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Historia de la aerografía
La aerografía tiene más de 35.000 años, debido al descubrimiento en Francia de las
cuevas de Lascaux y Pech Merle, las que contienen en sus paredes siluetas de manos
logradas por rociar pintura soplando a través de un tubo hecho de hueso. Si bien a lo
largo de la historia se han observado algunos trabajos realizados con esta técnica, es a
partir de fines del siglo XIX que alcanzaría una promesa cierta.
En 1926, un retrato nos muestra a Stalin con tres de sus colegas que, poco a poco en el
tiempo, fueron literalmente desaparecidos de la imagen, hasta dejar únicamente al
dictador. Así, para ellos el uso del aerógrafo era, de alguna forma, un modo de saber
quién sería eliminado por los intereses del poder.
Hasta los años treinta el aerógrafo no avanzó de manera significativa en sus aplicaciones
gráficas, cambiando en el transcurso de esta década debido a dos acontecimientos
principalmente; por un lado la Bauhaus con una base matemática más que puramente
imaginativa, introdujo el aerógrafo entre sus técnicas.
imágenes de Marilyn Monroe, el bote de la sopa Campbell´s ambas de Andy Warhol, las
viñetas de comic ampliadas de Lichtenstein, los estilizados desnudos de Wesselmann,
etc.
.La aceptación tanto del Pop Art como del Hiperrrealismo como de las técnicas utilizadas
para la realización de sus obras abría definitivamente las puertas de las Bellas Artes al
aerógrafo. Desde entonces, el aerógrafo ha demostrado ser una herramienta muy
versátil en manos expertas, como una extensión de la mano del artista. En la era del
ordenador, el aerógrafo definitivamente ha entrado por las puertas de Bellas Artes, de
hecho, todavía puede aportar muchísimo al arte ya que con él se pueden conseguir
luces, efectos de humo, vapor, sombras sutiles, hermosas mezclas de colores y conseguir
infinidad de texturas y efectos.
Es un instrumento que permite al artista expresar sus sentimientos con plena potencia.
Una vez dicho esto, podríamos dar un breve repaso a la obra de dos artistas
contemporáneos, que constituyen buenos ejemplos de la versatilidad del aerógrafo
aplicado al arte. Norman Catherine es un artista sudafricano cuya obra contiene
comentarios políticos explícitos. Utiliza el aerógrafo en primer lugar para dar a toda la
obra una pátina o brillo extraño y para aportar una claridad decidida, que resulta más
llamativa por su carácter directo y la ausencia de distracciones.
Wunderlich y Catherine son dos artistas que han utilizado el aerógrafo para lograr
determinadas calidades en sus obras. Es posible que estos artistas, junto con otros como
Sedgley, Phillips y John Clem Clarke, encabecen el movimiento definitivo de la
penetración del aerógrafo en el arte. Finalmente se ha liberado de su tradición, como
instrumento de arte comercial o como símbolo de rebelión, hasta llegar a usarse como
un instrumento más entre todos los que el artista puede utilizar, para crear nuevos
efectos y ampliar el vocabulario artístico. Esto es precisamente lo que hacía Burdick en
Nombre: Ariana Ramon Vera
Curso: 3 “A” Diseño gráfico
1890, pero se han tardado muchos años en aceptar un instrumento que nunca debió
haber provocado dudas.
Al día de hoy podríamos citar alrededor de unos cientos de marcas de ellos pero hace
veinte años se reducían a simplemente 3 Un dato histórico curioso es que durante la
época de Stalin en Rusia las fotografías eran sutilmente censuradas gracias a este objeto.
Los fotógrafos perfeccionaron su método a todos los niveles.
La aerografía es una técnica de pintura, por lo que no nos resolverá problemas de dibujo
pero sí puede corregir algunos inconvenientes con el color.
Que es la aerografía
La aerografía es una técnica pictórica, método por el cual aplica
color que consiste en pulverizar pintura sobre una superficie,
plana o tridimensional, Dos son las herramientas fundamentales
para ser utilizadas en esta actividad. Para realizar esta técnica se
necesita de mucha creatividad y un aerógrafo.