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EL TEMPLO MAYOR:

EXCAVACIONES Y ESTUDIOS

Instituto Nacional de Antropología e Historia

EDUARDO MATOS MOCTEZUMA


coordinador
Derechos reservados conform e a la ley.
© Instituto Nacional de A ntropología e Historia
C órdoba 43, 45 y 47.
México, D. F.

Impreso y hecho en México


Printed and m ade in M exico
INDICE

INTRODUCCION .......................................................................................................................... 7

I. EXCAVACIONES........................................................................................................................ 9
. A. DESCRIPCION DEL AREA DE ESTUDIO ........................................................... 12
> B. EXCAVACION DEL AREA DE ESTUDIO ......................................................... 15
SECCION 1
Arql. Eduardo Matos M o cte zu m a .................................................................................. 17
SECCION 2
Eduardo Contreras S
Pilar Luna E ....................................................................................................................... 71
EXCAVACION EN LA ZONA NORTE
Isabel Gutiérrez S ......................................................................................................................103

n . ESTUDIOS PREHISPAÑICOS.................................................................................................107
EL TEMPLO MAYOR: ECONOMIA E IDEOLOGIA
Arql. Eduardo Matos M o ctezu m a .....................................................................................109
REPORTE DE LAS OFRENDAS EXCAVADAS EN 1978
Diana Wagner ..........................................................................................................................119
LOS INVERTEBRADOS DE LA OFRENDA 7 DEL TEMPLO MAYOR
Oscar J. Polaco R .....................................................................................................................143
RESTOS DE PECES PROCEDENTES DE LA OFRENDA 7
Edmundo Díaz-Pardo ..........................................................................................................151
RESTOS DE VERTEBRADOS TERRESTRES EN LA OFRENDA 7
Y CONCLUSIONES
Ticul Alvarez .......................................................................................................................... 161
RELACION DEL MATERIAL IDENTIFICADO DE LA OFRENDA 7
Ticul Alvarez
Edmundo Díaz-Pardo
Oscar J. Polaco R ................................................................. ...................................................173
UNA MASCARA OLMECA EN EL TEMPLO MAYOR
Arql. Eduardo Matos Moctezuma 185

EXCAVACION DE LA CAMARA 11
Guillermo Ahuja O , .. 191

LA OFRENDA 41. INFORME PRELIMINAR


Carlos González 213

SOBRE UN CONJUNTO DE ESCULTURAS ASOCIADAS A LAS ESCALINATAS


DEL TEMPLO MAYOR
Eisa C. Hernándf!z Pons ¡ ••• 221

RESTOS DE MADERA EN EL ADORATORIO DE TLALOC


Mercedes Gómez Mont - 233

EL CARACOL MARINO DE PIEDRA ROSA


Pilar Luna Erreguerena .............•.....•.•...•........... 241

LA CERAMICA PREHISP ANICA EN EL TEMPLO MAYOR


Guillermo Ahuja O _.................•............... 245

lIT. ESTUDIOS COLONIALES 253

INFORME PRELIMINAR SOBRE LOS MATERIALES COLONIALES


Gonzalo López Cervantes 255

EXCAVACIONES EN EL EXCONVENTO DE SANTA TERESA LA ANTIGUA


Eisa C. Hernández Pons 283

IV. RESTAURACION
INFORME DE LA SECCION DE RESTAURACION
Yolanda Santaella 295

EL TRATAMIENTO DE CONSERVACION EN PIEDRA: TRES CASOS


Ma. Luisa Franco B 313

RESTAURACION DE DOS URNAS FUNERARIAS


Vida Mercado ......•....... " 349

RESTAURACION DE 33 CUCHILLOS CEREMONIALES POLICROMADOS


Bárbara Hasbach ..............•........................... 357

REST AURACION DE DOS OLLAS ...


Bárbara Hasbach ...•.•..•................................. 369
INTRODUCCION

La madrugada del 21 de febrero de 1978 se descubría la escultura de Coyolxa-


uhqui por obreros de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro. El interés que despertó
el hallazgo a todos los niveles vino a precipitar la puesta en marcha por el INAH de lo
que hoy conocemos como Proyecto Templo Mayor, si ¡jien existía previo al mismo el
proyecto de realizar algunos trabajos en el lugar. Hoy, a casi tres años de haber comen-
zado nuestros trabajos, podemos afirmar que hemos cubierto dos de las tres fases plan-
I

teadas al comienzo de los mismos, con las cuales se pudieron fijar algunos precedentes
que consideramos importantes dentro del campo de la arqueologza. Son ellos el que to-
I
do trabajo arqueológico debe ir precedido de los planteamientos teóricos correspon-
dientes y las problemáticas específicas a resolver al través de una práctica (técnica) que
permita y garantice la obtención de los datos de una manera claray precisa, además de
contar con los apoyos necesarios por parte de diferentes especialistas para la mejor in-
terpretación de los mismos.

Cualquier trabajo técnico en arqueología que no tenga su correspondiente base


teórica es como el enfermo sin médico, al igual que una teona sin aplicación concreta
es como el médico sin enfermo, y desgraciadamente ambos casos se dan frecuentemen-
te en nuestra arqueología. De ahí la necesidad de crear precedentes en que ambos as-
pectos se conjuguen dentro de una investigación concreta.

Además de lo anterior, se logró plantear la no reconstrucción del monumento, con


lo cual también se daba un paso firme en contra de aquella corriente que durante mu-
cho tiempo se dedicó a reconstruir edificios, de aquellos hacedores de milagros que ca-
rentes de un planteamiento específico, confundzan el quehacer de una disciplina cien-
fffica con el trabajo artesanal -y muy respetable- de quien levanta muros sin la pre-
tensión de que está haciendo arqueología.

Hoy presentamos el segundo volumen del Proyecto Templo Mayor, en el cual he-
mos reunido informes y estudios de diversos compañeros que han colaborado en el
transcurso de los trabajos, si bien se están emprendiendo nuevos estudios interpretati-
vos de lo encontrado. Pensamos que lo que aquf se presenta será de utilidad para todos
aquellos interesados en los procesos de excavación y en los resultad6s preliminares del
Proyecto, ya que comprende casi tres años de estudios en el área, los cuales se vieron en
ocasiones alterados por críticas sin fundamento y por planteamientos estériles de
quienes vezan la realización de un proyecto en el que no teman injerencia directa.
Sin embargo, su mala fe o su ignorancia afloró y quedó allí.

, '
7
Queremos dejar constancia de nuestro agradecimiento al Profr. Gastón Garda
Cantú, Director General del INAB, quien supo en todo momento apoyar, impulsar yen
su caso defender el Proyecto Templo Mayor-INAB y a quien se debe en mucho que
se iniciaran y llegaran a feliz término los trabajos emprendidos, culminando as! un pro-
ceso iniciado en 1790 con el hallazgo de la Coatlicue y que cerca de doscientos años
más tarde da nuevos frutos al conocimiento de la cultura mexica. Futuros trabajos am-.
pUarán el panorama, pero hoy por hoy dejamos constancia de lo realizado y nuestro
agradecimiento a quienes hicieron posible su realización....

EDUARDO MATOS MOCTEZUMA

Diciembre 31 de 1980.

8
____________ 1 EXCAVACIONES
/

\
Las excavaciones del Proyecto Templo Mayor (1978-1981).
por: A R Q L. EDUARDO MATOS M. sino respetarlo tal y como aparece en el proceso
excavatorio. También se planeó por el INAH la
Iniciado el Proyecto el 20 de marzo de creación del museo de sitio y la vialidad interna
1978, se plantearon desde un principio tres fases
de la zona, con el fin de que el visitante tenga
de trabajo que caracterizamos así: una idea general apegada a la realidad histórica.
Primera fase. En este volumen vamos a tratar sobre la se­
Recopilación y revisión de los trabajos ar­ gunda fase del proyecto: La obtención de datos
queológicos realizados en el área y en luga­ y algunos estudios particulares. La primera fase
res aledaños a la misma. Con estos trabajos ha quedado incluida en nuestro volumen Exca­
se formó el primer volumen del Proyecto; vaciones arqueológicas en el Centro de la Ciudad
además, en base a esta información y con de México, en donde se agrupan los más signifi­
los datos que nos ofrecen las fuentes histó­ cativos trabajos de excavaciones realizadas desde
ricas, se presentaron las problemáticas a 1790 hasta el momento actual en el Templo Ma­
resolver fundamentadas en una teoría yor o áreas aledañas, el cual se constituye en una
específica. antología de ayuda para el investigador.
Segunda fase.
Para dar una idea de como se programó esta
La obtención de datos. Esta fase compren­
segunda fase, vamos a guardar el siguiente orden.
de varios aspectos: desde la subdivisión del
área de trabajo en zonas internas, hasta la
A) Descripción del área de estudio.
aplicación de las técnicas de excavación
B) Excavación del área de estudio.
adecuadas para un mejor control arqueoló­
gico. Se establecieron las secciones de apo­
yo necesarias como son la de fotografía, di­
bujo, restauración, etc., además de la cola­
boración del laboratorio del Depto. de Pre­
historia para los análisis correspondientes.

Tercera fase.
Comprende la interpretación de los datos,
es decir, correlacionar los datos obtenidos
con los planteamientos iniciales y confron­
tar así teoría y práctica dentro de la inves­
tigación.

Además de lo anterior, se contemplaron


aspectos colaterales como son el principio que
hemos sustentado de la no reconstrucción, ya
que la destrucción del templo Mayor es un he­
cho histórico y no se debe alterar el momento,

11
SECTOR DE INVESTIGACION
COORDINACION
EDUARDO MATOS M.

EXCAVACION

SECCION 1 SECCION 2 SECCION 3


D.W A G N E R ’ F. H INO JOSA
EDU ARDO C O N T R ER A S H O R T E N C IA DE VEGA*
E. H ER N A N DEZ. M. G O M E Z
P IL A R LU NA IG N A C IO R O D R IG U E Z *
I. G U T IE R R E Z . C. G O N Z A L E Z

SEC CIO N ES DE APOYO


R E S TAU R AC IO N C O N TR O L DE FOTOGRAFIA D IB UJO E S T U D IO S ESTU D IO S
Y. S A N T A E L L A M A TE R IA LE S CERAMICOS E S P E C IA L E S
S. g u i l 'l i e m DON P A T T E R S O N
Ma. L. F R A N C O JU A N R O M A N M. A. M O R A L E S A L B E R T O ZUÑIGA P R E H IS PAN IC O S M A R IA N O L O P E Z
J. H E R N A N D E Z
A. N IS H IM U R A t M A R IA H E R E D IA FCO. A H U JA VIC TO R R A N G E L GUILLERMO AHUJA
V. M E R C A D O * A. M A L A G A M B A C O L O N IA L E S
B. H A S B A C H G O N Z ALO L O P E Z
E. P E R E Z

A PO Y O E X T E R N O
L A B O R A T O R IO S D E
P R E H IS T O R IA I.N.A.H.
« H A S T A D IC IEM B RE DE 1978.

A ) Descripción del área de estudio. inmuebles que no fueran edificios de relevancia


mayor, previo análisis de su valor histórico o mo­
El área de estudio se caracterizó por tener numental y que se encontraran sobre restos de
dos sectores: por un lado, la presencia de terre­ importancia. También se tom aría en cuenta el
nos baldíos en los que se podía empezar a exca­ estado estructural que guardaban algunos de
var de inmediato y, por el otro, las partes ocupa­ ellos, ya que en ciertos casos la situación era gra­
das por inmuebles. En el caso del primero, se ve. Se tuvo que hacer de esta manera ya que el
contaba con un estacionamiento particular ubi­ Templo Mayor está ubicado en un área muy im­
cado al lado sur de la calle de Guatemala y el portante del contexto urbano de la ciudad de
gran estacionamiento de Hacienda localizado en México, y el área total por excavar no se podía
el norte de la misma, así como un predio baldío precisar a principios de 1978 en que comenzó el
que se encuentra en la calle de Justo Sierra 13, Proyecto, ya que no se tenía una Idea real de la
además de la parte ya excavada por don Manuel extensión del Templo y se contaba solamente
Gamio en 1913-14 que era factible de profun­ con los planos de Alcocer y Marquina, en los que
dizarse más. se planteaba que en su fachada posterior, el edi­
ficio llegaba hasta la calle de Lic. Verdad. En el
En cuanto al área ocupada por inmuebles, transcurso de nuestras excavaciones de 1978 pu­
se acordó pedir la opinión de la Junta Consultiva do definirse el verdadero tamaño al localizarse
de Monumentos del INAH con el fin de que, una la unión de los dos templos tanto en su fachada
vez vistos los restos arqueológicos que se fueron principal (poniente) como por su lado poste­
encontrando, solicitar la demolición de aquellos rior, lo que permitió calcular el perímetro del

12
CALLE DE JUSTO SIERRA

CALLE DE LA MONEDA w
__________________________________________________ _i
_i

PALACIO NACIONAL 2

E3 AREAS CON INM UEBLES.

AREAS B A LD IA S PARA EXCAVACION.

m EDIFICIOS CONSTRUIDOS EN EL SIGLO XIX CON AÑADIDOS


DEL SIGLO XX Y ALGUNOS ELEMENTOS CO LONIALES.

[S EDIFICIOS CONSTRUIDOS EN EL SIGLO X IX CON AÑADIDOS


DEL SIGLO XX.

1X
1 EDIFICIOS CONSTRUIDOS EN EL SIGLO XX.
13
mismo. Recordem os que el Tem plo estaba for­
mado por u n gran basam ento dividido en dos
partes, com prendiendo el del norte a Tláloc y el
del sur a H uitzilopochtli.

Los inm uebles que finalm ente hubo necesi­


dad de remover fueron en total 13, de los cuales
nueve fueron construidos en los años 30 y 40 de
este siglo y no presentaban ningún valor. Del si­
glo XIX habían cuatro con añadidos en el siglo
XX, si bien dos de ellos tenían elem entos colo­
niales. Vamos a describir brevem ente estos cua­
tro casos.

El prim ero (Librería R obredo) se encontra­


ba en un alto grado de deterioro estructural: la
fachada principal que daba a la calle de Argenti­
na tenía un desplome a la vertical de 80 cms., y
en general había sufrido de tiem po atrás cuartea-
duras tan to en piso com o en m uros, así com o el
desplome de parte de techos interiores. La Ju n ­
ta Consultiva estuvo de acuerdo en su dem oli­
ción, si bien se enum eraron las piedras y se tras­
ladó la balconería a la Dirección de M onum entos
Históricos para su resguardo. Conform e a la in­
form ación obtenida éste inmueble databa de “Precisamente en la esquina de las actuales calles
1899. Al respecto, Galindo y Villa dice en su 2a. de Guatemala (Santa Teresa) y Argentina (la
de reloj), contraesquina del que fue Seminario, hay
“Historia de la Ciudad de M éxico” : una casa reconstruida, en cuyos bajos está hoy la
librería de don Pedro Robredo” .

En una cita a pie de página, añade el autor:

“En el año 1899, al hacerse la reconstrucción de


esta casa fue encontrada la lápida que se mandó
poner allí con ocasión de este suceso; documento
histórico curiosísimo, que fue obsequiado al Mu­
seo Nacional de Arqueología (donde ahora se en­
cuentra) por el dueño de la casa, don Mariano
Yáñez. La Incripción grabada en la piedra dice así:
“Estas casas heran de Al0 de Avila Alvarado, vezi-
no desta ciudad de M éxico, el qual fue condenado
a muerte por traidor; fue secutada (ejecutada) en
su persona la sentencia en la plaza pública desta
ciudad; le mandaron deribar (derribar) estas casas
que fueron las principales de su morada. Año de
15... (probablemente el mismo 1566)” .1

O tro edificio que tenía elem entos colonia­


les fue el de Guatem ala 48—50, edificio del siglo
XIX que en su interior tenía un arco colonial
com o parte de la escalera, el cual se enum eró y

1 Jesús Galindo y Villa, Historia de la Ciudad de México,


Ed. C ultura, México, 192S.

14
fotografió para hacer su traslado a la Dirección
de Monumentos Históricos. El otro inmueble fue
el de Guatemala 49, por cierto, del que algunos
especialistas en materia colonial han dicho pú-
blicamente que se trata de un edificio del siglo
XVII, afirmación irresponsable, ya que el inmue-
ble en cuestión en su gran mayoría pertenece al
siglo XIX e inclusive una parte del siglo XX, co-
mo lo demuestran los elementos arquitectónicos
de acero encontrados allí, si bien parece ser que
en la planta baja quedan algunos elementos y
muros coloniales aprovechados posteriormente,
pero al no mencionar la realidad de los diferen-
tes añadidos o transformaciones del edificio, se
puede pensar que en su totalidad es 'del XVII co- B. Excavación del área de estudio.
mo lo han afirmado los "especialistas" en cues-
tión, lo cual nos lleva a pensar que, o son igno- El área por excavar se dividió en tres sec-
rantes o actúan de mala fe.2 ciones de trabajo, cada una de ellas bajo el co~-
trol de un arqueólogo responsable y sus respectI-
Otro inmueble del siglo XIX fue el de Ar- vos ayudantes, siendo la más extensa la sección
No. l.
gentina 9, el cual no se pensaba remover. Sin
embargo, ésta casa sufrió el desplome de parte
de su fachada al quitarse la bodega de libros que Esta división correspondió a la necesidad de
había en su interior, lo que unido a la acumula- excavar de afuera hacia adentro para localizar las
ción del agua pluvial en el techo, ocasionó el fachadas norte, sur y este, lo que ha sido ya des-
derrumbe mencionado, afectando de paso al in- crito en otra ocasión. 3
mueble colindante, por lo que hubo necesidad
de demoler ambos, conforme al informe de los Para un mejor control arqueológico se pro-
peritos del Departamento del Distrito Federal. cedió a cuadricular el área de estudio a través de
una I:'etfcula de 2 x 2 mts., utilizando letras de
Finalmente, es interesante asentar como este a oeste y números de sur a norte. Se coloca-
la parte de terreno ocupada por el Templo Ma- ron cotas de nivel en distintos puntos del área
yor tenía una notoria elevación fácilmente per- por excavar para que sirvieran como referencia
ceptible en la confluencia de las calles de Se- y ubicación de los hallazgos, con un ,banco de ni-
minario, Guatemala y Argentina. La elevación vel central que quedó colocado sobre la esquina
mayor se encontró debajo de la Librería Robre- SO del tercer cuerpo de la 3a. etapa constructi-
do. Todo lo anterior nos indica la existencia del va, excavada por Gamio, con la cota 2235.91
montículo arqueológico dentro del contexto ur- mts. s.n.m.
bano.
Antes de iniciar la excavación, se procedió
a la ~laboración de las diferentes formas para el
control de materiales. Así, se imprimieron en di-
ferentes colores las siguientes formas:

a) Hoja de enterramientos
b) Hoja de materiales
c) Hoja de elementos
d) Hoja de informe
e) Etiquetas.

3 Matos Moctezuma, Eduardo "el Proyecto Templo Ma-


yor" Boletín del INAH, No_ 24, 1979" México.

15
e
PRO Y E T O TE M P L O M A Y O R - L N. A. H.
REGISTRO DE ELEMENTO

PRO YE eTo TE M P L o o
M A Y R - 1.\ . A. H. EI__
o
No.

REGISTRO DE EfHERRAMIENTO
SIKc:ihn ..• . _...•... U••ld.d

SaccilSn. Unidad •O c.po Intruy.nclodaet.

Cuadro Capa H.tri~, _

Intruyendo d"a4., _ Dncripcl6n


Profundidad dt!, , _

Tipo pri •••rio secundario Poaici6n _

Condici6n Orientaci6n _

Tu'lIIba, fo •• , ciata, nicho, lIort_ja, olla.

____ Edad aproll:" _

Po.ícUln d8 l. cabell'& _

Excrell.idadell lIuperiorea _

Exrre.idadea inferíore. ~ __

' ..echo de _
Cubierta de _

Caracter!aticall y diatribuci6n de la ofrenda _


Otrot d.tot,

Obaervacionea: _

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Cloqull Rollo
Explorado por: Caja bol •• Noo _
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Croquia

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PRO Y E T e o TE M P L o o
M A Y R - 1.N_A. H.
s.« •••.•

Desde un princIpIo se dividió el Proyecto REGtSTRO DE BOLSAS


CAJM
(
(
)
)
CON MA TIRIAL ARQUEOlOGKO

en dos sectores, el administrativo y el de investi- COSTALES ( )

gación. El primero cubre los aspectos del perso- UNID ••O. (.'~uc. CU"OllO¡ e...... .~~~.. 1;1 •• ( iIl Y '" l: ION I •
-----=-1----1---1--------
nal, adquisición de materiales, etc ... y el segundo ---- -1-- ------ --1-------
------ ------
- --- ----1----------
comprende todo lo relacionado con la excava-

-I-k~-~ >~=l~~~ --~ ~-


~
ción arqueológica. Así, desde el comienzo de
nuestros trabajos se instaló la sección de control
de materiales, en L .lnde se llevó el registro deta-
llado de cada objeto o grupo de objetos que se
encontraron en la excavación, además de tener
--------1---------------. -----
el control del lavado y marcado de todos los ma-
teriales. También se montó un laboratorio de
11

i --= ----~_-======-=--=-:..:~:..:~=-=:_
-~,--~=-I-==t~:-==-~ -------=-- -
conservación, en donde se enviaron todos aque-
llos materiales que requieren intervención por
parte del especialista para garantizar su preserva-
ción. Asimismo se contó con un laboratorio fo- -- -- -----I---f--I------- --
tográfico y con la sección de dibujo, lo que uni-
dos al apoyo de !os laboratorios del Depto. de
Prehistoria para los análisis de materiales, han si-
_--~_--r====_ ~------------
do de indudable utilidad y ayuda para el buen
funcionamiento del Proyecto. I -T-------[------ ------- --

,.. Con todo lo anterior, dió comienzo nuestra fotografías y de los planos respectivos, con lo
excavación el 20 de marzo de 1978, y a conti- cual se tendrá una idea bastante clara de como
nuación damos un resumen de cada una de las fue el desarrollo de nuestro trabajo hasta di-
tres secciones de excavación, acompañado de ciembre de 1980.
16
------------------- Sección 1.

por: ARQL. EDUARDO MATOS M. aftadidos, dado la variedad de sistemas de fabri-


cación de los muros. Entre la cala A y el muro
20 DE MARZO A 30 DE MA YO DE 1978. que limita al estacionamiento con el Museo
Etnográfico, se dejó espacio de 2 mts. que no se
La Sección 1 del Proyecto Templo Mayor excavó sino más al norte, por ser este muro de la
comprende toda el área ocupada por el Templo misma casa habitación y al cual se le denominó
Mayor, especialmente su fachada principal, al cála A'.
norte y al sur, en sus distintas etapas constructi-
vas. De esta manera quedaban bajo su control el Procedimos a abrir un pozo bajo el piso
estacionamiento sur y parte del de Hacienda; el de uno de los cuartos que ocupa la mitad del
Museo Etnográfico; las excavaciones de la calle cuadro 4 y deIS de la cala C, y después de obser-
de Seminario y los predios de Argentina 1, 3, 5, var un cambio radical en el material de relleno,
7 y 9 y de Guatemala 42. que es mucho más homogéneo, de tierra y piedra
(tezontle y cantera esencialmente) se encontró
A partir del 20 de marzo de 1978 se inició un piso de estuco a los 4.70 mts. de profundidad
la excavación en el estacionamiento sur, que mi- respecto al piso del estacionamiento. Se protegió
de aproximadamente 41 mts. de largo (N-S) por el piso y se registró el material cerámico ex-
16mts. de ancho (E-W). traído del pozo.

Se abrieron calas de sur a norte de 2 mts.


de ancho, que se denominaron con letras, A' ,A,
B,C,D,E, etc. Cada cala está diVidida en cuadros
de 2 x 2 mts., nominados con números, del 1 al
18, siendo éste último el límite con la banqueta
de la calle de Guatemala.

Se comenzó por abrir las calas A y E hasta


el cuadro 5, para lo cual se procedió a romper el
pavimento del piso del estacionamiento, encon-
trándose material de relleno moderno consisten-
te en botellas, latas, fragmentos de plástico, etc.
A una profundidad de 1.70 se encontró un piso
de concreto y muros de piedra o tabique recu-
bierto de·aplanado en rojo y amarillo.

Se decidió abrir las calas B, C, D, para unir


las calas A y E y se comprobó que toda el área
lo ocupaba el mismó piso y muros que al parecer
pertenecieron a una casa habitación con~truida a
principios del siglo XX con diversos elementos

17
Se continuó la excavaClon hacia el norte
dentro del estacionamiento procediéndose a se-
guir librando los elementos arquitectónicos de la
casa, por lo cual se excavaron los cuadros del 6
al 18 de todas las calas (A a E).

Del cuadro 6 al 11 aparecen en las calas C,


D, E, 2 pisos de lajas, uno 0.20 mts. encima del
otro, por lo que suponemos esta zona correspon-
de a un patio. Dentro de las calas A', A Y B en
los mismos cuadros aparecieron varios cuartos,
a partir del tercero de ellos (de sur a norte), que
ocupa los cuadros la al 15, hay piso de losetas
de mosaico y muros de tabique en dirección E-
W que subdividen el espacio. De sur a norte co-
rre un gran muro de 1.00 mt. de ancho, en el
que se encuentran los accesos a todos los cuar-
tos.

D'el cuadro 12 al 18 aparecen una zona de


registros de tabique y cañerías de barro vidriado,
sobrepuestos y en diversas orientaciones, es de-
cir, que ya no existía el piso de la casa que segu-
ramente fue removido cuando se hizo el estacio-
namiento. Realizado lo anterior se empezó a docu-
mentar los restos de la casa y continuar exca-
Una vez que se excavó la casa en toda el vando por debajo del piso de la misma, encon-
área del estacionamiento, dejando solamente 5 trándose los cimientos de los que sobresalía uno
mts. sin excavar en los lados sur y este del mis- que corre de sur a norte del cuadro 6 al 16 de
mo, como medio de precaución, aconsejada por las calas B, y C, con un ancho aprox. de 2.00
nuestro asesor en mecánica de suelos Ing. Sa- mts. en la base y de 1.20 mts. en la cima y una
muel Ruíz, se hicieron los planos, cortes y perfi- altura promedio de 1.20 mts.
les respectivos que pueden verse en el plano co-
rrespondiente. En los primeros 5 cuadros se encontraron
cimientos de piedra de varios muros, además de
los correspondientes a los muros de la casa, to-
dos en dirección S-N o E-W, además del nivel
de registros de tabiques y tuberías de barro vi-
driado.

En el límite de los cuadros 12 y 13 de las


calas A a E, los cuadros 12, 13, 14 del límite en-
tre las calas D y E, Y el límite de los cuadros 14
y 15 de la cala A a E, hay grandes cimientos de
piedra y concreto, más anchos en su base, simi-
lares al que corre de S a N en los límites de las
calas By C.
&; ••• ,
.
.~ rr'
.
Bajo el nivel de cañerías de barro vidriado
se encontraron cañerías de tabique con tubos de
plomo en su interior, en menor número que las
- )' anteriores.

18
En toda el área debajo de la casa se encon-
tró material cerámico vidriado, porcelana china,
colonial mexicano y prehispánico, que aumenta-
ba a medida que se profundizaba. Había partes
con rellentl del material mencionado y restos de
huesos.

Al retirarse los grandes cimientos de con-


creto se encontraron restos de un piso de losas
de cantera en los cuadros 9 y 10 de las calas A,B,
C,D,E, a una profundidad de 3.20 mts. Debajo
de este piso hay uno de tezontle y estuco, te-
niendo este último un espesor de .03 a .06 mts.
y el tezontle de 0.14 a 0.20 mts.

En el cuadro 17 de la cala D a una profun-


didad de 1.80 mts. tomados a partir del piso del
estacionamiento, apareció la esquina S-E del
edificio excavado por don Manuel Gamio, así
como el piso de estuco sobre el que se desplanta,
el que se encuentra a 3.15 mts. de profundidad.
Esta esquina corresponde, al parecer, al primer
cuerpo del basamento y en lo que sería el 20
cuerpo se encuentra un muro de piedra y ce-
mento de'2 mts. de altura, construido en la épo-
ca colonial o tal vez después, que destruyó lo
que sería el 20 cuerpo.
presenta a Tláloc y posiblemente a su esposa
En los cuadros 15 de las calas A a la E a Chalchiuhtlicue, guardando aún restos de pig-
una profundidad de 2.30 mts. a partir del piso mento rojo y negro.
del estacionamiento, se encontró la continua-
ción de. la fachada sur de la IV etapa construc- Todas las parte originales de los paramen-
tiva, consistente en un talud de 1 mt. de altura tos y muros encontrados están siendo consolida-
recubierto de estuco, que se desplantaba sobre das y se empieza el tratamiento de las secciones
una plataforma que tiene 3.25 mts. de altura. en que aparece estuco, al cual se ha encontrado
en buenas condiciones especialmente en la 111
En el arroyo de la calle de Guatemala y par- etapa constructiva.
te del estacionamiento de Hacienda se continua-
ron las calas D,E,F,G,H, del cuadro 19 al 24 para
seguir el patio del muro N-S 111 etapa construc-
tiva que va en la cala D y límite de la E y de
la IV etapa que corre a lo largo de las calas
FyG.

Se empezaron a encontrar restos de las ha-


bitaciones modernas que ocuparon uno de los
predios en el estacionamiento de Hacienda, y lo
que podríamos denominar capa No. 1 (relleno
moderno) salió en toda el área de excavación del
estacionamiento que estamos explorando. Deba-
jo de esta capa, en el cuadro E-27, el 22 de ma-
yo se encontró un monolito fragmentado que re-

19
CALA CENTRAL (CALLE DE GUATEMALA)

El lunes 27 de marzo se inició una cala de


la mitad sur del arroyo de la calle Guatemala, de
29.5 mts. de largo por 4 rnts. de ancho, con el
fm de detectar el núcleo del Templo en sus di-
ferentes etapas constructivas y para tratar de en-
contrar la continuación de las escalinatas de los
edificios excavados por don Manuel Gamio en
1914, además de que era necesario liberar estos
edificios de la calle y banqueta que impide se
apreciaran los conjuntos arquitectónicos, por lo
que también se desmontó la banqueta sur, lo-
grándose además unir a la Coyolxauhqui con su
respectiva etapa constructiva.

La primera capa, hasta 1.30-1.80, es de re-


lleno y se encuentran varias tuberías de agua y
un ducto de teléfonos que atraviesa diagónal-
mente la cala de E. a W. Debajo de lo anterior
hay tezontle sin carear que seguramente era par-
-
te del núcleó de la III etapa constructiva.
--- ~
Vale la pena mencionar que por el centro
de la calle de Guatemala atraviesa un colector
moderno que destruyó parte de las diversas eta-
pas constructivas y cuya parte más alta es el re-
gistro correspondiente que se profundiza hasta
5.60 rnts. aproximandarnente.
20
EXPLORACION EN EL ESTACIONAMIENTO
DEL MUSEO.

En la semana 17-22 de abril se iniciaron 2


calas de 2 mts. de ancho y con una extensión de
12 mts. N-S, en lo que fue el estacionamiento
del Museo Etnográfico, ccm-el-f~ - ..
continu' e-ios mures-d a-UI y..Iv. t-ap . .,: :

--.
nstructivas del Templo Mayor.
-

La primera capa es de relleno y varía de 1 espesor total, posiblemente prehispánico. Bajo


a 2 mts. de espesor. Se encontraron restos de 3 1.00 mt. de este relleno en el extremo sur se en-
muros, que corren N-S; uno al N y 2 al S for- cuentra un piso de estuco muy concrecionado,
mando quizás un pasillo. Se encuentra cerámica con pendiente N-S, Y líneas de rotura corriendo
colonial, oriental, vidriada y poca prehispánica. E-W. Se trata del descanso de lo que sería la
plataforma de la V etapa constructiva.
En la parte norte hay una masa de concreto En la parte central se inicia la capa nI en
que empieza inmediatamente debajo del piso del un piso de lajas que cubría el talud de la IV
estacionamiento del museo y se profundiza has- etapa.
ta 2.50 mts. que destruyó parte del 20 cuerpo
de la nI etapa. Fue necesario desmontarla Bajo el piso de lajas sigue un relleno, de 45
con pistolas neumáticas. Abajo de ésta masa se
encontraba el núcleo que cubrió a la In etapa cms. de espesor, de tezontle y arcilla. Todo esto
cubría al talud, el cuello de la serpiente excavada
y parte de la fachada sur de la misma, cuyo pri-
mer cuerpo tiene 2.25 mts. de altura y 36 cms.
de pendiente y se desplanta desde un piso de es-
tuco. El descanso y partes del 20 cuerpo tienen
50-90 cms. de altura.

Están hechos de tezontle rojo y negro ca-


reado, más pequefios arriba y más grandes abajo.
En parte conserva el estuco y capas de pintura
blanca.

En la parte sur, se inicia la capa n (a-70).


con un piso de losas de cantera rosa (bajo el mu-
ro Este del Museo) asociados a un relleno de ca-
pas sucesivas de estuco y tezontle, con 1.70 de

21
por Gamio, el brasero (elemento 5) y sus frag­
mentos, similar al descubrimiento al W de la ser­
piente y la plataforma; todo perteneciente a la
IV etapa.

El talud tiene 8 0 -9 0 cms. de altura y 30


cms. de pendiente. Está cubierto por varias ca­
pas de estuco y de inmediato se procedió a
su conservación.
En el escombro del brasero se encontró una
El cuello de la serpiente excavada se asocia punta de obsidiana de 1 0 x 3 cms. navajas de ob­
al talud; no siendo monolítico sino de rocas de sidiana y muy poca cerámica prehispánica.
tezontle unidas con'barro, estucadas y pintadas
en blanco y ocre. Se vio que la serpiente descan­ En la semana del 8 al 13 de mayo se amplió
sa en una pequeña plataforma de 25 cms. de al­ la cala del estacionamiento del museo 3.00 mts.
to, estucado y pintado de blanco y ocre. hacia el sur con el fin de continuar el piso de es­
tuco de la V etapa. Se vio que contaminaban los
El brasero se encontró a 1.25 al Este de la muros descubiertos anteriormente y a ± —2.50
serpiente, equidistante al brasero y con sus del nivel del pasillo continúa el piso de estuco y
mismas características excepto que éste conserva se une al piso encontrado en la cala A del esta­
varias capas de estuco y pintura ocre y roja cionamiento sur de Guatemala. Tiene una pen­
en el moño. El brasero está destruido en su diente pronunciada de N a S.
parte superior y sus fragmentos y clavos se en­
cuentran formando una capa (20—cms. de espe­
sor) sobre el piso alrederor de éste. El brasero
descansa sobre el piso. Está hecho de una mezcla
de estuco muy concrecionado y en la mitad tie­
ne una faja de tezontle careado de 18 cms. de
ancho con estuco y pintura (consiste en 2 conos
truncados unidos por esta faja). Tiene 60 cms.
de diámetro en su parte angosta y 95 cms. en las
más anchas.

En la parte inferior tiene como adorno 3


grupos de clavos que dan al N, E y W, formado
cada grupo por 16 clavos. Al sur tiene un moño
de 80 cms. x 65 cms. de alto.

22
2 cuchillos de pedernal en forma de hoja de
laurel de 27 x 9 y 19 x 5 cms.

Se encontraron en el relleno y bajo el es-


calón que corresponde a la etapa IVb, descansan-
do en un piso de estuco, que corresponde al de
la Coyolxauhqui con un peralte que sube hacia
el Este en el cual fue superpuesta la escalinata
posterior.
COYOLXAUHQUI

En la semana del 17 al 22 de abril se hizo El 19 de mayo se encontraron indicios de


que alIado oeste de la cista con la ofrenda No.
una excavación de 1.50 mts. (E-W) x 5.50 mts.
1 de Coyolxauhqui, podia existir otra ofrenda,
(N-S) al oeste de la Coyolyauhqui, con el fm
por lo que se levantó parte del piso de estuco y
de liberar la V etapa. A 95 cms. de pavimento
se empezó a explorar lo que hemos denominado
y al sur de la excavación se encontraron 2 esca-
ofrenda No. 6, la que hasta el momento se con-
lones posiblemente reconstruidos por Gamio. Al tinúa excavando.
centro pasa la cala del registro y al norte hay un
registro y concreto.
ESTACIONAMIENTO
El 24 de abril se encontró un elemento al
sureste de la Coyolxauhqui, consistente en
En la zona del estacionamiento se hizo una
excavación de 5 mts. de ancho N-S; totalizando
10 mts. de largo E-W, tomando las letras A,B,
C,D,E, y los números 13, 14 Y parte del 15; con
el fm de seguir el cuerpo de la III etapa y la po-
sible plataforma, para unirlo a lo ya excavado.

Se levantaron las zonas deller. piso de lajas


(a-2.50), ya registrado, y se vio que el relleno
desde el talud hasta el piso, es de tezontle y con
un espesor de 70 cms. El piso es el descanso (a-
3.65) de una plataforma que baja casi vertical-
mente a 2.40 mts. de talud, primeramente a un
20 piso de grandes lajas (a-4.30) que cubre el
siguiente relleno.

23
Se consideró capa 111,desde el ler. al 20
piso de lajas, donde apareció material prehispá-
nico pero aún revuelto con colonial.

El talud tiene 80-90 cms. de alto y una


pendiente de 30 cms. Está estucado con va-
rias capas al igual que el descanso y la plataforma.

A partir del 20 piso de lajas se consideró ca-


pa IV, donde salió material prehispánico. Se pro-
fundizó un cuadro (D-13) con el fin de ver si
continuaba la plataforma y se vio que continua-
ba casi verticalmente y (con una pendiente de ±
10 cms. x mI.) el piso (30) de lajas pulidas que se
asocia a la plataforma está a 3.25 de profundi- ra, basalto; redondeadas o con aristas, hasta de
dad desde el descanso (a-2.60 del 20 piso de la- 50 cms. de tamaño, tiene 2 capas de 3-4 cms.
jas y - 7.55 respecto al pavimento). El muro de de espesor de tezontle molido. Se está consoli-
la plataforma, estucado con algunas capas, dando todo el estuco.
está en muy buen estado de conservación
y tiene una saliente de 50 cms. de alto desde Se excavó 4 mts. más hacia el sur cuadros
el nivel del piso 30 por 10 cms. de ancho 11 y 12 calas B,e,D,E) con el fin de seguir el
y en talud (15 cms. de pendiente). 20 piso de lajas que ya se encontró en el 12. Par-
te del 12 y el 11 es relleno colonial que alteró el
El relleno bajo el 20 piso de lajas (capa IV) núcleo superior.
no es uniforme, es de piedras de tezontle, cante-
JUNIO, 78.

a). Fachada Sur (estacionamiento)

Se trabaj ó en la zona sur del estacionamien-


to (calas A,B,e,D, cuadros 2 al 9), descubriendo
el piso de lajas de la VII etapa. Casi toda la zona
presenta restos de este piso, muy destruido, el
cual conserva las lajas en algunas partes y en o-
tras solamente las huellas de éstas en el estuco.

Este piso tiene gran pendiente norte-sur.


Empieza en línea recta (E- W) en lo que se su-
pone fue el desplante de la plataforma de la VII
etapa. Termina (en la hilera 2) en un muro (40
cms. de altura) de tezontle estucado y la huella
de éste, que corre E-W. El piso tiene una exten-
sión de 15.30 mts. N-S y 7.70 mts. E-W en la
zona excavada.

En la zona central (C7, e8) se localizó un


basurero del siglo XVI, que al excavarlo y al ex-
cavar en las zonas donde estaba destruido el pi-
so, se encontraron 3 niveles más de este piso de
lajas superpuestas. El piso 2 conservaba algunas
lajas y los demás sólo las huellas de estas en el
estuco.
24
Se trabajó en la zona excavada previamente A lo largo de la cala D se encontró a partir
(calas C’ D’ E’ F ’ G ’ hileras 12—13) para descu­ de una profundidad de 2.50 mts. la continuación
brir la plataforma de la IV etapa, en la zona del muro este de la III etapa constructiva, que
frente a la serpiente y los braseros. muestra una línea de sillares que marca la mitad
de la pirámide, estando la sección sur, (Huitzilo-
Se encontró a 65 cms. de la esquina de la pochtli) poco estucado y la norte (Tláloc) mos­
plataforma un piso de lajas y tierra que sellaba el trando restos de estuco.
relleno. La zona de la E’ había sido alterada. En
la zona de la F ’ y G ’ se encontró un piso tosco A una profundidad de 4.70 mts. a partir del
de tezontle sin carear y rastros de estuco. piso del estacionamiento se encuentra el descan­
so del que suponemos I o cuerpo, estucado, de
En la unidad D’ 13 se localizó, enfrente de
la serpiente y a 1.04 mts. de profundidad respec­
to del descanso de la plataforma, una caja de o-
frenda, la número 7.

Se une a la pared de la plataforma y mide


1.60 N -S y 1.00 mt. E -W Sus paredes son de
tezontle careado unido con mezcla de estuco.

La semana del 19 al 24 se empezó a exca­


var la caja de ofrendas, encontrándose 5 niveles
de lajas y losas. Al levantarse el último nivel de
losas, a 70 cms. de profundidad desde el inicio
de la caja, se descubrió la ofrenda, que consiste
en la escultura en piedra de una deidad, 3 vasi­
jas, 1 braserito en cerámica y demás elementos
asociados al agua: caracoles, caimanes, corales,
tortugas, restos de peces, aves. Se procedió a lim­
piar la ofrenda e iniciar el registro.

b). Estacionamiento de Hacienda

Se amplió la excavación en el estaciona­


miento al norte del arroyo de Guatemala, lo que
correspondería a las calas D a H y los cuadros 26
a 36.

25
un ancho de 1.70 mts. El largo de cada mitad
sería de 23.50 mts. aproximadamente.

Sobre la banqueta o descanso de la sección


sur de este muro, en el cuadro 24 de la cala E
apareció una caja de ofrendas que marca la mi-
tad de este cuerpo, de la que se extrajeron 8 cu-
chillos de siléx, 2 sartas de caracoles y restos
óseos de animales pequeños. (Ofrenda 8).

En los limites de las calas F y G corre el ta-


lud del 1er cuerpo de la etapa constructiva;
con una banqueta o descanso de 2.70 mts. de an-
cho, a una profundidad de 2.40 mts. respecto al
asfalto; al parecer toda esta cuarta etapa con-
serva aún el estuco y también presenta unos silla-
res a la altura del cuadro 29 que representaría la
mitad de la pirámide.

A lo largo de la cala H en este estaciona-


mLJlto aparecen fragmentos de piso de estuco a
una profundidad de 2 mts. que podrían repre-
sentar la banqueta de la 40 época constructiva.

c). Excavación de la III etapa.

En la esquina SW de ésta etapa se excavó


bajo el nivel alcanzado por Gamio. A una pro- A lo largo de la cala O' corre la escalinata
fundidad aproximada de 6.20 mts. se encontró de la 20 época, estucada también y con su alfar-
piso de estuco con un pronunciado declive hacia da central a partir del cuadro 27, dándo a esta
el sur, y se comprobó que sigue el descanso estu- escalera un largo total de 13 mts.
cado a todo lo largo de este muro sur, con un an-
cho de 1.50 mts. • A lo largo de la cala R' aparece el desplante
de la escalinata de la etapa IVb, estucada, con
d). Robredo alfarda a partir del cuadro 27, dando un largo to-
tal a la escalera de 14.10 mts. (lado de Huitzi-
Se abrió la zona correspondiente al predio lopochtli).
de la librería Robredo, de la cala K' a la V' (26
mts. en .dirección este-oeste) y 6 mts. del cua-
dro 26 (que limita con la banqueta) al 28.

Los primeros 3 mts. de profundidad son


una matríz de tierra y cerámica colonial abun-
dante, por lo que suponemos el empleo de esta
zona como tiradero durante un considerable lap-
so de tiempo.

En la cala M' a partir de una profundidad


de 1.3- mts. aparece la escalinata de la ilI etapa
con restos de estuco, la alfarda comienza en el
cuadro 27 teniendo la escalera un largo total de
13.40 mts. (lado de Huitzilopocht1i).

26
JULIO, 78. recieron dos cabezas esculpidas en piedra, con
restos de pintura e incrustación de concha en los
a). Fachada principal (Robredo). ojos, que al profundizar la excavación se encon­
tró eran estatuas de basalto o tezontle de cuerpo
Se descubrieron las dos alfardas centrales
de la escalera de la etapa IVb (Coyolxauhqui), completo, tal vez portaestandartes, de una altura
aproximada de 1,30 mts. y al norte se encontra­
en la base de cada una de las cuales se encuentra
ron alineadas otras 6 estatuas similares mas no
una serpiente tallada en piedra con restos de co­
idénticas, todas recostadas sobre la escalera.
lor. La que limita la Io escalera es idéntica a la
descubierta por Gamio en la esquina SW de esta
etapa; la de la alfarda contigua es diferente aun­ Atrás de la escalera de la etapa III se en­
que de iguales dimensiones y conserva más color contró a una distancia de .60 cms. y a una pro­
que la anterior. No se ha podido descubrir el lí­ fundidad de 2.25 mts. otra escalera de losas de
mite de esta segunda alfarda ni el principio de la cantera y relleno de tezontle, que corre paralela
a esta etapa y podría representar una época
escalera que deben continuar hacia el norte. Las
serpientes se encuentran sobre un piso de estuco anterior. Está muy destruida, y con huella de .20
que se prolonga hacia el oeste y corresponde al cms, y peralta de .25 cms. A su vez, atrás de ésta
de la Coyolxauhqui; en esta mitad norte de la escalera (hacia el oriente) a una distancia de 1.20
mts. y a partir de una profundidad de 2.50 mts.
escalera solo se conservan 3 escalones, mientras
tenemos otra escalera, con un sistema cons­
que junto a la alfarda sur se conservan 7. El piso
tructivo idéntico, también muy destruida, que
de esta época esta a 2.70 mts. de profundidad.
podría representar una época aún más antigua.
La mitad norte de la escalera de la IV etapa Solo se ha descubierto 4 escalones en cada escali­
ca comienza a partir de una profundidad de 2.20 nata, pero ambas están incompletas.
mts. respecto a la banqueta, y está completa­
mente estucada; los escalones miden .25 cms. de Inmediantamente atrás de la escalinata de
huella por 25 cms. de peralte. Al igual que en la la etapa IVb, en la mitad N de la misma, se lim­
etapa III y IV 6 la alfarda apareció a partir del pió otra escalinata, estucada, que ya había sido
cuadro 27, siendo simétrica a la de la etapa IV; detectada en la exploración de la Coyolxauhqui
pero no se ha descubierto la mitad de ésta que y parece corresponder con el piso que corre a .90
debe seguir al norte, ni se ha alcanzado el piso, cms. de profundidad del gran monolito, mismo
aunque se tiene ya una profundidad de 5.50 mts. en el que se encuentra la lápida de piedra verde.
respecto al asfalto. Solo se han podido descubrir 2 escalones por la
falda de espacio entre las dos escaleras.
En la etapa III las escaleras estucadas apa­
recen a partir de una profundidad de 1.20 mts., A partir de una profundidad aproximada de
la alfarda empieza ligeramente más al norte que 2 mts. surgió el primer escalón de la V etapa
las de las etapas IV y IVb; en el escalón 10° apa­ que corre paralela a la banqueta de Argentina,

27
mientras en la esquina SW empezaba esta escali­
nata a una profundidad de .90 cms., al parecer
en nuestra zona está mucho más destruida.

b). OFRENDAS

1. Ofrenda No. 7. (Relleno de la etapa IV) - F a ­


chada Sur—Cuadro D’ 13).

Se levantó el primer nivel de la ofrenda a


cargo de Diana Wagner. Se etiquetó y registró
con el número de elementos, cuadro de la cista,
tamaño, X - Y - Z , nivel, asociación y observa­
ciones.

Quedó expuesto lo que se consideró el se­ Se levantó el piso de la caja, previa calca,
gundo nivel de la ofrenda, registrándolo debida­ para continuar explorando bajo ésta. Se vio que
mente. Consiste principalmente en material or­ era un piso de lajas con recubrimiento de estuco
amarillo. Algunas penetran por debajo de las pa­
redes de esta, por lo que ésta fue construida en­
cima del piso.

Se encontró relleno de piedras de basalto,


tezontle y cantera (20—40 cms.), tierra arcillosa
oscura y grava y gravilla de tezontle y pequeñas
lajas, hasta el piso de lajas que se asocia a la pla­
taforma. Esta continúa casi perpendicular hasta
la moldura que se encuentra a 2.85 mts. de pro­
fundidad. La moldura tiene 30 cms. de altura
desde el piso de lajas y continúa con 75 cms. de
altura hasta que se asocia a un piso de estuco
en muy mal estado, cerca del nivel freático.

En total tiene la plataforma 3.75 cms. de


gánico, principalmente acuático, marino y lacus­ altura hasta el piso de estuco. Entre ambos pisos
tres, aves. Corales cerebro, asta de venado, rama hay un relleno de arcilla negra compactada.
y re d ; caracoles strombus (2) y ankus (12) orien­
tados N —S en toda la caja; tortugas pequeñas
(10 cms. promedio). Muchos restos óseos de aves
y peces dispersos en toda la caja, muchas con­
chas y caracoles pequeños (2—7 cms.) y corales
red, dispersos en toda la caja bajo los cuales se
encuentra una capa (1 cms. de espesosr) de arena
negra que cubre el piso de estuco.

Se recogió el segundo nivel de la ofrenda,


quedando expuesto el tercer y último nivel de la
ofrenda, sobre el piso; consistente en más de 400
conchitas y caracolitos (2 a 7 cms.) dispersos en
toda la caja, y los 14 caracoles grandes. Se regis­
tró debidamente y se levantaron.

28
bos lados de la cista y sobre ella se encuentran
restos de piso.

Se levantó la capa de piedra, que se en-


contraron asociadas a lodo y algunos fragmentos
de cerámica.

La capa de relleno de la ofrenda es en su


mayoría de tezontle y algunas de estas piedras
están trabajadas (las cuales se separaron, para
examinarlas posteriormente).

El relleno de piedras y lodo se localiza has-


ta 70 cms. bajo la superficie de la ofrenda y a es-
ta profundidad empiezan a aparecer algunos ele-
Se resanó el estucó de la platafonna, se re- mentos, como caracoles, cuchillos de pedernal,
llenó lo excavado hasta el piso de la caja de restos óseos, una cabeza de figurilla, además de
ofrenda y se repuso éste. que en algunas partes ya se observa el piso de la
ofrenda.
2. Ofrenda No. 8

Esta ofrenda se localiza en un descanso que


mide 1.73 mts. de ancho y que corresponde a la
fachada Este (posterior) de la III etapa cons-
tructiva del Templo Mayor. (Cala E, cuadro 23).
La exploración estuvo a cargo de EIsa Hernández
Pons y Mercedes Gómez Mont.

La ofrenda fue depositada en una caja o


cista con paredes de piedra de tezontle, y con las
dimensiones siguientes: de N a S, el lado W tiene
103 cms. el lado E 94 cms., de E a W, el lado N,
73 cms., y la pared S 76 cms.

La primera capa visible, presenta un grupo 30/VI/78. Se levantó una laja de 30 x 30 cms.
de piedra de tezontle, con algunos restos de es- que se encontraba recargada en la pared E de la
fuco. El piso de la banqueta está presente a am- caja, localizándose en la planta No. 2 y con los
siguientes datos de ubicación: X = .05, y = Aa,
Z = .61-91

La limpieza de la ofrenda prosigue, obser-


vándose que el piso de la ofrenda es de lajas y
que algunas de ellas tiene estuco, así como tam-
bién lo tienen algunas piedras de la pared de la
ofrenda.

En el centro de la ofrenda se observa gran


concentración de pequefios cuchillos, así como
también caracoles con perforación lenticulada del
grupo C.

Se está limpiando el lodo de la pared S, des-.


cubriéndose varios cráneos y huesos correspon-

29
ciado a espinas. Se encontró un extremo NW un
cráneo pequeño de animal con orientación E-W.

Se enviaron a restauración los elementos


No. 5 a 8, además 4 cajas con: a) restos óseos
(N y S); material vario.

Los restos de pez encontrados y las espinas


antes descritas corresponden ambas a una espa-
darte chico de pez sierra.

4/VII/78. Ya concluída la limpieza total de la


ofrenda y de las lajas del piso se dibujarán y re-
gistrarán los elementos en la planta No. 3.

El total de elementos visibles hasta el mo-


mento son: 8 cuchillos de sílex, 29 caracoles
con perforación lentículada y 2 bolas de mate-
rial blanco que todavía no se distingue de que ti-
po de material se trata.

Las paredes de la cista son de piedra de te-


zontle y el piso es de lajas de cantera.

La mayor parte de los elementos de la


ofrenda se concentra en el centro del piso, en-
dientes a aves. La mayor concentración de restos
óseos se localiza en el extremo SW.

10/VII/78. Se observa una cuarteadura en la caja


de ofrenda en la pared S, que se continúa en el
piso y se prolonga en la pared N. Las lajas del pi-
so están a distintos niveles.

En X = 40, Y = 45, Z = 90, elemento No. 4


se encontró restos de material quemado y espi-
nas. Está mancha de material quemado se en-
cuentra entre dos cuchillos y al E se localiza una
hilera de caracoles trabajados.

Quedaron al descubierto las esquinas SE y


SW encontrándose muchos restos de ave, sobre
todo en el extremo SW.

3/VII/78. De la esquina NE de la cista, se levan-


tó material (probablemente comida) para
análisis posterior. También en la misma caja
se guardó envuelta en papel aluminio restos
probablemente de hoja vegetal.

Bajo la cabe:::ita mexica y a nivel del piso


de la ofrenda, se encontraron restos de pez, aso-

.30
contrándose 5 cuchillos y una hilera de caraco-
les con orientación N a S. En la esquina SE de la
cista se encuentra un cuchillo con orientación
NW-SE. En la pared S, a 16 cm. de ella se en-
cuentra otro cuchillo (de 16 cms. de largo) en
posición E a W. a 10 cms. de la pared W (en di-
rección E) se encuentra un cuchillo en posición
inclinada, que está orientado N a S. Pegados a la
pared E. se encuentran 2 bolas de material blan-
co.

El otro grupo de caracoles se encuentra cer-


ca de la pared E y acomodados de N a S. Dos de
los cuchillos del centro se encuentran fragmen-
tos en 2 partes.
tezoptle rojo molido. Bajo ésta se encuentra una
Ya fotografiados los elementos se procedió capa de rocas grandes similares a las anteriores,
a levantarlos. bajo la cual y entre el mismo relleno se localizó
la ofrenda No. 9 y su anexo (un felino) en el
5/VII/78. Se terminó de levantar elementos, cuadro F' 13.
después de limpiarse y fotografiarse el piso
de la ofrenda se levantarán las piedras Nos. Se tomó como nivelO el mismo de la o-
4 y 2, encontrándose bajo ellas restos de estuco frenda No. 7 (-1.04 de la esquina de la plata-
y tierra compacta.
forma) y se tomó como eje X -y la esquina del
cuadro F' 13.
Se exploró hasta una profundidad de 25
cms. no encontrándose evidencia de que existía
otra ·ofrenda. Pocos centímetros abajo se encon-
traron fragmentos de cerámica bajo la piedra No.
2; por lo cual se procedió a levantar la piedra
No. 8.

Bajo el piso, junto con el relleno se encon-


tró un clavo de piedra a una profundidad de 108
cms. (en relación al punto cero).

A una profundidad de 65 cms. del piso de


la ofrenda y a 155 cms. en relación al punto ce-
ro, se localiza un núcleo de relleno de piedras y
lodo, encontrándose algunos restos de cerámica.
Se procedió a tapar la excavación y volver a co-
locar las lajas del piso en su posición original.

3. Ofrenda No. 9.

Se inició la excavación al Oeste de la ofren-


da No. 7 en el nivel en el que se dejó, en los cua-
dros E', G' 13, por parte de Diana Wagner,. Bajo
el piso de tezontle se encontró una capa de rocas
de basalto y cantera (30-40 cms.) bajo el cual se
encuentra una capa de 4-5 cms. de espesor de

31
La ofrenda No. 9 consiste en algunos ele-
mentos en piedra, pequeñas deidades, copal, una
figura en copal, un punzón de hueso, pequeñas
conchitas y caracolitos.

Todo está sin orientación aparente, entre el


relleno; ocupando un área de 55 x 65 cms. Hay
una figura central con sombrero en pico tallado
en serpentina (23 cms.); al lado se encuentra un
Tláloc (13 cms.) tallado en piedra blanca; y dis-
persos alrededor: copal, elementos de piedra ver-
de, el punzón, conchitas, caracolitos, pequeños
corales. Todo en matriz de relleno, entre rocas
de tezontle, grava y gravilla de tezontle y arcilla
negra.

Es de notarse que la ofrenda aparece en la


zona de aproximadamente 30 cms. de espesor
en que se ha encontrado las huellas de quemado,
en todo lo excavado de este relleno (D', E', F'
13 Y C' D' 13). Esta capa empieza a aproximada-
mente -2.10, -2.30 de descanso de la platafor- .
ma de la IV etapa, por lo que la ofrenda apare-
ce con huellas de quemado.

Se registró debidamente este primer nivel


de ofrenda, etiquetándose tridimensionalmente,
quedando expuesto el 20 y último nivel de o-
frenda. Se encuentra otro Tláloc (13 cms.) talla-
do en piedra blanca bajo la deidad central, dos
tallas en piedra miniatura (3 cms. una humana y
una hacha), conchitas, caracolito. Se registró y
levantó. La ofrenda descansaba sobre relleno de
tezontle, grava y gravilla de tezontle y tierra ar-
cillosa oscura.

El anexo de la ofrenda No. 9 consiste en


restos óseos de felino, al parecer sin orientación,
y probablemente completo. Los restos fueron
colocados entre piedras, lajas y cantera forman-
do un semicírculo de 1.60 mts. EW y 80 cms.
N-S. Los huesos también aparecen quemados.

4. Ofrenda No. 10

Se exploró la ofrenda No. 10 ubicada en la


plataforma frontal de la IV época constructiva al
norte de la Coyolxauhqui y de la ofrenda No. 2,
consistente en una urna de barro naranja esgra-
fiada, conteniendo restos óseos cremados muy
fragmentados y un pectoral en piedra verde con
la forma de una serpiente.

32
AGOSTO, 78.

Durante el mes de agosto se continuaron


los trabajos del mes anterior, si bien en las sec­
ciones 1 y 3 el ritmo de excavación bajo mucho,
y prácticamente el trabajo más relevante fue de
consolidación y resane de muros, pisos y muros
de contención. En el caso de la Sección 1 se
desmontó uno de los pasillos del Museo hasta
llegar al piso de la etapa IV y se continuó con la
excavación de la ofrenda 11. También se excavó
la ofrenda 14, que en realidad es una urna fune­
raria con un grabado muy elaborado en sus pare­
des y con restos de material óseo cremado en su
interior. Estos últimos están siendo estudiados
por el Profr. Arturo Romano. El viernes se realizó la visita presidencial y la
inauguración de la exposición de objetos del
Se continuó excavando la parte posterior Templo Mayor, cuya preparación absorbió bue­
del Templo Mayor, encontrándose el piso de la na parte del tiempo.
V etapa. También se localizó el basamento o
plataforma sobre la que se desplanta la III etapa, SEPTIEMBRE, 78.
el cual no se ha podido excavar totalm ente ya
que se llegó al nivel freático. Interesante es la Durante el presente mes hubo una reduc­
localización de un glifo 1—conejo labrado en ción considerable de personal manual ya que, en
piedra encontrado en la parte posterior de la general, el trabajo de excavación ha disminuido
etapa IV del lado de Huitzilopochtli, en el que por no haber sido desmontados los edificios de
se detectaron restos de color verde y naranja. Guatemala 42 (Farmacia Vely) y Argentina 3, 5
y 7 que están autorizados por la Junta Consulti­
va de Monumentos. Lo anterior ha permitido
Dentro de la sección 2, pero en la porción
continuar en las tres secciones de trabajo con el
del estacionamiento más al Este, se continuó la
aspecto de conservación de muros y pisos de es­
excavación del piso de estuco, dando por resulta­
tuco por parte del equipo de restauración, ade­
do el hallazgo de 9 Tlálocs muy semejantes a los
más de trabajo en el taller de conservación. Sin
4 que aparecieron al principio de los trabajos.
embargo, en la sección 1 se continúa la excava­
ción de la ofrenda 11 y en la sección 2 de la 15
En la sección 3 se excavó parte de la facha­ y 16, siendo en ésta última sección donde hay
da norte del Templo, y se continuó bajando en más trabajo de excavación. ■
en el pozo estratigráfico que se abrió en el pre­
dio que da a Justo Sierra. De este pozo se extra­
jeron muestras de tierra y polen para ser analiza­
dos en los laboratorios de Prehistoria, cuyo per­
sonal fue el que tomó las muestras. También se
tomaron muestras del pozo que se abrió en la
Sección 2, rompiendo el piso de estuco que se
encuentra siendo excavado y donde aparecieron
los Tlálocs.

Se empezó a permitir la visita controlada


los sabados de 10:00 a 12:00 hrs. del público en
general, el cual hace un recorrido en que se le
permite ver la Coyolxauhqui y las serpientes que
limitan la escalinata de Huitzilopochtli.

33
Durante este mes se incorporó al Proyecto excavar las ofrendas 15 y 16 en la parte poste-
el Arqlgo. Gonzalo López Cervantes para iniciar rior del Templo Mayor y se excavaron las ofren-
el estudio del material colonial, continúandose das 11, 18 y 19, ubicadas en la fachada princi-
además con el estudio del materia prehispánico pal, en la unión de los dos edificios. En este in-
a cargo de Felipe Solís y Guillermo Ahúja. Se ha forme se acompañan los dibujos respectivos.
continuado con el lavado y marcado de materia-
les por parte de la sección de control de materia- Por otra parte, se localizaron las ofrendas
les. En lo que respecta a dibujos, se terminaron 17 y 20 en la unión de ambos edificios en su fa-
los planos (plantas) mensuales de avance de obra chada posterior (este), además de otras dos o-
en escala 1:100, y en este momento se realizan frendas más en la sección 3 de excavaciones, a
diversos cortes norte-sur y este-oeste, además los que se les asignó los números 21 y 22. Las
de que se revisan todos los planos de ofrendas y dos primeras han empezado a excavarse y las
arquitectónicos para que no falten datos de rela- otras dos se excavarán al terminarse el trabajo en
ción vertical. las primeras.
En relación a la visita de los sábados, se está
implementando una investigación para captar as- Además de las ofrendas, la única área en
pectos que sean relevantes a través de una cédula que se continúa excavando es en la sección 2, en
que está en preparación y supervisado por la el estacionamiento del extremo este, en donde se
Antrop. Margarita Nolasco. ha ampliado la excavación hacía el lado sur. Los
trabajos que se iniciaron en la banqueta de la ca-
OCTUBRE,78. lle de Seminario fueron suspendidas temporal-
mente en virtud de encontrarse gran número de
Durante el mes de octubre se excavaron di- cables de alta tensión. Se dió aviso a la Compa-
versas ofrendas que vienen a enriquecer el gran ñía de Luz y Fuerza del Centro, quienes estu-
número que ya se tiene de ellas. Se terminó de dian el cambio de estos duetos.

PROYECTO TEMP
MAYOR 'NA
llF 15 IIlIlll H

SEl:CIOII * *
FEeIIiIl2S-11 _

34
Un aspecto de fundamental importancia es
la demolición que se efectúa en Guatemala 42
(Farmacia Vely) con lo cual se podrá ampliar el
área de excavación en la parte central del Tem-
plo Mayor y en la sección 3 (al norte). En tan-
to se realiza la demolición, se trabajo en la ela-
boración de los planos de avance de obra de las
secciones 2 y 3, así como la revisión de los infor-
mes semanales con el fin de ubicar todos los di-
bujos con la cota de nivel respectiva.

En general se continúa con la conservación


de pisos, muros y escaleras originales por parte
del equipo de restauradores, así como el trabajo
en el taller respectivo.
Los estudios de materiales continúan nor-
malmente, y se siguen enviando objetos a Chu-
Los estudios de materiales cerámicos pre- rubusco para su conservación. Por otra parte,
hispánicos y coloniales se desarrollan normal- se esperan los resultados de los objetos enviados
mente, así como todo lo relativo al control de para su análisis a Prehistoria.
materiales. A finales de este mes se seleccionaron
7 objetos para que fueran exhibidos como pieza Para el mes de diciembre se espera conti-
del mes de noviembre y trasladados al Museo nuar con la excavación de los núcleos prehispá-
Nacional de Antropología con la intervención de nicos de cada época constructiva del lado de Tlá-
el Depto. de Inventarios. Igualmente se han re- loe, y la colocación del muro de contención en
mitido materiales al Depto. de Prehistoria para su parte posterior.
su estudio y a Churubusco para su conservación
mediante oficio y descripción de los mismos.

NOVIEMBRE,78.

Durante este mes se realizó la demolición


del edificio de Argentina No. 3, con lo cual se
• pudo avanzar en la excavación de la escalinata
del lado de Tláloc, la que empezó a salir en rela-
tivabuena condición.

Se continuó la excavación de las ofrendas


17 y 20, esta última importante ya que en ella
han aparecido objetos anteriores y más antiguos
que los mexica, en especial una máscara olmeca
depiedra verde.

En la sección 2 se terminó de levantar el


plano del nivel colonial, dejando solamente el
arco que había salido, continuándose con la
consolidacióndel piso y muros de los altarcillos
prehispánicos.

En la sección 3 no hay trabajo de exca"a-


ci6n salvo consolidación de los estucos, pero se
prosigueen la elaboración de los planos por nive-
lesculturales.

35
Por otra parte, se continuarán excavando
las ofrendas 17 y 20 Y muy posiblemente se
comience con la ofrenda 13 (sección 1) Y la 21
(sección 3).

La zona 2 queda pendiente ya que el


Arqlgo. Eduardo Contreras tuvo que salir a Casas
Grandes urgentemente a una inspección.

DICIEMBRE, 78.

Se trabajó durante todo el mes, salvo los


• días 24, 25 Y 31, con lo cual se pudo avanzar
considerablemente en las excavaciones del Pro- Los encargados de la sección 3 están elabo-
yecto, especialmente en el lado de l1áloc, en rando los planos y cortes de avance de obra por
donde se dejó a la vista los restos de escalinatas mes y por niveles culturales, los que en parte ya
de las etapas IV y IVb (Coyolxauhqui), encon- han sido entregados a esta Coordinación.
trándose la cámara No. 2 que ocupa la parte cen- • "!tI

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tral de la escalera y quedó cubierta por la mis- •••• '.\ >.:,.. r'\'-•••
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ma. También se despejó la posibilidad de que sa-


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liera un elemento equivalente a la Coyolxauh-
qui, encontrándose el piso con huellas de conte-
ner una ofrenda y parte del túnel que lleva a
la cámara 2. De inmediato se procedió a conso-
lidar las escaleras y el piso de estuco.

Otro trabajo efectuado en la fachada princi-


pal de la época de Coyolxauhqui fue el comien-
zo de la excavación de la ofrenda 13, que se en-
cuentra entre las dos cabezas de serpiente que
marcan la unióií de los edificios de Tláloc y ,wy,~: .~
Huitzilopochtli. Con anterioridad hay que re-
Se continúa con el trabajo de restauración'
cordar que habían sido excavadas 3 ofrendas
tanto en campo como en el taller, haciéndose los
exactamente entre las dos cabezas (ofrendas 11,
envíos de objetos a Churubusco cuando esto es
18 y 19). La 13 está hacia el lado oeste de éstas
necesario.
ofrendas.

Se empezó a excavar en lo que es el núcleo


de Templo Mayor, retirando primeramente la
capa de cimientos de la Farmacia Vely y parte
de la carpeta del estacionamiento de Hacienda,
trabajo que se' realiza lentamente ya que se tra-
ta del nivel moderno, con la presencia de los ci-
mientos mencionados.

En la sección 2 solamente se continuó


con el trabajo de consolidación de pisos. Se
terminaron de excavar las ofrendas 17 y 20,
en la parte posterior del Templo.

36
En lo referente a estudio de materiales, se
continúa con la clasificación del material prehis-
pánico y colonial. Vale la pena mencionar que
6 objetos del Templo Mayor van a ser enviados
a Europa para que formen parte de una exposi-
ción del INAH que recorrerá varios países.

ENERO, 79.

En este mes se avanzó considerablemente


en la parte central del Templo Mayor, en el pre-
día que ocupaba la Farmacia Vely, levantando
primeramente los cimientos del edificio y poste-
riormente el nivel colonial, donde se encontra-
ron basureros con restos de tiestos, huesós, car-
bón, etc ... Se iniciaron las calas para unir la parte
posterior del Templo Mayor en sus distintas
etapas, con la esquina N-E del mismo, encon-
trada en la sección 3.

Otro trabajó que se empezó fue la cuadri-


culación de parte de la calle de Guatemala (sec-
ción 2), para unir el piso encontrando en el esta-
cionamiento de Hacienda con el Templo Mayor.

En la sección 1, se continuó excavando en


la fachada principal del lado de Tláloc, detectán- los muros de contención ya mencionados, los
dose la ofrenda 23 a la mitad de la escalinata de que serán recubiertos con piedras de tezontle pa-
l1áloc, correspondiente a la época de Coyol- ra dar apariencia de núcleo. Se continuará igual-
xauhqui. También se encontró el túnel que lleva mente con la excavación de la parte central del
a la cámara 2, la que se excavó localizándose las Templo Mayor y de la calle de Guatemala.
primeras figuras.
La sección 3 rindió su informe de 1978,
con lo que quedaron concluidos los trabajos, en
Se continuó la excavación de la ofrenda 13,
la misma, pasando los encargados a incorporarse
ubicada en la fachada principal entre las dos ca-
al INAH para su nueva adscripción.
bezas de serpiente que marcan la unión de am-
bos edificios, empezando a salir objetos simila-
res a los que han aparecido en otras ofrendas.

Se siguieron colando los muros de conten-


ción detrás de la escalinata de la IV etapa. Los
colados tienen un grueso entre 10 y 12 cms. y se
han ido dejando puertas e intervalos para poder
excavar por túneles hasta encontrar el arranque
de la escalera de la etapa III y algunos otros ele-
mentos escultóricos.

Para el mes de febrero se tiene programado


el continuar con la excavación de las ofrendas
13, 23 y la cámara 2, así como de los colados de

37
FEBRERO. 79. grupo de 12 conservadores distribuidos con dife-
rentes materiales del Proyecto. Igualmente, un
Durante el presente mes se intensificó la grupo de 5 alumnos de la üEA realizan su prác-
~xcavación en la parte central y la esquina N-E tica de restauración de materiales coloniales, lo
del Templo Mayor. En ésta última se tenían lo- cual ha sido de gran ayuda.
calizadas dos ofrendas (21 y 22) resultando ne-
gativa la primera de ellas. Se cuadriculó el área a En la sección 2 se continúa la excavación a
excavar y ~e fueron encontrando la continuación lo largo de la calle de Guatemala y se prepara la
de pisos y muros de las diversas etapas construc- retícula para empezar a excavar en el estaciona-
tivas, notándose una clara inclinación del piso de miento este de Hacienda.
sur a norte.
MARZO, 79.
Se terminó de excavar la ofrenda No. 13 y
se continúa en la cámara 2. Se comenzaron las Durante el presente mes se terminó de recu-
ofrendas Nos. 23 y 24 que se localizan frente a brir con tezontle (imitando núcleo) las losas co-
la cámara 2. ladas que sirven de muro de contención a la esca-
linata de la etapa IV. También se encontraron
Se propuso a la Escuela de Restauración de del lado de Tláloc un total de tres esculturas, dos
churubusco, que los pasantes realizaran el curso de ellas con forma cilíndrica y cabeza humana
de Rescate Arqueológico en el Proyecto, con el policromada, sobre la escalinata de la que se ha
fín de que se trataran los diversos objetos que denominado III etapa constructiva. Estas escul-
han salido, además de que siempre excaven las turas se trataron por el equipo de conservación,
ofrendas un arqueólogo y un restaurador, lo cual fijándose los pigmentos y limpiándolas previa-
fue aceptado y actualmente se cuenta con un mente.
",1_
En la fachada principal se continúa exca-
vando la cámara 2 y las ofrendas 23 y 24, todas
del lado de Tláloc. También se empezaron a le-
vantar los primeros objetos de la cámara 2, en-
contrándose que algunas máscaras tienen un gli-
fo en su parte posterior.

En la fachada sur se comenzó a abrir una


cala de sur a norte, localizándose un pequeño al-
tar de forma circular, el cual se delimitó y di-
bujó.

38
Se continúa eXcavando un cuarto que salió En la escalinata de lláloc correspondiente a
en el centro-este del Templo Mayor, y parece lo que hemos llamado etapa 111, se limpia-
ser colonial, lo cual se tratará de corroborar más ron y fijaron in situ las tres esculturas que des-
adelante. cansaban sobre la escalinata, procediéndose a ex-
traerlas con poleas y perfectamente protegidas
En la sección 2, se loc-alizódebajo de la ca- para trasladarlas al taller de restauración y al de
lle de Guatemala frente a los restos de la casa co- control de materiales, para continuar con su tra-
lonial, un pozo de visita de barro con desagues tamiento y al mismo tiempo consolidar la parte
del mismo material formado por tramos que se de escalinata sobre el que se encontraban.
unen entre sí. Otro pero igual se encontró en la
sección 1 cerca de la esquina SE del Templo. Se ha continuado excavando lo que parecen
ser los dos templos de la parte superior de una
En el estacionamiento este de Hacienda se época anterior a la que hemos denominado etapa
continuó excavando hasta llegar a niveles prehis- 111,procediéndose a su inmediata conservación.
pánicos, previo dibujo de los elementos colonia-
les que aparecen. También se excavó la ofrenda 25 y el pozo
de visita colonial con tubería de barro.
Se encontró un enorme caracol de piedra el
cual se ubicó de inmediato dentro del contexto En el estacionamiento del lado sur, al con-
general.
tinuar excavando la cala que va de N-S, se·en-
contró la esquina de un adoratorio policromado
En general se ha continuado con los traba- que muestra un tablero. Se encuentra debajo del
jos de conservación en toda el área y se continúa pequeño adoratorio circular ya reportado.
trabajando en el taller de restauración.
En la sección 2, al ampliar la excavación del
ABRIL,79. patio de los altares, se encontraron una serie de
Durante el mes de abril se continuó avan-
zando en la excavación de las dos secciones de
trabajo. En la Sección 1 se siguen excavando las
ofrendas 23 y 24, así como la cámara 2, de la
que se han empezado a levantar objetos una vez
realizado su dibujo y control fotográfico. Algu-
nas de las máscaras muestran en su parte poste-
rior glifos con pintura negra, los que son trata-
dos en el taller de restauración por el equipo de
restauradores de la Escuela de Churubusco.

39
Tlálocs semejantes a los que ya habían salido so-
bre el mismo patio, además de otra rana en pie-
dra (la cuarta) siendo interesante la presencia de
todos estos materiales que junto con el caracol
de piedra, guardan relación con el agua.

Se continúa con el trabajo de restauración


en taller y campo y los estudios de material colo-
nial continúan satisfactoriamente.

MAYO,79.

Se continúan trabajando las ofrendas 22,


23, 24 Y la cámara 2, todos ellos localizados del
lado de Tláloc. Partrcularmente interesantes han
sido las máscaras y figurillas de piedra de éste úl-
timo, con glifos pintados en su parte posterior En la sección 2 se continuó avanzando so-
los que han sido limpiados y fijados para su pos- bre la calle de Guatemala, habiendo salido varias
terior estudio. tuberías, algunas de barro. Estos trabajos servi-
rán para ver que elementos se encuentran frente
En el estacionamiento sur (sección 1) se a los restos de la casa No. 48 y poder fijar la im-
amplió la excavación, localizándose un adorato- portancia de los mismos para así solicitar su re-
rio con pintura mural que se encuentra debajo mosión.
del altar circular ya reportado. De inmediato se
atendió el mural y se amplía la excavación de es- Quizá uno de los hallazgos más interesantes
te adoratorio que presenta características simila- sea el de la parte posterior de lo que pueden ser
res al encontrado en las obras del metro y que los templos superiores de una de las primeras
tenía un pórtico de entrdda al altar. etapas constructivas.
40
Un hallazgo importante fue el de un C hac-m ool
policromado frente a la puerta de acceso al tem­
plo, e inmediatamente detrás de un agregado de
la escalera de este templo. Se procedió a liberar­
lo de las piedras del relleno que lo cubrían y a
conservarlos, siendo importante que es el primer
Chac—mool policromado in -situ que se encuen­
tra.
En su parte posterior, se liberó parte del úl­
timo cuerpo sobre el que se asientan los dos tem­
plos, y se inició su consolidación. Al mismo
tiempo se continuaba la excavación del lado nor­
te del templo.

En la zona 2 se excavaron grandes losas de


piedra que parecen pertenecer a la sexta etapa
constructiva, que limita hacia este con dos o tres
escalones, que pensamos puede ser el muro lími­
te del recinto ceremonial en la parte posterior
del templo. Hay que recordar que en Tlatelolco
el recinto está formado por escaleras alternándo­
se con alfardas, por lo que puede tratarse del lí­
mite del recinto ceremonial.

En el patio de los altares se encontró, ha­


cia el lado este, restos de la escalinata de acceso
al mismo, las que se continuarán excavando el
próximo mes.

JUNIO, 79. JULIO, 79.

Durante este mes se continuó trabajando en Durante el presente mes se avanzó en la ex­
las ofrendas 21, 22, 23, 24 y cámara 2, quedan­ cavación de las ofrendas de la cámara 2, exca­
do terminadas las ofrendas 22 y 24. Lo más inte­ vándose hasta el noveno nivel. Igualmente se ter­
resante fue la localización de las jambas de ma­ minó de excavar las ofrendas 21 y 23, la primera
dera del acceso al Templo de Tláloc de una de en la fachada posterior de la III etapa del Tem­
las primeras etapas constructivas, las que se ex­ plo Mayor (lado de Tláloc) y la primera en la fa­
trajeron y trasladaron al taller de conservación chada principal a la mitad de la escalinata de Tlá­
para su tratamiento. También se contrataron los loc. Se localizó la ofrenda 29 consistente en una
murales interiores (policromados) de este Tem­ caja de piedra con su tapa, la cual se trasladó al
plo, empezándose a consolidar de inmedianto. taller de conservación para excavar el interior.

