Sie sind auf Seite 1von 32

DERECHO ADMINISTRATIVO

SISTEMAS DE INGRESO AL SERVICIO CIVIL


Significa que cualquier ciudadano puede ingresar a la carrera administrativa.
Ingreso por selección: Sistema por el cual se ingresa al servicio civil a través de
examen Solo ingresan las que ganan el examen de oposición.
Ingreso mixto: Todos los ciudadanos tienen derecho a ingresar al servicio civil
siempre y cuando demuestren sus capacidades para el ejercicio del cargo
mediante el examen por oposición, que comprueben capacidades técnicas para
desempeñar el puesto y así poder ingresar. Este sistema es el que adopta
Guatemala, Artículo 113 de la Constitución de la República de Guatemala. De
conformidad con la Constitución Política de la República, ésta garantiza que los
guatemaltecos tienen derecho a optar a empleos o cargos públicos y para su
otorgamiento no se atenderá más por razones fundadas en méritos de capacidad,
idoneidad y honradez.
Momento crucial para el desarrollo de este sector fue la prohibición de importación
de carne sudamericana decretada por Estados Unidos en los años sesenta debido
a la fiebre aftosa. Esta enfermedad no afectó a Guatemala y los productores
ganaderos conquistaron un mercado que aún mantienen. El sistema tradicional de
explotación ganadera es el extensivo, y su exportación se realiza a través de
Puerto Barrios y del aeropuerto de la capital. Otros sectores ganaderos relevantes
en la economía guatemalteca...
Existen varios sistemas para el ingreso al servicio civil, éstos pueden ser: a)
Ingreso libre: es aquel sistema en el que cualquier guatemalteco puede entrar al
servicio civil; b) Ingreso por selección: es el sistema por el cual ingresan al servicio
civil personas con capacidad suficiente, la cual debe ser demostrada a través de
un examen de oposición; e c) Ingreso mixto: es el sistema en el cual pueden
ingresar al servicio civil todos los ciudadanos guatemaltecos, siempre y cuando
demuestren su capacidad, preparación, eficiencia para el ejercicio de un cargo, a
través de un examen. Este sistema es el utilizado en Guatemala, de conformidad
con el Artículo 113 de la Constitución Política de la República de Guatemala y
Artículo 3 de la Ley de Servicio Civil, Decreto número 1748 del Congreso de la
República de Guatemala. La Ley de Servicio Civil establece las siguiente
condiciones para ingresar al servicio por oposición: poseer aptitud moral,
intelectual y física propias para el desempeño de un puesto; 2) Satisfacer los
requisitos mínimos especiales que establezca el manual de especificaciones de
clase para el puesto de que se trate; 3) Demostrar idoneidad 8 sometiéndose a las
pruebas, exámenes o concursos que establezca esta ley y sus reglamentos; 4)
Ser escogido y nombrado por la autoridad nominadora de la nómina de candidatos
certificada por la Oficina Nacional de Servicio Civil; 5) Finalizar satisfactoriamente
el período de prueba; 6) Llenar los demás requisitos que establezcan los
reglamentos de esta ley”. Esta a cargo de la Oficina Nacional de Servicio Civil
(ONSEC) la organización, convocatoria, dirección y ejecución de las pruebas para
el ingreso y ascenso, las cuales deben ser de libre oposición y tienen por objeto
determinar la capacidad, aptitud y habilidad de los candidatos. Pueden ser orales,
escritas, físicas o una combinación de éstas. De acuerdo a los procedimientos
normados, la convocatoria para la selección de servidores públicos bajo el
“servicio por oposición”, debe hacerse con quince días de anticipación a la fecha
señalada por la Oficina Nacional de Servicio Civil para la realización de los
exámenes, por los medios que considere más apropiados. En todo caso, el aviso
se debe publicar en el Diario Oficial y en otro de los de mayor circulación en el
país. La convocatoria debe indicar los deberes y atribuciones del puesto, los
requisitos deseables o exigibles, la forma de hacer la solicitud de admisión y la
fecha, lugar y hora de celebración del examen. Para ser declarado elegible, el
candidato debe obtener una calificación mínima de 75 puntos, en la escala de 1 a
100. Dentro de los candidatos declarados elegibles, gozan 9 de puntos de
preferencia, quienes en igualdad de circunstancias, sean ex-servidores públicos o
tengan mayores cargas familiares. A partir de la fecha en que se han realizados
los exámenes de ingreso, la Oficina dispone de 60 días máximo para la
calificación de los mismos y el establecimiento de los registros respectivos. A cada
candidato examinado se le notifica la calificación que obtuvo, y en su caso se le
indica el lugar que ocupa dentro de la lista de candidatos elegibles. Dentro de los
30 días siguientes a la notificación de los resultados de las pruebas de ingreso, el
candidato examinado, puede solicitar al Director de la Oficina Nacional de Servicio
Civil la rectificación de cualquier error en sus calificaciones. Las personas que se
consideren perjudicadas por una decisión del Director en lo que se refiere a la
admisión y calificación de pruebas, podrán apelar ante la Junta Nacional de
Servicio Civil dentro de los tres días de notificada la decisión, para que se revise la
resolución. La decisión de la junta será definitiva. Cuando la autoridad nominadora
de la entidad estatal correspondiente desee llenar cualquier vacante debe requerir
a la Oficina Nacional de Servicio Civil (ONSEC), una nómina de todos los
candidatos elegibles. La autoridad nominadora dentro de los ocho días de recibida
la nómina, debe escoger al nuevo servidor público, comunicándolo al Director de
la Oficina Nacional de Servicio Civil y a la persona seleccionada, para proceder a
realizar su nombramiento. 10 Un aspecto importante de este procedimiento es que
cada autoridad nominadora al ocurrir una vacante, requerirá a ONSEC la lista de
candidatos elegibles, y de ésta, la autoridad nominadora debe seleccionar a la
persona idónea dentro del período que establezca el reglamento respectivo,
comunicándolo al Director de la ONSEC y la persona seleccionada. El
procedimiento que se está utilizando actualmente para los nombramientos es el
siguiente: el candidato se presenta a la dependencia que necesita sus servicios, la
dependencia inmediata superior evalúa el requerimiento y lo traslada a la oficina
de personal interna, quien evalúa el expediente y lo traslada a la ONSEC,
incluyendo varios candidatos para seleccionar, si los hubiera; la Oficina Nacional
de Servicio Civil procede a hacer los exámenes correspondientes y emite
certificación declarando la elegibilidad de los candidatos, enviándola para el efecto
a la oficina de personal con los resultados de la evaluación y sobre estos
candidatos puede la entidad nominadora hacer el nombramiento.

DESIGNACION DE FUNCIONARIOS

Existen diversas maneras a través de las cuales se accede a los cargos públicos,
entre ellas: vía elección popular en los sistemas democráticos, el ciudadano, elige
a través del voto a quienes quiere que sean sus representantes y por ende que
ocupen tales o cuales cargos públicos; por designación o nombramiento de una
autoridad; y por concurso público, es decir, hay algunos cargos públicos que serán
ocupados por individuos que previamente hayan ganado un concurso especial,
entre otros.

Al funcionario, a diferencia de lo que ocurre con otro trabajador que se desempeña


en la actividad privada, se le suele exigir mucho más en cuestiones como ser: la
dedicación que le da a su actividad, el cumplimiento de la cantidad horas de
trabajo estipuladas y la honestidad con la cual actúa, porque somos los
contribuyentes quienes con el pago de nuestros impuestos pagamos sus sueldos.

Entonces es justamente por ello, por esa circunstancia que somos los habitantes
quienes proveemos dinero para pagar sus honorarios, que siempre el ojo, el foco,
se coloca sobre el accionar de los funcionarios públicos y estallan sonados
escándalos si se comprueba que un funcionario de peso ha incurrido en alguna
falta grave durante el desarrollo de su función pública, por ejemplo malversación
de fondos públicos, cobro de coimas, entre los casos más corrientes.

Lamentablemente, el acceso a cargos públicos está mayormente vinculado al


“amiguismo”, es decir, alguien que ocupa un espacio de poder suele nombrar en
puestos públicos claves a personas de su extrema confianza, amigos, familiares,
entre otros, y que normalmente no disponen ni de experiencia ni de las cualidades
profesionales que requiere ese cargo.
Y como si ya no fuese una barbaridad que alguien que no está debidamente
capacitado ejerza un trabajo de este tipo, estos trabajadores públicos suelen
cobrar altísimos salarios que se pagan a través del dinero que el estado recauda
por pago de impuestos y gozan de tremendos beneficios.

CLASES DE FUNCIONARIOS
1. Funcionarios de carrera

Son funcionarios los que han superado un proceso selectivo de oposición,


disponen de un nombramiento en el que se reconoce dicha condición -es decir,
han conseguido una plaza fija- y trabajan para la Administración Pública.

