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Perspectiva Humanista

Concepto
Esta teoría considera que el ser humano y sus motivos están determinado por las tendencias
a la autorrealización personal que se va dando a lo largo de la vida, donde se destaca la
libertad personal, la toma de decisiones y el desarrollo personal. La psicología humanista,
como otros movimientos, se desarrolló hacia los años 1960.

ORIGENES Y FUNDAMENTOS DEL HUMANISMO


 Los conceptos básicos de esta teoría son:
 Desarrollar la individualidad de las personas.
 Ayudar a los individuos a reconocerse como seres únicos.
 Ayudar a los educados a actualizar sus potenciales
 Tercera Fuerza (Psicología Humanista)
 Destacó la importancia del individuo y, especialmente, de la libertad personal:
libre albedrío, creatividad, espontaneidad.
 Se hizo hincapié en la experiencia consciente
 Se destaca todo lo relacionado con la naturaleza humana.

Principales Expositores
 Erick Ercikson

 Rogers

 Lawrence Kohlberg

 Abraham Maslow
Desarrollo Afectivo – adolescente

http://psicologiauce.blogspot.com/2010/09/desarrollo-afectivo-emocional.html

LA EMOTIVIDAD EN EL ADOLESCENTE.

La adolescencia es un PERIODO DE EMOTIVIDAD INTENSIFICADA. Emotividad


intensificada = Estado emocional por encima de lo normal, para una determinada
persona. Debe compararse la manera de reaccionar en un momento particular y la
normal o habitual.

La emotividad intensificada jamás permanece oculta, en los adolescentes se


manifiesta en cierta clase de conducta: depresión, hábitos nerviosos, gustos
melindrosos, peleas, estallidos emocionales, mecanismos de escape, etc.
La emotividad intensificada tiene más a menudo un origen ambiental y social. Existe
una necesidad de adaptarse a nuevas exigencias; en este periodo el adolescente
manifestar probablemente sentimientos de inseguridad e incertidumbre, que lo
predispondrán al exceso de emotividad.

El incremento de emotividad es característico sólo de uno o dos últimos años de la


infancia y del primero o de los dos años iniciales de la adolescencia; momento en
que es mayor el cambio evolutivo. Cuando el ritmo de desarrollo se hace más lento,
la emotividad intensificada deja de producirse en forma cotidiana. Ésta alcanza su
punto máximo entre los 11 y los 12 años.

Los adolescentes que se desvían notablemente de la norma (tiempo y ritmo) de


maduración sexual, son los que tienen más probabilidades de experimentar un
incremento perjudicial y prolongado de la emotividad. El aumento de emotividad es
más pronunciado en los muchachos que en las muchachas debido a que se espera
que resuelvan sus problemas con menos dirección.
Los adolescentes que en su infancia padecieron perturbaciones emocionales debido
a condiciones ambientales desfavorables, sobretodo relaciones deficientes con sus
padres, tienden a experimentar más emotividad intensificada.

CAUSAS QUE PREDISPONEN AL AUMENTO DE LA EMOTIVIDAD:


1. Adaptación a nuevos ambientes.
2. Expectativas sociales de un comportamiento más maduro.
3. Aspiraciones carentes de realismo.
4. Ajustes sociales relacionados al sexo opuesto.
5. Problemas escolares.
6. Problemas vocacionales.
7. Obstáculos para hacer lo que se quiere.
8. Relaciones familiares desfavorables.

PAUTAS EMOCIONALES COMUNES EN EL ADOLESCENTE.


Las emociones dominantes tienden a ser desagradables, principalmente el Temor y
la Ira. Las emociones placenteras son menos frecuentes y menos intensas;
sobretodo en los primeros años de la adolescencia.

MIEDO:
Pueden dividirse en 4 tipos los miedos durante la adolescencia:
+ Fenómenos naturales y objetos materiales.
+ Relaciones sociales (timidez y turbación).
+ Relacionados consigo mismo.
+ Lo desconocido.

Cuanto más importante es una cosa para una persona, mayores probabilidades hay
de que lo invada el temor si cree que va a perderla o que no podrá obtenerla.

La respuesta ante el miedo consiste en: rigidez del cuerpo y huida de la situación
que produce temor. Cuando el joven está asustado se pone rígido, tiembla y
transpira; si el temor es leve se ruboriza; si es más intenso, palidece.

PREOCUPACIÓN:
Forma de miedo que tiene su origen en causas imaginarias. Existe un elemento real
pero exagerado fuera de toda proporción. "El hecho temido puede suceder, pero
aún no se ha hecho presente". La preocupación es ESPECÍFICA. Varía en función del
sexo. Por lo general el adolescente que está preocupado habla y pide consejo, pues
la preocupación es más aceptable socialmente que el miedo.

La respuesta ante la preocupación consiste en: aspecto acosado; inquieto por algo
no presente, se desatiende de lo presente; da la impresión de mirar al vacío.

ANSIEDAD:
Forma del miedo; la amenaza que promueve el estado de ansiedad es más a menudo
imaginaria que real. Se distingue de la preocupación y del miedo en que es un
ESTADO EMOCIONAL GENERALIZADO Y NO ESPECÍFICO. Con frecuencia tiene su
origen en la repetición de diversas preocupaciones.

Pautas de conducta: infelicidad, desasosiego, depresión inexplicable, cambios de


humor, irritabilidad, insatisfacción consigo mismo y con los demás.

