 días. bido a que el estafilococo no coloniza el intesti-;
no, no deben administrarse antibióticos, ya quei
Toxiinfecciones alimentarias la enfermedad está ocasionada por la toxina
Las toxiinfecciones alimentarias más frecuen preformada en el alimento. Sólo se repondrán lí
tes son producidas por Síaphylococcus aureus^ quidos y electrólitos, y se tratará en forma sinto
lia c illu s c e r e u s, C lo s tr id iu m p e r fr in g e n s , mática.
C losíridium boíiilinum, Escherichia coli, Vibrio
cholerae 01 y Vibrio cholerae no 01, Campy- Bacillus cereus
iobacíer je ju n i, Salm o n ella . Sh ig ella , Vibrio Esta bacteria grampositiva produce dos tipos
parahaemolyticus y Yersinia eníerocoUtica, como de toxinas que se asocian con los signos y sínto
tam bién por h o n g o s, m a risco s, etc. E stos mas gastrointestinales propios de la toxiinfección
microorganismos pueden provocar distintos tras- alimentaria. La primera, similar a la del estafilo
lornos en la esfera digestiva y a veces con reper coco, origina un cuadro clínico que se caracteri
cusión general, ya sea por la ingestión de toxinas za por vómitos. La segunda, semejante a la de
prcformadas en el alimento o por la colonización Escherichia coli. es la causante de cólicos y de
en el tubo digestivo, o por ambos mecanismos. posiciones diarreicas. La signosintomatología por
Un aspecto importante relacionado con el diag lo general dura menos de 24 horas. Uno de los
nóstico diferencial es la determinación del tiem alimentos que en general está involucrado en esta
po transcurrido entre la ingestión del alimento y toxiinfección es el arroz. Las esporas de B. cereus
la aparición de los primeros síntomas. En efecto, pueden soportar la ebullición y después, en el
de acuerdo con el intervalo transcurrido se pue alimento, transformarse en la forma vegetativa
de sospechar la presencia de determ inados productora de las toxinas. Las consideraciones
microorganismos. Siempre se deberá indagar so en cuanto a la terapéutica son las mismas que para
bre una fuente alimentaria común cuando los sín el estafilococo.
tomas y signos se presentan en más de dos per
sonas dentro de los tres días de haber ingerido Clostridium perfringens
una comida compartida. El género C lostridium incluye más de 60 espe
La prevención de estas enfermedades se basa cies, de las cuales C. peifringens^ además de las
en evitar la contaminación de los alimentos du diferentes afecciones asociadas con su presencia,
rante su manipulación, en la destrucción de las puede producir la toxiinfección alimentaria que
posibles sustancias contaminantes y en una co se relaciona con la producción de una enterotoxi
rrecta educación de todo el personal de la indus na por las cepas del tipo A. Los alimentos que
tria alimentaria que elabora las diferentes com i con más frecuencia se asocian con esta toxiin
das. fección son las carnes y las salsas mal conserva
í
Eí
C apítulo 26 • Diarreas infecciosas □ 231
El período de incubación varía entre los 3 y los triquinosis, listeriosis, algunas parasitosis, fiebn
7 días. En más del 80% de los casos los pacien tifoidea y leptospirosis- serán consideradas ei
tes consultan por diarrea, dolor abdominal y fie> los capítulos correspondientes.
bre. Estos síntomas pueden persistir durante dos
a tres semanas. Diarrea por antibióticos
Cualquier antibiótico puede ser causa de dia
Vibrio vuínificus rrea pero aquellos que tienen un espectro que in
La toxiinfección alimentaria por este microor cluye a las bacterias anaerobias son los implica
ganismo se presenta doce horas a tres días des dos con mayor frecuencia. C lo strid iim difficiU
pués del consumo de ciertas sustancias, como es el agente etiológico en el 25% al 30% de lo:
mariscos crudos y en especial ostras. El cuadro casos. Clínicamente puede presentarse como un¡
clínico es muy grave, ya que predomina un esta portación asintom ática, colitis sim ple, coliti;
do de hipotensión y shock. La mortalidad llega seudomembranosa y colitis fulminante. En prí
al 90%, en particular cuando la afección se pre mer lugar se interrumpirá la terapéutica anti
senta en individuos con hepatopatías o alcoho biótica; el metronidazol a la dosis de 250 mg cadj
lismo crónico. 6 horas o 500 mg cada 8 horas por vía oral du
rante 7 a 10 días es de elección en estos casos. Si
E s c h e r ic h ia c o li no puede emplearse la vía oral se administrará
Este microorganismo es parte de la flora nor por vía parenteral. También puede utilizarse li
mal del intestino. Sin embargo, algunas cepas vancomicina en dosis de 125 mg cada 6 horai
toxigénicas y enteropatógcnas pueden asociarse por vía oral durante 10 días. A veces es suficien:
con toxiinfecciones alimentarias. Esta bacteria, te con suspender la terapéutica antibiótica. |
productora de enterotoxinas term osensibles y
termoestables, es la causa de casi la mitad de los Síndrome disentérico j
casos de diarrea del viajero. Los alimentos co Se define como síndrom e disentérico (del grie^
múnmente contaminados son vegetales y frutas go dys: mal, y énteron: intestino) a un conjunto
crudas. Es una afección a menudo autolimitada y de signos y síntomas entre los que se destacan:
sólo requeriría tratamiento sintomático. diarrea aguda, deposiciones frecu en tes de esca¡
Otra cepa de E. coli, el serotipo 0157:H 7, pro so volum en con m oco, p u s y sangre que se acom*
duce una verotoxina con un mecanismo de ac pañan de p ujos, tenesm o y dolor abdom inal.
ción similar a la de Shigella. Los individuos afec veces se presenta en forma epidémica y con frc;
tados presentan habitualmente diarrea sanguino cuencia en climas tropicales.
lenta sin fiebre. En algunos niños la consecuen La anatomía patológica se caracteriza por le
cia de esta afección es el síndrome urémico-he- siones inflamatorias y ulcerosas en la mucosa dej
m olítico, que puede llevar a la insuficiencia re colon y recto que además, pueden incluir la últij
nal aguda. ma porción del íleon.
Las etiologías infecciosas más frecuentes son
Vibrio cholerae no 01 especies de Shigella, responsables de la disenteríi
Los gérmenes de este grupo producen cuadros bacilar, y E ntam oeba histolytica, agente de lá
diarreicos, algunas veces muy graves, similares disentería amebiana. Otros microorganismos tamj
al cólera, o manifestaciones gastrointestinales bién pueden ser causa de síndrome disentéric^
más leves. A menudo la fuente de la infección es como Escherichia coli, Vibrio parahaemolyticus^
el agua contaminada, aunque también pueden S a lm o n e lla , C a m p y lo b a c te r je ju n i, Yersiniá
estar contam inados los alim entos. Su acción enterocolitica, Clostridium difficile, Balantidium
patógena se debe a una enterotoxina. El trata coli, G iardia lam blia y Trichuris trichiura. Eq
miento es sintomático, con reposición de líqui las infecciones provocadas por £ . coli 0 1 5 7 : ^
dos y electrólitos. o Shigella, sobre todo en los niños, junto con e!
Otras infecciones que pueden considerarse síndrome disentérico puede desarrollarse un sín
toxiinfecciones alimentarias -cólera, botulismo. drome urémico-hemolftico. Otros padecimientoí
»í;-. C apítulo 26 - Diarreas infecciosas O 233
fe
iSf/
i- (Je etiología desconocida pueden originar cuadros tas y verduras crudas muy bien lavadas y pela
compatibles con el síndrome disentérico como la das.
colitis ulcerosa inespecífica o la enfermedad de
Crohn. Disenteria amebiana
Aquí serán descriptas la disentería bacilar y la La disentería amebiana es provocada por
disentería am ebiana. Entam oeba histolytica. Este protozoario parási
to, se presenta ya sea com o quiste, que es la for
bacilar
D is e n t e r í a ma de resistencia o infecciosa, o como trofozoíto,
Distintas especies de Shigella (S. dysenteriae, que es la forma patógena. Los quistes, elimina
S.flexneri, S. sonnei y S. boydii) pueden ser cau dos con las deyecciones de enfermos o portado
sa de disentería aguda. Es una enfermedad con res asintomáticos, llegan al intestino con el agua
tagiosa, endémica y epidémica. La bacteria in o los alimentos contaminados y allí se transfor
gresa al organismo a través del agua o los ali man en trofozoítos que invaden ia m ucosa
mentos contaminados en forma directa o indirecta colónica y producen así una enfermedad intesti
(moscas, objetos) con heces de un enfermo o nal o extraintestinal. Casi todas las infecciones
portador del germen. El período de incubación son asintomáticas, pero en algunas circunstancias,
es corto, desde pocas horas hasta 6 a 7 días. El puede producirse un síndrome disentérico agudo
comienzo suele ser brusco con náuseas, vóm i con fiebre, e sca lo frío s y diarrea m ucosan-
tos, dolor abdominal y diarrea. En dos o tres días guinolenta. La mucosa colónica, presenta un pro
se establece un verdadero síndrome disentérico ceso inflamatorio intenso y exudativo con úlce
con 15 a 50 deposiciones de aspecto característi ras profundas, de bordes socavados que se ex
co constituidas por moco, pus y sangre y muy tienden por la submucosa lo que les confiere una
escaso contenido fecal. La m ucosa rectosig- «forma de botellón». Rara vez se ulcera la piel
moldea presenta edema intenso, ulceraciones su de la región perianal por extensión de las lesio
perficiales múltiples de pocos milímetros con nes intestinales.
bordes irregulares y fondo vegetante cubierto por El diagnóstico puede realizarse a través de la
exudado pseudomembranoso. rectosigm oidoscopia, el examen directo de la
El diagnóstico bacteriológico se realiza con el materia fecal o la serología. La rectosigmoidos
cultivo e identificación del germen a partir de las copia muestra las úlceras y permite obtener ma
heces. Los hemocultivos son negativos; en los teriales para la biopsia y el examen directo del
inmunocomprometidos pueden ser positivos. El exudado de los bordes de la úlcera donde se ob
hemograma muestra leucocitosis y neutrofilia. servarán los trofozoítos de Entamoeba histolytica
Los p acien tes portadores del an tígen o de vivos y móviles. El examen de la materia fecal,
histocompatibilidad HLA-B27 pueden desarro también puede evidenciar dichos trofozítos, ade
llar en la convalecencia una artritis serosa o un más de leucocitos, en menor número que en la
síndrome de Reiter. disentería bacilar, abundantes hematíes y moco.
El tratamiento consiste en el aporte adecuado de Además, el examen serológico por los métodos
líquidos y electrolitos por vía oral o IV y los anti de hemaglutinación indirecta (HAI) y enzimoin-
microbianos por espacio de 5 a 10 días. Pueden munodiagnóstico (ELISA) suelen dar resultados
utilizarse: ampicilina, 500 a 1000 mg por vía oral o positivos.
IV cada 6 horas; cotrimoxazol (TMP 160 mg/SMZ El tratamiento se realiza con metronidazol en
800 mg), oral o IV cada 12 horas; ciprofloxacina, dosis de 250 a 500 mg cada 6horas por vía oral o
500 a 750 mg oral o 200 mg IV cada 12 horas; o 500 mg cada 8 horas por vía IV durante 10 días.
ceftriaxona, 1 g IV cada 12 horas. Las formas le El metronidazol tiene acción sistémica y puede
ves son autolimitadas y no requieren tratamiento. eliminar tanto la enfermedad intestinal como la
La profilaxis reside en las medidas de higiene extraintestinal (abscesos hepáticos o en otras lo
personal, combatir las moscas y el control de los calizaciones).
portadores de gérmenes. Los alimentos deben La profilaxis consiste en medidas de higiene
consumirse cocidos y servidos calientes y las fru personal, la eliminación sanitaria de las heces y
T if
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234 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
(H
m el lavado de las manos después de la defecación y frutas crudas sin lavar, ni beber agua con posibili
antes de preparar e ingerir los alimentos y el trata dad de estar contaminada. La cloración del agua
m miento de los portadores. No consumir verduras o no siempre destruye los quistes de E. histolytica.
0%
m Bibliografía—
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•
%
27
Infecciones de la piel y partes blandas
Ornar J. Palmieri
Elena I. M aiolo
FOLICULITIS LINFANGITIS
La foliculitis es una infección de la desem bo La linfangitis es la infección de los vasos linfá
cadura dei folícu lo pilosebáceo causada por ticos superficiales, que se produce a partir de una
Staphylococcus aureus. Por lo general se locali herida de la piel. Se localiza con más frecuencia
za en la cara y las extremidades, y por ser super- en las extremidades. El microorganismo causal
fícial no deja cicatriz ni alopecia. La lesión se suele ser Strepíococcus pyogenes y se manifiesta
observa como un punto rojo, levemente doloro con dolor local, fiebre y repercusión general poco
so, que se hace purulento en 2 o 3 días y desapa importante. En el examen puede verse la puerta
rece en 5 a 7 días. Las localizadas en la barba de entrada, que es una herida con eritema y ede
son de curación más difícil a causa del trauma ma circundante de la cual parten cordones erite-
tismo constante de la afeitada. matosos, palpables y dolorosos, que se dirigen
hacia la raíz de la extremidad y comprometen los
ganglios linfáticos regionales, que están aumenta
FORÚNCULO
dos de tamaño y dolorosos. Puede haber edema
Es una foliculitis profunda, necrosante y con del miembro afectado.
p erifo licu litis, causada por S ta p h y lo c o c c u s El laboratorio muestra leucocitosis, neutrofília
aureus. El compromiso de la dermis hace que y eritroscdimcntación acelerada. Los hemocultivos
siempre deje una cicatriz. Comienza con una suelen ser positivos. El diagnóstico diferencial se
fo licu litis infiltrada, dolorosa y con edem a hará con la linfangitis que producen Nocardia
perilesional. A los pocos días en su parte central b ra silien sisy S p o ro th rix sc h e n c k ii y algunas
aparece una zona de necrosis y ulterior supura micobacterias como M . marinum y M . kansasii.
ción. Merece mencionarse la localización en el Estos microorganismos originan formas crónicas
conducto auditivo externo, por la intensidad del de linfangitis con escasa repercusión sistémica.
dolor que provoca, y la del labio superior, por la El tratamiento de la linfangitis estreptocócica
posible complicación con la trombosis de los se consiste en la administración de penicilina o ma-
nos de la duramadre. crólidos (azitromicina, claritromicina).
La forma recidivante se observa en diabéticos
y pacientes con trastornos en la inmunidad, o en ER ISIPELA
los tratados con corticosteroides u otros medica
mentos. La erisipela es la inflamación aguda y febril de
la piel. Hay un importante compromiso linfático
regional y también puede afectar el tejido celular
ÁNTRAX
subcutáneo. Es provocada por Strep to co ccu s
El ántrax o hidradenitis supurativa es una in b etah em olítico del grupo A (S tre p to c o c c u s
fección provocada por Staphylococcus aureus. pyogenes). Otras bacterias, com o Staphylococcus,
T
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is
C apítulo 27 - Infecciones de la piel y partes blandas □ 237
pueden ser causa de esta enfermedad, aunque es El diagnóstico casi siempre es clínico, ya que
un hallazgo poco frecuente. es raro que el microorganismo se aísle del mate
El cuadro clínico se caracteriza por la apari rial obtenido por punción de la lesión . Los
ción súbita de síntomas generales, como males hemocultivos son de escasa utilidad, dado que
tar, náuseas, vómitos, cefalea, escalofríos, len las formas bacteriémicas, de elevada mortalidad,
gua saburral y, en los casos más graves, diarrea. son poco frecuentes.
La fiebre es de 38®C a 40®C y a veces se mani El diagnóstico diferencial más importante en la
fiesta antes de la aparición de la placa de erisipela, localización facial es el herpes zoster trigémina!»
junto con el dolor en el ganglio linfático regio en el que la hiperestesia y el dolor preceden siem
nal. En estos casos la placa se hace visible 24 a pre a la aparición de las lesiones, y con la derma
36 horas después del comienzo de los síntomas titis de contacto o la urticaria gigante, aunque
mencionados antes. ambas evolucionan sin fiebre y se asocian con pru
La lesión inicial es una pápula eritematosa que rito. La erisipela de la pierna deberá diferenciarse
se extiende progresivamente en forma circular y del eritema nudoso, la tromboflebitis, el eritema
a vcces adquiere bordes sobreelevados (rodete). polimorfo exudativo, el eritema indurado, el eri
La piel se halla indurada debido al edema provo tema solar y el eritema crónico migrans de la en
cado por la obstrucción linfática regional. El lí fermedad de Lyme. Este último es indoloro, pro
mite entre la piel sana y la lesión es nítido, y el gresa con lentitud y la fiebre es escasa.
centro de ésta, menos congestivo. En los casos El tratamiento de elección es la penicilina G
graves se observan vesículas, flictenas y a veces por vía intramuscular, en dosis de 1.000.000 UI
evoluciona a la necrosis. cada 6 horas, o fenoximetilpenicilina (penicilina
Los síntomas son tensión dolorosa local, ardor V) 1.000.000 a 1.500.000 UI por vía oral cada 6
y escozor más o menos intensos. Las lesiones se horas. En los alérgicos a la penicilina se admi
localizan más comúnmente en las extremidades nistrará eritromicina, 250 a 500 mg cada 6 horas
y con menos frecuencia en la cara. Los ganglios por vía oral o claritromicina, 500 mg cada 12
regionales están aumentados de tamaño, son do horas por vía oral o IV, o roxitromicina o azitro-
lorosos y persisten varios días después de la des micina en las dosis habituales.
aparición de la placa de erisipela.
Si bien hay factores predisponentes, com o
ERITRASMA
estasis venosa, paraparesia, diabetes y alcoholis
mo, en la mayoría de los casos la puerta de entra El eritrasma es una infección superficial de la
da se desconoce. Puede originarse en trauma piel, cuya localización habitual es la zona geni-
tismos locales, úlceras cutáneas, abrasiones de la tocrural. Son máculas pruriginosas, de color par
piel, psoriasis, eccema e intertrigos, en especial el do rojizo, con descamación fina. Con la lámpara
interdigital de los pies. Una importante causa de Wood se observa una fluorescencia rojo coral
predisponente es el linfedema debido a la exéresis característica. Es más frecuente en hombres y
de los ganglios axilares en la cirugía del cáncer sujetos obesos y diabéticos. El agente etiológico
mamario. es C orynebacterium minutissimum^ bacilo gram-
La evolución espontánea de la erisipela se com positivo cultivable en medios aerobios. El exa
pleta en 6 a 8 días y después aparece la descama men directo del raspado de la lesión muestra el
ción, cuya importancia está en relación directa microorganismo en gran cantidad.
con la intensidad de la lesión. El diagnóstico diferencial debe hacerse con las
En los casos graves la evolución puede pro m icosis de la zona crural, que son procesos más
longarse hasta 15 días por extensión de la lesión profundos y sintomáticos.
inicial, con aparición de celulitis, necrosis y co El tratamiento consiste en la administración de
lecciones purulentas. Son frecuentes las recidivas eritromicina, 500 mg cada 6 horas o claritromicina,
en la misma zona, las cuales originan obstruc 500 mg 2 veces por día por vía oral durante 8 a 10
ciones linfáticas, linfangiectasias y edema cróni días. El tratamiento tópico consiste en la aplica
co, que predisponen aun más a la recidiva. ción de solución acuosa de clindamicina al 2%.
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238 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
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Capítulo 27 - Infecciones de la piel y parles blandas □ 239
I?
¡ sobre lesiones o heridas previas. La lesión ini- treptococcus spp y Peptococcus. Estos últimos
i cial es una pápula violácea en nnanos o zonas están presentes como flora única o en infecciones
! expuestas y evoluciona hacia una úlcera costrosa mixtas, asociados con enterobacterias como E. coli,
¡; -yg cuando cura lo hace con la formación de una Klebsiello, Proíeiis, Enrerobacter y, raramente,
■ cicatriz. Las lesiones pueden ser únicas o múlti- Pseiidom onas aeriiginoso (fascitis necrotizante
‘ pies y a veces a partir de ellas aparecen lesiones tipo I). La gangrena hemolítica estreptocócica es
: ascendentes que simulan una esporotricosis. Es provocada por estreptococos del grupo A, que en
importante el antecedente epidem iológico de ha ocasiones se asocian con Staphyhcoccus oureus
b e r limpiado un estanque de peces. Las piscinas (fascitis necrotizante tipo II). Cuando la fascitis
¡ 'únicamente son una posibilidad si el agua no está necrotizante compromete los genitales masculinos
clorada. El diagnóstico se realiza con el aisla o el periné en la mujer, se denomina gangrena de
miento del microorganismo (A/, m arinum ) del Fournier.
•kuliivo de la biopsia y de la secreción de la úlce- Los abscesos pueden presentarse como com
ra, además del estudio histopatológico de la le- plicaciones de inyecciones intramusculares o sub
í-sión. El tratamiento se basa en una combinación cutáneas. El principal agente etiológico en estos
^ de rifampicina y etambutol o en monoterapia con casos es Staphylococcus aureus, aunque en for
¡{doxiciclina, claritromicina o SMX/TMP durante ma ocasional pueden provocarla bacilos gramne-
i.- por lo menos tres meses. gativos facultativos o anaerobios.
' La micobacteriosis cutánea ulcerosa o úlcera En adictos a drogas intravenosas es frecuente
^ de Buruli, infección provocada por M. uicerans. el hallazgo de abscesos subcutáneos causados por
■; es una afección rara, más frecuente en zonas tro- microorganismos anaerobios y estreptococos,
h picales, que se manifiesta por úlceras anfrac- como consecuencia del hábito de destapar la aguja
^ luosas de crecimiento rápido, con amplias zonas soplándola con la boca.
f. de necrosis grasa subcutánea, que se localizan en Los abscesos autoinducidos, en pacientes con
'j. las extremidades pero respetan palmas y plantas. patología psiquiátrica, son polimicrobianos y se
i\El diagnóstico se realiza com o ya fue señalado deben a la autoinoculación con flora oral o fecal;
más arriba. El tratamiento también es como en la los abscesos por autoinoculación de material ex
micobacteriosis anterior. traño sin contaminación bacteriana son estériles.
Staphylococcus aureiis es el agente etiológico
más frecuente en los abscesos secundarios a fo
í ABSCESOS
f cos contiguos, como osteomielitis aguda hemató-
i - Las infecciones bacterianas que comprometen gena, o por osteomielitis crónica con formación
‘ los tejidos blandos -p iel, tejido celular subcutá- de secuestros y trayectos fistulosos que drenan
: neo, fascias y músculo esquelético- y que evolu- al exterior. En otras ocasiones los abscesos son
; clonan hacia la abscedación no son fáciles de cía- una complicación de piodermitis primarias, como
{•sificar, dada la gran superposición de cuadros foliculitis, forunculosis y celulitis por Staphylo
¡ clínicos. Éstos no sólo están determinados por la coccus aureus; por lo general son secundarios a
Mocalización y la extensión de la infección, sino defectos de las células fagocíticas o a hematomas
i .también por los múltiples agentes etiológicos que postraumáticos con infección secundaria. Tam
i.con frecuencia producen cuadros clínicos de ca- bién hay que tener en cuenta los abscesos que se
i racterísticas similares. originan en el curso de infecciones bacieriémicas
; Las dos grandes entidades que por lo común o metástasis piógenas infectadas.
evolucionan hacia la formación de colecciones y
l abscesos son la celulitis por clostridios anaerobios
MIOSITIS
; como la provocada por Clostridium peifringens,
; y la celulitis no clostrídica o fascitis necrotizante. Es la infección del músculo esquelético que se
; En esta última, como ya se mencionó, se recono- produce por extensión de infecciones de sitios
; cen múltiples agentes etiológicos, los anaerobios contiguos, como abscesos subcutáneos, heridas
:-no esporulados, como Bacteroides spp, Peptos- quirúrgicas o traumáticas, osteomielitis y úlce
d’ .
240 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
ras por decúbito. El origen bacteriémico es poco de los casos se limita a la fascia del psoas, perc
frecuente. puede extenderse hasta la articulación de la ca
dera. En general es secundario a osteomieliti:
vertebral piógena o tuberculosa, pero también s<
PIOMIOSITIS
observa en casos de infecciones intraabdominalc;
Es la infección bacteriana del músculo esque (diverticulitis, apendicitis, abscesos perirrenale;
lético, causada con frecuencia por Staphylococcus o infección de hematomas retroperitoneales).
aureus y caracterizada por la presencia de pus Sus manifestaciones clínicas son fiebre y do
entre los haces musculares. Tiene un comienzo lor abdominal o dorsal, con contractura muscu
brusco, con intenso dolor muscular y edema lo lar refleja dolorosa. El signo del psoas (aire entn
cal. En esta infección se reconocen factores pre los haces musculares), observado en la radiogra
disponentes, como heridas penetrantes, insufi fía, junto con la tomografía computarizada o l¡
ciencia vascular e infección contigua. resonancia magnética permiten el diagnóstico. E
En raras ocasiones Streptococcus p yo g en es hallazgo de calcificaciones sugiere el diagnósti
puede provocar una piomiositis fulminante, que co de tuberculosis. La terapéutica empírica S(
se caracteriza por toxicidad sistémica elevada, indica de acuerdo con la sospecha etiológica y s(
bacteriemia y síndrome compartimental. adecuará según los microorganismos aislados ei
Una escasa proporción de casos de piomiositis los cultivos del material obtenido por el drenaj(
puede ser provocada por otros agentes etioló- quirúrgico o la punción aspirativa.
gicos, com o Streptococcus pneumoniae^ Entero-
coccus^ bacilos gramnegativos, P seudom onas
GANGRENAS INFECCIOSAS
aeruginosa, P. m allei, P. pseudom allei y Aero-
m onas hydrophila. Este último microorganismo Son infecciones graves que se originan en e
se adquiere por contaminación de heridas en cur tejido celular subcutáneo, pero después pueder
sos de agua o por contacto con animales acuáti comprometer piel, fascias y músculos, ademáj
cos. Evoluciona rápidamente, con dolor local, de generar una toxicidad sistémica importante j
edema marcado, gas entre los haces musculares mortalidad elevada. Aquí serán consideradas h
y fascias, formación de ampollas serohemáticas, gangrena p o r clostridios, la fa sc itis necrotizanu
gran toxicidad sistémica y bacteriemia. El trata y la celulitis necrotizante sinérgica.
miento exige una debridación quirúrgica rápida
y extensa, además de una terapéutica antimicro Gangrena por clostridios
biana adecuada. La gangrena gaseosa, por clostridios o mione
crosis por clostridios es una enfermedad aguda
de progresión rápida y extremadamente grave
PIOMIOSITIS TROPICAL
caracterizada por necrosis muscular extensa
Esta denominación se debe a que la gran ma toxicidad sistémica marcada. En la mayoría d(
yoría de los casos se diagnostican en países tro los casos el agente etiológico es C lostridium per
picales. Casi nunca se reconocen factores predis frin g en s, bacilo grampositivo, anaerobio obliga
ponentes y el agente etiológico es Staphylococcus do y esporulado. En forma ocasional la gangrení
aureus. El comienzo es agudo, con intenso do es provocada por otras cepas de C lostridium
lor, ausencia de toxicidad sistémica y síntomas como C. septicum , C. novyi, C. sordelli, C. his
generales. La linfadenopatía regional es poco tolyticum , C .fa lla x y C. bifermentans.
prominente. Los microorganismos del género Clostridiun
son ubicuos, se encuentran en el suelo, en el air<
y también se hallan, en altas concentraciones, er
ABSC ESO DEL MÚSCULO PSOASILÍACO
el tracto digestivo.
A menudo se produce por extensión de las in C lo strid iu m p erfrin g en s sintetiza múltiple
fecciones de estructuras adyacentes, pero es raro enzimas extracelulares, como colagenasa, neura
que se origine por vía hemática. En la mayoría minidasa, hialuronidasa y DNAsa, pero ademá
r
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I; Capítulo 27 ‘ Infecciones de la piel y partes blandas □ 241 ((
lis-.
((
i produce dos toxinas de importancia capital que Los síntomas de la gangrena gaseosa espontá
■determinan las manifestaciones clínicas. Éstas nea no traumática son fiebre súbita, dolor abdo u
:$on la fosfolipasa C (alfa toxina), que produce minal, náuseas y vómitos. El paciente evolucio
: hemólisis, destrucción plaquetaria, daño capilar na con rapidez al shock, con falla multiorgánica (C
muerte por falla multiorgánica, y una hemo- y evidencia de zonas de mionecrosis en sitios
¡ilisina (perfringolisina O), responsable de hipoten- distantes. En la gangrena gaseosa uterina el cua
i sión profunda y bradicardia sostenida. dro es similar al anterior. En ambas formas la mor
Las puertas de entrada más comunes son las talidad es elevada.
>asociadas con heridas traumáticas, fracturas ex El diagnóstico clínico temprano es de impor IC
puestas, aplastamientos, heridas de bala, cirugía, tancia capital para salvar la vida del paciente. Se
en especial del tracto intestinal y la vía biliar, in- basa en la demostración de la mionecrosis, en la f
.yecciones intramusculares y, más raramente, el cirugía y también en el examen microbiológico
/pie diabético y las úlceras por decúbito. En la pa- de los líquidos de punción y de las muestras ob i
i togenia son muy imponantes las condiciones lo- tenidas quirúrgicamente, en el que se observan (
kcales de la herida, ya que factores tales como la gran cantidad de bacilos grampositivos y esca
fchipoxia celular, la presencia de cuerpos extraños, sos leucocitos. En las radiografías se puede obser i
lia insuficiencia vascular y la coinfección por otros var la presencia de gas entre los haces y fibras
Ümicroorganismos promueven la replicación de las musculares. La tomografía computarizada tam l
] formas vegetativas y la elaboración de toxinas. bién permite evidenciar la presencia de gas, lo
El curso de la infección es fulminante, con sig que es útil para evaluar la extensión del compro i
nos y síntomas locales e importante toxicidad
ísistémica. £1 período de incubación desde la le-
miso muscular; sin embargo, su indicación pue
de retrasar el inicio de la terapéutica. Los hemo-
c
Ssión hasta la aparición de los síntomas es habi- cultivos con frecuencia son negativos, dado el (
c
Itualmente de 1 a 4 días, pero en los casos graves bajo porcentaje de formas bacteriémicas. En la
ipuede ser de pocas horas. cirugía el músculo aparece pálido, con aspecto
I El síntoma más temprano es el dolor, que es
'intenso, agudo y se manifiesta aun sin la apari-
de carne cocida, no se contrae al ser escindido y
la superficie muscular no sangra. En general la c
:ción de los signos locales de la infección. En
jminutos o en horas se observa un edema tenso y
extensión de la mionecrosis es mayor que el com
promiso cutáneo.
c
•se comprueba crepitación con la palpación; la piel El tratamiento consiste en la desbridación qui c
:.al inicio se presenta pálida y después se torna roja rúrgica, que debe implementarse con rapidez y
jhasta adquirir color bronce, por último aparecen ser tan extensa y agresiva como lo requiera la <c
Iampollas de contenido hemático y enfisema sub- situación clínica. Todo músculo necrótico debe
c
;cutáneo. De las lesiones manan secreciones sero- ser resecado. En ocasiones está indicada una se
^hemáticas de olor característico. gunda intervención quirúrgica, ampliatoria de la
X
^ El paciento está desasosegado, sudoroso, la fie- primera, así como la fasciotomía, si existiere un
tbre es escasa o está ausente y la taquicardia no síndrome compartimental. En algunos casos, c
íguarda relación con ella. Librado a su evolución cuando la mionecrosis es extensa, se requiere la
natural el cuadro presenta complicaciones tardías, amputación de la extremidad comprometida, así €
[que consisten en hemólisis intravascular, hemo- como la histerectomía en caso de gangrena gaseo
iglobinuria, hipotensión refractaria, falla renal, sa uterina. La mortalidad global es del 20% al 25% (
[acidosis metabólica, alteración de la permeabili y se reconocen factores de mal pronóstico, como (
dad capilar con anasarca, falla multiorgánica, leucopenia, hemólisis intravascular, falla renal,
coma y muerte. edad avanzada y compromiso de la pared abdo I
Dos entidades poco frecuentes merecen men minal. La mortalidad sin tratamiento es del 100%
cionarse por su gravedad extrema: la gangrena a las 48 horas del comienzo de los síntomas. 4
gaseosa espontánea no traumática, cuya puerta El antibiótico de elección es la penicilina G,
c
de entrada es siempre el colon, y la gangrena ga 10 a 24 millones de Ul/día IV más clindamicina,
seosa uterina, secundaria a aborto séptico. 2.400 mg/día IV. Esta asociación parece ser la c
i
242 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
más eficaz para inhibir la síntesis y liberación de que producen gas, como Escherichia cali, Kleb-
toxinas. También son útiles el cloranfenicol, el sieUa y AeromonaSy microorganismos facultati
mcíronidazol y el imipenem. La utilidad del oxí vos como Streptococcus, en ocasiones Staphy
geno hiperbárico aún está en discusión. lococcus y anaerobios no esporulados, como
Bacteroides, Peptostreptococciis y Peptococcus.
Fascitis necrotizante Al igual que en las formas clínicas descriptas
La fascitis necrotizante es una infección grave antes, hay áreas de extensa necrosis cutánea y de
de la piel y el tejido celular subcutáneo provoca tejido celular subcutáneo, con secreción purulenta
da por Streptococcus pyogcnes, a veces en aso fétida e importante toxicidad sistémica. Cuando
ciación con Staphylococcus aitreus. Es una afec esta afección compromete el pene, el periné y la
ción de comienzo agudo que habitualmente com pared abdom inal, se denom ina gangrena de
promete las extremidades y, en orden de frecuen Fournier o flemón perineal. A veces es produci
cia, la pared abdominal, el periné y las heridas da por Streptococcus pyogenes^ y es muy frecuen
quirúrgicas. Las puertas de entrada más frecuen te en pacientes diabéticos y obesos. Los factores
tes son los traumatismos, las picaduras de insec predisponentes son parafimosis, extravasación
tos o las quemaduras. Afecta a pacientes con fac periuretral de orina, infecciones perianales y
tores predisponentes, como diabetes, insuficien perirrectales, traumatismos y cirugía de la zona
cia vascular, alcoholismo o adicción a drogas por (ver el capítulo de Infecciones perineales).
vía intravenosa. En el recién nacido por lo general El tratamiento de elección es la administración
es secundaria a onfalitis. La toxicidad sistémica de ampicilina-sulbactam más gentamicina y la
es importante y la fiebre, elevada; el paciente se desbridación quirúrgica, que debe ser extensa. En
halla hipotenso, taquicárdico, confuso y evolucio la gangrena de Fournier la desbridación quirúr
na con rapidez a la falla muUiorgánica. gica nunca incluye la orquiectomía, ya que la irri
La lesión inicial comienza como un área erite- gación de los testículos pertenece a otro temto-
matosa, edematizada, de límites poco precisos, rio vascular.
caliente, sensible, dolorosa y sin compromiso lin
fático. Con el correr de los días la piel en esa área
SÍNDROME DEL SHOCK TÓXICO
se torna rojiza, con zonas pálidas o grisáceas; en 4
ESTREPTOCÓCICO
o 5 días aparecen ampollas extensas con conteni-
do seroso o hemático, y necrosis cutánea. La le El agente etiológico del síndrome del shock
sión se caracteriza por la presencia de zonas de tóxico estreptocócico (SSTE) es en la mayoría
anestesia debidas a microtrombosis vascular y de los casos Streptococcus beta hemolítico del
necrosis de los filetes nerviosos, lo que permite el grupo A. Con el advenimiento de los antibióticos,
diagnóstico diferencial con la celulitis provocada la mortalidad de las infecciones estreptocócicas
por Staphylococcus aitreus. disminuyó de manera importante, pero en los úl
Las formas bacteriémicas invasoras son fre timos años se ha observado un aumento en la in*
cuentes, presentan leucocitosis marcada y un sín cidencia de fiebre reumática y de infecciones de
drome tóxico similar al provocado por estafilo curso fulminante por estreptococos del grupo A,
cocos. La antibioticoterapia es esencial, así como caracterizadas por shock séptico, bacteriemia y
la desbridación quirúrgica. Ésta debe ser amplia, elevada mortalidad (SSTE).
con resección de todos los tejidos necrosados La respuesta inmunológica se ve influencia
hasia encontrar fascia y músculo sano. da por los factores genéticos relacionados con
La terapéutica de elección es la ampiciiina más m oléculas de clase II del com plejo mayor de
clindamicina o gentamicina, siempre por vía histocompatibilidad y la presencia de aloantí-
intravenosa. genos que interaccionan con linfocitos B, o re
ceptores de membrana de células T La acción de
Celulitis necrotizante sinérgica las toxinas pirógenas (exotoxinas A, B y C) ela
También llamada mionecrosis sinérgica, es pro boradas por el microorganismo, inducen a las
vocada por la asociación de bacilos gramnegativos células mononucleares a liberar factor de necrosis
r
C apítulo 27 • Infecciones de la piel y partes blandas □ 243
i
tumoral alfa, IL lb, IL6 y otros mediadores de la alta (30 al 70%), el pronóstico mejora si se reali
inflamación que causan gran toxemia y shock de za el diagnóstico temprano y se implementan me
elevada mortalidad. didas agresivas de reanimación, tratamiento qui
Algunos casos se presentan como un síndrome rúrgico y antibioticoterapia adecuada.
de tipo influenza, pero en general el comienzo es El tratamiento consiste en la exploración y
aoudo con fiebre alta, faringitis, escalofríos, mial- desbridación quirúrgica amplia que deben reali
gias, náuseas, vómitos y diarrea. El cuadro clíni zarse tempranamente para determinar la exten
co se inicia habitualmente con una lesión en sión del compromiso del tejido celular subcutá
miembros inferiores, con marcado edema, flogo neo, fascias y músculo. La primera fase del shock
sis y dolor intenso que progresa rápidamente ha responde a la expansión con líquidos pero la agre
cia un estado confusional con hipotensión y sividad del cuadro y la velocidad con que pro
shock. Las lesiones evolucionan rápidamente, con gresa requieren de sostén con inotrópicos y de
la presencia de bullas de contenido serohemático asistencia respiratoria mecánica. Streptococcus
de aspecto violáceo que evidencian el compro beta hemolítico del Grupo A permanece sensible
miso profundo de los tejidos que a veces se ex a los antibióticos betalactámicos, pero éstos pier
tiende al tejido celular subcutáneo, músculos y den efectividad ante la presencia de grandes
fascias (fascitis necrotizante, mionecrosis). El acúmulos bacterianos (efecto inóculo) en los cua
paciente en menos de 4 horas se presenta hipo- les la reproducción de las bacterias es más lenta.
tenso, taquicárdico e hiperdinámico por aumen La clindamicina es un antibiótico que actúa de
to del gasto cardíaco que produce la sepsis. Ade- manera sinérgica, su acción no se ve afectada por
; más del gran edema local, el aumento de la per- el efecto inóculo, inhibe la producción de toxi
i meabilidad capilar causado por las toxinas, ori- nas estreptocócicas, la síntesis de proteína M, la
• gina vasodilatación periférica con edema gene producción de lipopolisacáridos y el FNT alfa.
ralizado y síndrome de distrés respiratorio del Disminuye de manera importante los mediado
• adulto. La eritrodermia es difusa y es la causa de res de la inflamación y permite la fagocitosis del
una importante descamación en la convalesencia. estreptococo.
Se reconocen como factores predisponentes del
shock tóxico afecciones virales com o varicela o
SÍNDROME DEL SHOCK TÓXICO
influenza pero en general se origina en una alte
ESTAFILOCÓCICO
ración de la barrera cutánea tales com o úlceras,
cirugía, laceraciones extensas, quemaduras y le El síndrome del shock tóxico (SST) estafilo-
siones por adicción a drogas de uso intravenoso. cócico es provocado por Sraphylococcus auretis
La infección puerperal también puede dar origen productor de toxinas. Las principales toxinas que
al SSTE pero en la mitad de los casos no se co originan esta enfermedad multisistémica son la
noce la puerta de entrada. toxina 1 del SST y las enterotoxinas estafilocó-
El diagnóstico se basa en las manifestaciones cicas. El SST estafilocócico es una intoxicación
clínicas y en el laboratorio. El recuento de leuco aguda y grave que se caracteriza por fiebre, hipo
citos no es inicialmente muy elevado dado el ca tensión, exantema, falla multiorgánica y desca
rácter fulminante del cuadro pero se observan en mación en la fase precoz de la convalecencia. Para
la sangre periférica de formas inmaduras, con más que se desarrolle la enfermedad se requiere estar
del 50 % de neulrófiio.s en cayado. El 80% de los colonizado o infectado con una cepa toxigénica
pacientes presentan insuficiencia renal aguda con de S. aureus y no poseer anticuerpos protectores
hipoalbuminemia e hipocalcemia. En los casos contra la toxina elaborada por esta cepa. Esta
de mionecrosis o fascitis necrotizante, la CPK se enfermedad se describió en 1980 en mujeres y
halla elevada. en relación con el uso de tampones durante la
El diagnóstico microbiológico se lleva cabo a menstruación. Posteriormente se observó en si
través de los cultivos en los medios adicionados tuaciones distintas de la menstruación, en am
^ de líquido de las bullas o de material de desbri- bos sexos y en todas las edades. El SST estafilo
; dación quirúrgica. Si bien la mortalidad es muy cócico no menstrual puede deberse a múltiples
244 □ Prim era parte - Generalidades - Síndrom es clínicos
causas tales com o sobreinfección de lesiones lengua despapilada («de frambuesa»). El labo
cutáneas, quemaduras, picaduras de insectos, ratorio muestra aumento de la urea, hipoalbu-
heridas quirúrgicas, sinusitis agudas y otras le minemia, hipocalcemia, hipofosfatemia, elevación
siones colonizadas por una cepa productora de de la creatinfosfocinasa, leucocitosis o leucopenia
toxina. con neutrofilia, trombocitopenia, proteinuria y
Las manifestaciones clínicas de la enfermedad piuría. Al cabo de una semana comienza la desca
comienzan en general en forma repentina con mación de piel del tronco, brazos y piernas a la
hipertermia, náuseas, vómitos, dolor abdominal, que le sigue la de palmas, plantas y dedos.
diarrea, mialgias, cefalea, odinofagia, hipotensión El tratamiento consiste en mantener el equili
arterial y la aparición de la eritrodermia maculosa brio hidroelectrolítico y la administración de anti
característica, que puede ser generalizada o lim i microbianos antiestafilocócicos. Si hay heridas
tada a una zona de la piel. Pueden producirse quirúrgicas recientes o evidencias del foco produc
sufusiones conjuntivales, faringitis eritematosa o tor de toxina debe realizarse el drenaje quirúrgico.
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Infecciones oculares
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Humberto A, M etía €
Ornar J. Palmieri t
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Las infecciones que comprometen el ojo y las el párpado y la destrucción de los folículos de las €,
estructuras vecinas generan alteraciones anato- pestañas.
¿ mofuncionales capaces de poner en peligro la i
I visión e incluso la vida del paciente. Estos he- Orzuelo
• chos y las diferentes formas de comportamiento Es la infección aguda supurativa de las glán i,
i de la infección en un área tan sensible, hacen que, dulas de Zeiss o de Molí. Se evidencia como una
<
■ en ocasiones, su tratamiento requiera la interven tumefacción circunscripta superficial, eritematosa
ción de un equipo multidisciplinario compuesto y dolorosa, ubicada en el margen palpebral cerca i
por oftalmólogos, infectólogos, clínicos, otorrino- de las pestañas. Es frecuente la recidiva.
laringólogos, odontólogos y bacteriólogos. C
En este capítulo se tratarán las infecciones ocu Chalazión
lares desde una perspectiva clinicoinfectológica. Es el absceso de las glándulas de Meibomio.
Se considerarán infecciones palpebrales, con Se localiza en el tejido duro y fibroso del tarso;
juntivitis, dacriocistitis, queratitis, infecciones produce más dolor e inflamación que el orzuelo
orbitarias, endofialmitis infecciosas y uveítis in y a veces conduce a una celulitis preseptal.
fecciosas.
Tratamiento í .
‘J
246 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
gina secuelas o complicaciones como cicatrices Las queratitis virales originan secreción serosa
comeanas (leucomas) o perforación. o acuosa. El virus del herpes simple -agente más
Las queratitis virales pueden originarse por vía común de opacidades corneanas en los países
exógena, a partir del contacto con las manos, o desarrollados- tiene la característica de provo
por vía endógena, desde la vía aérea superior o car queratitis recurrentes, de las que hay tres for
por trayecto neurógeno. Los virus destruyen el mas de presentación: queratitis epitelial (dendrí-
estroma y el epitelio por replicación in situ. tica, geográfica), queratitis parenquimatosa (es-
Las queratitis micóticas requieren la alteración tromal) y queratitis disciforme (edema del estroma
previa del epitelio comeano. de forma circular). Durante el curso del herpes
zoster oftálmico hay queratitis si se afecta la rama
Etiología nasociliar. Puede sospecharse ante lesiones dérmi
Los agentes bacterianos más comunes en la cas del ala de la nariz (signo de Hutchinson).
actualidad son estafilococos, estreptococos, Pseu- La queratoconjuntivitis epidémica por adeno-
dom onas spp y enterobacterias. En circunstan- virus se presenta con ojo rojo y doloroso, con
cias especiales (uso de lentes de contacto) pre adenopatía preauricular, y es unilateral.
dominan Pseudom onas aeruginosa y Staphylo- Las m icosis originan una queratitis con infil
coccus spp. La conjuntivitis por N . gonorrhoeae trado bl^ q u ecin o leucocitario, de bordes desfle
no tratada puede ser causa de queratitis. cados (filamentos fúngicos) en el estroma y le
M. tuberculosis y T. pallidum desencadenan siones satélites. Son de curso prolongado y difí
queratitis intersticiales provocadas por la respues ciles de erradicar.
ta inmune del enfermo. Asimismo, el primero de Durante la evolución temprana de la queratitis
estos microorganismos se asocia con úlceras de por A ca n th a m o eb a se observan ulceraciones
curso crónico. epiteliales focales y multifocales pleomorfas. Una
Los virus que con más frecuencia causan que vez establecida la infección, se observa un infil
ratitis son los del herpes simple tipos 1 y 2, y los trado estromal anular, completo o no. Siempre
de la varicela zoster. Los tipos 8 y 19 de adenovi- causa dolor y puede asociarse con escleritis.
rus causan queratoconjuntivitis epidémica. Este protozoo se ubica profundamente en el
La frecuencia de queratitis micóticas está en parénquima, lo que dificulta la investigación diag
aumento; los agentes etiológicos más comunes son nóstica. O nchocerca volvulus provoca hiperemia
Fusarium solani, Aspergillus spp y Candida spp. conjuntival, lagrimeo excesivo y fotofobia, como
Dentro de las queratitis parasitarias, Acantha- consecuencia de la invasión de las microfilarias
moeba -una ameba de vida libre- es reconocida al segmento anterior. Al morir las larvas se desen
con frecuencia crecien te com o causante de cadena una reacción inflamatoria grave, que lleva
queratitis en sujetos que usan lentes de contacto. a la queratitis esclerosante y a la ceguera luego de
En los tejidos se la encuentra en dos formas: años de exposición a la alta carga parasitaria.
trofozoítos y quistes. Esta última la hace resis
tente a condiciones adversas, por lo que su erra Diagnóstico
dicación es difícil. Ante la sospecha de queratitis microbiana, la
escarificación comeana debe realizarse con la es*j
Manifestaciones clínicas pátula de Kimura, que requiere anestesia local. ¡
L os síntom as capitales de la inflam ación La muestra se tiñe con coloraciones de Gramj
comeana son dolor, fotofobia y disminución de Giemsa, Ziehl-Neelsen y metenamina de plataj
la visión, a los que se agregan características pro se cultiva en medios con agar-chocolate, agar-san-
pias de los patógenos responsables. gre, tioglicolato, Sabouraud, Lówenstein-Jensen
En las queratitis de causa bacteriana se obser u otros medios rápidos para micobacterias, y en
va edema palpebral, secreción, edema de córnea medios para anaerobios. Si se aísla el microorga
y ulceración del epitelio. Pseudom onas aerugi nismo y no hay evolución favorable, puede sei
nosa provoca úlceras superficiales amplias que necesaria una queratoplastia superficial o biop-
progresan con rapidez y exudado mucopurulento. sia comeana. j
C apítulo 28 - Infecciones oculares □ 249
f
Con frecuencia, en las queratitis virales no es
INFECCIONES ORBITARIAS
necesario el cultivo, el diagnóstico se realiza por
el aspecto morfológico de la lesión. Definición
Las infecciones orbitarias -inflam aciones di
Tratamiento fusas de los tejidos blandos orbitarios, con ex
El objetivo del tratamiento es eliminar el agente cepción de los componentes oculares propiamen
infeccioso y reducir con rapidez la inflamación, te d ich os- incluyen la celulitis orbitaria y la ce-
para prevenir el daño estructural. lulitis preseptal.
Los antibióticos se administran por vía tópica,
subconjuntival y sistémica. Celulitis orbitaria
La primera incluye colirios disponibles en el Este proceso infeccioso es retroocular y retro-
comercio, soluciones con alta concentración (for septal. Suele ser secundario a sinusitis, dacrio-
tificados), ungüentos y lavados continuos con so cistitis agudas, infecciones dentarias, cuerpos
luciones de antibióticos. extraños intraorbitarios (traumatismos o cirugía
Las vías venosa e intra-muscular se reservan previa), septicemias, meningitis u otros procesos
para queratitis supurativas graves en las que hay sépticos.
amenaza de perforación. Para iniciar un trata
miento empírico o ante infecciones mixtas se uti Etiología
lizará una cefalosporina de primera generación El agente causal varía de acuerdo con el foco
(cefazolina) asociada a gentamicina. de origen, la edad del huésped, las enfermedades
En lo posible se indicará la antibioticoterapia subyacentes y el estado inmunitario.
de acuerdo con el microorganismo aislado y su En las celulitis orbitarias relacionadas con si
sensibilidad. nusitis agudas predominan las especies únicas,
En la queratitis intersticial por Treponem a como Streptococcus pneum oniae, S. pyogeneSy S.
pallidum el curso de la inflamación no es inñuen- viridans^ Staphylococcus aureus, H aem ophilus
ciado por la penicilinoterapia. Ésta reduce la pro influenzae y M oraxella catarrhalis.
babilidad de recurrencia y el compromiso del otro Cuando se originan en sinusopatías crónicas,
ojo. Un concepto equivalente se aplica en el caso se aísla flora polimicrobiana aerobia y anaerobia:
de M. tuberculosis. S tr e p to c o c c u s a lfa h em o lítico , H a e m o p h ilu s
La trifluridina y el aciclovir tópicos son útiles influenzae, Veillonella sp, Peptostreptococcus sp,
y seguros en casos de queratitis por los virus del Propionibacterium acnés y B acteroides sp.
herpes simple y de la varicela zoster. La querato- En los casos de diseminación a partir de absce
conjuntivitis epidémica sólo requiere ciclopléji- sos dentarios, por vía hemática o por contigüi
eos y lágrimas artificiales. dad, se aísla flora mixta en el 65% de los casos,
En las queratitis micóticas puede usarse natami- anaerobia estricta en el 30% y aerobia en el 5%
cina tópica (en suspensión al 5% ) administrada restante.
con frecuencia horaria. Si no se cuenta con este Ante lesiones con maderas o vegetales hay que
fármaco, se pueden administrar soluciones de considerar la posibilidad de infección por Bacillus
anfotericina B (1,5 mg/mL) o fluconazol al 1%. cereus, N ocardia o agentes micóticos.
El tratamiento de este trastorno requiere con En niños menores de cuatro años (entre seis
frecuencia un enfoque medicoquirúrgico (quera- meses y dos años) es frecuente la participación
toplastia). Se utiliza propamidina en combinación de H. influenzae tipo b a partir de otitis, rinofarin-
con antifúngicos (im idazoles) y antibióticos gitis, sinusitis o infecciones sistémicas (menin
(paromomicina, neomicina). gitis, bacteriemias).
El uso de corticosteroides es controversia! y
requiere antibioticoterapia previa; en las queratitis Man/fesíac/o/ies clínicas
virales están formalmente contraindicados. Los hallazgos sem iológicos más importantes
de la celulitis orbitaria son edema palpebral y
conjuntiva!, proptosis (desplazamiento anterior
250 □ Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
I: [lipersensibilidad tipo I, constituido por un ede traumatismo penetrante. Las endoftalmitis exó
ma blanco, blando, pruriginoso por la exposición genas tienen progresión anteroposterior.
a alérgenos (polen, pelo de animales, etc.); la E n d o fta lm itis endógenas: son metastásicas,
blefaroconjuntivitis por contacto: reacción tipo secundarias a bacteriemia o fungemia originadas
IV con edema eritematoso y eccemátide, y por en localizaciones infecciosas alejadas. Las endof-
último los traumatismos, en los cuales el hema talmitis endógenas tienen progresión posteroan-
toma y la disminución de los signos inflamatorios terior.
con el transcurso del tiempo facilitan el diagnós
tico diferencial. Etiología
El conocimiento de la causa u origen de las en
Tratamiento doftalmitis permite sospechar el agente etiológico
Tamo en la celuütis orbitaria como en la pre- e implementar una terapéutica apropiada y tem
septal, antes de realizar la terapéutica antibiótica prana.
se tomarán las muestras para los estudios micro- Los agentes aislados con más frecuencia son
biológicos de material del foco y hemocultivos. los pertenecientes a la microflora de la superfi
Después se llevarán a cabo los exámenes de ruti cie ocular: S. epiderm idis, S. aureus, Pseudo-
na, los estudios por imágenes y la evaluación m onas sp, Proteiis sp.
odontológica.
Dada la gravedad y evolución rápida de estas Endoftalmitis posquirúrgicas agudas
infecciones, el tratamiento empírico inicial debe Se desarrollan dentro de las 2 semanas de rea
comenzar de inmediato tras la obtención de las lizada la intervención.
muestras para el estudio microbiológico. M ien
tras se aguarda el resultado de estos estudios Factores predisponentes
-que podrán modificar el esquem a- puede c o Preoperatorios: blefaritis, conjuntivitis, dacrio-
menzarse con la asociación de una cefalosporina cistitis, obstrucción del drenaje lagrimal, colirios
de primera generación (cefazolina) con amika- contaminados, lentes de contacto y focos sépti
cina, o la combinación de vancomicina con una cos extraoculares.
cefalosporina de tercera generación (ceftriaxona Intraoperatorios: material quirúrgico con este
o ceftazidima). Si el paciente es alérgico a los rilización deficiente, cirugía prolongada o com
betalactámicos, se puede utilizar vancomicina o plicada.
clindamicina asociadas con un aminoglucósido. Del huésped: diabetes e inmunosupresión.
; La cobertura para anaerobios se logra con cua-
lesquiera de los esquemas que incluyan metro- /Wan/fesíac/ones ciinicas
; nidazol o clindamicina. Si se dispone de ampici- Es destacable la rapidez de instalación y pro
lina-sulbactam o amoxicilina-clavulanato para gresión. Ya a las 12 horas de la cirugía los pa
; uso parenteral, se los puede usar como agentes cientes suelen referir dolor leve a intenso, con
[ únicos. efecto Tyndall y preservación del rojo pupilar o
f secreción conjuntival, edema comeano, hipopión
neto, sinequias pupilares, exudado masivo en el
' ENDOFTALMITIS INFECCIOSAS
i vitreo, dolor intenso, edema palpebral e imposibi
I Definición lidad de ver el fondo de ojo a las 36 horas, o panof-
; La endoftalmitis -una forma grave de infección talmitis con síntomas sistémicos a las 48 horas.
- microbiana intraocular- afecta cavidades ocula- Esta característica subraya la importancia que
^ res y estructuras inmediatamente adyacentes, pero tiene el diagnóstico precoz para una resolución
i sin extenderse más allá de la esclera. Según el ori- anatomofuncional óptima.
J gen y progresión de la infección se consideran:
Endoftalmitis exógenas: 1) posquirúrgicas agu Endoftalmitis posquirúrgicas crónicas
das, 2) posquirúrgicas crón icas, 3) posqui- También llamadas «de inicio demorado o re
I rúrgicas asociadas a ampollas filtrantes y 4) pos tardado», se producen luego de las 2 semanas del
252 ü Prim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
acto quirúrgico; pero en ocasiones se presentan ampolla, la atraviesan y pasan al interior del glo-
desde ios 7 días hasta meses después de éste. bo ocular.
üt-
Iritis aguda: es provocada por depósitos de coroiditis. Los quistes formados luego del ingre
inmunocomplejos. Cursa con dolor, fotofobia, so íransplacentario o por vía digestiva se rompen
lagrimeo, blefarospasmo, disminución de la agu en los 10 a 35 años ulteriores; ello libera taqui-
deza visual, precipitados queráticos e inyección zoítos que van a alojarse en células retinianas
periquerática. Sus secuelas son sinequias poste previamente normales. De este modo se produce
riores del iris, así com o seclusión y oclusión la destrucción sucesiva de diferentes áreas de la
pupiUr. Se asocia con fiebre y tumefacción de retina, con compromiso coroideo y vascular.
las lesiones cutáneas.
Iritis crónica (miliar o nodular): se debe a in Manifestaciones clínicas. El niño o adulto acusa
vasión directa de la úvea anterior por bacilos. En disminución de la visión, dolor y disopsias. Con
el margen pupilar hay lesiones brillantes (perlas lámpara de hendidura se detectan vitritis en ca
del iris) que aumentan de tamaño, coalescen, ad sos graves, retinitis necrotizante focal solitaria
quieren un pedículo y caen en la cámara anterior. (en general) o multifocal, periférica a una cica
Son características de la lepra lepromatosa y es triz pigmentada antigua inactiva (lesión satélite).
tán compuestas por histiocitos cargados de baci Las lesiones pueden ser solitarias, de tamaños
los. Genera una uveítis neuroparalítica de los variables y en general asientan detrás del ecua
nervios del iris, por lo que lleva a la atrofia de dor, donde se observan exudados blanco-amari
este último. llentos con bordes borrosos indiferenciados. Otras
Las complicaciones de las uveítis anteriores son veces, como primeras localizaciones toma el área
la causa más frecuente de ceguera en la lepra. La yuxtapapilar (coroiditis de Jensen) o el nervio
afectación de la coriorretina y el nervio óptico óptico. Sobre el disco óptico se observa una masa
son de evolución tardía y las lesiones del seg inflamatoria blanca con derrame vitreo supraya-
mento anterior hacen dificultoso observarlas. cente. La agudeza visual es buena, salvo en los
Consisten en máculas blanquecino-grisáceas o casos en que también hay compromiso de la má
pigmentadas en el sector periférico. No se obser cula o el haz papilomacular. En algunos pacien
vó correlación entre estas lesiones y la presencia tes la inflamación persiste durante meses a pesar
de bacilos. del tratamiento específico. Lo habitual es la cu
Otras lesiones originadas por la lepra en el ojo ración del episodio, con cicatriz atrófica de lím i
son madarosis, queratitis, conjuntivitis, escleritis, tes bien definidos y rodeada de un borde hiperpig-
epiescleritis y cataratas. mentado. Luego del primer ataque suele haber 2
o 3 recidivas durante la vida del paciente.
Tratamiento. La forma aguda, además del tra Como consecuencia de esta uveítis se registran
tamiento sistém ico, se trata con midriáticos y pérdidas de la visión por causas directas o indi
esteroides. La crónica es más resistente al trata rectas. Las causas directas son la afectación de la
miento; para resolver las sinequias es necesaria fóvea (mácula), el haz papilomacular o la papila;
la cirugía. Además, se indcará el tratamiento las indirectas son edema macular cistoide, ple-
sistémico para la lepra (ver el capítulo Lepra). gamiento foveal, neovascularización y despren
dimiento de retina.
Uveítis parasitarias
Uveitis toxoplásmica D iagnóstico. Se realiza con pruebas seroló-
La toxoplasmosis os la causa más frecuente de gicas y angiorretinofluoresceinografía. Los títu
uveítis infecciosas. Casi la totalidad de los casos los serológicos no sirven para demostrar activi
se deben a la infestación intraútero. Tiene curso dad, ya que no hay correlación entre éstos y la
crónico con reactivaciones (recurrente). Sólo el producción intraocular de inmunoglobulinas. La
1% de las uveítis toxoplásmicas se deben a in negatividad serológica debe inducir la investiga
fecciones adquiridas luego del parto. Origina ción de otras causas de uveítis. Se emplean inmu-
uveítis posteriores, aunque por reacción inflama- nofluorescencia indirecta (IFI) IgG e IgM. La
:loria puede dar lugar a iritis. presencia de anticuerpos de tipo IgM denota in
En un sentido patogénico estricto es una retino- fección adquirida en época reciente.
256 □ P rim era parte • Generalidades - Síndromes clínicos
Tratamiento. Son indicaciones absolutas de tra M a n ifesta cio n es clín ica s. Provoca diversas
tamiento aquellas lesiones que afecten la mácu manifestaciones, de acuerdo con su presentación:
la, el haz papilomacular o la papila, así como la endoftalmitis crónica, granuloma del polo poste
vitritis grave capaz de llevar a la fibrosis vitrea y rior y granuloma periférico.
al desprendimiento de retina por tracción. Se uti La endoftalmitis crónica se presenta entre los
liza sulfadiazina por vía oral - 4 g/día fracciona 2 y los 9 años de edad; se observa uveítis ante
dos en 4 tom as- asociada con pirimetamina por rior leve y vitritis. El pronóstico es malo por sus
vía oral, en dosis de 75 mg el primer día; 50 mg complicaciones (desprendimiento de retina, ede
el segundo y luego 25 mg/día hasta completar 21 ma macular, cataratas).
días. También se administran 10 mg/día de ácido El granuloma del polo posterior se presenta
folínico, para prevenir la deficiencia de ácido entre los 6 y los 14 años. Es redondo, solitario y
fólico provocada por la inhibición de la dihidro- asienta sobre la papila o haz papilomacular. Pue
folato reductasa debida a la pirimetamina, con la de distorsionar los vasos.
consiguiente toxicidad medular. Durante el tra Las complicaciones son el desprendimiento de
tamiento deberán realizarse controles hemato- la retina y la hemorragia subretiniana.
lógicos frecuentes. El granuloma periférico se presenta entre los 6
Como tratamiento alternativo, en casos refrac y los 40 años, es blanco, grande y se localiza so
tarios o ante toxicidad manifíesta, algunos auto bre el ecuador del ojo, o por delante de éste. Es
res recomiendan administrar clindamicina por vía asintomático, salvo que se complique con plie
oral, en dosis de 1.200 mg divididos en 4 tomas gues retinianos que lo unan al nervio óptico.
diarias.
En todos los casos el tratamiento dura 4 a 6 D iagnóstico. Se tendrá en cuenta la edad del
semanas. paciente, el antecedente epidem iológico de con
El uso de corticosteroides está indicado siem tacto con gatos o perros cachorros y el aspecto
pre que haya lesiones en actividad, pero hay que oftálmico compatible. El diagnóstico serológico
administrarlos después de haber iniciado el es se realiza con enzimoinmunoensayo (ELISA);
quema con los fármacos antiparasitarios. Se uti< adquieren significación los títulos superiores a
lizarán por vía tópica (ante uveítis anteriores aso 1/32. Ante una lesión ocular, un título de 1/8 ya
ciadas), subconjuntival (en casos graves) y es significativo. Se tendrá en cuenta en especial
sistémica. La corticoterapia sola o la inmunosu- el diagnóstico diferencial con el retinoblastoma,
presión pueden desencadenar una inflamación dada la similitud clínica de éste con la toxocariasis
fulminante. ocular y las trágicas consecuencias de una ciru
gía radical innecesaria en el caso de esta última.
Uveítis p or Toxocara
La toxocariosis se produce por la ingestión ac Tratam iento. Se utiliza la dietilcarbamicina o
cidental de huevos de Toxocara cati o Toxocara el tiabendazol asociado con corticosteroides. La
caniSy presentes en la tierra u objetos contamina muerte larvaria provocada por estos compuestos
dos con heces de gatos o perros. Los huevos eli puede llevar a una mayor inflamación por reac
minados por las heces de esos animales desarro ción inmunitaria. Por ello es necesario iniciar el
llan embriones y se tornan infecciosos al cabo de tratamiento con corticosteroides 24 a 48 horas
algunas semanas. Una vez ingeridos por el hom antes de tomar los compuestos larvicidas.
bre hacen eclosión las larvas, que atraviesan la La dietilcarbam acina se indica en dosis de
pared intestinal, pasan al torrente sanguíneo y se 2 mg/kg tres veces por día, durante 7 a 10 días;
localizan en diversos tejidos. Permanecen sin el tiabendazol en dosis de 25 mg/kg/día durante
completar su evolución, por no ser el hombre su una semana, repartida en 2 o 3 tomas y la predni-
hospedero habitual. Sin embargo, generan un sona en dosis de l mg/kg/día, con reducción gra-
i Capitulo 28 - Infecciones oculares □ 257
dual durante 2 a 4 semanas. Todos los fármacos ketchup» o también «en pizza». Conduce a atro
í se administran por vía oral. fia de la retina y afectación del nervio óptico o
desprendimiento de la retina. El diagnóstico de
Uveítis virales certeza es difícil, salvo si se logra aislar el virus
Oveitis por el virus del herpes zoster de sangre, fauces u orina. La serología es muy
Alrededor de un 40% de pacientes con herpes difícil de interpretar, dada la seroconversión que
zoster oftálmico presenta iridociclitis en el ojo se produce durante la segunda década de la vida
afectado dentro de las dos semanas de aparición en una gran franja de población y la alteración
del cuadro herpético. El compromiso del ala de en la producción de inmunoglobulinas en el inmu-
la nariz, dermatoma correspondiente a la rama nodeprimido.
nasociliar (signo de Hutchinson), implica mayor El tratamiento se realiza con 5 mg/kg cada 12
riesgo de iridociclitis o queratitis. horas de ganciclovir por vía intravenosa o con
La iridociclitis no es granulomatosa y presenta 60 m g/kg cada 8 horas de foscarnet por vía
precipitados queráticos finos y efecto Tyndall leve intravenosa.
en la cámara anterior. En forma excepcional se
: ven exudados retinianos amarillos, hemorragias Uveítis micóticas
i; retinianas e infiltrados perivasculares. Uveítis por Candida spp
Candida spp son flora habitual de la piel, la
I D iagnóstico. Se realiza por el cuadro derma- boca, el tracto gastrointestinal y la vagina. Son
I tológico, disestesia o hipoestesia corneana y el causa de enfermedad en huéspedes inmunocom
t aspecto oftálmico. prometidos, adictos a drogas intravenosas, por
r. tadores de catéteres, neoplásicos, con sida, o
Tratamiento. Se utiliza aciclovir en forma de en quienes reciben terapéutica prolongada con
; pomada oftálmica. También puede administrarse antibióticos o corticosteroides. Puede provocar
¿ por vía oral o intravenosa, sobre todo en los ca- uveítis anterior, a veces con hipopión; también
f' sos de compromiso dcl segmento posterior. coriorretinitis multifocal con lesiones pequeñas,
redondeadas, ligeramente sobreelevadas y de
Uveitis por virus del herpes simple bordes borrosos. Se asocia a hemorragias con
En algunos casos la iridociclitis se debe a in centros pálidos . Si estas lesiones progresan, da
vasión directa de partículas virales; en otros, a rán lugar a vitritis caracterizadas por colonias
: un fenómeno de hipersensibilidad. Puede mani- algodonosas blancas y flotantes, que al fusionar
. festarse asociada con queratitis o no. No hay cri se por medio de cordones opalescentes se ase
terio unánime acerca de la incidencia de este tipo mejan a un «collar de perlas».
de uveítis en ausencia de queratitis. El tratamiento Se resuelve en forma espontánea o se desarro
es competencia del oftalmólogo. Si hubiera afec- llan abscesos del cuerpo ciliar y vitreorretiniano,
i tación sistémica, se indicará aciclovir, como en así como necrosis retiniana con desprendimiento
• el herpes zoster. posterior por tracción.
El diagnóstico se sospecha ante antecedentes
t Uveítis p o r citomegatovirus epidemiológicos con cuadro oftalmológico com
Se observa en pacientes inmunocomprometidos patible. La única forma de certificarlo es mediante
y es la principal causa de ceguera en los infecta examen m icológico, directo y de cultivos de las
dos por HIV. Origina retinitis crónica difusa, ca muestras obtenidas por vitrectomía o punción
racterizada por lesiones blanco-algodonosas a las aspirativa.
que siguen áreas de necrosis granulares blanco- El tratamiento tópico se realiza con natamicina
amarillentas, con edema de todo el espesor de la al 5%. En casos de endoftalmitis o vitritis deberá
retina. Se inician en la retina periférica o en el realizarse vitrectomía más inyección intravítrea
polo posterior y luego coalescen. Coexisten he de anfotericina B o fluconazol, siempre que se
morragias retinianas y vasculitis. Por su aspecto respeten las concentraciones para evitar toxici
se la denomina retinitis en «queso cottage y dad retiniana. A dem ás se utilizarán por vía
258 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
B ib liografía------------------------------------------------
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Infecciones en el paciente
inmunocomprometido
M arcelo E. Corti
Ornar J. Palmieri
nuir el riesgo de que un agente infeccioso ingre central, y los macrófagos esplénicos y los de los
se en el hospedero, como la integridad de la ba* ganglios linfáticos. Los linfocitos T y B son los
rrera cutaneomucosa, la flora autóctona normal, responsables de la respuesta inmune específica.
ciertas características genéticas y los anticuerpos Los linfocitos B, o plasmocitos, proveen la inmu-
naturales. Como paso intermedio antes de la res nidad humoral mediante la síntesis de anticuerpos
puesta inmune específica, cuando un microorga en respuesta a un antígeno dado, el cual ha sido
nismo ingresa en el hospedero se produce la res previamente procesado por los macrófagos. Los
puesta inflamatoria, en la que participan los anticuerpos actúan a través de la neutralización
macrófagos circulantes, polimorfonucleares neu- directa de virus o toxinas, por la activación de la
trófilos, basófilos, eosinófilos y monocitos, los vía clásica del complemento o por la opsonización
que son generados por la médula ósea. Estas cé del antígeno que facilita la fagocitosis posterior.
lulas son estimuladas por distintas sustancias a La respuesta inmune celular está mediada por los
migrar al lugar donde deben actuar, como el com linfocitos T, que por acción de distintos estímulos
plemento y diversos factores humorales quimio- quimiotácticos llegan al sitio donde deben actuar.
tácticos. Otro grupo de macrófagos se localiza Las células T controlan la actividad de las células
en el denominado sistema reticuloendotelial, del B, facilitan su función (linfocitos T colaboradores
cual forman parte células fagocitarias distribui o helpers) o la regulan (linfocitos T supresores).
das en diferentes órganos, como los macrófagos
alveolares, las células de Kupffer en el hígado, M ecanism os de defensa de barrera. La inte
las células de la microglia en el sistema nervioso gridad de la piel y las mucosas es fundamental
como primera barrera para el ingreso de microor
ganismos. También es importante la acción de
C u ad ro 29-1. Mecanismos de defensa de! organis diversas sustancias, como las enzimas y el ácido
mo. clorhídrico, o que se mantenga el flujo normal
de los diferentes líquidos corporales. Todos es
Generales o no específicos tos mecanismos pueden ser modificados por dis
Integridad de )a barrera cutaneomucosa tintos factores, com o la colocación de catéteres
Flora autóctona venosos o arteriales, sondas vesicales o tubos
Características genéticas endotraqueales, la administración de antiácidos
Anticuerpos naturales o la inflamación de todo el tubo digestivo (mucov
Respuesta inflam atoria sitis), así como la obstrucción parcial o total de
Macrófagos circulantes conductos (colédoco, uréteres, etc.).
Sistema reticuloendotelial La mucositis se asocia con los microorganismos
presentes en la boca, tales como estreptococos
Respuesta inmune específica
aerobios y anaerobios. Los estafilococos son los
Linfocitos B (inmunidad humoral)
microorganismos más frecuentes en las infeccio
Linfocitos T (inmunidad celular)
nes por catéteres intravenosos. Los bacilos gram-
negativos son la primera causa de la neumonía
asociada con la asistencia respiratoria mecánica
C u ad ro 29-2. Infecciones asociadas a déficit de la
inmunidad humoral. y con el uso de sonda vesical.
Diagnóstico. En los pacientes con neuiropenia ciente tiene colocada una sonda vesical, está indi
es frecuente la ausencia de síntomas y signos de cada la realización de cultivos de orina. La radio»
inflamación, o bien éstos pueden ser mínimos y grafía de tórax está siempre indicada, aun cuando
hacen que se demore el diagnóstico. Por lo tamo, el paciente no presente síntomas o signos de com
hay que tener en cuenta la aparición de infeccio promiso respiratorio. La punción lumbar en cam
nes pulmonares que no muestren infiltrados en bio, sólo se hará ante la sospecha de meningoen-
la radiografía de tórax, meningoencefalítis sin cefalitis y en la medida en que la trombocitopenia
respuesta inflamatoria celular en el líquido cefa no la contraindique. Toda lesión cutánea debe ser
lorraquídeo, infecciones del tracto urinario sin escarificada o biopsiada para estudio citológico,
piuria e infecciones dermoepidérmicas o del te histopatológico y microbiológico.
jido celular subcutáneo sin signos evidentes de Debe tenerse en cuenta que la progresión de la
flogosis (induración, eritema). El examen clíni infección en pacientes neutropénicos puede ser
co deberá buscar signos y síntomas sutiles, fun rápida y el tratamiento con antimicrobianos debe
damentalmente dolor en los sitios que con más ser precoz tras el inicio de la fiebre. Los pacien
frecuencia son la puerta de entrada de estas in tes neutropénicos, aun sin fiebre, pero con sínto
fecciones: cavidad bucal, faringe y amígdalas, re mas o signos compatibles con un proceso infec
gión perianal, piel y faneras (región periungueal), cioso también deben iniciar tratamiento con anti
así como áreas que presenten catéteres vasculares microbianos (cuadros 29-4).
o sitios en los que se hayan efectuado punciones.
La fiebre es con frecuencia el único signo detec- Tratam iento de las infecciones bacterianas
table y obliga a mantener una metodología de diag en pacientes neutropénicos. Las bacterias gram-
nóstico posterior al examen clínico que debe in posilivas son las responsables del 60% al 70%
cluir: hemocuitivos para bacterias y hongos obte de las infecciones documentadas microbiológica-
nidos de una vena periférica y del catéter central. mente en los pacientes con fiebre y neutropenia.
Si existen síntomas o signos de infección urinaria En la selección del tratamiento antibiótico empí
(alteraciones en el sedimento de orina), o si el pa- rico inicial debe tenerse en cuenta la frecuencia,
el tipo de microorganismos y la sensibilidad a
los aniimicrobianos de los aislamientos de ese
Cuadro 29-4. Infecciones en pacientes neutropénicos. hospital o lugar de internación. El uso de ciertos
fármacos puede verse limitado por los anteceden-''
'l^jcrocírgl^^^
tes de alergia, insuficiencia renal o hepática.
Leucemias Bacterias Aquellos pacientes con bajo riesgo de compli
Ünfomas Escherichia coli caciones pueden ser tratados por vía bucal, aun
Tumores sólidos Klebsiella sp que esta vía sólo incluye a aquellos pacientes con
Infiltración tumoral de la Enterobaaer $p fiebre como única manifestación clínica, sin foco
médula ósea \ Serratid sp infeccioso ni signos sistémicos como escalofríos
Fármacos Pseudomonas e hipotensión arterial. También los pacientes en
Infecciones graves aeruginosa fase de recuperación de la neutropenia pueden
Defectos congénitos Staphylococcus aureus recibir tratamiento por vía bucal ya que éste, tie
Neutropenia cíclica Staphylococcus ne la ventaja de su menor costo, posibilita el trata
Síndrome de Kostman coagulasa negativos. miento ambulatorio y evita el uso de catéteres, lo
Estreptococos que reduce el riesgo de infección hospitalaria.
Hongos
Entre los regímenes orales, se prefiere la combi
Candida sp nación de ciprofloxacina más amoxicilina/clavu-
Aspergillus sp lánico, aunque también puede optarse por una
Mücorales fluoroquinolona como monoterapia.
Hongos ambientales En aquellos pacientes cuyas manifestaciones
Fusaríum clínicas indiquen la necesidad de hospitalización
Acremonium y tratamiento por vía intravenosa, puede optarse
C apítulo 29 - Infecciones en el paciente inm unocom prom eiido □ 263
?( -
por tres esquemas con eficacia similar. El prime berá asociarse vancomicina u otro glucopéptido
ro de ellos se basa en la monoterapia con una con el régimen terapéutico inicial de los pacien
cefalosporina de tercera generación (cefiazidima) tes de alto riesgo y suspenderla a las 24 o 48 ho
o de cuarta generación (cefepima) o un carbape- ras si el diagnóstico no se confirma. La adición
némico (im ipenem /cilastatina o meropenem). de un glucopéptido en forma empírica al régi
También es útil la asociación de piperacilina/tazo- men inicial estaría indicada en pacientes con in
bactam como monoterapia, pero ha sido menos fecciones relacionadas con catéteres intravascu-
empleada que las anteriores. En cambio, no es lares como celulitis, tromboflebitis séptica, bacte-
aconsejable en estos pacientes el uso de monote riemia, neumonía o meningitis pov Streptococcus
rapia empírica con fluoroquinolonas o aminoglu- pneum om ae resistente a penicilina y cefalospo-
cosidos por vía intravenosa por tratarse de regíme rinas o Staphylococcus aureus meticilino-resis-
nes subópiimos. Además, debe observarse en for tente.
ma estrecha la evolución de! paciente para detectar Las infecciones asociadas con dispositivos
falla de respuesta que pueda requerir la necesidad intravasculares, por lo general, son causadas por
de añadir otro antibiótico. Los esquemas mencio S taphylococcus aureus coagulasa negativos y
nados habitualmente no son activos frente a habitualmente responden bien al tratamiento an
estafilococos coagulasa negativos, estafilococos tibiótico parenteral sin necesidad de retirar el
meticilino-resistentes, enterococos resistentes a catéter, salvo evidencias de infección del túnel
vancom icina, algunas cepas de neum ococos del mismo o alrededor del dispositivo (celulitis).
penicilino-resistentes y Sfreptococcus viridans. Si luego de 48 a 72 horas de tratamiento no se
Cuando se decide utilizar dos fármacos sin in aprecia respuesta a los antibióticos, deberá reti
cluir un glucopéptido, los esquemas más utiliza rarse el catéter vascular, así como también se re
dos son los que combinan un aminoglucósido tirará en las infecciones provocadas pov Stenotro’
(gentamicina, amikacina) con una cefalosporina p hom onas n w lto p h ilia , P seudom onas a eru g i
con actividad 2tx\\.\-Pseudomonas (ceftazidima o nosa, enterococos resistentes a vancomicina,
cefepima) o con un carbapenémico (imipenem/ A cinetobacter hauniannii y las fungemias por
cilastatina o meropenem) con una carboxipeni- C andida spp para adecuar el tratamiento al ha
cilina o ureidopenicilina (piperacilina/tazobactam llazgo microbiológico.
o ticarcilina/clavulánico). En general, cualesquie Otra indicación para añadir un glucopéptido al
ra de estas combinaciones ofrece resultados si esquema inicial es la mucositis en pacientes que
milares. Las ventajas del tratamiento combinado han recibido quimioterapia intensiva, ya que esta
incluyen el efecto bactericida de ambos fármacos situación incrementa el riesgo de infecciones por
con mínima emergencia de bacterias resistentes estreptococos resistentes a la penicilina (Strepto-
durante el tratamiento. Algunas combinaciones, coccus viridans) como ocurre en los pacientes
como ceftazidima más un aminoglucósido, tie en profilaxis con quinolonas. La teicopJonina
nen como principal desventaja, la falta de activi aparece en estos casos como una alternativa a la
dad frente a algunas bacterias grampositivas, ade vancomicina con menos nefrotoxicidad.
más de su nefrotoxicidad. Cualquier esquema de El linezolid, una oxazolidinona. es otra alter
tratamiento debe incluir fármacos con actividad nativa para las infecciones por bacterias gram
frente a Pseudom onas aeruginosa. positivas resistentes, incluso enterococos resis
La vancomicina debe reservarse para casos de tentes a la vancomicina. Su principal efecto ad
infección por Staphylococcus aureus meticilino- verso es la mielosupresión.
resistente y no debería formar parle de los es La quinupristina-dalfopristina también es efec
quemas iniciales para no incrementar la tasa de tiva para infecciones por Enterococcus faecium
microorganismos resistentes a vancomicina, en resistente a vancomicina.
especial los enterococos aunque en algunos ca La eficacia del tratamiento antibiótico se eva
sos, puede añadirse posteriormente. Sin embar lúa luego de 3 a 5 días de iniciado el mismo; en
go, en aquellos lugares donde predominan las este momento, puede ocurrir que el paciente esté
infecciones graves por cocos grampositivos de afebril, con lo cual el esquema deberá mantener
264 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
se un mínimo de 7 días o hasta la negativización más importante para el desarrollo de una micosis
de los cultivos y siempre que el paciente se en invasiva es la neutropenia prolongada. La mor
cuentre asintomático. Lo ideal es que al suspen- talidad asociada con estas complicaciones es muy
der el tratamiento antimicrobiano se haya supe alta y oscila entre el 20% y el 40% para la candi-
rado la neutropenia. diasis diseminada y entre el 70% y el 95% para
En caso de que no haya un foco evidente para las infecciones invasoras pov A spergillus El
el origen de la fiebre ni cultivos positivos luego diagnóstico es con frecuencia difícil y requiere
de 48 horas de terapia intravenosa, el tratamien un elevado grado de sospecha clínica y una pre
to se puede continuar por vía oral. Si el paciente coz intervención terapéutica. Como ya ha sido
es de alto riesgo se mantendrá la vía intravenosa. expresado, una opción para aquellos pacientes
En cambio, cuando la fiebre persiste durante neutropénicos con fiebre persistente luego de 3 a
más de 3 a 5 días sin identificación de un patóge 5 días de tratamiento antibacteriano de amplio
no bacteriano deberá pensarse en que se trata de espectro, es la adición de un antifúngico. El éxi-j
una enfermedad no bacteriana, de que exista re to depende del diagnóstico precoz, de una rápidaj
sistencia del microorganismo o una respuesta len iniciación del tratamiento y de la recuperación]
ta a los antimicrobianos utilizados, en la emer de la neutropenia. La opción terapéutica es la
gencia de una segunda infección, en inadecua anfotericina B tradicional o desoxicolato que
dos niveles séricos o tisuiares del antibiótico, en durante mucho tiempo representó el tratamiento
supuraciones cerradas tales com o abscesos, empírico estándar para estos pacientes. Tiene el
pionefrosis, colecistitis y otras o también, en fie inconveniente de la nefrotoxicidad que puede
bre de causa no infecciosa (ver el capítulo Fiebre sumarse al de otros fármacos utilizados (amino-
de origen desconocido). En estos casos podrán glucósidos, glucopéptidos), de la hipokalemia yj
repetirse estudios microbiológicos, evaluar nue de los efectos adversos inmediatos en el momen
vamente los accesos vasculares, repetir la radio to de la administración que incluyen: dolor en el
grafía de tórax y agregar ecografía y tomografía sitio de la administración, flebitis, hipotensión,
computarizada de tórax, abdomen y pelvis. Si la mareos, cefalea, sudoración, náuseas y vómitos.
reevaluación no ha aclarado el origen de la fie Estos efectos secundarios pueden mitigarse con
bre y el paciente se mantiene estable se puede la administración lenta en no menos de 6 horas y
continuar con el mismo esquema de antibióticos. el agregado de antihistamínicos y antieméticos.^
En cambio, si hay evidencias de enfermedad pro Como alternativa se cuenta con las formulaciones^
gresiva o aparece alguna complicación no exis lipídicas de la anfotericina B, fluconazol e itraco-i
tente originalmente, se podrán cambiar o añadir nazol. D e las formulaciones lipídicas, la anfoteri-j
nuevos antimicrobianos o añadir un antifúngico ciña B liposomal y la anfotericina B en complejo:
con o sin cam bios en el esquem a de antimi lipídico incrementan notablemente los costos de
crobianos. Si el paciente recibía un esquema con la terapia aunque reducen sustancialmente la
uno o dos fármacos pero sin vancomicina, se aña nefrotoxicidad, mejoran la tolerabilidad inmedia
dirá ésta. Si en cambio, recibía un glucopéptido ta y permiten utilizar dosis más elevadas y du
desde el principio y no se identifica una bacteria rante mayor tiempo. Hay que tener en cuenta que
grampositiva, se puede suspender el glucopéptido el fluconazol no es activo frente a Aspergillus y
y añadir el antifúngico. Otra opción sería suspen determinadas esp ecies de C a n d id a y que eli
der el tratamiento si se sospecha que la fiebre es itraconazol sólo puede administrarse por vía oral,
debido a los antimicrobianos. situación que no es siempre posible.
La aparición de nuevos antifúngicos como las
Tratam iento de ias infecciones fúngicas en equinocandinas y el voriconazol permite contar
el p a c ie n te n e u tr o p é n ic o . La in fe c c io n e s con nuevas alternativas terapéuticas para estos
fúngicas invasoras afectan entre el 5% al 25% de pacientes. El voriconazol, que es un triazólico,
los pacientes con neutropenia prolongada, en es constituye el tratamiento de elección en la asper-i
pecial en aquellos sometidos a trasplante de cé gilosis invasiva. Puede administrarse por vía
lulas madre hematopoyéticas. El factor de riesgo intravenosa o por vía oral; por esta última tiene
I C apítulo 29 - Infecciones en el paciente inm unocom prom etido □ 265
una excelente absorción y biodisponibilidad, riesgo de infecciones graves. Este riesgo, aunque
siempre que se administre fuera de las comidas. con variaciones, persiste toda la vida del paciente.
Se m etaboliza en e l hígado por el sistem a Se encuentran en esta situación aquellos pacien
enzimático citocromo P-450, por lo que presenta tes esplenectomizados por traumatismos con ro
interacciones con otros fármacos que compartan tura del bazo (anesplenia anatómica) o por linfo-
esta vía metabóiica. mas, talasemia o hiperesplenismo (anesplenia fun
La caspofungina es el primer preparado de una cional). También deben ser considerados los pa
nueva familia de amifúngicos llamados equino- cientes cirróticos con pancitopenia periférica por
candinas que, a diferencia de otros amifúngicos, hiperesplenismo que son sometidos a embolización
actúan sobre la pared celular del hongo inhibiendo esplénica. Ésta es una forma de terapia con menos
la síntesis de l-3b-D-glucano. Este glucano no morbimortalidad que la esplenectomía.
está presente en las células de los mamíferos, lo Son características las infecciones por microor
que explica la escasa toxicidad de este grupo de ganismos capsulados como Streptococcus pneu-
antimicóticos. Otra equinocandina se incorporó monxae, N eisseria m eningitidis y H aem ophilus
recientemente al mercado farmacéutico, es la influenzae y también ciertas protozoosis como
anidulafungina que también tiene un amplio es* babesiosis y paludismo. El neumococo es la causa
pectro de actividad antifúngica y por su diferen del 90% de los episodios de sepsis fulminante en
te mecanismo de acción estas equinocandinas pacientes esplenectomizados y el agente causal
pueden combinarse con otros fármacos como el más frecuente de sepsis y meningitis.
voriconazol o la anfotericina B en pacientes con Desde el punto de vista preventivo, estos pa
infecciones graves. cientes deben recibir la vacunación frente a neu
mococo, meningococo, H aem ophilus influenzae
lyatam ientoantíviral en el paciente neutropé- tipo b y virus influenza. La vacunación debe efec
nlco. En general no hay indicación para adminis tuarse al menos quince días antes de una esple
trarlos en forma empírica, por lo que se reservan nectomía programada o, en caso contrario, quin
para aquellos casos con diagnóstico documentado ce días después de la cirugía si ésta fue de urgen
de infecciones virales o para aquellos pacientes cia. Se recom ienda una única revacunación
que presentan lesiones cutáneas o mucosas por el antineumocócica a los cinco años. Algunos auto
virus herpes simple o varicela zoster, que deben res aconsejan la profilaxis con antibióticos cuya
recibir aciclovir aun en ausencia de fiebre. Como duración va desde los dos años hasta toda la vida.
alternativa terapéutica se cuenta con el valaci- Se utilizan la penicilina oral, ampicilina, amoxi-
clovir y el famciclovir que se pueden administrar cilina/ácido clavulánico o macrólidos.
por vía oral por su'éxcelente absorción y con ma El tratamiento de los pacientes esplenectomi
yor intervalo entre dosis en comparación con zados que desarrollan fiebre debe realizarse
aciclovir debido a su vida media más prolongada. precozmente para evitar la sepsis fulminante. Al
La infección diseminada por citomegalovirus inicio podrá utilizarse penicilina y si se sospecha
y en especial la neumonía, es una complicación la presencia de H aem opilus influenzae produc
, frecuente de los pacientes sometidos a trasplante tor de betalactamasas y resistente a ampicilina o
de médula ósea. En este caso, el tratamiento de si existe alto riesgo de cepas de neumococo re
elección es el ganciclovir o el foscarnet. sistentes a la penicilina, el tratamiento se inicia
rá con cefalosporinas de tercera o cuarta genera
ción más vancomicina.
INFECCIONES EN EL PACIENTE ANESPLÉNICO
o» nos casos suelen asociarse otros factores que fa o cocos grampositivos (5. epiáermidis, Streptoco-
cilitan infecciones, como las mucositis asocia ccus sp), que producen bacteriemia de origen in
# das con algunos fármacos. testinal o por la alteración de la barrera cutaneo-
4 » Fárm acos utilizados para evitar el rechazo de
mucosa (catéteres, sonda vesical). En esta etapa
inicial también se presentan infecciones por vi-
# órganos. La inmunosupresión necesaria para dis rus del herpes simple. Durante los tratamientos
minuir el riesgo de rechazo de un órgano tras de consolidación, como los pacientes tienen inter
41 plantado requiere el uso de varios fármacos. Uno naciones más prolongadas y han sido expuestos
de ellos, la azatioprina, se asocia con una mayor a antibióticos de amplio espectro, pueden presen
I» incidencia de infecciones por el virus varicela tarse in feccion es por bacilos gramnegativos
zoster. En época más reciente se han desarrolla multirresistentes, hongos, como C andida spp o
I»
do otros fármacos, como la ciclosporina y el AspergiUits spp, y reactivación o primoinfección
m mofetil micofenolato, que disminuyen el riesgo por citomegalovirus.
de rechazo con menor incidencia de infecciones.
m L eucem ias crónicas. En la leucemia linfática
Corticosteroides. Por su uso tan difundido es crónica en particular, las infecciones se asocian
9 posible que sean los agentes inmunosupresores a la deficiencia de inmunoglobulinas. Esta últi
m de uso más común. Se utilizan como profilaxis o ma puede no estar presente en el momento del
tratamiento del rechazo de órganos y en las en diagnóstico, pero con el avance de la enferme
fermedades autoinmunes. Los corticosteroides dad y la implementación de las distintas medidas
modifican la respuesta inflamatoria al disminuir terapéuticas, la hipogammaglobulinemia se acen
la circulación y proliferación de los linfocitosT túa y el paciente puede adquirir infecciones del
circulantes, la circulación de los monocitos, como tracto respiratorio superior e inferior (sinusitis,
también la actividad bactericida y quimiotáctica otitis, neumonía), de piel y partes blandas, e in
de estas células. También actúan en el lecho fección urinaria. Los microorganismos más fre
vascular, al impedir la migración de los macrófa- cuentes son S. pneum oniae, S. aureus. H. in-
gos a los sitios de la inflamación. flu e n za e y E. coli. La administración periódica
La inmunosupresión asociada con el uso de de gammaglobulina intravenosa disminuye el
corticosteroides está en función de la dosis y el riesgo de desarrollar este tipo de infecciones.
tiempo de administración. Se consideran dosis
inmunosupresoras las superiores a 20 mg/día de M ielom a m últiple. Esta enfermedad se carac
prednisona o su equivalente durante más de dos teriza por la disminución en la síntesis de inmii-
semanas. noglobulinas, un aumento de su catabolismo y la
deficiente actividad del complemento. En conse
cuencia los pacientes desarrollan infecciones por
iiSJFECCIONES EN PACIENTES
gérm enes capsulados, en particular S. pneii'
ONCOHEMATOLÓGICOS
m oniae. El tratamiento del mieloma y la neutro
Leucemias agudas. En este grupo de pacientes penia exponen al paciente a las infecciones que
las infecciones se relacionan con la presencia de se asocian con esta condición.
neutropenia, que se produce como consecuencia
de la infiltración medular o en forma secundaria
INFECCIONES EN PACIENTES TRASPLANTADOS
al tratamiento quimioterápico. Es importante di
ferenciar si el tratamiento quimioterápico es de Infecciones en receptores de trasplante de
inducción o de consolidación, ya que si bien las órganos sólidos. El trasplante de órganos sóli
infecciones estarán en relación con la neutropenia dos no sólo ha permitido prolongar la vida, sino
asociada con la quimioterapia, existen variacio también el desarrollo de actividades normales a
nes. En el caso de la quimioterapia de inducción muchos pacientes que de otra forma tendrían ries
las infecciones se asocian con bacilos gramne- go de vida o de padecer enfermedades crónicas
gativos (£. coii, P. aeriíginosa, K. pueum onioe) invalidantes. En la actualidad son cada vez más
Capítulo 29 - Infecciones en ei paciente inm unoconiprom etido □ 267
frecuentes los trasplantes de riñón, hígado, pul C uad ro 29-5. Factores asociados con infecciones en
món, corazón, corazón-pulmón, páncreas-riñón trasplante de órgano sólido.
e intestino delgado. Las dos complicaciones más
Tipo de trasplante
importantes de estos procedimientos son el re
chazo del órgano trasplantado y las infecciones. Técnica quirúrgica
La aparición de infecciones en el receptor del tras Tipo de inmunosupresión empleada
plante depende de múltiples factores, entre ellos Anormalidades metabólicas
el tipo de trasplante, la técnica quirúrgica, la
Alteración de la barrera cutaneomucosa
modalidad de la inmunosupresión empleada, la
presencia de anormalidades metabólicas, la rup Infección por virus Inmunomoduladores (CMV)
tura de la barrera cutaneomucosa, la existencia Antecedentes epidemiológicos
de infección porcitomegalovirus, los anteceden Factores ambientales (exposición a infecciones
tes epidemiológicos, los factores ambientales (ex intrahospitalarias o extrahospitaiarias)
posición a infecciones intrahospitalarias o extra-
Tiempo transcurrido desde el trasplante
hospitalarias) y el tiempo transcurrido desde el
trasplante. Este último factor es muy importante,
ya que permite orientar la búsqueda del agente cau-
C u ad ro 29-6. Infecciones en pacientes con trasplan
.sal o su localización. En el primer mes postrasplante
te de órgano sólido de acuerdo con el tiempo trans
son más frecuentes las infecciones intrahos
currido postrasplante.
pitalarias, como la de la herida quirúrgica, la neu
monía, la asociada con el catéter o la de las vías
urinarias. Esta última, relacionada en particular Infecciones intrahospitalarias
con el trasplante de riñón o páncreas-riñón. Infecciones de la herida quirúrgica
Las infecciones virales que pueden observarse Neumonía
en este período son la hepatitis B, transmitida por Infección asociada con catéter
el órgano trasplantado, por sangre o por hemode- Infección urinaria
rivados o la reactivación de la infección por el Infecciones virales (hepatitis B, herpes simple)
virus del herpes simple tipos I o II. Entre el se
gundo y el sexto mes los pacientes desarrollan
Infecciones por virus
las infecciones denominadas oportunistas. Den
Herpes simple
tro de las infecciones virales se encuentran las
Varicela zoster
provocadas por la reactivación del virus del her
Epstein-8arr
pes simple, el de la varicela zoster (herpes zoster),
Citomegalovirus
infecciones por virus de Epstein-Bair, capaces de
Infecciones por hongos
desencadenar enfermedades linfoproliferativas, y,
por último, infecciones por citom egalovirus Aspergillus spp
Pneumocystisjiroveci
(CMV). Estas últimas suelen presentarse con un
Candida spp
cuadro febril sin foco, acompañado con leucope-
Histoplasima capsulatum
nia y aumento de las transaminasas, o con for
Cryptococcus neoformans
mas localizadas, cóm o neumonía o hepatitis.
Además, puede favorecer la aparición de otras Infecciones por bacterias
infecciones oportunistas, com o la producida por asteria mor)ocytogenes
Pneiimocysfis jiroveci, o acelerar el rechazo del Nocardia spp
órgano trasplantado. El uso de ciertos esquemas Mycobacterium tuberculosis
inmunosupresores, como los anticuerpos mono- Infecciones por parásitos
clonales anti-0KT3 o la gammaglobulina anti-
Toxoplasma gondii
ünfocitaria, se asocia con más frecuencia con en
fermedad por CMV. El diagnóstico de la citome- Trypanosoma cruzi
Strongyloides stercoralis
galovirosis en el paciente receptor de trasplante
268 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
requiere, además de la sospecha clínica, exáme recurso terapéutico que se utiliza en algunas neo-
nes complementarios com o la investigación del plasias hemáticas (leucemias, linfomas, mieloma)
virus, por cultivo de sangre u otros materiales, o o tumores sólidos. Para llevarlo a cabo es preci
la detección de antígenos virales como pp65 o so provocar en el paciente la aplasia medular, para
del material genético viral por reacción en cadena lo cual se utilizan fármacos o radioterapia. Lue
de la polimerasa (PCR). Para el tratamiento de las go por vía intravenosa se infunde la médula ósea
infecciones por CMV el ganciclovir es el fármaco o células progenitoras periféricas de un donante
de elección; la alternativa es el foscamet. Durante (trasplante alogénico) o del mismo paciente (tras
el tratamiento con corticosteroides en altas dosis, plante autólogo). La frecuencia y gravedad de las
con anticuerpos monoclonales anti-0KT3 o con infecciones es mayor en pacientes con trasplante
gammaglobulina antilinfocitaria, debe prevenirse alogénico, ya que reciben un tratamiento inmuno-
la enfermedad por CMV mediante la administra supresor mucho más intenso que para un trasplan
ción profiláctica de ganciclovir. te autólogo. Los receptores de trasplante alogé
Las infecciones fúngicas que se presentan entre nico desarrollan enfermedad injerto contra hués
el segundo y el sexto mes se deben a Aspergillus ped (EICH), que se produce porque los linfocitos
spp, Pneumocystis jiroveci, Candida spp, Histo- T del donante atacan distintos tejidos del recep
plasm a capsulatum y Cryptococcus neoformans. tor, La expresión clínica de EICH consiste en
Las infecciones por Candida spp pueden asociar exantema, diarrea y alteraciones hepáticas. Tan
se con la presencia de catéteres o como complica to los fármacos utilizados para tratarla (ciclos-
ción de la herida quirúrgica. La aspergilosis se lo porina, corticosteroides, metotrexato) com o la
caliza con más frecuencia en el pulmón; se pre enfermedad en sí aumentan el riesgo de desarro
senta, en particular, en pacientes con trasplante de llar infecciones.
corazón o pulmón (cuadros 29-5 y 29-6). En el trasplante de médula ósea se distinguen
La neumonía por Pneum ocystis jiro veci afecta estadios en los que pueden presentarse diferen
más a menudo a los pacientes con trasplante de tes infecciones.
pulmón. La criptococosis puede presentarse como
meningitis aguda o subaguda, como lesiones cu Período pretrasplante. En esta etapa las infec
táneas o como síndrome febril. ciones son producidas por bacilos gramnegativos
La incidencia de histoplasmosis asociada con y se localizan con más frecuencia en la piel y par- ^
el trasplante de órgano sólido varía con el área tes blandas, la cavidad bucal y el tracto urinario.
geográfica o en relación con refacciones edilicias
contiguas al quirófano. Desde el punto de vista Período posirasplante inm ediato. Comprende ;
clínico se presenta como una forma diseminada, desde el día O, día de la infusión de la médula í
con fiebre, sudoración, escalofríos, cefalea, ar ósea o células progenitoras, hasta el día 30 en el |
tritis, mialgias, lesiones cutáneas (pápulas, pla que comienzan a producirse células progenitoras \
cas, úlceras o celulitis) y hepatoesplenomegalia. hematopoyéticas en el paciente. Durante esta eta- ;
Las infecciones bacterianas entre el segundo y pa el enfermo se encuentra neutropénico. Los ■
el sexto mes postrasplante son producidas por agentes etiológicos y la localización de las in- *
Listeria m onocytogenes, N ocardia spp o M yco- fecciones son similares a las que se observan en
bacterium tuberculosis. el paciente neutropénico por otra causa. Una di- ’
Las infecciones parasitarias pueden tener como ferencia es la mayor incidencia de enterocolitis o ¡
agentes etiológicos a Toxoplasma gondii, Tiypa- tiflitis necrotizante, así com o la mayor frecuen- |
nosoma cruzi o Strongyloides stercoralis. Merece cia de reactivación de infección por virus del j
destacarse que en este período, en el receptor de herpes simple tipo L Esta última produce gingi- *
trasplante renal también pueden desarrollarse in voestomatitis, que a su vez es puerta de entrada •
fecciones urinarias por microorganismos comunes. de infecciones bacterianas o micóticas. !
médula ósea. Durante esta etapa predominan las patógenos es necesario el estudio microbiológi-
alteraciones de la inmunidad celular y de la ba co del lavado broncoalveolar.
rrera cutaneomucosa. El riesgo de infecciones
está supeditado en gran medida a la presencia de Período postrasplante tardío. Después del día
EICH. La infección por CMV y sus manifesta 100 postrasplante la incidencia de infecciones es
ciones clínicas son frecuentes; se observan en baja, a menos que el paciente presente EICH. Esta
cerca del 50% de los receptores de trasplante, ya última eventualidad se presenta en un 30% a 50%
sea como reactivación de una infección previa o de quienes sobreviven más de 6 meses y condi
como primoinfección. La reactivación es la for ciona la aparición de infecciones virales (40%),
ma más frecuente y grave. Su aparición depende bacterianas (30%) o fúngicas (20%). El virus de
de la historia de infección por CMV, tanto del la varicela zoster es el agente etiológico más fre
donante como del receptor, y los factores de ries cuente en esta etapa y produce formas localiza
go asociados son: das o diseminadas. Las infecciones bacterianas
son producidas por bacterias capsuladas (neumo
• Incompatibilidad HLA entre receptor y do coco, meningococo, H aem ophilus influenzae) y
nante. se presentan como neumonía o sepsis.
• Edad avanzada.
• Uso de hemoderivados provenientes de do
INFECCIONES EN PACIENTES CIRRÓTICOS
nantes CMV serop ositivos en receptores
inmunosusceptibles. Las infecciones bacterianas son una compli
• Presencia de EICH. cación muy frecuente en pacientes con cirrosis
• Irradiación corporal total. hepática descompensada, ictericia, edemas, asci-
tis, encefalopatía y hemorragia digestiva; se aso
La enfermedad por CMV puede presentarse cian con elevada morbimortalidad y ocupan el
como un cuadro febril inespecífico acompañado tercer lugar como causa de muerte. El mayor ries
por leucopenia, trombocitopenia, hepatitis, esofa- go de infección se produce en aquellos enfermos
gitis, enterocolitis o neumonía. Esta última, que con mayor grado de compromiso hepático y su
es la forma más grave, se presenta en el 10% al prevalencia oscila entre el 30% y el 50% de los
40% de los pacientes con trasplante alogénico sin pacientes cirróticos hospitalizados. Le siguen en
profilaxis; no tratada tiene una mortalidad del importancia la insuficiencia hepática y la hemo
80%. El diagnóstico virológico, al igual que en rragia digestiva. El alcoholismo como causa de
los receptores de trasplante de órgano sólido, se cirrosis a g r^ a otro factor de riesgo para las in
basa en el cultivo viral, la detección de antígenos fecciones. Estas, son provocadas por trastor
virales como pp65 o de ácidos nucleicos del vi nos en los mecanismos de defensa humoral y ce
rus, por técnica de PCR en sangre u otras mues lular, cambios en la flora intestinal, aumento de
tras representativas. El tratamiento también re la permeabilidad de la mucosa intestinal para las
quiere la administración de ganciclovir o foscar- bacterias (translocación bacteriana desde la luz
net y, en caso de neumonía, de la asociación con intestinal hacia los ganglios mesentéricos) y dis
gammaglobulina intravenosa. El diagnóstico di minución de la actividad fagocítica del sistema
ferencial de la neumonía por CMV se plantea con retículoendotelial debido al cortocircuito porto-
otras causas infecciosas o no infecciosas. Entre sistém ico que se produce en aquellos sujetos con
éstas últimas se describe la neumonía intersticial hipertensión portal, razón por la cual, el intesti
idiopática, que clínicamente no se distingue de no es una importante puerta de entrada para las
la neumonía por CMV (fiebre, hipoxemia e infil bacteriemias.
trados intersticiales bilaterales) y se asocia con Las infecciones bacterianas más frecuentes en
una mortalidad del 50%. Como agentes infeccio los enfermos con cirrosis son; peritonitis bacte
sos a considerar en el diagnóstico diferencial, hay riana espontánea, infecciones del tracto urinario,
que tener en cuenta Aspergillus spp y Pneumo- neumonías y bacteriemias. Menos comunes son
cysiis ¡iroveci. Para la identificación de ambos la celulitis de los miembros inferiores y de la
270 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
pared abdominal, la endocarditis y el empiema llos que se recuperaron de una peritonitis bacte
pleural. riana espontánea, la probabilidad de recurrencia
El peritoneo puede infectarse de manera pri es del 70%. La norfloxacina se administrará has
maria en ausencia de un proceso intraabdominal ta la desaparición de la ascitis o hasta que se rea
agudo. En estas circunstancias, el agente causal lice el trasplante hepático.
puede no ser de origen entérico {Streptococcus
pneum oniae, Siaphylococcus aureus). Este cua
INFECCIONES EN PACIENTES EN HEMODIÁLISIS
dro, denominado peritonitis bacteriana espontá
CRÓNICA
nea, es propio de los pacientes con asciiis y fo
cos sépticos extraabdominales (endocarditis, ca Después de las enfermedades cardiovasculares,
téter infectado, infección urinaria). También pue las infecciones constituyen la segunda causa de
de ser provocada por bacterias gramnegativas; la muerte en pacientes en hemodiálisis crónica. Las
que se identifica con mayor frecuencia es E. coli. infecciones son una causa frecuente de morbilidad
Los signos clínicos incluyen dolor abdominal, y las responsables del 10% al 25% de la mortali-
fiebre y leucocitosis, que pueden no estar pre dad global en los hemodializados. Los factores
sentes hasta en el 30% de los casos. Por esta ra que incrementan el riesgo de muerte incluyen la
zón el diagnóstico precoz puede ser difícil y re edad avanzada, la duración prolongada de la
quiere un alto índice de sospecha. La paracentesis hemodiálisis, la diabetes como causa de la insu
diagnóstica debe efectuarse en todo paciente ficiencia renal crónica y la desnutrición.
cirrótico con ascitis y signos de peritonitis o en Hay que tener en cuenta que la fiebre no siem
casos de deterioro renal o neurológico. El hallaz pre es sinónimo de infección y puede responder
go en el líquido ascítico de un recuento de neu- a múltiples causas condicionadas o no por la he
trófilos mayor de 250 células/mni^es una indica modiálisis. Además, las infecciones no siempre
ción para iniciar el tratamiento antibiótico empí se acompañan de fiebre, debido a la hipotermia
rico, antes de obtener el aislamiento bacteriano fisiológica de estos pacientes y a su respuesta
en el cultivo. térmica disminuida. Finalmente, con frecuencia,
El antibiótico de elección es la ceftriaxona en los enfermos en diálisis reciben analgésicos y
dosis de 1 g cada 12 horas por vía intravenosa, antitérmicos que pueden enmascarar la fiebre.
que tiene un índice de respuesta del 80% al 95%. Múltiples factores condicionan la alta frecuen
Como alternativa pueden utilizarse otras cefalos- cia de infecciones en la insuficiencia renal c^óni-^
porinas de tercera generación o la combinación ca; entre ellos se incluyen las alteraciones que
de amoxicilina con ácido clavulánico. El uso de afectan tanto a la respuesta inmune humoral como
aminoglucósidos está contraindicado por la toxi a la celular, las alteraciones de la barrera cutaneo-
cidad renal. El tiempo de tratamiento es de 7 a mucosa, las enfermedades del riñón y de las vías
10 días. A las 48 horas de iniciado el mismo de urinarias, la presencia del acceso vascular y las
berá efectuarse una paracentesis de control para derivadas de la contaminación de los filtros y del
evaluar la eficacia del tratamiento. Una disminu líquido de diálisis.
ción del recuento de polimorfonucleares del 25% Algunos circunstancias pueden ayudar a es
del valor inicial, acompañada de la resolución de tablecer el origen de la fiebre. Cuando ésta apa
los síntomas y signos indica buena respuesta. La rece al inicio de la sesión de hemodiálisis, la causa
administración concomitante de albúmina dismi habrá que buscarla en reacciones de incompati
nuye la mortalidad. bilidad, contaminación de filtros o del líquido de
La descontaminación intestinal se postula diálisis o en la bacteriemia a punto de partida del
como la mejor forma de prevenir las infecciones acceso vascular. La fiebre durante la sesión de
en los pacientes cirróticos. La profilaxis con diálisis puede obedecer a pirógenos bacterianos,
norfloxacina en dosis de 400 mg cada 12 horas temperatura excesiva del líquido de diálisis,
está indicada en los pacientes cirróticos con he bacteriemia o hem ólisis aguda. La aparición de
morragia digestiva, en los que el riesgo de infec fiebre en los períodos entre las sesiones obliga a
ción es dei 35% a! 65%, con o sin ascitis; en aque descartar la etiología infecciosa, bacteriana, viral
C apítulo 29 - Infecciones en el paciente inm unocom prom etido □ 271
caciones más graves de los ADIV con elevada el 7% de la población adulta padece diabetes. De
morbilidad y mortalidad. La gran mayoría de los ellos, el 90% son diabéticos de tipo 2, y su pre
casos comprometen al corazón derecho y son valencia aumenta por la mayor expectativa de
debido a Staphylococcus aureus. En los heroinó- vida, el sedentarismo y la obesidad. El paciente
manos hay que tener en cuenta la posibilidad de diabético es más susceptible a padecer infeccio
Candida albicans. La enfermedad se localiza pre nes en comparación con la población general y
ferentemente en la válvula tricúspide y se mani además, estas com plicaciones revisten mayor
fiesta clínicam ente por fiebre, presente en el gravedad.
100% de los casos y síntomas respiratorios de La frecuencia y gravedad de las infecciones en
prevalencia variable tales com o tos, disnea, ex el paciente diabético se relacionan con el grado
pectoración hemoptoica y dolor torácico asocia de control metabólico; en aquellos pacientes con
dos con tromboembolismo pulmonar séptico ori buen control glucémico, la incidencia de infec
ginado en las vegetaciones tricuspídeas. ciones no parece superior a la del resto de la po
La radiografía de tórax muestra infiltrados blación.
nodulares unilaterales o bilaterales que pueden El motivo de la mayor susceptibilidad del pa
cavilarse. ciente diabético a la infección se debe a la hiper-
El diagnóstico se confirma con los hemocul- glucemia y la acidosis; ambos estados generan
livos y el ecocardiograma transtorácico o transe- una reducción en la quimiotaxis, adherencia y
sofágico que permite ver las vegetaciones en más fagocitosis de los polimorfonucleares neutrófilos
del 80% de los pacientes. El mejor pronóstico de en el sitio de la infección. La función bactericida
la endocarditis tricuspídea en comparación con de los neutrófilos está asociada con el control de
la del corazón izquierdo y la necesidad de acor la glucemia. Además del control metabólico, exis
tar la hospitalización de estos pacientes ha lleva ten otros factores que condicionan la mayor sus
do a reducir la duración del tratamiento a cuatro ceptibilidad del paciente diabético a la infección:
semanas, las dos primeras por vía parenteral para la neuropatía predispone a microtraumatismos y
luego continuar por vía oral. quemaduras, en especial en los miembros infe
Infecciones pleuropulmonares. Las infecciones riores que originan puertas de entrada para di
respiratorias en ios ADIV pueden originarse en versos microorganismos, tanto los que forman
la aspiración de material orofaríngeo provocada parte de la flora habitual de la piel com o los del
por el deterioro del nivel de conciencia provoca medio exterior. Estas infecciones en general son
do por el consumo de drogas. En estos casos son dermoepidérmicas y con frecuencia están provo
frecuentes las neumonías por bacterias anaero cadas por Staphylococcus aureus.
bias, los abscesos pulmonares y las pleuresías La neuropatía autonómica genera una dificul
purulentas; además del ya señalado compromiso tad en el vaciado de la vejiga, lo que favorece la
pulmonar en la endocarditis derecha. aparición de infecciones urinarias.
Infecciones p or hongos. Las infecciones por El compromiso macrovascular y microvascular
Candida spp. son las m icosis más frecuentes en genera isquemia tisular que predispone a la pro
ADIV. Entre las infecciones micóticas merecen liferación bacteriana.
destacarse las candidemias y la endocarditis por El control estricto de la glucemia es un factor
Candida spp de los heroinómanos. fundamental en el tratamiento de las infecciones
en el paciente diabético y es tan importante como
la antibioticoterapia o el drenaje quirúrgico de
INFECCIONES EN EL PACIENTE DIABÉTICO
abscesos o colecciones purulentas.
La diabetes constituye en la actualidad un gra Existe una serie de infecciones que son caracte
ve problema de salud pública y se ha transforma rísticas del paciente diabético; entre ellas se in
do en una verdadera epidemia. En el año 2000 se cluyen al pie diabético, la otitis externa maligna
calculaba que 170 millones de personas padecían por P seu d o m o n a s aeru g in o sa , la colecistitis
esta enfermedad y la predicción para el año 2030 enfísematosa por bacterias anaerobias, las feohi-
es de 366 millones de afectados. En la Argentina fom icosis, la mucormicosis rinocerebral (ver el
JW
9
274 □ P rim era parte - Generalidades - Síndromes clínicos
m
4» capítulo Mucormicois), así como las pielonefritis 0K T 3 en receptores de órgano sólido. También
y cistitis enfisematosas. Todos estos padecimien lo es en receptores de trasplante de órgano sólido
tos se asocian con diabetes de larga evolución o de médula ósea asintomáticos, en los que por
con mal control metabólico (cetoacidosis). medio del cultivo se detecta replicación viral en
Por otra parte, existen otras infecciones rela sangre, o antígeno o ácidos nucleicos virales por
cionadas con intervenciones terapéuticas frecuen PCR.
tes en pacientes diabéticos como la diálisis peri- La administración de trimetoprima-sulfame-
toneal o hemodiáiisis crónica, la infección de toxazol durante los primeros 6 m eses postras
marcapasos o desfibriladores cardíacos y los tras plante, tanto de órganos sólidos como de médula
O
plantes de órganos. ósea, es útil para prevenir la neumonía por Pneu-
a Finalmente, existe un aumento de la inciden
cia de neumonía bacteriana de la comunidad por
m ocystis jiroveci.
Para la prevención de la enfermedad por HSV
o Streptococcus pneum oniae con aumento de la en pacientes con trasplante de m édula ósea
mortalidad asociada con cetoacidosis. También seropositivos, durante el período de neutropenia,
ü
son frecuentes las neumonías por Staphyiococcus se utiliza aciclovir.
9 aureiis como complicación de la influenza. Estas La administración de antifúngicos tópicos,
circunstancias hacen recomendable la vacunación com o nisiatina, reduce el riesgo de desarrollar
antigripal y la antineumocócica en todos los dia infecciones cutaneomucosas por hongos del gé
béticos. nero Candida. En los pacientes con trasplante de
médula ósea el uso de fluconazol reduciría el ries
go de candidiasis superficial y profunda.
PROFILAXIS
Los pacientes esplenectomizados deben reci
# La alta morbimonalidad de las infecciones en bir profilaxis antibiótica con penicilina benzatina
hospederos inmunocomprometidos justifica la intramuscular una vez por mes o amoxicilina oral
• importancia de las estrategias de prevención, des todos los días, en particular durante los dos pri
tinadas a disminuir el riesgo de infección o de meros años luego de la esplenectomía, para pre
41 enfermedad asociada. Las medidas a tener en venir las infecciones por bacterias capsuladas.
cuenta se describen a continuación:
4»
3. Vacunas
(O 1. Generales Los hospederos inmunocomprometidos no pue
Lavado de manos. den recibir vacunas de gérmenes vivos por el ries
a Aislamiento en habitación individual (impres go de patogenicidad. Las habituales, con excep
cindible en pacientes neutropénicos). ción de las mencionadas antes, se administran
41 Alimentos cocidos en caso de pacientes neu según el esquema de rutina.
tropénicos. La respuesta a las inmunizaciones es menor
Técnica quirúrgica adecuada (el riesgo de in cuanto mayor es el grado de inmunodepresión.
fecciones en receptores de órgano sólido aumen Para mejorar la respuesta, en el caso de pacien
ta con la mala técnica quirúrgica o la prolonga tes con quimioterapia antineoplásica, la adminis
ción del tiempo operatorio). tración de las vacunas debe efectuarse dos sema
Evitar la internación de pacientes neutropénicos nas antes de la quimioterapia o dos meses des
en cercanías de áreas en construcción, ya que pués de finalizado el tratamiento. Si el paciente
aumenta en forma significativa el riesgo de in recibe corticosteroides, se lo vacunará, de ser
fección por Aspergilliis spp. factible, luego de haberlos suspendido o reduci
do la dosis. En los pacientes a quienes se les va a
2. Profilaxis con anrimicrobianos practicar una esplenectomía programada se re
Ya se mencionó la utilidad del ganciclovir para comienda vacunarlos al menos dos semanas an
prevenir la infección por citomegalovirus, en el tes. Los que van a recibir un trasplante deben
marco de un tratamiento con corticosteroides en inmunizarse antes; si se hace después, se hará una
altas dosis o con anticuerpos monoclonales anti- vez superada la etapa de mayor inmunosupresión.
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C apítulo 29 - Infecciones en el paciente inm unocom prom eiido □ 275
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Segunda parte
Infecciones virales
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WJKia
Mononucleosis infecciosa
M arcelo E. Corti
Ornar J. Palmieri
ETIOLOGÍA EPIDEMIOLOGIA
En 1889 la mononucleosis infecciosa fue deno Se trata de una enfermedad cosmopolita, que
minada «fiebre ganglionar» por Pfeiffer. La pre en nuestro país es endémica con mayor inciden
sencia de células anormales en sangre periférica cia en primavera.
hizo que en 1920 Sprunt y Evans la denominaran Predomina en la infancia, la adolescencia y an
mononucleosis infecciosa. En 1923, Downey y Me tes de los 30 años. La transmisión del EBV se
Kinday describieron en detalle las características realiza por vía aérea, del individuo enfermo al
de estas células mononucleares. La serología para receptor susceptible. Es importante destacar que
el diagnóstico de la afección evidenció un gran el virus persiste en la orofaringe hasta 18 meses
avance en 1932, cuando Paul y Bunnell detecta después de la infección primaria. Luego es eli
ron la presencia de aglutininas heterófilas en el minado en forma intermitente por todos los indi
suero de pacientes afectados, las cuales aglutinan viduos seropositivos aunque no presenten enfer
los glóbulos rojos de carnero. Esta reacción fue medad clínica. La incidencia de infección por
mejorada en 1937 por Davidsohn, quien, antes de EBV se incrementa con la edad; en algunas se
hacer la reacción de aglutinación con glóbulos ro ries se demostraron anticuerpos específicos en el
jos de camero, adsorbió con riñón de cobayo las 90% al 95% de los adultos.
aglutininas heterófilas del tipo Forssman del sue El EBV está vinculado con la etiología del Un-
ro del enfermo. Los anticuerpos heterófílos pro foma de Burkitt, un trastorno linfoproliferativo
pios de la mononucleosis presentes en el suero del maligno descripto en niños de Africa Central; con
enfermo no son adsorbidos por riñón de cobayo. el carcinoma nasofaríngeo anaplásico y con el
280 □ Segunda parte - Infecciones virales
linfoma de células B que afecta a pacientes inmu> con linfocitos de distinto tamaño, y cierto grado
nodeprimidos. de reacción de las células B en el interior de los
folículos. Éstos presentan un mayor tamaño y
centros germinales prominentes, en los que se
PATOGENIA
observa gran cantidad de mitosis. Hay cierto gra
El virus penetra en el hombre a través de la do de distorsión de la arquitectura normal del gan
orofaringe, en cuyas células epiteliales se mul glio, debido a la reacción linfoproliferativa, don
tiplica; desde este lugar alcanza los linfocitos de de en forma ocasional puede haber células del tipo
la sangre periférica. Los únicos linfocitos que tie Reed-Stemberg. Esto da lugar a dificultades en el
nen receptores para el EBV son una pequeña diagnóstico diferencial histológico con la enfer
subpoblación linfoide de células B, que en con medad de Hodgkin. También deben descartarse
secuencia son las células blanco. Estas células B otras enfermedades linfoproliferativas malignas.
infectadas expresan diversos antígenos: el EBNA El bazo suele estar agrandado hasta duplicar o
{Epstein-Barr N uclear Antigen), que indica la triplicar su tamaño normal, es blando y con una
presencia del genoma del EBV, el antígeno de superficie de corte hipcrémica. En el estudio
superficie EA {Early Antigen) o antígeno tem histológico se observan folículos esplénicos pro
prano, cuya aparición indica la entrada de la cé minentes, por la infiltración de linfocitos inmu-
lula infectada en un ciclo lítico y el antígeno de noestimulados que pueden borrar su arquitectu
la cápside (VCA, Viral Capside Antigen), cuya ra. La infiltración de las trabéculas y la cápsula
presencia se relaciona con la producción de par del órgano por estas células aumenta la probabi
tículas de EBV. lidad de ruptura esplénica.