41
Se intensificó la excavación en la parte cen- AGOSTO. 79.
tral del Templo Mayor en donde se localizó la e-
tapa más antigua con los dos adoratorios en la Durante el presente mes se continuó traba-
parte superior. El trabajo consistio fundamental- jando en el adoratorio del lado sur (estaciona-
mente en extraer el relleno o núcleo prehispáni- miento), especialmente en quitar (una vez dibu-
ca que cubrió ésta etapa, el cual es el núcleo más jado y fotografiado) el pequeño altar circular,
grande que se ha localizado hasta el momento. viéndose que debajo de él se encuentra otro al-
Al mismo tiempo se comenzó a consolidar la es- tarcillo circular, el cual corresponde a la misma
calinata y parte del piso de la etapa más antigua. etapa constructiva del vestíbulo del adoratorio
decorado con motivos en rojo y blanco.
Un hallazgo importante fue el de un Chac-
mool policromado, que durante este mes se con-
En cuanto a las ofrendas, se extrajeron los
tinuó limpiando y fijando el pigmento por parte
últimos objetos de la # 23 Y de la Cámara 2.,
del equipo de conservación. además de explorar el interior de la caja de 0-
-t'renda No. 29, que a fines del mes pasado había
En la parte posterior de ésta etapa se en- sido trasladada a la oficina de control de mate-
contrÓ"el basurero No. 10, que resultó ser mo- riales. En su interior solo se encontraron restos
derno. Dos llantas y otros materiales fueron en- óseos y algunos otros elementos, pero en gene-
contrados. Este basurero debe de haberse hecho ral el contenido fue mínimo.
al construír el estacionamiento de Hacienda y
afectó parte del basamento.
Debajo de la ofrenda 23 se detectó una
nueva ofrenda a la que se le asignó el número 30,
Se continuó excavando en el lado sur del
la cual será excavada de inmediato.
Templo Mayor, y se acordó desmontar el peque-
ño altarcillo circular, el cual resultó estar ubica-
do sobre otro altar circular que corresponde y
forma parte del adoratorio decorado del lado
sur.

En el patio de los altares se continuó con-


solidando y en limpieza general.

El taller de restauración continúa dando


tratamiento a los objetos que lo requieren tanto
en campo como en el taller mismo.

42
En la etapa constructiva más antigua del altura que los localizados del lado de Tláloc, los
Templo Mayor que hemos encontrado, se conti- que tenían las jambas a un lado y descansando
nuarán las excavaciones. Quedó casi totalmente sobre pequeñas salientes de piedra.
liberada la escalinata del lado de Huitzilopochtli,
notándose en el mismo escalón hacia su parte
central, una máscara con el rostro de un persona- En el exterior de esta época constructiva se
je y encima de él dos glifos: 2 conejos y un calli. continúa excavando, principalmente de los la-
Un hallazgo importante fue el de la piedra de sa- dos norte y este, encontrándose los muros en
crificios, hecha en tezontle negro y perfectamen- buena condición, los que de inmediato se con-
te empotrada en el piso de estuco. El interior del solidan.
adoratorio de Huitzilopochtli también fue casi
en su totalidad excavado, encontrándose restos En la zona 2 (patio de los altares), se sigue
de pintura sobre el aplanado de lodo del fondo la excavación profundizando en lugares donde se
del aposento, además de una banqueta similar habían detectado altares, y durante este mes se
a la encontrada en el interior del adoratorio de empezó el desmantelamiento cuidadoso del in-
Tláloc, con la particularidad de que en el adora- mue,ble de Guatemala 48 ó 50, previa enumera-
torio de Huitzilopochtli además de la banqueta ción de las piedras del arco colonial, trabajo que
hay un pequeño altarcillo cuadrado que descansa estuvo a cargo del personal de la Dirección de
sobre la banqueta misma, y que es el lugar donde Monumentos Históricos.
estaba colocando el ídolo.

En cuanto a los restos de madera, se vio En cuanto al taller de Conservación, ha sido


que los restos de jambas descansaban directa- trabajado materiales tanto en taller como in situ,
mente sobre los pilares de piedra que forman la especialmente los estucos, pigmentos, Chac-
entrada al adoratorio. Estos pilares son de menor mool y piezas varias.

43
SEPTIEMBRE, 79.

Durante el mes de septiembre se desmontó


totalmente la casa de Guatemala 48 ó 50, previa
enumeración de los elementos arquitectónicos
de relevancia por parte de la Dirección de Mo-
numentos Históricos. De esta manera se podrá
empezar a excavar en la Sección 2, con el fin de
unir el patio de los altares con la parte posterior
del Templo Mayor.

Se continuó la excavación de los Templos


de Tláloc y Huitzilopocht1i, tanto en el interior
de los adoratorios como en los cuerpos exterio-
res del basamentos. Del lado sur (adoratorio de
Huitzilopochtli), se encontraron los arranques de
las pilastras de entrada construidos de piedra
hasta una altura menor de 1 mt., hallándose res-
tos de. madera que descansaban directamente so-
bre estos arranques. De inmediato se trasladó la
madera al laboratorio de conservación y se pro-
cedió a consolidar las pilastras.

Otro hallazgo interesante en este mismo


adoratorio fue el de la banqueta que corre de
norte a sur junto a la pared del fondo del adora-
torio (muro este), bpnqueta que en su parte cen-
tral tiene un pequefío basamento en donde iba
colocado el dios. Todos los muros del adorato-
rio, al igual que los del adoratorio de Tláloc, tie-
nen restos de pintura mural sobre aplanado de
lodo, lo que de inmediato se empezó a tratar pa-
ra evitar su destrucción.

Se continuó también la excavación tanto


del lado norte como del sur de los cuerpos del
basamento que sostiene ambos adoratorios. Pu-
do apreciarse que en una época se aprovechó el
descanso entre un cuerpo y otro para colocar un
piso.

Se continúa el tratamiento del Chac-mool


encontrado frente a la entrada del adoratorio de
Tláloc, y se procedió a retirar parte de la escalera
que lo cubría, escalera que fue añadida quizá
con el fin de elevar la altura del templo, cubrien-
do el Chac-mool. Ahora puede verse ésta escul-
tura en su contexto además de que se dejó un
tramo de esta escalera como testigo. Por otra
parte, se continúa en la limpieza de los murales
del interior del Templo de Tláloc.

44
Debajo del piso de la etapa a que pertenece lor azul con la efigie del dios Tláloc, y en su in­
Coyoxauhqui, se localizó una nueva ofrenda terior tres figurillas del área de Guerrero. Debajo
(ofrenda 30) muy cerca de la Cámara 2 (lado de de la olla venía un número elevado de conchas
Tláloc), la que de inmediato se procedió a exca­ y caracoles.
var (ver informe). En la parte posterior del Tem­
plo Mayor, en ésta misma época constructiva, se También se localizaron las ofrendas 33 y 34
liberó parte del muro de la plataforma en que en el interior del templo de Huitzilopochtli, en­
descansan los braseros con efigie del Tláloc, lle­ frente del altarcillo en donde iba colocado el
gándose al piso de desplante de esta plataforma. dios y en eje con la piedra de sacrificios. La se­
gunda de ellas contenía un vaso de obsidiana con
En general se continúa con el trabajo de restos quemados en su interior, la que se envió a
conservación, tanto en campo como en taller, radiografiar para ver el total del contenido.
así como con el control de materiales y el estu­
dio de las cerámicas tanto prehispánica como co­ En la parte posterior del cuerpo que sostie­
lonial. ne a los dos adoratorios, en el relleno para hacer
la siguiente etapa constructiva, salieron otras dos
OCTUBRE, 79. ofrendas: la 32 y 36, localizados hacia la parte
media de cada uno de los adoratorios. En el ca­
Durante el mes de octubre se excavaron va­ so de la primera no hubo ningún objeto, por lo
rias ofrendas en distintas etapas constructivas del que se tomaron muestras de tierra para análisis,
Templo Mayor. En la fachada principal del lado ya que podría tratarse de una ofrenda de semi­
de Tláloc, en la misma época de Coyolxauhqui, llas, textiles, etc. En el caso de la ofrenda 36 el
se localizó y exploró la ofrenda 31 que resultó contenido era en su mayoría de objetos moder­
muy interesante, ya que contenía una olla de co­ nos como peines, estopa, etc.

45
Además de la excavación de éstas ofrendas,
se continuaron excavando los cuerpos del basa-
mento que sostiene a los dos adoratorios en su
fachada sur, llegando a la esquina SW. También
se empezó a construir el muro de contención pa-
ra sostener la escalinata de la época I1-b y hacer
al mismo tiempo un pasillo para los visitantes.
También se continuó excavando ésta escalinata
que i diferencia de todas las excavadas, se nota
muy mal construida.

En la zona 2 se reticuló toda el área donde


estaba la casa "colonial" y se empezó a explorar
de inmediato, localizándose restos cerámicos y
arquitectónicos coloniales y en algún caso, mo-
dernos. En la porción sur de este predio se llegó
a niveles prehispánicos, encontrándose parte de
la escalera que va de norte a sur y con su fachada
hacia el poniente.

Se continúa con la clasificación cerámica y


con los trabajos de consolidación en toda el área
de excavación.

NOVIEMBRE, 79.

Durante el mes de noviembre se terminó de Se siguió consolidando la escalinata 2b que


excavar la ofrenda 31 y se empezó a trabajar en por cierto es la que se ha encontrado en peores
las paredes que dejó el colector de 1900, con el condiciones, quizá provocado por asentamientos
fin de dejarlas con apariencia de núcleo. El co- del núcleo. Se han encontrado en ella restos muy
lector también se empezó a tratar, ya que servirá pobres que indican que hubo alfardas centrales,
como paso para visitantes. Igualmente, se quita- pero en general faltan piedras y su estado es, en
ron los muros de contención que puso don comparación con las otras escalinatas, pésimo.
Manuel Gamio detrás de los tramos de escalera
de dos etapas constructivas excavadas desde Se empezó a abrir la cala junto a la piedra
1914, para darles el acabado tipo núcleo que se de sacrificios en el templo de Huitzilopochtli
viene colocado en el Proyecto. con el fin de ver varios aspectos: a) sistema con s-

46
tructivo; b) si existe una etapa más antigua y c) Se continuó con la localización de ofrendas
si hay ofrenda debajo de la piedra. Para esto se en el interior de los adoratorios de Tláloc y Huit-
seleccionó este sitio (lado norte de la piedra), zilopochtli. Así, se excavaron las siguientes
porque allí el piso se veía más deteriorado. Con ofrendas: 37, 38 y 39 en el interior del Templo
la cala pu,go verse cómo penetra la piedra en el de Huitzilopochtli y la 40 en el de Tláloc. Los
núcleo así como la existencia de una caja debajo detalles de los mismos y su contenido viene en
'de la piedra y algunos objetos (cuchillos) que los reportes correspondientes, sin embargo, que-
consideramos'como ofrenda 38. remos destacar el caso de las ofrendas 38 y 39,
ya que la primera era una ofrenda dedicada a la
En el templo de Huitzilopochtli también se piedra de sacrificio y colocada debajo de ella,
encontró la jamba del lado norte, la que se lim- consistente en cuchillos de sacrificio. La 39 fue
pió y fue atendida por los restauradores, trasla- interesante, ya que posteriormente se radiografió
dándose los restos de madera para su tratamien- la vasija de tecali que contenía huesos cremados
to al taller de conservación. con el fín de ver si entre los huesos venía algún
elemento. El resultado fue positivo y se detectó
En la zona 2 (parte posterior del Templo un cascabel de oro y dos pequeñas placas de pie-
Mayor) se continuó excavando encontrándose dra verde. En general, las ofrendas encontradas
restos de uno de los pisos de la última época, así en el interior de éstos adoratorios nos siguen
como la escalinata de lo que pensamos sea el re- confirmando que posiblemente ésta época cons-
cinto ceremonial. Otro hallazgo fue el de cabezas tructiva es anterior a la liberación de Azcapot-
de serpiente en piedra reutilizados en elementos zalco, es decir, antes de 1428.
coloniales.

Por otra parte, se empezó a demoler el edi- Se continúa excavando la cala al norte de
ficio moderno de Justo Sierra 11, para dar salida la piedra de sacrificios, para ver si hay otra etapa
a esa calle, adquiriéndose los lotes de Justo Sie- más antigua. Esta es la que permitió excavar la
rra 11, 13 y 15, lugar este último en que se insta- ofrenda 38 ya mencionada.
larán provisionalmente las oficinas del Proyecto
y poder desmantelar el Museo Etnográfico.
Fue localizada la ofrenda 41 de la etapa de
DICIEMBRE, 79.
Coyolxauhqui, del lado de Tláloc, y a la parte
media frente a la escalinata, la cual empezará
Durante este mes se continuó con la demo- a excavarse en el transcurso de enero.
lición del edificio No. 11 de Justo Sierra, alIado
norte del Templo Mayor, el cual deberá quedar También durante este mes se terminaron
totalmente demolido a principios del próximo los muros de contención junto al colector de
mes de enero. 1900, el cual será adaptado como paso peatonal.

47
En la zona 2 (parte posterior del Templo 2 DE FEBRERO A 29 DE MARZO, 80.
Mayor) se continúa excavando y liberando el
área de cañerías y muros recientes y coloniales, Durante estos dos meses se terminaron de
con el fin de llegar al nivel prehispánico, que ya excavar diversas ofrendas, como la 41 (lado de
fue encontrado debajo de la banqueta norte de Tláloc) que aportó datos interesantes. También
la calle de Guatemala, donde salió la escalinata se excavaron las ofrendas 43, 44, 45, 46 Y 47,
que corre de norte a sur y que pasamos es ellí- todos debajo de los pisos o en el relleno que cu-
mite del recinto ceremonial. Esta escalinata con- brió la etapa mejor conservada hasta el momen-
tinúa siendo consolidada. to, o sea la de los adoratorios (etapa 11).

Los trabajos de restauración continúan tan-


to en campo como en laboratorio, así como los
estudios de cerámica prehispánica y colonial.

ENERO, 80.

Este mes se caracterizó fundamentalmente


por la excavación de diversas ofrendas y la colo-
cación 'de los muros de contención de las distin-
tas escalinatas que dan al colector de 1900,
además de la terminación del pasillo que servirá
de mirador de la segunda etapa constructiva,

En el caso de las ofrendas, una de las más


interesantes fue la ofrenda 41 localizada frente
a la mitad de la escalinata de Tláloc (etapa de
Coyolxauhqui), la que consistió en una caja de
tezontle con su tapa, colocada esta caja en el in-
terior de una cista. El contenido de la caja fue
variado y abundante en elementos relacionados
con el agua, como son: caracoles, figuras de ser-
pientes, peces de concha nácar, dos canoas de
piedra con sus remos, dos máscaras del área de
Guerrero que son las dos más grandes hasta
ahora encontradas, etc ...

Otras ofrendas fueron localizadas en el inte-


rior de los adoratorios de Tláloc y Huitzilopoch-
tli, o sea que se trata de las ofrendas más anti-
guas del área en estudio. Se prosiguió con la ex-
cavación de la cala junto a la piedra de sacrifi-
cios, habiéndose localizado restos de una etapa
anterior consistente en un piso y dos escalones,
por lo que hemos asignado el número 11a la eta-
pa de la piedra y los adoratorios.

Se continúa adaptando el colector de 1900


como paso de peatones así como los muros de
contención de las diversas etapas constructivas
que afectó la construcción del colector,
48
Otro trabajo interesante fue el de terminar grandes losas sobre el que se encuentra un gran
los muros de contención (especialmente junto a relleno formado por varias capas muy duras y
Coyolxauhqui) para liberar el colector de 1900 compactas que seguramente corresponden a los
que será adaptado como paso peatonal, respetan­ rellenos para dar solidez a las últimas etapas
do así esta obra y dándole una utilidad inme­ constructivas.
diata.
I o DE ABRIL A 31 DE MA YO, 80.
Se empezó a desmontar el Museo Etnográ­
fico en el lado sur de las excavaciones, iniciando Durante los meses de abril y mayo se con­
de inmediato las excavaciones en el lugar. Tam­ tinuaron trabajos iniciados en los meses anterio­
bién se iniciaron trabajos de excavación en el la­ res tanto de excavaciones como en demoliciones
do norte encontrando restos de cuartos con re­ y adapatación de pasillos en la zona.
lleno moderno.
Entre los trabajos de excavación tenemos
En la zona 2 (parte posterior del Templo primeramente los que se desarrollarían debajo
Mayor) se continuó la consolidación de la esca­ de donde se encontraban las oficinas y el Museo
linata y piso que corresponden al gran recinto Etnográfico (Seminario 4), encontrándose pri­
ceremonial. Se extendieron las excavaciones ha­ meramente los cimientos modernos y algunos
cia el norte encontrando otros tramos de escale­ rellenos coloniales, entre ellos dos arranques de
ra así como una serpiente enrrollada policroma­ columnas y llegándose a niveles prehispánicos
da que fue atendida de inmediato por los restau­ como la sucesión de pisos muy compactados y
radores. También se encontraron nuevas escultu­ que corresponde a una de las últimas épocas
ras de Tláloc y se continúa excavando el piso de constructivas, además de “clavos” , algunos con
forma de cráneo. También en estos meses se si­
guió trabajando en el patio posterior del Templo
Mayor, en la liberación precisamente de este piso
compacto, habiéndose obtenido cuatro nuevas
ofrendas ubicadas en el relleno de estos pisos
y a las que corresponden los números 49, 50, 51
y 52, caracterizados por la presencia de cuchi­
llos, caracoles, y en algún caso pequeñas escultu­
ras de flautas y de dioses viejos. Se empezará a
resanar este piso de lajas quitando la tierra entre
piedra y piedra y uniéndolas con cemento.

Se continuó adaptando el colector para el


paso de los múltiples visitantes a la zona y se
hacen los múros de contención de las partes que
dan al colector de la sección posterior del Tem­
plo Mayor.

En cuanto a las demoliciones, se siguen ha­


ciendo en los edificios modernos que están en
los números 5 y 7 de Argentina, lo que permitirá
excavar el lado norte del Templo Mayor.

Durante estos meses se preparó el material


con el catálogo correspondiente para la exposi­
ción en Bellas Artes, la que se inauguró el 11 de
mayo por el C. Presidente de la República, Lic.
José López Portillo.

49
JUNIO,80.

Con la demolición del edificio moderno


ubicado en Argentina 5, se pudo empezar a ex-
cavar la parte norte de las diferentes etapas cons-
tructivas del lado de Tláloc, encontrándose parte
de la escalera, la alfarda y la cabeza de serpiente
del extremo norte, la que se encontró en perfec-
tas condiciones y con restos de pigmentos rojos,
azules, ocres y blancos, los que de inmediato em-
pezaron a tratarse por el equipo de conservación.
Al mismo tiempo se continuó la demolición de
Argentina No. 7, que pensamos sería el último
edificio en demolerse sobre esta calle, pero a
principios de este mes, el edificio No. 9 sufrió un
desplome en la mitad de su fachada principal,
provocada por lfl descarga de libros de la parte
posterior del inmueble, que servía de bodega.
Varias toneladas fueron extraidas, lo que causó
problemas estructurales que repercutieron en la
fachada principal, que ya de tiempo atrás estaba
resentida. Este derrumbe causó inestabilidad en
todo el inmueble así como en el de Argentina
No. 11, que según los peritos también deberá de-
rrumbarse, ya que está visiblemente inclinado
hacia la calle de Justo Sierra.

Se continuaron las excavaciones en el lado


sur, donde se ubical1a el Museo Etnográfico, y se
empezaron a colocar los muros de contención
para sostener la fachada sur de la etapa IV.

En la zona 2 se empezó a excavar en el ex-


tremo norte del patio de lajas posterior al Tem-
plo Mayor y se continuó la consolidación de este
piso, con lo cuál quedaron concluidos los traba-
jos en esta zona por parte del Arqlgo. Contreras,
y se reanudarán posteriormente cuando se hallan
retirado los edificios de Guatemala No. 49 y 51.

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so
JULIO 1980

Durante el presente mes pudo excavarse


del lado norte del Templo de Tláloc en las dis­
tintas etapas constructivas, habiéndose liberado
totalm ente la cabeza de serpiente de la alfarda
norte de la etapa de Coyolxauhqui, la que ve­
nía siendo tratada por los restauradores, ya que
tiene restos de pigmento rojo, azul y ocre. Muy
cerca ésta cabeza, al norte de la misma, se lo­
calizó un pequeño altarcillo con fachada hacia
el poniente el cual termina en su extremo nor­
te en una escalera que da vuelta hacia el ponien­
te y con su orientación hacia el sur, equivalen­
te a la encontrada por don Manuel Gamio al
extremo sur de la fachada del Templo Mayor.
Detrás de éste altarcillo se localizó la ofrenda
48 consistente en una cista de piedra. Las alfar­
das y escalones encontrados en las distintas
etapas constructivas empezaron a consolidarse
de inmediato.

En el arroyo de la calle de Seminario se


iniciaron los trabajos de excavación con el fin
de localizar las plataformas sobre las que se
asienta el Templo Mayor, aprovechando por
ello el hallazgo en 1933 del Arq. Emilio Cuevas,
consistente en una alfarda muy elaborada y
parte del muro de la plataforma de una de las
últimas etapas constructivas.

En el lado sur del Templo Mayor, se ex­


cavó la parte donde se encontraba el Museo
m
y .~ | -
Etnográfico, previa cuadriculación del área,
encontrándose el nivel colonial y las lajas del
piso de la última etapa constructiva.

51
También en el lado norte se han excavado
y consolidado las alfardas de las diferentes
etapas constructivas, encontrándose en muy
buen estado de conservación. Igualmente se em-
pezó a excavar lo que faltaba del Templo más
antiguo encontrado (etapa III).

En el lado sur se siguió excavando justo


al edificio de Seminario 6 y en el Templo
Rojo, a la vez que se extraía el relleno original
a un lado de la ofrenda 7, con el fín de liberar
una parte más amplia del gran basamento en
que descansa la cabeza de serpiente y los dos
braseros con moños del lado sur.

En el ángulo SE del Templo Mayor y


frente a¡ lo que fue la Preparatoria No. 2, se
continuó excavando, encontrándose muy cerca
de la calle de Lic. Verdad restos de pintura
mural sobre aplanado de lodo, la que se proce-
dió de inmediato a atender por el equipo de
restauración.

Se continúa con el tratamiento de objetos


Un aspecto interesante durante este mes en el taller de conservación y con el dibujo
fue que se contihuó con la demolición de los de ofrendas, ad~más del control fotográfico
edificios de Argentina 9 y 11 así como la crujía correspondiente.
que quedaba en Justo Sierra 11 y 13, además de -"""':7:-:;¡-:~~
empezar la demolición de los edificios de Guate-
mala 49 y 51, con lo cual tendremos prácti-
camente toda el área disponible para la excava-
ción del Templo Mayor y de una parte del
recinto ceremonial de Tenochtitlán.

AGOSTO 1980

Durante el mes de agosto se incrementaron


las excavaciones en diversos sectores del Templo
Mayor. En la calle de Seminario se continuó
excavando y salieron ductos y cañerías tanto
coloniales como modernas, consolidándose los
restos de la plataforma excavada por Emilio
Cuevas en 1933. Sin embargo, en donde se ha
trabajado intensamente es en toda la fachada
norte del Templo Mayor, localizándose varias
ofrendas (48, 53, 54, 55, 56), siendo muy
interesante la primera de éstas, que contenía
hasta 11 esculturas de piedra representando a
Tláloc decorados con pigmentos azules, ocres,
rojos, etc... además de gran cantidad de res-
tos óseos humanos. Las demás ofrendas, al igual
que ésta, están en proceso de excavación.
52
SEPTIEMBRE 1980 >
Durante este mes se continuó excavando
en diferentes secciones del Templo Mayor. En
la fachada principal, se localizaron los ductos
modernos de teléfonos, tuberías, etc., debajo
de la calle de Seminario, frente a la excavación
de 1933 de Emilio Cuevas. Sin embargo, el área
en que se concentran más intensivamente las
excavaciones en el lado norte del Templo
Mayor, donde se excavan las diferentes etapas
constructivas, localizándose varias ofrendas en­
tre los rellenos de una y otra. Así tenemos
que, con las ofrendas en proceso de excavación
y las nuevas, hacen un total de 5 ofrendas (48,
5 4 ,5 5 ,5 6 ,5 8 ).

La ofrenda 48 se encuentra en el interior


del pequeño altarcillo que está al extremo
norte de la plataforma de Coyolxauhqui, y
contenía 11 esculturas policromadas del dios
Tláloc y debajo de ellas los restos óseos de
infantes. En este mes se procedió a dibujar
los niveles No. 3 y 4 y los cortes respectivos,
así como a la extracción de las esculturas men­
cionadas, los que recibieron tratamiento in situ La ofrenda 54 se localizó inmediatamente
por parte de los restauradores. al norte de la anterior, y en los dos primeros
niveles se encontraron ocho cuentas de piedras
verdes en el centro de la cista, así como hue­
llas de una pluma de ave y una hoja vegetal.
De los 67 cms. de profundidad en adelante
se nota huellas de cremación.

En el caso de la ofrenda 55, se encontró


con el relleno que cubrió la etapa II (lado
norte), consistente en una caja de piedra que no
contenía ningún objeto en su interior, por lo
que tomaron muestras de tierra ya que pudiera
tratarse de una ofrenda vegetal.

La ofrenda 56 también es una caja que


contenía una olla azul con la efigie del dios
Tláloc en reheve, similar a la encontrada en la
ofrenda 21. Se continúa excavando, al igual
que la 58.

En la fachada sur, se empezó a quitar el


entortado o relleno de la última época, con el
fin de dejar visible la plataforma de la etapa V,
encontrándose el sistema constructivo que se
utilizó para la última etapa, consistente en di­
versos conjuntos de pilotes que sirvieron de
cimentación para el edificio.

53
En el lado sur, se siguió la excavaClOn
del Templo Rojo, hallándose los taludes norte
y sur bien conservados, especialmente éste
último, que por la inclinación que tiene en
este lugar el piso enlajado del recinto ceremo-
nial, se conservó a una altura mayor, por 10
que puede verse el talud y parte del tablero,
sobre el que hay motivos de pintura mural,
posiblemente brazos o garras de felino.

En las excavaciones del lado SE, donde se


encontraban los edificios que formaban la es-
quina de Guatemala y Lic. Verdad, se encontró
la ofrenda 57 consiste en una serie de cuchillos
y otros objetos de piedra, frente a la fachada
••de un altar cuyas alfardas están siendo consoli-
dadas, ya que por el tiempo habían sufrido
aberturas de consideración .

.Al norte del Templo Mayor también se


excava, para 10 cual fue necesario remover los
cimientos de varilla y concreto del edificio
que estaba en la esquina de Guatemala y Justo
Sierra, encontrándose inmediatamente debajo
un patio colonial con los arranques de las co-
lumnas (5 en total hasta el momento) que es-
tán alineadas de este a oeste. Cerca de la esqui-
na antes mencionada empezó a salir una esca-
linata con sus dos alfardas, que está orien-
tada hacia el sur.

Se continúa con los trabajos de restaura-


ción en~oda el área de excavación así como
en laboratorio, y también con el control de los
objetos procedentes de las ofrendas.

OCTUBRE 1980

En la plataforma de la fachada principal


se continuaron los trabajos de quitar los ele-
mentos modernos y coloniales (tuberías, ductos,
etc.) previo plano, y se prolongó la excavación
al norte de la alfarda excavada por el Arq.
Cuevas, encontrándose la escalinata en buenas
condiciones, así como la esquina sur de la pla-
taforma.

Por otra parte, las fachadas del lado norte


del Templo Mayor siguen siendo liberadas y con-
solidadas localizándose restos policromados del
brasero así como el cuello de la serpiente que
S4
marcan la mitad del edificio del lado norte. Al La ofrenda 56 consistió en una caja que
pie de elementos, en el relleno que cubrió ésta contenía una olla de color azul con el rostro del
etapa constructiva (IV), se encontró una caja dios Tláloc en relieve y en su interior conchas
de ofrenda que se denominó ofrenda 61, que marinas.
es igualmente a la No. 7 encontrada alIado sur.
En cuanto a la excavación de las otras ofrendas, La ofrenda 58 se empezó a excavar en este
tenemos que la 48 sigue conteniendo restos mes, previa ubicación de la misma dentro del
óseos en abundancia (hasta el momento con plano general, localizándose bajo el piso del
20 cráneos humanos) además de costillas y descanso de la plataforma de la etapa de Coyol-
huesos largos. También aparecen cuentas de xauhqui (lado norte). Se obtuvo el primer nivel,
piedra verde. La ofrenda 54, por otra parte, que contenía caracoles, una máscara-eráneo), un
fue excavada hasta el piso de la misma, el cual ciervo de alabal)i.ro, un dardo de alabastro y
se encontró a 90 cms. de profundidad. En la una figura serpentina del mismo material,
esquina SO de la caja se exploró una canoa, caparazones de tortugas, conchas, etc ... conti-
un atado formado por un remo, el atlal y un nuándose la excavación.
arpón tridente. Todos estos objetos estaban
elaborados en una masa blanca que se envió
Una hallazgo interesante realizado sobre
para su análisis al laboratorio de Prehistoria. la plataforma del lado norte, cerca de la esqui-
Otros objetos fueron cuatro flautas o represen-
na NO de la misma, fue el de varias lápidas
taciones de ellas, ya que los agujeros solamente
policromadas similares a la banqueta de gue-
están simulados, un brasero trípode miniatura,
rreros que describe Beyer, y que nunca se dió
un disco de cerámica en espiral y bolsas de
su ubicación. Ahora podemos saber su locali-
copal, además de dos pulseras de cuentas verdes. zación que estaban como relleno y no en su
Sobre el piso, se pudo rescatar un fragmento lugar original.
de tela. Se procedió a levantar el plano res-
pectivo.
En cuanto a la fachada sur, se terminó
de liberar buena parte del muro de la plata-
forma de la época V, y se continuó excavando
el Templo Rojo, además de la intervención
inmediata de los especialistas en restauración
para tratar los murales del mismo. Hacia el sur
de éste templo, desde el mes anterior se había
localizado un muro que pertenece a otros edi-
ficios, el cual se excava para definir sus carac-
terísticas.

En las excavaciones del lado SE, se encon-


tró una ofrenda (60) exactamente en la esquina
de la plataforma de la época IV, dentro del
relleno que la cubrió. Por otra parte, se continúa
la excavación del área hasta la calle de Lic.
Verdad, habiéndose detectado la ofrenda No.
59.

En el lado norte (sección 3) se sigue la


excavación de los dos templos cuyas alfardas
son similares y de la misma época (penúltima),
a las encontradas por Emilio Cuevas en la pla-
taforma de la fachada principal, 'con la parti-
cularidad que el templo que va hacia el ponien-
te tiene a mitad de las alfardas cabezas de águi-
la que aún guardan su pigmento original. Las

55
alfardas de ambos templos muestran en la par- rior del Templo dedicado a Tlá10c. Del la-
te baja sobre el piso de lajas, restos del cuello do de Huitzilopochtli, enfrente de la escalina-
de 10 que debieron ser serpientes. A mitad de ta que conduce al adoratorio de este dios,
cada templo y frente a la escalinata, se encon- tenemos una lápida de 2.50 mts. de largo deco-
traron ofrendas denominadas A y B, consis- rada con serpientes que forman parte del cuar-
tentes en cuchillos y figuras de copa!. to escalón de la plataforf'1r'

ENERO-OCTUBRE DE 1981

FACHADA PRINCIPAL

Etapa IV.-

Se trata de la penúltima etapa constructi-


va que había sido excavada en una de sus alfar-
das por Emilio Cuevas en 1933. Se encuentra
debajo de la calle de Seminario y consiste en
una escalinata de la plataforma con una alfar-
da muy elaborada y el muro que corre de N-S
y que forma la esquina SO de la plataforma.
En este muro tenemos tres cabezas de serpien-
te empotradas y otra más en la parte sur del
muro. Se encontró el piso formado por losas
de cantera rosa, similar a uno de los pisos del
patio del lado norte.

Parte de la plataforma fue destruida por


una tubería grande que va de N-S y que desagua
al colector de 1900.

Plataforma de Coyolxauhqui.-

Uno de los hallazgos importantes fue el


de liberar en su totalidad la plataforma de la
etapa IVb o de Coyolxauhqui, para 10 cual
fué necesario hacer el levantamiento en plano
y cortes de los restos de otras etapas que cubrie-
ron a ésta para poder removerlas, logrado lo
cual se encontraron elementos escu1tórico-
arquitectónico interesantes, que describimos a
continuación.

Esta plataforma que tenía una escalinata


corrida, en cuyos extremos se han encontrado
enormes serpientes cuyo cuerpo ondulante
remata en grandes cabezas que aún conservan
algo del pigmento original que las cubría. La
escalinata de la plataforma sólo está interrum-
pida por un altarcillo con dos ranas que des-
cansan sobre los pequefios dados del mismo.
Este eiemento se encuentra en eje con la mitad
de la escalera que conduce a la parte supe-
56
57
El basamento formado por los restos de En esta plataforma se encontraron varias
las dos escalinatas que conducían a la parte ofrendas, algunas alrededor de Coyolxauhqui,
superior, consta de cuatro cabezas de serpiente: otras en medio de las dos cabezas de serpiente,
dos en sus extremos y dos en medio que marcan y otras a la mitad de la escalinata de lláloc,
la unión de ambos edificios. A la mitad de la todas ellas debajo del piso de la plataforma y
plataforma del lado de Huitzilopochtli se apa- solamente las cámaras 1 y 11 se hallaron detrás
reda la Coyolxauhqui, monumental escultura de los escalones en la mitad exacta de cada
en piedra que representa a la hermana de Huit- uno de los edificios. A los extremos norte y
zilopochtli, con quien combate en el cerro de sur se encontraron aposentos con pisos de már-
Coatepec. mol de colores, además, en el lado norte había

58
59
un altarcillo con su pequeña escalinata, dentro Fachada sur y Templo Rojo.-
del cual se encontraron dos ofrendas: una con
más de 35 cráneos y huesos de niños, y debajo
de ésta lo que denominamos cámara III, ambas Se excavó el relleno que cubría la plata-
dedicadas a Tláloc. forma de la etapa IV, desde el lugar en que se
encuentra el conjunto con braseros y cabeza de
Fachadas norte del Templo Mayor.- serpiente hasta la esquina SE de la misma, hasta
llegar al piso de lajas. En este trabajo se locali-
Se excavaron las fachadas del lado norte zaron diversas ofrendas como la 60, 62 Y 82,
de las diferentes etapas constructivas, encon- ésta última consistente en dos máscaras, una
trándose todas ellas en buen estado y con ca- de ellas Teotihuacana con incrustaciones en
racterísticas similares a los ya encontrados en ojos y dientes de concha.
el lado sur. Por ejemplo, en la platafOlma de
la etapa IV se encontraron restos de los bra- En cuanto al Templo Rojo, se consolidó
seros y el altarcillo en que descansaba la cabeza en su totalidad y se excavó la ofrenda de su
de serpiente que marca la mitad del edificio, parte superior, (78), consistente en instrumen-
y al pie de este conjunto una ofrenda similar tos musicales (esculturas) así como grandes
a la ofrenda 7 del lado sur. Todos los muros cuchillos de piedra y otros elementos.
de las etapas fueron consolidadas de inmediato
y se procedió a hacer los muros de contención
Al ampliar la excavación hacia el sur de este
respectivos, con el fin de dar solidez a los para-
templo, se encontró parte de un basamento
mentos originales.
con su esquina, y la parte interior del mismo.
Consistente en banquetas decoradas que aún
Del muro de la plataforma de la penúl-
conservan restos de policromía. No se pued~
tima etapa (IV) hablaremos en lo correspondien-
extender más la excavación ya que muy cerca
te al patio norte.
están los edificios actuales colindantes.

Parte posterior del Templo Mayor.-

Se continuó excavando en este sector,


encontrándose hacia .el lado sur- un conjunto
de altarcillos y de habitaciones algunos de los
cuáles tienen pintura mutal. Se -aprovechó
para consolidar el tramo de colector de 1900
que pasa por aquí, así como los muros de los
edificios que fueron cortados por este colector.

60
Un hallazgo interesante lo constituyó,
en la parte más oriental de la excavación, un
caracol similar al ya conocido y que se encontró
tirado deJltro del nivel freático, pero con carac-
terísticas que permiten suponer que se encon-
traba originalmente en la parte superior de
un altarcillo, que se encuentra junto a una es-
calinata que corre de N-S.

Patio Norte

Excavamos en su totalidad el relleno de


tezontle que llenaba el espacio entre el muro
norte de la últiILa época constructiva del Tem-
plo Mayor y la gran plataforma a que se adosan 2.- Basamento de las águilas.-
la escalinata norte y de las águilas.
La escalinata del basamento de las águilas
1.- Edificio norte.-
fue nombrada así por las dos cabezas de águi-
la, policromadas, que muestran las alfardas
La escalinata norte, que se adosa al muro hacia su parte central. Esta escalinata se adosa
de la plataforma ubicada en el extremo norte a un muro de la plataforma y esta orientada
que corre de este a oeste, consta de 10 escalo- hacia el poniente y que corre de norte a sur,
nes, los dos últimos muy destruidos; y está después de hacer esquina con el muro norte
flanqueada por dos alfardas que muestran una a que se adosa la escalinata norte. Es idéntica
moldura en forma de moño a la altura del 40 en tamaño y forma a la escalinata norte, excep-
y 50 escalón. La alfarda Este muestra en su
desplante restos de una espiga con restos de ~ l1!Jt 'i.~
/"
, .~~~ ;\\r,lft' ,..

!J.
pintura amarilla con trozos que podrían repre-
,1 t:1 r
sentar escamas; en la alfarda oeste muestra
una huella a la que tal vez se adosa una espi-
ga similar. Ambos debieron ser parte del cuello
de cabezas de serpiente que adornaban la parte
baja de las alfardas. La escalinata ve al sur, lo
mismo que el muro al que se adosa, prúlon-
gándose éste último hacia el oeste, por debajo
de la calle de Argentina.

61
a oeste, diferentes las de una hilada a las de la
otra, no obstante de correr paralelamente.
En la hilada más al norte que fue la que sur-
gió primero, había una Sa. base de columna
sobre la alfarda norte de la escalinata de las
águilas, por lo que nos vimos obligados a remo-
verla para descubrir la mencionada alfarda.

En el extremo este de la plataforma se


practicó una excavación en una zona donde
faltaba el piso; encontrándose bajo el nivel
colonial un piso prehispánico de estuco, con una
serie de vasijas adosadas una con la represen-
tación de un lláloc, además de un friso de
to por la presencia de las cabezas de águila y piedra muy policromado, con representación de
porque solo cuenta con 9 escalones. En la base guerreros y de serpientes. El friso desplanta del
de sus alfardas muestra también restos de arran- piso de estuco y se orienta al norte. Además
que de posibles cabezas, muy destruida la norte. apareció una alfarda y pequeñas plataformas
La sur tiene restos de color amarillo y diseño de base cuadrada, cuya función no hemos acla-
como de escamas. rado.

El muro al que se adosa esta escalinata hace 3.-Piso de lajas.-


esquina con el muro más largo de la plataforma,
que corre de oeste a este (orientado al sur), El piso sobre el que se desplantan los mu-
con un largo aproximado de 31.40 mts., y ros a que se adosan las escalinatas y el muro
muestra en su límite oriente, una esquina norte del Templo Mayor, tiene hasta 4 super-
I
con otro muro, que corre de sur a norte y ve
al oriente, a lo largo de 20.50 mts., pero al
parecer continúa hacia el norte por debajo del
límite de nuestra excavación. Todos los muros
de la plataforma están ligeramente inclinados
y están aún estucados; la parte superior de
ésta muestra una destrucción irregular, tenien-
do en sus partes menos destruidas una altura
máxima de 2.50 mts. a partir del piso de lajas
del que desplanta. La parte superior de dicha
plataforma fue inicialmente destruida por los
mexicas, ya que el piso de lajas más alto que
limitaban al muro norte del Templo Mayor,
pasaba por encima de ésta, pero las intrusiones
coloniales y modernas aumentaron su deterioro
en época posterior.

Sobre la plataforma a que se adosa la es-


calinata de las águilas, encontramos en el nivel
colonial, después de levantar los pisos de mo-
saico de las casas que ocupaban el área y de
demoler numerosos cimientos de concreto, una
serie de muros de pisos de lajas y de lozas y
zonas con cantos rodados, siendo lo más sobre-
saliente, dos hiladas de bases de columnas,
con 4 columnas cada hilada en dirección este

62
posiciones que aumentan su altura hacia el sur tura en la zona más alta desplantada del ler
en la medida en qut, se acercan al muro norte, piso de lajas y a la altura de 2.85 mts. encon-
provocando un desnivel de la palza de sur a tramos restos de una banqueta; o sea que en un
norte. Ello de estos pisos, el más profundo, momento dado sobre su banqueta o platafor-
es de lajas irregulares; el 20, que en parte cubre ma se volvió a elevar su altura. A partir de su
al anterior, es de lozas de cantera rosa de gran esquina NE, mide 72.30 mts. de largo, pero
tamaño, casi rectangulares, con algunas lajas. no conocemos aún su esquina NW.
El 30, es de lajas irregulares; y el 40 lo cons-
tituyen algunos grupos aislados de lajas. :Nin-
guno de estos pisos cubre actualmente la zona
5.- Adoratorios A, B Y c-
en su totalidad razón por la cual pudimos co-
nocer todos los niveles. En la zona comprendida entre el muro
sur de la plataforma y el muro norte del Templo
Observamos que las escalinatas desplantan Mayor, encontramos los restos de 2 estruc-
del 3er. nivel, mientras que la plataforma des- turas alineadas, una al oriente de la otra, que
planta del 10., por lo que podemos deducir consistían en una pequeña plataforma rectangu-
que ésta es más antigua que aquellas. lar con restos de una alfarda y 2 escalones orien-
tadós hacia el poniente. En la estructura más
En la zona al sur de la escalinata norte, occidental falta el muro oriente que sería la
el piso de lajas no aparece, por lo que sondea- parte posterior, y la alfarda que limitaría al
mos el terreno y encontramos un canal, infe- sur los 2 escalones de los que solo queda la
rior a los 4 niveles de pisos, que corre de este mitad norte. La estructura que se ubica al
a oeste, y al parecer se prolonga por debajo oriente de la anterior, si muestra restos de los
de la escalinata de las águilas; no estaba cu- 4 muros de su plataforma y en la zona ponien-
bierto por lajas o algún otro elemento, y supo- te muestra solo la alfarda norte y parte del lo
nemos que pudo haber servido para recoger escalón adosado a esta. Estas estructuras des-
el agua de lluvia que caía en la plaza. Sus dimen- plantan del lecho de tezontle y mezcla a una
siones son: 0.35 mts. de ancho por 0.40 mts. altura aproximada de 1.50 mts. sobre el 30
de profundidad. piso de la zona.

4.-Muro Norte del (remplo Mayor.- En el muro oriental de la estructura más


\ oriental, encontramos dos hiladas de cráneos
tallado en piedra y estucados, empotrados en la
El muro norte del Templo Mayor muestra pared; la inferior con 9 cráneos y la superior
3 cabezas de serpiente empotradas en esta zona con 3; rompimos el piso de lajas de que des-
y se prolonga por debajo de la calle de Argen- plantaba esta estructura, para descubrir que
tina. La destrucción de su parte superior es las hiladas de cráneos son 7 en total, las 5 in-
muy irregular, llega a medir 3.30 mts. de al- feriores con 16 cada una, y forman la parte

63
central del muro oriental de una subestructu- éstas con una moldura similar a la de las es-'
ra que sí desplanta del 3er piso de la zona. calinatas norte y de las águilas, y se conservan
Los muros norte y sur de la estructura muestran solo 3 escalones y la huella del 40.
también 5 hiladas superiores, muestran una
línea roja horizontal que nos atraviesa a la al- Bajo la estructura que se encuentra al
tura del frontal o de los pómulos. (Una línea poniente de la anterior, encontramos una subes-
similar encontramos en las alfardas de las estruc- tructura contemporánea a la de los cráneos,
turas superiores y en las de las alfardas de las que desplanta también del 20 piso. A esta es-
escalinatas de la plataforma, así como en al- tructura se le denominó A y B a la de los crá-
gunos de sus muros, aproximadamente 0.10 neos.
mts., sobre el piso).
Esta estructura A muestra 2 escalinatas,
El muro poniente de esta estructura de los una al oriente y otra al poniente, ambas flan-
cráneos muestra una escalinata con alfardas, queadas por alfardas la que ve al poniente mues-
64
tra 6 escalones y la del oriente solo 4, la alfar­ tura A, encontramos otra estructura que se
da de ambas escaleras remata a la altura del denominó con la letra C; se trata de un adora-
4o escalón en un muro vertical. Detrás de la torio con basamento más o menos cuadrado
escalinata oriental, a 0.61 mts. de distancia, de muros en talud, con una escalera al oriente,
encontramos otra escalinata con alfardas, desplantado ésta de una plataforma que mues­
orientadas también al poniente; se observan tra en su centro un altar circular, y al norte
solo sus tres escalones superiores, ya que yten­
al sur muros policromados en rojo y blanco,
dríamos que remover la extetna para descu­ con molduras que contienen: 9 anillos rojos
brir la interna; pero pensamos que puede tra­ en el muro norte, y 10 en el sur.
tarse de otra estructura interna y por consi­
guiente anterior. Esta estructura es similar al templo rojo
de la zona sur, en sus características formales
Hacia el oriente de la estructura B o de y decoración de la plataforma de acceso. El
los cráneos, y en línea con ésta y con la estruc­ Templos del sur ya no tiene sus anillos por es-

65
tar más destruido que el del norte, pero se con-
serva la huella y restos de algunos; y la decora-
ción del basamento del templo sur, parece si-
milar a la de su plataforma de acceso, en tanto
que la de este templo norte es diferente, mues-
tra ojos celestes y elementos marinos como
caracoles. La posición de ambos templos es
simétrica respecto al Templo Mayor, pero el
del norte está más cerca del muro norte del Tem-
plo Mayor, que la del sur del muro sur. La es-
calinata del Templo C muestra 3 escalones, con
un gran peralte de 0.45 mts. su parte superior
fue destruida por los aztecas, y muestra la in-
trusión de un cimiento de concreto en direc-
ción N-S, también en la parte superior.

6.- Parte posterior del basamento de las águilas.-

En la zona nororiental de esta sección,


frente al muro oriente de la plataforma, exca-
varnos el nivel moderno y el colonial, encon-
trando bajo éste último una serie de pisos de
lajas a diversos niveles y enclavados en el piso
de lajas del que desplanta la plataforma, que es
el 30 de toda la zona una serie de pilotes de
madera que pueden haber servido como sopor-
te de uno de los pisos de lajas. El nivel freá-
tico cubre en parte este suelo, que muestra
un declive hacia el NE. El límite oriente de
esta zona se encuentra aproximadamente a
21.20 mts. hacia el este del muro este de la pla-
taforma.

7.- Ofrendas del lado norte.-


", ..~
Las ofrendas encontradas en esta zona
norte se denominaron con letra, para diferen- ,.! ,'"

ciarse de las que aparecieron en el Templo Mayor,


que se nombraron con número, aparecieron las
que siguen:

Ofrenda A.- Ubicada a la altura del 3er


escalón de la escalinata norte, en relleno.

Ofrenda B.- Ubicada a la altura del 3er


escalón de la escalinata de las águilas, en relleno.

Ofrenda C.- En caja de piedra, ubicada


en el relleno frente al muro oriente de la plata-
forma.
66
67
Ofrenda D.- Ubicada en el relleno, al Ofrenda H.- Ubicada bajo el piso superior
oriente del muro oriental del templo B o de los de la estructura B o de los cráneos, cerca de la
cráneos, se encontró en caja de piedra. escalera.

Ofrenda E.- Ubicada en el relleno de la Ofrenda 1.- Ubicada en el relleno frente


zona central entre las estructuras A y B. a la escalera poniente de la estructura A.
Ofrenda F.- Ubicada en el relleno del
Templo A de la doble escalinata, a la altura Ofrenda J.- Ubicada a la altura del ler
de 3er escalón de la escalera oriente. escalón del Templo Rojo o C; en relleno.

Ofrenda G.- Ubicada bajo el piso en la zona Ofrenda K.- Ubicada bajo el piso superior de
central entre las estructuras A y B. la estructura A, en caja de piedra.
68
69
Ofrenda L.- Ubicada a la altura del 3er frisos policromados con relieves de serpiente
escalón de la escalinata poniente del templo y de guerreros. (Estos dos últimos elementos
A; en relleno. no se encontraron en relleno, sino asociados
al piso del interior de la plataforma).
Ofrenda M.- Ubicada bajo el piso superior
del Templo Rojo o C, cerca de la escalera, en 8.- Restauración.
una caja de piedra.
Toda el área norte fue consolidada o res-
Ofrenda N.- Ubicada dentro del Templo taurada en su caso. El muro norte del Templo
B, bajo la ofrenda H. Mayor fue consolidado e inyectadas las partes
de estuco que estaban huecas, a la vez que
Se encontró también la ofrenda 84, entre se hacia el muro de contención d~ su parte
el muro norte de Templo Mayor, y la esquina posterior para darle solidez al mismo. Lo mis-
SE; se le denominó con número por su cerca- mo se hizo en el basamento de las águilas y en
nía al Templo Mayor, estaba contenida en una el edificio norte, en donde las cabezas de águi-
caja de piedra en el relleno. las se atendieron de manera especial por el
equipo de conservación, con el fin de proteger
Se encontraron una serie de elementos el pigmento original.
coloniales y prehispánicos en el relleno, entre
los que sobresalen: base cuadrada de granito En el caso de los adoratorios A, B y C, también
que muestra en su cara superior unas garras se hizo la limpieza de los elementos importan-
fragmentadas y en la inferior un relieve del tes (cráneos, murales del adoratorio C) así
monstruo de la tierra; lápida fragmentada con como su consolidación con Primal, además de
un recuadro grabado con el glifo '1 caña, que inyectar las partes huecas con Mowilith para
está fracturado; bloque de cantera en forma de unirla a su base original de piedra.
cubo con representaci~n en una de sus caras
de un personaje con la posición de Tlaltecuhtli Los restos de banquetas policromadas
y con ciertos atribtltos de Tláloc; gran laja en encontradas en el interior del basamento de las
forma de cuchillo con un listón rojo con mofio águilas también estuvieron sujetas a limpieza,
al centro, pintado en su parte media; escul- consolidación y fijación del pigmento, con-
tura en piedra negra de un Huehueteotl sentado tándose con la ayuda de estudiantes de la Es-
en flor de loto, con un -"brasero" circular de cuela de Churubusco. Actualmente se continúa
paredes rectas, que en su superficie muestra excavando en este lugar.
glifos relacionados con el agua, y en la parte
trasera de su tocado lleva el numeral 11 cafia; las ofrendas fueron atendidas cuando se
monolito en forma de cubo que tenía en su cara requirió para salvaguardar algún elemento im-
superior un relieve de Tlaltecuhtli con atribu- portante (corales, pigmentos, huesos) y trasla-
to de Tláloc y fue reutilizado como base octa- darlos al taller de restauración para su poste-
gonal de columna; vasija de Tláloc estucada; rior tratamiento.

70
Sección 2.

por: EDUARDO CONTRERAS S. Hay un marcado desnivel entre la superficie


PILAR LUNA E. de terrenos de la sección 2 con respecto a la de
Año de 1978. la sección 3. Esta última está a más de 2 M. arri­
ba de la 2, lo que hace suponer que los restos
El presente informe se refiere a los traba­ correspondientes a las estructuras, se encuentran
jos desarrollados en la sección 2, cuyo objetivo en la sección 3, en tanto que en la 2, quizá se
principal es el de descubrir la parte posterior de encuentran los pisos que, descubriéndolos hacia
las diferentes estructuras que tuvo el Templo el W., lleguen al desplante de los edificios. En
Mayor y los niveles a que se desplantan. trabajos a campo abierto, la mayor elevación del
terreno, corresponde a la cima del montículo,
Prácticamente las secciones 2 y 3 están en por lo que las trincheras que se excaven, deben
terrenos que ocupaba el estacionamiento de la partir de la superficie más baja y retiradas conve­
Sría. de Hacienda, separadas por un edificio en nientemente, avanzando hacia el cuerpo del
ruinas cuyo frente da hacia la calle de Guatemala montículo. Esta es la forma más apropiada para
y tenía el No. 50. (Foto 1). Su origen es de la iniciar una excavación, por lo que, en el caso
época de la colonia y ha tenido muchas altera­ particular de los trabajos que se iniciaron en esta
ciones posteriores tanto en la fachada, como en sección 2 del Templo Mayor, se consideró que el
el interior. (Fotos 2 y 3). Por lo pronto, las au­ cuerpo del montículo, se encuentra en la superfi­
toridades del Depto. de Monumentos Coloniales cie de mayor elevación y que por medio de las
del I.N.A.H. acordaron que se conservara en tan­ trincheras, se descubrirían los restos de los pisos.
to se decidía si se restauraba o se trasladaba a Las trincheras se trazaron más o menos en la
otro sitio, ya que por lo que a simple vista puede parte central del estacionamiento y después de
observarse, algunos de los elementos estructura­ levantar la carpeta de asfalto y la capa de con­
les correspondientes a las últimas épocas de la creto que servía de firme, empieza una capa de
pirámide, pueden estar debajo de dicho edificio. tepetate y después la tierra o el relleno. En la
V parte correspondiente a la trinchera central que
Respetando el acuerdo, se iniciaron los tra­ es la No. 2, después de levantar la carpeta de as­
bajos de la sección 2, el día 20 de marzo del pre­ falto, se descubrieron unas grandes losas de con­
sente año, trazando 3 trincheras de E a W, de 10 creto armado. Por las huellas que se notan en el
M. de largo por 2 de ancho, dejando un espacio alfalto una tiene 5.80 M. de largo por 3 M. de
de 4 M. entre una y otra. Lo primero que se ancho, otra es de 5 x 5 M. y hay algunas más. Al
hizo, fue levantar la carpeta de asfalto de cada principio de los trabajos, se desconocía la finali­
trinchera, que en partes alcanza un espesor de dad de estas losas; pero se aclaró que cubrían
mas de 20 cms. ya que los trabajos se iniciaron unos pozos a cielo abierto.
simultáneamente en las 3 trincheras. Después se
procede a excavar empezando de los extremos Fue materialmente imposible levantar las
Este de las trincheras y que es lo más indicado, losas por lo que fueron destruidas con la ayuda
puesto que se pretende localizar los niveles a los de una máquina retroexcavadora de gran poten­
que se desplantaron las estructuras en su parte cia, dejando al descubierto un armazón de ma­
posterior. dera que se puso con seguridad para sostener las
71
losas que se apoyaban en los extremos, en los Después de levantar el asfalto y las capas de
bordes de la excavación, la que se profundizó cemento y tepetat~, empiezan a descubrirse mu-
hasta 4.20 M. en que quedó al descubierto un pi- ros de la época colonial y los tubos de cemento
so de estuco en buen estado de conservación y del drenaje del estacionamiento, en un contexto
las huellas de unas contrucciones, eran altares. que es un relleno de cascajo (pedacería de ladri-
(Fotos 4 y 5). llos y otros materiales de construcción y tierra).
El material arqueológico en reducida cantidad es
Estos pozos se hicieron para ver la clase de de la época actual no significativo. Los muros
material que había en el subsuelo y si podía so- coloniales son de gran consistencia, hechos de
portar el peso de los vehículos y los movimien- mampostería, conocidos generalmente como de
tos de los mismos. Seguramente que ya no em- cal y canto y de un espesor medio de 0.60 M.
plearon el material extraído para rellenarlos, por Invariablemente debajo de estos muros, están las
lo que optaron por taparlos con grandes losas estacas o pilotes que emplearon para consolidar
muy resistentes. En las paredes de estos pozos, el terreno que por haber sido una zona lacustre,
se aprecian las grandes estacas o las huellas que era muy poco consistente. En otros casos, los
quedan y que funcionaban como pilotes para muros coloniales se desplantan de grandes y
compactar el terreno y desplantar los edificios. gruesas lajas de basalto. El nivel del desplante de
(Fotos 4 y S). Este sistema lo emplearon los az- los muros es muy variable. Cuando por la exca-
tecas con buen resultado y posteriormente los vación se empieza a descubrir los muros, dentro
españoles después de la conquista y destrucción del relleno que los cubre, el material arqueológi-
de los monumentos. Los altares descubiertos por co y se presenta en mayor cantidad, predomi-
medio de estos pozos, fueron parcialmente des- nando el de la época actual asociado al de la épo-
truidos y saqueadas las ofrendas si las tuvieron. ca colonial y posteriores, especiahnente la cerá-
72.
mica. También se encuentran objetos de madera, En relación con los elementos descubiertos
huesos de animales como aves, reses, y otras cla- en el frente de la pirámide, éste estaba dividido
ses, vidrio, cristal, etc. por una marca preferente visible en dos partes,
correspondiente al templo de Tláloc, la que que-
Los tipos de cerámica son muy variados y da hacia el N y a Huitzilopochtli, la del S. Esta
la época prehispánica que se encuentra, asociada marca también llega hasta la parte posterior de
hasta con la de la época actual, se debe a que es- las estructuras, por tanto, considerando que el
taba dentro de la tierra utilizándola como relle- eje de las pirámides pasaba por el centró de la
no para nivelar el terreno. calle de Tacuba hacia el W. y por la calle de
Guatemala hacia el E., la sección 2 está ubicada
hacia el N. y correspondiente por tanto, al tem-.
Para llevar un buen control de todo el ma- plo de Tláloc.
terial que se obtenga durante las excavaciones,
se hizo una reticulación de toda el área que se va
Todo cuanto elemento era descubierto por
a explorar, trazando trincheras de N a S de 2 M.
las excavaciones, ya fueran restos estructurales o
de ancho y dividiéndolas en cuadros de 2 x 2 M. tiestos, objetos de madera, hueso u otros mate-
asignándole letras a las trincheras, denominándo- riales, se tomaba en consideración, anotando sus
las "calas" y números a los cuadros. En esta características y ubicación. En el caso de muros,
forma, se determina fácilmente la ubicación en pisos de losas o cemento, ladrillo, los tubos de
el terreno de cualquier elemento y para determi- conducción de agua, drenajes, etc., no se des-
nar la profundidad, se han establecido bancos de truían sin antes levantar un plano de la planta y
nivel (B. N.) en toda el área, referidos a la cota los cortes respectivos. En un principio, solamen-
de un banco de nivel fijo que se transportó a la te se estaban excavando las trincheras y ante el
zona, por tanto, las profundidades son dadas SO- número tan grande de muros y pisos que apare-
bre el nivel del mar (S. N. M.). cían, se optó por ampliar la excavación uniendo

73
las trincheras y formando un rectángulo de 14 x cubrió con cuidado y se notó que en la tierra
10M. (Fotos 6 y 7), en el que se llevaba cierta que la cubría, había restos de pintura de varios
uniformidad en la excavación, dejando los mu- colores, por lo que no se limpió totalmente. Una
ros, pisos, ductos, etc. "in situ" para levantar el vez que quedó libre de las piedras y losas que la
plano respectivo. En el caso particular de los mu- protegían, se tomaron sus dimensiones y se de-
ros, éstos se desplantaban a diferentes niveles, lo terminó su orientación que era de N a S; pero
mismo ocurría con los pisos. Después se reticuló sin saber qué representaba o si era parte de una
el terreno, con el sistema de calas y cuadros columna. Se levantó con precaución y fue cuan-
adoptado en toda la zona, lámina l. Cuando la do se identificó plenamente. Se trataba de una
profundidad de la excavación tenía un promedio figura de tezontle con estuco policromado que
de 1.60 M. en la parte media de la superficie y representa a Tláloc, Dios de la Lluvia. Era la pri-
muy cercana al límite E., se descubrió una figura mera figura descubierta en la parte posterior del
de piedra que parecía el remate de una columna templo dedicado a este Dios. Son varias las capas
o pilastra de la época colonial pues estaba a 1 M. de pintura que lo decoran y de varios colores,
escaso al N. del resto de un pequefto altar que en predominando el blanco y el azul. La figura esta-
la parte superior, remataba con un.fragmento de o ba muy próxima a los restos de la construcción
pilastra esculpida, de claro e inconfundible estilo que remataba con la pilastra o fragmento de din-
hispano, por lo que en un principio, no se había tel esculpido y que resultó ser un pequefto altar
identificado plenamente el altar que a la postre, que en el la base o desplante tenía restos de piso
resultó de la época prehispánica. La figura esta- de estuco. Esto resultó interesante pues deter-
ba debajo de un~osa de cantera que descansaba mina quizá el nivel a que se desplantó una de las
sobre unas piedras grandes alineadas de E. a W., últimas estructuras de la pirámide; por tanto, se
por lo que estaba debidamente protegida. Se des- conservó dicho altar aunque muy destruido.
74
Al día siguiente de este hallazgo, a una pro- excavación hasta niveles prehispánicos. Ya se te-
fundidad de 2.60 M. Y de 0.85 M. más que la de nían algunos elementos a varios niveles y el de
la primera figura de TIáloc, se descubrió una más mayor profundidad 'lo constituía un piso de es-
de características y dimensiones muy semejan- tuco muy bien conservado, descubierto por los
tes. Estaba dentro de un relleno de piedra y lo- pozos a cielo abierto hechós hacia más o menos
do; pero como el anterior, también estaba prote- 8 afios y que dejaron al descubierto, restos de
gida por piedras y losas. Esta figura estaba orien- tres altares y que según pudo observarse, fueron
tada al N-E. saqueados.

Era indudable que estos hallazgos confIr- A diferentes niveles, se localizaban los con-
maban plenamente que las excavaciones que se tactos coloniales con los prehispánicos, identifi-
practicaban en esta sección, correspondían a la cados principalmente por la cerámica y algunos
parte posterior del templo de Tláloc. Se localiza- elementos más, y profundizando más la excava-
ban en las partes que no había restos de estruc- ción, empezaban a descubrirse restos de pisos de
turas coloniales en su mayoría y que pennitían estuco, muros pintados y los elementos arqueo-
lograr profundidad. lógicos, sobre todo la cerámica aparece con más
frecuencia, aunque sigue predominando la de
Cuando ya se habían descubierto dentro épocas posteriores hasta la actual. Un elemento
del área excavada todos los elementos coloniales que aparece en gran abundancia lo constituyen
y de épocas posteriores, incluyendo ductos de huesos de animal como aves, pequeflos cuadrú-
drenaje, de conducción de agua, etc., se procedió pedos como, conejos, carneros, y otros, y tam-
a levantar un plano, para demoler después, todos bién grandes, con seguridad de res, lo que de-
los muros y demás elementos y profundizar la muestra su consumo en cantidades como parte

75
de su dieta. Toda clase de material, que se descu- La superficie de terreno destinada a la sec-
bría por medio de las excavaciones, se remite a ción 2, estaba sujeta a ciertas limitaciones. No
la ceremoteca para su estudio y clasificación. podía extenderse 10 suficiente, porque debía
dejar espacio suficiente por los lados N. Y E. pa-
Una vez que se levantó el plano del área ra el paso de los vehículos, sobre todo los que se
excavada, se demolieron todos los muros y utilizaban para la extracción del escombro de las
demás elementos que no correspondían a la tres secciones. Por el W., nada se podía hacer por
época prehispánica, 10 que costó mucho trabaj o la proximidad del edificio colonial, que aunque
y tiempo, pues los muros eran de mampostería presenta grandes alteraciones, debía conservarse
(piedra con mortero de cal y arena) de una gran en tanto que la comisión respectiva no decida
dureza y en algunos tenían grandes y gruesas vi- qué deberá hacerse, (Foto 10) y por el S. que co-
guetas y varillas de acero. En muy frecuentes ca- rresponde a la calle, no estaba 10 suficientemente
sos, al destruir los muros de la época colonial, se te despejada, quedando dentro de la superficie
descubrían muchas estacas de madera que tenían de la sección, una entrada muy amplia para los
una longitud de poco mas de 1.50 M. como pro- vehículos. Ante esta situación, se optó por am-
medio, sobre la cual se desplantaban los muros. pliar la excavación lo más que fue posible y reti-
Estas estacas penetraban hasta llegar a los pisos rar todo cuanto elemento no correspondielra a
de estuco prehispánicos. (Fotos 8 y 9). Poste- la época prehispánica y profundizar la excava-
riormente se aclaró que este sistema de estucado, ción hasta el nivel más bajo posible, dejando res-
era 10 que hoy se conoce como piloteado para tos de estructuras, pisos y muchos otros ele-
compactar el terreno cuando es falso o pantano- mentos, que proporcionaron datos por demás in-
so. Fue empleado con mucha eficacia, primero teresantes; en esta forma, se descubrieron tres
por los mexicas para sus grandes edificios y pos- niveles con pisos de estuco de inconfundible ori-
teriormente por los espafioles. gen o características prehispánicos y que de con-

76
tinuar su descubrimiento hacia el W., necesaria- que, aunque la mayoría estaba dentro de un re-
mente conducirá al desplante de otras tantas lleno de piedra y tierra, todas estaban bien pro-
estructuras de la gran pirámide. En estos pisos, tegidas ya fuera con lajas, losas o bien con gran-
se descubrieron restos de más de diez altares de des piedras que formaban huecos dentro de los
pequeñ.as dimensiones. La mayoría están super- que estaban las figuras. Las ranas estaban en los
puestos y algunos tienen restos de pintura ('0n cimientos de los muros y la cabeza humana, es-
diferentes motivos decorativos, especialmente taba en el piso, protegida con piedras que for-
los que están en el nivel más bajo. Por esta razón maban un cerco. De la forma en que estaban
a esta parte de la sección se le ha llamado "patio protegidas se infiere que fueron los mismos indí-
de los altares". Las excavaciones se ampliaron genas quienes lo hicieron, dejando inclusive en
principalmente hacia la parte N. y se profundiza- algunos casos como en el de la figura humana y
ron hasta el nivel del piso intermedio que es otras, señ.alespara su localización cuando llegaron
el de mayor extensión y está bien conservado. a reconquistar su imperio. Para los conquistado-
Tiene un marcado desnivel de S. a N. y en esta res aquellas figuras grotescas, eran cosas del
superficie, sin ser muy extensa, se descubrieron diablo; pero para ellos, los aztecas, los tamemes,
hasta 14 figuras de Tláloc de forma y dimensio- los esdavos, eran las representaciones de sus
nes semejantes, algunas de cantera y la mayoría dioses protectores, que regían su vida y por
de tezontle, 3 figuras zoomorfas (ranas) con res- quienes vivían y había que protegerlos hasta el
tos de estuco policromado, una cabeza humana final.
de cantera y que parece una deidad lunar y algu-
nos fragmentos nás de figuras que no han sido La excavación no pudo ampliarse más hacia
identificadas, hechas también de piedra. Respec- el W., para no debilitar el terreno y provocar un
to a las figuras del Dios Tláloc, como las zoo- derrumbe en el edificio colonial. De la parte ex-
morfas y la cabeza humana, fue muy notorio cavada, se levantaron planos y se hicieron algu-

77
nos cortes y perfiles y los elementos descubier- objetos que se descubren. Con la reticulación del
tos quedaron a cargo del personal de restaura- terreno y el establecimiento de los bancos de ni-
ción para los correspondientes trabajos de con- vel cuyas cotas están referidas al nivel del mar, se
servación. Se dejó "in situ", un conjunto de pi- ha logrado unificar el sistema de los trabajos,
lotes para su conservación y su exhibición. presentando los planos parciales a una misma es-
(Foto No. 11). cala y proporcionando las profundidades referi-
das al nivel del mar, empleando las siglas:
De todas las excavaciones' que se realizaban, S.N.M.
se levantaban planos que correspondían al avan-
ce de obra, apoyándose en los puntos de la re- Como nada se resolvía cerca del edificio
ticulación que previamente se hizo en las super- colonial en ruinas, las excavaciones de la sección
ficies de la zona en que se iniciaron los trabajos 2 se suspendieron temporalmente y se iniciaron
de exploración. los trabajos topográficos en la zona, para el le-

Era del todo indispensable referir los nive- vantamiento del plano general. Todos los datos y
les a que llegaban las excavaciones con el del planos parciales se remiten al Depto. de dibujo
mar, por lo que de un banco de nivel fijo situado para que los expertos construyan el plano de-
en la Alameda central, se tomó su altura y por fmitivo.
medio de una nivelación exacta, se llevó a la zo-
na estableciendo en un sitio estratégico, un ban- Después se reanudaron las excavaciones sal-
co de nivel con una cota que marca la altura so- vando el edificio, apoyándose en varios puntos
bre el nivel del mar. En varios sitios de la zona, de la reticulación, que correspondían a la sec-
se establecieron mas bancos de nivel, relaciona- ción l. Por tanto se trabajó excavando de W. a
dos con el primero que se fijó en el terreno y en E. por la parte posterior de las estructuras y que
los cuales, los investigadores se basan para deter- estaban parcialmente descubiertas, correspon-
minar los niveles a que se llega, lo mismo que los diendo a las épocas III y IV.

78
En la sección 1, se habían descubierto parte Para el efecto hubieron que destruirse restos de
de las estructuras III y IV correspondientes a los muros coloniales hechos de mampostería de una
costados del lado sur, sin haber llegado a las es- gran dureza y algunos tenían grandes viguetas
quinas S-E de los cuerpos inferiores, porque de acero. La labor fue muy dura; pero se logró.
quedan debajo de los edificios colindantes con la Se aprovechó para descubrir estos elementos los
zona por dicho lado. Esta fue la razón por la que cortes que se hicieron para la instalación del
se excavó de W a E aprovechando una trinchera ducto del drenaje profundo y los subsecuentes
que se abrió en la seccion 1 y otras más de la para drenajes, algunos de los cuales datan del
sección 3. Los elementos descubiertos fueron tiempo de la colonia y posteriores y los des-
parte del cuerpo superior y el descanso del mis- tinados a la conducción de cables de energía
mo. El cuerpo es ataluzado y el descanso tiene eléctrica, teléfonos y de agua potable. De estos
un ligero desnivel hacia afuera. Continuando la últimos, la mayoría son de plomo y fierro. Uno
excavacion de estas trincheras, se descubrieron
de estos cortes y para precisar fue el que se hizo

los elementos correspondientes a una estructura para la instalación del colector del drenaje pro-
superpuesta a la anterior y que corresponde a la fundo, se aprovechó para determinar la altura
época IV.
original del cuerpo inferior de la estructura In y
el nivel del desplante, pues parte de este cuerpo
Los elementos de esta estructura constan se encuentra dentro del agua del nivel freático.
como la de la época 111, de un cuerpo en talud La aplicación de un sistema de bombeo permitió
muy destruido y cuya altura no llega a 1 M. y un tomar los datos necesarios, el desplante está cla-
descanso de 1.70 M. de ancho, después del que ro y tiene piso de estuco. (Lámina No. 2).
parte un cuerpo más hacia abajo. Estos datos por
demás interesantes, dieron margen para conti- Las excavaciones de la estructura IV
nuar las excavaciones para descubrir los elemen- continuaron hacia el norte, descubriéndose el ni-
tos que quedaron después de la destrucción, has- vel y piso correspondientes al desplante de la es-
ta lograr el nivel del desplante de las estructuras. tructura, el cuerpo en su verdadera magnitud, un

79
descanso y parte del cuerpo "Superior,que de nin- cuadro 35. En el cuerpo, o mejor dicho en la
guna manera fue el último, pues debió haber parte del cuerpo superior, está perfectamente
cuando menos, dos mas. (Foto 12). marcada por unas losas de cantera colocadas ver-
ticalmente, la división de los basamentos pirami-
El nivel de desplante de esta estructura, es- dales de los dos templos. La huella de la división,
tá más alto que el de la 111 como se aprecia en de los basamentos piramidales de los dos tem-
la lámina 2 y fue debido a las inundaciones que plos. La huella de la división continúa hacia
sufrió cuando subía el nivel de las aguas del lago el cuerpo inferior. (Foto 13). Esta división
y que con seguridad no se resolvió el problema, aparece en la parte frontal de las estructuras,
pues las subsecuentes estructuras, la V y final- precisamente entre las alfardas centrales que li·
mente la VI, se desplantan a niveles más altos. El mitan las escalinatas de los dos templos. Sobre
descanso tiene 1.70 M. de ancho y está ligera- la superficie del descanso y en los cuadros 33 al
mente inclinado hacia afuera. Con el fm de des- 36 de la cala G, fueron descubiertos los restos de

cubrir el mayor número de elementos de las es- dos grandes braseros y entre estos, la primera ca-
tructuras superpuestas, tuvo que ampliarse la beza de serpiente correspondiente a la parte pos-
trinchera que se trazó de N a S., por medio de terior de la estructura 11-111. El brasero de la
la cual, se descubrió un piso de estuco muy des- parte sur, fue destruido por la excavación y la
truido en la mayor parte, que tiene un espesor construcción de un pozo para agua, quizá en el
medio de 0.25 M. Esta a 1.50 M. arriba del des- siglo XVI. Esto se infiere por el sistema y mate-
canso de la estructura IV y corresponde a la rial empleado. El brasero del lado Norte, estaba
V. El relleno que sostiene a este piso parte de un parcialmente destruido. Felizmente la cabeza de
tendido de grandes lajas que están a 0.65 M. aba- serpiente, que es de basalto, estaba intacta, sohre
jo el nivel del descanso de la estructura anterior. una plataforma cubierta de estuco. Tanto el esti-
(Fotos 12A y l2B). Por medio de esta trinchera lo como la decoración, son diferentes a las des-
que abarcó varias calas y cuadros de la reticula- cubiertas anteriormente y que corresponden al
ciQn, se lo~aron importantes descubrimientos. templo de Huitzilopochtli. Tiene pintura roja en
Las calas fueron las G, H, I y J, llegando hasta el las fauces y motivos blancos en la parte superior
80
de la nariz y dos anillos blancos también en la En la parte sur de este descanso correspon-
parte superior de la cabeza. (Foto 14). Al frente diente a la estructura IV, se descubrió el res-
de cada uno de los braseros y a una distancia no to de un brasero y la plataforma en que estaba
mayor de 50 cms. se descubrieron dos figuras de una de las cabezas de serpiente, correspondiente
lláloc. Son de tezontle y están recubiertas de es- a la parte posterior del basamento del templo de
tuco y policromada. (Foto 15). Los colores son Huitzilopochtli. Están próximas al corte que
muy vivos y variados, ambas estaban boca arriba, corresponde al ducto del drenaje profundo y las
orientadas de E a W. y descansaban sobre unas excavaciones que se hicieron para la instalación
figuras también de tezontle cubiertas de estuco de otros más. Fue al hacer estos trabajos, cuando
policromado. En la parte inferior no tiene una se descubrieron los dos grandes braseros y la ca-
base que las mantuviera erectas como las ante- beza de serpiente, correspondiente a la parte
riormente descubiertas en la parte E. de la sec- posterior del basamento del templo de Huitzilo-
ción.
pochtli y que se localizaban hacia el sur de la
linea divisoria de las dos grandes estructuras. De
Estaban bien protegidas con grandes y estos elementos, sólo queda la parte inferior del
gruesas lajas de basalto que descansaban sobre brasero del lado Norte y la plataforma donde es-
unas piedras. taba la cabeza de serpiente. (Foto 18).