IRA:
Los factores que estimulan con más fuerza a la ira en la adolescencia tienen que ver
con la gente. Puede también presentarse como consecuencia de la interrupción de
actividades habituales (sueño, estudio), fracaso en actividades emprendidas y
proyectos frustrados.

La manifestación colérica depende del ambiente en el que el adolescente vive y se


desenvuelve, más que de su edad y sexo.

En los primeros años de la adolescencia son frecuentes los estallidos


temperamentales. El adolescente mayor se vale de ataques verbales en sustitución
de agresión física.

FRUSTRACIÓN:
Es una respuesta a la interferencia en la satisfacción de alguna necesidad. Puede
resultar de la privación que surge del medio o de la incapacidad del sujeto para
alcanzar un objetivo. Es acompañada de sentimientos de impotencia; esto da lugar
a una forma de ira leve o excesiva.

Las frustraciones más comunes se relacionan con: físico, salud, dinero, rasgos de
personalidad e incapacidad para lograr objetivos.

Reacciones comunes ante la frustración: 1) agresión: extrapunitiva o intrapunitiva;


2) retraimiento; 3) conducta constructiva o reexaminación de objetivos.

CELOS:
Aparecen cuando una persona se siente insegura o temerosa de que su posición en
el grupo, o en el afecto de alguien importante para ella está amenazada. El estímulo
siempre es social. Hay dos fuertes elementos emocionales en los celos: miedo e ira.
El gran valor que se atribuye a la aceptación social es fundamento de buena parte
de los celos.

Reacción: típicamente verbal; sarcasmo, alusión despreciativa de quien se percibe


como amenaza, así como comentarios despectivos respecto de las cualidades de
éste.

ENVIDIA:
Es similar a los celos porque se dirige a un individuo, pero difiere en que lo que
estimula la envidia no es el sujeto en sí, sino sus "posesiones materiales". Es
sinónimo de codicia.

Reacción verbal: menospreciar el valor de las posesiones ajenas o ridiculizarlas;


tratar de convencerse de que se está satisfecho con lo que posee. Puede conducir a
la acción: robo furtivo o trabajo.

CURIOSIDAD:
Fuente principal de nuevos intereses es su propia maduración sexual y la de sus
amigos. Por lo general el adolescente habla de las cosas que despiertan su curiosidad
y hace preguntas al respecto.

AFECTO:
Estado emocional placentero de intensidad relativamente leve; tierna afición a una
persona, animal (mascota) o a un objeto (raramente). Los afectos se estructuran a
través de asociaciones placenteras.

PESAR:
Emoción desagradable, con efectos perjudiciales tanto en lo físico como en lo
psicológico. Proviene de la pérdida de algo que es muy preciado y por lo cual el
individuo ha desarrollado un apego emocional en razón de llenar una importante
necesidad en su vida. Durante la adolescencia inicial es una de las principales causas
de infelicidad.

El pesar es una nueva emoción para el adolescente y debe aprender a hacerle frente,
ya que en su infancia tuvo mucha protección de sus padres. La mayor parte del pesar
en el adolescente tiene un origen social; por pérdida (muerte, divorcio; ruptura de
una relación). Puede asumir una forma leve y manifestarse como tristeza cuando no
puede alcanzar algo que es importante para él.
Pocos adolescentes muestran su pesar llorando en presencia de otros. Esta
inhibición genera muchas veces un estado general de apatía.

FELICIDAD:
Es algo generalizado más que específico. Estado de bienestar y satisfacción
placentera. Forma leve: euforia; forma más intensa: júbilo.

Causas de felicidad en la adolescencia:


+ Buena adaptación a una situación.
+ Sentimientos de superioridad.
+ Liberación de energía emocional reprimida.
+ Estado físico general.
Respuesta ante la felicidad: cuerpo y rostro revelan tranquilidad, la boca se curva en
una sonrisa; cuando la emoción es fuerte la sonrisa da lugar a la risa.

LA INESTABILIDAD EMOCIONAL:
Se describe como "un estado de ánimo fundamentalmente deprimido y
angustiado". Schenk-Danzinger opinan que los cambios de humor que se observan
principalmente en las muchachas púberes varían de unas a otras y tienen una causa
biológica: cambios endocrinos.

Otra explicación es la siguiente: la muchacha púber observa ciertos cambios en su


cuerpo y se vivencia a sí misma en una situación de tránsito de la infancia a la
adultez. Por la problemática de roles y la consiguiente inseguridad acerca de su
status futuro, la chica reacciona con inestabilidad; es decir, con una angustia general
y con cierta ansiedad.

Al comienzo de la adolescencia, por el riesgo de considerar todavía al joven como


niño o de imponerle, como si ya fuese un adulto, un rol que no es aún capaz de
cumplir (esta sobrecarga puede despertar en él vivencias de fracaso); puede
provocar un refuerzo de la inestabilidad emocional y una serie de crisis, dada la
inseguridad general respecto de los roles.

Se necesita una actitud de espera y una exigencia de rendimiento adecuado a las


energías y capacidad existentes; que aprovechen plenamente, por una parte, las
nuevas disponibilidades corporales y psicomotoras; pero que eviten, por otra, toda
carga y obligación que desborden las posibilidades del joven.

EFECTOS DE LAS EMOCIONES SOBRE LA ADAPTACIÓN ADOLESCENTE.