Los funcionarios de carrera realizan funciones de carácter permanente y están


vinculados a la Administración Pública. Dependiendo de la titulación requerida
para el acceso a la Administración Pública, estos funcionarios se adscriben a los
grupos de empleados públicos siguientes:

o Grupo A: Dividido, a su vez, en los Subgrupos A1 y A2. Todos ellos cuentan con
un título universitario de Licenciatura o Grado.
o Grupo B: Los funcionarios adscritos a este grupo cuentan con un título de Técnico
Superior
o Grupo C:
o Subgrupo C1: Título de Bachiller o Técnico
o Subgrupo C2: Título de Graduado en Educación Secundaria Obligatoria

2. Funcionarios internos

En ocasiones ocurre que, después de aprobar una oposición, el candidato no


consigue plaza fija en su especialidad. ¿Significa esto que nunca podrá trabajar en
la Administración Pública? En absoluto.

Los funcionarios interinos son aquellos funcionarios que desempeñan las tareas
propias de los funcionarios de carreras en determinadas circunstancias
excepcionales, pero no como norma general. Los funcionarios interinos sustituyen
a los anteriores por un plazo máximo de 6 meses dentro de un periodo de 12.
exceso o acumulación de tareas. El sistema de acceso público que han superado
suele realizarse por medio de una bolsa de trabajo para funcionarios o, como
ya hemos adelantado, cuando han aprobado las oposiciones sin obtener plaza fija.

3. Personal laboral
Es personal laboral el que en virtud de un contrato de trabajo, en cualquiera de las
modalidades de contratación de personal previstas en la legislación laboral, presta
servicios retribuidos por las Administraciones Públicas. Este tipo de empleado
público puede trabajar con tres modalidades distintas de contratación:

o Contrato temporal
o Contrato indefinido
o Contrato público

4. Personal eventual

Son aquellos empleados públicos que se nombran libremente en régimen no


permanente.

LA CARRERA ADMINISTRATIVA

DERECHOS Y OBLIGACIONES
Los razonamientos, que en contra de los derechos de contratación colectiva y
huelga de los funcionarios del Estado, se han señalado anteriormente, han perdido
terreno frente a los argumentos favorables. Las posiciones que defendían la
aproximación y el paralelismo real y legal entre funcionarios y trabajadores ha
resultado garantizada. La Ley Orgánica del Trabajo en su artículo 8, extiende la
aplicación de sus disposiciones a todos los funcionarios o empleados públicos;
señalando, que gozarán de los beneficios acordados por ésta, en todo lo no
previsto en sus respectivos ordenamientos. Igualmente, la norma comentada
expresamente consagra, el derecho de los funcionarios o empleados públicos que
desempeñen puestos de carrera, a la negociación colectiva, a la solución pacífica
de los conflictos y a la huelga, de conformidad con lo previsto en el Título VII de la
Ley. En cuanto al valor de esta disposición es posible señalar que la misma ha
sido consecuencia del derecho de los funcionarios a sindicalizarse. Es absurdo
concebir una organización sindical sin la posibilidad de ejercer el derecho a la
negociación colectiva y a la huelga, como mecanismo para la defensa de sus
derechos. El Art. 23 de la Ley de Carrera Administrativa al consagrar el derecho a
la sindicalización, hace un reenvío a la legislación laboral, y establece la
posibilidad de que los funcionarios públicos, al igual que los trabajadores del
sector privado, puedan tener representados sus derechos en instituciones
semejantes a las del Derecho del Trabajo. La Organización Internacional del
Trabajo (OIT), ha sostenido criterios favorables en relación al derecho de
sindicalismo y negociación colectiva de los funcionarios públicos. En reunión
celebrada por la Conferencia Técnica sobre Servicio Público (Ginebra 1975),
convocada por la OIT, las discusiones versaron sobre dos puntos: la libertad
sindical en el Servicio Público y los procedimientos para la determinación de las
condiciones de empleo en el mismo. En dicha reunión se alcanzaron conclusiones
importantes, que ayudaron a despejar las dudas existentes, en cuanto a la
interpretación del Convenio No. 98. En este sentido, se logró un reconocimiento
expreso de que el derecho de libertad sindical consagrado en el Convenio No. 98
(1949), son aplicables a los funcionarios del sector público, con excepción de la
Policía y de las Fuerzas Armadas. El Convenio No. 98 fue ratificado por Venezuela
el 22 de agosto de 1968 (G.O. No. 3170 Ext.), y desde esa fecha es Ley Nacional
de obligatorio cumplimiento en el País. Ahora bien, su discutido valor como norma
vigente, basado en la interpretación de que sólo constituía una obligación del
Estado venezolano de legislar en torno a esta materia, carece de relevancia. El
vacío legislativo viene ahora a ser cubierto por las disposiciones de la Ley
Orgánica del Trabajo. Por otra parte, reconocer la obligación de Venezuela, de dar
cumplimiento a lo establecido en dicho Convenio, y aceptar que la Ley de Carrera
Administrativa, promulgada en 1975, niega ese mismo derecho, es una
contradicción que debía ser subsanada.. Igualmente, las argumentaciones que
sostienen la nulidad de las convenciones colectivas, basándose en el Art. 124 de
la Constitución Nacional, carecen de validez. El referido artículo establece: "...
nadie que esté al servicio de la República, de los Estados, de los Municipios y
demás personas jurídicas de derecho Público, podrá celebrar contratos alguno con
ellos, ni por sí ni por interpuesta persona, ni en representación de otro, salvo las
excepciones, que establezcan las leyes". Tales argumentos sostienen, que no
existe norma expresa que otorgue facultad a los funcionarios para celebrar
contratos. Con la disposición contenida en el Art. 8 de la L.O.T., se invalida este
criterio, toda vez que ahora si existe una norma expresa que permite a los
funcionarios públicos la celebración de tales convenios. De todas formas se
estima, que este argumento no tenía efectiva aplicación en el campo de la
contratación colectiva, en virtud de que si se aplicase dicho criterio, igualmente
serían nulos todos los contratos celebrados por los funcionarios. Dicha norma
debe ser interpretada con carácter restringido, con una función moralizadora y de
prevención de los delitos contra la cosa pública.
OBLIGACIONES
(Art. 128 del Reglamento Núm. 81-94 de Aplicación a la Ley 14-91 de Servicio
Civil y Carrera Administrativa)
1*Cumplir y hacer cumplir la Constitución de la República, las leyes, los
reglamentos, manuales, disposiciones y órdenes emanados de autoridades
competentes.
2*Desempeñar con interés, dedicación, eficiencia, honestidad e imparcialidad
las funciones de su cargo;
Obedecer y respetar a los superiores jerárquicos en sus actuaciones legítimas y
procedentes.
3*Dar un tratamiento cortés y considerado a sus superiores, compañeros y
subordinados, y compartir sus tareas con espíritu de solidaridad y unidad de
propósito.
4*Guardar la reserva y confidencialidad que requieren los asuntos relacionados
con su trabajo, o con especiales intereses de la Administración Pública
DERECHOS
(Art. 132 del Reglamento Núm. 81-94 de Aplicación a la Ley 14-91 de Servicio
Civil y Carrera Administrativa);
1. Vacaciones Anuales (Art.26 Ley,
2. 113 Regl.) Remuneración por vacaciones no disfrutadas a un servidor
separado de su cargo
3. (Art.118 Regl.) Indemnización Económica
4. (Arts. 28 Ley, 134 y 137 Regl.) Regalía Pascual
5. (Arts. 27 Ley y 49 Regl.) Aumentos Ordinarios de sueldo
6. (Arts. 91 y 92 Regl.) Licencia Ordinaria sin sueldo
7. (Arts. 22 Ley y 121 Regl.) Seguro de Vida y Salud
8. (Art.47 Regl.) Licencias con disfrute de sueldo – por enfermedad,
maternidad,matrimonio, etc.
9. (Arts. 22 Ley y 122-123 Regl.) Distintos tipos de permisos
10. (Art.22 y 123 Regl.) Ejercer los Recursos
11. (art.160 Regl.) Pensión por enfermedad, Jubilación por antigüedad Derecho
de Organización y Acción Laboral