La respuesta de los linfocitos B es policlonal; En la mayoría de los casos el hígado está afec
en el suero primero aparecen los anticuerpos de tado. Su tamaño aumenta en forma moderada y
tipo IgM y luego los tipo IgA e IgG. En la segun su aspecto macroscópico es normal. En el estu
da semana la hipergammaglobulinemia sérica dio histológico es posible observar infiltración
desencadena una respuesta de las distintas subpo- de los espacios porta por células mononucleares
blaciones de linfocitos T, con el propósito de con anormales que también invaden los sinusoides, y
trolar los linfocitos B. Éstos actúan a través de un hay áreas de necrosis parenquimatosa con célu
mecanismo citotóxico e inhiben a los linfocitos B. las mononucleares. Estas alteraciones justifican
Por lo tanto, la leucocitosis que se observa en el aumento de las enzimas hepáticas. En el parén-
esta enfermedad se debe, en un principio, al in quima cerebral y las leptomeninges se puede ob
cremento de las células B y después al aumento servar congestión, edema e infiltrados mononu
de células T, que adoptan la forma de linfocitos cleares perivasculares. En algunos casos, en el
atípicos o células de Downey. parénquima pulmonar se ha observado neumo
nía intersticial. En la médula ósea se han hallado
linfocitos atípicos.
ANATOMÍA PATOLÓGICA
i
ra, se muestra francamente asténico y con una mana de la enfermedad y pueden dejar secuelas
anorexia pronunciada. hasta en un 10% a 12% de los casos.
El 90% de los pacientes presenta durante este Entre las presentaciones atípicas es importante
período una faringitis que en general es seudo- recordar la mononucleosis infecciosa que puede
membranosa, pero también puede presentarse aparecer en el curso de remisiones de leucemias
como eritematosa, eritematopultácea, ulcero- o linfomas.
membranosa o ulcerosa, unilateral o bilateral. Se La evolución es habitualmente hacia la cura
acompaña habitualmente con faringitis exudativa ción espontánea.
y enantema petequial, que tapiza el paladar óseo,
membranoso y los pilares del velo.
DIAGNÓSTICO
Las adenopatías se localizan sobre todo en la
región cervical (subangulomaxilares, submandi- Se basa en ios antecedentes epidemiológicos,
bulares, carotídeas y suboccipitales). También las manifestaciones clínicas, el cuadro hemato- ii
pueden palparse adenomegalias axilares e ingui> lógico y las reacciones serológicas.
nales. Se trata de adenopatías que cursan sin El hemograma se caracteriza por leucocitosis
periadenitis, son espontáneamente dolorosas y de
tamaño mediano.
(10.000 a 20.000/mm^) con 40% a 50% de células
mononucleadas (linfocitos y monocitos), acompa
'¡i
La presencia de adenopatías mesentéricas y ñados por neutropenia relativa. Las modificacio -
mediastínicas puede dar lugar a fenómenos com nes cualitativas de los leucocitos mononucleares dan
presivos. origen a los linfocitos atípicos o células de Downey (
La esplenomegalia completa junto a la fiebre, tipos I, II y III, en porcentajes que oscilan entre
<
la faringitis y las adenom egalias, la tétrada 5% y 20%. Las de tipo I se originan en linfoblastos,
diagnóstica de la enfermedad. En el 50% a 70% las de tipo II en los plasmocitoblastos y las de tipo (i( ■
de los pacientes el bazo se percibe agrandado con III son linfoblastos que han pasado a la sangre.
la palpación, de consistencia blanda y con un do> Estos linfocitos atípicos, también llamados inmuno- *
lor discreto. citos o virocitos, pueden aparecer en otras infec
La hepatomegalia es poco frecuente, se encuen ciones virales (rubéola, sarampión, hepatitis, CMV)
tra en el 10% al 15% de los casos; sin embargo, y en reacciones de hipersensibilidad y postransfusio-
i ‘
la elevación de las transaminasas es casi cons* nales. Desaparecen por lo general en 3 a 4 sema
tante durante el período de estado. Con menos nas, pero pueden persistir durante varios meses. (í
frecuencia se observa edema periorbitario, acom Las reacciones serológicas para el diagnóstico
pañado con dolor retroocular y conjuntivitis. de la mononucleosis infecciosa se dividen en no (
Las manifestaciones hemorrágicas incluyen la específicas, que detectan anticuerpos heterófilos,
presencia de exantema petequial o purpúrico, y específicas, que miden anticuerpos anti-EBV. ■i
epistaxis, hematuria y proctorragia. La serología no específica incluye la reacción de
(
La anemia hemolítica aguda puede hacerse pre> Paul-Bunnell, que es una prueba de aglutinación de
sente durante la primera semana del período de glóbulos rojos de camero por el suero del paciente f
estado. Entre un 25% a 60% de estos pacientes que contiene anticuerpos heterófilos (heteroaglu-
presentan autoanticuerpos. tininas). La modificación de Davidsohn o método
Hasta en el 50% de los casos se constata trom- de adsorción es muy útil, ya que permite excluir re
í
bocitopenia. La presencia de anticuerpos antipla- acciones inespecíficas y los anticuerpos tipo Forss-
quetarios en suero es mucho más frecuente que man, que aparecen luego de la administración de
(f
en la población general. Más raras son la neumo sueros heterólogos (sueros equinos antitetánico,
nía y la pericarditis, en tanto las localizaciones antidiftérico u otros). El tejido renal de cobayo '(
neurológicas afectan al 1 % de los pacientes y adsorbe este tipo de anticuerpos, no así los de la mo
pueden presentarse en forma de meningoence- nonucleosis infecciosa. Se consideran significativos a
falitis, mielitis, síndrome de Guillain-Barré, y títulos mayores de 1/32. Algunas variantes de esta
(
compromiso de pares craneanos y nervios peri reacción incluyen el Monotes! (hematíes de caballo
féricos. Aparecen entre la segunda y tercera se formolizados) que se utiliza sin prueba de adsorción (i
t
I
(
TT
(i
O
282 □ Segunda parte - Infecciones virales
i*
O del suero en estudio; el Monosticon (es una mez comentarse las hematológicas, las neurológicas
cla de hematíes de carnero y caballo) que se usa y la ruptura esplénica. La anemia hemolítica se
4» con adsorción previa del suero en estudio en ri produce hasta en yn 3% de los enfermos y en
ñón de cobayo, y el Monospot (hematíes de ca general está mediada por anticuerpos; en el 80%
«
ballo citratados) que requiere doble prueba de de los casos son crioaglutininas de la clase IgM.
O adsorción, del suero en estudio en riñón de cobayo La trombocitopenia leve es común. Alrededor
y estroma de hematíes de buey. del 50% de los enfermos con mononucleosis in
4# Las reacciones serológicas estudiadas prece fecciosa tiene recuentos por debajo de las 150.000
dentemente no son específicas y pueden resultar plaquetas. Rara vez la trombocitopenia es causa
4^ negativas, aun en presencia de mononucleosis de hemorragias. Es posible que esta complica
infecciosa. Ante la duda diagnóstica, el diagnós ción responda a un mecanismo inmune de des
O
tico de certeza se realiza con las reacciones sero trucción periférica de las plaquetas. Las compli
l> lógicas específicas que ponen en evidencia anti caciones neurológicas son raras y habitualmente
cuerpos elaborados contra las distintas estructu evolucionan a la curación. Puede producirse me>
O ras antigénicas del EBV. ningoencefalitis con cambios leves en el líquido
La detección de anticuerpos anticápside viral cefalorraquídeo, síndrome de Guillain-Barré,
O (VGA) del EBV es precoz en la evolución del parálisis facial periférica y mielitis transversa. La
cuadro clínico. Los anticuerpos de tipo IgM, tra ruptura esplénica es infrecuente, pero es la más
ducen infección aguda por este virus. En ausen grave de las complicaciones. La solución siem
O cia de anticuerpos heterófilos, el hallazgo de pre es la esplenectomía. Se presenta más a me
anticuerpos anticápside del EBV de tipo IgM en nudo en la segunda o tercera semana de enfer
títulos significativos se considera diagnóstica. medad y el dolor es la manifestación más suges- j
Durante la evolución de la mononucleosis in tiva. Las esplenomegalias importantes predispo-:
fecciosa se observa la elevación de los anticuer nen a la ruptura. Se deberá ser muy prudente en
pos anti-VCA del tipo IgG y 3 a 4 semanas des la palpación y prohibir la práctica de deportes
pués del comienzo de la enfermedad los anticuer hasta tanto el bazo haya retrogradado a su tama- ¡
pos anti-EBNA. Estos dos últimos persisten toda ño normal. i
la vida. Transcurrido el período agudo, descien
den los títulos de los anticuerpos anti-VCA IgM
PRONÓSTICO
hasta desaparecer en 4 a 8 semanas. \
En conclusión, en el 100% de las mononucleosis Es habitualmente favorable. Se ensombrece en
infecciosas hay anticuerpos específicos y su ha los raros casos de complicaciones hematológicas. ¡
*
llazgo confirma la etiología del cuadro clínico. neurológicas o si hay ruptura esplénica.
4 »
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL TRATAMIENTO
Se tendrán en cuenta otras afecciones que com La mononucleosis infecciosa es una enferme
4»
prometen las fauces. Entre éstas pueden citarse: dad que evoluciona en forma espontánea hacia
# faringoamigdalitis estreptocócica, angina de Plaut- la curación, por lo que en las formas clínicas ha
Vmcent (asociación fusoespirilar), agranulocitosis, bituales el tratamiento se limita a medidas gene
discrasias sanguíneas, difteria, candidiasis orofa- rales de sostén. Dentro de éstas se incluyen el
ríngea, toxoplasmosis, citomegalovirosis, rubéola, reposo, los analgésicos y los antitérmicos si fue
« hepatitis virales y enfermedades linfoproliferati- ran necesarios. Los antibióticos no son eficaces
vas malignas. ni modifican el curso de la afección.
El reposo en cama y la duración de la inactivi
m dad dependerán de la intensidad de los síntomas,
COMPLICACIONES
en especial de la fiebre, la astenia y la faringitis.
Raras veces se producen complicaciones en la En general el período de inactividad oscila en
mononucleosis infecciosa. N o obstante, merecen tre 2 a 4 semanas, aunque en ocasiones puede
4 0
áá
C apítulo 30 - M ononucleosis infecciosa □ 283
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Rabia
Ornar J. Palmieri
M arcelo E. Corti
(i
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o
(• culado, el sitio de la inoculación y la edad del ani tuido por murciélagos vampiros, que se alimen
mal enfermo. La llamada rabia silvestre, selvática tan de la sangre de los animales y el ciclo terres
o rural constituye un problema grave en países de tre está compuesto por ganado, zorros, chacales,
Europa, como Alemania y Francia. En estas re coyotes, zorrinos, linces, mangostas y otros.
giones los zorros son los principales transmiso Después de muchos años sin casos de rabia, el
res. La rabia silvestre es un peligro permanente 10 de abril de 2008 se produjo el primer caso de
para el hombre y los animales domésticos, debido rabia felina en la Ciudad de Buenos Aires, en el
a que los animales salvajes pueden acercarse a los barrio de Caballito; un gato doméstico, de unos
sitios poblados y agredir tanto a los seres huma 3 años, se contagió al entrar en contacto con un
(« nos como a los animales. murciélago. El gato sufrió un episodio de rabia
La rabia del ganado bovino es transmitida por furiosa y mordió y rasguñó a su dueña y a otra
i* la mordedura de murciélagos vampiros, cuya sa mujer que debieron ser sometidas al tratamiento
liva posee gran cantidad de virus. Los síntomas antirrábico. El gato no estaba vacunado.
predominantes en estos casos son de tipo paralí En 2008, en Llavallol, partido de Lomas de
u tico, por lo que se la denomina rabia paresiante o Zamora, provincia de Buenos Aires, se produjo
paralítica; esta variante produce importantes pér el primer caso de rabia felina desde 2002. El gato
o didas económicas. había contraído la enfermedad al tener contacto
El mecanismo de transmisión por aerosoles con un murciélago. El felino atacó y mordió a su
A puede producirse en accidentes de laboratorio y dueña. En este caso el gato tampoco estaba vacu
4» en espeleólogos durante la investigación en cue nado. El diagnóstico histopatológico fue negati
vas habitadas por quirópteros hematófagos y no vo, pero la inmunofluorescencia directa fue positi
m hematófagos. También se han comunicado casos va. La inoculación de ratones lactantes demostró
luego del transplante de córneas obtenidas de que se trataba del tipo de rabia que transmiten los
personas que habían muerto de rabia. murciélagos. Los estudios fueron realizados por el
En la epidemiología de la rabia se reconocen Instituto Pasteur de la Capital Federal.
dos ciclos: el urbano y el silvestre. A su vez, am El 24 de abril de 2008, un niño de siete años,
bos tienen un ciclo aéreo (murciélagos) y un c i residente en Punta Diamante, un barrio periféri
clo terrestre (mamíferos). co de San Salvador de Jujuy fue mordido por un
En la rabia urbana, el ciclo aéreo está consti perro enfermo de rabia. El 29 de junio desarrolló
tuido por los murciélagos insectívoros y el terres los primeros síntomas de la enfermedad y días
« I tre por los mamíferos, en especial el perro y en después falleció. El niño no había recibido trata
V?.
rabioso. Éste contiene hialuronidasa en su sali neuronas, como inclusiones intracitoplasmáticas,
va, lo que facilita la progresión del virus, que redondeadas u ovales, eosinófilas, por lo general
inicialmente se replica en las células del múscu múltiples. Se colorean de rojo con la tinción de
lo estriado próximas al área de la inoculación. A S e llers. A sientan fundam entalm ente en las
partir de allí, infecta el sistema nervioso periféri neuronas piramidales del hipocampo y en las cé
co y se propaga en forma centrípeta por el nervio lulas de Purkinje. Además, la presencia del virus
(neuroprobasia), a una velocidad de alrededor de de la rabia se puede detectar por exámenes inmu-
3 mm por hora. Por esta vía llega al SNC, se re nohistoquímicos y ultraestructurales.
plica en la sustancia gris y luego se dirige en for
ma centrífuga por los nervios vegetativos hasta
MANIFESTACIOi^ES CLÍNICAS
las glándulas salivales, los pulmones, los riño
nes, el hígado, las glándulas suprarrenales, la piel, Serán considerados los períodos de incubación,
el corazón y el mdsculo esquelético. La llegada invasión y estado.
del virus y su replicación en las células acinares
de las glándulas salivales es la causa de su elim i Período de incubación
nación con la saliva y el contagio a través de ella. Dura alrededor de 40 días, aunque en algunas
El virus no atraviesa la piel indemne, aunque ocasiones puede acortarse a 15 o prolongarse a
no es necesario que se produzca una mordedura 90 o más días. Esta etapa es totalmente asintomá-
inoculante. En efecto, unas gotas de saliva del ani tica y su duración se relaciona con:
mal rabioso, con suficiente concentración viral,
que se pongan en contacto con una solución de 1) extensión y profundidad de la herida: cuan
continuidad, alcanzan para que se produzca la en to más extensa y profunda, menor es el período
fermedad. Esta situación no es muy frecuente, de incubación;
aunque sí lo es la mordedura inoculante del ani 2) distancia entre el sitio de inoculación y el
mal rabioso. Es muy importante la ubicación de SNC: a menor distancia, período de incubación
la herida en relación con los centros nerviosos. más breve;
Son muy peligrosas las que se ubican por encima 3) cantidad de virus inoculado: a mayor canti
de los hombros e incluso las que se producen en dad, menor período de incubación; y
los miembros superiores. Éstas pueden ser úni 4) animal agresor: la mordedura de gato y lobo
cas o múltiples, proximales o distales y directas son las más profundas, desgarrantes y de mayor
o a través de la ropa. concentración de hialuronidasa en saliva. Ade
más, los gatos tienen una mayor predisposición
a saltar a la cara. Estos factores determinan el
ANATOMÍA PATOLÓGICA
menor período de incubación en estos casos.
El examen macroscópico demuestra una con
gestión vascular marcada y edem a cerebral. Período de invasión
Histológicamente se comprueban lesiones ines- Es de 48 a 72 horas, con manifestaciones a ni
pecífícas similares a las observadas en otras in vel de la herida, como dolor, ardor, hormigueos,
fecciones virales, tales como una reacción infla prurito, y generales, como irritabilidad, insom
matoria intensa, con degeneración neuronal que nio, cefalea, cambio de carácter, llanto y tenden
afecta en forma predominante los núcleos basales, cia al aislamiento.
el mesencéfalo, el piso del cuarto ventrículo y,
en especial, el bulbo raquídeo. También pueden Período de estado
estar afectados la médula espinal y los ganglios Se caracteriza por una encefalitis aguda mor
de las raíces dorsales. La alteración histológica tal. En este período se altera francamente el psi-
patognomónica, por lo tanto de extraordinario quismo. El enfermo presenta un estado de exci
valor para el diagnóstico, es la presencia de los tación incontrolable, se vuelve agresivo, hay des
corpúsculos de Negri. Éstos son conglomerados orientación temporoespacial, convulsiones toni-
de partículas virales que se observan en las coclónicas, alucinaciones, respiración suspirante,
288 □ Segunda parte - Infecciones virales
fotofobia, aerofobia e hidrofobia. Este último sig ción inversa en saliva, LCR, o tejidos del pacien
no se debe al espasmo doloroso de la faringe que te. D e practicarse la autopsia, se realizará la bús
se produce al intentar ingerir líquidos, motivo por queda de anticuerpos fluorescentes y corpúscu
el cual los rechaza. Debido a este espasmo farín* los de Negri en el cerebro. Éste, también puede
geo doloroso, el paciente evita tragar su propia inocularse por vía intracerebral a ratones lactantes
saliva, la que entonces fluye por las comisuras en los que, a los 5 a 7 días, se produce encefalitis
labiales. Se distinguen tres formas clínicas prin que comienza con parálisis del tren posterior. En
cipales: el cerebro de los ratones se practica la inmuno-
fluorescencia directa y la búsqueda de los cor
Espástica: se manifiesta por contracturas toni- púsculos de Negri.
coclónicas violentas y dolorosas, desencadenadas
por estímulos lumínicos, táctiles y auditivos.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
Form a dem encial o fu rio sa : se caracteriza por Aunque se han comunicado casos esporádicos
su rápida evolución al coma y a la muerte. de supervivencia, se considera que esta enferme
dad es mortal.
En resumen, la rabia humana es una encefalitis
aguda e irreversible, que sobreviene después de
TRATAMIENTO |
la mordedura de un animal rabioso, doméstico o
salvaje, y evoluciona, desde las primeras mani Debe efectuarse en un centro especializado. En j
festaciones clínicas hasta la muerte, en 5 a 7 días. todos los casos se administran agentes que in-
duzcan al sueño crepuscular hasta que llegue el
paro cardiorrespiratorio.
DIAGNÓSTICO
por debajo de los niveles protectores, se admi 2 mL poi* vía subcutánea 1 vez por día, durante 7
nistrará una dosis de refuerzo. La vacunación días, y 3 refuerzos a los 10, 20 y 30 o 60 días
<c
preexposición no excluye la necesidad de apli después de la última dosis. A los niños de hasta 3
car un refuerzo ante una exposición. años se les aplicará I mL por dosis; de 3 años en (i.
La p rofilaxis p o s e x p o s ic ió n (tratam iento adelante, 2 mL por dosis. Las vacunas de cultivo
antirrábico) se indica a cualquier edad en aque celular se aplican los días 0 , 3 ,7 ,1 4 y 30, con un <%
llos casos en que desaparece el animal agresor, eventual refuerzo a los 90 días.
mientras se inicia el período de observación ve i
terinaria o cuando el accidente de la mordedura Exposiciones graves
(C
involucra animales silvestres. Se consideran así las lesiones de la cara, el cue
Toda profilaxis posexposición debe iniciarse llo, la punta de los dedos, las mucosas o las pro fC
con el tratamiento inmediato de la herida, con ducidas por la agresión de animales silvestres.
agua y jabón, y la posterior aplicación de anti S e aplicará una d o sis diaria de la vacuna
sépticos. Debe evitarse la sutura de la herida. Fuenzalida-Palacios, por vía subcutánea durante
Asimismo, se indicará la profilaxis antitetánica 14 días, y 3 refuerzos a los 1 0 ,2 0 y 30 o 60 días
y antimicrobiana. Estas medidas se completan con luego de la última dosis. Las vacunas de cultivo
la imprescindible administración de alguna de las celular se aplican los días O, 3, 7, 14 y 30, con
vacunas disponibles en la actualidad. La produ refuerzo opcional a los 90 días. En estos casos la
cida por el método Fuenzalida-Palacios es una vacunación se complementará con la administra
suspensión al 1% del sobrenadante de un cen ción de inmunoglobulina antirrábica humana, que
trifugado de cerebro de ratón lactante (CRL) in se obtiene de plasma de dadores hiperinmu-
fectado por el virus fijo e inactivado por radia nizados. La inmunización pasiva con suero an
ción ultravioleta. La producida por el Laborato tirrábico equino ha sido abandonada, por la fre
rio Central de Salud Pública del Ministerio de cuencia de accidentes alérgicos.
Salud de la Provincia de Buenos Aires, se pre La vacuna Fuenzalida-Palacios se administra
senta en frasco-ampolla que contiene 1 mL de la rá por vía subcutánea, en la región glútea, alter
suspensión al 1 %. nando el lado en cada dosis. Las vacunas de cul
La elaborada en el Instituto Malbrán (ANLIS) tivo celular se aplican por vía intramuscular, ha-
se presenta en frasco-ampolla con 2 mL de sus bitualmente en el músculo deltoides.
pensión de CRL al 1%; y la producida por el Ins En aquellos casos en que exista una nueva ex
tituto Pasteur de la Ciudad de Buenos Aires se posición dentro del año de terminado el esquema
presenta en frasco-ampolla con 1 mL de suspen anterior, corresponde realizar un estudio seroló-
sión de CRL al 1%. gico o efectuar la vacunación de refuerzo. D es
También se dispone de la vacuna antirrábica pués de tres años se realizará serología para de
liofilizada producida sobre línea celular Vero, terminar el nivel de anticuerpos y, de acuerdo con
inactivada y purificada. Con esta vacuna la éste, se aplicarán 3 o 4 dosis de refuerzo (ver el
seroconversión con títulos protectores es del capítulo Inmunoprofílaxis).
100% a los siete días de iniciado el esquema; es
tos títulos son 8 a 10 veces superiores a los obte
RABIA ANIMAL
nidos por la vacuna con CRL.
Estas vacunas se conservan a temperaturas en La enfermedad que afecta al perro, mordido por
tre 4°C y 8°C; no deben congelarse. otro perro, gato u otro animal, tiene un período de
Los diferentes esquemas profilácticos se rela incubación muy prolongado. Durante el período de
cionan con la gravedad de la exposición. invasión el animal modifica su carácter, se vuelve
retraído, desorientado, se excita, modifica el ladri
Exposiciones leves do y produce un aullido ronco y prolongado. Esto
Se consideran así las lesiones del tronco, el tó último se debe a la parálisis de las cuerdas vocales.
rax y los miembros, excepto la punta de los de Se vuelve agresivo, muerde a otros animales y per
dos. Se aplicará la vacuna Fuenzalida-Palacios, sonas, y bebe con avidez (no tiene hidrofobia).
f l
m Además de la rabia furiosa ya descripta, el pe Esto no significa que el médico veterinario nece
rro puede presentar una forma paralítica. En esta site de este plazo para diagnosticar la enfermedad.
• última la fase de excitación está ausente o es muy En general puede realizarlo clínicamente durante
corta. La parálisis comienza por los músculos de los primeros dos días de observación.
m la cabeza y cuello y no deglute la saliva debido a En el cerebro del animal muerto se realiza la
la parálisis de los músculos de la deglución, lo prueba de anticuerpos fluorescentes directos o se
cual origina abundante salivación. Luego la pa buscan los corpúsculos de Negri; si éstos no se de
rálisis se extiende a las extremidades y sobrevie tectan, se realiza la prueba de Webster, que es la
«
ne la muerte en un plazo de 1 a 10 días. inoculación por vía intracercbral de cerebro del ani
n La enfermedad en el perro dura también entre 5 mal muerto a ratones lactantes. Éstos se sacrifican
y 7 días, con una mortalidad del 100%. La obser a los cinco días para la búsqueda de dichos cor
a vación veterinaria del animal dura 10 días. Super púsculos, o se realiza la búsqueda de anticuerpos
vivencias de más de 10 días descartan la rabia. fluorescentes directos que es más rápida y eficaz.
a
«
iá •
••í
32
Fiebre hemorrágica argentina
Ornar J. Palmieri
cias de Buenos Aires, Sama Fe, Córdoba y La món, peritoneo, riñón, cerebro y corazón. Hay un
Pampa. Este área tiene en el presente una super aumento discreto del tamaño de algunos órganos
ficie aproximada de 150.000 km^ y una pobla como ei riñón, el bazo y los ganglios linfáticos.
ción estable de alrededor de 3.000.000 de habi La microscopía pone en evidencia endotelios
tantes. Los brotes epidémicos se han registrado vasculares tumefactos, aumento moderado de la
anualmente, a partir de 1958, con extensión pro pared vascular, focos hemorrágicos perivascu-
gresiva del área endémica. lares, sobre lodo en piel y mucosas, e infiltrados
Los hospederos naturales y reservorios del vi discretos de células mononucleares en la perife
rus Junín son varias especies de roedores campes ria de esos focos.
tres: Calomys laucha, Akodon azarae y M us mus- En el pulmón pueden observarse focos hemo
culus, aunque el reservorio principal es Calomys rrágicos de diámetro moderado, con escasos in
musculinus. Estas especies se han capturado en el filtrados intersticiales de células mononucleares,
área endémica infectadas en forma persistente. En y en los vasos, trombos fibrinosos, fibrinohe-
ellas la infección cursa en forma crónica e inapa- máticos o acelulares eosinófilos.
rente, con altos títulos de virus en la sangre, en ca En el riñón suele haber necrosis tubular, glomé-
si todos los parénquimas y en especial en la saliva. rulos congestivos, e hiperplasia moderada de los
Estos roedores contaminan el suelo, los pastos epitelios capsulares y glomerulares; microhe-
y el rastrojo, al eliminar gran cantidad de virus morragias intersticiales, congestión vascular, y
con la saliva, la orina y las secreciones. Entre ellos cilindros proteicos y hemáticos.
existe la transmisión horizontal y posnatal verti En el sistema nervioso central los rasgos más
cal a través de la leche y secreciones. notables son congestión meníngea intensa, focos
El hombre se infecta en forma accidental, en el hemorrágicos, microfocos de necrosis y gliosis
medio ambiente contaminado a través de excoria reaccional; los ganglios linfáticos presentan
ciones en la piel o por vía de las mucosas nasal, hiperplasia linforreticular. El bazo está congesti
oral o conjuntival, y por la inhalación de aerosoles vo, la pulpa roja está hiperplásica y hay hipoplasia
contaminados producidos durante la cosecha ma linfoide folicular.
nual o mecánica. En resumen, el aspecto anatom opatológico
Los sujetos más afectados son los trabajadores dominante es la capilaropatía generalizada, con
rurales, que por la índole de sus tareas tienen una repercusión secundaria en el intersticio de diver
mayor exposición. Sus edades oscilan entre los sos órganos y tejidos, y lesiones parenquimatosas
15 y los 60 años, y en el 80% de los casos son del atribuibles a la acción patógena viral.
sexo masculino. La transmisión interhumana se
ha registrado como un hecho excepcional y como
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
consecuencia de contactos muy cercanos con el
enfermo. En los laboratorios que manipulan este El período de incubación de esta enfermedad,
virus es posible contraer en forma accidental la que varía entre 6 y 14 días, es silencioso y asinto-
infección a través de aerosoles, pipeteo o manejo mático. La invasión tiene un com ienzo insidio
de animales infectados. También pueden adquirir so, con malestar general, astenia, anorexia y fati
la los sujetos que por dedicarse a la caza deportiva ga, a lo que pronto se agregan hipertermia, esca
o por otras razones incursionen en el rastrojo. lofríos, cefalea, artromialgias, lumbalgia, som
La mayor incidencia de FHA se produce en otoño nolencia o insomnio, irritabilidad, mareos e in
(abril, mayo y junio), época de cosecha de maíz y seguridad en la marcha. Luego de este período
sorgo, por el aumento de la población de roedores. de invasión, que dura 3 o 4 días, con temperatu
ras de 37,5®C a 38,5®C, se pasa insensiblemente
al período de estado, que dura 12 a 16 días y en
ANATOMÍA PATOLÓGICA
el cual la temperatura llega a 39®C y 40®C acom
En el examen macroscópico se observan fenó pañada por escalofríos y sudoración. La facies
menos congestivohemorrágicos en diversos pa presenta un importante elemento sem iológico; se
rénquimas, como mucosa gastrointestinal, pul trata de un eritema rojo vinoso que abarca la cara,
T
Capítulo 32 - Fiebre hem orrágica argentina O 293
♦
el cuello y la parte superior del tórax, y se acom rragia gingival, hemorragias digestivas, hema- (I-
paña con mirada brillante, inyección conjuntival turia, metrorragia, púrpura y sufusiones hemorrá
y edema palpebral, todo lo cual configura una gicas en piel, espontáneas o provocadas por las
«facies abotagada». Las mucosas bucal y faríngea punciones venosas.
están hiperémicas en toda su extensión; las en Otros hallazgos frecuentes son deshidratación,
cías se observan congestivas y edematosas, con oliguria y proteinuria. Las formas graves pueden
mayor intensidad en los bordes, lo que se deno llegar a la insuficiencia renal.
mina ribete gingival. Es frecuente la hemorragia El período de estado dura 30 a 45 días. En la
gingival espontánea o al presionar las encías. mayoría de los casos, aproximadamente a los 10
Sobre ese fondo congestivo se destaca una red a 12 días comienza con lentitud la mejoría; cae
vascular de color rojo vinoso más intenso, micro- la temperatura, desaparecen las manifestaciones
vesículas y petequias. Estas lesiones se localizan hemorrágicas y nerviosas, mejora el psiquismo,
sobre todo en el paladar blando, aunque a veces se restablece la diuresis, desaparece la protei-
lo hacen en otras zonas de la mucosa bucofaucial. nuria, comienzan a normalizarse los valores de
La lengua saburra! y los bordes congestivos mues los leucocitos y plaquetas, y se inicia la convale
tran la impresión dentaria a causa del edema. Al cencia. Ésta puede prolongarse por uno o dos
proiruirla se observa un fino temblor fibrilar ca m eses y transcurre con astenia acentuada, caída
racterístico de la enfermedad. Se palpan adeno- del cabello, hipoacusia y labilidad emocional. En
patías, sobre todo cervicales posteriores y supra- general la enfermedad se cura sin secuelas.
claviculares, no dolorosas ni adheridas a planos Las formas clínicas son inaparente, leve, co
superficiales o profundos. mún y grave. Las formas graves pueden ser he
En la piel de las axilas, flancos y cara anterior morrágicas. neurológicas o mixtas. Estas últimas
del tórax puede observarse un exantema petequial son las más frecuentes. Las formas graves de los
poco intenso. No hay manifestaciones catarrales enfermos no tratados con plasma de convaleciente
de las vías aéreas superiores; puede haber los seca son casi siempre mortales. En las formas neuro
pero en general no hay compromiso broncopul- lógicas graves hay confusión mental, temblores,
monar importante, a diferencia de las virosis res excitación psicomotora, convulsiones, delirio y
piratorias estacionales. coma.
Las manifestaciones digestivas consisten en En las formas hemorrágicas graves hay hemo
inapetencia, náuseas, vómitos, diarrea o constipa rragia digestiva, hemoptisis, hematuria, metrorra
ción, epigastralgia o dolores abdominales en otras gia, hemorragia gingival, epistaxis y hematomas.
localizaciones o generalizados, que pueden ha El shock hipovolém ico, común en los estados
cer pensar en un cuadro quirúrgico. N o hay hepa- terminales, puede conducir a la insuficiencia re
toesplenomegalia y es raro observar ictericia. nal por necrosis tubular aguda.
El sistema nervioso sufre alteraciones impor
tantes dentro de las que hay que destacar cefalea,
DIAGNÓSTICO
dolor retroocular, convulsiones, arreñexia osteo-
tendinosa, lumbociatalgia, hiperestesia cutánea, Son importantes para el diagnóstico la noción
mareos, estupor, coma, excitación, insomnio, de medio epidem iológico, las actividades labo
somnolencia, marcha inestable, y temblores fi rales desarrolladas en ese medio (trabajadores
nos de la lengua, las manos y peribucales. rurales) o recreativas (cazadores). En este último
Las alteraciones del aparato cardiovascular caso hay que tener en cuenta que el sujeto pudo
consisten en hipotensión, bradicardia -absoluta haber permanecido en contacto con el rastrojo
o relativa-y a veces pulso dicroto. La taquicardia sólo por algunas horas.
con hipotensión suele ser signo de gravedad. El Los aspectos epidemiológicos y clínicos per
ECG presenta algunas alteraciones inespecíficas miten sospechar la FHA, pero el laboratorio con
y a veces arritmias transitorias. firmará el diagnóstico.
Es importante destacar las m anifestaciones Son importantes la leucopenia precoz, con ci
hemorrágicas, que consisten en epistaxis, hemo fras de 1.000 a 3.000 leucocitos por mm^ con
C1
( t
60% a 70% de neutrófilos. La trombocitopenia período agudo. La viremia está presente durante
oscila entre 20.000 y 80.000 plaquetas por mm^. todo el período agudo febril y el virus se puede
<% La orina presenta alteraciones del sedimento con aislar de la sangre o de los parénquimas en los
sistentes en el hallazgo de hematíes, cilindros hia casos fatales, en particular de los órganos linfá
linos, granulosos y células redondas similares a ticos, donde el virus se replica preferentemente.
las observadas en otras infecciones virales (célu El aislamiento se puede realizar en animales de
m
las de Milani). En general hay proteinuria y la laboratorio, como ratones y cobayos, y en los cul
9 densidad es superior a 1020. La uremia y la creati- tivos celulares.
ninemia suelen estar elevadas; la eritrosedi- La serología incluye pruebas de fijación del
m mentación permanece normal o disminuida. complemento, inm unofluorescencia, ELISA y
La aspartatoaminotransferasa (ASAT oTG O ), neutralización. En la convalecencia es necesario
m la creatinfosfocinasa (CPK) y la deshidrogenasa documentar la conversión serológica. La técnica
del ácido láctico (LDH) pueden estar algo eleva de la trascriptasa reversa y reacción en cadena
m
das. La bilirrubinemia y la amilasemia suelen de la polimerasa (TR-RCP) es de gran utilidad,
9 estar normales, también el LCR, incluso en los sobre todo para establecer el diagnóstico etioló
enfermos con alteraciones neurológicas graves, gico en los pacientes fallecidos.
9 en contraste con el LCR patológico que se obser
va en el síndrome neurológico tardío. Éste se pro
m DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
duce en el 8% al 10% de los pacientes tratados
a con plasma inmune (ver más adelante). Deberán considerarse enfermedades febriles
En resumen: si los antecedentes epidemioló infecciosas y no infecciosas. Dentro de las pri
m gicos son compatibles, ante todo síndrome febril meras, fiebre tifoidea y otras salmonelosis, bruce-
in esp ecífico, con leucopenia menor a 4.000 losis, leptospirosis, hepatitis virales, mononu-
9 leucocitos y trombocitopenia menor a 120.000 cleosis infecciosa, listeriosis, infecciones por ade-
plaquetas, debe considerarse caso sospechoso de novirus y enterovirus, septicemia, enfermedades
9 FHA, en particular durante la primera semana de exantemáticas, meningitis, encefalitis, enferme
9 la enfermedad, a fín de tratarlo con la mayor ur
gencia posible con plasma inmune. Si la trom
dad por hantavirus y otras.
Dentro de las no infecciosas, todas aquellas que
9 bocitopenia está por debajo de 100.000, se con cursen con trastornos hemáticos, de la coagula
siderará caso probable. ción o purpúricos y las encefalopatías tóxicas o
9 Si el enfermo tiene antecedentes epidemioló metabólicas.
gicos y síndrome febril inespecífico pero no
9 leucopenia ni trombocitopenia, se lo controla dia
COMPLICACIONES
9 riamente a fin de establecer el diagnóstico lo an
tes posible. Se producen en general en los enfermos no tra
9 La FHA provoca una inmunodeficiencia agu tados y son infecciones bacterianas o micóticas
da y transitoria, con alteraciones en las subpo- que pueden generalizarse; hemorragias digesti
9 blaciones linfocitarias y depresión de la inmuni vas, hemoptisis, hematuria, metrorragia y hema
dad celular. tomas en diferentes localizaciones.
9 La fisiopatogenia de la hemorragia aún no está
9 totalmente dilucidada, pero además de la trom
bocitopenia hay anomalías en los mecanismos de
PRONÓSTICO
9 la coagulación, con KPTT prolongado, y descen La mayoría de los pacientes se cura sin secue
so de los factores VIII, IX y XI. las. Un 15% a un 30% de los casos no tratados
9 En la médula ósea se evidencia un cese tempo son fatales. El tratamiento con plasma de conva
rario de la hematopoyesis, con hipocelularidad lecientes reduce la mortalidad a menos del 1 %.
9 acentuada, pero que no deja secuelas definitivas. El 8% al 10% de los tratados con plasma de con
9 El diagnóstico etiológico de FHA se realiza a
través del aislamiento del virus Junín durante el
valeciente desarrolla un síndrome neurológico
tardío entre 4 y 7 semanas después del período
C apítulo 32 - Fiebre hem orrágica argentina □ 295
agudo; puede remitir o dejar secuelas, pero la tos se administran por vía oral o intravenosa, no
muerte por esta causa es más rara. por las vías intramuscular o subcutánea, por la
posibilidad de que se produzcan hematomas o
infecciones. No está indicado el uso profiláctico
t r a t a m ie n t o
de antim icrobianos ni la adm inistración de
El tratamiento específico de la FHA es con plas corticosteroides.
ma inmune (plasma de convaleciente). Aplicado En la actualidad, la ribavirina se evalúa como
dentro de los primeros 8 días del comienzo de la una opción terapéutica. Es un nucleótido sintéti
enfermedad reduce la mortalidad del 15% al 30% co que se ha utilizado en el tratamiento de otras
a menos del 1%. No es eficaz cuando se trans enfermedades virales. El efecto adverso más im
funde después de los 8 días del comienzo de los portante es la hemólisis de carácter reversible.
síntomas. La dosis óptima de anticuerpos neutrali
zantes contra el virus Junín a transfundir es de
PROFILAXIS
3.500 UT (Unidades Terapéuticas) por kg de peso.
El incremento de esta dosis no se asocia con una El control de los roedores y no entrar en con
mayor reducción de la mortalidad. Este tratamien tacto con sus secreciones es prácticamente im
to neutraliza la viremia, acorta la duración del posible. Por lo tanto, además de los cuidados hi
período febril y reduce la incidencia de sobrein- giénicos y las medidas tendientes a disminuir los
fecciones, aunque en el 8% al 10% de los pa riesgos de exposición al virus, hay que recurrir a
cientes se desarrolla un síndrome neurológico la vacunación preventiva de las personas expues
tardío, cuyas manifestaciones son distintas a las tas. La vacuna disponible en la actualidad es
observadas durante el período agudo de la FHA. inocua, inmunogénica y eficaz. Es elaborada con
Aparece durante la convalecencia y se caracteri la cepa Candid#l de virus Junín atenuado y su
za por un síndrome febril con afectación predo eficacia fue demostrada en un 95,5%. La persis
minante del tronco cerebral, y un LCR con pleo- tencia de los anticuerpos neutralizantes se demos
citosis y anticuerpos contra el virus Junín. En tró hasta el octavo año posvacunación. Desde
general la evolución es satisfactoria, pero pue 1991 se comenzó a vacunar a la población con
den quedar secuelas y en raros casos sobreviene mayor riesgo que no tuvieran antecedentes de
la muerte. El resto del tratamiento es sintomáti haber padecido esta enfermedad. Las epidemias
co y de sostén, con el paciente en reposo y los de 1992-1995 han sido las de menor número de
controles de los signos vitales y de laboratorio casos desde que se describió la FHA, lo cual avala
adecuados a su estado clínico. Los medicamen la eficacia de la vacuna.
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Hepatitis virales
Gerardo E. Laube
Ornar J. Palmieri
DEFINICIÓN HEPATITIS A
(%
298 □ Segunda parte - Infecciones virales
m trado el estado de portador después de padecer certeza se llega con los datos de laboratorio. Los
hepatitis A aguda. Los viajes a áreas endémicas más relevantes son leucopenia, aumento de la
m de los sujetos susceptibles constituyen una fuen bilirrubina como consecuencia del incremento de
m te de infección para los que proceden de regiones la forma directa y aumento de las enzimas hepá
no endémicas. La presencia del virus en la natura ticas: la alaninoaminotransferasa (ALAT) o tran*
leza da infecciones subclínicas. Son frecuentes saminasa glutamicopirúvica (TGP) aumenta sus
los brotes epidémicos en grupos cerrados de po valores más de diez veces; la aspartatoamino-
blación, como guarderías, asilos y cuarteles. transferasa (ASAT) o transaminasa glutami-
cooxaiacética (TGO) lo hace en menor grado y
Patogenia la fosfatasa alcalina (FAL) se incrementa en for
No se ha demostrado que el virus de la hepatitis ma proporcional al grado de colestasis.
9
A sea directamente citopático para los hepatocitos. El diagnóstico de certeza se obtiene con la
m Las manifestaciones clínicas y la evolución sugie serología específica. En la hepatitis aguda es po
ren que la lesión hepática está determinada por las sitivo el anticuerpo anti-HAV IgM, pero pasada
(t respuestas inmunitarias del hospedero. la etapa aguda éste deja de detectarse y la sero
logía es positiva para el anticuerpo anti-HAV IgG,
(i Anatomía patológica que también es marcador de infección pasada.
(• Las lesiones consisten en infiltración de los
lobulillos por mononucleares, necrosis de los Diagnóstico diferencial
(• hepatocitos, hiperplasia de las células de Kupffer En las formas anictéricas incluye otras enferme
y grados variables de colestasis. El infiltrado dades infecciosas, y en las formas ictéricas afec
• mononuclear está constituido por linfocitos, y a ciones que en algún momento de su evolución
veces por células plasmáticas y eosinófilos. La cursan con ictericia. Además se tendrán en cuenta
o
regeneración de los hepatocitos se evidencia a leptospirosis, paludismo, sepsis, mononucleosis
través de numerosas mitosis, células multinu- infecciosa y enfermedades no infecciosas, como
cleadas y la formación de seudoácinos. litiasis del colédoco, neoplasias de las vías biliares
o del páncreas y otras ictericias obstructivas.
Manifestaciones clínicas
« El período de incubación varía entre 15 y 45 Complicaciones
días. En la gran mayoría de los casos la hepatitis La complicación más importante es la necrosis
(•
A transcurre en forma totalmente asintomática o hepática masiva o hepatitis fulminante que en
(• se expresa con síntomas inespecíficos que no general se produce en adultos, ancianos o pacien
generan la sospecha, salvo en epidemias. Si hay tes con enfermedades hepáticas subyacentes. Otra
A manifestaciones, las más comunes son fiebre, complicación a considerar incluye la forma co-
cefalea, epigastralgia, anorexia, náuseas, vóm i lestásica, de evolución prolongada y con prurito
• tos, prurito, ictericia, coluria y acolia. El examen intenso, que puede simular una ictericia obstruc
clínico revela dolor en el hipocondrio derecho y tiva. La hepatitis A no evoluciona hacia la forma
el epigastrio, hepatomegalia dolorosa y a veces crónica activa como las hepatitis B y C y son
• esplenomegalia discreta. Luego de un período pocos los pacientes con recaídas luego de sema
variable entre 2 a 6 semanas de persistencia de la nas o meses de la curación aparente.
m ictericia, se inicia el período de convalecencia,
con desaparición gradual de los síntomas y recu Pronóstico
m La mayoría de los pacientes se cura sin secue
peración del apetito.
las. La mortalidad, salvo en las formas fulminan
A
Diagnóstico tes, es muy baja.
4» Se basa en criterios epidem iológicos, clínicos
y de laboratorio. Tratamiento
• La epidemiología y la clínica responden a la N o hay tratamiento específico alguno para la
descripción precedente, pero al diagnóstico de hepatitis A. En la fase aguda se indica reposo. La
49
«•
Capítulo 33 - Hepatitis virales Q 299
dieta se basará en la tolerancia y los gustos del El HBsAg es el primer marcador que se detec
paciente, con prohibición absoluta de alcohol y ta en el suero de los pacientes con hepatitis B. Su
medicamentos potencialmente hepatotóxicos. Los presencia precede al aumento de las enzimas he
corticosteroides no tienen utilidad alguna, salvo páticas y las manifestaciones clínicas, y conti
en pacientes con colestasis muy importante. Se núa detectándose durante toda la fase aguda de
administran en dosis equivalentes a 20 mg dia la enfermedad.
rios de prednisona, con reducción gradual según
la evolución. Epidemiología
Las formas fulminantes, caracterizadas por ic La hepatitis B es un grave problema de salud
tericia pronunciada, el descenso crítico de los en el mundo. Es responsable del 50% de los ca
factores de la coagulación y los trastornos de la sos de hepatitis virales agudas y el 1% evolucio
conciencia requieren hospitalización en un cen- na hacia la cronicidad con riesgo de desarrollar
íro con capacidad de realizar el trasplante hepá cirrosis y cáncer hepático. Más de un millón de
tico ortotópico. personas por año fallecen en el mundo por esta
enfermedad, mientras que en los países en desa
Profilaxis rrollo es la causa más común de infección en el
Consiste en la educación sanitaria, medidas niño. El estado de portador afecta del 5% al 15%
higiénicas, control de las excretas y tratamiento de la población adulta, lo que a nivel mundial
adecuado del agua de consumo. Los individuos representa más de trescientos millones de indivi
susceptibles que estén en contacto con enfermos duos.
de hepatitis A o que se trasladen a zonas hiperen- La forma más frecuente de transmisión es la
démicas deben recibir una sola dosis de gamma- vía parenteral, por sangre contaminada o subpro
globulina IM de 0,02 mL/kg o 2 mL en los adul ductos de ésta, en particular por la transfusión de
tos. En la actualidad hay una vacuna inocua, sangre o de factor antihemofílico; también por
inmunogénica y eficaz com puesta por virus tatuajes, acupuntura y tratamientos odontoló
inactivados (ver el capítulo Vacunas). gicos. La detección de sangre contaminada en
bancos de sangre ha disminuido en forma drásti
ca la hepatitis B postransfusional; en cambio, la
HEPATITIS B
infección en drogadictos por vía intravenosa está
Etiología en franco incremento. Otras formas son el con
El agente causal de la hepatitis B es un virus tacto sexual y la transmisión perinatal. Los re
ADN perteneciente a la familia de los Hepadna- cién nacidos de madre HBeAg positivas tienen
virus, también denominado partícula de Dañe. alto riesgo de infección (90%) y tendencia a la
Tiene forma esférica, un diámetro de 42 nm y su cronicidad. Se considera que la infección se pro
envoltura está formada por lipoproteínas. La pro duce por la sangre en el canal del parto, más que
teína de la envoltura que se expresa en la super por transmisión transplacentaria. Los niños naci
ficie externa del virión se denomina antígeno de dos en estas circunstancias deben ser protegidos
superficie de la hepatitis B (HBsAg) y posee ca con gammaglobulina hiperinmune y vacunación.
pacidad antigénica. El anticuerpo correspondiente
es el anti-HBs. Por dentro de la envoltura se en Patogenia
cuentra una cápside de 27 nm que envuelve el Cuando el hepatocito es infectado por el virus
ADN y la transcriptasa del virus. La cápside está de la hepatitis B, sus proteínas virales se expre
formada por la proteína C o antígeno del core san en la membrana celular; por consiguiente, son
(HBcAg) y su anticuerpo es el anti-HBc. El reconocidas por el sistema inmune, tanto en su
HBcAg no es detectable en el suero porque está componente celular como humoral. Si la respues
dentro de una cubierta de HBsAg. Otro antígeno ta es eficiente, todas las células infectadas son
del HBV es el denominado HBeAg que es un destruidas y la necroinflamación resultante de
marcador de la replicación del virus y su anti termina la eliminación del virus. Si la limpieza
cuerpo es el anli-HBe. viral es masiva, puede dar formas fulminantes de
300 □ Segunda parte - Infecciones virales
enfermedad. Una respuesta inadecuada condicio El período sintomático coincide con un aumen
na la persistencia del virus con diversos grados to de las transaminasas 5 a 20 veces los valores
de necroinflamación y tendencia a la cronicidad. normales y de la fosfatasa alcalina 2 a 3 veces, lo
que refleja la necroinflamación hepática. El au
mento de la bilirrubina con predominio de la di
Anatomía patológica
recta suele llegar hasta 30 mg/dL. El tiempo de
En la hepatitis viral aguda los cambios morfo protrombina puede alterarse de acuerdo con la
lógicos que se producen son independientes del importancia del daño hepático.
tipo de virus causal e incluso son semejantes a En estos pacientes el ADN viral y su polimerasa
las reacciones a fármacos. £Í examen macros desaparecen con rapidez. El HBsAg persiste por
cópico del hígado revela hepatomegalia de dife más tiempo porque su ARN mensajero es de vida
rentes grados y un color verdoso que depende de media larga, por lo que su producción es excesiva.
la intensidad de la ictericia. La microscopía pone Durante la etapa aguda el anticuerpo anticore
en evidencia la necrosis de los hepatocitos, con de tipo IgM (anti-HBc IgM) está presente en tí
lesión difusa de éstos y cambios reactivos de las tulos altos, pero con la recuperación del paciente
células de Kupffer. Durante la etapa de recupera es sustituido por un anticuerpo de tipo IgG que
ción hay signos de regeneración de los hepa- persiste durante toda la vida.
tocitos. En el estado de portador la histología El antígeno e, elemento soluble del core (HBeAg),
hepática revela cambios poco significativos. La es un índice de replicación viral que desaparece
microscopía electrónica permite demostrar la pre con rapidez reemplazado por el anticuerpo e (anti-
sencia del HbsAg en el citoplasma de los hepa- HBe), que también desaparece luego de meses o
tocitos en forma de esferas y túbulos, y núcleos años. Esta seroconversión tiene gran significa
«arenosos» debido a la presencia de HBcAg. ción en el tratamiento de la hepatitis B crónica.
El anticuerpo de superficie de la hepatitis B (anti-
HBs) aparece luego de la recuperación y después
Manifestaciones clínicas
de la desaparición del HBsAg; entre ambos he
Luego de un período de incubación que varía chos lo habitual es que haya un período ventana,
entre 30 y 180 días, la infección por HBV puede en el que la única manera de demostrar la infec
dar lugar a diferentes formas de presentación: ción es por detección del anti-HBc IgM. Un pe
agudas, crónicas y portación asintomática. queño porcentaje de pacientes no desarrolla anti
cuerpo de superficie a pesar de estar curados.
F o rm a s a g u d a s A veces la remoción del HBsAg se produce con
Gran parte de los individuos infectados tienen gran rapidez al comienzo de los síntomas, a pe
una infección subclínica seguida por una remo sar de la gravedad del cuadro. El marcador que
ción rápida del virus. Ésta se debe a una respues permite el diagnóstico en este momento es el anti-
ta inmunitaria adecuada, con producción de al HBc IgM. Este perfil es común en las formas ful
tos títulos del anticuerpo de superficie (anti-HBs) minantes.
que confieren inmunidad. Una cuarta parte desa En pacientes con respuesta inmunitaria eficien
rrolla una hepatitis clínica. Durante el período de te el virus es removido y la recuperación se pro
incubación hay replicación viral y en el suero del duce en un período de 1 a 6 meses. Una pequeña
paciente se hallan HBsAg, DNA viral, polimerasa minoría -u n o de cada mil pacientes- desarrolla
del DNA viral y HBeAg. formas fulminantes (hepatitis B fulminante), con
Antes de la aparición de la ictericia y los otros necrosis hepática masiva y una mortalidad global
síntomas de la hepatitis, el paciente puede pre del 85%. Felizmente, el trasplante hepático orto-
sentar exantema cutáneo, neuralgias, artralgias, tópico ha modificado este pronóstico ominoso, j
artritis, glom erulonefritis, vasculitis, crioglo- I
bulinemia mixta, anemia aplásica y otros trastor H e p a t it is c r ó n ic a j
nos. Todas estas manifestaciones son el resulta Una décima parte de los pacientes infectados
do de inmunocomplejos circulantes. por HBV no pueden eliminar el virus y permane
C apítulo 33 - Hepatitis virales □ 301
embargo, debido a que este antígeno está presen supresión de la replicación viral y se utiliza en;
te tanto en la infección aguda como en la cróni los pacientes que no respondieron al interferón.
ca, la primera puede confirmarse por la presen También puede utilizarse el peginterferón (ver
cia de altos títulos de anticuerpo anticore del tipo más adelante) asociado con lamivudina, aunque
IgM (anti-HBc IgM). La persistencia del HBsAg el agregado de ésta no parece mejorar las tasas
durante más de seis m eses indica estado de de respuesta.
portación crónica. La persistencia del HBeAg por La falta de respuesta al tratamiento plantea la
más de 10 sem anas sugiere progresión a la necesidad del trasplante hepático.
cronicidad. El HBeAg. el ADN viral y la poli- I
merasa del ADN son marcadores de infectividad Profilaxis |
que persisten en los pacientes que progresan a Como ya se señaló al tratar la epidemiología,!
formas crónicas de enfermedad. es importante evitar el contacto con sangre con
El nivel de ADN viral es el marcador más sen taminada o sus derivados, las relaciones sexua
sible de replicación viral. Si es alto mientras que les con enfermos, como también compartir con’
las transaminasas se mantienen bajas, por lo ge ellos utensilios de uso común como afeitadoras,
neral la respuesta inmunitaria es baja. cepillos de dientes, agujas hipodérmicas y jerin-|
La positividad para anti-HBe en ausencia de gas para drogadicción intravenosa. Hay que to
HBeAg y ADN viral sugiere resolución de la in mar precauciones para evitar los pinchazos acci
fección, aunque el mejor indicador es la positi dentales en personas que trabajan en labórate-:
vidad para anti-HBs. rios y en el medio quirúrgico.
La profilaxis puede ser pasiva y activa. La pro
Diagnóstico diferencial filaxis pasiva comienza inmediatamente después
Es similar al de la hepatitis A. del accidente o contacto infectante. También está
indicada en el recién nacido cuya madre es
Complicaciones HBsAg positiva, antes de las 72 horas de vida.
La complicación de la hepatitis por virus B en Se administra gammaglobulina humana hiperin-
la presentación aguda es la hepatitis fulminante mune anti-HBV en una sola dosis de 0,5 mL por
y en la forma crónica la evolución hacia la cirrosis vía intramuscular, y en otro sitio la primera dosis
hepática y el hepatocarcinoma. de la vacuna anti-HBV. En las otras situaciones;
de riesgo se procederá a aplicar la gammaglo-i
Pronóstico bulina en dosis de 0,06 mL/kg de peso, o 5 mL,
En la mayoría de los casos la infección se en los adultos, lo más temprano posible. En to
autolimita. En el \% al 10% de los casos evolu dos los casos se complementará con la vacuna
ciona hacia la cronicidad. El 70% al 90% de es ción anti-HBV (ver el capítulo Vacunas).
tos enfermos son asintomáticos, mientras que el
10% al 30% llegan a la cirrosis y al hepatocar
HEPATITIS C
cinoma.
La infección por el virus de la hepatitis C (HCV)
Tratamiento es una causa frecuente de enfermedad hepática
En la hepatitis aguda el tratamiento es sinto crónica. La forma aguda es en general moderada
mático. En la hepatitis fulminante se requiere el y raramente origina formas fulminantes, pero
control de la hemostasia (tiempo de protrombina, cerca del 85% evoluciona a la cronicidad. La
factor V, etc.) y de las complicaciones nerviosas población afectada se estima que es del 1 % al
(confusión, coma, extrapiramidalismo, rigidez y 2%. Las formas crónicas pueden evolucionar a
asterixis) en un medio de cuidados intensivos y la cirrosis y al hepatocarcinoma. j
apto para el trasplante hepático ortotópico. Muchos pacientes son totalmente asintomáticosi
En la hepatitis crónica se utiliza el interferón y el diagnóstico se basa en alteraciones del hepa-
alfa recombinante que puede asociarse con la tograma practicado en un examen de rutina 0|
lamivudina. Este análogo de nucleósido induce cuando concurren a donar sangre. Sin embargo,
iI C apitulo 33 - Hepatitis virales O 303
m anifestaciones extrahepáticas de tipo inmu- peso mayor, obtiene una respuesta completa i
nitario, como artritis, queraioconjuntivitis, liquen sostenida en el 31 % de pacientes tratados duran
plano, glomerulonefritis y crioglobulinemia mixta te 6 meses y de 38% en pacientes tratados duran
esencial. La porfiria cutánea tarda es frecuente te 12 meses. Las mejores respuestas se logran er
en los pacientes con infección crónica por HCV. pacientes con genotipo 1 cuando el tratamientc
se prolonga durante ¡2 meses.
Diagnóstico No obstante, en la actualidad se prefiere la com
Hay varias pruebas disponibles para la deter binación del interferón pegilado (peginterferón
minación del anticuerpo para el HCV. El ensayo con ribavirina.
inmunoenzimático determina antígenos dcl core El peginterferón se presenta en dos formas
y componentes no estructurales del virus. El alfa-2b y alfa-2a. Este último tiene la ventaja di
inmunoblot recombinado (RIBA), contiene los no requerir dosificación de acuerdo con el pes(
mismos antígenos y no proporciona ventajas sus del enfermo y se puede suministrar en una dosi;
tanciales respecto del anterior. La prueba de la estándar, que es de 180 ^ig una vez por semana, ei
trascriptasa reversa con PCR, para detectar el casi todos los pacientes adultos. El agregado d<
ARN viral, es la prueba de confirmación por ex ribavirina a la dosis de 800 a 1.200 mg diarios me]
celencia. jora significativamente la respuesta antiviral sos
Una vez aislado el ARN puede establecerse el tenida y favorece la eliminación del HCV del or
genotipo y los subtipos. Hasta el presente se han ganismo. Esta respuesta alcanza al 56% (en comj
determinado 6 genotipos y más de 30 subtipos de paración con el 44% de los que recibieron interí
ARN del HCV. Los pacientes con genotipo la /lb ferón alfa -2b) y resulta independiente del genotipd
tienen menor respuesta sostenida que los posee y de la carga viral para el HCV. Los pacientes in-¡
dores de genotipos 2 o 3. fectados con los genotipos 2 o 3 pueden recibir 1^
La biopsia hepática se considera el procedi dosis más baja de ribavirina (800 mg/día); en camj
miento más importante para establecer el diag bio, los infectados por el genotipo 1 deben recibir
nóstico y evaluar la gravedad o actividad de la dosis mayores ( 1.000 a 1.200 mg/día).
necroinflamación hepática como también el gra Los efectos adversos del peginterferón son si:
do de fibrosis. milares a los comunicados con el interferón alfa
convencional; sin embargo, los menores niveles
Tratamiento séricos obtenidos con el peginterferón se asocian'
Está a cargo del especialista y se basa en el uso con menor riesgo de fiebre, síntomas símil gripe;
del interferón alfa recombinante. Entre el 8% al cefalea y mialgias. En cuanto a la ribavirina, sii
21% de los pacientes con hepatitis C crónica sin principal efecto adverso es la anemia hemolíticaj
cirrosis y con niveles altos de alaninoamino- La combinación de peginterferón más ribavi-j
transferasa van a desarrollar una respuesta com riña también es de elección en los pacientes con
pleta y sostenida, se entiende por tal la normali coinfección HIV/HCV. Éstos, deben ser tratadosi
zación de las enzimas hepáticas y la no detec al menos durante un año, independientemente del
ción del ARN viral a los seis meses de interrum genotipo del HCV. }
pida la terapéutica. Aquellos porcentajes pueden
ser menores en el caso del genotipo la /lb . El tra Profilaxis
tam iento c o n v e n c io n a l es la in y e c c ió n de Son válidas las medidas de control ya expre
3.000.000 de unidades subcutáneas de interferón sadas en la profilaxis de la infección por el HBV
3 veces por semana durante seis meses. El man pero, la aplicación de inmunoglobulina con fines
tenimiento del interferón durante 12 meses no profilácticos no es eficaz en HCV. Aún no hayí
mejora la respuesta inicial, pero puede disminuir vacuna disponible para la profilaxis activa. Las,
el índice de recidiva. medidas preventivas se circunscriben a la bús-;
La asociación de interferón con ribavirina, en queda sistemática de anticuerpos contra el HCV¡
dosis de 800 mg/día por vía oral en pacientes de en todos los donantes de sangre. Además, se des
menos de 70 kg, y de 1.200 mg en pacientes de cartarán todas las unidades de sangre en las que
•»
aquellas en las que se identifiquen anticuerpos hepática fulminante, sobre todo en drogadictos
contra HCV. Es necesaria la orientación para re por vía intravenosa. El diagnóstico se establece
ducir riesgos a personas no infectadas pero ex por el hallazgo de anti-HDV IgM, HBsAg y anti-
puestas a gran peligro de estarlo como el caso HBc IgM.
del personal sanitario además de observar todos La infección provoca aumento de las enzimas
los recaudos que surgen de lo ya expresado al hepáticas o, con más frecuencia, una curva bifá
tratar la epidemiología de la enfermedad. sica con dos picos separados por semanas o me
ses. Si la infección es simultánea, la expresión
del HDV es posterior a la infección de los hepato-
hepatitis D
citos por el HBV. En estas circunstancias este
El anlígeno delta fue aislado por Rizzetto en último produce el primer aumento de las transa-
Italia, en 1977, en biopsias de pacientes con in minasas; el segundo es responsabilidad del HDV.
fección crónica por HBV. Con este antígeno se Si los dos picos son muy cercanos, se superpo
desarrolló un método sensible de radioinmu- nen; el resultado es una necrosis hepática masiva
noensayo para detectar la presencia del anticuer con falla hepática fulminante y muerte del pa
po correspondiente en el suero de los pacientes. ciente. Si los picos están separados por meses, el
La zona endémica es la cuenca del Mediterrá primer ataque es producido por el HBV. En ge
neo, Medio Oriente, Asia, África, Australia, Nue neral ambos virus son eliminados después del
va Zelanda, islas del Pacífico Sur y la cuenca del ataque agudo, el paciente se recupera y desarro
Amazonas. lla anti-HBsAg y anti-HDV
Epidemias de hepatitis por virus D (HDV) fue Los anticuerpos para HDV por lo general no
ron comunicadas en América del Norte, y en son detectables en el suero al com ienzo de los
Colombia y Venezuela en América del Sur. En síntomas y en ocasiones, en los casos autolimi-
las zonas endémicas se transmite de persona a tados no se detecta el anti-HDV. Por esta razón,
persona, por contactos transmucosos o líquidos el diagnóstico de la infección aguda por HDV es
orgánicos. La transmisión perinatal es rara. dificultoso y requiere la búsqueda en la etapa
En regiones no endémicas del norte de Europa aguda y en la convalecencia.
y América, la transmisión se produce por inocu En un portador crónico del HBV, la sobrein-
lación con sangre o sus productos contaminados. fección causa enfermedad grave y llega a la falla
Sólo los infectados por HBV tienen susceptibili hepática fulminante. Esta situación se da en áreas
dad a la infección por HDV, en especial adictos a geográficas donde la infección por HDV es preva-
drogas por vía intravenosa, hem ofílicos, tratados lente, ya que acelera la progresión de la enfer
con hemodiálisis, homosexuales y población car medad hepática hacia la cirrosis, que sobreviene
celaria. en poco tiempo.
El HDV es un virus ARN hepatotrópico defec El tratamiento de la infección crónica por HDV
tuoso, que requiere la presencia del HBV para es poco satisfactorio. Se utilizan altas dosis de
ser patógeno. Sólo se replica en hospederos con interferón alfa recombinante por tiempo prolon
infección por HBV simultánea. El HDV es una gado, 12 meses o más. No más del 10% al 15%
panícula esférica de 36 nm compuesta por una de pacientes logran una respuesta sostenida con
cadena simple de ARN cubierta por el HBsAg. norm alización enzim ática y desaparición del
Tiene efecto citopático directo y no causa lesión ARN HDV, que en pocos casos es permanente.
mediada por la respuesta inmune. En la actualidad el control de la infección delta
Los pacientes inmunes al HBV también lo son depende de la prevención. Al ser un virus defec
al HDV; los portadores de HBV están expuestos tuoso que se asocia al HBV, la vacunación contra
a la infección por HDV. este último previene nuevas infecciones en las
La infección por los dos virus puede ser simul áreas endémicas. No hay vacuna contra el HDV.
tánea. La enfermedad suele ser autolimitada y de
curso clínico similar al de la hepatitis viral agu
306 □ Segunda parte - Infecciones virales
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J é
i
crs%í«rrMresíu
Parotiditis epidémica
Gerardo E. Laube
Ornar J. Palmieri
pos específicos con conversión serológica, lo que meningoencefalitis, de las meningitis con LCR cla
asegura el diagnóstico. Se llevan a cabo reaccio ro causadas por enterovirus (poliovirus, virus
nes de inhibición de la hemaglutinación, fijación Coxsackie y echovirus).
del com plem ento y neutralización. La intra-
dermorreacción con el antígeno viral es una reac
COMPLICACIONES
ción de hipersensibilidad retardada que en suje
tos infectados se hace positiva a partir de los 15 Son raras. En forma ocasional la afectación
días del comienzo de la enfermedad. Se lee a las testicular bilateral puede dejar esterilidad. Cuan
24 o 48 horas y sólo tiene valor epidemiológico. do se padece durante el embarazo, los trastornos
en la descendencia son poco frecuentes.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
PRONÓSTICO
La localización parotídea incluye las parotiditis
agudas bacterianas, que suelen aparecer en pacien En la mayoría de los casos esta virosis tiene un
tes con enfermedades previas como diabetes o in pronóstico favorable y cura sin dejar secuelas.
suficiencia renal. Se evidencia la salida de pus por
el conducto de Stensen y hay leucocitosis con neu-
TRATAMIENTO
trofilia. Son producidas habitualmente poiStrep-
tococcus pneum oniae y otros estreptococos, y en Es sintomático. Es importante el reposo, que
el medio hospitalario por Staphylococcus aureus. deberá mantenerse hasta una semana después de
También deberán tenerse en cuenta las otras la apirexia.
parotiditis virales, unilaterales o bilaterales, pro
ducidas por los virus influenza, parainfluenza tipo
PROFILAXIS
3 y coxsackievirus.
La litiasis salival es unilateral y presenta el Los pacientes con parotiditis epidémica deben
característico cólico salival. permanecer aislados para evitar la propagación
Los tumores de la parótida (mixto, adeno-car- del virus a las personas susceptibles. No obstan
cinoma y otros), evolucionan en forma más len te, esta medida es útil sólo en forma parcial, ya
ta, con menos dolor e inflamación y son de insta que la eliminación del virus con la saliva se pro
lación progresiva. duce antes de la tumefacción parotídea.
Puede observarse tum efacción bilateral de La inmunoglobulina hiperinmune específica ya
parótidas en casos de alcoholismo crónico, desnu no se comercializa y su utilidad fue puesta en duda.
trición o cirrosis hepática. Algunas reacciones En la actualidad se dispone de una vacuna con
medicamentosas se acompañan con tumefacción virus vivos atenuados que se prepara en cultivo
dolorosa de la parótida y otras glándulas salivales, de células de embrión de pollo. Se aplica por vía
como ocurre con los productos yodados que se subcutánea a los 12 meses de vida dentro del es
utilizan para contraste radiológico. Son parotiditis quema de la vacuna triple viral (sarampión, rubéo
tóxicas que evolucionan sin fiebre. la y parotiditis) con refuerzo a los 6 años. Tam
La orquitis deberá diferenciarse de las agudas bién deben vacunarse los adolescentes y adultos
de causa bacteriana o de la producida por virus sin antecedentes de haber padecido la enferme
Coxsackie B; la pancreatitis, de las inflamaciones dad, y no posean anticuerpos neutralizantes con
pancreáticas debido a virus Coxsackie B, y la tra el virus (ver el capítulo Inmunoprofilaxis).
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r
36
Influenza
Alfredo C. Seijo
Ornar J. Palmieri
Cápside: la nucleocápside está compuesta por minada es un fenómeno recurrente que se inicia
segmentos de ARN, cuya especificidad determi en los meses de frío, con tasas de ataque que pue
na la clasificación del virus en ios tipos A, B y C. den llegar a ser del 50% de la población afecta
En este sector del virus también se producen da. El mayor número de casos se verifica en las
variaciones antigénicas, por intercambio de se primeras tres semanas, con descenso al cabo de
cuencias de ARN cuando coexisten dos cepas un mes y medio. N o se sabe por qué cesa la epi
distintas en la misma infección. demia. El virus no se aísla durante el resto del
año. La excepción la constituyen los países tro
picales, donde la circulación sería endémica. La
EPIDEMIOLOGÍA
variación epidémica explica el motivo por el cual
Para comprender el comportamiento epidémi el virus continúa produciendo epidemias en una
co de la influenza deben considerarse dos fenó región durante varios años. Es posible que esta
menos resultantes de la variación antigénica del recurrencia produzca en la población un estado
virus. inmunitario capaz de favorecer la aparición de
1. El denominado fenóm eno de desviación g e variantes nuevas (cambio antigénico). Estos nue
nética o tendencia genética, que consiste en una vos subtipos se dispersan con facilidad, ya que
variación antigénica menor dentro de un subtipo no hay inmunidad específica que se les oponga,
viral. Estos cambios se producen con una perio lo cual favorece la aparición de una pandemia.
dicidad de 1 a 4 años y condicionan cepas -sie m Las pandemias en las que son afectadas pobla
pre dentro de un mismo subtipo- las cuales se ciones de varios continentes es un fenómeno que
dispersan con mayor facilidad en una población se repite con intervalos de más de 10 años.
con inmunidad para otras cepas distintas del m is Es posible que dentro de una epidemia circu
mo subtipo. Esto explica las epidemias que se len dos subtipos o incluso dos tipos (A y B) dis
presentan en una región donde ya circuló el m is tintos y otros virus respiratorios, hecho que des
mo subtipo. La variación antigénica se atribuye de el punto de vista clínico es difícil de precisar.
a cambios en los segmentos de ARN que codifi La mortalidad depende de diversas variables.
can neuraminidasa y hemaglutinina, lo que alte Es mayor en niños, ancianos y en personas con
ra la secuencia de los aminoácidos de éstas. algún grado de inmunocompromiso, riesgo que
2. El cam bio genético^ que es una alteración no aumenta en forma sustancial en el paciente
estructural mayor, determina la aparición de una HIV positivo y en los ya afectados por enferme
neuraminidasa o hemaglutinina nuevas. Esto su dades pulmonares. En época de epidemia la mor
cede porque el segmento de ARN que las codifi talidad puede ser muy alta.
ca ha sufrido una reclasificación genética, por lo En los últimos años en la República Argentina
tanto es distinto al subtipo original. Este cambio circularon los tipos A y B, pero el primero es el
antigénico explica la aparición de epidemias ex de mayor prevalencia.
tendidas y de pandemias, dado que la población
no posee anticuerpos contra este nuevo subtipo.
PATOGENIA
La reclasificación genética, y por lo tanto el cam
bio antigénico, sucede por transferencia de ma La influenza es la típica enfermedad de trans
terial genético entre distintas cepas virales en un misión por aerosoles. La carga viral en las secre
animal común. Hay evidencias de que es en el ciones del paciente es alta, porque en las células
cerdo donde se opera ese intercambio. En este del epitelio bronquial el virus se replica a alta ve
animal, los genomas que codifican la neurami- locidad. Esto explicaría la brevedad del período
nidasa en los virus influenza aviarios se mezcla de incubación, de no más de 72 horas. La disper
rían con los del virus del ser humano. sión del virus en la comunidad es favorecida por el ¡
En cuanto a las epidemias, tanto la incidencia clima frío. Un día antes y hasta una semana des- I
en la población como la probabilidad de varia pués de iniciados ios síntomas hay eliminación viral. ,
ción y cambio genético son mayores en el tipo A. La adhesión a las células cilindricas del epite- ;
La aparición de una epidemia en un área deter lio bronquial es un paso fundamental, que se rea- |
Capítulo 36 - Influenza □ 317
(
liza por las hemaglutininas de la superficie del ro a cuarto día. La postración es prolongada, con (
virus. Superados los mecanismos de inmunidad astenia y adinamia residuales.
local se produce la viremia, en coincidencia con La reaparición o incremento de la temperatura í
la aparición de los síntomas sistém icos (fiebre, alrededor del cuarto día (curva bifásica), así como
mioartralgias). el recrudecimiento de los síntomas respiratorios,
La secreción de interferón (quinto a séptimo en general se debe a la sobreinfección bacteriana. í
día) limita la replicación viral, con lo cual, de no Las complicaciones que aparecen en el curso de
mediar una complicación, se produce la mejoría la influenza están muy ligadas al estado general <
de los síntomas. A las dos semanas se detectan del paciente así como a la pertenencia a ciertos
grupos de edades -ancianos, lactantes y niños de <
anticuerpos de clase IgM y luego IgG, mientras
que en las mucosas hay IgA secretoria. La inmuni la primera infancia- y a la presencia de inmu-
dad es específica de cepa, pero existe inmunidad nodepresión, enfermedad pulmonar obstructiva
cruzada dentro del mismo subtipo siempre que no crónica, tabaquismo y enfermedades metabólicas. í
haya una divergencia antigénica marcada. Una forma particularmente grave de influenza
Los anticuerpos antihemaglutininas son protec es la neumonía primaria por el mismo virus -fo r
tores (títulos mayores a 1:40) y se utilizan para ma parte del diagnóstico diferencial de las neumo
(
la clasificación de cepa y subtipo. nías graves de la comunidad-, cuyo rápido pro
greso conduce a la insuficiencia respiratoria. La c
neum onía por sobreinfección bacteriana que
ANATOMÍA PATOLÓGICA
aparece al promediar la semana de evolución, con
El epitelio traqueobronquial desarrolla edema curva bifásica y esputo purulento, se debe a
con escaso infiltrado leucocitario, pérdida de las H . influenzae, S. p n eum oniae, S. aureus o S. (
cilias, necrobiosis celular y descamación. En los pyogenes. A diferencia de la debido al virus in
(
casos graves se observan exudados hemorrágicos fluenza, ésta responde a un esquema antibiótico
que incluyen los alvéolos y se forman membra apropiado. Ambas formas de neumonía producen (
nas hialinas con escasos polimorfonucleares. La más del 90% de las muertes por influenza.
sobreinfección bacteriana asociada modifica este En la neumonía primaria por virus influenza, <
patrón histopatológico. la radiografía de tórax muestra un compromiso
alveolointersticial bilateral, que progresa con ra (
pidez. La neumonía por sobreinfección tiene un
MANIFESTACIONES CLÍNICAS (
patrón radiológico alveolar confluente (síndro
La influenza produce desde un síndrome febril me de condensación) o bien diseminado en am (
inespecífico hasta la forma de presentación habi bos campos pulmonares.
tual: brusca, con hipertermia, mioartralgias, cefa El estudio del esputo debe realizarse en exten (
lea y catarro de las vías aéreas. Las mialgias son didos con coloración de Gram o Giemsa. La pre
sencia de leucocitos polimorfonucleares en ausen (
particularmente intensas, como las observadas en
el dengue, la leptospirosis, la triquinosis y otras cia de gérmenes hace sospechar la neumonía por
afecciones donde hay algún grado de inflamación virus influenza. En las infecciones por patógenos
del tejido muscular. Hay quebrantamiento, aste como M ycoplasm a pneumoniae, Chlamydia spp,
nia y adinamia. También hay odinofagia, eritema Coxiella burnetii, Legionella spp, Leptospira spp
faucial, rinitis no purulenta y traqueobronquitis, y varios virus respiratorios, las características del
con los seca e irritativa. En pocos días ésta se trans esputo son las mismas y en ocasiones producen
forma en tos con secreción mucosa, que puede un cuadro clínico similar, por lo que forman pane
evolucionar a mucopurulenta si se agrega una del diagnóstico diferencial. Los esputos con abun
sobreinfección bacteriana. Algunos pacientes re dantes leucocitos y diplococos grampositivos
fieren estado nauseoso y dolor abdominal difuso, como flora microbiana predominante son caracte
y la mayoría, anorexia. rísticos de la neumonía neumocócica.
De no mediar complicaciones, la fiebre remite El virus influenza puede ser el desencadenante
dentro de la primera semana, en general al terce de una crisis asmática o exacerbar una enferme
318 □ Segunda parte - Infecciones virales
dad pulmonar crónica, propiedad que comparte la influenza no responde a los antivirales. La neu
con C h la m y d ia p n e u m o n ia e , M y c o p la sm a monía bacteriana se trata con antimicrobianos en
pneum oniae y virus sincitial respiratorio. En ni forma empírica. En pacientes de riesgo la apari
ños, una complicación frecuente es la laringitis ción de esputo mucopurulento y tos productiva
subglótica. puede ser una indicación de antibioticoterapia.
En algunas epidemias se han comunicado mio La amantadina es un agente antiviral que, cuan
carditis, polineuritis, trastornos hemáticos, miosi- do se administra ante los primeros síntomas, re
lis graves y disfunción hepática con trastornos duce las complicaciones, la intensidad de los sín
ncurológicos, un cuadro, denominado síndrome tomas y probablemente la mortalidad en la in
de Reye, que si bien también aparece como com fluenza por vitus tipo A. La dosis es de 100 mg
plicación de otras infecciones virales, se lo rela por vía oral dos veces por día. La rimantadina
ciona con mayor frecuencia con los grupos vari -100 mg/día por vía oral- parece ser más efecti
cela zoster e influenza. Este síndrome aparece co va. El tratamiento dura 7 días.
mo complicación durante la convalecencia de la
influenza en niños, asociado con la administra
PROFILAXIS
ción de aspirina durante la enfermedad. Como
mecanismo patogénicp se propone la existencia En las últimas décadas, una vacuna de virus
de un estado metabólico alterado en la estructura inactivado ha sido útil para disminuir la mor-
mitocondrial de varios parénquimas. La disfun bimortalidad de la influenza. Si bien es posible
ción hepática lleva a un aumento del amoníaco que no prevenga los síntomas, es el arma más
circulante, lo que desencadena encefalopatía. poderosa con la que se cuenta para el control de
esta enfermedad. Su eficacia está en relación di
recta con la semejanza antigénica entre los virus
DIAGNÓSTICO
que la componen y las cepas circulantes en la
£1 diagnóstico se basa en la clínica y en los epidemia. La vigilancia epidemiológica de la in
antecedentes de medio epidémico. Para el diag fluenza implica el aislamiento y tipificación viral,
nóstico de laboratorio se utilizan muestras obte para producir vacunas acordes con esta última.
nidas de hisopado faucial y nasal, lavado nasal y Por desgracia no siempre existe esa conespon-
esputo, las que luego se inoculan a cultivos celu dencia, por lo que se producen brotes epidémi
lares o embrión de pollo. El crecimiento suele cos, aunque caracterizados por su atenuación clí
ser rápido. Se están evaluando pruebas rápidas nica y baja morbimortalidad. En cambio, la cir
para detectar antígeno viral en los materiales clí culación de un nuevo subtipo vuelve ineficaz la
nicos (PCR). La serología im plica encontrar vacuna utilizada. Su administración está indica
scroconversión, por lo cual no es útil en situacio da en los niños mayores de 6 meses con riesgo
nes de epidemia. aumentado de padecer complicaciones y en los
adultos mayores de 65 años. También deben re
cibirla los portadores de afeccione pulmonares
TRATAMIENTO
(EPOC, asma, fíbrosis quística, etc.), los que pa
La mayoría de los casos de influenza se tratan decen trastornos cardíacos crónicos y los que re
en forma sintomática: reposo en cama, dieta de quieren tratamientos o internaciones prolongadas
acuerdo con la tolerancia, y administración de por enfermedades metabólicas, insuficiencia re
antitérmicos y analgésicos. La aspirina no se re nal, insuficiencia hepática o terapias inmuno-
comienda en niños o jóvenes adolescentes por su supresoras, así como los residentes en asilos o
asociación con el síndrome de Reye. En adultos instituciones.
está indicada en las dosis habituales. Las nebu La vacuna puede administrarse al mismo tiem
lizaciones con solución fisiológica atenúan los po que la antineumocócica, indicación muy útil
síntomas respiratorios. No deben administrarse en personas mayores de 65 años o con otros fac
antibióticos como profilaxis de la sobreinfección tores de riesgo de adquirir neumonía. La reva
bacteriana. La neumonía primaria por el virus de cunación antiinfluenza es anual y la antineu-
Capítulo 36 - Influenza □ 319
i'
:- mocócica, quinquenal. Esta última se aplica sólo control de los brotes institucionales en personas
í3 dos veces en la vida. El uso de amantadina y no vacunadas antes del comienzo de la epidemia
‘ rimantadina en forma profiláctica no reemplaza o cuando existen contraindicaciones para la va
•' la vacuna. Estos antivirales se utilizan para el cunación (ver el capítulo Inmunoprofilaxis).
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Dengue (í'
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Ornar J. Palmieri í
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322 ü Segunda parte - Infecciones virales
sionan larvas que en unos 7 días maduran, pue En 1981, con la epidemia de dengue hemorrá-
den aparearse y repetir el ciclo. La ovipostura gico en Cuba, se produjo un punto de inflexión
causa un incremento metabólico importante en en la historia del dengue en las Américas. En esa
la hembra, que necesita alimentarse de sangre y epidemia se notificaron más de 300.000 casos,
pica al hombre durante las horas diurnas. La pi de los cuales más de 10.000 fueron graves; de
cadura a un enfermo con dengue en período bieron internarse 116.143 pacientes en tres me
virémico infecta al mosquito, que a su vez puede ses y se calcula que se infectó el 50% de los ha
transmitir la infección al hospedero siguiente. bitantes de ese país. La circulación de los cuatro
Hasta hace pocos años el ciclo aceptado era hom serotipos, pero en especial la reintroducción del
bre con viremia, mosquito, hombre susceptible. serotipo 3 en América Central a partir de 1994,
Se ha demostrado la transmisión transovárica del indica la gravedad del problema.
virus, por lo que la infección puede mantenerse Para complicar este panorama ya difícil, desde
en la población de mosquitos sin necesidad de la 1985 se conoce la presencia de Aedes albopictus
participación humana. Este ciclo enzoótico es un o «tigre asiático» en el sur de los Estados Unidos,
factor de primer orden en el mantenimiento de la en Brasil y América Central. Esta especie, impor
endemia. tada probablemente de Japón, se ha dispersado y
Si las condiciones no son aptas (desecación), compite con A. aegypti; sus efectos en el largo
los huevos depositados pueden permanecer via plazo en la transmisión del dengue, la fiebre ama-¡
bles durante un año. rilla y otros arbovirus es difícil de precisar, j
La magnitud de la epidemia de dengue en el El control de Aedes es un desafío para la salud
mundo está estrechamente relacionada con las pública, en la medida en que las variables que
condiciones que favorecen la procreación y su determinan su dispersión son múltiples y no siem
pervivencia de A. aegypti. En América, con ex pre bien conocidas: desde climáticas (como en
cepción de Canadá y Chile, todos los países tie América la relación entre el brote de dengue y el
nen niveles en general altos de infestación por efecto del fenómeno de El Niño); políticas y eco
AedeSy desde el sur de los Estados Unidos hasta nómicas (m igraciones, asentamientos urbanos
la región pampeana de Argentina. En ciudades precarios, planes de salud deficitarios, aumento
como Buenos Aires y sus alrededores, la activi del intercambio comercial, zonas con actividad
dad del vector aumenta a partir de octubre o no militar) y factores propios de la biología del
viembre. Alcanza su mayor incremento en los vector, como el muy importante de la transmi
meses estivales y está presente hasta junio. El sión transovárica del virus.
índice de infestación en la ciudad de Buenos A i El alto nivel de infestación por A edes aegypti^
res puede llegar al 30% de las casas censadas, y la aparición en forma epidémica del dengue|
con variaciones según las condiciones climáticas. hemorrágico con shock, más una notificación dej
En regiones tropicales la actividad del mosquito cientos de miles de casos anuales y una crecientq
se mantiene durante todo el año. población expuesta al riesgo de contraer la enfer
Se calcula que alrededor de ochenta millones medad fueron las características sobresalientes del
de personas se infectan por año en el mundo. Las dengue al finalizar el siglo XX. Es un trastorno
zonas de mayor prevalencia son el sudeste asiá cada vez más importante entre los viajeros.
tico, el Pacífico Occidental, las islas del Pacífico
Sur, y América Central y del Sur. En los prime
PATOGENIA
ros seis meses de 1997 sólo en Brasil se denun
ciaron 200.000 casos. Una de las condiciones necesarias para la apa
En la Argentina se han observado casos prove rición del dengue hemorrágico es la reinfección
nientes de otros países; en la frontera noroeste se por un serotipo distinto al del primer episodio.!
detectaron enferm os y personas sanas con Se considera que la inmunidad heterotípica no es|
anticuerpos antidengue. Si bien aún no se atra protectora y que los anticuerpos se comportarían
viesa por un brote epidémico, de mantenerse la como no neutralizantes, pero sensibilizan las par-|
situación actual ello podría ocurrir. tículas virales para su posterior fagocitosis por¡
C apítulo 37 - D engue □ 323
ción. El paciente entra en una convalecencia pro la temperatura y sudoración fría. La profundi-
longada, caracterizada por astenia, cefalea y zación de los síntomas circulatorios y neuroló-
mialgias residuales, que puede durar m eses, en gicos indica un estado de shock profundo. Re
especial la astenia. cién en los estadios fmales se produce coagula
ción intravascular diseminada (CID). Son fre
Dengue hemorrágico y dengue con shock cuentes la aparición de ascitis, derrame pleural e
Se asume que estos pacientes han padecido una hipoalbuminemia, y hepatomegalia en los niños.
infección previa (desde 6 meses o años antes) por La extravasación de plasma con hipovolemia gra
un serotipo de virus distinto; sin embargo, no ve no se produce en todos los pacientes con den
siempre se recoge este antecedente. Los prime gue hemorrágico. La recuperación del estado
ros días de enfermedad son indistinguibles del hipovolém ico suele ser rápida al cesar los acon
dengue clásico. Con la defervescencia de la tem tecimientos patogénicos que llevaron a la extra
peratura, alrededor del quinto día, el paciente re vasación, siempre que medie un tratamiento de
fiere dolor abdominal intenso, náuseas, vómitos sostén adecuado. Las complicaciones del dengue
y se percibe un deterioro progresivo del senso hemorrágico se relacionan con la sobreinfección
rio. Éste en sus comienzos puede ser apenas de- bacteriana del aparato respiratorio y la sepsis. Las
tectable o mostrar al paciente en estado de agita causas de muerte son el shock, las hemorragias
ción. Es el síndrome de alarma que indica la ne masivas y las sobreinfecciones. En la actual epi
cesidad de solicitar un recuento de plaquetas y demia de Brasil se observó miocarditis y encefa
evaluar la integridad de la pared vascular median litis, que se han atribuido a la acción directa del
te la prueba del lazo. Esta última se realiza con el virus. La tasa de mortalidad del dengue hemorrá
manguito del tensiómetro colocado en posición gico puede superar el 30%.
habitual, insuñado a un valor intermedio entre la
tensión arterial sistólica y la diastólica, durante 3
DIAGNÓSTICO
a 5 minutos. Se mide el número de petequias que
aparecen en la región del antebrazo adyacente al La sospecha se basa en la epidemiología y en
manguito. En un cuadrado de 1 cm de lado, que las m anifestaciones clínicas ya descriptas. El
se dibuja sobre la piel, no deben aparecer más de diagnóstico virológico consiste en el aislamiento
3 petequias. Esta prueba positiva y un recuento del virus del suero o de muestras de tejidos de;
de plaquetas menor a 100.000/mm^, junto con el autopsia. El suero no debe congelarse y no sel
síndrome de alarma, obligan al seguimiento aten utilizarán anticoagulantes. El período óptimo de
to del paciente en un medio hospitalario. En e s aislamiento en el suero son los primeros cinco
tos casos se realiza el control del hematocrito, en días de enfermedad. Las muestras de autopsias
forma periódica, para evaluar la pérdida plasmá se congelan a -70°C
tica por extravasación capilar. Un aumento del El diagnóstico serológico se realiza con: inhi
hematocrito indica hemoconcentración por la bición de la hemaglutinación, fijación del com
pérdida de plasma, lo que constituye un signo de plemento, neutralización y enzimoinmunoensayo
suma gravedad que preanuncia el shock hipovo- (ELISA), con técnica de captura de IgG e IgM
lémico. Aparecerán hemorragias en forma de sín (MAC-ELISA). Con excepción de MAC-ELISA,
drome purpúrico, equimosis, epistaxis, hemorra con todas las otras técnicas se debe demostrar la
gia gingival, hematemesis, melena y hemorragias seroconversión. Un resultado de MAC-ELISA
en los sitios de venopuntura. Las hemorragias positivo indica infección reciente, pero se pro- \
agravan la hipovolemia. En estos casos el valor ducen reacciones cruzadas con otros flavivirus.
del hematocrito puede no expresar la hemocon
centración. Un cociente hematocrito/hemoglobi-
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL j
na superior a 3,5 indica extravasación. La hipovo i
lemia se manifíesta por disminución de la ten El diagnóstico diferencial incluye leptospirosis, j
sión diferencial, descenso de la tensión sistólica, paludismo, fiebre amarilla, enfermedades virales i
pulso débil, depresión del sensorio, descenso de respiratorias, encefalitis virales, fiebres hemorrá- i
i
I^
(
gicas por arenavirus y hantavirus, rubéola, saram £1 control del vector se basa en el saneamiento
pión, meningococemia y otras. ambiental, con activa participación comunitaria í
dado que es un mosquito de hábitos domicilia
rios. Todas las acciones en este sentido son posi i
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do es similar al plasma, con alto contenido pro mínimo de colestasis y necrosis hepatocelular. Se
teico; en consecuencia, habrá hipoproteinemia. postula que los casos mortales refractarios al trata
La histología pulmonar revela edema intersticial miento con inotrópicos se deberían a una disfun- i
con edema alveolar más o menos abundante. En ción del miocardio, pese a que no hay hallazgos
las formas evolutivas menos graves el edema anatomopatológicos apreciables en ese tejido.
alveolar puede ser escaso, lo que en la radiogra La infiltración periarteriolar de la pulpa blan>
fía se correspondería con imágenes intersticiales ca y de la pulpa roja esplénica por inmunoblastos
sin ocupación del espacio alveolar y en clínica, es muy característica y coincide con la marca
con la disociación clinicorradiológica. Aun en ción de partículas virales; sin embargo, el bazo
aquellos ca.sos con edema intersticial solo, el in no es palpable. Iguales consideraciones merecen
tercambio de gases está gravemente afectado los hallazgos en los ganglios del sistema linfático
(hipoxia). El escaso infiltrado celular del inters y en las muestras de tejido hepático.
ticio está constituido por células mononucleadas
(inmunoblastos) y algunos leucocitos polinu
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
cleares. En las células endoteliales no se demues
tra efecto citopático, aunque por técnicas histo- Los hallazgos clínicos y la cronología de la fie
químicas se evidencian partículas virales en su bre hemorrágica con síndrome renal se detallan
interior. Por microscopía óptica tampoco se ob en el cuadro 38-4.
serva ruptura endotelial ni del epitelio alveolar; La denominada nefropatía epidém ica, es una
en cambio, mediante microscopía electrónica las variante clinicoepidemiológica, producida por el
uniones intercelulares del endotelio se comprue serotipo Puumala, cuya distribución abarca la
ban alteradas. región escandinava. A diferencia de la fiebre
No se halla líquido extravasado en el pericardio, hemorrágica con síndrome renal, no se producen
el peritoneo o el retroperitoneo. manifestaciones hemorrágicas. Luego de una fase
Las lesiones renales no tienen importancia clí prodrómica, similar a la señalada para los otros
nica y se deben a un doble mecanismo: la agre serotipos, se instala una nefropatía con localiza
sión directa del virus y los efectos propios de la ción directa del virus en el riñón. Aparece una
disminución del ñujo plasmático renal, causada insuficiencia renal oligúrica con proteinuria no
por el estado hipovolémico. Se observa un grado selectiva, signos de colestasis intrahepática,
intranosocomiales, se produce una mejoría rápi que el paciente permanezca en reposo estrictoj
da de las funciones respiratoria y cardiovascular. La fiebre se controla con paracetamol (aceta-j
El diagnóstico diferencial abarca otras neumo minofeno). La fase prodrómica es común a otras
nías graves de la comunidad y la leptospirosis, enfermedades, por lo que las indicaciones seña-Í
que presenta algunas características clínicas y ladas son generales, ya que en este período casi
epidemiológicas en común con este síndrome. nunca hay diagnóstico o a lo sumo es una sospe^
También se considerarán las neumonías por in cha. En la actualidad la ribavirina es una opción
fluenza, Legionella spp, Streptococcus pncum o- que se evalúa para pacientes febriles que hayan!
niae, C hlam ydia psiítaci y R ickettsia spp. En de estado en contacto con casos confirmados de!
terminadas regiones se deberá tener presente la SPH. Es un nucieótido sintético que se ha utiliJ
emergencia de peste con formas neumónicas. zado en el tratamiento de enfermedades causa-l
das por los virus sincitial respiratorio, parain-i
fiuenza, sarampión, arenavirus (incluidos los de!
la fiebre Lassa, y los de la fiebre hemorrágicaj
DIAGNOSTICO
argentina y boliviana) y en hantavirus producto-,
El aislamiento del virus es muy dificultoso y res de fiebre hemorrágica con síndrome renal.'
requiere procedimientos complejos, debido a ello Como efecto adverso más importante se mencio-,
el diagnóstico se realiza con la demostración de na la hem ólisis de carácter reversible. I
anticuerpos séricos o material genómico, tanto En la fase cardiopulmonar se debe corregir la^
en suero como en material de necropsia. La téc hipoxemia con la administración de oxígeno (en
nica serológica utilizada en nuestro país es un general con asistencia respiratoria mecánica),
enzimoinmunoensayo con antígeno del serotipo reducir los ingresos de líquidos a valores míni
Andes. El hallazgo de IgM específica tiene valor mos, para no incrementar el edema pulmonar, y
diagnóstico; pero en los pacientes en quienes sólo mejorar el estado hemodinámico con inotrópicos
se detecta IgG debe demostrarse seroconversión (dopamina o dobutamina). Recién al cesar la pér- j
en muestras pareadas, debido a la posible reactivi dida capilar se inicia la reposición con expansores ;
dad cruzada con otros hantavirus o a la presencia plasmáticos. Se ha comprobado la utilidad de la
de anticuerpos por infección previa no reconoci restricción acuosa en la fase de edema pulmonar.!
da. Ambas eventualidades son poco frecuentes Dada la patogenia propuesta para el SPH, en la j
en nuestro medio. Sin embargo, estudios recien actualidad se evalúa el uso de corticosteroides '
tes en una población aborigen del noroeste ar como inmunomoduladores.
gentino indicarían seroprevalencias más altas en Como toda neumonía de la comunidad, hasta
algunos grupos. La técnica es altamente sensible no disponer de un diagnóstico firme se indicará ■
y específica. un tratamiento empírico con antimicrobianos, !
En materiales como sangre entera o coágulo, basado en la experiencia regional y en los crite- ;
dentro de la primera semana de enfermedad, o rios epidem iológicos. !
en muestras de tejido pulmonar, hepático, renal
o en otros tejidos de biopsias o necropsias, el
PROFILAXIS
material genómico viral se puede reconocer me
diante PCR. Los materiales se guardan congela La prevención se basa en evitar el contacto con
dos (-20°C a -70°C) o se envían de inmediato re excretas de roedores. Los ambientes cerrados, don
frigerados a los laboratorios especializados. Hay de se sospeche que hay circulación de esos ani
técnicas histoquímicas para marcar el antígeno males, deben ser aireados y los pisos, y otros lu- !
viral en muestras de tejidos. gares, lavados con soluciones de agua e hipoclo-
rito de sodio. Para entrar en estos sitios debe utili- ;
zarse barbijo, lentes y ropa adecuada. La elimina
TRATAMIENTO
ción de los residuos, la protección de los alimen- !
El tratamiento es sintomático y de sostén car- tos y evitar que los roedores convivan en el pendo- ;
diorrespiratorio. En la primera fase es necesario micilio son medidas muy importantes para la pre- .
C apítulo 38 - Enfermedad por hantavirus □ 333
vención de las enfermedades donde se involucran recomendación para la atención de toda neumo
estos reservónos. En las zonas donde se han com nía grave de la comunidad.
probado casos de SPH no deben imponerse res En el presente no se dispone de vacuna para
tricciones al turismo o al intercambio comercial. esta enfermedad. En China está en desarrollo una
La atención del enfermo con SPH requiere res vacuna para la prevención de la fiebre hemorrá-
peto por las normas universales de bioseguridad, gica con síndrome renal.
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m cunstancias, por el CMV, Ambos trastornos pue tintas localizaciones, algunas de las cuales serán
den tratarse en forma adecuada. consideradas a continuación.
(•
Diagnóstico Herpes zóster toracoabdominal
(•
El diagnóstico es relativamente sencillo si las Es la localización más frecuente, hallada en más
!• lesiones son características. La confirmación se de la mitad de los casos comunicados. Lo habitual
basa en el aislamiento y la identificación del vi es que, algunos días antes del comienzo de la erup
rus. En general se considera que la serología es ción, los enfermos manifiesten una sensación uren
poco relevante para el diagnóstico, a menos que te o dolor en el dermatoma afectado. Aquélla se
m se dem uestre seroconversión indicadora de presenta bajo la forma de un eritema sobre el que
primoinfección. asientan múltiples vesículas dolorosas. El cuadro
dura unas tres semanas, pero en los individuos
m Tratamiento inmunOcomprometidos la evolución clínica suele
De acuerdo con la gravedad del cuadro clínico ser más grave. Es frecuente el compromiso del sis
m y del estado de inmunocompromiso del pacien tema nervioso central, con características del LCR
te, está indicado el aciclovir. Este agente antiviral similares a las de las meningoencefalitis virales.
se prescribe en los casos de encefalitis, afeccio Una de las manifestaciones más significativas aso
nes neonatales o disem inación en pacientes ciadas con el herpes zóster es la neuritis aguda y,
inmunodeprimidos, en dosis de 10 mg/kg cada 8 con ulterioridad, la neuralgia posherpética. El tra
# horas, por vía IV, durante diez días. En los pa tamiento con aciclovir acorta la evolución de la
cientes inmunocompetentes puede utilizarse el afección y disminuye su gravedad.
m aciclovir por vía bucal en dosis de 200 a 800 mg
cada 4 horas, por el día, o sea 5 tomas por día, Herpes zóster oftálmico
m durante 10 días. En los casos de recurrencias, en Es una de las localizaciones asociada con ma
especial de localización genital, puede indicarse yor gravedad. Se produce por la afección de la
en dosis de 400 mg dos veces por día, por vía rama oftálmica del nervio trigémino y por lo co
<• bucal, durante períodos de 6 meses a un año. mún afecta a ancianos, aunque en ocasiones se
observa en jóvenes. Puede provocar lesiones ocu
4 ENFERMEDADES POR EL VIRUS VARICELA
lares que comprometan gravemente la visión. Es
necesario que todos los casos sean controlados
# 2ÓSTER
por un oftalmólogo. Las secuelas, en especial el
# En la actualidad se conoce la secuencia com dolor, alteran en alto grado la calidad de vida.
pleta del genoma de este virus, que infecta a se
# res humanos y a una gran variedad de tipos celu Herpes zóster ótico
lares de animales. El VZV origina dos entidades El herpes zóster ótico del conducto auditivo ex
# clínicas distintas: la varicela y el zóster. La pri terno o síndrome de Ramsay Hunt se presenta con
mera se trata en el capítulo Enfermedades exan dolor y vesículas en esa localización, que a veces
temáticas; en cuanto al zóster, se sabe que, luego se extienden al pabellón auricular, pérdida del
de la primoinfección varicelosa, el VZV persiste sentido del gusto en los dos tercios anteriores de la
#
en los ganglios sensitivos del sistema nervioso lengua y parálisis facial del mismo lado. En ocasio
--# central. Todavía no está aclarado si se trata de nes puede producirse una polineuritis craneal con
una infección latente o persistente, pero la reacti compromiso de los pares V, VIII, IX y X. En esta
# vación, que se produce años después, lleva al afección se compromete el ganglio geniculado.
daño tisular del dermatoma relacionado con el Otras localizaciones del zóster son: crural,
ganglio afectado y origina la erupción herpética, ciático, cervical, sacro, braquial y otros. Todas
o herpes zóster. Es importante tener en cuenta estas localizaciones deben tratarse precozmente
que el herpes zóster puede ser una manifestación con aciclovir, a fin de acortar la evolución y re
paraneoplásica o de algún otro proceso que com ducir los síntomas dolorosos (ver el capítulo In
prometa la inmunidad. Este puede presentar dis fecciones oculares).
C apítulo 39 - Enferm edades por virus de la fam ilia H erpesviridae □ 339
de células diploides, en las que el efecto citopático T CD4+, además los primeros aislamientos se pro-
se observa en 10 a 20 días. El diagnóstico rápido dujeron en pacientes HIV positivos. Sin embargo
se basa en la detección de los antígenos del virus hasta el presente no se ha establecido una asocia
mediante anticuerpos monoclonales. La conver ción causal entre ambas afecciones virales.
sión serológica, comprobada por ELISA, indica Se han desarrollado numerosas pruebas con
infección reciente. Todos los donantes de órga anticuerpos m on oclon ales, sondas de ADN,
nos deben ser sometidos a la detección de la IgG ELISA y amplificación con PCR, con las cuales
a fin de identificar los seropositivos. es posible diagnosticar con rapidez esta infección.
Estos métodos permiten confirmar la etiología de
Tratamiento muchas convulsiones febriles.
A pesar de haberse ensayado diversos tratamien N o hay terapéutica específica para este agente
tos con fármacos antivirales, los únicos con los que y en general no es necesario tratamiento alguno.
se demostró efectividad son ganciclovir y foscar- Sin embargo, en algunos casos con complicacio
net. El primero, en dosis de 5 rng/kg cada 12 horas nes neurológicas se puede indicar ganciclovir, en
por vía IV durante tres semanas, tiene eficacia de dosis de 10 mg/kg/día, por vía IV, dividida en
mostrada en pacientes con sida, en especial en los dos aplicaciones diarias.
afectados por coriorretinitis. En algunos casos gra
ves, e! foscamet -e n dosis de 60 mg/kg cada 8horas
ENFERMEDADES POR EL HERPESVIRUS
por vía IV durante tres semanas- produjo mejorías.
HUMANO TIPO 7
i-
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Fiebre amarilla
Ornar J. Palmieri
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toda la vida, en caso de viajes a zona endémica gia al huevo: hipersensibilidad inmediata carac
se recomienda revacunar cada 10 años. Deben terizada por exantema, urticaria y broncoespas-
vacunarse los viajeros que ingresan o salen de mo, pero es extremadamente rara. Excepcional
zonas endémicas o epidémicas, los residentes de mente puede producir encefalitis en menores de
zonas endémicas o epidémicas en las que esté seis meses de edad, razón por la cual está con
presente el mosquito Aedes aegyptiy población de traindicada en el primer semestre de la vida. Tam
provincias limítrofes con áreas de riesgo; en la bién está contraindicada en las personas que han i
actualidad (marzo de 2008) existe en la Repúbli tenido reacción anafiláctica a la ingestión de hue
ca A rgentina un program a de v a cu n a ció n vos o sus derivados y en inmunocomprometi-
antiamarílica en las provincias de M isiones, Co dos. En lo posible no vacunar en el embarazo y
rrientes, Entre Ríos, Salta, Jujuy, Formosa y Cha en especial no hacerlo antes del 6® mes de la ges
co, por la proximidad con Brasil y Bolivia, don tación. La vacuna es compatible con la profilaxis
de existen áreas de epizootia. del paludismo, lo que no afecta su respuesta
En general, es una vacuna bien tolerada, en el inmunitaria. i
2% al 5% de los vacunados es posible que entre Durante la fase aguda los pacientes deben ser
los días 5® al 10® ocurran efectos adversos posva protegidos de las picaduras de mosquitos, para i
cunación. Los efectos locales son: eritema y do evitar la diseminación de la infección. Es impor
lor. Los generales son: fiebre moderada, cefalea, tante la lucha contra estos insectos y el uso de
mialgia y malestar general. En personas con aler ropas protectoras, mosquiteros y repelentes. i á
< -
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En 1981 fueron descriptos los primeros casos ternacional de Taxonomía Viral, en 1986, HIV o
de una enfermedad que hasta hoy se conoce con virus de la inmunodeficiencia humana. Fue aisla
la primitiva denominación de síndrome de la do por primera vez en 1983 por Luc Montagnier,
inmunodeficiencia adquirida (sida). Más que un en el Instituto Pasteur de París, quien lo denomi
síndrome, es una enfermedad con un agente nó LAV (Lym phadenopathy Associated Virus).
etiológico debidamente identificado: el virus de Posteriormente, en 1984, Roben Gallo, en el Ins
la inmunodeficiencia humana (HIV). No obstan tituto Nacional del Cáncer de los EE.UU., lo de
te» la denominación sida aún se conserva y se nominó HTLV-III (Human T-Cell Lymphotropic
utiliza para la etapa en la cual a la infección por Virus Type III). En el mismo año, Jay Levy, de la
el HIV, debido a la inmunodeficiencia que ésta Universidad de California, lo designa ARV (AIDS
produce, se le agregan distintas complicaciones related virus). En los tres casos el agente identifi
tales como infecciones o enfermedades prolife- cado fue el mismo. Por esta razón, y para aunar
rativas malignas, o ambas. criterios, desde 1986 se lo conoce como virus de
la inmunodeficiencia humana (HIV), denomina
ción que considera la especie a la que afecta y el
DEFINICIÓN
cuadro clínico que provoca. Se lo designó como tipo
El HlV/sida es una enfermedad infectocon- 1 (HTV-1) para diferenciarlo del tipo 2 (HIV-2). Éste,
lagiosa, producida por el HIV (human immuno- aislado en 1986 en pacientes con sida de África
deftciency virus), de evolución crónica y de co Occidental, posee similitud estructural con el vi
mienzo agudo o asintomático, que genera una rus de la inmunodeficiencia de los simios (SIV).
disfunción progresiva e irreversible de la inmu El HIV-l es una partícula esférica, de 80 a 110
nidad, la cual predispone a padecer infecciones nm de diámetro, con un núcleo, centro o core que
y enfermedades proliferativas malignas. contiene ARN genómico y varias moléculas de
una enzima, la transcriptasa reversa -también
llam ada transcriptasa inversa o retrotrans-
ETIOLOGIA
criptasa- que cataliza la síntesis de una copia del
El agente etiológico de esta enfermedad es un ADN (cDNA) a partir del ARN viral. Este cDNA
virus de la familia de los retrovirus, subfamilia se autoduplica e integra en el ADN de la célula
de los lentivirus, denominado por el Comité In hospedera infectada.
348 □ Segunda parte - Infecciones virales
La envoltura del HIV está constituida por una Es sensible al calor - s e inactiva a 56®C duran
doble capa lipídica que, como en la mayoría de te 30 m inutos- y su infectividad desaparece en
los virus envueltos, loma sus elementos grasos contacto con etanol al 25%, éter al 50%, for-
de la membrana externa de la célula hospedera. maldehído al 0,5%, hipoclorito de sodio al 0,5%
En esta capa bilipídica están incluidas dos uni y glutaraldehído al 1%. Es relativamente resis
dades glucoprotcicas. La mayor y más externa es tente a las radiaciones ionizantes y a la luz ultra
la g p l2 0 , que al protruir hacia el exterior de la violeta.
partícula viral forma en ésta un engrosamiento o
botón terminal. Tiene gran importancia en la
EPIDEMIOLOGÍA
patogenia de la enfermedad, pues va a interactuar
con los receptores CD4 de las células blanco. La La OMS, OPS y ONUSIDA estimaban que a
segunda glucoproteína, la gp 4 1, se encuentra to fines de 2007 más de 33,2 millones de personas
talmente incluida en la capa lipídica, por lo que se encontrarían infectadas por el H IV -l, con un
también se la denomina glucoproteína de trans rango de entre 30,6 a 36,1 millones. Esta cifra
membrana. incluye 2,5 millones de niños menores de 15 años
Inmediatamente por debajo de la envoltura se y un 50% (más de 15 millones) de mujeres. Más
encuentra la cápside externa, que contiene a la del 90% de las personas infectadas viven en paí
proteína p l8 . Esta cápside encierra el core, for ses pertenecientes al mundo en desarrollo y la
mado a su vez por una segunda cápside cuya pro mayoría de ellas desconoce su condición de por
teína es la p24. El core protege dos cadenas de tadora del virus. La propagación del HIV-l es
ARN y la transcriptasa reversa. alarmante; se estima que se registran 6.850 nue
El HIV, de gran variabilidad genética, posee vos casos de infección por día, de los cuales más
tres genes principales: ENV, GAG y POL. El gen de la mitad son mujeres. Durante el año 2007 se
ENV (por envoltura) codifica las dos unidades produjeron 2,5 millones de nuevas infecciones;
glicoproteicas de la cubierta viral; el POL (por 2,1 millones en adultos y 420.000 en niños de
polimerasa), la síntesis de la transcriptasa reversa, menos de 15 años.
y el GAG (por gen antígeno de grupo), la proteí Desde el comienzo de la pandemia, en 1981,
na que dará origen, luego de sucesivos clivajes más de 20 m illones de personas han fallecido de
proteolíticos, a las tres proteínas internas del core: sida. Durante el año 2007 fallecieron de sida 2,1
p 2 4 ,p l8 y p l3 . m illones de personas en todo el mundo; de éstos,
Además de estos tres genes principales están 300.000 fueron menores de 15 años. Tres de cada
los denominados SOR, TAT y TRS, que regulan cuatro muertes por sida en 2007 se registraron en
la expresión genética del virus; el gen 3 ’ORF, el Africa subsahariana. A pesar de que la morta
cuyo producto es la proteína p27, y los LTR {long lidad por sida ha disminuido desde 1996, a la fe
term inal repeats). Estos últimos se ubican en los cha, a partir de la introducción de la terapéutica
dos extremos del genoma y a través .de ellos el antirretroviral de gran actividad (TARGA o
provirus se inserta en el cromosoma de la célula HAART por sus siglas en inglés), sigue figuran
hospedera. do como una de las principales causas de muerte
Todas las proteínas mencionadas tienen poder en todo el mundo.
antigénico y en el individuo infectado inducen la Aunque casi todos los países han denunciado
síntesis de anticuerpos específicos, cuya detec casos de sida, el virus se propaga de distinto modo
ción permite diagnosticar la infección a través en cada región e incluso entre zonas geográficas
de métodos serológicos. de un mismo país.
El virus ha sido aislado de sangre, semen, secre El África subsahariana es la región donde más
ciones vaginales y leche materna, que soii los lí rápidamente ha avanzado la epidemia. Se calcu
quidos infectivos; pero también se lo ha identifi la que esta zona alberga al 90% de los infectados
cado en tejido nervioso, piel, pulmones, bazo, hí y a 2 de cada 3 adultos (68%).
gado, médula ósea, ganglios linfáticos, LCR, sa En esta región la mayoría de las infecciones se
liva y lágrimas. han producido por relaciones heterosexuales sin
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodefíciencia hum ana (HlV/sida) □ 349 c-
c
protección. La transmisión vertical produjo el monía bacteriana a repetición y el carcinoma in
c
nacimiento de 530.000 niños infectados, lo que vasor de cuello uterino que motivaron el 30% de
representa un 90% del total mundial. los casos notificados ese año. A partir de ese año t
La epidemia es más reciente en Asia que en se registra una reducción constante del número
Africa; en China, por ejem plo, con más de de casos de sida, coincidente con el uso expandi c
300.000 personas infectadas, se distinguen dos do de la TARGA. La población infectada oscila
grandes epidemias. Una afecta a ios adictos a entre 130.000 y 150.000 personas, el 60% de las c
drogas intravenosas (ADIV); la otra, más recien cuales ignora su condición serológica. En la Ciu
l
te, predomina entre los heterosexuales, en espe dad de Buenos Aires, desde el inicio de la epide
cial en la zona oriental, donde ha reaparecido la
prostitución y las enfermedades de transmisión
mia, la vigilancia epidemiológica estuvo centra
da en la notificación de casos de sida. Pero a par
i
sexual (ETS). tir del año 2003, se inició la notificación obliga l
En América latina la situación permanece esta toria de los nuevos casos de infección por HIV.
ble. La cantidad de nuevas infecciones en el 2007 Desde ese momento y hasta fines de 2007 se han (
se calcula en 100.000, lo que aumenta a 1,6 mi notificado 5.133 nuevos diagnósticos de infec
(
llones el número de personas infectadas en esta ción por el retrovirus (el 41,1 % o sea 2.111 casos
región, con 58.000 muertes durante el último año. se registraron en la Ciudad de Buenos Aires. En <
La infección predomina en la población de nivel relación con los casos de sida, en la Ciudad de
socioeconómico más bajo, con menor acceso a Buenos Aires desde 1983 y hasta fines de 2007
los sistemas de salud y a la educación. En esta se habían registrado 15.235 casos, el 36,3% no
región, las relaciones homosexuales y heterose tificados por el Hospital de Infecciosas «F. J. (
xuales no protegidas representan la principal vía Muñiz». El mayor número se encuentra en la Pro
(
de transmisión del retrovirus con un marcado in vincia de Buenos Aires (42% del total), la Ciu
cremento de la infección entre las mujeres.
En muchos países de América latina el sida se
dad de Buenos Aires (33%), y las provincias de
Santa Fe (7%) y Córdoba (4,7%). La relación
c
convirtió en la principal causa de muerte en la hombre/mujer de los casos de sida se redujo de c
población comprendida entre los 25 y los 34 años, 21/1 en 1988 (año del primer caso notificado en
incluso supera a los accidentes de tránsito. mujeres) a 2,4/1 en la actualidad. En cambio en «
En resumen, en casi todo el mundo la mayoría tre los nuevos infectados, la relación hombre mu
de los nuevos casos de infección se dan en ado jer es de 1,5/1 (es decir, de cada 10 nuevos infec
i
lescentes y adultos jóvenes; las mujeres son es tados, 6 son hombres y 4 mujeres). i
pecialmente vulnerables. En la actualidad la epi El comportamiento de esta variable no es ho
demia está concentrada en el mundo en desarro mogéneo y se modifica según la región conside %
llo, donde 9 de cada 10 personas están infectadas rada.
y más de 30 millones ignoran su situación. La mediana de edad de los casos de sida es de %
En la República Argentina el número total de 32 años para los hombres y 29 años para las mu i
pacientes con sida registrados hasta fmes de 2007 jeres, lo que indica que estas últimas la adquie
era de 34.214 casos denunciados al Programa ren a edad más temprana, probablemente por ini (
Nacional de Sida del Ministerio de Salud de la ciarse antes en las relaciones sexuales y por la
Nación. Sin embargo, se calcula que por el retra posibilidad de un diagnóstico precoz durante el
so en las notificaciones el número de casos de embarazo. En esta variable se aprecia un aumen
sida asciende a 36.570. Del total de casos de sida to progresivo de la mediana de edad a partir de
notificados, 25% corresponden a mujeres y 75% 1992 que alcanza en 2006 los 37 años.
a hombres, pero entre 2006 y 2007 el número de En cuanto a las vías de contagio, la tendencia
casos en mujeres ascendió al 30%. El año 1996 tanto en la Argentina com o en el resto del mun
con 2.860 casos representó el mayor número de do. señala que el mayor número de casos se con
enfermos notificados. Este año coincide con la centra en edades sexualmente activas. De esta
incorporación de 3 nuevas enfermedades marca manera, las relaciones sexuales han sido la puer
doras del sida: la tuberculosis pulmonar, la neu ta de entrada de la infección en el 59% de los
T
350 □ Segunda parte - Infecciones virales
anticuerpos anti-HIV-1 pueden destruir células T infectan células susceptibles, en las que ejercen
CD4+ infectadas que no producen nuevos virus, un efecto citopático directo o bien se mantienen
las cuales son vulnerables si expresan proteínas latentes.
virales en su superficie. 5) L o s linfocitos T CD4+ activados pero no
c) Circulación libre de g p l2 0 : es un proceso infectados. Son aquellos que en su superficie
exclusivo de la infección por HIV. La g p l2 0 que expresan moléculas proteicas que servirán como
circula libre puede unirse al receptor CD4 de las receptores para el HIV-1. De esta forma se con
células; en consecuencia, sin estar infectadas és vierten en células susceptibles de ser infectadas.
tas pasan a ser blanco del sistema inmune. Se ubican principalmente en los órganos linfoides
d) Síniesis de citocinas: éstas son tóxicas para y son escasas en la circulación.
las células T coadyuvantes en la respuesta inmu Las poblaciones celulares descriptas no son
ne. El virus infecta y se replica no sólo en los lin- estáticas, ya que se han comprobado interacciones
focitos T CD4+, sino también en macrófagos, célu entre todas ellas.
las dcndríticas foliculares y células de Langerhans En el presente se considera que la eliminación
presentes en diferentes tejidos: piel, ganglios lin del virus de los linfocitos T CD4+ de memoria
fáticos, hígado, bazo, intestino y cerebro, donde podría insumir 7 a 10 años de tratamiento, mien
induce la síntesis de esas citocinas. La infección tras que erradicar las poblaciones virales de las
por HIV-1 es un proceso dinámico; se considera células de vida media prolongada tardaría 3 años.
que la mitad de la población viral plasmática se La carga viral que desciende con más rapidez es
renueva cada 6 horas. En la actualidad se estima la aportada por los linfocitos T CD4+ de vida
que hay 5 compartimientos celulares que contri media corta.
buyen al mantenimiento de la viremia: Todos los órganos linfoides y los sistem as
1) Las células T CD4+ recientem ente infecta macrofágicos celulares son alcanzados por el HIV
das, que son responsables de la mayor parte de desde los primeros estadios de la infección. Por
la carga viral plasmática. Son células de vida consiguiente, estos órganos se transforman en los
media corta, aproximadamente de 1,6 días, en las reservorios del virus en el organismo y son una
cuales el virus se replica activamente. fuente de infección crónica potencial.