Toda experiencia acompañada de una emoción intensa puede ejercer una influencia
profunda sobre las actitudes, los valores y el comportamiento futuro del individuo.
Esta influencia puede ser favorable o desfavorable, dependiendo de la emoción
suscitada, de su intensidad, de la experiencia anterior con esa emoción y de la
preparación que se tenga para asumirla.

EFECTOS FAVORABLES:
+ Excitación y alivio.
+ Vigor físico y resistencia.
+ Motivación.

EFECTOS DESFAVORABLES:
+ Debilidad física.
+ Pérdida de eficacia.
+ Desajustes de la personalidad.
+ Hábitos emocionales.

EL CONTROL EMOCIONAL:
No significa represión ni eliminación. Significa aprender a encarar una situación con
una actitud racional, responder a ella con la mente tanto como con las emociones y
a obviar la interpretación de las situaciones de manera que susciten exageradas
reacciones emocionales. Además significa frenar el desborde o la expresión verbal
de las emociones.

Llegar a controlar las emociones es una indicación de madurez emocional. Sin


embargo, el solo mantenimiento bajo control de las emociones no es prueba de
madurez; las emociones deben ser controladas a modo de obtener la aprobación
social y, al mismo tiempo, de producir el menor daño posible, físico o psicológico, a
la persona misma.

No se exige al adolescente que controle sus emociones en todo momento o en todo


lugar; sino que aprenda cuándo puede expresarlas y cuándo debe controlarlas. Se
espera que el control emocional aumente con la edad; se espera y se permite que
los muchachos de todas las edades expresen sus emociones más abiertamente que
las muchachas, con excepción del miedo.

EL ADOLESCENTE Y SU MUNDO INTERNO.


Durante la adolescencia, el joven se preocupa y comienza a estudiarse a sí mismo;
medita acerca de su posición ante los que le rodean; examina en especial las
relaciones que le vinculan a las personas de su confianza.
Esta facultad de introspección y de análisis del entorno se ve robustecida con el
progreso intelectual; la calidad de estas funciones depende, en gran parte, del nivel
intelectual general, relacionado a su vez, con el tipo de educación escolar y con la
clase social a que el adolescente pertenece.

La índole y el grado de atención dirigida hacia sí mismo, así como del estudio de los
propios sentimientos, deseos, tendencias y pensamientos, se ven determinados,
fundamentalmente, por estos factores. La creciente preocupación por los propios
sentimientos y pensamientos despierta también la comprensión de los procesos y
problemas análogos que afectan a otras personas.

DUELO POR LA INFANCIA PERDIDA.


Los cambios que el adolescente percibe en su propio cuerpo durante la pubertad,
particularmente los referentes a los rasgos sexuales, atraen su atención con mayor
fijeza porque le anuncian que ha dejado atrás la infancia y que está en camino de
convertirse en adulto.

Se hace consciente de la incertidumbre de su status actual; tiene que ir modificando


su rol actual, abandonando las prácticas, intereses, conductas, etc., consideradas ya
como "de niño".

Algunos adolescentes presentan problemas para abandonar estos patrones de


conducta y de relación, y sufren por ello. Otros más se empeñan en aferrarse a los
mismos, por ejemplo: las muchachas que sufren ANOREXIA (se cree que es un
mecanismo utilizado para evitar crecer).

DESVINCULACIÓN DE LA FAMILIA Y DESEOS DE INDEPENDENCIA.

Al abandonar durante la pubertad el status de la infancia, se modifican también las


relaciones y actitudes del adolescente respecto de sus familiares. Se va
desprendiendo de la total sujeción que le había atado a sus padres, hasta entonces,
y aspira a la independencia y a la autodeterminación. Se caracteriza al mismo
tiempo, por una inseguridad respecto de los roles; por ello, busca nuevas
vinculaciones dentro de grupo de iguales. El debido cultivo de los roles adecuados
al estado de desarrollo acelera la desvinculación respecto de los padres.
Los deseos de independencia y la progresiva desvinculación respecto de los padres
y de la familia, constituyen la manifestación de un cambio de rol y de la búsqueda
de un nuevo status; se trata de la última fase de un proceso de desarrollo que se
inicia en la primera infancia, cuando el niño comienza a desprenderse de la
dependencia respecto de las personas que lo cuidan, y a aspirar a una formación
personal de experiencias, así como al cumplimiento de sus propios deseos y planes.

Son muchos padres que aceleran, involuntariamente, en sus hijos la desvinculación


respecto de la familia, así como el acercamiento descomedido a los iguales, cuando
creen que ya no pueden dirigirles acertadamente, o cuando se enfrentan con ánimo
intransigente a sus legítimas aspiraciones de autonomía.

Aquellos padres que se angustian porque quisieran y no logran ver a sus hijos libres
de todo riesgo, lo que consiguen en realidad es impedir una auténtica y sólida
vinculación o causarles daños irreparables al fomentar en ellos un comportamiento
GREGARIO, que los incapacita para tomar decisiones por sí mismos y llevar una vida
independiente.

Por otro lado, el conceder demasiada libertad comporta ciertos peligros, sobretodo
cuando falta una cariñosa comprensión: puede crear confusión y extravíos en la ya
difícil búsqueda de un ajuste con el mundo de los adultos.