Sobre estas lajas, ya estaba el material del Aprovechando el corte que hicieron para la
relleno o núcleo para la construcción del piso instalación de los ductos, se profundizaron las
muy grueso de la época V.
excavaciones para descubrir el nivel del desplan-

81
te del patio inferior de la estructura IV y co- intención de quienes las pusieron, las dedicaron
nocer la altura original del cuerpo. Para el efec- a los templos de las dos deidades.
to, se retiró el núcleo que cubría los elementos
estructurales de ésta época, desde el nivel del pi- Anteriormente a los descubrimientos de es-
so correspondiente a la estructura de la época tas dos ofrendas, se descubrió una a la que le co-
V. El núcleo cubría también el piso de grandes rrespondió el No. 12. Estaba dentro de un nú-
lajas que estaba a 0.65 M. abajo del nivel del des- cleo de uno de los cuerpos de la estructura V. Se
canso de la estructura IV. En el relleno aso- pensó que se trataba de un material que había si-
ciado al talud deller. cuerpo de la estructura, se do removido al hacer el corte y la excavación pa-
descubrió la ofrenda No. 15, número que le co- ra la construcción del ducto del drenaje profun-
rresponde por el orden en que han sido descu- do, pues está muy próximo al sitio en que se des-
biertas las anteriores en la zona. Fue explorada cubrió dicha ofrenda; pero no fue así, pues ele-
por personal especializado, habiendo tomado los mentos que la integraban, estaban en la posición
datos de ubicación con respecto a la estructura, en que fueron colocados. Estos son: un pequeño
profundidad, material, etc., etc. brasero de piedra y qUe apareció en el nivel mas
alto que el resto de los elementos que consisten
en tres pequeñas vasijas de piedra verde con la
En la parte superior del primer cuerpo de la representación de Tláioc, una figura antropo-
estructura, se descubrió un glifo empotrado en el morfa de piedra verde, un cuchillo de sílex y dos
cuerpo de la estructura. Es de tezontle y tiene la ·cascabeles. (Foto 21).
fecha 1 conejo (ce tochtli). (Foto 19). A corta
distancia al Norte de la ofrenda 15, se descubrió
el resto de una escalinata que conducía del nivel Los altares.
inferior de la estructura o sea el desplante al pri-
mer descanso que es en el que se descubrieron Tratando de descubrir nuevos elementos so-
los braseros y la cabeza de serpiente ya mencio- bre todo estructurales, que permitieran esclare-
nados. La escalera carece de alfardas y solamente cer aún más los diferentes niveles de los desplan-
tiene tres escalones muy bien conservados de la tes de las estructuras principales en sus diferen-
parte superior sin llegar a la superficie del des- tes épocas constructivas, se practicaban peque-
canso. La parte inferior, la constituye el núcleo fías ampliaciones y se profundizaban las excava-
de la propia escalera. Es posible que esta escalera ciones en algunas partes de "patio de los altares",
haya sido empleada para subir a encender el co- que fue la parte de ~a sección 2, donde se inicia-
pal de los grandes braseros que se encontraban ron las exploraciones. Estos trabajos se hicieron
en los lados N., E. y S. de la estructura y tam- principalmente hacia el lado sur donde está la ca-
bién para los trabajos de aseo y mantenimiento lle de Guatemala y se descubrieron nuevos restos
de la misma. A unos cuantos centímetros del pi- de altares que con los anteriores, suman 15. Es-
so de grandes lajas y al Norte de la escalera men- tos se desplantan a cuatro diferentes niveles,
cionada y casi en la división de las dos grandes siendo el más alto, el del altar No. 4. En su ma-
estructuras, se descubrió una caja de ofrenda, yoría, los altares están superpuestos. El número
Sus dimensiones eran las mayores de las descu- 4, es como la mayoría, de dimensiones reducidas
biertas en la zona. Es de forma rectangular de 2 y se desplanta a 1.40 M. del piso de estuco que
M. de largo por 1.50 M. de ancho. Está ubicada ocupa la superficie más extensa descubierta has-
ligeramente al S. de la división de las estructuras. ta hoy y de la que se desplantan la mayor parte
A esta le correspondió el No. 17 y en una depre- de los altares. No está sobre un relleno, sino en
sión muy notable del piso del descanso y en la una capa de material sedimentario que quedó
misma dirección en que está la caja de la ofren- después de una de tantas indicaciones que hubo.
da, se descubrió sorpresivamente la ofrenda No. En la parte superior de la pequeña construcción,
20. Ambas fueron exploradas por los especialis- tiene un fragmento de dintel de cantera con mo-
tas en este trabajo. (Foto 20). Por la ubicación tivos esculpidos que data de la época colonial.
de estas dos ofrendas, pudo considerarse que se (Foto 22).
encuentran en la parte media de los basamentos
de los dos templos; el de Huitzilopochtli al sur Se ha conservado en el mismo estado en
y el de Tláloc al Norte, por lo que, si esa fue la que fue descubierto, porque marca el primer ni-

82
vel prehispánico que hay, después de haber reti- desplante, se descubrió una pequeña vasija poli-
rado cuantos elementos de otras épocas lo cu- cromada en la efigie de Tláloc. Estaba cubierta
brían. Tiene un pequeño fragmento de piso de con una gruesa laja. Lámina 3. Contenía 24
estuco en la base, que es lo que determina dicho cuentas de jade. El altar No. 5 está sobre el piso
nivel. Se hizo una exploración en la base del al- de estuco cuya superficie la mayor que se ha des-
tar, con objeto de estudiar la mejor forma de cubierto en la sección. Este piso corresp'onde al
conservarlo y a la vez restaurarlo ya que está nivel intermedio y presenta un desnivel muy
muy destruido y al hacer esta operación, se des- marcado de S. a N. Es de un 100/0 y sobre el se
cubrieron dos ofrendas que bien pudieron consi- desplantan la mayor parte de los altares del pa-
derarse como una sola, pues están muy ligadas tio. El No. 5 es uno de ellos. Es de sección cua-
entre sí. Están hacia el lado W. del altar y una es drada de 1.50M. por lado y 0.55 de altura. Está
una pequeña caja formada por losas que tenía su estucado totalmente y tiene motivos decorativos
tapa. Es de poco menos de 0.40 M. por lade, y de policromados y en la cara W., tiene empotrada
0.35 de profundidad. A esta parte se le asignó el una calavera de tezontle cubierta de estuco blan-
No. 16 y la otra parte es un pequeño nicho al co. El altar está en buen estado de conservación
fondo y en la parte superior de la primera, y está y solamente en la parte superior se notan algu-
cubierta por una laja. A ésta se le asignó el No. no~ desperfectos ocasionados por las estacas o
16-A. La primera contenía en su interior cuyo pilotes que clavaron para desplantar un alto y
fondo era una laja, una pequeña figura antropo- grueso muro de mampostería de la época colo-
morfa en posición sedente. Es de tezontle rojo y nial. Si la destrucción del altar no fue total, se
tenía 5 grandes cuentas de piedra verde Gadeí- debió a que la superficie está formada por losas
ta). El nicho o sea la ofrenda l6-A es de dimen- de cantera cubiertas de estuco; no obstante,
siones mas reducidas que la anterior y contenía algunas su posición original y algunas estacas lle-
(Fotos 23 y 24). En el lado E del altar y debajo garon a penetrar por las juntas de las losas. (Fo-
del piso de estuco correspondiente al nivel de to 25). De todos los altares descubiertos sobre el
nivel de este piso de estuco, éste es el que mejor
conservado está. De los otros, solamente quedan
las huellas claras que marcan sus dimensiones,
pero invariablemente debajo de éstas están las
subestructuras Foto 16, en la que se aprecia el
altar No. 12, que se desplanta del piso de estuco
del nivel inferior.

El primer entierro humano que se ha descu-


bierto durante la fase inicial de los trabajos en
este é;lño,tuvo lugar en la superficie del altar No.
13 del patio de los altares. Según los especialis-
tas, se trata de una persona joven, quizá un ado-
lescente. La posición original en que se enterró,
fue en' decúbito dorsal. El cráneo está muy des-
truido y le faltan las extremidades inferiores. El
resto del cuerpo está en posición anatómica. Por
la posición en que se encuentra la osamenta, se
trata de un entierro de la época prehispánica. Es-
taba justamente debajo de un muro de mampos-
tería de la época colonial. (Foto 27).

, Por todo lo expuesto en esta síntesis de los


trabajos realizados durante el año en esta sección
2, se verá que éstos no se realizaron en forma sis-
tema tic a y se debió principalmente a, que no pu-
dieron llevarse ordenadamente E. a W., porque

83
no se ha decidido si el edificio de la calle de Gua- protectoras (ver los esquemas relativos a estos
temala No. 50, se cambia de sitio o es demolido. descubrimientos). Estos descubrimientos, lo
Por la ubicación en que se encuentra, es un obs- mismo que los de los altares que están en la par-
táculo para continuar las excavaciones en la for- te S. de la sección, hacen que se estudie y vea la
ma que se había previsto al inicio de los trabajos. posibilidad de ampliar la zona de excavación,
No obstante, el edificio ha sido respetado inte- tanto hacia el E. como al S. de la parte oriental
gramente y las excavaciones, tanto por el lado E de la sección.
como por el W., se han llevado hasta una distan-
cia pertinente para no provocar algún derrumbe, En todos los casos, se han tomado todos los
dadas las condiciones tan críticas en que se en- datos de los elementos descubiertos, situándolos
cuentra la construcción. Esta es la razón por la según la profundidad, se le dan sobre el nivel del
que unas veces se hacían excavaciones por ella-o mar (S.N.M.) de acuerdo con las cotas estableci-
do W y se ampliaban hacia el N. y otras se ha- das en toda la zona. Lo mismo se hace con todo
cían por el E. ampliándolas hacia la calle o sea al el material arqueológico que se obtiene de las
S. y también al E. sin que se obstruyera el paso excavaciones, anotando todos los datos de las ca-
de los vehículos que extraían el escombro de las y cuadros en que se descubren y sus profun-
ésta y las demás secciones. También se profundi- didades en las hojas que se han hecho para el
zaban las excavaciones de la superficie ya exca- control y remitiéndolo a la ceramoteca debida-
vada, desalojando principalmente material de re- mente etiquetado y en bolsas de tela.
lleno, dentro del cual se descubrían elementos
arqueológicos, cerámica y restos de material Todos los elementos estructurales que se ha
auxiliar de las construcciones como las estacas o descubierto y que tienen restos de estuco, ya
pilotes que servían para compactar el termo y sean muros, pisos, cajas de ofrenda, así como fi-
desplantar las estructuras, tanto prehispánicas suras que pueden provocar destrucciones mayo-
como coloniales. También se levantaban planos res, se están considerando. Esta es una labor
parciales de las estructuras y elementos mas so- constante que está a cargo del personal del
bresalientes que se descubrían y que se aprove- Depto. de Restauración. En el caso de las partes
chaban para construir el plano general de toda de núcleo que quedan al descubierto, ya sea por
la zona. los cortes que se hacen al explorar y descubrir
las estructuras o bien por destrucciones de que
En una ocasión en que se trabajaba en una
superficie no muy amplia de la parte oriental de fueron objeto, éstas se consolidan debidamente
la sección, se estaba retirando un material de re- con mezcla a base de arena, cal y cemento, para
lleno de piedras grandes en su mayoría (más de evitar las filtraciones del agua y en consecuencia,
una destrucción mayor o total.
30 cms.) y lodo, sobre el que había restos de es-
tructuras coloniales que habían sido descubiertas Se espera una resolución defmitiva con res-
desde el principio de los trabajos. Este relleno pecto al edificio del No. 50 de la calle de Guate-
estaba sobre el piso de estuco y en una sección mala. Es evidente qlie parte de las estructuras de
en que estaba destruido y a una profundidad de las épocas V y VI y sobre todo esta última, se
casi 5 M. del banco de nivel establecido en la su- encuentran debajo del edificio y de la banqueta
perficie, cuya cota es: 2234.696 M.S.N.M. que tienen al frente y que no puede destruirse,
porque puede producirse un derrumbe de la fa-
Según la reticulación del terreno, este relle- chada. El terreno que está después de la banque-
no se localizaba en los cuadros 40 al 43 de las ca- ta hacia el arroyo, está muy removido desde la
las X, Y, Z, dentro del cual, se localizaron 9 fi- superficie hasta la profundidad en que se instaló
guras de Tláloc hechas de cantera y tezontle, se- el ducto del drenaje profundo, el de conducción
mejantes a las descubiertas con anterioridad y de agua, drenajes del siglo XVI al XIX, ductos
una rana más de tezontle negro. Todas las figuras para cables de energía eléctrica, teléfonos y mu-
estaban con las piedras mas grandes que forma- chas obras más, 10 que hace que las excavacio-
ban huecos en los que estaban las figuras, por 10 nes que se hagan por este lado tengan muy pocas
que se infiere que su colocación fue intencional probabilidades de éxito, en cuanto a la localiza-
hecha por los indígenas, para evitar su destruc- ción de los elementos estructurales de las épocas
ción ya que representaban a una de sus deidades V y VI del Templo Mayor.
84
Año de 1979.
En la superficie excavada y entre los altares
y muros, se han descubierto varios grupos de es-
Se descubre en una superficie de poco más tacas o pilotes, formando hileras bien alineadas,
de 400 m2., el piso de estuco en que se localizan sobre las que se desplantan muros de la época
principalmente altares o plataformas de no muy colonial y las que están de la superficie del piso
grandes proporciones. Esta superficie está den- de estuco hacia abajo, son de la época prehis-
tro de lo que era el estacionamiento de la Secre- pánica.
taría de Hacienda en la parte sur.
Aprovechando el corte que se hizo para la
Hacia la parte N. de esta superficie, el piso instalación del drenaje profundo, se determina-
presentaba una rotura en la que falta el estuco y ron las dimensiones verdaderas de los cuerpos in-
que abarcaba poco más d'e 20 m2• Había un re- feriores de las estructuras de los templos de las
lleno de piedras grandes en su mayoría y era di- épocas III y IV, especialmente de la III, cuyo
ferente al material de tierra sedimentaria del cuerpo inferior del basamento, queda dentro del
resto de la superficie excavada. Entre este relle- nivel freático.
no se localizaron cuatro grupos de estacas de las
que funcionaban como pilotes para compactar el Se descubre la ofrenda No. 15 al pie del
terreno. Asociadas al relleno de piedras y a las cuerpo inferior de la estructura IV en la parte
estacas, se descubrieron nueve figuras de Tláloc posterior del basamento y un poco hacia el N. de
de cantera y tezontle. Todas tenían restos de es- la ofrenda; se descubren los restos de una escale-
tuco policromado. Son de las mismas dimensio- ra que presenta 4 escalones bien conservados y el
nes en general y algunas están rotas. núcleo de la misma. Conduce dicha escalera, al

85
descanso entre el ler. y segundo cuerpos del ba- En la parte E. de la sección, se está consoli-
samento piramidal, correspondiente al templo de dando el altar No. 5 que tiene decoración poli-
Huitzilopochtli y en el que están los braseros y cromada en los lados y una calavera empotrada
las cabezas de serpiente de ambos templos. Por en el lado W. Es de tezontle y cubierta con estu-
la ubicación y características de la escalera, pa- co blanco. Se dejaron algunos pilotes o estacas
rece una escalera de servicio a los braseros. de madera de los que estaban debajo de un muro
colonial y que al clavarlos penetraron en el cuer-
En la parte E de uno de los primeros altares po del altar.
descubiertos, el No. 4, se descubrió al nivel del
desplante, una pequeña vasija con incisiones y la Como no se pueden ampliar las excavacio-
efigie de Tláloc. Está policromada y tenía en el
nes de esta sección 2 hacia el W. donde se locali-
interior, 24 cuentas de jade. En el lado W. del al-
za el edificio del No. 50 de la calle de·Guatema-
tar y debajo del pi~o de estuco que se encuentra
la, se están haciendo los lados N. y S. aunque no
muy maltratado, se descubrió una losa de cante-
ra que cubría una pequeña caja de ofrenda, y en gran escala y en todas las partes excavadas
adosado a la cara E. tenía un nicho más pequeño se descubren, en primer lugar, restos estructura-
les de la época colonial que son demolidos des-
que la caja. Tanto la caja como el nicho, conte-
pués de hacer los planos correspondientes y
nían ofrendas. La primera, 5 grandes cuentas de
cuando se profundizan y llegan a los niveles
jade y figura de piedra que representa a Xauhte-
prehispánicos, se empiezan a descubrir los ele-
cutli, de 0.25 M. de altura. El nicho saliente mentos de las fases antiguas o prehispánicas. Así
contenía otras cinco cuentas de jade también
han continuado descubriéndose nuevas figuras
grandes. Son las ofrendas 16 a 16A. de Tláloc, ranas de piedra y algunos elementos
Se aclaró que los llálocs V y VI descubier- más relacionados con el agua y nuevos altares,
tos a ambos lados de la cabeza de serpiente los que en su mayoría están superpuestos y
correspondiente al Templo de esta deidad, en la desplantados a diferentes niveles. En consecuen-
parte posterior del basamento y en el descanso cia son varios que con toda seguridad y de
del 1er cuerpo, estaban adosados a los braseros, continuar su descubrimiento hacia el W. o sea
por lo que el del lado N. se reconstruyó como hacia las estructuras, se aclarará a qué estructu-
estuvo originalmente. El del lado S., está en ras o épocas corresponden.
exhibición. Estas figuras están en la estructu-
ra lI-lII. Las excavaciones en esta sección solamente
podrán ampliarse hacia el S. con poco éxito de
La ofrenda 17 fue descubierta a 0.70 nuevos descubrimientos, debido a las grandes y
M. abajo del nivel del descanso de la estructura profundas excavaciones que se han hecho desde
IV y casi en la parte media de la división de principios del presente siglo, para la instalación
los templos y que es bien clara y defmida. Es del ducto de grandes proporciones del drenaje
una caja de piedras de tezontle bien trabajadas principal de la ciudad y otros más como los de
que mide 2 M. de E. a W. y 1.50 M. de N. a S. conducción de agua potable, dé cables de alta
Los elementos que contenía así como sus carac- tensión de energía eléctrica, teléfonos y otros
terísticas generales las proporcionan las personas más. Hacia el E. hay un muro que corre a todo
comisionadas para su exploración. lo largo de la superficie de excavación. Es de la
época colonial de más de 2.50 M. de altura y
Todos cuantos elementos estructurales han 1.20 M. de ancho. Es de mampostería de gran
sido descubiertos, se están consolidando para dureza y ha servido de contención para evitar de-
proteger sobre todo el estuco y las pinturas, para rrumbes que pudieron originarse sobre todo al
evitar su total destrucción. paso de los vehículos que extraen el escombro.
Hacia el N. no puede excavarse más por la pro-
Cada día se realizan trabajos de ampliación ximidad de los edificios que limitan la zona por
de las excavaciones. Por medio de éstos, ya se dicho lado y que son de la época colonial y es-
descubrió el piso correspondiente a la estructura tán en malas condiciones de conservación y ade-
V y parte de un muro que seguramente corres- más están habitados. Los frentes de estos edifi-
ponde al respaldo de la No. V. cios están hacia la calle de Justo Sierra.
86
La superficie en la que se han practicado españoles. Algunas de las estacas para desplantar
excavaciones, es de más de 400 M2 en la que las construcciones de la época colonial, penetra­
aparece el piso estucado y donde se han descu­ ron hasta las prehispánicas como se puede ver en
bierto restos de 7 altares de diferentes dimensio­ el altar 5 en cuya superficie del estuco, quedaron
nes, y 5 de ellos constituyen otras tantas super­ elevadas, destruyéndola parcialmente, tanto por
posiciones. Se localizan en tres niveles diferen­ las estucas, como por el peso del muro de gran­
tes. des proporciones que se desplantaba sobre las
estacas. Algunos de estos grupos de estacas se
A reserva de poder ampliar las excavaciones han tratado convenientemente para su conseva-
en esta parte de la sección, a este sitio en el que ción y quedarán a la vista.
se localizan los altares, se le ha denominado el
“patio de los altares” . Estos, a la fecha, constitu­ Debido a los edificios que circundan la su­
yen los principales restos estructurales descubier­ perficie dispuesta para exploración, las limitacio­
tos y, tanto los que corresponden a la época pre- nes para continuar o ampliar las excavaciones
hispánica como los de la colonial, se ve que se cada vez son mayores. Al W. de la superficie en
desplantan de grandes y bien alineadas hileras de que se encuentran los altares, ya no se puede
estacas de madera que previamente se clavaron hacer ninguna ampliación, para no afectar la
en el piso con objeto de compactar la superficie construcción de tipo colonial y que corrrespon-
para después proceder a la construcción. Este era de al No. 50 de Guatemala. No obstante se han
un sistema de pilotaje empleado eficazmente pri­ continuado haciendo algunos trabajos de los que
mero por los mexicas y posteriormente por los se obtienen datos de interés arqueológico. Uno

87
de estos es el que se hizo aprovechando el corte conservación, por personal del Depto. de restau-
a 10 largo de la calle para instalar el ducto ración y las piezas que lo requieran, son restau-
del drenaje profundo a principios del pre- radas.
sente siglo y que partió de E. a W. todas las es-
tructuras del Templo Mayor. El cuerpo inferior Además de los trabajos de exploración, se
de la estructura IJI queda dentro del agua del ni- toman frecuentemente todos los datos para la re-
vel freático, lo que puede apreciarse bien por el gularización del plano general del Proyecto. Se
corte que se hizo para .eldrenaje. Con auxilio de levantan los planos de todas las partes de la sec-
una bomba para extraer el agua, logró llegarse al ción donde se realizan las excavaciones y se con-
nivel del desplante de la estructura y en conse- signan todos los elementos arqueológicos descu-
cuencia, determinar la altura verdadera del cuer- biertos. Así, con respecto a los restos de estruc-
po y sus características de construcción como la turas, primero se levantan los planos de los de la
inclinación del cuerpo, las dimensiones del des- época colonial que posteriormente serán demoli-
canso entre los cuerpos, el revestimiento, etc. Es- dos, para levantar después los correspondientes
tos datos se consignaron en un corte que se hiz.o a los de la época prehispánica. En esta forma
de la estructura. "Queda un testimonio de .los restos de las cons-
trucciones que superpusieron a las de origen pre-
Todos los trabajos que se han hecho, así co- hispánico, destruyéndolas en una gran mayoría.
mo los que se hagan, se están relacionando de
acuerdo con la relación que se acordó adop- No hay una plena justificación o razón, pa-
tar, antes de que se iniciaran los trabajos en ra denominar "Plaza de los Altares" a la super-
el proyecto. El sistema adoptado fue el de calas ficie donde se han descubierto anteriormente sie-
de 2 m. de ancho y trazadas de S. a N. La longi- te. No obstante han continuado las excavaciones
tud de las calas será de acuerdo con la superficie no muy amplias y a diferentes niveles, desplan-
que se determine para los trabajos y están divi- tándose de pisos de estuco más o menos bien
didas en cuadros de 2x2 m. A las calas se les asig- conservados, se han descubierto más altares, lle-
naron letras mayúsculas y a los cuadros números gando ya a once. Algunos como ya se ha dicho,
y el origen es la letra A y el O (cero) ubicado en están superpuestos. En algunas secciones de los
el ángulo más ubicado al S.W. de la superficie pisos de estuco, así como en los altares, han que-
que se explorará. Las profundidades que se regis- dado bien marcadas las huellas de las estacas que
tren en las excavaciones, así como los elementos clavaron para consolidar el terreno. Grupos de
que se descubran, están relacionadas con bancos estas estacas se han' dejado en su sitio intencio-
de nivel establecidos estratégicamente en la zo- nalmente para que puedan verse.
na, cuyas cotas están referidas al nivel del mar
(S. N. M.). Con objeto de obtener el mayor acopio de
datos que aclaren la distribución y funciones de
Cuando se trata de elementos como escul- las construcciones prehispánicas, se ampliaron
turas, restos humanos y otros más, además de las excavaciones hacia el sur, procurando no obs-
proporcionar su exacta ubicación por el sistema truir el paso por lo que era la calle, para la fácil
de coordenadas tridimensionales en función de extracción del material y el escombro. La super-
las calas, cuadros y profundidad, también se to- ficie que primero se excavó y que eran poco más
ma el dato de la orientación a que se encuentre de 380 m2 se amplió hacia el E. y al S. en 140
el elemento determinado. En esta forma se han m2 más. Por medio de las excavaciones se obtu-
proporcionado los datos de los elementos descu- vo gran cantidad de material o elemento arqueo-
biertos hasta hoy y en ocasiones, se han hecho lógico y restos estructurales de las épocas prehis-
esquemas, cróquis o dibujos a escala, que se re- pánicas, colonial y posteriores. Entre los elemen-
miten junto con los informes de trabajo respec- tos destacan numerosas esculturas representati-
tivos. vas de Tláloc, el Dios de la Lluvia, otros muchos
objetos más y gran cantidad de cerámica. Todo
Todos los elementos estructurales descu- el material se remite a la ceramoteca y al taller
biertos, como pisos, muros, escaleras, etc. son de Restauración con los datos de localización,
debidamente consolidados y tratados para su profundidad, características, etc.
88
En todos los casos, se han levantado planos dad de un friso de la época colonial. Se desplan-
de los restos estructurales descubiertos, ya sea ta de la superficie de un piso de estuco cuyos
coloniales o prehispánicos, con los cortes corres- restos aún se conservan. La capa de material se-
pondientes. dimentario sobre el que se edificó, fue compac-
tada con estacas de las que aún quedan en un
En la superficie que se ha excavado, además banco en que se ha conservado. Esta capa con
de los restos prehispánicos descubiertos, se ha toda seguridad fue la que quedó después de una
procurado conservar varios restos de pisos de es- de las varias inundaciones que sufrió Tenochti-
tuco, correspondientes a diferentes épocas cons- tlan. Fue un poco complicado el tratamiento pa-
tructivas. Respecto de los altares, el No. 4 que ra lograr conservar el resto de la capa sedimenta-
fue de los primeros que se descubrieron, es el ria que además presenta las estacas ya que la im-
que se encuentra desplantado al nivel más alto. permeabilización resultaba muy costosa y reque-
Este altar presenta caractedstic.as muy peculia- ría mucho tiempo.
res, pues está sobre un terreno de material sedi-
mentario en que la piedra es muy escasa. Desde Al término del año de 1978, pocos descu-
su base, presenta el tipo de construcción neta- brimientos se habían realizado en esta sección y
mente prehispánica hecha de cantera de color ro- en el mes de diciembre, lo de mayor interés fue
sa y tezontle negro y rojo. Conserva algunos res- el de un entierro en la superficie del altar No.
tos de estuco con que estaba cubierto y en la 13, cubierto por un muro de mampostería (cal y'
parte superior tiene parte de un relleno de piedra canto) de una gran resistencia y dureza que pa-
y lodo y remata con una piedra de cantera gris saba por encima del altar. Este muro correspon-
con un grabado y que procede con toda seguri- día a una construcción de la época colonial. El

89
entierro estaba incompleto, {altándole las extre- trataba de un entierro que, a la profundidad y
midades inferiores. El resto de la osamenta esta- condiciones en que estaba, era indudable que te-
ba en posición anatómica y el cráneo completa- nía que ser prehispánico. Y 10 único que se des-
mente destruido por la presión del muro que 10 cubrió, fue el cráneo; pero 10extraordinario fue
cubría. Por las características que presenta la que tenía dos mandíbulas, una estaba sobre la
osamenta, se infiere que correspondieron a un correspondiente al cráneo que tenía un ligero
individuo en edad de la adolescencia. desplazamiento hacia afuera. El cráneo está per-
forado de lado a lado y es la clásica perforación
de los guerreros decapitados y cuyo cráneo se
Todos los restos de pisos se han consolida- colocaba en el tzompantli. La plataforma que
do para su conservación, 10 mismo que los res- contenía dicho cráneo y otras dos mandlbulas
tos estructurales de la época prehispánica. separadas una de otra y colocadas en la orilla del
1ado N. de la plataforma, se encuentra a 6 m. al
Se practicaron algunas excavaciones de po- S. W. del arco que contiene la piedra con graba-
ca profundidad, descubriendo más restos de pi- dos de cráneos y huesos cruzados.
sos a diferentes niveles que conservan el estuco
original y también restos de estructuras entre las La reticulación se ha extendido hacia la
que se encuentra el altar No. 14. parte S. de la sección y se trazó sobre la calle,
incluyendo todo el frente del edificio No. 50. Se
Inicio de los trabajos en 1979. empezó la excavación en esta parte, partiendo
del centro de la calle hacia el N., dejando paso
Como se dijo anteriormente, la superficie para la extracción de los materiales, sobre todo
excavada donde se localizaron la mayor parte de el escombro, en la parte de la calle que queda al
los altares, se amplió en 140 m2 más, principal- sur y en toda su longitud. Las excavaciones se
mente hacia la calle que había quedado libre de iniciaron hasta la orilla de la banqueta, quitando
escombros. Tanto del patio como de la superfi- primero la capa del asfalto de la calle y después
cie que se amplió, se retiraron todos los elemen- la muy gruesa de concreto armado que servía de
tos que no son prehispánicos, excepto un arco firme al asfalto con un espesor de más de 0.50m.
de la época colonial. Es de baja altura y se loca- Esta capa de concreto tiene además grandes vi-
lizó a pocos centímetros de la superficie hacia guetas de acero en la parte en que circulaban los
abajo, así que no llegó al nivel superior del piso tranvías. No es solamente esta capa la que cons-
de estuco. Está hecho de tezontle y ladrillo y tituye el mayor obstáculo para las excavaciones,
fprma una pequeña bóveda. Se ha dejado inten- sino también los ductos para energía eléctrica
cionalmente lp mismo que las estacas de madera, cuya corriente de los cables es de alta tensión y
para mostrar objetivamente hasta qué profundi- los de teléfonos. Estos se encuentran dentro de
dad llegaron los restos estructurales de la época la capa de concreto y hay otros más que corres-
colonial. El arco se consolidó y en el interior, ponden a drenajes a diferentes niveles y de agua
tiene una piedra de tezontle de 0.52 x 0.26 m. potable.
con grabados que representan cráneos y huesos
cruzados alternados. Por sus dimensiones, parece El material de relleno que hay después de la
corresponder a alguna construcción de carácter capa de concreto, está muy removido y es debi-
funerario o quizá al tzompantli. do a la excavación que se hizo a 10largo de la ca-
lle y por la parte central, para la instalación del
Adosada a la esquina S. W. del altar No. 14, ducto del drenaje profundo de la ciudad. Según
se descubrió una plataforma de baja altura. Se datos fidedignos, esta instalación se hizo a prin-
desplanta de dos niveles de pisos con estuco. La cipios del siglo y todo el sistema de ductos de los
altura del lado S. es de 0.20 m. y la del N. de drenajes de las casas y edificios de esta calle, es-
0.10 m. Sus dimensiones son: 1.60 m. de largo tán concentrados al ducto general.
de E. a W. y 1.10 m. de ancho de N. a S. En el
lado S. de la plataforma, está roto el estuco que La excavación que se hace en la calle, es
la cubría y en la rotura se veía parte de un crá- prácticamente una trinchera de '2 m. de ancho
neo. Se descubrió cuidadosamente para ver si se por 28 de largo y va de W. a E. Las condiciones

90
del terreno así 10 requieren por la proximidad de
las casas y edificios y sobre todo el ancho de la
calle en la que es indispensable dejar un paso
conveniente para el paso y extracción del mate-
rial necesario para los trabajadores y la extrac-
ción del escombro.

En esta trinchera, como en toda la superfi-


cie que se ha excavado, los restos y elementos
que se descubren al iniciar las excavaciones, co-
rresponden a la época actual y la colonial y des-
pués se llega al nivel del material prehispánico el
que no es uniforme pues depende del nivel de
intrusión de las construcciones de la época co-
lonial que desplantaron después de la destruc-
ción de las estructuras prehispánicas. El material
arqueológico que se obtiene es muy variado, so-
bre todo la cerámica que en muchos casos se
presenta en grandes cantidades, pero muy revuel-
to, mientras la profundidad de las excavaciones
no llega a niveles francamente prehispánicos. To-
do el material que se descubre se controla y se
remite a la ceramoteca y al departamento de res-
tauración. el sistema del registro estaba protegido por
una construcción de tabiques de muy buena ca-
Las excavaciones que se practican en la ca- lidad, con mortero de cal y arena de una extra-
lle, no pueden ampliarse hacia el N. sino hasta la ordinaria dureza. Fue una tarea muy ardua la
guarnición de la banqueta, para que el edificio que se realizó a fin de lograr sacarlo íntegro,
de la época colonial que hasta hoy ha sido con- pues por su funcion como por su forma y mate-
servado, no vaya a resentirse por las excavacio- riales de que está hecho, es del todo interesante y
nes, ya que su estado es verdaderamente ruinoso. una pieza única. Casi paralelo al eje de la calle y
a muy corta distancia de un tubo de fierro de
8" conductor de agua potable, se descubrió
uno de no más de 0.60 m. de altura. Es de
En tanto no se llega al nivel francamente tezontle con revestimiento o aplanado de
prehispánico, muchos elementos son descubier-
estuco. Su función aún no se ha aclarado porque
tos y mu6hos de ellos son verdaderamente inte-
en esta parte no es posible ampliar más las exca-
resantes. Entre éstos se cuentan los tubos con- vaciones.
ductores del agua potable que son de plomo y
que datan del siglo XVII. Los tubos de barro uti- Pese a las limitaciones que existen para po-
lizados en el sistema de drenajes, son semicóni- der ampliar las excavaciones, siempre se buscó
cos, de una gran dureza y de un conocimiento la forma de hacerlo, procurando no obstante los
perfecto. Van perfectamente acoplados sin nin- pasos para la extracción de los materiales, ni
gún mortero o argamasa en las juntas. Uno de acercarse demasiado a las construcciones y edifi-
estos ductos que pasaba a lo largo de la calle y a cios que están habitados. Así que se trabaja a ba-
una profundidad de más de 2 m. y una separa- ja escala, ampliando en algunos casos, las excava-
ción de casi 3 m. de la banqueta, estaba conecta- ciones en uno o dos cuadros como máximo en
do a un "pozo de visita" o registro de forma de las calas que 10 permitían. En esta forma, se des~
olla con dos orificios en donde se conectan los cubrió el altar No. 15. En el cuadro 29 de la'cala
tubos. Como los tubos, son de barro cocido de DI q~e ya está, muy al E. de la sección, se descu-
una gran dureza. En la parte superior tenía un brió a una profundidad de 2.53M. con relación
brocal con su tapa correspondiente. Este es de al B.N. No. 2 cuya cota es de 2234.696 M.S.N.
cantera y tiene más de 30 cms. de grueso. Todo M., una escultura de cantera de color rosa y to-

91
nalidades gris claro que representa un caracol. Es y en el que ya no hay el menor resto de estuco,
una pieza de extraordinaria belleza y de una gran se encuentran las estacas o pilotes sobre los que
perfección. Tiene 0.90 m. de largo por 0.75 m. desplantaron los muros de las construcciones de
de ancho y 0.52 m. de altura. Se encontraba so- la época colonial. De éstos quedan los cimientos
bre un resto de piso de estuco y dentro de un y parte de los muros. Al retirar el escombro de
cuarto de gruesos muros de mampostería de la los cuadros 40 y 41 de la cala DI, se descubrió
época colonial. Estaba junto a una data de can- una ofrenda más que es la No. 27 según las des-
tera gris con dos conexiones a los lados para tu- cubiertas anteriormente en el Proyecto. Estaba
bos de barro y en la parte superior, un tapón a una profundidad de 4.13 m. con relación al B.
también· de cantera. La figura es de origen N. #2 sobre un material de tierra sedimentaria.
netamente prehispánico y tiene una pequefia Consiste en gran número de conchas y caracoles
rotura que le hicieron con alguna herramienta pequefios en su gran mayoría, dos cuchillos de
metálica, según se aprecia la huella en que está sílex blanco y varios fragmentos de concha ná-
la parte dafiada y que con seguridad, se la hi- car. Estos objetos fueron depositados en una su-
cieron al instalar el sistema de drenaje. Este perficie aproximada de 2 m2 sin una coloca-
tipo de datos, cantera y tubos de barro, data ción determinada. Limitaban la ofrenda algunas
del siglo XVII. Asociada a la escuela, había piedras colocadas irregularmente. Al levantar las
cerámica prehispánica. piedras y los objetos se continuó excavando con
cierta precaución y a una profundidad no mayor
En el "patio de los altares" él piso de estu- de 25 cms. se descubrió un número mayor de
co que presenta la mayor superficie, es el inter- conchas y caracoles, una figura de alabastro y
medio. Este apareció roto en la parte N y por la numerosos cascabeles de cobre. Todo el material
forma que presenta la rotura, parece que fue in- de esta ofrenda, se remitió al taller de restaura-
tencional. Poco antes de llegar al nivel del piso, ción con todos los datos de ubicación correspon-
dientes. La figura de alabastro parece parte de
una serpiente, tiene 9.1 cms. de largo.

Otros elementos más se han descubierto en


la parte N. E. de la sección, al demoler los muros
y cimientos de la época colonial, a diferentes ni-
veles. En un relleno de piedras y lodo, a unos
cuantos centímetros del nivel freático y al mis-
mo del piso de estuco. Se descubrieron 5 figuras
de Tláloc y una rana. Son de cantera y tezontle
y todas tienen restos de estuco policromado.
Además en este grupo de figuras, se descubrieron
fragmentos o partes de otras figuras no identifi-
cadas. La humedad ,del rellenQ dentro del que
se descubrieron, se debió sin duda a la cercanía
del agua. Estaban las figuras sin una colocación
definida y en forma desordenada. Algunas están
rotas, por lo que se infiere que simplemente for-
maban parte del material de relleno para conso-
lidar el terreno. Otras cinco figuras también de
Tláloc, fueron descubiertas a un nivel mucho
más alto y nada húmedo. Estaban pegadas al ci-
miento de un muro colonial y en un contexto de
tierra sedimentaria o cuando menos libre de pie-
dras. Estaban todas colocadas horizontalmente y
orientadas hacia el N., por 10 que es seguro que
su colocación fue intencional y sobre una cama
de tierra, para evitar que se rompieran. Las fi-
92
guras son de piedra de tezontle y cantera con es­ aclaró que lo que se denominó “patio de los alta­
tuco policromado. Una figura más fue descubier­ res” , es una plataforma que tiene un límite y se
ta francamente dentro del lodo y agua del desplanta de un nivel de otro piso de estuco a
nivel freático. Todas estas figuras se remi­ 0.80m. más bajo y tiene un escalón. Esta límite
tieron al taller de Restauración, y en el informe es completamente recto de S. a N. Parte de esta
respectivo a la semana en que se descubrieron, plataforma, queda en la cala E l y debajo de un
se remitieron todos los datos de ubicación, pro­ muro de manipostería de 1.20 m. de espesor de
fundidad, características, etc., así como un la época colonial y que se desplantaba de un es­
esquema de las figuras. tucado colocado a todo lo largo de los cuadros
de la cala, por lo que para descubrir todo el lí­
Después de haber consultado a un ingeniero mite de la plataforma, fue necesario demoler el
especialista en mecánica de sueldos quien, previo muro, tarea que fue muy dilatada y dura, dadas
estudio del terreno excavado, dio su autoriza­ las dimensiones y el material que lo formaba. En
ción para ampliar la excavación por el lado E. en los cuadros 35 y 36 de las calas El y F1 se des­
otras 2 ó 3 calas como máximo, se procuró ata­ cubrió una estructura que en un principio pare­
luzar la pared de la última cala para evitar algún cía un altar y resultó ser un cuarto cuyos restos
derrumbe, poniéndole una capa de cemento co­ alcanzan altura de 1.53m. del piso de estuco de
mo protección. Por tanto, las excavaciones se la plataforma. Conserva restos de aplanado de es­
ampliaron hacia el E. empezando por las calas tuco en el exterior y los muros interiores que
DI y E l y continuar después con la F1 y en los también tienen estuco, continúan hacia abajo
cuadros 27 al 43. Se iniciaron los trabajos y se hasta una profundidad de 1.35m. del nivel del

93
la calle de Guatemala, se trazó una trinchera que
abarca los cuadros 23 y 24 de las calas L a la Y.
Al excavarse, se procuró llegar hasta la banqueta
hacia el N. Se descubrieron hasta 5 ductos de tu-
bos de barro de diferentes dimensiones, que se
destruyeron en su mayoría debido al sistema de
protección que tenían. Este era en forma de
canal, hecho de ladrillos. y tabiques cubiertos
con gruesas losas de cantera, todo amarrado con
mortero de cal y arena de una gran dureza. To-
dos estos ductos se localizaron al N. del muro de
baja altura del que ya se habló. También a estos
ductos corresponde el "pozo de visita" ya des-
crito.

La trinchera tenía un poco más de 2 M. de


ancho debido a las limitaciones que había para
ampliar la excavación, pues hacia el N. estaba la
banqueta frontal del edificio y hacia el S. el mu-
ro prehispánico de baja altura. La trinchera tenía
una orientación de W. a E. y partió de una pe-
queña huella de un paramento que por sus carac-
terísticas y ubicación, parece corresponder a la
última época constructiva del Templo Mayor.
piso, teniendo en el fondo un piso de grandes la- Este pequeño paramento se desplanta del nivel
jas bien colocadas. Al sacar el escombro que te- de un piso de grandes losas de cantera, algunas
nía en el interior, se descubrieron algunas estacas de las cuales tienen más de 2 M. de largo por
de madera y restos de copal. Originalmente el 0.75 de ancho. Este piso se extiende hacia el N.
cuarto era de baja altura por el exterior, pues debajo del edificio y hacia el S. y con seguri-
a la altura de 0.45 m. tiene la señal de la altura dad fue roto cuando hicieron el corte para la ins-
con restos de estuco en la superficie que se ve en talación del gran ducto del drenaje profundo. A
algunas 'roturas y después se continuó hasta al- partir del pequeño paramento y hacia el E., por
canzar la altura de 1.85 desde el piso de lajas medio de la trinchera, el piso de losas fue descu-
del interior. No presenta ninguna puerta de acce- bierto en una longitud de 12.20 M. en que se
so y no se descubrieron restos del techo. Es de descubrió el arranque de una escalinata que co-
forma rectangular de 3.03 m. de largo de N. a rre de N. a S. y que conserva solamente 3 esca-
S. por 2.65 de ancho. Se desconoce su función. lones y una pequeña parte de uno más. El resto
de la escalinata fue destruido por los ductos que
En el altar No. 4 que es el que desplanta pararon sobre ella. La excavación se continuó
al nivel mas alto, se hicieron los trabajos de con- hacia el E. descubriéndose otro piso de losas
solidación desde el nivel del piso de estuco, para pequeñas en una longitud de 3 M. en que hay
su conservación. Ya antes se dijo que entre el pi- otra escalera en idénticas condiciones de destruc-
so de estuco que presenta una superficie mayor ción. Las losas del piso que está entre las esca-
descubierta y el del desplante de este altar, el leras son cuadradas de 0.40 M. por lado. Después
material es sedimentario, que quedó después de de esta segunda escalera, hay otro piso más de
alguna inundación. El altar quedó en un banco estuco, que está a un nivel más alto que los de
de este material y a la vista quedando algunas de losas. Estos restos estructurales deben correspon-
las estacas que clavaron para consolidar el terre- der quizá, a la que se ha considerado hasta hoy,
no. como la sexta etapa constructiva del Templo Ma-
yor, lo que se aclarará cuando pueda ampliarse
Para continuar las excavaciones en tanto se el área de excavación en la que se descubrieron
tomaba una determinación acerca del edificio de estos elementos.

94
Como ya se había dado la autorización para ción. El agua invade precisamente en el ángulo
ampliar las excavaciones hacia el E. cuando mu- que forma la escalera, 4 escalones. Los restos de
cho en 4 M. mas o sean 2 cuadros y a lo largo de esta escalera tienen una longitud de 28 M. Y por
toda la superficie excavada, se destruyó un muro la posición que tiene con relación a la platafor-
de mampostería de la época colonial que tenía ma en que está el mayor número de altares, pare-
un espesor de 1.30 M. y se encontraba a todo lo ce corresponder a otra gran plataforma super-
largo del área excavada de N. a S. Se desplantaba puesta que, debido al estacado que la destruyó
de varias hiladas de estacas clavadas muy juntas en gran parte, no hay la menor huella de su altu-
una de otra que en la parte superior, formaban ra original. La escalera está construída en posi-
una superficie un poco más ancha que el grueso ción paralela a la anterior y es posible que haya
del muro. Por medio de este trabajo, se descu- sido usada como embarcadero, cuando el nivel
brió el límite de la plataforma. Las estacas que de las aguas del lago, subía considerablemente.
en muchos casos alcanzan una longitud de más
de 2 M., penetraron en la mayoría de algunas
estructuras, llegando inclusive al piso de estuco La parte N.E. del área excavada es la que
en el que se aprecian las huellas. Desde luego que resulta más invadida por el agua del nivel freáti-
el estacado ya es de origen colonial, que di- co, por lo que se instalaron unos drenes, uno de
fiere del prehispánico, por la clase de madera los cuales pasa por debajo de la escalera; és-
que emplearon y por los cortes para hacerles la tos desaguan en un cárcamo del que se ex-
punta en los que se conoce que fueron hechos trae el agua por medio de una bomba. Sola-
con herramienta metálica. mente en una parte de los escalones se acumula
el agua. Los drenes son tubos de cemento con
Debido al desnivel del piso que es de un perforaciones y después de colocados, se taparon
con una capa de pequeñas piedras de tezontle y
100/0, en la parte N.E., ya se llegó al nivel freá-
finalmente con tierra. El agua que se debía acu-
tico dentro del que se han descubierto más res-
tos estructurales. mular en la superficie, se filtra a través de estas

Además del muro que se desplantaba del


estacado, por la ampliación que se hizo de los
4m. se descubrieron más muros de la época co-
lonial; los cuales también fueron demolidos; pe-
ro antes se levantó un plano de todos. El muro
de mayor espesor y longitud que estaba a lo lar-
go de la excavación tenía más de 2 M. de altura.

Uno de los restos estructurales que sufrie-


ron mayor destrucción debido al estacado para
desplantar el muro de mayor longitud, fue el que
corresponde a una escalera. Los escalones más
afectados fueron los de la parte S. donde sola-
mente se descubrieron 3, y, en la parte N que ya
está más cercana al nivel freático y, por tanto, a
mayor profundidad debido al desnivel del piso,
la escalera muestra, en una parte, 9 escalones. La
escalera está limitada en la parte N por una pla-
taforma cuya longitud no se ha descubierto.
Tiene además, casi a la mitad de la longitud des-
cubierta, otra plataforma que se desplanta del
nivel del piso y que llega al escalón No. 4 y en
el extremo N., la escalera hace una escuadra
hacia el E. Y,. su longitud no podrá determi-
narse por haber llegado al límite de la excava-

95
capas a los ductos que desaguan en el cárcamo. interior de los muros tiene motivos decorativos
Uno de los drenes se hizo pasar por debajo de la de varios colores, destacando unos círculos o
'escalera, en la parte más afectada por el agua. anillos que conservan su colorido original. Co-
Toda la parte posterior de la escalera que mos- mo en el piso superior sólo quedaba la huella
traba el núcleo que, como en todo tipo de es·· de la superposición, se decidió descubrir total-
tructuras en la zona, es de tezontle con mortero mente la estructura inferior que, en un princi-
lodo, ha sido consolidado debidamente para su pio se creyó que se trataba de un altar más. Es
conservación. Los escalones también se consoli- de la forma ya dicha de baja altura. La super-
daron, en la misma posición en que se descubrie- ficie exterior del muro E., está inclinada y las
ron. Algurios muestran los efectos de las estacas. demás verticales. No obstante se dejaron partes
de la superposición, además de los planos y fo-
tografías correspondientes. Lo mismo se hizo
Sobre el piso de la primera plataforma que
se descubrió y cuyo estuco ocupa la mayor su- con otras construcciones de 2 altares más.
perficie, hay una huella de una construcción
formada por el desplante de 3 cuerpos en forma El día 17 de agosto, empezó al fin la demo-
de "U" con los ángulos en escuadra. Correspon- lición del edificio del No. 50 de la calle de Gua-
día a la superposición de otra de la misma que temala, lo que dará margen a continuar las
se desplanta del nivel del piso inferior y que está exploraciones de la calle hacia el N. y también al
a 0.80 M. del primero. Esta fue descubierta con E. y W, que por mucho tiempo se interrum-
mucha anterioridad parcialmente, y la superficie pieron.

96
Según la decisión al respecto, los elemen- La demolición de los muros del edificio se
tos estructurales y arquitectónicos que se con- hizo hasta el nivel en que había unos pisos de
servaron a la fecha sin sufrir alteraciones y mo- cemento y mosaico correspondientes a un patio
dificaciones, van a ser desmontados numerando del edificio, por lo que quedan las huellas del
previamente todas las piedras para ser nueva- desplante de los muros y desde luego los cimien-
mente reconstruidos. tos de los mismos.

Conforme avanzaban las excavaciones, se


La mayor parte de los trabajadores de esta
sección intervinieron en la demolición, lo que iban descubriendo los cimientos, algunos de los
cuales estaban muy profundos. Entre los restos
se aprovechó para continuar el levantamiento
de los muros y cimientos, también se descubrie-
de los planos parciales que se utilizarán en la
construcción del plano general del Proyecto. ron muchos ductos de barro en varias direccio-
nes y los registros correspondientes. También se
descubrieron algunos restos de estructuras subte-
El día lo. de octubre, se inician los trabajos rráneas, correspondientes quizá a algún sótano,
en la superficie que ocupaba el edificio que se comp un arco adintelado hecho de tezontle muy
demolió. Empezaron por trazar las líneas corres- bien trabajado y que según al nivel a que con-
pondientes a la reticulación, para continuar las duzca, probablemente se quede en su sitio, lo
excavaciones en un orden determinado, según que demostrará objetivamente los niveles a que
los elementos descubiertos desde el principio de llegó la destrucción de los elementos estructura-
los trabajos del Proyecto. les prehispánicos. Un arco semejante es el que

97
está en la plataforma de los altares y que tiene pudiera impedir el paso a las instalaciones que
en el interior, la piedra grabada con cráneos y hay: almacén, taller de reproducción de piezas
huesos cruzados que ya se mencionó. Otras pie- arqueológicas, carpintería, etc.
dras con los mismos motivos y de dimensiones
muy semejantes, se descubrieron asociadas a los Como una buena parte de la superficie que
muros coloniales al excavar uno de los cuadros ocupaba el edificio demolido ya había quedado
de la cala G 1 . Cuatro de estas piedras estaban co- libre de restos de estructuras coloniales e inclu-
locadas formando un cuadro y eran probable- sive ya se había levantado el plano correspon-
mente base de alguna columna o pilastra. Una diente, se procedió a continuar las excavaciones
más se descubrió casi al mismo nivel y en otro en la parte sur del terreno. Se empezó por am-
un cuadro de la misma cala. El hecho de haber pliar la excavación que con mucha anterioridad
descubierto estas piedras y los motivos de los se inició en la calle hasta llegar a la banqueta,
grabados que tienen, hace pensar que correspon- y que empezó en la cala 1, continuando hasta
dían a algún monumento funerario, quizá un la S. Fue cuando se llegó al nivel del piso de
tzompantli, de los que debe haber habido varios las grandes losas de cantera, sobre el que se des-
según las dimensiones del gran centro ceremo- plantan los restos de las dos escalinatas que están
nial de Tenochtitlan. paralelas y cuyo desarrollo va hacia el N, precisa-
mente debajo de la banqueta y del edificio. Am-
Con la complicación que se hizo en la úl- bas escaleras fueron cortadas por la excavación
tima cala hacia el E. se llegó al límite de la ex- que se hizo a lo largo de la calle, por lo que el
cavación que no presenta ningún obstáculo que resto de éstas, queda hacia la parte sur, es decir

98
linata y que adornan las fachadas sur y posterior ma de canal, hecho de ladrilla con mortero de
hacia la calle. Como la que se encuentra al E. cal y tezontle molidos, de una gran dureza, y te­
presentaba 3 escalones más que la del W. y me­ nía además, tapa de losas de cantera. El sistema
nor grado de destrucción, las nuevas excavacio­ de protección impidió la extracción de los duc­
nes empezaron para descubrirla totalm ente. En tos que eran de barro cocido de muy buena cali­
una parte, a partir del escalón No. 4, los escalo­ dad. También se extrajeron los ductos de los ca­
nes presentan un hundimiento debido a que un bles conductores de energía eléctrica de alta ten­
ancho muro de mampostería de la época colo­ sión, los de teléfonos y uno más de fierro de 6”
nial, pasó sobre la escalera. Los escalones son de diámetro que era de conducción de agua pero
7 en total, y llegan a la superficie de un piso estaba fuera de servicio.
de losas de cantera y lajas de basalto. Sobre és­
te hay otro superpuesto, de los mismos materia­ El frente que se empezó a excavar, partien­
les. Por el lado N. la escalera remata con una do de los trabajos que con mucha anterioridad
alfarda de 3.45 mts. de ancho. se hicieron en la calle, precisamente frente al edi­
ficio, abarcó varias trincheras, para continuar el
descubrimiento de los restos estructurales y de
A fin de continuar los trabajos en esta parte
algunos pisos que habían quedado parcialmente
de las escaleras, fue necesario romper totalm ente
descubiertos. Por lo que se pudo ver al principio,
la banqueta, el firme de concreto de la misma
el piso de losas de cantera de grandes dimensio­
que era bastante grueso y resistente, y todos los
nes, continúa hasta el norte; pero sobre éste, hay
ductos de los drenajes que estaban a diferentes
otras superposiciones más hasta llegar a la super-
niveles y protegidos por una construcción en for­

PROYECTO TEMPLO!
MAYOR 1 NAH |
S E C C IO N - 2 i
CRIAS 1 - 1 CimORO 26
ENTIER R O 1 SOBRE E L RURR 131
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99
ficie de uno que está en muy mal estado de con- piedras, tanto en las construcciones como en los
servación. Del nivel de este piso, también hay cimientos de casas y edificios, y con mucha fre-
otros superpuestos que se han dejado formando cuencia, al demolerlos se descubren piedras que
unos bancos. Se van a descubrir con cuidado, pa- tienen grabados o bien son figuras. Entre el
ra determinar con exactitud el número de super- escombro que usaron para rellenar, también sue-
posiciones. len encontrarse estos elementos. Las piedras
careadas son las que utilizaron con mayor fre-
Las excavaciones no se hacen hasta una cuencia. Al destruir algunos de los muros del
profundidad determinada porque los restos de edificio recientemente demolido, se descubrie-
las estructuras coloniales se desplantan a dife- ron en uno de ellos, que estaba orientado de E.
rentes niveles, entonces, la profundidad de la ex- a W, dos cabezas de serpiente de tezontle negro,
cavación en cada cuadro se hace hasta que se utilizadas como simples piedras. Ambas conser-
descubren los pisos o bien elementos estructura- van restos de estuco blanco con que estaban cu-
les, o elementos cuyas características son neta- biertas. Con el fin de desprenderlas sin que se
mente prehispánicas. maltrataran más de lo que estaban, se trabajó
con mucho cuidado, pues como se ha dicho, en
Aunque las excavaciones empiezan con la la construcción de estos muros de mampostería,
demolición de restos de las construcciones de la con mortero de cal y arena de una gran dureza.
colonia, siempre se hace con cuidado, porque Estas cabezas no son muy grandes. Sus dimensio-
elementos prehispánicos como son piedras gra- nes son muy semejantes a otras muchas que es-
badas, producto de la destrucción de los monu- tán empotradas en algunos muros y cuerpos de
mentos, fueron aprovechados, como simples los basamentos de los templos. Una conserva

100
•£ .MC' T M fc v : « ; . . -~ :Q
í>' " • '.

completa la espiga que se empotraba en el muro Todos los pisos descubiertos en ésta área,
y la otra sólo tiene un fragmento. No obstante desde el más profundo hasta el de nivel más al­
el empleo que se les dio, están relativamente to, tienen un desnivel de W a E y S a N. Están
bien conservadas en sus principales rasgos. Fue­ marcados como en el piso estucado de los al­
ron descubiertas en dos cuadros de una misma tares que de S a N. es de 10°/o.
cala. Las dimensiones de la más completa son:
0.61 M. de largo por 0.26 M. de ancho y la otra En el cimiento de un muro más, formando
tiene 0.47m. de largo por 0.34m. de ancho. Am­ parte del mismo y sem i-enterrado en el piso de
bas estaban en la orilla del muro, la primera esta­ estuco, se descubrió una piedra muy interesante.
ba orientada de W a E y la otra de S a N. En otro Es de cantera, tiene 0.58 M. de altura y lo mis­
muro que penetraba hasta el piso de estuco que mo de ancho y 0.47m. de grueso. En dos de sus
se está conservando, se descubrió, como las figu­ caras opuestas tiene grabados. En una tiene un
ras anteriores, un cráneo de tezontle rojo de 28 cuádrete que enmarca una cabeza de águila
cms. de altura por 18 cms. de ancho. En la par­ (cuauhtli), y en la parte inferior 3 círculos, y
te posterior conserva parte de la espiga que se uno más en la parte superior derecho del cuádre­
empotraba en algún muro. Es muy semejante te por lo que el conjunto corresponde a una fe­
al que tiene el altar No. 5 en el muro W. Esta fi­ cha que es: 4 cuauhtli. La otra cara, o sea la
gura también estaba formando parte del muro opuesta, está muy rota y conserva restos de un
que, como el que contenía las serpientes, estaba grabado que no se puede identificar debido a lo
de E a W. dañada aue está.

101
La cerámica de todos tipos, desde la actual,
colonial y prehispánica, está resultando muy
abundante en esta área. Asociada a la cerámica
y al escombro, se descubren también infinidad
de otros elementos de madera, vidrio, metal,
hueso, etc., y, como todo producto de excava-
ción, también se apartan y se envían a la Cera-
moteca con su debida documentación con res-
pecto a su ubicación en pozos y calas y los datos
de profundidad en que se localizó. Cuando las
excavaciones se hacen por capas, ya sean de los
materiales que se compone el terreno en cuanto
color, textura, etc., o bien por medidas determi-
nadas, todo el material se levanta sin mezclarse
y se separa por capas.
En todos los restos de las estructuras de la
época colonial el porcentaje de material pétreo El análisis de los materiales proporcionará
empleado, corresponde al de la destrucción de los datos precisos sobre los pueblos tributarios de
los monumentos prehispánicos; pero en el área Tenochtitlan: los materiales que aportaban, su
que ocupaba el edificio que se demolió última- procedencia y sus característicos rasgos cultura-
mente, es notable que, formando parte de íos les; sus conquistas, triunfos, etc., desde su
,nuros y en ocasiones hasta los cimientos, se en- fundación hasta su trágico fin. Después, los ele-
cuentren piedras de cantera, en su mayoría muy mentos y materiales de procedencia europea,
bien trabajadas y algunas de gran tamaño, que con sus semejanzas o marcadas diferencias en
antes formaron parte de otras construcciones cuanto a formas, materiales de manufactura y
coloniales. Hay entre éstas, bases de columnas muchos, desconocidos por los mexicas, para
y pilastras, dinteles, cornisas, molduras, etc. To- culminar con los materiales de la época mo-
das estas piedras que bien se pueden aprovechar derna.
una vez más, aunque no en restos prehispánicos,
se separan del escombro que se desecha.

Todos los elementos descritos en el presen-


te resumen, se consignan también en los planos
respectivos que se levantan topográficamente y
en los que puede verse su correcta ubicación, de
. acuerdo con la reticulación que se adoptó. Las
profundidades de toda clase de elementos, están
referidas al Nivel del Mar, (M.S.N.M.), determi-
nadas con relación a los diferentes Bancos de
Nivel (B. N.) establecidos estratégicamente en
toda la zona. Particularmente los datos de pro-
fundidad del área que se está trabajando hasta
este último mes del presente año, están referidas
al B. N. No. 3 cuya cota es: 2235.594 M.S.N.M.

102
----------- Excavación en la zona norte.

por: ISABEL GUTIERREZ S. Al inicio de la temporada en 1978, se exca-


vó en el predio de Justo Sierra 13 y podríamos
Al demolerse la casa habitación que ocupa- decir que es ahora el límite Este de ésta zona
ba la esquina Sureste de las calles de Argentina y Norte, encontrándose bajo el nivel colonial los
Justo Sierra, así como su colind~nte al Sur, que- pisos de lajas que limitaban el lado Norte del
dó incorporada al proyecto una zona que no ha- Templo Mayor en esa sección. Este predio fué
bía sido prevista dentro del plan inicial, entre denominado como sección 3, y así denomina-
cosas por quedar ya al Norte del perímetro del mos ahora la zona Norte en cuestión que se ex-
Templo Mayor. cava a partir de agosto de 1980.

103
dos de lajas (prehispánicas) y de lozas y lajas (co-
loniales) así, como una zona con lo que podría
ser estuco con pigmento rojo, que corre sobre un
lecho de cantos rodados, por lo que es dificil
deducir a que periódo pertenece.

En el nivel colonial es interesante mencio-


nar el hallazgo de cinco basas de columna en da-
dos de 0.67 mts. por lado, y con una altura má-
xima de 0.39 mts. a partir del piso de lozas, to-
das en línea, separadas 2.30 una de la otra, ubi-
cadas en las calas K', M' en su límite con D', N',
Ñ' con O' y P'.

El piso de lajas prehispánico que al parecer


cubrió toda la zona en la etapa que antecedió a
la conquista, muestra espacios cuadros que po-
drían marcar la huella de una estructura que
arrasó el conquistador. Uno de estos espacios es-
tá comprendido de las calas P' a la R', cuadros
64 a 62, otro en las J' y K' del 64 hacia el Sur,
pero todavía está cubierto por lozas coloniales, y
en las calas S', H' 1', cuadros 64 y 65.

En las calas H' el', cuadro 66, encontramos


un muro de lodo con restos de pintura roja, al
parecer ya sin diseño; continúa visiblemente ha-
Lo que suponemos constituyó la última cia el Este y hacia .abajo, pero dado lo difícil de
etapa constructiva del Templo Mayor en su flan- su restauración, al momento no vamos a seguir el
co Norte corre a lo largo del cuadro 48 y los pi- descubrimiento.
sos de lajas que limitan se aprecian ya a lo largo
del cuadro 49; así podríamos establecer la zona A lo largo del cuadro 64 y parte del 63, ca-
Norte a partir del cuadro 50, tentativamente has- las T', U'; encontramos 4 escalones, los 3 supe-
ta el 68, ya qut' la banqueta de la calle de Justo riores muy destruidos con restos de estuco, hue-
Sierra corre en el límite de estos dos cuadros lla de 0.30 mts. y peralte de 0.25 mts. que co-
(68 y 69) con una desviación hacía el Sureste. lindan al Este con una alfarda de 2.30 mts. de
En cuanto a las calas, la sección 3 que se excavó ancho. Ya descubierta en su casi totalidad la
en 1978 abarcaba de la cala D a la 1, y la actual estructura consiste en: una escaljnata de 4 mts.
sección abarca de la A a la D (en dirección Oes- de largo con 10 escalones, los siete primeros
te-Este) y de la A' a la Z' (Este y Oeste), estan- completos y los 3 superiores muy destruidos;
do la banqueta de Argentina a lo largo de la W', con 2 alfardas a los lados, al momento sólo esta
X', Y' y Z' sobre la calle o arrollo. completa la Este, con talud hasta el 40 escalón
una moldura de 4 partes en bisel hacia el centro
El primer nivel lo constituían los pisos de (2 y 2) divide el lado de la alfarda. La alfarda
mosaico y cemento de las casas demolidas, bajo Oeste continúa por debajo de la banqueta
el que se encontraron numerosos cimientos de de Argentina, en la base de la alfarda Este se
concreto, siendo los mayores: 2 que corrían de encuentran restos de una espiga de 0.40 mts.
Este a Oeste, uno a lo largo del cuadro 65, y de ancho que debe haber tenido en su extremo
otro a lo largo del 60, 61 y otro que corre de algún motivo decorativo que no se encontró.
Norte a Sur a lo largo de la cala V'. A partir de
una profundidad que oscila entre 0.75 y 1.05 La escalinata ve al Sur, y la hemos denomi-
mts. encontramos una serie de pisos fragmenta- nado escalinata Norte.
104
A lo largo del cuadro 64, detectamos un igual a la de la alfarda Norte y en su base restos
muro de estuco que desplanta del mismo piso de de una espiga misma que fué casi totalmente
lajas de la escalinata Norte, tiene un fuerte de- destruida en el caso de la alfarda Norte. Estas es-
clive de 0.25 mts. a 1.40 mts. de altura, y al pa- calinatas desplantan de un piso de lajas semides-
recer colinda con el lado Este de la escalinata. Al truido, al que llegamos después de remover el re-
seguir este muro encontramos que hace esquina lleno de tezontle y lodo. En las sucesivas capas
en la cala O' con otro muro que ve al Poniente y de tezontle y lodo hay un piso intermedio, a par-
Este a su vez, colinda con una alfarda con la mis- tir del 60 escalón hacia abajo (1.80 a 1.20 mtc),
ma orientación. Al descubrir la alfarda que ve al constituida por una mezcla de cal y tezontle du-
Poniente, encontramos que es similar a la de la ro como el cemento, que cubrió las molduras en
escalinata Norte, midiendo ésta 2.35 mts. de an- ambas escalinatas y por consiguiente las águilas,
cho, pero al centro de la moldura que divide la y al removerlo encontramos frente a ambas esca-
alfarda, encontramos una cabeza de águila empo- linatas dos ofrendas.
trada que tiene el pico semiabierto, con pigmen-
to amarillo en la cabeza y rojo en la boca. Mide
0.40 mts. de largo por 0.35 mts. de altura. La es- Por considerarse esta zona fuera del perí-
calinata al Sur de la alfarda es de nueve escalones metro del Templo Mayor, dónde se han localiza-
muy bien conservados, excepto el último, y mi- do las demás ofrendas, decidimos denominarlas
den 3.90 de largo,. 30 de huella y .25 de peralte con letras para diferenciar los dos grupos. Así, la
y en su extremo Sur tienen otra alfarda de la que ofrenda A se encuentra a la altura del peraite
hemos descubierto más de la mitad, con ángulo del 40 escalón de la escalinata Norte, aproxima-

105
damente 0.25 mts. al Sur del 10 escalón y con- bola de copal, y algunos con incrustaciones de
siste en una serie de 12 cuchillos (aunque no ha concha y pigmento rojo. (Cuadros 60-61, cala
terminado el levantamiento), conchas marinas y Q').
coral red. Los cuchillos son desilexy muestran
pigmento rojo, las puntas de todos se dirigen al La zona se va a ampliar hacia el Oeste para
Norte, que es donde está la escalinata. (Cuadro delimitar el extremo en la escalera Norte y bus-
62, cala U'). car una estructura que pudiera ser simétrica a
la escalinata de las águilas, y hacia el Sur para
La ofrenda B se localiza frente al centro de descubrir el resto de la alfarda de las águilas y
la escalinata de las águilas, a la altura del peralte delimitar la plaza que forman estas estructuras.
del 40 escalón, encima de la huella del 10 y
consta al momento de 3 grandes figuras antro- Nuestra cota de nivel es de 2,232.935 mt/
pomorfas de copal, conchas marinas, y cuchillos s.n.m. a la altura del descanso del escalón su-
de silex, algunos verticales sostenidos sobre una perior de la escalinata norte.

106
--- 11 ESTUDIOS PREHISPANICOS
El Templo Mayor:economía e ideología.

por: ARQL. EDUARDO MATOS MOCTEZUMA son el fen ó m en o y la esencia. La prim era la en­
tendem os como el aspecto sensible de los obje­
Las investigaciones que venim os realizando tos y los procesos de la realidad objetiva: es m o­
actualm ente dentro del Proyecto Tem plo M ayor vible y cam biante, en tanto que la esencia es el
han perm itido obtener toda una serie de m ateria­ aspecto interno y más estable de los casos o pro­
les arqueológicos que, ju n to con los datos de las cesos y que está oculto detrás de los fenóm enos
fuentes históricas, nos llevan a profundizar más m anifestándose a través de ellos. El conocim ien­
en el conocim ento del Tem plo M ayor de Méxi- to científico debe ir dirigido al estudio no sólo
co -T en o c h titla n , lugar sagrado desde donde se de los fenóm enos, sino especialm ente de los pro­
rige el destino de los mexicas y de los pueblos cesos internos, de la esencia que los determ ina.
sujetos a ellos.
Así, vamos a describir y estudiar diversos
Iniciado en m arzo de 1978, el Proyecto
aspectos fenonénicos presentes en el Tem plo Ma­
partía de problem áticas específicas a resolver a
yor, para lo cual hemos escogido cuatro de ellos
través del dato arqueológico y del dato histórico,
que consideram os im portantes y que analizare­
ya que consideram os que ambas fuentes de co­
nocim iento son com plem entarias y hoy nos per­ mos en el siguiente orden:
miten presentar, a m anera de síntesis, los plan­
team ientos de que partíam os al com ienzo de
nuestra investigación en com paración con los da­
tos hasta ahora alcanzados, si bien es necesario I Se analizará el m ito del naciemiento de Huitilo-
pochtli y su lucha en contra de Coyolxauhqui ya
aclarar que nuestra investigación se encuentra que este mito juega un papel importante en rela­
aun en el proceso de obstención de datos a tra­ ción al Templo mismo y al dios.
vés de la excavación por lo que todavía falta m u­
cho por obtener y por lo tan to , de estar en la po­ II Partiremos del estudio de Tláloc y Huizilopochtli
ya que ambos presiden el Templo Mayor, y men­
sibilidad de com probar o m odificar lo aquí cionaremos algunas ideas en cuanto a la dualidad
planteado. que representan, además de los rasgos arquitectó­
nicos del Templo.
Nuestro ensayo parte del estudio de un
conjunto de fenóm enos relacionados con el III Se hará un análisis de las festividades mensuales y
los rituales que se realizaban en el Templo.
Templo M ayor, los cuales nos perm itirán pene­
trar a la esencia que los produce, oi?rdo necesa­ IV Presentaremos un resumen de las ofrendas asocia­
rio para analizar científicam ente este abigarrado das al Templo.
conjunto de fenóm enos, recurrir a la utilización
de dos categorías generales que juegan un papel T odo lo anterior nos perm ite hacer los
importante en el proceso del conocim iento: ellas planteam ientos que a continuación expresamos.

Trabajos presentados en la Universidad de Colorado (Boolder), en Octubre de 1979 en el Simposium sobre “El
Templo Mayor” , con la participación de los Dres. Nicholson, Armillas, Calnek, Broda, Pasztory, López Austin,
Carrasco, Heydn y publicado en A ntropología Americana, n 21, IPAH. 1980, México.

109
El Templo Mayor de Tenochtitlan es el lu- 1
gar en donde real o simbólicamente se asentaba Vamos a empezar por hacer un somero es-
todo el poder mexica. Para nosotros, la presencia tudio del mito del nacimiento y lucha de Huitzi-
de Tláloc y Huitzilopchtli en su parte superior lopochtli conforme a la versión que nos da Saha-
no era más que un reflejo de la base económica- gún, para que esto nos dará pie para observar los
a~icultura y tributo- dentro de un contexto elementos fundamentales del.mito, y por lo tan-
ideológico (religión). to, ver la relación que guarda~con el Templo Ma-
yor, ya que este último con algunos de sus com-
En consecuencia, todo el contexto arqueo- ponentes asociados no es más que la rep!esenta- .
lógico asociado al Templo Mayor (ofrendas, es- ción "viva" del mito mismo. 1 -r

culturas, rituales, etcétera), de alguna manera-


nos están indicando el control económico-re ji- Empezaremos por mencionar que el mito
gioso-político que ejerce Tenochtitlan sobre su del nacimiento y lucha de Huitzíiopochtli parte
pueblo y otros grupos. de un hecho real, histórico. Sabemos por dife-
rentes fuentes históricas que hablan de la pere-
grinación de los mexicas cómo, al llegar al cerro
En el cuadro 1 hemos sintetizado lo antes
de Coatepec, cercano a Tula, surge el dios y se
planteado, que se explica así: el aspecto fénome.=
realiza el combate contra sus hermanos. Tam-
nico (A) es lo que en términos generales cono-
bién es evidente que antes de llegar a este lugar
cemos: la presencia de Tláloc y Huitzilopochtli
han sucedido varios acontecimientos que, junto
en el 'Templo Mayor; los simbolos y elementos
con lo ya señalado, sugieren que el mito está
propios de cada deidad; los rituales en las dife-
estructurado en hechos reales. Algunos autores
rentes festividades y sus características; etcé- han mencionado lo anterior al estudiar la pere-
tera ... Es todo aquéllo que está manifiesto y pre-
grinación mexica.2
~nte ante el sacerdote y los participantes con
toda-su Gomplejidad religiosa. Pero esto no es de extrañar. Bien sabemos
cómo Cé Acatl Topitzin Queta;lcoatl, personaje
La esencia (B) es lo que no está presente vivo, real, se convertiría en dios, al igual que Osi-
empíricamente, y que sin embargo, está actuan- ris en el antiguo Egipto. Con Huitzilopochtli
do en la base de todo este proceso. Para nosotros ocurre lo mismo, es decir que muy a menudo la
esto se ve en la presencia de estas dos deidades historia da paso al mito y éste se incorpora al
en el Templo Mayor. TIáloc, por un lado, dios terreno de lo sagrado, se sacraliza, y el ritual
del agua, de la lluvia, dios fundamental para un hará que oonstantemente esté vigente lo que
pueblo agrícola como el mexica, y bien sabemos ocurrió en el tiempo mítico.
que parte de la base económica de Tenochtitlan
se asentaba sobre la producción agrícola. Por Vamos a continuación a ver qué elementos
otro lado, Huitzilopochtli, dios tribal, solar, dios del mito vemos presentes en el lado sur del
de la guerra, de la imposición a otros grupos, Templo Mayor, el lado destinado a Huitzilo-
imposición que traía aparejado el tributo de las pochtli. Asi tenemos que el mito hecho realidad
áreas sometidas con lo cual Tenochtitlan se abas- queda plasmado en este templo:- Coyolxauhqui,
tecía de toda una serie de productos necesarios a decapitada y desmembrada, yace al pie de la
su economía: cargas de maíz, frijol, cacao, man- escalinata que da acceso a la parte superior del
tas, plu-mas, objetos, materia prima como pieles, Templo, en donde se encuentra Huitzilopochtli,
- piedras, cal, etcétera ... Es decir, que la presencia vencedor, dentro de su santuario. Otro elemento
de estos dioses y no otros son reflejo de la base Í!11p<;:>rtante
es la presencia de las grandes cabezas
sobre la que se asi~nta económica y política- de Serpiente, que rematan las alfardas de la esca-
mente Tenochtitlan.
León Portilla, Miguel, México Tenochtitlan: su espacio y
A continuación vamos a analizar los fenó- . tiempo sagrados, INAR, 1978, México.
menos antes mencionados, para lo cual utiliza-
2 Ver el compendio que presenta en su estudio Yólotl G.
remos tanto el dato arqueológico como el de las de Lesúr "El dios Huitzilopochtli en la peregrinación mexi-
fuentes históricas, como quedó dicho al comien- ca", en Anales, tomo XIX, pp. 175-190, 1968, INAR,
zo de este ensayo. México. '

110
TEMPLO MAYOR

MITO
FESTIVIDADES- RITUAL
SACRIFICIOS OFRENDAS

®
FENOMENO
HUITZILO-
TLALOC
POCHTLI

AGUA GUERRA
AGRICULTURA TRIBUTO

@
ESENCIA
BASE ECONOMICA
DE TENOCHTITLAN

111
del Templo, así como una serie de piedras sale- "Solían poner así en los pechos de los idolos una
dizas sin representación ninguna que aparecen en piedra preciosa fina, diciendo que aquéllas eran
los distintos cuerpos del basamento piramidal. sus corazones, en memoria de lo cual debían poner
Otro hallazgo significativo es el de ocho figuras también a sus muertos."s
de piedra que se encontraron reclinadas sobre
la escalinata de una de las etapas constructivas Es así como el dato histórico de una lucha
(111) Y que seguramente estaban colocadas intestina se convierte, al paso del tiempo, en una
en los diferentes cuerpos del templo, siendo re- lucha cósmica protagonizada por dos deidades,
cogidos y colocados allí al momento en que se una de las cuales es inmolada y como el templo '"
iba a cubrir esa etapa constructiva. 3 (lugar sagrado) en realidad es la representación"'j
del cerro en donde ocurrió la lucha, es la presen-
Si vemos más detenidamente estos ele- cia real del mito. .
mentos tenemos que, conforme al mito, hay
una estrecha relación entre mito y templo. Así, y hay algo que no queremos pasar por alto.
la ubicación de las deidades protagonistas de Coyolxauhqui es también la ¡:~presentación del
la lucha es perfectamente lógica y ocupan el grupo vencido. Junto a ella subían los prisione-
lugar que el mito les señala: Coyolxauhqui al ros destinados al sacrificio. Terrible preámbulo ~
pie del cerro-templo, vencida; y Huitzilopochtli para quienes vencidos también, serían ofrenda-
en la parte alta, vencedor. Las cabezas de ser- dos al dios Huitzilopochtli, el vencedor.
piente; por otro lado, nos hablan del nombFe~_
mismo del cerro: Coatepec, el "cerro de la ser- Con todos estos elementos el mexica logra=--
piente". En cuanto a las piedras saledizas que ba dos fines y resolvía dos problemas: por un_
vemos en alguna de las etapas constructivas, bien lado, el aspecto religioso, la presencia real del
pudiera tratarse de dar la idea de un cerro, ya mi to y su reactualización a través del sacrificio-
que no tienen ningún tipo de decoración. en el cerro-templo que así justifica su función
La sangre, el líquido precioso, garantizaba la
De las escultura encontradas, algunas de marcha del sol, del universo. Por otro lado lo
ellas de cerca de 2.00 m de alto, podemos decir económico-político: la víctima, proveniente de
que por lo menos seis son de los llamados porta- un grupo enemigo, de un pueblo vencido (Coyol-
estandartes. Sin embargo, ¿no serán la represen- xauhqui) y lo que esto significaba: el pago de un
tación de los Centzonhuizanahua, de los ene- tributo necesario para la economía mexica.
migos de Huitzilopoch tli a que hace referencia
Alvarado Tezozómoc en su "Crónica Mexica- Es decir, el ofrendamiento a través del ri-
yotl" cuando dice " ...y de las otras llamadas tual no era solamente a una deidad tribal impor--
Tzohuitznahua, los cuales estaban en piedras, tanteo Permitía el ofrendam.iento al sol-guerrero (
figuradas con rodelas, alrederor del cerro del que garantizaba la supervivencia de sí mismos,
templo."?4 tanto económica como religiosamente ..Dicho en
otras palabras, todo el aparato ideológico mexi9L.
Estas esculturas están ataviadas con maxtIa- . tendía a lograr la supervivencia, la reproducció
tI y en la cabeza tienen una especie de diadema. de un estado de cosas en que lo económico y 1
En el pecho algunas tienen una oquedad que se mítico se funden a través de mecanismos religi<i-
encontró tapada, ya con estuco o con piedra. En sos que dan validez al ritual y cómo este fenóme
el interior se encontraron piedras verdes en algún no -el ritual- encierra en sí toda una esencia
caso y en otro piedras verdes y una cabecita del que es importante descubrir.
mismo material. Esto nos recuerda a Las Casas
cuando dice: 11
Pasaremos ahora al estudio del segundo
3 Recordemos que el Templo Mayor, al igual que muchos
edificios mesoamericanos, tuvieron varias etapas construc-
conjunto de fenómenos que tenemos en el Tem-
tivas en las que la etapa anterior se utilizaba como núcleo pló Mayor, desde la presencia de las dos deidades
y se cubría por la nueva construcción.