RESPONSABILIDAD POLITICAS Y JURIDICAS CIVILES PENALES Y


ADMINISTRATIVAS

Es la consecuencia jurídica derivada de la comisión de un hecho tipificado en


una ley penal por un sujeto, y siempre que dicho hecho sea contrario al orden
jurídico, es decir, sea antijurídico; además de punible. Generan responsabilidad
penal todas aquellas acciones humanas (entendidas como voluntarias) que
lesionen o generen un riesgo de lesión a un bien jurídicamente protegido por el
ordenamiento jurídico (por ejemplo: vida, integridad física, libertad, honor, orden
público, etc.). La comisión de un delito o falta generará responsabilidad penal.
La responsabilidad penal se concreta en la imposición de una pena, que bien
puede ser de privativa de libertad (como la pena de prisión o la localización
permanente), privativa de otros derechos (como el derecho a portar armas, el
derecho a conducir vehículos a motor, el derecho a residir en un lugar
determinado, etc.), pudiendo también consistir dicha pena en una multa
pecuniaria.
Históricamente se ha entendido que una persona jurídica no puede ser
responsable penalmente, en tanto en cuanto no puede cometer delitos por sí
misma (y hay muchas penas que no puede cumplir). Este principio está reflejado
en la expresión latina: "societas delinquere non potest".
Sin embargo, existirían algunos delitos que pueden ser cometidos desde una
persona jurídica y que incluso pueden realizarse únicamente en beneficio de la
misma (estafa, apropiación indebida, delitos fiscales, etc.). En esos casos, se ha
entendido que el responsable penal sería la persona física que toma las
decisiones.
Este principio se sigue manteniendo en la gran mayoría de ordenamientos
jurídicos, si bien en algunos ha comenzado a aparecer la posibilidad de que una
persona jurídica cometa un delito. En esos casos, la pena se ajusta al tipo de
sanción que la persona jurídica puede cumplir, normalmente pecuniaria, aunque
también se podría hacer alguna privación de derechos, e incluso, en algunos
sistemas penales se adoptan sanciones que reciben el nombre de medidas de
seguridad, que consiste en la posibilidad de que el Estado intervenga a la
asociación o sociedad, liquide los bienes y con ellos pague los daños causados
por la persona física que haya cometido algún delito con motivo del ejercicio de
sus funciones, sin embargo esto implica una sanción trascendente, ya que se
afectan los derechos de los demás socios o asociados que no tienen una relación
directa con el hecho ilícito.
Concusión o extorsión. Del delito de los funcionarios que se hayan mezclado en
asuntos incompatibles con su calidad (arts. 175 y 176 c. penal). Soborno o
cohecho de los funcionarios o empleados públicos. Corrupción de los jueces y
administradores de justicia que deciden en pro o en contra por amistad u odio.
Abusos de autoridad
Abuso de autoridad contra particulares,
Abuso de autoridad contra l a cosa pública. ejercicio de autoridad pública
ilegalmente anticipado o prolongado

ACTOS ADMINISTRATIVOS
EVOLUCION DEL DERECHO ADMINISTRATIVO
El del Derecho Administrativo, nace en Francia, a partir de la Revolución
Francesa, en 1789 cuyo fin fue terminar con el Feudalismo, asi mismo se dice que
se desarrollo con las revoluciones liberales de los siglos XVII y XIX, por cuanto el
antiguo regimén liberal requeria la existencia de normas jurídicas, aprobadas
aprobadas por asambleas, con caracter abstracto, general y permanente que
permitieran a los monarcar regular la relación entre estado y ciudadanos.

Luego de este proceso surge lo que se conocio el Estado Liberal, en la cual


se reconcio por primera vez la igualdad de los hombre como un principio juridico, a
partir de hay dejaron de ser subditos para convertirse en ciudadanos, con
derechos y obligaciones iguales. Con posterioridad a la instalación del régimen
administrativo, surge en Francia la pregunta de quién debe juzgar a la
Administración.

Se cuestiona si, por una parte, debían ser los jueces ordinarios
pertenecientes al Poder Judicial quienes juzgaran a la Administración, o si, por
otra parte, debía ser la propia Administración quien ejerciera esa función. La raíz
del problema se encuentra en que los jueces ordinarios eran aquellos del Antiguo
Régimen, nobles que quedarían dotados de poder de anular las decisiones del
Nuevo Régimen. Por tal razón, se desconfiaba sumamente.

En Francia se resolvió el problema con la creación del Consejo de Estado,


que será el órgano encargado de juzgar a los entes administrativos, al mismo
tiempo que será dependiente del Jefe de Gobierno.

LA EJECUTORIEDAD
Facultad de los órganos estatales que ejercen función administrativa para disponer
la realización o cumplimiento del acto sin intervención judicial, dentro de
los límites impuestos por elordenamiento jurídico.
El hecho de que también los actos administrativos emitidos por los
órganos judicial y legislativoposean ejecutoriedad obedece a
una particular significación histórica. En efecto, cuando se produjo la tranferencia o
la aparición de ciertas y limitadas funciones administrativas en los
órganos judicial y legislativo-al fraccionarse el ejercicio de la función estatal- los
mismos asumieron dichas funciones administrativas con las facultades mínimas
indispensables para poderlas ejercitar.

Sin embargo, en el proceso de traspaso o aparición de las funciones


administrativas hacia o en los órganos legislativo y judicial, el Poder ejecutivo se
ha reservado en todas partes el uso de lacoacción como facultad exclusiva.

La dinámica constitucional también impone la vigencia del principio de la


ejecutoriedad dentro de una interpretación adaptada a la realidad contemporánea
que se caracteriza por la realización deactividades administrativas de singular
gravitación en el orden social y económico, que exigen ser desarrolladas en forma
intermitente sin obstáculos formales que la paralicen (aunque siempre dentro de la
normativa y la justicia).

La ejecutoriedad es la cualidad que tienen los actos administrativos de ser


directamente ejecutables. Por tanto, todo acto administrativo en principio es
ejecutable.
Hay excepciones como que una concreta disposición legal establezca la no
ejecución o que ante un recurso, el órgano encargado de conocer del suspenda
dicha ejecución.
Las Administraciones Públicas tienen también la capacidad de ejecutar
forzosamente los actos. Las Administraciones disponen de una serie de medios
para llevar a cabo la ejecución forzosa, siempre respetando el principio de
proporcionalidad (art. 96 LRJPAC):
1. Apremio sobre el patrimonio.
2. Ejecución subsidiaria.
3. Multa coercitiva.
4. Compulsión sobre las personas.

LA IRRETROACTIVIDAD
concepto propio de la Teoría General del Derecho, íntimamente relacionada con la
propia eficacia de las normas, puede ser definida como la imposibilidad de
extender los efectos derivados de una ley a las relaciones jurídicas existentes
antes de su entrada en vigor.

El mero transcurso del tiempo tiene una influencia decisiva en el Derecho, pues
las normas nacen con una vocación de permanencia transitoria, en la medida que
el ordenamiento jurídico debe evolucionar para adaptarse y dar respuestas a
nuevas situaciones jurídicas antes desconocidas. Los dos momentos
transcendentales en la vida de una norma son, precisamente, los de su entrada en
vigor (inicio de su vigencia) y su derogación (como fin de la misma). Obviamente,
uno de los principales problemas que se plantean al respecto de la sucesión de
leyes que regulan una misma materia, es la cuestión de abordar cómo debe incidir
la nueva regulación sobre las situaciones y relaciones jurídicas constituidas con
arreglo a la normativa anterior, sobretodo cuando la nueva normativa reconoce o
deroga situaciones desconocidas o admitidas anteriormente. A tal fin, tiende el
establecimiento del denominado "Derecho transitorio" (o "Derecho intertemporal",
según la Doctrina alemana), que, en la necesidad de armonizar ambas
regulaciones, regula aspectos tan importantes, por lo que ahora interesa, como la
posibilidad de respetar el estado jurídico creado con anterioridad aún cuando sea
distinto a la nueva situación jurídica.

En este sentido, el principio de irretroactividad, supone el mantenimiento del orden


jurídico vigente antes de la entrada en vigor de la nueva normativa; frente al
principio de retroactividad, que determina la vigencia de la ley nueva sobre las
relaciones nacidas al amparo de la anterior regulación. En cualquier caso, la
retroactividad o irretroactividad no suelen ser absolutas, sino que admiten
matizaciones; hablándose, por ejemplo, de una retroactividad débil, o de primer
grado, cuando los efectos de la nueva ley se extienden únicamente a los efectos
de la relación ya existente que deban nacer bajo el imperio de la misma. Mientras
que en la retroactividad fuerte, o de segundo grado, el cambio normativo afecta no
sólo a los efectos futuros, que estén por nacer, de estas relaciones, sino también a
los efectos ya consolidados. Igualmente, de modo antagónico, la irretroactividad
admite la constatación de una eficacia débil, donde la nueva regulación se
extienda a los efectos futuros de la relaciones vigentes; además de una
irretroactividad plena o fuerte, en donde quedan excluidos plenamente de su
ámbito todos los efectos, incluidos los futuros. A este respecto, los ordenamiento
jurídico de nuestro entorno (incluido el nuestro) no han establecido una previsión
única y aplicable de forma inmutable a la generalidad de ámbitos y la diversidad
de normas que puede afectar. Pues, tan peligrosa se concibe la implantación de
un sistema de exclusiva retroactividad, que supondría la desaparición de toda
seguridad jurídica; como de exclusiva irretroactividad, que impediría la necesaria
evolución del Derecho.