La emancipación no sólo es deseable, sino también necesaria, incondicionalmente;


hay que apoyar este proceso, a tenor de las necesidades y posibilidades del
correspondiente nivel de edad, acompañada de una actitud fundamentalmente
comprensiva y afectuosa.

Por una parte existe una comprensión racional acerca de la necesidad de conceder
independencia al adolescente; por otra, se abrigan serios temores sobre la
capacidad o peligrosidad de su uso.

Es posible que el miedo a que se deteriore la relación afectiva desempeñe aquí un


importante papel, cuando los padres impiden, consciente o inconscientemente, que
los hijos "se liberen".

Las personas jóvenes se sienten constantemente en conflicto entre su deseo por ser
independientes de sus progenitores y el darse cuenta de la forma en que realmente
dependen de ellos. En su búsqueda de independencia, los adolescentes a menudo
rechazan los intentos de sus progenitores para guiarlos, consideran sus opiniones
como pasadas de moda e irrelevantes.

Además de los factores socioculturales, los factores educacionales (en especial la


actitud educativa de los padres), deciden si ha de haber profundos conflictos, un
proceso evolutivo crítico o un desarrollo libre de problemas, con una relación
renovada, pero estable, entre padres e hijos.

CRÍTICA A PADRES Y ADULTOS:


Durante la adolescencia surgen conflictos y divergencias de opiniones, máxime
respecto de aquellos sectores en los que el adolescente acumula nuevas
experiencias y en los que quisiera imponer sus sentimientos de autonomía. Aquí se
incluyen los problemas inherentes al comportamiento sexual, y a las relaciones con
el sexo contrario, aparte de las cuestiones referentes a la moda, a los contactos
sociales, a los problemas de la vida diaria.

Dubbe descubrió que son estos temas los que no se pueden discutir con los padres.
Cuanto más pronto adopten las personas encargadas de la educación de los
adolescentes una actitud fundamentalmente comprensiva y cariñosa; cuando mejor
están dispuestas a apoyar las aspiraciones naturales de los jóvenes a la
independencia y a evitar restricciones y prohibiciones innecesarias, tanto más
fácilmente lograrán que éstos últimos ocupen la posición a la cual tienen derecho,
sin chocar con sus familiares y profesores, y conservar los vínculos creados pero con
las debidas reformas y modificaciones.

Allport considera que sólo hasta más o menos los 23 años la mayor parte de las
personas puede entenderse con sus progenitores en una forma madura.

Mark Twain afirma: "Cuando yo tenía 14 años mi padre no sabía nada, pero cuando
tenía 21 me sorprendió cuánto había aprendido el viejo durante esos siete años".
Tratando de encontrar sus propios valores en una sociedad confusa, las personas
jóvenes se preocupan por la autenticidad de aquellos que observan como modelos.
Están prontos a acusar a sus progenitores y profesores de hipócritas cada vez que
se dan cuenta de cualquier incongruencia entre los ideales profesados y el
comportamiento real. Las primeras imágenes de sus progenitores como seres
perfectos y modelos omnisapientes, se derrumban y nunca más vuelven a aparecer.

Desde esa época en adelante, los progenitores son solamente personas como
cualquier otra. Pero debido a que una vez se les otorgó mucho más poder que a
cualquier otra persona, se producen derrumbamientos de modelos ideales y ello
llega a ser penoso.

Oscar Wilde en este sentido hace la siguiente afirmación. "Los niños comienzan por
amar a sus progenitores. Después de un tiempo los juzgan. Excepcionalmente, si es
que alguna vez sucede, llegan a perdonarlos".
CAMBIOS EN LA PERSONALIDAD.
Pocos adolescentes se sienten satisfechos con su personalidad. El deseo de mejorar
es casi obsesivo. El adolescente está insatisfecho consigo mismo tal como es; esta
insatisfacción alcanza su nivel máximo entre los 15 y los 16 años. Después se sienten
más complacidos con las mejoras.

"Cambio" y "Mejora" no son sinónimos. Cambiar significa alterar o variar y no


implica necesariamente que el cambio operado sea positivo. Mejorar significa
CAMBIAR PARA LO BENEFICIOSO. El adolescente anhela un cambio que implique una
mejora.

Los cambios pueden ser:


* Cuantitativos.- Debilitamiento o fortalecimiento de un rasgo ya existente.
* Cualitativos.- Un rasgo socialmente indeseable es eliminado del todo y se lo
reemplaza por otro deseable; o viceversa.

OBSTÁCULOS PARA LA MEJORA DE LA PERSONALIDAD.

Algunos son producto del propio individuo; otros están fuera de su control.

CREENCIAS TRADICIONALES:
El individuo "hereda" su personalidad; esto sofoca todo intento de cambio, pues
cree que nada puede hacer para producir una modificación. La personalidad cambia
en las épocas en que el cuerpo experimenta cambios extremos (adolescencia y
climaterio).

ESTEREOTIPOS DE PERSONALIDAD:
Ciertas características positivas o negativas se vinculan con grupos raciales,
religiosos u ocupacionales, con individuos de ambos sexos y con ciertos aspectos
físicos. El adolescente que admite estos estereotipos llega a pensar de sí mismo en
función de quien se vincula con su grupo, sexo o caracteres físicos; se supone que
son hereditarios y al aceptarlos admite que es imposible modificarlos.