2) Los linfocitos T CD4+ de m em oria, infecta Una vez que el virus ingresa en el organismo
dos en forma latente, que pueden ser activados induce una rápida respuesta inmune humoral y
para producir viriones infectivos y tienen una vida celular, la cual inhibe la replicación viral en po
media prolongada. cas semanas y hace descender la elevada carga
Este segundo compartimiento sólo contribuye viral que caracteriza el período de primoinfección
con una pequeña proporción de la viremia esta aguda. Las diferencias individuales en esta res
ble (menor del 1%). puesta inmune inicial determinan el curso de la
3) Las células de vida prolongada, de 1 a 4 infección. La inhibición de la replicación viral
semanas, son los macrófagos infectados, las cé en esta primera etapa se correlaciona con la apa
lulas dendríticas foliculares, las células de la rición de linfocitos T CD8+ citotóxicos, que con
microglia y las de Langerhans. Se trata de una trolan la infección mediante la destrucción de
población con una cinética de recambio baja, que células infectadas productivas. Desde el punto de
puede servir como reservorio del virus por su re vista de la inmunidad humoral, la respue.sta in
sistencia a la actividad citopática del HIV-L De mune inicial consiste en la aparición de anticuer
estas células proviene menos del 1% de la carga pos neutralizantes. La importancia de la respues
viral plasmática. ta humoral inicial queda demostrada por el ha
4) Los viriones libres, son los virus presentes llazgo de niveles bajos de anticuerpos en perso
en la circulación sanguínea. El 99% de ellos pro nas que progresan rápidamente al sida y de nive
cede de los linfocitos infectados en las 2 sema les altos en quienes no muestran progresión de la
nas previas, de los que el 30% al 50% proviene enfermedad.
de células infectadas el día anterior. La vida me Durante el período clínico de latencia el virus
dia de los viriones es de unas 6 horas. Estos virus continúa replicándose activamente en los gan
352 □ Segunda parte - Infecciones virales
glios linfáticos, en los cuales el número de célu En conclusión, la encefalopatía por HIV-1 es
las infectadas es 5 a 10 veces mayor que en las el resultado de un proceso multifactorial. Es pro
células mononucleadas de la sangre periférica. bable que el tropismo del retrovirus por los ma-
Esta actividad en el tejido linfático, que se aso crófagos sea mayor que por el tejido neuronal.
cia con una imagen histológica de hiperplasia
folicular, se vincula con un mecanismo de secues
ANATOMÍA PATOLÓGICA
tro y atrapamiento, de partículas virales y célu
las infectadas, a cargo de las células dendríticas Las características anatomopatológicas de la
foliculares de los órganos linfoides. La forma infección por HIV-1 varían con el estadio clínico
ción de inmunocomplejos (partículas de HIV con de la enfermedad. Los aspectos histopatológicos
inmunoglobulinas y complemento) contribuiría de las infecciones oportunistas y las neoplasias
notablemente a la acumulación viral en las célu serán tratados más adelante. Aquí se hará refe
las dendríticas foliculares. La activación del sis rencia a los cambios que se comprueban a nivel
tema inmune y la liberación de ciertas citocinas del tejido linfoide.
(en especial TNF-a e IL-6) desempeña un papel Durante la fase intermedia o crónica los gan
importante en el establecimiento de la infección glios linfáticos se muestran hiperplásicos, con un
en los ganglios linfáticos. aumento de tamaño ostensible que clínicamente
En estadios avanzados se produce la destruc se evidencia com o síndrome de linfadenopatías
ción de la histoarquitectura ganglionar, con in generalizadas. El examen histológico revela una
volución de los centros germinales y pérdida de hiperplasia folicular reactiva, con centros germi
la capacidad de retención de panículas virales por nales prominentes de gran actividad mitótica,
parte del tejido linfático. Esto coincide con la numerosos macrófagos, algunos inmunoblastos
muerte masiva de células dendríticas foliculares, en zonas interfoliculares, leucocitos polimorfo-
pérdida de los mecanismos de atrapam iento y nucleares, células plasmáticas y escasas células
elevación de la vircmia plasmática. gigantes multinucleadas que rodean los vasos.
El SNC es un blanco importante del HIV-1. La Esta proliferación linfoide también se observa en
replicación del retrovirus en las células nervio el pulmón, las glándulas salivales y el tejido
sas ocasiona una encefalitis que conduce a la linfoide del tubo digestivo. En relación con la
demencia en el 25% al 30% de los pacientes. progresión de la enfermedad se comprueba un
Dentro del SN C , las células del com plejo cambio en la histología ganglionar, que pasa del
macrófago/monocito son las que mejor albergan patrón de hiperplasia folicular al de depleción
al retrovirus, aunque las células del endotelio linfoide parcial. Esta última se expresa por una
capilar y las gliales también están en condicio pérdida de lin fo cito s paracorticales, mantos
nes de contener partículas virales y reaccionar foliculares mal definidos o ausentes, hialinización
frente a anticuerpos específicos dirigidos contra de los centros germinales y, a veces, intensa
el virus. plasm ocitosis interfolicular. Esta etapa coincide
Es probable que las células microgliales se ha con la aparición de infecciones oportunistas.
llen comprometidas en la formación de las célu Por último se ingresa en el tercer patrón his
las gigantes multinucleadas, características de la tológico, que consiste en una depleción linfoide
demencia asociada con el sida; sólo aquellas cé completa, con pérdida de la arquitectura ganglio
lulas microgliales con receptores T CD4+ son nar tanto en áreas de células B como en zonas de
aptas para albergar el HIV-1. células T; sólo quedan histiocitos y células plas
La muerte neuronal ha sido relacionada con máticas residuales.
mecanismos indirectos, ya que las neuronas no La inmunohistoquímica de los ganglios linfá
son aptas para albergar el H IV-l. Se considera ticos muestra cambios sustanciales en el número
que la g p l2 0 es uno de los factores de daño y la distribución de los linfocitos T CD4+, los
neuronal, además de la proteína TAT y otras sus cuales coinciden con las variaciones que se ob
tancias neurotóxicas liberadas por los macrófagos servan en los estudios de sangre periférica. Las
infectados. células T colaboradoras comienzan a disminuir
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (H lV /sida) D 353
en las áreas paracorlicales, mientras que en cen A continuación se describirán cada uno de los
tros foliculares y zonas del manto hay un incre- períodos antes señalados:
(Tiento de los linfociios T supresores citotóxicos.
gn etapas más avanzadas también se comprueba Fase aguda o síndrome retroviral agudo
una depleción de linfocitos B, además de profun La evolución de la infección a partir de la pri
dizarse la disminución de células T CD4+. mera partícula viral que ingresa en el organismo
La biopsia ganglionar muestra los aspectos es relativamente independiente del mecanismo de
histológicos ya señalados, propios de la infección transmisión, aunque la dosis infectiva y, sobre
por HIV, y también suele revelar lesiones asocia todo, la virulencia intrínseca de la cepa involu
das con la inmunodeficiencia (tuberculosis, mico- crada así como la capacidad de respuesta inmu
bacteriosis atípicas, toxoplasmosis, linfomas, sar ne del hospedero parecen desempeñar un papel
coma de Kaposi y otras). importante.
La mayoría de los pacientes con sida presenta Durante esta fase el virus se disemina e invade
esplenomegalia de grado variable. En el examen numerosos tejidos y órganos, en especial los gan
histológico se observa gran congestión esplénica, glios y otras estructuras linfáticas.
con virtual ausencia de centros germinales y una El paciente infectado puede permanecer asin-
profunda depleción de linfocitos B y T. tomático o presentar un síndrome mononucleó-
En relación con la pancitopenia periférica que sico, como ocurre hasta en un 60% a 70% de los
acompaña a los estadios finales de la enferme casos. El inicio de este cuadro se detecta luego
dad, la médula ósea puede mostrar hipercelu- de un período de incubación de 2 a 6 semanas
laridad moderada, hiperplasia mieloide, disminu después de la exposición; se caracteriza por fie
ción de los elementos eritroides, hiperplasia lin- bre, adenopatías generalizadas, enaiflema faucial
foide, plasmocitosis variable, hiperplasia megaca- y, en ocasiones, un exantema morbiliforme tran
riocítica y aumento de la cantidad de fibras de sitorio. Algunos pacientes presentan trombocito-
reticulina. p en ia, que puede confundirse con púrpura
trombocitopénica idiopática. Aunque con poca
(
frecuencia, esta primoinfección aguda puede ex
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
teriorizarse mediante trastornos neurológicos: (
El curso clásico de la infección por HIV-1 con meningoencefalitis, neuropatía periférica, mielo-
siste en la infección p rim a ria , con síndrome patía, parálisis del VII par craneal o, más rara t
retroviral agudo o sin él, el período clínico de mente, encefalitis o síndrome de Guillain-Barré.
(
latencia y la enferm edad clínicam ente eviden- En ocasiones la seroconversión se acompaña
dable debida a la inmunodeficiencia (sida). con la aparición de erosiones o ulceraciones en (
A la luz de los conocimientos actuales se sabe la cavidad oral, gastroenteritis o hepatitis.
que desde el momento en que el HIV-1 infecta a La primoinfección también se acompaña con
un paciente, prolifera de manera continua, en es niveles elevados de carga viral, antigenemia p24
pecial en los ganglios linfáticos, aunque a velo detectable y una importante caída en los recuen
cidades diferentes según el estadio evolutivo de tos de linfocitos T C^D4+ circulantes.
la infección. Se distinguen entonces: De uno a tres meses después del inicio de los
• Fase aguda o síndrome retroviral agudo, de síntomas aparece una respuesta de anticuerpos
algunas semanas de duración. específica contra el HIV-1, coincidente con una
• Fase intermedia o crónica, con replicación declinación significativa de los niveles de carga
viral activa aunque a velocidad baja, cambios pa viral, desaparición del antígeno p24 y recupera
tológicos mínimos y varios años de duración. ción parcial de los linfocitos T CD4+.
• Fase final o de crisis, que clínicamente co A lo largo de este proceso agudo, y como con
rresponde al denominado síndrome de inmuno- secuencia de la inmunodepresión transitoria que
deficiencia adquirida (sida) propiamente dicho, se produce, es posible que se presenten infeccio
con una duración de meses o años de acuerdo nes oportunistas, como la candidiasis esofágica
con la respuesta al tratamiento. y la neumonía por Pneum ocystis jiroveci, carac-
354 □ Segunda parte - Infecciones virales
lerísticas de etapas más avanzadas de la enfer Una respuesta inmune inicial adecuada también
medad. ayuda a la caída de la carga viral plasmática. :
La duración habitual de este cuadro es 2 a 4 Durante esta etapa la carga viral es 10 a 100 i
semanas, aunque puede prolongarse hasta 3 me- veces superior en los órganos linfoides que en
ses. La persistencia de la sintomatología en esta las células mononucleares de sangre periférica.
fase de la enfermedad suele asociarse con una Esta actividad en los ganglios linfáticos, que se
progresión más rápida hacia el sida. El laborato asocia con hiperplasia folicular, es resultado del
rio puede mostrar lin fop en ia marcada, con secuestro de células infectadas a este nivel.
depleción de linfocitos T CD4+ y T CD8+ y linfo- Los pacientes suelen presentar pocos síntomas:
citos atípicos en sangre periférica. A esta lin adenomegalias periféricas palpables y trastornos
fopenia inicial le sigue un período de linfocito- neuropsiquiátricos mínimos, sólo detectables por
sis relativa en la que predominan los linfocitos medio de pruebas de evaluación neurocognitivas
T CD8+. Desaparecidos los síntomas que acom y electrofisiológicas.
pañan el síndrome de primoinfección aguda, los En consecuencia, queda claro que si bien hay
niveles de linfocitos T C D8+ se normalizan, mien un período de latencia, se trata de un acontecimien-
tras que los de células T CD4+, si bien aumentan, to clínico y no virológico. Aun cuando durante esta
no vuelven a los valores previos a la infección. fase intermedia haya pocas evidencias de enfer
Aunque durante el denominado período «ven medad, la infección debido al HIV-1 es progresi
tana» o preserológico la detección de anticuerpos va aunque el paciente esté clínicamente silente.
por serología es negativa, el diagnóstico de sín Este período es de gran interés epidemiológico,
drome retroviral agudo puede confirmarse me ya que el enfermo, al ignorar su enfermedad, no
diante la demostración del antígeno p24, por la adopta las precauciones necesarias para evitar el
reacción en cadena de la polimerasa o por la car contagio.
ga viral. Los anticuerpos se delectan a partir
de las 8 a 12 semanas de producida la infección; Fase final o de crisis
al inicio son de tipo IgM y luego IgG. Los prime Cuando el HIV-I ingresa ai organismo, invade
ros anticuerpos en aparecer son los anti-p24 y distintos tipos de células. Si bien los linfocitos T
anti-gpl60; después aparecen los anti-gpl20 y CD4+ son la principal célula blanco, también se
anti-gp41. infectan otras células, las cuales pueden expre
sar receptores CD4+ o no, como monocitos, ma-
Fase intermedia o crónica crófagos, linfocitos T C D 8+ , otras células hema-
Durante esta etapa, que por lo general dura topoyéticas, células del SNC (oligodendrocitos),
varios años, la actividad proliferativa viral per de la piel (células de Langerhans), así como de
siste aunque no haya sintomatología clínica; ade los epitelios renal, intestinal y pulmonar, entre
más se comprueba un deterioro progresivo de la otras. La destrucción progresiva de estas células,
inmunidad celular, en cuya aparición desempeña la pérdida de sus funciones o ambos hechos per
un papel la incapacidad del ganglio linfático para miten explicar la mayor parte de las manifesta
atrapar los antígenos circulantes. ciones clínicas. La disminución progresiva del
Las causas de la disminución de la carga viral número de linfocitos T C D 4+ provoca la inmuno-
y de la replicación del HIV-1 en sangre periférica supresión celular grave que favorece la aparición
son una combinación entre el mecanismo de atra de las infecciones asociadas y las neoplasias ca
par los viriones por parte de las redes de células racterísticas del sida. Por último, la infección del
dendríticas foliculares y el secuestro de células SNC produce la encefalopatía desmielinizante
T CD4+ infectadas en el ganglio linfático hiper- subaguda o crónica, que en el 25% al 30% de los
plásico. Además, la formación de inmunocom- pacientes conduce al síndrome demencial del sida
plejos (partículas de HIV-1 más inmunoglobuli- o déficit cognitivomotor asociado con el HIV-l.
nas más complemento) contribuiría en forma El tiempo que transcurre hasta la aparición de
notable a la acumulación de virus en las células las manifestaciones clínicas del sida varía de un
dendríticas foliculares de los ganglios linfáticos. sujeto a otro. En general se acepta que en los pri
Capitulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (HlV/sída) □ 355
meros 2 años y hasta los 4 años que siguen a la desaparecen en los estadios avanzados de la en
infección las tasas de progresión son bajas; au fermedad, lo que indica el progreso de ésta.
mentan en forma considerable a partir de los 5 Un tercer grupo es el integrado por aquellos
años, y llegan al 50% a los 10 años de seguimien marcadores de activación del sistema inmunitario,
to. En la actualidad los esquemas de terapéutica entre los que se citan: l) la p,microglobulina, una
antirretroviral combinada y la profilaxis adecua proteína presente en la superficie de todas las cé
da de las infecciones asociadas, al prolongar y lulas nucleadas entre ellas, linfocitos y macró-
mejorar la supervivencia, han modificado la his fagos, cuyo incremento refleja la activación de
toria natural de la enfermedad HlV/sida. estas células. Los niveles plasmáticos mayores
Se ha intentado identificar cofactores que per que 5 mg/mL indican progresión de la enferme
mitan explicar por qué la enfermedad progresa dad; 2) la neopterina, metabolito del trifosfato de
con más rapidez en ciertos pacientes más que en guanosina, es producida por los monocitos y ma-
otros, como también el motivo de que algunas de crófagos activados. Niveles plasmáticos de más
sus manifestaciones, como el sarcoma de Kaposi, de 20 nmol/mL son indicadores de progresión de
sean más frecuentes en grupos de riesgo deter la infección; 3) los linfocitos T CD8+, cuyo au
minados (varones homosexuales y bisexuales). mento refleja la activación del sistema inmune; 4)
La teoría más aceptada se apoya en la activación la IgA, cuyo incremento refleja la activación de
del sistema inmune y del HIV-1 por parte de la los linfocitos B, y 5) el interferón gamma y el TNF-
coinfección por otros patógenos: CMV, EBV, a, cuyos niveles elevados también indican progre
HSV-1. HSV-2, HHV-6, HHV-8, HBV, HCV y sión de la enfermedad.
HTLV-1. En el LCR, los niveles aumentados de p,micro-
También se han propuesto como cofactores de globulina y de neopterina se asocian con el com
progresión la magnitud del inóculo infectivo, la plejo demencial del sida. El número y porcentaje
vía de inoculación, la infección por más de una de linfocitos T CD4+ es uno de los marcadores
cepa de HIV-1, la exposición frecuente a antí- biológicos más utilizados, ya que indica el m o
genos alogénicos, como sangre o semen, la des mento de iniciar la profilaxis primaria contra de
nutrición, la drogadicción, la edad (en los mayo terminadas infecciones asociadas. En esto aspec
res de 35 años la enfermedad progresa con ma to, la etapa de sida propiamente dicha puede di
yor rapidez) y los factores genéticos. vidirse como se indica a continuación.
Desde el inicio de la epidemia se ha procurado
identificar marcadores biológicos que anticipen Enfermedad temprana
la progresión hacia el sida. En este sentido, un Los pacientes con recuentos de linfocitosTCD4+
primer grupo de parámetros de laboratorio lo de 400 a 500 cél/|xL suelen presentar adenome-
constituyen la anemia, la leucopenia (menos de galias generalizadas y manifestaciones cutáneas.
4.000 leucocitos/|oL) con linfopenia (menos de Dentro de estas últimas se destacan la dermatitis
1.000 linfocitos/|iL) y la eritrosedimentación ace seborreica, la exacerbación o aparición de lesiones
lerada. de psoriasis, la foliculitis eosinofílica, el molusco
Un segundo grupo de marcadores inmuno- contagioso y las formas diseminadas de sama. La
lógicos y de actividad viral incluye los recuen leucoplasia oral vellosa, debida al EBV, compromete
tos de linfocitos T CD4-f- inferiores a 200 cél/fiL los bordes y la punta de la lengua, y es casi pato-
o un porcentaje menor de 25%, o un cociente gnomónica de infección por HIV-1. Las ulceracio
CD4/CD8 menor que 1, y la antigenemia p24. nes bucales (aftas gigantes) así como la erupción la
Esta última sigue un curso bifásico: se detecta bial por herpes simple o el herpes zoster metamérico
durante la infección aguda y ai final de la enfer también pueden observarse durante este período.
medad. No se comprueba antigenemia p24 con
niveles de T CD4-I- por encima de 500 cél/iiL. Su Enfermedad moderada
detección en un paciente asintomático es un mar Se asocia con recuentos de linfocitos T CD4+
cador biológico de progresión de la enfermedad. de 200 a 400 cél/jiL. Estos pacientes pueden
Los anticuerpos antiproteínas del core (p l7 y p24) presentar manifestaciones clínicas de enfermedad
356 □ Segunda parte - Infecciones virales
constitucional (diarrea recurrente, pérdida de peso, de Kaposi. El examen del fondo de ojo habitual-
fiebre intermitente, artromialgias y fatiga cróni mente revela exudados algodonosos asociados
ca), trastornos cutáneos (herpes simple recidivan con la retinopatía por HIV-1.
te, candidiasis oral o vaginal recurrente, derma Durante esta etapa también pueden presentarse
titis seborreica, foliculitis pruriginosa, leucoplasia cuadros de mononeurítis, mielitis, parálisis de pares
oral vellosa y erupción por VZV). craneanos y neuropatía periférica. Más raramente
En este estadio también son frecuentes las in se comprueban accidentes isquémicos transitorios.
fecciones bacterianas recurrentes, como sinusi Desde el pumo de vista endocrino, se observan
tis, bronquitis o neumopatías, cuyos agentes irregularidades menstruales, manifestaciones de
causales suelen ser Strepiococcus pneum oniae, insuficiencia suprarrenal crónica, hipogonadismo
H aem ophilus influcnzae, M oraxella catarrhalis e hipotiroidismo.
y M ycoplasm a pneum oniae. Son frecuentes la anemia, la leucopenia con
neutropenia y la trombocitopenia, como también
Enfermedad tardía las neoplasias asociadas con la infección por HPV,
Por lo general la padecen aquellos enfermos com o el carcinoma cervical invasor en la mujer
con recuentos de linfocitos T CD4+ de 50 a 200 y el carcinoma de recto en varones homosexua
cél/|iL . Estos individuos suelen presentar con les.
mayor frecuencia síntomas constitucionales y se Durante esta etapa algunos pacientes pueden
encuentran en alto riesgo de desarrollar ciertas desarrollar un síndrome urémico progresivo con
infecciones oportunistas, com o neumonía por proteinuria, lo que se denomina nefropatía asociada
Pneumocystis jiroveci, encefalitis por Toxoplasma con el HIV-1, que desemboca en una glomerulo-
gondii, criptosporidiosis, isosporosis, tuberculo nefritis rápidamente progresiva, la cual provoca
sis diseminada, candidiasis esofágica y sarcoma una insuficiencia renal terminal en 4 a 6 meses.
• Síntomas constitucionales, como fiebre de bada (durante más de 30 días, intermitente o cons
más de 38,5®C o diarrea de más de un mes de tante).
evolución.
Categoría C DIAGNÓSTICO
Incluye los siguientes trastornos clínicos, que Se basa en las m anifestaciones clínicas, la
corresponden a enfermedades conocidas como epidemiología, las pruebas de laboratorio que
«marcadoras» de un caso de sida: identifican la infección por HIV. Estas ültimas
• Infecciones bacterianas múltiples, graves o son:
recidivantes. 1. Determinación de anticuerpos específicos.
• Candidiasis esofágica o pulmonar (tráquea, 2. Detección del antígeno viral p24.
bronquios o pulmón). 3. Cultivo viral.
• Carcinoma cervical invasor, 4. Detección de los ácidos nucleicos.
• Coccidioidomicosis diseminada o extrapul-
monar. Determinación de anticuerpos específicos
• Criptococosis extrapulmonar. Se emplean dos tipos de métodos: aquellos que
• Criptosporidiosis intestinal crónica (de más por su bajo costo y ejecución sencilla se utilizan
de un mes de duración). com o pruebas de detección o screening y prue
• Isosporosis intestinal crónica (de más de un bas confirmatorias. Las primeras, por su menor
mes de evolución). especificidad, requieren confirmación mediante
• Enfermedad por citomegalovirus (excepto la métodos más específicos, denominados pruebas
localizada en el hígado, el bazo o los ganglios confirmatorias, que no pueden utilizarse para
linfáticos). evaluar un gran número de personas por su ma
• Encefalopatía relacionada con el HIV-1. yor costo y complejidad técnica.
• Úlcera mucocutánea crónica (de más de un Entre las pruebas de detección la más utilizada
mes de evolución) por virus del herpes simple, o es el enzimoinmunoensayo indirecto (ELISA) y
bronquitis, neumonía o esofagitis. entre los confirmatorios se encuentran el ELISA
• Histoplasmosis diseminada o extrapulmonar. específico para proteínas anti-p24 y anti-gp41,
• Sarcoma de Kaposi. el Western blot, la inmunofluorescencia indirec
• Linfomas primarios de cerebro. ta (IFI) y la radioinmunoprecipitación (RIPA).
• Linfoma de Burkitt.
Enzimoinmunoensayo (ELISA)
• Linfomas inmunoblásticos.
Detecta anticuerpos anti-HIV-1 globales de tipo
• Infección por M ycobacterium tuberculosis,
IgG. Cuando una muestra da resultado positivo
pulmonar o diseminada.
se la repite; si el resultado vuelve a ser positivo,
• Infección diseminada o extrapulmonar por el
corresponde llevar a cabo una prueba confir
com plejo M ycobacterium avium o M yco b a c’
matoria, cuyo resultado podrá ser positivo o ne
ten u m kansasii.
gativo. En este último caso el resultado del ELISA
• Infección diseminada por otras especies de se considerará falso positivo.
micobacterias atípicas. También puede dar falsos negativos, como ocu
• Neumonía por Pneum ocystis jiroveci. rre en las etapas finales de la enfennedad y en la
• Bacteriemia recurrente por Salm onella. fase inicial de la infección cuando aún no se pro
• Leucoencefalopatía multifocal progresiva. dujo la seroconversión. A pesar de su elevada
• Toxoplasmosis cerebral. especificidad y sensibilidad (99%), son necesa
• Neumopatías bacterianas recurrentes. rias pruebas confirmatorias.
• Síndrome constitucional por H IV -l, que in Actualmente se han desarrollado ensayos de
cluye pérdida de peso persistente (>10%), dia- ELISA de cuarta generación que incluyen antíge-
iTea crónica (al menos dos deposiciones blandas nos específicos adicionales (p24) y que son de
al día durante más de 30 días) o fiebre compro suma utilidad en los bancos de sangre.
C apitulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (HlV/sida) □ 359
específicas, aunque los pacientes presentan con bacterium tuberculosis no alcanza niveles endé
frecuencia hipoxemia y elevación de la LDH en m icos, com o en los EE.UU., la pandemia causa
relación con la gravedad del proceso. da por el HIV ha provocado un notable incremen
£l centellograma con galio 67 ha demostrado to del número de casos.
una alta sensibilidad, pero carece de especifici Los pacientes infectados por HIV que tienen
dad. Puede ser de utilidad en aquellos pacientes alta probabilidad de enfermar de tuberculosis son
sintomáticos sin evidencias de alteraciones en la los que han padecido infección previa por el ba
radiografía de tórax. cilo de Koch, los adictos a drogas por vía intra
El tratamiento de elección es la combinación trime- venosa, los residentes en zonas pobres con alto
loprima-sulfamctoxazol, en dosis de 20 mg/kg/día índice de coinfección HlV/tuberculosis y quie
de trimetoprima y 100 mg/kg/día de sulfameto- nes han mantenido un contacto estrecho con en
xazol, en 4 dosis diarias por vía oral o intravenosa. fermos tuberculosos.
Como alternativa se usa pentamidina, en dosis En los individuos infectados por el retrovirus
de 3 a 4 mg/kg/día, en una única aplicación dia la tuberculosis por lo general es consecuencia de
ria por vía intravenosa, durante 21 días. la reactivación de una infección tuberculosa la
En las formas moderadas o graves están indi tente.
cados ios corticosteroides, cuyo uso ha provoca Con frecuencia las formas de presentación de
do una reducción notable de la mortalidad. Sus la tuberculosis relacionada con el sida son atí-
efectos se basan en la reducción del exudado in picas; hay una prevalencia elevada de localiza
flamatorio alveolar. ciones extrapulmonares, anergia cutánea a la PPD
Con frecuencia relativa se presentan efectos ad e infiltrados difusos en la radiografía de tórax.
versos atribuibles a la terapéutica implementada ta Cuando la enfermedad se presenta en etapas
les como reacciones cutáneas, trastornos digestivos, tempranas de la inmunosupresión las manifesta
elevación de las transaminasas séricas, hipoten ciones clínicas no difieren de las formas clásicas
sión arterial, fiebre, elevación de la urea plasmática, que afectan a individuos inmunocompetentes.
leucopenia, e hiperglucemia o hipoglucemia. Son formas pleuropulmonares que cursan con fie
Los pacientes cuyos niveles de linfocitos T CD4+ bre, tos productiva, pérdida de peso, disnea y
descienden por debajo del límite de 200 cél/iiL anorexia. El dolor torácico sugiere compromiso
deben recibir profilaxis primaria. Quienes hayan pleural. La radiografía de tórax puede mostrar
superado un episodio de neumocistosis habrán infiltrados difusos o focales; las lesiones cavila
de recibir, de todos modos, un esquema de profi rlas son menos frecuentes. La presencia de adeno-
laxis secundaria. Ambas formas de profilaxis, pri patías mediastínicas o de derrame pleural sugie
maria o secundaria, pueden realizarse con trime- re el diagnóstico de tuberculosis. Algunos pacien
toprima-sulfametoxazol, en dosis de 160 mg de tes con diagnóstico confirmado de tuberculosis
trimetoprima/800 mg de sulfametoxazol, 3 veces tienen radiografías de tórax normales. Otros, sin
por semana, o pentamidina intravenosa en dosis gran deterioro inmune, presentan imágenes radio
de 4 mg/kg/mes; también puede emplearse dap- lógicas más típicas, con infiltrados lobulares su
sona, en dosis de 100 a 300 mg/semana, o pentami periores que pueden evolucionar a la cavitación.
dina en aerosol en una nebulización mensual de El com ienzo de los síntomas suele ser insidio
300 mg (ver también el capítulo Neumocistosis). so y es común que éstos precedan al diagnóstico
en varias semanas o meses. El diagnóstico dife
Mycobacterium tuberculosis rencial con la neumocistosis u otras infecciones
La tuberculosis, tanto en sus formas pulmo oportunistas pulmonares a veces es dificultoso.
nares como en las extrapulmonares o disemina Cuando la tuberculosis se presenta en estadios
das, tiene una incidencia elevada en pacientes más avanzados de la enfermedad por HIV los sín
infectados por el virus de la inmunodeficiencia tomas son inespecíficos: fiebre prolongada, dia
humana. Es particularmente frecuente en aque rrea, pérdida de peso, adenomegalias, hepatoes-
llas regiones en las que la tuberculosis es endé plenomegalia y compromiso del sensorio. En es
mica. En países en los que la infección por Myco- tas formas diseminadas el compromiso pulmonar
362 □ Segunda parte - Infecciones virales
puede no ser ostensible. Si se presenta, se apre bacteriológicos, con una asociación de 4 fármacos
cian imágenes de tipo miliar u opacidades exten mayores (isoniacida, rifampicina, pirazinamida,
sas confluentes que afectan campos medios e in y estreptomicina o etambutol) durante dos me
feriores. ses. Luego, si no hay datos de resistencia de la
La tuberculosis debe incluirse en el diagnósti cepa, se continúa con una etapa de consolidación
co diferencial de los pacientes con compromiso con dos fármacos (habitualmente isoniacida y
pulmonar infectados por el HIV. Por lo tanto, la rifampicina) hasta completar 9 m eses de trata
búsqueda exhaustiva del bacilo de Koch es obli miento. En aquellos casos en que por algún mo
gatoria. tivo no puedan utilizarse la isoniacida o la
En los pacientes en estadios tempranos de la rifampicina, el tratamiento se prolonga hasta los
enfermedad HlV/sida la metodología diagnóstica 18 meses (ver también el capítulo Tuberculosis).
no d ifiere de la utilizada en los p acientes
inmunocompetentes: exámenes directos y culti Neumonías bacterianas
vos de esputo, lavado broncoalveolar, líquido Las neumonías bacterianas (NB) son compli-
pleural, y biopsias de pleura, pulmón o ganglios, caciones pulmonares frecuentes en el paciente
a lo que se suma el examen liistopatológico de HIV positivo y se asocian con importante morbi-
estas últimas. mortalidad. Pueden presentarse en cualquier
En las formas diseminadas se agregan los cul momento de la historia natural de la infección, a
tivos de orina, LCR, líquido peritoneal y materia v eces en forma independiente del deterioro
fecal. La aspiración con aguja fina de una adeno- inmunitario y en muchos casos constituyen la
patía es una alternativa aceptable de la biopsia primera manifestación clínica. Desde 1993 los
ganglionar. Centros de Prevención y Control de Enfermeda
La práctica rutinaria de hem ocultivos para des de los EE.UU. (CDC) incluyeron a la NB re
micobacterias ha sido altamente rentable en es currente como un evento definitorio de sida. Los
tos pacientes, dado lo frecuente de las bacilemias. factores que inciden en la aparición de NB en los
Los hemocultivos pueden ser positivos aun en pacientes HIV positivos son: la disfunción celu
pacientes sin evidencia de compromiso pulmonar lar propia de la infección por el retrovirus a ve
o sospecha de tuberculosis. ces sin correlación con el recuento de linfocitos
Los métodos de diagnóstico radiométricos T CD4+; las alteraciones de la inmunidad humo
(BACTEC) han acortado el tiempo necesario para ral que predisponen a las infecciones bacterianas,
el desarrollo de M ycobacterhim tuberculosis a en particular a aquellas causadas por microor
sólo 10 a 14 días, lo que permite realizar más ganism os capsulados com o S. p n eu m o n ia e y
rápidamente las pruebas de sensibilidad a los H. influenzae; el consumo de drogas especialmente
fármacos antituberculosos. inhalatorias, como así también el uso de irritantes
La prueba cutánea con tuberculina (PPD) debe químicos y el humo del cigarrillo son también fac
practicarse a todos los pacientes. Suele ser posi tores predisponentes debido al daño directo sobre
tiva en los enfermos en etapas tempranas de la el epitelio respiratorio e independientes del esta
infección por el retrovirus. En aquellos pacien do de la inmunidad. En relación al consumo de
tes con enfermedad avanzada la prueba será ne alcohol, los hallazgos son contradictorios. La
gativa, por lo que en estos casos carece de utili neutropeniacomo consecuencia de la infección por
dad diagnóstica. HIV, o asociada a la TARGA o a otros fármacos
Cuando existe compromiso del SNC, la TC del utilizados en el tratamiento de las infecciones opor
encéfalo puede mostrar im ágenes de aspecto tunistas, a la invasión de la médula ósea por dife
nodular con refuerzo del contraste «en anillo», rentes patógenos o neoplasias o a mecanismos
lo que obliga al diagnóstico diferencial con la autoinmunes también aparece como un factor fa
toxoplasmosis cerebral. vorecedor de la NB. La esplenectomía, la desnu
Cuando la sospecha clínica de la enfermedad trición, el antecedente de hospitalizaciones por
sea firme el tratamiento deberá iniciarse de in neumonía y un índice de Kamofsky bajo, también
mediato, aun sin los resultados de los exámenes se relacionan con mayor incidencia de NB.
Capítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodefíciencia humana (HlV/sida) o 363
El cuadro clínico suele ser de comienzo agu relación con el grado de inmunodepresión; la
do o subagudo con fiebre, escalofríos, tos pro obtención de desarrollo en hemocultivos es más
ductiva con expectoración mucopurulenia, dolor frecuente en aquellos individuos con recuento de
torácico de tipo pleuríiico, la denominada «pun linfocitos T CD4 + < 200 cél/iiL. En la NB por S.
tada de costado», asociado o no a disnea. El exa pneum oniae la positividad ocurre aproximada
men físico puede revelar desde el clásico síndro mente en el 50% de los casos y en aquellas pro
me de condensación hasta ausencia de signos vocadas por H. influenzae alcanza al 15%. La
semiológicos de compromiso pulmonar. En rela fibrobroncoscopia con LBA se realizará en aque
ción con las diferencias clínicas más notables llos casos en que la evolución no es la esperada o
entre NB por Streptococcus pneum oniae en el ante la sospecha de otros microorganismos, como
paciente HIV seropositivo y seronegativo, la bac- por ejem plo M ycobacterium tuberculosis. Ai
leriemia es significativamente más frecuente en igual que en el inmunocompelente, el microor
el paciente HIV positivo. Esta alta frecuencia de ganismo que se identifica con mayor frecuencia
bacieriemia se comprueba cualquiera sea el mi es Streptococcus pneum oniae: le siguen en or
croorganismo considerado. Un recuento de linfo- den de frecuencia, H a em o p h ilu s in flu en za e,
citos T CD4+ < 100 cél/jiL, la presión parcial de Staphylococcus aureus, M oroxella catarrhaüs y
oxígeno < a 70 mmHg, un índice de Kamofsky Pseudom onas aeruginosa. Un estudio realizado
< 50, un recuento de neutrófilos < 1000 c€M\\L y en el laboratorio de bacteriología del Hospital de
signos de sepsis con hipotensión, coagulopatía y Infecciosas «F. J. Muñiz» que incluyó 1.384
falla multiorgánica son indicadores de mal pro muestras respiratorias se obtuvo el desarrollo de
nóstico y se asocian con alta mortalidad. patógenos bacterianos en 296 (21,39%), con un
Las anormalidades radiológicas son también 10,4% de los aislamientos con más de un pató
mucho más comunes entre los HIV positivos. Las geno. Los microorganismos más comunes tam
más frecuentes son las opacidades lobulares y bién fueron H. influenzae y S. pneum oniae que
segmentarias, aunque puede haber infiltrados incluyeron el 55,8% de las muestras, pero con
intersticiales uni o bilaterales, consolidaciones 30,9 % de pacientes en los que se identificó
multilobulares y compromiso bilateral (bronco- H. influenzae. En esta serie, la identificación de
neumonfas) o infiltrados alvéolo-intersticiales, R hodococcus equi alcanzó el 2,4 % de las mues
especialmente en neumonías porH. influenzae. La tras analizadas. En un estudio realizado en la di
incidencia de derrame pleural asociado con neu visión B del Hospital de Infecciosas «F. J. Muñiz»
monía en esta población de pacientes es mayor en se evaluaron 333 episodios de NB en 8 años pos
comparación con la población general. En la ma teriores a la introducción de la TARGA (1997-
yor parte de los casos, el derrame pleural para- 2004). Las NB representaron el 18,5% de los
neumónico acompaña a la neumonía por Strep- diagnósticos de egreso durante ese período. La
íococais pneumoniae o Staphylococcus aureus. media de linfocitos T CD4 + en esta cohorte fue
El diagnóstico se confirma por los estudios de 80 cél/pL. Se logró el aislamiento e identifi
microbiológicos. Para tal fin, deberá efectuarse cación del agente etiológico en 188 muestras de
la búsqueda de microorganismos en el esputo, esputo y LBA (56,5%). Se identificó S. pneu
líquido de lavado broncoalveolar (LBA), hemo- m oniae en 69 muestras (20,7%), H. influenzae
cultivos y líquido pleural en caso de derrame. El en 29 (8,7% ) y Staphylococcus aureus en 27
examen microbiológico del esputo es uno de las (8,1% ). P seudom onas aeruginosa y A cineto-
estudios más valiosos para llegar a un diagnósti b a c te r b a u m a n n ii resultaron los patógenos
co definitivo. Sin embargo, en la práctica diaria intranosocomiales identificados con mayor fre
sólo permite el diagnóstico en la tercera parte de cuencia. En esta serie, la mortalidad por NB fue
los casos. La escasa producción de esputo y los del 3,3%.
tratamientos previos con antibióticos podrían ser Tratamiento de elección para la neumonía por
algunas de las causas de la poca posibilidad de Streptococcus pneum oniae:
obtener el diagnóstico etiológico. El porcentaje * Paciente ambulatorio: amoxicilina 1 g por vía
de hemocultivos positivos es variable y está en oral (VO) cada 8 horas.
I
364 □ Segunda parte - Infecciones virales
dad en aquellos enfermos con fiebre prolongada patógenos pulmonares. La pancitopenia, que se
y diarrea de causa no explicada. La bacteriemia observa habitualmente, se asocia con la invasión
por MAI es persistente y los hemocultivos con de la médula ósea por el hongo.
técnicas de centrifugación/lisis son positivos en Los hemocultivos con técnica de centrifuga-
el 95% de los casos de infecciones diseminadas. ción/lisis y los mielocultivos son positivos en
Otros especímenes útiles para el aislamiento de gran número de casos. En la mitad de los pacien
las micobacterias atípicas son el lavado broncoal- tes, H. capsulatum puede visualizarse en los frotis
veolar, el esputo, las heces, así como la aspira de sangre periférica o médula ósea teñidos con
ción o las biopsias de hígado, médula ósea o Giemsa.
ganglios. Los hemocultivos positivos confirman Más del 80% de los pacientes con diagnóstico
el diagnóstico de enfermedad invasora y habitual de histoplasmosis diseminada asociada con sida
mente diseminada. Los cultivos positivos de se presentan lesiones cutáneas y mucosas. El raspa
creciones respiratorias o materia fecal preceden do y la biopsia de éstas, con el examen micros
comúnmente a la bacteriemia. cópico directo, los cultivos y el estudio histopa-
El complejo MAI a menudo es resistente a los tológico, son métodos sencillos que permiten al
luberculostáticos de primera línea (isoniacida, canzar el diagnóstico con rapidez.
rifampicina, pirazinamida y estreptomicina), pero La serología tiene poco valor diagnóstico, ya
muestra una sensibilidad variable in vitro a etam- que sólo un 25% de los pacientes tiene anticuer
butol, rifabutina, clofazim ina, ciprofloxacina, pos específicos demostrables; en cambio, la exis
ofloxacina, claritromicina y azitromicina. tencia de antigenemia o antigenuria se detecta con
En la actualidad se utilizan esquemas que com relativa frecuencia mediante técnicas de radioin-
binan 2 o 3 de los antimicrobianos citados. Habi munoensayo.
tualmente se asocian etambutol, amikacina y El tratamiento inicial se realiza con anfotericina
ciprofloxacina u ofloxacina, en esquemas de 3 B en dosis de 0,5 a 0,6 mg/kg/día por vía intra
meses de duración. La amikacina puede reem venosa durante 6 semanas o itraconazol, en do
plazarse por alguno de los nuevos macrólidos sis de 400 mg/día por vía oral durante 8 sema
(claritromicina o azitromicina) o también por nas. Luego se pasa a un régimen de profilaxis
cicloserina o clofazimina. secundaria (terapia supresora crón ica) con
itraconazol, 200 mg/día o anfotericina B, en una
Histoplasma capsulatum dosis semanal de 0,5 a 0,8 mg/kg (ver también el
La histoplasmosis es una micosis endémica que capítulo Histoplasmosis).
se presenta con frecuencia en pacientes con sida.
Es la consecuencia de la reactivación de una in Compromiso del aparato digestivo
fección latente y es mucho más grave en pacien Es sumamente frecuente en pacientes con sida.
tes con sida que en portadores de otras inmuno- Entre las causas infecciosas, a los patógenos intes
deficiencias. En la República Argentina es me tinales habituales en varones homosexuales y bi
nos frecuente que la criptococosis. sexuales (Shigella, Salm onella, Giardia lamblia
Las manifestaciones clínicas son las propias de y Entam oeba histolytica) se agregan las enfer
una enfermedad diseminada: fiebre prolongada, medades de transmisión sexual, que pueden cau
pérdida de peso, sudoración nocturna, tos y dia sar enfermedad anorrectal (gonorrea, sífilis, her
rrea. En el examen físico se detecta hepatoes- pes simple, infección por HPV y por Chlamydia
plenomegalia, adenomegalias y lesiones cutáneas trachom atis). Además de los patógenos mencio
diseminadas de localización predominante en la nados, se suman aquellas infecciones oportunis
cara y el tronco. Éstas suelen ser asintomáticas, tas asociadas con la inm unodeficiencia (can-
de aspecto poco llam ativo, papulocostrosas, didiasis, criptosporidiosis, isosporosis y cito-
acneiformes, moluscoides o ulcerosas. megalovirosis).
La radiografía de tórax muestra infiltrados Entre las neoplasias, son comunes el sarcoma
intersticiales reticulonodulillares, bilaterales y de Kaposi, los linfomas de alto grado de malig
difusos, indistinguibles de los que provocan otros nidad y los carcinomas.
366 Q Segunda parte - Infecciones virales
Si bien la imagen endoscópica es bien caracte Entre las afecciones tumorales merece mencio
rística, el diagnóstico de la candidiasis esofágica narse el sarcoma de Kaposi. Las imágenes endos-
se basa en el examen m icológico directo y el cul- cópicas son sugestivas de esta afección y están
livo del material obtenido por cepillado de las constituidas por máculas, nódulos o tumores de
lesiones, también por biopsia de la mucosa y la color rojo vinoso.
submucosa. En las ulceraciones de causa viral el
efecto citopático se observa tanto en las de etio Compromiso intestina!
logía herpética como en las atrlbuibles a CMV. En diferentes estudios se ha estimado que en
En consecuencia, el diagnóstico deberá confirmar tre el 30% y el 80% de los pacientes con sida
se mediante el estudio por inmunofluorescencia desarrollarán diarrea en algún momento de la evo-
con anticuerpos monoclonales específicos para lución de la enfermedad.
HSV (tipos 1 y 2) y CMV. También hay que tener El compromiso intestinal es más frecuente en
en cuenta la posible presencia de ulceraciones tre los hom osexuales y bisexuales que en los
idiopáticas asociadas con la infección por HÍV-1. ADIV, quizá com o resultado de los numerosos
El tratamiento de la candidiasis esofágica con patógenos que se transmiten a través de las prác
siste en la administración de ketoconazol, 200 a ticas sexuales de tipo oral-anal. No obstante, las
400 mg/día o fluconazol, 100 a 200 mg/día du causas son variadas y pueden ser infecciosas o
rante 14 días. Si se indica ketoconazol, su mayor no infecciosas. Entre los agentes infecciosos se
absorción en medio ácido indica la conveniencia incluyen protozoos, bacterias, hongos y virus.
de administrarlo lejos de las comidas. En gene
ral es bien tolerado, pero puede provocar hepato- Criptosporidiosis. Es provocada por Cryptos-
toxicidad con elevación de las enzimas hepáti poridium parvum , un protozoo de distribución
cas, además de interacciones medicamentosas, en universal que parasiia las microvellosidades del
especial con la rifampicina y ios inhibidores de epitelio del intestino delgado. En sujetos inmu-
la proteasa. El fluconazol, en cambio, es soluble nocompetentes produce una gastroenteritis agu
en agua, se absorbe bien por vía oral, indepen da y autolimitada, pero en personas inmunocom-
dientemente de los alimentos, y su vida media es prometidas causa una diarrea crónica, debilitan
más prolongada que la del ketoconazol..Tiene te, intensa y a veces mortal. La patogenia de la
menos efectos adversos y es más eficaz. diarrea por Cryprosporidium aún no está bien
La anfotericina B, en dosis de 0,3 mg/kg/día, determinada, pero el síndrome de malabsorción,
se reserva para aquellos casos de enfermedad que se produce en ausencia de reacción infla
grave (afagia) o de falta de respuesta al tratamien matoria, sugiere que podría tratarse de una dia
to mencionado antes. rrea secretora o provocada por alguna toxina.
Para la esofagitis herpética se utiliza aciclovir, Si bien este coccidio infecta preferentemente
en dosis de 2 a 4 g/día por vía oral o 10 mg/kg al yeyuno, se lo ha encontrado a lo largo de todo
cada 8 horas IV durante 10 a 14 días. Este esque el tracto gastrointestinal incluso en la vía biliar,
ma se continua con una dosis de mantenimiento donde causa colangitis.
de 400 a 800 mg/día por vía oral. La esofagitis El diagnóstico de criptosporidiosis se confir
por CMV se trata con ganciclovir, 5 mg/kg cada ma por la visualización de los quistes del micro
12 horas durante 21 días y ulteriormente se organismo, en muestras de materia fecal recién
instaura profilaxis secundaria. emitida o en biopsias de intestino delgado, me
Como alternativa, en ambos casos de esofagitis diante la coloración de Kinyoun. En la materia
virales se puede recurrir al foscarnet, en dosis ini fecal no se observan leucocitos, tampoco se ha
cial de 60 a 120 mg/kg cada 12 horas durante 14 lla leucocitosis periférica.
a 21 días. Hasta el presente no hay un tratamiento efecti
Las lesiones idiopáticas, tamo de la orofaringe vo para esta parasitosis. Sin embargo, la espira-
como del esófago, suelen responder a la talido- micina y la paromomicina pueden provocar al
mida; de no haber respuesta, los corticosteroides guna mejoría.
constituyen una alternativa eficaz.
368 □ Segunda parte - Infecciones virales
¡sosporosis. Es causada por Isospora belli. El tinal, constituido por hepatoesplenom egalia
cuadro se caracteriza por una diarrea intensa, con adenom egalias, invasión de la médula ósea )
dolor abdominal» ñatulencia y malabsorción. El bacteriemia con hemocultivos positivos.
microorganiso, que completa su ciclo sexual en El diagnóstico se confirma por biopsia, en I
los enterocitos, invade la mucosa del intestino que se visualizan los bacilos en el interior de los!
delgado y destruye el ribete en cepillo. El diag macrófagos intestinales.
nóstico se basa en la observación de los ooquistes El tratamiento consiste en la asociación de 3 ,4
en la materia fecal o en material obtenido por o 5 fármacos, de acuerdo con el antibiograma,
aspiración duodenal. No se observan leucocitos hasta 6 a 12 meses después de obtenido el con
en las heces, aunque suele haber cristales de trol clínico y bacteriológico de la enfermedad (ver
Charcot-Leyden. La leucocitosis es poco frecuen atrás).
te, pero suele haber eosinofiíia periférica.
El tratamiento consiste en la administración de Salm onelosis. Una de las causas de bacteriemia
trimetoprima-sulfametoxazol. En los alérgicos a recurrente en pacientes con sida es Salmonella
las sulfonamidas se utiliza la pirimetamina, 50 a e/tteritidis. Se manifiesta por fiebre prolongada
75 mg/día más un suplemento de ácido folínico con hem ocultivos positivos. El tratamiento se
durante 10 a 14 días. realiza con fiuoroquinolonas: ciprofloxacina, en
dosis de 500 mg 2 veces por día durante 14 días
Microsporidiosis. El %éntro M icvosporidium es y se continúa con profilaxis secundaria.
la causa del 30% de los casos de diarrea crónica
en pacientes con sida. Son parásitos intracelulares C am pilobacteriosis. Es provocada por Campy-
obligados que invaden las vellosidades del intes lobacterjejuni, un bacilo gramnegativo, microae-
tino delgado; pero también han sido descriptos co rófilo, que causa fiebre y diarrea con bacteriemia.
mo causantes de hepatitis, peritonitis y queratitis.
Debido a la localización intracelular y al tama C o litis seu d o m em b ra ñ o sa , es causada por
ño pequeño de estos microorganismos, el diag C h s tr id iu m d ifficile, un bacilo grampositivo,
nóstico es difícil. Se llevan a cabo biopsias del esporulado, que se asocia con el uso de antibió
intestino delgado que se examinan con el micros ticos. Se la debe considerar en el diagnóstico dife
copio electrónico. rencial de la diarrea asociada con sida. El diag
En la mayoría de los casos descriptos se iden nóstico se confirma por el hallazgo de su toxina
tificó Enterocytozoon bieneusi. El microorganis en las heces filtradas. El tratamiento incluye la
mo predomina en el yeyuno, donde se observa supresión de la antibioticoterapia y la administra
atrofia y fusión de las vellosidades, con elon ción de metronidazol o vancomicina por vía oral.
gación de las criptas e infiltrado inflamatorio en
el que predominan linfocitos. C itom egalovirosis. El citomegalovirus es cau
El tratamiento se basa en la administración de sa de ulceraciones en la región rectosigmoidea.
albendazol 400 mg 2 veces por día. El diagnóstico se confirma con la endoscopia y
biopsia de las lesiones, en las que se observan
O tras protozoosis. Otros protozoos completan las típicas inclusiones virales, infiltrados perivas-
el grupo de parásitos que con mayor frecuencia culares de polim orfon u cleares y trom bosis
se identifican en los pacientes con sida y diarrea vasculares (enteritis necrosante). El tratamiento
crón ica tales com o E n ta m o e b a h is to ly tic a , no difiere del que se emplea para otras localiza
Giardia lam blia y Blastocystis hom inis. ciones de este patógeno.
M icobacteriosis. El complejo M ycobacterium H erpes sim ple. Es producido por el virus ho
avium es una causa frecuente de infecciones mónimo, que coloniza el área anorrectal de ho
entéricas en pacientes con sida. El cuadro clíni mosexuales y bisexuales. Se asocia con la apari
co se caracteriza por fiebre, pérdida de peso, ción de ulceraciones perianales profundas, que
malabsorción, diarrea y compromiso extraintes- causan dolor intenso, tenesmo y síntomas urina
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inm unodeficiencia humana (HlV/sida) □ 369
rios bajos. El tratamiento se basa en el uso de hepática ayudará más al diagnóstico que el estu
aciclovir. dio colangiográfico.
En la mayoría de los casos de compromiso de
Enteropatía asociada con el sida. Es un diag la vía biliar intrahepática, los estudios por imá
nóstico de exclusión que se relaciona con la in genes revelan la dilatación del tracto biliar. Una
fección del tracto gastrointestinal por el propio dilatación marcada de la vía biliar es una indica
HíV-1. El virus invade linfocitos y monocitos de ción para la realización de la colangiografía re
la lámina propia del intestino, lo que provoca dia trógrada, que permitirá la toma de biopsias para
rrea con esteatorrea y síndrome de malabsorción. cultivos y estudio anatomopatológico.
El tratamiento de la diarrea asociada con el sida En muestras de la mucosa duodenal o de la vía
es el empleado para erradicar el agente causal. La biliar la histopatología suele revelar un infiltra
terapéutica no específica incluye difenoxilato, do inflamatorio crónico; también puede identifi
loperamida y hace poco tiempo se incorporaron carse CMV o Cryptosporidium. En forma oca
talidomida y octreótido, un octapéptido análogo sional se observan neoplasias de la región de la
de la somatostatina, empleados en la diarrea incoe ampolla de Vater.
rcible por Cryptosporidium o Microsporidium.
Compromiso pancreático
Compromiso hepatobiliar N o es frecuente, aunque en algunos casos se
La presencia de hepatomegalia o la elevación comprueba hiperamilasemia, habitualmente asin-
de las enzimas hepáticas en el suero son hechos tomática.
habituales en pacientes con sida. Sin embargo, el Desde que comenzó la terapéutica con ddl y
compromiso hepatobiliar no ha sido destacado en ddC, la aparición de pancreatitis ha ido en au
la literatura con la misma frecuencia y profundi mento debido a un fenómeno de hipersensibili-
dad con que se ha hecho referencia al compromi dad a esos fármacos. También puede presentarse
so del tubo digestivo. Los pacientes con sida es durante el tratam iento de la neum onía por
tán expuestos a gran variedad de factores capa Pneum ocystis jiroveci con cotrimoxazol o penta-
ces de alterar la función hepática, como fármacos, midina, o debido a infecciones diseminadas por
dieta con d eficien cia de proteínas, hipoxia, C ryptosporidium o CMV.
coinfección por virus de las hepatitis B y C, trans Es posible el compromiso tumoral dei páncreas,
fusiones y procedimientos quirúrgicos. por sarcoma de Kaposi o linfomas no Hodgkin.
El compromiso del tracto biliar se evidencia
por dolor en el hipocondrio derecho, fiebre, vó Compromiso neurológico
mitos y aumento de la fosfatasa alcalina. El compromiso neurológico, muy frecuente en
Las causas más comunes de enfermedad hepa pacientes con infección por HIV-1, suele afectar
tobiliar en los pacientes con sida son la colecistitis tanto el sistema nervioso central (SNC) como el
alitiásica y la colangiopatía asociada con el sida. periférico (SNP).
La colecistitis alitiásica es habitualmente se Los mecanismos patogénicos se originan en la
cundaria a la infección por C ryptosporidium o propia acción del HIV-1 en forma directa o indi
CMV, o a la invasión directa de la mucosa biliar recta, o en las infecciones oportunistas. Ambos
por el propio HIV-1. A veces requiere tratamien factores no son mutuamente excluyentes y en al
to quirúrgico. gunos casos pueden darse en forma conjunta, in
La colangiopatía asociada con el sida está vin cluso con más de una infección oportunista al
culada con distintos trastornos del tracto biliar, como mismo tiempo.
la estenosis papilar, la colangitis esclerosante y
la estenosis de las vías biliares extrahepáticas. Meníngoencefalitis aséptica
La evaluación del paciente se realiza mediante Se presenta durante la primoinfección y pare
ecografía hepatobiliopancreática, la cual debe ce ser la respuesta inicial del SNC a la agresión
preceder a la colangiografía retrógrada endos- del HIV-L Cuando se hace sintomática, se ca
cópica. Si la ecografía es normal, una biopsia racteriza por un síndrome meningoencefalítico
370 □ Segunda parte - Infecciones virales
9
del lavado broncoalveolar y orina. Los hemocul- antivirales no han dado resultados satisfactorios;
tivos son positivos en más del 80% de los casos; no obstante, se han observado algunas remisio
el método de lisis/centrifugación es de elección. nes asociadas con la terapia antirretroviral.
La cápsula de C. neoform ans posee antígenos
que constituyen un importante elemento de diag Enfermedad de Chagas
nóstico, tanto por su especificidad como por su Trypanosom a cruzi es causa de encefalitis ne-
sensibilidad. La búsqueda del antígeno capsular crosante multifocal en pacientes con sida. En
puede llevarse a cabo en suero (antigenemia), general se debe a la reactivación de la enferme
LCR (antigenorraquia) u orina (antigenuria). Para dad latente, por lo que es necesario el control de
su determinación se emplea el método de agluti todos aquellos pacientes con serología positiva
nación de partículas de látex sensibilizadas con para la enfermedad de Chagas. También es posi
anticuerpos específicos. El descenso de los títu ble la adquisición de esta enfermedad por vía
los del antígeno tiene valor pronóstico. La TC p o stra n sfu sio n a l. C om o produce im ágenes
muestra un patrón de atrofia cortical, raramente radiológicas de masa ocupante similares a las de
se observan lesiones focales. la toxoplasmosis y los linfomas, hay que incluir
En la actualidad, la asociación de anfotericina la en el diagnóstico diferencial de esos trastor
B con flucitosina se considera el tratamiento de nos. El diagnóstico se confirma por la visualiza-
elección para las formas diseminadas de crip- ción de los amastigotes de T. cruzi en el material
tococosis asociada con sida. Se administran 0,3 obtenido por biopsia de las lesiones focales cere
a 0,5 mg/kg/día de anfotericina B por vía IV y brales, o de los tripomastigotes en el LCR, en
100 mg/kg/día de flucitosina por vía oral, en 4 casos de meningoencefalitis difusa.
tomas, durante 6 a 8 semanas. Si este esquema
no puede utilizarse, se administrará anfotericina Linfomas primarios del $NC
B sola, 0,8 mg/kg/día durante el mismo tiempo. Son tumores de células B que constituyen una
La anfotericina B es nefrotóxica y puede generar complicación tardía de los pacientes con sida. Se
anemia, neutropenia, hipopotasemia, hepatoto- presentan en aquellos enfermos con menos de 100
xicidad y cardiotoxicidad. T CD4+/^iL.
El derivado imidazólico fluconazol, 800 a 1.200 Se trata de tumores m ulticéntricos de gran
mg/día por vía oral o IV es una alternativa. Está malignidad, que se localizan preferentemente en
especialmente indicado en pacientes que no pue los ganglios basales, el cuerpo calloso, el tála
dan recibir anfotericina B, pero además se em mo, la región subependimaria y la sustancia blan
plea para la profilaxis secundaria en dosis de 200 ca periventricular.
a 400 mg/día por vía oral. En la actualidad el sida es el factor de riesgo
más importante para el desarrollo de linfomas
LeucoBncefalopatia multifocal progresiva primarios del SNC. Su incidencia en esta pobla
Es una infección oportunista, propia de ios e s ción contrasta con su rareza en sujetos inmuno-
tadios finales de la enfermedad, causada por el competentes. Se caracterizan por la presencia de
papovavirus JC. Se caracteriza por un deterioro un síndrome de foco neurológico semejante al que
lento pero progresivo de la con cien cia, con provoca la toxoplasmosis, con imágenes simila
incoordinación motora, ataxia y signos focales, res en la TC y la RM. El diagnóstico se confirma
como paresias, afasias y hemianestesias. La TC con la histopatología de muestras obtenidas por
y la RM muestran extensas lesiones en la sustan biopsia estereotáxica, que permite observar las
cia blanca que se caracterizan por no producir células atípicas con disposición perivascular pre
efecto de masa. El diagnóstico de certeza sólo se dominante. La detección del genoma del virus
realiza con la biopsia estereotáxica. La anatomía de Epstein-Barr en el LCR de un paciente con un
patológica revela áreas extensas de desm ieli- cuadro de masa cerebral ocupante es diagnóstica
nización, con alteraciones de los astrocitos y de linfoma primario del SNC. La supervivencia
oligodendrocitos, que pueden mostrar cuerpos es breve luego del diagnóstico.
de inclusión intranucleares. Los tratamientos
V
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (H lV /sida) □ 373
íM
ib
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (HlV/sida) □ 375
células endoteliales grandes, de citoplasma abun de la retina periférica pueden permanecer asinto-
dante, que prolruyen hacia la luz vascular. El máticas o provocar defectos en la visión periférica
estroma circundante suele mostrar cúmulos de llamados «moscas volantes». No se acompaña
neutrófilos y material granular perteneciente a los con dolor ocular ni fotofobia.
bacilos, que se evidencian con la tinción argéntica La acción directa del virus sobre las células de
de Warthin-Siarry. la retina provoca necrosis, que lleva a la pérdida
El principal diagnóstico diferencial de esta en permanente e irreversible de la visión. Las se
fermedad es el sarcoma de Kaposi, cuyas lesiones cuelas dependerán de la precocidad del diagnós
cutáneas y viscerales tienen un aspecto muy simi tico, de la localización de las lesiones (con com
lar. En este sentido es sumamente iltil la histología promiso de la mácula o no) y de la extensión de
que, en el caso de la neoplasia, muestra extrava ¡a necrosis.
sación de hierro y depósitos de hemosiderina. Debido a las dificultades para obtener muestras
El tratamiento de la angiomatosis bacilar se de tejido retiniano para el estudio histopaiológico,
basa en el uso de antibióticos del grupo de los el diagnóstico de retinitis por CMV se realiza
macrólidos. Se utiliza la roxitromicina en dosis mediante el examen oftalmoscópico. Los hallaz
de 600 a 900 mg/día, por vía oral, durante 8 a 12 gos predominantes y característicos de la oftal-
semanas. Una vez lograda la remisión clínica se moscopia son infiltrados perivasculares blanco-
mantendrá un esquema de profilaxis secundaria amarillentos, asociados con hemorragias reti-
con 300 mg diarios. nianas. Hay escasa o nula inflamación vitrea. En
general comienza siendo unilateral y, de no me
Compromiso ocular diar tratamiento, en la mayoría de los casos se hace
El compromiso ocular puede ser una de las pri bilateral.
meras manifestaciones de la progresión al sida. El tratamiento se basa en el uso de ganciclovir,
Deben mencionarse los exudados algodonosos y un inhibidor de la polimerasa del ADN de CMV,
los microinfartos retinianos, característicos de la HSV y VZV, con acción virostática. Para el trata
microangiopatía ocular de! sida; la necrosis reti- miento de inducción se indica en dosis de 5 mg/kg
niana aguda por HSV o VZV; la coriorretinitis cada 12 horas, por vía IV, durante 14 a 21 días.
por Toxoplasma gondii; la coroiditis por Pneumo- Cuando se lo administra muy rápidamente puede
cystis j i w v e d y el compromiso ocular por Cryp- causar flebitis o dolor local. El ganciclovir es un
íococcus neoform ans, M ycobacterium tubercu depresor de la médula ósea; provoca leucopenia
losis, Histoplasma capsulatum. Candida albicans y neutropenia y, con menor frecuencia, plaque-
y Treponema pallidum . Una de las más impor topenia, anemia y eosinofilia. Durante la etapa
tantes y frecuentes es la retinitis por citome- de inducción se requiere un control hematológico
galovirus (CMV) que se describe a continuación. cada 48 a 72 horas. Para la profilaxis secundaria
se administra ganciclovir en una dosis diaria de
Retinitis por CMV 6 mg/kg durante 5 días por semana. No debe ad
En estos pacientes, es la localización más co ministrarse con otros fármacos potencialmente
mún de la citomegalovirosis; las otras, esofágica, m ielotóxicos com o zidovudina, cotrimoxazol,
intestinal, pulmonar, nerviosa, hepática y su pirimetamina, dapsona o anfotericina B.
prarrenal, son menos frecuentes. Se presenta en Como alternativa terapéutica puede utilizarse
pacientes con enfermedad avanzada y deterioro foscarnet; 60 a 120 m g ^ g cada 12 horas como
inmunitario grave (m enos de 100 lin focitos terapia de inducción y 60 a 120 mg/kg/día en
T CD4+/|iL). La retinitis es la consecuencia de dosis única como mantenimiento. El foscarnet
la diseminación del CMV por vía hemática, lue inhibe la polimerasa del ADN de los virus herpes
go de la reactivación de la infección latente. y la transcriptasa reversa del HIV-1. Es nefro-
Aquellos pacientes con lesiones que comprome tóxico, por lo que debe administrarse junto con
ten principalmente la mácula o el nervio óptico un adecuado aporte de líquidos (2 a 3 litros dia
consultan por disminución de la agudeza visual rios). Puede provocar hipocalcemia e hipomag-
o por defectos en el campo visual. Las lesiones nesemia en el momento de la administración, con
376 Q Segunda parte - Infecciones virales
crisis de tetania. Por lo tanto, deberán indicarse dores de la integrasa inhiben la reacción de trans>!
suplementos de calcio y magnesio, y administrar ferencia de la cadena de la integrasa y finalmen- [
el fármaco con lentitud, en no menos de 2 horas. te los antagonistas de los correceptores. Es decir,
También se ha descripto como efecto adverso la de las 6 familias de antirretrovirales, cuatro inhiben
aparición de erosiones en el pene y el escroto. enzimas del ciclo intracelular y dos actúan antes
N o debe administrarse con otros fármacos poten de la entrada del retrovirus a la célula blanco.
cialmente nefrotóxicos, como pentamidina, anfo-
tericina B y aminoglucósidos. Inhibidores de la transcriptasa reversa análogos
de los nucleósidos (ITRN)
Z idovudina (ZDV). También conocida como
TRATAMIENTO
azidolimidina o A2T, la ZDV, es el primer fár
Los retrovirus son un blanco habitualmente maco con el que se demostró alguna actividad
difícil para los fármacos con actividad antiviral. contra el H IV -l. Se sintetizó por primera vez en
Como ya se dijo, estos virus se integran al genoma 1964, com o fármaco antineoplásico, y en 1085
de la célula hospedera, donde pueden permane se demostró su actividad como potente inhibidor
cer en estado de latencia durante períodos pro del HIV-1 en cultivos de células T. En 1986 se
longados. En el caso del HlV-1 el problema se comenzó a utilizar en ensayos clínicos y en marzo
agudiza por su capacidad para infectar distintas de 1987, a 6 años del comienzo de la epidemia,
células y tejidos, de manera especial el SNC al fue aprobado por la FDA, de los EE.UU., para su
que muchos fármacos no pueden acceder en con utilización en pacientes con infección por HIV.
centraciones útiles por su incapacidad para atra Pertenece al grupo de los didesoxinucleósidos,
vesar la barrera hematoencefálica. que son fárm acos inhibidores de la enzima
La complejidad del HIV-1, sumada a la natura transcriptasa reversa; o sea que impiden la trans
leza devastadora de la enfermedad en sí, hace cripción del ARN a ADN viral.
necesario diseñar de la manera más racional po Se absorbe bien en el tracto gastrointestinal y
sible los diversos esquemas terapéuticos dirigi alcanza concentraciones séricas pico dentro de
dos a actuar en las distintas etapas del ciclo de las 0,5 a 1,5 horas. Su vida media es de alrededor
replicación viral. de una hora; en su mayor parte se metaboliza con
Desde diciembre de 2007, se dispone de más rapidez, mediante glucuronización hepática, para
de 20 fánnacos antirretrovirales pertenecientes a dar un metabolito inactivo, el gatz. Se elimina
6 familias con actividad sobre distintas etapas del por vía renal, tanto por filtración glomerular como
ciclo de replicación viral. por secreción tubular. Aquellos fármacos capa
ces de inhibir la glucuronización hepática, como
Fármacos antirretrovirales el probenecid, los AINE y las sulfonamidas, pue
Existen en la actualidad, 6 familias de fárma den prolongar la vida media de la zidovudina y,
cos antirretrovirales aprobados para el tratamiento en consecuencia, modificar su perfil de toxici
de la infección por HIV. Los inhibidores nucleo- dad. La pentamidina, la anfotericina B y la flucito-
sídicos/nucleotídicos de la transcriptasa reversa sina, al ser nefrotóxicas, pueden incrementar los
y los inhibidores no nucleósidos de esta enzima riesgos de toxicidad. Atraviesa bien la barrera
que inhiben la transcripción inversa, un paso ne hematoencefálica y alcanza niveles satisfactorios
cesario para la replicación del genoma viral lue en el LCR, del 55% al 60% de los niveles plasmá
go de la entrada en la célula hospedera. Los inhi ticos. Por esta razón está especialmente indicada
bidores de la proteasa actúan al final del ciclo en pacientes con manifestaciones neurológicas y
intracelular lo que impide el ensamblaje de las psiquiátricas atribuibles al propio HIV-1, inclui
nuevas partículas virales. Los inhibidores de la da la demencia. Esta acción se ejercería debido a
fusión actúan en el primer paso del ciclo de in un efecto directo sobre los monocitos y macró-
fección viral y se unen a las glucoproteínas de la fagos del SNC infectados y de manera indirecta
cubierta del virus necesarias para que éste se ad a través de la inhibición de la neurotoxina o
hiera y penetre en la célula hospedera. Los inhibi linfocina neurotóxica producida por el HIV.
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inm unodefíciencia hum ana (HlV/sida) □ 377
Otros efectos adversos son trastornos gas La zalcitabina deberá utilizarse con precauciónl
trointestinales, toxicidad hepática con elevación en pacientes con trastornos de la función renal.!
transitoria de las transaminasas, alteraciones Tampoco se la empleará junto con otros fármacos
electrolíticas (hipocalcem ia, hipopotasemia e capaces de provocar neuropatía periférica (ddl,
hipomagnesemia), hiperuricemia asintomática y isoniacida, d4T, vincristina).
xerostomía.
D osis y vías de adm inistración. Se administra
Dosis y vías de administración. En individuos por vía oral, lejos de las comidas y en dosis de
de más de 60 kg de peso la dosis es de 400 mg/día 0,75 mg cada 8 horas.
y en los de m enos de 60 kg se administran
300 mg/día. Se presenta en cápsulas entéricas de Estavudina (d4T), La 2 ’,3 ’-didesoxit¡midina
400 mg para administración en una sola dosis al también es trifosfatada dentro de la célula, pero
día. por su efecto más reducido sobre el metabolismo
de las timidinas genera menor toxicidad hemática.
Zalcitabina (ddC). La 2 \ 3 ’-didesoxicitidina Se absorbe con rapidez tras la administración
es un análogo de los nucleósidos que inhibe la oral y ios alimentos no interfieren. La vida me«
transcriptasa reversa; posee un perfil de toxici dia plasmática es de alrededor de una hora, con
dad similar al de la ddl, con la que no debe aso una penetración en el SNC del 30% al 40% de
ciarse. Dentro de la célula la zalcitabina es los niveles plasmáticos. Un 50% de la dosis oral
fosforilada a trifosfato, que actúa como sustrato se elimina por vía renal sin cambios. En estudios
de la transcriptasa reversa del HIV-1, se incorpo in vitro se ha demostrado una disminución de la
ra al ADN viral, que se está replicando, y provo fosforilación intracelularde d4T en pacientes tra
ca una terminación prematura de la síntesis de tados en forma prolongada con zidovudina.
éste. Como en los otros fármacos de este grupo,
su actividad depende de su capacidad para ser Efectos adversos. El principal es la neuropatía
fosforilado por las enzimas celulares timidina- periférica sensitiva, que se presenta en alrededor
quinasas, lo que da lugar a la forma activa. del 30% de los pacientes. También puede provo
Tras la administración oral se absorbe con ra car hepatitis con elevación de las transaminasas.
pidez y en alta proporción en el tracto gastroin No debe combinarse con zidovudina por su anta
testinal, pero los alimentos reducen la velocidad gonismo farmacológico.
de absorción. Menos de un 4% se une a las pro
teínas plasmáticas y en el LCR su concentración D osis y vías de adm inistración. La dosis de
es el 20% de la plasmática. No se metaboliza pende del peso corporal. En individuos de me
significativamente en el hígado; el 70% se elim i nos de 60 kg se indican 30 mg cada 12 horas y en
na en forma intacta por el riñón en 24 horas. Su los de más de 60 kg, 40 mg cada 12 horas por vía
vida rr>edia de eliminación es de unas 2 horas. oral.
Cuando se indica junto con atazanavir se redu E favirenz (EFV). Se absorbe bien por vía oral
cen los niveles plasmáticos del inhibidor de la y su biodisponibilidad, que es del 50% al 60%\
proteasa. Por esta razón se aconseja usar ataza es favorecida por los alimentos. La vida media
navir en dosis de 300 mg, en combinación con plasmática es prolongada, de 40 a 55 horas, lo que
ritonavir 100 a 200 mg una vez por día por vía permite la administración de una sola dosis diaria]
oral. Existe en la actualidad una presentación que Se metaboliza en el hígado por inducción e inhi
combina tenofovir con emtricitabina y efavirenz, bición del sistema citocromo P450. Se elimina por
a las dosis de 30 0 ,2 0 0 y 600 mg, respectivamen la orina en un 35% y el resto por las heces. j
te, que permite indicar 3 fármacos en una única
tableta diaria. Efectos adversos. En más del 50% de los pa-|
cientes produce reacciones adversas en el SNC.
Inhibidores de la transcriptasa reversa no Éstas incluyen vértigos, mareos, somnolencia,)
análogos de los nucleósidos (ITRNN) insomnio, amnesia, dificultades para la concen-;
Nevirapina (N VP). Es el primer fármaco de este tración en el trabajo, alucinaciones, euforia y iras-|
grupo aprobado para el tratamiento de pacientes tornos del pensamiento.
HIV positivos. Siempre debe indicarse en asocia Modifica los niveles de los inhibidores de la pro
ción con inhibidores de la trascriptasa reversa, teasa, con los que comparte la vía metabólica, y
análogos de los nucleósidos o inhibidores de la suele interactuar con claritromicina, anticoncepti-'
proteasa. Su absorción tras la administración oral vos orales, rifampicina, rifabutina, antihistamíni-i
es excelente y su biodisponibilidad sobrepasa el eos, midazolam, triazolam, fenobarbital y fenitoína.
90%. Una vez en el interior de la célula, no re
quiere transformación. Su vida media plasmática D osis y vías de adm inistración. La dosis habi
es muy prolongada, de 25 a 40 horas, lo que per tual es de 600 mg por vía oral en una sola toma
mite administrarla en 1 o 2 dosis diarias. Después diaria, preferentemente por la noche. i
de la zidovudina, es el antirretroviral que mejor se I
concentra en el SNC. Se metaboliza en ei hígado, E travirina (ETV). Recientemente aprobado
a través del sistema citocromo P450, y se elimina para su uso en pacientes HIV positivos.
en un 90% por la orina en forma de metabolitos.
E fectos adversos. Los más importantes son las ¡
Efectos adversos. Ei más frecuente es la erup reacciones de hipersensibilidad cutánea tales !
ción cutánea, que se presenta en el 7% al 17% de como exantemas de distinto tipo. Aparecen por j
los casos. Se manifiesta por un exantema mor- lo general en la segunda semana de tratamiento;
biliforme, con prurito o sin él, que compromete son de grado leve a moderado y, por lo general,
al tronco, la cara y las extremidades. A veces desaparecen en forma espontánea sin necesidad
puede adquirir las características de eritema poli de interrumpir la terapia.
morfo, con compromiso de las mucosas (síndro Otros efectos adversos incluyen náuseas, dia- ■
me de Stevens-Johnson). Es más frecuente du rrea, dolor abdominal, vómitos, fatiga, neuropatía '
rante las primeras semanas de tratamiento y su periférica y cefalea.
incidencia puede reducirse cuando el incremen
to desde la dosis inicial hasta la dosis completa D osis y vías de adm inistración. Se presenta en
es paulatino. tabletas de administración oral y debe tomarse
También puede provocar hepatitis tóxica. con las comidas. La dosis diaria recomendada de
Interactúa con rifampicina, rifabutina, anticon etravirina para adultos es 200 mg (dos tabletas
ceptivos orales, midazolam y triazolam. de 100 mg) dos veces al día.
inhibición produce partículas virales inmaduras tornos digestivos, epigastralgia, náuseas, vómi
y no infecciosas, con el genoma viral mulante. tos, diarrea, sequedad de piel y mucosas, y hepa
titis tóxica.
Saquínavir (SQV). Es el fármaco más antiguo El síndrome de lipodistrofia y las alteraciones
de este grupo. Su absorción es escasa por vía oral, m eta b ó lica s a so cia d a s con él (h ip ertrig li-
pero aumenta en fom ia considerable con los ali- ceridemia, hipercolesterolemia, hiperglucemia e
nientos. Su vida media plasmática es de 1 a 2 incremento de la resistencia periférica a la insu
horas y se metaboliza en el hígado a través del lina) se asocian con frecuencia al uso del indinavir
sistema citocromo P450 (isoenzima CYP 3A4). y pueden obligar a suspenderlo. Al igual que otros
Se excreta por vía biliar en un 96% y por la orina fármacos de este grupo, puede incrementar el í
en un 1%. sangrado en pacientes hemofílicos.
Interactúa con otros fármacos que se meta- c
Efectos adversos. Se limitan a la esfera gastro bolizan por el sistema citocromo P450 (rifam- (
intestinal y consisten en náuseas, vómitos, dolor picina, rifabutina, astemizol, cisapride, midazo-
abdominal y diarrea. También suele causar cefa lam, ketoconazol e itraconazol), lo que obliga a f
lea y toxicidad hepática. ajustar la dosis de indinavir.
i,.
Dosis y vías de adm inistración. Se presenta en D osis y vías de administración. Se administra
c
cápsulas blandas de 200 mg y se administra por por vía oral en dosis de 800 mg cada 8 horas. Cuan
vía oral en dosis de 1.000 mg cada 12 horas aso
ciado con 100 mg de ritonavir. Recientemente se
do se asocia con otros inhibidores de la proteasa
debe modificarse la dosis (por ejemplo, 800 mg
r
dispone de cápsulas duras de 500 mg que se ad cada 12 horas de indinavir más 600 mg cada 12 i
ministran en igual dosis y también asociado con horas de saquinavir, o 1.000 mg cada 12 horas de
ritonavir, pero que mejoran notablemente la ad indinavir más 750 mg cada 12 horas de nelfinavir). c
herencia y tolerabilidad de este fármaco.
Nelfinavir (NFV). Su biodisponibilidad por vía
ir
Indinavir (IDV). Es uno de los fármacos más oral es variable; si se administra con las comidas,
su absorción mejora. Su vida media plasmática
c
potentes de este grupo. Se administra siempre en
combinación, en especial con los análogos de los es de 3,5 a 5 horas. Un 1% a 2% de la dosis se
nucleósidos. Su biodisponibilidad por vía oral es
afectada por los alimentos. La absorción mejora
elimina por orina y más del 90% con las heces,
fundamentalmente en forma de metabolitos. c
con el estómago vacío o con una comida liviana
t
de e sca so con ten id o graso. Su vida m edia E fectos adversos. El más frecuente es la dia
plasmática es de 1,5 a 2 horas y se metaboliza en rrea que afecta a más del 90% de los pacientes y (
el hígado a través del sistema citocromo P450. suele responder en forma adecuada a la lope-
De este grupo, es el fármaco con mayor penetra ramida. Al igual que con los otros inhibidores de
ción en el SNC. Se elimina por la orina sin cam la proteasa, pueden com probarse trastornos
bios o como metabolitos. metabólicos y síndrome de lipodistrofia.
Efectos adversos. El más comdn es la eleva D osis y vías de adm inistración. La dosis es de
ción de la bilirrubina indirecta sin movilización 750 mg, tres veces por día, con las comidas. Es
de las transaminasas. Algunos enfermos presen el único IP que no se utiliza asociad o con
tan nefrolitiasis y hematuria, por lo que se debe ritonavir. En la embarazada se utiliza a la dosis
indicar la ingestión de más de 2 litros de líquido de 1.250 mg cada 12 horas.
por día, en especial agua, para mantener una diu
resis mayor de 150 mL/hora durante las 3 horas Ritonavir (RTV): Desde hace algCin tiempo
que siguen a la toma de una dosis. se ha dejado de utilizar como IP debido a la fre
Los cálculos son cristales de indinavir más cal cuencia de sus efectos adversos gastrointestinales
cio. También se presentan con frecuencia tras y dislipemia y a la cantidad de comprimidos dia
m 382 O Segunda parte - Infecciones virales
m
rios que deben ingerirse para completar la dosis ridos, hiperglucem ia, aumento de amilasa e
de 1.200 mg (600 mg, 6 comprimidos cada 12 hiperuricemia. En pacientes con coinfección por
horas). Sin embíirgo, RTV ocupa en la actuali virus de la hepatitis B o C o ambas puede obser-
dad un lugar im portante en la terapéutica varse aumento de las transaminasas.
antirretroviral de gran actividad (TARCA) por su
capacidad de potenciar los efectos de otros IR Se D osis y vías de adm inistración. Se presenta en
trata de una estrategia terapéutica en rápida ex comprimidos y solución oral para uso pediátrico.
pansión, que aprovecha el efecto inhibidor del Cada comprimido contiene 200 mg de lopinavir
metabolismo del primer paso hepático que tie y 50 mg de ritonavir. La dosis diaria habitual en
nen todos los IP a excepción de NFV (con el que adultos es de 2 comprimidos (400/100 mg) cada
no se asocia). Este efecto inhibitorio de RTV se 12 horas junto con las comidas. Cada mL de so
ejerce a nivel del sistema enzimático citocromo lución oral contiene 80 mg de lopinavir y 20 mg
P450 y se logra con pequeñas dosis de 100 mg a de ritonavir. La dosis habitual de la solución oral
200 mg 2 veces por día. Esta potenciación de los en adultos es de 5 mL cada 12 horas. La dosis en
efectos de otros IP permite la ingesta de menor niños se establece en función de su peso.
número de comprimidos, mejora la adherencia,
reduce los efectos adversos y mejora la tolera- Fosam prenavir (FAMP). En una prodroga del
bilidad. RTV puede asociarse con un IP (LOP/r, amprenavir.
SAQ/r o ATV/r) o con 2 IP (ATV más SAQ más
RTV) o (SAQ más FAPV más RTV). Efectos adversos. Entre sus efectos adversos
se incluyen erupciones cutáneas, a veces graves,
Lopinavir/ritonavir (LPV/r). Lopinavir/rito- que pueden presentarse en hasta un 20% de los
navir es una combinación fija de dos inhibidores pacientes; diarrea, náuseas y vóm itos, aumento
de la proteasa con un alto nivel de potencia de las transaminasas, cambios en la distribución
antiviral y buena tolerancia. Su favorable cociente de la grasa corporal, hipercolesterolemia, aumen
de inhibición incrementa su actividad y permite to de los episodios de sangrado en pacientes con
alcanzar una alta bañera genética de resistencia hemofilia, elevación de la glucemia con apari
que requiere una gran cantidad de mutaciones ción o empeoramiento de la diabetes.
para superar los elevados niveles plasmáticos de
lopinavir. D osis y vías de adm inistración. Se presenta en
Lopinavir es rápidamente metabolizado por el tabletas de 700 mg. Hay tres formas de adminis
sistema citocromo P450 del hígado, casi exclusi trar la dosis de fosamprenavir en pacientes vír
vamente por la isoenzim a CYP3A. Ritonavir genes de tratamiento: 1.400 mg dos veces al día
inhibe en forma potente el metabolismo de lopi sin ritonavir o l .400 mg más 200 mg de ritonavir
navir, lo que incrementa sus niveles plasmáticos. una vez al día; o 700 mg más 100 mg de ritonavir
La biodisponibilidad de LPV/r en cápsulas y so dos veces al día. Para los pacientes que ya han
lución oral, cuando son administrados con ali recibido fármacos antirretrovirales, la dosis re
mentos con moderado tenor graso se incrementa comendada de fosamprenavir es de 700 mg más
en un 48% y 80% respectivamente. Su absorción 100 mg de ritonavir dos veces por día por vía
es alta y se recupera sólo el 20% de la droga en oral (en estos casos, no se recomienda la admi
heces. Presenta alta unión a proteínas plasmáticas nistración en una única dosis).
(entre 90 a 98%). Su vida media es de 5 a 6 horas.
A tazanavir (ATV). Fue aprobada por la FDA
E fectos adversos. Los efectos adversos más en junio de 2003.
comúnmente observados son diarrea, dolor ab
dominal, astenia, cefalea, náuseas y vómitos. En E fectos adversos. Comprenden hiperbilirru-
ocasiones puede causar insomnio. Las alteracio binemia asintomática a predominio de la fracción
nes de laboratorio más comunes son aumento de indirecta, prolongación del intervalo P-R en el
los niveles plasmáticos de colesterol y triglicé- electrocardiograma, hiperglucemia, diarrea, in
Capítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (H lV /sida) □ 383
L
384 □ Segunda parte - Infecciones virales
dos veces al día (dosis máxima de 90 mg dos para su uso en pacientes con resistencia a otras
veces por día). familias de fármacos antirretrovirales. Debido a
su particular mecanismo de acción, los pacientes
Nuevos fármacos antirretrovirates deben realizarse una prueba de tropismo para
Inhibidores de los correceptores asegurarse de que su virus utiliza al receptor
Los fármacos que inhiben la entrada del HIV CCR5.
a los linfocilos T CD4+ incluyen los inhibidores
de la fusión como el enfuvirtide que bloquea la E fectos adversos. Los más comunes incluyen
unión de la glucoproteina gp41 al receptor; los cefalea, mareos, náuseas, vómitos, exantemas e
que bloquean a la gp 120 y aquellos antagonistas hipotensión arterial. Se asocia con incremento en
de los correceptores. Los dos principales corre* los niveles plasmáticos del colesterol. Puede aso
ceptores involucrados en la entrada in vivo son ciarse con toxicidad hepática. N o ha sido eva
el CXCR4 y el CCR5. Aquellas cepas de HIV luado en niños ni en embarazadas.
que utilizan el correceptor CXCR4 para ingresar
a la célula pero no el CCR5, se denominan virus D osis y vías de adm inistración. Se presenta en
CXCR4-trópico o X4. Las otras son las CCR5- tabletas de 150 o 300 mg para la administración
trópicas o R%. Existen además, cepas con tro oral. La dosis habitual es de 300 mg cada 12 ho
pismo mixto o dual, capaces de utilizar ambos ras, con o sin alimentos. La dosis de 150 mg 2
correceptores que se designan como R5/X4. veces por día se utiliza cuando se asocia MVC
En un paciente la población de viru.s circulan con la mayoría de los inhibidores de la proteasa
te está compuesta por una población pura en la que incrementan sus niveles plasmáticos (excep
que todas las cepas comparten el mismo tropis to TPV), Con enfuvirtide, TPV/r y NVP la dosis
mo (virus R5, X4 o R5/X4) o una población mix es de 300 mg cada 12 horas. En cambio con
ta compuesta por virus con diferentes tropismos. efavirenz, etravirina o rifampicina, la dosis debe
CCR5 es el pricipal correceptor existente en aque incrementarse a 600 mg cada 12 horas pues re
llos pacientes que adquieren el retrovirus por vía ducen sus niveles en sangre. MVC no está apro
sexual. Además, es el receptor predominante en bado como tratamiento de inicio. MVC sólo debe
los estadios iniciales de la infección en tanto las emplearse como primer tratamiento en pacientes
variantes usuarias de CXCR4 emergen más larde que estén infectados por virus R5 trópico cuando
en coincidencia con una pérdida acelerada de no sea posible el tratamiento con no nucleósidos
linfocitos T CD4+ y una progresión rápida de la ni inhibidores de la proteasa.
enfermedad. La mayoría de los pacientes que re
cién empiezan a tratarse alojan sólo cepas R5 en Inhibidores de la iniegrasa viral
tanto que en aquellos con múltiples fracasos te R altegravir (R G V ). Es el primero de los
rapéuticos emergen las cepas X4. Esto se expre inhibidores de la integrasa aprobado para su uso
sa por lo general como cepas mixtas; son raras clínico en 2008. Posee un novedoso mecanismo
las poblaciones con predominio de X 4 y aun en de acción y no tiene resistencia cruzada con los
pacientes tratados la mayoría de las cepas son otros fármacos antirretrovirales usados hasta aho
R5. Por todo lo expuesto es de utilidad, antes de ra. Es un fármaco sintético con potente actividad
iniciar un tratamiento con estos fármacos, efec inhibitoria de la reacción de transferencia de la
tuar un estudio de tropismo. cadena de la integrasa viral. Tiene buena dispo
nibilidad por vía oral y se metaboliza principal
M araviroc (M VC). Es un potente antagonista mente por glucuronización hepática sin influen
selectivo del correceptor CCR5 con potente acti cia significativa del sistema enzimático citocromo
vidad antiviral frente a aquellasa cepas de HIV P450. Por lo tanto es poco probable que presente
que usan este receptor para ingresar a los linfo interacciones farmacológicas clínicamente signi
citos T CD4+ (las denominadas cepas R5) pero ficativas con otros fármacos antirretrovirales que
no contra aquellas usuarias de CXCR4 (llama son metabolizados por este sistema enzimático.
das cepas X4). Ha sido aprobado recientemente Raltegravir es activo frente a cepas resistentes a
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (H lV /sida) a 385
j^üliiples fármacos, incluyendo variantes CCR5 nibles, de ser posible medida mediante técnicas
trópicas y CXCR4 trópicas. ultrasensibles (< 20 a < 50 copias/mL). En los tí.
pacientes ya tratados este objetivo es difícil de
Efectos adversos. Tiene un buen perfil de se alcanzar, y de no conseguirse, se debería intentar (C
guridad con escasos efectos adversos y sin efec mantener la CVP lo más baja posible.
tos sobre los lípidos sanguíneos. Los efectos ad La selección de resistencias es probablemente
versos más frecuentes son cefalea, mareos, dia un fenómeno inevitable cuando el HIV se expo
rrea y elevación de la CPK. ne a la presión selectiva de uno o más fármacos
-m
r
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de ia inmunodeficiencia humana (HlV/sida) Q 387
por este motivo debe medirse la cifra de linfocitos En base a datos de cinética viral en pacientes con
T CD4+ en la primera consulta para adoptar de TARGA, los criterios de respuesta viral son los
cisiones respecto del inicio del tratamiento. Por siguientes:
el contrario, la cifra de linfocitos T CD4+ es un • Respuesta anfhrefroviral: CVP < 50/20 co-
criterio menos importante que la CVP para deci pias/mL a las 16 a 24 semanas. En todos estos
dir cambios en el tratamiento. El fracaso de! sis pacientes se obtiene una respuesta antiviral al mes
tema inmune suele ir precedido por el fracaso (disminución >1 loglO/mL) y a los 3 a 4 meses
antirretroviral, y los cambios de tratamiento sue tienen una CVP indetectable por las técnicas con
len estar condicionados por las variaciones en los vencionales.
niveles de CVP. • Fracaso antirretroviral: cualesquiera de las
En los pacientes asintomáticos, debe efectuar siguientes situaciones definen el fracaso de la te
se una determinación de linfocitos TC D 4+ cada 3 rapia antiviral; a) CVP detectable a las 24 sema
o 4 meses aunque, debido a la variabilidad de la nas de inciada la TARGA; o h) en los pacientes
técnica (± 20%) y ante cualquier duda, siempre que tras alcanzar una CVP indetectable (< 50 co-
debe repetirse el recuento de linfocitos T CD4+ pias/mL) ésta vuelva a ser detectable en dos de
antes de tomar alguna decisión terapéutica. terminaciones consecutivas.
El tercer objetivo de la TARGA es alcanzar una La CVP es el principal parámetro para evaluar
supresión lo más rápida y duradera posible de la la eficacia de la TARGA. para definir el fracaso
rcplicación viral. Para cumplir con este objetivo de la misma y, por lo tanto, para tomar decisio
es fundamental la adherencia del paciente al tra nes de cambio de tratamiento. Sin embargo, ac
tamiento. La CVP desciende rápidamente (1 a 2 tualmente se admite que la CVP es un criterio
log lO/mL de plasma) tras iniciar el tratamiento complementario a la cifra de linfocitos T CD4+
y el descenso que se alcanza a las 4 a 8 semanas para el inicio de la TARGA. Para el control y se
se correlaciona con la durabilidad de la respues guimiento de la eficacia de! tratamiento debe uti
ta. En pacientes sin tratamiento previo, los nive lizarse, siempre que sea posible, una técnica
les indetectables de la CVP por las técnicas con ultrasensible de determinación de CVP y, en lo
vencionales (< 500 o < 200 copias/mL) suelen posible, se debe emplear la misma técnica. Se
alcanzarse tras un período promedio de 3 a 8 se recomienda confirmar siempre el valor de la CVP
manas. Sin embargo, para conseguir menos de con una segunda determinación antes de tomar
20 a 50 copias/mL suelen necesitarse 4 semanas decisiones terapéuticas.
más. Algunos pacientes, especialmente aquellos Se debe efectuar una determinación de la CVP
que parten con las CVP más altas, pueden tardar a las 4 semanas de haber iniciado el tratamiento,
en lograr niveles inferiores a 20 a 50 copias/mL como medida de la adherencia del paciente y para
más de 24 semanas. Es importante obtener una comprobar que existe respuesta antiviral. Poste
CVP < 50/20 copias/mL, ya que se ha compro riormente debe realizarse esta determinación cada
bado que continúa la replicación viral en el teji 3 o 4 meses junto con la medición de los valores
do linfático en pacientes cuya CVP se sitúa entre de linfocitos T CD4 +. Es muy importante tener
50 y 500 copias/mL. La duración de la respuesta presente que si se lleva a cabo la determinación
antirretroviral a los 18 a 24 meses es mucho ma de CVP tras un proceso infeccioso (habitualmente
yor en los pacientes que logran alcanzar una CVP viral) intercurrente o luego do haber sido vacu
< 20 copias/mL, frente a aquellos que se mantie nado (vacuna antigripal o contra la hepatitis B),
nen con CVP entre 20 y 500 copias/mL. Además, pueden existir incrementos transitorios de la CVP,
debe tenerse en cuenta, que pequeñas elevacio por lo que en ese caso, se recomienda una nueva
nes temporales (blips) de la CVP (< 1.000 co- evaluación después de algunas semanas.
pias/mL) en pacientes con una respuesta antirre Los resultados de la TARGA que se observan
troviral completa a la TARGA no se asocian con en pacientes en una fase precoz de la infección
una mayor incidencia de fracaso. Sólo tienen sig crónica y que pueden llegar a normalizar su ni
nificado los cambios en la CVP superiores a tres vel de inmunidad, se han visto oscurecidos por
vcccs o 0,5 loglO respecto de las cifras iniciales. la toxicidad de los antirretrovirales a mediano y
388 □ Segunda parte - Infecciones virales
largo plazo, los problemas de adherencia, la apa niveles más altos de CVP, por lo que debe con
rición de resistencias con la consiguiente limita trolarse más estrechamente a los pacientes con
ción de futuras opciones terapéuticas, la posible CVP elevadas. La CVP puede ayudar a decidir
transmisión de cepas resistentes, las interacciones en determinadas situaciones, especialmente cuan
medicamentosas y el impacto sobre la calidad de do la cifra de linfocitos T CD4+ está entre 250 y
vida. Por todas estas razones, las recomendacio 350 cél/jiL. En cambio, en pacientes que presen
nes de la TARGA son actualmente más conser tan una cifra de linfocitos T CD4+ < 250 cél/|iL
vadoras. es claro el beneficio clínico de recibir tratamien
to antirretroviral. Esperar hasta que los linfocitos
Cuándo iniciar el tratamiento T CD4+ estén por debajo de 200 cél/|iL puede
El debate actual se centra en tomo a cuál debe exponer a los pacientes al riesgo de enfermeda
ser el criterio a utilizar para decidir el inicio de la des oportunistas.
TARGA y cuál es el momento óptimo para ello. Di La decisión de inicio del tratamiento antirre
versos estudios apoyan el inicio de la TARGA cuan troviral debe basarse entonces en tres elementos:
do la cifra de linfocitos T CD4+ es < 200 céI/(iL, ya la sintom atología, el recuento de linfocitos T
que el riesgo de progresión a sida es alto a los 3 CD4+ y la CVR En los pacientes sintomáticos
años y varía de 14,3 a 85,5% en función de la (incluidos en los grupos B y C de la clasificación
CVR El riesgo de progresión a sida es del 38,5% de los CDC) se recomienda iniciar tratamiento en
en pacientes con linfocitos T CD4+ entre 201 todos los casos. Si el paciente tiene una infección
y 350 cél/}iL comparado con el 14,3% en pacien oportunista aguda, la TARGA puede diferirse unas
tes con cifras de más de 350 cél/íiL. Además, con semanas si las circunstancias clínicas lo aconse
una cifra de lin focitos T C D 4+ entre 201 y jan. En los pacientes asintomáticos el inicio del
350 cél/|iL el riesgo de progresión a sida a ios 3 tratamiento se basará en la cifra de linfocitos
años es muy bajo (4,1% ) cuando la CVP es T CD4+/|iL y en la CVR En estos casos, en pa
< 20.000 copias/mL, mientras que el riesgo au cientes con linfocitos T CD4+ < 250 cél/p.L se re
menta si la CVP se encuentra entre 20.001 y comienda iniciar la TARGA, en aquellos con ni
55.000 copias/m L (36,4% ) o si es superior a veles de linfocitos T CD4+ entre 250 y 350 cél/|iL
55.000 copias/mL (64,4%). Asimismo, en pacien debe recomendarse el inicio del tratamiento en la
tes con linfocitos T CD4+ > 350 cél/jiL, el riesgo mayoría de los casos. No obstante, podrá diferirse
de progresión es bajo si la CVP es inferior a en aquellos pacientes con recuentos de linfocitos
20.000 copias/mL pero aumenta al 14,8% cuando T CD4-f que se mantienen de manera estable en
la CVP está entre 20.001 y 55.000 copias/mL y al una cifra próxima a 350 cél/|xL y con CVP bajas
39,6% si está por encima de 55.000 copias/mL. (< 20.000 copias/mL).
Para el inicio del tratamiento se debe poner más En los pacientes con valores de linfocitos
énfasis en la cifra de linfocitos T CD4+ en el va T CD4+ entre 350 y 500 cél/^L puede diferirse
lor de la CVP. Hay que tener en cuenta que la el inicio de la terapia; sin embargo en este grupo
depleción de linfocitos T CD4+ es más rápida con de pacientes debe iniciarse la TARGA cuando la
•* Excepto: CVP > 100.000 copí3S/mL: proporción de CD4 <14%; cirrosis hepática, hepatitis B con indicación de tratamiento; hepatitis C
crónica.
En pacientes con linfocitos TCD4 +> de 500 céU^L puede diferirse el inicio de la TARGA.
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inm unodefíciencia hum ana (HlV/sida) □ 389
tener en cuenta que TDF + FTC y ABC + 3TC se especialmente en pacientes sin tratamiento pre
presentan actualmente en combinaciones fijas de vio y su uso se ve comprometido en pacientes
un solo comprimido al día, lo que facilita la ad con fracaso del tratamiento. En relación con la
herencia. toxicidad, un estudio reciente sugiere que el ries
La elección de la combinación de ITRN depen go de lipoatrofia es menor en los pacientes que
derá de las características del fármaco y de la si reciben LPV/r en comparación con EFV.
tuación clínica del paciente. Deben preferirse Cuando la elección final incluya un IP, la se
aquellos que se administran una vez por día o los lección del mismo se basará en su eficacia, tole
productos combinados con dosis fijas. rancia, interacciones farmacológicas, posología
En relación con los ITRNN como tercer fár y farmacocinética. Indinavir utilizado como úni
maco para completar el esquema inicial, tanto co IP debe indicarse cada 8 horas en ayunas lo
EFV como NPV pueden ser una buena opción y que dificulta la adherencia; no se recomienda su
la elección de uno u otro se basará en sus efectos administración 2 veces al día (1.200 mg cada 12
adversos e interacciones con otros fármacos. horas) por la peor respuesta viral en compara
Ambos fármacos son potentes inductores del sis ción con 3 veces diarias. En cambio, nelfinavir
tema enzimático citocromo P450 por lo que pue puede administrarse en 2 dosis diarias (1.250 mg
den originar interacciones farmacológicas. D e cada 12 horas) o en 3 veces al día (750 mg cada 8
ben utilizarse en combinaciones potentes ya que horas).
si no se consigue una supresión completa de la En la actualidad no se recomienda el uso de
replicación viral, su baja barrera genética origi ritonavir como único IP de inicio por su mala to
na mutaciones que se asocian con resitencia cru lerancia y porque deben ingerirse 12 cápsulas al
zada a lodos los fármacos de esta familia. día (6 cápsulas cada 12 horas). Tampoco se utili
En general, los esquemas basados en el uso de zan las cápsulas duras de saquinavir por la gran
ITRNN ofrecen algunas ventajas sobre aquellos cantidad de cápsulas (6 cada 8 horas) que difi
que contienen IR Entre ellas se incluyen menos cultan la adhrencia. Esta formulación ha sido re
interaccion es farm acológicas, m ejor perfil emplazada por la de cápsulas blandas y. más re
metabólico y menores costos. Debido a su baja cientemente por las cápsulas duras de 500 mg.
barrera genética, estos fármacos están indicados Amprenavir ha sido reemplazado en la actuali-
dad por el fosamprenavir que permite reducir y de barrera genética frente al desarrollo de re
notablemente el número de cápsulas a ingerir tan sistencias respecto de los IP no potenciados.
to si se lo administra solo (700 mg cada 12 horas)
o potenciado con ritonavir (700 mg más 100 mg Esquemas de TARGA basados en una única
de ritonavir cada 12 horas o 1.400 mg de fosam dosis diaria
prenavir más 200 mg de ritonavir en una sola Hay que tener en cuenta que la adherencia del
toma diaria, aunque esta posología parece me paciente es uno de los principales parámetros a
nos efectiva). evaluar; se pueden elaborar esquemas de TARGA
ATV está aprobado para su uso en pacientes basados en drogas que por sus características far-
sin tratamiento previo y su eficacia se ha demos macocinéticas pueden administrarse en una sola
trado con ZDV más 3TC. Es de cómoda admi dosis al día. Existe ya un número significativo de
nistración (una sola vez al día 400 mg o 300 mg fármacos antirretrovirales para su administración
con 100 mg de RTV) y parece tener un buen per en una sola dosis: efavirenz (600 mg), didanosina
fil lipídico en comparación con otros IP. (400 mg cápsula entérica EC), tenofovir (300 mg),
Actualmente se utilizan cada vez con más fre lamivudina (2 comprimidos de 150 mg) emtrici-
cuencia esquemas de TARGA que incluyen un tabina (200 mg) y atazanavir (2 comprimidos de
IP potenciado con ritonavir en pequeñas dosis 150 mg o I comprimido de 300 mg). Además de
(100 a 200 mg). Esta combinación mejora el per éstos, y en base a parámetros farmacocinéticos,
fil farmacocinético al inhibir el retonavir, el meta abacavir, nevirapina, lopinavir/ritonavir, saqui-
bolismo hepático del IP (por su efecto sobre el sis navir/ritonavir y fosamprenavir/ritonavir, pueden
tema enziniático citocromo P450) lo cual mejora indicarse en pautas de una sola dosis al día.
la farmacocinética y los niveles plasmáticos de este Estos esquemas de una dosis al día se recomien
fármaco. Esta asociación también permite, en al dan sólo para pacientes sin tratamiento previo o
gunos casos, reducir el número de tabletas a inge en aquellos en quienes se quiere simplificar la
rir» indicar posologfas de una o dos veces por día terapia.
con las comidas, con lo que mejora la adherencia En los últimos tiempos se ha considerado la
de los pacientes. Sin embargo, estas combinacio posibilidad de simplificar el tratamiento en pa
nes de 2 IP pueden incrementar la toxicidad. cientes con CVP indetectable a los que se los rota
Lopinavir/ritonavir (LPV/r) es la primera aso de una esquema con IP a otro sin IP.
ciación de dosis fijas de 2 IP; su posología es de
2 comprimidos (200 mg de Iopinavir/50 mg de Cambio de TARGA por fracaso
ritonavir) cada 12 horas. Existen estudios en eva El fracaso de la TARGA tiene tres aspectos:
luación basados en la administración de este fár clínico, inmunitario y viral que ya han sido des-
maco en una sola toma diaria en combinación con criptos. Los factores que influyen en el fracaso
2 ITRN también de una única administración dia terapéutico pueden depender del paciente (defi
ria (TDF/FTC). Este IP combinado es de primera ciente adherencia), de los fármacos (baja poten
elección cuando se desee iniciar un esquema con cia o mala absorción e interacciones farmacoló
este grupo de fármacos; como alternativas pue gicas que pueden dar lugar a bajos niveles plas
den utilizarse saquinavir en cápsulas blandas o máticos que comprometen su eficacia antiviral) o
duras potenciado con ritonavir, atazanavir poten del virus (desarrollo de mutantes resistentes). Otro
ciado o no con ritonavir y fosamprenavir potencia factor dependiente del virus que puede actuar
do o no con ritonavir. A diferencia de los demás IP com o causa de fracaso terapéutico es su perma
potenciados, LPV/r se administra en comprimidos nencia en ciertos lugares del organismo denomi
coformulados que no requieren refrigeración. Para nados «santuarios» de difícil acceso para los fár
todos los demás IP potenciados se recomienda macos y donde podría seguir replicándose sin que
mantener las cápsulas de RTV refrigeradas. se delecte en el plasma. En general se considera
En pacientes sin tratamiento previo, la admi que la mayoría de los fracasos terapéuticos están
nistración de un IP potenciado con RTV (LPV, en relación con interrupciones del tratamiento por
SQV, FPV, ATV, DRV) tiene ventajas de eficacia mala adherencia o por efectos adversos y muy
392 □ Segunda parte - Infecciones virales
pocas veces se trata de un fracaso terapéutico ge vos ITRN, más otro IP sin resistencia cruzada con
nuino por las causas estrictamente farmacológicas el del esquema que se desea modificar o 2 nue- j
ya citadas. vos ITRN, más 1 ITRNN, más un IP con las mis
Como pauta general, y ante un fracaso viro- mas condiciones que las citadas anteriormente.
lógico, se recomienda cambiar el esquema tera
péutico lo antes posible para evitar la acumula En cualquier caso deberá tenerse en cuenta que
ción de mutaciones y la elevación de la CVP, al la elección de dos nuevos ITRN tiene mucha tras-
mismo tiempo de facilitar ia respuesta al nuevo cendencia y deberá en lo posible guiarse por un
esquema terapéutico elegido. estudio de la sensibilidad, pues si ésta, está redu
Es importante tener en cuenta que en algunos cida a algunos fármacos de este grupo probable
pacientes con CVPindetectable pueden observar mente implique algún grado de resistencia a otros
se elevaciones transitorias de la CVP, apenas por integrantes de la misma familia. También deberá
encima del límite de detección, conocidas como considerarse que los ITRNN son drogas con baja
blips, que por lo general no se acompañan de ma barrera genética y que una sola mutación es ca
yor frecuencia de fracaso virológico, aun en pa paz de generar resistencia de alto nivel a todos
cientes con múltiples tratamientos. los fármacos de la misma familia, lo que suele
Con respecto del fracaso inmunológico, en la ocurrir con frecuencia cuando se administran
mayoría de los casos va precedido del fracaso vi como parte de esquemas que producen una su
rológico. Ocasionalmente, en algunos pacientes presión incompleta de la replicación viral. En este
con CVP indetectable se observa un descenso en aspecto, los IP presentan algunas diferencias con
la cifra de linfocitos T CD4+. En estos casos, al respecto del resto de los fármacos antirretro-
no ser posible alcanzar una mayor efícacia viroló- virales ya que el desarrollo de resistencia a los
gica, se deberá valorar el uso de interleucina-2. fármacos de este grupo es un proceso gradual que
En relación con el fracaso clínico, habitualmen requiere de la acumulación de múltiples muta
te va precedido del deterioro inmunológico y del ciones. La eficacia de este grupo de fármacos se
incremento de la CVP y obliga a elaborar un nue reduce gradualmente a medida que se acumulan
vo esquema de tratamiento. mutaciones en el gen de la proteasa. En este sen
En aquellos casos en los que el cambio de tra tido, se ha establecido en cinco el número máxi
tamiento obedezca a efectos adversos o intole mo de mutaciones para asegurar una buena efi
rancia a alguno de los componentes del esquema cacia de la combinación lopinavir/ritonavir. El
terapéutico puede realizarse la sustitución selec tratamiento tras un primer fracaso de un esque
tiva del fármaco implicado. ma que contenía un IP puede ser dificultoso por
la frecuencia con que se detectan resistencias cru
Cambio de TARGA luego del primer fracaso zadas entre miembros de esta familia. Este pro
En estos casos deberá valorarse el esquema que blema es menos frecuente en aquellos pacientes
recibía el paciente. Pueden darse tres posibilida que reciben como primer tratamiento un IP po
des: tenciado con ritonavir (lopinavir, saquinavir o
a) Si el paciente recibía un esquema que in fosamprenavir) o que son tratados con un IP con
cluía 3 ITRN podría optarse por la combinación un perfil de resistencia diferente como atazanavir.
de 2 ITRN nuevos, más 1 ITRNN o 2 ITRN nue A pesar de esto la utilización de un segundo IP,
vos, más IIP o I o 2 ITRN nuevos, más 1 ITRNN, un IP potenciado con ritonavir o 2 IP es una al
más 1 IP. ternativa válida en estos pacientes.
b) Si el esquema previo incluía 2 ITRN y 1 También es importante tener en cuenta, que la
ITRNN el nuevo tratamiento deberá incluir 2 eficacia de los IP está más condicionada por fac
nuevos ITRN, más 1 IP, preferentemente poten tores farmacocinéticos que en las otras clases de
ciado con ritonavir. antirretrovirales.
c) En casos de fracaso terapéutico de un primer Las alternativas a utilizar en pacientes que han
régimen que contenga IP la nueva elección debe fracasado con un primer esquema con IP es la
rá incluir 2 nuevos ITRN, más 1 ITRNN o 2 nue combinación de lopinavir/ritonavir, saquinavir/
C apítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodefíciencia humana (HlV/sida) D 393
riionavir (especialmente en aquellos que recibían En general puede decirse que para tener cier
nelfínavir) o indinavir/ riionavir. Cuando no se tas posibilidades de éxito, una terapia de rescate
han utilizado ITRNN en el esquema inicial debe debe incluir ai menos dos fármacos nuevos de
considerarse su inclusión en el tratamiento de
segunda línea, dado que no existe resistencia cru
forma simultánea frente a los que no haya ev i
dencia de resistencia. Un fármaco que tiene un
t
zada entre ITRNN y los IP e ITRN y porque cier lugar en estos casos es el tenofovir, un análogo de 1
to grado de resistencia a los ITRN incrementa la los nucleótidos con gran actividad frente a cepas
e
susceptibilidad del virus a los ITRNN. silvestres y resistentes del HIV, aunque su efica
Para cualesquiera de estas alternativas debe cia en terapias de rescate se reduce significativa c
tenerse en cuenta que las posibilidades de res mente cuando aparece la mutación K65R con tres
puesta se incrementan cuanto más precozmente o más mutaciones para la transcriptasa reversa t
se realiza el cambio de terapia, es decir con una (TAMS), en especial la 41L y la 21OW.
CVP lo más baja posible y con el menor deterio El otro fármaco posible en estos casos es enfu- c
ro posible en los niveles de linfocitos T CD4+. virtida (T20) perteneciente a la familia de inhibi
<
dores de la fusión.
Cambio de TARGA luego de más de un fracaso Atazanavir/ritonavir (300 mg/100 mg) una vez
Este tratamiento ha sido denominado «terapia por día también ha sido evaluado en pacientes
(le rescate», y debe considerarse que las posibili con fracasos múltiples, en combinación con sa-
dades de alcanzar una CVP indetectable son ma quinavir/ritonavir O-OOO mg/lOO mg) dos veces
yores en aquellos pacientes con dos fracasos te por día o con lopinavir/ritonavir (400 mg/100 mg)
rapéuticos en comparación con los que eviden dos veces por día. Aunque en los pacientes sin
cian múltiples fallos terapéuticos. Sin embargo, tratamiento previo el atazanavir puede indicarse
con los nuevos fármacos de reciente aparición y sin ser potenciado con ritonavir, en pacientes en
diferentes mecanismos de acción el objetivo debe situación de múltiple fracaso debe tomarse con
ser también en estos pacientes alcanzar una CVP ritonavir, especialmente cuando tenofovir forma
indetectable. Las opciones terapéuticas para pa parte del esquema terapéutico.
cientes con múltiples fracasos son limitadas de Tipranavir es un nuevo IP que se utiliza aso
bido a la aparición de mutaciones de resistencia ciado con ritonavir (500 mg/200 mg) con el que
cruzadas entre las diferentes familias de fármacos logra concentraciones plasmáticas suficientes
antirretrovirales. Los estudios de genotipificación com o para inhibir la replicación de cepas con
son de mucha utilidad en estos casos. múltiples mutaciones para IP, lo que lo convierte
Para pacientes con múltiples fracasos terapéu en una alternativa interesante para pacientes con
ticos existen tres opciones: la primera consiste fracasos múltiples.
en implementar un nuevo esquema terapéutico En todos estos casos es conveniente que la elec
que combine cinco o más drogas en lo que se ha ción de los antirretrovirales se realice según estu
dado en llamar mega TARGA (o mega HAART). dios de resistencia. El objetivo terapéutico en esta
Son tratamientos de difícil cumplimiento, asocia población es también conseguir de nuevo la máxi
dos con importante toxicidad y muy costosos. Su ma supresión de la replicación viral (CVP < 50 co-
beneficio clínico todavía está en evaluación. pias/mL) para lo cual deben incluirse en el nuevo
La segunda posibilidad son tos esquemas de esquema al menos 2 fármacos plenamente activos
rescate precedidos de una interrupción supervi y otros ya utilizados pero que conserven cierta acti
sada de la TARGA (IST). Los resultados de esta vidad y sean tolerados por el paciente. El porcenta
opción son por ahora contradictorios. je de éxitos se reduce conforme se vayan acumu
La tercera opción es la combinación de dos IP lando fracasos terapéuticos. La persistencia de un
potenciados con ritonavir, específicamente lopina- tratamiento inefectivo sólo conduce a la acumula
vir/ritonavir/saquinavir o fosamprenavir. De esta ción de un mayor número de mutaciones en el gen
forma, la pequeña dosis de ritonavir que contiene de la proteasa y de la transcriptasa inversa.
la formulación comercial de lopinavir/ritonavir Con los conocimientos actuales, las combina
potencia también al segundo IR ciones de DRV/r + ETR + T20 proporcionan ex
394 □ Segunda parte - Infecciones virales
celentes resultados en pacientes que no han sido con infección por el HIV. Actualmente está en|
tratados previamente con enfuvirtide. Si este úl evaluación, y los resultados aún son escasos, uní
timo no puede utilizarse por intolerancia o fraca esquema de simplificación con monoterapia con
so previo podría sustituirse por MVC siempre que lopinavir/ritonavir luego de un período de induc
la cepa viral del paciente mantenga tropismo R5. ción con triple terapia incluido este IP.
La reducción en el número de comprimidos,
Simplificación de la TARGA las dosis diarias o ambos se obtiene al reempla
Desde hace algún tiempo, se intenta sim plifi zar el IP del régimen por un fármaco de otro gru
car el tratamiento de aquellos pacientes que han po. Este tipo de estrategia está ampliamente eva
alcanzado la supresión de la replicación viral a luada y para tal fin se han utilizado tres fármacos:
través de un régimen complejo evidenciado por efavirenz, nevirapina y abacavir. También se pue
una CVP indetectable. La intención de sim plifi de disminuir el número de comprimidos y dosi.si
car la terapia es mantener dicha supresión, redu reemplazando un IP de primera generación por,
cir la complejidad de la TARGA, mejorar la cali atazanavir otro IP pero de administración más!
dad de vida y la adherencia de los pacientes y sencilla y mejor perfil de efectos adversos. Debe
evitar o revertir algunos de los efectos adversos. tenerse en cuenta que está contraindicada la sim
Esta estrategia comenzó a utilizarse con el re plificación con abacavir asociado con tenofovir
emplazo de los IP de primera generación para y lamivudina o a tenofovir y didanosina.
atenuar sus efectos adversos y disminuir el nú La última forma de simplificar la terapia es a tra
mero de comprimidos diarios. La TARGA se pue vés de la indicación de esquemas con drogas que
de simplificar a través de disminuir el número de puedan administrarse en una única dosis diaria.
fármacos, de comprimidos o de tomas por día, En este sentido, se recomiendan esquemas de
lodo lo cual mejora la adherencia. didanosina EC 400 mg en cápsula entérica, más
La reducción del número de fármacos es lo que emtricitabina 200 mg, más efavirenz 600 mg o
se denomina estrategia de inducción-manteni tenofovir 300 mg, más lamivudina 300 mg, más
miento, con una primera fase de inducción con efavirenz 600 mg.
tres o cuatro fármacos seguida de una fase de Recientemente se ha comprobado la eficacia
mantenimiento con menos de tres drogas. Los de simplificar un esquema terapéutico con IP por
resultados de esta estrategia indican que no es otro que contiene ZDV + 3TC + ABC coformu-
una pauta útil en el tratamiento de los pacientes lados y TOE Este esquema mantuvo la respuesta
Nevirapina Exantemas (15% a 30%), hepatitis tóxica (con CD4 > 250 cél/pl 11%). Barrera genética baja.
Efavirenz Exantemas (15 % a 27%), hepatitis tóxica, somnolencia, insomnio, confusión, agitación,
alucinaciones, pesadillas (>50% en las primeras 2 a 4 semanas), teratogénico. Barrera
genética baja. ___________________________
Capítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inmunodeficiencia humana (HlV/sida) □ 395
viral (CVP indetectable) y mejoró el perfil Hpí- Otro efecto adverso asociado con los ITRN es
dico y redujo la necesidad de usar fármacos la lipodistrofia y la estavudina es la que se aso
hipolipemiantes. cia con mayor frecuencia con esta alteración.
De los efectos colaterales específicos de droga
Efectos secundarios de la TARGA debe resaltarse la hipersensibilidad al abacavir
pueden estar asociados con cada fármaco o gru que si bien es rara (3% a 4%) puede llegar a ser
po de drogas; pueden ser agudos o de mediano o fatal. El espectro de presentación va desde exan
lar<»o plazo. El efecto adverso específico de gru temas morbiiiformes a cuadros graves de erite
po más importante para los ITRN es la toxicidad ma polimorfo. Aparece precozmente (dentro del
miiocondrial (inhibición de la ADN-polimerasa primer mes de iniciada la terapia) y el fármaco
niitocondrial) que puede llevar a la acidosis lácti debe interrumpirse y no se volverá a indicar.
ca y esteatosis hepática, cuya incidencia es baja Los efectos secundarios del grupo de ITRNN
pero que si no se reconoce puede llegar a ser mor son las reacciones de hipersensibilidad (no nece
tal en 1 de cada l.OOO pacientes/año. Las mani sariamente cruzada entre nevirapina y efavirenz).
festaciones clínicas se presentan con niveles de Pueden causar desde exantemas hasta síndrome
ácido láctico por encima de 5 a 10 mm olA- Clí de Stevens-Jonhson.
nicamente se caracteriza por astenia, mialgias y El otro efecto secundario de este grupo es la
sienos de insuficiencia hepática. El tratamiento hipertransaminasemia y a veces hepatitis tóxica
consiste en suspender los ITRN y controlar los grave asociada principalmente con el uso de
niveles de lactato en el plasma. nevirapina.
Enfuvirtide Reacciones locales en el sitio de inyección (dolor, eritema, prurito, induración, nódulos,
1abscesos), exantemas, escalofríos, fiebre, hepatitis, pancreatitis, neuropatía del VI® par craneal.
396 □ Segunda parte - Infecciones virales
En relación con efavirenz más del 25% de los por este método. Es necesario ajustar las dosij
pacientes que reciben este fármaco presentan tras de los ITRN y ITR nucleótidos ya que se excretar
tornos en la esfera neuropsiquiátrica (mareos, fundamentalmente por el riñón.
somnolencia, insomnio, alucinaciones, delirio, Zidovudina se ajusta de acuerdo con el clearan-
sueños vividos, confusión y despersonalización) ce de creatinina de la siguinete forma: Cl 10-50'
que suelen desaparecer luego de 2 a 4 semanas 250-300 mg c/12h; Cl <10: 250-300 mg c/24h.'
pero que en un 3% de casos obligan a interrum Didanosina y estavudina requieren mayor ajus
pir el tratamiento. Por esta razón el uso de efavi te de dosis debido a la influencia del peso corpo
renz debe evitarse en pacientes con antecedentes ral sobre su farmacocinética; ambas son elimi
psiquiátricos. nadas con facilidad por la diálisis debido a su baja
Dentro de la familia de los IP tos efectos ad unión a las proteínas plasmáticas. Por lo tanto
versos más comunes son las alteraciones en los deben administrarse luego del procedimiento.
lípidos plasmáticos y el síndrome metabólico con Abacavir no necesita ajuste de dosis porque su
resistencia a la insulina. El riesgo de padecer es excreción urinaria es baja y su metabolismo es
tos trastornos es mayor cuando se utiliza ritonavir, predominantemente hepático.
solo o com o potenciador de otros IR La dislipi- Lamivudina debe ajustarse de acuerdo con el si
demia se puede manifestar en forma de hipertri- guiente esquema: clearance de creatinina ^ 50:
gliceridem ia (lo más frecuente), hipercoles- 150 mg c /l2 h o 300 mg c/24h; Cl 30-49: 150 mg
terolemia y disminución en los niveles de! coles- c/24h (primera dosis de 150 mg); Cl 15-29: l(X)mg
terol HDL. El atazanavir es un IP que no com c/24h (primera dosis 150 mg); Cl 5*14:50 mg c/24h
parte estos efectos adversos del resto de los inte (primera dosis 150 mg); Cl <5: 25 mg c/24h (pri
grantes de este grupo. mera dosis 50 mg).