4 Alvarado Tezozomoc, Fernando, Crónica Mexicayotl, Ins- s Las Casas, Fray Bartolomé, Historia de las Indias, Ed. Agui.
tituto de Investigaciones Históricas, UNAM, 1975, México. lar, sr. Madrid .
.....•

112
en su parte superior y de algunas características ...El cuerpo de él estaba lleno de todas las semillas
del templo mismo, hasta el por qué de esa dua- que había en toda la tierra, y decían que era el
lidad. dios de las sementeras y frutas ... ,,1I

Ya hemos hecho mención páginas atrás lo En cuanto a las características del Templo,
que para nosotros significa la presencia de estos Sahagún nos relata en el apéndice II del Segundo
dos dioses en el Templo Mayor. Vamos ahora a Libro:
recordar algunas fuentes que nos hablan de ca-
da uno de ellos. Así, Sahagún nos dice de Tlalóc: "La principal torre de todas estaba en el medio y
era más alta que todas, era dedicada al dios Huitzi-
lopochtli o Tlacauepan Cuexcotzin. Esta torre es-
"1. Este dios llamado Tláloc Tlamacazqui era el
taba dividida en lo alto, de manera que parecía
dios de las lluvias.
ser dos y así tenía dos capillas o altares en lo alto,
cubierta cada una con un chapitel, y en la cumbre
2. Tenían que él daba las lluvias 'para que regasen
tenía cada una de ellas sus insignias o divisas distin-
yerbas, árboles y frutas mantenimientos: también tas. En 'la una de ellas y más principal estaba la
tenían que él enviaba el granizo y los relámpagos y estatua de Huitzilopochtli, que tam bién la llama-
rayos, y las tempestades del agua, y los peligros de ban Ilhuicatl Xoxouhqui; en la otra estaba la ima-
los ríos y de la mar.
gen del dios, Tláloc. Delante de cada una de éstas
estaba una piedra redonda a manera de tajón que
3. El llamarse Tláloc Tlamacazqui quiere decir que
llamaban téchtl, donde mataban los que sacrifica-
es dios que habita en el paraíso terrenal, y que da
ban a honor de aquel dios; y desde la piedra hasta
a los hombres los mantenimientos necesarios para abajo estaba un regajal de sangre de los que mata-
la vida corporal.,,6
ban en él, y así estaba en todas las otras torres.
tenían la cara hacia el occidente, y subían por gra-
Al describir a Huitzilopocht1i, dice el mis- das bien estrechas y derechas, de abajo hasta arri-
mo cronista: ba, a todas estas torres.,,9

"1. Este dios llamado Huitzilopochtli fue otro Es interesante ver cómo del lado de Huit-
Hércules, el cual fue robustísimo, de grandes fuer-
zas y muy belicoso, gran destruidor de pueblos y
zilopocht1i, en la parte superior y frente a la
matador de gentes. entrada del santuario, se ha podido encontrar
recientemente la piedra de los sacrificios, sím-
bolo evidente del poder mexica y del sacrificio
2. En las guerras era como fuego vivo muy temero- de los cautivos de guerra. En este caso, es una
so a sus contrarios ... " "A este hombre, por su for-
taleza y destreza en la guerra, le tuvieron en mu- piedra de tezontle negro muy sencilla en la que
cho los mexicanos cuando vivía.,,7 coincide las dimensiones que da Sahagún al re-
ferirse a una de estas piedras. 1 o
Cuando Bernal Díaz del Castillo nos relata
de la visita que hacen a la ciudad de Tenoch ti- Dice este autor al mencionar al sacrificio
tIan, nos habla de lo que ven en el Templo Ma- en honor a Xipe-Totec en la fiesta de TIaca-
yor. Así dice: xipehualixtli :

"En cada altar estaban dos bultos como de gigante, 8 Bernal Díaz del Castillo, Historia Verdadera de la Con-
de muy altos cuerpos y muy gordos, y el primero, quista de la Nueva España, Ed. Nuevo Mundo, p. 286-7,
que estaba a mano derecha, decían que era el de 1943, México. Por cierto, que en general se piensa que
Huitzilopochtli, su dios de la guerra." este edificio es el Templo Mayor de Tlatelolco, pero creemos
que es el de Tenochtitlan, en virtud de que al principio
Másadelante agrega: del relato, claramente menciona que Moctezuma va al Tem-
plo Mayor de Tenochtitlan para ciertas ceremonias y como
allí lo dejan y van a visitar Tlatelolco, de donde pensamos
"En lo más alto de todo el cuerpo estaba otra con- que egresan, ya que vuelve a relatar que Moctezuma seguía
cavidad muy rícamente labrada de madera de ella, ofrendando en lo alto del Templo y cómo los envía sacerdo-
y estaba otro bulto como de medio hombre y me- • tes para que los acompañe.
dio lagarto ...
9 Sahagún, p. 232, ob cit.
6y7
Sahagún, Fr. Bernardino. Historia general de las cosas de 1o Estos hallázgos corresponden a una de las primeras etapas
Nueva España, Ed. Porrúa, 1956, México. constructivas.

113
"llegándolos al tajón, que era una piedra de tres En la cara interior, los pilares del lado de
palmas en alto o poco más, y dos de ancho, o Tláloc, tiene cada uno a un personaje de pie.
casi, echábanlos sobre ella de espalda ..."11 con el cuerpo pintado de amarillo y porta bla-
zaletes y ajorcas de color azul y negro. El
Efectivamente, la piedra encontrada in situ brazo izquierdo lo tiene extendido hacia ade-
perfectamente empotrada en el piso y muy cer- lante y tiene en la mano un bastón o lanza.
ca de la escalinata (2.00 m) tiene 50 x 45 cm.
Durán nos ubica claramente la posición de la El interior del adoratorio parece constar
piedra de sacrificios cuando nos dice: de dos aposentos, ya que hay una banqueta
y dos muros a los extremos, banqueta sobre la
"delante de estos dos aposentos donde estavan
estos Dioses havia un patio de quarenta pies en
cual se encontraba el dios. En el caso del de
quadra muy escalao y lisso en medio del qua1 Huitzilopochtli, además de la banqueta y en su
y frontero de las dos piezas estava una piedra algo parte media, en eje con la piedra de sacrificios,
puntiaguda berde de altor como hasta la cintura se encuentra una e~pecie de altarcillo que se
de altor que hechado un hombre de espald.as desplanta sobre la banqueta y sobre el que se
sobre ella le hacia doblar el cuerpo sobre esta ple-
dra sacrificaban los hombres."12
colocaba la deidad.

Dice Durán al referirse al ídolo en el in-


Ahora bien, del lado de Tláloc, en la mis-
ma posición que guarda la piedra en relación terior del templo de Huitzilopochtli:
con ei santuario de Huitzilopochtli, pudimos
encontrar in situ un Chacmool policromado, "Este ydolo assi bestido y adere9ado estaba
siempre puesto en un altar alto en una pie9a pe-
es decir, que está frente a la entrada del santua- queña."13
rio de Tláloc. El Chacmool, si nos atenemos a
lo aceptado hasta el momento en relación al Como parte de los pilares en ambos santua-
papel que desempeña, aquí queda plenamente rios se encontraron restos de madera, los-que se-
confirmado: es el intermediario entre el sacer- guramente estaban decorados. Varios son los
dote y el dios, el mensajero divino. cronistas que vieron maderas ricamente deco-
radas en el interior de los santuarios, como es
Ambos elementos -piedra de sacrificio
el caso de Bernal Díaz y de lo que relata Cor-
y Chacmool- frente a cada uno de los santua- tés en su segunda Carta de Relación.l4
rios, pueden ser signo del carácter que vamos a
tratar en cuanto a la dualidad. La primera re-
Vale la pena señalar que el templo que
presenta su relación con la ,~erra, el ?tro ~s mencionamos corresponde a una de las prime-
un fenómeno más "religioso : el mensajero dI-
vino. ras etapas éonstructivas del Templo Mayor,
quizá correspondiente a los reinados de Huit-
zilihuitl, Chimalpopoca o Itzcoatl, es decir,
En cuanto a la descripción del interior de
antes de 1428, al momento inmediato anterior
los aposentos o santuario, hemos encontrado
a la liberación de los mexicas de Azcapotzal-
que en el caso del de Tláloc está formado por
co. Varios datos nos hacen pensar esto. Por un
dos pilares de piedra que sirven de acceso al inte-
lado el tamaño del edificio en relación a las
rior. Estos pilares están decorados en su exte-
construcciones posteriores, así como por ser la
rior por ojos del dios Tláloc en color negro so-
más antigua etapa encontrada. Sobre este edi-
bre blanco y debajo de ellos dos bandas rojas ficio se hacen con fmes de ampliación hasta
horizontales y una azul, encontrándose toda la diez etapas posteriores, si bien sólo cinco de
parte media inferior del pilar decorada con ban- ellas son ampliaciones totales, es decir, por los
das negras y blancas verticales. cuatro lados, en tanto que las otras cinco son

13 Durán, ob. cit., p. 81.


11 Sahagún,p. 111,ob.cn.
14 Cortés Hernán "Carta enviada a su Sacra Majestad..."
12 Durán, Fr. Dieg. Historia de las Indias de Nueva España en cartas de Relación de la Conquista de América, Ec.
y islasde tierra firme, p. 82, Ed. Nacional, 1951, México. NuevaEspaña,p. 202-3, slf, México.

114
ampliaciones únicamente de la fachada princi­ Sin embargo, la pugna entre los dos grupos
pal. El templo que mencionamos sería la más por el control total de estas sociedades lleva
antigua construcción hasta ahora encontrada finalmente a la unión de ambos aparatos del
que tiene sus cuatro fachadas. Por otra parte, Estado, el ideológico (sacerdotes) y el represivo
se pudo ver claramente cómo el relleno con el (militar) para tener el control del todo social,
que se cubrió este templo fue de gran amplitud lo cual se logra claramente entre los mexica.
en comparación con los rellenos de las siguien­ Sabemos cómo entre ellos el Tlatoani es a
tes etapas constructivas. la vez el gran sacerdote y el capitán de los ejér­
citos. La alianza política de sacerdotes y guerre­
Da la impresión de que se quiso hacer un ros queda plasmada en el Templo Mayor: Tlá-
gran templo una vez liberados del yugo de Az- loc y Huitzilopochtli, pero en la persona de un
capotzalco y que tenían ya los elementos para solo gobernante que encarna ambos aspectos:
poder hacerlo: tributarios que trajeran piedra de el Tlatoani.15
tezontle y lodo para el relleno, además de otras
cosas indispensables para la construcción (ver III
plano). Además, los santuarios encontrados
presentan en la mayor parte de los muros in­ Vamos a analizar ahora los rituales que se
teriores pinturas policromadas hechas sobre llevan a cabo en el Templo Mayor, para lo cual
aplanado de lodo y en menor escala sobre es­ nos serán de gran ayuda las fuentes históricas.
tuco, lo que evidencia una pobreza con la Empezaremos por ver la importancia que el
utilización de este material en el Templo Mayor. ritual guarda en relación con el mito, y que im­
Finalmente, la misma piedra de sacrificios he­ portancia tiene la reactualización de los mitos
cha en tezontle puede ser un indicador de que dentro del contexto sagrado de Tenochtitlan.
aún se encontraban sujetos, ya que esta pie­
dra es de fácil obtención visto que cronistas Primeramente, vamos a tratar de ubicar
como Durán mencionan para la última época al mito dentro del todo que le dio origen. Así,
que esta piedra era verde, es decir, traída de las tenemos que hay tres aspectos que son impor­
áreas tributarias, del actual estado de Guerrero, tantes y que ya hemos señalado en otra ocasión:
de donde proceden este tipo de materiales.
“ 1. El mito forma parte del fenómeno mágico-
religioso, el cual a su vez refleja parte de la estruc­
No vamos a discurrir más sobre el tema, tura socioeconómica, junto con otros fenómenos
pero sí en cuanto a la dualidad que representan como el arte y el derecho.
las dos deidades al estar juntos en la parte su­
perior del Templo Mayor. Sobre esto ya hemos 2. El mito trata de dar respuesta a fenómenos
dicho lo referente al aspecto económico, pero que siempre han preocupado al hombre. Basado
en mecanismos mágicos causales que le permiten
también está unido al poder político. desarrollar una explicación, crea seres sobrenatu­
rales que lo ayudarán en la ansiada búsqueda.
Recordemos que el Templo Mayor está Surge el mito como respuesta.
estructurado, en base a dos escalinatas de acce­
3. Una vez creado el mito por los hombres, tiene
so a su parte superior, en donde se encuentran que trascender constamentente, por lo que la
los santuarios de ambas deidades. Este rasgo conducta social y el rito vienen a convertirse en
arquitectónico lo vemos presente en el centro el acto repetitivo de lo que aconteció en el tiem­
de México a partir del siglo XII (Tenayuca) po m ítico.” 16
y posteriormente en varios templos mexicas
(Teopanzolco, Sta. Cecilia, Tlatelolco, Tenoch- 15 Recomendamos el estudio sobre la importancia y caracte­
titlan). Nosotros pensamos que esta idea surge rísticas del Tlatoani realizado por Johana Broda “relacio­
de la lucha por el poder que se presenta desde nes políticas ritualizadas: el ritual como expresión de una
ideología” , en Economía Política e Ideología en el México
que surgen las sociedades clasistas. En Teotihua- Prehispánico. Centro de Investigaciones Superiores del
can, de la que varios autores hablan como INAH, Ed. Nueva Imagen, pp. 221-225, México.
de una sociedad teocrática,, parece ser que el 16
control lo ejercían los sacerdotes a quienes es­ Matos Moctezuma, Eduardo, Muerte a Filo de Obsidiana,
taba supeditado al aparato coercitivo militar. 1978. INAH. México.

115
De esta manera vemos cómo el ritual es 2. Tlaxochimaco.
un mediol de volver a repetir el mito original. 3. Ochpaniztli —Toci (sacrificios a Huitzilopoch­
Esto se logra a través de dos formas de tiempo: tli).
el sagrado y el profano, según Eliade. Nos dice 5. Quecholli (Mixcoatl).
este autor: 6. Toxcatl — Tezcatlipoca y Huitzilopochtli.

En relación al templo de Tláloc, no sería


“El hombre religioso vive así en dos clases de extraño que al igual que el de Huitzilopochtli,
tiem po, de las cuales la más importante, el tiempo
sagrado, se presenta bajo el aspecto paradójico
se le considera un cerro, dado que algunos sa­
de un tiempo circular, reversible y recuperable, crificios en honor del dios de la lluvia se reali­
com o una especie de eterno presente m ítico zaban en lo alto de algunos cerros, como era el
que se reintegra periódicamente mediante el caso, por ejemplo, de los meses de Atlacahua-
artificio de los ritos.” 17 lo y Tozoztontli. También es interesante ver
cómo en el Templo de Tláloc se sacrificaba
Dentro del contexto del Templo Mayor, a una mujer que representaba a Uixtocihuatl,
es im portante ver que contamos tanto con el hermana mayor de los tlaloqes. Por otra parte,
rito como con el mito que le dio origen. Ya algunos rituales de sacrificio se hacían colocan­
hemos estudiado páginas atrás cómo el Templo do a la víctima, por lo general mujer, espalda
Mayor del lado de Huitzilopochtli es en realidad con espalda y se le decapitaba, como es el caso
la presencia “viva” , real, del m ito del nacimien­ de la diosa Xilonen.18 Mencionamos esto por­
to y lucha de Huitzilopochtli. También hemos que en las excavaciones se encontró una gran
visto las características que tiene ese lugar sa­ escultura decorada con elementos de los dioses
grado, ese cerro-templo. Vamos ahora a estu­ del agua (caracoles, corrientes de agua, etcé­
diar las diversas festividades (rituales) que se tera. . .), y con la representación de una mujer,
verifican en él y cómo el sacrificio cobra una a la que se le ven los senos, que está colocada
importancia fundamental dentro del ritual. sobre otra figura, ambas mostrando en la cara
rasgos del dios Tláloc, además de llevar peque­
Si vemos los dieciocho meses del año ños cráneos de adorno amarrados en las pier­
náhuatl, nos encontramos con que por lo menos nas y también cráneos y huesos cruzados en el
siete de ellos están relacionados con los dioses faldellín. Pudiera tratarse, en este caso, de la
de la lluvia y el agua o con las deidades del representación de un sacrificio de este tipo.
maíz, etcétera... y por lo menos seis en rela­
ción con Huitzilopochtli o con la guerra. Los
primeros son: Del lado de Huitzilopochtli, quizá la ce­
remonia más significativa sea la de Panquet-
zaliztli. Del estudio de la versión de Tezozomoc
1. Atlcahualo— Tlaloques o Chalchiuhtlicue. y de la que nos da Sahagún, vemos claramente
2. Tozoztontli— Tláloc. cómo esta fiesta es la reactualización del mito
3. Uey Tozoztli — Centéotl. de la lucha de Huitzilopochtli. No vamos a am­
4. Efzacualiztli — Dioses de la lluvia. pliar más sobre el tema, ya que varios auto­
5. Tecuihuiltontli — Uixtocihuatl (hermana de res han investigado al respecto.19 Solamente
los tlaloques). enumeraremos los elementos más significa­
6. Uey Tecuilhuitl - Xilonen. tivos:
7. A tem oztli — Dioses de la lluvia.
lo . Es interesante el recorrido que hacen los es­
En relación a Huitzilopochtli tenemos los clavos que van a morir, cargando mantas y
siguientes: huipiles hasta depositarlos en el calpulco.
Pudiera ser una reminiscencia de la peregri­
nación antes de llegar a Coatepec.
1. Tlacaxipehualiztli — Xipe (sacrificios en el
tiempo de Huitzilopochtli.
18 Sahagún, ob. cit., 1956.
17 Eliade, Mircea, 1967, p. 71, Lo Sagrado y lo Profano, Ed.
Guadarrama, Madrid. 19 Ver como ejemplo a Lesur, ob. cit., y León Portilla, ob. cit.

116
2o. Sacrificio de cuatro cautivos en el juego de “abajo ponían unos huesos hechos de tzoalli,
pelota (Tezozom oc), y de otros diferentes cerca de los pies de la imagen, y cubríanlos la
lugares. misma manta que tenía cubierta, en la cual esta­
ban labrados los huesos y miembros de una per­
3o. Se hacia una escaramuza entre dos bandos sona despedazada; a esta manta labrada de esta
de esclavos. Un grupo eran los Huitznahua, manera, llamaban tlacuacuallo.”20
a aquienes ayudaban los de aquel barrio.
En general, podemos ver cómo en ambos
4o. Los cautivos daban una vuelta alrededor del
Templo, tal y com o se dice que Huitzilopoch-
templos (Tláloc y Huitzilopochtli) el sacrifi­
tli los perseguía alrededor del cerro de Coa- cio es la forma en que el hombre trata de pagar
tepec. al dios el sacrificio que éste hizo en un tiempo
m ítico por crear o sustentar al hombre. La
5o. Bajada de la Xiuhcoatl (serpiente de fuego) muerte de la deidad conlleva la reactualiza­
imitada con teas y cola y cabeza de papel
en forma de serpiente. De las fauces salían
ción de mitos cosmogónicos y antropogénicos.
plumas coloradas para que pareciera fuego. En el caso concreto del ritual de Pariquetza-
liztli, es claro que se trate de la reactualiza­
6o. Después de matar a los cautivos y esclavos, ción del mito de la lucha de Huitzilopochtli
se arrojaba el cuerpo por las gradas del tem ­
plo, al igual que el dios arrojó a Coyolxauh- y la muerte de una deidad (Coyolxauhqui)
qui desde lo alto del cerro, desmembrándose. que no es otra cosa que el triunfo del sol,
y por lo tanto, de la vida.
La práctica de arrojar los cuerpos una vez
sacrificados, creemos que corresponde al hecho No cabe duda, pues, que la presencia de
m ítico de lo que H uitzilopochtli hizo con los dioses en lo alto del doble cerro, está en­
Coyolxauhqui. No sería raro que el desmem­ vuelto en aspectos míticos importantes, a la
bramiento que se hace del cuerpo al caer abajo, vez que claramente, pensamos nosotros, están
sea también una reactualización de esta parte indicando la necesidad del grupo por el agua
del mito. y el sol. No es fortuito que a Tláloc y toda
una serie de deidades en relación al maíz y al
Sin embargo, hay otro ritual en el que se agua se les asignen el mayor número de fiestas
hacen ciertas alusiones al mito. En el mes de mensuales. Es la necesidad apremiante de un
Tóxcatl, dedicado a Tezcatlipoca, se hacía pueblo agrícola. Tampoco es de extrañar el
la masa (Tzoalli) con la imagen de Huitzilopoch­ culto que se le rinde a Huitzilopochtli, el gue­
tli y se le colocaba en el Templo de Huitz- rrero, el dios solar.
nahuac, como dice Sahagún:
El último tema que vamos a tratar es el
“en el cu que llamaban Huitznahuac hacían para de las ofrendas. A través de nuestras excava­
ponerla un tablado (y) los maderos de él eran ciones hemos podido encontrar hasta la fecha
labrados com o culebras y tenían las cabezas a
todas cuatro partes del tablado, contrapuestas
(diciembre de 1979) alrededor de 40 ofrendas
las unas a las otras, de manera que a todas cuatro de diferente, contenido y ubicación en las dis­
partes había colas y cabezas. tintas etapas constructivas del Templo Mayor.
A la imagen que hacían poníanla por huesos Como puede apreciarse, casi todas están
unos palos de mizquitl, y luego henchían toda
de aquella masa, hasta hacer un bulto de un
localizadas en algún eje específico. El lugar más
hombre; hacían esto en la casa donde siempre usado para colocarlas fue la fachada principal,
se guardaba la imagen de Huitzilopochtli. en donde tenemos hasta 15 de ellas.

Acabada de hacer, componíanla luego con todos


En la fachada sur, al pie de la cabeza de
los atavíos de H u itzilopochtli. . serpiente y los brazos que marcan la mitad del
templo se encontraron 2. En la parte posterior
Cuando se refiere a cómo cubrían la tenemos las ofrendas 8 y 21, cada una en la par-
figura, vemos algo muy significativo: la manta
estaba decorada con la representación de una
persona desmembrada (Coyolxauhqui?): 20 Sahagún, ob. cit.,p. 156.

117
te media de los templos de Tláloc y Huitzilo- materiales mexicas y de las áreas ya menciona­
pochtli. En la unión de ambos tenemos las ofren­ das.
das 17 y 20.
También fueron interesantes la localización
de las ofrendas 10 y 14, en la fachada principal,
En general, se han podido obtener una gran las que en realidad son urnas funerarias. Se
cantidad de objetos cuya asociación nos aportará trata de dos vasijas de barro anaranjado con su
valiosos datos. Por el momento, podemos decir tapa y conteniendo en su interior restos de
que el 80 por ciento aproximadamente de los huesos incinerados, además de algunos objetos.
materiales son de áreas sujetas a Tenochtitlan. Lo importante es que ambas piezas tienen un
Así tenemos materiales de la costa del golfo rico decorado que representa, en un caso, a
consistentes en caracoles, conchas, cabezas de Quetzalcóatl, y la otra a Tezcatlipoca. Qui­
cocodrilo, peces, restos de jaguares, corales, zá sea una alusión al mito de la lucha cósmica
etcétera . . . Por otra parte, tenemos materiales entre estas dos deidades, ya que ambos están
del área de la mixteca (penates, cerámica), y una armados con el atlatl y llevan un manojo de
cantidad muy fuerte de objetos provenientes del dardos. Es quizá, la representación esquemati­
área del actual estado de Guerrero^ encontrán­ zada de la Leyenda de los Soles . . .
dose desde el típico estilo mezcala y un sin­
número de máscaras. Por cierto, de la Cámara II, En general, podemos decir que la gran
que se caracterizó por tener puro material del mayoría de los objetos están relacionados con
área guerrerense, provienen máscaras que en su Tláloc y con Huitzilopochtln Toda esta presen­
parte posterior presentan glifos, lo que nos hace cia marina además de las efigies del dios del agua
pensar que posiblemente provienen de los son abundantes. Por otro lado, los cráneos
pueblos tributarios y que era una forma de dejar con cuchillos de sílex clavados en la nariz y
constancia de la entrega. Un estudio más a fondo en la boca y con incrustación de concha en los
de este material está por iniciarse. 'ojos; la presencia del técpatl y del arma del
dios Huitzilopochtli están relacionados con
sacrificios, además de los objetos provenientes
Hay ofrendas que son muy interesantes por de las áreas tributarias. Interesante, por otro
su contenido. La número 7, en el lado sur, lado, es la presencia muy común del dios Xiuh-
que tenía puro material marino o costeño, tecutli en diversas ofrendas, lo cual no deja de
y los caracoles estaban orientados hacia el sur. ser significativo.
Las ofrendas 18 y 19, localizadas en la unión
de los dos edificios en su fachada principal Para finalizar, queremos hacer énfasis en
y que estaban colocadas dentro de cajas de que todo este material está aún por estudiarse.
piedra, conteniendo cada una 13 figurillas de Sin embargo, creemos que claramente está
Guerrero alineadas y viendo hacia el sur. La expresado en él todo el poder económico-
ofrenda 20, en la unión de ambos edificios eolítico que ejercía Tenochtitlan sobre los
en su fachada posterior, y en la que se encon­ otros grupos, de lo que el Templo Mayor es un
traron una máscara teotihuacana y el objeto reflejo muy claro: lugar de gloria para los me-
más antiguo encontrado en las excavaciones: xica y de infortunio para quienes habían su­
una máscara olmeca todo en asociación con cumbido bajo su poder.

118
-----------_ Reporte de las ofrendas excavadas 1978.
por: DIANA WAGNER Para su mejor descripción, se agruparon las
ofrendas según sus características comunes, en 7
grupos. Se tomó en cuenta: época; si estaban
En el año de 1978 se excavaron 20 ofren-
contenidas en cajas o en el relleno y si contenían
das en el área del Templo Mayor. Las primeras S
obJetos similares o de similar procedencia. (ver
ofrendas se excavaron durante el mes de Marzo cuadro).
y Abril por el Departamento de Salvamento Ar-
queológico del INAH. * Estas S cajas de ofrenda
La ofrenda 8 es la más antigua encontrada
se encontraron en la periferia de la Coyolxauh-
hasta el momento, y la única perteneciente a la
qui, siendo la número S la cámara conteniendo llamada época III etapa constructiva.
el monolito en piedra verde.

Las ofrendas 18 y 19 pertenecen a la etapa


Las ofrendas se fueron numerando confor- IV. Consisten en dos capas de piedra estucada
me se detectaban. Se excavaron aproximada- con tapa, conteniendo cada una 13 esculturas en
mente en el mismo orden si las Gondiciones lo piedra verde tipo mezcla orientadas hacia el Sur.
permitían, excepto en algunos casos, como el de
la ofrenda 13 que se detectó en Agosto y no se Las ofrendas 6,11 y 20 pertenecen a la
pudo excavar hasta Enero de 1979 por encon- etapa IVb constructiva y se encuentran en el re-
trarse muy próxima a los cimientos de un edifi- lleno de tezontle. Contienen elementos simila-
cio aún no demolido. res: cráneos y máscaras cráneo, Xiuhtecuhtli~,
máscaras en piedra y esculturas en piedra tipo
Se presenta a continuación un informe a ni- mezcala, "penates" mixtecos, cuchillos y téc-
vel descriptivo de las 1S ofrendas excavadas por patl, figuras de copal, pez sierra, tortugas, cara-
coles y conchas. Las tres presentan un orden si-
el Proyecto Templo Mayor durante el año de
milar en la. deposición de elementos y están.
1978. El análisis e interpretación de los elemen-
orientadas al poniente. La 11 y la 20 presentan
tos individualmente y en conjunto, que contri- una distribución similar: elementos acuáticos y
buirá al mejor conocimiento de la superestructu- cráneos en la zona Norte y elementos en piedra
ra mexica y del aspecto tributario o de intercam- en la zona Sur.
bio de esta formación social, se realizará poste-
riormente.
Las ofrendas 10 y 14 pertenecen a la cuarta
etapa, están en el relleno y descansan en el pi-
Asimismo se incluye una descripción de la so de una época anterior. Ambas son vasijas de
técnica de excavación de las ofrendas. cerámica conteniendo restos óseos humanos cre-
mados.

Las ofrendas 9, 12 y 1S se encuentran en el


relleno que cure la cuarta etapa constructiva,

119
bajo un piso de lajas. Las ofrendas 9 y 15 contie- Se registra cada capa de piedras, losas o la-
nen "penates" mixtecos y algunos elementos jas que cubre la ofrenda con dibujo, niveles y fo-
marinos; siendo la ofrenda 12, muy pequefia. No tografía.
tienen una orientación aparente.
Cada ofrenda fue colocada en un solo mo-
Las ofrendas 7 y 17 se encuentran también mento, pero en .la mayoría de éstas se encuen-
en el relleno que cubre la cuarta etapa, bajo el tran 2, 3 o más superposiciones de objetos, por
piso de lajas, pero están contenidas en cajas de lo que se delimitan un tanto arbitrariamente los
tezontle. Ambas contienen uno y dos Xiuhte- diferentes niveles de la ofrenda siguiendo las so-
cuht1is, respectivamente y elementos acuáticos breposiciones. Se denomina nivel 1 al primero
pero éstos predominan en la 7. La 17 contiene encontrado, 11al segundo, y así sucesivamente.
cráneos y la 7, no. En la 7 hay elementos en ce-
Al detectar los primeros elementos de la
rámica y en la 17, no; predominando en ésta los
ofrenda se procede a limpiarla cuidadosamente,
objetos en piedra, aunque representado los mis-
interviniendo los técnicos de Restauración si es
mos símbolos o deidades. En ninguna de las
necesario. Cuando se tiene el primer nivel de la
dos hay elementos de tipo mezcala o "penates"
mixtecos. ofrenda limpio, se registra debidamente. Se dibu-
ja a escala más grande para tener una mayor cla-
ridad; se toman los niveles respecto del nivelO;
La ofrenda 16 y 16A pertenecen a una de
se fotografía y se describe en el diario de campo.
las últimas épocas constructivas (cuarta o quin-
ta). Están contenidas en cajas de tezontle y losas
de cantera, consistiendo en un Xiuhtecuhtli y Posteriormente se levantan los elementos
en envases adecuados para conservarles la hume-
grandes cuentas globulares de piedra verde puli-
dad y se envían al Almacén donde se les registra,
da,y no corresponde el Templo Mayor sino que
y se les manda a Restauración si el objeto lo re-
se ubican en el gran muro posterior o Coatepan-
tIí. quiere. Al levantar cada elemento se le da un nú-
mero que se anota en él dibujo y se describe sus
TECNICA DE EXCA VACION diversas características en unas hojas de registro.
EN LAS OFRENDAS. Se anota en varias columnas: la cantidad, mate-
ria prima, técnica de manufactura, objeto y de-
Las ofrendas se detectan ya sea por una corazón; número de elemento; tamafio; X, Y y
fractura y hundimiento en el piso de estuco o Z; nivel de la ofrenda; asociación y observacio-
por la presencia de una caja de tizontIe careado. nes; arqueólogo y fecha.
Al detectar una ofrenda, se procede a ubicarla
dentro de la cuadrílla gener~ con un dibujo en De esta misma manera se procede con cada
planta y otro en corte, a es.cala 1: 10. Igualmente uno de los niveles de la ofrenda. Al terminar és-
se fija un punto O a partir del cual se van a to- ta, se excava, por precaución, aproximadamente
mar los niveles de los elementos de la ofrenda un metro más.
(Z), refiriéndolo a la cota en metros sobre el ni-
vel del mar. Este nivelO se fija en un punto con- Se hacen asimismo los dibujos necesarios en
veniente, ya sea en el piso o en el borde de la ca- corte. Posteriormente los dibujos de localiza-
ja de ofrenda. Se fijan también los ejes X y Y ( Y ción, los de los varios niveles de la ofrenda y los
corre Norte-Sur y X, Este-Oeste) para la loca- cortes.
lización tridimensional de los elementos de la
ofrenda. Si es conveniente, se hace coincidir el OFRENDA 6
eje y con la línea que divide las calas, y el eje X
con la línea que divide las hileras. Si no, se corre La ofrenda 6 se localiza el Oeste de la caja
unos centímetros, siempre refiriendolos a la cua- de ofrendas número 1, ambas al poniente de la
drícula. Coyolxauhqui, donde el piso que se asocia a és-
120

"
MATERIAL O FRENDA
CARACTERISTICAS
6 7 8 9 10 11 12 14 15 16 16-A 17 18 19 20
CRANEOS 3 6
CRANEO S 9
MASCARA CRANEO 2 2 2 2 3
XIUHTECUHTLI 2 I 1 '2 I I
TEZONTLE GRANDE 1 1 I
BRASERO CANTERA - MEDIANO I 2
JADEITA - CHICO
1
TIPO MEZCALA 6 2 S I 13 13 7
ESCULTURAS MIXTECA (PENATES) S 2 6 2 6
TEOTIHUACANA O MEXICA
I
TIPO MEZCALA 6 S S
TEOTIHUACANA
MASCARAS I 2
OLMECA
I
OTRAS I
CURVO DE OBSIDIANA 2 1 I I
SILEX O PEDERNAL DENTADO I
SILEX 4 I B I 2
CUCHILLOS CURVO DE SILEX
I
TECPACTL 4 4 10 4
CUCHILLO PIEDRA VERDE
2
RASPADOR DE OBSIDIANA
12
MANO MORTERO OBSIDIANA I
PIEDRA I 2 3
BOTO N OBSIDIANA 4 2 I
OBSIOIANA 3 4 1 2
NARIGUERA I I I
CROTALO y CABEZA DE SERPIENTE
2/2

•• • • • ••
JADE ITA 21
CUENTAS S S 20
VARIAS
OREJERAS 4
• I
• 4
17 22
6
OLLAS TLALOC EN CANTERA
2
VASO MICTLANTECUHTLI I 1
MAZOS I
I
TLALOC DE TEZONTLE I
I
VENADITO DE ALABASTRO I 1 1
BASTON O DARDO DE HUITZILOPOCHTLI 1 I 1
ELEMENTO SERPENTINO 2 2
ATLATL EN PIEDRA 2
VASIJA TLALOC EN PIEDRA VERDE 3
CAJETE EN PIEDRA VERDE
I
MOSAICO DE TURQUEZA S 7 16


B
PUNTAS 16 36 2 I 16 3B
OTROS (MINIATURAS, ETC) 4 I
MAMIFERO (JAGUAR) I ,mo
AVE
PEZ SIERRA • • •
2 I • • 1
""""'"
I • I • I
HUESO
ACUATICOS
PESCADO
TORTUGAS 6 • • 40 11 • 1 •• 10
COCODRILO 2
PUNZONES 7 I 1 lB

••
NACAR

CONCHA
NATURAL
SPONDYLUS
DISCOS
22

2
•2
10
3
9 2 4

S
TRABAJADA PENDIENTES, NARIGUERAS S 2 2 2
ATLATL
2 3 4 I
STROMBUS 2
XANCUS 12 12 3

••• • • •
4 4
CARACOL PEQUEÑOS CON DESGASTE LENTICULAR
• • • •
•• •• • • ••
PEQUEÑOS DESGASTE AMBOS LADOS
CONCHITAS
CARACOL
y
CORTADO
CARACOLILLOS
(EHEILACACOXCAT L) 3 1
• I
ERIZO MORADO
BLANCO • • •• •
••• • •
ASTA DE VENADO

••• ••
ASTA DE RENO
CORAL

••
RAMA
RED
CEREBRO
VASIJA TLALOC
•3 • • 10
I I
VASIJA DEIDAD 2 I 1 I I
CERAMICA VASIJA TLALOC TEOTIHUACANA 2
ELEMENTOS (GLlFOS) 4
OTROS(BRASERO CUNA DEFORMATORIA ET I 1 1
FIGURAS S I
COPAL 6 1 2

• • •
MASAS 2 2 I 3 2 4

METAL
CASCABELES
OREJERAS
ORO O
DE
TUMBAGA
DE
COBRE
COBRE
• 2 174
2
224

• ••• ••• •••


SOLA
MADERA

••• •
TALLADA CON PIGMENTO O MOSAICO
ARENA
RELLENO
GRAVILLA
• • •
• • • • • • • • • • • • • • •
TIPO DE EN CAJA
OFRENDA EN RELLENO
ORIENTACION W S E-W W W W W-E W W S S W
EPOCA 3 Rell.3 I RoJl.3 3 3 4 3 Rell.3 4ó5 4 ó5 Rell.3 3A 3A 3

TAMAÑO
CON
N-S
E-w
LOSAS O LAJAS
• •
1.10 • •
1.60 • • • •
1.00 •5S.5! .60 1.20 .33 .90 .BS .40 .40 2.00 .60 .52 1.45
1.00 1.05 .70 65.B .60 .BS .26 .90 .BO .40 1.50
.40 .50 .45 1.10
NUMERO OE ELEMENTOS 150 121 20 2B 3 195 7 6
23 44 5 222 14 14 172
ta presentaba una fractura y un hundim iento. concha nácar, caparazones de tortugas, cascabe­
Pertenece probablem ente a la denom inada cuar­ les de cobre, dos espadartes de pez sierra, figuras
ta etapa constructiva. No se localiza en caja, de copal, cuentas y caracolillos.
sino en el relleno de tezontle, habiendo ro to e
intruído el piso de la época constructiva ante­ Am bos X iuhtecuhtli, uno al extrem o Este y
rior. La ofrenda descansa sobre un piso anterior, otro al Oeste de la ofrenda, están orientados al
a una profundidad de 1.15 m t. del piso desde el poniente. Describiendo la ofrenda de oriente a
que se empezó la excavación. Se levantaron en poniente, en el prim er nivel están: un X iuhtecu­
total 150 elem entos. htli ju n to a una vasija Tláloc en cerámica y 2
cráneos, un técpatl o cuchillo sagrado incrustado
La ofrenda 6 consta de varias superposicio­ en copal, una escultura tipo Mezcala, una orejera
nes de objetos colocados en un mismo m om en­ en piedra, cuentas, 3 pendientes, un cuchillo cur­
to: un prim er nivel de 3 cráneos de decapitados; vo en obsidiana (xiuhcóatl). Hacia la parte cen­
2 X iuhtecuhtlis (deidades sedentes en piedra ne­ tral de la ofrenda se concentran 4 cuchillos en
gra), esculturas, máscaras y un brasero en piedra; silex y pedernal (32 a 40 cms) - u n o de éstos
vasijas de cerámica, cuchillos en sílex y pedernal; aserrado— orientados Este O este; al lado de és­
un segundo nivel de máscaras cráneo, esculturas tos, un brasero en tezontle, un cráneo y una ore­
en piedra, cuchillo, una vasija en cerámica, más­ jera en piedra. Al poniente de la ofrenda, se en­
caras, caracoles; y un últim o nivel de caracoles, cuentra, el segundo X iuhtecunhtli; una vasija tri-

122
pIe, Tláloc, teotihuacana; 2 máscaras tipo Mex- en piedra, un caracol cortado (ehecacoxcatl),
da; un vaso en piedra blanca con el dios Mictlan- un átlatl en concha, 2 "botones" de obsidiana
tecuhtli; 3 caracoles Xancus, conchas nácar, una con cobre en el centro. En la zona poniente de
nariguera de conchas; cascabeles de cobre. la ofrenda están 2 técpatl, un cuchillo curvo de
obsidiana (xiuhcóatl), un pendiente de concha
En el segundo nivel hacia el Este, está una nácar, un caracol cortado, dos "botones" de ob-
vasija Tláloc de cerámica, teotihuacana; una más- sidiana con cobre, un caracol Xancus, mosaicos
de Turquesa.
cara con un cuchillo de sílex incrustado en la fo-
sa nasal y otro en la boca; un pequeño Xiuhte-
En un tercer y último nivel se encuentran,
cuhtli en tezontle, un "penate" -o escultura an-
sobre un piso de estuco: dos espadartes de pez
tropomorfa de una deidad sentada- mixteco,
sierra orientandose Este-Oeste (90 y 75 cms);y,
una escultura antropomorfa en piedra con in-
crustación de concha en los ojos; una máscara distribuidos más o menos por toda la ofrenda:
TIáloc mixteca, en piedra blanca, y una máscara mosaicos de turquesa sobre concha, discos de
tipo Mezcala; un niazo en piedra y un átlatl en . concha nácar, caparazones de tortuga, caracoles
concha. En la parte central se encuentra una se- Xancus, concha nácar, cascabeles de cobre aso-
gunda máscara cráneo con incrustación de con- ciados a copal y madera, masas y figuras de co-
cha y hematita en las órbitas oculares; un téc- pal orientadas Este-Oeste, caracolillos con des-
patl, 2 "penates", 4 esculturas antropomorfas gaste lenticular, con desgaste a ambos lados, y
tipo Mezcala, un l1áloc en tezontle, una orejera cientos de caracolillos y cuentas de piedra.

123
Entre el relleno, en la ofrenda, se encuentra
arena gris fina y gravilla. También se encuentran
restos de madera -sin tallar y tallada- con pig-
mento o mosaico de turquesa.

Gran parte de los elementos de mayor ta-


maño -Xiuhtecuhtli, máscaras, vasija Tláloc- se
les encuentra orientados al poniente. Los cuchi-
llos centrales, los dos espadartes de pez sierra y
las figuras de copal se hallan colocados en direc-
ción Este-Oeste. No se encuentra ninguna
orientación definitiva uniforme en los cráneos u
objetos pequeños.

No se encuentra una distribución definida


en planta; más si en los diferentes niveles, ha-
biéndoseempezado por colocar cuentas, caraco-
les, conchas, tortugas, figuras de copal; siguiendo
con la esculturas, cuchillos, máscaras, máscaras
cráneo y terminando con los cráneos de decapi-
tados.
una caja de tezontle careado construida en el re-
lleno que cubre esta cuarta etapa. Se adosa a la
En esta ofrenda se encuentran -hasta el
plataforma a 1.05 mt. de profundidad respecto a
momento, previo al análisis- objetos mexicas,
la esquina de ésta, quedando 30 cms bajo el piso
de la región de Guerrero, de la Mixteca, del Gol- de lajas. La caja mide 1.60 mt N-S y 1.05 mt
fo, y objetos teotihuacanos. E-O, y tiene 95 cms de profundidad. El piso de
ésta es de lajas estucadas.
OFRENDA 7
La ofrenda consiste principalmente en ele-
La ofrenda' 7 se locali~a en la mitad de la mentos relacionados con el agua; un Xiuhtecuh-
fachada Sur del Templo; correspondiendo al lu- tli, una vasija Tláloc, 2 vasijas con una deidad. Se
gar en que se ubica la serpiente y los dos brase- podría considerar una sola capa de elementos co-
ros de la IV etapa. Esta ofrenda se encuentra en locados en el piso de la caja, con 2 y 3 superposi-
ciones. Se levantaron 121 elementos. La ofrenda
tiene una clara orientación hacia el Sur y una
distribución simétrica, en la que los elementos
guardan cierto orden de colocación.

Recostado en la pared Norte de la caja, al


centro, se encuentra un Xiuhtecuhtli. A su lado
-en la esquina Oeste- hay una vasija Tláloc en
cerámica con tapa yen la esquina Este, frente de
la deidad hay una gran masa de copal y dos vasi-
jas -una a cada lado (Este y Oeste) de la caja--
en cerámica con tapa y en la esquina Este, un co-
ral asta de venado en buen estado de conserva-
ción. Enfrente de la deidad hay una gran masa
de copal y dos vasijas -una a cada lado (Este y

124
Oeste) de la caja- en cerámica con una deidad 400 conchas y caracolillos (2 a 7 cms de tama-
representada, conteniendo copaI. Hacia el Sur de fío) de varios tipos, descansando sobre una delga-
la caja, en cada extremo (Este y Oeste) se en- da capa de arena negra fina, o arena gris-beige
cuentran dos cráneos de cocodrilo y sus placas según la zona.
dorsales; al lado Este, el espadarte de un pez sie-
rra (1.20 mt). Esta ofrenda consiste principalmente en
elementos relacionados con el agua, ya sea mari-
Dispersos por toda la caja, uniformemente na o lacustre. Se puede decir hasta el momento,
distribuidos y orientados Norte-Sur, hay 12 ca- que hay objetos de manufactura mexica, lacus-
racoles Xancus y 2 Strombus, generalmente aso- tres y del Golfo (?). No se encontraron cráneos,
ciados a un coral rama. Hay una concha Spondy- ni objetos de clara procedencia mixteca o gue-
lus (?) sobre la que descansaba el Xiuhtecuhtli, 5 rrerense. La mayor parte de elementos mira ha-
tipos de corales: asta de venado, asta de reno, cia el Sur: el Xiuhtecuhtli, la olla Tláloc, las dos
cerebro, rama y red; muchos caparazones (apro- vasijas con las deidades, los dos cocodrilos, el
ximadamente 40) de tortugas pequefías, así co- pez sierra. Los 14 caracoles, el cuchillo, el bas-
mo diversos restos óseos de aves (codorniz, gar- tón, los corales rama están orientados Norte-S
za?) y pescados (pez globo, pejelagarto ?). Sur.

Además se encuentran glifos representados OFRENDA 8


en cerámica: ollin, 2 espirales, un bastón o
"dardo de Huitzilopochtli"; un brasero peque- La ofrenda 8 se localiza en la fachada pos-
fío en cerámica; punzones de hueso, discos y terior del Templo, en el descanso del primer
pendientes de concha nácar; un cuchillo de cuerpo, en la mitad correspondiente al Templo
pedernal, cuentas de diversas piedras, puntas ~
miniatura de obsidiana en grupos de 4 y 5.

Bajo todo ésto y como primeros elementos


colocados en la ofrenda, se encuentran más de

125
de Huitzilopocht1i. Pertenece a la llamada terce-
ra etapa constructiva. Se encuentra en una caja
de tezont1e careado, de 1 mt (N-S) por 70 cms
(E-W) y 70 cms de profundidad, teniendo losas
de cantera como piso.

No se halló sellada por ninguna laja, losa, o


estuco; más sí bajo el núcleo de tezont1e de la si-
guiente época constructiva. Dada su pobreza y
escasez de elementos se pensó en un posible sa-
queo mexica.

Descansando sobre el piso de la caja se en-


cuentran 8 cuchillos de sílex -con la tendencia a
orientarse Este-Oeste, grupos de caracolillos
con desgaste lenticular, y restos óseos de ave y
pescado.

OFRENDA 9
La ofrenda 9 se localiza aproximadamente
en la mitad de la fachada sur del templo, en el
núcleo o relleno que cubre la cuarta etapa, 1.30
mts. bajo el piso de lajas que queda a 70 cms, de
profundidad respecto a la esquina de la platafor-
ma de la cuarta etapa constructiva.
La ofrenda 9 consiste en algunos elementos
La ofrenda 9 es pequeña, consta de 27 ele- en piedra -pequeñas deidades-, copa1, un pun-
mentos y un anexo, a 60 cms. de distancia al zón de hueso, pequeñas conchitas y caracolitos.
norte de ésta, que consiste en los restos óseos de
un felino -posiblemente un jaguar. Abarca una Hay una figura con sombrero en pico, ta-
extensión de 55x65 cms.; y el anexo de 55x80 llado en serpentina, tipo mezca1a. Rodeándolo se
cms. Están colocados dentro del relleno de te- encuentran 2 "penates" Tlá1ocs, mixtecos
zont1e y sin orientación aparentemente intencio- copa1, una figura antropomorfa en piedra tipo
nal de sus elementos. mezcala, un hacha y una figura humana minia-

126
Ambas consisten en vasijas de cerámica
anaranjada, con tapa; con un personaje de un
gran tocado (Quetzalcóatl?), labrado en la cara
poniente de la vasija. Estas tienen un diámetro
de 28 cms., una altura de 30 cms. aproximada-
mente; son cilíndricos y descansan en un soporte
anular.

La vasija 10 contiene restos óseos humanos


y como único elemento, un pectoral en piedra
verde tallado en forma de una serpiente.

La vasija 14 contiene huesos humanos cre-


mados y 14 pendientes en forma de cabeza de
pato en obsidiana pulida, 2 cuentas tubulares
helicoidales en obsidiana, 1 cuenta en piedra
verde, un fragmento de disco en obsidiana, 1
cuenta en piedra verde, un fragmento de disco, y
un punzón en hueso.
turas en piedra, un punzón de hueso, coral asta
de venado, pequeftas conchas y caracolillos.
Se observa que ambas ofrendas tienen una
El anexo consiste en los restos óseos de un orientación poniente.
felino, aparentemente destrozado y completo.
OFRENDA 11
En esta ofrenda se encuentran objetos de
mezcala, de la región Mixteca, y marinos. La ofrenda 11 se localiza en la mitad de la
fachada oeste del Templo, entre las 2 serpientes
OFRENDAS 10 Y 14 que delimiten la doble alfarda que separa la es-
calinata del Templo de Tláloc al norte de la del
Las quizás mal denominadas ofrendas 10 Y templo de Huitzipolochtli al sur; en la cuarta
14 son el realidad urnas funerarias, vasijas de ce-
rámica conteniendo restos óseos humanos inci-
nerados.
Ambas se localizaron en la explanada fron-
tal de la cuarta etapa constructiva, frente a la
escalinata del templo de Huitzilopochtli, al Nor-
te de la Coyolxahuqui -entre ésta y la serpiente
que delimita la alfarda. En esta zona también se
ubica la ofrenda 3 (Salvamento) que es una urna
funeraria con las mismas características.

Las "ofrendas" 10 Y 14 se detectaron por


una fractura circular en el pho de estuco; la 10
de 60 cms. de diámetro y la 14 de 90 cms. de
diámetro. Las dos descansan sobre el piso de es-
tuco de una época constructiva anterior, a 75
cms. de profundidad. Se ubican dentro del relle-
no de tezontle.

127
etapa construtiva. El piso de estuco presenta vel se encuentran 1 cráneo, más esculturas y
ba fracturas y un hundimiento. Esta ofrenda no máscaras, un brasero de tezontle, caparazones de
se encuentra en caja, sino en el relleno de tezon­ tortuga, concha nácar, una máscara cráneo; en
tle que rompió e intruyó un piso de estuco de el tercer nivel un cráneo infantil sobre un es­
arcilla de 10 cms. de espesor a 1.05 mts. de pro­ padarte de pez sierra, una máscara cráneo,
fundidad respecto al piso del que se empezó a
excavar. Esta capa de arcilla está sobre otro piso
de estuco, parchado, bajo el cual se encontró las
ofrendas 18 y 19.

En esta ofrenda se levantaron 195 elemen­


tos. Consta de varias sobreposiciones de objetos,
colocados en un mismo mom ento, que se separa­
ron en 4 niveles. El primer nivel tiene piedra ha­
cia la mitad sur, y mayor abundancia de material
óseo (cráneos, caparazones de tortuga. Consta de
un xiuhtecutli rodeado de máscaras y esculturas
en piedra, cuchillos de sílex y pedernal, 4
cráneos, una vasija de cerámica, caparazones de
torguras, cascabeles de cobre. En el siguiente ni­
una escultura en piedra, cascabeles de cobre, ca­
racoles grandes y pequeños, conchas y discos de
concha nácar, caparazones de tortugas, cuen­
tas de piedra; y un últim o nivel de mosaicos
de turqueza; cuentas y caracolillos, un pe-
nate, conchas nácar, y figuras de copal.

Se observa en general una orientación hacia


el poniente, principalm ente del xiuhtecutli, las
esculturas en piedra y las máscaras, En el prim er
nivel de la ofrenda, en la m itad N, se encuen­
tran: restos de 3 tortugas, caracolillos un cráneo
de tzom pantli con un cuchillo de pedernal en la
boca, 2 cráneos de decapitados, 2 conchas nácar,
una vasija de cerámica con una deidad y copal.
En la m itad sur se encuentran elem entos en pie­
dra, un xiuhtecuhtli (deidad sedente), rodeado
de esculturas antropom orfas tipo mezcala, más­
caras tipo mezcala una de ellas de obsidiana con
una gran nariz. Un técpatl clavado en copal y

129
cascabeles de cobre, 2 orejeras en piedra, un bo- lenticular, cascabeles de cobre asociados a copal
tón de obsidiana, con restos de cobre junto a un y madera, un cuchillo curvo de obsidian~ y una
pendiente en concha nácar; 2 técpatl (uno de "nariguera" en obsidiana pulida. En la mItad sur
ellos en muy buenas condiciones, conserva el ojo se encuentra una figura antropomorfa de un jo-
robado en piedra verde, tipo mezcala; una segun-
en concha y hematita, la caja en mosaico de tur-
da máscara cráneo con incrustaciones de concha
quesas, los dientes en concha y clavado en co- y hematita en la órbita oculares, con un cuchillo
pal), al este de la ofrenda y un cuchillo curvo en de pedernal incrustado en la fosa nasal y otro en
sílex (Xiuhcoatl), un mosaico de turquesa; al la boca; un sartal de cascabeles de cobre y cara-
extremo suroeste un grupo de 35 cascabeles de colillos con desgaste lenticular y con desgaste a
cobre y restos de erizo. ambos lados, discos de concha nácar, 2 átlatl en
concha, pequeñas puntas (2cms) de obsidiana en
En segundo nivel, en la zona norte, se en- grupos de 4 ó 5, cientos de caracolillos y cuentas
cuentran más restos de tortuga, erizos, concha de piedra.
nácar, concha (spondylus ?), madera, un elemen-
to en cerámica (réplica de una cuna deformato- En un último nivel de la ofrenda, se en-
ria), un cráneo con un técpatl encima y un pena- cuentra al noroeste, un "penate" (representado a
te mixteco. En la zona sur, alrededor del xiuhte- Tláloc) mixteco; asociado a un venadito, un bas-
cuht1i, se encuentra más esculturas antropomor- tón y 2 elementos sepentinos en alabastro; hacia
fas tipo mezcala (totalizando 4), "penates", mix-
tecas (totalizando 4), máscaras tipo mezcala (to-
talizando 6), una concha spondylus con cuentas
de jadeíta, una máscara cráneo con mutilación
dentaria e incustración de concha y hematita en
las órbitas oculares, y un brasero en tezontle.

En el tercer nivel, en la mitad norte, se ha-


llan: más restos de tortuga, 2 caracoles Xancus,
conchas nácar, discos de concha nácar, un crá-
neo infé: til sobre el espadarte de un pez sierra
que se oriente E-W con aproximadamente 70
cms. de largo, cientos de caracolillos y restos de
erizo asociados a arena gris fina, cientos de cuen-
tas de piedra, pequeños caracoles con desgaste
130
la mitad norte, más restos de tortugas, concha
nácar, mosaicos de turquesa sobre madera y con-
cha; hacia la mitad sur, un caracol Xancus, una
"mano de mortero" en obsidiana pulida; y en to-
da la zona de ofrenda: 6 figuras de copal, casca-
tón y 2 elementos serpentinos en alabastro; ha-
cia la mitad norte, más restos de tortugas, con-
chado 2,031). .

Entre el relleno de la ofrenda, se encuentra


arena gris fina -asociada a caracolillos y eri-
zos principalmente -y gravilla. En la arcilla so-
bre la cual descansa la ofrenda hay pigmento ro-
jo en zonas, probablemente Cinabrio.

La mayor parte de elementos en piedra:


Xiuhtecuhtli, esculturas antropomorfas y másca-
ras tienen una orientación poniente, al igual que
la ofrenda 6.

131
El espadarte de pez sierra, las tortugas y fi-
guras de copa! tienen una orientación este-oes-
te. Los cráneos y objetos pequeños no parecen
tener una orientación definida uniforme.

A diferencia de la ofrenda 6, la ofrenda 11


si parece tener cierta distribución de objetos in-
tencional, en la planta. Al norte parte correspon-
diente al templo de Tláloc se concentraron los
cráneos, restos de tortugas, concha nácar, pez
sierra; y a! sur correspondiente al templo de
Huitzilopochtli se concentraron los elementos en
piedra: Xiuhtecuhtli, figuras antropomorfas,
máscaras y cuchillos. Se observa también cierta
intencionalidad en la colocación de los niveles de
ofrenda, similar a la ofrenda 6: primero un lecho
de cuentas, caracolillos, figuras de copa!, pez sie-
rra, concha nácar; continuando con tortugas,
máscaras cráneo, cuchillos, esculturas y máscaras
en piedra: y terminando por colocar cráneos de
decapitados.

132
En esta ofrenda se encuentra hasta el mo- cuarta etapa constructiva, 1.30 mt. bajo el piso
mento objetos mexicas, de la región de Guerre- de lajas que está a 70 cms de profundidad res-
ro, de la Mixteca y del Golfo. pecto a la esquina de la plataforma de la IV eta-
pa.
OFRENDA 12
La ofrenda tiene una extensión de 85 cms.
La ofrenda 12 se localiza en la fachada pos- por 80 cms; se levantaron 44 elementos. Consis-
terior del templo, aproximadamente en la mitad te principalmente en: esculturas de Tláloc en
correspondiente al Templo de Huitzilopocht1i piedra, 2 máscaras cráneo, y elementos marinos,
dentro del relleno de tezontie que cubre la cuar- tal como diferentes tipos de corales, pez sierra,
ta etapa, bajo el piso de lajas que está a 70 restos de pescado. Dos esculturas de Tláloc y el
cms. de profundidad respecto del vértice de la pez sierra tienen una orientación Oeste-Este;
plataforma de la etapa IV. pero en general no se observa una orientación
uniforme en el resto de elementos, ni una dis-
tribución intencional.
Consiste en pocos y pequeños elementos, 7
en total, colocados son una orientación; abar- Al Noite de la ofrenda se encuentran los
cando un área de 33 cms por 26 cms. Se encuen- dos "penates" o esculturas en piedra verde de
tran: 3 vasijas Tláloc en piedra verde, una figura Tláloc, posiblemente. Uno destaca por su gran
antropomorfa en piedra verde, un cuchillo en pe- tamaño (42 cms) y bella talla. Dispersos por la
dernal, 2 cascabeles de cobre y restos óseos de ofrenda hay una máscara cráneo y una careta
animal en muy mal estado que no fue posible su infantil, un Tláloc en tezontle, una escultura
identificación. sedente en cantera, un cuchillo en sílex y otro
en obsidiana, botones de obsidiana, copal y una
OFRENDA 15 figura de copal, el espadarte de un p~ sierra y
restos óseos y escamas de pescado, conchas ná-
La ofrenda 15 se ubica en la fachada poste- car y discos de concha, caracolillos con desgas-
rior -Este- del Templo, hacia la mitad corres- te lenticular, restos de una tortuga, y diferentes
pondiente al Templo de Huitzilopochtli. Se en- tipos de corales: coral red, asta de venado, asta
cuentra dentro del núcleo o relleno que cubre la de reno, rama y coral cerebro.

133
globulares de jadeíta, cuatro de ellas (4.5 cms de
diámetro) colocadas en cada uno de los ángulos
de la caja y una (7 .5cms) hacia el centro Sur.

La ofrenda 16A es un pequefío nicho que


está al Este de la caja de ofrenda 16, separando
de ésta por una laja. Contiene únicamente 5
grandes cuentas globulares de piedra verde puli-
da, con perforaciones bicónicas. Cuatro de ellas
tienen 5 cms de diámetro y una 7.8 cms.

OFRENDA 17

La ofrenda 17 se localiza en la fachada pos-


terior (este) del Templo; en la mitad que divide
el Templo de Tláloc del de Huitzilopochtli. Con-
siste en una caja de tezontle careado construida
En esta ofrenda se encuentran hasta el mo- dentro del relleno o núcleo que cubre la cuarta
mento, posiblemente objetos mexicas, mixtecos
y del Golfo.

OFRENDAS 16 Y 16 A

La ofrenda 16 y 16 A se localizan en el de-


nominado "patio de los altares" que queda al Es-
te del Templo Mayor. El altar No. 4 pertenece a
las últimas épocas constructivas (quinta o sexta).
pero aún no se puede precisar porque esta zo-
na de excavación hasta el momento no se ha uni-
do a la excavación del Templo.

La ofrenda 16 es una caja de tezontle carea-


do y losas de cantera; cúbica, de aproximada-
mente 40 cms por lado. Dicha caja contiene un
Xiuhtecuhtli pequefío (25 cms), deidad sedente
en cante:a rosa burdamente tallado, orientado al etapa constructiva, adosada a la plataforma de
Poniente. Contiene además 5 grandes cuentas éste -a 90 cms. de profundidad respecto de su
vértice. Se encuentra, al igual que la ofrenda 7,
inmediatamente bajo el piso de lajas que sella el
núcleo. La caja mide 2mts. este oeste por 1.50
mts. norte-sur, siendo la de mayores dimensio-
nes encontrada hasta el momento. Tiene 1.15
mts. de profundidad y su piso es de lajas es-
tucadas.

La ofrenda consiste principalemtne en: 2


Xiuhtecuhtli, 1 vasija Tláloc en piedra, 2 brase-
ros en piedra, cuchillos y raspadores, cráneos y
máscaras cráneo, y elementos acuáticos.

La ofrenda se podría considerar como una


sola capa colocada sobre el piso de la caja, con 2
superposiciones en algunas zonas. Se levantaron

134
técpatl con ojos y dientes de concha, cejas de
mosaicos de turquesas e incrustados en copal y
cascabeles de cobre-, 12 raspadores burdos en
piedra verde -polícroma (con vetas rojas y
amarillas) un cuchillo curvo (Xiuhcoatl) en
obsidiana; 2 braseros pequeños en piedra; un
venadito, un bastón o "dardo de Huitzilopoch-
tli" y un brasero miniatura en la misma piedra
verde; una "nariguera", 2 "manos de mortero",
2 cabezas y 2 crótalos de serpiente en obsidiana
pulida; mosaicos de turquesa sobre madera,
destacando unos sobre cuentas tubulares; 2 pares
de orejeras de turquesa (?) sobre madera, 2 ore-
222 elementos en total. Ambos Xiuhtecuhtlis y jeras de cobre; coral cerebro, coral rama, cara-
las ollas Tláloc están claramente orientados al coles Xancus y caracoles cónicos (6 cms.) capa-
poniente y en general, se nota una tendencia de razones de tortugas, restos de erizos; caracolillos
los demás elementos a estar orientados este-oes- con perforación lenticular y con perforación a
te, pero no es claro. Tampoco se aprecia una dis- ambos lados, discos de concha nácar y átlatl en
tribución ordenada o intencional de los obje- concha. Sobre el piso en el lado sur de la caja
tos en planta. descansa el espadarte de un pez sierra OJO mt)
en muy buenas condiciones de conservación.
Por razones, en toda el área de ofrenda, se
encuentran restos de madera, muy destruida, lo
que hace pensar que posiblemente la ofrenda tu-
viera una protección de madera.

Se encuentra una Xiuhtecuhtli en el centro


-Este alIado de una vasija Tláloc un piedra, con
tapa, conteniendo coral rama; el otro Xiuhtecu-
htli está al oeste, también junto a una vasija Tlá-
loe, ésta conteniendo 3 orejeras en piedra verde.
La ofrenda se concentra más hacia la zona Este,
donde se encuentran: 5 ,-;ráneosde decapitados,
2 máscaras cráneos -una de ellas con un cuchillo
de sílex en la boca y otro en la fosa nasal y la
otros con copal en las órbitas oculares-; 12
cuchillos de s(1exy pedernal -siendo la mayoría

'135
Hacia la zona oeste se encuentran el Xiuh-
tecuhtli y la olla Tláloc, cascabeles de cobre aso-
ciados a madera, coral asta de venado, restos de
erizo -siendo éstos de mayor tamaño (10 cma.)
y sus púas pequeñas y blancas, a diferencia de
los de las otras ofrendas que son pequeñas y con
púas grandes y moradas. En esta zona yen gene-
ral en toda la ofrenda hay dispersos restos óseos I

de diferentes especies de ave (codorniz y garza?)


y de pescado.

Se encuentran además puntas miniaturas (2


cms.) de obsidiana y sílex en grupos de 4 y 5,
cuentas de diversas piedras y jadeíta - destacán-
dose una con la representación de una pulga-,
"botones" de obsidiana con cobre, punzones en
hueso y copa!. Sobre el piso de la caja se encuen-
tra un elemento marino de color rosa hecho
polvo.

En el relleno de la ofrenda hay arena gris fi-


na -asociada a los elementos marinos- y gravi-
lla en la esquina Suroeste de la caja.

En esta ofrenda, hasta el momento, hay ob-


jetos mexicas y de la región del Golfo. A diferen-
cia de la ofrenda 7, ésta sí tiene cráneos, tiene
más elementos en piedra y ninguna en cerámica.
Ambas tienen elementos relacionados con el
agua y ninguna objetos de clara procedencia de locada al Norte, correspondiente al Templo de
Guerrero o la Mixteca. Tienen diferente orienta- Tláloc y la 19, al Sur, correspondiente al Templo
de HuitzilopochUi.
ción: la 7 hacia el Sur la 17 al poniente. En la
ofrenda 17 -a diferencia de la 7 no se ve una Ambas cajas están orientadas a los puntos
distribución y un orden intencional de los cardinales. La 18 mide 50 por 60 cms de alto, la
objetos.
19 mide 52 por 45 cms y 45 cms de alto. Las
dos ofrendas son de características similares.
OFRENDA818y19

Las ofrendas 18 y 19 se localizan en la par-


te central de la fachada frontal -Oeste- entre
las dos serpientes que delimitan las alfardas del
Templo de Tláloc y Huitzilopcht1i. Se encuen-
tran bajo la ofrenda 11; 20 cma bajo el piso de
estuco parchado sobre el cual descansa la ofren-
da 11, por 10 que pertenecen a una época cons-
tructiva o de renovación anterior a la de éste
(IV).

Ambas ofrendas consisten en cajas de pie-


dra estucada con tapa y sistema para embonar, a
40cms de distancia una de la otra. La 18 está ce-
136
La caja de ofrenda 18 contiene 13 escultu- OFRENDA 20
ras antropomorfas - 2 femeninas- tipo Mezcala
(lOa 15 cms de tamaño) en piedra verde con La ofrenda 20 se localiza en la fachada pos-
pigmento rojo, blanco y ocre. Están colocadas terior (este,) del templo; en su cuarta etapa cons-
en la pared Norte de la caja, alineadas en dos hi- tructiva; en la mitad o división entre el templo
leras y orientada al Sur. El resto de la caja está de Tláloc y Huitzilopochtli; correspondiente al
cubierta de carac~litos de piedra; y masas de co- mismo eje, y posiblemente época, de la ofrenda
pal al Sur de la caja. 11. Se encuentra en la descanso de la plataforma
-donde el estuco presentaba un pronunciado
La caja de ofrenda 19 contiene igualmente hundimiento- dentro del relleno de tezontle. La
13 esculturas antropomorfas -dos femeninas- ofrenda descansa sobre este relleno, a 1.05 de
en piedra verde, tipo Mezcala. Son más grandes profundidad con respecto al inicio de la excava-
(15 a 30 cms de tamaño), más labradas y pig- ción.
mentadas que las de la ofrenda 18. Tienen pig-
mento blanco, ocre, rojo, azul y negro en las me-
jillas, ojos, boca, tocado y parte de los cuerpos. A pesar de estar en la fachada este, la ofren-
Algunas parecen tener la bigotera de Tláloc. Las da presenta una orientación poniente. Y, al igual
13 esculturas también están colocados en la zona que la ofrenda 11, se nota una concentración de
Norte de la caja, acomodadas en hileras irregula- diversos elementos hacia el norte se encuntran
res (3 y 4) Y orientados al Sur. La parte Sur de la más cráneos, tortugas, caracoles, conchas y el
caja está cubierta de masas de copa!. Bajo éste y
las esculturas, sobre el piso de la caja, hay cara-
colitos y cuentas de diversas piedras.

En ambas ofrendas se encuentran 13 perso-


najes o deidades, dos de ellos femeninos, coloca-
dos en la caja y viendo hacia el Sur. El resto de
elementos consiste en copal, caracolillos y cuen-
tas de piedra.

Hay objetos tipo Mezcala y caracolillos ma-


rinos.

137
pez sierra. En el sur se encuentran los elementos orejeras en piedra. Hacia la zona sur: un Xiuhte-
en piedra: el Xiuhtecuhtli, máscaras y escul- htli -deidad sedente- en piedra, esculturas an-
turas en piedra, cuchillos. tropomorfas tipo mezcala, máscaras en piedra
tipo mezcala -una de ellas en obsidiana con
Esta ofrenda consta también, de varias su- una gran naríz- destacándose una máscara
perposiciones de objetos colocados en un mis- teotihuacana con incrustaciones de conchas
mo momento. Se encuentra un primer nivel de y obsidiana en los ojos, y muy especialmen-
cráneos de decapitados, una vasija en cerámica, te una máscara en piedra verde de tipo olme-
un Xiuhtecutli, máscaras y esculturas en piedra; ca. Se encuentra también un cajete en piedra ver-
un segundo nivel con más cráneos, máscaras de con tapa lobular tetrápoda, tipo teotihuaca-
cráneos, restos de tortugas, esculturas y máscaras no, conteniendo piedra verde en bruto.
un piedra, un brasero en piedra, técpatl, un
espadarte de pez sierra y un tercer nivel de restos En un segundo nivel se halla en la zona nor-
de tortugas, caracoles Xancus, cascabeles de te: 2 cráneos de decapitados -uno de ellos con
cobre, cuentas de piedra, caracolillos, y figuras mutilación dentaria-, una careta infantil, restos
de copa!. de una tortuga, el espadarte de un pez sierra
orientado norte-sur, conchas nácar y caracol
En el primer nivel de ofrenda, se encuentra, Xancus.
en la zona norte: 6 cráneos de decapitados, una
vasija de cerámica con una deidad, un caracol En la zona sur: más esculturas tipo mezcala
Xancus, cascabeles de cobre asociados a madera, (totalizando 7) una escultura en piedra verde,

138
posiblemente mexica representando a la diosa En la zona sur: un Tláloc en tezontle, cara-
Xochiquetzal, "penates" mixtecos (totalizan- coles cónicos, un caracol cortado (ehecacozcatl).
do 6), un brasero en piedra, 4 técpatl sagrados y distribuidas en toda la zona de ofrenda: fi-
incrustados en copal, un mazo en piedra, másca- guras de copal, cascabeles de cobre asociados a
ras en piedra tipo mezcala (totalizando 5), otra madera y copal, "Manos de mortero", puntas de
máscara tif>ó teotihuacanoide, un vaso en piedra erizo, coral red y rama, caracolillos con desgaste
blanca con la representación de Mictlantecuhtli, lenticular y con desgaste a ambos lados, restos
2 botones de obsidiana, un átlatl en concha, Y de ave y cientos de caracolillos, conchitas y
dispersas en la ofrenda: 3 máscaras cráneo, una cuentas de piedra.
de ellas con un cuchillo de sílex en la boca y he-
matita en las órbitas oculares, otra con un cuchi-
llo de pedernal incrustado en la fosa nasal y otro En el relleno de la ofrenda se encuentra are-
en la boca, y el tercero con hematita en las órbi- na gris fina.
tas oculares.

En un tercer y último nivel se encuentra en La gran parte de elementos en piedra -Xiu-


la zona norte: un Xiuhtecuhtli pequeño en te- htecuht1i, esculturas y máscaras- y la vasija en
zontle, una "nariguera" de obsidiana pulida, un cerámica presentan una orientación al poniente,
bastón o dardo de Huitzilopocht1i, un venadito al igual que la ofrenda 6 y 11. El pez sierra no
y 2 elementos serpentinos en alabastro: restos de tiene la misma orientación, está colocado norte-
tortuga, conchas nácar, discos de concha, y cara- sur, no se observa orientación uniforme definida
col Xancus. en los cráneos y demás objetos pequeños.

139
A diferencia de la ofrenda 6 y similar RESUMEN
a la ofrenda 11, en la ofrenda 20 se observa una
distribución intencional de objetos en planta Se encontraron cráneos y máscaras cráneos
Al norte - parte correspondiente al Templo de en todas las ofrendas del tercer grupo: 6, 11 Y
Tláloc - se consentraron los cráneos, restos de 20; también en la ofrenda 17 y 2 máscaras crá-
tortugas, caracoles, conchas nácar y pez sierra; neo en la 15.
al sur - correspondiente a! templo de Huitzilo-
pochtli - se encuentran los elementos en piedra: Se encontraron Xiuhtecuhtlis o la deidad
Xiuhtecuhtli, esculturas antropomorfas, másca- sedente de tipo similar, en todas-las ofrendas del
ras, brasero, cuchillos, Al igual que la ofrenda 6 tercer y sexto grupo (6, 11 Y 20 - 7 Y 17) Yuno
y 11 se observaron los mismos niveles de coloca- más pequefto en la ofrenda 16.
ción: primero un lecho de cuentas y caracolillos,
figuras de copa!, tortugas, conchas nácar, poste- Esculturas antropomorfas tipo mezcala se
riormente el pez sierra, tortugas, elementos en hallaron en las ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y
piedra: Xiuhtecuhtli, máscaras y esculturas, bra- 20), en las ofrendas 18 y 19 Y aisladamente en
sero y cuchillos, máscaras cráneo; y terminado las ofrendas 9 y 12. "Penates'" mixtecos se en-
con la colocación de cráneos de decapitados. contraron en las ofrendas del tercer grupo (6, 11
Y 20) Yen las del quinto grupo (9 y 15).
En esta ofrenda se encuentran - hasta el
momento - objetos mexicas, de la región de Las máscaras en piedra se hallaron única-
Guerrero, de la Mixteca, del Golfo, teotihuaca- mente en las ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y
nos y olmeca. 20), tipo mezcala, teotihuacanas y una olmeca.
140
Los cuchillos de sílex y pedernal y técpatl en la 8 y en la 12; restos óseos de cocodrilos
se hallaron en las ofrendas del tercer grupo (6, en la 7. Se encontraron punzones de hueso en las
11 Y 20) en las del sexto grupo (7 y 17), en las ofrendas del sexto (7 y 17) Y aisladamente en las
ofrendas 8, 15 Y 12. Los raspadores burdos en ofrendas 9 y 14.
piedra verde sólo se encontraron en la ofrenda
17. Se encontraron conchas nácar, pendientes o
narigueras en concha, en las ofrendas del tercer
Los demás elementos en piedra: "botones", grupo (6, 11 Y 20) y en la ofrenda 15; discos o
"narigueras", "manos de mortero" en obsidiana pendientes en las ofrendas del sexto grupo (7 y
pulida; orejeras en piedra; mosaicos de turque- 17); átlatl en concha en las ofrendas del tercer
sas; puntas; se encontraron en mucha mayor frupo (6, 11 Y 20) y en la 17.
concentración en las ofrendas del tercer grupo
(6, 11 Y 20) Y en la ofrenda 17. El "venadito"
Se encontraron caracoles Strombus única-
asociado al bastón o "dardo de Huitzilopocht1i" mente en la ofrenda 7; caracoles Xancus en to-
tallados en la misma piedra se encontraron en las das las ofrendas del tercer (6, 11 Y 12) Y sexto
ofrendas 11, 20 Y 17. (7 y 17) grupo; conchitas y caracolillos en las
mismas ofrendas, además en las del quinto grupo
(9 y 15) Y en las del segundo grupo (l8 y 19);
Se hallaron espadartes de pez sierra en las caracolillos con desgaste lenticular o a ambos la-
ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y 20) Y del sex- dos, en las ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y
to grupo (7 y 17) Y en la ofrenda 15; caparazo- 20), un la 17, en la 8 y en la 15; caracolillos cor-
nes de tortuga en las mismas ofrendas; restos tados, únicamente en las ofrendas del tercer gru-
óseos de aves o pescados en las mismas, además po (6, 11 Y 20).
141
Se encontraron restos de erizo morados en
las ofrendas 11 y 20, Y erizos b1anos en la ofren-
da 17. Se encontraron corales de 4 y 5 tipos en
las ofrendas del sexto grupo (7 y 17) Y en la 15;
Y corales de 1 6 2 tipos en las ofrendas 11, 20 Y

.
.9.

Vasijas o elementos en cerámica se halla-


ron en las ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y 20)
Y en la ofrenda 7; además de las vasijas funera-
rias de las ofrendas 10 Y 14.

Se encontraron figuras de copal en las


ofrendas del tercer (6, 11 Y 20) Y quinto (9
y 16) grupo; masas de copal en las mismas, tam-
bién en las ofrendas del sexto grupo (7 y 17) Y
del segundo (l8 y 19).

Se hallaron cascabeles de cobre en las


ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y 20), en la 17 y
en la 12; orejeras de oro o tumbaga (?), en la
ofrenda 17.

Se encontr6 madera (tallada o sin tallar) en


las ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y 20) Y en la
ofrenda 17.

En el relleno de la ofrenda se encontr6 are-


na en las ofrendas del tercer (6, 11 Y 20) Y sexto
7 y 17) grupo; y gravilla en las del tercer grupo y
en la 17.

La ofrenda 8, las ofrendas del segundo gru-


po (18 y 19), las del sexto grupo (7 y 17) Y la
16 y 16A se encontraron en cajas; las demás, en
el relleno.

En cuanto al tamaño y al número de ele-


mentos, hay variedad entre las diversas ofrendas.
Respectivamente a la orientaci6ns se ve una ten-
dencia a dirigidaOfrenda hacia el Oeste -mismo
punto cardinal al cual está orientado el Templo:
las ofrendas del tercer grupo (6, 11 Y 20), las del
cuarto grupo (lO y 14); las ofrendas 17 y la
16 están claramente orientadas al Poniente.