PERSONALIDAD IDEAL:
Si el adolescente se adhiere a un ideal poco realista es probable que todo termine
en un gran desencanto y en la frustración. El núcleo del patrón de la personalidad
es el concepto que el individuo tiene de sí mismo como persona. El otro componente
son los rasgos específicos que caracterizan la forma típica del individuo de adaptarse
personal y socialmente.
En la adolescencia el patrón de personalidad es menos flexible pues el auto concepto
está bien formado y las cualidades y actitudes son más numerosas y estables. A
medida que el auto concepto adquiere mayor fijación, el adolescente se asigna un
rol vinculado con el mismo.

FACTORES QUE INFLUYEN EN EL AUTOCONCEPTO.

Éstos son:
ESTRUCTURA CORPORAL:
El adolescente sabe que su cuerpo (tamaño, adecuación al sexo y atractivo personal)
llama la atención de otras personas y afecta sus reacciones hacia él; esto a su vez
afecta su actitud hacia sí mismo.

DEFECTOS FÍSICOS:
El adolescente consciente de sí mismo piensa que cualquier defecto es notado por
todos y de que lo juzgan desfavorablemente por eso. Cuando un defecto significa un
impedimento, el efecto sobre el auto concepto es especialmente perjudicial (por
ejemplo: ceguera, sordera, invalidez). Las imperfecciones físicas de menor cuantía
pueden corregirse por lo general.

CONDICIÓN FÍSICA:
Un problema temporal o una condición más duradera influye en el auto concepto y
en la forma en que se adapte el adolescente a su forma de vida.

VESTIMENTA:
Las prendas de vestir son un símbolo de status.

NOMBRE Y APODO:
No es el nombre en sí el que influye en el auto concepto del adolescente, sino la
actitud de éste hacia el mismo; es decir, la manera de sentir del adolescente
respecto de su nombre o apodo.

INTELIGENCIA:
La inteligencia promedio o algo superior al promedio permite al adolescente
adaptarse con razonable éxito a la vida estudiantil. La inteligencia inferior al
promedio y la brillante, influyen también en el auto concepto.

NIVELES DE ASPIRACIÓN:
El nivel de aspiración influye mucho en su auto concepto y determina si se ve a sí
mismo como triunfador o como fracasado. Una ayuda educativa es incitar al
adolescente a hacer una evaluación realista de sus aptitudes y a establecer niveles
de aspiración razonables.

ESCUELA:

STATUS SOCIAL:
Popularidad, impopularidad. El status social es usado por los jóvenes para medir lo
que valen; por lo que una mejora de posición social tiene como consecuencia la
mejora del auto concepto.

INFLUENCIAS FAMILIARES:

AUTOACEPTACIÓN Y AUTORRECHAZO.
Ya que pocos adolescentes están satisfechos con su personalidad, a muchos les es
difícil agradarse y aceptarse.

La "auto aceptación" es el GRADO EN QUE UN INDIVIDUO DESPUÉS DE CONSIDERAR


SUS CARACTERÍSTICAS PERSONALES, PUEDE Y ESTÁ DISPUESTO A EXISTIR CON ELLAS
(Pannes). Debido a estas actitudes de auto aceptación la persona gusta de sí misma
y piensa que también otros hallan en ella cualidades agradables; hay entonces una
estabilidad en la manera positiva de considerarse (independientemente de la crítica
o elogio).

El individuo que se rechaza a sí mismo no se quiere. Tiende a despreciarse y a creer


que otros lo ven con hostilidad y menosprecio; no confía en sus propios
sentimientos y actitudes, y su auto concepto oscila de acuerdo con el trato que le
dan los demás.

EFECTOS DEL AUTORRECHAZO:


Sus adaptaciones personales y sociales resultan precarias.

EFECTOS DE LA AUTOACEPTACIÓN:
Buena adaptación. El adolescente bien adaptado disfruta de "armonía interior": Está
en paz consigo mismo y con los demás; es razonablemente feliz como es y se adapta
a la vida de conformidad. Esto no quiere decir que sea resignado o derrotista;
simplemente que es un individuo realista. Una de las principales razones de que el
joven se acepte aun cuando sepa que no es perfecto, es que lo demás lo aceptan.
NIVEL DE ADAPTACIÓN Y FELICIDAD:
La felicidad y la buena adaptación van de la mano. Además, como la buena
adaptación depende de la auto-aceptación, la felicidad sólo puede alcanzarse
cuando la persona está razonablemente satisfecha consigo misma. La infelicidad que
experimentan muchos adolescentes desaparecería si éstos tuviesen un concepto
más sano y más realista de sí mismos.

Los elementos esenciales de la felicidad son:


+ Aceptación de los demás.
+ Afecto.
+ Rendimiento.

¿EN QUÉ MEDIDA MEJORA LA PERSONALIDAD?:


Tiene que revisarse el patrón persistente de la personalidad y su relación con el nivel
de adaptación personal y social, y el grado en que el adolescente es "feliz".
CONDICIONES QUE LLEVAN A LA MEJORA DE LA PERSONALIDAD:
+ Mejora de la condición física.
+ Cambios ambientales.
+ Presiones sociales.
+ Visión de sí mismo.

CONDUCTA SOCIAL DEL ADOLESCENTE.


SIGNIFICADO DE LA SOCIALIZACIÓN:
La transición hacia la socialización adulta es difícil para los adolescentes porque las
pautas de comportamiento social aprendidas en la infancia ya no se adaptan a las
relaciones sociales maduras; tampoco los patrones de conducta social que los
adolescentes aprenden como parte de la conducta juvenil. La "socialización" es el
proceso de aprendizaje de la conformidad a las normas, hábitos y costumbres del
grupo.

