LA VIRGINIDAD PERPETUA DE LAS COSAS

Cuando me pidieron hacer un ensayo sobre la virginidad perpetua de las cosas, lo primero
que se vino a la mente fueron sinsentidos sexuados, sin embargo, en el tránsito de la
lectura de aquel capítulo, me encontré con verdades muy ciertas, las que mostraré en el
transcurso del ensayo.

En general, lo que trato de ostentar en este ensayo no es negar sino afirmar la teoría de
la virginidad de las cosas, aunque de cierto modo difiero de todas las ideas, sin
embargo, en su mayoría las considero importantes, puesto que es inmensurable conocer
absolutamente todo, pero esto, no quita la posibilidad de medios para llegar a conocer
fuentes inagotables de saber.

Para poder entendernos tengo que aclarar, qué entiendo por virginidad perpetua de las
cosas. Citaré para ello al autor de esta teoría, Luis Guerrero Díaz en su libro Arte y
condición humana “(...) las cosas, por su ser, siempre son vírgenes. No hay temas
acabados para un creador…solo el que accede a la virginidad innombrada y, a veces
innombrable de las cosas tiene posibilidades de perdurar en el tiempo, pues será original,
irradiara una luz, engendrara recursos técnicos propios, aportará, mascara las letras de
su tiempo”. El autor claramente nos define que para cualquier hombre amante de las letras
y agregaría, sin ser mezquino, a los de ciencias. Pueden encontrar una fuente inagotable
de inspiración y conocimiento.

Me pregunto ¿Cuál es la virginidad de las cosas? Será posible que la respuesta esté en
lo más sagrado, la biblia, acaso esta nos revelará con profundidad el enigma. Es evidente
la invitación a platicar de la misma María, madre de Jesús. Por ello citare a Mateo “El
nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que
se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. José su marido, como era
justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y pensando él en esto, he aquí
un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a
María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. En pocas
palabras nos dice que ella fue virgen antes, durante y perpetuamente después del parto.
Aunque parezca insólita esta analogía, no podemos negar que nos aclara las dudas sobre
la virginidad perpetua de las cosas. En sentido estricto usare el término “cosas” para
referir a diversidad temas que pueden ser usados por el artista o el poeta, científico, cuya
principal característica es que nunca podremos tocarlo de forma absoluta, por lo que se
convierte en una fuente inagotable de información o conocimiento.

¿Qué es el nombre? Es un conjunto de seis caracteres, que pueden encasillar lo más

sublime de la existencia, reducirlo a la banalidad y a la simplificación.

nunca podremos nombrar totalmente el ser de las cosas (…)”

“las cosas y los objetos en general no conocen su nombre y, menos su ser (…)”

Como alcanzar el conocimiento de las cosas ¿Quién lo puede alcanzar? ¿para quién es
más fácil alcanzar el conocimiento de las cosas?”

artista o el poeta

Con los célebres versos de Gustavo Adolfo Bécquer

RIMA IV

[…]Mientras la ciencia a descubrir no alcance de su

Las fuentes de la vida
Y en el mar o en el cielo haya un abismo
Que al cálculo resista,
Mientras la humanidad siempre avanzando
No sepa a dó camina,
Mientras haya un misterio para el hombre habrá poesía. […]

 científico

 El problema del conocimiento,

Podemos conocer las cosas en si—kant

Nos sustentamos a platón en el mito de la caverna
“Las cosas y su ser pueden obviar, prescindir del hombre y del nombre que
siempre es corto y avaro respecto de su soledad exclusiva “

AFIRMARLO
“Jamás el arte, y menos la ciencia, agotarán el ser misteriosos de las cosas.”