En principio, el carácter retroactivo o irretroactivo de la nueva normativa


dependerá de la expresa declaración que la misma contenga al respecto, más
concretamente su Derecho transitorio en cumplimiento de su más genuina función.
No obstante, de faltar esta expresa previsión, deberá ser el intérprete (es decir, el
Juez o Tribunal) el que deba resolver esta cuestión en atención al espíritu de la ley
y a los principios generales del derecho. Y, más concretamente, dentro de estos
principios, destacar, fuera de expresas previsiones legalmente establecidas, la
consagración en nuestro Derecho del principio general de irretroactividad de las
disposiciones sancionadoras no favorables o restrictivas de derechos individuales
en el artículo de la Constitución Española de 1978. Por tanto, las normas que
establezcan sanciones desfavorables (ya sean civiles, administrativas o penales,
en este mismo sentido se pronuncian los artículos 25 de la Constitución Española
y 2 del Código Penal) y las que restrinjan algún derecho, no podrán extender sus
efectos a las situaciones existentes antes de su entrada en vigor. Aclarando la
Jurisprudencia del Tribunal Constitucional que, interpretado el citado precepto en
sentido contrario, sí admitirían aplicación retroactiva las normas
sancionadoras "favorables", entendidas como aquellas que establecen una
sanción menor, cuantitativa o cualitativamente. Tampoco las normas que vengan a
reconocer un "derecho individual" se verán afectadas por la regla general de
irretroactividad, reconociéndose retroactivamente los nuevos derechos.
Igualmente, ha matizado el Tribunal Constitucional que por"derechos
individuales" debe entenderse los comprendidos en el Título I de la Constitución
Española de 1978, es decir, los derechos fundamentales (Sentencias de 20 de
julio de 1981, 4 de marzo de 1982 o de 4 de febrero de 1983); así como, "que lo
que prohíbe el artículo 9.3 es la incidencia de la ley nueva en los efectos jurídicos
ya producidos de situaciones anteriores, pero no que se extienda dicha ley nueva
a los efectos no consumados" (en Sentencia 227/1988, de 29 de noviembre,
recurso de inconstitucionalidad). En definitiva, el margen establecido en esta
materia a favor del legislador español es realmente amplio, aún bajo las
prohibiciones y matizaciones del Tribunal Constitucional; admitiéndose la
retroactividad, bajo lógicas limitaciones en aras al necesario principio de seguridad
en las relaciones jurídicas, a salvo en cuanto a las normas sancionadoras y, en
general, desfavorables.
LA UNILATERALIDAD
Es el que emana de una sola voluntad, sea ésta unipersonal o compuesta. por
tanto, los actos administrativos simples o compuestos, son siempre actos
unilaterales. Tal es el caso de los llamados actos «ex oficio», que son actos
espontáneos de la administración. en cambio, cuando el acto administrativo es
el resultado de dos voluntades contrapuestas (administración y administrado, en
general), se tratará del llamado acto administrativo bilateral. tal es el caso del acto
a instancia de parte, en el que el administrado requiere a la administración para
que emita una determinada declaración de voluntad. por ello, a esta clase de actos
se le denomina también acto requerido.
son producto de la voluntad exclusiva de la administración. es decir, sin el
consentimiento de particulares. Etapas nacimiento el acto nace y produce efectos
una vez reunidos los requisitos, así hayan sido cumplidos ilegalmente alguno de
ellos efectos desaparición competencia facultad o poder jurídico que tiene una
autoridad para ejercer una determinada función es de estricto cumplimiento. si no
existe, el acto nace con vicios de ilegalidad elemento.
El acto puede ser dictado por una autoridad que en principio no es la competente
para ejercer por atribución no de la ley, sino del funcionario realmente competente.
Procedimientos Principio general:
Procedimiento Administrativo no Contencioso Los procedimientos de los actos
administrativos pueden ser regulados por leyes especiales Actos como conclusión
de actuaciones iniciadas de oficio Se producen por voluntad directa de la
administración, sin solicitud previa de una persona. Actos como conclusión del
Derecho de Petición No se producen por propia iniciativa de la Administración,
sino como respuesta a la petición inicial de una persona. Procedimientos
contradictorios Presentación de objeciones contra una decisión administrativa. Se
fundamenta en la garantía de los derechos de la defensa Procedimiento de
publicidad El acto nace con su expedición, y su aplicación es a partir de su
publicación. De lo contrario, es ilegal.

Puede darse por publicación (actos de carácter general) y por notificación (dar
conocimiento de asuntos particulares) Actos Generales Los actos rigen a partir de
la fecha de su publicación.

Los actos expedidos por el gobierno nacional y demás órganos y dependencias de


ámbito nacional deben publicarse en el Diario Oficial
Los expedidos por las demás entidades de carácter departamental o municipal, se
publican en medios locales y regionales. Actos Individuales Notificación personal
Si la petición es verbal, la notificación podrá ser de la misma manera
Envío de la citación por correo certificado al domicilio del interesado
Actos de inscripción de reg. públicos: el día en que se efectúe la anotación
Se entrega copia auténtica y gratuita de la decisión
Si no es posible notificarse personalmente en cinco (5) días, se fija un edicto por
un término de diez (10) días, con la resolución de la providencia
Cuando en el acto se afecte a terceros que no hayan intervenido en la actuación,
se ordena la publicación de la parte resolutiva en el Diario Oficial o en periódicos
de amplia circulación

LA REVOCABILIDAD

Es un modo de extinguir una relación jurídica o una causal de ineficacia del acto
jurídico.
Es cuando todo acreedor puede decidir la extinción del negocio celebrado por el
deudor en perjuicio. (la Revocación es solo para el acreedor.)
La revocación de los actos administrativos es la facultad que compete a las
Administraciones Pública para sustituir un acto inválido, dejándolo sin efecto, por
otro conforme a derecho. La Administración Pública puede al declarar la nulidad,
establecer la revisión del acto. En España en concreto, la encontramos en el
artículo 109 de la Ley 39/2015, de 1 de octubre, del Procedimiento Administrativo
Común de las Administraciones Públicas, que establece que las Administraciones
Públicas podrán revocar, mientras no haya transcurrido el plazo de prescripción,
sus actos de gravamen o desfavorables, siempre que tal revocación no constituya
dispensa o exención no permitida por las leyes, ni sea contraria al principio de
igualdad, al interés público o al ordenamiento jurídico.
La revocación opera ex nunc, para futuro, desde la manifestación de la voluntad
de revocación, en caso de tratarse de la revocación de un acto anulable mediante
la declaración de lesividad. Sin embargo, si la revocación se lleva al cabo
mediante la revisión de oficio en los actos nulos de pleno derecho, provocará
efectos "ex tunc" es decir, hacia el futuro y hacia el pasado, de modo que se
retrotraen los efectos producidos por tal acto o reglamento nulo, hasta el momento
en el que se dictó el mismo (a excepción de los actos firmes respetando el
principio de seguridad jurídica) de modo que tal acto o reglamento nulo se tendrá
por "no puesto"
ACTOS VICIADOS DE NULIDAD ABSOLUTA

es, en Derecho, una situación genérica de invalidez del acto jurídico, que provoca
que una norma, acto jurídico,acto administrativo o acto procesal deje de desplegar
sus efectos jurídicos, retrotrayéndose al momento de su celebración. Para que una
norma o acto sean nulos se requiere de una declaración de nulidad, expresa o
tácita y que el vicio que lo afecta sea coexistente a la celebración del mismo.
Tiene por fundamento, proteger intereses que resultan vulnerados por no
cumplirse las prescripciones legales al celebrarse un acto jurídico o dictarse una
norma. acto administrativo o judicial.
Antes de que se produjera la declaración de nulidad, la norma o acto eran
eficaces. Por ello, la declaración de nulidad puede ser ex nunc (nulidad
irretroactiva, se conservan los efectos producidos antes de la declaración de
nulidad) o ex tunc(nulidad retroactiva, se revierten los efectos producidos con
anterioridad a la declaración de nulidad).
La nulidad en la historia constitucional de Estados Unidos es una teoría legal bajo
la cual un estado tiene derecho a declarar nula o a invalidar cualquier ley federal
que ese estado considere inconstitucional.
La nulidad de un acto puede producirse por muchos motivos, entre los cuales
podemos mencionar:

 Ausencia de consentimiento real en un acto jurídico que lo requiera.


 Incumplimiento de requisitos formales en un acto jurídico que lo requiera.
 Ausencia de causa que da origen al acto jurídico. Simulación del acto sin
verdadero ánimo de realizarlo (ius jocandi).
 Ausencia de la capacidad de las personas que realizan el acto: menores de
edad o incapaces (El acto jurídico se estima nulo cuando es celebrado por
persona absolutamente incapaz, salvo se trate de incapaces no privados de
discernimiento que pueden celebrar contratos relacionados con las
necesidades ordinarias de su vida diaria).
 Objeto ilícito, es decir, está prohibido por ley. Si el propósito para el cual se
crea el acto jurídico fuese ilícito, el acto sería nulo, la ilicitud del fin va en
contra del ordenamiento jurídico de cada país.
Hay que tener en cuenta que la nulidad es la sanción más grave que se puede
imponer a un acto jurídico. Por lo tanto losórganos jurisdiccionales son muy
estrictos a la hora de interpretar estas causas.
de los que ya hemos hablado pueden dejar de producir sus efectos por ser
susceptibles de una sanción legal. Es entonces por obra de la ley que un acto
jurídico se ve imposibilitado de cumplir sus efectos por causas producidas durante
la celebración del acto, o con anterioridad a éste.
CLASIFICACIONES
-IMPERATIVOS
Son los que establecen, modifican o extinguen una situación o una relación
jurídica concreta. O un mandato o una prohibición su misión es provocar el los
obligados por el acto una determinada conducta respecto de la administración y
en caso necesario forzar coactivamente a ella por lo tanto hay que contar también
entre los actos administrativos de esta clase las medidas coactivas adoptadas
para la ejecución de un mandato o una prohibición
-CONFORMADORES
Esta clase de datos son los que establecen modificar o extinguen una situación o
una relación. Jurídica. Entre ellas tenemos las concesiones, licencias y permisos
Completa. son my numerosos los actos administrativos, conformadores , entre
ellos tenemos las concesiones Son manifestaciones de la Administración de las
que dependen determinadas consecuencias jurídico-administrativas
-DECLARATIVOS