Para determinar si un joven es social, asocial o antisocial debe juzgársele tanto


objetiva como subjetivamente. Objetivamente en función de su conducta, y
subjetivamente en función de sus sentimientos y actitudes.

Un adolescente social tiene las siguientes características: 1) conducta que se


conforma a las normas aprobadas por el grupo; 2) desempeño correcto de la función
social prescrita por el grupo; 3) actitudes sociales que lleven a la conducta aprobada;
4) satisfacción personal derivada de la conducta social.
El adolescente asocial: debido a su ignorancia de las expectativas sociales, no puede
adaptarse a los criterios de una persona social.
El adolescente antisocial: es consciente de las expectativas sociales, pero no se
conforma a ellas porque no lo desea.

Todo grupo cultural establece sus propias normas con sus propias pautas para
ayudar al adolescente a realizar la transición desde las actitudes y la conducta social
de la infancia a la de adultos.

El valor de la socialización no se limita a la felicidad y al auto concepto favorable;


influye en el grado de éxito que la persona logra en la vida.

La razón más importante para fomentar la socialización en el adolescente es que el


patrón de adaptación social establecido en la adolescencia quizá determine su nivel
de socialización para el resto de la vida.

DIFICULTADES QUE PRESENTA LA TRANSICIÓN SOCIAL:


- Bases deficientes.
- Falta de guía.
- Falta de modelos aptos para la imitación.
- Falta de motivación.
- Diferentes expectativas sociales.
- Nuevas clases de grupos sociales.

Los cambios de conducta social tienden a producirse con lentitud mientras el


adolescente estudia y vive con sus padres; esta transición se acelera normalmente
en la última etapa de la adolescencia.

La razón por la que necesitan tanto tiempo es que, si ha de conformarse a las


expectativas sociales y lograr la aceptación, debe modificar toda la estructura social
de su vida.

GRUPOS SOCIALES EN LA ADOLESCENCIA.


Tipos: social y antisocial. Amigos íntimos, grupos.

IMPORTANCIA DE LA CONDUCTA SOCIAL EN LA ADOLESCENCIA:


Un adolescente tiende a atribuirles gran importancia a las actitudes y opiniones de
otras personas, en especial a las que tienen su propia edad. La adolescencia es una
época de interés creciente y urgente por las personas del sexo opuesto.
Es una época en la que se buscan un papel social apropiado y relaciones sociales
satisfactorias que concuerden con los conceptos de sí mismo. Los adolescentes
entre ellos mismos, son más sensibles, más discernidores y más involucrados
personalmente con la otra persona; de hecho son más tiernos en sus relaciones
interpersonales.

El adolescente mira hacia su interior; comienza a considerarse a sí mismo como una


persona con un interés correspondiente por otras que lo impele a ver lo que son
como personas.

Los amigos íntimos representan el nuevo interés por otras personas como seres
humanos, a medida que el adolescente inicia el esfuerzo de interesarse
analíticamente por sí mismo como persona, y conforme trata de definirse a sí
mismo.

Los amigos le brindan una oportunidad para tratar y llegar a conocer bien a una
persona de su propia edad y sexo que se convierte, de hecho, en un laboratorio en
el que puede contemplar a los otros y ensayar en él (o ella) sus propias ideas y
percepciones. La influencia del grupo de coetáneos ofrece a cualquier cultura o
sistema educativo una poderosa arma para orientar a la juventud.

El grupo de coetáneos es bueno, porque a un adolescente le puede dar: seguridad,


una oportunidad de status, y una sensación de pertenecer a un grupo. Le permite
aprender algo sobre los derechos de otras personas entre sus iguales que se inclinan
a sus propios intereses y expresión de sí mismo. Le brinda al adolescente un refugio
del mundo adulto. Por último, el grupo de coetáneos actúa como una agencia de
control y un lugar para aprender.

El ser en verdad miembro de un grupo representa, por un lado la aceptación de los


miembros y, por el otro, un sentido emocional de pertenencia.

Los grupos de adolescentes pueden ser efímeros o pueden tener una larga vida con
gran vitalidad y continuidad de programa y actividad. Puede haber un sentimiento
interno considerable de "nosotros" y de unión de grupo, o puede que se carezca de
estas cualidades y parezca existir tan sólo para fomentar los esfuerzos individuales
de los miembros.

TIPOS DE GRUPOS SOCIALES EN LA ADOLESCENCIA:


* Los PARES (que abarcan agrupamientos íntimos como el de madre-hijo, marido y
mujer, una pareja de novios o dos amigos cercanos) pueden categorizarse como
unisexuales o heterosexuales.
* El GRUPO PRIMARIO, el más típico de todos los agrupamientos de adolescentes,
se caracteriza por una asociación cara a cara, números reducidos, propósito no
especializado, intimidad comparativa y permanencia relativa. Ejemplos: hogar,
grupo de juego espontáneo, etc.
* El GRUPO PRIMARIO AMPLIADO es un grupo organizado íntimo cara a cara,
limitado en cierto grado por un propósito especial y por el hecho de la organización.
Ejemplos: tropa de boy scouts, clubes, asociaciones universitarias, etc.
* Los GRUPOS SECUNDARIOS carecen de la intimidad y asociación, y por lo normal
de la mayoría de las otras características de los grupos primario y primario ampliado.
Ejemplos: muchedumbre, asambleas, comunidades, corporaciones, etc.

