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TRATANDO EL AUTORRETRATO
Las vanguardias artísticas del sXX han corrido los límites del arte y sus modos de
representación. La cuestión de la fidelidad mimética dejó de ser esencial en el arte, por lo que
el género del autorretrato también dejó de responder al mismo mandato. El arte objetual
logró un quiebre significativo, en el que la presentación (y no la representación) de objetos
entran en las dimensiones de la expresión artística. Si bien las rupturas de la vanguardia
declararon su autonomía y han abierto el campo artístico abismalmente seguimos
encontrándonos con la idea que en un autorretrato deberíamos encontrar autorrepresentado
al artista - o al menos que el título indicativo que referencie al género, es decir, que la obra se
llame Autorretrato, para validarlo como tal.
Es necesario hacer una revisión en lo que respecta a este género en el arte contemporáneo. El
arte de archivo- clasificación y numeración de objetos bajo un criterio-, o el atlas-
presentación de objetos sin nexo explícito- son recursos que han sido utilizados en el arte
contemporáneo.
La investigación que propongo en este momento instaura una relación horizontal entre
universos artísticos absolutamente distintos. Arthur Bispo do Rosario creó la mayor parte de su
obra internado en un asilo psiquiátrico Rio de Janeiro desde 1938 a 1989, y esta consiste de un
extenso archivo del mundo que le había sido encomendado por Dios. La obra de On Kawara
registra sus actividades diarias, movimientos y encuentros desde 1968 a 1977. Mientras que
Sol Lewitt desarrolla su Autobiografía en 1.101 fotos que el artista tomó de cada uno de los
objetos de su vivienda en Nueva York, y que publica en un libro en 1980.
¿Pueden ser autorretratos sin ser retratos de sí mismos? ¿Pueden una serie de objetos y/o
documentos hablar de lo que somos? ¿Cuáles son los límites del autorretrato? ¿Pueden ser
autorretratos sin llevar ese nombre como título?¿Qué sucede con la autorreferencialidad?
La práctica del autorretrato es el género por excelencia del yo. En el sentido tradicional y
clásico de la historia del arte, podríamos entender al autorretrato como la representación
exacta de los atributos físicos o morales del autor real en la obra, a través de los métodos
tradicionales como la pintura, el dibujo y la escultura.
" partiremos de la base de que el retrato es la imagen de una persona, hecha por cualquier
procedimiento, que de alguna manera establece relación de reconocimiento entre el modelo y
la obra, dentro de las condiciones apuntadas en el sentido corriente de realismo, pero también
en otros muchos que se alejan profundamente, siempre que persista al menos la intención de
mantener mutua dependencia. El autorretrato hay que considerarlo dentro de este concepto,
con la diferencia de que en el retrato la acción es transitiva: hay un sujeto (artista), alguien que
la recibe (modelo) y un complemento directo (obra), mientras que el autorretrato equivale a
una oración reflexiva porque la recibe el mismo sujeto que actúa y se identifican artista y
modelo. Por esto se añade a "retrato" el prefijo griego auto en las lenguas latinas, y self en las
germánicas, indicativas de esa reflexividad básica."
Antes del surgimiento de las técnicas fotográficas, la única forma de captar la imagen de una
persona para inmortalizarla era a través de una creación artística, y en el caso del autorretrato
era pintarse de frente a un espejo. Durante largos períodos en la historia del arte el receptor
de la obra también resultaba ser el mismo artista, ya que los autorretratos no eran realizados
para ser vistos, consumidos y/o exhibidos por otro sino para sí mismos. Modelo, artista y
receptor de la obra se unifican en una sola persona. Es recién en el arte moderno y
contemporáneo que un artista empieza a pensar su autorretrato más allá de su uso personal y
estas obras pueden ser parte del mercado del arte.
Desde finales de la década de los sesenta se puede evidenciar una tendencia de las prácticas
artisticas hacia el «archivo». El arte de archivo encuentra como destino reunir documentación
-usando estrategias como almacenar, clasificar, numerar, catalogar, registrar- en torno a uno o
varios parámetros. El archivo unifica una configuración de documentación u objetos,
predetermina un corpus de su selección y recorta de manera sistemática.