Estos actos son manifestaciones de la administración de la que dependen


determinadas consecuencias jurídico administrativos, como por ejemplo de este
tipo de actos tenemos la declaración de utilidad pública de un deteriorado
programa

-REGISTRALES
Estos actos no contienen ni una disposición sobre una situación jurídica
Nada fundan ni nada modifican, nicamente tiene la visión de constituir medios
probatorios de atestiguación ya producida de los datos exigentes de un registro
público mediante la expedición de un documento especial estos documentos
debidamente extendidos son instrumentos públicos.
no tiene por objeto la creación, modificación o extinción de una situación jurídica
porque mediante ellos nada se crea ni se modifica, su objeto es el de constituir
medios o instrumentos probatorios escritos, sobre datos o pruebas que ya existen
en un registro público.
POR LOS EFECTOS DEL ACTO
-ACTOS LIMITADOS
La facultad de representación con facultades de administración y de dominio
cuando se otorga exclusivamente respecto de bienes precisados en lo pactado en
una cláusula del mismo poder, se limita a tales bienes, es decir, administrar o
enajenar inmuebles o realizar actos tendentes a su defensa, pero no se extiende a
facultades para responder en relación a bienes distintos a los propios inmuebles
objeto del mandato. Dicha cláusula, acorde con el artículo 2596 del Código Civil
para el Distrito Federal, es clarísima en cuanto a que el poder se otorga en
beneficio del mandatario, a efecto de cumplir con una obligación previamente
contraída, que tiene por objeto tales inmuebles, de modo que esa cláusula de
irrevocabilidad tiene por efecto garantizar totalmente el cumplimiento de esa
obligación contraída, en lo que toca a esos inmuebles. Cuando existen cláusulas
relativas a actos de administración y dominio, acotados con la cláusula de la
limitación a determinados inmuebles, ese mandato general limitado debe
constreñirse a la administración y dominio de los inmuebles identificados. Por
consiguiente, dada la naturaleza especial del mandato, el mandatario carece de
legitimación procesal pasiva para representar al mandante en una controversia
judicial en la que si bien una parte de la materia lo es el dominio sobre los
inmuebles materia del mandato, las prestaciones de los juicios naturales exceden
a obligaciones que deben cubrirse con los propios inmuebles, porque afectan otra
parte del patrimonio del mandante. En tal virtud, para que el mandatario cuente
con facultades de representación en juicio en nombre del mandante respecto de
prestaciones que afecten el patrimonio de éste y no únicamente respecto de los
bienes que el mandatario tenía la administración y el dominio, es menester que en
el mandato se señale en forma expresa que se otorgan las facultades generales y
especiales para que se pueda entender que se trata de un poder general para
pleitos y cobranzas respecto de todo el patrimonio del mandante. Cuando el
mandato carece de la característica de generalidad ilimitada en relación a todo el
patrimonio del mandante, por virtud del mismo, el mandatario no puede realizar un
sinnúmero de negocios de determinado tipo, sino que se encuentra limitado
únicamente a la administración y dominio sobre inmuebles determinados.
-ACTOS DE AMPLIACION

La Administración puede conceder de oficio o a petición de los interesados,


unaampliación de los plazos.

Esta ampliación no puede superar la duración de la mitad del plazo cuya


extensión se solicita (Por ejemplo, si se solicita a la Administración que amplíe un
plazo de diez días, ésta sólo podrá conceder una prórroga del mismo por cinco
días más)
Debemos solicitar la ampliación dentro del plazo que queremos prorrogar: la
Administración no concederá la ampliación de un plazo que ya ha vencido.

Contra las resoluciones que concedan o denieguen la ampliación de


plazos no puede interponerse ningún tipo de recurso.

POR LA CONCURRENCIA DE ELEMENTOS


-ACTOS VALIDOS O PERFECTOS

-ACTOS VICIADOS O IMPERFECTOS

LOS HECHOS ADMINISTRATIVOS

EL CONTROL PARLAMENTARIO SOBRE LOS ACTOS DE GOBIERNO

La Constitución configura un sistema de gobierno parlamentario, racionalizado, en


el que se trata de combinar el principio de estabilidad gubernamental con el control
parlamentario del Gobierno. Característico de nuestro sistema político es que el
nombramiento y cese del Gobierno van unidos al nombramiento y cese de su
Presidente. Este rasgo de signo presidencialista no impide que el Gobierno deba
ser considerado como un órgano constitucional, primario, autónomo y complejo.
La actual Ley del Gobierno responde al mandato constitucional dirigido al
legislativo para que se proceda al correspondiente desarrollo normativo del
Gobierno, deslindado de la Administración, sobre todo tras la aprobación de la Ley
6/1997, de 14 de abril, de Organización y Funcionamiento de la Administración
General del Estado (LOFAGE). La Ley 50/1997, de 27 de noviembre, regula la
composición, organización y funciones del Gobierno, la posición de los órganos de
colaboración y apoyo del mismo, el estatuto jurídico de los miembros del
Gobierno, las normas relativas al funcionamiento y delegación de competencias, la
iniciativa legislativa, la potestad reglamentaria y el control de los actos del
Gobierno. Entre las novedades destacables se encuentra la regulación del
Gobierno en funciones (Título IV de la Ley, art. 21). El Gobierno en funciones está
vinculado al cumplimiento del principio y deber de lealtad constitucional; su
existencia responde a la necesidad de conseguir un normal desarrollo del proceso
de formación del nuevo Gobierno, tras el cese del Gobierno hasta entonces en el
poder: como el Gobierno es un órgano colegiado que en su funcionamiento trata
de compaginar los principios de estabilidad, permanencia y responsabilidad, la
Constitución prevé la existencia de un Gobierno en funciones hasta la toma de
posesión del nuevo Gobierno. La noción de Gobierno en funciones tiene contornos
propios y su posición no se explica tan sólo a través de la institución de la
prorrogatio. Dos son los elementos 2 generales que la matizan: a) La expresada
noción no remite tan sólo a la idea de Gobierno cesante prorrogado, sino que, en
un contexto más amplio, se mantiene “en funciones” carente de la confianza
parlamentaria al haberse quebrado la relación fiduciaria, lo que ha permitido en
algunos ordenamientos equiparar su posición a la del Gobierno recién nombrado
que aún no ha obtenido el respaldo del Parlamento. b) La heterogeneidad y
amplitud de las funciones encomendadas al órgano gubernamental en el régimen
parlamentario y la reducción de tales funciones con correlativa constricción de los
mecanismos de control parlamentario una vez rota la relación de confianza, es lo
que ha generado una corriente de cautela y prevención hacia los Gobiernos en
funciones. En tales circunstancias se debe atender a la necesidad de combinar la
continuidad del sistema con la limitación del ámbito de competencias de los
Gobiernos cesantes, siendo el mayor problema teórico y práctico que
tradicionalmente se ha planteado la fijación de los límites que enmarcan las
facultades del Gobierno cesante y, consecuentemente, de los controles a que está
sometido. Son escasos los Estados europeos que por vía constitucional, o más
bien por vía legislativa o simplemente reglamentaria, regulan la composición,
estructura y funcionamiento del Gobierno y, aún así, no todos estos
ordenamientos nacionales se ocupan realmente del Gobierno como tal órgano
colegiado, sino de organizar los Departamentos ministeriales como unidades
administrativas. Es significativo que ninguna de las grandes democracias clásicas
(Reino Unido, Bélgica, Holanda, Luxemburgo, Suecia y Dinamarca) han creído
necesario someter a ordenación positiva esta materia. Este aparece como una
figura jurídica, consistente en el control que ejerce el parlamento sobre los actos de los
funcionarios públicos, a través de la invitación, citación o de la interpelación de ministros.
Este sistema se encuentra contemplado dentro de los países que adoptan el sistema
parlamentario, controla los actos y las políticas administrativas de ministro o
presidente del consejo de ministros y los ministros de estado.
La interpelación es una figura típica del sistema parlamentario, donde este se encarga de
nombrar al primer ministro y ministros de estado. En Guatemala los ministros de estado
son órganos de competencia administrativa, y eso lo convierte en un régimen Emi
presidencialista, y Emi parlamentario. Esta figura jurídico! Política la encontramos
regulada en el artículo de la institución política de la república de Guatemala. En
cuanto a la interpelación de ministros encontramos varias excepciones dentro de las podremos
mencionar' diplomáticos.