La resistencia a la insulina suele ser asintomá- Para tenofovir se usa el siguiente esquema:
tica pero puede desencadenar una diabetes Cl > 50: no requiere ajuste de dosis; Cl 30-49:
mellitus en un 2% de los pacientes. Por estos efec 300 mg c/48h; Cl 10-29: 300 mg c/72 a 96h.
tos adversos, la duración de laTA R G A es un fac Los ITRNN, los IP y los inhibidores de la fu
tor de riesgo independiente para el desarrollo de sión, con excepción se metabolizan fundamen
cardiopatfa isquémica. talmente en el hígado con escasa eliminación re
El otro efecto adverso de los IP es el síndrome nal. En principio no requieren ajuste de dosis en
de lipodisírofia que se caracteriza por la presen pacientes con enfermedad renal crónica.
cia, combinada o no, de pérdida de grasa perifé
rica (lipoatrofia) y acumulación de grasa en ab
SÍNDROME DE RECONSTITUCIÓN INMUNE
domen, mamas y cuello. Las alteraciones metabó-
licas citadas ames suelen ser más frecuentes en El inicio de la TARGA en pacientes con enfer
pacientes con lipodistrofia. Las formas modera medad por HlV/sida suele acompañarse de un
das o graves de lipodistrofia afectan al 20% de incremento en los valores de linfocitos T CD4+ y
los pacientes a los 2 años de la TARGA y su pre- de una reconstitución inmune parcial con una sus
valencia aumenta progresivamente con el tiem tancial reducción en la incidencia de enfermeda
po de tratamiento. des oportunistas y en la mortalidad por sida. Sin
embargo, algunos pacientes bajo TARGA desa
rrollan una respuesta inmune paradojal, asocia
USO DE ANTIRRETROVIRALES EN PACIENTES
da por lo general con un deterioro del estado clí
CON DETERIORO DE LA FUNCIÓN RENAL
nico, a pesar del control satisfactorio de la repli-
En estos casos no se debe posponer el uso de la cación viral y el incremento en los niveles de
TARGA sino adaptar de manera apropiada la linfocitos T CD4-H, conocida com o síndrome in
dosis de los diferentes fármacos que tienen eli flamatorio de reconstitución inmune. El denomi
minación predominantemente renal y agregar una nado síndrome inflamatorio de reconstitución o
dosis con posterioridad a la diálisis en aquellos de restauración o recuperación inmune asociado
casos de fármacos que se eliminen con facilidad con la TARGA consiste en una variedad de cua*
(4
dros clínicos que presentan una respuesta para- ses de iniciada la TARGA. Los autores señalan
dojal a diversos patógenos preexistentes. Antes una incidencia de 15,2 casos/100 pacientes/año. (C
de la era de la TARGA, este síndrome ya se ha El tratamiento del síndrome de reconstitución
bía descripto en pacientes con tuberculosis o le inmune se basa en mantener el tratamiento de la
pra, pero su frecuencia se incrementó notable infección oportunista junto con la TARGA, más (i
mente en la era de la TARGA, a partir de la cual, el agregado de antiinflamatorios no esteroides.
se han comunicado una gran variedad de manifes Si las manifestaciones persisten puede agregarse K
taciones relacionadas con una respuesta inflama metilprednisona a la dosis de 20 a 40 mg/día du
toria exagerada frente a patógenos oportunistas rante 4 a 8 semanas. Eventualmente puede reque '(
que generalmente han causado enfermedad con rirse el drenaje quirúrgico de las lesiones focales.
anterioridad o recientemente. Se observa espe (C
cialmente en pacientes con antecedentes de tu Formas clínicas más comunes de SIRI i
berculosis o infección por el complejo M ycobac- 1. Respuesta paradojal en pacientes con tuberculosis
terium avium (MAC), citomegalovirus (CMV) o El principal factor de riesgo para el SIRI asocia c
Cryptococcus neoform ans y entre uno y tres me do con tuberculosis es el comienzo de la TARGA
ses después del inicio de la TARGA. En el caso dentro de los 2 primeros meses de haber iniciado í
del M ycobacterium tuberculosis y el MAC suele el régimen antituberculoso, cuando una cantidad
l
presentarse como una adenitis mediastinal, pe- sustancial de carga antigénica de las micobac
riaórtica, mesentérica o subcutánea, en especial terias aún puede estar presente. La alta frecuen (
de localización supraclavicular, acompañada de cia de estas reacciones provocó la recomenda
fiebre y leucocitosis; o como una pleuresía con ción, por parte de algunos investigadores, de re (
derrame y granulomas tuberculoides en la biopsia trasar el inicio de la TARGA al menos 2 meses
pleural.Con menor frecuencia, este síndrome pue luego del comienzo del tratamiento antitubercu (
de m anifestarse con ab scesos subcutáneos, loso. Sin embargo, algunos estudios retrospecti
miositis, bursitis, nódulos cutáneos y osteomielitis. vos sugirieron que, si bien dicho retraso puede
En otros casos la manifestación de la recupe efectuarse en pacientes con recuentos de linfo- <
ración inmune se expresa como una vitreítis aso citos T CD4+ mayores de 100 células/pL, los que
ciada con el CMV, meningitis en el caso de la presentan cifras por debajo de este valor tienen c
criptococosis o leucoencefalopatía multifocal un riesgo elevado de morbilidad y mortalidad por
progresiva asociada con el virus JC. otras infecciones oportunistas, por lo que resulta (
En todos los casos publicados en la literatura conveniente tratarlos en forma más precoz. A di (
los pacientes que recibían TARGA y se encon ferencia del SIRI asociado con el complejo MycO'
traban con buena respuesta inmune (mediana de bacterium avium (MAC), la mayoría de los ca (
incremento de T CD4+ 120/pL) y viral (mediana sos tienen diagnóstico previo de tuberculosis, es
de carga viral en plasma 200 copias /mL). decir, antes de comenzar la TARGA. Las mani «
La incidencia del síndrome de reconstitución festaciones clínicas más comunes del SIRI aso
inmune en pacientes que reciben TARGA es des ciado con la infección por M ycobacterium tuber
conocida. Olalla y colaboradores observaron 9 culosis son la fiebre, las linfadenopatías y el agra
episodios de respuesta paradojal en 33 pacientes vamiento de los síntomas respiratorios. Al igual
HlV/sida con enfermedad por micobacterias. que en el caso del MAC, las linfadenopatías son
Ocho tenían diagnóstico de tuberculosis y uno la forma de presentación más frecuente (70%) con
de enfermedad diseminada por MAC; la inciden localización periférica predominante (cervicales,
cia en esta serie fue del 27%. La incidencia anual inguinales, axilares o supraclaviculares) o aun
de respuesta paradojal durante los dos primeros mediastinales. La segunda manifestación más
años de este estudio fue del 20% y se incrementó común es la aparición de lesiones pulmonares o
al 50% en el tercer año de seguimiento. Kumara- el agravamiento de las preexistentes (28%). A
samy y colaboradores observaron el síndrome de veces puede manifestarse por síntomas neuroló-
reconstitución inmune en 11 pacientes de 144 su gicos por el crecimiento de tuberculomas o la
jetos con tuberculosis y sida dentro de los 6 me aparición de abscesos. Una vez hecho el diag
398 □ Segunda parte - Infecciones virales
nóstico se debe tener una actitud expectante, «moscas volantes», visión borrosa, pérdida de la
mantener tanto el tratamiento antituberculoso, sin agudeza visual, a veces marcada, y ausencia de
adición de nuevos fármacos, como la TARCA. enrojecimiento o dolor ocular. El tratamiento con
En algunos casos graves o con mala evolución siste en la terapia anti CMV, mantener la TARGA
pueden utilizarse antiinflamatorios no esteroideos y utilizar corticosteroides tópicos o sistémicos.
(AINEs) o corticosteroides (metilprednisolona en
dosis de 20 a 40 mg/día) durante 4 a 8 semanas o 4. Herpes zóster
mientras se mantenga la clínica de SIRI. Entre un 7 y un 9% de los pacientes que ini-
cian TARGA presentan episodios de herpes zóster
2. Linfadenitis porMycobacterium avíum complex que se caracterizan clínicamente por ser mono*
El MAC provoca enfermedad en pacientes con metaméricos y responder bien ai aciclovir. La
SIDA y marcado deterioro inmune. Por lo gene aparición de herpes zóster de reconstitución iti-
ral, en estos pacientes se observan formas dise muñe está relacionada con el incremento de la
minadas en las que el microorganismo puede cul población de linfocitos T CD8+.
tivarse de la sangre o de la médula ósea.
Desde el advenimiento de la TARCA, nume 5. Empeoramiento paradoja! de la leucoencefalopatia
rosas publicaciones señalan la asociación entre multifocal progresiva
SIRI y MAC. En la mayoría, la infección apare El mal pronóstico de la leucoencefalopatía
ció sin historia previa de enfermedad por esta multifocal progresiva (LEMP) en los pacientes
micobacteria y las manifestaciones aparecieron con sida, que producía el fallecimiento de éstos
en un tiempo promedio de 4 semanas luego de en los meses inmediatos a su diagnóstico, ha me
iniciada la TARCA. El SIRI asociado con MAC jorado con la TARGA. Sin embargo, hay casos
aparece, en general, en individuos con inmuno- descriptos de empeoramiento de esta enfermedad
supresión profunda que presentan una respuesta en las cuatro primeras semanas luego del inicio
excelente a la TARCA. La presentación clínica de la TARCA. En algunas biopsias realizadas en
más frecuente es fiebre y linfadenopatías o estos pacientes se ha encontrado com o dato
linfadenitis con tendencia al reblandecimiento, histológico relevante la existencia de infíamación
supuración y fistulización (70%). Estos pacien linfoplasmocitaria perivascular con predominio
tes deben recibir tratamiento antimicobacteriano, de linfocitos T CD8+. Se recomienda el uso de
el mismo esquema de TARCA y AINEs o even- AINEs, aunque la experiencia es escasa.
tualmente corticosteroides sistém icos. Por lo ge
neral, las lesiones responden bien a la terapia,
RECOMENDACIONES G EN ERA LES PARA EL
como es de esperar en el contexto de un microor
MANEJO CLÍNICO DEL SIRI
ganismo de baja virulencia y con una respuesta
inflamatoria intensa. En ocasiones puede ser ne N o existen estudios controlados que permitan
cesario el drenaje quirúrgico. realizar recomendaciones precisas sobre el ma
nejo del SIRI. Las recomendaciones existentes
3. SIRI relacionado con citomegalovirus se basan en opiniones de expertos y pueden
Se caracteriza por un cuadro clínico oftalmo resumirse de la siguiente forma:
lógico denominado uveítis por recuperación in • Antes de iniciar la TARGA en pacientes con re
mune. Se trata de la aparición de uveítis en las cuentos de linfocitos T CD4+ menores de ICC cél/
primeras semanas o meses, y a veces mucho más |iL, descartar infección oportunista activa.
tarde, después de iniciar la TARCA. Se produce • Mantener los esquemas de profilaxis indica
en pacientes previamente infectados por citome dos antes de iniciar la TARGA, hasta alcanzar la
galovirus (CMV) y no se relaciona con reactiva reconstitución inmune.
ción de esta infección, sino con presencia de • Mantener la TARGA siempre que no existan
Hniígcnos que producen una intensa respuesta signos de toxicidad.
inflamatoria secundaria a la reconstitución inmu • Iniciar o mantener el tratamiento etiológico
ne. Clínicamente se caracteriza por visión de de la enfermedad subyacente.
Capítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inm unodefíciencia humana (H lV /sida) □ 399
• En ca so de SIR I con m a n ife sta c io n e s madres, incluso a aquellas con CVP bajas.
inflamatorias graves utilizar corticosteroides o Existen tres estrategias para intentar disminuir
AlNEs. e incluso evitar la transmisión vertical: TARGA,
cesárea programada y evitar la lactancia.
En relación con la TARGA, el tratamiento de
p r o f il a x is
la madre con ZDV a la dosis de 500 a 600 mg/día
Ya que por ahora no hay vacunas, la única po por vía oral (100 mg 5 veces al día o 200 mg
sibilidad cierta de prevenir esta enfeimedad con cada 8 horas o 300 mg cada 12 horas) que co
siste en difundir en forma adecuada los conoci- mienza entre las 14 y 34 semanas del embarazo
niientos necesarios para evitar su transmisión, y continúa hasta iniciado el trabajo de parto; la
¿ io s ya se mencionaron al tratar la epidemiología administración de ZDV intravenosa durante el tra
de esta infección. Sin embargo, hay tres circuns bajo de parto a la dosis de carga de 2 mg/kg dilui
tancias en las que la indicación de regímenes de da en dextrosa al 5% a pasar en una hora, seguida
prevención con fármacos antirretrovirales está de una dosis de mantenimiento de 1 mg/kg/hora
ampliamente aceptada: la profilaxis de la trans hasta el parto, y la administración de ZDV en so
misión vertical; la de la exposición ocupacional lución oral al recién nacido que se inicia entre
y la de la exposición no ocupacional al HIV-1. las 8 a 12 horas posparto en dosis de 2 mg/kg
cada 6 horas durante las primeras 6 semanas
Profilaxis de la transmisión vertical del HIV de vida, disminuye el riesgo de transmisión del
La transmisión matemo-fetal es la causa de casi 25,5% ai 8,3%.
lodos los casos de infección por HIV en niños. En países subdesarrollados se ha empleado ne-
La tasa de transmisión sin intervenciones preven virapina como único antirretroviral y en dosis úni
tivas oscila entre 13% y 48%, esta variación de ca en el momento del parto con el que se obtiene
pende en gran parte del hecho que las madres una reducción del 50% en el riesgo de transmi
amamanten o no a sus hijos. Esto se debe a que si sión vertical y se mantiene su efectividad en ni
bien en la mayor parte de los casos la transmi ños que se alimentan con lactancia materna. Sin
sión ocurre durante el tercer trimestre del emba embargo, la rápida aparición de la mutación
razo y en el momento del parto, la lactancia ma K I03N que invalida el uso de ITRNN desacon
terna es la causa del 40% de la infecciones de los seja la utilización de este fármaco como mono-
recién nacidos en países subdesarrollados. terapia y en dosis única.
En el mundo desarrollado, la eficacia de la La combinación ZDV más lamivudina (3TC)
TARGA ha motivado el interés por la procrea reduce la transmisión vertical a un 1,6%. El agre
ción en parejas con ambos miembros infectados gado de un IP, especialmente nelfinavir, reduce
o serodiscordantes. este porcentaje a 0%.
Varios factores tienen influencia en el riesgo Si la mujer HIV positiva llega al embarazo sin
de transmisión; entre ellos so incluyen factores TARGA previo se podrá iniciar el tratamiento lue
maternos, virales, obstétricos, lactancia y neona go de la semana 14 de gestación; en estas circuns
tales, pero es la CVP materna durante el embara tancias, los esquemas más utilizados son ZDV, más
zo y en el momento del parto el factor más im 3TC, más NFV o ZDV, más 3TC, más NVP. En
portante asociado con la transmisión vertical. Sin aquellos casos en que la TARGA fuera opcional
embargo, no existe un nivel de CVP materna por o se prefiera limitar la exposición a antirretro
encima del cual se pueda asegurar una transmi virales, se deberá ofrecer al menos monoterapia
sión del 100% ni un valor por debajo del cual la con ZDV.
transmisión no se produzca. En este sentido, una En aquellas mujeres bajo TARGA en quienes
CVP materna < de 1.000 copias/mL en mujeres el diagnóstico de embarazo se realice luego del
bajo TARGA se asocia con una tasa de transmi primer trimestre de gestación, la TARGA debe
sión de 0,9%; en cambio si la madre no recibe continuar; finalmente, cuando el diagnóstico de
TARGA esta tasa asciende al 9,8%. Esto demues embarazo se realice antes de la semana 14, se
tra la importancia de ofrecer TARGA a todas las deberá interrumpir todo el esquema de TARGA
400 □ Segunda parte - Infecciones virales
y reíniciarlo a partir del inicio del segundo tri Si se elige la cesárea como forma de parto, U
mestre. administración de ZDV debe iniciarse tres horas
Los datos de seguridad de los antirretrovirales antes de la cirugía.
para el feto son limitados hasta la fecha. ZDV es Finalmente, la lactancia está contraindicada, ya
el fármaco más experimentado y con el que se que representa el 15% de los casos de transmi
tiene mayor experiencia. Sólo se refiere un ries sión por esta vía.
go pequeño de toxicidad mitocondrial en niños En resumen, la profilaxis de la transmisión
de madres tratadas con este ITRN. La adminis perinatal incluye el tratamiento antirretroviral de
tración de IP a la madre parece asociarse con ries la madre desde la semana 14, durante el parto, U
go de bajo peso al nacer. La seguridad de otros cesárea electiva, la sustitución de la lactancia
fármacos no es bien conocida; por la informa materna y el tratamiento del recién nacido. Estas
ción disponible deben evitarse, hasta no dispo medidas reducen el riesgo de transmisión verti
ner de más datos, los siguientes fármacos: teno- cal casi a 0%.
fovir, abacavir y fosamprenavir. Efavirenz está
formalemnte contraindicado en ios primeros 3 Profilaxis de la exposición ocupacional
meses del embarazo por el riesgo de efectos tera- El riesgo de una infección luego de una expo
togénicos sobre el tubo neural. sición accidental a líquidos posiblemente conta
Si existen otras alternativas se desaconseja tam minados por HIV-1 difiere según el tipo de ac
bién el uso de indinavir por el riesgo de ictericia cidente. Cuando se trata de una exposición percu-
neonatal. La prevalencia de defectos al nacer en tánea, el riesgo de seroconversión alcanza a un
niños que han estado expuestos a antirretrovirales 0,33% (o sea I cada 333 accidentes); en una ex
durante el primer trimestre del embarazo fue del posición de las mucosas es del 0,09%, y cuan
3,1%, cifra que no difiere significativamente de do el contacto es con la piel intacta resulta ser
aquellos niños no expuestos (2,1%). menor del 0,09%. Los factores de riesgo están
En relación con la madre, se han descripto ca relacionados con la profundidad de la lesión,
sos de toxicidad mitocondrial y acidosis láctica y con el estado clínico y virológico de la fuente
en mujeres embarazadas, las cuales parecen es de contacto.
tar más predispuestas a esta complicación. Estos Los accidentes de alto riesgo son los que invo
efectos adversos se relacionan fundamentalmen lucran un gran volumen de sangre (por ejemplo
te con el uso de estavudina y didanosina, que por pinchazo profundo con una aguja que se ha utili
esta razón están contraindicados en mujeres em zado en un acceso vascular del paciente) que con
barazadas. Además, la hepatotoxicidad por nevi- tenga una carga viral elevada (por ejemplo, de
rapina es mucho más frecuente en mujeres em un paciente que se encuentra en etapa de serocon
barazadas con recuentos de linfocitos T CD4+ versión o en la fase final de la enfermedad).
> de 250 cél/pL. Los líquidos corporales pueden dividirse en
La cesárea electiva a las 38 semanas de gesta aquellos que contienen una elevada carga viral y
ción, antes de que comience el trabajo de parto y pueden intercambiarse entre personas: sangre, se
de la ruptura de membranas, reduce en un 50% men, secreciones vaginales y leche materna; los
el riesgo de transmisión del HIV, independien que contienen una elevada carga viral y no son in
temente de otros factores asociados ya descrip- tercambiables entre personas, pero pueden conta
tos. Si la cesárea se realiza luego de comenzado minar al personal de salud en accidentes de labo
el trabajo de parto o luego de la ruptura de mem rales: líquido pleural, pericárdico, ascítico, amnió-
branas, el valor preventivo de la transmisión ver tico y cefalorraquídeo; los considerados no conta
tical del HIV desaparece. En mujeres que lle minantes (excepto cuando tienen sangre macros
gan al parto con CVP < de 1.000 copias/mL la cópica): saliva, esputo, vómitos, lágrimas, sudor,
cesárea programada no reduce el riesgo de trans bilis, secreciones nasales, orina y materia fecal.
misión; en estos casos, la tasa de transmisión es Producido el accidente, hay una serie de medi
del 0,8% con cesárea electiva y 0,7% con parto das generales a tomar. Si la herida sangra, per- ;
vaginal. mítase el sangrado profuso, para eliminar posi- •
\
Capítulo 41 - Enferm edad por el virus de la inm unodefíciencia humana (HlV/sida) □ 401 (
bles cuerpos extraños, y lávese con agua y ja 800 mg cada 8 horas o NFV 750 mg cada 8 horas
c
bón. Cuando se contamina la piel corresponde o lopinavir/ritonavir 400 mg más 100 mg, res (
lavarla con agua y jabón. En el caso de la muco pectivamente cada 12 horas.
sa oral, se efectuarán enjuagues con agua limpia, El efavirenz no puede utilizarse durante el c
y en cuanto a la conjuntiva, se indicarán irrigacio embarazo y debe tenerse en cuenta el riesgo ele
t
nes con solución fisiológica. vado de exantemas por hipersensibilidad que
Ante una exposición accidental (pinchazo, sal
picadura) de un profesional sanitario por líqui
pueden confundir con el exantema del síndrome
retroviral agudo. La nevirapina no se aconseja
i
dos de una persona con diagnóstico de sida o HIV por el mismo riesgo de hipersensibilidad y por la t
(+)i o que rechace la investigación serológica, hay posibilidad de hepatopatía tóxica.
que informar al trabajador de los riesgos posi Si se sabe o se sospecha que el paciente índice t
bles y efectuar una evaluación clinicoserológica puede tener una cepa viral resistente a uno o va
1
inicial del accidentado, para descartar o confir rios fármacos, deben seleccionarse antirretro
mar una infección previa. Se le indicará que con
sulte ante cualquier cuadro febril que se presente
virales sin resistencia cruzada con aquellos. Ésta
podría ser una indicación para efectuar un estu
c
en las siguientes 12 semanas y que pudiera co dio de resistencia en el caso índice, pero sin por i
rresponder a la primoinfección. Después de la esto demorar el inicio de la profilaxis en la per
evaluación inicial, los trabajadores seronegativos sona expuesta. «
deberán repetir las pruebas serológicas a las 6 y
i
12 semanas, y a los 6 y 12 meses posteriores al Profilaxis posexposíción no ocupacional
accidente laboral. El riesgo de transmisión del HIV a partir de i-
La administración de antirretrovirales posexpo una persona infectada es del 0,6 % tras una in
sición accidental, para prevenir la infección, debe yección intravenosa, del 0,4% tras la inyección i
iniciarse lo antes posible, preferentemente duran percutánea, del 0,01% al 0,05% en el sexo oral
te las primeras 6 horas después del accidente, y sin eyaculación, del 0,05% al 0,8% tras el coito
se mantendrá durante un mes. La eficacia de ini vaginal receptivo, sin preservativo o con la rotu (t
ciar esta administración después que transcurrie ra o mal uso de éste, y del 0,8% al 3% luego del
ron 24 a 72 horas es controversial. Los esquemas
disponibles incluyen la combinación de zidovu-
coito anal receptivo, sin preservativo o con su
rotura o mal uso.
c
dina más 3TC. El denominado esquema expan La decisión de llevar a cabo este tipo de profi (
dido agrega un inhibidor de la proteasa, por lo laxis debe ser tomada entre el médico y el pa
(
común indinaviro nelfinavir. El uso de uno u otro ciente, a través de la evaluación de los riesgos y
régimen debe basarse en el nivel de riesgo de in beneficios; se desaconseja en personas con repe (
fección. Habrá que considerar que toda exposi tidas exposiciones de riesgo. En todos estos ca
ción percutánea a sangre entraña un riesgo muy sos debe considerarse si la exposición es esporá <
alto y la indicación será de un esquema con 3 dica y excepcional, si la persona concurre dentro
fármacos (2 ITRN más 1 IP). de las 48 a 72 horas de la exposición y si es posi (
Tras la exposición de las mucosas y la piel a ble el seguimiento clínico y por el laboratorio de
sangre contaminada también se usarán regíme la persona expuesta. Además, el riesgo se incre
nes triples. menta si el caso índice tiene una carga viral e le
En cambio, las salpicaduras en la piel o muco vada (> 5000 copias/mL), durante la etapa aguda
sas con otros líquidos contaminados, como se de la infección, o tiene diagnóstico de enferme
men, secreciones vaginales, LCR, y líquidos pleu dad HlV/sida avanzada.
ral, peritoneal, pericárdico y amniótico, serán Los esquemas de profilaxis son similares a los
indicación de profilaxis con regímenes de 2 fár de la prevención de la exposición ocupacional y
macos (2 ITRN). su indicación se recomienda en los accidentes de
Las dosis a utilizar son: zidovudina, 200 mg alto o moderado riesgo y con contacto con sujeto
cada 8 horas; 3TC, 150 mg cada 12 horas, e IDV, HIV positivo o desconocido.
m
m
42
HlV/sida en la infancia
Héctor E. Ralli
Gerardo E. Laube
Ornar J. Palmieri
cia epidemiológica es la tuberculosis, en general, O tras m a n ifesta cio n es. Hepatitis viral A, B y
asociada con algún caso de enfermedad familiar. C, miocarditis, glomerulonefritis focal y prolife.
Infecciones m ucocutáneas. FoIicuUlis, celuli- rativa, afecciones oculares con compromiso de-
lis, molusco contagioso, herpes simple, herpes la retina o la córnea y de los nervios periféricos o
zoster y varicela. músculos. Otro padecimiento a tener en cuenta
In fe c c io n e s d e l siste m a n e rv io so c e n tra l. es la neumonía intersticial linfoide (NIL), que es
Meningoencefalilis por bacterias comunes, Myco- un proceso inflamatorio progresivo del intersti
b a c teriu m tu b e rc u lo sis, T oxoplasm a g o n d ii, cio pulmonar que evoluciona hacia la insuficien
C iyptococcus neoform ans, citomegalovirus, her cia respiratoria crónica con grave hipoxemia en
pes y por el mismo HIV. los pacientes que adquirieron la infección por HIV
M anifestaciones digestivas. Diarreas agudas y al atravesar el canal del parto. La etiopatogenia
crónicas de origen viral, bacteriano, parasitario de esta afección parecería estar vinculada con los
o micóiico. virus de Epstein-Barr y HIV.
M anifestaciones hem áticas. Anemia, leuco- Los signos y síntomas de la infección por el HIV
penia, plaquetopenia o aplasia de la médula ósea en la infancia son numerosos y muy variables y
ya sea por invasión viral, bacteriana o toxicidad pueden resultar de la acción directa del virus so
por medicamentos. bre diferentes órganos o sistemas o ser secunda-
Niños que no presentan signos o síntomas atríbuibies a la infección por el HiV o aquéllos que manifiestan tan sólo
una de las condiciones descriptas en la categoría A
' Categoría A: síntomas leves
Niños que presentan dos o más de las condiciones que se describen a continuación, pero ninguna
de las que se describen en las categorías 8 y C
• ünfadenopatfas
• Hepatomegalia
• Ésplenomegalia
• Dermatitis
• Parotiditis
• Infecciones de las vías respiratorias altas recurrentes o persistentes, sinusitis u otitis media
>Categoría B: síhtpmas'módérados
Niños que presentan manifestaciones clínicas átribuibles a la infección por el HIV diferentes delás enumeradas en
las categorías A y C. Como ejemplo se describen a continuación algünas de las condiciones clínicas de la categoría B
• Anemia (< 8 g/dL), neutropenia (< 1.OOQ/mL).o trombocitopenia (< 10O.pOO/mL) persistentes >30 días
• Meningitis baaeriana, neumonía o sepsis (episodio único)
• Candidiasis orofaríngea (muguet) persistente (> 2 meses) en niños mayores de 6 meses
• Cardiomiopatía
• Infección por citomegalovirus, durante el primer mes de vida
• Diarrea, recurrente o crónica
• Hepatitis
• Estomatitis herpética (HSV) recurrente (más de dos episodios en 1 año)
• HSV, bronquitis, neumonitis o esofagitis que se presentan durante el primer mes de vida
• Herpes zóster que afecta, al menos en dos episodios distintos, a más de un dermatoma
• Leiomiosarcoma - ,
• Neumonía intersticial linfoide (NIL) o hiperplasía pulmonar linfoide (HPL) continúa
Capítulo 42 - H lV /sida en la infancia □ 405
Cuadro 42-1. C la s i f ic a c i ó n d i n i c a d e l o s n i ñ o s i n f e c t a d o s p o r e l H I V ( C o n t i n u a c i ó n ) .
• Nefropatía
• Nocardiosis
• Fiebre persistente (> 1 mes)
• Toxoplasmosis, antes del mes de vida
• Varicela diseminada
Categoría C: síniornásgiravés
- Niños que presentan alguna de las condiciones enumeradas en la definición de caso de sida de 1987, con excepción
; de la NIL
• Infecciones bacterianas graves, múltiples o recurrentes (cualquier combinación, al menos, de dos infecciones
confirmadas con cultivo positivo en un períodos de 2 años) del siguiente tipo: sepsis, neumonía, meningitis,
osteomielitis o artritis, o abscesos de órganos internos (excluyéndose otitis, abscesos cutáneos o de mucosas,
. e infecciones relacionadas con catéteres)
• Candidiasis esofágica o pulmonar (bronquios, tráquea o pulmones)
. ■• Coccidioidomicosis diseminada (en localización distinta o, además, en pulmón y ganglios linfáticos cen/icales
■ o biliares)
• Criptococosis extrapulmonar
' • Criptosporidiosis o isosporosis con diarrea persistente durante más de 1 mes
• Citomegalovirosis activa de inicio después del primer mes (en otra localización distinta al hígado, bazo
, ó ganglios linfáticos)
;. • Encefalopatía (como mínimo, uno de los siguientes hallazgos progresivos presentes a! menos durante 2 meses,
- en ausencia de otras enfermedades concurrentes con la infección por el HIV que puedan explicar estas alteraciones):
d) pérdida o retraso en las adquisiciones propias de la edad o disminución de la capacidad intelectual, verificadas
mediante la escala normal de desarrollo evolutivo o tests neuropsicológicos; b) alteración del crecimiento del
. cerebro o microcefalia adquirida, demostrada mediante la medición del perímetro craneal o atrofja cerebral, puesta
' de manifiesto mediante TC o RM (se requieren alteraciones importantes en estas pruebas para el diagnóstico en
niños menores de 2 años), y c) déftcit motores simétricos puestos de manifiesto por dos o más de los siguientes
- hallazgos: paresía, reflejos patológicos, ataxia o alteración de la marcha
• Infección por herpes simple con úlcera mucocutánea persistente durante más de 1 mes o bronquitis, neumonitis
. :o esofagitis de cualquier duración que se inicie después del mes de vida
• HIstoplasmosis diseminada (en una localización distinta o, además, en pulmóri y ganglios linfáticos cervicales
. o biliares) .
• Sarcoma de Kaposi
• Linfoma primarlo de SNC
• Ünfoma de Burkitt o inmunoblástico, o linfoma de células B o de fenotipo Inmuriológico desconocido
• Infección por Mycobacterium tuberculosis, diseminada o extrapulmonar,
• Infección por otras especies de Mycobacterium o especies no Identificadas diseminada o extrapulmonar
; • Infección por Mycobacterium avium complex o Mycobacterium kansasii, diseminada p extrapulmonar
• Neumonía por Pneümocysf/s jiroveci ■
• Leucoencefalopatía multifocal progresiva '
• Bacterlemia por Salmonella (no tifoidea) recurrente
Toxoplasmosis cerebral de Inicio posterior al mes de vida .
' • Síndrome de emaciación en ausencia de otra enfermedad que coincida con la infección por el HIV que justifique
los siguientes hallazgos: a) Pérdida mantenida de peso >10%, o b) pérdida de peso durante el seguimiento, al
:. menos de dos percentlles de las tablas de los niños de edad superior a 1 año, o c) peso por debajo del percentil 5,
;:--en tablas de peso para la talla en dos controles consecutivos separados al.menos 30 días, además de: a) diarrea
;; aónica (por ej. dos deposiciones o más por día al menos durante 30 días), o b) flebre'documentada (durante un
: período mínimo de 30 días. Intermitente o constante).
TT
V
O
406 □ Segunda parte - Infecciones virales
#
O rios a la inmunodeficiencia que se complica con proteína viral (antígeno p24) o de su ácido nucleico
infecciones oportunistas. Las manifestaciones clí (ADN proviral o ARN genómico). Para los segun
V nicas de los pacientes con infección perinatal se dos la detección de anticuerpos es suficiente para
relacionan de acuerdo con su evolución en: diagnosticar la infección. Esto se debe a que hasta
• i Progresores rápidos. Son aquellos pacientes el año y medio de vida todavía pueden encontrar
que inician su sintomatología antes del año de se anticuerpos maternos en la sangre del niño.
u
vida, con retardo del crecimiento, retraso madu Una prueba virológica positiva indica presun
o rativo, infecciones graves, en especial por Ptieu-
m ocysíis jiroveci o candidiasis bucal y caída im
ción diagnóstica y debe ser confirmada con la re
petición en una segunda muestra entre los 30 y 60
O portante de los linfocitos T CD4+, En este gru días. Para la realización de los estudios en niños,
po están del 15% al 20% de los infectados. de acuerdo con la Ley 23.798, se necesita el con
D Progresores lentos. Son aquellos pacientes que sentimiento por escrito del padre, de la madre o
permanecen asintomáticos hasta el segundo o ter del adulto a cargo.
O
cer año o más; suelen presentar neumonía inters C ultivo viral. Se considera positivo cuando en
O ticial linfoidea, hipertrofia parotídea o infeccio dos muestras consecutivas se detecta antígeno
nes por el virus herpes zóster que progresan len p24 y negativo cuando a los 30 días todas lasi
O tamente. De un 70% al 80% de los pacientes es muestras fueron negativas.
tán en este grupo. Prueba de antígeno p24. Es una prueba muy
o Progresores lentos asintom áticos. Son aque específica pero de baja sensibilidad. Por la posi
llos niños hijos de madre infectada que permane bilidad de falsos positivos no se recomienda como
€)
cen asintomáticos, con valores de carga viral baja técnica aislada para diagnosticar la infección en
y sin alteraciones del sistema inmune por un pe menores de 1 mes de vida.
Cuadro 42-2. Categorías inmunológicas basadas en el recuento de linfocitos T CD4+ especificas para cada
edad en núní)ero total y en porcentaje.
«>
a) Niño nacido de madre in feaad a que presenta: dos exámenes de detección viral negativos y ELISA no reactivo
después de los 18 meses.
b) Niño nacido de madre infectada que presenta: dos pruebas de ELISA negativas antes deios 18 meses o una
después de dicha edad.
Ántécedéñte 5;ep'íáemio^
Padres HIV positivos Retardo en el crecimiento intrauterino
Padres con conductas de riesgo Detención intrauterina del perimetro cefálico
Tuberculosis Transfusiones intrauterinas o al nacer
Antecedentes de abuso sexual
M ad re HIV positiva
^
Positivo
\Negativo
y "
Positivo
\
Negativo
y Y
Confirmar con Repetir al Infectado No Infectado
segunda muestra segundo mes
Y
Positivo Negativo
Y
Infectado Repetir entre 4
y 6 meses
Y
Serología a ios
18 meses
(Jebe tener el plan completo de vacunaciones, con Cuadro 42-8. Esquema de vacunación en el niño con i
los refuerzos correspondientes en las fechas pro infección por el HíV/Sida.
gramadas. Las vacunas a virus vivos se deben Vacuna Asintomáticb Sintomátrco
aplicar en ei momento que no haya compromiso
BCG No No
de la inmunidad. La vacuna BCG si bien está
Polio (Salk) SI Sí
contraindicada en estos niños ia OMS autoriza
Polio (Sabin) No No
su uso en los países con alta prevalencia de tu
DPT-Hib Sí Sí
berculosis. La vacuna antipoliomielítica Salk, a
Antimeningococócica Sí Sí
virus muerto, reemplaza a la Sabin ora! a virus
Antineumococócica Sí Sí
vivos (ver Cuadro 42-8).
Antigripal Sí SI
Triple viral SI No
Tratam iento antirretroviral. La estrategia
Hepatitis 6 Sí Sí
actual de la indicación oportuna del tratamiento
Hepatitis A Sí No
es lograr la máxima supresión de la replicación
Antivaricelosa Sí No
viral, evitar el desarrollo de resistencia y preser
Antiinfluenza (< 6meses) SI SI
var o restaurar la función inmune. Por otra parte,
los niños presentan particularidades farmaco-
cinéticas, que es necesario conocer para la indi
cación dcl tratamiento antirretroviral. Éstas, pue b) Síntomas clínicos moderados o evidencia
den modifícarse en las distintas etapas de madu de inmunodepresión (linfocitos T CD4+ entre
ración y requiere formulaciones pediátricas e s 15% y 24% o carga viral >100.0(X) copias):
pecíficas, sencillas de administrar y de fácil do considerar.
sificación. Además, las interacciones medicamen c) En niños asintomáticos con estado inmune
tosas son frecuentes en los niños con infección normal y carga viral <100.000 copias: diferir.
por HIV, lo cual es un campo en continua evolu 4. A partir de los 13 años: considerar las si
ción. Los potenciales beneficios inmunitarios y guientes situaciones:
antivirales del tratamiento antirretroviral deben a) Presencia de sida o T CD4+ < 200 células:
evaluarse en relación con los problemas de ad recomendar.
herencia, resistencia y toxicidad. El inicio de la b) Síntomas clínicos moderados o evidencia
terapia antirretroviral no es una urgencia y antes de inmunodepresión (linfocitos T CD4+ en
de iniciarla es necesaria una correcta evaluación tre 201 y 350 cél/|xL y carga viral < 100.000
de cada caso basada en los criterios siguientes: copias): considerar.
c) En niños asintomáticos con estado inmune
L Edad menor de 2 años: independientemente normal y carga viral < 100.000 copias: diferir.
del estado clínico, viral e inmunitario.
2. Edad de 2 a 4 años: considerar las siguientes Regím enes recomendados para iniciar la te*
situaciones: rapia:
a) Presencia de sida o T CD4+ <20%: reco Inhibidor de proteasa más nucléosídos:
mendar. • Recomendado: 2 INTI más lopinavir/ritonavir
b) Síntomas clínicos moderados o evidencia (especialmente en niños menores de 2 años)
de inmunodepresión (linfocitos T CD4+ en • Alternativa: 2 INTI más nelfinavir
tre 20% y 24% o carga viral > 100.000 copias): Inhibidor no nucléosído más nucleósidos:
considerar • Recomendado: > 3 años: 2 INTI más efavi-
c) En niños asintomáticos con estado inmune renz; < 3 años : 2 INTI más nevirapina
normal y carga viral < 100.000 copias: diferir. • Alternativa: > 3 años: 2 INTI más nevirapina
3. Edad de 4 a 12 años: considerar las siguien N ucleósidos recom endados: AZT más 3TC;
tes situaciones: AZT + ddI;ABC más 3TC
a) Presencia de sida o T CD4+ <15%: reco Nucleósidos alternativos: ABC más AZT; d4T
mendar. más 3TC; ddl más 3TC
410 □ Segunda parte - Infecciones virales
pleta, radiografía de tórax, pruebas Uiberculínicas, C ontroles de la inm unidad. Recuento de linfo-
electrocardiograma y contenido gástrico cada 3 citos T CD4+ cada 3 a 6 meses.
o 6 meses de acuerdo con el criterio clínico. C ontroles de carga viral. Cada 3 a 6 meses.
Bibliografía -- ------------------------—— ^~
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Ocasionalmente el SARG puede acompañarse ratoria que haya tenido contacto estrecho con un
de un síndrome neurológico agudo grave. En pa caso sospechoso o probable de SARG, o antece
cientes que presentaron convulsiones, en el LCR dente de viaje o residencia en un área de trans
se identificó el SARS-CoV. misión local reciente de SARG dentro de los 10
El laboratorio muestra linfocitopenia (destruc días del comienzo de los síntomas. Se consideró
ción de los linfocitos CD4 y CD8), tromboci- probable a un caso sospechoso de SARG con
topenia, prolongación del tiem po parcial de hallazgos radiográficos de neumonía, o síndro
iromboplasíina activada, aumento del dímero D, me de distrés respiratorio, o un caso sospechoso
incremento dcl LDH, transaminasas y CPK. con una o más pruebas de laboratorio positivas
La radiografía torácica comparte las caracte para SARS-CoV, o un caso sospechoso con evi-
rísticas de la neum onía producida por otros dencias en la autopsia de síndrome de distrés res
patógenos. El máximo compromiso radiológico piratorio de etiología desconocida.
pulmonar se correlacionó con un mayor aumen Los Centros para el Control y Prevención de
to de las transaminasas, lo que sugiere un meca Enfermedades (CDC) proponen una clasificación
nismo patogénico común, principalmente de me basada en criterios clínicos, epidem iológicos y
diación inmune para las alteraciones pulmonares de laboratorio. Los criterios clínicos fueron: c«-
y hepáticas. La tomografía computarizada de alta ferm ed a d tem prana (presencia de dos o más de
resolución es útil para detectar en forma tempra los siguientes hallazgos: fiebre, escalofríos, mial
na opacidades parenquimatosas. Las imágenes gias, cefalea, diairea, dolor de garganta, rinorrea);
radiológicas se visualizan en la periferia o en una enferm edad respiratoria leve o m oderada (fie
localización mixta axial y periférica, y en forma bre mayor a 38®C y como mínimo un síntoma del
predominante, en los dos tercios inferiores de am tracto respiratorio inferior, como tos, disnea o di
bos pulmones. Las lesiones no evolucionan ha ficultad respiratoria); enferm edad respiratoria
cia la cavitación, ni se observan linfadenopatías grave (criterios de enfermedad leve o moderada
biliares o derrame pleural. La progresión radio más una o más de las siguientes características:
gráfica evoluciona desde una opacidad focal uni hallazgos radiográficos compatibles con neumo
lateral hasta el compromiso multifocal o bilate nía o síndrome de distrés respiratorio, o hallaz
ral durante la segunda fase de la enfermedad. Con gos necrópsicos compatibles con neumonía, o sín
poca frecuencia se produce neumomediastino es drome de distrés respiratorio de etiología desco
pontáneo o síndrome de distrés respiratorio. nocida).
La enfermedad tiene un patrón bifásico. La pri Los criterios epidem iológicos fueron: posible
mera fase, de replicación viral, se asocia con in o probable exposición a SARS-CoV dentro de los
cremento de la carga viral, fiebre, mialgias y 10 días anteriores al comienzo de los síntomas.
malestar general que mejoran después de unos Los criterios de laboratorio fueron: detección
días. La segunda fase, de daño inmunopatológico, de anticuerpos séricos anti SARS-CoV por una
se distingue por la recurrencia de la fiebre, desa- prueba válidada por los CDC o aislamiento en
turación de oxígeno, progresión radiológica de cultivo celular del SARS-CoV de especímenes
la neumonía y caída de la carga viral. clínicos, o detección del ARN del SARS-CoV por
La mayoría de los pacientes mejoran con el tra transcripción inversa de la reacción en cadena de
tamiento. Algunos requieren internaciones en la polimerasa (RT-PCR). Se estableció como caso
unidades de cuidados intensivos por evolucionar probable de SARG al cumplimiento de los crite
a síndrome de distrés respiratorio y requerir asis rios clínicos de enfermedad respiratoria grave
tencia ventilatoria mecánica. más los criterios epidem iológicos de exposición
al SARS-CoV, y como caso confirmado de SARG
a la presencia de enfermedad clínicamente com
DIAGNÓSTICO
patible con confirmación por el laboratorio.
La Organización Mundial de la Salud definió Las tasas de detección de SARG por medio de
como caso sospechoso de SARG a toda persona RT-PCR convencional son en la primera semana
con fiebre mayor de 38®C, tos o dificultad respi de enfermedad generalmente bajas. A los 14 días
C apítulo 43 - Síndrom e agudo respiratorio grave □ 415
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Infecciones bacterianas (t-
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Leptospirosis
A lfredo C. Seijo
Ornar J. Palmieri
ron en las trincheras alemanas y francesas du el daño tisular es producto de aquéllos o bien de
rante la Primera Guerra Mundial. Hubo brotes la liberación de sustancias con acción similar a
epidémicos en la Segunda Guerra Mundial y en las endotoxinas provenientes de la lisis bacte
la guerra de Vietnam. riana. Es la fase sindromática, en la que puede
La enfermedad predomina en adultos jóvenes haber meningitis, nefropatía, ictericia, neumo-
del sexo masculino, lo cual es atribuido al tipo patía, hemorragias, uveítis y miocardiopatías. Las
de actividades que favorecen la infección. La ma meninges y el tracto uveal son ejemplos de pato
yor incidencia en épocas de calor se debe a fac genia por inmunocomplejos. Es llamativo que en
tores climáticos, como las lluvias y las inundá la fase bacteriémica el pasaje de leptospiras por
is ciones, que dispersan el microorganismo y ex- el sistema nervioso sea asintomático y que a los
i ponen a los hospederos. El clima frío no es limi- pocos días se establezca una meningitis por com
tante para el mantenimiento de la leptospira, como plejos inmunes.
se ha comprobado en aislamientos realizados en En la patogenia de la ictericia y la nefropatía
'ñ la puna Argentina (Seijo y col.). concurren varios mecanismos: hipoxia, acción de
t*"i toxinas y consumo local de plaquetas. La vascu
litis intensa se asocia con necrosis tubular y neu
j- PATOGENIA
! monías graves con hemorragia alveolar. El m io
Hay dos fases bien diferenciadas en la pato cardio, además de las perturbaciones propias de
genia y la físiopatología, las que a su vez condi un estado metabólico alterado por la nefropatía y
cionan distintas manifestaciones clínicas. la agresión hepática, sufre la lesión directa pro
La primera es la irrupción del microorganismo vocada por la coronaritis. En el paciente grave se
en la sangre (bacteriemia), que condiciona una suman alteraciones que actúan en cascada y a su
respuesta evidenciada por los denominados reac- vez desencadenan nuevos mecanismos de daño. c
tantes de fase aguda (factor de necrosis tumoral
y otras interleucinas). Su resultado es la vasculitis, c
ANATOMÍA PATOLÓGICA
acontecimiento patogénico que será el marcador
c
evolutivo de la enfermedad. Desde el punto de vista La observación macroscópica de los órganos
clínico se corresponde con el período de inicio o involucrados en general los muestra congestivos c
«síndrome gripal», que se tratará más adelante. y con tamaño aumentado, en algunos casos con
La vasculitis es la primera causa de anoxia tisu- focos hemorrágicos y a veces impregnados por t
lar, trombocitopenia y manifestaciones hemorrá- pigmentos biliares.
gicas, cuya presencia es un signo de alarma ya El hígado conserva la arquitectura del lobulillo
t
que indican vasculitis subyacente de gravedad
intermedia a elevada.
excepto en las formas graves, en donde muestra
disociación de las trabéculas hepatocitarias y en
c
La segunda fase es la determinada por la apari las fases finales necrosis acidófila. La microsco t
ción de anticuerpos. Esta respuesta inmune es pía típica de la leptospirosis revela hepatocitos
cualitativa y cuantitativamente importante; ade tumefactos y balonizados en la región centrolo-
más es precoz, ya que se produce entre el 4® y el bulillar, con focos muy rart^de necrosis hepato-
5® día de la enfermedad. celular y sobrecarga de pigme^o-biliar. La acti
Los anticuerpos IgM e IgG producen lisis vidad mitótica marcada constituye una caracte
bacteriana, por lo cual la bacteriemia persiste en rística. El pigmento biliar también aparece en los
general alrededor de 10 días. Las leptospiras se canalículos y en las células de Kupffer, que están
localizan en los túbulos renales, donde quedan hiperplásicas e hipertróficas. En el espacio porta
protegidas de la respuesta inmune humoral. Es el infiltrado es linfocitario, con presencia de ma-
por ello que en algunas especies la leptospiruria crófagos. La placa limitante se conserva intacta.
puede continuar varios meses después de evolu La microscopia electrónica confirma la colestasis
cionada la fase aguda de la enfermedad. intrahepática, con desaparición de las microve-
La formación de inmunocomplejos y su depó llosidades de la región canaliculardel hepatocito
sito en los tejidos caracteriza esta fase, en la que y alteraciones del aparato de Golgi. Con técnicas
TT
'4
422 D Tercera parte - Infecciones bacterianas
ves, pero también suele originarse en la vasculitis agregado de suero de conejo o de ácidos grasos
de las arterias coronarias. de cadena larga, además de otras sustancias (me
La rapidez con que se instalan los síntomas hace dios de Fletcher, Tween 80, albúmina bovina,
que el bazo no sea palpable en la gran mayoría etc.). A la sangre para hemocultivo se le agrega
de los casos. Hay también una reacción linfática oxalato de sodio o heparina, pero no citrato. En
en forma de pequeñas adenopatías indoloras sin estas condiciones es factible procesarla aun has
periadenitis. ta 5 a 7 días después de su extracción. La orina
El hemograma muestra leucocitosis con neu- se envía refrigerada (4®C a 8°C, nunca congela
trofilia y, en muchos casos, la aparición de mielo- da) con corrección de pH a 7 o 7,2, si no puede
citos inmaduros. La anemia de tipo hipocrómico procesarse de inmediato. Las técnicas de reco
no es constante ni se corrige con la administra lección son las generales para los hemocultivos
ción de hierro. En su mecanismo estaría invo y urocultivos.
lucrado un trastorno del transporte del hierro. La El aislamiento tiene valor epidemiológico, pero
trombocitopenia en general se asocia con las for rara vez ayuda al clínico en el diagnóstico, debi
mas graves. La eritrosedimentación está acelera do a su demora.
da: 40 a 100 mm o más en la primera hora. En el estudio de la respuesta inmune se utili
Otros exámenes de laboratorio mostrarán la zan varias técnicas serológicas, de las cuales la
disfunción hepatocelular, los distintos grados de de referencia es la aglutinación microscópica
insuficiencia renal, las alteraciones gasométricas (MAT). El suero del paciente se enfrenta a dis
y las del medio interno, según los parénquimas tintos serogrupos de leptospiras, para observar la
afectados y su gravedad. aglutinación en microscopía de fondo oscuro. Las
La evolución de la enfermedad depende de su aglutininas son de clase IgM e IgG. En la fase
forma de presentación. En los casos leves dura alre aguda de la enfermedad el patrón de aglutinación
dedor de dos semanas, pero en los graves es más es bastante característico, pero debe demostrarse
prolongada y su desenlace puede ser la muerte. conversión serológica en dos muestras de suero
extraídas con un intervalo mínimo de 7 días.
La aglutinación m acroscópica con antígeno
DIAGNÓSTICO
termorresistente (TR) es útil, ya que sólo eviden
Como toda enfermedad infecciosa el diagnós cia aglutininas IgM, es de bajo costo y de reali
tico se basa en la epidem iología, la clínica y los zación sencilla. Se han desarrollado ELISA,
estudios microbiológicos. contrainmunoelectroforesis y otros procedimien
Epidemiología: considera las posibles fuentes tos que no tienen la difusión de los anteriores.
de infección, las actividades y los hábitos del El estudio de la respuesta inmune a través de
paciente, así como las condiciones de vivienda y la MAT es la forma habitual de diagnóstico. Esta
trabajo. Es necesario subrayar la importancia de técnica se lleva a cabo en laboratorios dedicados
la epidemiología para el diagnóstico. a leptospirosis, lo cual limita el estudio a áreas
Clínica: pensar en leptospirosis ante toda en determinadas. Sin embargo, los sueros pueden
fermedad de comienzo brusco, de tipo gripal, que derivarse correctamente refrigerados o congela
en su evolución presenta, en conjunto o por se dos para su procesamiento.
parado, ictericia, nefropatía, meningitis con LCR M ediante técnicas de biología molecular es
claro, hemorragias y neumonía atfpica. posible detectar la presencia del genoma de la
E studios m icrobiológicos: se basan en la recu leptospira en los distintos materiales clínicos. La
peración del microorganismo de los distintos reacción en cadena de la polimerasa (PCR) ha
materiales clínicos y en el estudio de la respues sido evaluada para el diagnóstico, con resultados
ta inmune. promisorios. Permite recuperar material genó-
El crecimiento de la leptospira es lento y está mico de sangre, orina, LCR y humor acuoso en
afectado por factores como la terapéutica anti- períodos más amplios que las técnicas conven
biótica previa y el tiempo de evolución de la en cionales de cultivo y sin las limitaciones de és
fermedad. Los medios de cultivo requieren el tas.
Capítulo 44 - Leplospirosis □ 425
diagnóstico diferencial
fropatía. Las miositis autoinmunes pueden cur
sar con distrés respiratorio, lo cual las asemeja a
En el primer período o «período gripal» el diag las formas graves de leptospirosis pulmonar.
nóstico diferencial incluye enfermedades virales La ictericia se diferencia de la provocada por
I.'-
í :~ como la influenza, la parainfluenza y la enfer- las hepatitis virales por la epidemiología, el cua
I niedad febril por algunos serotipos de adenovirus dro clínico y los resultados del laboratorio. En
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y enterovirus. La ausencia de manifestaciones en ocasiones, la hepatitis por virus de Epstcin-Barr
j las vías aéreas superiores puede ser sugestiva de puede simular una leptospirosis si, junto con el
leptospirosis; pero esta característica, con cua cuadro clínico de mononucleosis infecciosa, hay
dro clínico muy semejante, la comparten la fie otros signos de agresión parenquimatosa. Igual
bre hemorrágica argentina (FHA), la enfermedad consideración merecen algunas formas agudas de
por hantavirus, el dengue y la fiebre amarilla. infección por citomegalovirus.
La FHA y las enfermedades por hantavirus son Las salm onelosis que cursan con septicemia
zoonosis que también tienen a los roedores como (fiebre tifoidea y otras) tienen un comienzo y un
reservorios. En la FHA hay pancitopenia y me curso clínico más solapado, a diferencia del co
nor repercusión renal, pero los hantavirus, tan mienzo agudo, «gripal», de la leptospirosis. En
to los productores de fiebres hemorrágicas con la fiebre tifoidea en general hay linfomonocitosis
síndrome renal (FHSR) com o los causantes del con leucopenia y esplenomegalia o sin ellas, lo
í:^ síndrome pulmonar, sólo se diagnostican a tra cual es excepcional en la leptospirosis.
vés de los exámenes de laboratorio. En la FHSR Las meningitis virales presentan un LCR simi
el compromiso hepático y meníngeo no suele lar al de la leptospirosis, pero no se observa la
ser significativo. En el síndrome pulmonar por agresión pluriparenquimatosa de ésta. Por el con
hantavirus la nefropatía y la hepatopatía son se trario, en las meningitis por M ycobacterium /u-
cundarias al distrés respiratorio, y no hay he berculosis y C ryptococcus neoform ans, descien
morragia alveolar a diferencia de la leptospi den la glucorraquia y la clorurorraquia, además
rosis. casi siempre se observan signos de compromiso
El dengue ha sido considerado como la enfer encefálico.
medad emergente de mayor preocupación para El síndrome de neumonía atípica es producido ♦
las Américas, luego del sida. £1 cuadro clásico por varios agentes patógenos. Además del cua
tiene una forma de presentación similar a la lep dro respiratorio, cuya característica general es la <
lospirosis (síndrome gripal), pero no evoluciona denominada disociación clinicorradiológica, es
(
a una fase polisindromática. El dengue hemorrá- tos microorganismos agreden con distinta inten
gico, en cambio, se caracteriza por una vasculitis sidad otros órganos y sistemas. Es por ello que a I
cuyas manifestaciones clínicas remedan las de la neumopatía pueden asociarse ictericia, nefro
una leptospirosis grave. La nefropatía es secun patía, hemorragias, etcétera.
daria a la hipovolemia, como sucede en la fiebre Dentro de las neumonías atípicas, la de la lep
amarilla, ya que ambos agentes etiológicos no tospirosis debe diferenciarse de las asociadas con
muestran un tropismo particular por el riñón, psitacosis, fiebre Q, enfermedad por M ycoplas-
r
como sí ocurre con las leptospiras. ma, enfermedadide los legionarios, síndrome pul
El paludismo, en especial las formas graves por monar por hantavirus, neum onía grave por
Plasmodium falciparum y puede confundirse con Yersinia p estis y tularemia.
leptospirosis, dado que pueden no tener la curva La leptospirosis sfe-jncluye dentro de las deno
febril cíclica ni la secuencia de síntomas que pro minadas fiebres hemoitágicas, conjunto nosoló-
ducen los otros plasmodios. gico que abarca un espectro de enfermedades de
Distintas enfermedades que cursan con miositis alto impacto en la salud pública y que abarca el
también pueden incluirse en el diagnóstico dife dengue, las fiebres hemorrágicas argentina y bo
rencial, sobre todo la triquinosis y las miositis liviana, y las llamadas fiebres manchadas por
autoinmunes. En la triquinosis en general hay ricketlsias. Merece destacarse el hallazgo en nues
edema bipalpebral, eosinofilia y ausencia de ne tro país de evidencias de infección por Rickettsia
426 Q Tercera parte - Infecciones bacterianas
ricketísii y que el tifus murino {Rickettsia typhi) hipoxemia y los desequilibrios del medio interno
se considera una endemia universal. es tan efectivo como el tratamiento con antimi
crobianos. La utilización de estos últimos está
supeditada al momento evolutivo de la enferme
COMPLICACIONES
dad: son útiles en la etapa bacteriémica, pero de
La leptospirosis es una enfermedad autoli- valor dudoso en la fase siguiente.
mitada que en su evolución no origina enferme La penicilina se administra por vía intraveno
dad o lesiones crónicas. En la mayoría de los sa, a razón de 10 a 15 millones de UI por día o
pacientes los signos y síntomas se resuelven en ampicilina o amoxicilina por vía oral (2g/día). |
unas dos semanas. Las formas graves lo hacen Otras alternativas útiles son la eritromicina
en tres a cuatro semanas; las complicaciones más (2 g/día), la claritromicina (1 g/día), la roxitromi-;
importantes son la insuficiencia renal o, en las ciña (300 mg/día) y la doxiciclina (200 mg/día).
formas pulmonares graves, el shock hipovolé- La duración del tratamiento no deberá exceder
mico por hemoptisis. La insuficiencia hepática los 7 días. N o hay evidencias que avalen el uso
es una complicación y una consecuencia de las de corticosteroides.
anteriores.
En el paciente internado en unidades de tera
PROFILAXIS
pia intensiva suelen presentarse las complicacio
nes propias de este tipo de asistencia: infeccio Se relaciona con las formas de adquisición y
nes asociadas a los aparatos de reanimación, apo poblaciones de riesgo. Ante la existencia de bro
yo respiratorio, catéteres, etcétera. tes epidém icos se administran antibióticos en
forma profiláctica, durante períodos breves, en
dosis similares a las señaladas.
PRONÓSTICO
La doxiciclina en una sola dosis semanal se ha
La disminución del número de plaquetas indi propuesto como profilaxis preexposición.
ca una posible necrosis tubular aguda, causa pri El uso de calzado y guantes impermeables es
maria de muerte. Las manifestaciones atribuidas una medida efectiva para prevenir la enferme
a la vasculitis, como el síndrome purpürico y las dad en varias circunstancias, en especial labo
hemorragias parenquimatosas, indican peor pro rales.
nóstico que el de las formas clínicas no hemo- El conocimiento, por parte de los profesiona
rrágicas. La intensidad de la ictericia no indica les, de la prevalcncia, las formas de infección y
por sí sola mayor gravedad. los reservorios podría ser útil en el mediano pla
El pronóstico se relaciona estrechamente con zo para reducir el impacto sobre la salud, tanto
la virulencia de la cepa, que no debe confundirse en el hombre como en los animales domésticos.
con un serovar en particular. Aún hoy la leptospirosis es una enfermedad con
Los casos asociados con infección por HIV en siderada «exótica» por los médicos y muy poco
general no presentan características clínicas par conocida por la población. La vacuna es efectiva
ticulares, excepto en pacientes en estadios avan en animales tanto de cría como domésticos. En
zados del síndrome de inmunodeflciencia adqui algunos países con población humana de riesgo
rida, en quienes, como en toda enfermedad con (obreros de las alcantarillas de París, cose-
déficit inmunitario, la evolución y el pronóstico chadores de arroz en Italia y de azúcar en Cuba)
son ominosos. la vacunación contribuyó a bajar la prevalencia.
En el Instituto Finlay de La Habana (Cuba) se
investigó una vacuna con leptospiras muertas con
TRATAMIENTO
el agregado como coadyuvante de gel de hidróxi-
El tratamiento de sostén es fundamental, tanto do de aluminio. Esta vacuna incluye los serovares
en las formas moderadas como en las graves. La canicola, copenhageni y m ozdok (vacuna vax-
indicación temprana de la diálisis puede cambiar spiral) y resultó segura para el control de la en
en forma drástica el pronóstico. Corregir la fermedad, por lo que se recomienda su utiliza
C apítulo 44 • Leptospirosis □ 427
ción para prevenir la leptospirosis en los grupos no descarta en ningún caso las medidas preventi
humanos de riesgo. La aplicación de la vacuna vas generales para el control de la enfermedad.
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Actinomicosis c
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Ornar J. Palmieri (v
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niicetoma, ya que su distinción clínica es imposi- binación de ampicilina (2 g/día) con metronidazol
r ble- La actinomicosis pulmonar simula las neumo- ( i g/día) hasta la resolución de las lesiones. En
f nías, el cáncer de pulmón y la peripleuritis tuber- las actinomicosis torácicas o abdominales se em
culosa. Las formas abdominales se confunden con plea penicilina G sódica, por goteo intravenoso,
j. a p e n d ic itis » diverticulitis y cáncer de colon, y las administrado cada 6 horas, en dosis diarias de 10
pelvianas con anexitis, endometritis y neoplasias. a 20 millones de unidades. Una vez alcanzada la
Sin la aparición de fístulas, la actinomicosis es involución de las lesiones se procede a la elimi
■i jniiy difícil de sospechar. nación de los focos sépticos dentarios o del DIU y
se realiza un tratamiento de profilaxis secundaria
con penicilina V, en dosis diarias de 3 a 5 millones
PRONÓSTICO
de unidades o coirimoxazol (SMZ, 800 mg/TMP,
En la actualidad, debido a la buena respuesta 160 mg) cada 12 horas, ambos por vía oral.
clínica a los tratamientos con antibióticos, en
general es bueno. Sólo las lesiones muy extensas
PROFILAXIS
tratadas tardíamente pueden originar secuelas
discapacitantes. Deberá realizarse un cuidado adecuado de la
dentadura y la correcta higiene bucal. En el caso
del DIU, son necesarios los controles ginecoló
t r a t a m ie n t o
g ico s correspondientes, incluido el exam en
La penicilina es el antibiótico de elección. En citológico cervicovaginal por el método de Papa-
las formas cervicofaciales suele usarse una com nicolaou.
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SOS, las articulaciones y el cerebro, aunque cual tes a los de una neumonía no resuelta, derrame
quier órgano puede ser comprometido. N o es una pleural y fístulas hacia la pared torácica.
enfermedad transmisible de persona a persona ni Las lesiones metastásicas en el cerebro y el te
«I de los animales al hombre. El reservorio del agen jido celular subcutáneo son idénticas a los abs
te causal es el suelo. La enfermedad sistémica es cesos agudos o subagudos de otras causas.
11 más frecuente en los adultos del sexo masculino El síndrome linfangiticonodular suele locali-
y en época reciente han aparecido algunos casos zarse en los miembros y con menos frecuencia
en la enfermedad por HIV. en otras partes descubiertas del cuerpo, afecta la
«1 piel, los vasos linfáticos y los ganglios linfáticos
del territorio atacado. Clínicamente consta de tres
ANATOMÍA PATOLÓGICA
!• com ponentes: el chancro de inoculación, la
Las infecciones por Nocardia generan una res linfangitis nodular y la adenopatía satélite. El
r» puesta inflamatoria aguda con infiltrados de chancro es un nódulo que se ulcera y se cubre de
polimorfonucleares neutrófilos. Con el tiempo una costra, la que al ser removida muestra un fon
f»
originan abscesos que tienden a confluir y se ro do granuloso o deja escapar secreciones purulen
dean de tejido de granulación y fibrosis. La pro tas o gomosas. La linfangitis presenta una suce
ducción de granulomas epitelioides no es habi sión de nódulos a lo largo de un trayecto linfático,
O tual y las lesiones se sitúan principalmente en los pueden ser sólidos o sufrir diversos grados de
pulmones, el cerebro, las meninges, el peritoneo reblandecimiento tornándose fluctuantes, el con
y el tejido celular subcutáneo. D e no recurrirse a tenido de los mismos es gomoso o purulento. Tal
técnicas de coloración especiales, como Kinyoun como sucede con los nódulos, las adenopatías
11
(para acidorresistencia) o Grocott con metena- pueden ser sólidas o reblandecidas, gomosas o
(• mina de plata, las lesiones se confundirían con supuradas. En los casos de evolución prolonga
las producidas por cocos grampositivos, en e s da, tanto los nódulos como los ganglios se fístu-
«• pecial por Staphylococcus aureus. lizan o ulceran en la piel.
c»
MANIFESTACIONES CLÍNICAS DIAGNÓSTICO
f t
La nocardiosis pulmonar se presenta como un Los materiales clínicos útiles para el diagnós-'
m proceso agudo o crónico. En el primer caso asu tico son esputo, secreciones broncoaspiradas y
me el cuadro clínico de una neumonía comunita pus de abscesos cerrados. En general este último
úl ria con fiebre elevada, disnea, dolor torácico, es el mejor.
postración, síndrome de condensación o bronco- El examen microscópico directo se lleva a cabo
m neumónico. Los estudios por imágenes dan cuen en extendidos teñidos por las técnicas de Gramy,
f» ta de infiltrados lobulares o diseminados de as Kinyoun, que permiten reconocer la presencia de
pecto bronconeumónico. La tos al principio es filamentos finos, ramificados, grampositivos y j
í i improductiva y luego se hace mucopurulenta. Al acidorresistentes. Esta observación se realiza con
cabo de una o dos semanas hay una franca ten óptica de inmersión (1000 x). Los cultivos se
li» dencia hacia la formación de abscesos pulmo obtienen en diversos medios, com o agar-sangre,1
nares. La extensión hacia la pleura es menos fre agar-infusión de cerebro y corazón, agar glu-^
f i cuente en esta forma clínica. cosado de Sabouraud y medio de Lówenstein-
La nocardiosis pulmonar crónica se confunde Jensen. Se incuban a 37°C o incluso más (hasta
#
a menudo con la tuberculosis. Produce astenia, 45®C) sin agregar antibióticos ni efectuar técni
m anorexia, pérdida de peso, febrícula, sudores noc cas de homogeneización semejantes a las utili*.
turnos, tos con expectoración hemoptoica y los zadas para micobacterias. Los aislamientos pro-*
tÜ estudios por imágenes muestran infiltrados hete cedentes de expectoraciones o secreciones bron- ’
rogéneos con imágenes cavilarías ubicadas por quiales son dificultosos debido al desarrollo d e;
iÜ lo general en los campos superiores. Con menor otros microorganismos. Además, como ya se dijo,'
frecuencia determina infiltrados focales semejan en forma esporádica es posible aislar nocardias;
m
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f C apítulo 46 - Nocardiosis □ 435
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Enfermedades por rickettsias
A lfredo C. Seijo
Ornar J. Palmieri
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Grupo tífico
Tifus exantemático R prowazekii Hombre, ardilla Piojo corporal Africa, Asia, América
Enfermedad de Brill-Zinsser R. prowazekii Hombre Ninguno Mundial (inmigrantes)
Tifus endémico R. typhi Rattus spp Pulga Mundial
Tifus R. felis Felinos Pulga d íg a te EE.UU. y otros
Fiebres manchadas
de las Montañas Rocosas R. rickettsii Roedores, perros - Garra^Mtas América
del Mediterráneo R. conorii Perro, roedores Garrapatas Mundial
Rickettsialpox R. akari, R. africae Roedores Ácaros O^odes) EE.UU. Africa. Asia
438 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
lulares o recuperarse por inoculación en anima cuando la garrapata, al alimentarse, inocula los
les de laboratorio. En forma indirecta, se recono m icroorganism os presentes en sus glándulas
cen en muestras de tejidos por inmunofluores- salivales infectadas. Los estadios intermedios,
cencia, técnicas histoquímicas o reacción en ca larvas y ninfas, pueden actuar com o vectores; en
dena de la polimerasa. La coloración de Giménez estos casos es difícil reconocer en el ser humano
y otras se han abandonado por su baja sensibili la zona de inoculación. Las garrapatas pueden
dad. sobrevivir en condiciones adversas durante pe-
Las rickettsias inducen la fagocitosis celular, ríodos prolongados y sin alimentación, hasta que
pero luego salen del fagosoma para localizar encuentran el hospedero adecuado.
se libremente en el citoplasma y, en el caso de) Por lo tanto, la complejidad de los ciclos bio
grupo de las fiebres manchadas, ocasionalmente lógicos de las rickettsiosis depende de: 1) la dis
en el núcleo. La replicación dentro de las células tribución geográfica de los hospederos y vectores;
endoteliales del hospedero conduce a la vascu- 2) la especificidad hospedero/vector. Por ejem
litis, sustrato patogénico y hallazgo anatomopa- plo, la garrapata habitual del perro en nuestro
tológico común a todas las enfermedades por medio, Rhipicephalus sanguineus, excepcional
•
rickettsias. mente se alimenta de sangre de otro hospedero,
o El lipopolisacárido induce serorreactividad cru incluido el hombre; 3) la existencia de varios
zada entre los grupos y con bacterias de los gé hospederos, de vectores secundarios o de ambos;
n neros Proleus, Legionella y otros. 4) condiciones de los ecosistemas que faciliten
la supervivencia de los vectores y las posibilida
m des de difusión, y 5) en el caso de la enfermedad
epidemiología
humana, la posibilidad de integrar el ciclo bioló
m
Las rickettsiosis son el típico grupo de enfer gico. Esta circunstancia siempre es un «acciden
n medades transmitidas por vectores, con una am te epidem iológico», ya que el hombre es un mal
plia gama de reservorios animales. El tifus exan hospedero para mantener ciclos naturales.
m temático transmitido por piojos era considerado La distribución de las enfermedades rickett-
la única enfermedad del grupo con circulación siales es mundial, algunas con una delimitación
• humana exclusiva. Sin embargo, en los últimos geográfica característica por el tipo de reservorios
años se encontró un reservorio animal del grupo y vectores involucrados. En algunas regiones de
i»
de las ardillas, por lo cual también debe consi ben considerarse enfermedades emergentes, que
« I derárselo una zoonosis. En casos puntuales de en su aparición y difusión muestran una relación
alguna de estas enfermedades se ha comprobado estrecha con alteraciones del medio ambiente. Los
• transmisión por aerosoles y por vía parenteral. viajeros a áreas que tienen rickettsiosis endémi
Las garrapatas duras (familia Ixodidae) son res cas pueden manifestar síntomas no siempre reco
m ponsables de la transmisión de la mayoría de es nocibles si no se indaga el antecedente del viaje
tas enferm edades. Pulgas, com o X e n o p sylla (enfermedad importada).
m
cheopiSy son vectores del tifus murino {R. íyphí)\ En el continente americano, la mal denomina
m los piojos del cuerpo {Pedicitlus hiimanus cor- da fiebre de las Montañas Rocosas (/?. rickettsii)
porisX del tifus exantemático (R. prow azekií), y tiene una distribución amplia, que abarca Cana
m diversos ácaros e incluso garrapatas «blandas» dá, EE.UU., la región de América Central hasta
(Argasidae)y de otras rickettsiosis. Además de Brasil, Colombia y últimamente surgieron datos
m vectores específicos puede haber otros de carác que sugieren transmisión autóctona en el Noroes
ter secundario. te Argentino. Además se conoce la circulación
m
Las garrapatas y otros artrópodos vectores se de otras rickettsias del grupo «fiebres mancha
m infectan al alimentarse con sangre de los hospe das». En los EE.UU., la denominada rickettsial-
deros (diversas especies de vertebrados; los más pox o rickettsiosis varioliforme (por producir
m importantes, mamíferos). En algunos casos (ga exantema vesicular) es causada por R. akari. En
rrapatas) la infección puede mantenerse en for ese mismo país se ha reconocido una nueva es
m ma vertical (transovárica). El ciclo se perpetúa pecie {R .fe lis), cuyo hospedero es el gato y el
m
m
C apítulo 47 - Enferm edades por rickeitsias □ 439
vector probable, la pulga del felino. Se descono las localizaciones parenquimatosas; éstas, se pro
ce, por falta de estudios, su circulación en otras ducen por diseminación hemática. El vaso afec
regiones. La fiebre botonosa o fiebre del M edi tado (capilar, arteriola o vena) es rodeado por un
terráneo (/?. conorii), descripta en países del sur infiltrado de células plasmáticas, histiocitos y
de Europa y norte de África, fue comunicada hace polimorfonucleares. En los endotelios se produ
poco en forma de brote epidémico en Uruguay. ce adherencia de plaquetas y se forman trombos
Dentro del grupo tífico, el tifus exantemático en la microcirculación. La vasculitis por prolife
permanece endémico en las regiones más pobres ración bacteriana explica tanto las manifestacio
del mundo (Etiopía) y en forma esporádica en nes sistémicas com o la extravasación plasmática,
otras zonas de África y Asia. En los EE.UU. se mecanismo donde además intervienen mediado
han registrado casos aislados relacionados con res inmunitarios. N o se han demostrado toxinas.
la existencia de enfermedad en animales y la apa
rición, en emigrantes centroeuropeos, de una for
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
ma tardía de recidiva, hasta varios años después,
debida a inmunodepresión: enfermedad de Brill- Los tres grupos de Rickettsia se han clasifica
Zinsser. El tifus endémico o murino (por estar do por sus características inmunogénicas, pero
ligado a reservorios del género R attus) es causa hay una superposición de los síntomas clínicos,
do por R. typhi (antes m ooseri). Es probable que por lo cual se describirán en conjunto con las
su distribución sea universal y que no se lo diag particularidades que pudieren presentar cada una
nostique por la frecuencia de cuadros oligosin- de las especies. La infección sin enfermedad aso
i tomáticos. Se conoce su circulación en el conti ciada o los cuadros clínicos oligosintomáticos son
nente americano, por lo que deben profundizarse difíciles de diagnosticar salvo, si existen antece
los estudios para conocer la real situación epide dentes epidemiológicos orientadores (mordedu
miológica. ra de garrapata, permanencia en zona endémica
En la Argentina, en la provincia de Jujuy se u otros).
han confirmado casos clínicos producidos por^. Un cuadro clínico de inicio, común a la mayo
rickeítsiiy también se ha recuperado material ría de las rick ettsiosis, incluye hipertermia,
genómico de la misma especie en garrapatas mialgias, cefalea, dolor abdominal, náuseas, vó
Amblyomma cajenennse. Utilizando antígeno de mitos y diarrea, alrededor de una semana des
R. conorii se encontró una seroprevalencia del pués de la inoculación. Sólo será posible, aun
7% en la población del Noroeste Argentino y del que no constante, observar una escara de inocu
4% en habitantes de Buenos Aires. En una en lación característica cuando la mordedura la pro
cuesta en el N oreste Argentino, las tasas de dujo una garrapata adulta, como es el caso de las
seroprevalencia fueron del 5,7% para R. rickeusii fiebres manchadas (/?. rickettsii, R. conorii y otras).
y del 2% para R. prowazekii. Como enfermedad La mordedura de garrapata produce una pápula
importada se han estudiado casos de rickettsiosis pruriginosa que evoluciona a la ulceración y es
varioliforme en el Hospital «F. J. Muñiz» de Bue recubierta por una escara de color oscuro, que
nos Aires. remeda la úlcera carbuncosa. La vasculitis local
En el último decenio se han descripto nuevas producida por las ricketlsias y la probable acción
especies de rickeitsias, y reconocido sus reser enzimática de la secreción salival de la garrapata
vorios, vectores y patogenicidad, por lo que se son las causas de esta lesión inicial. Por el con
abre un interesante campo de estudio aún no to trario, en el grupo tifus (i?, prowazekii y R. typhi)
talmente agotado. no hay escara, debido a que las rickettsias son
depositadas en la piel con las heces de los piojos
y pulgas. El grupo tifus de los matorrales presen
ANATOMÍA PATOLÓGICA
ta una escara en el sitió de la inoculación por el
La lesión típica es una vasculitis con prolifera ácaro.
ción de la bacteria dentro de las células endo- Entre el quinto y séptimo día de iniciado el
leliales, tanto en la zona de inoculación como en cuadro en la mayoría de los pacientes se produce
L
440 O Tercera parte - Infecciones bacterianas
una erupción. En la infección por/?, ricketísii es específicos de las especies más importantes. El
maculopapular y petequial, aparece en las pal inmunodiagnóstico es tardío, ya que implica de-;
mas y plantas, y evoluciona en forma centrípeta. mostrar seroconversión y requiere una evaluación
En la fiebre botonosa (/?. conorii) predominan precisa por la serorreactividad interespecies con
las maculopápulas. El síndrome purpúrico, por otros géneros microbianos y en presencia de en-l
cl contrario, se origina en las axilas y el tronco y fermedades no infecciosas. Como el aislamiento!
deja indemnes la palma y las plantas, o tiene ma* debe llevarse a cabo en centros de alta seguridad
yor distribución en el tronco en los casos de tifus y cierta complejidad (cultivo celular), se han es-'
exantemático, tifus endémico y tifus de los ma tandarizado técnicas rápidas para demostrar el
torrales. Un caso especial lo constituyen las agente en el material de biopsia, en especial en
ricketisiosis con exantema vesicular {R. akari y raspados de las lesiones dérmicas: inmunofluo
R. africae). El cuadro clínico es difícil de dife rescencia directa, técnicas histoquímicas y reac
renciar de la varicela. La presencia de la escara ción en cadena de la polimerasa.
de inoculación es un dato muy valioso para el
diagnóstico. La enfermedad es autolimitada y
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
carece de repercusión sistémica.
Los tifus exantemático y endémico, las fiebres El diagnóstico diferencial incluye leptospirosis,
manchadas de las Montañas Rocosas y la bo septicem ias, m eningococem ia, fiebre tifoidea,
tonosa o del Mediterráneo, así com o la fiebre de secundarismo luético, mononucleosis, neumonías
los matorrales, presentan además compromiso atípicas, enfermedad por hantavirus (tanto fiebre
multisistémico de distinta gravedad. Son frecuen hemorrágica con síndrome renal com o síndro
tes las manifestaciones neurológicas: meningitis me pulmonar), fiebres hemorrágicas por arena-
con LCR claro, signos de foco y estupor. Hay virus y enfermedades exantemáticas, como sa
además manifestaciones de compromiso hepáti rampión. Entre las enfermedades no infecciosas
co, insuficiencia renal, miocarditis, neumonía se tendrán en cuenta vasculitis (com o la púrpura
alveolointersticial diseminada y signos de hipovo- de Schónlein-Henoch), púrpura trombocitopénica
lemia por fenómeno de escape capilar, similar a trombótica y púrpura debida a colagenopatías,
lo que acontece en enfermedades por hantavirus, trombocitopenias inducidas por fármacos, púrpu
arenavirus y virus dengue. Como en todas las vas- ra trombocitopénica idiopática y otras.
culitis, la trombocitopenia es frecuente y su mag
nitud, índice de gravedad.
TRATAMIENTO
Se debe sospechar enfermedad por rickettsias
ante la secuencia clínica de hipertermia, cefalea, Se utiliza la doxiciclina en dosis de 100 mg
mialgias y síntomas abdominales, seguidos por dos veces por día, durante 7 a 10 días según el
una erupción maculopapular y petequial con cuadro clínico. Son alternativas el cloranfenicol,
trombocitopenia, más signos clínicos y de labo la rifampicina y las nuevas quinolonas.
ratorio de agresión pluriparenquimatosa, en au
sencia de afección de la vía aérea superior.
PROFILAXIS
Se basa en los aspectos epidem iológicos de
DIAGNÓSTICO
cada enfermedad. En el grupo tífico se relaciona
Hasta hace unas décadas, para el diagnóstico con las condiciones de higiene personal, y elimi
del tifus exantemático y endémico se utilizaba la nación de roedores e insectos. En las fiebres man
reacción de W eil-Felix. Es una prueba de agluti chadas se evitará el contacto con garrapatas uti
nación que se basa en la utilización de antígenos lizando ropas adecuadas, algo difícil de cumplir
de Proteus 0 X 1 9 y 0 X 2 , que tienen reactividad cuando se realizan trabajos rurales en áreas calu
cruzada con las rickettsias. Pero es de baja espe rosas. Con excepción de una vacuna para el tifus
cificidad y sensibilidad. Actualmente se utiliza exantemático, en el resto de las rickettsiosis no
la inmunofluorescencia indirecta con antígenos se utiliza inmunoprevención.
I C apítulo 47 - Enferm edades por rickettsias □ 441
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48
Enfermedad por arañazo de gato
Ornar J. Palmieri
i d e f in ic ió n EPIDEMIOLOGÍA
i La enfermedad por arañazo de gato es una La enfermedad por arañazo de gato es de dis
zoonosis de distribución universal, producida por tribución universal y en los climas templados
í Bartonella {Rochalimaeá) henselae y en algunas muestra un predominio estacional hacia el fin del
^ oportunidades por A fip iafelis. Se caracteriza por verano y el otoño. La mayoría de los pacientes
’ una infección en el lugar del rasguño, lamedura son menores de 20 años y preferentemente ni
• o mordedura de gato, seguida por linfadenopatfa ños. Más del 90% refieren antecedentes de rasgu
, regional y síntomas generales variables que per ño, lamedura o mordedura por un gato joven, con
sisten durante semanas o meses. tacto con sus secreciones o heridas punzantes con
objetos contaminados por ellas. Los gatos que
transmiten la infección no tienen signos de enfer
e t io l o g ía
medad y se desconoce cuánto dura la contagio
Bartonella henselae es un cocobacilo gramne- sidad. En forma excepcional puede ser transmi
gativo, aerobio y de crecimiento intracelular. En tida por perros, monos u otros mamíferos.
la actualidad hay suficientes evidencias de que
es el principal agente etiológico de la enferme
PATOGENIA Y ANATOMÍA PATOLÓGICA
dad por arañazo de gato. La presencia del micro
organismo se demostró mediante la realización En el lugar del arañazo o mordedura se produ
de cultivos, amplificación del ADN por PCR y ce la lesión primaria, que se presenta como una
marcación inmunocitoquímica en los materiales pápula eritematosa. Ésta evoluciona a pústula,
obtenidos de los enfermos. B. henselae también que se cura en forma espontánea. Una o dos se
se aisló de hemocultivos de gatos jóvenes, que manas después de la inoculación, y en general
tienen una bacteriemia crónica sin evidencias de con la lesión primaria ya curada, aparecen lin-
enfermedad. En los cortes histológicos teñidos fadenopatías regionales de tamaño variable y
con la técnica de Warthin-Starry, el aspecto del dolorosas. El examen histopatológico de los
microorganismo es compatible con bacterias del ganglios linfáticos revela hiperplasia linfoidea
género Bartonella. En muy pocos casos A .fe lis que evoluciona hacia una inflamación granulo-
es el agente causal de la enfermedad por arañazo matosa, con necrosis estrellada, neutrófilos y es
de gato. No obstante, hay que considerar a ésta casas células gigantes. Con posterioridad las áreas
como un síndrome con distintos agentes etioló- de necrosis se fusionan para formar un absceso.
gicos. En las fases tempranas B. henselae puede evi-
444 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
denciarsc en los preparados histológicos colorea los casos de hepatitis granulomatosa las tran
dos con la tinción de plata de Warthin-Starry. El saminasas y la fosfatasa alcalina están alteradas
aspecto histopatológico de este padecimiento Es necesario efectuar la punción aspirativa de ia
puede asemejarse al de la tuiaremia, el linfo- adenopatías abscedadas. El pus obtenido no re
granuloma venéreo, las micosis y las micobac- vela la presencia de microorganismos en el exa
teriosis. men directo; los estudios realizados con las téc
nicas de uso corriente también son negativos, lc
que permite excluir las adenitis por otras bacte
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
rías. Los cultivos de pus del absceso, en medios
Después del arañazo o mordedura del gato, tras especiales, pueden ser positivos para B. henselae
un período de incubación de 3 a 10 días se desa Los hemocultivos son positivos únicamente eti
rrolla una pápula eritematosa; ésta evoluciona a los pacientes inmunodeprimidos. Los exámene:
pústula y a! cabo de 1 a 3 semanas se cura en sero ló g ico s de detección de anticuerpos poi
forma espontánea. Una a dos semanas después inmunofluorescencia contra B artonella son po
de constituida la lesión primaria aparecen las sitivos en títulos de 1/64 o mayores. Las prueb
linfadenopatías regionales» a veces voluminosas, cutáneas suelen ser positivas. La biopsia de gan
con dolor espontáneo y a la palpación. Se acom glio linfático a veces muestra una histopatologí;
pañan con fiebre o febrícula» cefalea, astenia, compatible con esta enfermedad, aunque raras]
anorexia, pérdida de peso y malestar general. Las veces está indicada. B. henselae puede identifi
lesiones primitivas más frecuentes están en las carse en los tejidos con la tinción de plata de
manos o la cara; por lo tanto, las adenopatías sue Warthin-Starry. La ecografía puede servir para
len ser epitrocleares, axilares, pectorales o cervi detectar la abscedación de las adenopatías y diri
cales. Los arañazos en las piernas, que se produ gir la punción aspirativa. La ecografía abdomi*
cen con menor frecuencia, determinan adeno nal, la TC o la RM suelen mostrar abscesos en el
patías inguinales. La inoculación conjuntival pue hígado y el bazo, que son múltiples, pequeños e
de provocar un síndrome de Parinaud, con con hipoecogénicos o lesiones nodulares. Con poste
juntivitis y adenopatía preauricular. Sin trata rioridad es posible que se agranden y que al cu
miento, las adenopatías persisten durante sema rarse se calcifiquen.
nas o meses y en el transcurso de su evolución
pueden llegar a supurar. La mayoría de los pa
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
cientes cursan un cuadro leve y se curan sin se
cuelas. A veces se observan exantemas maculo- Comprende casi todas las causas conocidas de
papulosos, petequiales, eritema nudoso o erite linfadenopatías: linfogranuloma venéreo» sífilis,
ma polimorfo. Otras manifestaciones menos fre tuberculosis, esp orotricosis, histoplasmosis»
cuentes son encefalitis, meningitis» neurorre- tularemia, brucelosis y linfadenitis bacteriana
tinitis, mielitis transversa y osteomielitis. La es (estreptococos, estafilococos). También hay que
plenitis y la hepatitis granulomatosa o peliosis considerar las linfadenopatías malignas.
hepática pueden evolucionar con múltiples y pe
queños abscesos esplénicos y hepáticos» dolor
COMPLICACIONES Y PRONÓSTICO
abdominal y fiebre persistente.
En los pacientes inmunocompetentes el cuadro
es autolimitado. En general no hay complicacio
DIAGNÓSTICO
nes ni deja secuelas. Los ganglios pueden persis
Los datos epidem iológicos más las manifesta tir agrandados por uno o dos años.
ciones clínicas sugieren el diagnóstico de enfer
medad por arañazo de gato. £1 hemograma reve
TRATAMIENTO
la leucocitosis discreta con neutrofília y a veces
eosinofilia. La eritrosedimentación está acelera A pesar de que B. henselae es sensible in vitro
da en las primeras semanas de enfermedad. En a muchos antimicrobianos, no parecen ser útiles.
C apítulo 48 - Enferm edad por arañazo de gato □ 445
Sin embargo, en los casos graves o en los que se lento, y se la repite las veces que sea necesario.
demuestren lesiones generalizadas puede utilizarse N o es aconsejable el drenaje quirúrgico y raras
doxiciclína, 1 comprimido de 100 mg 2 veces por
día, o ciprofloxacina, 1 comprimido de 500 mg 2
veces hay que extirpar el ganglio. 1
veces por día; también clarilromicina, I comprimi
PROFILAXIS
do de 500 mg 2 veces por día o SMX 800 mg/TMP
l60 mg 1 comprimido 2 veces por día durante 2 o La prevención se lim ita a evitar arañazos,
3 semanas. lameduras o mordeduras de gatos, en especial si
La linfadenopaiía abscedada se trata con pun son cachorros. Pero si se producen, se procederá
ción aspirativa, para evacuar el contenido puru a la limpieza prolija de las lesiones.
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49
Enfermedad de Lyme
Elena I. M aiolo
A lfredo C. Seijo
transformarán en larvas, éstas en ninfas y estas compromiso cardíaco se manifiesta por la apari
últimas en ejemplares adultos. En cualesquiera ción de bloqueo auriculoventricular, que es raro
de los tres estadios del ciclo> en especial el de que dure más de una semana.
ninfa, pueden picar eventualmente al hombre e La conjuntivitis es la manifestación ocular más
inocular la borrelia. frecuente; con muy poca frecuencia se desarro
Luego de la picadura, y al cabo de un período lla panoftalmitis.
de incubación de 3 a 32 días, la espiroqueta se El tercer estadio corresponde a la infección
multiplica localmente en la piel y se extiende a persistente, que se manifiesta meses a años des
otras zonas cutáneas. Varios días después se di pués de la infección inicial.
semina por vía hemática a otros sitios, com o el La respuesta inmune, humoral y celular, deter
sistema nervioso central, el miocardio, múscu mina la aparición intermitente de dolor articular y
los, huesos, bazo e hígado. edema que compromete las grandes articulacio
La respuesta inmune inicial en seres humanos nes, en especial las rodillas. En esta etapa hay com
es lenta. Los niveles detectables de IgM apare promiso de la piel y del sistema nervioso. La artri
cen después de la tercera semana y la respuesta tis de Lyme es una artritis inflamatoria, monoar-
de anticuerpos IgG, al cabo de varios meses. Esto ticular u oligoarticular, que se caracteriza por ata
posibilita la amplia diseminación del microorga ques recurrentes. Las articulaciones más afecta
nismo, con las correspondientes manifestaciones das son las muñecas, los hombros y en particular
clínicas. las rodillas. En esta etapa no se presentan sínto
En pacientes no tratados, Borrelia burgdorferi mas sistém icos; sin embargo, es común la fatiga.
sobrevive durante años, en especial en articula La lesión epitelial típica de esta etapa es la aero-
ciones, sistema nervioso y piel. dermatitis crónica atrófica, que aparece varios
años después, predomina en mujeres y consiste
en lesiones rojo-violáceas que evolucionan ha
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
cia la esclerosis y la atrofia. Además pueden com
La enfermedad de Lyme afecta diferentes ór probarse anomalías neurológicas, entre las que
ganos y sistemas. Cursa en forma habitual en tres se incluyen el compromiso del sistema nervioso
etapas bien definidas. La primera se presenta en periférico (axonopatía distal, polineuropatía asi
tre la primera y la tercera semanas después de la métrica) y del sistema nervioso central (encefalo-
picadura de la garrapata. En el sitio de la inocu mielitis crónica progresiva, encefalitis focal) y j
lación aparece una lesión característica de color un síndrome semejante a la esclerosis múltiple.
rojo, que se expande de manera centrífuga hasta
formar una mácula de forma anular, eritematosa
DIAGNÓSTICO
y de centro claro. Debido a la disem inación
hemática de la espiroqueta pueden aparecer en El diagnóstico de enfermedad de Lyme se basa
otras zonas de la piel lesiones semejantes; este en las manifestaciones clínicas y en los antece
hecho ha dado origen a la denominación de eri dentes epidem iológicos. El cultivo de muestras
tema migratorio. Esta lesión inicial se acompaña de las lesiones cutáneas permite el diagnóstico
con m anifestaciones clínicas com o síndrome definitivo.
gripal, fiebre, cefalea, mioartralgias, astenia y, en El diagnóstico serológico en la fase temprana
forma ocasional, rigidez de nuca. Los síntomas de la enfermedad es poco útil, dado que la res
persisten alrededor de tres o cuatro semanas y se puesta de anticuerpos es lenta. Ante un cuadro
resuelven con el tratamiento adecuado. clínico compatible, la presencia de anticuerpos
La segunda etapa se caracteriza por la apari es una fuerte evidencia a favor del diagnóstico,
ción de meningitis linfocítica acompañada por pero hay que tener en cuenta que un resultado
neuropatías y radiculopatías craneanas y peri positivo indica exposición a Borrelia más que
féricas, mioartralgias, hepatitis, linfadenopatía infección activa.
generalizada, esplenomegalia, faringitis y, a ve Las técnicas utilizadas son la inmunofluores-
ces, tos no productiva. En algunos pacientes el cencia o la prueba de ELISA. Esta última es el
C apítulo 49 - Enferm edad de Lyme Q 445
método más sensible y específico. Los pacientes cuatro semanas. En los niños o en mujeres em
con diagnóstico de artritis reumatoidea, fiebre barazadas la indicación es amoxicilina por víi
ipanchada de las montañas rocosas, mononu* oral.
cleosis infecciosa, meningitis tuberculosa, leptos- En pacientes en quienes el compromiso neuro-
pirosis y sífilis pueden dar resultados positivos lógico se limita sólo a parálisis facial, se admi
falsos. En estos casos son de gran utilidad las téc nistran antibióticos orales en las dosis ya men
nicas de inmunoblot que utilizan proteínas alta* cionadas. Ante la aparición de otros síntomas
mente específicas. neurológicos, se indicará ceftriaxona, 2 g IV poi
El tratamiento temprano con antibióticos pue> día, durante dos a cuatro semanas, o penicilim
de disminuir la respuesta de anticuerpos sin eli* G, 20 a 24 millones de UI por día, por vía IV.
minar el microorganismo del sistema nervioso y durante 10 a 14 días; también puede administrar
desarrollar, de esta manera, enfermedad de Lyme se doxiciclina, 100 mg cada 8 horas vía oral du
tardía en un paciente seronegativo. rante 14 a 30 días.
El pronóstico por lo general es bueno, en espe
cial si se trata de la forma temprana.
TRATAMIENTO
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50
Infecciones por bacterias anaerobias
j Ornar J. Palmieri
INTRODUCCIÓN
como anaerobios estrictos. Un tercer grupo de
bacterias son las llamadas anaerobias facultati
Las bacterias anaerobias son parte de la flora vas {enterobacterias). Esta últimas, pueden de
normal de la piel y mucosas y, bajo circunstan» sarrollarse indistintam ente en aerob iosis o
olas especiales, pueden dar origen a infecciones anaerobiosis (cuadro 50-1).
poiencialmente letales. Las dificultades que exis
ten para su aislamiento, han determinado que fre
CLASIFICACIÓN
cuentemente no se considere su rol en las infec
ciones graves. El aislamiento e identificación de Las características morfológicas y los factores
estas bacterias requiere de una adecuada toma de de patogenicidad de las bacterias anaerobias per
muestras y del inmediato transporte al laborato miten identificar 2 grupos:
rio. En ocasiones, la naturaleza polimicrobiana
de las in feccion es que involucran bacterias • bacterias anaerobias esporuladas
anaerobias dificulta la selección apropiada de los • bacterias anaerobias no esporuladas
antimicrobianos. En este capítulo se considera
rán los síndromes infectológicos más frecuentes Bacterias anaerobias esporuladas
causados por bacterias anaerobias y los princi Estas bacterias se encuentran en la naturaleza
pios que guían su diagnóstico y tratamiento. en forma esporulada (forma de resistencia en el
medio ambiente) o en forma vegetativa (forma
de reproducción e invasión en los tejidos). La
GENERALIDADES
mayoría de estas bacterias inducen enfermedad
Las bacterias anaerobias se caracterizan por no por medio de la síntesis y liberación de toxinas
utilizar el oxígeno molecular para obtener la ener (bacterias toxigénicas) com o las del género
gía necesaria en los procesos metabólicos de la C lostridium sp que incluyen los agentes etioló-
célula bacteriana. Por lo tanto, pueden crecer en gicos del botulismo (Clostridium botulinum ), del
ausencia de oxígeno (anaerobiosis) a diferencia tétanos {C lostridiu^ tetani), de la gangrena ga
de las bacterias aerobias que sólo se desarrollan seosa {Clostridium welchii, C. septicum, C. novyi)
en una atmósfera con oxígeno al 21 %. Además, y enterocolitis grdves (C. difficile, C. perfringens).
algunas bacterias anaerobias que no poseen enzi Las enfermedades producidas por este grupo de
mas capaces de conjugar el oxígeno molecular bacterias anaerobias se describen en otros capítu
{superóxido dism utasa) son inhibidas por la pre los de este lib ro.'
sencia de mínimas concentraciones (0,5%) de Un tercer grupb, de acuerdo con sus caracte
oxígeno atmosférico. Estas últimas se conocen. rísticas metabólicas, son las bacterias microaeró-
452 Ü Tercera parte - Infecciones bacterianas
1
filas. Estas bacterias no crecen generalmente en la biota normal del organismo es de utilidad para!
presencia de oxígeno pero se desarrollan en me orientar la antibioticoterapia de las infecciones'
dios sólidos con una atmósfera de anaerobiosis o que se originan en esos tejidos. Las infecciones
C 0 2 al 10 %, estas últimas, incluyen especies de por anaerobios se producen cuando el inóculo
Streptococcus. bacteriano contamina áreas de tejido o cavida
des normalmente estériles en presencia de uno o
Bacterias anaerobias no esporuladas más factores predisponentes (perforación de in
Este grupo de bacterias forma parte de la biota testino, heridas, cirugía, radioterapia, instrumen
normal del organismo. La proporción de bacte tación del tracto genital, mordeduras de anima
rias anaerobias en relación con las bacterias les o humanas, entre otras).
aerobias es de 10:1 en la saliva, 100:1 en el tracto Ciertas infecciones se asocian con anaerobios
genital femenino y 1000:1 en el colon. Según sus en forma característica, ya sea como único agente
características morfológicas y tintoriales se cla etiológico o en el contexto de un proceso polimi-
sifican en cocos y bacilos grampositivos o gram- crobiano. Estas infecciones incluyen abscesos de
negativos. El cuadro 50-2 indica las principales cerebro, abscesos de pulmón, abscesos odontóge-
bacterias anaerobias de importancia médica. nos, peritonitis secundaria a perforación del intes
tino, endometritis y aborto séptico (cuadro 50-4).
Epidemiología y Patogenia La bacteriemia primaria por anaerobios es infre-;
Las superficies cutáneas y mucosas están co cuente pero sugiere un foco oculto generalmente
lonizadas con bacterias aerobias y anaerobias en el tubo digestivo. Se ha identificado un cuadro
(cuadro 50-3). La proporción de las mismas, de bacteriemia y abscesos subcutáneos por Closiri-
como así también las especies de cada género dium septicum en pacientes con cáncer de colon.
presente, varía según el pH, la tensión de oxíge Las siguientes situaciones clínicas deben evo
no, la capacidad de las bacterias de adherirse a car infecciones asociadas con bacterias anaerobias:
diferentes epitelios y las defensas innatas del or
ganismo. En general, las bacterias anaerobias • Infección adyacente a una superficie mucosa
superan en cantidad a las aerobias en las diferen • Pus maloliente
tes localizaciones anatómicas. El conocimiento • Tejido con necrosis gangrenosa
de los géneros bacterianos que forman parte de • Presencia de gas en los tejidos
C apítulo 50 - Infecciones por bacterias anaerobias □ 453
(•
Amigdalitis supurativo al espacio retrofaríngeo y parafarín-
(• Los anaerobios de la flora bucal se asocian con geo. El absceso periamigdalino puede ser una
amigdalitis de evolución crónica o recurrente. complicación supurativa de la amigdalitis por
(• Estas bacterias se han aislado en el 25 % de las Streptococcus beta hemolítico en asociación con
adenitis cervicales que acompañan a una amig anaerobios. En estos casos, los pacientes presen
(• dalitis y también en niños con cuadros recurren tan intenso dolor, disfonía y disfagia. El examen
tes de amigdalitis asociada con Streptococcus beta de la faringe permite observar tumefacción del
hemolítico. Se ha sugerido que las bacterias anae área periamigdalina y desplazamiento de la amíg-
(• robias facilitan el desarrollo de amigdalitis recu dala hacia la línea media. El tratamiento se hará
rrente por S. beta hemolítico a través de la sínte en base a los hallazgos bacteriológicos.
(• sis de betalactamasas que neutralizan la activi La angina de Plaut-Vincent, provocada por la
dad bactericida de la penicilina. También se ha asociación de espiroquetas y Fusobacterium (aso
(é identificado que la persistencia de la amigdalitis ciación fusoespirilar), se caracteriza por faringitis,
que acompaña a la mononucleosis infecciosa por amigdalitis ulceronecrosante con exudado purulen
m
el virus de Epstein-Barr podría estar asociada con to sobre una o ambas amígdalas, fiebre, odinofagia
(O la sobreinfección por bacterias anaerobias. Las y aliento fétido. Dicha asociación también puede
complicaciones de las amigdalitis por bacterias provocar gingivoestomatitis ulceronecrosante agu
(• anaerobias resultan de la extensión del proceso da (GUNA) con halitosis, inflamación y úlceras en
las encías. El tratamiento se realiza con amoxici-
(• lina-clavulanato, metronidazol o clindamicina.
La angina de Ludwing, o flemón del piso de la
m Cuadro 50-3. Distribución de la flora anaerobia nor
mal. boca, es una celulitis que tiene origen en una in
m fección dental del maxilar inferior o de una sub-
Boca maxilitis aguda supurada causada por la litiasis
(• Aparato respiratorio
Ve///one//a del conducto de Wharton que se extiende por el
Intestino
piso de la boca y el espacio sublingual. El pa
Aparato genitourinario
ciente debe ser hospitalizado para controlar la
Boca permeabilidad de la vía aérea, el eventual drena
(• Tracto respiratorio superior je quirúrgico y el tratamiento con antimicrobianos
Bacteroid$s Vías biliares como amoxicilina-ácido clavulánico o clindami
m
Intestino cina. La complicación más grave de esta afec
Genitales externos ción es la mediastinitis que se produce por ex
Piel tensión de la infección a través del tejido laxo
(• fusobacterium ■
Mucosas que llega hasta el mediastino.
Vías biliares El síndrome de Lemierre, se presenta como una
m Clostridium
Intestino sepsis secundaria a una faringitis que se acom
«I Boca paña de trombosis de la vena yugular, lo que da
Propior)ibecteríurn Piel . origen a embolias sépticas pulmonares con em-
(« Intestino piema. El agente etiológico es el Fusobacterium
n ecro p h o ru m . El tratamiento se realiza con
(• Boca
clin d a m ic in a 6 0 0 m g IV cada 6 h oras, o
Peptococcus Intestino
ampicilina-sulbactam (1 g/500 mg) 3 g cada 6
(!• Peptostreptococcus Aparato genitourinario
Piel horas, o penicilina G 3 millones de UI por vía IV
«9 cada 4 horas más metronidazol 500 mg IV cada
Vías billares .
6 horas.
Er)terobacterías ■Intestino
Aparato urinario
Mediastinitis
U» Boca Los procesos supurativos por anaerobios que
Porphyromonas
Aparato genitourinario
se extienden por las fascias del cuello pueden lie-
(#
U#
C apítulo 50 - Infecciones por bacterias anaerobias □ 455
Infecciones periparto o at>orto, abscesos perírrectales. infecciones de partes blandas, úlceras por decúbito,
mionecrosis, infecciones de las vías biliares
Fusóbéctériüm '- ■ •s
Sinusitis, Infecciones de las vías respiratorias, abscesos pulmonares, úlceras del paladar blando, gingivitis
ulceronecrótica, peritonitis secundaria
Reptócoccus
Abscesos pulmonares, infecciones respiratorias, úlceras por decúbito, peritonitis, infecciones abdominales
pepfosírepfqcpccws .
úlceras por decúbito, infecciones por mordeduras humanas, sinusitis, osteomielitis, peritonitis, infecciones
abdominales, infecciones de las vías respiratorias
Infecciones por mordeduras humanas, infecciones bucodentales, infecciones de heridas posquirúrgicas. infecciones
de partes blandas
Infecciones urinarias, neumonía por aspiración, sinusitis, abscesos de cerebro, abscesos hepáticos, pileflebitis.
colangitis. infecciones abdominales, tromboflebitis séptica, aborto séptico
gar al mediastino. Las mediastinitis por anaero Infecciones de piel y partes blandas
bios pueden ser también secundarias a perfora Los bacterias anaerobias que colonizan la piel nor
ciones del esófago por cuerpos extraños, dilata mal son mayoritariamente especies de Propioni-
ciones terapéuticas, cáncer o la ruptura espontá bacterium spp y Peptostreptococcus spp. En la piel
nea (síndrome de Boerhaave). La terapéutica de del periné pueden encontrarse bacterias anaerobias
la mediastinitis es médico-quirúrgica. Aunque la que forman parte de la biota normal del colon o la
penicilina ü ofrece adecuada cobertura para los vagina {Bacteroides fragilis, Lactobacilltis).
anaerobios de la cavidad bucal, especies del gé Las infecciones de piel qíie involucran bacte
nero Prevotella y Porphyrom onas son frecuente rias anaerobias pueden tener importancia cosm é
mente resistentes a la penicilina. En casos donde tica (acné por Propionibacíeriiwi acnés) o de pro
se sospechen esas bacterias debe considerarse el nóstico mortal (celulitis-fascitis por infecciones
uso de metronidazol, clindamicina, penicilinas clostrídicas o no clostrídicas). Una descripción
con inhibidores de la betalactamasa, imipenem o de las infecciones de p iel y partes blandas que
meropenem. Debe tenerse en cuenta la naturale involucran anaerobios puede encontrarse en otros
za polimicrobiana de estas infecciones y ampliar capítulos de este libro (ver el capítulo Infeccio
la cobertura para enterobacterias. nes de la piel y partes blandas).
456 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
Estas infecciones pueden limitarse al tejido ce otitis crónica, m astoiditis, sinusitis, infección
lular subcutáneo adyacente a un sitio de mucosa dentaria y procesos supurativos de la orofaringe.
expuesta (orificio de traqucostomia» tejido adya Las infecciones del oído medio pueden extender
cente a una gastrostomía o colostomfa) o com se al lóbulo parietal y las de la apófisis mastoidea
prometer planos profundos con formación de abs al cerebelo, mientras que las infecciones de los
cesos. senos frontales pueden afectar al lóbulo frontal.
En ocasiones el proceso infeccioso diseca los Los focos sépticos pulmonares (abscesos de pul
planos anatómicos con compromiso de la fascias món, bronquiectasias o empiemas) y las bacte
y recesos anatómicos (infecciones del pie diabé rias que producen endocarditis en general llegan
tico, úlceras por decúbito, quemaduras graves). al cerebro por vía hemática. En este último caso
Las formas más profundas pueden afectar el mús los abscesos pueden ser únicos o múltiples. Se
culo y producir miositis y mionecrosis. ha reconocido que las cardiopatías congénitas
Existen poblaciones especiales con mayor sus cianóticas son un factor predisponente para el
ceptibilidad a las infecciones de piel y partes blan desarrollo de abscesos de cerebro. Hasta en el 20
das por bacterias anaerobias. En los pacientes % de los casos es posible que no se identifique el
diabéticos la infección distal de los miembros in foco primario (absceso criptogénico). Las bacte
feriores («pie diabético») frecuentemente involu rias aisladas conesponden en general a una flora
cra bacterias anaerobias com o parte de una ñora mixta de anaerobios (cocos y bacilos), en aso
mixta. La infección inicial de las partes blandas ciación con cocos aerobios grampositivos y ente-
(celulitis) puede extenderse al hueso (osteom ie robacterias. Los anaerobios que se aíslan con
litis) y evolucionar a la cronicidad. El manejo mayor frecuencia (70 % de los casos) son espe
clínico del cuadro requiere desbridamiento qui cies de Streptococcus aerobios, microaerófilos o
rúrgico de los tejidos desvitalizados, compensa anaerobios. En los abscesos que complican las
ción del cuadro metabólico y antibioticoterapia infecciones respiratorias y odontógenas se aso
de amplio espectro. cian esp ecies de P revotella, Porphyrom onas,
B a c te r o id e s , F u s o b a c te r iu m y P e p to s tr e p ’
La gangrena de Foumier es una forma clínica íococcus.
de fascitis necrotizante tipo 1 (producida por El proceso de formación de un absceso de ce
anaerobios facultativos y B .fra g ilis ) que gene rebro atraviesa cuatro etapas evolutivas que fue
ralmente se extiende desde la región ano-rectal ron definidas en modelos experimentales de in
hacia el periné, escroto y eventualmente la pared fección: cerebritis temprana (días 1 a 4), cerebritis
abdominal. El manejo terapéutico es clínico-qui- tardía (días 4 a 9), formación de cápsula tempra
rúrgico lo que incluye un agresivo desbridamiento na (días 10 a 13), formación de cápsula tardía (a
del tejido necrótico y en ocasiones la colostomía partir del día 14 del inóculo).
(ver el capítulo Infecciones perineales). Las manifestaciones clínicas consisten en hiper
tensión endocraneana, originada por el edema
Infecciones del sistema nervioso central perilesional, y la topografía de acuerdo con el
Las bacterias anaerobias pueden afectar diver lugar donde asienta la lesión. Éstas incluyen ce
sas estructuras anatómicas del sistema nervioso falea, alteración del nivel de conciencia, convul
central y provocar abscesos de cerebro, abscesos siones, náuseas, vómitos, bradicardia, hiperten
subdurales y con menos frecuencia abscesos sión arterial, trastornos sensitivos y sensoriales,
epidurales y meningitis. paresias y parálisis. Es de notar que se observa
Los mecanismos de invasión de las bacterias fiebre en sólo el 50 % de los pacientes. Los abs
al sistema nervioso ocurren por la extensión de cesos de cerebelo se presentan con ataxia, nistag-
fo co s in fe c c io so s c o n tig u o s, la ex p o sició n mus, vómitos y dismetría.
postraumática o posquirúrgica y la vía hemática. El diagnóstico de los abscesos del sistema ner
La patogenia más frecuente de los abscesos de vioso central se apoya en su visualización por to-
cerebro es la extensión de una infección crónica mografía computarizada o por resonancia mag
de una estructura anatómica adyacente com o la nética. Ambos procedimientos diagnósticos son
C apítulo 50 - Infecciones por bacterias anaerobias □ 457
r-,
C.:
también de utilidad para evaluar la respuesta al crónica, posquirúrgicos) es preferible ceftazidima
iraiamiento y las complicaciones (progresión de o cefepima. En los casos secundarios a un trau
l:-. la lesión, hemorragias, ruptura en el espacio ven- matismo o cirugía es recomendable incluir vaneo*
iricular y otras). micina en el esquema por la posibilidad de Sta-
El tratamiento de los abscesos del sistema ner phylococcus aureus MR u otros cocos grampo-
vioso central, tales como los abscesos de cere sitivos resistentes hospitalarios.
bro, cerebelo, subdurales o epidurales, incluye Las meningitis por bacterias anaerobias son
medidas especiales de sostén para controlar la poco frecuentes y secundarias a una infección
hipertensión endocraneana, antimicrobianos y a pulmonar o a la infección del catéter de deriva
veces la cirugía. El drenaje de los abscesos es ción ventricular. En este último caso se pueden
esencial para establecer el diagnóstico microbio- aislar bacterias anaerobias residentes en la piel
lógico y controlar la presión endocraneana. La {P. acnés) o anaerobios de origen entérico en el
aspiración del contenido del absceso puedo guiar caso de que el catéter de derivación ventrículo-
se por tomografía computarizada o por resonan peritoneal haya perforado el tubo digestivo {Bac-
cia magnética. teroides fra g ilis). Meningitis y abscesos de cere
El abordaje terapéutico de los abscesos de ce bro por Clostridium perfringes pueden ocurrir en
rebro es médico-quirúrgico. En los pacientes que casos de traumatismo de cráneo o com o compli
desarrollan un absceso por contigüidad a una in cación neuroquirúrgica.
fección del oído medio o de los senos paranasales
es imprescindible evacuar quirúrgicamente el fo Infecciones pleuropulmonares
co infeccioso mastoideo o de los senos paranasa Las infecciones pleuropulmonares primitivas
les. En la etapa temprana de cerebritis el trata por anaerobios se desarrollan debido a la aspira
miento consiste en intervenciones para reducir ción de secreciones orofaríngeas, de contenido
la presión endocraneana y el uso de antim i gástrico en pacientes con trastornos del sensorio
crobianos. En las etapas tardías, que se identifi o por alteraciones en el reflejo de la deglución.
can por la formación de cápsula en los estudios El alcoholismo, la anestesia general, los acciden
por imágenes, puede ser necesario el tratamiento tes cerebrovasculares con pérdida de la concien
quirúrgico a cielo abierto o punciones estereotá- cia, las convulsiones y el abuso de psicofármacos c
xicas para evacuar el contenido del absceso. En
el caso de los abscesos múltiples, el tratamiento
son habitualmente los factores predisponentes.
Estas infecciones también pueden complicar los
c
es inicialmente médico y eventualmente quirúr tumores endobronquiales, cuerpos extraños o (
gico para aquellos abscesos de mayor tamaño. como extensión de procesos sépticos infradiafrag-
Como regla práctica, se prefiere el tratamiento máticos.
médico de las cerebritis y los abscesos con cáp La enfermedad periodontal o el mal estado den
sula mayor de 2,5 cm; y el tratamiento quirúrgi tario incrementan el riesgo de infecciones pul
co para aquellos abscesos mayores de 2,5 cm o monares por anaerobios. El material bucofaríngeo
con lenta resolución luego del tratamiento antimi que llega al pulmón por aspiración puede origi
crobiano. nar una neumonitis, una neumonía necrotizante
La antibioticoterapia empírica debe orientarse o un absceso de pulmón con o sin empiema. La
según el foco primario. La penicilina G es activa orientación del árbol bronquial en posición supina
sobre los anaerobios de la boca. Cuando se sos determina que el material aspirado llegue con
pecha la presencia de B a ctero id es fr a g ilis o mayor frecuencia a los segmentos posteriores del
Prevotella spp debe considerarse el uso de me- lóbulo superior y al apical o posterior del lóbulo
ironidazol o cloranfenicol. Por la naturaleza mixta inferior del pulmón derecho. Las infecciones son
de los microorganismos que frecuentemente se en general polimicrobianas por aerobios y anae
aíslan de los abscesos del SNC se recomienda robios provenientes de la flora orofaringea Las
í: que el esquema empírico inicial incluya una cefa- bacterias anaerobias se identifican en el 90 % de
losporina de tercera generación (cefotaxima o los abscesos de pulmón y en la mitad de los m is
ceftriaxona). Si se aísla Pseudom onas sp (otitis mos son los únicos agentes aislados. Estos últi
o
#
C apitulo 50 - Infecciones por bacterias anaerobias D 459
dría obedecer a factores étnicos de la población yen dolor abdominal, desorientación y flujo
estudiada. Las diferencias podrían obedecer a la vaginal hematopurulento.
metodología de investigación utilizada en los di El aborto séptico asociado con infecciones por
versos estudios. Los géneros de anaerobios ais C lostridiiw i perfringens se presenta con la clási
lados con mayor frecuencia en mujeres con EPI ca tríada de coluria, ictericia y color bronceado
incluyen Bacteroides fra g ilis, Prevotella spp y de la piel que oculta la palidez secundaria a la
pepiosíreptococcus spp. La patogenia de las bac hemólisis intravascular inducida por las toxinas
terias anaerobias en la EPI se ha demostrado en de C. perfringens. Este cuadro clínico es también
modelos experimentales. Las bacterias anaerobias conocido como síndrome de Mondor y con fre
del tracto genital femenino inferior producen una cuencia se presenta con insuficiencia renal y
variedad de enzimas mucolíticas, como muci- shock. El laboratorio muestra leucocitosis o
nasas y sialidasas con capacidad para afectar el leucopenia, plaquetopenia, anemia, aumento de
moco cervical. La exéresis quirúrgica de trom la bilirrubina indirecta y cifras elevadas de urea
pas de Falopio con infección por Bacteroides y creatinina. La ultrasonografía es de utilidad para
fragilis muestran en el examen histopatológico confirmar la presencia de restos ovulares y pla-
el daño de la delicada estructura ciliar de este centarios. La forma más grave del aborto séptico
órgano. Otros factores que intervienen en la pato es la gangrena uterina o mionecrosis del útero, la
genia de la EPI son la instrumentación del tracto cual generalmente se diagnostica durante la ci
genital durante procedim ientos diagnósticos rugía exploratoria en aquellas pacientes que no
(histerosalpingografía), terapéuticos (curetaje), respondieron a un tratamiento inicial de soporte
iatrogénicos (aborto séptico) o el uso de disposi hemodinámico, diálisis y antibioticoterapia. Du
tivos intrauterinos (DIU). Las características clí rante la exploración quirúrgica pueden recono
nicas, complicaciones, diagnóstico y tratamien cerse perforaciones de la pared del útero, colon y
to de la EPI se tratan en otra parte de este libro. vejiga provocadas por la maniobra abortiva.
Se debe enfatizar en que la cobertura de bacte El aborto séptico es una emergencia infecto-
rias anaerobias en la EPI es de particular impor lógica y las pacientes con sospecha de mionecro
tancia en los abscesos tubo-ováricos y en las sis uterina deben ser evaluadas por cirujanos con
mujeres con infección por el virus de la inmuno- experiencia en el manejo quirúrgico de esta afec
deficiencia humana (HIV). En los casos que re ción. El tratamiento médico incluye medidas de
quieren hospitalización el tratamiento parenteral sostén hemodinámico, eventualmente diálisis y
se realiza con ceftriaxona, 1 a 2 g IV cada 12 altas dosis de penicilina G, 3 a 4 millones de UI
horas más metronidazol, 500 mg IV cada 8 horas por vía IV cada 4 horas, o clindamicina, 900 mg
y doxiciclina 100 mg cada 12 horas por vía oral. IV cada 8 horas o metronidazol, 500 mg IV cada
En los pacientes ambulatorios puede indicarse un 8 horas más una cefalosporina de tercera genera
régimen oral que ofrece la misma cobertura so ción (ceftriaxona o cefotaxima), o imipenem-
bre los agentes etiológicos de la EPI que es la cilastatina, 500 a 1000 mg IV cada 6 horas o
combinación de ciprofloxacina con metronidazol. levofloxacina, 500 mg IV cada 24 horas más
metronidazol 500 mg IV cada 8 horas. También
Aborto séptico debe administrarse la profilaxis antitetánica.
Las infecciones ginecológicas posaborto son
consecuencia de la evacuación incompleta del Infecciones Intraabdomipales
Utero gestante y el traum atism o secundario a las Las infecciones intr^ábdominales asociadas con
maniobras abortivas. Los agentes etiológicos in bacterias anaerobias incluyen las peritonitis se
cluyen microorganismos aerobios facultativos cundarias a perforación del intestino, apendicitis,
(enterobacterias) y anaerobios que forman parte diverticulitis y abscesos viscerales o intraperi-
de la biota normal de la vagina. Las pacientes toneales. Los anaerobios asociados con las infec
con aborto séptico se presentan con fiebre, taqui ciones intraabdominales son parle de la flora in
cardia y taquipnea dentro de los primeros cuatro testinal y la concentración de bacterias anaerobias
días del aborto. Otros síntomas asociados inclu en relación con las bacterias aerobias facultati
460 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
vas varía en diferentes segmentos del tubo diges- del paciente. En este caso, la selección de anti
tivo(1.000; 1 a 10.000: 1). La mayor concentra bióticos se realiza según los aislamientos predo
ción de anaerobios se observa en el colon y co minantes en la institución. En el caso de las in
rresponde a especies de Bacteroides, Clostridium, fecciones adquiridas en la comunidad las opcio
F usobacterium y Eubacterium. En la mayoría de nes terapéuticas se basarán en los resultados de
las infecciones intraabdominales se observa una los estudios bacteriológicos y el antibiograma.
flora mixta compuesta de enterobacterias, anaero Los esquemas deben tener en cuenta los gérme
bios y enterococos. Una infección característica nes anaerobios, los bacilos aerobios gramnega-
de pacientes diabéticos del sexo masculino es la tivos y en especial los enterococos. Son útiles las
colecistitis enfisematosa. Ésta, se caracteriza por asociaciones de piperacilina-tazobactam más me-
la formación de gas en la vesícula biliar. La pre tronidazol y eventualmente gentamicina o amika-
sentación clínica es similar a una colecistitis agu cina. Otros antimicrobianos a tener en cuenta son
da con fiebre, dolor en hipocondrio derecho y ciprofloxacina, levofloxacina, imipenem, mero-
vómitos, pero puede evolucionar a la gangrena y penem, ceftriaxona y otros de acuerdo con la res
perforación de la vesícula. Se observan cálculos puesta terapéutica y los hallazgos bacteriológicos.
vesiculares en el 50 % de los casos. La infección
es polimicrobiana e involucra bacterias aerobias
PROFILAXIS
facultativas y anaerobias. El diagnóstico se rea
liza teniendo en cuenta los factores predisponen La principal medida de prevención de las in
tes, la presencia de gas documentado por ecogra fecciones por anaerobios es evitar todas, las si
fía o tomografía computarizada y los hallazgos tuaciones que lleven a la disminución del poten
intraoperatorios. Para una adecuada selección de cial de oxidorreducción de los tejidos. Esto se
los antibióticos es preciso establecer si el comien logra mediante la limpieza adecuada de las heri
zo de estas infecciones fue en el medio intrahos- das, la elim inación de los espacios muertos y
pitalarío o en la comunidad. Las infecciones se cuerpos extraños, y la utilización de agentes ger
cundarias en pacientes internados se asocian con micidas y antimicrobianos que eviten la introduc
gérmenes intrahospitalaríos que colonizan el tubo ción de estos microorganismos en los diferentes
digestivo dentro de las 48 horas de la admisión tejidos.
gan al laboratorio antes de las 48 horas, no re E scherichia coli, Shigella, S a ln w n ella , Cam-
quieren refrigeración. Las materias fecales líqui p ylo b a cter fe tu s, C .je jitn i, Yersinia enteroco'
das se examinan en fresco con un microscopio Utico, Vibrio porahaem oliticus, BaciUtis cereus,
de campo oscuro o de contraste de fase, que per- Clostridium perfringens, C. bom linum , Staphy-
: Píite visualizar tamaño, forma y motilidad carac lococciis aureus, d o sfrid iu m difficUe, Rotavirus,
terísticos de los vibriones, y con coloración de virus tipo N orw aik, C andida, Isospora belii,
Gram, que muestra Vibrio cholerae com o un pe Cryptosporidium, Eiuamoeba histolytica, Giardia
queño bacilo gramnegativo en forma de «coma» lam blia, Balanfidium coli, Slrongyloides sterco-
con un único flagelo polar. En el frotis fecal en ralis, Trichinella spiralis y otros. También hay
■ general los leucocitos están ausentes, debido a que tener en cuenta distintas causas de diarrea,
que esta enfermedad es causada por una toxina y com o colitis ulcerosa inespecífica, colitis granu-
no hay inflamación de la mucosa intestinal. Si lomatosa inespecífica, pelagra, enfermedad de
bien esto es un hallazgo frecuente, no es cons W hipple, tirotoxicosis, síndrome carcinoide y
tante. Además del examen directo, las muestras otras.
deben cultivarse. Se utilizan distintos medios:
; agar sangre, agua peptonada alcalina y agar
COMPLICACIONES
l' liosulfato-citrato-sales biliares-sacarosa (TCBS).
