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Esquema
1. Estructura de la atmósfera.
1.1. Historia de la atmósfera
1.2. Capas atmosféricas.
2. Energía en la atmósfera.
2.1. Radiación solar sobre la atmósfera.
2.2. Distribución de la energía. Efecto invernadero.
2.3. Influencia del agua en la Tierra.
2.3.1. Humedad atmosférica.
2.3.2. Punto de rocío.
3. Observación meteorológica.
3.1. Distribución vertical de la temperatura.
3.2. Elevación adiabática del aire.
3.3. Estratificación atmosférica estable e inestable.
3.4. Inversiones y formación de nubes tormentosas.
4. Fenómenos meteorológicos.
4.1. Nieblas y nubes.
4.2. Circulación general de la atmósfera.
4.3. Ciclones y anticiclones.
4.4. Masas de aire y frentes.
5. Papel protector de la atmósfera. La capa de ozono.
6. Contaminación atmosférica.
6.1. Contaminación natural y artificial.
6.2. Emisores de contaminantes.
6.3. Tiempo de resistencia de los contaminantes.
6.4. Contaminantes más usuales.
6.4.1. Contaminantes primarios.
6.4.2. Contaminantes secundarios.
6.5. Efectos de la contaminación sobre el clima.
6.5.1. Contaminación fotoquímica.
6.5.2. Acidificación del medio ambiente. Lluvias ácidas.
6.5.3. Rotura de la capa de ozono.
6.5.4. Calentamiento atmosférico. Efecto invernadero.
6.6. Medidas de protección contra la contaminación
6.6.1. Acciones preventivas.
6.6.2. Acciones correctivas.
6.6.3. Acciones para prevenir el efecto invernadero.
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TEMA 13
FÍSICA DE LA ATMÓSFERA. FENÓMENOS ATMOSFÉRICOS. OBSER-
VACIÓN METEOROLÓGICA. BALANCE ENERGÉTICO TERRESTRE. PAPEL
PROTECTOR DE LA ATMÓSFERA. ALTERACIONES DEBIDAS A LA CONTA-
MINACIÓN. MEDIDAS PARA SU PROTECCIÓN,
1. ESTRUCTURA DE LA ATMÓSFERA
Parece probable que la mayor parte de las aguas y gases que existen en la superfi-
cie de la Tierra llegaron a ella como resultado de fenómenos de volcanismo posterior a
su formación como planeta. La energía potencial gravitatoria desarrollada en la contrac-
ción gravitatoria del polvo originario, convertida en calor produjo una desgasificación
primitiva excepcionalmente voluminosa que elevándose por las capas más densas de
materia, aportó a la superficie gran cantidad de gases y agua. Posteriormente las grandes
emisiones de lava de los volcanes aportaron nuevas cantidades de agua y gases a la at-
mósfera primigenia.
Las hipótesis más sólidas sostienen que la atmósfera primitiva contenía princ i-
palmente amoníaco y metano, con cantidades menores de monóxido de carbono y, por
supuesto, vapor de agua. Ésta evolucionó hasta convertirse en una atmósfera en la que el
nitrógeno y el dióxido de carbono superaron al amoníaco y al metano, hacia la época en
que se formaron los más antiguos sedimentos conocidos, hace unos 3800 millones de
años.
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Hace más de 3'5 millones de años, pequeñas criaturas pobladoras de mares poco
profundos empezaron el proceso que dio a la Tierra su atmósfera actual, rica en O2 . Es-
tas bacterias contenían clorofila y vivían en una atmósfera reductora sin oxígeno. Fue-
ron adquiriendo la capacidad de utilizar substratos cada vez más oxidados, hasta llegar
al agua, de la que tomaron los electrones y liberaron el oxígeno. Cuando empezó a libe-
rarse O2 , el hierro, abundante en el planeta, supuso un control al aumento indiscrimina-
do de su nivel en la biosfera, pues era absorbido por la reacción Fe+2 → Fe+3 . Los seres
vivos desarrollaron defensas contra el nuevo veneno presente en la atmósfera, el O2 ,
entre ellos los carotenoides.
Tropopausa. Es una superficie ideal que limita en altura las regiones perturbadas
de la Troposfera y marca el principio de la Estratosfera. Aparece en el punto en que la
temperatura deja de disminuir regularmente. La Tropopausa aparece comúnmente a 6
Km. en la zona del polo y a 17 Km. en la zona del Ecuador, pero su altitud varía de una
estación a otra e incluso de un instante a otro.