Cualquier individuo es simultáneamente miembro de muchos grupos diferentes con


diversos grados de importancia para él y en cada uno de ellos puede desempeñar
muchos papeles distintos. Pero para el adolescente, los grupos en verdad
importantes, psicológicamente, son los primeros tres, los grupos de asociación
personal más íntima y cara a cara que forman una parte funcional integral de su vida
cotidiana.

También pueden clasificarse a los grupos en términos de su función o hábitat, como


el grupo recreativo, grupo de muchachos mayores, etc. Una clasificación de uso más
común es la de: Pandilla y Camarilla.

Camarilla: Después de los 12 años es común este grupo. Es un grupo de pequeña


participación de asociados que interactúan íntimamente y que están de acuerdo con
la exclusión de otros de su grupo, y que poseen características similares de status
social y de intereses. Reúnen a niños que son similares en historial, habilidades,
valores y actitudes; suelen estar compuestos de individuos de la misma clase social.
La mayoría de las camarillas se componen de pequeños grupos formados por pares,
tríadas o sextetas que se mantienen unidas debido a las satisfacciones personales
que los miembros obtienen de la compañía mutua.

En el aspecto emocional las camarillas se caracterizan por la presencia de amistades


íntimas y buena voluntad para la asistencia mutua, y por la unión en presencia de
extraños.

CAMBIOS EN LAS ACTITUDES Y EN LA CONDUCTA SOCIAL.


La edad de maduración sexual determina en gran medida cuándo han de ocurrir las
modificaciones.
ACTIVIDADES HETEROSEXUALES:
El cambio más notable en la conducta social se da en el área de las relaciones
heterosexuales. Se olvida el antagonismo sexual infantil y se desarrolla un agudo
interés por miembros del sexo opuesto.

CONFORMIDAD CON EL GRUPO:


La conformidad se intensifica en la adolescencia, periodo en el cual los puntos de
vista sustentados por el grupo de igual edad, son de enorme importancia. Es más
manifiesta en la adolescencia inicial. Se expresa en variaciones de conducta, más
que en cambios de opinión: en la manera de vestir, en el uso del lenguaje aprobado
por el grupo, etc.

AFIRMACIÓN PERSONAL:
Cuando el adolescente adquiere mayor confianza en sí mismo se revela en él el
deseo de aprobación y de atención. Desea convertirse en un individuo por derecho
propio y alcanzar una posición en su grupo; descubre entonces que debe atraer la
atención del grupo hacia sí mismo.

RESISTENCIA A LA AUTORIDAD ADULTA:


Es una de las formas más comunes de que se valen los adolescentes para afirmar su
personalidad. Alcanza su índice máximo entre los 15 y los 17 años; después
comienza a disminuir.

AYUDA A LOS DEMÁS:


Su experiencia como miembros de un grupo determinado: (pandilla, camarilla, etc.)
les enseña que deben colaborar en él, como componentes del mismo.

PREJUICIO Y DISCRIMINACIÓN:
La discriminación social (snobismo o "prejuicio") es una actitud organizada y
estructurada de una manera definible y consistente; una actitud que ocasiona,
apoya o justifica la discriminación. Se compone de 3 elementos:
1. Creencia de que el que no pertenece al grupo o que difiere de algún modo, es
inferior; en tanto que los componentes del grupo son superiores.
2. Acompañamiento emocional que va desde la indiferencia hasta la hostilidad
manifiesta.
3. Convicciones acerca del trato que se debe dispensar a los individuos "inferiores".
Los adolescentes "prejuiciosos" lo manifiestan mediante denuncias rudas y
despiadadas contra quienes consideran sus "inferiores"; intencionalmente crueles.
Esto interfiere en el desarrollo de actitudes sanas hacia sí mismos y hacia los demás.
El efecto del prejuicio sobre el adolescente contra el cual se dirige es igualmente
perjudicial. Como ha sido objeto de discriminación desde la primera infancia, tiene
muchas actitudes desfavorables hacia sí mismo y hacia los integrantes del grupo
discriminativo cuando llega a la adolescencia, además de que puede llegar a sentirse
avergonzado de su propio grupo y a despreciarlo.

COMPETENCIA SOCIAL:
Significa la facilidad para tratar con personas y para actuar en situaciones sociales.
Para ser socialmente competente, el adolescente debe conocer las pautas de
conducta aprobadas para distintas circunstancias sociales y la manera de
ejecutarlas. Las aptitudes sociales se adquieren tras experiencias en todo tipo de
situaciones sociales y por la práctica durante un largo periodo.

Para desarrollar la competencia social, el adolescente necesita:


1. Una guía en el hogar y en la escuela.
2. Oportunidades para poner en práctica lo aprendido.

La competencia social confiere al joven equilibrio y confianza en sí mismo.