Por otro lado, lo que se entiende como Atlas, se despega del concepto de Archivo(* de aquí en
adelante cada vez que se hable de Archivo referiremos a la práctica artistica del archivo). El
Atlas propone una cartografía regida por criterios propios, siempre abiertos. A menudo
rayando en obsesiones personales, abierto ampliaciones de criterios o contenidos. Es una red
abierta de relaciones cruzadas, nunca cerrado o definitivo, siempre ampliable a la
incorporación de nuevos datos o al descubrimiento de nuevos territorios. El Atlas es por
definición Work in Progress, un proceso infinito. Está lejos de basarse en conceptualidades o
jerarquías, sino que se basan en asociaciones inconscientes, difíciles de determinar apriori.
Sin embargo y a pesar de sus diferencias, tanto en el archivo como en el Atlas los documentos
y objetos incorporados poco tienen de tautológico. Por el contrario, son de corte
mnemotécnico, evocan recuerdos y asociaciones, que permiten enunciaciones, relaciones de
sentido. Esto evidencia la posibilidad de lecturas inagotables. Tanto los Achivos como los Atlas
están abiertos a la posibilidad de una nueva opción que los seleccione y los recombine para
crear una narración diferente, un nuevo corpus y un nuevo significado dentro del
espacio/tiempo dado.
¿Qué es una obra? Hay que publicar todo, ciertamente, pero ¿qué quiere decir este "todo"?
Todo lo que el propio Nietzsche publicó, de acuerdo ¿Los borradores de sus obras?
Ciertamente. ¿Los proyectos de aforismos? Sí, ¿también los tachones, las notas al pie de los
cuadernos? Sí. Pero [...] una cuenta de la lavandería, ¿es obra o no es obra?¿Y por qué no?
MICHEL FOUCAULT
Cuando nos acercamos a la obra de Arthur Bispo do Rosario, es difícil disociar su figura, su
personalidad, su vida , de su obra. No podemos dejar de pensar en cómo habrá sido aquella
persona que dedicó su tiempo de encierro para la creación artística. Es su condición de
existencia la que resulta en una obra totalmente diversa y rica.
En palabras de Antonin Artaud "el artista sobrevive donde el loco naufraga". Arthur Bispo do
Rosario creó la mayor parte de su obra durante los 50 años que siguieron a su internación en el
asilo de Colônia Juliano Moreira, cerca de Rio de Janeiro, en 1938. Sus trabajos expresan la
forma en la que experimentaba el universo, mezclando elementos autobiográficos y objetos,
Si bien todas sus obras reúnen información entorno de su vida personal, ninguna tiene una
carga emocional, o dramática, ni siquiera cuenta una historia en una lógica de narrativa
personal. Apelan desde sus nombres a la autorrepresentación. Los criterios de archivos son su
vida personal, pero estos archivos pocos nos cuentan de su persona, de su vida humana. Son
un archivo que intenta ser objetivo, que si
bien el contenido puede ser considerado
autobiográfico, hace más énfasis en la
estructura que da forma a ese contenido.
Es decir, que si bien esta obra podría ser
considerada un autorretrato y un archivo,
es más archivo que autorretrato, lo que
permite trasladar estas estructuras a otras
configuraciones de sentido, a nuestra vida
personal (si es que vivíamos en aquellos años), a los territorios cartografiados (los espacios
comunes visitados), a la historia y los acontecimientos conocidos que sucedieron en aquellos
años. Además, nos genera la intriga de cómo habrán sido los días de ese artista, que planteó
sobre si mismo una estructura, motivos sistemáticos para archivar datos precisos de su vida
diaria y rutinaria.
La antonomasia del yo, como una serie de objetos puede hablar de lo que somos
El índice, los sistemas modulares, la fotografía objetiva, la colección, las series, la acumulación,
la secuencialidad, la repetición, resultan de un interés por el arte de la memoria, tanto la
memoria individual como la memora cultural o la memoria histórica, dibujan siluetas en lo
abierto.
Bibliografía:
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