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fuerte concentración hacia los 25 Km. Allí se encuentra prácticamente todo el ozono
atmosférico (Ozonosfera).
FIG.1
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Hemosfera. Es la capa que ocupa los primeros 100 Km. por encima del suelo y
sus componentes principales son el oxígeno y el nitrógeno que permanecen en propor-
ción constante.
2. ENERGIA EN LA ATMOSFERA.
La mayor parte de la energía radiante que llega procedente del Sol se convierte en
energía térmica atmosférica antes de ser devuelta al espacio en forma de radiación infra-
rroja. Los vientos redistribuyen esta energía, disipando en el proceso una parte de ella
mayor que la disipada por las corrientes oceánicas y otros fenómenos terrestres.
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la temperatura de este nivel de irradiancia se calcula por la ley de Stefan-Boltzmann,
resultando de 255ºK (-18°C). Tal es la temperatura media de la atmósfera a altura de 5
km. La superficie terrestre y la atmósfera vienen a comportarse como si fueran cuerpos
negros y a la temperatura calculada, un cuerpo negro emite radiación en un amplio do-
minio de longitudes de onda con un máximo a los 12 mm, en la región infrarroja del
espectro.
La Tierra absorbe más radiación solar en las latitudes bajas que en las altas. Más
de la mitad de la radiación solar es absorbida por la superficie y el resto por la atmósfe-
ra. Por tanto, a bajas latitudes, zonas próximas al ecuador, la atmósfera recibe más ener-
gía de la superficie terrestre y del Sol que la atmósfera a latitudes altas. Además la at-
mósfera pierde más energía hacia el espacio a grandes alturas que a bajas. En virtud de
estos desequilibrios, las temperaturas de la atmósfera suelen decrecer desde el Ecuador
a los Polos y desde bajas a altas altitudes.
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El vapor de agua es relativamente poco reactivo. Los procesos físicos de evapora-
ción y precipitación son mucho más importantes cuantitativamente que las reacciones
químicas que sufren. Difieren sin embargo de otros gases poco reactivos por el hecho de
que su vida atmosférica es corta, de unos 10 días, antes de retornar a la superficie te-
rrestre en forma de lluvia o nieve. La Troposfera contiene, pues, cantidades variables de
vapor de agua; cuanto mayor es su temperatura, mayor es la cantidad que puede retener.
Si la Troposfera está saturada y se enfría, el agua se condensa para formar nubes y nie-
blas.
La humedad relativa más confortable para la salud humana varía con la tempera-
tura y con el estado de agitación del aire. Así, en un local cerrado con mucha gente a
temperatura constante, la humedad relativa crece hasta la saturación y conviene desecar.
En cambio, en un local con pocas personas y caldeado artificialmente, el aire puede ha-
cerse demasiado seco y es conveniente humedecerlo. Estas operaciones se realizan en
las instalaciones de aire acondicionado.
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Midiendo la presión de vapor pv en mm de Hg y la temperatura, T, en grados Kel-
vin, resulta para la masa de vapor de agua, en gramos, contenida en un volumen de 1 m3
de aire, el valor:
p
mv ( g ) = 289 v
T
m
demostración: p.V = RT despejando m y sustituyendo datos:
M
M p V 18 g / mol ×1000lit × ( pv / 760) atm p
mv = v v = = 289 v
RT 0'082(atm.lit / mol.K ) × T ( K ) T
Si el vapor de agua satura completamente el volumen de aire, tendremos:
p m p
ms ( g ) = 289 s y por tanto Hr = v = v
T ms p s
Si llamamos p a la presión atmosférica, la presión del aire seco, según la ley de
Dalton, sería: pa = p − pv = p − H r ps
luego, la masa en gramos de aire seco contenida en 1 m3 de aire, resulta ser:
M p V 28'8 g / mol × [( p − pv ) 760]atm × 1000lit p − pv p − H r ps
ma ( g ) = a a = = 462 = 462
RT 0'082( atm.lit / mol.K ) × T ( K ) T T
3
y la masa de aire húmedo en gramos/m :
p p − pv 462 p − 173 pv 462 p − 173H r ps
m' ( g ) = mv ( g ) + ma ( g ) = 289 v + 462 = =
T T T T
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temperatura muy distinta de la del aire, en cambio, con aire húmedo, las dos temperatu-
ras están muy próximas.
