EL MODERNISMO

En su origen era usado con un matiz despectivo. En el ámbito artístico la palabra

Modernista se utiliza con un marcado matiz anticonformista ante las tendencias
vigentes como el Realismo, Naturalismo… y deseaban una renovación estética alejada
del feísmo, la vulgaridad, la producción industrial en serie. Defendieron la belleza, la
elegancia por encima de todo. Con ellos nació el arte de fusión y el diseño.

¿QUÉ ES EL MODERNISMO?

Es un movimiento artístico que comenzó a desarrollarse a finales del siglo XIX y se

prolongó durante la primera década del siglo XX (entre 1890-1919 aprox.) cuyo
objetivo principal fue la renovación estética a través de la búsqueda de la belleza (“el
arte por el arte”). Podríamos decir que es la literatura de los sentidos. Se puede hablar
de dos etapas: 1º ETAPA: CULTO A LA BELLEZA SENSIBLE. Es un modernismo más
externo, visual, ornamental, exótico, con espacios irreales (ninfas, caballeros,
princesas…) 2º ETAPA: MODERNISMO INTIMISTA. Es un modernismo lleno de
pesimismo, desencanto y falta de creencia religiosa.

¿DÓNDE SURGE? ¿POR QUÉ? En Hispanoamérica a finales del XIX surge el deseo de
alejarse de las corrientes literarias de la metrópoli. Hacia 1890 autores como Rubén
Darío, José Martí, aceptan con insolente orgullo la etiqueta de modernistas. Para ello,
vuelven sus ojos a las corrientes literarias francesas, el Art Nueve (parnasianismo y
simbolismo)

JOSÉ MARTÍ (1853-1895)

José Martí es considerado además el precursor del Modernismo en

Latinoamérica, un movimiento literario que explotaría en el continente
latinoamericano con Rubén Darío. El propósito era mostrar esta correlación
indisoluble, donde al aporte intelectual de hondo contenido humano y
latinoamericano une la necesidad de que los pueblos de América obtengan, no
solo la independencia política y económica sino también artística y cultural y
piensen en si mismos para si mismos. Palabras claves: modernismo, Nuestra
América, realidad latinoamericana, independencia.
Martí conoció a los pueblos aborígenes de América Latina le permitió
comprender que no solo Cuba necesitaba obtener la independencia que ya
estas naciones habían logrado. Llegó a la conclusión de la necesidad de
adoptar formas de gobierno propias según las características de estas
repúblicas que resolvieran de una vez los problemas acumulados. Para ello
había de partir del conocimiento de la historia y de la realidad de estos pueblos,
sin olvidarlo mejor de otros pueblos pero con bases propias. Para ello
utilizó como tribuna todos los medios posibles de su tiempo como la poesía, la
literatura y el periodismo
El no creía que se lograra una verdadera poesía entregándose al cultivo de la forma,
pues lo que prima es la emoción trasladada al verso en su pureza e intensidad. Si se
observa la más elaborada creación poeta de Martí, los versos sencillos (1891), se
encuentra un alejamiento radical de refinamiento y la artificiosidad que caracterizo un
momento del modernismo. una clara conciencia del giro que implicaba el modernismo.

¿QUÉ INFLUENCIAS RECIBE? España está abierta a las novedades que se habían
iniciado en Francia en pos de una poesía “pura”, es decir atenta exclusivamente a la
belleza de la forma. Las corrientes francesas más influyentes fueron:

El modernismo latinoamericano se baso en dos el simbolismo y el

parnasianismo:

- PARNASIANISMO: El maestro de esta corriente es Téophile Gautier, que años antes

había lanzado su divisa “El ARTE POR EL ARTE”, se instaura el culto a la perfección
formal.

PARNASIANISMO: esta tendencia poética contagio al afán de renovar la

expresión y de perfeccionar la forma, que debía ser impecable, bella,
escultural, de líneas muy puras. Para ello era necesario evitar el
sentimentalismo, la nota intima, el desliz emocional

SIMBOLISMO: el simbolismo le enseño al modernismo a revalorar la intuición y

el intimismo, a descubrir las emociones, pero a no “decir” sino “sugerir” por
medio de analogías, alegorías y símbolos tomados de la mitología griega, de la
edad media europea y de las leyendas escandinava

- SIMBOLÍSMO: Se alejan del culto de la belleza externa, quieren ir más allá de las
apariencias. Para ellos, el mundo sensible es sólo reflejo (o símbolo) de realidades
escondidas y la misión del poeta es descubrirlas. El objetivo es crear un mundo de
sugestiones que desplazan el significado de las palabras a través de la sinestesia. Entre
los autores más representativos, destacamos a Charles Baudelaire (Flores del mal),
Paul Verlaine y Stéphane Mallarmé.