Desarrollo afectivo – juventud

El adulto joven comienza a superar el egocentrismo de la etapa anterior y logra colocarse


en el lugar del otro, compartir experiencias y comportarse de una manera altruista, que le
permite establecer una relación de pareja responsable y asumir una posible paternidad.
Al encontrar su identidad permite la fusión con otro, ya sea laboral o afectivamente ya
posee la capacidad de adaptarse y de afiliarse.
Walster plantea que pueden existir en las parejas dos tipos de amor:
Apasionado: Se caracteriza por una confusión de estados emocionales, hay ternura, pasión
y alegría, sin embargo, genera mucha ansiedad y dependiendo de la estructura de
personalidad se manifiestan sentimientos. Es característico de la juventud.
Compartido: Es un amor más profundo, donde hay compromiso, se comparte, se toman
decisiones en conjunto con el otro en cuanto a la relación afectiva y existe conciencia de la
relación afectiva que se tiene.
Se espera que en el adulto joven temprano desarrolle un amor compartido, donde se sabe
administrar la relación de pareja.
Alrededor de los 30 años hay un cuestionamiento de la vida pasada, de la elección de pareja,
de la carrera, se hacen nuevas elecciones y profundizan o se cambian compromisos. El
adulto siente la necesidad urgente de dar un carácter real y comprometido a su vida con el
objeto de lograr la estabilidad, por lo tanto, reconstruye y reorganiza. Luego de esta
transición se establece con la familia, el hogar y logra un sentido de pertenencia y llega a
ser un miembro valorado por la sociedad.
http://la-juventuuud.blogspot.com/2016/03/cambios-emocionales-en-la-juventud.html

Desarrollo Afectivo – Adulto


En esta etapa de la vida el adulto se replantea frente a lo vivido. Los posibles cambios que
debe de enfrentar pueden afectar el matrimonio y la estructura familiar. Es una etapa
importante en la que la relación con los hijos, los padres y de pareja deben de considerarse.
Los hijos tratan de diferenciarse de los padres, comienzan a polarizarse y eso será difícil
cuando el rol parental es rígido y no evoluciona. La madre debe aceptar el desarrollo de sus
hijos hacia la individualidad y establecer una relación más distante y apoyador. Esta relación
se dificulta cuando la mujer ha formado su propia identidad en términos de su rol maternal.
La mujer debe de redefinir su autoestima en función de los logros que los hijos alcanzan en
esta etapa.
En su mayoría las mujeres, en la mediana edad se vuelven más asertivas y orientadas al
logro, la autoestima se centra en el trabajo y en el sentido de productividad.
Los adultos medios con sus padres alcanzan una mayor cercanía, ya que la brecha
generacional no es tan notoria, a su vez experimentan un deterioro físico y viven la
incertidumbre por el futuro y la vejez, al mismo tiempo se produce un sentimiento de
superioridad debido a que sus padres se ven débiles, hay preocupación por la vulnerabilidad
que ellos presentan frente a las enfermedades y al mayor riesgo de muerte.
Ocurre un cambio de roles, transformándose también, además de cuidar a sus hijos, en
cuidadores de sus propios padres.
En la adultez temprana hay una perdida de la intimidad en la pareja, sin embargo en la
adultez media al tener hijos adolescentes se produce un reencuentro, redefiniéndose como
pareja en función de logros obtenidos.
Las personas en los 40 años tienden a pensar que el futuro es infinito mientras que en los
50 empiezan a pensar, más bien, en el tiempo que les queda por vivir y en lo inevitable de
su propia muerte, lo que a muchos los lleva a empezar a estructurar sus vidas en términos
de prioridades.

Desarrollo Afectivo – Adulto Mayor


Los cambios emocionales o psicológicos que sufren las personas adultas mayores, se deben
a varios factores como pudieran ser, falta de aceptación personal de los cambios físicos , e
integrarlos como una nueva forma de vivir con ellos influyendo de alguna manera en el
estado de animo.
El adulto mayo requiere de cuidados especializados y lo mas importante, la necesidad de
un cambio de actitud hacia el por parte del todo el personal que lo asiste y de la sociedad
en conjunto.

 La necesidad que tiene el anciano de cuidados especializados y lo mas importante,


la necesidad de un cambio de actitud hacia el por parte de todo el personal que lo
asiste y de la sociedad en conjunto.
 Los sentimientos y las emociones conforman la afectividad como importante cambio
psicológico
 La vida afectiva del adulto mayor se caracteriza por un aumento de las perdidas.
- Perdida de la autonomía (valerse por sí mismo, hacer lo que desea)
- Perdidas referidas a la jubilación.
- Muerte del cónyuge y de seres queridos
 Se incrementa el manejo adecuado de los afectos y que, por tanto, exista una mayor
“madurez” afectiva.
 El balance para un bienestar es la teoría de lo socio-emocional
 Obstinación asumida como una autodefensa
 Ambivalencia entre el deseo de ser autosuficiente y la necesidad de ayuda
Desarrollo social

 Cumplimiento de roles familiares (principalmente el de abuelos)


 Necesidad de adaptación al proceso de jubilación
 Con el paso de los años el organismo va perdiendo ciertas condiciones propicias para
la actividad sexual
 Disminución de la actividad hormonal, aumento de la menopausia femenina y
andropausia masculina
 Establecer rutinas, planes y estilo de vida satisfactorios para el adulto mayor
 Adaptarse a la posibilidad de la muerte conyugal
 Afrontar la idea de la propia muerte
 Necesidad de interacción social que se satisface mediante una afiliación explicita
con el grupo de edad afín
https://es.slideshare.net/walitrondokeos/desarrollo-cognitivo-social-emocional-y-
moral?next_slideshow=1

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