' f Las colonias obtenidas se someten a la prueba de Las complicaciones más graves del cólera son
; ■ la citocromooxidasa, una reacción fuertemente la insuficiencia renal secundaria a la hipoperfu-
positiva en todas las especies de Vibrio, a dife- sión, con necrosis tubular aguda, y los proble
i’^ rencia de los microorganismos de la familia Ente- mas del aparato respiratorio ocasionados por la
!f robacteriaceae, que son oxidasa negativos. Las aspiración del vómito.
í- colonias oxidasa positivas son sometidas a la
aglutinación con antisuero 01 polivalente, cuya
PRONÓSTICO
positividad es una fuerte presunción de estar fren
te a Vibrio cholerae 0 1. La identificación defini El pronóstico depende de la precocidad y efec
tiva se realiza con pruebas bioquímicas, indis tividad del tratamiento de rehidratación. En con
pensables en áreas no endémicas o en países don diciones ideales la mortalidad es menor del \% .
de el cólera es raro. Al comienzo de las epidemias la mortalidad pue
Existen distintos métodos de diagnóstico rápi de ser mucho mayor, hasta tanto se disponga de
do realizados con materia fecal, como el empleo los medios para atender a los pacientes en forma
de anticuerpos fluorescentes contra V. cholerae; oportuna.
un método inmunoenzimático (ELISA) que de
tecta pequeñas cantidades de enterotoxina colé
TRATAMIENTO
rica, y una prueba de coaglutinación que utiliza
un anticuerpo monoclonal contra V. cholerae 01 Lo más importante en el tratamiento del cólera
adsorbido a S. aureus muertos por calor. Tam es la sustitución rápida y adecuada de las pérdi
bién es posible hacer un diagnóstico retrospecti das gastrointestinales de líquidos y electrólitos.
vo cuando el dosaje de los anticuerpos vibriocidas En la mayoría de los p a c i^ íe s la rehidratación
o antitóxicos en el suero sanguíneo de los pacien oral da buen resultado. ^ sobreviene el estado
tes; la primera muestra se toma al inicio de la de shock o los vómitos impiden la ingestión oral,
enfermedad y la segunda 15 días después. es imprescindible la reposición intravenosa, que
no se suspenderá hastó estar seguro de que el
paciente pueda equilibrar sus pérdidas con la in
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
gestión de la solución rehidratante. Los antimi
En la actualidad, en toda América el cólera se crobianos en el tratamiento del cólera acortan la
incluye en el diagnóstico diferencial de todos los duración de la diarrea, disminuyen su volumen,
I pacientes con diarrea. Otros microorganismos reducen la expoliación hidroelectrolítica y acor
también pueden ser causa de diarrea com o tan el período durante el cual se excreta Vibrio
464 □ Tercera parte • Infecciones bacterianas
cholerae. Deberán administrarse por vía oral tan 4 tomas diarias durante 3 días, o SM X 40 mg/
pronto com o cesen los vómitos, por lo general a TMP 8 mg/kg/día, en 2 lomas diarias, durante 3
las pocas horas de comenzada la rehldratación. días, o eritromicina, 50 mg/kg/día en 4 tomas día-
La vía parenteral no proporciona ventaja alguna. rias durante 3 día. En mujeres embarazadas:
Para la rehidratación oral se utilizan los sobres ampicilina, 1 comprimido de 250 mg cada 6 ho
SRO (sales de rehidratación oral), que se disuel ras durante 5 días, o furazolidona, l comprimido
ven en 1 litro de agua y contienen: 3,5 g de clo de 100 mg cada 6 horas durante 3 días.
ruro de sodio, 20 g de glucosa o 40 g de sacaro
sa, 2,5 g de bicarbonato de sodio y 1,5 g cloruro
PROFILAXIS
de potasio. Si no se consigue una rehidratación
oral adecuada o el paciente entra en estado de La protección más segura contra el cólera es la
shock, se indicará el tratamiento intravenoso. Para higiene cuidadosa. Es importante aislar y tratar a
la rehidratación por vía venosa, en una vena peri los enfermos y portadores, e interrumpir las vías
férica se colocará una aguja calibre 18 que per- de transmisión. El agua de consumo deberá ser
mita administrar con rapidez el volumen reque hervida o clorada con dos gotas de lavandina con
rido, que en los primeros 10 a 15 minutos puede centrada por cada litro; en este último caso se la
llegar a ser de 1 litro. Se utilizará la solución de deja 30 minutos antes consumirla. Los alimentos
Ringer lactato alternando con solución fisiológi se lavan con cuidado con agua clorada, pero es
ca. Si sobreviene hipoglucemia, complicación fre mejor hervirlos. Las excretas deben tener un tra
cuente en el niño, hiponatremia o hipematremia, tamiento adecuado y no se las usará como abono
e hipopotasemia, se corregirán con la mayor cele de suelos. Las vacunas actuales no son aconseja
ridad. Los antimicrobianos a utilizar en los adul bles, porque no protegen en forma eficaz y ade
tos son tetraciclina, 1 comprimido de 250 mg cada más pueden dar una falsa sensación de seguridad
6 horas durante 3 a 5 día, o doxiciclina, 300 mg en que lleve a descuidar los cuidados higiénicos. Las
una sola dosis, o SMX 800 mg/TMP 160 mg, 1 posibles indicaciones de la vacuna anticolérica'
comprimido cada 12 horas durante 3 días, o furazo- incluyen a los viajeros y en áreas de alta endemia
lidona, 1 comprimido de 100 mg cada 6 horas du (ver capítulo de Inmunoprofilaxis).
rante 3 días, o norfloxacina, 800 mg en una sola La quimioprofilaxis tampoco ha demostrado ser
dosis. En los niños: furazolidona, 5 mg/kg/día en eficaz.
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Lí\.
por el sistema reticuloendotelial; allí y después El período de invasión comienza en forma in
de una multiplicación intracelular, penetran nue sidiosa, con malestar general, cefalea, fiebre y
vamente en la circulación y producen una bac- anorexia. El 60% de los pacientes tiene tos y sín
teriemia continua durante días o semanas. Esto tomas bronquiales. La alteración intestinal más
coincide con el comienzo de las manifestaciones frecuente es la constipación. Sólo el 20% de los
clínicas. Durante esta fase se produce la infec pacientes tiene diarrea moderada.
ción del árbol biliar. De hecho, el aumento de En la segunda y tercera semana, durante el pe
Salm onella typhi en las heces durante la segunda ríodo de estado, la hipertermia es mayor y puede
y tercera semana de la infección se debe a la lle alcanzar los 40®C con bradicardia relativa, hipo-
gada al intestino de un gran número de bacterias. tensión, dolor abdominal, hepatoesplenomegalia,
Es importante resaltar que la enfermedad está diarrea o constipación y lengua seca. Es común
en relación directa con el número de microor la alteración del estado de conciencia, que se ma
ganismos ingeridos. Se sabe que se necesitan nifiesta por confusión, estupor o delirio. Pueden
concentraciones relativamente elevadas de Sal- aparecer las manchas rosadas típicas de la enfer
m onella typhi para provocar la infección. La flo medad (roséola tífica) localizadas por lo general
ra normal del intestino (o biota normal) es un im en la porción superior del abdomen. Se descri
portante mecanismo de protección. La liberación ben como pequeñas lesiones maculopapulares,
de endotoxinas desempeña un papel no bien de poco numerosas, que palidecen con la presión.
terminado, aunque sería responsable de una par Persisten entre 2 y 4 días y pueden reaparecer.
le de los signos y síntomas. Es posible que la re Su frecuencia de aparición es muy variable; en
sistencia a la infección se deba a la inmunidad la actualidad se observan en pocas oportunida-,
celular. des debido al tratamiento precoz con antibióticos.
El período de convalecencia comienza después'
Anatomía patológica de la tercera semana con disminución de la fíe-'
La lesión más característica es la proliferación bre. Los demás signos van desapareciendo lenta-:
de grandes células mononucleares en distintos mente. La recuperación completa puede deman
tejidos. Se localiza clásicamente en el tejido lin- dar más de cuatro semanas.
foide del intestino, en especial en las placas de
Peyer y en los folículos linfáticos del ciego. Pue Diagnóstico
de determinar necrosis y ulceración local, que si Las manifestaciones clínicas ya señaladas, así
se profundiza lleva a la perforación. Los vasos como los antecedentes epidem iológicos, pueden!
sanguíneos suelen erosionarse, lo que provoca sugerir el diagnóstico de fiebre tifoidea, Los ha
hemorragia intestinal. llazgos del laboratorio en general varían con el
Hay aumento del tamaño del hígado, que pre estadio de la enfermedad. Se observa anemia
senta cúmulos de células mononucleares fago- normocítica y normocrómica, que puede agravar
cíticas. se por las deposiciones sanguinolentas. La leuco-
El bazo también presenta un volumen mayor, penia, 3.000 a 4.000 leucocitos, con neutropenia,
con obliteración de los bordes foliculares, histio- es casi constante y es más acentuada en la terce
citosis sinusal y proliferación dcl rcticuloendo- ra semana. Puede verse leucocitosis transitoria
telio. Se observan áreas de necrosis e hiperplasia en los primeros 7 a 10 días. Su presencia des
de los ganglios linfáticos mesentéricos, con gran pués de esta primera fase puede sugerir una po
activación de la función fagocítica del sistema sible perforación intestinal, hemorragia u otra
reticuloendotelial. complicación piógena.
Durante el período febril suele haber protei-
Manifestaciones clínicas nuria, que es probable que se deba a glomerulo-
El período de incubación es de 10 a 14 días, nefritis por inmunocomplejos. También se obser
según el inóculo infectante. En los casos más tí va aumento leve y transitorio de algunas enzimas,
picos, en pacientes no tratados, la enfermedad como transaminasa glutamicooxalacética, deshi-
tiene una duración de unas 4 semanas. drogenasa láctica, creatinfosfocinasa y fosfatasa
C apítulo 52 - Fiebre tifoidea y otras salm onclosis □ 467
alcalina. Se han informado anormalidades de la cuenta otras enfermedades con un cuadro clínico
coagulación, o incluso coagulación intravascular semejante, como infecciones virales, mononu-
diseminada, que remiten con la resolución de la cleosis infecciosa, psitacosis, meningitis, apendi •
fermedad. No se han visto hemorragias por este citis, colecistitis, peritonitis, disentería bacilar o
motivo. amebiana, linfomas, enfermedad inflamatoria o
El diagnóstico definitivo se hace por el aisla granulomatosa intestinal, endocarditis bacteriana,
miento de Salm onella typhi en los hemocultivos. tuberculosis miliar, leptospirosis y otras.
Durante la primera semana es positivo en un 90%
de los casos, porcentaje que, de no mediar trata Compiícaciones
miento antibiótico, disminuye con la evolución La frecuencia de las complicaciones de la fie
de la enfermedad a un 50% al final de la tercera bre tifoidea se ha reducido notablemente desde
semana. el advenimiento de la terapéutica antibiótica. Se
El microorganismo también puede aislarse de las puede clasificar como sigue.
la materia fecal en cualquier período de la enfer
medad, hecho que si bien no define el diagnósti • Secundarias a la toxemia
co genera una fuerte presunción, en especial en Miocarditis, hiperpirexia, daño hepático y de
áreas endémicas. El coprocultivo es positivo en la médula ósea.
un 75% de los casos, durante la tercera y cuarta
semana de la enfermedad. A partir de allí la fre • Secundarias a lesiones gastrointestinales
cuencia de cultivos positivos disminuye; sólo el Hemorragia y perforación. La hemorragia es
3% de los pacientes continúa excretando microor producida por la erosión de los vasos sanguíneos
ganismos durante un año o más. La excreción en las placas de Peyer, que están hiperplásicas y
persistente es secundaria a la infección de la vía necróticas. El sangrado en ocasiones es impor
biliar o del aparato urinario. tante. En el 10% al 20% de los enfermos se de
El cultivo de la médula ósea puede ser positivo lecta la presencia de sangre en las heces.
aun cuando los hemocultivos sean negativos. De La perforación intestinal es el resultado de la
la roséola tífica también es posible aislar los necrosis del tejido linfoide, que compromete la
microorganismos. muscular y la serosa del intestino. Se produce
El diagnóstico serológico (reacción de Widal) durante la segunda y tercera semanas y por lo
muestra un aumento del título de aglutininas fren general se afecta la porción inferior del íleon. Esto
te al antígeno somático (O), que alcanza un máxi sucede en el 1% de los pacientes y es la compli
mo durante la tercera semana. La detección de cación más grave.
un solo título elevado no es suficiente para esta
blecer el diagnóstico. Los títulos contra el antí • Infección localizada
geno flagelar (H) son mucho más inespecíficos y Meningitis, tiroiditis, neumonía, derrame pleural,
no tienen valor en el diagnóstico. La inmunofluo- endocarditis, osteomielitis, artritis y tromboflebitis.
rescencia indirecta es de 10 a 100 veces más sen
sible y específica que la reacción de Widal. La • Secundarias al tratam iento
inmunización con vacuna antitifoidea puede pro Depresión medular por cloranfenicol y reaccio
ducir un aumento notable del título de aglutininas nes de hipersensibilidad.
anti-0. Sin embargo, las reacciones serológicas
no son confiables y carecen de utilidad clínica. • Recaídas
Como ya se ha señalado, el diagnóstico de certe En un 8% a 10% de los pacientes puede pro
za se logra con el aislamiento de Salmonella typhi. ducirse una recaída l a 2 semanas después de la
desaparición de la fiebre. Por lo general es más
I Oiagnóstico diferencial leve que la enfermedad inicial y se produce 1 a 2
j Los hallazgos clínicos de la fiebre tifoidea no semanas después de finalizado el tratamiento
\ son patognomónicos; por lo tanto, para estable- antibiótico. El cloranfenicol no ha disminuido la
i cer el diagnóstico diferencial deben tenerse en frecuencia de recaídas.
468 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
bacteriaceae. Su clasifícación ha vanado en los También el agua contaminada por heces u ori
últimos años. Los serotipos de Salm onella se de na, de seres humanos o animales infectados, pue
finen sobre la base de su estructura antigénica de transmitir la infección, que también es exten
(antígenos somático O y ciliar H). Casi todas las dida por los individuos portadores que manipu
salmonelas aisladas en la especie humana y ani< lan alimentos.
íííal pertenecen al subgrupo 1. Las conocidas Las mujeres embarazadas portadoras de 5a/-
como paratíficas son: m onella pueden contaminar al recién nacido y,
eventualmente, también la sala de partos o de neo-
Salm onella paratyphi A (bacilo paratífico A). natología.
Salmonella schottmuelleri (bacilo paratífico B). Hay una variación estacional en las infeccio
Salm onella hirschfeldii (bacilo paratífico C). nes por Salm onella, pero la mayor incidencia se
Salm onella sendai. registra en los meses de clima cálido.
La tasa de ataque es especialmente alta en el
Todas ellas crecen con facilidad en medios sim primer año de vida y se mantiene elevada hasta
ples, en condiciones aerobias y anaerobias, aun los 5 años.
que para aislarlas de la materia fecal deben utili Las alteraciones de las defensas del huésped
zarse medios selectivos. favorecen el desarrollo de la infección, en espe
Las salmonelas gastroenteríticas dan gastroen cial las infecciones sistémicas en pacientes con
teritis agudas sin bacteriemia o con bacteriemia enfermedad por HIV. Otros hospederos suscepti
transitoria, salvo en lactantes, ancianos e inmuno- bles son los que padecen cirrosis hepática, colage-
deprimidos, en quienes puede originar bacterie- nopatías, leucemias, linfomas u otras neoplasias,
mias graves. quienes han recibido trasplante de órganos y los
Las especies de salmonelas gastroenteríticas gastrectomizados.
son 5. fyphim uñum , S. enteritidis, S. choleraesuis, La mayoría de los aislamientos de Salm onella
S. newport, S. dublin y otras. provienen de los estudios de casos esporádicos.
Esto a veces permite identificar epidemias fami
Epidemiología liares no reconocidas.
Las infecciones por Salm onella en la especie Es frecuente la aparición de epidemias en ins
humana se deben casi con exclusividad a la in tituciones: hospitales de atención de agudos, sa
gestión de alimentos o bebidas contaminados. las de pediatría y neonatología, hogares de an
Las distintas especies del género se encuentran cianos, escuelas, hospitales psiquiátricos e insti
normalmente en numerosos animales: aves, mamí tuciones para retrasados mentales. Se asocian con
feros, reptiles e insectos. Su reservorio más impor frecuencia con alimentos o bebidas contamina
tante son las aves domésticas y sus huevos, en es dos y a veces con la transmisión interhumana.
pecial pollos, gallinas, pavos y patos. La infección Esto último es habitual en instituciones médicas
de los animales domésticos es de importancia fun y es la causa de las epidemias nosocomiales. Se
damental en la epidemiología de la salmonelosis, producen por contacto de persona a persona; los
ya que la infección puede transmitirse de un ani gérmenes son transportados por el personal y los
mal a otro en forma directa o indirecta. Los alimen pacientes, en menor proporción se encuentran en
tos que contienen harina de pescado o subproduc equipos de diagnóstico difíciles de esterilizar.
tos contaminados son las fuentes mayores de infec
ción para los animales. Su hacinamiento en corra Patogenia
les, donde se los alimenta y mantiene antes de la El desarrollo de la enfermedad está influido por
matanza, aumenta la diseminación de la infección. el número y la virulencia de los gérmenes, tam
Ciertas infecciones han sido transmitidas por bién por varios factores relacionados con el hos
la leche en polvo, el coco rallado, el chocolate y pedero.
algunos productos farmacéuticos de origen ani En seres humanos sanos por lo general es ne
mal, como colorantes, pancreatina, sales biliares, cesario que se introduzca un alto número de sal
gelatina, vitaminas y otros. monelas para que se produzca la enfermedad. Se
w
requiere la ingestión de un gran número de mi nos pacientes es tan intenso que hace sospechar
croorganismos para que se produzca una infec un proceso abdominal agudo, como apendicitís--
ción sintomática. La capacidad patogénica tam o colecistitis.
bién varía con cada serotipo. El hemograma puede revelar leucocitosis mo
En el estómago, en condiciones normales las derada. En la materia fecal hay abundantes poli-
salmonelas están expuestas a un pH bajo, lo cual morfonucleares; con frecuencia el coprocultivo
reduce el número de microorganismos viables. permite identificar la especie responsable, cuyo
Esto puede ser alterado por la ingestión de medi aislamiento es más fácil en las etapas iniciales y
camentos o por afecciones que disminuyan la agudas. Para considerar un individuo com o por
acidez gástrica. Asimismo, la modificación de la tador entérico crónico se requiere aislar la mis
flora intestinal por antimicrobianos reduce el ma especie de Salm onella un año después de ha
inóculo necesario para producir la infección. En berse iniciado la infección. Esto es casi exclusi
el intestino delgado y el colon las salmonelas se vo de Salm onella typhi.
multiplican, producen inflamación de la mucosa En las enterocolitis la frecuencia de bacteriemia
y posiblemente desarrollan una enterotoxina. La es baja en los adultos y alta en los lactantes. Las
multiplicación puede ser asintomática o sintomá pruebas de aglutinación no tienen valor para el
tica, con gastroenteritis o bacteriemia, además de diagnóstico.
localización secundaria en diversos parénquimas.
Tras atravesar la mucosa intestinal los microor Bacteriemia
ganismos son transportados al tejido linfático Suele ser persistente y se caracteriza por fiebre
regional. A llí se produce su multiplicación en prolongada e intermitente, escalofríos, anorexia
células mononucíeares del sistema reticuloendo- y pérdida de peso. Puede causarla cualquier es
telial y a través del torrente sanguíneo llegan a la pecie de Salm onella. Los cultivos de materia fe
vesícula biliar; por último, con la secreción biliar cal a menudo son negativos. En algunos casos se
se produce su retorno secundario al intestino. observan infecciones supurativas localizadas, que
pueden evidenciarse mucho tiempo después del
Anatomía patológica cuadro inicial. Es común en los pacientes con
La respuesta inflamatoria inducida por Salmo- enfermedad avanzada por HIV; su tratamiento es
nella se caracteriza por la presencia de leucocitos difícil y las recaídas frecuentes.
polimorfonucleares. En el intestino delgado se ob
serva un aumento del tamaño de los folículos Meningitis
linfoides, los que pueden llegar a ulcerarse. Es co Es una complicación infrecuente que se produ
mún la inflamación de los ganglios mesentéricos. ce casi con exclusividad en neonatos. La evolu
ción por lo general es prolongada y son comunes
Manifestaciones clinicas las recaídas. Sus complicaciones son el empiema
Enterocotitis subdural, el absceso cerebral y la ventriculitis. La
El período de incubación habitual es de 8 a 24 mortalidad por estos trastornos es elevada.
horas. El curso clínico típico se caracteriza por
la presencia de fiebre, dolor abdominal y diairea, Enfermedad pleuropulmonar
que se mantienen durante 3 a 5 días. Con fre Por lo general se trata de neumonía o empiema
cuencia los síntomas iniciales son náuseas y vó en pacientes con enfermedades subyacentes.
mitos, dolor abdominal marcado y después dia
rrea. El dolor y las características de la diarrea Endocarditis y pericarditis
varían de un individuo a otro, algunas veces son Son muy raras, se asocian con alta mortalidad
heces relativamente líquidas y en otras se produ y resistencia al tratamiento.
cen 30 a 40 deposiciones líquidas por día. La tem
peratura oscila entre 38®C y 39°C. Arteritis
En el examen físico se observa distensión ab- Se localiza en vasos mayores, aorta torácica y
(loniintil y dolor con la palpación, que en algu abdominal, arterias coronarias y periféricas, fís-
jm
Capítulo 52 - Fiebre tifoidea y otras salm onclosis □ 471
en los ijltimos años, por lo cual debe realizarse huevos procedentes de animales infectados re
siempre el antibiograma. duce la probabilidad de infección sin eliminarla.
Las salmonelas pueden sobrevivir al proceso de
Profilaxis cocción en las parles profundas de algunos ali
Como la mayoría de ios casos de salmonelosis mentos. El personal hospitalario debe observar
se deben a la ingestión de alimentos contamina normas estrictas de higiene para disminuir al
dos, el mejor método de prevención es modificar mínimo la transmisión interhumana. La vacuna
los sistemas de manipulación y preparación de ción no se recomienda en forma sistemática.
los alimentos. La cocción de la carne o de los
Shigelosis
O rn a r J . P a lm ie r i
(•
474 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
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Infecciones por clamidias C ’
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Alfredo C. Seijo
Ornar J. Palmieri
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Los programas de control ponen énfasis en el episodios anteriores; sin embargo, puede ser muy
diagnóstico temprano, la notificación, y el irata- útil en el linfogranuloma venéreo. Es importante
(Tiiento de lodos los pacientes y el de su pareja recordar que entre los objetivos de los progra
sexual. En algunos países la implementación ade mas de control se incluye la identificación tem
cuada de estos programas ha llevado a una lenta prana de los pacientes afectados, a fin de inte
declinación de la incidencia de estas infecciones. rrumpir la cadena de transmisión en la comuni
dad.
Infecciones neonatales
El neonato se infecta en su pasaje por el canal Tratamiento
del parto. Por lo general la forma de presentación Está demostrada la sensibilidad de este micro
es una conjuntivitis purulenta que se manifiesta organismo a los antimicrobianos con acción so
entre los 3 y los 10 días de vida, y no se evita con bre la síntesis de proteínas y ácidos nucleicos.
la instilación de nitrato de plata (método de Credé). Foreste motivo, en los casos de afecciones de la
Otra localización es la neumonía neonatal, que uretra y del cu ello uterino puede emplearse
se presenta entre las 2 semanas y los 2 meses de doxiciclina, 100 mg cada 12 horas o minociclina,
vida como un cuadro respiratorio de inicio gra 100 mg por día durante 10 a 15 días. Para las in
dual, evolución afebril y prolongada, y falta de fecciones oculares y las genitales, la azitromicina,
respuesta a los antibióticos betalactámicos. A l dosis única de 1 gramo por la vía oral, es equiva
rededor del 50% de los laclantes con neumonía lente al esquema tradicional de 7 días de tetra-
tienen el antecedente de conjuntivitis. Esta neu ciclinas. En los casos de epididimitis puede admi
monía se manifiesta con tos acompañada con nistrarse ceftriaxona, 500 mg IM como dosis ini
laquipnea, afección intersticial, eosinofilia leve cial por la posible asociación con N. gonorrhoeoe,
e incremento de las inmunoglobulinas. El cua seguidos por tetraciclinas durante 10 a 15 días.
dro clínico puede durar semanas, con persisten Las mujeres embarazadas pueden tratarse con
cia radiológica durante meses. macrólidos, como eritromicina, claritromicina,
La infección de los lactantes puede prevenirse roxitromicina o azitromicina.
con un diagnóstico y tratamiento correctos de las La conjuntivitis del recién Jiacido se tratará con
afecciones provocadas por el microorganismo en eritromicina oral, 50 mg/kg/día divididos en 4
los padres. tomas más colirio de tetraciclina durante 10 a 14
días.
Diagnóstico En la neumonía del lactante se administrarán
El diagnóstico se basa en la sospecha clínica y macrólidos en las dosis habituales durante 10 a
se confirma mediante diferentes procedimientos, 14 días.
para lo cual se deben tomar muestras de exudados
que contengan células. El procesamiento de las
INFECCION POR CHLAMYDIA PSITTACÍ
muestras debe ser rápido, porque el microorga
nismo es muy sensible. El método de elección La psitacosis, enfermedad provocada porC/?/¿7-
para el diagnóstico es el cultivo en líneas celula m ydia psittaci, es transmitida por los aerosoles
res, que permite la detección de los cuerpos de provenientes de las secreciones y la materia fe
inclusión en 3 a 4 días. También se pueden utili cal de las aves. La enfermedad en el ser humano
zar pruebas de detección directa de antígenos, por se manifiesta con fiebre y compromiso respira
medio de métodos com o la inmunofluorescencia torio que puede ser muy grave.
directa y ELISA, de eficacia y sensibilidad pro
badas. La reacción en cadena de la polimerasa Epidemiología
(PCR) es otra prueba diagnóstica de sensibilidad Es una enfermedad de distribución mundial. El
y especificidad elevadas. mayor número do casos se asocia con el contacto
La serología no es un método confiable para el con aves de la familia de los psitácidos, en parti
diagnóstico de la etapa aguda de la infección, ya cular loros, si bien este microorganismo se ha
que los anticuerpos circulantes pueden deberse a aislado de más de 120 especies de aves que pue
480 □ Tercera parte • Infecciones bacterianas
den estar infectadas en forma natural. La trans> nifestaciones reflejan la hipoxia subyacente, que
misión interhumana es ocasional, pero se ha in progresa en algunas ocasiones al estupor y al
formado en algunos brotes epidémicos. En los coma.
países europeos la psitacosis se presenta como La enfermedad evoluciona en unas dos sema
una enfermedad profesional en personas relacio' nas, con astenia franca que persiste durante un
nadas con la cría y comercialización de patos, y período prolongado.
en los EE.UU. con la de pavos. En la Argentina
tiene una incidencia sensiblemente mayor en los Diagnóstico
meses de verano y comienzos del otoño, en rela Para la sospecha clínica es fundamental el an
ción con la comercialización de aves, en espe tecedente epidem iológico. Los exámenes rutina
cial psitácidos, como mascotas. rios de laboratorio no permiten orientar con cla
Ambos sexos son afectados por igual. La trans ridad la etiología del cuadro clínico. El recuento
misión al ser humano puede producirse por inha de leucocitos puede encontrarse dentro de los lí
lación de excretas secas o por contacto directo mites normales.
con los animales enfermos. Es un trastorno co El aislamiento del agente etiológico es dificul
mún en las personas que manipulan aves o que toso. Los exámenes serológicos confirmarán, jun
concurrieron a locales donde se encuentran en to con los antecedentes de medio epidémico y la
exposición. Todos los casos confirmados de psita clínica, el diagnóstico de esta enfermedad. La
cosis deberán comunicarse con rapidez a las au elevación de los títulos de anticuerpos mediante
toridades sanitarias. inmunofluorescencia indirecta (IFI) permite es
tablecer el diagnóstico definitivo.
Manifestaciones clínicas
El período de incubación varía entre 6 y 12 días. Diagnóstico diferencial
La enfermedad comienza en forma brusca, con El diagnóstico diferencial puede ser muy difí
ñebre muy alta acompañada por gran decaimiento cil, aunque el antecedente del contacto con aves
general, inflamación conjuntival y cefalea fron- es muy importante para la sospecha clínica de
toorbitaria. Tiene las características del síndro esta enfermedad. Las neumonías que no respon
me tífico, en especial por su componente neuroló- den al tratamiento con antibióticos betalactámicos
gico. Es común el hallazgo de hepatoespleno- pueden sugerir, junto con la epidemiología, que
m egalia. El com prom iso respiratorio aparece el paciente padece esta afección. En estos casos
unos cinco días después del inicio del cuadro clí también debe establecerse el diagnóstico diferen
nico, con una neumopatía que evoluciona con cial con infecciones por micoplasma, influenza,
disociación clinicorradiológica, o sea con hallaz fiebre Q, legionelosis, leptospirosis, tuberculo
gos auscultatoríos escasos y signos radiológicos sis, m icosis y otras afecciones respiratorias que
ostensibles. En ocasiones se origina una conden> originan el síndrome de neumonía atípica.
sación de ubicación variable. Los hallazgos clí
nicos se contraponen con la extensión del com Tratamiento
promiso pulmonar. Merece destacarse que es la Las tetraciclinas son los agentes antimicro
neumonía atípica que produce con más frecuen bianos de elección. Lo habitual es indicar doxi-
cia síndrome de condensación. El paciente tiene ciclina, 100 mg por vía oral, dos veces por día,
tos persistente, que habitualmente es seca aun durante 10 a 14 días. En los niños se administra
que a veces es productiva con secreciones mu rá claritromicina, 15 mg/kg/día divididos en 2
cosas y viscosas. A veces se producen atelectasias tomas durante el mismo período. En los casos
segmentarias que son el origen de sobreinfeccio- graves en que no sea posible la administración
nes por diferentes microorganismos, con el de por vía oral, puede recurrirse a la claritromicina
sarrollo posterior de abscesos. Hacia fines de la por vía IV. La terapéutica con estos fármacos pro
primera semana de evolución, si el enfermo no duce mejoría clínica en 2 o 3 días. Si bien algu
es tratado en forma adecuada puede evolucionar nos casos son muy graves, en general se consi
con hipersomnia, confusión y delirio. Estas ma dera que el pronóstico es bueno.
C apítulo 54 - Infecciones por clam idias O 481
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C apitulo 55 - Tos ferina □ 485
yección conjuntival, proirusión lingual, ingurgi gundos. También pueden cultivarse las secreciones
tación yugular, cianosis labial, diaforesis y tórax rinofaríngeas obtenidas con hisopo. Se siembran
fijo en espiración. Puede haber incontinencia en medio de Bordet-Gengou con penicilina, para
esfinteriana y pérdida de conciencia. Sobreviene eliminar contaminantes, y en 2 a 5 días, a 37®C, se
entonces una inspiración profunda, larga, ruido* desarrollan colonias semejantes a gotitas de mer
sa, estridente y sibilante a través de la glotis semi- curio rodeadas por un halo de hemólisis. Las posi
cerrada, llamada estridor, gallo o reprise. En esta bilidades de aislamiento son del 70% al 80% du
etapa la tos es emetizante. rante el período catarral y se reducen en forma pro
Finalizado el acceso coqueiuchoso el niño ex gresiva a medida que se avanza en la evolución.
pulsa una mucosidad vitrea, filante, transparen El diagnóstico bacteriológico también es facti
te, espesa, semejante a clara de huevo crudo, for ble mediante reacciones de aglutinación con anti
mada por moco, leucocitos, células bronquiales sueros específicos o por identificación de antíge-
descamadas, flora mixta y bacilos de Bordet-Gen- nos en las secreciones por medio de inmunofluo-
gou. El paciente queda con cansancio, disnea y rescencia directa.
taquicardia. Los casos comunes evolucionan con La serología, a través de reacciones de aglutina
5 a 20 accesos por día, cuya repetición lleva al ción y fijación del complemento, ayuda poco al diag
agotamiento del enfermo. Puede observarse ede nóstico porque la elevación de anticuerpos recién se
ma bipalpebral y equimosis subconjuntivales, lo produce en la tercera semana de la enfermedad.
que se denomina fa c ie s pertussis. A partir de la tercera semana de evolución del pe
El período de declinación, de 1 a 2 semanas de ríodo de estado la radiografía de tórax puede mos
duración, se caracteriza por la defervescencia de trar imágenes anormales en el 70% al 80% de las
los signos y síntomas; los accesos se hacen me formas graves y en el 30% al 50% de las comunes.
nos frecuentes y de menor intensidad. La tos deja Las imágenes más características, lo que se deno
de ser emetizante y no hay reprise. mina pulm ón coqueiuchoso, son las siguientes: la
A veces el enfermo mantiene un estado coque- opacidad hiliofrénica de hilio a base, que sigue el
luchoide durante 3 a 6 meses. trayecto del pedículo broncovascular y ocupa el
En síntesis, lo más saliente de los accesos de seno cardiofrénico. N o es homogénea y resulta ser
tos en la tos ferina es su carácter im previsto, dis- semejante a una neumonía. La imagen basal de
neizante, cianosante y em etizante, y que finaliza Góttche, en escuadra, infrahiliar, paramedial dere
con una inspiración ruidosa y sibilante {reprise}. cha con base diafragmática y vértice dirigido al
hilio, es más densa y homogénea que la anterior y
corresponde al lóbulo medio atelectásico y rotado.
DIAGNÓSTICO
También puede observarse una imagen reticular y
Se evaluarán la epidemiología (antecedentes de compromiso pleural, pero esto no es frecuente.
medio epidémico, contacto con enfermos), el es
tado inmunitario del paciente (vacunas recibidas)
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
y las manifestaciones clínicas ya señaladas.
En cuanto al diagnóstico de laboratorio, al fi En el período catarral puede confundirse con
nal del período de invasión y al com ienzo del otras afecciones agudas catarrales de las vías aé
período de estado se destaca la leucocitosis, de reas superiores. Aquí tiene valor el antecedente
10.000 a 30.000 leucocitos/mm^ con linfocitosis epidem iológico y el no haber recibido la vacuna.
marcada. La eritrosedimentación se mantiene En esta etapa el diagnóstico puede confirmarse
dentro de lo normal, salvo que haya complica por el aislamiento de B. p ertussis en secreciones
ciones. Se comprueba anergia tuberculínica. de las vías respiratorias y por el hemograma, que
El aislamiento e identificación del bacilo de revela leucocitosis con linfocitosis.
Bordet-Gengou puede efectuarse en las gotas ex Durante el período de estado el diagnóstico
pelidas con cada golpe de tos. Para tal fm, durante diferencial deberá incluir las adenopatías com
los accesos de tos se coloca una placa de Petrí a presivas traqueobronquiales (tuberculosis, linfo-
10 cm de la boca del paciente y se la deja treinta se mas), que dan estados coqueluchoides secunda-
486 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
La legionelosis como entidad clínica fue des- aunque en los cultivos se han observado formas
cripta en 1976, durante un brote de neumonía que de más de 20 pm de longitud. En general no uti
afectó a 221 personas entre los asistentes a una lizan hidratos de carbono, ya que ios aminoácidos
convención de legionarios en un hotel en Filadel- son su principal fuente de energía; para su creci
fia, de los cuales 34 fallecieron. miento requieren L-cisteína.
El estudio del tejido pulmonar en la autopsia Su hábitat natural es el agua de ríos, arroyos,
permitió el aislamiento e identificación de un mi fuentes termales, etc. Resisten temperaturas entre
croorganismo desconocido hasta entonces que 0®C y 63®C, y rangos de pH de 5 a 8,5. Pueden
motivó la creación de la familia Legionellaceae. sobrevivir hasta 2 años en muestras de agua con
El primer aislamiento de Legionella pneumo- servadas entre 2®C y 8®C. En aparatos de refrige
phila tuvo lugar en 1947, por inoculación en el ración, y sistemas de distribución de agua, incluida
cobayo de sangre de un paciente con enfermedad la red domiciliaria, encuentran la temperatura, la
respiratoria febril. Por entonces se lo caracterizó protección física y las sustancias nutritivas que les
como un microorganismo semejante a Rickettsia. permiten resistir el tratamiento clorado habitual del
Estudios posteriores establecieron su verdadera agua. Se sabe que para su supervivencia es necesa
identidad. ria la presencia de microorganismos simbióticos
La investigación retrospectiva de anticuerpos (protozoos y ciertas bacterias) donde se multiplica,
en sueros pareados, provenientes de 81 enfermos hasta la ruptura del organismo hospedero que libe
(15 de los cuales murieron) de un brote de neu rará nuevos microorganismos, en un proceso seme
monía, producido en 1965 en un hospital psiquiá jante al de las células mononucleares humanas.
trico de Washington, permitió demostrar la sero-
conversión para L. pneum ophila en 69 de ellos.
EPIDEMIOLOGÍA
V
488 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
muestras) demostró la circulación del microor La fiebre de Pontiac es una enfermedad aguda
ganismo en la Rcpiíblica Argentina. autolimitada, difícil de diferenciar de un cuadro
La enfermedad adquirida en la comunidad ha gripal y en la que no se produce una neumonía.
sido relacionada con la contaminación de la red La enfermedad de los legionarios, en cambio,
o los reservorios de agua, al igual que en los bro se presenta com o una neumonía grave, asociada
tes hospitalarios. La transmisión tiene varias vías: con signos y síntomas de alteración de otros pa-
gotitas en la atmósfera, dispositivos respiratorios rénquimas.
contaminados e ingestión de agua contaminada. La búsqueda sistemática de Legionella ha per
Sin embargo, ninguna de ellas es absolutamente mitido reconocer formas clínicas de neumonía de
suficiente para explicar todos los casos. Es pro carácter leve y en ocasiones oligosintomáticas.
bable que la formación de aerosoles de agua con La neumonía está precedida por una fase pro-
taminada con cepas virulentas de legionelas sea drómica inespecífica, con fiebre, mialgias y ce
el principal mecanismo de infección. falea. A lgunos pacientes presentan un cuadro
Al igual que L. pneum ophila, las otras espe diarreico con dolor abdominal difuso, náuseas y
cies se encuentran ampliamente distribuidas en vómitos. Es frecuente hallar hiponatremia. En las
medios acuáticos y suelos. La infección produci formas graves se observan alteraciones neuroló-
da por estas especies se asocia con estados de gicas, en especial estado confusional.
inmunodepresión, uso de corticosteroides, tras La tos suele ser poco productiva y en ocasio
plantes o cáncer, pero también se presenta en suje nes puede comprobarse esputo hemoptoico. La
tos sin inmunodepresión conocida. disnea es progresiva. La sem iología respiratoria
Como agente etiológico de neumonía de la co revela condensación y estertores diseminados. La
munidad, la frecuencia varía, de acuerdo con nu neumonía puede ser unilateral o bilateral, y es
merosos estudios, entre el 5% y el 15%; se ha común el derrame pleural.
registrado un aumento en relación con el sida. Las imágenes radiológicas muestran la afecta
ción del espacio alveolar, ya que muy raras veces
el infiltrado es intersticial. Se ha comprobado que
PATOGENIA
la cavitación pulmonar sobreviene incluso con tra
En el pulmón los microorganismos se adhieren tamiento adecuado y a veces en períodos tardíos.
a los receptores de la célula hospedera. Se replica Los infiltrados pulmonares persisten durante va
con rapidez en el citoplasma de los macrófagos rias semanas, aun con el paciente asintomático.
alveolares donde, al no producirse la fusión fago- Todos los síntomas asociados, como ictericia,
lisosómica, resiste los procesos oxidativos y la ac miocarditis, alteraciones hemáticas, renales y ^
ción enzimática. neurológicas no son específicos y se atribuyen a
Los factores que llevan a una alteración del siste la diseminación bacteriémica y a las alteraciones
ma mucociliar (alcoholismo, tabaquismo, EPOC) metabólicas asociadas.
se asocian con mayor riesgo de infección y grave N o hay parámetros clínicos ni radiológicos que
dad evolutiva. El microorganismo puede llegar al permitan diferenciar una neumonía por Legio-
pulmón, por vía aerógena directa o por bacteriemia nella de otras neumonías.
desde otra localización, probablemente la digestiva. En pacientes inmunodeprimidos se han des-
En el estudio histopatológico se observa un in- cripto formas muy variadas: celulitis, sinusitis,
fíltrado multifocal que ocupa el espacio alveolar, abscesos perirrectales, pericarditis, pielonefritis,
compuesto por leucocitos polimorfonucleares, ma pancreatitis y endocarditis.
crófagos alveolares y fibrina.
DIAGNÓSTICO
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Los métodos de diagnóstico de laboratorio son:
En la legionelosis se diferencian dos formas de • Aislamiento en medios de cultivo con carbón
presentación: la fiebre de Pontiac y la enferme y el agregado de antibióticos, a partir de materia
dad de los legionarios. les respiratorios y sangre.
C apítulo 56 - Legionelosis □ 489
•
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57
Tuberculosis
Eduardo H. Abbaie
Ornar J. Palmieri
D E FIN IC IÓ N
algunas de las cuales determinan el característi
co daño tisular que produce.
Mycobacterium tuberculosis y xdi^^mtwitMyco-
bacterium hovis, son los agentes etiológicos de la
E P ID E M IO L O G ÍA
infección y la enfermedad tuberculosa. Ésta pue
de evolucionar en forma crónica y afectar diferen El reservorio del bacilo de Koch es principal
tes órganos, pero la localización más frecuente es mente humano. Por ser un parásito estricto, la
la pulmonar. transmisión es por lo general directa, de persona
a persona.
E T IO LO G ÍA M . tuberculosis es el responsable del 99%,
aproximadamente, de las infecciones humanas y
El complejo de microorganismos M yco b a c M. bovis, que afecta con preferencia el ganado
terium tuberculosis consta de cinco especies: M. bovino, del 1% restante.
tuberculosis, M. bovis, M . afiicanum y M. microti. La tuberculosis es una enfermedad muy anti
La tuberculosis por M. bovis ha sido prácticamen gua. Sus estigmas fueron encontrados en los hue
te erradicada. M . qfricanum y M. canetti son cau sos del hombre del N eolítico, en Europa, y en las
sa rara de tuberculosis en África y M. m icroti es vértebras de momias egipcias. En cadáveres
un patógeno de los roedores. incaicos momificados fue posible demostrar ba
M. tuberculosis es la causa más frecuente de cilos ácido-alcohol resistentes.
tuberculosis humana. Es un bacilo delgado, lige Sin embargo, las epidemias de tuberculosis se
ramente curvo, de 1 a 4 |im de longitud, que se produjeron con la aparición de la sociedad indus
tiñe en forma irregular. Tiene una pared celular trial, favorecidas por el hacinamiento, que facili
compleja de alto contenido lipídico. De ella de ta el contagio, y las malas condiciones de vida y
pende la ácido-alcohol resistencia, que hace que alimentación, que hacen posible el paso de in
una vez teñido sea capaz de resistir la decolora fección a enfermedad.
ción con ácidos y alcohol; de ahí el nombre de Un incremento muy importante de la tubercu
bacilos ácido-alcohol resistentes (BAAR). losis se produjo por la epidemia HlV/sida, que
M. tuberculosis necesita medios de cultivo además ha provocado la aparición de múltiples
complejos para su aislamiento. Es un aerobio casos de tuberculosis multirresistentes (ver más
obligado y su multiplicación es lenta. Tiene nu adelante).
merosos antígenos capaces de despertar una gran
variedad de respuestas inmunes en el hospedero,
492 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
de una respuesta cutánea positiva a la tubercuüna Oculta: es asintomática, con prueba tubercu
(«viraje tuberculínico»), que antes era negativa. línica positiva y alteraciones radiológicas (diag
La tuberculosis primaria consiste en la evolu nosticadas habitualmente cuando se estudia a
ción de esa infección primaria a enfermedad. El los convivientes de un enfermo con baciloscopia
'4»
paso de infección a enfermedad depende de dis positiva).
<(• tintos factores: 1) del bacilo: número y virulencia Manifiesta', puede ser atenuada (con escasos
o capacidad de reproducción, y 2) del hospedero: síntom as), larvada (síntomas inespecíficos) o
I# edad (mayor gravedad en lactantes, adolescentes manifiesta propiamente dicha, cuando los sínto
o adultos jóvenes), factores genéticos (mayor re mas y signos orientan hacia el diagnóstico etio-
sistencia en la raza blanca que en la negra), estado lógico.
de nutrición, alcoholismo, infecciones virales, aso
'i»
ciación con otras enfermedades (diabetes, sida), Tuberculosis posprimaria
tratamientos inmunodepresores y otros. La tuberculosis posprimaria es la que puede so
Los síntom as constitucionales, si están presen brevenir luego de la tuberculosis primaria. Se debe
'li* tes, son similares a los de cualquier infección viral a la reactivación endógena, a partir de un foco pri
autolimitada. Puede aparecer eritem a nudoso, mario, o a la reinfección exógena. La infección
aunque éste no es patognomónico de la tubercu progresa a la etapa de licuefacción y cavitación,
I» losis. En ocasiones, varias semanas después de con el cuadro clínico clásico de la tuberculosis
la infección suele presentarse derrame pleural. pulmonar, también llamado tuberculosis pulmonar
I» En los exámenes de catastro de los contactos de tipo adulto. Se diferencia de la primoinfección
con un caso bacilífero es posible demostrar alte por su mayor tendencia a progresar, por su ubica
# raciones radiológicas. También es posible demos ción frecuente en las parles altas y dorsales de los
trar el com plejo prim ario {complejo de Ghon)^ pulmones, porque se disemina con preferencia por
#
que está constituido por el chancro de inocula vía bronquial o intracanalicular, y por su facili
(i» ción {nódulo de G hon), la linfangitis intermedia dad para producir extensas áreas de caseosis y
y los ganglios regionales. Tanto el foco pulmonar cavidades. Los síntomas como astenia, anorexia,
ítt como el componente ganglionar del complejo pri adinamia y febrícula vespertina constituyen el
mario pueden calcificarse meses o años después. denominado síndrom e de im pregnación bacilar
'ill El compromiso ganglionar es más importante en y son tan frecuentes como los síntomas pulmo
tamaño cuanto menor es la edad del enfermo. nares (tos, expectoración, disnea, hemoptisis o
ilil
La estenosis bronquial es más frecuente en el expectoración hemoptoica). El diagnóstico se
ü bronquio del lóbulo medio, por la presencia de sospecha por el carácter insidioso, gradual y pro
adenopatías que lo rodean. En ocasiones el con gresivo de estas manifestaciones.
a» tenido ganglionar se reblandece y perfora el bron En otras ocasiones el comienzo puede ser agu
quio {fístula gangliobronquial). del foco do y simular un cuadro neumónico o gripal, con
Ifl parenquimatoso o ganglionar puede haber d i hemoptisis o compromiso pleural (neumotórax o
seminaciones hemáticas, linfohemáticas o canali- derrame). El enfermo en general se presenta adel
rd
culares, con progresión en el mismo pulmón, en gazado o francamente caquéctico. La semiología
«H el otro o en otros órganos. Las formas clínicas pulmonar puede ser negativa, sobre todo en las
más graves de la diseminación hemática son la formas iniciales.
ni tuberculosis m iliar y la m eningitis tuberculosa, En la radiografía de tórax el hallazgo de una
ambas potencialmente fatales si no se las trata en opacidad subclavicular y el compromiso total de
iii* forma adecuada. Otras localizaciones graves son un lóbulo o cavidades (la caverna es el cuadro
la osteoarticular y la renal. dominante de la tuberculosis posprimaria) deben
ii«
De acuerdo con estos signos y síntomas, se des hacer sospechar el diagnóstico.
criben las siguientes formas clínicas de la tuber
culosis primaria: Tuberculosis extrapulmonar
• li ínaparente: sólo hay una prueba tuberculínica La tuberculosis extrapulmonar representa al
positiva (en ausencia de vacunación con BCG). rededor del 15% al 20% de todos los casos de
II*
II»
C apítulo 57 • Tuberculosis □ 495
esta enfermedad. Las formas más frecuentes son En la mayoría de los pacientes con pleuresía
la pleural y la ganglionar, seguidas por la genitou tuberculosa la reacción a la tuberculina (PPD) es
rinaria, la osteoariicular, la tuberculosis disemi positiva. Mediante la punción pleural se obtiene
nada o miliar» la meningitis tuberculosa y el com un líquido claro, de color ámbar. El análisis quí
promiso de otras serosas u órganos (pericardio, mico demuestra que es un exudado, o sea que
peritoneo, colon» glándula suprarrenal, piel, etc.). tiene más de 3 g/dL de proteínas (o una relación
En la tuberculosis de los enfermos con sida es proteínas del líquido/proteínas séricas mayor de
com ún hallar formas diseminadas. 0,5), y una LDH mayor de 200 UI/L (o una rela
ción LDH del líquido/LDH de la sangre superior
rt/Jbercü/os/s pleural a 0,6). El número de células en el líquido es va
puede presentarse como una pleuresía serofibri- riable y predominan los linfocitos.
nosa o un empiema. La pleuresía tuberculosa es En las formas agudas hay predominio de neu-
la complicación más frecuente de la tuberculosis trófilos. Como en otras formas de tuberculosis,
posprimaria, en especial en adolescentes y adul el hallazgo de M. tuberculosis confirma el diag
tos jóvenes, aunque puede aparecer a cualquier nóstico etiológico. Sin embargo, la baciloscopia
edad y a veces, como ya ha sido señalado, puede directa del líquido pleural rara vez es positiva; el
ser expresión del complejo primario debido al cultivo sí puede serlo.
chancro de inoculación subpleural. La mayoría Los cultivos de la pleura parietal obtenida por
de los casos son producidos por la ruptura de un punción biopsia con aguja (Cope, Abrams) tie
foco tuberculoso pulmonar subpleural, aunque nen una positividad del 70% al 90% y el estudio
también puede deberse a diseminación linfohe- histopatológico puede mostrar el granuloma tu
mática. En este último caso son frecuentes las berculoso.
localizaciones en el pericardio, el peritoneo o en La respuesta a la terapéutica antituberculosa
varias serosas (poliserositis). En otras ocasiones casi siempre es muy buena. El agregado de corti-
la pleuresía está determinada por un foco conti costeroides favorece la reabsorción del líquido
guo (ganglionar mediastínico o peribronquial u pleural.
óseo: costillas, vértebras). El empiema tuberculoso se debe a la ruptura
Suele presentarse en forma aguda simulando de una cavidad tuberculosa en la cavidad pleural;
una pleuresía paraneumónica bacteriana, con fie puede asociarse una fístula broncopleural. El
bre, compromiso del estado general, tos seca y diagnóstico se sospecha por la gran cantidad de
dolor que puede ser intenso; este último mejora bacilos en el líquido, la expectoración y la pre
a! instalarse el derrame. Otras veces el comienzo sencia de lesiones pulmonares. El empiema tu
es más insidioso pero el dolor pleurítico y la fie berculoso puede curarse con un tratamiento ade
bre están presentes. cuado con fármacos antituberculosos, el que a
El examen físico evidencia un síndrome pleu veces debe ser complementado con cirugía.
ral: movilidad disminuida, matidez, disminución
o ausencia de las vibraciones vocales, ausencia Tuberculosis gangliotiar
de murmullo vesicular, con soplo pleurítico en La mayoría de las adenitis tuberculosas son una
los dos* tiempos respiratorios en el hemitórax manifestación posprimaria de la infección porM.
comprometido y matidez de la columna dorsal. tuberculosis variedad humana, ya sea por exten
La radiografía simple de tórax muestra una sión desde los ganglios intratorácicos o por dise
opacidad que ocupa el seno costofrénico y si la minación linfohemálica. En el cuello recibe el
cantidad de líquido es mayor, puede desplazar el nombre de escrófula. Antes de la pasteurización
mediastino hacia el hemitórax contralateral. Si de la leche de vaca era causada por la infección
el derrame es pequeño, menos de 300 cm^, no por M. bovis. A los síntomas inflamatorios loca
suele verse. La tomografía axial computarizada les se pueden agregar fiebre y síntomas sistémi-
es útil para demostrar pequeños derrames y áreas cos. El diagnóstico requiere la biopsia ganglio
de cavitación pulmonar o adenopatías, que ha nar quirúrgica. Además del estudio anatomopa-
rían pensar en la etiología tuberculosa. tológico (que demuestra granulomas tubercu-
496 □ Tercera porte - Infecciones bacterianas
loídes con caseosis) debe enviarse material en un mete dos o más vértebras adyacentes y sus dis-
tubo estéril para el examen bacteriológico direc eos, con disminución del espacio intervertebral;
to y cultivos. Si el ganglio se halla reblandecido, hay posibilidad de compresión medular y para-
se puede obtener material por punción aspirativa, plejía. La infección puede extenderse a los teji-
o bien si se ha fistulizado, de la secreción que dos blandos vecinos, lo que determina abscesos
mana por la fístula. En dichos especímenes se y fístulas. Los abscesos paraespinales (abscesos
hará el examen directo con la coloración de Ziehl- fríos) siguen la vaina del psoas y llegan a la re
Neelsen y el cultivo en el medio de Lowenstein- gión inguinal. La tuberculosis osteoarticular tam
Jensen. El examen directo suele ser negativo y el bién puede afectar la rodilla y la cadera. Produce
cultivo, en general positivo. La quimioterapia grados variables de artritis (en general monoar*
antituberculosa cura la mayoría de las tuberculo ticular) y osteomielitis.
sis ganglionares cervicales. Estas adenopatías pue La radiología es fundamental para orientar el
den aumentar de tamaño durante o después del tra diagnóstico y seguir la evolución, así como la to-
tamiento, tal vez debido a reacciones de hipersen- mografía computarizada y la resonancia magné
sibilidad. También pueden deberse a infección por tica.
otras micobacterias (micobacterias atípicas) entre Muchas veces el diagnóstico exige la biopsia
ellas M ycobacierium scrofulaceum. quirúrgica de la sinovia! o del hueso afectado, o
del aspirado de abscesos periarticulares o del lí
Tuberculosis genitourinaria quido sinovial, para biopsia y cultivos.
Por lo común es una manifestación tardía de la
infección (5 a 30 años después); por lo tanto, afec Tuberculosis diseminada o miliar
ta a personas mayores. Las lesiones aparecen pri La tuberculosis miliar se debe a una disemina
mero en la corteza renal y desde allí pueden dise ción hemática que se produce en el curso de una
minarse a la pelvis renal, el uréter, la vejiga y los tuberculosis primaria, posprimaria, pulmonar o
genitales. La obstrucción ureteral con hidrone- extrapulmonar, y es de extrema gravedad. El
frosis es la complicación más común. El diagnós nombre miliar se debe a la presencia de lesiones
tico se confirma con el cultivo de la orina. tuberculosas activas, nodulillares («como granos
La tuberculosis genital del hombre puede ser de mijo»), de menos de 2 mm de diámetro, dis
producida por implantación directa por vía cana- tribuidas en todo el organismo. D e no mediar tra
licular, por diseminación linfohemática o por tamiento precoz, la forma aguda es rápidamente
contigüidad. La orquiepididimitis tuberculosa es progresiva y casi siempre fatal. El hígado, el bazo
relativamente frecuente. El diagnóstico se basa y los pulmones son los órganos comprometidos
en la biopsia y el cultivo de la lesión, aunque el con más frecuencia. También puede haber afec
cultivo del semen puede ser positivo en algunos tación de médula ósea, riñón, sistema nervioso
casos. central, glándulas adrenales y peritoneo. Los sín
En la mujer, la localización genital puede afec tomas son inespecíficos: fiebre, debilidad, ano-
tar las trompas, el endometrio y los ovarios; es rexia, adelgazamiento y síntomas respiratorios.
causa frecuente de esterilidad. En forma ocasional la tuberculosis miliar puede
presentarse com o un «síndrome de dificultad res
Tuberculosis osteoariicular piratoria». Las formas crónicas son más insidio
Afecta la epífisis y metáfisis de los huesos lar sas, se presentan por lo general en individuos
gos y más raramente de los cortos. Compromete añosos com o «fiebre de origen desconocido». La
con preferencia la columna, donde se la conoce tuberculosis miliar diseminada no reactiva es
como «mal de Pott». Ataca con frecuencia las últi definida como una condición histológica en don
mas vértebras dorsales y las primeras lumbares. de se observan áreas de necrosis que contienen
Esta espondilitis tuberculosa se produce habitual gran número de bacilos, rodeados por escasa o
mente por diseminación hemática o linfática, pero nula respuesta inflamatoria habitual.
puede ser debida a contigüidad desde la pleura, El diagnóstico de tuberculosis miliar suele ser
el abdomen o los ganglios. En general compro dificultoso. En el fondo de ojo pueden observar
C apítulo 57 - Tuberculosis □ 497
i
se tubérculos coroideos. A veces hay compromi
so meníngeo y aumento de la fosfatasa alcalina.
La certificación etiológica se logra por el reco
nocimiento de M . tuberculosis en los cultivos.
fr 1
La tuberculina puede ser positiva o negativa. Los La reacción tuberculínica es una prueba indi i *
materiales para realizar los cultivos confirma recta, pues mide la respuesta del organismo a la
torios pueden obtenerse de esputo, o de biopsias infección por el bacilo de Koch. La mayoría de
transbronquiales, de médula ósea o hepáticas. las personas infectadas por M. tuberculosis nun
En los enfermos de sida la tuberculosis dise ca desarrollan la enfermedad, el organismo en esta
minada se manifiesta de manera heterogénea,
incluso con formas clínicas no reactivas, y el he-
situación es capaz de controlar la agresión; sólo i
queda una reacción positiva a la tuberculina. Ésta
mocultivo suele ser positivo. puede realizarse con PPD, que es el derivado pro-
teico purificado de un extracto del cultivo de baci
O tra s lo c a liz a c io n e s los tuberculosos o con la tuberculina «vieja de (i
El bacilo de Koch puede comprometer cual Koch» que es un filtrado del cultivo de M. tuber
quier tejido del organismo. culosis.
1. La tuberculosis digestiva es frecuente en la La prueba tuberculínica o intradermorreacción
región colónica y en el peritoneo. Es posible ha de Mantoux consiste en la inyección intradérmica
llar fístulas anales tuberculosas. en la cara externa del antebrazo, de 0,1 mL de
2. La tuberculosis faringolaríngea se presenta PPD. El eritema cutáneo no es sinónimo de posi
a partir de diseminaciones hemáticas o por vía tividad. Debe medirse la induración por palpa ce
canalicular a partir de la tuberculosis pulmonar. ción a las 48 y 72 horas de aplicada (reacción de
3. La pericarditis tuberculosa es una forma hipersensibilidad retardada). Se expresa en milí
exudativa que puede coexistir con el compromi metros y se considera que reacciona a la tuber %
so de otras serosas. Puede calcificar el pericardio culina todo aquel que presenta una induración
y originar una pericarditis constrictiva que obli mínima de 10 mm. La reacción menor de 5 mm se I
ga a la intervención quirúrgica. considera negativa, y entre 6 y 9 mm es dudosa.
4. La localización en la glándula suprarrenal es <í
Una reacción positiva no significa enfermedad,
causa de insuficiencia (enfermedad de Addison).
5. La tuberculosis cutánea (úlcera tuberculosa,
sino que el individuo ha sido infectado en algún
i
momento de su vida con una micobacteria y que
goma tuberculoso, lupus vulgar y tuberculosis se ha sensibilizado a sus antígenos; también pue í
verrugosa) es otra de las localizaciones posibles de ser el resultado de la vacunación con BCG.
de la tuberculosis. En los niños menores de 5 años no vacunados
6. La mcningoencefalitis tuberculosa es consi con BCG, tuberculina positivos, aunque no ten
derada en el capítulo Meningitis. gan signos de enfermedad deben ser tratados
En todos los casos es necesario obtener un diag como tuberculosos activos, ya que se estima que
nóstico de certeza rápido para poder establecer no han tenido tiempo de controlar la infección.
el tratamiento adecuado. Si las pruebas tuberculínicas son negativas, es
probable que el sujeto nunca haya estado en con
tacto con M . tuberculosis^ con lo que la probabi
D IA G N Ó S T IC O
lidad de tenerla es baja. Sin embargo, la reacción
El diagnóstico de tuberculosis se sospecha a tuberculínica también puede hacerse negativa en
partir de la epidemiología y de los síntomas clí forma transitoria o permanente. Esto puede ocu
nicos. Los antecedentes del paciente, un examen rrir en tuberculosis muy agudas o graves, o en pre
físico completo en busca de anormalidades y las sencia de infección por HIV u otras infecciones
pruebas complementarias (radiológicas o de la virales o bacterianas; sarcoidosis, enfermedades
boratorio) permiten confirmar la enfermedad. En proliferativas malignas, desnutrición, uso de
ocasiones, el estudio de personas que pertenecen corticosteroides y fármacos inmunodepresores.
a ciertos grupos de riesgo y de los contactos con La radiografía de tórax es un procedimiento
enfermos tuberculosos, aun asintomáticos, pue de singular importancia en el diagnóstico de la
de llevar al diagnóstico. tuberculosis pulmonar. Muestra imágenes que si
T IT
9\
««
bien son inespecíficas sugieren esta enfermedad. del total de los casos), la especificidad de la baci-
«I Hs bastante típica la afectación de los lóbulos loscopia para diagnosticar tuberculosis es casi
superiores, en especial en los segmentos apical y absoluta. En cuanto a la sensibilidad, la probabi
mi posterior. También puede afectar los segmentos lidad de resultado positivo es del 90% cuando la
apicales de los lóbulos inferiores. La presencia muestra contiene 50.000 bacilos por mL. Esta
^•1
de cavilación, infiltrados o nódulos es caracte cantidad de bacilos se puede hallar en el esputo
rística. El compromiso exclusivo de lóbulos in de pacientes con lesiones cavitarias.
feriores puede verse en pacientes diabéticos, de En cambio, el cultivo, puede delectar un míni
bilitados o inmunodeprimidos, o en mujeres que mo de 10 a 100 bacilos por mL de muestra. Su
estén cursando un embarazo. En los pacientes con implementación puede aumentar el rendimiento
mi sida es probable el desarrollo de formas no típi del diagnóstico bacteriológico hasta en un 20%
cas de tuberculosis pulmonar. o más.
l»U
El estudio bacteriológico de las secreciones o En los medios de cultivo sólidos, como el de
4» muestras de biopsia permite la confirmación de Lówenstein-Jensen, las colonias aparecen rugosas,
la enfermedad. La obtención de expectoración no pigmentadas, forman cordones y demoran 3 a
(espontánea o inducida) es el medio más frecuente 6 semanas en desarrollarse. Es fundamental para
para investigar Af. tuberculosis. Ante la ausencia determinar la resistencia a los fármacos antitu
liU de expectoración se puede recurrir al contenido berculosos (antibiograma) y para ios estudios de ti
gástrico. El examen directo de este material no pificación que permiten diferenciar los bacilos tu
tiene significación clínica, pues en este medio hay berculosos de otras micobacterias, patógenas o no.
Ííl bacilos ácido-alcohol resistentes no patógenos, Se han hecho muchos intentos para mejorar los
sólo tiene valor el cultivo. La fibrobroncoscopia métodos de cultivo de M. tuberculosis, de modo
permite obtener muestras de secreción bronquial que se pueda disponer de los resultados en pla
por aspiración, lavados bronquiales o broncoal- zos más breves. Se han estudiado técnicas que
1) veolares y eventualmente biopsias de la mucosa apuntan a la detección precoz de metabolitos del
bronquial o transbronquiales. desarrollo bacteriano o a la investigación de cier
ti
De acuerdo con la localización de la tubercu tos componentes bacilares, com o el ácido tuber-
losis, se podrá investigar la presencia del agente culoesteárico. Las técnicas más útiles parecen ser
etiológico en el líquido pleural, cefalorraquídeo, las radiométricas, que permiten hacer el diagnós
' articular, orina, punción ganglionar y otros. tico de muchas infecciones bacterianas en pocas
El material de biopsias puede obtenerse con horas y de tuberculosis en un tiempo medio de 9
» agujas o por cirugía y su estudio permite recono a 11 días. Se utiliza el medio de cultivo de Middle-
cer alteraciones histológicas compatibles. brook, enriquecido con ácido palmítico y marca
t
La bacHoscopia es un método de diagnóstico do con carbono 14. Al existir micobacterias vi
•t directo, rápido, sencillo y económico; es funda vas y metabolizar éstas los ácidos grasos, liberan
mental para la detección de la tuberculosis, en el isótopo en forma de CO^ al medio ambiente,
.i especial de las formas pulmonares avanzadas. donde es detectado y cuantificado (ya que sus
Este método demuestra la presencia del bacilo niveles son proporcionales a la cantidad de baci
i; ácido-alcohol resistente (BAAR) con la técnica los en crecimiento). Este mismo procedimiento,
de coloración de Ziehl-Neelsen. En el examen di conocido como B ACTEC, sirve para conocer en
recto los bacilos aparecen como bastoncillos lige pocos días la sensibilidad de la cepa en estudio y
’< ramente curvados, de color rojo sobre fondo azul. hacer el diagnóstico diferencial entre las distin
Debido a que otras micobacterias comparten tas especies micobacterianas.
t la ácido-alcohol resistencia con el complejo M. También se han ensayado técnicas serológicas,
tubercuhsis'bovisy la presencia de BAAR en el con las que se trata de demostrar la presencia de
il
examen microscópico no significa necesariamen anticuerpos específicos en tuberculosis. Desde la
• I te tuberculosis. Sin embargo, cuando la frecuen aparición del enzimoinmunoensayo ELISA, exis
cia de otras micobacterias es muy baja (en la te unanimidad en cuanto a sus ventajas, respecto
í República Argentina constituyen menos del 0,5% de otros métodos de serodiagnóstico, en esta en
1
C apítulo 57 - Tuberculosis □ 499
fermedad. Sin embargo, su aporte es limitado ya plicaciones más importantes son diseminación
que un resultado negativo no descarta la presen hemática, hemoptisis masiva, fibrosis pulmonar,
cia de enfermedad, pero uno positivo es altamente insuficiencia respiratoria, amüoidosis, insuficien*
sugestivo de tuberculosis. La reacción en cade- cia suprarrenal y otras. Una complicación a te
no de la poHmerasa (PCR) ha sido explorada en ner en cuenta cuando quedan cavidades residuales
forma exhaustiva en muestras clínicas, en casos es el aspergifom a, una bola micótica que ocupa
de tuberculosis de diversas localizaciones, con parte de la cavidad y da una imagen radiológica
resultados alentadores. Sin embargo, algunos as conocida como «signo del cascabel». Su mani
pectos técnicos (extracción del ADN de la mues festación clínica prominente es la hemoptisis.
tra, presencia de inhibidores de la polimerasa,
etc.) todavía no han sido resueltos.
P R O N Ó S T IC O
Otra técnica atractiva de la biología molecular
es el RFLP (restrictionfragm eni length polinior- Depende principalmente del diagnóstico tem
pliism) o polimorfismo de la longitud de fragmen prano, razón por la que es muy importante tener
tos del ADN separados por enzimas de restric un alto grado de sospecha. Diagnosticada la tu
ción. Distintas cepas de la misma especie mico- berculosis, el cumplimiento estricto del esque
bacteriana difieren entre sí en la ubicación, den ma terapéutico es otro factor que deberá tenerse
tro del genoma, de algunas secuencias repetitivas en cuenta para mejorar el pronóstico. En todos
de ADN; en la técnica de RFLP esto determina los casos el estado inmunitario previo condicio
patrones de bandas de ADN (fingerprinting o hue na el pronóstico, ya que las diversas inmunode-
llas dactilares) diferentes. Esta variabilidad o ficiencias se asocian con una peor evolución.
polimorfismo es útil para caracterizar cepas en
forma más rápida y sencilla que la tipificación
T R A T A M IE N T O
por fagos, antisueros, o por sensibilidad a antibió
ticos o a quimioterápicos. El RFLP se usa para el El tratamiento de la tuberculosis se basa en la
rastreo de foco en microepidemias hospitalarias administración de fármacos antituberculosos. La
y en Ja detección de multirresistencia a fármacos quimioterapia debe conseguir la muerte rápida y
antituberculosos. total de todos los bacilos presentes en las lesio
nes. Los primeros en ser destruidos deben ser
aquellos que constituyen la población bacilar en
D IA G N Ó STIC O D IF E R E N C IA L **
multiplicación activa, presentes en las paredes
De acuerdo con su localización, se deberá es cavilarlas. Esta población, por su magnitud, con
tablecer el diagnóstico diferencial con diversas tiene mulantes con resistencia a algún fármaco.
afecciones. En la forma pulmonar se realizará con Debido a que la selección de mulantes resisten
micosis, neumonías crónicas, intersticiopatías, tes puede llevar al fracaso terapéutico, por la apa
tumores y otras. Los derrames pleurales o de otras rición de resistencia adquirida, uno de los prime
serosas deberán diferenciarse de derrames pro ros objetivos del tratamiento es evitar su apari
vocados por colagenopatías, tumores, micosis, ción. Esto se logra con la administración simul
infecciones virales y otras infecciones. La menin- tánea de diversos fármacos a los cuales los baci
goencefalitis tuberculosa se deberá diferenciar de los son sensibles (tratamiento asociado).
otras meningoencefalitis (ver el capítulo Menin Otro de los objetivos del tratamiento es la nega-
gitis). tivización rápida de los pacientes. Por ello, una
vez hecho el diagnóstico se prescribirán fármacos
antituberculosos bactericidas.
C O M P LIC A C IO N E S
Ya que la destrucción de los microorganismos
Están asociadas con el tiempo de evolución de no se logra en fornia inmediata, y como el riesgo
la enfermedad, el estado inmunitario del pacien de selección de mulantes resistentes persiste hasta
te, la resistencia a los fármacos de la cepa infec que no se reduce en proporción significativa la
tante y el cumplimiento del tratamiento. Las com población en multiplicación activa, durante los
500 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
(•
<Cl()
Cuadro 57-2, Clasificación de Runyon de las micobacterias atípicas (actualizada).
(líl>
Expuestas a la luz: colonias blancas. Crecen: en 6 a 42 días. Complejo M. avium (M. avium, M. intracellulare),
M. branderi, M. celatum, M. conspicuum, M. gastric, M. genavense, haemophilum, M. heidelbergense, M. lacus,
m M. malmoense, M. paratuberculosis, M. shimoidei, M. triplex, M. ulcerans, M. xenopi.
#
Expuestas a la luz: colonias blancas. Crecen: en 3 a 14 días. M. fortuitum, M. chelonae. M. abscessus, M. ah/ei,
# M. aurum, M. elephantis, M. goodii, M. hassiacum, M. immunogenum, M. margerítense. M. mucogenicum,
M. neoaurum, M. novocastrense, M. peregrínum, M. phlei, M. septicum, M. smegmatis, M. thermoresistible,
üi
M. vaccae, M. wolinskyi.
C apítulo 57 - Tuberculosis □ 503
to la vía digestiva. N o se ha documentado el con la especie sea aislada en cultivo puro, con abun
tagio interhumano. Es común encontrar daño dantes colonias (más de 10), en muestras repeti
pulmonar previo (bronquitis crónica, enfisema das y sin que se asocie la presencia de otras mico-
pulmonar, tuberculosis pulmonar previa, neumo- bacterias (en especial M. tuberculosis). Son im
coniosis, bronquiectasias, cifoescoliosis). Tam portantes las biopsias que muestran granulomas
bién influye la presencia de inmunosupresión. con BAAR o no en el examen directo, pero con
Así, la reducción de mecanismos de defensa físi cultivo positivo. Otro dato de utilidad relativa es
cos o inmunitarios permite la colonización por una mayor reacción de positividad a la tuberculina
micobacterias que normalmente hubieran sido homóloga de la micobacteria aislada, comparada
destruidas o removidas. Si bien M. kansasii, M. con la PPD estándar del bacilo tuberculoso.
xenopi, M. m alm oense y otras MNT han sido En forma ocasional se presentan adenitis por
dcscriptas en los pacientes con sida, no se sabe M. scrofulaceum o M . avium , así como lesiones
por qué el complejo M, avium-intracellulare es el cutáneas por M. m arinum o M . ulcerans. En la
de mayor frecuencia en este grupo de pacientes. actualidad las lesiones diseminadas en los pacien
Con frecuencia la enfermedad por MNT se lo tes con sida, producidas por el com plejo M .
caliza en el pulmón y produce lesiones radioló Qvium-intracelluiare, son un problema grave y
gicas con opacidades y cavidades de evolución tienen elevada mortalidad.
crónica, indistinguibles de las que produce la tu Si el bacilo causante de la enfermedad es M.
berculosis. No hay síntomas ni signos específi kansasii, el tratamiento quimioterápico es sim i
cos. La infección por MNT puede ser asintomá- lar al de la tuberculosis. En cambio, otras MNT,
tica, pero si hay síntomas, son graduales y de en especial las pertenecientes al complejo avium-
aparición subaguda o crónica. Entre ellos se in intracellulare son resistentes a la mayoría de los
cluyen tos, expectoración, hemoptisis, disnea, fármacos antituberculosos. La condición clínica
pérdida de peso, febrícula y sudoración noctur del paciente y el diagnóstico de la enfermedad
na. La sospecha se genera ante pacientes con tos subyacente condicionan el pronóstico.
crónica e imágenes radiológicas compatibles. Se emplean combinaciones de 3 ,4 o 5 fárma
Debe enviarse una muestra de esputo para el exa cos, de acuerdo con el antibiograma, hasta 6 a 12
men directo y por cultivo. Si la tos no es produc meses después de obtenida la negativización.
tiva, se efectúa broncoscopia con lavado bron Los nuevos antimicrobianos (macrólidos y qui-
quial y biopsia. nolonas) han incrementado las opciones terapéu
Para diagnosticar enfermedad por MNT se ne ticas. La cirugía puede estar indicada, en espe
cesitan ciertos requisitos. Es indispensable que cial en lesiones localizadas.
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Carbunco
Ornar J. Palmieri
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En el carbunco orofaríngeo la mucosa presen supura. Algunas de las vesículas que rodean In
ta congestión, edema y áreas necrohemorrágicas, escara se rompen y son reemplazadas por cositas
con linfadenitis y edema cervical. melicéricas. Hay escurrimiento escaso de líqui
En el carbunco intestinai las lesiones asientan do seroso. Es frecuente la linfadenitis regional
con mayor frecuencia en el yeyuno y son menos poco dolorosa. La fiebre está ausente en la ma
comunes en otros tramos del tubo digestivo. Por yoría de los pacientes y la repercusión general es
lo general son múltiples y tienen características poco importante. El 80% de los casos llega a la
similares a la lesión cutánea. La pared intestinal, curación espontánea en pocas semanas. En los
el peritoneo, el mesenterio y el retroperitoneo enfermos graves la fiebre es alta y los síntomas
están intensamente congestivos, con focos necro- generales son muy marcados. Aparece bacte-
hemorrágicos y edema gelatinoso. Hay linfade riemia, que puede llevar al shock séptico y a la
nitis mesentérica necrohemorrágica y ascitis scro- muerte en plazo breve. En general la gravedad está
hemorrágica. en relación inversa con el tamaño de la lesión y en
En la septicem ia carbuncosa, además de las relación directa con la intensidad del edema. Si la
lesiones primitiva, cutáneas, pulmonares, orofa- lesión se localiza en una zona próxima al cuello,
ríngeas o intestinales, hay localizaciones espléni- el edema puede llegar a comprometer la permea
cas, renales, cardíacas y meningoencefálicas. En bilidad de la vía aérea. En la mayoría de los casos
estos órganos la tendencia lesional más común la escara se elimina en la segunda o tercera sema
es la necrohemorragia. Además de todas las le na de enfermedad y en su lugar queda una úlcera.
siones descriptas, pueden ser causa de muerte los Ésta cicatriza en 3 a 8 semanas más, lo cual de
desequilibrios hidroelectrolíticos y la coagulación pende de su tamaño y profundidad.
intravascular diseminada.
Carbunco pulmonar
El carbunco pulmonar, carbunco por inhalación
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
o enfermedad de los cardadores de lana es un
Más de 95% de los casos de carbunco en el ser padecimiento muy poco frecuente y de difícil
humano son cutáneos y menos de 5% son pulmo diagnóstico. Progresa con rapidez, con fiebre ele
nares. La localización primitiva en el aparato di vada, tos con expectoración abundante, a veces
gestivo, por lo general intestinal, es rara, como sanguinolenta, donde se hallan bacilos en abun
también lo es la forma orofaríngea. Otras formas dancia. Se acompaña además con disnea, estridor,
clínicas, como la meningoencefalitis carbuncosa, hipoxia e hipotensión; por lo general la muerte
son secundarias a septicemia por anthracis. llega en 1 a 3 días. Un aspecto radiológico carac
terístico es el ensancham iento sim étrico del
Carbunco cutáneo mediastino. También pueden observarse zonas de
La lesión se localiza principalmente en zonas condensación unilateral o bilateral, con derrame
descubiertas de la piel, como la cabeza, el cuello pleural o sin él.
y los miembros superiores. En general es única,
pero pueden ser varias. Uno a tres días después Carbunco orofaríngeo
de la inoculación de las esporas de B. anthracis Esta forma clínica también es muy poco fre
en la piel, aparece una mácula congestiva y pruri- cuente y difícil de diagnosticar. La lesión prima
ginosa. En 2 o 3 días la lesión se hace papulosa y ria casi siempre asienta en las amígdalas. La mu
luego vesiculosa. La vesícula es de tamaño va cosa está intensamente congestiva, edematosa y
riable, 3 a 15 mm, y tiene un contenido seroso o presenta áreas necrohemorrágicas. Tiene un co
serohemático. Entre el tercero y el quinto día la mienzo brusco, con temperatura elevada, 39°C a
lesión aparece constituida por una escara central 40®C, odinofagia, disfagia y linfadenopatías re
negra, deprimida, rodeada por una corona de ve gionales dolorosas. El edema de las fauces y el
sículas y una zona de edema duro característico, cuello puede provocar una dificultad respiratoria
que puede ir en aumento y llegar a ser muy in grave. En general esta localización también evo
tenso. La lesión es indolora o poco dolorosa y no luciona a la septicemia carbuncosa y a la muerte.
508 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
Septicemia carbuncosa
COMPLICACIONES
A partir de las lesiones descriptas precedente
mente, la infección puede generalizarse y deter Es posible la sobreinfección bacteriana de las dis
minar metástasis múltiples. Una de ellas, de sin tintas localizaciones del carbunco. Otras complica
gular gravedad, es la meningoencefalitis carbun ciones importantes son la obstrucción de la vía aé
cosa. Los casos no tratados son siempre morta rea y el síndrome mediastínico, ambos provoca
les. dos por el edema intenso, y las hemorragias causa
das por la coagulación intravascular diseminada.
DIAGNÓSTICO
PRONÓSTICO
En la forma cutánea, el aspecto clínico de la
lesión es sugestivo y por lo general los antece El carbunco cutáneo se cura en forma espon
dentes epidem iológicos no faltan. La demostra tánea en el 80% de los casos; la mortalidad es
ción de B. anthracis en las lesiones es posible si muy baja si es tratado en forma adecuada con
el enfermo no ha recibido antibióticos. Se reali antibióticos. En cambio, en las formas pulmonar^
zará el examen directo con coloración de Gram y orofaríngea e intestinal, y en la septicem ia car-
el cultivo del líquido de las vesículas. Se practi buncosa, la mortalidad es muy alta aun con tra
carán hemocultivos, que en las formas septicé- tamiento correcto.
micas son positivos. En la meningoencefalitis
carbuncosa el LCR es hemorrágico y en él se
TRATAMIENTO
demuestra fácilmente el microorganismo, por el
examen directo y los cultivos. La penicilina G es muy eficaz. B. anthracis
El diagnóstico clínico de las formas pulmonar, desaparece de la lesión cutánea 5 horas después
orofaríngea e intestinal es muy difícil. La epide de la aplicación parenteral de penicilina. La do
miología es un elemento valioso para orientar el sis para \z. fo rm a cutánea es de 2.000.000 de uni
diagnóstico. dades cada 6 horas por vía intravenosa, durante
3 o 4 días, hasta la disminución del edema, luego
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL se continúa con penicilina oral (penicilina V
1.500.000 UI cada 6 horas) hasta totalizar 10 días
La fo rm a cutánea incluye el forúnculo, la ecii- de tratamiento. En los individuos alérgicos a la
ma, la erisipela y la picadura de insectos. penicilina puede utilizarse eritromicina, tetra-
La form a pulm onar debe diferenciarse de en ciclina o cloranfenicol. Los antibióticos no ev i
fermedades respiratorias virales o bacterianas gra tan la formación de la escara. Las lesiones cutá
ves, como también de la mediastinitis bacteriana, neas se tratan con curas locales y se cubren con
producida por ruptura espontánea o provocada del vendajes. Estos serán incinerados de inmediato
esófago. luego de ser retirados. Está contraindicada la ci
En \difo rm a orofaríngea el diagnóstico diferen rugía local. En las formas pulmonar, orofaríngea
cial incluye el flemón del piso de la boca, la difte e intestinal así como en la septicemia carbuncosa,
ria, la angina por asociación fusoespirilar y el fle la dosis de penicilina es de 24.000.000 de unida
món laterofaríngeo. des diarias por vía intravenosa.
C apítulo 58 - Carbunco ü 509
\
•
el pelo de los animales, y mejorar las condicio
f profilaxis
nes de trabajo de las personas que los manipu
Los cadáveres de animales muertos por car- lan. Los animales susceptibles se inmunizan con
* bunco se incinerarán en el mismo lugar donde vacuna esporulada avirulenta de Sterne, que es
^ mueren o se enterrarán a 2 metros de profundi la indicada por su actividad inmunogénica ade
dad cubiertos con cal. N o hay que descuartizar cuada y su inocuidad. Hay vacunas para los se
los ni utilizar su cuero. Hay que recordar que la res humanos expuestos ai riesgo de contraer la
esporulación de los bacilos eliminados con las enfermedad, las cuales se preparan con el sobre
secreciones del animal se produce únicamente nadante de cultivos de cepas no capsuladas
en contacto con el aire. Para evitar el carbunco de B. anthracis precipitado con hidróxido de alu
por inhalación hay que descontaminar la lana y minio.
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59
Bmcelosis
Ornar J. Palmieri
Jorge Wallach
Las distintas especies del género Brucella tie órganos, como el hígado, el bazo, la médula ósea,
nen hospederos preferenciales, aunque no existe los ganglios linfáticos y los riñones, ricos en cé
especificidad hospedero-parásito. Los reservorios lulas del sistema reticuloendotelial.
naturales de importancia para la transmisión de Por la característica de sobrevivir y multipli
la enfermedad al hombre son el ganado vacuno carse en el interior de las células fagocíticas, se
{B. abortus)y el caprino, el ovino {B. me¡itensis)y consideran patógenos intracelulares facultativos.
el porcino (B. suis) y el perro {B. canis). Aún se desconocen los factores que favorecen la
Las fuentes de infección humana varían en re viabilidad intracelular de Brucella.
lación con las áreas enzoóticas, las ocupaciones, La virulencia de las distintas especies es varia
los hábitos alimentarios y los reservorios natura ble y provoca diferentes tipos de reacciones
les. Las vías de infección más comunes son el hísticas en el hospedero. B. m elitensis, que es la
contacto directo con animales infectados, la in más virulenta, resiste la actividad bactericida del
gestión de alimentos contaminados (carnes o lác suero y la destrucción por parte de los polimor
teos) y la inhalación de aerosoles en ambientes fonucleares. En animales de experimentación
contaminados. produce mayor reacción exudativa, con la forma
ción de abscesos. B. abortus es menos virulenta,
con menor capacidad invasora, es destruida en
PA TO G E N IA
parte por la actividad bactericida del suero hu
La forma de transmisión y las puertas de entra mano normal y en animales de experimentación
da del agente etiológico de la brucelosis están en produce granulomas, capaces de evolucionar a
relación con las áreas enzoóticas, con los grupos la fíbrosis y calcificación. La virulencia de B. suis
ocupacionales expuestos y con los hábitos ali se considera intermedia; las lesiones hísticas tien
mentarios e higiénicos de la población. den a la caseosis y la supuración. B. canis es sen
La vía cutánea, mucocutánea o mucosa (con- sible a la actividad bactericida del suero y su ac
juntival y otras) es frecuente en el personal de ción patógena se limita a un pequeño número de
frigoríficos, mataderos, trabajadores agropecua hospederos.
rios y médicos veterinarios. La vía respiratoria, a La infección induce la respuesta inmune hu
través de aerosoles, también afecta a trabajado moral y celular. Su magnitud y duración está de
res de frigoríficos y es la más común en el perso terminada por varios factores: la virulencia de la
nal de laboratorios que manipulan Brucella. cepa infectante, el tamaño del inóculo, y la edad,
La infección por vía digestiva se debe a la in el sexo y el estado inmune del hospedero. La res
gestión de leche o derivados no pasteurizados. puesta humoral se caracteriza por un aumento
Se han descripto brotes de infección en familias inicial de anticuerpos IgM, que alcanzan su máxi
o pequeños grupos poblacionales, causados por mo nivel al tercer mes y luego declinan en forma
el consumo de productos lácteos no hervidos ni gradual hasta alcanzar títulos bajos que perduran
pasteurizados. Las carnes saladas o ahumadas son durante años. El aumento de anticuerpos IgG se
una fuente potencial de in fección , dado que produce luego de la segunda semana de infec
B rucella es resistente a estos procedimientos. El ción y llega a niveles máximos durante el segun
contagio interhumano es excepcional; se docu do mes. La persistencia de títulos elevados o su
mentaron casos de infección por transfusión de aumento, luego de haber declinado, indican in
sangre, por transmisión vertical de la madre al fección persistente o recaída. Los anticuerpos
feto y por contacto sexual. Debe tenerse en cuenta intervienen en la opsonización de las bacterias,
como fuente posible de infección el trasplante de favorecen la fagocitosis y al parecer desempe
órganos. Cuando las bacterias pasan la barrera ñan cierto papel protector en la reinfección.
mucosa o cutánea, son fagocitadas por los leuco En forma simultánea a la activación de los lin-
citos polimorfonucleares y mononucleares, ingre focitos B, se activan los linfocitos T. La libera
san en el sistema linfático y se multiplican en los ción de linfocinas, principalmente interleucina 2,
ganglios regionales. Una vez que sobrepasan esta interferón gamma y factor de necrosis tumoral,
barrera se diseminan por vía hemática a distintos aumentan la respuesta inmune celular y la acti-
Capi7«/o 5P - Brucelosis □ 513
vación de macrófagos. Las personas y animales La fiebre suele acompañarse con dolor lumbar
infectados desarrollan una hipersensibilidad de y dorsal, astenia, disminución del apetito y adel
tipo retardado a los antígenos de Brucella. gazamiento. Otros hallazgos sem iológicos obser
vables en el curso de la brucelosis aguda son tos
seca o productiva, dolor abdominal, constipación
anatomía patológica
o diarrea, temblores, parestesias, adenomegalias
Los tejidos reaccionan frente a Brucella con la cervicales y axilares, hepatoesplenom egalia,
formación de granulomas, constituidos por célu exantema morbiliforme, papulonodular o erite
las epitelioides, células gigantes, linfocitos y cé ma nudoso. La presencia de púrpura, secundaria
lulas plasmáticas. Algunos de estos granulomas a trombocitopenia e ictericia, es una manifesta
presentan necrosis central y contienen numero ción de formas graves con compromiso hepato-
sos neutrófilos, otros adoptan un aspecto sem e celular y coagulación intravascular diseminada.
jante a las lesiones de la sarcoidosis y curan con Las formas septicémicas graves son excepcio
fibrosis y frecuentemente con calcificación. La nales. Las formas recurrentes se deben en gene
infiltración mononuclear difusa y los granulomas ral a recaídas por com plicaciones supurativas
pueden ser la causa de hepatoesplenomegalia. Las focales no resueltas o a reinfección.
lesiones localizadas y destructivas se asemejan a La brucelosis puede localizarse en uno o más
abscesos o infartos focales. En ocasiones la ra órganos o sistemas, en los que provoca alteracio
diología detecta lesiones calcificadas en el bazo. nes anatómicas y funcionales. La frecuencia con
que se presentan estas localizaciones es variable
y se relaciona en forma directa con demora en
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
llegar al diagnóstico y en iniciar el tratamiento
La brucelosis puede comenzar como una en específico.
fermedad febril aguda o en forma insidiosa. El Las localizaciones osteoarticulares son las más
espectro clínico es muy amplio y comprende des- frecuentes; las más comunes se observan en la
■ de formas asintomáticas hasta graves. El extraor columna vertebral, las articulaciones sacroilíacas
dinario polimorfismo clínico pone al médico ante y las coxofemorales, aunque puede comprome
I un verdadero desafío diagnóstico, para el que terse cualquier parte del esqueleto. Se manifies
i. debe valerse de una anamnesis prolija y un exa- tan por artralgias, artritis, osteomielitis, espon
’ men físico exhaustivo. dilitis, tenosinovitis y bursitis.
La sacroileítis es una de las localizaciones es
Brucelosis aguda queléticas más frecuentes, en especial en sujetos
En las formas sintomáticas el cuadro clínico jóvenes. El curso es agudo, y los signos y sínto
comienza luego de un período de incubación va mas dominantes son el dolor en la región glútea
riable de una a tres semanas, si bien se han comu y la fiebre. En pacientes adultos y ancianos el
nicado algunos de mayor duración. En alrededor diagnóstico de sacroileítis puede estar enmasca
de un tercio de los pacientes el comienzo es agu rado por la asociación con espondilitis de la co
do, en el resto de los casos los síntomas se incre lumna lumbar.
mentan en una o dos semanas. El compromiso de las articulaciones grandes y
El inicio de las formas leves, no complicadas, pequeñas de los miembros ocupa el segundo o ter
suele asemejarse a un cuadro gripal, pero se di- cer lugar en frecuencia, principalmente las coxo-
¡ ferencia de éste porque los síntomas no remiten fcmorales y las rodillas. El curso clínico de la ar
en una o dos semanas. La fiebre, mayor de 38®C, tritis es agudo o subagudo y hay que diferenciarlo
está presente en la mayoría de los pacientes. El de la inflamación de los tejidos periarticulares
patrón clásico de fiebre ondulante, que no es co (bursitis y tenosinovitis), que se caracteriza por su
mún, puede observarse en etapas tardías de la localización errática. La gran mayoría de pacien
evolución natural de la enfermedad. El síndrome tes con brucelosis sólo refiere artralgias.
febril se completa con escalofríos, sudoración El análisis del líquido articular revela aumento
profusa, cefalea y artromialgias. de la celularidad con predominio linfocltario y a
514 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
veces, utilizando medios de cultivo adecuados, llamados aneurismas micóticos). El LCR es cla
se aísla Brucella. ro u opalescente, con pleocitosis linfocitaria y re
También suele observarse un cuadro de artritis cuentos que van de 20 a 300 células/mm^ y po
reactiva por complejos inmunes, que no produce cas veces superan las l .000 células/mm^. Las pro
destrucción de los tejidos articulares. teínas están aumentadas y la glucosa disminuida
La espondilitis, que es la localización esque o normal.
lética más grave de la brucelosis, afecta más a Si se utilizan los medios de cultivo adecuados,
menudo a personas de sexo masculino y edad es posible m s h r B rucella del LCR. Las pruebas
avanzada. La localización más común es la co de aglutinación específicas en el LCR pueden ser
0 lumna lumbar, pero pueden estar afectados otros negativas o positivas con títulos bajos.
segm entos. Se manifiesta por dolor intenso e En la mayoría de los casos el compromiso
m impotencia funcional, y en muchos casos por medular y radicular se produce por efecto mecá
compresión radicular. La ausencia de fiebre y sín nico, secundario a espondilitis o sacroileítís, con
0
tomas generales no descarta la enfermedad. En la formación de abscesos epidurales, aracnoiditis
u algunos casos los pacientes con espondilitis tie o estrechamiento de los agujeros de conjunción.
nen extensión paravertebral, con la formación de Las localizaciones cardiovasculares son poco
o abscesos que requieren drenaje quirúrgico. La frecuentes pero de alta mortalidad. La endocar
compresión medular es poco común; se ha ob ditis por Brucella es muy rara, pero en áreas en
servado en pacientes con localización cervical o démicas, con alta prevalencia de B. m elitensis, la
dorsal y cuando se produce, requiere la inmedia infección endocárdica es menos infrecuente. Es
ta liberación quirúrgica de la médula espinal. más común en personas de edad media y sexo
<í» Las alteraciones radiológicas tardan 2 a 3 se masculino; en primer lugar afecta la válvula aór
manas en aparecer, las más precoces son el estre tica y después la mitral. En la mayoría de los ca
tti chamiento del espacio intervertebral y la espon sos el curso es subagudo, lo que muchas veces
dilitis anterior o epifisitis vertebral. Éstas se ob retrasa el diagnóstico, pero puede ser agudo, con
servan mejor en la incidencia lateral, como una insuficiencia cardíaca grave por disfunción o ro
muesca o desgaste del ángulo anterosuperior del tura del aparato valvular. Hay formación de gran
cuerpo vertebral (signo de Pedro Pons). des vegetaciones con embolizaciones frecuentes;
De gran utilidad para el diagnóstico de esta lo la extensión perivalvular da origen a abscesos
calización son la TC y la RM. miocárdicos.
La centellografía con Ga 67 es positiva en la Esta etiología debe plantearse en pacientes con
mayoría de los pacientes con compromiso esque diagnóstico de endocarditis infecciosa y hemocul-
i» lético, aunque la captación del radiotrazador es tivos negativos en los medios habituales. Asimis
menor que en las espondilitis piógenas. mo, se considerará la posibilidad de infección
f íi
La localización en el sistem a nervioso no es fre endocárdica en todo paciente con brucelosis y
cuente. Los síndromes clínicos más comunes son hemocultivos persistentemente positivos en los
meningitis, encefalitis, mielitis, radiculitis, neuri medios adecuados para Brucella a pesar de ha
i» tis o combinaciones de ellos. El curso clínico pue ber recibido tratamiento con antimicrobianos.
de ser agudo, subagudo o crónico y presentarse El alto porcentaje de fallas de la terapéutica
« I en etapas tempranas o tardías de la enfermedad. antibiótica obliga a plantear siempre la posibili
La forma más frecuente de afectación es la dad quirúrgica como parte del tratamiento de la
S f
meningoencefalitis. Pueden observarse parálisis endocarditis por Brucella.
0 de uno o más nervios craneales, principalmente Otros trastornos cardiovasculares de la bruce
los pares III, VI y VII. En menos de la mitad de losis son la miocarditis, la pericarditis y la aortitis.
« los casos hay rigidez de nuca. La localización hepática es frecuente. Se obser
Los episodios meningovasculares, que son ra van grados leves o moderados de citólisis hepato-
0 ros, se manifiestan como accidentes isquémicos citaria, que se manifiesta por aumento de la fosfa-
transitorios, vasculitis focal o hemorragias secun tasa alcalina y de las transaminasas al doble o
0 triple de sus valores normales. La bilirrubinemia
darias a la rotura de aneurismas infecciosos (mal
0
0
0
Capiiri//o 5P - Brucelosis □ 515
suele ser normal. El hallazgo clínico de hepato- Una complicación aún controversial es el abor
niegalia no siempre se relaciona con los resulta to en seres humanos provocado por B ntcella. Si
dos de las pruebas funcionales. El cuadro histoló bien el microorganismo se aisló del tejido pla-
gico es el de una hepatitis intersticial difusa o gra- centario y del líquido amniótico, las mujeres con
nuíomatosa. La formación de granulomas y la ten brucelosis tienen bajo riesgo de aborto. Esto pue
dencia a la supuración o caseosis es más frecuente de deberse a la escasa concentración de eritritol
en infecciones por B. suis y en segundo lugar por en el tejido placentario humano, a diferencia de
B. abortus, mientras que B. m elitensis causa una lo que ocurre en bovinos, ovinos, caprinos y por
hepatitis difusa y granulomas más pequeños. cinos, que contienen altas concentraciones de este
La ictericia y la insuficiencia hepática son ra azúcar-alcohol que favorece el desarrollo de Bru-
ras y en general forman parte de cuadros sépti celia.
cos graves con falla de múltiples órganos. La La infección renal se manifiesta como pielo-
cirrosis con ascitis, abscesos hepáticos o colecis nefritis o nefritis intersticial, con proteinuria,
titis son infrecuentes en la actualidad, pero de hematuria o piuría. La pre.sencia de granulomas
ben tenerse en cuenta. caseososupurativos, con extensión perirrenal y
La localización esplénica muestra la predilec retroperitoneal, es más frecuente en infecciones
ción de B ntcella por el sistema reticulohistioci- por B. suis.
lario, lo que determina que el bazo sea altamente Las localizaciones respiratorias son raras. La
vulnerable a la infección. La esplenomegalia ho infección broncopulmonar por B ntcella es difí
mogénea es común en los casos agudos, menos cil de documentar debido a que el aislamiento a
frecuente es la formación de abscesos, solitarios partir del esputo o el lavado broncoalveolar no
o múltiples, que pueden calcificarse. Las calcifi es común. N o obstante, hay que recordar que la
caciones esplénicas tienen un tamaño mayor de vía aérea es una puerta de entrada de la infec
un centímetro y una imagen central densa, ro ción, por inhalación de aerosoles contaminados,
deada por láminas concéntricas con un halo hipo- por lo que puede constituir el foco primario e in
denso que le confieren el aspecto de escarapela. clu so estar com prom etida durante la etapa
La presencia de imágenes calcificadas en el bazo bacteriémica de la enfermedad.
obliga a plantear el diagnóstico diferencial con En la radiografía de tórax pueden observarse
tuberculosis e histoplasmosis. En estas dos últi opacidades de tipo alveolar, segmentario o lobu
mas también pueden observarse calcificaciones lar, nódulos únicos o múltiples, adenomegalias
esplénicas, pero en general no superan un centí biliares, imágenes cavitadas y derrame pleural.
metro de diámetro, son homogéneas, múltiples y En pacientes con infección crónica por B. suis se
excepcionalmente de aspecto laminar. han descripto nódulos únicos o múltiples que
En los casos de infección crónica el bazo pue plantean el diagnóstico diferencial con carcino
de adquirir dimensiones importantes y aumentar ma primario o metastásico.
su actividad hemocaterética lo cual puede pro Las manifestaciones hemáticas más salientes
ducir pancitopenia. de la brucelosis aguda son leucopenia y linfo-
La esplenectomía o el drenaje quirúrgico de citosis relativa que pueden persistir por tiempo
ben plantearse en los pacientes con brucelosis e prolongado. En algunos casos hay troniboci-
hiperesplenismo o con la presencia de abscesos topenia moderada. También puede observarse
que no respondan al tratamiento antibiótico. anemia e hiperactividad macrofágica en la mé
Las localizaciones urogenitales se observan po dula ósea, que puede llegar a constituir un sín
cas veces. La más frecuente es la orquiepidi- drome hemocitofágico.
dimitis unilateral. Cuando se produce la reacción
inflamatoria de la túnica vaginal, la manifesta Brucelosis crónica
ción clínica más llamativa es el hidrocele. Entre los distintos autores no hay consenso
La orquiepididimitis puede evolucionar a la acerca de la definición de brucelosis crónica, un
atrofia testicular, que si es bilateral es causa de término que parece estar cayendo es desuso por
esterilidad. La infección prostática es muy rara. su escasa utilidad.
516 D Tercera parte - Infecciones bacterianas
La prueba de aglutinación en tubo con 2-mer- gicas positivas por los m étodos que detectan
captoeianol permite medir la actividad de IgG, anticuerpos contra los lipopolisacáridos, este mé
mediante la destrucción de IgM. Con esta técni todo permite diferenciar infecciones activas de
ca, los títulos de 1/50 o mayores son indicadores inactivas.
de infección activa, pero los resultados negati- La detección de anticuerpos antiproteína cito
vos no la descartan ya que al comienzo de la in plasmática tiene mayor especificidad, dado que
fección los anticuerpos son del tipo IgM. en los estudios preliminares no se demostraron
La prueba de Coombs antibruccla detecta anti reacciones cruzadas en infecciones por otras bac
cuerpos no aglutinantes. Es útil cuando la enfer terias gramnegativas.
medad lleva varios meses de evolución, período El card test o prueba de la tarjeta con rosa de
en el que disminuyen los anticuerpos aglutinan Bengala es casi tan sensible com o la aglutina
tes. Es una prueba complementaria y los títulos ción en tubo; es de ejecución sencilla y el resul
son iguales o superiores a los de aglutinación en tado se obtiene con rapidez.
tubo o en placa. Ambos resultados negativos des Hace poco se desarrolló una técnica de reac
cartan casi totalmente la infección. ción en cadena de la polimerasa (PCR), de alta
La introducción del enzim oinm unoensayo sensibilidad y especificidad.
(ELISA), para la detección y cuantificación de
las distintas ciases de inmunoglobulinas, permi
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
te estudiar las variaciones cuantitativas y cuali
tativas de los anticuerpos durante la evolución Como ya se expresó, el amplio espectro de ma
de la enfermedad. Las IgM aparecen en forma nifestaciones clínicas de la brucelosis hace que
precoz (primera semana), a lo que sigue un au el diagnóstico diferencial abarque numerosas en
mento de las IgG e IgA que se mantienen eleva fermedades. En las formas agudas, si no se evi
das por períodos prolongados (dos o tres años). dencian localizaciones deberá plantearse con
Cuando se produce una recaída aumentan las IgG otras enfermedades infecciosas y no infecciosas
y en menor grado las IgA, pero las IgM no se de manifestaciones clínicas similares, como fie
modifican. bre tifoidea, leptospirosis, mononucleosis infec
La mayor sensibilidad del ELISA ha desplaza ciosa, infección por citomegalovirus, toxoplas-
do en algunos lugares la prueba de aglutinación
en tubo con 2-mercaptoetanol para la cuantifi-
mosis, tuberculosis, hepatitis, paludismo, lupus
eritematoso sistém ico y otras. También se tendrá
c
cación de inmunoglobulinas. en cuenta el diagnóstico de brucelosis en todo
La prueba de fijación del complemento es com paciente con síndrome febril prolongado o fiebre
pleja y sujeta a error, debido a los múltiples pa de origen desconocido. En las formas subagudas I
sos y reactivos que se deben emplear. Los títulos o cuando se establecen localizaciones en distin
de 1/10 o mayores se consideran positivos. El au tos órganos o sistemas, el diagnóstico diferencial
mento del título en muestras de suero seriadas, incluye tuberculosis, leishmaniosis visceral, osteo
obtenidas con un intervalo de dos semanas, tam mielitis crónica, enfermedades linfoproliferativas
bién tiene valor diagnóstico. o mieloproliferativas, y otras neoplasias.
Todas las pruebas anteriores se basan en la de
tección de anticuerpos contra el lipopolisacárido
COMPLICACIONES
bacteriano, los cuales pueden permanecer eleva
dos en pacientes que se recuperaron de la enfer Las localizaciones del proceso infeccioso en
medad o en personas expuestas en forma reitera determinados órganos o aparatos pueden generar
da a antígenos de Brucella. complicaciones graves, como ruptura de un aneu
Un grupo de investigadores argentinos utili risma infeccioso, compresión medular produci
zó la técnica de ELISA para la detección de an da por un absceso paravertebral o aplastamiento
ticuerpos contra una proteína citoplasmática de vertebral, tromboembolismo o insuficiencia car
18 kD, específica del género Brucella. En indi díaca provocada por una localización endocár-
viduos asintomáticos y con reacciones seroló- dica. Esta endocarditis es en general valvular,
9
m 518 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
m
miíral o aórtica, con asiento en válvulas sanas o Al iniciar el tratamiento antibiótico debe tener
• previamente alteradas por malformaciones o fie se en cuenta que en alrededor del 25% de los pa
cientes se producirá un aumento de la fiebre y de
bre reumática.
(i los síntomas generales. Esta reacción tipo Herx-
heimer, denominada efecto Spink, se debe a la
PRONÓSTICO
lisis bacteriana masiva y en algunos casos requie
La brucelosis tiene en general buen pronósti re tratamiento con corticosteroides.
c»
co. En la mayoría de los casos es una enferme La combinación de rifampicina con SMX/TMP
dad autolimitada que puede curarse en 3 o 4 se tiene buena actividad bactericida in vitro (CIM90
manas. El tratamiento con antimicrobianos hace = 1 ng/m L y 6,5 P-g/mL, respectivamente). Estos
i» que la evolución sea más breve y menos sintomá fármacos alcanzan niveles adecuados en el SNC,
tica. El pronóstico es más grave en las localiza lo que los hace de primera elección para el trata
iW miento de la neurobrucelosis.
ciones endocárdicas y neurológicas.
La infección endocárdica es una de las locali
zaciones más graves de la brucelosis. Debido al
TRATAMIENTO
alto porcentaje de recaídas cuando se utiliza el
Se lo iniciará de acuerdo con el diagnóstico clí esquema convencional de tetraciclinas y rifam
nico y serológico. Los estudios bacteriológicos picina, se recomienda el uso combinado de 3 o 4
no deben condicionar el inicio del tratamiento, antibióticos: tetraciclina, estreptomicina o genta-
iíit
porque sus resultados demoran y son variables. micina, y rifampicina con SMX/TMP.
iS á La antibioticoterapia acorta la evolución de la En la mayoría de los casos se requiere el re
enfermedad, pero ningún agente por sí solo es efec emplazo valvular por válvulas bioprotésicas. La
m tivo. Se aconseja asociar dos fármacos, de efecto intervención quirúrgica temprana está indicada
sinérgico o aditivo, que tengan actividad bacte en pacientes con insuficiencia cardíaca progre
# ricida in vitro y penetración celular adecuada. siva, vegetaciones de gran tamaño e infección
En 1986 el Comité de Expertos en Brucelosis no controlada. En todos los casos hay que des
#
de la OMS estableció como régimen de elección cartar la presencia de abscesos m iocárdicos, o
m la asociación de doxiciclina, 200 mg/día más de otras localizaciones, que requieran drenaje
rifampicina, 600 a 900 mg/dfa, por vía oral y en quirúrgico.
# dosis única durante seis semanas. La brucelosis durante el embarazo puede pro
La combinación de estreptomicina y doxici vocar infección del feto por vía transplacentaria,
clina inhibe en forma sinérgica el crecimiento de que aunque es poco frecuente suele causar abor
B rucella. El tratamiento con estreptom icina, to sobre todo cuando se produce durante el pri
<n
1 g/día por vía intramuscular durante las dos prime mero o el segundo trimestre de la gestación. En
€» ras semanas asociado con doxiciclina, 200 mg/día estos casos el tratamiento de elección es la rifam
por vía oral durante 45 días disminuye la inciden picina en dosis de 900 mg una vez por día duran
m cia de recaídas y la aparición de complicaciones. te 45 días. Las tetraciclinas están contraindicadas
La estreptomicina se puede reemplazar por gen- durante el embarazo.
m tamicina administrada durante los primeros 7 días.
La asociación SMX/TMP también es efectiva,
m PROFILAXIS
pero se asocia con un porcentaje de recaídas ma
f t yor cuando se administra sola. Se recomiendan 3 La disminución de la incidencia de brucelosis
comprimidos por día de SMX 800 mg/TMP 160 mg está directamente relacionada con el control de
m durante las dos primeras semanas, luego 2 com los reservorios animales.
primidos por día durante tres a cinco meses. No En los países en vías de desarrollo las campa
# es conveniente su administración como agente ñas de control en áreas enzoóticas no siempre se
único, debido al alto número de recaídas, sino en llevan a cabo con los recursos humanos y mate
i*
combinación con otros fármacos útiles en situa riales necesarios y es frecuente su interrupción
41 ciones especiales. por razones presupuestarias. Las medidas de pre
Ü
C apítulo 59 - Brucelosis O 519
Bibliografía — .....................
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V 1
á / l i : . . ‘. :
Listeriosis
*-
Gerardo E. Laube
Ornar J. Palmieri
c
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t
DEFINICION nismo produce una intensa monocitosis en cone
jos, aunque en la infección humana la monocitosis 4
La listeriosis es una zoonosis provocada por es infrecuente.
Listeria monocytógenes. Está muy difundida en
tre los animales y puede contagiarse al ser hu>
mano» lo que da lugar a diferentes cuadros clíni EPIDEMIOLOGÍA t
cos: síndromes febriles, infecciones perinatales, La listeriosis tiene una distribución mundial y t
meningitis, abortos repetidos y otros. afecta a gran variedad de animales. El microor
ganismo causal también se encuentra en la tie C
Su mayor incidencia se registra en recién naci durante el último trimestre. Muchas veces los sín
• dos y en individuos de más de 50 años. Muchos tomas son poco reveladores, pero en algunas oca-¡
de los brotes epidémicos se han comunicado en siones el cuadro infeccioso puede precipitar un
los meses de verano. Alrededor de un 50% de los parto pretérmino. En estas circunstancias, el líqui
m
C apítulo 60 - Listeriosis □ 523
Infecciones focales
PRONÓSTICO
Éstas pueden ser la expresión local de la enfer
medad generalizada, como ocurre en la granu- Depende en general de cada cuadro clínico y
lomatosis infantiséptica, aunque también son el del estado inmunitario del paciente. La mortali
resultado de la inoculación directa, com o en el dad es más elevada en los ca.sos de granuloma-
caso de la conjuntivitis. También se comunica tosis infantiséptica y de meningoencefalitis. Sin
ron infecciones de los ganglios cervicales, uveítis, embargo, si la glucorraquia es normal, el pronós
endocarditis bacteriana, artritis y peritonitis. tico es bueno. Como en otras enfermedades, la
evolución depende de un diagnóstico temprano
y de un tratamiento efectivo.
d ia g n ó s t ic o
Las secuelas en el largo plazo de la infección
Sospechada la enfermedad, sobre la base de neonatal incluyen retraso mental, hidrocefalia y
criterios clínicos y epidem iológicos, se recurrirá parálisis.
al diagnóstico de laboratorio. Éste sólo es confir
matorio si se aísla el agente causal en las diferen
TRATAMIENTO
tes muestras clínicas. En este sentido es importan
te tener en cuenta que el método de enriquecimien Se acepta en general que la mayoría de las cepas
to en frío a 4'’C eleva las probabilidades de recu son sensibles a ampicilina, penicilina, eritromicina,
perar el agente bacteriano. Es excepcional su ha cloranfenicol, SMX/TMP y cefaloiina. No obstan
llazgo en muestras de LCR, debido al escaso nú te, debido al sinergismo existente entre los betalac-
mero de microorganismos presentes en él. támicos y los aminoglucósidos, se recomienda la aso
Los estudios serológicos no siempre son de ciación de ampicilina, 100 mg/kg/día y gentamicina,
utilidad, ya que L. m onocytogenes comparte di 5 mg/kg/día, durante dos semanas, para el tratamien
versos antígenos con otras bacterias. Sin embar to de las formas generalizadas, en particular las me
go, pueden ser de valor las técnicas de aglutina ningoencefalitis y la granulomatosis infantiséptica.
ción e inmunofluorescencia, siempre y cuando El SMX/TMP se ha empleado con buen resultado
demuestren conversión serológica. En la actuali en pacientes alérgicos a los betalactámicos. Las
dad hay procedimientos de biología molecular, cefalosporinas de tercera generación no son útiles.
aplicables principalmente a los estudios de bro
tes que se originan en los alimentos.
PROFILAXIS
B ibliog rafía----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- — i
Ausina Ruiz V, Moreno Guillén S. Tratado SEIMC de Pickering LK, et al. Red Book, Enfermedades Infecciosas i
Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica. 1*ed. en Pediatría. 25* ed. Editorial Médica Panamericana. í
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f
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•'AJO'cf.morxtm3i
f,
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Fiebre Q (r
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A lfredo C. Seijo i,
Cv
c
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DEFINICIÓN
I, virulenta, se relaciona con su estado natural y c
se la recupera de materiales infectados, mientras
Es una enfermedad zoonótica, febril, aguda y que la fase II es la forma avirulenta y adaptada
en ocasiones crónica, producida por C oxiella en pasajes sucesivos por cultivos celulares o em t
burnetii. Puede comenzar en forma repentina con brión de pollo. Posee tres plásmidos asociados
escalofríos, cefalea retrobulbar, astenia, males con la virulencia y a la capacidad de producir de
tar general y sudoración profusa. Además suele terminadas lesiones tisulares. Hasta el momento
comprometer diferentes órganos, con las consi se han identificado seis cepas, de las cuales cin
guientes manifestaciones clínicas. co son patógenas para el hombre o los animales.
Una forma de resistencia, de tipo esporógena,
producto de un ciclo de replicación con restric
ETIOLOGIA
ción del soma bacteriano, le permite la supervi
C oxiella burnetii (única especie del género vencia en condiciones adversas. t
Coxiella), considerada integrante de la familia
Rickettsiaceae, en el presente se la incluye dentro
C. burnetii muestra un patrón de alta patogeni-
cidad ya que un solo microorganismo es capaz c
del grupo de las gamma proteobacterias, más afín, de producir enfermedad, pero con una virulencia
por homología genética, a bacterias como Legio- en general baja que hace que predominen las in
nella. Su ciclo de vida es intracelular y se inicia fecciones subclínicas. Eliminada al medio exte i
cuando ingresa en una célula por un mecanismo rior, sobrevive por tiempos prolongados: varios
pasivo de membrana (fagosoma). El proceso de meses en carne congelada, heces de garrapatas y
replicación intracelular requiere la formación de materiales biológicos desecados; semanas en le
un fagolisosoma, en cuyo interior el microorga che no pasteurizada y sus derivados. Resiste con
nismo lleva a cabo su ciclo, en un medio cuyo pH diciones fisicoquím icas no comunes para una
oscila entre 3 y 4, y donde la presencia de enzimas bacteria.
líticas impediría la supervivencia de otro patóge
no. Esta característica, sumada a su alta resisten
EPIDEMIOLOGÍA
cia en diversas condiciones desfavorables en el
medio exterior, explican algunas de las particula Es un patógeno de distribución mundial; se ha
ridades de la epidemiología de la fiebre Q. recuperado de varias especies de mamíferos, aves,
El microorganismo tiene dos formas de creci peces y garrapatas, pero no necesita insectos vec
miento, indiferenciables desde el punto de vista tores para su transmisión, hecho habitual en las
morfológico, pero con distinta com posición del rickettsias. Las fuentes de infección para el hom
lipopolisacárido de la pared bacteriana. La fase bre son los animales domésticos y el ganado de
nr
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Cuadro 61-1. Serorreaa/V/dad en distintas poblaciones de nesgo de la R. Argentina.
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í^^bbiaaonféstudjáda.í^ á 199 ![' ■Núnnerb'de rnüestrás" . ' ' . 2ritáje-clé:posit¡y ‘dad
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Personal de frigoríficos 104 19,1
Trabajadores rurales * 71 16,5
'M
Trabajadores rurales MOA** 164 26,8
1» Personal del Zoológico de 8s. As. 44 36
Neumonías atípicas (Hospital Muñiz) 125 13,6
'M •Prov. Buenos Aires. **Noroeste argentino.
íM
>!•
(t
C apítulo 61 - Fiebre Q □ 527
de las iransaminasas con discreta o nula elevación la inmunofluorescencia indirecta, ya que la fija
de la bilirrubina directa (colesiasis intrahepática), ción del complemento clásica puede mostrar reac
o la formación de granulomas con una histopa- tividad inespecífica, debido a que el lipopolisa-
tología característica («granulomas en rosquilla»). cárido que utiliza también se encuentra en otros
En este último caso corresponde el diagnóstico microorganismos.
diferencial con otras causas de granulomatosis
hepática, como brucelosis, tuberculosis o linfomas.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
La endocarditis subaguda, que cursa con espleno-
niegalia y escasos síntomas, debe sospecharse ante Los diagnósticos diferenciales incluyen bruce
toda endocarditis con hemocultivos negativos, por losis, leptospirosis, psitacosis, neumonías (vira
lo general en sujetos con prótesis valvulares o en les, por micoplasma y otras neumonías extrahos-
fermedad endocárdica previa. El diagnóstico de pitalarias) y hepatitis virales.
esta forma clínica ofrece dificultades y se basa,
como en los cuadros anteriores, en la serología.
TRATAMIENTO
La respuesta humoral en la endocarditis se carac
teriza por anticuerpos antifase I. El tratamiento consiste en la asociación de doxi-
ciclina más ofloxacina, cotrimoxazol o rifampi-
cina, durante aproximadamente dos años. Debe
diagnóstico
rá evaluarse en forma periódica la función car
Los intentos de aislar C. biirnetii tienen el in díaca, los títulos de anticuerpos y los indicadores
conveniente del riesgo que entrañan para el ope inespecíficos de infiamación.
rador, al tener que trabajar con materiales infec
ciosos. Ello se debe a la facilidad de contraer la
PROFILAXIS
infección por aerosoles, lo cual hace necesario
contar con laboratorios de alta seguridad biológi En algunos países se administran vacunas al
ca. Por lo tanto, el diagnóstico se basa en la de personal en riesgo (veterinarios, matarifes, gran
mostración de anticuerpos, en general contra antí- jeros) y al ganado de cría o productor de leche.
genos de fase II. Es necesario demostrar la sero- En la Argentina no hay vacunas disponibles. Las
conversión, dado que pueden encontrarse anti medidas de prevención incluyen el uso de barbijos
cuerpos residuales por infección pasada incluso y anteojos protectores en lugares donde puede
de clase IgM, o inespecíficos, por reactividad cru haber alta concentración de microorganismos en
zada con otros patógenos como Legionella spp. aerosol: recintos de parición o tambos, así como
El empleo de técnicas de biología molecular po una correcta eliminación de materiales peligro
dría solucionar algunos aspectos del diagnóstico. sos, como placentas. Otra medida a tener en cuen
Como prueba serológica más específica se utiliza ta es la pasteurización de la leche.
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Difteria
Ornar J. Palmieri
Elena I. M aiolo
anterior del tabique y las fosas nasales. Produce paladar y la pared posterior de la faringe. Su as
una secreción nasal serosanguinolienta o seropu- pecto en esta forma clínica es diferente del de las
rulenta, y una seudomembrana delgada blanco- anteriores, ya que su coloración suele estar alte
amarillenta. rada por los vóm itos, el sangrado local o las
En ocasiones la piel que rodea las narinas y el epistaxis. Es gris negruzca y tiene mayor grosor.