3. OBSERVACION METEOROLOGICA.
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geno y a ello se debe precisa mente el fuerte aumento de la temperatura más allá de los
80 Km.
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El aire húmedo, en tanto no está saturado, se enfría al mismo ritmo que el aire se-
co, pero cuando el aire que asciende está saturado de vapor, como ocurre al alcanzarse
el punto de rocío, se produce el fenómeno de condensación que va acompañado de la
cesión del calor de vaporización y, por tanto, el gradiente adiabático del aire húmedo
será inferior al que corresponde al aire seco. Su valor real depende de la temperatura,
oscilando entre 4ºC por cada 1000 m de ascenso en ambientes fríos, donde el vapor
condensado es escaso, hasta 8ºC por cada 1000 m si el ambiente es cálido (tropical), y
por ello con abundante condensación.
Por el contrario, si λ<Λ y ∆z>0 (ascenso), resulta T1 ’<T1 , es decir, la masa ascen-
dente se encuentra rodeada siempre de aire más frío y más denso, y por consiguiente,
sigue ascendiendo con velocidad creciente, desarrollándose violentas corrientes verti-
cales bajo condiciones inestables. Si ∆z<0 (descenso) resulta T1 ’>Tl, la masa se en-
cuentra rodeada de aire más caliente y ligero y tiende a seguir descendiendo. Por tanto,
si λ<Λ, el aire separado de su nivel en cualquier sentido, tiende a separarse cada vez
más: Existe inestabilidad vertica1 en 1a atmósfera.
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ción de equilibrio ni tampoco a separarle de esta nueva posición. Se dice entonces que el
aire está en equilibrio neutro o estratificación indiferente.
Los sondeos aerológicos llevados a cabo diariamente por las estaciones meteoro-
lógicas demuestran la existencia de capas de aire en que Λ<0, o sea un incremento de
temperatura con la altura. Este fenómeno se llama inversión, ya que supone una inver-
sión en el sentido normal de la variación de la temperatura. Estas inversiones de pre-
sentan de madrugada, cuando la radiación nocturna del suelo enfría las capas de aire que
están en contacto, y en cambio apenas influye en la temperatura de las capas superiores.
Gráficamente vienen indicadas en la fig.4, por la porción AB de la curva de estado que
representa un ejemplo de un sondeo aerológico vertical de temperatura. Igual ocurre a
partir del nivel M, donde existe una nueva inversión.
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4. FENOMENOS METEOROLOGICOS.
a) Que la temperatura del aire descienda por debajo del punto de rocío.
b) Que el aire contenga núcleos de condensación sobre los que puedan formarse las
primeras gotas.
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las zonas ecuatoriales y se dirige por las capas altas hacia el Nordeste volviendo a la
superficie hacia los 30º de latitud; a partir de ésta se dirige hacia el Este, dando lugar a
los vientos predominantes del Oeste en las latitudes medias o zonas templadas; por esta
razón, en nuestro hemisferio, y en dichas zonas, el viento viene del Oeste. Por debajo de
los 30° existe una franja en la que el movimiento en superficie no está completamente
desarrollado, mientras que las corrientes superiores apenas la afectan: es la zona de las
calmas tropicales; entre ella y el Ecuador los vientos son predominantemente del Nor-
deste y se denominan alisios. Entre los 30º y 60º es donde se desarrollan preferente-
mente las irregularidades denominadas ciclones y anticiclones.
En una zona de baja presión, un ciclón atraerá al aire de las regiones próximas
donde la presión es más alta, pero por la desviación debida a la rotación terrestre (acele-
ración de Coriolis), el aire circulará alrededor del ciclón en el sentido opuesto al de las
agujas del reloj en el hemisferio Norte (y en el sentido horario en el hemisferio Sur). En
estas zonas ciclónicas convergen masas de aire de origen diverso y en ellas, por lo gene-
ral hay mal tiempo; por esto un descenso continuada de la presión barométrica, es pre-
sagio de un empeoramiento climático.