INTERPELACIÓN
es el acto de interrogar a un miembro del Consejo de Ministros o Gabinete por
parte de los miembros delpoder legislativo (Asambleas o Congresos) de cada país
o región acerca de un tema específico con el fin de -eventualmente- hacer valer
su responsabilidad política en un tema determinado. Según la Constitución, la
interpelación es la citación a los Ministros de Estado a concurrir al Legislativo para
dar cuenta de su gestión o de un asunto determinado. Mediante la interpelación se
interroga al Gobierno, por medio de los ministros, sobre alguna cuestión que
suscite el interés del Congreso. En general, la interpelación se reserva para los
temas más importantes.

La interpelación podrá derivar en el planteamiento de un voto de falta de confianza


por parte de, al menos, 4 diputados. Esta censura deberá ser aprobada por la
mayoría absoluta de los diputados al Congreso, es decir con el voto favorable de,
por lo menos, 80 congresistas. Si se emitiere el voto de falta de confianza, el
ministro quedará separado del cargo, salvo el caso de que el Presidente de la
República se oponga. Bajo este supuesto, el ministro interpelado podrá recurrir al
Congreso y este deberá ratificar la censura con el voto favorable de las 2 terceras
partes de los diputados.

Cuando una persona asume el cargo de ministro sabe que es susceptible de ser
interpelado, por lo que acudir al Congreso para ser interrogado forma parte
inherente de su función. Por tanto, no debe ser una sorpresa para un Ministro el
que se le cite para ser interpelado. Por el contrario, debería aceptar la
interpelación como algo común y corriente.

El martes pasado, Pavel Centeno renunció al cargo de ministro de Finanzas para


detener su interpelación en el Congreso; no obstante, el presidente Otto Pérez no
había aceptado dicha renuncia en el momento en que se reiniciaría la
interpelación del ministro Centeno, por lo que este permanecía en el desempeño
del cargo ministerial y procedía que continuara su interpelación. En todo caso, la
Junta Directiva del Congreso debió verificar que no había sido aceptada dicha
renuncia antes de someter a consideración del pleno la suspensión de la
interpelación del ministro Centeno.

La renuncia de un ministro para evitar la interpelación está totalmente fuera de


lugar. Existen 2 precedentes de este tipo de renuncia:

1) Álvaro Arzú (actual alcalde de la capital) renunció al cargo de ministro de


Relaciones Exteriores durante la presidencia de Jorge Serrano (1991-93), para
evitar ser interpelado sobre el reconocimiento gubernamental de la independencia
de Belice y el inicio de relaciones diplomáticas con su Gobierno; y 2) Romeo
Rodríguez renunció al cargo de ministro de Energía y Minas durante la presidencia
de Álvaro Colom (2008-12), para evitar ser interpelado sobre presuntas
irregularidades en licitaciones petroleras.
LA CITACIÓN

es una resolución dictada por un juez o tribunal a través de la cual se envía una
comunicación a una persona determinada para que se presente en eljuicio un día
a una hora determinada. La citación puede dirigirse tanto a las partes del proceso
como a terceros cuya presencia puede ser necesaria para la tramitación del
proceso: testigos, peritos, etc.
La citación se realiza a través de algún medio que permita la constatación de que
el destinatario ha recibido la comunicación. Así será posible adoptar las medidas
oportunas si el citado desobedece al órgano jurisdiccional. En la citación se suele
incluir un apercibimiento en el que se establece la responsabilidad en que puede
incurrir el citado si no se presenta el día prescrito a la hora fijada.
Existen dos modelos de citaciones:

1. La citación a fecha: Se cita a una persona en un día, en una hora y un lugar


determinado.
2. La citación a término o emplazamiento: No se especifica un día concreto a
una hora determinada sino que se ofrece un plazo máximo a la persona
citada para que comparezca cuando mejor le convenga antes de que se
cumpla dicho término.
La citación se compone de tres partes:

1. Encabezamiento: aparecen en el documento expresamente las palabras


identificativas del mismo: citación o citatorio. Luego se anotan los datos del
receptor o destinatario de la citación.
2. Cuerpo: se redacta el tema de la citación, especificando cuando se cita al
interesado, en el lugar y fecha determinados al efecto y los documentos
que, en su caso, deberá aportar.
3. Pie: Se compone de la firma, identificación y fecha de la emisión del
documento.
4. al final del oficio en el margen izquierdo abajo se escribe la sigla el que
realizo este tipo de documento.

EL CONTROL ADMINISTRATIVO EN EL AREA PÚBLICA


EL CONTROL TECNICO
El control es una etapa primordial en la administración, pues, aunque una empresa
cuente con magníficos planes, una estructura organizacional adecuada y una
dirección eficiente, el ejecutivo no podrá verificar cuál es la situación real de la
organización i no existe un mecanismo que se cerciore e informe si los hechos van
de acuerdo con los objetivos.
El concepto de control es muy general y puede ser utilizado en el contexto
organizacional para evaluar el desempeño general frente a un plan estratégico.
A fin de incentivar que cada uno establezca una definición propia del concepto se
revisara algunos planteamientos de varios autores estudiosos del tema:
 Henry Farol: El control consiste en verificar si todo ocurre de conformidad con el
PANM adoptado, con las instrucciones emitidas y con los principios
establecidos. Tiene como fin señalar las debilidades y errores a fin de
rectificarlos e impedir que se produzcan nuevamente.
 Robert B. Buchele: El proceso de medir los actuales resultados en relación con
los planes, diagnosticando la razón de las desviaciones y tomando las medidas
correctivas necesarias.
 George R. Terry: El proceso para determinar lo que se está llevando a cabo,
valorización y, si es necesario, aplicando medidas correctivas, de manera que
la ejecución se desarrolle de acuerdo con lo planeado.
 Buró K. Scanlan: El control tiene como objetivo cerciorarse de que los hechos
vayan de acuerdo con los planes establecidos.
 Robert C. Appleby: La medición y corrección de las realizaciones de los
subordinados con el fin de asegurar que tanto los objetivos de la empresa como
los planes para alcanzarlos se cumplan económica y eficazmente.
 Robert Eckles, Ronald Carmichael y Bernard Sarchet: Es la regulación de las
actividades, de conformidad con un plan creado para alcanzar ciertos objetivos.
 Harold Koontz y Ciril O´Donell: Implica la medición de lo logrado en relación con
lo estándar y la corrección de las desviaciones, para asegurar la obtención de
los objetivos de acuerdo con el plan.
 Chiavenato: El control es una función administrativa: es la fase del proceso
administrativo que mide y evalúa el desempeño y toma la acción correctiva
cuando se necesita. De este modo, el control es un proceso esencialmente
regulador.

CONTROL A PETICION DE PARTE


El que los particulares o administrados ejercen sobre los actos de la
administración, se refleja este control en los recursos administrativos o medios de
impugnación. Procede contra las resoluciones emanadas de un órgano
administrativo que tenga superior jerárquico dentro de la misma entidad autónoma
o descentralizada) que el funcionario público que emitió la resolución tenga
superior jerárquico. Llamado en la doctrina revisión jerárquica
Es el conjunto de recursos jurídicos diseñados para verificar la correspondencia
entre los actos emitidos por quienes decretan el poder y la Constitución,
anulándolos cuando aquellos quebranten los principios constitucionales. 1 Dicho de
otra forma, el control de constitucionalidad es el conjunto de herramientas jurídicas
por el cual, para asegurar el cumplimiento de las normas constitucionales, se
realiza un procedimiento de revisión de los actos de autoridad, incluyendo normas
generales, y en caso de contradicción con la Constitución se procede a la
invalidación de las normas de rango inferior que no hayan sido hechas en
conformidad con aquellas. El fundamento de este control es el mantenimiento
del Principio de Supremacía Constitucional.

El control de constitucionalidad tiene como fundamento el principio de supremacía


constitucional, esto es que la Constitución de un país es la norma de mayor
jerarquía a la cual deben sujetarse las normas de rango inferior, entendiéndose
por tales a las leyes dictadas por el parlamento, los decretos y demás resoluciones
dados por el Poder Ejecutivo o por entidades autárquicas y las sentencias y
demás resoluciones de los jueces, por lo cual las normas que presuntamente no
se ajusten al texto o normas constitucionales serán sometidas a este
procedimiento. La Constitución es un documento de origen político cuya
estructuración y consecuencias son jurídicas, puesto que la misma, derivado de su
naturaleza suprema y supralegal, genera efectos que irradian en todo el sistema
jurídico que, a su vez, es el resultado de dicho documento supremo. 2 Por ejemplo,
tenemos que es la Constitución quien determina el contenido material y formal del
orden jurídico que se origina a partir del sistema jurídico.
La Constitución recoge de manera general las decisiones políticas básicas de una
sociedad, estableciendo el cómo se debe organizar el Estado, quién puede
acceder al poder –contenido formal-, señalando el catálogo de derechos humanos
que las autoridades estarán obligadas a respetar y procurar –contenido material o
sustantivo-.3 De este modo, la Constitución determina las reglas formales y
materiales a las cuales los titulares del poder deberán sujetarse, ello mediante
cláusulas escritas o positivizadas. Es a través de estas cláusulas que se deja ver
la naturaleza de la Constitución: un pacto político que tiende a organizar una
sociedad, así como las instituciones constituidas mediante las cuales se ejerce el
poder.4 Consecuentemente, las instituciones determinadas por la Constitución se
encontrarán influenciadas a la luz de dos planos, veamos:5