. labio superior está erosionada. Los signos y sín A veces la invasión seudomembranosa alcanza
tomas de la toxemia son leves. las fosas nasales y provoca abundante secreción,
que puede estar mezclada con sangre. Hay odino
Difteria faríngea fagia que acentúa la dificultad para deglutir, pro
La presentación clínica de la difteria faríngea vocada por el intenso edema de las fauces. En
incluye tres formas: angina diftérica común, gra esta forma clínica, la adenitis y la periadenitis
ve y maligna. submaxilar alcanzan su máxima expresión, lo que
genera el característico aspecto de «cuello de
Angina diftérica común. Comienza de manera loro». En ocasiones la piel suprayacente presen
insidiosa, con decaimiento, odinofagia, tempe ta un enrojecimiento erisipeloide que no debe
ratura de 38°C a 39°C y congestión faucial que en confundirse con un flemón. El compromiso del
* horas da paso a la seudomembrana de color blan estado general es muy acentuado: palidez plomi
co brillante. Ésta asienta sobre una o ambas amíg za de la piel, abatimiento, facies terrosa, ojos
dalas y está rodeada por mucosa congestiva. Los excavados, taquicardia, hipotensión, colapso pe
ganglios linfáticos regionales, subangulo-maxila- riférico y hemorragias (epistaxis, equimosis, pete-
res, están agrandados y son poco dolorosos. No quias, enteronagia, hematuria). La temperatura
hay periadenitis. Los signos y síntomas generales no suele superar los 38®C. Cuanto más grave es
son poco pronunciados: palidez facial, taquicardia la difteria, menos intensa es la fiebre.
y decaimiento; más adelante en la evolución pue-
, den evidenciarse miocaiditis y veloplejía. D/fter/a laríngea
También llamada crup diftérico, es la localiza
Angina diftérica grave. Los síntomas de co- ción laríngea de la difteria. En general es la ex
{ mienzo son similares a la angina diftérica común. tensión a la laringe de la seudomembrana farín
‘ La seudomembrana es blanco-grisácea, excede gea. Rara vez es primitiva o de origen traqueo-
la superficie amigdalina, es unilateral o bilateral bronquial.
• y compromete los pilares anteriores y la úvula. Los elementos patogénicos de la difteria larín
El edema submucoso es intenso y las fauces pue gea son: seudom em brana, edema y espasmo.
den adquirir el aspecto de un flemón periamig- El crup diftérico evoluciona en tres períodos:
dalino (seudoflemón). La úvula puede aumentar disfónico, disneico y asfíctico.
su tamaño en grado considerable. La adenitis sub-
maxilar es moderadamente dolorosa y está rodea Período disfóníco. Se caracteriza por la alte
da por edema periganglionar (periadenitis) que ración progresiva de la voz y la existencia de tos,
modifica los relieves anatómicos normales del que es ronca y seca.
cuello. El estado general está más comprometi-
, do; la astenia es más marcada, la palidez se acen Período disneico. Continúa al anterior y se
túa, la taquicardia se acompaña con hipotensión origina por la reducción de la luz laríngea, pro
arterial. La veloplejía es más precoz y los fenó vocada por el aumento y la extensión de la
menos tardíos (miocarditis y parálisis) son más seudomembrana. Los dos síntomas más impor
frecuentes. tantes de este período son el tiraje y el cornaje.
La evidencia semiológica del tiraje es el hundi
Angina diftérica m aligna. Tiene un com ien miento de las fosas supraclaviculares, la fosa
zo similar a las anteriores. La seudomembrana subesternal y los espacios intercostales durante
se extiende con rapidez, sobrepasa los límites de la inspiración. El cornaje es el ruido producido
, las amígdalas e invade los pilares, la úvula, el por el pasaje del aire durante la inspiración a tra-
532 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
J
v6s de la laringe obstruida. La evolución espon auricular, extrasístoíes, taquicardia ventricularci
tánea del crup diftérico lleva al enfermo irremi fibrilación ventricular. Clínicamente la miocar
siblemente al siguiente período. ditis puede presentarse com o una insuficienciE
cardíaca congestiva aguda y colapso circulato
Período asfíctico. Provoca la muerte por so rio. Otras veces la falla cardíaca se manifiesta eri
focación, salvo que se proceda a la intubación y forma insidiosa con disnea progresiva, ruidosj
extracción de la seudomembrana. cardíacos hipofonéticos, cardiomegalia, soplos?
sistólicos y ritmo de galope. E! monitoreo de lal
D/fter/a traqueobronquial evolución de la miocarditis se realiza en forma
Como forma primaria es excepcional, por lo seriada, con electrocardiogramas y determinacio-1
general es secundaría a las localizaciones faucia nes de transaminasa glutamicooxalacética y CPK.j
les o laríngeas. Los síntomas corresponden a la Los pacientes con intervalo P-R prolongado yj
obstrucción de la vía aérea. La tos puede provo alteraciones mínimas de la onda T en generalj
car la expulsión de la seudomembrana, que es un evolucionan bien y sin secuelas; en cambio, los'¡
verdadero molde de la tráquea y los grandes bron que presentan bloqueos de rama y disociación AV
quios. completa tienen mayor mortalidad. Los sobrevi-*
vientes pueden quedar con alteraciones perma
Características de la seudomembrana diftérica nentes de la conducción.
Estas características son propias de las seudo
membrana diftérica y se observan en todas las Neurotoxícidad
formas clínicas. Esta complicación también es proporcional a
A dhereníe: cuesta desprenderla y deja una su la gravedad de! compromiso faucial. La infec-í
perficie sangrante. ción leve produce neurotoxícidad sólo en formaj
C oherente: no se disocia en el agua. excepcional. Una proporción importante de pa-;
Sin solución de continuidad: se extiende uni cientes con enfermedad grave desarrollan neuro- i
formemente sobre la mucosa. patía. La parálisis del paladar blando y la pared;
Invasora: invade la mucosa vecina a las amíg posterior de la faringe se presentan durante los
dalas, pilares anteriores, úvula, faringe, laringe, primeros días de enfermedad y se expresan por
tráquea y bronquios. regurgitación nasal de los líquidos deglutidos.
De rápida reproducción: se reproduce en po Después aparecen las neuropatías craneales con
cas horas. parálisis ciliar y oculomotoras. La afectación de
Olor: característico. los nervios faciales, faríngeos o laríngeos puede
provocar broncoaspiración. La polineuritis perifé
Efectos sistémicos de la exotoxina rica aparece entre los 10 y los 90 días después
La potente toxina diftérica hace sentir sus efec del inicio de la enfermedad faucial; consiste en
tos en todas las células del organismo, pero las ma una debilidad proximal de los miembros que se
nifestaciones más importantes, que se tratan a con extiende distalmente y afecta la dorsiflexión de
tinuación, son cardíacas y del sistema nervioso. los pies. Su gravedad varía desde paresia leve con
hiporreflexia hasta parálisis total con importante
Cardiotoxicidad compromiso de la dinámica respiratoria. Puede
En la mayoría de los casos se presentan signos haber neuropatía sensorial con parestesias «en
leves de miocarditis. Alrededor del 15% desarro guante» y «en bota». La afectación de los ner
lla manifestaciones relacionadas con la gravedad vios motores del tronco y cervicales impide man
y extensión de la enfermedad local. La miocardi tener la cabeza erguida.
tis puede aparecer durante la fase aguda o ini
ciarse una a dos semanas después de mejorado el
DIAGNÓSTICO
compromiso faucial. Los cambios electrocardio-
gráficos consisten en alteraciones del segmento A los fines prácticos, el diagnóstico de la dif
ST-T, bloqueos de grados variables, fibrilación teria es clínico, lo cual permite un inicio rápido
C apítulo 62 - D ifteria □ 533
• ' f
de la terapéutica que mejorará notablemente el cia suprarrenal. También se han señalado hemi
pronóstico. La enfermedad se sospecha ante la plejías por embolia o encefalitis, convulsiones,
presencia de un exudado seudomembranoso que corea, ataxia cerebelosa, psicosis, endocarditis
sobrepase la superficie de las amígdalas e invo parietal con trombosis cardíaca, albuminuria,
lucre la úvula y los pilares, además de adeno- glomerulonefritis e insuficiencia renal.
niegalias con periadenitís o sin ella, disfonía, ve>
lopiejía, secreción nasal serosanguinolenta, tem
PRONÓSTICO § -
peratura, que rara vez excede los 38,5®C, y sig
nos de toxicidad sistém ica. La confirm ación El pronóstico de la difteria depende de la for
diagnóstica se realiza mediante el aislamiento de ma clínica, de la precocidad del inicio del trata
C. diphtheriae de la seudomembrana o del hiso miento, de la correcta dosificación del suero an c-
pado del lecho de desprendimiento de la misma titóxico, de la edad del paciente, y de si ha recibi
cultivados en los medios selectivos con telurito do o no inmunización con toxoide diftérico y del 4-
de potasio. En la actualidad se dispone de técni estado de salud previo.
cas de inmunofluorescencia que permiten el diag Cuanto más extenso sea el proceso local y más
nóstico rápido en cultivos de 4 horas, pero la iden se demore la administración de la antitoxina, más
tificación definitiva de C. diphtheriae se realiza elevada será la mortalidad. Es máxima en la pri
por la morfología de las colonias, el aspecto mi mera semana de enfermedad en la difteria malig «
croscópico y las reacciones de fermentación. De na; en los afectados de miocarditis con taquicardia
ben efectuarse pruebas de virulencia sobre todos ventricular, fibrilación auricular y bloqueos car i
los aislamientos de C. diphtheriae aislados. Por el díacos; en la difteria laríngea o traqueobronquial,
estudio bacteriológico no siempre es posible con en lactantes o personas mayores de 60 años y en
firmar el diagnóstico de difteria, en especial si el alcohólicos. La gravedad del proceso es mucho
enfermo fue tratado previamente con antibióticos. menor cuando la difteria se produce en enfermos
parcialmente inmunizados, aunque la mayor parte
de los casos se da en pacientes no inmunizados.
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL r
Las características particulares de la angina
TRATAMIENTO i
diftérica, descriptas antes, permiten diferenciar
la de otras afecciones que comprometen las fau
ces. No obstante, para su diagnóstico diferencial
D ebe iniciarse de inm ediato ante ¡a sospecha
clínica de la enferm edad. La antitoxina diftérica
c
deberán tenerse en cuenta: mononucleosis infec se aplica antes de la confirmación diagnóstica por c
ciosa, faringitis y amigdalitis estreptocócicas o el laboratorio, que, como se señaló, no siempre
virales, angina de Vincent (asociación fusoespi- se obtiene. Precocidad en la aplicación de la an (
rilar), flemón periamigdalino, herpangina (virus titoxina y dosis suficientes son indispensables
Coxsackie A) y agranulocitosis. El crup diftérico para mejorar el pronóstico. La antitoxina diftérica
se diferenciará del falso crup o laringitis estridu- proviene de suero de caballo, por lo tanto debe
losa, y de la epiglotitis aguda provocada por//ae- interrogarse sobre la posible alergia. Se practica
mophilus influenzae. rá una prueba conjuntival o intradérmica, con
antitoxina diluida 1 en 20, para detectar una hi-
persensibilidad inmediata. Se tendrá preparada
COMPLICACIONES
adrenalina 1 en LOOO por si se produce una reac
Todo lo descripto hasta aquí corresponde a la ción alérgica grave. Los enfermos con hipersen-
acción propia del bacilo y sus exotoxinas, por lo sibilidad inmediata deben ser desensibilizados
tanto no se considerarán complicaciones. Éstas con el método de Besredka. Éste consiste en la
son en general provocadas por sobreinfecciones aplicación por vía subcutánea, cada 15 minutos,
bacterianas, como el adenoflemón cervical, la de dosis crecientes de suero antidiftérico diluido
otitis media, la neumonía y la bronconeumonía. al 1:100 en solución isotónica de cloruro de sodio,
En las formas graves es frecuente la insuficien desde 0,1 mL hasta 1,0 mL, 8 a 10 aplicaciones.
vw
Si no hay reacción de iiípersensibilidad, repetir oral o intramuscular, durante 14 días en las dosis
rl iniHiiu) esquema con solución sin diluir, y en habituales. Durante la fase aguda se recomenda
<• luiKcnciii de reacción alérgica se aplicará el total rá el reposo en cama y se iniciará un seguimiento
cir la dosis de antitoxina. Esia se administrará por para detectar los efectos de la acción sistémica
goteo intravenoso diluida en solución salina nor de la toxina y la permeabilidad de la vía aérea. A
mal durante I hora. Se busca de este modo neu veces es necesario, incluso urgente, practicar una
m tralizar con rapidez la toxina circulante, ya que intubación traqueal o una traqueostomía, para eli
no acdla sobre la toxina fijada en las células. Si minar la seudomembrana y evitar la muerte por
m se realiza el tratamiento dentro de las 48 horas asfixia.
lÜ del comienzo de la enfermedad, las dosis son de Concluido el tratamiento y antes del alta hos
1.000 unidades por kilogramo de peso en una sola pitalaria deben hacerse dos hisopados fauciales
II* aplicación para la forma común, de 2.000 U/kg para asegurarse la erradicación del bacilo. Los
de peso para la forma grave y de 3.000 U/kg de convalecientes de difteria deben recibir inmuni
lÜ peso para la forma maligna. Cuando el tratamien zación con toxoide, dado que es posible que la
to se inicia después de 3 o 4 días del comienzo enfermedad no induzca niveles adecuados de an
lif
de la enfermedad el pronóstico es más grave; en titoxina.
«I# estos casos pueden incrementarse las dosis de
antitoxina, pero sin superar las 300.000 unida
PROFILAXIS
des como dosis total. Algunos autores sostienen
(|ue si a las 24 horas de la aplicación de la anti> La prevención de esta enfermedad consiste en
toxina no se detiene la progresión de la seudo- la administración del toxoide diftérico por vía
membrana, ésta tampoco tiende a desprenderse intramuscular, junto con el toxoide tetánico y la
f»
y no hay mejoría en los aspectos local, regional vacuna anticoqueluchosa (vacuna triple DTP) o
Iti y general, debiera repetirse la aplicación o la mi la vacuna cuádruple (difteria, tétanos, pertussis,
tad de la dosis del día anterior. H. influenzae tipo b) al 2®, 4® y 6® m eses de vida.
•• La enfermedad sérica, que se produce en un 10% El primer refuerzo se hace a los 18 meses de vida
de los casos, es aceptable debido a la importante y el segundo al ingresar a la escuela. Luego se
reducción de la mortalidad lograda con la admi dan refuerzos con toxoide diftérico y tetánico (va
nistración de antitoxina. Además debe prescribirse cuna doble adultos dT) cada 10 años.
<•
un tratamiento antibiótico que actúe sobre el baci Los sujetos en contacto con los enfermos difté
lo. De este modo se logra eliminar la infección ricos, previo cultivo del hisopado de fauces, reci
local, detener la producción de toxina y evitar la birán una dosis de toxoide y tratamiento preven
llt transmisión del microorganismo a los contactos. tivo con penicilina o eritromicina (ver el capítulo
Se administra penicilina o eritromicina, por vía Inmunoprofílaxis).
t(l
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Tétanos
Ornar J. Palmieri
Elena I. M aiolo
el 1% al 20% de los casos la puerta de entrada es durante los movimientos de un grupo motor par
inaparente. El nivel socioeconóm ico y cultural ticular y la terminación de contracciones reflejas
es importante, ya que se relaciona con el conoci dependen de la acción de estos transmisores
miento de las normas higiénicas elementales para inhibitorios. Por el efecto de la neurotoxina, que
el cuidado de las heridas y sobre todo la inmuni produce la falta de inhibición, el sistema motor
zación adecuada conseguida a través del cumpU* responde a los estímulos aferentes con contrac
miento estricto de los planes de vacunación. ción intensa, sostenida y simultánea de los mús
culos agonistas y antagonistas, característica del
espasmo tetánico.
PATOGENIA
herida, parestesias y a veces contracturas. El tris- paciente concilia el sueño, es despertado por los
nio, que suele aparecer en este período, es lo que paroxismos. El delirio presente en el período de
evoca con seguridad el diagnóstico de tétanos. estado es más frecuente en los alcohólicos. En
El tétanos sin trismo es muy raro; en muy pocas las formas graves del tétanos la temperatura es
ocasiones éste es provocado por otras afeccio elevada, 39°C a 40®C, y aumenta si los paroxis
nes. Lo que impide o limita la apertura de la boca mos son subintrantes. En el tétanos sobreagudo,
es la contractura de los músculos maseteros, tem es frecuente el compromiso del sistema nervioso
porales y pterigoideos. El trismo provocado por autónomo caracterizado por un estado hipersim-
el tétanos es irreductible» dificulta la alimenta paticomimélico debido al bloqueo en la inhibi
ción, la deglución y el habla. En el período de ción de la liberación de catecolaminas produci
estado las contracturas musculares se generali do por la toxina tetánica. Dicho estado es la cau
zan, son descendentes y comprometen los mús sa de arritmias ventriculares graves (taquicardia
culos de la nuca, el tronco, los paravertebrales, ventricular, fibrilación ventricular) y de inesta
los abdominales y los de los miembros. Como bilidad hemodinámica (hipertensión o hipoten
consecuencia el enfermo adopta una posición ar sión arterial). La contractura de los músculos del
queada, opistótonos, donde el cuerpo se apoya en tórax genera respiración rápida y superficial, con
la nuca y los talones a modo de puente. Las manos estancamiento de las secreciones en el árbol bron
y los pies están relativamente respetados. Se acen quial, lo cual favorece el desarrollo de infeccio
túa el trismo y la disfagia. Se hace presente la fa nes pulmonares. En las primeras 2 a 3 semanas
cías denominada tetánica o risa sardónica, en la puede requerirse apoyo respiratorio.
cual la mitad superior del rostro llora, mientras El tétanos evoluciona en 4 a 6 semanas. El au
la inferior ríe. La contractura tetánica se caracte mento del tono muscular dura en general unos
riza por presentar una forma tónica, o contractura 60 días, pero la recuperación suele ser completa.
permanente, y la clónica o paroxística. Sobre un El tétanos generalizado se divide en formas
fondo de contractura permanente sobrevienen sobreagudas, agudas y suhagudas, las cuales se
paroxismos dolorosos, que pueden ser espontá relacionan con el período de incubación, la inten
neos o provocados. Estos últimos suelen ser ori sidad del paroxismo y el tiempo de generalización,
ginados por distintos estímulos, com o la deglu (cuadro 63-1)
ción, el ruido, la luz y aun el examen clínico. La En Inform a sobreaguda el período de incuba
frecuencia y gravedad de las crisis paroxísticas ción es breve, menos de 5 días, y la generaliza
varían según la forma de presentación y el grupo ción, rápida, se completa antes de las 24 horas.
muscular comprometido. Cuando son afectados La contractura tónica provoca la posición en opis
los músculos de la glotis, el diafragma y los de tótonos; los paroxismos son frecuentes, subintran
más músculos respiratorios, el paciente puede fa tes, dolorosos y de presentación espontánea. Su
llecer en plena crisis por asfixia. Los reflejos ten duración e intensidad generan trastornos respira
dinosos se hallan exacerbados. La sensibilidad y torios y circulatorios que conducen a la muerte.
el nivel de conciencia están conservados. El in La mortalidad de esta forma de presentación es
somnio es constante y, en ocasiones, cuando el mayor del 85%.
‘ 1
m
538 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
m
r C apítulo 63 - Tétanos □ 539
El tétanos cefálico disfágico o hidrofóbico se nico, pero son importantes en el seguimiento del
caracteriza por la acentuada intensidad del espas paciente. El LCR es normal. Los signos y sínto
mo faríngeo y los trastornos respiratorios. Las cri mas que caracterizan el comienzo de la enferme
sis disfágicas preceden al trismo. Se presentan dad, que casi nunca faltan, son: trismo, raquialgia
ante la tentativa de deglutir y en fases más avan e insomnio. Los tres son altamente evocadores
zadas ante la sola presencia de líquidos. Las crisis del diagnóstico de tétanos. El trismo es irreduc
de disnea son muy acentuadas; llevan a la sofo tible, el sensorio no está comprometido, los re
cación, que se produce por los espasmos diafrag- flejos tendinosos son hiperactivos y la facies tie
máticos, y pueden originar la muerte por asfixia. ne la típica expresión de risa sardónica. Después
Esta forma clínica también puede generalizarse se presentan las contracturas generalizadas y los
y el pronóstico es ominoso. espasmos. La inmunización ausente o inadecua
En las formas m onopléjica y parapléjica las da suma un elemento importante para el diagnós
contracturas y las crisis paroxísticas afectan du tico. Es poco posible la presentación del tétanos
rante toda la evolución de la enfermedad un te en un sujeto con historia de inmunización com
rritorio muscular determinado, en general los pleta.
miembros inferiores. En la mayoría de los casos
el período de incubación es de 6 a 14 días, aun
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
que en algunos puede prolongarse hasta 6 meses.
Estos últimos se denominan tétanos tardíos. Deberá plantearse con procesos inflamatorios
La fo rm o m onopléjica se caracteriza por con- locales que provoquen trismo, como flemones pe-
tractura y dolor en el miembro afectado. La con- riamigdalinos, abscesos alveolares dentarios, so
iractura es permanente, comienza en un grupo bre todo los del tercer molar, parotiditis y artritis
muscular y luego se extiende a todo el miembro. temporomandibular. Otras causas de trismo son
Suele haber crisis paroxísticas locales que nunca las reacciones distónicas por fármacos, como los
se generalizan. La evolución es lenta, pero la cu fenotiazínicos, butirofenónicos y la metoclopra-
ración se produce en todos los casos. mida. Otros procesos que pueden tener similitud
fo rm a parapléjica es poco frecuente. La pa- con el tétanos son la tetania hipocalcémica, la in
raplejía puede ser superior o inferior, y se carac toxicación con estricnina, la rabia, la menin-
teriza por dolor y contractura. Las crisis paroxís goencefalitis, la histeria y la enfermedad del suero.
ticas son intensas, frecuentes y simulan un cua
dro clínico de tétanos generalizado.
COMPLICACIONES
seguir cada 10 años. Es importante recordar que A los que consulten por heridas cutáneas o mu
las vacunas precipitadas con hidróxido de alu cosas, recientes o crónicas, se les administrará
minio deben administrarse por vía intramuscular. una dosis de refuerzo del toxoide tetánico si es
A los enfermos que sean intervenidos quirúrgi* que tienen el plan de vacunación completo; si no
camente y tengan el plan completo de vacuna lo tienen o no recuerdan, se aplicará toxoide y
ción, sólo se les aplicará una dosis de refuerzo gammaglobulina, com o ya se expresó.
antes de la operación. Si no lo tienen o no recuer La vacuna antitetánica o toxoide tetánico es un
dan, y la cirugía es programada, se hará la vacu preparado de toxina tetánica a la que, por distin
nación con 2 dosis del toxoide tetánico con inter tos procedimientos de laboratorio, se le suprime
valo de un mes. En cirugía de urgencia, si no hay su fracción tóxica con retención de su poder an-
referencia clara del estado inmunitario deberá tigénico, el cual se acrecienta por la precipita
aplicarse una dosis de vacuna, y en otro sitio, y ción con hidróxido de aluminio.
con distinta jeringa, gammaglobulina antitetánica La gammaglobulina antitetánica humana se
humana, 250 a 500 U por vía intramuscular, o obtiene de dadores inmunizados en forma ade
5.000 a 10.000 U de antitoxina antitetánica de cuada. Se puede reemplazar por antitoxina de
origen equino. Luego se completará el plan de origen equino, aunque con los inconvenientes
vacunación (ver el capítulo Inmunoprofilaxis). alérgicos ya citados.
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Botulismo
Ornar J. Palmieri
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adrenérgicas y aun se discute su efecto sobre las general se presenta como una parálisis descendente
vías colinérgicas del sistema nervioso central. Es simétrica, que puede llevar a la muerte por com
tas toxinas son sensibles al calor; se inactlvan a promiso de la mecánica respiratoria. El paciente
100®C en 10 minutos y a 80*C durante 30 minu permanece afebril y son muy poco frecuentes las
tos. Por lo tanto, los alimentos contaminados pier náuseas, los vómitos o el dolor abdominal. El co*
den su toxicidad si se los calienta lo suficiente. De mienzo de los síntomas suele ser la parálisis de
esta forma se previene la enfermedad. Es impor los nervios craneales, que produce diplopía y disar-
tante destacar que los alimentos contaminados tria con disfagia o sin ella, acompañada por sínto
suelen tener aspecto y gusto absolutamente nor mas generales como debilidad, desmayos y ma
males, aunque las cepas tipos A y B también pue reos. La alteración de la transmisión autonómica
den producir enzimas proteolíticas que alteren sus colinérgica provoca menor salivación, lo que cau
caracteres organolépticos. Las toxinas se absor sa importante sequedad de boca, lengua y faringe
ben principalmente en el estómago e intestino del que no se alivia con la ingestión de líquidos. Hay
gado y con más lentitud en el colon. Las enzimas odinofagia y eritema faríngeos que pueden hacer
digestivas no destruyen la toxina botulínica y la pensar por error en una faringitis estreptocócica.
tripsina pancreática parece aumentar la toxicidad Otros síntomas relacionados con la disfunción
de la toxina tipo £ . La eventual llegada al colon autonómica son el íleo, la constipación, la reten
de C. hotulinum o sus esporas puede determinar ción urinaria y la hipotensión ortostática. Con fre
allí su desarrollo y la producción de toxina. Esta cuencia la debilidad motora se propaga con rapi
circunstancia y la absorción colónica lenta de la dez desde la cabeza y afecta los músculos del cue
toxina hacen posible su hallazgo en la sangre has llo, los brazos, el tórax y las piernas. Puede haber
ta después de varios días de ingerido el alimento ptosis palpebral, parálisis extraoculares, alteración
contaminado. de los reflejos pupilares o pupilas fijas y dilata
das. visión borrosa y fotofobia. En la mayoría de
los casos el estado de conciencia está conservado,
ANATOMÍA PATOLÓGICA
pero puede haber adormecimiento, agitación o
El examen macroscópico de los órganos sólo ansiedad. El reflejo nauseoso suele estar atenuado
muestra congestión discreta. El bazo suele estar y los reflejos tendinosos permanecen normales o
congestivo y algo aumentado de tamaño. La mu están disminuidos. Los síntomas fuertemente su
cosa del tubo digestivo se halla hiperémica y con gestivos de botulismo son: ausencia de fiebre,
equimosis diseminada. Las lesiones halladas en el hipotensión postural, pupilas midríáticas, mucosas
aparato respiratorio no son propias de la intoxica secas, parálisis descendente y dificultad respira
ción botulínica, sino debido a alteraciones en la toria progresiva.
deglución causadas por la enfermedad.
Botulismo infantil
El botulismo infantil se debe a la ingestión de
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
esporas de C. boiulinum, las que evolucionan en
Se estudiarán el botulismo alimentario, el bo- el intestino hacia formas vegetativas y elaboran
tuiismo infantil y el botulismo de las heridas. allí la toxina, que es absorbida. En el lactante las
formas clínicas de esta enfermedad van desde los
Botulismo alimentario cuadros leves, en los que el niño no aumenta de
El botulismo alimentario se adquiere por la in peso, hasta las formas con parálisis y alteración
gestión de alimentos que contienen la toxina. El de la mecánica respiratoria. También puede ser una
período de incubación es de 12 a 36 horas, pero de las causas de muerte súbita del lactante. La en
puede ser de 6 horas y hasta 8 días después del fermedad se produce en general en menores de 6
consumo del alimento contaminado. La evolución meses, pero el porqué de este hecho se ignora. En
clínica es variable, desde una forma leve, que no la mayoría de los casos no puede atribuirse con
requiere atención médica, hasta formas graves y cretamente a ningún alimento ni se conoce la ra
mortales en un plazo menor a las 24 horas. En zón de la colonización intestinal por C. botulinum.
C apítulo 64 - Butulismo □ 545
La miel es una fuente de esporas de este microor Bairé. Ésta es una parálisis descendente, mientras
ganismo, por lo cual no es aconsejable alimentar que el síndrome de Guillain-Barré es una parálisis
con ella a niños menores de un año. ascendente con alteraciones sensoriales y LCR con
aumento de las proteínas y celularidad normal (di
Botulismo de las heridas sociación albúm ino-citológica). La miastenia
El botulismo de las heridas es provocado por su gravis puede excluirse por electromiografía, estu
contaminación con esporas de C. botulinunu que dio de anticuerpos y prueba del edrofonio. Aun
se desarrollan hacia formas vegetativas y produ que esta última suele dar resultados positivos fal
cen la toxina. Se ha observado en heridas traumá sos en el botulismo, es menos espectacular que en
ticas o quirúrgicas contaminadas con tierra, des la miastenia gravis. Otros diagnósticos diferencia
pués del parto por cesárea y en los drogadictos. les a tener en cuenta son la poliomielitis, la paráli
Los signos y síntomas de esta forma clínica son sis por garrapatas, la faringitis estreptocócica, los
similares al botulismo alimentario, excepto en que accidentes cerebrovasculares, y la intoxicación
el período de incubación es más prolongado (alre atropínica o por fármacos con acción anticolines-
dedor de 10 días) y no hay síntomas digestivos. El terasa.
aspecto de la herida es bueno. La fiebre se produ
ce sólo si hay infección simultánea por otras bac
COMPLICACIONES
terias. La profilaxis con antibióticos, para evitar
la infección de la herida, no impide el desarrollo En general son infecciosas: neumonía aspirativa,
de esta enfermedad. bronconeumonía y sepsis originada en el aparato
respiratorio o urinario. Trombosis y tromboem-
bolismo.
DIAGNÓSTICO
una prueba conjuniival o intradérmica con suero asistencia respiratoria adecuada. Se realizarán eva
antibotulínico diluido 1 en 20 para delectar hiper- luaciones frecuentes de la capacidad vital y estu
scnsibilidad inmediata. Se tendrá preparada adre dio de gases en sangre.
nalina al \%o por si se produce una reacción alér Si el paciente no tiene íleo, se le efectuarán ene
gica grave. A fin de prevenir un shock anafiláctico, mas salinos para evitar la absorción de la toxin?
los pacientes con hipersensibilidad inmediata son remanente en el colon. También se pueden admi
(Icscnsibilizados por el método de Besredka. La nistrar purgantes. Si hay íleo se coloca sonda nasoi
dcsensibilización consiste en la aplicación por vía gástrica. La retención urinaria hace necesario e
subcutánea, cada 15 minutos, de dosis crecientes cateterismo vesical. Se controla en forma adecúa
de suero antibotulínico diluido al 1:100 en solu da el medio interno y la alimentación parenteral;
ción isotónica de cloruro de sodio desde 0,1 mL Restablecida la moíilidad normal del tubo digestij
hasta 1,0 mL 8 a 10 aplicaciones. Si no hay reac vo, si el paciente no puede deglutir, se lo alimen
ción de hipersensibilidad, repetir el mismo esque tará por sonda nasogástrica. Estar atento a la apa^
ma con suero sin diluir, y en ausencia de reacción rición de fiebre, que puede evidenciar una infec-í
alérgica se administrará el resto de la dosis de suero ción bacteriana nosocomial. i
por vía intravenosa, en perfusión lenta, diluida al
t
10% en solución isotónica de cloruro de sodio. Se
PROFILAXIS
julminislrará lo antes posible, luego de haber ex-
iraído sangre para estudios de laboratorio. Si ello Es necesario un control adecuado en el procedi-i
no es posible, igual se lo aplica, ya que se ha de miento industrial del envasado y preservación de
mostrado la presencia de toxina botulínica en la los alimentos. A pesar de ser una eventualidad rara,
sangre de algunos enfermos durante 20 a 30 días. la contaminación de las consei*vas industriales es
Aunque su valor es dudoso, se aconseja el uso de posible. Todo alimento enlatado sospechoso debe
penicilina con la intención de eliminar la posible desecharse, aunque la cocción a 100®C durante 15,
colonización intestinal de C. botulinum y evitar minutos destruye la toxina botulínica. Hay que
nsí la producción de toxina en el intestino. señalar el peligro de la preparación casera de con-,
Además del tratamiento específico, puede ser servas. El consumo de éstas se hará sólo si han
necesario practicar una traqueostomía e iniciar sido hervidas previamente. !
La afectación del sistema nervioso periférico La facies toma un aspecto característico, con i
suele ser muy leve y no hay compromiso de las acentuación de los surcos normales, alopecia de
mucosas ni de las visceras. la cola o del total de las cejas, madarosis (ausen <
La baciloscopia puede ser escasamente positi cia de pestañas), alopecia sectorizada de la bar
i/
va o negativa y otro tanto ocurre con la lepromi- ba, infiltración de los lóbulos de las orejas (en
norreacción, que también puede dar cualesquie badajo de campana), lepromas y enrojecimiento
ra de los dos resultados. de los ojos por queratitis (facies leonina). La in
Si el diagnóstico es precoz, se puede curar sin filtración de las manos les confiere un aspecto i
que avance a otras formas clínicas. edematoso y brillante. ■
(t
1
1
550 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
Ojos: uveítis anterior, queratitis, cataratas y te la cara o los miembros. Se la considera una
lagoftalmos, que pueden llevar a la ceguera. primoinfección de carácter vacunante, en la que
Sistem a osteoarticular: las lesiones son pro el organismo responde a la agresión del bacilo
ducidas directa o indirectamente por el bacilo. con la formación de granulomas tuberculoides
En el prim er c a so , éste form a c o lo n ia s y reaccionales en los sitios de inoculación o con
granulomas típicos en el hueso; o en el segundo tacto con el antígeno.
caso, por alteraciones nerviosas se originan le En esta forma clínica la baciloscopia es nega
siones tróficas abacilares. tiva y la leprominorreacción fuertemente positi
En la lepra lepromatosa la baciloscopia es po va.
sitiva y la leprominorreacción negativa.
Episodios reaccionales
Grupo dimorfo Son fenómenos de orden local o general, que
Como el nombre lo indica, este grupo presenta siguen un curso agudo y se intercalan en el cua
algunas similitudes con ambas formas polares. dro crónico de la lepra. Suelen aparecer luego de
Cuanto más delimitadas sean las lesiones, más iniciado el tratamiento, aunque también pueden
cercano estará del polo T, por lo que pasará a ser la primera manifestación de la enfermedad.
denominarse BT. Cuanto mayor sea e! número Se observan en el 10% al 40% de los enfermos y
de lesiones y menos definidos sean sus bordes, son de patogenia inmune.
más cercano estará del polo L, por lo que recibi Pueden desencadenarse por distintos factores.
rá el nombre de BL. El grupo BB ocupa la zona En primer lugar por el tratamiento con la medi
intermedia del espectro. cación antileprosa, y además por embarazos, in
Las lesiones «en corte de hostia» son caracte fecciones intercurrentes, conmociones nerviosas
rísticas de este grupo. Se trata de máculas erite- y cambios de clima.
matosas o eritematovioláceas, de borde externo La evolución de estos episodios puede durar
difuso e interno neto, con una zona de piel sana, desde unos días hasta dos m eses. Una vez des
redondeada en el centro, anestésicas o hipoes- aparecido el brote, la enfermedad sigue su curso
tésicas. crónico. Se los puede clasificar en dos tipos:
Este grupo de pacientes es muy inestable, de
acuerdo con su inmunidad pueden virar de una Tipo 1
forma a otra. Mediado por la inmunidad celular. Se observa
- Baciloscopia positiva (BB-BL). en especial en los pacientes del grupo dim orfo.
- Baciloscopia negativa o débilmente positiva a) Reacción reversal o de mejoramiento de la
(BT). inmunidad o «upgrading». En este caso el incre
- Leprominorreacción negativa (BB-BL). mento de la inmunidad celular hace que el pa
- Leprominorreacción débilm ente positiva ciente vire y se acerque al polo T. Es rara y se
(BT). puede presentar en aquellos pacientes que hacen
el tratamiento correcto.
Lepra Infantil b) Reacción de degradación o de empeoramien
Esta enfermedad es excepcional antes del año to de la inmunidad o «downgrading». En este caso
de vida, rara antes de los tres y benigna hasta los se acercan al polo L. Por lo común se presenta en
cinco. En general los niños afectados conviven con aquellos pacientes que no reciben tratamiento o
enfermos bacilíferos. La forma clínica predomi lo hacen en forma incorrecta o irregular. Com
nante es la indeterminada. Es fundamental que prende: lepra tuberculoide en reacción, lepra
el diagnóstico y el tratamiento sean precoces. dim orfa en reacción y leprom atización aguda.
Otra forma clínica que puede detectarse es la
nodular de la infancia, de excelente pronóstico Tipo 2
dada su regresión espontánea. Las lesiones son Mediado por la inmunidad humoral. Se obser
nodulares, escasas en número, muchas veces úni va principalmente en pacientes con lepra lepro
cas y asientan en sitios expuestos, preferentemen m atosa y se manifiesta por eritema nudoso, eri-
C apítulo 65 - Lepra □ 551
_ C a p (tu h 6 ¿ ^ e . p r ^ □ 553
Pacientes paucibacilares Con bdciloscopia negativa Una toma diaria de DAPS (100 mg). auto-
TT-lndeterminada administrada. a la que se agrega una toma mensual,
Mitsuda negativa supen/isada, de rifampicina (600 mg) por un mínimo
de 6 meses.
Pacientes multibacilares Con baciloscopia positiva Una toma diaria de OAPS (100 mg) más clofazimina
LL-BB-BT-BL- Indeterminada (50 mg). autoadministradas. Un día por mes se
Mitsuda positiva administrará una toma supennsada de rifampicina
{600 mg) más clofazimina (300 mg) más DAPS
(100 mg), por un mínimo de 2 años y hasta la
negativización de la baciloscopia.
554 □ Tercera parte - Infecciones bacterianas
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Generalidades de micología médica t
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Ricardo Negroni t
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La m icología es la ciencia que estudia los hon Cuando los hongos alcanzan un grado de desa c
gos {myketes, en griego). Estos seres vivos en la rrollo determinado, se tornan visibles. Sus agru €.
actualidad se agrupan en un reino llamado Fungi, paciones reciben el nombre de colonias, las cua
del que se reconocen alrededor de 200.000 espe les a veces poseen aspectos macroscópicos que c
cies válidas. orientan en la identificación del hongo.
La micología médica comprende el estudio de los Hay especies con un talo intermedio entre el c
hongos patógenos para la especie humana, como unicelular y el micelio; esta estructura recibe el
nombre de seudohifa o seudomicelio y está inte c
también el de las enfermedades que ocasionan, su
epidemiología, patogenia, diagnóstico y tratamien grada por una sucesión de brotes que quedan uni
to. Aunque es una disciplina compleja, que exige el dos entre sí y crecen por su vértice, como lo ha
conocimiento de la clínica y de las técnicas de labo rían las hifas verdaderas.
ratorio, abarca una mínima parte de la micología Las células fúngicas poseen una pared celular
general, dado que sólo unas 200 especies de hongos con componentes amorfos y fibrilares. Entre los
son causantes de enfermedades en el ser humano. primeros pueden mencionarse los glucomananos
€
Los hongos son organismos eucariotas (poseen y su asociación con proteínas, mientras que entre
núcleo estructural) y heterótrofos, o sea que ne los segundos se encuentra un polisacárido fibro
cesitan vivir sobre sustancia orgánica muerta o so llamado quitina. Los componentes restantes
viva. En el primer caso son saprobios y en el se son los habituales de una célula eucariota: mem
gundo, parásitos. Poseen un cuerpo, llamado talo, brana plasmática, mesosomas, retículo endoplas-
que puede ser unicelular o pluricelular. En este mático, ribosomas, polirribosomas, mitocondrias,
último caso las células se disponen en tubos, una sistema de microvesículas transportadoras de en
a continuación de la otra, y los tubos crecen por zimas, que en los hongos reemplazan al aparato
€
su extremo distal (crecimiento apical). Esta es de Golgi, y un núcleo estructural con membrana t i
tructura tubular, que recibe el nombre de micelio, cribada que contiene un par de cromosomas.
se ramifica hasta formar una especie de telaraña Tanto del micelio como del talo unicelular al *
en la que cada ramificación se llama fiifa. Éstas, gunas células o compartimientos se diferencian
habitualmente están divididas en compartimien para resistir condiciones adversas del medio. Su t.
tos separados por tabiques o septos, aunque hay pared celular se hace más espesa, el citoplasma
t :
hongos con micelio continuo o cenocítico, no ta se condensa y las organelas se incluyen dentro
bicado. Los tabiques son incompletos, ya que de una vacuola lipídica. Estas células reciben el
poseen uno o más poros por los que pueden pa nombre de clam idosporas.
sar, de un compartimiento al otro, corrientes plas La reproducción de los hongos se hace por me •t
máticas, organelas e incluso núcleos. dio de células especiales, llamadas esporas, que
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clase de hongos posee m icelio cenocítico y pro especies pueden ser geófilas, zoófilas o antropó-
duce esporangios como fructificación asexual. filas. Como su nombre lo indica, las primeras se
Los hongos de la clase Basidiomycotina pro adquieren de la tierra; las segundas, por contacto
ducen células fértiles especiales, dilatadas en for con los anim ales, y las terceras por contagio
ma de maza, llamadas básides. En ellas tienen interhumano. Los hábitos de vida y la profesión
lugar la cariogamia y la meiosis, con formación influyen en forma considerable en la adquisición
de 4 núcleos hijos que dan origen a 4 esporas de estas micosis. Las especies antropófilas, en
sexuales externas llamadas basidiosporas. particular Trichophyton ruhrum^ causan trastor
Los hongos patógenos para el hombre poseen nos crónicos, difíciles de curar, que comprome
una amplia distribución en la naturaleza. La ma ten la piel y las uñas. Una especie zoófila, Micros-
yor parle son geófilos (viven en el suelo) o son porum canis, invade con frecuencia el cuero ca
parásitos de plantas. Sus esporas pueden pasar al belludo y es responsable de la mayor parte de las
aire y ser inhaladas o contaminar diversos sustra tiñas de la infancia.
tos, que a su vez sirven como fuente de infección Los hongos de género Candida son integran
para el hombre (alimentos, plantas, tela adhesiva, tes habituales de la biota del organismo humano,
etc.). Los agentes de micosis superficiales pue viven sobre la superficie de la mucosa digestiva
den pasar de persona a persona o de los animales o vaginal, o sobre la piel. Producen infecciones
al hombre, ya sea en forma directa o a través de superficiales, como vaginitis, estomatitis, derma
fómites. Los hongos productores de infecciones titis y compromiso ungueal y también invaden
profundas o sistémicas penetran en el organismo órganos profundos, lo que da lugar a las candi
humano por traumatismos cutáneos, por inhala diasis diseminadas o viscerales. Estas últimas se
ción y, muy raras veces, por vía digestiva. comportan com o micosis oportunistas.
Enferman al hombre valiéndose de diversos La pitiriasis versicolor es producida por leva
mecanismos y estas infecciones reciben el nom duras lipofílicas del género M alassezia, habitan
bre de m icosis. La colonización o contaminación tes normales de las zonas seborreicas de la piel
secundaria de tejidos necróticos se llama micoti- humana. Cuando la secreción sebácea del hospe
zación; los hongos del aire producen la sensibili dero presenta ciertos ácidos grasos, como el áci
zación alérgica de personas atópicas, lo que da do oleico, desarrolla la fase filamentosa, deno
origen a crisis asmáticas o rinitis. Por último, los minada M alassezia globosa o M .fu rfu r, que cau
hongos pueden ser responsables de intoxicacio san una dermatitis discromicoescamosa.
nes, ya sea por contaminación de alimentos por Las m icosis subcutáneas constituyen un grupo
los géneros Aspergillus, P enicillium , Paecilo- heterogéneo de afecciones cuyos agentes etioló-
myces y Fusarium , que produce m icotoxicosis, o gicos viven en la tierra o sobre restos de vegeta
por la ingestión de macromicetos del género Ama- les. Penetran en el organismo humano por trau
m’ta, que da lugar al micetismo. matismos cutáneos y mucosos, y habitualmente
Aquí sólo se tratarán las infecciones fúngicas causan infecciones localizadas que pueden com
o micosis. Se llaman m icosis superficiales aque prometer la dermis, la hipodermis, los músculos, y
llas cuyos agentes causales sólo invaden la capa los huesos o articulaciones. Algunas sólo progre
córnea de la piel o sus faneras y la superficie de san por contigüidad y otras lo hacen además por
las membranas mucosas. Son muy frecuentes, se vía linfática. Los hombres de campo y todo aquel
calcula que más del 20% de la población del que por sus tareas o aficiones esté más en contac
mundo las padece. Por lo común no comprome to con los vegetales y la tieira tienen mayor riesgo
ten la salud general y se transmiten de persona a de infectarse. En este grupo se incluyen la esporo-
persona o de los animales al hombre. Las m ico tricosis, la cromoblastomicosis, la lobomicosis, los
sis superficiales más comunes son las dermato- micetomas, la feohifomicosis, la rinosporidiosis y
fitosis, las candidiasis y la pitiriasis versicolor. las cigomicosis por Entomophtorales.
Las dermatofitosis son infecciones producidas por Las m icosis sistém icas endém icas son un con
hongos de los géneros M icrosporum , Tvicho- junto de afecciones con ciertas características
phyton y Epidevmophyton. Según su hábitat las comunes: 1) sus agentes causales son organismos
560 □ Cuarta parte - Infecciones micóticas y por algas
geófilos, 2) desarrollan en la tierra su forma fila la regla. Esos mecanismos pueden dividirse er
mentosa, a veces con la fase sexuada o teleo- innatos, que no requieren contacto previo con el
morfa, 3) su distribución geográfica es restringi hongo, y adquiridos, que se producen tras el con
da e incluso los más universales suelen mostrar tacto con él.
una incidencia mayor en determinadas regiones, La barrera mecánica que constituyen la piel y
4) infectan al hombre por vía inhalatoria y cau las mucosas es de gran importancia. N o sólo pot
san infecciones asintomáticas o respiratorias le su integridad anatómica, sino también por el pH,
ves y autorresolutivas; 5) en los tejidos del hom la presencia de ácidos grasos no saturados pro
bre y otras especies animales producen un talo cedentes de la secreción sebácea y la producción'
totalmente diferente al que desarrollan en la na de IgA secretoria en las membranas mucosas. Las
turaleza, en general consiste en elementos leva- ulceraciones y los traumatismos favorecen la pe
duriformes brotantes o esferas con endosporas; netración de los hongos hacia los tejidos más pro
6) las formas progresivas de infección, que no se fundos. Varios hongos patógenos son capaces de
curan en forma espontánea, son mucho menos fre adherirse a las células epiteliales y penetrar a tra
cuentes y los que las padecen por lo general po vés de ellas; así se inicia su acción deletérea para
seen factores predisponentes que disminuyen su los tejidos humanos.
resistencia inmunitaria. Se encuadran en este gru La segunda barrera defensiva se encuentra en
po la coccidioidom icosis, la histoplasmosis, la la sangre, donde las células fagocitarias y ciertas
paracoccidioidomicos, la penicilosis por P enici’ sustancias del suero ejercen una vigilancia per
Ilium m arneffei y la blastomicosis. La criptoco- manente. Entre las primeras, los neutrófilos son
cosis posee algunas características propias de las células que acuden con más rapidez al foco
estas m icosis y otras de las infecciones oportu de penetración de los hongos. Son capaces de
nistas, dado que su distribución geográfica es fagocitar y lisar levaduras, mediante un mecanis
universal y más del 90% de los casos de criptoco- mo dependiente de la mieloperoxidasa o indepen
cosis diseminada en la actualidad se asocian con diente de ella. También destruyen las hifas de los
la enfermedad por HIV. hongos filamentosos. Los macrófagos son aptos
El último grupo comprende las m icosis sisié- para fagocitar y lisar tanto esporas de diversos
m icas oportunistas. Los microorganismos cau hongos com o elementos levaduriformes. Algu
sales son poco virulentos y sólo afectan al hom nas subpoblaciones linfocitarias, como las natu-
bre cuando éste padece algún grado de compro ral killer, generan la destrucción de elementos
miso inmunitario. Los hongos que causan estas fúngicos por liberación de sustancias letales, sin
micosis tienen una amplia distribución geográfica. necesidad de fagocitar. Entre las sustancias
El sexo, la edad o la raza del hospedero no con séricas se destaca la transferrina insaturada, que
dicionan la aparición de la enfermedad, y las fuen actúa com o factor fungistático frente a derma-
tes de infección pueden ser endógenas (Candida) tófitos, hongos del género Candida, cigomicetos
o exógenas (Aspergillus, Rhizopus, Penicillium y otros. Una betaglobulina actúa como factor aglu
y otros). Los agentes causales» excepto Candida, tinante que facilita la fagocitosis de las levaduras.
no son dimorfos ni causan primoinfecciones be La mayor parte de las infecciones fúngicas origi
nignas que confieren cierta inmunidad. Todos los nan una doble respuesta inmune: humoral, median
hongos causantes de m icosis oportunistas son te la producción de anticuerpos, y celular, por la
capaces de desarrollarse a 37®C, adaptarse a ba proliferación de grupos celulares más aptos para
jos potenciales de oxidorreducción y vivir con la ingestión y lisis de las células fúngicas. Este
concentraciones de 0^ y COj similares a las de último, sin duda el mecanismo de mayor impor
los tejidos. tancia, está basado en la activación de macrófa
Dada la abundancia de fuentes de infección y gos por parte de los linfocitos T helper CD4-J-. Hay
la frecuencia de los contactos con las esporas fún- numerosísimas comprobaciones, tanto experi
gicas, es lógico suponer que los mecanismos de mentales como clínicas, que permiten afirmar que
fensivos del organismo humano son muy efica la falla del circuito células CD4+/macrófagos es
ces, dado que las m icosis son la excepción y no la principal responsable de la aparición de las mi
C apítulo 66 - G eneralidades de m icología m édica □ 561
cosis en los seres humanos. Este defecto se ob nes de la inmunidad mediada por células, no pre
serva en pacientes con candidiasis mucoculánea disponen a la aparición de micosis.
crónica, en quienes padecen m icosis asociadas El diagnóstico de las micosis se basa en la pre
con la enfermedad por HIV y en los portadores sunción clínica, luego confirmada o descartada
de linfomas en tratamiento quimioterápico. En por los resultados de los estudios de laboratorio.
estos dos últimos casos son frecuentes las candi Las m icosis profundas carecen de manifestacio
diasis recurrentes en las mucosas del aparato di nes clínicas específicas y las subcutáneas suelen
gestivo, así como criptococosis, histoplasmosis manifestarse con un cuadro clínico bastante ca
y coccidioidom icosis diseminadas. Lo mismo racterístico, que puede confundirse con el de in
ocurre en receptores de trasplantes de órganos que fecciones similares de otro origen. Las infeccio
reciben medicación inmunosupresora. nes fúngicas sistémicas por lo general no se aso
En condiciones normales la infección fiíngica cian con signos y síntomas típicos. Hay ciertos
determina la puesta en marcha de la inmunidad datos que ayudan a orientar la presunción diag
específica mediada por células, que induce la pro nóstica, como la edad, el sexo, la profesión, la
liferación de células T helper capaces de activar procedencia y la existencia de otras enfermeda
a los macrófagos. Esta cooperación se obtiene a des subyacentes o tratamientos médicos que pro
través de la secreción, por parte de las células ducen inmunodepresión. Los estudios por imá
TCD4+, de citocinas del tipo Th, com o IL-2, genes facilitan el reconocimiento de todas las
IL-12 e IN F -y, los macrófagos se tornan así con localizaciones de estas afecciones, pero no con
más capacidad de fagocitar y Usar células fúngi- firman su diagnóstico.
cas, pero también se agregan y forman granulo Los exámenes de laboratorio suelen dividirse
mas epitelioides compactos, que focalizan la in en técnicas directas e indirectas de diagnóstico.
fección e impiden nuevas diseminaciones. Con Las primeras procuran satisfacer los postulados
el tiempo estos granulomas se rodean de una capa de Koch y las segundas estudian la respuesta in
de fibras colágenas que en algunas circunstan mune específica o detectan la presencia de antí
cias se calcifica. En algunas personas la estimu genos fúngicos en los líquidos orgánicos. Para
lación de las células TCD4+ da origen a una res las técnicas directas de diagnóstico en las m ico
puesta de tipo Th2, que produce la secreción de sis profundas pueden ser de utilidad los siguien
citocinas tales como IL-4 e IL-10, que deprimen tes materiales: esputo, lavado broncoalveolar,
la actividad de los macrófagos, originan granu punción-aspiración de nódulos o abscesos, biop-
lomas laxos poco eficientes y estimulan a los sias de piel, mucosas, ganglios linfáticos y otros
linfocitos B con gran producción de anticuerpos, órganos, LCR, orina, y líquido pleural, pericár-
hiper IgE y eosinofilia sanguínea. dico o peritoneal. Todas las muestras se recogen
Los linfocitos T cooperan con las células B en en recipientes estériles y con cierre hermético.
la producción de anticuerpos específicos, cuya La muestra de esputo se obtiene por la mañana,
función todavía no se conoce por completo. El después de una higiene bucal minuciosa, y el
nivel de anticuerpos aumenta en las micosis más enfermo debe ser instruido para reconocer cuán
crónicas y diseminadas, y desciende cuando la do es catarro bronquial y no saliva. La orina se
enfermedad mejora por un tratamiento adecua recolecta después de un lavado prolijo de los ge
do. En algunas m icosis se han encontrado inmu- nitales externos. En las mujeres se colocará tam-
noglobulinas específicas dentro de los granulo pón vaginal y sólo se recogerá el chorro medio
mas, por lo cual se sospecha que pueden impedir de la orina. En algunas micosis puede ser útil la
la dispersión de los antígenos fúngicos. También muestra de orina después de un masaje prostético.
se sabe que activan al complemento, tanto por la Las biopsias se dividen en dos porciones o se to
vía clásica como por la alternativa; de esta forma man dos muestras, esto permite colocar una par
incrementan la inflamación por acción quimio- te en solución fisiológica estéril, para el estudio
táctica y facilitan la fagocitosis de las células m icológico, y la restante en formol tamponado
fúngicas por opsonización. Las hipogammaglo- al 10% para el examen histopatológico. Este úl
bulinemias, que no se acompañan con alteracio timo también puede utilizarse para recoger di ver
562 □ Cuarta parte - Infecciones micóticas y por algas
(•
r
C apítulo 66 - G eneralidades de m icología m édica □ 563
l
|: hongos es muy importante para el diagnóstico de C. albicans, búsqueda de arabitinol, mañosa o
' las micosis sisiémicas en enfermos con déficit enolasa en orina y suero; aglutinación de partí
arave de su inmunidad. En la actualidad sólo se
O culas de látex para glicoproteína de AspergiUus
I utiliza en forma rutinaria la aglutinación de par fum igatus, radioinmunoensayo para detectar un
tículas de látex sensibilizadas con gammaglo- p olisacárid o de H is to p la sm a c a p su la tu m y
bulina antipolisacárido capsular de Crypfococcus Western blot para los antígenos de Paracocci’
neoformans y una técnica de ELISA doble sand dioides brasilicnsis. Los inconvenientes de estas
wich para la detección de antígeno galactoma- reacciones son los lapsos relativamente breves
nano de la pared celular de AspergiUus fum igatus. en los que se encuentran antígenos en sangre u
Otras pruebas que se han empleado son la agluti orina» la falla de especificidad de algunas prue
nación de partículas de látex para antígenos de bas y la formación de inmunocomplejos.
dad en los cortes histopatológicos teñidos con com o las de los pies, producen hiperqueratosis
PAS o Grocott. En las formas clínicas de evolu- subungueal y destrucción de la lámina.
I ción prolongada la pared de los abscesos está El otro cuadro clínico es el granuloma candidiá-
; constituida por macrófagos y tiende a fornnar sico, un proceso más grave que desfigura al pacien
i granulomas mixtos, con centro supurativo y re- te y además del ataque bucoungueal produce lesio
' acción epitelioide con células gigantes en la pe- nes hiperqueratósicas de aspecto vegetante en la piel
I riferia. que cubre las panes salientes del cueipo, en espe
En la candidiasis mucocutánea crónica se ob» cial la frente, los pómulos, los codos y las rodillas.
; serva una hiperplasia epitelial, con acantosis y La candidiasis mucocutánea crónica no ocasiona
una respuesta inflamatoria crónica de la dermis candidiasis sistémica y su evolución no es habitual
constituida por linfocitos, plasmocitos y macró mente fatal, salvo que la muerte se produzca por
fagos. Las seudohifas de C andida sólo invaden infecciones bacterianas, acidosis diabética o des
la capa más superficial de la epidermis. La candi compensación de alguna endocrinopatía.
diasis del aparato digestivo genera ulceraciones
de la mucosa, reacción inflamatoria crónica no Candidiasis bucofaríngea
específlca y presencia de seudohifas de Candida. La candidiasis bucofaríngea aguda, de tipo seu-
domembranoso, es muy poco frecuente en los
adultos sanos. Puede presentarse hasta en un 5%
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
de los recién nacidos con peso normal y en el
Se considerarán las siguientes formas clínicas 10% de los ancianos. Fuera de estas edades ex
de candidiasis: tremas, este tipo de candidiasis bucofaríngea sue
le asociarse al empleo de antibacterianos de am
• Candidiasis mucocutánea crónica. plio espectro, al uso de altas dosis de corticoste-
• Candidiasis bucofaríngea. roides (locales o sistém icos), o a diabetes, leuce
• Candidiasis esofágica. mias, linfomas, enfermedades malignas, neutro-
• Candidiasis gastrointestinal. penia, así como empleo de fármacos citotóxicos,
• Candidiasis peritoneal. radiaciones o ambos. En las últimas décadas la
• Candidiasis pulmonar. causa más frecuente de candidiasis seudomem-
• Candidiasis urinaria. branosa aguda ha sido la infección por HIV. Los
• Candidiasis del endocardio. síntomas más comunes son sensación de quema
• Candidiasis diseminadas. zón, xerostomía, ageusia y odinofagia. Se com
prueban objetivamente seudomembranas blan
Candidiasis mucocutánea crónica quecinas, como leche cuajada, y eritema de la
Son candidiasis superficiales, de evolución cró mucosa bucal que sangra con facilidad.
nica y recidivante, que afectan la piel, las mucosas La candidiasis bucal crónica se observa en per
y las uñas de quienes padecen alteraciones meta- sonas que usan prótesis dentarias o con déficit
bólicas, endocrinas y de la inmunidad mediada de la inmunidad mediada por células, en grandes
por células. No mejoran con antifúngicos tópi fumadores y en presencia de otras causas de irri
cos y habitualmente requieren fármacos de ac tación crónica de la mucosa bucal. Los síntomas
ción sistémica. Por lo general estos pacientes son son semejantes a los de la forma clínica anterior,
niños con enfermedad granulomatosa crónica, pero algo más leves, con diversos aspectos clíni
defectos de la inmunidad mediada por células, cos que podrían resumirse en formas atróficas e
diabetes, hipotiroidismo, hipoparatiroidismo, sín hipertróficas. En las primeras la lengua se pre
drome de Addison o enfermedad poliglandular senta despapilada y roja, el resto de la mucosa
autoinmune. bucal está eritematosa y despulida. En las for
La manifestación más frecuente es la candidia mas hipertróficas hay macroglosia, lengua escro-
sis bucal crónica de tipo hipertrófico, acompaña tal, lesiones de la mucosa bucal, blancas y sa
da por distrofias ungueales. Estas últimas, que lientes, que pueden asemejarse al liquen rojo pla
pueden comprometer tanto las uñas de las manos no, la leucoplasia o la papilomatosis florida.
568 □ Cuarta parte - Infecciones micóticas y por algas
tes, el uso de sondas vesicales por períodos pro observa en pacientes con endocarditis bacteriana
longados, la hipertrofia prosiática, los tratamien previa tratados con antibacterianos en dosis altas
tos con antibióticos, las exploraciones endos- durante períodos prolongados. Se produce con
cópicas, las malformaciones de las vías urinarias, mayor frecuencia com o complicación de la en
la vejiga neurogénica y la irradiación de la pel docarditis por Staphylococcus o Entevococcus.
vis por cáncer de cuello uterino. La cistitis por Otras causas que la favorecen son las válvulas
Candida es más frecuente en la mujer que en el protésicas, los catéteres cardíacos y la adicción a
hombre. drogas por vía intravenosa. En este último caso
La candidiasis renal se manifiesta como un cua las endocarditis se sitúan en general en las cavi
dro de pielonefritis y puede producirse tanto por dades derechas.
diseminación hemática de la infección (candide- El cuadro clínico es similar al de otras endo
mia) como por vía canalicular ascendente. En este carditis infecciosas: fiebre prolongada, soplo car
último caso las malformaciones de las vías uri díaco, anemia, insuficiencia cardíaca, espleno-
narias y la colocación de catéteres persistentes m egalia y fenóm enos em bólicos, además de
desempeñan un papel importante en su aparición. tromboembolismo pulmonar, cuando están afec
Cabe señalar también que el 80% de las candi tadas las válvulas derechas. La ecocardiografía
diasis diseminadas, así como los pacientes con bidimensional muestra vegetaciones endocár-
candidemias transitorias, pueden presentar loca dicas de gran tamaño. Clínicamente el diagnósti
lizaciones renales. Los síntomas observados son co puede sospecharse por los antecedentes del
fiebre, dolor lumbar, puñopercusión dolorosa, paciente, la falta de respuesta a los antibióticos y
dolor en los puntos ureterales, orinas turbias y la gravedad de las embolias que afectan a arte
hematuria. Los estudios por imágenes suelen rias medianas y grandes. La positividad de la re
poner en evidencia estrecheces de las vías urina acción de inmunodifusión, así como el desarro
rias, necrosis de las papilas, bolas fúngicas y di llo de C andida en los hemocultivos ayudan a in
latación de las pelvis renales. crementar la sospecha. Por lo general se aísla C.
La candiduria no constituye, por sí sola, un parapsilosis y C. tropicalis.
buen elemento de sospecha de candidiasis dise El pronóstico de la endocarditis se relaciona
minada. Sin embargo, su hallazgo en pacientes con los émbolos. Cuando éstos afectan arterias
inmunocomprometidos siempre debiera tenerse medianas o grandes determinan la muerte de)
en cuenta. Los mayores problemas en las candi paciente. Por esta razón, las endocarditis de las
diasis urinarias se relacionan con la determina cavidades izquierdas tienen una indicación qui
ción de la zona afectada, infección baja o alta, ya rúrgica indiscutida.
que esta última con frecuencia es consecuencia
de una candidemia. Ayudan a sospechar la infec Candidiasis diseminadas
ción alta la obtención de cultivos positivos a par Candidiasis congénita neonatal
tir de punciones suprapúbicas, la existencia de La candidiasis congénita se origina en la infec
un sedimento urinario patológico con cilindros ción preparto del endometrio y puede ser causa de
granulosos, cilindros hialinos, leucocitos y hema aborto. El recién nacido presenta una erupción
tíes, junto a seudohifas de Candida", la prueba de eritematovesiculosa generalizada. Este proceso es
inmunodifusión positiva con antígeno citoplas- casi siempre superficial y de evolución benigna.
mático de C. albicans, en especial la conversión La candidiasis diseminada aguda de los neona*
de negativa a positiva de esta reacción en pacien tos de bajo peso y los pretérmino determina fie
tes con antecedentes de inmunocompromiso, y bre que no responde a los antibióticos. En gene
el desarrollo de hemocultivos positivos. ral son niños que están en incubadora, con trata
mientos intensivos, canalizaciones venosas y ali
Candidiasis del endocardio mentación parenteral. Es común la aparición de
Los hongos del género C andida son agentes meningoencefalitis con LCR claro. Compromete
causales de endocarditis infecciosas sobre vál también las vías urinarias, en las que produce he
vulas previamente dañadas. Esta localización se maturia, piuría y obstrucción ureteral por bola
570 □ Cuarta parte - Infecciones micóticas y por algas
fiingica. La artritis purulenta se observa con me mieloide aguda sometidos a tratamiento especí
nor frecuencia. fico y con neutropenia. En estos casos los pa
Los hemocuUivos son casi siempre positivos, cientes con procesos febriles que no respondan a
al igual que los cultivos de LCR, de punción arti 5 días de tratamiento con antibióticos deben re
cular y de orina. cibir anfotericina B en forma empírica.
Las manifestaciones clínicas más comunes de
Candidemias en pacientes no neutropénicos la candidiasis diseminada son fiebre, mialgias,
En los últimos años se han observado, con hipotensión arterial, arritmias cardíacas, deterioro
mucha frecuencia, enfermos en los cuales hay del estado general, alteraciones del estado de con
pasaje de Candida a la circulación sanguínea, con ciencia y aparición de nódulos cutáneos. En las
aparición de focos secundarios o sin ellos. Cuan formas fulminantes hay un cuadro de coagulación
do las personas afectadas no son neutropénicas, intravascular diseminada y shock endotóxico.
esta candidemia tiene un curso leve y autolimi- El diagnóstico de certeza es dificultoso por el
tado. Las causas que favorecen su presentación bajo rendimiento de los hemocultivos. Pese a las
son el uso de catéteres venosos, la cirugía abdo mejoras introducidas en esta técnica de diagnós
minal, en especial sobre el aparato digestivo, y tico, con los sistemas de lisis-centrifugación y la
ia adicción a la heroína marrón por vía intrave incorporación de métodos de lectura radiomé-
nosa. Clínicamente se caracteriza por un episo tricos o fotocromáticos, sólo en el 50% de los
dio febril inicial, que llega a los 39®C o 40°C y casos los hemocultivos son positivos. La búsque
dura alrededor de 48 horas. Luego hay un perío da de antígenos de Candida en suero o en orina,
do de latencia, de alrededor de 2 semanas, segui por medio de técnicas de ELISA, RIA o agluti
do por la aparición de focos metastáticos. Éstos nación de partículas de látex con anticuerpos
dan origen a osteofoliculitis o nódulos cutáneos monoclonales, da también resultados inconstan
en las zonas pilosas del cuerpo, condritis en los tes. Sin embargo, su sensibilidad aumenta si se
cartílagos costales, osteom ielitis de costillas o repite en 2 o 3 muestras. La comprobación de
vértebras, y endoftalmitis. Las lesiones intraocu- metabolitos de C andida en los líquidos orgáni
lares suelen situarse cerca de la mácula y produ cos como el D-arabinitol o la mañosa carecen de
cen visión borrosa. En el examen de fondo de especificidad. Debido a la evolución aguda de
ojo se observan exudados algodonosos en la co- este proceso y al tipo de enfermos a los cuales
riorretina o en el vitreo. afecta, por lo común inmunocomprometidos gra
En estas candidemias los hemocultivos son po ves, la prueba de inmunodifusión en busca de
sitivos en una baja proporción de casos, debido a anticuerpos específicos es poco útil.
su carácter transitorio. Proporcionan buen rendi Dado las importantes dificultades de diagnós
miento para el diagnóstico las biopsias cutáneas con tico de esta forma clínica, se adopta en general la
estudio histopatológico y los cultivos, la punción conducta de tratar con antifúngicos sistém icos a
de los abscesos y la aspiración del humor vitreo. todo paciente con factores de riesgo y cuadro clí
nico compatible, que presente colonización por
Candidiasis diseminada aguda C andida en dos o más lugares no contiguos.
Se observa en enfermos con hospitalizaciones
prolongadas que presentan abundante coloniza Candidiasis diseminada crónica
ción por Candida en el tracto digestivo, con caté También se la conoce com o candidiasis hepa-
teres venosos, en tratamientos prolongados con toesplénica y afecta a pacientes con anteceden
antibacterianos, corticosteroides o fármacos cito- tes de leucemia aguda y neutropenia prolongada.
tóxicos, en neutropénicos o en el posoperatorio Casi todos tienen colocado un catéter central para
de la cirugía abdominal. La nutrición parenteral, la administración de la quimioterapia. El proce
tas hcmopatías malignas y los tumores sólidos so se hace evidente al aumentar los recuentos
también son causas predisponentes de importan leucocitarios próximos al nivel normal.
cia. La candidiasis diseminada aguda es particu El cuadro clínico se caracteriza por fiebre pro
larmente frecuente en los pacientes con leucemia longada, ictericia, hepatoesplenomegalia, eleva
Capítulo 67 ‘ Candidiasis □ 571
ción de la fosfatasa alcalina, cilindruria, piuría, escamas, uñas y exudados mucosos es un fuerte
iTiicrohemaiuria, y ap arició n de im ág en es hipoe- argumento a favor de candidiasis superficial, en
coicas en el hígado, el bazo y los riñones. Estas especial si coexiste con un cuadro clínico com
dltimas corresponden a abscesos múltiples, que patible. La presencia de elementos levadurifor
también pueden ponerse en evidencia mediante mes sin seudohifas coincide habitualmente con
!a tomografía computarizada de abdomen. La colonización sin infección, salvo que la especie
mayor parte de las veces estos enfermos son tra aislada luego sea identificada com o C. glahrata
tados en forma empírica debido a la im posibili o C ./am aro.
dad de obtener cultivos de C andida o estudios La observación de levaduras y seudohifas en
histopatológicos confirmatorios a través de la secreciones bronquiales o esputo no permite diag
punción biopsia hepática. La punción dirigida nosticar candidiasis pulmonar. Igual hallazgo en
mediante ecografía o tomografía ha mejorado orina (obtenida en la forma adecuada) es un dato
algo el rendimiento de estos estudios. a favor de la infección urinaria, pero sin estable
Además de los expuestos, se han descripto ca cer su altura.
sos localizados de candidiasis osteoarticular por Estos microorganismos se cultivan con facili
infiltraciones intraarticulares con corticosteroi- dad en medios habituales, como el agar-glucosado
des, endoftalmitis postraumáticas o posquirúr- o agar-miel de Sabouraud, a los que se adicionan
gicas, colecistitis, prostatitis, etcétera. antibióticos, y se incuban a 37®C. Para los hemo
cultivos en la actualidad se prefiere el método de
lisis-cemrifugación con saponina, que permite la
DIAGNÓSTICO
siembra directa en medios sólidos y esto hace más
Los materiales útiles para el diagnóstico de las rápida su lectura. La obtención de cultivos posi
candidiasis son escamas, uñas, pelos, biopsias de tivos tiene valor diagnóstico cuando los materia
piel, punción de abscesos cerrados, biopsias de les examinados fueron obtenidos de líquidos o
órganos profundos, LCR, líquido pleural o peri- biopsias procedentes de sitios normalmente es
loneal, lavado broncoalveolar, hemocultivos y tériles, com o líquido pleural, peritoneal o articu
estudios serológicos. El examen microscópico lar, abscesos cerrados, LCR. sangre y humor vi
directo puede llevarse a cabo en fresco, colocan treo. Tienen poco valor diagnóstico los cultivos
do el material entre un portaobjetos y un cubre p o sitiv o s de esp uto, secrecio n es broncoas-
objetos, con una gota de hidróxido de potasio al piradas, materia fecal, orina y líquidos de drena
10% o blanco calcoflúor. Estas preparaciones se jes quirúrgicos. La presencia de cultivos positi
observan con objetivo de 400 aumentos. Cuando vos con exámenes microscópicos directos nega
se usa el blanco calcoflúor es necesario emplear tivos carece de todo interés cuando los especí
el microscopio de fluorescencia. También se exa menes son escamas, uñas o exudados de mucosas.
minan extendidos teñidos con los métodos de La importancia diagnóstica de los procedimien
Gram o Giemsa, así como preparaciones histopa- tos serológicos es un asunto muy debatido. En
tológicas procesadas por las técnicas de PAS y general puede afirmarse que si se buscan anti
Grocott. En todas estas preparaciones, en casos cuerpos específicos de tipo IgG, mediante reac
positivos se observan elementos levaduriformes ciones de inmunodifusión en gel de agar o con-
y seudohifas. Estas estructuras son grampositivas, trainmunoelectroforesis con un antígeno citoplas-
toman bien la coloración de Giemsa, se tiñen de mático de C. alhicans, en especial si éste es de
rojo con PAS y de marrón oscuro con Grocott. tubos germinativos, se obtendrá la máxima espe
La observación de levaduras y seudohifas en cificidad. Esta prueba da resultado positivo en
los materiales obtenidos (por punción de un abs toda persona que sufra candidemia y sea inmuno-
ceso cerrado, de líquido pleural o peritoneal sin competente. Sin embargo, esta candidemia pue
drenajes previos, en LCR o en una biopsia de te de ser transitoria, sin focos secundarios y a ve
jido) tiene un valor indiscutido para el diagnósti ces sin repercusión sobre el estado general del
co de candidiasis profunda. La comprobación de paciente. La reacción es negativa en los inmuno-
estos mismos elementos en los especímenes de com prom etidos graves, en particular en los
572 □ Cuarta parte - Infecciones micóllcas y por algas
neutropénicos y durante las fases iniciales de la candidemias por catéter tienen habitualmente
candidiasis sistémica. En consecuencia, su valor muy buena evolución.
para el reconocimiento de las formas disemina
das agudas es limitado.
TRATAMIENTO
La búsqueda de antígenos circulantes se reali
za por medio de técnicas inmunológicas« como La anfotericina B está indicada en el tratamien
la aglutinación de partículas de látex sensibiliza to de las formas diseminadas agudas, en particu
das con suero anticándida de conejo, o por ELISA lar cuando se trata de enfermos inmunocompro
o RIA utilizando anticuerpos monoclonales. Tam metidos o neutropénicos. Se emplea en dosis de
bién es posible detectar fracciones químicas de 0,7 a 0,8 mg/kg/día, diluida en 500 mL de solu- ■
estos antígenos en los líquidos orgánicos, por ción de dextrosa al 5%, que se administrarán por ■
medio de la cromatografía gas-líquido de alta vía intravenosa en 4 a 6 horas. Si este tratamiento ’
resolución; ésta permite comprobar la presencia falla o no es tolerado, puede recurrirse a la anfo-
de mañosa y D-arabinitol. tericina B liposómica, que es mejor tolerada y per
Las antigenemias en las candidiasis sistémicas mite administrar dosis de hasta 4 o 5 mg/kg/día.
son fugaces; la sensibilidad de estas pruebas au Recordar que este tratamiento sólo se emplea en
menta con la repetición de las reacciones y con forma excepcional debido a su elevado costo.
la concentración de las muestras, en particular Los compuestos azólicos son utilizados en el
las de orina. tratamiento de las candidiasis digestivas, de las
La más utilizada de todas las pruebas es la aglu infecciones urinarias, en las candidemias transi
tinación de partículas de látex, pero su sensibili torias, asociadas con catéter o drogadicción en
dad y especificidad son controversiales. enfermos no neutropénicos, y en la candidia
El diagnóstico de las candidiasis diseminadas sis mucocutánea crónica. En esta última se pre
agudas, en particular en enfermos neutropénicos, fiere el ketoconazol, por su eficacia y bajo pre
es siempre difícil. cio. En las restantes se utiliza habitualmente el
La clasificación de las especies aisladas se rea fluconazol, que se administra en dosis de 600 a
liza de acuerdo con las técnicas ya explicadas en 1.200 mg/día en las formas clínicas más graves,
Etiología. como la candidiasis diseminada crónica y las in
fecciones urinarias altas, a razón de 400 mg/día
en las fungemias e infecciones urinarias bajas, y
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
de 200 mg/día en las afecciones del aparato di
La mayoría de las veces las candidiasis dise gestivo. Debe recordarse que el efecto de los
minadas o viscerales pueden confundirse con in azólicos sobre C andida es fungistático y por este
fecciones bacterianas. También pueden imitar a motivo el tratamiento debe prolongarse por se
otras causas de fiebre de origen desconocido. La manas o meses.
candidiasis esofágica presenta síntomas semejan Como ya se señaló, en las endocarditis de vál
tes a los producidos por infecciones herpéticas y vulas izquierdas está indicado el reemplazo qui
por las aftas; igual sucede con la candidiasis rúrgico.
bucofaríngea. Las formas mucocutáneas cróni Recientemente se han incorporado dos nuevas
cas, pese a exhibir un cuadro clínico muy carac drogas antifúngicas al arsenal terapéutico utili
terístico, pueden confundirse con dermatoficias zado en candidiasis sistémicas, el acetato de cas-
hiperqueratósicas en inmunocomprometidos. pofungina y el voriconazol. La primera es una
equinocandina que inhibe la síntesis del (3 1-3
glucano y es fungicida. Sólo puede aplicarse por
PRONÓSTICO
vía venosa en dosis de 50 a 70 mg/día. Resultó
Es extremadamente variable. Depende de la eficaz en todas las formas clínicas de candidiasis
forma clínica y del estado inmunitario del pacien invasora y tiene muy buena tolerancia. El vori
te. Las formas diseminadas agudas en enfermos conazol es un compuesto triazólico vecino del
neutropénicos suelen ser las más graves; las fluconazol, con mayor potencia antifúngica y
/ij
C apítulo 67 - Candidiasis □ 573
(V
espectro de acción. Está indicado en las candi rotación adecuada de las canalizaciones venosas, (Ci
diasis debidas a especies menos susceptibles al la buena higiene de éstas y el control de las
fluconazol {Candida glabraía y C andida krusei). candidiasis digestivas o cutáneas.
Puede administrarse por vía intravenosa u oral, En los receptores de trasplantes hepáticos o ((
[as dosis varían de 3 a 6 mg/kg/cada 12 horas. alogénicos de médula ósea se aconseja el uso de
fluconazol o itraconazol en solución, por vía oral, «
a fm de reducir la alta incidencia de candidiasis
PROFILAXIS U,
sistémicas. Algunas instituciones adoptan igual
conducta con los pacientes que sufren leucemias
No hay, en realidad, medidas profilácticas es
peciales. Éstas son, fundamentalmente, el buen durante los lapsos de neutropenia provocados por
(t,
manejo de la terapéutica antimicrobiana, evitar los tratamientos antiblásticos y en aquellos que (t.
indicaciones innecesarias, así como el empleo de van a permanecer en terapia intensiva por más
antibióticos de espectro excesivamente amplio, de tres días después de una intervención quirúr ((
la moderación de la terapia inmunosupresora, la gica abdominal.
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Consultar al final del capítulo Generalidades de micología médica.
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Histoplasmosis
Ricardo Negroni
de la Plata en el cono sur de América. En la Repú inflamatoria, que es poco eficaz, está constituida
blica Argentina su distribución es amplia y abarca por neutrófilos y macrófagos no activados. Des
tanto áreas rurales como grandes ciudades. pués de la tercera semana se instala la inmuni>
La mayor parte de las infecciones son asinto- dad adquirida mediada por células. Los linfocitos
máticas o se presentan como cuadros respirato T sensibilizados producen citocinas de tipoT hl,
rios agudos, que se curan en forma espontánea. que agregan a los macrófagos y los activan do
El diagnóstico retrospectivo se hace por la positi tándolos de capacidad lítica sobre las levaduras
vidad de la prueba cutánea con histoplasmina de H. capsulatum. Se constituyen así granulomas
(antígeno de la fase m icélica de H . capsulatum ). epitelioides, con una zona central de necrosis
En la Argentina, entre el 20% y el 40% de la po caseosa y una cápsula externa de fibras colágenas,
blación adulta sana presenta intradermorrea- que con el tiempo tienden a calcificarse. Esto
cciones positivas con este antígeno. causa la muerte de gran cantidad de hongos pa
Las formas clínicas progresivas de histoplas- rásitos y la autolimitación de la infección.
mosis, que no tienden a la curación espontánea, Ya han sido señaladas las causas que pueden ori
se originan en defectos de la arquitectura pulmo- ginar el fracaso de este proceso defensivo en los
nar> o en alteraciones de la capacidad fagocitaria pacientes con formas progresivas de histoplasmosis.
y lítica de los macrófagos. Diversas situaciones
normales o patológicas actúan com o causas pre
ANATOMIA PATOLÓGICA
disponentes: el sexo masculino (relación 29:1),
la edad superior a los 50 años, el tabaquismo cró H. capsulatum produce, como respuestas tisu-
nico, el alcoholism o, el empleo de corticoste- lares, inflamación, necrosis y reparación. La in
roides, los fármacos inmunosupresores, los linfo- flamación consiste en infiltrados de polimorfonu-
mas, los trasplantes de órganos y, en época más cleares neutrófilos, hiperplasia histiocitaria y for
reciente, la infección por HIV. Esta última ha mación de granulomas epitelioides con células
ocasionado un notable incremento de la histo- gigantes. La necrosis es de tipo caseoso y la re
plasmosis diseminada en las áreas endémicas. paración se hace por fibrosis colágena con fuerte
Diversas especies animales se infectan, al igual tendencia a la calcificación. El cuadro histopa-
que el hombre, al inhalarlas microconidias proce tológico está íntimamente ligado al grado de efi
dentes de la fase micélica, que vive en la tierra. Es cacia de las defensas del hospedero. En las for
más frecuente en los perros, en los roedores do mas poco defensivas predominan la necrosis, los
mésticos y silvestres, y en los murciélagos. La his- infiltrados de neutrófilos y la hiperplasia histioci
toplasmosis no se transmite de hombre a hombre, taria simple. Los elementos levaduriformes son
ni de los animales al hombre en condiciones ha numerosos y se encuentran tanto dentro de las cé
bituales. lulas como fuera de ellas. Los pacientes con me
jores defensas exhiben granulomas epitelioides
compactos, con fibrosis periférica y escasos ele
PATOGENIA
mentos levaduriformes intracelulares. Para la me
Las microconidias de la fase m icélica de H. jor identificación de los hongos parásitos se re
capsulatum son inhaladas y penetran hasta los quiere el empleo de las tinciones de PAS y Grocott,
alvéolos pulmonares; allí son captadas por los así como la observación microscópica con l.OOO
macrófagos y en su interior se transforman en ele aumentos.
mentos levaduriformes brotantes. Éstos se pro
pagan por contigüidad y por vía linfática, hasta
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
provocar una diseminación hemática precoz en
los primeros 10 días consecutivos al contacto Se consideran las siguientes formas clínicas de
infectante. Esta fungemia por lo común es asin- histoplasmosis;
tomática y lleva a H. capsulatum a parasitar los
órganos ricos en sistema monociticohistiocitario. • Infección asintomática.
En las fases iniciales de la infección la respuesta • Primoinfección pulmonar aguda.
C apítulo 68 - H istoplasm osis □ 577
r
me ocular, presuntamente vinculado con la histo- am onio para descontam inar la muestra. La
plasmosis. Los histoplasmomas son asintomá- incubación se hace a 28®C.
ticos y pueden confundirse con los tumores be Los hemocultivos se realizan con la técnica de
nignos y malignos del pulmón. La fibrosis me- lisis-centrifugación, utilizando sangre venosa
diastínica puede determinar la compresión extrín anticoagulada con polianetolsulfonato de sodio
seca de la vena cava superior y del esófago. al 0,4% y solución de saponina al 5%. Dan resul
El síndrome ocular es una coriorretinitis cróni tados positivos en más del 80% de las histoplas-
ca que ocasiona desprendimiento de retina, he mosis asociadas con la enfermedad por HIV.
morragias y cicatrices blanco-amarilientas. Se la
observa en mujeres entre los 30 y 50 años con Pruebas inmunológicas
mayor frecuencia que en varones y predomina La reacción cutánea con histoplasmina al I/l 00
en portadores del antígeno de histocompatibilidad se torna positiva 7 a 10 días después del contacto
MLA B7. Las pruebas cutáneas con histoplasmi- infectante y permanece como tal durante años;
na son positivas, pero las reacciones serológicas por lo tanto, una respuesta positiva indica infec
son negativas o denotan títulos bajos; en la reti ción presente o pasada. Esta prueba da resultado
na, H. capsulatum no ha sido hallado ni cultiva negativo en las formas progresivas graves, lo que
do. Sin tratamiento produce ceguera en la mitad pone en evidencia la falla de la inmunidad celu
de los casos. lar. La reacción cutánea puede hacer que las prue
bas serológicas den resultado positivo, lo que hace
más difícil su interpretación; por lo tanto, no es
DIAGNÓSTICO
aconsejable repetirlas.
Los materiales útiles para el diagnóstico pue Las pruebas de inmunodifusión en gel de agar,
den ser esputo, secreciones broncoaspiradas, de contrainmunoelectroforesis y de fijación de
biopsias de piel, mucosas, ganglios linfáticos, as complemento, con histoplasmina o con antígenos
piración o biopsia de médula ósea, sangre peri de la fase levaduriforme de H. capsulafum , 2 a 6
férica heparinizada o anticoagulada y orina. Los semanas después de la infección dan resultado
materiales deben enviarse al laboratorio lo antes positivo. La inmunodifusión con histoplasmina
posible, refrigerados y en recipientes estériles. es la reacción serológica más específica; la apa
Las biopsias deben seccionarse en dos partes, una rición de la banda H significa histoplasmosis ac
ac coloca en un recipiente estéril con solución tiva, en tanto que la banda M puede aparecer
salina isotónica y la otra en solución al 10% de como consecuencia de una infección pasada o de
formol en buffer de pH 7,2 para histopatología. haberse efectuado intradermorreacciones. La
El examen microscópico de los materiales no fi contrainmunoelectroforesis es algo más sensible
jados en formol se lleva a cabo en extendidos fi e igualmente específica. La reacción de fijación
nos teñidos con Giemsa y con lente de inmersión de complemento puede cuantificar el tenor de
(1.000 x). Esta tinción también puede emplearse anticuerpos séricos; el título de estos últimos se
para examinar la capa de glóbulos blancos en una relaciona con la gravedad de la enfermedad y
muestra de sangre heparinizada y centrifugada. suele descender cuando el tratamiento específi
En las formas diseminadas agudas los resultados co produce la mejoría clínica. Esta prueba care
suelen ser positivos. Para el estudio de los cortes ce de especificidad y da reacciones cruzadas con
histopatológicos se prefiere la tinción de Grocott P. hrasiliensisy C. im m itis y B. derm aíitidis. Las
con metenamina de plata. reacciones serológicas son negativas en el 70%
A los cultivos en medios de Sabouraud con glu de los casos asociados con enfermedad por el
cosa o miel, agar-papa glucosado y agar-sangre, HIV, pese a su gravedad. Los estudios de labora
se agregan antibióticos y se los incuba a 28®C y torio de rutina suelen mostrar aceleración de la
37®C. Para los cultivos de materiales muy conta eritrosedimentación, anemia, neutropenia, hipoal-
minados, como las secreciones bronquiales o el buminemia e hipergammaglobulinemia en las
esputo, se prefiere el agar-extracto de levadura formas graves de histoplasmosis.
sin glucosa, con el agregado de hidróxido de
C apitulo 68 • H istoplasm osis G 579
Bibliografía
i Consultar a! final del capítulo Generalidades de micología médica.
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Paracoccidioidomicosis
Ricardo Negroni
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582 Q Cuarta parte • Infecciones micóticas y por algas
de la piel vecina. Con frecuencia son atacados fondo granuloso y sangrante. Cuando están afec
los ganglios abdominales y retroperitoneales. El tados los pulmones, los pacientes refieren disnea
bloqueo de los linfáticos abdominales suele ori de esfuerzo, tos, expectoración mucopurulenta o
ginar síndromes de malabsorción y ascitis quilosa. hemoptoica, y la radiografía muestra infiltrados
Es común comprobar hepatoesplenomegalia, abs intersticiales, difusos, lineales o micronodulilla-
cesos subcutáneos fríos y osteomielitis con pro res. Por lo general estos últimos se sitúan en los
ducción de áreas de osteólisis en las metáfisis de campos medios y se expanden en forma centrí
los huesos largos. En la radiografía los pulmones fuga (en alas de mariposa).
suelen no mostrar lesiones, aunque es factible Las lesiones cutáneas pueden situarse en cual
encontrar P. brasiliensis en secreciones bronquia quier parte, pero predominan en la cara, cerca de
les y biopsias peribronquiales. Las lesiones los orificios naturales. Son nódulos rojo-violá-
mucosas son excepcionales y las cutáneas adop ceos, de consistencia firme, que se ulceran y son
tan la forma de pápulas acneiformes, papulopús- cubiertos por costras serohemáticas; la remoción
tulas, pápulas ulceradas y escrofuloderma. Las de éstas deja ver un fondo granuloso con punti
meningoencefalitis son raras, en ellas el LCR es llado hemorrágico. El fondo de las úlceras puede
claro con pleocitosis linfocitana, hiperproteino- tornarse vegetante, de aspecto verrugoso y a ve
rraquia y reacciones positivas para las globulinas. ces se forman placas por confluencia de varias
P. brasiliensis puede hallarse en el pus de los lesiones.
ganglios, en las lesiones cutáneas, en los absce La paracoccidioidomicosis crónica multifocal
sos y en el sedimento urinario; con frecuencia compromete, por lo general en forma simultánea,
los hemocultivos son positivos. Las reacciones los pulmones, las mucosas aerodigestivas supe
serológicas muestran un título elevado de anti riores, la piel y los ganglios linfáticos. Estos últi
cuerpos específicos y las pruebas cutáneas con mos se reblandecen y supuran, en algunos casos
paracoccidioidina son negativas. se ulceran hacia la piel, en forma similar al escro
fuloderma tuberculoso. El compromiso de las
Forma crónica tipo adulto glándulas suprarrenales puede dar origen a una
Es más frecuente en hombres de más de 35 enfermedad de Addison típica o, con mayor fre
años. El 90% son trabajadores rurales o han des cuencia, a un hiposuprarrenalismo sólo descubier
empeñado esas tareas en el pasado, la mayor parte to mediante estudios de estimulación de la glán
son alcohólicos crónicos, de bajo nivel socioeco dula con ACTH. Otras manifestaciones, menos
nómico o con algún grado de desnutrición. El comunes, son: meningoencefalitis crónica, gra
estado general se afecta lentamente; se comprue nulomas abscedados de cerebro, meningomie-
ba fiebre o febrícula, pérdida de peso, astenia y lorradiculitis, osteoartritis crónica, úlceras gas
adenopatías múltiples, pequeñas y de consisten trointestinales y lesiones del tracto genitourina
cia fírme. La afección puede aparentar ser unifo rio. La muerte puede sobrevenir por insuficien
cal o multifocal. En el primer caso se observan cia respiratoria, caquexia o por infecciones inter-
lesiones mucosas en la boca, la faringe, la larin currentes.
ge o en la nariz; con menos frecuencia compro P. bra silien sis se halla con facilidad en las
mete los pulmones en forma aislada. Las lesio biopsias de las lesiones focales, pero los hemo
nes bucales son úlceras poco profundas que asien cultivos son habitualmente negativos. Las reac
tan sobre una base infiltrada, rojo-violácea, de ciones serológicas muestran un título de anticuer
consistencia casi cartilaginosa; el fondo es granu pos específicos que es proporcional a la grave
loso y sangrante (estomatitis moriforme), los la dad del caso; la prueba cutánea con paracocci
bios se toman infiltrados y prominentes (labio dioidina suele ser positiva en los casos crónicos
trombiforme) y el tabique nasal suele ulcerarse unifocales con buen estado general y negativa en
en su parte inferior. Las lesiones laríngeas son los pacientes graves con lesiones múltiples.
frecuentes y producen disfonía, odinofagia y a
veces disnea obstructiva. El estudio laringos-
cópico muestra infiltración difusa y úlceras de
584 ü Cuarta parte - Infecciones micólicas y por algas
B ibliografía------------------------------------------------------------
Consultar ai final del capítulo Generalidades de micología médica.
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70
Coccidioidomicosis
Ricardo Negroni
Las primoinfecciones son benignas, cursan en áreas de supuración o caseosis. En los casos cró
forma asintomática o con un cuadro respiratorio nicos esos granulomas se hacen compactos, pre
autolimitado. Las formas progresivas, pulmona sentan un manto externo de células mononu-
res o diseminadas, se presentan con mayor frecuen cleares, con abundancia de linfocitos T CD4+ y,
cia en varones en la edad media de la vida. Son aun más externamente, una fibrosis colágena. En
más comunes en negros, filipinos y aborígenes los procesos agudos predomina la necrosis y la
americanos que en las personas de raza blanca. supuración. La m orfología de las esferas de
Las diversas causas de depresión de ia inmunidad C occidioides también es variable; en la enferme
mediada por células favorecen su aparición y el dad de evolución lenta forma esferas de 40 a
embarazo actúa como un factor predisponente. 60 |im de diámetro sin endosporas, en tanto que
Los perros y los roedores se infectan con e le en las formas diseminadas agudas produce esfe
vada frecuencia. La coccidioidom icosis no se ras grandes, de 80 }im o más de diámetro, con
transmite de hombre a hombre ni de los animales abundantes endosporas muy pequeñas en su in
al hombre. terior. Las formas parasitarias de C. immitis se
tiñen de rojo con el PAS y de marrón oscuro con
la técnica de Grocott.
PATOGENIA
Como ya se ha señalado, las artroconidias de
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Coccidioides penetran por vía inhalatoria y se alo
jan en los alvéolos pulmonares. A llí producen fo Se acepta la siguiente clasificación de las ma
cos de neumonía aguda, seguidos por la propaga nifestaciones clínicas de la coccidioidomicosis:
ción linfática del agente causal» con adenitis de
los ganglios biliares y mediastínicos. Dos o tres • Primoinfección pulmonar asintomática o sub-
semanas después de la infección comienza a ac clínica.
tuar la inmunidad adquirida mediada por células. • Primoinfección sintomática.
Se produce entonces un cambio en la respuesta • Neumopatía persistente.
inflamatoria, con la formación de granulomas epi- • Secuelas de la primoinfección pulmonar.
telioides altamente defensivos que limitan la pro • Coccidioidom icosis pulmonar crónica exca
gresión de la infección y destruyen gran cantidad vada.
de esferas. Por último se forman nódulos de con • Coccidioidom icosis diseminada subaguda.
tenido caseoso, con una capa externa fibrosa o cal • Coccidioidom icosis diseminada crónica.
cificada, en los cuales hay esferas muertas o vivas
y latentes. En este estado la reacción intradérmica La prim oinfección asintom ática es la más fre
de coccidioidina vira de negativa a positiva. cuente, comprobada en más del 60% de los in
La coccidioidomicosis progresiva se produce fectados.
como consecuencia de fallas de la inmunidad me Las formas de prim oinfección sintom ática son
diada por células o por la existencia de afecciones cuadros respiratorios de gravedad variable, con
pulmonares previas que dificultan la cicatrización manifestaciones semejantes a las de una gripe o
definitiva de los focos de neumonía iniciales. Las una neumonía de la comunidad. Dos rasgos dis
causas más frecuentes de fallas de la inmunidad son tintivos son el dolor torácico intenso y la eosino-
las vinculadas con la raza (negros, filipinos y aborí filia sanguínea. En las personas de raza blanca
genes americanos) y el sexo, así como el empleo de suelen observarse alteraciones clínicas, vincula
fármacos inmunosupresores, corticosteroides, anti- das con la hipersensibilidad a ios antígenos del
blásticos y la presencia de enfermedad por HIV. hongo, com o derrame pleural serofibrinoso, eri
tema nudoso, eritema polimorfo y poliartropatía
inflamatoria no supurativa {reumatismo d el de
ANATOMÍA PATOLÓGICA
s ie r to ). Los procesos pulm onares primarios
La coccidioidom icosis produce granulomas involucionan en forma espontánea en 3 a 6 se
epitelioides con células gigantes que muestran manas.
C apítulo 70 * C occidioidom icosis □ 589
Se denomina neum opaiía persistente a la que casos más avanzados el cuadro meníngeo se hace
perdura más de 6 semanas. Son infiltrados focales más evidente con la aparición de alteraciones de
0 reliculonodulillares en personas con anteceden la conciencia, convulsiones, rigidez de nuca y pa
tes de alcoholismo, tabaquismo o infección por rálisis de alguno de los pares craneanos. Esta lo
HIV. La persistencia de la fiebre, la eosinofilia y calización es de muy mal pronóstico, por su es
la aceleración de la eritrosedimentación indican casa respuesta a los tratamientos y la tendencia
progresión lesional y tendencia a la diseminación. marcada a producir hidrocefalia interna.
Como consecuencia de los focos de neumonía Las fo rm a s disem inadas crónicas se asocian
primaria quedan secuelas broncopulm onares di con mayor frecuencia con compromiso cutáneo,
versas, com o bronquiectasias, cavidades quísti- ganglionar, óseo y del sistema nervioso central.
cas, nódulos solitarios (coccidioidom as) y focos Las lesiones cutáneas son nódulos ulcerados con
de calcificación pulmonar. Las cavidades quís- fondo vegetante, que tienden a crecer en forma
licas son únicas, de paredes finas, sin infiltrados excéntrica. Los ganglios sufren habitualmente un
pericavitarios. producen hemoptisis y a veces tie proceso de reblandecimiento supurativo o ca
nen cierto nivel líquido. Los coccidioidomas son seoso, que conduce a la fistulización y ulceración
asintomáticos, presentan imágenes numulares de hacia la piel vecina, lo que origina un cuadro se
1 o varios centímetros de diámetro y crecimiento mejante al escrofuloderma tuberculoso. Las le
muy lento. siones óseas son focos de osteom ielitis crónica
La coccidioidom icosis pulm onar crónica exca de localizaciones diversas; son dolorosos y deter
vada se presenta en adultos del sexo masculino minan la tumefacción de las partes blandas veci
de más de 40 años y con afecciones pulmonares nas así com o la impotencia funcional de la re
previas, en especial enfermedad pulmonar obs gión afectada. En los casos más avanzados hay
tructiva crónica (EPOC). Su cuadro es idéntico hallazgos radiológicos de osteólisis, periostitis hi
al de la tuberculosis avanzada del adulto; evolu pertrófica, colecciones purulentas en los tejidos
ciona durante años y puede ocasionar la muerte blandos y, por último, fistulización hacia la piel.
en una elevada proporción de casos por insufi El compromiso del sistema nervioso se mani
ciencia respiratoria o caquexia. Los síntomas más fiesta con una meningoencefalitis crónica, en la
frecuentes son astenia, anorexia, pérdida de peso, que el LCR es claro, y hay predisposición mar
tos, expectoración purulenta y hemoptisis. Las cada a la hidrocefalia y la demencia.
imágenes radiológicas son infiltrados pulmonares
heterogéneos, biapicales y excavados.
DIAGNÓSTICO
La coccidioidomicosis diseminada subaguda se
observa en pacientes con alteraciones graves de la Los materiales útiles para el diagnóstico pue
inmunidad, como los portadores de linfomas tra den ser esputo, secreciones broncoaspiradas, pus
tados con fármacos antiblásiicos, los receptores de de abscesos fríos o adenopatías, biopsias de di
trasplante de órganos con tratamiento inmunosu- versas lesiones, LCR y, con menor frecuencia,
presor y los afectados por enfermedad por HIV. hemocultivos. Para estos últimos se prefieren una
Son preponderantes los síntomas generales co o varias muestras de 10 mL de sangre venosa
rrespondientes a un cuadro infeccioso grave: fie heparinizada, que se procesan por las técnicas de
bre prolongada, pérdida de peso, anemia, hepa- lisis-centrifugación. El LCR tiene características
toesplenomegalia, imágenes pulmonares reticulo- semejantes al de la meningitis tuberculosa, pero
nodulillares, cefalea, hipersomnia y manifesta la prueba de fijación de complemento, cuando se
ciones de cuadro meningoencefalítico solapado. emplea coccidioidina como antígeno, permite el
Los exámenes de laboratorio muestran acelera diagnóstico de certeza. En los materiales restan
ción de la eritrosedimentación, leucocitosis con tes, toda muestra no fijada en formol se examina
eosinofilia y anemia. El LCR es claro, con hiper- en fresco, entre portaobjetos y cubreobjetos, con
proteinorraquia, pleocitosis linfocitaria leve, una gota de solución salina isotónica o hidróxido
menor de 300 células/mL, hipoclorurorraquia y de potasio al 10%. En este tipo de preparación
reacciones positivas para las globulinas. En los pueden observarse las esferas típicas.
II
(•
590 □ Ciiaría parte • Infecciones micóticas y por algas
4f
If [.Qs cultivos se llevan a cabo en agarglucosado berculosis. El diagnóstico diferencial, por lo tan
o agai'-micl de Sabouraud o en agar extracto de to, debe realizarse con la tuberculosis, las mico
U levadura y glucosa, con el agregado de estrepto sis sistémicas y las enfermedades proliferativas
micina y cloranfenicol a razón de 100 jig/mL y malignas.
H cicloheximida en proporción de 500 ng/mL. La
incubación se realiza tanto a 28®C como a 37°C y
Ct TRATAMIENTO
en una semana se hacen visibles las colonias. Las
<• ailroconidias típicas se tornan evidentes entre los Se han utilizado anfotericina B, ketoconazol,
15 días y las 3 semanas. itraconazol y fluconazol. Con todos ellos se han
Cf Los ratones, los cobayos, las ratas y los háms- obtenido resultados discordantes, buenos o ma
tcrs son sensibles a la inoculación de estas artro- los; puede aseverarse que no existe un tratamiento
M coiiidias, por lo que las coccidioidom icosis ex de elección. En general para el tratamiento de las
t t
perimentales que se producen en ellos permiten formas clínicas más leves se emplean los com
la identificación del cultivo. puestos triazólicos itraconazol o fluconazol. Las
(• Las pruebas serológicas más utilizadas son la dosis son de 400 mg/día y se administran por vía
inmunodifusión, la contrainmunoelectroforesis y oral durante un año como mínimo.
(• In fijación de complemento. Como en la histoplas- La anfotericina B está indicada en quienes pre
mosis, estas pruebas se tornan positivas en los sentan compromiso neurológico o formas clínicas
M
casos de enfermedad progresiva y los títulos de más graves. La dosis media es de 0,8 mg/kg/día y
t» la fijación de complemento son proporcionales a la dosis total por serie de tratamiento suele supe
la gravedad del proceso. Después del tratamien rar los 2 g.
m to el tenor de anticuerpos baja hasta que las reac La cirugía puede ser necesaria para remover
ciones serológicas se hacen negativas. nódulos pulmonares solitarios o cavernas pulmo
m La intradermorreacción con coccidioidina tie nares con hemoptisis frecuentes, y para colocar
ne valor diagnóstico de infección presente o pa válvulas de derivación ventriculares en los casos
o sada, y en las formas progresivas graves suele de hidrocefalia.
a lomarse negativa.
Rn las formas diseminadas subagudas, en pa
PROFILAXIS
n cientes inmunocomprometidos, por técnica de
inmunoblot se han detectado antígenos de C. Los pacientes inmunocomprometidos deben
í» immitis en suero y orina. evitar las visitas a zonas endémicas, así como la
realización de ciertas actividades com o excava
m
ciones y juegos de béisbol. Las obras de irriga
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
n ción artificial de los suelos y la pavimentación
La coccidioidomicosis imita todas las manifes reducen la frecuencia de infección. Está en estu
t t taciones pulmonares y exirapulmonares de la tu dio la preparación de una vacuna.
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«I Bibliografía - ........
m Consultar al final del capítulo Generalidades de micologfa médica.
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Criptococosis
Ricardo Negroni
cir filamentos in vitro. Cuando esto sucede, las La variedad gattii de C. neoform ans sólo ha
hifas presentan las típicas anastomosis en gan> sid o r ec o n o c id a en z o n a s tro p ica les o
cho, propias de la clase Basidiom ycotina. En el subtropicales de Australia, África, Asia, sur de
extremo distal de algunos de estos filamentos se California y América del Sur. Su hábitat está re
observan dilataciones en forma de maza, de las lacionado con árboles del género Eucaliptus, en
cuales salen cuatro esporas globulosas y muy pe cuya corteza y frutos se encuentra, así como en
queñas. La germinación continua de estas basi- la tierra vecina a estos árboles.
diosporas da origen a la formación de cadenas La criptococosis ha sido descripta como una
cortas. Esta morfología es típica de Filobasidiella enfermedad espontánea en varias especies de ani
neoformanSy fase teleomorfa de C. neoformans var males, com o perros, gatos, bovinos, equinos y
neoformans. Con menos frecuencia se observan leopardos. N o se ha comprobado la transmisión
cadenas de basidiosporas elípticas que correspon interhumana ni de los animales al hombre.
den a F. bacillispora teleomorfa de C. gattii. La mayor parte de las infecciones producidas
Cryptococcus neoformans presenta 4 serotipos, por C. neoform ans comprometen las vías respi-
designados A, B, C y D. El A y el D corresponden ratorias, son benignas y autolimitadas. La pro
a la variedad neoformans y el B y el C a la variedad porción exacta de población que ha sufrido este
gattii. Recientemente al serotipo A se lo ha desig tipo de infección no se conoce bien, debido a que
nado como C. neoformans var grubii. En la Ar no hay un antígeno útil para pruebas cutáneas de
gentina la mayor parte de los casos asociados con hipersensibilidad retardada. En la autopsia de per
el sida son producidos por esta última variedad. sonas con otras causas de muerte se ha compro
Esta especie debe diferenciarse de otros inte bado la presencia de granulomas subpleurales con
grantes del género C ryptococcus así com o de C. neoform ans.
otras levaduras capsuladas, lo que se obtiene por Las formas progresivas de criptococosis pueden
pruebas bioquím icas. C. neoform ans produce estar ligadas o no a factores favorables que alte
hidrólisis de la urea en 4 horas, no asimila el nitra ren los mecanismos defensivos. Desde el adve
to de potasio ni la lactosa, no produce fermenta nimiento de la pandemia de sida, el 90% de los
ción de hidratos de carbono, utiliza el inositol y casos diagnosticados de criptococosis están aso
la creatinina, produce melanina en presencia de ciados con la infección por HIV. Otras causas que
ácido cafeico y otros sustratos, y se desarrolla a la favorecen son el embarazo, los trasplantes de
37®C. La variedad gattii es reconocida por su ca órganos, los linfomas tratados con fármacos cito-
pacidad de asimilar la D-prolina como única fuen tóxicos, los tratamientos con altas dosis de corti-
te de nitrógeno. costeroides, como los utilizados en el lupus eri-
tematoso sistém ico, o el pénfigo. Los casos en
los que no se identifican causas predisponentes
EPIDEMIOLOGÍA
evidentes son más frecuentes en el sexo masculi
La criptococosis es una micosis de distribución no y después de los 40 años. Por lo tanto, la crip
geográfica universal, aunque la frecuencia de tococosis tiene, desde el punto de vista epidemio
casos clínicos es mayor en Africa y América. La lógico, un comportamiento intermedio entre las
variedad neoform ans y grubii de C. neoform ans m icosis sistém icas endémicas y las sistémicas
viven en excrementos y nidos de palomas. Estos oportunistas.
sustratos constituyen su hábitat ideal, por su alto
contenido en creatinina y nitrógeno, y su con
PATOGENIA
centración salina adecuada. En ellos se han en
contrado formas viables de este hongo durante Por lo general la penetración de C. neoformans
más de dos años. La luz solar destruye estos se produce por vía inhalatoria, llega al alvéolo
microorganismos. En su hábitat natura! las leva pulmonar y allí comienza a reproducirse e inva
duras no poseen cápsula y su diámetro sólo al dir. El desarrollo de la cápsula le permite evadir
canza 1 o 2 )im, lo que facilita su pasaje a través la primera barrera defensiva, que son los neutró-
de los bronquios más pequeños. filos. Luego acuden al foco los linfocitos; entre
C apítulo 71 - C riptococosis Q 593
éstos, los NK {natural killer) que son capaces de hospederos normales, la reacción inflamatoria es
destruir un buen número de hongos por mecanis menos productiva o está totalmente ausente. Se
mos no fagociiarios. Los macrófagos sólo son ca producen así lesiones seudoquísticas completa
paces de fagocitar y lisar C. neoform ans cuando mente ocupadas por levaduras capsuladas, las que
han sido activados por los linfocitos T CD4+. Hay se encuentran rodeadas por unos pocos macró
que destacar que la cápsula, rica en glucuroxido- fagos y células linfocitarias.
mananos, deprime la actividad de las células El reconocimiento de C. neoform ans en los te
CD4+ (helper) y exalta la función de las células jidos se realiza mediante las técnicas de mucicar-
citotóxicas CD8+. De esta forma un exceso de mín de Mayer o de Alcian blue, que destacan la
aniígeno capsular impide la producción de una cápsula.
fagocitosis eficaz, así como la formación de gra
nulomas epitelioides compactos que focalizan la
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
infección. La activación de los macrófagos se
produce a través de las citocinas, en particular el La criptococosis puede presentarse como una
interferón gamma y la interleucina 2. En las for enfermedad pulmonar crónica, com o una afec
mas diseminadas, la presencia dcl polisacárido ción extrapulmonar unifocal con manifestacio
capsular origina la formación de complejos in nes cutáneas o neurológicas, o como un proceso
munes, así com o la activación del complemento diseminado.
por la vía alternativa, lo que incrementa la de La criptococosis pulmonar raras veces se ma
presión de la inmunidad mediada por células. nifiesta com o un proceso agudo. En este caso
De esta forma se originan dos tipos de criptoco adopta el aspecto de una neumopatía aguda co
cosis: una leve, en sujetos con funcionamiento munitaria. La única posibilidad de distinguirla es
adecuado de la inmunidad celular, y otra grave, su falta de respuesta a los antibióticos antibacte
cuando este mecanismo defensivo falla. La pri rianos, así com o su curso, un tanto más prolon
mera se circunscribe al pulmón, es muy frecuen gado.
te y se cura en forma espontánea. La segunda se Las formas crónicas generan síntomas que si
origina en el pulmón, pero puede invadir los gan mulan ser los de una tuberculosis o un cáncer de
glios linfáticos del hilio pulmonar, los iniertra- pulmón: pérdida de peso, fiebre prolongada, ano-
queobronquiales y, por último, diseminarse por rexia, astenia, los, expectoración mucosa y he
vía hemática a cualquier órgano. Se destaca la moptisis. Con menos frecuencia aparecen disnea
frecuencia con que ataca el sistema nervioso cen y dolor pleural. En la radiografía suelen encon
tral, debido, probablemente, a la composición quí trarse infiltrados localizados, parahiliares, unila
mica del cerebro y a la incapacidad de este tejido terales, no excavados y densos, de aspecto sem e
de generar una respuesta inflamatoria eficaz. jante al cáncer broncopulmonar. También se ob
servan imágenes densas, esféricas, llamadas crip-
tococomas, y derrames pleurales unilaterales. En
ANATOMÍA PATOLÓGICA
la punción de estos últimos se extrae un líquido
En los huéspedes inmunocompetentes, C. ne 0 ‘ mucoso, de color achocolatado, muy rico en le
form ans produce una reacción inflamatoria proli- vaduras capsuladas.
ferativa, con formación de granulomas epitelioi El diagnóstico de criptococosis pulmonar debe
des compactos, con células gigantes y un manto confirmarse por biopsia, ya que el hallazgo de C.
periférico de células linfocitarias. En este granu neoform ans en las secreciones bronquiales no es
loma no se observan supuración ni caseosis; es prueba diagnóstica valedera.
común comprobarlo en todos los órganos, salvo La criptococosis del SNC puede manifestarse
el cerebro. Cuando se cronifica desarrolla un manto por una meningoencefalitis de evolución subagu-
de fíbrosis colágena que no tiende a la calcifica da o crónica que predomina en la base del cerebro,
ción. como una masa ocupante en el encéfalo o como
En todos los órganos de los pacientes inmuno- una meningomielorradiculitis. La meningoence
comprometidos y en el tejido nervioso, aun de falitis es de comienzo insidioso, con cefalea, modi
594 O Cuarta parle - Infecciones inicóticas y por algas
ficaciones del carácter, hipcrlermia leve, astenia y len ser de aspectos muy variados: pápulas aisla
somnolencia. Más tarde pueden aparecer proble das o en placas, nódulos, úlceras y masas sub
mas visuales (visión borrosa o diplopía), convul cutáneas de consistencia mixomatosa. Raras ve
siones. vómitos y por último se instala un síndro ces produce abscesos y celulitis. Este gran pleo-
me meníngeo, a veces incompleto. Es frecuente morfismo toma difícil la sospecha. Estas lesiones
observar parálisis de los pares craneanos, en es deben estudiarse con mucho cuidado en enfermos
pecial del VI par, edema de papila y coroiditis. con iinfomas, sarcoidosis o diabetes, o en recep
El LCR es transparente e incoloro, con hiper- tores de trasplantes de órganos.
proteinorraquia, hipoglucorraquia y pleocitosis, El paradigma de la criptococosis diseminada es
con predominio linfocitario. Cabe destacar que el asociado con sida, dado que en la actualidad
raras veces se cuentan más de 200 células/mL. más del 90% de los casos se observan en pacien
El examen microscópico directo con tinta china tes HIV positivos. Suele haber un cuadro infec
del sedimento del LCR es positivo en la mitad de cioso general caracterizado por fiebre, pérdida de
los casos. Los cultivos de este material dan como peso, astenia, anorexia, anemia, hepatoespleno-
resultado el desarrollo de C. neoform ans en más megalia y adenomegalias. Una o varias de estas
del 90% de ios pacientes. La búsqueda del antí- manifestaciones pueden fallar. En ausencia de otros
geno capsular en el sobrenadante del LCR, me síntomas o signos deben hacerse hemocultivos por
diante la aglutinación de partículas de látex, es la técnica de lisis-centrifugación, cuyo índice de
positiva en más del 95% de los casos. positividad es de aproximadamente el 70%. Alre
Si el paciente presenta convulsiones o alguna dedor del 10% de los pacientes sólo tiene el cua
parálisis focal, es aconsejable la realización de una dro infeccioso general con hemocultivos positi
tomografía computarizada de! encéfalo o una re vos. Las manifestaciones respiratorias se obser
sonancia magnética, a fm de descartar la presen van en algo menos de la mitad de los enfermos,
cia de masas ocupantes. En los casos que se acom son poco características y se expresan con tos.
pañan con un cuadro franco de hipertensión endo- expectoración mucosa o mucopurulenta, e infil
craneana este estudio debe ser previo a la punción trados pulmonares difusos. Se las confunde con
lumbar, para evitar el enclavamiento bulbar. bronconeumonías bacterianas o tuberculosis.
Los criptococomas encefálicos, que se producen Las manifestaciones neurológicas son las más
en sólo el 5% o 10% de los casos, determinan la frecuentes y se observan en alrededor del 90% de
aparición de un síndrome de hipertensión endo- los enfermos. Los síntomas son semejantes a los
craneana (cefalea, vómitos, edema de papila), jun descriptos, pero la evolución es más aguda, el co
to a manifestaciones focales variables. Predominan mienzo es menos típico, a veces sólo con cefalea,
los ubicados en la fosa posterior, que causan sín el síndrome meníngeo suele faltar o es muy in
drome cerebeloso. completo y a pesar del tratamiento una tercera parte
El examen de fondo de ojo pone en evidencia el de los enfermos muere por problemas neurológicos
papiledema o la presencia de una coriorretinitis en las primeras 4 semanas que siguen al diagnós
difusa o granulomatosa. tico. El LCR es transparente, incoloro, y exhibe
La evolución de la meningoencefalitis criptoco- muy pocas alteraciones fisicoquímicas y citológi-
cósica es subaguda o crónica. En la.s épocas an cas; los recuentos celulares suelen mostrar menos
teriores a la anfotericina B la muerte se producía de 20 linfocitos por mL. El examen con tinta chi
después de varios meses o un par de años. Tal na del sedimento es positivo en más del 80% de
como sucedía con la meningitis tuberculosa, en ios casos y los cultivos muestran desarrollo de C.
los casos crónicos se produce hidrocefalia, dila neoformans en la totalidad de los pacientes. Al ha
tación ventricular y demencia. cer la punción lumbar es común comprobar una
En raras ocasiones la criptococosis cutánea es presión de apertura elevada, con goteo rápido o
primitiva, por inoculación directa accidental. Se salida de líquido a chorro. Precisamente esta ele
presenta con un nódulo que se ulcera sin tenden vada presión de apertura, la escasa hiperprotei-
cia a diseminarse. En los casos en que las mani noiTaquia, los recuentos celulares por debajo de
festaciones cutáneas son secundarias, éstas sue las 20 células/mL, el examen con tinta china po-
C apitulo 71 - C riptococosis □ 595
del sistema nervioso central siempre está sujeta interacciones de este triazol con la rifampicina, en
a la aparición de complicaciones y recaídas. És particular por la suma de hepatotoxicidad. Otro tra
tas se producen en alrededor del 20% de los pa- tamiento alternativo es la asociación de itraconazol,
cientes HIV negativos y en más del 80% de los 400 mg/día con 5-fluorocitosina, 100 mg/kg/día,
enfermos con sida. Ya se han mencionado los sig durante 12 semanas. Este tratamiento se realiza
nos, síntomas y determinaciones de laboratorio exclusivamente por vía oral, pero tiene el incon
que se vinculan con un mal pronóstico en estos veniente de que la remisión clínica es más lenta y
pacientes. De cualquier forma, la supervivencia que hay interacción con un gran número de fár
de los pacientes con criptococosis asociada con el macos, en especial con los luberculostáticos. En
sida depende de la respuesta a los antiiretrovirales las formas que no comprometen el sistema ner
y de la evolución de la infección por HIV. vioso central se ha obtenido un buen número de
éxitos terapéuticos con fluconazol, itraconazol,
ketoconazol y anfotericina B. Debe tenerse en
TRATAMIENTO
cuenta, en el momento de escoger el esquema te
El tratamiento de elección de la criptococosis rapéutico que la 5-fluorocitosina no se comercia
es la asociación de la anfotericina B por vía in liza en la Argentina.
travenosa, a razón de 0,4 mg/kg/día, con 5-fluo- El tratamiento quirúrgico está indicado en los
rocitosina por vía oral, en dosis de 25 mg/kg de criptococomas cerebrales o pulmonares y para la
peso cada 6 horas. Este tratamiento debe mante eliminación de los secuestros óseos. Deben rea
nerse por 6 semanas en los pacientes HIV negati lizarse derivaciones ventriculoperitoneales o ven-
vos y durante 8 semanas en los enfermos con sida. triculoatriales en la hidrocefalia, y laminectomías
El porcentaje de remisiones clínicas completas en las epiduritis con compresión medular.
(desaparición de la signosintomatología y negati- Al com ienzo del tratamiento de las menin-
vización de los cultivos del LCR) se alcanza en el goencefalitis graves, con manifestaciones de hiper
90% de los HIV negativos y en alrededor del 45% tensión endocraneana, está justificado el uso de
de los HIV positivos. La 5-fluorocitosina no pue manitol y corticosteroides.
de ser administrada a los enfermos en coma, con
vómitos frecuentes, con leucopenias inferiores a
PROFILAXIS
3.000 células/^iL de sangre o con elevaciones de
las enzimas hepáticas que exceden en 3 veces el No hay medidas profilácticas eficaces. Sin em
límite superior normal. En estos casos debe sumi bargo, los pacientes inmunocomprometidos de
nistrarse anfotericina B por vía intravenosa, en do ben evitar las áreas muy contaminadas con ex
sis diarias de 0,7 a 0,8 mg/kg de peso, hasta com crementos de aves. La indicación de profilaxis pri
pletar la dosis total de 40 mg/kg de peso corporal. maria en los pacientes con sida no parece justifi
A veces es necesario interrumpir la administración cada. Por el contrario, siempre debe indicarse flu
de este fármaco por trombosis venosa, anemia con conazol, 200 mg/día o itraconazol, 400 mg/día, o
cifras de hemoglobina inferiores a ios 9 g%, ne- anfotericina B, 1 mg/kg dos veces por semana,
frotoxicidad irreductible, hipopotasemia inferior com o tratamiento supresor o profilaxis secunda
a 2 mEq/L y alteraciones del electrocardiograma. ria. La profilaxis secundaria puede ser interrum
Como alternativa puede usarse fluconazol, por pida en aquellos pacientes HIV positivos que se
vía oral o intravenosa, en dosis diarias de 600 a encuentran bajo TARGA cuando hayan presen
800 mg, durante 10 semanas. En los casos asocia tado dos recuentos de células CD4 h- mayores a
dos con tuberculosis hay que tener en cuenta las 150/pL separadas por tres meses de intervalo.