Sin embargo, alrededor de una zona de altas presiones el aire diverge hacia las zo-
nas que tengan inferior presión barométrica, girando por la fuerza de Coriolis, en el he-
misferio septentrional, en el sentido de las agujas del reloj. Los vientos son divergentes,
no hay contacto entre masas heterogéneas y por consiguiente el tiempo es bueno, en
general, aparece nubosidad en las capas altas, pues al movimiento divergente inferior
debe corresponder otro convergente superior. Este movimiento de subsidencia de las
capas altas hacia las capas bajas da lugar a importantes nieblas, típicas de las áreas ant i-
ciclónicas.
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4.4. Masas de aire y frentes.
Ya se ha mencionado al principio del tema, al tratar sobre las capas que confo r-
man la atmósfera y la distribución de la energía en ella, el carácter protector que realiza,
cara a la preservación y mantenimiento de la vida en el planeta. La atmósfera representa
un auténtico escudo protector de los organismos vivos frente a las agresiones cósmicas
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y sin ella no habrían evolucionado los seres vivos tal y como los conocemos actua l-
mente. En realidad, la atmósfera, tanto en su primitiva composición como en la actual,
ha propiciado el desarrollo y la evolución de un conjunto de seres vivos adaptados a ella
y la variación, contaminación o cambio en su composición puede poner en peligro el
delicado equilibrio entre la vida y su entorno.
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Algunos compuestos catalizan la destrucción del ozono, como el hidrógeno ató-
mico, el radical hidroxilo, los óxidos de nitrógeno, el monóxido de carbono, el cloruro
de metilo, el metano y los átomos de cloro y de bromo. Muchos de éstos llegan a la at-
mósfera de forma natural emitidos por los océanos, los volcanes y los incendios. Entre
los contaminantes de origen humano destacan los clorofluorocarbonos, el tetracloruro
de carbono y el tricloroetano, con tiempos de residencia de 100, 60 y 10 años respecti-
vamente. Estos clorofluorocarbonos, virtualmente inertes en la troposfera, carentes de
toxicidad para los organismos vivos, y muy utilizados como refrigerantes y propelentes,
llegan intactos a la estratosfera donde los rayos ultravioleta rompe sus moléculas libe-
rando cloro y bromo que cataliza la conversión del ozono en oxígeno molecular.
También es una amenaza para la capa de ozono las emisiones de óxidos de nitró-
geno (NO y NO2 ) de las combustiones, con especial significación las producidas por los
aviones en vuelos supersónicos a gran altura.
6. CONTAMINACION ATMOSFERICA
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6.2. Emisores de contaminantes.
Las sustancias contaminantes lanzadas a la atmósfera por los múltiples focos emi-
sores que se han descrito, permanecen en ella durante un tiempo más o menos largo,
denominado tiempo de residencia. Este período de permanencia está relacionado con la
capacidad de la atmósfera para dispersarlas, con la reactividad química de la sustancia y
con el lavado de la atmósfera que efectúa la lluvia y la nieve, efectos todos ellos que
contribuyen a ir reduciendo la concentración de contaminantes.
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distribución constante de materia y energía, ingresa a la mayoría de los contaminantes
en los ciclos biogeoquímicos existentes lo que supone un mecanismo de autorregulación
y limpieza natural de sustancias extrañas que da como consecuencia una disminución
del tiempo de residencia de los contaminantes en la atmósfera.
Otras sustancias que se presentan en la atmósfera más raramente, pero que pueden
dar lugar a alteraciones importantes del medioambiente atmosférico, en zonas muy con-
cretas, por lo general asociadas al entorno próximo del foco que los produce, son:
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Los Oxidos de Azufre. El óxido de azufre que se emite a la atmósfera en mayores
cantidades es el dióxido de azufre SO2 y en menor proporción (1 ó 2% del anterior) del
trióxido de azufre SO3 .
El SO2 es un gas incoloro, de olor picante e irritante, más pesado que el aire, que
se desplaza rápidamente en la atmósfera y es muy estable. El SO3 es un gas incoloro y
muy reactivo, que condensa fácilmente. En condiciones normales no se encuentra SO3
pues reacciona fácilmente con el agua, formando ácido sulfúrico H2 SO4 . La combustión
de cualquier sustancia que contenga azufre produce emisiones de SO2 y SO3 y la canti-
dad de este último depende de las condiciones de reacción, especialmente de la tempe-
ratura, oscilando entre 1 y 10% de los SOx producidos. Un mecanismo de formación de
los SOx podría ser: S + O2 → SO2
2SO2 + O 2 → 2SO3
La segunda reacción se produce en pequeña escala y tiene lugar muy lentamente,
a la temperatura atmosférica, siendo favorecida por la acción de los catalizadores. El
efecto neto es que la emisión de los óxidos de azufre se realiza fundamentalmente en
forma de SO2 .