 Los ejes que configuran la estructura constitucional, y


 Los elementos referentes de ésta.
Una Constitución, para ser considerada como tal, debe reconocer y proteger
derechos públicos subjetivos mínimos, mismos que habrán de ser denominados
como derechos fundamentales. Sucede que la exponenciación de valores como la
libertad o la democracia se logra en la medida en que el Estado se subordina a la
protección de los referidos derechos fundamentales. Aunado a lo anterior, la
Constitución también establece la organización del Estado, creando instituciones,
fijándoles competencias y dotándolas de facultades dentro de las cuales éstas
podrán actuar. De esta manera, el Estado se encuentra limitado y sujeto a lo que
el constituyente hubiere determinado en el texto fundamental.
Así las cosas, tenemos que la Constitución es el origen del sistema jurídico, es la
máxima expresión política de la sociedad. Como consecuencia de ello, en la
misma encontraremos herramientas que garantizan su supremacía con respecto a
otros ordenamientos al organizar el poder político mediante la constitución de la
serie de órganos competentes que hablan y actúan en su nombre, legitimándolo y
limitándolo; de esta forma se dota al poder, mediante esta regulación, de una
mayor estabilidad y regularidad.
Por últmo, sucede que, toda vez que la Constitución es el resultado o reflejo de los
factores reales del poder, la misma puede ser definida como el conjunto de los
más importantes procesos políticos de la sociedad que se desarrollan en las
instituciones que para tal efecto fueron creadas. En esa tesitura, podemos
observar que la protección de la Constitución, entendida ésta como la máxima
expresión de la voluntad de una sociedad y como constituyente de los principios e
instituciones fundamentales, adquiere un papel fundamental en el moderno Estado
Constitucional de Derecho, ya que no puede haber institución sin fundamento en
un principio ni principio que no pueda ser materializado y protegido por una
institución o herramienta, según sea el caso. En conclusión, la Constitución fija las
formas de expresión del poder y determina su control,6 siendo un imperativo que
todo acto de autoridad, sea judicial, legislativo o administrativo, se encuentre
ajustado a los principios fundantes básicos, imponiéndosele, en caso de no ser
así, la sanción de nulidad.

LAS IMPUGNACIONES O RECURSOS ADMINISTRATIVOS

Los medios legales de control directo que tienen los particulares para impugnar las
resoluciones administrativas los cuales son Revocatoria y Reposición. Es la
petición de revisión de un acto definitivo que es realizada por la propia
administración que lo dictó. El recurrente debe ser titular de un derecho subjetivo o
tener un interés personal directo o legitimo.
Los dos principales tipos de recursos son el de alzada, que se interpone ante el
órgano superior jerárquico al que dictó la resolución, y el de reposición, que se
interpone ante el mismo órgano que dictó la resolución, por carecer dicho órgano
de superior jerárquico y poner por tanto fin la vía administrativa.
los siguientes recursos administrativos ordinarios: Alzada, de Reconsideración y
Jerárquico, existiendo el recurso extraordinario de revisión contra actos firmes,
cuando se cumplan los requisitos que exige el art. 22 de la LNPA.
No obstante, se norman como especie de los remedios procesales los reclamos: el
R. Administrativo Previo (arts. 30 a 32 de la Ley) y el R. Impropio (a interponerse
contra actos de alcance general para impugnarlos de manera directa).
A su vez, contempla el Reglamento de la misma a las denominadas "vías
administrativas", que no son recursos en sentido estricto, pues no buscan
impugnar decisiones; v.gr.: la Reclamación en Queja, el pedido de Rectificación de
Errores Materiales y la Aclaratoria.
En general (excepto la Queja y el Reclamo Administrativo Previo, en este caso si
esa es la elección del particular) se interponen ante el mismo órgano que dictó el
acto. Las excepciones aluden a su interposición ante el superior.
La interposición de un recurso no suspende en general la ejecución del acto recurrido. Así, en
España, el art 111 de la Ley 30/92 indica que al interponer el recurso no se suspende su
ejecución, salvo que una norma lo indique, o el órgano competente indique la suspensión por
que se cause un perjuicio de difícil reparación.

De igual manera, tampoco la presentación del recurso afecta la ejecutoriedad del


acto (art. 12 LNPA), en principio, a menos que la Administración decida de esa
manera por haberse alegado fundadamente una nulidad absoluta, se vea afectado
el interés público o el mantenimiento del acto causare perjuicios graves al
interesado.
Se tomará medidas cautelares cuando se acuerde la suspensión del acto, para la
protección del interés público y la eficacia del acto. Cuando el recurso tenga por
objeto la impugnación de un acto administrativo que afecte a una pluralidad, la
suspensión se publicará en un periódico oficial.
Cuando se tenga en cuenta en el recurso un nuevo hecho o documento no
recogido en el expediente se le debe comunicar a los interesados para que
formulen las alegaciones pertinentes. No se tendrá en cuenta los documentos que
deberían haberse aportado anteriormente.
En la República Argentina, se podrá solicitar la suspensión de los efectos del acto
por voluntad del administrado en sede administrativa y/o judicial.

SISTEMAS DE CONTROL EN JUSTICIA DELEGADA


ELEMENTOS
básicamente podemos mencionar cuatro elementos indispensables que debe
contener el procedimiento administrativo:
antes de proponer una definición de este concepto, tal vez sea oportuno —para
entenderlo mejor— poner en relieve cómo la idea se ha abierto camino de muy
diversa manera y con distintos alcances en el suelo americano que en el
continente europeo. en norteamérica, a partir del célebre caso marbury vs.
madison —que data de 1802— la justicia constitucional es mérito exclusivo de la
jurisprudencia creativa de la suprema corte federal, no obstante la teoría de los
poderes limitados que emerge de la constitución; radica en la justicia ordinaria
como una de las expresiones del poder jurisdiccional; y se constriñe al principio de
supremacía normativa de la constitución. la preservación de los derechos
humanos, tanto en la américa anglosajona como en la de origen ibérico, ha sido
siempre competencia de la justicia ordinaria, así como la solución de ciertos
conflictos de poder, quedando otros entregados a los cuerpos políticos. en europa,
en cambio, la justicia constitucional es un producto tardío —o, al menos,
reciente— pero prolijamente elaborado. nace en austria en la carta de 1920 con un
tribunal constitucional especial que se establece seis años más tarde y que,
apenas levanta el vuelo, cae abatido por los acontecimientos que darían origen a
la segunda guerra mundial. la justicia constitucional viene a surgir con fuerza
expansiva sólo en la postguerra; se encuentra en plena etapa de desarrollo y está
radicada en tribunales supremos y autónomos, pero especiales, a los que se
atribuye varias categorías de competencias comparables y otras, misceláneas que
no admiten comparación. interesa también destacar aquí la paradoja de que,
habiendo sido más vigorosos los ataques que las defensas de que la justicia
constitucional ha sido objeto tanto en el campo de la doctrina como en el de la
política, ella se ha venido consolidando con gesto impertérrito, tal vez por el peso
irresistible de la intuición genial de que algún poder —y nadie mejor que el
jurisdiccional— debe resguardar la supremacía de la constitución del embate de
los poderes políticos; y, probablemente también, por el respal- 310 elementos
fundamentales de la justicia constitucional do creciente que ha ido concitando la
sabiduría de sus decisiones que es, a la postre, su verdadera base de
sustentación. se podría generalizar diciendo que todas las severas críticas contra
la justicia constitucional, giran en torno a la substancia política de las decisiones
que ella adopta y a su virtual prevalencia sobre la voluntad del parlamento, no
obstante su falta de legitimidad democrática.
CARACTERISTICAS DEL SERVICIO PÚBLICO
Aunque la doctrina no ha llegado a un consenso respecto del concepto de servicio
público, de las definiciones más aceptadas es factible obtener las siguientes notas
características: El servicio público debe consistir en una actividad prestacional, es
decir, una actividad que tiende a otorgar a otros una ventaja, un bien, un beneficio,
etcétera, de cualquier naturaleza y, por lo tanto, varía el ingreso de quien la recibe
o disminuye los gastos en que pudiera incurrir en el supuesto de no recibirlo. Esta
actividad es asumida por la administración pública de manera expresa y concreta,
lo que significa que es reservada en exclusiva en cuanto a la dirección y
organización a un órgano estatal y que el ejercicio de esa actividad requiere de
autorización previa del Estado expresada con un acto de autoridad. En este
sentido, las actividades en las que se permite la concurrencia de particulares sin
esta previa autorización no son servicios públicos. 3. La administración pública
realiza la actividad de servicio público en forma directa o indirecta, es decir,
valiéndose de la concesión, aunque la legislación mexicana no es consistente en
la denominación que otorga a esta figura jurídica, puesto que en algunas leyes
administrativas se emplea el término autorización, cuando se refiere a la
prestación de un servicio público. El servicio público siempre debe tender a la
satisfacción del interés general. El servicio público se presta conforme a un
régimen de derecho público, especial y propio que lo particulariza e identifica
frente a otras actividades administrativas y cuyas características son su
generalidad, uniformidad, continuidad, regularidad, obligatoriedad y subordinación
a la administración pública. Por lo tanto, no puede estar sujeto a un régimen de
derecho privado en cuanto a su prestación.
Entendemos por Servicios Públicos, las actividades, entidades u órganos públicos
o privados con personalidad jurídica creados por Constitución o por ley, para dar
satisfacción en forma regular y continua a cierta categoría de necesidades de
interés general, bien en forma directa, mediante concesionario o a través de
cualquier otro medio legal con sujeción a un régimen de Derecho Público o
Privado, según corresponda". Según la doctrina y el ordenamiento jurídico que los
rige, los rasgos más resaltantes de los servicios públicos pueden compendiarse
así:
A. Todo servicio público debe suministrarse con un criterio técnico gerencial y
con cuidadosa consideración a las funciones del procesoadministrativo
científico: planificación, coordinación, dirección, control y evaluación, tanto en
su concepción orgánica como en el sentido material y operativo.
B. Debe funcionar de manera permanente, es decir, de manera regular y
continua para que pueda sastifacer necesidades de las comunidades por
sobre los intereses de quienes los prestan.
C. La prestación del servicio público no debe perseguir principalmente fines de
lucro; se antepone el interés de la comunidad a los fines del beneficio
económico de personas, organismos o entidades públicas o privadas que los
proporcionan.
D. Generalmente les sirve un organismo público, pero su prestación puede ser
hecho por particulares bajo la autorización, control, vigilancia, y fiscalización
del Estado, con estricto apego al ordenamiento jurídico pertinente. (Arts. 113,
184 de la CRBV.).