Las ofrendas del segundo grupo (18 Y 19) Y


la ofrenda 7 tienen una clara orientaci6n al Sur.
Las demás ofrendas no tienen una orientaci6n
unifonne aparente.
142
______ Los invertebrados de la ofrenda 7 del Templo Mayor.

por: OSCAR J. POLACO R estaban adheridos a algún otro elemento de la


misma. La asignación específica no fue posible
debido a lo reducido y desgastado que se en-
cuentra el material, por lo que no se puede indi-
El presente estudio comprende únicamente car de dónde proceden ni obtener mayor infor-
el material de invertebrados identificados en los mación sobre ellos.
diversos elementos que componen la Ofrenda 7
del Templo Mayor de la Ciudad de México. De equidermos se identificaron espinas de
erizo, en cuatro elementos de la ofrenda, por lo
La identificación del material se realizó si- que suponemos corresponden al mismo número
guiendo a Abbot, (1954-1974); Keen (1958); de individuos. Todos ellos pertenecen a la es-
Morris (1973); Van Martens (1901) y Burch pecie Equinometra vanbrunti, distribuída en el
(1962) y también por comparación con el mate- Pacífico Mexicano y que vive adherido a las ro-
rial existente en las colecciones de moluscos del cas de la costa, de donde se puede colectar con
Laboratorio de Paleozoología del Departamento relativa facilidad.
de Prehistoria, I.N .A.H. Y con el auxilio de la
BioI. Esperanza Hidalgo, del Laboratorio de Eco- Los celenterados están representados por
logía Marina de la E.N.C.B., I.P.N. a quien agra- los llamados corales blandos y corales duros. De
los primeros, 16 corresponden a un alcionario no
decemos su gentileza.
identificado, ya que sólo se conservó el eje que
Se identificaron un total de 578 estructuras no es una estructura diagnóstica en la identifica-
que representan cuatro grupos de invertebrados: ción. Otros mejor conservados se asignaron a Al-
equinodermos, crustáceos, celenterados y molus- cyonum cf dedalium y a Gorgonia ventalina, el
cos; a estos últimos corresponde la mayor parte primero con dos piezas y con 17 el segundo, de
del material. A excepción de algunos moluscos los que la mayoría son sólo fragmentos; ambos
dulceacuícolas y terrestres, la mayoría son ele- celenterados son del Atlántico y se les encuen-
mentos marinos que habitan en las costas y arre- tra formando parte de la comunidad arrecifaI.
cifes de México. A los primeros tres grupos men-
cionados corresponde el 90/0 del material iden- Otros corales de arrecife son los llamados
tificado y está caraterizado en el caso de los ce- duros y que generalmente son los más abundan-
lenterados por el gran tamaño de las piezas, ra- tes en estas cumunidades; tal es el caso de Acro-
zón por la que se encuentran en tan baja propor- pora palmata, A. cervicornis y Diploria strigosa,
ción. este último conocido como coral cerebro y final-
mente Millepora alcicornis o coral de fuego, me-
De crustáceos se identificaron dos exoes- nos abundante que los anteriores; todos ellos
queletos de Balanus de menos de un centímetro forman enormes concentraciones y alcanzan un
de tamaño. Tomando en cuenta que son organis- gran tamaño.
mos que viven adheridos a algún sustrato como
conchas, caracoles, madera, etc.; creo que su pre- Los moluscos es el grupo mejor representa-
sencia en esta ofrenda es casual; seguramente do, puesto que agrupa 37 géneros con 46 espe-
143
cies y constituyen el 910/0 de los elementos plicatus, Phalium granulatum y Turbinella angu-
identificados. La mayor parte de ellos son mari- lata tienen más de 10 ejemplares cada una en la
nos. ofrenda. Las dieciocho restantes tienen menos
de cinco. Nerita scabricosta, vive adherido a las
De moluscos dulceacuicolas, se identifica- rocas de la costa por 10 que su colecta es fácil, y
ron dos géneros con una especie cada uno, Phyla 10 que permite reunir grandes cantidades. Poli-
osculans, que aparece en mayor cantidad en la neces y Phalium viven en aguas someras y el bu-
Ofrenda, y Helisoma cf tenuis, menos abundan- ceo se requiere para su colecta.
te, ambos se distribuyen en 10 que conocemos
como la Cuenca de México, sobre todo en la par- Destacan de entre los gasterópodos los cara-
te sur de la misma. En la actualidad se les puede coles de Strombus gigas que alcanzan gran tama-
encontrar en 10 que queda del Lago de Texcoco ño y que son utilizados como trompetas; los dos
y en los canales de Xochimilco, adheridos a las caracoles que se encuentran en la Ofrenda pre-
raíces de los lirios acuáticos. El tamaño del cara- sentan una abertura artificial alIado opuesto de
col no rebasa el centímetro y como elemento de la del caracol y en la segunda espira en ambos ca-
ornato no es significante. H. cf tenuis no es sos, abertura por la que probablemente se sopla
abundante en la ofrenda, ya que sólo se encon- para producir los sonidos. Otro caracol es Turbi-
traron dos conchas, y también vive adherido a nella angulata de casi 15 cm de altura; algunos
los lirios y plantas que se encuentran en la orilla de ellos presentan huellas de abrasión. 10 que in-
de los cuerpos de agua. dica que fueron recolectadas mucho después de
muerto el animal.
De los moluscos terrestres sólo fue identifi-
cada Retinella indentata, que se distribuye en la
zona aledaña de Yautepec, Morelos y al norte de De Lamelibranquios hay 20 especies y siete
ella; se separaron dos ejemplares cuyo tamaño de éstas tienen más de 10 valvas en la ofrenda.
no rabaso los 0.5 mm de longitud. Este caracol La más abundante es la conocida comúnmente
tiene un gran parecido con Oxichilus, del cual es como almeja (Anadara brasiliánaJ y que consti-
difícil separarlo con los restos con que se cuenta; tuye una ftiente de alimento de cierta importan-
cia; se le encuentra en los fondos arenosos de
sin embargo los elementos estudiados fueron
asignados al primero tomando en cuenta que aguas bajas y su pesca requiere de pocos artifi-
Oxichilus fue introduciso de Europa a Norte cios; de esta especie se contaron 107 yalvas, 10
América hacia 1850. que da como mínimo 53 ejemplares completos.
Le sigue en abundancia Dosinia discus que tiene
un habitat semejante a la anterior; existen 61
Considero casual la presencia de estos mo- valvas, algunas de éstas fragmentadas de tal ma-
luscos dulceacuícolas y terrestres en la Ofrenda nera que aparentemente el rompimiento se pro-
7; probablemente llegaron mezclados con otros dujo por la utilización de algún objeto punzante
objetos o materiales vegetales que hayan sido de- para abrir la concha. Dinocardium robustum y
positados ahí. Spondylus americanus, con 23 y 11 valvas res-
pectivamente, son otras especies que como las
Los moluscos marinos constituyen el anteriores pudieron servir como alimento; sin
820/0 de las conchas identificadas, con 34 géne- embargo, entre los elementos de S. americanus
ros y 43 especies. De éstas en 120/0 (6) provie- de la ofrenda, hay algunas valvas que presentan
nen de las costas del Pacífico y de las costas del desgaste por abrasión, 10 que sugiere que fueron
Atlántico, 760/0 (32). El 90/0 (4) corresponden recolectadas en la playa.
a especies no identificadas y por 10 mismo no
podemos determinar su procedencia, y finalmen- Otro molusco que sirve como alimento ac-
te una especie, Arquitectónica nobilis se encuen-
tualmente es Spondylus calcifer, del que tan sólo
tra en ambos litorales.
se encontraron dos valvas; vive adherido a las ro-
cas del fondo del litoral del Pacífico y para su
A los gasterópodos corresponden 23 espe- colección es necesario bucear y aplicar fuerza pa-
cies, de las que Nerita scabricosta, Polinices du- ra despegarle.
144
El resto de los ejemplares identificados son tes presentan gran semejanza tanto en número
valvas y caracoles de especies que no suelen ser de fragmentos como de especies representadas.
abundantes y cuyo mayor valor reside en los vi- El elemento 191 es el menos numeroso con 16
vos colores yen las ornamentaciones que presen- especies y 46 restos; 15 de las especies son del
tan, por lo que como objeto de ornato son muy Atlántico y una del Pacífico. El más numeroso
estimados. En general no son abundantes en la es el elemento 185, con 80 piezas y 21 especies,
ofrenda y en la mayoría de In casos sólo estafl de las cuales dos son del Pacífico. El cuadro si-
representados por una o dos conchas. Varias de guiente resume los seis elementos.
las especies, como Tonna maculosa y Lyropec-
ten nodosus entre otros, viven en los arrecifes de Como puede notarse en el cuadro anterior,
coral de la plataforma continental del Golfo de existe bastante regularidad en la distribución de
México y es de lugares así de donde deben de las piezas por elemento, predominando en todo
haberse colectado; otros como Polinices y Neri- momento los moluscos provinientes del Atlánti-
ta scabricos;." viven en áreas rocosas cercanas a co y poco representados los del Pacífico; sin
las playas. embargo, Nerita sacabricosta gasterópodo del Pa-
cífico, es un caracol común a todos los elemen-
La mayoría de los restos que se encuentran tos y el segundo en abundancia, por lo que su
en la ofrenda no presentan huellas de desgaste o uso fue frecuente y revistió cierta importancia
rotura, salvo el caso mencionado con anteriori- como objeto de ornato, consideración esta últi-
dad; la limpieza de las conchas y los caracoles, ma avalada por la presencia de operculos, estruc-
así como la presencia, en los casos correspon- turas con la que el molusco. tapa la entrada del
dientes, de la ornamentación típica de la especie, caracol, algunos de los cuales aún estaban en su
nos hace pensar que fueron colectados vivos en lugar, lo que indica que el animal se depositó
sus lugares habituales. Algunos otros presentan completo.
el desgaste característico del rozamiento con la
arena y otros fragmentos de invertebrados que
están mezclados con ella, así como el debido al De las especies del Atlántico hay seis co-
oleaje constante, por lo que probablemente es- munes a todos los elementos, la almeja Anadara
tas conchas fueron colectadas en las playas. brasiliana, Spondylus americanus, Equinochama
arcinella, Dinocardium robustum, Macrocallista
Desde luego que algunos de los ejemplares maculata y Dosinia discus; la primera y las últi-
limpios deben de prevenir de esta actividad re- mas tres comestibles, y las otras dos se conside~
colectora; sin embargo es diícil asignar con preci- ran un adorno por las ornamentaciones que pre-
sión cuales, pero generalmente los que se en- sentan. El resto de las especies se distribuyen de
cuentran coprresponden a lamelibranquios. manera irregular en la ofrenda.

Por otro lado también se presenta cierta re-


Los moluscos marinos se encuentran distri- gularidad en la proporción de gasterópodos y la-
buídos en siete elementos de la ofrenda de los melibranquios por elemento.; las especies de es-
cuales el elemento 436 consta únicamente de tos últimos se encuentran un una proporción del
dos valvas de Spondylus calcifer. Los seis restan- 560/0 en promedio, ligeramente mayor que los

Elemento No. de Piezas Pacífico Atlántico A/Costas Total


•••••••••••••••••••••••••••••••• ~..................................................................
185 80 2 18 1 21
189 69 1 18 1 20
190 64 2 14 1 17
191 46 1 15 - 16
192 73 1 18 - 19
193 77 3 20 - 23
TOTAL 409

145
primeros con 44°/o aunque se observa gran dife­ se distribuye en ambas costas, dos son dulceacuí-
rencia en cuanto al número de piezas. Esta dife­ colas, una terrestre y cinco no identificadas.
rencia está distorsionada, si consideramos que
por cada individuo de gasterópodos hay un ca­ En el caso de los moluscos marinos es tal la
racol y por cada uno de lamelibranquio hay dos regularidad en las proporciones en que aparecen
valvas, de tal manera que al sacar la proporción que induce a pensar que la ofrenda fue elaborada
resulta dos bivalvos, por cada caracol represen­ siguiendo un patrón previamente determinado.
tado en la ofrenda. Se anexa un cuadro donde se La limpieza y lo completo de muchos de los ca­
presentan las especies identificadas, su distribu­ racoles indica que fueron colectados vivos, de
ción por elemento y el número de piezas. Igual­ igual manera que las huellas dejadas por la abra­
mente se presenta el orden sistemático de todas sión manifiestan una actividad recolectora de
las especies identificadas en una lista anexa. playa.

La mayoría de las especies identificadas son


CONCLUSIONES. comestibles; sin embargo la presencia de apercu-
los en algunos casos, así como el número reduci­
Se identificaron 51 especies correspondien­ do de valvas y caracoles sugieren que fueron uti­
tes a cuatro grupos de invertebrados, de las que lizados más como objetos de ornato que como
35 provienen del Atlántico, seis del Pacífico, una alimento.

Templo Mayor —Ofrenda 7 Moluscos marinos


ELEMENTO

ESPECIE 185 189 190 191 192 193 436 DISTRIBUCION TOTAL
Nerita sacabricosta 9 10 14 10 9 14 — PACIFICO 66
Architectonica nobilis 2 1 1 — — — — AMBAS - COSTAS 4
Crepidula fornicata - — 1 — - — ATLANTICO 1
Strombus alatus 1 2 1 1 1 — — ATLANTICO 6
S. gracilor 1 - PACIFICO 1
Cyprea nigropunctata - — — 1 — — - PACIFICO 1
Polinices c f lacteus — - 1 - — - - ATLANTICO 1
P. hepaticus — - - — 1 1 — ATLANTICO 2
P. duplicatus 3 1 3 3 12 1 — ATLANTICO 23
Phalium granulatum 2 2 3 — 1 2 — ATLANTICO 10
Cymatium wiegmanni 1 - 1 - - — — PACIFICO 2
Tonna maculosa 1 - — 1 — - ATLANTICO 2
Murex sp — 1 — — — — ? 1
Thais haemostoma 1 — PACIFICO 1
Melongena melongena — 1 ATLANTICO 1
Busycom contrarium — 1 1 — — 1 — ATLANTICO 3
B. spiratum — — 2 2 — — ATLANTICO 4
Oliva sayana 1 - — — _ — — ATLANTICO 1
Oliva sp - - — 1 — — — ? 1
Conus spurius 3 2 — 1 2 — — ATLANTICO 8

146
Conussp - 1 - - - 1 - ? 2
Arca zebra 3 1 1 - 1 1 - ATLANTICO 7
A nadara florida na - - - - - - - ATLANTICO 1
A. brasiliana 29 16 13 12 10 27 - ATLANTICO '07
Modiolus americanus 1 - - 1 - - - ATLANTICO 2
Aequipecten muscosus - 1 - - 1 1 - ATLANTICO 3
Argopecten irradian s 1 2 - - 2 - - ATLANTICO 5
Lynopecten nodosus - - 1 - - 1 - ATLANTICO 2
Spondylus americanus 1 1 1 1 1 3 - ATLANTICO 11
S. calcifer - - - - - - 2 PACIFICO 2
Pseudochama radian s - - - - - 1 - ATLANTICO 1
Equinochama arcinella 5 2 1 1 3 1 - ATLANTICO 13
Laevicardium laevigatum 1 1 - - - 1 - ATLANTICO 3
Dinocardium robustum 4 5 4 1 8 1 - ATLANTICO 23
Tellina cf alternata - - - - - - - 1 ATLANTICO 1
Macoma cf calcarea - 1 - 3 1 5 - ATLANTICO la
Mercenaria cf mercenaria 2 - - - 2 1 - ATLANTICO 5
Chione cancellata - - - - - 1 - ATLANTICO 1
Chione sp 1 - - - - - - ? 1
Macrocallista maculata 1 1 4 2 2 2 - ATLANTICO 12
Dosinia discus 8 17 13 5 10 8 - ATALNTICO 61

TOTAL 80 69 64 46 73 77 2 1 412

BIBLIOGRAFIA

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Burch, John B.
1962 The Eastern Land Snalis WM. C. Brown Compa-
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1958 Sea Shells 01 Tropical West America Stanford
University Press California.

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1901 "Land and Freshwater Mollusca" Biologia Centra-
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1973 A Field Guide to Shells 01 the Atkzntic and Gull
Coasts and the West Indiens. 3a. Ed. Houghton
Mifflin Company Boston.

147
CLASIFICACION SISTEMA TICA Familia Cypraeidae
DE LOS INVERTEBRADOS DE LA Cyprea nigropunctata
OFRENDA 7, TEMPLO MAYOR Familia Naticidae
Polinices cf lacteus
Phylum Echinodermata P. hepaticus
Clase Echinoidea P. duplica tus
Orden Camarodonta Familia Cassidae
Familia Echinometridae Phalium granulatum
Echinometra vanbrunti Familia Cymatiidae
Phylum Coelenterata Cymatium wiegmanni
Clase Anthozoa Familia Tonnidae
Subclase Alcyonaria y Octocorallia Tonna maculosa maculosa
Orden Gorgonacea Orden N eogastropoda
Gorgonia ventalina Familia Muricidae
Alcyonium Murex sp.
Orden Alcyonacea Thais haemostoma
Clase Anthozoa Familia Melongenidae
Subclase Zoantharia Melongena melongena
Orden Madreporaria Busycon contrarium
A cropora cervicornis B. spiratum
Acropora palmata Familia Olividae
Diploria strigosa Oliva sayana
Clase Hidrozoa Oliva sp.
Orden Milleporina Familia Turbinelledae
Millepora alcicornis Turbinella angulata
Phylum Arthropoda Familia Conidae
Suphylum Crustacea Conus spurius
Clase Cirripedia Conus sp.
Orden Acamptosomata Orden Pulmonata Geophila
Familia Balanidae Familia Zonitidae
Balanus sp. Retinella i",dentata
Phylum Mollusca Orden Pulmonata Lemnophila
Clase Gastropoda Familia Physidae
Orden Archaeogastropoda Physa osculans
Familia Neritidae Familia Planorbidae
Nerita scabricosta helisoma cf tenuis
Orden Mesogastropoda Clase Bivalvia
Familia Architectonicidae Orden Arcoida
Architectonica nobilis Familia Arcidae
Familia Crepidulidae Arca zebra
Crepidula fornicata A nadara floridana
Familia Strombidae Anadara brasiliana
Strombus gigas Orden Mytiloida
S. alatus Familia Mytilidae
S. gracilor Modiolus americanus

148
Orden Pterioida Familia Cardiidae,
Familia Pectinidae Laevicardium laevigatum laevigatum
Aequipecten muscosus Dinocardium robustum
Argopecten irradian s Familia Tellinidae
Lyropecten nodosus Tellina cf alternata
Familia Spondylidae Macoma cf calcarea
Spondylus americanus Familia Veneridae
Spondylus calciter M ercenaria mercenaria
Orden Veneroida Chione cancallata
Familia Chamidae ehiane sp
Pseudochama radians Macrocallista maculata
Equinochama arcinella Dosinia discus

,,
Restos de peces procedentes de la ofrenda 7.

por: EDMUNDO D IA Z-PA R D O plares identificados fue de 53, representando


diez taxa distintos, que a continuación se men­
cionan:

CLASE ELASMOBRANCHII
Familia Pristidae.
En el Laboratorio de Cordados de la Escue­
la Nacional de Ciencias Biológicas, I.P.N., se re­ Pristis cf. pectinatus agrupa a los elasmo-
cibió una serie de huesos de peces procedentes branquios comúnmente conocidos como peces
de las excavaciones que el Instituto Nacional de sierra; fue identificado debido a la presencia de
Antropología e Historia realiza en el área deno­ distintos tamaños de fragmentos calcificados del
minada Templo Mayor de la Ciudad de México y cartílago rostral y de 53 dientes rostrales.
que fueron enviados para su análisis e identifica­
ción por el Laboratorio de Paleozoología, Depar­ Una de las características que distinguen a
tamento de Prehistoria, a través del Biol. Ticul las tres especies del único género mexicano, Pris­
Alvarez Solórzano. tis, es el número de dientes rostrales; sin embar­
go resulta difícil precisar si los encontrados co­
Mediante un primer análisis, se separaron rresponden a un solo ejemplar; de ser así deno­
los restos de acuerdo con aquellas características minan a la especie Pristis pectinatus como más
que permiten la diferenciación de grandes grupos posible; se distribuye en ambos litorales mexica­
(Jordán y Evermann, 1896—1900; Inst. Nal. de nos. Aún cuando en 17 muestras hubo indicios
Pesca, 1976); posteriormente las piezas óseas de la presencia de estos organismos, por lo ante­
fueron estudiadas de acuerdo con las descripcio­ riormente señalado no son incluidos en el por­
nes a nivel de familia (Hubbs, 1919; Gregory, centaje de abundancia.
1959) y la identificación genérica o específica se
llevó a cabo por comparación con los ejemplares CLASE TELEOSTOMI
respectivos de la colección osteológica del Labo­ Familia Belonidae.
ratorio de Cordados de la E.N.C.B.
Tylosurus acus conocidos como agujones o
Los datos sobre distribución, habitat y manjúas, fueron identificados por la presencia de
nombre común, fueron tomados de Jordán y cinco neurocráneos comprimidos y alargados,
Evermann (op. cit.), Inst. Nal. de Pesca (op.cit.), con los frontales como elemento dominante, sin
Castro—Aguirre (1965) Randall' (1968). Todos crestas frontoparientales y con el paraesfenoides
ellos permitieron corroborar, finalmente, las muy largo. Las mandíbulas (12 premaxilares y
identificaciones. 13 dentarios) son alargadas a manera de pico y
con una serie de dientes caniniformes; dichas
Se analizaron un total de 37 muestras, de mandíbulas caben dos o más veces en el resto de
las cuales sólo de tres no se logró reconocer a la cabeza. Las piezas óseas identificadas repre­
qué organismos pertenecieron. El Total de ejem­ sentan el 17.96 °/o del total.
í 151
En cinco de las muestras analizadas se halla- dientecillos cónicos; los dentarios (cuatro) pre-
ron un total de siete ejemplares, que representan sentan una serie de orificios en porción ventral
el 13.2 % de todos los peces identificados. que constituyen canales del sistema de la línea
lateral, y soportan dientes con la misma disposi-
Familia Sphyraenidae ción que los premaxilares. Los preopérculos
(tres) tienen el borde expuesto fuertemente ase-
En una muestra se indentificó un repre- rrado, con canales de la línes lateral.
sentante de este grupo, Sphyraena barracuda, co-
nocidas comunmente como barracudas. Aún cuando, Lutjanus sp., cuenta con nu-
merosas especies en nuestro país, algunas de ellas
Las piezas óseas que permitieron su identi- pueden ser descartadas, dado que los neurocrá-
ficación y que caracterizan a la familia son: dos neos examinados presentan los dientes vomeri-
premaxilares y desiguales entre si; cada uno de nos dispuestos a manera de ancla, por lo que
estos premaxilares tienen en su extremo anterior pueden pertenecer a: 1. peru, 1. guttatus, 1. ar-
- dos o tres dientes caniniformes, fuertes e imphm- gen tiven tris, 1. synagris, 1. campechaus, 1. jocu,
tados en alvéolos; los dos dentarios examinados o L. griseus; las tres primeras se distribuyeron en
tienen disposición dentaria semejante, excepto el litoral occidental mexicano y las restantes en
que cada uno soporta en su extremo anterior un aguas del Golfo de México.
solo diente carniforme. Además existe la presen-
cia de dos placas óseas, también con dientes Los cuatro opérculos y cuatro hiomandibu-
triangulares, que algunos autores llaman pala- lares reconocidos no tienen un carácter distinti-
tinos (Jordan y Evermann, 1896-1900) mientras vo y su identificación se realizó por comparación
que otros (Gregory, 1959) les denominan directa. El porcentaje de piezas identificadas es
prensales o predentarios. Es entonces la denti- de 12.570/0 y proceden de cinco muestras y sie-
ción propia de un pez voraz y fuertemente te ejemplares que representan el 13.20/0 de
depredador. abundancia.

El carácter que brindó su determinación es-


Familia Pomadasyidae
pecífica es un neurocráneo ancho, dorsalmente
deprimido; a diferencia de lo que sucede en otras
especies del mismo género, es corto y carece de El género Haemulon, que cuenta en nues-
tros litorales con varias especies generalmente
crestas dorsales. Un opérculo y dos vértebras to-
rácicas se identificaron por comparación directa. conocidas como roncos o roncadores, fue identi-
ficado con base en la presencia de tres neurocrá-
Las piezas identificadas representan el neos, caracterizados por ser cortos, con la región
4.10 / o y evidencian la presencia de un individuo, etmoidea dispuesta en ángulo de casi 450 con
que representa el 1.80/0 del total. respecto a la línea media, con el paraestenoides
prolongado en dos pequeñas crestas, una dorsal,
otra ventral y con las bulas auditivas muy apa-
Familia Lutjanidae
rentes. Los tres premaxilares reconocidos presen-
A este grupo pertenecen los huachinangos o tan los preocesos ascendentes muy alargados; los
pargos Lutjanus sp., que pudieron ser reconoci- dientes son cónicos, ligeramente retrorsos colo-
dos porque los neurocráneos (cuatro) tienen una cados en una serie, aunque en el extremo ante-
cresta fronto-occipital relativamente grande y rior existen otros dientecillos dispuestos irregu-
dos pequeñas crestas de menor longitud paralela larmente. Los dentarios (tres) y los preopércuios
a la anterior, cuyo extremo posterior termina en (ocho); estos últimos con su borde posterior
dos proceso, uno articular para la cintura pecto- finamente aserrado, llevan cavidades mucíferas.
ral y otro espiniforme libre; así mismo premaxi-
lares (dos) con dientes colocados en dos series Tanto el hiomandibular como la primera es-
principales, una externa con caniniformes, cuyo pina y basipterigio dorsal no tienen algún carác-
tamaño se acentúa gradualmente hacia el extre- ter que los distinga y se identificaron por compa-
mo anterior y otra serie interna, irregular, de ración directa.
152
Todas las piezas óseas representan el están tipificados por ser cortos, con la región et-·
11.370/0 y proceden del examen de seis de las moidea dispuesta en ángulo de aproximadamen-
muestras, que arrojo evidencia de la presencia te 45° con respecto a la línea media; llevan un
de ocho organismos de este grupo; sin embargo gran foramen medio donde se alojan los alarga-
consideramos que sólo pertenecen a siete ejem- dos procesos ascendentes de los premaxilares. La
plares dado que en el caso de dos muestras se re- cresta fronto-occipital es corta y baja y lleva un
conocieron solamente un preopérculo derecho y par de crestas paralelas a cada lado; la más
uno ezquierdo respectivamente, ambos del mis- externas soportan una serie de pequeños ori-
mo tamaño, lo que hace suponer que son de un ficios.
mismo ejemplar. El porcentaje de abundancia es
de 13.20/0. El total de piezas encontradas es de 35.
920/0, y provienen de dieciocho especímenes de
Familia Chaetodontidae este grupo, que corresponden al 33.90/0 del to-
tal, y fueron encontrados en 15 de las muestras
En este grupo se incluye el género Poma- analizadas.
canthus, que en México tiene tres especies que
reciben el nombre común de gallinetas o gallinas
-Familia Scaridae
y que fue determinado por el examen de dos A ella pertenece el género Sparisoma,
neurocráneos cortos, con la región etmoidea de conocidos como loros. Las piezas que permitie-
fuerte pendiente. La cresta occipitales muy alta, ron su identificación son: un premaxilar y dos
y lleva dos pequeñas crestas paralelas a cada la- dentarios que llevan dientes coalescentes, dis-
do; la primera termina en su extremo posterior puestos a manera de un mosaico en sentido dor-
en la foseta articular para la cintura pectoral y la so-ventral, de tal manera que forman una espe-
segunda presenta pequeños orificios; los cuatro cie de pico corto; un neurocráneo alargado, ca-
premaxilares y cuatro dentarios presentes en las racterizado porque la región etmoidea es de pen-
muestras llevan dientes setiformes, dispuestos a diente suave y su extremo más anterior presenta
manera de cepillo; el carácter que tal vez sea el una torsión hacia delante, volviéndose casi hori-
más distintivo es la presencia de una fuerte espi- zontal. Las piezas antes mencionadas hacen el
na en el ángulo inferior de cada uno de los seis 4.790/0 del total y pertenecen a un solo ejem-
preopérculos identificados y la ausencia de otra~ plar que representa el 1.80/0 de la totalidad.
espinas en las mismas piezas.

El total de piezas identificadas corresponde Familia Diodontidae


al 9.580/0 representadas en cuatro muestras por
cinco ejemplares, o sea el 9.40/0 de abundancia. LOS organismos comúnmente conocidos co-
mo peces erizo, del género Diodon fueron halla-
Familia Labridae dos en las muestras examinadas. Las evidencias
que permitieron su identificación son las espinas
El género Bodianus, conocido como vieja o dérmicas fuertes y delgadas que protegen todo el
perro colorado, pudo ser identificado por la pre- cuerpo, y las mandíbulas que se fusionan for-
sencja de 23 premaxilares, peculiarizados por mando un pico masivo de bordes cortantes, en el
llevar un par de fuertes caninos en el extremo cual los premaxilares constituyen la parte supe-
anterior y otro par en su extremo más posterior rior y los dentarios la inferior. Ambas piezas lle-
dirigidos hacia adelante; entre ellos existen pe- van en su parte interna dientes dispuestos a ma-
queños dientes cónicos. Los 20 dentarios reco- nera de placas moledoras. Los seis premaxilares
nocidos presentan una fuerte escotadura en su y seis dentarios reconocidos representan el 7.
parte posterior y llevan una disposición dentaria 180/0. Aún cuando se encontraron en 18 mues-
semejante, aunque los caninos posteriores apenas tras, se considera que los restos examinados per-
se diferencían; los ocho dientes faríngeos infe- tenecen a no más de 7 ejemplares, pues en la ma-
riores identificados son tubérculares y están dis- yor parte de las muestras sólo se halló unas cuan-
puestos en una sola placa ósea triangular sin su- tas espinas dérmicas; para el cálculo únicamente
tura media. Los nueve neurocráneos examinados se tomaron en cuenta las piezas óseas y la pres-
154
sencia de numerosas espinas en una misma mues- de México y los otros tienen bastante posiblili-
tra. El porcentaje de abundancia es entonces de dad de haber sido capturados en ese lugar, pero
13.20/0. con toda seguridad se trata de habitantes de
aguas someras principalmente de arrecife.
Familia Dactylopteridae
Además, los taxa identifioados comparten
Dactylopterus volitans, conocido como vo-
otras características que resulta conveniente se-
lador o muciélago, pudo ser identificado por la
ñ.alar; tal es el caso de las coloraciones llamativas
presencia de un neurocráneo cuya porción dorsal
en franjas, lunares yen general colores brillantes
y cortados constituyen una especie de armadura
que presentan en vida Pomacanthus (gallineta),
rígida formada por placas óseas simétricas que se Bodianus (vieja), Lutjanus, Sparisoma (loro) y
prolongan hacia el "cuello" por un proceso de Haemulon; o bien la forma del cuerpo que po-
ápices agudos a cada lado. Esta pieza representa dríamos considerar "extrañ.a", alejada de la habi-
el 0.600/0, procede de un solo ejemplar que tual, de Pristis, Pomacanthus, Diodon y Dacty-
significa el 1.80/0 de abundancia. lopterus volitans. Por otro lado algunos de ellos
presentan estructuras que podríamos llamar de
DISCUSION y COMENTARIOS. protección como son coraZas óseas (Dactylop-
terus volitans), espinas dérmicas (Diodon) o
Se identificaron en total diez taxa, cada fuertes denticiones (Pristis, Sphyraena barracu-
uno correspondiente a una familia distinta; una da, T. acus, Sparisoma).
de ellas pertenecen al grupo de los alasmobran-
quios o peces cartilaginosos y otras nueve al de
los teleóstomos o peces óseos. Tres peces (Sparisoma. Diodon y Dactylop-
terus volitans) no son utilizados actualmente
En dos casos se logró identificar los ejem- como alimento.
plares de manera específica, Tylosurus acus y
Dactylopterus volitans; los dos se distribuyen Otro hecho que resulta interesante mencio-
únicamente en el Golfo de México. El primero es nar es que en todo el material examinado existe
de hábitos pelágicos y el otro bentónico, pero una marcada preponderancia de piezas craneales
ambos frecuentan aguas arrecifales. D. volitans y con excepción de tres de las muestras en que
frecuenta fondos someros arenosos o fangosos, a se hallaron elamosbranquis (404, 410, 495) y
veces de pocos centímetros de profundidad. uno en que se encontró Lutjanus (488) en las
cuales se reconocieron vértebras, en todos los de-
De los otros ocho taxa encontramos que más casos la presencia de estos elementos se re-
Sparisoma tiene dos especies, ambas atlánticas; dujo a dos, o tres vértebras contiguas al cráneo.
los otros géneros tienen representantes en ambas Podría pensarse que en esta ofrenda sólo se colo-
costas mexicanas, pero hay preponderancia de caron las porciones cefálicas de los ejemplares, y
especies del Golfo de México. Sin embargo, en además la piel de los peces erizo.
todos estos casos se trata de peces que habitan
las áreas coralinas y recosas, de aguas claras rela-
tivamente someras; ocasionamente son captura-
BIBLIOGRAFIA
dos en las orillas o entre los mantos de algas.
Castro-Aguirre, J .L.
En el caso de Pristis (pez sierra), Lutjanus 1965 "Peces sierra, rayas, mantas y especies afines de
México",
(huachinango), Haemulon (roncador) y Diodon Anal. 1st. lnvest. Biol. Pesq. (1): 168-256, Mé-
(pez erizo), suelen invadir las aguas salobres y xico.
turbias de los manglares, incluso aguas franca-
mente dulces.
Gregory, W. K.
1956 Fish skulls, a study ofthe ecolution ofnatural me-
De lo señ.alado en párrafos anteriores se chanisms.
deduce que todos son marinos y la procedencia Trans. Amer. Phi1os. Soc. 23 (2): 1-481 New
de dos de los taxa es indudablemente del Golfo York.

156

25

N 32

4
ELEMENTOS
Nivel 1
.24
26•
•41
·49 10~m
.

• 19
27.

52·

55.
.
53
43.

.10
23•. ·48
·45
.54

.
57 56.

60.

15.
36.
16.

51.
17.
7•
39· 50.
57.

157
Hubbs, C. L. Familia Sphyraenidae
1919 "A comparative study of bones forming the oper-
culas series of fishes",
JournalMorphology 33 (1): 61-71,
Philadelphia. Sphyraena barracuda

Inst. Nat. de Pesca, S. I. C. ORden Perciformes


1976 Cátalogo de peces marinos mexicanos,
México.
Familia Lutjanidae
Joedan, D.S. y B. W. Evermann
1896-
1900 The jishes ofnorth and middle America, Lutjanus sp.
4 vols. Smithsonian Institution,
Washiton
Familia Pomadasydae
Randall, J. E.
1968 Caribbean reef [lShes, T. F. H. PubIs.,
Jersey City, New Jersey. Faemulon sp.

Familia Chaetodontidae
CLASIFICACION SISTEMA TICA
DE LOS PECES DE LA OFRENDA
No. 7, TEMPLO MAYOR Pomacanthus sp.

Phylum Chordata Familia Labridae

Clase Elasmo branchii Bodianus sp.

Orden· Rajiformes Familia Scaridae

Familia Pristidae Sparisoma sp.

Pristis cf. pextinatus Orden Tetrodontiformes

Clase Teleostomi Familia Diodontidae

Orden Beloniformes Diodon sp.

Familia Belonudae Orden Dactylopteriformes

Tulosurus acus Familia Dactylopteridae

Orden Mugiliformes Dacty/opterus volitans


158
N

1
-107

-
101
103
-95

108 -
lOO 93 -
- 99

-
92

-112

- 110
-81

-
83

-
89 -
106
-77

-78

- --85 87 86
-In

-79
-
82

6~

88- -
U4

-
75 -104 -61
- -
-
73
105

-67
80

ELEMENTOS -115 -66


Nivel JI

-
69

10cm.
- -
68

-
n
72

159
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1-<

Z
1-<
l:l.< o el :I: ~ o E-< l:l.<

Pristis ef. pectina tus

Tylosurus acus 5 12 13 30 17.9

Sphyraena barracuda 1 2 2 2 7 4.1

Lutjanus sp. 4 2 4 4 3 4 21 12.5

Haemulon sp. 3 3 3 1 8 1 19 11.3

Pomacanthus sp. 2 2 2 6 16 9.5

Bodianus sp. 9 23 20 8 60 35.9

Sparisoma sp. 1 1 2 2 2 8 4.7

Diodon sp. 6 6 12 7.1

Dactylopterus volitans 1 1 0.6

".:

TOTAL 26 53 54 10 5 19 4 2 1 174

160
- Restos de vertebrados terrestres en la ofrenda 7 y conclusiones.

por: TICUL ALVAREZ se calcula que en las ofrendas existían 40 tortu-


gas de este género. El cálculo se basa en el núme-
ro de petos completos o partes iguales de éstos
que pudieron contarse.
Los restos óseos de vertebrados terrestres
procedentes de la Ofrenda 7 encontrada en las En cuanto a la identificación específica
excavaciones que realiza el Instituto Nacionla de existen en la ofrenda cuatro especies de los cua-
Antropología e Historia, en el que fue el Templo les dos están representadas por uno o dos capara-
Mayor de los Aztecas, situado a un costado del zones, otra por cinco y la más abundante, Kinos-
actual Zócalo de la ciudad de México, son de dos temon hirtipes, por 27 caparazones. Esta última
clases zoológicas, reptiles, representados por tor- abunda en todo el Altiplano Mexicano, encon-
tugas, culebras y cocodrilos, y aves, por unos trándose indudablemente en los lagos que ocupa-
cuantos utensilios hechos de hueso de estos ani- ban la Cuenca de México. Se caracteriza por te-
males y esqueletos de codorniz. Es notable que ner el caparazón liso, sin quilla media dorsal y
no existió ningún resto de mamíferos en esta el peto más pequeño que la abertura del capara-
ofrenda. zón

REPTILES Kinostemon acutum, se caracteriza por te-


ner el lóbulo anterior del plastron o peto más pe-
Los restos de reptiles son quizá los más queño que las placas fijas del mismo. Sólo cinco
abundantes de esta ofrenda y comprenden tres fueron asignados a esta especie, cuya distribu-
órdenes: Testudines, con dos familias, kinos- ción está restringida a la región central de Ve-
ternidae o tortugas de charco y Emydidae, con racruz, norte de Oaxaca y Chiapas.
un género de jicoteas; Crocodylia, con un géne-
ro y especie de cocodrilos y Squamata con tres Kinostemon leucostomus: sólo un capara-
familias de culebras: Boidae con restos de boas; zón se asignó a esta especie por tener una carina
Colubridae con dos géneros distintos que no se media dorsal, las placas inquinal y axilar separa-
pudieron identificar y Crotalidae con dos o tres das; la primera vertebral con los márgenes cón-
géneros de víboras de cascabel y nauyacas. cavos y el peto cierra completamente la abertu-
ra del caparazón. La distribución de esta especie
TESTUDINES comprende la vertiente del Golfo desde el centro
de Veracruz hasta la Laguna de Términos, Cam-
Los restos de tortugas, representados siem- peche.
pre por caparazones, pertenecen a dos familias,
Kinosternidae y Emydidae. Kwastemon scorpoides: también se identi-
ficó sólo un caparazón por tener tres quillas dor-
De la primera familia que comprende las sales. Esta especie se distribuye actualmente en
tortugas de lagos, charcos y ríos (Kinostemon) las dos vertientes.

161
De la familia Emydidae se identificaron 32 De Boidae, culebras conocidas como boas,
petos que corresponden al mismo número de Boa constrictor, se identificó un maxilar y un
ejemplares ya que caparazones sólo fueron 16, dentario quizá del mismo ejemplar. La distribu-
pero existieron muchas placas sueltas que perte- ción de la boa en México cubre ambas costas y
necían indudablemente a los 8 petos que se en- zonas cálidas húmedas y subhúmedas.
contraron solos. Las jicoteas, como comúnmente
se conocen en la costa del Golfo, pertenecen a De la Familia Colubridae, a la que pertene-
Chrysemys scripta cuya distribución es muy am- cen el 90 por ciento de las culebras mexicanas,
plia, ya que ocupa ambas costas, siendo más se identificaron tres dentarios diferentes. por lo
abundante en las grandes lagunas costeras del que consideramos que están representados tres
Golfo. Es importante notar que la mayoría de géneros distintos, que no pudieron ser determi-
los caparazones de jicotea son de ejemplares jó- nados por falta de material de comparación de
venes en los que las placas costales no están to- los numerosos géneros de esta familia.
davía osificadas. Sólo unos 10 ejemplares son
adultos-jóvenes, ya que ninguno es de tamaño
La gran mayoría de los restos de culebras
grande como son los ejemplares adultos-viejos.
son de la Familia Crotalidae y dentro de ésta de
Crotalus o víbora de cascabel, de la que se calcu-
En total se identificaron 73 ejemplares de la que existían por lo menos 15 ejemplares que
tortuga de los cuales aproximadamente el 50 por es el número máximo de mandíbulas de un solo
ciento son Chrysemys y el otro 50 por ciento lado, el izquierdo; existen 10 del lado derecho,
Kinosternon. Dentro de este último género el 69 que es difícil correlacionar con los izquierdos,
por ciento corresponde a K. hirtipes; el 13 a K. por lo que el número de ejemplares quizá sea 1
acutum, e 5 a K. leucostomus y ellO por ciento mayor que el enumerado. Las especies de Cro-
solo se identificó hasta género. talus son numerosas y por los restos óseos es di-
fícil determinarlas; sin embargo consideramos
por el tamaño de los dentarios que pertenecen a
Del Orden Crocodylia, Familia Crocodyli-
especies cuyos individuos alcanzan un tamaño
dae se identificaron dos cráneos, 148 osteoder-
grande entre 80 y 150 m de longitud total.
mas, 54 falanges y 15 dientes. Consideramos por
los dos cráneos que sólo existían igual número
de ejemplares y que las falanges y osteodermas Existen dos mandíbulas que por sus carac-
correspondían a estos, aunque pudiera ser por el terísticas pudieran ser de nauyacas, Bothrops
alto número de osteodermas que existiese otra víboras más bien tropicales. Las mandíbulas son
piel más, sin cráneo. contrarias, por lo que representa un solo ejem-
plar. También existe con duda en la identifica-
ción una mandíbula de Sistrurus, pequeña víbo-
De las especies actuales que axisten en Me: ra de cascabel característica del Altiplano Me-
xico de Crocodylus los ejemplares de la ofrenda xicano.
pudieron asignarse a C. acutus por la forma del
contacto entre los huesos premaxilar y maxilar, En resumen de el Suborden Serpientes se
así como por otras características craneales, que identificaron 23 ejemplares de los cuales el 78
se ppdieron observar al compararlas con ejempla- por ciento son Crotalidae, el 13 Colubridae y
res recientes. Aunque actualmente la distribu- el resto Boidae.
ción de C. acutus es muy restringida debe haber
sido más amplia, cubriendo ambas costas. La
En resumen podemos concluir con rspec-
Longitud de los cráneos es de 29.5 y 18.0 cm,
to a los reptiles que de ellos no se uso más que
por lo que se deduce pertenecieron a un ejem-
la piel, dejándole el cráneo pegado, o el capara-
plar muy joven el menor ya un adulto-joven el
zón que en cierta forma es la piel de la tortuga,
de mayor tamaño.
aunque anatómicamente no sea igual. Esta con-
clusión se basa en el hecho de no encontrar nin-
Del Orden Squamata, Suborden Serpientes, gún hueso post craneal, de ninguno de los reptiles
se encontraron representantes de tres familias. identificados, excepto las falanges y osteodermas
162
,Ac

G
G

G
A

A A

E A
A
A
G

G
G
E A
G
A

A A

G
E

G
G G
G

Invertebrados A
Nivel 1- TI
A Aleiono rio
G Gorgonio A
E Equlnornetro
Ac Aeroporo

IOern.

163
de cocodrilo, pero las primeras son difíciles de nos permiten la comparación con huesos com-
remover de la piel y los segundos están incluídos pletos.
en la misma.
También se encontraron cuatro esqueletos
En total se puede calcular en 98 ejemplares completos de codorniz, Calipepla squamata, es-
de reptiles cuya distribución porcentual se con- pecie cuya distribución cubre todo el Altiplano
signa en el siguiente cuadro: Mexicano y parte de la Vertiente del Pacífico.

% %

Testudines 74 Kinosternidades 40 Kinosternon sp 4


K hirtipides 27
K acutum 5
K leucotomus 2
K scorpoide,~ 1
Emididae 32 Crysemis scripta 32
Crocodilia 43 Crocodilidae 3 Crocodypusacutus 3
Squamata 23 Boidae 3 Boa constrictor 3
Colubridae 3 3
Crotalidae 18 Crotalus 15
Bothrops 2
Sistrurus 1

Por la distribución de las especies identifi- CLASIFICACION SISTEMATICA DE


cadas es difícil determinar la procedencia del REPTI LES Y AVES DE LA
material, pero consideramos que en conjunto OFRENDA No. 7, TEMPLO MAYOR
pudieron ser traídas del Altiplano en su minoría
y de la Costa del Golfo la mayoría, aunque no
se descarta la posibilidad de que ciertos ejempla- Playllum CHORDATA
Clase Reptilia
res sean de la Costa del Pacífico.
Orden Testudines
La colocación de las especies dentro de la Familia Emydidae
Chysemys picta
ofrenda se analiza en la parte correspondiente
Familia Kinosternidae
a las conclusiones generales.
Kinosternon hirtipes
K acutum
AVES K leuconotus
K scorpoides
Los restos óseos de ave muy escasos, encon- Orden Squamata
trándose solamente cuatro utensilios, fabricados Suborden Serpentes
dos de ellos en huesos de pelícano (Pelecanus Familia Boidae
sp). El ave de cuyo hueso están hechos los otros Boa constrictor
dos no se pudo identificar por haber perdido Familia Colubridae
en la fabricación los rasgos característicos que Familia Crotalidae

164
P
B

HB
L

P
B

~
s
B
A

B B P
H
D

H T
B

L
P
PECES
Nivel I-ll
A Doctylopterus
B Bodionus
D~
H Hoemulon
D
L Lutjonus B D
D D
P Pomoconthus
S Sporlsoo
T Tylosourus locin.

165
Crotalus sp. En cuarto lugar en abundancia están los
Bothrops sp. corales (Coelenterata), tanto los blandos como
Sistrurus sp. los duros, con 44 ejemplares que representan el
Orden Crocodylia 6 por ciento del total.
Familia Crocodylidae
Crocodylus acutus El restante 2 por ciento se lo reparten entre
los erizos (Echinodermata); Balanus (Arthropo-
CLASE AVES da) y las aves (Aves), siendo éstas las más abun­
dantes dentro de este 2 por ciento.
Orden Galliformes
Familia Phasianidae
Como ya indicamos se identificaron ejem­
Calipepla squamata
plares de 64 especies de las cuales 37 son molus­
Orden Pelecaniformes
cos, el 58 por ciento. Al igual que en la cuenta
Familia Pelecanidae
individual los géneros de bivalbos fueron más nu-
Pelecanus sp.
jnerosos (20) que los de gasterópodos (17).
CONCLUSIONES GENERALES
Los peces (Teleostomi) y las tortugas, coco­
De todos los restos de animales que fueron drilos y vívoras (Reptila) presentan aproximada­
encontrados en la Ofrenda 7 del Templo Mayor mente el mismo número de géneros 9 los prime­
de México, se puede calcular que estaban repre­ ros y 8 los reptiles, que son el 14 y 12 por cien­
sentados 733 organismos, algunos como los mo­ to respectivamente. Dentro de los Reptiles las
luscos completos y otros como los vertebrados culebras y víboras (Squamata) están representa­
por alguna región anatómica, es decir que el nú­ das por mayor número de géneros (5) que los
mero antes mencionado no se refiere a las piezas otros dos grupos, uno los cocodrilos y dos las
identificadas que es mucho mayor, sino a los in­ tortugas.
dividuos que calculamos podían existir.

Taxonómicamente están representados sie­ De los celenterados o corales hay 5 géneros


te Phylla con 48 familias y 64 géneros distintos. que son el 8 por ciento del total. Los demás gru­
pos, erizos, atrópodos y aves sólo tienen uno o
De los 733 individuos 528 de ellos o sea el dos géneros y entre todos representan el 8 por
72 por ciento son moluscos, de los cuales los ciento restante.
bivalvos son ligeramente (279) más abundantes
que los caracoles o gasterópodos (249). En abun­ Como se indica en cada uno de los trabajos
dancia siguen con 95 ejemplares o sea el 13 por en que se analiza el material por grupos y sobre
ciento los Reptiles, de los cuales hay tres Orde­ todo en los de vertebrados, sólo se encontraron
nes representados, siendo el más numerosos el de restos de la cabeza, como en los peces, culebras,
las tortugas (Testudines) con 73 ejemplares de y cocodrilos, no encontrándose restos óseos de
dos géneros distintos, las jicoteas ( Chrysemys) postcraneales, lo que nos indica que en la ofren­
los casquitos (Kinosternon) continúan en es­ da se usaron las pieles de los animales a los que
te grupo las culebras y víboras (Squamata) con se les dejó la cabeza, es decir que no se ofrendó
varios géneros, pero el más numeroso en indivi­ al animal como alimento sino como protección.
duos es la cascabel (Crotalus). Por último de los Este se confirma en el caso de las tortugas, de las
cocodrilos (Crocodylia) sólo se encontraron dos que sólo estaban los caparazones no encontrán­
ejemplares. dose ningún resto esquelético. El caparazón sim­
bólicamente puede considerarse como la piel.
En tercer lugar quedan los peces con 52 Por último las conchas y caracoles pueden tener
ejemplares que son el 7 por ciento del total. Los este mismo simbolismo o bien, como en el ca­
géneros de peces son varios, algunos de ellos só­ so de los corales, pueden ser material ofrendado
lo representados por un ejemplar y del más como ornamento, ya que en este último caso,
abundante, Bodianus, hay únicamente 13 indivi­ dudamos que los aztecas hayan sabido que la
duos. parte que ofrendaron eran los exo esqueletos de
166
Fa!.

.
Fa!.

.
Fol .
.
Ost.

Cocodrilo
Niveles I-ll
Ost.

Fa!.
Osteodermos

Falanges
.
Craneo

167
animales coloniales y pequeñitos; de ser cierto En cuanto a las tortugas ya se indicó que
esto, se comprueba que los animales ofrendados existían en igual proporción en los niveles I y 11.
eran de protección. Es notable que casi todos los restos de víboras
de cascabel se encuentren en este nivel 11, pues
Al excavar la ofrenda se dividió en tres ni- sólo un ejemplar de 14 estaba en el 1. También
veles. A examinar los restos de animales de cada en esta capa apareció el único resto de boa que
uno nos damos cuenta de una marcada diferen- se identificó.
cia entre ellos.
En contraste con el nivel 1, donde encon-
El nivel 1, el superior se caracteriza por es- traron los utensilios de hueso de ave, en el nivel
tar formado por restos de animales grandes que 11 se rescataron cuatro de los cinco esqueletos de
sólo salieron allí, como los dos cocodrilos, la codorniz.
barracuda y el rostro del pez sierra. La cabeza
de los tres primeros está hacia el lado sur y las El nivel III estaba formado totalmente por
pieles se extendían hacia lado contrario cu- las conchas y caracoles pequeños que fueron
briendo toda la Ofrenda. Esto puede apreciarse identificados, de los que sólo unos cuantos frag-
en el plano de excavación (Fig. 1), en el que ha- mentos se encontraron en los dos niveles (Fig.
cia el norte de las cabezas de cocodrilo se notan 3).
los osteodermos, que son las placas óseas embe-
bidas en la piel, tan características de estos sau-
rios. La cabeza de la barracuda está enmedio de Por lo hnto, suponemos que existía una
las dos de cocodrilo. capa superior formada por pieles fuertes y gran-
des como son las de barracuda y cocodrilo, otra
intermedia formada por numerosas pieles de ver-
Encontramos igual número de caparazones tebrados pequeños, quizá dividida en una de
de tortuga en este nivel y en el 11. De casquitos pieles de víbora de cascabel y otra de pieles de
(Kinosternon) hay 16 en ambas capas y de laji- diversos peces, y por último la más inferior com-
cotes (Chrysemys) hay 9 en cada una. De peces puesta por conchas y caracoles pequeños. Entre-
sólo seis individuos hay en este nivel, por lo que mezclados con estas capas estaban los caracoles
la mayoría están en el 11. grandes y los caparazones de tortuga, esto sin
contar los elementos de cerámica y lítica que
Es también notorio que en el nivel I se en- fueron encontrad"os y que no son de la incum-
contraron los cinco utensilios fabricados de bencia de este trabajo.
huesos de ave y el pectoral de concha.
Para buscar si existía un patrón de distribu-
En el nivel 11se encuentra la mayoría de los ción de cada uno de los tipos de animales identi-
restos de vertebrados de tamaño medio, ya que ficados dentro de la Ofrenda, primero se puntua-
como se señaló los grandes están en el nivel 1. lizaron los elementos en el nivel 1 y II (Fig. 4 y
También en este nivel se encuentran la mayoría 5) y sobre estos patrones se fue localizando cada
de los celenterados y los caracoles de tamaño uno de los grandes grupos de animales, obte-
gtande, COI1lO los 12 ejemplares de Turbinella, niendo los siguientes resultados:
dos Strombus y las dos conchas de Spondylus
americanus que son los más grandes de todas las Los celenterados se encontraron localizados
conchas encontradas. en la periferia de la Ofrenda. En cuanto a Gorgo-
nia existe casi una distribución pareja o sea cua-
tro elementos en el lado sur, centro y norte. Los
En cuanto a los peces, el 88 por ciento de alcionarios se cargan ligeramente ·hacia el lado
los que se pudieron localizar por Elemento es- norte. Los erizos (Echinodernata) se .localizaron
tán en este nivel (Fig. 2). Así tenemos de Dio- en el centro de la Ofrenda (Fig. 6).
don 4 de 6, Tylosaurus 5 de 6, Bodianus 12 de
13; todos los ejemplares de Lutjanus (5); Hae- En lo que a los peces se refiere ya se indicó
mulon (4); Pomacanthus (4); Sparisona (l) y que en el nivel I la cabeza de la barracuda está
Dactylopterus (1) estaban en el nivel 11. en el lado sur al centro de la Ofrenda, y el rostro
168
x x

x
xx

Jicotea (e hrysemys)
Nivel 1

IOcm.

169
del pez sierra (Pristis) ocupa el lado este. En el Los esqueletos de codorniz están más bien
nivel n la distribución es muy simétrica en gene- en la periferia de la Ofrenda (Fig. 13).
ral, aunque por género advertimos que los ejem-
plares de Tylosaurus están cargados hacia el sur; Los caracoles también presentan una sime-
Diodon está más hacia el sur y centro de la tría en su distribución y todos tienen el ápice
Ofrenda y Bodianus hacia el norte y centro. apuntado hacia el sur (Fig.2)., Los, moluscos del
nivel nI están repartidos al azar, ya que no pudi-
Las distribución de los restos de cocodrilo mos encontrar ninguna relación entre los géneros
marca claramente la posición de las pieles con represen tados.
los dos cráneos al lado sur apuntando en estft
misma dirección, y los osteodermos distribuídos La procedencia de la mayoría de los ejem-
en toda la Ofrenda. Los grupos de falanges se plares parece ser el Golfo de México, aunque no
encuentran hacia el lado norte los de las patas se descarta la posibilidad que algunós sean del
y dos grupos poco atrás de los cráneos y a los Pacífico y en el caso de las tortugas parece ser el
lados de ellos, posición que representa las manos Altiplano Mexicano un de las fuentes de obten-
(Fig.7). ción del material.
Las cabezas de las cascabeles (Crotalus) y
de la boa (Boa) están hacia los lados norte y Finalmente, es de notarse que todos los ani-
sur, sin encontrar ninguna en el centro, lo cual males incluídos en la ofrenda son acuáticos,
puede intrerpretarse como si las pieles estuvieran principal aunque no exclusivamente marinos, lo
entrelazadas cabezas con cola, unas con la cabe- que debe estar relacionado con la deidad a la que
za hacia el sur y otras hacia el norte. Los que el tiempo estaba dedicado. Aún las víboras y ser-
apuntaban hacia el sur eran más numerosos que pientes, que no son acuáticas, estuvieron en cier-
los del norte, y también hacia el sur estaba la ca- to modo relacionadas con las deidades acuáticas
beza de la boa Fig. 8). de los aztecas.

Las conchas de jicotea (Chrysemys) están


en ambos niveles cargadas hacia el lado oeste de FIGURA 1 Dibujo de los Elementos del Nivel I tal co-
la Ofrenda. En el nivel I se nota cierta simetría mo fueron encontrados.
en la distribución como si formaran un cuadrado
con una línea al centro de sur a norte y otra en
el lado oeste de la Ofrenda (Fig. 9). En el nivel FIGURA 2 Dibujo de los Elementos del Nivel 11
n también están cargadas hacia el oeste, forman-
do un grupo con seis ejemplares y otras dos al
sur y dos al norte (Fig. 10). FIGURA 3 Dibujo de los Elementos del Nivel III

Los casquitos (Kinosternon) tienen una dis-


FIGURA 4 Localización por númer9 de los Elementos
tribución sin ninguna particularidad, aunque
del Nivel 1, que contenían restos animales.
también se encuentran con mayor frecuencia ha-
cia el lado oeste, dejando un círculo hacia el
lado central-este sin ninguno. En el nivel 11hay
también una concentración de seis caparazones FIGURA 5 Localización por número de los Elementos
del Nivel 11,que contenían restos animales
en el mismo sitio que las jicoteas (Fig. 11 Y 12).

Por último los huesos de aves están distri- FIGURA 6 Distribución de los Elementos de ambos
buídos más hacia el lado este y norte aunque Niveles, en los que se rescataron restos de inver-
siendo tan pocos esta distribución no es muy sig- tebrados
nificativa; así por ejemplo los tres grupos de
utensilios de hueso de ave forman un triángulo
con el ápice hacia el norte y la base en el centro FIGURA 7 Distribución de los Elementos en los dos
de la Ofrenda. Niveles en que se encontraron restos de peces.

170
x

x x

J ¡cotea (Chrysemys)
Nivel TI

IOem.

171
FIGURA 8 Distribución de los Elementos en los dos FIGURA 11 Distribución de los restos de tortuga cas-
Niveles en que se rescataron restos de víbora de quitos (Kinosternon) en el Nivel I
cascabel y boa

FIGURA 12 Distribución de los restos de casquitos en el


FIGURA 9 Distribución de los Elementos del Nivel I en Nivel 11.
que se encontraron restos de Jicotea (Chrysemys)

FIGURA 13 Distribución de los restos de aves en los dos


FIGURA 10 Restos de jicotea en el Nivel 11. Niveles.

172
---- Relación del material identificado de la ofrenda 7.

TICUL AL VAREZ Elemento 7


EDMUNDO DIAZ-PARDO
OSCAR J. POLACO R. (Te) Diodon.- 2 dentarios; 2 premaxila-
res 9 espinas dérmicas.
(Cr) Crocodylus acutus.- Cráneo y mandí-
A continuación se da el inventario total de bulas.
las piezas procedentes de la Ofrenda 7 que se pu-
dieron indentificar. Elemento 10

Dos utensilios de hueso de ave no identi-


La enumeración se hará por el número de
ficada.
cada Elemento yen su defecto por el de registro,
dando el nombre del taxa al nivel que fue posi-
ble su identificación y las piezas óseas de los ver-
Elemento 15
tebrados y el número de conchas o caracoles en
el caso de los moluscos. (Te) Sphyraena barracuda.- Cráneo.

Elemento 16
Para facilitar el reconocimiento de los ani-
males a que pertenece el nombre científico se (Sq) Crotalus.- Mandíbula.
ponen delante de éste dos letras que correspon- (Cr) Crocodylus acutus.- Cráneo y mandí-
den a la siguiente clave: bulas.

Elemento 17
Equinodermos (Ec) erizos
Calenterados (Co) corales (Tu) Kinosternon acutum. - Caparazón y
Artrópodos (Ar) plastron.
Gastrópodos (Ga) caracoles
Bivalvos (Bi) conchas Elemento 19
Elasmobranquios (El) peces sierra
Teleósteos (Te) peces (Tu) Kinosternon hirtipes.- Caparazón y
Testudines (Tu) tortugas plastron.
Squamata (Sq) culebras y víboras
Cocodrilos (Cr) cocodrilos Elemento 23
Aves (Av) aves
(Av) Pelecanus.- Utensilios.

Para la clasificación completa, identifica- Elemento 24


ción y otros detalles, ver los trabajos que sobre
Invertebrados, Peces y Reptiles y Aves se presen- (Tu) Kinosternon hirtipes. - Caparazón y
tan antes de este Anexo. plastron.

173
Elemento 25 Elemento 48

Instrumento en hueso de ave no identifi- (tu) Chrysemys picta.- 2 caparazones y


cada. plastrones.
(Tu) Kinosternon sp. Caparazqn.
Elemento 26
Elemento 49
(Tu) Kinosternon leucostomus. - Capara-
zón y plastron. (Tu) Chrysemys picta. - Caparazón.

Elemento 27 Elemento 50

(El) Pristis cf. pectinatus. - Rostro. (Tu) Kinosternon hirtipes. - Caparazón y


plastron.
Elemento 32
Elemento 51
(Co) Acropora cervicornis.- 1 ejemplar.
(Ga) Physa osculans.- 2 caracoles.
Elemento 36 (Te) Diodon.- 2 dentarios; 2 premaxila-
res; numerosas espinas dérmicas.
(Ga)Physa osculans.- 1 caracol. Resto de cartílagos calificado de Elasmo-
(Tu) Kinosternon leucostomus. - Capara- branquio.
zón y plastron.
Elemento 52
Elemento 37
(Tu) Kinosternon hirtipes. - Caparazón y
(Tu) Chrysemys picta.- Caparazón y plas- plastron.
trono K. acutum.- Caparazón y plastron.

Elemento 39 Elemento 53

(Tu) Kinosternon hirtipes. - Caparazón y (Ce) Gorgonia ventalina.- Fragmentos.


plastron. (Ga) Retinella indentata. - 1 caracol.
(Tu) K. acutum.- Caparazón y plastron. (Te) Diodon.-.Espina dérmica.
(Tu) Chrysemys picta. - 2 plastrones.
(tu) Kinosternon hirtipes. - Placas del capa-
Elemento 41
razón y plastron.
(Tu) Chrysemys picta. - Caparazón y plas-
trono Elemento 54
(Cr) Crocodylus acutus. - 8 falanges.
(Tu) Chrysemys picta. - Placas caparazón
Elemento 43 y plastron de 2 ejemplares.
(Tu) Kinosternon sp.- Placas caparazón y
pIastro n de 2 ejemplares.
(Tu) Kinosternon hirtipes. - Caparazón y
plastron; placas del plastron de otros 3
ejemplares. Elemento 55

Elemento 45 (Te) Bodianus. - 2 premaxilares; 2 denta-


rios.
(Te) Tylosaurus acus.- 2 premaxilares,2 (Tu) Chrysemys picta. - Placas caparazón y
dentarios. plastron.
17'!
x
X XBoo
)(

XX
XX

X
X

Crotolus y Boa
Nivel TI: X

IOern.

175
Elemento 56 Elemento 69

(Bi) Pinctada cf. radiata.- Pectoral de con- Kinosternon hirtipes. - Placas caparazón y
cha. pIastro n completo.

Elemento 57 Elemento 71

(Cr) Crocodylus acutus.- 62 osteodermos. (Co) Diploria strigosa.- 2 caracoles.

Elemento 60
Elemento 72
(Tu) kinosternon hirtipes.- 2 caparazones'
y plastrones. (Te) Diodon.- Numerosas espinas dér-
micas.
Elemento 61 (Cr) Crocodylus acutus. - Diente.
(Tu) Kinosternon. - Placa caparazón.
(Cr) Crocodylus acutus.- 7 osteodermos. (Av) Calipepla squamata.- Cráneo.
(Tu) Chrysemys picta.- Placas plastron.
Elemento 73
Elemento 63
(Co) Gorgonia ventalina. - Fragmento.
(Te) Diodos. - 2 espinas dérmicas. (Ga) Physa osculans. - 2 corales.
(Co) Crocodylus acutus.- 5 osteodermos. (Te) Pocacanthus. - Premaxilar; preopercu-
(Tu) Kinosternon.- 8 placas caparazón. lo.
(Sq) Crotalus.- 7 mandíbulas. (Cr) Crocodylus acutus. - Osteodermo y 12
(Av) Calipepla squamata.- Esqueleto casi falanges.
completo.
Elemento 74
Elemento 64
(Co) Millepira alcicoinis. -- 1 ejemplar.
(Cr) Crocodylos acutus.- 35 osteodermos.

Elemento 66 Elemento 75

(Co) Alcyonum cf. dédalium.- 1 ejemplar. (Tu) Chrysemys picta.- Caparazón y plas-
trono
Elemento 67 (Sq) Crotalus.- Mandíbula.

(Te) Tylosurus acus.- Neurocráneo; 2


premaxilares; 2 dentarios. Elemento 77
Lutjanus.- Neurocráneo; dentario; 7 vérte-
bras caudales. (Co) Alcionario.- 1 ejemplar.

Elemento 68
Elemento 78
(Co) Alcionario.- Fragmentos.
(Te) Tylosurus acus.- 2 Neurocráneos; 4
(Te) Diodon. - 9 espinas dérmicas.
premaxilares; 4 dentarios.
Bodianus.- Neurocráneo; 2 premaxilares.
(Cr) Crocodylus acutus. - diente.
(Tu) kinosternon.- Placa caparazón. Elemento 79
Fragmentos de cartílago de Elasmobran-
quío. (Co) Gorgonia ventalina. - Fragmento.

176
Casquitos(Kin osternon)
Nivel TI

X K. hirtipes
x
• Otros especies


•x

x
X

• xx
x-;<


x

177
Elemento 80 Elemento 87

(Co) Gorgonia ventalina. - Fragmento. (Co) Alcionario.- Fragmento.


(Te) Lutjanus.- 2 hiomandibulares. (Te) Lutjanus.- 2 neurocráneos premaxi-
(Sq) Crotalus.- Mandíbula. lar; dentarios 2 hiomandibulares; preoper-
Fragmentos de cartílago de Elasmobran- cular.
quio. Tylosaurus acuso- 2 neurocráneos; 4 denta-
rios; 4 premaxilares.
Elemento 81 Bodianus. - Neurocráneo; 3 dentarios; 3
premaxilares; placa dientes faríngeos.
(Cr) Crocodylus acutus.- 30steodermos. (Sq) Crotalus.- 3 mandíbulas.
(Tu) Chrysemys picta. - Placas caparazón y Bothrops. - Mandíbula.
plastron de 2 ejemplares. (Tu) Chrysemus picta. - Placas, caparazón
y plastron.
Kinosternon. - Placa, caparazón y plastron.
Elemento 82
Elemento 88
(Ec) Equinometra vanbrunti. - Espinas.
(Ga) Physa osculans. - Caracol. (Co) Alcionario.- 1 ejemplar.
(Te) Haemulon.- neurocráneos; 1 preoper-
cular; 1 premaxilar.
Elemento 89
Bodianus. - Neurocráneo; 2 dentarios; pla-
ca de dientes faríngeos. (Ec) Equinometra vanbruti.- Espinas.
(Sq) Crotalus.- Mandíbula y restos de crá-
(Co) Gorgonia ventalina,- 4 fragmentos.
neo. (Ga) Physa osculans. - Caracol.
(Tu) Kinosternon. - 12 placas caparazón.
(Te) Diodon.- 2 dentarios; 2 prexilares; 9
espinas dérmicas.
Elemento 83 (Tu) Chrysemys picta.- Placa caparazón.
(Cr) Crocodrylus acutus.- 5 falanges.
(Co) Gorgonia ventalina.- Fragmento. Fragmentos de cartílago de Elasmobran-
Alcionario.- Fragmentos. quios.
(Ar) Balanus.- 2 exoesqueletos.
(Te) Pomacanthus.- Neurocráneo; preo- Elemento 92
percular.
Haemulon. - Preoporcular. (Te) Dactylopterus volitans. - Neurocrá-
Bodianos.- Neurocráneo; premaxilar; pla- neo.
ca dientes faríngeos. Bodianus. - Dentario.
(Av) Calipepla squamata. - Esqueleto casi (Cr) Crocodylus acutus. - 2 osteodermos.
completo. (Tu) Kinosternon acutum. - Caparazón y
plastron.
K. hirtipes. - Caparazón y pastron.
Elemento 85 K. scorpoides. - Caparazón y plastron.
(Co) Alcionario.- 1 ejemplar.
Elemento 93, 94 Y 95

Elemento 86 (Co) Alcionario.- 1 ejemplar cada uno.

(Tu) Chrysemys picta. - Placas caparazones Elemento 96


y plastron de 5 ejemplares.
Kinosteron hirtipes.- Placas plastron de (Co) Gorgonia ventalina.- Fragmento.
5 ejemplares. (Te) Haemulon.- Neurocráneo; 2 premaxi-
K. acutus.- Placas plastron de 1 ejemplar. lares; 2 dentarios; 4 preoperculares; espinas
178

/
Casquitos( Kinosternon)
Nivel I
X Kinosternon hirtipes
• Otras especies

x

x
x


x
basipterigio; hiomandilmlar. Bodianus.- 3 Neurocráneo; 4 premaxilar; 3
Lutjanus.- Neurocráneo; premaxilar denta- dentarios; 2 placas dientes faríngeos.
rio; 2 preoperculares; 4 opérculos. (Sq) Crotalus.- 2 mandíbulas.
Bodianus.- Colubridae.- Mandlbula.
Bodianus.- Neurocráneo; 2 premaxilares; 2 (Tu) Kinosternon hirtipes. - Caparazón y
dentarios; placa dientes faríngeos. plastron.
(Sq) Crotalus.- Mandíbula.
Boa constrictor. - Maxilar y dentario. Elemento 101
(Tu) Chrysemys picta. - Caparazón y plas-
trono (Co) Alcionario.- 2 fragmentos.
Kinosternon hirtipes. - Caparazón y pIas- (Ga) Physa osculans. - 4 caracoles.
trono (Bi) Anadara.- 2 fragmentos.
(Av) Calipepla squamata.- Esqueleto casi (Te) Bodianus.- Neurocráneo; 3 dentarios;
competo. 2 premaxilares; placa dientes faríngeos.
(Sq) Crotalus.- Maxilar.
Elemento 98

(Co) Gorgonia ventalina. - Fragmento. Elemento 103


(Ga) Physa osculans.- 2 caracoles.
(Te) Pomacanthus.- Neurocráneo; 2 pre- (Co) Alcyonum cf. dedalium.- 1 ejemplar.
maxilares; 4 dentarios; 2 preoperculares.
Bodianus.- 2 premaxilares; dentario. Elemento 104 Y 105
(Sq) Crotalus.- 2 mandíbulas.
Colubridae.- Maxilar y dentario. (Co) Gorgonia ventalina. - 1 ejemplar cada
(Cr) Crocodylus acutus.- 3 osteodermos; 9 uno.
falanges.
(Tu) kinosternon hirtipes. - Caparazón y Elemento 106
plastron.
(Av) Calipepla squamata.- Esqueleto casi (Co) Gorgonia ventalina.- 1 ejemplar.
completo. (Bi) Spondylus calcifer.- 2 conchas.

Elemento 99 Elemento 107

(Co) Gorgonia ventalina.- Fragmentos. (Co) Gorgonia ventalina.- 1 ejemplar.


(El) Elasmobranqui.- 32 vértebras.
(Te) Sparisoma.- Neurocráneo; 2 dentarios;
Elemento 108 Y 109
premaxilar; vértebra toráxica; 2 cleitros; 2
preoperculares. (Ga) Turbinella angulata.- 1 caracol cada
Bodianus. - 2 premaxilares; dentario. uno.
(Cr) Crocodylus acutus.- 5 osteodermos; 3
falanges.
Elemento 110
(Tu) Kinosternon. - 8 placas caparazón.
(Ga) Turbinella angulata.- 3 caracoles.
Elemento 100
Elemento 111
(Ec) Equinometra vanbrunti.- Espinas.
(Co) Alcionario.- Fragmento. (Ga) Strombus gigas.- 1 caracol.
(Ga) Physa osculans. - 2 caracoles.
(El) Elasmobranquio.- 3 vértebras. Elemento 112
(Te) Pomacanthus.- Premaxilar; 2 preo-
perculares. (Ga) Turbinella angulata.- 3 caracoles.

180
Elemento 113 Spondylus americanus. - 4 "
Equinochama arcinella.- 3 "
(Ga) Turbinel/a angulata.- 1 caracol. Dinocardium robustom.- 8 "
Macoma calcarea.- I "
Elemento 114 Mercenaria cf. mercenaria.- 2 valvas.
Macrollista mawtata.- 2 "
(Ga) Strombus gigas.- I caracol. Dosinia discua.- 10 "

Elemento lIS Elemento 118

Turbinel/a angulata.- I caracol. (Ga) Nerita scabricosta.- 10 caracoles.


Crepidula formicata. - 1 "
Elemento 116 Strombus alatus.- 1 "
Cyprea nigropunctata I "
(Ga) Nerita scabricosta.- 14 caracoles. Polinices duplica tus. - 3 "
Strombus gracitis.- I " Busycom spiratum. - 2 "
Polinices hepaticus. - I " Oliva sp.- I "
P. duplica tus. - I " Conus spurius. - I "
Phalium granulatum. - 2 " (Bi) A nadara brasiliana.- 12 valvas.
Thais haemostoma.- I " Modiolus americanus.- I "
Busycon contrarium.- I " Equinochama arcinella.- I "
Conus sp.- I " Dinocardium robustum.- I "
(Bi) Arca zebra.- I valva. Macoma cf. calcarea.- 3 valvas.
A nadara jloridiana.- I " Macrocal/ista maculata.- 2 valvas.
A. brasiliana.- 27 " Dosinia discus.- 5 valvas.
Aequipecten muscosus.- I "
Lyropecten nodosus.- I " Elemento 119
Spondylus americanus. - 3 "
Pseudo ehama radians.- 1 " (Ga) Nerita scabricosta.- 14 caracoles.
Equinochama arcinella.- I " Architectonica nobilis.- I "
Laevicardium laevigatum.- 1 " Strombus alatus. - 1 "
Dinocardium robustum.- I " Polinices lacteus. - I "
Macoma el calcarea.- 5 " P. duplica tus. - 3 "
Mercenaria cf. mercenaria.- I " Phaliom granulatum.- 3 "
Chione cancel/ata. - 2 " Cymatium wiegmanni.- I "
Macrocallista maculata.- 2 " Murex sp.- I "
Dosinia discus. - 8 " Busycom contrarium.- 1 "
Turbinel/a angulata.- I "
Elemento 117 (Bi) Arca zabra.- 1 valva.
A. brasiliana.- 13 "
(Ga) Nerita scabricosta.- 9 caracoles. Lyropacten nodosum.- I "
Strombus alatus.- I " Spondylus americanus.- 1 "
Polinices hepaticus. - I " Equinochama arcinella.- I "
P. duplica tus. - 12 " Dinocardium robustum.- 4 "
Phalium granulatum.- I " Macrocallista maculata.- 4 "
Tonna maculosa.- 1 " Dosinia discus.- 13"
Busycom spiratum.- 2 "
Conus spurius. - 2 Elemento 120
(Bi) Arca zebra.- I valva.
A. brasiliana.- 10 " (Ga) Nerita scabricosta.- 18 caracoles.
Aequipecten muscosus.- 1 " Architectonica nobilis.- 1 caracol.
Argopecten irradium.- 2 " Strombus alatus.- 2 "

181
Polinices duplicatus.- I " Elemento H
Phalium granulatum.- 2 "
Melongena melongena.- I " (Co) Alcionario.- Fragmentos.
Busyum controrium.- I " Gorgonia vetalina. - Fragmentos.
Conus spurius.- 2 " (Ga) Physa osculans. - 9 caracoles.
Conussp.- I " (Te) Bodianus. - Premaxilar.
(Bi) A rca zebra.- I valva. Lutjanus.- Fragmento dentario.
Anadara brasiliana.- 16 " Diodon. - 6 espinas dérmicas.
Aequipecten muscosus.- I "
Argopecten irradians.- 2 " Elemento 1
Sponylus americanus.- I "
Equinochama arcinella.- 2 " (Te) Diodon. - 5 espinas dérmicas.
Laevicardium laevigatum.- I " Haemulon. - Preopercular.
Dinocardium robustum.- 5 " (Sq) Bothrops. - Mandíbula.
Macoma cf calcarea.- I " (Tu) Kinosternon. - 6 placas caparazón.
Macrocallista maculata.- I "
Dosinia discus.- 17 "
Elemento J

(Bc) Equinometra vanbrunti. - Espinas.


Elemento 121
(Te) Haemulon.- Preopecular.
(Ga) Nerita scabricosta.- 9 caracoles. Diodon. - 4 espinas dérmicas.
2 caracoles. (Cr) Crocodylos acutus.- 3 osteodermas.
Architectonica nobilis.-
Strombus alatus. - I " (Tu)
3 " (Tu) Kinosternon. - 2 placas caparazón.
POlinicesduplicatus.-
Phalium granulatum.- 2 " (Sq) Crotalus.- Cápsula veneno.
Cymatium wiegmanni.- I "
Tonna maculosa.- I " Elemento K
Oliva sayana.- I "
Conus spurius.- 3 " (Co) Gorgonia ventalina. - Fragmento.
(Bi) Arca zebra.- 3 " (Ga) Physa osculans. - 2 caracoles.
Anadara brasiliana.- 29 " (Te) Diodon.- 9 espinas dérmicas.
Modiolus americanus.- I " (Cr) Crocodylus acutus.- 2 osteodermas; 7
Argopecten irradians.- I " falanges.
Spondylus americanus.- 1 " (Tu) Kinosternon hirtipes. - 10 placas ca-
Equinochama arcinella.- 5 " parazón y plastron.
Laevicardium laevigatum.- I valva. (Sq) Crotalus.- Cápsula veneno; frontal.
Dinocardium robustum.- 4 "
Mercenaria cf. mercenaria.- 2 "
Chione sp.- I " Elemento L
Macrocallista maculata.- I "
Dosinia discus.- 8 " (Co) Alcionario.- Fragmento.
Gorgonia ventalina.- Fragmento.
(Ga) Physa osculans.- 3 caracoles.
Elemento G. (Te) Diodon. - Numerosas espinas dérmi-
cas.
(Co) Alcionario.- Fragmentos. Bodianus. - 2' dentarios.
(Ga) Physas osculans.- II caracoles. (Cr) Crocodylus acutus.- 2 dientes.
(Bi) Helisoma cf. tenuis.- I valva. (Sq) Crotalus.- Restos óseos de una ca-
(El) Elasmobranquio.- 2 vértebras. beza.
(Cr) Crocodylus.- acutus.- 50steodermus. (Tu) Chrysemys picta.- Plastron.
(Tu) Kinosternon.- 7 placas caparazón. Kinosternon. - 12 placas caparazón.

182
x
• x

AVES
Niveles I-ll
X Utencilios

• Esqueletos

183
Elemento M NUMERO 10
(Ga) Physa osculans 7 caracoles.
(Te) Tylosurus acuso- Fragmento dentario. Retinella indentata. - caracol.
Diodon. - Numerosas espinas dérmicas. (Te) Diodon.- Numerosas espinas dérmi-
Haemulon.- Dentario. cas.
Bodianus.- Neurocráneo; 2 premaxilarés; 1 Bodianus. - Placa dientes fanngeos.
dentario; placa dientes faríngeos. (Tu) Chrysemys picta. - Placas caparazón y
(Cr) Crocodylus. -;- acutus.- 23 oesteoder- plastron.
mas; 10 dientes; 10 falanges.
(Tu) Kinosternon. - Placas de 2 caparazo- NUMERO 11
nes. (Co) Alcionario.- Fragmento.
(Sq) Crotalus.- Cráneo sin mandíbulas (Ga) Physa osculans. - 3 caracoles.;
(Te) Diodon.- 6 espinas dérmicas.,
(Tu) Kinosternon. - 4 placas caparazón.
La siguiente relación se da por número, ya que (Sq) Crotalus.- Mandíbulas.
no tiene Elemento. (Cr) Crocodylos.- 2osteodermas.;
NUMERO 7
(Co) Alcionario.·- Fragmento. NUMERO 12
(Ga) Physa osculans.- 3 caracoles. (Co) Gorgonia ventalina. - Fragmento.
(Te) Diodon. - Espinas dérmicas. (Ga) Physa osculans. - 11 caracoles.
(Sq) Culubridae.- Dentario. (Te) Diodon. - 5 espinas dérmicas.
(Cr) Crocodylus acutus. - 5 osteodermas.
NUMERO 8 (Tu) Kinosternon. - 12 placas caparazón.
(Co) Alcionario.- Fragmento. (Av) Calipepla squamata. - Fragmento de
(Ga) Physa osculans.- 4 caracoles. tibia; ulna.;
(Tu) Kinosternon. - 3 placas caparazón.
(Sq) Crotalos.- Cápsula veneno. NUMERO 13
(Ga) Physa osculans. - 23 caracoles.
NUMERO 9 (Te) Diodon. - 5 espinas dérmicas.
(Ga) Physa osculans.- 3 caracoles. (Tu) Kinosternon hirtipes. - Placas capara-
(Bi) Helisoma cf tenuis. - Valva. zón y plastron.
(Tu) Kinosternon. - Caparazn. (Cr) Crocodylus acutus.- 14 osteodermas.
(Cr) Crocodylos.- 6 esteodemas. (Sq) Crotalus.- Mandíbulas y restos del
(Sq) Crotalus.- Maxilar. cráneo.