Blastomicosis
Ricardo Negroni
DEFINICION EPIDEMIOLOGIA
La blastomicosis es una m icosis sistémica en El área endémica más significativa se sitúa en
démica, producida por el hongo dimorfo Blasío- América del Norte, desde el sur de Canadá, en la
m yces derm atitidis. Esta afección es principal zona de los grandes lagos y el río San Lorenzo,
mente endémica en América del Norte. A partir hasta el sur de los Estados Unidos, en especial a
de 1952 se detectaron numerosos casos en otras lo largo de la cuenca de los ríos M ississippi y
partes del mundo. Ohio, y en los estados de la costa atlántica, ex
cepto Florida. Se han diagnosticado numerosos
casos en África, desde Marruecos hasta Sudáfrica,
ETIOLOGÍA
sin que haya una zona definida de mayor inci
Blastom yces derm atitidis se presenta en los te dencia; se registraron esca so s pacientes de
jidos como un hongo unicelular, esférico, de pa blastomicosis en Israel, Arabia Saudí y Polonia.
red gruesa y refringente, de 8 a 15 |im de diáme Blastom yces derm atitidis vive en la tierra, en
tro y con un solo brote, que se une por un ancho lugares húmedos y sombríos, sobre suelos de pH
pedículo a la célula madre y de la cual se separa, ácido, con materia orgánica en abundancia pro
finalmente, por la emisión de un tabique. Vive ducida por excrementos de animales. Su presen
en la tierra como saprobio y, tanto en este hábitat cia se asocia, en general, con cursos de agua cer
como en los medios de cultivo no enriquecidos canos, ríos, lagos, etc. La infección en el ser hu
incubados a 28®C, crece bajo su forma micélica. mano se produce, la mayoría de las veces, por
Las colonias son vellosas, blanquecinas y a tra inhalación y es asintomática. Las infecciones res
vés del microscopio muestran un m icelio fila piratorias sintomáticas son poco frecuentes y se
mentoso, hialino, ramificado y tabicado, con es- asocian con brotes epidémicos, de pocas perso
poróforos simples que presentan en su extremo nas expuestas a una fuente masiva de infección.
distal una aleurioconidia piriforme, con pared Esta m icosis sistémica se ha señalado en ani
celular lisa o ligeramente rugosa de 5 a 7 }im de males, en particular en los perros, pero no es
diámetro. Por unión heterotálica puede producir transmisible de ellos al hombre ni hay contagio
su fase sexuada o teleomorfa, llamada Ajellom y- interhumano.
ces derm a titid is, consistente en cleistotecios La blastomicosis progresiva es más común en
globulosos, de 100 a 150 |im de diámetro, con el sexo masculino (60% de los casos), entre los
hifas peridiales espiraladas y ascos globulosos 30 y los 60 años. La mayoría son campesinos o
c
que contienen 8 ascosporas elípticas. individuos que realizan con frecuencia activida
des recreativas al aire libre en zonas rurales. La c .
r
#
4»
598 □ Cuarta parte • Infecciones micóticas y por algas
<1
<• blastomicosis infantil es poco común, pero muy nar crónica, blastomicosis diseminada crónica, y
grave. blastomicosis diseminada aguda.
i* Como otras micosis sistémicas, los factores que La frecuencia de la infección asintom ática no
alteran la inmunidad mediada por células favo es bien conocida porque se carece de antígenos
(t recen la diseminación de la blastomicosis, aun adecuados para pruebas cutáneas, pero su exis
que como afección oportunista es mucho menos tencia es indudable.
frecuente que la criptococosis o la histoplasmosis. La prim oinfección cutánea produce un nódulo
4* en el lugar de la infección, que luego se ulcera y
PATOGENIA en pocos días da origen a una linfangitis nodular
con adenopatía satélite. Este proceso es muy poco
Es similar a las otras micosis sistémicas endé común y cura en forma espontánea en 4 meses.
micas. La infección se produce por inhalación y La blastom icosis p u lm o n a r aguda se presenta
determina una afección respiratoria benigna y au- 3 a 15 semanas después de la exposición a una
tolimitada. La inmunidad mediada por células es fuente masiva de infección. Las manifestaciones
el principal mecanismo defensivo que controla clínicas y radiológicas son similares a las produ
esta infección e impide su progresión. Como re cidas por las neumonías o bronconeumonías agu
O siduos de este proceso primario quedan peque das bacterianas. Raras veces ocasiona, además,
ños granulomas pulmonares que contienen mi derrames pleurales. Tienden a la remisión espon
« croorganismos viables; es a partir de ellos que se tánea en 2 a 8 semanas y habitualmente no dejan
produce la reactivación de la blastomicosis cuan focos de calcificación. Se han observado casos
O
do hay un déficit en la inmunidad celular. asociados a eritema nudoso.
« Desde estos focos pulmonares B, dermatitidis La blastom icosis p u lm o n a r crónica se origina
se disemina por vía hemática hacia varios órga como consecuencia de la progresión a partir de
nos, en especial a la piel, ios huesos, la próstata y la prim oinfección respiratoria sintomática. El
los testículos. La mayoría de las veces determina estado general empeora, aparecen astenia, ano-
« procesos diseminados de evolución crónica. rexia, pérdida de peso, sudores nocturnos, disnea,
tos, expectoración mucopurulenta o hemoptisis,
y dolor torácico. En el estudio radiológico se com
ANATOMÍA PATOLÓGICA
prueban infiltrados de diversos tamaños, por lo
La reacción inicial frente a B. derm atitidis es general densos y parahiliares, acompañados por
« la formación de un infiltrado inflamatorio agudo adenopatías. En los casos más graves aparecen
compuesto por neutrófilos. Con rapidez, en tor zonas amplías de condensación pulmonar con
no del absceso inicial se forma un granuloma adenomegalias mediastínicas. Las cavidades y los
epitelioide con células gigantes. En las lesiones nódulos pulmonares solitarios son raros.
crónicas hay fibrosis periférica y raras veces se Su evolución es crónica, no remite en forma
produce calcificación. En algunos órganos se espontánea y puede ser punto de partida para la
observa la existencia de necrosis caseosa en el diseminación hacia otros órganos.
centro de los granulomas. La blastom icosis disem inada crónica es la for
B. derm atitidis puede observarse tanto en el ma clínica diagnosticada con mayor frecuencia.
# interior de las células gigantes como libre en las Las lesiones cutaneomucosas se observan en el
áreas de supuración o caseosas. Es visualizado 80% de los pacientes y se sitúan en la cabeza, las
con mayor facilidad en cortes teñidos con FAS o extremidades y las mucosas de las vías aerodi-
metenamina de plata de Grocott. gestivas superiores. Hay dos tipos de lesiones
principales: nódulos que supuran o placas verru
« gosas. Los primeros son nódulos, con una pústu
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
la apical que se ulcera y cubre con una costra. En
# Se aceptan las siguientes formas clínicas: infec algunos el fondo de la úlcera se torna vegetante
ción asintomática, primoinfección cutánea, blas y de aspecto papilomatoso. Las placas verrugosas
tomicosis pulmonar aguda, blastomicosis pulmo pueden tener varios centímetros de diámetro, el
C apítulo 72 - B lastom icosis □ 599
centro es cicatrizal, fibroso y está cubierto por piel raud, con antibióticos antibacterianos y ciclohe-
atrófica, en tanto que los bordes son elevados, ximida. Estos tubos son incubados a 27®C y allí
verrugosos, con pústulas y costras. En la piel tam se desarrolla la fase micélica. Parte del material
bién se observan fístulas con granulomas satéli- también se cultiva en agar-sangre a 37®C, donde
les, que provienen de las lesiones ganglionares u crece en forma de levaduras.
óseas subyacentes. Las lesiones mucosas son poco De esta manera queda demostrada la naturale
comunes y sólo merece destacarse la laringitis cró za dimorfa de este hongo, lo que permite confir
nica granulomatosa, semejante a la observada en mar el diagnóstico. Su reconocimiento puede
la histoplasmosis y la paracoccidioidomicosis. hacerse también por su capacidad de infectar a!
El ataque óseo -que también es bastante común- ratón, por la vía intraperitoneal o intravenosa, y
se localiza en especial en las costillas y las vérte por producir exoantígenos específicos que en
bras. En estas últimas suele haber destrucción y pruebas de inmunodifusión reaccionan frente a
colapso del cuerpo vertebral, lo que origina un sín antisueros de conejo.
drome de compresión medular parecido al del mal El diagnóstico histopatológico es muy impor
de Pott. En las lesiones óseas los hallazgos radio tante; se recuerda la utilidad de las técnicas de
lógicos son semejantes a los de la osteomielitis coloración especiales que facilitan la observación
tuberculosa. de este hongo.
i Otro lugar de ataque habitual es el sistema geni- Sólo el 80% de los enfermos con formas pro
; tourinario masculino. Las prostatitis y orquitis gresivas de blastomicosis tienen pruebas de inmu
• crónicas son comunes, en tanto que los riñones nodifusión positivas cuando se utiliza un antígeno
en general son respetados. Los compromisos del purificado llamado A. Esta reacción es económi
hígado, el bazo o el sistema nervioso central son ca y su especificidad es próxima al 100%. Tam
raros. bién se han realizado pruebas de fijación de com
La blastom icosis disem inada aguda es muy plemento y ELISA con este reactivo. Ambas per
poco frecuente, tanto en pacientes inmunodepri- miten la cuantificación de anticuerpos, cuyos tí
midos como en personas que carecen de antece tulos guardan relación con la gravedad de la afec
dentes de enfermedades o medicaciones que afec ción; sin embargo, son técnicas más caras y com
ten la inmunidad mediada por células. Esta for plejas, y su especificidad es menor.
ma clínica puede adoptar dos tipos fundamenta Las reacciones serológicas tienden a hacerse
les de presentación: a) como enfermedad infec negativas después de la cura clínica de la blasto
ciosa grave, acompañada por una intersticiopatía micosis.
pulmonar micronodulillar y lesiones cutáneas
papuloulceradas, y b) como una insuficiencia res
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
piratoria aguda del adulto, con infiltrados pulmo
nares extensos y alteraciones cardiovasculares Las lesiones cutáneas se parecen a las produci
graves. das por tuberculosis, paracoccidioidomicosis, his
toplasmosis africana, leishmaniosis crónica, sí
filis terciaria y carcinomas de células basales.
DIAGNÓSTICO
Las lesiones pulmonares deben distinguirse de
Se basa en el hallazgo microscópico y el aisla las producidas por la tuberculosis y las neoplasias
miento en cultivos de B. derm atitidis en mues del pulmón. Los procesos óseos se asemejan a
tras de esputo, lavados bronquiales, pus, biopsias, los ocasionados por la tuberculosis, la actinomi-
escarificaciones cutáneas y raras veces hemocul- cosis y la coccidioidom icosis.
tivos. El examen en fresco del material no fijado
en formol permite ver los elementos levadurifor-
PRONÓSTICO
mes con un solo brote, así como la pared celular
gruesa y refringente. La confirmación requiere Por lo general es bueno cuando el tratamiento
su aislamiento en cultivos, habitualmente los ma específico se inicia en forma temprana. Las pri-
teriales se siembran en agar glucosado de Sabou- moinfecciones sintomáticas se curan solas y las
600 □ Cuarta parte - Infecciones micóticas y por algas
únicas que pueden ofrecer dificultades terapéuti También se ha empleado ketoconazol con bue
cas son las formas diseminadas agudas. Las ie> nos resultados, pero las dosis eficaces son de 400
sienes cutáneas crónicas remiten con rapidez. a 800 mg/día, razón por la cual era común la ob
servación de efectos colaterales tanto gastroin
testinales com o endocrinos.
TRATAMIENTO
Está indicado el drenaje y desbridamiento de
En la actualidad el tratamiento de elección es el las lesiones óseas y los abscesos.
itraconazol por vía oral, en dosis diarias de 200 a
400 mg durante 6 meses. La anfotericina B se re
PROFILAXIS
serva para los casos más graves y se aplica por vía
intravenosa, a razón de 0,7 a 0,8 mg^g/día hasta N o se conocen medidas de eficacia comproba
completar la dosis total de 30 a 40 mg/kg/peso. da.
B ib liografía----------------------------------------------------- ------
Consultar al final del capítulo Generalidades de nriicologíd médica.
73
Aspergilosis
Ricardo Negroni
DEFINICION EPIDEMIOLOGIA
Se denominan aspergilosis las infecciones pro Las especies de Aspergillus se hallan amplia
ducidas en el hombre y los animales por hongos mente distribuidas en todo el mundo. Como ya
del género Aspergillus. Las aspergilosis huma se expresó, son hongos saprobios de los vegeta
nas es un conjunto heterogéneo de afecciones, les y del suelo. Producen infecciones espontáneas
en su mayor parte de origen respiratorio, que com en los animales, en especial en las aves, en las
prometen ios pulmones y los senos paranasales, que invaden los sacos aéreos y los pulmones. En
y cuyos agentes causales más frecuentes son los bovinos producen el abono micótico.
Aspergillus fum igatus, A. fla v u s, A . niger y A. Los lugares húmedos y sombríos, en especial si
íerreiis. tienen vegetales, suelen ser ricos en esporas de
Aspergillus, que pasan al aire y son inhaladas. Su
abundancia es tan grande que casi todas las perso
ETIOLOGÍA
nas inhalan diariamente varios millares de espo
Los hongos del género A sp erg illu s son sa- ras de estos hongos. La mayoría de ellas son fago-
probios de amplia distribución en la naturaleza. citadas y lisadas por los macrófagos alveolares,
Viven en la tierra, sobre restos de vegetales, de sin que lleguen a ocasionar alteración alguna.
preferencia en lugares húmedos y sombríos. Pro La aspergilosis no se contagia de hombre a
ducen colonias vellosas de colores variables: ver hombre ni de los animales al hombre. Se requie
de ceniza, verde amarillento, negro, pardo, etc. ren ciertas precauciones con las personas som e
Poseen un m icelio vegetativo hialino, ramifica tidas a tratamientos con fármacos antiblásticos,
do y tabicado, y su fructificación asexual consis corticosteroides e inmunodepresores para no ex
te en un esporóforo largo; en la base de éste pro ponerlas al contacto con vegetales crudos u or
duce una célula con forma de pie cuyo extremo namentos florales. Tampoco deben trabajar en la
distal remata en una dilatación globulosa con una boratorios de microbiología donde se manejen
o dos series de esterigmas (ramificaciones de cultivos de estos hongos ni permanecer en luga
esporóforos), que dan origen a conidias dispues res próximos a obras en construcción o sitios en
tas en cadenas. Algunas especies poseen fructifi donde se efectúen movimientos de tierra. A fines
cación sexual, constituida por cleistotecios esfé de la década pasada se comprobó que los tan
ricos, de 100 a 150 mm de diámetro, que contie ques de agua, las cañerías, las duchas y los WC
nen ascos globulosos con 8 ascosporas elípticas. son fuentes importantes de infección hospitala
Las cuatro especies más comunes, ya señaladas, ria. Por lo tanto, los pacientes neutropénicos no
carecen de fructificación sexual. deben ducharse ni usar el WC.
602 □ Cuarta parte - Infecciones micóticas y por algas
lor marrón oscuro o negro con la metenamina de bajas, tumores sólidos, irradiación, etc.). La ra
plata de Grocott y aparecen con un color rojo con diografía de tórax muestra infiltrados pulmo
el PAS. nares biapicales con formación de cavidades.
Además se han observado casos de aspergilosis
sinusal semiinvasora, con rinorrea purulenta, fie
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
bre, cefalea, obstrucción nasal y opacificación
Se considerarán las siguientes formas clínicas radiológica de varios senos paranasales. Los es
de aspergilosis: tudios tomográficos exhiben destrucción ósea y
tendencia invasora hacia la base del encéfalo.
• Invasora aguda. En los pacientes con sida este tipo de aspergi
• Semiinvasora. losis sinusal se comprueba con poca frecuencia
• Broncopulmonar alérgica. y aún más rara es la forma pulmonar sem iin
• Intracavitaria. vasora. En estos pacientes la evolución suele ser
subaguda y con frecuencia fatal. En los restan
Aspergilosis invasora aguda tes, el curso es crónico y controlable.
Se presenta con fiebre acompañanda con infil
trados pulmonares en pacientes neutropénicos Aspergilosis broncopulmonar alérgica
con antecedentes de leucemias, linfomas, tras Esta forma clínica se presenta en pacientes ató-
plante de médula ósea, enfermedad granulo- picos con antecedentes de crisis asmáticas u otras
matosa crónica o aplasia medular de origen tóxi afecciones alérgicas del aparato respiratorio. Evo
co. La fiebre es refractaria al tratamiento con luciona en forma intermitente, con episodios ca
antibacterianos y puede acompañarse con tos, racterizados por fiebre, disnea, tos, expectoración
hemoptisis, dolor torácico y derrame pleural he- mucopurulenta, a veces hemoptoica, sibilancias,
mático. Los estudios tomográficos muestran in estertores subcrepitantes e infiltrados pulmonares
filtrados, al principio homogéneos y más tarde de ubicación cambiante en pocos días. Con menor
excavados, que a veces dan origen a la forma frecuencia se comprueban atelectasias que afec
ción de una bola fúngica aguda. Las lesiones tan áreas de extensión variable. La administración
pulmonares pueden coexistir con compromiso de de corticosteroides limita la extensión del episodio
los senos paranasales, en forma de una pansi- y alivia los síntomas. Cada recaída deja tras de sí
nusitis necrosante que tiende a la destrucción cierto grado de fibrosis pulmonar y bronquiec-
ósea. Cuando los pacientes recuperan los neutró- tasias proximales. Los exámenes complementarios
filos, y en la enfermedad granulomatosa crónica, muestran eosinofilia sanguínea y en la expectora
pueden producirse nódulos abscedados, abscesos ción se comprueba la presencia de cristales de
subcutáneos y lesiones de la piel, semejantes a Charcot-Leyden, espirales de Curshman, eosinó-
las producidas por bacterias, que determinan el filos y filamentos de Aspergillus. En el esputo pue
ectima gangrenoso. Estas lesiones son muy im den verse tapones o moldes bronquiales, como pe
portantes porque las muestras provenientes de queños cilindros pardos de 2 o 3 mm de largo.
ellas permiten confirmar el diagnóstico. Su cur La evolución de esta afección es prolongada y
so es rápido, se mide en días, y en más del 80 % conduce a la insuficiencia respiratoria crónica.
de los casos es fatal.
Aspergilosis intracavitaria
Aspergilosis semiinvasora Lo más característico de esta forma clínica son
Consiste en un cuadro pulmonar seudotuber- los antecedentes de una cavidad intratorácica pre
culoso, con un síndrome de impregnación toxiin- existente. Esta puede ser pulmonar, bronquial y,
feccioso, tos, expectoración purulenta, hemopti con mucho menor frecuencia, pleural; debe te
sis y disnea de esfuerzo. Los pacientes son adul ner contacto con el exterior, a través de uno o
tos de más de 50 años con antecedentes de enfer más bronquios de drenaje, y por lo general pre
medad pulmonar obstructiva crónica y causas de senta más de 4 cm de diámetro. Cuando se insta
inmunodepresión leve (corticosteroides en dosis la la infección los pacientes refieren tos, expec-
604 □ Cuarta parte - Infecciones micóticas y por algas
fu sarium y PscudaÜescheria. Las formas semiin- Otro antifúngico empleado con éxito en casos i
vasoras son semejantes a la tuberculosis pulmonar de aspergilosis invasora aguda que no respondie
excavada, a la histoplasmosis pulmonar crónica ron o no toleraron los medicamentos habitualmente
y a la coccidioidom icosis cavitaria. La forma empleados en esta enfermedad, es el acetato de
broncopulmonar alérgica debe diferenciarse de caspofungina. Esta droga se aplica únicamente por
otras causas de asma bronquial grave y de los vía venosa, la dosis inicial es de 70 mg/día y las «
infiltrados eosinófilos producidos por las migra subsiguientes de 50 mg/día.
ciones de larvas de parásitos hacia los pulmones. En las formas semiinvasoras se indica itracona (
La aspergilosis intracavitaria es idéntica a las zol, 200 a 400 mg/día durante 6 meses con muy
bolas fúngicas producidas por Pseudallescheria buenos resultados. Este tratamiento también es f
y otros hongos filamentosos. útil para la aspergilosis broncopulmonar alérgica (
Las sinusitis se diferenciarán de otras causas que asociado con corticosteroides facilita remi
de sinusitis crónica y de la mucormicosis rino- siones muy prolongadas. Las formas intracavi- ((
sinuso-órbito-cerebral. tarias sólo responden en forma parcial. Si no es
posible una solución quirúrgica, el itraconazol, <
200 a 300 mg/día por períodos de 6 a 12 meses
PRONÓSTICO
se asocia con mejoría clínica en casi la totalidad
Varía mucho con la forma clínica. En las inva- de los casos, pero sólo en el 60% los cultivos de <
soras agudas la tasa de mortalidad es muy eleva la expectoración se hacen negativos.
da; las semiinvasoras suelen responder bien al Los tratamientos quirúrgicos de las formas in- (
tratamiento con itraconazol, mientras que en las tracavitarias son lobectomías, neumonectomías,
formas broncopulmonares alérgicas la asociación toracocavernostomías y toracotomías a lo Mo- X
de itraconazol y corticosteroides ha mejorado naldi (pequeñas, de 2 cm de diámetro), a fin de
mucho el pronóstico. En la aspergilosis intraca- insertar un catéter que permita instilar fármacos
í
vitaria la evolución es impredecible y depende antifúngicos dentro de las cavidades. í
de las hemoptisis; si hay una lesión solitaria y es
posible la cirugía, el pronóstico es favorable.
PROFILAXIS
4
En las habitaciones de los pacientes neutro- (
TRATAMIENTO
pénicos hay que evitar la presencia de vegetales
En la aspergilosis invasora aguda el tratamien crudos, ya sea alimentos u ornamentos florales.
C
to de elección es la anfotericina B por vía intra Estos pacientes deben alejarse de las obras en f
venosa. Deben alcanzarse, tan rápido como fuere construcción o de remodelaciones edilicias y es
posible, las dosis eficaces de 0,8 a I mg/kg/día. El necesario controlar los equipos de aire acondi ■t
tratamiento se mantendrá hasta completar 2 a 2,5 cionado o de filtración de aire. La internación en
g en total. En casos de resistencia o intolerancia una habitación con flujo laminar es muy costosa t
se justifica el empleo de la anfotericina B liposó- y no se justifica en función de la relación costo-
(
mica, en dosis de 4 mg/kg/día. La mayor limita beneficio. Recordar la recomendación de no usar
ción de este tratamiento es su costo elevado. Re duchas ni WC durante la internación. (
cientemente, se incorporó un nuevo triazólico, el En los receptores dé trasplantes alogénicos de
voriconazol, que puede ser administrado por vía médula ósea se indica la profilaxis primaria anti- (
oral o itravenosa. Es considerado por muchos ex fúngica con anfotericina B desoxicolato a razón
pertos como el tratamiento de elección, aunque de 0,7 mg/kg/día o anfotericina B liposómica en (
el número de pacientes tratados es escaso. Se ini
cia con la administración por vía intravenosa de
dosis de 3 mg/kg/día, durante el periodo de neu-
tropenia. En algunas instituciones se indica tam
í
6 mg/kg/cada 12 horas, en los días subsiguientes se bién profilaxis primaria para pacientes con leuce (
reduce la dosis a 4 mg/kg/cada 12 horas y cuando mia mieloide aguda o linfoblástica aguda que se
el enfermo está clínicamente compensado, se pasa encuentren recibiendo quimioterapia antiblástica. <
a la vía oral a razón de 200 mg cada 12 horas. En estos casos se recomienda la solución oral de
c
(
(
í
(•
(É 608 □ Cuarta parte • Infecciones micóticas y por algas
(É
itraconazol a razón de 5 mg/kg/día o 400 mg/día, tra que más dei 8 % de los pacientes sometidos a
ÍÉ
en dos tomas alejadas de las comidas. Esta profi una determinada circunstancia de riesgo presen
ü laxis comienza tres días antes de la neutropenia ta aspergilosis invasora.
y se inten umpe siete días después de la recupe La detección oportuna de la tuberculosis redu
ÍÉ ración del número de neutrófilos. La indicación cirá significativamente el número de pacientes con
de profilaxis primaria antifúngica es una deci cavidades residuales o cavernas detergidas, que
u sión institucional y se justifica cuando se demues luego darán origen a la aspergilosis intracavitaria.
ü
a B ib liografía------------------------------------------------------------
€» Consultar al final del capítulo Generalidades de micología médica.
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Esporotricosis
Ricardo Negroni
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la importancia de los vegetales com o fuente de libres, en las zonas de supuración o en el interior
infección. También se han producido casos por de las células gigantes. Para facilitar su visuali-
la caza del armadillo (habitual en la Argentina y zación puede hacerse una digestión previa de los
el Uruguay), por mordedura de ratas o de iguanas, tejidos con diastasa y después teñir la prepara
y por traumatismos con objetos inanimados. Se ción con las técnicas de PAS o Grocott.
han descripto microepidemias familiares o labo
rales al exponerse varias personas a una misma
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
fuente de infección.
La esporotricosis aparece a cualquier edad y Se aceptan las siguientes formas de presenta
en ambos sexos casi por igual. La diferencia en ción de la esporotricosis:
tre sexos se debe con exclusividad al contacto
con la fuente de infección. Se ha comprobado la • Esporotricosis cutaneolinfática (linfangítico
existencia de infecciones asintomáticas en las nodular).
áreas endémicas. Son personas con las pruebas • Esporotricosis fija o dermoepidémica.
cutáneas de esporotriquina positivas, que no re • Esporotricosis pulmonar.
gistran antecedentes de la enfermedad. • Esporotricosis diseminada.
Esporotricosis cutaneolinfática
PATOGENIA
Es la manifestación clínica de la primoinfección
La infección por 5. schenckii puede producirse cutánea y constituye el ejemplo típico del sín
por vía transcutánea o inhalatoria. Las conidias drome chancriforme o síndrome linfangítico no
se transforman en elementos levaduriformes que dular. En 15 a 30 días después del contacto infec
son fagocitados por los neutrófílos y luego por tante, en el sitio de la penetración se produce un
los macrófagos. Se originan granulomas mixtos, pequeño nódulo. Éste aumenta de tamaño, se re
supurativos y epitelioides, que limitan la exten blandece en la parte central, se adhiere a los pla
sión de la infección. Ésta se propaga por vía lin nos superficiales y luego se ulcera. La úlcera tie
fática y, en casos excepcionales, por el torrente ne bordes bien definidos y se cubre con una cos
sanguíneo, lo que origina formas diseminadas de tra serohemática, que al ser removida deja ver un
esporotricosis. Éstas se comportan como afeccio fondo granuloso. Al cabo de dos semanas se for
nes oportunistas en personas desnutridas, alco ma una serie de nódulos satélites que siguen el
hólicos, diabéticos y, en época más reciente, en trayecto de un tronco linfático hasta los ganglios
afectados por la enfermedad por HIV. Estos da que drenan la zona afectada. Estos nódulos se
tos marcan la importancia de la inmunidad me cundarios tienen una evolución semejante a la del
diada por células como mecanismo defensivo. En chancro primario, sólo que el período de nódulo
la epidemia de Transvaal, que se produjo entre reblandecido es más prolongado y la punción de
mineros sudafricanos bien nutridos, no se obser uno de estos elementos da salida a una secreción
vó ningún caso de esporotricosis diseminada. gomosa. Los ganglios regionales aumentan de
tamaño pero no se reblandecen ni ulceran. La
evolución de este proceso es crónica, no afecta
ANATOMÍA PATOLÓGICA
el estado general del paciente y habitualmente
La esporotricosis produce la formación de un no tiende a curarse en forma espontánea. Las le
granuloma mixto, con necrosis central supurativa siones suelen situarse en los miembros superio
o gomosa, una zona media epitelioide, con macró res de los adultos, en la cara en los niños y, con
fagos y células gigantes, y una parte periférica menor frecuencia, en otras partes del cuerpo, en
con linfocitos y células plasmáticas. En los ca especial en los miembros inferiores y el tronco.
sos crónicos hay fibrosis colágena. Los agentes
causales son muy escasos en las lesiones del ser Esporotricosis fija o dermoepidérmica
humano; pueden verse bajo el aspecto de cuer Es el resultado de la reinfección cutánea en un
pos asteroides o con la clásica forma de habanos huésped con inmunidad parcial. N o se produce
T
<4
C apítulo 74 - Esporotricosis □ 609
(i
la linfangitis nodular. La lesión cutánea es única, en especial las rodillas. El ataque puede ser loca
localizada y de evolución prolongada, a veces du lizado o poliarticular. Este último, más la pre ((
rante años. Se sitúa con frecuencia en la cara y sencia de lesiones cutáneas múltiples en forma
los miembros superiores. Su aspecto clínico es de tubérculos, nódulos o gomas, se observa con
muy variable, pero en general adquiere la forma frecuencia en pacientes con linfomas, en recep
de placa verrugosa, con bordes elevados, vege tores de trasplantes, en individuos tratados con
(k
tantes, semejantes a la tuberculosis verrugosa u corticosteroides, en diabéticos descompensados 'I
otras infecciones similares. Pocas veces se pre y en pacientes con enfermedad por HIV. Las al
senta como lesiones ulceradas, lupoides, impeti- teraciones observadas son propias de una artritis <
ginoides o erltematoescamosas. Estas formas son crónica. El compromiso del SNC, que es muy
más comunes en las zonas de alta endemicidad y raro, consiste en el cuadro típico de una menin
por lo general representan el 25% de los casos. gitis crónica linfocitaria con predominio del ata
'(
que basal, como la observada en la tuberculosis
Esporotricosis pulmonar y otras micosis sistémicas. El LCR es claro, con
Es una eventualidad rara en casi todo el mun hiperproteinorraquia y pleocitosis linfocitaria. El
do. Se trata de una forma clínica endémica en el ataque ocular, poco común en estas formas dise l
centro-este de los Estados Unidos. Se han com minadas, origina endoftalmitis. Se han registra
probado infecciones pulmonares asintomáticas, do casos de endoftalmitis, sinusitis necrosante y <
con manifestaciones radiológicas que consisten
en el agrandamiento de los ganglios del hilio pul
celulitis orbitaria en pacientes diabéticos descom
pensados.
í
monar. Las infecciones sintomáticas son sem e (
jantes a una neumonía bacteriana, pero en la ra
DIAGNÓSTICO
diografía se observan adenomegaiias biliares pro C
minentes. Estos procesos primarios suelen in- Los materiales pueden obtenerse por punción
volucionar en forma espontánea. de los nódulos cerrados o por biopsias de las úl c
La esporotricosis pulmonar crónica es patrimo ceras cutáneas.
(
nio de personas del sexo masculino, alcohólicos El exam en m icroscópico de los preparados
o diabéticos, y con procesos pulmonares previos. histopatológicos permite observar la presencia de
La signosintomatología es semejante a la de la cuerpos asteroides en la tinción con hematoxilina-
tuberculosis fibrocaseosa del adulto o la histo- eosina, pero su aparición es muy poco constante. (
plasmosis cavitaria. La radiografía muestra in
filtrados biapicales y heterogéneos que se cavitan.
Las tinciones con PAS o Grocott, previa diges
tión con diastasa, muestran un número reducido c
Las cavidades son de paredes finas y están ro de elementos parasitarios. El estudio de extendi (i
deadas por nódulos o infiltrados difusos. La evo dos teñidos con Gram o Giemsa sólo raras veces
lución de este proceso es muy crónica y puede da resultados positivos. Hay un conjugado espe
dar origen a focos secundarios m eiastásicos
extrapulmonares.
cífico para el diagnóstico por inmunofluores-
cencia directa, aplicable tanto a extendidos como á
En algunos casos la esporotricosis pulmonar ha a cortes histológicos, pero sólo se lleva a cabo en
sido originada por la propagación hemática des laboratorios de referencia. El diagnóstico de cer
%
de otros focos de infección. Esto sucede en las teza surge del resultado de los cultivos, que se i
esporotricosis multifocales, en las cuales las le obtienen con facilidad en agar glucosado o agar-
siones pulmonares pueden pasar clínicamente miel de Sabouraud a 28®C, y agar-cisteína-san- %
inadvertidas, aunque evidenciables en el estudio gre incubados a 37®C. El empleo de estos dos sis
radiológico. Se presentan como nódulos miliares temas de cultivo permite observar las dos formas i
o infiltrados intersticiales difusos. de este hongo: micélica y levaduriforme. Los cul
t
tivos pueden inocularse por vía intratesticular al
Esporotricosis diseminada cobayo o a la rata, o en la almohadilla plantar del i
Las lesiones articulares, que son las más fre ratón. Se obtendrá así la reproducción de la in
cuentes, comprometen las grandes articulaciones, fección, en la cual es posible observar numero- (
i
(
612 □ Cuarta parte - Infecciones micólicas y por algas
Mucormicosis pulmonar
ANATOMÍA PATOLÓGICA
Esta forma clínica se observa en pacientes con
Los mucorales producen hifas gruesas no tabi leucemias o linfomas, con frecuencia en presen
cadas, de diámetros irregulares y ramificaciones cia de la pancitopenia que produce el tratamien
con orientación variable. Estos filamentos inva to de esas afecciones. La evolución es aguda, con
den las arteriolas, lo que provoca en éstas vascu- síntomas y signos de bronquitis, neumonía o in
litis y trombosis. La reducción de su luz origina farto séptico de pulmón. Las manifestaciones
la necrosis isquémica de los tejidos irrigados. Se radiológicas son similares a las observadas en la
producen, además, hemorragias y reacciones in aspergilosis pulmonar invasora aguda, con infil
flamatorias agudas inespecíficas con infiltrados trados nodulares o neumónicos, cavidades con
de polimorfonucleares. Los filamentos toman mal bolas micóticas y derrame pleural. La disemina
la coloración de PAS y se tiñen de marrón oscuro ción de la infección hacia otros órganos es fre
o negro con la metenamina de plata de Grocott. cuente. Su diagnóstico en vida es poco común y
lo habitual es que sea un hallazgo de autopsia.
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
Mucormicosis gastrointestinal
Serán estudiadas según las distintas localiza Se presenta en niños con desnutrición grave o
ciones. en adultos con fiebre tifoidea u otras causas de
C apítulo 75 - M ucorm icosis O 613
Bibliografía------------------------------------------------------------
Consultar al final del capítulo Generalidades de micología médica.
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Micetomas
Ricardo Negroni
Los micetomas por Actinom adura y Strepto- entre dos portaobjetos, se fragmentan en trozos
m yces producen escasa supuración. Por las bo irregulares, lo que da la sensación de haber que
cas de las fístulas sale muy poca secreción, los brado un trozo de tiza. En los extendidos se en
granos son más grandes y de colores variables, cuentran los mismos hallazgos que las dos espe
según el agente causal. Por lo general el diag cies precedentes. En los cortes histopatológicos
nóstico requiere la obtención de biopsias profun teñidos con hematoxilina-eosina los granos son
das, que lleguen hasta el plano óseo. ovoides o arriñonados, homogéneos, ligeramente
Actinomadura m adurae es el agente etiológico acidófilos y con hendiduras que se orientan en el
más frecuente de este grupo. Produce granos de sentido del paso de la cuchilla del micrótomo.
1 mm o más, de color blanco-amarillento, polilo- Como los anteriores, estos granos tienen una peri
bulados y de consistencia pastosa. En extendidos feria radiada y acidófila, luego una faja estrecha
obtenidos por aplastamiento de los granos pueden de filamentos laxos hematoxilinofílicos y una zona
realizarse tinciones de Gram y de Kinyoun. A. central muy abundante en cemento intercelular.
m adurae se presenta como filamentos largos, fi Tanto A. pelletieri como S. som aliensis se de
nos, de menos de 1 |im de diámetro, ramificados, sarrollan bien en los medios de cultivo en los que
grampositivos y no acidorresistentes. crecen las nocardias. A. pelletieri forma colonias
Se desarrolla bien en los mismos medios que plegadas, pastosas, de color rojo rubí y S. soma-
las nocardias; la incubación se lleva a cabo a 37®C liensis produce colonias pequeñas, cerebriformes,
y en 10 a 15 días produce colonias plegadas, li de color ocre, que se cubren tardíamente con un
sas y de consistencia pastosa, cuyo color varía vello blanquecino.
desde el blanco-amarillento al rosado. Los agentes causales de micetomas por Eumy-
En los cortes histopatológicos teñidos con cota son muy numerosos. Aquí consideraremos
hematoxilina-eosina, los granos de A. m adurae sólo cinco especies: M adurella grísea, Madurella
son grandes, con forma esférica irregular, poli- m ycetom atis, Pseudallescheria boydii {Scedos-
lobulados, con una parte periférica acidófíla cons porium apiosperm un), Fusarium solani (Acremo-
tituida por radiaciones finas m ezcladas con n iu m fa lcifo rm e) y Exophiala jeanselm ei.
neutrófilos; una parte media compacta, intensa M adurella grisea produce granos globulosos,
mente hematoxilinofílica, compuesta por una tra negros, de menos de 1 mm de diámetro y consis
ma densa de filamentos que, por su parte más tencia blanda. El examen microscópico en fres
externa, penetran en las radiaciones acidófilas. La co revela filamentos hialinos o ligeramente pig
porción más central, también hematoxilinofílica, mentados, ramificados y tabicados, con dilata
está integrada por una red más laxa de filamentos ciones vesiculosas y escaso cemento intercelular.
bacterianos. El reconocimiento de los granos de En los cortes histopatológicos teñidos con hema
A. madurae no requiere tinciones especiales. toxilina-eosina los granos son arriñonados, de 500
Actinom adura pelletieri produce granos de 0,5 a 600 Jim de diámetro, poseen radiaciones aci
a 1 mm de diámetro, de color rojo rubí. En los dófilas en la parte periférica, luego una capa
extendidos muestra las mismas características media de color castaño, con numerosas vesícu
morfológicas y tintoriales que A. m adurae. En las y escaso cemento y una parte central con una
los cortes histopatológicos montados sin teñir se red de filamentos pardos dispuestos de manera
lo identifica con facilidad por su color rojo. En laxa.
los cortes teñidos con hematoxilina-eosina pre En el medio de agar de Sabouraud produce co
senta una parte central hematoxilinofílica, com lonias que crecen con rapidez a 28®C. Tienen un
puesta por una trama densa de filamentos finos y m icelio velloso de color gris y son negras por el
una porción periférica con radiaciones acidófilas. reverso. El examen microscópico revela dos ti
Los granos se quiebran en forma irregular al paso pos de hifas, unas delgadas, hialinas y septadas,
de la cuchilla del micrótomo. y otras también tabicadas pero más anchas y con
Streptomyces som aliensis produce granos ovoi p igm en to gris. S e observan clam idosporas
des o arriñonados de color ocre, de 700 a 800 |im intercalares o terminales.
de diámetro. Son duros y cuando se los aplasta, M adurella m ycetom atis produce granos gran
Caprtw/o 7<í - M icetomas □ 617
des, de 1 a 3 mm, negros y duros. En el examen sarrollo rápido, con micelio aéreo abundante y
en fresco se observan filamentos cortos, septados, blanquecino. Los bordes y el reverso presentan w
dilataciones vesiculosas grandes y abundante un pigmento lila o violáceo que se difunde al
cemento intercelular amorfo de color pardo roji i
medio de cultivo. Con el tiempo el micelio aéreo
zo. En los cortes histopatológicos teñidos con se hace más corto y pulverulento. El examen c ,
hematoxilina-eosina se ven filamentos radiados, microscópico revela hifas hialinas y ramificadas,
tabicados y poco abundantes, junto a dilatacio con clamidosporas intercalares o terminales en C 'i
nes vesiculares muy numerosas, todo ello inclui grupos de 2 o 3. Los esporóforos tienen forma de
do en una matriz intercelular amorfa de color fiálide afilada y originan conidias en forma de
pardo.
Se desarrolla bien a 37®C en medios habituales.
salchicha. Las microconidias no son septadas y C'i
las macroconidias, que llegan a tener 30 ^m de
En agar de Sabouraud produce colonias planas, diámetro máximo, presentan 4 o 5 septos. (
de micelio aéreo pulverulento y color ocre, que Exophiala jeanselm ei es agente productor de
por el reverso presentan un pigmento de color cao micetomas de granos negros, pequeños, tubulares (
ba que se difunde al medio de cultivo. En el exa y huecos. En el examen microscópico se observa
men de microscopía se observan hifas finas y un centro hueco con una zona periférica ocupada ( "
hialinas, junto a filamentos gruesos, pigmenta por filamentos cortos de color pardo y cadenas de <
dos y con dilataciones vesiculosas que contienen artroconidias de paredes gruesas y color oscuro.
vacuolas de color ocre. Las esporas son escasas, En el medio de Sabouraud se desarrolla con i
piriformes y asientan sobre un esporóforo simple. rapidez, al principio como una levadura negra,
Forma esclerotes en agar-papa-zanahoria. formando colonias de aspecto mucoso y consis í -
Pseitdallescheria boydii es la fase teleomorfa tencia pastosa donde predominan los elementos
(sexuada) de Scedosporium apiosperm un. Produ í ■
unicelulares brotantes. Después de 2 o 3 sema
ce granos claros, esféricos, de 1 mm de diáme nas se cubre con un micelio aéreo gris oscuro que <
tro, blandos, que observados con el microscopio presenta colonias con reverso negro. El examen
muestran hifas hialinas con dilataciones vesi microscópico acusa la presencia de hifas pardas, <
culosas. En los cortes histopatológicos los gra ramificadas y septadas. Los esporóforos son lar
nos son blanco-amarillentos, ovales o reniformes, gos, simples, septados y en su extremo distal ori c
con una parte central, ocupada por hifas hialinas
entrelazadas en forma densa, y otra periférica,
ginan anelosporas ovaladas y pequeñas, que salen
de los puntos fértiles o anélidos. También produ
c-
compuesta de numerosas dilataciones vesiculo ce esporas muy pequeñas a partir de esporóforos c -
sas, sin cemento intercelular y con una corona de rectos y cortos en forma de boca de cañón.
radiaciones acidófílas. (
Los cultivos se desarrollan bien a 28®C o 30®C,
EPIDEMIOLOGÍA (
en agar-miel, lactrimel u otros medios comunes.
Produce colonias de micelio aéreo velloso, abun Los micetomas son más frecuentes en el hom c
dante. de color gris claro con el reverso también bre que en la mujer, en una proporción de 5:1. La
gris. Las hifas son hialinas, ramificadas y septa mayor parle de los enfermos son trabajadores 1
nas, los esporóforos son simples o compuestos rurales o han vivido en el campo y sus edades
en haces paralelos (sinemata) y producen conidias varían entre los 20 y los 50 años. La raza no pa t ^
piriformes de color gris. A lgunas cepas son rece ser un factor que incida en la predisposición.
homotálicas y presentan cleistotecios globulosos, Estas afecciones no se transmiten de los anima
t
oscuros, de 100 a 130 jim, con ascos esféricos les al hombre, ni hay contagio interhumano. Los
que contienen 8 ascosporas ovoides. actinomicetos aerobios y los hongos verdaderos
F u sa riu m so la n i, conocido también com o que causan micetomas viven en la tierra y sobre
Acrem onium falciform e, produce granos blancos, restos de vegetales; en particular astillas, espi
semejantes a los de P. boydii tanto en su aspecto nas y clavos sirven com o vehículos del agente
macroscópico como microscópico. causal, que penetra a través de la piel.
En medio de Sabouraud forma colonias de de Si bien en todo el mundo se han descripto ca (t. 1
i
618 □ C/mrtfl/7flr/e • Infecciones mícólicas y por algas
gresión muy lenta. Durante varios meses, a ve se los lava varias veces por decantación en tubos
ces más de un año, las lesiones se presentan sólo de ensayo que contienen 10 mL de agua destila
como nódulos aislados que se rebiandecen en el da estéril. Este procedimiento es útil para descon
centro y drenan su contenido al exterior a través taminar los granos que proceden de una fístula.
de una fístula. En los meses siguientes varios de Los granos se observan a ojo desnudo o con la
estos nódulos confluyen entre sí para formar pla ayuda de una lupa. Se consigna el color, el tama
cas induradas. Como los anteriores micetomas, ño, la forma y la consistencia. Esta última .se apre
éstos no respetan barreras anatómicas y al cabo cia al aplastarlos entre portaobjetos y cubreob
de años llegan a comprometer los huesos. Una jetos. Los granos duros suelen partir el cubre
vez constituidos, los eumicetomas o micetomas objetos. En los materiales no fijados el examen
maduromicóticos muestran un predominio de microscópico se practica en fresco, entre portaob
nódulos indurados y lesiones fibrosas de consis jetos y cubreobjetos, con una gota de solución
tencia leñosa. Los trayectos fistulosos finalizan salina isotónica o KOH al 10 %. En esta obser
en bocas poco salientes, cubiertas a veces por vación debe anotarse la presencia o ausencia de
epitelio, por donde mana una secreción serosan- clavas periféricas, así como el tamaño y la forma
guinolenta con escasos granos. Estos últimos di de los microorganismos integrantes del grano. En
fieren en color, forma y consistencia según el general los filamentos fúngicos se ven muy bien
agente causal. El ataque óseo es muy común y se con este procedimiento; por el contrario, los
caracteriza por la formación de lesiones osteolí- actinomicetos se observan con alguna dificultad
ticas de diferente tamaño, así como por la hiper- debido a su escaso diámetro, menor de 1 mm. Si
producción ósea a partir del periostio (osteófítos). el grano contiene hifas, debe detallarse su color
Se ubican en las partes expuestas del cuerpo, en y diámetro, la presencia y ubicación de las dila
especial en los miembros inferiores y en particu taciones vesiculosas (clamidosporas), como tam
lar en los pies. bién la existencia, color y abundancia de la ma
El estado general de los pacientes habitualmen triz intercelular amorfa o cemento. Si no se ob
te no se deteriora, sólo en casos muy avanzados servaron hifas, se retira el cubreobjetos y, con el
puede observarse adelgazamiento, astenia, ane material remanente en el portaobjetos, se prepa
mia, leucocitosis y eritrosedimentación acelera ran dos extendidos finos que serán teñidos por
da. las técnicas de Gram-Kopeloff y Kinyoun.
Una vez concluido el examen microscópico se
procede a la siembra de los granos. Si éstos están
DIAGNÓSTICO
integrados por Eumycotas, se utilizan medios de
El diagnóstico de los micetomas se basa en la cultivo como agar-miel de Sabouraud, lactrimel,
observación de ios granos y en el aislamiento en agar-papa glucosado y agar-papa-zanahoria, a los
los cultivos de los agentes causales. que se agrega estreptomicina y cloranfenicol a
En los de secreción purulenta abundante se re razón de 100 mg/mL. La incubación se hace a
coge el material que mana de las fístulas o bien 28®C y 37®C durante 3 a 6 semanas.
se realiza la punción y aspiración de nódulos Cuando el examen de los granos revela la pre
abscedados. Es aconsejable remitir al laborato sencia de actinomicetos, se emplean medios sin
rio entre 3 y 5 mL de pus. La mitad del volumen antibióticos. Para los actinomicetos aerobios se
se fija en alcohol absoluto y después de 24 a 48 usan el agar-caldo glicerinado al 5%, el medio
horas se centrifuga. La masa compacta obtenida de Lówenstein-Jensen, y el de Thayer-Martin y
se incluye en parafina y se corla para hacer tin la incubación se lleva a cabo a 37®C durante 3 a 4
ciones con hematoxilina-eosina. Gram-Weigert semanas. En los micetomas escasamente secre
y Kinyoun. El resto se vuelca en una placa de tantes debe hacerse una biopsia quirúrgica am
Petri y se diluye con agua destilada estéril, pro plia, de por lo menos 2 cm de diámetro, con una
curando desmenuzar el pus y separar los granos. profundidad que abarque hasta el plano óseo. El
Esta operación se facilita si se lleva a cabo sobre espécimen obtenido se divide en dos; una parte
un fondo negro. Una vez separados los granos. se coloca en formol-buffer al 10% o fijador de
620 □ Cuarta parte. • Infecciones micólicas y por algas
Buin y el resto en un recipiente estéril con solu glucósidos. El cotrimoxazol se indica a razón de
ción salina isotónica. El material fijado se inclu 1 comprimido, de la concentración mayor (SMX
ye en parafina, se corta y tiñe con hemaioxilina- 800 mg/TMP 160 mg), cada 12 horas, durante
eosina, Gram-Weigert o Brown-Brenn, Kinyoun lapsos prolongados, de meses o un par de años.
y PAS. La porción no fijada se abre en varios También pueden utilizarse las sulfamidas y las
puntos y se corta, con el propósito de separar los sulfonas. D e las primeras se prefiere la sulfa-
granos para luego proceder a su observación y diazina, en comprimidos de 500 mg; la dosis dia
siembra com o ya se señaló. ria es de 6 a 8 g que se dividen en 4 tomas. La
La identificación final del agente causal es ta sulfona preferida es la diamínodifenilsulfona, en
rea de especialistas. Se basa en el estudio de los dosis diarias de 100 a 200 mg. Estos tratamien
granos, de las colonias, de la temperatura óptima tos alternativos duran varios meses y a veces se
de desarrollo y de ciertas propiedades bioquímicas. alternan: varios meses de cotrimoxazol seguidos
por otros con sulfonas o sulfamidas.
La amikacina se administra por períodos bre
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
ves, de 10 a 15 días, en dosis de 15 mg/kg/día
Incluye principalmente las osteomielitis cróni por vía parenteral. En ios casos que presenten
cas que dan fístulas hacia la piel, cuyos agentes compromiso óseo se asocia al cotrimoxazol la
causales más frecuentes son S ta p h ylo co ccu s ciprofloxacina por vía oral a razón de 1,5 g/día,
aureiis y M ycobacterium lubeiculosis. Pocas ve durante 7 meses como mínimo, o la minociclina
ces se observan procesos similares debido a di por la misma vía, en dosis de 200 mg/día y du
versos hon gos, en esp ecial dim orfos, com o rante un lapso semejante.
C occidioides im mitis, P aracoccidioides brasi- Los micetomas maduromicóticos responden
liensis, B íastom yces derm atitidis y Sporothrix poco al tratamiento médico. Algunos producidos
schenckii. En todos estos casos la ausencia de por P. boydii y, con menos frecuencia, por Madii-
granos en el estudio de la secreción y los cortes relia grísea mejoran con la administración de
histológicos permite la diferenciación. ketoconazol, a razón de 400 mg/kg/día, o de itra-
También es importante distinguir las otras afec conazol, en dosis de 200 mg/día, durante más de
ciones capaces de producir cuadros de micetoma, un año. Sin embargo, la mayor parte de las veces
como la actinomicosis y la botriomicosis. estos tratamientos son indicados como coadyu
vantes de la cirugía. Los procedimientos quirúr
gicos son muy variados y se adaptan en función
PRONÓSTICO
de la presencia y extensión de las lesiones óseas,
Debido a la evolución lenta y el buen estado o de la ausencia de éstas. Un nuevo compuesto
general de la mayor parte de los enfermos, el pro triazólico, el posaconazol, ha dado resultados pro
nóstico de vida es bueno. El pronóstico local de misorios en estos micetomas.
pende de la extensión y gravedad del compromi
so óseo; si éste es muy extenso, se requiere la
PROFILAXIS
amputación del miembro afectado.
No hay medidas preventivas de aplicación prác
tica, dado que es muy difícil obligar a trabajado
TRATAMIENTO
res rurales de áreas tropicales a llevar ropas y
El tratamiento médico sólo da resultados satis calzados que los protejan de traumatismos con
factorios en micetomas producidos por actino- astillas o espinas. Por otra parle, combatir los
micetos aerobios, sin compromiso óseo extenso. agentes causales de micetomas en su hábitat na
Suelen emplearse el cotrimoxazol y los amino- tural es imposible.
Bibliografía............................................................... . ■■■—
Consultar al final del capítulo Generalidades de micología médica.
Neumocistosis
M arcelo E. Corti
María F. V illafañe Fioti
.\-Ar-t
-«.i.
cual, no logra alcanzar concentraciones séricas veolar muy característico. La técnica de Giemsa
elevadas. Además, en el parénquima pulmonar es útil para la visualización de las formas tróficas
puede producirse una mala distribución del fár y la inmunofluorescencia directa con anticuerpos
maco, con acumulación de éste en las bases y sin monoclonales facilita la detección de todos los
alcanzar concentraciones útiles en los lóbulos su estadios evolutivos. En los niños se ha propuesto
periores, lo que da origen a formas clínicas atí- recientemente el empleo de la reacción en cadena
picas en esa localización. de la polimerasa (PCR) en el lavado nasofaríngeo.
Finalmente, hay que tener en cuenta la posibili Los métodos indirectos de diagnóstico a través
dad de que la neumonía por Pneiimocystis jiro- de la búsqueda de antígenos o anticuerpos no han
veci se presente como una manifestación de la pri- dado resultados de utilidad clínica. La mayor parte
moinfección por HIV en aquellos pacientes con de las personas, a partir de los 4 años de edad, tie
infecciones primarias sintomáticas con caída en nen anticuerpos contra P. Jiroved. No resulta infre
los recuentos de linfocitos T CD4+ por debajo de cuente, por otra parte, que pacientes con grave in-
200 células/pL. munocompromiso exhiban reacciones serológicas
negativas mientras cursan una neumocistosis.
La demostración del microorganismo en el ma
DIAGNÓSTICO
terial obtenido por fibrobroncoscopia con lava
El diagnóstico de certeza se realiza por la vi- do broncoalveolar, secreciones bronquiales o
sualización del microorganismo en diferentes biopsias endoscópicas tiene valor diagnóstico.
muestras: esputo espontáneo, esputo inducido a El diagnóstico de las recidivas debe realizarse en
través de nebulizaciones con soluciones hiper base a un cuadro clínico compatible y no simple
tónicas, material de lavado broncoalveolar o biop- mente por el hallazgo del microorganismo que
sia transbronquial obtenida por broncoscopia. puede persistir en las secreciones broncoalveo-
Como el proceso patológico es alveolar y no bron lares, aun después de superado el cuadro clínico
quial, los microorganismos no son fáciles de ad luego del tratamiento adecuado.
vertir en las muestras de esputo. Las obtenidas En cuanto a las pruebas de función pulmonar,
mediante procedimientos invasivos tienen más la alteración más notable es la disminución de la
posibilidad de hallazgos positivos y, dentro de capacidad de difusión del monóxido de carbono.
éstas, el lavado broncoalveolar es el que propor Además, con frecuencia los pacientes presentan
ciona los m ejores resultados con la m enor hipoxemia y elevación de laLDH en relación con
morbilidad. Este estudio proporciona datos so la gravedad del proceso. El centellograma con
bre la carga de microorganismos, la respuesta galio-67 posee una alta sensibilidad pero carece
inflamatoria del huésped y la coexistencia de otras de especificidad; puede ser de utilidad en aque
infecciones oportunistas. llos pacientes sintomáticos que no evidencian al
Las técnicas microbiológicas clásicas para la teraciones radiológicas torácicas.
observación de Pneum ocystis jir o v e d se basan en
las tinciones de metenamina de plata (Grocott),
TRATAMIENTO
azul de toluidina y violeta de cresilo, que tiñen
selectivamente la pared de los quistes y la técnica El fármaco de elección es la combinación de
de Wright Giemsa que tiñe los núcleos en todas trimetoprima-sulfametoxazol (TMP/SMX) en do
las etapas del desarrollo. La inmunofluorescencia sis de 15 a 20 mg/kg/día de trimetoprima, en 4
con anticuerpos monoclonales es más sensible que dosis diarias por vía oral o intravenosa. Como al
las tinciones clásicas pero también más costosa. ternativa, se usa pentamidina en dosis de 3 a
En la observación microscópica directa, se iden 4 mg/kg/día en una única dosis diaria por vía
tifican los quistes que miden 4 a 8 pm, son de co intravenosa o la asociación de primaquina en do
lor pardo y paredes gruesas, y contienen en su in sis de 30 mg/día por vía oral más clindamicina
terior 4 a 8 esporozoítos. Con la coloración de 2.400 mg/día por vía oral o intravenosa.
hematoxilina-eosina los quistes no se tiñen y ad Con cualesquiera de los esquemas citados, la
quieren un aspecto de exudado rosado intraal- duración de la terapéutica es de 21 días; en aque-
C apítulo 77 - N eum ocistosis G 625
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78
Prototecosis (algosis)
Ricardo Negroni
Ornar J. Palmieri
stagnora tiene forma ovoide y está rodeada por ubres, que también se la utiliza como agua de
una cápsula semejante a la del género Crypto- bebida. Ha sid o frecuente el aislam iento de
coccus; P rototheca zopfii es ligeramente más Prototheca tanto de la leche no pasteurizada como
grande que Prototheca wickerham ii. Sin embar del estiércol de los animales. El perro es un ani
go, la diferenciación más certera se hace por mal altamente susceptible, que presenta formas
medio de las pruebas de asimilación de fuentes clínicas muy graves de prototecosis con disemi
de hidratos de carbono (auxanograma) de acuer nación a varios órganos, como el hígado, el bazo,
do con los trabajos de Arnoid y Ahearn. los riñones, la piel y los ganglios linfáticos. Ade
Estas algas se desarrollan bien en medio de más produce endoftalmitis y diarrea, con elim i
Sabouraud con glucosa o miel, a un pH de 5,6 a 6, nación de estos microorganismos en la materia
sin cicloheximida. La temperatura óptima de cre fecal. En los gatos se han observado lesiones sub
cimiento es de alrededor de 30®C; crecen bien cutáneas y de los huesos del tarso. Hay un caso
entre 25®C y 37®C y cesan de desarrollarse a 41 °C. de prototecosis diseminada en un ciervo.
Las colonias carecen de micelio aéreo, son lisas Estas algas aclóricas fueron encontradas en las
o levemente plegadas, de color blanco amarillen muestras de materia fecal de pacientes que su
to, con aspecto semejante al de las levaduras: se frían esprue tropical en Puerto R ico, también
hacen visibles después de 48 a 72 horas de incu como contaminantes de lesiones de paracocci-
bación. dioidomicosis y cromomicosis en Brasil, y de car
En la actualidad se aceptan tres especies váli cinomas en España. Sin embargo, el significado
das del genero Prototheca: P. zopfii, es la de ais de estos aislamientos parece ser el de coloniza
lamiento más común en animales; en el ser hu ción transitoria de lesiones debidas a otros agen
mano sólo se han registrado dos casos produci tes causales. El primer caso de prototecosis con
dos por esia especie. P. w ickerham ii es la culti firmada en el ser humano fue informado en 1964.
vada con más frecuencia de especím enes huma Un cultivador de arroz de Sierra Leona (Africa)
nos, mientras que P. stagnora hasta el presente se presentó con lesion es cutáneas ulcerove-
sólo fue recuperada de la naturaleza. getantes, de evolución crónica, en uno de sus
miembros inferiores y adenomegalias de los gan
glios satélites. Con posterioridad se fueron des
EPIDEMIOLOGIA
cribiendo casos aislados de estas infecciones en
Los integrantes del género Prototheca han sido distintas partes del mundo y su incidencia ha au
aislados de numerosas fuentes exógenas, entre las mentado en los últimos años, en relación con la
que se incluyen resina y savia de vegetales, ba mayor cantidad de individuos inmunocompro-
rro de las cercanías de cursos de agua y en la ve metidos. Como factores predisponentes se han
cindad de plantas, agua de alcantarillado, tanto mencionado traumatismos, accidentales o quirúr
de fuentes domésticas como municipales, pisci gicos, linfomas y leucemias, trasplante de órga
nas de natación, acuarios, agua de mar, heces de nos, diabetes insulinodependiente, tratamientos
animales (en especial bovinos, perros, cangrejos, inmunosupresores, inmunodeficiencia primaria e
almejas y porcinos) y alimentos como papas, za inmunodeficiencia adquirida debida a infección
nahorias, tomates y leche no pasteurizada. por HIV. En apariencia el contacto del hombre
Los casos de prototecosis animal y humana con estas algas sería muy frecuente y la infec
poseen una distribución geográfica universal. ción clínicamente evidente es de presentación
La especie animal que se encuentra infectada esporádica, por lo que es lógico pensar que es
con más frecuencia es el ganado bovino destina necesaria la existencia de fallas en los mecanis
do a la producción lechera. En estos animales se mos defensivos para que aquélla se produzca.
han descripto numerosas microepidemias de mas N o se ha comprobado la existencia de conta
titis. La afección de las ubres puede extenderse a gio interhumano, de los animales al hombre o
los ganglios linfáticos satélites. En la mayor par entre animales.
te de los casos la fuente de infección es el agua
de los estanques destinados a la limpieza de las
C apítulo 78 - Prototecosis (algosis) □ 629
•« la piel de la cara, en la nariz y en el tejido celular inmunofluorescencia directa, tanto para cortes
subcutáneo. En los últimos años se han comuni histopatológicos como para extendidos de mate
cados varios casos que exhibían distintas afec rial de cultivos. Estos reactivos son específicos
ciones subyacentes con déficit de la inmunidad de especie.
celular, com o in m u n od eficien cia primaria, En unos pocos casos se han utilizado técnicas de
leucemia mieioide aguda, linfoma de Hodgkin, diagnóstico serológico, para la identificación de
sida y trasplante de pulmón. Las manifestacio anticuerpos específicos con inmunofluorescencia
nes clínicas correspondieron a la de una infec indirecta, y los resultados fueron alentadores.
ción grave de evolución aguda o subaguda, con Los principales problemas que plantea el diag
m fiebre, astenia, adinamia, anorexia, diarrea y pér nóstico de esta afección es la presencia de estas
dida de peso, así como diversos signos y sínto algas aclóricas, en la superficie de lá piel o las
m mas focales ubicados en la piel, las meninges, el mucosas, com o colonizantes transitorios o como
m cerebro, la mucosa nasofaríngea y los órganos contaminantes de lesiones producidas por otros
abdominales. agentes causales.
humanos se han empleado tanto la anfotericina a 0,8 m g/kg/día). En las lesiones cutáneas y
B por vía intravenosa como el fluconazol, el iira- ungueales están indicados los triazólicos (fluco
conazol y, en menor medida, el ketoconazol. nazol, itraconazol) en dosis que varían de 100 a
En los casos diseminados y con pacientes inmu- 200 mg/día, durante lapsos de varios meses. Sin
nocomprometidos se ha usado con más frecuen embargo, la respuesta a estos tratamientos médi
cia la anfotericina B en las dosis habituales (0,2 cos ha sido dudosa.
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Quinta parte
Infecciones parasitarias
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79
Paludismo
Ornar J. Palmieri
caracteres morfológicos especiales; son los deno causante de la enfermedad predomina Plasmo-
minados gametocitos: macrogametocito el feme dium vivax.
nino y microgametocito el masculino. Recuérde
se que sólo las formas asexuales intraeritrocitarias 2. N oreste. En esta zona el paludismo es epi
son las responsables de la enfermedad. Tanto los dém ico, de mayor gravedad y está en relación con
esporozoítos, formas exoeritrocitarias, como los la endemia brasileña (paludismo por P. fa lc i
gametocitos no son deletéreos para el hospedero. parum ).
Después de la invasión parasitaria de los hema Las epidemias están vinculadas con las varia
tíes, en Píasm odium viva.x y P/asm odium ovale, ciones estacionales de los vectores {Anopheles
se produce un ciclo esquizogónico exoeritro- darlingi y A nopheles albitarsis) y pueden afec
citario secundario. Este ciclo no se produce en tar las provincias de Formosa, Chaco, Corrientes
Píasm odium falciparum ni se ha podido demos y Misiones. No obstante, los casos autóctonos son
trar en Píasm odium m alariae. por P. vivax.
Ciclo en el vector
PATOGENIA
El ciclo sexual o esporogónico comienza con
la llegada de los gametocitos masculinos y fem e Los elementos patogénicos más salientes del
ninos -que circulan en la sangre humana- al tubo paludismo son:
digestivo del mosquito, donde maduran hasta 1. La rotura de los esquizontes (hematíes para-
transformarse en gametos. El gameto masculino sitados) con liberación de merozoítos, toxinas y,
penetra en el femenino, lo que origina un cigoto posiblemente, una sustancia pirógena que al ac
y luego un ooquineto que es móvil. En la pared tuar sobre los centros hipotalámicos sería la res
del estómago del mosquito el ooquineto produce ponsable de la crisis febril típica del paludismo.
un ooquiste, que por división genera m iles de 2. Los hematíes parasitados son menos defor-
esporozoítos. Estos son liberados tras la ruptura mables y se adhieren en mayor grado a los endote-
del quiste y la mayoría penetra en las glándulas lios de los capilares y a las vénulas poscapilares;
salivales del mosquito, que al picar secreta sali esto lentifica el flujo sanguíneo, con la consi
va infectiva que lleva los esporozoítos a la san guiente anoxia hística.
gre del hombre. Esto da comienzo al ciclo asexual 3. Susceptibilidad de los hematíes menos defor-
o esquizogónico. mabtes a ser eliminados por el bazo.
4. Respuesta del sistema reticuloendotelial con
esplenomegalia y eventual hiperesplenismo.
EPIDEMIOLOGÍA
5. Anemia producida por la eliminación de cé
La distribución geográfica del paludismo en el lulas parasitadas o no parasitadas, a lo que se
mundo es muy amplia; abarca Á frica, A sia, suma la depresión eritropoyética.
Oceanía y América latina. Están infectadas alre
dedor de trescientos millones de personas. En la Un sinnúmero de otros factores constituyen la
Argentina el paludismo comprende dos zonas: patogenia del paludismo. Merece especial men
ción la fie b r e hem oglobinúrica, ya que en su
1. Noroeste. En esta zona el paludismo es en- transcurso se produce hem ólisis intravascular
démico. En la actualidad abarca las provincias masiva. Los hematíes son destruidos por el siste
de Tucumán, Salta, La Rioja, Caiamarca, Jujuy y ma reticuloendotelial del hígado y del bazo. Ade
Santiago del Estero. Debido a sus límites geo más puede haber trombocitopenia y coagulación
gráficos, se lo denomina paludismo de pie de intravascular diseminada. Este trastorno se pro
montaña (hasta 1.800 m sobre el nivel del mar) a duce si el parásito es P. falciparum .
diferencia del paludismo sudamericano (más de Los modos de contraer la infección palúdica
2.000 m sobre el nivel del mar). En esta región son:
es constante la presencia de Anopheles pseudo- Paludism o adquirido: por picadura de m os
punctipennis, principal vector del área, y como quito hembra (vector) del géiitxo A nopheles, que
Capítulo 79 - Paludismo □ 637
dencia una descarga simpática. Este período frío sangre muestra anemia normocítica, en general
licne una duración variable, de minutos a una o leve, pero puede ser de gran intensidad en casos
dos lloras, y es seguido por la fase caliente, ca de hemólisis por parasitemia intensa. El recuen
racterizada por fiebre alta (más de 39®C a 40®C), to de leucocitos arroja valores normales o dismi
piel caliente y seca, taquicardia, taquipnea, dolor nuidos; no hay eosin ofilia, pero puede haber
abdominal, náuseas, vómitos y delirio (en niños leucocitosis y neutrofilia.
>(# es frecuente la diarrea acuosa y la hipotensión La ictericia es rara, pero si la hay, es a predomi
ortostática, a causa de la vasodilatacíón periférica nio de la bilirrubina indirecta. Los casos graves
marcada). En una a seis horas hay defervescencia, pueden originar disfunciones hepáticas graves,
con importante diaforesis, astenia y somnolen con elevación de las transaminasas. En infeccio
cia. nes por Plasm odium fo lcip a ru m es frecuente ob
lii La calma después del acceso dura 48 horas en servar hiponatremia, con.aumento transitorio de
las fiebres tercianas y 72 horas en la fiebre cuar creatinina y urea. También son posibles otras
m tana, aunque es frecuente que la temperatura complicaciones, como anemia hemolítica grave,
permanezca elevada entre los paroxismos provo insuficiencia renal aguda, edema agudo de pul
m
cados por Plosmodium falcipanim . Es raro que se món y corea.
m mantenga la periodicidad si hay varias generacio
nes de P lasm odhm falcipanim por reinfección. Infección complicada por Plasmodium falciparum
« ni examen físico muestra esplenomegalia mo A pesar de incurrir en algunas reiteraciones, es
derada y hcpatomegalia leve y dolorosa (ésta po conveniente hacer hincapié en el concepto de in
« dría estar ausente en el primer examen). El bazo fección complicada a los fines del pronóstico y
es muy frágil, por lo que hay que extremar las de la terapéutica; si esta última no es oportuna,
m
precauciones en la palpación ya que puede de la vida del enfermo puede estar comprometida.
# terminar su ruptura. Ésta también se ha observa Son aquellos casos que presentan una o más de
do luego de iniciado el tratamiento. las siguientes condiciones:
En el paludismo no hay linfadenopatías. Se han • Parasitemia elevada (recuento mayor de
(lescripto otros signos menos frecuentes, como 80.000 glóbulos rojos parasitados/mm^ o más de
ictericia, exantema petequial, inyección conjun- 5% en el frotis).
tival, hemorragias e infecciones por herpes la • Alteraciones del estado de conciencia.
bial. • Cefalea intensa que no mejora con analgé
- • La auscultación pulmonar por lo general es nor sicos.
mal, aunque suele haber escasos estertores. La • Vómitos incoercibles.
# fiebre y la anemia pueden determinar taquicardia, • Disnea.
.soplos funcionales y también precipitar la insu • Ictericia.
ficiencia cardíaca congestiva en pacientes con en • Insuficiencia renal aguda.
fermedad cardíaca previa. • Deshidratación.
#
ni examen neurológico es normal. El delirio y • Hematocrito menor de 30%.
otro.s pequeños cambios de conciencia son atri • Embarazo.
buidos a la fiebre. En infecciones ^ ot Plasmodium • Fiebre hemoglobinúrica.
# falriparum las alteraciones neurológicas pueden
ser más importantes y consisten en cefalea, som El último trastorno es de particular gravedad.
nolencia, corea, cambio de conducta, alucinacio Comienza con escalofríos y fiebre, seguidos por
nes, meningismo, convulsiones y, más raramen- hem ólisis intravascular masiva, ictericia, hemo-
- #
u \ signos neurológicos focales o coma. globinuria, colapso, insuficiencia renal aguda y
4 !.!» punción lumbar no es diagnóstica; puede uremia. Se la considera una complicación «per
hallarse aumentada la presión del líquido cefalo- niciosa» del paludismo por P. fa lcip a ru m y su
11aijuíilco, por edema cerebral, y en raras ocasio causa se atribuye a sensibilidad a fármacos anti
nes se halla hiperproteinorraquiacon pleocitosis. palúdicos y a déficit de la deshidrogenasa de la
Iras varios días de enfermedad, el examen de glucosa-6-fosfato en los eritrocitos.
Capítulo 79 - Paludismo O 639
DIAGNOSTICO PRONOSTICO
Se administra por vía intravenosa en una dosis N o debe administrarse a niños menores de 6
inicial de 15 mg/kg en infusión lenta (2 a 4 horas), m eses, mujeres embarazadas, o a pacientes con
seguida por 7,5 mg/kg cada 8 horas, durante 7 días. paludismo postransfusional. Tampoco a aquellas
Por vía oral se administra a razón de 10 mg/kg personas que viven en zonas palúdicas o regre
cada 8 horas durante 7 días. sen a ellas.
Se realizará monitoreo electrocardiográfico en Otros fármacos curativos no son de uso corrien
busca de modificaciones del QRS, PR y QT. Los te ni superan a ésta.
demás efectos colaterales y la toxicidad son si
milares a los descriptos para la quinina. Se pro Esquemas terapéuticos
cederá con mayor prudencia en pacientes con 1. Infección no com plicada por todas las espe
cardiopatía previa, trastornos de la conducción, cies excepto Plasm odium falcip a ru m resistente
insuficiencia cardíaca, hipotensión e hipersensi- a la cloroquina.
bilidad conocida al fáimaco. Tratamiento supresor:
• C loroquina (en mg de cloroquina base)
M efloquina. Clorhidrato de mefloquina: Tro- 1er. día: 600 mg vía oral (VO) la primera loma,
picur* comprimidos de 250 mg. 300 mg VO 6 horas después.
Es un antipalúdico de síntesis, activo frente a 2do. y 3er. día; 300 mg VO diarios.
cepas de Plasm odium fa lciparum resistentes a Tratamiento curativo: (sólo para P. vivax y P.
otros antipalúdicos, aunque hay cepas resisten ovale)
tes a éste. La combinación con otros fármacos • Prim aquina (expresada en mg de primaquina
puede retardar el desarrollo de resistencia. Está base) 15 mg por día VO, durante 14 días.
contraindicado en el embarazo. Puede provocar Algunos pacientes con Plasm odium vivax tra
vértigo, náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdo tados con cloroquina y primaquina pueden pre
minal, anorexia, cefalea, palpitaciones y erupción sentar recaídas, las que se deben a fallas en el
cutánea. tratamiento con primaquina. Varían del \% al
30% y deben retratarse.
Proguaníl (cloroguanida). Se presenta en ta
bletas de 100 mg (no se comercializa en la Ar 2. Infección no com plicada por Plasm odium
gentina). falcip a ru m resistente a la cloroquina.
Su producto metabólico es químicamente si a. Quinina o quinídína, 600 mg cada 8 horas
milar a la pirimetamina. Su principal acción es VO durante 10 días; más pirim etam ina, 25 mg
esquizonticida hística primaria, por inhibición de dos veces por día, los primeros tres días, en forma
la dehidrofolato reductasa. La seguridad del simultánea con la quinina o quinidina; más sulfa-
proguanil supera la de todos los agentes profi diazina, 500 mg 4 veces por día, durante 5 días.
lácticos. En raras ocasiones y en dosis altas se b. Fansídar® (sulfadoxina, 500 mg, más piri
han observado vómitos, diarrea y hematuria. Su metamina, 25 mg) tres tabletas en una sola dosis.
eficacia está limitada por el rápido desarrollo de c. T rim etoprim a-sulfam etoxazol (Bactrim
resistencia del Plasm odium falciparum . Fuerte®) un comprimido (trimetoprima, 160 mg,
más sulfametoxazol, 800 mg) dos veces por día
Fármacos antipalúdicos curativos durante 4 días. Su uso es importante en las aso
8-A m inoquínolinas. Fosfato de primaquina: ciaciones del paludismo con enfermedades bac
tabletas de 26,5 mg equivalentes a 15 mg de pri terianas, bronconeumonía, fiebre tifoidea, o si no
maquina base. se dispone de la terapéutica convencional.
Puede dar reacciones adversas graves consis
tentes en anorexia, náuseas, vómitos, cólicos, dia 3. Infección no com plicada por Plasm odium
rrea, cefalea, anemia hemolítica en los pacientes falciparum resistente a: quinina, cloroquina y aso
con déficit eritrocitario de glucosa-6-fosfato des- ciación sulfadoxina-pirimetamina.
hidrogenasa, arritmias, metahemoglobinemia y a. Tetraciclina, 250 mg cada 6 horas VO, du
fiebre. rante 10 días; más quinina o quinidina» 600 mg
642 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
m cada 8 horas VO durante los tres primeros días plicarse en presencia de concentraciones que nor
de iraiamienio con tetraciclina. malmente destruyen esos parásitos.
- #
b. C lindam icina, 600 mg VO cada 8 o 12 ho Si bien esta condición se refiere a cepas de
ras, durante 7 días; más quinina o quinidina, Plasm odium fa lcip a ru m , se debe mantener un
600 mg cada 8 horas VO durante ios tres prime «estado de alerta» frente a la respuesta del Plas
ros días de tratamiento con clindamicina. modium vivaxy hasta el presente sensible a las
c. M efloquina, 25 mg/kg de peso como dosis aminoquinolinas.
m total. Puede administrarse como única dosis o dar Los patrones de resistencia para el Plasmodium
i0 tres comprimidos de 250 jng como primera do falcip a ru m se han establecido con respecto a la
sis, seguidos, 6 a 8 horas después, por dos com cloroquina en áreas g eo g ráfica s de A frica,
primidos, y una tercera dosis de un comprimido Oceanía, Asia y América del Sur.
6 a 8 horas más tarde. Esta distribución geográfica debe tenerse en
(• En casos de P. falciparum resistentes a cloro- cuenta en el momento de indicar quimioprofi-
quina y Fansidar, se puede administrar un curso de laxis, como también al inicio de un tratamiento
jj9
5 a 7 días de quinina o quintdina, en dosis habi empírico.
m tuales, seguidas por m efloquina, 1.500 mg/día La sensibilidad de los parásitos a los fármacos
como dosis única. esquizonticidas puede evaluarse por métodos in
m vivo o in vitro.
4. Infección c o m p lica d a por P la sm o d iu m La determinación de falla de respuesta a la te
m falciparum . Deberá tratarse con la asociación de rapéutica con cloroquina se basa en una investi
quinidina y clindamicina: gación cuidadosa del caso, en la que hay que te
t i»
• Q uinidina, 15 m g/kg/dosis en 500 mL de ner en cuenta la calidad del fármaco y la dosis
m solución de dextrosa al 5%, en goteo intravenoso ajustada al peso del paciente, además es necesa
muy lento (pasar en 4 horas). Si no se puede pa rio excluir la posible de falta de absorción (vó
(• sar a la vía oral, repetir cada 8 horas a razón de mitos, diarrea).
7,5 mg/kg/dosis, hasta que se pueda administrar Los métodos in vivo para un tratamiento habi
m por vía oral para completar 7 días de tratamiento. tual con cloroquina definen cuatro tipos de res
En caso de insuficiencia renal o hepática, las do puesta (OMS):
«
sis se ajustarán después del tercer o cuarto día de S (sensible): desaparición de las formas ase
m tratamiento. Se recomienda reducir de un tercio a xuales en sangre periférica dentro de los siete días
la mitad de la dosis diaria total y disminuir la fre de iniciado el tratamiento, sin recrudecimiento
(• cuencia de administración de 8 a 12 horas. El apor subsecuente.
te de líquidos y sodio se controlará en forma ade RI (resistencia I): desaparición de la parasite-
Ü cuada, por el peligro de provocar edema pulmonar. mia asexual dentro de los siete días, seguida por
recrudecimiento dentro de los siete a veintiocho
(•
• C lindam icina, 600 mg en 100 mL de solu días después del tratamiento.
9 ción de dextrosa al 5%, en goteo intravenoso lento RII (resistencia II): reducción marcada de la
(a pasar en una hora), cada 8 horas durante 7 días. parasitemia asexual sin desaparición dentro de
i» En las formas cerebrales está contraindicado el los siete días.
uso de corticosteroides. Las transfusiones serán R U I (resistencia III): ausencia de reducción o
(• realizadas cuando el nivel de hemoglobina esté aumento de la parasitemia asexual dentro de los
por debajo de 5 g% o haya evidencia clínica de siete días.
hipoxia. El empleo de heparina parece no mejo Es aconsejable realizar frotis de sangre perifé
(• rar la evolución de los casos con coagulación rica cada 6 horas en las primeras 48 horas, luego
intravascular diseminada. cada 12 horas hasta la desaparición de la para
i# sitemia asexuada y después cada 24 horas duran
Resistencia te 35 días.
La resistencia de los parásitos del paludismo a En los casos de paludismo por Plasm odium
un fármaco se define como su aptitud para multi vivax los exámenes de verificación de la cura
#
Capítulo 79 - Paludismo O 643
ción deben realizarse los días 15, 45, 75, 105, c. Emplear insecticidas ambientales durante la
135, 165 y 180. Se considera día O el primer día noche (piretrina).
del tratamiento. d. Colocar en las viviendas telas metálicas
(mosquiteros) en todas las aberturas.
PROFILAXIS
Quimioprofilaxis
Si bien las cuatro especies de Plasm odium pro El uso profiláctico de un antipnliídico se defi
ducen morbilidad significativa, sólo el Plasmo- ne com o la administración de un fármaco antes
dium falciparum causa mortalidad aguda, por lo de que la infección se vuelva evidente.
que la infección por esta especie se ha converti La prevención absoluta implicaría la destruc
do en un problema de difícil manejo dentro y fue ción de esporozoítos, pero no existe por el mo
ra de las áreas endémicas. La resistencia a los mento el fármaco que cumpla tal objetivo.
fármacos de uso habitual y la exposición creciente La profilaxis clínica reduce el número de pará
de individuos no inmunes son factores de impor sitos en sangre periférica (esquizontes) a un ni
tancia que determinan la morbimortalidad de la vel que no provoca síntomas. Cuando la admi
infección. nistración se suspende, los parásitos vuelven a
La demora en comenzar la terapéutica adecua multiplicarse y puede sobrevenir un ataque ya
da, los grupos de riesgo mayor (mujeres embara fuera del área endémica.
zadas, niños, inmunodeprimidos) o la ignorancia La indicación de quimioprofilaxis merece una
de las medidas profilácticas acrecientan aun más reevaluación a la luz de los siguientes hechos:
los riesgos de complicaciones y letalidad. a. Extensas áreas de resistencia a la cloroquina.
El consejo médico para quien viaja a un área b. Resistencia a los antifolatos.
endémica debe ser personalizado e informativo en c. Falta de protección total con los fármacos
conceptos básicos, acerca de la transmisión de la disponibles.
enfermedad y de sus manifestaciones clínicas. d. Efectos colaterales graves.
De acuerdo con el ciclo biológico del parásito, e. Infecciones mixtas que no responden a un
sólo una medida ofrece la máxima protección: esquema único.
evitar el contacto con el vector. f. Descuido de medidas elementales y eficaces
La información geográfica y la descripción de de protección (agravado por el abandono del ré
tallada del tipo de actividad a desarrollar debe gimen prescripto).
tener en cuenta: g. Selección de resistencia a fármacos de utili
a. Residencia en el área endémica (urbana, ru dad terapéutica.
ral, selvática).
b. Momento del día en el que se desarrollará la Sobre estos precedentes, la quimioprofilaxis
actividad. debe ofrecer mínimos riesgos de toxicidad y com
c. Tiempo de permanencia en el área. pletarse con el tratamiento precoz.
d. Itinerario y medios de locomoción emplea
dos. Esquemas recomendados
Es comprensible que fuera del área urbana (sin Area de sensibilidad a la cloroquina (inclu
exclusión) durante el crepúsculo y con la prolon ye el NO argentino, sin casos autóctonos de Plas-
gación de la permanencia aumenten las probabi m odium falciparum ):
lidades de transmisión. Cloroquina) 300 mg una vez por semana.
Algunas medidas efectivas que impiden el con
tacto con el Anopheles son: Areas con casos com unicados de resistencia
a. Usar vestimenta adecuada que deje la me a la cloroquina (África central y su costa occi
nor superficie corporal expuesta, fundamental dental):
mente en horas de la tarde. M efloquina, 250 mg una vez por semana.
b. Usar repelentes en áreas de piel expuestas y
en la vestimenta.
644 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
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Lyv;n*--“
r80
Enfermedad de Chagas
Ornar J. Palmieri
ETIOLOGÍA
La enfermedad de Chagas es exclusiva del con
tinente americano. La endemia más importante
El agente causal de esta enfermedad es Trypa se registra en Argentina, Brasil, Chile, Uruguay
nosoma cruzi, protozoo de la clase Zoom asíigo- y Venezuela. En Argentina se extiende desde los
phora, familia Trypanosomatidae. límites con Solivia, Paraguay y Brasil, hasta la
T. cruzi tiene un complejo ciclo biológico y du provincia de Santa Cruz.
rante su evolución adopta tres aspectos morfoló Los triatominos que transmiten T. cruzi se ha
gicos diferentes: tripomastigoie, amastigote y llan desde el sur de los Estados Unidos hasta el
epimastigote. sur de la Argentina. Esta enfermedad es una ver
El tripomastigote es la forma flagelada que cir dadera zoonosis.
cula por la sangre de los mamíferos. También se T. cruzi se ha aislado de más de 150 especies
halla en el intestino posterior de los triatominos. de mamíferos salvajes y domésticos. La parasi-
Es fusiforme y mide 20 a 25 |im de largo por 2 a temia prolongada en los animales signifíca un
3 ^m de ancho. abundante reservorio selvático y doméstico en las
£1 amastigote es la forma aflagelada. Se halla áreas enzoóticas. Triatoma infestans y otros tria
en los tejidos de los mamíferos y allí se reprodu tominos pueden hallarse en la vivienda humana
ce. Es redondeado y mide 2 a 4 p.m de diámetro. ocupando grietas, techos de paja u otras imper
m
646 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
#
m fecciones de paredes o leciios, con lo que se esta Mardsen (1987) verificaron la presencia de T.
blece el ciclo doméstico de transmisión. Se co cruzi y comprobaron que en ese medio mantiene
#
nocen 122 especies de triatominos vectores de la su capacidad infectante durante 24 horas. La con
enfermedad, la cual está vinculada fundamental taminación se produciría por la presencia de
mente con la vivienda precaria, la pobreza y la triatominos infectados y sus deyecciones presen
ignorancia. En América latina se estima que hay tes en la caña de azúcar, aplastados por el trapi
alrededor de 16 millones de personas infectadas. che durante el proceso de extracción del jugo.
• En la Argentina el número aproximado de infec Transplacentaria. La infección congénita es
tados es de 3 millones. Las provincias más afec poco frecuente. El pasaje transplacentario de tri-
m
tadas, por orden de importancia, son Santiago del panosomas desde la sangre materna al feto, puede
m Estero, Chaco, Salta, San Luis y Formosa. ocurrir con alta o baja parasitemia. Es desconoci
do el mecanismo por el cual algunos niños de ma
m Modos de transmisión dres chagásicas contraen la enfermedad y otros no.
El hombre puede adquirir la enfermedad por Leche materna. La posibilidad de transmisión
distintas vías: de T. cruzi a través de la leche materna es posible,
Vectorial. La transmisión vectorial es la más pero su frecuencia es muy escasa y es considerada
m
importante y frecuente vía de llegada de T. cruzi un riesgo excepcional. No obstante es aconseja
m al organismo. Los triatominos infectados, duran ble que la madre chagásica aguda no amamante.
te la noche, pican y defecan en la piel en la que Contaminación accidental. Puede contraerse al
# depositan con sus deyecciones los tripomasti- trabajar con vinchucas, animales infectados, cul
gotes; éstos, penetran por las mucosas vecinas o tivos de T. cruzi, al realizar necropsias, al extraer
m por el mismo orificio de la picadura llevados por sangre de animales o individuos infectados y otras
el rascado ya que la picadura produce prurito. tareas en laboratorios donde se estudia esta en
m
H emotransfusión. Se debe a la transfusión de fermedad. Ya ha sido citado el trágico accidente
m sangre de dadores infectados que ignoran su en con infección fulminante del investigador argen
fermedad. El receptor puede desarrollar hiperter- tino Mario Fatala Chabén.
m mia, hepatoesplenomegalia, chagomas, miocar Transplante de órganos. La procedencia de ór
ditis o encefalitis. ganos para transplante de dadores chagásicos,
m Drogadicción intravenosa. El hábito de compar expone al riesgo de enfermedad, el cual se incre
tir jeringas durante la drogadicción intravenosa menta debido a la inmunosupresión practicada en
m
provoca con alguna frecuencia la enfermedad. el receptor.
# Siempre hay que considerar esta posibilidad. Anim ales parasitados. En algunas regiones ru
Digestiva. La posibilidad de que la infección rales se observa este mecanismo de infección al
m chagásica se produzca por vía digestiva, si bien es desollar animales silvestres o semidomésticos, que
rara, está bien documentada en la literatura mé como las cuices, son criados para la alimentación.
m dica. Mazza y Jorg la demostraron experimental Sexual. Esta rara posibilidad ha sido comproba
mente en animales. En las necropsias de dichos da en animales y en el ser humano. Se han halla
m
animales se observó una voluminosa adenopatía do tripomastigotes en la sangre menstrual de mu
m mesentérica o retroperitoneal con gran reacción jeres chagásicas y en el semen de animales de la
macrofágica y nidos parasitarios que confirman la boratorio. Los casos comunicados son de enfer
m primoinfección en el tracto digestivo. Hay múlti medad aguda en hombres que tuvieron relacio
ples observaciones de infecciones humanas por nes sexuales con mujeres chagásicas asintomá-
« ingestión de carne de animales silvestres parasi- ticas. El tripomastigote puede penetrar a través
tados y aun la infección mortal sufrida por Mario de la mucosa del pene.
m
Fatala Chabén por ingestión accidental de sangre
# contaminada en el laboratorio. También fue de
PATOGENIA
mostrada por la ingestión de jugo de caña de azú
car {gtiarapo), alimento que se consume habi En el ciclo doméstico, domiciliario y peridomi-
tualmente en Brasil, y en el que Soares, Dias y ciliario, el reservorio es el hombre y los anima
m
m
C apitulo 80 - Enfermedad de Chagas □ 647
La lesión tisular se circunscribe a la capa mus fa se indeterm inada, clínicamente asintomática, adenopatía satélite preauricular. Este signo, si F ase c r ó n ic a
cular y a los plexos nerviosos mieniéricos; las ca y una fa s e crónica de larga duración. bien es característico, es poco frecuente. Durante esta fase los órganos involucrados con
pas mucosa y adventicia permanecen indemnes. El compromiso visceral es más comíin en el más frecuencia son el corazón y el tubo digestivo.
niño y muy grave en los menores de 2 años. El No obstante, la afectación de uno u otro varía con
Las lesiones observadas en la mucosa son secun Fase aguda
La fase aguda a menudo no se hace evidente, paciente tiene fiebre, habitualmente superior a los las distintas áreas geográficas. En la Argentina es
darias a la estasis.
El estudio histológico revela desaparición de las aunque también hay formas oligosintomáticas, 38®C, poliadenopatías generalizadas, diarrea, más frecuente el compromiso cardíaco y en raras
neuronas de los plexos nerviosos musculares. A por lo que el médico que se desempeña en áreas compromiso bronquial y hepatoesplenomegalia. ocasiones el del tubo digestivo, en tanto que en el
veces pueden verse infiltrados inflamatorios mo- endémicas debe considerar siempre este diagnós En las formas más graves hay compromiso car Brasil es mucho más común el hallazgo de me-
nonucleares; cuando no se ven, las lesiones son tico en los cuadros febriles, sobre todo en la po- díaco y del sistema nervioso central. gaesófago o megacolon. Esta diferencia parece de
indistinguibles de las del megacolon idiopático. blación pediátrica. También en este período pueden aparecer cho' berse a la existencia de distintas cepas de T. cruzi.
La transmisión transplacentaria de T. cruzi es El período agudo clínicamente evidente se pre gom as subcutáneos, {chagom as hem atógenos), La cardiopatía crónica es desarrollada por alre
posible durante la segunda mitad del embarazo. senta en alrededor del 5% de los infectados chagá- sobre todo a nivel de abdomen, nalgas y muslos; dedor del 30% de los enfermos chagásicos. Suele
En el feto produce una infección generalizada, sicos. La gravedad es mayor cuanto menor es la además de edema generalizado, fiebre, exante ser de inicio asintomático, con alteraciones elec
sin signos de puerta de entrada que -c o n lesio edad del paciente. mas, hepatoesplenomegalia, miocarditis, menin- trocardiográficas como primera manifestación.
nes similares a las de la fase aguda- afecta el sis En la transmisión vectorial, luego de un perío goencefalitis, cefalea, insomnio, astenia y mialgias. El electrocardiograma puede registrar extra-
tema nervioso central, el miocardio, el sistema do de incubación de 4 a 12 días, en el sitio de in La miocarditis puede manifestarse como una sístoles ventriculares, trastornos de la conducción
reticuloendotelial y el músculo esquelético. greso del parásito puede producirse el denomi dilatación leve con pequeñas alteraciones elec- intraventricular o auriculoventricular. Son carac
nado chagom a de inoculación. El mismo asienta irocardiográficas o como un cuadro grave con terísticos el bloqueo completo de la rama derecha
en zonas descubiertas de la piel, es de tamaño cardiomegalia, insuficiencia cardíaca descom y el hemibloqueo anterior izquierdo, que en un área
MANIFESTACIONES CLÍNICAS pensada, edemas, anasarca y alteraciones elec- endémica son altamente sospechosos de enferme
variable, poco o nada doloroso y puede adoptar
Se considerarán la enfermedad adquirida y la distintos aspectos (forúnculo, erisipela, hipoder- trocardiográficas francas. Estas últimas consis dad de Chagas. Durante la evolución pueden agre
enfermedad congénita (cuadro 80-1). mitis). Cuando la picadura está próxima al ojo ten en taquicardia sinusal, voltaje disminuido del garse signos y síntomas de insuficiencia cardíaca,
suele presentarse com o com plejo oftalm ogan- QRS, bloqueos auriculoventriculares, y trastor por lo general global y de curso progresivo, con
Enfermedad adquirida glionar o signo de Rom ana. Éste es unilateral y nos de la repolarización ventricular y de la con mayores alteraciones electrocardiográficas.
En la enfermedad adquirida se reconocen tres está caracterizado por edema bipalpebral, inyec ducción intraventricular. El bloqueo de rama de Los pacientes con cardiopatía chagásica, aun
fases: una fa s e aguda, de evolución breve, una ción conjuntival, dacriocistitis, dacrioadenitis y recha y los hemibloqueos de rama izquierda del con leves alteraciones electrocardiográficas, es c .
haz de His, muy comunes en la fase crónica, son tán expuestos a un riesgo aumentado de muerte
excepcionales en este período. súbita por arritmias complejas. Si hay dilatación
Cuadro 80-1. Enfermedad de Chagas, formas clínicas. La meníngoencefalitis, que es muy grave, se cardíaca, debe tenerse en cuenta el riesgo de trom-
produce sobre lodo en lactantes; se caracteriza boembolismo pulmonar por desprendimiento de
por trastornos motores, convulsiones, vómitos y trombos intracavitarios, que suele ser una de las
compromiso del sensorio. Las alteraciones del causas de muerte.
•Forma inaparente •Asintomática •Cardlopatías líquido cefalorraquídeo suelen ser leves. El cuadro digestivo más característico es la apa
•Forma aparente Normales: • IVlegavísceras rición de megaesófago y megacolon.
Cardiaca ECG •Neuropatías fa se in d e t e r m in a d a El megaesófago suele ser de inicio asintomá
Meningoencefálica Ecocardiograma Comienza 8 a 10 semanas después de la pri- tico. Se detecta sólo en estudios de catastro con
Ergometria moinfección, sintomática o asintomática, y puede radiografías de tránsito esofágico. En ellas se ob c
Rx: tórax durar años, incluso toda la vida. En esta fase se de serva el órgano de tamaño normal con retardo en
(C.
Rx. aparato digestivo sarrolla una multiplicación parasitaria lenta, sin la progresión de la sustancia de contraste. Con la
Serología (+) evidencias clínicas, electrocardiográficas o radio evolución aparece disfagia, dolor retroesternal y
Serología (+) Serología (+)
Parasitemia (-) lógicas de compromiso visceral. La infección se regurgitación.
Parasitemia (+) Parasitemia (-)
Xenodiagnóstico (+) o (-) reconoce únicamente por la serología y en forma Es común que los pacientes refieran tomar abun
Xenodiagnóstico (+) o (-)
eventual por la búsqueda del parásito en sangre, dante cantidad de líquido durante la comida para
lEnferbiedád dado que puede haber parasitemias transitorias. facilitar la deglución. Por último, la progresión del
Meníngoencefalitis Esplenomegalia Éstas no son detectables por los métodos directos, compromiso esofágico impide una alimentación
Miocarditis Anemia pero en el 20% al 60% de los casos pueden reco adecuada y sobreviene la desnutrición.
Hepatomegalia Irtericla nocerse mediante el xenodiagnóstico. En esta eta El cuadro radiológico evoluciona con dilata
Serología (+) pa el paciente no tiene conciencia de su infección ción del órgano, cuyo calibre puede estar muy
Parasitemia (+) y constituye un importante reservorio del parásito. aumentado.
650 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
su observación microscópica. Es un método sen piel, corazón, riñón y otros tejidos, además de la
cillo, rápido y sensible, que sólo requiere 0,6 cm' búsqueda de parásitos en sangre y LCR.
de sangre.
Xenocliagnóstico. En la piel del paciente se
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
aplican cajas con triatominos libres de infesta
ción, los cuales han sido alimentados con sangre En la fase aguda y en la zona endémica debe
de ave, y se dejan durante 30 minutos para que hacerse con todos los cuadros febriles que cur
se alimenten con su sangre. Treinta y sesenta días san con hepatoesplenomegalia: leucemia, lin-
después las deyecciones de los triatominos se fomas, leishmaniosis visceral, esquistosomosis,
observan entre portaobjetos y cubreobjetos; el paludismo, septicemia y otras.
resultado es positivo, si las deyecciones mues El signo de Romaña debe diferenciarse de otras
tran el parásito. causas de tumefacción ocular con conjuntivitis.
S ero h g ía . Se dispone de las técnicas de enzi- La forma congénita obliga a distinguirla de la
moinmunoensayo (ELISA), inmunofluorescencia sepsis neonatal.
indirecta (IFI), hemaglutinación (HAI), aglutina La forma cardíaca crónica no debe confundir
ción del látex, aglutinación directa, inmunoen- se con otras cardiopatías dilatadas: miocardio-
sayo en fase sólida y fijación del complemento patía hipertensiva, alcohólica, idiopática y otras.
(FC) o reacción de Machado-Gueneiro. La serología y la epidemiología son importantes
Las reacciones de ELISA e IFI son las más pre en estos enfermos.
coces y sensibles y pueden detectar IgM o IgG. Las megavísceras obligan al diagnóstico dife
La sensibilidad de la FC es algo menor (cercana rencial con la acalasia, en el caso del megaesó-
al 85% después del sexto mes de enfermedad). fago, y de la enfermedad de Hirschprung en el de
La HAI es poco sensible en etapas tempranas megacolon.
de la infección, dado que no detecta IgM; es útil
para pruebas de detección o screening por su sen
COMPLICACIONES
cillez y sensibilidad para detectar enfermedad
crónica. En los pacientes con formas cardíacas, las des
La aglutinación directa -detecta anticuerpos del criptas con más frecuencia son la muerte súbita
tipo IgM - es útil por su sensibilidad en etapas por fibrilación ventricular, la cardiopatía dilata
tempranas de la infección. da con insuficiencia cardíaca, la embolia pulmo
Todas las pruebas mencionadas pueden dar re nar por trombos intracavitarios y, aunque poco
acciones cruzadas con otros parásitos hísticos. En frecuente, puede haber rotura del aneurisma de
la práctica suelen realizarse 3 reacciones: IFI, FC la punta del corazón.
y HAI. La muestra se considera positiva cuando Las complicaciones del megaesófago suelen
lo es el resultado de dos de ellas. De este modo ser: esofagitis por reflujo, neumonías aspirativas,
la sensibilidad y especificidad se aproximan al dificultad para la alimentación -co n la consi
100 % . guiente desnutrición- y el aumento del riesgo de
La reacción en cadena de la polimerasa (PCR) desarrollar carcinoma epidermoide.
permite la detección de pequeñas cantidades de En los casos que cursan con megacolon pue
ADN de T. cruzi. den desarrollarse obstrucciones intestinales por
Durante la fa se crónica la parasitemia es baja fecalomas, vólvulos y, con menor frecuencia, per
y la identificación del parásito, poco probable; foración intestinal.
por lo tanto, se recurre a la serología, que estu
diará la respuesta inmune del hué.sped o sea sus
PRONÓSTICO
anticuerpos.
En las fornias de reactivación -e n pacientes so Depende de diversos factores, entre los que se
metidos a trasplante o con sida- suelen ser útiles destacan el área geográfica, el período evolutivo
los métodos directos. Puede realizarse el estudio y la edad del paciente.
histológico y la inmunomarcación de biopsias de El área geográfica parece desempeñar un pa-
652 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
peí importante, ya que la frecuencia de localiza Con frecuencia las taquiarritmias son contro
ciones no es igual en distintas zonas. En Argenti ladas con amiodarona. Si hay bloqueos auriculo-
na, Brasil y Venezuela, entre el 15% y el 35% de veniriculares, puede requerirse la implantación
los chagásicos crónicos presentan formas cardía de un marcapasos.
cas. En El Salvador y Panamá prácticamente la En los pacientes con megaesófago correspon
totalidad de los ECG tomados a pacientes con de instituir apoyo nutricional y, en muchas oca
serología positiva son normales. siones, la solución es quirúrgica.
De los pacientes que alcanzan la forma cróni En los pacientes con megacolon están indica
ca, en Brasil alrededor del 15% desarrolla for das medidas dietéticas para facilitar la evacua
mas digestivas. En la Argentina cerca del 30% ción intestinal, pero en los casos avanzados está
padece formas cardíacas, pero no hay estadísti indicada la cirugía.
cas respecto del compromiso del tracto gastroin El tratamiento destinado a la erradicación de
testinal. la causa es de gran utilidad durante la fase aguda
Estas diferencias regionales parecen deberse a y en la forma congénita. En consecuencia, corres
la presencia de cepas de T. cruzi con distinta vi ponde tratar a todos los pacientes dentro de los
rulencia. dos primeros años de contraída la enfermedad, ya
Durante el período agudo la enfermedad es que la eficacia de la medicación es máxima en los
mortal en el 10% de los casos no tratados. La le primeros meses y decrece con el tiempo.
talidad es mayor si hay bloqueos de rama izquier Si bien el tratamiento clásico se ha limitado a
da del haz de His o meningoencefalitis, también la enfermedad aguda, en un número creciente de
en pacientes de edad temprana y en los que pa publicaciones se señala la utilidad del tratamien
decen formas congénitas. to de los pacientes en fase crónica indetermina
La forma crónica indeterminada suele mante da. Instituciones oficiales en el Brasil y la Ar
nerse por períodos de 10 a 30 años, e incluso gentina, com o también muchos expertos, sostie
durante toda la vida. En este período el riesgo de nen lo mismo.
muerte es igual al de la población general. No se discute la necesidad de tratar las formas
Las manifestaciones orgánicas crónicas suelen de reactivación en enfermos inmunodeprimidos.
aparecer entre los 20 y los 40 años de edad, pero Hay dos alternativas terapéuticas:
en general las manifestaciones cardíacas graves El benznidazol -u n derivado nitroimidazólico-
se ven en mayores de 50 años. se administra en dosis de 10 mg/kg/día (600 mg/día
Las alteraciones del ECG, aun en pacientes en adultos) durante 30 a 60 días. Sus principales
asintomáticos, aumentan el riesgo de muerte sú efectos adversos son intolerancia digestiva, re
bita por arritmias complejas. acciones cutáneas y polineuropatías. Está contra
El pronóstico es peor en hombres que en muje indicado durante el embarazo.
res. El nifurtimox~üT\ agente del grupo de los nitro-
Las formas digestivas tienen mejor evolución furanos- se administra durante 30 a 60 días en do
que las cardíacas. sis de 10 mg/kg/día en adultos y de 15 mg/kg/día
en niños. Sus efectos adversos son comunes aun
que no suelen ser graves: puede producir intole
TRATAMIENTO
rancia digestiva y polineuritis. No tiene contrain
Debe considerarse el tratamiento de las locali dicaciones absolutas.
zaciones y consecuencias, pero también el de las
causas de la enfermedad.
PROFILAXIS
El tratamiento de la cardiopatía consiste en las
medidas habituales para los casos de arritmias o El denominador común de la endemia es el tipo
insuficiencia cardíaca de otra causa. Hay que te de vivienda. La profilaxis debe perseguir, en pri
ner cuidado especial en el manejo de los digitá- mer término, el control de la transmisión vectorial
líeos, ya que pueden complicar el manejo de las domiciliaria; cuando fuere posible, mejorando las
arritmias. condiciones de la vivienda mediante la elimina-
C apítulo 80 - Enfermedad de Chagas □ 653
cíón de las grietas, en las que el insecto anida, o rutinaria desde 1963; se efectúa hemaglutinación
por medio del rociado periódico, del dom icilio y indirecta y la sangre reactiva se descarta.
el peridomicilio, con insecticidas de acción resi Para los países de alta endemicidad en los que
dual, como los piretroides. Con estas medidas y no hay control en bancos, se recomienda el trata
con un sistema de vigilancia epidemiológica, en miento de la sangre con 125 mg de violeta de gen
Brasil se eliminó la transmisión vectorial. ciana cada 500 mL.
También se debe realizar un control estricto en Si bien la transmisión vertical es muy variable
bancos de sangre de los hemoderivados a trans según la región a considerar, es importante reali
fundir. zar pruebas serológicas a las mujeres embaraza
En la Argentina la sangre se controla en forma das para la detección precoz del niño en riesgo.
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11
Toxoplasmosis
Ornar J. Palmieri
tico. Éste tiene un diámetro de 10 a 200 jim y produce si la mujer contrae la infección durante I
puede contener varios miles de bradizoftos. Su la gestación.
pared se tiñe bien con ácido peryódico de Schiff Un grupo con susceptibilidad especial son los i
(PAS), Wrighi-Giemsa, inmunoperoxidasa y con pacientes con sida, en quienes la probabilidad de
la metenamina argéntica de Gomori. Los quistes adquirir la infección aumenta cuando el recuen- !
pueden localizarse en cualquier órgano, pero su to de células T CD4+ desciende por debajo de *
hallazgo es más común en el cerebro, la retina, el 100/mm^. Por lo general desarrollan una encefa
miocardio y el músculo esquelético. Son relativa litis cuyo mecanismo patogénico suele ser la reac
mente resistentes a los jugos digestivos, por lo que tivación de una infección pasada, aunque no hay ;
es posible adquirir la infección al comer carne cru que excluir su adquisición con ulterioridad a la
da o poco cocida. Son destruidos por el calor infección por HIV. Es importante advertir a las !
a61®C durante cuatro minutos y por congelación a embarazadas o a los sujetos inmunodeprimidos ^
20*C durante 24 horas seguida por calentamiento. con serología negativa para toxoplasmosis, cómo i
prevenir esta infección y la conveniencia de so- I
meterse a un control serológico periódico. 1
EPIDEMIOLOGÍA
C
658 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
lis, sarcoidosis, lepra o el presunto síndrome de tratamiento lo constituyen las mujeres con sero
histoplasmosis ocular. La panuveítis puede acom logía positiva que buscan el embarazo o las que
pañar a la coriorretinitis, pero la toxoplasmosis hayan tenido un hijo con toxoplasmosis congé
nunca produce uveítis anterior en forma aislada. nita, ya que en embarazos posteriores no se pro
En la toxoplasm osis congénita el diagnóstico ducirá la infección fetal.
diferencial abarca fundamentalmente todas las En cambio, hay que tratar a los pacientes inmu
afecciones del síndrome TORCH [T oxoplas nocompetentes con toxoplasmosis adquirida de
mosis, Otras (sífilis, listeriosis, HIV y otras in repercusión general importante; a quienes pade
fecciones virales y bacterianas). Rubéola, Cito- cen coriorretinitis activa; a los pacientes inmuno-
megalovirus y Herpes simple]. Esta forma clíni deficientes (por sida, linfomas u otra causa) con
ca se caracteriza por el aumento marcado de la toxoplasmosis adquirida o reactivada en cualquier
proteinorraquia. localización; a los niños con toxoplasmosis con
génita; a las mujeres en las que se demuestra sero-
conversión durante el embarazo; a los que ad
COMPLICACIONES Y PRONÓSTICO
quieren la toxoplasmosis por accidentes de labo
En la toxoplasm osis adquirida en el paciente ratorio, y a aquellos casos postransfusionales o
inm unocom petente no suele haber complicacio postrasplante de órganos.
nes y el pronóstico en general es bueno; en la El tratamiento de elección es la asociación de
mayoría de los enfermos transcurre en forma so sulfadiazina con pirimetamina. La primera se ad
lapada y el curso es autoUmitado. ministra por vía oral, a razón de 100 mg/kg/día;
En la toxoplasm osis adquirida o reactivada en en el adulto esto equivale 4 a 6 g por día reparti
el paciente inm unodeficiente las complicaciones dos cada 4 o 6 horas. La dosis de pirimetamina es
que se presentan se relacionan, en la mayoría de de 100 a 200 mg el primer día y luego 25 a 75 mg
los casos, con la localización neurológica. El pro por día, en una sola toma, por vía oral. En los
nóstico casi siempre es malo, aunque mejora si niños, 1 mg/kg/día durante 1 a 3 días y luego
se instaura tratamiento temprano. 0,5 mg/kg/día en una sola toma. Ninguno de estos
La complicación más importante de la toxoplas fármacos es activo contra las formas quísticas, sólo
m osis ocular es la ceguera cuando la lesión en la lo son frente a los taquizoítos, por lo tanto no
mácula es importante, no retrocede a pesar del erradican la infección. Tanto la sulfadiazina como
tratamiento y deja una secuela definitiva. la pirimetamina inhiben, en distintos niveles, el
La toxoplasmosis congénita puede originar im metabolismo del ácido fólico del parásito, por lo
portantes complicaciones, las cuales ya se han que se trata de una asociación sinérgica. La ac
descripto. El pronóstico depende de la forma clí ción antifolato sobre las células humanas puede
nica y de la precocidad con que se haya estable antagonizarse, sin mengua de la acción terapéu
cido el tratamiento en la paciente embarazada, si tica, mediante el agregado de ácido folínico (leu-
es que la primoinfección se diagnosticó oportu covorina) en dosis de 5 a 20 mg por día, por vía
namente durante el embarazo. oral. En todos los casos y durante todo el trata
miento debe realizarse, cada 2 o 3 días, el con
trol del hemograma con recuento plaquetario,
TRATAMIENTO
sobre todo al finalizar el tratamiento que es cuan
El tratamiento de la toxoplasmosis no es nece do la mielosupresión, inducida por la pirime
sario en pacientes inmunocompetentes con in tamina, es más intensa. Además hay que admi
fecciones asintomáticas o con formas linfogan- nistrar líquidos en abundancia con el fin de pro
glionares de escasa repercusión general. Tampo mover una buena diuresis, para evitar la cristaluria
co lo es en embarazadas con serología positiva, que puede provocar la sulfadiazina.
pero en títulos bajos que no se elevan durante el La asociación trimetoprima-sulfametoxazol es
curso del embarazo, ya que ésta es expresión de una alternativa terapéutica algo menos eficaz que
infección pasada y por lo tanto la infección fetal la anterior. La dosis es de 30 mg/kg de sulfame-
no es posible. El tercer grupo que no requiere toxazol y 6 mg/kg de trimctoprima, cada 6 horas.
m
m por vía oral o IV. También menos activa pero dosis altas 1 a 2 mg/kg/día de prednisona que se
menos tóxica es la espiramicina, por lo que está irán reduciendo en forma paulatina de acuerdo
indicada en la toxoplasmosis de la embarazada. con la mejoría clínica. El oftalmólogo debe con
La dosis es de 1 g cada 8 horas por vía oral. Otra trolar la evolución, dado que en algunos casos
I»
alternativa es la asociación de clindamicina con hay que recurrir a la fotocoagulación o a la vitrec-
m pirimetamina, sobre todo en las formas encefa- tomía. La duración del tratamiento varía con la
líticas de los inmunodeficientes (cuadro 81-1). evolución y la forma clínica, pero com o mínimo
•1 La coriorretinitis en actividad siempre debe tra es de 4 a 6 semanas. En los pacientes inmuno-
tarse, aunque en estos casos al tratamiento deficientes el tratamiento se prolonga hasta por
m etiológico hay que agregar corticosteroides en lo menos un mes después de la mejoría clínica.
Los niños con toxoplasmosis congénita, durante
m
el primer año de vida se tratan con sulfadiazina
m Cuadro 81-1. Esquemas de tratamiento de la ence 50 mg/kg dos veces por día, por vía oral más piri
falitis toxoplásmica en pacientes con sida. metamina 2 mg/kg/día durante dos días y luego
1 mg/kg/día. También se administrarán 5 a 15 mg
por día de ácido foiínico. Este esquema de trata
m • Pirimetamina: primera dosis 200 mg, miento se mantiene diariamente durante 2 a 6
luego 50 a 75 mg/día/vía oral meses; luego tres veces por semana durante 1 año.
m
más Algunos autores alternan con series de tratamien
m Ácido foiínico (leucovorina): 10 a 20 mg/día/vfa oral to con espiramicina en dosis de 100 mg/kg/día.
o IM o IV (hasta 50 mg/día)
más alguna de las siguientes opciones
Sulfadiazina; 1 a 1.5 g cada 6 horas/vía oral
PROFILAXIS
m o Es importante en la embarazada seronegativa
Clindamicina: 600 a 1.200 mgAria oral o IV cada 6 horas y en el paciente inmunodeficiente. Ambos deben
consumir la carne y otros alimentos perfectamente
1 • Sulfametoxazol-trimetoprima: SMX 30 mg/TMP cocidos; no limpiarán las cajas con arena donde
6 mg/Vg cada 6 horas, vía oral o IV orinan o defecan los gatos ni tendrán contacto
o con ellos; usarán guantes descartables durante los
• Pirimetamina trabajos de jardinería y para la preparación de
-m igual dosis que en el alimentos com o carnes y verduras crudas; se la
más
tratamiento de elección varán las manos después del trabajo y antes de
m Ácido foiínico
comer; no deben comer huevos crudos ni beber
más alguna de las siguientes opciones
leche no pasteurizada. Las cajas con arena que
Azitromicind; 1 a 1,5 g diarios, vía oral
contienen la orina y las heces de los gatos deben
'1 o
elim inarse todos lo s días, antes de que los
Atovacuona: 750 mg cada 6 horas, vía oral
ooquistes esporulen y puedan infectar.
o
Aún no se dispone de vacuna contra la toxo
Dapsona: 100 mg diarios, vía oral
»
plasmosis.
J 9
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í í
i-
Leishmaniosis
Ornar J. Palmieri
Lutzom yia longipalpis. Los reservorios de la in Estos promastigotes se convierten en amastigotes
fección son los perros domésticos y otros cánidos, en los macrófagos de la piel, se multiplican y lue
zorros, roedores y aun el propio ser humano. En go se diseminan a los fagocitos mononucleares
forma esporádica pueden producirse casos de del sistema reticuloendotelial. Los síntomas, que
leishmaniosis visceral por otros tipos de Leishma- pueden abarcar un espectro variable, dependen
nia com o L. (L.) m exicana y L. (L.) trópica. de la forma de presentación. Ésta puede ser agu
La leishm aniosis cutánea del Viejo Mundo, da, subaguda o crónica. Hay que destacar que hay
también llamada «botón de Oriente», «bolón de casos asintomáticos que se curan en forma es
Bagdad» o «botón de Aleppo», es causada porL. pontánea. En las formas sintomáticas hay fiebre,
(¿.) trópica^ L. (¿.) m ajar, L. (L.) aethiopica, L. hepatoesplenomegalia, astenia, anorexia, palidez
{L.) infantum o L. {L.) donovani. y pérdida de peso. El bazo es blando e indoloro.
Los reservorios animales son los roedores del La hepatomegalia tiene borde agudo, es lisa y
desierto, sobre todo los jerbos, y los perros. La blanda. Pocas veces hay ictericia. Los ganglios
leishmaniosis cutánea del Viejo Mundo es una linfáticos en general no se agrandan. Con la evo
enfermedad esporádica en las zonas endémicas. lución, la piel se toma grisácea, lo que dio origen
Éstas son el norte de África, India, Pakistán, Asia a la denominación kala-azar, que significa «fíe-
central y áreas urbanas de Medio Oriente, como bre negra». Puede haber distintas manifestacio
Bagdad, Teherán y Damasco. Los vectores son nes hemorrágicas, como petequias, equimosis,
especies de Phlebotom us. epistaxis y hemorragias gingivales. El compro
La leishm aniosis tegum entaria am ericana o miso de la médula ósea en ocasiones causa ane
leishmaniosis cutánea del Nuevo Mundo -en d é mia aplásica. La complicación más frecuente es
mica en América Central y América del Su r- la infección bacteriana (dermatitis, neumonía,
constituye un importante problema de salud pú- otitis, septicemia, disentería). Otras complicacio
blica. El norte de Argentina, Brasil y Perú son nes son tuberculosis, anemia y hemorragias gra
los países con mayor prevalencia. ves. Hay que tener en cuenta la posibilidad de
Los agentes etiológicos son L. (V.) braziiiensis, que la leishmaniosis visceral pueda ser la prime
L. (V ) peruviana, L. (V.) panam ensis, L. (L.) m exi ra manifestación del sida o incluso un aconteci-
cana, L. (L.) chagasi, L. (L.) amazonensis, L. (L.) miento de las etapas terminales.
pifanoi y otros. Los vectores son mosquitos del El diagnóstico de leishmaniosis visceral se sos
género Lutzomyia y los reservorios animales son pechará en los sujetos que viven en el área endé
los roedores del monte, el perro y otros animales mica o en los viajeros que semanas o m eses des
domésticos. La leishmaniosis tegumentaria am e pués de estar en ella presenten fiebre prolonga
ricana tiene distintas formas de presentación: da, astenia, anorexia, pérdida de peso, hepatome
leishmaniosis cutánea, cutánea difusa y cutáneo- galia y esplenomegalia marcada.
mucosa. Recibe distintos nombres populares, como Los hallazgos de laboratorio característicos
«úlcera de los chicleros» o «uta» para la forma cu incluyen anemia, leucopenia e hipergammaglo-
tánea, y «espundia» para la forma cutaneomucosa. bulinemia. También pueden observarse inmuno-
complejos circulantes, factor reumatoideo y al
teraciones del hepatograma.
LEISHMANIOSIS VISCERAL
El diagnóstico de certeza requiere la demos
La leishmaniosis visceral o kala-azar es pro tración de la leishmania en los tejidos o en los
ducida en la mayoría de los casos porL. (L.) dono cultivos en el medio de Novy, M cNeal y N icolle,
vani, aunque también puede hacerlo L. (L.) infan o medio NNN. La aspiración de la médula ósea
tum o L. (L.) chagasi. El período de incubación es es un método práctico, seguro y con el que es po
variable y puede oscilar entre pocos días y varios sible demostrar los amastigotes en los frotis teñi
meses. £1 sitio de la inoculación de los promas- dos con Giemsa en alrededor del 80% de los en
tigotes, debido a la picadura del Phlebotom us, fermos. La punción-aspiración esplénica, efec
puede pasar inadvertido o evidenciarse una pápula tuada con aguja fina, es un método de diagnósti
pequeña y más raramente por lesiones ulcerosas. co más sensible (hasta el 98% de positividad),
Capítulo 82 - Leishmaniosis □ 665
pero puede provocar hemorragias potencialmen- con fondo granuloso cubierto por secreción serosa
le fatales. La biopsia de hígado pocas veces re o serosanguinolenta. La histología revela una ne
sulta ser positiva. crosis focal con respuesta infiamatoria mixta,
El hemocultivo o ei cultivo de la capa leucoci- aguda y crónica, con linfocitos, plasmocitos y
taria pueden dar resultado positivo. En los frotis células mononucleares, algunas de las cuales tie
de la capa leucocitaria coloreada con Giemsa tam nen amastigotes en su interior. Después se desa
bién pueden evidenciarse amastigotes dentro de rrolla una respuesta granulomatosa con células
los mononucleares. En los enfermos de sida los gigantes multinucleadas. La evolución es lenta y
amastigotes suelen encontrarse en biopsias de la curación, que demora un año o más, deja una
diversos órganos, como también en líquidos de cicatriz atrófica, plana y brillante. En general esta
lavado broncoalveolar o de derrame pleural. La enfermedad no representa un peligro para la vida
cutirreacción con leishmanina (reacción de Mon pero causa molestias locales y deja cicatrices an
tenegro) suele ser negativa en la leishmaniosis tiestéticas, la mayoría de las veces en el rostro.
visceral. Las reacciones serológicas más utiliza Dos variantes clínicas infrecuentes son la forma
das son la prueba de ELISA y la inmunofluo- recidivante y la diseminada. En la primera, una
rescencla indirecta, relativamente sensibles y es variante hiperérgica, sobre las cicatrices de la
pecíficas. Suelen ser negativas en los enfermos de leishmaniosis ya curada o en su proximidad apa
sida y dan falsos positivos en los pacientes con recen tubérculos. La lesión contiene escasos pa <
paludismo, enfermedad de Chagas, lepra, esquis- rásitos y su aspecto se asemeja al lupus vulgar.
i
tosomosis y leishmaniosis tegumentaria. La forma diseminada o leishmaniosis cutánea
El diagnóstico diferencial deberá realizarse con difusa es una vanante anérgica. En la cara y las <
otras enfermedades infecciosas del área endémica extremidades apaiecen nódulos diseminados, que
y aun con enfermedades no infecciosas. Dentro de no se ulceran y albergan parásitos en abundan {
las primeras se considerarán: paludismo, enferme cia. Estas dos variantes clínicas tienen una evo
dad de Chagas aguda, esquistosomosis, fiebre ti lución prolongada. (
foidea, tuberculosis miliar, brucelosis, histoplas- El diagnóstico se sospecha cuando las caracte
t
mosis y otras. Dentro de las no infecciosas, leu rísticas clínicas son compatibles y el paciente
cemia, linfomas y otras enfermedades malignas. proviene de zonas endémicas. El diagnóstico de t
certeza se basa en la demostración de los amasti
LEISHMANIOSIS CUTÁNEA
gotes en los froiis del material del raspado de la i
base y bordes de la úlcera o en las improntas de
La leishm aniosis cutánea del Viejo Mundo, las muestras obtenidas para biopsia teñidas cor c
«botón de Oriente» o «botón de Bagdad», es pro
vocada en la mayoría de los casos por L. (L.)
la coloración de Giemsa, o también por el exa
men de la biopsia de los bordes de la lesión. Ade
c
trópica, L. (L.) m ajor y L. (L.) aethiopica. En más estos materiales pueden cultivarse en el me ‘i -
ocasiones puede serlo por L. {L.) infantum o L. dio NNN. Los métodos serológicos, como la prue
(L.) donovani. Los promastigotes son inoculados ba de ELISA, la inmunofluorescencia indirectí c
en la piel por la picadura del Phlebotom us. Allí o la cutirreacción con leishmanina (reacción de
se transforman en amastigotes y se multiplican Montenegro), carecen de valor práctico. (t‘
en los macrófagos. El período de incubación va El diagnóstico diferencial incluye micosis (blas-
ría de 2 semanas a 3 años. Las manifestaciones tomicosis, histoplasmosis o coccidioidomicosis)
(t
clínicas dependen de la cepa infectante y del es sífilis, lepra, tuberculosis (lupus vulgar) y mico- ft
tado inmunitario del paciente. bacteriosis atípicas. También deberán considerar
La lesión comienza como una pápula en el lu se los epiteliomas y otros tumores malignos. (t
gar de la inoculación de los promastigotes. Esta
aumenta lentamente de tamaño, se transforma en %
LEISHMANIOSIS TEGUMENTARIA AMERICANA
costra y luego en una úlcera redondeada de unos
t
2 cm de diámetro, superficial, con bordes netos La leishmaniosis tegumentaria americana pre
sobreelevados, rodeada de un halo eritematoso y senta tres formas anatomoclínicas principales
666 □ Q uinta parte • Infecciones parasitarias
\) ¡eishmaniosis cutánea; 2) leishm aniosis cutá- de los macrófagos parasitados. Incluso pueden
nea difusa y; 3) ¡eishmaniosis cufaneom ucosa. comprometer la nasofaringe y los ganglios linfá
ticos.