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Los principales problemas de contaminación atmosférica con CO son debidos a la
combustión incompleta de carburantes de los automóviles
Dióxido de Carbono. Es un gas incoloro e inodoro, no tóxico, más denso que el ai-
re, que se presenta en la atmósfera en concentraciones que oscilan entre 250 y 400 ppm.
En realidad, no puede considerarse como contaminante en sentido estricto, ya que no es
tóxico, y está presente en atmósferas puras de modo natural. No obstante, por los posi-
bles riesgos que entraña su acumulación en la atmósfera, como consecuencia de las alte-
raciones producidas en su ciclo por las actividades humanas que pudieran dar lugar a
una modificación del clima del planeta, lo consideramos como sustancia contaminante.
Entre los más importantes por sus efectos sobre la salud del hombre está el mercu-
rio y el plomo. La cantidad de plomo en el aire ha experimentado un marcado aumento
como consecuencia de las actividades humanas siendo las concentraciones de plomo en
las áreas urbanas de 5 a 50 veces superiores que en las áreas rurales.
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Sustancias radiactivas. Se consideran estas sustancias como contaminantes porque
emiten radiaciones ionizantes, que pueden provocar efectos nocivos cuando interaccio-
nan con los seres vivos. Las radiaciones ionizantes emitidas por los radionúclidos, pue-
den ser de tres tipos: rayos α (núcleos de Helio), rayos β (electrones) y radiación γ (on-
das electromagnéticas de altísima energía)
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-Formación de productos finales.
- Los radicales libres formados reaccionan con otros radicales, con contami-
nantes primarios y con constituyentes del aire, dando lugar a una mezcla
compleja de productos oxidantes siendo uno de los más importantes el ni-
trato de peroxiacetileno (PAN) formado a partir de radicales de peroxiacilo.
Este tipo de contaminación, conocida como smog fotoquímico se observó por pri-
mera vez en Los Angeles (California) en 1944 y se presenta en la actualidad, cada vez
con más frecuencia, en grandes ciudades industrializadas y que soportan densidades
intensas de tráfico.
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En el proceso de combustión de combustibles fósiles se libera el azufre y el nitró-
geno emitiéndose a la atmósfera como SO2 y NOx respectivamente.
FIG. 8
b) Deposición húmeda: la mayor parte de SO2 y NOx sufre oxidación que da lugar
a la formación de H2 SO4 y HNO3 . Estos ácidos se disuelven en las gotas de agua de
nubes y lluvia, retornando al suelo con las precipitaciones. Una parte de estos ácidos se
neutralizan por sustancias presentes en el aire, como el amoníaco.
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Recientes experimentos realizados en la Antártida ponen de manifiesto la apari-
ción, durante los meses de septiembre y octubre de cada año, de extensas zonas en la
vertical del Polo Sur, donde se producen importantes disminuciones de la concentración
de ozono, fenómeno que se conoce como Agujero de Ozono Antártico. Algunos cientí-
ficos lo atribuyen a fenómenos meteorológicos no totalmente conocidos, otros lo cons i-
deran debido a un desplazamiento de un equilibrio de la química de la estratosfera, in-
terviniendo numerosas y complejas reacciones químicas, fotoquímicas y procesos de
mezcla.
Desde este último punto de vista, las principales sustancias que aparecen implica-
das en la destrucción del ozono son los clorofluorocarbonos, si bien no son las únicas
responsables. Otros gases, tales como NOx , derivados del Br y compuestos hidrogena-
dos se combinan con los derivados del cloro para modificar el frágil equilibrio de la
capa de ozono de la estratosfera.
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6.6.1. Acciones preventivas.
Planificación de los usos del suelo, para la ubicación adecuada de industrias con-
taminantes, creación de zonas amortiguadoras de efectos y planes de ordenación urbana
con criterios ambientales.
Evaluaciones del impacto ambiental. Estos estudios prevén las alteraciones que
sobre el medio ambiente va a provocar la realización de determinadas acciones, planes y
proyectos, con el fin de adoptar las medidas correctoras que mitiguen los impactos antes
de que se produzcan.