184
_____ Una máscara olmeca en el Templo Mayor de Tenochtitlan.

por: ARQL. EDUARDO MATOS M. * dades de la ofrenda; b) descripción y estudio de


la máscara; c) concluciones preliminares.
En las excavaciones del Proyecto Templo
Mayor, iniciadas el 20 de marzo de 1978, se pre- a) Localización y generalidades
sentaba la oportunidad de trabajar en un contex-
to urbano sin las prisas ni presiones a que se han La máscara de características olmecas de
visto sometidos anteriores trabajos arqueológi- que trata esta nota se encontró como parte de la
cos en el área, lo que permitió planificar los pa- ofrenda Núm. 20, que se excavó durante el mes
sos a seguir desde el punto de vista metodológico de noviembre de 1978 por Eisa Hemández Pons
¡, así como realizar las excavaciones con la técnica e Isabel Gutiérrez en la unidad G-29 de nuestra
y rigor indispensables en cualquier trabajo de es- cuadrícula de control. Esta ofrenda se ubica en
te tipo. la parte posterior del Templo Mayor, en la unión
de los basamentos de Tláloc y Huitzilopochtli,
Fue así como uno de los aspectos funda- aunque la mayor parte de la ofrenda se encuen-
mentales que se planteaban era la excavación de tra del lado de este último y se localiza debajo
las ofrendas y elementos asociados al templo, ya del piso de estuco y piedra que forma el descan-
que la relación de todo el conjunto nos permiti- so de la plataforma de lo que provisionalmente
ría penetrar, aunque fuera en parte, dentro de la se ha denominado época IV. Es de las ofrendas
superestructura de los mexicas, puesto que el que no aparecen dentro de una cista o caja sino
Templo Mayor era el lugar en donde real o sim- que se encuentra en el núcleo de la estructura
bólicamente se asentaba todo el poder de este (Fig. 1).
grupo con las implicaciones económicas que esto
trae aparejado. Al igual que en otras ofrendas excavadas,
los objetos encontrados corresponden a diversas
A fines de 1978 se habían excavado 20 áreas de Mesoamérica: figuras y máscaras de pie-
ofrendas que varían en su tamaño, número de dra del actual Estado de Guerrero; figuras de pie-
elementos y características generales, la gran ma- dra de la Mixteca; elementos marinos probable-
yoría de ellos co.rrespondientes al Templo de mente de la costa del Golfo* y una máscara en
Huitzilopochtli. Todo este material, junto con piedra de características teotihuacanoides; los
el que aparezca del lado de Tláloc, será base fun- elementos propiamente mexicas, tanto en estilo
damental para el estudio antes mencion?do. Hoy como en materia prima, como podrían ser las es-
queremos solamente dar a conocer uno de los culturas sedentes del dios Xiutecuhtli, algunos
elementos más antiguos que han aparecido en navajones y otros. Además, se encontraron va-
nuestras excavaciones y, según parece, en ante- rios cráneos completos así como las máscaras-
riores trabajos en el lugar. Para esto vamos a se- cráneos con incrustaciones en los ojos (fotos 1 y
guir el siguente orden: a) localización y generali- 2).

- Artículo publicado en Anales del Instituto de. Investiga-


ciones Antropol6gicas de la UNAM., Vol. XVI, PP. 11-19, -Este material será estudiado posteriormente por biólo-
1979, México. gos de los laboratorios del INAH.

185
Dentro de este contexto y en asociación di- Dios 1, que relaciona en primer instancia con la
recta, fue encontrada la máscara de piedra verde tierra, el agua y la fertilidad agrícola. Por su par-
con rasgos de la llamada cultura olmeca, localiza- te, Coe (1972) lo relaciona con la fertilidad y
da a una profundidad de 68 cm. por debajo de la también con elementos propios del jaguar.
costa 2232.58 mt. sI1m. y en el extremo SE de la
ofrenda. Se le asignó como elemento el número Otro aspecto interesante es que la nariz se
41 al momento de ser extraída el día 16 de no- presenta ligeramente aguileña, lo que nos re-
viembre. A continuación vamos a describirla. cuerda algunas representaciones provenientes del
área de Guerrero, como las de la exposición de
b) Descripción y estudio preliminar arqueología de Guerrero que montó hace algu-
Se trata de una máscara en piedra verde de nos años la Universidad Autónoma de México
10.5 cm. de alto por 8.6 cm. de ancho y 3.5 de (ver Fig. 3), así como las de algunos de los perso-
grueso, con 2 perforaciones en la parte supe- najes de la cueva de Oxtotitlan, Gro., estudiada
rior-posterior, que seguramente servían para por Grove (1970).
colgarla. Tiene también dos agujeros de pocos
milímetros de perfundidad que no llegan a atra- En cuanto al estudio petrográfico mineraló-
vesar la pieza de lado a lado. En parte superior gico, practicado en el Laboratorio de Geología
tiene la hendidura sagital en forma de V y del del INAH por los geólogos Manuel Reyes y José
lado derecho de la misma puede apreciarse, si se Ortega, la pieza está hecha de una corneana de
mira con atención, un esgradiado que parece re- horblenda (hornfels de actinolita-tremolita Y
presentar una cabeza con la misma hendidura ya commingtonita) y de acuerdo con su origen se
mencionada. A ambos lados de la cara tiene sa- trata de una roca metamórfica de contacto que
lientes laterales. El estado de la pieza es, en gene- puede provenir, por ejemplo, del área de Guerre-
ral, bastante bueno (ver foto 3 y figura 2). ro; sur de Puebla, la zona de Acatlán, Pue; y
Teotitlán del Camino, Oax. 1
Un aspecto que llama la atención de inme-
diato es la hendidura sagital antes dicha, la que c) Conclusiones preliminares
está presente en diversas piezas olmecas, tanto El hallazgo de un objeto de 3 mil años de
dentro de la escultura monumental como de la antigüedad dentro de un contexto de hace 500
lapidaria menor. En el caso del primer grupo, te- años, resulta particularmente interesante. Cabe
nemos buenos ejemplos en los monumentos 10 aclarar que no es la primera vez que esto ocurre.
y 52 de San Lorenzo, así como en la escultura Recordemos que Sabloff y Rathje habían locali-
de San Martín Pajapan. Del segundo grupo, lo zado en Cozumel una máscara olmeca de piedra
vemos ejemplificado en diversas hachas proce- verde dentro de un contexto del clásico maya.
dentes de Arroyo Pesquero, Veracruz, represen- En cuanto al Templo Mayor de Tenochtitlan,
tada tanto de frente como de perfil (Jora/emon, pensamos que es la primera ocasión en que apa-
1976, Fig. 8, d,e,f,), así como en hachas que es- rece un objeto olmeca, que por las característi-
te autor relaciona con el "Dios 1" (God 1) de su cas ya descritas, puede provenir del área limítro-
clasificación, algunas de procedencia desconoci- fe de los Estados de Guerrero, Oaxaca y Puebla
da y otras procedentes de Oaxaca y la Venta (Fig. 4). Por otra parte, tenemos datos, tanto de
(Jora/emon, Fig. 12; a, b, c, d, f, g, h;Pohorilen- nuestras excavaciones como de hallazgos anterio-
ko, 1972, Figs. 34, 37, 38, 41, 42 Y 43). Tam- res en el área del templo, de materiales teotihua-
bién se localiza este atributo en varias máscaras canos y de otras culturas que son más antiguas
y objetos diversos (Jora/emon ob. cit., Fig. 14, cronológicamente al momento mexica. Sin em-
a, b;e, i). ' bargo, no es de extrañar que esto ocurre, lo que
quizá se debe a varias circunstancias: por una
parte, son objetos que representan status, dada
Diversas interpretaciones se han dado sobre la calidad del material en que están realizados y
este rasgo. Bernal (1968) piensa que se trata de
la hendidura occipital presente en los cráneos de
los felinos; Joralemon no atribuye el rasgo a un
lTomado de los datos proporcionados por el laboratorio
dios específico, sino que lo ve presente en diver- de referencia y el oficio No. 6 del jefe del Departamento de
sas representaciones de dios como es el caso del Prehistoria.

186

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187
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FIg.2 Móscara de piedra verde u l-J-'


ofrenda 20- Templo Mayor
1978.

FlG. 3 Piezas Olmecas de Guerrero.

108
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e 4

\ .....,......
~...•.............
......

Fig. 4
POSIBLE AREA DE
...5,....L
PROCEDENCIA DE LA MATERIA PRIMA

189
que aparecen por lo general en contextos cere- OBRAS CITADAS
moniales y del grupo dirigente y que bien pudie-
ron transmitirse de generación en generación. BERNAL, Ignacio
Por otra parte, pueden ser objetos de culto al 1968. Las capitales olmecas, conferencia en el
porvenir de lugares considerados sagrados, co- Museo Nacional de Antropología, febrero,
mo puede ser el caso de Teotihuacan, y recorde- México.
mos que en esta misma ofrenda se encontró una
máscara teotihuacanoide. También vale la pena COE, Michael
considerar cierto aprecio por objetos de maYQr 1972. Olmec jaguars and Olmec Kings en The
antigüedad, sin descartar algo que, inclusive, Cult 01 the Feline ...., Dumbarton Oaks,
ocurre actualmente: al estar sembrando en Sl:ls Washington, U.S.A.
lugares de origen, se encuentran estos materiales
que posteriormente son enviados a Tenochtitlan
como parte del tributo o como elemento de GROVE, David
-comercio. 1970. The olmec paintings of Oxtotitlan Cove,
Mexico, Studies in Precolombian Art and
Sea como fuere, es necesario seguir profun- Archaelogy n. 6, Dunbarton Oaks, Trustees
dizando en la características de las ofrendas que of Harvard Univ., Washington, U.S.A.
han sido encontradas en el Templo Mayor, ya
que podemos asegurar que la mayoría de los ob- JORALEMON, Peter D.
jetos no pertenecen a los mexica, ni en materia 1976. The Olmec Dragon: A Study in Pre-Co-
prima ni en estilo, mientras que por otra parte, lombian Iconography, en Origins 01 Relig-
sabemos que hay una relación directa entre Tlá- ous Art and Iconography in Preclassic
loc y Huitzilopochtli y la base económica mexi- Mesoamerica, v. 31, UCLA, U.S.A.
ca, que se asentaba fundamentalmente en la agri-
cultura (Tláloc) y en el tributo logrado por con-
quista militar (Huitzilopocht1i). Y el hecho de POHORILENCO A.
encontrar objetos ajenos a lo mexica puede indi- 1972. La pequeña escultura, en El arte Olmeca,
car, como lo dijimos en nuestros planteamientos Artes de México, n. 154, México.
iniciales, la presencia <leltributo procedente de
las áreas sometidas al terrible poder de los mexi- RUBIN DE LA BORBOLLA, Daniel
ca, lo cual podrá comprobarse al estudiarse los 1964. Escultura Precolombina de Guerrero. Uni-
diferentes objetos y ver si provienen de las áreas versidad Nacional Autónoma de México,
mencionadas. México.
\

------------- Excavación de la cámara 11.

por: GUILLERMO AHUJA O. Al momento de liberar el escombro y la tie-


rra suelta se dividió la Cámara U en cuadrantes
El 18 de diciembre de °1978, en las excava- los cuales fueron excavados en niveles métricos
ciones del Proyecto Templo Mayor, se detectó lo de 10 cms. Este procedimiento nos permitió te-
que se denominó Cámara 11, en la época III-A, ner un mejor control sobre las piezas que se ob-
en la mitad de la escalinata del lado de Tláloc. tuvieron y así se pudieron aplicar con todo cui-
Este descubrimiento principió por una agujero dado los materiales necesarios para la conserva-
de aproximadamente 50 cms. de diámetro por el ción de los objetos, por medio de la sección de
cual se podía apreciar una serie de rellenos de ti- restauración.
po colonial como: cerámica vidriada, piedras con
huellas de fundición, rebaba de fundición, huesos Con respecto al proceso de excavaciones, se
de animal, etc. Al contemplar este tipo de relle- estuvieron liberando los objetos a base de pincel,
no se pensó, en primera instancia, que el lugar bisturí y aguja de disección ya que el noventa
había sido saqueado en tiempos de la Colonia. por ciento de los elementos venían policroma-
Sin embargo, al profundizar en nuestra excava- dos, necesitando ser limpiados de la tierra que
ción pudimos constatar que, afortunadamente, llevaban encima para proceder a consolidar "in
la ofrenda estaba intacta. situ"y evitar que el pigmento fuera a perderse.
De cada una de las capas se realizaron los dibujos
La estrategia a seguir para la excavación fue correspondientes y en el levantamiento se regis-
liberar toda el área que ocupaba la Cámara U pa- traron tridimensiona1mente los objetos.
ra poder registrar los elementos que contuvieran.
En la parte superior de la Cámara se encontró en
posición original lo que fue la tapa de dicha cá- Se obtuvieron un total de 12 niveles de
mara: esta se encontraba totalmente decorada en elementos, entre los que se encontraban másca-
color negro y junto a ella se encontraron lajas ras antropomorfas policromadas; figurillas antro-
irregulares que ayudaban a tapar todo el acceso pomorfas policromadas de dos tipos: planas y
superior. tubulares, además de cuentas antropomorfas y
zoomorfas en piedra verde y concha; cuentas
Con respecto a la tapa, esta se encontraba sencillas en piedra verde y conchas; corales de di-
incrustada en la escalinata de la época IU-A, sir- ferentes tipos; conchas; cuentas de oro; escultu-
viendo como apoyo a la escalinata, por lo que ras; vasijas en cerámica; restos de animal; copal
fue necesario desmontar el tramo central de la y figurillas de copal. Toda esta serie de elemen-
misma. Una vez liberada la zona, se procedió a tos descritos se encontraban en su totalidad
montar una serie de techos para proteger los ele- sobre un estrato totalmente húmedo y cubierto
mentos que aparecieron. Posteriormente se le- con arcilla lodosa.
vantaron las lajas que tapaban la parte superior
de la Cámara y se colocó un columpio suspendi- Para el control de los objetos se llevaron 3
do por varios polines para poder realizar el traba- registros diferentes para evitar confusiones y con
jo de excavación directamente sobre la ofrenda esto entregar debidamente registradas las oiezas.
sin llegar a dañ.arla. Estos registros fueron:
1.- Registro de Campo. Este se llevaba en hojas
tabulares en donde se tenían apuntados los si-
guientes datos; descripción del objeto; número
de elemento; materia prima; registro tridimen-
cional (X,Y,Z); medidas de piezas (largo, ancho~
gruesos); nivel de ofrenda; No. de entrada de
control de materiales; quién lo recibió en dicha
sección; ficha de restauración (que se explicara
más detenidamente posteriormente); quién ex-
cavó; fecha de levantamiento y observaciones
especiales.

11.- Registro de la sección de control de


materiales. En este tipo de registro se entregaban
las piezas personahnente y la recibía el encarga-
do de esa sección, el cual inmediatamente les da-
ba un número de entrada en el que se incluye:
o
descripción del objeto; número de elemento; o
o n~ O o
procedencia; profundidad; quién excavó; fecha
de levantamiento; se anotaba el destino de los
objetos dependiendo de las necesidades (prehis- ~
toria, sección de restauración, depto. de restau- o
ración en Churubusco, etc.).

I1I.- Ficha de Restauración. Estas fichas


también nos sirvieron de registro ya que se le 2 Esculturas (en jadeita y alabastro).
asignaba una a cada objeto (Salvo lo que eran de 1 Vasija en arcilla con tapadera.
gran cantidad y de la misma materia prima, por 19 Cuentas de oro.
1 Osamenta de ocelote.
ejemplo en conchas, caracoles y cuentas). Co-
piando los datos necesarios como: descripción
de la pieza; número de elemento; medidas tridi-
mencionales (X,Y,Z); medidas de las piezas (lar-
go, ancho, grosor); nivel de ofrenda; número de
entrada; número de control de materiales; quién
excavó; fecha de levantamiento; observaciones y
número de ficha.

Esta ficha queda en poder de la sección de


restauración para consultas de tratamiento.

Estos tres registros se comparan periódica-


mente, para poder evitar cualquier confusión, y
finalmente concordaron exactamente todos los
o
registros y se pudo entregar un buen control so- o
bre las piezas.

El total de las piezas extraidas de la Cámara


11fueron 405 entre las que tenemos:

56 Máscaras antropomorfas policrp¡p.adas.


98 Figurillas antropomorfas, el 900/0 policromadas.
57 Caracoles marinos grandes.

192
Toda esta serie de elementos estuvieron dis-
tribuidos en 12 niveles de objetos de los cuales
se hicieron sus dibujos y medidas correspondien- o
tes. Entre toda esta serie de elementos mencio-
nados tenemos datos interesantes que ayudan a
convertir a la mencionada Cámara 11 como algo
verdaderamente importante en su estudio y con-
tenido, algunos de esos datos son los siguientes:

POLICROMIA DE LOS OBJETOS. A base


de rojo~azul, amarillo, blanco y negro; el pig-
mento fue comenzado a analizar en el momen-
to en que se estaba terminando de explorar la
cámara 11, enviando muestras a la sección de
Geología de los laboratorios de Prehistoria y al
Departamento de Restauración de Churubusco,.
dichos análisis se realizaron por las alumnas de
restauración Lucia de la Parra y Regina Trespala-
cios, quienes tuvieron la asesoría de la Química
Gloria Vera. En el análisis mencionado, se iden-
tificó la materia prima de los pigmentos, su com-
posición química y por el análisis g~ológico
se logró ubicar posibles áreas de extracción.

GLIFOS. Aparecieron una serie de símbo-


los en la parte posterior de algunas máscaras y'
figurillas, de las cuales se piensa puedan repre-
sentar las áreas tributarias. También dentro de
estos símbolos tenemos numerales entre las que
tenemos: el nuevo viento; cuatro caña, nueve
flor, siete viento, etc.

La mayoría de los glifos vienen represen-


tados en color negro, el cual al parecer puede ser
negro de hueso. Aunque tenemos 2 excepciones
de estos símbolos ya que vienen policromados
en ocre, rojo, amarillo y negro.

Con respecto a la interpretación de los gli-


fos hasta el momento no nos hemos avocado a
esa tarea, ya que hay que realizar toda una serie
o de comparaciones con varios símbolos que vie-
nen en códices indígenas y en algunas fuentes del
siglo XVI.

A continuación mostramos los dibujos, co-


rrespondientes a los glifos mencionados, mos-
o trando del lado ezquierdo la parte de frontal de
la pieza y a la derecha la parte posterior donde
se presenta el glifo.

193
00

w
-J
194
Toda la ofrenda guarda y presenta una
orientación de las piezas perfectamente definida
hacia el poniente. Con respecto a esta orienta-
ción y distribución de los objetos, mencionamos
que la osamenta de jaguar cubría la mitad de la
ofrenda, quedando la cabeza de este sobre la es-
cultura de Tláloc (ver foto) pero la cabeza se
encontró a un lado de dicha escultura ya que po-
siblemente rodó.
Esta osamenta presenta 2 aspectos muy
importantes: primero, tenía una cuenta de pie-
dra verde entre las fauces y segundo, tenía hue-
llas de pigmento; éste posiblemente lo lleva:
ba la piel al momento de ser sacrificado y de-
positado en la ofrenda. Posteriormente al co-
menzar a descomponerse la piel, el pigmento co-
menzo a filtrarse hasta llegar a depositarse sobre
el hueso.
Con respecto a los elementos marinos obte-
nidos, se elaboró un muestrario de los diferentes
tipos de especies que fueron apareciendo. Todo
el material se pasará a los laboratorios de Prehis-
toria para que se analicen por los especialistas en
la materia.

o o

195
196
L

197
198 e------~~---
o

199
/

200
VISTA GENERAL Y DETALLE DEL NIVEL UNO. CAMARA 11

201
PROCESO~ DE LIMPIEZA,
LEVANTAMIENfO y DETALLE
DE PIEZAS DE LA CAMARA 11.

202
ESCULTURA ANTROPOMORFA,
DEIDAD DESCONOCIDA
EN ALABASTRO.
ALTURA: 32 CMS.
ANCHO: 19 CMS.

ESCULTURA ANTROPOMORFA,
DEIDAD TLALOC EN
PIEDRA VERDE.
ALTURA: 31 CMS.
ANCHO: 19.5 CMS.
MASCARA ANTROPOMORFA POLICROMADA, QUE PRE-
SENTA EN LA PARTE POSTERIOR UN GLIFO.
GLIFO NUMERAL SIETE VIENTO.

GLIFO POSIBLEMENTE DE LUGAR


TRffiUTARIO A TE NOCHTITLAN.
205
GLIFO REFERENTE AL AGUA.

FIGURILLA TUBULAR FIGURILLA PLANA ANTROPOMORFA


POLICROMADA ANTROPOMORFA FEMENINA EN PIEDRA VERDE
EN PIEDRA VERDE. POLICROMADA EN ROJO, BLANCO Y AZUL.

206
MASCARAS ANTROPOMORFAS EN PIEDRA VERDE POLI-
CROMADAS EN BLANCO, ROJO Y NEGRO.

207
MASCARA
ANTROPOMORF A EN
PIEDRA VERDE.
POLI CROMADA EN BLANCO,
ROJO Y NEGRO.

MASCARA
ANTROPOMORF A CON
INCRUSTACION DE
CONCHA Y OBSIDIANA.

208
F IG U R IL L A A N T R O P O M O R F A MASCULINA,
EN PIEDRA V ER D E , PIGM ENTADA EN
C O LOR ES NEGR O Y BLANCO.
L L E V A EL SEXO M A RCAD O.

F IG U R IL L A A N TR O P O M O R F A
MASCULINA, EN PIEDRA
V E R D E , P IGM EN TAD A EN C O L O R NEGRO.

209
MASCARA
ANTROPOMORFA EN
OBSIDIANA PRESENTA
PIGMENTO AZUL EN LA
PARTE SUPERIOR.

VASIJA
ANTROPOMORFA
DEIDAD
CHALCHIHUTLICUE
EN BARRO.

210
FIGURILLA SEDENTE ANTROPOMORFA MASCULINA CON
SEXO MARCADO, PRESENTA INCRUSTACION DE CONCHA
y OBSIDIANA, PIGMENTADA EN COLOR NEGRO.

MASCARAS ANTROPOMORFAS ENPIEDRA VERDE. TIPO MEZCALA.

211
ELEMENTOS MARINOS, PROCEDENTES DEL OCEANO PACIFICO.

212
La ofrenda 41, informe preliminar.

por: CARLOS GONZALEZ la boca hacia el poniente y la frente hacia el


oriente. Las paredes sur y norte tienen labradas,
Al terminar la elaboración de los dibujos cada una, una pierna semiflexionada con su san­
correspondientes a la ofrenda 31, consultamos dalia y algunos atavíos en las pantorrillas. La
con el Prof. Matos acerca de la posibilidad de urna vendría a representar, de esta manera, el
efectuar un sondeo al poniente de la ofrenda 24, cuerpo de la deidad -q u e estaría en posición
respetando la pequeña estructura irregular de lo­ sedente mientras que la tapa vendría a ser la
sas encontradas en esa área y denominada cabeza. En la pared oriente de la urna hay 2
“altar” . El sondeo, por otra parte, fue pla­ glifos calendáricos: en la porción norte de esta
neado de acuerdo al eje formado por la Cámara pared un 13 lluvia y en la porción sur un 13
II y las ofrendas 23, 24, 30 y 31, eje que es per­ caña. Finalmente, en la pared poniente hay otro
pendicular a la escalinata de Tláloc, y que podía glifo que no ha sido bien identificado todavía;
prolongarse hacia el poniente. pudiera tratarse de otra fecha, pero esto no es
seguro.
Con la autorización del Profr. Matos, se ini­
ciaron los trabajos, encontrando a unos 50 cms. Como ya se explicó, la urna o caja se en­
un doble piso de estuco bastante fragmentado y contró dentro de la cista en una situación más o
que corresponde a la época IV ; se siguió bajando menos centrada, de manera que entre urna y cis­
hasta que se encontraron unas lajas bastante ta quedaban 4 espacios o “ corredores” , en los
grandes; se comprobó que se trataba de la tapa cuales pudo observarse la presencia de caracoles
de una ofrenda y se procedió a ampliar el pozo y conchas marinas, una vasija pequeña y algunos
de sondeo lo suficiente para que las lajas queda­ fragmentos de piedra verde. Estos objetos se en­
ran liberadas. Se trataba de 3 lajas que exceden contraban ya cerca del piso sobre el cual reposa­
en longitud de un metro y aproximadamente 30 ba la urna.
ó 40 cms. de ancho, colocadas longitudinalmen­
te en dirección Norte-Sur; dos de ellas estaban A continuación se removió la tapa de la ur­
fracturadas. na, que presentaba una fisura a todo lo ancho
por lo que se sacó en 2 partes. La tapa, una vez
Al remover estas lajas nos percatamos que removida, fue trasladada a la cámara humidifica-
lo que cubrían era una cista cuyas dimensiones dora para su tratamiento.
son aproximadamente de 1 metro x 1 metro,
dentro de la cual estaba una urna o caja de te­ La urna presenta en su interior un recubri­
zontle de planta rectangular con una tapa del miento de estuco pintado en azul con una con­
mismo material y dimensiones que la caja. En servación bastante buena. La tapa y la caja pre­
planta, la urna tiene 0.66 x 0.56 mts., mientras sentan un borde saliente cada una, de manera
que su altura es de 0.48 mts., contando los 0.13 que hacen una contra cuando la urna se cierra; la
mts. de la tapa. caja de la urna estaba casi completamente llena
de agua cristalina, la cual cubría todos los obje­
La urna tiene labradas la tapa y sus 4 pare­ tos depositados en su interior. Esta agua fue pro­
des; la tapa representa una máscara—Tláloc con ducto de filtraciones a través de la fisura en la
213
Nivel 1

tapa, y la mejor prueba de ello es la gran canti- caso de haberla sacado. Se consideró que lo
dad de sedimento depositado sobre las piezas y mejor era extraer el agua paulatinamente y de
el fondo de la urna, sedimento que trajo consigo acuerdo a los objetos que se extrajerQ.n en cada
algunos problemas para el registro de las piezas nivel, de manera que los mismos se depositaron
como se verá adelante; se tomó de inmediato en recipientes previamente llenados con dicha
una muestra del agua para su análisis. La presen- agua y los que aún permanecieran en la ofren-
cia del agua presentaba de inmediato un proble- da estuvieran siempre cubiertos por el líquido.
ma serio respecto a la conservación del material,
por lo que solicitamos al Profr. Matos que se Paralelamente a esto se efectuó el resane de
nombrara un restaurador de planta para que se los bordes superiores de la cista, que tenían al-
hiciera cargo del material. Este trabajo lo desem- gunas lajas pequeñas sueltas y la elaboración del
peñóla restauradora Ma. Luisa Franco. columpio de sostén para la "cama" de trabaio.
El punto de nivel para el registro de los objetos
A continuación se decidió el procedimiento se ubicó en uno de los barrotes del columpio,
a seguir para la extracción de los objetos deposi- siendo su cota de 2231.928 m.s.n.m.
tados en el interior de la urna. El agua se dejaría
exactamente como se encontró, puesto que su Una vez hechos los preparativos, se proce-
transparencia permitía el dibujo y registro de los dió el trabajo de la ofrenda. En total se extraje-
objetos y, por otro lado, hubiera sido perjudicial ron 9 niveles de objetos; los 7 primeros corres-
para estos el cambio brusco de humedad en ponden a los objetos en el interior de la urna y

214
los 2 últimos a los que se hallaban entre la ur- de, una figura zoomorfa, una cabeza-l1áloc de
na y las paredes de la cista. piedra verde y un braseró pequeño de piedra
blanca con tapadera.
El nivel 1 incluyó una máscara antropo-
morfa de piedra verde y 2 caracoles xancus (con El nivel 4 se compone de los siguientes ob-
restos de pigmento azul). En el nivel 2 se extra- jetos: 10 cuentas circulares y una tubular, 2 ser-
jeron una máscara antropomorfa, 2 serpientes de pientes, una serpiente-pectoral, una figura zoo-
piedra verde (una cascabel), una canoa de piedra morfa, otra figura y un pez, todo en piedra ver-
verde con 4 peces de concha y un atlatl, un ar- de. En el nivel 5 se extrajeron los siguientes ob-
pón tridente y un remo (todos en miniatura) de jetos de piedra verde: 29 cuentas (una de ellas
piedra blanca en su interior; finalmente, una antropomorfa), 2 serpientes-eascabel, 2 figuras-
concha esp6ndilus (2 valvas) con 2 cuentas de pectoral, una figura antropomorfa y un bastón
piedra verde en su interior. En este nivel 2 se to- de mando. Además, incluye una canoa de piedra
mó una muestra de sedimento en el área de la blanca con un remo en su interior, 2 peces de
frente de la máscara antropomorfa. concha y uno de alabastro.

Antes de proceder al registro y extracción Al llegar a este punto en el trabajo de la


del nivel 3, se cambió el agua original de la ofrenda, el sedimento depositado sobre las pie-
ofrenda por agua destilada con pentaclorofenato zas era demasiado y no dejaba verlas, por lo que
de sodio; este cambio se decidió a raíz de que la se hizo limpieza del nivel 6 de la siguiente ma-
muestra de agua que se había tomado inicial- nera: se extrajo completamente el agua de la ur-
mente estaba dando muestras de descompo- na para remover con espátula lo más posible del
sición. A continuación se extrajo el nivel 3 que sedimento; finalmente, se limpió en detalle con
incluye 2 figuras antropomorfas, 6 serpientes en una perilla yagua limpia, misma que se iba ex-
piedra verde, 10 cuentas circulares de piedra ver- trayendo conforme se usaba para limpiar las pie-
zas. Una vez limpias, se volvió a vertir agua en la
urna hasta cubrir los objetos, haciéndolo en
forma muy lenta y cuidadosa para no remover el
sedimento que aun quedaba. En este nivel 6 se
extrajeron los siguientes objetos: en piedra verde
se incluyen 35 cuentas (2 de ellas zoomorfas), 4
patos, 2 figuras antropomorfas y 3 zoomorfas
(una de ellas es un ave), 2 serpientes cascabel, un
pectoral zoomorfo y otro pectoral grabado con
una máscara y 2 serpientes. También se extraje-
ron 16 peces de concha y 2 bastones de piedra
blanca, uno tubular y en forma de "L" (proba-
blemente asociado al brasero) y otro en forma
de hacha.

Ya extraídos estos elementos, se procedió a


iniciar el dibujo y registro del nivel 7, para 10
que se siguió inicialmente el procedimiento de
limpieza que se le hizo al nivel 6. Este nivel 7 es
el último en 10 que corresponde a los objetos en-
contrados dentro de la urna e incluye: en piedra
verde 12 cuentas, 3 peces, 2 pectorales zoomor-
fos, 2 figuras zoomorfas, un caracol, una orejera,
un objeto (quizá bigotera) y un pectoral peque-
ño. Se extrajeron además 3 cuentas en piedra
blanca, 5 peces de concha y una vasija miniatura
hecha en piedra color café-verdoso.

215
216
Es importante destacar que la gran mayoría
de las figuras de piedra como serpientes, figuras
antropomorfas, las 2 máscaras, los 2 caracoles
xancus y otros objetos más o menos grandes pre-
sentaban una clara orientación oriente-poniente
que puede apreciarse bastante bien en los
dibujos.

La idea original que se tenía era sacar la


urna una vez extraídos los objetos de su interior
para poder registrar y sacar los caracoles y con-
chas que se encontraban entre la urna y la cista,
pero se desechó la idea debido a que para poder
sacar la urna se hu bieran dañado y removido
gran parte de dichos caracoles; por otra parte, la
restauradora Ma. Luisa Franco sugirió que se
mantuviera la urna en su sitio, pues aun no
terminaba el trabajo de limpieza de la tapa.

En seguida se inició el trabajo de limpieza


de los objetos encontrados fuera de la urna. Ini-
cialmente se pensaba que no había más que unos
cuantos caracoles y una pequeña vasija de barro,
pero al ir limpiando se vió que el número de ca-
racoles era bastante grande. Se extrajo un primer
nivel al que se denominó nivel 8 para diferenciar-

217
Nivel 6 Nivel 7

218
Nivel 8

219
lo de los niveles de la urna y seguir una numera- cuerdas y una polea colocada en una armazón de
ción continua respecto a dichos niveles. Este ni- vigas. Hecho esto, se recogieron algunos caraco-
vel 8 se compone de 172 caracoles, 27 conchas les y conchas que se encontraba bajo la urna y se
(una de ellas madre-perla), 4 fragmentos de procedió a registrar y levantar el piso de lajas de
piedra verde y una vasija pequeña de barro. Es- la cista para efectuar el sondeo bajo la ofrenda.
tos fragmentos de piedra verde pudieran ser des- Se registró y removió el piso de lajas de la ofren-
hechos de talla y tres de ellos se encontraron ca- da, encontrando a 0.05 mts. más abajo un
da uno en una esquina de la cista. segundo piso de lajas, que también fue removi-
do. Finalmente, se continuó el sondeo hasta al-
Ya levantado el nivel 8, se procedió a regis- canzar una profundidad de lmt. por debajo del
trar un 20 y último nivel de caracoles y conchas piso de la ofrenda, profundidad a la que apareció
(nivel 9) y que se compone de los siguientes ob- el nivel freático. Se volvió a rellenar el hueco de
jetos: 244 caracoles, 37 conchas, 2 fragmentos sondeo y a colocar los dos pisos encontrados.
óseos y varias espinas que aparecieron en grupos
pequeños algunas de ellas asociadas a los frag-
mentos óseos que posiblemente permitan su El trabajo de la ofrenda 41 llevó desde el
identificación. 29 de diciembre de 1979, fecha en que se inició
el sondeo de búsqueda hasta el 28 de marzo de
Tras de sacar este nivel 9 se procedió a ex- 1980, fecha en que se terminó el sondeo fmal
traer la caja o base de la urna, lo cual se hizo con bajo la ofrenda.

220
Sobre un conjunto de esculturas
--------- asociadas a las escalinatas del Templo Mayor.

ELSA C. HERNAÑlJEZ PONS.


fecha- la tercera superposición localizada
(Fig. 1).
Introducción
Se agrupan ocho en el lado sur, y al norte
Pocos son los trabajos que hasta la fecha se se ha encontrado uno solo, o sea, en los templos
han realizado acerca de este tipo de esculturas, de Huitzilopochtli y Tláloc respectivamente.
tal vez debido a que su aparición ha sido aislada
y fuera de contexto; aunque probablemente Se encontraron a 5 m. de profundidad del
también se deba a que ha privado para juzgar la banco de nivel # 1 de las exploraciones (2235.-
escultura mexica un criterio esteticísta, con lo 911 m.s.n.m.). Estaban recostados sobre la grada
cual se les ha visto en razón a la baja calidad de 5 a partir del piso que correspondía a la platafor-
su talla ya su forma aparentemente simple.
ma que probablemente se extendió al frente de
esta construcción, tema al que volvemos más
La historia del arte las ha marginado y los adelante.
arqueólogos las hemos visto únicamente en su
función de portaestandartes, opacadas por otras
piezas de mejor talla y mayor significado sim- Estas culturas se encontraban cubiertas
bólico. por el relleno entre las épocas 1 y 11(de Marqui-
na). En algunas gradas anteriores se habían en-
contrado varios elementos que también pueden
El hallazgo de un conjunto de este tipo de
esculturas en asociación con la escalinata de una presentar relación con las esculturas. En el pro-
ceso de limpieza pudimos observar que su aco-
de las épocas constructivas del Templo Mayor
modamiento en la escalinata fue cuidadoso, ya
de México- Tenochtitlan, nos permite hacer una
que se encontraron piedras que los calzaban o
serie de consideraciones sobre la relación que
sostenían, por lo que a pesar de estar cubiertas
guardan entre sí y con los objetos asociados.
por el relleno fueron dispuestas con cuidado y
Además han conservado gran parte de su color con un criterio de enterramiento simbólico.
original cuya importancia en la simbología me-
xica es obvia.
Para entender su relación con el demás
material rescatado, se hace necesario mencionar
Esto también nos ha permitido buscar otros
que en el proceso de excavación llamó la aten-
ejemplares de este tipo de representaciones que
ción el hallazgo de un sahumerio sobre la grada
podremos usar como material compartivo.
10, el cual estaba colocado exprofesamente co-
Situación y asociaciones mo ofrenda, encontrándose también algunos cu-
chillos de silex y obsidiana en la grada 6, lo cual
fue un índice de que pudieran aparecer otros ob-
Las esculturas se encuentran agrupadas en jetos.
la doble escalinata que corresponde, s.egún Mar-
quina (1960), a la primera época constructiva,
En seguida fueron descubriéndose las escul-
y que en las nuevas exploraciones es -hasta la
turas, a las cuales les dimos la siguiente clave ~e

221

FIGURA 1. Localización de las esculturas entre las escalinatas de las épocas I y 11.

identificación: los números 16 al 23 para las de Descripción de las esculturas


la escalera sur, y el 47 para el del norte, de
acuerdo al registro general de elementos del Pro- Hay que notar que la mayoría presentaban
yecto Templo Mayor. En el presente trabajo se fracturas muy visibles en diferentes partes del
identificarán en orden alfabético para facilitar su cuerpo, debido al enonne peso que soportaron.
descripción y el manejo de los elementos asocia- en cuanto a sus rasgos generales todas se en-
dos. cuentran descalzas y de pie, visten maxtlatl, pre-
sentan moño en la nuca y descansan sobre un pe-
Estos últimos fueron: a) dos cuchillos de destal -exepto la escultura F -; la descoración
silex (elemento # 13) en el cinto de la escultu- de las mismas está hecha en estuco, presentando
ra E, además de un fragmento de madera que diferentes colores cada pieza. Curiosamente to-
posiblemente correspondía al estandarte que das las que parecen haber sido portaestandartes
portaba el mismo; b) un cuchillo de silex (ele- llevan el característico agujero en el centro del
mento # 14) localizado entre las esculturas G - pecho, cosa negativa en las dos que tienen las
H; y, c) un cajete en barro naranja con decora- manos descansando sobre el mismo.
ción interior En café- de boluta de la palabra,
y borde café, fondo plano, bordes rectos; no Los portaestandartes guardan algunas carac-
presentaba contenido, se localizó en la grada 3 terísticas comunes, como el tener el brazo dere-
a la altura de la rodilla derecha de la escultura cho levantado y la mano derecha ahuecada con
B (Fig. 2). el típico agujero receptor. El otro brazo se pre-
FIGURA 3. Vista general
durante su descubrimiento.

senta caído sobre su flanco, algunas veces pega- concha y obsidiana, y dientes también en con-
do al cuerpo y otras separado; la única excep- cha. Presenta adornos de chapopote en las meji-
ción es la escultura J, que tiene las dos manos en llas y la nariz; el rostro tiene color rojo, en el pe-
el pecho, pero una funcionando como portaes- cho se observa una cuenta de piedra verde pro-
tandarte (Fig.3). bablemente pegada con estuco; conserva restos
de pigmentación negra y roja en varias partes del
Los rasgos particulares son: cuerpo y la mano derecha tiene pintura roja; el
maxtlatl tiene un moño al frente y es de color
ESCULTURA A) blanco; presenta brazaletes en ambos brazos en
Tiene una altura total de 1.32 m., siendo colores azul, rojo y blanco.
la base de .12 m. (Fig. 4). Realizada en tezontle
negro, tocada con una banda blanca y decorada
con chapopote en las mejillas, lleva orejeras y Es la escultura más grande y de más com-
ambas manos sobre el pecho; maxtlatl muy sen- pleto colorido. A la altura de su rodilla derecha
cillo con recubrimiento de estuco blanco. No es se encontró el elemento # 15.
portaestandarte.
ESCULTURA C)
ESCULTURA B) La figura tiene una altura total de 1.30 m.
Con una altura total de 1.85 m., siendo su y la base mide .20 m. (Fig. 6). Hecha en cantera
base de .12 m. (Fig. 5). Espulpida en cantera ro- blanca, lo que parece ser el pelo presenta pig-
sa, presenta una diadema con color azul y moño mynto blanco y azul turquesa, lleva moño pos-
posterior en blanco y rojo, orejeras con franjas terior blanco, orejeras muy simples en blanco,
en colores azul y rojo; ojos con incrustación de los ojos están realzados en estuco, la cara con co-

223
FIGURA 4. Escultura A
(elemento No. 16), figura con
manos en el pecho y
de talla burda en tezontle.

lor negro y manchas rojas, y el cuerpo coloreado ESCULTURA E)


en naranja; el maxtlatl alargado está cubierto de Esta escultura mide 1.31 m. de pies a cabe-
estuco blanco con un rivete naranja. za y la base es de .12 m. (Fig.8). Es de cantera
rosa, lleva diadema y mofio en la nuca color
En la perforación del pecho se encontraron blanco; la cara tiene restos de chapopote pero no
dos cuentas en piedra verde (Fig. 13, a); el om- se aprecia algún otro adorno fuera de las oreje-
bligo es anular y presenta colores negro y naran- ras en blanco y naranja. En la perforación del pe-
ja en su interior. cho se localizaron 3 cuentas de piedra verde
(Fig. 13, b). El maxtlatl alargado es color blanco
ESCULTURA D) sobre el que se localizaron dos cuchillos de silex
Su altura es de 1.34 m., midiendo la base -elementos # 13-, Y cerca del agujero de la ma-
.22 m. (Fig. 7). Trabajada en cantera rosa pre- no derecha un fragmento de madera de aproxi-
senta las manos en el pecho, diadema en la fren- madamente .30 m. de largo.
te con restos de pigmento blanco y naranja, mo-
fio trasero cubierto por estuco blanco, los ojos ESCULTURA F)
están hechos de estuco y concha; adornos de Mide de cabeza a pies 1.40 m., no existien-
chapopote en las mejillas y la nariz; presenta ya- do el pedestal de esta escultura (Fig. 9). Realiza-
cametztli o nariguera de media luna también cu- da en cantera rosa; lleva diadema, el típico mofio
bierta de blanco. El cuerpo tiene pigmentación blanco y orejeras muy simplificadas también
negra y azul, encontrándose también restos de blancas; adornos de chapopote en las mejillas y
estuco blanco en los lados; el maxtlatl es de este los ojos realizados en estuco naranja; tiene nari-
mismo tono con mofio al frente. Esta pieza no guera en fonna de media luna cubierta con estu-
es portaestandarte. . co. El cuerpo presenta pigmentación negra, y el

- 224 ..
maxtlatl muy erosionado muestra el nudo al dra verde (Fig. 13,c); viste maxtlatl blanco. Se
frente con restos de estuco. encontró un cuchillo de silex entre las figuras
GyH.
El trabajo y los rasgos físicos de esta pieza
son muy parecidos a la escultura D, siendo éstas ESCULTURA H)
las únicas que presentan pigmentación negra y La pieza tiene 1.26 m., de largo y .09 m. en
nariguera. La perforación del pecho está oculta el pedestal (Fig. 11). Es de tezontle negro. No
por una tapa redonda de tezontle. parece tener tocado fuera del mofio en la nuca, y
tanto éste como el pelo son de color blanco. El
ESCULTURA G) rostro presenta adornos de chapopote y pigmen-
Mide 1.68 m. y el pedestal tiene .23 m. to rojo en la naríz; en el pecho tenía una man-
(Fig. 10). Está realizada en cantera rosa. Entre cha central de estuco blanco, cubriendo una tapa
esta escultura y la anterior se localizó una diade- rectangular de tezontle negro, que protegía una
ma que corresponde a esta figura y posiblemente cabecita de piedra verde (Fig. 13, d) Y algunos
se desprendió en el traslado de la pieza a las gra- otros materiales que al analizarse, interesante-
das. Su mofio posterior es blanco; los ojos están mente, resultó ser copal puro y quemado. El
hechos de concha y obsidiana, y en las orejeras maxtlatl alargado es blanco.
ya no se observa color. Lleva brazaletes en am-
bos brazos.
ESCULTURA 1)
Altura total de 1.55 m. y base de .16 m.
El pecho de color negro, presentaba en el (Fig. 12). Trabajada en cantera rosa, es una pieza
centro una aplicación de estuco, bajo la cual se que mantiene gran parte de su colorido; porta
encontró una perforación con 9 cuentas de pie- diadema o copi/li blanco, decorado con líneas y

FIGURA 5. Escultura B
FIGURA 6. Escultura e
(elemento No. 17), portaestandarte con incrustaci6n
(elemento No. 18), portaestandarte
de concha simulando ojos y dientes, conserva
fragmentado en· el cuello, esta figura
gran parte de su colorido original.
presenta una perforaci6n que simula el ombligo.

225
DISCUSION
Lo primero que hay que señalar es su senci-
llezde talla, que en algunos casos podría conside-
rarse hasta burda si la comparamos con otras pie-
zas de gran calidad que han salido en las excava-
ciones del Templo Mayor. Esto puede deberse a
que, teniendo su propia importancia simbólica y
ritual, son piezas que podríamos calificar como
acompañantes, de función definitivamente. Prác-
tica, integrados a la arquitectura y al servicio de
los templos. Sobre todo a las que les podemos
atribuir el uso como portaestandartes ..

La misma posición en que se encontraron


así lo sugiere, ya que probablemente estuvieron
en la plataforma que se extendía al frente de la
escalinata de la época III, y al ser esta cubierta
por la época siguiente se les depositó cuidadosa-
mente sobre los escalones, casi a manera de
ofrenda.

A pesar de esa rudeza de trabajo que ya


mencionamos, las esculturas presentan rasgos

FIGURA 7. Escultura D (elemento No. 19),


figura con las manos en el pecho,
presenta yacametztli o nariguera de
media luna, sufre una fractura en el cuello.

estrellas en negro, el moño trasero es blanco


también con líneas negras, las orejeras con restos
de estuco azul, rojo, rosa y franjas negras; ador-
nos de chapopote en las mejillas y la naríz, nari-
guera en forma de media luna con estuco; los
ojos tienen incrustación de concha y obsidiana.
A pesar de ser portaestandarte ambas manos
descansan en el pecho, aunque la derecha cum-
pla esa función, las uñas de las manos conservan
color blanco.

La mano del estandarte conservaba un cen-


tro de madera con restos de pigmento azul de 46
cm. de largo, presenta collar en colores blanco
(con líneas negras), rojo y azul; los brazaletes
tienen franjas de color azul, blanco y rojo. Vis-
te maxtlatl blanco con moño al frente y líneas
negras.

El cuerpo de la escultura está decorado con FIGURA 8. Escultura E (elemento No. 20),
estuco rojo en su mitad derecha y coloración ne- portaestandarte fracturado en
gra en la mitad izquierda. ambas piernas a la altura de las rodillas.

226
distintivos que indican la jerarquía del lugar don-
de se les encontró, nada menos que el punto más
importante del recinto sagrado. Así vemos que
varios de 'ellos portan la diadema señorial, así
como la nariguera en forma de media luna.

Esta idea podría reforzarse con otro porta-


estandarte encontrado en el recinto ceremonial
de Tlatelo1co (Fig.# 14), que era hasta este mo-
mento la figura prototipo de esta clase de mani-
festaciones escultóricas.

Otra pieza -no portaestandarte- encontra-


da también en un lugar importante es la escultu-
ra que se encontró en las cercanías donde se ini-
ciaba el acueducto llamado Acuecuexatl de Co-
yoacan (Fig.# 15), hoy en el Museo Anahuaca-
lli de Diego Rivera (Artes de México 1965: 105).
Lástima no conocer la ubicación exacta y care-
cer de mayor información arquológica de las pie-
zas que publica Felipe Solís (1976) en su catálo-
go del Museo de Santa Cecilia, con los siguientes
números: 7 (procedencia desconocida), 8 (Tena-

FIGURA 10. Escultura G (elemento No. 22),


portaestandarte con incrustacién de concha y
obsidiana en los ojos. El c~pil1i o diadema de la
figura se localizó sobre uno de los
calones; presenta fracturas a la altura del cinto.
yuca, Edo. de México), 9 y 10 (Santiago Atlepe-
tlac, Axcapotzalco, D. F., de los que dice Solís:
" ...seguramente formaban el par de portaestan-
dartes que se colocaban en el pórtico de algún
templo ..."), y 42 (procedencia desconocida).

Una pieza semejante, de gran calidad, lo es


el famoso portaestandarte procedente de la re-
gión de Poza Rica, Ver. (Fig.# 16) de clara in-
fluencia mexica. Tiene diadema, un vistoso
moño en la nuca, ricas orejeras alargadas, el ca-
racterístico agujero para ofrenda en el pecho, y
la mano derecha ahuecada para sostener el estan-
darte; también lleva vistoso faldellín triangular y
maxtlatl que sale debajo. La nariguera tiene la
misma forma que en nuestras esculturas. Además
lleva un pectoral con el glifo "2 conejo" que la
identifica plenamente con el dios del pulque,
FIGURA 9. Escultura F (elemento No. 21), ame Tochtli. Por ello cobra importancia la nari-
portaestandarte con nariguera de media luna, guera que hemos venido describiendo, pues es
no presenta pedestal; tiene uno de los adornos característicos de las deida-
fracturas en la cintura y el lado derecho del tocado. des relacionadas con este licor sagrado.

227
Gonyalves de Lima (1956), principalmente en las
figuras que transcribe del Códice Magliabecchi,
pues mucho se asemejan en la rigidez del parado,
en la actitud del brazo derecho y los objetos que
portan; el yacametztli o nariguera, en el copilli o
corona, y en el moño de papel, tai como se mira
en los personajes de Tepoztécatl, Papáztac, Ya-
uhtécatl, Toltécatl, Patécatl, Tezcatzóncatl, Tlal-
tecayohua, Colhualzíncatl, Totoltécatl, y Tlihua,
siete de los cuales con el bastón curvo rematado
por el pedernal, como el que tenía en la mano
nuestra escultura J.

Es posible que nuestras esculturas no parti-


cularicen a un solo dios y que participen de ras-
gos comunes a "los conejos", los dioses del pul-
que en general, viéndose en la representación de
Totochtin -Fig. 18-, como lo publica León
Portilla (1958: 118-119), quien también tradu-
ce su descripción:

FIGURA 11. Escultura H (elemento No. 23),


portaestandarte en tezontle, se observan
fracturas en ambos tobillos.

Es importante señalar que ya otros autores


han hecho ver la presencia de estas deidades del
pulque en las excavaciones del Templo Mayor,
como en la escultura de piedra verde estudiada
por Alfredo López Austín (1978).

Extendiendo este problema interpretatiVO


hasta el propio santuario del dios del Pulque en
Tepozotlán, Mor., encontramos entre las lápidas
que decoran la banqueta interior del templo
-que sabemos estuvo dedicado a Ome Tochtli-
representaciones de algunos de los símbolos ya
mencionados: la diadema real, la nariguera de
media luna, y sobre todo el objeto adornado con
un moño de papel, que representa una e~pecie de
bastón de mando con el remate curvo que tiene
incrustado un cuchillo de pedernal. (Fig. 17).

Esta relación con partes de los atavíos que FIGURA 12. Escultura J (elemento No. 47),
portaestandarte con ambas manos
suelen llevar las deidades relacionadas con el pul- descansando en el pecho, presenta nariguera
que se hace más patente si acudimos a los códi- de media luna y ojos de concha y obsidiana.
ces, como se ve en la recopilación hecha por La pieza conserva gran parte de su colorido original.

228
'.

FIGURA 13. Material localizado en el pecho de las esculturas:


a) Escultura C; b) Escultura E; c) Escultura G; y, d) Escultura H.

5. Atavíos de (cada uno de) los conejos técnico de limpieza, que permitirá conocerlos en
(dioses del pulque).
sus verdaderos tonos. Por ahora nos conforma-
mos con presentar este primer informe.
Su cara pintada de dos colores su tocado de plu-
mas de garza, su nariguera en forma de media
luna, sus orejeras de papel. ARTES DE MEXICO
Lleva a cuestas su insignia de plumas de guaca- 1965 "Anahuecalli, Museo Diego Rivera", en Artes de
maya, México, número 64/65, año xn, 1965.
su collar de cuentas colgantes.
Tiene ceñidas sus caderas con flecos torcidos,
tiene campanillas, cascabeles en sus piernas, FEWKES, WALTER
sus sandalias de dos conejo. 1907 Mural relief figures of el Casa del Tepozteco, re-
Está colocado en su brazo su escudo de dos priented flOm Volume X, Procedings of the
conejo, con una mano tiene sU bastón de punta Davenport Academy of Sciences, Davenport,
de obsidiana. Iowa, published flOm the incone of the Petnam
Memorial Fund.

Otra pista que quisieramos seguir es la del


GONCALVES DE LIMA, OSWALDO
simbolismo de los colores presentes en las escul- 1956 El maguey y el pulque en los códices mexicanos,
turas, pero aún no se ha terminado el trabajo Fondo de Cultura Económica, México, 1956.

229
LEON PORTILLA, MIGUEL INDICE DE ILUSTRACIONES
1958 Ritos, Sacerdotes y atavíos de los Dioses, "Fuentes
Indígenas de la Cultura Nahuatl", textos de los in- FIGURA 1 Localización de las esculturas entre
formantes de Sahagún: 1, Instituto de Historia,
Seminario de Cultura Náhuatl, U.N.A.M.
las escalinatas de las épocas de las épocas
I y II
LOPEZ AUSTlN, ALFREDO
1978 Inconografía mexica, el monolito verde del Tem- FUGURA 2 Plano de localización en la escalina-
plo Mayor, Ponencia presentada en el Congreso ta de la época 1, y hallazgos asociados a
Interno del Instituto de Investigaciones Antropo16-
gicas de la U.N.A.M., el14 de agosto de 1978.
ellas

MARQUINA, IGNACIO FIGURA 3. Vista general durante su descubri-


1960 El Templo Mayor de México, Instituto Nacional miento.
de Antropología e Historia, México, 1960.
FIGURA 4 Escultura A (elemento # 16), figura
SOLIS OLGUIN, FELIPE
1976 Catálogo de la escultura mexica del Museo de con manos en el pecho y de talla burda en
Santa Cecilia Acatitlan, Estado de México. Colec- tezontle
ciones de los Museos, I.N.A.H.
FIGURA 5 Escultura B (elemento # 17), porta-
estandarte con incrustación de concha si-
mulando ojos y dientes, conserva gran parte
de su colorido original

FIGURA 6 Escultura C (elemento # lB), porta-


estandarte fragmentado en el cuello, esta
figura presenta una perforación que simula
el ombligo

FIGURA 7 Escultura D (elemento # 19), figura


con las manos en el pecho, presenta Yaca-
metztli o nariguera de media luna, sufre
una fractura en el cuello

FIGURA B.Escultura E (elemento # 20), porta-


estandarte fracturado en ambas piernas a la
altura de las rodillas.

FIGURA 9.Escultura F (elemento # 21), porta-


estandarte con nariguera de -media luna, no
presenta pedestal; tiene fracturas en la cin-
tura y el lado derecho del tocado

FIGURA 10.Escultura G (elemento # 22), por-


taestandarte con incrustación de concha y
obsidiana en los ojos. El copilli o diadema
de la figura se localizó sobre uno de los es-
calones; presenta fracturas a la altura del
cinto.

FIGURA 14. Vistas de frente y perfll de un FIGURA 11.Escultura H (elemento # 23), por~
portaestandarte que procede de Tlatelolco, taestandarte en tezontle, se observan frac-
se encuentra en el Museo Nacional de Antropololía. turas en ambos tobillos.
230
FIGURA 12 Escultura J (elemento # 47), por- FIGURA 15 Escultura con brazos en el pecho,
taestandarte con ambas manos descansando descansando en un pedestal; se localiza en
en el pecho, presenta nariguera de media el Museo Anahuacalli.
luna y ojos de concha y obsidiana. La pie-
za conserva gran parte de su colorido ori- FIGURA 16 Portaestandarte ricamente ataviado,
ginal. presenta nariguera de media luna y un pec-
toral con el glifo "2 conejo". Se encuentra
FIGURA 13 Materia localizado en el pecho de en el Museo Nacional de Antropología.
las esculturas: a) Escultura C; b) Escultura
E; c) Escultura G; y d) Escultura H. FIGURA 17 Algunos de los atributos caracterís-
ticos del Dios del Pulque, que decoran el
interior del Templo del Tepozteco.
FIGURA 14 Vistas de frente y perfil de un por-
taestandarte que procede de Tlatelolco, se FIGURA 18 Representación de Totochtin el
encuentra en el Museo Nacional de Antro- dios del pulque, según Sahagún -H.G.,T.l,
pología. lib.IV,V,l. p. 324- (León Portilla, op. cit).

FIGURA 16. Portaestandarte ricamente


FIGURA 15. Escultura con brazos en el pecho,
ataviado, presenta nariguera de media luna y
descansando en un pedestal; se localiza
pectoral con el glifo "2 conejo".
en el Museo Anahuacalli.
Se localiza en el Museo Nacional de Antropología.

231
F IG U R A 17. Algunos de los atributos
característicos del Dios del Pulque,
que decoran el interior del Tem plo del Tepozteco.

F IG U R A 18. Representación de Totochtin,


el dios del pulque según Sahagún —H.G., T . l,
lib. IV , V , 1, p. 324- (L eó n P o r tilk jo p . cit).

232
---------- Restos de Madera en el adoratorio de Tláloc.

por: MERCEDES GOMEZ MONT soporte y entre una y otra, formado el acceso al
adoratorio, hay una distancia de 6.81 mts. Esto
En los recientes hallazgos del Templo Ma- nos da un vano grande lo cual sería difícil de cu-
yor, ha sido muy importante la obtención de res- brir, por lo que se necesitó un soporte amplio.
tos de madera, los que se han logrado a través de Así, las bases de estas pilastras son de 1.11 x
ofrendas así como utilizados en la arquitectura. 1.44 mts. aproximadamente.
En este trabajo vamos a estudiar restos de Asociado a estas pilastras empezaron a sa-
madera como parte de la arquitectura, remitién- lir restos de madera las cuales requieren de una
donos para este fin a la época constructiva más excavación especial para su liberación inmedia-
antigua excavada hasta el momento, la que se ca- ta debido a su estado de conservación.
racteriza por conservar restos de los 2 adorato-
rios de la parte superior, en los que se encontra-
Estas maderas fueron tratadas in situ con
ron elementos de madera en el acceso o entrada. un fungicida (Pentaclorofenato de Sodio), ya
En este estudio solo nos referimos a las del lado
que había que evitar la proliferación de microor-
de Tláloc, ya que se encontraron en relativa bue-
na condición. ganismos del medio ambiente actual; a la vez se
le iba cubriendo conforme se liberaba para su
rescate y registro con un material llamado pulpa
Este adoratorio es de planta rectangular y
de papel, que contenía agua destilada con alco-
tiene 14.85 mts. de largo por 7.20 mts. Sus mu-
hol y el fungicida para así tratar de evitar el seca-
ros son en forma de talud, todo cubierto de es-
do, la absorción de sales orgánicas e inorgánicas
tuco y su fachada principal está orientada hacia
y evitar, en fín, la desintegración de la misma.
el poniente. Dicho adoratorio apareCió destrui-
do, sobre todo en la parte correspondiente al te-
Por la posición y características que presen-
cho del mismo, ya que con el fin de agrandar el
taban estas maderas vimos que podían ser las
templo, el techo se le debió de desmontar in-
tencionalmente. jambas de la puerta de acceso al interior del ado-
ratorio, pero al llegar al desplante de las mismas,
vimos que se encontraban sobre una base rectan-
La fachada principal presenta en sus esqui-
gular asociadas a las pilastras, bases que medían
nas NW y SW un muro en talud el cual remata en 1.20 mts. x .30 mts.
su parte superior en una pequeña saliente sobre
la que se ve el comienzo de un muro vertical. Es-
Si nos atenemos al término mismo de jam-
tos muros presentan una altura de 2.70 mts.
aproximadamente. bá, vemos que en general se le define como cada
pieza de madera que sostiene a los lados una
puerta o ventana (elementos verticales que sos-
Anexo a estos muros y a eje de la fachada tienen un arco o dintel de una puerta).
principal aparecieron unas pilastras con una se-
paración de 10 cms. aproximadamente de los
En el caso del templo de Tláloc vemos que
muros. Presentan decoración en sus lados exte':'
la función de estos elementos encontrados no
rior e interior. Estas pilastras tenían función de
podía ser de carga, dado lo inestable que resulta

233
1.- Se encuentra el primer elemento de madera de11ado norte.

el asentar una jamba directamente sobre una ba- Esta excavación por la misma importancia
se, sin que esté clavada en el suelo para una ma- y delicadeza del material fue muy exhaustiva, ya
que incluso podíamos encontrar huellas de mate-
yor estabilidad, por lo que pensamos que muy
rial orgánico o algo que pudiera ser testigo de
posiblemente estas maderas cumplían una fun- las actividades realizadas por los sacerdotes y
ción ornamental. principales en un lugar tan importante como el
Templo de Tláloc.

Estas maderas estaban integradas a la base Durante la excavación no aparecieron res-


de la pilastra por una capa de 3 cms. de estuco y. tos del dintelo lo que posiblemente fuera el te-
por la forma que conservaron la huella en la su- cho, ya que algunos de estos elementos pudo ser
reutilizado en la época posterior. Sin embargo,
perficie respectiva de la pilastra y restos de ma-
creemos importante reportar este hallazgo da-
teriales que se encontraron, vemos que posible- do que no es común encontrar restos de made-
mente fueron rectangulares y cubiertas de estu- ra asociada en la arquitectura y especialmente en
co y probablemente en algún momento tuvieron un edificio de tanta importancia como lo fue el
color. Templo Mayor.

234
2.- Pilar del lado norte y restos de
madera en el tratamiento.

3.- La madera apoyada en su


base con el tratamiento de
eliminación de hongos. (lado norte).

235
4.- Detalle de la base sobre la
que se asentaba la madera.

5.- Pilar del lado norte y


consolidación de la base
sobre la que se asentaba la madera_

236
7.- Una vez excavada,
se procede a extraer la
madera (lado sur).

237
8.- Detalle de la extracción.

238
9.- Pilar sur con su decorado.

239
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: : : : ::! PROYECTO TEMPLO MAYOR I.N.Á.H.

PLANTA: TEMPLO DE TLALOC


ESCALA. 1: 100
DIBUJO: VICTOR RANGEL.

240
El caracol marino de piedra rosa.

por: PILAR LUNA ERREGUERENA x2 mts. de ancho cada una, en lo que era el esta­
cionamiento de la Secretaría de Hacienda y Cré­
dito Público, localizado en la calle de Guatemala
Una de las esculturas que ha llamado la # 52. Estas calas se trazaron en dirección E s te -
atención por su extraordinaria belleza en las ex­ Oeste; se partió desde el punto más lejano de la
cavaciones del Proyecto Templo Mayor ha sido, pirámide, con el fin de avanzar hacia ella y poder
sin lugar a dudas, el caracol marino realizado en detectar cualquier construcción prehispánica que
un gran monolito de andesita. Se trata de la re­ se encontrara en su lado Este. Posteriormente, se
presentación de un caracol de género Strombus, amplió la excavación siguiente una retícula gene­
especie de Gigas, conocido también como “ cara­ ral de 2 x 2 mts. adoptada para todo el proyec­
col de ala” en el mar Caribe, y que abundó en el to. En nuestra sección comenzaron a descubrirse
Golfo de México en tiempos pasados. Está escul­ muy pronto muros y cimientos de los siglos pa­
pido con gran maestría y arte en un monolito de sados hasta llegar a la Epoca Prehispánica. Como
87 cms. de largo x 74.5 cms. de ancho y 44 cms. era de suponerse, no existe un nivel horizontal
de espesor. Al observar con detalle la pieza, se general donde terminen los cimientos de las
puede apreciar que la piedra tiene diferentes to ­ construcciones de la Epoca Colonial y posterio­
nalidades, siendo el rosa y el gris los colores pre­ res, y dónde empiecen los vestigios prehispáni-
dominantes. El artista que ejecutó esta obra de cos. Todo lo contrario, mientras que en algunas
arte, seguramente la concibió antes de realizarla, partes los restos coloniales profundizaban mu­
pues aprovechó de manera notable la veta de la cho, en otras empezamos a encontrar basamen­
piedra para darle color a la pieza. La parte que tos y pequeños altares prehispánicos a poca pro­
forma el cuerpo del caracol es de color rosado, fundidad del nivel del piso del estacionamiento.
mientras que el gris queda en el ala del mismo, Después de algún tiempo, y una vez debidamen­
dando la idea de que el cuerpo recibe la luz y el te registrados en planos y fotografías todos los
ala la sombra que ésta le da. restos arquitectónicos posconquista, éstos fue­
ron removidos, llegando así a una gran platafor­
ma estucada en la cual detectamos varias huellas
En la presente nota haremos una breve his­
de altares prehispánicos, algunos con altates de­
toria de las excavaciones y hallazgos más sobre­ bajo, desplantados sobre una plataforma estuca­
salientes en la Sección 2, donde se encontró esta da también, aproximadamente un metro más
asombrosa obra de arte. abajo de la plataforma superior. Es decir, en esta
gran plataforma o patio que denominamos “ Pa­
La llamada Sección 2 dentro del Proyecto tio de los Altares” se siguió el mismo sistema
Templo Mayor abarca básicamente el lado Este constructivo de la pirámide, en lo que se refiere
de la Gran Pirámide. Los trabajos de reticulación a sobreposiciones, mismas que seguramente co­
y excavación comenzaron el 20 de marzo de rresponden a las sobreposiciones de la pirámide.
1978, a cargo del Arqueólogo Eduardo Contre­ (Esto se comprobará cuando se terminen las ex­
ras Sánchez y de la que esto escribe. Con el fin cavaciones de esa zona y se puedan hacer cortes
de localizar los restos arquitectónicos de esta pi­ generales de la pirámide y de estas plataformas o
rámide, se iniciaron tres calas de 10 mts. de largo patios posteriores).

241
Tratamos, a través de esta breve síntesis dores de confianza excavaban en la cala D’,
de la situación de la Sección 2, de dar un panora­ cuadro 29, de la retícula general del sitio. Se en­
ma general de lo encontrado para hacer énfasis contraba sobre la gran plataforma de estuco su­
en los hallazgos de elementos prehispánicos y perior, a la que antes nos referimos, entre los ci­
comentar nuestras observaciones. Generalmente, mientos de un muro colonial y muy cerca de una
todas las piezas arqueológicas que se encontra­ data y tubería de drenaje de esa época, razón
ron ya no estaban donde fueron colocadas y ve­ por la cual, seguramente presenta una pequeña
neradas en tiempo de los mexicas. Fué notable fractura en una de las espimas de la espiral. Al
encontrar 38 esculturas en piedras, generalmente momento de descubrirlo y conociendo el cuadro
en tezontle rojo o negro y basalto, decoradas en el que se localizaba, pasó por nuestra mente
con estuco polícromo representando al dios Tlá- el pensamiento de que el caracol, aunque ya no
loc, “ Señor de las Aguas” . Prácticamente, todas estaba en el lugar donde los mexicas lo venera­
se localizaron entre los cimientos y rellenos de la ban (esto desgraciadamente no lo sabremos con
Epoca Colonial, pero colocadas orientadas y pro­ certeza, ya que bien pudo estar en la parte supe­
tegidas por los indigenas, ya que generalmente rior de uno de los altares de esta zona, o en la
las encontramos entre piedras que las protegían parte superior de la pirámide, o en los templos,
y orientadas hacia los puntos cardinales. Esto co­ o en cualquier otro lugar), si estaba, otra vez, co­
menzó a llamar nuestra atención desde las prime­ mo en el caso de las representaciones de Tláloc,
ras piezas encontradas y se repitió en cada nuevo “Dios de la Lluvia” , depositado y protegido por
hallazgo de elementos importantes prehispáni­ los indigenas mientras estaban al servicio de los
cos. españoles, con la esperanza quizá de recuperar la
representación de sus deidades en alguna oca­
El extraordinario caracol fué localizado el sión. Confirmamos nuestra hipótesis cuando al
29 de marzo de 1979, cuando nuestros trabaja­ hacer el levantamiento con plancheta, corrobora-

242
mos que el caracol estaba marcando el centro de en muchas de las ofrendas se ha observado que la
la pirámide, aunque a 39.60 mts. al Este del capa más profunda, es decir, la base de la ofren­
arranque del cuerpo de la penúltima época cons­ da esta compuesta de arena y diversos tipos de
tructiva. Es decir, que la colocación del caracol elementos marinos. Aunque faltan de realizar
coincide con la raya divisoria que se ve en todas muchos estudios que se harán cuando termine la
las fachadas (oeste) y muros posteriores (este) de temporada de excavación, se puede decir ya que
las diversas ampliaciones o etapas constructivas dichos elementos provienen tanto del Golfo co­
de la pirámide, así como con la separación de los mo del Pacífico, mostrando además como mu­
Templos de Huitzilopochtli y de Tláloc. Ade­ chos de los objetos encontrados en ofrendas, las
más, como en la mayoría de los otros elementos, zonas tributarias de los mexicas.
estaba orientado N orte—Sur. Todo esto no pue­
de ser coincidencia, por lo que nos atrevemos a Desde tiempos remotos, las conchas y cara­
decir que los mexicas ya derrotados y al servicio coles marinos han llamado particularmente la
de los conquistadores, aprovechaban la oportu­ atención de los hombres por muy diversas raso-
nidad de colocar a sus deidades entre los cimien­ nes, y eso explica que se les haya encontrado de
tos, muros y rellenos de las construcciones de la manera física, o en representaciones artísticas,
Epoca Colonial, con la esperanza quizá de reco­ en todo tipo de habitat del hombre, incluyendo
brarlas alguna vez, o de protegerlas para siempre. lugares muy apartados del mar. Para ejemplificar
esto, podemos citar la ciudad sagradad de Teoti-
Dentro de las 60 ofrendas que se han descu­ huacan, situada en el altiplano, lejos del mar. A
bierto hasta la fecha en el Proyecto Templo Ma­ pesar de esto, la cantidad de representaciones ar­
yor, se puede decir que han predominado los tísticas de caracoles y conchas en la cerámica,
elementos marinos, destacando entre ellos los pintura y escultura, son pruebas inconfundibles
caracoles y conchas de varias especies. Inclusive de la importancia de estos objetos en su cultura.
243
En general, en el mundo prehipánico me- Además, como dice el Arqueólogo Eduardo
soamericano tenemos abundantes representa­ Matos Moctezuma al referirse especialmente a la
ciones marinas y en muchos casos los esqueletos escultura del caracol que aquí hemos descrito:
de los animales que, como en las excavaciones “El caracol es símbolo de vida. El artista que lo
del Proyecto Templo Mayor, construyen un alto creó no sólo hozo vida a través de la forma sino
porcentaje de las ofrendas. Esto prueba la im­ que unió volumen y ritmo y logró, con líneas
portancia del culto al agua, propiciadora de la que se desparraman suavemente, el movimiento
agricultura que, al igual que los elementos aso­ constante y eterno del símbolo vital. En su in­
ciados al culto de la guerra y del tributo, nos finita belleza, el caracol nos recuerda el agua, el
muestran las formas básicas de abastecimientos mar, la lluvia, la fertilidad... en fin, todo aque­
del sistema económico mexica y la razón de la llo que forma parte de la vida...” 1.
construcción de estas pirámides gemelas que
forman el Templo Mayor de Tenochtitlan, el Al contemplar esta obra maestra, símbolo
cual en su parte superior soportaba los templos de la primera exposición de arte prehispánico
de sus dioses principales: Huitzilopochtli y Tlá- que se presentó en el Palacio Nacional de las Be­
loc. llas Artes bajo el nombre de “El Arte en el Tem­
plo Mayor” , y sin olvidar el papel que el arte
El caracol tiene diversos significados y usos. ocupa dentro del todo social, nos viene a la men­
Lo conocemos como alimento, instrumento mu­ te la frase de Justino Fernández: “Pretender la
sical, moneda, amuleto, objeto sagrado, etc. En comprensión de México con exclusión de su ar­
el mundo indígena mesoamericano, no podemos te, es suprimir la fuente más fecunda para com­
ignorar además su significado de fertilidad ni ol­ prender lo que somt>:: 1
vidarlo como el Ehecailacacozcátl o caracol ma­
rino, cortado en forma transversal, insignia de 1
y
2
. “El A rte del Tem plo 'i*) •• Catálogo de la Exposición,
Quetzalcóatl como deidad del viento. INBA, 1980, México

244
La cerámica prehispánica en el Templo Mayor.

por: GUILLERMO AHUJ A O. de sondeo en el cual no hubo gran presencia de


material cerámico.
La clasificación y el análisis inicial del ma­
terial cerámico procedente del Templo Mayor, El plan de trabajo elaborado para el análisis
ha permitido identificar algunos grupos cerámi­ de la cerámica obtenida en las excavaciones del
cos de manufactura prehispánica, si bien es nece­ Proyecto Templo Mayor es el siguiente:
sario aclarar que representan la minoría del ma­
terial obtenido, ya que un 70°/o es colonial, un 1. Planos parciales de cada una de las secciones,
20°/o es cerámica con motivos prehispánicos, basureros y pozos de sondeo.
pero fabricada en la etapa colonial, y por último
hay un 10°/o de cerámica prehispánica; de esta
2. Dibujos de Cortes localizando las tres grandes
última hay dos grupos principales que son, la lo­
capas que se tienen localizadas (moderna,
cal y la extranjera.
colonial y prehispánica), anotando asocia­
ciones a pisos, ofrendas, etc.
Para un mejor análisis y control de la cerá­
mica se ha aprovechado las tres secciones de tra­
bajo en que se encuentra dividido el Proyecto. 3. Análisis del material cerámico, acompañado
Esta división se acordó tomarla para tener un de la descripción de cada agrupación cerá­
mica, apoyándose en la bibliografía corres­
mejor control del dato arqueológico y estudiarlo
pondiente.
conforme a esas áreas de trabajo.

La Sección 1 se encuentra comprendida en 4. Elaboración de un plano de distribución de


todo el predio que abarca la estructura arquitec­ material que nos permita ju n to con la in­
tónica del Templo Mayor, en la cual se ha obte­ formación etnohistórica, determinar el ca­
nido un mínimo de material prehispánico, sien­ rácter del lugar (básicamente basureros y
do la zona que ha presentado más concentración material de relleno extraido de zonas de la
de material cerámico. orilla del lago).

La Sección 2, es la zona oriente del Proyec­ 5. Consideraciones finales o resumen de lo obte­


to que abarca una serie de altares encontrándose nido.
en la parte posterior del Templo. En esta zona
se tiene una concentración casi nula de material Hasta el momento se ha comenzado a reali­
prehispánico, ya que el 95 °/o de los tiestos son zar la clasificación de tiestos en diversos grupos,
coloniales. los cuales se unificarán posteriormente por fami­
lias o vajillas realizándose un muestrario de la ce­
Por último tenemos la Sección 3, que es un rámica presente. Los grupos que se han obtenido
pequeño predio en el lado norte del Templo, hasta el m om ento fueron descritos en base a
teniendo aproximadamente 30 x 15 mts. El ma­ cuatro puntos que se consideraron los más
terial extraido de esta zona proviene de un pozo importantes que son:
245
P A STA : rativos líneas gruesas y delgadas en forma hori­
a) Manufactura zontal, vertical, onduladas, en espiral y también
b) Desgrasante círculos.
c) Textura
d) Color Imitación Mixteca. La pasta es de un color
e) Cocción rojo claro con textura poco homogénea. El gro­
sor de sus paredes es mediano. Las formas pre­
SUPERFICIE: sentes son ollas, platos, tapaderas, cajetes y pla­
a) Color tos trípodes, teniendo motivos decorativos con­
b) Tratamiento exterior e interior sistentes en líneas geométricas, horizontales, ver­
ticales, semicírculos, líneas onduladas, espirales,
FORM AS: curvas y puntos.
a) Bordes
b) Espesor de las paredes Grupo II. Cerámica no Local.
c) Base
d) Anexos (molduras, asas, etc.)
Dentro del presente grupo hemos inclui­
e) Formas Generales do toda la cerámica que proviene del Valle de
México y que debido al tipo de pasta, decora­
DECORACION : ción y formas generales nos muestra claramen­
a) Técnica te que pertenecen a otras zonas que se encon­
b) Motivos traban sometidas por los mexicas. Dentro de
c) Cronología este tipo tenemos: Cerámica de la Huasteca,
del centro de Veracruz, Oaxaca y Cholula,
Actualmente se ha realizado una clasifica­ presentando las siguientes características.
ción preliminar del material en nueve grupos ce­
rámicos, los cuales se han comenzado a trabajar Huasteca. La pasta de esta cerámica es de
muy generalmente. un color crema blanquesino que en ocasiones lle­
ga hasta el anaranjado claro. Su textura es bas­
Esta primera clasificación forma parte de tante homogénea; el grosor de sus paredes es me­
la investigación final, quedando sujeto a modifi­ diano. Las formas que se tienen presentes hasta
caciones en el momento que lo requiera ésta ya el momento son ollas, cajetes, platos y tecoma­
que pueden variar los grupos, o bien, pueden tes; presentando como motivos decorativos ban­
presentarse otros elementos por considerar. Por das colocadas transversalmente, líneas ondula­
lo pronto los grupos cerámicos establecidos has­ das, flores, círculos y puntos.
ta el momento son los siguientes:
Oaxaca. La pasta es de un color gris con
G rupo I. Cerámica de Imitación. una textura homogénea, el grosor de sus paredes
es delgado. Las formas presentes son ollas que
En este grupo hemos querido reunir todos no presentan ningún tipo o elemento decorativo.
los estilos que el M exica adopta de diversas zo­
nas, pero deja ver muy notablemente una di­ Centro de Veracruz. La pasta es de un color
ferencia palpable de ambos estilos. crema con una textura homogénea, el grosor de
sus paredes es fino. Las formas presentes son ca­
Dentro de este primer grupo tenemos sola­ jetes trípodes que tienen motivos decorativos a
mente dos estilos de imitación, siendo el Huaste­ base de bandas horizontales, verticales y trans­
co y el M ixteco con las siguientes características. versales.

