0 Bewertungen0% fanden dieses Dokument nützlich (0 Abstimmungen)
9 Ansichten6 Seiten
Suset Sánchez. “Historias nómadas de un cuerpo híbrido y subversivo”. Revista Art.es, No.12-13, nov.-feb., Madrid, 2005-06, pp.38-44. Sobre la obra de Víctor Vázquez.
Originaltitel
Historias nómadas de un cuerpo híbrido y subversivo
Suset Sánchez. “Historias nómadas de un cuerpo híbrido y subversivo”. Revista Art.es, No.12-13, nov.-feb., Madrid, 2005-06, pp.38-44. Sobre la obra de Víctor Vázquez.
Suset Sánchez. “Historias nómadas de un cuerpo híbrido y subversivo”. Revista Art.es, No.12-13, nov.-feb., Madrid, 2005-06, pp.38-44. Sobre la obra de Víctor Vázquez.
PEP IEEy
art.es project #12: Tim ened (DVD inside)artes
Rellections
Dopo Dpch 8Oxb0em eu fear
Texas imagenes! Al nas: sane Un cro a cumra /senes 800908002008)
Fogate tas /tanbae pcgatia Ts
Historias nomadas de un cuerpo
hibrido y subversivo
(Eran vero tow)
(Cuerpo que trae cuerpo. Cuerpo que rechaza cuerpo.
Cuerpo que se desplaza, que ransita, que enajena,
Cuerpo que distibuye cuerpos, que sospecha, que contempie.
‘Cuerpos que se depostan, que se contolan, que se aoreden
CCuerpos que ibe cuerpos. que enajeran cuerpos. que se desconocen
Cuerpo que necesita everpos
(Cuerpos que desean cverpos, que cazan cuerpos, que araviesan cuerpos.
Vietor Vazquez
El arte producido en el Caribe esta plagado de imagenes alusivas a
fenémenos migratorios de diversa indole, tanto por sus motivaciones
Como por las circunstancias del viaje. Ese imaginario uidpico
asociado al desplazamiento geografico como signo caribefio
(obviamente, no reducido a ese espacio) es redimensionado en
Contextos insulares como Republica Dominicana, Haitl, Cuba 0
Puerto Rico, teniendo cada uno caracterisicas especifcas
eneradas a partir de condicionamientos historicos divergentes y
‘marcadas particularidades politcas.
Precisamente, Un cuerpo a cuerpo (dislocacién-encuentro-
desplazamiento), uno de los més recientes proyectos de Victor
‘Vazquez (producido en Paris), entronca con esa vocacion simbdlica
{que deconstruye los relatos escapistas que yacen tras la existencia
{dol sujeto que emigra. La metamorfosis del cuerpo de ese indivi,
transformado entonces en inmigrante", provocada porla adapiacién
de la memoria a un paisaje de batalas desconecidas, es anaizada
or este artista con la perspectiva minuciosa del crminalista, del que
Suset Sanchez
reconoce tras un elemental derecho humano la presencia
sospechosa de un “lito”
La pottica de Victor Vazquez, emperiada en desentrafiar las claves
‘dentiarias que envuelven al hombre segun sus nexos culturales,
religiosos, ideol6gicos y sentimentales, ora a través de metéforas
{que condensan e!repertorio dela fe, ora segun la vision simbdlica de
la historia, necesariamente no ha podido estar ajena a la condicén
Colonial puertoriquefia. Justamente, ese detalle que enreda la
historicidad insular en los repertorios espaciales impuestos por
Estados Unidos, cualifca la reflexién sobre las. migraciones:
realzada por un artista de Puerto Rico. La ambivalencia que en la
narracion de una historia propia implica el reconocer el dominio de
los Estados Unidos, desvela al mismo tiempo las ventajas
pragmaticas que en el terreno de un mundo glabalizado acarrea el
simple hecho burocratico de poseer un pasaporte norteamoricano.
Sin. embargo, la realidad excede los contratos sociales: el
puertorniqueno que emigra, no deja de ser latino, inruso, diferent.
La agonia pristina que para muchos constituye el hecho inicial de
trasponer fronteras, es redimersionada cuando se constata la
hipocresia colonial, pues no se poseen los mismos derechos porque
las marcas cutturales acrecientan as diferencias.
‘Aunque no se agote en la reflexion sobre el ser puertorriquefo, Un
Cuerpo a cuerpo plantea un didlogo intimo sobre el sentido de la
‘entidad en una nacion impregnada de una historia adversa. La
persistencia det estatuto colonial en el siglo XX| borinquefo,
Indiscutilemente mantiene reverberante un debate poitco sobre el
deber ser del cludadano puertorquef, y un incurso moral y ticoPoisec Poizner eotoem
‘Gunado a a resistencia. Sin embargo, estas fotografias de Vazquez,
‘que no desconocen el trauma insular historico, representan un
SSosegado sentimiento de tolerancia que pudiera llamar la atencién
ebro el reconocimiento cultural mutuo de quienes habitan un
‘espacio que no se restringe a un conficto de polaridades poliicas.
Dos cuerpos enfrentados, amén de ideologias, siguen siendo
puertoriquefios: seguramente, hay muchas cosas que unen a esos
feverpos, y tan solo unas pocas los separan. Por qué alimentar con
‘eldesencuentrola ragecia delanacion?
No obstante, circunserbir los alcances de un proyecto como Un
leverpo a cuerpo alos margenes de un discurso nacionalista,imitaria
ft signo universal de un fenémeno tan dramético como lrico. De
hecho, apelar a la construccion de una geografia humana en la que
ft cuerpo es la Unica trontera, el limite imperecedero, el margen
penetrable y ituminable, se convierte en una apologia heterotopica
{que entroniza la subversién de los discursos oficiales como légica
or excelencia. ustamente, los cambios que diatras dia se verifcan
fen las ciudades contemporéneas (resultado de la confluencia de
Jeuevos rostros, costumbres, tradiciones, modas, conductas... que
trae consigo la figura del inmigrante) dinartan el estado vegetatwo
ie las historias continentales de Occidente. La década de los
foventa ha sido el tesigo fie! y asombrado de las mutaciones
perfladas en las cudades europeas, a las que han llegado masas
Indefinibles de personas provenientes de Asia, Medio Orente,
Aitica, América Latina y Europa del Este. La presencia multicultural
de esas subjetividades esta deconstruyendo una historia
eurocéntrica fomentada a través del trayecto inverso que trazaron
los episodios coloniales sucedidos continuamento hasta l siglo XX.
Victor Vazquez explora el rostro mestizo que cada ver se deja ver
mas. por esas ciudades, buscando las huellas borrosas de
‘dentidades que se trastrocan en la multtud de transetntes que
deambulan por las plazas, ahora encontrados en un saludo, en otra
‘ocasién sospechando de la apariencia extrafa del otro, por el color
de su piel por el idioma ininteligibe. Sin embargo, esas caras van
perdiendo a ratos sus sefiales evidentes de identdad, los vestigios
dde una nacionalidad y de otras tantas construcciones limitrofes