IGUALDAD O UNIFORMIDAD

Que todas las personas somos iguales es un hecho innegable. Pero que
confundimos igualdad con uniformidad también lo es. Ser iguales significa tener
los mismos derechos y las mismas obligaciones, que todos respetemos los
derechos de los demás y que los demás nos respeten a nosotros, que tengamos
las mismas oportunidades que cualquiera, que se nos valore de la misma manera,
etc.

La uniformidad anula la identidad de las personas y las convierte en seres


dependientes y con fuertes deseos de aprobación por parte de quienes les rodean.
Por mucho que todos digamos que esto está garantizado y que cualquiera puede
llegar a donde quiera no es cierto del todo. Las condiciones que vienen dadas
desde fuera y desde que nacemos son completamente diferentes para cada uno.
Es cierto que podemos tener oportunidades que no aprovechemos pero, también
es cierto, que no todos tenemos las mismas capacidades o intereses.
Es aquí donde llegamos a la diferencia entre igualdad y uniformidad. Que seamos
todos iguales no significa que pensemos de la misma manera ni que aspiremos a
lo mismo o que nuestras cualidades tengan que ser como las de quienes nos
rodean. Igualdad, en este caso, sería que en aquello que nos gusta o que se nos
da bien podamos desarrollarnos y tengamos posibilidades de mejorar o
dedicarnos laboralmente. No que todos nos dediquemos a lo mismo (que, según
parece, ahora son el mundo de la economía y de las tecnologías).
Esta falsa ambigüedad de los conceptos la vivimos desde la escuela. El sistema
rígido educativo que fija unos objetivos y unas capacidades que obligatoriamente
todos los alumnos tienen que tener hace que aquellos que se salen de la norma
sean unos fracasados escolares. También lo serán en su futuro porque nadie les
dijo, por ejemplo, que era normal no tener gusto por las matemáticas y sí por el
teatro. Y cuando sean adultos, trabajen en una empresa llevando la contabilidad y
sin tiempo tan siquiera para acudir a ver una obra de teatro se seguirán sintiendo
unos fracasados.
Esta creencia errónea también se ve reforzada desde hace un tiempo con la moda
de los uniformes. Es cierto que para los padres es mucho más cómodo porque no
tienen que pensar qué les van a poner a sus hijos al día siguiente para ir al
colegio. Ese ahorro de esfuerzo, a la vez, es un esfuerzo que no estamos
haciendo a la hora de ayudar a los niños a crear su propia identidad. No se les
permite que desarrollen su iniciativa y su derecho a la elección; en este caso, de
su vestuario. No se les dan alternativas con lo que dejan de aprender, por ejemplo,
que quizá sea más cómodo llevar un pantalón que una falda o una camiseta en
lugar de una camisa que no da de sí a la hora de jugar, correr y saltar en el recreo.
“Así no hay comparación con los otros niños y todos son iguales”. A pesar de que
por fuera intentemos ser iguales, por dentro vamos a ser distintos por muchos
esfuerzos que se hagan. La personalidad, la educación que se recibe en casa y el
entorno en que se vive no se parecen en nada.
“Tienen un grupo de referencia donde sentirse aceptados y seguros”. Esto les
hace dependientes porque les lleva a la sumisión y a pensar que si no coinciden
con las mismas ideas, estilo de vida o costumbres que los demás, serán excluidos
y se quedarán sin amigos. Eso también hace pensar que no existen otras
alternativas fuera de su ámbito y que no es posible crear otros grupos de amigos.
Se verá reforzado ese miedo al rechazo y a lo desconocido. Con lo que la única
solución que verán será hacer lo mismo que los otros para “ser alguien”.
Según lo que se viva y aprenda en la infancia será cómo se viva en la edad adulta.
Que seamos personas seguras depende en buena parte de que no fomenten en la
infancia el miedo ni el odio a lo distinto y respeten las diferencias viéndolas como
oportunidades en lugar de amenazas.
Mirando hacia atrás y haciendo balance sobre los progresos del siglo XX, se
puede constatar una evolución sociológica marcada por el énfasis en la
reafirmación del derecho personal..
La toma de conciencia de que la sociedad está formada por individuos de igual
naturaleza revierte en la constitución de un marco de igualdad de derechos de
cada miembro frente a la colectividad. En cualquiera de los estratos sociales, las
personas participan con los mismos derechos y obligaciones. Este principio
general se extiende al estado, instituciones públicas, familia, asociaciones, etc.
Posicionar en primera línea los derechos personales ha supuesto una validación
de la persona frente a la masa social. Conceptualmente, el destino social de una
colectividad ha quedado determinado por la voluntariedad de los miembros a
empeñar su libertad en un proceso. La democracia ha impuesto su talante de
adición de decisiones iguales frente a la definición de los valores y fines de la
sociedad por unos pocos.
La marca de igualdad en el derecho ha sido tan contundente que ha repercutido
en dejar su impronta hasta en los asuntos sociales menos trascendentes. La
generalización del derecho a la igualdad de las persona -fundamento del progreso
de las libertades- si intelectualmente no se administra correctamente, puede
colateralmente engendrar una estructura de uniformidad que no represente un
beneficio para la colectividad.
La igualdad de derecho no supone en sí igualar personas, entornos, situaciones,
sino arbitrar un sistema en el que la diversidad de actitudes articulen su desarrollo
en un marco de protección común. El igualitarismo de actitudes, la uniformidad de
aportaciones, aunque facilita la lectura de la igualdad de derecho, también reduce
el desarrollo de la personalidad.
Planear en cada grupo, desde la igualdad de derecho, o sea, libremente, las
mejores posibilidades de desarrollo de cada uno, supone un respaldo de la
diversidad y una garantía de eficacia. Igualar el esfuerzo en una sociedad no
supone necesariamente aplicarlo en el mismo punto ni en una única dirección. Del
equilibrio de aportaciones según la capacidad y actitud se sigue la sintonía de
solidaridad.
INTRODUCCIÓN
Es necesario completar la legislación social de Guatemala estableciendo, además
del Código de Trabajo y de la Ley Orgánica del Instituto Guatemalteco de
Seguridad Social, una Ley de Servicio Civil que permita la realización y desarrollo
de los principios contenidos en los artículos 118, 119, 120, 121 y 122 de la
Constitución de la República, y que regule las relaciones de la Administración
Pública con sus trabajadores.
La denominación de funcionario en nuestra lengua se aplica extendidamente para
designar a aquel individuo que se desempeña laboralmente en un puesto del
estado, es decir, que ejerce una ocupación en la función pública. Un presidente de
la nación, un senador, un diputado, un ministro de defensa y un juez de la corte
suprema de justicia son ejemplos de funcionarios públicos.
CONCLUSIÓN
La filosofía de la igualdad de derecho no debe confundir en interpretar una
uniformidad de sujetos. La igualdad de derecho fundamenta para todos la
responsabilidad de participar en el marco del sistema consuetudinario para, desde
un estado de igualdad de oportunidades, favorecer en el rol social la función más
adecuada para cada persona.
Sólo la sociedad que asume y pondera la diversidad construye un sistema flexible
que, reflejo de la naturaleza, adapta lo mejor de las aportaciones de sus miembros
para generar el progreso, sin dejarse encorsetar de uniformizamos que a la larga
se manifiestan estériles.

Das könnte Ihnen auch gefallen