Imitación Huasteca. La pasta de esta cerá­ Cholula. La pasta es de color naranja con
mica es de color naranja, teniendo una textura textura poco homogénea, el grosor de sus pare­
poco homogénea y el grosor de sus paredes es des es mediano. Las formas presentes son caje­
mediano. Las formas que se tienen presentes son tes, platos, vasos y platos trípodes con motivos
ollas y cajetes; presentando como motivos deco­ decorativos a base de bandas gruesas y finas en
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m-n SV031ZV vrN vavN 3 u a o s ou93N v h iip v a
sentido transversal, puntos, elementos fitomor- Sonajas, Cucharas y Miniaturas. La pasta
fos, zoom orfos, círculos, semicírculos, picos tri­ es de un color naranja con una textura irregular,
angulares. el grosor de sus paredes es fino. Las formas pre­
sentes son sonajas, cucharas y copas miniaturas,
Estos diseños vienen policromados en ama­ no presentando elementos decorativos.
rillo, café, negro, blanco y naranja.
Con recubrimiento de estuco. La pasta es
de un color naranja con una textura irregular, el
Grupo III. Cerámica, negro sobre color natural.
grosor de sus paredes es mediano. Las formas
presentes son ollas y jarras, y lo que podríamos
Dentro de este tipo de cerámica, hemos
considerar como una decoración, consiste en una
querido agrupar todas las formas generales que
capa de estuco sobre el barro.
van componiendo lo que llamamos una vajilla,
como serían platos, cajetes, molcajetes, ollas,
etc. Pero como lo indica el nombre del grupo, Grupo V . Cerámica; rojo, pulida, bicroma.
nos referimos exclusivamente a los que llevan un
tipo de decoración a base de negro, aunque pos­ A l igual que en los grupos anteriores, se han
teriormente describiremos la cerámica sin deco­ clasificado por vajillas, pero en este grupo tene­
ración, la cual también hemos agrupado por vaji­ mos menos variedad de formas que en las
llas. anteriores, teniendo las características siguientes.

A continuación se describirá este grupo en La pasta es de un color naranja con una


base a las diferentes formas generales que hay textura irregular, el grosor de sus paredes es me­
presentes, los cuales se han tratado de conjuntar diano. Las formas presentes son platos, cajetes,
en una sola descripción. ollas y platos con motivos decorativos a base de
bandas en sentido transversal, puntos y semi­
La pasta es de un color naranja con una círculos. La aplicación del diseño es color blan­
irregular, el grosor de sus paredes es mediano. co y negro.
Las formas presentes son cajetes, molcajetes,
jarras y ollas; los motivos decorativos con­ Grupo VI. Cerámica Rojo Pulido Monocromo.
sisten en diseños fitom orfos, puntos, líneas
horizontales, verticales, espiral y onduladas. La pasta es de color naranja con una tex­
tura irregular, el grosor de sus paredes es media­
no. Las formas presentes son platos, cajetes, ja ­
Grupo IV. Cerámica Naranja Monócroma.
rras, platos trípodes y copas.
Com o ya especificamos anteriormente, este
grupo se ha reunido por vajillas en donde tam­ Grupo VII. Cerámica polícroma Mexica.
bién se han incluido los comales, miniaturas y
utensilios como cucharones, etc. además, consi­ El presente grupo viene a ser una cerámica
deramos como una variante el estucado que pre­ parecida a la cholulteca, pero con diseños muy
sentan algunas piezas. En un análisis a rasgos propios del mexica, además presenta una varia­
muy genenerales, presentan las siguientes carac­ ción en el tipo de engobe sobre el que van los di­
terísticas. ferentes diseños. En cuanto a su descripción pre­
senta a grandes rasgos las siguientes característi­
La pasta es de un color naranja con una cas.
textura poco homogénea, el grosor de sus pare­
des es mediano. Los tipos presentes son cajetes, La pasta es de color naranja con una textu­
molcajetes y platos. ra irregular, el grosor de sus paredes es mediano.
Las formas presentes son cajetes con motivos
Comales. La pasta es de un color naranja decorativos a base de bandas horizontales, verti­
con textura irregular, el grosor de sus paredes es cales, onduladas y espirales, con una pigmenta­
mediano, no presentando motivos decorativos. ción a base de negro, blanco, rojo y amarillo.

248
VAJILLA NEGRO SOBRE NARANJA AZTECAS J l-J R

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VAJILLA NEGRO SOBRE NARANJA AZTECAS m-m:

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VAJILLA NEGRO SOBRE NARANJA AZTECAS m-m:

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25]
Grupo VIII. Cerámica con impresión de textil. más importantes y las que nos podrán dar la pau- ,
ta a seguir en nuestra investigación.
Dentro del presente grupo incluimos la ce-
rámica que hasta el momento tenemos entendi- Analizando el material que ha salido en la
do servía para la transportación y venta de la sal. excavación y del cual hemos presentado un
y 10 hemos considerado un tipo especial, debido avance en este artículo, consideramos que la in-
a las características anteriores, presentando las vestigación cerámica se verá un poco restringida
siguientes características: debido a que no tenemos un universo completo
del cual se puede realizar una secuencia cultural,
La pasta es de un color naranja con una ya que la mayoría de 10 que llamamos cerámica
textura irregular, el grosor de sus paredes es me- prehispánica se encuentra mezclada con la cerá-
diano. No se tienen formas definidas y lo que mica colonial, es decir, que fueron encontrados
podríamos llamar decoración es a base de la en rellenos coloniales.
impresión que dejó el textil a la hora del coci-
miento. El resto de la cerámica se ha encontrado en
la superficie que queda bajo los cimientos de los
Grupo IX. Cerámica Ceremonial. diferentes edificios demolidos, mostrándonos
una cerámica de desecho y consideramos que és-
En este grupo hemos englobado toda la ce- to viene a ratificar 10 que nos han informado va-
rámica de uso ritual o sacerdotal como serían rios historiadores y que es lógico de comprender;
sahumadores y braseros, los cuales tenemos la que el predio ocupado por el Templo Mayor fue
certeza de su utilización dentro de las diferentes convertido posteriormente de su arrasamiento en
ceremonias. Por otro lado no hemos querido in- un solar que poco a poco se fue convirtiendo en
cluir formas generales como serían las copas, ya basurero.
que aunque otros investigadores las consideran
como ceremoniales nosotros tenemos nuestras Por otro lado, los grupos cerámicos men-
dudas al respecto. Por 10 pronto presentamos la cionados son los que hasta el momento están
descripción general y en base al material que te- presentes en la excavación, pero pueden aumen-
nemos presente. tar conforme avance el Proyecto. Además se
pueden ver enriquecidos por nuevos motivos de-
La pasta es de color naranja con una textu- corativos ó algun otro aspecto que no hemos
ra irregular, el grosor de sus paredes es delgado. considerado por ahora. Cabe mencionar fmal-
Los motivos decorativos son a base de molduras, mente que la investigación de la cerámica pre-
incisiones, aplicaciones moldeadas y pastillaje. hispánica se encuentra en un estado incipiente,
además que nuestra información hasta el mo-
En este trabajo hemos querido presentar en mento y debido a una serie de circunstancias
aspectos muy generales el tipo de estudio que se expuestas anteriormente, es somera y fragmenta-
lleva a cabo en cuanto al material cerámico, to- ria, por 10 que las presentes líneas deben consi-
mando en cuenta una serie de puntos que como derarse meramente introductorias a la investiga-
mencionamos al principio consideramos, son las ción.

252
------ 111ESTUDIOS COLONIALES

253
_______ Informe preliminar sobre los materiales coloniales.

por: GONZALO LOPEZ CERVANTES y cultural del Virreinato se gestó y desarrolló


el arte popular mexicano de nuestro tiempo,
Introducción enriquecido, fusionado y desarrollado con
base en tradiciones indígenas y europeas; desde
el vidrio soplado de Tlaquepaque, Jalisco, hasta
Los trabajos de excavación realizados en la cerámica vidriada de Puebla y Michoacán.
el Proyecto Templo Mayor han aportado una Estos productos los exhibimos y exportamos
considerable cantidad y variedad de materia- con orgullo. Investiguemos pues sus orígenes.
les arqueológicos de Virreinato, entre los cuales
destacan la cerámica, el vidrio y, en menor Como podrá suponer el lector, este tipo
escala, el metal. Su interpretación y estudio de estudios no son tarea fácil, ni realizables
arrojarán sin duda, nuevas luces acerca de estas en poco tiempo. Por ejemplo, tenemos que
artesanías que cubrieron múltiples necesida- conocer a profundidad los materiales llegados a
des cotidianas de dicha época, misma que como la Nueva España por vía comercial, como el
ya hemos asentado en otra ocasión (López vidrio veneciano, la cerámica europea y la por-
Cervantes, 1978: 37), todavía presentan diver- celana oriental, así como su posible impacto
sos aspectos por dilucidar, en vista de la poca e influencia en las manufacturas netamente
atención de los investigadores hacia éstas. novohispanas. Asimismo, es largo el camino
por recorrer examinando la múltiple documen-
De hecho nuestro material proviene del tación histórica al respecto; baste señalar los
núcleo mismo de una ciudad cuyo centralismo textos alusivos al envío de cerámica ibérica al
e importancia urbana no se ha interrumpido Nuevo Mundo, existentes en el Archivo de
desde su fundación hasta nuestros días. En Indias, en Sevilla, y la voluminosa reglamen-
consecuencia, el muestrario del material colo- tación sobre la vida gremial novohispana, en el
nial es rico y variado, como se verá. archivo General de la Nación, en la Ciudad de
México.
Por otra parte, conviene recordar que el
trabajo del hierro, la manufactura del vidrio, el Resta por apuntar que como nuestros
empleo del torno de alfarero, y la técnica del materiales provienen de relleno, no contamos
vidriado en la cerámica, fueron desconocidos con una estratigrafía confiable; fueron tratados
en el ámbito indígena del Nuevo Mundo. Así como tal y clasificados por tipo, tan sólo toman-
pues, los hemos considerado como una aporta- do en cuenta la sección excavada, que es de tres
ción cultural hispana. hasta el momento. De igual modo, aún están
en curso los trabajos en el Proyecto Templo
Debemos suponer que pocos años después Mayor, por lo cual nuestros resultados deberán
de la Conquista, el indígena aprendió nuevos tomarse como preliminares. Ojalá en lo futuro
oficios y técnicas a la par, imprimiéndoles un pueda ampliarse el apoyo y los medios suficien-
sello propio. Al mismo tiempo, bien podemos tes para estudiar a profundidad los materiales
decir que paulatinamente el mestizo los inter- de la vida diaria de esa época de nuestra his-
pretará a su modo. Así, en el crisol étnico toria.

255
Metodo clasificatorio. Materiales de Manufactura foránea

En cuanto al material cerámico, es impor- Es bien sabido que una de las ideas concer-
tante dejar asentado que continuamos los li- nientes a la política comercial sostenidas por la
neamientos clasificatorios acotados en un tra- Metrópoli fue la de abastecer a sus posesiones
bajo anterior (López Cervantes, 1976a: 27), americanas con productos elaborados por su
y que por la similitud con los tiestos localiza- industria (Arcila Farías, 1974, I/:20J). De
dos en el Templo Mayor, hemos obtenido re- tales envíos se tienen evidencias tanto documen-
sultados satisfactorios hasta el momento. tales como arqueológicas, en lo que a la cerá-
mica concierne. Así, en las Fig. 1 y 2 pueden
Llama la atención la presencia de algu- observarse algunas mayólicas ibéricas decoradas
nas variedades cerámicas totalmente nuevas, con varias tonalidades de azul de cobalto;
tanto en las manufacturas novo hispanas como petenecen al siglo XVI y principios del siglo
en las de procedencia ibérica. Estos tiestos XVII. Es evidente su ornamentación a base de
han sido enviados al Departamento y Labora- grotescos renacentistas, pues se elaboraron
torios de Prehistoria del INAH para su respec- precisamente cuando España se encontraba
tivo análisis de pasta y óxidos colorantes. Sin bajo la influencia de dicho movimiento artís-
duda alguna esos resultados ofrecerán mayor tico, expresado en diversas manifestaciones
amplitud al conocimiento de la variedad cerá- culturales.
mica usada en el Virreinato, y de la cual, repito,
no teníamos conocimiento. En la Fig. 3 se ilustra una jarra de mayó-
lica, también de procedencia ibérica; su deco-
De tal manera, el sistema clasificatorio ración es polícroma y tal vez corresponde al
empleado en los materiales del Templo Mayor, siglo XVII. Llama la atención que su peculiar
parte primordialmente del lugar de manufac- forma de vertedera ha perdurado en la cerámi-
tura: local y foránea, tema que veremos más ca española de nuestros días.
adelante.
La Fig. 4 presenta unos ejemplos de las
botijuelas, que sabemos eran destinadas al trans-
porte de algunos poductos, como aceite, vino,
aceitunas y alcaparras (Goggin, 1970:4), e
incluso agua o pólvora (Wagner, 1967:4/

Sobre esta cerámica hispana localizada


en el Templo Mayor podemos decir que quizá
se manufacturaron en Sevilla, aunque el lugar

256
exacto aún es discutible (López Cervantes,
1976b:33J. Viene el caso señalar que existen jaspe. Este tipo de vidrio ha sido denominado
en México múltiples paramentos de azulejos, "calcedonio" o "schmelzglas" (Barrington,
tanto en construcciones civiles como religiosas; 1970:66). El problema está en dilucidar si
efectivamente proviene de Venecia, o bien se
pero desafortunadamente han sido poco estu-
diados. Posiblemente salieron de alfares espa- trata de vidrio español siguiendo el modelo
ñoles, pues sabemos que también se embarca- veneciano, pues los objetos de esa localidad,
aparte de adquirir gran demanda en Europa
ron para América múltiples cargas con esta
variedad de cerámica. durante los siglos XV a XVII, paulatinamente
fueron copiados por otros fabricantes en todo
el continente (Ibid:38J.
Del mismo modo se han logrado identifi-
car algunos tiestos de porcelana europea, como
puede apreciarse en las Fig. 5 Y 6. Se trata de Si de gran parte de las manufacturas de
piezas pertenecientes al siglo XIX, excelentes la época colonial de México no sabemos gran
ejemplos de producción industrial y masiva, cosa, respecto al vidrio casi estamos en ayunas,
cuya decoración era lograda mediante estampas debido al nulo interés de los estudiosos, proble-
fijadas durante la cocción. Su pasta es de compo- ma que en algunos casos también es común
sición variable, o sea desplazando el caolín, en la arqueología del Viejo Mundo (Sm ith ,
1969:614).
materia prima de la verdadera porcelana. Sin
embargo, éstas piezas pueden clasificarse gené-
Especial mención merece la porcelana
ricamente como "porcelanas de pasta suave",
oriental, identificada dentro del material arqueo-
las cuales tuvieron demanda en las mesas del
lógico colonial del Templo Mayor, la cual fue
México decimonónico, al punto que presenta-
conocida desde el año 1573, pues en tal fecha
ron fuerte competencia a los productos pobla-
arribaron por primera vez al puerto de Acapul-
nos, llegando incluso a fabricarse aquí bajo las
mismas normas. co dos naos procedentes de Filipinas, trayendo
"Loza y otras brujerías" (Romero de Terreros,
1937:134). De tal suerte, durante el Virreinato
De la misma manera quedó demostrado
continuaron llegando porcelanas bajo las dinas-
con anterioridad el uso de vajillas europeas en
tías Ming (1348 - 1643) y Ch'ing (1644 _
México, en particular de las fábricas de Da-
venport y Copeland, Inglaterra y de Maastricht, 1912), cuyos ejemplos pueden apreciarse en las
Holanda (López Cervantes, 1974:52J. Fig. 10 - 17; mientras que la Fig. 9 nos presen-
ta diversos monogramas pintados en el asiento
En lo tocante al vidrio, en la Fig. 21 se de las piezas, mismos que aún falta por esclare-
ilustran algunos fragmentos de vidrio veneciano cer. Cabe destacar su similitud con tiestos
del siglo XVI, cuya ornamentación semeja al provenientes de otras excavaciones en la Ciudad
de México (López Cervantes, 1976-1977:75).

257
característico. Por lo común presentan elabo-
rados diseños en azul de cobalto, aunque tam-
bien las hubo polícromas. Conviene señalar
que aún es discutible si arribaron a la Nueva
España porcelanas de origen japonés. De cual-
quier forma, la porcelana oriental fue muy
apreciada y quizá sólo fue usada por los estra-
tos más altos de la sociedad novohispana, que-
dando para la diversidad de estas otras varie-
dades de cerámica. Sería interesante dedicar
en la actualidad un estudio acerca del consumo
de cerámica por estrato social.

Finalmente, en la Fig. 38 se ilustra un


ejemplo de las célebres "vajillas de pedido",
Obviamente se trata de caracteres chinos del
siglo XVI o XVII, difíciles de traducir en Mé-
xico.

Si bien estos productos provienen de los


hornos de la famosa fábrica de Ch'ing-te-ehen,
situada en la provincia de Kiang-si, cuyos cera-
mistas gozaron del patronazgo imperial hasta
el año 1912 (Boulay, 1973:29), en la Fig. 14
tenemos un tiesto de la porcelana llamada
Swatow, caracterizada por las adherencias de
arena en su base, que funge como ejemplo de
la producción china de otra localidad, y fuera
de dicha protección imperial.

Estas piezas pertenecen al grupo de "por-


celanas de pasta dura", es decir, compuestas
de caolín, cuarzo y feldespato, cuya tempera-
tura de cocción puede alcanzar los 1 400 C para
su vitrificación final. Son traslúcidas; su frac-
tura en conchoidal, e incluso tienen un sonido

llamadas por algunos "Compañía de Indias".


Se trata de los servicios completos de mesa
encargados por múltiples familias novohispanas
en las postrimerías del siglo XVIII, los cuales
fueron decorados con sus respectivos escudos
de armas, monogramas o simples diseños con-
vencionales(Romero de Terreros, op. cit.: 137).

Presumiblemente estas piezas provenían


de la fábrica de Ching-te-ehen, y de ahí eran
transportadas en blanco a Cantón ",Jara su
decorado, en base a los diseños proporciona-
dos por el solicitante novohispano, . or conduc-
to de comerciantes filipinos (Ibid:138).

258
Como es sabido, el arribo del galeón de En resumen, los materiales de m anufactu­
Filipinas era considerado como notable y dig­ ra foránea encontrados en el Templo Mayor
no de regocijo, pues junto con la porcelana pueden abrir nuevas rutas a la investigación
llegaban la lencería, pimienta, especiería, seda, arqueológica e histórica, como sinópticamente
ropas y marfiles, al punto que una regulación reseñamos.
fechada en el año 1720 declaraba: . . la mer­
cancía de China es el vestido ordinario de los Materiales de manufactura local
nativos de la Nueva España. . (Castelló,
1970:28), y otra del mismo año acotó: . .la Bajo este rubro incluimos aquellas arte­
nao de China, y que si se dilata su llegada sanías elaboradas en la Nueva España y de las
ocasiona clamores y sentimientos . . . " (Arcila cuales tenemos evidencia. No es el momento
Farías, op. cit. 1:44). de discutir si salieron de manos indígenas,
mestizas o españolas; tiempo habrá. Ahora,
Cabe puntualizar que la influencia de la en vista de que mayor preocupación se ha cen­
porcelana oriental en la cerámica poblana o de trado en la cerámica, comenzaremos pues por
otros centros alfareros novohispanos, no ha sido ésta; y para ello es conveniente familiarizar al
estudiada a profundidad, tanto en su reperto­ lector con nuestros términos clasificatorios. De
rio de formas como decoración; al igual que la modo que, en base al acabado de superficie y
distribución y consumo de esos productos en la técnica de manufactura, llegamos a estable­
el amplio territorio del Virreinato. cer dos familias: Vidriada y No Vidriada. Dichos

259
atributos fueron fundamentales, dado que la factura. acabado de superficie y función gené-
vitrificación fue desconocida en el mundo rica; de esa manera resultaron dos grupos más:
prehispánico. Por lo tanto, el vidriado lo consi- Grupo Alisado y Grupo Pulido, ambos de una
deramos rasgo diagnóstico de aportación espa- sola cocción -versus las dos que requiere el
ñola, y el"No vidriado, de aportación indígena. vidriado- y de uso utilitario. Al igual que los
anteriores, éstos grupos cuentan con sus res-
La separación interna de la familia vi- pectivos tipos.
driada se hizo en atención a la clase de barniz,
dando como resultado dos grandes grupos: A continuación presentamos los tiestos
Grupo de Barniz Plúmbeo -a base de plomo correspondientes a esa clasificación.
y eminentemente destinada a la cocción de
alimentos-, y Grupo de Barniz Estanno-Plum- De la Familia No Vidriada, Grupo Alisa-
bífero -cerámica con baño de plomo y estaño, do. Tipo Alisado con Incrustación. tenemos
comúnmente llamada mayólica, y destinada las Fig. 31 y 33. S~s elementos incrustados en
por lo regular a la contención de alimentos-o el cuerpo de las vasijas son fragmentos de cuar-
De ambos grupos se infIrieron respectivamente zo y feldespato, mismas que en ciertos ejempla-
Tipos y Variantes, en base a su decoración. res forman pequeños conjuntos circulares.
Corresponden al siglo XVI y mediados del 1

Ahora bien, la división interna de la Fami- XVII. Al parecer, esta peculiar decoración
lia No Vidriada obedeció a la técnica de manu- fue común en la península Ibérica durante el

260
lebrillo, así como un fondo sellado. Sin embar-
go, difiere por su técnica de manufactura, pues
en este caso fue modelado; además en color
blanco. En su fondo leemos la inscripción:
CHRISTO NAZARENO. Esta pieza quizá
corresponda hacia mediados del siglo XVII.

Del Grupo Pulido, el tipo Pulido Simple


se incluye en la Fig. 29, y el tipo Pulido Ornado,
en la Fig. 30. Estas piezas representan una con-
tinuación de modelos prehispánicos, a juzgar
por su acabado de superficie y algunas formas;
sin duda se manufacturaron en el siglo XVI.
Estas cerámicas paulatinamente se fusionaron
con elementos occidentales, bien se trate de
formas o diseños.
siglo XVI, e incluso se han observado decora-
ciones semejantes en tiestos localizados en En cuanto a la Familia Vidriada, del
Ciudad Vieja, Panamá, Habana Vieja y Cuba, Grupo de Barniz Plúmbeo presentamos el tipo
es decir, en asentamientos hispanos de aquella Polícromo Inciso, Fig. 35 y 36, mismo que ubi-
época. carnos cronológicamente en el siglo XVI y princi-

Del tipo Alisado con sellos mostramos


un ejemplo en la Fig. 32. La forma típica de
esta cerámica es ~l lebrillo, hecho en torno y
con engobe rojizo. Podemos ubicarlos desde
principios del siglo XVII hasta mediados del
XVIII. Es interesante acotar que algunos dise-
ños de lebrillos guardan similitud con los de
ciertos "tlacos" y otras monedas populares se-
gún se infiere de la numimástica colonial presen-
tada en otros estudios (Muñuz, 1968:61).

Dentro del' Grupo Alisado presentamos pios del XVIII. Esti cerámica tiene engobe
un ejemplar novedoso, ilustrado en la Fig. 34. de plomo y estaño; sin embargo hubo una
La vasija tiene un engobe rojizo igual que el falla en la tecnología, puesto que esos com-
ponentes no se fusionaron; así es imposible
considerarla como mayólica, aunque probable-
mente fueron representadas como ensayo del
artesano indígena. Dei cualquier modo reflejan
su transculturación, a juzgar por las típicas
formas de cajete tripQide inclusive algunos con
soportes zoomorfos. Tentativamente podemos
afirmar que esta cerámica, al igual que las an-
teriores, estuvieron fuera de reglamentación
gremial alguna.

El tipo Vidriado Café puede observarse


en las Fig. 41, 42, 44, 45 y 47 -'en esta resalta
la peculiar solución del artesano para resolver
el asa-o Asimismo, es patente la diversidad
de formas y funciones. En términos generales,
261
o
-, 1 2 3 em.

bien puede aftrmarse que algunas de ellas han (Fig. 49); azul/blanco (Fig. 50); polícromo
perdurado hasta el presente. Las Fig. 38 y 46 (Fig. 51 y 52); la variante azul y negro/blanco
ilustran el Vidriado Café sellado, variante (Fig. 53); azulejos (Fig. 54); y algunas marcas
del tipo que nos ocupa. La temporalidad de e inscripciones (Fig. 55). Todos ellos son de
estas piezas abarca del siglo XVI al XVIII. manufactura poblana, uno de los centros alfa-
reros más importantes del Nuevo Mundo. De
El tipo Vidriado Verde se incluye en la igual modo, esta cerámica fue reglamentada
Fig. 40; sus variantes Verde Sellado y Verde por la ordenanza de loceros, y fue motivo de
Inciso,.en las Fig. 39 y 48 respectivamente. exportaciones a Guatemala, Cuba, Perú y
Panamá.

El tipo de colorantes empleados en su de-


coración fue el siguiente: óxidos de cobalto,
plomo, manganeso y plomo, manganeso y
fierro, lo cual nos lleva a considerar el nivel
tecnológico de esa época, así como el avance,
comerCio y explotación de la minería.

Por otro lado, ofrecemos múltiples dibu-


jos de los elementos decorativos de esta cerá-
mica. El repertorio abarca diseños naturalistas,
antropomorfos y convencionales, un buen
ejemplo de la libertad creadora del ceramista
Los colorantes usados en la cerámica de o "locero" virreinal. Con justa razón sus produc-
barniz plúmbeo fueron: óxido de manganeso, tos fueron apreciados en diversas localidades
óxido de fterro y plomo, óxido de manganeso del mundo colonial americano.
y fierro, con esa gama de combinaciones.
En relación a las ftgurillas (Fig. 27 y 28),
Pasando al Grupo de Barniz Estanno- bástenos advertir que requieren una tipología
Plumbífero, tenemos los tipos verde/crema propia, a la fecha inexisten!e. Las hubo con

262
------~--

barniz plúmbeo, con barniz estanno-plumbí- de la casa comercial Sanbom's, fundada en la


fero y alisados, con o sin engobe. Acaso una ciudad de México a principios del siglo XX.
de sus funciones principales fue servir para los Esta pieza correspondería entonces a uno de
"nacimientos" de las festividades decembrinas, los iniciales envasesde dicho establecimiento.
pues las posadas tan mexicanas, con piñata,
vela y letanía, se gestaron en la época colonial. Materiales modernos
Así pues, algunas de estas figurillas serían el
El material arqueológico rescatado del
antecedente de las que adquirimos en el merca-
Templo Mayor, ofrece también algunos ejemplos
do Sonora de esta Ciudad, por esa fecha. Surge
de la producción del siglo XX. Entre otros,
la posibilidad de que futuras investigaciones
la Fig. 19 muestra dos tiestos procedentes de
separen las figurillas de uso navidefio de las de
Tonalá, Jalisco, ambos brufiidos y decorados
juguetería infantil, así como un estudio icono-
con disefios fitomorfos, artesanía típica tonal-
gráfico de los trajes, tocados, peinados y perso-
teca, y otro pertenece a la cerámica vidriada
najes representados en ellas.
de la ciudad de Oaxaca. La Fig. 43 aclara la
Otros materiales como el vidrio se ejeIJlpli- supervivencia de viejas técnicas cerámicas,
fican en la Fig. 22, en vidrio soplado, y 23 Y24 pues corresponde a una cazuela en miniatura,
en vidrio prensado; éste perteneciente al siglo en vidriado plúmbeo café.
XIX. El metal puede observarse en la Fig. 20.
La Fig. 25 atafie a un ejemplar de vidrio
Como ejemplo de la producción mexicana prensado del tipo denominado "carnaval",
de porcelana de pasta balda, véase la Fig. 8 característico de la producción norteamerica-
-siglo XIX- y la 7 -principios del sigloXX-o na de los afios 1920-1930. Su iridiscencia,
un tanto metálica, recuerda un poco los logros
Llama la atención el frasco de vidrio técnicos del vidrio Art Nouveau, en particular
prensado de la Fig. 26, que ostenta el logotipo de Louis Tiffany (1848 - 1913).

263
14 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple.

15 Miscelánea.

16 Metal.

17 Familia vidriada. Grupo de barniz. Es-


tanno-Plumbífero. Mon6cromo Blanco.

18 Familia vidriada. Grupo de barniz. Estanno-


Plumbífero. Azul/blanco.

..•._1
o
¡.
I 2
"
o ••
3 cm.
19 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
Plumbffero (piezas semicompletas).

20 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-


Plumbífero. Verde/crema.

Relación de cajas de material colonial clasificado 21 Azulejos. Varias técnicas.

22 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-


SECCION 1 Plumbffero. Polícromo.
Caja Núm. D E S C R I P C ION Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali.
23
sado con incrustaci6n.
Cerámica española. Botijuelas.
24 Figurillas.
2 Familia vidriada. Grupo de Barniz plúmbeo.
Vidriado verde.

3 Familia vidriada. Grupo de Barniz plúmbeo.


Vidriado verde.

4 Familia vidriada. Grupo de Barniz plúmbeo.


Vidriado verde.

5 Familia vidriada. Grupo de Barniz plúmbeo.


Vidriado café.

6 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde.

7 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple.

8 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado con sello.

9 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-


do simple.

10 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple.

11 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-


do simple (piezas semicompletas).

12 Familia no vidriada. Grupo pulido. Pulido


simple (piezas semicompletas).

13 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sad simple.

264
25 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo. 38 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
Vidriado verde manchado. Vidriado café sellado.
26 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo. 39. Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
Polícromo. Inciso y Variantes. Vidriado verde.
27 Familia vidriada. Piezas semicompletas. 40 Cerámica española. Botijuelas.
28 Vidrio. 41 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
Plumbífero. Mon6cromo blanco.
29 Familia no vidriada. Grupo alisado simple.
42 Cerámica Española, Mayólicas.
30 Porcelana europea y americana.
43 Cerámica Moderna. Tonalá, Oaxaca.
31 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-
do amado. 44 Porcelana oriental. Ming-Ch ' ing. Tipo
Swatow.
32 Familia no vidriada. Grupo pulido. Pulido 45 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
con incrustación. Plumbífero. Negro y azul/blanco.
33 Familia no vidriada. Grupo alisado. Tipos 46 Familia vidriada. Grupo de Barniz Estanno-
no identificados. Plumbífero. Monócromo azul.

34 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


47 Familia vidriada. Grupo de Barniz Estanno-
Vidriado verde sellado. Plumbífero. Monócromo verde.
48 Familia vidriada. Grupo de Barniz Estanno-
35 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo. Plumbífero. Azul y amarillo/blanco.
Vidriado verde inciso.
49 Porcelana oriental. Ming-Ch 'ing. Polícroma.
36 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
Vidriado café amado. 50 Porcelana oriental. Ming-Ch ' ing. Mono-
gramas o marcas.
37 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
Vidriado café inciso. 52 Porcelana de la Compañía de Indias.

265
53 Familia vidriada. Grupo de Barniz Estanno- 63 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
Plumbífero. Tipos no identificados. sado simple .
54 .Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
64 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
Plumbífero. Mon6cromo blanco.
Plumbífero. Mon6cromo blanco.
55 Familia vidriada. Grupo de Barniz plúmbeo.
Vidriado café. 65 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple.
56 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo. 66 Tricoles o separadores de vasijas.
Vidriado verde.
67 Cerámica Española. Botijuelas.
57 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple. 68 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-
do simple.
58 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple. Piezas semicompletas. 69 Familia vidriada. Grupo de Barniz plúmbeo.
Vidriado verde.
59 Familia vidriada. Familia no vidriada.
Tiestos retrabajados. 70 Familia no vidriada. 9rupo alisado. Ali-
sado simple.
60 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- 71 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple.
sado simple.
61 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- 72 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple. sado simple.
62 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo. 73 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
Vidriado verde. sado simple.

266
74 Cerámica española. Botijuelas. 83 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
Plumbífero. Azul/blanco.
75 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
Vidriado verde. 84 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple.
76 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-
do simple. SECCION2
77 Familia no vidriada. Grupo alisado. Tipo Caja Núm. DESCRIPCION
no identificado.
Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
78 Familia no vidriada. Grupo alisado. Tipo sado simple.
no identificado.
2 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
79 Familia no vidriada. Grupo alisado. Tipo sado con sello. Lebrillos.
no identificado.
3 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-
8Q Familia no vidriada. Grupo alisado. Tipo do simple.
no identificado.
4 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-
81 Familia no vidriado. Grupo alisado. Ali- do ornado.
sado simple.
5 Miscelánea (aplanados, conchas, etc.)
82 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
Plumbífero. Mon6cromo blanco. 6 Figurillas

267
o

-- 1 2 '!(.In..

7 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo. 18 Hueso trabajo.


Vidriado café.
19 Familia vidriada Grupo de barniz Estanno-
8 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo. Plumbífero. Verde/crema.
Vidriado verde.
20 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-
9 Cerámica española. Botijuelas. Plumbífero. Azul y Amarillo/ blanco.

10 Cerámica española. Mayólicas. - 21 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde manchado.
11 Familia vidriada, Grupo de barniz Estanno-
Plumbífero. Polícromo. Porcelana europea y americana.
22
12 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno- Familia vidriada. Grupo de Barniz Plúmbeo.
23
Plumbífero. Azul/blanco. Vidriado café omado. Vidriado verde oma-
do.
13 Porcelana oriental. Ming-eh ' ing. Azul/
blanco. Familia no vidriada. Grupo alisado.
24
Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno- Tipos no identificados.
14
Plumbífero. Monócromo blanco.
25 Familia vidriada. Grupo de Barniz
Estanno-Plumbífero. Tipos no identificados.
15 Metal.

16 Vidrio. 26 Familia vidriada. Grupo de barniz


Estanno-Plumbífero. Mon6cromo verde.
17 Azulejos. Mon6cromo azul.

268
32 Familia vidriada. Grupo de Barniz Estanno-
PlumbUero. Piezas semicompletas.

33 Familia vidriada. Grupo de barniz Estanno-


Plumbífero. Azul y negro. blanco.

34 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple.

35 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple~

36 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple.
27 Familia vidriada. Grupo de barniz
Plúmbeo. Polícromo inciso y variantes. 37 Familia vidriada. Grupo de barniz Plum-
bUero. Piezas semicompletas.
28 Porcelana oriental. Ming-Ch 'ing. Swatow.
38 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
29 Familia no vidriada. Grupo alisado. Vidriado verde inciso.
Alisado simple. Vidriado café inciso.
30 Porcelana oriental. Ming-Ch ' ing. 39 Familia no vidriada. Piezas semicompletas.
Polícroma.
40 Familia vidriada. Grupo de barniz Plúmbeo.
31 Cerámica moderna (Oaxaca, Michoacán, Vidriado verde sellado.
Jalisco, El Anfora). Vidriado café sellado.

--- 2

269
---
41 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo, 52 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
Vidriado café. sado simple.

42 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde. 53 Familia no vidriada. Grupo alisado Ali-
sado simple.
43 Familia no vidriada. Grupo pulido. Pulido
con incrustación. 54 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
Vidriado verde.
44 Familia no vidriada. Grupo alisado.
Alisado con incrustación. SS Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple.
45 Tiestos retrabajados.
56 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
46 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- sado simple.
sado simple.
57 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-
47 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- do simple.
sado simple.
58 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
48 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- sado simple.
sado simple.
59 Familia no vidriada. Grupo de barniz plúm-
49 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- beo. Vidriado café.
sado simple.
60 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
SO Sellos y moldes. sado simple.

SI Familia vidriada. Grupo de barniz Plúmbeo. 61 Familia vidriada. Grupo ere barniz plúmbeo.
Vidriado verde. Vidriado café.

62 Familia vidriada. Grupo alisado. Alisado


simple.

63 Familia vidriada. Grupo alisado. Alisado·


simple.

64 Familia no vidriada. Grupo pulido. Pulido


simple.

, 65 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


••-- 3 ~-
Vidriado verde .

66 Familia no vidriada. Grupo pulido. Pull-


doomado.

270
67 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- 4 Familia vidriada. Grupo de barniz estanno-
sado simple.
plumbífero. Azul y negro/blanco.
68 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- 5 Familia vidriada. Grupo de barniz estanno-
sado simple.
plumbífero. Verde/crema.
69 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali- 6 Familia vidriada. Grupo de barniz estanno-
sado simple.
plumbífero. Azul/blanco.
70 Miscelánea.
7 Familia vidriada. Grupo de barniz estanno-
plumbífero. Polícromo.
71 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.
Vidriado verde.
8 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-
do simple.

9 Familia no vidriada. Grupo pulido. Puli-


SECCION 3
do ornado.
CajaNúm. DESCRIPCION 10 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado con incrustaci6n.
Familia Vidriada. Grupo de barniz Estanno-
plumbífero. Mon6cromo verde. 11 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado con sello. Lebrillos.
2 Familia vidriada. Grupo de barniz estanno-
plumbífero. Mon6cromo blanco. 12 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-
sado simple.
3 Familia vidriada. Grupo de Barniz estanno-
plumbífero. Azul y amarillo/blanco. 13 Familia no vidriada. Tipos no identificados.

•..
-
'

271
14 Porcelana europea y americana.

15 familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado café.

16 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde.

17 Miscelánea.

18 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde sellado. Vidriado café sella-
do. Vidriado verde inciso. Vidriado café
inciso.

19 Familia vidriada.- Tipos no identificados.

20 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde manchado.

21 Porcelana oriental Ming-Ch'ing. Polícroma.

23 Cerámica española. Botijuelas.

24 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado café ornado. Vidriado verde
ornado.

25 Azulejos.

26 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde.

27 Familia vidriada. Piezas semicompletas.

28 Vidrio.

29 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple.

30 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado café.

, 31 Familia no vidriada.
sado simple.
Grupo alisado. Ali-

272
Familia no vidriada. Familia vidriada. Pie-
zas semicompletas.

33 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple.

34 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado café.

35 Familia vidriada. Grupo de barniz plúmbeo.


Vidriado verde.

36 Figurillas.

37 Familia no vidriada. Grupo alisado. Ali-


sado simple.

38 Metal.

39 Familia vidriada. Grupo dI; barniz plúmbeo.


vidriado café. BIBLIOGRAFIA

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274
275
276
277
278
DECORACION INTERIOR

IJ

DECORACION EXTERIOR
ESCALA 1:I
Q I 2 ~ • ~.'"
!¡;;;;J---1 ..........,

11 PROYECTO'
11 TEMPLO MAYOR I.N.A.H.

CERAMICA COLONIAL
TIPO POLlCROMO- BORDES
OECORACION INTERIOR-EXTERIOR
IN\lE:STtGAOOR
r~=~~:TOS MOCTEZUMA GONZALO LOPEZ C€RVANTES

I~ I~"::~o ZUAlGAINOV1EMBRE 7~

279
ESCALA 1:1
W 11 W-
IIPROYECTO:
11 TEMPLO MAYOR I.N.A.H.

CERAMICA COLONIAL
TIPO AZUL SOBRE BLANCO
FONDOS DECORACION INTERIOR
lNVE$TlGADOA
GQNhLO LOPEZ CERY,t,HTES

1 f'; == 1:~:E":~o lUÑlGA INOV1EMBRE 79

280
ESCALA 1;1
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IfPROYECTO:
11 TEMPLO MAYOR I.N.A.H.

CERAMICA COLONIAL
TIPO AZUL SOBRE BLANCO
BORDES DECORACION INTERIOR

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281
ESCALA 1:1
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IIPROYECTTOE'
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11 MAYOR I.N.A.H.

CERAMICA COLONIAL
TIPO AZUL SOBRE BLANCO
BORDES DECORACION EXTERIOR
tlNESTIGADOfl
QOf\IZALO LOP(Z CERVANTES.

I~

282
Excavaciones en el ex-convento de Sta.Teresa la Antigua.

por: ELSA C. HERNANDEZ PONS estuvo decorada en el interior por el artista m e­


xicano Juan Correa.
Antecedentes.
Al oriente de la iglesia se construyó una
El Convento de Santa Teresa la Antigua suntuosa capilla en que se veneraba la imagen
es edificado en el año de 1684 cerca de la Plaza del Señor de Santa Teresa, durando su cons­
M ayor, en la Calzada de la calle de Santa Tere­ trucción 15 años, concluyéndose el 11 de m arzo
sa la A ntigua, hoy Calle de Licenciado Verdad. de 1813. Es derribada por un tem blor ocurrido
A ctualm ente no se conserva nada del conven­ en abril de 1845, cayéndose la bóveda; los es­
to ya que en su lugar se encontraba un edifi­ com bros despedazaban una parte de la venera­
cio propiedad de la Universidad Nacional A utó­ da imagen. Para repararla, se contó con limos­
nom a de M éxico. En cuanto a ésta congrega­ nas de gentes adineradas y se term ina esta en
ción, nos dice Rivera Cambas: “ Esta congrega­ 1858 y es pintada por el artista Don Juan Cor­
ción se establece con religiosas del orden de dero (fig. 1).
San A gustín, a la que perteneció Teresa Zepe­
da y Ahum ada, reform adora de la orden carm e­ Las iglesias de m onjas presentan coros al­
lita en la cual ingresó. Este es el origen de las to y bajo, divididos de la nave por un m uro en
Carmelitas Descalzas en la que se establece que encuentran, en el centro del coro bajo,
la austera disciplina m onástica dada en 1209 2 rejas separadas una de la otra “la distancia
por San A lberto, partiarca de Jerusalem ” (R i­ de un brazo extendido” y en los extrem os
vera Cambas, 1882). “la cratícula” o cum ulgatorio y la puerta de
acceso al convento, por la que ingresaban las
Llegan a México en 1604 y se establecen futuras religiosas. El coro alto presenta una re­
en Puebla; posteriorm ente tratan de fundar ja corrida de m uro a m uro y cubriendo el ar­
en esta ciudad otro convento. Estas religiosas co una celosía. En am bos coros existía una te­
tom an posesión de las instalaciones en donde la negra que im pedía a los curiosos observar
empieza a funcionar el convento el lo. de m arzo a las religiosas.
de 1616, siendo estas algunas construcciones
civiles. Hasta que el 7 de septiem bre de 1684 Desgraciadamente, los coros de Santa
se bendice finalm ente el convento. Teresa están m uy destruidos, pudiéndose encon­
trar recientem ente el m arco del coro bajo,
La iglesia está orientada de N orte a Sur, que se encuentra decorado de azulejos, y en la
presentando dos puertas de acceso en su lado pared superior una viga que corre a lo largo
poniente. Su construcción corresponde a la for­ de toda la ventana, decorada con el mismo
ma característica en que se realizan todos los diseño de los azulejos.
conventos de m onjas, edificando el tem plo de
una sola nave; el eje principal se traza parale­ Los coros bajos fueron utilizados para
lo a la vía pública, y atrás de éste, se constru­ enterrar a las religiosas. “ En los conventos
yen las instalaciones del convento. La iglesia m enos ricos los cadáveres se enterraban en el

283
piso, poniendo excepcionalmente losas sepul­
crales, para las fundadoras, por ejemplo. Cuando
estaba lleno se desenterraban las monjas más
antiguas y sus restos se echaban al osario común,
que era un agujero en un rincón del mismo
Coro” (De la Maza, Francisco; 1973).

Al levantarse el piso del Coro bajo de


Santa Teresa, se encontraron en el piso una se­
rie de criptas de 2m. por .60m., que corres­
ponden a los lugares en que se enterró a las re­
ligiosas de esta orden.

El trabajo arqueológico

La exploración arqueológica del Templo


de Santa Teresa la Antigua por parte del Pro­
yecto Templo Mayor, se realizó durante los
meses de septiembre a diciembre de 1979.
Estas investigaciones se llevaron a cabo a peti­
ción de la Secretaría de Asentamientos Huma­
nos y Obras Públicas, ya que se habían encon­
trado algunos entierros al remover el piso de
la nave de la iglesia, y los cuales eran: un entie­
rro infantil en caja de madera con recubrimien­
to de plomo, y que contenía entre el cráneo Fig. 1. Antigua litografía que muestra la Capilla
y la pared de la caja una botella de vidrio con un del Señor de Santa Teresa.
papel en el interior. Cerca de éste, se localiza­
ban las extremidades inferiores de un entierro Los dibujos de entierro se realizaron a
adulto, directo. escala 1:10 o 1:5, y el registro de los mismos
en un formato hecho conforme a los requeri­
También se encontraban restos óseos y mientos que plantea el lugar (-se anexa for­
cerámica dispersos en el área excavada por ma-, lámina 2). La profundidad de los mate­
SAHOP. El arquitecto Ricardo Lozano encar­ riales se tomó en base a la cota de nivel 2233.
gado de la obra, nos facilitó dos trabajadores 093 m.s. n.m.
de SAHOP y se contó con la ayuda de un tra­
bajador de Templo Mayor. A su vez se contó Para el control de los entierros se nume­
con la asesoría de la Antropóloga Física Ma. raron éstos enforma progresiva, anteponien­
Teresa Jaén del Departamento de Antropolo­ do la letra Aen los que presentaron ataúd;
gía Física del Instituto Nacional de Antropo­ el material fotográfico se localiza en los libros
logía e Historia, a donde se remitirán los mate­ del Proyecto Templo Mayor.
riales para su estudio.
Dentro de los trabajos realizados en esta
Se iniciaron los trabajos de exploración primera fase del trabajo, se realizó una exca­
de la zona siguiendo el sistema de control vación en las unidades F,G,H,I,J,K,L,M,N-
del Proyecto Templo Mayor, dibujándose el 13,14,15,16,17 y parte de 18. En esta zona
material en superficie a escala 1:20; la iglesia se encontraron algunos entierros primarios
se recituló en unidades de l m 2, y sobre un bastante incompletos, de los cuales, el entierro
plano escala 1:100 facilitado por SAHOP A 1 (del cual se transcribe su descripción),
(lámina 1). presentó una botella con un papel en.su inte-

284
El atáud de este entierro presenta tachue-
las de metal y encajes, adornando la orilla de
la caja y formando en el exterior de la pared
sur una cruz. La caja a su vez se encontraba
recubierta con tela. Este atáud es de los mejor
conservados que se han encontrado en estos tra-
bajos de exploración; los otros están muy
destruídos o solo se observa la huella de que
existieron. Otros entierros trabajados en la
nave son: 2, A3, A4, A5,A6,13,A14,15,16,
17 Y 18 (fig. 3 Y 4).

En el nivel IV de esta zona, se encontró


un empedrado y restos de muro, los que pueden
corresponder a construcciones del siglo XVI
que se derribaron para construir la actual igle-
sia. Entre estos restos se encontró gran canti-
dad de material cerámico muy fragmentado;
sobre el empedrado se localizó una "bajada de
agua", que corre de noroeste a sureste (fig. 5
Y 6) Y de los que se realizó planta y corte
(lám.4).

Fig. 2. Entierro Al con los elementos asociados a él,


se observa la botella que contenía el papel.

rior; este Entierro Al, es primario, infantil,


indirecto; depositado en un atáud de madera
con recubrimiento de plomo, aunque desgra-
cidamente no se conserva la tapa del mismo
(fig. 2). Los restos óseos se orientan de sur a
norte, están incompletos y removidos, recu-
biertos de cal; se conservan reo;tos de tela (pro-
bablemente del vestido o la mortaja) y frag-
mentos de cuero cabelludo.

Entre la pared sur de la caja y el cráneo,


se encontró una botella de vidrio verde orien-
tada de este a oeste, dentro de la que se locali-
zó un papel con fecha de agua 1828, y el cual
presenta un escrito con letras muy poco visi-
bles, pues la tinta se ha borrado en casi todo
el papel.

Hasta el momento solo se han logrado leer


parcialidades de su contenido, gracias a distin-
tos procedimientos utilizados y se presenta Fig. 3. Entierro A3, del que solo se conservaban las
al final del texto como apéndice. extremidades inferiores.

285
tico, por lo que se continuó el trabajo utili-
zándose una bomba de agua, y además se empe-
zó a ademar las paredes del pozo.

Se ha encontrado escaso material cerámi-


co, y a 3. 70m. del piso de la cripta se locali-
zó un grueso piso de estuco en que se encuen-
tra una depresión en forma circular con recu-
brimiento de estuco que puede corresponder
a un ojo de agua (fig. 7). El pozo se trabajó
hasta una profundidad de 4AOm. encontrán-
dose mayor cantidad de material en los niveles
más profundos. De este pozo se presentan los
dibujos correspondientes (lámina S y 6).

En la Capilla del Señor de Santa Teresa,


se encontró un nicho al norte de la pared po-
niente de la misma, a una altura de 2.20m.
del piso actual de la capilla; en este nicho se
localizaba una caja de madera de 3Sm. de an-
cho, .6Sm. de largo y 30m. de altura. Después
de registrarse se trasladó a una mesa para abrir-
la, presentaba la cerradura oxidada, y al abrir-
la se encontró una caja de metal en el interior,
con soldadura en el perímetro de la tapa.

Fig. 4. Vista de algunos otros entierros En su interior se encuentran cabellos tren-


excavados en la nave. zados y restos de tela, bajo los que aparecen
restos óseos dispersos y un cráneo; correspon-
den a un entierro secundario, al que se dio el
Cuando iniciamos los trabajos se encontra- núm. 7 (fig.8).
ba en el piso de la cripta del altar mayor, un
pozo de 2.90m. de este a oeste, y de 1.40m. de En la capilla pequeña de la iglesia, se lo-
norte a sur, excavado a una profundidad de calizaron varios entierros secundarios indirec-
1.20m. y del cual se había extraído material tos en el piso de la misma. Estos entierros se
cerámico que fue controlado por SAHOP. han localizado dentro de una serie de tiras de
ladrillos que corren a lo largo de la capilla;
Aprovechando este pozo, se continuó durante este tiempo se trabajaron los entierros
la exploración en un área de lAOm. de norte A8, A9, AlO, All, A19, A20, A21, A22, A23,
a sur y I.SOm. de este a oeste, al que se dio el y A24 (fig. 9 y 10).
número l. La finalidad principal de éste, era
tomar datos estratigráficos y coorelacionar la Bajo el piso del siglo XVI, se realizó el
información obtenida con otros pozos extra- pozo No. 2, dentro de las unidades F,G-17,
tigráficos realizados en el Proyecto Catedral 18; el principal objetivo era determinar la pro-
y el Proyecto Templo Mayor. Esta exploración fundidad de los cimientos de la iglesia, aunque
se controló por niveles métricos de .SOm., a esto no se logró observar debido al nivel freá-
partir del 1.2Om. excavado anteriormente. tico. En este pozo se registró muy poco ma-
terial (fig. 11).
El material obtenido será analizado en el
laboratorio de Prehistoria del INAH. Al explo- Dentro de los trabajos realizados por
rarse se encontró un piso de lajas a I.SOm., SAHOP en el coro bajo, se encontro un hueco
y un pozo más abajo se encontró el nivel freá- rectangular en el muro, y que corresponde a

286
la ventana del coro. Está decorada con azule- núm. renglón lectura observada
jos en las paredes laterales e inferior. En la
pared superior se encuentra una viga que corre 1
.a lo largo de toda la ventana, la cual presenta 2 Cap. °4°
una decoración similar a los azulejos. 3 Redosmortaks
Esta zona de la iglesia falta excavarse. 4
Debajo del piso que retiró SAHOP se encuentran 5 Dn. José
algunas fosas orientadas de norte a sur, en que
se localizan los restos óseos de las religiosas 6 Villamil
del convento. 7 Nació en la ciudad de México
8 septiem bre de 1832
Apéndice
9 de mayo de 1834
Hoja de papel encontrada en el interior 10
de una botella de vidrio verde asociada al en- 11
tierro Al, excavado en la nave de la iglesia de
Santa Teresa la Antigua. Este papel presenta 12
una fecha de agua visible de 1828, el escrito 13
está muy borrado, lográndose leer a la fecha: 14

Fig. 5. Cimientos del siglo XVI en el extremo derecho un piso de empedrado,


al centro un muro, y al extremo izquierdo un piso de lajas.

287
Fig. 6. Detalle del empedrado y el muro.

288
Fig. 7. Pequeña oquedad de estuco localizada en el pozo No. l.

289
zando papel 5. También para futuras
pruebas, se conseguirá papel filtro color
amarillo y ámbar.

Esta primera prueba se realizó el día 6


de diciembre de 1979, cqn la participación
de los antropólogos físicos Arturo Romano
P. y Ma. Teresa Jaén.

BIBLIOGRAFIA

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1863 Las iglesias y conventos de México. Con
una reseña de la variación que ha sufrido durante el
gobierno de Don Benito Juárez, Topografía de M. Vi-
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1925 Historia Sumaria de la Ciudad de México,
Editorial Cultura, México, 1925.

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Fig. 8. Entierro secundario A7, al abrirse Editorial Santiago; México, D.F", 1946, (capítulo
las cajas que lo contenían. VIII, pp. 353400).

Rivera y Cambas, Manuel


1882 México pintoresco, artlstico y monumental,
Para la lectura presentada anterior- tomo segundo, Imprenta de la Reforma, Perpetua
mente, se utilizaron distintos procedimien- 714, México, 1882.
tos:

luces monocromas, luz ultravioleta


(4000 Angstrom) e infraroja (7000 Angs-
trom), empleando también filtro amarillo
factor
2, ultravioleta y pantalla polarizan te. Se
utilizó luz fluorecente normal y luz emitida
por foco fotográfico photo flud No. 2.

En otra prueba se puso por debajo del


documento un fondo de papel amarillo
semejante en tono al filtro amarillo 2,
habiéndose logrado leer parcialidades de los
renglones. '

En breve se realizaran pruebas fotográ- Fig. 9. Entierro secundario All, localizado en la


ficas con película de alto contraste y utili- entrada a la' capilla norte.

290
Fig. 10. Entierro secundario A23, excavado en la capilla norte.

291
Fig. 11. Pozo No. 2 Y pisos de estuco
localizados en el mismo.

INDICE DE LAMINAS

Lámina 1. Plano de la iglesia, que presenta las


unidades de excavación.

Lámina 2. Forma utilizada para el registro de


los entierros.

Lámina 3. Planta y cortes de los cimientos del


S.XVI.

Lámina 4. Planta del pozo No. 1, realizado en


la cripta del altar mayor.

Lámina 5. Corte del pozo No. 2.

292
------- IV RESTAURACION

293
--- Informe de la sección de restauración.

pm:YOLANDASANTAELLA tutivos fuesen estables a la acción del ambiente


que los rodeaba, o que alcanzasen con el mismo,
1. INTRODUCCION después de cierta degradación original, un equi-
librio físico-químico. En el momento de ser
La conservación de la arqueología de campo recuperados por el arqueólogo el equilibrio
físico-químico se rompe al ser expuesto a las
Los objetos o residuos de los mismos, nuevas condiciones exteriores, distintas a las que
que constituyen los artefactos arqueológicos los rodearon durante su abandono, dañándose el
que el arqueólogo recupera para reconstruir objeto y ocasionando pérdida de datos.
el pasado de grupos humanos desaparecidos,
generalmente han estado expuestos a la acción Hay que considerar, además, que la acción
de los agentes ambientales que los rodeó duran- misma de la recuperación arqueológica tiene
te su vida histórica, ya sea porque fueron depo- cierto carácter destructivo que coopera a la de-
sitados como ofrenda, u objeto de culto en de- gradación. Asimismo, no debemos olvidar
terminados sitios, o abandonados o perdidos las deficiencias de preparación y recursos teni-
una vez que cumplieron su función, o por al- dos por el arqueólogo, intervenciones que han
guna otra circunstancia, quedando expuestos colaborado en el pasado a la pérdida de I!0
a los agentes de deterioro en las siguientes pocos datos.
condiciones generales:
Para prevenir y minimizar estos problemas
a) expuestos a la acción directa de la intem- se ha desarrollado una especialidad de la con-
perie. servación de los bienes culturales, la conser-
vación de campo, cuyas características son de
b) Semiprotegidos en locales techados, evi- una intervención preliminar de intención pre-
tando la acción directa del viento, insola- ventiva, efectuada en el momento de la libera-
ción, lluvia, etc. ción de los objetos, en el sitio o zona arqueoló-
gica misma, con la finalidad de preservar a los
c) Protegidos en tumbas, cuevas, templos artefactos y los datos que contienen hasta que
u otros locales resguardados. éstos puedan ser estudiados en el gabinete, o
los objetos tratados en las condiciones ideales
d) Enterrados en diversos estratos del suelo. de un laboratorio de conservación.
e) Sumergidos en agua o bajo el nivel freá- La conservación arqueológica de campo en
tico. México

La unica oportunidad que estos artefac- En México la conservación de campo se


tos tenían de sobrevivir sin daños, guardan- ha realizado por los arqueológos mismos, y es
do toda la información que aportaría datos paralela a la historia de la arqueología. Se em-
al arqueólogo, fue que sus materiales consti- plearon los materiales y los procedimientos más
295
diversos, no siempre los más adecuados, siendo, dere la conservación de campo. Ya son varios
en consecuencia, variables sus resultados de los casos en donde arqueólogos y conservado-
efectividad conjugándose éxitos con fracasos, res han trabajado juntos en la preservación
cuyo resultado ha sido la pérdida de valiosos de obr.as y monumentos, con el fin de salvar
testimonios y bienes culturales. No es raro en- así el dato arqueológico.
contrar tepakates que quedan sin decoración,
que sólo muestran restos de la policromía La labor del restaurador de campo ha si-
eliminada durante lavados descuidados; obje- do velar porque el artefacto arqueológico li-
tos de cerámica con policromía postcocción, berado de su enterramiento, sea levantado y
donde el fijativo, ahora insoluble, está strap- colocado adecuadamente, y transportado con
panda a la capa de pintura; huesos o piedras seguridad al lugar donde se le pueda aplicar
que se desintegran por la falta de un tratamien- el tratamiento definitivo.
to, u obras que por haberlas expuesto a la in-
temperie sin la protección adecuada han desa- Es conveniente mencionar que dadas las
parecido completamente a causa de los ele- condiciones del país, no existen arqueólogos
mentos, como las desaparecidas pinturas del ni restauradores en número suficiente, con ex-
Templo o Palacio de la Agricultura de Teotihua- periencia en conservación de campo; además,
can, o por la acción vandálica del turismo y los proyectos no siempre cuentan con el presu-
del saqueo. Estas intervenciones fueron reali- puesto y los recursos necesarios para realizar
zadas tanto sobre objetos muebles como in- en forma adecuada estos trabajos; la concien-
muebles, y sus problemas no sólo pueden cia sobre la importancia de esta actividad. Sin
apreciarse en el deterioro material, sino aun embargo, debe mencionarse, que ha habido al-
en el grado de invención que no pocas accio- gunos acontecimientos indicadores de la preo-
nes se realizaron .con criterios equivocados, cupación creciente que existe entre los arqueó-
inventando faltantes de edificios y otros monu- logos y restauradores para resolver este proble-
mentos, o aun éstos mismos. ma, siendo el primero de éstos la Reunión
Técnica Consultiva sobre Restauración de Mo-
La intervención en conservación de campo, numentos y Zonas Arqueológicas, organizado
de manera sistemática, se inlcia con la funda- por el INAH, la Sociedad Mexicana de Antro-
ción a fines de 1960, en el INAH, del Depar- pología y el Instituto de Investigaciones antro-
tamento de Restauración y Catálogo del Patri- pológicas, en agosto de 1974.
monio Artístico, y del Laboratorio de Conser-
vación de Materiales Arqueológicos, adscritos En esta reunión, el intercambio de infor-
al Departamento de Prehistoria, por Manuel mación entre arqueólogos, restauradores de ~
del Castillo Negrete y Jorge Angulo, respecti- bienes muebles e inmuebles, arquitectos, res-
vamente. tauradores y otros especialistas, se concretó
en las conclusiones publicadas en el Boletín
En un principio se interviene sólo en obras del INAH No. 10, 11 Epoca, julio-septiembre
importantes, como las pinturas murales de 1974.
Teotihuacan, Cholula, Tenayuca, Las Higueras;
en objetos de piedra, como las estelas en el
Esta reunión traj o como consecuencia un in-
área maya, o de rescate del Cenote Sagrado de
cremento de la conservación de campo en la ar-
Chichen Itza, y en la construcción del Siste-
queología, que se puede apreciar por la creación
ma de Transporte Colectivo (Metro). Otro ti-
de la clase de conservación para arqueólogos en
po de intervención sobre objetos orgánicos,
la Escuela Nacional de Antropología; la clase de
edificios, etc., son aún más raros, y salvo ex-
conservación en arqueología de campo en la
cepciones, han quedado inéditos.
Escuela Nacional de Conservación, Restauración
y Museografía, y el cursillo de conservación
Estos antecedentes han hecho que actual- en arqueología de campo del HA. Los trabajos
mente exista una mejor conciencia sobre la con- de restauración del Departamento de Conser-
servación de bienes culturales y se preocupe vación del Patrimonio Cultural, del Departa-
porque en los proyectos arqueológicos se consi- mento de Salvamento Arqueológico, trabaján-

296
dose, entre otros casos, en las pinturas murales puestos insolubles. Estas costras pueden ocul-
de Cacaxtla, en la restauración de la Estela 1 tar las decoraciones y disefios pintados, o de
de Bonampak, y desde luego, el ejemplo más formar los relieves, impidiendo su lectura;
importante, en el proyecto arqueológico del pudiendo también haber manchas o decolora-
Templo Mayor. ción de los materiales que afectan su imagen.
Pero más peligrosa es la acción de las sales so-
La destrucción de material arqueológico lubles, que en el desecamiento cristalizan, y
algunos con los cambios de humedad se hidra-
Debido al cambio de condiciones que oca- tan, generando en ambos casos presiones consi-
siona la liberación del objeto o las estructuras derables que dafian mecánicamente a los mate-
arqueológicas, y que desencadena el deterioro riales.
al exponerlas a las condiciones externas, se
provoca una alteración en la estabilidad físico- Como consecuencia de estas alteraciones
química del material constitutivo del artefac- de la materia, los datos de interés arqueoló-
to, y los deterioros pueden afectar la forma gico sufren una degradación paralela, se pier-
o causar alteraciones dimensionales, provocar de la forma, la decoración, la policromía y el
tensiones que dafian mecánicamente a los ob- di~efio, y la evidencia material de tecnología,
jetos, con el desarrollo de grietas o fisuras, uso, procedencia u otro dato de interés se al-
o bien pueden provocar la fracturación o el tera, confunde o desaparece completamente.
desprendimiento de películas de pintura, deco-
ración o labrado, siendo a veces tan profunda
La conservación de campo pretenderá,
la alteración, que incluso puede terminar en la
pues, guardar esta evidencia arqueológica, con-
desintegración completa de los materiales. trolando los deterioros mencionados; asegu-
rándose, además, de que el levantamiento, el
En general, los materiales que más sufren manejo, transporte, empaque y estudio no dañe
son los orgánicos, ya que para que éstos puedan esta evidencia, por lo menos hasta que el ar-
preservarse en condiciones de enterramiento queólogo pueda recuperarla, o el objeto llegue
se requieren características muy especiales al taller para someterse al tratamiento de con-
que previenen la acción de agentes biológicos y servación adecuado.
físicos que afectan sobremanera a estos mate-
riales deleznables. En consecuencia, los cambios En la liberación de los inmuebles, la acción
de temperatura y de humedad en el aire pueden de los agentes de deterioro es igual de extensa,
ocasionar que durante el desecamiento se pro- pero la vida de las obras de los materiales cons-
duzcan cambios dimensionales provocadores de tructivos sufre un problema adicional, por el he-
tensiones, y la acción de la tensión superficial cho de encontrarse enterrados en una matriz
durante el secado desencadenan fuerzas; en am- que hace imposible o difícil el poder controlar
bos casos se colapsa por completo la estructu- la acción de la intemperie, o de los agentes de
ra celular. deterioro qu.e puedan hallar constantemente su
camino del suelo a la atmósfera.
En caso contrarlo, con la humedad eleva-
da, la exposición al aire puede favorecer el Por lo tanto, la acción de la conservación
crecimiento de microorganismos. de campo incluye, también, la prevención
de dafios en los materiales constructivos de los
Los materiales inorgánicos son muy esta- inmuebles y de los elementos asociados a los
bles a los cambios dimensionales por ser poco mismos.
higroscópicos, sin embargo pueden sufrir de-
terioro químico a causa de la acción constante La importancia de conservar el material recién
de la humedad. El proceso de hidrólisis de los excavado
componentes minerales los disuelve, transporta
y precipita, ocasionando una extracción del Los artefactos arqueológicos como bie-
cementante, y esto los hace débiles favorecien- nes culturales producidos por culturas desapa-
do la formación de costras superficiales de com- recidas, tienen otra significación especial como

297
umcos vestigios de la cu1tura de sociedades integra, desde su planeación en el Proyecto del
desaparecidas. Ellos son transmisores de un Templo Mayor, la conservación de campo de
mensaje, como dice Biek: el mensaje de un una manera global y no específica para una obra
hombre inteligente, el constructor, a otro hom- de importancia. Hay que considerar, en segun-
bre inteligente: el arqueólogo o investigador. do lugar, que la circunstancia de trabajar en la
Es la única forma en que hombres y culturas Ciudad de México permite la utilización del
muertas pueden hablar, y toda la potencialidad máximo de recursos y asesoría técnica, ya que
de ese mensaje se encuentra en la condición así es posible obtener experiencia con el míni-
del artefacto en el momento en que es extraí- mo riesgo que cuando se está en condiciones
do, tanto en su condición material como en el de campo más desfavorables. Existe, además,
contexto o posición que ocupó en su lugar de la circunstancia de las fuentes históricas que au-
hallazgo. nan el tipo de hallazgos, tanto en estructuras
como en objetos particulares, y algunas inves-
La acción del arqueólogo al disturbar el tigaciones que mencionan los posibles tipos de
sitio en donde permanecieron por siglos y la objetos materiales y problemas que se pudieran
acción de los agentes que se desencadena al ex- encontrar; además, el tipo de suelo y las condi-
traer los objetos, borrará ese mensaje del pasado; ciones del subsuelo son también conocidas, lo
es pues la responsabilidad del arqueólogo, del que permite prever los problemas que presen-
restaurador de campo y todos aquellos que te- tarán los materiales encontrados.
nemos el privilegio de cuidar la herencia cul-
tural, que la integridad del mensaje se preserve
para ser juzgado por nosotros y por las genera- En estas condiciones la experiencia gana-
ciones venideras. da al trabajar juntos arqueólogos, restauradores,
y contar con la asesoría de laboratorio y téc-
Actualmente, cuando la técnica de conser- nicos, será de gran utilidad para futuros traba-
vación se ha desarrollado en forma apreciable, jos de este tipo.
el deterioro de los materiales al ser excavados
es una negligencia criminal, y es nuestra respon-
El Templo Mayor
sabilidad el proveer los medios para que estos
documentos sean preservados.
La ciudad de México-Tenochtitlan fue la
ciudad más import~mte del altiplano en el mo-
La conservación en el Templo Mayor mento de la llegada de los espaftoles, y es uno
de los sitios arqueológicos de mayor importan-
El Templo Mayor es un ejemplo, el más cia para la arqueología de Mesoamérica. Sobre
claro y representativo, de la conciencia y evolu- esta ciudad existen numerosas descripciones y
ción que ha tenido la arqueología y la conser- relatos, desde los conquistadores mismos, como
vación en nuestro país, al incluir un equipo de Bernal Díaz del Castillo y Hernán Cortés, has-
conservación que atiende a los hallazgos en el ta magníficas reconstrucciones históricas y estu-
momento mismo de los descubrimientos, y que dios, como los de Marquina y Sonia Lómbardo.
incluye, desde su inicio, un equipo de conserva-
ción y un laboratorio de campo. La acción de Sin embargo, a pesar de la gran cantidad de
este equipo de trabajo comprende desde las informaciones que se tienen, hay pocos conoci-
operaciones realizadas in situ, el levantamiento, mientos comprobados por la investigación
el transporte al taller y los tratamientos preven- arqueológica directa, pues la totalidad de los tra-
tivos realizados en el taller de campo, hasta bajos arqueológicos realizados, aunque muchos
incluso, la realización de tratamientos comple- de ellos de gran calidad, han sido trabajos de
tos a los objetos importantes. salvamento que se realizaron por o durante la
ejecución de una obra de infraestructura, en los
El Proyecto del Templo Mayor tiene cuales no se ha podido tener una planificación
varios aspectos fundamentales para la conser- o hipótesis del proyecto, y por lo general, se
vación de campo. En primer lugar hay que des- trabajó contra reloj, tratando de no detener la
tacar que ésta es la primera ocasión en que se realización de la obra.

298
Históricamente se han realizado las si- en el público y las autoridades, lo cual ofrece
guientes intervenciones en el Templo Mayor: una magnífica oportunidad que se puede apro-
vechar para sensibilizar al público sobre nuestro
1790. Al realizar unas obras en la Plaza de Ar- pasado y la importancia de su preservación.
mas de la Ciudad de México, se locali-
zaron la Piedra del Sol y la Coatlicue. El problema de conservación en el Templo
Mayor presenta las características generales,
1900. Batres realiza trabajos de rescate en la que son las condiciones del medio en el que se
calle de Las Escalerillas (hoy Guatemala), encuentran los objetos y estructuras, las que se
cuando se construyó el colector. derivan de la localización del Templo Mayor
en el centro de la ciudad, y los propios de los
1913. Gamio localiza arqueológicamente el materiales arqueológicos enterrados.
Templo Mayor.
Como es sabido, el suelo de la ciudad de
1948. Moedano y Estrada Balmori amplían las México-Tenochtitlan fue siempre un problema
excavaciones de Gamio, localizando la pla- papa los aztecas, pues la falta de territorio para
taformacon cabezas de serpiente como habitación y cultivo fue siempre un problema
adornos, un brasero y una serpiente. que urgía resolver; es por esto que se dedicaron
a aumentar el terreno construyendo chinampas.
1968. Se explora una ofrenda, localizando es-
culturas sedentes, máscaras, estatuillas El material de relleno para los templos fué
(piedra) estilo guerrero y cráneos. también tomado posiblemente del fondo del
lago; así los objetos desenterrados se encontra-
1978. En febrero 21, la Compañía de Luz y ban en un suelo fino, ácido, con cierto conte-
Fuerza descubre la escultura de la Coyol- nido de sales y de materia orgánica, y hay que
xauqui.
considerar, además el nivel freático demasiado
cerca de la superficie, que ha hecho que gran
1978. Marzo 20. Se crea el Proyecto del Templo parte de los hallazgos se hayan realizado en con-
Mayor, interviniendo ya con planteamien- diciones de alta humedad, si no es que abajo
tos y un programa. del nivel freático, en un barro excesivamente
húmedo.
Es pues, el Proyecto del Templo Mayor,
a diferencia de las antiguas intervenciones Esta circunstancia ha traído como conse-
que han tenido un carácter más bien de rescate, cuencia que los materiales inorgánicos porosos
la primera y mejor oportunidad que han teni- hayan sufrido procesos de hidrólisis que pueden
do los arqueólogos para efectuar una investi- apreciarse en distintos grados en las piedras,
gación con mejores condiciones de realización e incluso en la cerámica; por ejemplo la escul-
en la antigua México-Tenochtitlan, y compro- tura en piedra verde "La Mayahuel", donde de-
bar en estas circunstancias los aportes de las coloraciones rojizas por la hidrólisis de materia-
fuentes históricas, complementarlas y suple- les ferromagnecianos han producido óxidos e
mentarlas. Una de las circunstancias que aumen- hidróxidos de hierro. Los velos de carbonatos,
tan la importancia del Proyecto Templo Mayor que se encuentran o forman sobre los murales
es el hecho del dominio de los mexicas sobre y que hace después necesaria su limpieza, se
sus contemporáneos y vecinos, que contribuían deben también a la presencia de la humedad,
con tributos, muchos de los cuales se encuentran pues estos velos de carbonato de calcio se for-
en el Templo Mayor como ofrendas, de manera man al momento de producirse la desecación.
que los hallazgos representan no sólo los recur-
sos e industria de los mexicas, sino también La ligera acidez del suelo ha restringido
los de sus contemporáneos y vecinos. la actividad microbiana durante el enterramien-
to, extrayendo parcialmente el cementante de
Los hallazgos impresionantes como el de los materiales calcáreos, que en consecuencia
la Coyolxauqui han despertado gran interés se encuentran debilitados; esto es particularmen-

299
te notable en las conchas y el material óseo, sien- tráfico de vehículos, que afectan a las obras,
do menor en las pinturas y aplanados calcáreos. así como la constante afluencia de visitantes.
Como el desecamiento no se produce rápidamen-
te, se ha observado el crecimiento de algas
cloroficease en los muros. 2. TRA TAMIENTOS y MATERIALES USA-
DOS EN LA CONSERVACION y RESTAURA-
La mayor parte de los problemas que se CION DE LOS BIENES CULTURALES HA-
encuentran ocurren durante el desecamiento, LLADOS EN EL TEMPLO MA YOR
pues existiendo un buen número de materia-
les con un alto contenido de humedad, hemos Los tratamientos de conservación y restau-
observado el aconchado de la capa pictórica, ración se efectúan en el área de excavación,
el deterioro de huesos, conchas, torceduras y en el momento de la misma. en los altares, la
agrietamientos en la madera. pintura mural, las esculturas asociadas a la arqui-
tectura, y en los artefactos contenidos en las
Con el desecamiento los rellenos de lodo ofrendas, así como en el Taller instalado en el
se encogen, y se observa la aparición de grietas mismo lugar del proyecto.
en aplanados y pinturas murales, e incluso
desprendimientos de la superficie. Como conse- El criterio de restauración seguido fue el
cuencia de la localización céntrica del Templo de la no reconstrucción, conservando el monu-
Mayor, hemos tenido que enfrentarnos a los mento tal y como se iba descubriendo, ya que
problemas como la contaminación atmosféri- este es un dato histórico muy significativo, y
ca y las vibraciones que se derivan del intenso como tal debía quedar.

Los tratamientos de conservación se realizan en el área excavación, en el inmueble y sus elementos asociados.

300
Así, se fue avanzando en la excavación
y aparecieron la estructura arquitectónica con
su fachada principal orientada al oeste; sus
diversas épocas constructivas, variando éstas
de 6 a 11 sus dobles escalinatas y alfardas,
arranques de muros, pisos, banquetas y descan-
sos, y principalmente los dos templos: el de
Tlaloc y el de Huitzilopochtli, localizados en
la parte superior de la pirámide, dato arqueoló-
gico que corrobora las fuentes históricas; estos
templos se encuentran destruídos en su parte
superior; así también, es de gran importancia la
presencia de pintura mural en ambos, con figuras
humanas representando a dos sacerdotes con
sus atavíos, el cual es un dato de gran importan-
cia para el conocimiento de la cultura mexica,
ya que casi no hay pintura mural de esta cultu-
ra in situ.

Estos templos se encuentran con una parte


abajo del nivel freático. Así, al ir liberando el
edificio, los agentes de deterioro actúan de la
misma forma que sobre los bienes muebles, pero
agregando el hecho de que al encontrarse ente-
rrados en una matriz, hace difícil el poder con-
trolar la acción de la intemperie y los daños El nivel freático se encuentra muy cerca de la superficie.
en los materiales constructivos y los elementos
asociados.
Como es la cal uno de los materiales cons-
Como ya se dijo, el suelo de México-Te- titutivos de los estucos originales, la hemos usa-
nochtitlan fue construido mediante el sistema do para el tratamiento de los mismos, ya que el
de chinampas, dando origen a que las estructu- uso del cemento se ha descartado porque traba-
ras arquitectónicas desenterradas se encuentren ja mecánicamente en forma diferente a como lo
en un suelo ácido, con sales y materia orgáni- hace el estuco; además de ser más rígido que
ca, y que el nivel freático esté muy cerca de la éste. Con la cal se realizan diversos procesos,
superficie, hallándose las estructuras con alta desde el apagado de la cal en piedra, el cerni-
humedad y a veces abajo del nivel freático, do y el podrido de la misma, dándole a este úl-
dando como resultado deterioros como: hidró- timo proceso el mayor tiempo posible para
lisis, formación de sales; originando carbona- lograr una buena hidratación y evitar futuros
tos, que se forman en el momento de la dese- daños como las palomas, lográndose una buena
cación, así como la formación de grietas. mezcla, propia para hacer los morteros de cal y
arena, usados para hacer los resanes y la pasta
Conforme se va excavando las superficies de cal más acetato de polivinil02 para realizar
recubiertas por estuco van apareciendo muy las consolidaciones, o también usando Primal
húmedas, con el lodo muy adherido, y a veces AC-333 para este mismo fm. Otro componen-
sin adherencia del estuco al muro, o fragmenta- te del mortero es la arena, la cual se lava para
do, por lo que, previa limpieza, se van resanan- eliminar sales y materia orgánica; se le cierne
do, consolidando, y luego de haber secado se para homogenizar su tamaño y lograr asÍ"una
procede a la impermeabilización. 1 buena adherencia.

301
Las pinturas murales de las pilastras fueron
ejecutadas sobre un enlucido de cal; posiblemen-
te sea un temple. Tiene la representación de una
figura humana con el atavío de sacerdote. La
pilastra norte, representa en su cara interna,
una figura humana ataviada a la manera sacerdo-
tal, con los siguientes colores:

azul: un tono

ocre: dos tonos

rojo: tres tonos

rosa: tres tonos

rosa: un tono

negro: un tono

gris
La medida de esta pintura mural es de
1.66 X 1.47 m. Posiblemente se trate de una
técnica al temple.

La pilastra sur también tiene una figura


Conforme se va excavando las superficies estucadas
van apareciendo, fragmentadas o separadas del humana ataviada como sacerdote, pero con los
muro, por lo que desde aquí se inicia su tratamiento. colores siguientes:

azul: dos tonos


La superficie de estuco trabajada en los
procesos de resane, consolidación, limpieza e ocre: dos tonos
impenneabilización ha sido de 1655.45 m.2,
y el área que se está trabajando es de 1314. rojo: tres tonos
79m2.
rosa: un tono
Pintura Mural
negro
La pintura mural se halla integrada a la
arquitectura, en las secciones 1 y 2 de la pirá- gris
mide.
Mide 1.76 X 1.43 m., con una posible técnica
En la sección 1 la encontramos en los tem- al temple.
plos de Tláloc y de Huitzilopochtli, y en ellla-
mado Altar Rojo. En la sección 2, en el Patio El Altar Rojo tiene representaciones geo-
de los Altares. métricas como entretejidas, con los colores:
En el Templo de Tláloc se encontró recubrien- rojo: un tono
do las dos pilastras que están a la entrada del
Templo, tanto en sus caras interiores y exter- blanco: un tono, dado por la cal del enlucido.
nas como en los muros del interior de este re-
cinto. negro

302
Patio de los altares

La pintura mural se encuentra en varios


altares, como en el Mural de los Círculos, el
Altar, con una calavera empotrada, y en el
arranque del muro, con resto de pigmento
rojoS además hay otras estructuras en otros
niveles inferiores, y mediante cala se ha encon-
trado pintura mural.

Se analizaron los pigmentos del Mural


de los Círculos (No. 11), dando los siguientes
resultados después de los análisis realizados
por el Ing. Alejandro Huerta c., del Depto. de
Restauración del Patrimonio Cultural del INAH.

resultados:

"El corte estatigráfico de las 2 muestras,


indica que la capa de pintura se aplicó sobre
una capa fina de enlucido blanco a base de car-
bonato de calcio: debajo de ésta capa blanca se
encuentra un aplanado aparentemente de cal y Pintura mural del Templo de Tláloc,
arena. ejecutada sobre un aplanado de lodo.