Leishmaniosis cutánea Esta leishmaniosis está asociada con la deficien
Esta enfermedad es transmitida por insectos cia inmunitaria del paciente en relación con los
vectores hematófagos del género Lutzom yia y antígenos parasitarios, lo cual lo lleva a un estado
producida por diversas especies del género Leish- de anergia frente a la infección. La reacción de
mania: L. (K) l?raziliensis, L. (K) guyanensisy L. Montenegro es negativa. La biopsia de las lesio
(L.) am azonensis y otras. La picadura del vector nes muestra acúmulos de macrófagos con abun
inocula los promastigotes, que en los macrófagos dante cantidad de leishmanias en su citoplasma.
de la piel se transforman en amastigotes. Luego Tiene un curso crónico y progresivo con esca
de un período de incubación de uno a tres meses, sa respuesta al tratamiento.
en el lugar de la picadura, por lo general los miem
bros, aparece una m ácula-que después evolucio Leishmaniosis cutaneomucosa
na a pápula y nódulo dérmico- que con frecuen Conocida como «espundia», es producida por
cia se acompaña con linfadenopatía satélite. Esta L. (K) braziliensis y más raramente por otras leish
lesión nodular inicial puede evolucionar a: 1) auto- manias. Es la forma clásica de la leishmaniosis
rresolución; 2) ulceración y; 3) lesiones vegetan cutaneomucosa hallada en América Central y gran
tes o verrugosas. La forma ulcerosa es la más co parte de la zona norte de América del Sur.
mún. Puede haber una sola úlcera o bien dos o tres; Luego de un período de incubación que varía
son redondeadas, con bordes sobreelevados debi entre 1 y 3 meses después de la picadura infec
do al intenso infiltrado inflamatorio y prolifera tante -producida por el insecto hematófago L u t
ción epitelial, y con un fondo de tejido granuloso zo m yia - se producen las primeras manifestacio
cubierto por exudado. Esta úlcera puede curarse con nes locales. Su patogenia y las características
tratamiento, lo que origina una cicatriz despigmen- anatomopatológicas son las de la leishmaniosis
tada, lisa, fina y brillante; o con menos frecuencia cutánea ya descripta. En la mayoría de los casos
progresa hacia formas fagedénicas y terebrantes, esta lesión inicial es única, aunque a veces c o
o bien adopta formas vegetantes o verrugosas. existen varías lesiones debido a múltiples pica
El diagnóstico y el diagnóstico diferencial se duras simultáneas. En el lugar de la inoculación
basan en los mismos criterios que en la leishma infectante, luego del período de incubación ya
niosis del Viejo Mundo o «botón de Oriente». señalado, aparece una zona eritematosa de va
rios milímetros de diámetro que evoluciona con
Leishmaniosis cutánea difusa lentitud a pápula y al final se ulcera. Con fre
En Brasil es causada por¿. (L.) am azonensis y cuencia el cuadro local es acompañado por linfan-
en Venezuela porL. (L.) pifanoi. En M éxico se la gitis y adenopatía regional.
denomina «úlcera de los chicleros», porque afecta A veces, por diseminación linfohemática, apa
a los que trabajan en los bosques en la extracción recen otras lesiones cutáneas. Éstas pueden cu
del látex (chicle) para la fábricación del caucho rarse en forma espontánea al cabo de varios me
y es producida por L. (L.) m exicana, también ses, tras lo cual queda una cicatriz com o la
hallada en Guatemala y Honduras. En Perú es descripta en la leishmaniosis cutánea. £1 rasgo
conocida como «uta» y provocada porL. (V.) bra- más importante y trascendente de esta enferme
ziliensis. Los vectores son los insectos hema dad es la localización mucosa centro-facial, que
tófagos del género Lutzom yia. aparece luego de períodos variables y se debe a
Se caracteriza por lesiones difusas papulares o diseminación hemática. En el 70% de los casos
nodulares, no ulceradas, algunas verrugosas, que tiene lugar dentro de los primeros 5 años que si
comprometen grandes zonas de la piel, en particu guen a la aparición de la lesión cutánea y en el
lar las áreas expuestas. Tiene predilección por los 30% restante, después de los 5 años.
pabellones auriculares. La multiplicidad de lesio La lesión se inicia en general en el tabique, con
nes se debe a la migración por vía linfohemática eritema y edema de la mucosa seguidos por su per
Capítulo 82 - Leishmaniosis □ 667
foración. Los signos más precoces son la epistaxis diosis, rinoescleroma, rinofima, granulomatosis
y la obstrucción nasal. El tabique es destruido y la de Wegener, linfomas, carcinoma laríngeo, epite-
punta de la nariz se retrae, lo que configura un as liomas y granuloma de la línea media.
pecto característico denominado «nariz de tapir».
El proceso ulcerovegetante puede extenderse y
TRATAMIENTO
perforar la piel de la nariz o el paladar blando. Es
característico el compromiso del labio superior. En Los medicamentos utilizados en el tratamiento
oportunidades se afectan la mucosa bucal, la len de la leishmaniosis son los mismos para todas
gua, la faringe, la laringe y la tráquea. La localiza sus formas clínicas.
ción en la cavidad bucal provoca que en forma Los fármacos de primera elección son los com
progresiva y destructivá desaparezca la lívula y puestos de antimonio pentavalente: el estiboglu-
ios pilares de las fauces. En etapas avanzadas la conato de sodio (Pentostam®) y el antimoniato
enfermedad progresa hacia la faringe y laringe. En de meglumina (Glucantime*).
el velo del paladar se observa un aspecto muy par Este último es el más utilizado en América lati
ticular que se ha denominado «cruz espúndica» y na. Se presenta en ampollas de 5 mL con 1,5 g de
que obedece a la retracción fibrosa de los tejidos antimoniato de meglumina, equivalentes a 425 mg
en medio del proceso vegetante que configura una de antimonio (Sb). La dosis es de 20 mg Sb/kg/día,
cruz. A veces las lesiones son tan destructivas y por vía IM profunda, durante 15 a 30 días. Es con
mutilantes que el paciente no puede comer. En esta veniente comenzar el tratamiento con una dosis
etapa la neumonía es una complicación común que reducida, que se incrementará en forma progresi
puede llevar a la muerte. va hasta alcanzar la dosis completa el tercer día. A
El diagnóstico de leishmaniosis se basa en la veces es necesario un nuevo ciclo de tratamiento
epidemiología, la clínica y la identificación de los luego de 4 a 6 semanas. En las formas cutáneas la
amastigotes. Para esta última se requiere biopsia, respuesta suele ser satisfactoria, aunque no siem
frotis de la punción aspirativa, raspado de los bor pre ocurre lo mismo en las formas mucosas. Aún
des de la úlcera o improntas de las muestras obte no hay criterios rigurosos para demostrar la cura
nidas para biopsia teñidas con coloración de ción y son frecuentes las recaídas luego de una
Giemsa. También puede recurrirse al cultivo de aparente buena respuesta al tratamiento.
parte del material obtenido para la biopsia en el Los efectos adversos del tratamiento con anti
medio NNN, a las reacciones serológicas y a la monio son fiebre, los, artralgias, mialgias, náu
intradermorreacción con leishmanina (reacción de seas, vómitos, pancreatitis, neumonía; alteracio
Montenegro), que en esta forma clínica es positi nes de las funciones cardíaca, renal o hepática, y
va. La identificación de los amastigotes en las biop- dolor en el sitio de la inyección.
sias de lesiones de larga evolución es dificultosa. Para los que no responden ai tratamiento con
En las adenopatías que acompañan a las úlce antimonio o sufren recaídas, una alternativa es la
ras cutáneas de la etapa aguda la punción aspira anfotericina B. Se administra en dosis de 0,5 o
tiva puede mostrar las leishmanias. 1 mg/kg/día por medio, según la tolerancia del pa
La respuesta de anticuerpos es variable, pue ciente, diluidos en 500 mL de solución glucosada
den detectarse en títulos bajos o ser indetectables. al 5% a pasar por vía IV en 6 horas. La dosis total
T,a prueba de ELISA es positiva en los primeros es de 1,5 a 2 g. Los efectos adversos de la anfote
años que siguen a la lesión primaria. La cicatriz ricina limitan su uso (nefrotoxicidad, cardiotoxi-
de esta última es un elemento clínico de gran cidad, fiebre, flebitis). Otra posibilidad es admi
importancia para el diagnóstico. nistrar isetionato de pentamidina 1 o 2 veces por
El diagnóstico diferencial de la lesión prima semana, hasta la curación de las lesiones, en dosis
ria abarca esporotricosis, tuberculosis cutánea, de 2 a 4 mg/kg de pentamidina base (máximo 180
sífilis, lepra, micobacteriosis atípica y neoplasias; mg/día) por vía IV diluidos en 100 mL de solución
en cuanto al de la lesión secundaria, cutaneo- glucosada al 5% a pasar en 1 hora. Este fármaco
mucosa, incluye paracoccidioidomicosis, histo* produce con frecuencia los siguientes efectos ad
plasmosis, sífilis, lepra, tuberculosis, rinospori- versos: cefalea, náuseas, vómitos, dolor abdomi-
668 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
nal, hipotensión aileria!, hipoglucemia y otros. do a un tratamiento previo con sal de antimonio sola.
El inieiferón gamma-1b recombinante, 100 pg/mV Otros fármacos utilizados son el ketoconazol,
día por medio, por vía subcutánea, asociado .con la el itraconazol, el alopurinol y aun otros, pero to-
sal de antimonio pentavalente puede ser eficaz en la davía no hay evidencias que permitan recomen*
leishmaniosis cutaneomucosa que no ha respondí- darlos en forma rutinaria.
_____________
Vectores Distribución geográfica
Kdld-azar L 0-) donovani Phiebotomus India, China, Asia, África
Fiebre negra L (L) chagasí Lutzomyia Brasil
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Babesiosis (t
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A m adeo J. Bava «
Ornar J. Palmieri
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Microsporidiosis
Ornar J. Palmieri
neral bilateral. El examen con lámpara de hen bilis, esputo, líquido de lavado broncoalveolar,
didura revela queratitis punciata superficial y di frotis conjuntival y otros líquidos corporales, y en
fusa. La ulceración comeana es infrecuente. La la biopsia de los tejidos infectados. No hay méto
enfermedad ocular es la manifestación local más dos de diagnóstico inmunológico confiables.
ostensible de una enfermedad sistémica, pero tam
bién se han diagnosticado bronquiolitis, sinusitis,
TRATAMIENTO
infección urinaria, hepatitis y peritonitis. En las
infecciones por Encephalitozoon en pacientes con Se han utilizado múltiples medicamentos para
sida los recuentos de HnfocitosTCD4+ son bajos. esta enfermedad: metronidazol, azitromicina,
Otros dos microsporidios han sido demostra quinacrina, paromomicina, atovaquona, octreó-
dos en enfermos con sida: Septoía intesiinalis y tido, albendazol, fumagilina y otros. El albenda-
Pleistophora. La infección por 5. intesíinaiis pro zol parece ser el más eficaz, si bien el tratamien
duce las mismas manifestaciones que E. bieneusi. to debe ser continuado para mantener la supre
En cuanto a la infección por Pleistophora aso sión clínica de la enfermedad ya que no produ
ciada con el HIV, se ha descripto un solo caso ce la erradicación del parásito. La dosis es de
que cursó con debilidad muscular y mialgias di 400 mg 2 veces por día.
fusas, y los estudios complementarios revelaban
una miopatía inflamatoria.
PROFILAXIS
En la naturaleza existen numerosas amebas que claro, con un nucléolo central denso y prominen
viven com o organismos de vida libre, algunas de te, y un citoplasma granuloso, que contiene eri
las cuales, además, pueden ser parásitos del hom trocitos, leucocitos y emite seudópodos para su
bre o de los animales, por lo que se denominan traslación. La exposición al agua destilada indu
amebas anfizoicas. ce al trofozoíto a transformarse en ia forma flage
Aquellas capaces de producir enfermedad en lada, que habitualmente es biflagelada aunque en
el hombre son las de los géneros Naegleria, Acan- ocasiones hay muchos más flagelos. El quiste es
tham oeha y Balam uthia. La primera provoca la esférico, tiene una pared densa y mide 8 a 12 (im.
m eningocncefalitis am ebiana prim itiva, denomi N, fo w leri es de distribución universal y ha sido
nada así para diferenciarla del absceso amebiano aislada de distintos medios; suelo, polvo, aire,
del encéfalo que puede producir en forma secun agua de ríos, lagos y piscinas, y también de la
daria Entam oeba histolyiica, por vía hemática, a nariz de individuos sanos.
partir del intestino. Las de los géneros Acantha- La meningoencefalitis amebiana primitiva afec
moeha y Balamuthia provocan la encefalitis am e ta sobre todo a niños y adultos jóvenes que se
biana granulomarosa. Las del género Acantha- han bañado en lagos, piscinas o estanques de agua
moebüy además, pueden causar úlceras corneanas dulce cálida. N. fo w leri invade la mucosa nasal,
en usuarios de lentes de contacto, úlceras cutá el neuroepitelio olfatorio y accede al SNC a tra
neas, abscesos subcutáneos, y lesiones pulmo vés de la lámina cribosa del etmoides. Provoca
nares, renales, uterinas, prostáticas y testiculares. una meningoencefalitis difusa y leptomeningitis
En el hombre la infección por amebas de vida purulenta. En la sustancia gris cortical se obser
libre no es frecuente; tampoco se conocen insec van hemorragias y edema, con herniación del un
tos vectores ni portadores humanos de importan cus o del cerebelo. Los bulbos olfatorios presen
cia epidemiológica. tan hemorragia y necrosis. En los preparados
histopatológicos coloreados con hematoxilina-
eosina o con hematoxilina férrica se observan los
MENINGOENCEFALITIS AMEBIANA PRIMITIVA
trofozoítos ó eN . fow leri, en los nervios olfatorios
La meningoencefalitis amebiana primitiva es y en la adventicia y espacios perivasculares de
causada por N aegleria fo w leri, única especie de arterias y arteriolas. No se observan los quistes
ese género que provoca enfermedad en el hom del protozoo en el encéfalo.
bre. Las manifestaciones clínicas comienzan des
El ciclo vital de N. fo w le ri pasa por tres esta pués de períodos de incubación de 2 a 8 días y
dios: trofozoíto, flagelado y quiste. El trofozoíto consisten en un síndrome meníngeo que evolu
mide 10 a 30 |im de diámetro, tiene un núcleo ción al coma con rapidez y en general sin signos
676 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
neurológicos focales. El LCR es hiperienso, tos y quistes. Puede haber compromiso pulmonar
hemorrágico, con 500 a 20.000 leucocitos entre con alteraciones radiológicas y anatomopa-
los que predominan los neutrófilos. La glucosa tológicas, que consisten en neumonía con pre
está disminuida y las proteínas aumentadas. En sencia de trofozoítos y quistes en los alvéolos
el examen microscópico del sedimento en fresco pulmonares.
pueden observarse los trofozoítos. El examen con Acantham oeba llega al SNC por vía hemática
ia coloración de Gram es negativo; por lo tanto, a partir del pulmón o la piel. En el cerebro puede
ante un LCR purulento, negativo para bacterias, hallarse edema, reblandecimiento, hemorragias
es importante la búsqueda de trofozoítos en un y abscesos. En los ganglios basales, el tronco ce
examen en fresco sin coloraciones. rebral y el cerebelo suele haber áreas de necro
La enfermedad sin tratamiento tiene una mor sis hemorrágica.
talidad del 100% y aun con tratamiento es muy El examen histopatológico revela encefalitis
elevada. La infección es fulminante y fatal en 24 necrosante y granulomatosa, con células epite-
a 96 horas. El tratamiento se realiza con anfote- lioides y células gigantes. En estas lesiones, así
ricina B por vía IV e intratecal. También se ha com o en los espacios perivasculares y los vasos »
utilizado miconazol por vía IV e intratecal, y ri- sanguíneos, pueden demostrarse trofozoítos ade
fampicina y sulfisoxazol por vía IV. más de quistes intracelulares y extracelulares.
También es posible hallar leptomeningitis focal
crónica. En ios enfermos de sida las lesiones tien
ENCEFALITIS AMEBIANA GRANULOMATOSA
den a ser necróticas y la inflamación es mínima.
La encefalitis amebiana granulomatosa es cau- El LCR revela pleocitosis linfocíticacon protei-
sada por varias especies de Acantham oeba y por norraquia moderada y gluconaquia normal. Los
Balam uthia mandrillaris. hallazgos en el LCR son inespecíficos y la demos
Las especies de Acantham oeba halladas en esta tración de Acantham oeba es poco probable.
enfermedad son A. culbertsoni, A. castellana, A. Para el tratamiento se han utilizado distintos ¡
polyphaga, A. astronyxis y A . healyi. fármacos: sulfametazina, cloranfenicol, penta-
Los trofozoítos de Acantham oeba tienen entre midina, miconazol. ketoconazol y flucitosina.
15 y 35 |im de diámetro, un núcleo claro, con nu La evolución de la enfermedad es prolongada
cléolos esféricos, y un citoplasma granuloso, con y entre el com ienzo del cuadro neurológico y la
gran cantidad de vacuolas y mitocondrias. Emite muerte pueden transcurrir días o semanas.
proyecciones filiformes llamadas acantopodios;
el quiste tiene doble pared y mide alrededor de
QUERATITIS POR ACANTHAMOEBA
18 pm.
El género Acantham oeba está ampliamente dis La queratitis por Acantham oeba es una infla
tribuido en todo el mundo. Se encuentra en el sue mación crónica de la córnea provocada por algu
lo, aguas estancadas, sedimentos oceánicos y tu nas especies de ese género. Se debe al traumatis
berías de aire acondicionado o calefacción. Tam mo com eano y a la exposición al agua contami- |
bién puede hallarse en las fauces de sujetos sanos. nada. Son factores de riesgo las lentes de contac
La encefalitis amebiana granulomatosa afecta to y su limpieza con soluciones salinas no estéri
a sujetos inmunodeficientes, a quienes padecen les. Esta afección se produce en individuos sin ¡
enfermedades crónicas y debilitantes, a los trata enfermedad previa, por lentes de contacto que j
dos con antibióticos de amplio espectro o a los dañan la córnea, por lavarse los ojos o las lentes
enfermos de sida. con aguas contaminadas.
Sus características clínicas son un comienzo Los agentes etiológicos hallados son A. culbert-
insidioso con signos neurológicos como hemi- soni, A. castellana, A. polyphaga, A. rhyzodes y
paresia, convulsiones, cefalea, náuseas, vómitos, A. hatchetti. Sus trofozoítos y quistes se locali
estupor y signos meníngeos. Pueden hallarse ulce zan en la profundidad del estroma comeano, don- ;
raciones de la piel, con signos inflamatorios agu de se genera una respuesta inflamatoria modera- I
dos y crónicos en los que se evidencian trofozoí- damente aguda. La córnea dañada puede presen- ■
C apítulo 85 - Infecciones por amebas de vida libre □ 677
tar un infiltrado anular característico, congestión £1 tratamiento se realiza con isetionato de pro-
conjuntival o una epiteliopatía dendritiforme con pamidina y dibromopropamidina. También se
infiltrados ¡acunares del estroma. Esta afección utilizan polimixina B, miconazol, ketoconazol,
se caracteriza por la ulceración recurrente y re clotrimazol, neomicina y neosporina, que son
fractaria a los tratamientos habituales para las efectivos cuando se los asocia con el isetionato
infecciones virales, bacterianas o micóticas, tam de propamidina.
bién por el dolor intenso que produce. La profilaxis de la queratitis por Acanthamoeba
£1 diagnóstico se realiza con frotis del hisopa requiere una higiene cuidadosa de las lentes de
do, raspado comeano o biopsia, donde se identi contacto y uso de soluciones estériles para su lim
fican trofozoítos y quistes. pieza.
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Esquistosomosis
Ornar J. Palmieri
DEFINICIÓN
pequeñas vénulas próximas a la luz intestinal,
donde depositan sus huevos. Éstos son de color
La esquistosomosis humana es una enferme marrón-amarillento y miden 120 a 180 }im de
dad aguda, subaguda o crónica, causada por tre longitud por 45 a 50 \xm de ancho. Su morfolo
mátodos del género Schistosom a. Las formas gía es muy característica; son ovalados, tienen
adultas de estos parásitos se ubican en los plexos una espina lateral, similar a la del rosal, que emer
venosos y los huevos que producen se localizan ge cerca de uno de sus polos y en su interior se
en diferentes órganos, según la especie de SchiS’ halla el miracidio. Estos huevos son eliminados
tosoma. Los agentes más frecuentes de la esquis con las heces del hombre, que es el hospedero
tosomosis humana son Schistosom a japonicum , definitivo de S. m ansoni, y pueden alcanzar las
S. haem atobium y S. m ansoni. Otras especies denominadas aguas superficiales de arroyos, ríos,
menos comunes son S. m ekongi, S. intercalatum cañadas, pantanos, bañados o lagunas. Una vez
y S. m attheei. en el agua los huevos hacen eclosión y liberan
En este capítulo se describirá sólo la enferme larvas de aspecto ciliado, llamadas miracidio. que
dad provocada por S. mansoni^ ya que ésta es la tratan de alcanzar al hospedero intermediario que
única especie autóctona de América. para S. m ansoni es un caracol del género Biom-
phalaria, donde el miracidio, después de perder
sus cilias, se transforma en esporocisto primario.
ETIOLOGÍA
Por poliembriotonía éste origina esporocistos
Schistosom a m ansoni es un platelminto trema- secundarios, que a su vez darán origen a nume
todo, dioico (con sexos separados). Los dos sexos rosas larvas con capacidad natatoria denomina
tienen morfología diferente. El macho mide 0,6 das cercarlas. Estas, que son las formas infectan
a 1 cm de longitud, tiene el cuerpo aplanado, for tes, se liberan del hospedero intermediario para
ma foliácea y está ventralmente curvado para for alcanzar al hombre. Después de fijarse al folícu
mar el canal ginecóforo, que aloja a la hembra lo piloso, con el auxilio de sus dos ventosas, las
durante la cópula. La hembra, larga y delgada, al cercarlas penetran a través de la piel con la ayu
canza una longitud máxima de 1,6 cm. El cuerpo da de movimientos activos y de las secreciones
es casi cilindrico, con un diámetro de 0,3 mm. histülílicas de las glándulas de penetración. Las
Ambas formas poseen dos ventosas: una terminal cercarlas también son capaces de penetrar a tra
y otra ventral. La morfología del cuerpo de los vés de las mucosas. Después de la penetración,
esquistosomas está especialmente adaptada, so transformadas en esquistosómulos, migran por el
bre todo en las hembras, a su existencia intravas- tejido celular subcutáneo hasta ingresar a la cir
cular. Las hembras abandonan al macho en las culación venosa, desde donde son llevadas pasi
680 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
vamente al corazón derecho, los pulmones, el luciona hacia la forma adulta y comienza la pos
corazón izquierdo, el sistema porta y las venas tura de huevos, lo que da lugar a la forma clínica
mesentéricas, hasta alcanzar el colon sigm oide y aguda. El cuadro se caracteriza por fiebre, dolor
el recto. En el sistema porta intrahepático los es- abdominal y diarrea con heces sanguinolentas o
quistosómulos se transforman en machos y hem sin ellas. Es poco frecuente la presencia de hepa-
bras, se aparean y migran por el sistema porta tom egalia o esp len om egalia. El hemograma
hasta el territorio de la arteria mesentérica infe muestra leucocitosis y eosinofilia. La respuesta
rior, donde comienza la postura de huevos, los inmunitaria del hospedero a los huevos deposi
que luego alcanzan la luz intestinal, con lo que tados en los distintos tejidos da lugar a las for
se completa él ciclo biológico. mas crónicas de la enfermedad. Una de ellas, la
esquistosomosis intestinal, se caracteriza por un
cuadro de diarrea crónica sanguinolenta, anemia
e p id e m io l o g ía
y desnutrición. En la endoscopia digestiva baja
Schistosom a japonicum se encuentra en Chi se pueden observar lesiones petequiales de la
na, Taiwán y Filipinas; Schistosoma haematobium mucosa, úlceras o pólipos. La otra forma crónica
se distribuye en África y Oriente Medio; Schis- es la esquistosom osis hepatoesplénica. Ésta se
tosom a m ekongi se encuentra en el sudoeste de presenta con hipertensión portal, hepatoesple-
Asia; 5. intercalatum , en el este de África, y S. nomegalia y várices esofágicas. En los estadios
mattheei, en Sudáfrica. La distribución de S. man- terminales de la enfermedad puede desarrollarse
soni incluye la zona tropical de Africa, Sudán, insuficiencia hepática.
Egipto y Yemen. En América, se encuentra en
Surinam, Puerto Rico y Brasil, donde llegó como
DIAGNÓSTICO
consecuencia del tráfico de esclavos africanos.
Un hecho epidem iológico importante es la pre El diagnóstico se basa en la identificación de
sencia en la Mesopotamia argentina de caracoles los huevos de S. m ansoni en las heces, las que se
que podrían actuar com o hospederos intermedia pueden examinar en forma directa o con técnicas
rios de S. mansoni. de concentración. La biopsia rectal permite de
tectar huevos en casos de infecciones crónicas.
El diagnóstico serológico realizado con la técni
ANATOMÍA PATOLÓGICA
ca de ELISA permite identificar anticuerpos con
Las características histológicas de las lesiones gran sensibilidad y especificidad.
provocadas por S. m ansoni se relacionan con la
reacción inflamatoria que producen los huevos
TRATAMIENTO
en los órganos donde se localizan. En el colon
pueden originar granulomas que dan lugar a le El praziquantcl es un fármaco activo contra
siones ulcerosas, polipoides o fibróticas. En el todas las especies de Schistosom a. Se absorbe
hígado suelen causar fíbrosis periportal, obstruc bien por vía oral y se administra en dosis de
ción presinusoidal y de la circulación portal. Tam 40 mg/kg en una sola toma.
bién pueden observarse granulomas en el SNC, Los efectos colaterales son escasos: fiebre, do
en especial en la médula espinal, y en el pulmón. lor abdominal y diarrea. También puede emplear
se la oxamniquina, que es activa sólo contra 5.
m ansoni. Se absorbe bien por vía oral y se admi
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
nistra en una sola toma de 15 mg/kg.
Los síndromes clínicos asociados con la esquis-
tosomosis están relacionados con el estadio de la
PROFILAXIS
infección. La penetración de las cercarlas en la
piel produce una dermatitis que puede adquirir Se basa en medidas que actúen sobre el ciclo
la forma de lesiones maculopapulosas, exante del parásito y en otras que permitan evitar la in
mas, vesículas o pústulas. Luego el parásito evo fección humana. Ellas son:
T
4
Capítulo 86 - Esquisiosom osis □ 681 I
1. El control deí molusco hospedero interme aseguren el suministro de agua libre de cercarias,
diario, por medio de sustancias químicas molus- como también la implementación de medidas para
quicidas, en ciénagas, lagunas y cursos de agua que las heces de pacientes infectados no entren
con flujo subcrítico que favorezca su desarrollo, en contacto con las aguas superficiales.
así com o rectificaciones de cursos de agua, re 3. El tratamiento de los enfermos.
lleno sanitario, etc. 4. Las campañas de educación acerca de los mo
2. La realización de obras de ingeniería que dos de transmisión y los métodos de protección.
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87
Fasciolosis
Ornar J. Palmieri
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Ornar J. Palmieri
m
688 □ Q uinta p a rte - Infecciones parasitarias
rinario. La localización cerebral suele dar lugar a divididos en 3 tomas, durante i a 3 días.
crisis epilépticas, lo que obliga al diagnóstico di El triclabendazol es tan efectivo como el prazi
ferencial con tumores o accidente vascular cere quantel. La dosis es de 5 a 25 mg/kg/día durante
bral. La portación asintomática de la infección pue 1 a 3 días. Este fármaco pertenece al grupo de
de durar muchos años y en ocasiones las imáge los benzimidazoles y ha sido extensamente utili
nes radiológicas se confunden con tuberculosis. zado en animales. Su utilidad en el hombre ha
sido evaluada en varias publicaciones en las que
se señala la buena tolerancia y la ausencia de toxi
DIAGNÓSTICO
cidad. Aunque el triclabendazol no ha sido apro
Se basa en la identificación microscópica de los bado para uso humano, es el de mayor eficacia y
huevos del parásito en muestras de esputo o even sería el tratamiento de elección.
tualmente en materia fecal. £n la actualidad se
dispone de pruebas serológicas muy sensibles y
PROFILAXIS
específicas para la determinación de anticuerpos.
La medida más eficaz es alertar a la población
expuesta sobre la necesidad de cocer los crustá
TRATAMIENTO
ceos. También es de gran importancia el conoci
El fármaco de elección es el praziquantel, que se miento del ciclo de vida y la forma de transmisión
administra por vía oral en dosis de 25 mg/kg/día del parásito.
Capilariosis <
f
A m adeo J. Bava
Ornar J. Palmieri
f
c
(
La capilariosis es una parasitosis provocada por Esta parasitosis es endémica de las Filipinas
nemaielmintos del género CapiUaria. Se descri (Luzón), donde se han diagnosticado más de c
ben diferentes formas clínicas: capilariosis intes- 1.000 casos durante una epidemia.
tinal, hepática y pulmonar, producidas por C. pA/- <
lippinensisy C. hepático y C. aerophila, respecti
TRATAMIENTO C 3
vamente.
Se realiza con tiabendazol o albendazol du
rante 20 días, además del tratamiento sintomáti
CAPILARIOSIS INTESTINAL
co. c
Consiste en una enteropatía acompañada por
pérdida masiva de proteínas y síndrome de malab- 0
CAPILARIOSIS HEPÁTICA
sorción. lo que provoca una pérdida de peso pro
gresiva y emaciación extrema cuando el número El parásito adulto mide 20 mm de largo por
de parásitos es elevado. 1 mm de ancho. Se localiza en el hígado, donde
La diarrea puede ser intratable y acompañarse produce un cuadro de hepatitis aguda o subaguda
con dolor abdominal y fiebre. Los síntomas va acompañada por eosinofilia, similar a lo que ocu
rían con el número de parásitos presentes en los rre con otras larvas migrantes viscerales.
pliegues del intestino delgado, preferentemente Desde su primera identificación, en 1924, se <
en el yeyuno. han descripto cerca de 25 casos en diferentes re
El diagnóstico se realiza por el examen micros giones del planeta, la mayor parte en Checoslo
cópico de la materia fecal, donde se visualizan vaquia y los Estados Unidos. C. hepatica es un
huevos y larvas, o por el examen macroscópico, parásito habitual de las ratas y otros roedores
en el que pueden observarse parásitos adultos de (hospederos definitivos).
2 a 4 mm de longitud. Los gusanos adultos colocan sus huevos en el
El ciclo biológico así como los mecanismos de (
tejido hepático y permanecen en él hasta que sea
contagio no se conocen bien. Los individuos in ingerido por otro hospedero, en cuyo intestino
fectados poseen en común el antecedente de la los huevos se liberan y pasan al medio externo
ingestión de pescados crudos o mal cocidos. Es donde sufren un proceso de maduración que los
tos hospederos intermediarios se infectan al in transforma en infectantes.
gerir huevos embrionados presentes en las heces Tras su ingestión los huevos embrionados li
de los hospederos definitivos, los cuales evolu beran las larvas en el intestino, las que atravie
cionan allí a larvas infectantes. 1
san la pared intestinal y llegan por el sistema porta
690 O Q uinta parte - Infecciones parasitarias
al hígado, donde maduran hasta alcanzar el esta la carga parasitaria del individuo. Es una parasi
do adulto en el que ponen los huevos. tosis frecuente en gatos, perros y otros mamífe
El diagnóstico parasitológico se hace por la ros. Se ha descripto en 9 oportunidades en seres
observación de los huevos en el interior de los humanos (que actúan como hospederos interme
focos necróticos o granulomas en la biopsia he diarios) en la ex Unión Soviética.
pática. En muchos casos el diagnóstico se reali Los síntomas son el producto de la presencia
za en la autopsia. de los helmintos en la tráquea y los bronquios,
donde los adultos cavan galerías y ponen hue
vos. Éstos pasan a la luz traqueobronquial y son
TRATAMIENTO
llevados hacia la faringe por el movimiento mu-
El tiabendazol y el albendazol son los fármacos cociliar, tras lo cual son deglutidos. Se eliminan
de elección para el tratamiento de esta parasitosis. con las heces al medio ambiente, donde se trans
forman en lavas infectantes.
El hombre adquiere la infección al ingerir ali
CAPILARIOSIS PULMONAR
mentos o agua contaminada con larvas infectantes
Es una enfermedad parasitaria caracterizada por (ciclo monoxénico). El diagnóstico se realiza por
la presencia de tos, broncoespasmo, fiebre y eosi- la visualización microscópica de los huevos en
nofilia, que varían de intensidad de acuerdo con el esputo de los individuos infectados.
Bibliografía-----------
Atías A. Parasitología Médica. 4* ed. Ed. Mediterráneo. Calle S. Parasitism by Capillaria hepatica. Pediatrics 1961,
Chile. 1999. 27: 648*655.
Botero O y Restrepo M. Parasitosis humanas. 4 ' ed. CIB.
Colombia. 2005.
90
Angiostrongilosis
Am adeo J. Bava
Ornar J. Palmieri
Son parasitosís provocadas por nematelmintos se encuentran las larvas de tercer estadio. Éstas
del género Angiostrongylus. Pueden manifestar atraviesan la pared intestinal y se sitúan en los lin
se como un cuadro intestinal provocado por A. fáticos, desde donde migran hacia las venas mesen
cosíaricensis o bien como una meningoencefalitis téricas de la región cecal para poner los huevos.
eosinofflica, producto de la infección por A. caH’ El hombre es un hospedero accidental que per
íonensis. mite al parásito llegar a su estadio adulto y colo
Ambas afecciones son endémicas de zonas di car los huevos, los que degeneran y producen le
ferentes del planeta, aunque la mayor parte de los siones granulomatosas de cuerpo extraño. En ge
casos de A. cosíaricensis corresponden a Amé neral, como se observa en otras enfermedades pa
rica Central y América del Sur; en cambio, A. cotí’ rasitarias, los niños se infectan con mayor fre
íonensis predomina en el sudeste de Asia. cuencia.
Las masas granulomatosas se ubican en diferen
tes porciones del intestino grueso y pueden confun
ANGIOSTRONGILOSIS INTESTINAL
dirse con tumores o abscesos, que con el tiempo
Esta afección descripta desde M éxico hasta el se inflaman, hipertrofian y necrosan. A veces, por
sur de Brasil es producida por el nematodo me- su gran tamaño, pueden dar lugar a cuadros de
tasirongiiídeo Angiosírongyltis cosíaricensis. Su oclusión intestinal. En forma simultánea hay fie
ciclo evolutivo es heteroxénico y comprende como bre, anorexia, dolor abdominal y vómitos, también
hospederos definitivos la rata algodonera (Sigmo- leucocitosis de 10.000 a 50.000 elementos/mm\
don hispidus) y la rata urbana (Ralíus norvegicits), con eosinofilia del 10% al 80%.
en cuyas arterias mesentéricas se alojan los hel El diagnóstico etiológico se realiza mediante
mintos adultos. A llí las hembras depositan sus la observación microscópica de larvas y huevos
huevos de los que surgen las larvas de primer esta en los materiales de biopsia intestinal, ya que casi
dio, que atraviesan la pared intestinal y son lle siempre la sospecha clínica lleva a la apendicec-
vadas al exterior con la materia fecal. Para una tomía. Hay que destacar que en general no se ob
evolución exitosa deben ser ingeridas por una servan huevos ni larvas en la materia fecal de los
babosa {Vaginilus plebeius), que actúa como hos pacientes, por lo que los estudios coproparasitoló-
pedero intermediario, en la que evolucionan a lar gicos de rutina son ineficientes para el diagnóstico.
vas de segundo y tercer estadio, estas illtimas con Como profilaxis se recomienda el lavado rigu
capacidad infectiva. roso de verduras que pudieron haber estado en
El hospedero definitivo habitual se infecta al in contacto con babosas, aunque este cuidado no
gerir las babosas o sus secreciones, en las cuales siempre elimina las larvas infectantes de los ali-
692 U Q uinta parte - Infecciones parasitarias
• nicntüs. A veces los alimentos pueden ser expor El ciclo biológico del parásito es heteroxénico
tados o introducidos de manera ilegal desde zo e incluye como hospederos definitivos las ratas
nas de endemia, sin pasar por los controles sani (hospedero habitual) o el hombre (hospedero ac
tarios pertinentes. cidental), que se infectan al ingerir los moluscos
parasitados con larvas del tercer estadio, o bien
TRATAMIENTO vegetales o agua contaminados con estas larvas.
En el hospedero habitual la larva llega a los pul
El tratamiento de esta parasitosis es en general mones, previo paso por el cerebro, donde alcanza
quirúrgico. Algunos autores no aconsejan el uso el estadio adulto y allí deposita los huevos. Éstos
de fármacos antihelmínticos para evitar fenóme hacen eclosión y las larvas (primer estadio) se li
nos alérgicos indeseables en las lesiones. Éstos beran en las arterias pulmonares, pasan luego a la
son provocados por la liberación de antígenos tráquea por donde llegan hasta las fauces, y son
parasitarios, que en los individuos sensibilizados deglutidas y eliminadas al medio externo con las
pueden provocar reacciones graves. heces. Los moluscos, que actúan como hospede
ros intermediarios, se infectan al ingerir las larvas
ANGIOSTRONGILOSIS MENINGOENCEFÁLICA presentes en los excrementos de las ratas.
O MENINGITIS EOSINOFÍLICA El hombre se infecta al ingerir alimentos mal
cocidos, com o caracoles o babosas parasitadas
Es una parasitosis sistémica provocada por An- con larvas de tercer estadio, o bien langostinos,
giosíro/ígyiiis cantonensis, un nematelminto que cangrejos y pescados que hayan ingerido a los
habitualmente vive como parásito en el pulmón anteriores. Las larvas pueden contaminar alimen
de ralas y otros roedores, que son sus hospederos tos vegetales y de esa manera infectar al hombre,
definitivos. si no se lavan lo suficiente o se ingieren crudos.
Produce la meningitis eosinofflica, que cursa con En el hombre, que actúa como hospedero acci
cefalea, fiebre y vómitos, aunque en ocasiones la dental, el ciclo se detiene en el SNC.
invasión puede ser asintomática. Un aspecto im
portante para el diagnóstico es la pleocitosis eosi-
TRATAMIENTO
nofílica presente en el LCR (25% a 100%), no
siempre acompañada por la simultánea eosinofi- N o hay un tratamiento adecuado para esta
lia sanguínea. parasitosis, aunque el albendazol o la ivermecti-
Rara vez suelen observarse las larvas en el LCR, na podrían ser útiles. Al igual que en la angios-
por lo que hay que hacer el diagnóstico diferen trongilosis intestinal, algunos autores recomien
cial con tuberculosis, micosis sistémicas endémi dan no tratar con antiparasitarios los casos
cas, toxoplasmosis u otras parasitosis. asintomáticos, para evitar la reacción de Jarish-
Es endémica del sudeste de Asia y de las islas de Herxheimer por liberación de antígenos parasi
la Polinesia, pero se han descripto casos en numero tarios, que podrían ser más nocivos que la propia
sas partes del planeta, como Egipto, Brasil, Aus parasitosis Oeer reacción de Jarish-Herxheimer en
tralia, África central y Nueva Orleans (Estados el capítulo Enfermedades de transmisión sexual,
Unidos). tratamiento de la sífilis).
aspecto granuloso y fácil de romper. Tiene un te, que permiten el paso del líquido hidatídico al
espesor de 20 a 25 pm. Histológicamente es una espacio limitado por la adventicia. La localización
masa de aspecto plasmodial con numerosos nú hepática más frecuente es el lóbulo derecho próxi
cleos. A partir de ella se desarrollan las vesículas mo a la convexidad. Allí su crecimiento puede
prolígeras, que son pequeñas vesículas que miden provocar síntomas pleurales o pulmonares, o abrir
de 250 a 500 pm y están unidas a la capa germi se en la cavidad pleural o en el pulmón y evacuarse
nativa por pedículos muy tenues que se rompen por vía bronquial. Los quistes que ocupan la zona
fácilmente. En su interior se desarrollan 30 a 40 central del hígado pueden adquirir gran tamaño
escólices, que por rotura de la pared de la vesícula sin provocar síntomas o bien se abren en las vías
quedan libres en el líquido hidalídico que llena la biliares y las obstruyen con restos de membranas
cavidad del quiste o hidátide. El líquido hidatídico o vesículas hijas. La ruptura del quiste en la cavi
es límpido y transparente; contiene sustancias or dad peritoneal puede originar un shock anafiláctico
gánicas e inorgánicas que le confieren propie y luego una siembra peritoneal hidatídica. La con
dades antigénicas, además de elementos figurados taminación del quiste con bilis o su infección se
constituidos por formaciones microscópicas, como cundaria provocan la muerte de la hidátide, al igual
vesículas prolígeras, escólices y ganchos {areni que la calcificación masiva de la adventicia. La
lla hidaíídica). También pueden hallarse vesícu calcificación parcial de la adventicia no causa la
las hijas. Éstas presentan la misma estructura de muerte del parásito.
la hidátide madre: cuticular por fuera, germinativa En el pulmón el quiste se localiza en general
por dentro y líquido hidatídico en su interior. en los lóbulos inferiores y con más frecuencia en
La capa externa o membrana cuticular de la hi el derecho. Crece más rápido que en el hígado y
dátide está en contacto íntimo con el parénquima puede adquirir gran tamaño sin generar síntomas.
del órgano comprometido. En éste se genera una Su apertura hacia los bronquios provoca una
reacción inflamatoria con fibroblastos, células gi vómica hidatídica constituida por líquido hidatí
gantes, mononucleares y eosinófilos, que dan ori dico y restos de membranas. La apertura del quis
gen a una cápsula fibrosa densa denominada ad te en la cavidad pleural provoca una reacción
venticia. Es la reacción del organismo frente al serosa y raramente hidatidosis pleural secundaria.
parásito y puede llegar a la calcificación total, que Además de las localizaciones hepática y pul
ocasiona la muerte del parásito. Esta reacción ad- monar descriptas, el quiste hidatídico puede loca
venticial es propia de tejidos blandos, como el hí lizarse en bazo, páncreas, riñón, corazón, tiroides,
gado, que además permiten el crecimiento pro órbita, parótida, músculo, mediastino, serosas,
gresivo del quiste; en cambio, en la localización hueso, encéfalo, canal raquídeo y otros sitios, ya
ósea no se produce este encapsulamiento adven- sea como localización única o en forma simultá
ticial fibroso y la larva al crecer penetra entre las nea con otras localizaciones. Los signos y sínto
trabéculas del hueso, donde produce múltiples mas que provoca en todas ellas corresponden al
microquistes que generan atrofia por compresión, tejido involucrado, al desarrollo de la hidátide y a
erosión de la cortical y fracturas espontáneas. las reacciones de vecindad con otros órganos. La
hidatidosis puede permanecer silenciosa durante
mucho tiempo o no dar síntomas en ningún mo
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
mento de su evolución, desde el comienzo de la
Éstas dependen de la localización del quiste y enfermedad hasta la muerte del parásito.
de su evolución. En ocasiones los quistes pue
den ser totalmente asintomáticos y de evolución
DIAGNÓSTICO
lenta, como ocurre en general con los de locali
zación hepática, o bien constituyen una tumora- La sospecha diagnóstica puede originarse en
ción palpable, indolora o poco dolorosa. razones epidemiológicas y en otras situaciones,
Las reacciones urticarianas y la eosinofilia, co tales com o fenóm enos alérgicos, eosinofilia,
munes a cualquier localización, están vinculadas vómica hidatídica, ruptura del quiste en la cavi
con la permeabilidad de las membranas del quis dad peritoneal con shock anafiláctico, fractura ósea
696 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
Figura 91-1. R a d io lo g í a p u l m o n a r e n la h id a t id o s is .
patológica, hematuria, síndrome de hipertensión radiología pulmonar (Fig.91-I) revela las siguien
endocraneana, síntomas vinculados con el creci tes imágenes: 1) sombra redonda u ovalada, de
miento del quiste, como molestias o sensación de bordes netos y densidad homogénea; 2) aire en
peso en ei órgano en que asienta, etcétera. tre la cuticular y la adventicia (signo del neumope
En muchas oportunidades la sospecha provie rivesicular)', 3) imagen neumoperivesicular y aire
ne de imágenes obtenidas en estudios radioló en el interior del quiste parcialmente evacuado
gicos, ecográficos, de tomografía computarizada con nivel horizontal del líquido hidatídico (sig
(TC) o de imágenes por resonancia magnética no del doble arco); 4) quiste parcialmente eva
(RM). El diagnóstico por imágenes puede ser de cuado con la membrana cuticular despegada flo
certeza cuando la ecografía, TC o RM muestran tando en el nivel horizontal del líquido hidatídico
un quiste que contiene vesículas hijas. La ecogra (signo del camalote); 5) cuticular totalmente des
fía de hígado, además, puede mostrar la precipi pegada de la adventicia y arrugada (signo de la
tación de la arenilla hidatídica que se produce al m embrana encarcelada); y 6) si el quiste se rom
cambiar en 180 grados y en forma brusca el de pe y se eliminan totalmente las membranas a tra
cúbito del paciente {signo del nevado). Otras ve vés de un bronquio, puede quedar como secuela
ces puede haber una fuerte presunción cuando la una cavidad aérea rodeada por la adventicia (sig'
Figura 91-2. C la s i f ic a c i ó n d e G h a r b i.
Capítulo 91 - Hidatidosis D 697
no de la caverna hidatídica).
COMPLICACIONES
En la hidatidosis hepática, la clasificación de
Gharbi (Fig. 91-2) ha propuesto cinco tipos de imá Las complicaciones de la hidatidosis dependen
genes ecográficas: de múltiples factores: I) de la ubicación del pará
Tipo I, corresponde a quistes uniloculares de con sito en el organismo; 2) de su tamaño; 3) de su
tenido líquido y bordes bien definidos. evolución hacia la invasión de áreas vecinas o su
Tipo II, es el que muestra despegamiento de loiptura, con vehiculización por vía canalicular del
membranas que flotan en la cavidad quística. parásito o sus fragmentos; 4) de la infección, que
Tipo III, evidencia colecciones multiseptadas comienza por la adventicia, invade el quiste y lo
o quistes multiloculares. transforma en un absceso que puede fistulizarse
Tipo IV, presenta masas heterogéneas complejas. hacia la piel u órganos, cavidades, conductos o
Tipo V, son quistes con gruesas calcificacio vasos sanguíneos; 5) de la calcificación de la ad
nes de la pared. venticia, que suele provocar dolor y hemonagia
Estas imágenes se corresponden con el estado locales; 6) de procesos alérgicos de distinta inten
evolutivo del quiste, lo cual es de utilidad para la sidad, desde eritema o prurito cutáneo hasta shock
elección de la conducta terapéutica. anafiiáctico y muerte por ruptura del quiste en una
El diagnóstico parasitológico puede ser macros cavidad. Merece destacarse que estas reacciones
cópico cuando se visualiza el quiste o alguno de alérgicas, que pueden configurar una verdadera
sus componentes durante el acto quirúrgico, o enfermedad sérica (exantemas, prurito, artralgias
cuando éste se rompe y su contenido sale al exte en las pequeñas articulaciones), se deben a la pro
rior por una fístula o vómica, o microscópico, si ducción de microfisuras en la pared del quiste, por
se hallan ganchos, escólices o vesículas prolígeras donde escapan pequeñas cantidades de líquido
en materiales provenientes de vómica, expecto hidatídico que pasan al espacio virtual, que se con
ración, líquidos de punción o fístulas. vierte en real, existente entre la cuticular y la ad
El diagnóstico serológico se basa en el enzimoin- venticia; 7) de la contaminación del quiste con bi
munoensayo (ELISA) que tiene alta sensibilidad lis, que pasa desde los canales biliares existentes
y especificidad. También se pueden utilizar la he- en la adventicia hacia el espacio entre ésta y la cu
maglutinación indirecta, la inmunofluorescencia ticular. Esto determina el daño de esta última y la
indirecta, la fijación del complemento, la aglutina germinativa, que permite el pasaje del líquido hida
ción del látex y el Western blot. tídico y las membranas hacia los canales biliares y
Capron y col. demostraron mediante la técnica provoca cólicos, ictericia y colangitis; 8) de la rup
de dispersión en agar la presencia del «arco 5» con tura del quiste en la cavidad peritoneal, que ade
siderado específico de la hidatidosis humana. Ul más de los fenómenos alérgicos ya mencionados
teriormente Coltorti y col. simplificaron la demos puede causar hidatidosis peritoneal secundaria; 9)
tración del «arco 5» con la doble difusión 5 o DD5. de la luptura del quiste en la cavidad pleural, que
Su especificidad es del 99%, en cambio tiene baja también provoca fenómenos alérgicos, irritación e
sensibilidad o sea que puede haber falsos negati infección pleurales, y raramente hidatidosis pleural
vos. También puede ser negativa en los portado secundaria; 10) de la mptura del quiste en grandes
res de quistes muertos o infectados. En pacientes vasos, que causa fenómenos embólicos; 11) de la
con otras enfermedades parasitarias, cirrosis he localización ósea, que provoca fracturas patológi
pática y enfermedades del colágeno puede haber cas; 12) de los quistes encefálicos, causantes de hi
reacciones positivas falsas a títulos bajos. pertensión endocraneana, signos de foco neurológi-
co y enclavamiento del tronco cerebral; 13) de los
quistes renales productores de hematuria y cólico re
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
nal; y 14) de los quistes en el canal medular, que ge
Debe hacerse con distintas afecciones, de acuer neran compresión medular, paraparesia y paraplejía.
do con el órgano involucrado: quistes simples, Por supuesto, muchas otras complicaciones
enfermedad poliquística, neoplasias malignas, tu puede originar esta enfermedad, cuya enumera
mores benignos, etc. ción completa sería difícil de alcanzar.
698 Ü Q uinta parte - Infecciones parasitarias
alcanzan los capilares linfáticos y venosos, y a graves y mortales por insuficiencia cardíaca
través de la circulación general llegan a todo el congestiva, neumonía o meningoencefalitis. En
organismo. Al cabo de tres semanas se enquistan las formas leves o asintomáticas el número de
sólo en los músculos esqueléticos y los quistes larvas por gramo de músculo es menor de 10. En
se calcifican al cabo de 6 a 18 meses. Éstos tie las formas graves hay entre 50 y 100 larvas por
nen forma ovalada, miden 500 [im y contienen la gramo de músculo. El período de incubación de
larva enrollada en espiral. Se calcula que perma la enfermedad depende del número de larvas in
necen vivos y viables durante 5 a 10 años. El c i geridas con la carne cruda o poco cocida. Uno a
clo biológico sólo puede continuar si un nuevo tres días luego de la ingestión comienzan los pri>
hospedero ingiere las larvas enquistadas. meros síntomas, en los que predominan las ma
Los músculos más afectados son; diafragma, nifestaciones digestivas: dolor abdominal, náu
pectorales, deltoides, gemelos, intercostales, ma- seas, diarrea y a veces fiebre y malestar general.
seteros, laríngeos, linguales y oculomotores ex Son producidos por la acción irritante local de!
trínsecos. El pasaje de las larvas por otros teji parásito sobre el intestino, originada por la pene
dos que no sean los músculos estriados produce tración de las hembras en la submucosa, y la pos
una reacción inflamatoria granulomatosa, pero no terior parición y liberación de las larvas. En esta
da origen a quistes. etapa pueden encontrarse triquinas en las heces.
El estadio siguiente, o de las manifestaciones
extradigestivas, comienza al séptimo u octavo día
ANATOMIA PATOLÓGICA
y corresponde a la diseminación larvaria por todo
Las lesiones más importantes están en los mus- el organismo. Los síntomas dominantes de este
culos esqueléticos. Hay miositis intensa, con de período son fiebre, edema periorbitario, edema
generación hialina de las fibras adyacentes, hi subcutáneo, conjuntivitis, hemorragias subcon-
peremia, edema, hemorragia e infiltración de juntivales o retinianas, quemosis, mialgias, dis-
linfocitos, neutrófilos, eosinófilos y macrófagos fagia, trismo, hiperestesia y postración. A veces
mononucleares. Las larvas se enquistan cerca de se observan hemorragias subungueales «en asti
los tendones, lo que da el aspecto microscópico lla» o exantema maculopapuloso. Las manifes
típico descripto antes. La pared quística, deriva taciones de mayor gravedad son el compromiso
da de la célula hospedera, se hace fibrosa y al pulmonar, que puede expresarse con hemoptisis,
cabo de 6 a 18 meses se calcifica. Las larvas al disnea, derrame pleural e imágenes radiológicas
canzan otros tejidos, pero terminan por desinte de consolidación; la miocarditis, que se caracte
grarse y reabsorberse sin enquistarse en ninguno riza por taquicardia, hipotensión, cambios elec-
de ellos. Durante su pasaje, la liberación de antí- trocardiográficos e insuficiencia cardíaca conges
genos parasitarios produce reacciones de hiper- tiva, y el ataque al sistema nervioso central, con
sensibilidad, con la consiguiente infiltración de meningoencefalitis, polineuritis, poliomielitis, ce
linfocitos, neutrófilos, eosinófilos y mononuclea falea, paresias focales o difusas, delirio, psicosis
res; a veces causa vasculitis, que compromete y coma. El LCR suele ser nornial. En general a las
arteriolas y capilares, como también nódulos gra- 2 o 3 semanas el paciente comienza a mejorar.
nulomatosos en los que se pueden identificar lar En los casos graves la evolución es más pro
vas muertas. En consecuencia, esta migración longada. La recuperación es lenta y los dolores
larvaria puede producir miocarditis, pericarditis, musculares pueden persistir varios meses.
conjuntivitis, meningoencefalitis, edemas, hemo
rragias, pleuritis e infiltrados pulmonares.
DIAGNÓSTICO
La sospecha diagnóstica surge del antecedente
MANIFESTACIONES CLÍNICAS
de haber comido carne de cerdo poco cocida o
En relación con el grado de parasitación, pue embutidos que la contengan. En general se da en
den variar desde formas totalmente asintomáticas, forma de brotes epidémicos, lo cual, junto con
que son la mayoría de los casos, hasta formas un cuadro clínico compatible, sugiere el diagnós
Capítulo 92 - Triquinosis □ 701
tico. El diagnóstico de los casos esporádicos con ción alimentaria aguda, el cólera y los cuadros
síntomas poco intensos es más difícil; por lo tan diarreicos de otras etiologías. En la etapa de las
to se fundamentará en la anamnesis, en el cuadro manifestaciones extradigestivas se considerarán,
clínico y en los hallazgos de laboratorio. Uno de entre otras enfermedades, la fiebre tifoidea, la
los datos más constantes es la leucocitosis con leptospirosis, la dermatomiositis y la poliarteritis
eosinofilia de hasta el 50% o más, que en general nudosa. A veces el oftalmólogo es consultado por
aparece a partir de la segunda semana y puede la conjuntivitis con quemosis y edema bipalpe-
persistir elevada durante varios meses. Paradóji bral. La rigidez de la nuca provocada por la inva
camente, en los casos graves no se desarrolla eosi sión muscular de larvas a ese nivel, más un cua
nofilia, lo cual es un signo de mal pronóstico. La dro encefalítico y fiebre, pueden hacer pensar en
eritrosedimentación suele estar en valores nor una meningoencefalitis bacteriana.
males. En el suero hay aumento de las enzimas
musculares: transaminasa glutamicooxalacética,
COMPLICACIONES
aldolasa y creatinfosfocinasa. Después de la ter
cera sem ana se presenta hipoalbum inem ia, Se observan sólo en las formas graves y están
hipergammaglobulinemia y aumento de la IgE en relación con la migración larvaria masiva. Las
circulante. El hallazgo del parásito en las heces, más importantes son: vasculitis necrotizante por
sangre o LCR es excepcional. A partir de la ter depósito de inmunocomplejos con IgE, cuadros
cera semana en la biopsia muscular pueden ha neurológicos como los ya descriptos, miocardi
llarse las larvas enquistadas. La muestra para tis seguida por insuficiencia cardíaca congestiva
biopsia debe obtenerse preferentemente del y trombosis mural secundaria del endocardio
deltoides o de los gemelos de la zona próxima a ventrícular originada por la infiltración eosinófila
la inserción tendinosa. El diagnóstico serológico de esta estructura, que se produce en forma oca
es positivo después de la segunda o tercera se sional cuando la eosinofilia persiste elevada du
mana siguientes a la infección; se utilizan las re rante varios meses. Además se mencionan los tras
acciones de prccipitinas, fíoculación de la ben- tornos respiratorios provocados por el pasaje lar
tonita, inmunofluorescencia e enzimoinmunoen- vario pulmonar, el compromiso de los músculos
sayo (ELISA). Estas reacciones tienen sensibili del tórax y la eventual intercurrencia bacteriana.
dad y especificidad adecuadas. La intradermo-
rreacción de Bachman consiste en la inyección
PRONÓSTICO
intradérmica de 0,1 mL de antígeno de larvas de
Trichinella. La reacción precoz se lee a los 30 En general es bueno. Muchos casos transcu
minutos. Es positiva si aparece una pápula del rren sin diagnóstico por la escasez de síntomas.
doble del tamaño de la provocada por la intrader- Menos del 10% de los pacientes con cuadros bien
morreacción cómo mínimo, rodeada por un halo ostensibles fallecen entre la cuarta y la sexta se
eritematoso. La reacción tardía es positiva si 12 mana por las complicaciones ya señaladas.
a 24 horas después se observa una pápula erite-
matosa. Es de mayor valor la positividad de la
TRATAMIENTO
reacción precoz que la de la reacción tardía, aun
que ninguna de las dos discrimina entre infec El tratamiento antiparasitario consiste en la
ción reciente o antigua y se hacen positivas du administración de albendazol, 10 a 15 mg/kg/día
rante las cuatro semanas siguientes a la infección. fraccionados en 2 tomas, durante 5 a 10 días. El
La intradermorreacción no es de uso corriente en propósito es eliminar las hembras de la submu-
la actualidad. cosa intestinal y de e se modo hacer cesar la
parición de larvas, que podría continuar durante
2 o 3 semanas más. En la actualidad esta medica
DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL
ción se considera de primera elección, debido a
Al comienzo de la enfermedad el diagnóstico su buena absorción intestinal y a que es muy bien
diferencial hay que establecerlo con la intoxica tolerada. Además es probable que tenga activi
702 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
dad sobre las larvas migrantes diseminadas o infección para el hombre. Hay que evitar la cría
enquistadas en los músculos. del cerdo en basurales y su alimentación con des
El tiabendazol, de similar acción terapéutica, perdicios, además de realizar la inspección vete
se administra en dosis de 25 a 50 mg/kg/día (do rinaria de los cerdos sacrificados mediante triqui-
sis máxima 3 g por día), divididos en 2 o 3 lomas noscopia, que es la investigación microscópica
diarias, durante 5 a 10 días. No siempre es bien de larvas en los músculos estriados, o por la de
tolerado y a veces produce náuseas, vómitos, epi- tección de anticuerpos en el plasma del animal
gastralgia o reacciones alérgicas. mediante el método de ELISA. La inspección
Otra alternativa terapéutica es el mebendazol, veterinaria no asegura en un 100% la ausencia
en dosis de 25 mg/kg/día distribuidos en 3 tomas de larvas de triquinas, de manera que lo más se
diarias, durante 5 a 10 días. Además se prescribi guro es consumir la carne luego de una adecuada
rán analgésicos y antipiréticos para el control sin cocción, la que se reconoce por el color oscuro
tomático de los dolores musculares y la fiebre. debido a la descomposición de la mioglobina que
En las formas graves se utilizarán los corticoste- se produce a los 70®C. N o comer carnes que con
roides, para impedir las reacciones de hipersen- serven el color rojo o que estén sangrantes. Las
sibilidad. Se administra prednisona, 1 mg/kg/día triquinas también son destruidas por la congela
durante 5 a 10 días. Se utilizará por el período ción a - I5®C durante 20 días, o a -30®C durante 6
más breve posible, para no interferir en la res días. La viabilidad de las larvas no es afectada
puesta inmunitaria del organismo. por la salazón o el ahumado.
PROFILAXIS
B ib lio g r a f ía ------------------------------
Acha PN. Szyfres B. Zoonosís. 3a ed. Organización Beaver PCh, Jung RC. Cupp EW. Parasitología Clínica.
Panannericana de la Salud. 2003. Esparta. Salvat Editores. 2a ed. 1986.
Atías A. Parasitología Clínica. Chile. Publicaciones Técnicas Botero D, Restrepo M. Parasitosis Humanas. Colombia.
Mediterráneo. 3a ed, 1991. CIB. 4a ed. 2005.
Cisticercosis
Ornar J. Palmieri
DEFINICIÓN
transparente y pared translúcida que permite ver
en su interior una pequeña esfera blanquecina,
La cisticercosis es una enfermedad provocada excéntrica, que corresponde al escólex invagi-
por Cysticercus ceilulosae, larva de Taenia so- nado provisto de cuatro ventosas y una doble
Uum, que alojada en distintos parénquimas origi corona de ganchos. En íilgunos cisticercos no se
na en el hombre, hospedero intermediario acci- individualiza el escólex ya que ha desaparecido
dental, una diversidad de signos y síntomas en com o consecuencia de un proceso degenerativo.
relación con su número y localización (ver Taenia Además de la forma vesicular descripta, el cis
solium en el capítulo Parasitosis intestinales). ticerco puede adquirir la forma racemosa. Ésta está
constituida por múltiples vesículas en forma de
racimo, con contenido líquido transparente, mem
ETIOLOGÍA Y PATOGENIA
brana más delgada y sin escólex en su interior. Con
El hospedero definitivo de Taenia solium es el frecuencia el cisticerco está rodeado por una fina
hombre y el hospedero intermediario habitual, capa de colágeno que lo separa de los tejidos del
portador de Cysticercus cellulosae, es el cerdo. hospedero. La localización de los cisticercos en el
La ingestión de huevos de Taenia solium con organismo humano es variada: encéfalo, ojos, te
vierte al hombre en hospedero intermediario ac jido celular subcutáneo, músculos, médula espinal,
cidental. Los huevos llegan a la boca a través de corazón, pulmones, huesos y otros tejidos, y de
los alimentos o de las manos sucias. Otro meca ella dependen las manifestaciones clínicas.
nismo es la regurgitación al estómago o duodeno
de los anillos grávidos en aquellos enfermos por
EPIDEMIOLOGIA
tadores de Taenia solium. En uno u otro caso, por
acción de los jugos digestivos, los huevos eclo- La zona endémica de esta enfermedad abarca
sionan y liberan en el intestino la oncosfera o áreas extensas de América latina, Asia, España,
embrión hexacanto, que con la ayuda de sus gan Portugal, África y Europa oriental. Esta infec
chos penetra en la mucosa intestinal, llega a los ción puede prevenirse si se impide la contamina
vasos mesentéricos y se disemina por vía hemá- ción con materia fecal humana, de la tierra, el
tica a todo el organismo. En los tejidos la oncos agua y los alimentos destinados al hombre o a
fera se transforma en una vesícula y en dos o tres los animales. El huevo de T. solium ya es infectivo
meses en cisticerco. Esta larva quística o vesicular al ser eliminado al exterior, por lo tanto también
se observa en los tejidos del cerdo o del hombre. es posible la infección por la vía ano-mano-boca.
El cisticerco es una vesícula esférica u ovoide de Otro modo de adquirir la cisticercosis, como
5 a 10 mm de diámetro, con contenido líquido ya fue señalado, es la regurgitación de anillos
704 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
grávidos al estómago o duodeno, a veces provo pueden observarse sus movimientos. Las manifes
cada por vómitos, en los portadores de T. solium. taciones clínicas son variables: uveítis, endoftal-
Los pacientes, en general adultos jóvenes, con mitis, cambios en la visión, dolor ocular, fotofobia,
frecuencia proceden de zonas rurales y pueden disminución de la agudeza visual y aun ceguera.
ser portadores de la tenia o no, o haber padecido La cisticercosis subcutánea y muscular, que a
esta parasitosis. El cerdo adquiere la infección veces coincide con la localización en el SNC,
debido a sus hábitos coprófagos provoca escasas manifestaciones clínicas.
La cisticercosis es un problema importante, Otras localizaciones viscerales son raras y en
tanto en salud pública por la gravedad de la in< general no dan síntomas. Se han hallado cisticer
fección humana, como económico, por el deco cos en el pulmón, el miocardio, el riñón y otros
miso de los animales parasitados. Las tasas de parénquimas.
infección humana, por encuesta serológica, en
América latina ascienden hasta el 7%.
DIAGNÓSTICO
cercosis en actividad y no en pacientes con le niveles séricos del praziquantel pero aumentan
siones calcificadas. los del albendazol. La respuesta al tratamiento
Es importante también el examen parasitoló médico en las localizaciones cerebrales casi siem
gico de la materia fecal para buscar huevos de pre es buena, en cambio, en las iniraventriculares
Taenia solium, los que son hallados en aproxi o cisternales o en la cisticercosis racemosa no
madamente el 20% de los casos, ya que en opor suele ser satisfactoria.
tunidades el enfermo es simultáneamente hospe La cisticercosis ocular requiere tratamiento qui
dero intermediario y hospedero definitivo. rúrgico, aunque en algunos casos se logra elimi
nar el parásito mediante fotocoagulación con rayo
láser.
TRATAMIENTO
m
Oncocercosis
Amadeo J. Bava
Ornar J. Palmieri
DEFINICIÓN EPIDEMIOLOGÍA
intravenosa en dosis única de un gramo una vez trucción de los insectos vectores en sus criade*
por semana, durante 10 semanas. ros, mediante el empleo de insecticidas. Es nece
La administración de 400 mg de albendazol du sario evitar la picadura de los insectos vectores
rante 10 días actúa sobre la embriogénesis del pa cubriendo las partes expuestas del cuerpo con
rásito y disminuye la densidad de las microfílarias. ropa apropiada o bien mediante la aplicación de
Se encuentra en estudio la efectividad de la repelentes contra insectos.
amocarcina, que al parecer se muestra activa con Es importante contar con laboratorios capaci
tra las formas adultas de Onchocerca volvuiiis tados para el diagnóstico de esta enfermedad y
cuando se administra en dosis de 3 mg/kg dos con centros a sisten cia les p ro v isto s de los
veces por día durante 3 días. fármacos necesarios para el tratamiento.
PROFILAXIS
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Parasitosis intestinales
Ornar J. Palmieri
como «portadores sanos» y administrar el trata la amebiasis intestinal invasora y de las localiza
miento adecuado en todos los casos en los que ciones extraintestinales. Se utilizan distintas téc
en el exam en coproparasitológico se halle nicas. La hemaglutinación indirecta es la más sen
Entamoeba histolytica, tanto por la posibilidad sible y los anticuerpos continúan elevados ( i/128)
de que desarrollen enfermedad grave como por durante años después de la enfermedad invaso
razones epidemiológicas. ra. La contrainmunoelectroforesis y la precipita
Como se ha expresado, puede haber enfermos ción por difusión en gel se vuelven negativas poco
asintomáticos con amebiasis intestinal; otros pa después de la curación de la enfermedad invaso
decen meteorismo, cólicos intestinales, diarrea ra.
crónica, constipación, dolor con la palpación del El diagnóstico de absceso amebiano de hígado
colon, dispepsia y síndrome disentérico. Algu se basa en la presentación clínica ya descripta y
nos pueden padecer formas fulminantes de coli en el diagnóstico por imágenes (ecografía, reso
tis amebiana, con perforación intestinal, mega- nancia magnética, tomografía computarizada),
colon tóxico u otras complicaciones. que puede complementarse con la aspiración de!
Los síntomas generales son variables e inespe- absceso con aguja fina bajo control ecográfico.
cíficos: astenia, anorexia, pérdida de peso, cefa
lea, nerviosismo y trastornos del sueño. El hemo- Tratamiento
grama revela anemia discreta y a veces eosinofilia En la colifis no disem érica se utilizará prefe
leve. El ameboma, forma particular de presenta rentemente alguno de los antiamebianos que ac
ción de la amebiasis intestinal, se caracteriza por túan en la luz intestinal, como el yodoquinol (5,7-
el hallazgo clínico y radiológico de una tumora- diyodo-8-hidroxiquinolina) 30 a 40 mg/kg/día,
ción, en general localizada en el ciego. A veces por vía oral, divididos en 3 dosis durante 20 días
coexiste alguna otra localización en distintos ni o paromomicina, 25 a 30 mg/kg/día, por vía oral,
veles del colon. La existencia de más de una tu- divididos en 3 dosis durante 7 días o furoato de
moración sugiere la etiología amebiana, pero en diloxanida, 500 mg 3 veces por día durante 10
todos los casos es necesario hacer el diagnóstico días y en los niños, 20 mg/kg/día. También se
diferencial con tumores malignos mediante la utiliza el metronidazol; si bien este fármaco tie
biopsia por endoscopia. ne acción sistémica, se lo puede utilizar como
La amebiasis extraintestinal origina distintas los anteriores en la colitis no disentérica. La do
manifestaciones clínicas en correspondencia con sis y modo de administración es la que se expre
los órganos comprometidos. En orden decreciente sará a continuación.
de frecuencia, los más afectados son hígado, piel, En la disentería, el ameboma y la amebiasis
pulmón y cerebro. extraintestinal los fármacos descriptos, que tie
La localización extraintestinal más común, el nen acción en la luz intestinal, deben asociarse
absceso amebiano de hígado, produce hepatome- con otros que posean actividad sistémica, como
galia progresiva, dolor en el hipocondrio dere el metronidazol, que en la actualidad es de elec
cho y el epigastrio, fiebre, náuseas, vómitos e ción entre los antiamebianos de acción sistémica.
ictericia. El hemograma revela leucocitosis y La dosis es de 35 a 50 mg/kg/día por vía oral,
neutrofilia. dividida en 3 tomas, durante 10 días. En aquellos
casos en que no sea posible la administración oral,
Diagnóstico puede utilizarse la intravenosa en goteo lento, cada
El examen coproparasitológico que muestre 8 horas, en dosis de 25 mg/kg/día. Conviene des
quistes o trofozoítos, o ambos, es confirmatorio tacar la necesidad de evitar la ingestión de bebi
de amebiasis intestinal. Otros recursos diagnós das alcohólicas durante el tratamiento. Otros
ticos son la endoscopia con biopsia de las lesio nitroimidazoles tales como ornidazol, nimorazol
nes ulcerosas colónicas y el examen microscópi y tinidazol también pueden usarse.
co del exudado de la superficie y los bordes de la Como alternativas están la cloroquina o la eme-
úlcera. Los exámenes de anticuerpos séricos an- tina. La primera a razón de 10 mg de cloroquina
tiamebianos son muy útiles en el diagnóstico de base/kg/día, por vía oral, durante 20 días (dosis
714 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
m Profilaxis
La amebiasis se adquiere por la ingestión de
15 mg/kg/día por vía oral, en 2 o 3 tomas, duran
te 10 días.
■
0
pación y eosinofilia sanguínea.
Tratamiento
Diagnóstico Se utilizarán los fármacos antiamebianos que
Se realiza examen coproparasitológico directo actúan dentro de la luz intestinal o bien metroni-
y con técnicas de concentración. Los preparados dazol, 15 mg/kg/día divididos en dos o tres tomas,
microscópicos requieren tinciones especiales. durante 10 días.
Cflp/ÍKfó P5 - Parasitosis intestinales □ 715
eos y el hombre enfermo. Los cuidados higiéni que infectan a los seres humanos. Existen algu
cos son importantes para prevenir esta enferme nas diferencias morfológicas de las especies ha
dad. En los hospitales deben extremarse las pre lladas en topos, víboras, roedores y miriápodos,
cauciones para evitar la transmisión interhumana. las cuales son ovoides y un poco más grandes
que el microorganismo esférico hallado en el
Cyclospora cayetanensis hombre.
Cyclospora cayetanensis es el agente etiológico El ciclo vital de Cyclospora en los seres huma
de la ciclosporosis. Produce cuadros gastroin nos no se ha dilucidado por completo; en apa
testinales con diarrea, a veces acuosa, e impor riencia, podría pasar por todas las etapas excepto
tante dolor abdominal, náuseas, vómitos, flatu- la de esporulación. Se ha demostrado la presen
lencia, anorexia y pérdida de peso, por lo gene cia de formas asexuadas del parásito en entero-
ral precedidos por fiebre y síntomas generales citos. Los enfermos de los cuales se obtuvieron
inespecíficos. Puede presentarse tanto en hués las muestras de tejido tenían ooquistes en la ma
pedes inmunocompetentes como en inmunocom- teria fecal, por lo tanto es de suponer que en ellos
prometidos, sean éstos adultos o niños. había tenido lugar el ciclo sexual del parásito.
El género Cyclospora es de la subclase Cocci- En los tejidos de esos hospederos aún no se han
dia, del phylum Apicomplexa. En un comienzo podido detectar las formas sexuadas de Cyclos
la clasificación de este patógeno fue contro- pora. Es posible que en los seres humanos la fase
versial; se lo describió como un coccidio no espo- sexual se desarrolle en otras células que no sean
rulado o como una espora fúngica, otros infor enterocitos. Al igual que los de Jsospora, los
mes lo consideraron similar a una cianobacteria ooquistes de Cyclospora requerirían un tiempo
o a un coccidio, también como alga azul-verdosa fuera del h osp ed ero para esporular y ser
o como un C iyptospondium grande. En 1993, infectantes. Es improbable la transmisión del
Ortega y col. identificaron en forma definitiva a parásito de persona a persona; en cambio, los
este protozoo como un coccidio» lograron indu ooquistes de Cryptosporidium pueden reinfectar
cirlo a esporular y demostraron dos esporoquistes, al mismo hospedero o ser infectantes para otros
cada uno de ellos con dos esporozoítos dentro de seres humanos en el momento de su excreción
cada ooquiste. De este modo se lo ubicó como con las heces. El microorganismo puede ser in
perteneciente al género Cyclospora y sugirieron ducido a esporular in vitro en agua o dicromato
el nombre de C yclospora cayetanensisy por la de potasio al 2% aireado, a temperaturas de 27®C
Universidad Cayetano Heredia, de Lima, Perú, a 32®C, para lo cual demora 8 a U días. A dife
donde se investigó la ciclosporosis humana. rencia de los esporoquistes de Cryptosporidium,
Se desconoce en detalle el ciclo de vida de las los de C yclospora se colapsan dentro de los 2
especies de Cyclospora que infectan a los seres minutos de exposición a soluciones hipertónicas;
humanos, aunque en apariencia, al igual que por lo tanto son difíciles de concentrar con mé
Isospora belii, podría esporular fuera del cuerpo todos de flotación con sacarosa o sulfato de cinc.
humano. A pesar de ser tan sensibles a la deshidratación,
Como se expresó antes, el género Cyclospora estos ooquistes exhiben una resistencia notable
es de la subclase Coccidia. Los coccidios son en el medio exterior: pueden sobrevivir en agua
parásitos intracelulares, principalmente de los potable clorada, soluciones al 2% de formol o
vertebrados. Los esporozoítos, fase infecciosa de dicromato de potasio, aguas estancadas y después
los coccidios, son expulsados del esporoquiste de la congelación. Tanto en seres humanos como
después de que el ooquiste es ingerido por el hos en animales Cyclospora es un parásito intrace-
pedero. lular obligado. Al igual que Isospora, se desarro
Otros cuatro géneros de coccidios se han ha lla en el citoplasma de los enterocitos, en los que
llado en seres humanos: Cryptosporidium, Isos se ubica entre el núcleo y la superficie apical.
pora, Toxoplasma y Sarcocysíis. Se han identifi Los ooquistes de Cyclospora son esféricos y tie
cado dos especies de Cyclospora en topos, pero nen un diámetro de 8 a 10 |im. Tanto en los pre
se ignora el número de especies de Cyclospora parados en fresco de materia fecal como en aspi
718 D Q uinta parte - Infecciones parasitarias
rados intestinales se observan como esferas no Las biopsias de tejido intestinal de pacientes
refringenies que contienen de 3 a 9 glóbulos con ciclosporosis han puesto en evidencia que
refringenies ligados a la membrana. Dentro de Cyclospora es verdaderamente un agente pató
cada ooquiste hay dos esporoquistes ovoides de geno del ser humano. La localización habitual de
4 por 6 jim, dentro de los cuales hay dos esporo- la infección es la parte superior del intestino del
zoítos. gado. El parásito se ha identificado dentro de las
Los ooquistes de Cyclospora se distinguen mor vacuolas del citoplasma de los enterocitos, entre
fológicamente de los de Cryptosporidium y de el núcleo y el polo apical. Las alteraciones histo-
los de ísosporo. Los de Cryptosporidium son re patológicas son marcadas e incluyen atrofia de
dondos y de 4 a 5 |im de diámetro, o sea la mitad las vellosidades, hiperplasia de las criptas y alte
de los de Cyclospora, y contienen 4 esporozoítos. ración de las células epiteliales con fenómenos
Los de Isospora son mucho más grandes y elípti inflamatorios. Las alteraciones histopatológicas
cos, miden 20 a 30 jim por 10 a 19 |im y contie consignadas se correlacionan con cuadros de
nen dos esporoquistes dentro de los cuales hay 4 malabsorción y parecen ser similares a las de la
esporozoítos. esprue tropical.
En cuanto a la prevalencia, en todo el mundo La colangitis sólo fue consignada en infecta
se han comunicado infecciones por Cyclospora. dos por HIV. La diarrea, que es acuosa y sin san
La parasitosis se produce en individuos de todas gre, está relacionada con un proceso no invasor
las edades y el parásito ha sido identificado en del intestino delgado. Aún no se ha determinado
nativos y viajeros a América del Norte, A. Cen el mecanismo específico del daño intestinal.
tral y A. del Sur, Caribe, Sudeste asiático, India
y África. Cyclospora sería endémico en Nepal, Manifestaciones clínicas
Haití y Perú. En Haití, Pope y col. hallaron que Incluyen diarrea, con frecuencia acuosa, que
el I I % de 450 adultos infectados por HIV, que puede ser grave y acompañada por dolor abdo
además padecían diarrea crónica, estaban infec minal, náuseas, vómitos, distensión abdominal,
tados por Cyclospora. Se desconoce la prevalen flatulencia, anorexia y pérdida de peso. Los sín
cia de la infección en los países desarrollados. tomas gastrointestinales pueden estar precedidos
Los estudios hechos en Nepal y Perú demuestran por fiebre y mialgias. Un síntoma característico
la estacionalidad de las infecciones. En Nepal, la es la astenia, que puede ser muy intensa. Si bien
incidencia máxima se registra durante la estación la diarrea es similar a la producida por la criptos-
lluviosa o cálida, de mayo a octubre, y en Perú, poridiosis o la isosporosis, en la ciclosporosis el
de abril a junio. dolor abdominal y la anorexia dominan el cua
Puede transmitirse a través del agua potable dro clínico. La diarrea puede ser continua, inter
contaminada. El parásito se identificó en una mitente o alternar con períodos de normalidad,
muestra de dos litros de agua filtrada y clorada, incluso de constipación. También hay formas
lo que sugiere que, como Cryptosporidium, pue asintomáticas y formas leves. El período de incu
de ser resistente a los tratamientos comunes del bación es de 1 a 11 días.
agua. También se ha señalado la posibilidad de En pacientes inmunocompetentes la enferme
transmisión por consumo de alimentos contami dad es autolimitada, pero puede prolongarse en
nados, como carne cruda o mal cocida, lechuga, tre 2 a 7 semanas o incluso más. La astenia y la
fresas u otros productos crudos. Es improbable anorexia suelen continuar durante semanas des
la transmisión de persona a persona, porque los pués de haber cesado la diarrea. En infectados
ooquistes requieren un período fuera del hospe por HIV, la infección por Cyclospora está en ge
dero antes de ser infectivos, como ocurre con neral asociada con diarrea crónica, sin períodos
Isospora. Fue sugerida la transmisión zoonótica, de remisión o con recaídas.
aunque no se ha podido establecer el espectro de En época reciente se ha informado la presen
hospederos para las diversas especies y cepas de cia de colangitis en individuos con infección por
Cyclospora, tanto de seres humanos como de HIV. N o se han comunicado casos de ciclo s
animales. p orosis en p a cien tes con otras inm unode-
Capítulo 95 - Parasitosis intestinales □ 719
ficiencias. Se han informado casos de ciclos* por HIV. La dosis es 160 mg de TMP/800 mg de
porosis asintomáticas en individuos nativos de SMX, 2 a 4 veces por día, durante 7 a 10 días. En
zonas endémicas. La eliminación de ooquistes en los enfermos por HIV puede haber recaídas al in
la materia fecal puede preceder el inicio de la en terrumpir la medicación, por lo que es convenien
fermedad clínica. La erradicación de estos ooquis te la profilaxis secundaria con una dosis (160 mg
tes normalmente coincide con la curación de la de TMP/800 mg de SMX) 3 veces por semana.
diarrea. Además de la terapéutica antiparasitaria, estos
pacientes pueden requerir otras medidas genera
Dtagnósiico les y algunos, la hospitalización. La hidratación
S e basa en la d etección m icroscópica de por vía oral suele ser adecuada, aunque a veces
ooquistes en la materia fecal recién emitida. Lo es necesario hacerlo por vía intravenosa. No se
ideal es el estudio del material fresco y sin con conoce con exactitud si los agentes antidiarreicos
servantes, también se lo puede concentrar por son beneficiosos o no.
centrifugación. El examen microscópico con con
traste de fase muestra ooquistes en forma de es Profilaxis
feras no refringentes, de 8 a 10 jim de diámetro, La infección se adquiere por la ingestión de los
que contienen varios glóbulos refringentes en ooquistes eliminados con la materia fecal por los
vueltos en membranas. animales domésticos y el hombre enfermo. Los
Al igual que los ooquistes de Cryptosporidium cuidados higiénicos son importantes para preve
e Isosopora, los de C yclospora son acidorre- nir esta enfermedad.
sistentes, lo que facilita su identificación cuando
se utilizan técnicas de coloración como Kinyoun Balantidium coU
o Ziehl-Neelsen. Un rasgo típico de los ooquistes Balantidium coli es el protozoo ciliado produc
de Cyclospora es su apariencia variable en esas tor de la balantidiosis, una zoonosis de distribu
coloraciones, lo cual puede ser de utilidad para ción universal. Parasita el intestino de varias es
su diferenciación de otros coccidios. Pueden pre pecies de insectos, peces y mamíferos. Se cree
sentar una coloración rosada o rojo brillante, in que el cerdo y secundariamente la rata son las
cluso no colorearse, y se distinguen de los ooquis fuentes de infestación para el hombre.
tes ovoides de Isospora por el mayor tamaño de El ciclo vital presenta dos estadios evolutivos:
estos últimos. Los ooquistes de Cryptosporidium el trofozoíto o forma vegetativa, y el quiste, que
son esféricos y de menor tamaño. También debe es la forma de resistencia en el medio exterior,
realizarse el examen con microscopía de fluores así como el modo de transmisión de la enferme
cencia (UV), dado que los ooquistes de CycloS' dad. El trofozoíto es piriforme, está rodeado de
pora son autofluorescentes. cilios, y mide entre 50 y 200 (xm de largo por 40
C yc lo sp o ra se ha detectado en aspirados a 70 |im de ancho. Es el protozoo más grande
duodenales y en biopsias de duodeno y yeyuno. que parasita el intestino humano. El quiste es re
La sensibilidad, la especificidad y el valor pre- dondo y más pequeño que el trofozoíto.
dictor de las diversas técnicas de diagnóstico no La infestación se produce por la ingestión de
han sido determinados. Después de la infección quistes que en el intestino se transforman en for
por Cyclospora se han detectado títulos eleva mas vegetativas. Éstas invaden la mucosa y pro
dos de anticuerpos en pacientes inmunocom- vocan una ulceración del colon, aguda y pene
petentes. Lo importante para el diagnóstico es que trante, que con frecuencia se extiende por la sub-
el clínico y el parasitólogo estén atentos a esta mucosa. Puede producirse megacolon tóxico,
enfermedad emergente, para recurrir a los méto perforación intestinal o disentería fulminante, con
dos de investigación adecuados. hemorragia y shock. En raras oportunidades se
propaga al hígado, la vesícula o la vagina. Los
Tratamiento niños parecen ser más susceptibles a la infección
El cotrimoxazol es eficaz en esta parasitosis, que los adultos.
tanto en inmunocompetentes como en infectados
720 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
gunas hembras pueden alojarse en la submucosa 100 mg en niños y 400 mg en adultos en una úni
intestinal. Los huevos tienen gran resistencia en ca toma repetida a los quince días; pamoato de
e el medio exterior y por su escaso peso son lleva pirantel, 10 mg/kg (expresado en fármaco base,
dos junto con el polvo de las habitaciones y se hasta un máximo de 1 g por dosis) en una sola
e depositan sobre muebles u otros objetos. A partir dosis repetida a los quince días.
• de allí pueden ser ingeridos y el ciclo se reinicia.
Estas dos posibilidades: reinfestación endógena
Otra alternativa terapéutica es la ivermectina,
0,1 a 0,2 mg/kg en una sola dosis.
e (hembras alojadas en la submucosa) y exógena
(huevos depositados en las ropas, uñas, ambien Profilaxis
I te exterior), hacen difícil la erradicación de esta Las medidas profilácticas incluyen la higiene
parasitosis. personal, el baño diario, el cepillado de manos y
uñas, y el cambio de la ropa interior y de cama.
Manifestaciones dinicas Debe observarse también la limpieza de habita
Los síntomas son variados: prurito anal, tras ciones, ya que en el polvo depositado sobre el piso
tornos nerviosos, prurito nasal, prurito vaginal, y los muebles pueden hallarse los huevos del pa
cólico rectal, astenia, anorexia, irritabilidad,
é enuresis, insomnio, pérdida de peso, pesadillas,
rechinar de dientes, piodermitis perianal por ras
rásito. Existe la posibilidad de contagio interhu
mano, por lo que hay que tratar el grupo familiar.
la forma infestante, atravesar la mucosa intesti En su migración desde el intestino las larvas
nal o la piel perianal e iniciar así el ciclo de llevan, en su superficie o en su intestino, bacte
autoinfestación. rias que pueden ser causa de meningitis, endo
carditis, neumonía, colecistitis, peritonitis o sep
M anifesiacmes clínicas sis. Hay que tener especialmente en cuenta que
En las zonas de penetración larvaria se produ casi todos los casos de meningitis por Escherichia
ce una dermatitis pruriginosa, maculopapulosa, coli, u otras bacterias de la flora intestinal en su
de pocas horas de duración. El avance acelerado jetos adultos, tienen com o causa la estrongi
de la larva por la piel, le ha valido el nombre de loidosis diseminada. Por lo tanto, en toda menin
larva ciirrens. En su pasaje pulmonar las mani gitis por bacilos gramnegativos en sujetos adul
festaciones dependen de la magnitud de la infes tos debe realizarse de inmediato, además del tra
tación: traqueobronquitis asmatiforme, tos seca, tamiento antimicrobiano adecuado, la búsqueda
fiebre, le u c o cito sis, anemia hipocróm ica y de larvas de S. stercoralis en el hisopado rectal.
eosinofilia elevada. Las manifestaciones diges
tivas son variables: epigastralgia, cólicos intesti Diagnóstico
nales, dolor epigástrico con ritmo de ülcera El examen coproparasitológico revela las lar
duodenal (duodenitis parasitaria) y diarrea. vas rhabditoides, que también se hallan en el lí
En los casos de reinfestación exógena o endó quido obtenido por sondeo duodenal. En las
gena (autoinfestación) puede originarse una es- autoinfestaciones masivas de los enfermos inmu-
irongiloidosis hiperinfestación. Esta se caracte nodeprimidos, en la fase de migración larvaria
riza por la colonización masiva de parásitos adul visceral, las larvas pueden encontrarse en el es
tos, en todo el intestino delgado y el colon, que puto, en el líquido de broncoaspiración, en el lí
produce importantes síntomas digestivos, como quido pleural, en el líquido cefalorraquídeo y en
diarrea, esteatorrea, dolor abdominal, íleo paralí otros humores o tejidos orgánicos.
tico, obstrucción intestinal, hemorragia intestinal
y hasta un cuadro clínico de abdomen agudo. Son Tratamiento
además consecuencias de la hiperinfestación, la En época reciente se ha utilizado, con gran efi
anemia, la hipoproteinemia y el adelgazamiento. cacia y buena tolerancia, la ivermectina en una
Otra forma clínica aun más grave es la estron- sola dosis de 0,2 mg/kg por vía oral.
giloidosis diseminada. En ésta, a diferencia de la Es importante tener en cuenta que una sola
anterior, las larvas pueden hallarse en todos los dosis de ivermectina puede curar la estrongi
órganos. Este cuadro se debe a la autorreinfes- loidosis con la misma eficacia que el tiabendazol,
tación endógena masiva, en enfermos que pade con la ventaja de que es menos tóxica y de que
cían estrongiloidosis en la forma crónica, y aun además sería útil si esta parasitosis coexistiera
asintomática, y que desarrollan enfermedades con ascariosis, tricocefalosis o enterobiosis.
proliferativas malignas, enfermedad por HlV/sida El tiabendazol se prescribe en dosis de 25 a 50
o son sometidos a terapéuticas inmunodepresoras mg/kg/día, repartidos en dos o tres tomas, duran
con citostáticos o corticosteroides. te 5 días. En los casos graves debe prolongarse
En estos casos la migración larvaria masiva con su administración por 15 o más días. La dosis
localización anómala de parásitos adultos en di máxima diaria es de 3 gramos.
versos órganos puede ser causa de muerte. La ra También puede utilizarse el cam bendazol,
diología pulmonar muestra, en los estados gra en dosis única de 5 mg/kg. El albendazol, menos
ves, imágenes de infiltrados pulmonares bilate eficaz en esta parasitosis se indica a razón de
rales algodonosos o, con menos frecuencia, som 10 mg/kg/día durante 6 a 10 días.
bras densas o derrame pleural.
También se han descripto hepatitis granulo- Profilaxis
matosa y compromiso renal, cardíaco, tiroideo, El calzado impide la penetración de las larvas
paratiroideo, pancreático, prostético, muscular, por la piel de los pies. Otras zonas de la piel en
ganglionar, cerebral y otros. contacto con tierra contaminada también pueden
Capítulo 95 - Parasítosis intestinales □ 725
ser puertas de entrada de esta parasitosis. Siem posible en los casos de prolapso de la mucosa
pre debe hacerse el examen parasitológico de la rectal, donde se ven los parásitos fijados en ella.
materia fecal a todo enfermo que va a recibir te
rapia inmunosupresora, para evitar, en caso de Tratamiento
que esté parasitado, la estrongiloidosis disemi* El fármaco de elección es el mebendazol, 100 mg
nada; si lo estuviera, previamente se realizará el dos veces por día, durante tres días, sin relación
tratamiento adecuado. con el peso corporal.
Es también de gran eficacia el albendazol, 400 mg
Trichurís trichiura en una única toma, o el fiubendazol, 100 mg dos
La infestación por este parásito produce la veces por día, durante 3 días. Estas dosis son para
trichuriosis. Es una parasitosis colónica habitual niños o adultos en forma indistinta.
mente poco sintomática, pero capaz de afectar Otra alternativa terapéutica es la ivermectina,
gravemente a niños mal alimentados. Es cosm o 0,1 a 0,2 mg/kg en una sola dosis.
polita, pero se observa con más frecuencia en
zonas tropicales húmedas y templadas. Profilaxis
Los gusanos tienen una forma muy caracterís Consiste en una educación sanitaria adecuada.
tica, que justifica el empleo del nombre «lom Es necesario impedir la contaminación fecal hu
briz látigo». Más de la mitad anterior de su cuer mana del suelo. Se señalan en particular los cui
po es fina y la posterior más gruesa; miden entre dados higiénicos, el lavado detenido de verduras
30 y 55 mm. Los huevos tienen en sus polos dos y alimentos, y evitar llevar a la boca las manos o
prominencias que les confieren aspecto de limón. elementos sucios con tierra.
En el momento de la postura no están segmen
tados y para embrionarse requieren 10 a 14 días Taenia saginata
en el suelo húmedo. Los huevos embrionados son Este parásito cosmopolita produce en el hom
ingeridos con los alimentos o por las manos su bre la teniosis saginata. Es un cestodo blanco o
cias con tierra. Son atacados por los jugos diges blanco amarillento que alcanza una longitud
tivos y liberadas las larvas, que se alojan en las aproximada de 5 metros (puede alcanzar 25 m o
criptas del intestino delgado donde se nutren y más). Se distinguen en él tres zonas bien diferen
desarrollan. Luego de 3 meses se localizan en ciadas: escólex, cuello y cuerpo o estróbila, cons
todo el colon, que es su ubicación definitiva, don tituida por anillos o proglótides. Los huevos son
de pueden vivir 7 a 10 años. iguales a los de otras especies de Taenia y no
tienen características que los diferencien. Llegan
Manifestaciones clínicas al suelo con la materia fecal humana y son inge
Los síntomas digestivos son variados y están ridos con el pasto o con el agua por el ganado
en relación con la intensidad de la parasitación: vacuno, en cuyo intestino eclosionan y se libe
deposiciones mucosanguinolentas, dolores cóli ran las oncosferas. Éstas penetran por la pared
cos abdominales, meteorismo, pujos y tenesmo, intestinal y caen en el torrente circulatorio hasta
náuseas, vómitos, anorexia y pérdida de peso. En alcanzar los músculos estriados y el miocardio,
los niños se da una situación muy característica, donde evolucionan hacia la forma de larva
que es el prolapso de la mucosa rectal donde se vesicular denominada Cisticercus bovis. Es una
observan los parásitos firmemente adheridos a vesícula ovoide blanco-opalescente de 5 por 8
ella. Entre los síntomas extradigestivos se con mm, que contiene el escólex invaginado en su
signan: palidez, astenia, mareos e irritabilidad. interior. El cisticerco es ingerido por el hombre
El hemograma puede revelar eosinofilia elevada con la carne vacuna cruda o mal cocida. Libera
y anemia hipocrómica microcítica. do de los tejidos circundantes por la acción di
gestiva, desinvagina el escólex, que se fija en la
Diagnóstico mucosa del intestino delgado mediante su.' vento
El examen coproparasitológico mostrará los sas, y a partir del cuello da las proglótides que for
huevos característicos. El diagnóstico clínico es marán el cuerpo de la tenia, A los 2 o 3 meses en la
m
m
726 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
m
materia fecal o en la ropa interior del paciente se colaterales hacen posible repetir el tratamiento
verán anillos grávidos, ya que por sus propios para lograr la curación.
m
movimientos pueden trasponer el esfínter anal. Si se ha recuperado el escólex, puede tenerse
m la seguridad de la curación, si se trata, como en
Manifestaciones clínicas la mayoría de los casos, de un solo ejemplar.
m En general son poco importantes: anorexia, Si el tratamiento fracasa, las proglótides vol
pérdida de peso, epigastralgia, diarrea, náuseas, verán a observarse unos 2 meses después.
m vómitos, urticaria, prurito anal, molestias anales
por deslizamiento de las proglótides y trastornos Profilaxis
f i
nerviosos atribuidos a la toxicidad del parásito. La inspección veterinaria es muy importante,
• Raramente da sensación de hambre excesiva. La pero Cisticercus bovis puede pasar inadvertido;
presencia de anillos en el apéndice puede favo en consecuencia, la mejor medida profiláctica
p recer el desarrollo de apendicitis aguda; la gran consiste en comer la carne bien cocida, con lo
longitud del verme, si se dispone en forma de que se asegura su destrucción.
p ovillo, puede causar obstrucción intestinal. To
das estas manifestaciones ceden con la elimina Taenia solium
m
ción del parásito, que suele ser un solo ejemplar. La parasitación del intestino humano por Taenia
p solium determina la enfermedad conocida como
Diagnóstico teniosis solium. Se denomina así para diferenciar
# En general el paciente consulta por la elimina la de la teniosis saginata, producida por Taenia
ción de proglótides grávidas, cuyo estudio saginata. Taenia solium se origina por consumo
parasitológico determina con precisión el diag de carne cruda o mal cocida de cerdos que tienen
nóstico diferencial de Taenia. Esto es muy im en sus músculos Cisticercus cellulosae. Esta pa-
portante, porque en caso de tratarse de Taenia rasitosis es frecuente en México, Latinoamérica,
solium deberán adoptarse precauciones para evi Portugal y otros países consumidores de cerdo.
tar que el enfermo vomite, lo cual puede hacer Taenia solium es un cestodo de una longitud
p regurgitar al estómago proglótides que luego da
rán origen a la cisticercosis humana. En el caso
de 2 a 7 m que se aloja en el intestino delgado.
Es de color blanco o blanco amarillento. En el
p de Taenia saginata esta situación no se produce. parásito adulto pueden observarse tres zonas bien
diferenciadas: el escólex, el cuello y el cuerpo o
p Tratamiento estróbila, constituido por unos 800 anillos o pro
p Los fármacos de elección son la niclosamida y
el praziquantel. La primera se prescribe en dosis
glótides. Las últimas proglótides grávidas, por
tadoras de gran número de huevos, son elimina
p de Ig para individuos entre 10 y 35 kg de peso; das del intestino con la materia fecal. El cerdo,
más de 35 kg de peso, 1,5 g; más de 50 kg de animal de hábitos coprófagos, ingiere esos hue
p peso, 2 g, siempre en una sola toma administrada vos, que al llegar al intestino delgado eclosionan.
cida de peces contam inados por esas larvas también mediante la ingestión de hospederos in
plerocercoides. El proceso digestivo las libera de termediarios (gorgojos de los alimentos). Los
los tejidos que la rodean y se fijan en el intestino huevos llegan al intestino delgado del hombre y
mediante sus botrios. Luego de cinco a seis se* en su luz dejan en libertad el embrión hexacanto,
manas completan su desarrollo y aparecen los que con sus ganchos se fija en el espesor de una
huevos en las heces. vellosidad intestinal donde en tres o cuatro días
se desarrolla la larva llamada cisticercoide.
Manifestaciones clínicas Ésta crece, la vellosidad se rompe, y deja en
En la mayoría de los casos son escasas. En otros libertad la larva, de la que emerge el escólex que
determinan manifestaciones mecánicas por la se fija a la mucosa del íleon. Se inicia así el desa
presencia del parásito. A veces, cuando hay más rrollo de proglótides y al cabo de 19 días, la pro
de un parásito suele haber obstrucción intestinal ducción de huevos. Éstos salen al exterior con la
por un ovillo de parásitos. materia fecal y ya son infestantes, de modo que,
La acción competitiva de D iphyllohothrium por mala higiene después de defecar, se puede
latum por la vitamina B12 determina en pocos producir la autoinfestación exógena. Aun sin sa
casos la aparición de anemia macrocítica. Otras lir al exterior los huevos pueden hacer eclosión
manifestaciones hemáticas poco frecuentes son dentro del intestino del individuo y producirse
leucocitosis y eosinofilia discretas. así la autoinfestación endógena. Esta autoin
festación es la causa del gran número de ejem
Diagnóstico plares que aloja el intestino humano.
Sólo es posible mediante el hallazgo de los ca>
racterísticos huevos operculados en la materia fe Manifestaciones cUnicas
cal. La confusión con los huevos, también opercu El elevado número de parásitos fijados en la mu
lados, de Fasciola hepático es posible, pero estos cosa intestinal determina fenómenos inflamatorios,
últimos son dos veces más grandes. En la para- expresados por diarrea y dolor abdominal. Ade
sitación pOT Diphyllobotríum latum no se produce más de anorexia, irritabilidad, cefalea, insomnio,
eliminación de proglótides con la materia fecal. prurito anal y nasal. Es frecuente la existencia de
Los últimos proglótides no se separan del estróbilo eosinofilia superior al 5%.
y se van desintegrando en forma gradual.
Diagnóstico
Tratamiento Se basa en el hallazgo de los huevos del pará
Las indicaciones son las mismas que para Tae- sito en el examen de la materia fecal.
nia saginata. En cuanto a la anemia, se la tratará
con vitamina BI2. Tratamiento
Los fármacos de elección son la niclosamida y
Profilaxis el praziquantel. Como alternativa puede utilizar
No comer carne de pescado cruda o mal cocida. se la paromomicina o el albendazol.
La niclosamida se administra durante 7 días.
Hymenoíepis nana El primer día se prescribirá la misma dosis que
H ym enolepis nana o «tenia enana» produce la la indicada para Taenia saginata, y desde el se
himenolepiosis nana. Es un parásito cosmopoli gundo día hasta el séptimo se continúa con la
ta observado en regiones templadas y tropicales. mitad de esa dosis una vez por día. Este esquema
Es la tenia más frecuente y pequeña que parasita se repite después de 10 días de descanso, lo que
el intestino del hombre. La parasitación es por evita la recidiva al impedir que los cisticercoides
múltiples ejemplares, a veces varios miles. Mide que están en las vellosidades intestinales lleguen
30 a 40 mm de largo por 1 mm de ancho. Los a ser tenias adultas.
huevos son liberados al desintegrarse las últimas El praziquantel se administra en una sola dosis
proglótides. El hombre contrae la afección al in de 25 mg/kg de peso.
gerir los huevos con alimentos contaminados o La paromomicina se indica en dosis de 45 mg/kg,
Capítulo 95 - Parasitosis intestinales □ 729
en una so!a toma, durante 7 días. El albendazol, Los huevos eliminados con la materia fecal
tanto en niños como en adultos, se administra en contaminan la ropa interior o de cama, los asien
dosis de 400 mg por día durante 3 días. tos de retretes y otros objetos. Las deyecciones
En todos los casos se deberán hacer exámenes de ratas y ratones parasitados por esta tenia con
coproparasitólogicos a los 30 y 60 días después tienen huevos infestantes.
de finalizado el último ciclo de tratamiento, ya Pueden actuar como hospederos intermediarios
que son frecuentes las recidivas. varias pulgas y gorgojos de los alimentos, cuya
ingestión determinará el desarrollo de esta para
P r o f ila x is sitosis.
Con el fin de evitar las reinfestaciones exógenas
es necesario contemplar cuidados higiénicos ade
cuados.
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96
Miasis
Ornar J. Palmieri
cas. La miasis puede afectar todo tipo de herí* pias y cubiertas con gasa estéril, pueden favore
das. accidentales o quirúrgicas. cer la extracción de las larvas de los lugares don
Las infecciones bacterianas secundarias son una de no se puede instilar éter o tolueno. La iver-
com plicación importante de las heridas con mectina ha sido usada en la miasis de los anima
miasis. Además de agravar el pronóstico, predis les y en pocos casos en humanos. La dosis es de
ponen a que otras especies de moscas semies* 0,1 a 0,2 mg/kg en una sola dosis.
pecíficas depositen sus huevos en la lesión, lo La profilaxis de la miasis es el cuidado ade
cual aumenta aun más la población de larvas. cuado de las heridas, sobre todo tenerlas cubier
Las localizaciones de esta miasis son todo tipo tas hasta su curación y evitar, mediante el uso de
de heridas de piel y tejido celular subcutáneo, con repelentes o insecticidas, el contacto con las
más frecuencia úlceras de piel, como la úlcera moscas. Las infecciones bacterianas secundarias
varicosa, o cavidades abiertas, como fosas nasa que complican la zona afectada requerirán trata
les, senos paranasales, órbita, boca, conducto miento con antimicrobianos. En todos los casos
auditivo externo y vagina. corresponde instaurar la profilaxis del tétanos.
Las manifestaciones clínicas más importantes
son dolor intenso y prurito en la zona afectada.
MIASIS POR LARVAS DE DERMATOBÍA HOMINIS
De no mediar tratamiento, la destrucción de los
tejidos se incrementa y pueden producirse infec D erm atohia hom inis es una mosca robusta, de
ciones o hemorragias que lleven a la muerte. 15 a 17 mm de largo. Su cuerpo poco velludo
Las larvas de C. hom inivorax son las que pro tiene un color azul acerado con tonos grisáceos y
ducen el mayor número de miasis de las cavida el abdomen es azul brillante.
des. De todas ellas, la de las fosas nasales o rino- Esta mosca es muy abundante en las regiones
miasis es la más frecuente; en general es una com boscosas de América tropical, desde México hasta
plicación de procesos supurativos preexistentes Paraguay y nordeste de Argentina.
o de la ocena. Puede destruir los cartílagos, el La hembra deposita alrededor de 20 huevos
paladar, penetrar en los senos paranasales, la ór sobre el abdomen de artrópodos, en general pun
bita e incluso en el cráneo. zantes, que captura durante el vuelo. El período
Otra forma de presentación de la miasis por de incubación dura 7 a 10 días.
larvas de C. hom inivorax la forunculoide. Ésta Cuando el artrópodo portador de los huevos ya
se caracteriza por la presencia de nódulos cutá incubados pica a los animales o al hombre, de
neos no migratorios y se confunde con frecuen posita en su piel las larvas que penetrarán, a ve
cia con forúnculos. En general se observan va ces por el mismo orificio de la picadura, hasta el
rios elementos en la misma zona de la piel. Estos tejido celular subcutáneo. Las larvas viven allí
nódulos, eritematosos y muy dolorosos, están durante 6 a 10 semanas, luego salen y caen al
centrados por un pequeño orificio por el que mana suelo, donde se transforman en pupas de las que
una secreción serosanguinolenta. Si se los com en 15 a 60 días emerge la mosca.
prime, puede observarse la parte posterior de la Las lesiones, que pueden ser múltiples, se lo
larva que asoma por el orificio. Su extracción es calizan en las zonas expuestas de la piel, como
dificultosa pero posible si se utiliza una pinza cuero cabelludo, cara, manos, brazos, piernas y
adecuada que, introducida por el orificio, tome cuello. Su aspecto es el mismo de la forma forun
al parásito en toda su extensión. culoide de la miasis por larvas de C. hominivorax
y en general cada nódulo aloja una sola larva.
Además de producir la miasis forunculoide,
TRATAMIENTO
D. hom inis puede invadir la cavidad orbitaria o
El tratamiento es fundamentalmente quirúrgi la boca. Las manifestaciones clínicas, el trata
co: se desbrida la herida y se extraen las larvas. miento y la profilaxis son los mismos que se con
Éstas también pueden eliminarse con éter sulfú sideraron al tratar la miasis por larvas de C. homi-
rico o tolueno. Las hojas de albahaca, bien lim nivorax.
Éám Étm
Capítulo 96 - Miasis □ 733
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Síndrome de larva migrans
Ornar J. Palmieri
El síndrome de larva migrans está provocado a tres milímetros de ancho. Éste, avanza irregu
por el ingreso al organismo humano de larvas de larmente, de varios milímetros a varios centíme
nemalodos de diversos animales, en general el tros por día y describe una curva o una línea si
perro y el gato, que pueden migrar por la piel, o nuosa. Estas larvas son incapaces de completar
por distintos parénquimas. En el primer caso se su ciclo biológico, pero pueden sobrevivir durante
denomina síndrome de larva migrans cutánea y algunas semanas migrando por la piel o incluso
en el segundo, síndrome de larva migrans visce por el tejido celular subcutáneo; describe líneas
ral. Estas larvas, no llegan a completar su ciclo serpenteantes, eritematosas y vesiculares en el ex
biológico en el hombre al que no reconocen como tremo por donde avanzan con atenuación del eri
su hospedero definitivo; en cambio, Ascaris lum- tema en las partes por donde penetraron. Suelen
bricoides^ N ecator am ericanus, A ncylostom a producir prurito intenso, y debido al rascado pue
duodenale y Strongyloides stercoralis, luego de de originarse una infección bacteriana sobrea-
la migración larvaria visceral, alcanzan su esta gregada; de no producirse ésta, el estado general
do adulto en el intestino humano. no se altera, ni hay adenopatías satélites. Este
cuadro dermatológico recibe distintas denomina
SINDROME DE LARVA MIGRANS CUTÁNEA ciones: la n 'a migrans cutánea, erupción lineal
rampante, dermatitis serpiginosa, dermatitis ver
Definición y etiología minosa rampante, creeping disease y otras. En
Este síndrome es debido a la penetración en la general, se produce la curación espontánea en dos
pie! normal de larvas de Ancylostoma braziliense, o tres semanas y a veces mediante el tratamien
parásito de perros y gatos, o de i4. caninum o Un- to. Excepcionalmente, las larvas pueden llegar a
cinaria stenocephala, parásitos del perro. Esta los tejidos profundos e iniciar el mismo ciclo lar
afección es frecuente en América del Sur, Amé vario que en el hospedero animal, io cual origina
rica Central, el Caribe, el sudeste de los Estados un síndrome de larva migrans visceral con ma
Unidos y en toda el África tropical. nifestaciones clínicas leves o graves.
La infección humana se produce por el contac
Manifestaciones clínicas to con la tierra contaminada: actividades agríco
Cuando las larvas penetran en la piel, produ las, excavaciones, jardinería, etc. Existen dife
cen pápulas pruriginosas que en 2 o 3 días se rencias en cuanto a la incidencia, aunque ésta obe
transforman en túneles serpiginosos que recorren dece a diversos modos de vida y de exposición a
la epidermis entre los estratos germinativo y cór la enfermedad. En los países tropicales los niños
neo, con inflamación del corion adyacente. El la adquieren al arrastrarse o jugaren la tierra. Se
trayecto tiene varios centímetros de largo por dos han descripto epidemias en guarderías infantiles.
736 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
cuya fuente de contaminación fueron los areneros en el intestino del hospedero cuyas larvas rhabdi-
para juegos. También están expuestos al conta toides se transforman en las márgenes del ano en
gio los que frecuentan las playas tropicales (An estrongiloides infestantes y penetran por la piel
tillas, México, Brasil, Senegal y Tailandia). En de la zona circundannte para reiniciar el ciclo. A
los lugares contaminados con excrementos de diferencia de la larva m igrans cutánea produci
perro el contagio aumenta durante los períodos da por las larvas de parásitos animales, la larva
de lluvia. currens requiere tratamiento por vía oral (ver el
capítulo Parasitosis intestinales).
Diagnóstico
El diagnóstico es clínico y se basa en los ante Tratamiento
cedentes epidemiológicos y en el aspecto de la El tratamiento del síndrome de larva migrans
lesión. La eosinofilia sanguínea es inconstante y cutánea se realiza con tiabendazol administra
moderada, por lo tanto, poco significativa. La do por vía oral en dosis de 25 mg/kg/día, en dos
biopsia cutánea es innecesaria, sólo se realiza o tres tomas, durante dos a cinco días. El tiaben
cuando no se sospecha el diagnóstico. En los cor dazol por vía tópica en crema al 5 % es de gran
tes histológicos sólo se observa una epidermo- utilidad y se aplica tres o cuatro veces por día
dermitis inespecífica con abundante infiltrado de durante una semana, lapso en el que la mayoría
eosinófílos; la larva no suele visualizarse, por de los enfermos curan. La vía tópica es tan efi
que en general, se encuentra uno o dos centíme caz como la vía oral y se tolera mejor. Otras al
tros por delante de la zona más congestiva de la ternativas terapéuticas son: el albendazol por vía
lesión. oral en dosis de 400 mg/día durante 6 días; o la
iverm ectina en dosis única por vía oral de
Diagnóstico diferencial 0,2 mg/kg, ambos con buena tolerancia y eficacia.
El diagnóstico diferencial debe hacerse con las En cuanto a las medidas de prevención son las
miasis rampantes que causas las larvas de mos mismas que para la larva migrans visceral las que
cas que atacan al ganado y accidentalmente al serán tratadas más adelante.
hombre como Gasterophilus o Hypoderma. Esta
afección se sospecha cuando se observa un pe
SÍNDROME DE LARVA MIGRANS VISCERAL
queño nódulo inflamatorio que avanza varios cen
tímetros por día y que deja un surco equimótico Definición
característico. Luego de pocos días la larva se El síndrome de larva m igrans visceral, es cau
elimina. sado por la migración a través de los distintos
Otro diagnóstico diferencial a tener en cuenta parénquimas del organismo humano de los esta
es el de lai'va currens. Así se denomina la afec dos larvarios de Toxocara canis, con menor fre
ción producida por la larva estro n g ilo id e cuencia T, cati y excepcionalmente por las larvas
infectante de Strongyloides stercoralis que al de helmintos parásitos de perros, gatos y otros
penetrar por la piel, también puede describir un animales carnívoros. Se caracteriza por uno o más
trayecto parecido al de la larva migrans que pro de los siguientes signos o síntomas: hipereosino-
ducen los parásitos de animales, pero ésta, se dis filia, hepatomegalia, esplenomegalia, neumonitis,
tingue por el avance más acelerado lo que le ha hipergammaglobulinemia y fiebre. Afecta en ge
valido el nombre larva currens. La evolución neral a niños pequeños y puede producir una en
también es más rápida y se completa en 24 a 48 fermedad leve o grave. La localización más im
horas, para luego seguir el ciclo de migración portante es el ojo, donde produce una endoftal-
larvaria visceral y en el intestino llegar al estado mitis debido a las larvas que invaden el ojo y ori
adulto. Las lesiones se localizan en el tronco y ginan una reacción granulomatosa eosinofílica,
sobre todo en la mitad inferior del cuerpo, región habitualmente en la retina. Este padecimiento no
perianal, lumbar, umbilical y parte superior de suele acompañarse de enfermedad general y ocu
los muslos. En general este cuadro es debido a la rre meses o años después del ataque inicial.
autoinfestación que produce el parásito alojado
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Capítulo 97 - Síndrome de larva migrans □ 737 f
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Etiología leucocitosis, de 20.000 a 100.000 leucocitos/mm^
El síndrome de lan>a m igrans visceral es cau con eosinofilia que puede llegar al 90%. Con poca <
sado por larvas de parásitos de la familia Asca- frecuencia se producen convulsiones y trastornos
ridea, pertenecientes al género Toxocara, que psíquicos. Los casos más graves se deben a afee* (
incluye las especies Toxocara canis y T. cati, tación neurológica, pulmonar o miocárdica que
ascáridos de perros y gatos respectivamente. T. pueden llevar a la muerte. <
canis parece ser el más importante y es el más La forma ocular de la toxocarosis se produce
frecuentemente identificado en los casos confir cuando las larvas de Toxocara invaden el ojo. Al f
mados de la enfermedad. Otros agentes etioló- rededor de las larvas se desarrolla un granuloma
f
gicos, parásitos de animales, tienen una impor eosinofílico que se ubica casi siempre en el polo
tancia secundaria en la génesis de este síndrome. posterior de la retina. Esta forma clínica se ca f
T. canis es un parásito habitual en el intestino racteriza por disminución de la agudeza visual,
de perros, que son sus hospederos definitivos. El dolor ocular y estrabismo. El examen de fondo
hombre es un hospedero accidental en donde el de ojo presenta alteraciones compatibles con
parásito no completa su ciclo biológico. uveítis, papilitis, granuloma del polo posterior o e
El parásito adulto, machos y hembras, se aloja periférico, catarata y endoftalmitis. La forma
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en el intestino del perro. La hembra fecundada ocular es casi siempre unilateral y afecta a niños
pone aproximadamente 200.000 huevos por día. de 10 a 14 años o adultos y no se acompaña de <
En el suelo, en adecuadas condiciones de tempe manifestaciones generales, ni eosinofilia. El he
ratura y humedad, en dos o tres semanas se tor cho más importante a tener en cuenta es que la (
nan infectantes. La larva dentro del huevo se man lesión retiniana puede ser confundida con un
tiene infectante por varios meses. La infección retinoblastoma u otro tumor ocular y llevar a una <
del perro por T. canis puede adquirirse por: 1) la enucleación innecesaria.
(
ingestión de huevos infectantes del suelo; 2) la Como ya fue señalado la toxocarosis ocular no
ingestión de larvas presentes en tejidos de otros suele acompañarse de enfermedad general y ocu (
hospederos que se infectaron del suelo; 3) el pa rre meses o años después del ataque inicial.
saje de larvas de la madre a través de la placenta (
0 de la leche; 4) la ingestión de larvas eliminadas Diagnóstico
con las heces por los cachorros lactantes. El diagnóstico de larva m igrans visceral debe (
Manifestaciones clínicas
ser considerado en todo paciente con eosinofilia
persistente, sobre todo en niños y más aún si tie <c
La infección humana con larvas de T. canis se
contrae al ingerir huevos infectantes del suelo.
nen el hábito de pica (ingestión compulsiva de
sustancias no nutritivas como suciedad, arcilla,
c
Liberada la larva en el intestino atraviesa la pa tierra, etc.) o tienen perros o juegan con ellos. (C
red y por vía hemática llega al hígado y pulmo Los exámenes de laboratorio evidencian, como
nes. Otras migran a casi todos los órganos, in ya fue citado, un número elevado de leucocitos, i
cluido el cerebro, donde mantienen su actividad entre 20.000 y 100.000 por mm^ con una eosino-
durante largos períodos. Se dirigen de uno a otro filia del 50% al 90%. La eosinofilia puede per c
parénquima y en su migración provocan granu sistir por meses o años aun después de desapare
(
lomas eosinofílicos que tratan de encapsularla. cidos los demás signos o síntomas. El proteino-
Las manifestaciones clínicas de la toxocarosis grama muestra la albúmina en cifras normales e
dependen del número de larvas ingeridas y de las hipergammaglobulinemia en especial de IgG,
distintas localizaciones en los tejidos, desde for IgM e IgE. Los títulos de isohemaglutininas anti 4
mas clínicas asintomáticas hasta formas graves. A o anti B están elevados en función de la estimu
La enfermedad afecta casi siempre a niños de lación determinada por los antígenos de superfi (
1 a 4 años de edad. Los síntomas consisten en fie cie de las larvas de Toxocara. El mejor método
bre, anorexia, pérdida de peso, tos y bronquitis as- de diagnóstico de !a toxocarosis es la prueba de (
matiforme. A veces se producen exantemas y he- ELISA que tiene buena sensibilidad y especifici
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patoesplenomegalia. Lo más característico es la dad. El examen de la materia fecal, que siempre
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738 □ Q uinta parte - Infecciones parasitarias
Bibliografía-----------------------------------------------
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Salvat Editores. Barcelona. 1986.
%
1
índice alfabético
<!
742 □ Enferm edades infecciosas
-
Neumonía neumocócica, 122 Paracoccidioidomicosis. 581
**
Neumonía nosocomial, 131 Paragonimosis, 687
Neumonía por P n e u m o c y sfis jiro veci^ P a ra g o n im u s, 687
358,360 Parálisis facial periférica, 337
Neumonías bacterianas, 362 Parasitosis intestinales, 18, 711
Neumonías crónicas, 123 Parotiditis epidémica, 311
Neumonías estafilocócicas, 122 Peginterferón, 304
© Neumonías por bacilos gramnegativos. Penicilina G benzatina, 37
122, 123 Penicilina G, 37
Neumopatias bacterianas recurrentes, Penicilina V, 37
358 Penicilinas resistentes a la
Neuropatía distal simétrica, 370 penicilinasa, 38
Neurosífilis, 212 P e p ío síre p to c o c c u s, 452,453
Nifurtimox, 652 Pericarditis, 470
Nitrofurantoína, 47 Peritonitis bacteriana aguda, 195
N o ca rd ia b ra silien sis, 615 Peritonitis bacteriana espontánea, 196
N o ca rd ia , 433 Peritonitis en la diálisis crónica, 196
Nocardiosis, 18,433 P h le b o to m u s, 663
9
Norfloxacina, 48 Phlebovirus, 328
N o se m a , 673 P h o n e u tria , 204
Picomaviridae, 307
O Pielonefritis, 136
9 Ofidios, 205 Pielonefritis crónica, 141
Ofloxacina, 48, 552 Pioderma gangrenoso, 236
O n ch o cei’ca volviiius, 707 Piomiositis, 240
9 Oncocercosis, 707 Piomiositis tropical, 240
Ooforitis, 313 Pirazinamida, 50
e i
Orquitis, 140, 313 Pirimetamina, 56, 640, 661, 662
o Orzuelo, 245 P la sm o d iu m , 635
<» Oseltamivir, 52 P le isto p h o ra , 673
Osteomielitis, 175,471 Pleuresías. 125
9 Otitis, 111 Pleurodinia epidémica, 308
• Oxitetraciclina, 44 P n e u m o c y stis jir o v e c i, 621
Polineuropatía desmielinizante
e i P crónica, 370
• Paludismo, 18. 635 Poliomielitis. 309
Pamoato de pirantel, 57 P o rp h yro m o n a s^ 452,453
A
V Panadizo herpético, 337 Posaconazol, 54
• Pancreatitis, 313 Praziquantel, 58
P a ra c o cc id io id e s b ra silien sis, 581 P re vo te lla , 452, 453
•
_ ^ 0
ín d ice alfabético □ 747
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