Expulsar los contaminantes por chimeneas adecuadas de forma que la dilución sea
suficiente para evitar concentraciones elevadas a nivel del suelo. Esto atenúa la conta-
minación a nivel local pero puede producir lluvias ácidas en lugares alejados de las
fuentes.
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dióxido de carbono generado por la actividad humana. Por otro lado, aún siendo cara,
puede ser más barata que otras muchas opciones alternativas y además aporta otros mu-
chos beneficios: proporciona madera, disminuye la erosión del suelo, mejora el régimen
hídrico y permite una mayor diversidad biológica.
ANEXO
∆T T −T
Coeficiente de enfriamiento adiabático: λ = − =− 1 0 de donde:
∆z ∆z
T1 = T0 − λ.∆z
T1 '−T0 '
Gradiente geométrico de disminución real de temperatura: Λ = −
∆z
T1 ' = T0 '−Λ.∆z
restando ambas ecuaciones, resultará:
T1 − T1 ' = (T0 − T0 ') − λ.∆z − (− Λ.∆z )
y considerando que T0 = T0 ' resulta: T1 − T1 ' = (Λ − λ).∆z c.q.d.
BIBLIOGRAFÍA RECOMENDADA
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Tratamiento Didáctico
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OBJETIVOS
Conocer en profundidad la atmósfera, como medio en donde desarrollamos nuestra
vida, los fenómenos meteorológicos y explicarlos a la luz de las leyes de la física y su-
perar las viejas concepciones supersticiosas relacionadas con ellos.
Iniciarse en el estudio de la observación meteorológica y recogida de datos.
Crear conciencia del grave problema de la contaminación atmosférica por la activi-
dad humana e industrial, para promover la adopción de medidas correctoras.
UBICACIÓN
El presente tema no está contemplado en los actuales currículos de la ESO, por ello,
y dado el elevado nivel conceptual, debe ubicarse, en su caso, en el 2º curso de Bachi-
llerato, como tema de especialización dentro de la Física y en algunos aspectos puede
explicarse parte de él, como tema transversal de protección de la naturaleza.
TEMPORALIZACIÓN
El tema puede exponerse teóricamente en un periodo de tiempo de 4 horas y dedicar
2 horas más a la experimentación práctica en el laboratorio con los equipos de meteo-
rología básica existentes en los centros.
METODOLOGÍA
Se explicará, en clases teóricas, los contenidos fundamentales del tema, descripción
de la atmósfera, fenómenos meteorológicos, balance energético, contaminación, etc.
mostrando constantemente ejemplos fáciles de observar.
Motivar al alumno en la observación, descripción y explicación de los fenómenos
atmosféricos, mediante una metodología activa y participativa.
Realización de observaciones de laboratorio de meteorología, recopilando datos y
realizando trabajos.
CONTENIDOS MÍNIMOS
Estructura de la atmósfera. Capas. Concepto de presión atmosférica. Barómetros.
Energía en la atmósfera y su distribución. Efecto invernadero.
Concepto de humedad. Higrómetros. Punto de rocío. Escarcha.
Distribución vertical de la temperatura. Inversiones.
Formación de nubes. Nieblas. Tormentas.
Circulación general en la atmósfera. Ciclones y anticiclones.
La capa de ozono. Consecuencias de su destrucción. Contaminación atmosférica.
Calentamiento atmosférico. Lluvia ácida. Medidas de protección.
MATERIALES Y RECURSOS DIDÁCTICOS
Apuntes de clase y especialmente recopilación de artículos de revistas y periódicos
sobre trabajos de meteorología, fenómenos atmosféricos e investigaciones actuales so-
bre el tema.
Material de laboratorio de meteorología con: barómetros, higrómetros, pluviómetros
y materiales para el tratamiento de datos manual o automático.
Medios audiovisuales como: vídeos didácticos sobre fenómenos meteorológicos,
previamente seleccionados, relacionados con el tema.
EVALUACIÓN
Pruebas objetivas escritas de carácter teórico sobre los conceptos fundamentales re-
lacionados con el tema, valorando comprensión, memorización y aplicación de estos
conceptos a situaciones reales.
Valoración de las prácticas realizadas en el laboratorio y los trabajos de campo.
Pruebas de opción múltiple con preguntas de varias respuestas (3 falsas y 1 cierta)
que obligue al alumno al razonamiento de las situaciones planteadas.
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