"El pigmento rojo de los Círculos (muestra Según se va descubriendo la superficie


No. 1) está formado por el pigmento conocido pictórica se va limpiando cuidadosamente el
como ocre rojo (óxido de hierro), aplicado por lodo adherido mediante agua destilada, alcohol
la técnica al temple, según el corte estatigráfi- etílico, y resanando los bordes de la pintura
co. mediante un mortero de cal-arena (2 a 1), con-
solidando donde hay separaciones mediante
"El color azul de las franjas anchas (mues- pasta de cal y acetato de polivinilo. También
tra No. 2), estd formado por el pigmento azul según el caso, se usa Primal AC-33. Una vez
maya, aplicado también por la técnica al tem- terminado se fija el color con Paraloid B72.,
ple".
o un fijativo apropiado si hay presencia de
humedad.
Nota: El pigmento azul maya fue objeto de
comercio en el mundo prehispánico, y lo encon-
tramos en la pintura mural de Las Higueras, Un tratamiento especial sería el de la pin-
Ver., Cholula, Pue., Cacatla, Tlax., por mencio- tura mural de los Templos de Tláloc y Huitzi-
lopochtli, pues está ejecutada sobre un aplana-
nar algunos. Asimismo lo hay en algunas pintu-
do de lodo.
ras murales coloniales.

Tratamientos En el muro hecho dejado húmedo y pie-


dra había la posibilidad de que al secar se ca-
yera junto con la capa de pintura, por lo que fue
Ya que la pintura mural esta integrada a
necesario consolidar el muro usando Curasal AR
la arquitectura, su causa de deterioro será la
procediendo luego a limpiar el excedente, a
misma, manifestándose los daftos en: desfa-
samientos, grietas, faltan tes, lagunas, y las pro- eliminar las sales y a resanar los faltantes.
pias de la pintura mural; falta de adherencia al
muro, a los aplanados, al enlucido y a la capa
pictórica.

303
totalmente cubierta por el núcleo de la pirámi­
de, piedras grandes de tezontle y lodo. A partir
de este momento la humedad fue constante
hasta su descubrimiento; esta humedad le
provocó una serie de alteraciones en su estruc­
tura, de forma tal que si se seca rápidamente
puede fracturarse en la superficie y perder los
relieves que no son muy profundos pero sí bien
definidos.
“Debido a estas condiciones, desde el ini­
cio de su exploración y limpieza se trató de
mantenerla en humedad constante, para evi­
Examen de la pintura mural.
tar su resecamiento; se hizo necesario proyec­
tar y contruir una cámara especial de humedi-
ficación, con clima controlado que permitiera
La superficie pictórica encontrada hasta ir desecando la pieza paulatinamente, e irle
ahora ha sido de 78.54m2. colocando substancias adecuadas que permitie­
ran el cambio de humedad por otros compo­
3. LAS ESCULTURAS INTEGRADAS A LA nentes de mayor y definitiva resistencia. De
ARQUITECTURA. acuerdo al informe del personal de Restaura­
ción, esta pieza deberá conservarse en ese me­
Estas esculturas, como la Coyolxauhqui, la dio durante 8 o 10 meses para su tratamiento
Mayahuel, los portaestandartes, las serpientes, y consolidación definitiva”.
los braseros, el brasero Tláloc, el Chac-Mool
y la piedra de sacrificios, se han ido intervinien­
do in situ desde su liberación y sus tratamien­
tos subsecuentes.
Al monolito de la Coyolxauhqui, una vez
liberado, se le eliminó la tierra húmeda, se
fijó el pigmento y consolidó mediante conso­
lidante para piedra OH5
La Mayahuel, escultura en piedra verde,
fue encontrada y tratada según la siguiente des­
cripción :
“La piedra se depositó originalmente en
el sitio descrito, por lo que creemos se trata de
una pieza de carácter ceremonial y que nunca
funcionó como estela o escultura; su posición
es acostada tal como se encontró, simulando la
cubierta de una caja de ofrendas o tapando otros
elementos. Al depositarse en el área rodeada
de muros, como nicho, y colocársele los obje­
tos de ofrenda alrededor y por encima, inmedia­
tamente se tapó con arcilla fina y posteriormen­
te con piedras de tezontle de tamaños entre 10
y 15 cms. que la protegieron; por último quedó
Proceso de limpieza de una pintura mural
304
Mayahuel en el proceso de secado.

Se le dio un tiempo de secado para ini- guientes aparecieron en la actual ex.cavaclOn,


ciar su consolidación por inmersión, en el con- realizándose el proceso de limpieza de la tierra
solidan te para piedra OH, el cual fue aplicado húmeda y fijado del pigmento. Estos mismos
después de analizar la piedra y ver la compati- procesos se hicieron con la cabeza de serpiente
bilidad de la constitución de la escultura y los del lado oeste, junto al brasero Tláloc.
componentes químicos del material empleado.
Durante la excavación de 1.948, en la parte
Al brasero Tláloc, hecho en piedra y con sur de la pirámide fue hallada otra cabeza de
policromía, se le restauró mediante el criterio serpiente empotrada en el talud, así como dos
de anastilosis, ya que sus elementos formales braseros hechos en piedra y recubiertos con es-
se encontraban ahí presentes, procediendo a tuco, los que después de haber sido limpiados,
levantarlos y a hacer la unión de los fragmen- se les está dando un tratamiento para remover-
tos con resina epóxica, les las sales, mediante pulpa de papel.?

En la fachada principal de la pirámide Los portaestandartes, esculturas en piedra


se encontraron 3 cabezas de serpiente en piedra: que se hallaron fragmentados, sobre las esca-
dos adosad¿¡s a las alfardas y la encontrada por linatas de la primera época constructiva, tienen
Gamio, al talud, la cual conserva mínimos res- policromía corporal, además de chapopote en
tos de pigmento, que fueron fijados, procedien- la cara. Asímismo como fueron encontrados
do a lavar6 y a impermeabilizarla. Las dos si- en un medio muy húmedo, su tratamiento

30S
fue, antes que nada eliminar el lodo y las sales, Material óseo humano como:
fijar el pigmento y adherir pequeñas capas de
pintura, así como fragmentos de chapopote. cráneos, vértebras cervicales, maxilares y hue-
Parte de este proceso fue hecho in situ, y una sos cremados.
vez liberadas y levantadas, se transportaron al
taller, donde se continuó con el trabajo faltan te. Restos óseos de animales como:

Ocelote, cocodrilo, tortuga, caimán, vértebras


El Chac-Mool, escultura en piedra policro- de serpiente y restos de diversos tipos de aves.
mada, al ser descubierta integrada al piso, fren-
te a la entrada del Templo de Tláloc, fue trata- Restos de peces como:
da en los procesos de limpieza, fijado del pig:
mento, eliminación de' sales con pulpa de papel y Pez sierra, pez globo, pez puerco.
adherencia de fragmentos8 .
Carbón en polvo y en fragmentos.
La piedra de sacrificios se encontró empo-
trada en el piso, frente al Templo de Huitzi- Madera, con talla y sin ella (según análisis pre-
lopochtll, dándole el tratamiento de conserva- dominan los pinos).
ción.
Copal, en forma antropomorfa y amorfa.
Nota: se agregan con detalle, los tratamientos
efectuados a las siguientes piezas: Los materiales inorgánicos son: las escul-
turas antropomorfas y zoomorfas y objetos
La Coyolxauhqui, lápida verde (Mayahuel), rituales, trabajadas en piedra, algunas con poli-
las. vasijas cilíndricas, la olla Tláloc, El
Chac-Mool y los tecpatl, efectuados por el
personal de Restauración del Proyecto Tem-
plo Mayor.

4. OFRENDAS

Los materiales encontrados en las ofren-


das son objetos arqueológicos colocados en las
mismas con un carácter ritual, destinados a
pemanecer ahí como ofrenda permanente, y
'son objetos de naturaleza orgánica e inorgánica.

Los materiales orgánicos son objetos mari-


nos como:

Conchas: bivalbas, madreperlas, Spondylus. Es-


tando unas trabajadas y otras en su estado na-
tural.

Caracoles: Strombus, Xancus, Buccinos, Oliva


Busycon. Algunos han presentado pigmentos.

Corales: tipo rama, cuerno de alce, asta de


venado, red, cerebro.

Brasero "T/á/oc" in situ.

306
cromía y diseño, siendo las piedras de diversos mentos de tezontle rojo y negro, unido con una
tipos: piedra verde, serpentina, tezontle negro mezcla de cal y arena y otras acabadas con
y rojo, basalto, cantera rosa y gris, obsidiana, tierra.
tecalli, granito, caliza, y máscaras en piedra
verde (tipo Mezcala), algunas con glifos en su En otras ofrendas se han encontrado los
parte posterior, mosaicos de turquesas, cuentas, objetos arqueológicos sobre piedras, directamen-
xicohuaztli, discos, braseritos, narigueras, oreje- te sobre el suelo. El medio del enterramiento
ras, átlatl, cuchillos, punta de proyectil, raspa- de estas ofrendas, dio como resultado, en el
dor. análisis, un PH de 6; humedad del aire de la
ofrenda de 60-700/0, y tierra con una textura
Cerámica como: limo-arcillosa.
Vasijas antropomorfas y zoomorfas: ollas, ca-
jetes, platos, sahumadores, vasijas cilíndricas, En la ofrenda el material arqueológico
presentando algunas decoración como modela- se ha depositado en la tierra a diferentes nive-
do, esgrafiado, bajo relieve, al pastillaje, etc. les, implicando con esto una estabilización
y sufriendo presiones de los que se encuen-
Metales como: tran colocados encima de otros, siendo estos
de diversos pasos y volúmenes.
Cascabeles de cobre y oro, cuentas laminadas
de oro; una pequeña mascarita de plata. Ahora bien, el arqueólogo en la explora-
ción de una ofrenda, al levantar el piso de estu-
Esta serie de objetos se encontraron en ca- co debe tener cuidado de conservarlo para des-
jas o cistas, con sus paredes trabajadas con frag- pués volverlo a colocar en su sitio. Aunque se de-
be tomar en cuenta que los artefactos no se
levantan inmediatamente, puesto que el arqueó-
logo necesita registrar todo el material que va
descubriendo, lo cual implica que la pieza quede
expuesta fuera de su microclima y mini clima
donde había alcanzado su estabilidad, por lo
que se procura proteger inmediatamente el área
de la ofrenda, impidiendo que los objetos que-
den expuestos a la luz directa del sol; de la llu-
via, tierra y demás causas de deterioro que
puedan controlarse; manteniendo también la hu-
medad para evitar bruscos desecamientos.

En el inlerior de la ofrenda, debido a su


alto contenido de humedad, la tierra del medio
de enterramiento es plástica y se halla adherida
a los objetos, por lo que es necesario se le rea-
lice una limpieza mediante alcohol etIlico o
agua destilada, poniendo especial cuidado en
los que tienen policromía, ya que dependiendo
del estado en que esté la capa pictórica, es ne-
cesario fijar o consolidar este pigmento usando
Paraloid B72 o un consolidante en emulsión
en bajas proporciones, aplicándolo con fmas
brochas o pinceles.

También se interviene adheriendo partes


Brasero "Tláloc", una vez hecha la unión de fragmentos. que se van desprendiendo (ejemplo: mosaicos

307
de turquesa de un cuchillo técpatl), usando
Mowital B60H9 del 1 al 100/0, o haciendo ve-
lados (ejemplo: un cráneo fragmentado que se
quiere levantar completo), usando Mowilith
DM4 y DMIH10 (1 al) yagua destilada, o con
Mowilith SOal 30/0.11

Si el material está húmedo y requiere


que se le consolide, conviene usar un consoli-
dante en emulsión (Primal AC-33) en objetos
marinos, copal y a veces también en el trata-
miento de algunos pigmentos; y mediante una
solución de Paraloid B-72 al material seco, en
restos óseos humanos y animales, a la policro-
mía de cerámica y escultura, y en el material ~
marino. A la madera húmeda, con polietilen- Levantamiento del piso para explorar una ofrenda.
glicol E 10001 2 (1 a 1 en alcohol et ílico).

Resumiendo, los tratamientos realizados Dependiendo del grado de deterioro o


iil situ en la ofrenda comprenden una serie de degradación, así como la naturaleza del objeto,
pasos metodológicos, que van desde la libera- se llevan a cabo procesos de limpieza mediante
ción de los elementos, limpieza, remoción de agua destilada, alcohol etílico yagua de cal;
sales, ~asta el mantenimiento de la humedad, de adherencia de los fragmentos separados de
fijado de pigmento, adherencia a los soportes los soportes, con Mowital B6o-H, y de unión
consolidaciones, velado y levantamiento de los de partes o consolidaciones a nivel estructural
objetos; para luego trasladarlos cuidadosamente o de la capa pictórica, con Paraloid B-72 o Pri-
al taller y proseguir con su tratamiento. mal AC-33.

Hasta ahora se han encontrado 57 ofren- En cerámica, además, se realizan uniones


das en la excavación. de fragmentos, y resanes en las uniones, con
una pasta de resina sintética y un material de
5. TALLER carga que aumenta su resistencia y sirve de base
para la reintegración del color mediante colores
El Taller de Conservación fue instalado
acrílicos (politec).
en el mismo Proyecto, con el fin de preservar
los artefactos hallados durante la excavación y
de realizar intervenciones preliminares de tipo Además, se han llevad/) a cabo algunos
preventivo, para la cual se necesitó de materia- tratamientos como la consolidación de la madera
les reversibles estables, y compatibles con los húmeda de las dos jambas adosadas a las pilas-
objetos a tratar. tras que formaban el cerramiento del Templo
de Tláloc, primero transportándolas a un lugar
Como ya se anotó anteriormente, una vez acondicionado en el taller, a fin de poder sumer-
liberados y levantados los objetos son traslada- girlas en alcohol etílico para eliminar el agua
do al taller, donde, si fueron hallados en estado contenida en su interior. Más tarde se sustituyó
húmedo, se colocan dentro de una cámara hu- el alcohol por polietilenglical E 1000, y por úl-
midificadora, para mantener un ambiente si- timo se les dejó completamente descubiertas
milar al de su proveniencia. para dejar evaporar el solvente, y poder conti-
nuar con su limpieza. El excedente del PEG se
eliminó por medio húmedo y seco.

Siguiendo este método se trabajo una es-


taca de madera con un cráneo tallado hallada

308
I
/
Vista parcial de una ofrenda con sus diferentes elementos, colocados unos encima de otros,
siendo éstos de diversos pesos y volúmenes.

abajo del nivel frático en la etapa constructi- por el arqueólogo, la descripción del objeto,
va 111. estado de conservación, materia prima, mate-
riales usados, proporciones, observaciones, fe-
La escultura en piedra verde, Mayahuel, cha, ftrmas del arqueólogo y conservador, y
fue tratada en su consolidación, así como dos recomendaciones. En el reverso, para usb del
vasijas cilíndricas con las representaciones de taller, los tratamientos.
Quetzalcoatl y de Tezcatlipoca, realizadas en
bajo relieve. Una máscara Tláloc, realizada en En el taller, funciona también una libreta
cerámica (posiblemente el pigmento azul sea de registro, donde se asientan una serie de da-
azul maya). Alrededor de 40 representaciones tos referentes al elemento. Se registraron, hasta
de Tlá1oc, trabajadas en piedra, con superposi- el 28 de marzo de 1980, un total de 2982 ele-
ción de varias capas pictóricas, habiendo a ve- mentos, y 1739 ya que fueron trabajadas en el
ces separación entre ellas, y la restauración de taller.
varias piezas cerámicas de la época colonial,
así como diversos objetos de porcelana. Recomendaciones
Para tener un control de los elementos -Dar una correcta solución museográfica que
encontrados en las ofrendas y sus tratamientos ofrezca óptimas condiciones de seguridad para
in situ, se maneja una forma donde quedan asen- la conservación del inmueble y sus elementos
tados los siguientes datos: los proporcionados asociados.

309
Liberación y consolidación de un objeto in situ, en la ofrenda.

310
Adherencia de fragmentos in situ, separados de su soporte.

311
-Igualmente para los bienes muebles, es conve- INAH
1974 "La conservación de los monumentos ar-
niente que se exhiban o almacenen en las me- queológicos". Primera Reunión Técnico-
jores condiciones para su conservación, y, si consultiva sobre conservación de Monumen-
es necesaria, con intervención del personal es- tos y Zonas Arqueológicas. Boletín INAH
pecializado del Departamento de Restauración Núm. 10, p. 51-54, Epoca 11, julio-sept.
México
deIINAH.
LOMBARDO DE RUIZ, SONIA
1973 Desa"ollo urbano de México-Tenochtitlan
-El inmueble y sus elementos asociados, nece- según las fuentes históricas.
sitan un constante mantenimiento especializado. SEP-INAH

MARQUINA, IGNACIO
-Quitar de su sitio original el monolito de la Co- 1960 El Templo Mayor de México.
yolxauhqui, poniendo en su lugar una réplica, México INAH.
ya que la pieza está expuesta a una serie de
deterioros. • MATOS MOCTEZUMA, EDUARDO
1979 "El Proyecto Templo Mayor", en CiencÜl
y Desa"ollo. Enero-Febrero, Núm. 24,
OBRAS CONSULTADAS p.30-33.

BIEK, Leo PHILlPPOT, PAULy PAULO MORA


"Artifacts", en Science in archaeology 1969 "La conservación de pinturas murales",
Ed. Brotwel1 and Higgs. London. en La conservación de los bienes culturales.
Museos y Monumentos, XI, p. 181-202.
UNESCO
DOWMAN, ELlZABETH
1970 Conservation in [ield archaeology. Methuen
& Co. LTD. London. RUIZ, R. LUIS
1911 Materiales de Construcción.
GARCIA COOK, ANGEL y RAUL ARANA
1970 Rescate arqueológico del monolito Coyol- RUlZ, R. LUIS
1911 MaterÜlles de Construcción. México
xauhqui. SEP-INAH

312
------ El tratamiento de conservación en piedra: tres casos.
por: MA. LUISA FRANCO B. Por estas razones, un equipo de Conserva-
ción del Centro de Churubusco colaboró en el
a) COYOLXAUHQUI: TRATAMIENTO DE tratamiento inmediato de Coyolxauhqui. Los
CONSOLIDACION integrantes de dicho equipo fueron: Carlos Mar-
tínez, Rodolfo Rojas, Alejandro Nishimura,
Datos Generales. Juan Hernández, Julio Chan, José Arroyo y Ro-
berto Peralta.
La escultura de la diosa Coyolxauhqui - "la
-de los cascabeles en las mejillas" - fue encontra- El trabajo efectuado fue el siguiente:
da el 21 de febrero de 1978, a los pies de la es-
calinata (sobre la plataforma general) que llevaba a) Limpieza superficial, tanto mecánica (con
al adoratorio de Huitzilopochtli, perteneciente a aguja de disección y brocha), como quími-
la época constructiva IVb del Templo Mayor. ca (con agua destilada en alcohol etílico
empleando hisopos).
La roca es una t-oba volcánica de tipo ex-
trusivo, clasificada como "t,ranquiandesita". Su b) Fijado de pigmentos con nylon soluble al
color es rosado claro con manchas blancas; los 2% en etanol.
minerales que la componen son plagioclasas, es
decir, feldespatos sódico-cálcicos. * Las dimen- c) Velado del área que abarca la grieta con pa-
siones de dicha escultura son: 3.25m x 2.95m de pel japonés y alcohol polivinílico.
superficie, y .30 de espesor.
Unión de fragmentos en el área de la grieta
Antecedentes. con resina araldita #6010 al 30u/o con el
endurecedor HY953, y algunos de los frag-
La pl'esión del suelo, los movimientos tectó- mentos sólo con Mowital B60H. *
nicos, el asentamiento del área y la humedad,
fueron causas del debilitamiento de la piedra, Tratamiento de Consolidación.
dando como resultado: la fractura que la divide
en dos partes y a lo largo de la cual el relieve Debido al estado de alteración en que fue
sufrió varias exfoliaciones; pulvurulencia en al- encontrado el monolito, aunque su conservación
gunas zonas; pérdida de pigmentos, e incrusta- en general es buena, se hizo necesaria también su
ciones de sales insolubles y lodo en los poros de consolidación.
la piedra (las sales existentes en la materia
prima fueron disueltas con el' agua que absor- Posteriormente al estudio del estado de la
bió y arrastradas por ella hacia la superficie de piedra se hizo una proposición de tratamiento de
la piedra; así, al momento de evaporarse el agua la misma. Esta fue hecha por las conversadoras
las sales se cristalizaron en la superficie volvién- Raquel Huerta y Ma. Elena Franco; más tarde se
dose insolubles).

-Estos datos fueron tomados de los informes de trabajo de los


- Análisis realizado por los la~orat.orios de Prehistoria. integrantes del equipo de Conservación.

313
Foto 1.Tratamiento de rescate de la pieza. Vista. Este-oeste.

unió la que suscribe en la aplicación directa del Al comenzar el proceso de limpieza y con-
tratamiento, trabajando conjuntamente con la solidación de la piedra, se dividió ésta por seccio-
sefiorita Huerta, y, como desde un principio, nes para poder controlar más fácilmente cada zo-
siempre con la asesoría del también conservador na. Dichas secciones iban siendo marcadas en un
José C. Arroyo. dibujo detallado del monolito. Cada sección
era limpiada con aguja de disección y brochuelo
Dicha proposición consistió en hacer una para eliminar sales insolubles y lodo de los po-
consolidación de la piedra con Consolidante OH ros.
de Wacker. Este es un producto a base de ésteres
de ácido silícito, materiales que hidrolizan y Se hicieron dos pruebas de consolidación
consolidan la piedra dafiada gracias a la forma- directamente sobre la piedra.
ción del Dióxido de Sílice. Así, se le restituye a
la piedra su componente natural que ha perdido: la Colocando una capa de papel absorbente sobre la
el sílice. El Consolidante OH no contiene aditi- piedra; sobre ésta se colocó algodón al cual se le
vos repelentes al agua ni a ambientes húmedos. dejó caer el consolidante por goteo, por medio de
dos venoclisis, cubriendo después con un plástico
El anhidrido sulfuroso existente en la atmós- sellado con cinta adhesiva.
fera contaminada se disuelve en el agua de llu-
via dando como resultado ácido sulfúrico 2a Se hizo de la misma manera, pero el algodón era
que reacciona con la piedra, destruyendo los impregnado previamente con el consolidan te y las
aglutinantes de ésta. venoclisis se usaban para matener la humedad.
Foto 2. Velado de las orillas de la grieta.

Posteriormente se hicieron más pruebas de con- limpiaba con algodón humedecido en bencina.
solidación en la parte inferior de la piedra, apli- Cuando cada sección se saturaba del consolidante,
cando el consolidante primero con brocha y des- se le quitaban las compresas y se le colocaba sim-
pués con compresas de algodón y gasa impregnadas
plemente una manta de cielo grande humedecida
del Consolidante OH, cubriéndolas después con en el consolidan te, y se dejaba secar la sección
placas de triplay forradas de plástico para sostener saturada.
las compresas, y apuntalándolas con maderas.
El total de litros del Consolidante OH al
La consolidación, finalmente se llevó a cabo apli-
cado primeramente al consolidan te con brocha, des-
500/0 en Nafta aplicados al monolito fue de
pués con compresas de algodón envuelto en gasa, 371 lt, Y se considera que la absorción del con-
impregnadas del consolidante, y cubiertas con un solidante en la piedra fue de 3cm a 5cm de pro-
plástico sellado con pesas. fundidad, aproximadamente.
Todos los días se repetía la op.eración aplicando el Los resultados hasta la fecha han sido sa-
consolidante sobre las compresas para mantener la
humedad necesaria y obtener buena penetración. tisfactorios. La piedra endureció notablemente,
El excedente de consolidante que escurría se iba y actualmente se hace un mantenimiento de'
recogiendo en recipientes colpcados bajo el mono- limpieza una vez por semana (o más si es necesa-
polio y se volvía aplicar sobre las compresas. Hu- rio), utilizando aspiradora con cepillos suaves.
bo zonas donde se acumulaba el consolidan te, en-
tonces se gelaba y cristalizaba. Para eliminarlo, se NOTA:Agradecemos atentamente al señor Roland Hil-
utilizaba aguja de disección, cepillo de joyero, y se del, Gerente Técnico de Wacker Mexicana, por su

315
Foto 3. Proceso de limpieza mecánica.

asesoría en los aspectos químicos del tratamiento La materia prima es una roca metamórfica
de consolidación de Coyolxauhqui, así como de la de bajo grado, de color verde olivo y textura es-
Piedra Verde (artículo que se presenta a continua- quitosa. Los minerales que la componen son:
ción).
clorita (rica en fierro), cuarzo y feldespato (albi-
También agradecemos a los laboratorios del De- ta). *
partamento de Prehistoria la gran ayuda e interés
brindados en la realización de los análisis de los di- La escultura se encontró cubierta con co-
versos materiales. pal, arcilla limonítica y piedras de tezontle.

El proceso de oxidación que sufrió la roca


b) TRATAMIENTO DE CONSERVACION DE cambió su mineralogía y provocó la alteración
LA PIEDRA VERDE (MAYAHUEL) en la pieza, por 10 que se observan tanto en la
zona de la cabeza como en la parte posterior de
Datos Generales. la Diosa corrosiones que van del amarillo al ma-
rrón.
La Diosa en piedra verde "Mily.ahuel" fue
encontrada el 27 de marzo de 1978 en la Cáma- Las dimiensiones de la pieza son: 135m de
ra 1, al Este de Coyolxauhqui, por el Arqueólogo largo; .45m de ancho y .21m de espesor.
Raúl Arana, integrante del equipo de Rescate
Arqueológico. -Datos proporcionados por el Departamento de Prehistoria.

316
Foto 4. Proceso de consolidación superficial ::on brocha; brazo izquierdo.

Mantenimiento. pelo" también de polietileno, colocando junto a


la piedra dos vasos de agua para que la piedra
Se conservó "in situ" la humedad de la pie- terminara de secarse en su ambiente de hume-
dra por med~o de venoclisis, con alcohol yagua, dad.
durante una semana, aproximadamente. Después
se trasladó a una cámara de humedad, contruida Tratamiento.
"exprofeso", donde estuvo a una temperatura de
18°C y con una humedad relativa de 800/0, El único tratamiento a que había sido so-
controladas automáticamente. De esta manera, metida la piedra posteriormente a su pérdida
cesó el tratamiento por goteo de las venoclisis, y paulatina de humedad, fue al de limpieza (sólo
se mantuvieron estas condiciones disminuyéndo- por el anverso y los costados) y unión de peque-
las paulativamente hasta llegar a una humedad ños fragmentos. Dicha limpieza fue hecha por
relativa de un 500/0. Así se m'antuvo la Piedra dos o tres personas que emplearon a su vez: (In
Verde del 8 de abril al 28 de junio de 1978, día situ) venoclisis con agua-alcohol; (en taller)
en que fue trasladada al Taller de Restauración, * compresas de agua destilada cambiadas cada ter-
donde se colocó sobre algodones en una mesa cer día; yagua-alcohol empleando hisopos. Así-
forrada de polietileno, fue cubierta con un "ca- mismo, la unión de fragmentos se hizo con ace-
tato de polivinilo (Mowilith 50 en acetona). (Lo
·Información recopilada por Salvador Guilliem. anteriormente mencionado fue llevado al cabo

317
Foto 5. Aplicación de compresas en el proceso de consolidación. Area del rostro.

por integrantes del equipo de restauración: Julio Sobre el entarimado se puso una hoja gruesa de
Chan, Rodolfo Rojas, José Arroyo y María Lui- hule espuma; sobre ella un gran pliego doble de
sa Franco en diversas etapas). polietileno grueso que hacía las veces de "cáma-
ra" para encerrar a la piedra mientras estuviera
Debido a la fragilidad de la piedra, a sus absorbiendo el consolidan te; sobre él una tira
exfoliaciones y a su pulverulencia en ciertas zo- doble de manta de cielo y, directamente sobre
nas, fue necesaria su consolidación. Por lo tanto, ella, la piedra. (Ver dibujo).
se pensó en un tratamiento con un material que
le devolviera la dureza y consistencia perdidas. El tratamiento duró aproximadamente tres
Se pensó en la Consolidante OH de Wacker cuyo meses. Se le aplicaron 24 lt de Consolidante OH
grado de penetración y efecto endurecedor son (rebajados al 500/0 en bencina), los cuales cu-
benefactores para la piedra. brieron la piedra 2/3 partes. En la p'arte superior
se le aplicó el Consolidante con brocha, dándole
Para una mayor y más fácil penetración del varias manos durante una semana. bespués se cu-
consolidan te en la piedra, la consolidación se hi- brió la piedra con un plástico grueso doble.
zo por inmersión, ya que sus dimensiones así lo
permitían. Para ello se adaptó una tina de baño Al cumplir la semana se vió que el consoli-
bastante resistente, colocándole un grueso enta- dante había sido absorbido en su mayor parte
rimado de madera que sostendría a la piedra . (24lt de 30 1t aplicados), retirando entonces los

318
Foto 6 Aplicación de compresas en el proceso de consolidación. Area del tocado.

litros restantes para que comenzara la reacción lo que se pensaba, fue más fácil su remoción
del OH con el medio ambiente. En algunas zonas conforme fue pasando el tiempo.
de la superficie se acumulaba el consolidan te y
comenzaba a gelar -mientras estaba sumergida Limpio el anverso, se volteó la piedra para
en él-Ir pero una vez sin el consolidante los exce- limpiar el reverso, obteniendo muy buenos resul-
dentes comenzaron a cristalizar en superficie. En tados en general.
ambos casos se limpiaba con cepillo de dientes y
brocha. Después de permanecer una semana sin c) CHAC-MOOL: TRATAMIENTO DE CON-
consolidan te, se le volvió a aplicar éste (8 lt) du- SERVACION
rante cuatro días, pero no fueron absofbidos y,
por lo tanto, se le retiraron. (Fotos 4, 5,6, 7,8 Datos generales.
Y 9).
La escultura policromada del Chac-Mool
Al cabo de una semana se comenzó a hacer se encuentra en la parte media de la entrada del
limpieza de superficie por los restos cristalizados Templo de Tláloc, correspondiente a la 11 Epo-
que le daban un aspecto blanquizco a la piedra. ca contructiva del Templo Mayor. Dicha escultu-
Esto se hizo ampleando un cepillo de dientes, ra mide 1.16 m de largo, .49m de ancho y .74m
bisturí y algodón, resultando difícil de remover de alto, y la materia prima que la compone es
estando reciente la cristalización. Al contrario de una toba vítrea de composición andesítica de 0-

319
Foto 7. Aplicación de compresas en el proceso de consolidación. Area del pecho.

rigen volcánico-extrusivo. (Análisis realizado bre su superficie, y unidas con una gruesa capa
por el Departamento de Prehistoria. de lodo. Para desprender cada piedra hubo que
eliminar previamente el lodo que la rodeaba y
Tratamientos de Limpieza y Consolidación. que la unía a la escultura, evitando así que se es-
trap aran los pigmentos y los estucos. (Fotos 1,2
El primer tratamiento que se le dio al Y 4).
Chac-Mool se concentró en el tocado de estuco.
Este se encontraba débil y fragmentado, y al re- En otros casos era necesario consolidar o fi-
mover el lado que lo cubría los fragmentos peli- jar éstos antes del desprendimiento de las pie-
graban con caer. Viendo esto, se procedió a fijar dras. Este fue el caso de la zona derecha del
supeficialmente los fragmentos en su lugar con tocado, la cual abarca una buena parte del rostro
una solución de Endurol en agua, previa aplica- de la escultura. En esta área se encontraban, una
ción de alcohol para una mejor penetración (tra- sobre otra, varias piedras, que bajaban hasta el
bajo efectuado por el restaurador Juan Hernán- pecho y que fueron removidas de la man'era ya
dez en colaboración con la que suscribe). (Fotos descrita. (Fotos 7 y 13).
1 y 5 ).
Sobre la cabeza, directamente sobre el to-
La escultura fue encontrada recubierta to- cado, se encontró una gran piedra encajada leve-
talmente con piedras colocadas directamente so- mente en el estuco, la cual fue difícil remover

320
Foto 8. Mantenimiento de limpieza semanal.

aún habiendo eliminado el lodo, y se llevó consi- completo. Más tarde, el fragmento de estuco fue
go -al levantarla- un fragmento bastante consi- repuesto en su lugar original, lugar (tocado del
derable de tocado (20 cm x 7cm aprox.). Este Chac-Mool) que había sido consolidado de la
fragmento fue trasladado al taller de Conserva- misma manera que el fragmento. La unión del
ción en la gran piedra como soporte, ahí fue tra- fragmento se hizo con una pasta a base de arena,
tado más tarde de la manera descrita a conti- cal, cemento y Mowilith DM4 como adhesivo,
nuación: empleando un mínimo de cemento y un buen
porcentaje de adhesivo. (Fotos 3, 22, 23, 25, 26,
Se comenzó por consolidar el estuco y las 27,28 Y 29).
pequeftas piedras de tezontle que formaban par-
te del núcleo del tocado; esto se hizo con un ace- Pigmentos.
tato de polivinilo (mowilith DM4) en agua de
cal, aplicándolo con jeringa previa aplicación de Conforme se iba eliminando el lodo que
alcohol. Esto dio excelentes resultados pues con- lo cubría, el Chac-Mool fue mostrando la exce-
solidó y endureció de tal forma al estuco, que és- lente conservación de sus pigmentos: azul, rojo,
te pudo ser liberado del lodo, el cual ya había se- negro y ocre. Estos pigmentos, que son de ori-
cado, y se fue rebajando con aguja de disección gen mineral, iban siendo limpiados mientras el
el lodo que unía el estuco a la piedra, y final- lodo estaba húmedo (caso de los rojos y ocres)
mente se desprendió de la piedra el fragmento pues permitía una b.uena eliminación de éste sin '

'321
estrapar el pigmento. Caso contrario fue el de los c) La pierna izquierda de la escultura fue encontrada
pigmentos azules y negros, ya que había que es- fragmentada en cinco partes; estos fragmentos fue-
perar a que secara el lodo para poder eliminarlo ron trabajados en el taller limpiándolos (tanto la
roca como los pigmentos) con aguja de disección y
sin pérdidas en el pigmento. (Fotos 9, 10, 11,14
bisturí, y consolidándolos con Paraloid B72 en xi-
Y 15). 101.En algunos fragmentos fue necesario unir pe-
queños pedazos pertenecientes a ellos mismos, pa-
ra lo cual se empleó Mowilith 50 en acetona. Una
Habiendo realizado pruebas de solubilidad vez tenninada esta limpieza y consolidaci6n se pro-
de los pigmentos, los cuales resultaron solubles cedi6 a unir los fragmentos al resto de la pierna de
en todo tipo de solventes, los métodos empleados la escultura. Para ello, se emple6 el adhesivo
para su limpieza fueron, en su mayor parte, me- Colmadur B- V líquido de SIKA (que es una resina
cánicos, es decir, empleando bisturí metálico, epoxy) habiendo hecho pruebas anteriores con el
mismo tipo de piedra. Este adhesivo se aplicó con
bisturí de hueso, aguja de disección y brochas de su endurecedor y se unió a la escultura fragmento
pelo fino. Unicamente en las zonas recubiertas por fragmento.Una vez tenninada la uni6n, se
de estuco (tocado, brazaletes y taparrabo) se hicieron amarres con cuerdas alrededor de la
empleó para su limpieza alcohol yagua destila- pierna para presionar los fragmentos en sus corres-
da. (Foto 12). pondientes lugares, previa protecci6n de los
pigmentos. Los resultados fueron excelentes.
(Fotos 19,20,21, 21a, 21b, 21c).
En los primeros pigmentos que fueron fija-
dos (rojo del tocado y rojo de la mano derecha) Resane.
se empleó una emulsión acn1ica (Primal AC 33
Las zonas que principalmente fueron resa-
en agua), previa aplicación de alcohol, pues es-
nadas son: los estucos del tocado y de la vasija
taban húmedos aún al terminar de limpiarlos.
del vientre, y la pierna izquierda. En las dos pri-
Sin embargo, la superficie del pigmento, incluso
meras se empleó una pasta fma a base de arena,
habiendo rebajado la proporción. Debido a cal y Mowilith DM4; en la tercera se emplearon
esto, se decidió esperar a que sacaran todos los los mismos materiales más un poco de lodo para
pigmentos para fijarlos entonces con una solu- dar un tono más oscuro al resane ya que en esa
ción acrílica (Paraloid B72 en xilol), el cual zona el pigmento es negro. (Fotos 6, 14, 15,
fijó los pigmentos al sustrato sin formar una 2la, 2lc, 28 y 29).
capa brillante en la superficie de éstos. También
el chapopote del rostro se consolidó con esta
solución. (Foto 26). Eliminación de hongos.

Estos fueron eliminados con un fungicida


Unión de fragmentos. (Pentaclorofenato de Sodio) disuelto en alco-
hol, aplicado directamente o con compresas, y
también se empleó bisturí. Los puntos donde se
Se realizaron varios tipos de unión de frag-
localizan los hongos son: el lado derecho del ros-
mentos:
tro y el suelo asoci~do a la escultura en su parte
frontal. (Foto 23).
a) En el estuco del tocado se fijaron algunos fr~gmen-
tos con acetal polivinil (Mowital B60H) en alcohol
etílico y acetato de etilo, y otros con Mowilith 50 Eliminación de sales.
(acetato de polivinilo) en acetona. (Fotos 6 y 25).
La presencia de sales se localizó en rodillas,
b) Sobre la nariz del Chac-Mool hay gran porci6n de manos, y en el chapopote de la espalda y del cos-
chapopote adherido fonnando a la misma. El apén- tado izquierdo. Para su eliminación se utilizó
dice inferior de esta nariz sobrepuesta se encontr6
desprendido, por lo que su adherencia se logr6 con pulpa de papel en agua destilada, impregnán-
Mowilith 50 en alcohol etílico y acetato de etilo. dose las sales en la pulpa y eliminándose éstas
(Foto 24). completamente. (Fotos 8,16,17 Y 18).

322
Foto l. Rostro elela Diosa.
Antes de Tratamiento.

Foto 2. Cuerpo de la Diosa.


Antes del tratamiento.
324
para el tratamiento.
Foto 4. En preparación

Foto 3. Faldas y piernas de la Diosa.


Antes del tratamiento.

325
Foto S. Tina donde se llev6 a cabo el tratamiento.

Foto 6. Aplicación
del Consolidante OH.

326
. Foto 7. Aplicación con
. brocha en superficie.

roto 8. Detalle de la absorción del consolidante OH.

327
La pieza en tratamiento.

328
TRATAMIENTO DE CONSOLlDACION

~NIVEL DEL CONSOLlDANTE

=~-r=7f J PIEDRA VERDE

~ __ PLASTICO

\'Iiiiiliiiililfiiilliiiilf/'===
\
•• ---L-.¡f-/----
MANTA DE CIELO
HULE ESPUMA
TACONES Y TARIMA DE MADERA

Foto 1. Inicio del descubrimiento. Vista posterior del Chac - Mool.

329
Inicio del descubrimiento. Detalle de la mano derecha.

Inicio del descubrimiento. Vista del


pen'J izquierdo del rostro y tocado.

330
Proceso de limpieza en el área de las
piernas y del re cipiente colocado sobre el vientre.

Proceso de limpieza del tocado por su parte posterior.

331
Foto 6. Resane y unión de fragmentos del escuto del tocado en su parte posterior.

332
Foto 7. Proceso de limpieza. Vista posterior.

333
Foto 8. Detalle de la mano derecha en su
proceso de limpieza. Eliminación de sales.

Foto 9. Proceso de limpieza del


perfil izquierdo. Vista lateral.

334
Foto 10. Detalle del proceso de limpieza de
los adornos que caen a la espalda de la escultura.
Vista lateral.

Foto 11. Proceso de limpieza del rostro.


Vista desde arriba.

335
Foto 12. Proceso de limpieza. Vista lateral.

336
Foto 13. Avance del proceso de limpieza de la parte posterior.

337
Foto 14. Detalle del avance de limpieza de la mano derecha y del recipiente colocado sobre el vientre.

Foto 15. Fin de la limpieza de la parte posterior. Proceso de limpieza de la parte frontal.

338
Foto 16. Proceso de limpieza de la parte frontal

Foto 17. Proceso de extracción de sales en la pierna derecha

339
Foto 18. Proceso de limpieza y
de extracción de sales.
Vista lateral superior.

Foto 19. Fragmentación de la


pierna izquierda. Vista lateral.

340
Foto 20. Detalle de la fragmentación
de la pierna izquierda. Vista desde arriba.

Foto 21. Pierna izquierda una vez removidos los fragmentos. Vista frontal.

341
• o 21-il. 'Uni6n de fragmentos y resane de la pierna izquierda.
Vista desde arriba.

Foto 21-b. Detalle de la uni6n de fragmentos y el resane de }.


pierna izquierda. Vista deSde arriba.

342
343
Foto 23. Proceso de limpieza del rostro y tocado.
Vista frontal lateral. Eliminación de hongos del rostro .
. ".."

Foto 24. Detalle del avance del proceso de limpieza del rostro y del tocado. Vista frontal-lateral.

344
Foto 25. Detalle del faltante del
tocado y unión de fragmentos.
Vista frontal-lateral.

Foto 26. Avance de limpieza del rostro y pectoral. Reposición del faltante del tocado. Vista Frontal.

345
Foto 28. Reposición del faltante del tocado. Resane d
Foto frontal

346
• Acercamiento de la reposición del fa1tante del tocado.
Resane del estuco. Foto frontal.

347
Foto 31. Fin del tratamiento. Vista frontal.

348
--------- Restauración de dos urnas funerarias.

por: VIDA MERCADO slclOn andesitica-basáltica, misma que pode-


mos ubicar en la "Cuenca de México".
Para hablar de la restauración de una pieza
de cerámica debemos primeramente colocarla en "La muestra vasija ofrenda 10 contiene
el contexto en que fue encontrada, después un fragmentos de Diatomaceas, organismos lacus-
análisis visual y del tipo de arcilla para saber a tres, por lo que podemos inferir que la arcilla
que material nos enfrentamos, a fin de tener ba- con la cual se elaboró la vasija pertenece a sedi-
ses antes de la intervención directa en la misma. mentos de fondos lacustres". *

Primero se debe pensar en la conservación Se procedió al tratamiento de conservación,


-que es nuestra principal preocupación- y su mismo que consistió en un lavado de los frag-
restauración, que consiste en devolverle la uni-
mentos con detergente neutro. Al eliminar el
dad estética que la posibilita para ser posterior- lodo, se hicieron evidentes algunas pequeftas
mente estudiada desde el punto de vista histó- manchas negras correspondientes a la huella de-
rico.
jada por los hongos, estas fueron removidas con
Peróxido de 20 vol. aplicado en compresas de al-
En el caso particular de las dos vasijas des- godón ayudado mecánicamente con un brochue-
cubiertas en las ofrendas 10 y 14 ubicadas en la la. Una vez eliminadas, se procedio a consolidar
explanada frontal de la época constructiva, a una los fragmentos, introduciendo en los poros de la
pequefta distancia de la Coyolxauhqui, ambas pieza resina para darle una mayor resistencia
fueron encontradas totalmente cubiertas por tie- mecánica. Esto se llevó a cabo por medio de su
rra húmeda. Debido a que no presentaba pig- inmersión en Mowilith 30, que es un acetato vi-
mentos y el barro estaba resistente no fue nece-
nílico, disuelto al 30/0 en xilol, dejando unos
sario un tratamiento "in situ". Una vez levanta- días en estas condiciones para lograr una buena
das de la ofrenda, fueron enviadas al taller de penetración del material.
restauración en donde se procedió a realizar un
examen detallado, observándose que las piezas
eran de un color pardo rojizo, un acabado alisa- Una vez protegidas del deterioro y dada su
do, y decoración en bajo relieve con la presen- importancia, se continuó con el tratamiento de
tación de un personaje en el cuerpo de la vasi- restauración, donde fue necesario combinar los
jas. Cerca del borde presentaban incisiones. En procesos de unión de fragmentos, resane y rein-
este punto, dado lo fragmentado de las piezas, tegración de color. Debido a la forma cilíndrica
resultaba difícil claramente: forma, decoración de las piezas, se dificultaba realizar estos en el'
y dimensiones. orden acostumbrado, es decir, que se unieron los
fragmentos de la base, después se resanaro.n y
Se sacaron muestras con el propósito de co- reintegraron y se continuó hacia arriba de la mis-
nocer el tipo de arcilla, cuyo resultado fue el si-
guiente para ambas; Las dos muestras pertenecen
·Copiado textualmente por el informe prestado por el dpto. de
a una misma procedencia petrográfica de compo- Prehistoria.

349
ma forma en cada fragmento hasta completar las tancia, por medio de pinturas acrílicas, en las
vasijas. partes alisadas y tierras naturales con una resina
como medio para la zona del bajo relieve por su
Para la unión de los fragmentos se empleó acabado opaco.
Mowital B-60-H que es un polivinil acetal, el
resane consistente en la aplicación de una pasta Del tratamiento descrito podemos agregar
hecha a base de una resina sintética y material de que en todo momento se respetaron las piezas,
carga, únicamente en las uniones a fin de llevar- interviniéndose únicamente en donde no se co-
las al nivel del origen y aumentar su resistencia. rría el riesgo ,de alterar su aspecto original y em-
Esto nos sirve de base para la reintegración de pIando solamente materiales que cumplieran con
color, proceso en la cual se aplica un color simi· los requisitos indispensables de estabilidad v re-
lar al de la pieza, diferenciable a una corta dis- versibilidad.

Fotografía 1.- UR A OFRENDA 10 "in sitll". Vista desde arriba


de las condiciones en que se encontró la pieza. Se
pueden observar, en el interior, los restos óseos y el objeto de piedra.

350
"

Fotografías 2 Y 3.- URNA OFRENDA 10. Pieza en fragmentos antes de! tratamiento.

35]
Fotografía 4.- URNA OFRENDA 10. Después de la limpieza en el proceso de unión de fragmentos.

352
Fotografía 5.- URNA OFRENDA 10. Pieza en proceso de resane de las uniones.

353
Fotografía 6.- URNA OFRENDA 10.
Después del tratamien to de restauración.

Fotografía 7.- URNA OFRENDA.


Detalle del personaje de la
pieza trabajado en relieve e incisión.

354
Fotografía 8.- URNA OFRENDA 14.
Pieza en fragmentos antes
del tratamiento de restauración.

Fotografía 9.- URNA OFRENDA 14.


Pieza después del trata.miento de restauración.

355
personaje

356
- Restauración de 33 cuchillos ceremoniales policromados.
por: BARBARA HASBACH LUGO
En mayo de 1980 se descubrió, en las ex- rosado, azulado, grisáceo y pardo oscuro. Pro-
cavaciones del Templo Mayor de los aztecas bablemente su forma se obtuvo por medio de
en la ciudad de México, la ofrenda 52 que cons- percusión directa controlando los golpes sucesi-
taba principalmente de 33 cuchillos ceremonia- vos en el núcleo de la piedra. Presentan retoque
les de los conocidos como "tecpatl" (del ná- bifacial y en los bordes sin llegar a ser muy afi-
huatl: cuchillo de pedernal). lados; en algunos se observa que fueron puli-
dos. Posteriormente se pegaron los ojos, dientes
Estos objetos eran símbolos de sacrificio y colmillos antes de recibir la policromía. El
o del sacrificador, durante las ceremonias y círculo blanco de los ojos y los colmillos son de
posteriormente en la ofrenda, razón por la cual pedernal y las pupilas de obsidiana bien puli-
se observan rasgos humanos de perfil, esquemati- da. Los pigmentos se aplicaron directamente
zados, siguiendo la forma del cuchillo que se sobre la piedra formando una capa delgadísima
utilizaba para este acto. En este caso tienen la utilizando principalmente el rojo y el negro
peculiaridad de presentar policromía, además de y algunos de ellos con detalles amarillo ocre y
una bola de copal para sostenerlas y ojos, dien- azul. Todos los pigmentos son de origen mineral,
tes y colmillos adheridos, lo cual los hace mas de allí su buen estado de conservación a través
reales. Es una ofrenda dedicada a Huitzilopoch- del tiempo. La extremidad proximal se dejó
tli, dios de la guerra a 10 que corresponden la sin pintura por ser la parte que se clavó en la
ubicación, los colores y el material encontrado. masa de copal para mantenerlos erguidos.
En la figura 1 se observa el dibujo a escala El proceso técnico se comprueba porque
5: 1 de cada "tecpa tl", con la indicación de la se encontraron separados de los cuchillos los
policromía, el copal y un número de identifi- ojos, dientes y copal dejando una huella sin po-
cación al que nos referiremos en el texto. licromía delimitando perfectamente las for-
mas; y en los elementos desprendidos, se observa
Proceso técnico. el borde con restos de pigmento. Estos hechos
fueron fundamentales para saber dónde se lo-
'Los "tecpatl" presentan forma peciolada calizaban los ojos y dientes y así poderlos colo-
o amigdaloide con la extremidad distal ligera- car en su lugar original de acuerdo al tamaño
mente más ancha que la proximal (base), osci- y color que dicha huella marcaba.
lando sus medidas entre los 8 y los 22 cm. de
.~ largo. Fueron manufacturados en pedernal o Existen varios motivos en la decoración
silexl de diversos colores: blanco, amarillento, de los cuchillos.

Sílex, del latín silex, sílice, pedernal color gris pardo,


amarillento o negro, azulado cuando ha sufrido fuerte 1. Líneas negras finas a 10 largo de la superfi-
comprensi6n, traslucido en los bordes, fractura con- cie roja. En la zona de dientes y ojos se
coidea y utilizado desde la Preh~toria para los cuchi-
Uos. El sílice es un compuesto de silicio y oxígeno S 102 carece de policromía (No. 2 en el esquema
que constituye el cuarzo, ópalo, pedernal, etc. de la figura 1.)

357
2. Tres franjas rojas horizontales de las cua- cia el oriente, curiosamente dando la espalda
les la central deja un espacio sin policro- a los templos.
mía para los dientes (cuchillo No. 15). El
número 18 tiene las mismas características Como se mencionó antes, originalmente los
pero con las franjas azules. "tecpatl" estaban erguidos, teniendo como ba-
se en la punta inferior, unas bolas de copal
3. Totalmente pintado de negro (No. 16) y que los mantenían en equilibrio. Con el peso de
tres de rojo (22, 27, 29) con excepción la tierra, las piedras y las construcciones se en-
de las extremidades distal, proximal y las contraron casi todos caídos, clavados en uno
zonas correspondientes a dientes y ojos. de sus filos laterales o recostados sobre una de
sus caras, con los restos de copal indicando dón-
4. El cuchillo número 30 presenta la línea ro- de se ubicaba cada uno. Esta posición determinó
ja de la lengua y una especie de bigotera el estado de conservación de la policrom ía, la
azul pálido y naranja. cara que quedó arriba se conservó mucho me-
jor por ser la zona protegida por las piedras, y
5. Hay siete cuchillos con la piedra lisa úni- en el otro lado que estaba directamente sobre
camente con la línea de la lengua roja en la arena y el lodo se conservan únicamente
ambas caras ( No. 11,12,13,14, 24) o con algunos restos.
los labios rojos abiertos (No. 7,8).
Junto a los cuchillos, esparcidos por toda
Anteriormente se han encontrado varios la ofrenda, se encontraron pequeños cuadrados
"tecpatl" en el Templo Mayor en las ofrendas y círculos planos de pedernal blanco (1.5 cm.
6, 11 y 17, en ningún caso policromados. Se aprox.) y otros más reducidos de obsidiana.
presenta el cuchillo en piedra con dientes y También se hallaron numerosos dientes, algunos
ojos de concha nácar, pupila de hematita, ce- colmillos de piedra blanca y mariposas esquemá-
jas a base de mosaico de turquesas y la base de ticas de concha nácar (2 cm.)
copal de mayor tamaño.

Hallazgo y tratamiento in situ Los objetos se liberaron cuidadosamente


con palitos de mad~ra y agujas de disección. Los
Los 33 cuchillos fueron encontrados en pigmentos se encontraban bastante bien adheri-
la ofrenda 52 localizada en la explanada de la dos a la piedra por tratarse de una capamuy fina.
zona posterior del Templo de Huitzilopochtli El rojo era el único frágil y pulverulento, por lo
como parte del relleno de una de las últimas eta- que hubo que fijarlo in situ.2 Se limpió mecáni-
pas constructivas que cubrieron el piso de losas camente cada cuchillo con policromía aprove-
y siguiendo el eje central del templo del dios chando su humedad y para los que carecían de
mencionado. La ofrenda constaba, además de ella se utilizó agua destilada hasta donde fuera
las navajas ceremoniales, de diversos objetos de . posible sobre todo en la cara que quedaba a la
obsidiana, concha nácar, copal y cobre, algunos vista. Los objetos no se movieron de su lugar
corales, espinas de erizo, escamas de pez y ca- para poder registrar su ubicación exacta en el
racolillos de mar. También se encontró pigmento dibujo a escala realizado por el arqueólogo.
rojo de origen mineral esparcido en toda la
ofrenda, especialmente en el lado sur. En este La tierra que se extraía de la ofrenda se
artículo nos concretaremos únicamente al cribó y se lavó obteniendo de esto, principal-
tratamiento de restauración de los 33 cuchillos mente, una gran cantidad de ojos y dientes de
policromados, desde que fueron encontrados silex.
in situ hasta la finalización del proceso en el El copal es uno de los materiales mayor-
taller. mente afectados por la humedad por su natura-
Los objetos se encontraron sobre un lecho
de arena de mar, cubiertos de lodo, protegidos 2 El fijado se realizó por medio del goteo de la resina acrí·
por grandes piedras de tezontle y orientados ha- Iica Paraloid 8-72 al 3% en xilol.

: 358·
T
1 2 3 4 5

6 ? 8 9 10

11 12 13 14 15

Ji'tg.l.
- If~GJPtgaento rojo ~Ptgaeato azul

l1li Pigaento negro [[O]ptgaento anaranjado

~ Piedra pardo oscuro jtíf~


l--2 [ Oopa.l

359
16 17 18 19 ro

21 22 23 24 25

26 27 28 29 30

31 •
32 33

360
Fotografía del primer nivel de la Ofrenda 52 donde se observa la colección de los
cuchillos y el material asociado; coral, discos de concha nácar entre otros.

leza orgánica.3 Unicamente aparecieron restos en agua ya que no hay que olvidar que la resina
en un estado extremo de deterioro con falta de de copal se disuelve en cualquier solvente. Se
cohesión, impregnado totalmente en el lodo aplicó varias veces, dejando secar antes de im-
y de un color que va del amarillo pálido al pregnar nuevamente. Se logró consolidar el
blanco. Fue necesaria una primera consolidación bloque de copal y tierra, dejando la continua-
in situ para permitir su levantamiento. Esto se ción del proceso para el taller.
hizo goteando una emulsión acrilica4 soluble
Una vez liberados los objetos del área y
realizado el trabajo conjuntamente entre el ar-
3 Copal, con este nombre se designan varias resinas de
árbol que pueden ser de origen fósil, encontrados a va-
queólogo y el restaurador: de limpieza, consoli-
rios pies bajo tierra y obtenerse directamente del árbol dación, dibujos, mediciones y fotografías, se
por medio de incisiones (este tipo es más blando). Se pre- procedió al levantamiento de los cuchillos
senta como terrones pardo-amarillentos con impurezas
en el interior. El copal mexicano se obtiene principalmen- junto con los elementos asociados. A este acto
te del Elaphrium jorullense del género Busera con más de siguió el traslado al taller con los respectivos da-
40 variedades. Fué muy utilizado en el culto prehispá-
nico para distintos f"mes(incienso, figurillas, etc.). tos de identificación.

4 Primal AC-33, contiene un plastificante, un estabilizador Tratamiento en el taller.


y un inhibidor de microorganismos, al 30/0 en agua des-
tilada. Para permitir su mejor penetración se rompió
la tensión superficial con alcohol el cuál, en este grado En el taller se procedió a la afinación de
de deterioro no afecta si se aplica en poca cantidad. la limpieza haciéndola mecánicamente y con

361
Dibujo del primer nivel de la Ofrenda 52 para observar
más claramente todos los detalles de la fotografía anterior.

agua destilada. Se dejaron varios ojos y dientes no dejar excedentes porque aparecerían como
sin lavar para un análisis de laboratorio, de halos brillantes que afectan el aspecto estéti-
detección e identificación de restos del mate- co de las piezas.
rial que sirvió de adhesivo con los cuchillos. Este
examen no tuvo éxito debido a la desaparición El polvo de copal impregnado en la tierra
total del adherente. se puso en una tela de trama ligeramente abier-
ta y se introdujo en agua, separando el copal
Se consolidó la totalidad de la policromía por flotación. En la superficie quedaron las
con la misma resina acrílica utilizada in situ partículas de resina y en el fondo del recipien-
ya que dio excelentes resultados, cuidando de te la tierra. Se dejó secar y se consolidó de la

362
Fotografía del segundo nivel de la Ofrenda 52 donde se
observa la colocación de los tres cuchillos más pequeños,
dos de los cuales están asociados a un coral rama y a un
disco de concha nácar. (cuchillos número 14 y 33)

misma forma que en campo, dejando la unión del contexto del cuchillo. La tierra se consoli-
al respectivo cuchillo para el fmal del trata-
miento.s dó con el acetato de polivinilo mencionado al
300/0 en agua inyectándolo para asegurar su
perfecta penetración; el coral se limpió y se con-
Unicamente en el caso del cuchillo número
27 se encontró la bola de copal casi completa; solidó con el Paraloid B-72 al 50/0 en xilol. Fi-
se consolidó y se pegó al cuchillo. En el hueco nalmente se resanó la tierra con el cuchillo y
que quedó sobre el cuchillo y el copal por la el coral con una pasta de tierra y acetato de po-
pérdida de este último, se hizo un resane a base livinilo como adhesivo.7 Resultó una unidad
de acetato de polivinilo y polvo de copal para perfectamente manejable sin peligro de despren-
derse.
reforzar la unión.6
Acabado de los cuchillos.
El cuchillo número 14 tuvo un tratamien-
to diferente porque se encontró abajo de un co- Una vez con los cuchillos limpios y conso-
ral rama, se levantaron juntos y. se procedió a lidado el pigmento, se presentó el dilema de la
consolidarlos en bloque para dejar un testigo unión de los ojos, dientes y colmillos a su res-
pectivo dueño.
s La uni6n se hizo con el poliviniI acetal: Mowital B 60 H
al ISo lo en alcohol y acetato de etilo. Fue necesario consultar los diversos códi-
ces para ver qué tipos de representaciones ha
6
Se utiliz6 Mowilith DM4 con un fungicida. A1 secar es
transparente y como se rebaja con agua, estaba, esta no 7
disuelve el copal. El mismo tratamiento se hizo al cuchillo 33 que se encon-
tr6 debajo de un disco de concha nácar.

,363
Fotografía de tres de los cuchillos antes de su tratamiento
de restauración. Se puede apreciar la huella en la policromía
de donde iban colocados los ojos, los dientes y el
copal en la extremidad proximal. (base)

habido de los cuchillos "tecpatl" porque si bien sible que se pudiera eliminar en cualquier mo-
en la mayoría de los casos teníamos la pauta mento que se deseara.
para la colocación de los elementos, había al-
gunos que presentaban dudas, por ejemplo los A partir de la figura 2 se presentan las re-
ojos cuadrados y los colmillos. presentaciones de "tecpatl" de diferentes có-
dices donde siempre están relacionados con sig-
nos calendáricos; con los nueve señores de la
Se encontraron varias representaciones que noche, de los cuales el segundo es Itztli o Tec-
podían tener una cierta afinidad con nuestros patl que significa obsidiana o pedernal; con los
cuchillos, aunque ninguno resultó ser exacta- trece señores del día que aparece como el nú-
mente igual. En algunos casos se encontraron mero once: Chalmecatecuhtli, dios del sacri-
colmillos pero en ninguno los ojos cuadrados, ficio; con la luna y únicamente en el caso de
así que para evitar falsificaciones se decidió una vasija azteca están relacionados con los
colocar únicamente los elementos cuya ubica- sacrificados (Fig. 7).
ción era segura, dejando los que no sueltos
junto a los cuchillos en que aparecieron. Casi Como hemos observado a lo largo de este
todos estos últimos fueron los' "tecpatl" que no artículo, para el tratamiento de conservación
presentaban policromía. Los dientes y ojos se o restauración de cualquier objeto arqueoló-
unieron a los cuchillos con el polivinil acetal gico es muy importante (de ser posible) verlo
Mowital B 60H disuelto en alcohol y acetato desde el momento en que se encuentra in situ
del etilo para proporcionar un adhesivo rever- con el fin de comprender mejor sus causas de

364
deterioro y así decidir el correcto tratamiento
a seguir. Es fundamental la relación de trabajo
entre el arqueólogo y el restaurador cuyos
conocimientos se complementan y se enriquecen
en el momento del hallazgo y levantamiento de
las piezas; esto permitirá la perdurabilidad de
los objetos y su localización a través del tiempo.
El contexto en que se encuentra un elemento
y su ubicación, son factores que después servi-
rán para determinar el uso, el significado y así
el valor socio-cuJtural que poseían. Razón por
la cual es importante recalcar el criterio de no-
falsificación ya que de lo contrario se conduci-
ría a un juicio erróneo que podría ser trágico
para la historia.

Fotografía del cuchillo número 22 después del Fotografía del cuchillo número
tratamiento de restauración. 16 cubierto de pigmento negro,
Se colocó frente a un espejo para con los dientes y ojos de
poder apreciar ambas caras del cuchillo. sílex colocados donde faltaba la policromía.

365
Fig. 2 Signos de los días "tecpatl" o cuchillo de pedernal. Repre-
sentaciones en el Códice Borgia, en el Vaticano "B" Y en
el Tonalámatl de Aubin y dos más de la página 13 del
Códice Borbónico sucesivamente. (Alfonso Caso, Los
calendarios prehispánicos. Mexico, UNAM., 1967, p. 7).
El último presenta mandíbula y bigotera semejante al
cuchillo número 30.

Fig. 3 Glifos calendáricos con la representación pictográfica


del "Tecpatl". (Carlos Martínez Marin, Códice Laud,
México, UNAM., 1960, p. 40)

366
Fig. 4 Dos representaciones de los 9 Señores de la Noche en el
Códice Borbónico y el Fejervary-Mayer. Se amplió única-
mente el detalle del cuchillo. El primero presenta un
colmillo. (Alfonso Caso, Los calendarios ... op. cit., p.
22)

Fig. 5 Símbolo de la luna en la pintura mural del "Templo de


las Caritas" en Cempoala.

Templo pirámide mixteca y altar de fuego coronado de


olmecas. (Códice Nutall)

(Walt.er Krickeberg, Las antiguas culturas mexicanas,


México, F.C.E., p. 330 Y 331)

367
Fig. 7 El cielo nocturno con símbolos de las estrellas (ojos pe-
ciolados) y el jeroglífico del planeta Venus (mariposa de
"tecpatl"). Relieve en la pared de una vasija azteca para
la sangre de los sacrificados. (Krickeberg, op. cit., fig.95)

368
---------------- Restauración de dos ollas.

Qor: BARBARA HASBACH LUGO nubes o los manantiales y ojos de agua. Había
muchos dioses del agua y vertían la lluvia de
Este artículo se dedica al estudio de dos cuatro grandes cántaros desde lo alto de los
ollas de cerámica con la representación del dios montes; según el cántaro el maíz crecía o se
del agua encontradas en las excavaciones del secaba. Cuando rompían los recipientes se oía
Templo Mayor en junio de 1979 y en octubre de el trueno y al caer sus pedazos en la tierra se
1980. Se hace conjuntamente el estudio de estas venía el rayo.2
dos piezas debido a que, aunque no pertenecen La deidad presenta atributos característi-
a la misma época ni a una sola ofrenda, existe cos: ojos, cejas, nariz y labios constituidos por
gran similitud en las condiciones del hallazgo y dos serrpientes entrelazadas3 las cuales son un
del tratamiento de restauración, además de tener antiguo símbolo del agua, de fertilidad y de los
un aspecto prácticamente igual en cuanto a ta- rayos. Krickeberg sostiene que más bien es una
mafia, forma, color y tema. Se darán algunos da- combinación de razgos provenientes de varias
tos de la representación temática y de las condi- figuras míticas (jaguar, serpiente, pájaro y mari-
ciones en que aparecieron las piezas con el fin posa). Presenta el mascarón pintado de azul y el
de contextualizarlas; el enfoque principal del es- rostro y cuerpo de negro porque se escondía en
tudio será el del tratamiento de conservación los oscuros nubarrones de tormenta: tocado de
in situ y la finalización en el taller de res~ pluma de garza blanca representando las nubes,
tauración. abanico de papel en la nuca, largos colmillos
aludiendo a su fase maligna, y en la cabeza una
Las ollas representan a Tláloc, dios de las joya que remata en dos plumas de quetzal sim-
aguas celestes y terrestres, señor de la lluvia y la bolizando el maíz.4
tormenta. Tiene un carácter ambivalente, es el
dios generoso que proporciona el líquido fecun- En las ollas Tláloc veremos casi todas estas
dante, '''el que hace crecer" como su nombre lo insignias características. Para facilitar la identifi-
indica, pero también puede negarlo y provocar cación de las ollas, objeto de nuestro artículo, se '
el desastre, la sequía. Envía el granizo y los ra- les nombrará Tláloc 1 y Tláloc 2 de acuerdo al
yos que ponen en peligro la vida de los pueblos orden cronológico en que fueron encontradas.
y su agricultura. 1 El tratamiento de conservación y restauración
fue el mismo en las dos piezas, en el caso de que
Tláloc era, junto con el dios del fuego, una algo varíe se especificará concretamente.
de las deidades más antiguas de los pueblos de
México; es el sefior de la tercera edad cósmica
que fue destruída por una lluvia de fuego, por lo 2 Kriceberg, Walter, Las antiguas culturas mexicanas, Mé-
cual en ocasiones aparecen asociados ambos dio- xico, Fondo de Cultura Económica, 1975, p. 148.
ses. Su morada eran las montañas cubiertas de
3 Soustelle, Jacques, El pensamiento cosmológico de los
antiguos mexicanos, París, 1940, p. 47.
1 Westheim, Paul, Ideas fundamentales de arte prehispd-
4 Brada de Casas, Johanna, "Las fiestas aztecas de los dio-
nico en México, Ed. Era, 1972, p. 152 ses de la lluvia", Ed. CISINAH, p. 263.

369
PROCESO TECNICO. cuello que presentan una capa de estuco debajo
del pigmento negro. Las ollas llevan cuatro colo-
Las ollas presentan cuerpo en forma redon- res: el azul para el cuerpo, cuello y mascarón; el
da con dos asas horizontales en cada extremo y rojo se utilizó en las franjas de decoración del
el cuello con paredes largas divergentes, y boca cuello, de las orejas y los colmillos así como pa-
con borde plano. Se colocó un mascarón de Tlá- ra el interior de los ojos, naríz y mejillas; el ne-
loc en alto relieve en una de las caras del cuerpo gro en la quijada y a manera de líneas sobre el
de la pieza prolongándose hasta la mitad del cue- azul del mascarón, del cuello y de las orejeras,
llo. conformando la decoración. En cuanto al ter-
minado de la policromía, se nota mayor esmero
Las dimensiones son las mismas en los dos y dedicación en el tláloc 1 pues, aunque ambas
Tlálocs: se pueden considerar bien trabajadas, el Tláloc
2 presenta colores del mascarón corridos sobre
altura total: 35cm. la mejilla derecha y falta de color en las zonas
diámetro máximo: 32.5cm. poco visibles para el espectador (base, interior
diámetro mínimo: 13.5cm del mascarón, etc.). En el Tláloc 1 se presenta la
esq uema tización de la piel de serpiente, 7 y en
mascarón: altura: 26cm. el Tláloc 2 posiblemente la síntesis del remoli-
ancho máximo: 25cm. no de los ríos y lagos. (Fig. 1 Y 2).
ancho mínimo: 14cm.
Para los pueblos prehispánicos el color no
tiene una función meramente decorativa, no sólo
Ambas ollas fueron realizadas en barro mol-
es encanto estético, siempre tiene su valor sim-
deado (de aquí la semejanza de tamaño y eje-
bólico implícito.
cución) y para eliminar las asperezas se pulió la
superficie, notándose en el interior de las ollas
unas finas estrías horizontales -huella del ins- HALLAZGO Y TRATAMIENTO "IN SITU".
trumento de trabajo-o s Las asas posiblemente
se aplicaron por pastillaje y el mascarón en alto Ambas ollas en sí fueron el objeto princi-
relieve se trabajó aparte con pastillaje en los de- pal de sus respectivas ofrendas, colocadas en el
talles e incisiones en el tocado. Después se in- centro de una caja de piedra constituida por si-
corporó a su destino final sobre la olla para ser llares y cubiertas con grandes pedruscos rellenan-
policromado y cocido. do la cavidad. Rodeando la pieza se encontraron
dos pequeñas bolas de copal, un cuchillo de pe-
El cobr del barro es café-anaranjado cla- dernal, tres conjuntos de huesos de ave y un es-
r06 lo cual indica que fue cocido en una atmós- padarte de pez sierra adherido al fondo de la ca-
fera oxidante, con corrientes de aire y poco hu- ja. El interior de los Tlalocs. contenía conchas
mo. La superficie exterior e interior de las pare- madreperla y varias cuentas de piedra verde.
des es del color mencionado, mientras que el
centro es negro, con textura más porosa, demos- El Tláloc. 1 fue encontrado en la ofrenda
trando esto que la pieza no tuvo un cocimiento 21 localizada en la zona oriental del templo de-
parejo. dicado a este dios. El sitio corresponde a la se-
gunda etapa constructiva. El Tláloc 2 pertenece
La policromía fue aplicada pre-cocción en a la ofrenda 56 ubicada en el relleno, entre la
una capa muy fina sin base de preparación, con quinta y la sexta ampliación del lado norte del
excepción del tocado y el borde superior del templo del mismo dios. El Tláloc 1 se halló
orientado hacia el poniente y el 2 hacia el sur, y
fueron descubiertos con un año y cuatro meses
S El espesor de las paredes que se consiguió fue oscilando
entre 1.8 y 1.Scm para el cuerpo; entre 1.3 y licm en el cuello y
de intervalo.
de 1.2 a .09cm en el mascarón.

6 En el exterior 6-S-D según la tabla Methuen de color 7 Esta decoración también se puede observar en la poli-
yen el interior 6-4-d. (Methuen Handbook ofcolour, London, cromía del Xiutecuhtli del Museo Nacional de Antropología; así
1978.) corno en algunos códices (Borgia y Natal1, por ejem.).
¡....
~ tJ..~IoG-Jr--
r•...
b•.
'f;~"
Figura 1.- TLALOC. Se observa la decoración del mas¡;arón
y los faltantes en la orejera derecha y el tocado.

. 371 _
Las piezas se presentaban enterradas en la TRATAMIENTO EN EL TALLER.
caja de ofrendas entre tierra húmeda y compac-
ta. Fueron aplastadas y fragmentadas por el peso Una vez con todos los fragmentos juntos se
de las grandes piezas de relleno y de las construc- procedió a una nueva consolidación de pigmen-
ciones posteriores que provocaron el hundimien- tos y a la unión del estuco a la superficie del to-
to a través de los años. cado. Esto se hizo por medio del goteo de un
acetal polivinílic09 en baja proporción sirvien-
do así de adhesivo y de consolidan te a la vez. Se
Fue necesaria la intervención del restaura-
procedió a la afinación de la limpieza de tierra
dor en colaboración con el arqueólogo para em-
sales y manchas de hongos. Las sales solubles'
pezar a tratar la pieza in situ en el momento
que aparecían como velos blancos sobre la poli~
mismo del hallazgo. El lodo y las piedras que se
encontraron unidas a la olla peligraban la perma- cromía, se eliminaron colocando localmente pul-
pa de papel en agua destilada y al evaporarse és-
nencia del pigmento si se retiraban violenta-
ta las sales se depositaron en la pulpa dejando li-
mente. En primer lugar se determinó controlar
?re la superficie de la olla. Existían algunas sales
el secamiento paulatinamente, colocando frane-
msol~bles sobre todo en el mascarón, que desa-
las húmedas sobre la olla y una tapa de madera
parecieron con la aplicación de ácido fórmico al
encima de la caja de ofrenda. Esto fue para
150/.0, neutralizando su acción con agua y en
evitar la rápida evaporación del agua y el exce-
ocasIOnes con ayuda mecánica.
sivo contacto con la contaminación atmosférica.

El tratamiento de las manchas oscuras, pro-


Esta situación de humedad determinó el es- ducto de la huella del metabolismo de los hon-
tado de conservación de las ollas. El barro se en- gos muertos, fue posible aprovechando la acción
contró fragmentado pero resistente; fue la poli- del ácido oxálico en baja proporción en las zo-
cromía la que sufrió el mayor daño presentando nas sin pigmento. En la policromía se utilizó
falta de cohesión, abrasión, poca adherencia con peróxido dando excelentes resultados. El último
el soporte principalmente en el rojo y el estuco lavado del interior de la olla se realizó con agua
del tocado. También hubo presencia de sales y y un detergente neutro, cepillado hasta la
de manchas de hongos los cuales dificultaban la eliminación de la suciedad.
apreciación total de la superficie.

Una vez limpios y consolidados los frag-


Se inició la intervención in situ de ambas mentos, se procedió a su unión haciéndose por
ollas haciendo una leve limpieza superficial de partes. 1 o Se empezó de abajo hacia arriba resa-
los terrones más grandes y se procedió a la con- nando el interior conforme se iba avanzando
solidación del pigmento con una resina acrílica puesto que la olla tiene el cuello tan estrecho
aplicada por goteo.' En las zonas sin policromía que se hubiera dificultado mucho el resane des-
se hizo una limpieza con agua destilada para fa- pués de la reconstrucción total.11 Como la pieza
cilitar la visión. Las madreperlas y las cuentas del había estado desunida mucho tiempo los frag-
interior no se movieron de su lugar así se foto- mentos se deformaron razón por la cual no coin-
grafiaron y·dibujaron. cidían unos con otros. Para lograr la unión hubo
que ayudarse de prensas.
Cuando las ollas se empezaban a secar, se
levantaron poniendo los respectivos datos de re-
gistro e identificación y se llevaron al taller para . 9M oWlt
'a1 860H al 2 o lo en alcohol etílico y acetato de
proseguir el tratamiento. etilo.

., se 11'
10 La unJon 0
evo a cabo con Mowital 860H al 15 /0
en alcohol y acetato;
11
.. . Pasta .de. resane a base de caolln, fibra cerámica, acetal
a Se utiliz6 el metacrilato Paraloid 872 disuelto el xilol en pohvm{hco y dlstmtos solventes. Se colore6 con pigmentos en
baja proporci6n para conseguir la 'penetraci6n. polvo.

372
Figura 2.- TLALOC 2. Se nota la diferencia con el Tláloc 1
en el delineado de la máscara, de las orejeras y el
borde del cuello.
Acotaciones de los colores de ambas ollas:
(válidas para las Fig. 1 Y 2).

Azul (la totalidad de la olla y el


D mascarón, excepto el tocado,
colmillos e interior de la misma)
Líneas negras sobre el azul

Rojo Negro sobre estuco


Café-anaranjado del barro

Negro
D (mejillas, bordes superior e inferior
de las orejeras y la punta de los colmillos)

373
Durante el levantamiento de las piezas de la
ofrenda se observó que no se olvidara ni el frag-
mento más pequeño. El Tláloc 2 apareció com-
pleto, mientras que del 1 faltó un fragmento de
la orejera derecha y otro del extremo izquierdo
del tocado. Estos fragmentos no se repusieron
porque en la zona rota hay pigmentos, lo cual
supone que se rompió y lOS aztecas la pintaron
disimulando la falta. Así se colocó en la ofrenda,
razón por la cual, el restaurador decidió no in-
tervenir.

Finalmente se procedió a la reintegración


del color de las uniones resanadas empleando
pigmentos en polvo y la resina acrílica mencio-
nada, como adhesivo. Se escogió este' material
por su estabilidad ya que no amarillea con el
tiempo, y al aplicarse con el pigmento se acerca
bastante a la apariencia de la policromía original.
Se siguió el criterio de no igualar totalmente al
original para hacer notoria la intervención a cier-

Fotografía 2.- TLALOC 2 in situ. Se observa la


caja de ofrenda con dos bolas de copal en ambos
lados de la pieza y las madreperlas en el interior.

ta distancia. Se logró la perfecta unidad del con-


junto y su apreciación sin la distracción de nin-
gún faltan te. 1 2

Como hemos visto a través de este artículo,


todo el tratamiento se realizó con materiales re-
versibles. Este largo y minucioso trabajo de res-
tauración nos permite apreciar la pieza como
una unidad cuyo estudio hace más accesible la
investigación tanto al arqueólogo como al histo-
riador.

Frecuentemente los hallazgos de fragmen-


tos amontonados -sin el tratamiento de restau-
ración- proporcionan datos históricos y tecno-
lógicos entre otros, pero la apariencia estética
queda ahogada en esta masa amorfa. Actualmen-
te se está aprovechando de los avances de la cien-
cia, y la restauración especializada se integra de~
bidamente al rescate arqueológico de nuestro
patrimonio cultural.

12 El tratamiento de restauración del T1aloc 1 fue _por


Fotografía 1.- TLALOC 1 in situ. Se pueden apreciar la restauradora Vida Mercado y la que suscribe. el T1a1oc 2 fue
las condiciones en que apareció la pieza, tratado por la que suscribe con ayuda de los alumnos Eva Ro-
así como las conchas de madreperla en el interior. dríguez C. y Ery Camara.

374
Fotografías 3 Y 4.- TLALOC l. Pieza en fragmentos después
de la limpieza y la consolidación de la policromía.

375
Fotografía 5.- TLALOC 2.
Mascarón en fragmentos después
de la limpieza y consolidación del pigmento.

Fotografía 6.- TLALOC 2.


Pieza después del
tratamiento de restauración.

376
El tiraje de esta publicación se terminó el jueves 30 de septiembre de
1982 en los talleres del Departamento de Impresiones del INSTI-
TUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGIA E HISTORIA de la SEP,
siendo Director General el Profr Gastón García Cantú, y jefe del
Depto el MAG Humberto Cruz Salas.

Edici6n: 2 mil ejemplares

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